INDICE Prólogo 4 Testimonios previa llegada a la Villa 6 De Maipú a Cerrillos 6 Antecedente de la Villa México 8 Orígenes de Villa México 9 La asignación de las viviendas 10 Ahorro 16 Las tomas 18 Toda la locomoción llegaba hasta allá, hasta Camino Melipilla 23 La Junta de Vecinos, donde está el famoso sombrero mexicano (o la que ordenó la villa) 24 Construyendo comunidad 27 Los clubes deportivos 30 1973. Como vivimos el golpe 35 MINISTERIO DE VIVIENDA Y URBANISMO Programa de Recuperación de Barrios Los 80’s, tiempos de la reactivación 41 Los 90’s, tiempos modernos 46 Autores: Verónica Vergara Bernales Deín Portela Valenzuela La reconocida y controversial Feria libre de Villa México 49 El Programa Quiero mi Barrio 52 El futuro de Villa México 68 Alameda 924 Código Postal: 6513482 Santiago de Chile Teléfono: (56-2)3513000 Fax: (56-2)6337830 www.minvu.cl ANEXO: Fotografías de la Villa y la Comuna 71 Fuentes consultadas 91 Villa México Historia y memoria PRÓLOGO Los barrios tienen identidad, las historias colectivas, familiares van modelando una manera de ser, de identificarse con el otro, con el vecino y con el entorno, el todo contribuye lo que somos y de ello sentimos orgullo justificado. La Villa México es eso, historia de familias trabajadoras que desde hace más de cuatro décadas sembraron esa vida colectiva. Familias esforzadas, cierto, luchadoras, sin duda, Villa Méxica madre de hijos dignos y no poco de ellos han marcado la historia comunal y nacional. Por ello el programa “Recuperación de Barrios”, es el abrazo de Cerrillos a estas familias nobles, es una forma de agradecimiento por lo que fueron, son y serán en el futuro. Cerrillos abraza con afecto esta bella historia. Arturo Aguirre Gacitúa 4 El propósito del Programa de Recuperación de Barrios del Ministerio de Vivienda y Urbanismo es potenciar la participación ciudadana para que los habitantes beneficiados logren ser protagonistas de su propio crecimiento urbano y social. El surgimiento de la Villa México en la comuna de Cerrillos, permitió que familias provenientes de otros lugares de la Región Metropolitana encontrarán un espacio nuevo donde desarrollar su proyecto de vida. Fue el esfuerzo de las autoridades y de los vecinos organizados el que permitió que estos terrenos y viviendas se fueran convirtiendo en el barrio que actualmente habitan. Es ese mismo espíritu de esfuerzo compartido en pos del bien común el que nos anima hoy como Gobierno a impulsar cada vez con más ahínco, el Programa de Recuperación de Barrios. Con éste, hemos podido detectar las reales necesidades de la comunidad, y trabajar a su vez por obtener resultados satisfactorios para los vecinos, renovar y reafirmar nuestro compromiso con su bienestar integral. Alcalde Ilustre Municipalidad de Cerrillos Al emprender la publicación de las notas y testimonios que aparecen acá, es cumplir con la última parte de un Programa y dejar establecido la natural forma de mis vecinos después de haberla leído. Les invitamos a recorrer las páginas de este libro, que habla de la historia poner el nombre del barrio y constata que el aporte otorgado por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo le ha permitido mejorar su entorno y fortalecer los lazos afectivos entre los vecinos. Juan Andrés Muñoz Saavedra Estos apuntes que entregamos al público son vivencias de carácter de información narradas bajo nuestra responsabilidad, con lo cual se explica el título de estas historias. Gracias a todos los actores que participaron en este desafío que permitió conocernos, unirnos y mejorar nuestra calidad de vida. Gracias al ministerio de Vivienda y Urbanismo. Gracias al Alcalde de la época Alejandro Almendares. Gracias a la Encargada de Vivienda, Sra. Verónica Morales y Secplan directores, que fueron tres con los que trabajamos. Gracias por creer en un Programa que nos hizo crecer en conocimiento y vivir en forma segura y protegida. María Hidalgo Salinas Presidenta del Consejo Vecinal de Desarrollo / 2008 - 2013 Seremi de Vivienda y Urbanismo Región Metropolitana 5 Villa México 1. Testimonios previa llegada a la Villa Los primeros habitantes de Villa México llegaron de diferentes lugares y con costumbres diversas. Algunos de ellos vivían de allegados, arrendando, recién casados, pero todos tenían un elemento en común, la anhelada vivienda definitiva. La gran mayoría provenía de Santiago. Sabemos que muchas viviendas fueron “tomadas”. De diferentes partes de la ciudad se organizaron grupos de familias en busca de la casa propia. Es así como llegaron a la Villa México. Este proceso se repite en otros conjuntos habitacionales de la época y los vecinos así lo describen. 6 “Yo viví en la Robert Kennedy, cuando recién se estaba creando también la población Robert Kennedy (…) Éramos un grupo de chicos, hay muchos chicos acá que… Y a la Robert yo he ido y sigue siendo igual (…) En Estación Central. De la Villa Francia para adentro (…) Si me acuerdo que en esa época, cuando nosotros estábamos allá, también se tomaron esos departamentos que hay afuera, esos blocks igual aquí que estos. También se los tomaron (…) Sí, se vinieron. Pero ya esa gente es poco lo que alcanzaron a agarrar de la villa para acá”. (Cristina Aguirre) 2. De Maipú a Cerrillos Cuando los vecinos llegan a la Villa esta pertenecía administrativamente a la comuna de Maipú. El relato de los primeros vecinos da cuenta de que se encontraron con un lugar grato para la vida, sin embargo reconocen que se encuentran lejos de sus fuentes laborales y carente de comercio. “Fíjese usted que cuando llegamos aquí a la Villa, solamente existía la micro número tres que eran municipales de color verde y no habían almacenes cerca. Dentro de la Villa estaban las viviendas para los comerciantes, había un grupo de locales allá y otro grupo de locales acá, pero como éramos todos recién llegados, tuvimos que esperar un tiempo determinado para que los comerciantes se hicieran cargo y empezaran a haber almacén y panadería, por lo tanto, tuvimos que surtirnos de Maipú. Y en Maipú en ese tiempo, era un área prácticamente campesina rural. Entonces los mismos campesinos venían a la plaza de Maipú con sus carretones a vender las verduras y todas esas cosas”. (Robinson Díaz) Historia y memoria El nombre de Cerrillos vendría de la batalla desarrollada el 5 de abril de 1818, entre el ejército patriota y las fuerzas leales al Rey de España, en dicha ocasión aparecería reiterativamente el nombre de Cerrillos. La comuna ha contribuido a la historia del país con diferentes acontecimientos, uno de ellos, quizás el más relevante se refiere al principal recinto de navegación aérea, inaugurado hace más de 110 años y que funcionó hasta el año 1967. Nos referimos al aeropuerto de Cerrillos que transformaría el territorio, de origen campestre, en uno incipiente de urbanización, por tanto, es clave para la aviación chilena y el desarrollo de la comuna. Son estos elementos, para muchos cerrillanos, los que le otorgan su identidad a la comuna, lo cual vendría a consolidarse con la creación de la comuna por el Decreto de Fuerza de Ley Nº 1-3260, del Ministerio del Interior, dictado el año 1981. Esta disposición agregó 17 nuevas comunas a la Región Metropolitana, como una manera de hacer más efectiva la preocupación por los sectores que habían crecido demográficamente y requerían mejor atención en infraestructura y en servicios. Hasta esos años, lo que hoy es la comuna de Cerrillos pertenecía en mayor medida a la comuna de Maipú y, una pequeña parte, a la comuna de Santiago. El nacimiento de la comuna de Cerrillos se da en el contexto de la democratización de los municipios. En este proceso se llamó a elecciones municipales para el día 28 de junio de 1992, a las cuales se presentaron 23 candidatos para ocupar el cargo de Alcalde y de 5 concejales de la comuna. Fernando Martínez resultó electo en forma cómoda, con el 28% de los sufragios¹. Desde entonces, la comuna funcionaria de forma autónoma imprimiendo en sus habitantes un sello particular, ya serían cerrillanos. La ubicación de la comuna de Cerrillos se sitúa al sur poniente de la provincia de Santiago. Al norte limita con la comuna de Estación Central, al poniente con la comuna de Maipú y San Bernardo y al oriente con la comuna de Pedro Aguirre Cerda y Lo Espejo. ¹ En Municipalidad de Cerrillos, http://www.mcerrillos.cl/home/comuna/default.aspx 7 Villa México 3. Antecedente de Villa México 4. Orígenes de Villa México La Villa México está ubicada en la comuna de Cerrillos, en el sector poniente de Santiago. Limita con Av. Américo Vespucio por el norte (actualmente la Autopista Vespucio Sur), Av. Esquina Blanca por el sur, Los Tilos por el este y Av. Salvador Allende por el oeste (ex Avenida Ferrocarril). Gracias a los fondos previsionales y de la Caja Empart que se construye Villa México, proceso que culmina aproximadamente en marzo de 1970 por parte de la Corporación de la Vivienda (CORVI). Se asignan las primeras residencias a los afiliados de la Caja Empart en junio de 1969, luego el Servicio de Seguro Social en agosto de 1970. La Autopista Vespucio Sur representa un límite urbano bien deinido, ya que en el tramo que limita la Villa México sólo contempla un cruce vehicular a través de la Av. Las Torres y una pasarela peatonal en Los Tilos. La Vía Férrea paralela a Av. Salvador Allende constituye un límite importante, ya que no permite el cruce de vías. La Av. Esquina Blanca constituye un límite urbano de uso, ya que no tiene calles que la cruzan hacia el sur y los destinos de los predios son industriales. 8 Historia y memoria Estas condiciones, le otorgan a la Villa México un carácter y espacialidad bien deinida urbanísticamente con características propias e identiicables². De esta manera Villa México se funda el año 1970 y hay quienes dicen que se contó con la presencia del embajador de México de la época. Este hito histórico se constituye en la identidad de la Villa y da origen a la Plaza Benito Juárez, lugar que hoy cuenta con un monolito en honor a tan ilustre personaje. Sin embargo, hay quienes niegan tajantemente su participación y visita. Lo que sí es innegable es la inauguración de la plaza. Los residentes del barrio, en su mayoría son adultos y adultos mayores, reconocidos como los “fundadores” de la Villa, son los primeros habitantes quienes fueron empleados, funcionarios e imponentes de la Caja de Empleados Particulares (Empart). Sin embargo, con posterioridad se cuenta que llegaron una gran cantidad de personas para tomarse las viviendas de la villa. Esto último, es parte importante de la historia que identiica a un grupo de vecinos. Las tomas se organizaron en 1970, con el triunfo de Salvador Allende, ya que se les respetó la ocupación de las casas y departamentos. Se recuerda que las escrituras le fueron entregadas solo a las ‘dueñas de casa’. ² En Estudio Técnico de Base, Programa Recuperación de Barrios “ex Quiero mi Barrio” Ministerio de Vivienda y Urbanismo. “Yo llegué acá a la Villa México el año 69, en setiembre del año 69, cuando esto todavía no se entregaba (…) La Villa México aún no se entregaba (…) No, se entregó la parte donde yo llegué fue justamente la calle Ciudad de México en el block al que yo llegué, el block 16, llegaron… eran para los funcionarios de la Corhabit, en ese tiempo, el año 69, estamos hablando del Serviu que es en estos momentos, sino que se llamaba Corhabit y uno que tenía que tener 530 cuotas, digamos estampillas, que le ponían, igual que en el seguro en la libreta a uno le ponían estampillas y eran 530 estampillas, digamos lo que a uno le ponían en la libreta para poder llegar a cumplir la meta para poder tener una vivienda. Y en esa oportunidad yo estaba soltero, bueno yo completé las 530 cuotas para mi vivienda” (Iván Osorio). 1965: APARECE EL MINVU (CORHABIT) Hacia comienzos de los sesenta existen por lo menos 28 instituciones dependientes de ocho ministerios que intervienen en asuntos de vivienda, urbanización y equipamiento. Para enfrentar esta situación se crea el Ministerio de la Vivienda y Urbanismo (Minvu), que junto a la Corporación de Vivienda (Corvi) y la Corporación de Servicios Habitacionales (Corhabit), es integrada por la Corporación de Mejoramiento Urbano (Cormu), empresa autónoma del Estado, una de cuyas principales funciones es mejorar y renovar las áreas deterioradas de las ciudades, mediante programas de rehabilitación y desarrollo urbano. Se aprueba el primer Plan Regulador Intercomunal de Santiago, que ajusta el crecimiento de las ciudades, protegiendo las áreas de cultivo y la ecología. Se establece una zoniicación para construir barrios industriales y un cinturón suburbano. Se deine la red básica de transporte y vialidad regional, intercomunal y comunal. Se regulan los sistemas de áreas verdes, la creación de multicentros cívicos y comerciales, y la protección de las reservas de suelo para grandes equipamientos metropolitanos. / En: http://www.minvu.cl/aopensite_20061113164636.aspx 9 Villa México Al llegar los vecinos relatan que faltaban árboles, no contaban con áreas verdes. Agregan que debieron organizarse y gestionaron con Corhabit una gran cifra de árboles3 que fueron plantados por los propios habitantes, los cuales muchos de ellos se conservan hasta el día de hoy. En la memoria de estos primeros habitantes se reconoce la importancia del conjunto como pionero y uno de los últimos que fue construido por la Caja de Empleados Particulares. Otro conjunto fue la población Santa Adela Camino Melipilla. En ese entonces era el Estado el que construía los conjuntos habitacionales, hoy se recuerda y queda en la memoria de los habitantes como un hecho único en la historia del país. 10 “…esta población fue terminada el año sesenta y ocho, como bien dijo la señora, por los empleados particulares, que yo me saco el sombrero con esos dirigentes, eran súper inteligentes, ellos solicitaron la construcción de esta población, y tengo entendido que no les gustó primero, porque hicieron estudios, y vieron que había un ambiente muy húmedo y que eso iba a perjudicar a sus familias, a los hijos, los niños, y fuera de eso, los edificios ninguno tenía balcón, así que ellos lo rechazaron. Y ahí quedó. Sesenta y ocho, sesenta y nueve, y yo heredaba uno de esta parte de acá. De Las Torres para allá que son casas bajas, era para los obreros, los asegurados, el seguro social, otra caja que había en esos años, pero ahí yo diría que más de la mitad eran asignados ya”. (Juan Díaz) Se dice que esta villa la diseñaron los empleados particulares, pensada e implementada como Unidad Vecinal. Cuenta con dos sedes sociales de iguales características. La actual sede de la junta de vecinos y una segunda en Cerro La Campana, ambas poseen sitios destinados a la construcción de equipamiento y/o servicios comunitarios como construcción farmacias, supermercados, locales comerciales, carabineros, servicio de salud, entre otros. 5. La asignación de las viviendas Las viviendas eran asignadas por medio de un puntaje. En ese entonces los diferentes trabajadores del país imponían para la Caja de Empleados Particulares que disponía para sus imponentes una serie de beneficios. Por ejemplo, la cantidad de hijos y el contar con un monto ahorrado. 3 Algunos hablan de 4.500 especies. Historia y memoria EL EMPLEADO PARTICULAR Para tener acceso a una vivienda construida por la Caja de Empleados Particulares era necesario ser “empleado particular“. Según el Artículo 2º del Código del Trabajo vigente en 1959, empleado particular era toda persona que en virtud de un contrato prestara servicios remunerados a un empleador, y en cuyo trabajo predominara el esfuerzo intelectual sobre el físico. Una vez que el Servicio Técnico de la Caja recibía las obras de un conjunto de viviendas, hacía un llamado a inscripciones especiales para su venta. Los postulantes que reunían los requisitos eran ordenados por puntaje, conforme a una tabla de prioridades basada en los siguientes criterios: antigüedad como imponente; número de cargas familiares; monto del sueldo. De este modo, según el Reglamento de la Ley 6071, de 1953, ”los postulantes comprendidos en la lista de selección tendrán derecho a elegir la casa o departamento de su preferencia en el orden en que figuren en esa lista“ (Boletín Empart, abril 1953; Nº 4). En: Unidad Vecinal Portales (1955-2010) Arquitectura, identidad y patrimonio. 2010. Minvu. 11 “…Y eso, al tener hijos a uno le ayudaba a tener puntaje y eso le subía a usted la posibilidad de adquirir una vivienda. Y por eso mismo a mi me dijeron “no, no en estos momentos…”. Claro, me dejaron la libreta en CORAVIV y “veamos qué posibilidades va a tener más adelante”. “Muy bien pues” le dije, perfecto, como yo trabajaba en el Ministerio de la Vivienda en ese tiempo, perdón trabajaba en el Ministerio de Obras Públicas, entonces me permitió desilusionarme en ese sentido y como debido a esos convenios políticos que estábamos recién tocando, el block donde yo ahora estoy viviendo era justamente para funcionarios o familiares de CORAVIV y la persona que quiso llegar a obtener el departamento donde yo estoy viviendo que le asignaron a ella, no le gustó, por debido a que le faltaban las puertas, puertas hablemos de los dormitorios, que tenía puertas si en la cocina y en el baño, y no estaba… bueno era mi departamento que no estaba bien terminado, no era entre paréntesis… porque todavía no me lo entregaban. Pero debido a que después que me lo entregaron, a mi me llamaron, me dijeron “señor la persona que… venga señor me dijeron porque resulta que le tenemos una buena noticia” y cuál era la buena noticia, era que me asignaron ese departamento, porque la persona… usted cumple con los requisitos para adquirir esa vivienda porque usted tiene sus cuotas, tiene todo, las 530 cuotas que correspondía a las estampillas en la libreta y me dieron de un día para otro para ocupar el departamento con todas las de la ley. Y uno al llegar acá a la villa esto estaba todo Villa México Historia y memoria cerrado desde Avenida Las Torres, si Avenida Las Torres si usted la ubica no sé, Avenida Las Torres estaba todo cerrado, no podía nadie entrar a este sector, porque todo esto de acá era para Empleados Particulares (…) era para la Empart. O sea, había un sector para funcionarios. Los seguros social (sic) eran justamente los operarios antiguamente. (Iván Osorio) Se cuenta que podían postular a la vivienda empleados particulares, fiscales, del seguro social, del seguro obrero, incluso funcionarios de la misma Caja de Empleados Particulares, tener la libreta significaba embarcarse en la posibilidad de acceder a la tan anhelada vivienda propia. Historias de trabajo, se casaban, formaban las familias a fines de los 60 y buscaban la independencia. Se llenaba el formulario y con eso se disponían a postular a la vivienda. 