Los clásicos deportivos Roberto Medina Encuentros que despiertan pasiones, que provocan división al interior mismo de las familias y los círculos amistosos; surgen apuestas, intercambios verbales y hasta pleitos: son los clásicos deportivos El deporte es una expresión pura de nuestra pasión por la competencia, lleno de fuertes metáforas respecto a la vida y nuestro espíritu de lucha. Para que un clásico se considere como tal, debe ser un enfrentamiento de algo más que dos equipos. Es una confrontación de dos ideologías. De dos estilos de juego. A veces, hasta de dos formas de ver la vida. Aquí un repaso por los contados encuentros, en distintas disciplinas, que pueden ser considerados verdaderos clásicos. Futbol Americano Los deportes gringos poco se prestan para la pasión de un clásico en toda le extensión de la palabra, pero hay un par de duelos en cada deporte que se consideran, al menos, de fuerte tradición. Redskins VS Cowboys (Pieles Rojas contra Vaqueros) El único motivo por el que este duelo es considerado “clásico” es por lo pintoresco de la situación que plantea, Indios contra Vaqueros, un concepto un tanto soso, pero relevante en el contexto de la cultura estadounidense. Lo destacable es que el americano es un deporte de fuerte contacto y exigente condición física, y por eso su gran popularidad. Además, Dallas es uno de los equipos con más seguidores en todo el mundo, incluyendo México. Raiders VS Cowboys Un duelo con mucha mayor tradición, incluso entre los seguidores de este deporte en nuestro país, por tratarse de dos de los equipos más populares. Chicos buenos contra chicos malos, los “fresas” contra los “pandilleros”, en algunos casos, se le asignan hasta tintes raciales, poco válidos si se contempla que algunos de los mejores jugadores de esta disciplina son de raza afroamericana. Por desgracia, hace más de una década que Dallas no gana un Super Tazón, el último fue en 1996 contra los Acereros de Pittsburg. Los Raiders son un caso lastimero ya, aunque llegaron a la final en 2003, la perdieron contra los Bucaneros de Tampa Bay; su último campeonato fue en 1984. La falta de competitividad de estas franquicias en la actualidad hace de éste un clásico deslucido. Basketball Es buen momento para aclarar un punto. Hay momentos en que un equipo, en cualquier deporte, sube de nivel por sus contrataciones y se encuentra cara a cara con otro de igual o similar jerarquía. Pero estas situaciones no siempre perduran, así es como se han dado en la NBA clásicos coyunturales como Bulls vs Lakers, Bulls vs Suns, Mavericks vs Suns, Trailblazers vs Lakers, etc. Para que un encuentro se considere clásico de verdad, debemos hablar de un duelo de instituciones e ideologías, con fuerte carga emocional, social y de campeonatos. Por lo mismo, en el deporte ráfaga, uno de los más apasionantes, en la liga más importante del mundo, consideramos que sólo ha existido un clásico real. Boston Celtics VS Los Angeles Lakers. Han disputado siete finales en la historia de la NBA. Entre estos dos equipos se repartieron 21 de los 30 campeonatos disponibles desde la temporada 58-59 hasta la 87-88. Han tenido en sus filas a varios de los 50 jugadores más importantes en la historia de la liga, incluyendo a los que pueden considerarse las dos primeras superestrellas mediáticas: Magic Johnson y Larry Bird. Dos auténticas instituciones deportivas, una con una fuerte y simbólica tradición irlandesa, con sede en Boston. Otra, que se mudó de Minneapolis al que sería su hogar por antonomasia, Los Ángeles, capital del entretenimiento con fuerte influencia de la tradición cultural afroamericana y de la cultura latina. Los encuentros entre estas franquicias, especialmente durante los ochenta, sembraron la semilla de la popularidad que adquiriría la liga con la llegada de su estrella definitiva, su majestad del aire, Michael Jordan. Cuando Mike apenas se vislumbraba como genio del balón, seguro disfrutó alguna vez de un duelo clásico entre la elegancia y pureza en ejecución de los Celtics y el relampagueante