CHAPTER SUMMARY El Renacimiento y la Reforma Sección 1 EL COMIENZO DEL RENACIMIENTO En el siglo XIV murieron tantas personas por la Peste Negra, el hambre y la guerra que la población disminuyó. Los agricultores producían tanto alimento que los precios cayeron y las personas empezaron a tener más dinero para gastar en otras cosas. Varias zonas de Europa comenzaron a especializarse en los productos más apropiados para su ambiente y creció el comercio regional. En lo que hoy es Italia, crecieron varias grandes ciudades estado en el norte, mientras que el sur se componía de varios reinos y estados pontifi cios. El sur era principalmente rural. Las ciudades norteñas de Venecia, Milán y Florencia se convirtieron en centros del comercio. La iglesia, los nobles, los artesanos y los mercaderes dominaban la sociedad. Venecia, que tenía acceso al mar, basó su economía en la construcción de barcos y el comercio con puertos tan lejanos como el Cercano Oriente y Egipto. La economía de Milán se basaba en la agricultura, la seda y las armas, mientras que Florencia se hizo famosa por los bancos y la tela. LAS IDEAS DEL RENACIMIENTO A medida que cambiaban la economía y la sociedad, comenzaron a aparecer nuevas ideas, y el interés en el arte, la literatura, la ciencia y la educación volvieron y se hicieron más fuertes. Llamamos a esta era de la historia Renacimiento, que signifi ca “renacer”. El Renacimiento surgió en Italia, gracias a sus ciudades, su comercio y sus ricos mercaderes. Las personas comenzaron a buscar inspiración en el pasado. Admiraban los artefactos de las antiguas culturas griega y romana. También se interesaron en las ideas del mundo antiguo, que descubrieron al leer textos en latín y en árabe. Estas obras inspiraron más adelantos en la ciencia, el arte y la fi losofía. Aunque la religión seguía siendo fundamental en la vida europea, el Renacimiento era más secular, es decir, se enfocaba en este mundo. Surgió un movimiento llamado humanismo. Este movimiento hacía énfasis en los logros de los individuos en lugar de enfocarse en glorifi car a Dios. Para muchos historiadores, el Renacimiento nació con las obras de los escritores Giovanni Boccaccio y Francisco Petrarca. Ambos escribían en la lengua cotidiana del pueblo en vez de hacerlo en latín. Algunos humanistas se concentraban en la sociedad. Baltasar Castiglione, un aristócrata italiano, escribió un libro en el que describía cómo debía comportarse el hombre o la mujer perfecta del Renacimiento. Otro italiano, Nicolás Maquiavelo, se inspiró en la violencia política de su época para escribir El príncipe. En él, aconseja a los gobernantes hacer lo que sea necesario para mantenerse en el poder. Científi cos como Galileo Galilei y Nicolás Copérnico sugerían que la Tierra no era el centro del universo, lo que se oponía a la visión de la iglesia. Galileo fue arrestado por expresar su punto de vista. EL ARTE DEL RENACIMIENTO Copyright © by Holt, Rinehart and Winston. All rights reserved. Las obras de arte del Renacimiento mostraban nuevos niveles de pericia y muchas de ellas son aún muy admiradas. Durante este período, los ricos se convirtieron en patrocinadores del arte y usaban el arte como símbolo de su estatus. En Florencia, la familia Médici, que gobernaba la ciudad, y especialmente Lorenzo de Médici, daba a los artistas, los intelectuales y los músicos grandes sumas de dinero por sus obras. Leonardo da Vinci logró grandeza en muchas áreas entre las que estaban la pintura, la ingeniería, la ciencia y la arquitectura. Dos de sus pinturas se hicieron muy famosas, la Mona Lisa y La última cena. También tuvo ideas para una máquina voladora, un tanque y una ametralladora. Entre otras cosas, diseñó y construyó canales y una máquina para hacer la rosca de los tornillos. Durante este período, los artistas querían pintar el mundo real de la manera más realista posible. Comenzaron a usar la perspectiva, una técnica para representar objetos tridimensionales sobre superfi cies planas. Sus obras eran muy distintas a las de la Edad Media. Un pintor y arquitecto que es admirado aún hoy es Rafael. Pintó sobre temas religiosos y clásicos. Miguel Ángel Buonarotti era un consumado escultor capaz de crear estatuas humanas muy reales. Su estatua David aún no fue superada. También pintó el cielo raso de la Capilla Sixtina en Roma y creó muchas otras obras maestras de la pintura, la escultura y la arquitectura. Como en otras áreas, el diseño de edifi cios del Renacimiento refl ejaba el renovado amor por las ideas de los antiguos griegos y romanos. El arquitecto más famoso era Donato Bramante, que diseñó la basílica de San