PRONUNCIAMIENTO DE LA COMUNIDAD CUBANA RESIDENTE EN EL SALVADOR, AGRUPADOS EN ACRES CAGUAIRAN, CON MOTIVO DE LA PARTICIPACION DE CUBA EN LA VII CUMBRE DE LAS AMERICAS, ABRIL 2015. San Salvador, 01 de Abril de 2015 La comunidad cubana residente en El Salvador, con motivo de la participación de Cuba en la VII Cumbre de las Américas, a celebrarse en Panamá los días 10 y 11 de abril del presente año, queremos manifestar nuestra satisfacción y beneplácito por tal medida. Nosotros, cubanos y cubanas, sabemos mejor que nadie sobre las plenas garantías que tienen nuestros ciudadanos en cuanto a derechos humanos, como son el acceso universal y gratuito a la educación y la salud, al empleo, a la información, a la protección y a la igualdad racial y de género, así como a la aprehensión por parte de los jóvenes de conocimientos que les permiten salvaguardar sus derechos y deberes. En términos de seguridad ciudadana, conocida esta como un estado ideal de ausencia de todo daño a los derechos humanos, podemos decir que en Cuba existen instituciones jurídicas con la misión de garantizar el cumplimiento de los derechos del hombre y que la seguridad ciudadana tiene plenas garantías, En otros temas como los Objetivos de desarrollo del Milenio, podemos decir que nuestra nación tiene cubiertos en gran medida desde hace tiempo, sobre todo los referidos a terminar con la pobreza extrema y el analfabetismo. Hemos apoyado y apoyaremos todas esas acciones de mecanismos regionales como la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio con los Pueblos (ALBA-TCP) en busca de mayor equidad, accesibilidad y desarrollo, en especial para intentar erradicar el hambre del panorama latinoamericano y caribeño. Nuestro pueblo tiene mucho que compartir con nuestros hermanos latinoamericanos, el bloqueo y el aislamiento económico al que injustamente hemos estado sometidos durante décadas nos ha obligado a sacar lo mejor de este pueblo y en aspectos como el MEDIO AMBIENTE Y ENERGÍA, MOTORES DEL DESARROLLO SOSTENIBLE, tenemos mucho que compartir, las experiencias en el uso de la energía renovable en Cuba, las consecuencias de la acción del hombre y las políticas y estrategias que deberían asumirse desde la región para enfrentar el impacto del cambio climático y las metas hacia el año 2030, entre las que se encuentran el cambio en la matriz energética, que llevaran a Cuba a la transición a un mundo más sostenible, en el cual se deben buscar respuestas en el ámbito local, nacional e internacional. Nuestro Comandante Fidel Castro en la Cumbre de la Tierra (1992), en Río de Janeiro, dijo: “Una importante especie biológica está en riesgo de desaparecer por la rápida y progresiva liquidación de sus condiciones naturales de vida: el hombre”. Es por ello que constantemente nuestro país está buscando e implementando medidas para revertir estos patrones y creemos que un primer paso sería incluir en los planes y programas de estudio de la región desde edades tempranas el conocimiento y cuidado del medio ambiente, como una manera de contribuir en la protección de nuestra casa común. Otro de los pilares de nuestra revolución ha sido, es y seguirá siendo la EDUCACIÓN Y SALUD, PILARES DE LA SOCIEDAD, Los retos para el perfeccionamiento de los sistemas de enseñanza básica, media y universitaria, así como del sistema sanitario cubano y de las Américas es otra experiencia para compartir con nuestros hermanos latinoamericanos. Es importante hacerle saber al mundo la voluntad política del Gobierno revolucionario que ha permitido que nuestro país ostente indicadores de educación tan altos como los de muchos países desarrollados. Existe una tendencia en el contexto de las Américas a querer mercantilizar la educación cuando este derecho debería ser asequible para todas las personas.En Cuba el 9,1 % del Producto Interno Bruto se dedica a la formación de recursos humanos porque se entiende que esto es esencial para el desarrollo, la calidad de la enseñanza pasa por la adecuación de los programas de estudio a las necesidades concretas de la sociedad y la economía, y por el entendimiento de que las universidades son centros formadores de cultura. En términos de Salud, Cuba constituye un ejemplo para el mundo, no solo por los logros internos en esta materia, sino también por sus contribuciones solidarias en más de 60 países. Hemos tenido muchas experiencias positivas de cooperación regional como la Cumbre Extraordinaria del ALBA-TCP sobre el ébola que se realizó el pasado año en La Habana y permitió coordinar una respuesta regional al desafío que representaba el virus. Es por ello que creemos necesario promover el intercambio científico y la transferencia tecnológica sobre la base de la defensa de la soberanía de nuestros pueblos. Los indicadores de nuestro país en muchos aspectos sanitarios solo se explican por el carácter humanista de la medicina cubana, que por Constitución y práctica es universal, accesible, gratuita, integral e internacionalista. No puede haber salud al nivel que deseamos en las Américas si no se forman suficientes recursos humanos, así como la educación se ha convertido en negocio muy lucrativo en muchos países del área, lamentablemente la salud también lo es. Proponemos que de cara a la VII Cumbre de las Américas, se logre analizar las posibilidades económicas, el género, origen étnico, preferencia sexual o religión dejen de ser condicionantes en el acceso a derechos ciudadanos y a condiciones básicas de vida, especialmente para la juventud. Promover la cooperación y la alianza entre las sociedades civiles y los estados, apoyando la creación de una Red de la Sociedad Civil Humanística, de la cual la Organización Continental Latinoamericana y Caribeña de Estudiantes (OCLAE) forme parte de manera activa; así como que la juventud debe luchar porque se haga permanente la existencia de espacios de debate a todos los niveles (local, nacional y regional) y usar estos para defender, entre otros, la identidad y la historia de nuestros pueblos fueron también propuestas realizadas durante la jornada. Declaración Final La comunidad cubana queremos reclamar para las Américas sociedades más justas, equitativas y prósperas, que contemplen las demandas autóctonas de nuestros pueblos y garanticen todos los derechos humanos para todas y todos, incluido el acceso universal y gratuito a una educación y salud de calidad. Reafirmar la trascendencia histórica de la Proclamación de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, que fuera acordada en la II Cumbre de la Celac en La Habana, junto a la convicción profunda de que sin paz, cooperación y respeto mutuo entre las naciones, será imposible avanzar hacia el desarrollo sostenible. Defender la soberanía e independencia de nuestro país, y reclamar respeto al derecho de autodeterminación ejercido por nuestro pueblo y al sistema político, social y económico que libremente ha decidido construir. Exigir el cese del criminal bloqueo económico, financiero y comercial impuesto por Estados Unidos a Cuba por más de cinco décadas, que constituye el principal obstáculo al desarrollo del país y que afecta directamente a la juventud cubana. Condenar la absurda inclusión de Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo. Expresar nuestra solidaridad con las causas progresistas de los pueblos de las Américas y rechazar las acciones injerencistas y campañas de manipulación mediática que se orquestan contra varios gobiernos democráticos de nuestra región, en particular contra nuestra hermana República Bolivariana de Venezuela. Defender la legitimidad de nuestra sociedad civil y juventud revolucionarias, participativas y representativas de la inmensa mayoría de nuestro pueblo, comprometidas con edificar un país donde la ley primera sea el culto a la dignidad plena del hombre. Contribuir al Foro de los Jóvenes que sucederá en Panamá, en abril próximo, como parte de la VII Cumbre de las Américas, a través de nuestras experiencias, realidades y resultados de los debates del Foro Juvenil Cubano. ACRES CAGUAIRAN