Document PDF

Anuncio
ceramica
2/8/05
18:50
Página 63
DESIRÉE TORRALBA MESAS
LA CERÁMICA ARQUITECTÓNICA DE ALAQUÀS
(ULTIMOS AÑOS DEL SIGLO XIX Y PRIMER TERCIO DEL
SIGLO XX)
Introducción
No cabe duda que las referencias sobre la cerámica dentro de lo que se conoce como Historia del Arte, no se asemejan ni alcanzan en número e importancia
a otras disciplinas tales como la pintura, la escultura o la arquitectura, a pesar de
constituir uno de los elementos más característicos en el desarrollo de la cultura
humana.
Si bien es cierto que existe una amplia bibliografía referente a este campo, y
en especial en alusión a las principales culturas y centros productivos a lo largo
de la historia, existen importantes vacíos que están a la espera de ser sometidos a
estudio.
En España, la producción cerámica ha sido muy relevante, lo que ha dado
lugar a importantes análisis e investigaciones que han configurado una visión, en
parte global, de este tema, pues todavía existen campos que requieren una completa y correcta sistematización.
Éste es el caso del presente artículo, cuyo núcleo es la cerámica arquitectónica, es decir, aquellos elementos de naturaleza cerámica aplicables a la arquitectura; en concreto, los azulejos situados en distintas zonas de las fachadas de los
edificios.
Perfilando aún más en la génesis de este artículo, hay que recalar en un aspecto determinado y es, que si bien en nuestro país se cuenta con importantes obras que
presentan la historia y evolución de varios de los principales núcleos cerámicos1,
como es el caso de Talavera o Sevilla, hay otros aspectos carentes de desarrollo.
1
FROTHINGAM, Alice Wilson, “Tile Panels of Spain,1500-1650”. The Hispanic Society of America.
Nueva York. 1969.
PLEGUEZUELO HERNÁNDEZ, Alfonso. “Cerámica de Sevilla (1248-1841)” Cerámica Española.
Summa Artis, historia general de arte XLII. Editado por Trinidad Sánchez-Pacheco. Madrid. Espasa
Calpe, 1997.
-63-
ceramica
2/8/05
18:50
Página 64
En una zona tan rica en producción cerámica como es Valencia, donde además de en la capital se gestaron algunos de los principales focos de elaboración
azulejera como Manises, Onda o Alcora, se cuenta con una gran cantidad de análisis que permiten llevar a cabo un rastreo preciso de la cerámica de la provincia
de Valencia desde la Prehistoria hasta el siglo XIX, a pesar de que se aprecian
notables lagunas y la falta de una sistematización completa.
Ante esto llama la atención que sólo se ha encontrado un único referente a la
cerámica arquitectónica que aluda al periodo comprendido entre 1900 y 1936,
mientras que otras épocas cuentan con una profusa documentación; queda demostrada, por tanto, la necesidad de ampliar estos estudios, más aún si se hace hincapié en el factor geográfico, dado que la mayor parte de municipios donde la
cerámica cuenta con una presencia notable, carecen de una catalogación y estudio propios.
Por ello, este trabajo toma como punto de partida una vertiente básica, y es la
compilación de datos concretos que permitan elaborar en un futuro, el catálogo
de la cerámica arquitectónica de la Villa de Alaquàs atendiendo principalmente al
primer tercio del S. XX, concretamente hasta los inicios de la Guerra Civil
Española en 1936.
De la misma manera, también se han incluido varios ejemplos pertenecientes
a las últimas décadas del S. XIX o posteriores a la Guerra con el fin de crear una
visión de conjunto más completa, aspecto este muy enriquecedor no sólo para el
propio núcleo poblacional, sino también para configurar una correcta y completa
visión de determinados aspectos de la cerámica arquitectónica tan diversos como
la procedencia, las distintas tipologías o las principales características, entre otros
muchos puntos de análisis.
Los datos concretos que de Alaquàs se pueden rastrear en torno a esta materia, tanto en lo relativo a documentos publicados como atendiendo a archivos, se
reducen únicamente a las alusiones de los conjuntos y piezas que decoran la Casa
– Palacio de los Aguilar2, al pavimento de una capilla del antiguo convento de la
2
CORTINA PÉREZ, Manuel: El Palacio Señorial de Alaquás. Valencia. 1922.
FERRANDO MARTÍ, Mª Teresa y PLANELLS IBOR, Mª Teresa.: “Los azulejos del S. XV del CastilloPalacio de Alaquàs. Descripción y clasificación. Quaderns d´investigació d´Alaquàs. Col·lectiu
“Quaderns d´investigació d´Alaquàs”. 1983. pp. 11-22
“Los azulejos del Palacio Señorial de Alaquàs” (S. XVI-S. XIX)”. Quaderns d´investigació
d´Alaquàs. Col·lectiu “Quaderns d´investigació d´Alaquàs”. 1984. pp. 67-82.
-64-
ceramica
2/8/05
18:50
Página 65
Iglesia de Nuestra Señora del Olivar3 y a los diversos paneles devocionales ubicados en las fachadas de varias viviendas4.
Es por tanto el presente, un proyecto de gran interés, no sólo en lo alusivo a
la Historia del Arte a nivel genérico sino en lo que comprende al Arte Valenciano
como tal. Además, se atiende a los valores históricos y sociológicos que amplían
el conocimiento de la cerámica en sí a la vez que se enriquece y configura con
mayor exactitud la identidad de un pueblo; con ello, se consigue dar luz a un
nuevo capítulo en la dilatada historia de Alaquàs
Principales características de la cerámica arquitectónica
Lo primero que se debe tener en cuenta es lo que actualmente se conoce como
cerámica arquitectónica, es decir, aquella que se aplica en la arquitectura. Dentro
de esta calificación se pueden configurar dos grandes grupos: los elementos constructivos cerámicos, que forman parte de la propia estructura del edificio como
atobas o ladrillos, y los elementos cerámicos de revestimiento que se aplican a
suelos y paredes.
