RECUPERACIÓN AMBIENTAL DE LA RÍA DE AVILÉS MAURO H. PÉREZ HOLGUERA y CARLOS FERNÁNDEZ VELARDE Consulnima, S.L. RESUMEN A lo largo de la 2ª mitad del siglo XX, la parte más alta de la ría de Avilés acumuló una considerable cantidad de sedimentos contaminados por vertidos industriales y urbanos. La mayor parte de estos sedimentos quedó retenida en la cola de la ría, prácticamente dentro del casco urbano y zona industrial. La masa de sedimentos, de color negro y olor característico (aproximadamente 160.000 m3), constituían un foco de dispersión de contaminantes (metales pesados, hidrocarburos, compuestos orgánicos específicos como BTEX, PAH, PCB), además de una afección visual muy notable. Para resolver esta situación, se ha realizado el “Proyecto de Ordenación Hidráulica y Ambiental de la Ría de Avilés”, que ha consistido en la retirada de los sedimentos (con su correspondiente tratamiento y disposición final en un vertedero construido al efecto), el encauzamiento de la masa de agua y la restauración de las márgenes, convirtiendo así una zona fuertemente degradada en un parque urbano de carácter rústico. La ejecución ha supuesto un notable esfuerzo técnico y económico, con condiciones de trabajo complejas, tanto debido a las características hidráulicas del tramo (en el que confluyen los caudales fluviales, con algunas avenidas muy intensas, y la incidencia diaria de las mareas) y a la naturaleza de los sedimentos. INTRODUCCIÓN A partir de la segunda mitad del siglo XX, Avilés y su comarca han experimentado un proceso de fuerte industrialización, que se inicia con la instalación de la factoría de ENSIDESA (Empresa Nacional de Siderurgia, S.A.). Esta industria, que inicia su actividad en 1957, va a implantar sucesivamente los hornos altos, una central térmica, las baterías de cok, la primitiva acería Siemens Martín, y las instalaciones de laminación en caliente. Con el paso del tiempo, se sumarán nuevas instalaciones de laminación en frío y tratamientos superficiales, las nuevas acerías de convertidores LD1, LD2 y LD3, y diversas instalaciones auxiliares. Con ella, se instala una cohorte de empresas auxiliares. De ENSIDESA saldrá, a su vez, el germen de las actividades de la Empresa Nacional de Fertilizantes (ENFERSA); que devendrá en la actual factoría de Fertiberia. Ya antes de ENSIDESA, se había asentado en las proximidades de la desembocadura la factoría de Asturiana de Zinc, que ha ido aumentando paulatinamente su capacidad hasta convertirse en la mayor instalación de producción de zinc primario de Europa. Posteriormente, dos nuevas factorías de gran volumen de producción se instalan en las márgenes: Cristalería Española y la Empresa Nacional de Aluminio (ENDASA), que posteriormente se transformará en Alcoa-Inespal. Todo ello hace que el entorno inmediato de la ría de Avilés se convierta en una de las áreas con mayor concentración de industria pesada de España. 1 Semejante proceso de industrialización conllevó también un fuerte incremento de la población de la zona, que se duplicó en unos pocos años, llegando a unos 80.000 habitantes. Buena parte de este incremento de población se asentó en el entorno de ENSIDESA, donde nacieron en la década de los 50 y 60 barrios enteros de nueva construcción. Debido a la escasez de terreno apto para las instalaciones industriales, y buscado la salida al mar, estas instalaciones se han asentado en buena medida en la orla de marismas y dunares que rodean la ría. Esto ha supuesto el relleno de varios centenares de hectáreas de antiguas marismas, y, especialmente en el caso de ENSIDESA, el desvío y canalización del drenaje natural de la zona. Las necesidades de agua de estas industrias han impulsado también la intercepción de manantiales y la implantación de dos pequeños embalses que, alimentados por bombeo desde el cercano río Nalón, almacenan el agua requerida para el uso industrial. Finalmente, el nuevo tráfico de mercancías, especialmente de materias primas, pero también de productos terminados, conllevó una ampliación del puerto, con la construcción y ampliación de muelles y los dragados necesarios para alcanzar los calados requeridos por los cargueros que tenían que arribar a los muelles. Todo este proceso ha supuesto una profunda alteración, tanto desde el punto de vista