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Principios de enfermería en el quirófano
Lourdes Osoro, Helena Eugui, Iliana Sánchez, Rosa Rodríguez
INTRODUCCIÓN
El área quirúrgica es el recinto en el cual se desarrollarán
los procedimientos quirúrgicos, entre ellos la cirugía del cristalino. Su organización general así como las condiciones ambientales y de asepsia exigidas responden a unos principios
universalmente aceptados y que han sido recogidos en diferentes normativas que intentan responder a tales necesidades. En función del tipo de cirugía a desarrollar variará el nivel
de exigencia de tal normativa; existen diferentes niveles de
protección recomendados dependiendo de las necesidades de
cada lugar de trabajo. El fin último es garantizar la seguridad
del paciente y desarrollar la labor profesional con eficacia; por
ello, es exigible la colaboración de todo el personal sanitario
implicado: unos sentando las bases y dictando las condiciones exigibles, todos cumpliendo la normativa establecida.
Además de los aspectos generales mencionados, la prevención de las infecciones es una labor multidisciplinaria que
obliga al personal sanitario a conocer los principios de la lucha anti-infecciosa, por lo tanto el área quirúrgica debe ser
una zona protegida. Así, la organización del quirófano debe ir
orientada a permitir la circulación del personal manteniendo
el nivel de asepsia y debiendo existir una clara delimitación
entre las áreas limpias y las sucias o contaminadas.
NORMAS Y ORGANIZACIÓN DEL ÁREA QUIRÚRGICA
Los procedimientos quirúrgicos disminuyen las defensas
corporales haciendo al paciente más susceptible de padecer
infecciones. Además, sabiendo que los microorganismos se
transmiten por el hombre, por los objetos y a través de las corrientes de aire, será necesario establecer las formas para
evitar la existencia de tales microorganismos en el área quirúrgica y eliminar la posibilidad de contacto entre tales microorganismos y el paciente.
Barreras y circulación
El principio fundamental al diseñar y organizar la función
asistencial en un quirófano consiste en limitar todo lo posible
la penetración de partículas en el área quirúrgica1.
En el área quirúrgica hay tres zonas que deberían ser claramente diferenciables2:
1. Zona de acceso: recepción, vestuarios y esterilización.
2. Zona limpia: sala de preparación, antequirófanos, pasillo limpio, quirófanos y locales adyacentes.
3. Zona sucia: pasillo de postquirófano y reanimación.
Para poder organizar el área quirúrgica, preservando las
características deseables para cada una de las zonas, será
necesario pensar en la organización de tres circuitos:
1. Circuito del personal.
2. Circuito de pacientes.
3. Circuito de materiales.
Tanto en las zonas (acceso, limpia y sucia) como en los
circuitos (personal, pacientes y materiales) debe trabajarse
con el concepto de «asepsia progresiva» según vayan las zonas y los circuitos confluyendo hacia el quirófano propiamente dicho. Para lograr que la máxima asepsia se dé en el
quirófano suele ser útil, además de los aspectos organizativos que comentaremos, utilizar sistemas de señalización
(zonas) diferenciando claramente las diferentes áreas y mucha disciplina (circuitos) evitando los retornos dentro del
sistema1.
Para lograr una adecuada integración de las zonas del
área quirúrgica y de los circuitos que deben integrarse lo ideal sería montar un quirófano unidireccional donde los retornos no fueran posibles y en el que no existieran nunca cruces entre zonas. Este principio teórico exige una adaptación
al medio y a la realidad de cada quirófano.
Zonas en el área quirúrgica
Las áreas deben estar claramente delimitadas y deben
existir aduanas, a ser posible físicas, entre ellas. Además de
las barreras físicas, la señalización debe ser clara, bien con
letreros o de forma más conveniente con cambios de color en
suelo y paredes.
La diferentes zonas del área quirúrgica sería aconsejable
estuvieran también diferenciadas por niveles de presión positiva progresivos, siendo alcanzada la máxima presión en el
propio quirófano; así, por el gradiente de presión existente, se
cumpliría el principio de no retorno para partículas de la zona
limpia que salieran a las demás zonas. El mantenimiento de
los niveles de presión exige la entrada forzada de aire adecuadamente filtrado y el mantenimiento de la estanqueidad
dentro de cada zona del área quirúrgica.
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IV. CIRUGÍA DE LA CATARATA: CUIDADOS PREOPERATORIOS
Circuitos en el área quirúrgica
2. Circuito de pacientes2
Como hemos mencionado, se hace necesario organizar
diferentes circuitos que respeten los niveles de higiene y
asepsia de cada una de las zonas del área quirúrgica.
El paciente procedente de la unidad de cirugía sin ingreso (UCSI) llegará a la recepción del área quirúrgica propiamente dicha con indumentaria preparada para quirófano:
bata abierta por delante, gorro y cubrezapatos. Una vez en el
área quirúrgica, el paciente será dependiente del personal auxiliar en sus desplazamientos, no debiendo permitirse la libre
circulación de los mismos en estas zonas.
En este apartado deberían protocolizarse:
1. Recepción del paciente.
2. Traslado al antequirófano.
3. Traslado al quirófano.
4. Salida de quirófano.
1. Circuito de personal sanitario2
El personal sanitario debe acceder al área quirúrgica, trabajar en el quirófano y cumplidas sus funciones salir del mismo y del recinto.
El personal que entre en un quirófano, antes de hacerlo
debe conocer y cumplir los siguientes principios básicos1:
1. Pasar al cuarto de baño antes de cambiarse de ropa
(recordar que debe lavarse las manos después de
acudir al cuarto de baño y después de sonarse).
2. No entrar en la zona de quirófano si se padece una enfermedad transmisible (gripe u otros).
3. Vestir ropa y calzado propios de quirófano.
4. Llevar el pelo limpio, ir afeitado, evitar la barba, y tener las uñas cortadas y limpias.
5. Colocarse un gorro cubriéndose totalmente el pelo y
las orejas (la barba si la tuviese).
6. Cubrirse la nariz y la boca con una mascarilla bien
ajustada a la cara.
7. Restringir el número de personas presentes en la
zona de quirófanos (visitantes y otros).
8. Prohibir que el personal esté entrando y saliendo del
área quirúrgica.
Todo trabajador de un área quirúrgica está obligado a seguir las siguientes normas elementales2:
1. Para circular por la zona de acceso o recepción se requiere únicamente el uso de cubrezapatos.
2. Para circular por la zona limpia se requiere gorro, mascarilla, zuecos lavables y pijamas exclusivos de quirófano.
3. Para circular por la zona sucia es obligatorio el uso de
gorro, zuecos lavables y ropa diferenciada.
3. Circuito de materiales2
Todo el material disponible en un quirófano debe tener
asegurada la forma de recepción, circuito y destino final, según protocolos. Dependiendo de su origen y de las características propias del material, tanto sus circuitos y manipulación
dependerán del personal que se encuentre suficientemente
cualificado para tal fin. Estos materiales se transferirán a un
carro limpio en la zona de acceso para su posterior distribución o traslado, previo desembalaje del sistema de protección
con el que ha sido remitido de origen.
