El mercurio en productos y desechos

Módulo 1
El mercurio
en productos
y desechos
El PNUMA promueve las prácticas
racionales desde el punto de vista ambiental
en todo el mundo y en sus propias actividades.
Esta publicaión está impresa íntegramente en papel
reciclado CyclusPrint, utilizando tintas vegetales
y otras técnicas no perjudiciales para el medio ambiente.
Nuestra política de distribucíon apunta a reducir la
contribución del PNUMA a las emisiones de carbono
en el medio ambiente.
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Módulo 1
El mercurio
en productos
y desechos
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El mercurio en productos y desechos
M E N S A J E S
F U N D A M E N T A L E S
■ Debido a sus singulares propiedades químicas, el mercurio se ha utilizado en una
amplia gama de productos a lo largo del tiempo, pero en la actualidad la mayor parte
se usa en aparatos eléctricos y electrónicos, interruptores (incluso en algunos
termostatos) y relés, equipo de medición y control, lámparas de luz fluorescentes
de bajo consumo, pilas y amalgamas dentales.
■ Se usan cantidades más pequeñas de mercurio en algunos aparatos o instrumentos
de laboratorio y en algunos productos cosméticos y farmacéuticos, pinturas y
alhajas.
■ La mayoría de los productos que contienen mercurio y de los procesos en que se
utiliza pueden sustituirse por otros que no lo contienen o utilizan y que están
disponibles en un número cada vez mayor de países. Se exhorta a los fabricantes,
los propietarios de marcas y los comerciantes minoristas a producir y vender
productos que no tengan mercurio.
■ El mercurio y sus compuestos no se pueden destruir; sólo es posible aislarlos para
que no circulen en el medio ambiente ni pongan en peligro a los seres humanos y
la fauna y flora silvestres. Cuando se desechan productos que contienen mercurio
en la corriente general de desechos, el mercurio contamina el medio ambiente – los
cursos de agua, los humedales y el aire – y pone en peligro a las personas tanto a
nivel local como mundial.
2
s
¿ P O R Q U É E S T O E S I M P O R TA N T E PA R A U S T E D ?
El mercurio es tóxico. Es importante que usted sepa si los productos que utiliza
actualmente y los que se usan a su alrededor contienen mercurio, para que pueda
proteger su salud y la de su familia.
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a
¿ Q U É
P U E D E
H A C E R
U S T E D ?
aEl público
aBuscar productos que no contengan mercurio.
aDescartar los productos que contienen mercurio por separado, no con otros desechos.
aNo desechar productos que contienen mercurio junto con residuos que se incinerarán,
ya que si lo hace el mercurio se evaporará y contaminará el aire.
aLlamar la atención de los dirigentes de su comunidad y de las autoridades públicas
sobre la necesidad de una gestión adecuada de los desechos.
aLos trabajadores de la salud
aInstruir a las personas sobre el riesgo de intoxicación por mercurio, los productos
con contenido de mercurio que utilizan, y los procedimientos que deben seguir en
caso de derrame.
aEvaluar los niveles de mercurio en sangre u orina de las personas que se cree que
pueden haber estado expuestas a una cantidad excesiva de mercurio.
aVer la información que figura en el módulo 4 sobre el uso del mercurio en los centros
de atención de la salud.
aLos gobiernos
aPromover la concienciación del público respecto de los productos que contienen
mercurio.
aAlentar a los organismos públicos, las instituciones, los hospitales, los industriales
y los comerciantes minoristas a que elijan y adquieran productos sin mercurio.
aAlentar a los municipios a que implanten, para la eliminación de desechos que contengan
mercurio, sistemas sometidos a medidas de control. Crear instalaciones nacionales o
regionales de confinamiento seguro para los desechos contaminados con mercurio.
aReglamentar y vigilar a las industrias que usan mercurio.
aReglamentar la exportación e importación de mercurio y de productos que contengan
mercurio.
aParticipar en el Programa mundial de modalidades de asociación sobre
el mercurio del PNUMA. Se puede encontrar más información en:
www.chem.unep.ch/mercury/partnerships/new_part.htm.
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El mercurio en los productos
¿Dónde y por qué se usa el mercurio en productos y procesos?
El mercurio se ha utilizado en una amplia gama de productos a lo largo del tiempo. A
temperatura ambiente es un líquido, y se expande y se contrae en forma muy precisa en
respuesta a los cambios de temperatura. Estas propiedades especiales lo han hecho útil
para varias aplicaciones.
El mercurio es muy denso, y mantiene su volumen en respuesta a los cambios en la presión
atmosférica. Gracias a estas propiedades, resulta útil en dispositivos diseñados para medir
la temperatura o la presión. Además, hay una serie de componentes (es decir, partes que
cumplen una determinada función en otros productos) que contienen mercurio, y que se
usan como interruptores y relés en aplicaciones eléctricas y electrónicas. Muchos de esos
dispositivos contienen 1000 mg o más de mercurio líquido.
Muchos países desarrollados han prohibido el uso del mercurio en los productos
manufacturados. Ha habido una tendencia general a trasladar las actividades de fabricación
de productos con mercurio (termómetros, pilas, etc.) a países en desarrollo, donde suele
haber un menor grado de conciencia de los beneficios que entraña para la salud y el medio
ambiente la sustitución por productos y procesos libres de mercurio.
En ciertas partes del mundo donde las mujeres usan productos cosméticos, como cremas
y jabones, que prometen aclarar la piel, se suele incorporar mercurio en esos productos
como compuesto farmacológico habitual (más adelante en este mismo módulo, y en el
módulo 5, se da más información sobre este tema en particular).
¿Por qué la preocupación por el uso del mercurio en productos y procesos?
Cuando se descartan productos que contienen mercurio en la corriente general de desechos,
con frecuencia van a dar al medio ambiente – a cursos de agua, humedales, depósitos de
basura junto a las carreteras, vertederos o basureros, donde pueden ser quemados. El
mercurio que contienen se libera finalmente en el aire, el agua y el suelo.
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¿Qué productos contienen mercurio?
El mercurio se usa en una cantidad de productos, entre ellos aparatos eléctricos
y electrónicos, interruptores (incluso termostatos) y relés, equipo de medición y
control, lámparas de luz fluorescentes de bajo consumo, pilas, amalgamas dentales
y productos químicos de laboratorio.
A continuación figura una lista de productos que se sabe que contienen mercurio. Se han
clasificado en dispositivos de medición y control, componentes y otros productos que
contienen mercurio, incluidas las pilas.
Dispositivos de medición y control
> Termómetros usados para medir la temperatura corporal, la temperatura ambiente y
ciertos procesos industriales. Pirómetros que miden temperaturas extremadamente altas,
por ejemplo en fundiciones.
> Ciertos termostatos utilizados para controlar la temperatura.
> Barómetros y manómetros empleados para medir la presión.
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> Higrómetros para medir el contenido de humedad de un volumen de aire o gas confinado;
psicrómetros para medir la humedad exterior.
> Hidrómetros para medir la densidad o gravedad específica de un líquido.
> Medidores de flujo para medir el flujo de gas, agua, aire y vapor.
> Aparatos comunes de uso médico, como esfigmomanómetros (que miden la tensión
arterial), termómetros de laboratorio y para atención de pacientes y dispositivos
gastrointestinales (véase información más detallada en el módulo 4).
Componentes
> Es común que se utilicen interruptores de flotador e interruptores basculantes en los
automóviles, los interruptores de luz, los termostatos, las bombas de riego y ciertos
procesos industriales. En algunos procesos industriales se usan también interruptores
de temperatura y de presión.
