ACTUALIZACIONES El Médico Diabetes tipo 2: Tratamiento con incretinas Adela Rovira Loscos Jefe del Servicio de Endocrinología y Nutrición Instituto de Investigaciones Sanitarias de la Fundación Jiménez Díaz. Madrid 3,8 CRÉDITOS Actividad acreditada por la Comisión Nacional de Formación Continuada del Sistema Nacional de Salud con 3,8 créditos Test de evaluación disponible en: www.elmedicointeractivo.com/Documentos/Evaluacion Esta obra se presenta como un servicio a la profesión médica. El contenido de la misma refleja las opiniones, criterios, conclusiones y/o hallazgos propios de sus autores, los cuales pueden no coincidir necesariamente con los de AstraZeneca y Bristol-Myers Squibb. © SANED 2010 Reservado todos los derechos. Ninguna parte de esta publicación podrá ser reproducida, almacenada o transmitida en cualquier forma ni por cualquier procedimiento electrónico, mecánico, de fotocopia, de registro o de otro tipo, sin el permiso de los editores. Sanidad y Ediciones, S.L. Capitán Haya, 60. 28020 Madrid. Tel: 91 749 95 00 Fax: 91 749 95 01. [email protected] Anton Fortuny, 14-16. Edificio B, 2º 2ª. 08950 Esplugues de Llogregat (Barcelona). Tel: 93 320 93 30 Fax: 93 473 75 41. [email protected] Composición y Fotomecánica: Artecomp SVR 37/09-L-CM ACTUALIZACIONES El Médico ÍNDICE Diabetes tipo 2: Tratamiento con incretinas SISTEMA INCRETINA: NUEVOS FÁRMACOS PARA EL TRATAMIENTO DE LA DIABETES MELLITUS ..................................................................................................... 5 GLP-1: FISIOLOGÍA Y ACCIONES ............................................................................................ 7 ● ● ● Acciones..................................................................................................................... 8 Bibliografía ............................................................................................................... 10 Puntos clave ....................................................................................................... 13 GLP-1 EN LA DIABETES MELLITUS ........................................................................................ 14 ● ● ● ● ● Secreción de GLP-1 en los pacientes con DM tipo 2 ....................... 14 Actividad insulinotrópica del GLP-1 en los pacientes con DM tipo 2 .. 14 Otros efectos del GLP-1 en la diabetes ..................................................... 15 Bibliografía ............................................................................................................... 16 Puntos clave ....................................................................................................... 16 IMPORTANCIA DE LA OBESIDAD/SOBREPESO EN EL TRATAMIENTO DE LA DIABETES MELLITUS TIPO 2....................................................................................... 17 ● ● ● ● ● Obesidad en la fisiopatología de la diabetes ...................................... 18 Relación del tratamiento de la obesidad con la diabetes .............. 18 Relación del tratamiento de la diabetes con la obesidad .............. 19 Bibliografía ............................................................................................................... 20 Puntos clave ....................................................................................................... 21 IMPORTANCIA DE LA HIPOGLUCEMIA EN EL TRATAMIENTO DE LA DIABETES MELLITUS TIPO 2 ...................................................................................................................... 22 Clasificación de la hipoglucemia en la diabetes mellitus ............... 22 ● Frecuencia de hipoglucemia en pacientes con diabetes mellitus tipo 2 ........................................................................................................ 22 ● Relación entre grado de control glucémico e hipoglucemia ......... 23 ● Factores que pueden predisponer al desarrollo de hipoglucemia .................................................................................................... 24 ● Bibliografía ............................................................................................................... 24 ● Puntos clave ....................................................................................................... 25 ● TRATAMIENTO DE LA DIABETES MELLITUS TIPO 2 CON ANÁLOGOS DEL GLP-1 .................................................................................................................................... 26 ● ● Exenatida ................................................................................................................... 27 Liraglutida.................................................................................................................. 27 3 ACTUALIZACIONES El Médico ● ● Bibliografía ............................................................................................................... 28 Puntos clave ....................................................................................................... 29 TRATAMIENTO DE LA DIABETES MELLITUS TIPO 2 CON INHIBIDORES DE LA DIPEPTIDILPEPTIDASA- 4 ............................................................................................ 30 ● ● ● ● ● Efectos de los inhibidores de DPP-4............................................................ 30 Indicaciones ............................................................................................................. 31 Efectos secundarios de los inhibidores de DPP-4................................. 33 Bibliografía ............................................................................................................... 33 Puntos clave ....................................................................................................... 34 ALGORITMOS DEL TRATAMIENTO DE LA DIABETES MELLITUS TIPO 2: UBICACIÓN DE LAS INCRETINAS........................................................................................................................ 35 Consenso ADA/EASD (American Diabetes Association/ European Association for the Styudy of Diabetes) ............................... 35 ● Guía NICE (National Institute for Health and Clinical Excellence) ................................................................................................................. 36 ● Guía de la Asociación Americana de Endocrinólogos Clínicos (ACE) ............................................................................................................................ 36 ● Guía de práctica clínica de la Asociación Canadiense de Diabetes (CDA) 2008 .................................................................................. 36 ● Guía Global para la Diabetes tipo 2 de la Federación Internacional de Diabetes (IDF) ...................................................................... 37 ● Guía del Grupo de Estudio de la Diabetes Mellitus en Atención Primaria (GEDAPS) ........................................................................... 37 ● Bibliografía ............................................................................................................... 38 ● Puntos clave ....................................................................................................... 38 Diabetes tipo 2: tratamiento con incretinas ● 4 WEBS DE INTERÉS ..................................................................................................................... 39 ACTUALIZACIONES El Médico Sistema incretina: nuevos fármacos para el tratamiento de la diabetes mellitus Adela Rovira Servicio de Endocrinología y Nutrición. Fundación Jiménez Díaz. Madrid. D esde comienzos de los años 20 del siglo pasado comenzaron a publicarse los resultados experimentales de la acción hipoglucemiante de la administración intravenosa de extractos de intestino delgado a animales diabéticos que mantenían reserva funcional pancreática. Este efecto se atribuyó a la existencia de sustancias en el intestino que aumentaban la secreción de insulina. Estas sustancias se denominaron incretinas, y no ha sido hasta finales del siglo XX que se han podido caracterizar. Actualmente, se sabe que hay varias hormonas con acción incretina, siendo las más potentes el glucagon-like peptide 1 (GLP-1) y el glucose-dependent insulinotropic peptide (GIP). Los estudios realizados sobre la vía incretina han puesto en evidencia que tienen una menor eficacia en los pacientes con diabetes mellitus. Esta menor eficacia se debe a una menor secreción del GLP-1 y a una disminución de la acción del GIP en la diabetes. El tratamiento de la diabetes mellitus tipo 2 supone un continuo reto para el profesional. Por una parte, nos encontramos con la hipoglucemia como factor limitante para el uso de ciertos fármacos como las sulfonilureas, glinidas e insulina, por otra parte nos enfrentamos con la ganancia de peso que producen ciertos fármacos hipoglucemiantes como la insulina, las sulfonilureas, las glinidas y las tiazolidindionas y no podemos olvidar la evidencia de que la mayoría de los fármacos presentan una falta de eficacia hipoglucemiante con el paso del tiempo. Hemos dejado atrás la escala lenta y sucesiva de tratamientos y hemos pasado a un manejo enérgico de la hiperglucemia desde su inicio. Elegimos fármacos en monoterapia o en combinación con mayor perfil de seguridad y facilitando el cumplimiento terapéutico. La importancia que ha adquirido el GLP-1 como tratamiento potencial de la diabetes mellitus tipo 2, ha hecho que en los últimos años se hayan desarrollado diferentes estrategias para paliar el déficit de esta hormona. En la figura 1 se esquematiza la estrategia para potenciar las acciones de GLP-1, bien con péptidos análogos al GLP-1 que se unen a su receptor o bien aumentando la vida media del GLP-1 endógeno. En ambas situaciones se tiene en cuenta la enzi- 5 ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico Diabetes tipo 2: tratamiento con incretinas ma DPP-4 que inactiva el GLP-1 en 1-2 minutos. Los análogos del GLP-1 son resistentes a la acción de esta enzima y los inhibidores de la enzima actúan directamente sobre ella alargando la vida media del GLP-1 endógeno. Disponemos ya en nuestra farmacopea de análogos de GLP-1 y de inhibidores de DPP-4 y próximamente dispondremos de nuevas moléculas pertenecientes a estas familias de hipoglucemiantes. Tenemos evidencia de la eficacia de estos fármacos en la diabetes tipo 2 con una reducción de la HbA1c entre 0,5 y 1,5% según se empleen en monoterapia o combinados y según el grado de hiperglucemia de partida. 