ADDENDA Nota del autor.El “Derecho Procesal Penal” de la colección “práctica jurídica” de Tecnos, fue publicado en noviembre de 2015 con la confesada vocación de ser, primordial aunque no exclusivamente, un texto utilizable en la preparación de la oposición para el ingreso en las carreras judicial y fiscal, a sabiendas de que futuras convocatorias forzosamente habrían de incluir cambios en la configuración del programa de la oposición. Aprobado éste por acuerdo de la Comisión de Selección de 18 de diciembre de 2015, publicado en el BOE nº 306, de 23 de diciembre de 2015 por el que se convoca el proceso de selección, comprobamos que las modificaciones introducidas exceden de la simple adaptación a las nuevas reformas legales y son de tal magnitud que hacen necesaria la publicación de esta addenda, que comprende unas indicaciones generales para toda la obra y otras particulares para determinados temas afectados por la modificación del programa. Publicada también la convocatoria de la oposición al Cuerpo de Letrados de la Administración de Justicia (BOE de 7 de enero de 2016), no hay cambios en el programa, no obstante lo cual resultan evidentemente de aplicación la nota general y las correcciones de los temas 16 (decisión judicial sobre su situación personal), 18 (artículos de previo pronunciamiento) y 35 (efectos de la sentencia de revisión). A) Nota general para todos los temas: Con carácter general, aparte de adaptar la nueva numeración de los temas es preciso realizar una serie de correcciones puramente terminológicas impuestas por las nuevas denominaciones adoptadas por la legislación vigente. Resulta ocioso decir que cuando se trate de citas literales sea de normas legales, criterios jurisprudenciales u opiniones doctrinales anteriores a la reforma, se ha de mantener la antigua 1 terminología valorando si debe hacerse la aclaración oportuna a la nueva denominación de la institución de que se trate o al cambio legislativo operado. Entre otros, deben hacerse los siguientes cambios: 1º En aplicación de la disposición adicional primera de la LO 7/2015, de reforma de la LOPJ, todas las referencias a los Secretarios judiciales deberán entenderse hechas a Letrados de la Administración de Justicia. 2º La supresión del Libro III del Código Penal llevada a cabo por la LO 1/2015 debe llevar a la eliminación del término faltas y, cuando proceda, su sustitución por delitos leves. 3º La misma LO 1/2015 impone los siguientes cambios: 1. Todas las referencias contenidas en la Ley Orgánica 10/1995, de 23 de noviembre, del Código Penal, a los términos «incapaz» o «incapaces» se sustituyen por los términos «persona con discapacidad necesitada de especial protección» o «personas con discapacidad necesitadas de especial protección». 2. Todas las referencias contenidas en la Ley Orgánica 10/1995, de 23 de noviembre, del Código Penal, al término «minusvalía» se sustituyen por el término «discapacidad.» 3. Todas las referencias contenidas en la Ley Orgánica 10/1995, de 23 de noviembre, del Código Penal, al Rey se sustituyen por los términos «Rey o Reina». 2. Todas las referencias contenidas en la Ley Orgánica 10/1995, de 23 de noviembre, del Código Penal, al Príncipe heredero de la Corona se sustituyen por «Príncipe o Princesa de Asturias». 4. Todas las referencias contenidas en la Ley Orgánica 10/1995, de 23 de noviembre, del Código Penal, al término “comiso” se sustituyen por el término “decomiso”. 4º De conformidad con el art. 20 de la Ley Orgánica 13/2015, que establece para determinados preceptos la sustitución del término imputado por los de investigado o encausado, debe llevarse a cabo, con carácter general, dicha sustitución teniendo en cuenta para ello los criterios que se expresan en el párrafo 2 primero de la página 212 del manual, que, en síntesis, asocian el término investigado a la fase de instrucción y el de encausado a la fase intermedia del proceso penal. Correcciones y adiciones a los temas afectados por la reforma del programa: TEMA 5 En pág. 79 debe añadirse el siguiente epígrafe: El perjudicado.- Diferencia la doctrina penal los conceptos de ofendido y perjudicado; aquél es el sujeto pasivo del delito, titular del bien jurídico tutelado por la norma penal transgredida, éste, el que sufre en su esfera patrimonial los efectos nocivos de la acción. La cualidad de ofendido es, como regla general, personal e intransmisible, en tanto que la de perjudicado es susceptible de sucesión procesal. La consecuencia práctica de esta distinción es que es el ofendido quien ostenta la legitimación activa para el ejercicio de la pretensión penal, en tanto que el perjudicado la tiene para el ejercicio de la pretensión civil de resarcimiento, si bien a ambos ha de hacerse el llamado ofrecimiento de acciones. Aunque la