image - Universidad de Colima

Anuncio
Ciencia, Deporte
y Cultura Física
2da. Época / Núm. 2 / Julio 2010
Instituto de Altos Estudios en Deporte, Cultura y Sociedad
Red de Investigación sobre Deporte, Cultura y Sociedad
CONSEJO EDITORIAL
MC Miguel Ángel Aguayo López, Rector
Dr. Ramón A. Cedillo Nakay, Secretario General
Dr. Jesús Muñiz Murguía, Coordinador General de Investigación Científica
Ing. Juan Diego Gaytán, Coordinador General de Extensión Cultural
Lic. Gloria Guillermina Araiza Torres, Directora General de Publicaciones
Lic. Rosario de Lourdes Salazar Silva, Directora de la Facultad de Ciencias
de la Educación
CONSEJO DE ASESORES EXTERNOS
Manuel Vizuete (España)
Sebastian Feu (España)
Jesús Viciana (España)
Roger Magazine (USA)
Jesús Galindo (México)
Juan López Taylor (México)
Jesús Muñiz (México)
Andrés Fabregas Puig (México)
David Wood (Inglaterra)
Gabriel Cachorro (Argentina)
Martín Scarnatto (Argentina)
Osvaldo Ron (Argentina)
Edison Gastaldo (Brasil)
Marco Antonio Cossio Bolaños (Brasil)
Hernán Humana (Canadá)
COMITÉ EDITORIAL DE CDYCF
Directora Editorial
Rosario de Lourdes Salazar Silva
Coordinación editorial
José del Río Valdivia
Ciria Margarita Salazar C.
Emilio Gerzaín Manzo Lozano
José Samuel Martínez López
Genaro Zenteno Bórquez
Diseño
Carmen Millán, Joanna Vaca
Corrección
Emilio Gerzaín Manzo Lozano y Rosa
Marcela Villanueva Magaña
Rocío Mendoza Ocón
Abstracts
Martha Patricia Pérez López
Divulgación Digital
Maricela Larios Torres
COMITÉ CIENTÍFICO POR ÁREAS
Guillermina de León (Bioquímica Deportiva)
Héctor Icaza (Entrenamiento Deportivo)
Celia Cervantes Género y Deporte)
Daniel Pérez (Rehabilitación)
Eduardo Flores (Rehabilitación)
Jaime Velasco (Desempeño Humano)
Juan Contreras (Tecnología)
Karla Covarrubias (Antropología)
Martín Villalobos ((Dirección Deportiva)
Sergio Hernández (Didáctica)
Rossana Medina (Recreación)
Oswaldo Ceballos (Educación Física)
David Hernández (Derecho Deportivo)
Edith Cortés (Comunicación y Deporte)
Loredana Távana (Nutrición)
Ana Luisa Sánchez (Psicología)
Miguel Ángel Lara (Periodismo Deportivo)
Martín Gerardo Vargas Elizondo (Didáctica de la
Educación Física)
ISSN 1870-7475
Ciencia, Deporte y Cultura Física es una revista arbitrada.
INDICE
SEGUNDA ÉPOCA / NÚM. 2 / Julio 2010.
INVESTIGACIÓN
1. Revisión sistemática de la influencia de los componentes
del entrenamiento en la liberación de marcadores de daño
cardíaco con el ejercicio. Luis Enrique Carranza García, Alejandro
Legaz Arrese, Fernando Ochoa Ahmed................................................07
2. De lo físico a lo simbólico: razonamientos léxicos y
discursivos que tienen los jóvenes universitarios para
practicar el deporte en la Universidad de Colima, México. Alan
Emmanuel Pérez Barajas, Aideé Consuelo Arellano Ceballos Y Elia
Serratos Chávez......................................................................................31
3. Gimnasia y satisfacción corporal: ¿un binomio deportivo?.
Alfredo Hernández-Alcántara y José Salinas Polanco............................61
4. Influencia de las variables antropométricas sobre la
capacidad aeróbica en niños pre-púberes. Rossana Gómez
Campos, Miguel de Arruda, Cristian Loarte, Jaime Pacheco, Marco
Antonio Cossio Bolanos.........................................................................75
5. El ejercicio como estrategia de afrontamiento al estrés en
estudiantes de 14 a 18 años de edad, de la Ciudad de Colima,
México. Sara Lidia Pérez Ruvalcaba, Ma. Elena Vidaña Gaytán ,
Claudia Leticia Yañez Velasco, Evelyn Rodríguez Morril , Carlos David
Solorio Pérez y Cristina González........................................................89
3
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
DIVULGACIÓN
Ingeniería en Comunicación Social del Deporte. Apuntes hacia
un Programa de Trabajo. Jesús Galindo Cáceres..........................105
Friedrich Nietzsche: El Cuerpo y la Danza.
Alberto Cabañas Osorio........................................................................127
Fundamentos Metodológicos del Entrenamiento de
Resistencia Aerobia en la Natación. Pedro Julián Flores Moreno y
Arturo Osorio Gutiérrez......................................................................139
NORMAS PARA AUTORES................................................................151
4
INVESTIGACIÓN
2da. Época / Núm. 2 / Julio 2010
Revisión sistemática de la influencia de los componentes del entrenamiento
en la liberación de marcadores de daño cardíaco con el ejercicio
Revisión sistemática de la influencia
de los componentes del entrenamiento
en la liberación de marcadores de daño
cardíaco con el ejercicio
Luis E. Carranza García, Alejandro Legaz Arrese y Fernando Ochoa Ahmed
Resumen
El ejercicio físico regular es recomendado para la prevención de
enfermedades cardiovasculares. Aunque la elevada prevalencia
de inactividad física sigue constituyendo un problema de salud
Luis Enrique Carranza García. Licenciado en Organización Deportiva, Master en Ciencias del
Ejercicio por la Facultad de Organización Deportiva (FOD) de la Universidad Autónoma de Nuevo
León (UANL). Doctor en Medicina de la Educación Física y el Deporte (Universidad de Zaragoza).
Profesor Titular de Tiempo Completo de la FOD, imparte la asignatura de Teoría del Entrenamiento
en pregrado y Planeación del Entrenamiento Deportivo en posgrado. Cuenta con más de 5 artículos
publicados en revistas de alto índice de factor de impacto en el área de Ciencias del Deporte, colaborador del Manual del Entrenamiento Deportivo del Dr. Alejandro Legaz Arrese. Realizó una estancia
pre-doctoral en el Research Institute for Sport and Exercise Sciences de Liverpool supervisado por el
Dr. Keith George. Profesionalmente ha trabajado como técnico especialista en el equipo Basket CAI
Zaragoza de la liga ADECCO ORO, temporada 2009-2010. email: [email protected]
Alejandro Legaz Arrese. Licenciado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte (Universidad
Politécnica de Madrid). Master en Alto Rendimiento Deportivo (Universidad Autónoma de Madrid).
Doctor en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte (Universidad de Zaragoza). Profesor Titular
Universitario en la Facultad de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte de la Universidad de Zaragoza, imparte la asignatura de Teoría y Práctica del Entrenamiento Deportivo desde hace más de 10
años, ha publicado más de 15 artículos con alto índice de factor de impacto, dirigido 5 tesis doctorales
calificadas todas con Cum Laude. Autor principal y editor del Manual de Entrenamiento Deportivo.
Líder del grupo de investigación Movimiento Humano. Actualmente dirige un proyecto de investigación del Ministerio de Ciencia e Innovación del Gobierno de España. Profesionalmente ha sido Preparador Físico de fútbol sala del equipo Mainfer femenil durante 2003-2005. email: [email protected]
Fernando Ochoa Ahmed. Licenciado en Administración de Empresas (Universidad Regiomontana). Doctor en Ciencias de la Cultura Física (Instituto Superior de Cultura Física “Manuel
Fajardo”, La Habana Cuba). Profesor Titular de Tiempo Completo de la UANL, imparte clases
de pregrado y posgrado en la FOD y en el Departamento de Medicina del Deporte. Cuenta con ponencias internacionales (International Tennis Federation). Ha publicado 3 artículos de divulgación
científica nacional, dirigido 3 tesis de maestría. Miembro de la Cátedra Latinoamericana de Teoría
y Metodología de la Educación Física y el Entrenamiento Deportivo (CLTM). Ha sido galardonado
con el premio nacional de investigación por la CONADE en el área de alto rendimiento en el 2010.
Profesionalmente ha sido Entrenador Nacional (Capitán) del equipo Copa Davis Femenil (Copa
Federación) en los años 1994, 1995, 1996 y 1997. email: [email protected]
7
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
pública, la participación de deportistas aficionados en pruebas
de larga duración como maratón y triatlón también está siendo
debatida. Aunque la participación regular en programas de
ejercicio reduce el riesgo de enfermedades cardíacas, recientes
estudios han documentado la liberación de troponinas cardíacas
(cTn) consistente con daño cardíaco y de NT-proBNP con
disfunción cardíaca después de competiciones extenuantes en
sujetos aparentemente sanos. Actualmente, la prevalencia, los
mecanismos, y el significado clínico de la liberación de cTn y NTproBNP con el ejercicio son pobremente comprendidos. Este
artículo revisa la evidencia actual de la liberación de marcadores
de daño cardíaco con el ejercicio y sus factores determinantes.
Palabras clave: cTnI, NT-proBNP, atletas, larga duración
Abstract
Regular physical exercise is recommended for the prevention of
cardiovascular diseases. Although the high prevalence of physical
inactivity remains a public health issue, the participation of amateur
athletes in long competitions such as marathon and triathlon is also
being debated. Even though the regular participation in exercise
programs reduce the risk of heart disease, recent studies have
documented the release of cardiac troponin (cTn), consistent with
cardiac damage and NT-proBNP with cardiac dysfunction right after
strenuous competition in apparently healthy individuals. Currently,
the prevalence, mechanisms, and clinical meaning of the release of
cTn and NT-proBNP with exercise are poorly understood. This
article reviews the current evidence for the release of cardiacdamage
biomarkers with exercise and its determinants factors.
Key Words: cTnI, NT-proBNP, athletes, long duration.
8
Revisión sistemática de la influencia de los componentes del entrenamiento
en la liberación de marcadores de daño cardíaco con el ejercicio
Introducción
Las investigaciones en cardiología y ejercicio han focalizado su
atención en determinar los posibles efectos beneficiosos de la
actividad física moderada y los posibles efectos perjudiciales de
la actividad física competitiva y extenuante. Así, varios estudios
prospectivos a gran escala observacional, han documentado
claramente una relación dosis-respuesta entre la actividad física y el
riesgo de enfermedades cardiovasculares y la mortalidad prematura
(Ignarro, Balestrieri & Napoli, 2007; Lee, Rexrode, Cook, Manson
& Buring, 2001; Manson et al., 2002; Rockhill et al. 2001; Tanasescu
et al., 2002; Yu, Yarnell, Sweetnam & Murray, 2003). Estos
estudios observaron niveles significativamente más bajos de riesgo
con una mayor cantidad de actividad física. Se ha estimado que,
en comparación con sus homólogos sedentarios y los que tienen
capacidad aeróbica baja, las personas que realizan actividad física y
tienen buen nivel aeróbico presentan un 25-50% menos de riesgo
global de desarrollar enfermedad cardiovascular (U. S. Department
of Health and Human Services, 2004; Williams, 2001).
Recientemente, en base a criterios científicos, el Colegio
Americano de Medicina del Deporte y la Asociación Americana
del Corazón han establecido que para promover y mantener
la salud, todos los adultos sanos con edades entre 18-65 años
requieren realizar como mínimo actividad aeróbica de intensidad
moderada (ej. caminar rápido) durante 5 sesiones/semana de 30
min o actividad aeróbica de intensidad vigorosa (ej. jogging) durante
3 sesiones/semana de 20 min (Haskell et al., 2007). Los adultos
que deseen mejorar su forma física o reducir aún más su riesgo
de enfermedades crónicas prematuras y la mortalidad relacionada
con la inactividad física, deberán realizar un nivel de actividad física
superior al mínimo recomendado (Kesaniemi et al., 2001).
Sin embargo, el volumen de ejercicio (intensidad, duración,
frecuencia) que induce al máximo beneficio para la salud no ha sido
establecido, y probablemente varíe con la dotación genética, edad,
9
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
sexo, estado de salud, composición corporal y otros factores (Haskell
et al., 2007). Al parecer, puede ser erróneo suponer que existe una
relación lineal entre el volumen de ejercicio y la salud cardíaca.
Así, algunos autores sugieren la hipótesis de que puede existir un
límite en el volumen de ejercicio que determine los posibles efectos
beneficiosos o perjudiciales de la actividad física sobre el corazón
(Figura 1) (Whyte, 2008). Mientras que se ha documentado que el
riesgo de paro cardíaco o infarto de miocardio es muy bajo en adultos
generalmente sanos durante actividades de intensidad moderada
(Vuori, 1986; Whang et al., 2006), el riesgo de complicaciones
cardiovasculares aumenta de forma transitoria durante el ejercicio
físico vigoroso, especialmente para las personas con enfermedad
arterial coronaria y habitualmente sedentarias (American Heart
Association & American College of Sports Medicine, 2007).
Así, se ha reportado la historia de casos de patologías cardíacas
teóricamente asociadas a la ejecución de esfuerzos extenuantes
(Damm et al., 1999; Douglas, O`Toole & Katz, 1998; Douglas,
O`Toole & Woolard, 1990; Douglas, O`Toole, Hiller & Reichek,
1990; Douglas, O`Toole, Hiller, Hackney & Reichek, 1987;
McKechnie et al., 1979; Niemelä, Palatsi, Ikäheimo, Takkunen &
Vuori, 1984; Rowe, 1993; Osbakken & Locko, 1984), así como
más recientemente estudios que evidencian muertes y patologías
cardíacas (fundamentalmente arritmias y fibrosis miocárdica) en
deportistas que han competido durante años en esfuerzos de larga
duración (Ector et al., 2007; Heidbuchel et al., 2003; Karjalainen,
Kujala, Kaprio, Sarna & Viitasalo, 1998; Lindsey & Dunn, 2007).
Por ejemplo, se ha estimado que un 4% de los infartos de miocardio
ocurren asociados a esfuerzos extenuantes (Siegel, Sholar, Yang,
Dhanak & Lewandrowski, 1997), y 1 muerte súbita de cada 50000
participantes en carreras de maratón (Siegel et al., 2008).
Numerosos deportistas realizan entrenamientos y competiciones
extenuantes que superan significativamente los estándares de
duración e intensidad de esfuerzo establecido para los programas
10
Revisión sistemática de la influencia de los componentes del entrenamiento
en la liberación de marcadores de daño cardíaco con el ejercicio
de actividad física saludables. La práctica competitiva extenuante
ha sido casi exclusiva de deportistas de élite, a los que se les supone
un adecuado nivel de entrenamiento y seguimiento técnicobiomédico. En las dos últimas décadas ha crecido exponencialmente
el número de deportistas aficionados que compiten en una gran
variedad de modalidades deportivas extenuantes (ej. maratón,
ultramaratón, triatlón, cicloturismo, fútbol, etc.). A muchos de
estos deportistas se les presupone, de menor dotación genética,
nivel de entrenamiento y seguimiento técnico-biomédico respecto
a los deportistas de élite. Además, en las modalidades deportivas
que están reguladas por una distancia determinada, el volumen de
esfuerzo es muy superior en los deportistas aficionados que en los
deportistas de élite.
El incremento de deportistas aficionados que compiten en
pruebas extenuantes, permite observar la presencia de disfunción
cardíaca (ej. reducción de la fracción de eyección y del ratio E/A)
después de la competición (Hart et al., 2007; La Gerche, Connelly,
Mooney, MacIsaac & Prior, 2008), y especialmente la constatación
de liberación de marcadores específicos de daño cardíaco después
de competiciones de resistencia de larga duración (Neilan et al.,
2006; Serrano-Ostáriz et al., 2009a) ha reabierto el debate sobre
los posibles efectos negativos que sobre el corazón pudiera tener la
actividad física extenuante.
Estos datos han generado confusión y preocupación en
deportistas, entrenadores, científicos y clínicos (George, Shave,
Warburton, Scharhag & Whyte, 2008). Incluso han inducido a
intervenciones clínicas inadecuadas (Whyte et al., 2007) y a titulares
alarmistas en medios de comunicación: “Los corredores que no
entrenan bien puede tener el maratón de las miserias” (The Boston
Globe, 17 de abril de 2006), “Los atletas Ironman ponen al corazón
a un riesgo de daño grave, advierten los expertos” (The Times, 22
de enero de 2007) (George et al., 2008). La sugerencia de que el
ejercicio prolongado puede conducir a lesión celular cardíaca es
11
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
una de las principales preocupaciones y área de investigación de
la medicina deportiva. Si la liberación de marcadores específicos
de daño cardíaco después de esfuerzos extenuantes constituye un
proceso fisiológico o patológico con posibles repercusiones clínicas
a largo plazo es actualmente desconocido (George et al., 2008). Para
una mejor comprensión de este fenómeno es necesario conocer
los factores que determinan la liberación de estos marcadores con
el ejercicio. Este trabajo presenta una revisión del conocimiento
actual sobre la evidencia científica de la liberación de marcadores
cardíacos con el ejercicio, así como de sus factores determinantes.
Figura 1. Relación hipotética entre el volumen de ejercicio y la incidencia de eventos cardíacos.
Marcadores Específicos de Daño Cardíaco
Los marcadores de daño cardíaco son sustancias contenidas en
el interior del cardiocito que se liberan a la sangre cuando hay
“muerte celular”. Varios marcadores de daño cardíaco se han
utilizado tradicionalmente en la práctica clínica: creatinfosfokinasa
(CPK), lactato deshidrogenasa (LHD), transaminasa glutámico
oxalacético (GOT), fracción MB de la creatinkinasa (CK-MB),
mioglobina (Myo). Estos marcadores están limitados debido a
que su liberación en la sangre puede venir determinada por otros
factores no relacionados con una incidencia cardíaca.
12
Revisión sistemática de la influencia de los componentes del entrenamiento
en la liberación de marcadores de daño cardíaco con el ejercicio
Actualmente la medición de las troponinas cardíacas específicas
(cTnT y cTnI) es la prueba estándar para identificar en suero daño
miocárdico, y son usadas para determinar clínicamente el infarto
agudo de miocardio (Alpert, Thygesen, Antman & Bassand, 2000).
El límite máximo de referencia (LMR) de cTnT es <0.01 µg.L-1 y de
cTnI entre 0.04 y 0.8 µg.L-1 en función de las diferentes pruebas de
laboratorio disponibles (Apple, Quist, Doyle, Otto & Murakami,
2003). Las concentraciones elevadas de N-terminal pro-BNP (NTpro-BNP) reflejan la tensión elevada de la pared del miocardio por
la extensión del miocito en la disfunción cardíaca, el paro cardíaco
congestivo, cardiomiopatías y en otras enfermedades cardíacas
(Hall, 2005). Para NT-proBNP se ha establecido un LMR de 125
ng.L-1 (Raymond et al., 2003).
Liberación de Marcadores Específicos
de Daño Cardíaco con el Ejercicio
Un creciente número de estudios evidencian que el ejercicio
prolongado y extenuante promueve la elevación de cTnI, cTnT y NtproBNP (George et al., 2004a; Herrmann et al., 2003; Koller et al.,
2008; La Gerche et al., 2008; Leers, Schepers & Baumgarten, 2006;
Melanson, Green, Wood, Neilan & Lewandrowski, 2006; Neilan
et al., 2006; Neumayr et al., 2001; Neumayr, Pfister, Mitterbauer,
Eibl & Hoertnagl, 2005; Niessner et al., 2003; Obha et al., 2001;
Rifai, Douglas, O’Toole, Rimm & Ginsburg, 1999; Scharhag et al.,
2005; Serrano-Ostáriz et al., 2009a; Shave et al., 2002; Shave et al.,
2004a; Siegel et al., 2001; Tulloh et al., 2006; Urhausen, Scharhag,
Herrmann & Kindermann, 2004; Vidotto et al., 2005). Todos
estos estudios han evaluado a deportistas aficionados después de
competir en pruebas de larga duración (media maratón, maratón,
ultramaratón, triatlón, pruebas cicloturistas, etc.). La prevalencia de
deportistas que superan después de estas competiciones el LMR
de marcadores cardíacos es muy variable entre estudios debido a
numerosos factores no controlados (duración, intensidad, tipo de
13
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
esfuerzo, nivel de entrenamiento, sexo, edad, etc.) y a limitaciones
metodológicas (precisión de los analizadores, diseños simple prepost, etc.). En un metaanálisis se reportó que un 47% de los 1120
atletas evaluados mostraron liberación de cTnT después de un
ejercicio de resistencia (correr, ciclismo y triatlón) (Shave et al.,
2007). En corredores de maratón, considerando únicamente los
estudios con analizadores de mayor precisión, Regwan et al. (2010)
observaron para un total de 940 corredores una incidencia superior
al 60% tanto para cTnI como para cTnT. Hasta la fecha ningún
metaanálisis ha evaluado la prevalencia de NT-proBNP. En la
muestra más amplia analizada en un único estudio, Scharhag et al.
(2005) observaron en 105 sujetos que después de una carrera de
maratón, una carrera de 100 km, y una prueba de BTT un 77%
de los sujetos superó el LMR de NT-proBNP. Similar porcentaje
observó nuestro grupo de trabajo en 91 deportistas después de una
prueba cicloturista (Serrano-Ostáriz et al., 2009a). Recientemente,
Middleton et al. (2008) mostraron que es necesario monitorear la
cinética de los marcadores cardíacos durante las 24 post-esfuerzo para
determinar el valor real pico después del ejercicio. Considerando
que ningún estudio ha realizado este análisis después de pruebas
de competición, es de esperar que la prevalencia de sujetos con
valores de marcadores cardíacos post-esfuerzo superiores al LMR
sea mayor que la establecida hasta la fecha.
También es referida en la literatura una reducción de la función
sistólica y diastólica del ventrículo izquierdo subsiguiente a un
ejercicio prolongado en sujetos aparentemente sanos (Dawson et
al., 2005; George et al., 2004ab; Hart et al., 2007; La Gerche et al.,
2008; Lucía et al., 1999; Middleton et al., 2006; Middleton et al.,
2007; Neilan et al., 2006; Oxborough et al., 2006; Rifai et al., 1999;
Shave et al., 2002; Shave et al., 2004ab; Tulloh et al., 2006; Whyte
et al., 2000; Whyte et al., 2005).
Algunos estudios han observado una asociación en el aumento
de marcadores cardíacos y la evidencia ecocardiográfica de una
14
Revisión sistemática de la influencia de los componentes del entrenamiento
en la liberación de marcadores de daño cardíaco con el ejercicio
reducción en la función cardíaca después de haber competido
en pruebas de larga duración (La Gerche et al. 2008; Neilan et
al., 2006; Tulloh et al., 2006). Estos datos soportan la teoría de
algunos autores de que la liberación de marcadores cardíacos con
el ejercicio puede tener significado patológico (Herrmann et al.,
2003). Sin embargo, la mayoría de los estudios no han encontrado
esta relación (George et al., 2004a; Herrmann et al., 2003, Koller
et al., 2008; König et al., 2003; Leers et al., 2006; Neumayr et
al., 2005; Niessner et al., 2003; Rifai et al., 1999; Scharhag et
al., 2005; Scharhag et al., 2006; Shave et al., 2004ab; Vidotto
et al., 2005; Whyte et al., 2005). Además, la literatura científica
también muestra que en los días posteriores a la competición,
contrario a lo que ocurre después de un infarto de miocardio
(Newby, 2004), los biomarcadores cardíacos disminuyen hasta
niveles normales (Apple et al., 2002; Herrmann et al., 2003;
La Gerche et al., 2008; Leer et al., 2006; Neumayr et al., 2001;
Neumayr et al., 2005; Scharhag et al., 2005; Shave et al., 2002;
Shave et al., 2004b; Siegel et al., 2001; Whyte et al., 2000), y
que la disfunción cardíaca es reversible (Dawson et al., 2005; La
Gerche et al., 2008; Middleton et al., 2007; Shave et al., 2002;
Shave et al., 2004b; Tulloh et al., 2006; Whyte et al., 2000).
Estos resultados soportan cierta evidencia de que el aumento
de marcadores cardíacos con el ejercicio puede representar una
reacción fisiológica sin significado patológico en sujetos sanos
(Middleton et al., 2007; Scharhag et al., 2005).
Así, se ha sugerido que el ejercicio podría incrementar la
permeabilidad de la membrana del sarcolema de la célula cardíaca,
liberándose por difusión pasiva la cTn libre en el citosol desde el
espacio intracelular al espacio extracelular, sin que realmente haya
liberación de la cTn de la estructura de la célula, y por tanto, sin
muerte celular (Shave et al., 2010). Ésta sería la explicación de
la diferente cinética de marcadores cardíacos evidenciada después
del ejercicio respecto a la inherente después de una incidencia
15
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
cardíaca. Diversas teorías podrían explicar el posible incremento de
la permeabilidad de la membrana del sarcoplasma con el ejercicio:
incremento de estrés de las células cardíacas (McNeil & Khakee,
1992), la producción de radicales libres (Goette et al., 2009), y
la alteración del balance ácido-base (Hultman & Sahlin, 1980).
Debido a que estos procesos fisiológicos han sido documentados
en el músculo esquelético como consecuencia del ejercicio y
parecen tener un rol importante en la hipertrofia muscular (Evans
& Cannon, 1991; McNeil & Khakee, 1992), se ha sugerido que la
liberación de marcadores cardíacos con el ejercicio pueda reflejar
la activación celular que resulta en la hipertrofia fisiológica cardíaca
(Scharhag et al., 2006).
Factores asociados a la liberación de marcadores
específicos de daño cardíaco
Duración e intensidad de ejercicio
A pesar de que la intensidad y la duración de un ejercicio
determinan los cambios en numerosos procesos fisiológicos,
la influencia de estos parámetros sobre el incremento en los
marcadores de daño cardíaco ha sido poco estudiada. Inicialmente
en estudios no controlados, analizando pruebas de competición,
se observaron correlaciones débiles significativas entre la duración
del esfuerzo y el incremento de los niveles de NT-proBNP
(Figura 2) (Herrmann et al., 2003; Scharhag et al., 2005; SerranoOstáriz et al., 2009a) pero no con el incremento de cTnI ni cTnT
(George et al., 2004a; Neilan et al., 2006; Scharhag et al., 2005;
Scharhag et al., 2006). Un metaanálisis reciente observó relación
entre el incremento en cTnT y la duración de la competición, con
un incremento del marcador ligeramente menor al aumentar la
duración (Shave et al., 2007). Debido a que las pruebas de mayor
duración son habitualmente realizadas a menor intensidad, estos
16
Revisión sistemática de la influencia de los componentes del entrenamiento
en la liberación de marcadores de daño cardíaco con el ejercicio
autores sugirieron que la intensidad del ejercicio puede explicar el
incremento en cTnT. Esta explicación puede justificar el porqué
Roth et al. (2007) no encontraron mediciones positivas de cTnT
en siete corredores adultos después de una maratón de ultraresistencia de 216 km. Hasta la fecha, en el único estudio que se ha
controlado la intensidad en una prueba de competición, nuestro
grupo de trabajo observó una débil asociación entre el incremento
de cTnI y la FC promedio durante una prueba cicloturista (Figura
3) (Serrano-Ostáriz et al., 2009a).
Figura 2. La relación entre los cambios en la concentración de NT-proBNP y la duración de una
prueba cicloturista (min= minutos).
17
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Figura 3. La relación entre los cambios en la concentración de cTnI y la frecuencia cardíaca media
realizada durante una prueba cicloturista (lpm= latidos por minuto).
En estudios controlados por la duración e intensidad de esfuerzo
nuestro grupo de trabajo ha verificado que la intensidad de
ejercicio influencia el incremento de cTnI, pero no de NTproBNP (Legaz-Arrese, George, Carranza-García, Moros-García
& Serrano-Ostáriz, 2010; Serrano-Ostáriz et al., 2009b), mientras
que la duración del ejercicio influencia el incremento de ambos
marcadores, especialmente de NT-proBNP (Serrano-Ostáriz et
al., 2009b). En la misma línea, para los valores de cTnT se ha
descrito, para intensidades y duraciones de esfuerzos moderadas,
una mayor influencia de la intensidad de ejercicio con respecto a
la duración (Fu, Nie & Tong, 2009).
Observamos que estas relaciones no son lineales, y sugieren
que puede haber un umbral de duración y/o intensidad que
determinan un marcado incremento de ambos marcadores.
De hecho, si la intensidad es moderada (inferior al umbral
anaeróbico), y la duración no es excesiva (menos de 180 min) los
valores de ambos marcadores al finalizar el esfuerzo son inferiores
18
Revisión sistemática de la influencia de los componentes del entrenamiento
en la liberación de marcadores de daño cardíaco con el ejercicio
al LMR, mientras que si la intensidad es competitiva un elevado
porcentaje de sujetos supera el LMR (Legaz-Arrese et al., 2010;
Serrano-Ostáriz et al., 2009b). Estos resultados sugieren un límite
en el volumen de ejercicio que es asociado a un incremento de
marcadores específicos de daño cardíaco superior al LMR. Sin
embargo, la existencia de este límite no ha podido ser verificada.
Tipo de esfuerzo
Hasta la fecha ningún estudio ha controlado la influencia del
tipo de esfuerzo sobre la liberación de marcadores cardíacos.
Mediante metaanálisis se mostró que el número de casos positivos
de cTnT es superior en carreras que en pruebas cicloturistas
(Shave et al., 2007). Sin embargo, estos resultados pudieron estar
influenciados por la mayor duración de esfuerzo caracterizada en
las pruebas cicloturistas. Mientras que la liberación de marcadores
cardíacos en esfuerzos competitivos continuos está claramente
documentada, los resultados sobre esfuerzos intermitentes son
escasos y confusos. Recientemente nuestro grupo de trabajo ha
mostrado, mediante un estudio de múltiples medidas durante
las 24 post-esfuerzo, que a) partidos simulados de fútbol sala y
sesiones con sobrecargas inducen a un incremento significativo
de NT-proBNP con pocos datos excediendo el LMR (Figura
4), b) que los cambios en cTnI son ausentes (sesiones con
sobrecargas) o modestos (fútbol sala) con pocos datos excediendo
el LMR (Figura 5), y c) que en ambas intervenciones de ejercicio
son muy pocos los valores detectables de cTnT (CarranzaGarcía et al., 2010). Estos resultados confirman los encontrados
previamente en diseños simples pre- post-esfuerzo para sesiones
con sobrecargas (Stephenson et al., 2005) y partidos simulados
de deportes de equipo (George et al., 2004b; Nie et al., 2008).
19
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Figura 4. Valores de NT-proBNP antes y después de realizar una competición simulada de fútbol
sala y una sesión de pesas.
Figura 5. Valores de cTnI antes y después de realizar una competición simulada de fútbol sala y
una sesión de pesas.
20
Revisión sistemática de la influencia de los componentes del entrenamiento
en la liberación de marcadores de daño cardíaco con el ejercicio
Nivel de entrenamiento
La influencia del nivel de entrenamiento sobre el incremento
de marcadores específicos de daño cardíaco es pobremente
comprendida. Herrmann et al. (2003) encontraron una débil
asociación entre el incremento de NT-pro-BNP después de
una maratón y el tiempo de entrenamiento. Estos resultados
fueron confirmados posteriormente por Neilan et al. (2006):
después de una maratón observaron mayor incremento de cTnT
y NT-proBNP en corredores con <56 km semana respecto a
corredores con mayor entrenamiento. Fortescue et al. (2007)
también reportaron que los maratonianos con menor experiencia
estuvieron asociados con un mayor incremento de troponinas
después de la maratón de Boston. Sin embargo, esto no ha sido
confirmando en la maratón de Londres (George et al., 2004a,
2005) o después de otras pruebas de resistencia (Scharhag et al.,
2005). Hay que considerar que ninguno de estos estudios controló
la influencia, por ejemplo, de la duración del ejercicio sobre los
niveles de correlación. Así, después de una prueba cicloturista,
nosotros no observamos una relación entre el incremento de cTnI
y el nivel de entrenamiento (Figura 6A), y la relación observada
para el incremento de NT-proBNP fue como consecuencia de que
los ciclistas menos entrenados tardaron más tiempo en recorrer la
distancia de competición (Figura 6B) (Serrano et al., 2009a).
21
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Figura 6. La relación entre el cambio en la concentración de cTnI (A) y NT-proBNP (B) con el
entrenamiento realizado 6 meses antes de realizar una prueba cicloturista.
Los resultados encontrados en los dos únicos estudios que han
determinado el incremento de marcadores específicos de daño
cardíaco en deportistas de élite difieran de los descritos en
deportistas aficionados. Bonetti et al. (1996) encontraron niveles
normales de cTnT durante la disputa del Giro de Italia. König et
al. (2003) comprobaron estos resultados para los valores de cTnT,
observando además que los ciclistas que presentaron niveles de
NT-proBNP por encima del LMR eran mayores de 30 años. No
obstante, estos resultados están limitados por el pobre nivel de
precisión de los analizadores utilizados en ambos estudios.
22
Revisión sistemática de la influencia de los componentes del entrenamiento
en la liberación de marcadores de daño cardíaco con el ejercicio
Con base en las diferencias observadas entre los estudios
con deportistas de élite y aficionados es posible especular que el
incremento de marcadores específicos de daño cardíaco por encima
del LMR está asociado a deportistas que realizan un esfuerzo
superior a su nivel de adaptación cardíaca, lo que puede determinar
un posible riesgo cardíaco a largo plazo, aunque también podría
ser consecuencia de un mayor nivel de adaptación requerido en
deportistas con menor nivel de entrenamiento. Futuros estudios
son necesarios para examinar esta teoría. Actualmente no existen
estudios controlados que determinen la influencia del nivel de
entrenamiento sobre el incremento de marcadores específicos de
daño cardíaco, ni el posible efecto mediador del entrenamiento
sobre estos marcadores.
Debido a que la principal variable que determina valores postesfuerzo de marcadores específicos de daño cardíaco superiores
al LMR son los valores pre-esfuerzo (Legaz-Arrese et al., 2010;
Sahlén et al., 2008; Serrano et al., 2009b) es es importante señalar
si el nivel de entrenamiento determina diferencias en los valores
basales de estos marcadores.
Conclusiones
La liberación de marcadores cardíacos después de la ejecución
de esfuerzos extenuantes es habitual en sujetos aparentemente
sanos. Sin embargo, al contrario de lo que ocurre con la incidencia
cardíaca, los valores vuelven a la normalidad a las 24 horas después
del ejercicio. Aunque con resultados todavía limitados, al igual que
en otros procesos fisiológicos, la duración, intensidad y tipo de
ejercicio, y el nivel de entrenamiento son factores que determinan
un mayor o menor incremento de marcadores cardíacos. Todos
estos resultados dan más soporte a que este fenómeno es un
proceso fisiológico y no patológico. Aunque los mecanismos que
inducen a la liberación de marcadores cardíacos con el ejercicio
no son conocidos, se sugiere que el ejercicio podría incrementar
23
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
la permeabilidad de la membrana del sarcoplasma de la célula
cardíaca, y así liberarse, fenómeno que podría estar asociado con
la hipertrofia fisiológica cardíaca documenta con el entrenamiento.
Desde una perspectiva clínica, no existe fundamento justificado
con el conocimiento actual para considerar una intervención médica
por el incremento de marcadores específicos de daño cardíaco
con el ejercicio. Los clínicos deben conocer que la liberación de
marcadores cardíacos con el ejercicio es habitual, y por tanto,
deben considerar otros síntomas claros sugestivos de incidencia
cardíaca. Un diagnóstico erróneo de lesión miocárdica después
del ejercicio de resistencia y la mala gestión posterior, incluida la
hospitalización y la intervención invasiva, puede ser innecesariamente
costosa y psicológicamente perjudicial para el atleta. La especulación
sin fundamento y alarmista podría tener un efecto profundamente
negativo en la captación de la actividad física en la población general.
