Aproximación a la dogmática de la individualización judicial de la medida de internamiento pp. 28-33 Trejo Escobar, M.A. Unive rsidad Tecnológica de El Salvador 1 Aproximación a la dogmática de la individualización judicial de la medida de internamiento 1P oR: MIGUEL ALBERTO Introducción e u a nd o m e re fie ro a la indi vidualizac ión judicial d e las m edid as qu e se imponen a los jóve nes po r la comisió n de hechos deli cti vos, es to es, a la actividad qu e reali za el Juez d e M e no res pa ra determin ar cuál medid a impondrá y por cuánto ti empo, quiero situarme en un ámbito del Derecho Penal Juve nil que me parece confuso, po r no decir arbitrario, en su ap licació n prác ti ca . Tal co nfu sió n obedece al empleo un idireccio nal de un c rit e ri o interpretativo es ui cta m e nt e legaJ isra que reina en la praxis de esta especial parcela de la jurisdicción; pese a que existe, a mi juicio, en el régimen jurídico especial de meno res un marco normativo que posibilita un a interpretació n distinta que aquí propongo. Mi intención , sin más, es poner de rel ieve un aspecco p roblemático que está prese nt e es p ecialme nte en la individu alización judi cia l d e la medida d e internamiento, y o ri entar un a propuesta de solució n en línea co n algu nos criterios destacados que nos da la dogmática de la individualización judicial de las med idas, en especial, cuand o se aplica la medida de internamiento a jóvenes que, al momento de la comisión del il íciro, tenían entre los di eciséis y dieciocho años. Entorno ISSN: 2218-3345 entorno TREJO EscoBAR Co mo parto de la co nvicció n que toda norm a juríd ica nec es ita se r interpretada, incluso en casos de "claro tenor literal", pues el se ntido jurídico de un prece pro legal puede ser distinro a lo que el normal entendimiento deduce del texro aparentemen te claro , traigo a cuenro los co rrespo ndientes incisos de las dos disposicio nes de la Ley Penal Juvenil que dan orige n al pro blema, estos so n: el lnc. 1° del Arr. 17 y el lnc. fin al del An. 15. El primero di ce: La duración dt las medidas no excederti de cinco años, salvo lo dispuesto para los menores que hubiertn cumplido ditciséis años al momtnto de la comisión del hechon. ce El segundo: ce Cuando la infracción fuere cometida por un mmor, qut lmbiere cumplido dieciséis años al momento dt su comisión, el juez podrti ordenar el internamiento por un término cuyos mínimo y máximo, serdn la mitad de los establecidos como pena de privación de libertad w la legislación penal respecto de cada delito. En ningún caso la medida podrd exceder de siete m1o!l•. Para el p la nte o d e mí t es is: cela aplicación de las medidas en materia penal juvenil se rige por el sisuma del 'libre espacio dejuego~ , intentaré, en primer luga r, una breve delimitació n co nceptual de lo que enti endo por ind ividuaJización judicial de las medidas en el Derecho Penal Juven il ; en segundo luga r, entraré aJ planteamiento del problema qu e presenta esa actividad judicia l c u a ndo d e la m e did a de internam iem o se trata; y, en terce r lugar, dejaré esbozado, co nrextualmem e, que el mod elo que sub yace en la Ley Pena l Juve nil, en cuanto a la individuaJización judicial de las medidas, es el del "libre espacio de juego" y no " el de la medida exacta o fija". Al fi nal , co mo no puede se r de otro modo , aparecerá mi co nclusión precedida de las razo nes en que la fundam ento. Desarrollo H ay un a di fe rencia e ntr e " determinación legal de la medida" e "individualiwción judicial de la medida". Para una clara inrelige ncia de este di st ingo , res ult a obli ga do el refe rente insoslaya ble del Códi go Penal y de las Leyes Penales Especiales qu e tipifican los hec hos punibles. En esos ordenami enros jurídicos co n st a ta m os qu e la d etermin ac ió n legal de la co nsecuencia jurfdica puniti va la ha realizado el legislador al es tablece r, en abs tracto, la sa nció n que asoc ia a cada hecho, fijand o un máx imo y un m ínim o de pena para cada deliro. De ese m odo pone a disposición del Ju ez un " espacio limitado dejutgo", similar Mayo 2006, N°. 