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Derecha venezolana confiesa 17 años de delincuencia política: La ‘Ley de Amnistía’
A confesión de parte, relevo de prueba
Francisco Domínguez
Director del Centro de Estudios de América Latina, Universidad de Middlesex, Gran
Bretaña
(Artículo aparecido en inglés en el Huffington Post, 8 de Marzo, 2016 –
http://www.huffingtonpost.com/dr-francisco-dominguez/venezuelas-right-wingcon_b_9401644.html?utm_hp_ref=venezuela)
Introducción
El escritor mexicano Carlos Fuentes no podía imaginar cuan correcto estaba al decir que
el reto del escritor latinoamericano es producir ficción que sea más extraordinaria que la
realidad misma.
La Oposición derechista de Venezuela acaba de llevar a cabo un evento que supera el
realismo mágico de Gabriel García Márquez: el 18 de febrero de 2016, haciendo uso de
su mayoría en la Asamblea Nacional, ha pasado una ‘Ley de Amnistía’ que busca otorgar
impunidad legal a actos políticos delincuenciales que ellos y sus seguidores han
perpetrado durante 17 años. El Proyecto de Ley de ‘Amnistía’ de la mayoría derechista de
Venezuela en la Asamblea Nacional es no solamente una admisión de culpabilidad por,
sino que además es un catalogo muy bien organizado de, los delitos políticos que ellos
mismos y sus seguidores han perpetrado desde 1999.
El proyecto de ley es descarado acerca de lo que pretende amnistiar: “Actos definidos
como delitos, faltas o infracciones [...] otras medidas contempladas [en el presente
documento]” (Art.1) Este proyecto de ley es un lapsus Freudiano colosal de la Oposición
ya que, inconscientemente, ha admitido su culpabilidad por más de una década y media
de delitos políticos ilegales, violentos y antidemocráticos.
El Proyecto de Ley de Amnistía no es todavía ley, ya que tiene que pasar por varios
procedimientos constitucionales, incluyendo el ser vetado por el presidente Nicolás
Maduro, quien lo ha condenado en los términos más enérgicos. En el caso muy probable
de que el presidente Maduro lo vete, el proyecto entonces sería remitido al Tribunal
Supremo de Justicia (TSJ) para que éste emita un fallo sobre su constitucionalidad. El
TSJ tiene la facultad para declarar el proyecto inconstitucional, independientemente del
tamaño de la mayoría de la derecha en la Asamblea Nacional (para más detalles de lo que
la mayoría de la oposición en la Asamblea Nacional puede y no puede hacer, ver mi
artículo en el Huffington Post (en ingles), Right Wing Majority in Venezuela’s National
Assembly: The Constitutional and Political Stakes (Mayoría Derechista en la Asamblea Nacional de
Venezuela:
Lo
que
está
en
juego
constitucional
y
políticamente
http://www.huffingtonpost.com/dr-francisco-dominguez/right-wing-majority-inve_b_9069350.html?utm_hp_ref=venezuela).
Objetivos y alcance del proyecto de ley de Amnistía
La ‘Ley de Amnistía y Reconciliación Nacional’ de la Oposición de derecha venezolana
http://www.asambleanacional.gob.ve/uploads/documentos/doc_ed81a6f2079a4d3aeaa
5e74710b47c5458f139d6.pdf) estipula que sus disposiciones tienen carácter retroactivo al
1 de enero de 1999, y en 45 artículos, cubre todo tipo de delitos y crímenes cometidos (y
por cometer) hasta el momento en que se convierta en ley (que, en el improbable caso de
ser aprobada, podría ser este año, 2016), cuando oficialmente sería promulgada en la
Gaceta Nacional (Art.2, p.6). Como veremos más adelante, los tipos de delitos y
crímenes políticos que cubre son exhaustivos ya que el proyecto de ley abarca desde
delitos menores en una manifestación pública hasta actos terroristas con explosivos y
armas de fuego. La elección del período delata su verdadera intención ya que incluye
todos los actos políticos ilegales, criminales y violaciones a la ley perpetradas desde 1999
por los líderes de la Oposición y sus partidarios en todo el período que incluye a los
gobiernos de Hugo Chávez y Nicolás Maduro.