12 Era un momento especial. Los vecinos se inscribían, juntaban sus puntos (cuotas), hasta que recibían la noticia, en ese momento se les daba un plazo para desistir. Se cuenta que varios imponentes por determinados motivos prefirieron otros conjuntos de la época (Villa Olímpica y Villa Portales o Unidad Vecinal Portales, por ejemplo). Una vez que se les daba la gran noticia, les entregaban las llaves y partían a reconocerlo, muchos se quedaron, no lo pensaron dos veces, tomaron sus cosas y hacían de este espacio el lugar donde forjarían comunidad, otro, no. La Caja ofrecía ciertas garantías, por ejemplo en salud para el imponente y la familia. LA CAJA DE EMPLEADOS PARTICULARES Creada por el Decreto Supremo Nº 857, del 11 de noviembre en 1925, la Caja de Previsión de Empleados Particulares contaba con la facultad de recaudar fondos individuales de retiro mediante el cobro de imposiciones y contribuciones voluntarias de empleados y empleadores. Estos fondos individuales se destinaban al pago de beneficios sociales como auxilio de cesantía, invalidez, pensiones de jubilación, viudez y orfandad, así como a los gastos administrativos necesarios para la gestión institucional de la Caja. A partir de 1952 la Ley 10.475 facultó a la Caja para invertir los excedentes de estos beneicios. Esta ley estipulaba que ese dinero podía destinarse a la construcción de casas de habitación aisladas o en colectivos, podrá adquirir sitios eriazos y urbanizarlos, el otorgamiento de préstamos con garantía hipotecaria a sus imponentes para adquirir o construir casas de habitaciones; la adquisición o construcción de ediicios institucionales propios; el otorgamiento de préstamos de auxilio a sus imponentes. Así, la Caja quedó facultada para adquirir terrenos, urbanizarlos y construir viviendas en ellos, convirtiéndose en gestora de proyectos inmobiliarios. Con estas atribuciones pudo abocarse a resolver lo que en su momento el Boletín Empart señalaba como ”el más grave problema que afectaba al empleado particular: el de la habitación“ (Editorial Boletín Empart. Año I. Nº 12, diciembre 1953). La vivienda, recordemos, fue una de las carencias más urgentes de la década del ’50. En: Unidad Vecinal Portales (1955-2010) Arquitectura, identidad y patrimonio. 2010. Minvu. Muchos pospusieron su luna de miel y siguieron ahorrando en la CORVI, donde se inscribían, la cual establecía el valor de la unidad reajustable para la vivienda. “…entonces todos los meses uno tenía que colocar la unidad reajustable que pudiera, nosotros colocábamos diez”. (Robinson Díaz). Equivalente a unos quinientos pesos actuales. En relación a la adjudicación de la vivienda por medio del seguro social el vecino relata: “Como le anticipé, que el llamado que hizo nuestra asistente social, yo me inscribí, llené los formularios y puse las garantías que yo podía dar, la cantidad de cuotas reajustables más una cantidad de dinero. Y yo tenía en ese momento diecisiete años de trabajo, porque en el primer trabajo que tuve, ese señor que hacia cera, su señora me dijo, te voy a sacar la libreta de seguro. Y yo siendo un muchacho, me sacó la libreta, me inscribió y desde ese año yo era trabajador con la libreta de seguro social, y eso significó que yo no tenía ni un tiempo de cesantía y eso en el puntaje, porque después supe como hacían el puntaje dependiendo de la cantidad que ofrecía, dependiendo de los años que usted era obrero en el servicio de seguro social, eso le daba un puntaje, y con eso que nos dio el primer piso. Además que nosotros la cantidad de puntaje nos favoreció en ese sentido porque yo preguntaba a la gente. Entonces el seguro tenía el criterio de las personas que ofrecen más garantía, el primer piso, y las de menor hacia arriba.” (Robinson Díaz). Otros vecinos llegaron también por medio del Servicio de Seguro Social, otros desde la Caja de Empleados Particulares y un grupo no menor desde el Servicio Nacional de Salud. 13 Villa México En sus inicios, la villa estaba cerrada con tablas y mallas. Corría el inicio de los años ´70 y era evidente el proceso de efervescencia social que se vivía en esa época, ante las tomas los vecinos y vecinas procuraban cerrar para evitar conflictos con los nuevos habitantes. El acuerdo era pasarles los departamentos desocupados para que se hicieran cargo de ellos. Las familias llegaban muchas de ellas con sus hijos pequeños a un lugar diferente, con amplios departamentos, grandes bloques de edificios, instalada en un lugar particular, con un cordón industrial por el Sur, la línea del tren, Américo Vespucio y la Villa Zaror como vecinos. Se reconoce siempre una buena relación con los habitantes de esta última. También se valora esta suerte de aislamiento. De hecho se reconoce su tranquilidad como su principal cualidad. Asimismo, la solidez de su estructura, que ante los terremotos no ha sufrido prácticamente daño alguno. 14 Se dice que en el gobierno de Eduardo Frei Montalva, la villa se encontraba en la etapa de proyecto y tras la visita a Chile del Presidente de México López Mateo se le comentó dicha iniciativa. Habría sido el propio presidente mexicano quien sugirió el nombre, accediéndose por cuestiones diplomáticas. Sobre este suceso hay versiones encontradas, puesto que hay quienes ratifican esto y otros que tajantemente la rechazan. Por ahora es la única versión. De hecho, sus defensores señalan que habría venido el propio presidente a inaugurarla. Sin embargo, al consultar sobre este episodio no se encuentran registros. Más allá de la anécdota, sus detractores lo consideran un hecho que ha ido configurando y reforzando la identidad del barrio. Muchos señalan que fue un gran cambio llegar a la villa, algunos vivían en casas independientes y el asentarse en un block junto a otros, implicó el desafío de construir comunidad. Por otro lado, había quienes vivían de allegados por lo que tenían que compartir el baño, la cocina, el comedor y llegar a Villa México implicó una mayor independencia e intimidad en el entorno familiar. La Caja de Empleados Particulares contaba con una oficina de administración en la Villa México, operaba en dos departamentos contiguos a la Casa del Dirigente. Se encargaba de recibir a las familias que llegaban a la villa; chequear a los asignatarios; llevarlos hasta sus departamentos y entregarles las llaves. Contaba con una nómina con todas las casas y todos los departamentos. Se cuenta que la entrega no siempre respondía al proceso de asignación de las viviendas como la Caja lo establecía, es decir, en varios casos llegaban a acuerdos. También contó con sub administraciones, una de ellas se encontraba en el block 14. Historia y memoria “Yo llegué sola, el chofer de la firma me trajo en una camioneta con mis niñitas, mi esposo no. Vino del norte, y yo llegué aquí como a las nueve de la mañana y habían entregado la llave de mi departamento por cinco escudos, o sea, la gente que estaba no era muy especializada, no era gente muy correcta porque para que le voy a decir si eran muy correctos para que se vendían, ya eso no se llama ser correcto. Entonces yo esperé hasta casi las cinco de la tarde con mis niñitas sin comer. Venia de Chillán yo como de las cinco de la mañana y no había forma que me trajeran algo. Y yo quería una casa por 5 de Abril… ahí de las primeras casas. No para adentro de la villa, pero también estaban entregadas por plata, la casa que nos habían asignado estaba entregada por plata. Entonces me dijeron ahí en la caja, que me quedara ahí, que me iban a entregar un departamento, porque estos departamentos estaban vacíos, era solamente que habían recibido plata, y yo de tanto luchar con mis niñitas me abrieron y me dijeron que en quince días más me entregaban la casa. Y todavía estoy esperando los quince días. Parece cuento todo.” (Ester Pincheira Chaparro). Estas entregas habrían sido el año 71. Hace poco había sido electo el Presidente Salvador Allende. “…de Los Tilos a Las Torres, es de la Caja de Empleados Particulares y de Las Torres a Salvador Allende o ex Calle del Ferrocarril, esa es de la servidora. Por eso te digo, son como dos etapas, porque acá las casas de un piso tiene 70 metros cuadrados, y las casas de un piso de acá al lado tienen 42 metros cuadrados, entonces se ve la diferencia. Entregaron las dos etapas con sede social, con los espacios para las escuelas, y los viejos [tuvieron] la capacidad de juntarse y luchar por las escuelas, porque no teníamos escuela, cuando llegamos a la villa, yo llegué de 6 años”. (Cecilia Foncea) “Llegué acá porque mi viejo…, él entró a trabajar haciendo el aseo. Por ejemplo, … porque estos eran de la Caja de Empleados Particulares y ellos hacían el aseo y eran por ejemplo, por decirte,… empleados. Así que barrían, limpiaban, hacían el jardín, cortaban la luz, el agua todas esas cosas…eran… No me acuerdo como se podría llamar eso. Una cosa así como guardia se me imagina. Auxiliar”. (Cristina Aguirre) 15 Villa México Historia y memoria ¿QUIéNES ERAN LOS EMPLEADOS PARTICULARES? “…es empleado particular aquel que presta sus servicios a otro mediante remuneración y en cuyo trabajo hay predominancia del esfuerzo intelectual por sobre el físico. Luego es la preponderancia de un esfuerzo sobre otro, físico sobre el intelectual o viceversa, el que determina la calidad de obrero o de empleado particular.” P.137* “Si predomina el esfuerzo intelectual puede tratarse de un empleado particular, siempre y cuando concurran los demás elementos constitutivos de esta calidad y que son: Que el asalariado este subordinado a un empleador o patrón y que los servicios se presenten en virtud de un contrato de trabajo.” P.138* La Ley 8.377 de 3 de noviembre de 1945, reconoció la calidad de empleados particulares -si bien solo para los efectos de la previsión- a los profesionales que sirvan de manera continua y a base de sueldo fijo a 2 o más empleadores. 16 Con la Reforma Previsional de 1980, una vez privatizado el sistema de seguridad social a través de la creación de las Administradoras de Fondos de Pensiones, la distinción entre empleado particular y obrero deja de ser relevante, dado que en las AFP se cotiza de manera individual. Al romper se el principio mutualista, será la capacidad individual de acumular capital lo que garantizará su seguridad social, independiente de cuál sea el origen o la composición familiar del trabajador. Fuente: “Apuntes del derecho de trabajo y de la seguridad social”, Editorial jurídica de Chile, Cap. XV., sin fecha, pp. 137-138. En: Unidad Vecinal Portales (1955-2010) Arquitectura, identidad y patrimonio. 2010. Minvu. 6. Ahorro Para llegar a ser propietario de una vivienda se contemplaba un ahorro previo que era en escudos, justificando además renta personal del postulante y la del grupo familiar, se les daba a los beneficiarios un plazo de 15 días dicha renta “Aporte al contado de mil quinientos escudos ofrecidos por usted, que yo ofrecí en dinero”. (Robinson Díaz) También se relata que tras las tomas, se buscó regularizar la situación por medio de un ahorro, en cuotas, que según los vecinos hoy homologaría a las unidades de fomento (UF), se habría encuestado a los vecinos y solicitado este aporte para regularizar la situación de ocupación de las viviendas. Las familias ocuparon sus ahorros, vendieron algunas cosas, se juntó el dinero y se depositó, después vinieron los pagos de dividendo, muchos pagaron dividendo hasta los años 80, historias de esfuerzo familiar, que en ocasiones tuvo que sortear desempleos del jefe de hogar, del crecimiento de las familias y crisis económica. No obstante, hubo quienes no pudieron reunir el monto establecido y se fueron de la villa. “…con las 420 cuotas que existían (…) pero de los ferrocarriles (…) tuve que venirme al tiro para acá porque la cosa se estaba poniendo peluda, ja, ja, porque ya estaban comenzando las tomas casi, y así fue (...) había que poner unas cuotas que se exigían, todavía tengo una libreta yo, 430 cuotas había que tener para el plan que teníamos nosotros acá, y yo incluso después tenía ya antecedentes de Chile, no de la ésta de Eduardo Frei Montalva, allá en Ñuñoa tenía una casa yo, me la habían asignado, y yo no quise irme para allá, ya estaba acá yo, eran bonitas las poblaciones, ¿saben por qué me quedé? por el sitio, el sitio es amplio el que tengo yo, es inmenso, las casas son chicas de 42 metros como dice la señora, pero el sitio es grande”. (José Álvarez) Otros postularon en varias ocasiones a la vivienda sin tener suerte, se dice que además la Caja, de acuerdo al sueldo del imponente, estimaba las posibilidades del postulante, siendo claves la cantidad de hijos, los sueldos y la renta familiar. “Yo era un burdo empleado particular hotelero, ganaba poco y tenía una carga familiar, entonces había postulado tres veces por la Caja de Empleados Particulares. Yo era del gremio hotelero. La Villa estaba totalmente terminada en ese tiempo, los departamentos. Y ahí me dijo que don Lucho que venía a elegir en el sector de empleados particulares, en ese sector estaban los primeros cuatro blocks que están en la calle Vespucio de las Torres para arriba, esos primeros cuatro blocks eran para empleados particulares y los departamentos eran más grandes que el resto. Y el caballero que me atendió personalmente me atendió y eligió entre los cuatro blocks, de cada block sacó un llavero y me llevó a donde yo vivo actualmente, me dijo: Señor, ¿Qué le 17 Villa México parece este departamentito? Yo no hice demás que darle gracias a Dios porque me encontré con un departamento con tres dormitorios, un living comedor estupendo, un baño y una cocina estupenda, que me iba a regodear. Y me dijo traigo cuatro llaves más para mostrarle, me quedo con este si es que tengo méritos, había postulado varias veces en la Caja de Empleado Particulares, y no salía (…) yo le dije, si esto es la bendición de Dios me quedo con él, ‘pero si quiere le muestro los otros para ver si le gustan’, y yo no, yo me quedo con esto y ahí tiene las llaves, cámbiese rápido, día viernes en la tarde, cámbiese rápido porque estos se los van a tomar ¿y quiénes se los van a tomar?, el gremio de Servicio Nacional de Salud, que tenía un gran problema habitacional, organizadamente se iban a tomar los 800 departamentos de la Villa, ese es el inicio de la historia” (Raúl Contreras) Corrían los años 70’ y Chile como el resto del mundo, se removía ante un cambio social, el socialismo se presentaba como una opción real de construcción sociopolítica. La Villa México no fue ajena a dicho proceso y las tomas son un claro ejemplo de ello. 18 7. Las tomas Previo a la llegada de los nuevos vecinos, la Villa contaba con rondines cuya misión era evitar las tomas. Para esto, contaban con una campana que estaba en la plaza frente al comunitario Nº 2, entonces ante la amenaza de tomas, se hacía tocar para alertar a los vecinos. Se relata que las tomas se iniciaron al poco andar del gobierno de Salvador Allende. Los nuevos habitantes se instalarían principalmente en los bloques desde Av. Las Torres hacia el oriente. Incluso se relata que los mismos propietarios tenían la posibilidad de tomarse otra vivienda. Esta nueva oleada de habitantes se organizaba desde el gremio de la salud, funcionarios de hospitales y consultorios. “El período de las tomas como le digo, eehh, hubo gente que pusieron banderas, ponían la bandera en la ventana y ‘esta casa está tomá’. Una bandera chilena y punto. Era la forma de tomarse… o la vivienda porque también habían casas, también poh, que también estaban toma’. Entonces esa era la forma, digamos, de tomar la casa, tomarse las casas, no todos si, no todos se los tomaron, hubo una gran parte también que fue asignada pero la gran mayoría de este Historia y memoria sector que yo conozco. Acuérdese cuando estaban las protestas, justamente ese sector era mucha protesta, sobre todo este sector para acá” (Iván Osorio) Un grupo de funcionarios venía del Hospital del Salvador, se organizaron para tomarse primero una vivienda en la Villa Francia, pero el departamento les quedó chico, supieron de un grupo que se organizaba para tomarse viviendas en la Villa México, no lo pensaron dos veces y partieron. “…y nos tomamos la Villa Francia. Bueno, yo tenía dos hijos, la señora, mi suegra, éramos cinco, y los departamentos en la Villa Francia no sé si usted los conoce, son chiquititos, tienen dos dormitorios, living comedor, cocina y lavadero, me quedaron la mitad de las cosas afuera, así que con mi hermano decidimos abandonar la toma. Llegamos a la pega, pero otro grupo nuestro estaba trabajando para venirse a la Villa México a través de Pareto, porque era amigo de nuestro director Juan Fierro” (Juan Díaz) “ Llegamos aquí, nos sentamos en Acapulco con las Torres y nos llega el aviso, estos son los departamentos de ustedes, tomen, aquí están las llaves, y cada uno entró con su llave al departamento, no hicimos tira absolutamente nada (…) ya, al otro día, a los dos días después, los carabineros, ‘qué pasó aquí’ y nosotros todos entramos con llaves, somos todos asignados, y el oficial medio así puntudo ‘no, no, no, no’, ‘vaya a preguntarle al administrador’, ‘bueno pero todos afuera, y me esperan aquí, en el bandejón central’,’ listo no más mi teniente vaya no más’. Partió el teniente y después llegó con 15 llaves, el administrador le había pasado 15 llaves para su dotación de carabineros, con eso se acabó el problema con la fuerza pública. Bien pues, así que ‘adelante muchachos de regreso otra vez’, bueno y después venían una especie de bandadas, así, oleadas de tomadores, del San Juan de Dios, del San Borja, de todos los hospitales de Santiago, llegaban aquí a Las Torres y de aquí seguían para arriba, lo que veían desocupado se lo tomaban. Estuve un mes haciendo guardia, con así unos barrotes de cobre que tenían los casilleros de los closet, y nuestras mujeres se dedicaban a hacernos el almuerzo”. (Juan Díaz) Cabe preguntarse por qué funcionarios de la salud principalmente llegan a tomarse las viviendas de Villa México, entre otras. La respuesta apunta a los precarios sueldos que recibían los funcionarios, muchos contaban con libreta de ahorro. Sin embargo, no alcanzaban a reunir el dinero correspondiente a la asignación de la vivienda o postularon en más de una ocasión sin lograr resultados. 19 Villa México “…nosotros en aquellos tiempos ¿cuánto ganábamos? ¡una miseria po’! yo tenía como 200 unidades de ahorro, cuotas que le llamaban en aquellos tiempos. Casi todos teníamos una libreta, pero nos faltaban la mitad, era complicadísimo conseguirse una vivienda”. (Juan Díaz) Una vez establecidas las familias entra en escena la Junta de Vecinos que regulariza la situación de las familias que se habían tomado una vivienda. Se les daba la posibilidad de inscribirse en un comité de vivienda, ahorrar, asegurándose que no tenían otra vivienda. Algunos dejaron sus departamentos o casas y así se alejaron de Villa México. Otros, de hecho la mayoría, se quedaron, compartiendo con aquellos que llegaron por medio de la Caja de Empleados Particulares, empleados de la Corporación de la vivienda, o de la Caja de Ahorro Municipal. 