35 Aproximación a la dogmática de la individualización judicial de la medida de internamiento pp. 28-33 Trejo Escobar, M.A. Universidad Tecnológica de El Salvador - Aproximación a la dogmática de la individua lización judic ial de la med id a de intern ami ento co nsigo, dos mo me nros distimos: un o c ualirari vo y otro c ua ntita ti vo e n el razo nami enro judicial. al de una "cancha marcada" q ue le traz..'l el campo dentro del cual puede moverse. Esos límites vistos co mo fro nteras inferior y superi o r se convie n en de esa fo rm a en el área de mani o bra qu e el Ju ez no puede rebasa r ni h acia arr iba ni h ac ia abajo. A este ámbi ro pertenece la agravac ió n o at e nua c ió n de la pena , seg ün s i co n c urr e n o n o c i rc un sran c ias qu e modifi ca n la respo nsabil idad pe nal (Arr. 64 C P), la pe nalidad de las difere nres formas de auroría - d irecta, medi ata y coauro ría- y de part icipación crimi nal instigac ió n y co mp licidad- (A rts. 65 y 66 CP), la punibilidad del delito consumado (Art. 62 C P) co mo la de la tenrativa o d e liro imp e rfec t o (A rt . 68 C P), la pe nalidad de los co ncursos - ideal o realde del itos (Arts. 70 y 7 1 CP), entre ot ros. En cambi o, en la individual izació n judicial es el Ju ez qu ien asume la rarea de fij ar la medida de la sanció n que im po nd rá en el caso co ncreto, en base al desvalo r del he-cho rea liza- do por el auto r y en Entorno ISSN: 2218-3345 proporc ió n a s u culp abilidad (Arr. 63 C P), para ello debe ten er en cuenta: la extensión del dañ o o d el peli g ro provocado al bien jurídico, la calid ad de los motivos que impulsaro n al auto r a rea lizar el h ec h o , la m ayo r o m e n o r co mp rensió n del ca rác ter ilícito de la co nd ucra, las circunsta ncias perso nales del suj eto, es pecialm em e, las eco nó mi cas, sociales y culturales, pe ro sin pasa r de los límites mínim o y máx imo establec idos legalm ente para cada delito y, al di ctar se nte nc ia, es tá ob li ga do a razo nar los motivos q ue justifi can la proporción de la sa nción impuesta , as í reza el Arr. 62 lnc. 2 ° d e l Cód igo Pe n a l que se a pli ca, nacu ralmenre, a los adu ltos. C ierra la d isposició n uheriorm em e citada, en la parte final del inciso tercero, as í: "En ning1Ín caso podrá sobrepasar ~1 máximo de la determina". p~nn de prisión qu~ la lq E n el á mbi to Pe na l Ju ve nil a l proceder el Ju ez a la individualización judi cial de la medid a debe tener en cuenta qu e és ta , a l posee r un a fin a lidad pr im ord ialm ente socia l-edu ca ti va y no repres iva, sea necesa ria , idónea y justa a los fin es qu e co n su imposición se han previsro para el suj em al que se le ap lica rá. Esros rrcs aspecms: necesa ri a, idó nea y jus ta, qu e le dan suste m o al principio de la propo rcionalidad de la med ida, traen En el primero , el Ju ez debe proceder, sobre la base de la necesidad' e ido neidad' de la medida , a hacer un a elecció n de índo le cualitativa, dada la am plia vari edad de medidas que ex isten en este ámbito (Art. 8 LPJ 3 ); pero como la selección de la medid a necesari a e id ónea no puede ser arbitr ar ia, pa ra s u escog imicnro debe co nsiderarse la medid a más co nveniente que le h aya reco m e ndado , co n las jus tifi cacio n es del caso, el equip o de especialistas en el estud io psicosociaJ . Es t e in s trum e n to no pu ed e soslayarse, pues, po r prescripció n legal , el Juez debe tenerlo ..... tn cu~nta al dictar la resolución para aplicar In nudidn mds conuenim tl' (Art. 32 In c. 1° LPJ); no obstante , bien puede el Juez decidirse po r una m ed id a dis rinr a a la reco m e nd ad a, fac ultad qu e le es inh erente a su eje rcicio jurisd iccional, pues la "recomendació n de la med ida" que aparezca en el es rudi o psicosoc ial e n modo alg uno puede se r entendida como un a "camisa de fuerza", esro es, vinculante; ahora bien , si se apa