La lista de delitos que se intenta amnistiar es tan larga como los actos que se han
perpetrado, y se correlaciona perfectamente con los esfuerzos de la Oposición de
derecha para derribar ilegalmente al gobierno democráticamente elegido, constitucional y
legítimo de la República Bolivariana de Venezuela. La lista incluye actos criminales
perpetrados durante eventos sediciosos tales como el golpe de estado de abril de 2002; el
paro-sabotaje en 2002-3; barricadas y violencia callejeras (conocidas en Venezuela como
guarimbas) que acompañaron a su campaña política durante el referéndum revocatorio de
2004 contra el presidente Chávez; la connivencia con paramilitares colombianos en el
asalto al palacio presidencial y asesinar al presidente; varios otros intentos de golpe de
Estado (en 2008, 2009 y 2010); el uso de las guarimbas y el acaparamiento de artículos de
primera necesidad, incluyendo alimentos, durante el referéndum constitucional de 2007;
la totalidad de las calumnias y falsedades propagadas; todas las actividades asociadas con
la guerra económica; la violencia sin sentido, la destrucción y la pérdida de la vida en las
guarimbas de abril de 2013 y de febrero-julio 2014 asociadas con la derrota de Henrique
Capriles como candidato presidencial y ‘La Salida’, respectivamente. La Salida, campaña
política dirigida por Leopoldo López, se llevó a cabo explícitamente para derrocar al
gobierno democráticamente elegido (Ver confirmación de esto en las propias palabras de
López - https://www.youtube.com/watch?v=sQqoCNxPJTw). Y, además, todos los
actos de violencia, incluidos actos terroristas, llevados a cabo con fines políticos ilegales e
inconstitucionales.
En su Art.4, el proyecto de ley confirma lo anterior con una elocuencia que deja sin
aliento:
Se concede la amnistía de los hechos considerados delitos o faltas que se indican a continuación, cuando se
hayan cometido o puedan haberse cometido por la participación en manifestaciones o protestas o en
reuniones que hayan tenido una finalidad política, o por su organización o convocatoria; por la expresión
de ideas o difusión de informaciones con móviles políticos; o por la realización o promoción de acciones,
proclamas, acuerdos políticos o pronunciamientos que se estime hayan estado dirigidos a cambiar el orden
institucional o el gobierno establecido, acompañados o no de acciones consideradas conspirativas. En estas
circunstancias se otorga amnistía de los siguientes hechos punibles:
a. Instigación a la desobediencia de las leyes, instigación al odio y apología del crimen;
b. Instigación a delinquir;
c. Agresión y ataque físico;
d. Violencia o resistencia a la autoridad, y desobediencia a la autoridad;
e. Causar pánico en la colectividad o mantenerla en zozobra mediante la difusión de
informaciones falsas;
f. Conspiración;
g. Obstaculización de la vía pública con el objeto de preparar el peligro de un siniestro y
demás delitos;
h. Daños a los sistemas de transporte, servicios públicos, informáticos o de
comunicación;
i. Destrucción o deterioro de caminos y obras destinados a la comunicación pública;
j. Daños a la propiedad;
k. Conspiración y terrorismo;
l. Importación, fabricación, porte, detentación, suministro u ocultamiento de artefactos
explosivos o incendiarios;
m. Perturbación de la tranquilidad pública;
n. Ultraje al funcionario público, en sus diversas modalidades;
