008-016 ESADE 28/12/06 07:36 Página 8 DOSSIER >> STOCK PHOTOS Recomendaciones de mejora para el marketing industrial: aprendizaje desde el marketing de consumo Tendencia a la colaboración Un proveedor que gestiona la categoría a su cliente es una de las grandes oportunidades en el marketing industrial, en lo que es una muestra clara hacia la colaboración y la creciente dificultad de diferenciar entre distintos marketings. A continuación se exponen algunas tendencias en consumo que ya son una realidad, o lo serán pronto, para los sectores industriales. Gerard Costa Guix, Profesor Titular del Departamento de Dirección de Marketing de ESADE |8 08 AUTOR: COSTA GUIX, Gerard TÍTULO: Recomendaciones de mejora para el marketing industrial: aprendizaje desde el marketing de consumo. Tendencia a la colaboración FUENTE: “MK Marketing+Ventas”, Nº 220 Enero de 2007. Pág. 8 DESCRIPTORES: • Distribución • Marketing de Consumo • Marketing industrial • Orientación al Cliente • Trade Marketing • Ventas RESUMEN: En un nuevo escenario de marketing industrial, los proveedores evolucionan hacia una orientación a las empresas distribuidoras como mercado, mientras las fronteras entre los distintos tipos de marketing se difuminan cada vez más. A partir de esta reflexión, el autor revisa los orígenes y las peculiaridades del industrial, en contraposición al de consumo, para concluir con algunas de las tendencias de este último que son, o serán muy pronto, una realidad para los sectores industriales. El objetivo de este artículo es conceptualizar las novedades o saltos cualitativos que el marketing industrial puede aprovechar de una tendencia en los mercados de consumo como es el Trade Marketing. 008-016 ESADE 28/12/06 07:36 Página 9 www.marketingmk.com y, no…, todo esto del marketing en otros sectores está muy bien, y los ejemplos que hemos visto son apasionantes, pero verás Gerard, mi sector es muy distinto, es otra cosa…, apasionante, pero no se puede aplicar nada de lo que hemos visto”. Cuando uno de los participantes en algún programa ejecutivo acaba con este resumen de una sesión, es que algo no ha funcionado. Y es que, el marketing es una disciplina donde aprender de otros sectores, entornos, para mejorar el propio proceso de toma de decisiones. Desde los años 80 el escenario en los mercados de consumo es el de empresas líderes en marketing al consumidor final que han generado un proceso diferenciado: el marketing industrial hacia las empresas distribuidoras. El dossier especial de “MK Marketing+ Ventas” de enero de 2006 planteaba las usuales dudas sobre el marketing industrial; desde que es uno de los de más futuro por la necesidad de evolución y diferenciación, hasta la urgencia inaplazable de romper con el anclaje de la orientación al producto. Dos conclusiones sobre una misma realidad: la orientación al mercado en el escenario industrial está en progreso, y puede y debe aprender de sectores más evolucionados en desarrollar una disposición empresarial al mercado. Las fronteras entre los tipos de marketing se diluyen, o simplemente se hacen más complejas. Los manuales de marketing siguen diferenciando los marketings de productos, de servicios, de consumo o el industrial. Y, aunque siguen existiendo casos extremos, se difuminan los límites, como se ve en algunos ejemplos: “U - Caterpillar, empresa industrial especialista mundial en sofisticada maquinaria, se redefine tras la crisis de los 90: “Compra el acero, consigue la compañía. ” Propone diferenciarse de los nuevos competidores low-cost (de bajo coste) asiáticos a través Nº 220 • Enero de 2007 no sólo del producto, sino también del servicio que los clientes recibirán de sus distribuidores locales. - Migros, líder suizo en el servicio de distribución en supermercados, poseía en 2004 siete plantas de producción para su marca distribuidora y cualquier otra europea interesada. Un marketing de servicios que acarrea uno industrial de productos. - SAP, especialista mundial en soluciones ERP (sistemas de planificación de recursos empresariales), que ha logrado su privilegiada situación en el mercado gracias a su marketing de servicios para sus distribuidores consultoras, las cuales reparten su producto a cambio de tener asegurado su mantenimiento. Cada uno de estos casos plantea la dificultad creciente de mantener diferenciadas tipologías de marketing. A partir de esta reflexión, a continuación se revisan los orígenes, las peculiaridades del marketing industrial, en contraposición al de consumo. Y se concluye que algunas de las tendencias en consumo son