Este tipo de aplicaciones ya se conocían en Egipto y Mesopotamia y, como
elemento decorativo, fueron muy importantes en la génesis del pueblo musulmán,
a través del cual se establecieron importantes corrientes de influencia con España.
El reino de Valencia siempre ha despuntado en este sector y ha contado con
importantes centros productores. Tal es el caso de Paterna, donde la cerámica
plana dedicada a completar y decorar la arquitectura tuvo un papel esencial, constituyendo un capítulo muy importante los llamados “Socarrats”, o Manises,
núcleo conocido como el lugar de fabricación azulejera más importante del
mundo occidental en los dos últimos siglos de la Edad Media.5
Durante el renacimiento y el barroco, el campo de la azulejería vinculada al
espacio arquitectónico alcanzó grandes niveles de técnica e imaginación6 cuyas
3
BESÓ ROS, Adrià, “La capella de l´antic convent de la Nostra Senyora de L´Olivar d´Alaquàs.
Aspectes histórics i artístics” en Quaderns d´investigació d´Alaquàs. Col·lectiu “Quaderns d´investigació d´Alaquàs”. 1994. pp. 35-57.
PÉREZ GUILLÉN, Inocencio V., La pintura cerámica valenciana del siglo XVIII. Valencia. 1991.
Pág. 47-49
4
PÉREZ GUILLÉN, Inocencio. V. La pintura... op. cit. pp.96 y 517.
5
SÁNCHEZ PACHECO, Trinidad., Cerámica española. Balmés – Edició. S. L. 1995. pp. 68 y 70
6
Ibídem, p. 149.
-65-
ceramica
2/8/05
18:50
Página 66
decoraciones y modelos se mantuvieron en los siglos posteriores, generándose un
claro gusto hacia la tendencia historicista que se fue desarrollando junto a la
ampliación de mejoras a muy diversos niveles, afectando tanto a los procesos de
fabricación como a la tecnología aplicada.
Se observa por tanto una importante tradición en el uso del azulejo que se vio
mejorada, sin lugar a duda, en el primer tercio del siglo XX debido a distintos factores muy diversos entre sí, pero que a la vez configuraron un panorama óptimo
e idóneo para “la implantación cada vez más generalizada del azulejo como complemento de la construcción para el recubrimiento”7.
En este momento se vivió un auge notable en el ámbito sociológico pues tuvo
lugar un aumento considerable del nivel de población, originado por un importante avance económico que posibilitó que en el campo de la azulejería se introdujeran importantes innovaciones tecnológicas.
Junto con estos dos factores, hay que anotar otras dos características que
potenciaron la generalización del empleo de la cerámica vinculada a la arquitectura. Se trata por una parte, de la implantación de nuevas condiciones higiénicas
y de salubridad, ante las cuales el azulejo funcionaba de manera muy correcta.
Por otro lado, no cabe duda que el aumento del nivel económico de la sociedad, potenció la aparición de sectores enriquecidos que pretendieron dejar constancia de la mejora en su status de vida mediante el enriquecimiento de sus
viviendas; así el azulejo será entendido tomando cuenta de su carácter estético a
la hora de revestir superficies, dotándolas de una mayor riqueza y dignidad ornamental, tanto en interiores como en los exteriores.8
Ante esto hay que desechar la concepción de que un azulejo es un elemento
de carácter popular con una cierta connotación despectiva porque, incluso, se
pueden llegar a rastrear ejemplos que fueron decorados por notables artistas de la
Academia de San Carlos, constituyendo auténticos objetos de lujo.
Principales aplicaciones y tipos
La cerámica arquitectónica se puede aplicar en un gran número de espacios
pues se trata de un elemento que, bien por si mismo en solitario o bien por la
7
PÉREZ CAMPS, Josep., Taulells de Manises 1900-1936. Valencia. 1987. p. 12
SOLER FERRER, Mª Paz – PÉREZ CAMPS, Josep., Historia de la cerámica valenciana. Tomo IV.
Valencia. 1989. pp. 121-123.
8
-66-
ceramica
2/8/05
18:50
Página 67
adhesión de distintas piezas que permiten múltiples combinaciones a la hora de
ser colocadas, constituye un elemento útil para las necesidades que se le requieren, a la vez que da lugar al enriquecimiento del entorno plástico y a la configuración del panorama azulejero en un periodo y época determinados.
En este estudio no se van a hacer referencias a ejemplos propios del revestimiento interior de las casas9, no cabe duda que el azulejo contó en estos espacios,
con funciones muy específicas tales como los arrimaderos10, las cocinas, los
baños y sanitarios, los pavimentos y las diferentes intervenciones que se llevaban
a cabo en zonas concretas como los patios o los jardines.
Correspondientes al periodo citado, se pueden rastrear numerosos modelos y
tipologías ornamentales que abarcan desde los ejemplos que mantienen rasgos
propios de épocas anteriores como el renacimiento o el barroco, hasta aquellos
que se muestran en consonancia con los movimientos artísticos más cercanos en
el tiempo como son el modernismo o art decó.
En cuanto a la decoración exterior, que centra el objetivo principal en este artículo, se debe anotar que las distintas aplicaciones se concentran principalmente
en las jambas que marcan el acceso a las puertas y en las distintas adhesiones que
pueden completar la decoración de una fachada como los frisos, la zona del sota
balcón o los zócalos entre otros.