rra de la medida que le ha sido reco mendada por e l equ ipo d e es pec ialis t as d e be jus tifi ca r s u d ecisió n ex poni e nd o las razo nes en que se fundamenta para el ca mbi o, es decir, por qué ésta y no aq uélla le parece necesari a e id ó nea para los fines que co n su aplicació n ha previsto (Are. 32 ln c. 3° LPJ ). E n e l segu nd o m o m e n t o, d e be procede r a la delimitac ió n cuanritativd', a la justa proporción de la medida que se d eba impo ner, cons id e ra nd o el libre espacio de juego que le provee el Art. 17 ln c. 1° LPJ , o el del área de mani ob ra que le dete rm ina la ley, esto es, el mínimo y el máx imo que res ulte, si es el caso en la ap licación del Art. 15 lnc. final LPJ . Puede califica rse, en princ ipio, la activid ad de la individ ual ización judicial d e las m ed id as co mo un acto d~ discr~cionalicúuljurídicammu vinculado~ , Mayo 2006, N°. 35 entorno Aproximación a la dogmática de la individualización judicial de la medida de internamiento ~ pp. 28-33 Trejo Escobar, M.A. Univer idad Tecnológica de El Salvador Aproxim~c1on a 1~ dogm~tica de la individualización judicial de la medida de internam iento po r c u :~ nr o el Ju ez de Me no res puede m ove rse d isc rec iona lm e nt e e n la in div id u:d izac ió n , un a vez so rt ea d o el mo men to cualita rivo, fijand o cl nw nro d e la m edid a, pero sin rebasa r el rec h o o m ~x im o qu e co n carác t er ge n e ral prcst' IH:t ll rod as las medid as co m o as pec ro vi ncubnre. Aho ra b ien, b Ley Penal Ju ve nil p revé e n abs rracw q ue cll ímir c m áx im o d e d ur ac ió n d e un :t ú ni ca m e did a impu es ta o d e d os o m:í.s a pli ca d as e n fo rm a sim u lrán ca, suces iva o alrern:ui va, no exceda d e cin co a ños, a ral efecto di s p o n e e l A re 17 In c. 1° qu e: "Ln duración de lns medidns no rxcederd de cinco tl!ÍOS.. Ap oya d os e n ese e nun c iad o lega l acu ñ e m os, e nron ces, un a pr im e ra co n c lu s ió n ge n é ri ca: e l lfmir e fi jad o lega l m e nt e co n ca rác re r ge n e ral pa ra c u ales qui e ra de las m edidas qu e se p uede n impo ne r e n rn a rc ri a p ena l j u ve nil esrá e n la c u a n ría m áx im a d e c in co a ños. A contm rio sensu, n o se fij ó, co n carác te r ge ne ral, un límire c u a nrirari vo m í nim o. As p ec t o qu e n os ll ev arí a prelimina rm e nre a afirm a r qu e el sisre m a ad o pt ad o p o r la LPJ e n c u a n ro a la impos ició n d e las m edi das es el del "libre rspacio de j uego", p ues , co m o se ha visto, no ex iste u n límit e mín imo, a un q ue sí un límit e m áximo. Sin e mbargo, pa ra co rro bo ra r la regla, el legislado r prev ió dos exce pcio nes, una alud e al lími te mínim o y o tra ve rsa sobre e l lfmire m áx im o. As í, se di spuso, e n cua nro a la prim e ra exce pció n qu e, e n tratá nd ose d e la m edida de li berrad as isrida cs ra se fija ra " ... por un plaw mlnim o de seis meres" (A r t. 14 LPJ ), lo c u a l es co mpre nsibl e po r la rev isió n obl ig:u o ri a y o fi ciosa d e ell a, como d e c ualqu ie ra o tra, cad a rres m eses e n la fase d e ejecució n , "a fin de controlar que sr rJtán mmpliendo los objeti110s pam los que fite 11plimda" (A rts. 17 1n c. 2° LPJ, 4 N ° 3 y 1 1 LVCEMMSLPJ ). m áx im o. Situ ació n q ue ocurre única me nte c ua nd o el Ju ez, lu ego de ha ber el egid o c u a lita ti va m e nt e la m edid a d e inr e rna mi cnt06, se la apli ca rá a un me no r cuya ed ad , al m o me nt o d e la co mi sió n del h ec h o, osc il a b a e ntre los d iec isé is y di ec ioc h o a ños, e n es te supu es to para de re nnin a r la ca ntidad d e la medida d e inrc rn ami e nro a impo ne r d ebe acudir no sólo al marco legal del Código Penal o al de un a Ley Pe nal Especia l, segün el caso, qu e fi jan pa ra cad a hecho un mínimo y un m áx im o d e p e n a, s in o también al ma rco normati vo que le se ñala la Ley Pe· nal Ju ve nil. Esto signifi ca qu e el juez, al realiza r el acto d e di screc io nalid ad jurídica me nte vin cu lado, d eba te