Poder Judicial de la Nación Neuquén, 2 de febrero de 2009. Y VISTOS: Para dictar sentencia en los presentes caratulados: “BIANCO, CORA BEATRIZ C/ ADMINISTRACIÓN FEDERAL DE INGRESOS PÚBLICOS –DGI- S/ ART. 82 LEY 11.683”, Expte. Nº 341, Folio 93, Año 2006, de los que RESULTA: 1) Que a fs. 15/25 comparece la Sra. Cora Beatriz Bianco a iniciar la demanda contenciosa prevista por el art. 82 inc. revoque la a) de la ley Resolución Nº 11.683 solicitando que se 124/06 (DI RNEU) de la AFIP, emitida el 10 de agosto de 2006 en el Sumario Nº RNSM 404/05. Relata a tales fines que la multa le fue impuesta por haber alegado la AFIP que su parte presentó la Declaración Jurada del Impuesto al Valor Agregado del período diciembre de 2003 omitiendo reflejar ingresos, habiéndosele USO OFICIAL cuestionado además el margen de la actividad, que surge por la simple aplicación de la utilidad, lo que fue entendido por la AFIP como constitutivo de un ardid o engaño efectuado con intenciones de defraudar al Fisco. Afirma relevamiento aplicado tan de que la stock solo inspectora ni una actuante inventario presunción no alguno, respecto efectuó habiéndosele al margen de marcación que correspondía a un comercio de su rubro. Destaca que la intención dolosa no existió, por lo que considera erróneo que su conducta sea encuadrada en el art. 46 de la ley 11.683, tratándose tan sólo de una omisión de ingresar impuestos, conducta que se sanciona con la multa prevista por el art. 45 de la misma ley, norma en la que pretende que se encasille la situación. Ofrece prueba y pide que oportunamente se deje sin efecto la multa apelada y subsidiariamente, se encuadre su conducta en el art. 45 de la ley 11.683. 2) declarada a Recibido el sumario Nº SM:404/05 de la AFIP y fs. 99 habilitada la instancia judicial, se corrió traslado de la demanda a la Administración Federal de Ingresos Públicos, quien se hizo parte por medio de su apoderado a contestarla a fs. 110/119. Tras relatar los antecedentes administrativos –de los que surge, agrega, que en la foja 1 del Sumario Nº 404/2005 se dejó constancia que el origen de las diferencias determinadas en forma cierta fue la omisión de venta, ingresos, honorarios, sueldos, etc. y otros ingresos no declarados- , negó que durante la verificación efectuada se haya cuestionado el margen de marcación de la actividad, así como que el ajuste realizado corresponda a la aplicación de una presunción referida a tal aspecto. Señala en cambio que el ajuste se practicó en forma cierta en virtud de haberse detectado ingresos no declarados por omisión de ventas, ingresos, honorarios, sueldos, etc. Descarta jurisprudencia por ello que citada por la sea aplicable actora al caso la a la referida improcedencia de aplicar sanciones en función de presunciones útiles y admitidas para la determinación de tributo pero no para tener por reunido el dolo exigido por el art. 46 de la ley 11.683. Niega la ausencia del ardid o el engaño, considerando presente el elemento subjetivo requerido por la norma citada. Recuerda que el art. 46 de la ley 11.683 reprime a quien mediante declaraciones engañosas u ocultación maliciosa, sea por acción u omisión, defraudare al Fisco, así como que su art. 47 contempla diversas presunciones iuris tantum sobre la presencia del dolo, que invierten la carga de la prueba poniendo sobre el contribuyente la de demostrar la inexistencia de dicho elemento subjetivo. Indica que el sumario fue instruido por infracción al art. 46 de la ley 11.683, en función de la presunción emanada del art. 47 inc. a) del mismo texto legal, según el cual se presume el dolo cuando medie una grave contradicción entre los libros, registraciones, documentos y demás antecedentes correlativos con los datos que surjan de las declaraciones juradas. Agrega que la Sra. Bianco reconoce haber declarado a sabiendas menores impuestos que los que debía tributar, habiendo alegado en su descargo, en sede administrativa, que ya había presentado la DDJJ rectificativa en función del ajuste determinado por la inspectora. Afirma que la DDJJ Rectificativa fue presentada a instancias de la inspección interviniente, de modo que si el organismo recaudador no hubiese emprendido su actividad fiscalizadora, no hubiese podido determinar la real cuantía del gravamen que la accionante evitó ingresar. Poder Judicial de la Nación Pone omitido ($ de resalto 21.713,64, la elevada contra $ cuantía del 162,71 tributo originalmente liquidados e ingresados), que a su juicio revela la intención de la contribuyente de inducir a error a la AFIP con la finalidad de extensión, evitar acción el que ingreso no pudo del tributo perpetrar en en su virtud real de la actividad fiscalizadora