> El funcionamiento de los relés se basa en propiedades magnéticas:
Los relés de desplazamiento y solenoides se usan en aplicaciones de corriente intensa
y alta tensión, como controladores de procesos industriales, interruptores de suministro
de energía, caldeo por resistencia, iluminación de tungsteno, soldaduras, iluminación de
corriente intensa y alto voltaje, reflectores, copiadoras, cargadores de baterías, sistemas
de gestión de la energía y hornos industriales.
> Se usan relés de láminas magnéticas bañadas de mercurio en dispositivos electrónicos de
interrupción o para transmisión de señales, y en aplicaciones de prueba, calibración y medición.
> En ciertos dispositivos electrónicos se usan relés con mercurio en los contactos.
> A veces se usan sensores de llama o sondas de termostato en aparatos de gas en los cuales,
cuando la luz (llama) piloto se enciende, el mercurio que se encuentra en el bulbo del sensor
se evapora y se expande y hace que la válvula del gas se abra, y cuando la llama se apaga,
el mercurio se contrae y hace que la válvula se cierre, deteniendo la salida de gas.
Otros productos que contienen mercurio:
> Las pilas de botón contienen hasta 25 mg de mercurio (y a veces más) y se usan con
frecuencia en relojes, audífonos, calculadoras, juguetes y artículos novedosos que se
encienden o producen ruido. Otras pilas especiales (en particular las pilas de óxido de
mercurio, o “pilas de mercurio”) usan más de 25 mg de mercurio y se utilizan habitualmente
en hospitales, instalaciones militares y aplicaciones comerciales.
> También se emplea mercurio en las lámparas de luz (fluorescentes largas, fluorescentes
compactas, de descarga de alta intensidad (DAI), de sodio de alta presión, de metal
halógeno, neón, vapor de mercurio). Se usa entre 5 y 50 mg de mercurio como vapor
de mercurio, que emite energía ultravioleta cuando se energiza. Esto genera luz visible
cuando reacciona con la capa de fósforo del interior de la lámpara.
> En algunos países se utiliza óxido de mercurio en algunas pinturas como pigmento rojo,
y a veces también se usa mercurio en las pinturas como agente fungicida, conservante
y contra el moho. El mercurio se sigue utilizando como biocida en los hogares y en el
sector industrial (en pinturas, colas adhesivas y conservantes de la madera), en la industria
del cuero (en soluciones de curtido), en la agricultura (para proteger las semillas) y en la
industria del papel y de la pulpa de papel.
> El mercurio tiene también algunos usos culturales, como en la joyería o la aleación de
objetos religiosos, como los artículos Parad de la India (véase el módulo 5).
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> Ciertos productos farmacéuticos y jabones (como agente antibacterial o antiséptico; se
examina más adelante en este módulo), medicamentos tradicionales (véase el módulo 4).
> Amalgamas dentales, llamadas habitualmente empastes de “plata” (véase el módulo 4).
> El mercurio y los compuestos que contienen mercurio son de uso habitual en soluciones
de laboratorio, reactivos de diagnóstico, catalizadores, preparaciones histológicas y
conservantes de muestras para los sectores de la salud convencional moderna y la
medicina veterinaria, las escuelas y universidades y las industrias.
¿Cómo se libera el mercurio de los productos?
El mercurio de los productos puede liberarse en distintos momentos a lo largo del ciclo de
vida de un producto:
> Emisiones y desechos generados durante la producción del mercurio (ya sea que se
extraiga de una mina o que se obtenga como subproducto o mediante reciclado, etc.)
que se usa en el producto;
> Emisiones ocurridas durante la fase de fabricación del producto;
> Liberación durante el uso habitual del producto, como en el caso de las amalgamas
dentales, los cosméticos que contienen mercurio, etc.;
> Liberación por rotura durante el uso (por ejemplo, lámparas fluorescentes y termómetros
de vidrio);
> Liberación por rotura en la corriente de desechos (por ejemplo, lámparas fluorescentes)
o por vertido;
> Liberación durante el proceso de reciclado;
> Liberación asociada al tratamiento y eliminación final de desechos de mercurio (ya sea
mediante enterramiento, incineración o reutilización de material de desecho (por ejemplo,
en el cemento)).
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¿Cuánto mercurio se libera de los productos?
Es difícil cuantificar el volumen que aportan las diversas fuentes. Gran parte del mercurio
que se utiliza en los productos se emitirá en última instancia en el medio ambiente, ya
sea en un basurero o cuando se queme basura al aire libre o se incinere. En muchos
lugares del mundo, la eliminación no controlada permite que las toxinas entren directamente
en el medio ambiente. Lo que es más, incluso parte del mercurio tratado y desechado
en condiciones más controladas, como el que se coloca en vertederos designados,
también puede liberarse en el medio ambiente al cabo de un período de tiempo más
prolongado.
El PNUMA ha publicado un documento titulado “Instrumental para la identificación y
cuantificación de liberaciones de mercurio”, que es de gran ayuda para preparar evaluaciones
del flujo de sustancias con mercurio. En general se considera que gran parte del mercurio
que se libera procede del uso habitual de los productos que lo contienen, los derrames y
roturas y las actividades de procesamiento y eliminación de metal de desecho.
¿Cuáles son los riesgos?
El riesgo de exposición ocupacional es generalmente alto para las personas que trabajan
en ambientes donde se usa mercurio en la fabricación de productos. Las personas también
quedan expuestas al mercurio elemental cuanto se rompe un dispositivo que contiene
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mercurio. Los derrames de mercurio representan un riesgo. Las vías de exposición más
comunes son por inhalación o por contacto con la piel.
El uso de productos y dispositivos con mercurio también puede afectar entornos más alejados
con los que pueden entrar en contacto ulteriormente. Los desechos que contienen mercurio,
incluso los restos que pueden quedar después de la limpieza de un derrame, con frecuencia
terminan en medios acuáticos y en la atmósfera debido a una eliminación incorrecta.
¿Es posible sustituir el mercurio en los productos?
Hay en el mercado otros productos libres de mercurio que se pueden adquirir para sustituir
casi todos los productos que contienen mercurio, en un número cada vez mayor de países.
Por lo general, los productos sustitutivos son eficaces en función de los costos, y con el
tiempo lo serán aún más debido al aumento de la demanda. Además, cuando se piensa en
el costo de la eliminación de los productos que contienen mercurio a lo largo de todo su
ciclo de vida, la relación costo-eficacia de los sucedáneos se vuelve más convincente aún.
Un recurso útil, como punto de partida, es la “Guide for Reducing Major Uses and Releases
of Mercury”, UNEP 2006. Este documento está disponible en inglés en la siguiente dirección
de Internet: www.chem.unep.ch/mercury/Guidance-training-materials.htm.
Las lámparas con contenido de mercurio siguen siendo el modelo corriente de lámparas de
bajo consumo. Los esfuerzos de la industria para reducir la cantidad de mercurio en cada
lámpara son permanentes. En julio de 2008 ya había lámparas sustitutivas con bajo contenido
de mercurio (de 3 a 5 mg de mercurio en lugar de 20 a 40 mg). Hay señales de que en los
próximos años se dispondrá de productos sustitutivos sin mercurio económicamente viables.
¿Qué pueden hacer los gobiernos?
> La sustitución de los productos que contienen mercurio por otros sin mercurio es una
de las medidas preventivas más eficaces para influir en toda la corriente de mercurio que
fluye a través de la economía y el medio ambiente. En algunos casos debería considerase
la posibilidad de utilizar productos con menor contenido de mercurio, o de implantar un
sistema de recolección separada, junto con una campaña de concienciación para reducir
el mercurio en la corriente de desechos.