6 Figura 1. Estrategias que inducen una activación de los efectos del GLP-1. GLP-1 R: receptor del GLP-1 ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico GLP-1: Fisiología y acciones Elda Castro, Eva Cruces y Ángeles Gonzalo Servicio de Endocrinología y Nutrición. Fundación Jiménez Díaz. Madrid. E l llamado “efecto incretina” surge de estudios realizados en los años 60, en los cuales se pone de manifiesto que la ingesta de glucosa oral genera una respuesta de liberación de insulina mayor que la que se produce tras la administración intravenosa de glucosa, a pesar de que la glucemia alcanzada es superior en este segundo caso. Este “efecto incretina” implica que la ingesta de glucosa estimula la liberación de hormonas incretinas en el intestino y que estas hormonas potencian la secreción de insulina más allá de la producida por la propia glucosa absorbida. Se han descrito dos incretinas principales: GLP-1 (glucagon-like peptide) y GIP (glucose-dependent insulinotropic peptide). GPL-1 es una hormona peptídica de 30 aminoácidos, derivada del gen del proglucagón, localizado en el brazo largo del cromosoma 2. Este gen codifica no sólo GLP-1, sino además glucagón y otros péptidos derivados del proglucagón. El glucagón es el principal producto de postprocesamiento de la transcripción de proglucagón en el páncreas endocrino, y GLP-1, GLP-2 y glicentina (enteroglucagón) son los principales productos en las células L enteroendocrinas (1-6). GLP-1 se expresa principalmente en las células L localizadas en el intestino distal (íleon y colon), en las células α pancreáticas, así como en varias áreas cerebrales (hipotálamo, hipófisis, núcleos del tracto solitario, núcleos reticulares) (6-15). Su acción se realiza a través de la estimulación de receptores de membrana expresados en el tracto gastrointestinal, páncreas endocrino (células α y β), pulmón, riñones, corazón y a nivel cerebral (hipotálamo, núcleo del tracto solitario, área postrema) (15-19). La unión del GLP-1 a su receptor de membrana en la célula β, activa el monofosfato de adenosina cíclico (AMPc) a través de la estimulación de la proteína G, que a su vez estimula la vía PKA, lo que incrementa la concentración intracelular de calcio, desencadenando la liberación de vesículas maduras que contienen insulina por exocitosis (20-22). Este efecto insulinosecretor es dependiente de la concentración de glucosa. Las concentraciones plasmáticas de GLP-1 y GIP son muy bajas en ayunas y aumentan a los 15-30 minutos de la ingesta, pero sus niveles activos disminuyen muy rápidamente por la inactivación enzimática realizada por el enzima DPP-4 (dipeptidyl peptidase-4), siendo su vida media muy corta. La DPP-4 es una enzima muy expresada en el organismo, tanto en forma libre como unida a membranas celulares de la mayor parte de los tejidos como el aparato gastroin- 7 ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico testinal, hígado, riñones, linfocitos y células endoteliales. La DPP-4 inactiva a GLP-1 y GIP al separar dipéptidos de sus extremos aminos y dando lugar a la formación de péptidos inactivos más cortos (23-27). ACCIONES (FIGS. 1 Y 2) Efectos sobre la secreción de insulina Diabetes tipo 2: tratamiento con incretinas El GLP-1 estimula la secreción de insulina inducida por la glucosa en respuesta a la ingestión de alimentos, tanto en sujetos sanos como en pacientes con diabetes mellitus tipo 2 (DM tipo 2). Por debajo de una glucemia de aproximadamente 65 mg/dl casi no existe estimulación de insulina por parte del GLP1 en seres humanos, lo que evita en principio la aparición de hipoglucemias. También, se ha demostrado que estimula la transcripción del gen de insulina y todos los pasos de la biosíntesis de la insulina en las células β aisladas. Tanto GLP-1 como GIP mejoran algunos aspectos de la función de las células β, como se ha demostrado en estudios con animales e in vitro. En seres humanos se ha demostrado que la infusión de GLP-1 o de un análogo de GLP-1 o el tratamiento con inhibidores de la DPP-4, mejora los parámetros de la función de la célula β y disminuye la proporción entre proinsulina e insulina. In vitro, el GLP-1 regula al alza la expresión de genes esenciales para la función de las células β como el transportador de glucosa 2 (GLUT 2) y la glucocinasa (28-32). 8 Estimula la secreción de insulina: potencia la secreción de insulina inducida por la glucosa estimula todos los pasos de la biosíntesis de insulina regula positivamente la expresión del gen de insulina regula positivamente la expresión de genes implicados en la funció n de la célula beta (GLUT2, glucokinasa..) Aumenta la masa de las células Beta: induce mitosis promueve la diferenciación de células ductales progenitoras a células beta inhibe la apoptosis de células beta GLP-1 Mejora la sensibilidad a la insulina Regula la secreción de glucagón Aumenta la utilización de la glucosa Disminuye la ingesta de alimento Enlentece el vaciamiento gástrico Figura 1. Efectos pleiotrópicos del GLP-1. ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico Figura 2. Las incretinas desempeñan un papel clave en la regulación de la glucosa en el periodo postprandial. Efectos sobre la secreción de glucagón El GLP-1 es capaz de suprimir la secreción de glucagón tras la ingesta, tanto en sujetos sanos como en pacientes con DM tipo 2. Este efecto es glucosa dependiente, por lo que es poco probable que altere el efecto contrarregulador del glucagón en respuesta a la hipoglucemia. El efecto inhibitorio es probablemente mediado indirectamente por vía de la liberación de la insulina y vía de la secreción de la somatostatina. Sin embargo, un efecto directo de GLP-1 no se excluye por completo, ya que los receptores del GLP-1 se expresan en las células α del páncreas. El efecto inhibitorio sobre la secreción de glucagón, parece representar un mecanismo importante para la regulación de los niveles elevados de glucosa en sangre (32-35). Efectos tróficos y protectores sobre la célula β El GLP-1 ejerce un efecto trófico sobre la masa β celular pancreática. Estimula la proliferación y neogénesis de células β en el conducto pancreático humano, si bien el mecanismo por el cual se produce no es bien conocido. El GLP-1 inhibe la muerte programada (apoptosis) de las células β en roedores e in vitro. El GIP estimula la proliferación y supervivencia de las células β en roedores e in vitro. Aún no se dispone de datos clínicos en seres humanos que demuestren efectos de las incretinas sobre la proliferación y supervivencia de las células β (36-41). Efecto sobre el tracto gastrointestinal GLP-1 ejerce efectos inhibitorios sobre la secreción y la motilidad gastrointestinal, especialmente sobre el vaciado gástrico. La administración de GLP-1, a dosis fisiológicas en voluntarios sanos, produjo un enlentecimiento del vaciado gástrico y de la absorción de la glucosa dosis dependiente, con la consiguiente reducción de la concentración de glucosa plasmática postprandial (42, 43). 9 ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico Efecto sobre la ingesta de alimentos El GLP-1 reduce la ingesta calórica y aumenta la saciedad; estos efectos están relacionados probablemente con mecanismos centrales. Esto se ha demostrado en sujetos normales, obesos y en pacientes con DM tipo 2 (44-46). Efectos sobre el corazón En células cardiacas como cardiomiocitos, células del endocardio, células del endotelio microvascular y células del músculo coronario se expresan receptores para GLP-1. El GLP-1 puede mejorar la disfunción endotelial en pacientes con DM tipo 2 con enfermedad coronaria estable. Además, ejerce un efecto protector directo sobre la isquemia miocárdica, mejorando la fracción de eyección del ventrículo izquierdo en ratones sometidos a reperfusión isquémica (47, 48). Diabetes tipo 2: tratamiento con incretinas Otros efectos 10 El GLP-1 puede controlar la resorción ósea. Se ha descrito que el GIP puede tener un efecto importante en la regulación del remodelamiento óseo, si bien la importancia de estos hallazgos en humanos no está clara (49). El GLP-1 es un potente estimulador de la secreción de somatostatina de islotes aislados humanos. Este efecto es independiente de las concentraciones de glucosa (4, 32). Otras acciones relacionadas con la homeostasis de la glucosa han sido: abolir el aumento de triglicéridos plasmáticos postprandiales, suprimir el aumento relacionado con la comida y el ayuno de ácidos grasos no esterificados en sujetos normales y en pacientes con DM tipo 2 (50). Se han detectado receptores de GLP-1 en múltiples células del sistema inmune (48). En la pasada década, algunos estudios en ratas sugieren que GLP-1 puede ser protector tanto del sistema nervioso central como del sistema nervioso periférico, previniendo la degeneración neuronal y disminuyendo los déficit funcionales (4). Bibliografía (1) Holst JJ, Bersani M, Johnsen AH, Kofod H, Hartmann B, Orskov C. Proglucagon processing in porcine and human pancreas. J Biol Chem 1994;269:18827–33. (2) Mojsov S, Heinrich G, Wilson IB, Ravazzola M, Orci L, Habener JF. Preproglucagon gene expression in pancreas and intestine diversifies at the level of post-translational processing. J Biol Chem 1986;261:11880–9. (3) Orskov C, Holst JJ, Poulsen SS, Kirkegaard P. Pancreatic and intestinal processing of proglucagon in man. Diabetologia 1987;30:874–81. (4) Fehmann HC, Göke R, Göke B. Cell and molecular biology of the incretin hormones glucagon-like peptide-I and glucosedependent insulin releasing polypeptide Endocr Rev 1995;16:390-410. (5) Baggio LL, Drucker D.J. Biology of in- ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico cretins: GLP-1 and GIP Gastroenterology 2007;132:2131-57. (6) Holst JJ. The Physiology of Glucagon-like Peptide 1. Physiol Rev 2007;87:140939. (7) Bell GI, Sanchez-Pescador R, Laybourn PJ, Najarian RC. Exon duplication and divergence in the human preproglucagon gene. Nature 1983;304:368–71. (8) Br yant MG, Bloom SR, Polak JM, Hobbs S, Domschke W, Domschke S, et al. Measurement of gut hormonal peptides in biopsies from human stomach and proximal small intestine. Gut 1983;24:114-9. (9) Drucker DJ, Asa S. Glucagon gene expression in vertebrate brain. J Biol Chem 1988;263:13475–8. (10) Eissele R, Goke R, Willemer S, Harthus HP, Vermeer H, Arnold R, et al. Glucagon-like peptide-1 cells in the gastrointestinal tract and pancreas of rat, pig and man. Eur J Clin Invest 1992;22: 283– 91. (11) Jin SL, Han VK, Simmons JG, Towle AC, Lauder JM, Lund PK. Distribution of glucagonlike peptide I (GLP-I), glucagon, glicentin in the rat brain: an immunocytochemical study. J Comp Neurol 1988; 271:519–32. (12) Kauth T, Metz J. Immunohistochemical localization of glucagon-like peptide 1. Use of poly- and monoclonal antibodies. Histochemistry 1987;86:509–15. (13) Larsen PJ, Tang-Christensen M, Holst JJ, Orskov C. Distribution of glucagon-like peptide-1 and