del organismo recaudador. Observa también que fue la misma actora quien afirmó que la inspectora realizó en ajuste en base a la documentación que su parte le proporcionara, de donde surge con evidencia que la contribuyente tenía a su disposición los elementos para efectuar su DDJJ en debida forma desde el inicio, sin que explique los motivos por los cuales omitió ingresar el gravamen en su justa medida. Considera que ello es suficiente para dar lugar a la aplicación del art. 47 inc. USO OFICIAL a) de la ley 11.683, presunción iuris tantum que debe ser desvirtuada por la contribuyente –aunque, destaca, no ofreció medida alguna en tal sentido, pese a la carga que sobre sí pesaba-. Pone de resalto que de los antecedentes del sumario administrativo no surge que el ajuste se haya practicado por margen de utilidad, imputación se ya efectuó que por muy por omisión el de contrario, ventas, la ingresos, honorarios, sueldos, etc. e ingresos no declarados, y se realizó sobre base cierta, por lo que la aseveración de la actora es parcial y tendenciosa, o cuanto menos, equívoca. Sostiene que la Resolución Nº 124/06 (DI RNEU) que confirmó la sanción de multa rechazando el recurso de reconsideración en su contra intentado, cumple con todos los recaudos previstos solicitando en por el definitiva art. que se 7 de rechace la la ley 19.549, demanda con costas. Hace reserva del caso federal. 3) Celebrada a fs. 140 la audiencia prevista por el art. 360 del CPCyC, y fracasada la instancia conciliatoria, existiendo hechos controvertidos sin que se hubiese producido otra medida de prueba que la documental, allí mismo se llamó AUTOS para dictar sentencia; y CONSIDERANDO: revoque la Resolución I. Nº Que la 124/2006 actora (DI persigue RNEU) de que la se AFIP, emitida el 10 de agosto de 2006 en el Sumario Nº DRNSM 404/05 por la Jefa la (Int.) de la División Revisión y Recursos a/c de Dirección Regional Neuquén, por entender ausente el elemento subjetivo (dolo) que integra la figura por la cual se la sancionara, ya que alega, los datos contenidos en las DDJJ del IVA del período inexactos diciembre de 2003 no configuraron una maniobra tendiente a engañar al Fisco o a ocultarle provino información, de la alegando aplicación, en por cambio parte que de la el ajuste inspectora actuante, de una presunción referida al margen de marcación en la actividad comercial que desarrolla, que su parte conformó para evitar tarea administrativa adicional que no estaba en condiciones de afrontar. La AFIP, por su administrativo lado, defiende la validez del acto objetado, señalando que la diferencia detectada provino de la omisión de la actora de declarar ingresos, habiéndose efectuado el cálculo sobre bases ciertas y sobre documental aportada por la propia actora, lo que torna procedente la presunción nacida del art. 47 inc. a) de la ley 11.683. Negó categóricamente que el ajuste tenga origen en un cuestionamiento sobre el margen de utilidades calculado. II. Sintéticamente reseñado el conflicto, tenemos que configura un hecho cierto, admitido por las partes, que la Sra. Bianco presentó una DDJJ Rectificativa del Impuesto al Valor Agregado del período fiscal diciembre de 2003 a instancias de la inspectora actuante en la fiscalización iniciada por el organismo recaudador, en la cual se detectó una diferencia entre lo tributado ($ 162,71) y lo devengado ($ 21.876,35) de $ 21.713,64 (fs. 45/50). Es decir que es un hecho admitido que al presentar la actora, a la fecha del vencimiento general, la DDJJ del IVA de diciembre de 2003 omitió liquidar e ingresar el tributo por la suma de $ 21.713,64, situación que fue corregida en virtud de haber desplegado la AFIP su actividad fiscalizadora. También lo es que el ajuste fue practicado por la AFIP “en base a comprobantes aportados por el contribuyente”, según éste afirmara a fs. 57, cuarto párrafo, al formular su descargo en el sumario administrativo iniciado. Se diferencia referida al encuentra controvertido, en cambio, de una provino de la aplicación margen de utilidades propio de la si la presunción actividad Poder Judicial de la Nación comercial que realiza la actora –como sostiene esta última-, o si por el contrario, tuvo origen en una diferencia cierta advertida en los ingresos declarados –posición ésta sustentada por el organismo recaudador-. La diferencia no es menor, pues la Corte Suprema de Justicia de la idoneidad, Nación como se elemento ha encargado probatorio de del desechar dolo, de la las presunciones creadas por la ley a los fines de determinar la cuantía del tributo (al estilo de las del art. 18 de la ley 11.683), en "Mazza, Generoso y Mazza, Alberto s/recurso de apelación" (Fallos: 312:447). Allí, el