ya una realidad, o lo serán en el futuro, para los sectores industriales. Marketing es una disciplina reciente, con infinidad de definiciones, para la que se utiliza habitualmente la de la American Marketing Association (www.msi.org): “Marketing es una función organizacional y un conjunto de procesos para crear, comunicar y entregar valor a los clientes y para gestionar las relaciones con ellos de tal modo que beneficie a la organización y a sus stakeholders (públicos de interés)”. En ella se recoge la peculiaridad del marketing de ser, al mismo tiempo, una función organizacional y una orientación empresarial, ambas demasiado frecuentemente confundidas. El especialista funcional es habitual ya en los sectores industriales, sea el experto en elaborar los catálogos de ventas (salesfolders), el técnico que organiza visitas de clien9 | 008-016 ESADE 28/12/06 07:36 Página 10 DOSSIER >> Si bien siguen existiendo casos extremos, las fronteras entre los distintos tipos de marketing se diluyen. El marketing entra en una nueva dimensión de crear valor al cliente tes a la fábrica, o el responsable de la estrategia de comunicación integrada. La voluntad de crear valor a los clientes como filosofía empresarial es mucho más compleja; parece imprescindible que vaya asociada a una misión muy claramente orientada al cliente, y que se vea más como un camino que como un destino. Ambos significados surgen y se consolidan en los mercados de consumo. La primera función de marketing aparece en los años 60 en Procter&Gamble, una posición extraña en una organización por funciones. Mientras el resto de departamentos son claramente funciones con resultados (outputs) fácilmente cuantificables y, por lo tanto, evaluables, marketing es un promotor transversal de un plan que implica al resto de departamentos, un tutor directivo cuyos resultados son más difícilmente mesurables y evaluables. Marketing o marketings La disciplina marketing ha sido desagregada entre aplicaciones que parecían claramente diferenciadas. Miguel Santesmases (2004) se refiere al Marketing Especial, diferenciando el industrial y el de los servicios: ✔ Marketing industrial: es aquel caracterizado por la utilización del producto comercializado por otra empresa que lo incorpora a su proceso productivo. Sin embargo, hoy existen empresas de consumo, como los productores de detergente, postres lácteos o automóviles, que realizan un marketing de consumo o su solución se incorpora al proceso productivo de otra empresa llamada distribuidor. ✔ Marketing de servicios: diferenciado del de bienes físicos, y un sector con un peso creciente en la producción nacional. Sin embargo, conviene pensar si el | 10 valor creado al cliente tiene una componente prioritaria de producto o de servicio, si el comprador de una cerveza adquiere un producto físico, o una cercanía, horario, surtido o frío de la tienda, o ambas. La orientación al mercado La investigación en marketing está profundizando en definir las dimensiones que caracterizan a una empresa orientada al mercado, para después medirlas y mejorarlas. Existen diferentes métodos contrastados para llevarlo a cabo; aquí se utiliza el cuestionario generado desde ESADE: cerrado, completado por los directivos, que mide las dimensiones de la orientación al cliente, a la competencia, la capacidad de coordinación interdepartamental, la orientación al beneficio de la compañía, la generación y diseminación de información de mercados formal e informal, y, finalmente, el diseño e implantación de la ejecución. Las investigaciones muestran que las empresas de sectores industriales tradicionales obtienen, como sector agregado, las siguientes evaluaciones comparativas: - No son líderes en ninguna de las dimensiones; en cada una hay otro sector (consumo, distribuidor, servicios profesionales …) más orientado al mercado. - Presentan como áreas significativas de mejora comparativa la orientación al cliente, la coordinación interfuncional, y el diseño e implantación de respuestas. Por el contrario, las empresas de productos de consumo y el sector detallista de distribución destacan en orientación al mercado en diversas dimensiones. Son interesantes referentes sobre buenas prácticas o tendencias en marketing, y más, con los cambios acaecidos en su interrelación. Nº 220 • Enero de 2007 008-016 ESADE 28/12/06 07:37 Página 12 DOSSIER >> namientos diferenciados. Así, la misma empresa es propietaria de Ikea y Habitat, o de Alcampo y Decathlon. ¿Consumo o industrial? Desde los 90 se asiste a un entorno competitivo distinto en consumo entre