> La elaboración de un inventario nacional del mercurio existente en los productos puede
ayudar a los gobiernos a enfocar mejor los esfuerzos destinados a reducirlo.
> Los gobiernos pueden reglamentar la fabricación, la venta y/o la comercialización del
mercurio en los productos. A veces no es viable desde el punto de vista político o práctico
prohibir los productos con mercurio (por ejemplo, las lámparas de bajo consumo), o no
es posible hacer respetar estrictamente esa prohibición.
> El cobro de impuestos sobre los productos con mercurio puede ser un medio eficaz de
fomentar la sustitución por otros productos. El etiquetado de los productos que contienen
mercurio es otra buena manera de hacer tomar conciencia, mejorar las técnicas de manejo
y promover el uso de productos sustitutivos. El etiquetado de los productos tiene ventajas y
desventajas, pero se ha demostrado que es bastante eficaz si se combina con otras medidas.
Por ejemplo, en el caso de las pilas de consumo general, hay muchos consumidores que
prestan mucha atención a las etiquetas en lo que respecta al contenido de mercurio y cadmio.
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> Los funcionarios de adquisiciones de los gobiernos están en inmejorables condiciones
de proteger el medio ambiente si se informan acerca de los productos que pueden
utilizarse en sustitución de los productos con mercurio que adquieren y buscan productos
libres de mercurio. En la siguiente dirección de Internet hay una plataforma de intercambio
de información para quienes tengan interés en adquirir productos sustitutivos sin mercurio:
www.informinc.org.
¿Qué sucede con las empresas que fabrican, usan y/o compran
y venden estos productos?
En el módulo 2: El mercurio y la industria, se da información general sobre las industrias
que emplean mercurio en sus procesos.
Las empresas que venden productos que contienen mercurio deberían ser conscientes de
los riesgos que entraña el mercurio y compartir información con sus clientes sobre los
productos sustitutivos de los que contienen mercurio. Siempre que sea posible, las empresas
deberían proponerse vender productos sin mercurio.
¿Cuáles son los obstáculos para la adopción de productos sin mercurio?
Suele haber barreras económicas y sociales que impiden que los fabricantes, los
vendedores y los consumidores adopten productos nuevos sin contenido de mercurio.
En la mayoría de los casos, esos obstáculos se pueden superar con la ayuda de una
estrategia apropiada del gobierno o de la administración local, o con programas de
información e incentivos.
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Los fabricantes pueden estar preocupados por los gastos inherentes a la modificación de
sus productos o procesos:
> Necesidad de una labor más intensa de investigación y ensayo para verificar que el
producto o componente sustitutivo cumple con las normas correspondientes;
> Preocupación por la posibilidad de que sus competidores sigan produciendo y
comercializando productos con mercurio a un costo inferior al de los productos sin
mercurio;
> Conocimiento de otras técnicas necesarias para la producción de productos sin
mercurio;
> Normas internacionales que requieren, o parecen requerir, el producto con mercurio;
> En lo que respecta al proceso de fabricación, costo de los nuevos envases y de los
cambios en las actividades de comercialización.
La transición a productos sin mercurio puede ser difícil para los consumidores debido a:
> La falta de información y conciencia sobre los riesgos del mercurio y la disponibilidad de
alternativas;
> El costo del reemplazo y/o el costo más elevado de los productos sustitutivos sin
mercurio;
> Algunos productos con mercurio son componentes incorporados a otros productos,
como los interruptores que contienen mercurio instalados en equipos electrónicos;
> La falta de acceso de los comerciantes minoristas y los consumidores a proveedores de
productos sustitutivos que no contienen mercurio;
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> Los laboratorios científicos y médicos pueden tener barreras importantes para el cambio.
Algunas de las normas actuales se elaboraron en torno al uso de ciertos compuestos de
mercurio, que a veces se consideran necesarios para reproducir determinados análisis
en forma fiable. Además, los técnicos tienden a favorecer los procedimientos que conocen
bien y que han usado durante mucho tiempo.
¿Sabía usted que algunos productos para el cuidado de la piel contienen mercurio?
En algunas partes del mundo hay personas, especialmente mujeres, que usan productos
cosméticos como cremas y jabones que prometen aclararles el tono de la piel. El mercurio
es un compuesto farmacológico utilizado habitualmente en las cremas y jabones que aclaran
la piel.
Ejemplos regionales:
El uso de productos para aclarar la piel es muy común en los países africanos. Hay estudios
que indican que el porcentaje de mujeres que usan esos productos con regularidad en el Senegal,
Malí, el Togo, Sudáfrica y Nigeria es de 27%, 25%, 59%, 35% y 77% respectivamente. Muchas
mujeres han usado estos productos por períodos prolongados, a veces de hasta 20 años.
En 2004, más de un tercio (38%) de las mujeres encuestadas en Corea, Filipinas, Hong
Kong, Malasia y Taiwán usaban productos para aclarar la piel, lo que representa un aumento
en relación con el 34% observado en 2002. Según una encuesta realizada en junio de 2004,
el 61% de las encuestadas en Corea del Sur, Filipinas, Hong Kong, Malasia y Taiwán dijeron
que en su opinión se veían más jóvenes con el cutis más claro.
¿Cuáles son los riesgos?
> El uso del mercurio en productos cosméticos puede tener efectos adversos como
erupciones cutáneas (dermatitis de contacto y acné venenata), decoloración y cicatrices
(discromía postinflamatoria) y puede disminuir la resistencia de la piel a enfermedades
bacterianas y micóticas.
> La exposición directa y prolongada del organismo a través de la piel durante las reiteradas
aplicaciones puede provocar daños al cerebro, el sistema nervioso y los riñones.
¿Qué puede hacer usted?
> La medida de protección más segura es no usar estos productos.
> Si utiliza productos para aclarar la piel, use únicamente los que tengan etiquetas que
usted comprenda y que no contengan mercurio ni compuestos de mercurio. Consulte a
las autoridades locales para determinar si las etiquetas son válidas y correctas.
> Informe y advierta a su familia y amigos sobre este problema.
¿Qué pueden hacer los gobiernos?
> Se debería prohibir la fabricación y la importación de los productos para el cuidado de
la piel que se sabe que contienen mercurio, y cuando se encuentren productos de este
tipo deberían retirarse del mercado.
> El ministerio de salud debería advertir a los consumidores acerca de los productos que
se sabe que contienen mercurio, indicando su nombre comercial y, en lo posible,
mostrando fotos del envase.
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> Debería aconsejarse a las personas que utilizan cualquiera de estos productos que
suspendan su uso inmediatamente y se sometan a un examen médico.
> El ministerio de salud, las organizaciones de atención de la salud y los grupos de defensa
del consumidor deberían, en forma conjunta o separada, informar a los consumidores
publicando avisos en los medios de difusión que tengan mayores probabilidades de
llegar al sector de la población que usa productos para aclarar la piel (en su mayoría
mujeres).
> Esos avisos deberían:
- Alertar sobre la posibilidad de intoxicación por mercurio y las consecuencias de su
uso prolongado.
- Desaconsejar el uso de productos que aclaran la piel que contengan mercurio o
cualquiera de sus formas (azogue, cinnabaris (o sulfuro de mercurio), calomel (o
cloruro de mercurio) o hydrargyri oxydum rubrum (u óxido de mercurio) y yoduro de
mercurio).
- Desaconsejar el uso de productos que no especifiquen sus ingredientes o cuyos
ingredientes se indiquen en un idioma extranjero que el consumidor no
comprenda.