Alto Tribunal destacó que si bien la presunción consagrada por el art. 25 de la ley 11.683 -t.o. determinación 1978- resultaba impositiva, suficiente dichas extenderse al campo del hecho USO OFICIAL necesario sustento de para fundar consecuencias no una podían ilícito tributario, sin el otros elementos de prueba que permitiesen acreditar la existencia de una actividad dolosa, tendiente a defraudar los intereses del fisco. De modo que si el reajuste provino de la aplicación de una de estas presunciones, la AFIP sólo podría mantener la sanción de multa cuestionada si demostrarse la presencia del dolo a través de otros elementos. Ahora bien: de la documental obrante a fs. 45/46 (Formulario F 8003 de la AFIP) surge que la forma en que se determinó el impuesto, según lo allí consignado por la inspectora actuante, fue “cierta”, y que el origen de las diferencia determinadas provino de “1) Omisión de ventas, ingresos, honorarios, sueldos, etc.” y “6) Otros: ingresos no declarados”, conformidad habiendo con ello la y contribuyente presentado la prestado DDJJ su Rectificativa voluntariamente, lo que es ratificado por la actora en su descargo (fs. 57, cuarto párrafo) –ocasión en la cual además, aclara que no sólo rectificó la referida DDJJ, sino que también pagó la diferencia del tributo-. Ningún elemento de prueba tendiente a demostrar que el ha aportado la actora reajuste provino de la aplicación de una presunción legal, que además, no identifica –sin señalar ni la naturaleza de la presunción ni la norma que la establecería-. En este contexto, no es posible tener por acreditado que el resultado de la verificación provenga de la aplicación de una presunción. Ello así, siendo un hecho cierto que la actora rectificó su DDJJ del IVA de diciembre de 2003, a raíz de la inspección llevada a cabo por la AFIP, en la que se detectó la omisión de declarar e ingresar impuesto por la suma de $ 21.713,64, así como que la diferencia fue calculada sobre elementos aportados por la propia contribuyente –resultando evidentemente graves las contradicciones habidas entre ellos y la DDJJ original-, no cabe duda sobre la procedencia de la sanción en el marco de los arts. 46 y 47 inc. a) de la ley 11.683. En efecto, el texto del art. 46 vigente al momento de los hechos (reformado por la ley 25.795, art. 1, que entró en vigencia el 17/11/2003) establece que “El que mediante declaraciones engañosas u ocultación maliciosa, sea por acción u omisión, defraudare al Fisco, será reprimido con multa de DOS (2) hasta DIEZ (10) veces el importe del tributo evadido.” El art. 47 del mismo texto legal presume, “... salvo prueba en contrario, que existe la voluntad de producir declaraciones engañosas maliciosas cuando: o de incurrir en ocultaciones a) Medie una grave contradicción entre los libros, registraciones, documentos y demás antecedentes correlativos con los datos que surjan de las declaraciones juradas o con los que deban aportarse en la oportunidad a que se refiere el último párrafo del art. 11”. Si en el caso, entonces, existe una clara contradicción entre los elementos documentales aportados por la actora y su DDJJ, se presume que su intención fue, al incluir los datos discordantes en esta última, la de ocultar maliciosamente la información al Fisco. La presunción admite prueba en contrario, pero ninguna causal invocó a tales fines el actor, más que su dificultad en afrontar la ardua tarea administrativa de revisar su documentación. Y aún cuando la constitucionalidad del art. 47 ha sido cuestionada por entenderse que podría resultar contraria al art. 18 de la Constitución Nacional (Cfr. “La evasión tributaria en las leyes 11.683 y 24.769”, Soler, Osvaldo H., Poder Judicial de la Nación LA LEY 2004-A, 899), lo cierto es que en el caso, la actora no ha cuestionado la validez de la disposición legal en análisis. Por lo demás, la Sra. Bianco presentó la DDJJ Rectificativa con posterioridad a que el organismo recaudador iniciara su actividad fiscalizadora, y no explicó motivo alguno que justificase la gruesa diferencia advertida entre la cuantía del tributo originalmente declarado y el finalmente liquidado. En estas condiciones, estimo que la demanda no puede prosperar. De igual modo se pronunció, frente a un supuesto sustancialmente similar, lo Contencioso la Sala 2ª de la Cámara Nacional en Administrativo Federal el 15/02/2007 en “Cordens S.A. v. Administración Federal de Ingresos Públicos” USO OFICIAL (Documento publicado en Lexis Nexis ocasión en la cual consideró que bajo Nº 35010728), “...la actora no intentó siquiera explicar la inexactitud de las declaraciones ni las circunstancias que determinaron las significativas diferencias