actualidad tributaria Sección elaborada por: C ontestación de la Dirección General de Tributos, de fecha 25 de febrero de 2010, en la que se analiza la tributación, a efectos del Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, de una ampliación de capital mediante la aportación de un inmueble gravado con una hipoteca, en la que la sociedad adquirente se subroga en el préstamo hipotecario existente. En el presente caso, el consultante, socio y apoderado general de una sociedad limitada, tiene previsto acudir a la ampliación de capital de dicha sociedad, aportando un inmueble gravado con una hipoteca. La citada sociedad se subrogará en la obligación personal del préstamo hipotecario garantizado con la hipoteca que pesa sobre el inmueble aportado. Dicha operación se podría efectuar con o sin la liberación del consultante 76 Directivos Construcción Enero 2011 En la presente colaboración se comenta una contestación de la Dirección General de Tributos, de fecha 25 de febrero de 2010, en la que se analiza la tributación, a efectos del Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, de una ampliación de capital mediante la aportación de un inmueble gravado con una hipoteca, en la que la sociedad adquirente se subroga en el préstamo hipotecario existente. Asimismo, comentamos una contestación del mismo Centro Directivo, de fecha 1 de junio de 2010, en la que se analiza la deducibilidad, a efectos del Impuesto sobre Sociedades, de la pérdida patrimonial contabilizada como consecuencia de las cantidades dejadas de percibir por la entidad consultante como resultado de un convenio de quita suscrito con la entidad deudora de dichas cantidades. como titular del préstamo garantizado por la hipoteca. Sobre la base de los hechos expuestos, el consultante desea conocer la cuantía a la que ascenderá la base imponible de la modalidad de Operaciones Societarias (en adelante OS) del Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados (en adelante ITPAJD), correspondiente a la ampliación de capital y si dicha operación origina adicionalmente un nuevo hecho imponible consistente en la adjudicación expresa en pago de asunción de deudas, tanto si el propio consultante quedase liberado de la deuda como en el caso de que siguiera siendo cotitular de la misma junto a la sociedad. Por lo que se refiere a la cuestión relativa a la base imponible de OS correspondiente a la operación de ampliación de capital, la Dirección General de Tributos (en adelante DGT), señala que tal y como establece el artículo 25.1 del Texto Refundido de la Ley del ITPAJD, en los aumentos de capital de sociedades que limiten de alguna manera la responsabilidad de los socios, la base imponible coincidirá con el importe nominal en que aquél quede ampliado con adición de las primas de emisión en su caso exigidas. En cuanto al posible hecho imponible adicional consistente en la adjudicación en pago de asunción de deudas, en el escrito de consulta se distingue entre que la asunción de deuda tenga lugar bien de forma exclusiva, quedando el consultante totalmente liberado de su obligación, o bien de forma solidaria con el primitivo deudor, lo que se denomina asunción cumulativa, en cuyo caso el socio sigue siendo cotitular de la deuda junto con la sociedad, por lo que el acreedor puede dirigirse indistintamente a cualquiera de los dos deudores para el pago de la misma. A este respecto, la DGT comienza por explicar que si a la aportación de un inmueble hipotecado a una sociedad que amplia capital se añade la asunción de la deuda por parte de la entidad adjudicataria del inmueble, esta segunda operación es otra convención, distinta de la transmisión del inmueble, por lo que debe gravarse separadamente de aquélla. Una vez dicho esto, la DGT señala que deben distinguirse dos figuras, la asunción de deuda, que puede tener lugar de forma exclusiva o de forma solidaria, y la adjudicación de bienes en pago de deuda. Si bien, la DGT aclara que, no constituyendo la asunción de deuda una figura reconocida en el Texto Refundido de la Ley del ITPAJD como hecho imponible al no estar recogido en el artículo 7 de dicha norma, no debe tributar en el Impuesto la constitución de dicha figura. No obstante, en relación con la adjudicación de bienes en pago de deuda, el artículo 7.2 del Texto Refundido de la Ley del ITPAJD equipara la transmisión de bienes a la adjudicación