teorías y prácticas de los Derechos Humanos básicos en

Anuncio
UNIVERSIDAD CENTROAMERICANA
“JOSÉ SIMEÓN CAÑAS”
LA REVOLUCIÓN BOLIVARIANA: TEORÍAS Y PRÁCTICAS DE LOS
DERECHOS HUMANOS BÁSICOS EN AMÉRICA LATINA
TESIS PREPARADA PARA LA
FACULTAD DE POSTGRADOS
PARA OPTAR AL GRADO DE
DOCTOR EN FILOSOFÍA IBEROAMERICANA
POR
CARLOS MANUEL GONZÁLEZ IRAGO
OCTUBRE DE 2011
ANTIGUO CUSCATLÁN, EL SALVADOR, C.A.
1
Rector
Andreu Oliva De La Esperanza, S.J.
Secretaria General
Celina Pérez Rivera
Decana de la Facultad de Postgrados
Nelly Arely Chévez Reynosa
Director del Doctorado en Filosofía Iberoamericana
Sajid Alfredo Herrera Mena
Director de Tesis
Héctor Samour
2
Agradecimientos………………… …………………………………………………………... 5
Introducción………………………………………………………………………………….... 6
Capítulo I.
Marco teórico para delinear una perspectiva universalista intercultural de los derechos
humanos…………...………………………………………………………………………….. 26
1. ¿Ahimsa: Principio intercultural de la “no violencia”?……….……...…………….…..... 43
1.1. Henry Shue: modelo político de estado para la defensa de los derechos humanos básicos
de seguridad y subsistencia…........................................................................................... 51
Capítulo II.
Desarrollo del derecho básico a la seguridad personal en Venezuela…………..……………. 59
2. El terrorismo de estado y la ficción democrática de la IV República…..….……….…… 62
2.1. Metodología para el estudio del terrorismo del estado en la democracia……………...... 69
2.2. El método represivo: el patrón de acción, su intensidad y alcance………………............ 78
2.3. La seguridad nacional y el discurso democrático en la IV Republica…………………… 80
2.4 Un régimen civil autoritario de seguridad nacional……………………………………… 89
2.5 La V República, nuevo concepto geopolítico de seguridad……………………………… 97
2.6. El derecho a la identidad y el nuevo modelo de “seguridad ciudadana”………………... 104
2.7. Conclusión………….…………………………………………………………………… 114
Capítulo III.
Desarrollo del primer derecho de subsistencia: la soberanía alimentaria…………...……….. 117
3.
3.1.
3.2.
3.3.
3.4.
3.5.
3.6.
3.7.
3.8.
3.9.
La Reforma Agraria (1946-1999) y la Nueva Ley de Tierras …….…...……………...... 138
Datos y diseño del estudio comparativo………………………………………………… 146
Desarrollo histórico…………………………………………….……………………….. 150
Trienio: Reforma Agraria directa (1946-49)……………………………………………. 154
Reforma Agraria indirecta: desarrollo agrícola (1960-68)……………………………… 157
Impacto electoral y legado de la Reforma Agraria 1961……………………………….. 173
Los objetivos de la Nueva Ley de Tierras y Desarrollo Agrario (2005)………………... 180
La soberanía alimentaria: nuevo modelo de desarrollo agrario……………………..….. 182
La distribución de tierras y la organización campesina………….………………………190
Conclusión ………………………………………………………………………...……. 196
3
Capítulo IV.
Desarrollo del segundo derecho básico de subsistencia: la educación obligatoria y
gratuita…………………………………………………………………….….……………… 198
4. Nuevo marco constitucional de la educación…………………………….……………... 210
4.1. Las misiones: la transformación del oprimido en sujeto liberador…………...……….… 213
4.2. La guerra mediática desafío al pensamiento crítico y a la democracia……………….……. 226
4.3. La nueva Ley Orgánica de Educación (LOE) y su defensa de los derechos humanos…… 232
4.4. Impacto cuantitativo de la Revolución Bolivariana en la educación……………………. 243
4.5. Conclusión: la educación como método de integración social …………………………… 246
Capítulo V.
Desarrollo del tercer derecho básico de subsistencia: la salud para todos………………….. 253
5. Barrio Adentro nuevo modelo de salud …………………….…..…………….…..…..……264
5.1. Integración social de las personas con diversidad funcional ……..…………….…………..284
Conclusiones Generales……………….………………………………..……..……………... 291
Bibliografía………………………………….……………………………………………… 298
4
Agradecimientos
He acumulado muchas deudas, tanto personales como profesionales, con gente que me
han brindado señalado apoyo durante la elaboración de esta tesis. Primero quiero agradecer a
todos los profesores y compañeros estudiantes del Departamento de Filosofía Iberoamericana de
la UCA por el apoyo académico y personal en las clases de doctorado; también a la universidad
misma por la oportunidad que me brindaron de ser un estudiante en esta ejemplar institución.
Especiales gracias a los doctores Héctor Samour, José Francisco Lazo y Guido Véjar por
despejar las dudas en el planteamiento de mis hipótesis con un criterio objetivo, serio y
profundo. Gracias por todas las aportaciones, correcciones y críticas. Gracias a la Lic. Marcia
Hernández por tu desinteresada y constante ayuda. Además quiero agradecerle a mi ex
compañera Adriana Cifuentes por su amor, paciencia, comprensión, comentarios y entusiasmo
durante los largos años de investigación. Gracias a mi familia: a mi madre Teresa, a mis
hermanos María Teresa, Pedro, Ingrid y Carolina y a mis cuñados y amigos: Belén, Domingo y
sobre todo a Alfonso, que me animó a visitarle en San Salvador y a visitar la UCA por primera
vez.
Agradezco de corazón a la doctora Adamantia Pollis por su ayuda académica y animarme
a no abandonar la causa de investigar y estudiar temas relacionados con los derechos humanos
en Venezuela. Tampoco puedo dejar de lado a mis compañeros y periodistas venezolanos
Octavio Beaumont,
Ángel Bastidas y Joaquín Ortuño por la inspiración revolucionaria
bolivariana; es para mí un privilegio haber trabajado con ellos todos estos años. Gracias a la
profesora Carmen Borhórquez de la Universidad del Zulia y los congresos de filosofía que ha
organizado y que contribuyen a entender mejor qué pasa realmente en Venezuela. Un recuerdo
especial para mi amigo, luchador por los derechos de las personas con diversidad funcional
Francisco Chico Martín, Patxi, quien fue un apoyo fundamental para completar este trabajo.
Finalmente, agradecer a mis colegas profesores en EE UU: dra. Nancy Joa, Lule Seltzer,
Igor Jasinsky, Carmen Rodríguez, Aldo Bautista y a toda la familia Woods Murphy por su
apoyo, amistad y discusión constructiva y crítica en los temas relacionados con este trabajo. Y,
por último, gracias a mis estudiantes de Bergen County Academies, particularmente a los que
participaron en la clase de Teoría y Práctica de Derechos Humanos. Ellos me enriquecen con sus
ideas y discusiones filosóficas y me dan ejemplo con su compromiso y trabajo en la defensa de
los derechos humanos. Gracias y un abrazo sandinista y bolivariano a todos ellos.
5
Introducción
La Constitución Bolivariana está dirigida a transformar el estado venezolano en Estado
Democrático y Social de Derecho y Justicia, creando un nuevo ordenamiento jurídico que
permita el funcionamiento efectivo de una democracia social y participativa en la que se
garanticen las condiciones para un desarrollo humano autónomo y digno, y en donde el poder se
ejerza desde el cumplimiento cabal de los derechos humanos. Al reforzar la centralidad de los
derechos humanos, todo acto del poder público que viole o menoscabe los derechos
garantizados en la Constitución y la ley, resultan nulos per se y los funcionarios que los
ejecutaron, responsables sin excusa alguna 1.
¿Qué son realmente los derechos humanos? ¿Cuáles derechos humanos son prioritarios
en una sociedad? ¿Qué significa concretamente reforzar la centralidad de los derechos humanos
en las leyes de un país? ¿Qué modelo propone el filósofo humanista Herny Shue al definir los
derechos humanos de seguridad y subsistencia como los más centrales o básicos? ¿Es posible
concretar los derechos humanos en las leyes y en las prácticas sociales y políticas? ¿Qué modelo
de defensa de derechos humanos propone la Constitución Bolivariana? Al igual que la profesora
Carmen Bohórquez pienso que la centralidad de los derechos humanos en la Constitución
Bolivariana es un hecho político significativo y extraordinario.
No es común utilizar la
Declaración Universal de los Derechos Humanos (DUDH) como base para la redacción de un
texto constitucional y como inspiración legal para la formulación de las leyes orgánicas que
desglosan el texto constitucional.
Este estudio tiene como objetivo entender qué tipo de
centralidad de los derechos humanos se está llevando a cabo en Venezuela hoy y qué modelo
filosófico-político de diálogo cultural propone.
Es obvio, que el proceso y proyecto constitucionalista venezolano fue una respuesta
concreta a una coyuntura histórica nacional e internacional, a los cambios que están ocurriendo
en América Latina y en el mundo hoy. Por lo tanto a las preguntas anteriores hay que añadir
aquellas que son de carácter comparativo histórico-sociológico y que ilustran el modelo. ¿Es la
Revolución Bolivariana una praxis posible del modelo de estado democrático de derechos
básicos de seguridad y subsistencia que propugna Henry Shue? ¿Por qué? ¿Qué diferencias hay
entre el modelo histórico –dominante-- del estado de derecho de la “seguridad nacional” que
imperó durante la Guerra Fría y los nuevos que ahora emergen en varios países de América
1
Carmen L. Bohórquez, “La experiencia del proceso venezolano actual”, 8. Artículo del 22 de noviembre 2005.
Conferencia en la UCA, 2005. www.uca.edu.sv/facultad/chn/c1170/bohorquez1.htm
6
Latina? ¿Existen otros ejemplos concretos de la aplicación de los derechos básicos de seguridad
y subsistencia en la actualidad?
¿Formulan estos modelos
planteamientos hechos por la
Teología y las Filosofías de la Liberación planteados en los años sesenta y setenta en nuestro
continente y que resurgen en la actualidad?
Finalmente, quedan pendientes las preguntas de filosofía política sobre el significado real
de la democracia y la naturaleza de los cambios que se están proponiendo a nivel institucional en
nuestro continente. ¿Qué es la democracia participativa y protagónica de la que habla la
Constitución Bolivariana? ¿Qué papel cumple y qué límites tiene el estado a la hora de
implementar políticas de seguridad? ¿Es el estado el protector o el represor del diálogo
democrático? ¿Qué responsabilidades además tiene la sociedad y el individuo en esta materia?
¿No son acaso estos elementos básicos de participación y defensa de los derechos humanos
requisitos indispensables para la creación de un socialismo verdaderamente democráticos?
El punto de partida de esta investigación es la teoría política de la defensa de los derechos
humanos básicos de seguridad y subsistencia que propone el filósofo humanista Henry Shue 2.
Es intuitivo pensar que los derechos humanos tienen que garantizar primero la identidad y la
seguridad personal del individuo; y además ofrecer un nivel de subsistencia mínimo para que las
personas puedan tener un sentido social y político verdadero. Esta responsabilidad tiene que
corresponder a alguien, y ese alguien, lógicamente, es el estado 3. De poco les sirve a los
desposeídos el derecho al voto y la libertad de expresión si “legalmente” no existen, si están
enfermos, desempleados, hambrientos, en una palabra si son o están marginados socialmente. La
democracia exige la existencia y la presencia social de todos, necesita que las personas puedan
participar conscientemente y así contribuir socialmente en la cosa pública. Para ello, se requiere
2
Henry Shue es profesor de Filosofía Política y Relaciones Internacionales. Su trabajo se ha desarrollado
básicamente en las universidades de Maryland y Cornell en Estados Unidos. Es un académico destacado en temas
de Ética, Filosofía del Derecho, Política Internacional y de los Derechos Humanos. Su trabajo más destacado se
refiere a la importancia de los derechos económicos, las relaciones internacionales y el papel de las instituciones
para proteger aquellos más vulnerables. Su libro más conocido es “Basic Rights,” cuya traducción es “Derechos
Básicos” --es la base teórico- filosófica del presente trabajo. Fue cofundador en 1976 del Instituto de Filosofía y
Política la Universidad de Maryland y miembro del Comité ejecutivo de la Asociación de Ética Profesional entre
otros cargos y honores académicos.
3
“¿Qué derechos son importantes y deben ser reconocidos? Esta pregunta es parte de otra más general: ¿Para el
disfrute o qué cosas tenemos derecho a demandar protecciones sociales, contra qué tipo de amenazas? Las
amenazas –humanas o naturales—existen, las reconozcamos o no. La protección social solo existe si el pueblo
decide crear los derechos y las instituciones necesarias para proveerlas.” Henry Shue, “In The American Tradition,
Rights Remain Unalienable,” en “Human Rights and American Foreign Policy,” The Center Magazine, (enerofebrero 1984), 9.
7
que cada individuo tenga un ambiente mínimo de seguridad personal y de calidad de vida que le
permita aportar su propia historia a su comunidad 4. La teoría de Henry Shue es una formulación
político-legal posible –una praxis institucional— cuyas bases respalda las mismas ideas, teorías y
procedimientos que debaten las Filosofías de la Liberación en América Latina. El modelo de
estado de defensa de los derechos humanos básicos cumple en principio con los fundamentos
filosóficos de participación, diálogo y formación de consensos que defienden Raúl FornetBetancourt, Enrique Dussel y Emmanuel Levinas entre otros.
El modelo teórico de Shue –a mi entender—tiene importantes virtudes. Por un lado, la
simplicidad de sus premisas, la coherencia de gran sentido común y su profundidad democrática
y programática son ventajas para su aplicación y defensa. Para Shue el “derecho existe sólo
cuando además de ser proclamado se han hecho los arreglos necesarios para que su disfrute por
la gente esté garantizado. 5” Estos “arreglos” institucionales ya sean económicos, políticos o
sociales no son iguales para todos; cada situación particular, según las necesidades y las
amenazas existentes al disfrute de tales derechos tendrá que crear aquellas instituciones o tomar
las medidas que considere necesarias.
Aunque algunas amenzas son estándar – casi
universales—las medidas adoptadas no tienen porque serlo. Este planteamiento ofrece una
alternativa ideológica válida contra el “huracán de la globalización” que sufrimos en la
actualidad y que cada país sufre de forma particular. Una globalización que precisamente trata
de legitimarse políticamente “tergiversado” no sólo la teoría y la práctica de los derechos
humanos y sino la propia función pacifista de las instituciones internacionales. Este “huracán
globalizador” –definido por Franz J. Hinkelammert en varios de sus escritos-- lo resume Raúl
Fornet-Betancourt como una nueva forma de opresión:
es expresión y vehículo propagador de una hegemonía de poder que va desde lo económico a lo
militar, pasando por los organismos internacionales y que se expande hoy como fuerza
uniformadora de tal potencia y coherencia que su paso está marcando el comienzo de un
proceso de colonización sin precedentes en la historia de la humanidad 6.
4
“Pero lo importante ahora es subrayar que en las culturas, por muy coherentes que puedan presentarse, siempre hay
espacio práctico para eso que solemos llamar biografía personal como historia de una vida irrepetible e
irrepresentable que busca su realización.” Raúl Fornet Betancourt, “Supuestos Filosóficos del Diálogo Intercultural,”
en Interculturalidad y Globalización. (San José, Costa Rica: Editorial DEI, 2000), 26.
5
Herny Shue, Basic Rights: subsistance, affluence and US Foreign Policy. (Pricenton : Priceton Universy Press,
1980), 16.
6
Raúl Fornet Betancourt, “Aprender a filosofar desde el contexto del diálogo de las culturas,” en Interculturalidad y
Globalización, 11.
8
En este sentido, la jerarquización clara de los derechos humanos básicos desenmascara
ideológicamente su “manipulación interesada;” que es constante y perniciosa en los medios de
comunicación y en las instituciones internacionales. Al responsabilizar al estado de la defensa
de los derechos humanos básicos tanto a nivel nacional como internacional se pone límites a los
abusos del capitalismo corporativo y salvaje que propone la globalización.
“Los derechos
básicos son un intento de dar a los menos poderosos – a los pobres-- el veto sobre aquellas
fuerzas que de otro modo podrían hacerles daño 7.” Esta claridad ideológica ayudaría sin duda al
uso de los derechos humanos de acuerdo con sus fines pacifistas, es decir como alimento base
del diálogo cultural e intercultural de los pueblos 8. Por otro lado, pondría en evidencia el
“abuso” de aquellos estados y políticos que en esta materia son prontos a ver la “paja en el ojo
ajeno” e ignoran la “viga” delante del propio. Denunciaría y pondría en evidencia estados o
personas que usan los derechos humanos con fines egoístas y que los utilizan con violencia
verbal para golpear la cultura del “otro.” La teoría de Henry Shue responsabiliza al estado y a la
sociedad democrática --que lo conforma y sostiene-- no sólo de la defensa de los derechos
humanos individuales en un país sino a promover la solidaridad internacional que exige la
implementación de tales derechos –universales-- a todos sin distinción 9. Por tanto, expone la
manipulación interesada de los derechos humanos cuyo objetivo fundamental --no es restaurar un
mínimo de justicia social-- sino enmascarar la injusticia misma. Esta solidaridad requiere un
modelo de estado de derechos básicos que desnuda a los poderes hegemónicos que monopolizan
la riqueza y producen la marginación; y a los medios de comunicación social que enmascaran un
“estatus quo” nacional e internacional claramente injusto y violatorio de los derechos humanos
más elementales.
Fue estudiando y enseñando el modelo propuesto por el filósofo humanista Henry Shue y
estudiando la historia de América Latina que entendí la posible efectividad del mismo. Pienso
que además tiene la ventaja de poder aplicarse independientemente de la perspectiva política ya
sea liberal o socialista; ya que tiene una base común a ambas. Henry Shue califica la efectividad
7
Shue, Basic Rights, 18.
Como señala Fornet-Betancourt el diálogo intercultural “no sólo tiene que ser en condiciones de igualdad sino que
hay que exigir que el diálogo de las culturas sea una diálogo sobre los factores económicos, políticos, militares, etc.
que condicionan actualmente el intercambio franco entre las culturas de la humanidad.” Ibíd., 12.
9
“No es función de los gobiernos seleccionar, según sus propios objetivos, que derechos se respetan o promueven.
Al contrario, los derechos constituyen el estándar por los cuales los gobiernos son juzgados. Es el objetivo de
asegurar el derecho la razón por la que los gobiernos son instituidos;… cualquier forma de gobierno que es
destructivo en vez de protector de los derechos universales debe ser reformado o abolido.” Shue, The Center
Magazine, 6.
8
9
de un gobierno o estado no por su tamaño, sino por la calidad de su funcionamiento en responder
a las necesidades del pueblo.
El mejor gobierno es aquel que honra y cumple los derechos humanos. En algunos casos esto
simplemente significa no violar los derechos de los ciudadanos y esto ya es un éxito; pero
muchas veces también, esto significa crear las instituciones legales y reales para hacer este
trabajo. Entonces, las instituciones que se crearán son las necesarias para cumplir esta función
y varían en diferentes circunstancias 10.
La defensa de los derechos humanos es un camino posible y viable para establecer una
transición real de un régimen autoritario o semidemocrático a una verdadera democracia. Una
democracia no formal sino substancial; donde todos participan y creen honestamente que los
derechos humanos esenciales son la fundación mínima de cualquier diálogo político.
En
palabras de la filosofía de la Liberación, el estado de los derechos básicos tiene tres de sus
elementos esenciales: primero, reconoce la existencia de todos sin exclusión, particularmente el
“rostro del otro” –el marginado, la mujer, el pobre, el indio, el discapacitado,…--; segundo, “abre
las puertas sociales a la igualdad” garantizando a los antes marginados sus derechos se seguridad
y subsistencia mínimos inalienables para participar plenamente en su comunidad; para por último
construir un consenso cultural nuevo, más justo, fruto de un diálogo democrático, abierto y
solidario 11.
Aunque vivo en EE UU, soy venezolano y como tal, he seguido con mucho detalle la
evolución política de mi país; particularmente los avances y retrocesos en materia de los
derechos humanos. A partir de 1999, con las nuevas medidas políticas y la implementación de
nuevas leyes que se estaban llevando a cabo en Venezuela, empecé a entender que las
prioridades que se establecían eran las mismas que establecía el modelo de estado propuesto por
Henry Shue. Entendí que los ataques que se le imputaban en materia de violaciones de los
derechos humanos a la Revolución Bolivariana eran casi siempre una clara tergiversación
política creada por los poderes hegemónicos existentes en Venezuela para defender sus intereses
particulares. Había una contradicción obvia entre las acusaciones hechas desde los poderes
10
Ibid., 10.
En este sentido entiendo la teoría o propuesta cultural de Henry Shue es una formulación política programática,
como lo son las propuestas de las filosofías de la Liberación. La conceptualización de las filosofías de FornetBetancourt, Levinas y Dussel buscan precisamente crear las condiciones para una “praxis” liberadora. Asimismo,
una vez finalizado este proceso liberador previo --es decir una vez logrado lo más difícil que es integrar “al otro” –
al pobre o marginado-- al diálogo democrático se abriría un nuevo universo de posibilidades políticas que bien
podrían seguir las líneas de búsqueda de un consenso marcadas en diferentes aspectos por filósofos como Jurgen
Habermas entre otros.
11
10
hegemónicos y sus medios de comunicación y las propuestas hechas desde el estado bolivariano
para democratizar y eliminar la pobreza en el país. Entonces, tanto en los métodos como en los
fines, busqué paralelismos existentes entre la experiencia y visión bolivariana del estado y la
propuesta de Henry Shue. Descubrí que la centralidad legal de los derechos humanos esenciales
son la base filosófica y política fundamental en ambos modelos. Entendí, entonces, que sería
posible probar la hipótesis política que el modelo democrático del estado bolivariano es
básicamente uno de defensa de los derechos humanos básicos de “seguridad y subsistencia.”
La centralidad de los derechos humanos en la Constitución Bolivariana es diferente a la
de otros textos constitucionales anteriores ya que es programática no simple retórica legal. Este
estudio demuestra que existe una relación directa entre el modelo teórico de defensa de los
derechos humanos básicos y la práctica constitucional –legalista-- y la política institucional que
enmarca e implementa el estado bolivariano.
Con ello se reduce la distancia que
tradicionalmente existía entre el país legal y el real. Por primera vez, dentro del estado se crea
una dialéctica democrática coherente entre la legalidad y la realidad social; que tiene como
premisa la inclusión de los anteriormente marginados y el reclamo su participación sociopolítica.
Como señala Bohórquez, esta dialéctica, acercamiento y diálogo es constituyente a la
nueva democracia bolivariana.
Sus diez años de práctica política han producido y están
produciendo cambios sociales y políticos estructurales a nivel nacional en Venezuela y
planteamientos internacionales de resistencia que denuncia el estado venezolano y que
significativos ya que denuncian al huracán globalizador que todos sufrimos. Espero que en el
futuro este modelo se consolide con sus nuevas estructuras legales y políticas para que la defensa
de los derechos humanos desde el estado se profundice hasta sus últimas consecuencias y
emerjan alternativas solidarias a nivel nacional e internacional. Obviamente, el experimento
político bolivariano no es ni mucho menos la única ilustración posible del modelo propuesto por
Shue pero si cumple con sus elementos esenciales. Cada país con su propia particularidad
histórico-económica y cultural tendrá que encontrar su propia versión y evolución hacia un
modelo que utilice los derechos humanos básicos como concepto legal y filosófico central para
su praxis política de integración en la relaciones entre el estado y la sociedad. En este trabajo
mostraré que la versión venezolana es sin duda un ejemplo primero, claro y evidente del mismo
11
y como tal ha sido atacado por el huracán globalizador liberal post-moderno al que resiste y
cuestiona.
En el presente estudio primero contextualizaré el marco teórico de los debates sobre los
derechos humanos en la actualidad y la búsqueda de un modelo intercultural para la defensa de la
universalidad de estos derechos.
En este contexto, explicaré la teoría de Henry Shue y su
importancia dentro del marco de la filosofía política de los derechos humanos y que se integra
“como un guante” a las filosofías de la Liberación en América Latina.
Para ello, me
fundamentaré en la filosofía legal de la propia Declaración Universal de los Derechos Humanos
(DUDH) y su impacto histórico, en la filosofía de la no violencia tal como la conceptualiza
Mohandas K. Gandhi, y el diálogo cultural e intercultural tal como lo proponen los filósofos que
defienden los derechos humanos como el propio Henry Shue y la propia Filosofía de la
Liberación, en particular la que expone Raúl Fornet-Betancourt en sus trabajos.
Después analizaré el nuevo sistema político venezolano desde un punto de vista histórico
sociológico para ver cómo ha evolucionado para cumplir con los requisitos legales y prácticos
que ahora dan prioridad a los derechos humanos básicos. En una primera parte, el análisis se
enfoca en el aspecto de los derechos de seguridad, la alternativa fundamental para desmantelar la
ideología política del terror –dominante en la cultura política del estado. Aquí el análisis
histórico es fundamental para entender las dificultades y la evolución política venezolana desde
el estado. En la segunda el estudio trata de explicar la evolución de la historia socio-económica
y los cambios que introduce la revolución bolivariana en materia de derechos de subsistencia:
alimentación, educación y salud. Para ello, es fundamental entender el problema de la reforma
agraria y los cambios que esta estructura social hegemónica produce en el país. La investigación
ilustra la evolución, las posibilidades y los desafíos internos y externos que la defensa de los
derechos humanos de un modelo de “seguridad y subsistencia” tiene en Venezuela hoy. El
objetivo prioritario es exponer y defender la centralidad de los derechos básicos como ejemplar y
posible –matriz política--; y ofrecer los avances de la Revolución Bolivariana en la defensa de
los derechos humanos como ejemplo de su factibilidad histórica. Por supuesto aquí también se
incluyen los trabajos de muchos otros politólogos, historiadores, periodistas y filósofos.
De esta forma conseguiré responder si no directamente todas las preguntas formuladas al
menos ofrecer respuestas indirectamente los tres tipos de preguntas que planteé inicialmente y
que buscan esclarecer desde un punto de vista político-filosófico, ético y moral qué significa para
12
la defensa de los derechos humanos el modelo democrático que propone la Revolución
Bolivariana en la historia de América Latina. En resumen, espero que este trabajo clarifique las
bases ideológicas y profundamente democráticas de las que parte la construcción del socialismo
del siglo XXI del que tanto se habla en Venezuela. Un modelo constitucional venezolano que
cumple y tiene la intención de cumplir con las dos premisas –que según Herny Shue—se
necesitan para la defensa democrática de los derechos humanos en una sociedad. La primera es
que la sociedad en general y el estado en particular deben responsabilizarse por garantizar
requisitos mínimos de seguridad y subsistencia a todos sus conciudadanos; y la segunda,
responder con toda la fuerza del estado de derecho --instituciones y leyes-- por cualquier
violación de los derechos humanos que se cometa en el país, apelando incluso a tribunales y
leyes internacionales. Asimismo, una Revolución que es programática y producto de un dialogo
cultural e intercultural y que busca un futuro diferente al previsto por “el huracán globalizador
neoliberal.”
La metodología de este estudio es simple. Primero explica una teoría –la de defensa de
los derechos básicos-- dentro de un marco temático –el debate sobre la primacía de los derechos
humanos en los debates interculturales.
Luego, con un ejemplo concreto –la Revolución
Bolivariana-- se ilustra los elementos del modelo y su evolución histórica con los posibles
efectos sociales que conlleva de su praxis concreta. Dentro del marco general de la defensa de
los derechos humanos hay que preguntarse cómo su implementación afecta la construcción de
una sociedad verdaderamente solidaria y democrática. Este modelo teórico de los derechos
humanos básicos parece el más apropiado para cierta coyunturas históricas, es decir sociedades
que viven un estado de necesidad de desarrollo económico y que necesitan de una transición
política hacia la democracia. América Latina está constituida por países en vías de desarrollo
con grandes desigualdades económicas y sociales que tienen sistemas políticos en su mayoría
autoritarios pero con elementos democráticos importantes. En este trabajo se muestra como la
Revolución Bolivariana ha creado una nueva República --con una nueva Constitución-- y una
nueva práctica democrática que confronta el problema de la desigualdad económica y al mismo
tiempo fomenta la participación democrática. Estas nuevas instituciones y prácticas representan
un cambio significativo con el pasado reciente y desafían los modelos económicos del
neoliberalismo y los políticos de “seguridad nacional” que las oponen.
13
Las teorías nos hacen pensar y nos permiten ver las conexiones y las relaciones entre las
partes y el todo. Generan pensamiento crítico y entendimiento. En este caso hay dos aspectos
paralelos que son importantes. Por un lado, mostrar la concordancia entre la teoría y su ejemplo;
por el otro, comparar el nuevo modelo con él que le precedió históricamente. En filosofía política
esto significa mostrar y comparar dos dimensiones fundamentales: la legal y la institucional.
¿Cuáles son los nuevos contenidos legales e institucionales y su concordancia con el modelo
teórico? ¿Qué efecto tienen estas nuevas prácticas con respecto al pasado histórico?
Siguiendo la teoría de Shue, necesitamos un análisis del contenido legal y de sociología
comparativa, en este caso también histórica, para poder evaluar la calidad y la cantidad de los
cambios que se producen. Estos aspectos comparativos son precisamente en la situación real de
los derechos humanos esenciales: la seguridad personal y los derechos de subsistencia:
alimentación, educación y salud. Así, mostrar las similitud entre el modelo y su ejemplo; y
marcar las diferencias entre el antes y el ahora o el después de la aplicación del nuevo modelo.
Esto es fundamental para entender la dimensión y los cambios cualitativos y cuantitativos que se
están produciendo. Esto requiere en el caso venezolano hacer continuas referencias históricas y
comparaciones legales e institucionales entre la IV (1961-1998) y la V República desde su
fundación en 1999 hasta el presente.
La conclusión del estudio ratifica mi hipótesis inicial: la V República instituyó un modelo
constitucional de defensa de los derechos humanos básicos de “seguridad y subsistencia” que
está dando resultados cualitativos y cuantitativos muy concretos en esta materia. El modelo no
está completo el proceso es largo requiere tiempo y le faltan todavía elementos importantes,
sobre todo en materia de seguridad personal. Sin embargo, se establece una base profundamente
democrática y solidaria que es el punto de partida para la construcción de un futuro socialismo
democrático del siglo XXI 12.
12
El socialismo por definición es solidario. “La solidaridad --en las palabras de Jon Sobrino-- es un modo de ser
reflexivamente escogido para practicar la manera de relacionarse consigo mismo y con otros.” (ver “Solidaridad:
llevarse mutuamente,” Misiones extranjeras 157-159 (1997), 71-79). También ver, Jon Sobrino, Terremoto,
terrorismo, barbarie y utopía. (San Salvador: UCA editores, 2003) 52-55. Por supuesto, hay muchos tipos de
solidaridad, pero los socialistas europeos hace treinta años se definían a sí mismos como personas militantes
“internacionalistas” y “solidarias.” Esto contradice las formulaciones actuales de los partidos socialistas europeos -que no sólo han dejado estos principios fundamentales de lado-- sino que incluso los escoden, es como si se
avergonzaran de su pasado solidario. Para ellos, el socialismo es ahora pragmático no programático, está definido
no desde el individuo comprometido sino desde el estado y el partido; y su objetivo social es de simplemente
generar un estado con buenos “servicios públicos.” El estado socialista europeo es tecnócrata, el proveedor efectivo
de servicios públicos: policía, transporte, educación y salud. No le interesa la ética solidaria ni la participación de
su militancia sino el día de las elecciones por su voto. Por eso, con raras excepciones los particos socialistas
14
Finalmente, habría que preguntarse ¿Qué significación tiene este estudio?
Primero, pienso que este trabajo tiene importancia histórico-política porque al plantear
una alternativa al modelo político “seguridad nacional” dominante en la IV República cuestiona
a aquellos que todavía lo defienden como solución única a la situación política actual. Como la
diferencia entre estos modelos es radical y alternativa en materia de defensa de los derechos
humanos, la dialéctica nos dice que uno deslegitima al otro, al menos en Venezuela. El modelo
bolivariano aplica la centralidad de los derechos humanos a la práctica política, y se ofrece como
alternativa posible al modelo de “seguridad nacional” que supedita –temporal o
permanentemente-- los derechos humanos a la necesidad militar del poder hegemónico. Ni que
decir tiene que es la “seguridad nacional” el modelo que propone el neo-liberalismo y que se
presenta como futuro inevitable desde “el huracán globalizador” de los países ricos hacia los
países pobres. Un modelo que tergiversa la defensa de los derechos humanos para favorecer
nuevos intereses coloniales, corporativos, económicos y claramente hegemónicos a nivel
internacional.
Segundo, también es significativa la ventaja que ofrece Venezuela para estudiar el
impacto y la evolución de la defensa de los derechos humanos. Los derechos básicos en
Venezuela eran precisamente los que históricamente no se reconocían como tales a una mayoría
significativa de la población --a pesar de tener un estado pleno de recursos económicos y con un
sistema liberal “democrático” considerado modélico en funcionamiento durante los últimos 40
años.
Este problema no es único en Venezuela, los derechos básicos son significativos e
importantes pero igualmente ignorados en la mayoría de los países del mundo en vías de
desarrollo. Es importante recordar que el modelo de “seguridad y subsistencia” se enfoca en la
responsabilidad primaria inmediata del estado en eliminar por ejemplo la pobreza y la indigencia.
Se trata de un cambio cultural que no es simple sino complejo nada menos que recuperar al
individuo traumatizado por la injusticia --pobre, analfabeto y marginado-- para convertirlo en
agente socio-económico protagónico, ciudadano político participativo y creador en una sociedad
democrática nueva. Como señala Henry Shue, la responsabilidad primera de este difícil proceso
europeos carecen de una agenda nacional e internacional solidaria y no tienen interés de solidaridad internacional ni
les preocupa la integración social nacional ni el debate ético. Es por lo tanto un “socialismo” a histórico, sin alma ni
utopía, sin ética ni pasión e incapaz de movilizar a sus militantes por compromiso personal de solidaridad.
15
está en el estado democrático, que tiene que crear las leyes, las instituciones, la educación y los
recursos necesarios para que el cambio ocurra y garantizar su futuro.
Tercero, este proceso tiene también una significación filosófica, ideológica y ética que es
resultado de las alternativas presentadas al subdesarrollo en América Latina en los años 60 y que
son bien conocidas por todos. Podría decirse que la teoría de Shue es una reformulación paralela
con las mismas premisas desde una perspectiva constitucional para la defensa de los derechos
humanos. Los objetivos sociales y políticos son similares a los planteados por muchos líderes
históricos latinoamericanos, también. Pero su base constitucional y solidaria recuerda mucho a
los planteamientos del gobierno de Salvador Allende en Chile. En otras palabras, existe un
paralelismo entre la teoría de Shue y las teorías políticas y sociales planteadas para la superación
de la dependencia y el subdesarrollo --presupuestos planteados no sólo por Simón Bolívar o José
Martí, sino en las teorías más recientes de la Dependencia, la Teología y Filosofía de la
Liberación y la Pedagogía del Oprimido de Paulo Freire. La Revolución Bolivariana utiliza todo
ese bagaje histórico, ideológico, filosófico y ético –por muchos considerado anticuado o perdido- para crear las bases culturales que consolidan los cambios promovidos desde el estado.
Asimismo debiera, y de hecho lo hace --asumir de palabra y hecho-- la bandera de la defensa de
los derechos humanos básicos y democráticos, denunciando los atropellos que se comenten a la
Declaración Universal de los Derechos Humanos (DUDH) en la supuesta “defensa de la
libertad.”
Cuarto, es significativo también la implementación en la nueva cultura bolivariana de las
las prioridades programáticas económicas y políticas que defiende y ha defendido la ONU para
los países en desarrollo en las últimas décadas.
Muchas de las políticas bolivarianas son
similares o las mismas que las que propone la FAO, la UNESCO, UNICEF y otros organismos
internacionales que defienden los derechos humanos.
Lamentablemente muchas de estas
propuestas ha sido ignoradas o simple papel escrito. Ojalá, que en un futuro no muy lejano el
modelo Bolivariano pueda ser considerado como ejemplar de cambio político pacífico a este
nivel también. No hay que olvidar que muchas instituciones de la ONU son producto de un
diálogo intercultural que busca la superación de la violencia política que origina la pobreza
misma, particularmente en los países en desarrollo.
Los desafíos internos y externos al nuevo modelo no son ni serán pocos. La vinculación
existente entre el modelo propuesto y la Constitución Bolivariana y su práctica política –con
16
todas sus virtudes y defectos- demostrada en este trabajo de investigación, me convierte en un
defensor de la misma. En este sentido acepto la responsabilidad con gusto. No porque acepte las
violaciones de derechos humanos que el estado venezolano pudiera estar cometiendo --que
obviamente condeno sin paliativos– sino por la calidad de la teoría de los derechos humanos
básicos que modela la Constitución de Bolivariana de 1999 y los innegables avances hechos en
la materia en los últimos diez años. Por supuesto, falta mucho por hacer en materia de seguridad,
salud, alimentación, educación y vivienda en Venezuela. Pero no hay duda que los avances
hechos son estructurales y significativos con prioridades claramente establecidas a nivel legal e
institucional. La sociedad asimismo está respondiendo con niveles de participación política y
social sin precedentes. Sería interesante estudiar desde el punto de vista sociológico como el
pueblo ha ido asumiendo sus nuevas responsabilidades políticas y culturales; ya que le
corresponde ahora llevar adelante su participación y protagonismo a todos los niveles, dentro y
fuera del estado 13.
Esta introducción necesita explicar la significación político-histórica en la cual se
enmarca este estudio y que mencione como primera anteriormente. Necesita matizarse en detalle
ya que es el trasfondo que fundamenta este trabajo investigación desde el punto de vista político.
El método de política comparativa demostrará que los avances legales y reales superan modelos
previos de “seguridad nacional” que legalizaban, condonaban y justificaban la violencia y el
terrorismo de estado. Es por esta razón que este estudio incluye la historia y el análisis de
modelos de “seguridad nacional” 14 previos, en los que se basaba el sistema “democrático”
venezolano de la IV República. Estos modelos no eran sólo venezolanos, sino que imperaron
durante todo el período de la Guerra Fría (1949-1989) en todo el hemisferio. Es un hecho
histórico que los modelos de la “seguridad nacional” --incluso aquellos que tenían leyes e
instituciones democráticas-- condonaban y practicaban diferentes niveles de terrorismo de
estado. En este contexto el estado practicó la desaparición física, la tortura y asesinó a cientos de
miles de latinoamericanos. Asimismo, el estado legitimó un sistema económico injusto que
condenaba y todavía condena a la pobreza a muchos millones más. Este trabajo muestra que la
13
Ver Heinz Dieterich, Democracia Participativa y Protagonismo Social. (Caracas: Alcaldía del Municipio
Libertador, 2001).
14
Para una visión del modelo de planificación política de la seguridad nacional en toda su dimensión, ver Michael
M. Boll, National Security Planning Roosevelt through Reagan. (Lexington: The University Press of Kentucky,
1988). Para ver lo que significaba el modelo en la Venezuela de la IV República, ver toda la obra del escritor
venezolano José Vicente Abreu, pero en particular su libro: Se llamaba SN. (Caracas: Ediciones Centauro 1979).
17
Revolución Bolivariana representa una ruptura con ese pasado histórico nefasto. Es un intento
genuino de establecer un nuevo modelo de estado democrático que por definición elimina
ambos: “el terrorismo de estado” y “la miseria económica” para integrar a las mayorías y
minorías.
Históricamente, la Declaración Universal de los Derechos Humanos (DUDH) (1948)
prácticamente es uno de los últimos hechos políticos significativos del período previo a la Guerra
Fría (1949-89). Durante este período de 1945-1949, Estados Unidos y la Unión Soviética eran
países aliados que luchando conjuntamente consiguieron la victoria en la Segunda Guerra
Mundial. Los enormes costos de materiales y morales de la guerra, establecieron un positivo
“status quo” internacional que lamentablemente sólo duraría cuatro años. Durante este breve
período, en la periferia de mundo --que incluye a América Latina—florecía la democracia y la
legalización de los derechos a los trabajadores y de los partidos socialistas y comunistas en la
mayoría de los países. Fue un momento histórico de extraordinaria importancia histórica, ya
que mostró que había otros “mundos posibles” y que el “subdesarrollo” podría superarse en un
ambiente de paz democrática 15. No es coincidencia que las Naciones Unidas y la Declaración
Universal de los Derechos Humanos se hicieran realidad durante este breve pero significativo
período histórico.
La Guerra Fría que se inició en 1949 cambiaría todo; particularmente en los países mal
llamados “subdesarrollados.” EE UU –la súper potencia dominante en América—estableció un
nuevo modelo político --que justificado en la necesidad militar hemisférica-- excluía la
posibilidad de la democracia participativa y la paz para América Latina. La prioridad del estado
no era la democracia, ni la justicia, ni el desarrollo económico. La prioridad era garantizar la
“seguridad del hemisferio” para que los Estados Unidos pudiera ganar la guerra a la Unión
Soviética.
El estado latinoamericano se modela entonces según su matriz: el sistema de
“seguridad nacional” de los EE UU. La función de América Latina es ayudar y contribuir a
ganar la guerra “global” contra el nuevo “enemigo” común, la Unión Soviética y la “ideología
comunista”. La Guerra Fría revertiría rápidamente los avances democráticos de 1945-49 para
establecer un modelo tétrico de “terrorismo de estado” en la mayoría de América Latina con
15
Bethell, Leslie e Ian Roxborough. Latin America Between the Second World War and the Cold War, 1944-1948.
(Cambridge: University Press, 1985).
18
raras excepciones 16. Los niveles de terror se calibraban con los niveles de amenaza existentes
internos y externos y según la necesidad militar del momento. El enemigo externo era la Unión
Soviética, pero el interno eran “los comunistas” y sus posibles “simpatizantes” ideológicos o
sociales ya fueran socialistas, demócratas, campesinos o trabajadores. Esto incluiría a clases
sociales completas que conformaban las grandes mayorías de la población; y también a sectores
sociales “sospechosos” como los artistas, periodistas, intelectuales, activistas, sacerdotes o
simplemente a cualquiera que rechazara el modelo impuesto desde los EE UU.
El modelo de “seguridad nacional” se muestra, con su genialidad literaria, el insigne
escritor guatemalteco Miguel Ángel Asturias en su libro “El Presidente.” A partir de 1949,
América Latina se llenó de “Presidentes” --militares y civiles— y algunos de ellos llegaron a ser
“electos” en las urnas. Pero, todos para conservarse en el gobierno adoptaron inexorablemente
un modelo más o menos autoritario de la “seguridad nacional;” impuesto por la necesidad militar
hemisférica de los EE UU.
Estos “Presidentes” no fueron sino
el instrumento brutal y
sanguinario de los abusos de los derechos humanos de cientos de miles de sus conciudadanos.
Los modelos de “seguridad nacional” dominaron la política en nuestro continente hasta la caída
del Muro de Berlín y el final de la Guerra Fría en 1989. ¿Qué pasa después? Un sistema de
estado no cambia sólo, pero el cambio geopolítico crea oportunidades para transformaciones
importantes. Un período de apertura democrática similar al que se originó entre 1945-49 ha
permitido cambios radicales en América Latina. Esto ha afectado a los países de forma diferente
y variada a cada país en particular. Lamentablemente, en varios países todavía está vigente el
modelo de seguridad nacional y hemisférica impuesto por los intereses de EE UU. Pero la
creación de UNASUR busca romper el “dogma” del monopolio geopolítico que mantenía la
doctrina de la “seguridad nacional” y que se definía únicamente desde el Departamento de
Estado en Washington.
El modelo político de la “seguridad nacional” persiste en la matriz --es básicamente el
mismo que se estableció en la Guerra Fría-- y que a partir del 11 de septiembre del 2001 se
reactivó con toda su fuerza. El modelo de seguridad nacional de EE UU resurgió de sus cenizas
16
La excepción sería Costa Rica que desmantela el ejército nacional en 1948. Sin embargo, evidencias –
suministradas por la organización no gubernamental de “Observadores de la Escuela de las Américas” que lidera el
Padre Roy Bourgeois-- muestran que los policías de la Guardia Civil costarricense fueron entrenados en la Escuela
de las Américas de Panamá y en Fort Benning, Georgia a partir de 1984. La Escuela de las Américas –que cambió
su nombre en el 2001–muy apropiadamente por cierto – a Instituto de Cooperación para la Seguridad Hemisférica
entrenó a más de 61.000 oficiales militares latinoamericanos durante y después de la guerra fría.
19
con el prestigio de la victoria sobre la Unión Soviética y con nuevos objetivos de necesidad
militar.
El enemigo ya no es el comunismo --ahora derrotado y pasado de moda-- sino el
extremismo islámico de grupos terroristas como Al Qaeda y otros. Aparecen de nuevo las
contradicciones que ocurrieron con la implementación de la “seguridad nacional” y la “necesidad
militar” durante la Guerra Fría. Por ejemplo, se justifica --todo lo moralmente injustificable-incluyendo la violación de los derechos constitucionales de minorías “sospechosas” dentro del
país y la “guerra preventiva” en el extranjero. La necesidad militar de hacer la guerra en
territorio enemigo lleva a la muerte a miles de civiles inocentes en esos países. Lleva a la
creación de campos de concentración para “sospechosos” o aliados del enemigo. Requiere
golpes de estado y alianzas estratégicas con regímenes autoritarios para ganar la “guerra.”
Incluso se aprueba el uso de la tortura --como método “eficaz” de interrogación—al enemigo.
Internamente, en nombre de la seguridad se suspenden los derechos constitucionales
fundamentales para el funcionamiento de la democracia y con ellos los derechos humanos más
elementales. El estado para defender “nuestras libertades” se convierte en “inquisidor” en casa
y en “cruzado” fuera de casa.
Este es el mismo modelo que a partir de 1949 se impuso en América Latina. En el
modelo de “seguridad hemisférica” de los EE UU se legitimó “el golpe de estado” como forma
de hacer política. Fue el instrumento político “lamentable” pero “necesario” para restablecer “la
seguridad nacional” y evitar “males mayores” como sería una invasión militar extranjera. La
doctrina “de facto” puso a la clase militar latinoamericana –entrenada en la doctrina de seguridad
nacional-- en el poder. Los militares latinoamericanos dejaron de representar a los héroes de la
independencia y del poder popular en la lucha contra el colonialismo, para representar la mano
asesina del “inquisidor”. Una mano que usaba la represión, el terror y la violación criminal de
los derechos humanos del propio pueblo para defender “la libertad” y la “soberanía” nacional.
Los “Presidentes” civiles o militares tenían un valor presencial -- no substancial o soberano-- ya
que eran “instrumentos” de la necesidad militar del súper poder que diariamente evaluaba la
situación político-militar del hemisferio.
Era por lo tanto importante que los militares
latinoamericanos fueran entrenados en Panamá o en Estados Unidos en la “Escuela de las
Américas,” ahora “Instituto de Estudios de Seguridad Hemisférica.” Allí aprendían y todavía
aprenden la doctrina y los mecanismos que se aplican cuando “las circunstancias” lo requieren.
Esto incluye todos los pormenores necesarios de la lucha contra “la subversión.” Gracias a la
20
“seguridad nacional” el ámbito militar rompe con su raíz histórica de soberanía libertadora de los
pueblos para convertirse en represor y único conocedor de los “verdaderos valores” de la patria.
Ante semejante prospectiva y experiencia histórica es motivo de optimismo --desde el
punto de vista de la defensa de los derechos humanos-- que emerjan nuevos modelos
democráticos internos y externos que se definan soberanos e independientes de la matriz
estadounidense. Modelos democráticos que condenen y superen sin paliativos el modelo de la
“seguridad nacional y hemisférica.” Es fundamental que el poder militar recupere su papel
histórico y se subordine al poder civil; y que fracasen una y otra vez las intentonas golpistas -que todavía amenazan y ocurren en América Latina. Hay que acabar de una vez por todas con el
terrorismo de estado, legitimado “a posteriori” por los EEUU y sus aliados. Acabar con el
“golpe militar” en política es acabar con la tortura y la muerte que traen siempre consigo. Es
importante recordar que la Guerra Fría terminó para siempre; y con ella, el modelo militarista
que durante décadas imperó en América Latina. Cualquiera que sean los nuevos modelos
propuestos, es necesario que rescaten la verdadera democracia y con ella los “desaparecidos”
derechos humanos que se llevó para siempre la necesidad militar de la Guerra Fría.
Esta significación no es trivial sino sumamente importante para la creación de una cultura
de los derechos humanos en América Latina. Es importante destacar que una nueva cultura
política auténticamente democrática “de seguridad y subsistencia” es un desafío al sistema
dominante de la seguridad nacional. Es por eso que empiezan a verse no sólo en Venezuela sino
en muchos países nuevos horizontes políticos como MERCOSUR, UNASUR, ALBA e incluso
en el propio seno de la OEA. Los países integrantes de los mismos reclaman nuevos modelos
constitucionales y soberanos que rechacen el golpe de estado como forma de hacer política. Un
modelo de “seguridad y subsistencia” defiende los derechos humanos democráticamente y es
aplicable en los países que controlan tanto la izquierda como la derecha. La Constitución
Bolivariana de 1999 permite el diálogo democrático y la oposición tiene que reformular sus
planteamientos y hacer política aceptando el nuevo rol constitucional que tiene. La conspiración
y el retorno a la mentalidad de la IV República no tienen razón de ser y no tiene futuro.
Es interesante que el nuevo Presidente constitucional de Colombia, Juan Manuel Santos,
todavía enmarque todas sus políticas en el modelo establecido de la Guerra Fría de la “seguridad
democrática” --eufemismo que define una nueva versión colombiana de la ‘seguridad nacional.’
El Presidente Santos a pesar de justificar el modelo en la guerra contra las FARC y el ELN,
21
ahora hace también referencias constantes en sus discursos a la necesidad que tiene el país de
reducir los altos índices de pobreza e indigencia. ¿No sería acaso esta política de inclusión en sí
misma una reformulación del modelo político colombiano? ¿Puede Colombia formular políticas
prioritarias desde el estado que reduzcan y eliminen la pobreza y acabar así con la “razones” en
las que justifican la guerra estos grupos subversivos? Lo cierto es que empieza a haber un
creciente consenso soberano --como lo señala Henry Shue y como defiende la Filosofía de la
Liberación-- que define los derechos humanos de seguridad personal y subsistencia como
prioritarios, necesarios y básicos para desarrollar una cultura realmente democrática de tipo
universalista.
El rechazo al pasado en casa, requiere que Venezuela ahora demande un mundo
multipolar; y reclame que la defensa de los derechos humanos sea igual para todos los países, los
grandes y los pequeños. Es quizás este factor filosófico universalista ya anti-globalizador la
explicación de la popularidad creciente de las ideas bolivarianas no sólo en toda América sino
internacionalmente en muchos países en desarrollo. El nuevo modelo obliga al cambio del
“estatus quo” internacional, particularmente de los países que tienen el poder geopolítico y que
pertenecen a la Organización de Defensa del Atlántico Norte (OTAN).
La Revolución
Bolivariana demanda –de forma vehemente -- el respeto de los derechos humanos a aquellos que
dicen proclamarlos y defenderlos en sus propios países: los EE UU, la Unión Europea y el estado
de Israel. Es obvio, que si los derechos humanos deben ser respetados para el ciudadano
estadounidense, europeo e israelí en cualquier parte del mundo; también lo sean igualmente para
el nigeriano, etíope, somalí, cubano, venezolano, emigrante, refugiado o menor de edad en
cualquier parte del mundo.
Si la vida es sagrada, es sagrada para todos.
La Revolución
Bolivariana ha denunciado sin paliativos la guerra ilegal en Irak, en Afganistán, en Libia y los
bloqueos estadounidense e israelí al pueblo de Cuba y Gaza, respectivamente.
Ni que decir tiene que la denuncia de estas guerras y bloqueos --desde el punto de vista
de la ley internacional— como violaciones flagrantes e injustificables a los derechos humanos de
cientos de miles de personas, ha causado reacciones negativas contra la Revolución Bolivariana
en EEUU, Israel y en los países de la OTAN. Objetivamente, hay que reconocer que tales
guerras y bloqueos perjudican la paz mundial y obstaculizan el avance de los derechos humanos
a todos los niveles.
22
Esta significación político-histórica también ayuda a entender las críticas exacerbadas
que el modelo de “seguridad y subsistencia” suscita en los medios de comunicación occidental y
la política internacional en contra de Venezuela que genera. Por eso, no quiero terminar esta
introducción sin hacer referencia al valor relativo de las críticas y considerar los hechos y el
ambiente político que rodea todo lo relacionado con la Revolución Bolivariana. Es importante
recordar las palabras de José Vicente Rangel a este respecto 17. Porque la mayoría de las críticas
que se oyen no son precisamente constructivas. Las voces críticas que se oyen --desde la
oposición interna y externa-- son “jauría ruidosa 18” que hace mucho ruido y daño al proceso de
cambio democrático venezolano.
Ante todo hay una descalificación brutal del proceso bolivariano, al que se le niegan sus
atributos democráticos, origen popular, y profundo sentido social. La estrategia consiste en
presentar lo que ocurre en Venezuela como una siniestra conspiración contra la libertad, los
derechos humanos y el estado de derecho, liderizada por un déspota que secuestró las
instituciones e impone, de manera implacable, su voluntad: Hugo Chávez 19.
Desde 1999, en Venezuela los hechos y los procesos revolucionarios democráticos
iniciados son innegables. Primero, hay una nueva Constitución --que se origina a través de una
asamblea constituyente-- que define nuevos contenidos políticos incluyendo la prioridad de la
defensa de los derechos humanos de todos los venezolanos. Segundo, se registra un cambio en el
comportamiento de las instituciones existentes que difiere radicalmente con las costumbres y
prácticas políticas anteriores; es decir hay una ruptura institucional significativa con las prácticas
del pasado. La más significativa es el rechazo a la violencia política y el uso democrático de las
urnas para legitimar decisiones políticas que afectan a todos. Durante el proceso bolivariano ha
habido votaciones para el referéndum constitucional, reforma constitucional, elecciones
presidenciales, elecciones para la asamblea legislativa y consejos municipales, además de
procesos revocatorios. Los resultados, la validez y la transparencia de esas consultas están a la
vista de todos en el Consejo Supremo Electoral (CSE) venezolano. Además, se han establecido
17
José Vicente Rangel es el defensor de los derechos humanos más conocido públicamente en Venezuela. Tiene
una larga e incuestionable trayectoria de denuncias como abogado, periodista y político antes y después de la
Revolución. Con la Revolución fue el primer ministro civil de Defensa en la Historia de Venezuela y
posteriormente llegó a ser vice-presidente del país. Una vez retirado de la política activa, José Vicente ha vuelto al
periodismo y sigue desde su programa de televisión en la cadena Televen promoviendo el diálogo democrático en el
país de todas las fuerzas vivas tanto en el gobierno como en la oposición.
18
“Jauría es el conjunto de personas que persiguen con saña a una persona o grupo” definición que utiliza José
Vicente Rangel en su artículo “La Jauría” en www.aporrea.org
19
Ibíd.
23
elecciones directas, secretas e imparciales de las bases para elegir líderes en algunos partidos
políticos. Este es un cambio de la cultura política muy importante y significativa. Tampoco se
puede negar el origen de estas iniciativas y cambios democráticos están vinculados a la relación
muy particular del líder del proceso, el actual Presidente Hugo Chávez Frías –supuesto déspota
según la oposición—elegido democráticamente en las urnas varias veces, sus compañeros de
gobierno y partido –la mayoría destacados defensores de los derechos humanos durante décadas
--y la mayoría del pueblo venezolano.
Es cierto que históricamente cualquier proceso político revolucionario causa pasiones
encontradas entre los representantes del pasado y los del presente-futuro. Lo mismo ha ocurrido
en procesos históricos similares. También, es cierto que la personalidad y el estilo de los líderes
revolucionarios afectan directamente a la percepción de la realidad de estos procesos. Ha
ocurrido en los procesos revolucionarios desde los tiempos de George Washington, Robespierre,
Simón Bolívar y hasta los más recientes como Mao Tse Tung, Fidel Castro u Ho Chi Ming. Los
líderes de la revolución intensifican las pasiones de ambas partes; y en el caso de Venezuela y
del líder de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez Frías no es diferente. No es difícil de
entender quiénes son y qué quieren las voces de la “jauría humana” que persigue a la Revolución
Bolivariana. Representan el pasado y con su grito visceral --dentro y fuera de Venezuela-- se
oponen a todo lo que genera la Revolución, particularmente a lo bueno. Sin embargo, debido a
su limitado y anodino análisis --claramente parcializado por una agenda militar sin razón de ser y
una agenda económica que fracasó durante la IV República— ignora los hechos, los cambios y
tiempos que vive el país.
Sin duda es el ambiente crítico más difícil para el investigador. Cualquier planteamiento
u escrito sobre lo que pasa es inmediatamente catalogado de “apología revolucionaria” o
“propaganda anti-revolucionaria.” El autor es calificado de “chavista” o “escuálido”-- antichavista’’ 20.
Es paradójico, pero no sorprendente, que el mismo argumento puede ser
catalogado como “apología” del chavismo por los “escuálidos” y “aberración antirevolucionaria” por los “chavistas” dependiendo únicamente del punto de vista del lector. Es un
ambiente imposible, de críticas viscerales, insatisfacciones, donde todos o casi todos expresan
desacuerdo y disgusto. El que no critica el contenido, critica las fuentes o incluso las personas.
Todo es “válido” para desacreditar los méritos desde el punto de vista de la oposición política.
20
Término que se usa para identificar aquellos que se oponen a la Revolución en Venezuela.
24
La presente tesis, sin duda, será victima propicia de la polarización existente. Auguro
que las acusaciones vendrán por ambos lados. La “jauría” contra-revolucionaria me acusará de
ser un fanático de la Revolución y calificará este trabajo de propaganda chavista. Sencillamente
porque documento que la Revolución Bolivariana --en comparación con la IV República— es un
ejemplo positivo de avances significativos en la defensa de los derechos humanos en los últimos
diez años. Esta tesis destruye, creo que con argumentos muy fuertes, la matriz de opinión de
que la Revolución Bolivariana es una máquina de violación de los derechos humanos --que
algunas importantes organizaciones de defensa de los derechos humanos como Human Rights
Watch por ejemplo-- han hecho. Human Rights Watch cuenta verdades a medias, ignora lo más
importante desde el punto de vista de los derechos humanos, la superación del marco-histórico
de la Seguridad Nacional. Sorprendentemente ignora los avances hechos --que son muchos-tanto en materia legal como real en materia de defensa de los derechos humanos básicos. Es
responsabilidad de ellos argumentar lo contrario.
Por otro lado, algunos revolucionarios denunciarán el marco teórico seleccionado, al
considerarlo insuficiente y demasiado liberal. Es decir un marco teórico no suficientemente
marxista; que ignora la prioridad de la lucha de clases y otras tesis importantes marxistas y
socialistas.
Este estudio no hace referencias al futuro
--al socialismo del siglo XXI--
simplemente destaca los cambios que produce la Revolución Bolivariana con respecto a la IV
República. Señala un modelo teórico en el cual la Revolución Bolivariana puede defender sus
conquistas y puntos de vista desde una perspectiva humanista; y por qué no ofrece una
prospectiva interesante para la defensa de los derechos humanos en una sociedad. Define en
principio un modelo de estado de “seguridad y subsistencia” que enfatiza la creación de
instituciones y prácticas sociales de participación ciudadana que determina la mejor defensa de
los derechos humanos y que integra activamente a los más vulnerables.
El objetivo final de este trabajo no es otro que avanzar las tesis de defensa de los
derechos humanos en el mundo. Es por eso que deseo contribuir humildemente con este trabajo
a la misión y el compromiso del Departamento de Filosofía Iberoamericana de la Universidad
Centroamericana (UCA) “José Simeón Cañas” en la defensa de los derechos humanos en
América Latina. Sigo fielmente --con plena conciencia-- la misión de la UCA tal como lo
expresó Ignacio Ellacuría en 1982: “en el mundo donde reinan la falsedad, la injusticia y la
represión, la misión de la UCA es luchar por la verdad, la justicia y la libertad.”
25
Capítulo I.
Marco teórico para delinear una perspectiva universalista intercultural de los
derechos humanos.
La Declaración Universal de los Derechos Humanos (DUDH) está siempre bajo el
escrutinio desde el punto de vista académico y político. Algunos critican el contexto histórico del
texto. La DUDH fue la respuesta a la brutalidad de la Segunda Guerra Mundial, después de los
terribles eventos del Holocausto nazi, los bombardeos aliados de Dresde, Hiroshima, Nagasaki, y
la brutalidad de la guerra misma. Millones de personas, la mayoría civiles, perdieron la vida y la
destrucción física y moral fue brutal. Podemos decir que históricamente la DUDH fue y es
todavía un documento legal para promover la paz mundial. También la DUDH ha estado y está
vinculada directamente a las Naciones Unidas (ONU), institución multinacional e internacional
creada como un foro de consenso y diálogo. La ONU aunque carece de poder definitivo y
autoridad sobre los estados, particularmente sobre aquellos que son miembros permanentes en el
Consejo de Seguridad, tiene una autoridad moral y diplomática importante. Sin embargo China,
Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia y Rusia tienen un poder de veto que utilizan
frecuentemente para defender sus intereses particulares sobre los generales. En resumen, la
ONU es un organismo de buena voluntad en la comunidad internacional y su compromiso en
general es fomentar el diálogo, defender y promover la paz aunque no siempre lo consigue, ya
que muchos estados --que la conforman—no renuncian a sus ambiciones geopolíticas y
económicas que acaban frecuentemente en conflictos y guerras.
Además de la realidad internacional, los propios contenidos de la DUDH tienen desafíos
adicionales a nivel teórico como la separación entre derechos individuales civiles y políticos de
los no menos importantes económicos, culturales y colectivos 21. Más desafíos se presentan en
los debates académicos entre universalistas y relativistas, entre socialistas y liberales,
individualistas y comunitarios; y más recientemente entre todos y los ecologistas. En este
polémico contexto no es difícil ver las dificultades y los desafíos que la aplicación de la DUDH
tiene frente sí. A pesar de estos desafíos y dificultades, el hecho más importante persiste; la
21
Ver Adamantia Pollis y Peter Schwab, “Human Rights: A Western Construct with Limited Applicability.” En
Adamantia Pollis y Peter Schwab eds. Human Rights: Cultural and Ideological Perspectives. (New York: Praeger
Publishers, 1979) 1-18.
26
DUDH es el punto de referencia fundamental en esta materia en todo el mundo. Como bien
señala Fornet-Betancourt los derechos humanos son un “desarrollo histórico concreto que va
cristalizando un ethos de liberación humana como alternativa de emancipación frente a las
condiciones de dominación que desprecian al ser humano 22.” Por tanto académicos y activistas
están de acuerdo que la DUDH y la ONU ofrecen un marco adecuado para el diálogo
intercultural y así alcanzar acuerdos políticos que alcancen la paz y el respeto a la dignidad
humana. Todos sabemos que hay un largo camino todavía por recorrer, aunque se han logrado
importantes avances tanto en la interpretación como en la implementación de los derechos
humanos. Existe una conciencia mundial sobre la necesidad de respetar estos derechos y rescatar
la dignidad de la persona particularmente en las zonas en conflicto. La creación de la Corte
Internacional de Justicia 23 fue un paso significativo hacia delante desde el punto de vista legal.
Es una
contribución a
lo que el profesor Carlos Villán Duran define como el Derecho
Internacional de los Derechos Humanos (DIDH) 24 o lo que la profesora Ann Ginger Fagan
llama “Peace Law” o Ley de la Paz 25. La existencia de una Corte Internacional obliga a muchos
líderes --a pensar dos veces-- antes de cometer crímenes de estado y lesa humanidad.
El desafío académico fundamental en la defensa de los derechos humanos está todavía
por resolver. Se trata de desarrollar un marco conceptual inclusivo e integrador que nos lleve a -lo que Pollis y Schwab definen-- “una doctrina universal consensuada que nos dé la esencia de
la vida digna de las personas” 26 y que además como puntualiza Fornet-Betancourt “sirva de
camino para liberar y canalizar la energía liberadora de la humanidad” 27. Hay razones para el
optimismo porque después de años de investigación y reflexión, empieza a emerger una teoría
sólida, no dogmática, dentro de una cultura propia de los derechos humanos. El propio FornetBetancourt afirma que “hay una cultura allí donde las metas y valores por los que se define una
comunidad humana, tienen incidencia efectiva en la organización social del universo contextual-
22
Fornet-Betancourt, “Los derechos humanos, ¿Fuente ética de critica cultural y de diálogo entre las culturas?”, en
Interculturalidad y globalización, 91.
23
Ver, Adamantia Pollis ”A New Universalism.” En Adamantia Pollis and Peter Schwab, eds. Human Rights:
New Perspectives, New Realities. (Londres: Lynne Rienner Publishers Inc., 2000),26.
24
Carlos Villa Duran, Curso de Derecho Internacional de los Derechos Humanos. (Madrid: Editorial Trota, 2006).
25
Ann Ginger Fagan, Peace Law. (San Francisco: San Francisco State University, 1995).
26
Ver “Introduction.” En Pollis y Schwab, Human Rights: New Perspectives, New Realities, 7.
27
Fornet-Betancourt, “Los derechos humanos, ¿Fuente ética de critica cultural y de dialogo entre las culturas?”, en
Interculturalidad y globalización, 91.
27
material que afirman como propio porque están en él” 28. En este sentido podríamos definir la
cultura de los derechos humanos como una cultura intercultural que se define como universal -sin fronteras-- y que quiere dialogar sus principios con todas las demás.
Existe interés en estudiar los mejores ejemplos de la legislación y el activismo en la
defensa de los derechos humanos. Estudiado las ideas, los principios éticos que están detrás de
la ley, los métodos políticos empleados por líderes y grupos humanos es fácil reconocer que se
han cumplido objetivos políticos importantes y se han promocionado cambios profundos en la
psique colectiva en esta materia. Obviamente, una ley perfecta para todos que incluya a toda la
humanidad no es realmente posible sin antes estudiar desde el punto de vista intercultural los
principios éticos en los cuales podamos concordar y consensuar. Es necesario un diálogo entre
culturas –religiones, filosofías, historias-- sobre aquellos principios éticos que sean los menos
ambiguos; y que sirvan para eliminar posibles contradicciones que nos presenta el contenido de
la DUDH. Este diálogo es parte de la construcción de este nuevo universalismo. Abdullani
Ahmed An-Na’im argumenta además que cada cultura tiene que abrirse a esta posibilidad ya que
“necesita desarrollarse una legitimación interna e intercultural en defensa de los derechos
humanos” 29. Argumentaré – como propuesta--que esta cultura emergente de los derechos
humanos y que es común a todas las culturas tiene como principio ético básico, el respeto a la
vida, definido en términos de “ahimsa.” Este concepto también conocido como el principio de la
“no violencia,” fue definido filosófica y éticamente por Mohandas K. Gandhi. Es un principio,
presente, implícito y a veces claramente defendido como sagrado por muchas religiones; pero
que afortunadamente no requiere ni necesita la religión para explicarse ni justificarse. Es un
principio básico humanista y esencial que define la humanidad del ser.
Es mi tesis que ahimsa --principio ético original del Oriente; de la cultura hindú y
budista-- elimina muchas ambigüedades y fragilidades de la DUDH --construcción legal de
Occidente--, llevando este documento a una dimensión universal y positiva. Crea las bases para
una cultura y teoría de los derechos humanos basada en la tolerancia, el diálogo y la “no
violencia.”
Este nuevo universalismo basado en ahimsa o “no violencia” fue definido
específicamente por Gandhi como “la ley básica del ser humano.”
28
Ibid.,14
Abdullahi Ahmed An-na’im, “Toward a Cross-Cultural Approach to Defining International Standards of Human
Rights.” En Ibid. ed., Human Rights in Cross-Cultural Perspectives’ a Quest for Consensus. (Filadelfia: University
of Pennsylvania Press, 1994),19.
29
28
Básicamente significa que uno debe tratar de no dañar a otros. Esta es la razón que
hace este principio como el más efectivo para la acción, ya que está en lo más profundo de
nuestro ser; es el que nos define de verdad como seres humanos y se corresponde a nuestro
deseo profundo por la paz, justicia, orden, libertad y dignidad personal. Ahimsa en positivo
además restablece y construye nuestra naturaleza humana, mientras facilita los medios
necesarios para la justicia y paz social. Significa una transformación de las relaciones para
transferir el poder de forma libre y sin compulsiones entre las personas involucradas, porque
todos lo reconocen como un derecho.
Es el principio que complementa el derecho a la vida, que es el más intuitivo según
explica Pollis.
Un análisis en profundidad debe hacerse para encontrar los valores comunes existentes
entre religiones y filosofías. En esta búsqueda ciertos valores interculturales vienen a la mente,
por ejemplo que no existe cultura o sistema filosófico que apruebe matanzas arbitrarias,
desapariciones o tortura. El derecho a la vida es sacrosanto, por lo menos para los miembros
de la propia comunidad, ya sea comunidad o nación estado. Esto no significa que este derecho
no sea violado en la práctica tanto en occidente como en culturas no occidentales 30.
Este derecho a la vida puede definirse mejor, más contundentemente con el principio de
ahimsa. Este principio si es adoptado como el ethos -- la fundación ética-- de la DUDH fomenta
precisamente lo que Fornet-Betancourt define como transformación cultural de doble sentido.
Por un lado, la DUDH para estar a la altura del diálogo intercultural debe ser transformada por
este; y al mismo tiempo esta misma DUDH en transformación intercultural se convierte en
fermento de transformación de las culturas con las que dialoga. En otras palabras, La DUDH es
un texto “vivo” y la cultura que genera no puede ser monopolizada por un grupo o cultura
particular.
La cultura de los derechos humanos necesita del debate intercultural, de la
argumentación académica e incluso de la desobediencia cultural para no caer en el encerramiento
solipista y en el aislamiento; y al mismo tiempo las culturas y las sociedades que entren en ese
diálogo se transformarán a sí mismas en el proceso 31.
La conexión entre ahimsa y la DUDH (1948) es muy efectiva. El resultado inmediato es
la incorporación de toda la historia humana de la lucha por la justicia y paz social desde los
tiempos antiguos por medios pacíficos. Genera una historia multicultural de la lucha por la paz,
en la que la DUDH y la ONU son una expresión moderna --legal e institucional-- de estos
esfuerzos. Esta historia ya no pertenece a occidente solamente, porque incorpora a todos los
30
31
Adamantia Pollis, “A New Universalism,” 23.
Fornet-Betancourt, Interculturalidad y Globalización, 16-17.
29
grupos religiosos, a las naciones, a los líderes políticos y personas en cada lugar, clase, género,
orientación sexual, filosofía, etc. Como señala Fornet Betancourt:
La idea de los derechos humanos no desciende del cielo como maná ni es tampoco el
resultado de alguna genialidad filosófica. Su origen y desarrollo se explican más bien a partir
de los procesos de contestación situados histórico-socialmente en los que seres humanos
concretos en nombre de la simple, pero decisiva vivencia de su propia humanidad universalizan
el sentimiento de su ser parte del género humano 32.
Igualmente elimina el monopolio de la historia que se centra únicamente en todos
aquellos que han mejorado la condición humana a través de la lucha armada o la violencia sin
disminuir su relevancia personal, histórica, religiosa o política. Tal vez lo más importante es que
esta nueva historia cultural ayuda a desmitificar la que glorifica la violencia como medio único
para alcanzar el cambio político-social --concepto muy arraigado en muchas culturas. Ahimsa es
clave fundamental en la agenda de los más importantes activistas de los derechos humanos en la
historia. Las historias del propio Gandhi, de Martin Luther King Mr., el líder campesino César
Chaves en EE UU, el Cardenal Católico Arnulfo Romero, Desmond Tutu en Sur África, el Jefe
indígena Seattle, el activista gay
Harvey Milk, la madre Teresa de Calcuta, el líder del
movimiento de las personas con diversidad funcional Ed Roberts, el Honorable Dalai Lama y
muchos otros que han cambiado la conciencia humana afirmando la “no violencia” como el
medio supremo para defender sus derechos a la dignidad humana. Lo mismo puede decirse de
organizaciones nacionales e internacionales de defensa de los derechos humanos que han hecho
un trabajo encomiable de solidaridad como Amnistía Internacional, Habitat For Humanity,
Médicos sin Fronteras, UNICEF y muchas otras. Todos luchan por la afirmación de diferentes
aspectos del derecho a la vida digna y reivindican además --la vía no violenta-- como medio para
alcanzar sus objetivos igualmente.
Afortunadamente, Gandhi, apóstol de la “no violencia,” desarrolló una metodología
extraordinaria de como cambiar las leyes injustas y discriminatorias vía desobediencia civil y
otros métodos --no violentos-- de acción política.
Desde entonces, todos los grupos
discriminados han usado estos métodos para defenderse contra la indignidad del racismo, del
hambre, de la discriminación, del abuso, la injusticia y de la violencia misma.
Fuerzas anti-
coloniales, africano-americanos, indígenas, mujeres, trabajadores, homosexuales, personas con
32
Fornet-Betancourt, “Los derechos humanos, ¿Fuente ética de critica cultural y de diálogo entre las culturas?”, en
Interculturalidad y globalización, 90.
30
diversidad funcional, minorías, emigrantes han usado ambos métodos --violentos y “no
violentos”-- para luchar por sus derechos. En muchas ocasiones, hay que reconocerlo finalmente,
los métodos “no violentos” han sido fundamentales y tan efectivos como los violentos para
derrotar la indignidad y romper con la injusticia.
La DUDH, es un texto “no violento,” es el producto de la historia concreta de la postguerra con el objetivo especifico de “terminar con la violencia” de las guerras mundiales; y fue
redactado para restablecer un orden nuevo de paz y justicia. Es un anacronismo que se use para
justificar la violencia y la agresión política, venga de donde venga.
La DUDH “es el
compromiso por humanizar la humanidad del hombre”—resume Fornet-Betancourt 33. Si ahimsa
es el principio ético intrínseco -ethos- a la DUDH y de la lucha por los derechos humanos será
por tanto el mejor método para conseguir sus objetivos. Como Pollis señalaba anteriormente el
problema teórico básico de la DUDH ha sido que de hecho comportamientos y acciones
contradictorias pueden justificarse en el mismo valor abstracto. Esto es más difícil si filtramos
tales comportamientos y acciones con los principios de la “no violencia.” Entonces, podemos
reconocer sin miedo que si la violencia no es un recurso posible, se necesita desarrollar algo muy
diferente; una cultura y teoría de defensa de derechos humanos que desarrolle formas diferentes
de resolver conflictos para restablecer y conservar el principio el ethos no violento en las
relaciones humanas.
Para el estudiante y el estudioso, la literatura de los derechos humanos parece un
rompecabezas. El rompecabezas tiene el desafío de armarle sin que queden piezas sin colocar.
El rompecabezas de la defensa de los derechos humanos no es fácil. En la clase de “Teoría y
Práctica de los Derechos Humanos” los estudiantes de la escuela secundaria tienen que buscar
respuestas a preguntas difíciles. La dificultad radica precisamente en la existencia de muchos
puntos de vista ya sean culturales, religiosos o filosóficos que hay que tener en cuenta. Estos
incluyen perspectivas musulmanas, judías, cristianas, budistas, hindús, indigenistas y ateas que
presentan diferentes y múltiples soluciones. Muchas veces hemos tenido que buscar nuevas
respuestas; y frecuentemente, los propios estudiantes encontraron mejores respuestas a las que se
ofrecían en los textos de estudio. Cualquier respuesta clara que responda a las complejidades de
los conflictos que se presentan requiere trabajo e investigación y diálogo. Para resolver estos
33
Ibíd., 93.
31
problemas hace falta muchas veces utilizar lo que Fornet-Betancourt define como
“desobediencia cultural,” una praxis cultural de liberación 34.
No es lo mismo el análisis de los efectos del conflicto palestino-israelí, de la guerra civil
en Colombia, de los ataques de septiembre 11 en Nueva York (2001) de los golpes de estado
contra el Presidente Hugo Chávez en Venezuela (2002) o contra el Presidente Manuel Zelaya de
Honduras (2009) o contra el Presidente Rafael Correa de Ecuador (2010); que el análisis de las
guerras en Irak, Afganistán, Libia o de los conflictos armados en África. Todos varían en
evidencia y naturaleza desde el punto de vista de los derechos humanos.
La respuesta a
preguntas aparentemente simples se torna compleja. ¿Cuál es o sería la mejor defensa de los
derechos humanos ante tal o cuál problema o conflicto?
Para encontrar respuestas los
estudiantes utilizan la DUDH y otros textos legales nacionales o del DIDH y analizan como las
diferentes demandas de los grupos de defensa de los derechos humanos que están respondiendo
en determinado conflicto. También, se buscan casos similares en el precedente histórico y
cultural reciente. Una serie de respuestas sólidas y convincentes emergen, algunas no muy
conocidas, tal vez nuevas, la mayoría no muy populares para alguna o ambas de las partes en
conflicto. Estas respuestas no surgen sólo porque los estudiantes toman muy en serio los
derechos humanos sino porque existe la honestidad de no enjuiciar las posibles respuestas a los
problemas planteados 35.
34
“Entroncando con la historia del conflicto de las tradiciones en el seno de cada cultura, así como con los procesos
de interacción que supone, la filosofía fomenta primero la desobediencia intercultural como actitud que se genera
desde el interior del mismo de una cultura y que apunta a la crítica de su forma de estabilización … Se trata,
segundo de fortalecer el derecho de cada miembro de una cultura determinada a ver en su cultura un universo
transitable y modificable; es decir un mundo que no se agota en sus tradiciones pasadas… De aquí, tercero, que la
filosofía fomente la desobediencia cultural mostrando correctamente, o sea, en base a la experiencia del contraste de
los universos culturales, que toda cultura tiene el derecho de ver el mundo por sí misma, pero no reducirlo a su
visión. Es decir que no tiene derecho a imponerse a sus miembros como la única visión que pueden o deben
compartir. ...Por eso, cuarto, la filosofía cultiva la desobediencia cultural como la perspectiva de fondo a cuya luz
cada persona humana debe hacer de su cultura “propia” una opción… De lo anterior se desprende, quinto, que la
filosofía intercultural potencia la “desobediencia cultural” porque considera necesario agudizar en cada cultura la
conciencia de que sus sujetos deben retomar constantemente el conflicto de tradiciones que trata de ocultar la cara
estabilizada de su cultura, para leerlo en la clave de la dialéctica de la liberación y opresión… Desobediencia
cultural es pues, praxis cultural de liberación.” Fornet-Betancourt, Interculturalidad y Globalización, 16-17.
35
En la escuela secundaria Bergen County Academies en Hackensack, Nueva Jersey, existen varios clubs de
estudiantes organizados en grupos de defensa de los derechos humanos. Grupos de estudiantes de Amnistía
International, Habitat For Humanity, Students against Sweatshops, Children International, Gay Straight Alliances,
Operation Smile y otros más trabajan y se agrupan bajo una organización aglutinadora llamada el Multicultural Task
Force. Algunos estudiantes han continuado sus actividades en defensa de los derechos humanos en la universidad e
incluso hay varios que han escogido carreras relacionadas con la defensa o la promoción de los derechos humanos.
32
Existe una razón que explica este interés y dedicación estudiantil a la defensa de los
derechos humanos y ecológicos; y es que está emergiendo una cultura internacional e
intercultural que se define en torno a los derechos humanos e incluye también todos los temas
ecológicos. Estamos en un momento histórico en el cual existe una conciencia colectiva, un
debate constante y una experiencia adquirida en esta materia. Fornet-Betancourt explica mejor
las causas de esta búsqueda al señalar que “para el ser humano no hay uso de la libertad ni de la
razón sin condicionamiento cultural, pero tampoco hay cultura humana sin la praxis de la
libertad ni el ejercicio reflexivo de la razón. 36” Todavía existen algunos que prefieren no pensar
en estos temas, pero la gravedad y frecuencia de las crisis humanas y ecológicas que
confrontamos globalmente nos obligan a tomar posición.
La praxis de la libertad – a la
desobediencia cultural-- y a buscar respuestas donde las haya -- frecuentemente en el diálogo
intercultural es una alternativa obvia.
Por supuesto, quizás no gusten las soluciones ya que la
mayoría exigen cambios muy revolucionarios, no sólo en lo colectivo, sino incluso en los hábitos
de la vida cotidiana. Unos hábitos establecidos, cómodos y arraigados – impuestos desde el
mundo desarrollado y que basados en un consumismo sin sentido-- son parte del problema y
tienen consecuencias ecológicas y humanas insostenibles para el futuro inmediato.
Aunque la literatura sobre los derechos humanos ha sido extremadamente útil para
estudiar y encontrar respuestas, hemos observado que existe una dialéctica entre teoría y práctica
que se enfoca no solamente en la aplicación de la DUDH o en las resoluciones de la ONU. Hay
una práctica que se basa “en las experiencias y acciones de seres vivientes y concretos en las que
se manifiesta un objetivo humano que puede ser reconocido y compartido por otros seres
humanos como una finalidad común 37”. Las luchas se repiten y hay respuestas en la teoríapráctica de líderes conocidos como Gandhi, Martin Luther King, Monseñor Romero y otros, pero
también hay respuestas en las luchas cotidianas de muchos otros activistas menos conocidos y
otros prácticamente desconocidos. Estos activistas locales ganaron y ganan batallas en defensa
de los derechos humanos vía la “no violencia” y son capaces de avanzar en la práctica la agenda
de los derechos humanos significativamente “transcendiendo” su experiencia humanizadora y
liberadora incluso en las circunstancias más difíciles que podamos imaginar. No son conocidos
porque su ejemplo y su mérito desafía un “status quo” hegemónico y tienen un acceso restringido
36
37
Fornet-Betancourt, Interculturalidad y Globalización, 26-27.
Ibíd., 94.
33
si acaso a unos medios de comunicación y una cultura dominante que promociona y “glorifica”
la violencia y la muerte 38.
En este sentido Gandhi es una fuente extraordinaria para encontrar respuestas teóricas y
prácticas a las preguntas más difíciles y complicadas en materia de derechos humanos
precisamente por su interés en lo personal y cotidiano. No encontramos ninguna contradicción
entre la DUDH y la articulación gandhiana de su práctica cotidiana de la “no violencia.” Al
contrario, fue precisamente la sensibilidad de Gandhi hacia el diálogo contra el colonialismo y su
rebeldía intercultural, lo que le convirtió en una fuente formidable para resolver temas de
conflicto político, cultural y religioso, ahora nuevamente críticos en nuestros días. Su habilidad
y elocuencia para romper la intolerancia a través del razonamiento y la resistencia pacífica
individual y colectiva –desobediencia política, económica, cultural y muchas veces religiosa—
desafiando las costumbres de su propia comunidad, lo convirtieron en un recurso remarcable
para implementar su metodología en temas actuales de conflictos en materia de derechos
humanos 39. La mayoría de los activistas en materia de derechos humanos argumentan que las
tradiciones culturales injustas –aquellas que violan derechos humanos básicos de individuos o
grupos— deben y deberían cambiarse y remplazarse por otras más justas. Esto no es tan sencillo
como parece. Para Gandhi este cambio no solamente es legal o jurídico sino que este debe ser
precisamente resultado de un consenso cultural; que incluye la asimilación popular de una nueva
tradición que efectivamente disuelve y absorbe a las tradiciones anteriores. Asimismo debe
desarrollarse en el contexto histórico y particular de esa nación-estado. Es en este sentido que la
Revolución Bolivariana es un buen ejemplo ya que se está expandiendo de una forma colectiva
no dogmática, pero si democrática –legal, popular y no violenta—con nuevos objetivos sociales
38
Por ejemplo, la película española “Mar Adentro” ganadora de muchos premios cinematográficos nos presenta la
historia de una persona que sufre de parálisis, que por motivos personales de dignidad --muy respetables a mi juicio,
quiere terminar con su propia vida. El problema –para la comunidad de personas con diversidad funcional -- no es
esta película en particular, sino la falta de otras películas –premiadas o no-- sobre las vidas ejemplares de miles de
personas que en las mismas circunstancias que en condiciones tan difíciles o más que el protagonista de “Mar
Adentro” quieren vivir y viven “mar afuera” luchando día a día por la dignidad de sí mismos y sus compañeros
marginados.
39
Gandhi fue un propulsor de la “desobediencia cultural” al desafiar el rol discriminatorio contra la mujer y los
intocables en su propia cultura y un promotor incansable del diálogo religioso al promover la lectura del Corán en
los templos hinduistas. Fueron precisamente extremistas de su propia religión quienes lo asesinaron en 1948. Una
muestra de lo difícil que es cambiar la cultura y las leyes es que los culpables del crimen, después del juicio fueron
ejecutados en 1949. El estado indio al aplicar la pena de muerte obviamente violó el principio más sagrado que
defendió el padre de la patria durante toda su vida: ahimsa o la no violencia.
34
y políticos. Está generando una cultura solidaria, pacifista y de defensa de los derechos humanos
que remplaza a una anterior que carecía de tales atributos 40.
La Constitución Bolivariana – es producto del ethos de
la DUDH—y ha ido
implementándose progresivamente en todos sus aspectos. Este cambio de marco legal no fue
importado sino producto de una diálogo nacional e intercultural que ha ido generado un contexto
político social y cultural democrático nuevo, que involucra todos los aspectos de la vida
venezolana, incluso la vida cotidiana. El pueblo aprobó en referéndum nacional la nueva carta
magna con la idea de eliminar la pobreza –la peor forma de violencia-- y educar a la población
en los mejores ideales de figuras históricas tales como Simón Bolívar, Simón Rodríguez y
Ezequiel Zamora. Su objetivo es generar reformas profundas revolucionarias e implementar una
nueva cultura social en defensa de los derechos humanos que son leyes de raíz histórica y que se
aprueban democráticamente en la Asamblea Nacional. Asimismo, a la ley se añade la práctica
de una democracia directa, participativa y protagónica instrumento que exige el mandato
constitucional.
El objetivo final no es otro que integrar a todos los ciudadanos sin
`discriminaciones de ningún tipo en un proyecto cultural común 41. Se trata en las palabras de
Fornet-Betancourt de proveer a la mayoría – en este caso de los venezolanos-- de algo que
muchos carecían en el pasado una “biografía personal” que contribuya a la historia colectiva 42.
El “proceso” –conocido y definido por los venezolanos con ese nombre—tiene los tres
elementos que Gandhi definía como necesarios para implementar con éxito un cambio cultural
en defensa de los derechos humanos: crear un nuevo marco legal, establecer los medios políticos
–democracia participativa—y conformarlos al contexto histórico-social que enmarca el cambio
dentro de la cultura local (Bolívar-Zamora-Rodríguez) 43. Crear los mecanismos que canalicen
este espíritu de participación y desobediencia cultural representa el desafío más importante para
40
Obviamente, ni toda la oposición venezolana ni todos los bolivarianos son militantes de la no violencia, la
violencia verbal a veces es frecuente e innecesaria por ambas partes. Es fruto quizás de un pasado todavía no
superado. Sin embargo hay que destacar que las mayorías en ambas partes del espectro político rechazan la
violencia política o social venga de donde venga. La V República nace precisamente como rechazo a la violencia
institucionalizada de la IV República.
41
La democracia como una propiedad de los sistemas sociales puede concebirse en tres dimensiones: 1. La social,
entendida como calidad de vida material; 2. La formal, definida como el conjunto de determinadas reglas generales
que componen el sistema; 3.La participativa, entendida como la decisión real de los asuntos públicos
transcendentales por parte de las mayorías de la sociedad, con la debida protección de las minorías. Dietrich,
Democracia Participativa, 72.
42
Fornet-Betancourt, Interculturalidad y Globalización, 26.
43
Para leer la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela en español o inglés ver, www.vheadline.com .
35
la implementación de la DUDH en un contexto histórico. Gandhi lidió con conflictos coloniales,
de género, de clase social, de hambre, de odio religioso y de fanatismo nacionalista; todo junto
en un contexto cultural, intercultural e histórico complejo. A veces tuvo éxito y otras veces
fracasó. Estudiando los métodos políticos de Gandhi, es posible encontrar respuestas a preguntas
difíciles, y además identificar ejemplos positivos –como es el caso de Venezuela— para entender
la naturaleza del cambio político-cultural con todas las dificultades intrínsecas que plantea. En la
lucha por los derechos humanos ya no basta con ser reactivos -- cuando existe la posibilidad—
hay que ser activos; y es por eso que el ejemplo venezolano es importante y un caso interesante
de estudio para este trabajo 44.
Como lo expresa Fornet-Betancourt este principio de método y defensa de los derechos
humanos es un principio de liberación ya que es: “un principio racionalmente comunicable y
compartible, es decir un principio que convence y que por convencer, mueve a la acción y con
ella a la reversión liberadora de la historia y de las culturas. 45” Por lo tanto, es necesario ampliar
la educación en materia de derechos humanos para que integre la teoría y la práctica; y se
desarrollen nuevas técnicas, prácticas políticas y culturales autónomas e independientes que
ayuden a la implementación de la DUDH y que sirva de alimento solidario para otras tradiciones
y culturas. La vía “no violenta,” es también el vínculo directo a la integración de los derechos de
los animales y el medio ambiente en la agenda política de la DUDH. El cultivo de la “no
violencia” dará tanto a los verdes como a los defensores de los derechos humanos una posición
de fortaleza ética y política que no tendrán de otra manera.
Nuevamente, Fornet-Betancourt nos advierte que “las culturas son condición de la acción
humana, pero al mismo tiempo su vitalidad depende sencillamente de la praxis de sus
miembros. 46” El desafío es conocer y entender los contenidos de la DUDH, para integrarla, vía
“no violencia,” en un contexto cultural y político particular. Aquí los desafíos varían mucho de
una tradición cultural a otra. La mayoría mis estudiantes, que profesan y provienen de religiones
y culturas muy diferentes, creen en la necesidad de los derechos humanos, pero tienen dificultad
44
“No se trata sólo de reaccionar ante la injusticia y denunciarla; sino que hay que buscarla, enfrentarla y atacarla de
frente para generar el cambio necesario”. Para una visión completa de la filosofía de Mahatma Gandhi, ver Louis
Fischer ed., The Essential Gandhi: An Antohology of His Writings on His Life, Work and Ideas. (New York:
Randon House Inc., 1983).
45
Fornet-Betancourt, Interculturalidad y Globalización, 29.
46
Ibíd., 44.
36
en adaptar estos derechos en el caso particular de su cultura y familia 47. Su experiencia es que
existe una dialéctica tensa entre la tradición y la innovación cultural, con peligros evidentes que
bien señala Fornet-Betancourt.
Una cultura que cree poder vivir de las rentas de sus tradiciones, termina por sacralizar sus
tradiciones e interrumpe así la dinámica propia de su desarrollo. Es más, es muy posible que
sucumba ante la tentación del fundamentalismo degenerando en in-cultura, ya que les roba a sus
miembros toda posibilidad de desarrollarse en sentido autónomo y personal. La vida cultural
posible al interior de una cultura semejante no sería otra que la de estar condenado a repetir
tradiciones declaradas como sagradas 48 .
Por ejemplo, en las tradiciones judío-cristianas y musulmanas existe el valor primordial
de respeto a la vida, pero paralelamente convive con una tradición maniquea que glorifica la
violencia, vía la batalla del “bien contra el mal.” Existe una resistencia cultural a entender la
violencia como un mal en sí mismo o incluso como último recurso. Es difícil convencer y
entender que el concepto de “la buena” violencia es básicamente una perspectiva subjetiva y
contradice el espíritu de la DUDH. En estas tradiciones se han creado subculturas que buscan
legitimar la violencia –incluso en su uso cotidiano-- ya sea desde un punto de vista individual,
nacional o religioso. Es más, existe una cultura de consumo que refuerza esta distinción entre
“buena” y “mala” violencia en los medios de comunicación. Esta incluye desde las noticias, las
revistas, los libros, las películas, los video-juegos y muchos programas de televisión. Existe una
correlación directa entre la presencia masiva de productos mediáticos que justifican la violencia
de “bien” sobre el “mal” con la relativa ausencia de los mismos productos que muestren las
mismas luchas por la vía “no violenta.” Por lo tanto, el debate cultural siempre está enmarcado
en la distinción entre tipos y niveles de violencia que difícilmente cuestionan la violencia misma
como solución. Es la cultura de la violencia como mal necesario. Este punto de vista es
radicalmente diferente al punto de vista de la defensa de los derechos humanos que se interesa en
47
“… las diferentes culturas no se han creado en años sino en siglos y los cambios no son fáciles de conseguir.
Muchas culturas enseñan valores que son opuestos a aquellos que otras deciden como sagrados y cuando esto ocurre
es todavía más difícil acercar tales culturas... Si uno trata de cambiar culturas o influenciar otras debe tomar un
método no invasor. El mejor método es siempre aquel que obliga a las personas de esa cultura a reflexionar si estas
creencias son en realidad prácticas esenciales o no. Solamente, cuando las personas inmersas en la cultura
consideran la práctica como defectiva, ellos consideran la necesidad del cambio de creencias. Existen aspectos
comunes en todas las culturas, pero no siempre. Años atrás, no todos los países o sociedades tenían un concepto del
derecho. Ideas como el esclavismo, el racismo y el sexismo han sido y son parte de nuestra cultura como la de otras
muchas. El primer paso para introducir un concepto multicultural de los derechos humanos sería introducir el
concepto del derecho para todos.” Reflexión personal de A. H. (9th grado) hecha en su diario de clase “Theory and
Practice of Human Rights” en otoño del 2002. A.H. fue una estudiante coreana-americana de bachillerato de Bergen
County Academies, que se graduó en 2005.
48
Fornet-Betancourt, Interculturalidad y Globalización, 45.
37
diferentes formas de diálogo como método para resolver los conflictos y obtener resultados
concretos. Obviamente, el contexto cultural –dentro y fuera -- de la DUDH ha sido siempre
evitar la violencia; y solamente puede enmarcarse de una forma honesta y efectiva, en el uso de
la crítica constructiva, la persuasión y la razón para alcanzar el orden. Para las culturas indígenas
el problema es diferente, no entienden una cultura de los derechos humanos --ni un texto
fundacional como es la DUDH-- que ignora los derechos de la madre naturaleza.
Aquí
perfectamente funciona el doble sentido del diálogo intercultural –que Fornet-Betancourt señala
como imprescindible. La DUDH necesita una reformulación que incluya aspectos importantes
que le faltan. Las culturas indígenas pudieran hacer una gran aportación en este sentido. Por lo
tanto no hay que adaptar la DUDH a la tradición judío-cristiana y musulmana sino lo contrario; y
por qué no adaptar la DUDH a los requerimientos básicos de una cultura que incluya la
protección del medio ambiente --que claman como esenciales las culturas de los pueblos
originarios e indígenas.
Las respuestas muchas veces obvias no lo son tanto, ya que las preguntas se mantienen al
margen del epicentro cultural por razones de resistencia al cambio. Entonces, hay que ser
valientes y formularlas abiertamente y provocar la “desobediencia cultural” si es necesario. Hay
muchos casos en todas estas culturas –el record histórico tiene muchos -- que por ejemplo
ayudan a entender claramente las ventajas de la resistencia pacífica sobre la violencia inmediata
por sus ventajas a largo plazo. Primero y fundamental desde el punto de vista lógico es que los
fines buscados no entren en contradicción con los medios empleados. Segundo, se evitan los
peligros de generar una espiral de terror que frecuentemente se ignora antes de aplicar la
violencia misma. En simples términos los medios no violentos son fácilmente reversibles
mientras que la violencia es frecuentemente impredecible.
Esto puede ser una desventaja
significativa ya que sobran ejemplos históricos que explican cómo la espiral de la violencia
funciona y se desarrolla. En el peor de los casos crea un cáncer social puede degenerar en una
cultura psicópata, donde “morir” y “matar” son “norma” cultural. No solamente está el ejemplo
del holocausto nazi, el linchamiento de africano-americanos en EEUU, o las “tomas” de las
tierras indígenas en las Américas. Hay casos nada sutiles como la sub-cultura del duelo –
glorificada en las películas y las novelas—donde el héroe “mata” simplemente por cuestiones de
“honor.” O la glorificación de “la caza de brujas” y el espionaje durante la Guerra Fría que
promovía y justificaba el propio el modelo de la “seguridad nacional” tanto en el bloque
38
capitalista como comunista.
La realidad era sin embargo que “la caza de brujas” si bien
marginaba injustamente a intelectuales de izquierda en EE UU de las universidades causaba
decenas de miles de muertos en Chile, Argentina, Venezuela, Colombia y otros muchos países de
América Latina, Asia y África. La espiral de la violencia lamentablemente es un fenómeno
común y frecuente en el mundo moderno. Existen subculturas perversas cuya norma es “matar”
al “otro” en América Latina, EE UU, Europa, Medio Oriente, África, India y otras partes de
Asia. Todos han desarrollado una lógica de la violencia del “bien,” básicamente demonizando al
“mal” o sea al “otro.” El conflicto palestino-israelí es quizás el mejor ejemplo ya que está en
todos los medios de comunicación. Políticos palestinos e israelíes aparecen en los medios de
comunicación diariamente --por décadas ahora-- justificando la naturaleza y las nuevas formas
de violencia empleadas. Cada nueva forma de violencia profundiza una espiral que destruye los
derechos humanos y la dignidad de tanto civiles como militares de ambas partes. Después del
último atentado terrorista, aparecen los políticos de turno argumentando la necesidad de
responder al ataque anterior. Todos hablan de paz y de iniciar unas negociaciones que siempre
quedan interrumpidas por nuevos actos de guerra. Oleadas de violencia han hecho de la misma
la “norma de vida” en la región. ¿Cuál será la solución final? Obviamente hay dos opciones,
detener la espiral de la violencia y hacer la paz de verdad o aniquilar al otro hasta que el último
ser humano --con la bandera palestina o israelí-- quede en pie.