Algunos ejemplos de medidas que pueden tomar los gobiernos locales para
proteger a los consumidores de estos productos
En 2004, la Dirección de Fiscalización de Alimentos y Medicamentos de Indonesia (BPOM)
difundió una advertencia sobre 51 productos de belleza con contenido de mercurio y una
tintura carcinogénica que se estaban importando. Tras hacer una encuesta a nivel de la
población en todas las provincias, el BPOM encontró varias docenas más de productos
cosméticos que contenían sustancias químicas peligrosas, entre ellas mercurio. Sin embargo,
los productos importados no eran los únicos culpables. En enero de 2006, la policía de
Yakarta incautó 200 cajas de productos cosméticos con contenido de mercurio de una
pequeña fábrica del oeste de Yakarta.
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Entre 1998 y 1999, la Oficina de Normas de Kenya emitió un comunicado por los medios
de difusión para informar e instruir a los consumidores sobre los efectos nocivos del mercurio,
la hidroquinona y los preparados hormonales y agentes oxidantes presentes en algunos
productos cosméticos disponibles en el mercado. Estos productos no cumplían con las
normas vigentes y se habían usado indebidamente para aclarar la piel. La prohibición apunta
a proteger a los consumidores desprevenidos y a desalentar la introducción masiva de
estos productos a precios bajos en el mercado de Kenya. Los productos con mercurio y
compuestos de mercurio que se han identificado son: MOVATE, MEKAKO, JARIBU, TURA,
ACURA, RICO, FAIR LADY, ELEGANCE, MIKI, JAMBO, PIMPLEX MEDICATED CREAM,
NEW SHIRLEY MEDICATED CREAM.
En enero de 2005, el Departamento de Salud y Salud Mental de la ciudad de Nueva York
emitió una alerta sanitaria por la cual se recomendaba a los neoyorquinos que dejaran de
usar inmediatamente las cremas y jabones para aclarar la piel que tuvieran mercurio entre
sus ingredientes, así como todo otro producto cosmético en cuya etiqueta no se especificaran
los ingredientes. En ese momento, los productos disponibles en los comercios que tenían
mercurio entre sus ingredientes eran los siguientes: Miss Key Crema Blanqueadora, Santa
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Cream, Dermaline Skin Cream y Jabón Germicida. Estos cuatro productos se fabricaban
en la República Dominicana, pero en la alerta sanitaria de la Ciudad de Nueva York se indicó
que también se fabricaban productos similares para aclarar la piel en países europeos,
africanos y asiáticos.
En la Directiva 76/768/CEE de la Comunidad Europea (y sus modificaciones 2000/6/EU y
2000/11/EC), relativa a la aproximación de las legislaciones de los Estados Miembros en
materia de productos cosméticos, se establece que no puede emplearse el mercurio o sus
compuestos como ingrediente en productos cosméticos como jabones, lociones, champúes,
productos para aclarar la piel, etc. (con excepción de las sales de fenilmercurio como agente
conservador de las pinturas para ojos y en productos para retirar la pintura de los ojos en
concentraciones que no superen el 0,007% del peso).
Eliminación de desechos
¿Por qué es un problema la eliminación de desechos?
La eliminación inadecuada o incorrecta de los desechos puede redundar en la liberación
de sustancias tóxicas como el mercurio en el medio ambiente, donde pone en peligro a la
vida silvestre y a los seres humanos. La forma en que se recolectan, manejan, almacenan
y eliminan los desechos que se producen durante las actividades humanas puede muchas
veces repercutir negativamente en la salud pública y el medio ambiente.
Los asuntos relacionados con la gestión municipal de los desechos sólidos adquieren una
importancia creciente a medida que aumenta el conocimiento de los riesgos. El rápido
crecimiento de la población ha sobrepasado la capacidad de muchas autoridades municipales
para proporcionar hasta los servicios más básicos de manejo de desechos.
¿Qué sucede con el mercurio existente en los productos que se desechan?
Cuando se desechan, rompen o queman productos que contienen mercurio y éste se libera,
ese mercurio comienza a circular en la biosfera. El mercurio puede cambiar de forma, y
pasar por ejemplo de estado líquido a gaseoso, o de mercurio elemental a metilmercurio,
pero no se puede degradar, destruir o descomponer en formas menos nocivas porque es
un elemento natural.
La concentración de mercurio en la corriente de desechos depende directamente de la
cantidad de mercurio incorporada a los desechos, y por lo tanto es probable que haya
variaciones importantes según el país y las circunstancias. El contenido de mercurio de la
corriente general de desechos puede tener tres orígenes principales:
1) el mercurio utilizado intencionalmente en los productos desechados;
2) las impurezas de mercurio natural existentes en minerales y materiales de gran volumen
(plásticos, papel, etc.); y
3) el mercurio como oligocontaminante generado por actividades humanas que se encuentra
en materiales de gran volumen (por ejemplo, en productos reciclados).
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El contenido de mercurio de los desechos sólidos municipales dependerá de la proporción
de productos con mercurio presentes en esos desechos, así como de la existencia de
sistemas de recolección específicos para productos que contengan mercurio. Las fuentes
de mercurio más comunes de los residuos sólidos municipales son, entre otras, las pilas,
los artefactos eléctricos desechados, las lámparas fluorescentes, los desechos odontológicos,
los residuos de pintura, etc. Dependiendo del ciclo de vida de los distintos productos, las
fuentes del mercurio existente en los desechos reflejarán el uso que se haya hecho del
mercurio en distintos productos unos años antes de que el mercurio llegue a la corriente
de desechos.
El mercurio que se libera en un vertedero puede quedar expuesto al aire y volatilizarse, o,
a menos que el vertedero esté diseñado de una manera especial, puede entrar en el lixiviado
y en última instancia llegar a las aguas subterráneas.
En muchas partes del mundo, los desechos sólidos municipales se vierten sin control, a
veces en barrancos o humedales cerca de zonas residenciales, o se eliminan mediante la
quema al aire libre. Las emisiones tóxicas y los efluentes llegan a las aguas subterráneas
y a otras masas de agua, cercanas o ubicadas aguas abajo. En algunos lugares se hace
una limpieza periódica de los desechos acumulados en montones de basura al aire libre,
utilizando retroexcavadoras y camiones abiertos, creando un grave peligro de exposición
al polvo y los aerosoles. En otros lugares los desechos se queman al aire libre, emitiendo
humo tóxico.
La eliminación del mercurio y de los productos que contienen mercurio es especialmente
problemática cuando los desechos se queman, ya que el mercurio se volatiliza y queda en
el aire. Por este motivo el mercurio nunca debería quemarse. La emisión sin control de
gases de combustión de los incineradores de desechos y la quema de desechos al aire
libre liberan en la atmósfera el mercurio de los productos que lo contienen, y éste cae en
nuestros cursos de agua y sobre la tierra.
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El mercurio gaseoso volatilizado puede recorrer grandes distancias en la atmósfera, pero
a la larga se depositará nuevamente sobre la tierra. También puede introducirse en las
aguas residuales, especialmente cuando se eliminan por el desagüe productos químicos
de laboratorio que contienen mercurio, o productos como amalgamas dentales, que terminan
en los lodos de las aguas residuales o entran en el sistema de aguas superficiales. Cuando
se queman lodos de aguas residuales, el mercurio se libera en la atmósfera. Si el lodo se
extiende sobre campos agrícolas, el mercurio escapa al aire, penetra en el suelo y puede
ser absorbido por las plantas. También puede escurrirse a las aguas superficiales,
transformarse en metilmercurio y ser ingerido por los peces.
¿Cómo se deben manejar las sustancias peligrosas en la corriente de desechos?
