EQUIPO PUEBLOS ORIGINARIOS SERPAJ - ARGENTINA PUEBLOS INDIGENAS Y SITUACION TERRITORIAL EN ARGENTINA 2007 - 2008 Presentación El presente informe se centra sobre las condiciones actuales en relación con las tierras indígenas y la situación del estado argentino en cuanto al cumplimiento de los derechos reconocidos a los pueblos indígenas de nuestro país. Ha sido realizado por el equipo Pueblos Originarios de la fundación Servicio Paz y Justicia a partir de casos que han sido atendidos en la fundación. Otros han sido relevados por instituciones y personas profundamente involucradas en la temática y con quienes compartimos cotidianamente el trabajo y la esperanza de un país más inclusivo y respetuoso de los derechos de nuestros pueblos originarios. El informe releva situaciones diversas de conflictos que involucran a comunidades indígenas en distintas partes del país. Las situaciones seleccionadas tienen relación con la tenencia y uso de la tierra por parte de las comunidades indígenas y cómo el estado nacional o provincial respeta y/o contempla o no la normativa referida al derecho de los pueblos indígenas en esos espacios. Este recorte es a fin de hacer más específico este informe. De ninguna manera implica restar importancia a otras demandas de los pueblos indígenas y que requieren atención urgente de las políticas estatales y profundos cambios en la percepción social de la realidad multicultural de nuestro país. Temas como la salud y la educación desde una perspectiva intercultural real son aun ampliamente postergados, por no decir inexistentes en nuestro país y demandan el compromiso y adecuación de diferentes estructuras del estado para poder avanzar en ellos. Otro tema pocas veces tenido en cuenta es la situación que enfrentan los pueblos indígenas forzados a migrar y los desafíos que enfrenta la continuidad de su identidad y organización como pueblo en contextos urbanos. Aun dentro de la especificidad de éste informe sobre la situación de las tierras indígenas, es necesario enfatizar que se trata de una selección muy restringida de los cientos de casos que nos llegan cotidianamente y con los cuales nos hemos involucrado directamente o de casos con los que entramos en conocimiento a través de nuestros contactos con diferentes organizaciones, referentes de las comunidades s 1 indígenas e instituciones de la sociedad civil y del estado con las que tenemos contacto. El criterio de selección se basa en la elección de casos de larga data a través de los cuales podemos visualizar los diferentes matices que asumen las condiciones estructurales que obstan a las comunidades el ejercicio y respeto de sus derechos. El segundo criterio para la selección de los casos tiene que ver con su relación con algunas de las temáticas específicas que son de gran interés para el estado y grandes grupos económicos, porque justamente en éstas áreas es donde se visualizan las mayores dificultades para que el derecho de los indígenas sea una realidad en la práctica. Son en éstos casos donde las políticas de los estados son más proclives a denegar el derecho de los pueblos indígenas para favorecer los intereses económicos ligados a él. A los fines de brindar una necesaria contextualización, el informe inicia con una breve síntesis histórica de la relación de los pueblos indígenas con la corona española primero y la conformación del estado luego. Los ideales y visiones que marcan de alguna manera la realidad que viven aun hoy los pueblos indígenas. Se continúa luego con una breve síntesis del marco normativo vigente en la actualidad a nivel nacional para pasar finalmente a la exposición de los casos que grafican la situación general de los pueblos indígenas y los límites que encuentra en la práctica la realización plena de los derechos indígenas. El informe culmina con algunas recomendaciones que desde nuestro punto de vista ayudarán a que los pueblos originarios de nuestro país puedan gozar de sus derechos. s 2 PARTE I - PUEBLOS INDÍGENAS Y SITUACIÓN TERRITORIAL EN ARGENTINA. AÑO 2007-2008. Actualmente existen en argentina más de veinte pueblos indígenas que se reivindican como tales. La cantidad de integrantes de cada pueblo no está fehacientemente registrada debido a la ausencia de instituciones que se ocupen de registrar eficientemente