En este contexto la misma violencia genera confusión sobre el significado de la vía
pacífica para justificarse. Muchos estudiantes confunden la “no violencia” con la indiferencia; o
piensan que la “no violencia” es la autodestructiva actitud de los mártires o de gente muy
religiosa. Ellos ignoran los simples hechos de la vida cotidiana. Normalmente, todos operamos
de forma “no violenta” en todas nuestras relaciones diarias. Interacciones “no violentas” entre
personas son “la norma de vida” de las relaciones humanas saludables ya sea a nivel político,
económico, social o familiar. Ahimsa o “no violencia” es por lo tanto lo “normal.” Es la ética
de relaciones democráticas y sanas entre personas; y no es necesariamente solo un principio
religioso de comportamiento. Es la norma de convivencia en todas las culturas. La única
diferencia es que ahimsa, si se toma como principio ético fundamental de los derechos humanos,
elimina el uso de la violencia, justificada o no, como medio para resolver conflictos. Es más,
dirige las energías de protesta social y política a la resistencia pacífica y al diálogo. ¿Es el
razonamiento y la filosofía la vía legítima para cambiar leyes y las tradiciones culturales y
39
confrontar la injusticia? Desde el punto de vista de la defensa de los derechos humanos –tal
como Gandhi usó este principio— ahimsa significa precisamente la confrontación directa contra
la injusticia, abriendo un diálogo directo con ella, exponiendo a todos a la luz de la razón la
evidencia de sus contradicciones. O sea expone la evidencia injusta en un conflicto positivo y
ofrece un cambio usando la lógica de un bien mejor razonado. Razones y no colaboración
masiva con la injusticia debería ser más que suficiente para producir los cambios sociales y
culturales deseados. La cultura substituye el camino de la violencia. “Las culturas –como señala
Fornet-Betancourt-- no son la solución, pero sí el camino para alcanzar soluciones viables y
universalizables. 49
¿No es acaso el rechazo de la violencia y el uso de la razón para resolver
conflictos el corazón del activismo en defensa de los derechos humanos y la razón de ser de la
propia DUDH y de la Carta fundacional de la ONU?
A nivel teórico para reorganizar este rompecabezas político del universalismo de los
derechos humanos, primero debemos apoyar la idea del diálogo cultural e intercultural que nos
ofrece Fornet Betancourt y Abdullahi Ahmed An-Nai’im para definir como ahimsa se aplicaría
la DUDH en un contexto particular.
Esto nos ofrece una posible respuesta al nuevo
universalismo que tanto las Filosofías de la Liberación, como Pollis y An-na’im proponen.
¿Puede la “no violencia” o ahimsa ser el elemento intercultural que haga a la DUDH finalmente
funcionar? También, si aceptamos el principio ahimsa como básico, ¿Podemos encontrar puntos
de encuentro con los movimientos indígenas y de protección del medio ambiente? Segundo,
podemos utilizar la teoría de derechos básicos de Henry Shue que responde a la pregunta básica
de establecer una jerarquía lógica de los derechos humanos existentes en la DUDH. Si bien hay
una prioridad básica que define cada grupo que sufre discriminación dentro de su propio discurso
cultural; Shue hace un trabajo excelente respondiendo a las preguntas de cuáles son los derechos
realmente básicos y cuáles no lo son tanto en un contexto general pero concreto dentro de la
nación-estado 50. Finalmente, y no menos importante, son las constantes preguntas hechas por los
estudiantes sobre la dificultad de crear una ética de los derechos humanos que responda en su
aplicabilidad a las situaciones cotidianas de la política y las relaciones diarias entre las personas.
En este respecto, las fuentes son múltiples desde la profesora Ann Ginger Fagan y su concepto
de Ley de Paz o Peace Law, o Carlos Villa Durán con su similar DIDH, es decir la creación de
49
Fornet-Betancourt, Interculturalidad y Globalización, 24.
Para una perspectiva completa de las diferentes corrientes filosóficas de la justicia, ver Thomas Kesselring, Ética,
Política e Desenvolvimiento Humano; A Justiça na era da Globalização. ( Caxias do Sul, Brasil: EDUCS, 2007).
50
40
un cuerpo de leyes que promueven la paz y la tolerancia que se incorporan con la propia DHDU
y la carta de fundación de la ONU. Están en el centro de un esfuerzo legislativo y que pueden
llegar hasta las acciones históricas del Juez español Baltasar Garzón en sus órdenes de
extradición del dictador chileno Augusto Pinochet por la desaparición de personas en Chile
durante la dictadura iniciada por el militar tras el golpe de 1973 contra el Presidente
constitucional Salvador Allende.
Todo ello crea una jerarquía de leyes y una experiencia
histórica que van del ámbito internacional al nacional y local. En este punto es imposible ignorar
los textos legales existentes y la existencia de tribunales para la defensa y denuncia de
violaciones de los derechos humanos a todos los niveles. Estos esquemas pueden formularse
más fácilmente y así expandirse y trasladarse a los diferentes ámbitos culturales y regionales de
cada país evitando los conflictos de dogmatismo e imperialismo cultural siempre y cuando
respondan a las diferentes formulas de diálogo cultural e intercultural que incluya a todos. Estas
propuestas humanistas de dialogo, de jerarquización de los derechos, de praxis legal y ética
cotidiana desarrollan filosóficamente a diferentes niveles en la Filosofía de la Liberación desde
el trabajo de Raúl Fornet-Betancourt, Enrique Dussel y Emmanuel Levinas entre otros.
Para ilustrar este marco teórico utilizaré a la Revolución Bolivariana de Venezuela que
con su nuevo marco constitucional, su práctica de la “democracia participativa y protagónica” y
sus políticas de eliminación de la peor forma de violencia --la pobreza 51. Tanto Gandhi como
Shue coinciden en señalar que el desafío político primero es establecer una cultura de la defensa
de los derechos humanos para hacer de ellos normas del derecho positivo y no solamente
costumbres de comportamiento a nivel general e internacional. Se trata de crear leyes y culturas
nacionales y sobretodo prácticas locales a los niveles más cotidianos de la vida. Por lo tanto una
lectura del proceso venezolano nos ayudará a ilustrar dos puntos básicos: como los derechos
humanos se transforman en derecho positivo y exponer un ejemplo de cómo emerge la nueva
cultura de los derechos humanos con una raíz histórica autóctona. En otras palabras como una
51
Los venezolanos ven la nueva constitución no solamente como las reglas constitucionales que enmarcan el debate
político del país; sino como el programa que defiende sus derechos humanos y crea una nueva cultura. El carácter
programático de la Constitución Bolivariana provee a cada venezolano con sus derechos básicos, incluyendo
derechos políticos, económicos, civiles, sociales y culturales. El medio para conseguirlos es la democracia
participativa; la gente reclama sus derechos y la función del estado y las instituciones del gobierno es responder a la
demanda. Esto se hace ofreciendo los medios materiales y el marco legal para hacer los cambios realidad. Las
misiones bolivarianas han sido los medios y el marco legal para hacer cambios radicales y puntuales en materia de
educación, salud y participación política en Venezuela, como analizaremos en este estudio.
41
cultura de nuevas leyes e instituciones genera prácticas sociales que defienden los derechos
humanos y la solidaridad.
El objetivo es generar una ética multicultural directa y simple que pueda usar cualquier
persona o individuo.
Si estamos de acuerdo de que existen derechos humanos y que su
aplicación es universal; aceptamos que existe una responsabilidad humana, individual y colectiva
para reclamar y practicar esos derechos.
Una ética de los derechos humanos debería ser
razonablemente simple para que las personas puedan hacer juicios, tomar decisiones y reclamar
justicia. Pienso que esta ética ya existe de forma implícita y fragmentada. Crearla de una forma
más explícita y coherente será un largo proceso cultural. Auguro que será una ética a mi juicio
pacifista, no dogmática, liberadora y que pueda ser fácilmente revisada y cambiada siguiendo un
diálogo intercultural abierto 52. Una ética que responda desde el punto de vista de los derechos
humanos a los problemas internacionales y nacionales. Con respuestas coherentes y contundentes
a los ataques del once de septiembre en Nueva York, al uso de soluciones militares en
Afganistán, Iraq, Libia, al conflicto palestino-israelí, a las guerras civiles, al golpe de estado, a la
tala de árboles en los bosques que nos quedan, al problema del hambre en el mundo. Con
respuestas no menos solidas a las políticas anti-democráticas de la Organización Mundial del
Comercio (OMC), del Consejo de Seguridad de la ONU, del Banco Mundial, del Fondo
Monetario Internacional o las prácticas laborales de las grandes corporaciones --como Nike y
otras-- que abusan de menores, mujeres y trabajadores con salarios de miseria y condiciones de
trabajo inhumanas. Es más, una ética que nos ayude a responder preguntas tan simples como:
¿A quién votaré en las próximas elecciones presidenciales? ¿Qué camisa debo comprar y usar?
¿Qué comida debo comer y dónde comprarla? ¿En qué banco o corporaciones debo invertir mi
dinero?
Vivimos más que nunca en un mundo donde cualquier acción o --no acción-- por pequeña
que sea es una respuesta a favor o en contra de la defensa de los derechos humanos y del medio
ambiente. Esto es a la vez una causa de frustración pero al mismo tiempo una oportunidad para
practicar la “desobediencia cultural,” cuestionar nuestros hábitos de comportamiento y valores
tradicionales. Quizás valores obsoletos o deficientes para tomar decisiones efectivas ante los
52
Paulo Freire argumentaba que en el diálogo para ser efectivo y pedagógico en estos casos, tiene que empezar con
la escucha detallada de quien reclama el abuso de sus derechos; para entender. Entonces, buscar juntos en diálogo
las respuestas creativas y concretas que requiere el caso. Esta es otra formulación del mismo diálogo cultural que
defiende Raúl Fornet-Betancourt.
42
problemas que confrontamos. Necesitamos incorporar nuevos valores que nos ayuden a defender
nuestros derechos humanos en la vida cotidiana y avanzar hacia una cultura global y diferente a
la que nos presenta la globalización. Para ello es fundamental conocer el contenido de nuestros
derechos y su historia, defender una clara jerarquización de los derechos para que sean de todos
sin exclusiones y mejorar nuestros métodos políticos y legales para exigirlos y lograrlos. Esto
requiere indispensablemente la “desobediencia cultural” contra lo injusto y la participación
activa en un diálogo cultural e intercultural de liberación servirá para salvar los obstáculos que se
presenten en el camino. Hay un estudio, un entendimiento de los problemas, hay campañas de
concienciación y desarrollo de los derechos humanos y hay movimientos sociales pro-derechos
humanos en todo el mundo, pero falta una articulación unificadora de todos esos esfuerzos.
1. ¿Ahimsa: principio intercultural de la “no violencia”?
Para Rhoda E. Howard, la defensa de los derechos humanos es una decisión moral. Ella
argumenta que el concepto de los derechos humanos nace del pensamiento moderno cuando se
plantea el problema de la justicia; para ella no nace de una antropología del consenso entre
culturas acerca de valores, necesidades o deseos de los seres humanos 53.
Este enfoque
universalista como decisión moral es correcto tal como Howard lo manifiesta: “Los derechos
humanos son una decisión –una decisión moral. Una que uno puede aceptar y que cualquiera
debe tener en un mundo moderno dominado por el estado nacional” 54. La mayoría de los
activistas de derechos humanos estarían de acuerdo con la idea de que los derechos humanos son
una decisión moral y también favorecerían la creación de una cultura moderna y universal de la
defensa de los mismos.
Sin embargo, la pregunta es cómo llegamos a esa decisión moral. Hay dos problemas
fundamentales en la idea de Howard de que los derechos humanos nacen únicamente del
pensamiento político moderno acerca de la justicia. Primero, esta afirmación no está clara, la
palabra “moderna” parece aquí significar la filosofía política del liberalismo. Sin embargo, sería
mucho más acertado decir que la DUDH nace –no solamente de la teoría liberal del derecho—
53
Rhoda E. Howard, “Dignity, Community, and Human Rights,” en Abdullahi Ahmed An-na’im ed., Human Rights
in Cross-Cultural Perspectives’ a Quest for Consensus. (Filadelfia: University of Pennsylvania Press, 1994), 81.
54
Ibid.
43
sino del pensamiento pacifista que busca evitar y abolir la guerra o la violencia en lo posible y
con ello la posibilidad devastadora de otra
guerra “moderna.” Es decir, es una reacción
específica a las prácticas de guerra “moderna” y hechos históricos como el holocausto y la
bomba atómica y otras armas de destrucción masiva. Sería muy difícil en mi opinión decir que
los autores de la DUDH tenían únicamente la filosofía liberal del derecho cuando escribieron
esta declaración tratando de desarrollar un concepto moderno de la justicia. Ellos eran parte de
un debate histórico y concreto que estaba intentando impedir la guerra como opción política, más
que construir un nuevo concepto de justicia liberal. A pesar del contexto histórico claro y
determinante en este aspecto, existe un grupo considerable de académicos de la DUDH que
favorecen una interpretación liberal del concepto de los derechos humanos tal como la define la
Profesora Howard.
Mi propuesta argumenta siguiendo la línea de An-Aa’im, Gandhi, Fornet-
Betancourt y las Filosofías de la Liberación y que va más allá del concepto liberal. Una
interpretación que enfatiza el objetivo pacifista e histórico de abolir la guerra como medio de
hacer política; y que defiende un punto de vista intercultural en materia de los derechos humanos
que es universalizadle.
Básicamente este concepto se refiere a la existencia de valores humanos comunes, al
igual que necesidades y deseos comunes a todos los seres humanos; pero no sólo desde el punto
de vista antropológico, sino desde el punto de vista de todas las ciencias sociales, incluyendo la
historia; que pueden ayudar a identificarnos con esos valores. Esto se hace para avanzar un
concepto cultural universal –moderno o quizás mejor definirlo como contemporáneo, porque fue
redactado en 1945—que es inter y multicultural en el mejor sentido de la palabra.
Tal
perspectiva no puede solamente incorporar el pensamiento liberal sobre el derecho, sino que
incorpora la memoria histórica, es decir la perspectiva de las víctimas de la opresión y de las
violaciones de los derechos humanos en el pasado. Esta iniciativa para tener éxito no puede
excluir el punto de vista de los indígenas, de los africanos, de los judíos, de las mujeres, de los
trabajadores, de los socialistas y muchos otros grupos discriminados históricamente.
Desgraciadamente, una lectura meramente liberal y pro-capitalista de los derechos
humanos no sirve de mucho en la mayoría de los casos; es más, parece ser parte del problema
más que la solución. En otras palabras, la lectura de los derechos humanos como una extensión
teórica de la idea de los derechos individuales de la persona en un estado liberal --aunque se
defina como democrático-- ignora la práctica legal real de tal filosofía. El récord histórico es
44
claro y abrumador; la existencia de una DUDH no significa en la práctica la implementación de
esos derechos en las sociedades liberales y democráticas occidentales. Igualmente como en
cualquier construcción legal pre-moderna cualquiera que sea su contexto, existe la necesidad
adicional de un movimiento popular o social que reclame esos derechos y los convierta en
derechos positivos; es decir en un derecho proclamado e implementado. La historia de los
derechos civiles en los Estados Unidos es un excelente ejemplo de esta situación. En otras
palabras, los oprimidos en las sociedades liberales necesitan luchar por los derechos negados y
enfrentarse al estado para poder alcanzar la dignidad humana que se les niega. Esto incluye algo
tan simple y básico como la identidad, la representación en el parlamento y el derecho al voto; y
requiere preparación de activistas a todos los niveles, movilización social considerable, recursos
económicos significativos, muchos abogados competentes y comprometidos para forzar el
cambio de un status quo legal claramente discriminatorio. En resumen, es muy difícil cambiar
patrones sociales modernos y pre modernos que son injustos en países liberales. Existe la
discriminación de grupos minoritarios, religiosos, étnicos e incluso de grupos mayoritarios como
la mujer en estados liberales que asimismo se proclaman defensores de los derechos humanos.
La lucha contra estas injusticias muy presentes en el mundo moderno del respeto a la ley y en las
tradiciones políticas del liberalismo moderno son parte de la memoria histórica de la lucha en
defensa de los derechos humanos. Un ejemplo muy reciente sería la nueva ley europea que
criminaliza la inmigración ilegal; una ley claramente violatoria de la DUDH. En otras palabras,
la DUDH sin Rosa Parks –y el movimiento de los derechos civiles que se originó después-- con
Martin Luther King a la cabeza del mismo, quedaría tan vacía de significado en un sistema
liberal moderno y democrático como en uno pre-moderno, autoritario y tradicional. Es obvio,
que la DUDH no fue ni escrita ni concebida únicamente con la concepción liberal del derecho,
aunque se manifieste de esta manera muchas veces.
Además de la historia, la conceptualización de An-na’im y de las Filosofías de la
Liberación ayudan a la incorporación de ahimsa como un valor intercultural importarte para
crear una cultura universal en defensa de los derechos humanos. Primero debemos preguntarnos:
¿Es ahimsa o alguna manifestación de este principio un elemento esencial en todas o la mayoría
de las culturas? No puedo pensar en ninguna tradición cultural, moderna o antigua, que no
valore la “no violencia” como una forma positiva y fundamental de las relaciones humanas al
menos dentro de su propia comunidad y muchas veces también con las demás. Es un hecho
45
básico importante que la mayoría de la gente valora más las normas de comportamiento cuando
éstas vienen de su propia comunidad y están sancionadas y apoyadas en su propia tradición
cultural. Por lo tanto, el establecimiento de un respeto a los derechos humanos puede mejorarse
a través de la implementación de una ética ahimsa que fortalece la legitimidad cultural de esos
valores 55.
Segundo, la diversidad cultural es muy extensa en el mundo contemporáneo, puede
argumentarse y con razón, que los derechos humanos deben fundamentarse en el menor común
denominador entre todas las culturas existentes. Pienso, que ahimsa es el denominador común
implícito o explícito de cualquier interacción humana. Es más, tiene una base ética de expansión
en calidad no sólo individual sino colectiva, permitiendo la inclusión del mayor margen posible
de seres humanos dentro y fuera de una cultura 56.
Tercero, ahimsa favorece la tesis de legitimidad cultural que acepta la existencia de
varios niveles de respeto de los derechos humanos mientras busca ampliar su base dentro de los
diálogos internos de cada tradición cultural. Obviamente, predecir que ahimsa será fácilmente
aceptado en las culturas del este e indígenas parece lógico, mientras que judíos, cristianos y
musulmanes y otras poblaciones de la “modernidad” tendrán más dificultades en terminar con la
glorificación de la violencia como mal necesario ya sea desde el punto de vista religioso,
nacionalista o revolucionario como medio para resolver los conflictos. Sin embargo, ahimsa, que
puede fácilmente traducirse a un diálogo en la tolerancia, es quizás el mejor instrumento para
encontrar el lenguaje y la lógica común que resuelva estos conflictos.
Ahimsa significa una serie de actitudes humanas que se enmarcan desde el diálogo
positivo con los demás, a negar el uso de la violencia en momentos de conflicto y usar formas de
resistencia pacífica contra la injusticia. ¿Cuál es el momento en el cual cada cultura decide
respetar la vida? ¿Es ahimsa el denominador común o valor universal del pueblo global?
¿Tienen los cristianos, judíos, musulmanes, hindúes, budistas, ateos algo en común en que
puedan estar de acuerdo en su valoración particular de ahimsa? ¿Es ahimsa para ellos el fin o el
medio para alcanzar la justicia?
Ahimsa (non-violencia) es --para Gandhi-- la ley básica del ser humano. Es por eso que
puede usarse como un principio efectivo de acción humana, ya que está de acuerdo con lo más
55
56
An-Na’im, “Toward a Cross-Cultural Approach,” 20.
Ibíd., 21.
46
profundo de la naturaleza humana y se corresponde con nuestro deseo innato de paz, justicia,
orden, libertad y dignidad personal. La “no violencia” cura y restaura la naturaleza humana,
mientras construye un orden social justo. Ahimsa no es una forma de adquirir el poder, es el
estándar de las relaciones humanas. Es una forma de transformar la sociedad y las relaciones
humanas, incluyendo las relaciones de poder, efectuado de una forma libre sin forzamientos
entre todos, porque todos lo reconocemos como un derecho.
Como un simple ejercicio voy a remplazar en la definición Gandhi de la palabra ahimsa
por la de DUDH para ilustrar el paralelismo de ambos conceptos.
La DUDH es la ley básica del ser humano. Es por eso que puede usarse como un
principio efectivo de acción humana, ya que está de acuerdo con lo más profundo de la
naturaleza humana y se corresponde con nuestro deseo innato de paz, justicia, orden, libertad y
dignidad personal. La DHDH cura y restaura la naturaleza humana, mientras construye un
orden social justo. La DUDH no es una forma de adquirir el poder, es el estándar de las
relaciones humanas. Es una forma de transformar la sociedad y las relaciones, incluyendo el
poder, efectuado de una forma libre sin forzamientos entre todos, porque todos la reconocemos
como un derecho.
Naturalmente, como ahimsa es parte de la naturaleza humana misma—como Gandhi
explica-- “puede ser aprendida por todos sin distinción.” ¿Es la “no violencia” parte de la
naturaleza humana? No sé, a priori pareciera que la violencia sí es parte de la naturaleza
humana; somos un animal que mata no sólo por comida. Somos la única especie que mata
frecuentemente y a veces sistemáticamente a miembros de su propia especie.
Parece sin
embargo que culturalmente primero se nos enseña los valores de la “no violencia;” y que después
-- también se nos socializa—en el uso de algunas maneras de usar la violencia. Si vemos la vida
diaria en todas las culturas la forma preferida de interacción humana es ahimsa; que es la norma
saludable de relacionarse. Es prácticamente la cultura de la buena convivencia y de respeto; que
aprendemos de niño como aprendemos las normas básicas de higiene y salud. Aprendemos estas
normas de convivencia en la familia, en la comunidad, en la tribu, y por extensión en la nación.
Ahimsa se mantiene como norma correcta en tiempos de paz, prosperidad, tolerancia y felicidad;
que debe ser utilizada con visitantes y extranjeros también.
Esta actitud positiva de las
relaciones humanas es la base sin duda del desarrollo de los sistemas políticos democráticos
donde el diálogo de una forma u otra es la manera de resolver conflictos y progresar socialmente.
Es interesante destacar que “himsa” o el uso de la violencia es rechazado y se presenta como “la
47
excepción” de la regla. Normalmente el uso de la violencia no es enseñado a todos por igual y
hay una diversidad cultural inmensa de cómo y cuándo se usa selectivamente en cada cultura.
¿Por qué existe tal variedad en el uso y enseñanza de la violencia en las culturas? ¿Por
qué varía tanto su uso, cuando es respuesta a conflictos internos o externos? En contraste con
ahimsa, “himsa” es un concepto bien particular y específico de cada cultura en particular. La
violencia se aplica según la situación y normalmente varia cuando los conflictos son internos o
externos. Las respuestas pueden ser radicalmente diferentes en sus formas y contenidos. Tan
pronto como el conflicto emerge, el uso de la violencia parece ser la respuesta más común al
problema.
Como consecuencia, parece producirse una variedad intercultural de respuestas
violentas que varían del abuso verbal a las peores formas de tortura y muerte.
Muy
frecuentemente existe un código de restricciones físicas al uso de la violencia que se convierte en
práctica común en casi todos los grupos. Aquí hay disparidad de restricciones de estatus, género
y edad por ejemplo. En cualquier caso, las culturas que usan la violencia siempre la consideran
como “el último recurso” y su uso debe ser restringido y controlado social y políticamente. Esto
es porque se reconoce que el uso de la violencia es objetivamente “malo” y/o al menos
“peligroso” y que por lo tanto debería utilizarse bajo estricto control cultural y político. Aparece
entonces todo un subsistema de barreras culturales que establece los métodos y los límites de la
violencia que se aplican a cada problema.
Históricamente, han existido reglas o leyes
interculturales de guerra y de métodos de guerra; que fueron creados para evitar brotes de
violencia extrema. La propia Convención de Ginebra es un ejemplo de un intento por controlar y
limitar los niveles de matanza en la guerra moderna. A nivel interno, los códigos penales, las
leyes, los jueces y las policías --con todos sus sistemas controladores—fueron creados para
determinar los niveles de violencia que son aceptables en cada ocasión.
Pocas culturas han tratado de aplicar ahimsa o “no violencia” a cualquier forma de
conflicto. Los indígenas Canela de la selva del Brasil usan el aislamiento y la exclusión social
como la máxima forma de castigo social. Evitan el uso de la violencia para resolver sus
conflictos. Para ellos, el asilamiento y la exclusión social parecen funcionar de forma efectiva y
las negociaciones entre miembros de la tribu tienen siempre el mismo objetivo, alcanzar la paz
social. Las negociaciones no pueden detenerse hasta que se llegue a un acuerdo de paz; ya que el
objetivo no es la justicia en abstracto sino el acuerdo concreto entre las partes en conflicto. Para
muchos cristianos, la mayoría de los hindúes y todos los budistas el uso de la violencia no es
48
aceptable en tiempos de conflicto. Para el Islam, el respeto a la vida es sagrado y la violencia
contra otro musulmán no es justificable. Todos ellos argumentan que la violencia no debe ser
utilizada para resolver problemas ni conflictos dentro o fuera del grupo; y para ello aducen una
serie de razones que son espirituales, pragmáticas e incluso razones simples de sentido común.
El chárter de la ONU, como las leyes de los indios Canela de Brasil, considera cualquier uso de
las armas ilegal, ya que antes de usarlas deben agotarse “todos” los métodos de resolución
pacífica del conflicto. Esta regla fundacional es raramente respetada en las decisiones del
Consejo de Seguridad de la ONU.
Existe una lógica simple entre la DUDH y ahimsa. De lo contrario las contradicciones se
multiplican –habría que crear un código o apéndice de cómo y cuanta violencia se aplica en
defensa de los derechos humanos. Desde la perspectiva de la defensa de los derechos humanos
el mejor ejemplo contemporáneo fue preparado y ejecutado por el propio Gandhi en sus
campañas de no colaboración con el Imperio Británico (conflicto externo) y en la solución de los
conflictos religiosos entre musulmanes y hindúes (conflicto interno) en la India de su tiempo.
Gandhi fue exitoso en el primero e indicó la posible solución del segundo. Esto no ocurrió sin
años de sufrimiento y sacrificios, a todos los niveles. Gandhi condujo una guerra de liberación
alcanzando victorias inimaginables y resultados extraordinarios. Incluso la ausencia de violencia
de su parte, preparó el camino de las presentes excelentes relaciones entre India y Gran Bretaña.
Los británicos salieron caminando de la India y ahora cuando la visitan son invitados especiales
en el país. Igualmente, Martin Luther King Jr. rehusó el uso de la violencia para derrotar la
“supremacía” y el “horror” del Ku Klux Klan (KKK), apoyado institucionalmente desde el
aparato del estado en los EE UU. King y la comunidad afro-norteamericana fue sesgando, no sin
terrible sufrimiento, el suelo moral de una mayoría racista enfrentada a su propia brutalidad,
indignidad e injusticia. King hizo con el racismo lo que Gandhi hizo con el imperialismo, redujo
toda una cultura de la violencia de las mayorías (racista e imperialista) a una “minoría” sicópata,
necesitada de ayuda psicológica y finalmente objeto de compasión. La mayoría de los afronorteamericanos reciben en sus casas a sus compatriotas blancos con una mente abierta y aceptan
a los descendientes de aquellos que esclavizaron y torturaron a sus ancestros por décadas. ¿Al
igual que en el caso británico en la India qué solución violenta podría haber conseguido
semejante transformación y resultado social y psicológico?
49
La violencia consigue soluciones diferentes, a veces justas sin duda. Desgraciadamente,
Gandhi murió en su campaña contra la violencia religiosa en la India y tal como él predijo, la
solución no era la división entre dos estados ahora “enemigos:” India y Pakistán. Este último se
convirtió eventualmente en Pakistán y Bangladesh. Cada país tiene los mismos problemas
internos y externos que tenían antes de conformarse --todos tienen minorías religiosas-- y desde
entonces son víctimas de una carrera armamentista que incluye la construcción, prueba y
posesión de armas nucleares apuntándose mutuamente. Hindús, musulmanes y sikhs, antiguos
aliados de las luchas no violentas contra el formidable Imperio Británico, rehusaron dar el mismo
tratamiento a sus propios hermanos y hermanas. Ambos casos son ejemplos de lo que significa
un acuerdo de paz real y uno de paz puramente formal.
Otros casos de no violencia han sido empleados por las naciones. Por ejemplo, la lucha
del Tíbet contra la ocupación militar china sigue por lo general los lineamientos de Gandhi y
King sin resultados positivos hasta el momento. No se ha alcanzado una solución final y a pesar
de los 50 años de ocupación militar china --la mayoría del mundo reconoce la legitimidad del
reclamo tibetano-- que con extraordinario sufrimiento, ha resistido la ocupación política,
económica, cultural y militar sin usar la violencia. China tarde o temprano tendrá que dialogar
con el Dalai Lama --que ya no pide independencia sino ciertos niveles de autonomía política
para su país. Otro ejemplo conocido, más exitoso, fue Costa Rica en América Central que
eliminó su ejército en 1948 para asegurar su democracia interna y evitar la continua intervención
interna de los militares en la vida política. Costa Rica permaneció una nación pacífica durante la
crisis centroamericana que llevó a la mayoría de los países del área a una guerra brutal durante la
de los años 70 y 80. Es más, el presidente de Costa Rica, Oscar Arias, sirvió como instrumento
de paz para detener en parte los conflictos en la región particularmente en la hermana república
de Nicaragua. La contribución a la paz del Plan Arias, finalmente dio al Presidente tico el honor
de recibir el Premio Nobel de la Paz. Se puede estar de acuerdo o no con las ideas del Presidente
Arias, pero no cabe duda de que el hecho de que Costa Rica no tenía ni tiene un ejército en
activo ayudó a detener el conflicto y facilitar alternativas posibles.
En resumen, la cultura es la fuente original de la visión del mundo que nos rodea; provee
a la persona y a la comunidad con los valores e intereses para conseguir los objetivos en la vida,
así como los medios legítimos para alcanzarlos 57. En una cultura de los derechos humanos, la
57
Ibíd., 23
50
DUDH/ahimsa provee los valores de una visión particular de nuestro mundo y nos da los medios
legítimos para obtener esos objetivos de vida. Para que la cultura de los derechos humanos sea
efectiva, sus valores han de ser el marco de nuestra visión del mundo; y además servirnos para
interpretar y reaccionar ante el mundo que se nos manifiesta 58. Para tener éxito tiene que tener
ser fruto de un diálogo intercultural tal como lo señala Fornet-Betancourt y tener los elementos
gandhianos mencionados: un marco legal con referencia histórica específica, un ethos –ahimsa—
o un procedimiento de acción y un efecto de inclusión común e intercultural de liberación ante la
injusticia.
1.1. Henry Shue: el modelo político de estado para la defensa de los derechos humanos
básicos de seguridad y subsistencia
Si la conexión entre la DUDH y ahimsa es importante, también lo es establecer una
jerarquía de derechos humanos que tenga sentido. La teoría de los derechos básicos de Henry
Shue ofrece a mí entender una de las mejores respuestas a este problema. Obviamente, los
diferentes grupos oprimidos tienen diferentes prioridades en la defensa de los derechos humanos.
Esto crea contradicciones y algunas veces rivalidades acerca de cuál derecho es prioritario o
fundamental y cuál lo es menos.
Estas contradicciones estratégicas son importantes y los
activistas defensores de los derechos humanos necesitan informarse y conocer las prioridades y
necesidades de cada grupo.
Para las personas con diversidad funcional –mal llamados
“discapacitados” 59-- el establecimiento de una vida independiente y la eliminación de barreras
arquitectónicas son reivindicaciones que no pueden posponerse si el movimiento debe avanzar y
progresar. Para los trabajadores emigrantes las mejoras de sus condiciones de trabajo y la
legalización de su estatus es prioritaria; para los refugiados la definición de su estatus definitivo
lo mismo; para los gais y las lesbianas el reconocimiento de sus derechos civiles básicos --que
les son negados-- son también fundamentales y prioritarios, etc.
58
Por lo tanto, no existen
Ibíd.
No tiene sentido llamar “discapacitado” a una persona que de forma extraordinaria precisamente ha superado la
deficiencia funcional que tiene. El término de persona con diversidad funcional es mucho más acertado para definir
la realidad; y no discrimina por definición. No define a las personas por su hándicap. Los Juegos Para Olímpicos
no se llaman Juegos Olímpicos “Discapacitados.” Para información sobre la terminología correcta en materia de
los derechos humanos de personas con diversidad funcional ver, www.vidaindependiente.org.
59
51
solamente luchas por los derechos humanos en un contexto cultural particular, sino que existen
derechos básicos fundamentales dentro de cada grupo que ha sido y es discriminado dentro de su
propia dinámica política interna. La agenda se expande y sus necesidades varían según las
propias circunstancias locales; además existen las necesidades globales en un contexto cultural
general. Algunos países obviamente han avanzado más en algunas áreas que en otras y en esas
mismas áreas sirven de motivador para avanzar en la causa global. Es necesario conocer que
este caos de necesidades insatisfechas existen conexiones importantes entre todas estas luchas
por los derechos humanos que muchas veces intuimos pero desconocemos. ¿Cómo podemos
hacer un mapa de estas conexiones y establecer prioridades que tengan sentido?
Para Shue todo derecho por definición limita la libertad. Por ejemplo, el derecho de una
persona a la alimentación limita la libertad de acción de personas con obligaciones correlativas.
Pero es que cualquier derecho siempre impactará la libertad de otras personas. Está en la
naturaleza misma del derecho el limitar la libertad de otros, imponiendo obligaciones sobre los
demás. Los derechos de unos son fundamentalmente obligaciones impuestas a los demás. La
pregunta esencial de lo que significa tener un derecho es esencialmente analizar la justificación
legítima del mismo para poner estas obligaciones sobre los demás.
Por ejemplo, tu derecho a la integridad física obviamente impone límites a mi libertad. No
puedo esclavizarte, ni violarte, ni golpearte, etc. No vemos estas limitaciones como graves
porque no consideramos que el asalto, la violación y otros actos violentos sean acciones
moralmente aceptables. Pero no cabe duda que la razón por la que son moralmente
inaceptables es que violan el derecho a la integridad física de la persona. Nadie tiene derecho a
la libertad de asaltar a quien desee. Esta libertad está prohibida. Es una libertad perdida 60.
Los derechos humanos también restringen la libertad humana y no deben considerarse ni
como medios ni como fines en sí mismos. Algunos estados usan los derechos humanos como un
medio político y escogen qué derechos respetan o cuales no, según sus propios fines particulares.
Muchos estados defienden los derechos políticos sobre los económicos o viceversa; ambos
violan la integridad y autenticidad de los derechos humanos. Para Shue la división de los
derechos en económicos y políticos o positivos y negativos es bastante artificial. Es por eso que
propone una jerarquización diferente. “El objetivo fundamental para reconocer un derecho como
básico es prevenir o eliminar, en lo posible, la vulnerabilidad que deja a unas personas a la
merced de otras. Por lo tanto crear garantias sociales que reconozcan los derechos de seguridad
60
Shue, The Center Magazine, 12.
52
personal y subsistencia son fundamentales para alcanzar este objetivo 61”.
Tampoco,
los
derechos humanos deben verse como fines en sí mismos ya que eso permitiría posponerlos
fácilmente debido a las circunstancias del momento. Los fines u objetivos políticos siempre
pueden ser temporalmente suspendidos o diferidos en el tiempo y esta es la forma como se
justifica la violación de los derechos frecuentemente, justamente cuando más se necesitan 62. Los
derechos humanos son básicamente restricciones sobre los medios y los fines políticos de los
estados. Es más implementar los derechos humanos requiere crear instituciones sociales que sean
respuesta inmediata y responsable para proteger --contra las amenazas existentes-- a aquellos que
son más vulnerables. Obviamente, crear instituciones y prácticas de este tipo requiere tiempo y
trabajo --que prácticamente nunca termina-- ya que existe el gradualismo que las propias
prioridades de la vida real impone 63.
Para Shue la estructura de su argumento para determinar que un derecho es básico o no es
la siguiente:
1. Todos tienen derecho a algo.
2. Ciertas cosas son necesarias previamente para el disfrute ese algo como derecho.
3. Por lo tanto, todos tienen derecho a esas cosas previas que son necesarias para el
disfrute de ese algo como derecho.
Nada sería necesario para el disfrute de ese derecho, a no ser que ese algo sea necesario
para el disfrute de todos los demás derechos; es precisamente esta la razón por la que este
derecho es básico y no otro. Los derechos básicos son la demanda mínima razonable sobre el
resto de la humanidad para tener una existencia digna. Por ejemplo, la integridad física no sólo es
deseable en sí misma, que lo es; sino también es deseable para el disfrute de todos los demás
derechos. Es más no existe ningún derecho que pueda ser disfrutado sino se garantiza el derecho
a la integridad física de la persona 64.
Cada sociedad debe entonces jerarquizar según sus propias necesidades y defender
primero los derechos humanos de los más vulnerables. Existen aspectos teóricos importantes
para ordenar los derechos y Henry Shue responde ofreciendo una definición de “derechos
básicos” que es muy útil para esclarecer el tema. Para Shue hay una clara y definida prioridad de
61
Shue, Basic Rights, 30.
La prisión estadounidense de Guantánamo suspende “temporalmente” la defensa de los derechos humanos de los
prisioneros.
63
Shue, The Center Magazine, 15.
64
Shue, Basic Rights, 31.
62
53
derechos que es paralela a los problemas prácticos de la vida diaria y que define las prioridades
políticas desde el punto de vista de los derechos humanos. Él piensa que el derecho a la
seguridad física y a la subsistencia como en la primera línea necesaria de acción que facilita e
integra la segunda que son los derechos a la participacion social y de autonomía o libertad de
movimiento. Estos derechos básicos son el sosten que facilitan el cumplimiento de todos los
demás.
Un derecho moral provee (1) una base racional para una demanda justificada (2) para que
el disfrute de su substancia sea (3) socialmente garantizada contra cualquier amenaza presente.
Como este concepto del derecho es algo complicado, vamos a dar una breve explicación a sus
partes. El significado general de la estructura moral del derecho será mejor explicarlo con
ejemplos concretos, que rápidamente utilizaremos para añadir claridad 65.
Coincidiendo con el punto de vista liberal, Shue argumenta que los derechos morales
están basados en una serie de razones buenas y racionales por las que se justifica la demanda
hecha.
Este derecho moral debe garantizarse socialmente ante cualquier amenaza que se
presente; y es aquí donde la conceptualización de derechos humanos emerge. Mientras los
liberales piensan que la garantía para salvaguardar estos derechos debe ser simplemente legal, es
decir el recurso a los tribunales; Shue reclama garantías sociales adicionales que van más allá de
lo legal. ¿Qué significan garantías sociales adicionales?
Para Shue, “el cumplimiento de ambos los derechos morales básicos y no básicos
consiste en efectivas, aunque no infalibles, medidas o garantías sociales que protegen su
cumplimiento contra su amenaza. Es decir garantías que protegen contra las amenazas a la
seguridad o integridad físicas de la persona y contra la subsistencia de las mismas” 66.
Un derecho es algo que puede ser demandando o reclamado sin ningún tipo de
vergüenza. Cuando aquello a lo que se tiene derecho no se tiene, la reacción apropiada es
aquella de indignación; y cuando se obtiene no debe sentirse “ni agradecimiento ni gratitud” sino
sentir la satisfacción natural de dar o recibir lo que a cada uno le corresponde. Un mundo que
reclama derechos es uno en que cada persona, como reclamante real o en potencia, es un sujeto
dignificado de respeto, tanto en su estima propia como en la de los demás. Ni el amor, ni la
65
“…todos los derechos básicos tienen estos tres elementos… Muchos otros derechos tienen obviamente esta misma
estructura. Por lo tanto justifico la más amplia demanda y no meramente la más específica de las demandas.”
Henry Shue, “Security and Subsistence,” in Morton E. Winston, The Philosophy of Human Rights. (Belmont, CA:
Wadsworth Publishing Co, 1995), 153. También ver, Kesselring, Etica, Politica e Desenvolvimiento, 67.
66
Shue, “Security and Subsistence,” 167.
54
compasión, ni la obediencia a la autoridad o a las obligaciones pueden servir de substituto al
valor propio que el derecho concede a la persona 67.
Es la moralidad y racionalidad, socialmente garantizada en la conceptualización de los
derechos lo que buscamos en un mundo que reclama sus derechos humanos. Obviamente, este
derecho a la racionalidad y a las garantías sociales de nuestras necesidades tiene que ser
entendido, proclamado e implementado como tal. Es decir que se necesitan hacer arreglos –
sociales y políticos-- para que las personas disfruten sus derechos. Aquí las políticas de “acción
afirmativa” en EE UU son un ejemplo ilustrativo interesante; a veces no es suficiente dejar de
violar los derechos de las minorías afectadas –en este caso afro-estadounidenses, latinos e
indígenas-- removiendo las leyes y ordenanzas discriminatorias en los restaurantes, trabajos,
autobuses, parques,... La sociedad necesita crear mecanismos y provisiones que ayuden a los
discriminados a disfrutar sus derechos en plenitud. La “acción afirmativa” no termina hasta que
la reacción colectiva contra el racismo sea aquella que produce indignación y rechazo total.
Acción afirmativa –no es simplemente una medida legal temporal para incluir a todos los grupos
sociales anteriormente discriminados en el campo laboral y escolar—sino un proceso
educacional que garantiza la implementación social de los derechos en una sociedad
determinada. Este proceso empieza con aspectos legales pero realmente no termina hasta que
esos derechos son asimilados moral y racionalmente en la comunidad para que sean plenamente
disfrutados por todos. ¿Dónde están los límites de la acción afirmativa? Los límites están
marcados por su necesidad de eliminar la discriminación. La necesidad de reparaciones morales
y/o económicas para compensar por un pasado de esclavitud y tortura es positiva si sirve para
integrar a la sociedad en su plenitud, eliminando de raíz la dicotomía racista
privilegio/discriminación existente en esa comunidad. Es la inversión social que garantiza los
derechos humanos a nivel de igualdad y justicia entre todos y consigue el objetivo de una
verdadera integración social y nacional.
Para
Shue, a nivel global existen los derechos humanos básicos.
Estos derechos
defienden a aquellos que no pueden defenderse por si mismos contra las más devastadoras
amenazas de vida; e incluyen el mínimo de la seguridad personal y de acceso a los medios de
subsistencia. Los derechos básicos son una barrera contra las fuerzas políticas y económicas que
de otra manera sería imposible resistir. Son las garantías sociales contra la privación de al menos
67
Ibid. 153.
55
lo más básico de las necesidades humanas que definen su dignidad de ser. Los derechos básicos
son un intento de dar a los necesitados de un poder de veto sobre fuerzas que de otra manera les
dañarían de más. Los derechos básicos son la moral del mínimo posible, trazan la línea que
nadie puede ni debe pasar moralmente, un mínimo razonable de demandas de las que todos los
humanos somos responsables 68.
Obviamente el estándar sólo puede ofrecer un nivel de garantía de seguridad y
subsistencia que responda al estándar de las propias amenazas presentes. Para Shue, tenemos un
derecho básico de integridad y seguridad física, significando que no podemos ser violentados
físicamente. No hay derecho que valga sino disfrutamos de nuestra integridad física, a salvo de
cualquier forma de violencia. Es por lo tanto una condición fundamental para poder ejercer
nuestros derechos. El enfoque de Shue en la integridad física como primer derecho básico
ratifica la importancia de ahimsa como principio ético básico de la DUDH 69.
Además, el segundo derecho básico es el acceso a los medios de subsistencia que
complementa al primero; añade una dimensión de seguridad económica mínima que tiene
aspectos ecológicos importantes. Para Shue el derecho a la subsistencia significa no sólo el
derecho a un mínimo de comida, sino el derecho a respirar aire limpio, a beber agua potable, a un
mínimo de educación, de vivienda, de ropa y de salud que garanticen un nivel mínimo de
subsistencia. Este derecho a la subsistencia está en el corazón de la DUDH como en la obsesión
de la erradicación de la pobreza que el propio Gandhi definió como “la peor forma de violencia.”
Shue hace una distinción importante entre el derecho a la subsistencia y otros derechos
económicos y políticos de la DUDH. 70 Es interesante porque Shue abre la puerta a los derechos
del medio ambiente al nivel más básico y profundo al reconocer la necesidad del aire y el agua
limpia como necesidades básicas de subsistencia humana; sin las cuales, los derechos humanos
se diluyen y desaparecen rápidamente.
68
Ibíd., 156. En este sentido, la Revolución Bolivariana de Venezuela ha aceptado este desafío extraordinario e
innovador. La Constitución de 1999 responsabiliza al estado de proveer a todos los venezolanos de sus derechos
básicos mínimos de seguridad y subsistencia. Derechos básicos proclamados pero denegados de hecho por el
régimen democrático liberal anterior a una mayoría aproximada del 80% de la población.
69
Para Shue, toda sociedad y/o estado que no puede garantizar la integridad física de la mujer o/y los niños --dentro
y fuera del hogar-- tiene un problema fundamental que viola los derechos humanos básicos de seguridad personal.
70
Para más información de los derechos de subsistencia ver, Ibíd., 159-163. “Una observación final acerca de los
derechos de subsistencia es valiosa aquí: los derechos a la subsistencia no son originales ni nuevos ni son una idea
inovativa. Si los derechos de subsistencia son “raros” es porque en los sistemas liberales occidentales son ciegos
cuando se trata de resolver problemas económicos de necesidades graves y fundamentales. Los derechos de
subsistencia son frecuentes y comunes en sociedades tradicionales que son consideradas por la ‘modernidad’ como
comunidades ‘atrasadas’ o primitivas.” Ibid. 162.
56
Si aceptamos la definición de Shue de derechos básicos y su propuesta de protección a la
integridad física de la persona y su derecho al acceso a los mínimos medios de subsistencia como
válida, entonces la abolición de la violencia física –incluyendo el hambre y la guerra-- en el
mundo es la prioridad básica a nivel global para cualquier cultura que afirme defender los
derechos humanos. Esto requiere asimismo una cultura que respete la naturaleza ya que el aire y
agua limpia son parte de fundamental de la subsistencia de todo ser humano. En un análisis del
activismo existente de los diferentes grupos de defensa de los derechos humanos es fácilmente
observarle que se trabaja en ambas direcciones. Un número significativo de grupos luchan
contra la violencia física ya sea la pena de muerte, la guerra, la violencia contra la mujer, los
niños, las minorías religiosas, los animales,… Otros grupos, incluyendo aquellos que luchan por
el medio ambiente, reclaman comida, luchan contra las enfermedades, la polución ambiental,
buscan medicinas básicas y otros elementos básicos que dan acceso a los medios mínimos de
subsistencia. Es importante que la existencia de organizaciones no gubernamentales (ONG) no
exima de responsabilidad al estado-nación. Podríamos argumentar que las ONG existen porque
el estado no está haciendo su trabajo en esta materia. Por lo tanto la definición de Shue es
teóricamente sólida --y también práctica-- ya que nos ayuda a jerarquizar las acciones dentro de
la lucha global y particular por los derechos humanos en el mundo y poder evaluar políticas
críticamente. Además, proclama aquellas prioridades fundamentales desde el punto de vista
concreto y puntual necesario para cada país según sus necesidades. Utilizaré el ejemplo de la V
República de Venezuela –el modelo que promueve la Revolución Bolivariana-- como un ejemplo
a gran escala de la aplicación de la teoría de los derechos básicos de Henry Shue a todo un país
en la creación de una cultura de los derechos humanos y que supera las planteadas por el
liberalismo.
57
Shue: en los Derechos
Básicos el estado es
arbitro y actor garante de
esos derechos
Negativos: aquellos que
exigen el deber de no
hacer algo
Derecho de defensa: nadie
puede atacar la integridad
física de una persona,
requiere medidas positivas
El estado tiene que
proteger contra los
transgresores: requiere
medidas positivas
Positivos: presupone la
existencia de instituciones
determinadas que facilitan
el derecho; derecho a la
educación, democracia,…
Los derechos son para
todos por igual y debe
compensar a los que son
más débiles
Los derechos básicos (negativos y
positivos ) son universales
58
Capítulo II.
Desarrollo del derecho básico a la seguridad personal en Venezuela
El Estado garantizará a toda persona, conforme al principio de progresividad y sin
discriminación alguna, el goce y ejercicio irrenunciable, indivisible e interdependiente de los
derechos humanos. Su respeto y garantía son obligatorios para los órganos del Poder Público
de conformidad con la Constitución, los tratados sobre derechos humanos suscritos y ratificados
por la República y las leyes que se desarrollen”. (Art.19 Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela)
Siguiendo los principios de derechos básicos establecidos por Henry Shue y nuestra
invocación de ahimsa no nos queda otra que destacar las diferencias entre la IV y la V República
en Venezuela en dos aspectos fundamentales.
Se trata de buscar los derechos básicos de
identidad, seguridad y los de subsistencia según se establecen en la Venezuela de hoy. Esto
ayudará sin duda a desmitificar malentendidos y falsedades que existen en el mundo académico y
mediático sobre las llamadas democracias representativas modernas y en el caso venezolano.
Para ello, analizamos los derechos humanos básicos de las leyes, instituciones y prácticas
políticas de la Revolución Bolivariana. Siguiendo la línea propuesta por Gandhi analizaremos
conjuntamente los marcos legales, las prácticas políticas y las referencias históricas comparando
ambas experiencias políticas de la IV y la V República. Por ejemplo, es importante destacar la
novedosa renuncia a la violencia, como vía para resolver los problemas políticos y económicos
del país, tal como lo especifica la Constitución Bolivariana. En su título primero donde define
“principios fundamentales,” y establece la premisa de la prominencia de los derechos humanos,
la ética y el pluralismo político como su filosofía básica o primaria.
Venezuela se constituye en un Estado democrático y social de Derecho y de Justicia, que
propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico y de su actuación, la vida, la
libertad, la justicia, la igualdad, la solidaridad, la democracia, la responsabilidad social y en
general, la preeminencia de los derechos humanos, la ética y el pluralismo político.” (Art.2
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela)
Al igual que la Constitución de los EE UU establece y da rango constitucional a los
tratados internacionales en su artículo VI.2, “todos los tratados así definidos (tratados
internacionales) forman parte de la ley suprema del estado” 71; la Constitución Bolivariana
71
En inglés: “This Constitution and the laws of the US which shall be made in pursuance thereof and all the treaties
made of which shall be made, under the authority of the US, shall be the supreme law of the land, and the judges in
59
claramente establece la supremacía de los derechos humanos, en el título III, “De los deberes,
derechos humanos y garantías,” y en particular su artículo 23.
Los tratados, pactos y convenciones relativos a derechos humanos, suscritos y
ratificados por Venezuela, tienen jerarquía constitucional y prevalecen en el orden interno, en la
medida en que contengan normas sobre su goce y ejercicio más favorables a las establecidas
por esta Constitución y la ley de la República, y son de aplicación inmediata y directa por los
tribunales y demás órganos del Poder Público. (Art. 23 Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela)
En materia de seguridad personal es importante señalar el importante cambio cualitativo
“no violento” que va de la formalidad legal a la práctica real. Por ejemplo, la Constitución
Bolivariana no sólo se adhiere a la DUDH sino que incluye los Principios de Núremberg en sus
artículos 45 y 46. Este es un compromiso innegable constitucional para la salvaguarda física del
pueblo venezolano --denunciando y renunciando a la tradición histórica violenta abierta y
secreta existente en la IV República—y que rechaza abiertamente el modelo de “seguridad
nacional” vigente en el pasado histórico reciente. Además es un compromiso que se traslada -como veremos después-- a los textos legales de la Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas
Bolivarianas y la Ley de Policía Nacional para regular sus acciones y prácticas en los momentos
de mayor conflicto social y político.
Principio de Núremberg III:
Constitución Bolivariana de la República de
Venezuela
El hecho que una persona cometa un
acto que constituya un crimen bajo
la ley internacional, ya sea Jefe de
Estado u oficial del gobierno no lo
exime de responsabilidad bajo la ley
internacional.
Art. 45:
Se prohíbe a la autoridad pública, sea civil o militar,
aun en estado de emergencia, excepción o
restricción de garantías, practicar, permitir o tolerar
la desaparición forzada de personas. El funcionario
o funcionaria que reciba orden o instrucción para
practicarla, tiene obligación de no obedecerla y
denunciarla a las autoridades competentes. Los
autores o autoras intelectuales y materiales,
cómplices y encubridores o encubridoras del delito
de la desaparición forzada de personas, así como la
tentativa de comisión del mismo, serán sancionados
de conformidad con la ley.
every State shall be bound thereby, anything in the Constitution or laws of any State to the contrary
notwithstanding.” (art.VI.2, de la Constitución de los EE UU).
60
(The fact that a person who
committed an act which constitutes a
crime under international law acted
as Head of State or responsible
government official does not relieve
him from responsibility under
international law).
Principio de Núremberg IV:
El hecho que una persona actúe bajo
órdenes de su gobierno o de un
superior
no
le
exime
de
responsabilidad
bajo
la
ley
internacional siempre y cuando exista
la posibilidad de una decisión moral
por parte del sujeto
(The fact that a person acted pursuant
to order of his government or of a
superior does not relieve him from
responsibility under international law
provided a moral choice was in fact
possible to him.)
Art. 46: Toda persona tiene derecho a que se le
respete su integridad física, psíquica y moral, en
consecuencia:
1. Ninguna persona puede ser sometida a
penas, torturas o tratados crueles, inhumanos
o degradantes practicando o tolerado por
parte de agentes de Estado, tiene derecho a la
rehabilitación.
2. Toda persona privada de libertad será tratada
con el respeto debido a la dignidad inherente
al ser humano.
3. Ninguna persona será sometida sin su libre
consentimiento a experimentos científicos, o
a exámenes médicos de laboratorio, excepto
cuando se encontrare en peligro su vida o
por otras circunstancias que determine la ley.
4. Todo funcionario público o funcionaria
pública que, en razón de su cargo, infiera
maltratos o sufrimientos físicos o mentales a
cualquier persona, o que instigue o tolere
este tipo de tratos, será sancionado o
sancionada de acuerdo con la ley.
Art.31 Toda persona tiene derecho, en los
términos establecidos por los tratados, pactos
y convenciones sobre derechos humanos
ratificados por la República, a dirigir
peticiones o quejas ante los órganos
internacionales creados para tales fines, con
el objeto de solicitar el amparo a sus
derechos humanos
El Estado adoptará, conforme a esta
Constitución y la ley, las decisiones
emanadas de los órganos internacionales
previstos en este artículo.
Es importante recordar que en la primera sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas
en 1946, los principios de Núremberg fueron adoptados por unanimidad, pero son raramente
aplicados y mucho menos adoptados legalmente. Estos principios fueron reformulados en 1950
61
por la Comisión de Ley Internacional de la ONU. Fueron adoptados para reforzar la defensa de
los derechos humanos de los militares en épocas de conflicto y guerra, con objeto de evitar
situaciones similares a las que ocurrieron en la Alemania nazi y que permitieron el genocidio del
Holocausto.
Al no aplicarse “de facto” durante la guerra fría decenas de miles de
latinoamericanos fueron y han sido torturados, asesinados o desaparecidos impunemente en
América Latina desde 1946. Los crímenes de estado fueron cometidos por militares, policías y
grupos paramilitares, que cumplían órdenes superiores, del poder ejecutivo, con el pretexto de
proteger la “seguridad nacional y hemisférica.”
2. El terrorismo de estado y la “ficción” democrática en la IV República
Se han hecho pocos estudios serios de cómo el estado usa la coerción y la violencia en
regímenes políticos que se auto-definen como democracias liberales. Nadie quiere estudiar el
tema porque afecta el discurso dominante y su estudio es un “suicidio” académico para cualquier
persona que quiera graduarse y enseñar en la universidad en Estados Unidos.
El uso del
encarcelamiento arbitrario y el más grave uso sistemático de la tortura --en la prisión
estadounidense de Guantánamo—que se redefinen como forma de interrogación extrema en la
actualidad-- no hace sino confirmar lo que ya sabíamos.
Estados que se autodefinen
democráticos también usan frecuentemente el terror y la violencia como arma y práctica política.
Ahora EE UU lo hace abiertamente y lo justifica como mal necesario para combatir el terrorismo
internacional.
El uso de la tortura como método de interrogación se justifica por ser una
“necesidad militar” para proteger la “seguridad nacional.” Sin embargo, existe la negativa
formal a reconocer la realidad, tal como John McCarmant explica. El investigador social se
frustra cuando busca información sobre el tema de la violencia y el terror considerado “tabú,” –
aunque cada vez menos-- en las democracias llamadas “liberales”.
Uno busca en vano a través de miles de artículos y libros escritos por politólogos,
sociólogos, economistas, antropólogos por referencias a los horribles y sangrientos hechos
cometidos por los gobiernos y por explicaciones de cómo y por qué se cometieron tales hechos.
Para muchos autores y estudiosos políticos, los gobiernos apenas existen; para el resto el
proceso de gobierno es siempre aséptico, limpio y justo. La única excepción a esta
generalización es la literatura que se refiere a los gobiernos totalitarios, donde claramente se
reconoce que los gobiernos usan el terror. Sin embargo estos escritos hacen del totalitarismo
62
una aberración, y por implicación presuponen que el terror gubernamental no existe en otras
formas de gobierno 72.
¿Es el uso del terror la diferencia entre un régimen democrático y uno totalitario? ¿O son
en cambio solamente los aspectos cualitativos y cuantitativos de niveles de intensidad y
frecuencia de terror que se aplican a la ciudadanía los que los diferencian? Obviamente, una
forma de analizar y definir este problema es precisamente estudiar el terrorismo de estado según
se aplica en los países “democráticos.” Por ejemplo, como se aplicaban en la llamada Venezuela
democrática de la IV República (1961-1999). Para ello, tenemos que distinguir siempre entre lo
que llamaríamos violación esporádica o fortuita de los derechos humanos y el uso sistemático
del terror para amedrentar a la población 73 o a un sector determinado de la misma.
Ted Robert Gurr califica "la violencia” de los regímenes como 'terrorista' cuando es de
tipo 'instrumental;' lo que significa que los efectos de la acción están dirigidos “no sólo a la
víctima sino que tienen como objetivo el control de una audiencia” 74. Previamente Eugene
Victor Walter en su libro Terror and Resistance, a study of Political Violence 75 introdujo varias
distinciones que tienen valor analítico en este respecto. Walter reconoce que el uso del terror por
el estado no es algo "exótico" o "extraordinario," sino algo muy corriente en todos los sistemas
políticos --que sin distinciones-- lo han usado en un momento u otro 76.
72
John F. McCarmant, "Governance without Blood: Social Science's Antiseptic View of Rule; or The Neglect of
Political Repression." En Michael Stohl y George A. López, The State As Terrorist. The Dynamics of
Governmental Violence and Repression. (Westport, Connecticut: Greenwood Press, 1984), 11. Es interesante el
uso de los términos políticos en este sentido, por ejemplo en Colombia se recalifican políticas de “seguridad
nacional” del estado con las medidas necesarias para preservar la “seguridad democrática”. Cuando el Presidente de
Colombia habla de “seguridad democrática” sabemos que habla de operaciones militares y policiales que se llevan a
cabo para acabar con el narcotráfico y la guerrilla colombiana. Asimismo, la “Escuela de las Américas” de Fort
Benning cambió su nombre en 2001 por otro mucho más apropiado: “Instituto de Cooperación para la Seguridad
Hemisférica.” Según la doctrina que se enseña en el Instituto, el golpe de estado a Salvador Allende en Chile (1973)
y la brutal dictadura del General Pinochet que siguió, fue necesaria, para proteger la seguridad nacional de Chile y la
hemisférica de los EE UU.
73
No soy ni mucho menos la primera persona en reconocer que existía el terrorismo de estado en la llamada
Venezuela "democrática," varios venezolanos prominentes, miembros del Congreso Nacional, sacerdotes católicos,
periodistas y activistas de derechos humanos habían denunciado el uso sistemático de la violencia terrorista por
parte del estado durante la IV República. Menciono en particular quizás al más conocido de todos en Venezuela, el
periodista José Vicente Rangel quien durante toda su trayectoria política desde los años 60 hasta el presente había
denunciado sistemáticamente innumerables casos de abusos y terrorismo de estado.
74
Ted Robert Gurr, "The Political Origins of State Violence and Terror: A Theoretical Analysis," en Michael Stohl
y George A. López, Government Violence and Repression, An Agenda for Research. (Nueva York: Greenwood
Press, 1986), 46.
75
Eugene Victor Walter, Terror and Resistance, a study of political violence with case studies of some primitive
African communities. (Nueva York: Oxford University Press, 1969)
76
Siguiendo las líneas de análisis de Walter, Noel O’ Sullivan dice que la justificación ideológica del terrorismo
moderno es parte de la doctrina de legitimación política. "La doctrina de la soberanía popular proclamada en la
63
Ni que decir tiene que el carácter y el sufrimiento que implica el terror “democrático”
tienen mucho en común con el que practican los regímenes autoritarios. Contraria a la imagen
que se proyecta o proyectaba tanto en el mundo académico como periodístico occidental. El
régimen "democrático" establecido en Venezuela en 1961 parece demostrar que no es ni mucho
menos la excepción de la regla 77. En 1979, Miles Wolpin en su artículo "State Terrorism and
Repression in the Third World; Parameters and Prospects" incluye a Venezuela entre los estados
que sistemáticamente usaban la violencia como recurso político, específicamente: tortura,
ejecuciones, desapariciones y brutalidad penal.
Wolpin también incluía a Venezuela entre
aquellos estados que usan la represión, la dominación militar y modelos económicos
desarrollistas 78.
La clasificación de Wolpin confirma los estudios más específicos hechos por
organizaciones de defensa de los Derechos Humanos internacionales y venezolanas tales como
American Watch, Amnistía Internacional y PROVEA en esta época 79. Muchos periodistas y
activistas venezolanos se hicieron famosos denunciando los casos de abusos y de las violaciones
a los derechos humanos durante los gobiernos de la IV República. Entre ellas, hay que destacar
los que denunciaban y que luego fueron líderes políticos del gobierno durante la V República
como José Vicente Rangel entre otros. Estas organizaciones e individuos conjuntamente con
otros reportes independientes internacionales presentan muchas pruebas, en testimonios de
Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, declara que el poder sólo es legítimo si es concedido
desde abajo por la gente. En las palabras de la Declaración, 'el principio de la soberanía reside en la nación: no
grupo o individuo, puede ejercer autoridad que no emane expresamente de la gente'. No es difícil ver como esta
doctrina, que supuestamente iba a liberar a las masas e inaugurar una época de armonía mundial, puede en su lugar
producir efectos opuestos a los esperados. Esto puede ser gracias a que el concepto nación puede ser definido de
muchas formas diferentes." Más en "Terrorism, Ideology and Democracy," en Noel O. Sullivan ed., Terrorism,
Ideology, and Revolution. (Boulder, Co: Westview Press, 1986), 8.
77
Sino todo lo contrario, ya que con el “National Security Act” o Ley de Seguridad Nacional (1947) se crea la CIA
(Servicio Nacional Civil) y se formaliza la ideología hemisférica “anti-comunista” y pro-corporativa que define los
intereses prioritarios de los EE UU para América Latina; confirmando la dominación ya histórica proclamada de la
Doctrina Monroe. Esto significa la integración de diferentes instituciones como La Escuela de las Américas (1946),
el TIAR, el Comando de Inteligencia Hemisférico, la OEA y otros organismos e instituciones que se informarán
posteriormente en la ideología de la Seguridad Nacional de los EE UU. Este modelo de Seguridad Nacional
“justifica” el uso del terror de estado por necesidad militar. La necesidad militar incluye desde el golpe de estado
anti-constitucional, al asesinato de opositores y la desaparición de ciudadanos de la calle.
78
Ver Stohl and López ed., Government Violence, 97-164.
79
En 1997, Human Rights Watch publica un informe devastador y completo sobre la situación jurídica y el estado
de las prisiones en Venezuela que se titula, “Castigo antes del Juicio: Informe sobre la condición de las cárceles en
Venezuela. Ver, Punishment before Trial: Prison Conditions in Venezuela. (New York: Human Rights Watch,
1997). También ver informe de Amnesty International, Venezuela: The Eclipse of Human Rights. (London:
Amnesty International, 1993) e Informe Anual: Situación de los Derechos Humanos en Venezuela (octubre 1994septiembre 1995). (Caracas: PROVEA, 1994).
64
particulares en muchos casos, que exponen con toda clase de detalles, los métodos policiales
brutales que se usaron sistemáticamente en el país. Muchos de estos reportes ofrecían soluciones
específicas a problemas y situaciones que fueron ignorados sistemáticamente por los gobiernos
de turno. La política oficial fue casi siempre negar convenientemente la magnitud del problema
y amenazar a aquellos --periodistas, políticos, abogados y activistas-- que exponían la situación
en toda su gravedad. Todos estos hechos y actitudes no hacen sino confirmar la existencia en la
Venezuela de la IV República una "violencia política institucionalizada” 80 durante todo el
período llamado “democrático” que se inicia en 1959 sin excepciones, obviamente más
sofisticada que la que había durante la dictadura previa del General Pérez Jiménez 81.
El trabajo de la Comisión Andina de Juristas, “Venezuela, Administración de Justicia y
Crisis Institucional”, ofrece un detallado informe de la administración de justicia desde el punto
de vista de los derechos humanos 82. El informe no hace sino confirmar lo que el propio ministro
de Justicia venezolano Henrique Meier reconoció públicamente en un momento de debilidad al
declarar al diario “El Nacional” en julio de 1996, lo que todo el mundo sabía: había una
violación de los derechos humanos particularmente grave en las cárceles venezolanas. La
violación de los derechos humanos en las cárceles ha sido un problema serio que todavía es un
problema habitual en Venezuela 83.
La Revolución Bolivariana reconoce el problema y ha
empezado a hacer cambios estructurales en el sistema, aunque queda mucho para hacer. En la IV
80
El Presidente Rafael Caldera se negó a recibir al director de Amnistía Internacional, quien vino a Caracas en julio
de 1996 para discutir posibles acciones políticas y sugerencias para mejorar los derechos humanos de los
venezolanos. Esta negativa fue ridícula, porque el propio ministro de Justicia reconoció que había una violación de
los derechos humanos generalizada en prácticamente todas las instituciones penales de la República. Estos
ejemplos, ilustran otros muchos, en los que los presidentes de la IV República ignoraron no sólo las denuncias
nacionales sino también las ayudas internacionales para resolver los problemas existentes en esta materia.
81
Para un exhaustivo estudio de violaciones graves de los derechos humanos en la IV República, ver Pedro Pablo
Linarez e Irakara Castillo, Desaparecidos: el rescate de los asesinados políticos en los años 60 en Venezuela.
(Caracas: Ediciones Universidad Bolivariana de Venezuela, 2007).
82
Comisión Andina de Juristas, Venezuela, Administración de Justicia y Crisis Institucional. (Lima, Perú:
Comisión Andina de Juristas, 1992). El sistema judicial venezolano durante la IV República era tan deficiente en
materia de derechos humanos que el Banco Mundial prestó 30 millones de dólares para implementar reformas
inmediatas en 1992. Ver Halfway to Reform: The World bank and the Venezuelan Judicial System. (New York:
Lawyers Committee for Human Rights, 1996).
83
El problema de seguridad jurídica y de respeto a los derechos humanos en las cárceles no es de fácil solución y es
uno de los desafíos pendientes que tiene la Revolución Bolivariana. Requiere una reforma seria de sistema judicial,
de los cuerpos policiales y de seguridad del estado y de una reforma penitenciaria completa. Se han hecho avances,
pero queda todavía mucho camino por recorrer. La diferencia es que los gobiernos no pueden ignorar el problema
sin pagar un alto costo político ya que hay un mandato constitucional esencial que resalta los conceptos de
dignidad humana y respeto a la vida. Un derecho que se reitera y especifica de varias formas y maneras a lo largo
del todo el texto legal. Ver, Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (24-III-2000).
65
República todas estas denuncias, artículos, estudios, reportes se enfrentaban a la negativa oficial
de aceptar la existencia del problema. Una negativa con los elementos suficientes y necesarios
que nos sugieren y apuntan que la responsabilidad de la existencia del “terrorismo de estado”
estaba en manos fundamentalmente del poder ejecutivo, el Presidente. Todos los presidentes de
la época democrática de la IV República implementaban el modelo de la “seguridad nacional”
sacrificando su primera responsabilidad legal y moral para con la ciudadanía; la de respetar los
derechos que establecía la propia Constitución de 1961. En el modelo, gracias a la debilidad
institucional del poder judicial; el poder policial y militar desde el ejecutivo podía funcionar con
impunidad y “eficiencia.”
Para colmo, los partidos políticos del Presidente en el poder
penetraban al poder judicial y
manipulaban la administración de la justicia.
Ya, Julio
Fernández Toro, director de la fallida COPRE (Comisión Presidencial para la Reforma del
Estado) señalaba lo siguiente sobre el funcionamiento de “tribus partidistas” dentro del Estado
venezolano: “el partido que domina la Administración y el Congreso termina por imponer su
yugo sobre la judicatura convirtiendo la separación del Poder Público en una concentración del
mismo en un sólo partido” 84.
Desde un punto de vista histórico el caso venezolano es muy ilustrativo.
Primero,
confirma que la transición política del régimen de la dictadura militar de Pérez Jiménez (195258) a un estado de derecho en materia de derechos humanos nunca se concretó.
Se fue
distorsionado hacia el encubrimiento --ya fuera legal o mediático-- para paralizarlo por un
prolongado lapso de tiempo hasta que llegó finalmente la V República. El viejo dicho “la muerte
no paga,” se cumple, ya que la V República no tuvo sino que inteligentemente sacar los crímenes
de lesa humanidad de la IV República para legitimarse y diferenciarse claramente de las
atrocidades del “régimen democrático” anterior. La V República tiene con los mártires de la
democracia (1961-1999) –asesinados, desaparecidos, torturados, detenidos injustamente—en la
mano la bandera de la defensa de los derechos humanos que permite mostrar dos conceptos de
dignidad humana contrapuestos. Ya no son sólo hay diferencias a nivel de educación, salud y
trabajo; la V República defiende un concepto de dignidad humana cualitativo que rechaza la
tortura y que renuncia al terrorismo de estado del régimen anterior. Denuncia las ideologías que
84
Comisión Andina de Juristas, Venezuela, 26.
66
sustentaban el “terror democrático” incluyendo la adaptaciones venezolanas de las teorías de la
seguridad nacional promovidas desde EE UU 85.
Las reformas del estado ejecutadas en la IV República, como la mencionada COPRE,
enfocadas en un desarrollo del derecho del ciudadano a ejercer su voto fracasaron por falta de
credibilidad, ya que eran dirigidas por aquellos que ejercían y lideraban con impunidad el
terrorismo de estado. El presidente responsable de crímenes y abusos de poder --apoyado por su
partido político—eran los menos interesados en fortalecer un sistema de justicia eficiente y
neutral que ajuiciaría tales abusos. Las reformas seguían ignorado lo esencial, que la democracia
no es solamente “el derecho al voto” sino el desarrollo de los todos los derechos humanos
básicos legales del ciudadano. La COPRE y otras reformas fallidas de la IV República resumen
el fracaso del Pacto de Punto Fijo en materia de derechos humanos. Con el paso de los años la
democracia real y los objetivos liberales del prólogo constitucional de 1961 se convirtieron en
“papel mojado” --a los que nunca se aproximaron los gobiernos de turno. El prólogo era un
recordatorio del fracaso oficial de la propia constitución. La vigencia de leyes claramente
anticonstitucionales --como la Ley de Vagos y Maleantes, la Ley Orgánica sobre Sustancias
Estupefacientes y Psicotrópicas, la Ley de Salvaguarda del Patrimonio Público-- eran evidencias
de una democracia que no garantizaba ni la administración de justicia ni la vigencia de los
derechos humanos que proclamaba 86.
La administración de la justicia y la horrible reputación
de los aparatos de seguridad del estado eran ejemplo viviente del fracaso institucional. En
resumen el poder judicial durante la IV República no solo carecía de la intención de
constitucionalidad sino de sus tres elementos esenciales: recursos, autonomía y eficacia.
Debilidad necesaria para permitir al gobierno de turno y su partido la violación sistemática de los
derechos humanos y la manipulación corrupta de los recursos del estado 87.
85
Todo el apartado sobre la defensa de los derechos humanos de la Constitución claramente define explícitamente
este concepto de dignidad humana que deslegitima todas las formas de terrorismo de estado. En este caso la
experiencia de la IV República sirvió para prevenir un estado similar o parecido al mismo. No sólo eso, Venezuela
denuncia sin paliativos a nivel internacional las políticas “terroristas” en América Latina y en todo el mundo.
86
Comisión Andina de Juristas, Venezuela, 29.
87
Dos hechos claves, que se convierten en símbolos culturales de la violación de los derechos de los ciudadanos
fueron la masacre de “El Amparo” y “El Caracazo.” La masacre de “El Amparo” ocurrió el 29 de octubre de 1988,
14 personas civiles fueron asesinadas por el comando especial “José Antonio Páez” –CEJAP—integrado por la
policía y el ejército. Una vez cometida la masacre los implicados encubrieron los hechos disfrazando a los civiles de
presuntos guerrilleros. Tres meses después, se desató el terrorismo de estado en los barrios de Caracas, y durante
los meses de febrero y marzo de 1989, tuvo lugar lo que se denominó popularmente como “El Caracazo.” Durante
la represión oficialmente murieron 276 personas, hubo 1.522 heridos de bala y 2.446 lesionados. Fue el resultado
del estado de sitio declarado por Presidente Carlos Andrés Pérez – quien fuera en su día ministro del gobierno de
67
Un análisis crítico y serio del funcionamiento del sistema político venezolano y del rol
del estado durante estos años nos señala dos direcciones. Por un lado, la necesidad de un
estudio de los aspectos ideológicos que perpetuaron una ideología liberal deforme o incompleta;
incluyendo la implementación de políticas de exclusión económica y política que fueron
establecidas y ejecutadas sin interrupción desde 1961. Es decir, el Pacto de Punto Fijo –nombre
del modelo de seguridad nacional adoptado en Venezuela-- que fue una traición al verdadero
espíritu democrático del "23 de Enero" como muchos análisis de la izquierda ha señalado
acertadamente 88. El Pacto excluyó dogmáticamente del sistema a sectores mayoritarios de la
población --los trabajadores, campesinos, indígenas, pobres y marginales, incluyendo aquellos
sectores políticos contestatarios – el Partido Comunista Venezolano (PCV)-- que discrepaban
con las premisas de democracia excluyente y reforma económica propuestas por los partidos
dominantes AD, COPEI y URD. Por otro lado, por la naturaleza del propio Pacto se vio
obligado a crear un sistema de coerción social donde el estado --en particular el ejecutivo-desarrolló el papel protagonista. El nuevo estado no sólo limitó las libertades y derechos básicos
de una sociedad liberal y democrática sino que creó un sistema de seguridad nacional que
utilizaba el “terror de estado” y que estaba dirigido a todos aquellos que se negaban a aceptar las
exclusiones establecidas en el Pacto de Punto Fijo.
No es de extrañar que la Constitución de 1961 sólo tenga valor para aquellas clases y
grupos que se beneficiaron de ella. La mayoría del pueblo venezolano, se manifestó a favor de
una Constituyente que cambiara todas las reglas del juego democrático. Durante el golpe de
estado de abril del año 2002, los golpistas quisieron restablecer la Constitución de 1961, lo cual
incluso disminuyó más su posibilidad de éxito popular. Sorprende, que las clases dominantes de
la IV República --ahora en su mayoría en las fuerzas política de la oposición-- todavía no
entiendan el por qué la Constitución de 1961 no tenía, tiene, ni tendrá atracción entre la
Rómulo Betancourt y encargado de la represión en 1961—que sacó al ejército a la calle para reprimir la revuelta
popular que originó su decisión de implementar las recomendaciones económicas del Fondo Monetario
Internacional. Informe completo sobre “El Caracazo,” ver Carmen Ramia y Sandra Bracho, 27 de Febrero Cuando
la Muerte Tomó las Calles. (Caracas: Editorial Ateneo de Caracas, 1990). Las organizaciones PROVEA,
COFAVIC y la Red de Apoyo por la Justicia y Paz aseguran que hubo al menos 400 muertos, miles de heridos,
cientos de detenidos, al menos tres desaparecidos y muchos torturados. Ver, Comisión Andina de Juristas,
Venezuela, 23.
88
El 23 de enero de 1958 se inició en Caracas el levantamiento popular que derrocaría al Dictador Marcos Pérez
Jiménez de la Presidencia y eventualmente restablecía la democracia. El espiritu del “23 de Enero” representaba la
aspiración democrática del pueblo venezolano sin exclusiones y que sería destruida por el modelo democrático de
seguridad nacional impuesto en Venezuela y que es conocido como el “Pacto de Punto Fijo.”
68
población. Obviamente, estas clases y sectores jamás sufrieron las prácticas del terrorismo de
estado que si sufrieron las mayorías excluidas por el sistema.
El terror no sólo paraliza a las víctimas sino que produce una lealtad y seguridad falsa en
las clases dominantes que lo practican. Así ocurre en las dictaduras. La población en cambio
recuerda perfectamente las historias de un aparato represivo que sin los controles judiciales
suprime --de facto-- la mayoría de los derechos individuales del ciudadano; incluyendo el
derecho a trato digno, al respeto, al debido proceso a ser juzgado por un tribunal competente,
independiente e imparcial. Durante la IV República el aparato policial era represivo, parcial, y
sólo obedecía las órdenes del ejecutivo. ¿Cómo funcionaba? Funcionaba en base a "zonas de
terror" establecidas. El aparato represivo del estado era controlado básicamente por el ejecutivo
–El Presidente y
su ministro del interior—que determinaban abierta o solapadamente las
acciones brutales de las policías. Un sistema que manipulaba los juicios. Un sistema similar al
de la dictadura anterior y que poca lealtad podía generar en el pueblo. Era un modelo político y
una Constitución que ignoraba al ciudadano de la calle --excepto durante las elecciones-- y que
servía indistintamente a las élites de turno --civil y militar-- y a los partidos políticos en el poder.
Irónicamente, en el nombre de la defensa "democracia," “el orden público” y la "seguridad
nacional" se cometían toda clase de crímenes de corrupción administrativa y de graves
violaciones a los derechos humanos con una impunidad prácticamente garantizada.
2.1. Metodología para el estudio del terrorismo del estado en las democracias
Sería injusto calificar un estado de “terrorista” sin definir claramente el significado de la
palabra y sin exponer un argumento que ofrezca las pruebas correspondientes. Eugene Victor
Walter distingue entre el uso ocasional y sistemático del terror. Una violación ocasional de los
derechos humanos es un hecho aislado a un individuo en particular, por ejemplo la tortura de un
prisionero en la cárcel. Una violación sistemática de los derechos humanos tiene como objetivo
el control social; por ejemplo la tortura de un prisionero con el objetivo de controlar no sólo a la
víctima sino otros prisioneros en la cárcel o intimidar a sus familiares, sus amigos u otros actores
políticos. En este caso, estamos definiendo terrorismo como la transformación de la violación de
los derechos humanos a ciudadanos en un instrumento político que tiene un significado social
particular; y que se aplica según las circunstancias de forma gradual, de acuerdo a las
69
"necesidades" del estado. La diferencia entre el estado criminal y el terrorista es que el primero
hace uso "ilegítimo" consciente del monopolio de la violencia del estado mientras que el segundo
crea mecanismos que le permiten sacar provecho político de la violencia ejercida; sin importarle
violar los derechos más básicos del ciudadano, incluyendo el derecho a la vida.
Individuos, grupos y estados que conocen y respetan los derechos humanos básicos son
los que tienen mayores posibilidades de controlar la degeneración aislada o la corrupción que
ocurre en toda empresa humana. Ahora bien, un sistema que desconoce y esconde la infracción
de tales derechos obviamente la perpetua y hasta cierto punto fomenta la corrupción de estos
valores. Sin duda, los estados usan diferentes formas de coerción social a diferentes niveles, sin
embargo en un estado liberal democrático existen ciertas reglas, definidas como leyes, que
claramente delimitan lo que es legítimo y permisible. No es la existencia de la ley sino su uso y
aplicación efectiva en la vida real, lo que define a un estado de derecho. No es la declaración de
derechos o principios sino el cumplimiento concreto de la ley justa lo que genera la cultura moral
necesaria para el desarrollo efectivo de los derechos humanos y la democracia.
Es pertinente distinguir los matices entre los siguientes tres términos políticos: opresión,
represión y terrorismo. Siguiendo la línea de trabajo de Richard Bissell, López y Stohl una
situación de opresión es aquella en la que "los privilegios sociales y económicos son denegados
a clases completas de personas sin importar si esta población se opone o no a las autoridades."
Por ejemplo, el Pacto de Punto Fijo excluyó por definición a los sectores socialistas, primero
aquellos que pertenecían al Partido Comunista de Venezuela y luego a todos los demás. Estos
grupos eran objeto de opresión política y esta política estaba justificada en la doctrina de la
seguridad nacional y hemisférica, tal como la define los EE UU en su área de influencia. La
represión es el "uso de la coerción o la amenaza de coerción contra oponentes u oponentes
potenciales con el objetivo de prevenir o debilitar su capacidad de oposición a las autoridades y
sus políticas." En Venezuela a la opresión se añade la represión evidente, particularmente a los
miembros de los partidos de izquierda y a todos aquellos demócratas que se oponían al Pacto de
Punto Fijo. Finalmente, se escala la represión al terrorismo de estado cuando aparece "el acto
voluntario o la amenaza de usar la violencia para crear miedo y provocar comportamientos
sumisos en la víctima y la audiencia a las que tales actos o amenazas van dirigidas” 89. En el caso
89
Ver George A. López and Michael Stohl, "Introduction: the Development and Dependence Factors of State
Repression," en López y Stohl eds., The State as a Terrorist. (New York: Greenwood Press, 1986), 7.
70
venezolano, las víctimas de la opresión, represión y el terrorismo de estado fueron decenas de
miles de estudiantes, trabajadores, campesinos, políticos, periodistas y ciudadanos de la calle.
Los instrumentos del terror eran todos los aparatos de seguridad del estado. Incluía a todas las
policías dependientes del Presidente de la Republica (Digepol, después DISIP), del poder judicial
(Policía Técnica Judicial -PTJ), del ejecutivo o gobernador estatal (las Policías Estatales y la
Guardia Nacional), del poder municipal o local (policías metropolitanas) y finalmente del
Ministerio del Interior –Las Fuerzas Armadas. Era el ejército con sus --campañas militares antiguerrilleras y anti-subversivas—las que se organizaron con el objeto de aterrorizar y paralizar a
los sectores excluidos del Pacto de Punto Fijo desde 1961. En el estado democrático, el terror se
usa siempre que “saltan las alarmas;” y particularmente en los estados de emergencia o de
excepción 90. Hay que recordar que la Constitución de 1961 declara el estado de emergencia
inmediatamente a su aprobación y promulgación en 1961.
En el caso venezolano, la historia del colonialismo y la opresión económica han generado
una "cultura" de la violencia en la que el estado ha tenido hasta 1999 un papel protagonista.
Tradicionalmente, el estado y su ejército usan un sistema represivo donde el terrorismo ha sido la
norma cultural y política de su implementación y reproducción 91. En este sentido, el terrorismo
de estado es un proceso histórico y cultural del ejercicio del poder que ha sido la "norma" o
tradición política moderna venezolana.
Antes y después de la guerra fría.
Sus formas e
ideologías han variado a través de la historia y el tiempo, pero sus mecanismos se han
mantenido. El terrorismo de estado en el caso venezolano –y me temo que en muchos países
latinoamericanos-- se refiere a los cambios de intensidad de las campañas del terror de los
diferentes regímenes y gobiernos de turno a partir de 1949.
La violencia deja efectos
psicológicos en sus víctimas. Es importante no olvidar que son el factor tiempo y los efectos
psicológicos y sociológicos que una cultura del terror en el ejercicio del poder los que tienen un
90
El conocido Patriot Act o Ley Patriota en los EE UU es un claro ejemplo de esto. La Ley estable una serie de
alertas a nivel nacional que directamente da mayores poderes a la policía y proporcionalmente menos al ciudadano
dependiendo del nivel de emergencia del país.
91
Las dictaduras de Pérez Jiménez y Juan Vicente Gómez usaron el terrorismo de estado sin ningún tipo de
restricciones legales o morales. Existía un miedo o terror al estado y en particular a los cuerpos policiales o
armados; el ciudadano carecía de derechos y estaba siempre a merced de la decisión de los agentes del estado. Los
crímenes y torturas de Pedro Estrada, Jefe de Policía de Pérez Jiménez, son legendarios para los venezolanos que
vivieron en los años 50. Sólo el pronunciamiento de su nombre produce escalofríos a una generación que sufrió de
las torturas de su policía. Muchos recuerdan que durante la dictadura de Pérez Jiménez, uno podía dejar abierta la
puerta de su casa. Los ladrones no robaban por miedo a caer en manos de la policía.
71
efecto dañino sobre la población a largo plazo. Substituyen la razón por la violencia en las
relaciones humanas y establecen el poder de la violencia como norma social.
Para considerarse que un estado tiene un 'eficiente' aparato represivo, la represión debe
tener o irradiar un efecto que va 'más allá,' es decir que se mantiene por un largo tiempo
después que los hechos observables de violencia hayan sido cometidos por los agentes del
estado. Con ellos, la amenaza permanece implícita ya que un proceso de aprendizaje general se
ha llevado a cabo. En esencia, el proceso terrorístico del estado se convierte en parte de la
estructura política, y como estructura se convierte en una 'forma de hacer las cosas' que no se
considera anormal ni por lo tanto observable como hecho significativo. De esta forma, la
coerción social más efectiva es aquella que se manifiesta por la ausencia 'relativa' de hechos
concretos, efectos que obviamente dificultan la recopilación de información por parte del
investigador social 92.
Contrario al modelo dictatorial, en los modelos liberal-democráticos, Gurr señala el
terrorismo de estado es selectivo; es utilizado cuando los “tiempos” lo requieren: "son una
respuesta táctica a un caso particular de desafío, cesa (y muchas veces es criticado e incluso
sancionado) cuando el conflicto termina o subsidia” 93. La historia del terror de estado en los
Estados Unidos es un buen ejemplo de este modelo. La creación de campos de concentración de
ciudadanos estadounidenses de origen japonés durante la II Guerra Mundial ilustra estos casos.
Años después –superado el “peligro”-- se piden “disculpas” y se critica la medida como excesiva
o innecesaria. Se piden disculpas oficialmente; sin embargo estas disculpas no son sinceras ya
que si la situación lo amerita, la misma situación se reproduce.
El encarcelamiento de
musulmanes en prisiones sin acusaciones formales en cárceles secretas y no tan secretas, como la
prisión de Guantánamo, recuerda mucho el caso japonés. Ahora el determinante del peligro a la
“seguridad nacional” es la afiliación religiosa --en lugar del origen étnico—que impera sobre los
derechos constitucionales y humanos más básicos de las personas. En defensa de la “seguridad
92
Michael Stohl, David Carleton, George López, y Stephen Samuels, "State Violation of Human Rights: Issues and
Problems of Measurement," en Human Rights Quarterly, 8(4), 1986, 594-95. Para una información más específica
de los traumas del terrorismo de estado, ver Ignacio Martin-Baro, "Political Violence and War as Causes of
Psychosocial Trauma in El Salvador." Conferencia presentada en el "Symposium on Central American Immigrants
and Refugees," sostenido en San Francisco State University, y organizado por La Raza Studies Department, en
marzo 10, 1988. También, más información en T. David Mason y Dale A. Krane, "The Political Economy of Death
Squads: Toward a Theory of the Impact of State-Sanctioned Terror," en International Studies Quarterly (1989) 33,
175-198. En Venezuela, José Vicente Abreu ha escrito innumerables trabajos sobre el terrorismo de estado durante
la época de Pérez Jiménez, Seguridad Nacional y 1952 son dos trabajos importantes. Pienso en este tema, estudios
feministas de los efectos de la violencia contra las mujeres pueden ser muy útiles; ya que explican las secuelas
psicológicas que la violencia física y el terror deja en las víctimas. Los efectos psicológicos estresantes y
traumáticos son similares a todas las víctimas de la violencia; y requieren un tratamiento médico y psicológico para
superarlos.
93
Gurr, "Political Origins of State Violence,"50.
72
nacional” y de “la lucha contra el terrorismo” se usa nuevamente el terror de estado y se violan
los derechos humanos de “extremistas” musulmanes, mientras se aterroriza a todos los que tienen
esa afiliación religiosa. Incluso se justifica la tortura –aunque hay debates interminables en el
congreso y en los medios de comunicación sobre su validez legal y moral— mientras se
implementa como método de interrogación policial en la práctica. Es muy posible que la prisión
de Guantánamo, donde se mantienen todavía prisioneros bajo un régimen de tortura y sin
derechos legales a un indeterminado número de personas, sea condenada como una “aberración
histórica” en el futuro por gobiernos posteriores, como lo fueron los campos de concentración de
japoneses americanos durante la II Guerra Mundial. El Presidente Barack Obama ha prometido
cerrar Guantánamo; sin embargo “necesita tiempo” para resolver el problema policial, legal y de
seguridad nacional que tal cierre supone 94.
Es obvio, que las democracias como la mayoría de los otros sistemas políticos usan
selectivamente el terror, después de haberlo usado con maestría en el pasado 95. Desde el punto
de vista político es el conocimiento de los aspectos psicológicos y sociológicos del terrorismo de
estado y sus efectos a corto y largo plazo los que convierten el análisis histórico de los mismos
en significativos. Entender cómo funcionan estos instrumentos represivos es algo mucho más
importante que el tradicional análisis político comparativo entre niveles de terror en diversos
estados.
La pregunta no es tanto distinguir si el estado venezolano es o era más o menos
terrorista que el de Colombia, Guatemala, Brasil, Argentina o Estados Unidos. La cuestión más
fundamental es entender la ideología latente del caso venezolano, los patrones bajo los cuales el
terrorismo de estado se justificó, cómo se usó para implementar la coerción social en Venezuela
y qué ramificaciones o efectos a corto y a largo plazo ha tenido. Sólo así podremos luchar contra
la cultura del terror, erradicando su “valor” o “esencia” cultural.
En muchas ocasiones, el terrorismo de estado se justifica en nombre de la defensa de "la
patria" o la "nación," de la “libertad,” o de la “democracia” contra un “enemigo” interno. Se
declara un estado de “emergencia,” entendiéndose una definición particular de la “seguridad
94
En sistema de seguridad nacional estadounidense la tortura no es solo una forma de interrogación es una
necesidad y practica militar establecida. Cerrar Guantánamo antes de eliminar el “peligro” del extremismo
islamismo daña la política de seguridad nacional tradicional de EE UU; y expone a los servicios de “seguridad” del
estado a un revisionismo de sus métodos antes de ganar la guerra y de que los “delitos cometidos” proscriban. Una
vulnerabilidad legal interna que el estado no puede permitirse ante un “enemigo” que todavía es considerado una
amenaza real.
95
Para una explicación del uso del terrorismo de estado en los Estados Unidos, ver Robert J. Goldstein Political
Repression in Modern America, mencionado por MaCarmant, "Governance without Blood," 25.
73
nacional” o de la sociedad, o de la cultura y de las instituciones que no se corresponde con la
realidad. El caso de la dictadura militar argentina, “la guerra sucia” se justificó como una
operación de limpieza de emergencia para crear una sociedad “verdaderamente” argentina. En
Venezuela, la raíz de la violencia democrática radica en el mismo Pacto de Punto Fijo. Un pacto
que no fue producto de un proceso democrático o consenso social y que redefine la nación
venezolana de una forma excluyente. Un Pacto dentro de un contexto particular donde las élites
político-económicas venezolanas eligen y supeditan la soberanía nacional venezolana a las
necesidades de la Seguridad Nacional de EE UU en su guerra contra el “castro-comunismo.” El
Pacto excluye a la mayoría de trabajadores y campesinos, un sector tan significativo de la
población de más del 80% del total; y que genera la necesidad de un aparato de coerción,
represión y terror de estado poderoso y sofisticado para mantener a los excluidos fuera del
sistema.
El estudio histórico del Pacto de Punto Fijo ayuda a entender el por qué del terror del
estado. El por qué se institucionaliza en la necesidad intrínseca de sus relaciones políticas y
sociales excluyentes. El régimen político usa y necesita de la violencia y del terror, para de
forma eficiente mantenerse en el poder. En sus instrumentos y estructuras, el terrorismo de
estado no es una necesidad esporádica, sino el producto histórico y eficiente que define la
ideología presente en el Pacto de Punto Fijo. Las instituciones que se crean y las prácticas
autoritarias del estado que se adoptan se adaptan del pasado dictatorial y toman un nuevo
significado cultural y político aparentemente “democrático.” Los agentes del estado se entrenan
en sus métodos y "conscientemente" usan particulares patrones de violencia que se consideran
necesarios para producir los comportamientos sociales que el estado demanda en un momento
determinado.
En sus elementos esenciales, el modelo teátrico efectivo del proceso del terror incluiría
tres actores: el agente de la violencia, la víctima y la audiencia. La víctima perece, pero la
audiencia debe reaccionar al espectáculo o a las noticias de la destrucción con sumisión o
acomodo 96.
96
Walter, Terror and Resistance, 9. El importante papel del entrenamiento militar de la llamada “Escuela de las
Américas” que tenía sus bases en Panamá y en los últimos años en Fort Benning (Georgia) no puede ser
minusvalorado y lo mencioné en la introducción. Los militares entrenados en la Escuela de las Américas entre
1946-1992, usaron manuales que enseñaban cómo llevar a cabo operaciones para ejecutar, torturar y extorsionar
enemigos políticos; y qué técnicas usar para combatir la subversión comunista. Estos manuales están en un reporte
del propio gobierno de EE UU hecho público en 1996. Esta información ha sido publicada en español por el Diario
El Nacional, Caracas 22 de noviembre 1996. Ver Linarez-Castillo, Desaparecidos, 48.
74
¿Cómo se ejecuta y afecta el terror del estado en la sociedad? Hay muchos ejemplos que
podríamos escoger a la de ilustrar este modelo teátrico dentro del contexto histórico venezolano.
El teatro del terror delinea como el estado actúa y quienes participan en el mismo. El ejemplo
que uso es un ejemplo que me ocurrió a mí personalmente cuando era periodista durante un
período de relativa paz social y dentro de los parámetros de estabilidad económica que antecede
a la crisis de 1984. El hecho ocurrió después de veinticinco años de régimen "democrático,"
durante el gobierno demo-cristiano del Presidente Luis Herrera Campins y cuando Rafael
Montes de Oca era el ministro del Interior.
En 1982 en la ciudad de Guanare (Estado Portuguesa) dos estudiantes de bachillerato
menores de dieciocho años de edad, en plena luz del día fueron detenidos por policías
uniformados de la DISIP (Policía política del Estado "democrático" directamente bajo la
dirección del Ministerio del Interior) e introducidos en una patrulla, en frente del resto de los
estudiantes del Liceo. Estos dos estudiantes eran activistas políticos de afiliación comunista,
miembros de la Juventud Comunista del Partido Comunista de Venezuela (PCV), partido legal
que participaba en las elecciones regularmente y que había renunciado a la violencia tras la
derrota guerrillera a finales de los años 60.
Los estudiantes detenidos por la DISIP
desaparecieron para no ser vistos de nuevo. Sus cuerpos nunca fueron encontrados. La familia
de los afectados y sus amigos denunciaron públicamente el secuestro y la desaparición de los dos
estudiantes; estas desapariciones se reportaron en los medios de comunicación, tanto en la radio
como en la prensa, sin resultados positivos. Reporté esta denuncia tanto en Radio Portuguesa
como en el periódico donde trabajaba en ese entonces, el diario Ultima Hora de AcariguaAraure 97.
En este caso de terrorismo de estado, los agentes eran miembros de la policía política
DISIP, las víctimas fueron dos estudiantes de bachillerato del Liceo de Guanare, militantes
97
Estos hechos me ocurrieron a mí, cuando era periodista del Diario Ultima Hora de Acarigua. No recuerdo el
nombre de los estudiantes y las fechas precisas de estos hechos, pero la información correspondiente puede
encontrase en los archivos del diario Ultima Hora de Acarigua, diario en el que trabajé en los años 1981-82. Hay
muchos ejemplos de este tipo, pero me gusta éste, primero porque fui testigo presencial y luego víctima del terror de
estado; y segundo lo ejecuta el propio ministro del Interior. Además, ilustra en detalle los dos niveles del ciclo del
terror que muestra la estructura sistémica de las violaciones de los derechos humanos que ocurrían durante la IV
República. Un primer ciclo, el del crimen mismo, --crímenes imperdonables y abominables; y un segundo el del uso
de la censura y la amenaza “directa” o “indirecta” a los periodistas y medios de comunicación– o activistas de
derechos humanos-- que denunciaran el crimen. En este caso, ambos ciclos fueron ejecutados al más alto nivel,
personalmente, por el entonces ministro del Interior, Rafael Montes de Oca.
75
activos de la Juventud Comunista.
La audiencia fue amplia: los comunistas, los otros
estudiantes, los familiares de las víctimas y la comunidad local y estatal en general. El mensaje
de terror obviamente estaba dirigido directamente
a la Juventud Comunista y al Partido
Comunista de Venezuela que estaba organizando, al parecer con éxito, a grupos de estudiantes en
oposición al gobierno del Presidente Luis Herrera Campins.
Victimarios: en aquel tiempo, el presidente electo era el doctor Luis Herrera Campins,
líder del partido social-cristiano COPEI. Rafael Montes de Oca, un portavoz prominente del
gobierno, miembro del mismo partido, era el Ministro del Interior, y responsable directo por el
funcionamiento de la policía política DISIP. La DISIP fue el instrumento del terror que
secuestró y desapareció a los dos estudiantes.
Testigos: yo era periodista trabajando para el diario local Última Hora de AcariguaAraure y Radio Portuguesa. Acarigua-Araure son ciudades gemelas del estado Portuguesa no
lejanas a la capital del Estado Portuguesa, Guanare, donde ocurrieron los hechos. AcariguaAraure no sólo era la ciudad natal del entonces Presidente Luis Herrera, sino uno era y es uno
de los centros agrícolas y económicos más importantes del país; donde se producía y produce
mucha de la comida que consume el resto del país.
Un par de semanas después del secuestro y desaparición de los jóvenes estudiantes el ministro
Montes de Oca dio una conferencia de prensa en la ciudad de Acarigua. Fui como
representante de mi periódico y de un programa de radio; también estaban presentes otros
periodistas de los medios de comunicación social local, regional y nacional.