Los materiales peligrosos, que conllevan riesgos potenciales en todas las etapas de su
manejo y eliminación, deben identificarse y aislarse de forma tal que las personas que manejan
esos desechos no sufran daños y que las sustancias, vapores y desechos peligrosos no se
introduzcan en el medio ambiente. El mercurio es un ejemplo de esta clase de desechos.
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Se encuentra en los productos mencionados en este módulo y a veces en los desechos
provenientes de usos culturales, medicinales o religiosos (véanse los módulos 4 y 5).
El manejo correcto de los materiales peligrosos requiere una combinación de enfoques que
tienen que ver con la tecnología, la legislación, el cumplimiento y la financiación. La creación
de un sistema de manejo de desechos peligrosos a nivel nacional o regional requiere una
inversión financiera importante, tanto al inicio como durante el funcionamiento. Los gastos
iniciales abarcan la preparación del lugar designado, la obtención de permisos, la construcción
y el equipo. Los gastos de funcionamiento comprenden mano de obra, suministros,
combustible para las máquinas que manejan los desechos, teneduría de libros, presentación
de informes, y capacitación y recursos para proteger la seguridad y la salud del personal.
Aunque la instalación finalmente se cierre, hay gastos permanentes de vigilancia y gestión,
y de cumplimiento de las normas reglamentarias.
En muchos países, sobre todo del mundo en desarrollo, aún no se han construido
instalaciones para desechos peligrosos debido a restricciones financieras. Si no hay recursos
suficientes para poner en práctica un proceso integral de manejo de desechos peligrosos,
debería darse prioridad a la tarea de separar los desechos peligrosos de los no peligrosos,
y a la de almacenar correctamente los primeros.
A fin de evitar o limitar la exposición al mercurio existente en los desechos, deberían tomarse
diversas precauciones:
> Los productos que contienen mercurio se deben separar de los demás desechos antes
de proceder a su eliminación;
> Si se almacenan, los desechos deben mantenerse en contenedores herméticos, para
evitar las fugas y la evaporación;
> Los desechos que contienen mercurio pueden reciclarse, y el mercurio recuperarse,
siempre y cuando se tomen precauciones especiales para asegurar que todas las
emisiones de mercurio derivadas de este proceso estén por debajo de los límites fijados
por las normas convenidas internacionalmente;
> Los desechos con muy bajas concentraciones de mercurio se pueden desechar en
vertederos aprobados;
> Otros desechos de mercurio pueden tratarse y luego descartarse únicamente en vertederos
especiales para desechos peligrosos, o en depósitos subterráneos a gran profundidad;
> Los desechos con contenido de mercurio no deben nunca quemarse o incinerarse, a
menos que existan mecanismos especiales de control de los gases de combustión que
permitan capturar el mercurio.
¿Qué pasa si se derrama mercurio en el hogar o en un lugar público?
Muchas veces se libera mercurio elemental en el hogar o en un centro de atención de la
salud, cuando se rompe un producto o instrumento que contiene mercurio (por ejemplo,
termómetros para la fiebre, lámparas fluorescentes o instrumentos médicos o de laboratorio).
Cuando cae, el mercurio elemental se separa en bolitas diminutas que se esparcen por el
suelo y que pueden introducirse con facilidad en cualquier ranura pequeña. El mercurio
elemental no se absorbe fácilmente por la piel, pero no debe manipularse, ni siquiera con
guantes de goma. El principal peligro para la salud que representa un derrame es la inhalación
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a lo largo del tiempo del vapor que emana de las partículas de mercurio que han quedado
dispersas en una vivienda o lugar de trabajo. Los derrames de mercurio son particularmente
peligrosos en espacios cerrados y sobre todo para los niños, porque el vapor del mercurio
es más pesado que el aire y se deposita en el suelo. Por ello es fundamental que se haga
un manejo correcto de los derrames de mercurio. Aunque el mercurio puede tener la
apariencia de pequeñas bolitas caídas en el suelo, se necesita un procedimiento de limpieza
especial para que el problema no se agrave.
Las autoridades locales del sector de la salud o encargadas del manejo de los desechos
deberían familiarizarse con los procedimientos de limpieza de derrames, y trabajar en
colaboración con las demás autoridades locales para difundir estas instrucciones. En la
página siguiente puede verse un ejemplo de instrucciones. Además, los proveedores de
servicios de salud y el público deberían tener acceso a instalaciones adecuadas de
almacenamiento y eliminación de desechos contaminados con mercurio
·
Directrices para manejar un derrame pequeño de mercurio
Los 10 pasos a seguir en caso de un derrame de mercurio
(por ejemplo, cuando se rompe un termómetro)
å Haga salir a las personas (especialmente a los niños) del lugar del derrame.
ç Si alguien tiene mercurio en los zapatos, que se los quite para no seguir
esparciendo el mercurio. No permita que los niños ayuden a limpiar. Si fue un niño
quien derramó el mercurio, se debe suponer que su ropa está contaminada. Se le
debe quitar la ropa y colocarla en una bolsa de plástico sellada.
14
é Abra las puertas y ventanas para ventilar la vivienda o lugar de trabajo. Si es
posible, mantenga la temperatura por debajo de los 20º C para disminuir la velocidad
de volatilización del mercurio en el aire.
è Si hay vidrios rotos, recójalos con cuidado, usando guantes. Colóquelos en un
recipiente de paredes rígidas que se pueda sellar.
ê Use un trozo de cartón o un papel doblado a modo de pala para juntar las bolitas
de mercurio. NO utilice una escoba ni una aspiradora, ya que sólo servirían para
esparcir el mercurio. Use cinta adhesiva, un cuentagotas o un poco de crema de
afeitar sobre un pincel pequeño para recoger las bolitas más pequeñas de mercurio,
y colóquelas en un recipiente de plástico que se pueda cerrar herméticamente.
Haga esto lentamente y con cuidado para que las bolitas no se dispersen.
ë Use una linterna para buscar otras bolitas de mercurio que puedan haber
quedado adheridas a la superficie o atrapadas en ranuras pequeñas de ésta. El
mercurio puede recorrer distancias sorprendentes en superficies lisas y duras.
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Otras consideraciones importantes:
~ Nunca se deshaga del mercurio arrojándolo por un desagüe ni ponga en el lavarropas
ropa contaminada con mercurio. El mercurio puede quedar adherido a las cañerías y
permanecer en la vivienda o el lugar de trabajo, volatilizándose lentamente. Si se descarga,
puede contaminar los cursos de agua locales.
~ Mantenga las ventanas abiertas durante un día entero para ventilar completamente
el lugar en que se produjo el derrame. Mientras tanto, aleje a las personas de allí.
~ Observe atentamente a las personas que pueden haber estado expuestas para
determinar si presentan síntomas como temblores, acrodinia o síntomas neurológicos.
En caso de duda consulte a un médico. Los médicos pueden determinar la
contaminación y los riesgos para la salud midiendo las cantidades de mercurio en la
sangre, la orina, la leche materna, las uñas y el cabello.
~ Reemplace el dispositivo roto por otro que no contenga mercurio.
í Si el derrame se produce sobre una alfombra o tapizado, recorte el área
afectada, colóquela en una bolsa de plástico y cierre la bolsa herméticamente.
ì Si el mercurio se va por el desagüe, desarme la cañería y retire cualquier
resto de mercurio que haya quedado en los codos en forma de “J” o “S”. Si el
mercurio permanece allí, emitirá vapores tóxicos en la vivienda o lugar de trabajo.
î Si dispone de polvo de azufre, éste hará que sea más fácil ver el mercurio
y evitar que se volatilice. Espolvoree un poco de polvo de azufre sobre la zona
del derrame; si adquiere una tonalidad marrón, significa que aún quedan restos
de mercurio; si continúa de color amarillo, es porque no quedan. Recuerde que
el azufre mancha las telas.
