CONSUMO DE LEGUMBRES EN ESTUDIANTES UNIVERSITARIOS Buks, Adriana; Llano, Alicia; Gullerian Adriana Cátedra de Nutrición Básica. Instituto Universitario de Ciencias de la Salud. Fundación H. A. Barceló. Introducción Las leguminosas figuran entre los primeros productos alimenticios que fueron cultivados por el hombre.1 Las primeras “culturas permanentes”, como son conocidas, pudieron evolucionar de ser comunidades cazadoras recolectoras a ser pueblos con una incipiente agricultura gracias a las legumbres. Hoy sabemos, por los restos de cultivos de legumbres que datan de hace unos 10 mil años en Tailandia, que este alimento fue de los primeros en ser cultivados domésticamente por el hombre. En América Latina los antiguos pobladores de México y Perú ya cosechaban diversos tipos de frijoles desde hace unos 7 mil años. En esa misma época, las lentejas y los garbanzos también eran parte de la dieta de las comunidades del Medio Oriente. Esto permitió que los asentamientos humanos en esa zona del planeta crecieran y dieran lugar a las primeras civilizaciones. Hoy en día, casi todas las culturas del mundo tienen algún plato característico con legumbres. Desde el frijol latinoamericano hasta la soja asiática, pasando por el garbanzo del norte de África o la lenteja del Medio Oriente, prácticamente no hay una nación que no haya incorporado las leguminosas a su dieta..2 El Codex Alimentarius señala: “se entiende por legumbres a las semillas secas de plantas leguminosas, que se distinguen de las semillas oleaginosas por su bajo contenido de grasa”..3 Según el Código Alimentario Argentino (C.A.A.). Artículo 877: “Con el nombre de legumbres, se entiende a los frutos y las semillas de las leguminosas”. 1- “Se entiende por legumbre fresca la de cosecha reciente y consumo inmediato en las condiciones habituales de expendio.” 2- “Las legumbres secas, desecadas o deshidratadas no presentarán un contenido de agua superior al 13% determinado a 100-105° C.” 4 Se comercializan luego de un proceso de secado o deshidratación. Al cocinarlas en medio húmedo se ablandan, absorben agua, y aumentan entre dos y tres veces su volumen..5 El C.A.A en el Artículo 927 cita “Se entiende por Arvejas verdes o Guisantes verdes en conserva, la elaborada con las semillas inmaduras (verdes) extraídas de la vaina, enteras, prácticamente sanas y limpias del Pisum arvense L y P. sativum L, envasadas en un medio líquido apropiado; el envase cerrado herméticamente y esterilizado industrialmente. Artículo 928 - " Se entiende por Conserva de arvejas secas remojadas, el producto preparado con las semillas secas previamente remojadas de distintas variedades de cultivo de la especie Pissum sativum L (excluída la subespecie macrocarpus); envasadas en un recipiente bromatológicamente apto con un medio de cobertura apropiado y sometido a esterilización industrial para asegurar su conservación. Artículo 934 - "Con la denominación de Porotos en conserva, se entiende el producto elaborado con las semillas frescas, sanas, limpias, de las distintas variedades de Phaseolus vulgaris; lunatus L, envasadas con un medio líquido apropiado en un recipiente bromatológicamente apto, cerrado herméticamente y sometido a esterilización industrial. Artículo 935 Se entiende por Porotos secos remojados, la conserva elaborada con porotos secos, y que debe reunir las mismas condiciones de elaboración y características del producto anterior. Artículo 936 Se entiende por Garbanzos en conserva, la elaborada con las semillas del Cicer arietinum L y sus variedades, envasadas en un medio adecuado en un recipiente herméticamente cerrado esterilizado industrialmente. La conserva elaborada con garbanzos secos deberá presentar las mismas características, pero se rotulará: Conserva de garbanzos secos remojados" .6 En cualquier caso, consumidas frescas, o secas, las legumbres, han