showtime de los Lakers. Uno local que ha quedado casi en el olvido: UdeG vs UAG Para los que vivieron su adolescencia y temprana juventud a principios de los noventa, este duelo les puede sonar familiar. Los juegos de basketball del ahora desaparecido CIMEBA (Circuito Mexicano de Basketball) entre estas dos franquicias, surgidas de dos de las más importantes universidades locales, no sólo eran espectáculo asegurado, si no que a menudo terminaban en bronca. Las emociones encontradas eran muchas, además de la presencia de grandes estrellas como “El Chango” López, “El Diablo” Castellanos y “Palmita” González. Futbol Para muchos, el único deporte en el que se puede emplear la palabra “clásico”. Por la gran cantidad de duelos de tradición internacionales, mencionaremos sólo algunos brevemente, para concentrarnos en los locales y el que es considerado “el clásico de clásicos” mundial. Manchester City vs Manchester United Una de las rivalidades más antiguas del futbol europeo, ensalzada siempre por la oscura presencia de los hoolingans. Pese al riesgo que representa el vandalismo, el nivel de juego lo vuelve un duelo irresistible. AC Milan vs Internazionale Un clásico italiano, en una de las ligas de más alto nivel en el viejo continente, ambos equipos comparten el estadio San Siro, pero eso no amaina la crudeza de su rivalidad, basada en la ideología de que el AC Milan, al ser fundado, solamente permitía jugadores nacidos en suelo italiano. Al pasar el tiempo, algunos dirigentes del AC Milan pensaron que la ideología de tener solamente jugadores italianos en la plantilla era obsoleta, por lo que decidieron apartarse del club y crear el Internazionale de Milan, que aceptaba jugadores de todo el globo. Obviamente, actualmente participan jugadores de todo el mundo en las dos plantillas. FC Celtic vs Glasgow Rangers Escocia tiene también una triste tradición en lo que respecta a vandalismo en el futbol. Este duelo tiene fuertes influencias religiosas e ideológicas en juego, pues es bien sabido que Escocia es una de las regiones de más notoria división entre católicos y protestantes. Boca Juniors vs River Plate Con su ego desbordado y exacerbado nacionalismo, los argentinos ven en este encuentro una especie de lucha social, entre las clases altas que apoyan al River Plate y “el pueblo” que se identifica con Boca, a pesar de que ambos clubes fueron fundadas en un distrito pobre de Buenos Aires llamado, justamente, La Boca. De estas franquicias han surgido algunas de las más grandes estrellas de este país. Nuestros clásicos Chivas vs Atlas Un duelo local de increíble trascendencia, para muchos en Guadalajara, más importante que el clásico nacional. La rivalidad de estos equipos tiene ese sabor corrosivo de pleito familiar, pues divide de tajo a tapatíos por nacimiento y adoptivos por igual. Una vez más, muchos elementos enriquecen este clásico, entre ellos el supuesto encuentro social. Que si los Chivas llegan al estadio en bici directo de la obra, que si los del Atlas llegan en su carro de lujo y se van de ahí al antro a ahogar la pena de su derrota. El equipo con más campeonatos en la historia del país contra el club que tiene su sala de trofeos más vacía que un templo en lunes. Estos elementos se enriquecen con los duelos de palabras entre jugadores y directivos, que arrebatan protagonismo al juego en sí. Los “hijos de Vergara” contra los “juega bonito aunque pierdas”, tantas visiones de una misma pasión. Una cosa es cierta, este es un clásico que la mayoría de los tapatíos, Zorros o Chivas, consideran que corre por su sangre, tanto o más que la salsa de una buena ahogada. Chivas vs América La capital del país contra la mal llamada “provincia”. Tapatíos contra capitalinos. Chilangos contra jalisquillos. La institución de poder económico casi ilimitado contra el que fue considerado por mucho tiempo el equipo del pueblo. La franquicia de las estrellas extranjeras contra la oncena de inalterable nacionalismo. En los viejos tiempos, este era un duelo que dividía incluso a las televisoras