Le pregunté al ministro directamente sobre la desaparición de los dos estudiantes en Guanare y
sobre las posibilidades de una investigación judicial para castigar los implicados en el crimen.
También le pregunté sobre la posibilidad de buscar los cuerpos de las víctimas, que todo el
mundo asumía –que habían sido asesinados—para retornarlos a sus familias. El ministro
Montes de Oca se puso furioso, y después de preguntar quién era yo, me gritó a mí y a los
demás: "nadie, nadie desaparece en Venezuela ¡Todavía no sabes que no existen violaciones de
derechos humanos en Venezuela!" Inmediatamente preguntó a uno de sus guardias --un DISIP
uniformado de su escolta personal-- que tomara nota de mi nombre y la conferencia de prensa
se terminó al instante, sin respuestas, ni más preguntas.
Me sorprendí porque aunque era un joven periodista y hasta cierto punto muy ingenuo,
era “incrédulo” de que estos crímenes se cometieran en Venezuela en 1982 y menos por el
partido social-cristiano COPEI. Honestamente pensaba que el propio ministro Montes de Oca
desconocía la desaparición de los jóvenes estudiantes y que haría algo al respecto. Después de
su reacción y de la conferencia de prensa, no me quedaron dudas de que no sólo conocía el caso
sino que lo sancionaba y posiblemente había ordenado él mismo la desaparición de los
estudiantes. Al mismo tiempo su amenaza directa a mi persona y a la prensa, usando a la DISIP
de su propia guardia personal, me clarificó cualquier tipo de dudas sobre la calidad de persona,
de demócrata y de ministro, que era Rafael Montes de Oca.
Más sorpresa me causó al día siguiente leer la prensa local y nacional; ya que solamente
el diario Ultima Hora había publicado los incidentes ocurridos en la rueda de prensa,
incluyendo la pregunta y la respuesta del ministro sobre los estudiantes desaparecidos. Es como
76
si la rueda de prensa no hubiera existido. Los demás periodistas ignoraron totalmente no sólo
la desaparición de los estudiantes en sus reportajes sino incluso no mencionaron la rueda de
prensa. También, ignoraron las amenazas personales que me lanzó y que obviamente iban
dirigidas a todos los presentes y a la prensa en general. La DISIP vigilaría y se encargaría de a
cualquiera que deseara denunciar violaciones en materia de derechos humanos en Venezuela.
El modelo teátrico del terror no podía ser más efectivo.
Días después un grupo de congresistas del PCV me visitaron y me agradecieron el haber
denunciado valientemente la desaparición de los jóvenes estudiantes. Me advirtieron y
confirmaron que eran conscientes del "peligro" en que estaba mi persona si persistía en
denunciar estos hechos. Denuncias que continuamos durante meses en el diario Ultima Hora y
en Radio Portuguesa varios periodistas: José Ramón Briceño, Octavio Beaumont Rodríguez,
Ángel Bastidas, Joaquín Ortuño y mi persona.
La repuesta del ministro del interior Montes de Oca sobre las desapariciones nos permite
no sólo analizar los elementos teátricos del crimen de estado mismo y sus ciclos de operación;
sino también los factores ideológicos –claramente delineados en el Pacto de Punto Fijo-necesarios para que el sistema de terrorismo de estado entre en funcionamiento. Los elementos
teátricos definen el objeto, la intensidad y el alcance del acto de terror. Tal como en el primer
nivel donde el crimen del secuestro y desaparición ocurre como los efectos destinados a la
audiencia. La rueda de prensa ilustra una repetición efectiva del patrón teátrico para asegurar sus
efectos en la audiencia. En este caso el agente es el ministro del Interior y sus guardias de la
DISIP, que amenaza a sus víctimas --periodistas que denuncian violaciones de derechos humanos
en Venezuela-- con una audiencia en la mente -comunistas y sus “simpatizantes”- y con una
ideología pretexto –proteger la seguridad nacional definida en el Pacto de Punto Fijo.
Asimismo, se produce algo muy importante, una confirmación oficial al más alto nivel –nada
menos que el ministro del Interior-- de que cualquier asunto relacionado con la denuncia de
violaciones graves de los derechos humanos en Venezuela es tabú, y amenaza directamente la
“seguridad nacional” del estado venezolano. Como extrapolamos del estudio de Gurr en su
análisis, en la Venezuela de la IV República --cualquier denuncia de violaciones de derechos
humanos— activa a la DISIP –policía del aparato represor del estado venezolano desde el
Ministerio del Interior-- contra los denunciantes y los medios de comunicación que den cabida a
sus denuncias 98.
98
“En Venezuela las experiencias de la arqueología forense en el rescate de los desaparecidos comienza en 1997 y
se han continuado a lo largo de estos años como una actividad conjunta entre los familiares y los amigos de los
desaparecidos. No es sino en el año 2005, cuando la Asamblea Nacional crea la Comisión Especial para la
Investigación de los detenidos, torturados, masacrados y desaparecidos de los años 60,70 y 80…” Para una análisis
77
2.2. El método represivo: el patrón de acción, su intensidad y alcance.
El primer factor para el análisis del terrorismo de estado es lo que se denomina el patrón
de acción. Se refiere a aquellas acciones perpetradas en las víctimas, y especifica los aspectos
cualitativos de qué abusos a los derechos humanos se producen en particular. Gurr define este
aspecto del terrorismo de estado como "la existencia de patrones de actos que atentan contra la
vida 99."
La existencia de cientos o miles de desaparecidos en Venezuela y el “silencio”
mediático y cultural que socialmente producían, confirman la existencia de un ciclo completo de
terrorismo de estado. El patrón de acción incluye --secuestro y desaparición-- a diversos niveles
que va de las amenazas a la acción criminal concreta y específica de la policía. La acción mayor
fue obviamente dirigida a los jóvenes comunistas estudiantes y activistas de izquierda con el
secuestro y desaparición de sus militantes. Ser de izquierdas tiene un “riesgo y precio” que
incluye la amenaza directa hecha por el ministro a todos los periodistas que quieran denunciar
crímenes de estado, incluyendo violaciones a los derechos humanos en el país cometidas por los
cuerpos de seguridad del estado. La gravedad del crimen y la directa participación de la policía
del Ministerio del Interior y la reacción del propio Ministro confirma al más alto nivel que el
secuestro y desaparición –con el asesinato implícito-- de oponentes al régimen no es un hecho
“aislado” sino que es parte de un patrón de comportamiento normal de los cuerpos de seguridad
del estado bajo las órdenes del poder ejecutivo; e incluyen obviamente al Presidente y sus
ministros 100.
El segundo aspecto es la intensidad y frecuencia de cada uno de los incidentes violatorios
y el conocimiento que las autoridades tienen de los mismos. No es lo mismo matar que torturar,
detener o intimidar a la víctima. Tampoco, es lo mismo matar una vez, que hacerlo cien veces.
Asimismo, Gurr señala la relevancia de la responsabilidad del gobierno por hechos de
terrorismo, en otras palabras "la cuestión esencial es si el hecho terrorístico ocurre con o sin
exhaustivo de casos específicos de desaparecidos durante la época “democrática” en Venezuela y su larga lista de
víctimas, entre los cuales se encuentran: Delfín González Arias, Nicolás Sánchez, Francisco Fernández, Carmelo
Mendoza, Nicolás Hurtado Barrios, Antonio Díaz “El Gavilancito,” Jacinto Romero Andueza, Juvencio Moreno
Lucena, Capitán Gonzalo Pérez Marte, Douglas Días Correoso, incluyendo la excavación de los restos del
legendario comandante Argimiro Gabaldón, ver Linarez-Castillo, Desaparecidos, 92-220.
99
Gurr, "Political Origins of State Violence,"47.
100
"Un régimen que 'desaparece' ciudadanos debe juzgarse como un violador a los derechos humanos peor que uno
que 'solamente' encarcela oponentes, y demás." Para una mayor información sobre diferentes niveles de terrorismo
de estado, ver Stohl, "State Violation of Human Rights,"600.
78
consentimiento explícito o implícito de las autoridades. 101" No cabe duda que el hecho de que el
Ministro decida ignorar los hechos gravísimos y que amenace públicamente en una rueda de
prensa oficial a todos los periodistas que deseen reportar los crímenes del estado, confirma la alta
intensidad, aunque no la frecuencia de este tipo de incidentes. Al ministro Montes de Oca le
ofende la pregunta porque hay un
consentimiento implícito previo
y que por culpa del
periodista inoportuno tiene que volver a hacer claramente explícito. Para él, a estas alturas
debería estar claro que las actuaciones de la DISIP son materia de “seguridad nacional” y no
pueden ser cuestionadas por periodistas. Es obvio que la DISIP actúa por encima del poder
judicial, de la Constitución y las leyes; sólo bajo órdenes directas y explícitas y de control del
más alto nivel de las autoridades venezolanas en el poder ejecutivo. Esto incluye la perpetración
de torturas, asesinato, desapariciones y otros crímenes de estado 102. Es más el análisis histórico
confirma que los niveles de intensidad no disminuyen y se establecen durante el estado de
emergencia decretado en 1961. La intensidad se mantendría aunque disminuiría o aumentaría la
frecuencia de los hechos criminales según las circunstancias políticas de momento y las
valoraciones que hiciera el ejecutivo del nivel de amenaza a la seguridad nacional.
Escandaloso fue el crimen de estado del líder estudiantil de la Liga Comunista de la
Universidad Central de Venezuela, Jorge Rodríguez el 27 de julio de 1976. El líder estudiantil
fue secuestrado por la DISIP y apareció muerto en la cárcel. Al día siguiente el ministro del
Interior Octavio Lepage declaró que Jorge Rodríguez había muerto de un infarto. La autopsia de
Rodríguez claramente determinaba que la causa de la muerte había sido una hemorragia interna
que le causó la rotura del hígado; resultado de las torturas y golpes a los que había sido sometido.
101
Gurr, "Political Origins of State Violence," 48.
Empieza a ser evidente que la frecuencia de estos incidentes ha variado según el momento político. Aun así es
difícil investigar, por un lado no existen los cuerpos de las víctimas. Sí de hecho existen no hay acceso a los mismos.
Ahora por primera vez se están abriendo los reportes oficiales de la DISIP y de la DIM, por iniciativa de la
Asamblea Nacional de la V República. En 1988, el Presidente Jaime Lusinchi y el General Camejo rehusaron
aceptar la verdad en casos donde la evidencia era incontrovertible; el tristemente famoso caso de la masacre de El
Amparo. De nada valieron las demandas legales, los testimonios de testigos, los reportes periodísticos, las
manifestaciones públicas. La versión oficial de los gobiernos "históricamente democráticos" de la IV República ha
sido desconocer y mucho menos investigar y penalizar a aquellos responsables de crímenes de estado. Este hecho,
la negativa a aceptar la posibilidad de violaciones de los derechos humanos por parte del estado, es la prueba
"incontrovertible" de la existencia de terrorismo de estado en un sistema que implica de arriba a abajo a toda la clase
política. Para un análisis de la Masacre de El Amparo, ver Fernando Coronil and Julie Skurski, "Dismembering and
Remembering the Nation: The Semantics of Political Violence in Venezuela." En el caso venezolano del la IV
República, el régimen rara vez ha alterado su patrón de acción, intensidad o cambiado el alcance de violencia
manteniendo sus objetivos y la frecuencia de la violación de los derechos humanos. La inexistencia de un poder
judicial efectivo e independiente facilitó grandemente el terrorismo de estado. Obviamente, la intensidad del terror
se incrementa en los momentos de crisis económica, social o política. Para más información en el concepto de
intensidad, ver Sthol, "State Violation of Human Rights," 601.
102
79
Este homicidio confirmaba que el gobierno de Carlos Andrés Pérez, su ministro Octavio Lepage
y la DISIP continuaban con las mismas prácticas de terrorismo de estado de los años sesenta. El
propio médico forense que le hizo la autopsia a Jorge Rodríguez confirmó años después lo que
todo el mundo sospechaba, que efectivamente había muerto debido a las torturas sufridas en las
cárceles del gobierno.
El tercer y último factor es el alcance o el tamaño de la audiencia o de población a la cual
se dirige la violación de los derechos humanos. En este sentido la audiencia es prácticamente
todo el país. En el caso de Guanare, el alcance directo y explícito fueron los jóvenes estudiantes
comunistas de la Juventud Comunista del estado Portuguesa. El alcance implícito incluyó a los
testigos y familiares que denunciaron los hechos, a los vecinos y familias de Guanare. Una vez
que se conocen y denuncian los hechos criminales, el alcance directo es a los periodistas y
activistas de derechos humanos que denuncien violaciones a los mismos en Venezuela 103. Un
análisis del alcance realmente requeriría analizar los efectos psicológicos y sociales que tal
acción tuvo en todas las víctimas afectadas. El efecto en los periodistas fue inmediato, ya que
los periodistas aprendieron los riesgos a que se exponían si denuncian violaciones de los
derechos humanos ejecutadas por el estado venezolano durante la IV República. En la mayoría
de los casos los periodistas se ven obligados a ignorar este tipo de crímenes por su propia
seguridad personal y profesional.
2.3. La “seguridad nacional” y su discurso “democrático” en la IV República.
La existencia del terrorismo de estado cuestiona seriamente las definiciones positivas y el
discurso "democrático" que politólogos e historiadores han hecho en sus estudios del sistema
político venezolano durante la IV República tanto en el mundo académico venezolano como el
estadounidense. Es un ejemplo de cómo el discurso académico y universitario, salva raras
excepciones, está casi siempre bajo el control y el dominio de la doctrina de seguridad nacional y
hemisférica que defiende el Departamento de Estado de los EE UU. Por otro lado, también
explica en gran parte el por qué el partido político Acción Democrática (AD) y el cristianodemócrata COPEI cayeron popular y electoralmente en picado en la década de los 90. Y el por
103
"Es significativo si el estado viola los derechos de una minoría o de una comunidad en su totalidad." Para una
mayor información en el concepto de alcance, ver Ibíd., 602-03.
80
qué los cambios políticos que introduce la V República y su asamblea constituyente tendrán un
apoyo popular masivo de la población.
Los líderes de los partidos políticos tradicionales AD y COPEI fueron participes y
cómplices de la corrupción, la crisis económica y de los crímenes de estado que ocurrieron
durante la IV República durante cuarenta años en el poder. Las dimensiones de la crisis moral y
política en el país durante los años 90 era fruto del agotamiento del modelo de Punto Fijo -incluyendo su sistema de administración del terror—que expone abiertamente durante el
“Caracazo” sus aspectos más siniestros y antidemocráticos. La represión militar del pueblo de
Caracas en febrero y marzo de 1989, bajo el gobierno de Carlos Andrés Pérez con cientos de
muertos en las calles --enterrados en fosas comunes sin identificar--, de miles de heridos y
detenidos por parte de las Fuerzas Armadas fue el fin del doble discurso "democrático." Es
interesante que el análisis de esta crisis nacional sin precedentes desde la derrota guerrillera de
1967, y que es reconocida por la mayoría de los habitantes en Venezuela como el principio del
fin de la IV República, se excluye --o acaso se menciona superficialmente-- en la mayoría de los
estudios en la literatura de la democracia “oficial” venezolana fuera del país.
A partir de 1961 el incremento de los ingresos petroleros y el “boom” económico después
de la nacionalización de la industria petrolera en la década de los setenta permitió a los partidos
políticos dominantes AD y COPEI,
conjuntamente con algunos de sus selectos oficiales
militares de alto rango, controlar la administración de inmensos recursos económicos por parte
del estado. En el aspecto político el control del estado incluyó no sólo las instituciones militares
sino los controles legales necesarios para el cumplimiento de las leyes. La ley no era igual para
todos; había una ley para el rico y otra para el pobre. Muchos políticos y élites vinculadas a
ambos partidos legal e “ilegalmente” no sólo se enriquecieron con los dineros públicos sino que
cometieron violaciones a los derechos humanos sumamente graves; utilizaron la ideología de la
“seguridad nacional” para justificar sus crímenes de estado y conservar sus privilegios
económicos.
El primer protagonista elegido democráticamente que estableció el patrón de acción del
terrorismo de estado del Pacto de Punto Fijo fue Rómulo Betancourt en 1961. El presidente
electo declaró el estado de emergencia al asumir el poder y utilizó las estructuras del aparato
represivo que heredó de la dictadura de Pérez Jiménez (1948-58). Betancourt lo cambió y
perfeccionó al incluir nuevas técnicas e ideologías que lo hicieron en apariencia "más legítimo."
81
La ideología del modelo de “seguridad nacional” era la misma que defendía el General Pérez
Jiménez. Betancourt usó la disculpa de la lucha armada en Venezuela para crear, modificar y
perfeccionar el modelo de “seguridad nacional” venezolano 104. Las fuerzas de seguridad del
estado matan y torturan en nombre de la democracia. La intensidad –tortura y desapariciones—y
el alcance –aquellos que demandaban participación e inclusión en el Pacto de Punto Fijo— no
cambiaría hasta la caída del modelo en 1999. Betancourt cambia simplemente el discurso, ahora
se trata de una guerra para “defender la democracia” y protegerla de los peligros del “castrocomunismo” internacional y la frecuencia de los hechos delictivos. La guerra contra los
comunistas termina siendo una guerra de clases, contra todos los grupos de trabajadores,
campesinos y estudiantes que rechazan el Puntofijismo 105. “En defensa de la democracia" se dio
carta libre al ejército y a la policía para organizar la lucha anti-subversiva y cometer crímenes de
lesa humanidad. La impunidad durante los continuos períodos de emergencia fue la disculpa
perfecta para depurar a la oposición política y establecer un régimen “democrático” bipartidista
que duró hasta las elecciones de 1999. El sistema murió como nació en unas elecciones libres y
democráticas. El estado de emergencia duró básicamente de 1961 a 1967. Fue la época de los
levantamientos guerrilleros de las FALN (Fuerzas Armadas de Liberación Nacional) contra los
militares y policías que implementaron el nuevo patrón del terror para reprimir el alzamiento
armado (1962-67) 106. Se usaron los mismos métodos del terror de la guerra, que van de los
interrogatorios --con tortura incluida-- a los campos de concentración, denominados Teatros de
Operación Antiguerrilleros. Estos se ubicaron en toda la geografía nacional en Caburé, La
Marquesina, El Rayo, El Tocuyo, Yumare, Cachipo, El Guapo, Cocollar y Cumanacoa 107.
Se
usaron los mismos tribunales militares --que el propio Pérez Jiménez utilizaba-- para juzgar y
condenar a los sublevados ya fueran civiles o militares.
Durante y después de la derrota de la guerrilla en Venezuela el estado desarrolló cambios
en la policía política --que tomó el control de la aplicación del "terror" para supervisar y vigilar
a los rebeldes y callar a los críticos que sobrevivieron el conflicto. A la violencia y la tortura se
añadió el soborno y la extorsión a muchos líderes de la izquierda venezolana. Lamentablemente
en ningún momento la democracia se fundamentó en la reconstrucción de un consenso político y
104
Para un análisis completo sobre el fracaso de la lucha armada en Venezuela, ver Octavio Beaumont Rodríguez,
¿Por qué fue derrotada la lucha armada en Venezuela? (Caracas: UBV, 2007).
105
Sobre la sofisticación del sistema terrorista, ver el capítulo: Torturadores, desaparecidos y muertos (1959-1998),
Ibid., 55-57.
107
Ibid.55.
82
unas reglas de juego claras y justas para todos. Los parámetros excluyentes que se impusieron
por la vía de la violencia, alimentaron la corrupción y el terror que se mantuvo vigente en su
intensidad aunque varió su alcance según las circunstancias. La derrota guerrillera significó la
victoria total de los partidos AD y COPEI y la doctrina del Pacto de Punto Fijo.
A partir de 1968 con la derrota de la guerrilla además cambiaría la frecuencia de los
patrones de acción del estado en guerra. El sistema pasa de la represión a la dominación. El
Pacto de Punto Fijo se viste de seda y se transforma --anunciando el triunfo de la democracia-con un cierre paulatino de los campos de concentración.
Se aplicó un cambio cualitativo
mediante el cual la coerción es ahora parte de una "sofisticada” represión que mantiene a la clase
trabajadora lejos de los beneficios de la renta petrolera. El terror es selectivo y se dirige en
particular a los líderes populares, a la izquierda política no corrupta, a los jueces, a los sacerdotes
de la teología de la liberación, a los periodistas, a los intelectuales y estudiantes que cuestionan el
“estatus quo.” La opresión, la represión y el terrorismo de estado tienen como audiencia siempre
las clases más pobres y en particular aquellos líderes que hacen demandas económicas y de
justicia contra el estado.
Esta breve, pero crítica evaluación del discurso "democrático" seriamente contrasta con
los trabajos que presentan sobre el sistema político venezolano durante este tiempo. Se habla de
uno de los modelos
de democracia estable dignos de imitarse en toda Latinoamérica.
Obviamente, esto trae a colación qué criterios usan los politólogos y sociólogos en orden para
evaluar la democracia. Dependiendo el estándar que se use, la democracia –como los derechos
humanos-- puede significar cosas bien opuestas. Si el criterio es únicamente el de mecanismos
electorales en el sistema político venezolano y la alternancia en el poder, éste es altamente
democrático y eficiente. Si el criterio es el estado de derecho, la separación de poderes y el
respeto a las leyes y a los derechos humanos; el sistema político venezolano es claramente
autoritario, represivo y terrorista, como lo señalaba Wolpin.
Es importante definir los criterios y los factores que conforman una verdadera
democracia. Teóricos sociales nunca mencionan modelos democráticos diferentes para países en
desarrollo y mucho menos criterios diferentes para Latinoamérica. Los politólogos tienen que
acordar si es posible medir la democracia de un sistema, examinando solamente los factores
satisfactorios del mismo.
Argumentar la existencia de unos parámetros de alguna manera
diferentes para medir la democracia en Latinoamérica es "condescendiente" en el mejor de los
83
casos y "racista" en el peor. Tampoco es apropiado crear un criterio diferente para medir la
democracia basándose simplemente en la existencia de un pasado absolutista. Varios autores -probablemente con muy buenas intenciones-- han concluido que el sistema de la IV República
era tan superior a aquellos del pasado que es permisible ignorar los elementos descalificadores
del sistema tal como se estableció. En resumen, la literatura que se enfoca en una relativa mejora
del presente con respecto a un pasado nefasto y la otra que se enfoca únicamente en la historia de
aquellos factores satisfactorios deja mucho que desear. Más, cuando se usan términos como
"revolución democrática," e incluso otros menos afortunados tales como "revolución dentro de la
ley," o "democracia racial" que ignoran los fundamentos básicos necesarios para la existencia de
un sistema democrático de derecho.
El oportunismo político tiene implicaciones importantes. Primero, cualquier análisis
crítico que se enfocara en los aspectos negativos del estado era calificado inmediatamente como
"peligroso," y "amenazante" --esto ocurría en Venezuela incluso después de cuarenta años de
"experiencia" democrática. El crítico era calificado de “comunista” o de ser un “perezjimenista”
es decir en favor de un “futuro” o pasado autoritario. De la misma manera que el denunciante de
los abusos a los derechos humanos y el pacifista es frecuentemente acusado de traidor, antipatriota o algo similar en momentos de crisis. Entonces, se confunde convenientemente el estado
con la nación, --como ocurre abiertamente en los regímenes autoritarios-- y se ignora el hecho
fundamental que la libre crítica al estado es un requisito indispensable para la existencia de la
democracia misma.
Consecuentemente este criterio de que el estado está por encima de toda duda, común en
los regímenes autoritarios y fascistas, hace mucho más difícil el estudio de la realidad y la
mejora del mismo, ya que no se analiza aquello que se da por hecho. Algunas generalizaciones
han sido repetidas tantas veces durante la IV República que se transformaron de hipótesis de
trabajo en verdades incontrovertibles. Nadie dudaba del carácter democrático del sistema en
Venezuela, sencillamente porque democracia se equiparaba con la existencia de elecciones
periódicas y alternancia entre los dos partidos políticos dominantes. El mito no sólo reproducía
la hegemonía existente y asumía la realidad neo-colonial internacional sino que además afectaba
y distorsionaba la percepción de la realidad.
Afortunadamente y en último caso, calificaciones son siempre posibles y un examen
cercano de la realidad puede contrarrestar en cierto grado la literatura "triunfalista" de
84
investigación sobre él, un sistema político venezolano --IV República-- que exageraba los pocos
factores democráticos existentes en el mismo y que convenientemente ignoraba aquellos que lo
equiparaban con las peores dictaduras. Es interesante desde el punto de vista de las ciencias
sociales estadounidenses que Venezuela ahora carezca de estudios confiables ya que la mayoría
de los estudios hechos en el pasado era apologías del sistema anterior. Ahora, es la literatura
política “marginal” y “autóctona” la que toma relevancia en sus análisis políticos; ya que esta
literatura pronosticó los acontecimientos y la evolución política que ocurriría después. En
general los estándares democráticos que se aplican en este trabajo son los básicos que distinguen
una democracia liberal de otros tipos de regímenes políticos; en particular los objetivos definidos
en la propia Constitución venezolana de 1961. Sin idealizar la democracia liberal --que como
dijimos anteriormente-- utiliza el terrorismo de estado de forma selectiva y tan frecuentemente
como determine necesario para mantenerse en el poder.
En este contexto, Jorge Zaverucha distingue claramente entre regímenes civiles que están
en
transición democrática y aquellos que pueden definirse propiamente como regímenes
democráticos. Existen dos tipos de transición. La primera de un gobierno autoritario a un
gobierno electo democráticamente que puede o no completar una segunda transición: de un
gobierno electo democráticamente a un régimen democrático 108. El argumento es que la segunda
transición en Venezuela había sido bloqueada por los propios gobiernos de la IV República y por
los partidos políticos que gobernaban. La IV República era un régimen civil en transición
democrática con elementos de la misma como partidos políticos y elecciones. Si bien eran
gobiernos elegidos, estos acumulaban en el poder ejecutivo un autoritarismo presidencial que
contradice lo establecido en un régimen verdaderamente democrático. Es más, las reformas al
estado no se habían dirigido nunca a hacer la segunda transición necesaria a un régimen
verdaderamente democrático. Es más la presencia de un sofisticado régimen de terror de baja o
alta intensidad según las circunstancias que funcionaba con gran efectividad bloqueaba cualquier
evolución en la dirección deseada. En otras palabras no existía interés o voluntad política en
democratizar un régimen civil autoritario donde las elites mantenían el control político,
económico y social. La propia clase dominante, con sus partidos políticos, vivía por encima de
la ley.
108
Jorge Zaverucha, "The Degree of Military Political Autonomy during the Spanish, Argentine and Brazilian
Transitions," en The Journal of Latin American Studies, 25, 1993, 283-299.
85
Lo que no se decía entonces, ahora es obvio. El hecho de no avanzar en el proceso de
democratización exponía a toda la sociedad al riesgo de resucitar un régimen militar como
aquellos sufridos en el pasado o a un proceso revolucionario democratizador, como así ocurrió.
Es más, con el uso de la violencia y de las fuerzas de seguridad a la hora de resolver diferencias
entre venezolanos, se invitaba --de facto-- a la intervención política militar o militarista en la
política como para su sorpresa ocurrió con el alzamiento del Hugo Chávez Frías en 1992. En
otras palabras el "terror" invita al “contra-terror" y la violencia genera o termina generando más
violencia; y un rechazo visceral a las instituciones del estado.
En contraste al modelo venezolano, ha habido modelos liberal democráticos en
Latinoamérica que han sido más efectivos, tales como el chileno durante el período previo al
1973, el uruguayo antes de 1968, el costarricense que desmanteló sus fuerzas armadas y
posiblemente otros.
Estos países avanzaron más en el proceso de democratización que
Venezuela, si bien esos procesos fueron interrumpidos por diversas razones.
El "mito
democrático" de la IV República y su modelo es peligroso, ya que se pretende equiparar la
elección de civiles al poder con la idea del estado de derecho. Se enfoca en quién tiene derecho a
asumir el poder del estado, en vez de establecer claramente cuáles son los derechos y deberes del
estado para con la ciudadanía.
Estas críticas no son nuevas, habían sido presentadas anteriormente por varios
intelectuales y politólogos venezolanos. Ellos han estudiado todos los aspectos del sistema
político --no sólo el electoral-- y habían señalado los "fallos fundacionales” del sistema del Pacto
de Punto Fijo. Por ejemplo, Rubén Darío Alviarez 109 ha descrito el sistema político de la IV
República como "criatura deforme" e identificado solamente el derecho del ciudadano al voto
como el único aspecto democrático de todo el sistema. Guillermo O'Donnell menciona el peligro
de aquellos regímenes políticos que permiten la creación de grupos "para-militares" que operan
ignorando las leyes. En el caso de Venezuela, los grupos militares y ciertos sectores de la policía
han sido utilizados por el poder ejecutivo como grupos paramilitares o siguiendo la moda
terminológica presente --como sicariatos-- para implementar un sistema de terror de estado que
ignora las leyes fundamentales del país y los derechos de los ciudadanos.
109
Ver Rubén Darío Alviarez, La Democracia Venezolana, Criatura Deforme. (Caracas: Imprenta Universitaria de
la Universidad Central de Venezuela, 1987)
86
¿Por qué no existió un poder judicial poderoso e independiente durante la IV República?
R. Lynn Kelley "Venezuelan Constitutional Forms and Realities" da varias razones por las cuales
no se han hecho estudios sobre el sistema judicial en los países latinoamericanos, usando
Venezuela como ejemplo.
Estas razones están todas relacionadas con la falta de una historia constitucional real,
esto es, un real respeto por reglamentos y la solución pacífica de las disputas a través del uso de
leyes conocidas e imparciales. Solamente desde 1930 ha existido en Venezuela un esfuerzo real
en desarrollar una teoría de las leyes. Anteriormente, los pocos tratados existentes fueron
desarrollados por juristas que utilizaban sus talentos en justificar y escribir apologías para el
gobernante de turno en sus acciones como legislador. Estas teorías inevitablemente tenían un
carácter fascista, en ellas la noción de que la voluntad de la sociedad era ejemplarizada en la
figura de la persona del presidente y sus pronunciamientos eran básicamente leyes.
Mientras que tales teorías están de acuerdo con criterios mínimos sostenidos por
positivistas legales (en otras palabras, la ley existe si puede ser determinada o definida por la
"voluntad del soberano" cuya decisión es irrefutable), se ignoran aspectos importantes tales
como, conocimiento de la ley, equidad en la aplicación de las leyes y el justo uso de un proceso
legal justo que tenga en cuenta los cambios de opinión de la voluntad del soberano. La teoría
pos dictatorial legal venezolana se ha desarrollado despacio. Primero es evidente que el
desarrollo de teorías legales que no tienen precedentes es difícil sin una tradición histórica en la
práctica 110.
La primera parte de este argumento es apologético. Han existido en Latinoamérica y
Europa varias experiencias constitucionales que han tenido valor jurídico que podrían servir para
cubrir cualquier necesidad legal existente en Venezuela. Esto se ha hecho en otras ocasiones.
Existe una extensa cultura indígena, española y americana que podría ser adaptada para crear un
sistema legal de acorde con las necesidades sociales particulares existentes. Es más no tiene
sentido que haya dificultades en adaptar aquellas experiencias legales de los modelos europeos y
de los Estados Unidos cuando se han copiado modelos constitucionales, políticos, económicos e
incluso policiales y militares de estos mismos países con bastante precisión y efectividad.
La segunda parte del argumento que hace referencia al lento desarrollo del sistema
judicial venezolano durante el período "democrático" es superficial. Un análisis cercano al
sistema judicial venezolano nos muestra la notoria falta de recursos económicos y políticos
dedicados a la administración de la justicia durante todo el período de la IV República en sus
cuarenta años de existencia. Existió en el Pacto de Punto Fijo la decisión consciente, política, de
110
Ver el artículo de Kelley en John D. Martz and David J. Myers, Venezuela The Democratic Experience. (Nueva
York: Praeger, 1986), 43-47.
87
no desmantelar el carácter "militarista" y "absolutista" de la tradición judicial cultural del país;
así como una decisión consciente de dar al presidente –al poder ejecutivo-- capacidades y
atribuciones que correspondían al poder judicial. Existió la decisión política de debilitar el poder
judicial a propósito, para poder crear las “zonas de terror” establecidas por la doctrina de la
“seguridad nacional.” Por si fuera poco, el vacío constitucional de leyes y procedimientos
judiciales y penales democráticos se cubrió copiando leyes y procedimientos de sistemas "no
democráticos" tales como leyes de la dictadura pasada o europeas, tales como la franquista en
España 111. Esta falta de recursos y de voluntad política en la administración de la justicia
contrasta con la inversión económica y política del estado en crear un sistema sofisticado de
terror y coerción social. Esta realidad encubierta tal vez para el investigador extranjero o
visitante, nunca lo fue para el venezolano de ahí su desprecio hacia las clases políticas que
dominaron la IV República.
El estudio del sistema de la IV República venezolana nos enseña muchas lecciones
importantes acerca de las dificultades existentes en toda transición democrática. Ilustra los
problemas existentes para la creación de un modelo realmente democrático que respete las leyes
en un contexto cultural e histórico de autoritarismo y colonialismo. Específicamente, es un
ejemplo de la importancia de la necesidad indispensable de la educación política de la ciudadanía
y de crear un poder institucional ejecutivo que renuncia a la violencia y un poder judicial
claramente independiente para que el sistema realmente funcione 112. El respeto a la ley es el
principal legitimador y regulador de las relaciones sociales de todo tipo para que exista un
sistema "democrático.” Ni estado, ni la policía, ni el ejército, ni el propio presidente están por
encima de las leyes. El grado de democracia se determina por la habilidad del sistema en
111
La Ley de Vagos y Maleantes de la IV República era una copia textual de las leyes que impuso el General
Francisco Franco en España durante la dictadura militar. De acuerdo con a esta ley una persona puede ser recluida
por períodos de hasta cinco años, en base a una decisión administrativa, sin posibilidad de apelar esta decisión ante
un tribunal de justicia. Para colmo, a los acusados tan sólo se les informa del inciso de la ley que se les aplica y se
les otorga un plazo perentorio de tres días, para la promoción y evaluación de todas las pruebas que crea necesarias
en su defensa. El único que puede revocar la decisión de cárcel, es el gobernador del estado -- jefe de la policía en
la zona. Esa ley que fue usada frecuentemente por la IV Republica y daba al poder ejecutivo y a “su” policía la
capacidad de reprimir a los pobres y desempleados para los cuales no existían de facto derechos constitucionales.
Aunque la Ley de Vagos y Maleantes era claramente anticonstitucional; era aplicada y utilizada impunemente por la
propia policía judicial (PTJ), supuestamente garante de los derechos constitucionales de los venezolanos.
112
La mayoría de los estudios del sistema político venezolano durante la IV República se centraba básicamente en
la efectividad de sistema electoral y de partidos. Pocas veces se menciona y muy de pasada como funcionaba el
sistema judicial.
88
garantizar y proteger los derechos humanos básicos e individuales de los ciudadanos; y la
existencia de oficiales electos que cumplen y ejercen la ley.
En resumen la IV República fue un régimen civil autoritario que se estancó en su proceso
de democratización. A pesar de las elecciones y la alternancia de poder entre los dos partidos
políticos mayoritarios, la democracia estaba deformada por un aparato terrorista del estado que
impedía el diálogo y la integración social.
Este hecho redujo el ejercicio democrático al
"mínimo" y permitió la reproducción de la corrupción administrativa y judicial incluyendo la
creación de "zonas de terror" en la sociedad. El sistema político careció de algunas leyes básicas
necesarias y de las instituciones judiciales que defendieran los derechos constitucionales de los
ciudadanos.
El estado ignoró el objetivo constitucional básico de defender los derechos
humanos de todos los ciudadanos, particularmente el derecho a la vida en un ambiente de
civilismo y democracia participativa. El grito popular "no a la impunidad" dirigido contra el
estado y en particular contra el poder ejecutivo es quizás el mejor ejemplo de este fenómeno en
Venezuela.
La V República es una refundación del estado.
Parece un serio avance hacia la
democratización de Venezuela porque su Constitución define claramente los límites de un poder
ejecutivo que además renuncia a la violencia y proclama la defensa de los derechos humanos
básicos de todos los ciudadanos sin exclusiones. Abiertamente rechaza el modelo de seguridad
nacional del Pacto de Punto Fijo y cambia la cultura autoritaria y represiva policial y militar del
país; adoptando los principios de Núremberg en su mandato constitucional.
2.4. Un régimen civil autoritario de seguridad nacional.
Gurr señala que una condición necesaria para el desarrollo del terrorismo de estado es la
existencia de un grupo, clase, incluso partido político que es considerado por las élites
dominantes como una “amenaza” directa al poder establecido. En el contexto latinoamericano
existen elementos internos y externos que hay que tener en cuenta para entender las decisiones y
el papel de la élite gobernante.
El sistema dominante reaparece como una fuerza "interna", a través de las prácticas
sociales de grupos sociales y clases que tratan de reforzar los intereses extranjeros, no
89
precisamente porque sean extranjeros sino porque estos intereses y valores coinciden con los
propios intereses y aspiraciones de estos grupos 113.
Después de la segunda guerra mundial, la ideología oficial que justifica la necesidad y la
existencia del terrorismo del estado “democrático” estaba basada en una concepción bipolar de la
confrontación entre el Oeste y el Este (USA vs. USSR): la amenaza del comunismo. La filosofía
estadounidense de la seguridad nacional para el hemisferio no era otra que contener el
comunismo por necesidad militar para ganar la guerra.
La versión latinoamericana estaba
definida no sólo en el contexto geopolítico de la guerra fría sino también en el histórico neocolonial de la doctrina Monroe. Sin embargo, incluso si no existía contradicción entre ambos
contextos, había un énfasis de lo político --contención del comunismo a cualquier costo—que
reforzaba su contraparte económica y suponía defender los intereses económicos de las
corporaciones estadounidenses en América Latina.
El significado era claro los intereses
globales –macro políticos-- de los Estados Unidos en el hemisferio eran prioritarios a cualquier
otro. Estaba incluso por encima de la doctrina Monroe y mucho más todavía sobre los intereses
"nacionalistas," autonómicos, soberanos e incluso liberal-democráticos de los estados al sur del
Río Bravo. Además, la guerra fría era una guerra caliente que se peleaba en las trincheras de la
periferia: Asia, África y América Latina.
Para los Estados Unidos y el resto de Latinoamérica la versión icónica del modelo
geopolítico presentaba al estado como una unidad orgánica, "la fusión o integración de millones
de voluntades en una única voluntad común en guerra contra cualquier discrepancia o
diferencia." La versión estadounidense enfatizaba la existencia de enemigos externos, pero la
versión latinoamericana se concentraba en la existencia de “enemigos” internos, quienes
debilitaban y amenazaban la seguridad del sistema nacional y hemisférico. Los comunistas eran
una plaga a exterminar en toda América y había muchos en América Latina 114.
Estos
subversivos o posibles traidores deberían ser tratados militarmente. Por lo tanto el modelo
icónico geopolítico al enfatizar la represión política --no como una excepción--, la convierte en
un proceso natural y necesario para preservar la seguridad nacional. El modelo geopolítico
icónico racionaliza y legitima la represión, sin embargo el mismo modelo para proteger su
113
Fernando Henrique Cardoso y Enzo Faletto, Dependency and Development in Latin America. (Berkeley:
University of California Press, 1979), xvi.
114
Ver “El Presidente John F. Kennedy aprobó el Plan “América” para la intervención armada de los Estados
Unidos a Venezuela.” Escrito por Allen Scott y publicado en el Miami Herald el 10 de octubre de 1963. En
Beaumont, ¿Por qué fue derrotada la guerrilla armada en Venezuela?, 124-125.
90
ideología “democrática” nunca define estos mecanismos como represivos sino como
"defensivos” 115.
El aspecto "interno" de esta ideología para Latinoamérica es institucionalizar
permanentemente la necesidad de una "cacería de brujas" en tiempos de relativa paz social y la
necesidad de una guerra protráctil en el peor de los escenarios. Venezuela durante el período
democrático no ha sido la excepción sino todo lo contrario, uno de los principales escenarios
para la implementación de ambas posibilidades. El modelo de represión terrorista venezolano,
exitoso según el Pentágono, fue aplicado después otros países, sobre todo en materia de
desaparecidos 116.
La ideología de la seguridad nacional en Venezuela fue más sofisticada que otras
versiones latinoamericanas. Primero, el carácter doctrinal se vistió desde el principio de una
retórica de "defensa de la democracia" y del "orden constitucional" mientras que al mismo
tiempo se combatía “el comunismo, la subversión y la delincuencia." Segundo, la versión
venezolana es encabezada por un civil, una figura histórica de prestigio democrático como
Rómulo Betancourt y un partido Acción Democrática (AD) de larga trayectoria en la lucha por la
democracia y contra la dictadura. Muchos de sus líderes durante el período entre 1949- 1958
murieron y sufrieron cárcel y tortura a manos de la dictadura. AD era un partido con miles de
mártires en la lucha por la democratización del país, que ayudaron al restablecimiento de un
gobierno civil, y que prometía una reforma agraria seria y el uso del sufragio universal.
Betancourt usó su prestigio y el de su partido (AD) obtenido por el gobierno de Rómulo Gallegos
durante el Trienio (1945-48) y en la lucha contra la dictadura (1949-58) para ganar las
elecciones, gracias al voto campesino.
115
McCarmant, "Governance without Blood," 32. También en la nota a pie de página 68, McCarmant menciona
algunos de los libros de geopolítica que escriben los generales latinoamericanos: el General Golberry do Couto e
Silva, líder ideológico de los militares brasileños publica Geopolítica de Brasil in 1964. Incluso el dictador chileno
General Augusto Pinochet publica un libro llamado Geopolítica en 1974. Otro ejemplo de la doctrina extremista
que resume el pensamiento militar y geopolítico argentino puede encontrase en inglés en Ricardo Zinn, Argentina,
A Nation at the Crossroads of Myth and Reality. (New York: Robert Speller & Sons, 1979). Un resumen de las
doctrinas de seguridad nacional en America Latina, también en ingles, es el artículo de Roberto Calvo in "The
Church and the Doctrine of National Security," Journal of Inter-American Studies and World Affairs. (Febrero
1979), 21-1:69-88
116
Si una “democracia” puede desaparecer a más de mil ciudadanos y torturar de decenas de miles con impunidad,
una dictadura puede hacerlo con mucha más facilidad. El trágicamente conocido manual de tortura KUBARK
creado y enseñado en la Escuela de las Américas—fue utilizado en la guerra contra las FALN primero en la década
de los años 60 en Venezuela. Luego, fue utilizado a escala masiva en Uruguay, Brasil, Paraguay, Chile y Argentina
por las dictaduras de turno.
91
Sin embargo, una vez en el poder, la nueva ideología de Rómulo Betancourt expresa
claramente ya la necesidad de un "realismo" geopolítico –llamado Pacto de Punto Fijo. Este
requiere la exclusión de ciertos sectores mayoritarios por razones de “seguridad nacional” y que
son impuestos desde Washington. Fundamentalmente, Venezuela no puede seguir una iniciativa
política propia, mucho menos incluir alternativas que pueden categorizarse como “socialistas,”
por la sencilla razón de que los Estados Unidos nunca permitirían un desarrollo político o
económico de este tipo. Menos en un país petrolero en su área de influencia y cuyo petróleo EE
UU necesita estratégicamente para la estabilidad de su economía, mientras está implicado en una
guerra con la República de Vietnam del Norte. Estos principios de exclusión de la izquierda son
de carácter doctrinal, no requieren argumentación y no serán susceptibles a cambios hasta el fin
de la guerra fría, la caída del muro de Berlín y la desaparición física de la Unión Soviética.
Los principios de exclusión fueron formalmente establecidos en el Pacto de Punto Fijo
por Rómulo Betancourt (AD), Jovito Villalba (URD) y Rafael Caldera (COPEI), quienes fueron
los agentes, ideólogos y representantes de sus partidos políticos. La doctrina Bentacuriana de
Punto Fijo repetida día a día, en los medios de comunicación, fue efectiva en su objetivo final de
establecer la doctrina de seguridad nacional del estado como "sacrosanta” 117.
La filosofía política comunista no se compagina con la estructura del estado venezolano,
ni el enjuiciamiento por ese partido de la política internacional que debe seguir Venezuela
concuerda con los mejores intereses del país 118.
La ideología ofrece una fachada internacional de "respeto formal" de los derechos
humanos al incluir varios artículos constitucionales e incluso adoptar las convenciones
internacionales de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas. Esto permite además la
acusación a los comunistas de no hacer lo mismo. Sin embargo, estas provisiones humanitarias
son "formales" y nunca se aplican a las leyes nacionales; ya que no existe un sistema judicial
autónomo que pueda determinar su constitucionalidad, obligación y aplicación.
Francisco Miró Quesada, en su estudio "Human Rights in Latin America" 119, presenta un
análisis de la evolución de los conceptos jurídicos en las repúblicas latinoamericanas. Miro
117
Para entender el carácter doctrinal de la política de la ideología de Seguridad Nacional de EE UU ver Noam
Chomsky, The Culture of Terrorism. (Boston: South End Press, 1988), 119.
118
Rómulo Betancourt, discurso de inauguración del su gobierno, 13 de febrero, 1959. En Carlos Dorante, Rómulo
Betancourt Ideas y Acción de Gobierno, antología de conceptos 1959-1964. (Caracas: Ediciones Centauro, 1987),
123.
119
Francisco Miró Quesada, "Human Rights in Latin America," in Ricoeur ed., Philosophical Foundations of
Human Rights. (Mayenne, France: UNESCO, 1986), 304-317.
92
Quesada argumenta que las repúblicas latinoamericanas usaron como modelos las constituciones
de los Estados Unidos (1787) y de la “Declaración de los Derechos del Hombre y del
Ciudadano” durante la Revolución Francesa (1789). Sin embargo, desde un punto de vista de la
filosofía jurídica fue la herencia cultural de España y Portugal la que se utilizó para la
interpretación de las leyes y documentos legales. Por lo tanto, el concepto de la democracia -- tal
como se interpreta en España, Portugal y Grecia por ejemplo-- incluyen un conjunto de
instituciones formales y de derechos individuales que emanan y son garantizados por el estado, y
no son interpretados como en los países anglo-sajones o del norte de Europa como derechos
inalienables y naturales.
No existen derechos excepto aquellos especificados en las leyes, y si no existe una ley que
proteja un derecho en particular, este derecho no existe en la realidad. Si no existe la ley
específica no se puede argumentar la violación o el infringimiento del derecho de la persona 120.
En este contexto jurídico es posible mantener una retórica formal de defensa de los
derechos humanos y al mismo tiempo violar o ignorar los mismos derechos. Es más, es posible
usar palabras de respeto a los derechos humanos como de hecho ocurría en Venezuela, y al
mismo tiempo pasar leyes inconstitucionales que eliminan o coartan estos derechos humanos en
la práctica. Esto permite el desarrollo y mantenimiento de la impunidad del aparato de terror del
estado.
Sin embargo, la retórica democrática no es tan importante como la retórica de lucha
contra rebeldes y delincuentes –criminales-- de las clases pobres. Es en este aspecto de la
ideología de la seguridad nacional donde el contexto de la guerra fría se hace muy evidente. La
justificación de la guerra contra los rebeldes tiene varias etapas. Primero, la "demonización"
verbal del "enemigo." En este caso, se presenta siempre al oponente como un agente del
comunismo “extranjero” y segundo como un “criminal.” Durante los años sesenta, el término
que define al oponente político usado es "castro-comunista." El objetivo es poner de manifiesto
que aquellos que pelean contra el gobierno no son realmente venezolanos. Ellos tienen una
visión diferente de su país, son agentes pagados, mercenarios de Cuba o Rusia, y así lo expresa el
propio presidente Rómulo Betancourt.
120
Ver Pollis y Schwab, "Human Rights," 13. Por eso la Constitución Bolivariana es extensa y reiterativa en
muchos casos y aunque algunos la acusan de ser un programa político, su pecado es la defensa reiterativa de los
derechos humanos de los venezolanos. Se trata de un intento constitucional de eliminar la diferencia entre el país
legal y el país real. Una diferencia que permite que leyes anti-constitucionales y el terrorismo se enquisten dentro
del aparato del estado como ocurrió con la Constitución de 1961.
93
Venezuela ha soportado, como ninguna otra nación americana, el embate del castro
comunismo. Venezuela ha sido para el gobierno de La Habana, una obsesión. Y también su
más rotunda derrota. Desde 1959 a la fecha, Fidel Castro --como delincuente internacional-no ha hecho otra cosa que buscar el modo de abatir la democracia venezolana 121.
Segundo, los rebeldes son criminales del “tipo” de los líderes comunistas Fidel Castro y
Nikita Kruvchev. Estos son definidos como criminales internacionales mentores de los rebeldes
como si fueran miembros de una mafia criminal. La forma de enfatizar el carácter "criminal" del
movimiento guerrillero es poner precio por cabeza de mayor a menor a todos sus líderes. Esto se
hace al mejor estilo de las bandas de criminales de las películas del oeste norteamericano. La
mayor recompensa era la ofrecida por Douglas Bravo (6.000 bs.= $1.700). Por otros guerrilleros
“menos valiosos” ofrecían 3.000 bs. Esta rebelión, obviamente justificaba y "legalizaba" la
necesidad de implementar operaciones de "limpieza" en todo el ámbito nacional, incluyendo la
universidad; tal como el propio Betancourt las definía.
"...la cátedra no puede ser utilizada en Venezuela, de acuerdo con la Constitución y las
leyes, para realizar un proselitismo contrario a la nación y en favor de la Rusia y de Cuba
comunistas. La administración pública está siendo radicalmente limpiada de militantes de
ambos partidos." (MIR/PCV) 122.
La “doctrina Betancourt” establece dos zonas claras para el ejercicio del terror de estado.
El alcance de la primera zona del terror tiene como objetivo un sector específico de la población:
disidentes activos. Lógicamente aquellos miembros de la izquierda o ultra derecha, así como
todos aquellos que al denunciar la "corrupción" ponen en peligro el sistema. El alcance y la
intensidad del terrorismo de estado varían durante el período de la insurrección (1961-67)
mientras existe una confrontación directa y frontal contra estos grupos.
Los niveles de
terrorismo y contra terrorismo sólo pueden ser entendidos en términos de una guerra civil no
declarada. Se producen masacres de campesinos sospechosos de ayuda a la guerrilla 123, campos
de concentración -definidos como Teatro de Operaciones- donde se torturaba a los prisioneros
121
Ver, Venezuela: Seis años de agresión. (Caracas: Oficina Central de Información, ?), 5. La terminología del
"Castro-comunismo" fue adoptada en los documentos de los EE UU; ver Castro-Comunist Insurgency in
Venezuela. A study of Insurgency and counterinsurgency operations and techniques in Venezuela. (Washington,
D.C.: Atlantic Research Corporation, 1964).
122
Esto es interesante ya que Venezuela nunca estuvo en guerra con Rusia o Cuba. Rómulo Betancourt, Miraflores,
15 de octubre, 1962. Ibíd., 125
123
El sacerdote y párroco de Sanare, Padre Oscar Freitas denunció las masacres de familias completas de
campesinos. El caso de la familia Colmenares está documentado por un testigo superviviente Nabor Colmenares.
Estas masacres ocurrían siempre en zonas donde había actividad guerrillera. Muchas veces campesinos asesinados
eran llevados a zonas de combate y se les hacía pasar por combatientes de guerra.
94
que luego serian asesinados y desaparecidos 124. A parte se regulariza el uso de las palizas y la
tortura sistemática de prisioneros; y el uso de tribunales militares en muchos casos 125.
Después de 1967, durante el período de pacificación emerge un sistema que existe hasta
1999 de baja frecuencia, salvo en períodos de emergencia y se mantienen en la mira grupos
"potenciales" de rebelión, tales como estudiantes, trabajadores, campesinos
y grupos
subversivos. La intensidad de las violaciones de derechos humanos se extiende de asesinatos
(sicariato), secuestros policiales, desaparecidos, tortura, persecución, amenaza policial y el uso
de los tribunales y leyes militares pero el número de casos disminuye sensiblemente.
La
audiencia política y las zonas de terror se mantienen e incluyen a un grupo completo de
disidentes políticos, periodistas, académicos, profesores, activistas de derechos humanos y en
particular todos aquellos que no pertenecen a los partidos políticos del estatus quo, tales como
AD y COPEI.
Si la primera zona de terror es claramente política, la segunda zona del terror
"democrático" es social, y es importante, debido a su intensidad y a la cantidad de personas que
afecta; me refiero a los pobres y desempleados. El alcance y la intensidad de la violación de los
derechos humanos contra este grupo social no pueden minusvalorarse; ya que expone en toda su
plenitud el carácter intrínseco anti-democrático del estado, incluyendo el sistema judicial
venezolano, en su aplicación de las leyes durante la IV República. Este grupo es excluido
incluso de las estadísticas y sus víctimas no sólo de asesinato sino que son sistemáticamente
victimas de brutalidad policial, tortura, violaciones e aprisionamiento inhumano. Se establecen
condenas indeterminadas en condiciones infrahumanas --ya que la mayoría de las cárceles
venezolanas, sino todas-- carecían de las condiciones de habitabilidad mínimas requeridas para la
existencia humana. Muchos "ciudadanos" son frecuentemente encarcelados usando leyes anticonstitucionales; tal como la Ley de Vagos y Maleantes y sometidos a una situación penal
124
Los primeros desaparecidos son Jesús María Vázquez (1961), Julio César Rodríguez, Amado Antonio Petit
Colina, Toribio García (1962), Mario Colmenares (1963) Rubén Darío Álvarez (1964). Durante el Gobierno de
Leoni desaparecen, no sólo líderes políticos comunistas sino todo tipo de opositores desde campesinos a maestros de
escuela. Algunos casos documentados son Ramón Soto Rojas, Trino Barrios, Heriberto Cartagena, Carmelo
Mendoza, Rafael Madera, Fabricio Ojeda Negretti, Alberto Lovera, Luis Rafael Tineo, César Burguillos, Donato
Carmona, Juan Mollejas, Ramón Pasquier, Juan y Agustín Ollarves, Víctor Tirado, Felipe Malaver, Bartolomé
Vielma, Leonel Petit, Higinio Ortiz, Juan Francisco Lugo, José Agustín Petit Colina, Saúl Morales, Palermo
Ordóñez, Julio Molina, Nicolás Hurtado Barrios, Alejandro Tejero Cuenca, Francisco Palma, Eduardo y Alejandro
Navarro. Se calcula un total de al menos mil ejecutados y desaparecidos.
125
Ver David Nieves, La Tortura y El Crimen Político: Recursos de un Sistema en Apuros. (Caracas: Poseidón
Editores, 1979)
95
injusta, en condiciones horrendas y esperando durante meses y años por una decisión
administrativa o un juicio que no llega. Estas personas son víctimas de un sistema “kafkiano” ya
que carecen del dinero para pagar abogados o "administradores" de "justicia" para que sus casos
judiciales tengan una salida definitiva.
Los tres instrumentos del terrorismo de estado en la IV República fueron: el sistema
judicial, las policías y las cárceles. Primero, el sistema judicial en su totalidad carecía del poder,
de la filosofía legal de la justicia y de los recursos económicos e instrumentos legales y políticos
necesarios para operar con normalidad. No podía defender los derechos políticos y humanos del
ciudadano sin discriminación de ningún tipo. Los tribunales y los jueces carentes de poder real
eran frecuentemente víctimas del terrorismo judicial imperante del país. El juez era vulnerable a
las presiones no sólo del estado sino de particulares también. El segundo instrumento fueron las
policías y sus mafias internas. El número de diferentes policías que compiten y que operaban
creaba la confusión y el caos necesario para violar las leyes. La policía política DISIP (ex
DIGEPOL) un cuerpo policial que sería definido en el mejor en términos de fuerza para-militar
del poder ejecutivo o del Presidente fue utilizado para la represión de disidentes políticos. Las
Fuerzas Armadas de Cooperación (FAC) o Guardia Nacional eran las encargadas de operaciones
de limpieza de guerrilleros o estaban a cargo de un sistema penal que no cumplía con las
condiciones humanas mínimas para su funcionamiento. La Policía Técnica Judicial (PTJ), que
en nombre de la lucha contra el crimen --y aprovechándose de un poder judicial débil-- violaba
sistemáticamente los derechos humanos y legales de los ciudadanos en lugar de respetar las leyes
que juraba defender. Además, habría que incluir que la Dirección de Inteligencia Militar (DIM)
(ex SIFA) que también se involucraba en hechos de terrorismo de estado y dependía del
Ministerio de Defensa.
Finalmente, el tercer instrumento y el epitome del terrorismo de estado durante el periodo
"democrático" fueron sin duda las atroces cárceles venezolanas. En ellas se ha sistematizado una
historia de cuarenta años de indignidades, torturas y violaciones de los derechos humanos más
básicos; que descalifican toda pretensión democrática necesaria a un estado de derecho 126.
126
Aquí las denuncias de la organización American Watch son interesantes ya que en sus reportes de los años 90
define las cárceles de Venezuela como las más peligrosas de América Latina --honor que compartía con Brasil. La
tortura, el crimen, las drogas, las violaciones y otras muchas violaciones de los derechos humanos básicos eran
rutina diaria. El hacinamiento de personas en las cárceles eran un riesgo para la salud y la seguridad pública. Se
encerraban en las mismas celdas a disidentes políticos, ladrones, prostitutas, vagos o desempleados sin papeles con
asesinos y criminales de alta peligrosidad.
96
2.5. La V República, nuevo modelo geopolítico de seguridad y soberanía.
El desmantelamiento de un modelo civil autoritario de seguridad nacional y el
establecimiento de un régimen realmente democrático no son fácil, pero tampoco es imposible.
Requiere antes que nada una ruptura constitucional sin la cual sería muy difícil empezar. La IV
República nació mal, defectuosa e inmersa en una guerra civil con dos conceptos de soberanía
totalmente contradictorios. La victoria del Pacto de Punto Fijo determinó la victoria de la
República de la exclusión y el fin del “espíritu del 23 de Enero.” La V República si se quiere es
consecuencia de la IV, ya que significa la superación de sus defectos. Se define como la
República de la inclusión -- un intento de integrar a todos los anteriormente excluidos--, y
rescatar el espíritu democrático y soberano del “23 de Enero.”
De ahí la necesidad de una
Asamblea Constituyente para refundar la república de la inclusión. “Venezuela ahora es de
todos,” es uno de los eslóganes de la Revolución Bolivariana que aparece en todas partes. Este
mantra es la refundación y reformulación política y social de la nación se define claramente en su
preámbulo constitucional.
…con el fin supremo de refundar la República para establecer una sociedad
democrática, participativa y protagónica, multiétnica y pluricultural en un Estado de justicia,
federal y descentralizado, que consolide los valores de la libertad, la independencia, la paz, la
solidaridad, el bien común, la integridad territorial, la convivencia y el imperio de la ley para
estas y futuras generaciones;…(Preámbulo, Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela)
La primera acción fundacional es el desmantelamiento del terrorismo de estado. Para
ello, la Revolución bolivariana tiene dos facetas: por un lado el rescate de la memoria histórica
de las víctimas; y por otro lado el cambio radical del carácter represivo del estado y de sus
instrumentos de control. La nueva Constitución tiene que redefinir al estado, particularmente al
poder ejecutivo, al poder judicial y a las policías y las Fuerzas Armadas. Ambos factores sirven
para construir esta nueva identidad republicana que substituye los principios e ideologías
militaristas de “seguridad nacional” que rigieron las acciones del estado durante la IV República.
La nueva redefinición de la nación y del nuevo sistema democrático tiene todas las
características del modelo de derechos humanos básicos de “seguridad y subsistencia” que
defiende el filósofo humanista Henry Shue.
Asimismo, necesita como bien señala Fornet-
Betancourt recuperar la memoria histórica.
97
La memoria histórica potencia la capacidad de juzgar éticamente y, con ello, la práctica
de la crítica del sujeto. Además la memoria histórica confronta a la filosofía con el desafío de
recuperar y activar aquellas experiencias históricas liberadoras testimoniando situaciones de
sufrimiento y de injusticia… Deben ser rememoradas en tanto que son momentos de una historia
de liberación todavía abierta y porque son precisamente memoria (hechos para recordar) del
despertar de la libertad humana en la lucha del ser humano por la realización de un orden
racional justo 127.
Por lo tanto, la memoria histórica no es sólo reconocer muertos e identificar
desaparecidos y denunciar los crímenes de estado; es recuperar las biografías de liberación de los
caídos en el combate por la justicia y así recuperar la soberanía nacional. Por supuesto, hay
renunciar a la ideología de la doctrina Betancourt y a sus conexiones internacionales con las
doctrinas de seguridad nacional hemisférica y hay que eliminar las zonas y los instrumentos de
terror. Pero es tan importante rescatar la memoria de los que cayeron. En este sentido hay dos
organismos que trabajan en este sentido en Venezuela. Se crea dentro de la sede Universidad
Bolivariana de Venezuela (UBV), en la Dirección de Estudios Avanzados, un colectivo para
construcción de la Memoria Histórica de los años 60. Este centro dirigido por el antropólogo
venezolano Pedro Pablo Linarez está llevando a cabo un registro de casos de desaparecidos y sus
historias durante la IV República. Asimismo, la propia UBV empezó a publicar libros y trabajos
de mártires o víctimas de la “democracia” que habían sido censurados o no publicados durante la
IV República por motivos políticos sobre temas relacionados con la historia o política
venezolana. Además, Alberto Enrique Lovera crea y dirige la Asociación Bolivariana contra el
Silencio y el Olvido 128, que se encarga básicamente de llevar a cabo la reconstrucción histórica
de violaciones de los derechos humanos que estaban ocultas durante la IV República.
La memoria histórica y la renuncia a la doctrina Betancourt llevan a una nueva política
exterior de soberanía nacional. La Revolución Bolivariana para triunfar necesita defender su
soberanía de los EE UU. Una defensa que fue facilitada desde Washington con los gobiernos de
George Bush que mostraban su peor cara violando leyes internacionales y con la invasión ilegal
de Irak. Hay que añadir la participación y reconocimiento oficial del gobierno de EE UU al
“presidente golpista” Pedro Carmona del golpe de estado del 11 de abril del año 2002 contra el
127
Fornet-Betancourt, Interculturalidad y Globalización, 89.
El director Alberto Enrique Lovera no es otro sino el hijo de Alberto Lovera, miembro del Partido Comunista de
Venezuela (PCV) y Comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Liberación Nacional (FALN), quien fuera
detenido el 18 de octubre de 1965 y brutalmente asesinado y desaparecido días después por la DIGEPOL y el SIFA.
Su cadáver fue lanzado al mar, pero fue rescatado por un pescador en la playa de Lecherías. El cuerpo mostraba las
marcas de las torturas y la violencia a que fue sometido antes de morir.
128
98
Presidente Constitucional Hugo Chávez Frías, liquidó la posibilidad de ambigüedades. El golpe
militar trató de restaurar la Constitución de 1961, es decir la IV República. También, los
seguidores del auto-proclamado presidente Pedro Carmona, empezaron a perseguir y a buscar a
los “chavistas” en sus casas; y a cometer actos de violencia física contra la embajada de Cuba en
Caracas. Afortunadamente, la reacción popular fue masiva y rápida y el mismo 13 de abril, los
golpistas no tuvieron otra que salir del Palacio de Miraflores, irónicamente – protegidos y
protegiéndose en los derechos humanos constitucionales que la V República-- les otorgaba.
Derechos que fueron respetados al pie de la letra.
Estos hechos facilitan el desenmascaramiento de las políticas encubiertas de EE UU que
permeaban todas las políticas de la IV República y de la actual oposición al gobierno
bolivariano; que ambiguamente, se acoge y se niega a aceptar las nuevas reglas de juego según
se presenten las circunstancias a su favor o en contra. Tras el fallido golpe militar y el paro
petrolero –organizado por la oposición a la Revolución-- la Revolución Bolivariana tuvo que
enfrentar la realidad. Se presentó la oportunidad de depurar filosóficamente y físicamente dos
organizaciones claves para el país, La Corporación estatal Petróleos de Venezolana SA
(PDVESA) y las Fuerzas Armadas. Substituyó y sacó del poder a todos los elementos anticonstitucionalistas y “golpistas” que convivían dentro de ambas organizaciones.
Después de golpe, con el poder moral y ético que le da la propia Constitución de repudiar
y denunciar a los golpistas y la participación de los EE UU y sin revanchismos se llevó a cabo
una reforma profunda de las Fuerzas Armadas. La reforma sigue los lineamientos del Proyecto
Nacional Simón Bolívar, un plan estratégico cívico-militar con una visión geopolítica que incluía
a las Fuerzas Armadas en su nuevo papel en la vida social venezolana de la defensa de los
derechos humanos de los ciudadanos.
Antes del golpe ya había un esfuerzo importante para cambiar la imagen tradicional
represiva que tenía el ejército venezolano; y que había plagado de muertos y desaparecidos la
historia de las dictaduras militares anteriores y de la IV República. Primero, se habían tomado
medidas importantes que rompían el hermetismo de las Fuerzas Armadas, que existía durante la
IV República. Por ejemplo, se da el derecho al voto en las elecciones políticas a los militares y
se crea la Reserva Nacional –voluntarios civiles que forman en su tiempo libre parte de nuevas
unidades del ejército y que está abierta a personas sin discriminación de edad o género. Además,
se fomenta la participación de la mujer en todas las fuerzas armadas, abriendo las puertas a
99
cuerpos del ejército de operaciones especiales. Se abren las puertas de las universidades civiles,
incluyendo la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV), a miembros del ejército que
quieran estudiar en la misma; y asimismo la Universidad Nacional del Ejército y las Fuerzas
Armadas (UNEFA) abre sus puertas a los civiles que quieran estudiar en un ambiente militar.
Por primera vez, se nombra a un civil, a un defensor destacado de los derechos humanos, José
Vicente Rangel como ministro de la Defensa. También, se abren los cuarteles para prestar
servicios médicos y sociales básicos a personas que los necesiten en diversas actividades y
campañas de educación y salud pública.
Todas estas actividades sociales y políticas cambian radicalmente la imagen de un
ejército represor --al que el pueblo tenía pavor-- a un ejército del pueblo, que ahora celebra. El
Ejercito Bolivariano después de once años de revolución tiene un récord impecable de respetar la
vida y los derechos de seguridad personal de los venezolanos; que es una de las conquistas más
importantes hasta el momento. Los cuarteles y el ejército han sido refugio y ayuda en momentos
de emergencia nacional y catástrofes naturales.
Además el ejército ha participado en las
campanas sociales de educación y salud. Estas reformas concluyen con la aprobación de la Ley
Orgánica de las Fuerzas Armada Nacional Bolivariana el 22 de julio de 2008. La Ley codifica
en todos sus aspectos el mandato constitucional de defensa de los DUDH dentro de las Fuerzas
Armadas Bolivarianas (FAB). Materializa uno de los principios políticos de crucial importancia
un sistema político democrático y moderno que es el control civil sobre lo militar pero según lo
determinan las leyes. El poder militar, como en la mayoría de los países democráticos cae
directamente en el Presidente del país y en las manos del ministro de la defensa de turno, pero
con límites constitucionales y legales claros, incluyendo el derecho a la desobediencia militar en
los casos de violaciones de los derechos humanos a civiles.
Además de defender el país, la
FAB, sus universidades y cuarteles, participan activamente en proyectos civiles del estado que
tienen que ver con el desarrollo del país y no sólo en momentos de emergencia nacional. Es
decir los militares oficialmente pueden ser encomendados con actividades civiles cuando las
circunstancias y el gobierno lo requieran.
100
Constitución Bolivariana de la República de
Venezuela
Art. 45
Se prohíbe a la autoridad pública, sea civil o
militar, aun en estado de emergencia, excepción
o restricción de garantías, practicar, permitir o
tolerar la desaparición forzada de personas. El
funcionario o funcionaria que reciba orden o
instrucción para practicarla, tiene obligación de
no obedecerla y denunciarla a las autoridades
competentes.
Los autores o autoras
intelectuales y materiales, cómplices y
encubridores o encubridoras del delito de la
desaparición forzada de personas, así como la
tentativa de comisión del mismo, serán
sancionados de conformidad con la ley.
Ley Orgánica de las Fuerza Armada
Bolivariana (LOFAB)
CAPITULO IV
Derechos Humanos y del Derecho Internacional
de los Conflictos Armados
Ente Rector
Art. 133
El Ministerio del Poder Popular para la Defensa es
el ente rector del Sector Defensa en materia de
Derechos Humanos y de Derecho Internacional
Humanitario y establece la estructura organizativa
y reglamentaria necesaria para la promoción,
vigilancia y defensa de estos derechos, mediante la
Adopción de políticas y doctrinas.
Art. 46
Toda persona tiene derecho a que se le respete Respeto al Derecho Internacional Humanitario
su integridad física, psíquica y moral, en Art. 134
consecuencia:
Los integrantes de la Fuerza Armada Nacional
Bolivariana, deben conocer, respetar, cumplir y
1. Ninguna persona puede ser sometida a hacer cumplir las disposiciones legales nacionales
penas, torturas o tratados crueles, y los convenios, tratados y acuerdos
inhumanos o degradantes practicando o internacionales suscritos y ratificados por el
tolerado por parte de agentes de Estado, Estado Venezolano, en materia de Derecho
tiene derecho a la rehabilitación.
Internacional Humanitario.
2. Toda persona privada de libertad será
tratada con el respeto debido a la Respeto a los Derechos Humanos
dignidad inherente al ser humano.
Art. 135
Los integrantes de la Fuerza Armada Nacional
3. Ninguna persona será sometida sin su Bolivariana deben conocer, respetar, cumplir y
libre consentimiento a experimentos hacer cumplir las disposiciones legales nacionales
científicos, o a exámenes médicos de e internacionales relacionadas con los Derechos
laboratorio,
excepto
cuando
se Humanos en tiempo de paz y en estado de
encontrare en peligro su vida o por otras excepción, actuando en el marco de los mismos.
circunstancias que determine la ley.
Formación y Capacitación
4. Todo funcionario público o funcionaria Art. 136
pública que, en razón de su cargo, Los integrantes de la Fuerza Armada Nacional
infiera maltratos o sufrimientos físicos o Bolivariana deben estar formados y capacitados
mentales a cualquier persona, o que permanente en Derechos Humanos y en Derecho
instigue o tolere este tipo de tratos, será Internacional Humanitario, conforme al principio
sancionado o sancionada de acuerdo con de progresividad contemplado en la Constitución
la ley.
de la República Bolivariana de Venezuela.
101
Después de un pasado histórico plagado de terrorismo de estado, este código ético en
defensa de los derechos humanos y del derecho humanitario internacional es parte fundamental y
revolucionario del nuevo pensamiento militar bolivariano. Las bases filosóficas dejan de ser
formales y tienen como inspiración inicial el pensamiento propio de Simón Bolívar y de Simón
Rodríguez, quien fuera maestro de Bolívar. Asimismo en las dimensiones de la educación
militar no son sólo existe “el deber militar” sino también el “deber social” que rompe el
hermetismo tradicional y establece relaciones cívico-militares de gran importancia para la
democracia. Así lo señala el art. 119 de la Ley Orgánica de la FAB. La educación en el Sistema
Educativo Militar incluye las dimensiones militar y cívico-militar.
Dimensión Militar: Exclusiva para los integrantes activos de la Fuerza Armada Nacional
Bolivariana, que comprende la educación en la conceptualización avanzada de las ciencias y
artes militares y en otras disciplinas científicas y tecnológicas, aplicadas a la defensa integral
de la Nación; en función de la misión de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana.
Dimensión Cívico-Militar: Dirigida al personal militar y civil de la Fuerza Armada
Nacional Bolivariana, la cual comprenderá todos los centros educativos de formación no militar
en sus diferentes niveles y modalidades.
Hay dos cuerpos dentro de la estructura de las Fuerzas Armadas que tienen una relación
especial con la población civil. Primero, la Guardia Nacional Bolivariana (Sección Quinta de la
Ley, arts.40-43) que tiene importantes actividades relacionadas con el transporte, conservación
de medio ambiente y responsabilidades policiales. Destaco aquí el art. 42, secciones 4, 5 y 6
porque determina las funciones policiales de la misma.
4. Ejecutar actividades de empleo de los medios de orden interno y policial del
componente en tareas específicas rutinarias, de conformidad con la ley respectiva;
5. Cooperar en las funciones de: Resguardo nacional, el resguardo minero y la
guardería del ambiente y de los recursos naturales.
6.Cooperar en la prevención e investigación de los delitos previstos en la legislación
sobre la materia de sustancias estupefacientes y psicotrópicas, contra el secuestro y la extorsión,
la seguridad fronteriza y rural, la seguridad vial, la vigilancia a industrias de carácter
estratégico, puertos y aeropuertos, control migratorio, orden público, seguridad ciudadana,
investigación penal, apoyo, custodia y vigilancia de las instalaciones y del patrimonio del Poder
Legislativo, Poder Judicial, Poder Ciudadano y Poder Electoral, y apoyo a órganos de
Protección Civil y Administración de Desastres;
Por otro lado, la ley crea la Milicia Nacional, compuesta de dos cuerpos: la Reserva
Militar y la Milicia Territorial. Ambas tienen una composición diferente a la tradición militar ya
102
que la conforman civiles que voluntariamente se alistan a la misma. Los reclutas son civiles que
viven bajo un régimen diferente al de un ejército regular. El deber social del civil es también
asumir una responsabilidad militar si así lo desea. La misión de este cuerpo cívico-militar se
estipula en el art. 44 de la LOFAB.
La Milicia Nacional Bolivariana tiene como misión entrenar, preparar y organizar al
pueblo para la Defensa Integral con el fin de complementar el nivel de apresto operacional de la
Fuerza Armada Nacional Bolivariana, contribuir al mantenimiento del orden interno, seguridad,
defensa y desarrollo integral de la nación, con el propósito de coadyuvar a la independencia,
soberanía e integridad del espacio geográfico de la Nación.
Dentro de las funciones existen atribuciones civiles, que se especifican en el art. 46 de la
LOFAB:
10. Orientar, coordinar y apoyar en las áreas de su competencia a los Consejos
Comunales, a fin de coadyuvar en el cumplimiento de las políticas públicas;
11. Contribuir y asesorar en la conformación y consolidación de los Comités de Defensa
Integral de los Consejos Comunales, a fin de fortalecer la unidad cívico-militar;
12. Recabar, procesar y difundir la información de los Consejos Comunales,
instituciones del sector público y privado, necesaria para la elaboración de los planes,
programas, proyectos de Desarrollo Integral de la Nación y Movilización Nacional;
13. Coordinar con los órganos, entes y dependencias del sector público y privado, la
conformación y organización de los Cuerpos Combatientes de Reserva, los cuales dependerán
administrativamente de los mismos, con la finalidad de contribuir a la Defensa Integral de la
Nación; Supervisar y adiestrar los Cuerpos Combatientes de Reserva, los cuales dependerán
operacionalmente del Comando General Nacional de la Milicia Nacional Bolivariana.
Por ejemplo, la Reserva Nacional ha sido desplegada y de mucha utilidad durante las frecuentes
elecciones que ocurren en Venezuela; su presencia ha facilitado la paz y la tranquilidad en las
jornadas electorales.
En resumen, el compromiso de recuperar la memoria histórica de
violaciones a los derechos humanos, el mandato constitucional de compromiso con la defensa de
los derechos humanos de la propia Constitución Bolivariana, los cambios introducidos por la
nueva Ley Orgánica de la Fuerza Armada Bolivariana en el Pensamiento Militar Venezolano en
su educación y ética militar son las bases del nuevo ejército venezolano.
Esto incluye la
restructuración de la Guardia Nacional Bolivariana con esta dimensión cívico militar y la
creación de una Milicia Nacional que incluye la Reserva Nacional de composición básicamente
civil dentro del propio ejército. Estas medidas parecen avances para una mejora significativa en
103
la defensa de de los derechos humanos de los venezolanos por parte de las Fuerzas Armadas de
Venezuela a las que hay que añadir una independencia ideológica significativa con las políticas
internacionales de terceros países. Todas estas medidas son necesarias para establecer un modelo
democrático de defensa de los derechos humanos básicos de “seguridad y subsistencia.”
2.6. El derecho a la identidad y el nuevo modelo Bolivariano de “seguridad ciudadana”
La reforma del poder judicial es una asignatura pendiente todavía y es parte de la
recuperación de la memoria histórica; ya que habrá que detener y enjuiciar a aquellos que
cometieron crímenes de estado durante los últimos cuarenta años. La investigación judicial de
los crímenes de la IV República no se ha hecho y lamentablemente no se ha enjuiciado a muchos
de los culpables. No se ha hecho justicia, y estos crímenes graves y que han sido definidos por el
ex ministro de defensa, ex vicepresidente de la V República, José Vicente Rangel como crímenes
de “lesa humanidad” no proscriben con el tiempo. Sin embargo, muestra lo difícil que es crear
un sistema judicial nuevo y bolivariano que responda a las necesidades reales del país. La
reforma aunque difícil es urgente para hacer cambios estructurales que conviertan al poder
judicial en el árbitro más efectivo en la defensa de una cultura democrática de la defensa de los
derechos humanos en Venezuela. La reforma crearía la infraestructura judicial que necesita el
país para la defensa de los derechos humanos de un modelo completo de “seguridad ciudadana”
que reclama la Constitución 129.
Durante la IV República el poder judicial violaba los derechos humanos de seguridad de
sus ciudadanos --la presunción de inocencia, la defensa, el derecho a ser juzgado sin demora, el
derecho a la reparación de la injusticia-- y el debido proceso –a ser juzgado por un tribunal
competente, independiente e imparcial y el derecho a recursos legales efectivos contra actos que
vulneraban los derechos humanos.
Una reforma judicial que siga los lineamientos de la
Constitución Bolivariana debe garantizar todos los derechos de la justicia antes mencionados a
todos los venezolanos. El estado se ha centrado en el desmantelamiento de los instrumentos del
terror del régimen anterior. Instrumentos que violaban los derechos humanos a los más pobres,
129
Existen varios proyectos de ley en este sentido, pero todavía no se ha llegado a un consenso final en la Asamblea
Nacional.
104
frecuentes víctimas de una policía violenta y un sistema penal brutal, que violentaba todos los
derechos humanos habidos y por haber.
Aproximadamente el 80% de los venezolanos vive en condiciones de pobreza. El 38.5%
percibe ingresos que no cubren la canasta alimentaria y el 42.37% no logra satisfacer sus
necesidades básicas de alimentación, vivienda, vestido, salud y educación 130.
La debilidad judicial explica en gran parte que en la policía y en las cárceles imperaban el
abuso, el tráfico de influencias, la violencia y la tortura. Aquí los informes y las denuncias de las
organizaciones de derechos humanos --como American Watch de los EE UU y nacionales como
PROVEA-- coinciden sistemáticamente en el diagnóstico del problema.
Las cárceles de
Venezuela eran las más peligrosas de América. El crimen, las drogas, las violaciones entre
presos, el abuso policial, la extorsión, el hacinamiento, las condiciones de vida eran todas
violatorias de los derechos humanos y de la dignidad humana más elemental. Fueron hechos
conocidos y aceptados en el sistema penal venezolano de la IV República durante cuarenta años
y parte de su modelo de “seguridad nacional.” El hacinamiento de personas y la humillación
pública de personas eran la norma de la vida en los penales venezolanos. Se encierran en las
mismas celdas a disidentes políticos, ladrones, prostitutas, vagos o desempleados, inmigrantes
sin papeles con asesinos y criminales de alta peligrosidad 131. En el sistema penal –como en el
judicial-- no funciona la ley sino el dinero. Consecuentemente caer en manos del poder judicial
venezolano --y no tener dinero ni influencias—e ir a la cárcel era sufrir tortura física y
psicológica. Era “El Proceso” de Kafka por la ambigüedad de las acusaciones y la lentitud
desesperante de un procedimiento judicial. Entonces hay que preguntarse: ¿Qué pasos se han
dado para el avance en materia del derecho a la seguridad personal en la V República?
Algunos avances importantes son estructurales y otros son de carácter formal. El primer
paso, fue crear, aprobar y promulgar una nueva Constitución que enfatiza la defensa de los
derechos humanos individuales y colectivos de todos los venezolanos sin distinciones y que
deroga todas las leyes anteriores que violan la carta magna. Esto es importante ya que como
mencionamos antes, las leyes particulares de la IV República quitaban en la práctica los derechos
que la Constitución de 1961 anunciaba y proclamaba. Hay un cambio de filosofía jurídica
importante, la ley particular --no puede ni debe-- contradecir el mandato constitucional. Este
130
131
PROVEA, Informe Anual: octubre 1989-septiembre 1990.
Ver Informes anuales tanto de American Watch como de PROVEA.
105
cambio formal es fundamental para que el sistema de “seguridad y subsistencia” exista y para no
cercenar los aspectos democráticos que tiene la Constitución de 1999.
El segundo paso fue dar identidad a los marginados. En Venezuela había cientos de
miles de personas que existían y vivían en el país, pero que no tenían oficialmente un estatus
ciudadano. Para tener derechos hay que ser persona y eso significa algo tan básico como tener
documentos legales y legítimos de identidad personal. Los documentos de identidad le permiten
a un ciudadano tener derechos y tener participación y protagonismo político. La cédula le
permite a uno votar, ir a la escuela, a la universidad, a los centros de salud, tener derecho a la
jubilación, etc.
La Misión Identidad fue un plan de cedulación creado por el gobierno
bolivariano en el 2004 para garantizar el derecho humano a la identidad con una cédula laminada
a todos los ciudadanos y residentes extranjeros de la República. La Misión Identidad dio
personalidad jurídica a muchos, en su mayoría pobres, que estaban excluidos del sistema por la
razón que fuese. Se rescataron un total de 4.032.928 ciudadanos 132, incluyendo menores de edad
que carecían de documentos básicos de identidad. La Misión Identidad va de la mano con toda
una serie de programas educativos y medidas económicas destinadas a erradicar el problema de
la pobreza de raíz; integrando socialmente a cientos de miles de pobres y marginados a la
economía nacional. El estado bolivariano ha sido proactivo dio identidad y devolvió la dignidad
a miles de ciudadanos, incluyendo perseguidos políticos, desempleados, migrantes ilegales, etc.
Abrió las puertas para la participación política y económica de todos. Se convirtió al estado –al
gobierno y a las corporaciones estatales-- en el instrumento financiero de recursos económicos y
humanos fundamental en la lucha contra la pobreza y pobreza extrema –que explicaremos
detalladamente en la tercera parte de este trabajo.
Un tercer paso fue eliminar los instrumentos del terror dentro del poder judicial y
transformarlos en instrumentos de seguridad ciudadana, tal como lo estipula la Constitución
Bolivariana. Rescatar el respeto cultural a la ley y a las instituciones no ha sido fácil. Hay que
cambiar la filosofía funcional, los mandos y la estructura de la fuerzas armada, de la policía y del
sistema penitenciario. Crear un nuevo ejército, una nueva policía y llevar a cabo una reforma
penitenciaria --que esté de acuerdo con los nuevos mandatos constitucionales de respeto a la
132
Misión identidad: Onidex, feb 2007.
106
dignidad humana y política de las personas-- ha sido un objetivo revolucionario en el cual los
avances han sido dispares.
El avance ha sido variable y siempre pendiente de una reforma profunda del sistema
judicial que se resiste debido a las presiones políticas e institucionales que existen en la
actualidad. La IV República, por ejemplo, dejó una herencia de 123 policías diferentes,
incluyendo las cuatro principales: el Cuerpo de Investigaciones Científicas y Criminalísticas
(Cicpc; antigua Policía Técnica Judicial PTJ), la Dirección de Servicios de Inteligencia y
Prevención (Disip), la Policía Metropolitana (PM) y las Policías Estadales. Según un estudio de
la Comisión Nacional Para la Reforma Policial (Conarepol) estos organismos dedicaban sólo un
52% de sus recursos a la prevención y combate del delito; mientras que el 48% era destinado a
labores de custodia de personalidades y de instituciones. La nueva Ley Orgánica del Servicio de
Policía y del Cuerpo de Policía Nacional, que se conoce como Ley de Policía Nacional,
básicamente elimina el anarquismo o en el mejor de los casos el pluralismo policial que existía.
La nueva policía crea los criterios oficiales unificados, creando una policía moderna de diversos
niveles.
Los niveles de complejidad avanzan de sus elementos más simples en la policía
comunal, a las policías más complejas: la municipal, la estatal y finalmente la nacional.
Un aspecto importante e innovador es la unificación de todas las policías bajo el comando
del Jefe de la Policía Nacional y de los criterios de formación, derechos legales y laborales de
todos los funcionarios. Para ello, la ley decreta sin ambigüedad la ilegalidad de servicios de
seguridad y de las policías particulares. La nueva ley cierra las puertas a los grupos para
policiales o para militares, que tan de moda estuvieron durante la IV República.
Del carácter profesional del servicio de policía
Artículo 7. El servicio de policía es de carácter profesional. Bajo ningún concepto se permitirá
ni se delegará el ejercicio de las funciones policiales a particulares.
De la responsabilidad del servicio de policía
Artículo 8. El servicio de policía es responsabilidad exclusiva del Estado.
Se trata de cambiar totalmente la imagen que la sociedad tiene de la policía y de los policías. La
policía y ser policía en la IV República era un desprestigio y se asociaba con la corrupción,
represión y el abuso al ciudadano de la calle. El policía no tenía ni derechos ni profesionalismo
y por lo tanto gozaba de poco o ningún respeto social. La Revolución crea primero un debate y
107
luego con consenso para unificar de criterios y transformar radicalmente el trabajo del policía y
la policía y su imagen en la comunidad. Se crea la Universidad Nacional Experimental de las
Ciencias de la Seguridad (UNES) que agrupa las escuelas de las diversas academias de policías
existentes en todo el país como un organismo único --incluyendo las que trabajan en el sistema
penitenciario—para educar y profesionalizar los trabajos de la policía. La rectora de la UNES,
Soraya El Ackhar, abogada, profesora de la universidad y defensora durante 25 años de los
derechos humanos de las víctimas del terrorismo de estado fue una de las personas que lideró el
diálogo nacional para reorganizar la policía y ahora está a cargo de educar a los nuevos policías.
Ser policía pasa de ser un trabajo poco profesional, mal pagado y desprestigiado socialmente a
una carrera técnica y universitaria; con el estatus social que le corresponde. La formación del
policía ahora requiere estudios académicos –incluyendo de deontología profesional— con
derechos laborales y obligaciones. El policía tiene el derecho a un salario justo, a los equipos
necesarios para hacer su trabajo y al apoyo corporativo –incluyendo derechos laborales, seguros
médicos individual, familiar y de pensiones—que necesita su trabajo de servicio a la comunidad
y generar el respeto social que merece. La ideología del nuevo policía es profesional, humanista
y de servicio a toda la comunidad. El policía ahora sabe defender los derechos humanos propios
y de sus conciudadanos, tiene que ser transparente en sus actuaciones, sabe ayudar a las
víctimas, sabe utilizar la fuerza de acuerdo a los reglamentos y sabe que tiene que responder a los
controles internos –de la propia policía-- y externos –de la comunidad—para hacer bien su
trabajo. En la Ley de Policía Nacional vemos estos avances –incluyendo aquellos específicos en
materia de derechos humanos a diferentes niveles—y señalamos algunos a continuación.
Ley Orgánica del Servicio de Policía y Cuerpo de Policía Nacional
Capítulo I
De las funciones del servicio de policía
Artículo 4. Son funciones del servicio de policía:
1) Proteger el libre ejercicio de los derechos humanos, las libertades públicas y la paz social.
5) Facilitar la resolución de conflictos mediante el diálogo, la mediación y la conciliación.
De la naturaleza del servicio de policía
De las condiciones de seguridad e higiene
Artículo 9. Los cuerpos de policía contarán con espacios adecuados tales como: dormitorios,
sanitarios, depósitos, parques de armas, salas de resguardo de evidencias, centros de detención y
otros, que cumplan con condiciones de seguridad e higiene a fin de garantizar la dignidad de las
personas.
108
Principio de garantía de los derechos humanos
Artículo 14. Los cuerpos de policía actuarán con estricto apego y respeto a los derechos humanos
consagrados en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en los tratados sobre
derechos humanos suscritos y ratificados por la República y en las leyes que los desarrollen.
Principio de universalidad e igualdad
Artículo 15. Los cuerpos de policía prestarán su servicio a toda la población sin distinción o
discriminación alguna, fundamentada en posición económica, origen étnico, sexo, idioma, religión,
opinión política o de cualquier otra condición o índole. Sin embargo, para los pueblos y las
comunidades indígenas se desarrollará un servicio de policía que tome en cuenta su identidad
étnica y cultural, atendiendo a sus valores y tradiciones.
De las atribuciones del órgano rector
Artículo 20. Son atribuciones del órgano rector:
8. Velar por la correcta actuación de los cuerpos de policía en materia de derechos humanos.
14. Establecer y supervisar planes operativos especiales para los cuerpos de policía en
circunstancias extraordinarias o de desastres con el fin de enfrentar de forma efectiva situaciones
que comprometan el ejercicio de los derechos ciudadanos, la paz social y convivencia. Dichos
planes se ejecutarán de manera excepcional y temporal, con estricto apego y respeto a los derechos
humanos.
De la Defensoría Delegada Especial de Asuntos Policiales
Artículo 28. La Defensoría Delegada Especial de Asuntos Policiales de la Defensoría del Pueblo
tendrá como función emprender investigaciones independientes sobre violaciones de los derechos
humanos cometidos por las funcionarias y funcionarios policiales, proponiendo las
recomendaciones que estime oportunas para reducir sus efectos, compensar a las víctimas y
mejorar el desempeño policial.
De las competencias de las autoridades de dirección policial
Artículo 35. Corresponde a las autoridades de policía, en el ámbito profesional y funcional de los
diversos cuerpos de policía:
1. Ejecutar las políticas de seguridad ciudadana, los principios y programas generales para la
prevención y el control del delito, cumplir las metas establecidas y garantizar el respeto de los
derechos humanos por parte del órgano o ente que dirigen.
Capítulo II
Del Cuerpo de Policía Nacional
Naturaleza
Artículo 41. El cuerpo de policía nacional tiene carácter civil, público, permanente, profesional y
organizado. Estará desplegado en todo el territorio nacional para garantizar el ejercicio de los
derechos individuales y colectivos y el cumplimiento de la ley.
Atribuciones de la Directora o el Director General
Artículo 46. Son atribuciones de la Directora o Director General del Cuerpo de Policía Nacional:
8. Velar por el estricto respeto de los derechos humanos y la correcta aplicación de la ley.
109
Prohibición de interrupción del servicio
Artículo 68. Las funcionarias y funcionarios policiales se abstendrán de cualquier práctica que
implique la interrupción, alteración o discontinuidad en la prestación del servicio de policía.
No se permitirá la asociación en sindicatos ni la huelga.
De las normas básicas de actuación policial
Artículo 70. Son normas básicas de actuación de las funcionarias y funcionarios de los cuerpos de
policía o militares que cumplan funciones del servicio de policía:
1. Respetar y proteger la dignidad humana, y defender y promover los Derechos humanos de todas
las personas, sin discriminación por motivos de origen étnico, sexo, religión, idioma, opinión
política, origen nacional, posición económica o de cualquier otra índole.
5. Observar en toda actuación un trato correcto y esmerado en sus relaciones con las ciudadanas y
los ciudadanos, a quienes procurarán proteger y auxiliar en las circunstancias que fuesen
requeridas.
6. Velar por el disfrute del derecho a reunión y del derecho a manifestar pública y pacíficamente,
conforme a los principios de respeto a la dignidad, tolerancia, cooperación, compresión e
intervención oportuna, proporcional y necesaria.
7. Respetar la integridad física de todas las personas y bajo ninguna circunstancia, infligir, instigar
o tolerar ningún acto arbitrario, ilegal, discriminatorio o de tortura u otros tratos o penas crueles,
inhumanas o degradantes, que entrañen violencia física, psicológica y moral, en cumplimiento del
carácter absoluto del derecho a la integridad física, psíquica y moral garantizado
constitucionalmente.
9. Extremar las precauciones, cuando la actuación policial esté dirigida hacia las niñas, los niños o
los adolescentes, así como hacia las y los adultos mayores y las personas con discapacidad, para
garantizar su seguridad e integridad física, psíquica y moral, considerando el principio de
Preeminencia de sus derechos en todo momento.
10. Abstenerse de ejecutar órdenes que comporten la práctica de acciones u omisiones ilícitas o
que sean lesivas o menoscaben los derechos humanos garantizados en la Constitución o en los
tratados internacionales sobre la materia, y oponerse a toda violación de derechos humanos que
conozcan.
11. Denunciar violaciones a los derechos humanos que conozcan o frente a los cuales haya indicio
de que se van a producir.
12. Asegurar plena protección de la salud e integridad de las personas bajo custodia adoptando las
medidas inmediatas para proporcionar atención médica.
110
La nueva policía por supuesto usa las armas reglamentarias y la Ley de Policía establece
un tono de prudencia y respeto hacia el ciudadano.
Artículo 73. El uso de la fuerza por parte de los cuerpos de policía estará orientado por el
principio de afirmación de la vida como valor supremo constitucional y legal, la adopción de
escalas progresivas para el uso de la fuerza en función del nivel de resistencia y oposición de la
ciudadana o ciudadano, los procedimientos de seguimiento y supervisión de su uso,
entrenamiento policial permanente y difusión de instructivos entre la comunidad, a fin de
facilitar la contraloría social en esta materia. El uso de la fuerza mortal sólo estará justificado
para la defensa de la vida de la funcionaria o funcionario policial o de un tercero.
La fuerza policial necesita ser aplicada siguiendo criterios específicos graduales de
acuerdo con los hechos, y está regulada en el art. 75 de la Ley de Policía.
Artículo 75. Las funcionarias y funcionarios policiales emplearán la fuerza física con apego a
los siguientes criterios:
1. El nivel del uso de la fuerza a aplicar está determinado por la conducta de la ciudadana o
ciudadano y no por la predisposición de la funcionaria o funcionario.
3. La funcionaria o funcionario policial debe mantener el menor nivel del uso de la fuerza
posible para el logro del objetivo propuesto.
4. En ningún momento debe haber daño físico innecesario, ni maltratos morales a las
ciudadanas o ciudadanos objeto de la acción policial, ni emplearse la fuerza como forma de
castigo directo.
La reforma de la policía ha sido lenta, pero parece finalmente ir tomando cuerpo en sus
estructuras y más con la graduación de nuevas generaciones de funcionarios de policía de la
universidad mencionada. Mucho más difícil ha sido y es la reforma penitenciaria. Sin duda la
espada de Damocles de las acusaciones de violaciones a los derechos humanos en Venezuela
desde la dictadura del General Pérez Jiménez hasta nuestros días. Los avances en este tema
según lo exige el artículo 272 de la Constitución Bolivariana requieren una inversión
significativa de recursos humanos y económicos que todavía queda por hacer en su mayor parte.
Artículo 272. El Estado garantizará un sistema penitenciario que asegure la rehabilitación del
interno o interna y el respeto a sus derechos humanos. Para ello, los establecimientos
penitenciarios contarán con espacios para el trabajo, el estudio, el deporte y la recreación,
funcionarán bajo la dirección de penitenciaristas profesionales con credenciales académicas
universitarias, y se regirán por una administración descentralizada, a cargo de los gobiernos
estadales o municipales, pudiendo ser sometidos a modalidades de privatización. En general,
deberá preferirse en ellos el régimen abierto y el carácter de colonias agrícolas penitenciarias.
En todo caso las fórmulas de cumplimiento de penas no privativas de la libertad se aplicarán
con preferencia a las medidas de naturaleza reclusoria. El Estado creará las instituciones
indispensables para la asistencia post penitenciaria que posibilite la reinserción social del ex
111
interno o ex interna y propiciará la creación de un ente penitenciario con carácter autónomo y
con personal exclusivamente técnico.
La reforma penitenciaria debería proteger los derechos humanos de los
aproximadamente 20.000 reclusos que viven en las cárceles venezolanas actualmente. Se han
encontrado obstáculos de voluntad política, de falta de recursos humanos y económicos, que han
retardado y paralizando las mejoras. Si bien, el Código Orgánico Procesal Penal creó los Jueces
de Ejecución Penal cuya función principal ha sido reducir la población carcelaria, esto no es
suficiente. Es cierto que la población penal se redujo de manera considerable mediante el justo
otorgamiento de medidas sustitutivas a la cárcel; que inicialmente fueron significativas y
efectivas durante los primeros años de la Revolución. Pero los índices de delincuencia y los
cambios de una policía en transición parecen haber paralizado el proceso de cambios. Una
reforma penitenciaria a fondo está pendiente de ejecución. Después de diez años de vigencia --el
artículo 272 ha sido papel mojado-- como lo señala el penalista y defensor de los derechos
humanos Carlos Alberto Nieto Palma en su artículo “Diálogo Penitenciario.” El manifiesta que
los avances se quedaron en buenas palabras y mejores intenciones.
…lo que ha pasado después es conocido por todos, más de dos decenas de directores de
Rehabilitación y Custodia del Recluso, una docena de Ministros de Interiores y Justicia,
anuncios reiterados de Planes de Humanización Penitenciaria nunca cumplidos. Nuevas
cárceles nunca hechas, comisiones de trabajo “fantasmas” y lo más grave consolidación de las
“mafias carcelarias” compuesta por miembros de la Guardia Nacional y del personal del MIJ.
Mafias encargadas del negocio del ingreso de armas, drogas, alcohol y todo aquello ilícito y que
produzca dividendos a este grupo de seres inescrupulosos; responsables de manera directa de
que tengamos las cárceles más violentas del continente americano y de las principales del
mundo, ante la indiferencia y complicidad de todos los poderes públicos 133.
