4. Análisis desagregado de la principal partida de exportación

113 veces mayores, las de los alimentos para el ganado superaron las
72 veces, y la de los animales vivos las 27 veces; únicamente descendieron por debajo de ese valor medio los productos cuyas importaciones son relevantes para Marruecos; cereales 4,7 veces, azúcar y miel
4,5 veces, aceites vegetales 3,2 veces;café,té y cacao 5,5 veces y productos lácteos y huevos 8,1 veces (Cuadro N° 23).
Cuadro N° 23
IMPORTACIONES
IMPORTANCIA RELATIVA ESPAÑA/MARRUECOS
1986
1990
1991
7,7
39,3
27,2
58,0
6,4
3,0
28,6
1,5
7,3
102,1
6,7
3,6
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3,2
4,9
113,9
8,1
4,7
76,5
4,5
5,5
Alimentos ganado
24,4
219,0
149,2
Bebidas
Tabaco
Aceites vegetales
94,5
4,4
0,5
46,9
8,7
1,9
72,0
6,0
3,2
Grasas animales
Materias en bruto
14,0
19,5
17,8
14,9
12,4
11,4
Otros productos
3,0
13,1
16,4
TOTAL
6,6
10,1
10,9
Animales vivos
Carnes y prepazados
Leche y huevos
Cereales y prepazados
Frutas y verduras
Azúcaz y miel
Café, té y cacao
Fuente de datos: FAO.
4. ANÁLISIS DESAGREGADO DE LA PRINCIPAL PARTIDA
DE EXPORTACIÓN: EL COMERCIO DE FRUTAS
Y HORTALIZAS
Antes de comenzar el análisis de este grupo de productos fundamentales para la exportación, parece conveniente conocer el comportamiento de la producción del sector a fin de determinar las diferencias de magnitud existentes en las producciones totales de los productos significativos así como las diferencias de rendimientos. Este
56
análisis, que complementa el que se realiza posteriormente sobre el
comercio exterior, posibilitará vislumbraz cuáles son los productos en
donde la competencia es más fuerte, ya que de existir rendimientos
análogos, la tecnología utilizada a nivel de semillas y de otros inputs
sería similar.
4.1. Análisis desagregado de la producción de frutas y hortalizas
Procediendo a realizaz un análisis desagregado del sector a nivel productos, el Cuadro N° 24 recoge el detalle de los productos significativos,
destacando de entre ellos para ambos países la producción de cítricos, fundamentalmente de naranjas y de clementinas. En 19921a producción española de nazanjas multiplicó por 3,6 a la de Marruecos, y la producción de
clementinas fue 5,1 veces superior a la marroquí20.
Otra producción significativa para Marruecos y España es la de aceitunas para mesa; en 1992 Mazruecos recolectó 500.000 Tm. experimentando un crecimiento del 28% con respecto al año anterior; la producción
española en ese mismo año fue casi 8 veces superior a la de Marruecos al
alcanzar 3,8 millones de Tm, siendo el crecimiento con respecto al año
anterior igual al producido en Mazruecos.
1'or el contrario, la producción de aceite de oliva en Marruecos es mazginal, hecho que no se produce en España al ser una potencia mundial en
la producción de este producto.
En fresas, la producción en Marruecos es también importante, aunque
en el período considerado ha experimentado grandes fluctuaciones;
España, potencia productora y exportadora de fresas, también tiene su producción sujeta a fluctuaciones, en algunos años considerables, como
puede comprobazse en la información facilitada.
A1 igual que en frutas, en hortalizas Marruecos se configura como
una potencia exportadora de la ribera sur del Mediterráneo, hecho que
no significa que su producción alcance la magnitud de la española,
dado que al ser menos adversas las condiciones climáticas del
Mediterráneo norte y al haberse realizado mayores inversiones en agri-
ZÓ En 1994 la producción de naranjas en España seguía creciendo a un rirmo superior representando
2,7 veces la producción marroquí, y en el caso de la producción de clemen[inas, el proceso se intensificaba alcanzando nuestra producción 5,3 veces el peso de lo produccido por Marruecos.
57
cultura irrigada, existen diferencias significativas en productividad para
gran parte de los productos, amén de que como puede comprobarse en
el Cuadro N° 25, España utiliza una mayor superficie de cultivo para
esta producción.
Cuadro N° 24
PRODUCCIÓN DE FRUTAS ( Miles de Tm.)
