Módulo 3 EVALUACIÓN DE PROYECTOS SOCIALES LA EVALUABILIDAD DE UN PROYECTO SOCIAL • El tema central en la evaluación es establecer si se ha solucionado el problema o se ha mejorado la situación que dio origen a un proyecto. • Un proyecto implica una teoría del cambio o una hipótesis de solución de un problema determinado. Por tanto, la evaluación tiene que permitirnos conocer si los resultados de un proyecto han producido el cambio esperado en áreas como salud, educación, seguridad, etc. • Para realizar esta tarea es necesario diseñar el proyecto pensando en que debe ser evaluado. La evaluación no es algo externo, posterior, ajeno al proyecto, sino que debe estar incorporado desde el momento de su formulación. • La incorporación de los elementos que permitan la evaluación de un proyecto determinado es lo que se denomina evaluabilidad. • Para que un proyecto sea evaluable, en un sentido estricto, debe reunir ciertos requisitos y cumplir con unas pautas determinadas. Los indicadores Un indicador puede definirse como la traducción numérica de un concepto. Ese proceso de traducción (u operacionalización) consiste en establecer unidades concretas o variables, observables y medibles que permitan dar cuenta de un concepto determinado. Para que un indicador cumpla con su función debe reunir ciertos requisitos. Los indicadores deben especificar: • la cantidad (cuánto) • la calidad (de qué tipo) • el tiempo (para cuándo o entre qué periodo) • el grupo social (o grupo objetivo de la población) • el lugar (la localización) Por ejemplo, si queremos evaluar el estado nutricional tomando un indicador, el peso, vemos que a los doce meses de edad, el peso de un niño debería estar entre 9 y 12 kg. Si volvemos a nuestro caso inicial, podemos decir que los niños de la comunidad rural tienen una nutrición adecuada si el 100% de los niños de 12 meses tienen un peso entre 9 y 12 kg al finalizar el proyecto. En este caso “niño” se refiere específicamente a personas de sexo masculino, ya que en la Agenda Pediátrica se establecen diferentes parámetros de crecimiento para niñas y niños. Tomando como criterio la Curva de Crecimiento de niños del nacimiento a los 24 meses que se encuentra en la Agenda Pediátrica (Sociedad Paraguaya de Pediatría). Según esta curva a los 12 meses el peso medio de un niño es de 10 kg y si se considera una desviación estándar por encima y por abajo se tiene la variación entre 9 y 11 kg. La línea de base La línea de base es justamente la medición de los indicadores antes que se realice la intervención prevista en un proyecto. Consiste en la medición de la magnitud del problema. Si afirmamos, como en el ejemplo, que el problema es la desnutrición infantil, necesitamos medir nuestros indicadores al inicio de tal forma a establecer, por ejemplo, que el 28% de los niños y niñas de 0 a 5 años de edad de la comunidad X tienen un estado de desnutrición crónica. Al cabo de un tiempo de implementación del proyecto (por ejemplo, un año) podemos medir el estado nutricional de esa población y podemos repetir esa medición al cabo del segundo año. Tal como se señaló anteriormente, el “porcentaje de desnutrición crónica”, al igual que casi todos los problemas que intentan ser solucionados por los proyectos, no es un concepto medible directamente en la población y que para hacerlo se deberán tener en cuenta diferentes variables que en su conjunto dan cuenta de este indicador, como los aspectos bioquímicos, antropométricos y dietéticos. Grupo de comparación Estos diseños implican tener un grupo de control. Es decir, un grupo similar al grupo experimental pero al que no se le aplica el tratamiento (es decir, no participa en el proyecto) y al que se mide su situación también al inicio y al final del proyecto.