Pedro, en Roma. Sección 2 EL RENACIMIENTO SE EXPANDE HACIA EL NORTE En los siglos XIII y XIV, la mayoría de las ciudades de Europa estaban en Italia. Para el siglo XVI, sin embargo, también crecieron grandes ciudades en el norte de Europa. Entre estas ciudades estaban Londres, París, Ámsterdam y otras. El comercio, el intercambio de artistas y estudiosos y el desarrollo de la imprenta contribuyeron a la difusión de las ideas del Renacimiento en las ciudades más nuevas. En el norte de Europa, el comercio estaba dominado por la Liga hanseática, una organización de mercaderes que operó entre el siglo XIII y el XV. La liga trabajaba para proteger a sus miembros de los piratas e hizo que la navegación fuera más segura al construir faros y entrenar a los capitanes de los barcos. Este grupo ayudó a difundir ideas y productos. Los artistas italianos que escapaban de las luchas en las ciudades italianas y los estudiosos del norte que iban a Italia para educarse y luego volvían con ideas humanistas también difundieron ideas. A mediados del siglo XV, un alemán llamado Juan Gutenberg desarrolló los tipos móviles, hechos de placas de metal con letras dentro de una prensa de madera. Esto hizo posible imprimir texto en ambos lados de una hoja de papel con rapidez. Hasta ese momento, la única forma de producir un libro era a mano. Ahora, los libros y otros materiales impresos se podían producir mucho más rápidamente y a menor costo. Pronto, las imprentas aparecieron en muchas otras ciudades. Los estudiosos podían acceder a las ideas más rápidamente. Además, esto inspiró a mas personas a aprender a leer, lo que ayudó a difundir más las ideas del Renacimiento. FILÓSOFOS Y ESCRITORES Los fi lósofos del norte, como Desiderio Erasmo, combinaron el humanismo y las ideas cristianas y crearon el humanismo cristiano. Erasmo fomentaba una vida cristiana pura y simple, Copyright © by Holt, Rinehart and Winston. All rights reserved. despojada de la política y los rituales. También destacaba la importancia de educar a los niños. Sus escritos aumentaron el creciente descontento con la Iglesia católica. El humanismo también llegó a Inglaterra. Un humanista inglés fue Sir Tomás Moro. Escribió el famoso libro Utopía, que describía una sociedad perfecta pero inexistente basada en la razón. En su libro, también criticaba a la sociedad real y al gobierno de la época. Aún hoy llamamos utopía a una sociedad ideal. El escritor inglés más importante del Renacimiento fue el dramaturgo y poeta William Shakespeare. Shakespeare se inspiraba en los antiguos escritores griegos y romanos y en escritores más recientes. Las obras de Shakespeare mostraban emociones humanas complejas y un gran conocimiento de la lengua. Su uso de la lengua y la elección de temas, sin embargo, hicieron que sus obras fueran atractivas incluso para personas sin educación. A través de sus obras, Shakespeare contribuyó a la difusión de las ideas del Renacimiento a un público masivo. Sus obras dramáticas fueron un cambio respecto de las obras sobre la moralidad religiosa que se habían hecho populares en la Edad Media. Para el momento de su muerte, en 1616, Londres era una fl oreciente zona de teatros. Cristina de Pisan, una mujer nacida en Italia que se crió en Francia, se concentró en el papel de las mujeres en la sociedad en sus obras. Poeta, biógrafa y moralista, fomentó la educación y la igualdad para las mujeres y fue muy admirada, incluso en su época. ARTISTAS El artista alemán Alberto Durero visitó Italia a fi nales del siglo XV. Allí, aprendió las técnicas de realismo y perspectiva. Tras su regreso a Alemania, infl uenció a muchos pintores alemanes del Renacimiento con este nuevo estilo. Su obra también tuvo algunas características exclusivas del Renacimiento del norte. Por ejemplo, como muchos pintores del norte de Europa, usaba óleos. Esto permitía un mayor nivel de detalle en las pinturas, como la textura de la tela o pequeñas imágenes de objetos que se refl ejan en un espejo. En la zona de los Países Bajos conocida como Flandes, los pintores desarrollaron un estilo único conocido como Escuela Flamenca. Jan van Eyck perfeccionó este estilo. Su obra a menudo mostraba paisajes o escenas domésticas cotidianas. Las pinturas de van Eyck contenían simbolismos como un rayo de luz que representaba la presencia de Dios. En el siglo XVI, el artista fl amenco Pieter Brughel el Viejo usaba técnicas italianas. Pero también pintaba escenas de la vida cotidiana, muy distintas de las escenas mitológicas de las pinturas italianas. Sección 3 EL CATOLICISMO EN EL SIGLO XV Para principios del siglo XVI, la Reforma protestante había comenzado. Era