20 Historia y memoria En el testimonio de algunos vecinos que se tomaron departamentos aparece el nombre de Abelardo Marín, quien instó y organizó a empleados para que se quedaran en la villa, quien además habría organizado un club deportivo en los orígenes de ésta. Se cuenta que otro grupo procede de gendarmería, quienes en menor número habrían llegado a la villa. Las casas fue lo que primero se tomaron. Y muchos de los departamentos tomados fueron previamente rechazados por la gente a quienes se les asignó. Algunos de los asignatarios se preocuparon de cuidar sus viviendas, en tanto, otros no se complicaron con las tomas y llegaron a un acuerdo con los nuevos habitantes, indicándoles la disponibilidad de departamentos que quedaban vacíos para ser ocupados. Se decía que la Caja ya no seguiría construyendo. En relación a las tomas los vecinos comparten que no se trató de un proceso violento, pero que fue organizado principalmente desde el área de la salud, quienes se instalarían junto a familiares y amigos hacia el sector de la circunvalación Américo Vespucio. Se comenta que la autorización bajó desde el mismo Presidente de la República, Salvador Allende, con el argumento que existía un gran número de viviendas desocupadas y una gran cantidad de familias que necesitaba de ellas. “Todo tomado, eran del hospital San Juan de Dios, eran todos enfermeros y esas cosas. Una invasión de tomados acá en la Villa. Y en eso estaba este sector. Y mi viejo me dice, que los chiquillos le habían dicho que se querían tomar estos departamentos, para que te voy a decir, yo no conocía acá, mi viejo sí, porque él trabajaba acá. Y me acuerdo que él cuando me dijo, ¿y te gustaría irte para allá si lo tomamos? y yo le decía que me daba miedo. Porque lógico era muy jovencita. Y él me dijo es que supieras que es bonito que se yo, me dijo si se toman los chiquillos ¿te irías tu?, y yo le dije que no, y después yo vine a conocer y lo encontré tan lindo, nada que ver con lo que yo vivía con mis hijos porque allá era feo”. El proceso de tomas fue rápido, se decía que como el gobierno de Eduardo Frei Montalva se encontraba en las postrimerías y ya había sido elegido el doctor Allende, la Democracia Cristiana no presentaba problemas en entregarles el gobierno paulatinamente a los socialistas. “…yo tenía una casa de maderita no más, y acá todo listo, yo siempre le dije que acá era una bola de cemento, todo tan bien urbanizado y allá no. Pero yo en todo caso estaba postulando para una casita, pero me faltaba puntaje porque era muy de mejor calidad y como no había medido en operación sin que hubiese llamado, entonces por eso me tocó eso, pero después iban a hacer otras. Y mi viejo de la noche a la mañana, el grupo se organiza acá y se toman. Y me fue a buscar a mí, yo estaba trabajando. Y cuando yo llego a la casa no veo nada, en mi casa, en mi cuartucho que yo vivía. Y él me dice, oye me dijo se fueron todos porque se tomaron acá, y cuando yo llego ‘vive aquí’. Y acá nos quedamos”. (Cristina Aguirre) “…Entonces la gente del gremio del servicio nacional de salud que tenía mucha necesidad habitacional se organizaron una toma general de los 800 departamentos. El señor que me fue a mostrar a mí el departamento me dijo cámbiese rápido porque después que se lo tomen esto no se lo van a entregar a usted, aquí tiene las llaves cámbiese lo más rápido que pueda. El día sábado en la mañana yo le puse la pistola al pecho a mi señora, que en paz descanse, y a mi hija y nos vamos a la Villa México ‘y donde queda eso’, ‘en Maipú’, ‘no como nos va a ir a desterrar’, vivíamos en pleno centro, ‘si ustedes quieren se van conmigo, si no, me voy solito me llevo mi colchoncito a ocupar esto porque se van a tomar los departamentos, les doy la última opción’, a mi señora y a mi hija, ‘les voy a ir a mostrar el departamento a ver si les gusta o no’, vivíamos en dos piezas arrendadas allá en Santiago. Cuando vio el departamento mi señora revisó todo el departamento y cerró la puerta principal y dijo, ¡de aquí no me sacan ni muerta! Nos cambiamos el sábado en la mañana, a mi me cambió Hernán Arena el esposo de Silva Infanta de Los Cóndores, el famoso conjunto folclórico. Hernán se había comprado un camión para hacer fletes, trabajamos juntos en la Posta Tarapacá y me dice: ‘Raúl ayúdame a hacer algunos 21 Villa México clientes’ y me entregó como 5 tarjetas. El primer flete que hizo fue conmigo. Nos cambiamos el sábado en la mañana y el sábado en la noche se tomaron todos los departamentos. Venían en buses, en auto, en camiones, en camionetas, en carretones, que se yo para tomarse los 800 departamentos. Vieron que yo tenía una ampolletita ahí en el departamento, que se veía iluminado y yo veía el tropel que se sentía como a las 11 de la noche, calcule usted: en buses, en camiones, en camionetas, en carretones, llegaron la gente así como una invasión. Yo le dije a mi gente, quedémonos tranquilitos aquí con llavecita por adentro, veremos si nos respetan. Y no nos molestaron hasta hoy día. Yo no soy enemigo de las tomas, ni soy yo partidario de las tomas, no me pronuncio al respecto. Desde entonces conozco la Villa”. (Raúl Contreras) No podemos desconocer que las tomas generan diferentes miradas y versiones, hay quienes aprueban y otros que disienten. La mayoría no se pronuncia. Lo que la gran mayoría no comparte es que con posterioridad muchas de estas viviendas tomadas habrían sido vendidas en suculentos precios o que algunas familias habría adquirido más de una vivienda, impidiendo la posibilidad de resolver las necesidades de otras familias. 22 Se reconoce a la gente del gremio de la salud como organizado, aguerrido, bien formado y capaz de hacer paros sindicales a gran escala. “…cuando vino la trasmisión de mando, ya ahí con el compañero Allende empezaron a producirse las tomas por parte de nuestros contrarios, de la derecha, entonces nosotros dijimos ¡no!, ‘cómo le vamos a entregar la población a la derecha’. Esa es más o menos la historia del grupo nuestro”. (Juan Díaz) Años después, como ya indicamos, la Junta de Vecinos normalizaría la situación en casas y departamentos tomados, por medio de la entrega de los títulos de dominio, sucedió también que se reasignaron a algunas personas. Una de las situaciones que queda en el recuerdo de los vecinos por su peculiaridad, es la siguiente historia en relación a las tomas en el sector de Nueva Laredo: “…habían cuidadores, entonces llegaron las funcionarias del Hospital San Borja, y entonces hicieron un partido de futbol entre ellos, puras mujeres, y fueron a jugar el partido. Equiparon toda la cuestión, entonces los cuidadores fueron a mirar [le] las piernas a las chiquillas, estaban Historia y memoria jovencitas, y métale mirando todos los cuidadores, entonces los maridos se tiraron por el lado, estaban en la cancha, y los maridos se tiraron por este otro lado y se metieron y pusieron las banderas y de ahí no los sacaron más”. (José Álvarez) 8. Toda la locomoción llegaba hasta allá, hasta Camino Melipilla Durante los primeros tiempos de Villa México se cuenta que la entidad encargada del transporte público era estatal. Era la ETC, Empresa de Transporte Colectivo. “…Entonces a las cinco de la mañana ingresaba el bus a la Villa y se daba una vuelta por aquí tocando la bocina. Tocaba la bocina y se paraba en la Avenida Acapulco. Y la gente que sabíamos nos íbamos ligeritos para donde estaba el bus, nos subíamos, se llenaba y partía”. (Robinson Díaz) Pero este no era solo un traslado, era una instancia de encuentro y conocimiento entre los vecinos de la villa, el recorrido que hacía la locomoción, generalmente era largo antes de llegar al centro de la ciudad, como Estación Central o Mapocho. Se esperaba la llegada del bus en una larga fila, espacio que se prestaba para la conversación. Había varias líneas, las cuales en su gran mayoría terminaban su recorrido en Camino Melipilla. Para llegar a la Villa México ingresaban caminando por 5 de Abril, se acompañaban en el trayecto y ahí se conocían, conversaban y hacían amistad. Se dice que también salía un colectivo desde Estación Central, pero solo los usaba la pura gente que tenía platita no más, unos amarillos grandes que había que eran tan grandes esos autos. Con el tiempo llegaron otros recorridos: La Cerrillos, la Bernardo O’Higgins, Y con posterioridad, las conocidas “amarillas” recorridos 210 y 211. También se habla del tren que provenía de Cartagena y llegaba todos los días a las 10 de la mañana, se detenía en la villa y los dejaba en Estación Central. Éste fue un recurso bastante ocupado por los vecinos, dicho servicio habría dejado de funcionar a mediados de los años 80’, lo cual habría coincidido con la mayor presencia de locomoción colectiva en el sector. Por aquel entonces no habían paraderos, el bus se detenía en la calle Esquina Blanca, la única avenida. Era un bus que venía de la Municipalidad de Maipú y que llegaba hasta el centro de Santiago. Muchos 23 Villa México vecinos se conocieron caminando desde la micro a sus casas. También se recuerda la “Ñuñoa – Cerrillos” “…era la 31 creo, era la liebre que llegaba justamente a esa esquina de la población Zaror. Es una de las alternativas que empezó a llegar acá. Esa iba para Ñuñoa, para Av. Grecia creo. Sí, pasaba por todo el sector Ñuñoa y se iba por este, camino Melipilla y tomaba Buzeta, Buzeta tomaba, San Joaquín, seguía derecho y de ahí doblaba por Isabel Riquelme, tomaba Isabel Riquelme seguía y no me acuerdo después la otra calle que llegaba a Gran Avenida, de ahí de Gran Avenida tomaba para el sector, para llegar a Ñuñoa, seguía derecho por la calle San Joaquín y llegaba hasta Vicuña Mackenna, hasta el paradero nº 5 de Vicuña Mackenna y de ahí doblaba, doblaba por la calle, Vicuña Mackenna tomaba por el lado izquierdo, por el Diario La Tercera y seguía para allá y de allí tomaba para el sector de Ñuñoa. Guillermo Mann, por ahí”. (Iván Osorio) 24 El destino principalmente era la Alameda, de ahí se distribuían hacia sus diferentes empleos, tomando otra locomoción o caminando hasta sus trabajos. Cerrillos – Villa Olímpica o la liebre Manuel Montt – Cerrillos, eran otras líneas del anterior sistema de transporte público. Más adelante se estrenarían las conocidas micros amarillas, sistema de transporte público que funcionó desde el año 1997 hasta el año 2007 cuando se implementa el Transantiago, “…y se buscaban otros medios también para poderse trasladar, así de a poco se comenzó a poblar esta villa y empezó a llegar también más locomoción, y empezaron a llegar las micros amarillas.” (Iván Osorio) 9. La junta de vecinos, donde está el famoso sombrero mexicano (o la que ordenó la villa) La sede de la junta de vecinos ya estaba construida cuando se entregó la villa, sin embargo, faltaba terminar su edificación, así lo relatan sus dirigentes: “Es muy bonita la historia de acá en ese tiempo, porque había mucho compañerismo, almorzábamos acá nosotros, trabajábamos y esto era puro tierral, y ahí nosotros picoteábamos y lo hacíamos re bien, entonces juntábamos a los vecinos y hacíamos trabajo voluntario, y hacíamos almuerzo, las señoras hacían almuerzo, y para comprar el cemento no había plata Historia y memoria entonces pagábamos las cuotas anticipadas y ahí juntábamos la plata, y para traer el material era un carretón de caballos y nos traían para acá (…) estaba construida la sede, pero el patio que ve usted era puro tierra (…) y los baños ya estaban obsoletos, todo se cambió, y eso se ha hecho a puro… nosotros no más (…) dos sedes, la otra está allá en el cerro La Campana (…) había una campana antes ahí. La campana para las reuniones, y quedó como cerro La Campana, tocaban, la tocaban entonces nos reuníamos allá”. (José Álvarez) A la junta de vecinos se le atribuye una de las gestiones más importantes para los vecinos de la villa, esto es la normalización de las tomas a partir de la entrega de los títulos de dominio. “Fue la junta de vecinos la que limó todas las asperezas, porque tampoco la gente tenía su casa, se preocupó de hacer las cosas que les correspondía hacer. La junta de vecinos empezó caso por caso a ver, por ejemplo, ‘usted tiene que cumplir estas etapas’, cancelar lo que corresponde y no conocí ningún caso en que la gente se fuera. Porque o le asignaban a él o le asignaban a un hijo. Porque de repente la familia llegaba y el hijo es el que estaba inscrito, porque estaba casi la gran mayoría estaba inscrito -como en ese tiempo había una efervescencia política- en las poblaciones se tomó como una norma ir a tomarse las viviendas, algunas que estaban semi-terminadas, algunas que estaban terminadas como en este caso la Villa México. Pero la junta de vecinos, como eran gente trabajadora del área de la corporación de la vivienda, del servicio de seguro social, del plan particular, todos gente de trabajo, activos. Por lo tanto, ellos estaban dispuestos a ordenarse. No había ninguna cosa violenta aquí, todo era porque ellos peleaban por tener la vivienda, además cuando se dieron cuenta cómo eran las construcciones”. (Robinson Díaz) Se dice que la junta de vecinos fue guiando a las familias para que se hicieran propietarias legalmente de sus viviendas, asesorándolas y haciéndoles seguimiento de cada caso en particular. El proceso se caracterizaría por su prolijidad, lento pero seguro, sin disputas, ayudando a los vecinos a ordenar la documentación y poner al día sus ahorros. La junta de vecinos se encargaba de los temas que afectaban a la comunidad, que se caracterizaban por su trabajo, compromiso y organización. 25 Villa México RESEñA HISTÓRICA DE LA JUNTA DE VECINOS DE VILLA MéXICO Nuestra junta de vecinos fue creada el 17 de enero de 1971 El 06 de junio de 1984, el director del SERVIU Metropolitano a nombre de SERVIU nos hizo una cesión gratuita de dos sedes comunitarias, el Comunitario N°1 ubicado en Las Torres N°445, y el Comunitario N° 2 ubicado en pasaje Benito Juárez N° 665 , actual pasaje La Primavera N° 645. Nuestra Personalidad Jurídica consta en el Decreto 415, del 13 de agosto de 1980, de la Intendencia Metropolitana. Las sedes fueron inscritas en el Conservador de Bienes Raíces el 23 de julio de 2003. Cuando nos cedieron las sedes comunitarias éramos de Maipú y el año 1991 pasamos a ser organización de la recién creada comuna de Cerrillos. La escritura nos la entregaron cuando éramos la Unidad Vecinal N° 24 Villa México. Hoy pertenecemos a la Unidad Vecinal N°26 Junta de Vecinos Villa México. 26 El DLF 1-3260 de 1981, estableció la modificación de los territorios de algunas comunas de la Provincia de Santiago, entre ellas la de Maipú. El 19 de mayo de 1986, mediante Decreto Alcaldicio N° 420, quedo territorialmente estructurado en 35 unidades vecinales antes que se materializara la división con Cerrillos. Fuente: Junta de Vecinos de Villa México. “Llegaron funcionarios digamos, bueno, no sé si en ese tiempo de llamaba Corhabit o Serviu, ahí está, por ahí está el cambio… y qué pasó? que a mí, incluso yo me acuerdo, afuera de la misma Junta de Vecinos pusieron una mesas con unas letras para que las personas se fueran a retirar su título de dominio, fueron de las cosas que nos entregaron justamente la Junta de Vecinos. Y bueno, lógicamente como me pillo con la “O” y justamente estaba ahí mi título de dominio y después usted ese título de dominio que le entregaban usted, empezaba a pagar las cuotas, digamos como decirlo, los dividendos, para completar y terminar su vivienda para después asignarse, digamos completar una cantidad de dividendo para que después terminara de pagar definitivamente su vivienda. Una oportunidad en tiempo del caballero éste, de cómo se llama de, Augusto Pinochet que cuando hizo el cambio de Escudo a Peso, entonces al cambiar de Escudo a Peso, entonces obviamente se desvalorizaba el Escudo porque 1.000 escudos era la moneda, 1 peso que puede ser ahora…, 1.000 escudos estamos hablando, entonces obviamente que significaba ponerlo a pesos. Entonces esa devaluación que hubo, le dio la posibilidad a muchas Historia y memoria personas que estábamos pagando nuestro dividendo de pagar y hubo como un ‘perdonazo’, para que así tuvieran la oportunidad de pagar definitivamente toda su vivienda y tuvieron que pagar una ‘X’ cantidad de plata, en ese tiempo no me acuerdo porque hubo ese período que hizo este caballero ese cambio yo ya estaba trabajando en el norte”. (Iván Osorio) “Una vez que le entregaban el título de dominio se empezaba a pagar el dividendo, la Corhabit, se encargaba de los trámites, la libreta, una vez que completaban los trámites se les asignaba la vivienda, el proceso contemplaba la entrega del título de dominio y eso tenía que hacerlo ante Notario, el cual era dispuesto por la Corhabit, como una escritura pública acá, el título de dominio, luego se tenía que inscribir en el Conservador de Bienes Raíces y todo lo demás, entonces yo le estoy hablando del año… se pagaba dividendo, no una gran suma cuentan, pero se cancelaba un monto. Después cuando nos entregaron el título de dominio empezamos a pagar un poco más. (Iván Osorio) 10. Construyendo comunidad Relatan los vecinos que en los inicios la gente en la villa se prestaba ayuda, todos llegaban a un territorio nuevo y se pasaban datos en relación a la venta de frutas, verduras, mercaderías y enseres. Muchos llegaron con niños que requerían educación por lo que se daban el dato de algún colegio, la opción generalmente apuntaba hacia Maipú, por lo que tenían que cruzar la línea del tren, pasando la Industria Pizarreño. Se menciona por ejemplo el Mater Purissima, colegio católico que al contar con enseñanza media les permitió terminar la secundaria. Se daba bastante la reunión entre las familias que se empezaban a conocer, a compartir con sus nuevos vecinos. “…todos querían juntarse porque querían saber, ayudarse unos con otros y sabiendo que estaban en una Villa y que el dato…. Al principio la gente tenía ese problema, donde van a estudiar sus hijos pero cuando uno empieza a investigar en qué parte, al final la gente encuentra la solución”. (Robinson Díaz) Asimismo los niños, niñas y jóvenes que llegaban comenzaron a construir lazos de amistad, recorrían este nuevo territorio con grandes edificios y amplios espacios. Jugaban, se reunían en las esquinas, 27 Villa México compartían pichangas, pololeaban y se juntaban en grupos. Crecieron juntos entre las escaleras de los blocks, en los amplios terrenos y al costado de los blocks. Se cuenta que muchos se emparejaron e incluso se casaron y formaron familias. 28 “Pero acá era bonita la Villa cuando yo llegué, no había jardines, nosotros poquito a poco empezamos a movilizar a algunos vecinos y hicimos unos jardincitos allá y después por acá, pero había que ponerse con plata y a nosotros nos costaba porque no era buena la situación, acuérdate que después vino el Golpe de Estado, sin trabajo. Y la gente que era imponente ya casi toda se ha muerto, la que eran dueño de… porque la gente más adulta al estar en la Caja la gente tenía que tener más años para que le pudieran dar una vivienda, no eran nada tan así como nosotros que llegamos tan jóvenes acá. Y como te digo yo para tener mi casita yo tenía que esperar muchos años porque era por puntaje que a uno le daban, que se yo, que si tenía más hijos más puntaje le daban y yo lo que menos quería era tener más hijos porque era difícil la vida, había que salir a trabajar, salir adelante, no habían estas salas cunas que hay ahora, todos estas cosas, esto moderno que hay, entonces eso era lo que fue difícil, pero la villa siempre la he querido fíjate, porque encontré que me subió el status a mí, porque yo venía de otro lugar, claro que yo siempre que estaba allá, yo deseaba otra cosa”. (Cristina Aguirre) Se hacían recurrentes las visitas familiares en los departamentos y casas en base al respeto mutuo. Conversaban, se aconsejaban y se ayudaban entre las familias. Existía preocupación y especial apoyo a los matrimonios jóvenes, en cuestiones como soporte emocional y económico. Se juntaban para tener juegos de mesa entre los compadres y comadres. Se compartía un trago, una comida, así también las festividades familiares. Se acostumbraban los saludos navideños y año nuevo. Desde esas instancias se construía la comunidad de la Villa México. “Claro, nos juntábamos, él [amigo] me iba a buscar y me decía… él tenía su cierta edad más que yo y me decía ‘vamos a jugar una dama’, se hacía mucho vida social, mucho vida social, eso era lo que se hacía”. (Iván Osorio) Se cooperaba y formaban círculos de amistad que trascendían generaciones, el préstamo de utensilios, herramientas, alimentos y otros era claro ejemplo de esta incipiente comunidad que se forjaba, se daba y retribuía “hoy por ti, mañana por mí”, expresan. Dicha cooperación se traducía en muchos casos en el mejoramiento y hermoseamiento del block, del Historia y memoria pasaje, de las fachadas, de los jardines. Iniciativas comunitarias que en varias ocasiones terminaban con un “vinito” o un “asadito”. “La Población Zaror es otro importante sector de la comuna de Cerrillos, y tal […] Miguel Reyes llegó en octubre de 1959. Cuenta que estas tierras eran de la familia Zaror, quienes lotearon y vendieron los terrenos. La población no tenía más de 30 casas, las manzanas tenían dos casas en promedio, pero había algunas que no tenían ninguna. Recalca que todo estaba urbanizado, con las calles y las veredas pavimentadas” (Ilustre Municipalidad de Cerrillos). El origen de la población Zaror es anterior a la Villa México, viene a ser el conjunto vecino a la villa y que vio levantarse y habitar este nuevo espacio de ciudad. Se forjaron relaciones de vecinos entre ambos conjuntos habitacionales y se establecieron amistades que duran hasta hoy. Calles y veredas amplias, áreas verdes, pese a que se recuerda que debajo de las torres no había nada, un gran sitio eriazo que después de varios años Chilectra habría hermoseado con jardines de pasto, árboles, arbustos, etc. Pese a que no había jardines, se valoraba la urbanización del lugar. Gran parte del espacio estaba cerrado. Se recuerda un matadero clandestino de animales al otro lado de la línea del tren, se veía la villa desde lejos, sus blocks en altura, pasaba un canal que entubaron, a lo lejos al poniente también el Templo Votivo de Maipú. Algunas características de los blocks en relación a su funcionamiento que hoy ha cambiado, dicen relación con un sistema de suministro de gas por medio shaft, subterráneo, con medidores, sistema que hoy ya no funciona. Cada blocks además contaba con un incinerador para la basura, ductos por donde cada vecino podía depositar sus residuos que llegaban a un cuarto donde se almacenaba e incluso, antiguamente, se quemaba la basura. No obstante, los altos índices de contaminación que comenzó a sufrir la ciudad de Santiago llevaron a cancelar esta práctica. Dentro de las actividades se menciona la “Fiesta de la Primavera”, durante la década de los 70’ habría partido, celebración en la que participaban activamente los vecinos. 