El Clarí-n de Chile Chile a medias: sobre la limitación de los mandatos parlamentarios autor Rafael Luís Gumucio Rivas 2009-08-06 15:29:02 En materia constitucional y de regÃ-menes polÃ-ticos, el dicho famoso “Chile a medias―, cae como anillo al dedo. Parecie que los polÃ-ticos chilenos son algo asÃ- como los “maestros chasquillas―, que arreglan una llave para que la inundación salga por la otra. No en vano, “el maestro Faúndez― y su celular fue representativo de un perÃ-odo de la sociedad chilena en transición ininterrumpida. El ex presidente Ricardo Lagos y todos sus ministros iniciaron las acciones de recauchaje constitucional dejando intacto el carácter autoritario de la Carta Fundamental de 1980. Ahora, cuando para la opinión pública el Parlamento está en su más alto nivel de desprestigio y se hace evidente que un alto número de senadores y de diputados se ha convertido en vitalicio secuestrando el poder soberano de los electores, por medio del método de tener a todos los inscritos encuestados y fichados, las castas polÃ-ticas han captado que esta situación de pérdida de poder de representación no podÃ-a continuar, razón por la cual el Ejecutivo propone limitar los mandatos de diputados a tres perÃ-odos, es decir, doce años de mandato continuo en el tiempo, y de senadores, a dos perÃ-odos de ocho años, lo que equivale a dieciséis años consecutivos. Considero que este proyecto proponer un cambio tÃ-pico del “Chile a medias―, que denun en este artÃ-culo. Si lo miramos bien, los senadores durarán cuatro perÃ-odos presidenciales y los diputados tres.  ¿Por qué no ir al fondo del asunto? Estoy convencido de que sin un cambio radical de la Constitución vigente, a mi modo de ver inaceptable por autoritaria, los pequeños paños tibios de reformas, para que nada cambie, de poco sirve. Pienso que el sistema monárquico presidencial hace tiempo hizo agua, por consiguiente, es necesario reemplazarlo por el semipresidencialismo, que garantiza un mayor equilibrio de poderes. El senado tiene mucho sentido en el régimen presidencial norteamericano, donde duran nueve años y tienen un enorme poder para controlar el ejecutivo; en Chile hemos querido copiar este sistema, con un perÃ-odo de ocho años, además, con el agregado de que eligen por mitades, creando serios problemas, en ocasiones, a los gobiernos monárquicos presidenciales, elegidos por la soberanÃ-a popular. En los regÃ-menes parlamentarios o semipresidenciales el senado no tiene facultades polÃ-ticas, cuando son bicamerales. No entiendo cuál es la razón de la subsistencia del senado en Chile; de mantenerse, creo más útil que el senado fuera representativo de las grandes corrientes de pensamiento nacional, siendo elegidos por cuatro años, con una sola reelección, en un solo colegio nacional.  Los diputados, que en verdad deben representar los distritos regionales, deben tener la totalidad de las facultades polÃ-ticas; a mi modo de ver, debe incluir incluso los proyectos que impliquen gastos fiscales, además de las facultades propias de un régimen semipresidencial, es decir, un primer ministro que represente la mayorÃ-a parlamentaria, la censura al gabinete y la facultad del presidente de la república para disolver la cámara de diputados. En el caso del proyecto actual, creo que debiera limitarse la reelección de diputados a un solo perÃ-odo, lo que sumarÃ-a ocho años en el cargo, más que suficiente para “un servidor público― con verdadera vocación; se trata de representar a sus electores y no “apernarse―; se trata de ser elegido por ciudadanos y no domésticos carneros, por eupátridas y no por ilotas.  Para continuar con el “Chile a medias― a que estamos acostumbrados por “el peso de la noche autoritaria― propongo agregue a la reforma propuesta la obligación de primarias obligatorias, controladas por el Servicio Electoral, para la presentación de candidaturas a todos los cargos de elección popular – incluido en el proyecto la elección de intendente y consejeros regionales- todos los cargos deberán durar cuatro años, en una elección el mismo dÃ-a, y un plebiscito revocatorio, si la ciudadanÃ-a lo solicita, a los dos años de mandato. Esta propuesta supone que el presidente de la república durarÃ-a cuatro años, con una sola reelección.  Estoy completamente de acuerdo con la propuesta del candidato Jorge Arrate, en el sentido de introducir una cuarta urna en que la ciudadanÃ-a se pronuncie sobre creación de una Asamblea Constituyente.  En sÃ-ntesis, los diputados deben durar cuatro años, con una sola reelección; los senadores, ocho sin reelección, o cuatro con reelección. Asimismo presidente de la república, alcaldes, intendentes, consejeros y concejales, cuatro años con una sola reelección. Todos los candidatos serán elegidos en primarias abiertas y controladas por el Servicio electoral.  Rafael LuÃ-s Gumucio Rivas 05/08/09         http://www.elclarin.cl _PDF_POWERED _PDF_GENERATED 26 November, 2016, 09:40