La controversia se creó con la construcción de la Comunidad Penitenciaria de Coro -primer penal que cumple el mandato constitucional—que está ubicado lejos de las principales
ciudades del país; a 45 minutos por carretera de la ciudad de Coro, en el sector El Cebollal de la
vía Coro-Zulia. El penal tiene 16 hectáreas, de las cuales 4,9 son de construcción de pabellones
y talleres, con un costo aproximado de 60 millones de dólares. Este centro penitenciario es el
“modelo” del nuevo sistema penitenciario humanitario en el país. La Comunidad Penitenciaria
de Coro cuenta con pabellones donde viven los reclusos --en arreglo al tipo de condena que van a
133
Ver artículo de Carlos Alberto Nieto Palma, “Diálogo Penitenciario,” Aporrea, 2/6/09. También, Francisco
Sierra Corrales, “Las causas verdaderas de la crisis carcelaria,” Aporrea, 12/3/08(www.aporrea.org)
112
cumplir. La institución tiene talleres para que los reos aprendan un arte u oficio, con el objeto de
contribuir con su futura reinserción en la sociedad 134. Sin embargo, su localización tan apartada
de los centros urbanos ha sido un problema serio para las visitas familiares, por ejemplo. Las
críticas quizás han hecho que el Ministerio del Interior y Justicia reactive el Plan de
Humanización Penitenciaria (PHP) en otros lugares del país y se ha empezado a activar con
mayor intensidad con el ministro Tareck El Aissami; quien parece finalmente tenerlo como
prioridad política.
El PHP se ha aplicado al existente Centro Penitenciario de Yare, estado Miranda, con la
participación del alcalde de Yare, Saúl Yánez y los trabajadores municipales de esta localidad.
El ministro del Poder Popular para Relaciones Interiores y Justicia, Tareck El Aissami manifestó
que en este centro penitenciario ha recuperado la paz después que se invirtieran
aproximadamente seis millones y medio de bolívares fuertes en mejorar todo lo concerniente a
las áreas comunes: el comedor, la cocina, enfermería y odontología; así como la remoción de
escombros y la recolección de desechos sólidos. Además se construyeron distintas áreas
adicionales destinadas a la atención de los internos.
El Aissami explica la reactivación de la nueva filosofía de la reforma penitenciaria
humanitaria en dos factores. Por un lado, los principios del nuevo enfoque socialista de la
Revolución Bolivariana que son profundamente humanos. Por otro, la inclusión de la reforma
misma en el frente de batalla número 7 del Plan Nacional de Prevención y Seguridad Ciudadana.
Así lo declaraba, el mismo ministro, tras una reunión que sostuvo en el Consejo Superior
Penitenciario 135.
El Gobierno y poderes del Estado están comprometidos como nunca antes en la historia
del país en el tema penitenciario y en atención a esto estamos dedicados a transformar esos
134
Existen críticos del mega-proyecto de cárcel –entre los que se encuentran varios grupos anarquistas
venezolanos-- que consideran este proyecto de Coro como una barbaridad.
La empresa encargada de la construcción de la CPC es la empresa española Solub Cegema, la cual ha erigido 18
macro cárceles como ésta en España. La compañía obtuvo el beneplácito del gobierno a través de un proceso de
licitación internacional, que no fue sometido a los controles que existen en la licitación tradicional. Recordamos al
lector que esta modalidad se creó a mediados de los 90´s como concesión a las políticas impuestas por FMI y el
BM. También recordamos que el BID, brazo del BM para Latinoamérica, es el principal financista del proyecto
penitenciario. Esto sólo demuestra la falacia impuesta por el gobierno sobre nuestra supuesta “soberanía”. La
colonización en la Venezuela bolivariana se mantiene plena vigencia. Artículo: ¿Qué hay tras la construcción de la
CPC? Texto sin firmar de la Cruz Negra Anarquista de Venezuela.
135
En el Consejo Nacional Penitenciario funcionan finalmente además del propio ministro del Interior y Justicia
Tarik El Aissami, la fiscal general de la República, Luisa Ortega Díaz; la presidenta del Tribunal Supremo de
Justicia, Luisa Estela Morales; los ministros del Poder Popular para la Educación (ME), Héctor Navarro, y para la
Educación Superior (MES), Luis Acuña, así como representantes de la Asamblea Nacional (AN).
113
espacios en espacios para la vida, para el futuro, para que la persona pueda redimir su
conducta en paz, se reencuentre con su familia y se reivindique en una acción social, útil para la
patria 136.
2.7. Conclusión
El desmantelamiento del aparato terrorista del estado de la IV República y la visión
soberana de una geopolítica diferente a la impuesta por la Guerra Fría es un avance en casi todos
los aspectos internos y externos de la seguridad venezolana en materia de defensa de los
derechos humanos. Como dice Henry Shue el derecho a la integridad física de todas las personas
sin exclusión requiere crear garantías sociales e instituciones que la protejan contra las amenazas
existentes.
Esto se está llevando a cabo en Venezuela, aunque todavía queda camino por
recorrer. La recuperación de la memoria histórica de las víctimas del terror “democrático” y la
consecuente destrucción del aparato terrorista del estado son un paso importantísimo en la
dirección correcta. La creación de un marco legal y de instrumentos de verdadera “seguridad
ciudadana” es esencial para la construcción de un estado verdaderamente democrático. La
restructuración filosófica y física del ejército, de nuevos cuerpos policiales y de seguridad para
convertirlos en cuerpos garantes de los derechos humanos del ciudadano es una ruptura con un
pasado nefasto de violencia, terrorismo y abuso.
Por primera vez en la historia es una
obligación específica de la Fuerza Armada Bolivariana como en la nueva Policía Nacional
Bolivariana defender los derechos humanos de todos los ciudadanos sin distinción. ¿Entonces,
qué le falta a la Revolución Bolivariana para que se cumpla el modelo de “seguridad ciudadana”
y para cumplir con el mandato explícito de la Constitución Bolivariana?
Quedan pendientes importantes reformas al poder judicial. Asimismo, completar detalles
de las mencionadas reformas a los cuerpos de seguridad como la integración total y definitiva de
las instituciones de la Policía Nacional y la implementación seria y definitiva del Sistema
Penitenciario Humanitario. Esto requiere un esfuerzo legislativo importante, educativo en
proceso de los cuerpos policiales y una inversión económica significativa para acabar con la
nefasta historia del sistema penitenciario venezolano. Sin embargo, los aspectos que faltan para
completar el modelo de “seguridad ciudadana”
no son triviales, son fundamentales.
La
responsabilidad está fundamentalmente en la Asamblea Nacional ya que se necesita con urgencia
136
Tareck El Aissami, Ministro del Interior y Justicia, declaración a Radio Nacional de Venezuela, 5 de junio del
2009.
114
una nueva Ley Orgánica de todo el Poder Judicial que cambie profundamente la forma de hacer
justicia en Venezuela. Básicamente hay que repetir el esfuerzo legislativo que se hizo para
cambiar los aparatos de seguridad del estado y establecer nuevas estructuras para cambiar la
forma de hacer justicia en el país. Sin un poder judicial que se acomode realmente a las
exigencias de la democracia establecida en la Constitución Bolivariana se pone en peligro la
estructura de todo el sistema.
La reforma parcial del poder judicial
aprobada el 11 de
septiembre de 1998 fue insuficiente; y mantiene en funcionamiento precario la justicia cotidiana
venezolana. El Poder Judicial, es todavía --en gran parte—el mismo que se estableció en 1948 y
pertenece a un sistema de valores opuestos al que propone la Constitución Bolivariana. La
Revolución tiene la obligación de cambiarlo de arriba abajo. El sistema de administración de la
justicia en la actualidad es débil y está viciado en su funcionamiento, favoreciendo siempre a los
más poderosos. Repito, el sistema actual no satisface el modelo de seguridad ciudadana que
requiere la Constitución, ni la defensa de los derechos humanos, ni las necesidades de un sistema
verdaderamente democrático.
Sin un poder judicial fuerte, aunque importantes, no son suficientes los avances hechos
en materia de la protección y defensa de los ciudadanos, incluyendo el progreso logrado para
mejorar la defensoría del pueblo.
La Defensoría ahora forma parte del Consejo Moral
Republicano --ejecutor del Poder Ciudadano—y se agrupa conjuntamente con el Ministerio
Público y la Contraloría General de la República. Así la Defensoría deja de ser lo que siempre
había sido en la democracia venezolana “una voz que clamaba en el desierto” como todavía lo es
en tantos otros sistemas democráticos. La Defensoría del Pueblo tiene más poder que nunca en
el pasado.
Artículo 274. Los órganos que ejercen el Poder Ciudadano tienen a su cargo, de conformidad
con esta Constitución y la ley, prevenir, investigar y sancionar los hechos que atenten contra la
ética pública y la moral administrativa; velar por la buena gestión y la legalidad en el uso del
patrimonio público, el cumplimiento y la aplicación del principio de la legalidad en toda la
actividad administrativa del Estado, e igualmente, promover la educación como proceso creador
de la ciudadanía, así como la solidaridad, la libertad, la democracia, la responsabilidad social y
el trabajo.
Artículo 278. El Consejo Moral Republicano promoverá todas aquellas actividades pedagógicas
dirigidas al conocimiento y estudio de esta Constitución, al amor a la patria, a las virtudes
cívicas y democráticas, a los valores trascendentales de la República y a la observancia y
respeto de los derechos humanos.
115
También son encomiables las campañas para desarmar a la población y reducir el porte
legal de armas en el país. Sería de esperar que tanto la reforma judicial como la mejora policial
tendría como consecuencia el eventual desarme del país y la reducción drástica de los niveles de
violencia en el país. Debería erradicarse totalmente el porte de armas de fuego y continuar los
pasos necesarios iniciados en el sistema educativo que buscan erradicar la violencia familiar y
cultural desde temprana edad. Hay iniciativas para erradicar los video- juegos que fomentan la
violencia entre los jóvenes.
Ningún gobierno anterior había adoptado como presupuesto
filosófico que la violencia es algo que hay que evitar -- venga de donde venga—y que es en
definitiva un mal en sí mismo. La Revolución hace un esfuerzo para crear una cultura de la paz -que se basa en el concepto de evitar la violencia—y que fomenta el uso del diálogo para
resolver disputas. Asimismo, crea una cultura en los medios de comunicación que repudia la
violencia familiar y social en todas sus formas. Es importante destacar que la Revolución hace
constantes campañas educativas en las escuelas, en los barrios, en los medios de comunicación
del estado y en las universidades para promover y cambiar la cultura violenta existente todavía
en Venezuela.
Los modelos de Henry Shue, Gandhi y de la Filosofía de la Liberación requieren de los
elementos legales, institucionales y de las dinámicas culturales que garantizan los derechos de
seguridad a la integridad física de las personas sea para todos los ciudadanos por igual y sin
distinción de ningún tipo. El desafío democrático no es pequeño y requiere una inversión
considerable en recursos humanos y económicos. La Revolución Bolivariana ha avanzado mucho
en la dirección correcta y los frutos de esos cambios ya se empiezan a verse en la reducción de la
violencia política y social. Sin embargo, como diría Shue la falta de un poder judicial eficiente y
un sistema penal humanitario no ha acabado con las amenazas corrientes existentes a la
integridad física de los venezolanos. Tendrían que desaparecer de la calle las quejas impunidad
y de la inseguridad ciudadana y jurídica que se reclaman. Un poder judicial fuerte, eficiente y
rápido es la demanda popular
y constitucional. Las propuestas legislativas no faltan y es
responsabilidad de la Asamblea Nacional y los partidos políticos llegar a un consenso final en
esta materia para aprobar una Ley Orgánica del Poder Judicial que responda a las exigencias
constitucionales y a los conceptos de democracia participativa y protagónica que defiende.
116
Capítulo III.
Desarrollo del primer derecho de subsistencia: la soberanía alimentaria
A este respecto, cabe recordar que en el Tercer Mundo la pobreza es la causa de muerte
de 17 millones de personas al año por enfermedades infecciosas y parasitarias, fácilmente
curables, tales como la diarrea, el paludismo y la tuberculosis. De ellas, 34.000 son niños que
mueren cada día de malnutrición y enfermedad. Ello se debe a que 1.200 millones de personas
viven en la pobreza absoluta y de ellas más de 826 millones no tienen alimentos suficientes para
satisfacer sus necesidades nutricionales básicas. Además, el analfabetismo alcanza en el mundo
1.000 millones de personas, de las que dos terceras partes son mujeres. Son cifras dramáticas
que revelan lo injusto del “orden” económico internacional. Pues bien, estas condiciones de
injusticia lacerante es imposible pretender la consecución de la paz y seguridad internacionales,
propósito básico de la Carta de las UN 137.
América Latina (18 países): Coeficiente de la brecha de Pobreza e Indigencia
Unidades: Porcentajes de población por debajo de la línea de pobreza o indigencia
Período: 1990 -2007
Fuente: CEPAL. Anuario de Estadísticas de America Latina y el Caribe 2008
a
Año
Argentina
2006
Bolivia
Brasil
Chile
Colombia
Costa Rica
Ecuador
El Salvador
Guatemala
Honduras
México
Nicaragua
Panama
Paraguay
Peru
R. Dominicana
Uruguay
Venezuela
2007
2007
2006
2005
2007
2007
2004
2006
2007
2006
2005
2007
2007
1999
2007
2007
2007
a
137
c/
Pobreza
Indigencia
8.3
2.8
27.8
13.0
4.4
20.7
6.2
16.7
21.1
25.5
39.5
10.5
29.1
11.7
28.4
20.6
23.0
5.2
10.2
14.5
3.9
1.1
8.3
2.0
5.6
8.1
11.3
23.9
2.4
12.3
4.3
13.5
9.2
10.4
0.7
3.2
Incluye personas en situación de indigencia o en pobreza extrema. c Área Metropolitana.
Villa Durán, Curso de Derecho Internacional, 37-38.
117
Para el profesor Villa Durán --como para Henry Shue—el problema del hambre y la
indigencia es una amenaza real para la paz y la seguridad nacional e internacional. No podemos
hablar de defensa de los derechos humanos –incluso de democracia—si los estados ignoran el
derecho a la alimentación y por lo tano ignoran la situación en la que viven millones de personas
en todo el mundo 138.
El problema del hambre como el problema del medio ambiente es
internacional, y requerirá de soluciones conjuntas para resolverlos. El modelo de “seguridad y
subsistencia” de Henry Shue equipara la lucha contra el hambre y la indigencia con la lucha por
los derechos humanos y la democracia. Básicamente no hay vida normal y saludable si falta un
mínimo de cualquiera de estos dos elementos: seguridad y subsistencia.
El modelo está
incompleto sin una de sus partes. El estado es responsable en garantizar ambas; y los estados
desarrollados y las organizaciones internacionales –sobre todos los que dicen defender los
derechos humanos-- tienen la obligación moral y política de ayudar económica y políticamente a
resolverlos. En la estadística de los índices de la pobreza en América Latina vemos la dimensión
del problema en cada país. La pobreza en sus diferentes niveles afecta a las grandes mayorías en
muchos países latinoamericanos. Si la pobreza es la peor forma de violencia --según Gandhi-también sería lógico que existiera una correlación directa entre pobreza y violencia; incluyendo
la violencia de estado. La pobreza existe tanto en regímenes políticos dictatoriales como en
democracias representativas.
¿Es posible realmente la coexistencia entre la pobreza y la
democracia? ¿O es un verdadero obstáculo para la misma?
En un artículo escrito por Edward N. Muller “Democracy, Economic Development, and
Income Inequality”, se estudia la correlación entre democracia y la desigualdad económica entre
ciudadanos. Aunque no habla de la pobreza exactamente varias de las conclusiones a la que
llega Muller en su artículo son interesantes. Según su estudio “la desigualdad económica tiene
un impacto claramente negativo en el sistema democrático.” Primero, la desigualdad económica
reduce la posibilidad de que emerja un sistema democrático en un país. Segundo, la democracia
existente, si la desigualdad aumenta, se debilitará proporcionalmente y los niveles de democracia
se reducirán significativamente 139. Estos estudios no contradicen el consenso dominante que
desde los tiempos del politólogo Lipset (1959) que argumentaba --desde la perspectiva de las
138
“Los derechos de seguridad y subsistencia son esenciales para una vida saludable.” Shue, Basic Rights, 29.
Eduard N. Muller “Democracy, Economic Development, and Income Inequality,” en American Sociological
Review, 65.
139
118
ciencias políticas en los EE UU-- de que existe una correlación positiva entre estabilidad
democrática y desarrollo económico (recursos, industrialización, urbanización, educación,
desarrollo agrario y comunicacional, etc.). Contrario al sentido común y a la mayoría del
consenso en las ciencias políticas, es pretender que el desarrollo económico y la susodicha
democracia pueden coexistir con altos niveles de pobreza e indigencia. ¿Cómo puede coexistir
la democracia con altos índices de pobreza generalizada –incluso extrema; o/y con altos niveles
de analfabetismo en su población? La realidad es que en estos países se produce una división
social clara y definida. Por un lado, la mayoría básicamente vive en las márgenes de un
desarrollo humano y económico; mientras que las clases altas y medias disfrutan de ambas, el
desarrollo económico y de la democracia. Ignorar los altos índices de pobreza es premisa
necesaria para defender las
tesis neoliberales de desarrollo económico, y así hablar de
“democracia” –para unos pocos-- en América Latina. Los neoliberales equiparan desarrollo a
crecimiento económico de la economía nacional, e ignoran los altos índices de pobreza que sufre
la mayoría de la población 140.
140
Esta Información sobre las medición de la desigualdad, al igual que la estadística de la datos, fueron
suministrados por la Fundación Escuela de Gerencia Social, Ministerio del Poder Popular para la Planificación y el
Desarrollo de Venezuela. Lo más apropiado es utilizar los índices de desigualdad y sus resultados de manera
complementaria. No son comparables.
El índice de Gini, que geométricamente corresponde al área entre la curva de Lorenz y la línea de equis
distribución, es el índice más popular en el análisis de la distribución de los ingresos, pese a no cumplir con el
principio “fuerte” de transferencias ni “la propiedad de descomposición aditiva.” Toma valores en el rango (0-1),
donde 0 corresponde a la equidad absoluta y 1 a la inequidad absoluta.
Varianza Logarítmica: Donde n= tamaño de la población, yi= ingreso per cápita del i-esimo individuo, u= ingreso
medio y log. denota el logaritmo o natural. La varianza logarítmica es una de las pocas estadísticas de dispersión que
cumple con las propiedades deseables de los índices de desigualdad. (Aunque en ciertas condiciones puede no
satisfacer los principios de transparencia).
LV=∑(log Xi-log(µ(X)))2 /H
El Índice de Theil, otorga más importancia a las transferencias que se realizan en segmento inferior de la estructura
de la distribución y por tanto cumple con el principio “fuerte” de transferencias, tiene la ventaja de poder
descomponerse de forma aditiva. Su valor mínimo es 0 (equidad Absoluta) y su valor máximo es el log (n), donde n
representa el tamaño de la población.
El Índice de Atkinson, que toma valores entre 0 y 1, tienen la característica de utilizar un parámetro de “aversión a
la desigualdad.” Mientras mayor sea este valor, más alta será la ponderación que reciben las observaciones que se
ubican en el segmento inferior de la estructura de distribución.
119
Años
Argentina
Brasil
Chile
Colombia
Costa Rica
Ecuador
El Salvador
Mexico
Panama
Paraguay
R. Dominicana
Uruguay
Venezuela
2006
2006
2006
2005
2006
2006
2004
2006
2006
2005
2006
2005
2006
Porcentaje de personas
cuyo ingreso per cápita
es inferior:
Indices de concentración
al
promedio
al 50% del
promedio
Gini
Varianza
logarítmica
Theil
70.9
38.9
0.510
1.146
0.561
( =1,5)
0.513
75.9
73.3
75.9
68.6
72.2
68.1
71.9
70.3
71.0
50.7
42.2
48.7
36.4
42.3
37.5
40.2
43.3
42.1
0.602
0.522
0.584
0.478
0.526
0.493
0.506
0.548
0.536
1.646
1.065
1.460
1.031
1.083
1.325
0.992
1.639
1.319
0.807
0.568
0.752
0.427
0.711
0.449
0.527
0.571
0.614
0.621
0.497
0.591
0.475
0.504
0.552
0.481
0.609
0.553
72.5
68.2
48.6
33.6
0.578
0.452
1.597
0.798
0.692
0.383
0.614
0.414
66.5
32.9
0.441
0.811
0.359
0.409
b
Atkinson
є
CEPAL, indicadores sociales para America Latina 2007
La pregunta es obvia: ¿Crecimiento económico y democracia para qué, de qué y para
quién? La derecha política se resiste a ver el problema desde el punto de vista de las premisas
que impone la realidad imperante: un país rico en recursos pero humanamente pobre. Se empeña
en reducir el problema a términos de teoría económica usando modelos útiles y adecuados en los
países desarrollados; que no se corresponden ni con la realidad económica, ni social, ni política
del país en cuestión 141. Ignoran incluso el prerrequisito económico de teorías políticas de los
propios modelos de los países desarrollados que señalan a la pobreza es el impedimento número
uno; no ya para que la verdadera democracia exista, sino para que el verdadero desarrollo
económico emerja. Existe un consenso académico y en la ONU que señala que la pobreza es un
lastre para la democracia y el desarrollo. La lógica indica que el problema es más urgente y
complejo que el crecimiento económico en sí mismo; y requiere un estado fuerte que haga
inversión social y nacional. La eliminación de la pobreza y de la indigencia es fundamental para
generar desarrollo humano --factor clave para que se genere el verdadero desarrollo y
eventualmente la democracia política. “Con pobreza no hay ni huevo ni gallina,” y entonces
141
Las teorías del desarrollo económico de Rostow aunque nadie las defiende hoy día, muchos liberales y
neoliberales todavía las aplican en materia económica. La teoría de Modernización, cuyo representante más
conocido es Samuel Huntington, Political Order in Changing Societies (1969) se fundamenta en el crecimiento
económico. En la ONU se enfatiza el concepto opuesto del desarrollo humano, tesis fundamental de la teoría
económica socialista.
120
poco o nada importa cuál sería o debe ser el primero. Eliminar la pobreza es el requisito previo e
indispensable, necesario, para que existan y se desarrollen ambos: la democracia y el desarrollo
económico-social de cualquier país. Y por supuesto para establecer un régimen político que
defienda y respete los derechos humanos.
Un sistema político y económico con una población que vive con índices entre el 50% y
70 % de pobreza y otro tanto de analfabetismo no puede ignorar esa realidad, ese lastre político
y económico. Ese fue y ha sido el problema venezolano hasta la llegada de la Revolución
Bolivariana.
Los índices de desigualdad económica y pobreza --durante 40 años de
“democracia” y “desarrollo económico liberal y neoliberal” de la IV República-- se mantuvieron
constantes y altos, incluso durante los períodos de mayor bonanza económica. Se mantuvieron
en cifras cercanas al 70% e incluso en algunos momentos llegaron al 80% por ciento. El sistema
aparentaba un funcionamiento económico—había crecimiento-- y político-- había alternancia en
el poder--, pero el sistema no funcionaba a nivel de desarrollo humano. Tanto el desarrollo como
la democracia eran una ficción. Si además entre las premisas económicas, sabemos que el país
es multimillonario en recursos --tiene petróleo y riqueza abundante de recursos naturales y
humanos— habría que pensar que 40 años de “estabilidad” política sería más que suficiente para
eliminar estos problemas de pobreza e indigencia con relativa facilidad.
El fracaso de la IV República no pudo ser más rotundo en esta materia. Hay que concluir
que el fin de la IV República fue producto de “suicidio” social, al ignorar los altos índices de
pobreza e indigencia del país. Según las conclusiones del mencionado estudio de Muller, la
caída del sistema fue resultado de su propia incapacidad de reducir la creciente la desigualdad
entre la población.
La Revolución Bolivariana ha enfrentado el problema que hundió la IV República
inmediatamente. “Tomó el toro por los cuernos” y delineó planes y políticas para reducir la
pobreza en Venezuela. Los resultados han sido bastante rápidos y notables. La Revolución
Bolivariana ha reducido la pobreza entre los años 2003-2009 más que todos los gobiernos de la
IV República juntos. La gráfica “Venezuela: Desarrollo del Índice de Desarrollo Humano
(1980-2007)” muestra la evolución de un índice de desarrollo humano medio a alto durante los
diferentes gobiernos de de la IV República y la Revolución Bolivariana. Fueron los programas
de lucha contra la pobreza y la indigencia los que tuvieron como consecuencia definitiva el salto
a un índice de desarrollo humano alto y cada vez más alto (0,844).
121
En el cuadro “Venezuela. Tendencia de largo plazo del Índice de Desarrollo Humano,
1980-2007” desglosa la evolución de los diferentes aspectos que componen el índice de
desarrollo humano. El índice se calcula combinando las tasas de nacimiento, alfabetización, la
matrícula de educación y el ingreso per cápita.
La mejora del índice de desarrollo humano tiene mucho que ver con la lucha contra la
La mejora del índice de desarrollo humano tiene mucho que ver con la lucha contra la
pobreza en sus diferentes dimensiones. Según un estudio del Center for Economic and Policy
122
La pobreza en Venezuela ha declinado por más de la mitad, de un 53% existente todavía
en 2003 al 26% en el 2008. La reducción de la pobreza extrema o indigencia ha sido más
drástica y contundente de un 72%, a un 7% 142.
Este estudio usa el coeficiente Gini para su análisis. El coeficiente Gini muestra una
distribución desigual de los ingresos, equidistantes entre la optima distribución (Gini=0) y la
máxima desigualdad (Gini=1). De acuerdo con las estadísticas del Banco Mundial el índice de
concentración en América Latina es del 0,52 (52%). En Venezuela oscila en el período 19972007 entre 0,49 y 0,42. El coeficiente Gini ofrece un resumen de la evolución de la pobreza que
coincide claramente con las estadísticas oficiales de medición de la pobreza del propio Instituto
Nacional de Estadística.
Un Gini próximo al valor “0”significa una distribución igualitaria del ingreso, y próximo
a “1” una distribución totalmente desigual.
La reducción de Gini, se debe a una mejor
distribución de los ingresos de los hogares venezolanos, ya que las clases más empobrecidas han
mejorado su situación económica. En el primer semestre del año 2009, la desigualdad de la
distribución del ingreso alcanzó un Gini= 0,4068, +el más bajo de América Latina y del período
del Gobierno Bolivariano.
Los siguientes gráficos y tablas muestran la evolución de este progreso de diversas
maneras, según el Instituto Nacional de Estadística (INE) de Venezuela. Hay que destacar el
retroceso de los años 2002 y 2003, que fue debido al intento de golpe de estado y a la huelga
petrolera que básicamente paralizó la economía del país. Después la estabilidad y las políticas
del gobierno reflejan importantes cambios positivos. La segunda tabla muestra los cambios del
índice de Gini entre 1999 y 2006 de varios países de América Latina para comparar los cambios
en Venezuela con otros países de la región.
142
Mark Weisbrot, Rebecca Ray and Luis Sandoval, “The Chavez Administration at 10 years: The Economy and
Social Indicators,” Center for Economic and Policy Research, February 2009 (www.cepr.net)
123
Coeficiente de Gini, 1998-2007
0.5100
0.4938
0.4865
0.4811
0.4693
0.4772
0.4748
0.4600
0.4559
0.4573
0.4422
0.4237
0.4100
1998
1999
2000
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
Fuente: Instituto Nacional de Estadística, INE
21
Coeficiente de Gini, según país, 1999-2006
País
1999
2006
País
1999
2006
Argentina
0,542
0,510
Honduras
0,564
...
Bolivia
0,586
...
México
...
0,506
Brasil
0,640
0,602
Panamá
0,536
0,548
Chile
...
0,522
Paraguay
0,565
...
Colombia
0,572
...
Perú
0,545
...
Costa Rica
0,473
0,478
República
...
0,578
Ecuador
...
0,526
Dominicana
El Salvador
0,518
...
Venezuela
0,498
0,441
… Información no disponible
Fuente: Anuario Estadístico de las Naciones Unidas, 2007
124
22
¿Qué ha hecho el gobierno Bolivariano para reducir la “perenne” pobreza venezolana?
¿Cómo es posible que un modelo político de democracia pueda cambiar de forma tan radical la
vida de millones de ciudadanos? ¿Qué es la democracia participativa y protagónica y por qué
produce estos resultados? ¿Tiene elementos socialistas? ¿Es diferente de la democracia liberal?
Ni las cifras, ni la realidad del cambio social se discuten. Aunque la derecha política cuestiona la
magnitud de los cambios sociales --los esconde, y los minimiza en lo posible-- no tiene más
remedio que enfrentar la nueva realidad, muy diferente a la que existía en la IV República. Los
medios de comunicación privados en Venezuela y en los países desarrollados ignoran estos
cambios y se enfocan en otros temas que durante la IV República se ignoraban. Estos medios se
enfocan en problemas –casi siempre puntuales-- que se refieren a la falta de libertad de expresión
–supuesta persecución del estado a los medios de comunicación privados. También, a problemas
de seguridad ciudadana que siempre han existido, y que requerirán tiempo y recursos para su
solución definitiva --como son los altos índices de criminalidad en las grandes ciudades. ¿Por
qué la prensa privada nacional ataca al gobierno?
La prensa y los medios de comunicación privados son exactamente eso. Medios de
comunicación que son propiedad del sector privado nacional y extranjero; y que defienden no
interese generales sino sus intereses particulares. La Revolución Bolivariana prueba que la
pobreza y la indigencia son males combatibles y superables. En Venezuela, las políticas del
estado han reducido la pobreza significativamente, y mostrado que la indigencia no es mal
necesario y perenne. Esto tiene implicaciones importantes; los países pobres y muy pobres no
tienen necesariamente que ser “terceros;” para que otros – los ricos-- puedan ser los “primeros.”
La lógica académica nos dice algo similar, aunque a un nivel más sofisticado. Debería
haber más estudios sobre las políticas de cambio que están ocurriendo en Venezuela para
explicar cómo se reduce la pobreza. ¿Por qué es peligroso explicar abiertamente las políticas de
democracia participativa y protagónica que reducen la pobreza y ofrecen una perspectiva
diferente sobre el respeto de los derechos humanos? ¿Cómo se explica –después de diez años de
revolución-- el desconocimiento “profundo” del fenómeno que significa la Revolución
Bolivariana? Evidentemente, la falta de suficientes estudios académicos a nivel universitario de
lo que ocurre en Venezuela permite la existencia de una imagen mediática distorsionada o
claramente parcializada de las políticas sociales y revolucionarias venezolanas.
Muchas
universidades –particularmente en EE UU-- reciben fondos de entes privados que mediatizan
125
directa o indirectamente el contenido de sus investigaciones. ¿No será que “el hambre” de los
países en desarrollo es un “negocio” para intereses privados en algunos países que no lo son?
Este estudio me ha permitido observar que si la magnitud del problema de la pobreza es
tan grave como lo señaló el Prof. Durán en su libro en materia de los derechos humanos --y así lo
reconoce todo el mundo académico y político-- no hay razón para preocuparse por lo que está
pasando en Venezuela. Hay razones para preocuparse por lo que no está pasando en África, Asia
y muchos otros países de América Latina. Estos países --en circunstancias similares salvando las
distancias-- han avanzado poco o nada en su lucha contra la pobreza. Es más, la pobreza está
incrementándose. Es pertinente pensar que no hacen más porque no saben, no pueden, no quieren
o quieren pero no les dejan. Los que no saben necesitan recursos humanos y liderazgo político.
Los que no pueden necesitan recursos económicos para poder eliminar la pobreza. Los que no
quieren cambios en esta materia son aquellos que se benefician directa o indirectamente de la
existencia de la pobreza. Los que quieren y no les dejan deben neutralizar los obstáculos
externos que les impiden eliminar la pobreza. No podemos negar que hay elementos nacionales
e internacionales poderosos que se benefician con el estatus quo.
La indigencia y pobreza debilita a las instituciones del estado soberano, que en manos de
élites económicas –nacionales e internacionales—pueden extraer riquezas del país sin los
controles que tiene un país desarrollado.
Son los principios colonialistas europeos y
neocolonialistas de la doctrina Monroe. La pobreza favorece el poder mundial financiero y
fáctico de Wall Street; donde los países ricos usan su poder corporativo y nacional, para
mantener un “yugo neo-colonial” sobre los países pobres.
Este yugo económico-político
existente retroalimenta y favorece claramente las finanzas corporativas particulares de los países
ricos que tienen inversión extranjera en los países pobres. La corporación capitalista –dominante
en el sistema actual --requiere de países débiles –periféricos o terceros-- que con abundantes
recursos naturales y humanos --mano de obra barata— y sin legislación laboral ni mecanismos
eficientes de protección del medio ambiente permite la explotación y extracción de sus riquezas
para beneficio de sus administradores y accionistas. Los beneficios riquezas se van a los países
ricos mientras que los menos ricos son cada vez más pobres.
¿Es éste es el contexto internacional dominante? Si lo es, se explican las constantes y
obsesivas campañas en los medios de comunicación privados --nacionales e internacionales-contra la Revolución Bolivariana y sus líderes. Se explica la participación de las élites
126
corporativas nacionales en el golpe de estado del 2002 y su participación en el paro petrolero
para tumbar el gobierno de la Revolución. Se explica la obsesión no sólo de desprestigiar lo
positivo de la Revolución y de la nueva democracia sino las matrices informativas tendenciosas
con intención de “demonizar” al Presidente Hugo Chávez Frías. Se explica que se encuentren
aspectos “autoritarios” dónde nunca los hubo más democráticos. En resumen se explica el por
qué se ignora o minimiza el progreso político y económico en materia de derechos humanos y en
la erradicación de la pobreza que la Revolución ha logrado en Venezuela 143.
Es triste cuando políticas de solidaridad bolivarianas –como las del ex presidente Manuel
Zelaya estaba tratando de implementar en Honduras durante su gobierno-- son “recalificadas” en
los medios de comunicación nacional e internacional con adjetivos, tales como “populistas” o
“autoritarias.” El afán es desprestigiar y desinformar sobre las relaciones económicas de
solidaridad que hace el ALBA tanto en su política nacional como internacional. Asimismo, las
más absurdas acusaciones van dirigidas al líder de la Revolución, Hugo Chávez Frías -- como en
143
Los argumentos contra el Presidente Chávez y su política internacional son frecuentes. Roberto Micheletti
justificó el golpe de estado al Presidente constitucional Manuel Zelaya en Honduras en julio del 2009 porque Zelaya
replicaba las políticas –sociales-- contra la pobreza --que se implementan con éxito en Venezuela; y por incluir a
Honduras en organizaciones como son el ALBA y PETROCARIBE. El ALBA y PETROCARIBE no son
organizaciones terroristas ni narcotraficantes, son organizaciones internacionales que cambian las reglas del juego
económico. Simplemente promueven el comercio en condiciones equitativas, --reduciendo las diferencias
tecnológicas y económicas-- y fortaleciendo la posición de los países pobres en las estructuras del comercio
internacional –tal como lo recomiendan las Naciones Unidas. Un tipo de relación económica que va más alla del
capitalismo y promueve la solidaridad y la amistad entre los pueblos. Es interesante que este tipo de acciones que
serían perfectamente aceptables si las implementa una Organización No Gubernamental (NGO). No son aceptables
si las promueven Venezuela y/o Cuba. Sin embargo, repito este tipo de comercio internacional es el que
recomienda el “Informe sobre el Desarrollo Humano 1999”de la propia ONU. Estas políticas dejan de ser --fruto del
consenso en la ONU sobre el desarrollo – y se redefinen como “chavistas” y de repente adquieren un carácter
“demoníaco” en los medios de comunicación privados. Entonces, Micheletti justifica un golpe militar en defensa de
la “democracia” que incluye la muerte y persecución de los zelayistas y constitucionalistas que se oponen al
gobierno de facto. Además, Micheletti acusa a Chávez de anti-demócrata, mientras él abiertamente orquesta y
participa en el secuestro y expulsión del Presidente Constitucional Manuel Zelaya del país. Para colmo, para
mantenerse en el poder hasta las “elecciones” –donde por supuesto ganará el candidato golpista-- impone un
régimen militarizado y represivo. Todo ello para defender la “democracia” y con el reconocimiento oficial de
semejante “legalidad” de EE UU y España. El problema es grave, porque Roberto Micheletti no es un militar, sino
un ex candidato en las elecciones presidenciales pasadas y era presidente del Congreso hondureño cuando dio el
golpe de estado. Es decir un “demócrata” que considera que el “golpe de estado” es un recurso “legitimo” de hacer
política en Honduras. Entre los que participaron en el golpe y su posterior legitimación, se encuentran las fuerzas
supuestamente “democráticas” de Honduras: diputados, jueces de la Corte Suprema de Justicia, la cúpula militar y
eclesiástica del país. En la condonación del golpe militar participaron además los medios de comunicación privados
nacionales e internacionales, incluyendo CNN. Desde entonces, todos estos grupos y medios participan en encubrir
y apoyar a los golpistas y ocultan los crímenes y violaciones de los derechos humanos que ocurren en Honduras. Al
menos el golpe fue condenado en la OEA y la ONU por unanimidad; y todavía hay muchos países que no
reconocen la legitimidad del actual gobierno. Pero, mientras tanto, el Presidente Zelaya está en exilio forzoso y en
los medios la víctima es presentada como la “causa” del golpe. El pecado más grave de Zelaya --y así pasará a la
historia-- fue haber implementado alianzas y políticas económicas para acabar con la pobreza en Honduras. Estas
alianzas afectaban “negativamente” los intereses corporativos nacionales e internacionales.
127
el caso de Manuel Zelaya-- atacando no ya su obra política sino su carácter y su personalidad.
Son las acusaciones en el “modo subjuntivo.” El Presidente Chávez – que fue educado y viene
de la estructura militar venezolana -- tiene demasiada “popularidad” --dentro y fuera de
Venezuela, que bien “pudiera degenerar” en cualquier momento en un ser “autoritario” y
“monstruoso.” Se ignora su récord de participación democrática: la propia Constitución
Bolivariana, las victorias y derrotas electorales en los procesos de votación limpios y ejemplares,
la erradicación de la pobreza, las políticas de mejoras en la alimentación, educación y sanidad de
los venezolanos. Todo se ha conseguido en un ambiente democrático donde impera la propia
libertad de expresión y el desmantelamiento del aparato represor del estado con respecto a un
pasado realmente autoritario. Son precisamente los grupos de oposición los que se han
involucrado en hechos anti-democráticos: ignoran las propuestas al diálogo desde gobierno, se
implican en golpes militares, boicotean elecciones, llaman y preparan magnicidios, organizan
paros y huelgas ilegales para acabar con la paz y la democracia.
Los hechos dicen más que las palabras y los números y las estadísticas radicalmente
contradicen las críticas anti-democráticas hechas desde la oposición.
Aunque no todos lo
reconozcan, todos lo viven en Venezuela --lo disfrutan o lo sufren-- en la democracia
revolucionaria durante los últimos diez años.
El pueblo, votando en las urnas en cuatro
ocasiones, ha dado su confianza de forma mayoritaria a Hugo Chávez Frías y a las fuerzas
políticas que lo apoyan, que son muchas y que son verdaderamente democráticas en su mayoría.
La nueva Constitución, aprobada en referéndum nacional, es el hecho legal más
significativo del avance de la democracia en Venezuela. Los gobiernos bolivarianos han sido al
menos tan democráticos como los de la IV Republica y quizás menos “populistas” –que si
populares— en la historia de la democracia venezolana. Los venezolanos han sido consultados
electoralmente en los últimos diez años más que nunca en el pasado. Se han aceptado y
rechazado diferentes propuestas del gobierno en temas que les conciernen directamente 144. El
pueblo apoya claramente que el Gobierno Bolivariano haya puesto todas sus prioridades
correctamente en eliminar la pobreza del país, implementado políticas sociales necesarias y
efectivas.
144
Se rechazó en referéndum la reforma constitucional propuesta por el Presidente Chávez, por ejemplo. Para un
entendimiento del populismo en Venezuela, ver Ramades Larrazábal y Leticia Barrios G., El Colapso del Populismo
y el Auge de la Oligarquía Financiera. (Caracas: Universidad Central de Venezuela, 1991)
128
¿Podríamos definir el proceso como “socialista”? Sí, ya que sus resultados a nivel de
mejora social son innegables. El estado venezolano ha invertido la mayoría de sus recursos
humanos y económicos en rescatar al “pobre” del anonimato –dándole identidad--, de la
ignorancia—dándole educación-
y de la enfermedad—dándole salud.
El objetivo ha sido
incorporar y recuperar al ciudadano para volverlo activo, participativo y protagónico en el
progreso del país y de su propio destino. ¿Cómo se ha conseguido? En buena parte el estado
venezolano no ha hecho otra cosa que aplicar las medidas sociales que recomienda la
Declaración sobre el Derecho al Desarrollo. 145 En la misma se confirmó, durante la Conferencia
sobre los Derechos Humanos realizada en Viena, una premisa fundamental ahora muy de moda:
“la persona humana –y no la economía—es el sujeto central del desarrollo” 146.
No hay que engañarse tampoco, las mejoras no son avances definitivos todavía. Un
índice de desarrollo humano alto no resuelve el problema de los desequilibrios económicos
existentes en un país. La pobreza sigue siendo una amenaza grave y el mejoramiento del
desarrollo humano necesita cambios socio-económicos que cambien la distribución del poder en
todas las clases sociales. La profundización de la democracia a nivel constitucional necesita
además, ciertas reformas internas económicas y sociales entre las que se encuentra, por ejemplo,
la necesidad de una reforma agraria seria. Una reforma agraria que haga justicia a los pobres que
viven en el interior del país; que evite las migraciones sin sentido de campesinos en busca de
trabajo poco calificado en las ciudades; y que favorezcan el abaratamiento de la comida que
mejorara la salud y educación de todos los venezolanos.
La gran mayoría de los pobres están en el campo y la buena noticia es que la reforma
agraria bolivariana aparece en el marco de una política macro-económica que favorece la
racionalización de la producción y la comercialización agrícola de acuerdo a las necesidades del
propio país dando poder a los campesinos.
El estado rechaza las demandas del mercado
internacional y las corporaciones privadas nacionales y extranjeras que determinaban los precios
de la comida básica en el mercado venezolano hasta hace poco y establece parámetros de
desarrollo endógeno. El término bolivariano que define el contenido programático y políticoeconómico agrario es el de soberanía alimentaria.
145
Res.41/128 de la Asamblea General de la ONU, de 4 de diciembre de 1986. En Durán, Curso de Derecho
Internacional, 47.
146
Párr. I.10 de la Declaración de Viena sobre los Derechos Humanos. Ibíd., 47.
129
El cuadro “indicadores de la Pobreza 1997-2006” muestra la evolución positiva de una
mejora de los índices de pobreza en las dos categorías fundamentales en las que se mide, por
hogar e individual. Las políticas de soberanía alimentaria que favorecen el acceso a la comida y
el abaratamiento de la comida son fundamentales para acabar con la desnutrición que existía en
el país.
Indicadores de Pobreza 1997 - 2006
Cuadro 1
Situación de Pobreza de:
1997
2000
2003
2006
Hogares
Total
Total Declarado
No Pobres
No Pobres (%)
Pobres
Pobres (%)
Pobres No Extremos
Pobres No Extremos (%
Pobres Extremos
P obres Ex trem os (% )
No Declarado
No Declarado (%)
4,790,520
4,626,926
2,403,507
51.9
2,223,419
48.1
1,329,287
28.7
894,132
19.3
163,594
3.4
5,116,560
4,999,633
2,981,522
59.6
2,018,111
40.4
1,273,789
25.5
744,322
14.9
116,927
2.3
5,901,012
5,575,633
2,501,332
44.9
3,074,301
55.1
1,678,924
30.1
1,395,377
25.0
325,379
5.5
6,373,848
6,152,781
4,268,125
69.4
1,884,656
30.6
1,326,399
21.6
558,257
9.1
221,067
3.5
Personas Provenientes de Hogares
Total
Total Declarado
No Pobres
22,784,025
21,934,560
9,984,449
No Pobres (%)
45.5
Pobres
11,950,111
Pobres (%)
54.5
Pobres No Extremos
6,824,124
Pobres No Extremos (%
31.1
Pobres Extremos
5,125,987
P obres Ex trem os (% )
23.4
No Declarado
849,465
No Declarado (%)
3.7
24,179,360
23,638,896
12,684,301
53.7
10,954,595
46.3
6,695,836
28.3
4,258,759
18.0
540,464
2.2
25,625,384
24,110,756
9,140,395
37.9
14,970,361
62.1
7,797,008
32.3
7,173,353
29.8
1,514,628
5.9
26,951,658
25,985,605
16,551,960
63.7
9,433,645
36.3
6,555,637
25.2
2,878,008
11.1
966,053
3.6
Fuente: Encuesta de Hogares por Muestreo / INE
Nota: La línea de Pobreza es Nacional
El segundo aspecto que la Revolución crea, donde no lo había --o sea en prácticamente
todo el interior del país-- un sistema de educación y salud mínimo gratuito y universal. El nuevo
sistema beneficia a todas las personas que viven en Venezuela sin distinción de clase e incluye
emigrantes y refugiados también. Estos programas avanzan y llegan a las zonas más pobres
incluyendo a las comunidades indígenas;
cambiando la dinámica circular de la pobreza y
emigración existente en Venezuela desde los tiempos de la colonia y del dictador Juan Vicente
130
Gómez; según los cuales el progreso solo existía en la ciudad. El siguiente cuadro desglosa el
problema de la pobreza en Venezuela, y muestra como pequeños cambios estructurales pueden
hacer variar rápidamente grandes sectores de la población pasen de un nivel a otro.
Método integrado de pobreza, Línea de Pobreza (Lp) vs Método NBI,
Venezuela 2006
Método NBI
Sin
Necesidades
básicas
Insatifechas
Hogares 3,512,899
Por encima %
55.6%
de la línea
de pobreza
No Pobres
Al menos una
necesidad
básica
insastifechas
539,224
4,052,123
8.5%
65.3%
No
Pobreza
Pobres
Estructural
(Lp)
1,004,236
2,153,804
13.6%
34.7%
Pobreza
Pobres
Crónica
(Lp)
1,543,460
6,205,927
24.9%
100.0%
Método
Línea
de
Ingreso
Hogares 1,149,568
Por debajo
(LI)
%
18.2%
de la línea
Pobreza
de pobreza
Coyuntural
Hogares 4,662,467
%
75.1%
No Pobres
Pobres (NBI)
(NBI)
Total
Nota: - No Pobres corresponde a hogares que no experimentan problemas de
pobreza, según las líneas de pobreza establecidas por los dos métodos. Pobreza
Coyuntural este grupo sugiere una situación social descendente ya que aparentemente
tiene satisfecho todas sus necesidades básicas, pero recibe un nivel de ingresos por
debajo de la línea de pobreza. Pobreza Estructural podría indicar al hogar en una
situación social ascendente, con ingresos por encima de la línea de pobreza, pero que
todavía con necesidades básicas insatisfechas. Pobreza Crónica a este grupo
pertenecen los hogares que tienen al menos una necesidad básica insatisfecha y
reciben ingresos cuyo nivel está por debajo de la línea de pobreza. Porcentaje de No
Declarado 6,5%.
Fuente: Instituto Nacional de Estadística, INE
Dentro del marco de los derechos humanos hay que entender cómo define la Revolución
Bolivariana “la pobreza” y la “indigencia o pobreza extrema.” El concepto de pobreza que
utiliza el estado y el INE (Instituto Nacional de Estadística) define el desigual reparto de recursos
y oportunidades: económicas (ingresos-gastos), salud (acceso y calidad de los servicios),
educación (acceso y calidad), seguridad social (transferencias sociales) y derechos ciudadanos.
131
Es una definición con una dimensión multidimensional, que concuerda con la definición de
Henry Shue sobre la defensa prioritaria de los derechos humanos básicos –seguridad y
subsistencia-- que estamos analizando en este trabajo de investigación.
Los derechos de subsistencia los define el Instituto Nacional de Estadística (INE)
determinando la línea de pobreza de ingreso de los miembros de un hogar o familia con respecto
a su capacidad adquisitiva real. Esto se determina primero midiendo los ingresos provenientes
del trabajo principal (sueldo bruto sin deducciones; incluyendo bonos, viáticos, propinas, etc.)
más los ingresos provenientes de otros trabajos de todos los miembros familiares (incluyendo
trabajos no habituales) y añadiendo otros ingresos adicionales de ayudas tales como becas, ayuda
familiar, pensiones, etc.
Segundo, se considera la estimación mínima para cubrir
las
necesidades de una canasta alimentaria familiar, que es necesaria para satisfacer las necesidades
básicas alimenticias; y una segunda canasta básica para satisfacer las necesidades no
alimentarias, tales como los gastos de vivienda, higiene, educación, salud, etc..
Se define hogar no pobre a aquel en que el ingreso per cápita del hogar es superior a la
canasta alimentaria y básica per cápita. Hogar en situación de pobreza es aquel en que el ingreso
per cápita, es inferior al de la canasta básica per cápita. Un hogar en pobreza no extrema es
aquel cuyo ingreso es inferior al valor de la canasta básica per cápita, pero superior al de la
canasta alimentaria per cápita. Por último, un hogar en pobreza extrema, es aquel cuyos ingresos
per cápita es inferior al valor de la canasta alimentaria per cápita.
Las estadísticas de la pobreza son suministradas por el INE de Venezuela y desglosan
frecuentemente la variación de la situación de la pobreza en el país 147. Es por eso la importancia
de la inflación en la canasta básica de alimentos y servicios básicos. Esta forma de medir es en
mi opinión excelente porque cualquier cambio económico en el precio de la comida que se
registre en el país inmediatamente afecta para bien o para mal los índices de pobreza en el país.
Las siguientes son algunas de las estadísticas a nivel nacional en las cuales se basa el
índice Gini y que indican con todo detalle como las medidas sociales del gobierno reducen la
pobreza en el país. Merece la pena entrar en detalle y entender cómo medir la evolución de la
pobreza y queda claro que la pobreza no es irreversible y que no se ha erradicado. Un cambio en
las políticas sociales o económicas podría tener un efecto negativo inmediato en el país. Aunque
147
Siempre se pueden ver las estadísticas más recientes sobre la pobreza en Venezuela en la página oficial del
Instituto Nacional de Estadística: www.ine.gov.ve
132
queda un largo camino que recorrer, sin embargo, también es innegable que los avances son
significativos en la dirección correcta con respecto al pasado reciente. Podemos decir que en los
nuevos gobiernos bolivarianos hay una tendencia progresiva positiva a reducir la pobreza de
forma significativa. El papel del estado es fundamental en su capacidad de eliminar y reducir los
índices de la pobreza extrema medida por ingreso, que
disminuyó cerca de 11 puntos
porcentuales al pasar del 20,3 al 9,6 en 2007 en Venezuela. El número de personas indigentes,
en pobreza extrema medida por ingreso, registra un decrecimiento radical y para el año 2007 se
registra el menor porcentaje de hogares pobres del 9,6%. Obviamente, la lucha contra la pobreza
extrema es un buen barómetro de la efectividad de las políticas socio-económicas de
alimentación y trabajo del gobierno de la Revolución Bolivariana; y el de la pobreza es el mejor
medidor de la mejora existente del acceso a los servicios sociales básicos en Venezuela. Ambos
básicamente reproducen la definición de los derechos humanos básicos que defiende Henry Shue
en su jerarquización de los derechos humanos.
Los siguientes cuadros estadísticos y gráficas muestran de diversas maneras de leer el
estado de la situación del país en diferentes aspectos.
Medición de la Pobreza
Pobreza por
Ingreso (LI)
Desigualdad
Económica
(Coeficiente
Gini)
Condiciones
de Vida
Integración de
los Métodos
Pobreza por
Necesidades
Básicas
Insatisfechas
(NBI)
Índice de
Desarrollo
Humano (IDH)
Fuente: Instituto Nacional de Estadística, INE
10
133
Porcentaje de personas en situación de pobreza, según periodo,
2dos semestres 1998-2007
Periodo
Total
No Pobres
Pobres
Pobres No
Extremos
Pobres
Extremos
2do. Semestre 1998
2do. Semestre 1999
2do. Semestre 2000
2do. Semestre 2001
2do. Semestre 2002
2do. Semestre 2003
2do. Semestre 2004
2do. Semestre 2005
2do. Semestre 2006
2do. Semestre 2007
100,0
100,0
100,0
100,0
100,0
100,0
100,0
100,0
100,0
100,0
49,6
51,3
53,7
54,6
44,6
37,9
46,1
56,3
63,7
66,4
50,4
48,7
46,3
45,4
55,4
62,1
53,9
43,7
36,3
33,6
30,1
28,5
28,3
28,4
30,3
32,3
31,4
25,9
25,2
24,0
20,3
20,1
18,0
16,9
25,0
29,8
22,5
17,8
11,1
9,6
Nota: Método Línea de Ingreso
12
Fuente: Instituto Nacional de Estadística, INE
80.0
Porcentaje de personas pobres, por línea de ingreso,
2dos semestres 1998-2007
62.1
55.4
50.4
48.7
46.3
Personas Pobres
53.9
45.4
43.7
42.5
36.3
29.8
20.3
25.0
20.1
18.0
16.9
22.5
33.6
Personas en Pobreza
Extrema
17.8
11.1
9.6
5.0
2do. Semestre 2do. Semestre 2do. Semestre 2do. Semestre 2do. Semestre 2do. Semestre 2do. Semestre 2do. Semestre 2do. Semestre 2do. Semestre
1998
1999
2000
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
Fuente: Instituto Nacional de Estadística, INE
134
15
70.0
Porcentaje de hogares pobres por línea de ingreso,
2dos semestres 1998-2007
Porcentaje
55.1
43.9
48.6
42.0
40.4
47.0
39.0
Hogares Pobres
37.9
35.0
30.6
25.0
17.1
16.9
21.0
14.9
18.6
14.0
15.3
28.5
Hogares en
Pobreza Extrema
9.1
7.9
0.0
2do Sem. 1998 2do Sem. 1999 2do Sem. 2000 2do Sem. 2001 2do Sem. 2002 2do Sem. 2003 2do Sem. 2004 2do Sem. 2005 2do Sem. 2006 2do Sem. 2007
16
Fuente: Instituto Nacional de Estadística, INE
Hogares en situación de pobreza, por necesidades básicas insatisfechas,
según año, 1998-2007
Año
Total
No Pobres
Pobres
Pobres No
Extremos
Pobres
Extremos
1998
1999
2000
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
4.855.962
4.968.155
4.980.351
5.176.792
5.696.528
5.794.819
5.996.127
6.132.511
6.319.309
6.420.566
3.452.138
3.514.549
3.482.301
3.735.833
3.918.899
4.027.671
4.219.001
4.494.069
4.842.249
4.926.716
1.403.824
1.453.606
1.498.050
1.440.959
1.777.629
1.767.148
1.777.126
1.638.442
1.477.060
1.493.850
879.679
960.342
976.299
958.009
1.035.697
1.033.867
1.048.305
1.020.737
905.351
951.891
524.145
493.264
521.751
482.950
741.932
733.281
728.821
617.705
571.709
541.959
Nota: No incluye de otro tipo y colectiva
Fuente: Instituto Nacional de Estadística, INE
135
17
Porcentaje de hogares en situación de pobreza, por necesidades básicas
insatisfechas, según año, 1998-2007
Año
Total
No Pobres
Pobres
Pobres No
Extremos
Pobres
Extremos
1998
100,0
71,1
28,9
18,1
10,8
1999
100,0
70,7
29,3
19,3
9,9
2000
100,0
69,9
30,1
19,6
10,5
2001
100,0
72,2
27,8
18,5
9,3
2002
100,0
68,8
31,2
18,2
13,0
2003
100,0
69,5
30,5
17,8
12,7
2004
100,0
70,4
29,6
17,5
12,2
2005
100,0
73,3
26,7
16,6
10,1
2006
100,0
76,6
23,4
14,3
9,0
2007
100,0
76,7
23,3
14,8
8,4
Nota: No incluye de otro tipo y colectiva
Fuente: Instituto Nacional de Estadística, INE
35.0
18
Hogares en situación de pobreza por NBI, 1998-2007
28.9
29.3
31.2
30.1
30.5
27.8
29.6
Hogares Pobres
Porcentaje
26.7
23.4
23.3
21.0
13.0
10.8
9.9
10.5
Hogares en
Pobreza Extrema
12.7
12.2
10.1
9.3
9.0
8.4
7.0
1998
1999
2000
2001
2002
Fuente: Instituto Nacional de Estadística, INE
136
2003
2004
2005
2006
2007
19
Hogares pobres por tipo de método, según año, 2002-2008
Método
Año
Necesidades
Insatisfechas
Linea de Pobreza
Básicas
Pobreza Crónica
Total
Porcentaje
Total
Porcentaje
Total
Porcentaje
2002
2,715,379
48.6
1,777,629
31.2
1,106,671
20.2
2003
3,074,301
55.1
1,767,148
30.5
1,307,843
23.7
2004
2,690,006
47.0
1,777,126
29.6
1,276,274
22.7
2005
2,251,303
37.9
1,638,442
26.7
1,004,236
18.1
2006
1,884,656
30.6
1,477,060
23.4
856,641
14.1
2007
1,804,628
28.5
1,493,850
23.3
750,931
12.0
2008
1,775,069
27.5
1,535,575
23.4
752,649
11.8
Los cuadros muestran los cambios que han ocurrido y la realidad presente en esta
materia. Destacan los efectos de la crisis del golpe de estado y la huelga petrolera en el 2002 y
2003; donde se produce una paralización de las actividades del estado y claramente se muestra
un aumento de los índices de pobreza en el país. Una vez superada la crisis, los resultados de
esta lucha con la pobreza reflejan una clara mejoría y una tendencia muy favorable a partir de
entonces. Según el informe de la CEPAL del 2008 la tendencia no puede ser más esperanzadora,
pero también reconoce el camino que falta por recorrer:
Entre 2002 y 2007, la disminución más importante de la brecha entre quintiles extremos
(20% más pobres y 20% más ricos) se presentó en la República Bolivariana de Venezuela donde
alcanzó el 41%. Es cierto que en 2007 tenemos la menor brecha en toda América Latina, pero
todavía el 20% de los venezolanos más ricos recibe 10 veces más de lo que recibe el 20% de los
más pobres: es lo que indica el valor nacional de 0,4211 del coeficiente de Gini 148.
Hay que destacar datos adicionales tales como la reducción del índice de subnutrición
que disminuyó en el país un 70% a partir del 2003. Según la FAO, el mínimo de nutrición por
persona debería ser de 1.800 calorías por día.
En Venezuela, el índice de destrucción varia
148
Ver Jorge Dávila, “Votos, pobreza y desigualdad en Venezuela.” (Profesor de la Universidad de Los Andes,
Mérida, Venezuela).
137
significativamente durante la IV República de un 11% (1990) a 21% (1998). En el 2006, el IPS
(índice de subnutrición) se logró reducir 6%. Paradójicamente, en Venezuela repuntan los
problemas de obesidad y sobrepeso de los países desarrollados en esta materia, debido --según el
propio INN (Instituto Nacional de Nutrición) -- al aumento de comida “chatarra” y la adopción
de “patrones exógenos de alimentación” en el país. El promedio de calorías diarias consumidas
por persona era de 2.300 (2006). Ahora la calidad proteínica de la alimentación es por supuesto
un tema tan importante como la cantidad de la misma 149.
3. La Reforma Agraria (1946-1999) y la Nueva Ley de Tierras (2005)
El CIDA (Comité Interamericano de Desarrollo Agrario) señala que hay dos formas
diferentes de resolver la cuestión agraria en Latinoamérica. La reforma agraria indirecta que es
"aquella que trata de resolver los conflictos más obvios sin alterar la estructura rural existente."
Por otro lado, la reforma directa, que se define como "aquella que cambia radicalmente las
estructuras rurales existentes creando o afirmando los derechos e instituciones campesinas"150.
Para James Petras y Robert La Porte la reforma indirecta no es más que una política de estado
para el desarrollo agrario cuyo objetivo es principalmente económico.
La directa si es
significativa y "real" ya que se logra transformaciones en la estructura socio-política del país con
resultados económicos adicionales 151.
En materia de política exterior, los Estados Unidos y su programa de la década de los
años 60 --la Alianza Para el Progreso—favoreció y recomendó la implementación de reformas
agrarias indirectas para evitar revoluciones socialistas en Latinoamérica. Fue parte importante
de su política de “seguridad nacional” de “contención” del comunismo y método para prevenir
revoluciones en los países en desarrollo.
Incluso el propio Presidente John F. Kennedy y
funcionarios del estado estadounidense denunciaron retóricamente la "injusticia" existente en la
tenencia de la tierra de Latinoamérica y que era una de las causas de los levantamientos
revolucionarios 152. Los procesos de reforma agraria en Venezuela son interesantes porque se
producen en tres modelos diferentes en tres fases históricas continuas pero diferentes. Esto
149
Ver “Índice de desnutrición disminuyó 70% en Venezuela.” www.vtv.gov.ve . Declaraciones de María Mercedes
Agayon, especialista del Instituto Nacional de Nutrición a la Agencia Bolivariana de Noticias 28 de abril de 2010.
150
Solón Barraclough y Juan Carlos Collarte eds., Agrarian Structure in Latin America. (Lexington: Lexington
Books, 1971), 41.
151
James F. Petras y Robert LaPorte, Jr., Cultivating Revolution. (New York: Vintage Books, 1971), 11-24.
152
Para una detallada descripción de la Alianza Para El Progreso, ver ibíd., 375-422.
138
permite la siempre difícil comparación y el análisis político, fundamental para entender los tres
modelos y el proceso histórico paralelo.
La primera reforma agraria directa --sin precedentes histórico en América del sur-comienza precisamente en Venezuela(1945) y continua durante el primer gobierno democrático
del ilustre escritor Rómulo Gallegos en el Trienio (1946-49); justo antes del golpe militar del
general Marcos Pérez Jiménez. La implementó el primer gobierno democráticamente electo en
la historia del país. Fue una reforma agraria liderizada por las organizaciones campesinas de
Acción Democrática (AD) y el Partido Comunista de Venezuela (PCV). Entonces, Venezuela
era un país rural y la reforma agraria prometía transformar profundamente la estructura social,
económica y política del país. Pero, el golpe militar del general Pérez Jiménez frustró su
desarrollo prácticamente nada más nacer.
La retórica política agraria era "la tierra para quien la trabaje," y sus objetivos fueron: la
eliminación de la explotación humana en el campo a través de la distribución de tierras
productivas, la concesión de créditos para la producción, la eliminación de los grandes
latifundios y la educación del campesinado. Como mencionamos fueron los sindicatos agrarios
los agentes protagónicos y actores que ejecutaron el proceso de reforma, ocupando tierras
improductivas y forzando al gobierno a tomar decisiones en favor del campesinado.
Los
campesinos de esta época eran en términos marxistas “una clase política en sí misma y para sí
misma.” Como consecuencia se fraguó un cambio estructural en las zonas rurales y se produjo
un bajón dramático en la producción durante los primeros años de la reforma, tal y como es
característico de las reformas agrarias directas. De acuerdo con datos oficiales, el decline de la
producción afectó a la mayoría de los insumos durante este período revolucionario (1945-1945).
La estadística agrícola en la tabla siguiente mide los cambios agrícolas del proceso
revolucionario en miles de toneladas métricas. Las bananas se calculan por millones de ramos de
banano; miles las cabezas de ganado, huevos por unidad y leche de vacuno por litro 153. Esta fase
termina violentamente con un golpe militar que reversa las acciones campesinas y la producción
153
La tabla “Producción agrícola y ganadera durante los períodos revolucionarios (1945-49; 1959-1960) es una
traducción literal de la que presenta James W. Wilkie, tabla 35, "Venezuelan Agricultural Production, 1945-1969;
"Measuring Land Reform: Venezuela," Statistical Abstract of Latin America. (Los Ángeles: University of
California, 1978), 92.
139
rápidamente vuelve a la normalidad durante los primeros años de la década de los 50. Se
produce la contra-reforma agraria de la dictadura del general Pérez Jiménez 154.
Producción agrícola y ganadera durante los dos periodos revolucionarios (1945-49; 19591969)
1945
1946
1947
1948
1949
Maíz
300
280
300
223
323.5
Arroz
17.1
11.3
8.8
41.7
35.9
Café
45.7
57.8
48.9
54.7
41.5
1955
1959
1960
1961
1962
1963
1964
1965
1966
1967
1968
1969
317.4
336
439.5
419
540
430
475
521
557.5
633.4
660.8
670.3
60
38.6
71.9
80.7
103.1
131.1
165.8
199.9
195
223.1
244.6
143.9
53
60.8
59
57.1
54.2
60.7
56.1
54.3
61
61.8
59.2
60.6
Yuca Sésamo Banana Porcino Vacuno Huevos
85.6
0.5
282
328
87.3
2
312
363
90.4
2.8
293
357
95.9
1.8
344
345
148.6
6.3
62
395
392
156.8
217.9
340.2
339.2
322.8
342.4
311.7
301.4
320
315.6
340.9
309.8
9.1
19.8
16.2
24.9
28.1
30.9
46.6
54.1
60
80
76.2
82.6
63.9
54.5
66.6
50.2
43.7
51.4
49.5
55
56
57.3
63.2
63.2
445
620
618
621
606
621
663
672
686
721
725
827
495
673
707
773
782
826
896
915
994
1024
1049
1161
Leche
79
165
189
273
405
300
436
508
585
569
1071
1186
309
375
421
444
481
521
585
626
663
696
730
767
La segunda fase de la reforma agraria no es menos interesante y comienza en 1959,
después del importante interludio de la dictadura militar de Pérez Jiménez (1949-1958) durante
el segundo gobierno democráticamente elegido en la historia de Venezuela, el de Rómulo
Betancourt. Sin embargo y a pesar de las expectativas campesinas esta fase fue diferente de la
primera.
Primero, Venezuela es un país más urbanizado y segundo se lleva a cabo una
transformación cualitativa de la reforma para convertirse en una reforma indirecta o proyecto
estatal de desarrollo agrícola. La reforma ya no es dirigida por los sindicatos campesinos sino
154
Esta vuelta a la normalidad en los niveles de producción no se produjo en la producción de arroz. Ibíd., 84.
140
por el Ministerio de Agricultura y Cría y las instituciones del estado venezolano. El estado y no
los sindicatos campesinos son los agentes protagónicos del cambio.
Es concretamente el
Ministerio de Agricultura dentro de un gobierno de coalición que incluye a los tres partidos
políticos mayoritarios: AD, COPEI (Partido Social Cristiano) y URD (Unión Republicana
Democrática). Es importante destacar que el liderazgo --ya no lo tienen los líderes y sindicatos
campesinos de AD-- sino los técnicos agrónomos y políticos del gobierno del propio AD. El
papel del sindicato agrario se convierte en el de auxiliar secundario a los objetivos generales
trazados por las instituciones gubernamentales en los planes nacionales de desarrollo.
La
retórica política también cambia y se enfoca en aspectos de "modernización," "desarrollo,"
"siembra del petróleo," con objetivos de mejorar la producción, desarrollar agro-industrias,
conseguir la autosuficiencia alimentaria, diversificar e industrializar la agricultura.
La reforma indirecta tal como era de esperar produce incrementos inmediatos en la
producción de arroz, café, yuca y sésamo; también se producen incrementos dramáticos en
ganadería, producción de huevos y leche. 155 Coutsoumaris resume esta transformación en los
siguientes términos.
Debo indicar en conclusión que el problema de la reforma agraria en las condiciones
existentes en Venezuela --y otros lugares similares en Latinoamérica-- es la creación de una
nueva institución rural o granja que se ajusta a los prospectos y necesidades de un país con
posibilidades de rápida industrialización. En contraste con las experiencias de Europa y Asia,
donde el problema básico fue la modificación de una estructura social existente a través de la
re-distribución de tierras y cambios en el control de la tenencia de la tierra. Esto explica el por
qué, todos los intentos previos de implementar reformas agrarias con amplios objetivos sociales
y políticos se han encontrado con tantas dificultades en su realización 156.
Esta diferencia cualitativa es sumamente importante para entender el principio del fracaso
de la llamada "revolución democrática” durante la IV República. 157 El campesinado venezolano
votó masivamente en 1960 por Rómulo Betancourt (AD) con la aspiración de una reforma
agraria directa, tal como había sido definida e implementada durante el Trienio (1946-49) por su
antecesor Rómulo Gallegos (AD).
No hay que olvidar que Rómulo Betancourt gana las
155
En la tabla se ve claramente lo que indicamos para los años 1945-49 y 1959-1969. Para un balance del valor de
la producción agrícola en Venezuela: "Value of Agricultural Production in Venezuela (Total and Share Generated
by IAN Land recipients) Crop and Animal Production Value for 1958, 1963 and 1968," ver otras tablas estadísticas.
En Wilkie, "Measuring Land Reform," 93.
156
Este tipo de reforma evita los obstáculos presentes en una reforma agraria directa ya que evita enfrentar a los
terratenientes que obviamente no quieren redistribuir la tierra. Ibid. 21.
157
Ver Robert J. Alexander, The Venezuelan Democratic Revolution. (New Brunswick: Rutgers University Press,
1964).
141
elecciones con el voto rural –siendo la reforma agraria era el tema central de su programa
político-- además de sus promesas de democratizar el país. El voto rural masivo de AD gana las
elecciones a la izquierda que tenía mayoría en las ciudades, particularmente en Caracas 158. Es
interesante que académicos como Coutsoumaris, Robert J. Alexander y otros argumenten que la
reforma agraria trajo importantes cambios positivos económicos y sociales al país, que como
veremos son muy discutibles desde el punto de vista estadístico. Las estadísticas muestran lo
opuesto --contrariamente al efecto producido durante el Trienio. Los efectos de la reforma son
claramente "anti-democráticos” y condenan a los sindicatos campesinos a su desvalorización
política y a los campesinos a vagar entre la pobreza y la indigencia.
Por un lado los cambios económicos fueron muy limitados y los beneficios sociales al
campesinado mínimos donde los hubo. Una minoría campesina se benefició materialmente de la
reforma pero la gran mayoría quedó claramente marginada. En resumen la reforma transformó
al campesino en pobre. Los campesinos más jóvenes sin trabajo ni educación emigraron a las
afueras de las ciudades donde vivían en busca de trabajo en los “ranchos” o zonas marginales en
condiciones de pobreza urbana. Los que se quedaron en el campo se dedicaban a la ocupación
ilegal de tierras para sobrevivir; de las que eran expulsados periódicamente por los terratenientes.
La clase campesina -- la mayor fuerza política organizada en 1960-- quedó prácticamente
eliminada como clase social en ocho años gracias a la reforma misma. En 1968 ya se ven
cambios políticos significativos en los sindicatos campesinos, ahora divididos y sin poder. Para
los campesinos los cambios sociales son mínimos o insignificantes en materia de tenencia de la
tierra, analfabetismo y emigración rural. Los niveles serán los mismos que los que había durante
la dictadura de Pérez Jiménez. Como veremos después la reforma indirecta de Betancourt fue
en realidad una contra-reforma porque lo que tiene como resultado más importante es
desmantelar el poder campesino que existía en 1960.
Los campesinos perdieron poder e
importancia a nivel nacional, mientras se reafirma la existente estructura latifundista rural que
había dejado la dictadura anterior. Los pocos que se beneficiaron eran esclavos del sistema, que
creó un asiento campesino dependiente de la ayuda económica y legal del estado. Dependía
materialmente del estado para obtener crédito y servicios básicos tales como transporte,
electricidad, educación y agua. Dependía jurídicamente para conseguir los títulos permanentes
158
Ver Raymond J. Penn and Jorge Schuster, "La Reforma Agraria," en Oscar Delgado ed., Reformas Agrarias en la
América Latina. (México: Fondo de Cultura Económica, 1965), 249-258.
142
de la tierra. La reforma de 1961 dirigida por el IAN (Instituto Agrario Nacional), el MAC
(Ministerio de Agricultura y Cría) y la FCV 159 (Federación Campesina de Venezuela) fue
controlada por un grupo de técnicos y agrónomos del estado venezolano que seguían la línea
partidista de AD/Gobierno al pie de la letra. La reforma consolida la estructura social del campo
que se establece durante la dictadura y desmantela el poder político de la Federación Campesina
de Venezuela, eliminando al campesinado como clase social. Divide a la FCV en dos grupos,
aquellos campesinos que obtienen tierras (una minoría) y aquellos que siguen ocupando "tierras
ilegalmente" o no tienen otra opción que emigrar a la ciudad en busca de trabajo.
¿Una oportunidad perdida? Sin duda, los efectos de desmantelar a la FCV fue perder la
segunda oportunidad para eliminar la pobreza, alfabetizar el país y democratizar la sociedad e
incorporar a la población rural al proceso de desarrollo social y económico. Eliminando así las
desigualdades que existían y existen en el país. La Reforma Agraria de 1961 beneficia a los
latifundistas y la agroindustria; consolidando su poder en las zonas rurales. Pero en mi opinión
condena a muerte a la IV República. Se podría argumentar que la IV República gana la batalla
militar a la guerrilla venezolana en 1968 pero perderá finalmente la guerra al no llevar a cabo la
reforma agraria.
¿Por qué? Porque menospreció su gran oportunidad de transformación
económica y de integración social que hubiera significado una reforma agraria directa como la
que se implementó en 1949. Condenó la IV República al fracaso, ya que trasladó los problemas
del campo a la ciudad, llenándolas de pobres y marginados. No es casualidad que el actual
Presidente Hugo Chávez Frías, hijo de campesinos del estado Barinas, tenga gran popularidad en
el interior del país, en los barrios de las ciudades y en las Fuerzas Armadas, plagadas de
campesinos “refugiados” o hijos de “emigrados” del campo venezolano. La Revolución
Bolivariana no dejará pasar esta oportunidad para la democratización e integración en el país
éstas poblaciones marginadas.
159
El carácter “reformista” de la Reforma Agraria fue la causa principal para la primera división del partido Acción
Democrática en diciembre de 1961. Como consecuencia de esta división, AD perdió 22 congresistas durante el
gobierno de Rómulo Betancourt (1959-63); la mayoría eran partidarios de una reforma agraria que promovía el líder
campesino Ramón Quijada. En las elecciones de 1963, AD-gobierno perdió 100,000 votos a AD-0posición. Sin
embargo, lo significante de este hecho fue que la salida de Ramón Quijada, ya que dejó a los campesinos sin una voz
independiente dentro de la FCV (Federación Campesina de Venezuela). Los dos líderes miembros de la FCV que
tenían que formar parte del directorio del IAN (Instituto Agrario Nacional) y estaban encargados de ejecutar la
reforma agraria eran nombrados “a dedo” por el Presidente de la República. Por lo tanto, el IAN siempre estaba
bajo la dirección del partido en el poder y del Presidente de la República, Rómulo Betancourt (AD-gobierno).
143
El tercer intento de reforma agraria ha presentado más dificultades que las previstas. Se
inició con la llamada Ley de Tierras del año 2001, que debido a varias controversias legales de
constitucionalidad de algunos de sus artículos, tuvo que modificarse sustancialmente. Necesitó
cuatro años más, de debates interminables, para finalmente aprobarse el dieciocho de mayo del
2005 con el título de Ley de Tierras y Desarrollo Agrario. Esta reforma es muy diferente a las
dos anteriores y es interesante por varios motivos. Por un lado, es un nuevo modelo de reforma
indirecta. Podría definirse como una contra-reforma de la contra-reforma de 1961. Esto es
debido a razones geopolíticas y a que la situación rural venezolana es radicalmente diferente a la
que existía en 1961. Ahora, es desde el estado, desde donde se recrea de nuevo al campesinado y
se da a sus nuevas organizaciones la capacidad y el poder que necesitan para reformar las
estructuras existentes. Se trata de resucitar de las cenizas a un campesinado --que no existía
como clase social desde 1968-- para así poder luchar contra los grandes oligopolios que
controlan la agroindustria nacional desde 1949.
La Ley de Tierras y Desarrollo Agrario (2005) trata de rescatar los valores
revolucionarios de la primera reforma agraria de 1945 de una forma retórica. Pero tiene en
realidad el desafío primario de resucitar al movimiento campesino; primero rescatándolo de la
pobreza extrema donde existía para eventualmente darle una articulación política. Sólo una clase
campesina fuerte y segura de sí misma puede enfrentar a una clase terrateniente ultraconservadora y medieval en sus conceptos. Una clase terrateniente que todavía ve al campesino
con desdén, como un lumpen proletariado de siervos analfabetos.
El presente Decreto Ley tiene por objeto establecer las bases del desarrollo rural
integral y sustentable; entendido éste como el medio fundamental para el desarrollo humano y
crecimiento económico del sector agrario dentro de una justa distribución de la riqueza y una
planificación estratégica, democrática y participativa. Eliminando el latifundio como sistema
contrario a la justicia, al interés general y a la paz social en el campo; y asegurando la
biodiversidad, la seguridad agroalimentaria y la vigencia efectiva de los derechos de protección
ambiental y agroalimentaria de la presente y futuras generaciones 160.
Pero además, definimos la reforma agraria bolivariana como indirecta porque el gobierno
ni quiere ni puede perder los niveles productivos que existen en el país. No puede implementar
políticas riesgosas que pongan en peligro la seguridad alimentaria de la nación como ocurrió en
la Cuba revolucionaria de los años 60. Eliminar la pobreza requiere aumentar la producción de
160
El papel del estado es ahora diferente. Crear las bases campesinas a corto y mediano plazo para dar la batalla
por la tierra. Hugo Chávez Frias, discurso.
144
alimentos de calidad en la cantidad suficiente y a precios que sean asequibles a la mayoría de la
población en el mercado interno. Ya para el año 2009 la revolución bolivariana ha logrado este
objetivo, duplicado las tierras cultívales que existían en todo el país de 1.600.000 (1999) a más
de 2.300.000 de hectáreas (2009). Aunque la retórica revolucionaria se mantiene y es contra los
terratenientes; los verdaderos objetivos primarios de la Ley son crear un campesinado fuerte y el
incremento de la producción y el abaratamiento de la comida para eliminar la pobreza
generalizada existente en el país.
La IV República aceleró la transformación de un país mitad rural mitad urbano
(1946/1961) a un país virtualmente urbano. Un país con grandes mayorías de pobres –emigrados
del campo— que mal Vivian en los barrios circundantes de las grandes ciudades.
Estos
emigrados trabajaban como mano de obra barata o sobrevivían de la economía informal. La
presente Ley de Tierras y Desarrollo Agrícola tiene como objetivos a largo plazo revertir este
proceso. Primero, dando tierras a quienes no las tienen para que no emigren. Segundo, hacer la
vida rural más agradable -- invirtiendo en servicios básicos de infraestructura y transporte— y
creando nuevos centros rurales educativos y de salud donde no los había. Tercero, defendiendo
las tierras y los derechos culturales y políticos de las comunidades indígenas. Estas finalmente
pueden ser protagonistas de su propio destino en paz y armonía; sin verse obligados a emigrar
para subsistir. Cuarto, asegurar que la producción agrícola del país sea suficiente para eliminar
las importaciones y abaratar la canasta familiar de los venezolanos.
La nueva Ley de Tierras y Desarrollo Agrario representa una reforma indirecta, pero es
revolucionaria en un triple aspecto. Primero convierte a la agricultura en un sector estratégico
para eliminar la pobreza, dar trabajo digno e integrar, renovar y modernizar la vida rural en el
país.
Segundo, elimina paulatinamente el poder del latifundio no productivo tradicional por ser
una institución “colonial” contraria a la justicia social y a las necesidades de la nación.
Finalmente, sirve para derogar la Reforma Agraria de 1961 que legitimó precisamente un estatus
quo que favorecía a una clase de grandes empresarios agrícolas y condenó al campesinado y a las
comunidades rurales al hambre.
Sin duda, derogar la Ley de 1961 erosiona el poder oligárquico agrario establecido,
como veremos en el análisis siguiente. En la Ley de 1961 el estado venezolano compraba y
subsidiaba la producción de los terratenientes. “Premiaba” a los grandes latifundistas
comprándoles las cosechas a un precio alto. A los latifundistas que “expropiaba” les pagaba
145
precios establecidos por el libre mercado y no aquellos definidos por el impuesto sobre la renta.
La Ley de 1961 imponía al campesinado la tutela de un nuevo patrón opresor. Substituía al
latifundista por el de un gobierno anti-campesino, que otorgaba títulos provisionales en lugar de
títulos permanentes de las tierras repartidas.
Convertía a los campesinos favorecidos en
“clientes” del partido en el poder AD-COPEI del cual dependían para producir, vender y
finalmente para vivir. Por todas estas razones, la derogación de la Ley de Reforma Agraria de
1961 en sí misma es un acto revolucionario.
3.1. Datos y diseño del estudio comparativo
En este estudio de la cuestión agraria hay consideraciones importantes que conciernen a
la fiabilidad de las estadísticas existentes y al diseño del mismo. Se trata de encontrar sentido y
significado a una numerosísima cantidad de fuentes y datos; y organizar la información existente.
Además, el análisis debe mencionar algo nuevo sobre el impacto y la relación histórica de las
tres fases de la reforma agraria. Creo que estudiar el tema agrario es de suma importancia para
entender la evolución y los efectos políticos que ocasiona en la estructura social, en el propio
estado venezolano y en la transición democrática del país. En la mayoría de los estudios sobre
Venezuela hay un énfasis en la materia petrolera y su impacto socio político-económico 161. Es
una aportación adicional de este trabajo el tener un enfoque diferente, el agrario. Por supuesto
que toda actividad venezolana está enmarcada en la economía petrolera que permite al estado
tener un papel fundamental en todas las actividades económicas y políticas del país, incluyendo
la agraria. Incluyendo los efectos no tan sanos de corrupción a todos los niveles. Donde hay un
estado con dinero de más, hay más gasto, y todavía más malgasto y oportunidades de corrupción
administrativa que no existen de otros países.
161
Fernando Coronil, The Magical State: nature, money, and modernity in Venezuela. (Chicago: University of
Chicago, 1997). Los estudios sobre las distorsiones que la economía petrolera ha causado y causa en Venezuela en
la mayoría de los sectores son numerosos en español e inglés. Relativamente pocos son los análisis desde el punto
de vista agrario, como el que presentamos ahora, breve, pero analítico. Este énfasis petrolero se pone de manifiesto
en muchos de los trabajos ya en la década de los 1970 y 1980. Por ejemplo, las obras de Domingo Alberto Rangel,
un politólogo representativo de esos años son: La Oligarquía del dinero (Caracas:UCV 1976), Capital y desarrollo:
el rey petrolero (Caracas: UCV 1977), La Revolución de las Fantasías (Caracas: Ofidi, 1978) y Fin de la Fiesta
(Valencia: Vadell Hermanos, 1982). En inglés, Laura Randall escribe The Political Economy of Venezuelan Oil
(New York: Praeger, 1987)
146
En materia de datos agrícolas durante la IV República es importante recordar que,
lógicamente, Acción Democrática (AD) internamente tenía un interés particular en preservar la
ventaja electoral mediante la presentación exitosa de la reforma agraria.
Las expectativas
electorales eran muy altas en 1960 y el voto rural fue fundamental en sus aspiraciones al poder.
Externamente, de cara a los EE UU, AD presenta una alternativa modelo de reforma agraria
directa que llevaba a cabo en esos días la Cuba revolucionaria de Fidel Castro. Un desafío que
se manifiesta también en la implementación de una reforma diferente.
Una reforma
“supuestamente” democrática, encabezada por organizaciones campesinas de AD y apoyadas por
los expertos de Estados Unidos, específicamente con los recursos del famoso programa del
Presidente Kennedy en su “Alianza Para El Progreso.”
Obviamente, estos incentivos internos y externos fueron motivación suficiente para que el
estado venezolano y AD manipularan aspectos cualitativos y cuantitativos del análisis presentado
sobre la reforma de 1961 y presentar la mejor cara posible del progreso agrario venezolano. Para
ello, el Ministerio de Agricultura y Cría (MAC) infló algunas figuras entre el 20 y el 50 por
ciento en algunos casos. Desgraciadamente, muchos académicos nacionales y extranjeros usaron
la información oficial para evaluar los efectos de la reforma durante las décadas de los años 60 y
70; algunas veces usando abundantes datos y sofisticados métodos estadísticos para hacer
proyecciones y evaluaciones de la reforma. Sin embargo, fue James W. Wilkie quien presentó
una revisión de los datos oficiales en un trabajo titulado "Midiendo la Reforma Agraria:
Venezuela." En este estudio demuestra que una gran cantidad de datos y estudios hechos en esa
época son ahora inservibles. Wilkie identificó varios elementos propagandísticos en los datos
oficiales y contrastó sus resultados con otras revisiones hechas por organismos venezolanos
como el CENDES. En la tabla siguiente Wilkie reseña los “Títulos de tierra provisional dados
por la reforma agraria entre 1959-1969” según los datos oficiales del gobierno y los datos
siguiendo la información de CENDES en la tabla siguiente.
147
OFICIAL
1959
1960
1961
1962
1963
1964
1965
1966
1967
1968
1969
5874
31095
42169
56772
66428
77955
114398
131250
145350
162141
166363
CENDES
4423
22017
31280
39982
46204
52334
71589
84930
96273
113064
117286
1969
1968
1967
1966
1965
1964
CENDES
1963
OFICIAL
1962
1961
1960
1959
0
50000
100000
150000
200000
Este gráfico muestra con claridad el cuidado que hay que tener para llegar a conclusiones
definitivas y determinantes sobre la reforma agraria de 1961 y sus efectos económicos y sociales.
Otras fuentes de desconfianza en las estadísticas del MAC se originan en las clasificaciones que
se hacen.
Por ejemplo, se excluyen a las mujeres y las comunidades indígenas
--Wilkie
menciona que en 1961 había 26,465 mujeres empleadas en la agricultura, de las cuales 3,925
tenían edades comprendidas entre 10-19 años. Esto se hace con la idea de ocultar la falta de
cambios sociales 162.
Al diseñar este estudio, se introduce información cuantitativa y cualitativa que explican
mejor la función de la reforma agraria durante el período 1945-68. La primera parte es una breve
162
Wilkie, "Measuring Land Reform," 74.
148
sinopsis histórica de la historia de la cuestión agraria en Venezuela necesaria para entender todo
el proceso de avance en la democratización y el autoritarismo qué tiene implicaciones
interesantes para el resto de América Latina. He utilizado como fuentes importantes los trabajos
de Barraclough, Petras y LaPorte, Martz, Ducan-Powell, Alexander, Roseberry 163, Berquist y
Losada Aldana entre otros.
La segunda parte de este estudio se enfoca en la leyes de Reforma Agraria propiamente y
sus filosofías políticas conjuntamente con los elementos socio-económicos de las mismas. Para
esta parte consulté los trabajos de Blanco-Muñoz, Alvíarez, Domingo Alberto Rangel 164,
Coppens, Arvelo-Jiménez, Losada Aldana, Wilkie, Jasperman y algunas fuentes primarias,
incluyendo la Ley de Reforma Agraria de 1961 con escritos propios de Presidente Rómulo
Betancourt y Ramón Quijada, líder de la Federación Campesina. He tratado de contestar las
preguntas básicas que se refieren al número de familias beneficiadas por la reforma, hectáreas
distribuidas y estilo empleado en dicha distribución; así cómo el costo económico de la misma.
La tercera parte examina el impacto electoral, económico y social de la Reforma Agraria
de 1961 con respecto al campesinado. Mi hipótesis inicial era que la reforma agraria afectó el
voto rural de AD, partiendo de una mayoría absoluta en 1958, y consolidando su poder en las
áreas rurales gracias a la reforma agraria. Obviamente, yo mismo estaba influenciado por la
propaganda adeca, porque los resultados electorales muestran que AD había perdido una parte
muy significativa del voto rural ya en 1968. Desde ese entonces, la cuestión agraria empieza a
ser muy secundaria en el mundo político. No será sino hasta el triunfo de la Revolución
Bolivariana que de nuevo, la política agraria cobra importancia estratégica. Son las políticas de
soberanía alimentaria del estado y la nueva Ley de Tierras y Desarrollo Agrario del 2005 que
reviven la importancia del sector campesino. Es razonable pensar que este drenaje de votos
campesinos de AD hacia otras fuerzas políticas fue compensado por un cambio de estrategia
política que se re-enfoca del campo a la ciudad. La pérdida electoral de AD, las pocas familias
beneficiadas y la emigración a la ciudad son indicadores adicionales de los efectos de la reforma
de 1961. Contrariamente al legendario eslogan de AD: "adeco es adeco hasta que muera,"
muchos campesinos de ese partido ya habían desertado en 1968.
Blanco Muñoz resume
espléndidamente para la fecha: “la reforma agraria había logrado la liquidación del campesinado
163
164
William Roseberry, Coffee and capitalism in Venezuelan Andes. (Austin: University Press of Texas, 1983).
Domingo Alberto Rangel, Capital y Desarrollo: Venezuela Agraria. (Caracas: UCV, 1974).
149
como fuerza y clase social en Venezuela." Forzó a la emigración a los ranchos de las grandes
ciudades a un gran número de jóvenes campesinos sin tierras. Sería interesante determinar desde
el punto de vista político si la deserción electoral del voto rural que se produce en 1968 es
similar a la que se produjo eventualmente en las zonas urbanas en 1998. Entonces el voto de AD
y COPEI se fue al Movimiento V República que abrió las puertas a la Revolución Bolivariana.
Finalmente, aunque las reformas de la Revolución Bolivariana son iniciadas con la Ley
de Tierras del 2001, en realidad no ha sido sino hasta el 2005 cuando se decide de una forma
definitiva la política agraria en todas sus dimensiones. La Ley de Tierras y Desarrollo Agrícola
(2005) es novedosa en sus objetivos y en sus estrategias de crear un desarrollo agrícola
sustentable y competitivo desde el estado; y ha respetado la estructura agraria nacional e
internacional existente en Venezuela. Es una reforma agraria indirecta que tiene elementos
revolucionarios. Es una alternativa a las propuestas de la Organización Mundial del Comercio
(OMC), y es contraria a los intereses de las mega-corporaciones agrarias que tan nefasta historia
tienen en América Latina. Es una reforma anti-globalización, contraria la ingeniería genética
privada y al latifundio tradicional. Su implantación dificulta y limita, aunque no elimina, las
prácticas del “libre comercio” que empobrecen y polucionan el campo. Es una reforma que
finalmente protege a las comunidades indígenas venezolanas.
Es importante destacar que bajo el concepto de soberanía alimentaria se implementan e
implementarán políticas de desarrollo agrario que van más allá de la agricultura. A medio y
largo plazo cambiará profundamente la estructura agraria existente en Venezuela a favor de un
nuevo campesinado y ayudará a las comunidades indígenas a vivir y proteger sus hábitats
naturales. En pocos años, la agricultura ha dejado de ser la pariente pobre en la economía
nacional para convertirse en sector fundamental de la seguridad nacional y de la economía. La
agricultura es la vanguardia en la lucha contra la pobreza, el desempleo y generadora riqueza y
salud para el país.
3.2. Desarrollo Histórico
Históricamente Venezuela ha sido ejemplo del estado militar. Simón Bolívar, héroe
nacional y símbolo patrio era reconocido y venerado –hasta la llegada de la Revolución
Bolivariana—no por sus ideas políticas sino por su capacidad militar. Guerras y levantamientos
políticos han sido tan comunes que sería fácil escribir la historia de Venezuela como la historia
150
contra el estado-militarizado. A pesar de este militarismo, importantes cambios económicos y
políticos ocurrieron durante el gobierno de Antonio Guzmán Blanco (1870-88). La economía del
cacao floreció, así como el servicio postal, el ferrocarril, el telégrafo, la urbanización, la
construcción de puertos y otros servicios públicos. La primera moneda nacional, el bolívar,
empieza a circular en 1879. En la política aparece el estado, que con su gobierno central
compite y limita el poder de la Iglesia y de los caudillos locales. Aparece una burocracia central,
el ejército y un servicio cívico que incluye un sistema de colecta y pago de impuestos (Situado
Constitucional).
Durante la dictadura del general Juan Vicente Gómez (1908-35) otros cambios ocurren.
Gómez crea un ejército moderno que controla tanto a los caudillos locales como los
levantamientos populares. Crea la Academia Militar Nacional y los cuerpos de carrera, dando
posiciones de liderazgo a oficiales en los que confía. La economía petrolera durante este período
es la fuente principal de dinero para el estado y en 1928 representa ya el 90 % del intercambio
con el extranjero. Este primer “boom” petrolero iniciará la gradual transformación de Venezuela
de un país rural a una sociedad urbanizada. Gracias al clima económico creado por Gómez, el
capital extranjero llega y convierte a Venezuela en un líder mundial exportador de petróleo ya
1928. La economía petrolera transformará las fuerzas sociales del país hacia su modernización
en el siglo XX. La producción de petróleo crea un proletariado poderoso en los campos de
petróleo y genera el crecimiento de una pequeña pero activa clase media en las ciudades.
165
La agricultura comercial, dominante en el pasado, comienza a perder competitividad en la
década de los 20 y su declive continua hasta la Gran Depresión de la década de los 30. Los
salarios bajan y las condiciones de trabajo empeoran, los campesinos empiezan a emigrar a las
ciudades y campos petroleros en busca de trabajo; asimismo empiezan a organizarse en
sindicatos bajo la tutela de nuevas organizaciones políticas. 166 El petróleo no solo creó una ola
migratoria a la ciudad afectando la producción agrícola sino favoreció una ola de inflación de
precios. Aquellos productos agrícolas venezolanos, para la exportación y para consumo interno,
se encarecieron –y entonces se volvieron menos competitivos con las importaciones de otros
países vecinos. Se elevó el costo de la canasta doméstica que a su vez provocó una tendencia al
165
Charles Bergquist, Labor in Latin America. Comparative Essays on Chile, Argentina, Venezuela and Colombia.
(Stanford, Ca: Stanford University Press, 1986), 195.
166
Bergquist hace un análisis detallado del importante papel que tuvieron los movimientos sindicales petroleros en el
período de cambios políticos durante este período. Ver, Bergquist, Labor in Latin America, 205-273.
151
alza de sueldos y precios en Venezuela. Se volvió costumbre buscar productos agrícolas más
baratos en el mercado agrícola de importación 167.
El general López Contreras (1936-41) en la Constitución de 1936 da al estado el papel de
coordinador del desarrollo nacional. El gobierno asume el papel de agente económico y crea los
Bancos: Central, Industrial y Agropecuario (BAP). El gobierno además regula las relaciones
laborales y pasa la Ley Laboral de 1936, que garantiza derechos limitados a los trabajadores para
organizarse en sindicatos. Bajo esta ley, Rómulo Betancourt y otros grupos locales se organizan
en células del PDN (Partido Democrático Nacional) —que más tarde sería Acción Democrática
(AD).
Los miembros se organizaban con representantes de diferentes sectores laborales y
ocupacionales y buscaban miembros de los diferentes sindicatos existentes 168. Sin embargo, la
Ley Laboral estaba designada más como una forma de controlar a las organizaciones de
trabajadores que de dar representación legítima social y económica a los mismos. Los derechos
de los trabajadores se terminaban cuando empezaban las huelgas, entonces el sistema de
represión, prisión y exilio se activaba inmediatamente 169.
Betancourt lideró este esfuerzo clandestino de organización hasta que fue capturado, y
exiliado en 1939. Entre los campesinos, el primer sindicato fue el de los Pequeños Agricultores
de la Municipalidad de Magdalena formado por Luís Morillo en el estado de Carabobo. Morillo
se fue con Betancourt cuando se produjo la primera división entre adecos y comunistas en 1938.
La división la creó Betancourt con su estrategia política de crear un partido político no sólo de
los trabajadores, sino multiclase, partido de varias clases sociales 170. Durante este período
Morillo comentó en torno la necesidad de movilización campesina "para emanciparnos del
patrón... y para ayudar a crear escuelas, servicio médico y de agua, para obtener los títulos de las
167
Este proceso se agravó con la política monetaria de Gómez que sobrevaloraba el bolívar en el mercado monetario
internacional. Ibíd., 211-212.
168
La organización de células políticas se centraba básicamente en organizar a la clase trabajadora, particularmente
a los sindicatos. Por ejemplo, los trabajadores petroleros estaban organizados para luchar contra la segregación
racial contra los trabajadores venezolanos; tal como lo hicieron los trabajadores afro-americanos en los EE UU. En
los campos petroleros de la Creole, afiliada a la Standard Oil of New Jersey, quien era el productor petrolero más
importante de Venezuela durante la Segunda Guerra Mundial y empleaba a más de de 10.000 trabajadores, los
sindicatos se organizaban bajo el slogan: "equal pay for equal work."(“pago igual para todos los que hacen el
mismo trabajo”) Ver Bergquist, Labor in Latin America, 221-223.
169
Para una reseña detallada de los sucesos de la huelga del 14 de diciembre de 1936, ver John Martz, Acción
Democrática. (Princeton: Princeton University Press), 38-39. Una versión completa de los hechos, ver Bergquist,
Labor in Latin América, 229-242.
170
En 1945, AD y el PCV llegaron a un acuerdo para suavizar las diferencias entre ellos para crear una organización
sindical a nivel nacional. Este acuerdo es conocido como el Pacto de Cali. Ver John Duncan Powell, Political
Mobilization of the Venezuelan Peasant, (Cambridge: Harvard University Press, 1971), 62.
152
tierras que trabajamos… y traer la luz eléctrica” 171. Ya antes de Morillo, el primer Congreso
Laboral de diciembre de 1936 dio la siguiente lista de reivindicaciones campesinas.
-La defensa de los intereses de sus miembros confrontando la voracidad y rapiña de patronos y
comerciantes usureros;
-reducción de pagos en servicios y obligaciones labores;
-moratoria sobre las deudas que encadenan a los miembros;
-pago por los productos producidos al precio del Mercado menos el transporte; lo mismo que
productos en pago por préstamos por patronos y comerciantes a precio de mercado más el costo
del transporte;
-iguales derechos para pequeños productores;
-eliminación de pagos en cupones y “tokens” para trabajadores asalariados;
-y abolición de las deudas a patrones y comerciantes que pasan de padres a hijos 172.
Durante el gobierno del General Medina Angarita (1941-45), varias reformas adicionales
fueron implementadas en respuesta a las demandas internas y externas hechas desde los
sindicatos y organizaciones de trabajadores.
Durante la II Guerra Mundial, como Caracas
rompió relaciones con el Axis (Alemania/Italia/Japón), las restricciones a las libertades civiles
eran anacrónicas y se suavizó el control militar 173. Internamente Venezuela era un país rural, con
más del 70% de la población civil viviendo en las zonas rurales.
Pero las ciudades eran
importantes ya y podían demandar libertad y así lo hicieron durante este tiempo.
Angarita pasó nuevas leyes petroleras (1943), las cuáles incrementaron los ingresos
petroleros del gobierno en un 30%. Asimismo se creó el primer impuesto sobre la renta y un
sistema de seguridad social en el país. La demanda de libertad llegó al campo y debido a los
levantamientos campesinos, la quemadura de los campos de caña, las demandas por tierras en
Carora y Quíbor y las luchas en la Sierra de Carabobo se planteó en el Congreso la necesidad de
la primera Ley de Reforma Agraria 174.