Los orígenes del mencionado material serán diversos:
1. Almacén general.
2. Casas comerciales.
3. Ropero.
4. Hematología y unidad de trasplantes.
5. Farmacia.
6. Otros.
Los destinos de dicho material también serán diversos2:
1. Almacén de área.
2. Farmacia de área.
3. Antequirófanos.
4. Esterilización.
5. Almacén de limpieza.
6. Vestuarios.
7. Otros.
Los materiales que vayan destinados a una determinada
zona, deberían llegar a ella sin pasar por las otras zonas
(Fig. 1); por ejemplo, material que entra en zona de recepción,
parte irá por el circuito de limpio (instrumental, lencería, etc.),
pasando por esterilización si fuera preciso antes de llegar al
quirófano, parte por el circuito de sucio (material de limpieza,
mantenimiento, etc.) dado que nunca accederá al quirófano.
CLIMATIZACIÓN
Fig. 1. Niveles de organización dentro de un quirófano. Acéptese el
esquema que representa el ideal teórico de «no cruces» y los diferentes
niveles de presión.
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Los quirófanos, según el nivel de climatización a alcanzar,
se clasifican en dos grupos3:
30. PRINCIPIOS DE ENFERMERÍA EN EL QUIRÓFANO
1. Grupo I: quirófanos de cirugía normal.
2. Grupo II: quirófanos de cirugía especial.
Los quirófanos de Oftalmología en los que se va a realizar cirugía de catarata o cristalino son considerados como de
grupo II debido a que en tales procedimientos se procede a
implantar una lente intraocular.
Revisaremos los parámetros que deben contemplarse en
el diseño de la climatización de estos quirófanos (grupo II), a
efecto de conseguir las condiciones interiores adecuadas exigidas por la legislación vigente. Tales parámetros hacen referencia a: 1) Toma de aire (renovación y velocidad del aire); 2)
Presurización; 3) Temperatura; 4) Humedad; 5) Filtración; y 6)
Nivel de ruido.
Tal presurización supone que el aire circulante es expulsado desde los quirófanos al exterior de forma constante.
Para un correcto mantenimiento de la «Bioseguridad
Ambiental» es conveniente la verificación y mantenimiento
de los sistemas de climatización mediante los siguientes
medios4:
1. Sistema de registro (monitorización digital) de la temperatura, la humedad relativa y la presión diferencial.
2. Verificación mensual de la renovación del aire, mediante anemómetro.
3. Revisión y cambio de filtros según recomendaciones
del proveedor y siempre que haya anomalías en su
funcionamiento (disminución de la presión diferencial
antes y después del filtro absoluto, y/o disminución
del número de renovaciones de aire).
Toma de aire
Con carácter general y siempre que sea posible, las instalaciones de climatización de quirófanos y locales anexos,
se efectuaran con el criterio de «todo aire exterior».
Establecido tal criterio, un quirófano grupo II debe también asegurar:
1. Renovación. El número de renovaciones por hora del
aire debería ser de 15-20 renovaciones por hora3.
2. Velocidad del aire. Está indicado que el nivel de renovación no exceda de 20 renovaciones por hora con el objeto de que no existan turbulencias en el aire del quirófano. Por ello, se recomienda que la velocidad del aire
en esta zona debería estar comprendida entre 0,20 y
0,30 m/sg, no debiendo exceder el valor superior3.
Presurización
Los volúmenes del aire de impulsión y extracción deben
ser seleccionados para conseguir presiones positivas con
gradiente de mayor (quirófano) a menor (exterior), conforme al
grado de exigencia y clasificación de los diferentes locales.
Los quirófanos deben encontrarse con sobrepresión en
relación con los locales colindantes a los mismos, siendo el
caudal de aire de impulsión un 15% superior al aire de extracción3. Esto hace posible que el aire del quirófano sea expulsado hacia las zonas adyacentes expulsando o al menos impidiendo la entrada de las partículas flotantes. La diferencia
de presión ha de ser como mínimo de cinco milibares (mb)
entre cada zona, es decir, suponiendo un sistema con tres niveles de presurización se recomendaría:
1. Quirófano: habrá presión atmosférica + 15 mb; por
ejemplo: 1030 mb + 15 mb = 1045 mb.
2. Zonas pre y postquirúrgicas: presión atmosférica + 10
mb; por ejemplo: 1030 mb + 10 mb = 1040 mb. Ello
supone una hiperpresión del quirófano de 5 mb en relación con estas zonas.
3. Zona de entrada y salida de pacientes: presión atmosférica + 5 mb; por ejemplo: 1030 + 5 = 1035 Mb.
Temperatura interior
Las condiciones de temperatura deben serán regulables
dentro de un rango de temperatura preestablecida3:
1. Temperatura mínima: 20º C.
2. Temperatura máxima: 24º C.
Humedad
El adecuado porcentaje de humedad relativa en los quirófanos es básico por los siguientes motivos3: 1) Eliminación
de cargas electrostáticas; y 2) Necesidades asistenciales.
Los parámetros de humedad relativa recomendados se
deben establecer dentro del siguiente rango:
1. Invierno: 45-60%.
2. Verano: 50-60%.
Filtración
La purificación del aire para filtrar todo tipo de impurezas, incluso microorganismos, se realizará de forma escalonada, es decir, se realizarán los tres escalones de filtración, denominados3:
1. Prefiltración.
2. Filtración de alta eficacia.
3. Filtración absoluta (HEPA).
Los filtros de aire serán revisados periódicamente. Esta
periodicidad debe ser de una semana para los prefiltros y de
un mes para los filtros de alta eficacia y la absoluta. Dentro
de los controles de calidad y eficacia, debe existir constancia
escrita de este control de mantenimiento2.
Nivel de ruido
Los ruidos generados en un sistema de climatización
pueden provenir de: 1) Los motores, ventiladores y extracto383
IV. CIRUGÍA DE LA CATARATA: CUIDADOS PREOPERATORIOS
res; y 2) La velocidad del aire en los conductos y su descarga en las rejillas.
Los niveles admisibles de sonoridad permitidos en los
quirófanos no deben exceder en 40 decibelios (db)3.
CONTROL DEL AIRE AMBIENTAL
Los fenómenos de contaminación son complejos, pero el
aire desempeña una función importante en los mecanismos
de intercambio y transferencia y suele ser considerado como
un medio habitual a través del cual circulan partículas suspendidas que pueden ser foco de contaminación.
El hombre emite en su entorno próximo un número determinado de partículas de 0,5 a 10 µm de diámetro. Estas partículas se ponen en suspensión en el aire, y se producen por
las escamas cutáneas, la sudoración y principalmente por gotas de flügge de las vías respiratorias4.
Según la movilidad de la persona, la Organización Mundial de la Salud hace una valoración de las partículas emitidas que están resumidas en la Tabla I1,5.
El informe de un grupo de trabajo de la Sociedad Española
de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene y el INSALUD
presenta también las recomendaciones esenciales dirigidas a
conseguir y mantener en las áreas de especial riesgo del medio
hospitalario un nivel adecuado de bioseguridad ambiental respecto a hongos oportunistas6; se entenderá como tal aquella situación ambiental con niveles aceptables de contaminación de
esporas fúngicas, que hace improbable que enfermos susceptibles adquieran un proceso infeccioso vehiculado por el aire.