o. Uso de menores en la comisión de delitos;
p. Incendio y otros delitos de peligro común, en sus diversas modalidades;
q. Traición a la patria y otros delitos contra ella;
r. Rebelión y otros hechos punibles;
s. Insubordinación, rebelión de civiles, traición a la patria, rebelión militar, instigación a la
rebelión militar, sublevación, falsa alarma, ataque y ultraje al centinela, revelación de
secretos militares faltas al decoro militar, uso indebido de condecoraciones insignias y
títulos militares, y sustracción de efectos pertenecientes a la fuerza armada;
t. Negativa a servicios legalmente debidos;
v. Porte ilícito de arma de fuego y su uso indebido, o los delitos de posesión ilícita de
armas de fuego, porte ilícito de arma de fuego y porte de armas de fuego en lugares
públicos;
w. Daños a las instalaciones en el Sistema Eléctrico Nacional; y
x. Otros hechos punibles conexos o que aparezcan íntimamente relacionados con alguno
de los anteriormente mencionados. (Ley de Amnistía y Reconciliación Nacional’, pp. 9-10)
Los transgresiones incluidas en la lista anterior se identifican específicamente como
delitos en el Código Penal de Venezuela en los artículos. 128, 129, 132, 134, 140, 141,
143, 163, 215, 216, 217, 218, 219, 220, 221, 222, 223, 224, 238, 254, 255, 256, 257, 272,
273, 274, 275, 276, 277, 281, 283, 285, 286, 287, 288, 289, 290, 291, 292, 296, 296-A, 297,
343, 346, 347, 349, 350, 351, 352, 353, 354, 356, 357, 360, 362, 413, 414, 415, 483, 473,
474, 479, y 506.
Además, la ‘amnistía’ incluye la violación de: Art.37 de la Ley Contra la Delincuencia
Organizada y Financiamiento del Terrorismo; Art.264 sobre los delitos contra la Ley
Orgánica para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes; Arts.111, 112 y 113 de la
Ley para el Desarme y Control de Armas y Municiones o los delitos de posesión ilícita de
armas de fuego, porte ilícito de arma de fuego y porte de armas de fuego; Art.107 de la
Ley Orgánica de Servicio Eléctrico que tipifica daños deliberados al servicio de energía
eléctrica; y los artículos. 412, 464, 476, 481, 486, 497, 500, 501, 502, 550, 565, 566 y 570
del Código Orgánico de Justicia Militar que se ocupa de delitos como rebelión militar e
instigación a la rebelión militar.
Lo anterior asciende a la violación de un asombroso total de 82 artículos del Código
Penal y otras leyes, la mayoría de los cuales tiene que ver con violencia política. Por si
fuera poco, y aprovechando su 'súper mayoría', los parlamentarios de la derecha también
han incluido artículos del Código Penal que se ocupan de delitos de corrupción en la Ley
Contra la Corrupción (Ver arts. 16, 17, 18, 19, 20 , 21 y 22 del proyecto de ley de
'amnistía').
Esta exhaustiva lista de crímenes, si se aprueba como ley, otorgaría impunidad a la
totalidad del liderazgo de la Oposición de derecha (sin excepción) que ha estado
implicada centralmente en 17 años de desestabilización; todos los agentes y grupos de
choque de la Oposición que han llevado a cabo actos vandálicos y han causado decenas
de muertes y lesiones graves a cientos de personas durante las guarimbas; todas las
actividades relacionadas con el entrenamiento, el armamento y el entrenamiento militar
de grupos armados, y a actos relacionados a ataques con armas, explosivos, armas de
fuego; y la destrucción de propiedad privada y pública.