LECrim en ocasiones utiliza indistintamente y sin demasiado rigor los términos perjudicado y ofendido, en otros diferencia netamente uno y otro en el sentido doctrinal. Así, refiriéndose al perjudicado, como concepto distinto del de ofendido, dice el art. 110 LECrim que “Los perjudicados por un delito o falta que no hubieren renunciado a su derecho podrán mostrarse parte en la causa si lo hicieran antes del trámite de calificación del delito y ejercitar las acciones civiles que procedan, según les conviniere, sin que por ello se retroceda en el curso de las actuaciones. Aun cuando los perjudicados no se muestren parte en la causa, no por esto se entiende que renuncian al derecho de restitución, reparación o 3 indemnización que a su favor puede acordarse en sentencia firme, siendo necesario que la renuncia de este derecho se haga en su caso de una manera clara y terminante». Por su parte, el art. 771, en la regulación del procedimiento abreviado, “En el tiempo imprescindible y, en todo caso, durante el tiempo de la detención, si la hubiere, la Policía Judicial practicará las siguientes diligencias: 1.ª Cumplirá con los deberes de información a las víctimas que prevé la legislación vigente. En particular, informará al ofendido y al perjudicado por el delito de forma escrita de los derechos que les asisten de acuerdo con lo establecido en los artículos 109 y 110. Se instruirá al ofendido de su derecho a mostrarse parte en la causa sin necesidad de formular querella y, tanto al ofendido como al perjudicado, de su derecho a nombrar Abogado o instar el nombramiento de Abogado de oficio en caso de ser titulares del derecho a la asistencia jurídica gratuita, de su derecho a, una vez personados en la causa, tomar conocimiento de lo actuado, sin perjuicio de lo dispuesto en los artículos 301 y 302, e instar lo que a su derecho convenga. Asimismo, se les informará de que, de no personarse en la causa y no hacer renuncia ni reserva de acciones civiles, el Ministerio Fiscal las ejercitará si correspondiere”. No obstante, la Ley 4/2015, del Estatuto de la víctima del delito, introduce un nuevo concepto, el de víctima, y lo perfila en términos tan amplios, diferenciando entre víctimas directas e indirectas, que engloba tanto al ofendido como al perjudicado, excluyéndose de tal concepto únicamente a los terceros que hayan sufrido perjuicios derivados del delito (art. 2, párrafo segundo). TEMA 6 Se incluye completo. TEMA 7 Debe sustituirse el párrafo último de la página 88 y primero de la 89 por los párrafos siguientes: En el caso de personas jurídicas, la especialidad más notable es que pueden éstas designar a una persona física para que intervenga en las diligencias de 4 investigación o de prueba anticipada (art. 120) o, incluso, en el juicio oral en defensa y representación de la persona jurídica (art. 786 bis), pero ni la falta de designación de representante ni la incomparecencia de la persona especialmente designada impedirá la realización del acto o la celebración de la vista, que se llevará a cabo con la presencia del Abogado y Procurador de la persona jurídica imputada. No es ninguna particularidad que el art. 119 LECrim ordene que al tiempo de la primera citación se requiera a la persona jurídica para que designe Abogado y Procurador, con la advertencia de que, en caso de no hacerlo, se procederá a la designación de oficio; pero sí que la designación del Procurador sustituirá a la indicación del domicilio a efectos de notificaciones, practicándose con el Procurador designado todos los actos de comunicación posteriores, incluidos aquellos a los que esta Ley asigna carácter personal. Si el Procurador ha sido nombrado de oficio se comunicará su identidad a la persona jurídica imputada. TEMA 10 Además de acomodar los epígrafes al nuevo orden que establece ahora el programa, en pág. 137 añadid el siguiente epígrafe: El plazo para la instrucción.- La nueva redacción dada al art. 324 LECrim por la Ley 41/2015, opta por un modelo de instrucción temporal sujeta a un plazo máximo de 6 meses, que se eleva a 18 meses, prorrogables, cuando la causa haya sido declarada de tramitación compleja, es decir, cuando: a) recaiga sobre grupos u organizaciones criminales, b) tenga por objeto numerosos hechos punibles, c) involucre a gran cantidad de investigados o víctimas, d) exija la realización de pericias o de colaboraciones recabadas por el órgano judicial que impliquen el examen de abundante documentación o complicados análisis, e) implique la realización de actuaciones en el extranjero, f) precise de la revisión de la gestión de personas jurídico-privadas o públicas, o g) se trate de un delito de terrorismo. La temporalidad resulta, no obstante, mitigada puesto que: 1) puede el instructor, excepcionalmente, fijar un nuevo