Esto no implica, tal y como se documenta en la literatura, que
algunos sujetos, especialmente aquellos con patologías cardíacas
previas, puedan tener incidencias cardíacas como consecuencia
de esfuerzos extenuantes. Por ello es recomendable que todos
los deportistas realicen una progresión coherente en el volumen
de entrenamiento, compitan en pruebas de un nivel de exigencia
acorde a su nivel de entrenamiento, y se sometan a pruebas de
esfuerzo y valoración ecocardiográfica para tener más garantías de
que tienen una condición saludable.
Bibliografía
Alpert, J.S., Thygesen, K., Antman, E. & Bassand, J.P. (2000). Myocardial infarction redefined – a
consensus document of The Joint European Society of Cardiology/American College
of Cardiology Committee for the redefinition of myocardial infarction. Journal of the
American College of Cardiology, 36, 959-969.
American Heart Association & American College of Sports Medicine (2007). Joint Position Statement: Exercise and acute cardiovascular events: placing the risks into perspective. Medicine & Science in Sports & Exercise, 39, 886-897.
Apple, F.S., Quist, H.E., Doyle, P.J., Otto A.P. & Murakami M.M. (2003). Plasma 99th percentile
reference limits for cardiac troponin and creatine kinase MB mass for use with European Society of Cardiology/American College of Cardiology consensus recommendations. Clinical Chemistry, 49, 1331-1336.
24
Revisión sistemática de la influencia de los componentes del entrenamiento
en la liberación de marcadores de daño cardíaco con el ejercicio
Bonetti, A., Tirelli, F., Albertini, R., Monica, C., Monica, M. & Tredici G. (1996). Serum cardiac
troponin T after repeated endurance exercise events. International Journal of Sports
Medicine, 17, 259-262.
Carranza-García, L.E., George, K.P., Serrano-Ostáriz, E., Casado-Arroyo, R., Caballero-Navarro,
A.L. & Legaz-Arrese, A. (2010). Cardiac biomarker response to intermittent exercise
bouts. International Journal of Sports Medicine, en prensa.
Damm, S., Andersson, L.G., Henriksen, E., Niklasson, U., Jonason, T., Ahrén, T., et al. (1999).
Wall motion abnormalities in male orienteers are aggravated by exercise. Clinical Physiology, 19, 121-126.
Dawson, E.A., Shave, R., George, K., Whyte, G., Ball, D., Gaze, D., et al. (2005). Cardiac drift during prolonged exercise with echocardiographic evidence of reduced diastolic function
of the heart. European Journal of Applied Physiology, 94, 305-309.
Douglas, P.S., O`Toole, M.L & Katz, S.E. (1998). Prolonged exercise alters cardiac chronotropic
responsiveness in endurance athletes. The Journal of Sports Medicine and Physical Fitness, 38, 158-163.
Douglas, P.S., O`Toole, M.L. & Woolard, J. (1990a). Regional wall motion abnormalities after
prolonged exercise in the normal left ventricle. Circulation, 82, 2108-2104.
Douglas, P.S., O`Toole, M.L., Hiller, D.B., & Reichek, N. (1990b). Different effects of prolonged
exercise on the right and left ventricles. Journal of the American College of Cardiology,
15, 64-69.
Douglas, P.S., O`Toole, M.L., Hiller, D.B., Hackney, K. & Reichek, N. (1987). Cardiac fatigue
after prolonged exercise. Circulation, 76, 1206-1213.
Ector, J.J., Ganame, J., van der Merwe, N., Adriaenssens, B., Pison, L. Willems, R. et al. (2007).
Reduced right ventricular ejection fraction in endurance athletes presenting with ventricular arrhythmias: a quantitative angiographic assessment. European Heart Journal,
28, 345-353.
Evans, W.J. & Cannon, J.G. (1991). The metabolic effects of exercise-induced muscle damage.
Exercise and Sport Sciences Reviews, 19, 99-125.
Fortescue, E.B., Shin, A.Y., Greenes, D.S., Mannix, R.C., Agarwal, S., Feldman, B.J., et al. (2007).
Cardiac troponin increases among runners in the Boston Marathon. Annals of Emergency Medicine, 49, 137-143.
Fu, F., Nie, J. & Tong, T.K. (2009). Serum cardiac troponin T in adolescent runners: effects of
exercise intensity and duration. International Journal of Sports Medicine, 30, 168-172.
George, K., Oxborough, D., Forster, J., Whyte, G., Shave, R., Dawson, E., et al. (2005). Mitral annular myocardial velocity assessment of segmental left ventricular diastolic function after
prolonged exercise in humans. The Journal of Physiology, 569(Pt 1), 305-313.
George, K., Shave, R., Warburton, D., Scharhag, J. & Whyte, G. (2008). Exercise and the heart:
can you have too much of a good thing? Medicine and Science in Sports and Exercise,
40, 1390-1392.
George, K., Whyte, G., Stephenson, C., Shave, R., Dawson, E., Edwards, B., et al. (2004a). Postexercise left ventricular function and cTnT in recreational marathon runners. Medicine
and Science in Sports and Exercise, 36, 1709-1715.
George, K.P., Dawson, E., Shave, R.E., Whyte, G., Jones, M., Hare, E., et al. (2004b). Left ventricular systolic function and diastolic filling after intermittent high intensity team sports.
British Journal of Sports Medicine, 38, 452-456.
Goette, A., Bukowska, A., Dobrev, D., Pfeiffenberger, J., Morawietz, H., Strugala, D., et al. (2009).
Acute atrial tachyarrhythmia induces angiotensin II type 1 receptor-mediated oxidative
stress and microvascular flow abnormalities in the ventricles. European Heart Journal,
30, 1411-1420.
Hall, C. (2005). NT-ProBNP: the mechanism behind the marker. Journal of Cardiac Failure, 11,
S81-S83.
25
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Hart, E., Shave, R., Middleton, N., George, K., Whyte, G. & Oxborough, D. (2007). Effect of
preload augmentation on pulsed wave and tissue Doppler echocardiographic indices of
diastolic function after a marathon. Journal of the American Society of Echocardiography, 20, 1393-1399.
Haskell, W.L., Lee, I.M., Pate, R.R., Powell, K.E., Blair, S.N., Franklin, B.A., et al. (2007). Physical
activity and public health: updated recommendation for adults from the American College of Sports Medicine and the American Heart Association. Medicine and Science in
Sports and Exercise, 39, 1423-1434.
Heidbüchel, H., Hoogsteen, J., Fagard, R., Vanhees, L., Ector, H., Willems, R., et al. (2003). High
prevalence of right ventricular involvement in endurance athletes with ventricular arrhythmias. Role of an electrophysiologic study in risk stratification. European heart journal, 24, 1473-1480.
Herrmann, M., Scharhag, J., Miclea, M., Urhausen, A., Herrmann, W. & Kindermann, W. (2003).
Post-race kinetics of cardiac troponin T and I and N-terminal pro-brain natriuretic peptide in marathon runners. Clinical Chemistry, 49, 831-834.
Hultman, E. & Sahlin, K. (1980). Acid-base balance during exercise. Exercise and Sport Sciences
Reviews, 8, 41-128.
Ignarro, L.J., Balestrieri, M.L. & Napoli, C. (2007). Nutrition, physical activity, and cardiovascular
disease: an update. Cardiovascular Research, 73, 326-340.
Karjalainen, J., Kujala, U.M., Kaprio, J., Sarna, S. & Viitasalo, M. (1998). Lone atrial fibrillation in
vigorously exercising middle-aged men: case control study. BMJ, 316, 1784-1785.
Kesaniemi, Y.K., Danforth, E.Jr., Jensen, M.D., Kopelman, P.G., Lefèbvre, P. & Reeder, B.A.
(2001). Dose-response issues concerning physical activity and health: an evidence-based
symposium. Medicine and Science in Sports and Exercise, 33, S351-S358.
Koller, A., Sumann, G., Griesmacher, A., Falkensammer, G., Klingler, A., Fliri, G., et al. (2008).
Cardiac troponins after a downhill marathon. International Journal of Cardiology, 129,
449-452.
König, D., Schumacher, Y.O., Heinrich, L., Schmid, A., Berg, A. & Dickhuth, H.H. (2003). Myocardial stress after competitive exercise in professional road cyclists. Medicine and Science in Sports and Exercise, 35, 1679-1683.
La Gerche, A., Connelly, K.A., Mooney, D.J., MacIsaac, A.I. & Prior, D.L. (2008). Biochemical
and functional abnormalities of left and right ventricular function following ultra-endurance exercise. Heart, 94, 860-866.
Lee, I.M., Rexrode, K.M., Cook, N.R., Manson, J.E. & Buring, J.E. (2001). Physical activity and
coronary heart disease in women: is “no pain, no gain” passé? The Journal of the American Medical Association, 285, 1447-1454.
Leers, M.P., Schepers, R. & Baumgarten, R. (2006). Effects of a long-distance run on cardiac markers in healthy athletes. Clinical Chemistry and Laboratory Medicine 2006, 44, 9991003.
Legaz-Arrese, A., George, K., Carranza-García, L.E., Moros-García, T. & Serrano-Ostáriz, E.
(2010). The impact of exercise intensity on the release of cardiac biomarkers in marathon runners. European Journal of Applied Physiology, en prensa.
Lindsey, M.M. & Dunn, F.G. (2007). Biochemical evidence of myocardial fibrosis in veteran endurance athletes. British Journal of Sports Medicine, 41, 447-452.
Lucía, A., Serratosa, L., Saborido, A., Pardo, J., Boraita, A., Morán, M., et al. (1999). Short-term
effects of marathon running: no evidence of cardiac dysfunction. Medicine and Science
in Sports and Exercise, 31, 1414-1421.
Manson, J.E., Greenland, P., LaCroix, A.Z., Stefanick, M.L., Mouton, C.P., Oberman, A., et al.
Walking compared with vigorous exercise for the prevention of cardiovascular events in
women. The New England Journal of Medicine, 347, 716-725.
26
Revisión sistemática de la influencia de los componentes del entrenamiento
en la liberación de marcadores de daño cardíaco con el ejercicio
McKechnie, J.K., Leary, W.P., Noakes, T.D., Kallmeyer, J.C., MacSearraigh, E.T. & Olivier, L.R.
(1979). Acute pulmonary oedema in two athletes during a 90 km running race. South
African Medical Journal, 56, 261-265.
McNeil, P.L. & Khakee, R. (1992). Disruptions of muscle fiber plasma membranes. Role in exercise-induced damage. The American Journal of Pathology, 140, 1097-1109.
Melanson, S.E., Green, S.M., Wood, M.J., Neilan, T.G. & Lewandrowski, E.L. (2006). Elevation of
myeloperoxidase in conjunction with cardiac-specific markers after marathon running.
American Journal of Clinical Pathology, 126, 888-893.
Middleton, N., George, K., Whyte, G., Gaze, D., Collinson, P. & Shave, R. (2008). Cardiac troponin T release is stimulated by endurance exercise in healthy humans. Journal of the
American College of Cardiology, 52, 1813-1814.
Middleton, N., Shave, R., George, K., Whyte, G., Hart, E. & Atkinson, G. (2006). Left ventricular function immediately following prolonged exercise: A meta-analysis. Medicine and
Science in Sports and Exercise, 38, 681-687.
Middleton, N., Shave, R., George, K., Whyte, G., Simpson, R., Florida-James, G., et al. (2007).
Impact of repeated prolonged exercise bouts on cardiac function and biomarkers. Medicine and Science in Sports and Exercise, 39, 83-90.
Neilan, T.G., Yoerger, D.M., Douglas, P.S., Marshall, J.E., Halpern, E.F., Lawlor, D., et al. (2006).
Persistent and reversible cardiac dysfunction among amateur marathon runners. European Heart Journal, 27, 1079-1084.
Neumayr, G., Gaenzer, H., Pfister, R., Sturm, W., Schwarzacher, S.P., Eibl, G., et al. (2001). Plasma
levels of cardiac troponin I after prolonged strenuous endurance exercise. The American Journal of Cardiology, 87, 369-371, A10.
Neumayr, G., Pfister, R., Mitterbauer, G., Eibl, G. & Hoertnagl, H. (2005). Effect of competitive
marathon cycling on plasma N-terminal pro-brain natriuretic peptide and cardiac troponin T in healthy recreational cyclists. The American Journal of Cardiology, 96, 732-735.
Newby, L.K. (2004). Markers of cardiac ischemia, injury, and inflammation. Progress in Cardiovascular Diseases, 46, 404-416.
Nie, J., Tong, T.K., Shi, Q., Lin, H., Zhao, J. & Tian, Y. (2008). Serum cardiac troponin response
in adolescents playing basketball. International Journal of Sports Medicine, 29, 449-452.
Niemelä, K.O., Palatsi, I.J., Ikäheimo, M.J., Takkunen, J.T. & Vuori, J.J. (1984). Evidence of impaired left ventricular performance after an uninterrupted competitive 24 hour run. Circulation, 70, 350-356.
Niessner, A., Ziegler, S., Slany, J., Billensteiner, E., Woloszczuk, W. & Geyer, G. (2003). Increases
in plasma levels of atrial and brain natriuretic peptides after running a marathon: are
their effects partly counterbalanced by adrenocortical steroids? European Journal of
Endocrinology, 149, 555-559.
Ohba, H., Takada, H., Musha, H., Nagashima, J., Mori, N., Awaya, T., et al. (2001). Effects of
prolonged strenuous exercise on plasma levels of atrial natriuretic peptide and brain
natriuretic peptide in healthy men. American Heart Journal, 141, 751-758.
Osbakken, M. & Locko, R. (1984). Scintigraphic determination of ventricular function and coronary
perfusion in long-distance runners. American Heart Journal, 108, 296-304.
Oxborough, D., Shave, R., Middleton, N., Whyte, G., Forster, J. & George, K. (2006). The impact
of marathon running upon ventricular function as assessed by 2D, Doppler, and tissueDoppler echocardiography. Echocardiography, 23, 635-641.
Raymond, I., Groenning, B.A., Hildebrandt, P.R., Nilsson, J.C., Baumann, M., Trawinski, J., et al.
(2003). The influence of age, sex and other variables on the plasma level of N-terminal
pro brain natriuretic peptide in a large sample of the general population. Heart, 89,
745-751.
Regwan, S., Hulten, E.A., Martinho, S., Slim, J., Villines, T.C., Mitchell, J., et al. (2010). Marathon
Running as a Cause of Troponin Elevation: A Systematic Review and Meta-Analysis.
Journal of Interventional Cardiology, 23, 443-450.
27
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Rifai, N., Douglas, P.S., O’Toole, M., Rimm, E. & Ginsburg, G.S. (1999). Cardiac troponin T and
I, echocardiographic [correction of electrocardiographic] wall motion analyses, and ejection fractions in athletes participating in the Hawaii Ironman Triathlon. The American
Journal of Cardiology, 83, 1085-1089. Erratum in: The American Journal of Cardiology
1999, 84, 244.
Rockhill, B., Willett, W.C., Manson, J.E., Leitzmann, M.F., Stampfer, M.J., Hunter, D.J., et al.
(2001). Physical activity and mortality: a prospective study among women. American
Journal of Public Health, 91, 578-583.
Roth, H.J., Leithäuser, R.M., Doppelmayr, H., Doppelmayr, M., Finkernagel, H., von Duvillard,
S.P., et al. (2007). Cardiospecificity of the 3rd generation cardiac troponin T assay during and after a 216 km ultra-endurance marathon run in Death Valley. Clinical Research in Cardiology, 96, 359-364.
Rowe, W.J. (1993). Endurance exercise and injury to the heart. Sports Medicine, 16, 73-79.
Sahlén, A., Winter, R., Lind, B., Jacobsen, P.H., Ståhlberg, M., Marklund, T., et al. (2008). Magnitude, reproducibility, and association with baseline cardiac function of cardiac biomarker release in long-distance runners aged > or =55 years. The American Journal of
Cardiology, 102, 218-222.
Scharhag, J., Herrmann, M., Urhausen, A., Haschke, M., Herrmann, W. & Kindermann, W.
(2005). Independent elevations of N-terminal pro-brain natriuretic peptide and cardiac
troponins in endurance athletes after prolonged strenuous exercise. American Heart
Journal, 150, 1128-1134.
Scharhag, J., Urhausen, A., Schneider, G., Herrmann, M., Schumacher, K., Haschke, M., et al.
(2006). Reproducibility and clinical significance of exercise-induced increases in cardiac
troponins and N-terminal pro brain natriuretic peptide in endurance athletes. European
Journal of Cardiovascular Prevention and Rehabilitation, 13, 388-397.
Serrano-Ostáriz, E., Legaz-Arrese, A., Terreros-Blanco, J.L., López-Ramón, M., Cremades-Arroyos, D., Carranza-García, L.E., et al. (2009a). Cardiac biomarkers and exercise duration
and intensity during a cycle-touring event. Clinical Journal of Sport Medicine, 19, 293299. Erratum in: Clinical Journal of Sport Medicine, 2009, 19, 442.
Serrano-Ostáriz, E., Terreros-Blanco, J.L., Legaz-Arrese, A., George, K., Shave, R., Bocos-Terraz,
P., et al. (2009b). The impact of exercise duration and intensity on the release of cardiac biomarkers. Scandinavian Journal of Medicine & Science in Sports, Nov 17. [Epub
ahead of print].
Shave, R., Baggish, A., George, K., Wood, M., Scharhag, J., Whyte, G., et al. (2010). Exerciseinduced cardiac troponin elevation: evidence, mechanisms, and implications. Journal of
the American College of Cardiology, 56, 169-176.
Shave, R., Dawson, E., Whyte, G., George, K., Gaze, D. & Collinson, P. (2004a). Altered cardiac
function and minimal cardiac damage during prolonged exercise. Medicine and Science
in Sports and Exercise, 36, 1098-1103.
Shave, R., Dawson, E., Whyte, G., George, K., Nimmo, M., Layden, J., et al. (2004b). The impact of
prolonged exercise in a cold environment upon cardiac function. Medicine and Science
in Sports and Exercise, 36, 1522-1527.
Shave, R., George, K.P., Atkinson, G., Hart, E., Middleton, N., Whyte, G., et al. (2007). Exerciseinduced cardiac troponin T release: a meta-analysis. Medicine and Science in Sports and
Exercise, 39, 2099-2106.
Shave, R.E., Dawson, E., Whyte, G., George, K., Ball, D., Gaze, D.C., et al. (2002). Evidence
of exercise-induced cardiac dysfunction and elevated cTnT in separate cohorts in an
ultra-endurance mountain marathon race. International Journal of Sports Medicine, 23,
489-494.
Siegel, A.J., Januzzi, J., Sluss, P., Lee-Lewandrowski, E., Wood, M., Shirey, T., et al. (2008). Cardiac
biomarkers, electrolytes, and other analytes in collapsed marathon runners. American
Journal of Clinical Pathology, 129, 948-951.
28
Revisión sistemática de la influencia de los componentes del entrenamiento
en la liberación de marcadores de daño cardíaco con el ejercicio
Siegel, A.J., Lewandrowski, E.L., Chun, K.Y., Sholar, M.B., Fischman, A.J. & Lewandrowski, K.B.
(2001). Changes in cardiac markers including B-natriuretic peptide in runners after the
Boston marathon. The American Journal of Cardiology, 88, 920-923.
Siegel, A.J., Sholar, M., Yang, J., Dhanak, E. & Lewandrowski, K.B. (1997). Elevated serum cardiac
markers in asymptomatic marathon runners after competition: Is the myocardium stunned? Cardiology, 88, 487-491.
Stephenson, C., McCarthy, J., Vikelis, E., Shave, R., Whyte, G. & Gaze, D., et al. (2005). Effect
of weightlifting upon left ventricular function and markers of cardiomyocyte damage.
Ergonomics, 48, 1585-1593.
Tanasescu, M., Leitzmann, M.F., Rimm, E.B., Willett, W.C., Stampfer, M.J. & Hu, F.B. (2002).
Exercise type and intensity in relation to coronary heart disease in men. The journal of
the American Medical Association, 288, 1994-2000.
Tulloh, L., Robinson, D., Patel, A., Ware, A., Prendergast, C., Sullivan, D., et al. (2006). Raised
troponin T and echocardiographic abnormalities after prolonged strenuous exercise--the
Australian Ironman Triathlon. British Journal of Sports Medicine, 40, 605-609.
U. S. Department of Health and Human Services. (2004). Bone Health and Osteoporosis: A Report
of the Surgeon General, Rockville, MD: U.S. Department of Health and Human Services, Public Health Service, Office of the Surgeon General.
Urhausen, A., Scharhag, J., Herrmann, M. & Kindermann, W. (2004). Clinical significance of increased cardiac troponins T and I in participants of ultra-endurance events. The American Journal of Cardiology, 94, 696-698.
Vidotto, C., Tschan, H., Atamaniuk, J., Pokan, R., Bachl, N. & Müller, M.M. (2005). Responses of
N-terminal pro-brain natriuretic peptide (NT-proBNP) and cardiac troponin I (cTnI) to
competitive endurance exercise in recreational athletes. International Journal of Sports
Medicine, 26, 645-650.
Vuori, I. (1986). The cardiovascular risks of physical activity. Acta Medica Scandinavica, 220, 205214.
Whang, W., Manson, J.E., Hu, F.B., Chae, C.U., Rexrode, K.M., Willett, W.C., et al. (2006).
Physical exertion, exercise, and sudden cardiac death in women. The Journal of the
American Medical Associatio,295, 1399-1403.
Whyte, G., George, K., Shave, R., Dawson, E., Stephenson, C., Edwards, B., et al. (2005). Impact
of marathon running on cardiac structure and function in recreational runners. Clinical
Science, 108, 73-80.
Whyte, G., Stephens, N., Senior, R., George, K., Shave, R., Wilson, M., et al. (2007). Treat the
patient not the blood test: the implications of an increase in cardiac troponin after prolonged endurance exercise. British Journal of Sports Medicine, 41, 613-615.
Whyte, G.P. (2008). Clinical significance of cardiac damage and changes in function after exercise.
Medicine and Science in Sports and Exercise, 40, 1416-1423.
29
De lo físico a lo simbólico: razonamientos léxicos y discursivos que tienen los jóvenes
universitarios para practicar el deporte en la Universidad de Colima, México.
De lo físico a lo simbólico:
razonamientos léxicos y discursivos
que tienen los jóvenes universitarios
para practicar el deporte en la
Universidad de Colima, México.
Alan Emmanuel Pérez Barajas, Aideé Consuelo Arellano Ceballos
y Elia Serratos Chávez
Resumen
Hoy día reflexionar en torno a ¿Cuáles son los motivos por los
que los estudiantes universitarios practican una actividad física o
deportiva? es de suma importancia para el ámbito de las Ciencias
Aplicadas al Deporte y la Cultura Física, ya que a partir de las
razones que los jóvenes expresan se puede comprender el papel
que la actividad física y el deporte tienen en su vida cotidiana.
Desde la lingüística cognitiva y sociocultural, bajo un
enfoque metodológico cualitativo, por medio de la técnica de
Redes Semánticas Naturales a través de un cuestionario se
obtuvieron segmentos discursivos que nos permitieron hacer
una categorización de las expresiones y asociaciones léxicas para
evidenciar el razonamiento que motiva la práctica del deporte y
otras actividades físicas de 89 jóvenes estudiantes del nivel medio
superior y superior de la Universidad de Colima.
Alan Emmanuel Pérez Barajas. Maestro en Pedagogía, con especialidad en estudios Lingüísticos por la Universidad de Colima. Profesor Investigador de Tiempo Completo de la Facultad de
Letras y Comunicación de la Universidad de Colima.
Aideé Consuelo Arellano Ceballos, Maestra en Ciencias Sociales, con especialidad en estudios
de Cultura y Comunicación por la Universidad de Colima. Profesora Investigadora de Tiempo
Completo de la Facultad de Letras y Comunicación de la Universidad de Colima.
Elia Serratos Chávez, Licenciada en Periodismo. Profesora de la licenciatura en Medio Ambiente y Gestión del Riesgo en la Facultad de Ciencias de la Universidad de Colima.
31
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Entre los principales hallazgos encontramos que, los motivos
que los jóvenes manifiestan para realizar una actividad física
o deportiva, se agrupan en cinco tipos de razonamientos:
intrínsecos o inmanentes, trascendentes, de salud en stricto sensu,
simbólicos y metafóricos, permitiéndonos advertir el tránsito de las
motivaciones de los jóvenes no sólo a partir de aspectos percibidos
como básicos: salud, bienestar o recreación sino que sus razones
y motivaciones trascienden hacia el deseo de conseguir un ideal
físico, una función estética- corporal y con ello, los sentimientos y
aspiraciones provocados por la necesidad de lograr o cuidar una
imagen ante los demás.
Palabras clave: Jóvenes, Deporte, Razonamientos léxicos y
Razonamientos discursivos, construcción de significados.
Abstract
To think concerning what are the reasons for which the university
students practice a physical or sports activity? It performs supreme
importance for the area of the Sciences Applied to the Sport and
the Physical Culture, since from the reasons that the youth express
it is possible to understand the role that the physical activity and the
sport have in their daily life.
From the cognitive and sociocultural linguistics, under a
methodological qualitative approach, by means skill of Semantic
Natural Network across a questionnaire there were obtained
discursive segments that allowed us to do a categorization of the
expressions and lexical associations to demonstrate the reasoning
that motivates the practice of the sport and other physical activities
of 89 young students from high school and higher education of
Colima’s University.
Among the principal findings we think that the motives gather
in crowds in five types of reasoning: intrinsic or immanent,
transcendent, of health in stricto sensu, symbolic and metaphorical,
32
De lo físico a lo simbólico: razonamientos léxicos y discursivos que tienen los jóvenes
universitarios para practicar el deporte en la Universidad de Colima, México.
allowing to warn the traffic of the motivations of the young people
not only from the aspects perceived as basic: health, well-being or
recreation but their reasons and motivations come out towards the
desire to obtain an ideal physicist, an aesthetic function as well as
feelings and aspirations provoked by the need to manage or take
care of an image before the others.
Keywords: Youth, Sport, Lexical and discursive reasonings,
Semantic construction in lexical and discourse context.
I. Introducción
Reflexionar acerca de los razonamientos o motivos que tienen los
jóvenes universitarios en Colima para practicar deporte y distintas
actividades físicas, es de suma importancia para el ámbito de las
Ciencias Aplicadas al Deporte y la Cultura Física, ya que de la
construcción de significados obtenidos a través de preguntas
orientadoras y licitaciones discursivas se realizó la categorización
de las expresiones y asociaciones léxicas para evidenciar cómo se
configura el razonamiento que motiva la práctica del deporte y
otras actividades físicas de 89 jóvenes del nivel medio superior y
superior de la Universidad de Colima. El presente trabajo busca
contribuir al conocimiento de la cultura física desde una perspectiva
interdisciplinaria donde convergen el estudio simbólico del
lenguaje y las ciencias aplicadas al deporte.
En la Universidad de Colima estudian 11, 889 jóvenes en el
nivel medio superior y 11,614 alumnos en el nivel superior, de
los cuales, el 100% debe inscribirse y cumplir con la materia de
Actividades Culturales y Deportivas; lo anterior, garantiza que, por
lo menos el 50% de la población estudiantil esté inscrita y practique
una actividad deportiva con miras a fortalecer y promover su
formación integral universitaria.
33
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
La Dirección General de Deportes1, informa que existen más
de treinta disciplinas deportivas como aeróbicos, gimnasia, tae
kwon do, karate do, fisicoculturismo, esgrima, handball, boliche,
tenis de mesa, voleibol playero, atletismo y grupos de animación,
fisicoculturismo, baile de alto impacto, baloncesto, futbol rápido,
futbol soccer, voleibol de sala, natación, búsqueda y rescate canino,
brigada universitaria de primeros auxilios, búsqueda y rescate
acuático, ajedrez, tochito, hockey, levantamiento de pesas, tenis,
aikido, nado sincronizado, tumbling, softbol femenil, béisbol y
polo acuático, lo que da un amplio abanico de posibilidades a los
alumnos y les permite que elijan la actividad que más les guste .
De lo anterior se desprende que, la política de formación
integral universitaria en la Universidad de Colima promueva,
desarrolle y fomente la práctica deportiva como una estrategia de
formación integral de los estudiantes; esto no sólo para cumplir
con un esquema curricular formal que incorpora la actividad física
como una asignatura obligatoria, sino como la posibilidad real que
tienen los universitarios para insertarse en el ámbito deportivo y
cultural actual.
En el contexto latinoamericano otros programas universitarios
y planes curriculares sobre todo en educación superior, han
incorporado a lo largo de su historia académica y políticas
universitarias, programas deportivos y asignaturas relacionadas
con la cultura física, recreativa y de prevención de la salud
integral universitaria como parte del curriculum real 2 que deben
cursar los estudiantes. Unas de manera obligatoria y otras con
un carácter meramente opcional. Así, podemos mencionar
algunas instituciones pioneras que han implementado la práctica
1. Ver en http://www.ucol.mx/deportes/
2. Hemos de aclarar que, por no ser el presente texto un estudio transversal sino simples resultados
de una investigación local y además, por cuestiones estrictamente de cobertura biliohemerográfica y
fuentes directas, no consideramos otras universidades caribeñas y europeas que incorporan en sus
planes y programas de estudio aspectos o contenidos curriculares relacionados con el deporte, la activación física, prácticas deportivas y entrenamientos tanto a nivel básico como de alto rendimiento.
34
De lo físico a lo simbólico: razonamientos léxicos y discursivos que tienen los jóvenes
universitarios para practicar el deporte en la Universidad de Colima, México.
deportiva como obligatoria o bien con una carácter meramente
opcional como la Universidad Nacional Autónoma de México, la
Universidad Autónoma de Campeche, la Universidad de Colima,
la Universidad Veracruzana, la Universidad Iberoamericana, etc.
Como se puede apreciar en la idea anterior, es sumamente
importante considerar el contexto general en que se desarrollan
las prácticas académico-deportivas en la Universidad de Colima,
toda vez que su comprensión global depende también de
aspectos situacionales y locales que componen un paisaje general
de la vida universitaria donde se ven implícitos el deporte y las
prácticas físicas universitarias. Estos aspectos componen según la
noción de Eric Bredo (1994) lo que se denomina como paisaje
lingüístico en interacción. Este concepto fue introducido para
explicar cómo es que la conceptualización y expresión de las ideas
en los actos comunicativos y los estrictamente enunciativos, no
sólo están influidos o determinados por el conocimiento formal
de la lengua, sino por elementos socioculturales y patrones de
comportamiento social, cognitivo, pragmático, funcional donde
convergen e interactúan un grupo particular de individuos; en este
caso se aplicaron los elementos de la noción anterior al contexto
situacional de los jóvenes universitarios en Colima.
En ese sentido, las prácticas sociales de la lengua se manifiestan
en la convivencia cotidiana, el habitus académico, el espacio
compartido y las formulaciones lingüísticas formales en sentido
estricto en que participan los estudiantes universitarios. Resulta
imprescindible pues analizar cómo es que ellos mismos enuncian
las razones por las que practican deporte o una actividad física en lo
particular y desde esta perspectiva de reflexión analítica la lingüística
cognitiva y sociocultural nos proporcionan generosamente marcos
analíticos e interpretativos que desde el ejercicio lingüístico
explican los componentes de significación directa y extendida
que motivan a los jóvenes universitarios a las prácticas deportivas.
A continuación y con el ánimo de ejemplificar la pertinencia de
35
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
estas aproximaciones teóricas se plantea la pregunta que motivó
parte de la presente investigación: ¿Cuáles son los motivos por los
que los estudiantes universitarios practican una actividad física o
deportiva?
… y aunque la respuesta no es tan sencilla, sí es asequible
su comprensión global como significado proferido a partir de
unidades léxicas verbalizadas desde la noción de paisaje lingüístico
interactivo; se trata pues de dar a conocer la geografía verbal que
motiva y condicionan la vida académico-deportiva influenciada
por el medio, la percepción de sí mismos como jóvenes, la moda,
la apariencia corporal, la noción de cuerpo, el espacio y tiempo
de interacción de los estudiantes como sujetos con pertenencia
e identidad universitaria, etc. Además, como se evidenciará más
adelante, el texto aborda de manera central la geografía verbal
implícita en la noción de paisaje lingüístico (estrictamente léxica
para efectos de este trabajo) y donde el referente lingüístico cuerpo
humano forma parte constante de las distintas conceptualizaciones
que mueven a los jóvenes a las prácticas físicas. Lo anterior significa
que lo corporal es un proceso que se construye en un espacio y un
tiempo: el medio y la cultura establecen una manera de construirlo
socialmente y esto se manifiesta de maneras diversas en los cuerpos
de los sujetos, es decir, se construye desde la posibilidad de elección
y también desde la ignorancia impuesta por factores externos como
la ignorancia, descuido, modas, patrones equívocos, trastornos y
percepciones erróneas de lo que en realidad es la salud vista como
equilibrio entre lo físico, emocional y social (cfr. López, 2006: 8).
1.1. El enfoque desde la lingüística sociocultural
Para situarnos en una propuesta teórico-interpretativa y así poder
entender cómo es que las interacciones lingüísticas cotidianas
llegan a configurar significados sociales compartidos y verbalizados
por los estudiantes como parte de su identidad universitaria,
hemos considerado hacerlo desde la lingüística sociocultural,
36
De lo físico a lo simbólico: razonamientos léxicos y discursivos que tienen los jóvenes
universitarios para practicar el deporte en la Universidad de Colima, México.
con Mary Bucholtz y Kira Hall y definimos identidad como “el
posicionamiento social de sí mismo y del otro” (2005: 586).
Para efectos de proveer de un marco interpretativo adhoc
se recurre a la lingüística sociocultural, disciplina que engloba
subcampos disciplinarios diversos como la sociolingüística, la
antropología lingüística, el análisis conversacional, el análisis crítico
del discurso y la psicología social con enfoque lingüístico (Bucholtz
y Hall 2005: 586). Y que al ser considerado como un amplio
campo interdisciplinario interesado en la intersección entre lengua,
cultura y sociedad” nos sirve para analizar el posicionamiento
de sí mismo y del otro en trabajos como el presente donde los
razonamientos léxicos a partir de unidades mínimas de palabras
(consideradas como lexemas con carga semántica y representativa)
aluden a la percepción y representación cultural de los individuos
en un contexto determinado; por lo que la carga cognitiva de
una persona, en este caso, los jóvenes, representa la realidad
individual que sumada con la de otros jóvenes unidos o enlazados
por interacciones socioculturales afines, reflejan un paisaje de la
realidad colectiva y cuyo proceso de manifestación es el lenguaje.
Nos enfrentamos así, a una pregunta crucial desde la propuesta
de (Bucholtz y Hall 2005) “¿Cómo puede iluminar el estudio
empírico de la lengua los procesos sociales y culturales de los
jóvenes a partir de sus razonamientos?” Para el caso particular, el
enfoque sociocultural de la lingüística, nos ayuda a comprender y
a explicar mejor cómo los vínculos interactivos compartidos como
la convivencia en contextos afines, las actividades escolares, gustos
y aspiraciones compartidas, edad y otros segmentos de identidades
censales convergen en la percepción simbólica que tienen los
jóvenes universitarios.
1.2. El lenguaje como constructor de significados
Retomando lo anterior y desde la postura de la semántica social, la
lengua está influida por una serie de actos o condiciones reales que
37
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
permiten analizarla no sólo como signo lingüístico sino como un
referente completo (pragmático, semántico, sintáctico, fonológico,
etc.) es decir, tiene un valor cognitivo, social pero sobre todo,
permite la posibilidad de cumplir con una intención simbólica.
Así, podemos no sólo cifrar y descifrar un código (lengua) en un
acto comunicativo sino que también podemos ir más allá del mero
ejercicio lingüístico formal-enunciativo: podemos descubrir en
él, el valor de las palabras, las intenciones, funciones y reflexión
metalingüística que todos, sin excepción, involucramos en el habla
habitual (cfr. François, 2005: 14).