morfológico como hidráulico, de la ría y de su entorno. Sin embargo, uno de los impactos más severos sobre la ría ha sido la contaminación de sus aguas. Los vertidos industriales de distintos tipos, y los vertidos urbanos generados por las nuevas poblaciones, unidos a las condiciones hidráulicas específicas (una renovación de las aguas muy pobre a causa de la angostura de la bocana) convirtieron la masa de agua en una zona muerta, desapareciendo buena parte de la riqueza marisquera que tenía hasta los años 50 del siglo XX. En los últimos años, tanto las industrias como la administración han realizado un esfuerzo considerable para realizar el saneamiento de la ría. Así, en la década de los 90 se inician proyectos de colectores y depuradoras, que interceptan los efluentes urbanos hasta entonces vertidos directamente a la ría, y que culminarán en 2003 con la entrada en funcionamiento de la depuradora de Maqua. Este esfuerzo no ha terminado, estando aún pendientes de finalizar varios tramos de colectores interceptores y el emisario submarino que evacuará las aguas tratadas. En lo relativo a los vertidos industriales, se ha producido un paulatino proceso de mejora, a medida que las industrias asentadas en el entorno han empezada a depurar sus efluentes o a mejorar sus tratamientos anteriores. Aún está pendiente, no obstante, la construcción de un colector interceptor de aguas industriales, actualmente en fase de proyecto, y que conducirá los efluentes industriales con cargas contaminantes relativamente altas hacia la depuradora de Maqua y el emisario submarino. La historia reciente de los cambios de régimen hidráulico y de la contaminación de la ría ha quedado reflejada, no obstante, en sus sedimentos. Especialmente en su parte más alta, la cola, constituida por un canal que drena las antiguas marismas y da salida a las aguas de varios arroyos y ríos de pequeña entidad, este tramo superior no navegable ha recibido cargas contaminantes considerables. Se calcula que, a principios de los años 90 del siglo pasado, este tramo recibía del orden de 5 toneladas de hierro disuelto cada día, buena parte del cual precipitaba al contacto con las aguas alcalinas que subían en marea alta. En el tramo inferior, que constituye el puerto de Avilés, los sedimentos que pudieran acumularse han sido periódicamente dragados, por lo que no aparecen acumulaciones importantes. No es ese el caso de la parte alta, donde no se efectuaban dragados. Como consecuencia, se acumuló allí una masa de aproximadamente 160.000 m3 de lodos de color oscuro, olor desagradable y que 2 retenían en mayor o menor concentración un buen número de sustancias contaminantes (metales pesados, hidrocarburos, BTEX, PAH, PCB, cianuros, grasas animales y materia orgánica en descomposición). Además de constituir un foco de dispersión de contaminantes muy importante, la masa de lodos acumulada originaba una afección visual muy notable a las puertas mismas de la ciudad (Figura 1). Figura 1. Aspecto de la ría en marea baja Con el fin de eliminar este foco de contaminación y ganar este tramo de la ría al disfrute ciudadano, la Consejería de Medio Ambiente del Principado de Asturias puso en marcha el “Proyecto de Ordenación Hidráulica y Ambiental de la Ría de Avilés”, que se ha ejecutado entre 2002 y 2006. Este proyecto ha supuesto la caracterización y dragado de los sedimentos, su tratamiento y disposición final en un vertedero construido al efecto en terrenos próximos, el encauzamiento de todo el tramo, la restauración y ajardinamiento de las márgenes (aprovechando en la medida de lo posible el arbolado natural), y su puesta a disposición del público, convirtiendo así una zona fuertemente degradada en un parque lineal de carácter rústico. El objeto de esta comunicación es precisamente describir los trabajos de recuperación ambiental que se han realizado en este tramo de la ría de Avilés, y las experiencias que se han derivado de ellos. CARACTERÍSTICAS DE LOS SEDIMENTOS El ámbito de actuación del proyecto se centra en la parte alta de la ría de Avilés (Figura 2). Esta zona tiene características casi fluviales, y está formada por un cauce estrecho originado por el encauzamiento de los ríos que afluían a la antigua marisma, ya desecada, que ocupaba el área. No obstante, se encuentra dentro de la zona de influencia de mareas, lo que da lugar a un régimen de flujo alternativo: descendente en marea baja, y ascendente en marea alta. El área de actuación tiene una longitud total próxima a los 3.000 m, y anchuras que oscilan entre 25 y 80 m. En marea alta, la lámina de agua presenta una superficie del orden de 90.000 m2. 