El revestimiento con azulejos de las jambas, es muy característico en la zona
de L´Horta, siendo “una costumbre que se aplicaba en Manises desde la segunda
mitad del siglo XIX y que pasó a ser una práctica generalizada en el primer tercio del siglo XX”11. Por ello no es de extrañar, que las principales fábricas de este
sector, se hicieran eco de esta tendencia, y potenciaran su desarrollo.
Esta tipología, se puede organizar según la estructura que muestra su composición, es decir, atendiendo a la disposición y a la forma en que los distintos elementos se desarrollan en el espacio que ocupan y según las diferentes técnicas
mediante las cuales, se realiza cada tipo de azulejo12.
9
En Alaquàs se han localizado y catalogado elementos cerámicos propios de esta tipología que
constituyen otro apartado de gran interés que dará pie a nuevos estudios.
10
Franja de madera, corcho etc. que se coloca en la pared para preservarla del roce de las sillas u
otros objetos.
11
PÉREZ CAMPS, Josep., Taulells de ... op. cit. p. 34.
La mejor manera de entender este punto, es tomando como referencia la distribución que en
torno a esta tipología se lleva a cabo en el libro Taulells de Manises 1900-1936 ya citado con anterioridad, pp. 34 y 35.
12
-67-
ceramica
2/8/05
18:50
Página 68
La aplicación de elementos cerámicos en las fachadas puede considerarse una
constante, respondiendo a varios formatos, modelos y estilos que otorgaban al
conjunto una mayor vistosidad. Este rasgo se hace mucho más patente en los inicios del siglo XX debido a la influencia modernista que va a dejar una impronta
decorativista muy relevante en el campo de la azulejería, que a la vez se convertirá en uno de los elementos que marcaran el estilo en sí mismo, dotándolo de
características y rasgos esenciales.
Cerámica arquitectónica. Alaquás. 1900-1936
A continuación, se presenta un estudio detallado y pormenorizado de varios
ejemplos de cerámica arquitectónica de la Villa de Alaquàs, un pueblo de la
comarca de L´Horta Sud muy influenciado por dos núcleos punteros en esta actividad: Paterna y Manises.
A lo largo de la historia de esta población y aunque aquí no se haga hincapié,
se ha dado una importancia notable al empleo de elementos cerámicos vinculables a la arquitectura. El ejemplo más idóneo para contrastar esta información es
la Casa - Palacio de los Aguilar, donde se rastrean ejemplos relevantes y de gran
interés que a su vez han tenido proyección fuera de las fronteras del territorio que
constituía el Reino de Valencia13.
De la misma manera, tampoco se van a dar alusiones a los distintos ejemplos
que se han rastreado perteneciente al interior de las viviendas como ya se ha citado, ya que constituye un núcleo compacto para posibles nuevos estudios; con esto
se pretende tener como base una idea homogénea que abarque modelos pertenecientes a una misma aplicación, es decir, aquellas intervenciones aplicadas en las
fachadas.
La metodología que se ha seguido con el fin de dar respuesta a las dudas planteadas en la introducción se centra en tomar ejemplos concretos que se conservan
in situ y a su comparación con otros modelos similares que ya han sido sometido
a estudio en otras poblaciones o bien al rastreo en los distintos catálogos que crearon las fábricas dedicadas a este tipo de producciones.
Al igual, se ha creado un modelo o plantilla de trabajo donde se detallan los
diferentes puntos en que puede constar un análisis y que abarcan datos tan hete13
COLL, Jaume., “ Lozas de azulejos de Manises y Valencia”. Lozas y Azulejos de la Colección
Carranza. Junta de Comunidades de Castilla la Mancha. Consejería de Educación y Cultura. 2002.
pp. 117.
-68-
ceramica
2/8/05
18:50
Página 69
rogéneos como la denominación del azulejo, la cronología, la fabricación, la ubicación, el estado de conservación o la propia iconografía que presentan.
Con el fin de dar una visión global y conformar un panorama unitario y completo de lo que constituye esta manifestación artística en Alaquás, completando
el amplio vacío existente, se anotan a continuación varios modelos y sus principales características que dotan a la población de una mayor identidad, a la vez que
se adquiere una mayor sensibilidad hacia el propio patrimonio.
1. Alaquàs. Plaza del Santísimo. Nº: 2
Este modelo data de 1890 – 1900 aproximadamente y su procedencia bien se
puede situar tanto en Valencia como en Onda, ya que en ambos núcleos se realizaron ejemplos similares.
Concretamente se trata de un azulejo cuadrado de cenefa de 20 x 20 cm de
lado (Fig. 1), del que se conservan 10 ejemplares completos y en un buen estado
a pesar de que se aprecian en parte al quedar cubiertos por la moldura del balcón.
Se realizó aplicando pintura sobre superficie lisa mediante trepas, destacando
el uso del azul, al amarillo, el ocre, el verde oliva y el rosa.
Fig. 1
La decoración se encuentra organizada de forma paralela a uno de los lados
del azulejo y se encuadra en el grupo de azulejos que siguen modelos clasicistas
con motivos textiles; más concretamente se trata de una cinta en espiral plisada
en torno a un tallo.
Tomando como núcleo este eje central rígido (bambú) se aprecian a su alrededor una serie de campanillas azules enmarcadas por una guirnalda de laurel
Al igual, destaca una cinta ancha en espiral plisada con bordes en pasamanería y adornos centrales formados por ramilletes compuestos por dos florecillas
abiertas, diminutas hojas y tallos muy estilizados.
-69-
ceramica
2/8/05
18:50
Página 70
No se ha podido rastrear ningún modelo semejante y aunque se tiene constancia de ejemplos de gran similitud14 no se puede afirmar con rotundidad el
hecho de que los principales elementos decorativos sean exactos, si bien responden a una misma tipología decorativa.