proveedores y distribuidores. Los primeros evolucionan hacia un nuevo destino: de una orientación al consumidor como mercado, a simultanear ésta con el enfoque a las empresas distribuidoras como mercado, en un nuevo escenario de marketing industrial. La razón de este cambio es la aparición de distribuidores que evolucionan de intermediarios pasivos, especuladores entre el precio de compra y el de venta, a ser organizaciones con una orientación al marketing estratégico: - - - Aplican nuevas políticas de marketing, a partir de una sala de ventas que es un impagable anuncio de veinte minutos mientras está dentro el consumidor. Los resultados han sido espectaculares: las diez primeras marcas en distribución en España han evolucionado de ser un 19 por 100 de las ventas en 1991 al 65 por 100 en 2005, o llegan a tener con su marca distribuidor el 80 por 100 de participación en algunos mercados. Compiten por un consumidor que, por efecto de la globalización, percibe una falta de diferenciación de los productos, y es atraído por el valor del servicio ofertado por el distribuidor. Éste es el caso de la elección de la tienda por el surtido, el parking y ocio adjunto, por el posicionamiento en precio hard-discount, por las multisalas de cine… ¿Yogures industriales? Algunos de los efectos que este cambio ha tenido para los proveedores son: ✔ Su proceso de marketing se desdobla. Deben crear valor, tanto a los consumidores finales, como a las empresas distribuidoras. Es igual de desastroso lanzar al mercado un producto sin demanda final, como hacerlo sin presencia en los canales de distribución. Desarrollan estrategias de segmentación y posicionamiento: un mismo grupo empresarial es capaz de desarrollar posicio- STOCK PHOTOS ✔ Su estructura de marketing se desdobla. A un marketing estratégico, centrado en el consumidor, y un departamento de ventas táctico, enfocado al push al canal, se añade un tercer departamento, el Trade Marketing. Esto permite lograr dos objetivos: generar estrategias de marketing al canal y unir dos departamentos separados: el de marketing y el de ventas. Todo ello en compañías donde el director general es cada vez más un director comercial, con menos investigación, producción y tesorería gestionada en España. El mercado referencia en marketing de productos de consumo está generando proyectos de business to business (B2B) o negocio a negocio en relación con sus clientes distribuidores, donde se generan ideas de estrategia y estructura que utilizarán, en un corto plazo, los sectores exclusivamente industriales. | 12 ✔ Su presupuesto de marketing evoluciona. El pequeño presupuesto de below the line (por debajo de la línea del presupuesto de marca dado a ventas para su relación con los distribuidores) pasa a ser, según un estudio de De Vicentis (1995), más del 51 por 100 del de marketing para los proveedores de productos de consumo en EE.UU, creciente y extrapolable en Europa desde inicios del siglo XXI. Nº 220 • Enero de 2007 008-016 ESADE 28/12/06 07:37 Página 13 www.marketingmk.com ✔ Su cuadro de mandos de ventas evoluciona. De empresas que analizaban sus ventas por datos indirectos (paneles de consumidores o de detallistas, porcentajes de mercado), pasan a ventas por distribuidor. Controlan tanto el sell-in (la cantidad de producto que entra en las plataformas logísticas de los clientes), como el sell-out (la salida de esta cantidad de las tiendas del distribuidor al cliente final, el consumidor que recoge el producto por el escáner). ✔ Su relación con el distribuidor varía. Dentro de un entorno de muy fuerte presión por el poder adquirido por el cliente, el marketing evoluciona hacia una colaboración que permita llegar a situaciones de win-win (“todos ganan”). Aparece aquí el Category Management: el proveedor La arquitectura de ventas EN EL SECTOR INDUSTRIAL La cada vez más usual arquitectura de ventas, la gestión de diferentes tecnologías adecuadas a distintos segmentos de clientes, se basa en el peso de los componentes de producto y servicio en la actividad de venta. Visto cómo consumo recoge la figura industrial del Key Account Manager (KAM)), o Gestor de Cuentas Clave, y la mejora, es posible pensar en una arquitectura de ventas en tres grupos potenciales: ✔ Fuerza de Ventas. Gestores de un alto número de clientes, muy centrados en el producto. Su objetivo es la transacción, sobre la que se medirá la eficacia de su gestión. Su función prioritaria es comunicar al cliente el diferencial técnico de nuestro producto, en una función basada en el monólogo. ✔ Key Account