Propuesta de acciones para la prevención del abuso sexual en la niñez y la adolescencia MEDISAN 2007; 11(3) Policlínica Universitaria “Josué País García” Propuesta de acciones para la prevención del abuso sexual en la niñez y la adolescencia MsC. Iliana de la Caridad Calderón Morales, 1 Dr.Cs Félix López Sánchez, de León 3 y Dr.Cs Ernesto Pérez González 4 2 MsC. Iliana Artíles Los problemas de salud que afectan más frecuentemente a niñas, niños y adolescentes latinoamericanos hoy día, pertenecen al área psicosocial; son alteraciones psicopatológicas que repercuten en todos ellos y en la comunidad. En el mundo, la niñez y la adolescencia se están enfrentando a una gran epidemia de violencia, entendida como un proceso social que comprende las más variadas formas de agresión y tiene efecto multiplicador y expansivo, pues no solo afecta a las víctimas, sino a los victimarios. Los delitos contra el normal desarrollo de las relaciones sexuales y la familia, la infancia y la juventud se caracterizan por ser desagradables y deshumanizantes, por lo que suelen desencadenar crisis de impredecibles proporciones si se tiene en cuenta que estos hechos cambian el modo en que la víctima se percibe a sí misma y valora a los demás y el entorno circundante, así como la enorme repercusión psicosocial en la niñez y la adolescencia, dados los traumas físicos y psíquicos que sufren. 1 – 6 Cuando se cometen estos hechos se producen daños no solo físicos, sino psíquicos y morales, que traen consigo implicaciones muy complicadas y resulta repudiable someter a estas prácticas a niñas, niños y adolescentes, puesto que el trauma que puede provocarse en ellos y sus familiares, es realmente incalculable; sus vidas pueden devenir una tortura insostenible, la tabla de sus valores morales desaparecer y convertirse en adultos carentes por completo de conceptos éticos; en fin, estos delitos sexuales suelen hacer que se sientan personas inadaptadas, fuera de todo control social. 7 -12 Este problema latente, pero poco estudiado en todo el orbe, no escapa de la realidad cubana y Santiago de Cuba no es la excepción, considerando que se va haciendo visible la situación de salud en niñas, niños y adolescentes atendidos con el diagnóstico de abuso sexual en el Centro de Atención Integral a la Salud en la Adolescencia de nuestra provincia, donde se han realizado estudios descriptivos al respecto, tanto en víctimas como en victimarios, e ido reconociendo que este constituye un problema de salud que requiere de la urgente atención de los profesionales encargados del bienestar biopsicosocial de la población. Por la gravedad de estos delitos en niñas, niños y adolescentes, capaces de convertirse tanto en víctimas como en victimarios, que atentan contra los valores éticos y morales de nuestra sociedad y la salud de nuestro pueblo, nos propusimos aplicar el programa español sobre la prevención de los abusos sexuales para contribuir a evitarlos en niñas, niños y adolescentes, dirigido a profesionales de la salud que se encontraban desempeñando sus funciones en la atención primaria de salud, considerando de antemano que este nivel de asistencia es prioritario para la promoción, prevención, diagnóstico precoz y tratamiento oportuno de este problema de salud que repercute negativamente sobre el bienestar biológico, psicológico y social de esta joven población. Métodos Se aplicó el programa educativo denominado Prevención de los abusos sexuales en la niñez y 2 la adolescencia en la comunidad urbana “Abel Santamaría Cuadrado” de la ciudad de Santiago de Cuba, desde junio del 2004 hasta diciembre del 2005, a fin de capacitar a un grupo de profesionales de la salud, pertenecientes al Distrito 4 de ese mismo nombre, sobre la prevención y el control del abuso sexual en niñas, niños y adolescentes de ese territorio. El estudio se basó metodológicamente en una intervención de tipo cualitativa. Propuesta de acciones para la prevención del abuso sexual en la niñez y la adolescencia desarrollo de la investigación. Se divulgó la convocatoria para asistir al curso de