3 Figura 2. Ámbito de actuación Esta zona de la ría recibe las aguas pluviales de una pequeña cuenca, a través de varios cauces (río Alvares, Arlós, Magdalena y San Martín). En conjunto, la cuenca afluente tiene una superficie de aproximadamente 225 km2, lo que supone unos caudales relativamente modestos salvo en casos de lluvias fuertes. Sin embargo, hay que reseñar la existencia de importantes vertidos industriales, con algunos caudales notables (p.e. caudal de refrigeración de la Central Térmica) de las factorías situadas en la cuenca, especialmente ENSIDESA (y, en menor medida, Fertiberia, DuPont y el relativamente próximo vertedero de residuos urbanos e industriales de COGERSA). Además, recibía directa o indirectamente las aguas residuales de la población asentada en su área de influencia (del orden de 40.000 habitantes en los municipios de Avilés y Corvera de Asturias fundamentalmente). En el cauce se distinguían tres tramos. El tramo inferior, de unos 1.000 m presentaba las mayores anchuras, entre 40 y 80 m, y mayores oscilaciones mareales. En este tramo se concentraban las acumulaciones de sedimentos más espectaculares. El tramo intermedio, de unos 1.400 m, correspondía a un canal de sección casi constante, con una anchura de unos 30 m, y presentaba un lecho bastante homogéneo de sedimentos de potencia relativamente constante; este tramo recibía buena parte de los efluentes industriales más contaminantes, especialmente los de las baterías de cok del complejo siderúrgico de Avilés. El tramo superior, de unos 600 m, era el más estrecho y menos sometido a la acción de la marea (su influencia sólo se aprecia en mareas vivas), y aunque también recibía efluentes industriales, la cantidad de sedimentos acumulados era relativamente escasa. Los espesores medidos se encontraban en un rango comprendido entre pocos centímetros (en las márgenes y en algunos puntos del cauce donde la erosión en marea baja era más potente), hasta más de cuatro metros en algunas zonas, siendo los valores medios del orden de dos metros. El sustrato también resultó muy variable, estando constituido por: arenas, gravas, arenas limosas, arcillas (de muy compactas a bastante incompetentes) e incluso roca caliza. A partir del levantamiento topográfico y batimétrico de la ría, y de los espesores de columna determinados en las campañas de muestreo, se realizó la cubicación de los sedimentos presentes en el área de actuación. En la Tabla 1 se detallan los resultados obtenidos. 4 Tabla 1. Cubicación de sedimentos Tramo Tramo inferior Tramo intermedio Tramo superior TOTAL Superficie m2 51.630 23.980 15.000 90.610 Volumen m3 99.850 41.660 15.000 156.510 Espesor medio 1,9 1,7 1,0 La contaminación de los sedimentos se ha puesto de manifiesto en diferentes estudios, especialmente en el Estudio de caracterización de los sedimentos y de gestión de material dragado en la Ría de Avilés realizado por el Ayuntamiento de Avilés en 2002. Los contaminantes más significativos que aparecían eran metales pesados (hierro, manganeso, cadmio, zinc, plomo y cromo), aceites y grasas, compuestos orgánicos específicos (benzol y alquitranes, PCB), así como niveles elevados de contaminación fecal. Los ensayos microtox realizados también indicaban toxicidades elevadas para la vida marina (Tabla 2). Tabla 2. Resultados analíticos Estudio Ayuntamiento 2002 Parámetro pH Metales As Cd Cu Hg Ni Cr Fe Mn Pb Zn Microtox PCB Mat. Orgánica Colif. Fecales mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/l mg/kg % UFC Media 7,49 Máximo 7,66 22,3 6,85 61,5 3,42 14,9 248 38.443 1.481 1.456 2.552 900 0,25 7,42 20 45,8 23,9 172 30,4 42,9 1.670 108.000 7.010 5.750 9.390 12.590 1,09 18,4 85 Con motivo de la ejecución del proyecto, se realizó una caracterización detallada, orientada tanto a determinar la concentración y distribución de contaminantes como a su cuantificación y determinación de sus características. A estos efectos, se dividió