other preproglucagon-derived peptides in the rat hypothalamus and brainstem. Neuroscience 1997;77:257–70. (14) Novak U, Wilks A, Buell G, McEwen S. Identical mRNA for preproglucagon in pancreas and gut. Eur J Biochem 1987;164:553–8. (15) Alvarez E, Martinez MD, Roncero I, Chowen JA, Garcia- Cuartero B, Gispert JD, et al.The expression of GLP-1 receptor mRNA and protein allows the effect of GLP-1 on glucose metabolism in the human hypothalamus and brainstem. J Neurochem 2005;92:798–806. (16) Bullock BP, Heller RS, Habener JF. Tissue distribution of messenger ribonucleic acid encoding the rat glucagon-like peptide-1 receptor. Endocrinology 1996;137: 2968–78. (17) Campos RV, Lee YC, Drucker DJ. Divergent tissue-specific and developmental expression of receptors for glucagon and glucagon-like peptide-1 in the mouse. Endocrinology 1994;134:2156–64. (18) Wei Y, Mojsov S. Tissue-specific expression of the human receptor for glucagon-like peptide-I: brain, heart and pancreatic forms have the same deduced amino acid sequences. FEBS Lett 1995; 358:219–24. (19) Wei Y, Mojsov S. Distribution of GLP-1 and PACAP receptors in human tissues. Acta Physiol Scand 1996;157: 355–7. (20) Gromada J, Bokvist K, Ding WG, Holst JJ, Nielsen JH, Rorsman P. Glucagon-like peptide 1 (7–36) amide stimulates exocytosis in human pancreatic betacells by both proximal and distal regulatory steps in stimulus-secretion coupling. Diabetes 1998;47:57–65. (21) Holz GG. Epac: a new cAMP-binding protein in support of glucagon-like peptide-1 receptor-mediated signal transduction in the pancreatic beta-cell. Diabetes 2004;53:5–13. (22) Light PE, Manning Fox JE, Riedel MJ, Wheeler MB. Glucagon-like peptide-1 inhibits pancreatic ATP-sensitive potassium channels via a protein kinase A- and ADPdependent mechanism. Mol Endocrinol 2002;16:2135–44. 11 ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico (23) Orskov C, Wettergren A, Holst JJ. Secretion of the incretin hormones glucagonlike peptide-1 and gastric inhibitory polypeptide correlates with insulin secretion in normal man throughout the day. Scand J Gastroenterol 1996;31:665–70. (24) Deacon CF, Johnsen AH, Holst JJ. Degradation of glucagon-like peptide-1 by human plasma in vitro yields an N-terminally truncated peptide that is a major endogenous metabolite in vivo. J Clin Endocrinol Metab 1995;80:952–7. (25) Vilsboll T, Agerso H, Krarup T, Holst JJ. Similar elimination rates of glucagon-like peptide-1 in obese type 2 diabetic patients and healthy subjects. J Clin Endocrinol Metab 2003;88:220–4. Diabetes tipo 2: tratamiento con incretinas (26) Hansen L, Deacon CF, Ørskov C, Holst JJ. Glucagon-like peptide-1-(736)amide is transformed to glucagon-like peptide-1-(9-36)amide by dipeptidyl peptidase IV in the capillaries supplying the L cells of the porcine intestine Endocrinology 1999;140:5356-63. 12 (27) Mentlein R. Dipeptidyl-peptidase IV (CD26)--role in the inactivation of regulatory peptides Regul Pept 1999;85:9-24. (28) Vilsbøll T, Holst JJ. Incretins, insulin secretion and Type 2 diabetes mellitus Diabetologia 2004;47:357-66. (29) Kreymann B, Williams G, Ghatei MA, Bloom SR. Glucagon-like peptide-1 7-36: a physiological incretin in man. Lancet 1987;2:1300-4. (30) Nauck MA, Bartels E, Ørskov C, Ebert R, Creutzfeldt W. Additive insulinotropic effects of exogenous synthetic human gastric inhibitory polypeptide and glucagon-like peptide-1-(7-36) amide infused at near-physiological insulinotropic hormone and glucose concentrations. J Clin Endocrinol Metab 1993;76:912-7. (31) Vilsboll T, Krarup T, Madsbad S, Holst JJ. Both GLP-1 and GIP are insulino- tropic at basal and postprandial glucose levels and contribute nearly equally to the incretin effect of a meal in healthy subjects. Regul Pept 2003;114:115–21. (32) Orskov C, Holst JJ, Nielsen OV. Effect of truncated glucagon-like peptide-1 [proglucagon- (78–107) amide] on endocrine secretion from pig pancreas, antrum, and nonantral stomach. Endocrinology 1988;123:2009–13. (33) Nauck MA, Heimesaat MM, Behle K, Holst JJ, Nauck MS, Ritzel R, et al. Effects of glucagon-like peptide 1 on counterregulatory hormone responses, cognitive functions, insulin secretion during hyperinsulinemic, stepped hypoglycemic clamp experiments in healthy volunteers. J Clin Endocrinol Metab 2002;87:1239–46. (34) Shah P, Vella A, Basu A, Basu R, Schwenk WF, Rizza RA. Lack of suppression of glucagon contributes to postprandial hyperglycemia in subjects with type 2 diabetes mellitus. J Clin Endocrinol Metab 2000;85:4053–9. (35) Toft-Nielsen MB, Damholt MB, Madsbad S, Hilsted LM, Hughes TE, Michelsen BK, et al. Determinants of the impaired secretion of glucagon-like peptide-1 in type 2 diabetic patients. J Clin Endocrinol Metab 2001;186:3717–23. (36) Xu G, Kaneto H, Lopez-Avalos M, Weir G, Bonner-Weir S. GLP-1/exendin-4 facilitates β-cell neogenesis in rat and human pancreatic ducts Diabetes Res Clin Pract 2006;73:107-10. (37) Edvell A, Lindstrom P. Initiation of increased pancreatic islet growth in young normoglycemic mice (Umea +/?). Endocrinology 1999;140:778–83. (38) Egan JM, Bulotta A, Hui H, Perfetti R. GLP-1 receptor agonists are growth and differentiation factors for pancreatic islet beta cells. Diabetes Metab Res Rev 2003;19:115–23. ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico (39) Zhou J, Wang X, Pineyro MA, Egan JM. Glucagon-like peptide 1 and exendin4 convert pancreatic AR42J cells into glucagon- and insulin-producing cells. Diabetes 1999;48:2358–66. (45) Gutzwiller JP, Drewe J, Göke B, Schmidt H, Rohrer B, Larrida J, et al. Glucagon-like peptide-1 promotes satiety and reduces food intake in patients with diabetes mellitus type 2. Am J Physiol 1999;276:R1541-R1544. (40) Buteau J, El-Assaad W, Rhodes CJ, Rosenberg L, Joly E, Prentki M. Glucagonlike peptide-1 prevents beta cell glucolipotoxicity. Diabetologia 2004;47:806–15. (46) Näslund E, Barkeling B, King N, Gutmiak M, Blundell JE, Holst JJ, et al. Energy intake and appetite are suppressed by glucagon-like peptide-1 (GLP-1) in obese men. Int J Obes Relat Metab Disord 1999;23:304-11. (41) Farilla L, Bulotta A, Hirshberg B, Li CS, Khoury N, Noushmehr H, et al. Glucagon-like peptide 1 inhibits cell apoptosis and improves glucose responsiveness of freshly isolated human islets. Endocrinology 2003;144:5149–58. (42) Nauck M, Niedereichholtz U, Ettler R, Holst JJ, Orskov C, Ritzel R, et al. Glucagon-like peptide-1 inhibition of gastric emptying outweighs its insulinotropic effects in healthy humans. Am J Physiol Endocrinol Metab 1997;273:E981-E988. (43) Wettergren A, Schjoldager B, Mortensen PE, Myhre J, Christiansen J, Holst JJ. Truncated GLP-1 (proglucagon 78–107-amide) inhibits gastric and pancreatic functions in man. Dig Dis Sci 1993;38:665–73. (44) Flint A, Raben A, Astrup A, Holst JJ. Glucagon-like peptide 1 promotes satiety and suppresses energy intake in humans. J Clin Invest 1998;101:515-20. (47) Nyström T, Gutniak MK, Zhang Q, Zhang F, Holst JJ, Ahreu B, et al. Effects of glucagon-like peptide-1 on endothelial function in type 2 diabetes patients with stable coronary artery disease. Am J Physiol Endocrinol Metab 2004;287:E1209-E1215. (48) Brubaker PL. Minireview: Update on incretin Biology; Focus on Glucagon-Like Peptide-1. Endocrinology 2010;15:1984-9. (49) Yamada C, Yamada Y, Tsukiyama K, et al. The murine glucagonlike Peptide-1 receptor is essential for control of bone resorption. Endocrinology 2008;149:574-9. (50) Asmar M, Holst JJ. Glucagon-like peptide 1 and glucose-dependent insulinotropic polypeptide: new advances. Curr Opin Endocrinol Diabetes Obes 2010; 17:57-62. Puntos Clave ● El GLP-1 es una hormona pleiotrópica con acciones sobre la secreción de insulina y glucagón, el vaciamiento gástrico y núcleos hipotalámicos produciendo saciedad y reduciendo la ingesta de alimentos. ● El GLP-1 parece preservar la masa de células beta del islote pancreático, favorece la neogénesis de células beta y disminuye su apoptosis. ● La secreción de insulina inducida por GLP-1 es dependiente de glucosa y no se produce con glucemias menores de 65 mg/dl ● La inhibición de la secreción de glucagón producida por GLP-1 es glucosa dependiente y no se produce con niveles bajos de glucosa. 13 ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico GLP-1 en la diabetes mellitus Cristina Martín y Alicia Estrella Servicio de Endocrinología y Nutrición. Fundación Jiménez Díaz. Madrid. L as incretinas son unas hormonas producidas en el tracto gastrointestinal que participan en el control glucémico. Dichas hormonas aumentan tras la ingesta de alimentos y estimulan la secreción de insulina (1). La primera incretina identificada fue el polipéptido insulinotropo glucosa dependiente o GIP sintetizado por las células K del intestino delgado proximal (2). La segunda incretina identificada fue el péptido similar al glucagón o GLP-1 producido por las células L enteroendocrinas del íleon distal y el colon (3,4). En la diabetes mellitus tipo 2 (DM tipo 2) se ha descrito una reducción significativa del efecto incretina (5-7). En los individuos sanos, el GLP-1 y el GIP son responsables del 50-70% de la respuesta insulínica postprandial, mientras que en los pacientes con DM tipo 2 esta contribución puede ser menor del 20% (7). Las razones todavía deben estudiarse mejor pero este hecho ha dado pie a especular si los defectos en la secreción o acción de GIP y GLP-1 pueden ser en parte responsables del desarrollo de la DM tipo 2 (6,8). Diabetes tipo 2: tratamiento con incretinas Secreción de GLP-1 en los pacientes con DM tipo 2 14 Varios estudios han señalado que existe una disminución de los niveles postprandiales de GLP-1 en los paciente con DM tipo 2 (6,9,10). Este defecto ocurre sólo en el periodo postprandial tardío (2-3 horas), mientras que los niveles en el periodo postprandial inmediato son normales (6,7,10). Otros estudios, en cambio, no han encontrado defectos en su secreción (11). Globalmente se considera que existe una reducción moderada de los niveles de GLP-1 en pacientes con DM tipo 2 (6,7). Actividad insulinotrópica del GLP-1 en los pacientes con DM tipo 2 La secreción de insulina estimulada por GLP-1 está bastante preservada en los pacientes con DM tipo 2, a diferencia de lo que ocurre con la actividad de GIP que está reducida en la diabetes (8, 10, 12). Sin embargo, se ha visto que el efecto insulinotrópico del GLP-1 sí se ve afectado por los niveles de glucemia, de tal modo que en condiciones de hiperglucemia este efecto se reduce hasta en un 26% (6, 10). Asimismo, el aumento agudo de la glucemia puede interrumpir parcialmente el desarrollo del efecto incretina (7). A pesar de este hecho, está claro que la administración intravenosa de GLP-1 normaliza la hiperglucemia de los pacientes con DM tipo 2 y esto ha llevado a su uso en el tratamiento farmacológico de la enfermedad (7). ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico La disminución del efecto incretina también se ha visto en pacientes con otros tipos de diabetes como la DM secundaria a pancreatitis crónica, DM tipo 1 de reciente diagnóstico, DM tipo LADA y DM tipo MODY 3 (8,13). El defecto principal, también en estos casos, está en el GIP (13). Otros efectos del GLP-1 en la diabetes Cabe destacar la inhibición que produce el GLP-1 sobre la secreción de glucagón al actuar de forma inhibitoria sobre las células α. Este efecto está preservado tanto en la DM tipo 2 como en la DM tipo 1. La administración del GLP-1 en pacientes diabéticos tiene un claro efecto inhibitorio sobre las células α pero se desconoce si las células alfa expresan receptores de GLP-1 y si la inhibición ocurre de otra forma (14). Los otros efectos del GLP-1, como inhibición de la motilidad gástrica, retraso del vaciamiento gástrico, disminución del tránsito en el intestino delgado, inhibición de la secreción ácida y los efectos sobre la ingesta alimentaria también están preservados en la DM (3,6). En base a estudios in vitro se ha propuesto además que el GLP-1 es capaz de preservar la función y masa de células beta, debido a que estimula la proliferación y replicación de la célula β y a su efecto antiapoptótico sobre las mismas (3, 4). Sin embargo, esto todavía no ha sido probado en humanos. Como se dijo anteriormente, la disminución global del efecto incretina en los pacientes con DM ha llevado a varios grupos a preguntarse si esta disminución predispone al desarrollo de DM tipo 2. La respuesta más probable es que no. En apoyo de esta respuesta están los datos obtenidos de pacientes con gran probabilidad de desarrollar DM tipo 2, como son los familiares de primer grado y las mujeres con diabetes gestacional pasada, en los que el efecto incretina está totalmente preservado (7,10). La disminución del efecto incretina en la DM tipo 2 podría deberse a varios factores, entre ellos a una disminución en la capacidad máxima de secreción de insulina inducida por la disfunción de la célula β o a la subregulación del receptor de GIP que ocasiona la hiperglucemia (7). Por lo tanto, la reducción del efecto incretina en los pacientes con diabetes parece ser más bien un epifenómeno de la hiperglucemia crónica, independiente de defectos primarios en las incretinas, y no la causa de la diabetes (6,7). 15 ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico Bibliografía (1) Chia CW, Egan JM. Incretin-Based Therapies in Type 2 Diabetes Mellitus. J Clin Endocrinol Metab 2008;93:3703-16. (2) lsboll T, Host JJ. Incretins, Insulin Secretion and Type 2 Diabetes Mellitus. Diabetologia 2004;46:357-66. (3) Perfetti R, Merkel P. Glucagon-like peptide1: a major regulator of pancreatic β -cell function. Eur J Endocrinol 2000;143:717-25. (4) Doyle ME, Egan JM. Glucagon-Like Peptide-1. Recent Prog. Horm Res 2001; 56:377-400. (5) Nauck M, Stöckmann F, Ebert R, Creutzfeldt W. Reduced incretin effect in type 2 (non-insulin-dependent) diabetes. Diabetologia 1986;29:46-52. Diabetes tipo 2: tratamiento con incretinas (6) Meier JJ. The contribution of incretin hormones to the pathogenesis of type 2 diabetes. Best Practice & Research Clinical Endocrinology & Metablism 2009;23:433-41. 16 (7) Meier JJ, Nauck Michael A. Is the Diminished Incretin Effect in type 2 Diabetes just an Epi-Phenomenon of Impaired β-cell Function? Diabetes 2010;59:1117-25. (8) Knop F, Vislboll T, Hojberg P, Larsen S, Madsbad S, Volund A, et al. Reduced Incretin Effect in Type 2 Diabetes-Cause or Consequence of the Diabetic State? Diabetes 2007;56:1951-9. (9) Teft-Nielsen MB, Damholt MB, Mads- bad S, Hilsted LM, Hughes TE, Michelsen BK, et al. Determinants of the Impaired Secretion of Glucagon-Like Peptide-1 in Type 2 Diabetic Patients. J Clin Endocrinol Metab 2001;86:3717-23. (10) Nauck MA, Baller B, Meier J. Gastric inhibitory polypeptide and Glucagon-like Petide-1 in the Pathogenesis of Type 2 Diabetes. Diabetes 2004;53(Suppl. 3):S190-6. (11) Vollmer K, Holst JJ, Baler B, Ellrichmann M, Manck MA, Schmidt WE, et al. Predictors of incretin concentrations in subjects with normal, impaired and diabetic glucose tolerance. Diabetes 2008;57:678-87. (12) Vilsboll T, Krarup T, Sonne J, Madsbad S, Volund A, Juul AG, et al. Incretin secretion in relation to meal size and body weight in Helathy subjects and people with Type 1 and Type 2 Diabetes Mellitus. J Clin Endocrinol Metab 2003;88:2706-13. (13) Vilsboll T, Knop FK, Krarup T Johansen A, Madsbad A, Madsbad S, Larsen S. The pathophysiology of diabetes involves a defective amplification of the late phase insulin response to glucose by glucose dependent insulinotropic polypeptide regardless of etiogioly and phenotype. J Clin Endocirnol Metab 2003;88:4897-903. (14) Hare K, Knop F, Asmar M, Madsbad S, Deacon CF, Holst JJ, et al. Preserved Inhibitory Potency of GLP-1 on Glucagon Secretion in Type 2 Diabetes Mellitus. J Clin Endocrinol Metab 2009;94:4679-87. Puntos Clave ● El efecto incretina está reducido en la diabetes mellitus ● Las acciones del GLP-1 están conservadas en la diabetes mellitus ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico Importancia de la obesidad/ sobrepeso en el tratamiento de la diabetes mellitus tipo 2 Carmen Aragón y Olga Sánchez-Vilar Servicio de Endocrinología y Nutrición. Fundación Jiménez Díaz. Madrid. L a obesidad es un exceso de grasa corporal. El porcentaje de grasa corporal a partir del que se considera a un individuo obeso es del 30% para las mujeres y del 20% para los hombres. La medición de la grasa corporal es compleja y no existe un método patrón estándar. El Índice de masa corporal (IMC) (peso en kilogramos dividido por el cuadrado de la altura en metros) es el indicador adoptado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para clasificar a los individuos en función de su grasa corporal, dado que existe una buena correlación entre el porcentaje de grasa corporal y el IMC. Se considera obesidad todo IMC superior a 30 Kg/m2 (Tabla 1). En España la prevalencia de obesidad según la última Encuesta Nacional de Salud publicada en 2006 es de 15,56%, aproximadamente la mitad que en Estados Unidos. La obesidad interviene en la fisiopatología de la DM tipo 2 y su tratamiento puede mejorar el control de la misma e incluso curarla, pero muchos de los fármacos empleados en el tratamiento de DM tipo 2 se asocian a la ganancia ponderal creando un círculo vicioso que los nuevos tratamientos de la DM tipo 2 tratan de romper. Tabla 1 Categorías de Índice de masa corporal (IMC) CATEGORÍA Peso insuficiente Peso normal Sobrepeso grado I Sobrepeso grado II Obesidad grado I Obesidad grado II Obesidad grado III (mórbida) Obesidad grado IV (supermórbida) IMC (Kg/m2) < 18,5 18,5-24,9 25-26,9 27-29,9 30-34,9 35-39,9 40-49,9 >50 17 ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico Obesidad en la fisiopatología de la diabetes La base de la fisiopatología de la DM tipo 2 está en la resistencia a la insulina (RI) a la que se puede añadir un grado variable de déficit en la producción de la misma. La obesidad es un factor de riesgo para DM tipo 2 porque puede producir RI. Cuando el organismo se ve expuesto a un exceso de energía éste se almacena en forma de triglicéridos en los adipocitos que se hipertrofian dando lugar a la obesidad (1). El crecimiento exagerado de los adipocitos desencadena por distintos mecanismos una respuesta inflamatoria con liberación de citoquinas que producen RI. Además, estos mismos adipocitos sufren una hiperplasia y se extienden más allá del tejido celular subcutáneo, su localización habitual, produciendo un aumento de la grasa visceral. La grasa visceral sigue el retorno venoso esplácnico, con lo cual el hígado va a ser expuesto a las adipoquinas, moléculas con acción endo y paracrina producidas por el adipocito (Tabla 2) y a los ácidos grasos libres (AGL), que se depositan en el músculo e hígado produciendo RI. La obesidad produce una disminución de la secreción de adiponectina, que es una citoquina con propiedades antiinflamatorias e insulinsensibilizante, a favor de la producción de IL-6, TNF-α, angiotensinógeno y resistina, que producen resistencia a la insulina (2). Diabetes tipo 2: tratamiento con incretinas Relación del tratamiento de la obesidad con la diabetes 18 La reducción de un 5-10% del peso corporal en pacientes con sobrepeso/obesidad mejora la resistencia a la insulina y los factores de riesgo cardiovascular asociados (3). El pilar fundamental del tratamiento de la obesidad es la modificación de los estilos de vida (hábitos de alimentación y ejercicio físico) que predisponen a la acumulación de energía en forma de depósitos grasos. Cuando la modificación del estilo de vida fracasa pueden emplearse fármacos antiobesidad y si éstos también lo hacen, puede recurrirse a cirugía bariátrica. A continuación se exponen los efectos de las diferentes estrategias de tratamiento de la obesidad en la diabetes. Tabla 2 Adipoquinas ADIPOQUINAS PROINFLAMATORIAS ADIPOQUINAS INSULINSENSIBILIZANTES TNF-α (resistencia a la insulina) IL-6 (resistencia a la insulina) PAI-1 (hipertensión) Angiotensinógeno (alteración de la fibrinolisis) Adiponectina (sensibilizador a la insulina, antiateroesclerótico) Leptina (inhibidor del apetito) ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico Modificación del estilo de vida La modificación del estilo de vida puede mejorar el control de la diabetes y disminuir la resistencia a la insulina, como ha demostrado el estudio Look-AHEAD (4) (Action for Health in Diabetes). En una ramificación de este estudio se determinaron los parámetros relacionados con la RI (glucemia basal, AGL o distribución del tejido adiposo, etc.) antes y después de una reducción en la ingesta (500 Kcal/día) y un incremento en la actividad física (>175 minutos/semana) en un grupo de pacientes con DM tipo 2, sin modificar el tratamiento farmacológico. Al final del estudio se demostró una disminución estadísticamente significativa del peso y de la glucemia basal. Además, también disminuyó significativamente el depósito de grasa visceral y el grado de resistencia a la insulina. Fármacos antiobesidad En la actualidad el único fármaco autorizado para el tratamiento de la obesidad es orlistat, un inhibidor de la lipasa intestinal. Rimonabant (inhibidor selectivo de los receptores CB1 del sistema endocannabinoide) y sibutramina (inhibidor de la recaptación de serotonina y otros neurotransmisores) han sido retirados del mercado farmacéutico recientemente por efectos adversos