prevención de los abusos sexuales, diseñado para tales efectos. Se escogió una muestra de 88 cursistas, que fueron distribuidos en 3 grupos considerados como conjuntos restringidos de personas ligadas entre sí por constantes espacio-temporales y articuladas por su mutua representación interna, que se proponían explícita o implícitamente realizar una tarea que constituía su finalidad. Los 2 primeros se conformaron con una matrícula de 29 miembros y el tercero con una de 30. El criterio de selección fue intencional de caso típico por saturación de matrícula. La investigación se dividió en 3 etapas: • Etapa I. De diagnóstico de las necesidades educativas Para la ejecución del estudio se efectuó una entrevista previa con los profesionales de ambos sexos con el fin de explicarles el interés de su participación en el estudio, el objetivo de la investigación, los temas a debatir, la propuesta de calendario y el lugar donde se realizarían las actividades. Esta acción funcionó como entrada al campo Se aplicó la encuesta inicial a las y los participantes en la investigación para identificar las necesidades de aprendizaje referentes al abuso sexual y su prevención diseñada para tales efectos, según los temas y objetivos del programa utilizado. Esta acción se consideró como instrumento de entrada. • Etapa II De intervención o aplicación del programa Se aplicó el programa de prevención de abusos sexuales diseñado por el Dr. Félix López Sánchez y Amaia del Campo Sánchez, dirigido a profesionales de la salud para la prevención del abuso sexual en niñas, niños y adolescentes en forma de curso, dividido en seis sesiones de trabajo. Los objetivos de este fueron: • Obtener conocimientos sobre los abusos sexuales. • Identificar los factores de riesgo. • Aprender a transmitir estos conocimientos a niños, niñas y adolescentes. • Adquirir habilidades para entrenar a educadores, educadoras, padres, madres, niñas, niños y adolescentes. • Saber entrenar en habilidades para la protección, comunicación y afrontamiento de los casos de abuso sexual. • Deteminar los indicadores de abuso sexual. • Saber responder adecuadamente a las confidencias, denuncias o sospechas de abuso sexual. Etapa III: Evaluación de la eficacia del Programa aplicado • La aplicación de la encuesta final a los participantes de ambos sexos en la investigación para medir los conocimientos adquiridos luego de la puesta en práctica del programa. • Una evaluación de las habilidades adquiridas a través de monitoreos de desempeño en las áreas de salud a las cuales pertenecían los/las profesionales. • La detección de las denuncias referidas a casos de abuso sexual, lo que mostró una visualización de esta problemática que se mantenía individualizada. • La confirmación de un aumento en el total de casos atendidos en el Centro de Atención Integral a la Salud en la Niñez y la Adolescencia, específicamente en consulta provincial de abusos sexuales a niñas, niños y adolescentes. La evaluación de la eficacia del Programa se logró a través de: 1. Cumplimiento de los objetivos del Programa 2. Modificación de algunos indicadores propuestos para el trabajo en grupo y avalados como sistema de evaluación en otras investigaciones Los indicadores evaluados fueron los siguientes: • Vinculo afectivo desde lo personal • Valoración sobre lo nuevo Propuesta de acciones para la prevención del abuso sexual en la niñez y la adolescencia • Vínculo con la temática • Elaboración personal • Aprendizaje El nivel de satisfacción grupal se midió mediante el análisis de las rondas de cierre y la reunión de evaluación y cierre Resultados En la investigación predominaron las profesionales en los 3 grupos (tabla 1). Tabla1. Profesionales de la salud según sexo Sexo Grupo I Grupo II Grupo III Total Masculino 7 10 3 20 Femenino 22 19 27 68 Total 29 29 30 88 En la muestra fue más significativa la incidencia del grupo etario de 36 a 46 años, en el que también prevalecieron las féminas (tabla 2). Tabla 2. Profesionales de la salud según edad Edad (en años) Grupo I Grupo II Grupo III Total 25 - 35 11 10 7 28 36 - 