ner prese nre sobre todo el m a rco lega l qu e le d e te rmina la m a teSi so mos coh erc nres co n lo hasta aquí ex pu es w , y al hi lo d e las no rm as citadas, no p ued e nega rse la am pli a di sc rcc ionalid ad que, en la ind ivid ua lizació n judicial d e las m ed idas posee n los Ju eces de Me no res. El ve rd ade ro pro b le ma se prese nta en la segu nda excepció n que ro mpe la regla po r la c ual se indi ca qu e "las medidas no excederán de cinco míos". Po r esta exce pció n es pos ib le rebasa r esos cinco a ños d e tope ri a p e n a l ju ve nil , e l c u a l p osee un a n atural eza bifronre, pu es , por un lado, de be co nsid e ra r la d e te rmin ac ió n legal abs trac t a d e ca d a d eli ro, es d ec ir, el m ínim o y el m á:x im o d e pe na as ignado al hec ho e n el Códi go Pe nal o e n la Ley Pe n al Es p ec ia l; y, d e o rro, a pli car la "fOrmula aritmética" qu e establ ece la Ley Pe n a l Ju ve nil , e n el se ntido d e es ta r fac ult ad o p a ra p o d e r " ... orde n11 r t>l intemamiemo basta por un térm ino cuyos mínimo y máximo, u rán /11 mirad de los establecidos como pen11 de pri vación de libertad en !11 legislación penal respecto de cadtl de/ilo" (A n. 15 lnc. fin al LPJ ). Pe ro, s in d esc uid a r qu e e n la ap li cac ió n de esa fó rmula a rirm é ri ca, po r imp e rio n o rm a t ivo, e n nin g ún caso, pu ed e ir m ás all á d e los s ie rc a ñ os de im posic ió n d e la m edid a d e int e rna mi e n to, a ral efec w di ce la pa n c fin al d e la no rm a recié n cirad a: '' En nin gún caso la m edid a d e int e rn a mi c nro po drá excede r d e siete a ños". A n a l ice m os co m o o p e r a esa "ari tm é t ica n o rm a ti va " co n a lg un os eje mpl os: 1°) e n prese nc ia d e un Huno Ag ravado (A rt. 208 C P), cuya pena es d e cin co a o c ho a i1os, la fó rmu la no s pe rmit e fij a r el inr e rn a mi e m o e ntre d os a ños co n seis m eses, co m o mínim o, y Entorno ISSN: 2218-3345 entorno Mayo 2006, N°. 35 Aproximación a la dogmática de la individualización judicial de la medida de internamiento pp. 28-33 Trejo Escobar, M.A. Universidad Tecnológica de El Salvador - Aproximac ión a la dogmática de la individualización judicial de la medida de internamie nto cuatro afios, co mo máx imo; 2°) en caso d e Rob o Agravado {A rt. 2 13 C P), p e n ado co n oc h o a d oce años, n os permitida fij ar el intern a mi ento enuc cuauo, co mo m ínimo, y seis años, como m áximo. H ay qu e reco nocer qu e en a mb os ej e mp los n o ex is t e n ingún prob le ma , pues el Ju ez d e Menores "puede" m ove rse enrre ese es pacio - mínimo y máx imo- de juego. Si n e mb a rgo , e n orros casos la situació n se pla nr ea de modo dife rente, ve rb ig ra c ia, 3°) e n un H o m ic idio Agravado {Arr. 129 CP) sa ncio nado co n trei nra a cincuenra a ño s d e prisió n, la fó rmul a juve ni l llega ría a qu ince, como mínimo, y a ve inti c inco años, co mo máx imo; 4°) en un Secuestro {Arr. 149 C P), cuya pena es de treinta a cuaren ta y cinco años, co n la fórmula matemática llega ríamos a quin ce, co mo m ín imo , y a ve intidós años con seis meses, co mo m áx imo ; 5°) e n caso de una Vio lació n e n Menor o Incapa z {A rt. 159 CP), hechos sa ncionados co n pena de caco rce a ve inte años, nu es tra fórmu la nos d ada u n marge n de siete, como mín im o, y de d iez años, co mo máx imo. Nó tese qu e e n escos casos res u lta abso lut a m e nt e nu ga roria la operatividad de la "fo rmula matemática" a qu e a lud e el Arr. 15 in fine LP). Por si eso fu era poco, la situac ión se rorna aún más críti ca si, por ejemplo, el Homicidio Agravado no se co nsuma y se lo califica de Homicidio Imperfecto o Tentado, pues entonces co mbin ando el Art. 68 CP, por el cual se fij a la penalidad de la tentativa "entre la mitad del mínimo y la mitad del máximo de la pena señalada al deLito consumado", resultarían co mo extremos qu ince años y veinticinco años, los que m a ri zado s con la "fó rmul a mate mát ica" del ámbito pe na l juve ni l