El ministro de Agricultura del Gobierno Angarita, Ángel Biaggini preparó una ley para
distribuir las tierras del gobierno a campesinos sin tierras. Esta ley se aprobó en el Congreso
poco antes de que el gobierno fuera derrocado; después de un debate intenso por parte de los
elementos más conservadores del mismo. Biaggini también era el candidato presidencial que
171
Ibíd., 52.
Ibíd., 53.
173
Martz, Acción Democrática, 56-57. Hay una coincidencia muy interesante en este período de democratización,
incluyendo un giro a la izquierda e incremento del movimiento sindical en toda Latinoamérica durante los años 1944
a 1948. Este proceso termina en 1948 con la Guerra Fría que se convierte en el marco de las relaciones políticas
internacionales. Un análisis completo de este fenómeno lo hacen Leslie Bethell e Ian Roxborough, Latin America
Between the Second World War and the Cold War, 1944-1948. (Cambridge: University Press, 198), 1-33.
174
Para un análisis de la situación de levantamientos rurales de 1936-45, ver Powell, Political Mobilization, 54-57
172
153
promovía el General Angarita, quien había sido rechazado como tal por el Partido Acción
Democrática. Betancourt no sólo rechazó a Biaggini como candidato sino que participó en el
golpe de estado que se orquestó contra el gobierno de Angarita 175.
En 1945, siguiendo el golpe militar exitoso de la Unión Patriótica Militar (UPM) y AD,
una junta revolucionaria de siete miembros encabezada por el propio Rómulo Betancourt tomó el
control del país. El “nuevo” gobierno implementó básicamente la reforma agraria que promovía
Biaggini y creó una organización independiente, la Corporación Venezolana de Fomento (CVF),
para incrementar la producción agrícola en mayo de 1946 176.
3.3. Trienio: Reforma Agraria directa (1946-49)
Es interesante que los fines de la reforma agraria y aquellos de la Corporación
Venezolana de Fomento en 1946 fueran claramente distintos. La reforma agraria de 1946 no era
económica sino un proyecto social y político.
Fue Rómulo Betancourt quien coordinó un
esfuerzo dual usando la autoridad del gobierno como un agente de legitimación, validando las
demandas campesinas por los cambios en la propiedad de la tierra. Era la articulación de una
nueva estructura de poder sobre la tierra. La Comisión de Tierras directamente se encargó de
distribuir la propiedad de la tierra, siendo colonización y desarrollo económico los objetivos
secundarios 177. Funcionaba a dos niveles diferentes. Primero, reconociendo las necesidades de
los sindicatos campesinos, cuyas peticiones de tierras tenían prioridad sobre peticiones
individuales y de granjeros comerciantes. Durante los primeros cuatro meses un total de 12.991
hectáreas fueron distribuidas entre más 5.700 campesinos que pertenecían a 30 sindicatos rurales.
Incluso si los contratos eran temporales, después de un año el MAC (Ministerio de Agricultura y
Cría) podía cambiar los patrones de uso de la tierra de acuerdo con los lineamientos económicos,
175
Más sobre Ángel Biaggini, Martz, Acción Democrática, 60-61. Incluso si AD y Betancourt culparan a la Unión
Patriótica Militar (UPM) del golpe de estado contra Angarita, obviamente Betancourt tomó una actitud leninista a la
situación, convirtiéndose en el presidente de la nueva Junta Revolucionaria. Estos hechos son muy importantes no
sólo porque Angarita estaba haciendo progresos evidentes en materia de democratización del país, sino también para
entender el carácter político del propio Rómulo Betancourt. Es un hecho importante porque nos ayuda a entender
entre la retórica democrática de Betancourt y sus acciones políticas. Más tarde, durante el período guerrillero de
1960-1967, Betancourt favoreció soluciones militares en vez de negociaciones políticas mientras uso la retórica de
defender la democracia.
176
Para más detalles históricos leer David Eugene Blank, Politics in Venezuela. (Boston: Little, Brown and Co,
1973), 7-31.
177
En el art. 4, la Junta creó en diciembre de 1945 la Comisión de Tierras del Instituto Técnico de Inmigración y
Colonización (ITIC) responsable de reclutar granjeros y campesinos de origen europeo para colonizar la tierra con
inmigrantes de otros países. Ver Powell, Political Mobilization, 71.
154
distribuyendo tierras inmediatamente.
También, el gobierno dio créditos a los campesinos
sindicalizados por más de diez millones de bolívares dando autonomía a los mismos y creando
servicios de escuelas, carreteras, agua y alcantarillado a las comunidades afectadas.
Los
sindicatos campesinos tenían el liderazgo, y el rol del gobierno no era otro que el de legalizar y
cumplir con las demandas básicas campesinas para que la reforma fuera exitosa 178. La creación
de la Federación Campesina de Venezuela (FCV) en 1947, que fue incorporada a la
Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV), fue otro empuje al movimiento campesino.
No menos importante fue el papel que jugó el gobierno rompiendo la estructura rural
clasista y las relaciones de poder. En marzo de 1947, AD aprobó un decreto de renta de
propiedades rurales.
Por el cual todas las tierras gubernamentales –nacionales, estatales,
municipales—y todas aquellas privadas que no estén siendo cultivadas, entraban bajo la
jurisdicción de la Comisión Agraria para poder ser rentadas a los campesinos. Los propietarios
en desacuerdo con lo establecido por la Comisión podían apelar sus decisiones. La Comisión
Agraria estaba compuesta por un representante de los propietarios, uno del sindicato y dos del
gobernador del estado de turno. Este procedimiento permitía la maniobra de favorecer siempre
la posición de los representantes del gobernador de AD. El balance de poder en la Comisión lo
tenía el gobernador mismo, nombrado por el gobierno central. La Ley de Reforma Agraria de
1948 incorporó a las organizaciones campesinas dentro del marco administrativo de la Ley, lo
cual ratificaba “el cambio del poder rural al líder sindical campesino” 179. El Instituto Agrario
Nacional (IAN) dio a los sindicatos campesinos el poder de decisión al más alto nivel
administrativo.
La situación era tal que si la Federación Campesina decidía emplear su
influencia al máximo, ésta podría en la práctica limitar los beneficios de la Ley exclusivamente a
sus miembros y sindicatos campesinos 180.
Esta coalición política entre AD y el PCV con los sindicatos agrarios creó resentimiento
en COPEI y los miembros de la derecha conservadora, acusando al gobierno de comunista y
favoritismo partidista. Hasta qué punto fue este resentimiento la causa principal para el golpe de
estado de 1949 que siguió a la Ley de Reforma Agraria es difícil saberlo con exactitud. La
178
Ver más, "The Mobilizing Elite in Power 1945-1948," Ibid., 65-86.
Ibíd., 80.
180
Ibíd., 81.
179
155
política pro-trabajadores de AD 181, la reforma agraria, los rumores de que AD estaba armando a
los campesinos y trabajadores, y los complots pro-AD en la elite militar, son todas razones
internas poderosas que se usaron para justificar el golpe militar del general Pérez Jiménez. Es
más, ya en 1949 el espíritu de la Guerra Fría estaba transformando radicalmente la política
exterior estadounidense. A partir de 1949, el gobierno de EE UU favorecería abiertamente
regímenes autoritarios que controlaran las huelgas de trabajadores y que abolieran a los partidos
comunistas en Latinoamérica 182.
El golpe de 1949, que destituyó al Presidente Rómulo Gallegos y acabó con el primer
presidente electo libremente en el país. La eliminación de los sindicatos, el desmantelamiento de
las conquistas sociales hechas por la reforma agraria, la expropiación de campesinos
beneficiados con la reforma, el asesinato y la tortura de líderes sindicales fue la prioridad de la
dictadura del general Pérez Jiménez (1949-1958). Los efectos en el sector agrario son mejor
descritos por el Prof. Alexander.
El censo agrícola y ganadero de 1950 muestra que existían 234.730 unidades agrarias
en uso, solamente el 43.8 por ciento eran cultivados por sus dueños o semi-propietarios. El 15.5
por ciento eran cultivadas en régimen de renta, el 6.5 por ciento eran cultivadas por campesinos
trabajadores, y el 34.3 por ciento eran cultivadas por “ocupantes ilegales” sin derechos legales
sobre la tierra que ocupaban. Cuando se lleva a cabo el censo de 1956 los números cambian,
solamente el 25.1 por ciento de la tierra es cultivada por sus propietarios mientras que el
número de “ocupantes ilegales” se incrementa significativamente con respecto a 1950 183.
El régimen dictatorial de Jiménez reactivó la política anti-sindical implementando otra
vez la Ley Laboral de 1936. Esta Ley Laboral era una pesadilla burocrática incluso para los
trabajadores alfabetizados, y estaba diseñada para efectos retóricos más que para organizar y
proteger a los trabajadores. Para los campesinos la contrarrevolución significaba primero perder
el sindicato, segundo el crédito, tercero la tierra, y finalmente estar destinado al desempleo o la
migración a la ciudad o la cárcel. Las otras opciones eran el empleo con un sueldo de miseria en
un latifundio donde los viejos abusos patronales eran la norma, o la “ocupación ilegal” de tierras.
181
Durante el Trienio, de acuerdo con los números del Banco Central, los salarios reales aumentaron en un 65 por
ciento en Venezuela. En las zonas rurales la malaria fue erradicada, los programas de salud contra la malnutrición,
endémica en muchos casos, fueron implementados con efectividad. Una campaña efectiva de alfabetización fue
llevada a cabo para niños y adultos. Ver, Martz, Action Democratic, 83-84.
182
Bethell and Roxborough, Latin America, 19-32.
183
Robert Alexander, The Venezuelan Democratic Revolution. (New Brunswick: Rutgers University Press, 1964),
161.
156
Una ocupación incierta hasta ser descubierto, expulsado o capturado por la guardia nacional por
invasión ilegal de tierras. No es sorprendente que hubiera expectativas de cambio radical en las
zonas rurales cuando Pérez Jiménez fue finalmente depuesto diez años después, en 1958,
después de tres días de huelga general en todo el país.
3.4. Reforma Agraria indirecta: desarrollo agrícola (1960-99)
El gobierno provisional de la nueva Junta Militar encabezada por Wolfgang Larrazábal,
actuó inmediatamente a las demandas agrarias reactivando el Instituto de la Reforma Agraria
(IAN) y dando a 3.623 familias campesinas más de 675.000 hectáreas de tierras expropiadas a
los miembros del régimen Pérez-Jiménez. Lamentablemente, este impulso campesino inicial fue
inmediatamente detenido por el gobierno de Rómulo Betancourt. Obviamente nueve años de
contrarrevolución y persecución instauraron el miedo y la necesidad de un compromiso en
materia agraria en la mente de la vieja guardia de AD, y particularmente en la de su máximo
líder Rómulo Betancourt. Al contrario que durante el Trienio, Betancourt transfirió su foco de
apoyo político --de fortalecer a los trabajadores y campesinos-- a apoyarse en los intereses
opuestos de las clases altas. Esto incluía tener buenas relaciones con EE UU y con las clases
medias emergentes de la ciudad. Creó una alianza poli-clasista con el partido conservador
COPEI y la moderada URD; pero excluyó a los trabajadores y al Partido Comunista de
Venezuela. Este fue el “New Deal” para Venezuela, conocido desde entonces como el “Pacto de
Punto Fijo” 184. Había factores externos muy importantes --como la Revolución Cubana de Fidel
Castro-- que creaban un interés adicional a la evolución política venezolana por parte de los EE
UU. La influencia ahora de la Administración Kennedy en los EEUU, involucrado directamente
en la “crisis” cubana, la Guerra Fría y la guerra del Vietnam hacia muy difícil la posibilidad de
un pacto social con los trabajadores y con el poderoso Partido Comunista de Venezuela
(PCV) 185. Cualquiera que fueran las razones de la exclusión del Pacto de Punto Fijo la verdad era
que esta alianza conservadora de AD excluiría a la mayoría de la población. Excluía a la clase
trabajadora y campesina, que eran más del 70 % del total de la población; y alienaba a muchos
184
Martz, Acción Democrática, 104. El PCV tenía mucho poder político y electoral en las ciudades.
Betancourt rechazó la inclusión de comunistas en el gobierno de coalición, a pesar de que los propios comunistas
le ofrecían y querían participación en el gobierno. Martz, Acción Democrática, 106.
185
157
estudiantes que tenían expectativas de reformas sociales radicales, tales como las que se estaban
llevando a cabo en Cuba 186.
Esta transición ideológica de AD del “Pacto de Cali” al de “Punto Fijo” tuvo importantes
consecuencias. Primero, abrió un período de guerra civil y de revolución guerrillera que se
inició con el estado de emergencia declarado por Betancourt el mismo día que se aprobó la nueva
Constitución (1961). Esta guerra significó la pérdida de la vida de miles de venezolanos. Fue un
tiempo de guerra civil donde la violencia política se generalizó y duró hasta la derrota guerrillera
de 1969.
La guerra anti-subversiva creó todos los instrumentos del terror de estado que
mencionamos en este trabajo anteriormente. Segundo, Punto Fijo significó que las mejores y
más efectivas organizaciones de la clase trabajadora la Confederación del Trabajo de Venezuela
(CTV) y la Federación Campesina de Venezuela (FCV) perderían su carácter reivindicativo y
participativo y se ponían al servicio de estado que representaba ahora solamente a las clases
medias y altas. La clase media aunque emergente y creciente con la urbanización, era una
minoría si las comparamos con la masa trabajadora y rural 187. Tercero, el proyecto original de la
reforma agraria, que comenzó en el Trienio, se convirtió más y más en un proyecto de desarrollo
agrícola. Era la continuación de las políticas de Pérez Jiménez que buscaban la modernización
rural generada desde el gobierno central. Es más el nuevo ministro de Agricultura del gobierno
de Rómulo Betancourt era el líder conservador Víctor Martínez Landínez del partido social
cristiano COPEI.
El análisis de los efectos del Pacto de Punto Fijo es muy importante para entender las
limitaciones y el destino de la IV República (1961-1999). La evolución de la reforma agraria
explica precisamente el primer divorcio del pueblo con la clase política que llevara
186
La Ley de Reforma Agraria cubana del 17 de mayo de 1959, fue una reforma directa con claros y definidos
objetivos políticos y económicos. Cuatro tipos diferentes de organizaciones fueron establecidas: granjas estatales,
cooperativas, comunas y privadas. Unas quinientas granjas estatales, seiscientas cooperativas fueron creadas por el
Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA); muchas de éstas fueron después transformadas en granjas estatales.
Las comunas tuvieron un carácter experimental y tenían un significado cualitativo, y con los sindicatos de
trabajadores de la Asociación Nacional de Pequeños Agricultores (ANAP), recibieron el 70% de toda la tierra
cultivable. Rentadores, campesinos y trabajadores agrícolas fueron los principales beneficiarios de la nueva política.
Más en Carmelo Mesa-Lago, Revolutionary Change in Cuba (Pittsburgh: 1971), 191.
187
A pesar del prestigio histórico de AD en 1958, el giro de la su alianza con COPEI fue tan dañina que causó tres
divisiones internas consecutivas en diez años. Primero, la juventud radical de AD formó el MIR (Movimiento de
Izquierda Revolucionaria) y declaró la guerra contra el gobierno de Betancourt y Leoni; después se formó AD-ARS
que era una división de la Federación Campesina de Venezuela (FCV), liderada por Ramón Quijada quien se cansó
de esperar que el partido implementara de forma rápida la Reforma Agraria. Finalmente, una división electoral
ocurrió en 1968, cuando Prieto Figueroa y Paz Galarraga formaron el MEP (Movimiento Electoral del Pueblo) y
dejaron el partido AD justo en el momento en el cual la falta de ideología y la corrupción tomaron el control sobre
el partido.
158
eventualmente a la necesidad de un movimiento V República. Es decir la necesidad de la
refundación de la democracia en el país con parámetros de inclusión. Explica el por qué de “la
sed” de participación y de protagonismo del pueblo venezolano en una nueva democracia.
a/ La Ley de Reforma Agraria
La Ley de Reforma Agraria de 1960, se aprobó sin obstáculos con el apoyo de “todos”
los sectores. Este hecho mismo ya la hizo sospechosa ya que su contenido debía contradecir el
estatus quo y afectar radicalmente los intereses sociales, económicos y políticos de las clases
dominantes existentes. La Ley fue el trabajo de economistas, abogados, administradores, ex
ministros, IAN (Instituto Agrario Nacional) y MAC (Ministerio de Agricultura y Cría). Pocos
representantes campesinos, ausencia de las comunidades indígenas, y mucho menos miembros
radicales de los sindicatos trabajadores fueron activos participantes en alguna de las comisiones
que elaboraron la Ley. En la votación final en el Congreso, la Ley sólo fue opuesta por el
Partido Comunista de Venezuela (PCV) 188. En marzo de 1960, el presidente Rómulo Betancourt
promulgó la ley en el histórico lugar donde Bolívar derrotó a las tropas coloniales, en el Campo
de Carabobo, con la asistencia de miles de campesinos y representantes sindicales pro-AD.
A pesar del despliegue formal, la nueva Ley claramente contrastaba con la experiencia
del Trienio. En el artículo 9 de la Ley, la tierra era definida en base a su función social.
Propietarios tenían derecho legítimo a la tierra si ellos la trabajaban eficientemente, sin dejar de
usarla, sin dañar sus recursos naturales; si no violaban los contratos laborales y las leyes que
protegían a los trabajadores; y si no utilizaban la tierra indirectamente, es decir rentándola a
terceros. Solamente los propietarios que violaban estas provisiones podían verse sujetos a la
expropiación, excepto aquellas parcelas que tenían entre 150 y 5.000 hectáreas (art. 29).
Esta definición social de la tierra, era claramente utilitaria, enfocada a la explotación
individual de la misma y simplemente protegía al trabajador.
El papel de la comunidad
campesina era reactivo, limitado a denunciar tierras sin uso o abusos laborales de los
propietarios. Los campesinos tenían un uso restringido a las tierras públicas baldías y aquellas
privadas abandonadas; pero siempre bajo control directo del IAN. Las limitaciones del concepto
188
En aquel momento, ésta era la única organización que representaba los intereses de los trabajadores.
159
de “función pública” definido en la ley en base a la productividad y protegiendo la propiedad
privada ofrecía un contraste interesante y un "doble” estándar. Por un lado, restringía las
movilizaciones campesinas basadas en la necesidad colectiva; por otro lado, permitía al gobierno
y agentes privados ocupar las “tierras vacantes” de las comunidades indígenas y regular su
estatus legal.
Un ejemplo del primer caso, fue la restricción de las movilizaciones campesinas o tomas
de tierras. Ya para agosto de 1961 el IAN anunció que no donaría tierras a campesinos que
ocuparan tierras vacantes sin permiso previo del IAN. Como la FCV estaba controlada por AD,
la organización sindical campesina más importante empezó a colaborar con el MAC en la
protección legal de los propietarios que no estaban usando sus tierras para el cultivo. Los líderes
de la FCV y de los dos partidos políticos en el gobierno hicieron viajes especiales para convencer
aquellos campesinos que violaban esta disposición y desalojar las tierras “ocupadas” y en
algunos raros casos, la policía fue llamada a intervenir en el desalojo de ocupantes ilegales 189.
Desde 1961, los campesinos sin tierras fueron sistemáticamente expulsados de tierras
“ilegalmente” ocupadas.
En contraste con el Trienio, cuando el gobierno legalizaba las
ocupaciones de tierras inmediatamente que eran ocupadas, ahora cualquier tierra ocupada
necesitaba la aprobación previa del IAN. Esta aprobación no se conseguía fácilmente. Aunque
esto no era así cuando se trataba de ocupar tierras de las comunidades indígenas; lo que se hacía
con el apoyo del gobierno. Entonces, el IAN legalizaba las tomas después de los hechos sin que
las comunidades indígenas tuvieran formas y apoyos para defender sus derechos.
Este "doble estándar" tiene su ilustración perfecta en el tratamiento de las comunidades
indígenas en las invasiones de tierras del territorio Yekuana en el Paru-Cacuri (Territorio
Federal del Amazonas) en 1971. Los Yekuana, conocidos en Venezuela como Makiritare,
usaban estas mismas tierras desde antes de la llegada de Cristóbal Colón plantando, cosechando,
cazando y pescando. Sin embargo, en 1971 varios colonos, parte de una expedición promovida
por sectores privados apoyados por el gobierno, --operación "La Conquista del Sur"—empezaron
a establecerse en las tierras indígenas. Con el objetivo de desarrollar la economía y establecerse
189
Alexander, Venezuelan Democratic Revolution, 167. La existencia de miles de ocupaciones de campesinos sin
tierras es evidencia del fracaso de la Reforma Agraria de 1960. Desgraciadamente los campesinos denunciados eran
expulsados de sus casas con el uso de maquinaria pesada bajo supervisión de la Guardia Nacional. En 1982,
presencié y reporté como periodista el desalojo militar ordenado por el gobernador de Portuguesa de tierras
ocupadas “ilegalmente” por campesinos en la zona de Acarigua-Araure. Más, ver Carlos González Irago, "Diario
Ultima Hora de Acarigua," agosto\septiembre 1982.
160
en las “tierras desocupadas" empezaron a explotar minas y crear ranchos en la zona. Además,
comenzaron a forzar a los indios a trabajar las tierras que ocupaban en la zona. El área en
disputa, era aproximadamente un territorio de 9.200 km cuadrados, situado en el Territorio
Federal del Amazonas, con una población aproximada de 22.000 personas (1971), de los cuales
el 43 % eran indígenas venezolanos 190.
Fue gracias a que los líderes Yekuana, que aunque sabían hablar poco español, pudieron
defenderse. Los Yekuana usaron el apoyo de algunos antropólogos, abogados y periodistas
comprometidos con su causa para detener “La Conquista del Sur” 191.
El gobierno apoyaba la
invasión de tierras indígenas violando la propia ley agraria en su artículo 2, el decreto 250 del
Ministerio de Justicia de 1951, y las regulaciones del Ministerio de Minas e Hidrocarburos. Sin
embargo, fue sólo después de una audiencia en el Congreso y la denuncia pública en los
periódicos de Caracas, que finalmente detuvieron los abusos. El Ministerio de Justicia hizo
varios pronunciamientos a favor de los indígenas que fueron ignorados. Finalmente el IAN se
vio obligado a intervenir contra los colonizadores --“conquistadores”-- para obligarlos a retirarse
de las tierras Yekuana.
El IAN ahora ha entrado en la región de Paru-Cacuri y está tomando medidas para
incorporar esta región en su jurisdicción. Desde el punto de vista legal, el Paru-Cacuri
constituye una “tierra sin cultivar” o “tierra baldía”, y por lo tanto viable para ser afectada por
la Reforma Agraria. Una vez que la zona sea transfería a la jurisdicción del IAN, será posible
usarla y aplicar el art. 2 de la Ley de Reforma Agraria, que establece lo dicho anteriormente
que las comunidades y grupos indígenas tiene reservado para su familia y comunidad el derecho
a explotar sus tierras, bosques y aguas comunitarias 192.
Obviamente la intervención de última hora del IAN de tomar jurisdicción en el caso para
salvar los derechos indígenas, tal como Coppens claramente lo expone en su trabajo, es una
prueba más de los patrones coloniales tradicionales de pasar sobre los derechos de los más
débiles. La concepción Yekuana de posesión de tierras y sus obligaciones era radicalmente
opuesta a los criterios legales presentes en la Reforma de 1961. El concepto de "tierra baldía" o
190
Walter Coppens, "The Anatomy of a Land Invasion Scheme in Yekuana Territory, Venezuela." (Copenhagen:
IWGIA (International Work Group for Indigenous Affairs) Documents, 1972). También ver Nelly Arvelo de
Jiménez, "El Conflicto por la Tierra y las Etnias Indígenas del Amazonas," en Derechos Territoriales Indígenas y
Ecología en las Selvas Tropicales de América. (Bogotá: Fundación Gaia, Carec, 1992), 113-137.
191
Este era el nombre que utilizó el gobierno para promocionar su iniciativa.
192
Ibíd., 19.
161
"tierra sin cultivar" no concuerda con el concepto semi- nomádico de la economía y cultura del
uso de la tierra Yekuana.
En cuanto a lo concerniente a las tierras, es de suma importancia entender que los
grupos aborígenes quienes temporalmente ocupan y emigran a otros lugares situados dentro de
su territorio, no ceden sus derechos territoriales. En otras palabras, la tierra agotada por el uso
entra en una etapa de regeneración dentro del ciclo de cultivo a las que son sometidas, esta
tierra no se considera vacante o en desuso por la población indígena 193.
En resumen, la ley no incluía el concepto de función pública o social en beneficio de los
campesinos sin tierras, ni aquellos que tienen las comunidades indígenas venezolanas que viven
y han vivido en las mismas por miles de años.
OCAI (Oficina Central de Asuntos Indígenas) fue incapaz de crear una política
independiente de aquella que creara la Iglesia Católica ni la que promulgaba la Reforma
Agraria. Esta última omisión de las comunidades indígenas tuvo consecuencias críticas durante
la época de invasiones y apropiaciones de tierras en las zonas al sur del rio Orinoco y en
algunas otras regiones, como en el estado Apure. El problema de la tierra alcanzó niveles
críticos en 1968 cuando ocurrió la masacre de indios del Guajibo (Jiwi) en la zona fronteriza
Colombo-venezolana 194.
Además, la ficción de "tierras baldías" prohibida por la Ley de Reforma Agraria y IAN
para los campesinos sin tierra, fue
invocada y utilizada -quien sabe cuántas veces-- para
justificar la usurpación de tierras indígenas en zonas donde estas comunidades vivían. Las
comunidades indígenas nunca fueron incluidas, representadas o consultadas en la creación,
formulación y aplicación de la Reforma Agraria. El Gobierno Bolivariano derogando la ley y
rectificando al menos algunos de estos graves “errores” o –mejor definidos abusos-- se ganó
rápidamente el apoyo irrestricto de las comunidades indígenas venezolanas que por primera vez
ven sus derechos territoriales y culturales, no ya reconocidos, sino defendidos como patrimonio
de la cultura nacional.
b/ Limitado, lento y caro el proceso de distribución de la tierra en la Ley de 1961
La Reforma de 1961 no sólo fue selectiva contra el débil, sino además lenta y muy cara.
El número de familias beneficiadas fue selectivo dejando a la mayoría de los campesinos sin
193
Ibíd., 20.
Para un entendimiento de las presunciones existentes en los conceptos de "Indigenismo" y el problema de las
tierras indígenas ver Nelly Arvelo-Jiménez, "The Policies of Cultural Survival in Venezuela: Beyond Indigenismo."
En Marianne Schenicnk y Charles H. Wood ed., Frontier Expansion in Amazonia. (Gainesville: University of
Florida Press, 1984), 105-125.
194
162
tierras. Fue lenta porque la política del IAN de control político tenía dos etapas: primero
concedía títulos provisionales y después los permanentes. Finalmente, fue cara porque las
compensaciones de tierras expropiadas y la burocracia que envolvía, cada etapa del proceso, la
hacían onerosa para las arcas del estado. Como otros sistemas burocráticos en la Venezuela
petrolera; burocracia significaba también “corrupción” para que el sistema funcione de forma
“rápida” y “eficientemente.” El IAN fue el organismo encargado para implementar todo el
proceso, con unos recursos económicos y humanos limitados, que favorecían aun más la
corrupción.
¿Cuántas familias se beneficiaron con la Reforma Agraria de 1961?
James Wilkie señala que los datos oficiales no son confiables ya que en cierto momento
en 1963, el IAN tomó ventaja del proceso de titulación provisional para introducir elementos de
propaganda.
Porque los títulos provisionales son garantizados de una reforma interina mientras el
gobierno decide cuántas personas tiene capacidad de sostener una propiedad (y para
asegurarse de que la tierra está siendo trabajada), el título definitivo puede crecer o disminuir el
número de personas beneficiadas inicialmente con derechos sobre la tierra. Si los datos oficiales
estaban basados en la capacidad de la tierra de sostener a un número de campesinos en el
primer momento (en vez del número de personas que solicitaban el lote), el gobierno podía
mostrar una mejor cara de la reforma por lo tanto la capacidad de la tierra excedía el número
real de títulos provisionales otorgados 195.
En 1969 un total de 166.363 familias fueron oficialmente beneficiadas con un título
provisional; después de 10 años de reforma agraria. Sin embargo, estos números una vez
revisados muestran claramente la realidad por el mismo período. Según CENDES (Centro para
el Estudios del Desarrollo) de la UCV (Universidad Central de Venezuela) y CIDA (Comité
Inter-Americano de Desarrollo Agrícola), fueron realmente 117.268 familias las que obtuvieron
el título provisional de propiedad de la tierra. El cuadro siguiente desglosa las tierras repartidas
en cada estado durante los gobiernos de Rómulo Betancourt, Raúl Leoni y el primer año de
Rafael Caldera.
195
Wilkie, "Measuring Land Reform," 65.
163
Estado
Betancourt
Amazonas
oficial
Cendes
Anzoategui
2512
1345
Apure
973
1004
Aragua
2040
1768
Barinas
2065
1191
Bolivar
1795
1432
Carabobo
5131
3890
Cojedes
1330
906
Delta Amacuro
1830
1090
Distrito Federal
364
321
Falcon
2678
1520
Guarico
3248
1464
Lara
2775
2358
Merida
2776
1686
Miranda
3104
3015
Monagas
5327
3375
Nueva Esparta
39
42
Portuguesa
7388
4321
Sucre
1994
1593
Tachira
1545
762
Trujillo
3277
2473
Yaracuy
7377
5768
Zulia
6860
4880
Total
66428
46204
Leoni
Caldera
ofical
Cendes
oficial
4.967
3194
51
1683
1549
378
2770
2391
144
7408
4283
130
2752
2308
89
4402
2556
93
5248
3093
427
722
570
#
744
576
17
4156
2976
79
6861
3307
281
4775
3485
289
2927
2359
18
3033
2066
188
5481
3983
228
30
41
3
7546
4460
247
5046
3601
60
1052
812
394
2990
2192
502
4104
3372
318
17016
13686
289
95713
66860
4222
De las tierras distribuidas había bastante equidad entre las tierras públicas y privadas. El
presidente Rómulo Betancourt repartió 66.428 títulos provisionales de los cuales el 50.9 por
ciento eran tierras del estado (1960-64). El presidente Raúl Leoni (1964-68) repartió 95.713
títulos de los cuales el 52.4 por ciento eran tierras del estado y de los 4.222 títulos que entregó el
Presidente Rafael Caldera en 1969 solamente el 10 por ciento eran tierras del estado. 196 Además
en la tabla anterior, podemos ver la distribución de la tierra por estado con los números y datos
oficiales y los revisados por CENDES en cada período presidencial. Durante el período de la
196
Wilkie, "Measuring Land Reform," 93. James Wilkie ofrece una tabla de distribución de títulos provisionales de
tierras repartidas del estado y privadas. La tabla muestra una equidad entre las tierras privadas y públicas repartidas
por la Reforma Agraria.
164
Presidencia de Rafael Caldera sólo se registran las cifras oficiales para el año 1970. Las cifras en
la tabla nos dicen mucho, primero que el número de familias beneficiadas con tierras fue muy
limitado, además nos permite ver la velocidad del proceso y la distribución de tierras en toda la
geografía nacional. Obviamente, estos números no detuvieron la masiva emigración rural a las
ciudades en busca de trabajo ni la ocupación ilegal de tierras 197.
Zulia (18.566) y Portuguesa (8.781) tuvieron el número más alto de tierras otorgadas
provisionalmente durante los gobiernos de Betancourt y Leoni respectivamente. En Apure,
Barinas, Cojedes, Delta Amacuro, Monagas, Portuguesa y Yaracuy se dieron los ratios más altos
de hectáreas distribuidas y de personas beneficiadas en relación con la población de esos
mismos estados. 198 Los siete estados combinados eran aproximadamente el 13 por ciento de la
población total.
Estos datos son la mejor evidencia de la inexistencia de un proceso
revolucionario de cambio estructural en el campo. El impacto y los márgenes del mismo son
demasiado pequeños para ser socialmente significativos.
Además, las cifras explican el
incremento significativo de la inmigración interna a las ciudades. Desgraciadamente, el ritmo y
la filosofía de la Reforma Agraria de 1961 no cambió en años posteriores, y en 1975 Jacob
Senior, director de Corpoandes explicaba la situación del estado Trujillo.
Hay un índice de migración muy alto en este estado, un promedio de 20 personas diarias
dejan este estado para irse a vivir a los barrios periféricos de Caracas, Maracay, Valencia,
Maracaibo y otras ciudades. El aspecto más significativo es que los que se van son los más
jóvenes, mejor preparados y los que necesitamos para crear un futuro mejor en nuestra
región 199.
¿Cuán lento fue el proceso de distribución de tierras?
En 1959, Rómulo Betancourt explicaba la situación de la tierra.
La conclusión de la última investigación hecha por la FAO es precisa y dramática, una
radiografía de rayos X de la situación agraria venezolana. Ellos encontraron 400.000 unidades
agrarias bajo explotación con una extensión de 3 millones de hectáreas, la cantidad de tierra
explotable disponible es de 30 millones de hectáreas 200.
197
Para 1974, Agustín Blanco-Muñoz consideraba que era necesaria una revaluación total del papel social que
jugaba el campesinado en Venezuela porque debido al fracaso rotundo de la reforma agraria, el campesinado era
ahora una “clase” social en peligro de extinción. Ver, Agustín Blanco-Muñoz, Clases Sociales y Violencia en
Venezuela. (Caracas: Facultad de Ciencias Económicas, 1976), 135-175.
198
Una comparación estadística, ver Wilkie, "Measuring Land Reform," 73.
199
Declaración del Dr. Jacob Senior, Director of Corpoandes, El Universal, 6\6\75, 1,19. En Blanco-Muñoz, Clases
Sociales, 150.
200
Rómulo Betancourt, "La Reforma Agraria en Venezuela," Política, septiembre 1959, número 1, 119. En BlancoMuñoz, Clases Sociales, 151.
165
Cambios en títulos de propiedad de la tierra, 1950-1961
1950
Total del número de haciendas (miles de hectáreas)
1961
234700
320100
18399
22065
Alquiler a renta fija
740
582
Alquiler con cosecha compartida
486
153
Total de unidades alquiladas
1226
735
Ocupaciones ilegales
2501
3414
22127
26215
Unidades dirigidas por su propietario
Unidades en alquiler
TOTAL
Específicamente, si el censo agrícola de 1950 señala la existencia de 234.730 unidades de
explotación agraria; en el censo de 1961 aparece un total de 320.000 unidades de explotación
agraria. Durante este periodo (1950-61) había una concentración de la propiedad rural, y un
número importante de unidades agrarias eran muy pequeñas, minifundios. Aproximadamente la
mitad de las unidades o granjas tenían menos de 5 hectáreas de extensión. Las cifras de la tabla
siguiente muestran que el problema de asentamientos ilegales se mantiene estable en el 11% y
aumenta levemente con la reforma agraria en 1961 llegando al 13%. 201 La reforma del trienio
había rebajado a menos del 11% las tierras ocupadas, sin embargo con el gobierno de Pérez
Jiménez la situación empeora proporcionalmente al crecimiento de número de haciendas y tierras
cultivadas. Asimismo se reduce sensiblemente el número de unidades en alquiler y con las
cosechas compartidas durante este período.
La tabla siguiente “Propiedad de la tierra y tamaño por Hacienda” 202 muestra que el 44
% del total de las unidades agrarias eran trabajadas por ocupantes ilegales y nos indica
claramente la necesidad de la reforma agraria, tal como era esperada por la mayoría de los
campesinos, que habían sufrido diez años de estancamiento durante la dictadura militar. La
reforma se llevaría a cabo pero con objetivos diferentes a los esperados por los campesinos.
201
Changes in Land Tenure, 1950 to 1961. Table XXI, en Wilkie, “Measuring Land Reform,” 142.
202
Land Tenure and Farm Size, 1961. Table XXII, Ibid., 143.
166
Propiedad de la tierra y tamaño por Hacienda
Tipo de propiedad
Propiedad privada
operada por propietario
en alquiler fijo
cosecha compartida
ocupaciones ilegales
Tierras públicas
título temporal
en alquiler fijo
ocupaciones ilegales
Total
Número de
Unidades
Área en miles de
hectáreas
Promedio del tamaño
por unidad
233300
126300
22000
27400
23585
21765
473
177.9
14.5
5.6
57500
1347
23.4
111000
15900
11500
2647
300
262
23.7
18.9
22.8
83600
2068
24.7
344,300
26,215
76.1
Bajo estas circunstancias, las razones para una distribución lenta y burocrática de la
tierra por la reforma agraria es difícil de entender por razones simplemente pragmáticas. La
ocupaciones ilegales en tierras privadas eran más de 57.000 unidades y en tierras públicas más de
83.000 unidades con una superficie total de más de 3 millones de hectáreas. No fue sino hasta
1968 cuando se alcanzó la cifra total de 4.495.755 hectáreas distribuidas a campesinos como
vemos en la siguiente tabla.
Tierras distribuidas con título de propiedad provisional (1959-1969) 203
Año
1959
1960
1961
1962
1963
1964
1965
1966
1967
1968
203
Por año
460769
900823
180892
261492
171003
202864
784250
445457
380000
708205
Total acumuladas
460769
1361592
1542484
1803976
1974979
2177843
1926093
3407550
3783550
4495755
“Amount of Venezuela Land Distributed with Provisional Title, 1959-1969”. Tabla 24, Ibid., 72.
167
Wilkie señala que el récord de Leoni fue de 42.013 hectáreas por mes, la mitad del que
consiguió el gobierno de Paz Estenssoro (MNR) durante el período de 1960-1964 en Bolivia. La
cifra total de Betancourt fue de 32.916 hectáreas al mes. Incluso, el gobierno militar boliviano
de Barrientos-Ovando, que derrocó ilegalmente al MNR, distribuyó 45.766 hectáreas al mes, más
rápido que Betancourt y Leoni 204.
La lentitud de la reforma fue causa de la amarga disputa en diciembre de 1961 entre el
gobierno de Betancourt y varios líderes de la FCV (Federación Campesina de Venezuela).
Ramón Quijada abrió el debate interno en AD denunciando el enfoque conservador y lento de la
reforma.
El tema degeneró rápidamente y produjo la violencia verbal y física contra los
disidentes campesinos dentro de AD 205. La disputa tuvo como consecuencia que el propio CEN
(Comité Ejecutivo Nacional) de AD se dividiera y con él, el partido mismo en dos facciones.
AD-Gob y AD-oposición.
Para Quijada, líder de AD-oposición había que denunciar la lentitud y el carácter
conservador de la Ley de Reforma Agraria de 1961 206. En el primer congreso campesino se
entendió que la reforma agraria sería un proceso rápido y organizado para distribuir tierras a los
campesinos sin ellas; resolviendo el problema de invasiones ilegales existentes. Además se
acordó que se daría a los campesinos tierras y los títulos legales correspondientes a los que ya las
trabajaban y ocupaban tierras; incluyendo tierras privadas y públicas. Para AD-Gobierno el
enfoque era favorecer un proceso lento para mantener los niveles de producción agrícola y
alimenticia existentes. Quijada argumentaba que las leyes del mercado con incentivos del estado
para la agro-industria, mantenía más o menos intacto el sector privado de tenencia de las tierras
existentes ya en 1961. Decía que no era una reforma agraria y que solamente favorecía al sector
privado agro-industrial.
Ramón Quijada, Ramos Giménez y otros usaron su influencia política para tratar de
cambiar la orientación de la reforma pero fracasaron.
Su desafío al estatus quo fue
correspondido con medidas disciplinarias, violencia y persecución que llevaron finalmente a la
segunda escisión del partido Acción Democrática (AD). Por un lado, AD-Gob, encabezada por
204
Wilkie, "Measuring Land Reform," 72.
Alvíarez menciona violentas confrontaciones de grupos armados contra los disidentes adecos en Anzoátegui,
Bolívar y Guárico. Ver Rubén Darío Alviarez, La Democracia Venezolana, Criatura Deforme. (Caracas: Imprenta
Universitaria de la UCV, 1987), 90.
206
Ver "Tres Corrientes de Opinión sobre La Reforma Agraria," en Ramón Quijada, Reforma Agraria en
Venezuela. (Caracas: Editorial Arte, 1963), 67.
205
168
Leoni y Paz Galarraga apoyados por el ala conservadora de Rómulo Betancourt. Por el otro,
Quijada, Ramos Giménez y otros (incluyendo 20 congresistas) formaron AD-Op 207 y se unieron
a los partidos de oposición. Como consecuencia AD-Gob perdió aproximadamente más de
100.000 votos que fueron a parar a AD-Op en las elecciones de 1963.
¿Por qué una reforma tan lenta?
Wilkie señala que la lentitud por un lado facilitaba el acomodo político y económico; y
por otro se debía a errores de diseño en la misma ley que dificultaban su implementación.
Primero, la política de AD era acomodar la estructura agraria existente y mantener los niveles de
producción tal como lo expresaba la ley misma. La definición tan limitada de tierras de función
pública, discutida anteriormente, hacía las expropiaciones de tierras privadas difíciles y lentas.
Un sistema legal bizarro y burocrático, favorecía siempre a los terratenientes; ya que ralentizaba
significativamente, cualquier proceso de transferencia de la tierra. Después de cinco años de
reforma en el Gobierno de Leoni, CENDES en "La Reforma Agraria en Venezuela," da un
ejemplo de la clásica contradicción entre la práctica de AD y su retórica revolucionaria.
En este momento, toda acción y recursos del IAN están dirigidos a responder las
peticiones presentadas por los campesinos y resolver el problema previniendo las invasiones
campesinas de tierras. El cambio de la estructura agraria y la ruptura de latifundios ha sido
pospuesta por razones pragmáticas de este momento, entonces, después de una consideración
cuidadosa y un estudio de prioridades serán aplicadas siguiendo las peticiones campesinas…y
no por acciones deliberadas 208.
El IAN protegía las prácticas de los terratenientes a pesar de su retórica revolucionaria y
populista que olvidaba al campesino en su realidad. Obviamente, los retardos favorecían el
estatus quo. Ya en diciembre de 1961 Ramón Quijada entendió que la reforma perdía momento.
La dificultad en clasificar las tierras y en conceder títulos de propiedad fue muy significativa tal
como señala Wilkie. La Ley de Reforma clasificaba las tierras en siete categorías diferentes en
relación a la distancia de los mercados, acceso al agua, topografía, etc.
El proceso de
clasificación de unidades agrícolas y tierras no era realista, era sofisticado, largo e inapropiado
para los fines que se deseaba. Era necesario por lo tanto el uso de técnicos para las cosas más
207
Los congresistas disidentes que abandonaron AD-Gob fueron: Raúl Ramos Giménez, Jaime Pérez, Régulo
Briceño, Tomás Alberti, Arturo Ramón Añez, Ítalo Boscan, Ramón Quijada, Félix Adam, César Rondón Lovera,
Rafael Serfatti, Pedro Felipe Ledesma, Miguel Toro Alayón, Marcial Mendoza Estrella, Miguel García Mackle,
Ramón Vicente Casanova, Elpidio La Riba Mata, Manuel Alfredo Rodríguez, Eduardo Angarita, Daniel Salazar
Paz, Alberto Nieves, José Duarte Balza and Elio Chacín Reyes. Ver, Alviarez, Democracia Venezolana, 94.
208
Ibíd., 63.
169
simples, lo que generaba más y más burocracia y más y más corrupción. Las unidades agrarias
se clasificaban también en siete categorías. La primera categoría se refería a unidades de 150
hectáreas de tierra de alta calidad, y la “séptima” se refería a unidades de 5.000 hectáreas de
tierras de baja calidad 209.
Además, un complicado sistema de dos etapas era necesario para conseguir un título de
propiedad. Los primeros títulos definitivos de propiedad no fueron dados hasta 1967, cuando
finalmente la ley regulatoria de tierras de la reforma agraria fue finalmente aprobada.
Obviamente, los títulos provisionales no eran lo mismo que los definitivos. Los campesinos
venezolanos que habían sido víctimas de una historia de represión y confiscación de sus tierras
por años, veían como su trabajo e inversión con mucha cautela. La tierra les podía ser retirada
rápidamente en una decisión política o burocrática hecha en las oficinas del IAN y todo ello ver
su trabajo e inversión desvanecerse en un instante.
¿Cuánto costó la reforma agraria?
Una valorización cuantitativa de los costos de la reforma agraria es evasiva por varias
razones, incluyendo la forma de hacer el presupuesto y la corrupción existente. El presupuesto
de la reforma agraria incluía no sólo dinero procedente del IAN y MAC sino también del
Ministerio de Educación, Obras Públicas, Salud y otros muchos. El líder agrario de oposición
(AD-Op) José de Jesús Álvarez denunció la existencia de corrupción en las oficinas centrales del
IAN en el Congreso en su ponencia del 20 de julio de 1963.
Ha habido una serie de fraudes alarmantes en el IAN. La reforma agraria ha sido una
trampa, un negocio redondo para funcionarios corruptos, pseudos líderes agrarios y
terratenientes que venden su tierra por más dinero de lo realmente vale. El IAN ha pagado más
de 12.000.000 bs. en efectivo a terratenientes de un presupuesto total de 26.266.886 bs. Esto es
una violación de la ley de reforma agraria 210.
La reforma agraria fue muy costosa debido a sus componentes principales.
La
expropiación de tierras fue costosa; y el modelo de asentamientos o "proyectos de colonización"
fue costoso, paternalista y burocrático.
209
210
En total, la cantidad de dineros invertidos no se
Wilkie, "Measuring Land Reform," 62.
Alviarez, Democracia Venezolana, 120.
170
correspondía con los beneficios obtenidos y los problemas sociales no se resolvieron sino que se
agravaron con el tiempo.
El IAN pagó por tierras expropiadas el valor de mercado en lugar de pagar el valor que
figuraba en la declaración de impuestos. Esto obviamente, no solo premiaba a quienes no
pagaban impuestos, sino que hizo del proceso de expropiación un negocio beneficioso para el
terrateniente. Gracias a la reforma, los terratenientes podían vender tierras no usadas por ellos al
gobierno e invertir esos dineros en otros negocios más productivos. Una vez que el proceso de
expropiación empezaba, el IAN primero pagaba al terrateniente el 10 % del valor acordado en
efectivo y el resto en bonos no transferibles de la reforma agraria 211. Por lo tanto, una parte
significativa de los dineros de la reforma terminaban siempre en manos de los terratenientes o de
los burócratas que hacían servicios indirectos a los campesinos 212. En los años 60, entre el 50 y
el 70 por ciento del presupuesto del IAN fue destinado a la compra de tierras o trabajos de
consolidación. Después de 1963, el ratio disminuyó y estos gastos eran aproximadamente el 25
por ciento del total. El resto del presupuesto se gastaba en salarios, planificación, investigación y
otros gastos de implementación. Este cambio fue en parte reflejo de la política del gobierno de
Betancourt de disminuir la distribución de tierras e incrementar los requisitos necesarios para la
repartición de nuevas tierras 213.
El carácter paternalista de la “nueva democracia agraria” 214 estaba basado en los
objetivos económicos y en el individualismo que fomentaba. No se trataba de dar poder al
campesino, ni a las comunidades indígenas, ni a los sindicatos, ni a las cooperativas, ni a las
empresas colectivizadas ya que el objetivo social era crear proyectos de colonización de
desarrollo agrícola. Buscaban crear una clase de “pequeños propietarios familiares” de una masa
inmensa de conuqueros y otros campesinos 215.
211
Alexander, Venezuelan Democratic Revolution, 170.
Los evaluadores y auditores del gobierno tenían que hacer una valoración justa del valor de las tierras
incautadas. La lentitud del proceso fue desde el principio; y solamente al final de la administración de Betancourt
algunos logros empezaron a impactar la estructura de la tierra. Al final de su administración, los campesinos sin
tierras habían ocupado 4 millones de acres, un tercio de las cuales habían pertenecido a terratenientes anteriormente.
Esto benefició a 60.000 familias que ahora tenían tierras propias. Martz, Acción Democrática, 110-111.
213
Powell, Political Mobilization, 163.
214
Este término fue utilizado por Betancourt para definir su política agraria. Martz, Acción Democrática, 125.
215
Powell, Political Mobilization, 109.
212
171
Mientras había muchos programas agrícolas, incluyendo operaciones vigorosas de
apoyo comercial, la reforma agraria estaba designada a crear cerca de 300.000 unidades
familiares de subsistencia para añadirlas al sector productivo económico nacional 216.
En 1968, el IAN colocó aproximadamente 100.000 familias campesinas en 5.000.000
acres de su propia tierra.
Estas familias fueron distribuidas en aproximadamente 700
asentamientos 217 con un costo de 7.000 bolívares por familia 218. Estos caros asentamientos o
proyectos de colonización, en 1968 ya llegaban a 800, incluyendo parcelas de tierra, servicios
educacionales y sanitarios. Crédito y asistencia técnica también fueron facilitadas a través del
BAC y IAN. Sin embargo, los pocos campesinos que se beneficiaron --que en su mayoría eran
leales simpatizantes y miembros de AD y COPEI—dejaban al resto ocupando tierras
“ilegalmente,” abandonados a su propia suerte. Una crítica de dos de estos asentamientos, Las
Majaguas y Boconó, fue hecha por Jacob O. Maos en “The Spacial Organization of New Land
Settlement in Latin America”.
(En Boconó) Ya en 1971, aproximadamente 400 familias tenían vivienda y estaban
trabajando en producción agrícola bajo la supervisión de técnicos del ministerio de agricultura.
Los campos están labrados y los campesinos parecían felices y prosperando. El lado negativo
de esta imagen de éxito eran los cientos de campesinos sin tierras que llegaban a la región que
invadían las tierras donde el asentamiento crecería. Estos invasores reflejaban por un lado el
hambre de tierra y el deseo de ser uno de los elegidos que tendría la fortuna de ser escogido
para participar en el proyecto por la administración de turno 219.
En el análisis final el objetivo del asentamiento era siempre medido en términos de
productividad agrícola y manejado por los agro-técnicos y los administradores oficiales del
MAC. La participación de los campesinos en los procesos de toma de decisiones era mínimo, ya
que la mayoría de las decisiones eran tomadas y procesadas por el IAN, BAP y MAC. La
216
Ibíd.
Un claro contraste existe entre el “asentamiento” --estatal venezolano-- y el que se llevo a cabo en Chile, donde
el poder de decisión era campesino. "El asentamiento había sido una forma transitoria adoptada por el gobierno
demócrata cristiano que durante el primer año del Gobierno de Unidad Popular pudo explotar tierras por un período
de tres a cinco años. El asentamiento coincidía con los límites del las tierras explotadas anteriormente por los
terratenientes y era manejado como una unidad en forma de cooperativa con la ayuda de la corporación de la
Reforma Agraria y los miembros campesinos de la misma. Durante este período transitorio los campesinos eran
entrenados en todas las responsabilidades para el manejo absoluto de la cooperativa y el gobierno se limitaba a dar
asistencia y crédito. De acuerdo con la ley, los campesinos decidían como dividir la tierra y organizar la producción
y operar la cooperativa de una forma democrática y autónoma." Ver J.A. Zammitt, The Chilean Road to Socialism,
(Austin: University of Texas Press, 1973), 282.
218
Powell, Political Mobilization, 163.
219
Jacob O. Maos, The Spatial Organization of New Land Settlement in Latin America. (Boulder, Co: Westview
Press, 1984), 95.
217
172
Federación Campesina (FCV) se fue apagando después de perder algunos miembros en la guerra
civil entre la guerrilla y el gobierno y otros en las sucesivas escisiones dentro del partido AD. Al
final el campesino se quedó sin una voz independiente y autónoma que cuestionara la filosofía y
las técnicas o formas de producción. La reforma agraria de 1961 contribuyó a la división de los
campesinos en tres grupos: primero, aquellos campesinos que se beneficiaron con la reforma.
Una minoría de 100.000 familias, que esperaban por el título definitivo de sus tierras y que
dependían de AD y COPEI por crédito y asistencia técnica, educación y salud. El segundo grupo
eran aquellos campesinos que no se beneficiaron de la reforma, una mayoría de cientos de miles.
Estos sin tierra, desempleados, analfabetos, víctimas de mal nutrición y enfermedades curables,
vivían en la pobreza absoluta. Se mantenían invadiendo tierras vacías hasta que el IAN y
oficiales del gobierno --con la ayuda del ejército y la policía—derribaban sus ranchos y los
expulsaban de las tierras ocupadas. Un tercer grupo eran los jóvenes del segundo grupo, que
gracias a las mejoras en el transporte, decidían emigrar a la ciudad donde vivían malamente en
los cinturones de miseria de los centros urbanos en busca de trabajo y nuevas oportunidades.
3.5. Impacto electoral y legado de la Reforma Agraria 1961
Wilkie señala que en los estados del Zulia, Apure, Barinas, Cojedes, Delta Amacuro,
Portuguesa y Yaracuy obtuvieron los ratios más altos de hectáreas y personas que se beneficiaron
en relación a la población.
Decidí analizar los resultados electorales en estos estados,
excluyendo el Zulia, para ver si los resultados electorales favorecían al gobierno. De los ocho
estados, excluí al Zulia donde la población urbana y que trabajaba en los campos petroleros es
predominante, y me enfoqué en los estados fundamentalmente agrarios del país. Estos siete
estados representaban el 13 por ciento de la población total, sus ciudades más grandes eran
relativamente pequeñas (menos de 100,000 habitantes) y la mayoría de la población se dedicaba
a la agricultura o trabajos relacionados con la tierra. La siguiente tabla muestra los resultados
electorales de AD (1958, 1963, 1968) en los siete estados que se beneficiaron más con la reforma
agraria de 1961.
173
Votos por cientos según el CNE
Apure
Barinas
Cojedes
D. Amacuro
Monagas
Portuguesa
Yaracuy
28442
27860
15004
8080
66151
45725
44618
1958
76.60%
63.60%
59.10%
63.30%
75.20%
73.00%
67.80%
18789
21072
12018
7357
56455
32150
21234
1963
50%
39.20%
40.60%
53.80%
57.60%
42.40%
30.40%
21042
21527
12,527
5196
51691
35556
28049
1968
42.10%
30.10%
36%
30.80%
46.30%
33.80%
33.90%
Un vistazo rápido a la tabla anterior muestra que la reforma agraria no fue un factor
electoral positivo en favor del gobierno. AD perdió entre el 30 y el 50 por ciento del voto entre
los años de 1958 y 1968. Incluso entre estos siete estados "privilegiados" en los que AD tenía un
apoyo indiscutible en 1958, el gobierno perdió un número muy significativo de votos. Es más, la
relación población y votó por AD en 1963 y 1968 bien pudiera explicarse en términos de
militancia o clientelismo hacia el partido y gobierno de turno.
¿Cómo AD compensó está perdida de votos rurales? Tratando de responder a esta
pregunta es importante tener en cuenta las cifras que muestra la migración rural a la ciudad.
Pienso que AD cambió su enfoque electoral a las ciudades, no sólo para compensar la pérdida de
votos rurales, sino siguiendo su política económica desarrollista, urbana y migratoria que
fomentaba. Una reforma agraria efectiva hubiera frenado significativamente la migración a las
ciudades, como ocurrió en Cuba por ejemplo. En Venezuela, Blanco Muñoz argumentaba que
en la década de los 70 los campesinos estaban desapareciendo, una clase que sistemáticamente
había sido forzada a la extinción por la reforma agraria y la política socio-económica del propio
estado venezolano. Los campesinos eran ahora parte del "lumpen proletariado" y vivían en
condiciones de pobreza extrema en el campo o en situación de pobreza en los cinturones de
miseria de "los cerros de Caracas."
Para entender de forma específica la situación migratoria analicé dos tablas. Primero la
“Tabla de población rural y urbana en Venezuela” y segundo el “Total y porcentaje de cinco
niveles de asentamiento urbano-rural de mayor a menor en Venezuela desde 1950.”
174
Tabla de población rural y urbana en Venezuela (1936-1971)
1936
1941
1950
1961
1971
Poblacion Total
3364347
3850771
5034838
7523999
10721522
1168039
1516444
2709344
5078624
8276660
Urbana
34.75%
39.40%
53.80%
67.50%
77.20%
2196308
2334327
2325494
2445375
2444862
Rural
65.30%
60.60%
46.20%
32.50%
22.80%
La tabla muestra la tendencia clara de migración del campo a la ciudad desde 1936.
Entre 1950 y 1961, el promedio porcentaje de población emigrante era de 1.37. En 1971, el
promedio de este porcentaje se redujo al 0.99, una mejora del 0.37. Siguiendo un estimado
global la reforma agraria podría haber sido un factor positivo en la reducción de la migración,
reduciéndola en un tercio. Sin embargo, este estimado positivo puede refutarse rápidamente si
uno mira a la siguiente tabla donde se clasifica a la población de una forma más específica.
Total y porcentaje de cinco niveles de asentamiento urbano-rural de mayor a menor
en Venezuela desde 1950.
Censo Total
1950
1961
1971
Porcentaje
1950
1961
1971
0
Dispersa
1-99
1988578
1
Rural
2.500
597628
2783880
2680380
2
Urbana
20.000
771987
1203813
1544529
3
Urbana
500.000
886189
2043928
3668874
4
Metropolitana
+ 500.000
790602
1492378
2827739
39.5
11.9
37
25
15.3
16
14.4
17.6
27.2
34.3
15.7
19.8
26.4
Al definir específicamente en números la población rural y urbana se puede discernir que
la población rural "real" (aquellos viviendo en pueblos de 2.500 habitantes o menos) era el 37%
del total de la población en 1961. Para 1971, la población rural descendió a un 25 % del índice
total. La vida urbana simple (viviendo en poblados de 2.501-20.000) y compleja (viviendo ya en
ciudades de 20.001-500.000) era del 48.6 % del total. Usando estas cifras el ratio de emigración
a áreas urbanas simpe y compleja; y áreas metropolitanas es prácticamente el mismo (1.3 de
incremento para el período de 1950-61 comparado con un incremento del 1.2 para el período de
1961-71). Este último análisis nulifica incluso más el impacto de la reforma agraria en materia
migratoria; lo hace aparecer como un factor prácticamente irrelevante en materia de reducción de
la emigración hacia la ciudad.
175
El análisis del producto nacional bruto (PNB) ilumina desde punto de vista económico el
fenómeno. Es interesante ver que el factor petrolero y el sector servicios poco a poco toman un
papel más relevante en la economía venezolana. Es un proceso paralelo a la urbanización del
país. A pesar de la reforma agraria, que debería haber mejorado globalmente la importancia de
la agricultura, ganadería y pesca con respecto al Producto Nacional Bruto, el sector primario se
mantiene estancado. Al no haber cambios significativos, el sector primario va quedándose
marginado con respecto a los demás sectores económicos. Esto obviamente se refleja a nivel
social y político, significa la marginación del campesinado como clase social.
Evolución del Producto Nacional Bruto (PNB) en Venezuela 220
Sector
Primario
Secundario
Terciario
Total
4831
2170
5726
12727
1950
37.96%
17.05%
44.99%
100%
9775
5365
11976
27116
1960
36.05%
19.79%
44.16%
100%
11886
7332
19387
38605
1965
30.80%
18.99%
50.22%
100%
12706
9039
23042
44787
1969
28.37%
20.18%
51%
100%
Aquí podemos ver como el sector primario se redujo drásticamente de 37.96 % (1950) a
28.37 % (1969). La reforma agraria parece haber contribuido a esta reducción. Durante el
período de 1950-60 la reducción fue sólo de 1.92 %. Para el período de 1960-69, la reducción
fue de 7.68 %.
(servicios)
221
Esta reducción se complementa con un incremento en sector terciario
, que creció del 44.16 % (1960) al 51.45 % (1969). Un incremento del 7.29%, esta
cifra claramente explica la tendencia hacia la urbanización. Además, no debemos olvidar que
como mencionamos anteriormente la producción agraria se incremento durante el período de
reforma agraria.
Acción Democrática perdió un número significativo del electorado rural, incluso en
aquellos estados donde la reforma agraria tenía mayor número de beneficiados. Es razonable
pensar que AD cambió su enfoque electoral del campo a la ciudad siguiendo sus decisiones
políticas y socio-económicas. La reforma agraria fue una reforma indirecta (1961-68) que no
contribuyó a detener los patrones migratorios hacia la ciudad ni tampoco incrementó la
220
Datos del Banco Central de Venezuela 1971:54. Bolívares expresados en el valor de 1957.
El incremento del sector servicios es significativo, ver Jaspersen tabla V (Sectoral Composition of Activity
Employed Venezuelan Labor Forces, 1950-1965, por ciento), Economic Impact, 75.
221
176
importancia del sector agrario con respecto al PNB. Sin embargo, la reforma tuvo un impacto
moderadamente positivo en la producción agrícola 222.
La reforma agraria no cambió y con el paso de los años pasó a ser noticia de segunda
categoría; manteniéndose los niveles de producción moderados. Prosiguió sin tener influencia
decisiva a nivel social y los sindicatos campesinos sólo servían para apoyar al gobierno de turno.
Solamente en tiempo de elecciones los temas agrarios volvían a ser noticia en los medios de
comunicación de las zonas rurales; No hubo cambios de transformación de la estructura de la
tenencia de la tierra, como lo demuestran los datos ofrecidos en el cuadro siguiente del censo
agrícola 223.
Venezuela : evolución de la estructura de la tenencia de la tierra de las
explotaciones agrícolas (1961-1985)
Clase
superficie
(hectáreas)
de
Número de explotaciones
Número
1961
Superficie de las explotaciones
Porcentaje Hectáreas
1985
1961 1985 1961
Porcentaje
1985
1961 1985
0-19,9
254906 279072 79,7 73,2 1260402
1308218
4,9
4,2
20-49,9
28600
39714
8,9
10,4 816791
1124550
3,1
3,6
50-199,9
18899
35391
5,9
9,3
1661883
3174690
6,4
10,1
200-99,9
8949
19067
2,8
5,0
3610566
7571655
13,9 24,2
1.000 y más
4123
5608
1,3
1,5
18655220 18099042 71,7 57,9
sin tierras
4617
2 424
1,4
0,6
-
Total
320094 381276 100
100
26004862 31248155 100
-
-
100
Fuente: Censos agrícolas, años indicados.
222
Para más tablas sobre los incrementos en la producción. Ver tabla VIII (Volume of Agricultural Production in
content 1962 prices, 4 year averages and Average Annual Growth ever Preceding Period, Per cent,) y IX (Trends in
Area, Production and Yields of Principal Crops 4 Year Average, and 4 Year Plan Targets), en Jaspersen, Economic
Impact, 82,84. También, es interesante la tabla VI (Imports of Agricultural and Selected Processed Agricultural
Products, 4 Year Averages, thousand metric tons unless otherwise specified) Ibíd., 79.
223
Ver cuadro en el artículo Einstein Alejandro Morales Galito “La Reforma Agraria y la Ley de Tierras.” En
www.monografias.com.
177
Para 1997 el censo agrícola resume el incremento de las explotaciones agrícolas por
estado en el siguiente gráfico “Explotaciones agrícolas levantadas, censos 1985/97” visualiza los
cambios en el cuadro siguiente. Estos dos gráficos resumen el estado de la tenencia de la tierra
en Venezuela antes de la Revolución Bolivariana. Resumen los resultados de 40 años de
vigencia de la Ley de Reforma Agraria en Venezuela.
Número de Explotaciones y Superficie Sembrada Total (1985/1997)
por Entidad Federal
EXPLOTACIONES AGRÍCOLAS
ENTIDAD FEDERAL
1984/85
Nº de Explot.
Superficie (ha)
1997/98
Nº de Explot.
Superficie (ha)
TOTAL
381,276
31,278,155
500,959
30,063,783.44
AMAZONAS
ANZOÁTEGUI
APURE
ARAGUA
BARINAS
BOLÍVAR
CARABOBO
COJEDES
DELTA AMACURO
DTTO. FEDERAL
FALCÓN
GUÁRICO
LARA
MÉRIDA
MIRANDA
MONAGAS
NVA. ESPARTA
PORTUGUESA*
SUCRE
TÁCHIRA
TRUJILLO
YARACUY
ZULIA
2,783
15,308
15,611
9,966
19,466
13,268
12,803
8,750
2,499
1,942
19,855
18,937
28,167
24,174
19,424
16,310
1,529
25,409
26,109
26,716
26,844
15,276
30,130
276,145.00
2,654,114.00
5,218,445.00
521,068.00
2,659,654.00
2,561,687.00
380,810.00
1,247,653.00
143,942.00
18,322.00
1,475,158.00
4,620,219.00
896,148.00
565,348.00
322,219.00
1,100,620.00
2,392.00
1,594,863.00
292,105.00
707,941.00
500,304.00
566,239.00
2,952,759.00
3,579
22,488
23,223
11,395
29,698
26,855
11,571
9,662
4,650
3,552
25,505
31,245
33,945
33,636
29,406
17,763
796
30,640
29,243
29,665
38,235
21,772
32,435
90,439.06
2,584,141.92
4,937,119.36
400,477.12
2,896,998.96
2,733,619.41
221,649.77
1,255,626.40
123,694.04
11,626.16
1,300,520.87
4,516,982.31
879,460.67
446,916.15
235,232.12
1,293,720.66
3,316.34
1,259,309.32
219,598.97
739,851.09
397,308.99
510,965.02
3,005,208.72
* La Superficie Agrícola reportada para el año 1985 supera en 74.863 ha. la superficie total de la entidad
178
Es interesante señalar que en este cuadro aumenta el número de explotaciones agrícolas
pero disminuye el número de hectáreas cultivadas. Este hecho indica que hay una tendencia a
reducir el tamaño de las explotaciones agrícolas y a mantener la estabilidad en la producción.
En resumen, la Reforma Agraria no resolvió el problema de la pobreza en el campo sino
que lo traslado a las ciudades. Salvo unas pocas familias que se beneficiaron de la reforma la
diferencia entre ricos y pobres en las zonas rurales aumentó y en el mejor de los casos
permaneció igual por décadas. Los terratenientes conservaron el control no sólo de la tierra sino
de la producción interna y externa. Tenían además el control de las plantas de procesamiento de
alimentos y de la distribución y mercadeo de la comida en país. Controlaban el costo de la
canasta alimentaria del venezolano. El legado electoral fue básicamente cambiar el terreno de la
batalla electoral del campo a las ciudades. Es en las ciudades grandes y pequeñas donde se
ganan o pierden ahora las elecciones en Venezuela. Asimismo, los campesinos perdieron su
179
poder político y sus sindicatos. Se convirtieron en una clase social marginal, para mantenerse
viviendo en campo en niveles de pobreza extrema o emigrar a las ciudades para vivir en los
barrios pobres de las ciudades.
Con el fracaso de la Reforma Agraria y su incapacidad de
resolver el problema de la pobreza e indigencia y se pierde una “oportunidad de oro” de
verdadera integración y democratización del país. Este fracaso abre las puertas a la V República
cuyo objetivo será precisamente ese, integrar el país eliminando la pobreza, y democratizar
realmente las instituciones y el estado.
3.6 Los objetivos de la Nueva Ley de Tierras y Desarrollo Agrario (2005)
Aquí no venimos a engañar a nadie, como durante años se engañó a los campesinos de
Venezuela, cuando se dio la Reforma Agraria (1961), esa reforma, -dijo- fue un parapeto del
Pacto de Punto Fijo para engañar a los campesinos y para favorecer a los latifundistas y a los
explotadores de hombres, a los que hundieron a los venezolanos en la pobreza. Esa reforma
agraria no fue más que una máscara detrás de la cual se escondieron los grandes privilegios de
la oligarquía terrateniente para adueñarse de las mejores tierras de Venezuela 224. (Presidente
Hugo Chávez Frías)
¿Cuánto contribuyó la reforma agraria de 1961 a incrementar la pobreza en Venezuela?
Vimos que no mejoró la situación, los niveles de pobreza se mantuvieron y el control de las
tierras y de la agricultura permaneció en las manos de una minoría. La situación ha cambiado
significativamente. La población en Venezuela ha alcanzado los 28 millones de habitantes
(2009), de los cuales 50.2% son hombres y 49.8% son mujeres. Los niños y jóvenes representan
el 36% de la población total, lo cual indica que la población venezolana es predominantemente
joven. Viven en el país 506.341 indígenas, de 34 pueblos diferentes y que representan el 2.2%
de la población. La mayoría indígena es Wayuu, Sarao y Pemón. Existe un contingente no
determinado de afro descendientes que viven mayormente en las grandes ciudades y en la costa
oriental del país. Pero ahora, la mayoría de la población no es rural; el 88.4 por ciento vive en
pueblos y ciudades de más de 2.500 habitantes, es decir en centros urbanos que permiten el
acceso a cierta infraestructura. 225
224
Presidente Hugo Chávez Frías en Hernán Mena Cifuentes, “Sueño del campesino venezolano se hace realidad
con Ley de Tierras,” Venpres, 10/11/04
225
Datos en el informe de UNICEF sobre Venezuela tomados del censo nacional proporcionado por el INE.
180
En materia económica la mayoría de los estudios políticos sobre Venezuela continúan
siendo la economía petrolera y sus efectos; que son obviamente los más importantes. Pero hacen
falta nuevos estudios sobre el problema de la tierra y el nuevo modelo de desarrollo agrario que
propone la Revolución Bolivariana. Obviamente, es muy pronto para hacer una evaluación
exacta de lo que está pasando; pero vemos que el tema agrario es de nuevo protagonista. Está
afectando directamente a la población y tiene un efecto social y político importantísimo en la
realidad actual. La reducción de la pobreza tiene mucho que ver con los cambios hechos en la
política agraria impulsada desde el estado. La información que tenemos es insuficiente por que
los medios de comunicación social tanto públicos como privados no dedican suficientes recursos
a los temas agrarios. La mayoría de la información procede de los sectores del gobierno,
ministerial o/y del propio Presidente, que como buen hijo de campesino, dedica mucho tiempo a
la revolución agraria 226. Sin embargo, la poca información existente que se consigue en los
medios oficiales y de comunicación tanto pública como privada tienen –queramos o no-condicionamientos políticos obvios.
Sin embargo, sabemos que la mayor concentración de la pobreza extrema se ubica en
poblaciones menores de 25.000 habitantes y en las áreas más rurales (74%). Una de las más
recientes prioridades del Gobierno Bolivariana ha sido la nueva política agraria para tratar de
eliminar los desequilibrios y la desigualdad rural facilitando la distribución de tierra a los que la
quieren trabajar.
Como el nombre de la propia ley, “Ley de Tierras y Desarrollo Agrario”
indica hay dos objetivos. La Ley de Tierras trata de rescatar al campesino y ayudar a los que
trabajan el campo dándoles tierras y recursos. Trata de neutralizar a los terratenientes, amos del
campo venezolano. Para ello, crea un sistema que trata de crear una clase campesina diferente:
cooperativa, eficiente y revolucionaria. Por otro lado, la ley tiene objetivos de desarrollo agrario
fundamentales. Trata de transformar la estructura económica del sector agrario venezolano –
controlada hasta ahora por el sector privado-- para alcanzar la soberanía alimentaria, con el
significado geopolítico externo e interno que el concepto conlleva.
Es decir crear una
infraestructura de producción de alimentos y mercadeo desde el estado para conseguir que los
precios de la comida sea asequible para los venezolanos. Es decir garantizar los derechos de
226
Victor Alvarez, Venezuela: ¿Hacia dónde va el modelo productivo? (Caracas: Centro Internacional Miranda,
2010) . Victor Alvarez fue ministro del Gobierno Bolivariano.
181
subsistencia alimentarios mínimos de los que hablar Henry Shue en su modelo básico de
derechos humanos.
Las opciones de una Ley de Reforma Agraria directa no son realistas, después de
cincuenta años de contra-revolución. La nueva ley es una reforma “indirecta” por dos razones
fundamentales: no existe una clase campesina suficientemente numerosa y mucho menos fuerte y
organizada para la toma de tierras; y segundo la Revolución necesita incrementar la producción
de alimentos agrícolas en el país para acabar con la inmensa pobreza existente. La Revolución
Bolivariana con la nueva ley se propone recrear y organizar a la clase campesina; y segundo para
justificar su existencia eliminar la pobreza. Ambos objetivos ayudarán a combatir el asalto
interno “golpista” de la oligarquía, que tenía la capacidad de crear crisis de escasez alimentaria
cuando lo creía conveniente a sus intereses políticos o económicos.
Este último factor u objetivo estratégico para la seguridad nacional revolucionaria y se
define con el término de soberanía alimentaria. Si derogar la Reforma Agraria indirecta de 1961
fue un primer acto revolucionario, revertir su legado de efectos negativos será el fruto de un
largo proceso de reconstrucción e inversión que se alcanzará en etapas de varias décadas. La
nueva política agraria de la Revolución tiene varios objetivos.
(a) Reconstruir el campesinado como clase social.
(b) Distribuir la propiedad y terminar con el control del sector primario en las manos de unos
pocos dueños y complejos agroindustriales privados.
(c) Eliminar las migraciones de población hacia la ciudad.
(d) Restablecer la confianza en el Ministerio de Agricultura con las sociedades y
cooperativas rurales.
(e) Fortalecer a las comunidades indígenas y enriquecerlas culturalmente.
(f) Cambiar los altos los niveles de analfabetismo, desnutrición, hambre y servilismo en las
zonas rurales con respecto al resto del país. Hacer del campesinado una clase fuerte que
sea fuente riqueza material y fortaleza –como lo fue en 1946 y 1961—de la democracia
para el país.
Después décadas de abandono y abuso, el campesinado no tiene la capacidad cuantitativa
de repetir las gestas de un pasado glorioso como fue la reforma agraria directa que llevó a cabo
en 1946. Ahora las condiciones de clase, así como de la distribución de la población y del orden
económico son radicalmente diferentes a las de 1946. La Venezuela revolucionaria de 1999 es
182
básicamente urbana y por lo tanto, necesita crear un nuevo proceso innovador y restaurador de la
Venezuela rural. Tal vez, esto no sea tan difícil ya que muchos citadinos añoran y viajan a sus
pueblos de origen, donde todavía tiene vínculos familiares y afectivos importantes. Sin embargo
existe una inercia cultural de capitalismo salvaje que está llena de perjuicios contra el campesino
cuya imagen social es la de un ser “muy pobre”—sin zapatos-- y muy ignorante --analfabeto.
3.7.
La soberanía alimentaria: nuevo modelo de desarrollo agrario
El gobierno bolivariano ha evitado una reforma agraria que significaba una guerra abierta
por la tenencia de la tierra contra la oligarquía terrateniente que mantenía un control legal,
económico y cultural absoluto en las zonas rurales. Una oligarquía que poseía, según el censo
agrícola de 1998, el 75% de las tierras más productivas del país. Una oligarquía que además
mantenía el control de los medios y mecanismos de producción de alimentos y de casi todas las
redes de distribución y comercialización de los mismos en todo el país. Una élite que hasta la
llegada de la Revolución, determinaba a su antojo los precios de la comida importada y nacional;
y por supuesto, determinaba el costo estratégico de la canasta familiar alimentaria y básica. En
definitiva una oligarquía que hasta 1999 determinaba que comían o no comían los venezolanos.
Una oligarquía agraria poderosa que es además violenta. La política de los terratenientes
contra el gobierno bolivariano fomenta “el terror” en el campo y el “boicot” en la ciudad. No
sólo ha tratado de aterrorizar con violencia a los líderes campesinos sino que ha organizado
crisis de escasez en las ciudades. Es importante señalar que han muerto más campesinos que
estudiantes o trabajadores luchando por la Revolución Bolivariana. Es triste destacar que entre
las filas revolucionarias y a pesar del alto precio pagado por los campesinos, estos reciben poca
atención en los medios de comunicación públicos; un protagonismo menor al de estudiantes y
otros trabajadores del país.
Han sido asesinados, aproximadamente, cien campesinos
revolucionarios desde el año 2001.
Por otro lado, las compañías de distribución y
comercialización de alimentos privadas han tratado sistemáticamente –aunque sin mayor éxito
hasta el momento-- de crear “crisis” de desabastecimiento de alimentos básicos en varias
ocasiones en todo el país. Con las “crisis” de desabastecimiento han querido poner en evidencia
las carencias organizativas del gobierno bolivariano y provocar desaliento generalizado en la
población. Para ello, ha sido muy importante el uso coordinado de estos grupos de interés y de
183
los medios de comunicación privados --que con noticias alarmistas-- han buscado crear zozobra
y pánico en la ciudadanía. Estas campañas han tenido dos objetivos, por un lado subir los
precios de la comida, más dinero para el comerciante; y por otro, fomentar las condiciones de
descontento popular para un posible golpe de estado o derrota electoral de la Revolución. En
resumen, crear el descontento popular y fomentar las condiciones necesarias que favorecerían la
caída de la Revolución.
La oposición anti-revolucionaria ha imitando las acciones de
desestabilización que se llevaron a cabo --con relativo éxito-- en Nicaragua --en la década de los
ochenta durante la reforma agraria sandinista-- y también en Chile en los años anteriores al
golpe de estado contra Salvador Allende en 1973.
Esta oligarquía es la misma que preparó y ejecutó el golpe de estado el 11 de abril del
2002 contra la Revolución y secuestró al Presidente Constitucional Hugo Chávez durante varios
días. El señor Carmona Astanga --presidente de la organización empresarial más importante del
país FEDECAMARAS—asumió el poder del gobierno anti-constitucional. El propio Carmona
Astanga se autoproclamó Presidente, disolvió la Asamblea Nacional y todas las instituciones
nacionales, incluyendo la Corte Suprema de Justicia y al Defensor del Pueblo. Derogó la
Constitución Bolivariana y resucitó y proclamó la IV República y la Constitución de 1961.
Entonces, habló de construir un nuevo gobierno de “reconciliación nacional.” Es increíble que
los miembros de esta misma oligarquía golpista sean los mismos que tratan de presentar al
Presidente Constitucional Hugo Chávez como “autoritario” y “anti-demócrata” en los medios de
comunicación privados. Afortunadamente, el golpe duró sólo dos días y el pueblo y el ejército
bolivariano restauraron la constitucionalidad y al Presidente Chávez el mismo 13 de abril.
Después del fallido golpe del 2002, la violencia en el campo ha ido disminuyendo
paulatinamente en los últimos años; pero el terror fue intenso al principio de la Revolución. El
diputado de la Asamblea Nacional Darío Vivas denunció nacional e internacionalmente el
asesinato de un total de 72 dirigentes campesinos y defensores de derechos humanos a manos de
sicarios contratados por terratenientes ya en el 2003.
Nos hemos reunido con los familiares de las víctimas del sicariato y del terrorismo
político que se ha venido desarrollando en algunas zonas del país --especialmente en aquellas
zonas donde los trabajadores del campo se han venido organizando para implementar el
mandato constitucional y el mandato legal en relación a la aplicación de la Ley de Tierras. En
ese sentido se ha creado toda una organización por parte de los ciudadanos, de los campesinos
y de los agricultores que ha trastocado en muchos casos el poderío y la violencia de los
terratenientes en el campo. La reunión es buscando la organización de todos los familiares y la
184
sensibilización de la opinión nacional y de los organismos del estado, para que se haga justicia
y no haya impunidad como hasta ahora 227.
Sin poder usar la Guardia Nacional ni a la Policía Estatal --como ocurría en la IV
República-- para desalojar campesinos de las tierras que ocupaban “ilegalmente” para sobrevivir,
los terratenientes empezaron a usar matones profesionales, comúnmente conocidos como
“sicarios” del terror. Después de las amenazas y la intimidación directa, varios dirigentes
sociales revolucionarios que organizaban los comités de tierras fueron asesinados. Los sicarios,
fueron contratados para matar líderes y sindicalistas campesinos que trataban de organizar
nuevos sindicatos campesinos. Estos asesinatos han sido denunciados no sólo en la Asamblea
Nacional, sino también por José Vicente Rangel, abogado, periodista y activista defensor de los
Derechos Humanos, ex ministro de defensa y ex vicepresidente de la República Bolivariana de
Venezuela 228.
Ante esta coyuntura difícil y riesgosa el gobierno bolivariano ha sido muy
prudente; para muchos campesinos que se juegan la vida demasiado negligente. El gobierno ha
usado la vía policial para capturar el sicariato rural y reducir las muertes; y ha limitado su lucha
contra el latifundio a la vía legal.
Más que tocar la estructura agraria existente ha centrado sus esfuerzos en crear un
sistema agrario paralelo, autónomo e integral, mucho más eficiente al que existía en el país en
1999. La estrategia conceptual y prioritaria es conseguir rápidamente la soberanía alimentaria
del país. Para ello el estado trabaja en tres frentes: producción de insumos, fabricación de
alimentos y comercialización de los mismos. En la producción el gobierno está creando polos de
desarrollo agrícola por todo el país, con centros de producción endógena, fundos zamoranos,
cooperativas agrícolas. Estos mecanismos de producción dan nuevas tierras a los campesinos
desplazados y generan empleo repartiendo tierras públicas en su mayoría. La estrategia es
duplicar la producción de insumos para crear autoabastecimiento en el país. En la fabricación el
gobierno está creando sus propios centros de acopio y procesamiento de alimentos básicos; ya
sea comprando, expropiando legalmente o creando nuevos centros industriales.
Otro aspecto importante que tiene que ver con la estrategia de distribución de alimentos
es la capacidad operativa de almacenamiento en las plantas de silos administrados por LA
CORPORACION CASA S.A. De un total inicial de 122.000 TM en mayo 2003, se incrementó
227
“En diputado Darío Vivas, ‘La Ley de Tierras ha provocado que los terratenientes usen el asesinato…’”
www.aporrea.org
228
José Vicente Rangel denuncia abusos a los derechos humanos en un programa de televisión todos los domingos
en la cadena privada Televen.
185
para el primer trimestre 2005 en 734.000 TM. Un incremento del 502%, ello a partir de un
incremento del 283% en menos de dos años. De 6 plantas en mayo 2003 se pasó a 23 plantas en
el primer trimestre de 2005. Esto se debió fundamentalmente a la recuperación de plantas
abandonas o en estado de casi abandono en el cual se encontraban; y otras que se construyeron
recientemente 229.
En materia de comercialización, el gobierno creó Mercal una red de supermercados en
todo el país. Esta cadena de supermercados sirve para vender a precios más baratos los nuevos
insumos y alimentos que produce el estado y otros del sector privado. Además, está creando
nuevas redes adicionales de distribución y comercialización de alimentos en todo el país. Mercal
es una empresa del estado que ya en el 2004, antes de que se aprobara la Ley de Tierras y
Desarrollo Agrario, era la primera red comercial del país con más de 14.164 establecimientos
repartidos en toda la geografía nacional. Su crecimiento ha sido exponencial y el según datos del
propio gobierno para el año 2010 los supermercados Mercal atienden un total de once millones
de clientes diarios. Este sector de comercialización también ha generado empleo.
A tal efecto a través de los Mercaditos Móviles, Mercaditos, Mercal Tipo I, Mercal Tipo
II, Centros de Acopio y Súper Mercal se han generado 7.279 empleos directos y 42.858 empleos
indirectos al cierre del día 6 de junio 2004. La evolución del promedio diario de ventas en 4.399
centros, de mayo 2003 hasta junio 2004 es representativa del avance en la comercialización y
distribución de alimentos a nivel nacional, siendo Mercal la empresa más grande en dicha
actividad 230.
En 2008 se crea una segunda empresa estatal denominada Productora y Distribuidora
Venezolana de Alimentos PDVAL, que tiene relación con PDVESA, la empresa de Petróleo de
Venezuela. El crecimiento de PDVAL ha sido más rápido, aprovechando la experiencia de
Mercal y a principios del 2010 atiende un total diario aproximado de cerca de los 3 millones de
clientes.
Las consecuencias de esta estrategia de soberanía alimentaria son múltiples. El aumento
de sector primario generó y genera mucho empleo en los tres niveles mencionados y además
abarata de forma significativa el costo de los alimentos para el consumidor. Las políticas de
soberanía alimentaria aumentan la oferta, elimina intermediarios entre productor y consumidor y
favorece a los productores. En muchos mercados los propios campesinos venden su propia
229
230
Rafael Febles, “La Misión Mercal génesis del proyecto socialista,” www.aporrea.org (16/6/05)
Ibíd.
186
producción en la calle durante los fines de semana. Para Rafael Febles es muy importante notar
que la cobertura y alcance de la Misión Mercal tiene efectos importantes.
Significa un mayor nivel de acceso a los alimentos; y por ende un mayor aporte
nutricional que reduce las expectativas de mortalidad en niños y niñas de corta edad. Es
garantía de mejor alimentación a ancianos y personas de extrema pobreza. Además es ahorro
que se produce al obtener alimentos a menor costo que en el mercado de establecimientos
privados. Y desde el punto de vista social, significa la preparación física y mental de mejores y
más aptos ciudadanos para el futuro 231.
Por otro lado, este sistema ha dado un golpe sino mortal si moral a la oligarquía y los
oligopolios que controlaban el mercado y abastecimiento de la comida en Venezuela.
Al
incrementar sustancialmente la producción de comida básica que ofrecía el sector privado, los
precios han bajado y ahora los alimentos son más variados, de mejor calidad y más asequibles
para todos. El gobierno ha obligado al sector privado a competir en cantidad y calidad. Incluso,
muchos productos del sector privado ya se venden y distribuyen vía Mercal. En el 2005 más de
doscientas empresas privadas incorporaron sus productos en el sistema estatal 232.
Esto es una
gran victoria ya que el sector privado empieza a participar en el proyecto nacional de soberanía
alimentaria.
Así el gobierno evita que una “crisis” en el campo afecte directamente el
abastecimiento de alimentos en la ciudad e incorpora a la nueva política agraria la economía
informal de alimentos que existía anteriormente. Con la infraestructura de almacenamiento y
distribución los objetivos de incrementar la producción son más fáciles de conseguir, tal como lo
explica Yvan Gil, viceministro de Circuitos Agropecuarios y Agroalimentarios.
Estamos hablando de una siembra del sector vegetal de más de 3 millones de hectáreas
(meta para el bienio 2010-11), una cifra sumamente importante que nos va permitir producir
alrededor de 24 millones de toneladas de alimentos. Esto es una un gran logro tomando en
cuenta que en 1998 se producían 16 millones de toneladas de alimentos. Significaría un
incremento del 50% en diez años de gobierno revolucionario 233.
Ampliando la economía formal agraria se ha generando riqueza, empleo a miles de
venezolanos y mejorado la dieta. A fin de cuentas, es la producción y distribución de comida de
calidad y a precios asequibles el aspecto más importante para erradicar el problema de hambre
que existía en el país. Ya para el año 2009, la Revolución ha duplicado las aéreas cultivables a
231
Ibíd.
Ibíd.
233
Nota de prensa del MPPAT “Gobierno y sector productivo nacional revisan metas del Plan Integral de
Desarrollo Agrícola (PIDA)”. Caracas, 19 de enero, 2010. www.aporrea.org
232
187
2.300.000 hectáreas e incrementado en un cincuenta por ciento la producción y comercialización
de alimentos de la canasta básica. Además, se ha educado a la población financiando la creación
de “huertos familiares” que producen autoabastecimiento de alimentos orgánicos y saludables
básicos para la cesta familiar. Esto se ha hecho tanto en las casas particulares como en muchas
escuelas públicas rurales. Se enseña a los niños y a los jóvenes a cultivar tomates, lechugas, etc.
Se han creado espacios para mercados populares y locales en las plazas principales de cada
ciudad, donde los productores mismos venden sus productos semanalmente a precios más
asequibles que en los supermercados. Además, la cadena nacional de procesadoras de alimentos
o los supermercados Mercal compran directamente las cosechas al agricultor; lo que permite el
acceso a los nuevos productos frescos a cualquier persona que lo desee.
Esta estrategia de soberanía alimentaria es factible obviamente por la riqueza de recursos
del estado venezolano, que ha podido subsidiar al sector campesino y crear un sistema agrario
paralelo en un tiempo récord de cuatro o cinco años. La soberanía alimentaria no ha podido ser
más exitosa ya que está dando importantes resultados. Por un lado, es un aspecto importante de
la lucha contra la pobreza en Venezuela que logró multiplicar y abaratar la comida a todos los
venezolanos. Por el otro, neutralizó ideológica y prácticamente las acciones desestabilizadoras
de la oligarquía terrateniente.
La política agraria generó empleo, riqueza -- mejorando en
cantidad y calidad de la cesta básica alimentaria-- y consumo para millones de venezolanos.
Activó el sector primario que significó un crecimiento significativo de la economía interna con
una tendencia de reducción drástica de la pobreza extrema y de la pobreza rural del país.
Sería interesante estudiar cómo afecta en las elecciones el hecho de que haya comida
buena y barata en todo el país. No me sorprendería ver que la política agraria, haya sido la mejor
arma propagandística de la Revolución Bolivariana hasta la fecha. La mejora de la dieta diaria
del venezolano impacta directamente su calidad de vida, en su salud y tiene efectos físicos y
psicológicos muy importantes. La reducción drástica de los niveles de desnutrición, enfermedad
y pobreza en el país ha generado optimismo y esperanza en muchos sectores de la población que
desconocían tales sentimientos 234.
Los efectos de reducción de la pobreza son innegables desde todo punto de vista si
añadimos que el gobierno bolivariano se ha preocupado de crear comedores en las escuelas
234
Para una visión positiva de la política en Venezuela, ver Gregory Wilpert, Changing Venezuela by Taking
Power: The history of the policies of the Chavez Government. (Verso, 2007)
188
bolivarianas –que garantiza una mejora en la dieta infantil de los niños-- y los comedores
populares --para aquel que carece de recursos.
Con estas medidas adicionales habría que
concluir que la política soberanía alimentaria y agraria bolivariana ha afectado positivamente la
gran mayoría de la población. En materia de alimentación pocos han escapado a alguno de sus
obvios y directos beneficios.
La tasa de mortalidad infantil de los niños menores de un año descendió de 25.6 por
cada mil nacidos vivos en 1990 a 13.7 por cada mil nacidos vivos en 2007. Un reto fundamental
es el reducir la mortalidad neonatal, que representa el 70% de las muertes de menores de un
año 235.
Todo ello sin afectar mayormente a la propiedad privada de una oligarquía terrateniente,
que observa atónita, que las nuevas empresas del estado funcionan y son un competidor serio
generador de riqueza y consumo. En contraste a la IV República, el estado, es ahora un nuevo
agente productivo eficiente y generador --no de corrupción-- sino de riqueza material e
integración social. La Revolución ha elevado el nivel de vida del país y este hecho beneficia a
todos -- incluyendo la propia oligarquía. Después de todo, las políticas de soberanía alimentaria
también obligan al sector agropecuario privado a competir económicamente, mejorar su
eficiencia y diversificar sus mercados.
El nuevo sistema trata de cerrar la puerta a los
especuladores, pero amplia los mercados y aumenta el número de consumidores para los
productores honestos.
Las empresas privadas pueden vender sus productos en las nuevas
empresas estatales y de hecho lo hacen. El oligopolio se rompió y ahora los pequeños y
medianos productores pueden competir en un sistema más libre, donde unos pocos no pueden
manipular los precios de bienes esenciales.
Anteriormente, los oligopolios producían y
comercializaban la comida –exportándola o acaparándola— para mantener los precios altos. La
mejor comida era cara y se exportaba, la de baja calidad se vendía “cara” en el mercado nacional.
Los beneficios se originaban no en el mayor número de ventas sino en la manipulación de
precios. La población que no tenía otras opciones que comer poco y mal, es decir comer y
comprar lo que podía de lo que había. Los ricos nunca tuvieron estrés alimentario. No tenían ni
tienen problemas ahora, siguen comiendo lo mejor, productos nacionales para la exportación o
importados de buena calidad. Antes, los productos de calidad media o baja eran vendidos en el
mercado nacional, incluso a precios inasequibles para la mayoría de la población; que además
carecía de empleo y de poder adquisitivo para adquirirlos en cantidad.
235
Datos de UNICEF Venezuela. www.unidef.org
189
El modelo bolivariano al incrementar las cosechas, distribuir y comercializar más
alimentos, mejorar los sueldos de los trabajadores ha generando más consumo y empleo.
Además, ofrece productos orgánicos de alta calidad a todos por igual a un precio muy asequible.
Por eso tenemos que hablar propiamente de un plan o modelo de soberanía alimentaria público -no tradicional-- innovador e inteligente en el que la política agraria es parte fundamental de la
misma. El modelo garantiza el derecho de subsistencia alimentaria a un número cada vez mayor
de ciudadanos. El propio Presidente Hugo Chávez resume la política en las siguientes palabras:
La única manera de acabar con la pobreza es dándole poder a los pobres. La propiedad
de la tierra en Venezuela —como en la mayor parte del continente— ha estado desde hace años
en manos de terratenientes, politiqueros, hacendados y sicarios; hoy, a través del proceso
revolucionario de la Reforma Agraria, la tierra está siendo entregada a los campesinos. La
tierra, que fue convertida en mercancía y no en un bien común; y sirvió para el enriquecimiento
ilícito de grupos de poder. Ahora empezará a ser utilizada en actividades comunitarias y de
desarrollo rural integral 236.
3.8.
La distribución de tierras y organización de campesinos
Precisamente para derogar la Ley de 1961 hacía falta un nuevo marco legal. La Ley de
Tierras y Desarrollo Agrícola es novedosa en sus objetivos y en sus estrategias al crear un
desarrollo agrícola sustentable y competitivo en el contexto existente de la estructura agraria
venezolana e internacional. ¿Es socialista? o ¿Es capitalista? Eso está por determinar en el
futuro, pero es sin duda una alternativa diferente a las propuestas de la Organización Mundial del
Comercio (OMC). Es claramente contraria a los intereses de las mega-corporaciones agrarias
que tan nefasta historia tienen en América Latina --como la United Fruit Company, Monsanto y
otras—y que fomentaban y fomentan la globalización, la ingeniería genética privada y el
latifundio.
La nueva Ley dificulta las prácticas de un “libre” comercio con la comida que es injusto,
que empobrece, que poluciona y que ataca a las comunidades indígenas de los países más débiles
para favorecer a los que no lo necesitan. Hoy, gracias a Dios y a la Revolución Bolivariana, no
son los inversionistas y accionistas de las multinacionales de Wall Street, Londres y Tokio los
que determinan los precios de la comida en Venezuela. Los propios productores nacionales
236
Alex Contreras Baspineiro “Reforma Agraria en Venezuela y sus logros. Campesinos reciben tierras, maquinaria
y créditos,” 6 de septiembre de 2003. En Morales Galito “La Reforma Agraria y la Ley de Tierras.”
190
dentro de la dinámica del mercado público de alimentos determinan el precio de los productos
básicos.
La política de soberanía alimentaria es revolucionaria; ahora habría que determinar qué
tipo de reforma agraria es la Ley de Tierras y Desarrollo Agrario con respecto a los procesos de
reforma anteriores existentes en el país. No son muchos los datos que tenemos para hacer un
análisis completo del proceso, que está en sus comienzos; sin embargo, la respuesta a esta
pregunta es clara. Lo lógico sería pensar que la Revolución implementaría la reforma más
revolucionaria, que es una reforma agraria directa, tipo Trienio 1946-49. A pesar de la retórica
contra el latifundio, el análisis de las condiciones objetivas y estratégicas de la Ley y de las
políticas del gobierno demuestra que no es así. La Ley de Tierras y Desarrollo Agrario tiene
elementos que indican que es una reforma indirecta. Fundamentalmente, el papel del estado, el
costo económico y la velocidad de la reforma misma así lo determinan.
La nueva distribución de tierras en Venezuela viene acompañada de una serie de
iniciativas que apoyan el éxito de las nuevas empresas campesinas a todos los niveles
imaginables con el apoyo directo del estado. El estado dirige la reforma. Como la reforma
agraria de 1961, el proceso es costoso y relativamente lento. Hay facilidad para obtener créditos,
por ejemplo. El Banco de Desarrollo Económico y Social (BANDES) y del Banco Agrícola de
Venezuela (BAV) creado en el año 2006 cuenta con agencias en las zonas rurales que siguen
expandiendo sus actividades crediticias progresivamente en todo el país. El BAV tiene las tasas
de interés más bajas del mercado bancario, el 4% para campesinos productores individuales y el
3% para las cooperativas.
El FONDAS (Fondo Agrícola Socialista) ha entregado créditos
también por más de 500 millones de bolívares fuertes a cooperativas y proyectos de empresas
socialistas agrarias. Hay créditos asequibles para obtención de maquinarias en FONDAFA, que
las entrega a las cooperativas de campesinos y da asesoría técnica para aprovechar los suelos y
mejorar las temporadas de siembras.
Existe un sistema estatal para organizar a los campesinos.
formación integral para campesinos de todo tipo.
Se organizan cursos de
Cursos para formar cooperativas
(SUNACOOP), para entender el funcionamiento de silos para almacenar las cosechas, para usar
las plantas procesadoras de alimentos; y para participar en la producción y red de distribución de
alimentos CASA. Los nuevos productos se comercializan en mercados libres y en la red de
mercados populares Mercal que funciona en todo el país, y que incluyen productos del sector
191
ganadero y pesquero también 237. Como vemos, el estado y sus ministerios --no los sindicatos
campesinos-- tienen un papel fundamental en la organización, en el asesoramiento y la creación
de las empresas agrarias y el mantenimiento de las mismas.
En un balance general de los efectos de la distribución de tierras a los campesinos según
informaciones del propio MAT (Ministerio de Agricultura y Tierras), en el período 2001-2006,
se han financiado más de 300 mil campesinos con inversiones que superan los 6 billones de
bolívares. Según declara el propio ministro de Agricultura Elías Jaua, recientemente nombrado
vice-presidente de la República (2010):
Venezuela avanzó hacia un modelo de desarrollo agrario integral que hoy se concreta en
los núcleos de desarrollo agrario, en la entrega de más de 3 millones de hectáreas a campesinos
y en el rescate de más de 150 mil hectáreas bajo riego en el país que estaban abandonadas 238.
El sector público creó una planta de ensamblaje de tractores y maquinaria agrícola que ya
entregó más de 5 mil tractores y 2 mil cosechadoras a las nuevas empresas campesinas. Todo
ello en un contexto integral de polos de desarrollo agrario con todo tipo de empresas agrícolas,
ganaderas y pesqueras.