La literatura médica sobre las epidemias de infección nosocomial por Aspergillus pone de manifiesto la importancia de
mantener el medio ambiente hospitalario tan libre de esporas
de hongos como sea posible7,8, especialmente en aquellas
áreas donde se atiende a pacientes con un alto riesgo de
contraer esta infección (pacientes neutropénicos y pacientes
sometidos a determinados tipos de cirugía de alto riesgo)6.
Para la verificación de los niveles de bioseguridad ambiental es necesario un control microbiológico que se practicará según las siguientes pautas:
1. Se realizará mensualmente2.
2. El método de obtención de muestras recomendable
es el método volumétrico6.
3. Se muestreará 1 m3 de aire6.
4. Se utilizará un medio de cultivo selectivo para hongos6.
Tabla I. Emisión de partículas por un ser humano
Mayores de 0,3 µm por minuto
Actividad
100.000
250.000
400.000
500.000
1.000.000
Sin movimiento
Al sentarse
Al sentarse y moverse
Con movimientos lentos
Con movimientos importantes
384
También se re recomienda realizar dos recogidas de muestras2:
1. La primera antes de iniciar la actividad quirúrgica; para
ello, el quirófano debería estar limpio y desinfectado
tras finalizar la sesión quirúrgica del día anterior, no debiendo haber entrado ninguna persona desde entonces. Para que esto se respete se colocarán unos carteles indicativos en las puertas de acceso al quirófano.
Esta muestra recoge la entrada del aire (permite evaluar la calidad del aire que entra) y las posibles filtraciones de las partes bajas que permitirá evaluar la remoción de esporas de las superficies horizontales y la
calidad de limpieza de las mismas2.
2. La segunda justo antes de finalizar la actividad quirúrgica y servirá para evaluar la eficacia de las medidas
higiénicas y los efectos generados por la circulación
del personal en el quirófano y por la propia actividad
quirúrgica2.
Estos controles microbiológicos que se recomiendan
practicar con una frecuencia preestablecida se convertirán en
obligatorios tras producirse alguna de las siguientes incidencias o tras la toma de medidas para su corrección9-14:
1. Avería o anomalías de mantenimiento del sistema de
climatización.
2. Temperatura superior a 28º C.
3. Humedades o goteras en el techo o paredes.
4. Obras dentro del bloque quirúrgico.
5. Previo a la puesta en marcha de una nueva instalación.
6. Tras la aparición de un caso de infección quirúrgica
por hongo oportunista (detección de hongo oportunista por procedimientos histológicos o microbiológicos
en el órgano objeto intervención entre uno a doce meses siguientes a la intervención quirúrgica).
El umbral de bioseguridad es de 0,1 ufc/m3 (para hongos
oportunistas)10,13 tras la lectura inicial, tras 48 horas y definitiva a los cinco días de incubación a 37º C.
En caso de que superara el mencionado umbral de bioseguridad, la situación es considerada como de no bioseguridad6
y se impone la toma de diferentes medidas para subsanar tal
situación6, medidas que quedan recogidas en la Tabla II.
Actitud ante una situación de no bioseguridad en área
quirúrgica
En situaciones de no bioseguridad, es decir si se dan las
circunstancias mencionadas en el epígrafe anterior, puede
mantenerse la actividad quirúrgica en los quirófanos excepto
en aquellas circunstancias en las que es preciso practicar un
implante, tal y como sucede en la cirugía de cristalino.
Ante tal situación caben dos opciones:
• Si se practican cirugías de cristalino con implantación
de lentes intraoculares, es preciso suspender la cirugía y repetir nuevo control microbiológico a las 48 horas; una vez confirmado que éste está en niveles de
30. PRINCIPIOS DE ENFERMERÍA EN EL QUIRÓFANO
Tabla II. Medidas a tomar en situaciones de «no bioseguridad»
Criterio
Causa
• Crecimiento fúngico por encima del • Sistema ventilación
umbral de bioseguridad en las
muestras a la entrada de aire
Solución
Responsable
• Cambio o ajuste de los filtros (inter- Servicio mantenimiento
medios y/o HEPA)
• Limpieza de rejillas tras su retirada
• Crecimiento fúngico por encima del • Remoción de esporas fúngicas • Limpieza usando agua + jabón + lejía Servicio de limpieza
(1 parte de lejía por cada 9 de agua jadesde las superficies horizonumbral de bioseguridad en las
bonosa)
Personal servicios méditales
muestras del entorno del paciente
• Entrada desde el exterior por • Cierre correcto de puertas y ventanas. cos y quirúrgicos
• Disciplina intraquirófano
defectos en la hermeticidad
bioseguridad (menos de 0,1 ufc/m3 para hongos oportunistas)10,13 puede reiniciarse la actividad quirúrgica.
• Si se practican cirugías sin implante, es posible seguir
la actividad quirúrgica y debe realizarse nueva verificación de la bioseguridad tras la aplicación de las medidas de mejora; si a las 48 horas el control microbiológico indica bioseguridad, se reanuda toda la actividad
quirúrgica9.
cubriendo la nariz y la boca. Se recomienda cambiarla
cada 2 ó 3 horas o si se humedece; cuando no se
hace uso de ella no se dejará colgada al cuello15, siendo más recomendable cambiarla por una nueva.
• El calzado debe ser de materiales que permitan su limpieza y desinfección15 y no deben presentar manifiestas irregularidades en las que pueda acumularse la suciedad.
PROFILAXIS DE LA INFECCIÓN
Normas generales
Todas las personas que entren en un quirófano de Oftalmología deben conocer y respetar las normas de la asepsia
quirúrgica.
La asepsia quirúrgica es el conjunto de esfuerzos realizados para evitar la contaminación microbiana de la zona intervenida15.
Las puertas de entrada y salida del quirófano permanecerán cerradas durante la intervención para minimizar la contaminación aérea de esta zona. Para favorecer este punto lo
ideal es disponer de puertas correderas, no de vaivén, con
cierre hermético y automático1.
El nivel microbiano del aire en quirófano esta relacionado
con el número de personas que circulan por él, por lo tanto
deben ser las imprescindibles sobre todo durante la cirugía15.
El personal debe moverse lo más alejado posible del área estéril si no forma parte del personal quirúrgico y la zona de circulación prohibida alrededor de la cabeza del paciente es de
1,10 m15.
Indumentaria quirúrgica
La indumentaria quirúrgica es de uso obligatorio y consta
de: pijama, calzado, gorro y mascarilla, todo ello colocado correctamente.
Y las normas básicas:
• El pijama estará limpio y seco, cambiándolo si se mancha o se moja; si se saliera con la mencionada indumentaria del área quirúrgica, se hace necesario cambiarse nuevamente al regresar al área quirúrgica. Tiene
que cubrir todo el cuerpo dejando libres los antebrazos
y los brazos en la región proximal al codo; también es
necesario que se ajuste lo más posible al cuerpo, sin
dejar de ser confortable, para evitar que al moverse se
creen turbulencias que remuevan el aire15.
• El gorro debe cubrir el cabello, las orejas y la barba (si
la tuviese) por completo15.