46 9 9 18 36 47 - 57 8 9 3 20 58 - 68 1 1 2 4 29 29 30 88 Total La escolaridad que aportó las cifras más altas fue la universitaria (tabla 3). Tabla 3. Profesionales de la salud según escolaridad Escolaridad Grupo II Grupo III Total 7 5 2 14 Universitaria 22 24 28 74 Total 29 29 30 88 Preuniversitaria Grupo I La presencia de doctores y doctoras fue más significativa en la intervención, comparándola con otras especialidades de la salud (tabla 4). Las/los cursistas en su totalidad se encontraban desempeñando las labores correspondientes a la atención primaria de salud en sus áreas de trabajo. Propuesta de acciones para la prevención del abuso sexual en la niñez y la adolescencia Tabla 4. Profesionales de la salud según ocupación Ocupación Grupo I Grupo II Grupo III Total Enfermeras (os) 7 12 11 30 Médicas (os) 22 17 19 58 Total 29 29 30 88 Antes de la aplicación del Programa (tabla 5), todos ellos poseían escasos conocimientos sobre el tema de los abusos sexuales en niñas, niños y adolescentes; situación que fue totalmente modificada luego de concluidas las sesiones impartidas, lo cual pudo ser verificado en las evaluaciones realizadas 3 meses después de la ejecución del curso y en los monitoreos de desempeño realizados por la coordinadora durante toda la intervención. Tabla 5. Profesionales de salud según resultados de encuesta aplicada Después Antes Evaluación No. % No. % Adecuada 2 2,27 88 100,0 Inadecuada 86 97,73 0 0 Total 88 88 100,0 100,0 Discusión El predominio del sexo femenino obedeció a que la mayoría de las personas que laboran en el sector de la salud pública en nuestro medio, pertenecen al sexo femenino; situación genérica que no difiere de otras investigaciones revisadas, 13 - 16 pues considerando que son profesionales de la salud, han tenido que cursar estudios universitarios, realizar servicios sociales en el posgraduado y finalmente especializarse en determinadas esferas de la profesión, se explica la primacía de personas jóvenes de 36-46 años, teniendo en cuenta que el mayor número de profesionales que ejercen sus funciones en la atención primaria de salud son especialistas en Medicina General Integral, es decir, de una especialidad relativamente joven. Nuestros resultados se corresponden con los de otros autores. 17 - 19 La supremacía de las doctoras y doctores se atribuyó a la necesidad de conocimiento sobre el asunto tratado, pues este grupo tiene mayor nivel de decisión y poder de acceso en los casos de abuso sexual. Al analizar la eficacia se constató que los objetivos propuestos en el estudio se habían cumplido en este grupo de profesionales de la comunidad estudiada, en los diferentes indicadores: • Vínculo afectivo desde lo personal Desde el inicio los/las profesionales reconocieron la necesidad de un espacio grupal, aunque mostraron pocos conocimientos sobre el tema; sin embargo, a medida que se desarrolló el programa, todos los integrantes ganaron en participación en torno al asunto, así como se enriqueció el contenido con los aportes personales, las experiencias vivenciales y historias contadas por los cursistas de ambos sexos sobre hechos conocidos, con los comentarios sobre ejemplos de pacientes y experiencias en la comunidad. • Valoración sobre lo nuevo Unos de los aspectos significativos estuvieron dados inicialmente por las expresiones y manifestaciones de desconocimiento de los contenidos. En varias ocasiones, ante determinadas ideas propuestas, se reflejó en algunos oposición y en otros silencio; indicadores de una inmensa Propuesta de acciones para la prevención del abuso sexual en la niñez y la adolescencia contradicción, que fue expresada públicamente cuando se les preguntaba. Este hecho permitió reconocer que había implicación en la tarea y estaban dándose los primeros pasos para la introyección de valores y creencias referidos a los abusos sexuales. • Vínculo con la temática A través de la implicación personal con las actividades se logró que los comentarios, valoraciones y reflexiones giraran sobre el tema. Muchos fueron los aportes de los/las cursistas en los