2. Alaquàs. Plaza del Santísimo. Nº: 3.
Muy interesante resulta la combinación de azulejos que configuran las dos
jambas y el dintel que marcan el acceso a esta vivienda pues entorno a una pieza
central independiente, se colocaron unos cuadrados esquinares con laureas y
varias piezas rectangulares formadas por un azulejo biselado con forma de tronco de pirámide. (Fig. 2)
Fig. 2
La decoración del azulejo central se basa en la interpretación realizada de un
fragmento del cuadro de Rubens “La corona de frutos”, lo que deja constancia de
cómo varios fabricantes se adscribieron modelos muy cultos que respondían a las
últimas novedades estéticas; las fábricas que más destacaron dentro de esta línea
de producción fueron las de JOSÉ Mª VERDEJO y LEOPOLDO MORA. (Fig. 3)
14
Ver marco cerámico del panel de la Virgen de los Desamparados con los Santos Vicentes de
Ribaroja de Turia, C/ Garelli y Pastor Nº: 15 en PÉREZ GUILLEM, Inocencio., Cerámica arquitectónica. Azulejos valencianos de serie. El siglo XIX. Castellón de la Plana. Instituto de Promoción
Cerámica. Diputación Provincial. 2000. p.671.. y los distintos modelos del Catálogo de la colección
de azulejos de serie del siglo XIX. Museo del azulejo de Onda. Castellón. 2000.
-70-
ceramica
2/8/05
18:50
Página 71
Fig. 3
La cronología de este modelo, abarca desde 1916 a 1930 y se engloba en una
técnica productiva basada en la obtención de relieves mediante planchas de madera que originan concavidades sobre las que luego se aplica el color con un pincel.15
Este modelo de azulejo16 se adecua perfectamente a los modelos estilísticos
originados por el modernismo, donde se dio gran relevancia a la imitación de las
formas de la naturaleza.
3. Alaquàs. C/ Mayor. Nº: 5.
Las dos jambas de esta vivienda, se encuentran decoradas con una composición muy interesante realizada mediante azulejos cuadrados de 15 x 15 cm. que
forman paneles que se prolongan desde la parte inferior a la superior de forma
continua.
Estos azulejos se conservan en el lugar de origen para el cual fueron concebidos por lo que responden a una ordenación inicial en esta zona de la fachada y se
resuelven mediante la técnica de cuenca o arista, lo que permite la aparición de
relieves principalmente en los perfiles de los elementos representados.
La posible creación de este modelo se sitúa en Manises, donde entorno a
1920–1925 tuvieron un auge notable este tipo de producciones y composiciones.
Las tonalidades son muy variadas, destacando el uso del azul cobalto y diluido, amarillo, naranja, marrón, ocre, rosenc, verde oliva, verde tenue o gris.
15
PÉREZ CAMPS, Josep., Taulells de ... op. cit. p. 35.
Se puede observar el mismo azulejo en la C/ San Pascual de Manises Nª: 2 de Manises aunque
colocado de forma invertida y completado por elementos distintos.
16
Ibídem. p. 35.
-71-
ceramica
2/8/05
18:50
Página 72
La estructura que sigue la decoración de estas jambas responde a un modelo
compositivo cerrado simétrico con un motivo central asimétrico, siendo destacable el hecho de que los enlaces entre las distintas piezas son muy variados y atienden a lo representado.
Todo el conjunto se organiza en torno al eje central del espacio, apareciendo
una clara alternancia y combinación de elementos que a su vez constituyen una
unidad compositiva muy homogénea. En la parte inferior se aprecia una palmeta
de hojas lobuladas, flanqueada por tallos simétricos que culminan en dos hojas
fusiformes. (Fig. 4)
Desde este punto se desarrolla un motivo en forma de cruz, generado por molduras que se enroscan en sus extremos, desde donde parten prolongaciones curvas que delimitan el núcleo central. Aquí se ha representado un óculo dividido en
bandas que cuenta en su espacio central con una flor de cuatro pétalos trilobulados; de los bordes surgen tallos estilizados que culminan en una hoja de vid muy
esquemática.
Para enlazar con el motivo central y principal, parten
desde el citado óculo dos finos tallos en cuyos extremos aparecen dos flores simétricas de gran tamaño, con pétalos en
forma de lágrima; se acusa una notable abstracción y estilización.
Como elemento principal en esta jamba (Fig. 5), se presenta una cartela alargada y curva en sus extremos, con una
especie de guirnalda festonada como remate tanto inferior
como superior, donde se ha situado un motivo muy repetido
dentro de estas tipologías originarias de Manises a partir de la
segunda década del siglo XX: un pavo real de perfil; responde
a la moda de la época de rescatar modelos propios de la cultura islámica, al igual que también se hace
referencia a los estampados de algodón del
siglo XVIII.
Fig. 4
-72-
Fig. 5
Lo que más llama la atención de este
espacio central, es el tratamiento realista
y racional con el que fue tratado en contraste con el resto de la jamba, que se
encuentra sometida a los intereses y preferencias del estilo modernista.
ceramica
2/8/05
18:50
Página 73
La figura del animal está situada sobre la rama de un árbol de la que penden
ramilletes de hojas de tamaño diferente. Este elemento se encuentra enmarcado
por un paisaje de gran verosimilitud en el que se han plasmado las sombras generadas en el agua y las irisaciones de la montaña y la tierra.
Son muchos y muy diversos los modelos de jambas completas que se produjeron en Manises a principios del siglo XX, respondiendo al carácter culto que
ciertas fábricas pretendían reflejar en sus representaciones. Atendiendo a estos
modelos se han precisado los datos anotados, ya que el modelo concreto no ha
sido localizado. Aún así, se trata de ejemplos que responden a una misma concepción y tipología, lo que hace posible tales afirmaciones.