estos datos y debido también a otros factores de índole histórica. Así por ejemplo, un estudio realizado por expertos de la Universidad de Buenos Aires en el año 2005 mediante análisis genéticos afirma que el 56% de los argentinos tiene antepasados indígenas1. Por otro lado el mismo estudio afirma que entre las personas que poseen huellas aborígenes en su ADN, sólo el 10% es indígena puro. De acuerdo a los resultados de la Encuesta Complementaria sobre Poblaciones Indígenas2 - ECPI – publicados en el año 2005 hay 600.329 personas que se reconocen pertenecientes y/o descendientes en primera generación de pueblos indígenas que forman parte de una gran diversidad y se encuentran distribuidas en todas las provincias del país. Cuadro 1. Población por pueblo indígena. Total del país. Años 2004 y 2005 Pueblo indígena Atacama Ava guaraní Población 3.044 21.807 Provincias Jujuy Jujuy, Salta, E. Ríos, Corrientes y Misiones Aymara 4.104 Jujuy, Salta Chané - Chiriguano 4.376 Salta Charrúa 4.511 Entre Ríos Chorote 2.613 Salta Chulupí 553 Salta Comechingón 10.863 Córdoba Diaguita/diaguita calchaquí Guaraní 31.753 Jujuy, Salta, Tucumán, Santa Fe, Santiago del Estero, Catamarca,Córdoba y La Rioja 22.059 Jujuy, Salta, Corrientes, Entre Ríos,Misiones,Santa Fe, Buenos Aires 1 Este estudio fue realizado por el Servicio de Huellas Digitales Genéticas de la Universidad de Buenos Aires, a partir del análisis de casos en 11 provincias. 2 Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). Resultados de la Encuesta Complementaria de Pueblos Indígenas —ECPI— relevada a partir de 2004. http://www.indec.mecon.ar/webcenso/ECPI/index_ecpi.asp s 3 Mendoza, San Juan, Huarpe 14.633 Kolla 70.505 Lule - Vilela 854 San Luiis, Aires Buenos Jujuy, Salta Tucumán, Salta y Santiago del Estero Neuquén, Río Negro, Chubut, Santa Cruz, La Pampa, Buenos Aires Mapuche 113.680 Mbyá guaraní - Cainguá 8.223 Mocoví 15.837 Chaco, Santa Fe Omaguaca 1.553 Jujuy Ona 696 Tierra del Fuego Pampa 1.585 La Pampa, Bs. As. Pilagá 4.465 Formosa Quechua 6.739 Jujuy, Salta Querandí 736 Buenos Aires Rankulche 10.149 La Pampa Sanavirón 563 Córdoba Tapiete 524 Salta Tehuelche 10.590 Misiones Santa Chubut Cruz - Chaco, Formosa, s Toba 69.452 Tonocoté 4.779 Santa Fe y Buenos Aires Santiago del Estero Tupí guaraní 16.365 Jujuy, Salta, Corrientes, E. Ríos, Misiones, Santa Fe Wichí 40.036 Chaco, Formosa Otros pueblos declarados (1) 3.864 Pueblo no especificado (2) 92.876 Sin respuesta 9.371 Salta, 4 Se calcula que más de la mitad de la población indígena vive en zonas urbanas sin embargo gran parte de esta población ha perdido su identidad indígena y no son registradas por las encuestas. s 5 Marco histórico La situación de los pueblos indígenas en relación con los territorios que ocupan ha sido históricamente uno de los ejes del conflicto con la corona española primero y con el estado argentino luego de su constitución. Desde los primeros asentamientos en territorios ocupados por comunidades indígenas la disputa fue el territorio. La primera constitución del estado sancionada en 1853, excluye la condición indígena al establecer como atribución del congreso nacional: “1) conservar el trato pacífico con los indios, y 2) promover la conversión de ellos al catolicismo”. Desde ésta temprana afirmación hasta la reforma de 1994 que reconoce a los pueblos indígenas como sujetos de derecho, hubo de pasar más de un siglo. Más de un siglo de sometimiento, despojos, olvido del estado y resistencia de nuestros pueblos originarios. En primer lugar, más allá de la intención declarada de “conservar el trato pacífico”, la consolidación del estado argentino está fundada en uno de los mayores genocidios llevado a cabo por la oligarquía política y terrateniente contra los pueblos indígenas en argentina. Las campañas militares conocidas como la Conquista del Desierto en 1878 y Conquista del Chaco culminada en 1884 fueron dos acciones ejecutadas casi simultáneamente que al mismo tiempo que consolidaron definitivamente las fronteras del estado llevaron el exterminio masivo, la expulsión y la subyugación de los pueblos indígenas que hasta entonces habitaban esos territorios. Los territorios arrebatados a los pueblos indígenas fueron cercados dando origen a las grandes estancias ganaderas al sur de buenos