• La mascarilla, cuya función es evitar la contaminación
que producimos al respirar, hablar, toser o estornudar,
dispone de un filtro que debe ser colocado en la parte
que está en contacto con la cara, ajustándola bien y
Normas de asepsia quirúrgica
Las normal generales de asepsia quirúrgica han sido recogidas en diferentes manuales15 aunque pensamos que no
está de más recordarlas:
1. El personal lavado debe llevar bata y guantes estériles.
2. Las batas solo se consideran estériles desde el tórax a la cintura por la parte delantera y desde las
manos hasta inmediatamente por encima de los codos; todas las demás zonas se consideran contaminadas.
3. Para establecer el campo estéril deben utilizarse paños estériles.
4. Todos los objetos utilizados en el campo estéril han
de ser estériles.
385
IV. CIRUGÍA DE LA CATARATA: CUIDADOS PREOPERATORIOS
5. Todo el material introducido en un campo estéril
debe llegar al mismo a través de procedimientos que
mantengan la esterilidad del material o del instrumental y la integridad del campo estéril.
6. Los objetos contaminados deben ser retirados inmediatamente del campo estéril.
7. La mesa quirúrgica solo se considera estéril en y por
encima de su nivel, los objetos extendidos por debajo de su nivel se consideran contaminados.
8. Una vez abierto, se considera que los bordes de un
envase estéril están contaminados.
9. Debe mantenerse un margen de seguridad entre los
objetos estériles y el área no estéril.
10. El campo estéril se crea en el momento más próximo a su utilización.
11. Un campo estéril debe ser constantemente vigilado
y mantenido.
12. Si existe alguna duda sobre la esterilidad de un articulo, hay que considerarlo no estéril.
13. Una vez abierto un material estéril para su utilización
en un paciente, debe ser eliminado o reesterilizado,
si esto fuera posible en función de sus propias características, antes de usarlo en otro.
14. Los líquidos estériles deben verterse desde una altura suficiente para evitar contactos accidentales entre el envase no estéril y el envase estéril receptor,
pero sin que esa altura sea excesiva para evitar salpicaduras.
Lavado higiénico de manos
Especial relevancia tiene el lavado de manos, ya que éstas son uno de los vehículos principales de contaminación
éxogena. Su lavado es ineludible y forma parte inexcusable
de las normas higiénicas del área quirúrgica16, especialmente siendo un hecho conocido que el Staphilococcus aureus
meticilino-resistente (SAMR), un marcador de infección intrahospitaria, es responsable del 47% de los casos de bacteriemias y del 68% de las infecciones de herida quirúrgica18, pudiendo ser transmitido por el personal sanitario.
Algunas normas generales:
1. La sequedad y posterior descamación de la piel de
manos y antebrazos, que pueden ser facilitadotes de
la adherencia bacteriana, se evita con una buena hidratación.
2. Para facilitar un buen lavado de manos debe de prescindirse de las joyas, mantener las uñas cortas y sin
ningún tipo de esmalte.
3. Al entrar en el área quirúrgica se debe realizar un lavado básico y mantener las manos limpias con lavados superficiales siempre que sean contaminadas y
después de un contacto con el paciente5.
4. El cirujano, ayudante e instrumentista realizarán un lavado quirúrgico antes de cada intervención.
386
Lavado quirúrgico de manos
El objetivo del lavado quirúrgico es eliminar la suciedad,
reducir al mínimo posible el número de microbios residentes
e inhibir el nuevo crecimiento microbiano15.
Destacaremos algunos principios generales:
1. Antes del lavado se deben retirar el reloj y las joyas, las
uñas deben ser cortas y sin esmaltar para facilitar la limpieza y desinfección. Las cutículas deben estar en buenas condiciones y las manos y los antebrazos no deben
tener lesiones ni roturas en la integridad cutánea15.
2. El cepillado es una acción contaminante, por lo que
debe haber un espacio de 1 m, como mínimo, alrededor de la persona que se está lavando16.
3. Se deben utilizar cepillos estériles desechables que
contengan jabón de acción antimicrobiana rápida, prolongada y de amplio espectro15.
El procedimiento del lavado quirúrgico es el siguiente:
1. Se realizará un primer enjabonado de antebrazos, manos y espacios interdigitales además de un cepillado
de espacios subungueales, bajo agua corriente durante un tiempo aproximado de 3 minutos.
2. Se aclararán las zonas enjabonadas manteniendo
siempre las manos más elevadas que los codos y se
procederá al segundo enjabonado más minucioso y
sin cepillado durante otros 3 minutos.
3. Finalmente se aclararán de nuevo con abundante agua
sin olvidar mantener las manos por encima de los codos.
4. Tras el lavado quirúrgico continuaremos manteniendo
las manos más altas que los codos para que se escurra el agua desde las manos hacia los codos, debiendo también estar separadas del cuerpo y entre sí5.
Secado de manos
El secado de manos lo haremos con un paño secante estéril que acompaña a la bata estéril. Este procedimiento consiste en hacer que el paño absorba el agua por contacto y mediante ligeros toques, sin frotar ni arrastrar, para no levantar
las células cutáneas.
La rutina de secado debe ser la siguiente:
1. Al igual que para el lavado, empezaremos a secar por
los dedos, de uno en uno, palma y dorso de la mano,
muñeca y antebrazo; sin llegar al codo, doblaremos el
paño para hacer lo mismo con el otro brazo y finalmente desecharemos el paño5.
2. El secado ha de ser meticuloso ya que la humedad en
las manos dificulta la correcta colocación de los guantes.
Recordemos que tras un lavado quirúrgico las manos sólo
están limpias, no se consideran estériles por muy bien que se
hayan lavado, por lo tanto no se debe tocar nada que sí se considere estéril o bien, de hacerlo, dejará de serlo como, por ejemplo, la parte interior de los guantes, tanto al ponerlos como al
quitarlos durante la cirugía para sustituirlos por otros15.
30. PRINCIPIOS DE ENFERMERÍA EN EL QUIRÓFANO
Colocación de la bata estéril
LIMPIEZA Y DESINFECCIÓN
Este procedimiento se lleva a cabo después del lavado
quirúrgico y secado de manos y antes de la colocación de los
guantes quirúrgicos.
Para su correcta colocación se debe seguir los siguientes
pasos:
1. Coger la bata firmemente y levantarla de la mesa quirúrgica.
2. Desplegarla suavemente, sosteniéndola por los hombros sin sacudir.
3. Introducir las manos por las mangas y deslizar cada
brazo a través de ellas elevando y abriendo los brazos; las manos no deben salir fuera de los puños de
la bata.
4. La enfermera circulante ayudará tirando de la bata sobre los hombros y atando las cintas posteriores e interiores.
En el quirófano de Oftalmología la limpieza y desinfección
debe ser diaria. Para el mantenimiento de la bioseguridad se
recomienda realizar la limpieza entre intervención e intervención y la desinfección al finalizar la sesión quirúrgica. Es necesario comentar que, dado que la cirugía de la catarata y
cristalino es una intervención mínimamente invasiva y que genera pocos residuos y, en general, de una duración muy corta, la periodicidad de la limpieza entre intervenciones está
siendo replanteada en numerosos centros.
Limpieza
La limpieza consiste en un lavado de superficies horizontales y fregado del suelo, de dentro hacia fuera. El producto
que se utiliza es agua con lejía en una proporción de nueve
partes de agua con una de lejía. Las superficies verticales se
limpiarán solo en caso de salpicaduras1,9,15,16.