Definir el significado social que subyace de las prácticas
socioculturales de la lengua en el ámbito universitario, implica
hablar en primer lugar de cómo se construye, para ello es necesario
señalar que es el lenguaje, el que permite la estructuración del
habla y es a través de ella que hacemos referencia a las imágenes
y conceptos que se generan en nuestra mente. El vínculo entre
lenguaje y pensamiento, posibilita entender la capacidad del
primero de representar al segundo; a la vez de reconocer los
límites de tal caracterización. Aunque, como bien distingue
Michel Foucault:
“representar no quiere decir aquí traducir, proporcionar
una versión visible, fabricar un doble material que sea
capaz de reproducir, sobre la vertiente externa del
cuerpo el pensamiento en toda su exactitud: el lenguaje
representa el pensamiento, como éste se representa a
sí mismo (...) Así pues, las palabras no forman la más
mínima película que duplique el pensamiento, (...) lo
recuerdan, lo indican, pero siempre desde el interior,
entre todas esas representaciones que representan
otras” (1998: 83).
38
De lo físico a lo simbólico: razonamientos léxicos y discursivos que tienen los jóvenes
universitarios para practicar el deporte en la Universidad de Colima, México.
Para referir el pensamiento y la realidad, el individuo necesita
códigos y normas comunes a la colectividad con la que quiere
comunicarse. Es ahí donde entra el lenguaje como una
manifestación intrínseca y generalizada como práctica cultural en
contextos específicos, para nuestro caso, la universidad.
Para el caso del cuerpo como referente central de la
verbalización en el habla cotidiana de los jóvenes universitarios
resulta importante, en virtud de los resultados que se presentan,
entender la enorme influencia que tiene la percepción del cuerpo
en sí. El cuerpo según López Ramos (2006) ha tenido lecturas
diversas desde lo biológico y lo cultural; una de las tendencias
dominantes fue lo biológico, pues permeó en el siglo XIX, y no es
hasta el periodo comprendido entre 1895-1905 que se habla de la
categoría de cultura, esto significa pues que la célula cambia, no es
únicamente biológica, tiene una relación estrecha con la cultura,
veamos la siguiente explicación:
… [L]a condición del cuerpo como cultura se convierte
en una representación simbólica, una categoría que
forma y estructura una gran telaraña, como dice Clifford
Greef, y le da sentido a los símbolos y significados
de una geografía, de un tiempo y espacio. En esa
lógica parece que la exaltación de la cultura irrumpe
en el plano simbólico y le da sentido a símbolos y se
construye en el ícono, en la representación para hablar
de la cultura, entonces, la cultura pareciera ser que no
tiene un punto referente donde se materializa, como
un símbolo… [L]o que se pondera es la significación
y la representación de los grupos sociales, de ahí las
discusiones del género: de lo masculino-femenino, las
discusiones de que si son niños o adolescentes, son
mujeres o son ancianas, varones u hombres añosos….
(cfr. López, 2006:13).
39
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Cuando leemos y logramos entender lo anterior, podemos
comprender entonces que, el lenguaje como manifestación
compleja de la cognición social humana, cumple la función de
materializar la concepción del cuerpo como vehículo o motor de
las prácticas físicas, es decir, en la conceptualización del – porqué
- o bien –para qué - realizan deportes los jóvenes universitarios, el
cuerpo ocupa el núcleo o posición central de los razonamientos
léxicos y discursivos en el proceso de verbalización. Entonces para
nuestro caso el cuerpo y sus motivaciones para practicar deporte o
actividad física requieren una explicación no únicamente biológica
sino simbólica, extendida e incluso metafórica.
La noción de cuerpo en la verbalización es entonces un proceso
histórico-social atravesado por las prácticas socioculturales y
además, tiene símbolos y significados que se construyen en
contextos específicos.
1.3. Lo simbólico, lo extendido y lo metafórico de los
razonamientos léxicos.
Como señalamos antes, los razonamientos léxico-discursivos no
sólo están permeados por construcciones denotativas, literales
o directas sino que subyacen a ello lo simbólico el significado
extendido y el metafórico. Para poder entender los resultados que
aquí presentamos, explicamos a continuación cómo se da esta
amalgama de conceptos y cómo es que los hemos estudiado desde
una subcategorización de tipos semánticos (De Shazer, 1999), para
ello esbozamos lo siguiente:
a) Lo simbólico del lenguaje. Esta concepción radica en
mostrar que la lengua no sólo es literal o bien que existe símbolo
en el lenguaje más allá de lo que representa literalmente [Deporte
como mera práctica física] Vs. [Deporte como actividad que
se realiza para lograr el cansancio del cuerpo y la relajación
40
De lo físico a lo simbólico: razonamientos léxicos y discursivos que tienen los jóvenes
universitarios para practicar el deporte en la Universidad de Colima, México.
de la mente]. La primera acepción es una conceptualización
a modo de entrada básica dada. Mientras que la segunda
rompe el esquema normativo gramatical y discursiva; no es
prescriptiva sino que resulta de la noción cognitiva de la propia
experiencia humana que se tiene y comparte simbólicamente
por los hablantes que la han experimentado ya sea directa o
indirectamente. De este modo el lenguaje es la objetivación de
los procesos y significados construyen el mundo intersubjetivo
del sentido común de cada sujeto, lo que implica un análisis
fenomenológico de la experiencia subjetiva de la vida cotidiana
y sus implicaciones con el entorno donde recobran espacio y
sentido el cuerpo, la educación física y el deporte. El sentido
común implica innumerables interpretaciones sobre la realidad
cotidiana a la que da por presupuesta (Arellano, Pérez y
Serratos, 2010).
b) El significado extendido. Estos son significados dados a
partir de las conceptualizaciones subyacentes y sirven poder
formular relaciones de significados no directos sino más bien
extendidos y que son válidos como referentes lingüísticos
compartidos por los usuarios de una lengua. Entre los distintos
modos de producción del discurso, podemos considerar al
discurso oral como uno de los más efectivos en términos de
simplicidad y rapidez. Desde el momento en que adquirimos
las primeras nociones avanzadas del lenguaje, hasta que nos
convertimos en emisores del discurso a plenitud, nos valemos
mayormente de la oralidad para la expresión de ideas.
Los significados extendidos ayudan a conocer los temas de un
discurso determinado. Son el significado global que los usuarios de
una lengua establecen mediante la producción y la comprensión de
discursos, y representan la «esencia» de lo que más especialmente
sugieren. Los usuarios de una lengua no son capaces de memorizar
41
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
y manejar todos los detalles del significado de un discurso, y por
lo tanto, organizan mentalmente estos significados mediante
significados o temas globales. [...] Definidos como significados
globales, los temas no pueden ser observados directamente como
tales, sino que han de ser inferidos del discurso, o asignados a
él con un sustento crítico (Pérez Barajas, 2010: 5). Obsérvense
los dos siguientes fragmentos discursivos donde se responde a la
pregunta que nos ocupa en este trabajo.
Fragmento discursivo No. 1
[L]a verdad yo hago deporte porque además de
divertirme cuando hago ejercicio, me gusta mucho
y bueno, también por mantenerme activo porque
también así voy a tener buena salud (Varón, 27 años,
estudiante de psicología).
En este ejemplo se puede evidenciar que el tema o significado
global del discurso es principalmente la práctica del deporte por
Salud, sin embargo ésta se encuentra subordinada a tres significados
extendidos que son el goce o disfrute, el movimiento y la actividad
corporal en sí misma.
Fragmento discursivo No. 2
… [P]orque te hace sentir bien físicamente y
mentalmente, además es saludable porque me permite
relacionarme con otras personas y entablar amistades
así como mejorar mi aspecto físico.
En este segundo ejemplo se aprecia como el tema global es el
conjunto de posibilidades que representa practicar deporte,
y aunque no lo dice expresa o literalmente, se infiere como un
significado emergente sustentado en los razonamientos léxicosemánticos. Así, hay dos grandes beneficios, el primero es
42
De lo físico a lo simbólico: razonamientos léxicos y discursivos que tienen los jóvenes
universitarios para practicar el deporte en la Universidad de Colima, México.
personal porque “hace sentirse bien física y mentalmente”, el
segundo es sociocultural porque permite la interacción, propicia
generar nuevas amistades y cambia la imagen propia, “me permite
relacionarme” “entablar amistades” y “mejorar mi aspecto físico”.
c) El significado metafórico. Retomando la postura
sociocultural de este trabajo, se puede quizás entender mejor
lo propuesto por Sperber y Wilson (1994), en el que se da
cuenta de cómo es que se producen los procesos de inferencia
en un acontecimiento lingüístico, el desarrollo y la capacidad
para relacionar y producir figuras retóricas (metáforas), entre
otros elementos lingüísticos presentes en el discurso como
muestra de enunciaciones que interpretan el pensamiento de
los hablantes.
En este sentido, la producción y análisis del discurso desde
la perspectiva sociocultural, tiene como cometido establecer
relaciones que sustenten y expliquen el soporte del discurso a partir
de la recurrencia metafórica y así, entender su uso como síntesis
de un esquema o idea compartida materializada por la capacidad
humana para identificar y relacionar elementos comunes (Cfr.
Pérez, 2010: 7). Así, se puede responder a la pregunta ¿Qué
se entiende por dimensión conceptual de la metáfora? En un
discurso tan motivado por temas de la experiencia y cognición
compartida como éxito y fracaso, se pude responder que se trata
de “… [E]l conjunto de estructuras metafóricas que poseemos por
experiencias compartidas y que a partir de los cuales, la mayoría
de los conceptos se entienden parcialmente en términos de otros
conceptos” Lakoff y Johnson, 1980: 96). El sistema conceptual
adquiere entonces su dimensión en el discurso, a partir de la
interacción constante con el mundo y personas que nos rodean. Se
trata de referentes conceptuales básicos y fundamentales. Véase el
43
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
siguiente ejemplo donde la metáfora aparece entre comillas << >>
y al final de cada segmento discursivo se particulariza el enunciante
con la siguiente nomenclatura separados de manera intermedia
por un guión corto V= varón; M= mujer; S= educación superior;
MS= educación media superior.
Fragmentos discursivos, grupo único:
El cuerpo y el alma <bien ejercitados> crean una mejor persona (V-S)
Porque <liberas> el estrés y < mantienes en forma> el cuerpo y la mente (V-S)
<Es una fuente> de energía para lograr lo que quieres (M-MS)
Porque con el deporte <el cuerpo está siempre girito> y más< trucha> (M-S)
Porque el deporte <es un motor> para estar mejor siempre (V- MS)
Porque te liberas y tu cuerpo <trabaja> al máximo (M-S)
Lo antes expuesto ayuda a entender que, el análisis semántico
cognitivo de las metáforas en contextos discursivos particulares se
basa y cobra riqueza en la importancia cultural de los símbolos
lingüísticos para crear y mantener significados compartidos. La
importancia de esta postura radica en la concepción de que los
jóvenes, como actores sociales, ordenan sus experiencias por
medio de referencias simbólicas que no se limitan al uso lingüístico
y pueden incluir eventos y experiencias tanto individuales como
compartidas sin requerir de un saber sofisticado. Tal como lo
señala Spradley (1979) se trata de la comprensión de tareas
diferentes pero identificadas por quienes las emplean. Por
ejemplo por anciano se hace referencia como símbolo lingüístico
al varón o mujer que ha cumplido una determinada edad y que
ante todos posee características físicas y mentales específicas y
bien identificadas por los quienes lo refieren, pero a la par o de
modo subyacente, existen denominaciones que son asociadas con
elementos o características de otros referentes pero que como
símbolos o códigos simbólicos se dan por sentados y entendidos
dentro de un determinado contexto cultural ya que llevan implícita
44
De lo físico a lo simbólico: razonamientos léxicos y discursivos que tienen los jóvenes
universitarios para practicar el deporte en la Universidad de Colima, México.
una concepción compartida: anciano es igual a persona de avanzada
edad, alguien entrado en edad, un hombre o mujer en el invierno
de su vida, un sujeto en el ocaso de la vida, etc.
II. Metodología
El estudio se realizó desde un enfoque mixto: cuantitativo y
cualitativo a través de la técnica de redes semánticas naturales, por
medio de un cuestionario en el que también se incluyeron dos
preguntas orientadoras que buscaron indagar sobre la percepción
que los jóvenes de nivel medio superior y superior de la Universidad
de Colima tienen respecto a educación física, cuerpo y deporte.
Es importante aclarar que para este artículo, la evidencia
empírica a la que hacemos referencia y que analizamos e
interpretamos corresponde sólo a las preguntas orientadoras, que
en su conjunto permiten responder a ¿Cuáles son los motivos por
los que los estudiantes universitarios practican una actividad física
o deportiva? son las respuestas a dichas preguntas a las que nos
referimos como expresiones, asociaciones léxicas y segmentos
discursivos.
Los orígenes de la técnica de Redes Semánticas Naturales se
encuentran entre el diálogo de tres disciplinas: la psicología, la
inteligencia artificial y la pedagogía. Valdez (2005) utiliza las RSN
para el estudio del significado de manera natural, pues obtiene
los significados de los sujetos directamente, evitando el uso de
taxonomías artificiales, creadas por el investigador para explicar la
organización de la información a nivel de memoria semántica. Para
operacionalizar la técnica se debe definir con la mayor precisión
el concepto estímulo (entendiendo a éste como la palabra clave
que detona la emisión de significados), posteriormente se pide a
los sujetos que asocien cinco términos y en seguida se solicita que
jerarquicen las palabras que dieron como definidoras, otorgándoles
1 a la palabra más relacionada con el concepto estímulo, 2 a la que
sigue y así sucesivamente.
45
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
El primer paso para operacionalizar la técnica consistió en pensar
a través de qué palabras o frase estímulo se diseñará el instrumento,
pues educación física, deporte y cuerpo, son categorías teóricas a
las que, coloquialmente nos referimos con otras palabras, por lo
que construimos tres planteamientos:
1) Menciona cinco cosas (aspectos, situaciones) que relaciones con
educación física,
2) Menciona cinco términos o palabras que asocies con deporte y,
3) Menciona cinco aspectos, situaciones, palabras o expresiones
que vincules o relaciones con cuerpo.
Por otro lado, se pensó en dos preguntas orientadoras que nos
permitieran indagar sobre la percepción que los jóvenes de nivel
medio superior y superior tienen respecto a la influencia del
deporte y la actividad física en la vida cotidiana y de qué manera se
relaciona el cuerpo con el deporte (ver imagen 1).
Una vez que se tenían los planteamientos para operacionalizar
las tres categorías que nos interesaban, procedimos al diseño del
instrumento.
46
De lo físico a lo simbólico: razonamientos léxicos y discursivos que tienen los jóvenes
universitarios para practicar el deporte en la Universidad de Colima, México.
Imagen 1. Ejemplo del cuestionario.
47
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
En el diseño del instrumento es importante considerar un
apartado para recuperar algunos datos que permitan construir
un perfil del grupo social que estamos estudiando, así mismo, es
importante dejar visibles y claras las instrucciones para responder
las RSN.
La aplicación del instrumento se hizo los días 12 y 13 de marzo
de 2010 con estudiantes de bachillerato y de licenciatura de la
Universidad de Colima. El cuestionario se aplicó a 89 jóvenes
entre 16 y 23 años de edad.
La aplicación fue personal. El tiempo promedio de la aplicación
fue de 15 minutos por estudiante. El tipo de muestreo fue no
probabilístico, por conveniencia.
En todo proceso de investigación es importante la organización
de la información obtenida mediante el uso de una técnica
particular; en este caso, a través de las RSN. Para sistematizar la
información se diseñó una base de datos en Excel, la cual se dividió
en tres secciones, en la primera se capturaron los datos generales
del joven, en la segunda las palabras asociadas con cada pregunta
estímulo y en la tercera, las respuestas a las preguntas orientadoras.
Una vez que se diseñó la base de datos en Excel® se procedió a
la captura de todos los cuestionarios. Ya hecho el vaciado de toda
la información, se hizo una copia de la base de datos, para dejar
una sin ninguna alteración y la otra para continuar con el análisis
de la información.
El análisis consintió en un ejercicio de categorización de los
razonamientos léxicos y discursivos que los jóvenes universitarios
expresaron como respuesta a las preguntas orientadoras. La
categorización se realizó de acuerdo a cinco tipos de razonamientos:
intrínsecos o inmanentes, trascendentes, de salud en stricto sensu,
simbólicos y metafóricos.
48
De lo físico a lo simbólico: razonamientos léxicos y discursivos que tienen los jóvenes
universitarios para practicar el deporte en la Universidad de Colima, México.
3. Resultados: razonamientos léxicos y discursivos
que tienen los jóvenes universitarios para practicar el
deporte en la Universidad de Colima, México.
3.1. Razonamientos intrínsecos o inmanentes
Estas expresiones constituyen un ejemplo de enunciación directa
según lo señala Medina y Cielo (2008: 64) en tanto que el beneficio
o finalidad que persigue una persona es para el mismo individuo
que las realiza (comer, practicar deporte, realizar actividades físicas
o intelectuales, dormir, etc.) y además el último beneficio es propio;
es decir, inmanente y sobre ellas se puede trazar metas o logros
plausibles que cobran un afán o intención que logra proyectar
estados de bienestar significativos para quien las emprende (ver los
siguientes ejemplos).
1a. Porque te diviertes.
1b. Porque me aliviana y me siento ligerita para andar todo el día
con energía.
1c. Porque te ayuda a que desarrolles tus sentidos y otras cosas.
1d. Porque te entretienes mucho.
1e. Porque es mi terapia diaria.
Si reflexionamos un poco sobre este tipo de expresiones a partir de
la formulación de unidades léxicas encadenadas, podemos advertir
que, después de la explicación o nexo causal porque que subordina
la oración, encontramos principalmente verbos que establecen la
noción de ayuda hacia la persona que los profiere en relación a
una actividad (en este caso el deporte). También es importante
considerar que al respecto Len Talmy (1998) esclareció la noción
de espacio que se encuentra en el lenguaje, también ha aclarado la
noción de motivante o aliciente a través de los verbos que implican
idea o denotan causalidad (en 1a. divertir, 1b. alivianar como verbo
49
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
modal y en 1c. ayudar a desarrollar en su perífrasis verbal y en 1d.
entretener más el empleo del clítico se como dativo de afectación).
Desde esta apreciación es importante valorar no sólo la
función denotativa en el empleo de la lengua, sino que, resulta
imprescindible valorar la carga connotativa que poseen ciertos
verbos de acción que ayudan tanto sintáctica como semánticamente
a comprender que el deporte como una actividad física coparticipa
en una tarea común en los jóvenes: obtener beneficios hacia sí
de manera directa (ver el caso de 1a ,1b y 1c) e indirectamente,
colabora en la consecución de estados producidos con fines
recreativos y ocupacionales. También inmanentes o personales
(ver el caso de 1d y 1e).
3.2. Razonamientos trascendentes
Son todas aquellas acciones, motivos o intenciones que los individuos
tienen para realizar actividades o acciones encaminadas a lograr un
beneficio propio y que al final, además de beneficiar explícitamente
a sujeto que las emprende, llegar a impactar, beneficiar o a ser
advertidas y valoradas por otros individuos con los que se tiene
contacto o interacción. Este tipo de acciones conllevan según lo
establece Medina y Cielo (2008) a una trascendencia motivada por
la necesidad de reconocimiento, aceptación, seguimiento de roles
o patrones y de las propias necesidades y aspiraciones del sujeto
que las entabla y que a su vez buscan satisfacer una necesidad de
carácter social y/o cultural (ver los siguientes ejemplos)
2a. Te pone delgado y tienes energía para hacer las cosas incluso
bien y los demás lo notan.
2b. Para estar bien contigo y con los demás.
2c. Porque en mi trabajo es necesario como futura profesora de
educación física.
2d. Porque si trabajo como profesora de deporte debo tener buena
apariencia y me crean lo que hago.
50
De lo físico a lo simbólico: razonamientos léxicos y discursivos que tienen los jóvenes
universitarios para practicar el deporte en la Universidad de Colima, México.
2e. Me siento menos tensa y menos estresada .por lo que hago a
diario en mi trabajo para la gente.
2f. Porque gozas de mejor apariencia y cuando estás saludable la
demás gente también te lo nota.
2g. Te hace sentir mejor como persona y verte bien ante los demás.
2h. Porque te beneficia en todos los aspectos tanto familiares como
personales.
Si analizamos minuciosamente las anteriores expresiones a nivel
nuclear (modificadores del sujeto implícito y de la predicación en
general) podremos advertir que en la unidad léxica demás como
complemento indirecto o complemento agente, presenta una
equivalencia semántica que denomina o hace referencia a “otras
personas” con las cuales se tiene una interacción específica por
razones de trabajo, estudio, redes y por supuesto ante las cuales
es necesario proyectar cierta imagen para poder ser incluidos o
en su defecto, excluidos (ver caso de 2a, 2b, 2d y 2f). En las otras
formas léxico-discursivas presentes en los distintos segmentos de
respuesta, la noción de apreciación está delegada a la percepción
que tienen “los demás” de los jóvenes por la proyección estética o
funcional del cuerpo (ver caso de 2c, 2e,).
3.3. Razonamientos de salud en stricto sensu
Este tipo de acciones encuentran su motivación en la percepción
que los sujetos tienen única y exclusivamente por lo que consideran
parte del bienestar corporal o cuyo fundamento es considerado por
la mayoría de los miembros de un grupo o colectivo social como
el grado optimo de bienestar que clínicamente es considerado
como ideal por los expertos en el área médica. Lo anterior, en
función a que el ser humano como un organismo vivo cumple
determinadas funciones físicas, psicológicas y espirituales en un
momento y espacio determinados. Además, se incluyen todas
aquellas intenciones, aspiraciones o motivos que conllevan
51
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
acciones relacionados con aspectos socioafectivas (Cfr. Medina y
Cielo, 2008: 21-22).
3a. Porque te ayuda tanto físicamente como moralmente.
3b. Porque mantienes condición física, buena circulación sistémica,
bienestar mental.
3c. Porque al sudar eliminas toxinas, mejoras tu circulación y
ejercitas tus músculos.
3d. Porque incrementa la masa muscular además de que te brinda
salud y una mejor calidad de vida.
3e. Por la liberación de endorfinas que hacen que tengamos la
sensación de bienestar.
3f. Te ayuda a mantenerte sano teniendo los beneficios que el
ejercicio te brinda físicamente.
3g. Porque al hacer deporte disminuyen tus niveles de grasa y por
lo tanto tendrás un mejor aspecto.
3h.Subimos autoestima, adquirimos figura estética parcialmente
deseada.
3i. Primeramente mantiene nuestro organismo en un buen
funcionamiento para prevenir enfermedades además de que
nos mantiene en buena condición física y mental.
3j. Porque me ayuda a liberar el estrés y me da un estado de
bienestar.
3k. Te hace liberar endorfinas por lo tanto te sientes feliz. Ayuda a
tener una buena homeostásis.
3l. Porque te despeja y hace que funcione todo tu cuerpo, te
oxigena y hace que te sientas mejor ayuda también a tu aspecto.
3m. Porque te ayuda a regular todas las partes para que el cuerpo
trabaje correctamente.
3n. Porque te sientes más saludable y activo.
3ñ. Es bueno para la salud y para el estado de ánimo.
3o. Es importante para la salud.
3p. Porque activa tu cuerpo tus músculos y hay una glándula que
52
De lo físico a lo simbólico: razonamientos léxicos y discursivos que tienen los jóvenes
universitarios para practicar el deporte en la Universidad de Colima, México.
libera alegría.
3q. Porque me ayuda a mejorar mi salud y a mí misma.
3r. Porque con ello tenemos una actividad física y sirve para la
salud además de que te ayuda a no tener enfermedades.
3s. Porque me gusta hacer ejercicio porque me desestresa.
3t. Eliminas toxinas y te ayuda a que tu cuerpo esté bien así como
todo tu organismo.
3u. Porque te ejercitas y te sientes bien contigo mismo.
3v. Porque te ayuda a estar en forma y a que tengas salud.
3w. Me siento con más energía.
3x. Es sano y te ayuda a poner tu cuerpo en forma.
3y. Nos hace bajar de peso, nos ayuda a ser más fuertes.
3z. Hago que mi cuerpo y mis músculos trabajen y así tener mejor
condición física.
Aquí se puede apreciar que la mayoría de las asociaciones léxicas
están dadas a partir del conocimiento formal e informal que tienen
los jóvenes de la fisiología corporal. La mayoría de las expresiones
hacen referencia a la noción fisiológica como un elemento; así, el
deporte se vuelve un instrumento y el cuerpo un mismo agente
y los beneficios, consecuencias o resultados como efectos, son
pacientes (Crf. Roles y Papeles temáticos de Fillmore, 1989). La
función sintáctica que juega el deporte como un instrumento que
afecta el cuerpo de quien lo practica se vuelve un claro ejemplo
de cómo las etiquetas abstractas utilizadas para dar cuenta de la
relación entre predicados y sus complementos componen la noción
temática. Aquí, el deporte como los beneficios explícitos (la buena
circulación, ejercitar los músculos, mejorar la apariencia física,
la imagen corpórea, la salud emocional y psicológica, la fuerza
liberación del estrés, liberación de endorfinas, disminución de la
grasa y la noción de prevención) además de mostrar la relación
directa con las funciones sintácticas que encontramos en cada uno
de los distintos segmentos discursivos.
53
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Además, los contenidos metafóricos contenidos en algunos
ejemplos, aunque serán explicados infra líneas, acompañan la carga
conceptual de las estructuras superficiales en las oraciones (ver los
casos de 3h, 3k y 3z). Como se puede ver, las principales razones
por las que los jóvenes universitarios practican algún deporte son
estrictamente por salud, sin embargo no podemos ignorar los
elementos que acompañan y complementan esta conceptualización.
Por ejemplo, que sus predicaciones forman parte de motivaciones
y razonamientos que evidencian a la misma salud ya sea física o
psicológica relegada en un segundo plano conceptual, por lo
menos, desde la estructura semántica léxico-conceptual (ELC)
y no como parte de la sintaxis. Los sujetos involucrados en las
conceptualizaciones justifican realizar las prácticas deportivas
subordinándolas a efectos tanto físicos, sociales y culturales (Ver
efectos de subordinación y papeles temáticos en los casos de 3g,
3h, 3i, 3m, 3s, 3y).
3.4. Razonamientos Simbólicos
También llamadas como necesidades integrativas, desde la
antropología cultural, establecen que las intenciones o aspiraciones
que persiguen los individuos con determinadas acciones o
empresas, están condicionadas en gran medida por un conjunto
de intenciones profundas que van más allá de lo biológico o
estrictamente físico; se descuida al individuo o por lo menos las
razones biológicas y funcionales pasan a un segundo o tercer plano
para dar lugar a lo representativo a través de esquemas simbólicos,
estereotipos o influencias del medio ambiente sociocultural
vigentes. En este sentido la realidad biológica debe ser considerada
al lado de las necesidades corporales representacionales e incluir
en su análisis nociones emocionales e intelectuales de los procesos
que experimentan las personas en su devenir histórico (Harris,
2008: 477).
54
De lo físico a lo simbólico: razonamientos léxicos y discursivos que tienen los jóvenes
universitarios para practicar el deporte en la Universidad de Colima, México.
4a. Porque soy gorda y me gustaría ser delgada.
4b. Porque es una actividad recreativa y ayuda a sentirse bien
físicamente.
4c. Me da confianza y seguridad en mí mismo.
4d. Nos proporciona salud y bienestar físico, mental, etc.
4e. Porque mejora mi apariencia y contrarresta efectos nocivos de
la edad, ambiente, etc.
4f. Te hace sentir bien físicamente y mentalmente, además es
saludable.
4g. Porque me permite relacionarme con otras personas y entablar
amistades así como mejorar mi aspecto físico y salud física y
mental.
4h. Porque realizar deporte puede ayudar al cuerpo a verse bien
estéticamente y también te hace sentir bien por la adrenalina.
4i. Porque algunos no tenemos el físico que los demás quieren y
eso me entristece.
4j. Porque mejora tu apariencia que por lo tanto te hace sentir
bien.
4k. Me gusta mantenerme bien para ser atractivo a los demás y
gustarles.
4l. Porque traen seguridad y satisfacción.
4m. Porque estimula la mente y el cuerpo y obtienes satisfacción.
4n. Porque te ayuda a sentirte bien contigo mismo.
4ñ. Tienes condición física, verte bonita, tener fuerzas, cuidar tu
cuerpo, etc.
4o. Porque me mantiene en forma siempre.
4p. Estamos seguros con nosotros mismos.
4q. Porque te ves como te sientes.
4r. Te da más seguridad, salud y felicidad porque te sientes bien
contigo misma.
4s. Te ayuda a mantener un peso ideal y adquieres una personalidad
diferente.
55
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Aquí, desde el punto de vista de la semántica conceptual
sociocultural, se evidencia y sostiene a través de las expresiones
léxicas y razonamientos el papel o función simbólica de la
lengua. Esto debido a que la precisión del sentido pragmático
de los términos léxicos presume la noción, meta, aspiración,
conocimientos, deseo e intención que se tiene al momento de
emplearlos. Las palabras según lo dice Steven Pinker (2008:
209) son representadas mentalmente como expresiones de una
lenguaje más rico y más abstracto (simbolizante) a veces imprecisos
literalmente pero ricos pragmática y representacionalmente del
mundo y la experiencia humana.
El deporte entonces se practica porque ayuda a representar
iconicidad a través de la imagen corporal, cambia o provoca
sentimientos, deseos y aspiraciones; se convierte en un ideal,
genera satisfacción y es también una evidencia de bienestar ante
los demás (ver casos específicos de 4a, 4c, 4g, 4i, 4j, 4k, 4l, 4ñ y 4s).
3.5. Metáforas
Respecto a los significados metafóricos en la verbalización de las
razones o motivos que se tienen para practicar deporte o actividades
físicas, éstos encuentran su sustento lingüístico-discursivo tal como
lo señalan Bucholtz y Hall (2005), el rasgo o aspecto sociocultural
de la lengua “[S]e construye por medio de una variedad de
mecanismos semánticos y retóricos, uno de los cuales es el uso
característico de la metáfora”, ésta última trasciende como parte
de la imaginería como imágenes útiles de pensar e interpretar los
discursos de los estudiantes universitarios.
Una oración metafórica como la siguiente “Hacer ejercicio
me hace sentir arriba” reduce dos términos a sus características
comunes, permitiendo la transferencia lingüística del uno al otro.
No hay que olvidar que también existen variaciones del tipo general
de metáforas que sirven para ampliar su uso y análisis (apud Lakoff
y Johonson, 1980; Lodge, 1977; Sapir, 1977).
56
De lo físico a lo simbólico: razonamientos léxicos y discursivos que tienen los jóvenes
universitarios para practicar el deporte en la Universidad de Colima, México.
Para el propósito del análisis cualitativo en el presente artículo
se debe considerar la metáfora en su contexto más amplio, es
decir, en sus significados extendidos en los fragmentos discursivos
que se presentan ad hoc. En el análisis de los datos tomados de
interacciones lingüísticas, se puede ocupar, no sólo de cómo se
estructuran las metáforas, sino también de las maneras de cómo se
usan y se comprenden. Lo anterior porque el empleo de las mismas
en el discurso cotidiano cobra importancia para ejemplificar o hacer
referencia a las relaciones personales, las costumbres, las formas
de vida, las cosas buenas o malas que acontecen a las personas (ver
los siguientes ejemplos)
5a. El cuerpo y el alma bien ejercitados crean una mejor persona.
5b. Porque liberas el estrés y mantienes en forma el cuerpo y la
mente.
5c. Es una fuente de energía para lograr lo que quieres.
5d. Porque con el deporte el cuerpo está siempre girito y más
trucha.
5e. Porque el deporte es un motor para estar mejor siempre.
5f. Porque te liberas y tu cuerpo trabaja al máximo
Muchas metáforas que sustentan los razonamientos de los jóvenes
universitarios como elemento lingüístico-discursivo, trasladan
estructuras explicativas de un dominio familiar de experiencias a
otro dominio ante la necesidad de su comprensión o explicación.
(Klaus Krippendorff, 1997: 110), las prácticas deportivas en este
sentido se convierten en la materialización de la cognición y
humana. Los jóvenes universitarios enunciantes trasladan dominios
y emplean términos o palabras en función de otras. A veces, esa
similitud o parecido reside en el uso de las palabras como el de
las experiencias conceptualizadas por ellas. Se puede entonces
hablar de una especie de enlaces de dominios en el discurso pero
significando en cada uno situaciones completamente diferentes.
57
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Entonces el empleo de la metáfora en el habla común de
los estudiantes universitarios conlleva implicaciones (Lakoff y
Johnson, 1980) para el dominio de aplicación ya que, organizan
estructuras discursivas subyacentes ajustando rasgos seleccionados
en un patrón de similitud. Los ejemplos anteriores presentan la
interacción humana relacionada con el deporte y sus motivos para
practicarlo; asimismo, las metáforas en los distintos segmentos
discursivos se presentan como una experiencia volitiva.
4. Conclusiones
El ejercicio que hemos realizado para elaborar el presente artículo
no sólo nos ha permitido evidenciar los beneficios del deporte en
los jóvenes universitarios con fines recreativos y ocupacionales,
sino que los jóvenes están conscientes de que el deporte es una
actividad física que trae beneficios en la salud del cuerpo.
Por otro lado, las conceptualizaciones justifican realizar las
prácticas deportivas subordinándolas a efectos tanto físicos,
sociales y culturales que se manifiestan en las prácticas sociales de
la lengua. A partir de ellas se configuran y establecen interacciones
lingüísticas influenciadas por grupos primarios, secundarios,
de trabajo y por contextos diversos como el ámbito académico,
laboral y también multicultural.
Es importante reconsiderar que, de manera subyacente en
las razones o motivos que licencian los razonamientos que los
jóvenes universitarios argumentan tener para practicar el deporte,
coexisten significados subyacentes que deben ser estudiados al lado
de los significados explícitos o directos. Los primeros, merecen un
tratamiento especializado y valoración en contexto porque nos dejan
ver más allá de las palabras y nos permiten acercarnos al conocimiento
del la experiencia humana y cognitiva de los estudiantes universitarios.
Los segundos y, no menos importantes, tienen una valoración plena
por sí mismos y nos dan una idea general de las justificaciones explícitas
que tienen para realizar una actividad física o deportiva.
58
De lo físico a lo simbólico: razonamientos léxicos y discursivos que tienen los jóvenes
universitarios para practicar el deporte en la Universidad de Colima, México.
Debiese tener una apreciación más importante la función
simbólica del lenguaje al ser estudiada en trabajos como este que,
demuestra la importancia de la interdisciplina para acercarse al
conocimiento y comprensión del actuar humano, sin embargo, en
este trabajo entender cómo el lenguaje de los jóvenes es también
una práctica simbólica al representar su mundo, esquemas,
sistemas de creencias, valores y actitudes hacia el deporte, deja ver
que, las razones y motivos por los cuales se práctica deporte en
la Universidad de Colima por parte de los estudiantes, no sólo
obedece a razones que tradicionalmente son concebidas como
de primer orden (salud, bienestar, equilibrio físico y emocional,
pérdida de peso, liberar el estrés, etc.) sino también se realiza con
fines representacionales o simbólicos (buena apariencia, causar
buena impresión en el trabajo, hacer creíble una actitud o conducta,
estética, despertar deseos e intenciones en los coetáneos, generar
interés por algo o, hacia alguien, etc.).
Finalmente, este ejercicio muestra las aportaciones que desde la
lingüística cognitiva y sociocultural se pueden hacer a los estudios
sobre deporte y cultura física, que ayuden a un mejor entendimiento
no sólo de la configuración social del significado del deporte
o la actividad física, sino que sepamos que, desde otras áreas y
disciplinas del conocimiento se puede abonar generosamente al
entendimiento de los motivos en el actuar humano y como en el
caso particular, ahondar en el conocimiento de las intenciones
que mueven a los jóvenes hacia las prácticas deportivas relación
entre una actividad física y la relación que existe de éstas con la
configuración de perfiles identitarios al interior de la Universidad
de Colima.