graves. El estudio XENDOS demostró que la combinación de orlistat con modificación del estilo de vida reducía la incidencia de diabetes comparado con modificación del estilo de vida y placebo (9% vs 6,2%) (5). Anteriormente el estudio Latinoamericano de orlistat (6) objetivó una disminución de la hemoglobina glicosilada (HbA1c) en pacientes tratados con este fármaco frente a placebo (disminución del -0,61±0,15 vs -0,22±0,14%) y más recientemente otro estudio ha obtenido datos similares en cuanto a disminución de HbA1c incluso en ausencia de pérdida de peso (7). Cirugía bariátrica La cirugía bariátrica está indicada cuando el IMC es superior a 40 Kg/m2 o superior a 35 Kg/m2 si se asocia a DM u otras comorbilidades. El metanálisis de Buchwald de 2009 evidenció la remisión del 78,1% de los casos de diabetes (8) tras la cirugía bariátrica y el estudio de casos y controles de Adams en 2007, una reducción de la mortalidad relacionada con DM (0,4/10.000 vs 3,4/10.000) (9). Debe tenerse en cuenta que para obtener los mejores resultados es imprescindible una buena elección del candidato a cirugía bariátrica, contando con equipos multidisciplinares. Relación del tratamiento de la diabetes con la obesidad Una de las consecuencias del tratamiento de la diabetes es la ganancia de peso. Esto se debe, en parte, a la disminución de las pérdidas calóricas que 19 ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico produce el estado hiperglucémico asociado a insulinopenia absoluta o relativa. Pero además, algunos fármacos empleados en el tratamiento de la diabetes producen ganacia de peso (Tabla 3). La insulina y los fármacos insulinosecretagogos como las sulfonilureas y las glinidas producen ganancia de peso en la mayoría de los pacientes debido al efecto lipogenético de la insulina. Las tiazolidindionas aumentan el peso por sus efectos directos sobre la adipogénesis, además pueden producir retención hídrica. Los fármacos hipoglucemiantes que tienen un efecto neutro sobre el peso son la metformina, los inhibidores de las alfa-glucosidasas intestinales y los inhibidores de la dipeptidilpeptidasa-4. Los únicos fármacos hipoglucemiantes, comercializados en el momento actual, que reducen el peso son los análogos del GLP-1 debido a su efecto frenador sobre la ingesta de alimentos. Tabla 3 Diabetes tipo 2: tratamiento con incretinas Efectos de las diferentes terapias para la DM tipo 2 en el peso 20 GANANCIA PONDERAL EFECTO NEUTRO Insulina* Sulfonilueas Glinidas Tiazolidindionas Metformina Inhbidores de la DPP-4 Inhibidores de las alfagluscosidasas PÉRDIDA PONDERAL Análogos de GLP-1 * Excepto insulina detemir con efecto neutro o pérdida ponderal Bibliografía (1) Medina-Gómez G, Vidal-Puig A. Tejido adiposo como diana terapéutica de la obesidad. Endcrinol Nutr 2009;56:404-11. (2) Allende-Vigo MZ. Adipocytes and Cardiometabolic Risk. Endocr Pract 2010;3:121. (3) Goldstein DJ. Beneficial health effects of modest weight loss. Int J Obes Relat Metab Disord 1992;16:397–415. (4) Albu JB, Heilbronn LK, Kelley DE, Smith SR, Azuma K, Berk ES, et al. Metabolic changes following a 1-year diet and exercise intevention in patientes with type 2 diabetes. Diabetes 2010;59:627-33. (5) Torgerson JS, Hauptman J, Boldrin MN, Sjöström L. XENical in the prevention of diabetes in obese subjects (XENDOS) study: a randomized study of orlistat as an adjunct to lifestyle changes for the prevention of type 2 diabetes in obese patients. Diabetes Care 2004;27:155-61. (6) Halpern A, Mancini MC, Suplicy H, Zanella MT, Repetto G, Gross J et al. LatinAmerican trial of orlistat for weight loss and improvement in glycaemic profile in ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico obese diabetic patients. Diabetes Obes Metab 2003;5:180-8. (7) Jacob S, Rabbia M, Meier MK, Hauptman J. Orlistat 120 mg improves glycemic control in type 2 diabetic patients with or without concurrent weight loss. Diabetes Obes Metab 2009;11:361-71. (8) Buchwald H, Estok R, Fahrbach K, Ba- nel D, Jensen MD, Pories WJ, et al. Weight and type 2 diabetes after bariatric surgery: systematic review and meta-analysis. Am J Med 2009;122:248-256.e5. (9) Adams TD, Gress RE, Smith SC, Halverson RC, Simper SC, Rosamond WD, et al. Long-term mortality after gastric bypass surgery. N Engl J Med 2007;357:753-61. Puntos Clave ● La obesidad interviene en la fisiopatología de la diabetes tipo 2 porque induce resistencia a la insulina. ● Los diferentes fármacos disponibles para el tratamiento de la diabetes tipo 2 pueden provocar variaciones ponderales. ● Pérdidas de peso moderadas de entre un 5 y un 10% pueden contribuir a mejorar el grado de control de la diabetes. ● La base del tratamiento de la obesidad es la modificación de los estilos de vida. 21 ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico Importancia de la hipoglucemia en el tratamiento de la diabetes mellitus (DM) tipo 2 Edurne Lecumberri Pascual y María José de la Cruz Fernández Servicio de Endocrinología y Nutrición. Fundación Jiménez Díaz. Madrid. E n los pacientes con diabetes mellitus (DM) la hipoglucemia se define como cualquier episodio de disminución en las concentraciones de glucemia (en presencia o no de síntomas) que exponen al sujeto a un potencial daño (1). Los pacientes con diabetes deben tener precaución ante la posibilidad de poder presentar un episodio de hipoglucemia si objetivan cifras de glucemia capilar por auto-monitorización ⭐70 mg/dl, aunque este punto ha sido muy debatido. Diabetes tipo 2: tratamiento con incretinas Clasificación de la hipoglucemia en la diabetes mellitus 22 La Sociedad Americana de Diabetes (ADA) (1) ha clasificado la hipoglucemia en: 1) Hipoglucemia severa: cuando se precisa de la ayuda de terceras personas para solventarla. En la mayoría de las ocasiones no disponemos de la determinación de glucemia capilar, pero la recuperación neurológica al normalizarse las cifras de glucemia en plasma es suficiente evidencia. 2) Hipoglucemia sintomática documentada: situación en la que los síntomas típicos de hipoglucemia son acompañados de cifras de glucemia capilar ⭐70 mg/dl. 3) Hipoglucemia asintomática: medición de glucemia capilar ⭐70 mg/dl sin síntomas característicos de hipoglucemia. 4) Hipoglucemia sintomática probable: presencia de síntomas de hipoglucemia sin acompañarse de medición de glucemia capilar que la confirme. 5) Hipoglucemia relativa: situación en la que el paciente con diabetes presenta síntomas de hipoglucemia, pero la determinación de glucemia capilar objetiva cifras > 70 mg/dl. Frecuencia de hipoglucemia en pacientes con diabetes mellitus tipo 2 La hipoglucemia es menos frecuente en personas con DM tipo 2 que en tipo 1, sin embargo, teniendo en cuenta que la DM tipo 2 es muy prevalente y que la mayoría de estos pacientes acaban necesitando insulina, la mayoría de los episodios de hipoglucemia se dan en pacientes con DM tipo 2 y tienen carácter yatrogénico. De entre los fármacos utilizados para el tratamiento de la DM, son los secretagogos de insulina (sulfonilureas, metiglinidas) de vida media más larga, ta- ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico les como glibenclamida, los que más frecuentemente producen hipoglucemia (2). La hipoglucemia es relativamente infrecuente en los pacientes tratados con insulina en las fases iniciales de la DM tipo 2 (3,4). Por otro lado, disponemos de otros antidiabéticos que no provocan secreción de insulina, como la metformina, los inhibidores de la alfa-glucosidasa (acarbosa, miglitol) y las tiazolidindionas (pioglitazona, rosiglitazona) y los fármacos que actúan por la vía del GLP-1 como los análogos de GLP-1 (exenatida, liraglutida) y los inhibidores de DPP-4 (sitagliptina, vildagliptina, saxagliptina), que inducen secreción de insulina dependiente de la glucosa, por lo que, por norma general, no son causantes de hipoglucemia, aunque su asociación con insulina o con sulfonilureas puede aumentar el riesgo (3). En la Tabla 1 se muestra la asociación de hipoglucemia en relación con el tipo de fármaco hipoglucemiante. Relación entre grado de control glucémico e hipoglucemia Se conoce que el mejor control glucémico se asocia a un aumento en la incidencia de hipoglucemia en pacientes con DM tipo 2. En los tres últimos grandes estudios de control metabólico intensivo (ACCORD, ADVANCE, VADT) (5-7) realizados en sujetos con DM tipo 2, la hipoglucemia fue más frecuente en los pacientes tratados de manera intensiva (HbA1C entre 6,4% y 6,9%), y en el estudio ACCORD se objetivaron más muertes en los pacientes del brazo de tratamiento intensivo. Aunque el exceso de mortalidad no pudo ser explicado de manera directa por la mayor presencia de hipoglucemias sintomáticas, se pien- Tabla 1 Fármacos utilizados en monoterapia en la DM tipo 2 y su relación con el desarrollo de hipoglucemia (3-8) FÁRMACO INDUCEN HIPOGLUCEMIA Insulina ♠ Sulfonilureas ♠ Glinidas ♠ BAJO RIESGO DE HIPOGLUCEMIA Metformina ♠ Tiazolidindionas ♠ Inhibidores de las alfaglucosidasas ♠ Inhibidores de la DPP-4 ♠ Análogos de GLP-1 ♠ 23 ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico sa que las hipoglucemias no detectadas pudieron ser la causa del desarrollo de arritmias, que pudiera haber contribuido al mayor aumento de mortalidad cardiovascular. Un problema importante es la presencia de hipoglucemias de madrugada, que pueden pasar inadvertidas o detectarse de forma tardía y no corregirse a tiempo. Las tasas de mortalidad por hipoglucemias en pacientes con DM tipo 2 son desconocidas, pero han sido documentadas (3,8). Diabetes tipo 2: tratamiento con incretinas Factores que pueden predisponer al desarrollo de hipoglucemia 24 Se conoce que el riesgo de hipoglucemia está relacionado con la duración de la enfermedad y con la edad avanzada (9). Las personas mayores tienen más síntomas de neuroglucopenia (mareo, debilidad, confusión) que los adrenérgicos (temblor, palpitaciones). En ancianos, la presencia de hipoglucemias leves-moderadas se ha asociado a mayor riesgo de fracturas, mientras que los episodios de hipoglucemia severa que requieren hospitalización están asociados a mayor riesgo de demencia. Además de la edad, existen muchos factores de riesgo para el desarrollo de hipoglucemias: pérdida de las respuestas contrarreguladoras como consecuencia de la evolución de la DM (3,10), dosis excesivas de insulina (o del fármaco secretagogo), ayuno prolongado, ejercicio, aumento de la sensibilidad a la insulina, disminución de la producción hepática de glucosa (p.ej. alcohol), disminución del aclaramiento del fármaco por insuficiencia renal (insulina, fármacos secretagogos), tratamiento intensivo, fármacos antihipertensivos (ARA II, IECA, betabloqueantes) (11). Bibliografía (1) Defining