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FEDERACIÓN DE ASOCIACIONES DE MILITARES DE ESPAÑA (FAME)
AMARTE, ARFAGA, HERLEPERMISA, ...
A LOS MIEMBROS DE LA PONENCIA DE LA COMISIÓN DE
DEFENSA
DEL SENADO
Propuestas de ENMIENDAS al articulado del texto del Proyecto de Ley Orgánica
de Deberes y Derechos de los miembros de las FAS.
PRIMERA.- Al art. 3º. Nueva redacción:
“Titularidad y ejercicio de los derechos.- Los miembros de las Fuerzas
Armadas son titulares de los derechos y libertades fundamentales reconocidos por la
Constitución de 1978, el Convenio Europeo de los Derechos Humanos de 1950 y
demás textos internacionales sobre la materia. El legislador, a través de esta Ley y
demás leyes de desarrollo constitucional, solo podrá limitar el ejercicio de los mismos
en cuanto lo permita expresamente la Constitución, pero teniendo en cuenta que la
misma no impide modular o suprimir las limitaciones que enuncia.”
Justificación: La Constitución permite escasísimas limitaciones a los derechos y
libertades fundamentales de los militares sometidos a disciplina militar, pero permite
que las mismas sean moduladas o suprimidas por el legislador. La Constitución no
establece líneas rojas insuperables.
SEGUNDA.- Al art. 7º. Nueva redacción.
“Neutralidad política, sindical y religiosa.- El militar está sujeto al deber de
neutralidad política, sindical y religiosa. No estará obligado a declarar sobre su
afiliación política, sindical o religiosa, pero tendrá limitado el ejercicio de estos
derechos de la siguiente forma:
a) No podrá ejercer públicamente actividades políticas que impliquen
adoctrinamiento, proselitismo o propaganda de una determinada ideología política.
b) No podrá ejercer las actividades sindicales relacionadas con la huelga, el
conflicto colectivo y la declaración de conflicto colectivo.
c) No podrá participar de uniforme y con armas en manifestaciones o
ceremonias religiosas y se abstendrá, en el ejercicio de su empleo a adoctrinar a otros
militares en los dogmas de una determinada confesión religiosa.
Justificación.- La neutralidad política no tiene relevancia constitucional., ni en
cuanto a su titularidad ni en cuanto a su ejercicio. No está establecida expresamente en
la Constitución. Se opta por establecerla, en cuanto a su ejercicio, en esta ley, pero sin
amparo constitucional.
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La neutralidad sindical en el ejercicio de este derecho no viene imperativamente
impuesta por el art. 28 (como con harta frecuencia se dice desde Defensa y GPS). El art.
28 no impide, en absoluto, la titularidad del derecho (la afiliación). Tampoco impone la
prohibición o limitación del ejercicio del derecho. Solo PERMITE que el legislador
limite o exceptúe del EJERCICIO del mismo a los militares sometidos a disciplina
militar. El legislador puede prohibir o limitar el ejercicio (teniendo en cuenta que el TC
establece que el ejercicio se realiza mediante actividades de huelga, convenio o
conflicto colectivo). Pero el art. 11 del Convenio Europeo (de 1950!) solo permite la
limitación (nunca la prohibición), con lo cual el art. 28 CE, que debe interpretarse según
el Convenio (art. 10 CE) solo permite la limitación. En el texto que proponemos desde
la FAME admitimos la prohibición del ejercicio (aunque para ello sería precisa una
“reserva” del Gobierno ante Europa), pero no la supresión de la titularidad.
La neutralidad religiosa si tiene relevancia constitucional porque la Constitución
declara que España es un Estado ACONFESIONAL y, por tanto, todas las Instituciones
del Estado (también la Administración militar y las FAS) tienen el deber de neutralidad
religiosa. Por tanto, el militar, ni formando parte de fuerza armada, ni individualmente
vistiendo el uniforme, debe participar en manifestaciones religiosas en la vía pública.
TERCERA.- Art. 8.- Libertad personal. Texto que se propone:
“El militar solo podrá ser privado de libertad por resolución judicial firme.”
“Las actuales privaciones de libertad (de 1 día a 2 meses) impuestas por
mandos o autoridades militares quedan sustituidas por “días multa”, de acuerdo con
el concepto de este castigo establecido en el Código Penal Común, teniendo en cuenta
que un día multa equivale a dos días de privación de libertad”.
La Constitución permite, desde 1978, que el legislador pueda suprimir los
arrestos en el ámbito de la Administración Militar. El Convenio Europeo de los
Derechos Humanos prohíbe las privaciones de libertad sin sentencia judicial firme. Hora
es de que en este proyecto, que pretende servir para todo el siglo XXI (según sus
mentores) se empiecen a aplicar normas que llevan vigentes más de 60 años.
No debe demorarse este asunto a un futuro proyecto de Ley Disciplinaria de las
FAS, pues en esta legislatura (que le quedan 4 escasos meses hábiles, suponiendo que
las sesiones se mantengan hasta el 20 de diciembre para aprobar los presupuestos), es
imposible que puede presentarse, tramitarse y aprobarse tal proyecto.