el área de actuación en seis tramos o sectores más o menos homogéneos, atendiendo a la configuración de los depósitos y características del cauce. Para esta campaña se extrajeron más de 200 testigos (aproximadamente un sondeo por cada 400 m2), recogiéndose del orden de 800 kg de muestras para su posterior análisis. Además de la obtención de muestras, la campaña sirvió para medir el espesor de los sedimentos y para reconocer el sustrato sobre el que se apoyan. En las tablas 3 y 4 se indican los principales resultados obtenidos, promediados por tramos 5 Tabla 3. Caracterización de sedimentos por sectores SECTOR I II III IV V VI Densidad aparente 3 g/cm 1,49 1,47 1,66 1,69 1,80 1,56 Parámetro Humedad Granulometría s/MS s/total % finos D50 % 56,4% 54,7% 50,7% 38,3% 34,2% 72,6% % 36,1% 35,4% 33,6% 27,7% 25,5% 42,1% (< 0,08 mm) 58,8 56,9 51,2 31,2 15,9 53,0 Pérd. calcinación mm a 500º < 0,08 18,9% < 0,08 17,3% < 0,08 17,5% 0,2 14,1% 0,3 17,1% < 0,08 12,0% Tabla 4. Caracterización química de sedimentos por sectores Sust. lipófilas PCB Cianuros Índice de fenoles Metales As Ba Cd Co Cr Cu Hg Mo Ni Pb Zn PAH Naftaleno Acenaftileno Acenafteno Fluoreno Fenantreno Antraceno Fluoranteno Pireno Benzo(a)antraceno Criseno Benzo(b)fluoranteno Benzo(k)fluoranteno Benzo(a)pireno Indeno(1,2,3-cd)pireno Dibenzo(a,h)antraceno Benzo(g,h,i)perileno % m/m mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS Sector I 0,98% 0,109 < 0,01 < 0,01 mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS mg/kg MS 3,86 112,4 1,61 1,31 17,3 13,6 2,60 1,45 3,63 832 1.403 62,6 1,8 0,3 2,9 2,1 4,4 2,6 12,8 9,8 5,0 4,9 3,2 3,2 3,0 2,7 1,4 2,6 Sector II Sector III Sector IV Sector V Sector VI 0,59% 0,40% 0,70% 2,13% 0,83% 0,063 n.d. 0,04 0,833 0,27 < 0,01 < 0,01 < 0,01 < 0,01 < 0,01 < 0,01 0,067 0,03 < 0,01 0,05 3,79 208,2 1,22 1,65 62,3 9,74 1,69 1,53 3,41 444 1.413 88,9 4,5 0,4 9,4 8,2 20,2 7,2 15,6 10,4 3,7 3,3 1,4 1,6 1,5 0,6 0,3 0,4 7,78 122,2 1,04 1,83 34,9 343,7 1,95 4,63 10,97 601 978 725,3 26,1 88,0 94,0 186,4 57,4 97,0 61,0 29,4 26,8 12,9 14,9 12,6 4,8 1,8 3,3 9,0 5,28 78,1 1,37 1,65 82 35,1 1,99 5,40 16,2 502 1.909 591,2 30,8 5,0 65,8 39,7 120,2 43,9 93,7 60,3 32,3 29,2 18,8 17,3 17,4 8,0 2,6 6,1 1,82 52,7 0,78 1,01 166 14,2 1,93 1,60 4,59 253 483 1.645,3 116,0 9,1 169,6 130,9 378,2 108,0 265,9 166,9 80,2 68,3 40,7 38,4 40,1 18,2 4,1 10,8 4,14 53,9 1,24 1,85 119 45,3 3,16 6,38 30,5 622 986 602,4 70,8 22,7 111,8 75,0 107,1 25,1 56,9 37,9 19,9 18,1 14,4 12,7 13,3 7,8 2,2 6,6 Como puede observarse, se detectaron altas concentraciones de sustancias lipófilas (aceites y grasas, alquitranes y otras sustancias solubles en disolventes orgánicos), siendo especialmente relevantes en el tramo V, donde se encuentran los antiguos colectores de aguas residuales de las baterías de cok. Lo mismo sucede con los compuestos aromáticos policíclicos (PAH), típicos de este tipo de plantas, cuyas concentraciones sobrepasaban las obtenidas en estudios anteriores. Estos compuestos dan a los sedimentos un olor característico. Por su mayor toxicidad y concentraciones a las que se encuentran, los más relevantes eran naftaleno, fenantreno, criseno y benzo (a) pireno. En relación con los metales analizados, los más relevantes resultaron ser plomo 6 y zinc, dos elementos asociados a la industria siderúrgica, y en mucha menor medida As, Cd, Cr, Cu, Hg y Mo. Como ya se conocía, no se pudo establecer un patrón definido de distribución a lo largo de la ría. Por otra parte, se comprobó la poca relevancia de las concentraciones de PCB y fenoles, y no se detectaron cianuros. Tampoco se detectaron compuestos orgánicos volátiles (VOC y XVOC) en ninguna de las muestras. Debido a las características de los sedimentos, éstos no podían ser vertidos al mar, solución habitualmente utilizada en dragado de puertos y canales, puesto que sobrepasaban la mayoría de los criterios de calidad establecidos para estas operaciones. ALTERNATIVAS DE ACTUACIÓN A lo largo de la gestación del proyecto se estudiaron diversas alternativas de actuación, con dos líneas principales: dragado y extracción de sedimentos contaminados, para su gestión externa, y encapsulamiento in situ. En relación con el encapsulamiento in situ, se barajaron varias soluciones, que diferían en la disposición espacial de los