ï Coloque la ropa, las alfombras, los tapizados y demás elementos
contaminados en bolsas de plástico selladas y etiquételas como desechos
peligrosos. Saque las bolsas al exterior, colóquelas en un lugar inaccesible para
los niños y los animales y consulte a las autoridades locales sobre la forma de
deshacerse de ellas adecuadamente. Si no existen mecanismos previstos para
la eliminación de desechos peligrosos, deseche el material contaminado de
manera de reducir al mínimo la exposición de las personas al mercurio y la
posibilidad de que éste se vuelva a diseminar en zonas habitadas.
Fuente: Este procedimiento se adaptó del que figura publicado en el sitio web de
USEPA, http://epa.gov/mercury/disposal.htm
15
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¿Qué pueden hacer los gobiernos para disminuir la exposición al mercurio
existente en la corriente de desechos?
Los gobiernos pueden aprobar políticas destinadas a reducir el mercurio en la corriente de
desechos y pueden promover alternativas técnicas para evitar el uso de mercurio en los
productos. Se pueden contemplar tanto medidas reglamentarias como técnicas.
MEDIDAS REGLAMENTARIAS
Los gobiernos pueden optar por reglamentar el uso deliberado del mercurio en productos
y procesos y al mismo tiempo limitar la importación, la fabricación a nivel nacional y la
exportación de productos que contengan mercurio. Por ejemplo, en 1993 Suecia prohibió
o eliminó gradualmente la fabricación, importación y venta de termómetros, barómetros,
manómetros, interruptores basculantes, interruptores de flotación, interruptores de presión,
termostatos, relés y otros instrumentos de medición.
Se pueden dictar normas reglamentarias para ordenar y financiar la creación de un programa
de recolección, manejo y almacenamiento de desechos con mercurio en virtud del cual los
desechos mercuriales se retiren de los hospitales, hogares, plantas industriales y otros lugares,
y se almacenen en un lugar seguro (véase el recuadro sobre el manejo de los excedentes de
mercurio). Un elemento de ese programa podría ser el canje de los termómetros de mercurio
– es decir, que las personas canjeen sus termómetros de mercurio por dispositivos digitales.
Las medidas reglamentarias pueden incluir incentivos económicos o financieros. Por ejemplo,
si se grava con impuestos a todos los productos que contengan mercurio por el riesgo
potencial que entrañan, habrá un incentivo financiero para sustituir esos productos por
otros que no tengan mercurio. Si la eliminación correcta de los desechos peligrosos es
costosa, se estimulará a las industrias a reducir la cantidad de desechos peligrosos que
producen. Los fondos generados por la aplicación de estas medidas podrían utilizarse para
promover el retiro de la venta y la eliminación segura del mercurio y los productos con
mercurio que ya se hubiesen adquirido.
16
Los gobiernos podrían exigir que los productores asuman una responsabilidad más amplia
por los productos que contienen mercurio. En virtud de esa responsabilidad extendida de
los productores, se cobraría a los fabricantes y/o importadores de artículos que contienen
mercurio unos derechos anticipados que se usarían para cubrir el costo de los derrames y
su limpieza, todo lo cual haría del mercurio un elemento menos deseable desde el punto de
vista económico. En este tipo de programas también se pueden incluir políticas de devolución
de productos, requisitos de información y etiquetado y planes de depósito y reembolso.
Otras medidas reglamentarias posibles son:
> Exigir que se recupere el mercurio contenido en los desechos de procesos industriales.
> Fiscalizar la comercialización y venta de mercurio recuperado o reciclado.
> Prohibir el vertido ilegal de desechos.
> Exigir que se etiqueten los productos con mercurio agregado y que en la etiqueta se
incluya información sobre la forma correcta de eliminar el producto.
> Exigir que los productos con mercurio agregado se separen en la corriente de desechos,
y que el mercurio que contienen se recicle o se elimine como residuo peligroso.
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> Implantar una estrategia de ordenación ambiental que incluya la vigilancia responsable
y la observancia de las normas relativas al mercurio, el seguimiento de todos los
movimientos del mercurio (desde la materia prima hasta el residuo, pasando por el proceso
y el producto), y evaluaciones periódicas independientes.
> Fiscalizar y restringir el transporte transfronterizo de mercurio y otros desechos peligrosos.
> Exigir que los desechos o el material con mercurio almacenados in situ en una planta
industrial o comercial se coloquen en contenedores herméticos y a prueba de agua, y
que la empresa lleve un registro completo y tenga un plan y un cronograma escritos para
la correcta eliminación del material.
> Exigir que las industrias que fabrican productos con mercurio preparen un balance anual
del mercurio, que indique cuánto mercurio se incorporó a los procesos y cuánto se emitió.
> Exigir que los vertederos obtengan un permiso y estén preparados para recibir la clase
de desechos peligrosos que aceptan.
MEDIDAS TÉCNICAS
El Convenio de Basilea sobre el control de los movimientos transfronterizos de los desechos
peligrosos y su eliminación ha elaborado una serie de directrices técnicas pertinentes sobre
la gestión ecológicamente racional de los desechos domésticos, que constituyen un buen
punto de partida para encarar el manejo de desechos peligrosos como el mercurio. En la
siguiente dirección de Internet se pueden consultar varias directrices técnicas del Convenio
de Basilea sobre desechos: www.basel.int/meetings/sbc/workdoc/techdocs.html.
En general:
Implantar una estrategia de ordenación ambiental que incluya la vigilancia responsable y la
observancia de las normas relativas al mercurio, el seguimiento de todos los movimientos
del mercurio (desde la materia prima hasta el residuo, pasando por el proceso y el producto),
y controles periódicos independientes.
Establecer puntos de recolección a los que el público pueda fácilmente llevar estos productos
por separado.
Las medidas de pretratamiento de los desechos de mercurio pueden incluir la prohibición
o limitación de la liberación de mercurio en el medio ambiente, separando el mercurio y los
elementos que contienen mercurio de los desechos domésticos, los desechos peligrosos
y los desechos médicos.
Los gobiernos pueden participar en estos esfuerzos, ayudando a las instalaciones a
prepararse para aceptar desechos peligrosos, por ejemplo mediante la instalación de
membranas para impedir que el mercurio se evapore o se infiltre, o para recolectar y tratar
los efluentes de los vertederos y realizar pruebas de rutina y a largo plazo de la calidad del
agua subterránea y de las emisiones aéreas de las instalaciones.
Cuando no exista en las cercanías una instalación de eliminación final, los gobiernos pueden
considerar la posibilidad de crear una instalación para el manejo de los excedentes de
mercurio diseñada para impedir que el mercurio se libere en el medio ambiente y reducir al
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mínimo los riesgos de exposición de los seres humanos. Debería destinarse un lugar bien
ventilado para el almacenamiento de los bidones de recolección de los desechos de
mercurio. Estos bidones de acero deben tener un recubrimiento interior y colocarse sobre
losas de hormigón. Además, deben estar al abrigo de la lluvia y tener elementos de seguridad
que impidan que sean hurtados o abiertos por personas no autorizadas. Los instrumentos
médicos rotos u obsoletos pueden colocarse en estos bidones junto con el mercurio
proveniente de operaciones de limpieza (los residuos que queden después de los
procedimientos de limpieza de derrames de mercurio en la instalación). Estas instalaciones
deberían elaborar un plan de recolección de desechos de mercurio que establezca
procedimientos y describa responsabilidades. Antes de comenzar las operaciones, debe
haber un calendario establecido que indique cuándo se retirará el mercurio para su
procesamiento, manejo adecuado y eliminación.