4. Alaquàs. C/ Mayor. Nº: 11.
Forrando las jambas del vano situado a la derecha de la puerta de entrada a la
vivienda se encontraba una serie de azulejos que hasta fechas cercanas (abril
2005), se podían completar in situ pero que la ruina de la vivienda y la desaparición de los mismos impide actualmente su contemplación.
Se trataba concretamente de 16 piezas, varias de las cuales estaban devastadas
para adecuarse al marco arquitectónico que las albergaba; datan del siglo XIX
(1800 / 1890) y se realizaron tanto en Valencia como en Onda. (Fig. 6)
Cada uno de los azulejos fue realizado mediante el sistema de trepas, empleándose el azul cobalto, el verde agrisado, el negro manganeso y el rosenc. Se
constituye de esta manera una retícula ortogonal donde 4 rectángulos, enfrentados
entre sí, se perfilan mediante piezas esquinares con forma de triángulo. (Fig. 7)
Esta estructura enmarca el espacio central cuadrado donde se encierra una
pequeña cruz de San Andrés, con sus extremos y zona central decorados con rombos azules, mientras los espacios generados se decoran en rosenc.
Además de varios modelos similares en La Habana Vieja, como es el caso del
zócalo de la Casa – Palacio de la C/ Compostela, se pueden rastrear modelos
similares en el llamado catálogo Milton17.
17
PÉREZ GUILLEM, Inocencio., Cerámica arquitectónica. Azulejos valencianos... op. cit.
Azulejerías de la Habana. Cerámica arquitectónica española en América. Universidad de
Valencia. 2004. pp. 136 –137
Catálogo de la colección de azulejos de serie del siglo XIX. Castellón de la Plana.... op. cit.
-73-
ceramica
2/8/05
18:50
Página 74
Fig. 6
Fig. 7
5. Alaquàs. C/ Los Benlliure. Nº: 38.
Este modelo rectangular de cenefa, presenta una cronología retardataria pues
se fecha en torno a 1860 - 1870 correspondiendo a modelos fabricados tanto en
Onda como en Valencia.
La composición, forma parte del chapado de las jambas de uno de los vanos
de la fachada y se aprecia un buen estado de conservación a pesar de diversas
manchas de pintura debidas a posteriores encalados de la fachada.
La ornamentación es monocroma en azul cobalto, pintura que debió ser aplicada empleando el sistema de trepas o a mano alzada sobre un estarcido o calco,
y se distribuye en torno a dos ejes perpendiculares de simetría.
La banda central aparece decorada por un perlario simple en festón, que queda
delimitado por cardos de acanto muy estilizados que surgen de un núcleo fusiforme; por todo ello, este modelo se puede adscribir a los conocidos como azulejos de trazos azules finos a trepa. (Fig. 8)
Se dan modelos muy similares en el Catálogo de Onda, pero se trata de ejemplos cuadrados que podrían poner en relación este
azulejo de Alaquàs con
los llevados a cabo en la
Fábrica de Vicente Peris
Vidal o bien atribuirlos a
la Fábrica “La Campana”
a partir del año 186018.
Fig. 8
18
-74-
Ibídem.
ceramica
2/8/05
18:50
Página 75
6. Alaquàs. Plaza dels Ollers. Nº: 11.
Los presentes azulejos se colocaron formando parte del chapado de las dos
jambas laterales de la puerta, aunque en la zona inferior se aplicó una especie de
zócalo monocromo que enmarcaba el conjunto. Esta vivienda ha sido sometida a
una reforma total y no se conserva ninguno de ellos, aunque el mismo modelo se
mantiene intacto en la C/ de San Jeroni Nº: 15 de Alaquàs.
Se trata de un modelo creado entre 1920 – 1930 en la Fábrica Azulejos hijos
19
de Justo Vilar S. C. de Manises, resuelto con la técnica de cuenca o arista que
genera la aparición de relieves y pintado con trepas y tonalidades verde oliva,
negro y marrón.
Cada uno de los azulejos es rectangular de cenefa y muestra una decoración
estructurada en líneas paralelas al eje longitudinal basada en la repetición de una
muestra.
Varias cintas sinuosas paralelas, enmarcan dos arcos apuntados en cuyo interior se desarrolla un modelo con punta curvilínea de lanza.
El espacio central queda ocupado por un
rombo decorado en su zona interna por una
flor de 4 pétalos con forma de lágrima; de aquí
surgen estructuras triangulares simétricas dos
a dos que, mediante la prolongación de uno de
sus lados, se unen a la punta de los arcos antes
citados.
Estas jambas presentan un despiece
doble, pues los azulejos se colocaron formando dos columnas o hileras paralelas; se aprecia por tanto una adecuación completa al
marco. (Fig. 9)
Fig. 9
7a. Alaquàs. Plaza dels Ollers. Nº: 16.
En la fachada de esta vivienda, se realizaron importantes intervenciones
donde la cerámica jugó un papel fundamental, apareciendo en las jambas de acceso y en la sota puerta, en varias aplicaciones puntuales enmarcadas por estucos y
en una cornisa continua que actúa como remate previo al voladizo del tejado.
19
Catálogo de la fábrica de azulejos Hijos de Justo Vilar S. C. Fábrica de Azulejos, Loza y
Majólica. Nº: 18. Lámina 2.
-75-
ceramica
2/8/05
18:50
Página 76
Atendiendo a los azulejos cuadrados de cuarto ornato de las jambas, se aprecia un estado de conservación inmejorable a pesar de la pérdida de varias de las
piezas, procedentes de Manises en torno a 1920 – 1930.
La solución utilizada se basa en el empleo de trepas, predominando el azul
cobalto, verde, amarillo, naranja, azul muy diluido y marrón.