sido un importante complemento para la alimentación equilibrada de muchas civilizaciones, y durante siglos han constituido una inestimable fuente de proteínas para las clases sociales más desfavorecidas, que rara vez alcanzaban el privilegio de comer carne.7 Argentina no tiene un gran consumo per cápita de legumbres y la producción supera ampliamente este nivel de consumo, por lo que el país coloca un alto porcentaje de la producción en los mercados externos.8 El consumo de legumbres está poco desarrollado, se estima que es de 300 gramos/año por habitante. Esto determina un mercado interno de legumbres de aproximadamente 12 mil toneladas/año, incluyendo todas las variedades que se comercializan..9 En los países industrializados, donde el consumo de legumbres había disminuido con los años, se observa un incremento en el consumo per cápita, lo que se atribuye a la conciencia sobre los beneficios para la salud. La búsqueda de fuentes alternativas de proteínas, con bajos contenidos de grasa y buen aporte de fibra, posicionan a las legumbres como una excelente alternativa.10 Las legumbres secas, son ricas en hidratos de carbono complejos (fibra dietética y almidón) Poseen bajo índice glucémico. Constituyen una importante fuente proteica, aunque les falten algunos aminoácidos esenciales, esta deficiencia puede ser compensada mediante la combinación de legumbres con cereales, logrando proteínas de alto valor biológico. El contenido en lípidos es muy bajo, y aportan ácidos grasos poliinsaturados, especialmente linoleico. En cuanto a los ácidos grasos monoinsaturados, el oleico es el predominante. Poseen vitaminas del complejo B, destacándose el aporte de ácido fólico. Aportan minerales como calcio, magnesio, fósforo, potasio y hierro (no hemínico). 5 Los hábitos alimentarios poco saludables adquiridos en las primeras décadas de vida, en la mayoría de los casos, se mantienen hasta la edad adulta, incrementando en forma notable la probabilidad de desarrollar ciertas patologías como: sobrepeso, obesidad, diabetes, trastornos alimentarios, enfermedades cardiovasculares, entre otras. La juventud es una etapa decisiva para promover la salud, y el acceso a la universidad supone un cambio importante en el individuo que puede repercutir en su estilo de vida futuro, por lo tanto se vuelve imprescindible reforzar las conductas alimentarias apropiadas.11 Por lo expuesto, surge el interrogante, ¿los estudiantes consumen, arvejas, garbanzos, habas, lentejas, poroto, soja? Objetivo general: Valorar el consumo de legumbres en estudiantes de primer año de Nutrición del Instituto Universitario Fundación H. A. Barceló de la Ciudad de Bs. As. Objetivos específicos: - Investigar cuáles son las legumbres más consumidas. - Conocer las formas de presentación comercial, de las legumbres que adquieren. - Indagar la frecuencia del consumo de legumbres. - Identificar los motivos por los cuales no consumen legumbres. Materiales y Métodos Se evaluó el consumo de legumbres en 61 estudiantes argentinos de 17 a 44 años de edad, que hasta el momento de la encuesta no recibieron información académica sobre el tema. Se excluyeron de la muestra a 5 alumnos de otras nacionalidades y 6 estudiantes cuya alimentación es vegetariana. Se utilizó una encuesta de preguntas abiertas y cerradas. El estudio fue descriptivo, observacional y transversal. Resultados La edad media del grupo estudiado fue de 22.5 ± 4.69 años. El 78,6 % (n: 48) mujeres y 21,3 % (n: 13) hombres. Al 93% (n: 57) de los encuestados le gusta el sabor de las legumbres y al 7 % (n: 4) que no les agrada, igualmente la consumen por considerarlas saludables. Tanto las arvejas 75%(n: 46) como las lentejas 74% (n: 45), son las legumbres más consumidas por los estudiantes, siguiendo la soja con el 62% (n: 38) en tercer lugar.