plazo máximo, con el único requisito de que lo solicite el Ministerio Fiscal o alguna de las partes personadas antes del 5 transcurso del plazo y de que se oiga a las demás partes; 2) las diligencias de investigación acordadas antes del transcurso de los plazos legales serán válidas, sin perjuicio de su recepción tras la expiración de los mismos, y sobre todo porque 3) en ningún caso el mero transcurso de los plazos máximos fijados en este artículo dará lugar al archivo de las actuaciones si no concurren las circunstancias previstas en los artículos 637 o 641. TEMA 12 En pág. 163 sustituid el epígrafe “La intervención de las comunicaciones postales, telegráficas y telefónicas” por “Detención y apertura de la correspondencia escrita y telegráfica”, y añadir en pág. 167 el siguiente epígrafe: Utilización de la información obtenida en otros procedimientos distintos; los hallazgos casuales.- La reforma de 2015 introduce un nuevo artículo 579 bis, que aborda la cuestión relativa a la utilización de la información obtenida en un procedimiento distinto y descubrimientos casuales. La solución legal es que “El resultado de la detención y apertura de la correspondencia escrita y telegráfica podrá ser utilizado como medio de investigación o prueba en otro procesoApenal. tal efecto, se procederá a la deducción de testimonio de los particulares necesarios para acreditar la legitimidad de la injerencia. Se incluirán entre los antecedentes indispensables, en todo caso, la solicitud inicial para la adopción, la resolución judicial que la acuerda y todas las peticiones y resoluciones judiciales de prórroga recaídas en el procedimiento de origen. La continuación de esta medida para la investigación del delito casualmente descubierto requiere autorización del juez competente, para la cual, éste comprobará la diligencia de la actuación, evaluando el marco en el que se produjo el hallazgo casual y la imposibilidad de haber solicitado la medida que lo incluyera en su momento. Asimismo se informará si las diligencias continúan declaradas secretas, a los efectos de que tal declaración sea respetada en el otro proceso penal, comunicando el momento en el que dicho secreto se alce.» 6 La norma del art. 579 bis es aplicable a los medios de investigación tecnológica, por remisión expresa del art. 588 bis i. La doctrina (Bañuls Gómez) ha tenido ya oportunidad de pronunciarse expresando que en el caso de hallazgos casuales la solución dependerá de que el hecho distinto al investigado constituya un delito relacionado con él, esto es que exista conexidad entre ambos, o un delito autónomo e independiente. En el primer caso deberá darse una orden judicial ampliatoria del ámbito de la medida y proseguir la investigación en la misma causa, por el contrario, en el segundo supuesto, el Juez deberá tras volver a examinar las cuestiones de proporcionalidad y la competencia, dictar una autorización judicial expresa que permita la continuación de la medida e incoar la causa oportuna tras deducir el testimonio correspondiente, con lo que se iniciaría una investigación diferente, aunque con un punto de arranque común. Por otro lado, se ha planteado (Rodríguez Lainz) la duda de si la iniciativa para la deducción de testimonios debe proceder siempre del Juez que haya ordenado la intervención; o cabe la posibilidad de que un Juez distinto, por razón de una competencia objetiva o territorial, tras petición específica de la Policía Judicial que se hubiera encargado de llevar a efecto el acto de injerencia o tenido un conocimiento legítimo de tal investigación, recabe tales testimonios del Juez que hubiera acordado la injerencia o de quien finalmente hubiera conocido de su enjuiciamiento. TEMA 13 Se incluye competo y sustituye a las págs. 168 a 180 del manual. TEMA 14 Sin rotulación especial el contenido del nuevo epígrafe referido a “La incomunicación” se encuentra en las págs. 191 y 192 del manual, por lo que no es necesaria ninguna modificación o alteración. TEMA 16 Debe corregirse la nueva redacción de los epígrafes. 7 Por otro lado, dado su carácter introductorio la supresión del epígrafe “Condición de imputado e imputación judicial” no afecta al tema que puede mantener el mismo contenido con los nuevos epígrafes. Pero en pág. 219 al principio del epígrafe “El investigado en el procedimiento penal ordinario: decisión judicial sobre su situación personal”, deben insertarse los párrafos siguientes: Durante el sumario, el Juez de Instrucción ha de adoptar dos decisiones de importancia capital para el investigado: la que afecta a su situación personal y la atinente a su imputación formal o procesamiento. Respecto de la primera, del art. 505 LECrim se desprende que el Juez de Instrucción, de oficio, puede decretar la libertad provisional sin fianza del