daría co mo res ultado que la medid a se fij ara entre siete años con seis meses, como mínimo, y de doce aií.os con seis meses, como máx imo. Similar situación podría prese n ta rse e n caso d e un Sec ues t ro Tentado y de otros hechos punibles que resultaría ocioso mencionar. Entorno ISSN: 2218-3345 el valor justicia ni co n el principio de la proporcionalidad. Co lígese, ento n ces, qu e e n esta co nstelación de casos, tanto el mínimo como e l m áx im o qu e res u lt a d e la arim1ética legal, o nos deja en el límite máx imo de la med ida de inte rn ami ento a imponer (s iete años) o lo supera. Es ta situ ació n que no parece justa en materia pena l juve nil por quebrar el principio de la proporcionalidad , no se prese nta en mate ri a penaJ de adu ltos, pues en és ta el Juez al indi vidu aliza r la pena siempre debe fi jarl a entre un mínimo y un máx imo. Qu ed a as í p lanteada la situ ación p roblemática. En esa lógica ente ndemos qu e, por un lado el Ju ez de Meno res no puede rebasar el límite superior de siete años de intern ami ento, pues no es tá autorizado, "en ningzín caso", a imponer esa medida más allá del lím ite máx imo; en esto no hay discusión nin gun a. Pero ¿Podría hace rlo por debajo de ese lím ite? o ¿Es un lími te infl ex ibl e? Repárese qu e, en co nsonancia co n los ejemp los citados, "con la misma va ra se mediría" a un menor qu e ha co metido un Homicidio Ag ravado co nsum ado co mo al que lo ha realizado en fo rm a Tentad a, o al qu e ha reaJizado un Secuestro Co nsum ado o Im pe rfecto, lo cua l nos lleva a un "entuertojurídico" o resultado absurd o, que no se correspond e racionalmente ni co n Por tanto, co nsidero que el juez Penal juvenil sf puede decidir en qué medida puede aplica r el intern amiento por debajo del límite máx imo en ese grupo de casos ejemplificados, pues lo que no le es dable, en ningún caso, es rebasar el límite superi or de los siete años de inrern am ienro; caso co ntrario , n o só lo qu eda d a fulmin ado el sistema del "libr~ espacio de j uego" sino que se destruiría, adi cionalmem e, el acto de discrecionalidad jurídica vinculado que, co n carácter general según he plameado , se enerva en form a especial para el juez Penal de Menores, aspectos qu e lo lleva rían a posic io nes irreco ncilia bl es con el p rin cipio de proporcionalidad que deri va del valor justicia. Abono a es ta razó n, de un lado, en que el principio de la proporcionalidad co nsag ra excepc ion es no esc ritas a la obligato riedad de las disposiciones legales en el caso co ncre to, co n vini e nd o e n inadmisibles las med idas, aunque incluso lega lm e nt e sea n inob jetab les y su ap licac ió n p ued a co nsidera rse jurídi ca mem e co rrecta en otras circunstanc ias, si son injusras. De otro, en que no se puede segu ir sustent and o errári ca m ent e una co ncepció n restr ingid a del principio de propo rcionalidad en el D erecho Penal Ju ve ni l e nte ndid o úni ca m e nt e como ex igencia de proporcionalidad entre el hecho co metido y la sa nció n prevista por la ley. El principio de proporcionalidad así co nsiderad o, es to es basado sólo en la vert iente cuantitati va no es de reci bo. Su consideración debe se r en sentid o ampli o; pues, se concede a los Ju eces de Menores la discrecional idad sufi cie nte para apreciar ta m o la calidad co mo la ca nrid ad de la m edid a qu e p ueda imponerse. Som eti e nd o di ch a di screcion ali dad a un a directriz de propo rcionalidad , orientada segü n los fin es de la med ida y, por tam o, recl a m án d ose e n s u prá ct ica , un a razonable proporción enrre la gravedad de la injerencia y los fin es pe rseguid os. Mayo 2006, N°. 