Manager. Gestor de un número medio de clientes, aportando tanto producto como servicio. Su función es de consultor: conoce el sistema productivo de todos los clientes similares, el producto propio y el de la competencia, y por todo ello es percibido por el cliente como una ayuda. Su aportación queda recogida en dos máximas del clásico Regis McKenna (1991): “el marketing de un producto es el marketing de un servicio es el marketing de un producto” y “el marketing pasa de ser un monólogo a convertirse en un diálogo”. ✔ Equipos multifuncionales. Son gestores de un número pequeño de clientes especiales que aportan una diferenciación en servicio. Analizan la situación y tienen suficiente autoridad para iniciar un proceso de nuevas soluciones hechas a medida, denominadas en algunos sectores original equipment manufacturers (OEM). Antes se indicaba que la figura del KAM, procedente del sector industrial, ha sido revisada y potenciada en consumo. Otra vez un repaso desde la consultoría estratégica, muy por encima del trabajo diario pero sin duda realista, como la de Hancock (2005), desde Mckinsey, reseña que ante clientes más demandantes que nunca, serán necesarios desarrollos novedosos como los denominados entre- Nº 220 • Enero de 2007 prise selling o solution selling. Éstos son algunos de los desarrollos previstos a su alrededor: ✔ Función de Customer Developer. Asignación de pocos clientes, tanto activos como potenciales o perdidos, por cada KAM. Su metodología de profundizar en el proceso del cliente es la que permitirá generar los nuevos. ✔ Organización matricial. Siendo aún mayoría las empresas con una estructura meramente departamental, el KAM, como foco de la orientación al cliente, lleva a asignar personas de los diferentes departamentos implicados en los equipos de trabajo que capitanea (profesionales de atención a cliente, producción, diseño, finanzas….) ✔ Medición por rentabilidad por cliente. El KAM, como gestor de una unidad de cliente, con su cuenta de explotación y su planificación económica a largo plazo. Un gerente que, para obtener unos resultados, defiende unos niveles de inversión mediante la solicitud a dirección de diferentes propuestas de recursos. ✔ Perfil profesional de analista y directivo, de analista del negocio del cliente, que proviene de este último (directivos de Decathlon incorporándose a Nike o Adidas, directivos de Caprabo volviendo a la industria alimentaria), porque domina su proceso productivo, y tiene la agenda llena de interlocutores del cliente. Y debe proponer cambios en la relación fundamentados en los beneficios que le aportará al cliente. En conclusión, un KAM que no es el super vendedor, sino el analista generador de negocio. El consultor Alan Melkman lo define por contraposición al mejor de la fuerza de ventas: “el KAM se hace, no nace; es analista y soluciona problemas al cliente, no es un vendedor; le conoce tan bien que le genera soluciones adecuadas, no le visita para venderle; es un servicio que busca, a través de la experiencia, construir relaciones mediante el mantenimiento de las promesas y la credibilidad, la repetición de la venta”. 13 | 008-016 ESADE 28/12/06 07:37 Página 14 DOSSIER >> Migros, líder suizo en el servicio de distribución en supermercados, poseía en 2004 siete plantas de producción para su marca distribuidor y cualquier otra europea interesada pasa a asesorar y colaborar con el cliente distribuidor sobre cómo gestionar la categoría de productos donde está insertado el suyo. Es decir, el distribuidor subcontrata la gestión de una categoría a un proveedor en quien confía. Marketing industrial: la ola que viene El desarrollo de la disciplina del marketing ha estado relacionado con tendencias surgidas en mercados de consumo, y la más reciente ha sido la diversificación de proveedores de consumo hacia proveedores industriales dentro del Trade Marketing; un marketing industrial, atípico, pero de muy fuertes fundamentos y metodologías. ¿Qué repercusiones tendrá este aprendizaje para el marketing industrial sin entrar en políticas concretas, de difícil extrapolación entre sectores, sino en las dimensiones de estrategia y estructura donde sí es posible aprender entre divisiones constantemente? Lo primero que se plantea es si aumentar la orientación al mercado a través de atacar la estructura o hacerlo mediante la estrategia. Sin duda, ambas están correlacionadas, pero trabajos como el reciente de Lawrence Hrebiniak (2005), desde la Wharton Business School, refrendan que las tres principales razones por las que las buenas estrategias