sedimentos, en el aislamiento y en el posible tratamiento: • • • • Realización de dos depósitos longitudinales a lo largo del cauce, coincidiendo con los rellenos previstos en las márgenes, quedando los lodos aislados del cauce mediante tablestacados Realización de una celda aislada en el fondo el cauce, mediante muros pantalla y recubrimiento impermeabilizado Desvío del cauce en su tramo inferior, rellenándolo con los lodos e instalando un recubrimiento impermeable. Estabilización in situ de parte de los sedimentos Todas estas alternativas se consideraron insatisfactorias, en buena medida por problemas de espacio físico para su ejecución, y por los problemas de aislamiento y malas características geotécnicas de los sedimentos, cuya corrección encarecía notablemente la solución. Las alternativas de extracción se basaron en la retirada y envío a una instalación de gestión, para su tratamiento y depósito final. Se realizaron varias propuestas de tratamiento, tanto “on site” (a pie de obra) como “off site” (en el destino). Tras el correspondiente estudio de alternativas, la solución finalmente elegida con criterios de facilidad de ejecución, seguridad ambiental y viabilidad técnica y económica, fue el dragado de los sedimentos, y su encapsulamiento en una celda de seguridad, previo tratamiento de deshidratación y estabilización. Las operaciones que componían la solución y sus principales características fueron: • Dragado: tras un estudio de las características y morfología del cauce y de los depósitos, y del régimen hidráulico, se decidió el dragado en seco. En los tramos superiores esto se realizó desviando el cauce por un canal lateral. En la parte baja, se adoptó un sistema de recintos mediante caballones terreros para aislar los depósitos. De esta forma, el dragado se realizó con maquinaria ordinaria de movimiento de tierras, con control visual de la excavación, se pudo limitar el contenido en agua de los lodos extraídos y se minimizó el riesgo de dispersión de finos en el agua. • Tratamiento: tras la realización de diversos ensayos, se diseñó un sistema de tratamiento basado en la deshidratación por evaporación mediante volteo mecánico, y la estabilización por aporte de materiales alcalinos que evitaban la lixiviación de metales. 7 • Depósito final: el problema de encontrar un emplazamiento para el monovertedero se resolvió con el apoyo de Aceralia, que cedió el espacio necesario, así como los estabilizantes (escorias y residuos alcalinos de la producción siderúrgica), en un vertedero de residuos industriales a corta distancia de la ría (aproximadamente 7 km). • Transporte: se realizó en camiones de movimiento de tierras, utilizando cajas especialmente preparadas para evitar fugas, y siguiendo una ruta que evitaba en prácticamente todo su recorrido las vías públicas, para minimizar los efectos de posibles vertidos o fugas accidentales. EJECUCIÓN DE LAS OPERACIONES Tras el correspondiente concurso público de la Consejería de Medio Ambiente, Infraestructuras y Ordenación del Territorio, con un presupuesto de 13,75 millones de euros (financiados por el Principado de Asturias y el Ministerio de Medio Ambiente), las obras fueron encomendadas a la UTE Ría de Avilés, formada por las empresas Consulnima, SATO, DEC y SYL. La ejecución se inició en diciembre de 2002, terminando la parte principal en junio de 2005. Sin embargo, a junio de 2006 aún están pendientes de terminar algunos elementos, como la restauración del Puente de San Sebastián (incorporada a las obras en una ampliación posterior al concurso). Extracción de sedimentos La extracción de los sedimentos ha estado condicionada por varios factores: • Las limitaciones de espacio y accesos al cauce en los tramos más bajos (primeros 1.000 m de actuación), literalmente rodeados por vías de ferrocarril y carreteras. • Las limitaciones de gálibo inferior en las estructuras que cruzan la ría (tres puentes intermedios), y líneas eléctricas paralelas a ésta. • La necesidad de compaginar las obras con la existencia de tres ríos afluentes (todos ellos por la margen izquierda), tres colectores de aguas industriales de elevados caudales y la descarga de agua de refrigeración de la Central Térmica de Arcelor (por la margen derecha), a los que había que dar salida en todo