Existe un avance significativo de la agricultura que se efectúa
desarrollando núcleos endógenos, fundos zamoranos y otros tipos de organización cooperativa y
socialista por toda la geografía rural nacional.
La Ley de Tierras entró en vigencia el 11 de noviembre de 2001, y su progreso ha pasado
diversas etapas iníciales que van de la violencia, la controversia legal y la revisión constante
hasta su definitiva promulgación y definición en la Ley de Tierras y Desarrollo Agrícola del 18
de mayo del 2005. Sin embargo, si su avance legal ha sido lento, su alcance en la práctica ha
sido innegable, clave en el éxito del proceso revolucionario. Es verdad, siempre está favorecido
por la renta petrolera que permite este tipo de estrategia. Pero esta misma renta petrolera existía
antes de la Revolución sin que tuviera efectos significativos como ocurre en el presente. Sin
embargo, es el superávit de los recursos petroleros el que permite ejecutar una estrategia agresiva
de reforma de estas características desde el sector público.
237
El ministerio ha creado apoyos importantes para facilitar el trabajo agrario. Entes como el Servicio Autónomo de
Sanidad Agropecuaria (SASA), el Instituto Nacional de Investigaciones Agrícolas (INIA), la Fundación de
Capacitación e Innovación para apoya la Revolución Agraria (CIARA), el Instituto Nacional del Desarrollo Rural
(INDER) y las misiones sociales asisten a las cooperativas y organizaciones campesinas.
238
Lisbeth Barberini, “Ley de Tierras permitió financiar a 300 mil campesinos en cinco años,” Agencia Bolivariana
de Noticias (ABN), 12/12/06
192
El organismo gestor creado por la Ley es el Instituto Nacional de Tierras (INTI). El
Instituto Nacional para el Desarrollo Rural da apoyo tecnológico y profesional a los campesinos.
La Corporación Venezolana de Agricultura crea los mercados y ayuda a la comercialización de
los productos agrícolas. El INTI revisa la situación legal de la tenencia de tierras, promueve la
organización de campesinos y finalmente entrega las cartas agrarias --que es una constancia legal
de propiedad. Aunque se reconoce que las tierras pertenecen finalmente al INTI, éstas pueden
ser adjudicadas permanentemente y de forma hereditaria al campesino o campesina para
explotarla y su adjudicación no puede ser enajenada bajo ningún concepto (art. 12). El INTI y
demás organismos agrarios tienen que actuar conforme a los principios constitucionales de la
seguridad alimentaria, utilidad pública y función social de la tierra; incluyendo el respeto de la
propiedad privada, la promoción y protección de la función social de la producción nacional, y la
protección de la biodiversidad genética (art.22).
El INTI establece un sistema simple, claro, breve -- no burocrático—para la recuperación
y confiscación de tierras ociosas u ocultas que sean de interés para la producción agraria (arts. 35
a 40). El proceso de certificación de fincas productivas (arts. 41 a 48) y mejorables (arts.49 a 58)
es un poco más complicado. La Ley declara ilegal el latifundio y autoriza al INTI a proceder a
la expropiación de los mismos en el art. 69 de la Ley de acuerdo con los mandatos de la propia
Constitución Bolivariana.
De igual manera, se declara de utilidad pública e interés social, a los efectos del
presente Decreto Ley, la eliminación del latifundio como contrario al interés social en el campo,
conforme a lo previsto en el artículo 307 de la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela. En tal sentido, el Instituto Nacional de Tierras procederá a la expropiación de las
tierras privadas que fueren necesarias para la ordenación sustentable de las tierras de vocación
agrícola, para asegurar su potencial agroalimentario, quedando subrogado en todos los
derechos y obligaciones que de conformidad con este Decreto Ley puedan corresponder a la
República.(art.69)
La expropiación tiene que hacerse de acuerdo a la Ley.
La expropiación de los
latifundios tiene un procedimiento amistoso o coercitivo; es claro y simple y se establece en los
artículos 71 al 81 de la Ley.
Las expropiaciones se hacen con los estudios previos
correspondientes y hechos por el Instituto Nacional de Tierras y la Oficina de Planimetría para
conocer las dimensiones de los terrenos confiscados así como para establecer la calidad de la
tierra y clasificación de las mismas.
Las expropiaciones se hacen con las debidas
indemnizaciones a los ex propietarios de las tierras y siempre con apego a la ley. El presidente
193
del INTI, Eliézer Otaiza, explicó que ninguna documentación de propiedad que date de una fecha
anterior a la firma de la Independencia podrá ser aceptada como legítima por razones obvias.
No se reconoce ningún tipo de derecho colonial. No se reconoce ningún tipo de
documento desde el punto de vista legal, que no haya sido pasado por las formalidades
establecidas en la ley… Sólo podrán ser aceptados aquellos títulos que fueron validados y
certificados por las diferentes normas y leyes establecidas desde la primera República…, la Ley
de Ejidos y Baldíos de 1848, marca la fecha a partir de la cual se hizo el censo y registro de
todas las tierras, con toda la documentación y toda la certificación, que venían de las colonias
para registrarlo ante la República 239.
Varios latifundios han sido ya expropiados. Por ejemplo el hato El Caroní, ubicado en el
estado Barinas fue uno de los afectados por la Ley. Según el ministro del Poder Popular para la
Agricultura y Tierras en ese tiempo, Elías Jaua, la Ley establecía el derecho de recuperar las
tierras que eran de la nación. Si alguien no ha demostrado la propiedad que tiene sobre algunas
tierras, el estado tiene la opción de regularizar la situación; o de rescatar esas tierras para
distribuirlas entre campesinos; o para crear proyectos estratégicos de seguridad y soberanía
agroalimentaria que adelanta el gobierno nacional y regional. Además, la Ley en el artículo 84
faculta al estado para expropiar cualquier finca privada, independientemente de si está
productiva o no; si la considera de utilidad pública y existe una razón excepcional como un
proyecto estratégico para la nación. Asimismo el ministro Jaua puntualizó: “si se demuestra que
la propiedad es privada se pagaría el valor de las tierras a sus dueños; y si no se demuestra la
propiedad no podemos pagar por algo que es de la nación” 240. Previamente, en el año 2005 se
recalificaron tierras de varios hatos latifundistas muy conocidos en el país. El Instituto Nacional
de Tierras (INTI), en su directorio número 4.805 recalificó un total de 110 mil hectáreas
declaradas ociosas y pertenecían a los hatos Piñero, El Charcote (Agropecuaria Agroflora),
Borges y la Hacienda Sanz 241.
Un aspecto importante y significativo es el cualitativo; el INTI y la Ley favorecen en
particular el cooperativismo y la empresa socialista. Las unidades base para la producción
agrícola ayuda a los grupos colectivos, tal como lo afirma la Ley de Tierras y Desarrollo Agrario.
239
En “Eliézer Otaiza: No son válidos títulos de la colonia INTI declara más tierras ociosas y protege las comuneras
ancestrales,” Prensa INTI, 14/05/05
240
Más sobre el caso “Ministro Elías Jaua: Ley de Tierras justifica intervención de hato El Caroní,” Prensa MPPAT,
13/03/09 (www.aporrea.org)
241
Ver, “Declaradas tierras ociosas y de la Nación hatos: Piñero y El Charcote,” Por: Prensa Inti, 12/03/05
(www.aporrea.org)
194
Las organizaciones colectivas económicas para la producción agraria, se establecerán
teniendo como base los principios de mutua cooperación y solidaridad, privilegiando el sistema
cooperativo, colectivo o comunitario. En tal sentido, se estructurará el fundo colectivo mediante
la organización y destinación de bienes productivos, la organización de personas para el trabajo
colectivo y el desarrollo del poder autogestionario de los empresarios colectivos. (art.4)
Las actividades agrarias de mecanización, recolección, transporte, transformación y
mercadeo de productos agrarios, se establecerán en forma autogestionaria y cogestionaría a
través de organizaciones cooperativas o colectivas. (art.5)
Para acelerar el proceso de entrega de tierras, el Gobierno Bolivariano inició en febrero
del 2003, el llamado “Plan Ezequiel Zamora.” La primera entrega fue de 2.300 títulos de
adjudicación, activando 29 fundos zamoranos (colectivos e individuales), 40 conucos y
certificando 51 fincas productivas. Esto benefició a 12.300 campesinos y campesinas que ahora
utilizan legalmente 72.470 hectáreas productivas. Este plan o Misión Zamora, como también se
le conoce (decreto presidencial 3.408), da cumplimiento al artículo 307 de la Constitución y de
acuerdo a los objetivos de la Ley de Tierras y Desarrollo Agrario buscando alcanzar la igualdad
y equidad social en las zonas rurales del país. Ezequiel Zamora (1817-1860) es una figura
histórica venezolana que representa la lucha por la tierra, la igualdad social y los derechos de los
más humildes --es un líder histórico de las características y el carisma que tuvo y tiene Emiliano
Zapata en México.
El plan Zamora ha ido avanzando en su primera fase y ha logrado entregar más de un
millón de hectáreas, beneficiando a más de cuarenta mil familias con la entrega de 31.437 cartas
agrarias. Además suministra acceso a maquinaria agrícola de todo tipo y cientos de millones de
bolívares en créditos y asistencia profesional agraria para las diversas organizaciones de
producción existentes, ya sean conucos, fincas o fundos. Los fundos zamoranos – creados por la
Revolución-
incluyen en su modelo una vivienda dotada de energía eléctrica con varias
hectáreas cultivables y vías de penetración.
La segunda etapa del Plan Zamora, ya iniciada,
entregará dos millones de hectáreas más a otras muchas familias rurales en toda la geografía
nacional.
Las organizaciones campesinas, que formaban parte de la antigua Federación
Campesina de Venezuela, ahora se agrupan en la Coordinadora Ezequiel Zamora donde
participan más de 22 movimientos campesinos, pueblos indígenas y organizaciones de pequeños
productores en una estructura horizontal, participativa y democrática.
195
3.9.
Conclusión
El primer componente de la teoría de Henry Shue sobre los derechos de subsistencia es el
derecho a la alimentación, simplemente por sentido común; y deben garantizarse socialmente
para todos sin distinción. Simplemente la amenaza del hambre es tan seria como la violencia
física y sus efectos son tan serios como cualquier agresión ya que impacta directamente la
capacidad y la salud mental y física de las personas 242. En Venezuela esto significa la reducción
radical de los altos índices de pobreza e indigencia que han existido históricamente en el país.
Por otro lado, no puede existir un sistema democrático verdadero si existe una desigualdad
extrema entre ricos y pobres como la que existía en Venezuela al final de la IV República y
todavía existe en la actualidad. La nueva Ley de Tierras y Desarrollo Agrario es sumamente
importante porque establece las bases estructurales del derecho de alimentación para todos los
venezolanos. Sus beneficios son multiples desde el punto de vista de los derechos humanos.
Esta Ley y política agraria revolucionaria sería clasificada por el CIDA como una
reforma agraria “híbrida” con mecanismos típicos de una reforma indirecta pero con los
objetivos claros de una reforma directa. Es un proceso complejo --a largo plazo-- donde el sector
público y el estado tienen un papel fundamental.
El proceso necesita generar una clase
campesina creciente en su número y con varios niveles de organización. El objetivo prioritario
es conseguir la soberanía alimentaria del país repartiendo tierras y organizando empresas y
sindicatos campesinos de varios tipos. Genera comida, trabajo y participación democrática.
Explicamos que tiene un carácter y dimensión muy diferente –opuesta-- a la que hizo la
Reforma Agraria de 1961. Pero, tampoco es –al menos hasta el momento-- una reforma directa
liderada por campesinos ocupando tierras con un gobierno que legaliza las ocupaciones, como
ocurrió durante el Trienio (1946-49) cuando Rómulo Gallegos era el Presidente de la República.
Por ahora es el estado el agente de cambio, que va incorporado a los campesinos poco a poco a
un papel de mayor liderazgo. Una clase campesina que va recreando su autoestima, militancia,
instituciones, sindicatos y cooperativas que prácticamente habían sido destruidas con la reforma
de 1961.
La política agraria y la Ley tienen efectos revolucionarios desde el punto de vista
económico y social; ya que ha transformado y están transformado la Venezuela rural y afectado
242
El hambre como la violencia física convierte a la persona en victima e incapaz de proteger sus demás derechos
humanos. Shue, Basic Rights, 29-30
196
positivamente y directamente las vidas de millones de personas.
Desde el punto de vista
económico cambia estructuralmente el papel del sector primario en la economía, que hasta el año
2001 era un papel muy secundario. Ahora, la agricultura, la ganadería y la pesca convierten al
sector en un factor de crecimiento interno muy importante en la economía nacional. El sector se
industrializa y genera empleo a millones de personas a los que incorpora a la economía formal; y
previsiblemente revirtiendo la migración campo ciudad.
Obviamente, está transformando
estructuralmente la economía al incrementar el consumo y diversificar la producción de
alimentos en todo el país. Socialmente, transformara la estructura agraria creando una nueva
clase social protagonista: la campesina.
Transforma la estructura rural dominante, no vía
expropiación –aunque limita significativamente la creación de nuevos latifundios ya que obliga a
estos a producir y competir con una economía popular-- donde las prioridades nacionales
sobrepasan las de una economía de exportación. Se expropian prioritariamente las tierras fértiles
no trabajadas y se genera competitividad y presión campesina alrededor del latifundio. Las
expropiaciones son legales y se paga a los propietarios de las tierras el valor real de las mismas.
Existe un énfasis en el desarrollo de cooperativas agrarias, ahora con una producción
dirigida a las empresas estatales que rompe el monopolio del un sector privado, que hasta ahora
controlaba a su antojo el mercado de la comida. Las empresas públicas también comercializan
sus productos en los mercados estatales. En pocas palabras, se acaba con el oligopolio de forma
indirecta pero efectiva, al menos hasta ahora. Es una estrategia a largo plazo, que busca que el
latifundista se canse de competir con el estado; y finalmente venda sus tierras ya que no obtiene
de ellas los beneficios desproporcionados que conseguía en el pasado.
Los resultados de la nueva política de producción agraria son ya palpables y
complementados con medidas adicionales para acabar con la pobreza en Venezuela. Las nuevas
bases están establecidas y se produce más. La alimentación ha mejorado sensiblemente el estado
nutricional de los venezolanos. Según datos de La Fundación para el Crecimiento y Desarrollo
Social, FUNSACREDESA, el 24% de los venezolanos tenía un déficit de peso y talla en 1987.
En el año 2009, el déficit de peso se ha reducido al 7% y de la talla según edad a sólo el 2% de la
población. Hoy día, el 94% de los venezolanos tiene la talla normal que corresponde con una
alimentación adecuada a largo plazo 243. Es importante destacar que para aquellos que todavía
243
Datos de FUNDACREDESA en artículo “Revolución Bolivariana ha mejorado el estado nutricional de los
venezolanos.” En www.vtv.gov.ve/noticias-nacionales; 18 de marzo 2010.
197
están marginados y sufren hambre, el gobierno ha abierto paulatinamente un total de 6.000 casas
de alimentación gratuita en todo el país. Estas casas operan de lunes a sábado y dan de comer a
900.000 venezolanos que por indigencia o motivos de desempleo no tenían donde alimentarse
diariamente. Estas casas están abastecidas por el nuevo sistema de mercados del sector público.
En estos centros no sólo se da de comer a los necesitados sino que se organiza a las personas
desempleadas en unidades productivas para salir de la pobreza en la que se encuentran. La
inversión anual de este servicio es de 1.200 millones de bolívares fuertes 244.
La pobreza extrema no sólo cuenta con la ayuda en los comedores populares sino con
otras dos misiones adicionales. Primero, la Misión Negra Hipólita se encarga de ayudar a los
indigentes en las calles, dándoles un lugar donde comer, lavarse y dormir. En los centros
móviles de la Misión que se instalan en los parques públicos de Caracas y otras ciudades, los
indigentes que lo desean reciben tratamiento médico y psicológico. Esta Misión, adonde los
indigentes acuden voluntariamente, no ha conseguido que la indigencia desaparezca totalmente
pero si la han reducido. La Misión Madres del Barrio, asimismo trata de ayudar a las familias
víctimas de la pobreza extrema en los barrios pobres de la ciudad. Estos centros proveen ayuda
de todo tipo a las familias que se encuentran en la calle, y que antes estaban condenados a dormir
en el suelo y a mendigar para poder alimentarse.
En conclusión la eliminación de la pobreza, como la peor forma de violencia, es esencial
para crear un modelo de estado de subsistencia y para que tanto las propuestas de cambio cultural
e intercultural que promovía Gandhi y defienden todas las filosofías de la Liberación en América
Latina y los planteamientos de Henry Shue para que los derechos humanos puedan avanzar. En
esta materia la Revolución Bolivariana ofrece una fórmula de desarrollo humano adecuada con
su historia, necesidades y recursos. Pero como bien lo señalan estos estudios, estas medidas
contra la pobreza no son irreversibles todavía y necesitan tiempo y esfuerzo continuo para
conseguir y avanzar en los objetivos deseados.
244
Ibíd.
198
Capítulo IV.
Desarrollo del segundo derecho de subsistencia: la educación obligatoria y gratuita.
Conocido es el hecho de que desde que en 1842 Juan Bautista Alberdi formulara desde
Montevideo la necesidad de constituir y articular una “filosofía americana” a partir de las
necesidades reales de nuestros pueblos y para la solución de los problemas que afrontan
nuestras naciones, y de que desde que Leopoldo Zea, a cien años de distancia, retomara la
propuesta de Alberdi para concretizarla en un proyecto filosófico de envergadura continental
centrado en la idea básica de hacer filosofía desde la circunstancia y la historia americana, el
concepto de “filosofía latinoamericana’ ha sido objeto de controvertidos debates que han
marcado, y marcan todavía, buena parte de la producción filosófica en América Latina 245.
Para Fornet-Betancourt, Enrique Dussel y otros muchos filósofos latinoamericanos este
desafío es la razón de ser de la filosofía de la Liberación. Si nos enfocamos en campo religioso
entonces tenemos que referirnos a un desafío similar que confronta la Teología de la Liberación y el
diálogo interreligioso. Asimismo, si nos centramos en la educación terminamos con la Pedagogía
del Oprimido de Paulo Freire y otras propuestas similares que buscan una respuesta que se adapte
a “las necesidades de nuestros pueblos y que sirva para la solución de los problemas que
afrontamos”. Después de la alimentación, el segundo componente lógico de la teoría de los
derechos básicos de subsistencia es la educación. Para Henry Shue la alimentación, la educación y
la salud son la puerta para el disfrute del todos los derechos políticos, económicos y culturales
fundamentales de la DUDH. La libertad , la democracia, la expresión personal, la participación
social requiere minimos de alimentación, educación y salud colectiva que el estado deben
garantizarla ante cualquier amenaza existente.
La educación de todos para definir y crear un proyecto común es prioridad fundamental
para la integración social y para alcanzar respuestas concretas a los problemas sociales que
confrontamos. La Revolución Bolivariana ha asumido el desafio educativo haciendo un esfuerzo
radical y significativo. Además, la democracia por definición --no es simplemente votar en las
elecciones--
requiere una ciudadanía educada capaz de tomar decisiones inteligentes, crear
soluciones y participar en el desarrollo político, económico y social de la comunidad. El progreso
en educación durante la IV República fue insuficiente para fortalecer y vigorizar su propio sistema
político.
El sistema educativo tenía las mismas carencias y desequilibrios que tenían la
alimentación y la sanidad en el país. La educación durante la última década de los años 90 se
245
Fornet-Betancourt, Interculturalidad y Globalizacion, 59.
199
estancó, haciendo más obvio las diferencias y los privilegios entre una minoría rica educada y una
mayoría pobre y analfabeta. El restringido acceso a la educación a todos los niveles acentuaba las
diferencias de clase en el país, perjudicando incluso a la clase media. La diferencia en el acceso,
opciones de estudio y la calidad de la educación privada y pública siguió aumentando a todos los
niveles. Es más, la educación universitaria pública y privada continuó siendo el privilegio para las
familias de las clases altas que vivían en las grandes ciudades. Decenas de miles de jóvenes ni
tenían cupo ni dinero, querían pero no podían ir a la universidad.
Ante esta coyuntura, la Revolución Bolivariana ha iniciado un proceso masivo de educación
pública, gratuita, que va desde la eliminación del analfabetismo a la masificación de la educación
media y universitaria. Podríamos decir que en diez años el cambio ha sido radical. Hoy en
Venezuela, él que no estudia no es porque no puede, es porque no quiere. Como veremos en esta
sección, ni el horario de trabajo ni la falta de recursos económicos son disculpas para no estudiar y
mejorarse. Hay oportunidades de educación básica, media y superior gratuita en todo el país. La
educación universitaria ya no es un privilegio de los ricos; existen oportunidades para ir a la
universidad en casi todos los centros urbanos. Ni que decir tiene que el pueblo y los jóvenes en
particular,
están aprovechando estas oportunidades para mejorar su preparación personal y
profesional. Es fácil entender las razones por las cuales la democracia venezolana ha invertido en
educación, pero hay que preguntarse también: ¿Qué tipo de educación promueve la Revolución?
La dificultad de hacer una síntesis de las influencias ideológicas en la Revolución
Bolivariana en materia de educación radica en su pluralidad y diversidad sincrética. Todas ellas sin
embargo son válidas, porque aunque tengan un origen tan variado, como las ideas de intelectuales
tan dispares como Simón Rodríguez, José Martí, Ernesto Che Guevara, Karl Marx o el propio
Simón Bolívar, todos tienen algo muy importante en común. Todas esas fuentes intelectuales
buscan un objetivo claro que bien se resume las palabras de Bolívar (15-II-1819): “Renovemos en el
mundo la idea de un pueblo que no se contenta con ser libre y fuerte, sino que quiere ser virtuoso”.
Esta búsqueda de la virtud es fundamental a todos los pensamientos anticolonialistas; y no
es otra que la búsqueda del bien común y la justicia social. Es por tanto, la educación crítica el
instrumento designado para determinar el bien común y encontrar la justicia en la Revolución
Bolivariana. Se trata de liberar al oprimido o excluido (individuo/ pueblo/ nación) de la injusticia en
el marco histórico-geográfico en el que aparece, que es la América Latina. Para determinar juntos
en diálogo el qué hacer diario. Este concepto de justicia sin embargo no es sólo de América Latina,
200
es universal y concuerdan con los objetivos que señala la DUDH. Son los principios que defendía
Bolívar en Venezuela, Washington en EE UU, Gandhi en la India, Martí en Cuba, Farabundo Martí
en El Salvador y muchos otros más. Gandhi utilizó el pensamiento crítico para la liberación de la
India primero del colonialismo inglés; y después –incompleto por su muerte-- en su plan para
combatir la guerra de religiones y abolir las castas e incluir a los “intocables” o “excluidos” en la
propia sociedad hindú. En la actualidad, esta lucha por una pedagogía crítica se refleja ampliamente
en la filosofía de la ONU para la educación mundial y en los programas y objetivos de la
UNESCO. Todos concuerdan en la importancia fundamental de la educación para el desarrollo
humano y de la humanidad en todos sus aspectos.
En materia de derechos humanos es necesaria la educación crítica también. Una educación
para luchar contra la intimidación, el colonialismo y la injusticia en la realidad que se nos presenta
día a día. Tal como se señala en el marco teórico hay que crear nuevos marcos legales, usar
referencias históricas liberadoras, escoger estrategias participativas adecuadas que rechazan la
violencia e invitan a todos a la práctica de una ética superior. Una ética, evidente en sí misma,
que expone la virtud de la que hablaba Bolívar y que supera las injusticias en las que vivimos.
La educación crítica no es simplemente saber leer o escribir; es saber pensar, saber transformar la
realidad y la cultura a nuestro alrededor. Es construir un mundo mejor.
En América Latina este no es un proyecto cultural nuevo, nace con las denuncias los
indígenas, de los esclavos, de Bartolomé de Las Casas, continúa con Simón Rodríguez y José Martí
para tener una relación histórica directa con las filosofías de la Liberación que emergen en el mismo
contexto político cultural de los años 60. Todas explican su razón de ser en la lucha por encontrar
caminos de liberación de la injusticia social en América Latina. Aunque es un poco pronto para
hacerlo, podría aventurar que la Revolución Bolivariana y la rápida expansión de algunas de sus
premisas por varios países de América tienen mucho que ver con las semillas que plantaron los
movimientos revolucionarios durante décadas pasadas. Esto incluye no sólo la generosidad y el
compromiso humanitario de la revolución cubana, sino también la contribución creativa de la
teología y la filosofía de la liberación, y por supuesto la pedagogía liberadora del maestro y filósofo
Paulo Freire.
Las raíces de la revolución contra la opresión son tan profundas como las raíces del árbol
sagrado de los mayas: la ceiba. Tiene raíces generacionales, históricas y de larga trayectoria. Son
las luchas de América Latina de millones de indígenas, esclavos y desposeídos. Son las luchas de
201
los indígenas por la identidad, de Bartolomé de las Casas contra la tortura, de Simón Bolívar, San
Martín e Hidalgo por la independencia, de José Martí por la libertad y unidad del continente, de
Pancho Villa y Emiliano Zapata por la tierra, de César Augusto Sandino y Farabundo Martí por la
dignidad, de Salvador Allende, Ernesto “Che” Guevara por el socialismo, y de todos aquellos que
sacrificaron sus vidas en la lucha contra las diferentes formas de injusticia. Sin olvidar ni mucho
menos los que murieron en la lucha por la paz --tratando de detener la espiral de la violencia
militar, política y económica-- como el obispo de la Paz Arnulfo Romero, y otros muchos de sus
seguidores como Ignacio Ellacuría, Segundo Montes y tantos otros conocidos y desconocidos
luchadores contra la injusticia de la violencia misma.
La filosofía política anti-colonialista más reciente tiene mucho que ver con el análisis de
sociología política que Immanuel Wallerstein hizo sobre el desarrollo del sistema mercantil
capitalista en Europa. De su aplicación e interpretación se dedujo después de estudiar la literatura
política latinoamericana, las “famosas” Teorías de la Dependencia246. En este estudio del origen del
capitalismo mercantil moderno, Wallerstein asigna el rol de periferia capitalista a América Latina en
el sistema mundial
--confirmado posteriormente con el fracaso de las políticas neoliberales
aplicadas en los años 80 y 90. En pocas palabras, Wallerstein divide el sistema capitalista mundial
jerárquicamente en tres sectores:
-(a) el centro --naciones que controlan la economía mundial y tienen surplus económico;
-(b) la semi-periferia --naciones que dependen del centro pero tienen un desarrollo político,
económico y tecnológico intermedio;
-y (c) la periferia --naciones que dependen totalmente del centro y tienen nivel de desarrollo
económico, político y tecnológico deficiente; donde persisten incluso métodos de trabajo precapitalistas.
América Latina está en su totalidad en la periferia y pocas naciones se acercan a la semiperiferia del sistema ya sea por su desarrollo, tamaño o cercanía al centro que son los Estados
Unidos de América. En resumen, según el sistema de Wallerstein el centro del sistema hemisférico
son los Estados Unidos; y Latinoamérica cumple con una labor ya histórica de periferia colonizada,
246
El atractivo del análisis de Immanuel Wallerstein del sistema mundial es precisamente su simplicidad teórica.
Un marco teórico simple de esta naturaleza permite ver el bosque con claridad meridiana. Obviamente, el marco
global no responde al análisis particular de muchos de sus detalles particulares sino a lineamientos generales. Sin
embargo no deja de ser útil y valioso por ello. El merito teórico de Wallerstein con su simplicidad genial es lo que
explica, no su perfección total. Ver Immanuel Wallerstein, The Modern World-System I-II. (Orlando: Academic
Press, 1974)
202
de “patio trasero,” sirviendo como proveedor de materias primas y mano de obra barata. Es la
explicación económica de su contraparte política de la Doctrina Monroe y la “Seguridad Nacional”
ejercida desde el centro a su periferia.
Por lo tanto, la situación geopolítica es clara, América
Latina carece de identidad propia y depende en todo o casi todo --en lo económico y lo político—
de los intereses del gigante del norte.
Estas teorías pusieron al descubierto las falacias de las previas teorías de la modernización
de los años 50, del desarrollo progresivo de Rostow en su famoso libro: The Stages of Economic
Growth. El politólogo estadounidense argumentaba que “el desarrollo” era crecimiento natural de
los estados y posible para cualquiera que siguiera las etapas de crecimiento político-económico
normales. Eventualmente --todo era cuestión de tiempo y madurez-- todos los países de América
Latina alcanzarían la meta propuesta de desarrollarse en naciones poderosas e independientes como
lo hizo la estadounidense. Básicamente, se pasó de un extremo al otro, del optimismo ingenuo de
Rostow de los años 50, a los planteamientos pesimistas y realistas de Wallerstein. Con ellos, el Río
Bravo se convertía en frontera de la periferia en el continente americano, condenado a una
dependencia y marginalidad sin esperanza a todos los países al sur de dicha frontera.
La premisa fundamental de no tener que ser periferia marginal internacional, primero la
afirma la revolución cubana saliéndose del sistema hemisférico capitalista en los años sesenta; y
después paulatinamente Mercosur, la Revolución Bolivariana, Alba y Unasur. Se trata de crear un
nuevo “centro” y romper con el papel de “periferia neocolonial;” que se le quiere asignar a la
América Latina y al latinoamericano en el orden internacional de la economía mundial del
neoliberalismo y la globalización. Muchos piensan que sólo una revolución del pensamiento
crítico revolucionario puede cambiar la realidad; es decir destronar al centro existente y crear un
centro propio nuevo, propiamente latinoamericano. De ahí viene el eslogan bolivariano y de la
cadena de televisión Telesur: “nuestro norte es el sur.” El sur, no es sur geográfico de América, es
el sur político. Va desde el Río Bravo a la Patagonia y es lo que se considera en el sistema mundial,
la periferia hemisférica247. Es decir el “Sur” tal como lo define el “Norte”, los Estados Unidos.
Algunos mexicanos y centroamericanos se confunden pensando que ahora el sur es Argentina o
Brasil. No el “Sur” desde el punto de vista del Norte lo delinea históricamente la Doctrina Monroe
y militarmente la Seguridad Hemisférica de los EE UU.
247
Algunos compañeros mexicanos han malinterpretado el eslogan, pensando que el sur excluye a México, nada más
lejos de la realidad; México ha sido líder y vanguardia ejemplar en la lucha contra el imperialismo. Su experiencia
no puede ser más valiosa e importante para transformar América Latina de periferia a centro soberano.
203
La respuesta intelectual latinoamericana a las “mentiras” o “ingenuidades” de la teoría de la
modernización posible para todos, no se hizo esperar. En la década de los sesenta, las teorías de la
dependencia de Theothonio Dos Santos, Enzo Falleto, Fernando Henrique Cardozo248, Celso
Furtado y otros, básicamente explicaban que la naturaleza de la dominación norteamericana y
europea de América Latina y planteaban algunas fórmulas para superarla. Estas teorías no han
pasado de moda, ya que la situación neo-colonialista persiste. Al margen de la alternativa cubana,
dificultada por la Guerra Fría, emergieron varias corrientes de gran impacto pedagógico. Entre ellas
destaca la Teología de la Liberación dentro del marco católico y religioso; la Pedagogía del
Oprimido dentro del marco cultural secular; y finalmente la Filosofía de la Liberación que trata de
generar una ética nueva propia y crítica; que aglutine las diferentes corrientes existentes en el
continente.
Todos buscando un futuro más prometedor que cambiara el determinismo que
condenaba a América Latina en el sistema capitalista internacional a la servidumbre permanente.
Aunque nunca existió unanimidad en las soluciones propuestas había ciertos presupuestos y
lineamientos claros y comunes. Estos interesantes paralelismos ideológicos se manifiestan ahora
entre este movimiento intelectual cultural revolucionario y la propia Revolución Bolivariana que
nuevamente busca romper con la dependencia ¿Cuáles son estos tres presupuestos comunes
básicos?
Un primer presupuesto de la teoría de la dependencia era que las soluciones no vendrían de
fuera --mucho menos del centro dominante-- sino que los latinoamericanos necesitaban recrear su
propio destino249. Así como Europa dividida en naciones-estado tuvo que reinventarse a sí misma y
crear la Unión Europea para poder competir con los EE UU y China; el sistema internacional
requiere que América Latina se encuentre a sí misma, se centre y se auto conozca para romper su
estatus periférico en el sistema mundial. La Revolución Bolivariana plantea hoy la necesidad de
crear un centro cultural, social y político propio para competir de igual a igual en el mundo; y dejar
de ser periferia de otras culturas. El ALBA no deja de ser un intento de cambiar el destino asignado
a América Latina en el sistema internacional. La unión solidaria de países en desarrollo es la forma
que confrontar las tesis “imperialistas” y capitalistas de la doctrina Monroe y la presente presión de
248
Cardozo llegó a finales de los años 90 a la presidencia de Brasil y renegó de sus escritos sobre la dependencia de
Latinoamérica para apoyar políticas de carácter neo-liberal. Cuándo le preguntaban sobres sus escritos, él los
desechaba como “errores de juventud.”
249
De ahí la necesidad de una nueva Constitución que cambiara los conceptos básicos de democracia delegetiva
existentes. La nueva Constitución Bolivariana de Venezuela (24 de marzo de 2000) define la democracia como
participativa y protagónica, una definición muy freiriana.
204
globalización neoliberal que trata de solidificar un sistema mundial de centros ricos y todopoderosos
y una periferia cada vez más pobre y abandonada250.
En los sesenta algunos querían una salida todavía más radical --la cubana-- es decir salir del
sistema capitalista totalmente y formar parte de su alternativa: el sistema socialista-comunista
soviético251 existente en ese momento. Los movimientos guerrilleros en Venezuela, Argentina,
Colombia, Perú, y en Centro América décadas después, trataron con poco éxito de cambiar el
modelo dependiente de América Latina por la vía militar. Era la vía cubano-soviética que impuso el
contexto internacional de la Guerra Fría. Obviamente, la desaparición del sistema soviético deja tal
posibilidad ni siquiera como alternativa viable para la propia Cuba que necesita renovarse para no
morir. Sin embargo, las experiencias económico-sociales fuera del sistema capitalista vividas en
Cuba son referencia fundamentales para el éxito de los cambios filosóficos y culturales necesarios
que promueve la Revolución Bolivariana. Esto se ve particularmente en los programas para
erradicar el analfabetismo y en el sistema de salud pública adoptados en el país, donde la influencia
positiva de la experiencia cubana es innegable.
Es importante reconocer que contrario a estas propuestas anti-imperialistas; la derecha
tradicional propugnaba y todavía propugna “el sálvese quien pueda.” Es decir que cada país se
adapte al sistema capitalista internacional con los Estados Unidos como centro; sacando provecho
de sus propios recursos y de su situación geopolítica particular con respecto al norte. Es decir que
los países con mayores recursos humanos y de materias primas (México, Argentina y Brasil) se
conviertan en semi-periferia y aquellos más pobres se queden en su miseria. Los más extremistas
ideólogos de la derecha propondrían unirse directamente al centro, buscando un estatus similar –
estado asociado-- al de Puerto Rico252 o establecer tratados de libre comercio con el norte buscando
alguna conexión sanguínea con el centro. Algunos, incluyen experiencias como la “dolarización”
250
Planteamiento que retomaba las tesis bolivarianas de unidad continental; que defendieron a su vez Haya de la
Torre, César Augusto Sandino y otros líderes de centro e izquierda en la década de los años 20.
251
Planteamiento que emerge después de la segunda guerra mundial y parece ofrecer una alternativa al capitalismo
en ese momento histórico; el problema radica en la situación geopolítica que el continente tiene. Estados Unidos no
quiere bajo ninguna circunstancia tener aliados de su enemigo la Unión Soviética en “su” hemisferio. “No más
Cubas en América.”
252
Puerto Rico es un estado asociado, que goza de un estatus especial con los Estados Unidos. Este estatus aunque
tiene ciertas ventajas económicas y sociales está definido por la propia ONU como una forma moderna de
colonialismo. El centro político de decisión es Washington y no San Juan.
205
de la moneda nacional del país; es decir poniendo el control financiero nacional directamente en las
manos del gobierno de Washington y de Wall Street 253.
Comoquiera que fuere las tesis de inmersión, reforma parcial o salida de la periferia del
sistema requieren serio análisis crítico. No cabe duda que existe la posibilidad de una verdadera
revolución autóctona y latinoamericanista --en contra de la adaptación o sumisión al sistema que
pretendían y pretenden la mayoría de las élites oligárquicas nacionales de los países
latinoamericanos. La “norteamericanización” es confortable y beneficiosa para mantener el “estatus
quo” del Sur propuesto desde el Norte. Estos planteamientos explican en gran parte los argumentos
internacionalistas económico-políticos, sociales y pedagógicos existentes en la Revolución
Bolivariana y explica el por qué genera tanto recelo en EE UU como en Europa. ¿Qué pasaría con
el futuro de África o el Mundo Árabe si América Latina tiene éxito saliéndose de la periferia que el
sistema internacional le ha asignado? En conclusión, las opciones de una liberación obviamente
nunca vendrán ni de EE UU, ni de Europa, ni tampoco de una oligarquía confortable con el estatus
quo. Las soluciones, si las hay, vendrán de la propia experiencia del pueblo de América Latina. La
teoría de la dependencia puntualiza claramente el razonamiento del por qué esto es así y no de otra
manera.
Un segundo presupuesto de la teoría de dependencia, extensión lógica del primero, fue
entender que para competir no bastaba con tener materias primas. El capitalismo competitivo
requeriría de cierta unidad económico-política y desarrollo tecnológico, incluyendo capacidad de
crear corporaciones transnacionales y mercados propios. Asimismo, crear y tener consumidores y
niveles de consumo inexistentes en América Latina. Entonces, sería necesario no sólo crear grandes
empresas mixtas, sino bloques económicos e integraciones políticas a gran escala. Crear bancos y
corporaciones propias –competitivas-- que operando en mercados lo suficientemente grandes serían
efectivas a nivel internacional para competir en el mercado europeo, asiático y norteamericano254.
Es interesante notar que estas ideas no son nuevas, ya las barajaba César Augusto Sandino en sus
253
Con la drástica baja del dólar con respecto al euro y la libra esterlina, los países “dolarizados” no pueden sino
importar sus productos de Estados Unidos. La dolarización elimina cualquier tipo de flexibilidad a la hora de
controlar los efectos de una crisis económica en el propio EE UU. El país está afectado directamente sin ninguna
posibilidad de corregir nada para evitar los problemas que se le presentan.
254
La República Bolivariana busca muy activamente en su política exterior integrarse a MERCOSUR y crear nuevas
formas de integración como el ALBA, etc. La importancia de desarrollar un nuevo concepto de integración basado
en la creación de instituciones propias latinoamericanas con un centro dentro de la propia Latinoamérica y no al
servicio de economías externas.
206
diferentes propuestas económicas en 1928 255. Aquí la revolución Bolivariana utiliza no sólo el
estado --paralizado frecuentemente por la burocracia ministerial-- sino el poder independiente de
PDVSA (Petróleos de Venezuela S.A.) y la Fuerza Armada Bolivariana (FAB). La corporación
venezolana del petróleo implementa muchos programas sociales, económicos y de desarrollo en el
país y de ayuda en Venezuela y en países amigos. Asimismo, la FAB provee organización y
avances tecnológicos para confrontar los desafíos sociales que tiene el país.
La corporación --en el sistema capitalista-- es el instrumento de producción y explotación
económica que busca maximizar el beneficio a cualquier costo; es el “dragón” que devora recursos
naturales y poluciona el medio ambiente, transforma valores y comodifica todo lo que sale a su
paso. Sin embargo, puede transformarse funcionalmente –cambiando sus objetivos de explotación
por los de servicio comunitario --como es el caso de PDVSA — convirtiéndose en un agente e
instrumento de solidaridad y desarrollo.
Es un “dragón” domesticable y sus cualidades y fuerza
pueden convertirse en un agente constructivo; para ello es necesario cambiar sus objetivos egoístas
por otros altruistas y modificar sus métodos de comportamiento. De ahí vienen las iniciativas
venezolanas de Petro Caribe, ALBA y CITGO entre otras. En el aspecto financiero están las
iniciativas del Banco del ALBA y del Sur --con una moneda latinoamericana propia, el Sucre--, que
busca abrir nuevas puertas de intercambio y solidaridad económica diferentes a las que maneja el
Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial. También, la necesidad e insistencia de
Venezuela de entrar a MERCOSUR, con la idea de crear una alianza más estrecha económica y
social con países de tecnología media como Brasil y Argentina. Con estos países espera Venezuela
no sólo acceso a mercados sino a conocimientos; fortaleciendo los sectores económicos como la
petroquímica, agricultura, genética, tecnología, etc. La idea general es simple aunque de compleja
aplicación: América Latina tiene todos los recursos –humanos y materiales-- y produce de todo;
sólo necesita complementarse mutuamente económica y políticamente. La independencia necesita
crear y producir una economía propia, autónoma que compita con la de Europa y la de EE UU.
Obviamente, las élites nacionales se oponen al cambio porque trabajan directamente o
indirectamente para las corporaciones y bancos extranjeros del Norte; que ven tal desarrollo
económico-político como un ataque a sus intereses particulares.
255
Ver, Carlos González Irago, “Política y economías alternativas a la diplomacia de dólar,” en “Patria y Libertad”
The Human Rights Philosophy of Cesar Augusto Sandino. (New York: Civilities Internacional, 1995), 66.
207
Un tercer presupuesto concomitante con los previos, era y es la necesidad de la educación
masiva del pueblo. La educación crítica es imprescindible para romper el yugo neo-colonial y crear
una economía autónoma dinámica y capaz de eventualmente construir una sociedad diferente; y por
qué no, de valores solidarios y socialistas diferentes a los que defiende el sistema mundial
actualmente. Aquí, obviamente las propuestas educativas utilizadas en Cuba; las propuestas de
Paulo Freire; y las que practica la teología de la Liberación en la enseñanza religiosa son parte de la
base cultural e ideológica de la Revolución Bolivariana. Existe una tradición educativa y filosófica
importante que se remonta de las luchas indígenas y anti-esclavistas. Las denuncias de la tortura
hechas por Bartolomé de las Casas, la visión anti-colonialista de pensadores como Simón
Rodríguez, Simón Bolívar, Benito Juárez, José Martí, Che Guevara y otros muchos son su base
ideológica. Podrían definirse como las fuentes ideológicas de fondo y que conforman los diferentes
niveles de la formación político cultural del pueblo. Son “las venas abiertas” de América Latina de
las que habla Eduardo Galeano. Es por eso importante “convertir a la nación en una escuela” prerequisito revolucionario para Cuba que defendía Che Guevara. No hay desarrollo económicopolítico posible sin obviamente erradicar la pobreza e incorporar a las masas marginadas,
mayoritarias, de los habitantes de Venezuela (América Latina) a la participación política y la
democracia. Esta es la premisa bolivariana. No hay ni habrá democracia ni socialismo posible sin
educación crítica256. En este marco histórico-político existen los tres elementos gandhianos que
mencionamos anteriormente: enfrentamiento directo de la injusticia, conocimiento suficiente para
crear alternativas posibles y fortalecimiento de una riquísima tradición liberadora. En este contexto
como bien explica Fornet-Betancourt emerge la necesidad de una liberación irrenunciable del ser
humano. Exactamente los mismos elementos claves de la Pedagogía crítica de Paulo Freire y que
genera estrategias nuevas, autóctonas, que quieren y necesitan cambiar un “estatus quo” neocolonial que quiere imponer la globalización a América Latina. Son también los mismos supuestos
de la propia teoría de los derechos humanos de subsistencia de Henry Shue.
Todos los bolivarianos en Venezuela se preguntan: ¿Cuáles son las claves de la liberación
política? ¿Qué tipo de cambio y revolución democrática se necesita? ¿Cuáles son los elementos
necesarios para superar la injusticia interna y externa en la que vive Venezuela y América Latina?
¿Qué países, partidos, grupos e instituciones llevan la experiencia de la liberación y preparan el
cambio cultural que elimina todos los niveles de opresión y de neocolonialismo que impone la
256
Este foco en la educación que promociona la Revolución Bolivariana no puede ser más freiriano.
208
globalización económica? Las preguntas y las respuestas continúan generándose en círculos
concéntricos que van desde la situación continental de América Latina, a los países particulares,
para llegar hasta las clases sociales, a las comunidades, a las familias, y finalmente a cada persona.
Se involucran aquí todos los sectores vivos: trabajadores, intelectuales, artistas, economistas,
políticos, amas de casa, comunidades indígenas, etc.
Se necesita básicamente redefinir los
elementos más esenciales de la liberación en cada nivel, incluyendo aquellos aspectos filosóficos y
éticos que lo hacen posible. ¿Qué significa realmente ser libre? ¿Cómo alcanzar esa libertad?
En este contexto la Revolución Bolivariana no es nueva, sino otro intento más, el último que
recoge lecciones de los fracasos y contribuciones de los éxitos de las experiencias anteriores. Es
revolucionario porque es un intento por cambiar la cultura y de crear nuevos espacios de liberación
ya sea internacional, nacional, regional, comunal, local, familiar e individual. Los parámetros
abarcan todo el espectro político desde las experiencias políticas latinoamericanas y venezolanas.
Incluye desde el comunismo centralista a la dictadura militar. Cara y cruz de la experiencia
latinoamericana.
Es interesante que por primera vez --al menos en Venezuela-- esta alternativa se produce
por un agotamiento ideológico de la derecha tradicional, de los sectores conservadores que lo
apoyaban y que incluye sectores dentro y fuera de la Iglesia Católica. Este agotamiento ideológico
ha sido aprovechado por la izquierda para plantear sus planes alternativos. Al fin y al cabo, estos
sectores de la derecha son básicamente los únicos que abiertamente se oponen todavía hoy a la
existencia de la Revolución Bolivariana. Propugnan en su lugar, poco, lo mismo de siempre: una
adaptación más a “la oportunidad” de ser “satélites,” en la periferia de los Estados Unidos. Mientras
la derecha ofrece aisladamente un estatus político y económico nacional “preferencial” con EE UU,
la Revolución Bolivariana ofrece la posibilidad de usar los recursos naturales propios e invertir en el
propio país257. En este marco aparecen lo que podrían definirse como el objetivo y las matrices
estratégicas de la praxis liberadora bolivariana; que requiere la educación de todos para la justicia,
libertad y la solidaridad. La que reclamaba Bolívar “renovemos en el mundo la idea de un pueblo
que no se contenta con ser libre y fuerte, sino que quiere ser virtuoso.”
257
El diálogo democrático en Venezuela ha cambiado, pocos se atreven a cuestionar las ideas y los programas
Bolivarianos. Se puede criticar la gestión o incluso la dirección de la Revolución pero sólo la” ultra derecha” quiere
volver al pasado de la IV República adeco-copeyana. Hay una nueva cultura política, la corriente opositora
“Chavismo sin Chávez” tiene precisamente esta idea. Trata de buscar el recambio del líder --Hugo Chávez-siguiendo las líneas políticas revolucionarias creadas por el ahora PSUV y el Presidente Hugo Chávez Frías.
209
4. Nuevo marco constitucional en Venezuela y su efecto en la educación
Venezuela se constituye en un Estado democrático y social de Derecho y de Justicia, que
propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico y de su actuación, la vida, la
libertad, la justicia, la solidaridad, la democracia, la responsabilidad social y en general, la
preeminencia de los derechos humanos, la ética y el pluralismo político. (art.2 Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela, 24 de marzo, 2000)
A nivel nacional, el primer paso fue crear un nuevo marco constitucional que definía la
democracia y establecía una ruptura teórica práctica con la democracia delegativa dominante en el
pasado258. Pero lo más interesante es que la Constitución Bolivariana de la V República tiene un
carácter programático que ofrece un camino bien definido para la integración ciudadana, una
integración imposible sin un pueblo educado y crítico.
El carácter programático tendrá que
rehacerse y redefinirse una vez que se logren los objetivos integradores iniciales de todos aquellos
sectores que habían sido marginados en el pasado para alcanzar otros nuevos. Esto no es una tarea
fácil ni mucho menos. La participación del pueblo en la formación, ejecución y control de la
gestión pública requiere un pueblo solidario. El pueblo es el agente necesario, para lograr el
completo desarrollo, y proveer a todos, individuos y comunidades con los derechos y recursos
humanos que necesita el país. Es obligación del estado y deber de la sociedad la generación de las
condiciones más favorables para la práctica democrática, cuyo requisito fundamental es facilitar el
acceso a la educación a todos los ciudadanos. (Art. 62 Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela).
Es importante decir que el estado tiene la obligación constitucional de educar a los niños y
que la Revolución Bolivariana ha conseguido no sólo que el 98% de los niños en edad escolar
tengan acceso al sistema educativo y sino que el 82,4% de los niños inscritos alcancen ahora el
258
Para una definición teórica de la democracia delegativa, ver Guillermo O’Donnell, “Democracia Delegativa”.
Básicamente O’Donnell explica que la mayoría de los regímenes democráticos, previos a la Revolución Bolivariana
son delegativos. El pueblo delega su poder en el Presidente que durante cuatro, cinco o seis años tiene un poder casi
absoluto dentro del marco constitucional. El poder delegado en el Presidente es proporcional a la debilidad en el
equilibrio de poderes, el judicial y el legislativo. Recuerda mucho el concepto de un gobierno civil autoritario de
Wolpin. Esta “delegación de poder” es muy limitada por la Constitución Bolivariana, ya que existe el poder
revocatorio que puede ser convocado fácilmente no sólo para substituir a presidente sino a gobernadores y otros
mandatarios locales. El referéndum revocatorio confirma o destituye al político en el poder. En teoría es el pueblo
que de forma participativa exige al presidente acciones políticas en determinada dirección. De ahí la necesidad del
Presidente de explicar permanentemente todo lo que hace a través de la prensa y los medios de comunicación. Si un
presidente no tiene esa capacidad comunicacional, pienso que sería fácilmente revocado en las urnas. Si lo tienen
podrá mantenerse por un largo tiempo, hasta que el pueblo no crea en él o ella.
210
sexto grado y el 70,4% alcancen el noveno grado. Estas cifras, reflejan el esfuerzo y el compromiso
educativo de la Revolución y están muy por encima de los mejores niveles de educación que se
consiguieron en el pasado259.
Se introduce así una coalición entre el pueblo --los movimientos populares autóctonos y los
diversos grupos indígenas-- y el estado. El compromiso prioritario es de incorporar a las masas
desposeídas existentes en Venezuela al proceso democrático para desarrollar la misma a su
potencial máximo. Para ello, se requiere primero cumplir las metas económicas, educativas y de
participación ciudadana que requiere el mandato constitucional. Estas metas de participación son de
las bases sociales de acción protagónica. La participación de la bases es la práctica pedagógica que
demanda la Teología de la Liberación260 de Gustavo Gutiérrez, la Pedagogía del Oprimido de Paulo
Freire, la Filosofía de la Liberación y la propia experiencia socialista cubana. Se trata de crear una
educación universal obligatoria mínima para toda la ciudadanía. Esta aspiración a la educación
democrática,
protagónica y universalista fue proclamada en el pasado por los marxistas
y
socialistas venezolanos del Partido Comunista de Venezuela (PCV), del Movimientos de Izquierda
Revolucionaria (MIR) e incluso el Movimiento Electoral de Pueblo (MEP) del maestro Luis
Beltrán Prieto Figueroa ya décadas atrás. Coinciden a nivel teórico con las aspiraciones de la
mayoría de los latinoamericanos en sus objetivos generales básicos. En EE UU y en Europa no son
aspiraciones son realidades asumidas, aunque excluyen frecuentemente a los inmigrantes.
En Venezuela, ni que decir tiene que la influencia humanista, generosa y solidaria hoy día
va de la mano de la contribución y de la preparación de los educadores y médicos cubanos que
trabajan en el país. Su experiencia solidaria se añade a la de miles de maestros y médicos
venezolanos que con su experiencia, dedicación
y capacidad han hecho posible alcanzar
rápidamente los objetivos que ha ido trazando el gobierno bolivariano. Un resultado ha sido
precisamente el de crear lazos cada de hermandad y solidaridad entre Cuba y Venezuela261.
259
Cifras facilitadas por el ministro de educación Héctor Navarro, “98% de los niños en edad escolar tienen acceso
al sistema educativo,” www.abn.gov.ve (12/5/2010)
260
La Teología de la Liberación, emerge del contexto que crea el Concilio Vaticano II (1962-65) y la Conferencia
Episcopal de Medellín (1968) donde los obispos toman conciencia de los niveles de pobreza existentes en América
Latina y de la necesidad de cambiar radicalmente la situación.
261
Ver sección salud en “Logros de la Revolución Bolivariana.” (Caracas: Asamblea Nacional, 2008).
211
En el aspecto legal, existe el paralelismo entre la aspiración programática de la DUDH y la
materialización programática del derecho a la educación en la propia Constitución Bolivariana.
Declaración Universal de los Derechos Constitución Bolivariana de la República
Humanos
de Venezuela
Art. 26
(1)
Todos tienen derecho a la educación. La
educación será gratuita, al menos al nivel
elemental y básico.
La educación
elemental será obligatoria para todos.
La educación técnica y profesional deberá
ser de fácil acceso para los que quieran
estudiar y la educación superior también
deberá ser accesible y los puestos se
determinaran en base a merito.
(2)
La educación estará dirigida al desarrollo
de la persona humana y fortalecerá el
respeto de los derechos humanos y
libertades fundamentales.
Deberá
promover
el
entendimiento,
la
tolerancia y la amistad entre las
naciones, grupos étnicos y religiosos, y
profundizará las actividades de las
Naciones Unidas en su lucha por la Paz.
(2) Los padres tienen el derecho
prioritario de escoger que tipo de
educación recibirán sus hijos.
Art. 27
Todos tienen el derecho a libremente
participar en la vida cultural de la comunidad,
a compartir y disfrutar de los avances
científicos y sus beneficios.
Todos tenemos el derecho a la protección
moral y material que resulte de cualquier
Art. 102. La educación es un derecho
humano y un deber social fundamental, es
democrática, gratuita y obligatoria. El
Estado la asumirá como función indeclinable
y de máximo interés en todos sus niveles y
modalidades, y como instrumento del
conocimiento científico, humanístico y
tecnológico al servicio de la sociedad. La
educación es un servicio público y está
fundamentada en el respeto a todas las
corrientes del pensamiento, con la finalidad
de desarrollar el potencial creativo de cada
ser humano y el pleno ejercicio de su
personalidad en una sociedad democrática
basada en la valoración ética del trabajo y en
la participación activa, consciente y solidaria
en los procesos de transformación social
consustanciados con los valores de la
identidad nacional, y con una visión
latinoamericana y universal. El Estado, con
la participación de las familias y la sociedad,
promoverá el proceso de educación
ciudadana de acuerdo con los principios
contenidos de esta Constitución y en la ley.
Art. 103. Toda persona tiene derecho a una
educación integral, de calidad, permanente,
en igualdad de condiciones y oportunidades,
sin más limitaciones que las derivadas de sus
aptitudes, vocación y aspiraciones. La
educación es obligatoria en todos sus
niveles, desde el maternal hasta el nivel
medio diversificado. La impartida en las
instituciones del Estado es gratuita hasta
el pregrado universitario. A tal fin, el
Estado realizará una inversión prioritaria, de
212
producción científica, literaria o artística de la conformidad con las recomendaciones de la
que sea autor.
Organización de las Naciones Unidas. La
ley garantizará igual atención a las personas
Art.29 Todos tenemos obligaciones con la con
necesidades
especiales
o
con
comunidad que nos ofrece el libre y completo discapacidad y a quienes se encuentren
desarrollo de su personalidad
privados de su libertad o carezcan de
condiciones básicas para su incorporación y
permanencia en el sistema educativo.
Las contribuciones de los particulares a
proyectos y programas educativos públicos a
nivel medio y universitario serán reconocidas
como desgravámenes al impuesto sobre la
renta según la ley respectiva.
Incluso el mandato legal constitucional venezolano completa aspectos inexistentes de la
DUDH. Uno de los problemas de la DUDH -- que como fue redactada en 1948—es que no
establece específicamente los derechos relacionados con la protección del medio ambiente como
fundamentales. La Constitución Bolivariana que en su art. 107 enfatiza la importancia que tiene no
sólo la protección de los derechos humanos sino también los del medio ambiente creando una
educación para la protección del medio ambiente para las futuras generaciones.
La educación ambiental es obligatoria en los niveles y modalidades del sistema
educativo, así como también en la educación ciudadana no formal. Es de obligatorio
cumplimiento en las instituciones públicas y privadas, hasta el ciclo diversificado, la enseñanza
de la lengua castellana, la historia y la geografía de Venezuela, así como los principios del
ideario bolivariano. (Art. 107 Constitución Bolivariana de la República de Venezuela).
4.1. Las misiones: la transformación del oprimido en sujeto liberador
En materia de educación nadie discute que el trabajo de Paulo Freire, educador brasileño
mundialmente reconocido, marca los parámetros del campo pedagógico latinoamericano moderno.
Precisamente por el carácter estructural de la existencia de la pobreza en América Latina las ideas
de Freire alimentan el trasfondo estratégico-filosófico que recoge el carácter liberador que se
213
presenta en la teoría y la praxis educadora y que recoge el mandato constitucional bolivariano. En
su libro Education for Critical Consciousness 262, Paulo Freire presenta una clave filosófica
fundamental para la educación de adultos y en general. Primero, la necesidad de transformar a los
educandos de “objeto” en "sujeto” participante; es decir un cambio que convierte al estudiante en
actor y protagonista de su propia educación. El resultado de tal transformación es el cambio de la
persona misma.
La educación transforma las relaciones del estudiante consigo mismo y las
relaciones con su familia, su comunidad y con toda la realidad política, social y ambiental que le
rodea.
En Venezuela, el instrumento político que origina tal transformación educativa de la persona
no sólo se origina en la escuela, en la universidad o en las escuelas técnicas. La educación crítica
política del ciudadano nace fundamentalmente en los proyectos sociales de cambio, denominados
por el gobierno bolivariano con el concepto “misión.”
Las misiones están generando una nueva realidad, incluso en el orden cultural, en el orden
psicológico, en el orden ideológico y en el orden filosófico; además de la práctica de la realidad y
práctica que están generando en lo social, en lo económico y en lo educativo263.
Las misiones independientemente de su objetivo específico – que es restablecer la justicia
social-- tienen además una función pedagógica de educación política solidaria.
Son política
educativa y praxis democrática de la Revolución Bolivariana que busca la transformación
cualitativa del individuo y cuantitativa de la sociedad. Por eso, en la misión hay un énfasis en la
participación voluntaria, democrática y directa del ciudadano y de la comunidad. En política, la
misión es precisamente eso, un proyecto programático de justicia, legal, productivo, de defensa de
los derechos humanos y de mandato constitucional de todo el país en solidaridad. Si el instrumento
integrador educador es la “misión;” el resultado filosófico que define este proceso es el conocido
con el término de “desarrollo endógeno” de la comunidad. Este requiere la integración de la
comunidad en la toma de importantes decisiones políticas, sociales sobre el futuro de la propia
comunidad y del país.
262
263
Paulo Freire, Education for Critical Consciousness. (New York: Continuum, 1990).
Hugo Chávez Frías, Misiones Bolivarianas. (Caracas: Ministerio de Comunicación e Información, 2007), 7.
214
La democracia y el analfabetismo aunque conviven en América Latina, teóricamente se
excluyen y contradicen. La mayoría de los países desarrollados han erradicado el analfabetismo.
En EE UU o en Europa se consideraría un insulto a la democracia la existencia de altos índices de
analfabetismo. Sin embargo, el analfabetismo es compatible perfectamente con los regímenes civil
y militar de carácter autoritario. La dictadura militar quema los libros y considera a los intelectuales
y estudiantes una amenaza para el país.
La IV República creó el Consejo Nacional de Alfabetización y el Servicio de
Alfabetización ambos tuvieron un éxito muy limitado al sólo lograr la alfabetización entre 19902002 de un total de 97.190 personas. Durante muchos años en la IV República las personas
“participaban” en los procesos electorales votando por los colores del partido de su preferencia.
El votante no podía leer los programas de gobierno, se limitaba a escuchar lo que decían los
líderes del partido.
La Revolución Bolivariana estableció como primer objetivo educativo
nacional, pre-requisito para la creación de un sistema democrático participativo y protagónico
alfabetizar a todos los venezolanos. La alfabetización era la prioridad número uno para el
desarrollo endógeno de la nación y pre-requisito para una verdadera democracia.
El estado organizó una misión nacional cívico militar para alfabetizar el país sin
exclusiones. La Misión Robinson I alfabetizó a 1.548.511 personas de todas edades en un lapso de
cuatro años, entre el 2002 y el 2006.
Fue la Misión Robinson I, la primera misión que marcaría la
pauta de todas las demás que vinieron después. En ella participaron civiles y militares. Por primera
vez, el ejército venezolano participaba en un proyecto social de este tipo. Muchos miembros de la
Fuerza Armada Bolivariana fueron facilitadores, algo totalmente inconcebible en tiempos de la IV
República. Por supuesto, a los militares se unieron miles de civiles y jóvenes voluntarios que
sirvieron de facilitadores también. El facilitador básicamente era el guía profesor que indicaba el
camino a los estudiantes. El impacto y enfoque de la Misión Robinson I abarcó globalmente a
todo el país; incluyendo sin exclusión de género o edad a la población urbana, rural, indígena y
penitenciaria en todo el país. El cuadro siguiente resume el impacto de la Misión Robinson I en
todo el país, incluyendo cada estado.
215
Participantes Inscritos, egresados y facilitadores de la Misión Robinson 1 por entidad federal
(Diciembre 2006)
ENTIDAD FEDERAL
INSCRITOS
EGRESADOS
FACILITADORES
VENEZUELA
1.548.511
1.534.267
130.773
DISTRITO CAPITAL
55.032
54.725
2.715
AMAZONAS
18.734
18.347
1.457
ANZOÁTEGUI
58.778
58.213
12.358
APURE
67.409
67.051
6.112
ARAGUA
57.991
57.909
4.669
BARINAS
71.226
70.768
7.064
BOLÍVAR
62.721
62.200
3.480
CARABOBO
84.638
84.316
2.278
COJEDES
33.568
32.878
2.086
DELTA AMACURO
21.922
20.800
1.426
FALCÓN
52.993
52.897
5.137
GUÁRICO
68.481
67.813
4.201
118.094
117.467
13.890
MÉRIDA
51.572
48.706
3.465
MIRANDA
60.694
60.298
1.697
MONAGAS
50.785
50.659
3.268
NUEVA ESPARTA
18.684
18.101
1.512
PORTUGUESA
87.848
87.280
8.686
SUCRE
85.190
84.180
7.128
TÁCHIRA
86.828
86.475
7.328
TRUJILLO
71.931
71.817
7.003
VARGAS
18.256
18.061
829
YARACUY
56.357
56.128
4.220
188.779
187.178
18.764
LARA
ZULIA
FUENTE: Ministerio de Educación y Deportes. Dirección de Educación de Adultos.
216
La estadística muestra que la gran mayoría de los participantes lograron finalizar el
programa exitosamente. El método de alfabetización fue una contribución del gobierno de Cuba
y se denomina "Yo sí puedo." Representa una estrategia de aprendizaje novedosa, que parte de
lo conocido a lo desconocido. Los instrumentos esenciales en la enseñanza de la lectura y la
escritura son los medios audiovisuales: el televisor, el VHS y las video clases. El facilitador es
el encargado de supervisar el proceso de enseñanza-aprendizaje de los estudiantes. A través de
un manual, utilizado como herramienta principal de consulta – con orientaciones metodológicas
y de carácter general—se desarrollan encuentros con los aprendices. La cartilla "Yo sí puedo",
es muy sencilla. Presenta el mismo formato en cada una de sus páginas y está concebida
estableciendo un vínculo entre los números y las letras. El estudiante establece un proceso de
asociación entre lo conocido (los números) y lo desconocido (las letras) 264. Un proceso de
alfabetización similar se está llevando a cabo ahora en Bolivia, utilizando el mismo método cubano
de alfabetización. También como complemento del programa se crearon las bibliotecas familiares,
una colección de libros en serie para facilitar el acceso a los libros y a la lectura en los hogares
familiares. La misión Robinson I fue un proyecto comunitario de desarrollo endógeno nacional
fundamental para el país.
Estableció un nuevo tono de trabajo, dignidad y solidaridad que
involucró a todas las fuerzas sociales civiles y militares conjuntamente. Fue un trabajo y logro
comunitario sin precedentes en la historia del país. La participación masiva en un proceso de esta
complejidad ha sido el mayor hecho hasta la fecha en Venezuela. Esto permitió a la UNESCO
declarar a Venezuela el 28 de octubre de 2005, Territorio Libre de Analfabetismo.
Obviamente, la alfabetización fue el primer paso. El proceso continuó y continúa ya que
una vez cumplido su objetivo inicial, que fue acabar con la exclusión que ocasionaba el no saber
leer y escribir, faltaban los desafíos adicionales que tiene alcanzar una inclusión política y social
verdadera. Es decir crear oportunidades para mejorar los niveles de la educación en todo el país.
El proceso educativo continuó con el fácil acceso a las siguientes etapas: la educación primaria
(Misión Robinson II) y secundaria (Misión Ribas) y el acceso a la educación superior y a la
especialización universitaria (Misión Sucre).
264
Para un explicación detallada de la misión Robinson ver: www.venezuelabolivariana.com
217
La Misión Robinson II tiene como objetivo no sólo educar a la población recientemente
alfabetizada sino superar a corto plazo las deficiencias en materia de educación elemental entre la
población adulta. Esta misión sigue el método educativo cubano “Yo Sí Puedo Seguir Estudiando”
para adultos ya alfabetizados y que forma a las personas hasta el sexto grado. El sistema añade a los
conocimientos adquiridos nuevos conocimientos prácticos, incluyendo aquellos de varios oficios y
trabajos. A partir del 2005, se han inscrito en esta misión millón y medio de venezolanos, con la
participación de más de 100.000 facilitadores en todo el país. La misión tiene como objetivo
cumplir el mandato constitucional de los art. 102, 103 y 107; tal como explicó el propio
Presidente Chávez en el lanzamiento de la nueva misión educativa el 28 de octubre de 2003.
Con la tarea de incorporar no sólo a los egresados de la Misión Robinson I, sino
también a todos los venezolanos y venezolanas que no pudieron concluir sus estudios de
educación básica debido al sistema capitalista, que reinó en Venezuela por más de 40 años;
nace hoy 28 de octubre de 2003 Robinson II 265.
La enseñanza rural no llegaba a todos los pueblos y caseríos. Muchas escuelas rurales
estaban olvidadas. Sus maestros y maestras tenían que viajar de escuela a escuela sin recursos ni
ayuda del estado; sostenidos únicamente por su vocación de servicio y abnegación personal.
Las clases se impartían de manera irregular y la asistencia era escasa. La Misión Robinson II
llevó la oportunidad de la educación primaria finalmente a las zonas rurales, a las comunidades
indígenas y a la población penitenciaria de todo el país. La Misión Robinson II se propuso el
objetivo de la aprobación del sexto grado por parte de todos los participantes y abrió las puertas a
nuevas oportunidades de formación; como por ejemplo, la adquisición de conocimientos para la
práctica agrícola.
El gobierno otorgó 100.000 becas para los estudiantes de la Misión Robinson II que han
beneficiado a 51.852 estudiantes y otras 100.000 para educar a los campesinos que participan en
las cooperativas. La misión ha recibido desde el 2004, dineros adicionales del Fondo de Apoyo
Solidario creado precisamente para mejorar el financiamiento de las misiones educativas y de
salud. El cuadro siguiente resume el impacto de la Misión Robinson II y ofrece una visión
panorámica de la situación en toda la geografía nacional.
265
Ibíd.
218
Participantes inscritos, egresados y facilitadores de la Misión Robinson II por entidad
federal (Diciembre 2006)
ENTIDAD
FEDERAL
INSCRITOS
EGRESADOS
FACILITADORES
VENEZUELA
1.542.931
327.390
112.792
DISTRITO CAPITAL
50.872
8.320
3.926
AMAZONAS
16.511
1.000
1.140
ANZOÁTEGUI
44.078
13.000
2.885
APURE
86.969
14.500
7.501
ARAGUA
51.400
16.536
3.497
BARINAS
50.816
15.439
3.717
BOLÍVAR
57.712
9.200
4.198
CARABOBO
80.927
23.554
5.904
COJEDES
31.560
6.205
2.475
DELTA AMACURO
21.892
2.680
1.994
FALCÓN
48.933
22.000
3.265
GUÁRICO
45.817
9.960
3.363
LARA
171.043
38.958
12.958
MÉRIDA
57.480
15.000
4.623
MIRANDA
77.961
12.204
5.817
MONAGAS
60.814
4.414
4.135
NUEVA ESPARTA
11.100
2.742
834
PORTUGUESA
74.232
13.000
5.097
SUCRE
91.405
22.337
7.252
TÁCHIRA
61.627
11.525
3.804
TRUJILLO
64.293
13.996
5.555
VARGAS
27.726
1. 997
2.636
YARACUY
47.415
2.610
3.657
ZULIA
210.348
46.276
12.515
FUENTE: Ministerio de Educación y Deportes. Dirección de Educación de Adultos.
Obviamente, el desafío educacional de la Misión Robinson II fue mucho mayor que el de
la etapa anterior. La transición de la alfabetización a la educación primaria es un proceso más
219
costoso no sólo desde el punto de vista de los contenidos de la enseñanza sino desde el punto de
vista del compromiso de los estudiantes. Los adultos tienen que sacrificar su tiempo libre y de
descanso para estudiar varias materias y superar los desafíos de confianza e intelectuales que se
les presentan. El método "Yo sí Puedo Seguir Estudiando," utiliza la televisión, la video-clase y
los folletos de apoyo, como estrategia educativa. Las actividades están coordinadas por un
facilitador acompaña el proceso de 15 participantes por clase. Los estudiantes primero estudian
el cuarto grado, que consta de cinco asignaturas: Matemáticas, Lenguaje, Historia, Geografía y
Ciencias Naturales. Después, estudian quinto y sexto grado conjuntamente que agrega las
materias de Informática e Inglés al plan de estudios. Ambos cursos suman un total de 600 horas
de clases con una duración total de 20 meses. Según las estadísticas del año 2008, el total de
graduados de la Misión Robinson II es de 437.171 personas; de los cuales 81.000 son
indígenas 266.
La transición de la educación primaria a la secundaria no es quizás tan dura como la
anterior. Ahora ya, los estudiantes adultos están acostumbrados a un ritmo de estudio, la autoestima
y la confianza del estudiante son mayores. El 17 de noviembre del mismo año 2003, se lanzó la
Misión José Félix Ribas que otorga el título de bachiller a aquellos estudiantes, que ya graduados
del sexto grado, no habían tenido oportunidad de continuar sus estudios en el pasado. Este plan se
coordinó con la participación del Ministerio de Energía y Minas (decreto 2656) y el Ministerio de
Educación. Las clases se dictan en los centros docentes repartidos por todo el país, en horarios
asequibles para que los estudiantes puedan tener acceso a las mismas después del horario laboral.
El foco continúa siendo mejorar la educación en las zonas rurales, comunidades indígenas y centros
penitenciarios. En estos últimos, la Misión Ribas abrió ya para el año 2006, 114 clases diferentes
donde 1.893 reclusos están estudiando el bachillerato.
Para el año 2008, un total de 510.585 estudiantes terminaron su bachillerato en todo el país;
completando así su educación secundaria. La misión Ribas sigue las mismas estrategias de la
Misión Robinson I y II; y sus títulos son reconocidos legalmente a nivel nacional. A continuación
las líneas generales del plan de estudios.
266
Estadísticas oficiales del estado venezolano.
220
Asignaturas
1er Nivel.
1er semestre.
Frecuencia
semanal
1er Nivel.
2do semestre.
Frecuencia
semanal
2do Nivel.
2do Nivel.
3er semestre.
4to semestre
Frecuencia semanal Frecuencia
semanal
Matemática
5
3
3
3
Lenguaje
5
3
3
3
Geografía Universal
3
2
___
___
Geografía de
Venezuela
Historia Universal
___
___
2
2
___
2
___
___
Historia de
Venezuela
Formación de la
Ciudadanía
Ciencias
___
___
2
2
1
1
1
1
___
3
2
2
Inglés
2
2
2
2
Computación
___
___
1
1
El cuadro siguiente muestra el impacto de la Misión Ribas en todo el país y por entidad
federal. Como en los programas anteriores, la estadística muestra que aquellos estados rurales y
alejados de la capital son los que más se están beneficiando de la oportunidad de terminar los
estudios de educación secundaria. Estados de mayor población rural e indígena como Delta
Amacuro, Amazonas, Apure, Guárico y Zulia entre otros, son en los que la Misión Ribas está
marcando las diferencias. Con la excepción del Zulia, muchos de estos estados tienen poca
infraestructura en general y son los que más participantes y egresados tienen.
Es interesante también la cantidad de estudiantes que estudian en los estados llaneros de
Lara, Portuguesa y Barinas. El número de facilitadores obviamente muestra el enfoque
primordialmente rural de la misión. En la ciudad las oportunidades de la educación secundaria
para adultos siempre ha sido mucho mayor, sin embargo las personas que pueden toman ventajas
de las oportunidades que les ofrece la Misión Ribas.
221
Participantes inscritos, egresados y facilitadores de la Misión José Félix Ribas por entidad
federal (19 de enero 2007)
ENTIDAD
FEDERAL
VENCEDORES
INSCRITOS
VENEZUELA
1.041.114
340.961
31.697
DISTRITO CAPITAL
10.628
1.773
307
AMAZONAS
62.456
20.413
2.466
ANZOÁTEGUI
25.801
7.459
765
APURE
79.860
26.194
2.111
ARAGUA
43.335
15.486
924
BARINAS
51.405
13.473
1.241
BOLÍVAR
53.904
21.018
1.939
CARABOBO
13.853
6.545
586
COJEDES
7.857
1.829
260
DELTA AMACURO
63.139
24.964
1.280
FALCÓN
31.357
9.819
1.412
GUÁRICO
35.035
12.525
927
LARA
80.285
17.937
2.280
MÉRIDA
31.552
9.114
1.231
MIRANDA
70.185
30.734
2.656
MONAGAS
51.434
19.086
1.232
NUEVA ESPARTA
12.613
4.251
294
PORTUGUESA
35.766
14.245
692
SUCRE
46.424
14.075
1.182
TÁCHIRA
45.101
11.253
2.045
TRUJILLO
34.611
8.628
1.194
VARGAS
14.772
5.799
302
YARACUY
20.035
7.382
696
ZULIA
119.706
36.949
3.266
TITULADOS
FACILITADORES
FUENTE: Ministerio de Energía y Petróleo. Sala Socio geográfica Situacional Nacional de la Fundación Misión
Ribas
Muchos han querido estudiar en la universidad, pero las circunstancias de la vida, el costo
económico y el difícil acceso a la educación superior --falta de cupos en la universidad-- han sido
graves obstáculos en el camino. Sólo las élites tenían acceso a la universidad pública o privada.
La Revolución Bolivariana también ha abierto una puerta importante para aquellos que quieran
222
obtener títulos universitarios y de educación superior en todo el país. Para el año 2008 un total
de 571.917 venezolanos estaban cursando estudios en 24 programas universitarios en 334
municipios del país como parte de la Misión Antonio José de Sucre.
Este programa de educación superior es para carreras de tres años que tienen una gran
demanda en todo el país. En él, ya se han graduado 30 mil estudiantes en siete programas
universitarios diferentes: Educación, Gestión Ambiental, Gestión Social del Desarrollo Local,
Comunicación Social, Administración, Informática, Producción Agroalimentaria. Un total de
15,893 estudiantes son graduados en Educación, títulos que les son reconocidos legalmente. La
Misión Sucre convierte en la tarde-noche las escuelas primarias y secundarias en aulas
universitarias gratuitas para adultos que tienen deseos de aprender más. Pueden inscribirse todos
aquellos que habiendo terminado el bachillerato no había tenido oportunidad de ir a la universidad y
siempre desearon estudiar una carrera. Los beneficios son obvios, la Misión Sucre ha generado la
contratación de miles de profesores en todo el país que estaban desempleados; y que ahora pueden
ejercer su profesión en la docencia universitaria. Asimismo, aumentó la formación de nuevos
maestros de educación primaria y secundaria que tanto necesitaba y necesita el país.
Además de las misiones se ha reforzado el sistema tradicional de educación para adultos que
ya existía en el país. La siguiente estadística resume la evolución de la educación oficial para
adultos mostrando el incremento en todo el país y en cada estado en particular; antes y después de la
Revolución Bolivariana. El incremento en el número de estudiantes adultos en todo el país se
mantiene y hay una tendencia de mejora en las zonas urbanas y en los estados más desarrollados.
Sin embargo, son las misiones educativas, que con su diferente alcance geográfico y humano, las
que están transformando la cultura educativa en las zonas olvidadas del país. Aquí los adultos ahora
tienen oportunidades de educación importantes para su formación personal y profesional. Su
impacto ha sido muy superior al de la educación tradicional ya que ha mejorado el nivel de
convivencia y de vida de las zonas rurales.
Además se hace un esfuerzo para llegar a las
comunidades indígenas del país donde no había una oportunidad real de acceso a la educación en el
pasado.
223
Matriculados en educación de adultos, 1992/93-2006/07
Entidad federal
1994/95
1999/00
2004/05
2006/07
Total
229.187
360.216
451.825
356,159
Distrito Capital
-
40.625
55.952
45,633
Amazonas
1.787
175
2.343
1,231
Anzoátegui
-
18.076
20.100
13,814
Apure
8.987
8.399
8.897
4,647
Estado:
Aragua
22.316
33.510
40.346
36,366
Barinas
5.653
14.135
16.575
10,557
Bolívar
16.210
13.892
19.790
16,506
Carabobo
-
26.274
35.356
25,039
Cojedes
-
4.954
6.398
5,630
Delta Amacuro
548
1.165
2.155
2,002
Falcón
10.663
3.703
9.760
8,187
Guárico
8.146
12.237
13.839
9,656
Lara
12.978
13.334
25.642
17,376
Mérida
12.068
16.523
19.054
15,959
Miranda
26.429
29.183
36.217
36,902
Monagas
-
7.353
13.558
7,197
Nueva Esparta
7.610
5.464
7.670
5,798
Portuguesa
10.549
10.306
14.264
12,662
Sucre
13.913
14.295
22.240
12,612
Táchira
22.320
16.723
18.048
14,446
Trujillo
3.431
14.471
10.632
8,675
Vargas
a/
a/
5.324
4,063
Yaracuy
10.285
12.719
8.266
6,631
Zulia
35.294
42.700
39.399
34,570
Fuente: Ministerio del Poder Popular para la Educación
Es importante señalar que todas las misiones educativas, en sus lineamientos generales,
tienen elementos freirianos. La alfabetización y el acceso progresivo a la educación para todos, en
sí mismo, es el objetivo fundamental de la filosofía de Paulo Freire por excelencia. Pero además,
las misiones educativas –como veremos después muchas de las no educativas-- tienen una dinámica
o dialéctica liberadora y crítica ya que están enmarcadas en la realidad cotidiana del país.
Primero, la misión determina y señala el carácter violento e innecesario de una
circunstancia social injusta y real; ya sea el analfabetismo, la ignorancia, la indigencia, el trabajo
224
infantil, la enfermedad curable, la violencia contra la mujer, la discriminación contra las personas de
diversidad funcional o discapacitados, etc.
Segundo, la misión crea y genera líderes responsables en la propia comunidad y con
estrategias sociales y políticas determinadas y efectivas. Es responsabilidad del estado el proveer
con recursos económicos y humanos correspondientes para con el liderazgo local enfrentar y
eliminar la injusticia existente. Estos agentes comunitarios lideran el cambio radical esa realidad
injusta. Tienen no sólo que convencer sino involucrar a los miembros de su comunidad en praxis de
erradicar la injusticia.
Esto obviamente requiere pensamiento crítico por parte de todos los
involucrados.
Tercero, la misión incorpora a aquellos sectores marginados u olvidados, víctimas de la
injusticia, ahora liberados, al proceso democrático revolucionario para luchar contra otras
injusticias. Este es el proceso de “desarrollo endógeno” que definirá el carácter solidario del nuevo
ciudadano bolivariano socialista.
El propio Hugo Chávez define el primer frente de la conciencia
bolivariana.
Los valores del socialismo son, para mí, así lo digo, tal cual los principios verdaderos del
cristianismo: la igualdad, el amor por los demás, el sacrificarse uno, incluso por los demás. Eso es
imposible en el capitalismo, por eso creo que Cristo fue uno de los grandes socialistas de la
historia. Seamos como Cristo; seamos como Bolívar, seamos como el Che: seamos verdaderos
humanos, pues. Potenciemos los valores humanos, el amor humano. He allí lo social 267.
El proceso en sí mismo de la misión genera lo que Paulo Freire definía como
“concientiçao”; una conciencia solidaria colectiva o comunitaria. Esta conciencia solidaria es
primaria para romper las cadenas de la injusticia de grupos o individuos cuyos derechos humanos
habían o han sido denegados. Es misma la conciencia crítica necesaria que necesitamos para
resolver los problemas concretos de la vida real. Es la conciencia que Herny Shue señala cuando
dice que “los derechos humanos no se mendigan se demandan”. Por supuesto, el éxito de cada
misión ha variado con el interés, el apoyo popular, la disposición de los que participan en ella y el
recibimiento comunitario que reciben. Es importante destacar que “la misión” se ha convertido en
el instrumento de cambio revolucionario más usado por el gobierno bolivariano. Los ministerios y
el aparato del estado siguen siendo en su mayor parte “monstruos burocráticos” que muchas veces
observan y asimilan los cambios que reclama el pueblo.
267
Hugo Chávez Frías, Las Comunas y los Cinco Frentes para la Construcción del Socialismo. “Aló Presiente
Teórico”. (Caracas: Ministerio del Poder Popular para la Comunicación e Información, 2009), 9.
225
La Constitución habla de la educación como un derecho humano y un deber social
fundamental, tiene que ser democrática, gratuita y obligatoria. Es la clave teórica de Freire; y
también fue la clave práctica de Ernesto “Che” Guevara, cuyo eslogan revolucionario para Cuba en
los años sesenta fue “hay que convertir a toda Cuba en una gran escuela.”
La educación es un
objetivo del estado, un mandato constitucional, es un servicio público fundamental de todos para
todos. Un servicio que con el respeto a los valores nacionales y bolivarianos acepta todas las
corrientes del pensamiento, no margina ninguna; ya sea religiosa o secular, de derecha o de
izquierdas. El esfuerzo del Gobierno Bolivariano por fomentar la educación desde sus políticas de
estado ha sido hasta el presente verdaderamente encomiable.
Pero es importante destacar los efectos filosóficos --de los que Paulo Freire habla-- cuando
se “toma de conciencia de la opresión.” Esto genera en la comunidad de una forma abierta,
democrática y participatoria una búsqueda para encontrar las soluciones a sus propias situaciones.
En otras palabras, una educación liberadora, creadora de la “concientiçao”268, que abre un diálogo
continúo con la denuncia abierta y honesta de la injusticia. Hay que evidenciar la injusticia para
derrotar sus planteamientos erróneos y dañinos. Es el método de Gandhi en la India, de muchos
teólogos y filósofos de la liberación en América Latina.
4.2. La guerra mediática un desafío al pensamiento crítico y a la democracia
El mayor desafío a la conciencia crítica la tiene el pueblo venezolano en la guerra mediática
entre los medios de comunicación privados
--que continuamente critican las políticas
gubernamentales-- y los medios públicos, que las defienden. La población y la democracia están
abiertas a un debate o diatriba diaria que fácilmente degenera en irrespeto y desinformación. Es
irónico que la oposición se queje de falta de libertad de expresión, porque nunca la discusión
política ha sido tan frecuente, intensa y abierta en los medios de comunicación de todo el país. La
democracia es un debate entre canales de televisión que argumentan sin dialogar; pero que en cierta
manera representan un diálogo político sobre “la cosa” pública. La argumentación frecuentemente
es un “diálogo de sordos” donde los medios de comunicación parecen partidos políticos en campaña
electoral. Algunos definen esta situación como una “guerra mediática” constante tanto en la
268
Habermas y Fornet-Betancourt, entienden que este proceso llega a un punto que involucra a todos los sectores que
democráticamente quieran participar en este proceso creativo.
226
prensa, como en la radio y en la televisión privada y pública. El venezolano vive su vida en una
realidad concreta y obtiene dos versiones opuestas de lo que pasa en el país en los medios de
comunicación públicos y privados. Por ejemplo, Venezolana de Televisión (VTV) y el Canal Sur,
ofrecen programas argumentativos que explican al detalle todas las políticas y los avances de la
Revolución Bolivariana y la situación política en América Latina y el mundo. En VTV destacan los
programas de la como “Aló Presidente” que presenta el propio Presidente Hugo Chávez, “Contra
Golpe” que presenta la periodista Vannesa Davis y “La Hojilla” bajo la dirección del periodista
Mario Silva; entre otros muchos, que debaten y defienden los puntos de vista del gobierno. En
materia de noticias internacionales destaca el programa “Dossier”, del prestigioso periodista de
temas internacionales Walter Martínez. Todos denuncian abiertamente la desinformación que
presentan frecuentemente los medios privados para erosionar tanto las conquistas de la Revolución
como la popularidad del Presidente. Los canales privados caen en el sensacionalismo informativo -Globovisión, Venevisión y Televen-- se empeñan en ofrecer una imagen catastrófica del país. En
la televisión privada abundan los programas de opinión que defienden los puntos de vista de la
oposición y destacan comentaristas y periodistas que representan los puntos de vista de la IV
República. La información en la prensa escrita tiene las mismas fracturas que la información
televisada. Es curioso que los medios privados, dominantes en la IV República y con una mayoría
de canales televisivos y medios de prensa impresa se presentan así mismos frecuentemente como
víctimas de la injusticia y de los abusos del “autoritario” gobierno Bolivariano. Sin embargo, el
problema no es la crítica o la opinión contraria a las que defiende el gobierno Revolucionario y el
Presidente Constitucional. El problema es cuando las “victimas” lanzan acusaciones que degeneran
en apologías a la violencia, en huelgas ilegales, en golpes de estado o incluso llamdos al magnicidio
como lamentablemente ha ocurrido más de una vez. Es importante destacar que los canales de
televisión privados confesaron orgullosa y abiertamente a todo el país durante el golpe, su papel
fundamental “informando” y “desinformando” al público durante la ejecución del mismo en abril
del 2002.
Ante tan singular y único debate, el venezolano tiene que hacer un juicio de valor diario para
determinar a quién creer en este diálogo que casi siempre distorsiona la realidad. Se podría
argumentar que esta dualidad de opiniones favorecerá finalmente la capacidad crítica de los
227
venezolanos ya que tienen que discernir donde está la verdad entre tanta mentira269. Y además
tendrán que votar en las elecciones a quien realmente creen. Sin embargo, el extremismo y la
polarización muestra una fractura política, que es un desafío innegable para el futuro del país.
Freire matiza que la crítica no es por la crítica misma, tiene como objetivo la construcción de algo
mejor, la propia superación. El señala que los objetivos filosóficos que un sistema educativo
liberador necesita generar son aquellos de la integración social de los sectores excluidos y
marginados, con la participación de los sectores ya incluidos. Es mediante el desarrollo individual y
colectivo de las responsabilidades que se despierta la conciencia propia y colectiva que genera
satisfacción y felicidad. Esa conciencia encuentra el camino, usando sus propios recursos y
confronta sus problemas de opresión sin traumas, abriendo nuevas vías de participación e
integración que fomenta la crítica constructiva de hacer las cosas cada vez mejor270.
La política comunicacional ha avanzando y digamos, que la guerra mediática contra la
Revolución Bolivariana desde los medios privados, ha generado respuestas efectivas. Por un lado
una mayor sofisticación periodística en los medios públicos y por el otro la incorporación de un
269
El informe de 300 páginas de Human Right Watch, escrito por Daniel Wilkinson, “Una década de Chávez:
Intolerancia Política y oportunidades perdidas para el progreso de los derechos humanos en Venezuela,” publicado
en el 2008 es sorprendente y lamentable. Precisamente, porque HRW conoce la historia de los derechos humanos
antes y después de la Revolución Bolivariana. No sólo diría que ignora la evidencia y los avances que en materia de
derechos humanos en Venezuela en todo el país, sino porque adopta la postura de “víctima” de ciertos sectores de la
oposición y los medios de comunicación privados. Unas "victimas” que participan en un golpe de estado, que
participan o condonan el secuestro, el engaño y el asesinato de militantes de la Revolución. Unos medios de
comunicación que además de mentir, hacen apología del terrorismo para provocar otro “golpe militar” y algunas
veces invitan “magnicidio” del propio Presidente, elegido democráticamente por los venezolanos. HRW fue una
organización muy crítica de la IV República sin embargo no utilizó los mismos criterios en sus críticas a la V
República. No es extraño que los líderes de HRW Manuel Vivanco y Daniel Wilkinson fueran expulsados por
violar su condición de turistas al presentar el informe. Es grave que HRW olvide que el gobierno bolivariano tiene
en sus filas a muchos ministros que han sido toda su vida defensores incuestionables de los derechos humanos en
Venezuela. A ellos HRW no se les entrevista ni cuestiona sobre estos temas. Entre ellos, al menos al más conocido
internacionalmente: el periodista y abogado José Vicente Rangel.
Para colmo, las mentiras sobre el caso de RCTV continúan; la realidad es que el gobierno no ha cerrado ningún
medio de comunicación opositor, no prorrogó –como era su derecho legal-- la licencia de emisión de televisión
pública a Radio Caracas Televisión. Emisora que ahora funciona libremente en la televisión por cable. El gobierno
bolivariano sorprendentemente sigue sin aplicar ninguna forma de censura, que debiera enjuiciar sin
contemplaciones a aquellos que hacen apología del terrorismo, golpista o no, o llaman a la violencia entre
venezolanos en cualquier medio de comunicación público o privado. La libertad de expresión es un derecho
fundamental para denunciar y defender los derechos humanos y permite la crítica constructiva, que no incluye claros
intentos de desestabilizar el país, como ocurrió durante el golpe de estado del 2002. El embajador venezolano en la
ONU, Jorge Valero ha denunciado públicamente una campaña de los medios de comunicación privados
internacionales y nacionales contra el gobierno venezolano. Ver, “Venezuela denuncia en la ONU campaña de
agresión mediática.” www.vtv.gov.ve . 28 de abril 2010.
270
Paulo Freire, Pedagogy of the Oppressed. (New York: The Continuum, 1996). El ex presidente de Brasil, Ignacio
Lula da Silva, fue uno de los estudiantes de Freire en sus clases de alfabetización. Lula decía que gracias a Freire
aprendió no sólo a leer libros sino a “leer” el mundo. En una entrevista dijo: “no sé si lo leo bien, pero reconozco
que por lo menos lo leo.”
228
grupo de periodistas y medios de comunicación comunales y alternativos. Medios comunales que
con el apoyo técnico del gobierno buscan la verdad independientemente en sus propios términos.
Radio Catia y Ávila TV son quizás los ejemplos más destacados en este sentido.
En los medios de comunicación del estado --y en los comunales-- hay más agilidad
informativa y han mejorado significativamente su capacidad profesional para explicar los planes de
desarrollo del gobierno. Hasta ahora, excepto durante el período del golpe de estado en abril del
2002, han tenido la capacidad de detener los ataques y campañas de desinformación nacional
lanzadas desde los medios nacionales privados. Esto ha sido posible en parte porque el propio
Presidente Hugo Chávez Frías, ha mantenido una presencia constante en los medios del estado
explicando cada detalle de su política y desmintiendo las “falsas matrices de opinión” lanzadas
desde la oposición. Los medios de comunicación públicos usan en su mayoría la argumentación y
la contra argumentación y el desmantelamiento de la mentira --aunque lamentablemente algunos de
sus comentaristas puntualmente caen en la trampa del “insulto” y la “descalificación personal” que
tanto daño hacen la pensamiento crítico. El gobierno no ha sido capaz sin embargo de contrarrestar
los ataques de los medios de comunicación en el ámbito internacional; donde la imagen que se
presenta de Venezuela es únicamente aquella que se refleja en los medios privados venezolanos. Es
decir una imagen distorsionada de un país que vive en constante permanente conflicto y donde la
libertad de expresión está bajo amenaza constante.
¿Es la misión la mejor respuesta a la guerra mediática?
Afortunadamente para la
Revolución Bolivariana y para el pueblo, hasta el momento, los hechos son mucho más importantes
que las palabras. Las palabras se las lleva el viento, en cambio los hechos quedan y dejan huella.
Cambian vidas. Los efectos de las misiones sí tienen, y han tenido, un efecto integrador social muy
positivo en la sociedad venezolana. Las misiones además de mejorar la calidad de la vida de las
personas tienen en su dinámica una praxis educativa pacifista; que elocuentemente denuncia y lucha
contra la injusticia. Curiosamente, las misiones nunca son noticia en la prensa privada --que las
ignora en las noticias y en sus comentarios políticos. Tal vez porque cada misión ha sido un
proceso de integración social que señala las contradicciones injustas y de exclusión que existían en
la IV República. Ahora las injusticias son visibles y tratan de corregirse. Cada misión señala
claramente una carencia social que requiere una respuesta activa de “participación liberadora” de
la comunidad/estado; dispuesta ahora a trabajar y crear una cultura diferente. Su práctica educa,
229
ofrece el más importante de los conocimientos, el que provee la experiencia. ¿Qué nos enseña la
misión?
Paulo Freire advierte contra los peligros de la “conciencia alienadora,” aquella que oculta la
realidad. La mayor alienación es aquella que sufren algunos y que les no permite ver las injusticias
más obvias que les rodean. La misión nos pone en contacto con la realidad al identificar hechos,
problemas, injusticias. Entonces, en cada caso crea un plan de acción y provee los elementos o
agentes encargados de restituir justicia. Para ello, primero, reconoce la importancia del por qué de
la injusticia. En la historia, en la experiencia pasada, encuentra los caminos para evitar los peligros
y reconocer los obstáculos que se presentan o presentarán en el camino. Para la Revolución el
estudio y análisis del problema es fundamental ya que explican el por qué de las cosas. Este
aspecto liberador de la historia es necesario para crear una nueva cultura de valores culturales y
éticos diferentes. También, nos recuerda que enfrentar la injusticia no es fácil, requiere de todos los
recursos retóricos y organizativos necesarios para plantar cara a valores éticos, morales y racionales
“históricos” que son obsoletos e injustos. Para ello, la misión bolivariana tiene muchos referentes
históricos. Utiliza el pensamiento político y la praxis de Simón Bolívar, Simón Rodríguez, Ezequiel
Zamora y otras muchas figuras históricas nacionales y latinoamericanas para justificar y proponer
nuevas respuestas. La crítica positiva de las ideas sirve para el análisis de la realidad presente.
Supera con la razón histórica una ideología alienadora y dominante que perpetuaba la
injusticia y la presentaba como ley natural e inevitable –seudocientífica. Una realidad falsa que
escode en su lenguaje intereses económicos y políticos de dominación. Después de todo, existen
ricos porque existen pobres y existen países muy ricos porque existen países muy pobres. Si los
ricos no fueran tan ricos, los pobres no lo serían tanto. Ni la pobreza ni la riqueza son determinantes
históricos bajo ninguna de las ciencias conocidas. Son producto de decisiones políticas concretas,
son el resultado de prácticas históricas que determinan la riqueza y la pobreza de los pueblos.
La transformación pedagógica de Freire -- como la transformación de la Teología y
Filosofía de la Liberación-- rompe con la dicotomía filosófica tradicional sujeto-objeto. Transforma
al oprimido o marginado de objeto en sujeto; que además de “votar” “leer” y “creer” es capaz de
examinar la realidad y el mundo para “transformarlo”, hacerlo más justo.
La democracia
Bolivariana se define como participativa y protagónica; y requiere de sujetos sociales activos que
piensen, dialoguen, participen y transformen la cultura y la sociedad en la que viven. Su objetivo es
la virtud, incompatible con la opresión y la marginalidad. Hay que eliminar la marginación
230
existente integrándola en la comunidad; usando el método de diálogo y reflexión crítica. Se
convierte al “otro” –al ciudadano/el estudiante/ el creyente-- en un “tú” en una alteridad para el
diálogo, para llegar a la acción liberadora con un “nosotros.” Esta transformación liberadora, que
usa esta metodología no es otra que la que formula que defiende la propia ética de la filosofía de la
Liberación en América Latina271.
La revolución Bolivariana tal como lo define su Constitución es filosóficamente muy
analéctica272 (J.C. Scannone, E. Dussel, O. Ardiles, H. Ortega). Primero, tiene bases pedagógicas y
filosóficas
en
su
carácter
ético-político,
da
un
rol
profético/facilitador
al
filósofo
(revolucionario/presidente/educador), y tiene una metodología que usa la historia de la liberación de
la opresión como referente de significado transformador (Bolívar, Zamora, Sandino…). Tiene una
amplitud que va mas allá del marxismo ortodoxo que busca la vía al socialismo humanista273.
En Venezuela se habla del socialismo del siglo XXI, que es un proceso vivo, abierto, en
discusión. Nace de las bases de la cultura política de la Revolución Bolivariana y que está en busca
crear una ética liberadora –que ahora se define como socialista y democrática. Se plantea la
necesidad de integrar la ética marxista --que supere la lucha de clases y las contradicciones del
capitalismo-- para luchar contra la opresión económica donde quiera que se encuentre, para
encontrar la libertad individual y colectiva. La ética bolivariana, como su concepto de socialismo
no está plenamente definido. Se está desarrollando y creando en su propio proceso educativo, --una
“concientiçao” propia— en su propia lucha dialéctica por la tierra, la salud, el empleo, la vivienda,
la educación. La oligarquía tiene un nuevo papel social, integrarse creando empresas económicas
dentro de una economía que excluye de su dominio los bienes y servicios que garantizan la
subsistencia de todos. El mercado como todo tiene límites y la dignidad humana ni se puede
comprar ni se debe vender. No es sorprendente que estos conceptos revolucionarios, --que no son
sino racionales desde el punto de vista filosófico-- hayan arraigado rápidamente en los países más
pobres de América Latina y al mismo tiempo hayan saltado las alarmas en las filas de los defensores
europeos y norteamericanos del neoliberalismo274.
271
Aunque la filosofía de la Liberación tiene varias corrientes, la ética tiene el objetivo fundamental de superar la
injusticia.