35 entorno Aproximación a la dogmática de la individualización judicial de la medida de internamiento pp. 28-33 Trejo Escobar, M.A. Universidad Tecnológica ele El Sa lvador Aproxima ció n a la dogmirtica de la individualización judicial de la medrda de internamrento El fund a m enw d e afi rm ac ió n es rá e n una int e rpre ta c ió n basada e n los prin cipios rec 10 res, los princ ip ios ge n· e rales d el D e rec h o y en la doctr in a y nor mati va int e rn :tcio nal en m ateri a d e m e nores, ra l es la ex ige n cia del Art. 4 LPJ. Las razo n es so n la s s ig u ie nt es : primera , acudir a una interpretac ió n lit· era l ( prin c ipi o ge n e r a l d e la interpretac ió n del derec h o), rep árese e n que la ley, Arr. 15 In fine Ll'J, lir cralm e nrc di ce: " ... el j ruz podrá ordennr el inurnamiento basta por un thmino cuyos mínimo y máximo. serán la mirad dr los establecidos co mo pena ... ", para cad a delito. La no rma al utili za r el términ o "podrá', es rá come rnpl ando una fa c ult ad di sc rec iona l, es t o es, un a simació n d e se ñ o río d e qui en posee los m edios o fac u ltades d e hace r o d eja r de hace r un a cosa, o d e imp o ne r o no una ac tu ac ió n d e t e rmin ada; e n co n secuen cia , esa n o rm a se c umpl e ta nr o si se so m ete el j uez a lo es tablec id o por la ley y manti e n e co n esa fórmul a m atemát ica el límite m áx im o d e s iete años, como si al fi ja r el internamiento , en el caso co nc re to, lo h ace po r debajo d e ese m áx im o, pu es la reg la lo qu e impid e, e n mi o pini ó n , es rebasar e l tec ho de los siete años. La seg unda ra zó n se a poya e n la Co nve nció n so bre los D erec hos del Niño (normati va inrern ac io nal en m ateri a d e m enores suscrita y rarifi cad a por El Salvador). La Co nve nció n alude al el uso del intern ami ento " ... como medidA de último recurso y por el período mds breve que proceda" (Art. 37 le tr a " b " C DN ), di sposición que acoge el pri ncipi o penal de int e rv e n c ió n m í nim a, y no de interven ció n máx ima en la ap li cac ió n d e la medida restrictiva de la libe rrad; . Sa bido es qu e d int ern a mi cnro constitu ye la m edida m ás grave que pued e su frir un m eno r e n el pr o ces o pe n a l juven il. Probada su culpabilid ad , es privad o del libre ejerc icio de un o de sus d erechos m ás prec iados, e l d e rec h o a la libe rrad d e movimi entos, jun to co n otras res tricciones ad ic io n a les. E n es t e se ntido , co m o co nsecuencia d e la situ ac ión d e encie rro, Entorno ISSN: 2218-3345 entorno el menor sufre se rios perjui cios d e carácter pe rsonal , fa miliar y soc ial , e in cluso p s ico lóg icos, p o r ta l m ot ivo e n la Co nve nció n sobre los De rechos del iño se se rí ala qu e la medid a d e intern amiento se aplique, ún ica m ente si es n ecesa ri a, co mo "ultim a rati o". La terce ra razó n la fund am enro en un principi o fi losó fi co qu e dim ana d e la do c rrin a e n m ate ria pe n a l ju ve nil (la doctrin a d e la protecc ió n inreg ral). Segú n es ta d oc trin a el m enor sujero a la Ley Pen al Ju ve nil d ebe goza r d e los mi s m os d erechos qu e se le con ced en a los m ayo res d e di ec ioc h o años, a qui e n es se les atribu ye la co mi s ió n d e un a in fracc ió n pe nal (A rr . 5 In c. 1° LPJ ). enron ces, si para los adul tos en rod a deliro aparece s iempre fijado en abstracto el espacio d e juego puniti vo, es dec ir, u n mín imo y u n m áx im o d e pena , no se ve por qu é razó n para los jóve nes, en aquellos supu estos en qu e el hec ho punib le anule ese espacio d e juego, renga qu e so portar una regla que lo d e ja e n tot a l d es ve nr aja y a pli cá rse lc u n a m cdid:t f ija d e inrern:tm ienr o por el térm in o m áx im o d e s ie te años 8 , es pec ialm enr e, como h a qu edad o demostrado , en aquell os hechos qu e, s in ll ega r a la cons unu c ión d e l d e li ro, qu ed a n e n e l es t ad io de la pen ali dad d e b rent at iva. Tal fo rm a d e enjui cia mi em o aut o m áti ca qu e co ns· titu ye un a realidad en la prácr ica d e es ta ju ri sdi cc ió n es pec ial permite, lo que la ley no qui ere, que el menor qu ede en peo res co ndi cio nes qu e un m ayo r en un a situació n an áloga. La cua rta razó n la fun d amen to desd e la a talaya d e la Juri sp ru d en cia Co ns· ritucio