un movimiento contra la corrupción fi nanciera, el abuso de poder y la inmoralidad en la Iglesia católica. En ese momento, la iglesia practicaba la venta de indulgencias para reunir dinero. Las indulgencias eran perdones emitidos por el papa para reducir el tiempo que un alma pasaría en el purgatorio. Además, las personas comenzaban a sentir que la lealtad a su país era más importante que la lealtad a la iglesia. Dos de los primeros críticos de la iglesia fueron John Wycliffe y Jan Hus. Wycliffe creía que la iglesia debía renunciar a sus posesiones terrenales. Hus predicaba en contra de la inmoralidad y la mundanería de la iglesia. Wycliffe perdió su trabajo como maestro y Hus fue condenado a muerte por herejía. Sin embargo, sus visiones ayudaron a provocar la reforma. Copyright © by Holt, Rinehart and Winston. All rights reserved. MARTÍN LUTERO En 1517, el monje alemán Martín Lutero clavó sus críticas a la iglesia en la puerta de una iglesia en Wittenberg. Condenaba la venta de indulgencias, que en su opinión no tenían ningún poder para perdonar los pecados. También criticaba el poder del papa y la riqueza de la iglesia. Sus escritos se publicaron y se leyeron y comentaron mucho. Lutero creía que solo la fe, no las buenas obras, llevaban a alguien al paraíso y que Jesús, no el papa, era el único jefe de la iglesia. También tradujo la Biblia al alemán para que las personas pudieran interpretarla por sí mismas. En 1521, convocaron a Lutero ante el emperador Carlos V. Lutero se negó a cambiar sus opiniones, entonces Carlos declaró el Edicto de Worms, que condenaba los escritos de Lutero. Sin embargo, las ideas de Lutero siguieron difundiéndose. Para 1530, el luteranismo era una rama del cristianismo. Cuando Carlos intentó suprimir a los luteranos, los príncipes luteranos de su propio parlamento emitieron una protesta. De allí proviene el término protestante. LA EXPANSIÓN DEL PROTESTANTISMO Surgieron nuevos líderes protestantes. Ulrich Zwingli fundó una iglesia en Suiza que tenía la teocracia como su base. Esto signifi ca que la iglesia y el estado están unidos y que se cree que los líderes son inspirados por Dios. Muchos, incluso Lutero, se opusieron a Zwingli. La Iglesia católica fue a la guerra contra este grupo. Juan Calvino era un humanista y partidario de las reformas de Lutero. Es conocido por predicar la doctrina de la predestinación. Ésta es la creencia de que Dios ya sabe quién se salvará y que nada puede cambiar su destino. El calvinismo se hizo popular en todo el norte de Europa. Suiza se convirtió en teocracia bajo el liderazgo de Calvino. Era obligatorio asistir a la iglesia y había leyes contra los festejos, el baile y el canto. John Knox difundió el calvinismo en Escocia. Con el tiempo, su iglesia reformada reemplazó la Iglesia católica romana. Otro grupo, llamado los anabaptistas, se separó de los otros protestantes por creer que se debía rebautizar a los adultos. EL PROTESTANTISMO SE DIFUNDE EN INGLATERRA En Inglaterra, el joven rey Enrique VIII era devoto católico. Pero en 1525, pidió que su matrimonio fuera anulado, o declarado inválido por la iglesia, porque su esposa no le había dado un hijo. El papa no permitió la anulación. Mientras tanto, Enrique se había enamorado de otra mujer, Ana Bolena. Enrique hizo que el Parlamento declarara que Inglaterra no estaba más bajo la autoridad del papa y que, en cambio, Enrique lideraría la Iglesia de Inglaterra. El Parlamento declaró nulo e inválido el primer matrimonio de Enrique. También aprobaron la Ley de Supremacía, que obligaba a los súbditos a aceptar que Enrique era el jefe de la iglesia. Enrique tuvo seis esposas en total, y dos hijas y un hijo. El protestantismo siguió creciendo en Inglaterra bajo el mando de su hijo, Eduardo VI. Sin embargo, Eduardo murió muy joven y la hija de Enrique, María, devolvió a Inglaterra al catolicismo. Se hizo conocida como María la Sangrienta por quemar a protestantes. Cuando murió, su media hermana Isabel se convirtió en reina. Isabel, una comprometida protestante, redactó una nueva Ley de Supremacía en 1559 y volvió a convertir a Inglaterra en protestante. Isabel persiguió a los católicos, algunos de los cuales conspiraron para poner a su prima católica María, reina de los escoceses, en el trono de Inglaterra. Copyright © by Holt, Rinehart and Winston. All rights reserved. Sección 4 LA REFORMA DE LA IGLESIA CATÓLICA En respuesta a la expansión del protestantismo, algunos católicos trabajaron para reformar su iglesia durante la Contrarreforma. En el siglo XV, Girolamo Savonarola predicaba en Florencia que las iglesias debían fundir su oro y plata para