Para culminar, sugerimos la conveniencia de incorporar a
la investigación en ciencias humanas y aplicadas al deporte una
análisis inclusivo desde distintas posturas que aborden el lenguaje,
por ejemplo la teoría de la metáfora, el análisis conversacional,
y por supuesto, metodologías narrativas que saquen a flote la
59
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
importancia de la verbalización y exteriorización del lenguaje
como posibilidad infinita en la comprensión y explicación del
actuar humano.
Bibliografía
Arellano, Aideé C.; Pérez, Alan E. y Serratos, Elia. (2010). “Una aproximación a la configuración
semántico-social que los jóvenes de 13 a 23 años de edad en Colima, México, tienen
respecto a la educación física, el deporte y el cuerpo”, en Salazar, Ciria M, et. al. Usos y
representaciones de las prácticas físico-deportivas de los jóvenes medicanos. Estudios regionales. México: Universidad de Colima y Universidad Veracruzana, Págs. 40-61.
Berger, Peter L. y Luckmann, Thomas. (1968). La construcción social de la realidad. Buenos Aires:
Amorrortu editores.
Bucholtz, Mary y Hall Kira (2004). “Language and identity”. En Alessandro Duranti (ed.). A companion to linguistic anthropology. Malden, Oxford, Carlton: Blackwell
Bredo, Eric (1994) Cognitivism, Situated Cognition, and Dewewyian Pragmatism en Http://www.ed. uiuc.
edu/EPS/PES-Yearbook/94_docs/BREDO.HTM.
De Shazer, S. (1999) En un origen las palabras eran magia. Barcelona: Gedisa.
Fillmore, (1989). Temas de Lingüística y Pragmática. Valencia, España: Departamento de teorías de
los lenguajes.
Galindo, L. J. (1998). Sabor a Ti: Metodología cualitativa en investigación social, México: Universidad
Veracruzana.
García, C. B., y Jiménez, V. S. (1996). Redes semánticas de los conceptos de presión y flotación en
estudiantes de bachillerato. Mexicana de investigación Educativa, 1(2), 343-361.
Harris, M. (2008) Antropología cultural. Madris, España: Alianza editores.
Krippendorff, K. (1997) “Principales metáforas de la comunicación y algunas reflexiones constructivistas acerca de su utilización”, en Pakman, M. Construcciones de la experiencia humana.
Barcelona: Gedisa.
Lakoff, G y Johnson, M. (1980). Methapors we live by, Chicago, The Univesity of Chicago Press,
traducción en español como Metáforas de la vida cotidiana, Madrid, Cátedra.
Lodge, D. (1977) The modes of modern writing, Londres: Eduard Arnold edit.
López Ramos, S. (2006). El cuerpo humano y sus vericuetos. México: Miguel Ángel Porrúa.
Medina, J y Cielo, S. (2008). Formación Cívica y Ética III. México: Trillas.
Pérez Barajas, A. E. (2010). Significado extendido de la metáfora: aproximación e interpretaciones en fragmentos
discursivos sobre éxito y fracaso en adultos mayores de Colima, México. En prensa.
Pinker, Steven. (2007). El mundo de las palabras. Una introducción a la naturaleza humana, Barcelona:
Paidós Ibérica, S.A.
Rastier, F. (2005). Semántica Interpretativa, México: Siglo XXI Editores.
Sapir, E. (1977). The anatomy of metaphor. Filadelphia: University of Pennsylvania
Spradley, J, (1979) The ethnographic interview, Nueva York Holt: Rinehart and Winston.
Sperber, D y Wilson D. (1994). La relevancia, Madrid:Visor.
Talmy, L. (1998). Spacial Cognition : an interdisciplinary approach for representing. Germany: Springer.
Valdez Medina, J. L. (1998). Las redes semánticas naturales, usos y aplicaciones en psicología social. México:
Universidad Autónoma del Estado de México.
Vera Noriega, J. Á., Pimentel, C. E., y Batista de Albuquerque, F. J. (2005). Redes semánticas: aspectos
teóricos, técnicos, metodológicos y analíticos. Ra Ximhai, 1(3), 439-451.
Zermeño Flores, A. I. Arellano Ceballos, A. C., y Ramírez Vázquez, V. A. (2005). Redes semánticas
naturales: técnica para representar los significados que los jóvenes tienen sobre la televisión,
Internet y expectativas de vida. Estudios Sobre las Culturas Contemporáneas, XI (22), 305-334.
60
Gimnasia y Satisfacción Corporal: ¿Un Binomio Deportivo?
Gimnasia y Satisfacción Corporal:
¿Un Binomio Deportivo?
Alfredo Hernández-Alcántara y José Salinas Polanco
Resumen.
El propósito de esta investigación fue determinar la relación entre
la práctica gimnástica y la satisfacción con la imagen corporal
en un grupo de mujeres mexicanas deportistas y no deportistas.
Muestra: Intencional no probabilística formada por dos grupos
con observaciones independientes (n=307 gimnastas y n=307 no
deportistas, X=11.6, S=2.2). Instrumentos: Se empleó una escala
de figuras para medir el grado de satisfacción con la imagen
corporal. Resultados: Las gimnastas rítmicas, artísticas y recreativas
revelaron, sin excepción, satisfacción con su figura corporal en
comparación con las no deportistas. Conclusiones: Con base en
estos resultados concluimos que la práctica de la gimnasia femenil
promueve la satisfacción por la figura lo que puede representar un
factor que favorezca la percepción de la imagen corporal.
Palabras clave: Factores de riesgo, trastorno alimentario,
gimnasia, imagen corporal.
Alfredo Hernández-Alcántara. Doctor en psicología por la Universidad Nacional Autónoma
de México. Realizó el Posdoctorado en el Instituto de Investigaciones Antropológicas (IIA) con el
auspicio de la Coordinación de Humanidades de la esta Máxima Casa de Estudios. Es catedrático
de licenciatura y maestría de la Universidad Justo Sierra, México. Miembro del Sistema Nacional
de Investigadores del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, y Coordinador del Seminario
Permanente de Investigación en el Deporte, IIA, UNAM.
José Salinas Polanco. Candidato al Doctorado por la Facultad de Psicología de la Universidad
Nacional Autónoma de México. Es congresista nacional e internacional. Ha publicado artículos de
investigación en la materia. Actualmente es Profesor Adjunto de la Universidad del Distrito Federal,
en la Ciudad de México.
61
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Abstract.
The purpose of this investigation was to determine the relationship
between practice gymnastics and body image satisfaction in a group
of Mexican women athletes and nonathletes. Sample: Intentional,
non probabilistic with two groups formed by independent
observations N=614 (gymnasts n=307 and non-sport women
n=307) (X=11.6, S=2.2). Instruments: It was used a body silhouette
scale to measure the body image satisfaction. Result: All gymnasts
are more satisfied with their body image than non-sport women.
Conclusion: Based on these results, we conclude that the women´s
gymnastics practice promotes body shape satisfaction, which may
represent a contributing factor to the perception of body image.
Keywords: Risk factors, eating disorders, gymnast, body image.
Antecedentes.
Atávica y contemporáneamente el deporte y la actividad física,
han probado beneficios en cualquier etapa evolutiva de la vida
(Asztalos, De Bourdeaudhuij y Cardon, 2009; Merrick, Morad,
Halperin y Kandel, 2005; Morris-Dockers, 2006; Nowicka y
Flodmark, 2007), como un recurso de recuperación física (Hays,
1999) y como fuente de bienestar emocional sobre el autoconcepto
(Mechanic y Hansell, 1989), la competencia social (Bloom, 2000)
y la estima corporal (Wiggins y Moode, 2000).
En las últimas dos décadas los teóricos han puesto especial
atención en el papel que la actividad física desempeña como
promotora de la salud física y emocional a través de programas
deportivos de corte preventivo (Carraro, Cognolato y Bernardis,
1998; Elliot, Goldberg, Moe, y cols., 2004), correctivo (V., gr.,
desordenes alimentarios) (Hausenblas, Cook y Chittester, 2008) y
hasta terapéutico (Murphy, 1995) a través del fortalecimiento de la
autoestima (Kansi, Wichstrom y Bergman, 2003) y el mejoramiento
de la percepción de la propia figura corporal. Tal es el caso de
62
Gimnasia y Satisfacción Corporal: ¿Un Binomio Deportivo?
los modelos aeróbico y anaeróbico-muscular implementados por
Tucker y Mortell (1993) en un grupo de mujeres jóvenes, mismo
que derivó en una mejoría sustancial de la percepción del propio
cuerpo en las participantes del modelo anaeróbico-muscular al
optimar la definición de su figura.
En este contexto cabe resaltar que con suma frecuencia las mujeres
se hallan más insatisfechas con su propia figura corporal que los
hombres (Hausenblas y McNally, 2004), quizá debida a la presión de
sus pares (Stice y Whitenton, 2002) y a la inclinación sociocultural por
los modelos longilíneos como ideales estéticos de belleza (Pelletier,
Dion y Levesque, 2004) lo que afecta consecuentemente la autoestima
y la valía corporal de las personas. Y es en este marco precisamente que
los comentarios, la presión de compañeros del colegio y la influencia
de la moda propiciaron la eclosión de trastorno alimentario en un
grupo de púberes (Huang, Yang, Xu y cols., 2006).
En relación con la percepción de la imagen corporal debe
señalarse que la insatisfacción que produce es un factor de riesgo
claramente asociado con trastorno alimentario (Gómez­-Peresmitré,
Alvarado, Moreno y cols., 2001) que se manifiesta cuando, al
interiorizarse una figura ideal delgada culturalmente establecida,
es auto-comparada con la propia figura corporal hallándola en
consecuencia discrepante con dicho modelo artificial (Bunnell,
Cooper y Shenker, 1992).
En México, prácticamente tres de cada diez prepúberes de
entre seis y nueve años se encuentran insatisfechas con su figura
y más de la mitad de ellas anhelarían tener una figura delgada
estética (Gómez­-Peresmitré, Alvarado, Moreno, Saloma y cols.,
2001), por lo que no demorarán en sentirse tan insatisfechas como
las primeras. La investigación en el campo clínico sugiere que la
insatisfacción de la imagen corporal es una variable moderadora
crucial para comenzar a practicar dietas no patológicas y conductas
alimentarias de riesgo en quienes fundamentan su autoconcepto
en la figura y el peso corporal (Polivy y Herman, 1987).
63
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Frente a estas circunstancias, la actividad deportiva se
plantea a todas luces como un recurso de promoción de estilos
de vida saludables tanto en el plano físico como emocional.
Dos estudios comparativos realizados en la Ciudad de México
en mujeres nadadoras y gimnastas evidenciaron indicadores
positivos. El primer estudio mostró que las nadadoras presentan
menor presencia de factores de riesgo asociados con trastorno
alimentario, depresión y ansiedad al ser comparadas con chicas no
deportistas (Salinas y Gómez-Peresmitré, 2009), y el segundo, que
las gimnastas procuran comportamientos alimentarios más sanos
que sus contrapartes no deportistas (Hernández-Alcántara, 2006),
situación que fue atribuida sin duda, en ambos casos, a la práctica
de la actividad física.
Hoy por hoy, la actividad física organizada entendida como
deporte (Castillo, Balaguer y Tomás, 1997) ha cobrado especial
relevancia al ser adoptada por muchos como un estilo de vida
saludable3. Por lo que, en el marco de la importancia que reviste
el deporte y el ejercicio físico en la sociedad contemporánea, y
el notable incremento de las practicas alimentarias que ponen en
riesgo a la población más susceptible (los jóvenes y adolescentes), el
propósito del presente trabajo es evaluar la relación entre el grado
de satisfacción con la imagen corporal y la práctica gimnástica en
tres de sus especialidades deportivas (gimnasia rítmica, artística y
recreativa) a través de su comparación con un grupo de mujeres
no deportistas.
3. Es importante precisar la diferencia entre deporte como actividad física organizada de acuerdo
con estos autores y deporte de alto rendimiento donde, siguiendo a Durán, Jiménez, Ruiz y cols.,
(2006) tal contexto puede en cambio propiciar el surgimiento de una psicopatología debida a la
presión extrema bajo la que se encuentran sujetos los atletas.
64
Gimnasia y Satisfacción Corporal: ¿Un Binomio Deportivo?
Método.
Muestra.
Intencional, no probabilística formada por N=614 participantes
de entre 9 y 16 años de edad (M=11.6, DE=2.2) subdivididas en
n=307 gimnastas (rítmicas n=73, artísticas n=133, y recreativaslúdicas n=101) (M=11.5, DE=2.2), y n=307 no deportistas
(M=11.8, DE=2.1) (Ver Tabla 1) igualadas en las variables edad,
nivel socioeconómico, escolaridad y tipo de escuela (pública o
particular).
Tabla 1. Distribución porcentual de edad, media y desviación estándar por grupo.
Edad
9 a 10
11 a 12
13 a 14
15 a 16
Parcial
N
X
S
Gimnasta
40 %
29 %
17 %
14 %
50 %
307
11.5
2.2
No deportista
33 %
33.8 %
19.2 %
14 %
50 %
307
11.8
2.1
Total
36.5%
31.5 %
18.1 %
13.9 %
100.0
614
11.6
2.2
Diseño.
El diseño fue de campo transversal con cuatro submuestras
con observaciones independientes: gimnasia rítmica, artística,
recreativa-lúdica, y no deportistas (Ver Tabla 2).
Tabla 2. Porcentaje de participantes de las submuestras.
Grupo
Gimnasia recreativa-lúdica
Gimnasia artística
Gimnasia rítmica
No deportistas
Total
N
101
133
73
307
614
Porcentaje
16.5 %
21.5 %
12 %
50%
100 %
65
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Criterios de inclusión.
Las deportistas se caracterizaron por:
a) Pertenecer a instituciones deportivas de la Ciudad de México y
el interior de la república.
b) Ser supervisadas por un entrenador.
c) Practicar un promedio de M=12.7 horas por semana, DE=9.7
con un rango de horas de entrenamiento semanal que van de 2
y hasta 60 horas.
d) Participar en competencias en los ámbitos local, regional,
nacional e internacional (sólo gimnasia rítmica y artística).
e) La gimnasia rítmica o gimnasia ballet se caracteriza por el uso
de implementos (clavas, pelota, cinta, aro) cuyo desempeño es
acompañado generalmente de música clásica sin canto.
f) La gimnasia artística u olímpica se caracteriza por el uso de aparatos
como viga, potro, piso y barras asimétricas que demandan de la
gimnasta considerable flexibilidad y fuerza muscular.
g) La gimnasia precompetitiva incluye gimnastas rítmicas y artísticas
adscritas a instituciones deportivas. Entrenan entre 10 y 20
horas y participan en torneos locales y regionales.
h) La gimnasia competitiva incluye gimnastas rítmicas y artísticas
adscritas a instituciones deportivas. Entrenan más de 21 horas a
la semana y participan en torneos nacionales e internacionales.
i) La gimnasia recreativa se caracteriza por ser un recurso lúdico
carente de participación competitiva cuyas integrantes practican
menos de 9 horas a la semana.
j) Las no deportistas se caracterizan por hallarse exentas de actividades
físico-deportivas excepto, actividad física escolar obligatoria.
Instrumentos y Mediciones.
Satisfacción/Insatisfacción con la imagen corporal.
Se midió con base en una Escala formada por nueve figuras que
integran la Sección C-10 y G23 del “Cuestionario de alimentación
66
Gimnasia y Satisfacción Corporal: ¿Un Binomio Deportivo?
y salud para muestras mexicanas” (Gómez-Peresmitré, 1993).
Operacionalmente se define como la diferencia positiva (se quiere
estar más delgado) o negativa (se quiere tener más volumen o
músculo) entre la figura actual (FA) y la figura ideal (FI), es decir: FAFI=satisfacción/insatisfacción de la figura corporal. A más grande
la diferencia, mayor insatisfacción positiva o negativa, mientras que
la ‘satisfacción’ se define como la ausencia de diferencia o cero, es
decir, FA-FI=0 (Gómez-Peresmitré y Ávila, 1997).
Procedimiento.
La aplicación de los instrumentos se realizó con el apoyo de
personal capacitado quienes asistieron a las instituciones deportivas
solicitando permiso formal ante directivos, padres de familia,
entrenadores y participantes. Se expuso que se realizaba un estudio
anónimo sobre salud, que no era un examen y que tenían libertad
de participar o no en el estudio.
El análisis estadístico de los datos se realizó con base en dos
pruebas paramétricas; una prueba t y un análisis factorial de
varianza One Way (ANOVA) con apoyo del paquete estadístico
SPSS 10° versión para Windows.
Resultados.
Insatisfacción con la imagen corporal por grupo:
gimnastas y no deportistas.
El primer paso requirió de la aplicación de una prueba t de student
para conocer las diferencias por grupo resultando ésta, significativa
(t= -4.151, gl=260, p=.001). Las medias indicaron que las no
deportistas están más insatisfechas con su figura (quieren ser más
delgadas) (M=2.20, DE=1.2) que las gimnastas (x=1.62, s=0.9).
67
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Insatisfacción con la imagen corporal por tipo de
gimnasia.
Este análisis requirió la aplicación de un análisis de varianza
(ANOVA) One Way cuyos resultados indicaron ausencia
de diferencias significativas por tipo de gimnasia (recreativalúdica, artística y rítmica) en términos de insatisfacción positiva
(F(2,124)=2.168, p=.119) y negativa (F(2,640)=.580, p=.563).
Insatisfacción con la imagen corporal por nivel
competitivo.
El penúltimo análisis requirió nuevamente del desarrollo de
un ANOVA One Way por nivel de competencia (básico,
precompetitivo y competitivo) mismo que no mostró diferencias
significativas por insatisfacción positiva (F(2,124)=.196, p=.822) ni
negativa (F(2,64)=.511, p=.603).
Insatisfacción con la imagen corporal con base en
horas de entrenamiento.
Por último, una prueba t no reveló diferencias con respecto al
tiempo destinado al entrenamiento básico (menos de 9 horas/
semana) e intenso (entre 21 y 60 horas/semana) en términos de
insatisfacción positiva (t= -.064, gl=37, p=.949) ni negativa (t=
-.1.217, gl=25, p=.235).
Discusión.
El propósito general de investigación del presente trabajo consistió
en evaluar el grado de satisfacción con la imagen corporal en un
grupo de gimnastas mexicanas lúdicas, rítmicas y artísticas a través
de su comparación con un grupo de mujeres no deportistas. Sólo el
primer análisis reportó diferencias estadísticamente significativas,
es decir, entre deportistas y no deportistas, mientras el resto de
los análisis permanecieron sin efectos. La interpretación de las
68
Gimnasia y Satisfacción Corporal: ¿Un Binomio Deportivo?
medias del primer estadístico referido indicó que las gimnastas
están más satisfechas con su figura corporal que las no deportistas,
lo que coincide con los supuestos teóricos de O’Dea (2001) quien
propone que la práctica deportiva mejora la satisfacción por la
figura.
En tanto, la insatisfacción experimentada por las no deportistas
es concordante con los planteamientos de Guglielmino (2004)
y Hausenblas y McNally (2004) quienes advierten que la
insatisfacción es un fenómeno recurrente entre las adolescentes
mismas que enfrentan presión social por una figura estilizada,
internalización de la figura ideal delgada y deficiente respaldo
sociofamiliar (Stice y Whitenton, 2002).
En virtud de que tal circunstancia sociocultural no parece ser
privativa de las no deportistas surge la siguiente interrogante: si las
gimnastas comparten factores socioculturales semejantes (presión
social en favor de la delgadez, internalización de la figura ideal,
influencia de medios de comunicación, etc.), ¿el deporte promueve
la satisfacción por la figura corporal? Con fundamento en los
análisis aportados por esta investigación se desprende el supuesto
de que el deporte promueve la satisfacción de la imagen corporal
o al menos, en lo que concierne a la práctica gimnástica femenil.
Esto no es nuevo. Investigaciones previas realizadas por Faria y
Silva (2001) lo han constatado al señalar que la práctica gimnástica
periódica incrementa la autoestima, mejora el estado de ánimo y
el autoconcepto. Por otra parte, también se ha visto que prácticas
distintas como basketball y voleibol promueven la estima por sí
mismo (Kansi, Wichstrom y Bergman, 2003). Investigaciones más
recientes constatan lo anterior en virtud de que se ha observado que
el deporte procura una mayor satisfacción por la figura corporal y
merma el deseo de una figura ideal delgada (Bachner-Melman,
Zohar, Ebstein, y cols., 2006). En resumen, estas actividades físicas
procuran en los adolescentes, lo que Donaldson y Ronan (2006)
han llamado: un correcto ajuste socio-emocional.
69
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
El resultado del primer análisis estadístico destaca en función de
que es el único que provee de diferencias estadísticas significativas,
esto es, que las deportistas están más satisfechas con su figura
que las no deportistas. El resto de los análisis intragrupales
(entre gimnastas) resultan interesantes si se considera que bajo
ninguna circunstancia y en ningún caso se encontró insatisfacción
positiva (querer ser más delgada), ni negativa (querer ser más
gruesa) entre las deportistas, de lo que se desprende que, para
prevenir este factor de riesgo asociado con trastorno alimentario,
es conveniente atender las propuestas de los teóricos (BachnerMelman, Zohar, Ebstein, y cols., 2006; Donaldson y Ronan, 2006;
Kansi, Wichstrom y Bergman, 2003; Mechanic y Hansell, 1989;
O’Dea, 2001; Wiggins & Moode, 2000) tanto como los resultados
conducentes productos de esta investigación.
De lo anterior se concluye que las deportistas se encuentran
sin excepción, más satisfechas con su figura, lo que representa un
hallazgo significativo ya que el deporte jugó un papel protector
más que un factor de riesgo asociado con trastornos alimentarios
como lo han sugerido otros estudios (Brewer y Petrie, 2002; León,
1984; Malheior y Gouveia, 2001). En este marco, destacamos
las implicaciones que tales prácticas tienen en la salud. Por estas
razones, a guisa de conclusión, recomendamos que púberes y
adolescentes se involucren con prácticas físico-deportivas, con
el propósito de contrarrestar un factor de riesgo frecuente en
prepúberes, púberes y jóvenes mexicanas: la insatisfacción con la
figura corporal.
Limitaciones.
Entre las limitaciones de esta investigación destacan la dificultad
de contrastar los presentes hallazgos con estudios realizados en
otras especialidades deportivas como voleibol, básquetbol, nados
de estilo libre, judo, etcétera, como deportes que no requieren
propiamente una figura delgada como parte de su desempeño
70
Gimnasia y Satisfacción Corporal: ¿Un Binomio Deportivo?
deportivo. Ello permitiría comparar, confirmar, y/o refutar los
presentes resultados. Por lo anterior se recomienda desarrollar
investigaciones futuras sobre satisfacción e insatisfacción con la
imagen corporal en otros ámbitos deportivos en México.
Agradecimientos:
Nuestra gratitud a la Dra. Gilda Gómez-Peresmitré
por su basto conocimiento compartido. A la Facultad
de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma
de México por el apoyo institucional otorgado, a la
División de Estudios de Posgrado. A la Coordinación
de Humanidades y el Instituto de Investigaciones
Antropológicas de la UNAM. Al Consejo Nacional
de Ciencia y Tecnología y al Sistema Nacional de
Investigadores de México por los apoyos financieros
que facilitaron la consecución de esta investigación. A
los participantes, padres, entrenadores y directivos de
instituciones académicas y deportivas que amablemente
contribuyeron al desarrollo de esta investigación. A
TODOS, nuestra más profunda gratitud.
Bibliografía
Asztalos, M., De Bourdeaudhuij, I., y Cardon, G. (2009). The relationship between physical activity
and mental health varies across activity intensity levels and dimensions of mental health
among women and men. Public Health & Nutrition, 17, 1-8.
Bachner-Melman, R., Zohar, A.H., Ebstein, R.P. Elizur, Y., y Constantini, N. (2006). How anorexic-like are the symptom and personality profiles of aesthetic athletes? Medicine &
Science in Sport & Exercise, 38(4), 628-636.
Bloom, M. (2000). The uses of theory in primary prevention practice: Evolving thoughts on sports
and after–school activities as influences of social competency. En Danish S. J. & Gullotta
T. P. (Eds.); Developing competent youth and strong communities through after–school
programming. (pp. 17-66).Washington, D.C. EU: Child Welfare League of America.
Brewer, B.W., y Petrie, T.A. (2002). Psychopathology in sport and exercise. En Van Raalte J. L. y
Brewer B.W. (Eds.); Exploring sport and exercise psychology. (pp. 307-323). Washington, D.C. American Psychological Association.
Bunnell, D.W., Cooper, P.J, y Shenker, I.R. (1992). Body image concerns among adolescents.
International Journal of Eating Disordes, 1(2), 79-83.
71
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Carraro, A., Cognolato, S., y Bernardis, A.L. (1998). Evaluation of a program of adapted physical
activity for eating disorders patients. Eating and Weight Disorders, 3(3), 110-114.
Castillo, I., Balaguer, I., y Tomás, I. (1997). Predictores de la práctica de actividades físicas en niños
y adolescentes. Anales de psicología, 13 (2), 189-200.
Donaldson, S.J., y Ronan. K.R. (2006). The effects of sports participation on young adolescent’s
emotional well-being. Adolescence, 41(162), 369-389.
Durán, L., Jiménez, P., Ruiz, L., Jiménez, F., y Camacho, M. (2006). Trastornos de la alimentación
y deporte. Archivos de Medicina del Deporte, 23, 117-125.
Elliot, D.L., Goldberg, L., Moe, E.L., Defrancesco, C.A., Durham, M.B., y Hix-Small, H. (2004).
Preventing substance use and disordered eating: Initial outcomes of the ATHENA
(athletes targeting healthy exercise and nutrition alternatives) program. Archives Pediatrics and Adolescent Medicine, 158(11), 1043-1049.
Faria. L., y Silva, S. (2001). Promotion of self-concept and practice of academy gymnastic. Psicologia: Teoria, Investigaca e Pratica, 6(1), 41-57.
Gómez­-Peresmitré, G. (1993). Detección de anomalías de la conducta alimentaria en estudiantes
universitarios: Obesidad, bulimia, y anorexia nervosa. Revista Mexicana de Psicología
10 (1), 17-27.
Gómez­-Peresmitré, G. y Ávila, A.E. (1997). Cómo medir factores de riesgo asociados con imagen
corporal: insatisfacción y distorsión. México: Facultad de Psicología, Universidad Nacional Autónoma de México.
Gómez­-Peresmitré, G., Alvarado, H.G., Moreno, E.L., Saloma G.S., y Pineda, G.G. (2001). Trastornos de la alimentación. Factores de riesgo en tres grupos de edad: Prepúberes, púberes y adolescentes. Revista Mexicana de Psicología, 18 (3), 313-324.
Guglielmino, M. (2004). Chrysalis camp: Uniting and empowering girls an eating disorders primary
prevention program. The Sciences & Engineering, 64 (7-B), 3523 US: Univ. Microfilms
International.
Hausenblas, H.A., Cook, B.J. y Chittester, N.I. (2008). Can exercise treat eating disorders? Exercise
& Sport Science Reviews, 36(1), 43-47.
Hausenblas, H. A. y McNally, K. D. (2004). Eating disorders prevalence and symptoms for track
and field athletes and nonathletes. Journal of Applied Sport Psychology, 16(3), 274-286.
Hays, K. F. (1999). Working it out: Using exercise in psychotherapy. (pp. 177-187). Washington
DC: American Psychological Association XXI.
Hernández-Alcántara, A. (2006). Factores de riesgo en trastornos de la conducta alimentaria en
atletas gimnastas mexicanas. Tesis Doctoral. México. Facultad de Psicología. UNAM.
Huang, X.D., Yang, P.R., Xu, Y.Z., Yin, Y., Tang, Q.Y., y Zhang, Y.H. (2006). �������������������
Etiology and treatment of eating disorders in adolescents: a report of 6 cases. Zhongguo Dang Dai Er Ke
Za Zhi, 8. 279-282.
Kansi, J., Wichstrom, L., y Bergman., L.R. (2003). Eating problems and the self-concept: Result
based on a representative sample of Norwegian adolescent girls. Journal of Youth &
Adolescence, 32(5), 325-335.
Leon, G. R. (1984). Anorexia nervosa and sports activities. Behavior Therapist, 7(1), 9-10.
Malheior, A.S. y Gouveia, M.J. (2001). Physical anxiety and risky eating behaviors in sport context.
Analise Psicologica, 19(1), 143-155.
Merrick, J., Morad, M., Halperin, I., y Kandel, I. (2005). Physical fitness and adolescence. International Journal of Adolescence & Medical Health, 17(1), 89-91.
Mechanic, D. y Hansell, S. (1989). Adolescent competence, psychological well-being, and self-assessed physical health. Journal of Health & Social Behaviour, 28(4), 364-374.
Murphy S.M. (1995). Sport psychology interventions. Champaign, IL. Human Kinetics Publishers.
Morris-Dockers, S. (2006). Tai Chi and older people in the community: a preliminary study. Complementary Therapies in Clinical Practice, 12(2), 111-118.
Nowicka. P., y Flodmark, C.E. (2007). Physical activity-key issues in treatment of childhood obesity.
Acta Paediatrica. Supplement, 96(454), 39-45.
72
Gimnasia y Satisfacción Corporal: ¿Un Binomio Deportivo?
O’Dea, J. A. ���������������������������������������������������������������������������������������
(2001). Self-concept, weight issues and body image in children and adolescents. En: Columbus, F. (Comp.) Advances in psychology research. (6) (pp. 157-191). Nueva York:
Huntington. Nova Science Publishers, Inc. 291
Pelletier, L.G., Dion, S., y Levesque, C. (2004). Can self-determination help protect women against
sociocultural influences about body image and reduce their risk of experiencing bulimic
symptoms? Journal Soc Clinical Psychology 23. 61-88.
Polivy, J., y Herman, P. (1987). Diagnosis and treatment of normal eating. Journal of Consulting and
Clinical Psychology, 55, 635-644.
Salinas, P.J., y Gómez-Peresmitré, G. (2009). Modelos estructurales. Deporte de alto rendimiento y
conductas alimentarias de alto riesgo. Psicología y Salud, 19(2), 271-280.
Stice, E. & Whitenton, K. (2002). Risk factors for body dissatisfaction in adolescent girls: A longitudinal investigation. Developmental psychology 38(5). 669-678.
Tucker, L.A., y Mortell, R. (1993). Comparison
�������������������������������������������������������������
of the effects of walking and weight training programs on body image in middle-aged women: an experimental study. Am J Health Promot, 8(1), 34-42.
Wiggins, M. S. y Moode, F. M. (2000). Analysis of body esteem in female college athletes and nonathletes. Perceptual and Motor Skills, 90(3), 851-854.
73
Influencia de las variables antropométricas sobre la
capacidad aeróbica en niños pre-púberes.
Influencia de las variables
antropométricas sobre la capacidad
aeróbica en niños pre-púberes.
Rossana Gómez Campos, Evandro Lázari, Cristian Loarte,
Jaime Pacheco y Marco Antonio Cossio Bolaños.
Resumen
El estudio tiene como objetivo determinar si las variables
antropométricas influyen en la capacidad aeróbica de niños de
6 a 11 años. Se estudiaron 795 niños de manera probabilística
(estratificado), siendo 394 hombres y 401 mujeres de escuelas
públicas de la Ciudad de Arequipa-Perú. Se evaluaron las variables
de edad, masa corporal (Kg.), estatura (m), pliegues cutáneos:
tricipital (mm) y subescapular (mm), y circunferencia del tórax
(cm). Para el cálculo del % de grasa se utilizó la ecuación de
Boileau, Lohman y Slaughter (1985) para cada sexo; y para la
evaluación de la capacidad aeróbica, se realizó el test de carrera de
ida y vuelta de Navetta. Los resultados evidencian que el VO2max
en relación al peso corporal disminuye con el transcurso de la
Rossana Gómez Campos, formada en Educación Física por la Escuela Internacional de Educación Física y Deporte de La Habana - Cuba, Máster en Biodinámica del movimiento por la UNESP,
en Sao Paulo – Brasil. Líneas de investigación: Actividad física y salud; Fisiología del ejercicio;
Entrenamiento deportivo de deportes individuales. Publicación reciente: Prescripción del ejercicio
físico en poblaciones con enfermedades crónicas degenerativas no transmisibles. Revista Médica
Experimental de Perú, 2010. E-mail: [email protected]
Evandro Lázari, maestrante en la Universidad Estadual de Campinas – Brasil, Entrenador de la
selección de atletismo de Brasil. Líneas de investigación: Crecimiento y maduración; entrenamiento
deportivo de deportes individuales.
Cristian Loarte, profesor. Líneas de investigación: Actividad física adaptada.
Jaime Pacheco, Profesor. Líneas de investigación: Educación física escolar.
Marco Antonio Cossio Bolaños, formado en educación física en Perú, Máster en Ciencias
del deporte por la Universidad de Campinas – Brasil y Doctorando en ciencias del deporte en la
Universidad Estadual de Campinas – Brasil. Líneas de investigación: Crecimiento y maturación;
Entrenamiento deportivo; Metodología de la investigación y Entrenamiento en futbol.
75
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
edad en ambos sexos. Por otro lado, se observó una correlación
negativa entre las variables antropométricas de edad, peso, estatura,
% con relación a la capacidad aeróbica, siendo más elevada en las
niñas en comparación con los niños. Se concluye que las variables
antropométricas de edad, peso y % de grasa corporal influyen sobre
la capacidad aeróbica en el caso de las niñas, debido al proceso de
crecimiento y desarrollo en el cual se encuentran y por la mayor
acumulación de grasa corporal en comparación a los niños.
Palabras clave: Capacidad aeróbica, variables antropométricas, niños.
Abstract
The study aims to determine whether the anthropometric variables
influence the aerobic capacity of children 6 to 11 years. 795
children were studied in a probabilistic manner (stratified), with
394 men and 401 women in public schools in the city of Arequipa,
Peru. Were evaluated by age, body mass (kg), height (m), skinfolds:
triceps (mm) and subscapular (mm) and chest circumference (cm).
For the calculation of % fat using the equation of Boileau, Lohman
and Slaughter (1985) for each sex, and to assess the aerobic capacity
test the run back and forth from Navetta was realized. The results
showed that VO2max relative to body weight decreases over age
in both sexes. On the other hand, there was a negative correlation
between the anthropometric variables of age, weight, height, in
relation to aerobic capacity %, being higher in girls compared with
boys. We conclude that the anthropometric variables of age, weight
and body fat % affect aerobic capacity in the case of girls, due to
growth and development process in which they are and the greater
accumulation of body fat compared to boys.
Keywords: Aerobic capacity, anthropometric variables, children.
76
Influencia de las variables antropométricas sobre la
capacidad aeróbica en niños pre-púberes.
Introducción
El ejercicio físico y la aptitud física en niños y adolescentes se ha
tornado objeto de estudio de varios investigadores en el área de
las ciencias del movimiento humano, observándose una fuerte
contribución del crecimiento, desarrollo y aptitud física (Araujo,
Oliveira, 2008). De esta manera, la aptitud física relacionada a
la salud en la infancia y adolescencia, al estar operacionalizada
a través de variables como resistencia cardiorespiratoria, fuerza
muscular, flexibilidad y composición corporal, ha sido influenciada
por factores como la edad, sexo, composición corporal, estado
de maduración biológica, entre otros (Huang, Malina, 2007).