Como si fuera poco la ley de amnistía también incluye actos
• considerados como difamación o injurias, cometidos por cualquier ciudadano, líder
político, periodista, gerentes o editores de medios de comunicación, consejos editoriales
o cualquier otra persona, entre los que se incluye imágenes, mensajes a través de los
medios sociales (Arts.8 y 9);
• contrarios a la paz y el orden establecido en general, que se produjeron entre abril 11 y
14 de 2002 (Art.10)
• contrarios a la paz y el orden establecido cometidos durante la huelga general y el paro
sabotaje de la industria del petróleo, declarados y llevados a cabo desde los últimos meses
de 2002 hasta principios de 2003. (Art.11);
• en relación con declaraciones de líderes políticos el 23 de enero de 2014 y días
siguientes, a través de medios de comunicación y redes sociales, durante la campaña
política llamada La Salida. (Art.12)
• relacionados con el “Acuerdo Nacional para la Transición” firmado por los líderes políticos
de la Oposición el 11 de febrero de 2015 y la convocatoria pública para firmar o apoyar
dicho acuerdo. (Art.13)
• de “desacato a los tribunales respecto del mandamiento de amparo constitucional de la
Ley Orgánica de Amparo Sobre Derechos y Garantías Constitucionales...” (Art.14)
• considerados terrorismo individual como se describe en el artículo 52 de la Ley
Orgánica Contra la Delincuencia Organizada y Financiamiento al Terrorismo, cometidos
en 2014 y relacionados a planes que facilitaron la fuga de personas que habían sido
privadas de libertad debido a los eventos mencionados en este documento, siempre y
cuando tales actos no hayan dañado la vida y la integridad física de las personas [...]
• considerados como delitos en conformidad con el artículo 52 de la Ley Orgánica
Contra la Delincuencia Organizada y Financiamiento al Terrorismo en el caso de actos
presuntamente punibles cometidos durante protestas o manifestaciones en 2014, siempre
que dichos actos no hayan dañado la vida o la integridad física de las personas. (Art.15)
El Art.7 de la Ley de Amnistía (pp. 12-14) enumera los eventos políticos durante los
cuales los delitos que se intenta amnistiar fueron perpetrados: 2002 (fallido golpe de
Estado); 2003 (paro-sabotaje petrolero); 2004 (referendo revocatorio); 2006 (elecciones
presidenciales); 2007 (referendo constitucional); 2009 (el alcalde derechista de Caracas,
Antonio Ledezma, de manera arbitraria despide cientos de trabajadores de la Alcaldía);
2009 (agosto, manifestación contra la Ley de Educación del Gobierno); 2011
(manifestaciones violentas en el estado de Barinas); 2013 (abril, violentas protestas
callejeras en todo el país luego de la derrota electoral del candidato presidencial de la
Oposición, Henrique Capriles, que conduce a la muerte de 13 personas, dos de ellos
niños); y 2014 (febrero-julio guarimbas desencadenada por Leopoldo López orientadas al
derrocamiento - La Salida - del gobierno democráticamente electo y legítimo del
Presidente Nicolás Maduro, en el que 43 personas perdieron la vida, hubo más de US$15
mil millones en destrucción de propiedad privada y pública, incluyendo el incendio de 15
universidades y más de 800 heridos graves). Sobre La Salida, el Art.7 contiene una lista de
23 eventos durante los cuales partidarios de la Oposición se desmandaron en acciones
violentas, todos actos incluidos para ser amnistiados.
La trama se complica aún más con la inclusión en el proyecto de ley de amnistía de
delitos como tráfico de drogas, secuestro, malversación (Art.16 y Art.30), corrupción,
acaparamiento, especulación en el mercado negro, boicot económico, adulteración
fraudulenta de productos, venta de artículos de fecha vencida (Art.19), financiamiento
del terrorismo, enriquecimiento ilícito (Art.20), fraude y usura en la venta y construcción
de viviendas privadas, y no pago de impuestos (art.35).
En resumen, no sólo hay cláusulas en el proyecto de ley amnistía para cada delito
cometido por los partidarios de la Oposición, primeramente debido a sus acciones
políticas violentas y desestabilizadoras, sino que la amnistía se amplia e incluye todo tipo
de delitos económicos cometidos por banqueros, empresarios y financieros, la mayoría
de los cuales han evitado la justicia venezolana refugiándose en Miami, Perú, Panamá,
etc., como “exiliados políticos”.