a las que finalmente se arribó. Adviértase que en la presentación originaria se declaró un saldo igual a cero, y luego se allanó a los requerimientos de la inspección y conformó los ajustes propuestos. En este contexto, las afirmaciones que en abstracto expresó, no pueden eximirla de la sanción que corresponde por la conducta voluntaria de presentar una declaración jurada falsa, con el consecuente perjuicio al Fisco. Por lo demás, la circunstancia atinente a la presentación de la declaración rectificativa una vez notificada la iniciación de la inspección, resta entidad a la "espontaneidad" aducida (en este sentido, sala 1ª, in re "Victorino Reschini e Hijos S.R.L. [TF. 15086-1] v. DGI." causa 22318/97, 27/2/1998) sin que la rectificación sea empleada como presupuesto para una sanción automática.” Por ello, confirmó la sanción de multa impuesta por la AFIP. III. Llegado este punto, creo necesario destacar que el 24 de diciembre de 2008 se publicó en el Boletín Oficial de la Nación la ley 26.476, cuyo art. 4 estableció, “con alcance general, la exención y/o condonación: a) De las multas y demás sanciones, que no se encontraren firmes;...”. A su turno, el art. 6 de la misma ley precisó que “El beneficio de liberación de multas y demás sanciones correspondientes a infracciones formales cometidas hasta el 31 de diciembre de 2007, que no se encontraran firmes ni abonadas, operará cuando con anterioridad a la fecha en que se produzca el acogimiento al régimen, se haya cumplido o se cumpla la respectiva obligación formal....Cuando el deber formal transgredido fuese, por su naturaleza, insusceptible de ser cumplido con posterioridad a la comisión de la infracción, la sanción quedará condonada de oficio, siempre que la falta haya sido cometida con anterioridad al 31 de diciembre de 2007, inclusive. Las multas y demás sanciones, correspondientes a obligaciones sustanciales vencidas y cumplidas al 31 de diciembre de 2007, quedarán condonadas de pleno derecho, siempre que no se encontraren firmes.” En el caso que nos ocupa, la actora presentó la Declaración Jurada Rectificativa exteriorizando la cuantía real del tributo a ingresar, según fuera señalado por el Fisco y surge de fs. 46. Pero no se encuentra acreditado en el expediente, que el tributo respectivo haya sido abonado a la AFIP, más allá de la mención que el propio contribuyente efectuara en su descargo de fs. 57, que no fuera convalidada por la demandada. No habiendo sido el hecho incluido entre los constitutivos de la pretensión, sin que la AFIP se haya en consecuencia pronunciado en el marco del art. 356 inc. 1 del CPCyC sobre su veracidad, no es posible tenerlo por cierto. En estas condiciones, no es posible considerar que la multa haya quedado condonada de pleno derecho, pues entiendo que no está acreditado en autos que se encuentre cumplida la obligación sustancial respectiva. Las costas del proceso serán soportadas por la actora perdidosa. Sin acreditada Impuesto Resolución perjuicio la al de condición Valor General advertir de Agregado 689/99 de cada en la que no se profesional el modo AFIP y encuentra frente exigido por al por la razones de economía procesal, se procederá igualmente en este estado a regular los honorarios de los profesionales intervinientes según la actuación cumplida por cada uno, dejando aclarado que sólo corresponderá adicionar el 21% del Impuesto al Valor Poder Judicial de la Nación Agregado de aquellos profesionales que acrediten su condición de Responsables Inscriptos ante aquél Tributo. Por lo expuesto, RESUELVO: interpuesta por la 1) RECHAZAR Sra. CORA la acción BEATRIZ BIANCO ADMINISTRACIÓN FEDERAL DE INGRESOS PÚBLICOS que se revoque la Resolución Nº contenciosa 124/06 contra la tendiente que DI RNEU que le impusiera una multa de $ 14.475,33. 2) Con costas al actor (art. 68 del CPCyC). Tomando como monto base arancelario la cuantía de la multa atacada, de $ 14.475,33, regulo los honorarios de la Dra. ANA MARÍA SPINELLI, actuando como patrocinante de la actora, en la suma de pesos UN MIL CIEN ($ 1.100) (7,60%), los de la Dra. FLAVIA KARINA REYES, apoderada de la demandada, en la suma de pesos SEISCIENTOS ($ 600) (4,15%) y los de la Dra. MARCELA ANDREA USO OFICIAL CHIAPPE, patrocinante de la misma parte –y en doble carácter a fs. 140- , en la de pesos UN MIL CUATROCIENTOS ($ 1.400) (9,67%). Todo, considerando cumplidas dos de las tres etapas del proceso ordinario (arts. 6, 7, 8, 9, 11 y 38 de la ley 21.839). Los honorarios regulados precedentemente devengarán, en caso de mora, un interés a la tasa pasiva promedio que publica mensualmente el Banco Central de la República Argentina, hasta el efectivo pago. Regístrese y notifíquese.