Es también conocido que en el transcurso de los años se ha
observado una disminución en la práctica de actividad física, esta
reducción del ejercicio ha provocado un descenso en el estado de
la condición física con la consiguiente influencia sobre la salud y
la calidad de vida (Guerra, Duarte y Mota: 2001; Pierón: 2003;
Ribeiro, Guerra, Pinto, Oliveira, Duarte y Mota: 2002; Salbe,
Weyer, Harper, Lindsay, Ravussin y Tatarani: 2003), tornándose el
sobrepeso como un problema de salud a nivel mundial en niños y
adolescentes, debido al incremento de la prevalencia de la obesidad
y disminución del nivel de aptitud física que ha acrecentado
los riesgos de la salud asociado al aumento de la grasa corporal
(Rizzo, Ruiz, Hurtug-Wennlof, Ortega, Sjostrom, 2007) con la
consecuente disminución de la capacidad aeróbica en adolescentes
(Eisenmann, 2003). De esa forma, es importante considerar, que
durante la actividad física, el organismo altera su funcionamiento
con el propósito de mantener esa actividad por un mayor tiempo,
por lo que, para lograr una manutención y mejora da capacidad
aeróbica, es esencial que exista una mayor oferta de oxigeno a los
tejidos (Machado, Guglielmo, Denadai, 2002), por consiguiente,
el consumo máximo de oxigeno es generalmente considerado
el índice que mejor representa, cuantitativa y cualitativamente,
la capacidad funcional del sistema cardiorrespiratorio durante la
77
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
actividad física (Dencker, Thorsson, Karlsson Lindén, Eiberg,
Wollmer, Andersen: 2007).
Por otro lado, el acompañamiento de los índices de desempeño
motor en niños y adolescentes puede contribuir en forma decisiva
en la intención de promover la practica de actividades físicas, siendo
recomendado que los atributos relacionados al comportamiento
motor sean establecidos precozmente con el fin de asegurar los
niveles esperados hasta que el proceso de la maduración biológica
se complete (Guedes, 2002), por esta razón la administración
de tests motores viene a constituir una estrategia de recolección
de información que permite acompañar el desempeño motor
de las capacidades relacionadas a la salud como es el caso de
la capacidad aeróbica. Esta capacidad, está relacionada con el
nivel de gordura corporal, pues algunos estudios demuestran
que la cantidad de grasa corporal puede ejercer una importante
influencia en la relación entre capacidad cardiorespiratoria y
factores de riesgo cardiovascular, tanto en individuos jóvenes y en
adultos, o aún durante el periodo de transición entre esas fases de
vida (Carnethon, Gulati, Greenland, 2005, Anderssen et al: 2007).
Por lo que algunas variables antropométricas podrían ejercer
influencia sobre la capacidad cardiovascular de niños en fase de
crecimiento físico. Por lo tanto, el objetivo del presente estudio
radica en determinar si las variables antropométricas influyen en la
capacidad cardiovascular de niños de 6 a 11 años.
Metodología
Muestra
Fueron seleccionadas 795 niños de manera probabilística
(estratificado), siendo 394 varones y 401 damas pertenecientes a
escuelas públicas del área urbana de la Ciudad de Arequipa-Perú
(2320msnm), cuyas edades están comprendidas entre los 6 a 11
años, respectivamente.
78
Influencia de las variables antropométricas sobre la
capacidad aeróbica en niños pre-púberes.
Tipo y diseño del estudio
La investigación es de tipo descriptiva (de desarrollo) y el diseño
es de corte transversal (Bisquerra, 1998, Thomas y Nelson, 2002).
Técnicas e instrumento:
De acuerdo al tipo de investigación y teniendo en cuenta las
necesidades y las condiciones de la realidad de la Ciudad de
Arequipa (Perú), se utilizó los protocolos estandarizados a nivel
internacional, ofreciendo un mayor grado de confiabilidad para las
variables antropométricas de crecimiento físico.
Procedimientos para las variables antropométricas
• Masa corporal: El objetivo fue determinar la masa corporal
total y se utilizó una balanza digital con una precisión de (200g)
con una escala de (0 a 150 Kg.), siguiendo las recomendaciones
de (Gordon, Chumlea y Roche, 1988) para niños de 5-10 años
y de 10-15 años.
• Estatura: El objetivo fue determinar la estatura del individuo
en posición ortostática, evaluándose mediante un estadiómetro
de madera graduada en milímetros, presentando una escala
de (0-2,50m), siguiendo los procedimientos de (Jordan, 1980,
Gordon, Chumlea y Roche, 1988).
• Circunferencias: Se evaluó la circunferencia del tórax entre
la inspiración y expiración, siguiendo los procedimientos
propuestos por Callaway et al. (1988), utilizando una cinta
métrica de nylon milimetrada con una precisión de (0,1cm).
• Pliegues cutáneos: Fueron evaluados los pliegues tricipital y
subescapular con el objetivo de medir la adiposidad cutánea,
utilizando un compás de pliegues Harpenden que ejerce una
presión constante de (10gr/mm2), valiéndose de las sugerencias
de Guedes (1996).
79
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
• Porcentaje de grasa (%G): Para realizar el cálculo del % graso
se realizó mediante la ecuación de regresión propuesta por
Boileau, Lohman y Slaughter (1985). (ver cuadro I).
Procedimientos para la capacidad aeróbica.
• Capacidad aeróbica (m): Fue evaluada mediante el test de carrera
de ida y vuelta de Navetta, siguiendo las recomendaciones
de Leger, (et al: 1988), usando un CD room con ajuste da
distancia. El resultado final obtenido a través de la formula,
indicó los valores del VO2max.
Cuadro I. Ecuaciones utilizadas para el cálculo del % de grasa
Ecuaciones
%G=1,35 (Σ TR+SE) -0,012 (Σ TR+SE)2 -4,4 (hombres)
%G=1,35 (Σ TR+SE) -0,012 (Σ TR+SE)2 -2,4 (mujeres)
Análisis estadístico:
Se utilizó la estadística descriptiva de media (X), desviación
estándar (DE) y el coeficiente de correlación de Persson (r).
Así como también el análisis paramétrico de regresión simple y
múltiple para determinar el efecto de las variables antropométricas
sobre la capacidad aeróbica (p<0,001).
Resultados
El cuadro II muestra los valores medios (X) y desviaciones estándar
(DE) de las variables antropométricas utilizadas en el presente
estudio para ambos géneros. Estos valores muestran una tendencia
ascendente desde los 6 hasta los 11 años para ambos sexos, a través
del cual se distingue que dichas variables se encuentran en proceso
de crecimiento físico constante con el transcurso de la edad, con
80
Influencia de las variables antropométricas sobre la
capacidad aeróbica en niños pre-púberes.
excepción del VO2max, donde se observan una disminución de
los valores con el transcurso de la edad para ambos sexos.
Figura 1. Evolución del % de grasa de niños de ambos sexos, en función de la edad cronológica.
Figura 2. Evolución del VO2max de niños de ambos sexos, en función de la edad cronológica.
81
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Cuadro II. Caracterización de los niños estudiados.
Edad (años)
6
7
8
9
10
11
Masa corporal (Kg) Estatura (m) C. Tórax (cm)
Hombres
21,8±2,24
1,14±0,053
59,33±2,5
22,91±3,91
1,17±0,05
61,88±4,44
25,8±3,54
1,24±0,05
63,14±3,38
29,38±3,8
1,27±0,04
64,52±2,77
33,25±4,05
1,36±0,06
69.33±3,47
37,01±4,82
1,43±0,05
69,18±4,98
%G
VO2max
12,47±2,78
12,67±4,04
13,18±3,68
14,31±4,61
16,11±3,80
16,93±4,32
49,38±0,9
47,56±0,9
46,42±1,7
46,34±2,93
44,63±3,16
46,42±3,24
17,39±3,3
18,53±4,43
20,69±2,82
22,04±3,67
21,33±4,6
25,3±4,28
49,29±1,06
47,29±1,37
45,97±1,23
45,38±2,09
43,74±2,03
43,22±2,41
Mujeres
6
7
8
9
10
11
22,48±2,6
24,62±3,45
26,57±3,04
30,38±4,62
37,21±5,37
38,95±5,99
1,19±0,05
1,23±0,04
1,26±0,06
1,32±0,06
1,4±0,06
1,44±0,05
59,63±3,39
61,6±3,84
64,67±3,23
66,06±5,04
69,13±4,64
71,91±5,57
Los valores de correlación de Pearson (r) pueden ser observados
e el cuadro III, verificándose correlaciones moderadas entre la
capacidad aeróbica y la masa corporal, estatura, circunferencia del
tórax, % de grasa oscilando entre (0,31-044) para los varones y
de (0,47-0,66) para las mujeres. Por otro lado, la edad también
es una variable que se correlaciona de forma negativa con la
capacidad aeróbica, siendo de -0,40 para los varones y -0,77 para
las mujeres. De esta forma, podemos señalar que las variables que
se correlacionan de forma moderada con la capacidad aeróbica
son la edad, masa corporal, estatura, circunferencia del tórax, % de
grasa respectivamente.
Cuadro III. Valores de correlación producto-momento de Pearson para las
variables antropométricas y de capacidad aeróbica de niños de ambos sexos.
Edad
82
MC
Estatura
Tórax
%Grasa
VO2max
Influencia de las variables antropométricas sobre la
capacidad aeróbica en niños pre-púberes.
Edad
MC
Estatura
Tórax
%Grasa
VO2max
-0,81
0,85
0,701
0,458
-0,77
0,79
-0,895
0,883
0,611
-0,66
0,86
0,88
-0,794
0,44
-0,65
0,655
0,83
0,73
-0,62
-0,59
0,378
0,61
0,46
0,56
--0,47
-0,4
-0,33
-0,3
-0,33
-0,31
--
Los cuadro IV y V permiten observar los valores de regresión
obtenidos a través de modelos matemáticos para ambos sexos.
Estos resultados muestran que la variable que afecta la capacidad
aeróbica de forma moderada es la edad y peso en las niñas y
ligeramente en los niños. Puesto que a medida que va aumentando
la edad y el peso, el VO2max en relación al peso corporal va
disminuyendo. A su vez, cuando se adicionó otras variables
antropométricas el R2 se modificó ligeramente, aumentando los
valores, por lo que las variables como el % de grasa, peso y estatura
influyen de forma determinante en la capacidad aeróbica evaluada,
en mayor proporción en las niñas en relación a los niños prepúberes de moderada altitud.
Cuadro IV. Modelos matemáticos para verificar el efecto de las variables
antropométricas sobre la capacidad aeróbica de niños.
B
Modelo Edad
1ª
2ª
3ª
Peso Estatura tórax %G
C
R
R2
EEE
P
82,6
--
--
--
--
-299,3
0,611
0,371 183,4
0,0001
--
17,2
--
--
--
-71,2
0,494
0,242 201,2
0,1126
--
--
119,8
--
--
-110,8
0,575
0,329 189,3
0,0001
--
--
--
15,7
--
-598,7
0,354
0,123 216,4
0,0001
80,4
0,72
--
--
--
-300,4
0,610
0,369 183,6
0,0001
60,3
--
396,2
--
--
-610,8
0,617
0,378 182,3
0,0001
90,9
--
--
--
8,71 -246,6
0,628
0,391 180,3
0,0001
69,6
8,3
--
--
13,5 -230,6
0,639
0,404 178,4
0,0001
63,2
--
405
--
0,622
0,380 181,6
0,0018
--
-48,7
83
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Cuadro IV. Modelos matemáticos para verificar el efecto de las variables
antropométricas sobre la capacidad aeróbica de niñas.
B
Modelo Edad Peso Estatura tórax %G
1ª
2ª
3a
0,639
--
---
C
R
R2
EEE
P
-62,1
0,609
0,369
16,16
0,0269
--
94
0,464
0,213
129,8
0,0003
--
-603,3
0,548
0,298
122,5
0,0001
--
--
--
8,78
--
--
--
735,5
--
--
--
--
9,36
--
-254,8
0,397
0,156
134,4
0,0004
52,9
1,27
--
--
--
-61
0,610
0,369
116,2
0,0299
41,5
--
141,1
--
--
-184,8
0,611
0,371
116
0,0470
54,8
--
--
--
--
9,49
0,064
0,400
113,3
0,7619
54,1
--
--
--
4,92
-8,05
0,623
0,385
114,7
0,8013
52,5
--
--
--
--
14
0,614
0,374
115,7
0,7654
51,8
1,03
--
--
--
13,45
0,636
0,400
113,3
0,6721
52,5
--
--
0,857 5,38 -41,54
0,624
0,384
114,8
0,5278
52
--
--
0,322
0,614
0,373
115,8
0,9372
--
5,138
Discusión
Uno de los parámetros que se ha utilizado comúnmente para medir
el rendimiento de la capacidad aeróbica y la forma física, es el
VO2max, el cual ha sido evaluado en nuestro estudio por su poder
limitador de la capacidad de desarrollar tareas aeróbicas, así como
por haberse considerado el mejor indicador de salud relacionado a
la aptitud física (Krahenbuhl, et.al: 1985; Vasquez, et. al: 2007). De
esta manera, observamos en nuestros resultados que el VO2max
con relación al peso, tiende a disminuir con el transcurso de la
edad, tanto en niñas como en niños, este declino en la tendencia
de la aptitud cardiorespiratoria puede ser explicado, debido a que
el consumo de oxígeno, necesario para correr o caminar, decrece
con la edad en ambos sexos (Tourinho Filho, Tourinho, 1998),
debido al incremento de la masa corporal característico de la edad
y del sexo (Araujo, Oliveira: 2008).
Las variables de edad, masa corporal y estatura, de forma
independiente presentan una baja relación negativa con el
84
Influencia de las variables antropométricas sobre la
capacidad aeróbica en niños pre-púberes.
VO2max en los niños, y una alta relación negativa en el caso de
las niñas; esto se explica debido a que el VO2max relativo es
inversamente proporcional a la masa de grasa y al incremento de la
masa muscular, resultado del proceso de crecimiento y desarrollo,
observado en niñas y niños (Manchado, et al.), siendo que las niñas
logran alcanzar la pubertad en media a edad más temprano que en
los niños. De esta manera, esa mayor correlación negativa en las
niñas, reflejada en un menor desempeño verificado en la aptitud
cardiorespiratoria se justifica por una mayor acumulación de grasa,
impulsado por el incremento puberal anticipado que alcanzan
las niñas en relación a los niños, corroborando lo señalado en
la literatura, que indica que la mas importante contribución de
los factores que explican la variación en el consumo máximo de
oxígeno es la masa muscular del cuerpo, la frecuencia cardiaca
máxima y el sexo (Dencker, Thorsson, Karlsson Lindén, Eiberg,
Wollmer, Andersen: 2007).
En relación al % de grasa, los resultados evidenciaron un mayor
% de grasa en las niñas comparado a los niños, para una media
de edades muy cercana, lo que se corrobora con los estudios
existentes que proponen una tendencia del sexo femenino para
acumular mayores cantidades de grasa corporal (Guedes: 2002;
Moreira, Sardinha: 2003). Esa diferencia se acentúa con la
pubertad (Okano: 2001), debido a que el aumento de la masa
grasa en el sexo masculino ocurre hasta los 10-12 anos de edad
(Moreira, Sardinha: 2003), período a partir del cual se verifica un
rápido aumento de la masa libre de grasa (Guedes: 1996). De esta
manera, a pesar que los resultados no muestran una correlación
significativa entre la edad y el % de grasa, los estudios indican que
entre los 10 y 18 años, esta variable disminuye anualmente en los
hombres cerca del 1,15%, aumentando en el mismo periodo en el
caso de las mujeres (Moreira e Sardinha: 2003).
Al utilizar los modelos matemáticos, observamos que la edad
junto con el peso eleva en un 10% la correlación que existe con el
85
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
VO2, y sumados al % de grasa aumenta en un 17% en el caso de las
niñas; esto indica que el VO2 esta influenciado por la edad, peso
y % de grasa, esto se explica habitualmente con la acumulación
mayor de grasa en las niñas (McArdle, Katch, Katch: 2004). En
consecuencia, nuestro estudio indica que existe influencia de
las variables antropométricas sobre el VO2max en el caso de
las niñas, no así en el caso de los niños de 6 y 11 años de edad,
de tal manera que mientras mayor sea el % de grasa corporal,
menor será la capacidad aeróbica, en ese sentido, Albes, Barbosa,
Campos, Coelho, Silva (2008) recomiendan que el sexo y la edad
sean considerados cuando se pretenda analizar los indicadores de
sobrepeso, de obesidad y de aptitud física en niños pre-púberes.
Finalmente, el acompañamiento de los índices de desempeño
motor en niños y adolescentes puede contribuir de forma decisiva
en la tentativa de promover la práctica de actividades físicas en
el presente y para toda la vida, por lo que se recomienda que los
atributos relacionados al comportamiento motor sean establecidos
precozmente con el fin de asegurar los niveles esperados hasta que
el proceso de maduración biológica se complete.
Conclusión
A través de los resultados obtenidos podemos concluir que las
variables antropométricas, de edad, peso y % de grasa, influyen
sobre los valores del VO2max en relación al peso corporal en
niñas pre-púberes, no así en el caso de los niños, debido al mayor
acumulo de grasa en las niñas característico de la edad y sexo;
siendo esa tendencia mas diferenciada a partir de la adolescencia.
Sugiriéndose de esta forma, realizar un seguimiento de la capacidad
cardiovascular en los niños, evitando una disminución del estado
de condición física que influiría sobre la salud y la calidad de vida.
86
Influencia de las variables antropométricas sobre la
capacidad aeróbica en niños pre-púberes.
Bibliografía
Alves, F. Barbosa, A; Campos, W; Coelho, R; Silva, S. Analise dos indices de adiposidade e de
aptidão física em crianças prepuberes. Rev Port Cien Desp, 2008, 8(1)85-95.
Anderssen, SA; Cooper, AR; Riddoch, C; Sardinha. LB; Harro, M; Brage, S; et.al. Low cardiorespiratory fitness is a strong predictor for clustering of cardiovascular disease risk factors in children independent of country, age and sex. Eur. J cardiovasc Prev Rehabil
2007;14:526-31.
Bisquerra, R. (1998). Métodos de investigación. Editora Morata, Madrid.
Boileau RA, Lohman TG y Slaughter MH. (1985). Exercise and body composition in children and
youth. Scan, J. Sports Sci., 7,17-27.
Callaway, C.W., Chumlea, C.W., Bouchard, C., Himes, J.H., Lohmant, T., Pollock, M., Roche, A,
and Wilmore, J. Circunferences. In: Lohman, T., Roche, A, Martorell, R. (1988). Anthropometric standarization reference manual. Champaign, Human Kinetics, p.39-53.
Carnethon, MR; Gulati, M; Greenland, P. Prevalence and cardiovascular disease correlates of low
cardiorespiratory fitness in adolescents and adults. JAMA, 2005;294:2981-8
Dencker, M,; Thorsson, O; Karlsson, M.; Lindén, C.; Eeiberg, S.; Wollmer, P.; Andersen, L.
Gender differences and determinants of aerobic fitness in children aged 8-11 years. Eur.
J. Appl Physiol. 2007, 99:9-26).
Eisenmann, J.C. Secular trends in variables associated with the metabolic syndrome of North American children and adolescents: a review ans synthesis. Am. J. Hum Biol. 15(6):786-794,
2003.
Gordon,C., Chumlea, W., Roche, A. (1988). Stature recumbent length and weight. In: Lohman, T.,
Roche, A. Martorell, R. Anthropometric standarization reference manual. Champaign,
Human Kinetics, p.03-05.
Guedes, DP; Guedes, JERP, Barbosa, DS, Oliveira, JA. Atividade Física Habitual e aptidão Física
relacionada a saúde em adolescentes. Ver Brás cienc mov. 2002;10(1):13-21.
Guedes, R. M. Regional body composition: age, sex and ethnica variation. In: AF Roche, SB Heymsfield, TG Lohman (Eds). Human Body Composition. Champaign (Il): Human Kinetics, 217-255, 1996.
Guerra, s; Duarte, J; Mota, J. 2001. Physical activity and cardiovascular disease risk factors in shoolchildren. Eur Phys de rev, 7(3), 269-281.
Huang, Y; Malina, RM. BMI and Health-Related Physical Fitness in Taiwanese Youth 9 – 18 Years.
Med Sci Sports Exerc 2007; 39(5): 701-708.
Jordan, R.J. (1980). Crecimiento y desarrollo del niño de Cuba. Bol. Med. Hosp.Inf. México, 37.
Krahenbuhl, GS, Skinner, JS, Kohrt, WM. Developmental aspects of maximal aerobic power in
children. Exerc Sports Sci Rev. 1985; 13:503-38.
Leger, L.A. Mercier, D., Gadoury, C., Lambert, J. (1988) The multistage 20-metrele run test for
aerobic fitness. J. Sport Sci., v.6, 93-101.
Machado, FA; Guglielmo, LGA; Denadai, BS. Velocidade de corrida associada ao consumo máximo de oxigeno em meninos de 10 a 15 anos. Ver. Brás Med Esporte 2002;8(1):1-6.
Manchado, C; et.al. Fatores fisiológicos e antropométricos associados com a perfomance em subida
no ciclismo off Road. Revista brasileira de ciências e movimento, Brasília, v.10, n.4,
p.35-40, 2002.
McArdle, WD; Katch, FI; Katch, VL. Fundamentos de fisiología del ejercicio. 2ª edición
Madrid:McGraw-Hill/Interamericana;2004.
Moreira , M,; Sardinha , L. Exercício Físico, Composição Corporal e Factores de Risco Cardiovascular na Mulher Pós-Menopáusica. Tese de doutorado, Vila Real: UTAD, 2003.
87
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Okano , A. H.; Altimari , L, R.; Dodero , S. R.; Coelho , C. F.; Almeida , P. B. L.; Cyrino, E. S.
Comparação entre o desempenho motor de crianças de diferentes sexos e grupos étnicos. Rev. Bras. Ciên. e Mov. Brasília 9(3): 39-44, 2001.
Pierón, M. 2003. Estilo de vida, práctica de actividades físicas y deportivas, calidad de vida. Actas
de ponencias del II congreso Mundial de Ciencias de la Actividad física y el deporte.
Deporte y calidad de vida. Granada (Espana).
Ribeiro, J.; Guerra, S,; Pinto, A,; Oliveira, J; duarte, J,; y Mota, J. 2002. Overweight and obesity in
children and adolescents: relationship with blood pressure, and physical activity. Ann
Hum Biol, 30(2), 203-213.
Rizzo, N.S,; Ruiz, J.R,; Hurtig-Wennlof, A; Ortega, F,; Sjostrom. Relationship of physical activity,
fitness, and fatness with clustered metabolic risk in children and adolescents: The european youth heart stusy. J. Pediatr. 150(4):338-394, 2007.
Salbe, A,; Weyer, C,; Harper, I,; Lindsay, R, Ravussin, E,; Tatarani, P. 2003. Assessing the risk factors for obesity between chilhood and adolescents. II. Energy metabolism and phisycal
activity. Pediatrics, 110, 307-314.
Thomas. J., Nelson. J. Research Methods in Physical Activity. Human Kinetics, 1996.
Tourinho Filho, H; Tourinho, L. Crianças, adolescentes e atividade física: aspectos maturacionais e
funcionais. Revista paulista de educação física, São Paulo, 12(1):71-84, 1998.
Vasquez, DG; Silva, KS; Lopez, AS. Aptidão cardiorespiratoria de adolescentes de Florianópolis,
SC. Ver Brás Med Esporte, 2007; 13:376-80.
88
El ejercicio como estrategia de afrontamiento al estrés en estudiantes
de 14 a 18 años de edad, de la Ciudad de Colima, México
El ejercicio como estrategia de
afrontamiento al estrés en estudiantes
de 14 a 18 años de edad, de la Ciudad de
Colima, México
Sara Lidia Pérez Ruvalcaba, Ma. Elena Vidaña Gaytán, Claudia Leticia Yáñez Velasco,
Evelyn Rodríguez Morril, Carlos David Solorio Pérez y Cristina González
Sara Lidia Pérez Ruvalcaba. Doctoranda en Psicopatologías en niños, adultos y ancianos de la
Universidad Rovira i Virgilli, España. Maestra en Psicología General Experimental de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Profesora e Investigadora de Tiempo Completo de
la Universidad de Colima. Miembro del cuerpo Académico CA UCOL-69 “Psicología de la Salud”.
Responsable del proyecto “Estudio de manejo del estrés en jóvenes y adultos universitarios en Latinoamérica”, correo electrónico: [email protected]
Evelyn Rodríguez Morril. Doctora en Psicología por el Instituto INTEGRO, Profesora e Investigadora de Tiempo Completo de la Universidad de Colima. Miembro del cuerpo Académico CA
UCOL-69 “Psicología de la Salud”. Colaboradora del proyecto “Estudio de manejo del estrés en
jóvenes y adultos universitarios en Latinoamérica”, correo electrónico: [email protected]
Carlos David Solorio Pérez. Licenciado en Psicología, candidato al Doctorado en Ciencias
Sociales, en la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad de Colima, colaborador externo
del proyecto de investigación “Estudio de manejo del estrés en jóvenes y adultos universitarios en
Latinoamérica, adscrito a la Facultad de Psicología de la misma Universidad, correo electrónico es:
[email protected]
María Elena Vidaña Gaytán. Doctora en Psicoterapia Humanista por el Instituto Humanista de
Sinaloa, A.C. Maestra en Psicología Clínica y Psicoterapia, por la Universidad Autónoma de Ciudad
Juárez. Maestra en Terapia Familiar Sistémica por el Instituto Regional de Estudios de la Familia
A.C. Profesora e investigadora de la UACJ, Líder CA # 35 Psicología Clínica y de la Salud. Colaboradora externa del proyecto de investigación “Estudio de manejo del estrés en jóvenes y adultos
universitarios en Latinoamérica, adscrito a la Facultad de Psicología de la Universidad de Colima,
correo electrónico: [email protected]
Claudia Leticia Yáñez Velasco. Doctora en Psicología, por INTEGRO. Directora de la Facultad de Psicología de la Universidad de Colima. Miembro del cuerpo Académico CA UCOL-69
“Psicología de la Salud”. Colaboradora del proyecto de investigación “Estudio de manejo del estrés
en jóvenes y adultos universitarios en Latinoamérica, adscrito a la misma Facultad, correo electrónico: [email protected]
Cristina González. Doctora en Psicología. Profesora y Titular de la Cátedra de Psicología Clínica,
de la Universidad Nacional de Córdoba, Argentina. Colaboradora externa del proyecto de investigación “Estudio de manejo del estrés en jóvenes y adultos universitarios en Latinoamérica, correo
electrónico [email protected]
89
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Resumen
Ejercitarse se encuentra dentro de lo denominado actividad física,
lo cual permite reducir riesgos de enfermedades no trasmisibles
(OMS, 2004); su práctica con regularidad propicia mejorar la
calidad de vida, la autoestima, estimular la relajación y facilita el
manejo del estrés.
El objetivo de la investigación fue determinar si estudiantes de
14 a 18 años de educación media superior, utilizan el ejercicio
como estrategia de afrontamiento para el manejo de su estrés
cotidiano. Se aplicó el cuestionario FUSIES (Fuentes, síntomas
y estrategias de afrontamiento al estrés), a 120 estudiantes. El
ejercicio como estrategia de afrontamiento al estrés, es utilizado
“a menudo” por el 58% de las mujeres (70 mujeres de 1º y 3º
semestre), y el 34% de los hombres (28 de 1er semestre). Además,
como estrategias alternas para afrontar el estrés, ellas manifiestan
el buscar la solución del problema, tomar tiempo libre, y cuidar
de su arreglo personal, y ellos escuchar música, buscar compañía y
pensar positivamente. Se concluye que el ejercicio como estrategia
para afrontar el estrés, es necesario motivar a los estudiantes de
este rango de edad especialmente en el último semestre para
practicarlo con mayor frecuencia; evaluándose sus efectos a largo
plazo en cuanto a salud y calidad de vida.
Palabras claves: estrés, ejercicio, estrategias de afrontamiento.
Abstract
To exercise itself is within the denominated physical activity,
which allows to reduce risks of nontransmittable diseases Word
Health Organization (WHO, 2004), its practice with propitious
regularity improves the quality of life, the self-esteem, to stimulate
the relaxation and facilitates the handling of stress. The objective
of the investigation was to determine if students of 14 to 18
years of high school, use the exercise as strategy of facing for the
90
El ejercicio como estrategia de afrontamiento al estrés en estudiantes
de 14 a 18 años de edad, de la Ciudad de Colima, México
handling of their daily stress. It was applied the questionnaire
(FUSIES) Sources, symptoms and strategies of facing stress to 120
students. The exercise as facing strategy is used “often” by 58% of
women (70 women of 1º and 3º semester), and 34% of men (28
of first semester). In addition they to look for the solution of the
problem, take time off, and take care of their personal adjustment
and they listen to music, find company and to think positively.
One concludes that the exercise as strategy to confront stress is
necessary to motivate the students in this age range especially in the
last semestral to practice it most frequently; evaluating its long term
effects as far as health and quality of life.
Key words: stress, exercise, strategies of facing.
Introducción
En este siglo el uso de las nuevas tecnologías ha reducido las
exigencias físicas tanto en el ámbito laboral como educativo.
El poco esfuerzo realizado en actividades cotidianas, como el
dejar el automóvil lo más cerca de la entrada del edificio/casa/
establecimiento, el mantenerse sentado por largos períodos
de tiempo frente al televisor o computadora, propician que los
estudiantes lleven una vida sedentaria y poco saludable. Estas
acciones facilitan que los estudiantes estén propensos a disminuir
la calidad de su motricidad, flexibilidad, fuerza física, resistencia
del cuerpo, dando como resultado un pobre rendimiento en
las actividades de su vida cotidiana con una alta probabilidad a
desarrollar enfermedades crónicas no transmisibles como diabetes,
obesidad, hipertensión, riesgos cardiovasculares.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud 2008
(OMS), las enfermedades crónico-degenerativas son la mayor causa
de discapacidad y muerte en todo el mundo. Responsables del 57%
de los 57 millones de muertes que se producen al año, y del 46%
de la carga global de las enfermedades en general. En América
91
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Latina, el país que tiene más personas con este padecimiento es
México y ocupa el cuarto lugar a nivel mundial por prevalencia de
diabetes (Pérez, Bautista y Bazaldúa: 2008).
En este sentido, en el 2006, en la Encuesta Nacional de
Nutrición (ENSENAUT), se señala que una tercera parte los
adolescentes presentan exceso de peso, es decir, una combinación
de sobrepeso y obesidad. Siete de cada 10 personas entre 18 a 20
años presentan exceso de peso (IMC≥25), y 78% de la población
mayor de 20 años tiene obesidad abdominal, convirtiéndose ésta
última en una de las problemáticas de salud más frecuentes y de
mayor severidad en nuestro país, por sus diversas complicaciones;
y si le sumamos la gama de fuentes de estrés que son generados
por el mundo acelerado en el cual vivimos, el problema de salud
se complica.
Los estudiantes de preparatoria, población objetivo de la
presente investigación, además de afrontar la fuentes de estrés
clasificadas por Domínguez, Valderrama, Olvera, Pérez, Cruz
y González, 2002; como familiares, ambientales, personales,
interpersonales y laborales, habrán de afrontar los generados en
su ámbito escolar.
El estrés es “una situación particular entre el individuo y su
entorno que es evaluado por este como amenazante y/o desbordante
de sus recursos y que pone en peligro su bienestar” (Lazarus y
Folkman, 1986:46); la exposición continua está relacionada
con el inicio o evolución de numerosos procesos patológicos,
que precipita o provoca exacerbaciones de enfermedades
cardiovasculares y psiquiátricas. Aumenta la vulnerabilidad a
enfermedades autoinmunes, gastrointestinales, infecciones,
síndrome de fatiga crónica, consumo excesivo o adicción a drogas,
y diversas alteraciones cognitivas (Everson, Lynch, Kaplan, Lakka,
Sivenius & Salonen, 2001; véase Leza, 2005).
Los eventos estresantes activan el proceso de valoración del
grado de amenaza en relación al bienestar que se persigue (Wah,
92
El ejercicio como estrategia de afrontamiento al estrés en estudiantes
de 14 a 18 años de edad, de la Ciudad de Colima, México
Sawang y Oei, 2010), ante los cuales el individuo tiende a aplicar
estrategias de afrontamiento que le permitan amortiguar su impacto
biológico, psicológico y social.
Cuando un evento es percibido como amenaza o desafío, el
mecanismo de evaluación secundario provee una valoración global
de los recursos con los que cuenta el individuo para manejarlo
(Goh, Sawang y Oei, 2010), mecanismo que es identificado
como afrontamiento y que ha sido definido por Casullo y
Fernández (2001), como el conjunto de respuestas (pensamientos,
sentimientos, acciones) que una persona utiliza para resolver
situaciones problemáticas y reducir las tensiones que ellas generan.
Las estrategias de afrontamiento han sido abordadas desde
distintas perspectivas. Su función será amortiguar los efectos dañinos
del estrés y reestructurar cognoscitivamente la vulnerabilidad
que se percibe al encontrarse en la situación amenazante, o estar
próxima su experimentación, para la cual se cuenta con poco o
nulo control.
Las estrategias de afrontamiento pueden ser cambiantes
dependiendo de las condiciones desencadenantes (Cassareto,
Chau, Oblitas y Valdez: 2003), su aplicación “se inicia después
de la valoración cognitiva y de las eventuales experiencias
psicofisiológicas del evento potencialmente estresante y dependen
de la efectividad de las evaluaciones y procesos cognitivos además
de sus estrategias” (Goh, Sawang y Oei, 2010:13); el tipo de
estrategias y el momento de su aplicación estará relacionadas con
la experiencia, las características del evento a afrontar, la situación
social en la que se presenta, las experiencias relacionadas con el
evento, entre otros; es por ello que podrá aplicarse a tiempo o a
destiempo, en función del momento que se detone o experimente
el estrés, este puede ser psicológico o fisiológico (Minami,
Khuraishi, Yamaguchi, Nakai, Hirai & Satoh, :1991; véase Leza:
2005). El psicológico se puede relacionar con la percepción de
amenaza que se encuentra en la definición proporcionada por
93
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Lazarus y Folkman (1986), el fisiológico con la “perturbación de
homeostasis” (Sandin: 1999; véase González y Landero, 2006:50).
Se ha determinado que el estrés puede ser también oxidativo al
asociarse a la disminución de la fatiga, daño muscular y exceso de
entrenamiento (Pinho, Araújo, Melo y Benetti, 2010).
El estrés también tiene un carácter de reciente (sucesos vitales),
crónico (problemas, amenazas, conflicto relativamente duradero),
diario, como evento menor (Sandin: 1999, 2001, 2003; véase González
y Landero: 2006); agudo, crónico y persistente (Leza: 2005).
Los síntomas físicos más frecuentemente generados por el
estrés son: “taquicardia, manos y pies fríos, insomnio, frío y/o
mariposas en el estómago, sudor de manos, temblor de manos
y piernas, dolor de cabeza, gastritis, colitis, dermatitis, pérdida de
concentración, resequedad de boca, problemas respiratorios, falta
de apetito, ingestión excesiva de alimentos, diarrea, estreñimiento,
dolor de nuca” (Domínguez, Valderrama, Olvera, Pérez, Cruz y
González, 2002:19); los cuales podrán ser autorregulados a través
de la aplicación de estrategias de afrontamiento al estrés, que por
supuesto implicará la reestructuración cognoscitiva de los eventos
que lo producen, una de tales estrategias podría ser el realizar
actividad física.
La actividad física permite el mantenimiento del estado de
salud en las personas desde niños hasta el adulto mayor (Cevallos:
2000), el ejercicio distrae o aleja la atención, produce una
sensación de bienestar corporal y el consecuente mejoramiento de
la autopercepción del cuerpo y la autoestima (Garnier y Waysfeld:
1995; véase Fiorentino: 2006), se recomienda realizar actividades
como caminar, saltar, nadar, montar en bicicleta, durante 30
minutos diarios, ya que sus efectos permiten autocontrolar el
estrés (Quintero: 2006), es una estrategia de afrontamiento
adaptativa que se puede utilizar a tiempo o destiempo de la
situación estresante y que facilita la autorregulación de respuestas
fisiológicas desregularizadas por el estrés cotidiano, como es la
94
El ejercicio como estrategia de afrontamiento al estrés en estudiantes
de 14 a 18 años de edad, de la Ciudad de Colima, México
tensión muscular, la vasoconstricción, la resequedad de boca, el
insomnio, entre otros, su beneficio de distracción permite hacer
un alto en el camino y despejar los pensamientos mal adaptativos y
posteriormente tener la posibilidad de ver el evento estresante con
mayor objetividad.