and reporting hypoglycemia in diabetes: a report from the American Diabetes Association Workgroup on Hypoglycemia. Diabetes Care 2005; 28:1245-9. (2) Gangji AS, Cukierman T, Gerstein HC, Goldsmith CM, Clase CM. A systematic review and meta-analysis of hypoglycemia and cardiovascular events: a comparison of glyburide with other secretagogues and with insulin. Diabetes Care 2007; 30:389-94. (3) Cryer PE. The barrier of hypoglycemia. Diabetes 2008;57:3169-76. (4) UK Hypoglycaemia Study Group. Risk of hypoglycaemia in type 1 and 2 diabe- tes: effects of treatment modalities and their duration. Diabetologia 2007; 50:1140-4. (5) ACCORD: Calles-Escandón J, Lovato LC, Simons-Morton DG, Kendall DM, PopBusui R, Cohen RM, Bonds DE, et al. Effect of intensive compared with standard glycemia treatment strategies on mortality by baseline subgroup characteristics: the Action to Control Cardiovascular Risk in Diabetes (ACCORD) trial. Diabetes Care. 2010; 33:721-7. (6) ADVANCE: Du X, Ninomiya T, de Galan B, Abadir E, Chalmers J, Pillai A, et al. ADVANCE Collaborative Group. Risks of cardiovascular events and effects of routine blood pressure lowering among patients with type ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico 2 diabetes and atrial fibrillation: results of the ADVANCE study. Eur Heart J 2009; 30:1128-35. (7) VADT: Reaven PD, Emanuele N, Moritz T, Klein R, Davis M, Glander K, et al. Veterans Affairs Diabetes Trial. Proliferative diabetic retinopathy in type 2 diabetes is related to coronary artery calcium in the Veterans Affairs Diabetes Trial (VADT). Diabetes Care 2008; 31:952-7. (8) Holstein A, Egberts EH. Risk of hypoglycaemia with oral antidiabetic agents in patients with Type 2 diabetes. Exp Clin Endocrinol Diabetes 2003;111:405-14. (9) Zammitt NN, Frier BM. Hypoglycemia in type 2 diabetes: pathophysiology, frequency, and effects of different treatment modalities. Diabetes Care 2005;28:2948-61. (10) Cryer PE, Axelrod L, Grossman AB, Heller SR, Montori VM, Seaquist ER, et al. Evaluation and management of adult hypoglycemic disorders: an Endocrine Society Clinical Practice Guideline. J Clin Endocrinol Metab 2009;94:709-28. (11) Murad MH, Coto-Yglesias F, Wang AT, Sheidaee N, Mullan RJ, Elamin MB, et al. Clinical review: Drug-induced hypoglycemia: a systematic review. J Clin Endocrinol Metab 2009; 94:741-5. Puntos Clave ● La hipoglucemia es uno de los factores limitantes en el tratamiento intensivo de la diabetes ● La utilización de fármacos que pueden provocar hipoglucemia debe hacerse con cautela, sobre todo en los pacientes más frágiles ● Las cifras de glucemia iguales o menores de 70 mg/dl deben alertar al paciente del peligro de una posterior reducción de dichas cifras y por tanto tomar las medidas oportunas. ● Los nuevos fármacos que actúan por la vía de las incretinas tienen una seguridad alta, ya que tienen bajo riesgo de producir hipoglucemia. 25 ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico Tratamiento de la diabetes mellitus tipo 2 con análogos del GLP-1 José Ignacio Lara Capellán y Katty Manrique Servicio de Endocrinología y Nutrición. Fundación Jiménez Díaz. Madrid. Diabetes tipo 2: tratamiento con incretinas L 26 as células L del intestino delgado producen GLP-1 en respuesta a nutrientes, estando sus niveles reducidos en pacientes con DM tipo 2 (1). Los efectos de GLP-1 en humanos ya han sido comentados. Estos efectos han hecho muy atractivo su utilización en el tratamiento de la DM tipo 2, sin embargo, su perfil farmacocinético supone una desventaja importante. La molécula es degradada rápidamente a metabolitos inactivos o incluso antagonistas a través de un enzima ubicuo llamado dipeptidil peptidasa tipo 4 (DPP-4). Se han desarrollado dos aproximaciones terapéuticas diferentes, la primera es la utilización de análogos de GLP-1 (incretín miméticos) resistentes a DPP-4 y la segunda el desarrollo de agentes que inhiben DPP-4 aumentado los niveles endógenos de la hormona. Las diferencias entre los 2 grupos se muestran en la Tabla 1. En este capítulo solamente revisaremos los análogos de GLP-1. En la actualidad en nuestro país solamente se ha comercializado un análogo de GLP-1 la exenatida (Byetta® en plumas precargadas de 5 y 10 µg), próximamente se comercializará un segundo producto, liraglutida. Se están desarrollando otras moléculas como exenatida en una formulación semanal (exenatide LAR), albiglutida y taspoglutida (2). Tabla 1 Diferencias entre análogos de GLP-1 e inhibidores de DPP-4 Análogos de GLP-1 Inhibidor DPP-4 glucosa dependiente Sí Sí Supresión de la secreción de glucagón Sí Sí Retraso del vaciamiento gástrico Sí No Reducción de apetito Sí No Pérdida de peso Sí No Subcutánea Oral Estimulación secreción de insulina Vía de administración ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico Exenatida Es un componente natural de la saliva del monstruo de Gila, resistente a la degradación por DPP-4. Comparte una analogía del 53% con GLP-1 uniéndose a su receptor. Aumenta la secreción de insulina de una forma glucosa dependiente, suprime la elevación inapropiada de glucagón, enlentece el vaciamiento gástrico y favorece la pérdida de peso (3). Varios estudios han mostrado su eficacia en el control glucémico, a la dosis de 5 ó 10 µg 2 veces al día frente a placebo, en las DM tipo 2 no bien controladas con dosis máximas de sufonilureas y/o metformina o en tratamiento con glitazonas (4-7). Los datos de un metanálisis muestran un descenso medio de HbA1c entorno a 1% consiguiendo el objetivo de HbA1c < 7% en el 45% de los pacientes, frente a el 10% con placebo (8). También tiene un efecto significativo sobre la pérdida de peso, habiéndose demostrado, en un estudio, una perdida media de peso a 3 años de 5,3 Kg (9). La pérdida de peso se ve acompañada por mejoría en los valores de presión arterial (PA) y en el perfil lipídico. Tiene una eficacia sobre el control glucémico similar a insulina glargina cuando se asocia al tratamiento con metformina y/o sulfonilureas en pacientes con DM tipo 2 con no buen control, con la ventaja adicional de la pérdida de peso (10). En la actualidad no está aprobado el uso conjunto con insulina. Las dosis utilizadas son 5 y 10 µg 2 veces al día. En nuestro país solamente existe la indicación de utilización en asociación a metformina y/o sulfonilureas cuando con estos tratamientos no se consigue el objetivo terapéutico. Los efectos secundarios de exenatida son principalmente gastrointestinales, náuseas, vómitos y diarreas, que suelen ir disminuyendo con la utilización del fármaco. Otros efectos adversos gastrointestinales son: dispepsia, distensión abdominal y dolor abdominal. Se han descrito casos de pancreatitis aguda, algunas necrotizantes o hemorrágicas. No hay suficientes datos para determinar su verdadera frecuencia. Otros efectos adversos son: mareo, dolor de cabeza, hiperhidrosis y fallo renal agudo. La utilización conjunta con metformina no provoca hipoglucemias, pero sí pueden aparecer cuando se asocia a sulfonilureas (5). Liraglutida Un segundo análogo de GLP-1, es la liraglutida. Varios estudios han demostrado su eficacia en monoterapia frente a sulfonilureas o en combinación con metformina, sulfonilureas, metformina más sulfonilureas y tiazolidindionas más metformina (11). En estos trabajos se ha observado una reducción de HbA1c algo superior al 1%, consiguiendo en un 51% de los pacientes valores de HbA1c < 7%. Produce, al igual que exenatida, una reducción significativa de peso. Los efectos adversos son también similares a exenatida, siendo los más frecuentes náuseas, vómitos y diarreas. Se han descrito algunos casos de pancreatitis agu- 27 ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico da. El riesgo de hipoglucemia es bajo y aparece principalmente en la utilización conjunta con sulfonilureas. Las dosis utilizadas son 0,6, 1,2 y 1,8 mg en una única dosis diaria, a diferencia del anterior. En fases muy avanzadas se encuentra la formulación retardada de exenatida (exenatida LAR). Su eficacia, en los ensayos realizados, parece al menos similar a exenatida, con la ventaja de su administración subcutánea semanal (12). Efectos adicionales encontrados con la utilización de análogos de GLP-1 son mejoría del perfil lipídico, reducción de los valores de triglicéridos y aumento de los valores de HDL-col, y reducción de las cifras de PA (13). Bibliografía (1) Dungan K, Buse JB. Glucagon-Like Peptide 1-Based Therapies for Type 2 Diabetes: A Focus on Exenatide. Clinical Diabetes 2005;23:56-6. Diabetes tipo 2: tratamiento con incretinas (2) Davidson JA. Advances in therapy for type 2 diabetes; GLP-1 receptor agonists and DPP-4 inhibitors. Cleve Clin J Med. 2009;76 (Suppl 5): S28-38. 28 (3) Kolterman OG, Buse JB, Fineman MS, Gaines E, Heintz S, Bicsak TA, et al. Synthetic exendin-4 (exenatide) significantly reduces postprandial and fasting plasma glucose in subjects with type 2 diabetes. J Clin Endocrinol Metab 2003;88:30829. (4) DeFronzo RA, Ratner RE, Han J, Kim DD, Fineman MS, Baron AD. Effects of exenatide (exendin-4) on glycemic control and weight over 30 weeks in metformin-treated patients with type 2 diabetes. Diabetes Care 2005;28:1092-100. (5) Buse JB, Henry RR, Han J, Kim DD, Fineman MS, Baron AD; Exenatide-113 Clinical Study Group. Effects of exenatide (exendin-4) on glycemic control over 30 weeks in sulfonylurea-treated patients with type 2 diabetes. Diabetes Care 2004;27: 2628-35. (6) Kendall DM, Riddle MC, Rosenstock J, Zhuang D, Kim DD, Fineman MS, et al. Effects of exenatide (exendin-4) on glycemic control over 30 weeks in patients with type 2 diabetes treated with metformin and a sulfonylurea. Diabetes Care 2005;28: 1083-91. (7) Zinman B, Hoogwerf BJ, Durán García S, Milton DR, Giaconia JM, Kim DD, et al. The effect of adding exenatide to a thiazolidinedione in suboptimally controlled type 2 diabetes. Ann Intern Med 2007;146: 477-85. (8) Amori RE, Lau J, Pittas AG. Efficacy and safety of incretin therapy in type 2 diabetes: systematic review and meta-analysis. JAMA 2007;298:194-206. (9) Klonoff DC, Buse JB, Nielsen LL, Guan X, Bowlus CL, Holcombe JH, et al. Exenatide effects on diabetes, obesity, cardiovascular risk factors and hepatic biomarkers in patients with type 2 diabetes treated for at least 3 years. Curr Med Res Opin 2008; 24:275-86. (10) Heine RJ, Van Gaal LF, Johns D, Mihm ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico MJ, Widel MH, Brodows RG; GWAA Study Group. Exenatide versus insulin glargine in patients with suboptimally controlled type 2 diabetes: a randomized trial. Ann Intern Med 2005;143:559-69. (11) Montanya E, Sesti G. A review of efficacy and safety data regarding the use of liraglutide, a once-daily