Otras medidas educativas útiles podrían ser las siguientes:
> Instruir al público sobre la forma correcta de eliminar los productos que contienen mercurio,
así como otros desechos peligrosos.
> Establecer varios indicadores clave y dar publicidad a los progresos que se realicen con
respecto al manejo responsable del mercurio.
¿Qué puede decirse de la incineración de desechos?
La incineración es uno de los tantos métodos de manejo centralizado de desechos que se
usan en todo el mundo. Se incineran diversas categorías de desechos, entre ellos desechos
sólidos municipales, desechos médicos, lodos de aguas residuales y desechos peligrosos.
Debido a su bajo punto de ebullición, la mayor parte del mercurio existente en los desechos
que se incineran se libera térmicamente durante el proceso de combustión, se emite
directamente a la atmósfera y vuelve a la tierra con la lluvia o como deposición seca.
18
Se consideran desechos médicos los generados por diversas instalaciones médicas y
veterinarias como los hospitales, clínicas y consultorios médicos y odontológicos, hogares
de ancianos, clínicas veterinarias, laboratorios médicos y facultades de medicina y veterinaria
y sus unidades de investigación. Los desechos médicos abarcan una amplia gama de
vendajes descartables, sangre, productos farmacéuticos y otra clase de material y equipo
utilizados para el tratamiento médico de personas o animales. Estos desechos se suelen
eliminar mediante incineración, para destruir eficazmente los virus, bacterias y patógenos.
A veces los desechos médicos se incineran en incineradores específicos, y otras veces en
incineradores municipales seleccionados, equipados para ese fin.
La información disponible indica que los incineradores de desechos médicos pueden ser
una fuente importante de emisiones de mercurio. El contenido de mercurio de la corriente
de desechos médicos se origina primordialmente en el mercurio existente en sustancias
químicas y productos descartados, en particular termómetros, material odontológico con
amalgamas de mercurio, pilas, productos químicos de laboratorio, productos farmacéuticos,
lámparas fluorescentes, lámparas de descarga de alta intensidad (vapor de mercurio, metal
halógeno y sodio de alta presión), recubrimientos especiales de papel o lámina transparente,
y pigmentos. En lo posible, las fuentes de mercurio se deben separar de la corriente de
desechos antes de la incineración.
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Una cuestión que preocupa en relación con los incineradores de desechos médicos y
municipales es la eliminación de las cenizas residuales que pueden tener un alto contenido
de mercurio, y el mercurio capturado por los sistemas de control de la contaminación.
¿Qué pueden hacer los gobiernos con respecto al mercurio
que se libera de los incineradores?
Algunas medidas que podrían adoptarse para controlar las emisiones son:
> Exigir el uso de la mejor tecnología disponible para reducir o evitar las emisiones de
mercurio.
> Verificar que los desechos de mercurio se incineren únicamente en instalaciones equipadas
para el manejo de desechos peligrosos, con la mejor tecnología disponible (por ejemplo,
captadores de polvo y mecanismos de regulación de la salida de los gases de combustión).
> Crear una instalación (quizás en colaboración con un país vecino) para la eliminación final
o el confinamiento de los desechos tratados que tengan una concentración tan alta de
mercurio (y otras sustancias) o sean tan peligrosos en el largo plazo que no puedan
eliminarse responsablemente de otra manera.
> Es necesario que existan leyes sobre las emisiones de los incineradores para poder llegar
a establecer mecanismos importantes de control de esas emisiones. Sin embargo, las
leyes por sí solas no bastan para garantizar la observancia de la reglamentación. Debe
existir además un sistema serio de cumplimiento, en el que la autoridad pertinente no
tenga solamente la facultad de hacer cumplir estrictamente la legislación aplicable, sino
también la competencia técnica necesaria para comprender los mecanismos de control
de las emisiones y los métodos de medición.
Otras consideraciones relativas al mercurio presente en los desechos
Lodos de aguas residuales
Gran parte del mercurio contenido en las aguas residuales municipales (proveniente de diversas
fuentes, pero principalmente de desechos de amalgamas dentales) termina en los lodos de
aguas residuales. Estos son el producto de los procesos de tratamiento de las aguas residuales
de cualquier origen (por ejemplo, aguas residuales de actividades municipales, agrícolas o
industriales) y generalmente se incineran o se aplican sobre el suelo como fertilizante. Es
importante conocer el contenido de mercurio de los lodos de las aguas residuales.
Desechos peligrosos
El contenido de mercurio de la corriente de desechos peligrosos se origina principalmente
en el mercurio utilizado deliberadamente en los productos desechados y en los residuos
de diversos procesos. Algunos desechos peligrosos se incineran como parte del sistema
de tratamiento y eliminación. Los desechos peligrosos son los residuos y desechos que
contienen un volumen considerable de materiales peligrosos. Es importante señalar que
generalmente no deberían incinerarse los desechos que tienen una alta concentración de
mercurio, sino que es preferible clasificarlos (si es posible) y tratarlos por separado. No
obstante, en la práctica esto no siempre es posible. Por lo tanto, cuando no hay otra
alternativa que incinerar los desechos peligrosos con contenido de mercurio, es necesario
implantar mecanismos de control de las emisiones, ya que la incineración puede ser una
fuente importante de emisiones de mercurio.
19
ESTUDIO DE CASO 5: DINAMARCA – REDUCCIÓN Y SUSTITUCIÓN
DEL MERCURIO CONTENIDO EN LOS PRODUCTOS
ESTUDIO DE CASO 6: MASSACHUSETTS – GRACIAS A LA
REDUCCIÓN DE LAS EMISIONES A NIVEL LOCAL Y REGIONAL,
BAJAN LOS NIVELES DE MERCURIO EN ALGUNOS PECES
20
20-21
ESTUDIO DE CASO 5:
DINAMARCA – REDUCCIÓN Y SUSTITUCIÓN DEL MERCURIO
CONTENIDO EN LOS PRODUCTOS
En los últimos años, el Gobierno de Dinamarca ha decidido estimular el uso de sucedáneos
de los productos con contenido de mercurio, incluso mediante la prohibición de la venta
y la utilización de la mayoría de los productos que lo contienen. Al igual que en otros países,
se observó una disminución importante del consumo de mercurio para uso intencional.
Durante el período comprendido entre 1983 y 1993, el consumo anual de mercurio para
uso intencional se redujo de alrededor de 16 toneladas métricas en 1982-1983, a 6 toneladas
métricas en 1992-1993, y siguió disminuyendo hasta llegar a 1,5 toneladas métricas en
2000-2001. Durante el mismo período, las emisiones al medio ambiente disminuyeron de
un volumen estimado de entre 6,9 y 9,9 toneladas métricas en 1983, a un nivel de entre
2,3 y 3,0 toneladas métricas en 1992-1993 (de las cuales entre 0,3 y 0,8 toneladas
correspondían a cantidades minúsculas de mercurio presentes en combustibles y minerales).
Las cantidades depositadas en vertederos controlados aumentaron durante el mismo
período, de entre 1,7 y 2,9 toneladas métricas a un volumen de entre 2,3 y 4,5 toneladas,
probablemente como consecuencia del aumento registrado en la recolección de desechos
peligrosos (lo que refleja el contenido de mercurio de productos usados, pilas, etc.) y de
un mejor filtrado de las emisiones de los incineradores de desechos.