Con base a información anterior, surge la presente pregunta de
investigación: ¿Los estudiantes de nivel medio superior emplean
el ejercicio como estrategia de afrontamiento al estrés cotidiano?
Objetivo:
Identificar si la práctica del ejercicio es utilizada como estrategia
de afrontamiento para el manejo del estrés en estudiantes de
preparatoria de la Ciudad de Colima, México.
Método y técnicas
Sujetos: 120 estudiantes de nivel medio superior, 70 mujeres entre
las edades de 15 a 17 y 50 hombres de 14 a 18 años de edad, con
un promedio de 16.1 años.
Instrumento:
Cuestionario: FUSIES (fuentes, síntomas y estrategias de
afrontamiento ante el estrés), con alta validez y especificidad con
un Alpha Crombach .9597, consta de 135 reactivos tipo Likert
con opción de respuesta de 1 al 5; el análisis factorial determinó
la identificación de 3 factores (fuentes, síntomas y estrategias de
afrontamiento), los cuales quedaron distribuidos en tres bloques
del mismo nombre: el primero de estresores, con las sub escalas
de académico-laborales, interpersonales-familiares, ambientales
y otros, el segundo de síntomas de estrés, con las sub escalas
de síntomas emocionales, actitudinales, salud física, físicosconductuales y el tercero de Estrategias para manejar el estrés sin
sub escalas (Pérez, García, Velasco, Márquez y Solorio: 2006).
95
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Procedimiento:
Se realizó un estudio observacional, descriptivo y transversal
donde participaron 120 estudiantes de nivel medio superior a
los cuales se les aplicó un instrumento autoadministrado llamado
FUSIES (fuentes, síntomas y estrategias de afrontamiento ante el
estrés). Se analizaron los datos obteniéndose a través de medidas
de tendencia central en función al objetivo del estudio.
Resultados:
A continuación se presentan los resultados obtenidos en función al
semestre cursado y el género de los participantes.
Las mujeres de 1er. semestre de bachillerato (33%), identificaron
en grado 3 (regular) su nivel de estrés en una escala de 1 a 5, donde
1 es nada y 5 extremo, estableciendo como fuentes más estresantes
el estar enfermo, la pérdida de apetito, y no tener vacaciones
en grado 4 (mucho). Las estrategias de afrontamiento utilizadas
casi siempre, fueron buscar la solución del problema, estar en
compañía, pensar positivamente, tomar tiempo libre, escuchar
música y cuidar su arreglo personal.
Los hombres de 1er. semestre de bachillerato (34%),
identificaron en grado 2 (poco) su nivel de estrés en la escala
antes citada, señalando como fuente más estresante el no tener
vacaciones en grado 4 (mucho). La estrategia utilizada casi siempre
fue escuchar música, y a menudo el buscar compañía y pensar
positivamente.
Las mujeres practican ejercicio a menudo (3), y los hombres
algunas veces (2); tanto los hombres como las mujeres de este
semestre prefieren estrategias cognitivas o de distracción para
afrontar su estrés y las estrategias de afrontamiento utilizadas no
se encuentran directamente relacionadas con sus fuentes de estrés.
Las mujeres de 3er. semestre de bachillerato (36%), identificaron
en grado 2 (poco) su nivel de estrés, señalando como fuentes
más estresantes la falta de tiempo, la injusticia de autoridades,
96
El ejercicio como estrategia de afrontamiento al estrés en estudiantes
de 14 a 18 años de edad, de la Ciudad de Colima, México
el trabajo en exceso, el tráfico, y el calor excesivo en grado 4
(mucho). Las estrategias de afrontamiento ejercidas casi siempre
fueron buscar la solución del problema, estar en compañía, pensar
positivamente, escuchar música y cuidar su arreglo personal,
respirar profundamente y ver televisión.
Los hombres de 3er. semestre de bachillerato (30%), identificaron
en grado 3 (regular) su nivel de estrés, estableciendo como fuentes
más estresantes el estar enfermos, ser ignorados, falta de tiempo,
injusticia de autoridades, no tener vacaciones, y el trabajo en exceso
en grado 4 (mucho). Las estrategias de afrontamiento utilizadas casi
siempre fueron el escuchar música y descansar.
Tanto hombres como mujeres de 3º semestre, a menudo se
ejercitan para afrontar el estrés. Las estrategias más frecuentemente
utilizadas por las mujeres están dirigidas al problema (resolverlo,
buscar su solución y pensar positivamente), y los hombres hacia la
evasión (escuchar música y descansar).
Las mujeres de 5er. semestre de bachillerato (31%), identificaron
en grado 3 (regular) su nivel de estrés, determinando como fuente
más estresante la injusticia de autoridades en grado 4 (mucho). La
estrategia de afrontamiento aplicada casi siempre fue escuchar música.
Los hombres de 5er. semestre de bachillerato (32%),
identificaron en grado 3 (regular) su nivel de estrés, estableciendo
como fuentes más estresoras la injusticia de autoridades, y el ser
evaluados en grado 4 (mucho). Las estrategias de afrontamiento
aplicadas casi siempre fueron buscar la solución del problema y
tomar tiempo libre.
En 5º semestre, no aparece el ejercitarse como estrategia para el
manejo del estrés, y continúa el escuchar música para las mujeres
y aparece el buscar la solución del problema para los hombres,
como lo reportaron las mujeres en el 1º semestre. Así mismo, es
necesario atender que en este semestre se reportan como estresor
las evaluaciones.
97
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
En términos generales se puede señalar que el ejercicio como
estrategia de afrontamiento al estrés, lo practican a menudo las
mujeres de 1er y 3er semestre, y los hombres de éste último nivel.
La frecuencia más baja la presentan los hombres de 1er semestre
(algunas veces), y no se ejercitan como estrategia para manejo del
estrés tanto las mujeres como los hombres en 5o semestre; en una
escala de 1 a 5 donde 1 es nunca y 5 es siempre.
Las estrategias de afrontamiento adaptativas al estrés que utilizan
los estudiantes, como el pensar positivamente (mujeres y hombres
de 1er semestre y mujeres de 3º), respirar profundamente (mujeres
de 3er semestre), buscar la solución al problema (mujeres de 1er
semestre y hombres de 5º semestre), es factible presentarse “a
tiempo”, ante las situaciones estresantes de enfermedad y no tener
vacaciones (mujeres de 1er semestre y hombres en 3er semestre),
injusticia de las autoridades (mujeres y hombres de 3er y 5º
semestre), trabajo en exceso (mujeres y hombres de 3er semestre).
Discusión
Los estudiantes de bachillerato de la presente investigación, utilizan
el ejercicio como estrategia de afrontamiento al estrés sólo en 1er y
3er semestre, con una frecuencia de algunas veces en escala nunca
a siempre. Habrá de investigarse más profundamente ampliando
la muestra de estudio ya que Domínguez, Valderrama, Olvera,
Pérez, Cruz y González (2002) identifican que el deporte es la
segunda estrategia de afrontamiento más común.
Si en una muestra de 95 estudiantes de licenciatura se identificó
el deporte como la primera estrategia de afrontamiento al estrés
académico (Pérez, Solorio, Yáñez, Vidaña, Rodríguez y González,
en prensa), habrá de realizarse un estudio longitudinal del uso de
dicha estrategia del bachillerato a la licenciatura, identificándose
las condiciones que expliquen su mayor/menor incidencia,
tomándose en cuenta la forma en que la institución educativa
fomente el desarrollo de actividades deportivas.
98
El ejercicio como estrategia de afrontamiento al estrés en estudiantes
de 14 a 18 años de edad, de la Ciudad de Colima, México
El escuchar música es un estrategia para las mujeres de 5º
semestre, y para los hombres y mujeres de 1er y 3er semestre,
se puede utilizar como reforzador del ejercicio porque permite
disociar el cansancio producido al ejercitarse, estrategia que ha
sido satisfactoriamente utilizada por Karageorghis y Priest (2008).
Si se conoce que una de las estrategias de afrontamiento más
utilizadas por las mujeres de este estudio es el arreglo personal (1º
y 3º), las campañas escolares para incentivar la práctica del deporte
deberán estar enfocadas en sus beneficios en cuanto a la apariencia
personal, ya que, como lo señalan Cabanach, Rodríguez, Valle,
Piñeiro y Millán (2008), la preocupación por la defensa de la
propia imagen personal es una oportunidad para demostrar una
mayor capacidad (2008: 14).
Se propone una línea de investigación relacionada con el
ejercicio, la imagen personal, el estrés académico y sus diferencias
de género, donde las estrategias de afrontamiento, como el
escuchar música se utilice como técnica de disociación.
De continuar siendo el descansar, una estrategia de
afrontamiento (hombres de 3er semestre), se estará perdiendo el
beneficio de niveles óptimos de oxigenación que se adquiere a
través del ejercicio (Pinho, Araújo, Melo y Benetti: 2009).
En función a los resultados obtenidos, se propone caminar,
saltar, nadar y montar en bicicleta durante 30 minutos diarios, ya
que sus efectos se verán reflejados en el fortalecimiento, prevención
o retraso de la hipertensión arterial, obesidad y el sobrepeso,
recomendado por Quintero (2006).
Conclusiones
La frecuencia con la que se ejercitan los estudiantes de esta
investigación no les permite hacer del deporte un hábito. Habrá
de establecerse las medidas necesarias para mostrar sus ventajas
salutogénicas y académicas al ser utilizado como estrategia de
afrontamiento al estrés.
99
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
El ejercitarse puede ser una estrategia de afrontamiento
adaptativa que permita la creación y mantenimiento de redes de
apoyo social y éstas, a su vez, propiciarán la aplicación de otras
estrategias como la de hablar del problema.
Lograr que los estudiantes de bachillerato se ejerciten, como
estrategia para manejar su estrés cotidiano, permitirá integrar
algunas de las estrategias que cotidianamente utilizan como el
buscar compañía y escuchar música.
En situaciones académicas como el someterse a exámenes que
en 5º semestre es fuente de estrés, el buscar compañía y el arreglo
personal (estrategias mayormente utilizadas) no permitirán una
solución directa a la situación académica estresante; a partir de lo
cual se generó la pregunta ¿La búsqueda de compañía es utilizada
como estrategia para mejorar su rendimiento el aprovechamiento
académico?
El buscar la solución del problema podría ser un excelente
amortiguador ante el estrés que causan los exámenes, habrá de
proporcionar a los estudiantes herramientas que le permitan
aplicar esta estrategia de afrontamiento adaptativas “a tiempo”,
para dicho fin.
Considerando que los estudiantes de 3er semestre (hombres),
utilizan el descansar como estrategia de afrontamiento con lo que
no podrán amortiguar sus estresores (enfermedad, ser ignorado,
falta de tiempo, injusticia de autoridades, no tener vacaciones),
se recomienda fomentar el uso del ejercicio para obtener las
sensaciones de descanso que están necesitando, ya que después
de la relajación obtenida, podrá abordar bajo otra perspectiva el
evento estresante.
Será indispensable promover de esta activación física para el
manejo del estrés y para el mejoramiento de la calidad de vida de
los estudiantes de bachillerato.
Se propone una línea de investigación relacionada con el
ejercicio, la imagen personal, el estrés académico y sus diferencias
100
El ejercicio como estrategia de afrontamiento al estrés en estudiantes
de 14 a 18 años de edad, de la Ciudad de Colima, México
de género, donde las estrategias de afrontamiento como el escuchar
música, ver televisión y buscar compañía, sean un recurso para
fomentar el desarrollo del deporte como un hábito.
Bibliografía
Cabanach, R., Rodríguez, S., Valle, A., Piñeiro, I. y Millán, P. (2008). Metas académicas y vulnerabilidad al estrés en contextos académicos. Aula Abierta, 36 (1 y 2), 3-16.
Casullo,M., y Fernández, M. (2001). Estrategias de afrontamiento en estudiantes. Revista del Instituto de investigaciones, 6, 25-49.
Cassareto, M., Chau, C., Oblitas, H., y Valdez, N (2003). Estrés y afrontamiento en estudiantes de
psicología. Revista de Psicología, 2, 364 392.
Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (2006). Resultados por entidad federativa, Chihuahua.
México: Instituto Nacional de Salud Pública
Domínguez, B., Valderrama, P., Olvera, Y., Pérez, S., Cruz, A. y González, L. (2002). Manual para
el Taller Teórico-Práctico de Manejo del Estrés. México: Plaza y Valdez.
Fiorentino, M. (2006). Conductas de la salud. En Oblitas Luis. Psicología de la salud y calidad de
vida (2ª ed) (pp. 57-81). México: Thomson.
Goh, Y., Sawang, S., y Oei, T. (2010). The Revised Transactional Model (RTM) of Occupational
Stress and Coping: An improved process approach. The Australian and New Zealand
Journal of Organisational Psychology, 3, 13-20.
González, R. y Landero, H. (2006). Síntomas psicosomáticos y Teoría Transaccional del estrés.
Ansiedad y estrés. 12 (1), 45-61
Karageroghis, C. y Priest, D. (2008). Music in sport and exercise: an update on research and application. The Sport Journal, 11 (3). Obtenido en la Red Mundial el 29 de diciembre de
2010: http://www.thesportjournal.org/article/music-sport-and-exercise-update-researchand-application
Lazarus, R., y Folkman, S. (1986). El Estrés y Procesos Cognitivos. Barcelona: Editorial Martinez
Roca
Leza, J. (2005). Mecanismos de Daño Cerebral Inducido por Estrés. Ansiedad y Estrés. 11 (2-3),
123-140.
Organización Mundial de la Salud (2004). Estrategia mundial sobre régimen alimentario, actividad
física y salud. 57ª ASAMBLEA MUNDIAL DE LA SALUD. Obtenido de la Red
Mundial el 29 de octubre de 2010: http://www.who.int/moveforhealth/publi-
cations/WHO_resultion_WHA-57_R17_sp.pdf
Organización Mundial de la Salud. (2008). Informe sobre la Salud en el Mundo 2008. Atención
Primaria de Salud, más necesaria que nunca. Ginebra: OMS.
Pérez, E., Bautista, S., y Bazaldúa, A. (2008). Susceptibilidad percibida de Diabetes Mellitus en
adultos no diagnosticados. Obtenido de la Red Mundial el 22 de diciembre de 2010:
http://www.psicologiacientifica.com/bv/psicologia-317-6Pérez, R., García, R., Velasco, Márquez y Solorio, P. (2006) Psicología de la Salud y enfermedades
crónicas. Colombia: PSICOM Editores.
Pérez, S., Solorio, C., Yáñez, C., Vidaña, M., Rodríguez, E., y González, C. (en prensa). Significado
Psicológico del Estrés en el Ámbito académico. Un estudio comparativo en estudiantes
de un Modelo Educativo Tradicional y uno Innovador. Psicología de la Salud y sus
campos de aplicación. México: CUMEX.
101
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Pinho, R., Araújo, M., Melo, G. y Benetti, M. (2010). Enfermedad arterial coronaria, ejercicio físico
y estrés oxidativo. Arquivos Brasilerios de Cardiologia, 94 (4), 531-537.
Quintero, A. (2006). Actividad física y salud. En Marino, F., Cardona, O., y Contreras, L. (Comp.)
Medicina del Deporte (pp. 167-172). Colombia: Corporación para investigaciones Biológicas CIB.
Wah, Y, Sawang, S. y Tian, P. (2010). The Revised Transactional Model (RTM) of Occupational
Stress and Coping: An improved process approach. The Australian and New Zealand
Journal of Organisational Psychology, 3, 13-20.
102
DIVULGACIÓN
2da. Época / Núm. 2 / Julio 2010
Ingeniería en comunicación social
del deporte. Apuntes hacia un programa de trabajo.
Ingeniería en comunicación social
del deporte. Apuntes hacia un programa
de trabajo.
Jesús Galindo Cáceres
Resumen
Se presenta en un primer momento un apunte de problematización
sobre el Deporte considerado como un fenómeno de
comunicación social, donde el concepto de comunicación
social, desde la perspectiva de una Comunicología sistémica y
constructivista, ordena al Deporte como una configuración de
sistemas de información y sistemas de comunicación en procesos
de difusión-dominación y de interacción-colaboración, lo cual
influye de fondo en la configuración de los procesos sociales
generales de convivencia, creación y mantenimiento del mundo
social contemporáneo. Jugar fútbol o mirarlo en la televisión,
forma y refuerza patrones de competencia o de solidaridad, de
individualización o de sentimientos de pertenencia, por ejemplo.
En un segundo momento se presenta una síntesis de las ideas
expresadas en trabajos anteriores sobre la perspectiva de trabajo
Jesús Galindo Cáceres. Mexicano. Doctor en Ciencias Sociales (1985), maestro en Lingüística
(1983) y licenciado en comunicación (1978). Autor de 25 libros y más de doscientos treinta artículos
publicados en trece países de América y Europa. Promotor cultural en diversos proyectos desde
1972. Profesor universitario en Argentina, Brasil, Colombia, Perú, España y México desde 1975.
Fundador del doctorado en Análisis del Discurso y Semiótica de la Cultura, Escuela Nacional de
Antropología e Historia (1996). Fundador del doctorado en Ciencias Sociales, Universidad de Colima (1997). Fundador del doctorado en Comunicación, Universidad Veracruzana (2001). Fundador
del doctorado en Ciencias y Humanidades para el desarrollo Interdisciplinario, Universidad Autónoma de Coahuila y Universidad Nacional Autónoma de México (2010). Miembro de la Asociación
Mexicana de Investigadores de la Comunicación (AMIC) desde 1982. Miembro del Programa de
Estudios sobre las Culturas Contemporáneas (Programa Cultura) desde 1985. Miembro del Sistema
Nacional de Investigadores del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (SNI-CONACYT) desde
1987, SNI III. Promotor del Grupo de Acción en Cultura de Investigación (GACI) desde 1994.
Promotor de la Red de estudios en teoría de la comunicación (REDECOM) y del Grupo hacia una
Comunicología posible (GUCOM) desde 2003. Miembro de la Red Deporte, Cultura y Sociedad
desde 2006. Miembro de la Red Nacional de Promotores Culturales 3D2 desde 2007. Promotor del
Programa hacia una Ingeniería en Comunicación Social desde 2009.
105
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
de una Ingeniería en Comunicación Social del deporte, desde el
contexto de una Ingeniería Social Comunicológica. El deporte es una
parte medular del proceso de civilización, por tanto un proyecto de
la modernidad que necesita ajustes y nuevos cauces de promoción
en el mundo contemporáneo. El Deporte puede ser considerado
como un dispositivo central en los procesos de comunicación de
difusión-dominación o de interacción-colaboración. La práctica
deportiva es el primer escenario de la observación científica sobre
las situaciones con connotación deportiva. En el otro extremo está
la figura del espectáculo.
En cualquiera de los puntos de este gradiente de acción
percepción se encuentra la tensión termodinámica al centro. El
Deporte excita a la tensión social e individual, de su oportuno
manejo operativo depende la configuración de esa tensión y sus
consecuencias. Se requieren diagnósticos adecuados científicos de
la situación deportiva, y diseños de escenarios deportivos con una
nueva imaginación constructiva. Necesitamos entender primero
con claridad qué está pasando con el Deporte, y después una
decisión sobre lo que queremos hacer con el. El Deporte es un
proyecto social histórico de formación de ciudadanos, es momento
de evaluar y rediseñar lo que estamos haciendo con él.
En un tercer momento se presenta un apunte de programa
de trabajo en Ingeniería en Comunicación Social del Deporte,
desde el programa tecnológico de la Intervención como estrategia
comuniconómica y de construcción socioanalítica. En primer
lugar se requiere un buen conocimiento tecnológico de toda
la metodología a la mano para la exploración y diagnóstico de
situaciones deportivas, una buena aproximación científica a la
observación-percepción de lo que está sucediendo en la vida social
desde una perspectiva comunicológica del Deporte, para construir
unos buenos mapas de representaciones sobre lo que sucede, y
para obtener buenos diagnósticos de problemas a resolver. Y por
otra parte se requiere un buen dominio de la tecnología constructiva
106
Ingeniería en comunicación social
del deporte. Apuntes hacia un programa de trabajo.
de vida social, desde programas metodológicos de intervención y
colaboración de procesos de comunicación social deportiva, para
aspirar a diseñar soluciones efectivas de los problemas percibidos en
el diagnóstico, dentro contextos bien observados, bien estudiados.
Palabras Clave.- Ingeniería en Comunicación Social,
Comunicología, Programa Metodológico, Familias tecnológicas,
Intervención, Comunicación Social, Deporte.
Abstract
We present at first a note of questioning on Sport regarded as
a phenomenon of social communication, from the perspective
of a systemic and constructivist Communicology, directs the
sport as a configuration of information and communication
systems of diffusion-domination and collaboration-interaction
processes. This background influences in shaping the general
social processes of living, development and maintenance of the
contemporary social world. For example, playing football or watch
it on television forms and reinforces patterns of competition and
solidarity, individualization or feelings of belonging. In a second
stage a synthesis of the ideas expressed in previous works about the
prospective of work in an Engineering Social Communication of
sport, from the context of a social engineering communicological.
Sport is a central part of the civilization process, therefore a project
of modernity that needs adjustment and new channels of promotion
in the contemporary world. Sport can be considered as a central
device in the communication processes of diffusion-dominance
or interaction-collaboration. Sport practice is the first stage of
scientific observation on the situations with sporting connotation.
At the other extreme is the figure of the spectacle.
In any of the points of this gradient of action perception is the
thermodynamic voltage to the center. Sport excites social and
individual stress; its appropriate operational management depends
107
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
on the configuration of that stress and its consequences. Scientists
accurate diagnoses of the situation of sports are required, sports
venues and designs with a new constructive imagination. We need
to first understand clearly what is happening with sports, and then
a decision about what we want to do with it. Sport is a social history
project of education of citizens, it is time to evaluate and reshape
what we are doing with it.
In a third stage presents a sketch of the work program in
Engineering Social Communications of Sport, from the technology
program of the intervention as a strategy communicology-economic
and socio-analytical construction. First you need a good technical
knowledge of the entire methodology at hand for the screening and
diagnosis of sport situations, a good scientific approach to observationperception of what is happening in society from a perspective
communicological of Sport to build good maps of representations
of what happens, and for good diagnoses of problems to solve. On
the other hand a good knowledge of constructive technology of
social life is required, from methodological Intervention programs
and collaboration of sports social communication processes, to
aspire to design effective solutions of the problems perceived in
the diagnosis, inside observed, or studied contexts either.
Key words.- Engineering in Social Communication, Communicology,
Methodological Program, technological Families, Intervention,
Social Communication, Sport.
Problematización del Deporte como fenómeno de
Comunicación Social.
Se presenta en este primer apartado un apunte de problematización
sobre el deporte considerado como un fenómeno de comunicación
social, desde la perspectiva de una Comunicología emergente
constructivista, que ordena al deporte como una configuración de
sistemas de información y sistemas de comunicación en procesos
108
Ingeniería en comunicación social
del deporte. Apuntes hacia un programa de trabajo.
de difusión-dominación y de interacción-colaboración, lo cual
influye de fondo en la configuración de los procesos sociales
generales de convivencia, creación y mantenimiento del mundo
social contemporáneo. Por ejemplo, jugar fútbol o mirarlo en
la televisión, forma y refuerza patrones de competencia o de
solidaridad, de individualización o de sentimientos de pertenencia,
de cambio o de reforzamiento de formas de convivencia, entre
otras figuras de la vida social.
El deporte es un fenómeno social que fue adquiriendo
importancia y centralidad a lo largo del siglo veinte. Desde la
perspectiva de la agenda popular es de los temas más cercanos
a la vida cotidiana, sobre todo para los hombres. Es un referente
universal, está presente en todas partes del mundo, y el sector
más poderoso y consumidor del planeta no podría vivir sin él.
Las preguntas sobre lo que significa todo esto están en parte en la
mesa de lo interesante y de lo sugerente. Dada su cada vez mayor
relevancia económica y política ha ido ascendiendo en los puestos
de la agenda general global. En forma paralela a este ascenso la
inteligencia y la curiosidad han volteado hacia él poco a poco.
Por supuesto primero fueron los negociantes, en cierto sentido
los políticos, pero ha sido poca la atención de los intelectuales en
términos generales. De alguna forma este texto se ubica en este
último sector de la elite mundial, y trata de aportar elementos para
ajustar cuentas con el déficit que el mundo académico tiene con
tan relevante y aún emergente fenómeno mundial.
Presentar datos que sustenten el argumento de la importancia
social, económica y política del deporte es una redundancia, hay ya
muchas publicaciones en este sentido. La audiencia del deporte es
mayor que la de la audiencia de cualquiera de las grandes religiones.
El comité olímpico internacional agrupa más naciones que la ONU,
los emblemas corporativos más importantes en muchos países son
equipos deportivos o atletas destacados, los deportistas compiten
en popularidad con las estrellas del espectáculo y con los líderes
109
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
políticos y religiosos, el dinero en juego suma cifras astronómicas.
Y eso no es todo, al observar e intentar comprender lo que está
detrás de todo este inmenso e impresionante mundo deportivo,
las hipótesis ponen en juego sentimientos, pasiones, instintos,
configuraciones de la vida humana que sólo los paleontólogos,
los psicólogos, los antropólogos, habían tenido como foco de
su interés. El deporte no aparece en el grupo central de temas
universales de la agenda mundial, como el hambre, la educación, el
terrorismo, la guerra, el narcotráfico, la contaminación ambiental,
la crisis financiera, pero poco a poco se va posicionando como uno
de los temas básicos detrás de estos otros. Una carrera por una
parte silenciosa, por otra parte casi frívola. ¿Qué es el deporte para
el mundo contemporáneo?
Cuando aparece la pregunta por el deporte desde una visión que
pretende comprender el asunto más allá de las agendas prácticas
de lo inmediato o de la costumbre, todo se complica de inmediato.
Un primer recurso es la Historia Social, intentar averiguar desde
cuándo nos acompaña, y con ello interrogar a las fuentes sobre
cuáles fueron las motivaciones, las razones, las coartadas iniciales
de su emergencia, y qué sucedió después, hasta llegar a nuestros
días. Este punto es suficiente para agotar la energía de cualquier
intención y esfuerzo. Y tiene de momento algunas respuestas, una
de ellas la de la Sociología de Norbert Elias, que ubica al deporte
como componente central en el proceso de civilización. Para Elias
el deporte forma parte del movimiento general en occidente que
ensaya la construcción de escenarios y expresiones de la emoción,
que en el pasado tuvieron como centro a la guerra y la muerte, en
las formas del esfuerzo físico y la psicología de la competencia, pero
ahora sin muertes, sin mutilaciones, con ingredientes simbólicos
que permiten que las formas sociales de la testosterona del mundo
pre- moderno se trasformen bajo las nuevas formas del mundo
civilizado de la modernidad. Toda una propuesta, toda una visión
de comprensión y explicación de la aparición y emergencia del
110
Ingeniería en comunicación social
del deporte. Apuntes hacia un programa de trabajo.
deporte en occidente.
La lectura de Elias no es la única, pero es un buen ejemplo
de lo que sucede cuando el deporte es observado más allá de lo
evidente. En esta misma línea el proyecto de la Comunicología
posible ensaya una visión del deporte desde la perspectiva de la
comunicación social. En la propuesta de la Comunicología el
deporte es una configuración de sistemas de información y sistemas
de comunicación. El fenómeno del deporte construido como
asunto de comunicación social permite observar ciertos matices
que le dan una profundidad constructiva muy sugerente. Para un
primer enfoque desde este punto de vista hace falta un pequeño
apunte comunicológico antecedente.
La Comunicología Social posible tiene diversos componentes
que pueden aplicarse al fenómeno del deporte. En principio
distingue dos dimensiones de composición básica de la vida social
desde la relación posible entre sistemas de información en sistemas
de comunicación. Un sistema de información en forma elemental
es una configuración de instrucciones, de órdenes prescriptivas
sobre algo. Así por ejemplo las normas para jugar fútbol son un
sistema de información. Pero las normas para jugar fútbol son sólo
uno de los sistemas de información que están en juego cuando se
juega fútbol, otros sistemas de información también actúan cuando
el árbitro pita y el partido inicia. Por ejemplo todo lo relacionado
con la mentalidad masculina. Todos estos diversos sistemas de
información entran en juego en un sistema de comunicación donde
el tipo de relación entre los diversos sistemas de información
construye el tipo de sistema de comunicación resultante, uno de
los sistemas participantes puede ser el dominante, o pueden llegar
a equilibrarse todos los sistemas de información en juego entre sí.
Por ejemplo, el sistema de información de cierto machismo puede
ser dominante en cierta región social de hombres que juegan al
fútbol. Entonces ellos jugarán guiados sobre todo con un código
de macho. Pero si el sistema de información dominante es el de la
111
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
caballerosidad, entonces el juego acontecerá de otra manera. En un
tercer tipo de caso, el machismo y la caballerosidad se equilibran
para formar un tercer tipo de sistema de comunicación. Este es el
tipo de asuntos que la Comunicología observa.
Al mismo tiempo que lo anterior sucede otras configuraciones
de información están en juego también. Por ejemplo las
personalidades de los jugadores. Cada uno de ellos es un complejo
sistema de comunicación donde diversos sistemas de información
están conviviendo. Entre los jugadores uno son dominantes sobre
otros, el sistema de comunicación del equipo también es una
configuración de diversos sistemas de comunicación individuales
que en el nivel del equipo pueden ser percibidos con sistemas de
información en relación, constituyendo un cierto tipo de sistema
de comunicación equipo resultante. Como puede apreciarse la
figura de sistema de información y sistema de comunicación es
conceptualmente relativa a lo que se está observando, y puede
configurar diversos sistemas de sistemas en relación.
Las relaciones entre sistemas de información pueden ser de dos
tipos básicos, de dominación y de colaboración. En la primera un
sistema o grupos de sistemas de información colonizan y dominan
a otros, los someten a sus prescripciones, desplazando las de los
otros. Por ejemplo en el fútbol, la situación donde la caballerosidad
desplace al machismo, o viceversa. En el caso de la colaboración,
los sistemas de información no se desplazan o dominan, sino que
interactúan como pares y mutuamente se afectan. En el ejemplo
presentado sería el caso en que el machismo y la caballerosidad
pudieran establecer puntos de negociación, normas de convivencia,
de coexistencia, que en lugar de luchar para que sólo uno de los
sistemas sobreviva y domine, los dos pudieran en cierto sentido
convivir afectándose mutuamente.
Pero está el otro escenario presentado, el de los individuos,
además del escenario de los códigos culturales y sociales supra
individuales. En este otro escenario los individuos pueden luchar
112
Ingeniería en comunicación social
del deporte. Apuntes hacia un programa de trabajo.
bajo la norma y perspectiva de que uno vence al otro, y que sólo
puede haber un vencedor, siempre debe haber un vencido, y
que la victoria se justifica con todos los medios y recursos a la
mano para lograrla, y es lo único con valor. Pero también pueden
colaborar para mutuamente enriquecerse, aportarse elementos
que los empoderan en lo individual y en lo grupal, y en donde
todos salen beneficiados. Una forma en que el deporte fomenta
sólo la lucha y la dominación es muy distinta a una forma deportiva
que fomenta la cooperación y la colaboración. En el escenario más
complejo esta configuración de individuos y de equipos deportivos
se relaciona con la otra, la de normas morales y principios
constructivos normativos de la acción deportiva y socio-cultural.
El resultado es un fenómeno de comunicación que es complejo,
y que puede tener diversos matices y configuraciones particulares
concretas. Es decir, no todo los juegos de fútbol son iguales,
dependen de la construcción de que son objeto por los diversos
sistemas de información y comunicación en juego.
Es decir, por una parte es posible la percepción de una
configuración diversa de formas de asociación deportiva en
un juego como el fútbol. Y por otra parte es posible también
observar que en forma tendencial el juego se practica de cierta
forma, con ciertos antecedentes y ciertos efectos. El juego refuerza
la presencia de ciertos sistemas de información, y lo hace en un
acuerdo colectivo en ese sentido. Por ejemplo el machismo. Pero
podría ser de otra manera, el mismo juego con ciertos cambios
en construcción y configuración de relaciones entre sistemas de
información y sistemas de comunicación, podría promover por
ejemplo la caballerosidad, la honestidad, el respeto a los otros. En
un principio el fútbol fue sintetizado con esta última pretensión,
según la hipótesis de la escuela de Norbert Elias. ¿Qué pasó en
el desarrollo de su historia? ¿Cómo llegó hasta nuestro ámbito
social y cultural latinoamericano y mexicano? ¿Es posible cambiar
la historia?
113
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Síntesis del concepto de Ingeniería en Comunicación
Social del Deporte.
En este segundo apartado se presentará una síntesis de las ideas
expresadas en trabajos anteriores sobre la perspectiva de trabajo de
una Ingeniería en Comunicación Social del Deporte, en el contexto
de una Ingeniería Social Comunicológica. El deporte es una parte
medular del proceso de civilización, por tanto un proyecto de la
modernidad que necesita ajustes y nuevos cauces de promoción
en el mundo contemporáneo. El deporte puede ser considerado
como un dispositivo central en los procesos de comunicación
social de difusión-dominación o de interacción-colaboración.
La práctica deportiva en sí misma es el primer escenario de la
observación científica sobre las situaciones con connotación
deportiva. En el otro extremo está la figura del espectáculo. En
cualquiera de los puntos de este gradiente de percepción y acción
se encuentra una tensión termodinámica al centro. El deporte
excita a la tensión social colectiva, grupal, e individual. De su
oportuno manejo operativo depende la configuración de esa
tensión y sus consecuencias. Se requieren diagnósticos adecuados
científicos de la situación deportiva, y diseños de escenarios
deportivos con una nueva imaginación constructiva. Necesitamos
entender primero con claridad qué está pasando con el deporte, y
después tomar decisiones adecuadas sobre lo que queremos hacer
con él. El deporte es un proyecto social histórico de formación de
ciudadanos, es momento de evaluar y rediseñar lo que estamos
haciendo con él.
La mirada comunicológica nos permite observar al deporte
como un conjunto de prácticas, visiones, juegos de sentido,
códigos culturales, objetos, roles, patrones de comportamiento,
figuras sentimentales, formas emocionales, expresiones instintivas,
mercancías, flujos simbólicos y materiales. El mundo del deporte
es un universo. Al sintetizar su complejidad desde la perspectiva
de la comunicación, lo que queda es un movimiento que participa
114
Ingeniería en comunicación social
del deporte. Apuntes hacia un programa de trabajo.
de las dos tendencias dinámicas básicas de la acción comunicativa,
dominar o colaborar. Este es el primer escenario de la observación
comunicológica, a partir de ella se configuran otros elementos, se
reconstruyen todos los componentes hasta llegar de nuevo a la
complejidad original. Ese es el proceso constructivo de un punto
de vista, el comunicológico. Pero empecemos desde el principio.
El fenómeno de comunicación social se distingue en un
primer momento de observación como parte de alguna de las dos
tendencias básicas ya mencionadas. Visto así el deporte aparece
como una forma dinámica de los procesos de comunicación para
la dominación de un sistema de información sobre otros, o como
una forma dinámica de los procesos de comunicación para la
colaboración entre diversos sistemas de información. Tomemos de
nuevo al fútbol como ejemplo. En el campo de juego los jugadores
interactúan en una figura de la lucha, la competencia, por el triunfo
de un equipo sobre el otro. El observador comunicólogo identifica
que los jugadores colaboran hacia dentro del equipo, e intentan
dominar al otro equipo. Esto le da al fútbol una configuración
compleja, es al mismo tiempo un ejercicio de dominación
y un ejercicio de colaboración. Dentro del sentido común
contemporáneo de nuestra forma de percibir como aficionados
o jugadores del fútbol, afirmaríamos con la Comunicología que
un equipo es un sistema de comunicación colaboración, y que un
juego oficial es un sistema de comunicación dominación. Esto visto
desde la perspectiva normal de un individuo que juega u observa
un partido. Pero hay más.