de éstos en pago de la asunción de deuda. Por lo tanto, será hecho imponible, en la modalidad de Transmisiones Patrimoniales Onerosas, la adjudicación en pago de asunción de deudas y ésta se producirá con independencia de la total o parcial liberación del deudor primitivo, pues en ambos casos la sociedad asume la deuda. En el primer caso, dicha asunción se produce de forma exclusiva, y en el segundo de forma cumulativa o solidaria con el deudor primitivo, pero sin que ello signifique que en este segundo caso no tenga lugar la asunción de la deuda por parte de la entidad, pues ya se ha dicho que el acreedor puede dirigirse indistintamente contra cualquiera de los deudores para el pago de la misma. www.directivosconstruccion.es En relación con la base imponible de este hecho imponible, la DGT explica que la misma estará constituida por el valor real del bien transmitido. En conclusión, la DGT establece que, en el caso de operaciones de ampliación de capital, llevadas a cabo mediante la aportación de un inmueble gravado con una hipoteca y en las que la sociedad adquirente asume el préstamo hipotecario existente, nos encontraremos ante dos convenciones distintas que darán lugar a dos hechos imponibles diferenciados, por un lado, la ampliación de capital y por otro, la adjudicación en pago de la asunción de la deuda. Contestación de la Dirección General de Tributos, de fecha 1 de junio de 2010, en la que se analiza la deducibilidad, a efectos del Impuesto sobre Sociedades, de la pérdida patrimonial contabilizada como consecuencia de las cantidades dejadas de percibir por le entidad consultante como resultado de un convenio de quita suscrito con la entidad deudora de dichas cantidades. En esta ocasión, la entidad consultante vendió en el ejercicio 2006 la totalidad de su participación en una sociedad a otra entidad, acordando que el pago se satisfaría de forma aplazada y fraccionada a lo largo de 10 años. Para ello, se documentó el precio de forma fraccionada y se le entregaron a la consultante un total de 11 pagarés cuyo pago no fue garantizado. Posteriormente, dada la situación financiera de la entidad adquirente, ésta comunicó a la consultante la necesidad de renegociar la deuda derivada de la operación descrita ante la imposibilidad de hacer frente a la misma. Como consecuencia de todo lo anteriormente expuesto, en la actualidad la entidad consultante se está planteando la posibilidad de acceder a una quita a cambio del cobro inmediato, o garantizado bancariamente, del resto del precio. Es decir, la conveniencia de un rápido y efectivo cobro de una deuda que en su mayor parte no se encuentra vencida, evitando las demoras, pérdidas de intereses y de liquidez y de riesgo de insolvencia, ha llevado a la consultante a plantearse la posibilidad de suscribir un convenio de quita muy significativa del crédito que ostenta. En esta situación, la consultante desea saber si sería posible admitir como pérdida patrimonial deducible en el Impuesto sobre Sociedades el importe de la quita que eventualmente se convenga a favor de la entidad deudora. Para resolver la duda planteada, la DGT comienza estableciendo que, desde la perspectiva contable, la condonación parcial de una deuda, pactada tras el incumplimiento reiterado del deudor, y mediando acuerdos de renegociación del mismo debido a esos incumplimientos, cuando se considera que el crédito puede no llegarse a cobrar en su totalidad, debe registrarse, según el Plan General Contable, como gasto; al tratase de una pérdida irreversible de un crédito, de carácter ya infrecuente, y que cae fuera de las actividades típicas de la empresa. En estas circunstancias, parece que la causa de la condonación es evitar el perjuicio total de un crédito incobrado, renegociando el citado crédito con la finalidad de lograr su cobro, más que el “ánimus donandi”, entendiéndose, por tanto, que tiene la consideración de una pérdida irreversible, consecuencia de la renegociación entre las partes. En consecuencia, en aplicación de lo dispuesto en el artículo 10.3 del TRLIS, y en ausencia de precepto en la normativa del Impuesto que disponga una corrección del resultado contable que afecte a este concepto de gasto, concluye la DGT queresultaría deducible en el Impuesto sobre Sociedades el gasto contabilizado por la cantidad no cobrada y objeto de condonación. Enero 2011 Directivos Construcción 77