fallan son la ejecución, la ejecución y la ejecución. Es decir, la estructura disponible. De lo aprendido en el Trade Marketing de las empresas de consumo se deduce que: ✔ La orientación al mercado requiere aumentar la eficacia de la relación entre marketing y ventas: romper los silos existentes, y disponer de objetivos comunes para trabajar en la misma dirección. Y, en general, se verá un aumento de la dependencia de marketing de ventas por una sola razón: las actividades de marketing | 14 deberán cada vez más ser medidas en su eficacia a través de la adquisición de nuevos clientes y el aumento y retención de la base de los activos. ✔ La relación entre departamentos debe mejorarse mediante la eficacia de la coordinación interfuncional. Se utilizarán políticas como la rotación interdepartamental (específicamente entre producción, investigación, marketing y ventas), la localización conjunta en oficinas, o la potenciación de los objetivos compartidos entre departamentos. Y merced a la propia mejora de la coordinación, toda la información existente sobre el mercado formal e informal se diseminará con mayor eficacia entre ellos. ✔ Se romperá con la imagen del departamento de marketing puramente analista. Como definía el director general de una empresa de tecnología: “Marketing son todas las cosas que una compañía realiza para desarrollar oportunidades para vender; y las oportunidades, en empresas claramente orientadas a producto pero que mantienen relaciones con los clientes basadas en el servicio personalizado, se producen alrededor de todos los departamentos”. En consumo se han visto ejemplos de puro servicio, sea en la gestión integral de la categoría por el proveedor, o en la optimización logística con los principales clientes con conceptos como el flujo tenso de suministro. ✔ Y el riesgo de una organización poco orientada al mercado es descrito por Conrad Levinson, el autor de “Guerrilla Marketing”: “tener unas ventas conducidas básicamente por el precio, unos clientes que no pueden distinguir nuestros productos y servicios de los de la competencia, y unos clientes preferenciales que frecuentemente no conocen toda nuestra Nº 220 • Enero de 2007 008-016 ESADE 28/12/06 07:37 Página 15 www.marketingmk.com oferta. Si éstos son sus síntomas, revise los elementos estructurales reseñados”. Soluciones, no productos Un proveedor ofreciéndose a gestionarle la categoría a su cliente es una de las grandes oportunidades en el marketing industrial. Si bien no es un concepto nuevo, en él se combina el beneficio ofertado y la diferenciación, que será profesionalizado y mejorado aprendiendo de la voluntad vista en consumo. Un laboratorio de productos oftalmológicos ofrece a sus principales clientes (médicos oftalmológicos en hospitales de alto volumen) la posibilidad de comprar una bandeja monodosis por intervención. A través del diálogo entre Key Account Manager (KAM) y médico, se analiza cómo debe ser la bandeja óptima para el segundo. Además, se cuantifica cómo dicha bandeja ayuda a reducir los costes para el hospital: acortar el número de referencias adquiridas, el de proveedores, el del nivel de stocks y también, evidentemente, cuál debe ser la composición para maximizar la eficacia en las intervenciones. Para ello, el proveedor proporciona información al cliente sobre las novedades en los productos, y le suministra cualquier producto suyo o de la competencia que el cliente solicite. Es decir, se posiciona ante éste como el líder de la categoría, el que más sabe, el que más información le puede dar, y, por encima de todo, como proveedor de servicios. Un sumistrador de tintas para impresión se coloca ante sus clientes como el primero en tecnología e innovación: conoce todas las novedades, su utilidad real, y puede recomendar, como único interlocutor, a sus clientes (imprentas gráficas), qué producto suyo o de la competencia deben utilizar para problemas concretos. Reconstruye su portafolio de divisiones y marcas para consolidar su importancia y credibilidad en una determinada categoría, liquidando su actividad en otras en las que nunca tendrá este papel. Un caso final paradigmático, Dell Computers. Su fundador, Michael Dell, declara que su empresa, denominada generalmente como informática para empresas y consumidores, tiene por principio “el contacto Nº 220 • Enero de 2007 directo con clientes”. Siempre ha comercializado de forma directa, sin intermediarios. Esta filosofía llevó a Dell dentro del lema “producimos bajo pedido, con menores costes de stock para usted”, a aceptar, en 1999, suministrar