PROYECTO DE LEY REGULACIÓN DE HORARIO Y UBICACIÓN DE CASINOS Y MÁQUINAS TRAGAMONEDAS FUNDAMENTOS El avance de la Ludopatía como una de las más graves adicciones, registra en nuestra Provincia alcances escandalosos. Especialmente en la Capital Provincial, las salas de juegos de azar rodean el paseo principal de los riojanos. Junto con la proliferación de estos locales de juego, han proliferado también las casas de préstamos personales que cobran intereses usurarios y afectan gravemente la economía familiar del riojano medio. Ésta proliferación obedece por supuesto a una decisión política, de mantener el juego con una importante presencia en nuestra vida cotidiana. Emisoras de radio y televisión nos informan a diario de los resultados de las diversas loterías, a su vez existen programas televisivos que se basan en formatos centrados en el juego, cuando salimos a la calle podemos ver kioscos y vendedores de billetes de lotería, agencias de quiniela oficial de lotería o sistemas de juego on-line no faltan hasta en los pueblos pequeños de la Provincia. Los casinos y las máquinas tragamonedas permanecen abiertos en un amplio horario, en algunos casos como la Capital provincial, no cierran sus puertas nunca, permaneciendo abiertos las 24 hs del día. Salas dotadas de una infraestructura suntuosa, ambiente climatizado, luces, sonidos y música hacen perder la noción del tiempo, congelándolo especialmente para el juego de azar por dinero. en un espacio diseñado Si bien el juego por dinero existe desde hace muchos años, lo cierto es que con los juegos de azar por dinero con resultado inmediato seguido del auge de estas salas, crece exponencialmente la incidencia de patologías ligadas al juego, transformándose en un serio problema de salud pública. Los jugadores compulsivos, adictos al Juego o ludópatas son personas que cuando juegan experimentan un intenso placer que los evade de cualquier problema que exista en su vida, consiste en una alteración progresiva del comportamiento por la que un individuo siente una incontrolable necesidad que los lleva de forma persistente y progresiva a jugar, hasta acabar en una dependencia emocional respecto del juego afectando de forma negativa su vida personal, familiar y profesional. Generalmente hablamos de adicción cuando existe una droga, una sustancia, como objeto de adicción. La ludopatía no tiene sustancia externa que la provoque, siendo el juego el objeto de adicción o de la conducta compulsiva. En cuanto a la epidemiología, entre un 0,5 y 1,5% de la población es jugadora, aproximadamente el 20 % de las mujeres es afectada respecto del universo de personas adictas al juego, la distribución por sexo es bastante pareja, la diferencia entre sexos está dada en el tipo de juego que eligen. Las mujeres generalmente desean estar más tranquilas, no elijen el cara a cara, en consecuencia se inclinan por las máquinas tragamonedas y el bingo, mientras que los hombres optan por juegos de competencia, el casino, la ruleta o el hipódromo. En cuestión de adicciones, siempre se habla de rehabilitación y no de curación, lo que marca la gravedad de este trastorno psicológico donde todas las medidas son altamente importantes, que involucra regulación horaria de casinos, su ubicación y contención familiar conviviente, sin lugar a dudas la familia sufre las consecuencias de la patología del jugador compulsivo, cuando el paciente intenta abandonar el tratamiento, debe haber un familiar que lo contenga y acompañe para que continúe, ya que los tratamientos duran aproximadamente un año. Cuando hay un jugador patológico en la familia, se genera un nivel de crisis que las personas que constituyen el núcleo familiar quedan en estado de vulnerabilidad, en tal sentido la familia también es sujeto del tratamiento. Las denuncias con respecto al rango horario de atención de los casinos, tal es el caso del distrito capital, habla a las claras la imperiosa necesidad de regular mediante ley en forma específica el horario de explotación del juego de casinos y máquinas tragamonedas, transformándose esta medida en un acción notable de cooperación por parte de las autoridades competentes en tener bajo control, tanto a los jugadores compulsivos como empresarios y salas de juegos de toda la provincia. Si bien resulta difícil establecer una relación causal entre el tiempo en que permanecen abierto las salas de juegos y el aumento de la prevalencia de casos de ludopatía, lo cierto es que el juego, como toda actividad humana, necesita un corte. Los especialistas sostienen que la amplitud horaria de los casinos aumenta exponencialmente los casos de ludopatía. Los rangos horarios excesivos y la instalación de un espacio que invita al juego con una estrategia de marketing y una infraestructura diseñada para captar clientes inducen e incrementa el nivel de apuestas de los jugadores compulsivos. La solución al problema de la ludopatía no está en la prohibición del juego, como la solución al alcoholismo no está en la prohibición de la venta de bebidas alcohólicas, pero si es imprescindible que la provincia de La Rioja cuente con una ley específica que regule el horario de apertura y cierre, ubicación de los establecimientos, proximidad de cajeros automáticos, estrategias de marketing, mecanismos que estimulan el aumento de las apuestas, entre otros aspectos. Respecto de esto último, la relación consumo de alcohol y juego compulsivo es una dimensión interesante para tener en cuenta, la existencia de una patología dual dobla la vulnerabilidad de los que asisten a lugares acondicionados al juego y más aún cuando la exposición no se encuentra responsablemente regulada respecto al horario que