alimentar a los pobres. En un principio, el papa elogió a Savonarola, pero fi nalmente lo hizo ejecutar. Otros reformaron la iglesia mediante la fundación de órdenes religiosas. Ignacio de Loyola fundó la Compañía de Jesús, o jesuitas, que se concentraban en la espiritualidad y el servicio. Loyola dirigió a los jesuitas como una organización militar, fundando misiones, escuelas y universidades. Para 1700, los jesuitas operaban 769 colegios y universidades. Estas instituciones ayudaron a la Iglesia católica a recuperar terreno respecto del protestantismo. En 1545, el papa Pablo III convocó el Concilio de Trento. El concilio se reunió durante los siguientes 18 años para tratar problemas como la corrupción del clero y la venta de indulgencias. El concilio rechazó el énfasis de los protestantes en la fe individual, diciendo que la iglesia podía ayudar a los creyentes a obtener la salvación por medio del misterio y las ceremonias. El concilio también rechazó un acuerdo entre los católicos y los protestantes. Después del concilio, los líderes pusieron las reformas en marcha. Carlos Borromeo, arzobispo de Milán, construyó una nueva escuela para sacerdotes. Francisco de Sales devolvió el distrito de Savoy, en Francia, al catolicismo. Los papeles de las mujeres en la Iglesia católica empezaron a cambiar. Habían vivido en conventos aislados, pero para el siglo XVI, empezaron a ayudar a los pobres y los enfermos. Surgieron nuevas órdenes. La compañía de Santa Úrsula educaba a muchachas, mientras que la Visitación de Santa María capacitaba a las mujeres para ser maestras. María Ward de Inglaterra creó una red de escuelas para niñas. Teresa de Ávila pensaba que las prácticas de su convento eran demasiado fl exibles, así que creo sus propias reglas estrictas. Más adelante, reformó la orden de las carmelitas para que cumpliera con sus exigentes normas. El papa Pablo III fundó la corte eclesiástica de Roma, conocida como la Inquisición, para contrarrestar la Reforma. La corte veía casos contra las personas acusadas de ser protestantes, practicar la brujería o simplemente violar la ley. La Inquisición usó métodos duros, como la tortura y la ejecución. También se advertía a las personas que la lectura de libros prohibidos pondría en peligro sus almas. EFECTOS RELIGIOSOS Y SOCIALES Los cambios en las políticas de la Iglesia católica renovaron el entusiasmo por la iglesia, que luego hizo que la religión se expandiera hacia América del Norte. Mientras tanto, crecía la agitación religiosa. Los católicos perseguían a los que no eran católicos mientras los que no eran católicos perseguían a los católicos y se perseguían entre ellos. Se formaron muchas facciones protestantes, cuyas ideas solían no coincidir. En España y Portugal, se obligaba a los judíos y los musulmanes a convertirse al cristianismo católico o abandonar España. En otras zonas de Europa, los judíos tenían que vivir en guetos, partes de la ciudad rodeadas de paredes y puertas que se cerraban de noche. El temor a la brujería también creció en esa época. Las autoridades acusaban a las brujas de causar difi cultades tales como malas cosechas. Entre 1580 y 1660, miles de personas, en su mayoría pobres o mujeres, fueron ejecutadas por brujería. A través del tiempo, la Reforma protestante fomentó indirectamente la formación de estados y naciones independientes al separar el poder político de las iglesias. EL DESCONTENTO Y LAS GUERRAS RELIGIOSAS Copyright © by Holt, Rinehart and Winston. All rights reserved. En 1494 comenzaron las Guerras italianas, en las que Francia y España competían por el control de la península italiana. Inglaterra y varios papas también se involucraron antes del fi nal de las guerras, en 1559. Lo realmente signifi cativo de las Guerras italianas fue que los soldados regresaban a casa con ideas a las que habían estado expuestos en Italia. Además, los artistas italianos escapaban hacia el norte y llevaban consigo nuevas técnicas y nuevos estilos. En Alemania, el emperador Carlos V era católico pero muchos de los príncipes eran luteranos. Lucharon durante años sin un ganador claro y, entonces, en 1555, se fi rmó la Paz de Augsburgo, que daba a cada príncipe el derecho a decidir la religión de sus súbditos (católica o luterana). Fue un pequeño paso hacia la libertad de culto. En Francia, la minoría protestante luchó durante años contra los católicos. La lucha terminó cuando su líder, Enrique de Navarra, se convirtió al catolicismo. También emitió el Edicto de Nantes en 1598, en el que concedía la tolerancia religiosa a los protestantes. Copyright © by Holt, Rinehart and Winston. All rights reserved.