29 Villa México “…la gente aquí, diría yo que el 90% supo sobrevivir a los acontecimientos difíciles. La suegra de mi hijo trabajaba en costura de zapatos, tenía máquinas en el departamento, trabajaba toda la noche, las chiquillas estudiaban y así po’, mi mujer también trabajaba, yo trabajaba, con los dos sueldos podíamos sobrevivir, por decirte que mi mujer ganaba mil escudos, dos mil escudos, yo como vendedor ganaría unos seis mil escudos por lo menos, entre paréntesis, no me fue mal. Y así po’, ganas de mandarnos a cambiar tuve muchas, pero primaba en quedarme aquí (…) lo que más me gusta y me ha gustado siempre es el entorno, los vecinos, todavía quedamos de 16 departamentos en un edificio quedamos 4 del año ‘70, han quedado los hijos, y así”. (Juan Díaz) Al llegar a la villa no había colegio, estaban los espacios físicos para dos escuelas, por ello se hicieron las primeras clases en el comunitario, actual sede social de la Junta de Vecinos. 30 “…y en ese tiempo los viejos tuvieron la capacidad de reunirse con quien fuera en ese entonces ministro de educación, ya estaba don Salvador Allende como presidente y en tres meses consiguieron levantar la escuela de aquí al lado que era 447, ahora es la 262, le cambiaron de número, y allá abajo después de un tiempo construyeron la 505, actual 279, pero hay harta historia aquí en la villa, mucha, mucha historia”. (Cecilia Foncea) 11. Los clubes deportivos “El primer club deportivo que se formó, señala Alejandro Torres, fue el ‘Cultural Villa México’, el 16 de septiembre de 1970, que presidió, dejaría de funcionar hacia 1976” (Ilustre Municipalidad de Cerrillos). Historia y memoria Al principio cuando llegaron, sus primeros habitantes comenzaron a agruparse y formaron varios clubes deportivos de futbol, con sus respectivos banderines e indumentaria. “Tenía sus cosas, pero ya después desapareció el Club Villa México y quedaron Los Buenos Muchachos que andan ahí incluso actualmente. Pero el primer club aquí que yo recuerdo fue el Club Villa México, así era el nombre”. (Iván Osorio) Se organizaban en asociaciones que pertenecían a Maipú y entre varias de ellas se hacían torneos. Cada asociación contaba con cuatro, cinco o seis clubes, había otra asociación que comprendía unos cuatro o seis clubes. Algunos pertenecían a la Villa Zaror y jugaban en distintas partes según la localía. Y así como funcionaban por asociaciones, también por federaciones que sacaba campeón por zona. Se dice que las mujeres no participaban mucho, que se dedicaban más a labores domésticas, lo que no quita que muchas de ellas si participaban de la vida social en torno al futbol del día domingo en la cancha. “Porque claro las mujeres estaban cuidando a sus hijos en la casa y no les gustaba participar, participaban más los hombres porque después se tomaban su combinadito, había tercer tiempo también, entonces eso era, se compartía mucho la unidad del barrio. En ese sentido, la parte deportiva claro, le ponían culturales, incluso en el colegio le decía hagamos un diario mural cultural o que se yo…Todo era cultural. Un diario cultural, también le ponían si acuérdese que en los colegios, los liceos, si poh’ yo me acuerdo en ese tiempo que mis hijos estudiaron me entiende, entonces le decían cultural”. (Iván) Eran varios los clubes, en su gran mayoría aludiendo al país Azteca. Por ejemplo, se menciona el Benito Juárez, Los Pumas, El Toluca, el Defensor Villa México, de los cuales habrían salido varios otros. Generalmente, vecinos del mismo block que jugaban futbol, se organizaron en clubes deportivos. Como ejemplo, el blocks 16 dio origen al Club Deportivo Villa México, que jugaba en los terrenos donde hoy se construye el estadio que administra el equipo Benito Juárez. Allí jugaban los fines de semana, entre ellos el Club Villa México. Se cuenta que Iván Zamorano, el destacado futbolista que habría triunfado en España e Italia, paso por el Benito Juárez, fue vecino de Villa México, muchos lo recuerdan, se enorgullecen de haber sido vecinos de Iván Zamorano. Venían desde otros lugares de Santiago a jugar y el Club Villa México ofrecía a los visitantes su estadio. Fue ese Club, justamente a partir de sus primeros integrantes, quienes donaron e instalaron los primeros arcos de la cancha. “Si Zamorano salió de aquí del club del Benito Juárez. Y Zamorano cuando cabro chico vivía al frente de donde vivo yo y todavía ese departamento es de la mamá de Zamorano.” (Raúl Contreras) 31 Villa México Historia y memoria A los 10 años el pequeño deportista fue transferido al Club Benito Juárez. En esa época cubría incluso la plaza de zaguero central, posición dentro de la cancha que su delgada y esbelta igura hacía parecer como una opción inteligente. Sin embargo, su amor era el gol y su talento el romper mallas. La historia parece similar a la de muchos niños chilenos. Sin embargo, era evidente que la seriedad con que Iván enfrentaba el fútbol no tenía comparación con la actitud que mostraban sus compañeros. Los juegos y travesuras, típicas de cualquier niño, constituyeron una parte del entrenamiento diario de Zamorano. Dos ejemplos ratifican lo anterior. Cuando entraba a su casa saltaba para intentar rozar con la cabeza un adorno de copihues que había sobre una lámpara ubicada en el pasillo. Del mismo modo, cada vez que subía o bajaba las escaleras, hasta el cuarto piso donde estaba su departamento, lo hacía dando ágiles y largos saltos. El resultado de este juego daría a Iván, tiempo más tarde, una increíble capacidad para suspenderse en el aire y cabecear, además de una potencia física superior a lo normal. En ese tiempo la realidad económica de la familia Zamorano era dificultosa. De todas maneras, bajo el alero de padre esforzado, aquel pequeño no se dejó amedrentar y continúo el duro camino hacia el profesionalismo. Los anhelos paternos fueron fundamentales en su interés por el fútbol y siguen siendo hasta hoy, la motivación más importante de sus actos. 32 DE VILLA MéXICO SALIÓ UN GRANDE Iván Zamorano Zamora nació el 18 de enero de 1967. Apenas superaba los tres años cuando su familia se trasladó a la comuna de Maipú, escenario que será trascendente en su historia deportiva. Fue por esos años, en 1970, cuando su padre lo inscribió en el Club Cultural Villa de México. Los integrantes de la segunda infantil de esa institución fueron testigos de los primeros pasos que dio en el fútbol conocido como “piojo”. Alicia, el niño va a ser muy bueno.” Con esa frase emocionada Luis Zamorano sorprendía a su esposa cada vez que volvía de presenciar el rendimiento de su pequeño hijo dentro de la cancha. Era más que un padre. Era, tal vez, una forma de concretar de suplir una cierta frustración por no haber dedicado su propia vida al fútbol. Con todo, sus predicciones estaban basadas en las condiciones reales y las ganas de su retoño. Sin embargo, don Luis no alcanzó a vivir lo suficiente para estar presente en todo el proceso. Le entregó la vida a una peritonitis inoportuna como pocas. A los trece años Iván debió asumir el sufrimiento y tomar responsabilidades en el hogar. Debió buscar la forma de hacerse cargo de su madre, destruida por la pérdida y de su única hermana. Erika. Todo eso sin dejar de trabajar para cumplir la meta que su progenitor le había trazado, ser jugador de fútbol. La historia siguió su curso, en 1985 el Benito Juárez transfirió a su joven promesa a Sobresal por sólo 35 mil pesos. Cumplida la negociación, Zamorano debió emigrar a la Tercera Región, al Campamento de El Salvador, siempre con la vista fija en una promesa y con un nombre en la mente. El profesionalismo 1985 / Saint Gallen 1988 / Sevilla 1990 / Real Madrid 1992 / Inter De Milán 1996 / La Roja de Chile 1997 / Mundial de Francia 1998 / Sydney 2000 / América de México 2001 / Club Colo-Colo 2003 / El final soñado 2003. Fuente: http://www.ivanzamorano.cl/antiguo/p_ivan.html 33 Villa México Historia y memoria Cuentan los vecinos que en otras comunas funcionaban de igual forma, pero que en principio no se organizaban en asociaciones, que tras la formalización de los clubes deportivos y sus encuentros cada asociación debía cumplir con categorías, viejos cracks, súper seniors, seniors, primera, juveniles, infantiles. (Generalmente tres ramas en ese entonces: adultos, juveniles e infantiles). “Los arbitrajes también tenían una comisión de árbitros porque antiguamente cuando no existía la asociación de repente jugaban y alguien arbitraba y si no arbitraba bien lo agredían. Y cuantas veces vimos por ahí por la orilla de la circunvalación. Antes existía solamente el trazo, no existía la circunvalación y ahí a la orilla estaba la cancha. Se asociaron los clubes y la cosa cambió porque ya no podían agredir al árbitro, si lo hacían sencillamente los mandaban preso, o sea, se ordenó todo eso. Y la actividad de la Villa funcionó bien, veíamos jugar al club, se hizo un campeonato”. (Robinson Díaz) 34 Se habla también de otro club, el cual habría recibido su nombre de los propios jóvenes de la villa, el Gabriel Tudela, que también contaría con las tres ramas: adultos, juveniles e infantiles pero ya en los años 80’. También se habla del Abelardo Marín, en honor al vecino que organizó a un grupo importante de jóvenes y niños en los primeros tiempos de la villa. Jugaban en la cancha Benito Juárez que era de uso de todos los clubes, lugar donde se construye el Estadio. Se mencionan los “recibimientos”, instancia previa a los partidos donde desfilaban las delegaciones junto a los estandartes y banderines, participaba todo el club, junto a los administrativos, cada equipo salía vestido con su indumentaria oficial, todo en un marco ceremonioso. “Se hicieron muchos eventos aquí como campeonatos y todo, fue un buen sentido, especialmente para los niños y los cabros jóvenes, para que se entusiasmen y tomen una función de liderazgo deportivo. Se hicieron muchos campeonatos aquí” (Raúl) Otra actividad recordada son las fondas para fiestas patrias, organizadas por los jóvenes en algunos de los estacionamientos, pero que también trajeron consigo borracheras y riñas. A las cuales se les atribuye la prohibición a futuro en los años 80’. 35 12. 1973. Como vivimos el golpe “Y la efervescencia política fue complicada, previo a la elección de Salvador Allende, después los tres años que estuvo Salvador Allende, después vino el golpe militar. Yo del golpe militar felizmente no tuve ningún problema con el golpe militar. En el golpe militar yo estaba trabajando, me acuerdo ese día martes de Septiembre, llegué yo allá a la empresa y ya cuando venía en el trayecto dije algo pasa y llegué allá atrasado y allá nos dimos cuenta que hubo un golpe militar, escuchamos el discurso de Salvador Allende y en la empresa, el gerente dijo este problema es grave, por lo tanto, el que pueda irse a sus casa se va, yo que vivía en Maipú, me quedé y además que era, porque nosotros teníamos una sede cerca a media cuadra de la empresa teníamos una sede sindical, por lo tanto, me quedé cuatro días en la empresa”. (Robinson Díaz) Cuentan que tuvieron que cuidar las empresas ante posibles tomas, que se prestaron ayuda para llegar a sus casas y que por medio de los diarios, la radio o la televisión, se indicó cuándo se retornaría a la normalidad para seguir con la jornada laboral Villa México “Varios perdieron compañeros”, un vecino comparte su testimonio: 36 “…le dijimos, mire compañero ‘se va a la casa y cuando escuche por la radio que esto se normaliza usted recién se viene a la empresa’, pero él no esperó, un día equis se vino a la empresa, tres días, cuatros días, se vino de pie de su casa hasta la empresa y cuando venía por la calle Balmaceda, yo le cuento esto porque un testigo vio toda esta situación, el venía caminando y por la calle Balmaceda antes del puente Manuel Rodríguez existía una toma de terrenos a la orilla del Río Mapocho, casas callampas que en ese tiempo se llamaban, venía una micro por Balmaceda de carabineros, y los niños sacaron piedras, era la norma, y le tiraron piedras a la micro, se bajaron los carabineros y empezaron a ametrallar a cualquier persona que hubiera en ese momento, y en ese momento venía mi compañero. Y por la calle Manuel Rodríguez, venía un ciclista y cuando vio esa situación dejó su bicicleta y se tiró al pavimento, una vez que pasó toda esta situación, los carabineros se dieron cuenta que habían muerto algunas personas, este señor se paró, lo tuvieron detenido y le dijeron ‘para dónde va’, que se yo, y mi compañero que tenía sus tifas, se dieron cuenta que era de Novis, usted pase para allá y avise que hay un señor trabajador que está aquí en esta condición, así que el ciclista se fue por Vivaceta y de ahí nos avisó. Así que nos vimos en la obligación de ir, estaba el oficial en el puente Manuel Rodríguez le dijimos, nosotros somos dirigentes del sindicato y el oficial llamó a dos militares y les pidió que nos acompañara al cadáver número tanto, entonces un poco mas allá por Balmaceda bajamos y ahí estaba mi compañero tirado y le pedí permiso al oficial para revisarle su documentación, me dijo que sí, pero que no lo vaya a dar vuelta. Entonces mi compañero estaba con la cosa violenta en la cara y que hice yo, le hice un masaje facial, porque pasan dos horas y empieza el cadáver a ponerse tieso”. (Robinson Díaz) Se repiten los relatos de dirigentes y vecinos que tuvieron que ir a reconocer a compañeros a la morgue, retirarlos, contratar servicios, teniendo los cuidados necesarios para informarle de los decesos a los familiares y de tener la fortaleza suiciente para encontrarse con cuerpos despedazados por el impacto de las balas. En relación a cómo se vivió aquel período en la villa, existen diferentes versiones. Hay quienes dicen que fue tranquilo, no pasó mucho. Como en el resto del país se habla de las largas filas que se tenían que hacer para comprar pan, carne, aceite, cigarros y otros víveres, claro, previo al Golpe. Muchos se abastecían por medio de cooperativas. Se recuerdan los paros también de la locomoción colectiva y los largos trayectos que debían recorrer a pie producto de las movilizaciones. Historia y memoria “…bueno, nuestros dirigentes de la salud fueron perseguidos, maltratados, asesinados... eh, la gente del San Juan de Dios, nosotros, del Salvador, eh... bueno, esos hospitales fueron los más sufridos (...). Mira para serte franco, si tú hubieses vivido acá, habrías mirado cómo salía el humo por todas las cañerías de los sectores de la basura. Nuestras mujeres quemaban todos los libros, todas las cosas. A mí me quemaron toda mi biblioteca fabulosa. Mi suegra (…) para evitar que no lo acusaran a uno de revolucionario y qué se yo...un milico vio un libro que decía “La revolución francesa” y al compadre lo metieron como un año en la calle, ignorancia”. (Juan Díaz) En las inmediaciones de la villa estaba el Cordón Industrial de Cerrillos, se veía con mucho temor de que podían instalarse en la villa, nada sucedió en ese sentido. Algunos vecinos fueron exonerados, despedidos sin razones claras o justiicadas de la administración pública, por tanto después podían acogerse a este beneicio, siendo una forma de llevar el sustento a los hogares. “Me tuve que ir al norte (…), estuve un buen tiempo en el norte trabajando, debido a eso mismo y obviamente me acogí a varios beneficios de que a usted le descontaban el dividendo, es una de las cosas que yo pude pagar mi casa, fue cuando a mí me descontaban, lo mismo que a usted le descontaban las imposiciones a mí me descontaban el dividendo, entonces uno podía acogerse a ese beneficio, entonces estaba pagando mi vivienda y así terminé de pagar mi dividendo En escudos, si como yo le digo pagaba en escudos, haber yo creo que pagaba en ese tiempo, en escudo era harta plata, no estoy seguro”. (Iván Osorio) Más allá de los “toques de queda”, restricción de uso del espacio público en horarios principalmente de noche, no permitiéndose la reunión y actividad social, se dice que la presencia de militares no fue influyente en las dinámicas internas, muchos mantuvieron sus trabajos “todos eran gente de trabajo, se fueron los militares, nunca pasó nada con los militares tampoco”. Se recuerda sobre situaciones en que los jóvenes se quedaban conversando en la entrada de algún block y que llegaban los militares para intervenir la conversación juvenil. Se relatan situaciones donde entraron uniformados a los departamentos pidiendo identiicación de las personas que se encontraban dentro, buscando alguna asociación ilícita, deteniendo vecinos y terminando las reuniones de camaradería. En una ocasión la dueña de casa debió pagar una multa por todos los presentes, por ejemplo, como cuando a unos vecinos se los llevaron detenidos a la medialuna de Maipú. 