1991
1990
1992
. Frutas (ex. melones)
Matruecos
España
. Naranias
Matruecos
España
. Clementinas
Marruecos
España
2.002
2.438
2.148
14.345
12.800
14.524
781
2.590
1.097
2.651
748
2.724
225
311
292
1.576
1.340
1.488
. Limones
Marruecos
España
. Albaricoques
Mamtecos
España
18
20
20
2.590
2.651
2.724
74
92
66
120
211
193
396
3.396
390
2.983
500
3.831
. Aceitunas
Matruecos
España
. Aceite de oliva
Marruecos
España
32
58
41
703
647
597
1.000
206.500
1.900
181.000
1.500
188.000
. Fresas
Marruecos
España
. Vino
Marruecos
España
. Dátiles
Marruecos
España
30
38
44
3.969
3.224
3.472
120
104
82
10
8
7
Fuente de datos: Estadísticas de Producción. FAO.
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De entre todos los productos, Marruecos ha prestado mayor atención a la producc^.ón de tomates, siendo la mayor parte de invernadero
y con una productividad similar o algo menor a la española. En 1992
Marruecos obtuvo unos rendimientos de 35.431 Kg./Ha. frente a
46.229 Kg./Ha. obtenidos en España2l.
Otras producciones donde las inversiones se han hecho notaz son las
de sandías y melones y aunque la producción total española es mucho
más intensa que la producción marroquí los rendimientos por Ha. no
presentan diferencias significativas.
En ajos, las inversiones en Marruecos también han sido importantes
y en cebollas y zanahorias los rendimientos obtenidos por España casi
triplican los de Marruecos.
Aunque de las producciones recogidas la mayoría se destina a
abastecer el mercado local, tanto de productos frescos como de
productos transformados, existe cada vez más una parte importante de la misma destinada a la exportación. Estos productos de
exportación, que como regla general pertenecen al sector de hortalizas tempranas, han experimentado grandes transformaciones
en su producción, sobre todo en los últimos diez años ya que gracias a la expansión de la agricultura irrigada se han alcanzado
aumentos importantes en la productividad para la mayoría de los
productos.
4.2. Las exportaciones de frutas y hortalizas
Como se ha comprobado en el apartado 2. de este capítulo, el
comercio de frutas y hortalizas es el epígrafe más importante en la
exportación de productos agropecuarios de los dos países. Recordando
lo anteriormente dicho, en 1991 representó en Marruecos el 77% del
Z^ En 1994 los redimientos por Ha. se han incrementado alcanzando, respectivamente, eñ España y
Matruecos los valores de 49.731 kg/Ha y 39.139 kg/Ha. En cuanto al volumen de producción ascendió a 3.066 miles de Tm. y 900 miles de Tm., respectivamente.
60
total de sus ingresos y en España el 54%. Desde el punto de vista de
importaciones, en Marruecos las compras de estos productos han sido
prácticamente marginales, 2% del valor importado en 1991, hecho que
no se produce en el caso de España ya que es su segundo producto de
importación (14% en 1991) después de las materias en bruto (17% en
1991).
El Cuadro N° 26, que recoge los productos más relevantes, confirma la validez del comentario anterior permitiendo comprobar cómo con
excepción de las importaciones de patatas, que en 1991 alcanzaron
30.000 Tm., las importaciones marroquíes del resto de los productos
reseñados o bien no existen o son débiles como sucedió con las leguminosas cuyas importaciones alcanzaron 762 Tm. en ese mismo año.
Este comentario no implica que Marruecos sea estructuralmente deficitario en estos productos que necesita importar, sino al contrario: en 1991 las exportaciones de patatas alcanzaron la cifra de
126.000 Tm., siendo el grado de cobertura en dichas exportaciones
del 421%; situación semejante presentan las leguminosas cuyas
exportaciones alcanzaron en 1991 la cantidad de 16.000 Tm., siendo el grado de cobertura en valor de estas exportaciones del
2.108%.
En el caso de España, la tendencia es diferente a la apuntada para
Marruecos, ya que aunque el grado de cobertura de la balanza de hortalizas es muy favorable para nuestro país en varios epígrafes de este
grupo de productos, én el caso de las patatas y leguminosas necesita
realizar importaciones significativas, siendo la balanza deficitaria en
el primer caso, alcanzando el grado de cobertura el 35% en 1991, o
prácticamente no existiendo grado de cobertura en las leguminosas,
ya que las exportaciones apenas cubrieron el 0,5% del valor de lo
importado. En estos productos, cuya situación es inversa a la que se
da en Marruecos, se podría establecer una cooperación al existir cierta complementariedad.
Del resto de los productos recogidos, es en el tomate donde existe una fuerte concurrencia que se presenta, año tras año, con carácter
creciente. En 1989 Marruecos exportó casi 104.000 Tm. de este producto, elevándose en 1991 a 133.735 Tm.. En el caso de España estas
exportaciones, si bien superiores, se han movido en sentido inverso:
en 1989 España exportó 407.424 Tm. y en 1991 la cantidad se redujo a 364.172 Tm.ZZ. Las razones de la existencia de esta fuerte compe-
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titividad es la diferencia de precios; en 1991 el precio medio por Kg.
de las exportaciones marroquíes alcanzó 0,40 dólares, mientras que el
precio medio por Kg. del tomate español fue de 0,79 dólazes. La existencia de estas diferencias importantes en los precios radica en los costes inferiores de Marruecos en materia de mano de obra, coste de energía, valor del agua, etc., respecto a los existentes en España, ya que a
nivel tecnológico las empresas marroquíes tienen una tecnología similar, lo que origina productividades casi análogas, según quedó apuntado en el epígrafe anterior.