Al tratarse de modelos conocidos como de cuarto ornato, presentan una alternancia en su decoración siendo simétricos dos a dos. La pintura aparece estructurada en torno a los ejes diagonales, excepto en la zona de los enlaces donde se
sigue la forma propia de la pieza. (Fig. 10)
El primero de los modelos que constituye este
conjunto, presenta el espacio central ocupado por un
octógono que, en síntesis, forma parte de la sección
de una pirámide; se muestra con ello una clara derivación de la serie de punta de diamante propia del
siglo XVI. Queda limitado por dos molduras y en su
interior se desarrollan dos espacios de distinta tonaFig. 10
lidad separados por un eje diagonal, destacando la
aplicación de matices con el fin de otorgar al modelo de posibles efectos de sombreado.
Los laterales quedan ocupados por unos junquillos de formas convergentes, en
cuyo interior se acoge una hoja.
La decoración se completa con los diversos enlaces palmeados donde varias
prolongaciones estilizadas constituyen la culminación del elemento central del
azulejo contiguo.
Este segundo tipo presenta una estructura cruciforme decorada con bandas
paralelas que enmarcan una hoja espigada. El espacio central a su vez, muestra
un cuadrado con las mismas características de punta de diamante del azulejo anterior; lo mismo ocurre con los 4 junquillos convergentes.
Se deben destacar las hojas de acanto de penca abierta de los extremos diagonales que hacen referencia a un repertorio muy antiguo de tradición grecorromana.
El modelo de este conjunto aparece en uno de los catálogos conservado en el
Museo de Cerámica de Manises20, aunque formando parte de un arrimadero; por
ello esta aplicación en las jambas de una puerta es novedosa y no se ha podido
rastrear ningún ejemplo similar.
20
-76-
Catálogo dibujado por Vicente Sanchís Arcis, Museo de Cerámica de Manises, 1920-1930 aprox.
ceramica
2/8/05
18:50
Página 77
7b .Alaquàs. Plaza dels Ollers. Nº. 16
Otro interesante elementos de esta fachada lo constituye la sota puerta donde
se aplicó un conjunto de azulejos muy interesantes que presenta numerosas erosiones y desconchados, debidos precisamente a su ubicación en esta zona, lo que
también supuso que en parte fueran fragmentados para su mejor adecuación al
espacio.
Se trata originariamente, de azulejos cuadrados de cenefa fabricados en la
Fábrica Novella y Garcés de Onda entre 1870 – 1880.
La decoración completa de este azulejo se estructura atendiendo al eje perpendicular de simetría que se ve ocupado por un escudo nazarí con banda cruzada en diagonal y tres lágrimas en los distintos espacios generados.
El conjunto se completa con finos tallos y bolas en las intersecciones centrales y un interesante conjunto de vainas y atauriques; el original, estaba delimitado por un listón rectilíneo de color ocre y en la parte inferior y otro azul festonado en la superior. (Fig. 11)
Fig. 11
Este tipo de piezas tenía una finalidad casi arqueológica pues aunque de forma
escasa, se siguieron modelos de origen y procedencia nazarí como las solerías originales de la Alhambra del siglo XIV, el Cuarto Real de Sto. Domingo de Granada
del siglo XIII o el conocido como Azulejo de la Alhambra o “Fortuny” (1417)21.
8. Alaquàs. C/ San Hipólito. Nº: 13
Éste es uno de los conjuntos mejor conservado, a pesar de que no se puede
apreciar en su totalidad; únicamente permanece completa la jamba superior,
mientras que las laterales han perdido parte de sus elementos en la zona inferiores. Se trata en concreto del jambaje de la puerta que da acceso a la vivienda.
21
PÉREZ GUILLEM, Inocencio., Cerámica arquitectónica. Azulejos valencianos... op. cit.
-77-
ceramica
2/8/05
18:50
Página 78
Las piezas en cuestión datan del primer tercio del siglo XX y salieron de la
Fábrica de azulejos de Leopoldo Mora Más en Manises22.
Como es común en estos modelos, se emplearon las trepas en su ejecución
aplicándose un gran número de tonalidades: azul cobalto, azul diluido, amarillo,
naranja, verdes espeso, verde tenue, ocre y marrón.
Los azulejos que conforman estas jambas se organizan como conjunto atendiendo a una composición cerrada simétrica con un motivo central asimétrico.
(Fig. 12)
En torno a un mazo central cilíndrico con acanaladuras, rodeado por hojas
denticuladas de carácter carnoso, se desarrolla el grueso de la decoración, apareciendo dos margaritas de distinta tonalidad y tamaño unidas entre sí por un tallo
circular y sinuoso que culmina en una forma convexa.
El espacio central se rellena mediante una cartela en cuyo interior se desarrolla una imagen animalística compuesta por dos pájaros opuestos entre sí que se
apoyan en la rama de un árbol, cuyas hojas aparecen completando el conjunto en
la zona superior. (Fig. 13)
Este núcleo viene limitado por el
tronco central antes citado, que en la
parte de abajo se desarrolla en dos
ménsulas simétricas cuyas estrías forman dos meandros cerrados.
Fig. 12
Fig. 13
Toda esta estructura central cuenta
con una moldura inscrita dibujada, que
perfila y estiliza la composición; además se ha añadido una molduración
anexa que amplia el carácter decorativista de la obra y permite una mejor
adecuación a la anchura de la jamba.
Con todo esto, queda claro que se trata de un modelo que responde al “delirio” propio del modernismo en torno a la decoración, que tuvo en el campo de la
cerámica a propulsores tan relevantes como Gaudí o Puig i Cadafalch, exponentes máximos de la corriente modernista, cuya importancia y notable influencia ya
ha quedado patente.