Para las diferentes corrientes ver Carlos Beorlegui,
Historia del Pensamiento Filosófico
Latinoamerincano. (Bilbao: Universidad de Deusto, 2006), 661-699.
272
Ibíd, 698; 705-749. Ver la aplicabilidad del concepto de la dialéctica “analéctica” con el título III de la
Constitución Bolivariana: “De los Deberes, Derechos Humanos y Garantías.” (art.19-31)
273
Beorlegui, Historia del Pensamiento Filosófico, 710.
274
Los medios de comunicación europeos como la BBC de Londres, o la cadena SER en Madrid, y los medios
norteamericanos como la CNN en Washington, tienen una campaña mediática sistemática contra el Presidente
231
4.3. La nueva Ley Orgánica de Educación y su defensa de los derechos humanos
Parte de la guerra mediática fue la polémica que generó la nueva Ley Orgánica de
Educación. No sorprendió, ya que cada iniciativa legal de la Asamblea Nacional -- apoyada por
el Gobierno Bolivariano-- tiene siempre una respuesta negativa y distorsionada en los medios de
comunicación privados nacionales e internacionales.
La crítica dura un par de semanas y
después se apaga poco a poco con la pormenorizada discusión que ocasiona; forzando a los
diputados y medios de comunicación públicos a explicar y clarificar la desinformación. La
dinámica es siempre la misma. Primero, se clarifican los contenidos más “alarmistas” para
aclarar el verdadero significado de la ley. La política comunicacional del gobierno termina casi
siempre en ridiculizar las falsas alarmas para enfrentarlas y diluirlas. Lo mejor del proceso es
que al final, casi todos los venezolanos acaban conociendo el contenido real de la nueva ley.
Estas leyes jamás se leerían con tanta atención, sino fuera por la controversia y las “ollas”
informartivas que organizan los medios de la oposición.
En este caso, los medios privados buscaron confundir y tergiversaron muchos aspectos de
la Ley de educación para presentarla como un paso más “hacia el comunismo totalitario” de
Cuba. Después de la controversia se demuestra –con la Ley en la mano-- que no hay nada más
lejos de la realidad.
Se desinflaron las críticas y las exageraciones extremistas que
supuestamente contenía la Ley. La nueva Ley de Educación no sólo se apega a la Constitución
Bolivariana sino que --analizada cuidadosamente-- tiene mucho en común con la Ley Orgánica
de Educación de 1980 de la IV República. Diríamos que es una mejora significativa de la ley
anterior ya que clarifica muchas ambigüedades pero tiene poco de reforma radical y
revolucionaria.
La nueva Ley establece caminos claros y determinados para alcanzar los objetivos que en
materia de educación fija la Constitución Bolivariana. Diría que comparada con las misiones
educativas del gobierno, la nueva Ley Orgánica de Educación es un texto legal que ratifica los
principios filosóficos de la UNESCO para crear una cultura de la paz. Tal vez las legislaciones
particulares que establece serán más concretas, pero la Ley en si como marco general legal es
Chávez y la Revolución Bolivariana. Es difícil leer u oír en los medios de comunicación europeos o
norteamericanos ninguna noticia positiva sobre lo que está ocurriendo en Venezuela. La información sobre
Venezuela es simple: nada bueno que reportar y todo lo que pasa, cuando pasa, es negativo. Obviamente, existe un
interés económico en ocultar y desinformar sobre lo que ocurre en el país para mantener a la opinión pública
europea y norteamericana ignorante de los que está pasando. Para estos medios, América Latina es periferia y debe
continuar en la pobreza como en el pasado.
232
más sencilla y clara en sus principios que la ley de educación anterior. Reproduce el estatus quo
del sistema actual; y aunque cambia importantes detalles y orientaciones generales del mismo no
destruye la estructura educativa existente en el país 275.
Tal vez los aspectos más renovadores sean la seriedad presupuestaria y los valores
filosóficos que adquiere la educación en el país. Ahora bien, si a la LOE le añadimos las
misiones educativas y las nuevas universidades que ha creado la Revolución; el cambio
educativo en Venezuela se convierte en significativo y estructural. La Revolución no está en la
LOE misma; sino en el acceso obligatorio y gratuito a la escuela, en su financiación prioritaria, y
en la importancia cultural que recibe la educación para la paz y la democracia.
La LOE es una ley programática de sólo 50 artículos que enumera los principios y
valores esenciales. La nueva ley requiere leyes adicionales que cubrirán los aspectos
organizativos de los 155 artículos que la antigua ley tenía. Es quizá en esos textos legales donde
aparecerán los cambios estructurales más determinantes que la educación necesita.
A
continuación ofrecemos un resumen muy completo de la LOE y su comparación con la ley
anterior matizando aquellas diferencias que son significativas. Utilizo un estudio del Ministerio
de Educación del Estado Aragua como base para desglosar los principios que nos interesan de la
Ley en el presente trabajo. Este resumen pone en evidencia la desinformación que medios de
comunicación privados ocasionaron al presentar contenidos distorsionados de la LOE para crear
zozobra y temor en la población. Este cuadro es muy importante porque muestra claramente sus
principios universales fundamentales que son la DUDH, la democracia, la protección del medio
ambiente, la paz, la justicia social y la libertad de pensamiento 276.
LOE 2009
Comparación con la LOE 1980
Capítulo I
Disposiciones Fundamentales
Art. 3
La presente Ley establece como principios de la
educación, la democracia participativa y protagónica, la
responsabilidad social, la igualdad entre todos los ciudadanos
y ciudadanas sin discriminaciones de ninguna índole, la
formación para la independencia, la libertad y la emancipación, la
valoración y defensa de la soberanía, la formación en una cultura
275
Para una comparación detallada de cada artículo de la LOE ver documento “Comparación entre la recientemente
aprobada LOE de 2009 y la LOE de 1980.” Documento publicado por la Secretaria sectorial de Educación del
Ministerio de Educación de Aragua.
276
Ibíd..
233
para la paz, la justicia social, el respeto a los derechos
humanos, la práctica de la equidad y la inclusión….
Se consideran como valores fundamentales: el respeto a la vida,
el amor y la fraternidad, la convivencia armónica en el marco de
la solidaridad, la corresponsabilidad, la cooperación, la tolerancia
y la valoración del bien común, la valoración social y ética del
trabajo, el respeto a la diversidad propia de los diferentes grupos
humanos. Igualmente se establece que la educación es pública y
social, obligatoria, gratuita, de calidad, de carácter laico,
integral, permanente, con pertinencia social, creativa,
artística, innovadora, crítica, pluricultural, multiétnica,
intercultural, y plurilingüe.
La ley de 1980 habla básicamente de
los mismos valores pero en términos
más generales y menos específicos.
Se hablaba de tolerancia, conciencia
ciudadana y mejora del medio
ambiente. La diferencia sería de
énfasis en el ya carácter laico de la
Art.4 La educación es un derecho humano y deber social educación, ahora la religión pasa al
fundamental orientada al desarrollo del potencial creativo de cada
ámbito familiar.
ser humano….
Art.5: El estado docente es la expresión rectora del Estado en
Educación, en cumplimento de su función indeclinable y de
máximo interés como derecho humano universal y deber social
fundamental, inalienable, irrenunciable y como servicio público
que materializa en las políticas educativas…
Articulo.6:
-La ley garantiza:
La ley de 1980 no enfatiza tantas
veces la necesidad educativa y los
valores constitucionales que la
respaldan.
b. La gratuidad de la educación en todos los centros e
instituciones oficiales hasta el pregrado universitario
Igual a la ley anterior el Estado rige
el carácter y el cumplimiento de los
constitucionales de la
c. El acceso al Sistema Educativo a las personas con valores
discapacidad… Así como aquellas que se encuentren privadas educación en el país. La diferencia
de libertad,…
son
los
propios
valores
constitucionales, diferentes a los de la
IV República
-Regula, supervisa y controla:
a. La obligatoriedad de la educación …
c. El obligatorio cumplimiento de la educación en la doctrina de
nuestro Libertador Simón Bolívar, el idioma castellano, la
historia y la geografía de Venezuela;…Así como la obligatoria
inclusión, en todo el Sistema Educativo de la actividad física,
artes, deportes, recreación, cultura, ambiente, agroecología,
comunicación y salud.
d. La creación y funcionamiento de las instituciones educativas
oficiales y privadas…; la legitimidad y procedencia de los
recursos para fundar y mantener instituciones educativas
privadas.
f.. Los procesos de ingreso, permanencia, ascenso, promoción y
desempeño de los y las profesionales del sector …
i. El régimen de fijación de matrícula, monto, incremento,
aranceles… Se prohíbe el empleo de figuras o modos como
fundaciones, asociaciones civiles, sociedades mercantiles, o
234
La gratuidad ahora incluye la
universidad y la educación especial.
La ley anterior habla solo de becas
universitarias (art.8).
El acceso
educativo ahora se amplía a personas
con discapacidad y a personas
recluidas en centros penitenciarios.
Hay una referencia ideológica más
clara al pensamiento de Simón
Bolívar. Para el cual la nueva Ley
usa la palabra “doctrina” que como
sabemos tiene un aspecto ideológico
muy fuerte. La palabra “doctrina” se
usa frecuentemente en materia de
religión
para
determinar
un
pensamiento que no puede ser
cualquier otro mecanismo para ejercer coerción, en la
cancelación de montos superiores a los establecidos por el órgano
rector y demás entes que regulan la materia.
cuestionado bajo ningún concepto.
j. Los programas y proyectos educativos, la creación de
fundaciones destinadas a apoyarlos e instituciones en el sector
educativo de carácter oficial, privado, nacional, estadal,
municipal
-Planifica, ejecuta, coordina políticas y programas:
La ley reconoce la importancia de las
a. De formación, orientados hacia el desarrollo pleno del ser misiones; que no existían en el
humano …
pasado y por lo tanto no estaban
incluidas en la antigua ley. Esta si es
b. Para la inserción productiva de egresados universitarios y
una diferencia significativa, ya que
egresadas universitarias….
crea dos sistemas de educación
paralelos,
aunque
finalmente
c. De territorialización de la educación universitaria,….
integrados.
d. De desarrollo socio-cognitivo integral de ciudadanos y
ciudadanas…
e. Para alcanzar un nuevo modelo de escuela, concebida como
espacio abierto para la producción y el desarrollo endógeno, el
quehacer comunitario, la formación integral,… la consolidación
de la paz, la tolerancia, la convivencia y el respeto a los
derechos humanos.
f. De evaluación y registro nacional de información de
edificaciones educativas oficiales y privadas, de acuerdo con la
normativa establecida.
g. De actualización permanentemente del currículo nacional, los
textos escolares y recursos didácticos …
j. La creación de una administración educativa eficiente, efectiva,
eficaz,
desburocratizada,
transparente
e
innovadora,
fundamentada en los principios de democracia participativa,
solidaridad, ética, honestidad, legalidad, economía, participación,
corresponsabilidad, celeridad, rendición de cuentas y
responsabilidad social.
El nuevo modelo de escuela
básicamente se refiere a los valores
constitucionales que ahora tendrían
-Promueve, integra y facilita la participación social:
las escuelas en el país y da una mayor
a. A través de una práctica social efectiva de relaciones de participación social a la comunidad.
cooperación, solidaridad y convivencia entre …
Esta es una diferencia importante,
b. De las diferentes organizaciones sociales y comunitarias en el que estaba implícita en la ley anterior
funcionamiento y gestión del Sistema Educativo,
c. De las familias, la escuela, las organizaciones sociales y
comunitarias en la defensa de los derechos y en el cumplimiento
de los deberes comunicacionales para la educación integral …
d. En la defensa de la soberanía, la identidad nacional e
235
integridad territorial.
- Promueve la integración cultural y educativa regional y
universal
Las competencias administrativas y
academias son muy similares en
ambas leyes. El estado es el rector,
supervisor y garante de la educación
b. Desde una concepción de la integración que privilegia la
relación geoestratégica con el mundo, respetando la diversidad en el país.
a. En el intercambio de teorías y prácticas sociales, artísticas, de
conocimientos, experiencias, saberes populares y ancestrales, que
fortalezcan la identidad de nuestros pueblos …
cultural.
f. En la autorización, orientación, regulación, supervisión y
seguimiento a los convenios multilaterales, …
Artículo 7. El Estado mantendrá en cualquier circunstancia su
carácter laico en materia educativa, preservando su
independencia respecto a todas las corrientes y organismos
religiosos. Las familias tienen el derecho y la responsabilidad de
la educación religiosa de sus hijos e hijas de acuerdo a sus
convicciones y de conformidad con la libertad religiosa y de
culto, …
Artículo 8. El Estado en concordancia con la perspectiva de
igualdad de género, …
Artículo 9. Los medios de comunicación social, como servicios
públicos son instrumentos esenciales para el desarrollo del
proceso educativo y como tales, deben cumplir funciones
informativas, …
Articulo 10. Se prohíbe en todas las instituciones y centros
educativos del país, la publicación y divulgación de programas,
mensajes, publicidad, propaganda y promociones de cualquier
índole, a través de medios impresos, audiovisuales u otros que
inciten al odio, la violencia, la inseguridad, la intolerancia, la
deformación del lenguaje; que atenten contra los valores, la
paz, la moral, la ética, las buenas costumbres, la salud, la
convivencia humana, los derechos humanos y el respeto a los
derechos de los pueblos y comunidades indígenas y afro
descendientes, que promuevan el terror, las discriminaciones de
cualquier tipo, el deterioro del medio ambiente y el menoscabo
de los principios democráticos, de soberanía nacional e identidad
nacional, regional y local.
Artículo 12. No está permitida la realización de actividades de
proselitismo o propaganda partidista en las instituciones y
centros educativos …
Artículo 13. La responsabilidad social y la solidaridad
constituyen principios básicos de la formación ciudadana de los y
las estudiantes en todos los niveles y modalidades del Sistema
Educativo.
236
La nueva escuela está más integrada
y relacionada, no solo con la familia
sino con otros muchos agentes
sociales públicos y privados. Se
enumeran nuevos que no mencionaba
la ley anterior: organizaciones
comunitarias, empresas privadas y
públicas, centros de desarrollo
endógeno,
medios
de
comunicación,…
Mayor énfasis en la educación laica,
que ya existía en la ley de 1980.
La igualdad de género se enfatiza en
un artículo especial, mientras que la
ley anterior se ignora el tema.
Hay un énfasis en el papel
constructivo y educativo de los
medios de comunicación.
Se especifica y prohíben contenidos
específicos: de odio, contra la paz
social y los derechos humanos. Estos
contenidos ahora son explícitos en la
ley.
Se prohíbe explícitamente, como la
ley anterior, la propaganda y el
proselitismo político y electoral en
las actividades educativas.
Artículo 14. La educación es un derecho humano y un deber
social fundamental concebido como un proceso de formación
integral, gratuita, laica, inclusiva y de calidad,….
La educación regulada por esta Ley se fundamenta en la doctrina
de nuestro Libertador Simón Bolívar, en la doctrina de Simón
Rodríguez, en el humanismo social y está abierta a todas las
corrientes del pensamiento.
La educación ambiental, la enseñanza del idioma castellano, la
historia y la geografía de Venezuela, así como los principios
del ideario bolivariano son de obligatorio cumplimiento, en las
instituciones y centros educativos oficiales y privados.
Artículo 15. La educación tiene como fines:
Los
contenidos
y
materias
obligatorias son las mismas o muy
similares a las que promueve la ley
de 1980
1. Desarrollar el potencial creativo de cada ser humano para el
pleno ejercicio de su personalidad….
2. Desarrollar una nueva cultura política fundamentada en la
participación protagónica y el fortalecimiento del Poder Popular,
en la democratización del saber…
Los fines son parecidos, pero se
especifican más y se añaden ideas
y
referencias
4. Fomentar el respeto a la dignidad de las personas y la fundamentales
formación transversal izada por valores éticos de tolerancia, ideológicas de Bolívar, como la
justicia, solidaridad, paz, respeto a los derechos humanos y la no unidad latinoamericana por ejemplo.
discriminación.
5. Impulsar la formación de una conciencia ecológica …
6. Formar en, por y para el trabajo social liberador, dentro de una
perspectiva integral,…
7. Impulsar la integración latinoamericana y caribeña bajo la
perspectiva multipolar…
Explícitamente habla de la formación
de una conciencia ecológica y no solo
de educación ambiental.
8. Desarrollar la capacidad de abstracción y el pensamiento
crítico mediante la formación en filosofía, lógica y
matemáticas,…
Artículo 16. El Estado atiende, estimula e impulsa el desarrollo
de la educación física, el deporte y la recreación en el Sistema
Educativo, …
Capítulo II
Corresponsables de la educación
Artículo 17. Las familias tienen el deber, el derecho y la
responsabilidad en la orientación y formación en principios,
valores, creencias, actitudes y hábitos en los niños, niñas,
adolescentes, jóvenes, adultos y adultas, para cultivar respeto,
237
También se enfatiza el pensamiento
crítico freiriano, que incluye el
estudio
de
filosofía,
lógica,
matemáticas, la educación física y el
deporte.
amor, honestidad, tolerancia,
independencia y aceptación…
reflexión,
participación,
Artículo 18. Los consejos comunales, los pueblos y
comunidades indígenas y demás organizaciones sociales de la
comunidad, en ejercicio del Poder Popular y en su condición de
corresponsables en la educación, están en la obligación de
contribuir con la formación integral de los ciudadanos y las
ciudadanas, …
Artículo 19. El Estado, a través del órgano con competencia en
el subsistema de educación básica, ejerce la orientación, la
dirección estratégica y la supervisión del proceso educativo…
Artículo 20. La comunidad educativa es un espacio
democrático, de carácter social comunitario, organizado,
participativo, cooperativo, protagónico y solidario. … A tales
efectos:
1. La comunidad educativa está conformada por padres, madres,
representantes,
responsables,
estudiantes,
docentes,
trabajadores administrativos y trabajadoras administrativas,
obreros y obreras de las instituciones y centros educativos...
Artículo 22.
Las empresas públicas y privadas,… están
obligadas a contribuir y dar facilidades a los trabajadores y las
trabajadoras para su formación académica, actualización,
mejoramiento y perfeccionamiento profesional; así mismo, están
obligadas a cooperar en la actividad educativa, de salud, cultural,
recreativa, artística, deportiva y ciudadana de la comunidad y su
entorno.
Las empresas públicas y privadas están obligadas a facilitar
instalaciones, servicios, personal técnico y profesional para la
ejecución y desarrollo de programas en las áreas de formación
para el trabajo liberador, …
Artículo 23. Las promotoras y constructoras de desarrollos
habitacionales públicos o privados están obligadas a construir
planteles o instituciones educativas de acuerdo con las
especificaciones establecidas en la ley.
Capítulo III
El Sistema Educativo
Artículo 24 y 25.
El Sistema Educativo está organizado en:
1. El subsistema de educación básica, está integrado por los
niveles de educación inicial, educación primaria y educación
media. El nivel de educación inicial comprende las etapas
de maternal y preescolar destinadas a la educación de niños y
niñas con edades comprendidas entre cero y seis años. El
238
Los agentes educativos dirigidos por
el estado no solo es la comunidad
educativa: estudiantes, profesores,
administradores, y los trabajadores.
La nueva ley los amplia e incluye a
las familias, los consejos educativos,
trabajadores
los
pueblos,
las
comunidades indígenas y todas las
organizaciones sociales que puedan
aportar a la educación.
La
democracia participativa requiere que
los estudiantes tengan un papel
protagónico en el proceso; deben
participar en la toma de decisiones,
por supuesto de acuerdo con la edad.
Es importante que la nueva Ley
señale claramente que las empresas
públicas
y
privadas
tienen
obligaciones educativas. Tienen que
contribuir
a
la
educación
económicamente y facilitando a sus
trabajadores la posibilidad de estudiar
en sus horarios, instalaciones,
servicios, etc.… Las constructoras
tienen que construir escuelas dentro
de sus planes habitacionales
nivel de educación primaria comprende seis años y
conduce a la obtención del certificado de educación
primaria. El nivel de educación media comprende dos
opciones: educación media general con duración de cinco
años, de primero a quinto año, y educación media técnica
con duración de seis años, de primero a sexto año. Ambas
opciones conducen a la obtención del título correspondiente.
2. El subsistema de educación universitaria comprende los
niveles de pregrado y postgrado universitarios. La duración,
requisitos, certificados y títulos de los niveles del subsistema
de educación universitaria estarán definidos en la ley
especial.
El sistema educativo no varía en sus
lineamientos generales de los de
leyes anteriores, mantiene las
categorías generales de: básica,
media, universitaria o superior.
Artículo 26. Las modalidades del Sistema Educativo son
variantes educativas para la atención de las personas que por sus
características y condiciones específicas …
Son modalidades: La educación especial, la educación de
jóvenes, adultos y adultas, la educación en fronteras, la
educación rural, la educación para las artes, la educación
militar, la educación intercultural, la educación intercultural
bilingüe, y otras que sean determinada por reglamento o por ley.
Artículo 27. La educación intercultural transversa liza al
Sistema Educativo y crea condiciones para su libre acceso a
través de programas basados en los principios y fundamentos de
las culturas originarias…La educación intercultural bilingüe es
obligatoria e irrenunciable en todos los planteles y centros
educativos ubicados en regiones con población indígena, hasta el
subsistema de educación básica.
Artículo 28. La educación en fronteras tendrá como finalidad la
atención educativa integral de las personas que habitan en
espacios geográficos de la frontera venezolana…. Fomentara la
comprensión de las relaciones bilaterales, la cultura de la paz y la
amistad recíproca con los pueblos vecinos.
Artículo 29. La educación rural está dirigida…; así mismo, está
orientada por valores de identidad local, regional y nacional para
propiciar, mediante su participación protagónica, el arraigo a su
hábitat, …
Artículo 30. La educación militar tiene como función orientar
el proceso de formación, perfeccionamiento y desarrollo integral
de los y las integrantes de la Fuerza Armada Nacional
Bolivariana mediante los procesos educativos sustentados en los
valores superiores del Estado, éticos, morales, culturales e
intelectuales que tienen como fundamento el pensamiento y la
acción de nuestro Libertador Simón Bolívar, … dirigidos a
garantizar una educación de calidad en la Fuerza Armada
Nacional Bolivariana, para asegurar la defensa integral de la
Nación, …
Artículo 32. La educación universitaria profundiza el proceso
239
Las
modalidades
del
sistema
educativo son: especial, de jóvenes,
de adultos/as, intercultural, de
frontera, rural, militar y artística.
de formación integral y permanente de ciudadanos críticos y
ciudadanas críticas, … Su finalidad es formar profesionales e
investigadores o investigadoras de la más alta calidad ...
Artículo 33. La educación universitaria tiene como principios
rectores fundamentales los establecidos en la Constitución de la
República, …, la autonomía, la articulación y cooperación
internacional, la democracia, la libertad, la solidaridad, la
universalidad, la eficiencia, la justicia social, el respeto a los
derechos humanos y la bioética, así como la participación e
igualdad de condiciones y oportunidades.
La educación universitaria es similar
a la anterior pero habla de objetivos y
no de principios. Además la nueva
ley define con más precisión el
concepto de autonomía universitaria
y la libertad intelectual
Artículo 34. En aquellas instituciones de educación universitaria
que les sea aplicable, el principio de autonomía reconocido por
el Estado se materializa mediante el ejercicio de la libertad
intelectual, … funciones:
1. basadas en la defensa de la Constitución...
2. Planificar, crear, organizar y realizar los programas de
formación,…de acuerdo con el Plan de Desarrollo
Económico y Social de la Nación,…
La Ley de 1980 es mucho más
especifica ya que explica todo el
3. Elegir y nombrar sus autoridades con base en la democracia procedimiento legal universitario. En
participativa, protagónica y de mandato revocable, …
la nueva ley hay que esperar por las
leyes específicas que pasará la
4. Administrar su patrimonio con austeridad, justa distribución, asamblea nacional para hacer una
transparencia, honestidad y rendición de cuentas,…
comparación completa.
Artículo 35. La educación universitaria estará regida por leyes
especiales y otros instrumentos normativos en los cuales se
determinará
Artículo 36. El ejercicio de la formación, creación intelectual e
interacción con las comunidades y toda otra actividad relacionada
con el saber en el subsistema de educación universitaria se
realizarán bajo el principio de la libertad académica, entendida
ésta como el derecho inalienable a crear, exponer o aplicar
enfoques metodológicos y perspectivas teóricas, conforme a los
principios establecidos en la Constitución de la República y en la
ley.
Capítulo IV
Formación y Carrera Docente
Artículo 37. Es función indeclinable del Estado la formulación,
regulación, seguimiento y control de gestión de las políticas de
formación docente a través del órgano con competencia en
materia de Educación Universitaria, … La formación de los y las
docentes del Sistema Educativo se regirá por la ley especial …
Lo mismo ocurre con relación a la
Artículo 39. El Estado a través de los subsistemas de educación formación de profesores, la ley actual
lineamientos
que
serán
básica y de educación universitaria diseña, dirige, administra y hace
240
supervisa la política de formación permanente para los y las
responsables y los y las corresponsables de la administración
educativa y para la comunidad educativa…
Artículo 40. La carrera docente constituye el sistema integral de
ingreso, promoción, permanencia y egreso de quien la ejerce en
instituciones educativas oficiales y privadas. En los niveles desde
inicial hasta media, responde a criterios de evaluación integral
de mérito académico y desempeño ético, social y educativo, de
conformidad con lo establecido en la Constitución de la
República. Tendrán acceso a la carrera docente quienes sean
profesionales de la docencia,… Una ley especial regulará la
carrera docente y la particularidad de los pueblos indígenas.
Artículo 41. Se garantiza a los y las profesionales de la docencia,
la estabilidad en el ejercicio de sus funciones profesionales tanto
en el sector oficial como privado
Artículo 42. Los y las profesionales de la docencia se regirán en
sus relaciones de trabajo,…. El personal docente adquiere el
derecho de jubilación con veinticinco años de servicio activo en
la educación, con un monto del cien por ciento del sueldo y de
conformidad con lo establecido en la ley especial.
específicos en leyes especiales.
Hay cambios semánticos; no creo que
sea
relevantes
los
cambios
semánticos entre “actualización” del
profesorado de la ley anterior y la
“educación permanente” de los
mismos en la ley actual. Es evidente
que los profesores y maestros tienen
que actualizarse constantemente
durante su carrera docente para poder
hacer un buen trabajo. Estos cambios
semánticos tal vez tengan un
significado diferente una vez que la
leyes especiales se aprueben pero en
su concepto general no parecen
excesivamente relevantes.
Capítulo V
Administración y Régimen Educativo
Artículo 43. El Estado formula y administra la política de
supervisión educativa como un proceso único, integral, holístico,
social, humanista, sistemático y metodológico,…
Artículo 44. La evaluación como parte del proceso educativo, es
democrática, participativa, continua, integral, cooperativa,
sistemática, cuali-cuantitativa, diagnóstica, flexible, formativa y
acumulativa. …
Artículo 45. Los órganos con competencia en materia de
educación básica y educación universitaria, realizarán
evaluaciones institucionales …
Artículo 46. Los certificados, notas, credenciales y títulos
oficiales que acrediten conocimientos académicos, profesionales
o técnicos correspondientes a cualquier nivel o modalidad del
Sistema Educativo, serán otorgados oportunamente …
Articulo 48. Los órganos con competencia en materia de
educación básica y de educación universitaria normarán el
otorgamiento de reválidas o equivalencias de los estudios
realizados en instituciones extranjeras reconocidas, …
Artículo 49. Para el subsistema de educación básica el año
escolar tendrá doscientos días hábiles…
Capítulo VI
241
El estado conserva el papel rector de
la política administrativa del régimen
educativo. Se introduce la evaluación
institucional de los profesores, que no
existía en la ley anterior. Se habla de
un
proceso
democrático
y
participativo. Este sistema existe en
muchos
países,
donde
la
administración educativa evalúa, una
vez por año, a los profesores en un
proceso de observación de las clases.
Financiamiento de la Educación
Artículo 50. El Estado garantiza una inversión prioritaria de
crecimiento progresivo anual para la educación…
Capítulo VII: Disposiciones Transitorias, Finales y
Derogatoria
PRIMERA: Hasta tanto se dicten las leyes que se deriven de la
presente Ley, queda transitoriamente en vigencia el siguiente
régimen sancionatorio para el subsistema de educación básica:
Las disposiciones derogatorias se
centran en las sanciones, ya que se
deroga la ley anterior.
1. Durante el procedimiento de averiguación y determinación de
las faltas cometidas por las personas a que se refiere esta Ley y a
los fines de la decisión correspondiente, los Ministerios del Poder
Popular con competencia en materia de Educación, instruirán el
expediente respectivo,...
Es interesante que haya una
referencia a las faltas de disciplina de
los alumnos y alumnas que serán
tratadas por vía alterna.
10.Los estudiantes y las estudiantes que incurran en faltas de
disciplina, se someterán a medidas alternas de resolución de
conflictos,
11. Contra las sanciones impuestas por el Ministro con
competencia en materia de Educación, se oirá recurso
contencioso administrativo,... se podrá recurrir ante el Ministro
con competencia en materia de Educación.
12. Quienes dirijan medios de comunicación social están
obligados a prestar su cooperación a la tarea educativa y ajustar
su programación para el logro de los fines y objetivos
consagrados en la Constitución de la República y en la presente
Ley. ...
SEGUNDA: En un lapso no mayor de un año a partir de la
promulgación de la presente Ley, se sancionarán y promulgarán
las legislaciones especiales referidas en esta Ley.
TERCERA: En un lapso no mayor de un año a partir de la
promulgación de la presente Ley, se sancionará y promulgará su
Reglamento.
CUARTA: En tanto se promulga la Ley Especial que regulará el
ingreso, ejercicio, promoción, permanencia, prosecución y egreso
en la profesión docente,…se ordena al órgano con competencia
en materia de educación básica a establecer un Reglamento
Provisorio de Ingreso y Ascenso en la Docencia…
QUINTA: Por razones de necesidad comprobada en los
diferentes niveles y modalidades del subsistema de educación
básica y mientras dure tal condición de necesidad, se podrán
incorporar profesionales de áreas distintas a la docencia con las
mismas condiciones de trabajo de los profesionales y las
profesionales docentes.
242
Las
leyes
especiales
que
complementan la presente ley serán
aprobadas muy pronto, el plazo para
las mismas es de un año.
4.4. Impacto cuantitativo de la Revolución Bolivariana en la educación
Aclarada la fundamentación de la nueva LOE y la controversia sobre su carácter
“autoritario,” es importante analizar las estadísticas oficiales del estado de la educación preescolar, básica, secundaria y especial para entender la magnitud de los cambios que ha habido en
esta materia desde la llegada al poder del gobierno bolivariano en 1999. La estadística siguiente
muestra la evolución de la matrícula pre-escolar total y por entidad federal en todo el país.
Alumnos matriculados en educación preescolar, 1994/952006/07
Entidad federal
1994/95
1999/00
2004/05
2006/07
Total
716.529
800.885
974.958
1,047,811
Distrito Capital
Estado:
Amazonas
Anzoátegui
Apure
Aragua
Barinas
Bolívar
Carabobo
Cojedes
Delta Amacuro
Falcón p
Guárico
Lara
Mérida
Miranda
Monagas
Nueva Esparta
Portuguesa
Sucre
Táchira
Trujillo
Vargas
Yaracuy
Zulia
75.993
79.353
78.989
85,353
4.502
32.497
10.452
38.365
15.141
35.790
48.939
10.481
6.243
33.285
20.817
42.818
22.437
86.716
21.230
15.363
19.729
20.439
26.443
17.689
a/
18.467
92.693
5.240
41.554
13.881
42.091
17.701
39.479
51.123
12.004
8.036
40.268
21.070
52.936
24.262
82.664
25.337
17.830
24.176
25.976
28.622
23.227
a/
20.372
103.683
6.741
49.752
16.873
46.974
27.215
50.845
64.510
13.655
10.052
44.227
25.402
65.337
26.319
96.061
28.674
20.733
33.266
32.402
34.989
27.378
11.828
24.858
137.878
7,847
59,686
18,254
48,883
27,068
52,151
72,584
14,010
10,304
46,668
27,525
69,900
26,815
101,913
33,180
22,202
33,475
34,037
36,985
28,060
12,632
25,148
153.131
Fuente: Ministerio del Poder Popular para la Educación
Segundo, el siguiente cuadro muestra el incremento progresivo de alumnos en la
educación básica en el noveno grado. Es importante destacar que en los primeros cuatro años de
la Revolución, la población escolar aumenta en casi cuatrocientos mil alumnos más.
243
Alumnos matriculados en educación básica (9Gr) 1994/95-2006/07
Entidad federal
1994/95
1999/00
2004/05
2006/07
Total
4,249,389
4,448,422
4,857,780
4,984,453
Distrito Capital
358.522
351.601
309.843
315,458
Amazonas
20.952
23.981
28.589
31,746
Anzoátegui
211.927
236.779
267.084
278,113
Apure
82.945
96.162
105.584
109,008
Aragua
255.557
281.838
289.385
288,551
Barinas
118.477
136.106
156.203
161,406
Bolívar
240.406
250.376
286.304
299,924
Carabobo
323.256
346.440
378.861
386,006
Cojedes
49.137
54.241
58.309
60,363
Estado:
Delta Amacuro
24.854
26.967
32.554
34,690
Falcón
156.222
159.412
168.738
173,796
Guárico
127.333
138.212
140.650
142,003
Lara
286.333
296.337
313.161
321,688
Mérida
139.034
148.025
151.785
150,794
Miranda
398.817
354.166
432.295
452,617
Monagas
134.556
141.806
160.077
168,412
Nueva Esparta
64.016
70.898
76.894
78,902
Portuguesa
139.274
147.673
171.128
173,775
Sucre
181.809
181.106
182.949
186,558
Táchira
188.926
194.547
207.636
209,703
Trujillo
124.406
130.071
132.230
133,995
Vargas
a/
a/
58.822
59,136
Yaracuy
100.181
104.953
114.115
115,025
Zulia
522.449
576.725
634.584
652,784
Tercero, igualmente la educación media pasa de 400.000 alumnos a 700.000 en un
período de seis años. Esto significa que los alumnos de la educación básica ya no dejan sus
esudios sino que siguen estudiando y mejorando su formación personal y profesional.
La
Revolución con la mejora de la infraestructura de las escuelas, la contratación de profesores y
con las misiones educativas ha creado un clima de interés general de aprovechar la oportunidad
de mejorarse personalmente estudiando.
El espíritu de las misiones educativas ha puesto
básicamente a toda la familia a estudiar.
244
Alumnos matriculados en educación media, 1994/95-2006/07
Entidad federal
1994/95
1999/00
2004/05
2006/07
Total
333.704
422.800
619.898
711,305
Distrito Capital
33.423
35.294
42.399
46,629
Amazonas
1.050
1.606
3.022
3,696
Anzoátegui
15.864
21.883
31.099
36,491
Apure
3.508
5.840
10.756
12,704
Aragua
23.395
31.219
43.724
50,350
Barinas
6.332
9.651
16.250
20,285
Bolívar
18.125
24.836
35.399
41,587
Carabobo
27.315
32.571
54.028
62,801
Cojedes
3.576
4.786
6.809
8,300
Estado:
Delta Amacuro
1.410
1.557
2.654
3,538
Falcón
12.022
16.311
22.544
25,740
Guárico
8.479
10.050
15.911
18,783
Lara
21.585
29.067
41.440
43,976
Mérida
11.146
15.418
22.641
25,290
Miranda
34.680
38.287
56.280
65,591
Monagas
10.517
12.542
19.494
22,190
Nueva Esparta
5.273
7.117
9.429
11,443
Portuguesa
8.634
10.409
18.921
21,309
Sucre
13.172
15.553
21.639
24,519
Táchira
16.920
21.732
30.531
35,763
Trujillo
9.077
12.696
17.151
19,284
Vargas
a/
a/
7.424
8,720
Yaracuy
7.679
9.612
13.538
16,465
Zulia
40.522
54.763
76.815
88,851
Cuarto, es importante señalar que la educación especial casi se triplica en el número de
estudiantes. En siete años de 68.000 estudiantes en educación especial se pasó a 190.000. La
misión José Gregorio Hernández ha motivado a incorporar a miles de niños a la educación que
anteriormente estaban confinados en sus casas sin oportunidad de relacionarse y convivir con
otros jóvenes.
245
Alumnos matriculados en educación especial, 1994/95-2006/07
Entidad federal
1994/95
1999/00
2004/05
2006/07
Total
58.108
67.883
167.267
190,036
Distrito Capital
11.970
12.066
16.041
22,106
Amazonas
257
209
737
636
Anzoátegui
2.725
3.491
7.649
7,373
Apure
1.411
1.251
2.617
3,002
Aragua
2.289
3.234
17.546
21,012
Barinas
1.818
2.363
5.741
5,946
Bolívar
1.829
4.637
8.805
7,089
Carabobo
4.097
3.552
11.935
18,744
Cojedes
1.323
1.755
3.850
2,536
Delta Amacuro
276
454
1.423
2,138
Falcón
1.916
2.333
7.539
9,391
Guárico
1.827
539
1.463
2,452
Lara
3.244
2.952
7.985
6,198
Mérida
1.436
1.262
6.278
8,559
Miranda
7.471
7.928
13.109
10,748
Monagas
526
967
4.083
4,877
Nueva Esparta
2.463
3.081
4.869
6,570
Portuguesa
1.048
1.273
3.653
3,372
Sucre
1.685
1.654
4.789
5,920
Táchira
1.861
1.730
6.198
8,251
Trujillo
1.362
1.805
2.586
3,225
Vargas
a/
a/
2.536
2,561
Yaracuy
1.998
1.495
7.141
4,386
Zulia
3.276
7.852
18.694
22,944
Estado:
a/: Hasta el periodo escolar 1999/2000, la información está incluida en el Distrito capital,
antes Distrito Federal
Fuente: Ministerio para el poder popular para la Educación
4.5. Conclusión: la educación método de integración social
Los problemas sobre la orientación de la educación no sólo existen en América Latina sino
en la mayor parte del mundo. Tanto en los Estados Unidos como en los países europeos el término
integración está sobrentendido. Es básicamente un presupuesto formal y se da por hecho. Se refiere
246
vagamente a la integración económica que viven las clases medias en un sistema liberal
democrático, donde el poder se delega en una clase política. El trabajo de estos sistemas educativos
en los países avanzados no es otro que el de mantener el estatus quo nacional e internacional
favorable en este caso a sus intereses particulares. En América Latina la clase media es pequeña y
frágil, y los sectores de trabajadores y marginados son mayoritarios, y la palabra “integración” tiene
connotaciones claramente revolucionarias.
Así ocurre en Venezuela.
El término implica la
transformación de millones de “seudo-ciudadanos” en participantes, ciudadanos “activos,” y
“protagónicos” de su propia democracia.
La educación no sólo es “de derecho” sino “de
necesidad;” ya que una sociedad oprimida por la pobreza y el analfabetismo tiene el camino
trancado para encontrar la verdadera democracia y el desarrollo político277.
Juan Miguel Fernández-Balboa que aplica las ideas de Freire a la situación norteamericana
que sirve para contrastar la diferencia entre estas dos situaciones tan dispares.
En EE UU vivimos en una realidad “construida,” quizás virtual, que limita y distorsiona
nuestra percepción y las soluciones a los problemas que se nos presentan. En la sociedad
estadounidense de hoy no somos miembros integrados sino “participantes adaptados”278.
Esta adaptación acrítica del ciudadano estadounidense --de la habla Fernández-- genera
actitudes individualistas, derrotistas y paralizadoras. Tiene sus bases filosóficas en las posturas
post-modernistas, que encerradas en el “yo,” son incapaces de llegar al “tú” y mucho menos al
“otro.” De ahí, la dificultad profunda de una persona del “primer mundo” para entender los
problemas del “tercer mundo.” El concepto de liberación es radicalmente distinto. La liberación
del “primer” mundo –diría Freire-- está centrada en librarse del “consumismo” de simplificar el
“yo” para no perder su esencia. La liberación en el “tercer” mundo sigue siendo “colectiva” y
277
Incorporar a “los marginados” e integrarlos al proceso democrático es básicamente el proceso bolivariano. El
resultado ha sido la creación de un proceso político donde los antes marginados han tomado cierto control político
de las élites, que lo monopolizaban anteriormente. Los que antes siempre hablaban de política ahora callan –se
despolitizan-- no les interesa lo que ocurre; y los que antes callaban –despolitizados e ignoraban la política-- ahora
participan y hablan. El desafío de la Revolución Bolivariana ha sido en términos de Scannone integrar a los
opresores, que al perder parte del control directo y absoluto de lo que pasa, asumen básicamente tres posturas. Unos
dialogan y participan en el sistema; otros se auto marginan y se desentienden de lo político; y un tercer grupo trata
de deslegitimar y destruir los espacios nuevos creados para el diálogo. El número de los dialogantes se incrementa
pero muy lentamente al proceso, lo que hace difícil que podamos hablar de una oposición constructiva y
democrática en Venezuela.
278
Juan Miguel Fernández-Balboa, "Critical Pedagogy: Making Critical Thinking Really Critical." (trabajo presentado
en la 12 Conferencia Anual del Pensamiento Crítico y la Reforma Educativa, Sonoma State University, California,
Augusto 1992), 1. Fernández-Balboa pertenece al mismo grupo de radicales multiculturalitas de Giroux y McLaren que
se definen como pedagogos freirianos.
247
obliga a la creación comunitaria para superar la pobreza, el analfabetismo y el colonialismo. La
crítica post-modernista genera praxis negativas que evitan la responsabilidad individual y asumen
posiciones deterministas en el primer mundo. En eso se parece mucho a la psique de la mente
colonizada, alienada, que paraliza al individuo frente a la realidad. Una psique que genera actitudes
de mejor “no saber,” típicas de una ciudadanía apática:”no me gusta la política, la política es para
los políticos”. Una ciudadanía que cuando conoce “condena” y está en “desacuerdo,” pero no actúa
sobre su propio conocimiento. Esto permite fenómenos como la destrucción ecológica --que
aparece como un fenómeno irreversible e inevitable. Una ciudadanía que condena de palabra la
violación de los derechos humanos, pero condona hechos como la tortura y las guerras ilegales.
Una ciudadanía consciente que la tortura es inmoral, anti-constitucional, y dañina a la dignidad no
sólo del que la sufre sino del que la practica; pero condona y justifica su uso para “casos especiales”
y permite el funcionamiento de un campo de concentración en Guantánamo, Cuba.
Las políticas de estado en el “primer” mundo siempre se enmarcan en la justificación de la
inversión militar necesaria para pelear guerras o “cruzadas” contra enemigos no tangibles como el
terrorismo, las drogas, la inmigración ilegal, etc. El pueblo delega su poder a la clase política, no
participa, si acaso lo hace en las elecciones presidenciales o legislativas; y simplemente observa el
éxito o el fracaso del político de turno. Mientras la clase política hace y deshace a su gusto, el
ciudadano es incapaz de actuar con eficacia y mucho menos detener la dinámica auto-destructiva de
un estado --que ha dejado de ser democrático-- y que actúa contra la voluntad mayoritaria de su
pueblo.
Las contradicciones continúan por años y los problemas y las crisis se repiten
periódicamente. Es curioso que la ciudadanía esté educada --tiene incluso educación media y
superior a nivel técnico y profesional-- pero carece de capacidad crítica y de vocación política
suficiente para involucrase y defender sus valores individuales y colectivos.
¿Qué tipo de
democracia es ésta? ¿Cómo es esto posible en países educados, tecnológicamente avanzados, de
gran tradición “democrática” y con economías fuertes produzcan una ciudadanía acrítica, que
permite la impunidad en las acciones de sus gobiernos?
En este sentido la Revolución Bolivariana al definir al ciudadano como un ser protagónico y
participativo, que hace política a diario, cambia el “estatus quo” del ciudadano en el sistema liberal
de la democracia delegativa. La reacción, de toda la clase política tanto en EE UU como en Europa,
no se ha hecho esperar. Las clases políticas dominantes de EEUU y Europa tienen que defender sus
intereses y su “forma de hacer política” -- esconder la incongruencia de sus decisiones políticas,
248
justificar la burocracia y fomentar la pasividad ciudadana. A ninguno de ellos les interesa que
emerjan democracias “diferentes.” Menos, aquellas que exigen y practican el voto directo del
pueblo y que someten a sus líderes y programas periódicamente a referéndum popular y revocatorio.
Esas prácticas son una amenaza a la política “delegativa” dominante donde la burocracia legal y
administrativa favorece el dominio de los “lobbies” de los grandes intereses corporativos que
despolitizan e ignoran al ciudadano de la calle.
La cultura de la participación directa de la Revolución Bolivariana tiene como objetivo
“lograr la integración efectiva y afectiva en la vida social del ciudadano, que haga capaz a la
persona de sentir su barrio, su pueblo, su ciudad y su nación como propia”279. Esta cultura de
participación se crea primero en las escuelas y en los centros educativos del país. No es fácil, ya
que necesita crear un diálogo constante, realista, entre las personas y las diferentes entidades
sociales. El ciudadano participa en los centros comunales, partidos políticos, misiones, círculos
bolivarianos, batallones del partido, grupos cívico-militares, las radios y televisiones comunales y
dialoga con un estado que tiene que responder a las demandas del pueblo y cuya función es facilitar
y abrir nuevas vías de participación. El partido político sólo sirve si ayuda a diseñar mejores
políticas y crear más participación, movilización, celeridad y efectividad en resolver los problemas
sociales. La función del estado es escuchar y responder a la comunidad con recursos económicos y
técnicos; incluyendo la planificación de programas de estado que garanticen los derechos
constitucionales de todos. Como consecuencia a veces ocurre algo muy interesante hay una
saturación del debate político280.
La sumisión había sido impuesta y requerida no sólo a las mujeres, trabajadores,
campesinos, pobres, indígenas, ancianos y estudiantes en América Latina. También, ha sido
impuesta a las personas que viven en los centros de un sistema capitalista que transforma su rol
original de “ciudadanos” --autónomos y libres-- para reducirlos a “consumidores” pasivos en un
mercado privilegiado. No cabe duda que aquellos que confunden la libertad con la “capacidad de
compra” necesitan romper sus cadenas tanto o más que los marginados de América Latina. Es
interesante que Paulo Freire no solamente sea popular en América Latina sino también ahora en los
EE UU. La integración presenta el mismo desafío para un modelo educativo moderno y crítico.
279
Ezequiel Ander-Egg, Acción Municipal, Desarrollo Local y Trabajo Comunitario. (Caracas: Universidad
Bolivariana de Venezuela, 2007) 83.
280
Durante el golpe de estado de abril del 2002, fue el pueblo, la gente del barrio la que salió a la calle a defender la
democracia y reclamar a los militares la defensa de la Constitución. Los militares constitucionalistas se decidieron a
apoyar al Presidente cuando vieron a la mayoría del pueblo en la calle quería la democracia.
249
En la América Latina, la liberación –que propone Paulo Freire y todas las filosofías de la
liberación— de una forma u otra requieren la integración de los grupos marginados a la democracia.
No ya porque es justo sino porque su contribución es irrenunciable para cambiar la cultura
mediocre e injusta que ofrece la “globalidad” y que promueve la Organización Mundial del
Comercio. De lo contrario perderíamos una parte significativa de nuestra propia dignidad humana,
para convertirnos simplemente en “participantes adaptados” a la injusticia281. En EE UU el reto es
cambiar la indiferencia política de las clases medias, reactivar al ciudadano e integrar el clasismo y
el racismo imperante en el sistema educativo, donde las escuelas de las comunidades pobres sufren
abandono y marginación educativa.
El problema de la integración social y política es global, va escalando desde las personas, a
las comunidades, a las naciones y finalmente cada continente. Es un problema finalmente que
afecta a la universalidad de los derechos humanos y que afecta a toda la humanidad.
Es
independiente del estatus económico-político del estado (centro o periferia) y se resuelve
contestando algunas de las preguntas que podemos inferir de la ética política del papel de estado en
el mundo actual: ¿Existe un estado que busca ver el rostro al marginado? ¿Qué poder y papel tiene
el ciudadano en la política del día a día? ¿Qué concepto de ciudadanía y autoestima tiene de sí
mismo el ciudadano? ¿Qué individuos/grupos viven entre nosotros y no todavía no están integrados
a la sociedad? ¿Quiénes son nuestros líderes y que conceptos de integración o exclusión manejan?
¿Se están creando o cerrando espacios de participación democráticos para incluir a los excluidos en
sus propios términos? ¿Qué concepto de dignidad humana y justicia social tenemos y que nivel de
la misma existe en la sociedad en la que vivimos 282?
Es interesante que Freire sea reconocido en Estados Unidos como el pedagogo para
recuperar a los marginados --principalmente a los pobres y a las minorías lingüísticas y culturales
incluyendo aquellos que hablamos español. Debería reconocerlo también el pedagogo necesario
para “despertar” a los “aletargados ciudadanos” que van perdiendo poco a sus derechos civiles y
281
"Integración en nuestro propio contexto, no simple adaptación es algo distintivo y peculiar a nuestra naturaleza
humana. La integración es la capacidad de adaptarnos al medio que nos rodea y además usar nuestra capacidad crítica
para tomar decisiones y transformar el contexto que nos rodea." Ibíd., 4.
282
Definiciones de injusticia social, ver Fernández-Balboa, "Critical Pedagogy," 2-3. Estas preguntas habría que
hacerlas a todas las personas en sus respectivos países. En este momento si hiciéramos un examen ético dusseliano que
contrastara la parte fundacional y crítica de la arquitectónica liberadora contestando estas preguntas que formulo;
veríamos que pocos líderes hablan de estos temas. Hugo Chávez (Venezuela) y Evo Morales (Bolivia), con Cuba desde
otro ángulo y quizás Argentina y Brasil --desde una semi-periferia que se ve al borde del abismo-- son los únicos que las
formulan abiertamente. Los demás países predican una “adaptación” al sistema internacional, un “sálvese quien pueda”
personal y nacional buscando un Tratado de Libre Comercio (TLC) con EE UU.
250
políticos, conquistas sociales de la lucha de generaciones anteriores. Una educación necesita de la
memoria histórica para no perder su identidad y entender su presencia en el mundo real, como bien
señala Fornet-Betancourt.
La pérdida de derechos ciudadanos no se justifica ni en “lucha anti-
terrorista” ni en la “seguridad nacional” y afecta personalmente el vivir, el día a día ciudadano. Si
cambiamos la palabra educación por filosofía podríamos decir -como diría Freire-- la filosofía de la
Liberación o su ética es la práctica de la libertad en un contexto de responsabilidad de integración
social, que es la esencia de la democracia auténtica.
¿Cuál es el rol del intelectual? ¿Del tercero? ¿Del concienciado? ¿Del filósofo? ¿Del
educador? ¿Del ciudadano? ¿Del socialista? ¿Del cristiano? Coincidiendo con la ética de la
Liberación de Dussel y Scannone, Fernández-Balboa señala: "pensar no puede ser reducido a
manejar técnicas prácticas de una forma acrítica, aburrida y problemática”283. Freire, coincidiendo
con muchos cristianos de la liberación, socialistas y filósofos diría que: "la responsabilidad no puede
ser adquirida intelectualmente, necesita ser experiencial"284. Algunos budistas van más lejos y
dicen que “sólo existe el conocimiento experiencial, lo demás es simplemente ilusión.” Aquí una
vez más hace falta cuestionar el rol de la universidad e intelectualidad europea y norteamericana que
se concentra en el avance científico y la conquista de la naturaleza y deja de lado los criterios
filosóficos fundamentales de integración social que necesita una sociedad verdaderamente
democrática. Los problemas humanos sociales y ambientales se resolverán usando primero el
sentido común y luego la ciencia.
La supremacía de la ciencia es algo nuevo, antes e
inmediatamente después de la II Guerra Mundial los científicos eran individuos muy
comprometidos y preocupados de los problemas filosóficos y políticos --hay muchos ejemplos:
Bertrand Russell, Linus Pauling, Albert Einstein, etc. Creo que el filósofo alemán Jurgen Habermas
responde muy bien la pregunta de por qué la universidad –particularmente en los países
desarrollados— está como está y la preocupante supremacía de la ciencia sobre las humanidades y
la filosofía para resolver los problemas de la humanidad. Según Habermas, el conocimiento está
organizado en base a tres tipos de interés humano:(a) técnica, (b) práctica, y(c) emancipatorio.
-El primer tipo de interés técnico se refiere a aquello que hace que los humanos puedan controlar
los objetos naturales y adquirir dominio de la tecnología necesaria para desarrollas estas
habilidades. Este es un conocimiento instrumental en la forma de la explicación científica.
283
284
Ibíd. 1.
Ibíd. 16.
251
-El segundo tipo de interés es el práctico; que sirve básicamente para interpretar el ambiente en el
que vivimos. Sirve para adaptarnos y modificar el ambiente que nos rodea en un momento
determinado. Esta interpretación siempre está sujeta a limitaciones sociales y culturales que
limitan la acción.
-El tercer tipo de interés es el emancipatorio; y tiene que ver con ir más allá de lo técnico y lo
práctico, tiene que ver con muestra lucha por la “libertad” 285.
Obviamente, el conocimiento emancipatorio, en una sociedad que se cree ya “libre,” queda
minimizado por los conocimientos de interés práctico y teórico. En América Latina, conscientes de
la falta de libertad se necesita una matriz emancipadora o de la liberación, que Freire establece con
criterios específicos.
La liberación se alcanza con una pedagogía crítica teórica/practica que (a)estudia
relaciones y prácticas sociales, (b)eleva la sensibilidad social sobre las injusticias y
contradicciones que existen entre nuestros valores y las condiciones sociales existentes, y (c)busca
las herramientas políticas y las soluciones creativas que hay a la mano para crear una sociedad
mejor286.
Pienso que la Revolución Bolivariana ha llevado a la práctica un intento honesto de la
liberación que muy bien acompaña la praxis freiriana. Concuerda con la filosofía que defiende
Henry Shue en su defensa de los derechos humanos y con los objetivos de fomentar el diálogo
intercultural del que nos habla tan elocuentemente Fornet-Betancourt. Después de todo, el concepto
de la persona humana es el mismo para todos ellos.
Una persona debe ser capaz de encontrar y escuchar al otro, reflexionar a sí mismo, tomar
su responsabilidad y su papel en la creación de una cultura nueva; en resumen reflexionar sobre su
propio poder humano287.
Henry Shue enfatiza el derecho a la educación como necesidad básica para el disfrute de los
demás derechos y corresponde a la sociedad misma determinar los contenidos y el alcance de los
minimos educativos necesarios para el ejercicio saludable de la libertad y la participación en la
democracia. Digamos que los niveles de educación deben ser suficientes para que el ciudadano
pueda participar políticamente y afectar directamente en la toma de decisiones que le afecten en
particular y a la sociedad en general. Henry Shue coincide con Freire en la necesidad de una
educación de todos para la integración social.
285
Jurgen Habermas, Knowledge and Human Interests. (Boston: Beacon Press, 1972). También ver, , Jurgen Habermas,
Toward a Rational Society, Student Protest science and Politics (Boston: Beacon Press, 1971).
286
Fernández-Balboa, "Critical Pedagogy," 1.
287
Ibíd.
252
Capítulo V.
Desarrollo del tercer derecho a la subsistencia: la salud para todos
El Estado promoverá políticas orientadas a elevar la calidad de vida, el bienestar colectivo
y el acceso a los servicios. Toda persona tiene derecho a la protección de la salud y el deber de
participar activamente en su protección y defensa y el de cumplir con las medidas sanitarias y de
saneamiento que establezca la ley, de conformidad con los tratados y convenios internacionales
suscritos y ratificados por la República (art. 83. Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela)
La salud es un derecho fundamental, garantizado por el estado, y parte del derecho a la
subsistencia básica de la persona y a la vida. Está en el mismo orden a la alimentación y la
educación ya que como explica Shue “son requisito fundamental para la participación efectiva de la
persona en la sociedad y para el disfrute personal de los demás derechos humanos288.” Para Henry
Shue el derecho a la salud está conectado con el acceso a un medio ambiente sano que incluya el
aire limpio, el agua potable, la prevención de enfermedades; además de acceso a la medicina
curativa para aquellos que la necesitan aunque no puedan pagarla289.
La mayoría de la personas en el mundo que sufren de malnutrición también sufren otras
enfermedades, simplemente porque sus defensas son demasiado débiles. Cientos de millones de
ellos son niños y adolescentes. Un gran porcentaje de los adultos que sufren malnutrición, además
de enfermos y hambrientos están también desempleados; y todo forma parte de un círculo vicioso.
Cuando hablo de los derechos de subsistencia hablo derechos que incluyen medidas y provisiones
que garantizan la misma y afectan directamente a aquellos que no pueden sostenerse por sí
mismos290.
Obviamente, la existencia de altos índices de pobreza e indigencia son claros indicadores
que señalan la multiplicación exponencial de los problemas de salud y la saturación de sistema
público que provee el estado cuando lo hay. Por tal motivo, el sistema público de salud se
convierte en un servicio de emergencias hospitalarias y de prevención de epidemias como lo son la
malaria y el dengue entre otras enfermedades infecciosas. La falta de acceso a la salud preventiva y
primaria; y por supuesto a un eficiente servicio de emergencias es una violación de los derechos
humanos. Una violación que en Venezuela fue un factor más que contribuyó a los altos índices de
pobreza y la marginación que existieron durante la IV República.
288
Henry Shue, Basic Rights, 71
Ibid., 23-25
290
Ibid, 23-24.
289
253
En 1936 se crea el
Ministerio de Salud y Asistencia Social como una necesidad
económica para crear las condiciones necesarias para atraer la inversión extranjera. Fue una
época importante para la lucha contra las epidemias y se crearon varias de las infraestructuras
hospitalarias que existen hoy en el país. Se sentaron las bases para el sistema público de salud.
Hay que reconocer que el sistema público de salud venezolano iniciado antes de la II Guerra
Mundial era frágil e influenciado por el concepto dominante del modelo norteamericano. El 24 de
julio de 1940, se promulga la primera Ley del Seguro Social y en 1944 se crea el Instituto
Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS).
Surge en Venezuela el primer y principal
instrumento de la seguridad social, al que seguirán la creación de otros institutos de previsión
social para distintos grupos de trabajadores. Muchas de estas medidas ocurren con el gobierno de
Angarita y Rómulo Gallegos y coinciden con las políticas sociales que avanza Franklin D.
Roosevelt en los EE UU para combatir la Gran Depresión en su país. La década de los cuarenta
fue importante ya que se caracterizó por la creación y expansión de los programas de protección
social en todo el territorio nacional. Podríamos argumentar que los mejores años para el
desarrollo social y de la salud, coinciden con la Reforma Agraria y se concentran en el período
de 1936 a 1949, durante los gobiernos de Medina Angarita y Rómulo Gallegos. Justamente, el
período histórico anterior a la implementación del modelo de seguridad nacional hemisférico por
parte de los EE UU que mencionamos anteriormente.
Es importante señalar que en los EEUU se considera la salud como un sector más de la
economía de mercado; es parte del sector servicios. Hay mucha regulación y reglamentación, pero
la mayoría de las mismas son para proteger el propio funcionamiento del mercado de la salud y que
incluye a las compañías de seguro médico privado. Las leyes son mecanismos fundamentalmente
dirigidos a la protección del consumidor y del funcionamiento del libre mercado frente a posibles
oligopolios. El estado sólo interviene en materia de salud en casos extremos; como por ejemplo
epidemias. Entonces, se organizan desde el gobierno federal con la participación de las industrias
privadas campañas obligatorias de vacunación en las escuelas y en las universidades. El estado
también interviene para regular el consumo legal de medicinas, drogas y medicamentos en el país.
La preocupación del estado no es controlar los precios de los medicamentos sino la calidad y la
seguridad de los mismos. El control público es mínimo y el sistema básicamente funciona bajo el
control de las propias compañías farmacéuticas, aseguradoras y clínicas privadas que son los
principales proveedores de la salud en el país. La función del estado y de su agencia Federal Food
254
Administration (FFA) es prevenir que alimentos y medicinas no hagan daño a la salud de los
estadounidenses.
También agencias del gobierno determinan mediante la investigación
epidemiológica casos en los cuales se requiere la intervención del estado para prevenir o evitar
epidemias. La función del estado es la de árbitro para el control de calidad de los servicios al
consumidor y de regulador de la competencia capitalista; pero no tiene responsabilidad de
proveedor directo de la salud. La salvedad fundamental es el gigantesco sistema hospitalario militar
--que aunque tiene financiamiento del presupuesto del estado-- funciona operativamente de forma
similar a los hospitales civiles privados.
En Venezuela la situación no es la misma; ya que existe un sistema público de salud. Sin
embargo, las tendencias que favorecen “la privatización” del sistema público eran evidentes por
décadas. El estado favorecía el sistema privado capitalista de salud sobre el sistema público
haciendo una política de omisión. Es decir dejando que los hospitales del estado se deterioraran y la
calidad de sus servicios bajara. Esta tendencia fue evidente durante la IV República y se agudizó
aún más con la crisis que trajo el neoliberalismo. Los presupuestos del gasto en el sector salud por
parte del estado así lo indican, ya que disminuyen progresivamente de un 7.5% (1950) a 6.1%
(1980). Es decir, existía una tendencia y presiones de la industria de la salud y entre los propios
médicos y políticos de la IV República a seguir el modelo estadounidense.
Este concepto
filosóficamente considera la salud no como un derecho sino como un servicio y como tal debería
dejarse en manos del libre mercado. Es más este servicio estaba fundamentalmente más y más en
manos del sector privado que estaba creciendo y que ofrecía los servicios médicos que requería la
ciudadanía.
¿Es la salud un derecho o un servicio? La respuesta a esta pregunta es la clave para
determinar qué tipo de sistema de salud existirá en una comunidad. La IV República con su
tendencia claramente a la reducción presupuestaria y el deterioro del sistema hospitalario y de salud
pública en el país estaba transformando “de facto” un derecho constitucional en un servicio. El
sistema público necesitaba más inversión en todos sus niveles, ya que la población se había
duplicado y aumentaban progresivamente las necesidades del sector. Habrá que esperar a la
llegada de la Revolución Bolivariana (1999), para que se vuelvan a incrementar significativamente
los gastos del estado en el sector salud, alcanzando ya en el 2007 un 2,25% del Producto Interior
255
Bruto (PIB) 291. La Constitución Bolivariana definirá definitivamente la salud como un derecho
fundamental y básico de todos los venezolanos.
Para cumplir su compromiso constitucional la Revolución adoptará el modelo de salud
pública reconocido como el más efectivo y eficiente por la Organización Mundial de la Salud
(OMS), el cubano.
Esto ofenderá a los intereses de la industria privada médica nacional y
extranjera, que obviamente no quiere que el estado sea un competidor serio en el sector salud. Y
ofenderá al Gobierno de los Estados Unidos que mantiene un bloqueo ilegal económico y político a
Cuba. El ingreso de médicos cubanos a Venezuela generará todo tipo de acusaciones contra el
Gobierno Bolivariano, desde ser un país
“comunista,” a ser un peligro para la “seguridad
hemisférica” de los Estados Unidos.
Esta política supuso un cambio radical, estratégico y revolucionario con respecto al sistema
anterior. El presupuesto para la sanidad en la IV República era básicamente destinado a mantener
un servicio mínimo en hospitales ya deteriorados que se mantenían funcionando con o sin los
mínimos recursos. La reducción del presupuesto público para la salud primaria había sido todavía
más drástica, ya que disminuyó del 28% (1950) al 14% (1980). Es interesante destacar que existió
un bajón presupuestario entre los años de la dictadura de Pérez Jiménez y los mejores años de la
“democracia” de la IV República. Todo ello a pesar de que en la década de los setenta y principios
de los 80 el estado venezolano tenía recursos económicos y humanos más que suficientes para
mejorar la salud primaria y los hospitales públicos que había en el país. Esto contradecía los
compromisos retóricos constitucionales y los compromisos que el propio estado venezolano había
suscrito, ya que había firmado todos los tratados y convenciones internacionales sobre la materia.
En resumen, durante la IV República el estado del sistema público de salud pasó de estar enfermo a
estado grave y abandonado a su suerte. A partir de 1980, la situación se agravó con los recortes
presupuestarios que causaron la crisis de la deuda externa y las políticas económicas impuestas
desde el FMI y el Banco Mundial. Las políticas neoliberales del segundo gobierno de Carlos
Andrés Pérez tuvieron un efecto negativo añadido que incluso afectó al sector de salud privado y
Venezuela --junto con Perú— llegó a ser el país con los medicamentos más caros de toda América
Latina.
291
Ver “Inversión social en Salud como % del PIB” en Hugo Chávez Frías, “Revolución Bolivariana, 9 Años de
Logros.” (Caracas: Ministerio del Poder Popular para la Comunicación e Información, 2008), 36.
256
La falta de salud se sumó a la pobreza y al analfabetismo. El deterioro al acceso a la salud
en el país creó una polarización clasista que acentuaba las radicales diferencias que existían ya en el
mercado laboral. Hasta la llegada del gobierno bolivariano la salud exponía --con gran claridad-- la
diferencia entre las dos venezuelas. La salud era la frontera más obvia de las clases sociales en el
país. Por un lado, el sistema público sumido en el abandono absoluto, donde la ineficiencia, la
corrupción y la impunidad eran imperantes y que supuestamente atendía al 70% de los venezolanos
--aquellos que no podían pagar a un médico privado. Por el otro, un sistema de salud privado, con
un sistema de salud primaria y una red hospitalaria bastante eficiente, que atendía la necesidades del
30% de la población --aquellos con suficientes recursos económicos que vivían en los principales
centros urbanos. El sistema público con el paso de los años era cada vez más pobre y su
decrecimiento presupuestario deterioraba más y más su capacidad e infraestructura292.
hospitales
Los
y las instituciones de la salud, incluyendo aquellos que dependían del Instituto
Venezolano de Seguridad Social (IVSS), sobrevivían en el abandono, no tenían ni camas ni
medicinas suficientes. Ni siquiera los servicios de urgencias públicos más necesarios tenían el
abastecimiento regular requerido en la mayoría de las instituciones de salud de cualquier país.
En la IV República existían más de cincuenta entidades promovedoras de servicios de salud
en el sector público. Las más importantes eran el Ministerio de Salud, el IVSS, el Instituto de
Previsión y Asistencia Social del Ministerio de Educación, las gobernaciones estadales, etc.
Muchas organizaciones pero mal servicio, en el interior del país la situación era particularmente
grave ya que muchas zonas o estados no tenían médicos suficientes, ni infraestructuras básicas, ni
ambulancias, ni quirófanos, ni material quirúrgico, ni antibióticos, etc... Toda la salud pública
giraba en torno al centro hospitalario que funcionaba, dependiendo de los recursos que tuviera y de
la honestidad de sus administradores y trabajadores. Pero la mayoría de los hospitales vivían con
una crisis permanente de falta de recursos suficientes para tener un funcionamiento normal. En un
país joven, como lo es Venezuela, era notoria la falta de servicios de maternidad y pediatría. En fin
el abandono general de la salud pública era escandaloso y reconocido públicamente; con raras
excepciones, en algunos hospitales de las principales ciudades del país.
292
Los hospitales que
Ver Augusto Galli y Haydee García, El Caso Venezuela; una ilusión de armonía. Ver “El sector salud:
radiografía de sus males y de sus remedios.” (Caracas: Ediciones IESA, 2da edición, 1985), 452-470.
257
funcionaban eran aquellos que la prensa nacional cubría diariamente y lógicamente su estado
afectaba los índices de “popularidad” de los políticos de turno en el gobierno293.
La falta de acceso a la salud era parte del pesimismo y desconsuelo público de la mayoría de
la población venezolana que no tenía dinero para pagar el sistema privado. Salvo raras excepciones
las características siguientes resumen el estado del sistema en algunas, muchas o todas las
siguientes:
-falta de suficientes médicos y personal médico preparado,
-falta de servicios esenciales y especializados,
- hacinamiento de enfermos y colas de personas que necesitan atención primaria de salud en los
hospitales,
-falta de medicamentos y materiales de sanidad,
-falta de plazas hospitalarias,
-decadencia y pobre estado físico de la infraestructura existente,
- insuficiencia de recursos presupuestarios y opacidad en el manejo de los mismos, corrupción;
-hostigamiento, represión y cese de los trabajadores de la salud que se atrevan a denunciar las
numerosas y frecuentes irregularidades.
En un análisis de los problemas del sistema público de salud hecho por la Universidad de
Carabobo para hacer recomendaciones al nuevo Gobierno del Presidente Chávez al llegar al poder,
concluye que el sector exige una reforma completa en sus dimensiones institucionales, financieras,
legales y éticas a fin de convertirlo en un sector moderno, eficiente y solidario294. El análisis de la
universidad resume los problemas de gestión existentes en el sistema.
Déficit cobertura de los servicios de salud por el insuficiente alcance de los programas y
servicios de atención médica-hospitalarios. Además, el subsistema de Salud, dentro del sistema de
seguridad social, no pasa de ser un proyecto complejo y suspendido en el tiempo.
293
Eran notorios los reportajes periodísticos sobre los problemas en los hospitales públicos. La prensa y la denuncia
de abusos era una forma común de hacer presión política para que finalmente llegaran a su destino algunos de los
fondos económicos que se destinaran a los hospitales. Los propios médicos y enfermeros denunciaban a la prensa,
muchas veces anónimamente, casos de corrupción o la falta de materiales básicos para poder hacer su trabajo.
294
“Concretamente, el actual gobierno bajo la dirección del presidente Hugo Chávez debe prestar más atención a la
salud, porque su administración, calidad de servicio, atención, deja mucho que decir. Enfermarse en Venezuela es un
gran riesgo, considerando su inoperante sistema de salud, su alto costo, añadiendo a lo riesgoso de la inatención y la
adquisición de medicamentos cuyo costos son altísimos y muchas veces inaccesible para los ciudadanos de clase
media, no se diga para la baja.” Foro de la cátedra de la Administración Venezolana de Pregrado y Gerenciales de
Postgrado de la Universidad de Carabobo, Venezuela. (Valencia: Oficina de prensa de la Universidad de Carabobo,
2000)
258
Falta de autonomía de los centros dispensadores de salud, pertenecientes al sector público,
los cuales no tienen potestad para regir y administrar los recursos y servicios.
La gerencia de los centros de salud está concentrada en manos de los mismos médicos
quienes, en muchos casos desconocen los procesos y herramientas administrativas. El recurso
humano no recibe capacitación ni educación continua en materia de gestión, no está comprometido
con la calidad, la planeación estratégica y el marketing en el servicio de salud.
La administración de la salud, en el sector público está centralizada en el gobierno
nacional y aun y cuando, se ha desarrollado la descentralización para minimizar las funciones y
tareas del estado en relación con este aspecto, no se ha logrado otorgar la autonomía
presupuestaria, gerencial y el manejo total de recursos a los centros “descentralizados.”
La pirámide de la mano de obra sanitaria está invertida, existe una gran desproporción de
especialistas clínicos y quirúrgicos en relación con los médicos de familia y generalistas, una gran
cantidad de médicos en relación con las enfermeras y el resto del equipo de salud.
La falta de suficiente personal de nivel medio supone que los médicos realizan tareas de
nivel técnico o de enfermería.
Las instalaciones públicas y el personal calificado están distribuidos de forma desigual en
todo el país, con una gran proporción de las instalaciones y el personal concentrados en el área
metropolitana de Caracas.
El sistema actual de preparación del presupuesto y de pago a proveedores no fomenta una
distribución equitativa de los recursos ni una optimización en el ámbito organizacional en la
prestación de servicios.
Los servicios hospitalarios y ambulatorios reciben presupuestos basados en los gastos de
años anteriores, sin tomar en cuenta los índices inflacionarios y estos no se ajustan a las
necesidades prioritarias del sector salud.
Se puede deducir en general que se han descuidado muchas inversiones sanitarias eficaces
en función de los costes.
Remuneración injusta: en salud, debe ser de suma importancia considerar la seguridad de
los trabajadores, el ambiente laboral, la no-discriminación y la justa remuneración de todos sus
trabajadores.
La distribución geográfica del presupuesto muestra signos de desigualdad; varios estados
con gran índice de pobreza reciben bajos niveles de presupuesto per-cápita, al igual que otros con
una gran dispersión geográfica de la población.
En 1997, aproximadamente el 80% del presupuesto del MSDS se destinaba a los salarios,
alrededor del 15% a materiales, servicios y reparaciones y menos del 1% a equipos, construcción y
mantenimiento, y estos porcentajes no han cambiado mucho en los últimos tiempos. Los gastos de
259
personal impiden la adquisición de insumos, dejando poco dinero para el mantenimiento de
equipos, compra de medicamentos y otros suministros básicos 295.
Leyendo las recomendaciones tanto a nivel administrativo, presupuestario y de personal es
fácil darse cuenta del abandono político de un sistema de salud pública que funcionó por inercia por
décadas. Los problemas mencionados son típicos de un sistema recién instalado y no de uno que
lleva funcionado cuarenta años. Los médicos que trabajaban en estos hospitales públicos de la IV
República eran sin duda profesionales excepcionales; que además de atender, curar y operar a sus
enfermos, tenían que administrar el hospital, hacer de enfermeros y enfermeras e ingeniárselas para
evitar infecciones improvisando todo tipo de materiales médicos donde no los había. El enfoque
hospitalario del sistema provocaba el hacinamiento diario de pacientes donde cualquier nueva
emergencia causaba una crisis hospitalaria a gran escala. Por otro lado, la medicina primaria
fundamental en muchas zonas rurales era manejada por estudiantes de medicina o médicos recién
graduados. A pesar de su inexperiencia, estos médicos eran destinados a practicar solos la medicina
en los pueblos del interior. Por un período de uno o dos años, estos médicos realmente aprendían la
práctica de la medicina primaria y familiar; finalmente mejorando su capacidad profesional. Los
médicos gracias a su dedicación, vocación personal y a los campesinos, que les daban acogida y
apoyo, aprendían a ejercer la medicina profesionalmente. En pocas palabras, la mayoría de los
médicos del sistema público eran los más jóvenes que aprendían a trabajar en las condiciones más
duras y difíciles. Logrando muchos una capacidad profesional extraordinaria.
Lamentablemente, una vez que alcanzaban un nivel profesional eficiente --a no ser que
fueran idealistas comprometidos en la lucha contra la pobreza y no tuvieran deudas económicas que
pagar debido al alto costo de sus estudios-- ingresaban al sistema privado de salud en la gran ciudad
para dejar paso a la próxima generación de jóvenes médicos inexpertos que iniciaban su ciclo de
entrenamiento en el sistema público. Es decir que el sistema público retroalimentaba con sus
mejores médicos el sistema privado. El médico una vez cumplida su labor en el hospital público o
consultorio rural
volvía a la ciudad para entrar y trabajar en el sistema privado de salud. Un
sistema privado donde los horarios, los recursos, los sueldos y las condiciones de trabajo eran
mucho mejores. Salvo raras excepciones, durante la IV Republica, era en el sistema privado, en las
clínicas y las consultas particulares donde trabajaban los mejores profesionales de la medicina en
Venezuela. El sistema privado crecía y manejaba más del 68% del mercado nacional en el sector
295
Ibíd.
260
salud. Este sistema de consultorios, clínicas y hospitales particulares –sistematizado por el sistema
de las compañías aseguradoras de salud—conformaba el único sistema que realmente funcionaba en
el país. El clasismo era obvio ya que solamente una minoría, las clases medias y altas, un 20 o 25
por ciento de la población tenían acceso directo al mismo. Cualquier enfermo grave de las clases
altas era trasladado en avión o ambulancia a una clínica privada en Caracas o Maracaibo; donde era
atendido por los mejores médicos, en quirófanos bien equipados y donde no había problema de falta
de vendas, o de medicinas o antibióticos.
Es más cualquier familia –pobre o rica-- que lo necesitara trataba por cualquier medio de
ingresar a su familiar enfermo en el sistema privado. Muchas familias se arruinaban y perdían lo
poco que tenían en el esfuerzo de llevar a sus enfermos a una clínica u hospital privado. Por otro
lado, la mayoría de la gente pudiente estaba asegurada en el sistema privado e iba siempre al médico
particular o la clínica privada; y nunca tenían que pisar un hospital público. Incluso, aquellos con
enfermedades graves --como cáncer por ejemplo—podían pagar y viajar a Houston, en los EE UU,
donde eran tratados en los hospitales oncológicos de mayor prestigio. Las clases medias y altas
desconocían el sistema público de salud salvo por lo que leían en los periódicos, veían en la
televisión, o si por desgracia eran víctimas de un accidente de tráfico. Entonces, tenían que
“sufrir” el servicio de emergencia de un hospital público hasta ser identificados e inmediatamente
trasladados a una clínica privada por una ambulancia contratada por la familia. Ni que decir tiene
que en el sistema privado trabajaban los mejores oculistas, dentistas, pediatras, especialistas y
cirujanos del país. El sistema privado parecía maravilloso no porque lo fuera realmente, ya que
funcionaba con normalidad, sino porque la alternativa era tenebrosa. Como era todo lo opuesto al
sistema público, el privado parecía incluso más eficiente de lo que era en realidad. En definitiva era
un servicio administrado por las compañías aseguradoras, muy similar al sistema norteamericano,
que daba un servicio decente de salud únicamente a aquellos que podían pagárselo.
El gobierno Bolivariano le dio a la salud un giro de 180 grados en la dirección contraria.
Esta filosofía mercantilista de la salud contrasta radicalmente con el enfoque bolivariano – que se
modela según los planeamientos y sistemas del sistema de salud cubano. Para ello, el gobierno
realizó una reconversión total del sistema público progresivamente por etapas Primero creando un
sistema de salud pública preventiva y primaria; y segundo rescatando la abandonada red pública
hospitalaria. Mientras tanto, las clínicas y los servicios privados de salud no se han visto
afectados en su funcionamiento, y lo hacen con normalidad. Sin duda, uno de los mayores éxitos
261
revolucionarios –que ha favorecido significativamente las reelecciones sucesivas-- ha sido la
creación de un sistema nacional público de salud gratuita en todo el país y que además funciona
con bastante efectividad. Esto, obviamente, no ha sido una tarea fácil, ya que requiere una
cantidad de recursos humanos y económicos importantes para generar un cambio cultural tan
significativo, tanto de personal sanitario como en la población en general. La Revolución ha
logrado en un tiempo récord --de 10 años-- básicamente recrear –al menos en parte-- el exitoso
sistema de salud cubano en todo el país.
Por primera vez, el servicio público sanitario de nivel primario alcanzó entre 1999 y 2004
a más de 12 millones de personas; dando acceso a la salud a más del 82 por ciento de la
población. Esto en relación con lo obtenido en ciclos históricos anteriores, representa una
novedad radical 296. Digamos que lo poco que se había logrado entre 1958 y 1980 en materia de
salud pública, se derrumbó con la crisis de la deuda externa que empezó durante el gobierno de
Luis Herrera Campins en la década de los 80 y decayó más y más hasta su crisis final en 1999 297.
La propia Organización Mundial de la Salud resume la situación del sistema de salud en
Venezuela en los términos que siguen, y se muestra a favor de los cambios conceptuales que
ofrece la Constitución Bolivariana.
La red de establecimientos públicos de salud contempla diferentes niveles de atención se
encuentra distribuida a lo largo de todo el país. En Venezuela, más de 2,400 instituciones
trabajan en el campo de la salud. Pertenecen tanto al sector público como privado, incluidas
organizaciones no gubernamentales. El sector público lleva el peso de la prestación de los
servicios de salud a la población. Existen notorias insuficiencias en la cobertura de los
servicios de salud; mientras amplios grupos de población carecen de acceso a estos servicios, o
tienen un acceso muy restringido, algunos cuentan con múltiple cobertura de varios servicios y
la capacidad de solución de la red es insuficiente, con extensas listas de espera para cirugías y
atención ambulatoria especializada. La Constitución establece las bases para perfeccionar la
naturaleza jurídica y el modelo organizativo del sector salud. Así el artículo 83 establece que la
salud es un derecho social fundamental, obligación del estado, que lo ha de garantizar. Con este
propósito, en el artículo 84 se ordena la creación de un sistema público nacional de salud, bajo
la rectoría del Ministerio de Salud y Desarrollo Social que tendrá carácter intersectorial,
descentralizado y participativo, y estará integrado al sistema de seguridad social, regido por los
principios de gratuidad, universalidad, integralidad, equidad y solidaridad.
296
Modesto Emilio Guerrero, “La Salud en la Revolución Bolivariana. Conquistas y Riesgos,” www.aporrea.org
(9/2/05), 3.
297
Augusto Galli y Haydee García, “El Sector Salud de sus males y sus remedios,” en El Caso Venezuela. Una
Ilusión de Armonía. (Caracas: Ediciones IESA, 1985), 452-470
262
La propia OMS reconoce la situación grave del derecho a la salud de los venezolanos antes de la
Revolución Bolivariana.
En 1997, 65% de la población tenía algún tipo de aseguramiento. El IVSS es la
institución con mayor cobertura, pues alcanza a 57% del total de la población asegurada, entre
titulares y beneficiarios. El MS y DS y las entidades federales tienen la obligación de proteger a
los grupos de población que no disponen de otro tipo de aseguramiento público (35%); no
obstante, en la práctica, la red ambulatoria del Ministerio atiende a cerca del 80% de la
población 298.
La Revolución Bolivariana da un giro drástico a la situación, haciendo una inversión
extraordinaria en los servicios y en la infraestructura del sistema público nacional de salud desde
el año 2001 al presente. El gobierno con la ayuda cubana -- que ha generosamente enviado
aproximadamente un total de 30.000 médicos a Venezuela en los últimos diez años --ha creado
un extenso y sofisticado sistema público de salud gratuito y universal. Este es un sistema
comunitario de salud --que ahora funciona y compite con el sistema privado-- y que con su
progresiva especialización amenaza ya la supremacía que tenía del sistema privado en el país.
Ya no son sólo los pobres quienes van a los centros médicos del sistema público, más y más
venezolanos de clase media prefieren el sistema público. Van no sólo porque es gratuito sino
porque compite en calidad en muchos de sus servicios de atención primaria con el sistema
privado. El Ministro de Salud, Luis Reyes, afirmó que después de 10 años de revolución, hay
un 18% de los venezolanos que utilizan ambos sistemas, es decir que alternan el servicio privado
con el público. La percepción del sistema público ha sufrido un cambio drástico, un noventa y
cinco por ciento de las personas que acuden a los centros de atención primaria pública --conocida
como la Misión Barrio Adentro-- se manifiestan satisfechos con el servicio que reciben en su
centro comunitario de salud. Además, ahora un noventa y dos por ciento de las personas que
acuden al hospital se sienten satisfechos con el servicio cuando tienen que usar la red pública
hospitalaria 299.
298
Perfiles de País: Venezuela en “La Salud en las Américas,” Organización Panamericana de Salud (OPS).
(Washington: Edición v.2, 2002). Ver Marino J. González R., “Reformas del Sistema de Salud en Venezuela (19871999): balance y perspectivas.” (Santiago de Chile: CEPAL Unidad de Estudios Especiales, Junio 2001).
299
Gustavo Rangel “Ministro Reyes: El 82% de la población usa el sistema público de salud.” (Caracas: ABN,
7/4/10)
263
5. Misión Barrio Adentro nuevo modelo nacional de salud pública
Una de las virtudes del sistema de salud pública Misión Barrio Adentro es que empezó con
características integrales de atención primaria y preventiva que prácticamente no existían en el país.
La red de servicios ha ido creciendo y expandiendo sus etapas rápidamente por toda la geografía
nacional. Barrio Adentro es un modelo diferente de salud pública, --que desde fuera del sistema-ha ido integrando en sus etapas su filosofía y funcionamiento en el sistema público existente que
dependía directamente del Ministerio de Salud y Desarrollo Social y del Instituto Venezolano del
Seguro Social (IVSS). Asimismo, el IVSS está prestando, con la ayuda presupuestaria del estado,
por primera vez, importantes ayudas para mejorar la calidad de vida de los trabajadores
venezolanos. Además de mejorar los servicios de salud, se ha mejorando en todo el país el acceso a
su sistema de pensiones y de servicios sociales que conlleva. La Revolución Bolivariana ha
extendido los derechos a la pensión de seguridad social de vejez a todas las venezolanas mayores
de 55 años de edad y a los venezolanos mayores de 60; que hayan hecho –o hagan-- un mínimo de
700 cotizaciones laborales a la seguridad social300.
Además, el IVSS ha implementado misiones particulares para ayudar socialmente a los más
pobres, como la Misión Madres de Barrio, con la idea de eliminar la pobreza y acabar con la
discriminación de la mujer en el trabajo. Esta misión asigna el pago de una asignación mensual -que varía entre el 60 y el 80 por ciento del salario mínimo-- a las madres del barrio que necesitan
ayuda para salir de la pobreza absoluta y alimentar a sus familias. Son las propias organizaciones
comunitarias que identifican y buscan a las madres que necesitan ayuda urgente; y que en un
espíritu de solidaridad y justicia notifican al IVSS para que éstas puedan recibir la ayuda económica
que les corresponde por derecho. Asimismo, la Fundación Misión Negra Hipólita se encarga de
asistir a los indigentes y en situación de calle en todo el país. Por ejemplo en el Distrito Capital y
Miranda existen en diversos parques y lugares públicos 26 centros de asistencia voluntaria para
indigentes en materia de vivienda, alimentación, salud física y mental, deporte, educación, cultura y
servicios de integración social301.
Todas estas políticas sociales de la Revolución completan servicios que por alguna razón
escapan a su función fundamental que es facilitar el acceso a la salud, negado hasta 1999, a toda la
300
301
“IVSS definió trámites para completar cotizaciones” (Caracas: ABN, 6/5/10)
“Misión Negra Hipólita ha atendido a más de 900 personas en situación de calle.” (Caracas: ABN, 20/10/09).
264
población302. El sistema de salud bolivariano empieza en el barrio, en las comunidades más pobres;
y tiene como objetivo final el acceso a la salud como derecho humano fundamental gratuito para
todos los venezolanos. El nuevo sistema nacional de salud incluye dos aspectos: la creación de una
red primaria de salud (Barrio Adentro I y II) y la transformación y modernización de toda la red
pública de hospitales del país (Barrio Adentro III y IV).
La red primaria de salud conocida como Misión Barrio Adentro I, se creó ya en el 2001 y
empezó con varios programas piloto en los barrios de Caracas. El concepto base es una pareja de
médicos, en la mayoría de los casos cubanos, viven integrados en las comunidades de los barrios.
Los médicos trabajan parte del día dando consultas gratuitas en el recién creado centro de salud del
barrio y en su horario de tarde hacen visitas a las familias de su sector303. Los médicos visitan casa
por casa, realizando un censo médico del barrio; para supervisar y educar a las familias en materia
de salud preventiva y alimentación básica. Los médicos trabajan en coordinación con el comité de
salud de la propia comunidad que ayudan a los médicos en sus funciones y objetivos.
Con los
años, el sistema y el censo médico creado por Barrio Adentro I permiten ejecutar campañas de salud
preventiva y educación de gran efecto social. Por ejemplo, los censos médicos facilitan las
campañas de inmunización del gobierno. La campaña de inmunización que se inicio a principios
del año 2010 ha hecho posible que el Plan Nacional de Inmunización llegue a 13 millones y medio
de personas en tiempo récord. Para ello se utilizó la nueva red de salud colectiva. Esto significa
que el 70 por cien de la población censada venezolana ha sido vacunada; y tiene actualmente un
calendario de inmunizaciones contra 14 enfermedades, que hasta “ayer” eran plaga en la población.
Los venezolanos han sido vacunados gratuitamente contra: tuberculosis, hepatitis B, rotavirus,
influenza estacional, poliomielitis, difteria, tétanos, tosferina, meningitis, fiebre amarilla, parotiditis,
302
Para un exhaustivo análisis teórico del derecho a la salud como derecho humano, ver el Informe sobre el Derecho
a la Salud en Venezuela 2007: Situación del Derecho a la Atención Primaria. (Caracas: Editorial Convite Ac,
octubre 2007). Este informe es excelente en su parte teórica; sin embargo en su análisis de la situación actual, en mi
modesta opinión, tiene dos problemas muy serios. Por un lado, ignora la situación de decadencia que la salud
pública tenía previa a la Revolución Bolivariana. Por otro lado, ignora la transformación hecha después. Esta es
básicamente importar el modelo cubano de salud --que es el modelo Barrio Adentro-- con todos los beneficios que
ello conlleva. El modelo cubano de salud, incluyendo estudios hechos por la Universidad John Hopkins --la mejor
universidad norteamericana en esta materia—es reconocido como uno de los mejores del mundo e ideal para países
en desarrollo como Venezuela.
303
Curiosamente las unidades sanitarias de carácter preventivo fueron creadas en Venezuela en los años 30 por la
Fundación Rockefeller; y fueron dirigidas por estudiantes venezolanos que estudiaban salud pública precisamente en
la Universidad Johns Hopkins de EE UU. Estas unidades sanitarias hacían lo que hace hoy Barrio Adentro a gran
escala: control del niño sano, la atención prenatal, prevención de enfermedades veneras, epidemiologia, etc. Ver
José María Bengoa, “La Sanidad y la Nutrición en Venezuela a Mediados del Siglo XX.” Anales Venezolanos de
Nutrición. (Caracas: enero 2004. Volumen 17, número 1).
265
sarampión, rubeola y neumonía por neumococo 304. Aunque falta todavía aproximadamente un 30
por ciento por inmunizar, la campaña de inmunización continua; y se lleva a cabo desde todos los
centros de salud disponibles. Los trabajadores de la salud en colaboración de los comités de salud
del barrio, visitan casa por casa, tratando de llevar las vacunas a aquellos que no se han acercado a
recibirlas en los centros de salud. El costo de las vacunas ha sido de 98 millones de bolívares
fuertes, según datos facilitados por el Ministerio de Salud y Desarrollo Social, pero los beneficios
serán obviamente mucho mayores a largo plazo305.
Además, este nuevo censo médico de Barrio Adentro es fundamental ya que permite
atender directamente a la población recién nacida, ancianos y aquellos enfermos, que padecen
enfermedades progresivas. Por ejemplo, aquellos venezolanos que padecen diabetes, que requieren
medicinas y un seguimiento dietético y periódico de salud son fáciles de encontrar. Ni que decir
tiene que los consultorios médicos han sido un éxito y el sistema de centros de salud se ha extendido
desde los barrios de Caracas a los barrios y a las zonas más pobres de las ciudades y pueblos del
país. ¿Cómo se consigue que la Misión llegue al barrio? Es el pueblo organizado en los comités
de salud del barrio o de la comunidad que solicitan a los organismos competentes un consultorio de
salud de la Misión Barrio Adentro. A partir de ese momento, las funciones del comité de salud son
varias. Necesitan hacer la solicitud del consultorio, localizar lugares propios para crear el centro de
salud permanente, y organizarse para priorizar las zonas de mayor necesidad en materia de salud.
El
análisis de la situación epidemiológica de la comunidad permite convocar asambleas de
ciudadanos para resolver los problemas y educar a todos sus miembros. Los comités de salud los
conforman diez personas que viven en la misma comunidad y el único requisito burocrático que
necesitan es registrase en el Ministerio de Salud y Desarrollo Social. El comité de salud también
tiene en sus manos la posibilidad de hacer denuncias o reclamos por el funcionamiento deficiente de
los consultorios de salud si fuere necesario.
Es decir la comunidad organizada tiene una
responsabilidad directa en el manejo y administración de la salud en su propia comunidad. La
eficiencia del comité de salud está directamente relacionada con el éxito de todo el sistema de salud
preventiva y primaria en el barrio.
304
Esta información fue suministrada por la propia viceministra de Salud, Eugenia Sader, cuando explicaba el Plan
Nacional de Inmunización en la televisión venezolana. También ver, “Plan Nacional de Inmunización llegó a 13,5
millones de personas,” (Caracas: ABN, 3/5/2010)
305
“Inversión en 2010 para adquisición de vacunas superó los Bs. 98 millones.”(Caracas: ABN, 3/3/2010)
266
La demanda de médicos y consultorios ha sido tan extensiva que explica y justifica el
creciente número de médicos cubanos en Venezuela; que ha oscilado durante estos años entre un
mínimo de 15.000 y un máximo aproximado de 30.000 médicos. A Barrio Adentro se han ido
incorporando médicos venezolanos
--algunos educados en Cuba-- y otros venezolanos
comprometidos en las políticas de salud del gobierno y que apoyan el nuevo sistema nacional de
salud pública. Al principio la presencia de médicos cubanos en el país creo todo tipo de polémicas
en los medios de comunicación privados; y cierta oposición en sectores conservadores del Colegio
de Médicos de Venezuela. Algunos doctores venezolanos --que no están interesados en trabajar en
los barrios de Caracas-- se quejaban de la presencia masiva de médicos cubanos, acusándolos de
proselitismo político y de no ser “realmente” médicos. Pero los resultados han ido callando poco a
poco a los críticos; y ahora son minoría los que todavía cuestionan la profesionalidad de los médicos
cubanos y los beneficios palpables que el nuevo sistema ha traído a la salud en el país. Sería una
política electoral “suicida” para la oposición decir que eliminaría la Misión Barrio Adentro tan
pronto llegue al poder; aunque se mantienen campañas informativas críticas a la presencia cubana
desde el punto de vista político en los medios de comunicación privados.
Cuba Y Venezuela son miembros de CARICOM y del ALBA. Cuba recibe 100.000
barriles diarios de petróleo venezolano a precio preferencial como miembro de CARICOM y al
mismo tiempo, Cuba envía médicos a cualquier país de CARICOM que lo solicite, incluyendo
médicos y otro personal especializado para trabajar en salud en la Misión Barrio Adentro de
Venezuela. Para los críticos de Barrio Adentro, el problema es básicamente político, la presencia
cubana en Venezuela y los acuerdos bilaterales Cuba-Venezuela son un apoyo al “comunismo
cubano.” Además, Venezuela rompe el bloqueo estadounidense a la isla --que aunque es ilegal
según las propias Naciones Unidas y la Convención de Ginebra-- se aplica sin misericordia a todas
las corporaciones y países que negocian con Cuba. Ni que decir tiene que la estrecha relación
cubano-venezolana es considerada por los EEUU como un desacato a su política exterior de
“seguridad hemisférica” y van en detrimento de las relaciones bilaterales de los EEUU y
Venezuela306.
306
El internacionalismo cubano en materia de salud es bien conocido, un ejemplo interesante en esta materia, ver
Robert Huish y John Kirk, “Cuban Medical Internacionalism and the Development of the Latin American School of
Medicine,” in Latin American Perspective. (Sage: 2007; 34; 77.) DOI 10.1177/0094582X07308119). Online
versión:http://lap.sage.com/cgi/content/abastract/34/6/77. Una de las pocas noticias sobre el trabajo internacional de
los médicos cubanos, ver “Médicos cubanos han brindado 3.7 millones de consultas en 5 años.” (Madrid: Agencia
de noticias EFE, 11/11/09)
267
Es cierto que las relaciones Cuba- Venezuela siempre fueron buenas; pero nunca llegaron a
los niveles de colaboración económica y política actuales. Sin embargo, es importante destacar -aunque raramente aparece en la prensa nacional e internacional-- el internacionalismo cubano en
materia de salud no es nuevo y es mundialmente conocido y reconocido. La ayuda médica cubana
es legendaria en medios diplomáticos de los países más pobres de África y América Latina. Cuba
envía más médicos y personal de salud a los países en desarrollo, particularmente África, que todos
los países del G-8 juntos; y tiene más médicos trabajando en el exterior que las organizaciones de
salud de las Naciones Unidas. Frecuentemente, se leen noticias sobre las valiosas contribuciones de
organizaciones no gubernamentales (ONG) como Médicos Sin Fronteras,
Operation Smile,
UNICEF y otras muchas. Sin embargo, muy pocas veces leemos alguna noticia sobre el trabajo
sacrificado de los médicos cubanos en las zonas más pobres del continente africano y en las más
remotas del continente americano.
Los médicos cubanos llevan muchos años prestando sus
servicios gratuitamente en las condiciones más difíciles en toda la geografía mundial.
La Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM) tiene en Cuba más de 20 escuelas de
Medicina diferentes repartidas por toda la isla.
Según datos del 2007,
en el 2004-05 se
matricularon en la universidad 10.529 estudiantes extranjeros --49% mujeres—provenientes de
países pobres y que son becados por el gobierno cubano. En Cuba, estos estudiantes reciben
estudios de medicina --incluyendo estudiantes norteamericanos y puertorriqueños de pocos recursos
económicos-- ya que no pueden estudiar en sus países de origen. Los estudiantes extranjeros en
Cuba pertenecen a 101 etnias diferentes, 33% son miembros de comunidades indígenas de las
Américas y 72% viene de zonas rurales de América y África. Sin contratos previos de ningún tipo,
los estudiantes reciben un entrenamiento de seis años de clases; con el compromiso personal de
volver a sus países y ejercer la medicina; como lo hacen los propios médicos cubanos. Los dos
primeros años son de pre-medicina -- in campus-- con entrenamiento científico y de idioma;
necesarios para estudiar luego el resto del currículo mandatorio, que empieza con medicina de
familia y preventiva. Posteriormente, los estudios se complementan con medicina en zonas de
desastre y estudios de salud pública.
En materia de salud pública, los médicos estudian
epidemiologia, es decir cómo detectar enfermedades, crear récords y monitorear problemas de salud
en una colectividad; además de seguimiento en la aplicación de vacunas y medicamentos.
Obviamente, este tipo de trabajo médico requiere la participación y la integración en la comunidad
en el cuidado de su propia salud, que ayudará y participará en la recolección de datos médicos.
268
Tres de los seis años de entrenamiento son clínicos y prácticos; acompañando a otros
médicos ya graduados. En el sexto y último año, los estudiantes entran en la práctica rotativa preprofesional, donde practican todo lo que han estudiando en compañía de doctores en hospitales y
centros de salud. Además de los cursos principales, los médicos tienen que tomar asignaturas
electivas que ofrecen conocimientos en enfermedades particulares, como la malaria, por ejemplo.
Cursos en acupuntura, terapias de masaje, medicina indígena, tradicional o naturista son algunas de
las opciones ofrecidas a los estudiantes de medicina. Los cursos en deportes y educación física son
obligatorios; así como los de cirugía, patología y urología. Los médicos de la ELAM estudian la
importancia de las visitas a las familias en sus casas; donde aprenden y determinan el impacto de las
condiciones locales de vida que pueden tener y tienen en la salud de las personas 307.