Aparte de este comentario, en determinadas épocas del año, España
es deficitario en tomates y necesita importaz, alcanzado esas importaciones en 1991 las 19.220 Tm.
En cebollas, las exportaciones de Marruecos han ido descendiendo
paulatinamente alcanzando únicamente 391 Tm. en 1991, fenómeno
muy diferente al caso español en donde las exportaciones de este producto son comparativamente muy superiores; en 1991 se exportaron
239.870 Tm. de cebollas.
En lúpulo, ambos países son deficitarios necesitando realizar impor- .
taciones.
Completando el análisis con el comercio exterior de las frutas
(Cuadro N° 27), podemos comprobar cómo el producto fundamental de
exportación se concentra en las nazanjas y similazes, exportando
Marruecos 677.000 Tm. en 1991, cantidad muy por encima de la exportada en 1990 que ascendió a 472.000 Tm..
Como puede observarse, en el caso español las exportaciones se
encuentran más diversificadas, aunque sean las exportaciones de
naranjas también la paztida fundamental tanto en volumen exportado
como en ingresos. En 1991 España triplicó las exportaciones marroquíes al alcanzar 1,9 millones de Tm.; en cuanto a los precios medios
de exportación, los precios españoles fueron superiores a los mazroquíes: 0,70 $/Kg. en 1991 frente a 0,31 $/Kg.23.
Igualmente son importantes las exportaciones españolas de limones,
ZZ La tendencia creciente de exportaciones marroquíes sigue. En 1993 estas exportaciones han ascendido a 162.255 Tm. España, por su parte, [ambién ha incrementado su participación al alcanzar
566.031 Tm. sus exportaciones de tomates.
23 En 1992 y 1993 las exportaciones de naranjas marroquíes descendieron para situarse en unas
500.000 Tm. mientras que las exportaciones españolas de nuevo se incrementaron alcanzando en esos
años 2.221 miles de. Tm. y 2.620 miles de. Tm., respectivamente.
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ya que aunque la cantidad exportada haya ido decreciendo en los tres
años referenciados, los ingresos obtenidos han ido elevándose; en 1989
el precio medio alcanzó 0,43 $/Kg. alterándose en 1991 a 0,55 $/Kg..
De este producto, las exportaciones marroquíes son marginales y de
carácter decreciente, vendiendo en 1991 sólo 250 Tm.. Con respecto a
los otros productos recogidos, Marruecos no realiza comercio con plátanos, manzanas y peras, circunstancia que no sucede en España ya que
se exporta el plátano canario, aunque sea en cantidades decrecientes; en
manzanas aunque también se realizan exportaciones, las importaciones
son muy superiores siendo el grado de cobertura en 1991 para este producto únicamente del 9%; en cambio en peras las exportaciones españolas son superiores a sus importaciones alcanzando para ese año un
grado de cobertura de 151%.
Atendiendo a otros productos de exportación marroquí, melocotones y uvas, las exportaciones de melocotón son muy pequeñas e incluso han ido sufriendo oscilaciones y decreciendo las cantidades exportadas desde 1989, aunque a partir de 1992 se nota una elevación muy acusada, fenómeno que no se repite en el caso de la uva, que en 1991 fueron prácticamente inexistentes. Para España, en cambio, las exportaciones de ambos productos son de gran relevancia.
En dátiles y piñas, bien frescas o en lata, España es importador neto,
al igual que Marruecos.
5. ANÁLISIS DESAGREGADO DE LA PRINCIPAL
PARTIDA DE IMPORTACIÓN: EL COMERCIO
DE CEREALES Y PREPARADOS
El comercio de cereales y preparados, partida fundamental de
importación en Marruecos, representó en 1991, como ya se ha señalado, el 26,2% de las importaciones agropecuarias. Esta partida también
es importante para España alcanzando el citado año el 11,3% del valor
total de estas importaciones. Si se realiza un análisis paralelo con un
enfoque de exportación, no presentan estos productos la misma trayectoria, ya que mientras en Marruecos fueron prácticamente nulas estas
exportaciones (0,1% en 1991), en España alcanzaron el 6,2% en 1991,'
siendo el grado de cobertura para ese año del 55%, grado de cobertura
en descenso al ser en 1990 del 66% y en 1989 del 136%.
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