Colocación de guantes
Ya hemos mencionado que tras el lavado, las manos están limpias pero no estériles. Las manos del cirujano no deben tener ninguna lesión y han de estar protegidas por guantes de un solo uso. Los guantes no deben tener poros de
diámetro superior a 5 Ìm1. Tras la colocación de la bata, procederemos a la colocación de los guantes.
La colocación de los guantes puede hacerse de la siguiente forma:
1. Se toma el guante derecho por el borde de la empuñadura, que se encuentra plegada, con los dedos índice y pulgar de la mano izquierda.
2. Se introduce la mano derecha y se suelta la mano izquierda liberando el guante pero sin finalizar su colocación.
3. Se procede a coger el guante izquierdo introduciendo
los dedos índice y corazón de la mano derecha en la
zona interna de la empuñadura que se encuentra plegada.
4. Se introduce la mano derecha y se estira el guante.
5. Se procede a introducir dedos índice y corazón de la
mano izquierda en el pliegue del guante de la mano
derecha y se procede a extender éste.
El cambio de guantes durante la cirugía se realiza colocando el dedo pulgar en el borde de la empuñadura; a continuación, la circulante puede coger el guante por su borde sin
tocar la bata y tirando de él15.
El cambio de bata durante la cirugía también exige un
cambio de guantes. En primer lugar se retira la bata para evitar la contaminación de las manos con la bata y después se
procede a retirar los guantes, tocando guante de una mano
con zona de guante de la otra y mano sin guante con la parte interna del guante de la otra mano.
Desinfección
La desinfección consiste en limpiar todas las superficies
horizontales y verticales, siempre de arriba a abajo y de dentro hacia fuera. Se utilizará el sistema de doble cubo2. El producto utilizado es un desinfectante trialdehídrico (glutaraldehido, formaldehido y glioxal) en una proporción de 50 cc del
producto en 10 litros de agua2.
Una vez realizada la desinfección se procede al cierre del
quirófano; bajo ningún concepto se debe entrar en el quirófano después de esta desinfección. Si fuese imprescindible, se
procederá a una nueva desinfección, dejando un periodo de
por lo menos media hora antes de utilizar de nuevo el quirófano2.
Después de cualquier limpieza, se recomienda esperar
hasta el secado de las superficies antes de plantearse cualquier actividad.
ORGANIZACIÓN DE ESPACIOS
Un quirófano para cirugía ocular precisa de ciertas salas
complementarias para poder cumplir de forma adecuada su
función. Pasaremos a describir las que, a nuestro entender,
deben encontrarse adecuadamente habilitadas.
Quirófano
El quirófano es la sala donde se practica la intervención
quirúrgica. En su interior solo debe de haber aparataje y mobiliario indispensable, de esta manera minimizamos la cantidad de superficies susceptibles de contaminación.
387
IV. CIRUGÍA DE LA CATARATA: CUIDADOS PREOPERATORIOS
El contenido de un quirófano de oftalmología incluye, entre otros, los siguientes aparatos:
1. Microscopio quirúrgico. Se recomienda el microscopio
con soporte fijado al techo, de esta manera se eliminan los cables de alimentación, ofrece mayor estabilidad en todo su conjunto y proporciona mayor espacio
dentro del quirófano. Se requiere en ocasiones un reforzamiento de sus estructuras de anclaje, con una altura mínima de 2,5 a 3 m del suelo, dependiendo del
modelo, para que de esta forma no obstaculice la circulación alrededor del paciente. Solo dispondría de un
cable imposible de eliminar debido a que va conectado desde la columna del techo hasta el pedal, que
está en el suelo. Desde el pedal se gobiernan las siguientes funciones: 1) La iluminación, a través del microscopio; 2) El zoom, que permite la variación del tamaño de la imagen que se observa; 3) El enfoque, a
través del movimiento ascendente-descendente del
cabezal del microscopio para enfocar el plano del trabajo deseado; y 4) El desplazamiento X-Y, que mueve
el cabezal del microcopio con respecto al ojo (X será
el desplazamiento en sentido nasal-temporal e Y el
movimiento superior-inferior).
2. Aparato de anestesia. Dispone de monitorización y se
debe calibrar al inicio de la sesión quirúrgica. Su descripción escapa a los objetivos de este capítulo.
3. Otros: aparato de vitrectomía posterior, laser diodo,
bisturí eléctrico y otros. Es recomendable que estos
últimos estén colocados en una torre móvil (con ruedas o con soporte fijado al techo), siendo de esta forma fácilmente accesibles y de una movilidad total
para lo que pudiera requerirse.
4. Elementos de almacenaje. En el quirófano se deben
minimizar al máximo los almacenajes pero de ser necesarios debe recurrirse a armarios cerrados, con ruedas y cajones extraíbles. Puede ser útil establecer las
siguientes diferencias en el almacenaje dentro del
quirófano: 1) Armario de anestesia, contiene todo lo
necesario para tal fin y conviene su situación próxima
al equipo de anestesia; 2) Armario de medicación,
para almacenar lo necesario en un quirófano de Oftalmología (colirios y otros medicamentos para uso intraocular); 3) Armario de instrumentación y suturas,
con material esterilizado individualmente en bolsa,
fungibles y suturas.
Los aparatos específicos para cirugía de cristalino, serían:
1. Facoemulsificador. Dispone de ruedas que facilitan su
movilidad, un cajón en el cual se guarda el pedal con
su cable enrollado y una percha en su parte posterior
para recoger el cable de alimentación, y de esta manera, al finalizar la sesión quirúrgica facilita la colocación de una funda protectora a todo su conjunto ocupando el mínimo espacio. En general, los
facoemulsificadores actuales incluyen equipo de vitrectomía, por si fuera necesario, y equipamiento para
388
coagulación del campo quirúrgico expuesto en una cirugía de cristalino o catarata.
2. Monitor de vídeo. El campo quirúrgico del microscopio
solo es percibido por el cirujano y sus ayudantes, por lo
tanto, es conveniente que las otras personas que colaboran en la intervención vean así mismo la operación5.
Para lograr esto se debe instalar un sistema de vídeo en
el microscopio y disponer de monitor en la sala operatoria. La instalación de un DVD grabador permite la grabación de las intervenciones que así lo requiriesen.
3. Mesa de operaciones. La mesa de operaciones debe
disponer de un cabezal que apoye solamente la cabeza y éste ha de ser regulable en altura y flexión para
poder lograr la mayor comodidad cervical del paciente.
El cabezal debe ocupar poco espacio para que las piernas del cirujano no choquen, pudiéndolas mover para
accionar con comodidad los pedales de los aparatos5.
También es conveniente que tenga las posibilidades
de ajuste básicas de posición del paciente: trendelenburg, antitrendelenburg y regulación de altura5.
4. Asiento del cirujano. El asiento del cirujano debe ser
estable y con ruedas que permitan su movilidad suave y fácilmente permitiendo la mayor ergonomía durante la actividad quirúrgica. La regulación en altura
es preferible que sea realizada por el propio cirujano
para darle más autonomía. Un asiento muy bajo ocasionará que el cirujano tenga muy flexionadas las piernas y dificulta la pulsación precisa de los pedales; por
el contrario, un asiento muy alto contactará con la parte baja de la camilla impidiendo un movimiento apropiado de los pies5. También la altura inadecuada forzará una postura incómoda limitando el movimiento
de las manos y provocando la tensión cervical5. En todos los casos la regulación del asiento está condicionada por la altura de la mesa de operaciones. Además del asiento del cirujano se precisa asiento para
el ayudante, la instrumentista y el anestesista.