aires e ingenios azucareros y algodoneros al norte, cuyos propietarios fueron los propios mentores de las campañas de exterminio contra estos pueblos. En segundo lugar, el paradigma que sanciona la Constitución de 1853 acerca de “promover la conversión de ellos (los indios) al catolicismo ha marcado el trato dado a los pueblos originarios hasta el presente desde el estado, toda vez que la idea de conversión implica la idea de evolución de los indígenas a la condición de ciudadanos. Esta idea implicó el desconocimiento de los sistemas de organización, costumbres e idiomas de los pueblos indígenas en favor de una cultura hegemónica y “argentinizante”, que sin posibilidad de negociación atravesó todo los órdenes de la vida indígena. De esta forma, luego de arrebatárseles sus territorios a los pueblos indígenas, fueron obligados a incorporarse a un estado que no solo no les reconoce entidad, ni su forma de organización y no contempla para ellos ningún tipo de derechos, sino que los obliga a adoptar una forma de vida e impone una cultura que en su aspecto educativo y religioso los niega y denigra, ya que el indio es considerado la imagen infrahumana de la barbarie en oposición a civilización. En la práctica ésta concepción habilita el trato de ciudadano de segunda categoría para quienes su cultura es, justamente, una de las razones de su barbarie, del que hay que sacarlo, despojarlo, igual que de su territorio. La escasa legislación y políticas que el estado puso en práctica hasta casi fines del siglo pasado hacia los pueblos originarios están atravesados por este paradigma. Y más allá de los cambios normativos recientes, ésta es una concepción que perdura hasta el presente en todas las acciones de la política oficial. s 6 Breve síntesis del marco legal – normativo actual El marco normativo que reconoce y protege los derechos de los pueblos originarios en Argentina es amplio y se puede afirmar que es excepcional en muchos casos comparado con el marco normativo de muchos países en América Latina. Máxime si se tiene en cuenta que en términos cuantitativos la proporción poblacional indígena es notablemente menor comparadas con otros países de América Latina. Constitución Nacional. Aún cuando ya había algunas leyes para atender la situación indígena en Argentina (caso ley 23.302 de Política indígena y apoyo a las comunidades indígenas de 1985), sin dudas la reforma constitucional de 1994 abrió un amplio abanico de posibilidades mas concretas para las demandas de los pueblos originarios al incluir dentro del artículo 75 sobre las atribuciones del congreso en uno de sus incisos el mandato de: Reconocer la preexistencia étnica y cultural de los pueblos indígenas argentinos. Garantizar el respeto a su identidad y el derecho a una educación bilingüe e intercultural; Reconocer la personería jurídica de sus comunidades, y la posesión y propiedad comunitarias de las tierras que tradicionalmente ocupan; y regular la entrega de otras aptas y suficientes para el desarrollo humano; ninguna de ellas será enajenable, transmisible ni susceptible de gravámenes o embargos. Asegurar su participación en la gestión referida a sus recursos naturales y a los demás intereses que los afecten. Las provincias pueden ejercer concurrentemente estas atribuciones. Convenio 169 de la OIT sobre Pueblos Indígenas y Tribales en Países Independientes. Este convenio fue suscripto por la Argentina en el año 1989 y ratificado por la ley 24.071 en 1992. Sin embargo, el depósito de ratificación del Convenio se efectivizó recién el 3 de Julio de 2000 y entró en vigencia un año después. Instituto Nacional de Asunto Indígenas – INAI - : Es el organismo oficial que entiende en cuestiones indígenas en Argentina. Fue creado en septiembre de 1985, a partir de la sanción de la Ley 23.302. Conforme las disposiciones de dicha ley, el INAI se constituye como una entidad descentralizada con participación indígena, dependiente del Ministerio de Desarrollo Social de la nación. En el año 2004 fue creado dentro del INAI, el Consejo de Participación Indígena (CPI) integrada por representantes indígenas distribuidos por pueblo y por provincia de todo el país a efectos de garantizar la participación indígena en todos los intereses que los afecten. s 7 Según definiciones de la propia