nacionales. Los intercambios de jugadores entre ambos equipos, el recién adquirido poderío económico del Guadalajara, la transmisión de los partidos por Sky y, por qué no decirlo, el retiro de José Ramón Fernández del liderazgo deportivo en TV Azteca (aunque fuera Puma, el antiamericanista por excelencia); todos estos elementos le han quitado un poco del sabor añejo al clásico. Pero ahí están los desplegados, ahí el “asesinato deportivo” en la semifinal y la revancha consabida de las últimas dos temporadas. Y sobre todo, ahí están los fanáticos, que son los que mantienen encendida la llama. Hasta en las temporadas más mediocres y deslucidas del futbol nacional (demasiadas, para nuestro gusto), este es el juego que asegura rating, cobertura y pasión. El Pachuca puede tener campeonatos recientes, ganados a pulso y con justa razón, además de un gran equipo. El Toluca ostenta a la “perra brava” y una tradición futbolística que se nutre con varias copas de campeón. Los Pumas pueden contar con la mayoría de los estudiantes (y porros, por desgracia) de la más grande casa de estudios del país, así como el apoyo de varios personajes en los medios. América y Guadalajara tienen algo que ninguno de ellos puede presumir: la capacidad de paralizar al país y dividirlo en dos a su antojo. EL DERBY, clásico de clásicos Barcelona vs Real Madrid Tendrán que perdonarnos por no otorgarle este trono a un clásico nacional, pero creemos que el impacto de este duelo lo amerita. Como sentenciaba un comercial de una conocida cadena televisora deportiva, hay muchos clásicos en todas partes, pero sólo uno que divide al mundo en dos. Lean y juzguen. El primer factor que engrandece este duelo es la calidad del futbol europeo, muy superior al que estamos acostumbrados en el país. No por nada es en esta liga, la española, donde se han forjado auténticas leyendas del balompié mundial. El Real Madrid es el equipo oficial de España, representa la aristocracia del deporte. Es la esencia misma del poder político y económico reflejado en el futbol, por ser el equipo de la capital española, apoyado por reyes y, en su momento, por el dictador Franco. El Barcelona, a pesar de ser una de las instituciones más poderosas en el deporte, mantiene su esencia de representar la resistencia civil. Nace literalmente para antagonizar contra la potencia del Madrid, apoyado por el pensamiento de la región donde surge, Cataluña, una ciudad identificada con rebeldía y autonomía. En sus primeros años, era tan marcada la rivalidad entre estos equipos, entre la autoridad y la rebeldía, que ser un seguidor del Barça representaba ser perseguido y, en ocasiones, desaparecido. Durante la dictadura de Franco, uno de los presidentes del Barcelona fue mandado a fusilar. En el DVD llamado Barcelona, más que un club, se menciona que apoyar a este equipo es apoyar la libertad y la autonomía. Cuando el Real Madrid armo a sus “galácticos”, con estrellas como Ronaldo, Beckham, Zidane y otros, el Barcelona hacía lo propio con jugadores menos reconocidos, pero tanto o más eficaces, entre ellos Rafael Márquez. Con ese equipo, el Barça gana la liga española dos años consecutivos y consigue la Champions League, la mas importante de Europa. El comentario en el ámbito deportivo fue que el Real Madrid hizo contrataciones para vender camisetas, el Barcelona armó un equipo para ganar campeonatos. La temporada pasada, Madrid ganó el Derby y la liga, a pesar de estar empatado en puntos con el Barcelona (y con menos goles), debido a políticas de desempate establecidas por la liga, según algunos, creadas para favorecer al Real Madrid. El último Derby dejó mal parado al Barcelona, que estaba envuelto en un mundo de lesiones y pleitos internos. Hoy, ambos equipos prometen, el Real Madrid es el campeón defensor de España, de la mano del ariete holandés Van Nistelrooy. El Barça consiguió los servicios del aguerrido Thierry Henry, y en su cuna se mece la promesa de Giovanni Dos Santos, sin pasar por alto al joven maravilla Leonel Messi y al resto del equipo.