Ha de haber dentro del quirófano todo el material necesario para la intervención prevista y de esta manera no tener
que recurrir al almacén del área quirúrgica en busca de elementos que puedan ser precisados durante la cirugía. Esto
suma tiempo de espera que en determinadas situaciones
pueden ser críticos para el buen resultado de la intervención.
Sala de lavado quirúrgico
Esta sala dispone de unos lavabos que deben mantenerse
limpios y dispuestos a ser utilizados en cualquier momento.
Los cepillos quirúrgicos deberán ser estériles, de un solo
uso, y contendrán jabón desinfectante, que actuará en sus
dos caras, una de esponja para la piel de manos y antebrazos y otra de cepillo para las uñas.
La salida de agua en estos lavabos deberá ser automática, bien por pedal o palanca, o célula fotoeléctrica. El sumi-
30. PRINCIPIOS DE ENFERMERÍA EN EL QUIRÓFANO
nistro de agua para el lavado quirúrgico debe ser filtrado con
al menos elementos filtrantes cerámicos para garantizar la
eliminación de impurezas.
Antequirófano
Sala adyacente a quirófano, dispone de armarios cerrados para fácil almacenaje del material estéril, como por ejemplo: 1) Cajas de instrumental quirúrgico; 2) Stock de material
fungible; 3) Amplio stock de lentes intraoculares, anillos intracapsulares y otros implantes que el equipo de oftalmología
haya estimado necesario.
Los armarios deberán estar debidamente rotulados para
la fácil identificación del contenido de los mismos. Los periodos de revisión de fechas de caducidad y reposición del material deberán ser establecidos por el personal de enfermería.
Esta sala puede contar con el equipo informático y con
una zona para despachar la historia clínica del paciente con
las correspondientes anotaciones escritas (recetas, informes, preoperatorio y cuanta documentación se considere imprescindible).
Sala de preparación
Es la zona de preparación preoperatoria y de preanestesia. El área de preparación preoperatoria es una sala anexa
al quirófano provista de las conexiones de gases, monitores
de control y otros materiales anestésicos para realizar la premedicación de anestesia general o local. Los desfibriladores
y otros materiales de emergencia deben estar en un lugar accesible, pudiendo encontrarse en esta sala, y ser examinados
diariamente antes de la sesión quirúrgica por el personal de
enfermería.
CUIDADOS PERIOPERATORIOS DEL PACIENTE
La cirugía de catarata o cristalino se practica en la mayoría de las ocasiones sin ingreso en el centro. Esto implica la
existencia de una buena organización y coordinación entre el
servicio de admisión, la unidad de cirugía sin ingreso y el quirófano.
Al paciente se le informa detalladamente de la intervención que se va a practicar antes de su programación. Al programar la cirugía se dan las pautas preoperatorios preanestésicas y de higiene: ayuno de seis horas antes de la cirugía,
mantenimiento de su medicación habitual y aseo corporal el
día de la cirugía, haciendo hincapié en el lavado de la cara con
agua y jabón, prescindiendo de productos cosméticos15,16.
Cuando el paciente llega al centro quirúrgico es conducido por un celador desde el servicio de admisión hasta la unidad de cirugía sin ingreso donde se le proporciona la indumentaria apropiada para entrar en el área quirúrgica y se le
explica su correcta colocación que debe facilitar los cuidados
preoperatorios.
Como recomendaciones generales:
• El gorro debe recoger todo el cabello cubriendo también las orejas. Se debe evitar la presencia de horquillas, goma o pasador en el pelo ya que pueden originar
incomodidad durante la cirugía.
• La bata debe vestirse abierta hacia delante para que
facilite la colocación de los electrodos de monitorización. Se comprueba que haya permanecido en ayunas
durante el preoperatorio prescrito.
• Si el paciente lleva prótesis auditiva en el mismo lado del
ojo a operar, se debe retirar porque durante la intervención puede entrar líquido en la oreja y dañar el aparato15.
En casos de sordera total, para evitar el aislamiento del
paciente se procederá a la protección del aparato auditivo con un plástico adhesivo una vez dentro del quirófano.
Y a continuación se realizan los procesos prequirúrgicos
indicados:
• Toma de constantes vitales que serán empleados
como datos basales para controlar al paciente durante los periodos operatorio y postoperatorio15.
• Indicación de que orine antes del traslado al área quirúrgica para eliminar la posibilidad de molestias por tener la vejiga llena durante los periodos quirúrgico y
postoperatorio inmediato.
Cuando el paciente llega al área quirúrgica se revisa la indumentaria, será ayudado a colocarse sobre la camilla y el celador lo conducirá a la sala de preparación.
Durante el preoperatorio inmediato podemos tener al paciente discretamente reclinado, con las rodillas ligeramente
flexionadas y cubierto con una sábana o manta para preservar
su intimidad y evitar la sensación de frío. La posición decúbito supino pone el cuerpo en un estado de rigidez y es poco
confortable especialmente para los pacientes ancianos15.
En la sala de preparación, la enfermera de anestesia recibe e identifica al paciente; valora su grado de conocimiento
sobre la intervención quirúrgica y aclara la información errónea, si la hubiera, para facilitar su colaboración.
Se comprueba que venga bien preparado, asegurando
que se hayan aportado todos los datos del preoperatorio requerido por el servicio de anestesia y se procede a la preparación ocular.
La preparación ocular debe seguir la siguiente rutina:
• Comprobaremos la limpieza de la cara, en caso de no
ser correcta limpiaremos con agua y jabón y la secaremos sin frotar, para evitar la irritación de la piel. Puede repetirse este lavado hasta que dejen de detectarse restos de impurezas por la inspección externa.
• Para limpiar los párpados instilaremos una gota de colirio anestésico en ambos ojos, en el ojo a operar para
aliviar la sensación de escozor de los colirios midriáticos y de la solución antiséptica, en el ojo contralateral
para evitar las molestias en el caso que de forma accidental cayera solución antiséptica4,15.
389
IV. CIRUGÍA DE LA CATARATA: CUIDADOS PREOPERATORIOS
• Instilar la pauta de colirios midriáticos prescritos: nos
aseguraremos, leyendo el plan quirúrgico, qué ojo requiere la medicación y, ante cualquier duda, preguntaremos al cirujano antes de preguntárselo al paciente
para no crearle inseguridad y confusiones. Con el paciente solo lo confirmaremos.
• Seleccionamos la medicación y la colocamos cerca de
su cabeza, de este modo nos será fácil cogerla para
hacer las aplicaciones repetidas. Cada vez que cojamos la medicación leeremos la etiqueta asegurándonos que es la correcta.
• Indicaremos al paciente que incline la cabeza hacia
atrás, abra los ojos y mire hacia arriba. Con los dedos
meñique y anular de la mano que sostiene la medicación, traccionaremos suavemente hacia abajo y hacia
fuera del párpado inferior apoyándonos en el pómulo
con una gasa estéril con la que recogeremos el exceso
de gotas que caen por la cara del paciente, de este
modo nos quedará expuesto el saco conjuntival. Si el
paciente no puede controlar el parpadeo traccionaremos y sujetaremos el párpado superior con un dedo de
la otra mano. Instilamos 1 ó 2 gotas en cada aplicación
sujetando el contenedor con los dedos índice y pulgar
para instilar la cantidad correcta en el saco conjuntival.