37 Villa México Historia y memoria Se sentían atemorizados incluso de mirar por las ventanas, se escuchaban disparos, por ejemplo cuando desocuparon la CIC, fábrica de muebles y colchones, que pertenecía al reconocido Cordón Industrial Cerrillos “Salió toda la gente por ahí por Esquina Blanca, la llevaban a todos con las manos arriba y a todos los trabajadores.” CORDONES INDUSTRIALES 38 Los cordones industriales surgen como una necesidad material y real de la clase trabajadora, surgen frente a la necesidad de coordinar las luchas, de solidarizar y de mantener una unidad de clase. Al mismo tiempo, es el resultado de la aplicación de un método propio de la clase trabajadora, el método de la auto- organización, de la democracia directa, del funcionamiento en base a Asambleas, que muestra la unidad solidaria básica del lugar de trabajo, con delegados, con revocabilidad de los mandatos, con la exigencia del Control Obrero. Con tendencias a uniicarse en los momentos más álgidos de la lucha de clases, en torno a organismos independientes como fueron los Cordones, que en sus puntos más elevados logran transformarse en órganos de doble poder. (P. 32-33. Mujica, 2011) …Finalmente, y en medio de este clima de organización y de lucha, nace el Cordón Industrial Cerrillos-Maipú, logrando movilizar a miles de trabajadores. A través de una oleada de luchas de las industrias del sector por demandas económicas, se logra dar un salto en calidad con una serie de luchas de carácter político que comienzan a exigir la extensión del Área Social a todas las industrias de Maipú. El Comando de Trabajadores, se convierte ahora en el poderoso Cordón Industrial Cerrillos-Maipú, como un resultado directo de este enorme salto. Pronto los Cordones que nacerían como órganos de lucha y coordinación para la defensa de las demandas, los derechos y los intereses de los trabajadores, se convertirían en órganos de lucha por el control obrero, para avanzar más tarde en órganos de Frente Único que se comenzarían a plantear políticamente el problema del poder. (P. 16-17. Mujica, 2011) Fuente: http://www.ptr.cl/publicaciones/wp-content/uploads/2011/12/cordones-industriales.pdf 39 LA AUTODEFENSA DEL CORDÓN INDUSTRIAL CERRILLOS (1972-1973) Esta entrevista es testimonio de uno de los momentos más álgidos del gobierno de la Unidad Popular, en que la organización no se limitaba a la institucionalidad y la dualidad de poder (popularinstitucional) se hacía presente. A pesar de que gran parte de los partidos de la época planteaban una línea no-violenta en el afán de evitar una guerra social (guerra de clases, mejor dicho), muchos grupos decidieron defenderse del golpe de estado que se proyectaba en una agudización de las contradicciones del sistema. Por otro lado, este testimonio viene a clarificar ciertos mitos en torno al real involucramiento de las bases en este proceso. Fuente: http://metiendoruido.com/2012/08/la-autodefensa-del-cordon-industrial-cerrillos-1972-1973/ “Y entonces había mucho que trabajaban ahí y eran de acá, muchas mamás de acá les gritaban a los chiquillos que se vinieran. Los chiquillos querían arrancan y disparaban, fue terrible, y mi viejo decía, vengan a acostarse y no estén en la ventana que les puede llegar un disparo. Se vio cosas feas de ahí. Y ya después, y a la Fisa, no ves que acá estaba la Fisa acá atrás, y allí Villa México los llevaron. Y de otra empresa también los llevaron ahí y traían para acá, porque antes acá era mal nombrado porque antes era el cordón cerrillo, bueno yo te digo acuérdate, y tú no habías nacido todavía. El Cordón Cerrillos le llamaban a toda la franja de industrias. Estaba el Cobre, estaba Madeco, si yo te empezara a nombrar todas las industrias que habían, en este minuto me perturbo de todas las industrias que habían acá. Y me acuerdo que mi viejo después trabajo en esta que todavía está Somela, Famela, esa todavía existe porque esa está más acá, en la calle Piloto Lazo, mas tirado para el oriente” (Cristina) Uno de los hechos que rescatan los vecinos de la época en cuestión, fue la visita del conjunto musical Los Jaivas, a la misma medialuna de Maipú, a la que asistieron en familia. 40 También se habla de tiempos precarios, de escases, costaba encontrar varios víveres, las familias crecían y era evidentemente complejo tras el nuevo modelo de adquisición de viviendas, el tener una casa o un departamento, el “allegamiento” fue un recurso, y claramente como en la Villa Olímpica en Ñuñoa y la Villa Portales en Estación Central, la Villa México, no estaba ajena a esta realidad. Además la cesantía causaba estragos, no había recursos para comprar mercadería, gas, pagar el pasaje del transporte público. Todo esto favoreció el mercado negro, mercaderías a bajo costo en el marco del comercio informal. “…ahí donde yo vivo había una pila de militares aquí, al otro lado había otra pila de militares, en 5 de Abril habían filas de militares y yo estaba esperando a mi guagua, el 74 nació mi guagua y yo tenía la dicha de salir a repartir comida, salía a repartir pan, salía a repartir toda clase de alimentos que me mandaban de Temuco, porque yo soy nacida y criada en Temuco. Entonces me mandaban harina, papas, de todo me mandaban de allá, me llegaba en avión aquí al aeropuerto. Entonces yo salía a dejar comida a los mismos que eran compañeros de mi esposo de la Caja de Empleados Particulares porque eran de la UP, entonces esos pobres en ese entonces carecían de comer, carecían de todo porque no podían ir a hacer fila para que les vendan y todo. Entonces nosotros teníamos porque a mí me llegaba. Yo observaba y escondía a mis hijas, cerraba con llave y golpeaban la puerta, la ventana y que por qué estábamos ahí y de donde éramos y que quienes éramos. Entonces por el saber vivir con los malos o buenos nunca fui atropellada gracias a Dios. Aquí en 5 de Abril tomaban los muertos y los tiraban al camión, para donde los llevaban, Dios sabrá no más”. (Ester Pincheira) Historia y memoria 13. Los 80’s, tiempos de la reactivación Rol importante habría jugado la junta de vecinos en el proceso de reactivación social por medio de diversas actividades, por ejemplo, sábados bailables, instancia en la que se pagaba una entrada que permitía el consumo de algún alimento o bebida, ganancias que permitían, a su vez, seguir realizando actividades. Después vendrían las escuelas, que venían a resolver las necesidades básicas en educación básica, las familias crecieron y con ella la demanda educacional. Se establecieron nuevos locales comerciales, la feria se transformaba en un lugar clave para la compra de frutas, verduras y otros alimentos y porque no, también de encuentro y socialización entre los vecinos. Así como las familias crecían se daba una vida social más amplia al interior de la villa. Los estudiantes eran de la villa, pero también venían de otras villas y poblaciones del sector a estudiar a los colegios de Villa México. Con el tiempo se hizo reconocida la Fisa (Feria Internacional de Santiago), que se realizaba en el Parque Cerrillos. Varios elementos confluían haciéndola una instancia especial, por ejemplo, el tren llegaba hasta Cerrillos, se bajaba la gente en la estación y de ahí se iba a buscar otro grupo personas y en la tarde llegaba más gente. BREVE RESEñA HISTÓRICA DE LA FISA 1869 La Sociedad Nacional de Agricultura inicia una exposición anual de agricultura, ganado y maquinaria industrial, incorporando la participación de otros países en esta muestra ferial. Esta feria, conocida como Feria de Animales, evoluciona como Feria General. 1962 FISA filial de la SNA, realiza su primera Feria Internacional de Santiago, -reconocida a nivel mundial-. Su última versión se efectuó el año 1998, producto de un paulatino cambio en las condiciones económicas del país. 2001 A partir de este año, FISA organiza ferias técnico profesionales orientadas a las industrias más 41 Villa México representativas de la economía. Como resultado surgen: Expomin, Exponaval, Edifica, Vinitech Latinoamérica, Agrotech, Expovivienda, Ambiental, entre otras. Fuente: http://www.fisa.cl/ “Yo no sé cuánto tiempo estaría la Fisa, cinco años, tres años, no tengo claro cuánto y en un momento dado se fue para otro lado, pero por eso mucha gente veía la Villa, la gente que venía del tren veía la Villa, no estaba como está ahora pintadita, tenía la pintura original, pero no estaba como condominio, entonces la gente de la Villa tenía como algo característico y venía mucha gente y compraba. Era como en esos pueblos que llega el tren y va toda la gente a la estación, fue un tiempo bonito.” (Robinson Díaz) Para muchos vecinos la Fisa era un paseo, gracias a la cercanía y al atractivo panorama que ofrecía, era considerada un paseo familiar, era algo propio y por ello, los vecinos eran los anfitriones. 42 “…era lindo, nosotros… ¿sabías cómo entrábamos? yo no sé si tú lo hiciste, pero uno iba y hablaba con el portero y el portero decía, pero ‘cuando venga un grupo grande ustedes se meten entre medio’, entonces tú ibas todos los días, yo me acuerdo que iba allá al stand de (?) Que era una cuestión plástica, y te regalaban una pantera rosa, una cuestión más ñoña, y tú ibas todos los días y siempre te venías con una de esas cuestiones, e ibas a ver el show de don Francisco con Mandolino, imagínate! todos los días los mismo chistes fomes, pero era la cosa más entretenida, era la única cosa entretenida que había. Ahí en Vespucio, antes que lo terminaran, era un hoyo y ahí venían a botar los camiones, por darte una marca de jugos, ¡rollos y rollos de una marca de jugos! venían también a los del puente de los tubos de agua potable, entonces casi todas las casas, tenían las mitad de los tubos, los partían por la mitad y los ponían en los antejardines”. (Cecilia Foncea) Durante los 80’s se habría cercado los condominios, se hicieron cierres, se les pidió una cuota y los vecinos cooperaron. Se pusieron ligustrinas, después se instalaron cercos duros de reja. Se arreglaron los jardines de los blocks, en algunos blocks se pusieron regaderos. Pero algunos espacios no se trataron y se convirtieron en basurales. Varios vecinos atribuyen a este período la irrupción de las drogas y “tomateras” callejeras en la villa, los jóvenes muchos de ellos desempleados encontraban en el alcohol y los pares un espacio de distracción, Historia y memoria de acompañamiento. Muchos se “perdieron” o se quedaron “pegados”, sumado al desempleo y a los problemas en el hogar producto del hacinamiento tras los allegamientos. Historias de vecinos que vendieron todo; perdieron familia y se quedaron viviendo en precarias condiciones. Algunos de ellos definitivamente migraron. Había una clara distancia entre los primeros habitantes imponentes de la Caja de Empleados Particulares y los habitantes que llegaron por medio de las tomas a la hora del encuentro. Se realizaban convivencias en las que cautelosamente se iban integrando los vecinos, se apreciaba cierta distancia generacional que reforzaba este distanciamiento. A ello se sumaban las diferencias políticas y pese a que transcurrieron varios años, la dictadura, entre otros elementos desatendieron la situación del acercamiento y encuentro vecinal. No obstante, se dieron “…yo era harina de otro costal, me costaba como integrarme a ello, por el hecho de que yo era de otro nivel social”. (Cristina Aguirre) Se recuerda la visita del Papa a nuestro país y su paso por Villa México cuando se dirigía al Templo Votivo de Maipú. “…nosotros vimos pasar al Papa, cuando pasó por aquí, cuando vino el ochenta y…, pasó por aquí por Esquina Blanca, pasó por acá al templo en el ochenta y … Ahí pasó por acá y salimos todos porque me acuerdo que mi vieja estaba en el templo esperándolo allá, ella pensando que no iba a pasar por acá y ella se quedó toda la noche allá me acuerdo y cuando después dijeron que va a pasar por acá, me acuerdo que fuimos allá adelante con mi hijo, con el menor y fuimos a mirar. Hermoso, algo divino cuando lo vi pasar, no pensé que iba a pasar, para mí una de las cosas hermosísimas y el templo donde tu vayas y yo tengo hermanos que están afuera, tengo dos hermanos que están en Estocolmo y tengo una hermana que está en Montreal, y ellos estuvieron aquí cuando vino, vinieron para acá, siempre me dicen que donde ellos han ido el templo por decirte, octava maravilla del mundo lo nombran así”. (Cristina Aguirre) A fines de los 80’s se habla de los cierres de los primeros pisos, los vecinos de los departamentos del primer nivel organizaron el espacio apropiándose del suelo y extendiéndolo como patio privado. Para los mismos vecinos es un periodo definido por ellos como “ingrato”, producto de las apropiaciones de terreno que si bien respondía respondían a una necesidad evidente, también que generó diferencias y conflictos entre algunos de los vecinos. 43 Villa México 44 Historia y memoria Los adultos mayores también se organizaban en clubes. La Casa de Todos tomaría un rol importante entre la comunidad organizada. se llamaba La Oficina, se juntaban en la calle, habían unos troncos parece y esa era su oficina. A ellos les nació la idea de hacer esto.” (Ulises Rojas) “…a finales de los 80’s, nosotros éramos un grupo de amigos que se dieron el trabajo de por ejemplo contabilizar todos los departamentos y las casas para hacer más o menos un catastro de cuánta gente vivía. Nosotros quisimos recuperar lo que era la tradición de la fiesta de la primavera, ¿cómo lo hicimos? eh, dividimos la villa en sectores, que eran 8 sectores y cada sector tenía que tener una candidata a reina y participar en diferentes actividades. Se competía todo un fin de semana, pero todos competían en baby futbol, vóleibol, básquetbol, una maratón. Una vez me conseguí una bala e hicimos lanzamiento de la bala. Las candidatas a reina un día lo dedicaban e iban a un club de abuelitos y le hacían una once y eso provocó que la gente se uniera, no todos, porque habían sectores que eran muy unidos, por ejemplo el sector Buenos Muchachos, ellos siempre han tenido la cohesión de la gente para estar unidos, Ciudad Maderos, a pesar de ser un sector que al principio era un poquito más retirado, pero los vecinos todos se conocían, ellos tenían la capacidad (…) Habían organizaciones de futbol, de baby, etc., y a todas esas organizaciones se las invitó, pero no llegaron todas. Con las que llegaron se hizo un esquema, cuando se hacía el sorteo era muy divertido, porque de repente… ya, los primeros días no éramos nadie, pero transcurriendo la competencia ya sabíamos quiénes eran los equipos fuertes y nos tirábamos tallas [bromas]. (…) hice una maratón. Yo tengo un amigo (…) y a él le tocó ser juez, de Vespucio con Ferrocarril. Porque en ese tiempo era Ferrocarril y la maratón era con diferentes rangos de edad, estábamos tan emocionados que al final de la competencia nosotros nos juntamos aquí a ver los puntajes y todo eso, y se nos olvidó este niño y llegó como a las 2 horas y nos dijo, ¡son vacas, no me avisaron que la competencia terminó!” (Ulises Rojas) Los nuevos tiempo y la experiencia de organización va dando otros pasos y comienza a cimentar verdaderos procesos democráticos al interior de la villa. La organización del barrio no excluía a nadie, todos tenían un lugar para animarse y participar. “De hecho, hay una cosa simpática, habían unos equipos de baby que eran de volados y de curaditos, pero ellos para poder competir, ellos entrenaban, no tomaban, no fumaban y la peleaban, de la seguridad ellos mismos se hacían cargo, una vez hubo un atado [problema] y estos mismos curaditos echaron al compadre, porque no querían echar a perder algo que fue súper lindo. Había un caballero acá que vendía papitas fritas, para el festival acá él vendía aquí en Los Tilos, supo que había festival y trajo su carrito, en dos horas vendió toda su mercadería (...) primero era un grupo que se juntaba aquí en la esquina de Río Magdalena con Acapulco, que “el ‘89, después de haber ganado el plebiscito del ‘88, nos bajó un espíritu democrático, así salvaje, y dijimos ¡vamos a democratizar la junta de vecinos!, se formó una comisión electoral, se abrieron como 20 libros de socios, los libros salieron para todos lados. Yo en esa ocasión me acuerdo que mi hermana me dijo, ‘inscribámonos en el que anda por ahí’, ‘no’ le dije yo, ‘vamos a inscribirnos allá a la sede’, ¡mira la visión ah!, y nos inscribimos acá. Bueno, hubo problemas, no pudimos hacer las elecciones acá en la Junta de Vecinos y teníamos tres locales de votación, uno era en Ciudad de México frente a la shoperia, otra en la placita que está aquí al lado de la parroquia, y la otra era en Los Tilos con Primavera, en ese tiempo éramos todos una pura Junta de Vecinos con la Zaror, a mí me tocó estar ahí en Primavera con Los Tilos, estábamos ahí con mesas, con sillas, y la comisión electoral, ¿eran tres o cinco personas? bueno la cosa es que se desaparecieron porque nos echaron los pacos [carabineros], y nos detuvieron, entonces primero habían agarrado el grupo de Ciudad de México, los habían tomado detenidos entonces andaban esas cucas antiguas, esas que eran como pan de molde y venían la gente que estaba allá y atrás venía una micro donde subían las urnas, las mesas, los papeles... y a nosotros nos agarran ahí en Los Tilos con Primavera y yo nunca me voy a olvidar porque justo venía una señora, la Mariana, y bueno y ahí estábamos todo el espectro de partidos políticos, porque todos teníamos color político, entonces justo venía la Mariana que en ese tiempo era DC igual que yo. Ahora es de derecha, pero bueno, y venía don Joaquín Parra que era comunista, y yo nunca me voy a olvidar que el paco abre la puerta atrás y le dice ‘¡ya, ya, ya, ya suba, suba!’, y yo le digo ¡Marianaaa!, ‘ya suban, suban, suban si no van na’ de paseo’, y yo te juro que en el minuto en que me subí, yo me acordé de todas las cosas que habían contado los viejos de acá que decían pucha, si los pacos desaparecen a la gente, las matan, las violan. Hay! yo me imaginé, me pasé flor de película y don Joaquín él era comunista, y él había estado preso en el Estadio Nacional, ese caballero estaba, venía albo, como el papel. Yo siempre me acuerdo, y cuando llega el furgón acá, a tomar los últimos que estaban en el estacionamiento aquí al lado de la plaza y de la parroquia, uno de los cabros, el yerno de don Manuel, el Manuel chico, y el paco le gritó un improperio ‘¡ven pa’ acá, no seai’ maricón, dejai’ a las mujeres y a los 45 Villa México demás solos!’ y el otro tenía que arrancar porque el otro también era comunista y no lo podían pillar. Nos llevaron a la 25 comisaría de Maipú, como ya había sido el terremoto del ‘85, se había caído la comisaría de donde está el Líder ahora, era una casa roja bonita, adobe, puro adobe, entonces estaba funcionando ahí donde está la biblioteca en Maipú, debajo de la oficina, y ahí nos tuvieron retenidos más o menos habrán sido unas 3 horas, pero fueron laaargas, yo las sentí largas, porque yo me imaginé chuta, no, ‘pucha mi familia, no voy a volver nunca más’, pero debo ser honesta, los comunistas estaban súper bien organizados, llegaron con un bus y un camión a buscarnos, y lo lograron, llegaron con abogados, con todo, nos sacaron ligerito. A la comisión electoral todavía la ando buscando, porque las viejas arrancaron despavoridas, ja, ja ja. A la semana siguiente, la parroquia nos prestó para hacer las elecciones, nunca se reconocieron esas elecciones”. (Cecilia Foncea) 14. Los 90’s Tiempos modernos 46 “Y llegó la democracia, y el gobierno de Eduardo Frei, no el de Aylwin, pero antes yo conocí a Jorge Alessandri y a Frei Montalva. Después tuvimos los 17 años de los militares, después llegó la democracia nuevamente y la vida tomó una característica más dinámica diría yo”. (Robinson Díaz) Historia y memoria al ser éste una inversión importante de la familia. El vehículo y su irrupción en la ciudad no estuvo contemplado en el diseño de este conjunto como el de muchos otros de la época, ya hemos hablado de las semejanzas entre Villa México, con otros conjuntos como la Villa Olímpica y Villa Portales, donde se habría dado la misma situación. Pero también se crítica la forma de abordar la necesidad de estacionamientos, situación que en muchos casos se tradujo en el arriendo de los mismos, situación se habría solucionado con las mejoras realizadas a partir del Programa Piloto de Condominios Sociales al que se acogió la Villa México, a propósito de la instalación en el barrio del Programa “Quiero mi Barrio”, al que nos referiremos más adelante. Lo que si podemos rescatar es que para muchos vecinos esta situación tuvo como resultado rencillas y distanciamiento entre ellos, mirando y centrándose cada vez más en el espacio privado, es decir, resolver los problemas particulares hacia el interior de la vivienda. Una vez instaurada la democracia nuevamente, cuentan los vecinos que se dieron más actividades al aire libre, se reactivó la junta de vecinos dirigiendo varias actividades a los jóvenes, ya sean de orden cultural, artístico, musical, etc. Una de ellas fue la construcción del altar a la Virgen de Guadalupe: No está del todo claro si es a fines de los 80’s o a principios de los 90’s cuando los primeros pisos comienzan a cerrar (tomarse), principalmente para estacionar su vehículo junto a su vivienda. Muchos lo consideran como un periodo ingrato. Otros cerraron y quedaron con un patio propio. Se dieron situaciones entre los vecinos de pisos superiores que solicitaron a los del primer piso estacionar sus vehículos también en este espacio con el fin de asegurarlos y evitar así los robos. Esto generó un clima incómodo de diferencias no menores en algunos casos. “Iglesia tampoco había, nosotros ayudamos a construirla. Así fue la historia de... Le cuento algo de la virgen de Guadalupe de ahí también (…) esa los vecinos, todos la construimos, donaron plata, cuando estaban haciendo el Américo Vespucio arriba. Entonces ahí la empresa nos donó fierros para hacer las rejitas, y esa virgen llegó de México, de allá la trajeron. La señora Hilda -ella falleció- Aida, tenía un bazar allá y fue la iniciadora (…) por intermedio de la embajada se trajo esa virgen”. (José Álvarez) “…hubieron vecinos que quisieron estacionar su vehículo obviamente en la parte del primer piso que estaba con un cierre y los vecinos del primer piso les dijeron ‘no poh, si tu no me ayudaste a poner la reja’, como muchos sí, otros le ayudaron a poner la reja, pero otros no, entonces ‘cómo tu no me ayudaste a hacer a la reja porque te voy a permitir que estaciones tu auto adentro’ y hacía jardines, que se yo”. (Iván Osorio) “…primero conectaron Vespucio, ¿te acuerdas que Vespucio estaba cortado? entonces en ese tiempo, pero eso fue como en el ‘90 y algo” (Cecilia Foncea) _________________ Se fundamenta desde varios vecinos la necesidad de cerrar debido a lo expuestos que quedan los primeros pisos, hecho reconocido por los habitantes, asimismo la necesidad de proteger su vehículo Un rol importante lo jugó la Municipalidad de Cerrillos. Se dio inicio a diversos talleres y se realizaron festivales. Muchos habitantes de la villa se conocieron en esos espacios y formaron sus propias agrupaciones. Por ejemplo, los clubes han venido a ser por excelencia el espacio de encuentro y entretención de los adultos mayores, donde juegan lota, comparten alegrías y penurias, participan en 47 Villa México talleres de manualidades, realizan onces, etc. Varios de ellos funcionan en la Casa del Dirigente, así los hacen Las Cerrillanas que se reúnen todos los días jueves. “Si, son todas conocidas. Nos conocemos por años y conocemos a sus hijas y a sus maridos que algunos se han muerto. Hay una muy buena relación, porque la gran mayoría somos adultos mayores más o menos de la misma edad, por lo tanto, tenemos los mismos gustos, crecimos en una misma época, nos casamos en una época, eso coincide con nosotros, entonces los temas que hablamos son esas características, hay un intercambio de cosas buenas, la salud, los nietos, las familias.” (Robinson Díaz) Han transcurrido cerca de 40 años del arribo de vecinos a Villa México que llegaron con sus hijos, que en su gran mayoría han formado familias y han migrado. Sin embargo existe un vínculo con la villa. Aquí son recurrentes las visitas 48 “…los viejos que hemos quedado aquí nos preguntamos por los hijos y nietos, o sea, esa relación.” (Robinson Díaz) Por su parte, el deporte perdura, hasta el día de hoy funciona el Club Deportivo Benito Juárez, que cuenta con su sede a un costado de la antigua cancha que hoy se convierte en Estadio, en Avenida Primavera con Avenida Las Torres. Historia y memoria en tanto la mujer generalmente era quien se dedicaba a las labores del hogar, a lo que en muchas ocasiones se le sumó un empleo. Al jubilar algunos optaron por seguir trabajando. Otros optaron por dedicar su tiempo a los nietos, a la vida organizada, a actividades de corte artístico – cultural (música, pintura, tejido, poesía, otros), a cooperar en actividades de mantención y hermoseamiento del condominio, etc. Otros tan solo a descansar en sus hogares. Varias agrupaciones se han mantenido en el tiempo organizando actividades, es el caso del Grupo de Guías y Scout Kme-Feleal, quienes han liderado la celebración del Carnaval Villa México invitando a celebrar en familia con cicletada, humoristas, disfraces, entre muchas otras actividades. Otro de los logros, se le atribuye a la junta de vecinos. Se trata de un recorrido del Transantiago que antes tenía un paradero fuera del barrio. Se gestionó su traslado y ahora tiene su paradero justo fuera de la sede de la junta de vecinos, ofreciéndoles un espacio para el descanso y el acceso a servicios higiénicos a los conductores en la reconocida sede con el sombrero mexicano en su entrada. Un elemento que caracterizaría a la villa y que se repite en todos los testimonios de diferentes generaciones es su tranquilidad, más marcada en una que otra época, pero la tranquilidad es sin duda su mayor atributo. Cuestión reconocida prácticamente por todas y todos los vecinos. 15. La reconocida y controversial Feria libre de Villa México Existen historias de habitantes o personas que rondaban la villa y se convirtieron en personajes míticos, por ejemplo, el “ladrón de bicicletas y carteras” “Me acuerdo que aquí en la Villa llegó un señor que se robaba las bicicletas y que les robaba las carteras a las señoras, los vecinos se molestaron y un día lo pillaron, le dieron su barraca y nunca más apareció.” (Robinson Díaz) En términos generales se dice que la gente de la villa es tranquila, confiada, se da el encuentro y la conversación, y que fue justamente esa forma de relación entre los vecinos lo que se prestó para la llegada de este individuo, que terminó recibiendo el castigo de la propia gente. Los vecinos en su gran mayoría trabajaban, salían temprano de sus hogares, se dirigían a sus fuentes labores, al volver retiraban a los niños/as del colegio o se encontraban con ellos al llegar al hogar, Se cuenta que la feria habría comenzado con quince puestos y se iniciaba en calle Los Tilos. Su llegada, cuentan, habría sido repentina. Según muchas personas era suficiente ya que suplía las necesidades de la villa. Los comerciantes no eran vecinos del barrio y fue creciendo con el paso del tiempo, lo que la hizo reconocida como una de las ferias más grandes de Santiago. En la actualidad la feria del día domingo es demasiado extensa y genera importantes problemas de seguridad y medioambientales, lo que no implica que igual los vecinos la consideran muy bonita. “¡La del día Domingo es más grande todavía!” (Robinson Díaz) “Bueno aquí tenemos versiones encontradas, personalmente para mí, con todo lo malo que es a mí me encanta la feria, sé que dejan malos olores, pero, yo desde que tengo memoria siempre ha estado la feria, los productos normalmente son frescos, hay caseros que uno los conoce 49 Villa México por años, que quizás prácticamente hasta de su vida, y bueno, a mí personalmente me encanta la feria, pero yo sé que por sus malas prácticas se han echado a muchos vecinos encima, porque en rigor ellos a las 16:00 deberían tener vacío y limpio, y normalmente el limpio estamos hablando 21:00-22:00 de la noche, y se van a las 17:00-18:00 de la tarde, porque a veces se quedan tomando su traguito, compartiendo”. (Ulises Rojas) Según un grupo importante de vecinos, la feria del día jueves es relativamente “tranquila”, no obstante, la del día domingo superaría la demanda local, ocupa desde Los Tilos hasta la línea del tren por el poniente y de allí hasta la circunvalación y de ésta última hasta la industria Pizarreño. A los comerciantes organizados de la feria libre, se les suman los “coleros”, que vienen a ser todos quienes venden cachureos, ropa, artefactos, herramientas, libros, etc., en su mayoría usados. Ahora son vecinos o afuerinos. Lo que más destacan es la basura que dejan y el uso de veredas como estacionamientos, hacen que muchos vecinos de la villa la rechacen, o al menos se manifiesten contrarios a su extensión. 50 “Tenemos la mala suerte de eso, pero dicen ellos abiertamente que ellos no tienen culpa de que quede basura porque a ellos la municipalidad les cobra para limpiar y la culpa la tendría la municipalidad y no los férianos, ellos se defienden así, la municipalidad dice que los férianos y los férianos que la municipalidad, porque a veces es de noche y los pobres hombres andan agachándose, recogiendo papeles, bolsas, basura y los férianos dicen que pasan puesto por puesto pidiéndoles plata porque tienen que limpiar, entonces quien es el culpable, uno no puede hacer nada”. (Ester Pincheira) Más allá de relevar a uno u otro actor, lo cierto es que la villa y sus vecinos tienen un tema no resuelto en relación a la feria, porque indudable es el uso que se le da a la feria, la gran mayoría se abastece de ésta, pero innegable es también que los olores y la basura que deja son evidentes. La irrupción en los espacios, la gran cantidad de gente que atrae, muchos de ellos en vehículos que hacen uso de las veredas como estacionamientos, entre otras situaciones, implica una incomodidad para los actuales habitantes de la villa. “Sí, yo voy. Realmente yo compro todo, compro para que me dure hasta la otra feria. La fruta, la verdura porque somos muy naturistas nosotras, mis hijas las crié muy naturistas, nada de comida chatarra, nada de andar eligiendo cosas que no deben de comer, solamente comida sana que se hace en la casa, fruta, no más allá, si quieren algo exquisito se puede hacer en la casa y eso, entonces yo compro la verdura, la fruta, todo lo compro en la feria, verdad que no compro nada en ninguna otra parte. (Ester Pincheira) Historia y memoria “Yo soy un fanático de la feria acá, a mi me encanta que esté esta feria acá. Primero que nada es una de las más grandes ferias de Santiago, tiene una gran variedad, tiene desde precios bajos, hasta precios altos. Cuando hay feria yo me la recorro entera, me gusta ir para los cachureos, soy fanático de los cachureos. Y lo otro que es una gracia que la gente baja de sus departamentos, sale y se encuentra prácticamente ahí con la feria. Ahora si nosotros vamos al supermercado y vemos los mismos productos, las verduras o la fruta, están al doble o al triple del precio que están en la feria. Así que yo he sabido que incluso viene gente de otras comunas, viene de Ñuñoa, vienen de Quinta Normal, vienen algunos de otros sectores de Padre Hurtado que vienen a esta feria, tanto como a vender como a comprar. Y se encuentra una gran variedad de cosas, yo voy muchas veces a comprar cosas antiguas y me he encontrado con grandes colecciones de libros muy buenos, que ni en el Bio Bio los he encontrado y los he encontrado aquí en la feria a precios baratísimos. De tal manera que esta feria aporta bastante a la comunidad, ahora esto de que queda sucio ya no es problema de los ferianos, ellos pagan el derecho para que quede limpio y yo veo que tipo seis de la tarde esta todo limpio, porque hay muchos ferianos que se retiran tipo cuatro de la tarde. Entonces después de la gran feria del día domingo, ya el día martes no queda ninguna basura. Ha cambiado bastante, eso sí que no sería malo buscar otro lugar cercano y más apropiado porque ahí queda muy tedioso. Pero yo la feria la encuentro bastante buena hay de todo, hay un surtido fabuloso y la gente clase media o un poquito baja que el gran porcentaje de la gente que vive acá, yo creo que se alimenta bastante bien y a un precio bastante accesible por lo productos que venden en la feria, productos buenos, frescos y aquí hay gente que yo creo que ferianos que llevan toda la vida, yo he conversado con algunos que me han dicho, ‘no’, ‘si mi abuelo estaba aquí ahora soy yo el que sigo con el negocio’, en las pescaderías, que se yo”. (Raúl Contreras) La gran mayoría coincide en que algo se debe hacer y no es que la feria tenga que desaparecer, pero si contemplar el tamaño preciso y que la basura que deja sea controlable, así también que se solucione el tema de los estacionamiento tanto de los feriantes como de quienes vienen a comprar, ya que rompen las veredas y disminuyen considerablemente el espacio del peatón. Se propone que existan depósitos de basura, que se acompañe de campañas de limpieza para la misma gente, que exista coordinación entre los feriantes y la municipalidad, a esta feria que tendría sus orígenes, según los vecinos por ahí por el año 1974, por tanto que es historia y parte también de la historia de la villa. 51 Villa México 16. El Programa Quiero mi Barrio Primero que todo debemos aclarar que el Programa Quiero mi Barrio llega a Villa México en su fase piloto, estuvo dentro de los primeros 200 barrios que iniciaron su proceso de mejoramiento el año 2007. De hecho al programa se le conocía como “200 barrios” o “Vivo mi Barrio”. En la villa se le conoce hasta el día de hoy por el “Quiero mi Barrio”. Cabe mencionar, que la intervención en Villa México no contempló todo el espacio del conjunto, debido a su magnitud se enfocó solo a los blocks del sector sur. El polígono de intervención fue entre Avda. Salvador Allende ex Ferrocarril por el Oeste, Calle La Primavera por el Norte, Los Tilos por el Este y Avda. 5 de Abril por el Sur. Historia y memoria Aún no existía la intención de intervenir las copropiedades, sin embargo son los propios vecinos quienes manifiestan la necesidad de mejorar los blocks y su entorno inmediato. No se llegaba a comprender las razones de invertir en equipamiento comunitario, ya que para los vecinos ya se contaba con cancha de futbol y con la sede de la Casa de Todos. El diagnóstico para la señora María Hidalgo, ya estaba claro y se la jugó desde el inicio para resolver los problemas fundamentales de la villa. Lo proyectos de mejoramiento no eran precisamente lo que la comunidad de la Villa México requería. Los proyectos debería ser definidos por sus habitantes. “…y esas eran las que teníamos que elegir nosotros. Entonces yo le dije ‘de qué me sirve que me hagas una plaza y me pongas pasto cuando yo sé que esa en seis meses va a estar destruida, aquí lo que nos sirve es que a nosotros se nos cierren los edificios y nosotros como vecinos cuidemos lo que se ponga’, la planta, el árbol y la limpieza”. (María Hidalgo) Según se da cuenta en el Diagnóstico del Barrio (Hito Inaugural): 52 “La intervención comenzó el día 06 de octubre del 2007, en el Colegio José Joaquín Prieto Vial, con una asistencia de aproximadamente 300 vecinos. Esta asamblea se inició con la presentación a la comunidad del Programa, Obra de Confianza y el Equipo Quiero Mi Barrio Villa México (…) Las primeras aproximaciones al barrio incluyeron salidas a terreno, con el fin de realizar un diagnóstico del barrio. Posteriormente se comenzó con la difusión del Programa, que incluyó conversaciones con vecinos, organizaciones vecinales, colocación de afiches en lugares estratégicos y visibles (Casa del Dirigente, kioscos, negocios, farmacia y entrada de cada block a intervenir), además la entrega de dípticos con información del programa, facilitados por los Coordinadores de la Seremi”. (Diagnóstico Compartido. Programa Quiero mi Barrio. Seremi – Minvu) Para los vecinos organizados en el Consejo Vecinal de Desarrollo (CVD) se da pie al programa el día 14 de septiembre del año 2007, cuando se reúnen en la sala tres de la Casa del Dirigente con la gran noticia que se contaba con 280 millones para invertir en obras en la villa. En la ocasión, se dio a conocer el programa, informado a los vecinos sobre el propósito del programa, los compromisos que deberían tener como comunidad, los montos de inversión y el tiempo que estaría trabajando conjuntamente la Seremi de Vivienda y Urbanismo, el municipio y los vecinos de la villa. En la ocasión se les habló de la obra de confianza. “Lo que a nosotros nos hacía falta era que se nos cerraran los condominios, eso, porque ya había uno aquí cerrado que es el que está al lado, que es en 5 de Abril ese, y había en Las Torres otro que estaba cerrado también. Había como tres que estaban hechos ya. El de allá de la esquina del Servicio de Salud. En ese tiempo para que se pudieran hacer los condominios había que pagar tres UF para que pudiera el municipio… era participativo y eran los vecinos lo que ponían tres UF y la municipalidad ponía el resto y se cerraban los condominios y después seguían avanzando, entonces ahí yo me pregunté qué es lo que había que hacer para hacer un condominio, ahí se nos habló de la constitución de un condominio, cómo se tenía que hacer, qué es lo que había que hacer, la documentación.” (María Hidalgo) Para constituirse en condominio, recuerdan que en la ocasión no se entendió mucho, que tuvieron que asesorarse en diferentes lugares, reunir la documentación necesaria fue lo primero, identificar a los dueños, identificar el año, la inscripción de la propiedad en el Conservador de Bienes Raíces ¿y qué más hay que hacer? Un ministro de fe. La Municipalidad de Cerrillos, la Seremi de Vivienda y Urbanismo y el Serviu fueron claves. En el 2008 se habría iniciado el proceso de constitución de los condominios, en paralelo corría el Programa Quiero mi Barrio, pero lo que más motivaba a los vecinos era el cierre y mejoramiento del entorno de los blocks. Una ardua tarea fue convocar y reunir a los vecinos por condominio, debía contarse con un 80% de quórum, en el caso del condominio 5 de Abril había 58 personas, solo faltaron seis, se recorrían los departamentos puerta a puerta, se reunían en las escaleras, en las entradas de los blocks, en los pasillos, etc. 53 Villa México Debieron leer y aprender de las leyes relacionadas con el tema, por ejemplo, de la exención del pago de impuestos notariales e impuesto del Conservador de Bienes Raíces, se la consiguieron en la Municipalidad y la copiaron y se la repartieron entre los representantes de los condominios. El paso siguiente fue pasar la documentación, escrituras de las viviendas incluidas, ante notario. Los vecinos que dirigieron el proceso cuentan que muchos de sus pares no creían, que fue un arduo trabajo el motivarlos. 