22
-78-
Catálogo de la fábrica de azulejos de Leopoldo Mora Más. Catálogo Nº: 4. Imagen: 146.
ceramica
2/8/05
18:50
Página 79
9. Alaquàs. C/ San Hipólito. Nº: 19.
Los dos vanos que enmarcan el acceso a esta vivienda presentan un amplio
interés para el campo de la cerámica al quedar chapadas sus jambas por varios
azulejos diferentes; se pueden rastrear hasta 4 modelos, cada uno de los cuales
presenta características y rasgos concretos.
-El azulejo más numeroso procede de Quart de Poblet, quizá de la Fábrica
Valdecabres y se fecharía en torno al año 1900. La razón de emitir tales afirmaciones radica en que, en este cercano pueblo, se han encontrado los mismo azulejos
formando parte del chapado de una ventana; concretamente en la C/ Gerardo Darín,
Nº: 15. De aquí se obtiene una datación bastante segura ya que la fachada cuenta
con dos paneles: “La Virgen de los Dolores con San Vicente Ferrer” y “La Trinidad”
fechado en 190023. Todas estas intervenciones deben responder a un mismo plan
constructivo por lo que la datación de los azulejos del vano se prevé cercana.
La decoración, trazada mediante trepas en azul diluido, azul cobalto, verde,
rosa, amarillo y naranja, se desarrolla en torno al eje longitudinal de la pieza que
viene conformado por un mazo cilíndrico con flores de lino, amapolas, hojas denticuladas sobre fondo oscuro. Alrededor se despliega una cinta azul pálido sobre
la que se desarrollan un perlario en azul oscuro y varios trazos paralelos muy
difuminados. (Fig. 14)
Fig. 14
Esta cinta se enrosca
en espiral doble y de las
distintas hendiduras que
genera, surgen ramitos de
laurel que se expanden en
direcciones opuestas.
Se trata por tanto de un modelo clasicista con motivos textiles; concretamente a aquel que hace referencia a un mazo floral cilíndrico atado con cintas.
-En uno de los vanos, se conservan dos azulejos que a pesar de estar devastados para incorporarse al espacio, presentan detalles muy interesantes; son piezas
de cenefa, en principio cuadradas, cuya producción se rastrea en torno a Valencia
y Onda entre los años 1870 – 1880.
Aparecen unos enlaces implícitos en cada uno de los azulejos, que permiten
su unión a través de los cuatro espacios de forma triangular que configuran los
23
PÉREZ GUILLEM, Inocencio., Cerámica arquitectónica. Azulejos valencianos... op. cit.
-79-
ceramica
2/8/05
18:50
Página 80
flancos; se componen de un rayado paralelo en azul con perlarios y trazos arqueados superpuestos, también azules.
Se configura un núcleo central romboidal cuyos
perfiles se completan con dos tramos de hojas lobuladas muy estilizadas; el espacio residual se rellena con
un rayado paralelo no homogéneo, pues es más ancho
en la zona central. (Fig. 15)
Rasgos muy similares se observan en la casa de
Adrià Besó en Torrente y en ciertos ejemplos realizados
en la ciudad de Onda; ambos aspectos ayudan a marcar
tanto su génesis como una probable cronología24.
Fig. 15
Hay que dejar constancia de que en estas mismas
jambas se observan otros dos tipos distintos de azulejos, uno muy similar al analizado anteriormente, y otro
que refleja la influencia mudéjar dentro de la producción cerámica de este periodo.
10. Alaquàs. C/ Ramón y Cajal. Nº: 9.
En Alaquàs existen varias viviendas cuyas aplicaciones cerámicas en distintas
zonas de la fachada, ejemplifican la inspiración en modelos retardatarios típicos
de época renacentista. Concretamente, se trata de una tipología generalizada
durante el primer tercio del siglo XX y cuyas principales referencias se encuentran en los paneles que revisten el zaguán y el zócalo del refectorio del Colegio
del Patriarca en Valencia, la escalera del antiguo Colegio de los Jesuitas o un pilar
de la iglesia Mayor de la Antigua Cartuja de Ara Christi; se observa una total asimilación de los ejemplos del Libro IV de Serlio25.
Estos modelos fueron muy repetidos en este periodo en las diversas fábricas
de Manises tal y como lo refleja la consulta de los catálogos. Por ello y aunque
no se han encontrado piezas similares al modelo analizado, las similitudes observadas y la cronología común, permiten la catalogación del azulejo.
24
PÉREZ GUILLEM, Inocencio., Cerámica arquitectónica. Azulejos valencianos... op. cit.
Catálogo de la colección de azulejos de serie del siglo XIX. Castellón de la Plana.... op. cit.
25
GUEROLA I BLAI, Vicent., La pintura cerámica a Carcaixent. U. P. V. Ajuntament de Carcaixent.
2002. p. 354.
-80-
ceramica
2/8/05
18:50
Página 81
Concretamente, se trata de un azulejo cuadrado de cenefa de 20 x 20 cm, que
en conjunto recubre la zona de las jambas de la vivienda. Esta tipología, se ha rastreado formando parte de paneles de zócalo y conformando conjuntos en combinación con otras piezas, por lo que su aplicación en jambas resulta muy curiosa e
interesante.
Los distintos colores: azul cobalto, amarillo, naranja y verde, fueron aplicados mediante el uso de trepas, generándose una decoración que presenta enlaces
tanto en las esquinas como en los espacios centrales, lo que posibilita la adhesión
de azulejos uno al lado del otro.