Evitar aplicar la medicación directamente sobre la córnea porque ésta tiene mayor sensibilidad. No tocar con
el recipiente de las gotas al paciente ya que si esto ocurriera consideraríamos el recipiente como contaminado.
• Indicaremos al paciente que cierre ambos ojos suavemente, colocaremos nuestro dedo sobre el orificio lagrimal del paciente y aplicaremos una ligera presión
durante 15 sg, tras instilar las gotas. Favorece una mejor absorción ocular y evita que la medicación se drene a través de la vía lagrimal y pase a nariz y garganta; esto es especialmente necesario en bebés que
puede producir complicaciones generadas por la absorción a nivel del tracto digestivo de los principios activos de los colirios15.
En la sala de preparación el anestesista valora el preoperatorio y el nivel de ansiedad el paciente, y pauta la sedación15.
Durante este proceso se puede comprobar si la midriasis
va siendo correcta y se instilan tres dosis de anestesia tópica
(Lidocaína 5%, por ejemplo) y una dosis de povidona iodada 5%
(povidona iodada 10%, diluida al 50% con suero fisiológico). Antes de entrar en quirófano se procede a la desinfección periocular mediante una gasa estéril impregnada con povidona iodada 10% y dejaremos que actúe por lo menos durante tres
minutos indicando que mantenga los ojos cerrados.
APOYO Y ASISTENCIA EMOCIONAL
La asistencia de enfermería debe incluir un cálido contacto personal que humanice el ambiente del quirófano, a menu390
do frío, aséptico y muy tecnificado. Nos dirigiremos de forma
personalizada, siempre «de usted» y luego por su nombre.
Durante la preparación para la anestesia y la cirugía, el
personal de enfermería continuará tranquilizando al paciente,
reduciendo su ansiedad y proporcionándole comodidad física
y medidas de seguridad15.
Se describirán todos los estímulos sensoriales que va a recibir el paciente; por ejemplo: colocación del manguito de presión arterial, del electrocardiógrafo, de las vías intravenosas,
del pulsioxímetro y de las gafas nasales para oxigenoterapia.
El personal de enfermería debe utilizar sus conocimientos
básicos de comunicación, como el tacto, el contacto ocular y
una tranquilización verbal realista, para reducir la ansiedad15.
Esta asistencia de enfermería centrada en el paciente se
mantendrá durante toda la intervención y se debe tener presente la importancia de la comunicación «no verbal» entre el
personal quirúrgico.
ACTIVIDADES Y FUNCIONES DE ENFERMERÍA
EN QUIRÓFANO
La enfermera debe saber, con antelación, las intervenciones que se realizarán al día siguiente para tener previstas las
necesidades y evitar que por su causa pueda retrasarse el comienzo de la sesión quirúrgica.
Debe conocer la patología y la técnica quirúrgica a realizar
para adelantarse, en lo posible, a ellas en cuanto al material necesario y no causar entorpecimiento durante la intervención.
Una rutina elemental en cirugía del cristalino contemplaría los siguientes pasos:
1. Al inicio de cada sesión quirúrgica se enciende y calibra el aparato de anestesia, se comprueba el correcto funcionamiento del monitor, del oxígeno y se prepara la medicación necesaria para la cirugía y anestesia.
2. También activa el BSS-Plus® para irrigación intraocular
y le añade la dosis estipulada de adrenalina, si fuera
el caso.
3. Procede a encender y programar el equipo de facoemulsificación, a conectar el microscopio y colocar los
pedales, y comprobar el correcto funcionamiento de la
mesa de intervenciones2.
4. Revisa que todo el material necesario para la intervención esté bien preparado, registra en el ordenador los
datos del paciente y prepara los papeles necesarios:
1) Hoja de enfermería; 2) Hoja de gasto de lente; 3)
Hoja de petición de farmacia; 4) Otros.
En el momento en que el paciente llega a quirófano se convierte en el centro de atención del personal de enfermería2,15.
1. La enfermera le recibe y ayuda en su correcta colocación: la cabeza debe apoyar bien sobre el cabezal
basculante de la mesa de intervenciones y debe dar
importancia al confort del paciente ya que de ello
puede depender su buena colaboración durante la
intervención.
30. PRINCIPIOS DE ENFERMERÍA EN EL QUIRÓFANO
2. Procede a su monitorización, continúa la pauta de
anestesia tópica comprobando la midriasis y repite
la desinfección ocular y periocular antes de la colocación del campo quirúrgico: Se instila povidona iodada al 5% en el saco conjuntival para reducir la
flora bacteriana conjuntival. Después le indicamos
que cierre los párpados y mediante una gasa estéril aplicamos povidona iodada 10%. La desinfección se empieza por las pestañas e iremos ampliando la zona a desinfectar realizando círculos
hasta llegar al labio superior, el pabellón auditivo,
la sien, la frente y la nariz. No debemos volver hacia atrás, y si tenemos que insistir en alguna zona
cogeremos otra gasa estéril y volveremos a aplicar
la povidona iodada 10% de la misma forma. De
esta manera no desplazamos gérmenes de las zonas más externas del campo que estamos desinfectando hacia el ojo2,15.
3. Abre el custom pack quirúrgico y todo el material preparado para la cirugía.
4. Ayuda a vestir a los oftalmólogos.
5. Colabora en el proceso de purgado y sintonizado del
aparato de facoemulsificación2.
6. Ayuda en la colocación del campo quirúrgico. La tendencia actual es utilizar desechables que incorporan
una zona adhesiva transparente fácil de manipular y
permite que las pestañas queden pegadas a los párpados y al plástico quedando aisladas por completo
del globo ocular y dispone de una o dos bolsas para
recoger los líquidos. La sábana se extiende a lo largo del paciente ajustando las bolsas para no derramar los líquidos, y se levanta ligeramente la sábana
que queda sobre la nariz y boca del paciente con la
ayuda de una guía maleable.
7. Con unas tijeras se abre el campo transparente a nivel de la hendidura palpebral siguiendo a dos milímetros el borde de los parpados de forma que al colocar el separador, el borde de los parpados quede
forrado por el adhesivo2,15.
8. Una vez iniciada la cirugía, la enfermera circulante
debe estar atenta en todo momento a las necesidades que puedan surgir durante la intervención.
9. La enfermera instrumentista es responsable en
cada momento del instrumental y material de la
mesa quirúrgica hasta finalizar la intervención y
debe seguir el curso del acto quirúrgico procurando
anticiparse a las necesidades del cirujano.
10. Es importante que las jeringas de suero, viscoelástico u otros fluidos se den al cirujano correctamente
purgadas para evitar la entrada de burbujas de aire
en cámara anterior.
11. En el momento en el que la catarata ha sido extraída se abre el paquete que contiene la lente intraocular y la enfermera instrumentista la pliega y la monta en el inyector. Al mismo tiempo de entregarla al
cirujano dice, en vos alta, la potencia y el tipo de lente intraocular para una mayor seguridad.
