06/ago/2007 Aumenta la auditoría forense en México CPC Daniel Álvarez Ramírez* Especial para El Economista Debido al incremento de actividades delictivas en el mundo de los negocios derivado de la globalización mundial y de la sofisticación de los sistemas electrónicos de información, ha surgido la figura del contador público especializado en delitos del orden criminal (auditor forense). En especial, en nuestro vecino país del Norte en el que existe en la ciudad de Austin Texas una asociación formada de especialistas en delitos del orden criminal denominada "Asociación de Examinadores Certificados de Fraudes" (Association of Certified Fraud Examiners) que año con año incrementa sus asociados. En México, el número de firmas de contadores públicos que prestan este servicio se ha venido incrementando paulatinamente. Sin embargo, continúa siendo un área poco explorada y por lo tanto, constituye una excelente oportunidad para los contadores públicos que deseen incursionar en esta actividad. Cabe aclarar que la auditoría de estados financieros practicada de acuerdo con normas de auditoría generalmente aceptadas, debido a su naturaleza y limitaciones, no tiene como finalidad el descubrimiento de fraudes. Se trata de permitir al auditor expresar una opinión profesional independiente respecto a si los estados financieros presentan la situación financiera, los resultados de las operaciones, las variaciones en el capital contable y los cambios en la situación financiera, de acuerdo con las Normas de Información Financiera Mexicanas. El término fraude se refiere a distorsiones intencionales en los estados financieros por parte de una o más personas de la administración, empleados o terceros, con objeto de obtener una ventaja ilegal en perjuicio de la empresa en la que se lleva a cabo, y de los que confían en los estados financieros para la toma de decisiones de negocios. A estos fraudes se les conoce como "fraude administrativo" cuando involucra a uno o más miembros de la administración y "fraude de empleados" cuando involucra únicamente a los empleados. En cualquier forma, el auditor solo está interesado en el fraude que da como resultado representaciones erróneas en los estados financieros, sobre los cuales expresa su opinión. No obstante que la auditoría de estados financieros no tiene como objetivo el descubrimiento de fraudes, el auditor tiene la obligación frente a las normas de auditoría 1 generalmente aceptadas, de planear y llevar a cabo su examen con una actitud de escepticismo profesional, reconociendo que de la aplicación de sus procedimientos de auditoría puede obtener evidencia que indique la posibilidad de que existan errores e irregularidades en los estados financieros. La búsqueda del auditor de errores e irregularidades de importancia relativa, se lleva a cabo mediante la aplicación de aquellos procedimientos de auditoría que a su juicio son apropiados en las circunstancias para formarse una opinión sobre los estados financieros. Si el examen practicado revela que pueden existir errores e irregularidades de importancia relativa, se requiere de la ampliación de los procedimientos de auditoría. En cualquier forma, el examen del auditor basado en pruebas selectivas, una de las grandes limitantes de la auditoría, está sujeto al riesgo inherente de que existan errores e irregularidades de importancia relativa que no sean detectados. Un enfoque diferente . Con objeto de dar a conocer las características y limitantes de la auditoría forense, el Colegio de Contadores Públicos de México impartirá una conferencia sobre el tema denominado "Auditoría Forense, Un enfoque Diferente" el próximo 30 de agosto, estará a cargo de un contador público socio de una importante firma de auditores, con amplia experiencia en la materia. *El autor es integrante de la Comisión de Auditoría del Colegio de Contadores Públicos de México (CCPM). Los artículos y respuestas expresan la opinión de los profesionistas de las diferentes comisiones. Envíe sus dudas y comentarios a: consulta. [email protected] 2