La 'Ley de Amnistía’: Manual para el Golpismo y la Impunidad
Debido a la información sesgada de los medios de comunicación, la mayoría de la gente
probablemente cree que el Gobierno Bolivariano está animado por una actitud
intolerante y sectaria cuyo autoritarismo lo inclina a reprimir a sus opositores. Esto no es
correcto. En más de una ocasión, Hugo Chávez, otorgó amnistía a individuos
involucrados en acciones sediciosas e ilegales contra su gobierno. Debido a la
desinformación de los medios mucha gente debe probablemente también pensar que la
ley de amnistía es en realidad muy popular. No los es: una encuesta de Hinterlaces,
realizada entre el 19 y 24 de febrero de 2016, mostró que sólo 9% pensaba que aprobar
una ley de amnistía era una prioridad - http://www.hinterlaces.com/monitorpais/monitor-pais-58-de-los-venezolanos-esta-de-acuerdo-con-la-ley-de-amnistia).
Del mismo modo, la mayoría de la gente probablemente cree que la supuesta naturaleza
intolerante y autoritaria del gobierno bolivariano es la principal razón de la intensa
polarización que azota a esta nación sudamericana. De hecho, tanto los presidentes
Chávez como Maduro han pedido a la Oposición derechista en numerosas ocasiones de
entablar un diálogo constructivo. Por otra parte, el gobierno de Venezuela ha promovido
y conseguido el apoyo al diálogo constructivo con la Oposición a través de organismos
regionales como MERCOSUR (Mercado Común del Sur), UNASUR (Unión de
Naciones Suramericanas, ALBA (Alternativa Bolivariana para las Américas), y CELAC
(Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe), sólo para mencionar los más
importantes.
Tras el anuncio hecho por la mayoría derechista de la Asamblea Nacional de su intención
de aprobar el Proyecto de Ley de Amnistía, parlamentarios chavistas propusieron que en
su lugar se creara una Comisión de la Verdad y Reconciliación multipartidaria para
analizar en detalle caso por caso para el conjunto de delitos de los 17 años que el
proyecto de ley de amnistía pretende cubrir. La Comisión, sobre la base del consenso y
luego de serias y rigurosas pesquisas forenses y judiciales, determinaría los casos que
merecen indulto, amnistía o castigo. Los parlamentarios chavistas declararon en términos
inequívocos que la Comisión investigaría también a todos los individuos, miembros de
cuerpos policiales y de seguridad que puedan haber perpetrado crímenes violentos,
especialmente los que implican violación de los derechos humanos. En ninguna parte de
la ley de amnistía hay ni la mas mínima manifestación de arrepentimiento por los tantos
actos de violencia política perpetrados, ni tampoco una sola frase de disculpa dirigida a
las víctimas.
El rechazo sin discusión de la propuesta Comisión y de la Verdad y Reconciliación y su
tenaz insistencia en buscar aprobar la ley de amnistía, confirma que la mayoría derechista
de la Asamblea Nacional no tiene ningún interés real en la Reconciliación, aún menos en
la Verdad, con ello desaprovechando una oportunidad de oro para genuinamente crear
las condiciones de la reconciliación nacional. Ellos Prefiere optar por su ley de amnistía,
revelando así que su objetivo real no es la paz, sino la impunidad, que, de lograrlo,
alentaría a la comisión de más “delitos, faltas o infracciones” en los años por venir. Por
ello, el abogado constitucional más prominente de Venezuela, Hermann Escarrá, tiene
toda la razón al señalar que el Proyecto de Ley de Amnistía generará más violencia en el
país.
No es difícil sacar la conclusión de que en vez de reconciliación la derecha está más
interesada en usar su ‘super mayoría’ para darse impunidad por los crímenes cometidos.