Sobre las figuras anteriores aparecen otras más. El equipo puede
estar ordenado como sistema de comunicación dominación. De
los once jugadores, la tendencia es a que unos cuantos, a veces
uno en especial, dominen a los demás, el resultado es un juego de
equipo cargado hacia cierta parte del equipo. Esto se manifiesta en
el campo de juego, y en lo que se llama el vestuario, las relaciones
personales del grupo de jugadores sin balón de por medio. Por
115
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
otra parte, para bien del espectáculo, por ejemplo, el que dos
equipos colaboren jugando y dejando jugar, beneficia el ir y venir
de la bola, y cierto tipo de flujo de acción en el campo de juego.
En este segundo escenario básico la visión del juego supone
colaboración, no dominación. El azar tendrá la palabra para definir
al ganador en esta competencia abierta de jugar y dejar jugar. La
estrategia de juego vigente tiene en el centro otra configuración de
comunicación, donde la variante básica es no dejar jugar al otro,
o incluso renunciar a jugar abierto para que el otro no juegue con
éxito. Como puede apreciarse el sistema de comunicación del
equipo y del juego entre dos equipos, es más complejo de lo que
parece en un primer lugar. Y si sumamos a otros equipos, ligas,
y torneos, la configuración de comunicación se hace más y más
compleja, e interesante.
Hasta aquí sólo estamos percibiendo al fútbol desde esta su
configuración elemental de equipo y juego. Pero la situación se
complica cuando aparecen otros sistemas de información asociados.
Por ejemplo, el ethos masculino del macho. El fútbol es un juego
que se supone masculino en principio, y promueve formar cierto
tipo de hombres, cierto tipo de masculinidad. La masculinidad
de la dominación es un tipo muy distinto a la masculinidad de
la colaboración. El fútbol es una figura de comunicación que ha
reforzado sobre todo la masculinidad de la dominación. La fuerza
física, las cualidades físicas del hombre guerrero dominante, son
reforzadas por la figura deportiva del fútbol. Es pertinente observar,
siguiendo la argumentación y la reconstrucción histórica de Elias,
que el fútbol forma aún hoy a guerreros. La pregunta es qué tipo
de guerrero es el que necesita la vida social actual. En la Inglaterra
del inicio de la modernidad esta pregunta tuvo una contestación
muy clara, el tipo de guerrero necesario era un guerrero que se
autocontrolara y permitiera la emergencia de una sociedad más
autocontrolada. La alternativa ante la que se construye la figura del
deporte es la guerra, la violencia, la preponderancia costosísima
116
Ingeniería en comunicación social
del deporte. Apuntes hacia un programa de trabajo.
del más fuerte y agresivo. El deporte nace colaborando con una
sociedad emergente, una sociedad donde se pide a los guerreros
que sean menos dominantes y más colaboradores, menos agresivos,
y más receptivos, menos violentos y más sensibles.
Como puede apreciarse el asunto de fondo con el deporte,
con el fútbol en particular, es más complejo que lo que aparece
como un simple juego. Por una parte la sociedad requiere cierto
tipo de masculinidad, y no la tiene. Por otra parte esa misma
sociedad tiene recursos tan valiosos como el deporte para formar
esa masculinidad necesaria para una mejor convivencia ciudadana,
y no lo aprovecha. Parece ser que tenemos olvidos estructurales.
El deporte surge para formar caballeros, ciudadanos, pero la veta
de la lucha, de la confrontación, sigue siendo atractiva, y sin la
mediación constructiva original, se convierte en una forma más
del sólo luchar, del excitarse, del expresar las ganas de matar, de
dominar. El sistema de información general del deporte no ha sido
descompuesto hasta niveles por completo retrógradas. Aún en los
escenarios más exitosos el deporte es claramente una confrontación
alternativa a la lucha hasta morir. El deporte es una lucha que excita
en forma similar a la lucha hasta morir, pero sin morir, y sin matar.
En todo esto hay configuraciones constructivas muy importantes,
poderosas, que pueden seguir la trayectoria actual, comercial y
espectacular, hasta donde esto nos lleve, o pueden ser reordenadas
en el programa original de construcción de ciudadanía, de actores
modernos. Aquí es en donde puede aparecer la Ingeniería Social,
la Ingeniería en Comunicación Social.
La idea es entonces que lo que hace el deporte lo siga haciendo,
pero bajo supervisión de un programa social de construcción de
ciudadanía. Como aparece en los párrafos anteriores en buena parte
el deporte nace en la modernidad occidental con ese propósito,
transformar a los guerreros asesinos, formar ciudadanos. Así
que no es algo ajeno o arbitrario el proponerse un programa de
ciudadanización a partir del deporte. La Comunicología propone
117
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
los marcos de observación para entender cómo está siendo
construido el deporte en este momento. Y será la Ingeniería en
Comunicación Social, la que partiendo de esas observaciones
de la Comunicología, proponga rutas de acción para intervenir
la práctica deportiva, o la fenomenología deportiva en general, a
favor de programas más claramente socio-culturales de evolución
ciudadana productiva.
En este programa posible de Ingeniería en Comunicación
Social del deporte, los dos escenarios básicos en los cuales se
podría aplicar son, por una parte la práctica deportiva en sí misma,
afectando al jugador, al deportista, que en su actividad misma dentro
de la forma deportiva, se convierte en un ciudadano cada vez más
capaz y empático en el proyecto social de formación ciudadana
por el deporte. Y por otra parte está el mundo del deporte como
espectáculo. Ahí el trabajo es armónico con el primer escenario,
pero con otros elementos de intervención. No es lo mismo un
deportista que un espectador deportivo, aunque están conectados
por el mismo dispositivo de la excitación, de la emoción extrema,
de la satisfacción por la lucha y la victoria.
La Ingeniería en Comunicación Social del deporte supone un
ejercicio de imaginación constructiva superior. Primero se trata
de entender lo que pasa hoy con el deporte, conocer a fondo su
construcción social y los efectos de esa construcción. Segundo,
conocer los elementos constructivos elementales, fundamentales, de
la fenomenología del deporte, para entender dónde se encuentran
los operadores que construyen lo que tenemos. Tercero, a partir
de esos operadores iniciar un proceso de intervención que vaya
modificando la fenomenología en la dirección y sentido previstos
por el programa de formación de ciudadanos. Y por supuesto en
cuarto lugar, el aprendizaje de todo el proceso para ajustar, mejorar,
hacer más eficientes y eficaces las operaciones controladas.
El ejercicio de la Ingeniería en Comunicación Social puede ser
parte de un programa público, de Estado. Pero también puede
118
Ingeniería en comunicación social
del deporte. Apuntes hacia un programa de trabajo.
ser parte de programas particulares, en escuelas, ligas, asociaciones
regionales. Tenemos un espacio de intervención muy grande,
el deporte es parte de la vida social contemporánea, una parte
sustantiva. Además de hacer crecer todo lo dicho hasta ahora,
también hace falta el desarrollo de una propuesta metodológica
específica. Esta dimensión del trabajo es el centro operativo de
la intervención eficaz de un programa o una acción concertada
de Ingeniería en Comunicación Social. De eso trata el siguiente y
último apartado de este texto.
Hacia un programa de Ingeniería en Comunicación
Social del Deporte.
En esta tercera parte se presenta un apunte de programa de trabajo
en Ingeniería en Comunicación Social del Deporte, ahora si con
mayúsculas, desde el programa metodológico-tecnológico de la
Intervención como estrategia comuniconómica y de construcción
socioanalítica. En primer lugar se requiere el mejor conocimiento
tecnológico posible de toda la metodología disponible para la
exploración y el diagnóstico de situaciones deportivas. Con ello
se aspira a una buena aproximación científica de la observaciónpercepción de lo que está sucediendo en la vida social desde una
perspectiva comunicológica del Deporte. Y con ello se pretendería
construir unos buenos mapas de representaciones sobre lo que
sucede, claridad y precisión en el diagnóstico de los problemas
por resolver. Por otra parte se requiere un buen dominio de
la tecnología constructiva de la vida social, desde programas
metodológicos de Intervención y colaboración en procesos de
comunicación social deportiva, para aspirar a diseñar soluciones
efectivas a los problemas percibidos en el diagnóstico, siempre
dentro de contextos bien observados, bien estudiados.
El punto de arranque para un programa de trabajo en Ingeniería
en Comunicación Social del Deporte es tener una cierta claridad
sobre lo que se va a construir a mediano y largo plazo, desde
119
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
ciertos parámetros constructivos. Necesitamos algunos conceptos
y perspectivas antes de hilvanar lo pertinente. Los primeros
conceptos son el de programa de investigación y el de programa
metodológico.
Todo se relaciona con el programa de investigación. De ahí
parten todos los proyectos particulares, concretos, en el se incuban
propuestas e ideas, ahí se acomodan los hallazgos y las preguntas.
El programa de investigación tiene marcos macros y micros de
desarrollo. En el nivel macro la configuración de preguntas y
problemas es general, la totalidad de lo que se quiere conocer o
resolver aparece como un gran bloque constituido de pequeños
y grandes esfuerzos para desentrañar incógnitas. No es algo que
pueda ser construido desde una sola voluntad o un solo lugar,
aunque a veces así lo parezca, es más bien algo en lo que muchos
concentran su interés y su energía, para entre todos avanzar como
un gran conjunto. Los programas de investigación macro son de
las dimensiones de los programas generales de una comunidad
científica completa, los físicos, los sociólogos, los comunicólogos.
En las proporciones intermedias y micros están los programas
de investigación a la escala de regiones de la comunidad científica,
de centros de investigación, o incluso equipos o individuos
particulares. Aquí lo que es más importante resaltar es el tiempo.
El programa de investigación es un objeto del deseo, es algo que se
visualiza en el tiempo a largo plazo. Es deseable que los programas
individuales se relacionen con los programas de equipos, redes,
grupos, y esos programas intermedios a su vez es importante que se
relacionen con los grandes programas de la comunidad científica.
Todo esto es relativo a lo que los investigadores individuales
estén haciendo en particular, y de cómo eso particular se asocia
a intereses, preguntas, proyectos, más generales y colectivos. Un
mundo de la ciencia ideal frente a un mundo de la ciencia real que
trata de alcanzarlo.
120
Ingeniería en comunicación social
del deporte. Apuntes hacia un programa de trabajo.
El centro de los programas de investigación son las preguntas
y los problemas. Las primeras promueven a la ciencia, al
conocimiento del mundo y su composición y organización. Los
segundos gestionan a la ingeniería, al conocimiento práctico, a la
acción reflexiva que resuelve, inventa, crea, lo que necesitamos para
mejor vivir y convivir. Es posible entonces hablar de programas de
investigación mixtos, y programas de investigación más inclinados
a uno y otro énfasis. El sólo responder preguntas o el sólo resolver
problemas. La Comunicología supone un énfasis en las preguntas,
la Ingeniería en Comunicación Social un énfasis en los problemas.
Si queremos avanzar en este marco, necesitamos herramientas
para construir el conocimiento sobre la vida deportiva, y
herramientas para construir a la vida deportiva en sí misma. Para
ello requerimos de los programas metodológicos. Cadenas de
operaciones relativamente estandarizadas que permiten actuar
para buscar la respuesta a una pregunta, configurar las preguntas,
identificar problemas, y resolverlos. Los programas metodológicos
son algo así como una forma de explorar al mundo para conocerlo,
o una forma de conocer al mundo para intervenirlo. Así que
tenemos programas metodológicos para promover a los programas
de investigación científica y a los programas de investigación
en ingeniería. En nuestro caso programas metodológicos para
promover a la Comunicología del Deporte y a la Ingeniería en
Comunicación Social del Deporte.
En el caso de la Ingeniería el programa metodológico general
supone dos operaciones generales, el diagnóstico de problemas y
el diseño de soluciones. Estas dos macro operaciones adquieren
configuraciones específicas dependiendo del campo de trabajo
de que se trate, la medicina, la mecánica, la electricidad, la
construcción de objetos diversos, la vida social, el deporte. En el
diagnóstico, la exploración del objeto de estudio es la clave, y por
tanto las operaciones de observación, registro y análisis, constituyen
el centro del programa metodológico. En el diseño, la intervención
121
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
en el objeto de trabajo es la clave, y por tanto las operaciones de
representación, modelización, simulación y ejecución, constituyen
el centro del programa metodológico.
Así que lo requerido para un buen diagnóstico en asuntos del
deporte sería un buen punto de observación, o varios, un primer
esquema que permita ordenar las observaciones, organizarlas,
sintetizarlas. La configuración espacio tiempo es muy importante.
El diagnóstico observa algo en un momento presente, pero necesita
ubicarlo en una trayectoria constructiva en el tiempo, en un antes
y en un después. Eso permite proveer de las claves para el diseño
de intervención en ese proceso, donde lo que se quiere es reforzar
una tendencia, diluirla, o mantenerla. En el caso del deporte sería
observar lo que sucede en las prácticas deportivas o en el fenómeno
del espectáculo deportivo, y a partir de ello decidir qué se quiere
mantener, qué se quiere diluir, qué se quiere reforzar, e incluso
qué es necesario crear que en el diagnóstico no aparece.
El programa posible en Ingeniería en Comunicación Social del
Deporte supone entonces un buen programa diagnóstico, donde la
Comunicología es el primer referente para observar a las prácticas
deportivas y al espectáculo deportivo. Ahí la clave es aquello de
observar al deporte como configuración de sistemas de información
y comunicación en procesos dinámicos de dominación o de
colaboración, dentro de las formas generales comunicológicas de la
difusión y la interacción. Para lograr este conjunto de observaciones
necesarias se requiere tiempo y método. Ahí aparecen las familias
tecnológicas de observación dentro de los programas metodológicos
tradicionales y heterodoxos, que combinan tecnologías distributivas
como la encuesta, fenomenológicas como la etnografía, y
estructurales como la entrevista, la historia de vida y los grupos de
discusión. A todo ello se aplicarán tecnologías analíticas positivistas,
como la estadística, y hermenéuticas, como el análisis del discurso.
Lo que se busca es conocer el objeto de estudio, construir una buena
representación de el, identificando los elementos que están en juego
122
Ingeniería en comunicación social
del deporte. Apuntes hacia un programa de trabajo.
en los problemas propuestos en un inicio, y las configuraciones
problemáticas que surgen a partir del programa diagnóstico.
La pregunta central en el diagnóstico es sobre un problema que
se está identificando en su composición y organización. El trabajo
sobre el diagnóstico puede ser la respuesta a una demanda, ese es
un primer escenario. Puede ser también resultado de la búsqueda
intencional de algo que no es del todo evidente. Puede ser la
respuesta a un programa general de reingeniería, de desarrollo,
de economía de gasto energético. El programa diagnóstico puede
responder a diversos escenarios, y procede en todos los casos
de forma similar, y con ajustes según las condiciones del inicio
del proceso de investigación, los recursos disponibles, el tiempo,
y para mucho ingenieros el punto principal, las expectativas de
duración de la solución posible.
Después del diagnóstico sigue el diseño de la solución. En
ciencias sociales tenemos tecnologías de trabajo que combinan
diagnóstico y diseño en el mismo paquete metodológico. Tal es el
caso del socioanálisis y de la investigación acción participativa. En
un caso se procede por demanda, en el otro a partir de la intención
de intervenir a priori por alguna razón una configuración social.
Para el caso del deporte y de la perspectiva de la Ingeniería en
Comunicación Social, se requiere aplicar con ajustes estas dos
propuestas tecnológicas ya probadas y exitosas, al tiempo que
se ensayan nuevas propuestas. En el caso de la comunicación
como matriz para concebir y desarrollar el ámbito del deporte, la
casuística tiene un lugar privilegiado, como en otros campos. En el
tema de la comunicación es la Comuniconomía la propuesta más
práctica para la construcción de una Ingeniería en Comunicación
Social deportiva a partir del análisis de casos concretos.
La Comuniconomía del Deporte supone la configuración de
casos típicos de composición y organización tanto del macro tipo
de las prácticas deportivas, como del macro tipo del espectáculo
deportivo. Se trata de reunir información suficiente y recurrente para
123
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
tipificar una correlación estándar entre cierto tipo de problemas y
cierto tipo de solución. La Comuniconomía simplifica la casuística
proponiéndose armar un grupo de casos típicos, con los cuales
un ingeniero pueda en poco tiempo diagnosticar y aplicar una
solución, reconociendo en el diagnóstico la consistencia de ciertos
indicadores con un modelo de problemas típicos construido
previamente, y por tanto la correlación probable con una solución
ya tipificada a partir de esos indicadores.
La Ingeniería en Comunicación Social del Deporte por tanto
trabaja en principio sobre dos grandes escenarios, las prácticas
deportivas y el espectáculo deportivo. Se mueve dentro del programa
metodológico general de la Ingeniería, el diagnóstico de problemas y
el diseño de soluciones. En particular se alimenta de los programas
metodológicos estándar de las ciencias sociales para uno y otro
asunto. En el caso del diseño de soluciones se mueve en la lógica
que en ciencias sociales nos ha mostrado el trabajo del Socioanálisis
y la Investigación Acción Participativa. Y busca estandarizar tipos
de problemas con tipos de soluciones en una figura denominada
Comuniconomía del Deporte. Todo esto enmarcaría en principio el
apunte inicial para un programa de trabajo general sobre Ingeniería
en Comunicación Social del Deporte.
Bibliografía.
Adams, Richard N. (1978). La red de la expansión humana. México: Ediciones de la Casa Chata.
Alcaide Hernández, Francisco. (2009). Fútbol. Fenómeno de fenómenos. Salamanca: LID Editorial
Empresarial.
Ander-Egg, Ezequiel. (1990). Repensando la investigación-acción-participativa. México: El Ateneo.
Anderson, Benedict. (1993). Comunidades imaginadas. México: Fondo de Cultura Económica.
Anderson, Tom. (1994). El equipo reflexivo. Barcelona: Gedisa.
Bauman, Zygmunt. (2008). Comunidad. Madrid: Siglo XXI Editores.
Beriain, Josetxo y Maya Aguiluz (editores). (2007). Las contradicciones culturales de la modernidad.
Anthropos, Universidad Autónoma Metropolitana Ixtapalapa, Universidad Nacional
Autónoma de México-CEIICH, Universidad Nacional de Colombia, Barcelona.
Boden, Margaret. (1994). La mente creativa. Barcelona: Gedisa.
Braun, Eliezer. (2009). Caos, fractales y cosas rara. México: Fondo de Cultura Económica.
Bruner, Jerome. (1988). Realidad mental y mundos posibles. Barcelona: Gedisa.
Cáceres, María Dolores. (2003). Introducción a la comunicación interpersonal. Madrid: Síntesis.
Caffarel, Carmen (compiladora). (1996). El concepto de información en las ciencias naturales y
sociales. Madrid, Universidad Complutense.
124
Ingeniería en comunicación social
del deporte. Apuntes hacia un programa de trabajo.
Cimadevilla, Gustavo. (2004). Dominios. Crítica a la razón intervencionista, la comunicación y el
desarrollo sustentable. Buenos Aires: Prometeo Libros.
Coulon, Alain. (1988). La etnometodología. Barcelona, Cátedra.
De Kerckhove, Derrick. (1999). Inteligencias en conexión. Barcelona, Gedisa.
Débord, G. (1995). La sociedad del espectáculo. Buenos Aires: La Marca.
Díaz Larrañaga, Nancy (editora). (2006). Temporalidades. La Plata: Editorial de la Universidad
Nacional de La Plata.
Elias, Norbert y Eric Dunning. (1995). Deporte y ocio en el proceso de la civilización. México:
Fondo de Cultura Económica.
Elster, Jon R. C. (1990). Tuercas y tornillos. Barcelona: Gedisa.
Galindo Cáceres, Luis Jesús. (1997). Sabor a ti. Metodología cualitativa en investigación social. Xalapa: Universidad Veracruzana.
Galindo Cáceres, Luis Jesús. (2005). Hacia una Comunicología posible. San Luis Potosí: Universidad Autónoma de San Luis Potosí.
Galindo Cáceres, Jesús (coordinador). (1998). Técnicas de investigación en sociedad, cultura y comunicación. México: Addison Wesley-Longman.
Gergen, Kenneth J. (1996). Realidades y relaciones. Barcelona: Paidós.
Ibáñez, Jesús. (1985). Del algoritmo al sujeto. Madrid: Siglo XXI.
Ibáñez, Jesús (coordinador). (1998). Nuevos Avances en la Investigación social I y II. Proyecto A,
Barcelona.
Ibáñez, Tomás. (1994). Psicología social construccionista. Guadalajara Universidad de Guadalajara.
Katz, Daniel y Robert L. Kahn. (1977). Psicología social de las organizaciones. México: Trillas.
Manero Brito, Roberto. (1992). La novela institucional del socioanálisis. México: Colofón.
Marc, Edmond y Dominique Picard. (1992). La interacción social. Barcelona: Paidós.
Martín Serrano, Manuel. (2007). Teoría de la comunicación. La comunicación, la vida y la sociedad.
Madrid: McGraw Hill.
Mead, George Herbert. (1968). Espíritu, persona y sociedad. Buenos Aires: Paidós.
Moles, Abraham y Elizabeth Rohmer. (1983). Teoría estructural de la comunicación y la sociedad.
México: Trillas.
Murcia Florián, Jorge. (1997). Investigar para cambiar. Bogotá: Magisterio.
Piaget, Jean. (2005). La equilibración de las estructuras cognitivas: problema central del desarrollo.
México: Siglo XXI.
Reséndiz Núñez, Daniel. (2008). El rompecabezas de la ingeniería. Por qué y cómo se transforma
el mundo. México: Fondo de Cultura Económica.
Rheingold, Howard. (2004). Multitudes Inteligentes. La próxima revolución social. Barcelona: Gedisa.
Rogers, Everett M. y Rekha Agarwala-Rogers. (1980). La comunicación en las organizaciones. México: McGraw-Hill.
Schneider, Eric D. y Dorion Sagan. (2008). La Termodinámica de la vida. Física, cosmología, ecología y evolución. Barcelona: Tusquets.
Sluzki, Carlos. (1996). La red social. Barcelona: Gedisa.
Tapscott, Don y Anthony D. Williams. (2007). Wikinomics. La nueva economía de las multitudes
inteligentes. Barcelona: Paidós.
Varela, Francisco. (1990). Conocer. Barcelona: Gedisa.
Villasante, Tomás R. (2006). Desbordes creativos. Estilos y estrategias para la transformación social.
Madrid: Los libros de la Catarata.
Von Foerster, Heinz. (1998). Sistémica elemental. Medellín: EAFIT.
Watzlawick, Paul et al. (1971). Teoría de la comunicación humana. Buenos Aires: Tiempo contemporáneo.
125
Friedrich Nietzsche: El Cuerpo y la Danza
Friedrich Nietzsche:
El Cuerpo y la Danza
Alberto Cabañas Osorio
Resumen.
El presente texto, es resultado del Primer Congreso entorno al
pensamiento de Friedrich Nietzsche realizado en agosto de 2010,
en la Facultad de Filosofía y Letras de la Benemérita Universidad
Autónoma de Puebla, en el marco del homenaje realizado a la
vida y obra de Nietzsche y el centenario de su muerte. En este
sentido, el presente texto aparece como una interpretación hacia
las nociones fundamentales de cuerpo y danza que el filósofo
propone en gran parte de su obra. Es por ello que destacamos
las ideas de cuerpo potencia y cuerpo transfigurado que Nietzsche
propone, para generar la concepción de cuerpo del superhombre.
Ideas que posteriormente serán retomadas e interpretadas por
Isadora Duncan, la bailarina norteamericana que más tarde
concretará la filosofía de Nietzsche como principios de ruptura de
la danza clásica con la danza moderna en el mundo.
Abstracs
The present text is the result of the First Congress around the
thought of Friedrich Nietzsche held in August 2010, at the Faculty
of Philosophy and Letters of the Autonomous University of Puebla,
as part of the homage realized to the life and work of Nietzsche
Alberto Cabañas Osorio. Doctor en Historia del Arte con especialidad en cine y Maestro en
Historia del Arte por la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM. Lic. en Ciencias de la Comunicación por la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, y Lic. En Artes escénicas
por el CENART-INBA, además de contar en su formación con cursos y diplomados en materia de
Arte, Educación Artística, Comunicación y Cultura. Ha ejercido la docencia en instituciones como
la UNAM, escuelas del INBA y la Universidad del Valle de México, entre otras. Ha publicado
ensayos y artículos sobre cine, performances y teoría del arte contemporáneo. Curador, museógrafo
y escritor de cédulas de sala para diversas exposiciones e instituciones como El Colegio de México
y el Senado de la República entre otras. Actualmente es Académico de tiempo completo en el Departamento de Comunicación de la Universidad Iberoamericana e imparte clases en la Licenciatura
y en el postgrado en Comunicación.
127
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
and the centenary of his death. In this sense, this text appears as
an interpretation to the fundamental notions of body and dance
that the philosopher suggests to a large extent of his work. That
is why we emphasize the ideas of body power and transfigured
body that Nietzsche proposed to generate the conception of the
body of superman. Ideas that will be subsequently adopted and
performed by Isadora Duncan, American dancer who later realize
the philosophy of Nietzsche as principles rupture of classical dance
with modern dance in the world.
Key words: Body, power, configuration, creation and dance.
Introducción
Al exponer un punto de vista sobre el filósofo más irreverente
de la ciencia, la técnica y la ilustración, también interrogamos
un pensamiento bien sabido por todos controvertido, pero cuya
grandeza, como ya la historia de la filosofía lo reafirma, alcanzará
todavía varios de los siglos venideros. Es por ello que en principio,
iniciamos nuestra exposición, afirmando categóricamente que el
pensamiento de Nietzsche es el precursor de un heroísmo abierto
y rabioso en contra de toda miopía de lo verificable y comprobable
visto como lo racional, y se ha convertido, hasta nuestros días, en
referencia y combate franco contra toda razón absoluta entendida
como lo apolíneo.
De este modo, el proyecto de pensamiento dedicado a la
vida y la creación que Nietzsche sugiere, es un proyecto siempre
encarnado, como el propio filósofo lo dijera, en lo dionisiaco por
encima de lo apolíneo. Es decir, en lo orgánico y sensitivo del
cuerpo en su conjunto, muy por encima de la razón positivista
y sus estrategias lógicas de explicación del mundo. Un proyecto
de vida que hoy entendemos como una sistemática declaración
de guerra, dirigida a todo formalismo del pensamiento y a la
acción humana inmóvil y sin motivación creativa. Una filosofía
128
Friedrich Nietzsche: El Cuerpo y la Danza
cuyos violentos ataques hacia todo optimismo metafísico, pasivo
y divino, constituyen la apertura y el desarrollo de los saberes y
las potencialidades del cuerpo en el hombre.4 Punto de partida
que toma el yo psicológico, como un yo integrado en la piel y no
solo en algunos sitios o segmentos del cuerpo del cuerpo como
la cabeza. Pues en Friedrich Nietzsche el cuerpo aparece no solo
como porción de lo viviente, como materia, sino como porción de
existencia que integra pasado y porvenir para irrumpir con todas
sus fuerzas creativas en el ser y su presente. Un pensamiento que
en principio no separa lo intelectual de lo sensitivo, esto es, el
cuerpo de su espíritu como el edificio conceptual de la filosófica
de Occidente lo ha formulado.
Desde esta visión dionisíaca del cuerpo, en Así habló Zarathustra,
Nietzsche nos dice:
“Yo solo creería en un Dios que supiera bailar.
Cuando vi a mi demonio lo hallé serio y grave,
profundo y solemne. Era el espíritu de la
pesadez: por él caen todas las cosas.
¡No se mata con la ira, sino con la risa:
Matemos, pues al espíritu de la pesadez!
Aprendí a caminar, y desde entonces corro.
Aprendí a volar, y desde entonces no tolero que
me empujen para pasar de un sitio a otro.
¡Ahora soy ligero, ahora vuelo, ahora me veo a
mí mismo por debajo de mí!
Ahora un Dios baila en mí”
Del leer y escribir con la sangre: Así habló Zarathustra 5
4. Granier, De Jean México ¿Qué sé? Nietzsche., Consejo Nacional para la Cultura y las Artes.
5. Nietzsche, Friedrich. Así habló Zaratustra. Ed. Madrid Sarpe, 1983. Pág. 40
129
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
El dios danzante
En el pasaje señalado, Nietzsche nombra a un dios que conoce
el arte de la danza, y subraya que ese dios es el que lo habita. La
imagen que nos propone, es la de una deidad viva, dinámica y en
perpetuo movimiento. En esa noción del dios en movimiento, del
dios danzante que habita un cuerpo, Nietzsche ya regresa, lo que
él considerará a lo largo de su obra, como las verdades del cuerpo;
un cuerpo con todas sus habilidades, sabidurías y capacidades que
aparece como un dios en sí mismo. Un dios que se distingue por
vivir un cuerpo como acto creador y potencia que se convertirá en
el cuerpo del superhombre. Una potencia creativa que se levanta
con toda su sabiduría por encima de la razón absoluta, vista la
razón, como una perpetua pretensión de petrificar y disecar todo
lo que mira.
La imagen del dios danzante, nos sugiere de entrada diversas
interrogantes en torno a la noción de cuerpo, y sus principios de
acción a través de sus correlatos con el arte de la danza. Pues como
observamos, el método de conocimiento nietzscheano aparece
inscrito en el organismo viviente, y sus modos de expresión se
revelan por la exhuberancia de los instintos y los deseos del ser.
Ambos procesos se constituirán, según el filósofo del cuerpo,
como principio y vigilia permanente del yo orgánico y materia.
Como una permanente potencia de lo viviente.
En el proceso, el instinto, nos sugiere Nietzsche, es el genio
rector, en cuyos actos aparece lo perfecto sin mentira, pues
el instinto no sabe mentir, y es, al mismo tiempo, el regulador
armónico del cuerpo en su conjunto, en donde el deber ser de la
conciencia y su constante vigilia sobre el mundo se anulan por la
síntesis somática que propone el conjunto sensorial del cuerpo:
lugar, organicidad y tiempo, en donde se educa la vigilia y se
almacena la total experiencia de la vida.6
6. Op. Cit. Granier, De Jean México ¿Qué sé? Nietzsche. Pág. 45
130
Friedrich Nietzsche: El Cuerpo y la Danza
La voluntad de poder
En tal forma de conocer el mundo, la voluntad interior del hombre,
es entendida como una voluntad de poder, que promueve una
subjetividad global y armónica en el conjunto del esquema corporal.7
Esta concepción de cuerpo, es capaz de modificar la visión pasiva y
racional del mundo inmediato y circundante, pero también el de la
historia y su forma de concebirla; al mismo tiempo que promueve,
que la estandarización de la felicidad humana propuesta por las
promesas de la especulación y la modernidad tecnológica, cedan
su rigidez frente a los procesos somáticos de la vida.
Nietzsche nos aclara, que en la experiencia de habitar un cuerpo,
se está más allá de una vulgar felicidad terrestre a través de la liberación
del deseo, es decir: de una liberación del instinto sin proyecto, pues
en la experiencia de habitar un cuerpo, también aparece la idea de
transfigurar el mudo. De esta forma, la propuesta de Nietzsche,
es la propuesta del cuerpo como productor de grandes obras, y
subraya impetuosamente, que la voluntad de poder es la traducción
de la materia con la más extrema energía, y es la transformación
del mundo, a fin de poder tolerar el vivir en él; he aquí la fortaleza
del instinto motor que Nietzsche propone. El cuerpo es potencia
y voluntad de transfigurar el mundo, y nos sugiere entonces como
advertencia, que la creación llevada al arte, la encontramos a fin de
no morir de tanta verdad en el mundo, y de tanto ser y estar del
mundo.8 En este mismo sentido Nietzsche escribe:
«Un día, sentado sobre una piedra, delante de
su caverna, mirando a lo lejos en silencio, sus
animales pensativos empezaron a dar vuelta en
derredor suyo, y acabaron por situarse delante de él.
¡Oh, Zaratustra, dijeron, ¿es que buscas con los
ojos tu felicidad?!
7. Íbidem, Pág. 57
8. Íbidem, Pág. 43
131
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
¡Qué importa la felicidad - contestó - hace
tiempo que no aspiro a la felicidad, aspiro a mi obra!
De la ofrenda de miel. Así habló Zaratustra9
El pasaje nos muestra que la felicidad deja de estar en la
contemplación para sumergirse en la acción, y al incorporar
el concepto de razón a un conjunto armónico del cuerpo,
Nietzsche lo propone como una interpretación dinámica sobre
la realidad vivida, y se aleja así, definitivamente de la concepción
occidentalizada y platónica del cuerpo como sepulcro del alma. Un
cuerpo idealizado en donde el alma no aparece como informadora
del mundo, sino como su prisionera. Así mismo, Nietzsche se
separa radicalmente del concepto de vigilia como representación
de la vida anímica, y en consecuencia, anuncia al conjunto corporal
como articulación de procesos orgánicos y sensibles, a manera de
una gran razón, al que atribuye pensamiento propio del conjunto
del organismo, en donde todas las funciones del organismo vivo,
participan en el acto de pensar, del querer y del sentir.
El cuerpo inteligente: fuerza y vida
En este concepto, el cuerpo inteligente juzga, imagina y concretiza
valores, la obediencia de sus procesos orgánicos es multiforme. Su
actuar en el mundo no es ciego ni mecánico sino crítico y rebelde.
El conocimiento del cuerpo propuesto por Nietzsche tiene ya un
entendimiento previo a la palabra, en donde su saber es previo
también a todo pensamiento simbólico, pues como lo escribe el
fenomenólogo de la percepción Merleau Ponty, el cuerpo antes
que la palabra, ya tiene en sí mismo, una certeza de los sucesos del
mundo.10
9. Op. Cit. Nietzsche. Así habló Zaratustra. Pág. 80
10. Merleau-Ponty, Maurice. Fenomenología de la percepción. Editorial Planeta. 1980. Pág. 123
132
Friedrich Nietzsche: El Cuerpo y la Danza
Destacan dos conceptos claves para comprender la solidez del
cuerpo que Nietzsche propone. El primero de ellos, es el de la
«fuerza», cuyo vigor está más allá del ámbito energético y físico,
para situarse como una facultad psicológica, a manera de un
estado omnipresente de significaciones, expresión de la voluntad
de poder. Esto es, «fuerza» como poder del instinto, traducida en
transfiguración de la libre expresión de la creatividad. En última
instancia, la noción de fuerza que Nietzsche advierte, es la fuerza
de la plasticidad artística, cuyo principio fundamental es la lucha
sobre la materia, de donde han de surgir las formas nuevas de la
creatividad humana: en este sentido, toda forma corporal creada,
es la coagulación de una fuerza creadora.
El segundo de estos conceptos, es el de vida, concepto que
rebasa todo biologisismo, para situarse en el cuerpo como centro
de poder y habilidad, encaminados a la dominación y a la violencia
para la sublimación estética de la fuerza y de la vida orgánica.
Idea bien sabido por todos, mal entendida por Adolfo Hitler, y
expresada en el oscurantismo de la barbarie nazi; pues Nietzsche
sugiere, que la violencia bárbara es característica de la mediocridad.
El verdadero sentido de su noción de vida, de fuerza, y de poder,
es de quien impone su imagen a la forma, ya sea como maestro, o
ya sea como creador.11
El cuerpo del superhombre
Desde esta perspectiva, el cuerpo se constituye del tejido de la
realidad y su consistencia y verdad le permite no esperar juicios de
valor para vivir, ni tampoco desentenderse de lo que piensa; pues
al percatarse el cuerpo de una idea, la atrapa y la realiza, del mismo
modo, que al concretar una idea, es que ésta, antes ya había tocado
la vida. Este es el cuerpo del creador como superhombre en la
noción cuerpo-potencia del nietzschismo.
