un meteorologo yugoslavg controla el waterpolo

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del partido, y solamente se podrá
sustituir cuando se haya mar
cado un gol.
—Se hablaba también algo de
la «congelación» del balón.
—Efectivamente, . sólo podrá
retenerse por espacio de cuarenta
y cinco segundos. Ello proporcio
nará también más dinamismo.
—No lo ha habido en esta
fase éuropea de Barcelona?
—Ya’ lo creo, y además en
forma. muy acusada. ¡Qué gran
des encuentros hemos visto!. No
me ha extrañado.
—Qué opina del’ C. N. Bar
celona?
—Sin pasión de ninguna espe
cie, puedo afirmarle que ha jugado mejor waterpolo que la selec
ción española en Méjico. Como
equipo, ha dado más sensación
de clase y potencia que’ el pro
piG cuadro nacional olímpico.
—Cree usted que en la fase
de cuartos de final, el C. N. Bar
celona puede superar la difícil
prueba?
—Si mantiene el tono progresi
vo y la buenísima forma obser
vadas, estoy seguro que está en
condiciones de oseguir
en la
«european cupo. Tiene mucha
clase.
—Bien; ¿que puede hacer el
Barcelona en Mbscú, contra el
trío de «Dynamos»?
_Tiene posibilidades ciertas.
Ya se lo dije antes.
UN METEOROLOGO
YUGOSLAVG
CONTROLA
EL WATERPOLO
EUROPEO
•
Es un hombre alto, moreno,
de media edad, al que le cuesta
explicarse en inglés. Se trata de
Ante Lanibassa, yugoslavo,
direc-.
tor técnico de la fase preliminar
de la VI Copa de Europa de wa
terpolo de clubs. Nos encontra
mós en el «Camarote Enrique
Granados», de un gran hotel bar
celonés. El ambiente marinero del
lugar es propicio a la charla de
natación. No hay que olvidar que
los descendientes del gran músico
que pereció en el Océano, fueron
grandes nadadores y waterpolis
tas: La reunión pues, no podía
tener mejór marco.
—Satisfecho de cómo ha ido
la fase de Ja Copa de. Europa en
Barcelona, señor Lambassa?
—Muchísimo. Todo ha ido per
fectamente. «Congrulations»para
Barcelona.
—Y la organización; ¿qué le
ha parecido?
—Maravillosa, aunque de ello
ya estaba seguro, por conocer a
muchos miembros de este gran
club español.
—Usted a qué se dedica en su
vida particular?
—Soy director del Instituto de
Meteorología de Belgrado.
- —Y el waterpolo es su «hola.
by»?
_Me encanta el deporte, sobre
todo éste.
—Lo
había jugado alguna
vez?
—Sl, en el Beograd ‘B.O.B.
Sevet. Pero nunca destaqué de
masiado.
El señor Lambassa ríe abierta
mente, cruza unas palabras máscon don Miguel Olla que nos
sigue de traductor y entonces se
nos pone a tiro el árbitro inter
nacional don Mateo Manguillot,
que «relevas al señor Olla en sus
funciones de intérprete.
—Señor Lambassa, del water
polo actual se dicen cosas y no
demasiado agradables para su re
glamentación actual... ¿Es brutal,
como se afirma?
—Cuando el waterpolo se jue
ga respetándose- las reglas, y con
árbitros que las sepan interpretar,
es un deporte bello, fuerte, viril,
pero muy noble.
‘ No obstante,inbemos que se
van a introducir variaciones en
su articulado.
Buró
—El de la F.tN.A. dp
berá aprobar en su día dichas
•
modificaciones, gue. sustancial
mente afectan a los puntos de
«penalty», que van a ser supri
midos.
—Qué harán entonces con los
jugadores excesivamente tempe
ramentales? —Habrá expulsiones de dito y
dos minutos para quienes come- - tan faltas graves, los cuales po
drán reintegrarse al• juego, una
vez pasados aquellos tiempos, o
bien cuando se obtenga en su in
termedió un gol. Támbién,se pi
de que se permitan cambios en
• el equipo, una vez marcado un
tanto. lguamente, el jugador que
corneta hasta tres faltas graves.
será xpulsado por todo el resto
ANTE LAMBASSA:
«El C. N. Barcelona,
es superior al equipo
español));0]
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A
—No cree que el ambiente y
los arbitrajes pueden influir en
los resultados?
—Yo espero que no, porque si
los árbitros, que por humanos a
veces se equivocan, mantienen la
línea general’que ha imperadoen
Barcelona, creo que puede verse
un final de Copa de Europa de
maravilla. Es uná competición
que crece día a día.
—Pero en esta ocasión han
faltado equipos de muchisima
solera, como el Pro-Recco italia.
no, y’ el campeón holandés...
—Los primeros no pudieron
intervenir’ por habérseles agota
do sus vacaciones y los holande
ses no se inscribieron, ni han
dado razón alguna sobre sus cau
sas.
—,Se vuelve satisfecho a Bel
grado?
—Encantado de todas ‘las aten
ciones recibidas de este gran
club, y también de las circuns
tancias técnicas vividas, así -como
de la deportividad imperanteen
casi todos los partidos.
Naturalmente, renunciamos a
preguntarle su opinión sobre los
.griegos. No quisimos «marear»
a un expertó en méteorologla, co
mo es este señor, nacido en Sibe
nic a orillas del Adriático, que
es Ante Lambassa.;1]
José M.. MIEDES
(Fotos Victor)
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