impresoras de Hewlett Packard a sus clientes. Dell se convertía así en el sorprendente primer cliente mundial de HP, y el experto en la categoría “ordenadores portátiles y periféricos” para sus clientes. Un ejemplo de soluciones de marketing como comprensión de las necesidades del cliente y de ayudarle de una forma rentable para la propia compañía. Marketing como diálogo y colaboración El marketing en sí mismo, y por encima de las diferencias sectoriales de aplicación, entra en una nueva dimensión de crear valor al cliente. El trabajo de investigación de C. K. Prahalad (2004) expone que los directivos que quieran aprovechar oportunidades de negocio deben utilizar un nuevo enfoque en las relaciones con clientes: co-crear valor con ellos a través de experiencias personalizadas. El referente es Philip Kotler, quien contestaba que la principal tendencia en marketing en los años venideros será el Collaborative Marketing: colaborar con los clientes para generarles un valor diferencial, como evolución de la dimensión inicial del marketing como transaccional, o relacional. Las tendencias vistas, que se irán confirmando en el marketing industrial, parten de ese valor a través de dialogar y colaborar con los clientes. ¿Y cómo hacer ese marketing? A partir de los ejes: ✔ Diálogo: un proceso de interactividad con el cliente, profunda involucración por ambas partes, aprendiendo de modo conjunto y con canales de comunicación abiertos para resolver los problemas. ✔ Acceso a poder co-diseñar las soluciones. ✔ Transparencia: reducir la opacidad en precios, costes, márgenes, en definitiva, una transparencia de información que aumente la confianza entre las organizaciones. 15 | 008-016 ESADE 28/12/06 07:37 Página 16 DOSSIER >> tos apasionantes de business to business (B2B) o negocio a negocio en relación con sus clientes distribuidores (un mercado industrial como cualquier otro), donde se generan ideas de estrategia y estructura que, en un corto plazo, utilizarán los sectores exclusivamente industriales. STOCK PHOTOS Una reflexión final para evitar obsesiones innecesarias de hasta cuándo se debe estar aprendiendo, incluso de sectores ajenos al nuestro. Si Ud. no ve demasiado sentido en preocuparse de otros sectores, tampoco se agobie demasiado. Ya decía un clásico en gestión empresarial, como W. Edwards Deming, desde su atalaya de la Calidad Total: “aprender no es obligatorio… tampoco lo es sobrevivir”. Bibliografía - Cannon, J.P. and Homburg, C. (2001) “Buyer-Supplier Relationships and Customer Firm Costs”. Journal of Marketing 65, 29-43 - De Vincentis, John R. y Kien Kotcher, Lauri (1995). “Packaged Goods Salesforces. Beyond Efficiency”. McKinsey Quarterly, ww.mckinseyquarterly.com - Farris, P. et al (2006). “Marketing Metrics: 50+ Metrics Every Executive Should Master”. Wharton School Publ. - Hancock, M. et al. (2005). “Better B2B Selling”. The McKinsey Quarterly,. www.mckinseyquarterly.com - Hrebiniak, L. (2005). “Making Strategy Work: Leading Effective Execution and Change”, Wharton School Publishing - McKenna, Regis (1991). “Marketing is everything”. Harvard Business Review - Prahalad, C. K. & Ramaswamy Venkat (2004). “The Future of Competition”. Harvard Business School Press. Santesmases, M. (2004). “Marketing: conceptos y estrategias”. Ed. Pirámide. ● En 1999, Dell se convertía en el sorprendente primer cliente mundial de HP, y el experto en la categoría “ordenadores portátiles y periféricos” para sus clientes. Un ejemplo de comprensión de las necesidades de los clientes y de ayudarles de forma rentable para la compañía. ✔ Medición: un diálogo basado, mesurado y controlado por la voluntad creciente de la medición de la eficacia del marketing. Esa voluntad parte de la constatación empírica desde ventas, de investigaciones como las de Cannon y Homburg (2001), en las que se remarca que “nuestros resultados demuestran que la venta industrial puede beneficiarse mucho de contar con comerciales entrenados en análisis de costes”; hasta obras de divulgación para directivos como la de Farell (2006), un potencial best-seller sobre indicadores de eficacia. Estas son algunas de las tendencias que veremos en el marketing industrial. El objetivo del artículo era doble: por un lado, insistir en que un directivo de marketing no debería quedarse en los hábitos y costumbres del sector, sino que tiene que revisar todas las parcelas en una higiénica actitud mental de benchmarking. En segundo lugar, el mercado referencia en marketing de productos de consumo está generando proyec- | 16 - 16 Nº 220 • Enero de 2007