investigado, pero para acordar la prisión provisional o la libertad provisional con fianza se requiere solicitud de parte acusadora en una audiencia que deberá celebrarse en el plazo más breve posible dentro de las 72 horas siguientes de la puesta a disposición judicial del investigado, detenido o no. Excepcionalmente, de no poder celebrarse la audiencia, el Juez competente podrá acordar la prisión o la libertad con fianza pero deberá convocar la audiencia dentro de las 72 horas siguientes al objeto de la ratificación de la medida. Si no es el Juez de la causa, sino otro distinto aquél a cuya disposición hubiera sido puesto el detenido, celebrará éste la audiencia y adoptará la medida cautelar, debiendo después el competente dictar la resolución que proceda, oyendo al reo. La resolución judicial revestirá forma de auto (art. 506.1) que es apelable (art. 507.1), a cuyo efecto el Abogado del investigado tendrá, en todo caso, acceso a los elementos de las actuaciones que resulten esenciales para impugnar la privación de libertad (art. 505.3). TEMA 18 En el párrafo último del epígrafe los artículos de previo pronunciamiento (pág. 243) sustituid las dos referencias al recurso de casación por recurso de apelación, que es precisamente la redacción del art. 676 de la LECrim. Es decir que lo que fue considerado como un lapsus del legislador, según se explica en la nota nº 8 8, vuelve a concordar con la regulación legal al instaurarse con carácter general la segunda instancia, lo que subsana ex post facto la incorrección legal. TEMA 22 El epígrafe “Doctrina derivada de las sentencias del TEDH en el ámbito del proceso penal” debe ser trasladado al final del tema 22, pág. 322, desde las págs. 526 a 531. TEMA 28 En pág. 392 añádase el siguiente epígrafe: El proceso por aceptación de decreto.- El proceso por aceptación de decreto, regulado en los arts. 803 bis a) a 803 bis i), puede incoarse en cualquier momento después de iniciadas diligencias de investigación por la fiscalía o de incoado un procedimiento judicial y hasta la finalización de la fase de instrucción, siempre que el delito esté castigado con pena de multa o de trabajos en beneficio de la comunidad o con pena de prisión que no exceda de un año y que pueda ser suspendida de conformidad con lo dispuesto en el artículo 80 del Código Penal, con o sin privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores. El decreto de propuesta de imposición de pena emitido por el Ministerio Fiscal contendrá: 1.º Identificación del investigado. 2.º descripción del hecho punible. 3.º Indicación del delito cometido y mención sucinta de la prueba existente. 4.º Breve exposición de los motivos por los que entiende, en su caso, que la pena de prisión debe ser sustituida. 5.º Penas propuestas. 6.º Peticiones de restitución e indemnización, en su caso. El decreto se remitirá al Juzgado de Instrucción para su autorización y notificación al investigado, si éste, asistido de letrado, acepta en la comparecencia la propuesta de pena en todos sus términos el Juzgado de Instrucción le atribuirá el carácter de resolución judicial firme, que en el plazo de tres días documentará en la forma y con todos los efectos de sentencia condenatoria, la cual no será susceptible de recurso alguno. Pero si el decreto de propuesta de pena deviene ineficaz por no 9 ser autorizado por el Juzgado de Instrucción, por incomparecencia o por falta de aceptación del encausado, el Ministerio Fiscal no se encontrará vinculado por su contenido y proseguirá la causa por el cauce que corresponda. TEMA 29 Se incluye completo. TEMA 30 Se incluye completo y sustituye a las págs. 393 a 415. TEMA 31 Se incluye completo y sustituye a las págs. 416 a 442. TEMA 34 El contenido del epígrafe “La segunda instancia penal: consideraciones generales” se encuentra, sin rotulación especial, en las págs. 471 a 473, por lo que dicho contenido deberá ser trasladado a la pág. 475. TEMA 35 En la pág. 498 los párrafos referidos a los efectos de la sentencia de revisión deben ser corregidos. Se propone la redacción siguiente: Por lo que respecta a los efectos de la sentencia de revisión, materia a la que la LECrim dedica el art. 958, la desconexión actual entre este precepto, que no ha sido reformado en 2015, sin duda por inadvertencia del legislador, y el art. 954 en su nueva redacción es evidente. Con carácter general, el efecto de la sentencia estimatoria del recurso de revisión será siempre la anulación de la sentencia firme de condena y sólo eventualmente la incoación ulterior de una nueva causa penal por el Tribunal competente, lo que dará lugar al llamado juicio rescisorio si es que subsiste algún género de responsabilidad criminal que deba ser depurada. 10 TEMA 37 Se incluye completo y sustituye a las págs. 518 a 526. 11