Como elementos propiamente decorativos, destaca en la zona central un casetón, similar a los que aparecen en los techos decorados, con forma de pirámide de
base cuadrada, que se conoce con el nombre de punta de diamante. Se delimitan
dos espacios triangulares de distinto color y con clara alusión al sombreado, que
enmarcan un cuadrado central de fina moldura que contiene una roseta sobre
fondo verde a manera de cabeza de clavo26. (Fig. 16)
Alrededor de esta figura central
se desarrolla un octógono delimitado por una moldura similar que
contiene un conjunto de roleos con
formas convergentes en sus extremos.
Fig. 16
Los enlaces de las esquinas se
forman mediante cuatro cuadrados
cuarteados de doble moldura, quedando completada la exterior con
roleos similares a los ya citados.
Así mismo, los enlaces centrales se basan en una especie de cartela estilizada
con enrollamientos cóncavos y convexos; en su interior se inscribe un óculo oval
con perfilado doble.
26
PÉREZ GUILLEM, Inocencio., Cerámica arquitectónica. Azulejos valencianos... op. cit.
SOLER FERRER, Mª Paz – PÉREZ CAMPS, Joseph. Historia de la cerámica valenciana. Tomo III.
Valencia. 1989.
Cerámica, Arte y Devoción. Colección Carranza. Catálogo de Exposición. Daimiel, Ciudad Real.
Del 9 al 30 de Abril de 1995.
-81-
ceramica
2/8/05
18:50
Página 82
11. Alaquàs. C/ Doctor Barberá. Nº: 10.
Los presentes azulejos fueron resueltos mediante la técnica de cuenca o arista, lo que se deduce del relieve que presentan. Se trata de piezas cuadradas de
cuarto ornato de 15 x 15 cm que se ubican en las jambas laterales de la puerta que
da acceso a la vivienda.
La cronología de este modelo, remite a los años 1920 - 1925 y se conoce a
ciencia cierta debido a que todas las referencias con respecto a él se han tomado
de los Catálogos de la Fábrica de José Mª Verdejo conservados en el Museo de
Cerámica de Manises; sin embargo, hay que anotar que las dos referencias encontradas a este modelo, hacen referencia a su colocación en los años posteriores al
fin de la Guerra Civil.
Atendiendo a la estructura de conjunto que presentan estas jambas (Fig. 17)
se aprecia un modelo que repite una muestra con una solución de remate.
En cada uno de los azulejos la decoración se ha dispuesto de forma diagonal al espacio, por lo que las zonas
residuales de las esquinas no presentan ningún tipo de elemento. Todos los elementos, se articulan en relación completa con el azulejo continuo destacando varias molduras
estilizadas en azul cobalto, cuyas formas cóncavas y convexas apuntadas funcionan claramente como enlaces.
Fig. 17
El carácter decorativista de este modelo responde a su
concepción modernista por lo que no es de extrañar la aparición de este tipo de elementos desarrollados de forma particular.
El motivo central queda delimitado por tallo que se enrosca levemente en sus
extremos y que presenta adosadas dos molduras rectangulares que se adaptan al
perfil curvilíneo, decoradas por dos listones paralelos y una franja central.
El núcleo del conjunto queda ocupado por una especie de vaso corto del que
penden dos argollas a casa uno de los laterales, decorado por una primera franja
horizontal salpicada por tres puntos y diversas bandas en zigzag que permiten
plasmar formas romboidales muy estilizadas,
Se observan también una especie de plumas enroscadas que complementan el
espacio con un claro carácter simétrico y flanquean una flor de pétalos dobles;
estos dos elementos enlazan con el azulejo continuo que presenta la misma decoración pero de forma invertida, dando lugar a una forma vegetal abstracta.
-82-
ceramica
2/8/05
18:50
Página 83
La composición resulta en parte extraña y poco realista, lo que no es de extrañar si se anota que se trata de un modelo que no corresponde a su concepción inicial. Únicamente se ha empleado un tipo de azulejo para configurar el conjunto,
pero en realidad el modelo correcto presenta sobre el vaso dos palomas simétricas salpicadas de geometrizaciones vegetales en forma de roleo. Estas piezas se
han omitido salvo en la parte superior, por lo que es en el único espacio donde se
aprecia la génesis de este modelo.
Para poder apreciar esta jamba tal y como fue concebida, hay que tomar como
referencia las jambas de la puerta de una casa de Aldaya (C/ de la Iglesia, Nº: 66)
Fig. 18; junto con las similitudes propias, también queda patente como en los distintos pueblos que componen L´Horta, se dieron modelos similares lo que puede
constituir un panorama interesante a la hora de analizar la actividad de compra y
venta de azulejos que tuvo lugar en el primer tercio del siglo XX.
Fig. 18
Todos los modelos analizados, constituyen
un pequeño número de ejemplos de todo el
panorama global que configura el conjunto de
cerámica arquitectónica de la Villa de Alaquàs.
No se han citado estos modelos ni teniendo en
cuenta su mayor calidad, importancia o categoría, sino pretendiendo dar una visión general de varias de las distintas tipologías que en
torno a este campo se pueden rastrear.
Se tiene constancia de otros ejemplos de cerámica exterior de los que únicamente se han encontrado piezas parejas en ciudades tan lejanas como La
Habana27, de intervenciones interiores en multitud de zócalos y pavimentos de
conservación inmejorable e incluso, la conservación de modelos muy posteriores
al siglo XIX.
Queda patente que la importancia del patrimonio de un pueblo, no se encuentra sólo en sus edificios más relevantes o en sus tradiciones más arraigadas, sino
en todos y cada uno de los elementos que constituyen su génesis única y determinante, que da lugar a los rasgos autóctonos que definen y caracterizan una
población y su cultura.
27
PÉREZ GUILLEM, Inocencio. pp. 136 –137 y 228 – 229.
-83-
ceramica
2/8/05
18:50
Página 84
Descargar