54 “…Y…al conservador y le digo a la dama de la ventanita: ‘señorita vengo a inscribir un condominio social’. Ella me dice ‘sabes que no tengo idea lo que me está pidiendo’, llega y llama al guardia, ‘guardia venga’ le dice ‘acompañe a la señora al conservador adentro’. Yo dije ¿que estoy haciendo? no hice ninguna maldad que llama los guardias, y me acompaña el guardia al conservador y el conservador dice ‘señora buenos días ¿Qué se le ofrece?’, ‘señor vengo por esta ley’, ‘a ver’, me dice, la mira, la lee y le da la mirada pero profunda al secretario de ahí. ‘Mira lo que trae la señora’, le dice, ‘¿qué trae?’ le dijo el otro ‘mira lo que salió en febrero’ le dice ‘ley de condominio sociales’ y que no pagan. ‘Señora me lo presta un minuto’, ‘claro’ le digo yo. Por favor fotocopie todos los estamentos le dice el conservador y me empezó a conversar con el conservador yo y le cuento. Yo estaba en todo caso muy atenta de esa ley, porque esa ley salió en febrero y no había nadie en Santiago y yo estaba viendo tele en el canal de lo del Senado cuando salió esa ley. Así que con un cuaderno y un lápiz yo la anoté y en seguida empecé a buscarla quién la tenía para que la bajaran y ahí fue cuando me la bajaron en el municipio (…) y ahí me mandaron y ‘no haga fila’, me dijeron, la señorita la va a atender, y ahí la señorita me dice ‘¿Qué pasó?’, no, es que vengo por esta ley y aquí traigo esta cosa, espéreme un poquito, llama por teléfono al segundo piso, llama otra vez al guardia, acompáñela al segundo piso a hablar con tal señor y me fui al segundo piso y me nombraron a un funcionario que hiciera el trámite, fue tanto el asombro que tuvieron y el susto de no tener idea de la ley porque los conservadores, imagínate, no tener idea de una ley y que llegue una persona particular a exigir esa ley, entonces me nombró el mismo conservador una persona para que me atendiera y todo el asunto y que me llamara por teléfono, a los dos días me llamaron por teléfono, ‘dos rechazados’ ¿por qué? No aparecían inscritos en ninguna parte. Uno, estaba inscrito al margen de otras propiedades que habían tenido porque había fallecido el dueño, al margen de los otros estaba inscrito la posesión efectiva, y el otro, que era la señora Quena, el marido había muerto y la señora pensó que el marido murió, aquí tengo yo pagado todo esto, esto es mío, y va donde un abogado y el abogado le hace posesión efectiva Historia y memoria y ella no lo alcanzó a inscribir, por eso que no aparecía en ni una parte y debía el departamento todavía porque ellos no pagaron el último dividendo cuando murió el caballero y no funcionó el seguro de desgravamen y como no funcionó el seguro de desgravamen, le rogué como quince días hasta que la mandé ‘no, señora María, si yo tengo pagado’, ‘no señora’ (…), ‘vaya a hablar con esta persona al segundo piso’, ‘este señor quiere conversar con usted, su departamento no está pagado, está en deuda con la Caja de Empleados Particulares’. Ya, la señora fue y tal sería la sorpresa que la mandan ahí al asunto del seguro social ¿cómo se llama ahora, no me acuerdo? INP” (María Hidalgo) El testimonio da cuenta de los esfuerzos que hay detrás de los dirigentes por mejorar la calidad de vida de los vecinos a través de la formalización de los condominios y de la experiencia en la cual fueron pioneros. El proceso era desconocido e incluso ajeno a las prácticas de un vecino e incluso de un dirigente. Gran asombro causó también en la Municipalidad de Cerrillos la gestión realizada por los vecinos organizados por parte de los condominios. “… Me vine pa la municipalidad, le pedí a la Verónica que lo mirara, que lo revisara, no lo podía creer ‘¿lo hiciste ya?’ ‘Sí, lo hice’. Me dijo ‘sabes qué, voy a llamar a don Alejandro’ [Almendares, Alcalde de la época], ‘anda para allá, llévaselo’. Llamó a don Alejandro y don Alejandro me saluda y [me dice] ‘¿qué se le ofrece?’ ‘mire, le traje esto’, le dije yo, (…) ‘espérese un poquito’, me dice, pesca el teléfono y pide que Guillermo subiera, sube Guillermo y ‘mira lo que trae la señora’, le dijo, ‘¿qué es lo que trae?’ Le dijo Guillermo bien asustado así, ‘trae la escritura, trae la inscripción, trae todo’, ‘ah’, dijo, ‘no lo puedo creer’, ‘créalo no más’, ‘ahora se va a tener que esperar’ ‘¿y por qué?’ Le dije yo, ‘porque ahora el programa que le presenté el otro día trae un programa piloto y ese programa piloto es para todo este sector que está aquí en este cuadrante’. [¿Cuál era ese programa piloto?] ‘El de los condominios, pues’”. (María Hidalgo) Efectivamente era el piloto del Programa de Condominios Sociales, que venía a complementar la inversión del Programa Quiero mi Barrio, con asignación de recursos diferentes, pero dependiente de igual forma del Ministerio de Vivienda y Urbanismo. Se les encargó a los vecinos que en un período de tres meses, los seis condominios debían organizarse. Recibieron la colaboración de los abogados en el Conservador de Bienes Raíces, con la información 55 Villa México que les entregaban los dirigentes (nombres, apellidos y los RUN’s). Cuentan que en muchos casos tuvieron que buscar a los dueños de los departamentos, que en otros, se ocupaba el número de inscripción de SERVIU, ya que en los registros algunos departamentos aparecían como dueño dicho Servicio. Algunos vecinos atemorizados de las intenciones que podría haber tras la solicitud de las escrituras de sus viviendas se rehusaban a entregarlas, además se creía que posteriormente les iban a cobrar, es más, que existían intenciones de apropiarse de las viviendas. Le seguía el reglamento por condominio. Y por supuesto el bautizarlos. Nació por ejemplo el condominio “Nueva Vida”. “…de la ley se sacaron todos los puntos, los deberes, las obligaciones y los beneficios. Se sacaron de la 19.537.” (María Hidalgo) El más complejo habría sido el condominio “Las Torres”, una de las tareas más complicadas era revisar los libros en el Conservador de Bienes Raíces y encargarse de las inscripciones. El 2008 se constituyeron los seis condominios. 56 Una vez constituidos vendrían las obras, pero antes la definición de las obras, la asignación de los recursos y el diseño de los planos, que recuerdan los vecinos les apoyo Nélson González de la SERPLAC de la Municipalidad de Cerrillos. Para el caso fueron alrededor de 1.000 UF por condominio. Fueron largas discusiones donde se trataba desde la materialidad hasta el trazado de las obras, una vez definida la obra, diseñado el plano debía firmar cada uno de los presidentes de los comités de administración de los condominios. “…Entonces los planos la escritura, la inscripción todo tenía que ir en un solo (…) al ministerio, fotocopia de la escritura, de la inscripción. Una vez nos hicieron sacar a los chiquillos de aquí un documento, ¿se acuerdan que por internet lo sacaron? En el cual tenía que aparecer en el Ministerio si nosotros los presidentes éramos o no propietarios de algún departamento de los cuales estábamos liderando, y se sacaban por internet y nos dieron 24 horas para presentar ese papel. Lo pagó Vesma Carrasco porque ella tenía cuenta para pagarlo, pagaron los seis certificados. Después que estaba todo listo empezaron a hacer el gato y el ratón, cazándonos por alguna parte. Buscando alguna cosa para decir no, este no calza, este no cumple con la documentación”. (María Pino) Historia y memoria Fue complejo relatan, ya que uno de los condominios no contaba con el 80% de quórum, entonces como ya se habían reunido las escrituras, el mismo Alcalde, convocó a reunión a los vecinos, donde participaron el Ministro de Fe y Secretario Municipal y se constituyó el Condominio Tical. Recuerdan que hacía frío, era invierno durante el mes de julio, se les daba café a los vecinos, se conversaba en torno a los posibles arreglos que tendrían los condominios. La Escuela Joaquín Prieto era el escenario de un momento histórico para el condominio y la Villa. Se apoyaban todos los integrantes del CVD⁴. Los asistentes debían firmar uno a uno el libro. Hoy el Condominio Golfo de México, es el más grande de la Villa México ya que cuenta con ocho edificios. El condominio “Las Torres”, relatan se constituyó en los pasillos del edificio, del block 23, mientras llovía, con la mesa de inscripción en la puerta de entrada del edificio con los vecinos sentados en las escaleras junto a los funcionarios municipales después del horario laboral, dieron las 22:00, las 23:00 horas, muchos departamentos sirvieron como espacio para acoger a los vecinos y las cocinas se echaron a andar para aplacar el frio con café o té. Los que no eran propietarios debieron solicitar un poder simple del propietario. “…pero todos con la angustia ´ ¿se formará o no se formará?’, estaban todos entusiasmados” (Cristina Aguirre) “Escrita, con un voto (…) y el voto venía (...). El voto era un documento hecho que usted aprobaba o no aprobaba y además de eso usted firmaba el libro (…) la gente aprobaba la constitución del condominio.” (Cristina Aguirre) En las elecciones de las directivas por condominio, el tiempo era escaso y las expectativas de la comunidad se hacían ver. “Nosotros nos iniciamos en febrero del 2008, ahí se eligió la directiva, Presidente don Robinson Díaz, secretario el Sr. Aravena, tesorero Alejandro Oyarzun, director Cristian Olivares, directora la señora María Pino”. (Robinson Díaz) ⁴ El Consejo Vecinal de Desarrollo se habría constituido en febrero del año 2008. 57 Villa México 58 Historia y memoria Después se constituyó el condominio “La Primavera”, de igual forma se juntó la documentación, se pedía la escritura vivienda por vivienda, se leía para ver quién era el dueño, donde estaban inscritos, cuáles eran los números, las fojas, etc. En los pasillos, lloviendo, en invierno, la noche de un sábado, solo faltaba uno, La Primavera, contaban ya con la documentación para el Conservador de Bienes Raíces, solo faltaba la votación la que por fin se dio cerca de las 23:00 horas. se relevara más bien el proceso de activación social y asociatividad que viene a ser el “espíritu” del Programa Quiero mi Barrio”. Por ende, largas reuniones y palabras dirigidas a la participación y la vida de barrio o “en comunidad”, no siempre caían bien entre los vecinos, lo tangible, lo concreto, el mejoramiento tras años de problemas en el espacio físico, que radicaron en una serie de diferencias y conflictos en la comunidad, se hacían ver por parte de los vecinos y los dirigentes. En tanto, relatan, que del Ministerio de Vivienda y Urbanismo seguían el proceso llamando a los dirigentes. Según éstos llevaban un conteo de proyectos por región. “Yo dije siempre, yo no necesito venir a escuchar el mismo discurso, para qué, si yo necesito el beneficio y tienen idea ustedes cuanto trabajamos para este beneficio, que nos daban las 1 y 2 de la mañana leyendo escrituras para buscar números y qué sé yo, y golpear puertas, lógico que nosotros teníamos el interés de que se hicieran los condominios porque la vida social, a la orilla de los condominios era pésima, pésima, basura, usted le sobraba un mueble ¿para donde lo tiraba? para el lado afuera del edificio, le sobraba un colchón para afuera de los edificios también, todo lo que sobraba en su casa muebles, colchones, lo que fuera lo tiraba para el lado afuera del edificio, entonces aunque pasara una vez al mes, por ejemplo, un vehículo municipal recogiendo cosas de casa, no las sacaban, las dejaban ahí y después al otro día aparecían, afirmada en los muros qué sé yo, ¿me entiende? entonces contra todo eso ellos no pensaban lo que uno estaba pasando, además de ese desorden de muebles y qué sé yo, nunca faltan en los barrios la gente que está en situación de calle, muchas veces yo vi ahí en los condominios no sé si en los tuyos, durmiendo personas para las lluvias tapadas con plásticos al lado de afuera, y al lado de afuera hay un colegio, y no puede ser (…) nosotros como condominio en ese momento no funcionábamos todavía, pero los vecinos de mi edificio compramos un foco y lo instalamos en la esquina del bock y le pusimos luz al pasillo y todo eso, porque ya era demasiada la oscuridad...” (María Hidalgo) “Por ejemplo, en Maipú estaba Villa Esperanza; en Cerrillos nosotros Villa México; en El Bosque estaba la Villa San Francisco I y Villa San Francisco II; en Lo Prado Villa Caupolicán y Valentín; Peñalolén El Cobre y Villa San Eugenio; Concón Villa Vista al Mar, Peñalolén… Eran 10 los proyectos. Nosotros después nos enteramos que estábamos muy bien evaluados, no teníamos ningún problema porque en otros lados la directiva se elegía primero, creían que la cosa era fácil, renunciaban, se iban, tenían serios problemas, yo me acuerdo que esa parte era...” (Robinson Díaz) Costaba creer que el Ministerio financiaría los proyectos, pero debían reunir la documentación y constituirse. Se valoró bastante el apoyo que brindó el Alcalde “…él llegaba, entonces eso a nosotros como que nos incentivo. Ya dijimos nosotros si estamos apoyados por el dueño de casa.” Asimismo la presencia y acompañamiento del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, el Departamento de Vivienda del Municipio. “…tuvimos mucho apoyo (…) ya constituidos todos ya empezamos hablar de plata, que yo quiero esto, quiero esto otro.” (María Hidalgo) Se reconoce y valora durante el proceso de constitución de los condominios, la participación del Ministerio a través de la Seremi, de la Municipalidad y por supuesto el rol primordial de la comunidad. “Nosotros éramos tan importantes como las otras dos partes, pero nunca aquí lo entendieron y siempre a mí me criticaron porque yo hacía críticas de que no funcionaba este asunto y que era muy lento”. (Carlos Aguilera) Según los dirigentes, la comunidad quería y necesitaba obras, mientras los funcionarios del Quiero mi Barrio apostaban a un cambio social, quizá era complejo explicar y entender una intervención que buscaba un mejoramiento por medio de obras, pero donde éstas pasaran a segundo plano y Una situación a la cual ya se hizo referencia y que propició la regularización de los condominios, fue la apropiación de los primeros pisos para uso por parte de los vecinos, donde se había construido estacionamientos para sus vehículos, en ocasiones también arrendados. “Entonces todo eso por los condominios se terminó, se terminó la situación de la basura, de los muebles que se tiraban para afuera (…) las apropiaciones indebidas de los espacios, cuando no eran de ellos y cobraban por los estacionamientos, entonces por eso nosotros nos apurábamos para que se hicieran los condominios.” (María Hidalgo) Con el Programa Piloto de Condominios Sociales, paralelamente se desarrollaba el Programa Quiero mi 59 Villa México Barrio, el que iniciaba su trabajo con la definición y ejecución de la Obra de Confianza, proyecto inicial que permitía establecer un marco de “confianza en la comunidad”, de que efectivamente lo prometido se haría efectivo. Por su parte, el Programa Quiero mi Barrio avanzaba también con el mejoramiento de los espacios públicos. En el mes de mayo de 2009 se inauguran los juegos infantiles en la plaza del Cerro La Campana y se realiza una entrega masiva de ampolletas de bajo consumo a los vecinos de los condominios. “Acuérdate que yo acá tengo anotado que el 31 de mayo de 2008 se recibe el certiicado número 75 en la Municipalidad de Cerrillos, donde informa que en sesión el Consejo Municipal acordó por unanimidad asumir el cargo de mantención, reparación y consumo de electricidad de alumbrado adosado a los ediicios (…) La gente ya al ver eso…” (Robinson Díaz) Sigue el trabajo colaborativo con el municipio, según relatan los vecinos, después de limpiar, se removió la tierra para plantar pasto y se trajo tierra para nivelar, se instalaron las rejas que venían armadas, se hizo el cierro perimetral y la pintura vino inmediatamente, para finalizar con los estacionamientos. Reconocen en Nelson González de la Municipalidad de Cerrillos un gran apoyo en el diseño de los planos, asesoría en el proceso de construcción, en el repintado de los blocks, dado que la combinación de colores, no era del todo satisfactorio para los vecinos quienes reclamaban que los edificios quedarían de distintos tonos. “Se empezó a motivar. Se motivó. Oiga yo no soy del primer piso, siempre tuve un jardín hermoso lo digo con bastante orgullo, rosas hermosas.” (María Pino) También se realizaron actividades sociales de encuentro, convivencia y entretención. Un día de octubre del año 2008, la comunidad se traslada al Colegio. Allí niños, niñas, hombres, mujeres y adultos mayores, pasan una jornada inolvidable. 60 Historia y memoria “baile, rayuela, tirar la cuerda, baby futbol ¿se acuerdan? con los amigos y el premio lo obtuvo el condominio Vida Nueva, una cortadora de pasto.” (Robinson Díaz) Recuerdan algunas normas que se establecieron y se hicieron cumplir tras las obras: “18 de agosto de 2009 informa el departamento jurídico del municipio ratificando que los condominios deben tener dos puertas de acceso para vehículos de emergencia, bomberos o ambulancia,… eso también a la gente se le dijo, porque de repente ¿para qué dos puertas? la gente había que decirle que estaba reglamentado tener dos portones para vehículos (…) todos tienen dos portones.”. (Robinson Díaz) “Todavía la tenemos, con eso cortamos el pasto, una tremenda máquina.” (Cristina Aguirre) Ya a esas alturas, y después de un año de trabajo, el Programa Piloto de Condominios Sociales comenzaba a dar sus primeros frutos. Partieron con el Condominio Tikal. Ahí se produjo algunas dificultades que hicieron detener las obras. Hubo que hacer una nueva licitación, lo que implicó cambio de constructora y eso derivó que fuera el más atrasado, cuestión que no hizo decaer el ánimo de los vecinos, ni de sus dirigentes. Se partió despejando el terreno, ello implicó sacar las rejas provisorias y una serie de muebles “cachureos”, restos de las ampliaciones de material ligero, “todo el basural había que despejar, camionadas y camionada de basura”. Le siguieron los condominios “Las Torres” y “5 de Abril”. Diferentes empresas constructoras se adjudicaban las licitaciones. La misma gente ejerció control “fiscalizador”. Se cuenta que hubo que pintar en más de una ocasión los blocks, asimismo las rejas, esto producto del rol y alta exigencia que plantean sus dirigentes. Cuentan los integrantes de la Directiva del Consejo Vecinal de Desarrollo, que en principio algunos vecinos se sentían encerrados, “encarcelados”, pero que en definitiva se valoraba el espacio resguardado, más aun con la instalación de los citófonos que ayudó a mantener comunicados a los vecinos con la entrada de cada condominio, por ejemplo, a la llegada de amigos o parientes. La citofonía no fue parte del Programa Piloto de Condominios, sin embargo los vecinos interesados hicieron un aporte adicional, que permitió a su vez la instalación de portones automatizados. Se hizo la gestión de presentar presupuestos al municipio y obtuvieron el beneficio de una subvención y se instalaron los portones eléctricos a control remoto. Pero los estacionamientos no resultaron en principio como se esperaba ya que no cumplían su función, se cuenta que algunos intentaron arrendar los estacionamientos, sin embargo, hubo que poner reglas y nuevamente apelar a la ley. “Enero 2010 se espera el pronunciamiento de parte del SEREMI sobre el estacionamiento pues estos son públicos al momento que se entregan los block, la contraloría indica que las 61 Villa México respectiva municipalidad puede solucionar este problema y en marzo de 2010 se reside el decreto exento 202 de la Municipalidad de Cerrillos comunicando la entrega de concesión por 30 años prorrogable tácitamente, sucesivamente por periodos iguales a los condominios y administración”. (Robinson Díaz) “Nosotros cuando hicimos el reglamento interno, dice el reglamento en el artículo 8 que los estacionamientos son de uso exclusivos de los residentes, eso dice el artículo 8 y eso es lo que hay que respetar, aquí según la ley de condominios sociales dice que la ley se cumple construyendo un estacionamiento por cada dos viviendas, eso dice la ley de condominios sociales”. (María Hidalgo) La cantidad de estacionamientos se respetó en todos los condominios, exceptuando el condominio Tikal. 