Cuba –como la OMS y la Universidad John Hopkins reconocen—lleva trabajando el tema
de la salud pública con éxito por décadas y su experiencia tiene un valor particular para los países de
pocos recursos tanto humanos como económicos. El gobierno bolivariano ha potenciado esta
iniciativa educativa cubana y ha invertido en la creación de una segunda Escuela de Medicina
Latinoamericana, para eventualmente duplicar el número de médicos preparados para trabajar la
medicina de solidaridad que Cuba practica y que --Barrio Adentro-- defiende y representa en
Venezuela. Según información facilitada por el ministro del poder popular para la Educación
Universitaria, Luis Acuña, la V Promoción de médicos de la ELAM graduó 96 estudiantes
venezolanos y 83 extranjeros; que han revalidado su título en la Universidad Rómulo Gallegos de
Venezuela.
Un total de 741 médicos venezolanos conforman ya el número de graduados
provenientes de la ELAM para trabajar en Venezuela. Asimismo, en el 2009 llegan de la ELAM
en Cuba 2,236 estudiantes a hacer sus prácticas de medicina en Venezuela, y donde además
cursaran su quinto año haciendo pasantías hospitalarias 308.
El Programa Nacional de Formación de Medicina Integral Comunitaria en Venezuela se
creó con la intención precisa de popularizar los estudios en el sector salud. Existen escuelas de
Medicina Integral en todos los estados, en más de 318 municipios diferentes. Estos trabajadores de
la salud, incluyendo los médicos graduados --sin deudas pendientes que los haga emigrar a la
ciudad ni la necesidad de trabajar en el sector privado-- y con la experiencia de trabajo de formación
en las zonas rurales y urbanas más pobres del país; adquieren la experiencia, el compromiso, y la
307
Ibíd., 83-90.
“En el Teatro de la Academia Militar, Presidente Chávez asiste a la V Promoción de médicos de la ELAM”.
(Caracas: Prensa Presidencial, 13/10/09).
308
269
conciencia profesional digna de los mejores médicos. En estos centros se enseña la misma ética de
los médicos de la ELAM: una ética humanista de su responsabilidad que los constituye en gerentes
y líderes de salud para la comunidad en la que trabajan.
Afortunadamente para Venezuela, las estadísticas claramente muestran el impacto en la
calidad de vida de los venezolanos de los nuevos sistemas de alimentación y salud, logrando reducir
la tasa de mortalidad infantil de niños menores de 5 años de 25.8 por mil (1990) a una tasa actual de
13.7 por mil. Además, la talla de los niños menores de siete años ha aumentado un promedio de
más de un centímetro desde que se inicio la Revolución Bolivariana.
Las campañas de
inmunización y de educación, así como el número de consultorios populares de salud son sin duda
parte de la razón de los progresos alcanzados.
El número de consultorios populares creado por Barrio Adentro I ha alcanzando los 6.531en
todo el país. En cada consultorio, al médico de turno, lo acompañan en sus funciones no sólo el
comité de salud, sino al menos un estudiante de Medicina Integral Comunitaria (MIC) y otro de
postgrado de Medicina General Integral (MGI).
El consultorio ofrece servicios de medicina
general, pediatría, atención al niño sano, a la persona mayor, control pre y post natal, vacunación,
odontología, citología y emergencias (24 horas). A las seis horas de actividad médica asistencial se
añaden como mencionamos antes visitas en el terreno y actividades de docencia y de prevención de
enfermedades y de promoción de la salud. Esto ha originado no sólo educación preventiva básica
en materia de salud y alimentación, sino una solidaridad nueva entre los vecinos que a través del
trabajo voluntario y otras formas de apoyo. Se han ido integrado al trabajo comunitario muchos
vecinos para mejorar el ambiente de la comunidad fomentando el deporte, la dieta sana y el
ejercicio.
La filosofía del modelo de Barrio Adentro es que la comunidad asume su parte de la
responsabilidad en materia de salud, convirtiéndola en protagonista que actúa y trabaja por la
mejoría de la salud de todos. El comité de salud origina planes comunales para todos. Por ejemplo
Barrio Adentro Deportivo, inicio una campaña en las comunidades y barrios para fomentar la
práctica de ejercicios físicos, el deporte y el empleo sano del tiempo libre. Para ello capacitó
promotores deportivos y programas de recreación para niños, jóvenes y adultos en los barrios309.
Los centros de salud y el espíritu creado por la misión Barrio Adentro son sin duda un frente común
309
Barrio Adentro Deportivo ha organizado todo tipo de actividades saludables de cultura física, terapéutica en los
barrios y en las escuelas.
Además ha creado programas deportivos.
Para más información ver:
www.misionesbolivarianas.gob.ve
270
para luchar contra las epidemias sociales que también plagaban las zonas pobres de las ciudades y
pueblos venezolanos, tales como la delincuencia, las drogas, el tabaco y el alcoholismo. Barrio
Adentro ha creado una conciencia social y un conocimiento sobre la importancia de la salud; y por
supuesto un respeto mayor por las personas que tienen problemas de salud y que son víctimas de
adicciones malignas. Ahora se organizan festivales de salud en los barrios donde se da información
y servicio a las personas del barrio. Se está desarrollando una disposición comunitaria para ayudar
al que tiene dificultades y ayudarle a vivir mejor. Muchos barrios tienen módulos de atención
primaria, que les bridan lo que nunca habían tenido en el pasado, un servicio médico de 24 horas,
cercano, gratuito y que les abastece de los medicamentos y la ayuda que necesitan para vivir
tranquilos.
A partir del 2005, al consultorio de salud primaria y preventiva le siguen en su siguiente
etapa los servicios médicos que crea la misión Barrio Adentro II. En esta etapa aumenta la
especialización y la capacidad de los servicios ofrecidos. Siguiendo las líneas del sistema cubano de
salud y la experiencia que tan buenos resultados han tenido en Cuba. En estos últimos cinco años,
Barrio Adentro II ha creado: 479 Centros de Diagnostico Integral, conocidos como CDI, 26
Centros Médicos de Alta Tecnología (CAT), 543 Salas de Rehabilitación (SRI) y 13 Clínicas
Populares310. Todos ellos, representan un avance en la sofisticación del servicio médico primario y
tienen como objetivo atender a los pacientes con más complicaciones.
Hay pacientes que debido a condiciones personales, a accidentes laborales o de tráfico, a
enfermedades infecciosas u otros problemas serios de salud requieren tratamiento y seguimiento
médico específico en un centro de salud. Estos centros, repartidos por toda la geografía nacional,
son base institucional también para otras misiones y campañas de salud importantes, como el plan
Nacional de Inmunización que antes mencionamos. Antes de la creación de los Centros de
Diagnostico Integral (CDI) había en el país 400 camas hospitalarias, concentradas en los hospitales
de las ciudades más importantes. Ahora cada CDI tiene al menos de tres camas para atender a
pacientes graves; y que al estar repartidas por toda la geografía nacional tienen una cobertura
sanitaria más amplia. Por ejemplo, el CDI de Los Godos tiene una extensión de unos 1000 metros
cuadrados y presta servicios de atención primaria de salud que incluyen además análisis de
laboratorio de sangre, rayos X, estudios endoscópicos, quirófano y salas de cuidados intensivos311.
310
Datos suministrados por Radio Nacional de Venezuela en su programa “10 Años de Logros.” (Caracas: RNV
2/5/2010)
311
Ver Judith González, “Gobierno Bolivariano inaugura nuevo CDI en Monagas.” (Caracas: ABN, 16/01/06).
271
Los CDI, como los consultorios de salud, no sólo atienden pacientes sino que son además centros de
docencia para nuevos profesionales del sector: médicos, enfermeros, técnicos y administradores. En
algunos casos los CDI dan tratamiento pre-natal a las mujeres embarazadas que no tienen
complicaciones en su embarazo. Los servicios técnicos que prestan varían según los casos, algunos
tienen además de las antes mencionadas capacidades para sonogramas de diagnóstico, endoscopía,
electrocardiograma, laboratorio clínico y un sistema ultra micro analítico (SUMA). Este último se
usa para hacer estudios de serología y de prevención de enfermedades del feto y de la madre.
También sirve para diagnóstico de enfermedades como: dengue, hepatitis B, hepatitis C, SIDA e
hipotiroidismo. Además, la mayoría tiene servicios de oftalmología clínica para servir pacientes de
la Misión Milagro y un servicio de emergencias completo con servicios de urgencias, apoyo vital,
terapia intensiva y quirófano.
La importancia de los CDI es muy grande ya que los mayores desafíos para la salud en
Venezuela son los accidentes y las enfermedades infecciosas. Enfermedades como el dengue, el
paludismo, la amibiasis y otros trastornos de este tipo que requieren un tratamiento inmediato y
especializado. La importancia de los CDI no sólo son notables en las zonas rurales, sino que su
celeridad es encomiable también en las zonas urbanas. El testimonio de Idegar Gil señala la
importancia de tener un servicio de urgencias en el barrio.
Hay que ponerle el ojo, digo, porque lo que dentro de sus paredes –CDI del barrio San
Martín de Caracas-- se vive, es la revolución en carne y hueso. Hay que ponerle el ojo a ese
CDI porque es ejemplo vivo de cómo deben funcionar no sólo los centros médicos bajo la tutela
del Estado, sino también las clínicas privadas que aún dicen ser el paradigma de asistencia
medicinal. El sábado, a media tarde, por esas circunstancias imponderables de la vida, la
emergencia tocó el timbre de mi casa. Sin pensarlo dos veces, trasladé a mi pareja y a nuestra
niña, de siete meses de nacida, a ese Centro de Diagnóstico Integral. Ambas estaban
intoxicadas. El rojo intenso cubría su piel y la asfixia amenazaba constantemente a la madre del
bebé. Fueron momentos nada agradables para ninguno de los tres. Pero la cura empezó apenas
pisamos la entrada del recinto de salud. Aunque llovía, por ningún lado había asomos de
charco; aquellas instalaciones son una oda al brillo. La sala de espera es impecable y lo que
terminó de convencernos que la decisión de ir allí había sido la mejor fue el ambiente humano
que envuelve a todo el personal. Un ambiente humano que va desde la responsable del
mantenimiento hasta el director, pasando por enfermeras, enfermeros y otros pacientes. Era
definitivamente en una atmósfera de cordialidad como aquella donde hasta los malogrados se
tornan amables. Lo bueno también se pega 312.
Similares historias encontramos en los centros de Rehabilitación Integral (SRI), que son
parte fundamental de Barrio Adentro II. Por supuesto trabajan en coordinación con los CDI y
312
Idegar Gil, “Hay que ponerle el ojo al CDI de San Martín,” en www.aporrea.org (24/05/10).
272
prestan servicios gratuitos de electroterapia (sonograma y terapia laser), termoterapia (tratamiento
con calor infrarrojo), hidroterapia (hidromasajes), gimnasio pediátrico y de adultos, terapia
ocupacional, medicina natural y tradicional. Se incluyen además servicios de podología, logopedia,
foniatría, acupuntura, ventosas y optometría; y tratamientos para problemas comunes como la
bursitis, el lumbago y otros dolores agudos. No todas los SRI tienen todos los tratamientos, los
casos más severos de rehabilitación están atendidos en los hospitales y los centros de alta
tecnología (CAT); donde se prestan regularmente servicios de electroterapia, termoterapia,
hidroterapia y mecanoterapia.
En medicina, la rehabilitación --infantil y adulta-- y la terapia ocupacional son las más
costosas. Requieren básicamente crear e implementar programas de rehabilitación individuales
adecuados a las necesidades de cada enfermo y entrenamientos a corto, mediano y largo plazo.
Cada paciente necesita acudir al SRI y recibir tratamientos particulares adecuados a sus
necesidades y progresos.
Además del experto terapeuta, se necesita el lugar físico y los
instrumentos para hacer la terapia y el apoyo psicológico para superar los problemas de dolor y
movimiento que se presentan.
La creación de estos centros requiere equipos humanos y
tecnológicos muy sofisticados.
También se han creado los centros Médicos de Diagnostico de Alta Tecnología
(CMDAT), conocidos popularmente como Centro de Alta Tecnología (CAT). El CAT “Manuela
Sáez” es quizá un buen ejemplo de cómo funcionan estos centros, que incluyen ambos servicios
de CDI y SRI. El centro atiende a los municipios de la costa oriental del Lago Maracaibo entre
los que se encuentran Miranda, Santa Rita, Simón Bolívar, Lagunillas, Valmore Rodríguez,
Baralt y otros más pequeños. Tiene un área de 1.860 metros cuadrados y está a cinco kilómetros
del centro de la ciudad de Cabimas.
La inversión inicial --hecha por Petróleos de Venezuela
(PDVESA)-- fue de 11 millardos de bolívares fuertes y los equipos médicos fueron
suministrados por el Ministerio del Poder Popular para la Salud. Este CAT se integra a la red de
salud del estado Zulia que cuenta con 1.020 consultorios médicos, 63 CDI, 63 SRI y ahora 1
CAT. Este nuevo centro médico tiene capacidad para atender de 500 a 600 pacientes diarios.
Tiene una capacidad tecnológica para hacer: tomografías, resonancias, mamografías,
densitometrías óseas, sonogramas y rayos X. El CAT cuenta con cincuenta especialistas –
273
médicos y técnicos-- distribuidos en las tres áreas de servicios mencionados 313. Sólo en el
primer año de gestión de los CDI y CAT han realizado un total de 225.550 análisis de todo tipo y
atendidos a miles de pacientes.
¿Ha habido problemas de gestión e implementación en Barrio Adentro I y II? Sin duda,
el propio crecimiento rápido del programa --cuyo desarrollo llevo décadas en Cuba-- se ha
ejecutado en Venezuela de forma acelerada. Han existido problemas de improvisación, gestión e
implementación en numerosas ocasiones.
Por ejemplo, varios Consultorios Populares se
abandonaron por problemas de falta de personal médico y otros funcionaron parcialmente.
Algunas veces, los médicos se ausentaban porque tenían que atender dos consultorios diferentes
y tenían que multiplicar sus funciones. Las demandas clínicas y pedagógicas, al tener que
atender pacientes y preparar al mismo tiempo un grupo de los 30.000 estudiantes de medicina
integral comunitaria --que existen en Venezuela-- creó y ha creado problemas de funcionamiento
en algunos consultorios. Tal vez el exceso de trabajo de algunos médicos llevó al colapso de
algunas de sus funciones; y la propia inexperiencia de los comités de salud del barrio ha llevado
a situaciones de crisis en algunos barrios. Es decir han existido, debido al crecimiento de la
misión y las demandas siempre crecientes de la propia labor de Barrio Adentro problemas en el
funcionamiento de algunos consultorios. Pero en general, el sistema y la experiencia han sido
más que positiva. Con el paso de los años, la mejora en la planificación ministerial y el
mejoramiento en la capacitación de los comités de salud han sido factores importantes para
superar los problemas. La mejora del nivel educativo de las comunidades, el incremento del
número de médicos cubanos en el país, el propio funcionamiento de los servicios de Barrio
Adentro II, y las campañas de salud preventiva y educativa -- como el plan de inmunización
nacional—han distribuido mejor las cargas del inmenso trabajo. También, lo está siendo la
incorporación del creciente número de graduados de Medicina Integral que han ido subsanando
y mejorando --al menos en parte-- las muchas presiones que los médicos de Barrio Adentro
tenían y tienen de multiplicar sus funciones profesionales debido al aumento de las necesidades
existentes. Los mayores problemas han sido de planificación, cuando los propios médicos se
enferman, o tienen problemas personales o familiares que atender, o simplemente se van de
vacaciones a su tierra natal. En muchos casos ha habido fallos para mejorar los sistemas de
313
“Inaugurado el Centro de Alta Tecnología Manuelita Sáez.” (Caracas: VTV, 22/03/07)
274
suplencia de médicos que se ausentan por alguna razón, ya sea personal o profesional. Pero es
importante reconocer también que con el paso del tiempo, los comités de salud han mejorado
mucho su gestión para prever y organizarse mejor en estos casos 314.
¿Hay corrupción?
Supongo que ha habido casos individuales, pero en general, la
abnegación de los médicos cubanos es ya legendaria en Venezuela. Es difícil corromper donde
no hay mucho dinero y mucha solidaridad. Es cierto que al principio algunos consultorios
tenían defectos en su construcción y planta física. Muchos fueron construidos a la carrera por
empresas privadas, más preocupadas por hacer negocio, que por hacer un buen trabajo. En estos
casos fallaron los controles de calidad y de supervisión, que garantizan el mejor trabajo posible y
cuya responsabilidad está en las instituciones públicas del estado. También ha habido muchas
fallas burocráticas en la dotación de los alimentos y materiales sanitarios, de aseo y limpieza en
algunos centros médicos; que posiblemente se deban a corrupción o irresponsabilidad según los
casos.
Para resolver algunos de estos problemas, la comunidad ha respondido tomando y
asumiendo nuevas responsabilidades. Aquí los comités de salud tienen un papel primordial de
control y administración de los centros de salud. Por su parte el gobierno ha ido respondiendo,
algunas veces lentamente, pero ha ido tomado medidas que van desde el aumento del número de
médicos en los consultorios, al mejoramiento de los servicios de abastecimiento y planificación
de la propia Misión Barrio Adentro.
En general podemos decir que muchas de las fallas han sido originadas en la falta de
experiencia, planificación y preparación profesional a varios niveles, que siempre dan
oportunidad a la corrupción. Sin embargo, la graduación progresiva de las promociones de
médicos y técnicos en formación en estos momentos ayudará sin duda a la mejora de la gestión e
implementación de Barrio Adentro en todas sus etapas 315. Pero sería mezquino, enfocarse en los
errores de implementación, abuso y corrupción puntuales, que existen en toda empresa humana
314
“La meta era construir 600 Centros de Diagnóstico Integral (CDI), 600 salas de Rehabilitación (SRI) y 30
Centros de Alta Tecnología (CAT) pero al 2007 todavía falta por cumplir el 50%. En Barrio Adentro III, se anunció
la rehabilitación y modernización de 33 hospitales públicos y hasta el 2006 solamente se ejecutaron obras en 5 de
ellos… Sin embargo, después de 5 años, estos (médicos venezolanos) representan menos del 2% en el total de
personal y, hasta el presente, la práctica médica de los cubanos no ha sido certificada por las autoridades académicas
nacionales ni es objeto de regulación por parte del ente rector del sistema de salud.” Para un visión crítica de la
Misión Barrio Adentro, ver Yolanda D’Elia y Luis Francisco Cabezas, “Las Misiones Sociales en Venezuela.”
(Caracas: IDIS, mayo 2008), 11-12.
315
Reinaldo Quijada, “Los Ataques a Barrio Adentro.” (Caracas: Clase Media Revolucionaria, 07/10/09)
275
para ignorar los beneficios que ha traído el nuevo sistema nacional público de salud y que han
superado con creces todas las expectativas desde el punto de vista del desarrollo humano a todos
los venezolanos. El doctor Norgen Beaton Pay, director del CDI “Pedro Pérez Delgado”, en la
Parroquia de San Juan de Caracas señala su experiencia.
En tres años que lleva funcionando este centro de salud (CDI) se ha salvado 2.494 vidas,
se han atendido a más de 43.468 pacientes, se han efectuado 77.251 consultas de pediatría y
2.849 endoscopias. Se atienden diariamente 10 casos de oftalmología, a quienes se les
suministran lentes o se remiten a otros centros más especializados. En el SRI se han
rehabilitado 2.711 personas y se les ha dado consulta a 14.228 pacientes 316.
Podríamos decir que el desafío a la Revolución Bolivariana en materia de salud no ha sido la
corrupción sino fundamentalmente como afrontar las crecientes demandas que tiene para mejorar la
salud de los venezolanos. Por ejemplo, la Misión Sonrisa que se encarga de revisar y curar los
problemas odontológicos existentes en la población venezolana tiene muchos años de trabajo por
delante. La magnitud y el costo de la Misión Sonrisa han dificultado enormemente alcanzar
objetivos significativos en sus primeros años de gestión. El gobierno calcula que aproximadamente
once millones de personas necesitan asistencia odontológica rápida, periódica o permanente en el
país. Es decir 7 de cada 10 venezolanos mayores de 25 años necesitan ir al dentista ya, y no han
podido hacerlo por falta de servicio o porque no pueden pagárselo.
La atención odontológica es muy importante para la autoestima y la salud general de una
persona; pero es sofisticada y muy costosa. La meta de atender la odontología de 10 millones de
personas no es ni será fácil y hasta el momento las estadísticas más optimistas de la Misión Sonrisa
afirman que se han logrado llegar a atender unas 50.000 personas al año. Los esfuerzos son
notables, la Misión Sonrisa ha duplicado el número de odontólogos que trabajaban en el sector
público del IVSS o del Ministerio de Salud, y ya en el 2003 había multiplicado por cuatro el
número de consultas odontológicas. Un aspecto importante son los servicios odontológicos móviles
que viajan ofreciendo servicios en las zonas más remotas del país, donde no se conocían los
dentistas. Esto indica que la Revolución Bolivariana tendrá que trabajar muy duro y hacer una
inversión mucho mayor a las previstas para lograr avanzar en las metas señaladas y alcanzar los
objetivos trazados 317. Aunque las metas estén muy lejanas en el horizonte, hay efectos muy
316
Lady Gómez, “Reimpulsan Barrio Adentro II en San Juan,” Ciudad de Caracas, 17/11/09.
Las críticas no se refieren a la buena voluntad, que sin lugar a duda existe. Pero será difícil de lograr sin antes
mejorar toda la infraestructura en la que trabajan Barrio Adentro II y III.
317
276
positivos al lanzar una misión como esta adelante. Primero, porque se toma conciencia social de un
problema importante; segundo, se hace un desafío global a las comunidades para trabajar en
resolverlos --a los comités de salud, al gobierno y al propio sistema de salud. Tercero, obliga a los
políticos a incluir servicios de salud en sus programas electorales. La toma de conciencia del
problema mantiene una demanda social que acicatea el desafío y son muchos los que al recibir los
beneficios de Barrio Adentro y la Misión Milagro, se preguntan cuándo llegará la Misión Sonrisa al
barrio. Será una obligación del gobierno presente y otros futuros abaratar los costos médicos de la
odontología en Venezuela.
El costo de una prótesis dental es en el sistema privado de
aproximadamente 2.000 bolívares fuertes; muy por encima de la capacidad económica de cualquier
familia venezolana media. Desgraciadamente, tenemos que decir, que la dentadura sana en
Venezuela es todavía el privilegio de unos pocos, y que la Misión Sonrisa ha empezado a reducir y
a eliminar la discriminación existente.
El modelo de efectividad en materia de salud, después de Barrio Adentro, ha sido sin duda
la Misión Milagro. Esta es una misión de salud visual que ha recuperado y mejorado la visión a
cientos de miles de venezolanos y latinoamericanos. Funciona en varios países latinoamericanos y
del Caribe que han permitido --ignorando las presiones y cargas políticas que significa asociarse
con Cuba y Venezuela hoy día-- que los médicos de la Misión Milagro hagan su labor médica en el
territorio nacional. Este es otro programa de salud cubano-venezolano y que fue firmado el 21 de
agosto del 2005. El último objetivo es intervenir quirúrgicamente de cataratas y plerigium a seis
millones de latinoamericanos en período de 2006- 2016. La Misión Milagro empezó en Venezuela
en octubre del 2005 y en sus primeros cinco años, ha intervenido quirúrgicamente a 263.949
pacientes y ha atendido de la vista a 1.777.128 personas en consulta personal. De los pacientes
operados, el 90% son ciudadanos venezolanos y un 10% son extranjeros. De los 25.716 extranjeros
operados satisfactoriamente en Venezuela, hay ecuatorianos (5.324), salvadoreños (3.989),
colombianos (1.177), brasileños (110), guatemaltecos (2.082), peruanos (1842), chilenos (1.099),
puertorriqueños (5), paraguayos (992), costarricenses (1.301), nicaragüenses (3.406), dominicanos
(802), uruguayos (3), bolivianos (1), argentinos (310), mexicanos (509), portugueses (3), cubanos
(1) e italianos (1).
Ya en agosto del año 2007, la Misión Milagro funcionaba en ocho países diferentes de
CARICOM y América del sur desde sus treinta y siete centros oftalmológicos que están atendiendo
277
pacientes gratuitamente en esos países.
La doctora Yolimar Alberti, directora del Centro
Oftalmológico Estado Vargas, explica la Misión Milagro.
Actualmente la Misión Milagro es una de las misiones sociales que más se ha mantenido en
el tiempo y además tiene un estándar de atención muy alto. Nos complace y nos llena de orgullo
que el ascenso ha sido la única palabra que hemos conocido quienes formamos parte de esta
iniciativa, ya que nunca hemos dejado de crecer en las estadísticas y por ello hoy día la Misión se
ubica en una meseta de eficiencia y calidad 318.
En el caso de Venezuela, la Misión Milagro tiene una conexión muy importante con Barrio
Adentro y sus resultados mejorarán incluso más con la implementación de la siguiente etapa del
mismo. A partir de agosto del 2005, se inició la etapa Barrio Adentro III, que se centró en recuperar
la infraestructura y mejorar el funcionamiento de los hospitales públicos existentes en el país.
Añadir nuevos hospitales para mejorar la red clínica de salud pública existente es la etapa Barrio
Adentro IV. Los hospitales públicos, con la nueva filosofía de salud pública bolivariana seguirán
siendo coordinados por el Ministerio de Salud y Desarrollo Social pero ahora se plantean cambios
drásticos de adecuación física y tecnológica de cada hospital. Consiste en su adecuación a un nuevo
modelo de atención y gestión hospitalaria.
El objetivo es ambicioso, nada menos que mejorar y recuperar la capacidad de los 299
hospitales públicos repartidos por toda la geografía nacional y hacerlo por etapas. En Venezuela
hay 181 hospitales generales, 36 especiales, 33 que gestiona el Instituto Venezolano de Seguros
Sociales, 13 hospitales militares, 3 hospitales de PDVSA, 2 de la Corporación Venezolana de
Guyana (CVG) y uno de la policía Estadal de Maracaibo. Barrio Adentro III se plantea la
renovación de la infraestructura de estos hospitales en varias etapas. La primera parte del proyecto
es mejorar la infraestructura de 42 hospitales estratégicamente seleccionados que cubren toda la
geografía nacional; la segunda sería extender los beneficios a otros 90 y finalmente transformar
progresivamente el resto de la red hospitalaria del país.
La preparación y planificación de Barrio Adentro III fue hecha por un equipo de trabajo
de profesionales del Ministerio de Salud y Desarrollo Social, del IVSS, directores de salud,
directores de hospitales, funcionarios de las gobernaciones y alcaldías; también varios
especialistas cubanos expertos en la materia. Siguiendo las recomendaciones de la OMS --que
sugiere duplicar el número de camas en el país—y el nuevo censo hospitalario se procedió con la
318
Declaraciones de Yolimar Aberti, directora del Centro Oftalmológico del Estado Vargas en Cuaderno de
Misiones. (Caracas: Ministerio del Poder Popular para la Comunicación e Información, 2009).
278
planificación de Barrio Adentro III. El nuevo censo hospitalario fue hecho para conocer las
necesidades hospitalarias regionales y nacionales. Incluye un informe del estado de todas las
instalaciones existentes y de las necesidades más urgentes de cada uno.
Cada hospital necesita una adecuación tecnológica, un nuevo modelo de gestión y de
atención al público. Además muchos requieren trabajos de remodelación en la planta física de
los mismos. Obviamente, se necesita un cambio en la política presupuestaria de los hospitales
para que reciban no sólo los nuevos equipos sino también los recursos humanos que necesitan.
Barrio Adentro III favorecerá la dedicación exclusiva de los trabajadores de la salud en cada uno
de los centros señalados. Para la modernización hospitalaria el gobierno ha destinado 5 mil
millones de dólares de las reservas internacionales del país. La compra de equipos médicos se
hace a través del Fondo de Desarrollo Nacional (FONDEN) – aprobados por el Banco Central de
Venezuela—y cuyos fondos económicos vienen de los excedentes que recibe el país procedente
de la exportación de petróleo 319. Las prioridades de los 44 hospitales seleccionados para reforma
son los más grandes del país y donde se imparte además docencia universitaria.
Estos
representan el 60 por ciento de las camas y más del 50 por ciento de los quirófanos públicos.
Las mejoras van de los servicios de cocina y lavandería a la incorporación de equipos
computarizados de imagen en las salas de emergencia, unidades de terapia intensiva, diálisis y
quirófanos de cada hospital. Por ejemplo los nuevos quirófanos – que se conocen en el argot
médico como inteligentes—son de fácil instalación y con un costo de 2.500.000 bolívares
fuertes.
Tienen equipamiento que permite la intervención quirúrgica con la utilización de
cámaras que generan imágenes en los monitores –conocidos como telemedicina-- del quirófano.
En el nuevo modelo de atención el paciente en los hospitales sigue los pasos desde el
momento en que la persona llega al centro médico.
1. El paciente acude al centro de salud con una dolencia.
2. El médico examina al paciente y realiza los análisis necesarios para hacer un
primer diagnóstico. (nivel I de salud)
3. Si es necesario el paciente acude al CDI para hacer más exámenes si los necesita.
(nivel II de salud)
4. Tras confirmar el diagnóstico el paciente vuelve a su casa, ingresa en la clínica
popular o es trasladado al hospital para recibir el tratamiento o intervención
quirúrgica que necesita (nivel III de salud).
319
“Barrio Adentro III: Gobierno en línea.” www.aporrea.org (31/8/05)
279
Según el ministerio de Salud y Desarrollo Social el avance de la Misión de Barrio
Adentro III es el siguiente:
Año Denominación
Metas
programadas
2005 Centros de atención recuperados y modernizados
Dotación a hospitales
2006 Recuperación de hospitales tipo I y tipo II equiparables con
los Centros de Diagnóstico Integral
Número de pacientes evaluados en todas las patologías
Pacientes atendidas en consulta prenatal, postnatal y por
abortos
Intervenciones quirúrgicas
Emergencias médicas atendidas
Pacientes con riesgo potencial
Análisis de laboratorio
Personas atendidas en oncología
79
79
229
215.793
26.004
8.565
176.500
26.004
26.004
3.640
Año
Denominación
Metas ejecutadas
2005
Intervenciones quirúrgicas
Partos
Cesáreas
Consultas
Estudios radiológicos
Exámenes de laboratorio
Usuarios beneficiados
294.422
310.903
88.255
12.900.000
2.900.000
31.400.000
1.500.000
Año
Presupuesto asignado
2005
Bs
Bs
Bs
Bs
Bs
Bs
Año
50.000.000.000 para equipamiento
15.000.000.000 para hospitales
224.000.000.000 para insumos
700.000.000 en material médico quirúrgico
214.000.000.000 en recursos adicionales para hospitales
240.000.000.000
Presupuesto ejecutado
2006 Bs 41.296.000.000 para estudios de vulnerabilidad en hospitales tipo IV
Bs 40.000.000.000 para dotación de Insumos
Bs 393.851.338 para gestión hospitalaria
280
Bs 34.000.000 red de biología molecular
Bs 6.400.000 suministro de reactivos para laboratorios 320.
El propio Centro Oftalmológico del Estado Vargas es un ejemplo concreto de la Misión
Barrio Adentro III. El centro está dotado de 12 consultorios, 6 quirófanos, una sala de recuperación
post-operatoria, un área de servicios generales. Además como todos los nuevos hospitales tienen
ahora una zona administrativa, cafetería y residencia médica. El centro tiene una capacidad
tecnológica y profesional que supera cualquier centro oftalmológico privado. La propia directora
Yolimar Alberti señala la importancia de Barrio Adentro III:
En materia hospitalaria nunca había visto, en los 20 años de experiencia que tengo como
médica, tanto desarrollo y evolución. En el pasado la salud estaba en decadencia absoluta, hoy en
día existe un gran número de hospitales modernizados y con equipos de última generación;
entonces, eso dice mucho de que tanto hemos avanzado en materia de salud. Sólo a nivel
hospitalario estamos hablando del presupuesto de un billón de bolívares para el mejoramiento
de infraestructura y el equipamiento de esos centros hospitalarios que entrarían en el programa
de Barrio Adentro 3 dentro de poco tiempo 321.
Por último, desde agosto del 2006, Barrio Adentro IV tiene planes para construir nuevos
hospitales siguiendo la pauta del Hospital
Rodríguez Ochoa”.
Cardiológico Infantil Latinoamericano “Gilberto
Los nuevos hospitales del Barrio Adentro IV serán además centros de
investigación. El Cardiológico Infantil da atención gratuita cardiovascular, hemodinámica y de
electrofisiología a más de 4000 niños y adolescentes; ya se han realizado 1.104.150 operaciones en
seis años de su funcionamiento, en la unidad oncológica del Hospital Luis Razetti y otros más. El
Hospital fue inaugurado el pasado 20 de agosto del 2006 con el objetivo de reducir la segunda causa
de muerte de niños menores de un año en Venezuela y atender a los niños y jóvenes que sufren
malformaciones cardiacas. En Venezuela nacen cada año 4.500 niños con cardiopatías congénitas
que necesitan tratamiento médico.
Antes de la creación de este hospital sólo se operaban 600
pacientes al año en los ocho centros cardiovasculares infantiles regionales; ahora se espera por lo
menos triplicar la cobertura de la demanda existente.
320
Ministerio de Salud. Memoria y Cuenta 2005. (Caracas: Ministerio de Salud. 2006).
321
Ibíd.
281
El hospital cuenta con un edificio compacto de planta cuadrada organizado alrededor de
un patio de 39 mil metros cuadrados, compuesto por un nivel quirúrgico de 18 mil, un área de
consulta de más de 10 mil metros. El nivel de hospitalización consta de 8 mil metros cuadrados,
y el nivel techo con 10 mil 312 metros cuadrados, además de las áreas exteriores y
estacionamientos con un rango de superficie de 47 mil 532 metros cuadrados. A esto se suma el
espacio que alberga 142 camas de hospitalización, 33 en el área de cuidados intensivos,
asociada a su altísima capacidad para realizar 4 mil 500 operaciones anuales cuando el
hospital se encuentre en su máxima capacidad de atención en el año 2009. Quizá lo más
resaltante de este moderno centro hospitalario es que cuenta con una altísima complejidad
tecnológica 322.
La construcción de este centro cardiológico costo un monto de 41.405 millones de
bolívares, y tiene los siguientes equipos médicos.
De hemodinámica realizan estudios de angiografía digital. El costo del equipo
monoplano es de 2. 681 millones de bolívares y el biplano valen 3.308 millones de bolívares.
Estos equipos se sustentan de cinco bombas de circulación extra corpórea más dos balones de
contra pulsación aórtica que cuestan 2.245 millones de bolívares.
De iconografía: un equipo de eco cardiografía de 3D o tercera dimensión con traductor
trans-esofágico que cuesta 505.000 millones de bolívares; y once equipos más pero 2D con
“dopler” a color que permiten una mejor imagen para los estudios médicos con un de 2.885
millones de bolívares.
De monitoreo: sesenta monitores de signos vitales sin presión, alta resolución en imagen,
quince monitores de transporte, cuarenta monitores de signos vitales multi-parámetros adultopediátrico con gasto cardíaco, doce monitores de signos vitales neonatal sin gasto cardíaco y
seis centrales de monitoreo, representan un valor de 2 mil 685 millones de bolívares.
De ventilación: 16 ventiladores de transporte, la mitad de características pediátricosneonatal y los demás para el renglón adulto, veintiocho para adultos-pediátricos, diez más para
los pacientes pediátrico neo-natales y treinta carros de paro desfibrilador.
De máquinas de anestesia: cuenta con siete máquinas de anestesia, ejes del nivel
quirúrgico y preoperatorio con un soporte de 3 vaporizadores más 4 endoscopios para
intubaciones difíciles, 12 laringoscopios para adultos, 12 pediátricos y 12 neo natales. Su costo
es de 1.004 millones de bolívares.
De cirugía: se sustentará en seis electro-bisturís para procedimientos mayores que
requieren gran precisión, su valor es de 90 millones de bolívares.
De instrumental: comprende 48 cajas de material quirúrgico de alta tecnología para dar
forma a la respuesta médica, su monto es de 583 millones de bolívares.
322
“Hospital Cardiológico Infantil Latinoamericano Dr. Gilberto Rodríguez Ochoa.” www.venezuelabolivariana.com
282
Otros: 37 equipos de serología y otras pruebas para banco de sangre, 93 equipos de
laboratorio, 29 equipos de anatomía patológica, 13 equipos de farmacia, 22 neveras y
congeladores para los bancos de sangre, laboratorio, farmacia y anatomía patológica, 15
equipos de succión, 7 gastro-evacuadores, 90 resucitadores, 6 electrocardiógrafos, 6 electro
nebulizadores, 19 mantas térmicas, una máquina de hemodiálisis, 40 bombas, 20 de difusión
volumétrica y 20 de infusión de jeringa, 4 lámparas cialíticas con satélite y sistema de video, 4
columnas de instalaciones para quirófanos y 2 lámparas auxiliares quirúrgicas de pedestal.
Todos estos equipos por un monto de 2.990 millones de bolívares. A la par los servicios de
sistemas y equipos informáticos primordiales para el manejo y coordinación de imágenes,
radiología, así como los servidores, computadores, impresoras y otros equipos menores
ascienden a 2.560 millones de bolívares 323.
Barrio Adentro IV representa la última etapa de la nueva red nacional de salud pública
que se está construyendo en Venezuela. El modelo para implementarlo ha sido el mismo que se
ha hecho con las otras misiones. Primero crear un sistema paralelo al existente y después; una
vez creado el modelo alternativo, confirmada la necesidad y el apoyo popular al proyecto, iniciar
por etapas la integración del sistema existente o heredado de la IV República al nuevo. De esta
forma crear --con la mínima resistencia posible-- la reforma burocrática que se necesitaba en
todos los sistemas públicos controlados las roscas ministeriales del estado de la IV República.
Es interesante destacar que independientemente de los éxitos y de los reveses de la
propuesta bolivariana en el sector salud --durante diez años-- se mantiene fresca su actualidad, su
optimismo y su vigor como alternativa política. Los niveles de crecimiento, apoyo y popularidad de
Barrio Adentro demuestra que existe en Venezuela la necesidad de una praxis liberadora creadora y
una concienciación popular que es autóctona y venezolana; pero que ahora empieza a trascender
barreras nacionales e incorpora nuevas prácticas de participación democrática auténtica en Bolivia y
más recientemente en Ecuador y Nicaragua 324.
323
Ibíd. Más información en www.cardiologicoinfantil.gob.ve
En Ecuador se votó la nueva constitución el 29 de septiembre de 2008. Similar en su espíritu y planteamientos a
los formulados en la venezolana. Curiosamente los mismos grupos opositores se oponen a la nueva constitución, la
derecha y la jerarquía de la Iglesia Católica. Por otro lado en Venezuela, el Partido Socialista Unificado de
Venezuela (PSUV) de reciente creación se crea como una necesidad de unificar criterios y establecer prácticas
democráticas claras y definidas. Todos los candidatos locales que presenta el PSUV fueron elegidos
democráticamente en elecciones locales previas del partido, supervisadas por el Consejo Nacional Electoral (árbitro
de todas elecciones nacionales). Los representantes no son escogidos por la dirigencia o por el congreso del partido,
sino directamente por los miembros del partido en una determinada localidad. Esta práctica de democracia directa –
que creo que favorecería sin duda Paulo Freire— es un precedente interesante para eliminar privilegios y corrupción
dentro de los partidos.
324
283
5.1. Misión José Gregorio Hernández: integración de las personas con diversidad funcional
Toda persona con discapacidad o necesidades especiales tiene derecho al ejercicio pleno
y autónomo de sus capacidades y a su integración familiar y comunitaria. El Estado, con la
participación solidaria de las familias y la sociedad, les garantizará el respeto a su dignidad
humana, la equiparación de oportunidades, condiciones laborales satisfactorias, y promoverá su
formación, capacitación y acceso al empleo acorde con sus condiciones, de conformidad con la
ley. Se les reconoce a las personas sordas o mudas el derecho a expresarse y comunicarse a
través de la lengua de señas venezolana (art. 81 de la Constitución Bolivariana de Venezuela).
El artículo 81 de la Constitución Bolivariana es posible gracias a las luchas que han
llevado a cabo las personas con diversidad funcional desde hace muchos años. La revolución dio
pasos importantes en los EEUU con su líder principal, Ed Roberts y sus “rolling squads” en la
Universidad de Berkeley y en la Bahía de San Francisco, en California, cuando empezaron sus
protestas y encierros reclamando sus derechos humanos. La lucha se inició de una forma
organizada a finales de los años sesenta y principios de los setenta y concluyó su primera etapa
con la ley American Disability Act (ADA) en 1990; ley firmada por el presidente de los EE UU
en ese entonces George Bush, padre. Digamos que esta etapa previa de esta revolución en
progreso fue el inicio de un largo camino que todavía queda para la integración social de las
personas de diversidad funcional en EE UU y el resto del mundo. Aunque se avanza lentamente
en materia de los derechos humanos para las personas con diversidad funcional en los países en
desarrollo, la agenda revolucionaria de Ed Roberts de integración social para las personas con
diversidad funcional ha ido extendiéndose también en Europa y en el resto del mundo. Según la
Organización Mundial de la Salud (OMS) hay más de 600 millones de personas con diversidad
funcional, que es un diez por ciento del total de los habitantes en el planeta. El 80% de las
personas con diversidad funcional vive en los países de más bajos ingresos. Según la OMS la
mayoría de las personas con diversidad funcional lo son a causa de heridas de guerra y
accidentes, de enfermades infecciosas y de malnutrición crónica.
La Organización de las
Naciones Unidas, inició el de mayo de 2008 la Convención sobre los Derechos de las Personas
con Discapacidad (CDPD) como un instrumento más para educar y concienciar a los países de la
necesidad de trabajar juntos en esta materia. Michael Fox, Presidente de Rehabilitación
Internacional (RI) describe la situación actual.
284
La realidad de la mayoría de los niños y niñas con diversidad funcional es que están
generalmente condenados a un “comienzo en desventaja en la vida” donde se les ha despojado
de las oportunidades para desarrollar sus potencialidades íntegras y de su participación en la
sociedad. Como rutina, a estos niños y niñas se les ha negado el acceso a las mismas
oportunidades que otros niños gozan como educación preescolar, primaria, y secundaria,
capacitación para las destrezas de la vida o la educación vocacional, o ambas 325.
La agenda de las personas con diversidad funcional es la igualdad social. Va más allá de
pan y trabajo ya que reivindica el derecho a tener una vida normal, independiente, participativa y
protagónica, como cualquier adulto.
Vida independiente es un paradigma, un modelo desde el que la persona con diversidad
funcional ejerce su plena capacidad de elección como ser humano en plenitud de condiciones,
con libertad, de modo individual, controlando todos y cada uno de los aspectos de su vida para
acceder al mismo rango de igualdad de derechos y deberes que sus conciudadanos 326.
Este concepto es fundamental y central ya que determina la filosofía social de cualquier
ley que afecte a los derechos humanos de las personas con diversidad funcional, tal como bien lo
señala la Constitución Bolivariana. En Venezuela, la Revolución Bolivariana reclama la voz de
los afectados mismos, es decir las personas con diversidad funcional 327. La Ley para personas
con discapacidad, aprobada en el Congreso en noviembre del 2006, que se aplica para apoyar el
mandato constitucional exige la atención médica, social y laboral a la persona con diversidad
funcional. Para ello, la Ley crea los instrumentos de salud necesarios para hacer los planes de
rehabilitación y terapia ocupacional que se necesiten, se crean instrumentos educativos
especiales necesarios para atender a las personas con diversidad funcional y un programa de
acción afirmativa laboral para integrar a las personas con diversidad funcional en el mercado de
325
Michael Fox, “Editorial ¿Qué significa la CDPD para las vidas y el futuro de los niños y la juventud con
diversidad funcional? “ En One in Ten (Unicef y RI, volumen 26, 2008)
326
www.vidaindependiente.org. Esta organización creada y dirigida por personas con diversidad funcional
defiende los derechos humanos de las personas “discapacitadas” y funciona a nivel internacional.
327
Por ejemplo la nueva Ley hecha en España -- que aparentemente es muy progresista-- y que ha sido aprobada y
promulgada por el Gobierno de Rodríguez Zapatero, denominada Ley de Dependencia, es un auténtico “desastre” y
es un ejemplo de hacer mal haciendo “bien.” Básicamente no favorece la independencia de la persona afectada sino
todo lo contrario. Favorece la institucionalización de las personas con diversidad funcional, ya sea en el círculo
familiar o en instituciones del estado. Más dependientes, más dinero. El problema es fundamental y conceptual ya
que los fondos que provee no son manejados directamente por las personas afectadas; sino por terceros, que
supuestamente “tutelan” al discapacitado. Ignora que la mayoría de las personas con diversidad funcional no
necesitan este tipo de tutela. Esta ley sería buena si destinara los fondos económicos directamente a las personas
con diversidad funcional para que tuvieran acceso a una vida independiente. De no ser así, La ley tendrá efectos
negativos porque creará más dependencia. Las familias con una persona con diversidad funcional no quieren que
este haga su vida independiente sino que lo quieren en casa ya que reciben una ayuda mensual nada despreciable de
400 o 500 euros al mes.
285
trabajo. Por ejemplo, se establecen claras cuotas mínimas de empleo para integrar a las personas
afectadas. Este programa de acción afirmativa tiene el objetivo de avanzar en la integración de
las personas discriminadas en la sociedad y se utiliza frecuentemente en EE UU. Similares
medidas que se tomaron en EE UU para reducir y eliminar la discriminación racial en la
administración pública, en las universidades y en las empresas privadas. En Venezuela, las
compañías del estado o privadas tienen tres años para cumplir el requisito mínimo de empleo de
personas con diversidad funcional de un cinco por ciento de su personal. Las empresas de más
de 50 empleados necesitan cubrir un porcentaje que no será menor del dos por ciento.
Vida independiente requiere un cambio de protagonistas, de palabras y de cultura muy
profundo; y que afortunadamente se están dando los primeros pasos. Recordemos que antes de
la Revolución se veían muy pocas personas con diversidad funcional en las calles del país, ni en
los medios de comunicación, ni en los centros de trabajo. La persona con diversidad funcional
estaba condenada a la marginación y aislamiento de su casa o de una institución. Sufría la cárcel
de la inaccesibilidad de los cerros de Caracas donde las barreras arquitectónicas y culturales lo
mantenían prisionero y lejos de la posibilidad de una vida independiente.
La “vida
independiente” era un concepto imposible, no imaginado, el concepto dominante --como lo
señala el Presidente Chávez-- era el de minusválido, el que vale poco o nada.
Ellos no son minusválidos. Esa palabra hay que eliminarla de nuestro vocabulario.
Minusválido es una cosa que vale menos, minusválido es el capitalismo, eso no vale nada. Ellos
son nuestros compatriotas, que tienen el mismo valor que todos nosotros y muchas veces más
que nosotros, porque el esfuerzo que hacen, espiritual, físico, (es) mucho mayor que el que
nosotros hemos hecho toda nuestra vida 328.
Los términos, minusválido o discapacitado están cargados de connotaciones negativas y
que afectan la dignidad misma de las personas afectadas. No así, el nuevo término de persona
con “diversidad funcional” propuesto por los propios involucrados.
Las mujeres y hombres con diversidad funcional constituyen un colectivo que ha sido
tradicionalmente discriminado de una manera diferente al resto de colectivos que también han
sufrido o sufren discriminación (mujeres, personas de raza negra, indígenas, inmigrantes, etc.).
Esta discriminación se ha dado incluso dentro de esos otros colectivos discriminados, que
también han olvidado incluir en su lucha a sus propios miembros con diversidad funcional. Los
términos limitantes o despectivos utilizados para denominar al colectivo de mujeres y hombres
con diversidad funcional juegan un papel fundamental en el refuerzo de las minusvaloración y,
por lo tanto, en el mantenimiento de dicha discriminación. Este artículo pretende proponer un
328
Hugo Chávez Frías, en su presentación de la misión José Gregorio Hernández en televisión.
286
nuevo término para denominar al grupo de mujeres y hombres, “mujeres y hombres con
diversidad funcional”, que representan el 10% de la humanidad más olvidado y discriminado a
lo largo de la historia en la casi totalidad de las sociedades humanas 329.
Las tesis de igualdad laboral e integración profesional y ciudadana de las personas con
diversidad funcional a la vida normal ya tiene que dejar de ser la excepción para convertirse en
rutina en muchos países y lugares del mundo. La Revolución Bolivariana no ha sido indiferente
a la marginación física y social que han sufrido estas personas para afrontar su vida. Hasta ahora
las personas con diversidad funcional han sufrido doble marginalidad incluyendo la social. El
Consejo Nacional para las Personas con Discapacidad (CONAPDIS) se crea con el objetivo de
formar a las propias personas con diversidad funcional.
Aprender a organizarse y crear
programas de formación e integración social a todos los niveles. Este organismo me recuerda a
los Centros de Vida Independiente (Center of Independent Living-CIL) que creó Ed Roberts en
EE UU con el objetivo de organizar a las personas con diversidad funcional para facilitar su
lucha y preparación para la integración social.
Además de CONAPDIS, la Revolución Bolivariana lanza la Misión José Gregorio
Hernández. Esta Misión tiene varios aspectos importantes y aunque --no se adopta la nueva
terminología todavía-- y usa todavía el término “discapacitado” tanto de forma legal como
cultural es importante destacar la selección de la figura del doctor José Gregorio Hernández
como su representante 330. La presencia de José Gregorio –como se le conoce popularmente-- es
obvia para cualquier venezolano, ya que su retrato es común en muchos hogares venezolanos.
Por humilde que sea una familia, uno encontrará al lado de símbolos religiosos y artísticos
frecuentemente dos retratos colgados en la pared: uno del Libertador, Simón Bolívar y otro del
doctor José Gregorio Hernández. Este hecho tiene connotaciones culturales y filosóficas que
representan los valores individuales y sociales que defendió el propio doctor José Gregorio
Hernández en su vida ejemplar. Su figura se asocia nada menos que tres valores humanos que
representan la mayor virtud: el amor incondicional, el respeto a los más necesitados y la fé ante
las adversidades. Como médico además representa el conocimiento científico que con el espíritu
329
Ver Javier Romanach y Manuel Lobato, “Diversidad Funcional nuevo término para la lucha por la dignidad en la
diversidad del ser humano.” (Logroño, España: Foro de Vida Independiente, mayo 2005)
330
“La manera en la que desde el Foro de Vida Independiente proponemos denominar a ese colectivo, al que
pertenecemos, es mujeres y hombres con diversidad funcional, ya que entendemos que es la primera
denominación de la historia en la que no se da un carácter negativo ni médico a la visión de una realidad humana, y
se pone énfasis en su diferencia o diversidad, valores que enriquecen al mundo en que vivimos.” Ibíd.
287
de lucha espiritual y física se requiere para vencer la enfermedad y las limitaciones. José
Gregorio Hernández es el modelo espiritual y social opuesto a la muerte y el miedo; representa
la lucha por la vida digna contra las mayores dificultades.
En el aspecto profesional e integral la Misión José Gregorio Hernández es una extensión
de la propia Misión Barrio Adentro --y parte del convenio de cooperación Cuba-Venezuela en
materia de salud. Es decir que la Misión tiene a su servicio todos los recursos humanos y
profesionales del sistema nacional de salud. A partir del 2008, la Misión tiene como objetivo
dar asistencia y ayudar a la integración social a más de 80.000 venezolanos que sufren algún tipo
de discapacidad física o mental. La primera inversión alcanzó los 592 millones de bolívares
fuertes 331. Para alcanzar la posibilidad de una vida independiente a la mayoría de los afectados,
la Misión establece varias etapas.
Primero, tiene que llevar la atención primaria a todas las personas que padezcan algún
tipo de discapacidad. Los médicos y especialistas han terminado el primer censo y estudio
médico para determinar las causas de cada problemática individual; determinando si existen
causas genéticas o hereditarias para aplicar planes preventivos donde fuera oportuno.
Segundo se inicia la etapa que pone que en marcha estrategias de atención, tanto para el
afectado como para la familia y el entorno social. En este sentido es preciso educar a través de
especialistas, voluntarios, organizaciones, comités de salud y consejos comunales la lucha contra
las barreras arquitectónicas y culturales que conforman la discriminación. Además hay que
organizar cursos de capacitación artística, laboral y deportiva que incluya a las personas con
diversidad funcional en las diferentes comunidades. El objetivo comunitario, como se ha hecho
en otros casos de marginación, es crear el mayor número posible de vías de inclusión social para
las personas que sufren de marginación. Incorporar a la persona para el pleno disfrute de sus
derechos como ciudadano;
incluyendo el derecho básico a la vida independiente para las
personas con diversidad funcional.
La primera fase de la Misión José Gregorio Hernández fue llevada a cabo por las
personas afectadas en colaboración con estudiantes de Medicina General Integral, que trabajaban
bajo la dirección de un equipo profesional. El gurpo de expertos profesionales y activistas
comunitarios está formado por un especialista en genética, un doctor local de Barrio Adentro, un
331
Dexy García, “Misión José Gregorio Hernández: salud integral para los más débiles.’ (Caracas: Ministerio del
Poder Popular para la Comunicación e Información, 25/3/08)
288
psicólogo y un trabajador social del Frente de Juventud “Francisco de Miranda.”
Juntos se
elabora un cuadro clínico-social de cada persona con diversidad funcional, que recoge toda la
información médica necesaria sobre los problemas físicos, psicológicos, motores, sensoriales y
sociales de la persona afectada y un plan de acción de integración social.
La problemática de las personas con discapacidad y el estudio de la discapacidad en
general –diversidad funcional—sólo puede ser mejorada desde el punto de vista social. Uno
debe tener sensibilidad y un profundo sentido humano. Una revolución socialista de verdad
necesita ocuparse primero de los sectores sociales más vulnerables, como los niños, los
ancianos y aquellos que sufren discapacidades 332.
Por ejemplo, según el primer censo del estado Miranda se han detectado 21.917 casos de
personas con diversidad funcional. En Delta Amacuro (1.164), Zulia (33.119), Barinas (6.382),
Vargas (4.256) y en otros estados incluyendo Caracas se llevan diagnosticados un total de 83.324
casos de personas con diversidad funcional. Hay varios datos analíticos importantes que revela
el censo hecho.
Por ejemplo, casi un 7 por ciento de las personas que sufren diversidad
funcional intelectual están desamparados, están viviendo en la calle y mientras que otro 2 por
ciento vive en condiciones pésimas. Hay un 14 por ciento que están marginados en sus camas,
en una situación degenerativa, debido a la falta de atención médica y al abandono familiar o
social. Es interesante destacar que hay un 15 por ciento capacitado para trabajar con normalidad,
pero están en situación de desempleo por marginación laboral y prejuicio. Hay 5.000 niños
marginados por su diversidad funcional que no van a la escuela como el resto de los niños del
país.
Una vez determinada la naturaleza y la dimensión de los problemas viene la segunda
etapa; que obviamente es más compleja ya que requiere crear soluciones para cada situación
particular. Se trata de determinar con el afectado o sus familias el tratamiento adecuado para
cada caso; atendiendo las necesidades y capacidades particulares de cada persona, usando los
equipos médicos, psicológicos y sociales necesarios. Aquí el censo fue muy importante para
determinar la dimensión de las necesidades existentes. Se necesitarán un número de sillas de
ruedas, camas especiales, muletas, aparatos auditivos, aparatos ortopédicos y otros para restituir
la dignidad de estas personas. Es importante destacar que es el estudio de cada caso el que
determina el tratamiento particular y social que logra la integración social de la persona.
332
Por
Marcia Cobas, viceministro de salud pública de Cuba. En James Suggett, “Venezuela launches New Mission for
Health of the Disabled.” www.venezuelanalysis.com
289
supuesto, dentro de estas medidas sociales hay una parte muy importante que corresponde a la
comunidad y al estado hacerlas. Así lo ha manifestado Lady Ramírez, presidente del Consejo
Nacional de Personas con Discapacidad, ya que hay que eliminar los prejuicios que como las
barreras arquitectónicas existen por todas partes, tanto en las mentes como en los edificios
públicos y
privados.
Además –añadió—hay que crear un servicio público de transporte
adecuado para que las personas con diversidad funcional puedan tener una vida normal 333.
No hay que olvidar que la misión tiene el aspecto educativo tanto comunitario como
profesional y laboral. La comunidad debe hacer un estudio de riesgos del hábitat, para evitar
accidentes que pueden causar problemas serios de discapacidad.
Hay que recordar que la
mayoría de los problemas de discapacidad física ocurren en accidentes de transporte y/o
laborales. Muchas veces se ignora el uso de cascos apropiados a cada actividad; y no se toman
medidas mínimas preventivas necesarias que minimicen los riesgos de accidentes.
Además, los profesionales de la salud tienen con esta misión –igual que con Barrio
Adentro—la oportunidad para especializarse y mejorar su capacidad profesional para resolver
problemas de rehabilitación y terapia ocupacional; necesarios para crear las condiciones de vida
independiente de las personas con diversidad funcional. Otros beneficios médicos de la misión
es que facilita gratuitamente los estudios genéticos necesarios para determinar los diferentes
casos de discapacidad hereditaria. No olvidemos que el equipo médico tiene una conexión
directa con los servicios de genética y rehabilitación que los especialistas de Medicina General
Integral, preparados en la ELAM -- que se ofrecen desde la Misión Barrio Adentro. Estos
equipos médicos son los necesarios para hacer los estudios clínicos individuales que se necesitan.
En resumen, la Misión José Gregorio Hernández es parte integral con el sistema de salud
Barrio Adentro y con su inversión inicial ha sido capaz de hacer los estudios individuales –
psicosocial, pedagógico, genético y clínico – necesarios para lanzar los programas de salud
primaria para las personas con diversidad funcional en el país. Estos estudios médicos eran
necesarios para tomar las medidas médicas, sociales y laborales que se necesitan para la
integración social de aquellas personas que están marginadas.
De esta forma iniciar el
cumplimiento de los instrumentos legales y constitucionales que garantizan a las personas con
diversidad funcional su derecho a la identidad, a la salud y a la vida independiente.
333
Ibíd.
290
Ahora se inicia la etapa más difícil que es la educación de los afectados y de la sociedad
para el cumplimiento del derecho. No sólo se trata de la entrega las sillas de ruedas, muletas,
andaderas, bastones o prótesis que necesitan los afectados, sino atender a la rehabilitación
psicológica y laboral a la que todas las personas tienen derecho. Se estima que el número
potencial de personas con diversidad funcional varia de mayor a menor de unos 80.000 a
600.000 según los casos. El éxito de la Misión ha hecho –con su visión integral del problema—y
como el caso de la Misión Milagro, extenderse a otros países interesados como Ecuador y
Nicaragua. En el Ecuador, se llamaría Misión Solidaria “Manuela Espejo” y su fase piloto se
ejecutará en la provincia de Cotopaxi, al sur de Quito. Esta sería una iniciativa del ALBA
(Alternativa Bolivariana para los Pueblos de América) para mejorar la vida en el continente 334.
En Bolivia se está creando la Misión “Moto Méndez” y en Nicaragua, la Misión “Todos con
Voz” con el objetivo de integrar socialmente a las personas con diversidad funcional en ambos
países.
Conclusiones Generales
El reconocimiento de la existencia de los derechos humanos básicos de seguridad y
subsistencia --que constituyen la jerarquía lógica de los derechos humanos-- y cuya
responsabilidad recae en el estado-nación -- propuesta teórica de Henry Shue-- tiene en la
Revolución Bolivariana un exponente y un ejemplo posible de su significado social y político.
La dirección de los cambios sociales y políticos en materia de derechos humanos que su
aplicación producen es una razón para el optimismo general. Estos cambios coinciden con los
que promociona la propia UNESCO en sus programas educativos para la creación de una cultura
para la defensa de los derechos humanos y de La Paz. La UNESCO propone buscar y estudiar
ejemplos pacíficos en la búsqueda de la justicia por la via de la no violencia 335. Este trabajo
cumple con este objetivo proclamado y requerido de los educadores hechos desde las Nacionales
Unidas.
334
“Misión José Gregorio Hernández será extendida al Ecuador.” (Caracas: ABN, 7/10/09). En www.aporrea.org
John M Amoda, Third Party Interventions and the Designing of Unesco’s Culture of Peace Programs: Cultivating
the Disciplines of Peace-making Statecraft. (New York: Ai –Bethel Consults, Inc,, 1995), 48-49.
335
291
Asimismo, el modelo de la Revolución Bolivariana parece ir por buen camino en tres
diferentes frentes importantes para la defensa de los derechos humanos. Primero, hay que
señalar que la Revolución Bolivariana tiene todos los elementos para crear un estado de defensa
de los derechos humanos de “seguridad y subsistencia,” alternativa histórica que substituye al
Pacto de Punto Fijo --modelo de “seguridad nacional hemisférica” – existente durante la IV
República en Venezuela. Segundo, la Revolución Bolivariana sigue las estrategias de la “no
violencia” que Mohandas K. Gandhi y muchos pacifistas desde entonces han fomentado y
apoyado. Es decir enfrentar la injusticia con la razón y un plan o estrategia de cambio social, en
términos bolivarianos con las conocidas “misiones.” Esta defensa de los derechos humanos
empieza en la afirmación o propuesta de una Constitución que se centra en la defensa de los
derechos humanos de seguridad y subsistencia. Una mejora legal, que se articula en leyes
orgánicas y de carácter menor que involucra un consenso comunitario y una responsabilidad
institucional de defender estos derechos. Este nuevo marco social se integra a la historia de la
lucha por la liberación del pueblo venezolano. La dinámica político social bolivariana hasta el
presente sigue claramente tales lineamientos y con ello satisface los objetivos de un diálogo
cultural e intercultural que es el mismo que promueve desde hace ya décadas la Filosofía de la
Liberación.
Básicamente los mismos elementos que Fornet-Betancourt señala como
fundamentales para avanzar un diálogo de culturas con una defensa de los derechos humanos que
sea liberadora y universalizable.
Gran parte de este trabajo explica en detalle los contenidos legales de la Constitución y
leyes fundamentales bolivarianas. La Profesora Ann Ginger Fagan de la Universidad de San
Francisco ha desarrollado durante muchos años el concepto de la Ley de la Paz o lo que ella
denomina en inglés: Peace Law. Ella define la Ley de la Paz como el conjunto de leyes
internacionales y nacionales que, en jerarquía, protegen los derechos humanos de las personas a
nivel internacional y nacional. Asimismo el Profesor Durán sigue un argumento legalista del
mismo tipo en sus estudios de los textos legales internacionales que defienden los derechos
humanos; y además señala a la pobreza como la causa original de la violencia y de la mayoría de
los conflictos humanos. Ambos profesores ofrecen argumentos que enfatizan la importancia de
las leyes para establecer una jerarquía legal sobre la expansión de la DUDH y la Carta de las
Naciones Unidas como leyes matrices para la defensa de los derechos humanos universales y su
posible expansión a las leyes nacionales en cada país. La expansión de estos textos en el espíritu
292
y letra a las leyes nacionales es sin duda requisito de suma importancia para la práctica y la
educación de la defensa de los derechos humanos. La jerarquización de los textos legales
internacionales, nacionales y locales se complementa a mi juicio con las prioridades propias de
los mismos contenidos legales que defiende Henry Shue.
En ambos sentidos, las leyes –que analizamos en esta tesis—incluyendo su inspiración
base --la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela-- son un ejemplo de ambas.
Reafirman los principios y valores éticos que defienden tanto la DUDH y como en el derecho
internacional para plasmarse en los contenidos legales y culturales nacionales. Si consideramos
la DUDH y la legislación Internacional como las raíces y el tronco del árbol de los derechos
humanos y el concepto filosófico de ahimsa, o no violencia, como la savia que alimenta el árbol,
tenemos que concluir que la actual Constitución venezolana y su práctica legal en su legislación
particular es un fruto prometedor que empieza a florecer en la rama latinoamericana.
El
crecimiento de este fruto es un desarrollo optimista ya que afirma, defiende y promulga un futuro
promisorio para la cultura de los derechos humanos. La DUDH está en las raíces éticas legales
de todo el sistema y la savia --de la no violencia—en las prácticas democráticas y de diálogo que
defiende de acuerdo con una jerarquización de los derechos humanos básicos como prioritarios.
Contiene los elementos en los que la profesora Fagan y Fornet-Betancourt insisten, de que los
derechos humanos sólo son derechos positivos si reflejan la práctica cultural humana diaria a
nivel local, tal como lo aspira la propia UNESCO.
Creemos una escuela de valores, de actitudes y de acciones prácticas para obtener la
justicia a través de la no violencia y asegurarnos de que los derechos humanos son realidad viva
para cada persona.
Acepto de antemano las críticas de mi enfoque positivo que maximiza los importantes
avances políticos, económicos y sociales que la defensa de los derechos humanos ha logrado en
Venezuela. Significan mucho en la lucha por los derechos humanos no sólo en Venezuela sino
también en América Latina y en muchos países del tercer mundo. En mi modesta opinión el
modelo de la defensa de los derechos básicos se convierte en un modelo político a seguir en esta
materia -- ya que salvando las distancias-- puede ser aplicable a nivel legal, político e histórico a
otros países que sufren de los mismos males que sufre Venezuela: pobreza, marginación,
abandono y violencia. Este nuevo modelo es una posible respuesta histórica al modelo de estado
293
de seguridad hemisférica que dominó la cultura política en América Latina en los últimos
cuarenta o cincuenta años.
Ratifico mi selección de un marco teórico que considero fundamental para la defensa de
los derechos humanos en el mundo, que es la teoría de Henry Shue sobre los derechos humanos
básicos. Con su raíz política liberal legalista --que defendía el propio Simón Bolívar-- y sus
prioridades socialistas –al defender los derechos de subsistencia como básicos—ofrece un
excelente punto de partida para entender la transformación de un sistema liberal autoritario y
delegativo a un sistema verdaderamente democrático, solidario, socialista y participativo sin
exclusiones. Un sistema de estado de seguridad y subsistencia es quizás una etapa previa de
transición de un sistema político delegativo y autoritario a un sistema socialista y auténticamente
democrático y participativo.
La teoría de Henry Shue sirve para jerarquizar los derechos
humanos básicos, los “despolitiza” para convertirlos en “condición objetiva” sin las cuales no
hay posibilidad de un estado y sociedad realmente democrática. Sé, que filosóficamente será
cuestionada por liberales y marxistas; ya que está en medio de ambas concepciones.
Sin
embargo, su virtud es la misma que tiene la propia Revolución Bolivariana precisamente su
difícil categorización ideológica que la protege de dogmatismos ideológicos. En pocas palabras,
la Revolución Bolivariana esta abierta al debate y puede seguir diferentes direcciones,
dependiendo mucho de las aspiraciones que el pueblo determine como importantes en su
transición al socialismo democrático.
Reconozco que este trabajo es quizás una voz en el desierto. Mi investigación en esta
materia, está basada en el conocimiento concreto y mi experiencia comparativa con lo vivido en
la IV República como periodista en Venezuela en la década de los ochenta y educador y
académico venezolano de los derechos humanos en EE UU.
La comparación supongo
automáticamente me hace simpatizante de los avances hechos por la Revolución Bolivariana.
Como periodista venezolano durante la IV República y como profesor de derechos humanos en
EE UU ahora, no entiendo la razón de la furia de “la jauría” opositora contra todo lo que
representa la Revolución Bolivariana. Hay muchas cosas buenas, entiendo las críticas, pero no el
ataque furioso contra compatriotas que han asumido de una forma honesta y sin egoísmos
particulares eliminar la pobreza y la corrupción en la que estuvo sumido el país por más de
cuatro décadas. Por primera vez, desde Bolívar, con excepción de los gobiernos de Angarita y
Gallegos, un gobierno utiliza el poder institucional del estado para atender las necesidades
294
básicas de todos los venezolanos sin discriminación; particularmente para atender a los más
pobres. Las estadísticas se pueden manipular hasta cierto punto, pero en este caso son tan claras
y evidentes, que ofrecen una prueba sociológica que valora la significación de los cambios y el
esfuerzo hecho hasta el momento. El Instituto Nacional de Estadística venezolano ha hecho un
trabajo extraordinario para documentar los cambios ocurridos en Venezuela y son una fuente de
información objetiva para todos aquellos académicos y periodistas que quieren estudiar la
naturaleza y la magnitud de los cambios sociales en el país.
Es precisamente el carácter profundamente democrático y defensor de los derechos
humanos básicos que hace este proceso revolucionario digno de estudio. Su raíz liberal y sus
elementos socialistas representan un cambio significativo a los que hasta ahora habíamos visto
en política latinoamericana. Es un híbrido bastante original, pero claramente democrático, al
menos hasta ahora. Independientemente de la admiración o el odio que genere la figura de Hugo
Chávez Frías, la Revolución y la democracia venezolana avanzan con un programa político
concreto, propio y original, diferente a los tradicionales que conocíamos. Se han creado nuevas
instituciones y formas de ver la política en Venezuela --que a mi juicio-- son las más
democráticas que las que han existido en el pasado.
Las verdades a medias y los ataques de los medios de comunicación extranjeros sobre
Venezuela y su Revolución son calculados y menos pasionales que los que vemos y oímos en los
medios nacionales y locales. Son las respuestas a las denuncias abiertas del Presidente Hugo
Chávez y la Revolución Bolivariana en materia internacional contra el imperialismo militar y el
neoliberalismo económico.
Las posiciones políticas internacionales de Venezuela
y el
apasionado estilo que usa el Presidente Chávez en sus denuncias, molestan y afectan temas
sensibles y controversiales en el mundo Occidental. La crítica abierta a las prácticas económicas
de libre comercio y globalización que fomentan los EE UU y Europa molestan profundamente a
los poderes económicos establecidos en ambos continentes.
La ruptura del bloqueo ilegal
estadounidense con Cuba, la condena a las invasiones militares de Irak, Afganistán y Libia, la
denuncia del campo de concentración de Guantánamo, la expulsión del embajador israelí de
Venezuela después de la invasión a Gaza, la relación económico-política con Irán, Vietnam,
China y Siria desafían los “valores” o intereses políticos prevalentes en el mundo capitalista e
imperialista internacional.
295
Estas posiciones económicas y políticas críticas a nivel internacional son debatidas
abiertamente en la Revolución Bolivariana y no oscurecen la positiva labor bolivariana de
defensa de los derechos humanos a nivel nacional, sino todo lo contrario. Venezuela tiene una
ética en su política exterior que no contradice sus valores nacionales y que favorece el antimilitarismo y la paz internacional. Favorece intereses en el fortalecimiento de un proceso de paz
en Colombia y su participación en el intercambio humanitario entre las FARC y el gobierno
colombiano son simplemente otro ejemplo más de su prioridad humanitaria. Nunca Venezuela
se ha involucrado en el conflicto colombiano sin autorización de las autoridades neogranadinas.
En los medios de comunicación se ignoran hechos tan esenciales como que Venezuela es la casa
de más de cuatro millones de trabajadores emigrantes colombianos, muchos legalizados por la
Revolución. Venezuela además atiende y protege a otros 200.000 más en calidad de refugiados;
víctimas del conflicto interno colombiano, garantizando sus derechos humanos como tales 336. El
presidente Chávez y el estado venezolano se han cansado de pedir a las FARC y ELN que
abandonen la lucha armada e inicien negociaciones de paz con el gobierno colombiano y se ha
ofrecido para mediar en el conflicto. La fabricación de un sentimiento anti-venezolano en
Colombia, asociándolo con acciones militares de una guerrilla que opera desde hace décadas, es
una gran irresponsabilidad política. Es más contradice toda la política interna y externa de la
Revolución Bolivariana. La creación del ALBA y UNASUR en el campo latinoamericano
donde Venezuela es protagonista molesta a aquellos cuyos intereses económicos y políticos
rechazan la solidaridad de los pueblos como la base del diálogo entre países. Una solidaridad
que es lógica consecuencia del debate intercultural por la liberación del que habla FornetBetancourt y la filosofía de la Liberación.
Venezuela es ejemplo a nivel de seguridad nacional. El desmantelamiento del aparato
terrorista del estado de la IV República está muy avanzado en casi todos sus aspectos y se está
creando un sistema de seguridad soberano y anti-autoritario donde los haya. La recuperación de
la memoria histórica de las víctimas del terror “democrático” y la conversión de los militares y
policías en garantores de los derechos humanos del ciudadano ha progresado significativamente
336
La propia senadora colombiana Piedad Córdoba que ha participado, con la Iglesia Católica, abiertamente y con la
aprobación del gobierno colombiano, en la liberación de secuestrados por las FARC, ha sido denunciada
recientemente en los Tribunales colombianos por traición a la patria. Si la senadora Córdoba es una traidora por su
labor humanitaria, el Presiente Chávez se presenta en la prensa como un agente secreto o un líder de las FARC.
Obviamente, hablar con las FARC será necesario para conseguir cualquier tipo de acuerdos humanitarios y
eventualmente la paz. Estas actitudes inflexibles y “demonizadoras” son precisamente originadas por la dinámica
propia de la guerra que sufre el país implicado, después de décadas de guerra.
296
con la creación de las Fuerzas Armadas Bolivarianas y la Policía Nacional. Queda pendiente la
implementación definitiva del Sistema Penitenciario Humanitario y el fortalecimiento de la
autonomía e independencia del poder judicial -- cuyos principios están claramente delineados y
definidos en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.
Finalmente, este estudio me ha permitido observar que si la magnitud del problema de la
pobreza es tan grave como lo señaló el Prof. Durán en su libro en materia de los derechos
humanos --y así lo reconoce todo el mundo académico y político-- no hay razón para estar
preocupados por lo que está pasando en Venezuela. Hay razón para preocuparse por lo que no
está pasando en África, Asia y muchos otros países de América Latina.
Estos países en
circunstancias similares --salvando las distancias-- han avanzado poco o nada en su lucha contra
la pobreza. Es pertinente pensar que no hacen más porque no saben, no pueden o no quieren.
Los que no saben tienen en la Revolución Bolivariana un experimento político digno de estudio.
Los que no pueden, no deben perder la esperanza, deben tratar de superar los obstáculos con
paciencia e inteligencia. Los que no quieren que asuman su responsabilidad ya que ahora hay
conocimiento experiencial para superar la pobreza. La pobreza favorece el poder fáctico de Wall
Street, donde los países ricos usan su poder corporativo, para mantener un “yugo neo-colonial”
sobre los más pobres. Un sistema de estado de “seguridad y subsistencia” se presenta ahora
como una alternativa viable a la globalización, al neoliberalismo y romper el yugo neo colonial
para establecer una sociedad soberana, democrática y socialista.
297
Bibliografía
Abdullahi Ahmed An-na’im, ed., Human Rights in Cross-Cultural Perspectives’ a Quest for
Consensus. Filadelfia: University of Pennsylvania Press, 1994.
Abreu, José Vicente. Se llamaba SN. Caracas: Ediciones Centauro 1979.
________________. La Revolución de las Fantasías. Caracas: Ofidi, 1978.
________________. Fin de la Fiesta. Valencia: Vadell Hermanos, 1982.
________________. Capital y desarrollo: el rey petrolero. Caracas: UCV 1977.
Ander-Egg, Ezequiel. Acción Municipal, Desarrollo Local y Trabajo Comunitario. Caracas:
Universidad Bolivariana de Venezuela, 2007.
Alexander, Robert J.. The Venezuelan Democratic Revolution. New Brunswick: Rutgers
University Press, 1964.
Alvarez, Víctor. Venezuela: ¿Hacia dónde va el modelo productivo? Caracas: Centro
Internacional Miranda, 2010.
Alviarez, Rubén Darío. La Democracia Venezolana, Criatura Deforme. Caracas: Imprenta
Universitaria de la UCV, 1987.
Amoda, John M. Third Party Interventions and the Designing of Unesco’s Culture of Peace
Programs: Cultivating the Disciplines of Peace-making Statecraft. Nueva York: Ai –Bethel
Consults Inc., 1995.
Arvelo-Jiménez, Nelly. "El Conflicto por la Tierra y las Etnias Indígenas del Amazonas," en
Derechos Territoriales Indígenas y Ecología en las Selvas Tropicales de America. Bogotá:
Fundación Gaia, Carec, 1992.
__________________. "The Policies of Cultural Survival in Venezuela: Beyond Indigenismo."
En Marianne Schenicnk and Charles H. Wood ed., Frontier Expansion in Amazonia.
Gainesville: University of Florida Press, 1984.
Barraclough, Solón y Juan Carlos Collarte editores. Agrarian Structure in Latin America.
Lexington: Lexington Books, 1971.
Beaumont Rodríguez, Octavio. ¿Por qué fue Derrotada la Lucha Armada en Venezuela?
Caracas: UBV, 2007.
Bergquist, Charles. Labor in Latin America: Comparative Essays on Chile, Argentina,
Venezuela and Colombia. Stanford, Ca: Stanford University Press, 1986.
298
Bethell, Leslie e Ian Roxborough. Latin America Between the Second World War and the Cold
War, 1944-1948. Cambridge: University Press, 1985.
Beorlegui, Carlos. Historia del Pensamiento Filosófico Latinoamericano. Bilbao: Universidad de
Deusto, 2006.
----------------------. Antropología Filosófica. Bilbao: Universidad de Deusto, 2004.
Blanco-Muñoz, Agustín. Clases Sociales y Violencia en Venezuela. Caracas: Facultad de
Ciencias Económicas, 1976.
Blank, David Eugene. Politics in Venezuela. Boston: Little, Brown and Co, 1973.
Boll, Michael M. National Security Planning Roosevelt through Reagan.
University Press of Kentucky, 1988.
Lexington: The
Calvo, Roberto. "The Church and the Doctrine of National Security," Journal of Inter-American
Studies and World Affairs. Febrero 1979.
Cardoso, Fernando Henrique y Enzo Faletto. Dependency and Development in Latin America.
Berkeley: University of California Press, 1979.
Castro-Comunist Insurgency in Venezuela. A study of Insurgency and counterinsurgency
operations and techniques in Venezuela. Washington, D.C.: Atlantic Research Corporation,
1964.
Chávez Frías, Hugo. Misiones Bolivarianas. Caracas: Ministerio de Comunicación e
Información, 2007.
__________________. Las Comunas y los cinco Frentes para la construcción del Socialismo.
“Aló Presiente Teórico”. Caracas: Ministerio del Poder Popular para la Comunicación e
Información, 2009.
__________________. Revolución Bolivariana, 9 Años de Logros.” Caracas: Ministerio del
Poder Popular para la Comunicación e Información, 2008.
Chomsky, Noam. The Culture of Terrorism. Boston: South End Press, 1988.
Comisión Andina de Juristas, Venezuela, Administración de Justicia y Crisis Institucional.
Lima, Perú: Comisión Andina de Juristas, 1992.
Coppens, Walter. The Anatomy of a Land Invasion Scheme in Yekuana Territory, Venezuela.
Copenhagen: IWGIA (International Work Group for Indigenous Affairs) Documents, 1972.
Coronil, Fernando y Julie Skurski, "Dismembering and Remembering the Nation: The Semantics
of Political Violence in Venezuela."
299
Coronil, Fernando. The Magical State: nature, money, and modernity in Venezuela. Chicago:
University of Chicago, 1997.
Darío Alviarez, Rubén. La Democracia Venezolana, Criatura Deforme. Caracas: Imprenta
Universitaria de la Universidad Central de Venezuela, 1987.
Dieterich, Heinz. Democracia Participativa y Protagonismo Social.
Municipio Libertador, 2001.
Caracas: Alcaldía del
Dorante, Carlos. Rómulo Betancourt Ideas y Acción de Gobierno, Antología de Conceptos
1959-1964. Caracas: Ediciones Centauro, 1987.
Fernández-Balboa, "Critical Pedagogy: Making Critical Thinking Really Critical." Paper presented
at the Twelfth Annual International Conference on Critical Thinking and Educational Reform.
Sonoma State University, August, 1992.
Fischer, Louis ed., The Essential Gandhi: An Antohology of His Writings on His Life, Work and
Ideas. New York: Randon House Inc., 1983.
Fornet Betancourt, Raúl.
DEI, 2000.
Interculturalidad y Globalización. San José, Costa Rica: Editorial
Freire, Paulo. Education for Critical Consciousness. New York: The Continuum, 1990.
----------------. Pedagogy of the Oppressed. New York: The Continuum, 1996.
Galli, Augusto y Haydee García, El Caso Venezuela; una Ilusión de Armonía. “El sector salud:
radiografía de sus males y de sus remedios.” Caracas: Ediciones IESA, 2da edición, 1985.
Ginger Fagan, Ann. Peace Law. San Francisco: San Francisco State University, 1995.
González Irago, Carlos. “Politics and economic alternatives to the dollar diplomacy,” en “Patria
y Libertad” The Human Rights Philosophy of César Augusto Sandino. New York: Civilities
Internacional, 1995.
Guevara, Ernesto Che. "Man and Socialism." John Gerassi ed.¡Venceremos! New York: Simon
and Schuster, 1968.
Gurr, Ted Robert. "The Political Origins of State Violence and Terror: A Theoretical Analysis."
Michael Stohl y George A. López, Government Violence and Repression, An Agenda for
Research. New York: Greenwood Press, 1986.
Habermas, Jurgen. Toward A Rational Society, Student Protest Science and Politics. Boston:
Beacon Press, 1971.
------------------------. Knowledge and Human Interests. Boston: Beacon Press, 1972.
300
Halfway to Reform: The World bank and the Venezuelan Judicial System. New York: Lawyers
Committee for Human Rights, 1996.
Howard, Rhoda E.. “Dignity, Community, and Human Rights.” Abdullahi Ahmed An-na’im
ed., Human Rights in Cross-Cultural Perspectives’ a Quest for Consensus. Filadelfia: University
of Pennsylvania Press, 1994.
Huntington, Samuel. Political Order in Changing Societies, 1969.
Kesselring, Thomas. Ética, Política e Desenvolvimiento Humano; A Justiça na era da
Globalização. Caxias do Sul, Brasil: EDUCS, 2007.
Larrazábal, Ramadés y Leticia Barrios. El Colapso del Populismo y el Auge de la Oligarquía
Financiera. Caracas: Universidad Central de Venezuela, 1991.
Linarez, Pedro Pablo e Irakara Castillo. Desaparecidos: el rescate de los asesinados políticos en
los años 60 en Venezuela. Caracas: Ediciones Universidad Bolivariana de Venezuela, 2007.
López, George A. y Michael Stohl. "Introduction: the Development and Dependence Factors of
State Repression”. López y Stohl eds., The State as a Terrorist. Nueva York: Greenwood Press,
1986.
Martz, John D. and David J. Myers, Venezuela The Democratic Experience. Nueva York:
Praeger, 1986.
Maos, Jacob O.. The Spatial Organization of New Land Settlement in Latin America. Boulder,
Co: Westview Press, 1984
Martz, John. Acción Democrática. Princeton: Princeton University Press.
Mason, T. David y Dale A. Krane. "The Political Economy of Death Squads: Toward a Theory
of the Impact of State-Sanctioned Terror." International Studies Quarterly 1989.
McCarmant, John F.. "Governance without Blood: Social Science's Antiseptic View of Rule; or
The Neglect of Political Repression." Michael Stohl y George A. López, The State As Terrorist.
The Dynamics of Governmental Violence and Repression. Westport, Connecticut: Greenwood
Press, 1984.
Mesa-Lago, Carmelo. Revolutionary Change in Cuba . Pittsburgh: 1971.
Miró Quesada,
Foundations.
Francisco.
"Human Rights in Latin America." Ricoeur ed., Philosophical
Nieves, David. La Tortura y El Crimen Político: Recursos de un Sistema en Apuros. Caracas:
Poseidón Editores, 1979.
301
Penn, Raymond J. y Jorge Schuster, "La Reforma Agraria." Oscar Delgado ed., Reformas
Agrarias en la América Latina. México: Fondo de Cultura Económica, 1965.
Peffer, R.G. Marxism, Morality, and Social Justice. Princeton: Princeton University Press, 1990.
Petras, James F. y Robert LaPorte, Jr.. Cultivating Revolution. Nueva York: Vintage Books,
1971.
Pollis, Adamantia Pollis and Peter Schwab, eds. Human Rights: New Perspectives, New
Realities. London: Lynne Rienner Publishers, Inc., 2000.
-------------------------------------------------------------------. Human Rights: Cultural and Ideological
Perspectives. Nueva York: Praeger Publishers, 1979.
Powell, Duncan. Political Mobilization of the Venezuelan Peasant. Cambridge: Harvard
University Press, 1971.
Quijada, Ramón. Reforma Agraria en Venezuela. Caracas: Editorial Arte, 1963.
Ramia, Carmen y Sandra Bracho. 27 de Febrero Cuando la Muerte Tomó las Calles. Caracas:
Editorial Ateneo de Caracas, 1990.
Randall, Laura. The Political Economy of Venezuelan Oil. Nueva York: Praeger, 1987
Rangel, Domingo Alberto. Capital y Desarrollo: Venezuela Agraria. Caracas: UCV, 1974.
----------------------------------. La Oligarquía del dinero. Caracas: UCV 1976.
----------------------------------. La Revolución de las Fantasías. Caracas: Ofidi, 1978.
----------------------------------. Fin de la Fiesta. Valencia: Vadell Hermanos, 1982.
----------------------------------. Capital y desarrollo: el rey petrolero. Caracas: UCV 1977.
Roseberry, William. Coffee and capitalism in Venezuelan Andes. Austin: University Press of
Texas, 1983.
Ricoeur, Paul, ed. Philosophical Foundations of Human Rights. Mayenne, France: UNESCO,
1986.
Shue, Henry. “Security and Subsistence,” en Morton E. Winston, The Philosophy of Human
Rights. Belmont, CA: Wadsworth Publishing Co.
__________. Basic Rights: subsistance, affluence and US Foreign Policy. Pricenton : Pricenton
Universy Press, 1980.
302
__________. “In The American Tradicion, Rights Remain Unalienable,” en “Human Rights and
American Foreign Policy,” The Center Magazine, enero-febrero 1984.
Sobrino, Jon. “Solidaridad: llevarse mutuamente,” Misiones extranjeras 157-159 (1997).
_________. Terremoto, Terrorismo, barbarie y utopia: El Salvador, Nueva York, Afganistan.
San Salvador: UCA Editores, 2003.
Stohl, Michael, David Carleton, George López, y Stephen Samuels. "State Violation of Human
Rights: Issues and Problems of Measurement." Human Rights Quarterly, 8(4), 1986.
_______________ y George A. López, Government Violence and Repression, An Agenda for
Research. Nueva York: Greenwood Press, 1986.
Sullivan, Noel O. ed.. Terrorism, Ideology, and Revolution. Boulder, Co: Westview Press,
1986.
Villa Durán, Carlos. Curso de Derecho Internacional de los Derechos Humanos. Madrid:
Editorial Trotta, 2006.
Venezuela: Seis años de agresión. Caracas: Oficina Central de Información, ?
Wallerstein, Immanuel. The Modern World-System I-II. Orlando: Academic Press, 1974.
Walter, Eugene Victor. Terror and Resistance, a study of political violence with case studies of
some primitive African communities. Nueva York: Oxford University Press, 1969.
Weisbrot, Mark, Rebecca Ray y Luis Sandoval, “The Chávez Administration at 10 years: The
Economy and Social Indicators.” Center for Economic and Policy Research. Febrero2009
(www.cepr.net).
Wilkie, James W. "Measuring Land Reform: Venezuela," Statistical Abstract of Latin America.
Los Ángeles: University of California, 1978.
Wilkinson, Daniel. “Una década de Chávez: intolerancia política y oportunidades perdidas para
el progreso de los derechos humanos en Venezuela.” Human Right Watch, 2008.
Wilpert, Gregory. Changing Venezuela by Taking Power: The history of the policies of the
Chavez Government. Editorial Verso, 2007.
Zaverucha, Jorge. "The Degree of Military Political Autonomy during the Spanish, Argentine
and Brazilian Transitions." The Journal of Latin American Studies, 25, 1993.
Zinn, Ricardo. Argentina, A Nation at the Crossroads of Myth and Reality. Nueva York: Robert
Speller & Sons, 1979.
303
Zammitt, J. A. The Chilean Road to Socialism, Austin: University of Texas Press, 1973.
Zamosc, León. The Agrarian Question and the Peasant Movement in Colombia. Cambridge:
Cambridge University Press, 1986.
Artículos e informes especiales firmados sobre la situación de los Derechos Humanos en.
Venezuela
Arvelo-Jiménez, Nelly. "The Policies of Cultural Survival in Venezuela: Beyond Indigenismo."
En Marianne Schenicnk y Charles H. Wood ed., Frontier Expansion in Amazonia. Gainesville:
University of Florida Press, 1984.
Barberini, Lisbeth. “Ley de Tierras permitió financiar a 300 mil campesinos en cinco años.”
Agencia Bolivariana de Noticias (ABN), 12/12/06
Bengoa, José María , “La Sanidad y la nutrición en Venezuela a mediados del siglo XX.” Anales
Venezolanos de Nutrición. Caracas: enero 2004. Volumen 17, número 1.
Betancourt, Rómulo. "La Reforma Agraria en Venezuela," Política, septiembre 1959, número 1,
119.
Bohórquez, Carmen. “La experiencia del proceso venezolano actual.” Profesora de la
Universidad del Zulia, Maracaibo, Venezuela. Artículo fechado el 22 de noviembre 2005.
Contreras Baspineiro, Alex. “Reforma Agraria en Venezuela y sus logros. Campesinos reciben
tierras, maquinaria y créditos.” 6 de septiembre de 2003.
D’Elia, Yolanda y Luis Francisco Cabezas, “Las Misiones Sociales en Venezuela.” Caracas:
IDIS, mayo 2008.
Dávila, Jorge. “Votos, pobreza y desigualdad en Venezuela.” Artículo del Profesor de la
Universidad de Los Andes, Mérida, Venezuela.
Febles, Rafael. “La Misión Mercal génesis del proyecto socialista.” www.aporrea.org (16/6/05)
Fernández-Balboa, Juan Miguel. "Critical Pedagogy: Making Critical Thinking Really Critical."
Trabajo presentado en la 12 Conferencia Anual del Pensamiento Crítico y la Reforma Educativa,
Sonoma State University, California, Augusto 1992.
Fox, Michael. “Qué significa la CDPD para las vidas y el futuro de los niños y la juventud con
diversidad funcional? “ One in Ten Unicef y RI, volumen 26, 2008.
García, Dexy. “Misión José Gregorio Hernández: salud integral para los más débiles.’ Caracas:
Ministerio del Poder Popular para la Comunicación e Información, 25/3/08.
304
Gil, Idegar. “Hay que ponerle el ojo al CDI de San Martín.” www.aporrea.org (24/05/10).
Gómez, Lady. “Reimpulsan Barrio Adentro II en San Juan.” Ciudad de Caracas. 17/11/09.
González, Marino J. “Reformas del sistema de salud en Venezuela (1987-1999): balance y
perspectivas.” Santiago de Chile: CEPAL Unidad de Estudios Especiales, Junio 2001.
González Irago, Carlos. "Diario Ultima Hora de Acarigua," agosto\septiembre 1982.
González, Judith. “Gobierno Bolivariano inaugura nuevo CDI en Monagas.” Caracas: ABN,
16/01/06.
Guerrero, Modesto Emilio. “La Salud en la Revolución Bolivariana. Conquistas y Riesgos.”
www.aporrea.org (9/2/05).
Gustavo Rangel “Ministro Reyes: El 82% de la población usa el sistema público de salud.”
Caracas: ABN, 7/4/10.
Huish, Robert y John Kirk, “Cuban Medical Internationalism and the Development of the Latin
American School of Medicine.” Latin American Perspective. 2007.
Martín-Baró, Ignacio. "Political Violence and War as Causes of Psychosocial Trauma in El
Salvador." Conferencia presentada en el "Symposium on Central American Immigrants and
Refugees," sostenido en San Francisco State University, y organizado por La Raza Studies
Department, en marzo 10, 1988.
Mena Cifuentes, Hernán. “Sueño del campesino venezolano se hace realidad con Ley de
Tierras,” Venpres, 10/11/04
Morales, Galito. “La Reforma Agraria y la Ley de Tierras.”
Muller, Eduard N.. “Democracy, Economic Development, and Income Inequality.” American
Sociological Review.
Nieto Palma, Carlos Alberto. “Diálogo Penitenciario,” www.aporrea.org (2/06/09).
O’Donnell, Guillermo. “Democracia Delegativa”. Journal of Democracy, Vol.5, número 1, enero
1994.
Penn, Raymond J. y Jorge Schuster, "La Reforma Agraria," en Oscar Delgado ed., Reformas
Agrarias en la América Latina. México: Fondo de Cultura Económica, 1965.
Quijada, Reinaldo. “Los Ataques a Barrio Adentro.” Caracas: Clase Media Revolucionaria,
07/10/09.
Rangel, José Vicente. “La Jauría”. www.aporrea.org .
305
Romanach, Javier y Manuel Lobato, “Diversidad Funcional nuevo término para la lucha por la
dignidad en la diversidad del ser humano.” Logroño, España: Foro de Vida Independiente, mayo
2005. www.vidaindependiente.org.
Senior, Jacob. Entrevista del Director of Corpoandes, El Universal, 6\6\75, 1,19.
Sierra Corrales, Francisco. “Las causas verdaderas de la crisis carcelaria.” www.aporrea.org
(12/3/08).
Suggett, James. “Venezuela launches New Mission for Health of the Disabled”.
www.venezuelanalysis.com
Artículos e informes especiales no firmados sobre la situación de los Derechos Humanos en
Venezuela
American Watch. “Informe sobre Venezuela 1993”.
“98% de los niños en edad escolar tienen acceso al sistema educativo,” www.abn.gov.ve
(12/5/2010).
“Barrio Adentro III: Gobierno en línea.” www.aporrea.org (31/8/05).
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. 24 de marzo de 2000.
www.vheadline.com .
Castro-Comunist Insurgency in Venezuela. A study of Insurgency and counterinsurgency
operations and techniques in Venezuela. Washington, D.C.: Atlantic Research Corporation,
1964.
“Comparación entre la recientemente aprobada LOE de 2009 y la LOE de 1980.” Documento
publicado por la Secretaria sectorial de Educación del Ministerio de Educación de Aragua.
Cuaderno de Misiones. Caracas: Ministerio del Poder Popular para la Comunicación e
Información, 2009.
“Declaradas tierras ociosas y de la Nación hatos: Piñero y El Charcote,” Por: Prensa Inti,
www.aporrea.org (12/03/05).
“Eliézer Otaiza: No son válidos títulos de la colonia INTI declara más tierras ociosas y protege
las comuneras ancestrales,” Prensa INTI, (14/05/05).
“En diputado Darío Vivas, ‘La Ley de Tierras ha provocado que los terratenientes usen el
asesinato’” www.aporrea.org
306
“En el Teatro de la Academia Militar, Presidente Chávez asiste a la V Promoción de médicos de
la ELAM. Caracas: Prensa Presidencial, 13/10/09.
Foro de la cátedra de la Administración Venezolana de Pregrado y Gerenciales de Postgrado de
la Facultad de Medicina. Valencia: Oficina de prensa de la Universidad de Carabobo, 2000.
Halfway to Reform: The World bank and the Venezuelan Judicial System. New York: Lawyers
Committee for Human Rights, 1996.
“Hospital Cardiológico Infantil
www.venezuelabolivariana.com
Latinoamericano
Dr.
Gilberto
Rodríguez
Ochoa.”
“Inaugurado el Centro de Alta Tecnología Manuelita Sáez,” Caracas: VTV, 22/03/07.
“Índice de desnutrición disminuyó 70% en Venezuela.” www.vtv.gov.ve
Informe Anual: Situación de los Derechos Humanos en Venezuela (octubre 1994-septiembre
1995). Caracas: PROVEA, 1994.
Informe sobre el derecho a la salud en Venezuela 2007: Situación del Derecho a la Atención
Primaria. Caracas: Editorial Convite Ac, octubre 2007.
“Inversión en 2010 para adquisición de vacunas supero los Bs 98 millones.” Caracas: ABN,
3/3/2010.
“IVSS definió trámites para completar cotizaciones.” Caracas: ABN, 6/5/10.
“Logros de la Revolución Bolivariana.” Caracas: Asamblea Nacional, 2008.
“La Salud en las Américas,” Organización Panamericana de Salud (OPS). Washington: Edición
v.2, 2002.
“Médicos cubanos han brindado 3.7 millones de consultas en 5 años.” Madrid: Agencia de
noticias EFE, 11/11/09.
Ministerio de Salud. Memoria y Cuenta 2005. Caracas: Ministerio de Salud, 2006.
“Ministro Elías Jaua: Ley de Tierras justifica intervención de hato El Caroní,” Prensa MPPAT,
www.aporrea.org (13/03/09).
“Misión José Gregorio Hernández será extendida al Ecuador.” www.aporrea.org .Caracas: ABN,
7/10/09.
“Misión Negra Hipólita ha atendido a más de 900 personas en situación de calle.” Caracas:
ABN, 20/10/09.
307
Nota de prensa del MPPAT “Gobierno y sector productivo nacional revisan metas del Plan
Integral de Desarrollo Agrícola (PIDA)”. www.aporrea.org (19/01/10).
“Plan Nacional de Inmunización llego a 13,5 millones de personas.” Caracas: ABN, 3/5/2010.
Perfiles de País: Venezuela en “La Salud en las Américas,” Organización Panamericana de Salud
(OPS). (Washington: Edición v.2, 2002).
PROVEA, Informe Anual: octubre 1989-septiembre 1990.
Punishment before Trial: Prison Conditions in Venezuela. New York: Human Rights Watch,
1997.
¿Qué hay tras la construcción de la CPC? Texto sin firmar de la Cruz Negra Anarquista de
Venezuela.
Radio Nacional de Venezuela en su programa “10 años de Logros.” Caracas: RNV 2/5/2010.
“Revolución Bolivariana ha mejorado el estado nutricional de los venezolanos.” En
www.vtv.gov.ve/noticias-nacionales (18/03/10).
UNICEF Venezuela. www.unidef.org
“Venezuela denuncia en la ONU campaña de agresión mediática.” www.vtv.gov.ve (28/04/10).
Venezuela: The Eclipse of Human Rights. London: Amnesty International , 1993.
Venezuela: Seis años de agresión. Caracas: Oficina Central de Información, ?.
308
Descargar