diferentes encuentros, sobre todo dirigidos a fomentar conductas propias o de colegas que se encontraban o no cursando las sesiones del Programa • Elaboración personal Este indicador estuvo presente en las expresiones generadoras de pensamientos críticos y reflexiones, denotando la coherencia entre los sentimientos, ideas y actuaciones; se evidenció la incorporación en ellos y ellas de expresiones y conceptos comunes al grupo. El hecho de que existiera una aprobación grupal del tema tratado y la implicación afectiva en este, movilizó la participación activa en el grupo. • Aprendizaje Elemento muy relacionado con los anteriores y tuvo un efecto relevante, pues permitió medir el alcance del programa aplicado y valorar la incorporación de nuevas pautas de comportamiento, valores y conocimientos. Todas las actitudes eran en contra de los abusos sexuales, aunque algunos cursistas titubearon a la hora de asumir una postura frente a este problema, si bien el desarrollo del Programa posibilitó adoptar actitudes profesionales de total rechazo y eliminar algunas creencias erróneas Durante la aplicación del Programa fueron remitidos de forma adecuada a la consulta provincial de abuso sexual, por parte de los/las cursistas, de 4 casos en total. Durante la intervención se pudo notar una elevada capacidad de aprendizaje, a través no solo de los contenidos de enseñanza y reestructuración brindados por la coordinación, sino también por los recursos y las experiencias de los/las integrantes del curso, expresados en los casos analizados en forma de debate y juegos de roles durante todas las sesiones de trabajo. En cuanto a la satisfacción grupal, el Programa aplicado permitió lograr altos niveles al respecto en los profesionales de la casuística, tanto en los resultados en las rondas de cierre de los encuentros (bienestar, aceptación, apoyo y placer) como en la reunión de evaluación final. Estos elementos, junto a los indicadores ya analizados, pusieron de relieve la importancia que tuvo el Programa aplicado para este grupo. Se llegó a la conclusión de que las/los profesionales de la salud se encontraron aptos para responder adecuadamente a las confidencias, denuncias o sospechas de abuso sexual, teniendo en cuenta los monitoreos de desempeño realizados al azar en los consultorios de médicos de familia, donde no solo se adoptó la requerida conducta ante los casos, sino en los interrogatorios efectuados en busca de los indicadores del abuso sexual. Los resultados en el proceso de diagnóstico de las necesidades educativas de los integrantes de la muestra, condujeron a la aplicación del Programa con las modificaciones declaradas. En cada una de las sesiones del curso se logró sistematizar las concepciones existentes en la literatura sobre el abuso sexual y su prevención en niñas, niños y adolescentes. La aplicación del Programa fue eficaz, pues durante su desarrollo en un grupo de profesionales de la comunidad urbana “Abel Santamaría Cuadrado” de Santiago de Cuba, se cumplieron los objetivos inicialmente propuestos y se logró un elevado nivel de satisfacción grupal. Se recomendó poner en conocimiento de las administraciones los resultados obtenidos en esta investigación, a fin de sensibilizarlas sobre la necesidad de hacer extensivo el estudio a otras instancias de salud. Referencias bibliográficas 1. Barudy J. El dolor invisible de la infancia. <http://es.wikipedia.org/wiki/Abuso_sexual> [consulta: 12 junio 2006]. 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Catedrático de Psicología Universidad de Salamanca, España 3 Especialista en Estudios Sociales. Máster en Sexualidad. Profesora Auxiliar Centro Nacional de Educación Sexual 4 Doctor en Ciencias Médicas. Profesor Adjunto Instituto de Medicina Legal de La Habana CÓMO CITAR ESTE ARTÍCULO Calderón Morales IC, López Sánchez F, Artles de León I, Pérez González E. Propuesta de acciones para la prevención del abuso sexual en la niñez y la adolescencia [artículo en línea]. MEDISAN 2007;11(3). <http://bvs.sld.cu/revistas/san/vol11_3_07/san04307.htm> [consulta: fecha de acceso].