EL RECICLAJE DE ZOE Autora: María Jesús Ruiz Diseñadores: alumnos de 6ºB Colegio Sagrado Corazón Arnedo, La Rioja EL RECICLAJE DE ZOE Zoe era una niña educada, inteligente y pulcra, a la que le encantaba pasear por el campo, respirar el aire puro y subirse a un alto roble a mirar las vistas y a pensar. Además le gustaba que el planeta estuviera limpio y no sucio, por eso todas las mañanas se levantaba a las ocho e iba a recoger toda la basura que la gente tiraba. Un día se le ocurrió ir a visitar a su tío Mario, el inventor. Él diseñaba y creaba todo tipo de trastos y cachivaches para intentar arreglar y preservar el medio ambiente. Por desgracia, no le funcionaba ni uno sólo, salvo una máquina del tiempo que había construido y probado hace tiempo. Zoe, ilusionada con una nueva idea, le pidió la máquina a su tío: ̶ ̶ Tío Mario ¿Me dejas la máquina del tiempo? ¿Para qué se supone que las quieres, Zoe? ̶ le preguntó el tío muy interesado. Zoe no se atrevía a revelar el motivo a su tío, por si alguien estaba espiando el laboratorio y podía llegar a enterarse de sus verdaderas intenciones. Tenía una idea, una estupenda idea que quería probar, pero… no podía explicarla. Su tío solo le puso una condición para utilizar la máquina del tiempo: ̶ Vale, yo te la dejo pero con una condición, sólo puedes viajar a los años ochenta y volver para la hora de la cena. El tío no tenía claro si la máquina funcionaría de forma correcta fuera de ese margen, pues era a la única época a la que había viajado. Zoe asintió y se preparó para irse. Cogió la mochila, se puso su traje de los ochenta y se llevó una maqueta de un plan que tenía para contaminar menos el medio ambiente. Cuando entró en la máquina los colores eran opacos, con poca luz, pero conforme iba hacia esa época se convertían en otros distintos e incluso había colores como dorado, plata o rojo metalizado. Por fin llegó y vio todas las calles, la gente, los edificios… con un brillo diferente, limpios y relucientes sin una sola manchita. ´´¡Cómo ha evolucionado la gente!´´- pensó con una sonrisa irónica. Zoe no reconocía el lugar y se fue metiendo por callejones y puentes por los que no había pasado ni visto en su vida, pero estaba decidida a cumplir su objetivo: tenía que ir al Ayuntamiento a darle su maqueta al alcalde. Por fin vislumbró desde el puente un gran edificio con un enorme reloj, ¡era el Ayuntamiento! Zoe echó a correr hasta por fin llegar, subió las escaleras a toda prisa: tenía un importante mensaje que entregar antes de que se agotara el tiempo de espera de la máquina y llegó al despacho del alcalde: ̶ Buenos días alcalde, soy Zoe García y me gustaría poderle presentar una maqueta con un proyecto para que nuestra ciudad y todo el mundo esté limpio y no tan contaminado. El alcalde miraba fijamente a la niña hasta que le explicó todo. – “.Cada día se consume más. Nuestro planeta se va ver enterrado en nuestra propia basura, a no ser que la modifiquemos y la hagamos útil. Propongo crear tres tipos de contenedores para echar distintos materiales a 1 cada uno, que después se llevarán a unas fábricas y tras unas transformaciones se retornarán al consumo con otra forma diferente para que se puedan volver a usar. De esta forma no se creará tanta basura, los árboles y el medio ambiente se protegerán y crearemos un mundo más sostenible.” Al alcalde la idea le encantó, le pareció innovadora, y lo propuso en la siguiente reunión del gobierno, donde se quedaron alucinados por aquella revelación y visión de futuro. Zoe volvió a su tiempo. Nada más abrir la puerta de la máquina se percató que algo había cambiado, había más color, el aire olía mejor y se oían los pájaros. Comprobó con agrado como su idea de los contenedores se había propagado por todo el mundo. Su tío le sonrió porque estaba seguro de que la responsable de que el mundo se hubiera limpiado y de que fuera un hogar mejor tenía algo que ver con su adorada sobrina e indirectamente con él mismo a través de la máquina del tiempo. AYUDA A CUIDAR EL MEDIO AMBIENTE, TÚ TAMBIÉN ERES PARTE DE ÉL 2