nal. Así, tenernos qu e en fall o de la Sa la d e lo Co nst iru cion:1 l d e la Co rre Su pr e m a d e Jusr ic ia se h a di c ho 9 : '' Atmdiendo 11/11 rons11g;nción constitucion11l de /11 exigeuci11 de un régimm jurídico espe· ci11/ 11/ que se somete /11 co nduct11 11ntúoci11/ de los m mores, es neasario abord11r /11 prin· cip11l mamfistl1ción que diriJo régimen drbr 11doptar {. .. J Lo esenri11/ en el m11rco regulatorio distin to 11/ rlgimen pl'lwl de adultos es el est11bluimirmo de mayores gara ntías para el menor frente al poder punitivo del Esrado. en relación con /m gammíns rrconocidn.s ptrm los primeros. Lo que se traduce m que, m ningrín caso, el menor quedará en dewentaja frente al proceso penal de adultos, rs decir, el mmor tiene los mismos do·er/Jos que rm adulto proasado pena/mente. pero sobre esn base, las normas esprcialrs sólo purden ser Mayo 2006, N°. 35 ' Aproximación a la dogmática de la individualización judicial de la medida de internamiento Universidad Tecnológica de El Salvador Aproximación a la dogmatica de la individualización judicial de la medida de internamiento enttndida.s como tales en In medidn que stan mds fovombles y que, por fllnto, provean concrnamt!ltl' mayorn gnmntlas al nunor. Lo importante rs advertir que, mds n/M de una regulación formal de dnamint1tlos aspectos, resulta que lo regulado en la ley espuinl debe constituir algo más fovombletm momo nuuor en la prnalidad de los de/iros y fo!tas, plazos procesales mrí.s cortos, instimciones npuializadas rn su reinstrción social, ttc.". Emiendo q ue ir en co nrra d e las razo n es expu es ta s, se rí a sos t e n e r y fomenrar la resis del "lím iu inflexible'' o "fijo" de la m ed ida a los supu estOs qu e m e he refe rido. y ace p ta r qu e, e n esas situac io n es, el Ju ez Pen al Ju ve nil es tá "estéril en su discrecionalidad' y, q ue por lo ram o, no impo rta qu e pueda llega r al abs urd o , sanc io n and o co n el máx im o de imerna mi enro un H o mi cidi o Agravado cons umado qu e un H o micidi o Ag ravado Imperfecto , por eje mpl o. Susrenr ar una tes is tal es rompe r a rod as luces co n : (l) uno d e los m étod os d e la interpretac ió n (e l li te ral); (2) co n el p ri nc ip io políticocrimin al d e qu e un m enor jamás pu ed e quedar en peo res co ndic io nes frenre al eje rcicio d el ius puniendi que un adulto , e n situ ac ió n s imi la r; pr in ci pio por lo d em ás, sustenrab le d esd e dos pu ntos d e v is t a dife re n t es: e n Entorno ISSN: 2218-3345 prim e r lu ga r, d es d e e l p r in c ipi o d e iguald ad , d ad o que el m eno r se cncuemra en u na situ ac ió n ju rídi co soc ial diferem e a la d e los m ayores; y. en segundo lu ga r, d es d e el princip io d e es pec ialid ad d el régime n , que permite, co m o dij e supra, un a ampl ia di sc rec io n a li d ad ju rí d ica vin cul ada; (3) co n el pr in c ipio d e la p ro porcio nalid ad, que ta nto la doct rin a qu e lo h a creado co m o la jurisp rud encia qu e lo h a adoptad o, lo en t ienden co mo un pil ar d e la rac iona lid ad co n el qu e d e b e ac tuar se e n e l D e rec h o, aco mpañ ado de sus tres subprin cipi os, ta les so n: idon eidad -ad ec uac ió n d e la m edi da a s u s fi n es-; n eces id ad interven ció n mínima y menos gravosa-; y proporc io nalid ad en se mido estri cto ponderac ión d e int e reses y co n creriz.ac ió n-. Conclusión L - pp. 28-33 Trejo Escobar, M.A. a m oción inte rpre raciva qu e propon go, caso de acogerse po r aque ll os p a res a qui e n es la d es t in o , d ebería quebrar co n ese co mp lejo sistema d e arit m ét ica pe n al; pero m ás all á, d e esa simpl eza ju rídi ca, es tá la co nvicc ión d e inte rpretar las no rm as en el se ntid o d e q ue la p ro porciona lid ad , q ue aparece en todo s is t e m a p unit ivo m ode rn o, se fund a m e nta e n un a proporcio na lid ad con se ntid o ga ranri sta, es d ec ir, que ha d e se rvir para d ete rm ina r los grados m áx im os d e penalid ad y no para defi n ir los grados mínim os irr edu c t ib les. D ich o d e o tro m od o, el juic io d e p ropo rc io n alid ad e n la indi v id uali zac ió n jud icial d e las m edid as d ebe se rvir para impedir med id as superio res a las fi jadas po r la ley, pero eso no pued e se r óbice qu e impi d a a l Juez d e M en o res la po s ib ilid a d d e red u cir la m ed id a por debajo d el m ínim o qu e res ult e d e la o peració n m arem ári ca d el An . 