deben permanecer abiertos, esto suele tener como consecuencia un aumento gradual de severidad patológica, que acentúa las manifestaciones sintomáticas, a la se ven expuestos los jugadores compulsivos. Por su parte la misma arquitectura de las salas de juego es un punto importante en términos de motivación al juego. Salones sin ventanas, iluminados con luz artificial tanto de día como de noche, colores y sonidos que propician la pérdida de la noción de tiempo, más alcohol e ilusoria distracción crean un clima apropiado que excita las emociones e inhibe la razón. Un clima apropiado para perder el control y traspasar el umbral entre el juego social y el juego compulsivo. En el marco de la creciente prevalencia de casos de ludopatía que tiene que ver con la adquisición rápida de dinero en efectivo, la presencia de cajeros automáticos siempre preparados para una solicitud de dinero, es la frutilla de una oferta de servicios asociados a las apuestas por dinero, lo que hace necesario la obligación de regular la distancia en la que se debe encontrar este servicio de los casinosTodo fundamento siempre será insuficiente si del cuidado de la salud se trata. La ludopatía ha sido catalogada por la OMS (1992) como una enfermedad: se define como una alteración de forma progresiva en el comportamiento de un individuo por una incontrolable necesidad de jugar y apostar, presentando menos importancia a su entorno y las consecuencias negativas que pueden sufrir familiares, personales y vocacionales. De todas las adicciones, la LUDOPATÍA es tal vez la peor de todas en el universo de las enfermedades adictivas, si bien no requiere de algún tipo de sustancia si no de agentes externos como el juego, es dable que la sociedad tome conciencia y dimensione sus consecuencias. La Ludopatía es una adicción devastadora, que deja arruinadas a miles de personas y sus familias, arruinadas económicamente, pero por sobre todo, psicológicamente. Y además, una Adicción con un alto índice de suicidios. La Licenciada Graciela Seppi, psicóloga con gran experiencia en la materia, sostiene que el hecho de que los casinos estén ubicados a la vuelta de la plaza “influye casi en un 80 por ciento” para que aumenten los pacientes ludópatas. “El fácil acceso para las personas que son tan endebles, donde ya está instalada la enfermedad, tanto la facilidad en relación a los horarios y la cercanía de donde vive o trabaja facilitan a que la patología se agudice muchísimo más.” –señala la profesional. Es responsabilidad de todos, pero principalmente del Estado, arbitrar medidas de regulación y control en todas las actividades que comprometan gravemente la salud pública, como el caso de la adicción al juego. Es por éstas razones, y las demás que se expondrán en el tratamiento parlamentario, que solicito a mis pares el acompañamiento para el presente proyecto de Ley. LA CÁMARA DE DIPUTADOS DE LA PROVINCIA DE LA RIOJA SANCIONA CON FUERZA DE LEY Disposiciones Generales Artículo 1°.- Finalidad de la Ley.- Regular el horario y ubicación de los casinos y máquinas tragamonedas a fin de preservar y proteger a la ciudadanía de los posibles perjuicios o daños que afectan la salud, la moral y seguridad pública. Artículo 2°.- Ámbito de aplicación.- la presente ley se aplica a todas las actividades que persigan un fin económico en la explotación de los juegos de casinos y máquinas tragamonedas en todo el territorio de la provincia de La Rioja. Artículo 3°.- Objeto de la Ley.- Es objeto de la presente Ley: a. Garantizar que los juegos de casino y máquinas tragamonedas sean conducidos con honestidad, transparencia y trato igualitario. b. Establecer medidas de protección para los grupos vulnerables de la población. c. Evitar que la explotación de los juegos de casino y de máquinas tragamonedas sea empleada para propósitos ilícitos. Artículo 4° .- Definiciones.- Para efectos de la presente Ley se entiende por: a. Juegos de Casino.- Todo juego de mesa en el que se utilice naipes, dados o ruletas y que admita apuestas del público, cuyo resultado dependa del azar, así como otros juegos a los que se les otorgue esta calificación de conformidad con la presente Ley. b. Máquinas Tragamonedas.- Todas las máquinas de juego, electrónicas o electromecánicas, cualquiera sea su denominación, que permitan al jugador un tiempo de uso a cambio del pago del precio de la jugada en función del azar y, eventualmente, la obtención de un premio de acuerdo con el programa de juego. DE LOS JUEGOS DE CASINOS Y DE LAS MÁQUINAS TRAGAMONEDAS DE LOS ESTABLECIMIENTOS Artículo 5°.- Horario permitido para funcionar. 5.1 Dias hábiles.Los salones de juegos de casinos y máquinas tragamonedas, podrán funcionar a partir de la hora Dieciocho (18), debiendo cerrar sus puertas sin excepción, a la hora Dos (2) del día siguiente. 5.2 Dias feriados, viernes y sábados.Solo en días feriados las salas de juegos de casinos y máquinas tragamonedas, podrán funcionar a partir de la hora Dieciocho (18), debiendo cerrar sus puertas sin excepción, a la hora cinco (5) del día siguiente. Artículo 6º.- Ubicación de los establecimientos.6.1 Los establecimientos destinados a la explotación de juegos de casino y máquinas tragamonedas, no pueden estar ubicados a menos de 300 (trescientos) metros de cajeros electrónicos, iglesias, instituciones educativas, cuarteles y hospitales. 6.1 La explotación de juegos de casino sólo se puede realizar en establecimientos ubicados en los distritos autorizados mediante Resolución refrendada por la autoridad competente, para lo cual se tomará en cuenta además de la infraestructura existente, razones de salud, de moral y de seguridad pública. Artículo 7º.- De forma.