62 El cierre y el mejoramiento de los condominios habría traído como consecuencia el aumento de la plusvalía de los departamentos, así también mayor tranquilidad y seguridad al tener más control del acceso. “Así juegan los niños, porque los niños están dentro del condominio, las mamás están totalmente tranquilas, nadie extraño les va a tomar algo o les va a hacer algo, eso fue una de las grandes cosas.” (Carlos Aguilera) “…yo pensaba que en mi condominio no habían niños, después que se cerraron vi que todos salían a andar en bicicleta en la noche, habían hartos niños”. (María Hidalgo) El arreglo de las techumbres de los edificios también fue un elemento que vino a mejorar la calidad de vida de los vecinos y por supuesto la plusvalía de los blocks. “No. No. No. Venía en el programa y nos congelaron la plata para el terremoto y tuvimos que entrar por un proceso post terremoto para que nos arreglaron los techos”. (María Hidalgo) Terremoto del 27 de febrero de 2010 que azotó a la Zona Centro Sur de Chile. Una mención especial se hace a Jorge Castro, Presidente del Condominio Golfo de México, quien falleció en plena ejecución del Programa en la Villa, en mayo de 2010. Él al igual que otras personas que lideraron el proceso, luchó incansablemente por el mejoramiento la Villa México. Historia y memoria Pese al esfuerzo de muchas personas quedó la sensación de que los recursos no fueron entregados de manera proporcional, es decir, se entregaba un monto igual para cada condominio, sin considerar el tamaño del terreno y la cantidad de viviendas. En este sentido unos recibieron más y otros menos, no obstante, las mejoras en los condominios son evidentes y la comunidad en general las ha recibido muy bien. Incluso al tiempo después se equipó con recursos “sobrantes” a los condominios de mayor envergadura que quedaron un poco desprovistos. La crítica apunta a las deiniciones previas y al diseño de las políticas públicas que no siempre responden a la realidad. Sobre el “Quiero mi Barrio”, recuerdan que una de las primeras gestiones fue aclarar a sus propios vecinos el alcance que tendría la inversión en el barrio y que el perímetro de intervención incluía solo desde Los Tilos (Este) hasta Salvador Allende, ex Ferrocarril (Oeste), por los otros extremos, La Primavera (Norte), y 5 de Abril y Benito Juárez (Sur). Esto generó algunas complicaciones, puesto que “las casas, no estaban incluidas”. Cuando se hizo la elección de proyectos, uno de los elegidos fue la sede, ya que las reuniones tenían que hacerlas en los pasillos de los propios blocks o en los colegios. Así fue como se originó la idea de construir un salón multiuso, que permitiera llevar a cabo sus reuniones y encuentros entre los vecinos. También se podría hacer eventos artísticos, pues contaría con “proscenio” y un camarín para el cambio de vestimenta de los artistas. De ese modo tendrían tribuna los grupos y artistas locales, que llevan el sello de la Villa, como es el caso de Las Cerrillanas. El salón fue pensado por los vecinos y ello se plasmó en el diseño. En relación a la elección del Consejo Vecinal de Desarrollo se relata: “…fue un día de semana aquí en esta misma sala que vinimos todos y tuvimos que reunirnos porque se necesitaba que teníamos que tener una personalidad jurídica para poder hacer uso de las platas, entonces había que hacer eso, para empezar a invertir”… (Cristina Aguirre) La junta de vecinos hizo una gestión adicional para ser parte integrante del Concejo Vecinal de Desarrollo, principalmente porque el polígono de intervención estaba concentrado en los condominios y por lo mismo la representación de los vecinos se centró en la organización interna de los condominios. Lo claro es que había una inversión en el espacio público donde la junta de vecinos tenía mucho que decir. “…yo mandé dos correos electrónicos a la Presidencia de la República reclamando mi derecho 63 Villa México a participación, porque a mí no me querían dejar participar, y que yo sabía de todo el tema del Quiero mi Barrio tenían que ser las organizaciones territoriales y las funcionales (…) pero yo hice mi reclamo y se lo mandé a la Presidenta Bachelet en ese tiempo porque el Programa nació gracias a ella (…) y yo creo que nosotros fuimos un aporte al interior del Quiero mi Barrio, también hubo mucha gente que nos conoció y que, muchos ni siquiera sabían dónde estaba la Junta de Vecinos, entonces, yo creo que fuimos un aporte fíjate, en el tema ahí de la organización del consejo vecinal”. (Cecilia Foncea). En el proceso de la elección se instaló un tema que dio origen a otros proyectos. …” ya después otra señora dijo porque no le ponemos juegos para los niños, juegos para estos otros, nosotros como en tal fecha nos conseguimos como institución para que pusiéramos juegos en esa plaza que está allá arriba no es mala idea dije yo, y empezamos ‘juegos aquí, juegos allá’ y empezamos” 64 Historia y memoria EL “QUIERO MI BARRIO” AYUDA A CAMBIAR LA IMAGEN Se da inicio a la Obra de Confianza, que se traduce en la instalación y recambio de Luminarias. Se hizo la red eléctrica de todos los edificios aumentado a cuatro las dos luminarias con las que se contaba hasta ese momento. Los vecinos cuentan a modo de anécdota que apagaban las luces de sus casas, para ahorrar energía pensando en el alto consumo que este cambio tendría para sus bolsillos. Lo que no sabían es que se sacaron los interruptores y los focos pasaron a prenderse y apagarse de manera autónoma, puesto que ahora contaban con equipos fotovoltaicos. También se instalaron juegos infantiles y adolescentes. De a poco fue cambiando la imagen del barrio. Se proyectó también un Boulevard, desde Los Tilos hasta Ferrocarril a modo de paseo peatonal, proyecto que no prosperó por su alto costo. Siguiendo con las obras, se ofreció la instalación de un Telecentro, espacio que contaba con computadores y servicio de Internet gratis para los vecinos, por medio de un convenio con la Subtel⁵. La oferta inicial fue instalar un conteiner adaptado para los fines establecidos pero, tanto la Municipalidad como los dirigentes de la Villa se negaron. Por lo mismo, se cedió una sala en la Casa del Dirigente, la que fue acondicionada en términos de seguridad y óptimo funcionamiento con los recursos dispuestos para la compra del conteiner. Se instaló protecciones a las ventanas y el municipio colaboró con alarmas de seguridad. “…yo dije ‘yo necesito que el día en que esto se inaugure, hacer una transparencia de estos dineros, cuánto costó esto, cuánto costó lo otro”. (María Hidalgo) Tras una larga espera vino el inicio de obras del Salón Multipropósito, pero ya en enero de 2013, la flamante sala se encuentra lista para su inauguración. ⁵ Subsecretaría de Telecomunicaciones. 65 Villa México Historia y memoria LO SOCIAL En términos sociales, se recuerdan algunas actividades como la iesta de Halloween, o de “Día de Brujas”, algunas actividades para el adulto mayor, controles médicos, algunos encuentros recreativos, cursos de administración y elaboración de proyectos, además de una escuela para dirigentes. Dentro de la directiva del Consejo Vecinal de Desarrollo, se encontraba también la actual Concejala Cecilia Foncea, representando a la Junta de Vecinos Villa México, organización a la que renunció como presidenta, tras ser elegida concejala por la comuna de Cerrillos. 66 “…Y ojalá que ese texto incluya los valores, es muy importante el asunto de los valores, porque resulta que acá cada condominio tuvo su valor, cada obra tuvo su valor y entonces al inal de su texto, si se pudiera, este programa le costó al Estado tantos pesos. (…)Yo digo ¿por qué cuando se trata de dinero, todos tiran para las moras? Yo pienso que no debe ser así. Yo soy presidenta y directora de mi condominio. Yo le digo, ‘soy mujer de puertas abiertas que quiere venir a ver el libro’, ‘venga’, ‘aquí está’, ‘venga a verlo’, ‘¿quiere saber cuánta plata hay?’ ‘Venga, yo lo invito’, hasta puedo darle un café, yo lo atiendo (...) Pero lógico, yo encuentro que cuando se trata de plata todos arrancan. Yo pienso que no hay por qué arrancar”. (María Hidalgo) Hoy por hoy los condominios funcionan, puede verse cada edificio en buenas condiciones, aseados, con jardines en buen estado, el pasto cortado, los niños juegan, la gente riega, otros podan, de vez en cuando se hacen asados, se pagan gastos comunes, cada condominio tiene su Comité de Administración, lo que no implica que hayan diferencias y la vida sea idílica, por ejemplo, nos dicen que es complejo hacer elecciones, tomar decisiones por la falta de participación, el pago de los gastos comunes, todo un desafío, “…en el artículo 11 dice que cada uno puede tener una administración separada”. (Robinson Díaz) “Cada condominio con un comité de administración y cada edificio puede tener su delegado que da cuentas a la central, por eso le digo que en todo orden de cosas lo que más se enreda e´ el pelo e´ la vieja, como dicen por ahí, son los dineros, por eso llevo cuántos años de presidenta de mi condominio, he renunciado cuántas veces y no, gritan en patota ‘si usted se va yo no pago ni uno más’. ¿Por qué? Porque yo tengo las puertas abiertas, ahí está el libro, quien debe, quien no debe, aquí están las cuentas, aquí están pegaditas todas las boletas. La escoba costó dos mil pesos, dos mil pesos costó la escoba. La cera costó 4.560 el envase de cinco litros, ahí está la boleta pegadita con fecha con todo ¿Ya?” (María Hidalgo) “Todos abogan a la transparencia, se cancela un sueldo a un auxiliar de aseo en uno de los condominios, en otros es voluntario o cada vecino se encarga de su espacio, al igual que la mantención de los jardines, se compran herramientas con el dinero del fondo común. Se piden también espacios de reflexión y opinión, pero opinión de los vecinos y dirigentes y no monólogos desde los profesionales de los equipos ‘pero aquí yo también quiero que me respondan una cosa señorita’ le dije (…), que no venga todo pauteado” (Carlos Aguilera) “Todo esto es de la palabra mágica gestión, gestión, gestión, gestión, gestión, hasta el final”. (María Hidalgo) “Usted dice que debemos estar contentos porque finalmente lo conseguimos. Sí. Es cierto, pero yo siento un dolor de que dos presidentes de condominios que lucharon a la par con nosotros, murieron y yo tuve la clarividencia de decir… porque nosotros somos gente de edad y hay muchos que no van a alcanzar a recibir esto, a ver realizado por lo que tanto han trabajado Yo tengo la facilidad de que no tengo miedo de decir las cosas” (Carlos Aguilera) “A esta edad, mijito, cuando uno es vieja, ya no tiene miedo”. (María Hidalgo) La experiencia de los vecinos adultos mayores, muchos de ellos dirigentes por décadas, es un capital invaluable del cual todos podemos aprender y compartir experiencias en pro de políticas públicas a la medida de las necesidades de las comunidades, incorporándoles en la reflexión y en la toma de decisiones. “Quiero mi Barrio, la palabra lo dice, yo quiero la gente de mi barrio y la gente de aquí de mi barrio está incorporada a diferentes cosas, actividades que tiene el municipio, el municipio tiene muchas cosas buenas”. (María Hidalgo) 67 Villa México 17. Mirando el futuro de Villa México “…a mí me gusta la Villa México, no sé es que yo me crié, todos mis recuerdos son de acá, yo vengo, mi familia viene del barrio Independencia que nunca me gustó porque la casa, la vereda y la calle, no esa cosa, me gustan las casas con jardín, con patio, entonces yo quiero la Villa México, con todos sus virtudes, sus defectos, pero yo quiero este espacio fíjate, me gusta Villa México, yo estudié acá, entonces todo lo he hecho aquí en la Villa México”. (Cecilia Foncea) Al leer y escuchar los testimonios de los vecinos y dirigentes se aprecia una sensación de que más que estar terminando algo, de que se está iniciando un proceso “…este puntapié inicial”, tras la regularización de los condominios se espera darle continuidad al proceso de arreglos y mejoras de los edificios y sus entornos, postular a proyectos, se trabajó arduamente consiguiendo y sacando escrituras, recolectando firmas, haciendo reuniones 68 “Postular como decir así como condominio, eso es uno de los grandes logros que vamos a querer nosotros, no así los otros condominios, nosotros sí, los seis, por debido que tenemos esa escritura (…) No, el condominio que está acá se compone de cuatro blocks, el condominio que está allá, son de cuatro blocks, los otros condominios también son de cuatro blocks y otro de más allá también es de cuatro blocks. El condominio golfo de México es de ocho blocks y yo, soy de seis blocks (…) Además y eso que no se dieron cuenta, a usted la Ley de Condominios Sociales le dice ‘Un estacionamiento por dos viviendas’ y eso lo dice la ley, incluso así falta (…) Claro, porque yo no tengo más terreno, me entiende, yo estoy muy estrecho (…) poner mamparas de aluminio a la entrada de los blocks, a los seis blocks. Lo otro es poner goma en las escaleras, que también me falta, me entiende, esas son una de las cosas bonitas” (Iván Osorio) Se proyecta auspicioso el futuro. En base a ello se insta al compromiso y participación de los vecinos y dirigentes, darle continuidad y fortalecimiento a las organizaciones, trabajando en conjunto con el objetivo de dar solución a los problemas “…que lleguemos a ser una organización fuerte”. (Iván Osorio) También hay palabras para los niños y para los jóvenes. A ellos se les invita a participar, a aprender, a compartir, “…está bonito, está bonito en realidad, es bueno recordar, es bueno para que ustedes como jóvenes sepan que cómo se vivía antes”. (Iván Osorio) Historia y memoria Además tienen el desafío de integrar a los nuevos habitantes, a los originarios o a los históricos de la Villa. Muchos han fallecido o se han cambiado de domicilio. Llegan arrendatarios, a ellos se les invita a participar, a ser parte de este particular conjunto. Este lugar que tiene una arquitectura diferente, la que nunca más se verá en las nuevas políticas habitacionales y que es en definitiva lo que llena de orgullo a sus habitantes. Estas viviendas dan fundamento de su solidez y buena calidad en su construcción cada vez que pasan por un terremoto, mencionan permanentemente en el discurso los vecinos más antiguos, solo daños menores que proporcionan la seguridad que necesitan sus moradores. Hoy se reconoce por parte de la comunidad un mejoramiento en la calidad de vida, principalmente debido a su cambio de imagen tanto fuera como dentro de los condominios, permite y favorece el conocerse entre los vecinos, compartir espacios, el proceso de mejoramiento de la villa se nota “Los que han sido altamente beneficiados son los niños porque usted los ve en el pasto jugando, sacan sus bicicletas, sus patinetas, por allá por acá y sin ningún peligro de que los vayan a atropellar o quitar sus cosas. Entonces los niños son bastante favorecidos, y los papás pueden estar tranquilos, entonces eso ha sido muy bueno” (Robinson Díaz) La formalización de los condominios y las mejoras y arreglos habrían sido una motivación importante para los dirigentes y vecinos, sin embargo, en temporadas la participación decae. “Y ahí como que nos unimos un poco más, nos costó un mundo si. Primero habían 10, después 15, después 20, 25, 30, ahora nadie. Tú los llamas y no va nadie. Porqué, no sé…” (Cristina Aguirre) “Y nosotros siempre lo veíamos como algo inalcanzable, y nosotros queríamos hacer una cosa así (…) Porque dicen que era para recuperar esta, para recuperar el entorno, para hacernos mejor la calidad de vida. Eso al menos fue lo que yo entendí. Para mejorar la calidad de vida de todos nosotros, eso fue lo que llegó acá, a lo que yo fui a la Casa del Dirigente, eso fue lo que más nos llamó o aparte había otras cosas importantes (…) Antes no había iluminación en los blocks y yo me acuerdo que yo voy al municipio, porque yo quería poner una luz aquí afuera porque encontraba que todo era oscuro, aunque teníamos afuera, era oscuro”. (Cristina Aguirre) Existe la sensación de satisfacción y tranquilidad por una misión cumplida. Pero se instalan nuevos desafíos, ahora se espera más. Como por ejemplo terminar cosas pendientes que han ido apareciendo 69 Villa México en el transcurso del tiempo; resolver asuntos de algunos condominios que tendrán que seguir gestionando sus temas particulares, como don Iván que se ha autoimpuesto desafíos en torno a los estacionamientos, esperar crecer los naranjos de la sra. María, o los sombreaderos de don Robinson. Lo cierto es que esta historia escrita entre mucha gente, aún tiene capítulos por escribir. Pareciera ser que el principal desafío es que “otros vecinos” de Villa México, sigan forjando su futuro. El desafío es que cada block que forma una pequeña comunidad, entienda que todos y todas hacen Villa México. “…también tenemos el problema que tenemos muchas casas solas, desocupadas, o sea, hay gente que prefiere tener las casas botadas y los departamentos botados, a arrendarlos o venderlos. Y que hubiera mayor participación de la gente, porque la gente también está como apática, como te decíamos al principio, si la gente no se siente tocada por el problema no participa, entonces nos hace falta, porque igual la gente... mira aquí si tú vinieras un día miércoles, esto aquí es un bullicio porque está todo el día ocupado”. (Cecilia Foncea) 70 Dentro de las obras que faltan, al cierre de este libro, se encuentra el arreglo de la sede Comunitario 2. Eso ha implicado un particular esfuerzo por parte de los dirigentes, la tarea ingrata, pues debieron dar explicaciones permanentemente ante los vecinos que realizan preguntas sobre el destino de los recursos del Programa. Los dirigentes dan la cara, y como si no, si detrás de cada uno de ellos está el esfuerzo desinteresado en mejorar la villa y buscar el beneficio para sus vecinos, como parte del legado que dejarán en la construcción de comunidad. La villa ahora cuenta con aliados para el futuro, la Municipalidad de Cerrillos y el Ministerio de Vivienda y Urbanismo. Sin embargo su riqueza está en su gente en sus propios vecinos, en los vecinos de la Villa Zaror, en sus organizaciones, la Junta de Vecinos Villa México, el Consejo Vecinal de Desarrollo, clubes deportivos, centros de madres, clubes de adulto mayor, scouts, comités de administración, sus jóvenes y niños que no necesariamente saben de Personalidades Jurídicas, pero sí de reunirse, usar los espacios, ahora más seguros, más propios, más colectivos, más de todos, donde es posible compartir un partido de fútbol, conversar en una plaza, echarse a volar en la patineta de skate por 5 de Abril cuando no está la feria, caminar por las calles y pasajes, sentarse en una banca, sentarse a la sombra y disfrutar la tranquilidad y el paisaje de la nueva Villa México. “…yo también, yo quiero a la villa, porque ya tenemos como 40 y tantos años acá, uno se encuentra a cada momento con un vecino que te saluda, porque en otras no pasa eso, ni el saludo se dan, aquí no, acá nos saludamos”. (José Álvarez) 71 72 73 74 75 76 77 78 79 80 81 82 83 84 85 86 87 88 89 Historia y memoria FUENTES CONSULTADAS Forray, R. Marquez, F. Unidad Vecinal Portales (1955-2010) Arquitectura, identidad y patrimonio. 2010. Seremi - Minvu. Ilustre Municipalidad de Cerrillos. Cerrillos Nuestra historia nuestro futuro. Plan de Desarrollo Comunal (PLADECO) Seremi Metropolitana de Vivienda y Urbanismo. Estudio Técnico de Base. 2008. Cornejo Vilches, Marcelo D. Cordón Cerrillos. Extraído de Kaos en la Red 90 En: http://metiendoruido.com/2012/08/la-autodefensa-del-cordon-industrial-cerrillos-1972-1973/ - Ciudad Deportiva Iván Zamorano http://www.ivanzamorano.cl/antiguo/p_ivan.html - Ilustre Municipalidad de Cerrillos www.mcerrillos.cl - Ministerio de Vivienda y Urbanismo. Historia. http://www.minvu.cl/aopensite_20061113164636.aspx - Mujica, Dolores. Cordones industriales. Cronología comentada. 2011-2012. Biblioteca de Historia Obrera. http://www.ptr.cl/publicaciones/wp-content/uploads/2011/12/cordones-industriales.pdf 91