11. Op. Cit. ¿Que sé? Nietzsche. Pág. 73
133
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Este cuerpo potencia, de ninguna manera atenderá la realización de
su existencia por las abstracciones que éste exponga sobre él, pues el
cuerpo nietzscheano, no convierte a la certeza de la vida, en la certeza
de la idea que se tiene sobre la vida. En este cuerpo, su poderío de
superhombre no sustituye la vida por las ideas que de ella se tienen;
pues el cuerpo ya ejecuta el acto de vivir, y al vivir recrea espacio y
tiempo, sin pensar que los vive, y los recrea mucho antes de vivirlo. De
aquí, concluye Nietzsche, que el mundo deje de ser tema de discusión
del cuerpo, para convertirse en tema de acción.12
En este sentido, la verdad del superhombre, no es más que ser un
puente, dinámico y en perpetuo movimiento para alcanzar sus obras.
Nietzsche lo subraya cuando nos dice que «el hombre no es un fin
sino un puente», y nos sugiere al cuerpo, como armazón del mundo
capaz de alcanzar el verdadero sentido de la vida en su constante
experiencia. Cuerpo y estancia en la tierra, no persiguen entonces lo
que debería ser, sino lo que nos hacer posible estar para ser.
El cuerpo y la danza
Esta noción de cuerpo en movimiento, es la que Nietzsche entablará
como correlato análogo con el movimiento y creación de formas
corporales, y con más precisión, con el arte de la danza, pues para
él, el movimiento es algo que necesariamente tiene que ver con
la materia orgánica y flujo de movimiento, lo que lo conduce a
comprender el cuerpo, como espacio de acción y lugar, en donde
la voluntad de poder ejerce su potencialidad, para construirse y
devenir en formas, entendiendo estas últimas, como expresión
de una voluntad. En tal interacción, es en donde el movimiento
corporal expresará la praxis de sus formas en el espacio y en el
tiempo. Entonces, podemos afirmar cuando Nietzsche nos dice
«un Dios baila dentro de mí», que la danza es un orden de creación
perpetuo en el cuerpo, a manera de flujo de instantes privilegiados
12. Op. Cit. Fenomenología de la percepción. Pág. 85
134
Friedrich Nietzsche: El Cuerpo y la Danza
o trascendentes del cuerpo armónico, que en última instancia, no
es más que la creación nueva de espacios, tiempos, diseños, relieves
y múltiples formas corporales: es la creación artística propiciada y
formulada por el cuerpo.
En este orden de ideas, otro aspecto destaca como potencia
del cuerpo-creador, es el que se refiere al cuerpo como síntesis y
relación con el mundo, pues se advierte, que a través del movimiento,
traducido en fases de movimiento, trasferencias de peso y de gesto
significante y de energía física, Nietzsche ve al cuerpo humano,
como revelador de un mundo interior y exterior. Se entiende, que
en tales procesos orgánicos y creativos, la conexión y desconexión
de energía física, constituye el flujo de movimiento que es regulado
por el instinto, la intuición y la voluntad de crear.
En esa apertura, la transfiguración que el cuerpo experimenta,
es expresión de vida, por un lado la defensa, la lucha, contención
y por otro, la complacencia, el dolor y la creación. Procesos de lo
corporal creativo vistos como resultado de la acción, de un eterno
estado de alerta y de guerra en que se encuentra el cuerpo en
el mundo. Aquí la danza, surge como elección del movimiento
creado, pues las secuencias de movimiento no son caóticas sino
armónicas y voluntarias. Nietzsche observó en esta multiplicidad
de movimientos y actitudes encaminadas hacia la expresión
dancística, que tales tendencias podrían tornarse en hábitos;
entendiendo por hábitos, y siguiendo la idea de Bergson, que «los
hábitos son los residuos fosilizados de una experiencia espiritual».
Nietzsche también prefiguraba en estos hábitos creados por la
danza, los principios elementales de la construcción del carácter y
el temperamento, como resultado del conocimiento interno de la
fuerza y de la lucha interna y externa del propio cuerpo. Una vez
más, la danza surge como elección consciente de movimientos
creados y voluntarios.13
13. Laban, Rudolf. El dominio del movimiento. Madrid, Editorial Fundamentos, 1984. Pág. 95
135
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Nietzsche es entonces el principal transgresor de la mística
del intelecto, sugiriéndola y cambiándola por una nueva mística
creadora, la que propone el cuerpo liberado de su pesadez. Un
cuerpo en comunión con las fuerzas orgánicas y profundas de la
vida. Esta nueva mística constituye el descentramiento de la razón
como centro rector que deja de organizar el mundo conforme
a la contemplación distante. Aquí el cuerpo regula su existencia
cotidiana y la interactúa con el ritmo y con el movimiento, sin
pretender suscitar la admiración, sino la comunión y el intercambio
afectivo con el mundo, tal y cual lo hace la danza.
La ruptura de Nietzsche es definitivamente con las concepciones
clásicas de la civilización occidental y cristiana, pues en éstas,
el cuerpo es moralizado y se define como objeto pecaminoso y
amordazado de silencio. También como objeto de menosprecio,
plomo que lastra alma, el espíritu y el intelecto. Un cuerpo que
incomoda el camino hacia el acto liberador como principio de
libertad divina; muy lejos de lo mundano y terrestre, y por supuesto,
muy lejos de lo valioso y noble como valores del raciocinio. Este
es el cuerpo cristiano que debe ser disimulado, negado, limpio y
quieto, oprimiendo e indiferente hacia toda frontera entre la piel y
sus mensajes eróticos.
En conclusión
El cuerpo nietzscheano, es propuesto como una entidad capaz de
actualizar el mito, el tiempo y el espacio de la vida, incluso, aparece
como un cuerpo disuelto en el todo. Un cuerpo que impone una
economía de racionalidad por la práctica vivida, tanto en moral,
como en ciencia y en la técnica, así como en todas aquellas esferas
en donde la razón se levanta por encima de las fuerzas de la vida.
Un ejemplo de esto es la danza, pues en la danza, el cuerpo se
revela en sí mismo. Gesto significante en donde el sentido se
impone sobre el código en nombre de la libertad. Es decir, el
cuerpo es el interlocutor que se pronuncia en nombre de los
136
Friedrich Nietzsche: El Cuerpo y la Danza
derechos del entusiasmo, la inspiración, la fuerza y la emoción.
Procesos y antídotos contra el espíritu de la pesadez humana.
Lo que Nietzsche sugiere, no es la noción de un cuerpo negado
de su naturaleza, sino la de un cuerpo eternamente creador; no
es la de un cuerpo rechazado, cuyo sepulcro es la inmovilidad y
el secreto, sino un cuerpo abierto al mundo, como expresión de
voluntad y de poder; no así, un cuerpo portador de silencios y
elogios mudos, sino un cuerpo poseedor del mundo; no objeto
de la preocupación contemplativa, sino espacio de certidumbre
e integridad; no un cuerpo objeto de polución y de civilización
cristiana, ni de embellecimiento vulgar y de ocio. La propuesta
de Nietzsche es la del cuerpo como lugar de historia y destino.
Un cuerpo que toma su responsabilidad de accionar al mundo, y
que solo se demuestra y comprueba viviéndose en la acción y no
especulando sobre ella, tal y como Nietzsche lo propone en el dios
danzante que lo habita.
Bibliografía
Durán, Gilbert. (1989). Estructuras antropológicas de lo imaginario. Madrid: Taurus.
Granier, De Jean. (1983). ¿Qué sé? Nietzsche. México: Consejo Nacional para la Cultura y las
Artes.
Laban, Rudolf. (1985). El dominio del movimiento. Madrid: Editorial Fundamentos.
Langer, Susan. (1975). Sentimiento y forma. Taurus.
Merleau-Ponty, Maurice. (1980). Fenomenología de la percepción. Barcelona: Planeta.
Nietzsche, Friedrich. (1983). Así habló Zaratustra. Ed. Madrid Sarpe.
137
Fundamentos metodológicos del entrenamiento
de resistencia aerobia en la natación
Fundamentos metodológicos del
entrenamiento de resistencia aerobia en
la natación
Pedro Julián Flores Moreno y Arturo Osorio Gutiérrez
Resumen
El objetivo primordial del entrenamiento deportivo es provocar
cambios en el organismo del atleta dirigidos a aumentar su
rendimiento deportivo, por tanto, cuando un atleta es sometido
niveles altos de estrés físico como el nadar a diferentes ritmos durante
varios minutos y repitiéndolo por un periodo largo de tiempo, su
organismo responde realizando ajustes en los diferentes sistemas
y metabolismos que le permiten adaptarse a esa situación. En el
caso del entrenamiento, la resistencia aerobia cumple funciones
específicas de acuerdo a la disciplina y modalidad deportiva, ya
que al ejecutarse las diferentes cargas específicas de trabajo en la
sesión de entrenamiento se provocan diferentes adaptaciones
fisiológicas que posibilitan el óptimo desempeño del deportista en
la competencia.
Palabras claves: Entrenamiento deportivo, natación, resistencia aerobia.
Abstract:
The primary goal of sports training is to cause changes in the athlete’s
body directed to enhance sport performance, so when an athlete is
under high levels of physical stress like swimming at different rate
for several minutes and repeating it for a long period of time, your
Arturo Osorio Gutiérrez. Profesor-Investigador en la Licenciatura en Ciencias del Ejercicio
Físico del Instituto Tecnológico de Sonora. Licenciado en Educación Física-Maestro en Ciencias
del Deporte opción biología, Facultad de Educación Física y Ciencias del Deporte, Universidad
Autónoma de Chihuahua.
Pedro Julián Flores Moreno. Profesor de la Licenciatura en Ciencias de Ejercicio Físico en el
Instituto Tecnológico de Sonora, cursando la Maestría en Metodología del Entrenamiento Deportivo en la Universidad del Valle del Fuerte Sinaloa. Licenciado en Ciencias del Ejercicio Físico por
el Instituto Tecnológico de Sonora.
139
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
body responds by making adjustments to the different systems and
metabolism. These bodily changes allow the athlete to adapt to this
situation. Aerobic training make specifics functions according to
the sport discipline, as execute different specific loads of work in
the training session will get different physiological adaptations that
enable optimum performance of the athlete in competition.
Key words: Sports training, swimming, aerobic endurance
Introducción
Uno de los objetivos primordiales del entrenamiento deportivo es
provocar cambios en el organismo del atleta dirigidos a aumentar
su rendimiento deportivo. Estos cambios son producto de la
respuesta del organismo a las cargas de entrenamiento; si, por
ejemplo, un atleta es sometido a cierto estrés físico como correr
o nadar a un alto ritmo y durante varios minutos, y si además
lo repite por un largo periodo de tiempo (semanas, meses), su
organismo responde realizando ajustes corporales que le permiten
adaptarse a esa situación. Es tarea primordial del entrenador
conocer puntualmente, primero, cuáles son las adaptaciones que
les permitirán a sus atletas alcanzar un desempeño óptimo en la
competencia. En segundo lugar, es necesario conocer el estímulo
preciso (tipo de ejercicio, intensidad, duración) que se debe aplicar
para provocar los cambios deseados, y mantenerlos una vez que
éstos se alcanzan.
Muchos autores coinciden en que la resistencia aerobia es una
de las capacidades base, debido a que contribuye en el desarrollo
de otras capacidades físicas (Little, T. & Williams, G., 2006)
Pero además, en los deportes donde se tiene que mantener un
esfuerzo durante un tiempo prolongado esta capacidad es la más
importante, y esto queda claro si entendemos que la resistencia
aerobia es la capacidad para producir altos niveles de energía y
de retrasar los efectos de la fatiga (Wilmore, J. H., & Costill D.L.,
2007). Es fácil sospechar, entonces, que esta capacidad caracteriza
140
Fundamentos metodológicos del entrenamiento
de resistencia aerobia en la natación
a los atletas de los deportes de resistencia o fondo. Para el correcto
desarrollo de la resistencia aerobia y el de todas las capacidades
físicas, en el entrenamiento se debe seguir un plan premeditado
en donde, durante las sesiones de entrenamiento se respete el
nivel de condición física del atleta, los periodos de descanso, la
relación con las demás capacidades físicas (Sedlock, D., et. al,
2010). De manera que, una vez planificado el entrenamiento,
considerando todos sus principios, la responsabilidad de expresar
al máximo las cualidades físicas recaiga en el deportista. Cuando el
entrenador es consciente de que es necesaria la planificación del
entrenamiento deportivo, es posible que surjan algunas preguntas,
como por ejemplo, ¿Cómo hago una correcta planificación? ¿Qué
aspectos debo considerar? La situación se complica un poco más
si tomamos en cuenta que existen varios tipos de de resistencia,
de manera que es prudente señalar que para evitar desvíos en
cuanto a la dirección del entrenamiento (como por ejemplo,
desarrollar un tipo de resistencia que no sea la más adecuada
en ese periodo de entrenamiento o incluso en esa disciplina
deportiva), se debe atender a dos puntos específicos de forma
práctica y metodológica. Primeramente los tipos de resistencia
deben agruparse considerando que se pueden caracterizar en
cualquier disciplina deportiva. La agrupación más general sería
diferenciar la Resistencia Básica (RB) de la Resistencia Específica
(RE), donde la primera tiene como característica primordial la
contribución en el desarrollo de otras capacidades físicas (Navarro,
V, F., 1998). Mientras que el segundo tipo de resistencia enfoca
la carga específica de entrenamiento a la modalidad deportiva,
eso significa que dentro de las sesiones de entrenamiento los
ejercicios y las actividades son lo más parecido a las situaciones de
la competencia; esto se realiza siempre y cuando se atienda a una
relación óptima entre intensidad y duración de la carga. Además
de tener en cuenta la clasificación de la resistencia es importante
considerar que existen diferentes métodos de entrenamiento o
141
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
guías empleados para alcanzar el objetivo deseado, en este caso el
desarrollo de algún tipo de resistencia. El método de entrenamiento
responde a cuestiones como las siguientes ¿Cuánta distancia debe
nadar, correr o pedalear el atleta, a qué ritmo o intensidad, cuanto
tiempo de recuperación debe tener entre esfuerzos? Algunos de los
métodos más utilizados son los continuos, los cuales se componen
de la siguiente manera:
1. Método continuo: caracterizado por el trabajo ininterrumpido
por intervalos de descanso, donde la duración de la carga
de trabajo es larga, pudiendo ser normalmente de hasta 30
minutos, y la intensidad es de baja a moderada. De este método
se desprenden otros más. A continuación mencionamos
algunos de ellos.
• Método continuo uniforme: Se caracteriza por un alto
volumen de trabajo sin interrupciones a lo largo de todo
un ciclo de entrenamiento. Su utilización se lleva a cabo
preferentemente en el periodo preparatorio en una onda
grande de entrenamiento tradicional o bien en un mesociclo
de acumulación de un modelo contemporáneo; el método
continuo uniforme se subdivide en dos, el extensivo, que
consiste en largas cargas de trabajo que pueden llegar a
ser de hasta 120 minutos en deportes como el ciclismo
de ruta el atletismo de fondo, la natación y el triatlón; y el
intensivo que eleva la carga de trabajo, de tal manera que
las condiciones que éste crea sean de intensidad mayor que
el método continuo extensivo y que, por consecuencia, se
realiza con una carga proporcionalmente menor, de manera
que pueden llegar hasta los 90 minutos de esfuerzo.
• Método continuo variable: caracterizado por los cambios
de intensidad durante la ejecución total de la carga, donde
las variaciones de intensidad se determinan mediante
factores externos, como lo podría ser el terreno, entre
otros. Otra característica es que durante la actividad se
142
Fundamentos metodológicos del entrenamiento
de resistencia aerobia en la natación
alternan dos tipos de esfuerzo, uno de alta intensidad y uno
de baja intensidad que tienen como propósito recuperar al
organismo para el siguiente esfuerzo de alta intensidad. La
duración del esfuerzo se establece de acuerdo a la velocidad
o intensidad que mantendrá el atleta, y oscila entre 1 a 10
minutos. La relación entre los tipos de esfuerzo siempre
es negativa entre la duración y la intensidad del esfuerzo;
a mayor intensidad menor tiempo de esfuerzo y viceversa.
Los esfuerzos se alternan, buscando que se posibilite una
ligera recuperación del organismo antes del siguiente
incremento. La frecuencia cardiaca alcanzada en los tramos
de velocidad puede llegar hasta las 180 pulsaciones por
minuto, mientras que en las fases de velocidad moderada
se establece alrededor de las 140 pulsaciones por minuto.
El sistema ondulatorio que crea este método permite que
la capacidad circulatoria y del sistema nervioso central
mejoren significativamente.
Varios autores han señalado que la resistencia aerobia está asociada
a adaptaciones pulmonares, cardiovasculares, neuromusculares
y metabólicas (Sloan, P., et. al, 2009; Uchechukwu, D., 2009;
Impellizzeri, et. al, 2005). Estas adaptaciones fisiológicas dependen
de varios factores que se tratan de organizar dentro de la planificación
del entrenamiento. Algunos de estos factores son la intensidad,
frecuencia, duración de la sesión, periodo total del programa de
entrenamiento y nivel de condición física de los atletas. De todos estos
factores la intensidad es el más importante en cuanto a la dirección
del entrenamiento ya que condiciona las adaptaciones corporales
(Thevenet, D., et. al, 2008). En intensidades ligeramente bajas (entre
el 70- 80% del VO2max.) las adaptaciones ocurren primeramente
a nivel del corazón; aumenta su capacidad para bombear sangre al
cuerpo (Barbosa, F., et. al, 2008). Por otro lado, a intensidades más
altas (mayor al 80% del VO2max) las adaptaciones ocurren a nivel
143
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
periférico; aumenta la densidad capilar, la eficiencia en la actividad
enzimática es mayor, la cantidad de hemoglobina aumenta al igual
que el volumen y la cantidad de mitocondrias dentro de la célula
(Impellizzeri, et. al, 2005). De cierta manera las adaptaciones que
acabamos de mencionar tienen como finalidad contribuir en la
eficiencia del metabolismo energético, de tal modo que se provoque
un aumento en la producción de energía y que se retrasen los efectos
de la fatiga.
Hasta ahora hemos mencionado generalidades de algunos
métodos de entrenamiento usados para el desarrollo de la
resistencia aerobia, sin embargo es importante aclarar que la
planificación de la resistencia puede ser tan específica y variada
como la cantidad de disciplinas deportivas y pruebas que existen. En
la natación es interesante la planificación de la resistencia aerobia,
y las adaptaciones que el entrenamiento provoca. Durante el nado,
el atleta mantiene metabólicamente activos todos los músculos
de su cuerpo (Saavedra, J., Escalante, & Rodríguez, F., 2010) y
aunque es cierto que unos grupos musculares, como los de las
extremidades superiores, pueden tener mayor relevancia que otros
en la ejecución del nado (Konstantaki, M., & Winter, E., Swain,I.,
2008), no podemos negar que todos son sometidos a cargas de
entrenamiento importantes. La planificación del entrenamiento se
hace aún más interesante si pensamos en que la natación sobrelleva
acentos específicos para el desarrollo de la resistencia aerobia,
pues el nadador debe ser capaz de sostener su velocidad de nado
en las pruebas de distancia de 400 metros y más, mientras que, por
otro lado, en las pruebas de 50 y 100 metros debe asegurar una
pronta recuperación. Para lograr una adecuada adaptación en estas
pruebas en donde la exigencia física es tan diferente, es necesario
realizar el entrenamiento de la resistencia utilizando los métodos
generales, mencionados anteriormente. En el entrenamiento se
pueden identificar tres acentos diferentes; uno la eficiencia aerobia
o RI; la capacidad aerobia o RII; y por último, el volumen máximo
144
Fundamentos metodológicos del entrenamiento
de resistencia aerobia en la natación
de oxígeno VO2 máx. Estos tres acentos se subdividen y causan
diferentes efectos en el organismo del deportista, y como se ha
mencionado anteriormente, la intensidad es la que marca en cuál
de éstos tres acentos se estará entrenando (Navarro, V, F., 1998).
El entrenamiento de la eficiencia aerobia o RI se basa
fundamentalmente en el desarrollo de otras cualidades como lo
puede ser la técnica de nado, pero para alcanzar una alta precisión,
es necesario identificar tres áreas para su desarrollo; a continuación
mencionamos sus subdivisiones:
a) RI de corta duración. El trabajo de este acento se debe realizar
siempre con pausas de descansos breves que oscilen entre 5 y
15 segundos, y una distancia que no sobrepase los 200 metros.
La zona de intensidad ideal oscila entre los 120 y 140 latidos
por minuto (lpm); por ejemplo para su desarrollo se pueden
emplear las siguientes series de trabajo
• 10 x 200 cada 15 ´´
• 20 x 100 cada 10´´
• 60 x 50 cada 45´´
b) RI de media duración. Los tramos para el desarrollo de la RI
de media duración oscilan entre los 200 y 600 metros, y es
necesario distinguir dos maneras de entrenarla, una de ellas
es la convencional y consiste en asignarle un descanso estable
a cada serie, mientras que la otra, se estipula un tiempo de
descanso por tiempo de trabajo, es decir se obliga al nadador a
que esté dentro de un tiempo establecido durante la ejecución
de la serie, por ejemplo:
Descanso estable
• 15x 300 con 15´´
• 6 x 500 con 20´´
• 10 x 400 con 15´´
145
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Trabajo y descanso
• 12 x 300 cada 4 min haciendo 3´45”
• 20 x 200 cada 2´40” min haciendo 2´25”
• 12 x 400 cada 5 min haciendo 4´45”
En ocasiones se puede crear una confusión al momento de
elegir la forma de estructurar la serie de trabajo, sin embargo es
importante mencionar que estudios han demostrado que si se hace
una combinación de ambas en una misma serie de entrenamiento,
éste es más eficaz desde el punto de vista fisiológico, ya que el
descanso estable desarrolla la eficiencia cardiaca, aumentando el
volumen cardiaco, mientras que, por otro lado, la variante trabajo
descanso desarrolla el volumen sistólico y la eficiencia cardiaca.
Ejemplo de combinación de ambas variantes
12 x 400 m
•
•
•
•
3 repeticiones con 20” descanso estable
3 repeticiones cada 6´ haciendo 5´45”
3 repeticiones con 20”” descanso
3 repeticiones cada 6´ haciendo 5´45”
c) RI de larga duración. El entrenamiento de la RI de larga duración
está por arriba de los 800 metros de nado, donde se sugiere
utilizar pausas de descanso estable que estén en dependencia de
la intensidad y la distancia, donde por lo regular oscilan entre
los 30 segundos y 1 minuto, el volumen total para la RI de larga
duración puede ser de hasta 6 kilómetros por sesión, siempre y
cuando coincida con el objetivo que se desea perseguir.
Ejemplos de entrenamiento de la RI de larga duración:
• 5 x 800 m cada 45”
• 4 x100 m cada 1´
• 3x 1500 cada 1´
146
Fundamentos metodológicos del entrenamiento
de resistencia aerobia en la natación
El entrenamiento de la capacidad aerobia o RII, tiene la cualidad
de elevar el consumo máximo de oxígeno, de forma tal que influye
en el metabolismo de la glucólisis aerobia desarrollando la esfera
de la resistencia general de base en nadadores de alto rendimiento.
Las series de trabajo pueden llegar hasta 3 kilómetros por sesión,
con una intensidad de 160 a 180 lpm y la recuperación debe de
cumplir una relación 1:1, siendo por lo regular un rango de 30 a 90
segundos, en dependencia de la distancia de la serie, al igual que la
RI, la RII se subdivide en tres distancias de nado: corta, mediana y
larga. A diferencia de la RI los tramos de nado son más intensos y
los intervalos de descanso más largos, mientras que la duración de
las series son más cortas.
La RII se debe de trabajar en distancias de mediana y corta
duración, pues es necesario que se mantenga un nivel técnico
y velocidad de nado óptima para alcanzar los niveles de lactato
exigidos en el desarrollo de esta cualidad.
En ocasiones se cuenta con nadadores que no tienen una
estabilidad en el nivel técnico, por lo que se propone que se
naden tramos de hasta 400 o menos, con el propósito de ganar
mayor capacidad para aumentar las distancias. En esta esfera
de rendimiento deben mantener una duración de entre 30 y 60
minutos de trabajo, o bien lo equivalente a un volumen de 1.5 a 3
kilómetros por sesión.
Ejemplos de series de trabajo de la RII
• 3 veces (300 m c/30” o 45”)
• 30 x 100 m con 40” – 30” -20”
El trabajo de la RII puede ser combinado con la RI, de tal
forma que se logre una preparación integral. Entrenadores han
desarrollado esta forma de estructurar las series y han demostrado
un efecto positivo al momento de la recuperación y el aumento de
las velocidades de nado.
147
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Ejemplos de combinación de RII con RI
• 3 veces ( 800 m RI c/20” + 2 x 400m RII c/30-45”)
• 6 x 200 m RII c/45” + 300 m RI c/ 20” + 6 x 200 m RII c/30”
El consumo máximo de oxígeno (MVO2) se considera como la
máxima potencia aerobia, y es el mejor indicador de la resistencia
aerobia del atleta (George, J., et. al, 2009). Un atleta con un MVO2
alto, tiene la capacidad de aportar mayor oxígeno a la célula
muscular y demás tejidos metabólicamente activos, además, una
vez dentro de la célula el oxígeno es utilizado más eficientemente.
En algunos estudios se ha comprobado que el MVO2 se alcanza
aproximadamente entre los 3 y 7 minutos de trabajo intenso y
sostenido. En estos niveles de intensidad los niveles de lactato se
pueden llegar a elevar hasta 9.9 mmoles/l (Thevenet, D., et. al, 2008).
Las distancias que ayudan desarrollar esta esfera están
comprendidas entre los 300 y 500 metros, pudiendo llegar a ser
de hasta 1.5 kilómetros por sesión, con una intensidad mayor a
180 lpm. Los descansos para tramos inferiores a los 300 metros
oscilan entre los 5 y 20 segundos, y para tramos mayores deberá
ser entre los 3 y los 7 minutos. El tiempo total de las series no debe
pasar de 35´ y para su desarrollo se sugiere trabajar en microciclos
de 15 días.
Ejemplos de series de entrenamiento del MVO2
• 5 x 300m
• 4 x 400m
• 3 x 500m
El descanso debe ser la mitad o un
cuarto del tiempo total de la duración
de cada tramo
Ejemplos de series inferiores a los 300 metros
• 4x6 x 50 m
• 4x4 x 100 m
• 3x3 x 150 m
148
El descanso entre repeticiones debe oscilar
entre los 5” – 20” y entre series debe ser la mitad
o un cuarto del tiempo total de duración de la
misma incluyendo el descanso entre tramos
Fundamentos metodológicos del entrenamiento
de resistencia aerobia en la natación
Las series de trabajo del MVO2 pueden ser combinadas con
tramos de RI y RII, con el objeto de contribuir a elevar el nivel en
los atletas con niveles de entrenamiento bajos y requieran una base
aerobia, por ejemplo se pueden emplear las siguientes series:
•
•
•
•
4 veces (4 x 100 m de RI + 400 m MVO2 )
4 veces (400 m RI + 4 x 100m MVO2 )
8x 400 m 4 de RII c/ 1´ + 4 MVO2 c/ 2´ descanso
400 m RII c/1´ descanso + 4 x 300 m MVO2 c/2´ descanso
Conclusión
La planificación del entrenamiento deportivo en la natación y en
cualquier otro deporte, debe tener un sustento biológico en el que
el entrenador, el preparador físico o el metodólogo apoyen sus
propuestas metodológicas de entrenamiento. Es imprescindible
que conozcan las adaptaciones fisiológicas que están desarrollando
en sus atletas, cómo provocarlas, y estar seguros de que los efectos
de las cargas de entrenamiento aplicadas permitirán un mejor
desempeño en la competencia deportiva.
Bibliografía
Barbosa, F., Cabral, S., Neto, A., Mayolino, R., Knackfuss, M., Fernándes,. P., Roquetti, R., Filho,
J., (2008) Comparison of methods for the determination of the intensity of the aerobic
training for young individual. Fitness performance, 6, 6, 367-370
George, J., Paul, S., Hyde, A., Bradshaw, D., Vehrs, P., Hager, R., (2009) Prediction of maximum
oxygen uptake using both exercise and non-exercise data. Measurement in Physical Education and exercise Science, 13, 1-12.
Impellizzeri, F., Rampinini, E., Marcora, S., (2005) Physiological assessment of aerobic training in
soccer, Journal of Sports Sciences, 23(6): 583 – 592.
Konstantaki, M., Winter, E., Swain,I., (2008). Effects of Arms-Only Swimming Training on Performance, Movement Economy, and Aerobic Power. International Journal of Sports
Physiology and Performance, 3, 294-304.
Little, T., Williams, G., (2006) Suitability of soccer training drill for endurance training. Journal of
Strengtb and Conditioning Research, 20(2), 316-319.
Navarro, V, F. (1998) La Resistencia. (1ered). Gymnos.
Saavedra, J., Escalante, Y. Rodriguez, F. (2010). A Multivariate Analysis of Performance in Young
Swimmers. Pediatric Exercise Science, 22, 135-151.
149
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
Sedlock, D., Lee, M., Flynn, M., Park, K., Kamimori, G., (2010) Excess post exercise oxygen consumption after aerobic exercise training. International Journal of Sport Nutrition and
Exercise Metabolism, 20, 336-349.
Sloan,P., Shapiro P., DeMeersman,R., Bagiella E., Brondolo, E., . McKinley , P., Slavov, l., Fang
,Y,. Myers M. (2009) The effect of aerobic training and cardiac autonomie regulation in
young adults. American Journal of Pubüc Health, 99, 5, 921.928.
Thevenet, D., Leclair, E., Tardeu-Berger, M., Berthon, S., Regueme, S., Prioux, J. (2008) Influence
of recovery intensity on time spent at maximal oxygen uptake during an intermittent session in young, endurance-trained athletes, Journal of Sports Sciences, 26(12): 1313–132.
Uchechukwu, D. (2009) Post-exercise heart rate recovery: and index of cardiovascular fitness. Journal of Exercise Physiology 12, 10-22.
Wilmore, J. H., Costill D.L., (2007) Fisiología del esfuerzo y del deporte. (6ta ed). Paidotribo.
150
Normas para autores
Norma para autores
Ciencia, Deporte y Cultura Física es una publicación de la
Universidad de Colima y la Facultad de Ciencias de la Educación
en colaboración con la Universidad Iberoamericana y la Red
de Investigación de Deporte, Cultura y Sociedad, misma que
tiene como objeto propiciar la divulgación de investigaciones,
experiencias, testimonios, metodologías de entrenamiento y
actividades docentes, en el área de las Ciencias Aplicadas al
Deporte y la Cultura Física.
Publica trabajos desarrollados por profesores e investigadores,
especialistas de instituciones académicas, así como por organismos
deportivos locales, regionales, nacionales e internacionales.
La misión de la revista es promover la producción y divulgación
de conocimientos en las áreas de las Ciencias Aplicadas al Deporte
y la Cultura Física a nivel local, nacional e internacional.
Está dirigida a alumnos en formación, entrenadores y
académicos e investigadores de todas las áreas de las ciencias
aplicadas al deporte.
Los lectores tendrán acceso a la investigación, a las nuevas
teorías, así como a diversas reflexiones teórico-metodológicas o
experiencias de prácticas deportivas, líneas de investigación a nivel
local, nacional e internacional, así como, a los adelantos científicos
relacionados con el deporte.
La revista tiene cuatro secciones:
a) Investigación: la información contenida en esta sección está dedicada a los
resultados de investigaciones teóricas o aplicadas en alguna de las temáticas de
las ciencias del deporte y la cultura física. Se presentan en forma de artículo
científico (la estructura deberá presentar introducción, metodología, resultados,
conclusiones, referencias bibliográficas y anexos si son necesarios).
b) Divulgación: este apartado publicará análisis, reflexiones teóricas, críticas
metodológicas y materiales didácticos.
151
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
c) Testimonios: es un espacio destinado a la publicación de entrevistas,
crónicas o trabajos que den voz a las vivencias y experiencias deportivas o
científicas de actores e íconos del deporte y la cultura física.
d) Reseñas: de libros y documentos con información especializada en las
áreas de las ciencias aplicadas al deporte y cultura física.
OBSERVACIONES PARA LOS AUTORES
Las colaboraciones a Ciencia, Deporte y Cultura Física
deben ser enviadas a la Facultad de Ciencias de la Educación
de la Universidad de Colima, ubicada en Av. Del Estudiante y
Av. Camino Real , Colima, Col., CP 28000, México, o bien a
la dirección electrónica: [email protected] y samuel.
[email protected], sujetándose a los siguientes requisitos:
1. Deberá enviarse el texto grabado en formato electrónico y en
un procesador de palabras para computadora PC compatible, de
preferencia Word.
2. Ciencia, Deporte y Cultura Física publica informes de
investigación, artículos, recuperación de experiencias (testimonios)
y reseñas bibliográficas. El autor deberá especificar qué tipo de
texto envía para ser dictaminado como tal.
3. Los textos deberán remitirse en español.
4. Cada texto deberá enviarse firmado mediante seudónimo para
garantizar la imparcialidad y objetividad de cada dictaminen.
Deberá incluirse, por separado, en un sobre y en un archivo
electrónico, una breve ficha de autor(a/es/as) con los siguientes
datos: nombre(s) completo(s), dirección postal, teléfono, número
de fax, nacionalidad, institución en la que se formó y el grado
obtenido, adscripción institucional actual, líneas de investigación y
título de la publicación más reciente.
5. La extensión de los artículos de investigación y divulgación deben
ser de máximo 20 páginas y un mínimo de 10; para testimonios
152
Normas para autores
debe ser mayor de 3 páginas y menor de 5; y para las reseñas un
máximo de 4 y un mínimo de 2; líneas de 65 golpes y páginas de 28
líneas. Los trabajos deben ser escritos a doble espacio, utilizando
tipografía Times New Roman a 12 puntos.
6. El artículo debe acompañarse de un resumen de no más de
200 palabras en español, con su correspondiente abstract en
inglés; ambos deben incluir el objetivo, el método y la conclusión
principal de la investigación, así como de por lo menos tres (3)
palabras clave.
7. Las notas deberán ser numeradas y presentadas al final del texto.
8. Las citas textuales e interpretativas deberán ser introducidas
siguiendo el sistema APA y listadas al final en orden alfabético,
ejemplo:
Libro:
Bochenski, I. M. (1974). Los métodos actuales del
pensamiento (9ª ed). Madrid:Rialp.
Publicaciones periódicas:
Villagrá, A., y Román, A. (1981). Diferente utilidad
de las bases de datos americanos y europeos en las
ciencias sociales. Revista Española de Documentación
Científica, 1. 113-120.
Artículos en la web:
Ghigliotty, J. (1997, 16 de marzo). Cercana la última
campanada. El nuevo Día en Línea. p.12. Obtenido
en la Red Mundial el 20 de marzo de 1997:http://
www.notiaccess.com
9. Las referencias bibliográficas deberán seguir el mismo sistema.
10. Los cuadros deberán anexarse por separado y numerarse
usando el sistema romano: (cuadro I, II, III, etcétera).
153
Revista Ciencia, Deporte y Cultura Física
11. Las gráficas también por separado y numeradas usando el
sistema arábigo (ejemplo: 1, 2, 3, 4, etcétera), en papel blanco y en
tinta china.
12. Las fotografías (blanco y negro o a color) deberán anexarse al
final y habrán de listarse alfabéticamente (ejemplo: a, b, c, etcétera),
con resolución de 300 DPI y en archivo de formato JPG.
13. Los autores deberán anexar una carta donde expongan el
compromiso para la cesión de los derechos de autor.
154
Descargar