momento. La solución finalmente adoptada fue una combinación de extracción en seco, aplicada en todo el tramo superior, y dragado por recintos y extracción en húmedo en la parte inferior de la ría. El dragado en seco se aplicó en el tramo superior, más estrecho y somero, y en el que el caudal fluvial es menor. Para ello, se excavó un canal lateral de pequeñas dimensiones, cerrando aguas arriba y aguas abajo el cauce mediante ataguías. Una vez desviado el caudal de los ríos por el canal y cerrado el paso a las mareas ascendentes, se extraía el agua (operación que se realizaba en la medida de lo posible por gravedad, aprovechando las mareas bajas) y se excavaban los lodos “en seco”, mediante retroexcavadoras que avanzan por el cauce (figura 3). 8 Figura 3. Extracción de sedimentos en los tramos más altos Figura 4. Extracción de lodos en tramo bajo. Recinto en el cauce 9 En el tramo intermedio se utilizó un sistema semejante, con la diferencia de que en este caso el canal se formaba mediante la construcción de un dique paralelo a la orilla por el mismo cauce, al no haber espacio para un canal excavado en la margen (figura 4). En el tercio inferior de la ría el sistema anterior no era aplicable (dadas las mayores dimensiones del cauce y carrera de mareas, las dimensiones de los diques necesarios serían excesivas; por otra parte, el sustrato arenoso y poco resistente dificultaba el tránsito de maquinaria y camiones por el cauce). Por ello, se procedió a avanzar un terraplén por las márgenes, con una técnica consistente en dragar desde la orilla mediante retroexcavadoras, aprovechando la marea baja, y rellenando el hueco dragado con tierras, haciendo avanzar así la pista. Evidentemente, este proceso ha sido muy lento. Una vez desarrollada la pista de acceso, se procedió a extraer, igualmente en marea baja, los sedimentos accesibles desde la orilla. Para ello, además de la maquinaria ordinaria, se utilizó una retroexcavadora de brazo largo (30 m), que permitía alcanzar el centro del cauce desde las orillas. Depósito de sedimentos La gestión de los sedimentos consistió en su deshidratación, estabilización físico.-química y encapsulamiento en un depósito controlado construido específicamente para este residuo. El depósito se concibió para realizar en su interior tanto el depósito como el tratamiento previo, de forma que se reducía la superficie afectada. Para su diseño, se tuvieron en cuenta varios factores: • • • • La adecuación a la reglamentación vigente en materia de residuos y vertederos; para mayor seguridad, el depósito diseñado cumple con los requisitos establecidos para vertederos de residuos peligrosos (aunque los sedimentos están clasificado como no peligrosos) La flexibilidad en el volumen a almacenar, para absorber las cantidades realmente extraídas (que podían varias a lo largo de la ejecución con respecto a lo inicialmente previsto), y tener en cuenta las variaciones de volumen que experimentaban los lodos en el proceso de deshidratación y consolidación (disminución del 20 al 25% del volumen inicial) El adecuado tratamiento de los lixiviados generados por los sedimentos depositados. La evacuación rápida y efectiva de las aguas de escorrentía originadas por las precipitaciones directas en el vaso proyectado y en las laderas contiguas. El depósito se construyó en terrenos del Vertedero del Estrellín, propiedad de Aceralia (este vertedero recibe habitualmente los residuos no peligrosos de las factorías siderúrgicas de Avilés y Veriña), a una distancia aproximada de 6 km desde el final de la zona de actuación. Ocupa una vaguada en el extremo superior del valle del Estrellín, y tiene sección en V abierta Sus características principales se resumen en la Tabla 5. Tabla 5. Características principales del depósito de sedimentos Volumen útil Superficie interior del vaso Superficie plataforma Cota superior plataforma Cota inferior plataforma Cota inferior depósito 10 106.470 28.526 27.648 54,86 49,04 42,00 3 m 2 m 2 m m m m El esquema de impermeabilización del vaso fue el siguiente: • Sustrato arcilloso • Geocompuesto bentonítico • Lámina PEAD de 2 mm • Geodrén 6 mm La clausura se realizó con el mismo esquema de geocompuestos, finalizando con una capa de tierras de regularización de 1 m de espesor, que permite a Aceralia