CUARTA.- Art. 9. Libertad religiosa. Debe añadirse a lo ya aprobado, lo
siguiente:
“El militar ..., de 5 de julio, sin otros límites en su ejercicio que los derivados
de la neutralidad religiosa exigida a la FAS y a sus miembros, vistiendo el
uniforme y con armas, que las derivados de su pertenencia a una Institución de un
Estado aconfesional.”
Justificación: Precisar los límites en el ejercicio público de la libertad religiosa.
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QUINTA.- Art. 10. Derecho a la intimidad y dignidad personal: Al texto
aprobado (demasiado extenso, por cierto), hay que añadir un párrafo que es muy
importante:
“En ningún caso podrá invadirse la intimidad personal mediante análisis o
pruebas toxicológicas que tengan por finalidad imponer sanciones disciplinarias,
salvo que estando de servicio de armas se pongan de manifiesto signos evidentes de
consumo de alcohol u otras drogas que pongan en peligro la seguridad de dicho
servicio.”
Justificación: Evitar que dichas pruebas o análisis tengan una finalidad distinta
a la profiláctica, preventiva o terapéutica, como viene ocurriendo con frecuencia.
SEXTA.- Art. 13. Derechos de reunión y manifestación.
1. “El militar ....político o sindical.” (primer inciso, todo igual).
(segundo inciso, nueva redacción) “Vistiendo el uniforme o haciendo
ostentación de su condición militar, no podrá organizar ni participar activamente en
lugares de tránsito público, a manifestaciones o reuniones de marcado carácter
político o sindical.
(tercer inciso, nuevo) “Si podrá participar en manifestaciones de carácter
reivindicativo que tengan por finalidad la defensa de sus derechos adquiridos y la
promoción de sus legítimos intereses o expectativas de derechos, tanto de carácter
profesional, como económico o social.”
2. (todo igual)
Justificación: No puede privarse a los militares de las FAS del derecho a
reivindicar, reclamar, demandar, exigir, solicitar, ... por todos los medios
constitucionales (entre ellos el derecho de manifestación o reunión pacífica y sin
armas), sus derechos e intereses.
SÉPTIMA.- Art. 14. Derecho de asociación.
Párrafo 1 (igual).
“2. El ejercicio de este derecho, cuando tenga por finalidad la defensa de los
derechos adquiridos y la promoción de sus legítimos intereses o expectativas de
derechos profesionales, económicos y sociales, se regirá por lo dispuesto en el título
III, capítulo I de esta ley, en cuanto le resulte de aplicación y no se oponga a lo
establecido en sus estatutos si se ajustan a lo establecido en el art. 22 de la
Constitución.”
Párrafo 3 (igual).
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Justificación: Las asociaciones militares podrán regirse por lo dispuesto en el
Capítulo I del título III de esta ley, que más bien debería tener rango reglamentario, si
quieren obtener los beneficios (¿) que en el mismo se detallan. Pero las asociaciones de
militares deben regirse, en primer lugar por lo dispuesto en sus estatutos, siempre que se
ajusten –como ocurre a varias asociaciones de militares que llevan 20, 23, 24 años
funcionando legítimamente- al art. 22 de la Constitución.
No todas las asociaciones de militares decidirán inscribirse en el ministerio de
Defensa, tener carácter exclusivamente nacional, ser dirigidas solo por militares en
activo, y demás limitaciones que –de momento y creemos que inconstitucionalmenteexige el proyecto para poder formar parte del “Consejo de Personal” , ya que todas las
demás (aunque no estén en dicho Consejo, que por la forma de elección y estructura
será tan inoperativo o más como el que lleva 10 años vigente), tienen el derecho
constitucional (art. 105) al trámite de audiencia, regulado en el art. 24 de la Ley del
Gobierno para todos los ciudadanos y para todas las asociaciones que los representen
(en este caso ciudadanos militares). Limitar ese derecho a las asociaciones que pudieran
estar representadas en el Consejo, sería un “fraude de ley y de Constitución”.
NOTA IMPORTANTE.- El número de propuestas de enmiendas que podemos
presentar desde las asociaciones a los Ilmos. Señores Senadores, pueden ser mucho más
numerosas y concretas, pero para ello hace falta que alguno/s de los grupos más
interesados en que el proyecto mejore sustancialmente, soliciten a la Mesa la prórroga
del plazo de enmiendas.
Por otra parte, no estaría de más que la Comisión de Defensa del Senado (con el
permiso de la Presidencia de la Alta Cámara) decidiera OIR a las asociaciones de
militares, actualmente reivindicativas y en pleno funcionamiento, emplazándolas para
que comparezcan al efecto.
Jesús Navarro Jiménez, militar ®, abogado ejerciente, presidente de la
FAME, Asesor Jurídico de AMARTE.
Sevilla, 25 de mayo de 2011.
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