La ley de amnistía es inconstitucional pues contraviene un número bastante alto de
principios y artículos de la Constitución de 1999, pero más importante aún, esta ‘ley’
socava masivamente un principio esencial de toda democracia: el estado de derecho. Peor
aún, el proyecto de ley incluye delitos cometidos por muchos de los mismos
parlamentarios que lo patrocinan y que han votado por él. Se puede chequear la lista de
delitos incluidos en el proyecto de ley, artículo por artículo, y poner nombre de
destacados miembros de la Oposición a muchos de los crímenes especificados y los
acontecimientos políticos violentos que en él se describen. Así, por ejemplo, Art.7 de la
‘Ley de Amnistía’, incluye ‘protestas y manifestaciones universitarias, que tuvieron lugar
en el estado de Mérida, en mayo de 2006’, durante los cuales, Nixon Moreno, un
miembro de alto rango de la Oposición, fue acusado de intento de violación contra una
oficial de policía de la Guardia Nacional. Moreno huyó a Perú como “exiliado político” y
hay una orden de detención de Interpol en contra suya.
Por otra parte, es bien sabido que influyentes sectores de la coalición de Oposición
profesan opiniones de extrema derecha y han repetidamente demostrado su disposición a
recurrir a toda clase de violencia política. Por ello, por 17 años, el gobierno ha
denunciado a sectores de la oposición por su colaboración y utilización de paramilitares
colombianos en el territorio de Venezuela.
De hecho, el parlamentario más joven de la Asamblea Nacional, Robert Serra (27) y su
asistente, fueron asesinados por tres paramilitares colombianos que están ahora en
prisión tras ser extraditado por el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, a
petición de las autoridades policiales de Venezuela. Tanto Serra como su asistente fueron
asesinados a puñaladas en su propia casa; los paramilitares declararon que habían
utilizado esta forma tan brutal debido a ser una forma silenciosa que no alertaría a los
vecinos.
Además, están los sangrientos acontecimientos que condujeron al descuartizamiento del
cuerpo de Liana Aixa Argueta por dos sujetos vinculados a partidos políticos de extrema
derecha de Venezuela, que confesaron haber recibido entrenamiento militar en campos
clandestinos en Venezuela y Colombia por el general retirado de la Oposición, Antonio
Rivero
(ver
detalles
en
Diario
Miami
http://www.miamidiario.com/sucesos/venezuela/acusados-/voluntadpopular/entrenamiento-militar/mujer-descuartizada/alianza-bravo-pueblo/liana-aixahergueta/carlos-trejo/jose-perez-venta/samuel-angulo/342844).
A todo lo anterior hay que añadir que varias de los 43 de las personas que murieron
durante las guarimbas de La Salida (febrero a julio de 2014), murieron por tiros en la
cabeza disparados por tiradores profesionales. Estas muertes fueron la obra de
profesionales altamente capacitados.
Además, el Proyecto de Ley de Amnistía contraviene muchos protocolos y convenciones
internacionales sobre derechos humanos, sociales y políticos de los que Venezuela es
signataria. Hermann Escarrá señaló que el Proyecto de Ley de Amnistía contraviene,
entre muchos otros, la Convención de Ley Interamericana de Derechos Humanos,
convenciones internacionales de derechos civiles y políticos, sobre los derechos del niño
y así sucesivamente.
En conclusión, el Proyecto de Ley de Amnistía no es en absoluto un mecanismo para la
reconciliación como falsamente pretende la propuesta (pp. 1-7) sino que en realidad es
una ley de impunidad para crímenes políticos contra la nación, la constitución, la
estabilidad del país, sus leyes, su gente, sus instituciones, su gobierno, sus instalaciones,
sus instituciones militares, sus funcionarios, su infraestructura y mucho más. El proyecto
de ley es en realidad un Manual para el Golpismo y la Impunidad, pero sobre todo, una
admisión de culpabilidad de 17 años de delincuencia política.
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