continuar con sus vertidos por encima de la celda clausurada. Figura 5. Construcción del depósito de seguridad Se instaló un sistema de captación de lixiviados, para recoger las aguas drenadas y las precipitaciones sobre el vaso, que los concentraba en una arqueta de recogida, desde donde se bombeaban a una planta de tratamiento instalada al efecto. En el exterior, un canal perimetral, que ha quedado en servicio, desvía las escorrentías externas limpias hacia el drenaje general del vertedero. Tras la clausura, la celda ha quedado herméticamente cerrada. La planta de tratamiento estaba prevista para eliminar turbidez y compuestos orgánicos nocivos (especialmente PAH) que pudieran ser arrastrados por los lixiviados. Incluía las siguientes etapas: • Aireación • Filtración sobre arena • Filtración sobre carbón activo Tras el tratamiento, los lixiviados se enviaban a la red de lixiviados del Vertedero, que desemboca en la planta de tratamiento físico-químico de Aceralia. 11 Transporte El transporte de los sedimentos se realizó en camiones rígidos de 4 ejes, adecuados para entrar por las pistas establecidas en la ría. Se puso especial atención en evitar el riesgo de fugas y derrames a lo largo del trayecto de los sedimentos entre la ría y el vertedero del Estrellín, evitando la circulación por vías publicas (de los 7 km de media que tiene el recorrido total, sólo unos 300 m se realizan por carretera pública), evitando el paso de camiones por zonas con sedimentos, instalando un foso de lavado de ruedas en la salida de la ría, y preparando las cajas para evitar fugas (incorporando un sistema de cierre mecánico que evita filtraciones). Un equipo de limpieza de viales mantenía periódicamente todo el recorrido limpio y regado para evitar emisiones de polvo. Tratamiento de los sedimentos El tratamiento de los sedimentos se planificó para cumplir con los siguientes requisitos: • • • Asegurar una deshidratación rápida de los lodos, para evitar que generasen caudales de lixiviado importantes (por pérdida de humedad de los sedimentos depositados) a medio o largo plazo, fuera del ámbito temporal del Proyecto. garantizar la inmovilización a largo plazo de los contaminantes presentes (evitar su lixiviación), y consolidar el material para dar suficiente estabilidad geotécnica al depósito final. Conseguir unas características de lixiviación de los residuos tratados compatibles con las especificaciones de residuos no peligrosos El depósito se dividió en dos zonas: una de vertido propiamente dicho, que ocupaba dos tercios de su superficie, en la parte de mayor espesor de sedimentos (parte baja de la vaguada), y una zona de tratamiento que tenía una superficie aproximada de 10.000 m2, donde se realizó la estabilización de los sedimentos. En esta zona, dividida en seis áreas que se utilizaban secuencialmente, se dispuso sobre el paquete de impermeabilización una capa de arena de 70 cm, y una cubierta de escoria granular, para permitir el paso de maquinaria sin deterioro. Al final de las operaciones, esta zona fue paulatinamente rellenándose, y en la última etapa, el tratamiento se hacía sobre la cota de coronación de los rellenos. El tratamiento aplicado combinó un proceso mecánico con un tratamiento físico-químico. El tratamiento mecánico consistió en la extensión y volteo repetido de los sedimentos, para facilitar la deshidratación por gravedad y evaporación, y para airear el material, con lo que se obtenían condiciones oxidantes que facilitaban la fijación de los metales pesados presentes. Este volteo permitía también realizar la mezcla de los texturizantes y reactivos a aportar. El tratamiento físico-químico incluía la adición de cantidades variables (hasta un 10%) de aditivos alcalinizantes y texturizantes. La función de estos aditivos es triple: facilitar la deshidratación (por alcalinización), estabilizar el pH de los sedimentos para fijar los metales pesados presentes en el rango de mínima solubilidad, y modificar las características mecánicas de los sedimentos, para darles mayor rigidez y compactabilidad, y con ello, más estabilidad geotécnica. Los aditivos utilizados fueron escoria de acería y cenizas volantes de horno alto, seleccionados por su fácil disponibilidad en el entorno de la actuación (se trata de residuos siderúrgicos) y alto poder cementante. Las proporciones concretas de reactivos a utilizar se ajustaban en función de las características de cada partida de sedimento tratado, dependiendo en gran medida de la humedad con la que se recibían. 