12. Una vez terminada la cirugía se retira el campo estéril
y se instila de nuevo la dilución de povidona iodada.
13. Durante la desmonitorización del paciente se le explica unas recomendaciones a tener en cuenta15:
• Evitar frotamientos y presión sobre el ojo operado.
• Indicar la necesidad de lavado de manos previo a la
administración de los colirios en el postoperatorio.
• Evitar levantar objetos de más de 10 kg de peso15.
• Explicar que la ducha esta permitida siempre y
cuando el ojo esté protegido del agua.
• Puede lavarse el pelo, haciéndolo al estilo de las
peluquerías, con la cabeza hacia atrás.
14. Mientras tanto la enfermera instrumentista recoge la
mesa quirúrgica y entrega el instrumental a la auxiliar para que lo lleve al servicio de esterilización,
desmonta el equipo de facoemulsificación y desecha
todo el material de un solo uso2.
15. Al finalizar la sesión el personal de enfermería apaga y recoge los distintos aparatos utilizados.
16. Finalmente, archiva las hojas de enfermería y se ocupa de que las peticiones de las las lentes lleguen a
suministros para su posterior reposición.
El mantenimiento rutinario del microscopio, se centra
fundamentalmente en la limpieza de la óptica externa y los
oculares. Esta se realiza en tres fases4: 1) Primero con un
paño, no tejido, humedecido en una solución ligeramente jabonosa para disolver las materias grasas; 2) Luego con alcohol; y 3) Finalmente con un papel absorbente para secar los
objetivos, haciendo movimientos circulares del centro a la
periferia. A continuación se enfunda con una bolsa de plástico estéril. Los fusibles de protección y las bombillas de la
fuente de iluminación se reemplazan cuando se funden y es
importante que los recambios estén dentro del quirófano.
Se deja preparado el material necesario para la siguiente
sesión una vez revisado el parte quirúrgico.
Dado que la mayor parte del material que se utiliza es
desechable tiene una gran importancia el control y la reposición del stock.
MATERIAL E INSTRUMENTAL NECESARIO
PARA LA CIRUGÍA DE CATARATA Y CRISTALINO
Entendemos que es extremadamente difícil dar normas
generales y que cada centro puede tener sus preferencias
particulares. Intentaremos transmitir los principios que, a
nuestro entender, pueden guiar la práctica de forma general.
Custom pack
Es una aportación reciente a la cirugía de la catarata y su
introducción vino derivada del alto número de procedimientos
391
IV. CIRUGÍA DE LA CATARATA: CUIDADOS PREOPERATORIOS
que se practican y de la necesidad de disminuir cargas de
material para almacenaje; también facilita la cirugía.
El Custom pack es un paquete quirúrgico estéril con todo
el material fungible necesario para una cirugía, en este caso
de catarata. Como decíamos, facilita el control, la previsión
de stocks y los gastos por intervención quirúrgica, simplificando los procesos administrativos.
En el quirófano, permite una mayor dedicación al paciente al facilitar la preparación de la mesa quirúrgica con un solo
gesto y disminuye la posibilidad de errores.
Entre sus ventajas, destacamos:
1. Todo el material desechable necesario en un solo
contenedor
2. Todos los componentes son de un solo uso.
3. Se manipulan menos productos en quirófano.
4. No faltan productos durante la intervención.
5. Se generan menos partículas.
6. Facilita el montaje de la mesa quirúrgica.
7. Menor tiempo de preparación entre cirugías.
8. No hay pérdidas por productos abiertos no utilizados.
9. Garantía de esterilidad.
10. Facilita el aprendizaje de la enfermería.
11. Menores necesidades de almacenaje.
12. Control en los envíos, según una agenda personalizada.
13. Menor esfuerzo y tiempos dedicados en la gestión
de pedidos.
14. Favorece el control del inventario.
El contenido de un Custom Pack se elabora a medida y a
petición; uno básico puede incluir los siguientes elementos:
1. Paño cubremesa.
2. Campo quirúrgico.
3. Gasas.
4. Batas con secamanos.
5. Microesponjas.
6. Cistitomo.
7. Cánula de hidrodisección.
8. Cuchillete 15º.
9. Cuchillete angulado 2,75º.
10. Jeringa 1 ml.
11. Aguja 50 x 16 (25 G 5/8»).
12. Diferentes jeringas.
13. Filtro millex 0,22 µm.
14. Otro material: gasas, adhesivos,...
evita que éste se mueva y deteriore durante el desplazamiento y la manipulación de la caja.
El contenido de una caja básica de instrumental para catarata, en nuestra práctica, se compone del siguiente instrumental:
1. Pinza de córnea tipo colibrí. Moria, ref. 7862
2. Pinza de capsulorrexis, Coridon. Moria, ref. 17163
3. Pinza de lente, Mawas. Moria, ref. 12953
4. Manipulador de faco, Lebuissson. Moria, ref. 7825-B
5. Rotador de Lester. Moria, ref. 13227
6. Tijera abrecampos, Bregeat. Moria, ref. 878-B
7. Blefaroestato, Liebermann. Teufel, ref. 1403
8. Cánula Charleux 23G. Moria, ref. 9623
9. Pieza de mano I/A. Alcon, ref. 8178
10. Terminal I/A. Alcon, ref. 356-1010
También existe otro material necesario que es preciso esterilizar individualmente:
1. Pieza de mano del facoemulsificador.
2. Inyector de lente, que dependerá del modelo de lente
a implantar.
Otro material fungible
1. Pack de accesorios de facoemulsificación que incluye
cassette, bolsa de drenaje, tubos I/A y cubierta de
bandeja.
2. Aguja o punta de faco.
3. Set de accesorios de infusión: llave de cánula I/A,
manguito de irrigación, supresor de burbujas y test de
cámara.
Cuando la cirugía de cirugía de catarata programada para
facoemuslificación se reconvierte en cirugía extracapsular, el
material necesario puede ser el siguiente:
1. Tijera, Vannas. Moria, ref. 8100.
2. Portaagujas. Moria, ref. 9960.
3. Asa de Wilder. Katena, ref. K3-4100.
4. Tijera ramma izquierda. Moria, ref. 9850.
5. Tijera rama derecha. Moria, ref. 9851.
6. Vitreotomo anterior.
7. Sutura de nylon 10/0.
8. Cuchillete de 5,2 mm.
Sería exhaustivo pretender describir todo el material quirúrgico que debe existir en un quirófano de oftalmología.
CONCLUSIONES
Instrumental
La caja de instrumental de cirugía de catarata y cristalino
debe ser esterilizable a vapor y en doble bolsa, con una tapa
de fácil apertura en la mesa quirúrgica y, a ser posible, de un
material transparente que facilite su identificación visualizando su contenido. En su interior dispone, como base, de una
alfombrilla que proporciona la protección del instrumental y
392
El personal de enfermería es responsable de habilitar el
área quirúrgica de forma que se pueda asegurar sea un lugar
de trabajo con las máximas garantías de seguridad para el
paciente. Será también responsable de los cuidados perioperatorios del paciente desde su entrada hasta su salida, así
como de la preparación de todo el material necesario para la
cirugía.
30. PRINCIPIOS DE ENFERMERÍA EN EL QUIRÓFANO
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