15 Final d e la LPJ . Citas La necesidad de- la me-dida tiene- que ver con la wa.ltem.uiva que re-sulte- menos gravosa", C' implica una prohibición de- acc-so. En esta m.uancia se- debc:n comparar las mc-didal apliobles y aptaJ p;u;a la sau.sf;~cción dd fin ¡>eneguido y a elegir, finalmente. aquf.'lJ¡¡ que sea menos IC"$iV<t para los de-rechos del menor. 1 La idone1dad exige un¡¡ correspondencia de medio a fin: de tal manera que la medida que ha sido sdeccionada debe Kt adc-cu:~da p:11 ra a.lomur los find que- con su 1m posición SC' han ptC'VI!IO. 1 Lll...cy Penal Ju\-cnil desarrolla en el Capítulo J, dd Tirulo Primero, lu medidas que puede-n aplicarsC" a un menor cuando ha cometido una infracción ¡>enal. Ellas son: oric-nt:~.c i ón y apoyo sociofamiliar (An . \0), ;unonataci6n (Art. JI). 1mposióón de rcgla.s de conducta (An. 12). servicio~ a la comunidad (An. 13), libcnad asistida (A rt. 14) y. por úhimo, la medida de imc-rn:~.miento (Art. 1S). La imposición de estas mcdida.s tiene-n una finalidad esencia lmente educativ:~, pretendtl.'ndosc con ellas la formación integral dd menor y su reinscrción en l af:~.milia ye n bsocicd:~d. Con la :~d~ción cuanuta.tiV<I b l...cy Pr:n.U Ju,-cnil obliga en varios de sus preceptOs a restringir la intensidad de las injerencias dirigida.s a los limites en que resultenecesario para alca.nur la finalidad ~rseguida. Por ejemplo, "su duración scri por d meno r tiempo posible~. diceciArt. 1) lnc. I 0 LPJ. La. discrccion:.tlidad permite al Jua escoger entre un determinldo número de mcdid:u igua.lmeme vilidu y efe-ctuar la clccción bljO crite-rios de convenienci:1. p:1.n el menor. U mcdidl escogid:a debe sc.r ncces:uia, idónea y p roporcional:~! desv:~~lor del hecho y de b culp:abilidad del lUtOr. Como principio bisico la medid;a de internamiemo debe utiliz.a!'lt' sólo como medida o:uem:11. ~ U luma mtduúl' (An. 15 lnc. ! ").pue-s 13 LPJ enunci:1. u n:l. se-rie dt medidas :~.ltemuiva.s ::11 la pcn:1. priv:niva de- libcrud. que el jua dd>e o::amin:1.t prcviamentt :11111es de incardin:1.rsC" por d internamiento y. tn todo c:1.so. ruonu su imposición. Entre lu razones que SC' indican p:tn b aplicación de- mtdida.s :~.ltern:~.ti,~. cstin: (1) son mis ~decu;~d:1.s pu':l. cieno tipo dt dditos: (2) evi1:1.n 1:1. prisionaliución y sus consccuencia.s neg:niva.s; (3) son menos couow que la.s medidas de intt'tn:l.mitnto: (4) disminuyen el h:~.cinlnliento de ll población lntern;~; ~CE.n la CON se tst:ablc::ct c::n el An. 40 lnc. final ~ &dupondrd dt" dir'l'"fJIU mt"duiJJJ, raiD romo l'l (llltÚufo, las órdt"nN dt" ont"nlnnón y supn-t•tstón, l'i a.smrMmunro, /4 ilbmad t'tt;lndn, la ro!tKaáón m l10gam dt' guarda, Úu programm dt' mJ.t"ñllnZA y formaCIÓn profmonalll.JI como otras ponbllrdadn alurnarn·as a la murnacrón t'n mstlluao.us, para aSt'fllrrrr qut' los mños J.t"an trarptÚJs dt' mnnmt apropiada pam 111 bimNlitrJqut' gwmú propornón tanto con JUJ t'rrn..mlancillJ como con Ja mfiucáónw. Esto como )'a ~e h3 apucs10 produce la quiebra. dd principio de proporcion3lid:~.d en d proceso pc::nal ju,·c::nil. lo cwl no suadt en el Dem::ho Pcna.l sust:~.nuvo aplicable :1. los:~.duhos. Scntenci:~. de la Sala de lo Constitucional de !:1. Cone Suprem:1. dt Justicia. p ronunciad:!. al:as quina: horas del día uno dt' abril del afios dos mil cuatro, qut dccluó h inconstitucion:~.lid ~d dt disposiciones lcgalarontenid:u tn d DecretO Lq;isbti\'O N ° 1SS. de fcch:a nue-ve dt octubll:' dd afio dos mil tres, publicado tn el Diu•o Oficill N° 188. Tomo N° 36i.dd JOdt'octubll:'dedos mil trt'S, dc:nominad:~.l.c)• Anli /l.hr:as. Mayo 2006, N°. 35 entorno 1