12 La operación de extensión y volteo se realizaba en la zona prevista para el tratamiento. Los sedimentos se vertían por cargas en cada una de las áreas, quedando en reposo durante varios días, y perdiendo el agua libre que arrastraban. A continuación, se mezclaban con los reactivos y se apilaban formando parvas longitudinales, esponjándose y aumentando la superficie de evaporación. Estas pilas se volteaban periódicamente, acelerando así la deshidratación y aireación, y consiguiéndose una mezcla muy homogénea con los aditivos (figura 6). Figura 6. Sedimentos en proceso de tratamiento Una vez que se alcanzaban contenidos de materia seca superiores al 80%, los sedimentos se transportaban a zona de vertido, donde se extendían en tongadas y se compactaban (figura 7). Figura 7. Extensión de sedimentos en la zona de vertido del depósito 13 El resultado final de este proceso es que los sedimentos, que llegaban prácticamente líquidos al vertedero, se convirtieron en un sólido sobre el que podían transitar sin problemas los camiones de obra. ADECUACIÓN AMBIENTAL DE LA RÍA Además de la retirada de los sedimentos contaminados, el proyecto tenía un segundo objetivo: transformar un entorno muy degradado en un área abierta al uso y disfrute de los ciudadanos de Avilés. Para ello, se proyectó el encauzamiento del tramo comprendido entre el puente San Sebastián y el “puente del Hospitalillo”, la construcción de dos azudes para mantener una lámina de agua permanente, la construcción de paseos longitudinales en ambas márgenes, la instalación o restauración de puentes y pasarelas, y el ajardinamiento de los terrenos adyacentes, así como con la instalación de los servicios urbanos (iluminación, mobiliario, barandillas, ornamentos, etc.). La regularización del cauce se realizó mediante el relleno lateral, protegido por escollera y elementos prefabricados de hormigón. La sección de cauce se calculó para garantizar una capacidad hidráulica que absorba la máxima crecida previsible con un periodo de retorno de 500 años, coincidente con la marea alta. Para asegurar una lámina de agua permanente, evitando que, en marea baja, el lecho quede descubierto, se han instalado dos azudes, que quedan inundados en marea baja. Finalmente, el proyecto incluyó la urbanización del entorno. Esta urbanización se ha basado en la construcción de dos paseos laterales a lo largo de todo el tramo, con acabado aglomerado, y varios tramos paseos adicionales en aglomerado o tierra compactada en las zonas de mayor anchura, en la margen izquierda. El tramo más próximo al centro de ciudad con una longitud de 600 m, ha recibido un acabado de carácter “urbano”, con paseos de hormigón pulido, barandillas de acero inoxidable, escollera plana concertada (figura 8). Figura 8. Aspecto del tramo “urbano” una vez finalizada la obra 14 Al resto de la actuación se le ha dado un acabado rústico, con márgenes defendidas por escollera de acabado irregular o prefabricados de hormigón formando celosías revegetables, barandillas de madera, paseos aglomerados o en tierra compactada y mobiliario rústico (figura 9). Figura 9. Acabado de la urbanización en el tramo superior de la ría Merece la pena destacar la instalación, a lo largo de los paseos, de diversos elementos ornamentales obtenidos de las instalaciones siderúrgicas, que convierten el parque lineal en una suerte de museo de la siderurgia. Se han colocado lingoteras, cucharas de acero, elementos mecánicos de los antiguos hornos altos y se prevé recuperar también elementos de la antigua Central Térmica, que será desmantelada en breve. Finalmente, hay que mencionar la incorporación al proyecto de nuevos accesos peatonales, pasarelas y rampas que salvan los cauces afluentes (ríos Arlós, Magdalena y San Martín), y comunican la zona con los puentes existentes (rampas de unión con el Puente del Hospitalillo y Puente Azud), y la restauración del antiguo Puente de San Sebastián, centenario puente metálico que unía las márgenes de la ría y que se encontraba en estado de abandono desde hace décadas. 15