human glucagon-like peptide 1 analogue, in the treatment of type 2 diabetes mellitus. Clin Ther 2009; 31:2472-88. (12) Drucker DJ, Buse JB, Taylor K, Kendall DM, Trautmann M, Zhuang D, et al. DURATION-1 Study Group. Exenatide once weekly versus twice daily for the treatment of type 2 diabetes: a randomised, open-label, non-inferiority study. Lancet 2008; 372:1240-50. (13) Klonoff DC, Buse JB, Nielsen LL, Guan X, Bowlus ChL, Holcombe JH, et al. Exenatide effects on diabetes, obesity, cardiovascular risk factors and hepatic biomarkers in patients with type 2 diabetes treated for at least 3 years. Curr Med Res Opin 2008;24:275-86. Puntos Clave ● Los análogos de GLP-1 suponen una importante ayuda en el tratamiento de la DM tipo 2 en pacientes obesos por su efecto adicional sobre la pérdida de peso. 29 ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico Tratamiento de la diabetes mellitus tipo 2 con inhibidores de la dipeptidilpeptidasa-4 Elena López-Mezquita y Adela Rovira Servicio de Endocrinología y Nutrición. Fundación Jiménez Díaz. Madrid. Diabetes tipo 2: tratamiento con incretinas E 30 n los últimos años, tal y como se ha reflejado anteriormente, se ha puesto de manifiesto el papel del sistema incretina en la regulación de la homeostasis de la glucemia. Las principales incretinas GLP-1 y GIP son producidas por las células intestinales y aumentan rápidamente tras la ingesta de alimentos. Ambas incretinas tienen una vida media muy corta, debido a su rápida inactivación por la enzima dipeptidil peptidasa 4 (DPP-4), que separa los dos aminoácidos de la porción N terminal de ambos péptidos. Como se ha comentado en el capítulo de las incretinas en la diabetes, la secreción de GLP-1 tras la ingesta de alimentos se encuentra disminuida en la diabetes, pero su actividad insulinosecretagoga se mantiene intacta, a diferencia del GIP, que su actividad se encuentra reducida en la diabetes aunque su secreción parece no alterarse. Entre los nuevos fármacos que se han desarrollado en los últimos años se encuentran los inhibidores de DPP-4, que aumentan la concentración circulante de las hormonas incretinas endógenas. Restauran los niveles fisiológicos de GLP1 y es básicamente este efecto el responsable de la eficacia de estos fármacos en la diabetes, consiguiendo una reducción de la HbA1c entre 0,5 y 1% (1). En estos momentos en España están comercializados tres inhibidores de la DPP-4, vildagliptina, sitagliptina y saxagliptina, y en ensayos clínicos se encuentra la alogliptina y linagliptina (2-5). Estos fármacos se administran por vía oral, tienen una rápida absorción que es independiente de la ingesta de alimentos y tienen una biodisponibilidad mayor del 65%. La sitagliptina y la vildagliptina se metabolizan por vías diferentes al citocromo p450, dando lugar a metabolitos inactivos, presentado una eliminación renal de 79 y 85% respectivamente. La biotransformación de saxagliptina está mediada principalmente por citrocromo p450 a un metabolito activo que también es inhibidor selectivo de DPP-4, aunque la mitad de potente que saxagliptina. Su eliminación renal es del 75% (6). Efectos de los inhibidores de DPP-4 (Fig. 1) Secundario al aumento de la concentración de GLP-1 endógeno tiene lugar ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico una serie de efectos que dan lugar a una mejoría del perfil metabólico en los pacientes con diabetes mellitus (DM) tipo 2 secundaria a: 1. La liberación de insulina por las células β con respuesta dependiente de glucosa. Dicho efecto ocurre después de las comidas y durante el ayuno mejorando tanto el perfil postprandial como el basal (1). 2. La inhibición de la producción de glucagón por las células α del pácreas, lo que contribuye a la reducción de la hiperglucemia (7). 3. En estudios experimentales se ha sugerido la posibilidad de que los inhibidores de la DPP-4 tuvieran efectos sobre la apoptosis de la célula beta enlenteciendo su destrucción y, por tanto, preservando la función pancreática (8). Sin embargo, son necesarios más estudios que confirmen esta hipótesis. Debido a los dos primeros efectos mencionados más arriba, estos fármacos tienen bajo riesgo de producir hipoglucemia, ya que su acción insulino-secretagoga y frenadora de glucagón depende de las concentraciones circulantes de glucosa (1). La eficacia de los diferentes inhibidores de DPP-4 sobre la reducción de HbA1c parece que es similar, según diferentes estudios publicados (1,5,9). Son prácticamente neutros respecto al peso corporal (9). Entre los efectos extrapancreáticos, los inhibidores de DPP-4 parece que pueden disminuir la hipertrigliceridemia postprandial (10). Indicaciones Existen estudios que avalan la seguridad y eficacia de su uso, bien como monoterapia o en combinación con otros agentes hipoglucemiantes (9). Estos fármacos Figura 1. Los inhibidores de DPP-4 potencian la actividad incretina. 31 ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico están indicados en pacientes con DM tipo 2 y no deben utilizarse en diabetes tipo 1, diabéticas embarazadas, lactantes y niños o adolescentes. Las indicaciones se encuentran en las fichas técnicas respectivas (11-13) y podemos resumirlas en: Monoterapia Se ha aprobado para sitagliptina cuando existe intolerancia o contraindicación a metformina, a la dosis de 100 mg/d. Combinación Doble terapia: Cuando con dosis máxima tolerada de metformina, sulfonilurea o tiazolidindiona no se alcanzan objetivos glucémicos. Está aprobado también el uso de sitagliptina con insulina. En caso de asociación con sulfonilurea o insulina será preciso disminuir la dosis de estos fármacos (en el caso de sitagliptina y saxagliptina) o disminuir la dosis de DPP-4 (en el caso de vildagliptina), por el contrario si se asocia a metformina o tiazolidindionas se mantendrán la dosis que se estaban empleando. Triple terapia: en combinación con metformina y tiazolidindiona cuando el tratamiento dual con estos fármacos no proporcione un adecuado control; en combinación con sulfonilurea y metformina cuando el tratamiento dual con estos agentes no consigue buen control. Esta indicación está aprobada para sitagliptina. Tabla 1 Inhibidores de DPP-4 comercializados Diabetes tipo 2: tratamiento con incretinas PRINCIPIO 32 ACTIVO Vildagliptina NOMBRE COMERCIAL POSOLOGÍA GALVUS® 50 mg JALRA 50 mg ® XILIARX DOSIS DIARIA 50 mg/12 horas 50 mg ® EUCREAS 50/1000 mg ZOMARIST® 50/1000 mg ® 50/850 mg Vildagliptina/ Metformina 50/850 mg ICANDRA ® 50/1000 mg 50/850 mg JANUVIA Sitagliptina XELEVIA ® TESAVEL 100 mg 100 mg ® Sitagliptina/ ® JANUMET 50/1000 mg Metformina VELMETIA® 50/1000 mg EFFICIB 50/1000 mg Saxagliptina ® ONGLYZA 100 mg/24 horas 100 mg ® ® 5 mg 5 mg/24 h ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico Efectos secundarios de los inhibidores de DPP-4 Estos fármacos son bien tolerados, los efectos secundarios que se han descrito son poco frecuentes y tienen un buen perfil de seguridad (1,5,9). Los inhibidores de la DPP-4 son muy específicos de esta enzima y, en general, apenas tienen efecto sobre otras dipeptidil peptidasas. Los efectos secundarios que se han descrito con sitagliptina, vildagliptina y saxagliptina son: 1. Efectos gastrointestinales: náuseas, diarrea, flatulencia, vómitos, dolor abdominal. Se han referido casos postcomercialización de pancreatitis con el empleo de sitagliptina, por lo que debería usarse con precaución en pacientes con antecedentes de pancreatitis. Con el uso de vildagliptina se han objetivado elevación de las transaminasas con dosis de 100 mg al día en una sola toma, por lo que este fármaco se administra en dosis de 50 mg cada 12 h. Es necesaria la monitorización de la función hepática durante los primeros meses. En la ficha técnica de saxagliptina no se han referido casos de pancreatitis ni de elevación de transaminasas a la dosis de 5 mg/d. 2. Efectos neurológicos: cefaleas. 3. Efectos metabólicos: hipoglucemias, más con el uso combinado con sulfonilurea. 4. Efectos respiratorios: nasofaringitis. 5. Reacciones adversas adicionales: angioedema, erupción y urticaria. En relación con sitagliptina se ha referido a la aparición de problemas exfoliativos cutáneos como el síndrome de Stevens-Johnson. Estos fármacos no requieren ajuste de dosis en caso de insuficiencia renal leve, (aclaramiento de creatinina > 50 ml/min), dado que la experiencia es limitada y no se recomienda con insuficiencia renal moderada-grave. Están contraindicados en caso de cetoacidosis diabética, insuficiencia hepática, alcoholismo, problemas que puedan ocasionar hipoxia tisular. Su seguridad y eficacia no ha sido establecida en niños, embarazadas y lactantes. No tenemos aún datos de la seguridad a largo plazo, aunque recientes meta-análisis retrospectivos de los ensayos clínicos de vildagliptina (14) y saxagliptina (15) no han identificado ninguna alerta de seguridad cardiovascular. Se están realizando estudios controlados a largo plazo para conocer la seguridad cardiovascular con sitagliptina (16) y saxagliptina (17). Bibliografía (1) Neumiller JJ, Wood L, Campbell RK. Dipeptidyl peptidase-4 inhibitors for the treatment of type 2 diabetes mellitus. Pharmacotherapy 2010;30:46384. 2. Miller S, St Onge EL. Sitagliptin: dipeptidyl peptidase IV inhibitor for the treatment of type 2 diabetes. Ann Pharmacother 2006;40:1336-43. 3. Ahren B. Vildagliptin: an inhibitor of dipeptidyl peptidase-4 with antidiabetic pro- 33 ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico perties. Expert Opin Investig Drugs 2006; 15:431-42. 4. Dhillon S, Weber J. Saxagliptin. Drugs 2009;69:2103-14. (5) Gerich J. DPP-4 inhibitors: what may be the clinical differenciators? Diab Res Clin Pract 2010, doi:10.1016/j.diabres.2010.07.06 (6) Scheen AJ. Pharmacokinetics of dipeptidylpeptidase-4 inhibitors. Diabetes, Obes Metab 2010;12:648-58. (7) Ahrén B, Landin-Olsson M, Jansson PA, Svensson M, Holmes D, Schweizer A. Inhibition of dipeptidyl-peptidase-4 reduces glycemia, sustains insulin levels and reduces glucagon levels in type 2 diabetes. J Clin Endocrinol Metab 2004;89:2078-84. Diabetes tipo 2: tratamiento con incretinas (8) Mudaliar S, Henry RR. Effects of incretin hormones on beta-cell mass and function, body weight, and hepatic and myocardial function. Am J Med 2010;123:519-27. 