(Gráfico 1) Grafico n°1 Consumo de legumbres Arvejas 75% Lentejas 74% Soja 62% Poroto 30% Garbanzos Habas 25% 8% El 61% (n 37) prefiere las legumbres en conserva, siguiendo en preferencia las legumbres secas en un 46% (n 28).(Gráfico 2) Grafico n° 2 Preferencia de consumo otras 20% enlatadas 61% secas 46% congeladas 20% En cuanto a la frecuencia de consumo: la soja con un 31 % (n: 19), las arvejas con el 21 % (n: 13 y las lentejas en un 20 % (n: 12) son las más consumidas semanalmente. (Gráfico 3) Grafico n° 3 Frecuencia de consumo semanal 26% 15 dias mensual no consume 25% 38% 21% 70% 75% 34% 92% 33% 18% 13% 20% 15% 20% lentejas 21% arvejas 7% 8% 31% 8% 7% 10% 8% porotos garbanzos habas soja El 77 % (n: 47) de los alumnos consumen las legumbres por considerar que son saludables y el 23 % (n: 14) no responde. Los estudiantes consultaron las diferentes formas de preparar las legumbres en un 49% (n: 30) a través de la familia, el 26 % (n: 16) se informaron a través de medios electrónicos y en menor proporción 5 % (n: 3) en libros y 5 % (n: 3) revistas. El 15 % (n: 9) restante, a través de la televisión, amigos y dietéticas. Conclusiones Se observa que los alumnos que consumen legumbres, adquirieron éste hábito a través de las costumbres familiares y ampliaron su conocimiento buscando nuevas formas de preparación de las mismas, en páginas web y redes sociales. Los estudiantes encuestados prefieren los productos enlatados por su practicidad, desconociendo que el tiempo de cocción produce variaciones nutricionales y los productos en conserva tienen alto contenido de sodio. Seleccionan éste grupo alimentario, por considerarlo beneficioso para la salud, aún sin tener conocimientos específicos sobre los nutrientes que poseen. Dado el interés demostrado por los estudiantes en consumir alimentos saludables, se vislumbra un futuro promisorio. A partir de éstos resultados, el desafío será incentivar a los jóvenes estudiantes a promover el consumo adecuado de las legumbres, convirtiéndose de esta forma, en agentes multiplicadores de la información. Sería indispensable efectuar estudios similares en poblaciones de diferentes ámbitos, para tener un diagnóstico situacional, y a partir de esto los profesionales de la salud y los distintos sectores involucrados en el tema, realicen campañas a nivel nacional de divulgación, buscando estrategias para facilitar el conocimiento y poder transmitir los beneficios de la ingesta de legumbres secas en la población argentina. Bibliografía 1 Gil Hernandez A. Legumbres, verduras y productos hortícolas Tratado de Nutrición. Tomo 2. 2010 2 http://www.fao.org/alc/legacy/iniciativa/pdf/recetario2-abr.pdf (consultado el 18/4/14) 3http://www.alimentosargentinos.gob.ar/contenido/revista/ediciones/45/cadenas/r45_08_Legumbre sSecas.pdf (consultado el 12/4/15) 4http://infoleg.mecon.gov.ar/infolegInternet/anexos/215000-219999/216315/norma.htm (consultado 20/4/2015) 5http://www.alimentosargentinos.gob.ar/HomeAlimentos/Nutricion/fichaspdf/Ficha_31_Legumbres.p df (consultada el 20/4/15) 6http://www.anmat.gov.ar/webanmat/codigoa/Capitulo_XI.pdf (consultado el 26/4/15) 7http://www.magrama.gob.es/ministerio/pags/biblioteca/revistas/pdf_DYC/DYC_2000_50_35_36.pd f (consultado el 14/4/15) 8 Una Argentina Competitiva, Productiva y Federal. Cadena de las legumbres. Documento de trabajo. Año 17, Edición Nº 96, junio 2011. IERAL de Fundación Mediterránea. Córdoba, Argentina. 9http://inta.gob.ar/documentos/cadena-de-las-legumbres/at_multi_download/file/cadena-de-laslegumbres.pdf(consultado 12/4/15) 10 Papel de las legumbres en la alimentación. Revisión Elvieser Dogma, Actividad Dietética, 2010, 14(2): 72-76. España. 11 Fabro, A-Tolosa Muller, A. Patrón de consumo , estilo de vida y estado nutricional de estudiantes universitarios de las carreras de Bioquímica y Licenciatura en Nutrición, Revista FABICIB Año 2011 Volumen 15 página 160 a 169-Argentina