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ESTUDIO DE CASO 6:
MASSACHUSETTS – GRACIAS A LA REDUCCIÓN DE LAS EMISIONES
A NIVEL LOCAL Y REGIONAL, BAJAN LOS NIVELES DE MERCURIO
EN ALGUNOS PECES
En el noreste de Massachusetts, en una zona en la que funcionan varios incineradores de
desechos que fueron grandes fuentes de emisiones en la década de los noventa, en cerca
del 100% de las masas de agua analizadas los peces tenían altos niveles de mercurio. En
1998 se elaboraron unos modelos de deposición de mercurio que demostraron que esa
parte del noreste de Massachusetts era una “zona crítica”, que tenía la tasa más alta de
deposición de mercurio atmosférico de la región de Nueva Inglaterra (NESCAUM, 1998).
A fin de contrarrestar los efectos ambientales, de salud pública y económicos atribuibles a
la contaminación por mercurio, los gobernadores de Nueva Inglaterra y los primeros ministros
del este del Canadá aprobaron una meta regional binacional de “eliminación prácticamente
total” del mercurio antropogénico y un Plan de Acción sobre el Mercurio en 1998. En el año
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Como resultado de estas y otras iniciativas de gran alcance, el total de emisiones de mercurio
en Massachusetts se redujo aproximadamente un 70% en todo el estado y alrededor de
un 87% en las fuentes ubicadas en la “zona crítica” señalada más arriba. En muchos estados
de la región de Nueva Inglaterra las emisiones se redujeron entre un 60% y un 70%, y a
nivel regional disminuyeron más del 55%. Las emisiones seguirán disminuyendo a medida
que comiencen a aplicarse algunas normas que están pendientes de aprobación (por ejemplo,
la reglamentación relativa a las plantas de generación de energía por combustión de carbón).
E
En el marco de estas estrategias, Massachusetts y la región en su conjunto formularon y
están ejecutando algunos de los programas más eficaces de América del Norte, y quizás
del mundo, de reducción de la contaminación por mercurio y de vigilancia de sus
repercusiones en el medio ambiente. En Massachusetts el programa establece requisitos
estrictos pero viables con respecto al control de las fuentes de mercurio del estado. La
reglamentación sobre los incineradores de basura (la fuente más importante de
Massachusetts y de la región en 1998), que entró en vigor en el año 2000, ha logrado
reducir en más de un 90% las emisiones procedentes de esta categoría de fuentes. Las
emisiones de los incineradores de desechos médicos se han eliminado porque los centros
de atención de la salud, en respuesta a los rigurosos límites impuestos a las emisiones de
mercurio y dioxinas, optaron por utilizar otros métodos de esterilización que no emiten
grandes cantidades de mercurio.
S
2000 Massachusetts aprobó una Estrategia de Mercurio Cero para todo el estado. Estos
planes amplios se basaron en evaluaciones científicas y normativas que definían el alcance
de los efectos del mercurio y establecieron inventarios regionales y estaduales de fuentes
de mercurio. En los planes se fijó el objetivo a largo plazo de eliminar prácticamente toda
la contaminación por mercurio antropogénico de la región, y metas intermedias con plazos
concretos, a saber: una reducción de 50% para 2003 y de 75% para 2010.
A
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Las pruebas realizadas en peces en el estado de Massachusetts han revelado reducciones
considerables en los niveles de mercurio en las dos especies de peces de agua dulce
analizadas. Las reducciones más importantes se observaron en el noreste del estado, en
la “zona crítica” mencionada anteriormente, donde se registró la mayor reducción de las
emisiones de mercurio. Entre 1999 y 2004, las concentraciones de mercurio en las percas
canadienses de los lagos de la “zona crítica” disminuyeron alrededor de un 32% en promedio,
mientras que en los lagos de otras partes del estado la reducción fue aproximadamente
del 15%. En el caso de las percas atruchadas, la disminución en la “zona crítica” fue de
24% en promedio y en otras partes del estado de aproximadamente 19%. Estos resultados
son alentadores y sugieren que la adopción de medidas a nivel local puede redundar en
mejoras sustanciales con relativa rapidez (http://mass.gov/dep/toxics/stypes/hgtrend.doc).
21
AGRADECIMIENTO
Este estudio de caso fue proporcionado por C. Mark Smith, de la Oficina de Investigación
y Normas del Departamento de Protección Ambiental de Massachusetts, Boston,
Massachusetts.
Sitio web del Convenio de Basilea:
http://www.basel.int/
Draft Wisconsin Mercury Sourcebook
http://www.epa.gov/glnpo/bnsdocs/hgsbook/ed.pdf
A
Nota informativa sobre productos que contienen mercurio y sus sucedáneos.
http://www.informinc.org/fsmercalts.pdf
Interruptores industriales, relés, etc.
http://www.informinc.org/fact_P3industrialmeters.php
Northeast Waste Management Officials' Association (NEWMOA)
http://www.newmoa.org/prevention/mercury/
PNUMA (2005), Instrumental para la identificación y cuantificación de liberaciones de
mercurio. En inglés en:
http://www.chem.unep.ch/mercury/Toolkit/UNEP-final-pilot-draft-toolkit-Dec05.pdf
PNUMA (2006), Guía para disminuir los principales usos y emisiones de mercurio
En inglés en: www.chem.unep.ch/mercury/Sector%20Guide%202006.pdf
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INFORMACIÓN:
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22
US EPA (Organismo para la Protección del Medio Ambiente, EE.UU.), página web del
programa “Environmentally Preferable Purchasing”.
http://www.epa.gov/opptintr/epp/
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E
R
NRC (2000), Waste Incineration and Public Health. Comité sobre los efectos de la incineración
de desechos en la salud, Junta de estudios ambientales y toxicología, Consejo Nacional
de Investigación. http://newton.nap.edu/openbook.php?record_id=5803&page=1
F
Kurttio, P., J. Perkanen, G. Alfthan, M. Paunio, J.J.K. Jaakkola, y O.P. Heinonen (1998),
Increased mercury exposure in inhabitants living in the vicinity of a hazardous waste
incinerator. Archives of Environmental Health 53(2), págs. 129 a 138.
E
Allsopp, M., Costner, P., y Johnston, P. (2001), INCINERATION AND HUMAN
HEALTH: State of Knowledge of the Impacts of Waste Incinerators on Human Health.
Laboratorios de investigación de Greenpeace,
http://archive.greenpeace.org/toxics/reports/euincin.pdf
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PNUMA (2002), Global Mercury Assessment. División de Productos Químicos del Programa
de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, Ginebra (Suiza).
USGS (1998). Servicios de prospección geológica de China y los EE.UU. Working Together
on Environmental Issues. USGS News Release, 23 de junio de 1998.
AGRADECIMIENTOS
Mercury Policy Project
Secretaría del Convenio de Basilea
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Derechos reservados ©Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, 2008
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razonables para verificar la información que figura en la presente publicación, este material se distribuye
sin garantías expresas o implícitas de especie alguna. El PNUMA no se hace responsable de las
posibles inexactitudes u omisiones que surjan de ella ni de las consecuencias que éstas puedan tener.
La responsabilidad por la interpretación y el uso del material recae sobre el lector. Ni el PNUMA ni las
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Tel.:++254-(0)20-62 12 34
Fax.:++254-(0)20-62 39 27
Los gobiernos han acordado que
existen pruebas suficientes de
los significativos efectos
adversos debidos al mercurio y a
sus compuestos, que justifican la
adopción de medidas al
respecto. Esta publicación se
elaboró para aumentar la
concienciación en algunos países
y regiones entre los interesados
directos sobre los efectos del
mercurio en la salud humana y
en el medio ambiente. Se espera
que ayude a los ciudadanos, a
los gobiernos y a los encargados
de la atención sanitaria a apoyar
y adquirir la capacidad para
reducir o eliminar los usos del
mercurio, así como sus
liberaciones y la exposición al
mismo.
Se compone de cinco módulos.
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Subdivisión de Productos Químicos
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