34 testinal triglyceride-rich lipoprotein particles in patients with type 2 diabetes. Diabetologia 2006;49:2049-57. (11) Ficha técnica de Sitagliptina (12) Ficha técnica de Vildagliptina (13) Ficha técnica de Saxagliptina (14) Schweizer A, Dejager S, Foley JE, Couturier A, Ligueros-Saylan M, Kothny W. Assessing the cardio-cerebrovascular safety of vildagliptin: meta-analysis of adjudicated events from a large Phase III type 2 diabetes population. Diabetes Obes Metab 2010;12:485-94. (15) Frederich R, Alexander JH, Fiedorek FT, Donovan M, Berglind N, Harris S, et al. A systematic assessment of cardiovascular outcomes in the saxagliptin drug development program for type 2 diabetes. Postgraduate Med 2010;122:16-27. (9) Amori RE, Lau J, Pittas AG. Efficacy and safety of incretin therapy in type 2 diabetes: systematic review and meta-analysis. JAMA 2007;298:194-206. (16) http://www.clinicaltrials.gov/ct2/ show/NCT00790205?term=%22 TECOS%22&rank=1 (10) Matikainen N, Mänttäri S, Schweizer A, Ulvestad A, Mills, Dunning BE, et al. Vildagliptin therapy reduces postprandial in- (17) http://www.clinicaltrials.gov/ct2/ show/NCT01107886?term=SAVOR&ran k=1 Puntos Clave Los fármacos inhibidores de DPP-4 presentan las siguientes ventajas: ● Eficacia en el control glucémico en monoterapia (sitagliptina) y en combinación con otros hipoglucemiantes. ● Toma independiente de las ingestas. ● Prácticamente neutros con respecto al peso corporal. ● Bajo riesgo de hipoglucemias (aumento si uso concomitante con sulfonilureas o insulina). ● Posible mejoría de la función de la célula β. ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico Algoritmos del tratamiento de la diabetes mellitus tipo 2: ubicación del tratamiento con incretinas Maite Ortega y Roberto Domínguez Servicio de Endocrinología y Nutrición. Fundación Jiménez Díaz. Madrid. E l gran aumento de incidencia de diabetes mellitus (DM) tipo 2 en los últimos años en todo el mundo y las estimaciones periódicamente publicadas acerca de su importante aumento en las próximas décadas han acelerado el desarrollo y comercialización de nuevos fármacos hipoglucemiantes. Las diferentes sociedades científicas encargadas del desarrollo de guías de práctica clínica y algoritmos de tratamiento para la DM tipo 2 han realizado modificaciones de los mismos en los últimos dos años, basadas en nuevas evidencias científicas e introduciendo los nuevos fármacos que actúan por la vía del GLP-1. En el momento de la elección del fármaco hipoglucemiante el médico debe tener en cuenta factores como el grado de hiperglucemia, riesgo de hipoglucemias, efectos secundarios, contraindicaciones, posibilidad de adherencia al tratamiento, edad del paciente, complicaciones micro y macrovasculares, expectativa de vida, etc. Las diferentes guías de práctica clínica y algoritmos de consenso suponen una herramienta muy útil para tomar decisiones sobre la elección de fármacos, teniendo en cuenta todos estos factores. Todas las guías clínicas del tratamiento de la DM tipo 2 concuerdan en el primer paso del tratamiento basado en la intervención sobre el estilo de vida y la asociación de metformina, valorando en un plazo de 3 meses la eficacia de estas medidas. Cuando en el momento del diagnóstico de la DM tipo 2 la hiperglucemia es intensa y existen síntomas, las guías indican tomar medidas terapéuticas enérgicas que suelen incluir la insulina. Las diferentes guías que en este momento tenemos, presentan algunas diferencias sobre los siguientes pasos a seguir cuando no se han conseguido los objetivos del tratamiento, una vez establecido el primer paso. En este capítulo nos ceñiremos al posicionamiento de las diferentes guías clínicas en relación a los fármacos relacionados con la vía de las incretinas. Consenso ADA/EASD (American Diabetes Association/European Association for the Study of Diabetes) En su algoritmo publicado en diciembre de 2008 (1) se incluye el uso de 35 ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico exenatida como segundo escalón de tratamiento dentro del grupo de “terapias menos validadas”, en asociación a metformina y las modificaciones del estilo de vida. Aunque el algoritmo no incluye el uso de los inhibidores de la dipeptidilpeptidasa-4 (DPP-4), consideran adecuada su indicación en pacientes seleccionados. Guía NICE (National Institute for Health and Clinical Excellence) En la última actualización de mayo de 2009 (2), se considera el uso de los inhibidores de la DPP-4 como segundo fármaco asociado a metformina o sulfonilurea (SU). Su asociación a metformina queda reservada para los casos en los que existe riesgo de hipoglucemia o intolerancia/contraindicación a las SU y la asociación con SU para los casos de intolerancia/contraindicación a metformina. Esta guía considera también la triple terapia con inhibidores de la DPP-4 como tercer fármaco, asociado a metformina y SU cuando no se ha conseguido un control óptimo y no se considera apropiado el uso de insulina. En cuanto al análogo de GLP- 1, exenatida, se considera su uso en triple terapia, asociado a metformina y SU en pacientes obesos con control metabólico inadecuado. El mantenimiento de la triple terapia con exenatida se reserva para aquellos pacientes que presenten una reducción de al menos un punto en la HbA1c, y una pérdida de peso de al menos el 3% sobre el peso inicial a los 6 meses. Diabetes tipo 2: tratamiento con incretinas Guía de la Asociación Americana de Endocrinólogos Clínicos (AACE) 36 Publicada en septiembre/octubre 2009 (3) tiene rasgos diferenciales respecto a las demás. Considera el uso de los inhibidores de la DPP-4 como primer escalón en el tratamiento de la DM tipo 2 bien en monoterapia si la HbA1c está entre 6,5 y 7,5% o bien asociado a metformina si la HbA1c está entre 7,6 y 9,0%. También consideran como primer escalón terapéutico el uso de inhibidores de DPP-4 en triple terapia, asociada a metformina y sulfonilureas en pacientes con DM tipo 2 con HbA1c >9,0% asintomáticos y que no estuvieran con tratamiento hipoglucemiante previo. En esta guía se plantean algoritmos variados con múltiples opciones de tratamiento cuando fracasa el primer escalón terapéutico. Los inhibidores de la DPP-4 se encuentran preferentemente incluidos en terapia de asociación dual y en triple terapia, aventajando su posición a las glitazonas y a las sulfonilureas. Guía de práctica clínica de la Asociación Canadiense de Diabetes (CDA). 2008 Plantea utilizar los inhibidores de DPP-4 en asociación con metformina cuando con ésta en monoterapia no se ha alcanzado el objetivo de control o en triple terapia, asociado a metformina y a cualquiera de los demás hipoglucemiantes orales disponibles cuando fracasa el segundo escalón de tratamiento (4). Cuando se publicó esta guía el análogo de GLP-1, exenatida, no estaba aún en el mercado canadiense por lo que no está incluido en la misma. ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico Guía Global para la Diabetes tipo 2 de la Federación Internacional de Diabetes (IDF) Se publicó en el año 2005 y, por tanto, no incluye fármacos del grupo de las incretinas. En el año 2008 este organismo internacional desarrolló la “Guía para el control de la glucosa postprandial” (5) basándose en la evidencia que existe hasta el momento acerca de la hiperglucemia postprandial y su asociación con las complicaciones de la diabetes, tanto a través de su contribución a la HbA1c como de forma independiente en el desarrollo de retinopatía, neuropatía y nefropatía diabética. En ella describen como fármacos a tener en cuenta tanto los inhibidores de la DPP-4 como los análogos de GLP-1, aunque no especifica el momento en el que consideran que deberían ser introducidos o sus posibles asociaciones con otros fármacos. Guía del Grupo de Estudio de la Diabetes Mellitus en Atención Primaria (GEDAPS) En el año 2009, este grupo de estudio español publica el algoritmo del tratamiento de la DM tipo 2 (6), considerando los inhibidores de la DPP-4 como uno de los fármacos a asociar cuando han fracasado las medidas higiénico-dietéticas y la metformina. Propone la utilización de exenatida, en algunos casos seleccionados como alternativa a la insulina, en pacientes con índice de masa corporal mayor o igual a 35 kg/m2 en asociación a metformina y/o SU. Los detalles más importantes de cada algoritmo se detallan en la tabla 1. Tabla 1 Resumen de indicaciones de inhibidores de la DPP-4 y análogo de GLP-1 Inhibidores de la DPP-4 Análogo GLP-1 ADA/EASD Casos seleccionados Asociado a metformina NICE Doble terapia asociado a MET o SU Triple terapia acociado a MET y SU Triple terapia acociado a MET y SU AACE Monoterapia si Hba1c 6-7% Doble terapia asociado a MET o TZD si Hba1c 7-8% Doble terapia con MET, SU o TZD Triple terapia con MET y SU o TZD CDA Doble terapia asociado a MET Triple terapia No comercializado en la fecha de publicación IDF Incluido en la guía Incluido en la guía GEDAPS Doble terapia con MET Asociado a MET y/o SU ADA: Asociación Americana de Diabetes; EASD: Asociación Europea para el Estudio de la Diabetes; NICE: Instituto Nacional para la Salud y la Excelencia Clínica; AACE: Asociación Americana de Endocrinólogos Clínicos; CDA: Asociación Canadiense de Diabetes; IDF: Federación Internacional de Diabetes; GEDAPS: Grupo de Estudio de la Diabetes Mellitus en Atención Primaria. DPP-4: dipeptidilpeptidasa-4; MET: metformina; SU: sulfonilureas, TZD: tiazolidindionas 37 ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico Bibliografía (1) Nathan DM, Buse JB, Davidson MB, Ferrannini E, Holman RR, Sherwin R, et al. Medical Management of hyperglycemia in type 2 diabetes: a consensus algorithm for the initiation and adjustment of therapy. Diabetes Care 2008;31:1-11. (2) NICE clinical guideline 87 (update of NICE clinical guideline 66). The management of type 2 diabetes. May 2009. Disponible en: www.nice.org.uk Diabetes tipo 2: tratamiento con incretinas (3) AACE/ACE Consensus Statement. Statement by an American Association of Cli- 38 nical Endocrinologists/American College of Endocrinology Consensus Panel on Type 2 Diabetes Mellitus: An Algorithm for Glycemic Control. Endocr Pract 2009;15:54059. (4) Canadian Diabetes Association 2008 Clinical Practice Guidelines for the Prevention and Management of Diabetes in Canada. Can J Diabetes 2008;32 (suppl 1):1-215. (5) Guía para el control de la glucosa postprandial 2008. Disponible en: www.idf.org (6) Algoritmo de tratamiento de la DM 2. GEDAPS 2009. Disponible en: www.redgedaps.org. Puntos Clave ● Los fármacos incretinmiméticos aportan una nueva herramienta en el tratamiento de nuestros pacientes diabéticos. ● Tanto los inhibidores de la DPP-4 como los agonistas del GLP-1 ayudan a mejorar el control glucémico con cierto grado de seguridad, ya que tienen bajo riesgo de hipoglucemias. Además, los análogos de GLP-1 nos ayudan en el control del peso de los pacientes diabéticos obesos. ÍNDICE ACTUALIZACIONES El Médico Webs de interés http://www.naos.aesan.msps.es http://www.msc.es/estadEstudios/estadisticas/encuestaNacional/home.htm http://www.nice.org.uk http://www.idf.org http://www.redgedaps.org 39 ÍNDICE ESDCDI0014 ONGY1010WCIN