institución, dentro de sus responsabilidades figuran: - Organización del REGISTRO NACIONAL DE COMUNIDADES INDIGENAS (RENACI) encargada de llevar el registro de las comunidades indígenas en el país y de regular la entrega de personería jurídicas a las comunidades. - Es responsable de arbitrar todos los mecanismos disponibles para cumplir con el imperativo constitucional establecido en el artículo Art. 75, Inc. 17, de la Constitución Nacional. - Promueve la participación indígena en la formulación y ejecución de proyectos de desarrollo con identidad, dando el apoyo técnico y financiero necesario. - Coordina programas de apoyo a la educación intercultural, pedagogías aborígenes, acciones de recuperación cultural y a investigaciones históricas protagonizadas por las comunidades. - Promueve espacios de mediación y participación indígena en las temáticas afines a los intereses de las comunidades, como recursos naturales y biodiversidad, desarrollo sustentable, políticas de salud, comunicación y producción, gerenciamiento y comercialización de artesanías genuinas. Ley Nº 26.160/06 - Emergencia en materia de posesión y propiedad de las tierras. Esta ley fue sancionada el 1º de Noviembre de 2006 y promulgada el mismo mes. 1. En ella se declara la emergencia en materia de posesión y propiedad de las tierras que tradicionalmente ocupan las comunidades indígenas originarias del país y suspende por el término de cuatro años la ejecución de sentencias, actos procesales o administrativos, cuyo objeto sea el desalojo de comunidades indígenas de sus territorios. 2. Ordena al INAI realizar en un plazo de tres años contados a partir de la vigencia de la ley, un relevamiento técnico –jurídico- catastral de la situación dominial de las tierras ocupadas por las comunidades indígenas y promover acciones que fueren menester conjuntamente con el Consejo de Participación Indígena, los Institutos Aborígenes Provinciales, Universidades Nacionales, Entidades Nacionales, Provinciales y Municipales, Organizaciones Indígenas y Organizaciones no Gubernamentales. 3. Establece la creación de un Fondo Especial asignados al Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) para asistir a las comunidades indígenas, por un monto de diez millones de dólares aproximadamente a erogarse equitativamente durante tres ejercicios presupuestarios consecutivos. Dicho fondo es exclusivamente destinado a afrontar los gastos de relevamiento técnico jurídico-catastral de las tierras indígenas, labores profesionales en causas judiciales y extrajudiciales y los programas de regularización dominial a elaborar por el INAI a los efectos de esta ley. Ley Nº 26.160/06 – Programa de Relevamiento Territorial. Para cumplir con lo reglado por la Ley Nº 26.160 se debe realizar un paso previo que resulta fundamental como es la realización de un relevamiento territorial integral s 8 de las comunidades indígenas del todo el país. Para lo cual el INAI ha propuesto la creación de una Coordinación del Programa a su cargo junto con una mesa Coordinadora de articulación con representantes de cada Consejo de Participación Indígena en las provincias. La propuesta se complementa en cada provincia con un representante del ejecutivo provincial y la conformación de un Equipo Técnico encargado de realizar el relevamiento territorial. Al presente y transcurridos ya dos de los tres años de plazos previsto por la ley, son solo ocho las provincias con las que el INAI ha firmado convenio para la creación del Equipo Técnico encontrándose en proceso de negociación la creación del Equipo en otras seis provincias. Este es solo un brevísimo resumen de las principales leyes nacionales que reconocen derechos a los pueblos indígenas de nuestro país. No ahondamos aquí disposiciones constitucionales ni leyes provinciales que tratan la temática indígena, como tampoco se enumeran resoluciones y decretos sobre temáticas más específicas que no obstante por su generalidad alcanzan a los derechos de los pueblos indígenas – caso biodiversidad, medioambiente, patrimonio, etc.-. La razón para este recorte tiene que ver con que nos interesa cotejar cumplimiento del marco normativo nacional como referente y garante de los derechos de los pueblos indígenas en el país, detrás del cual debiera ceñirse la legislación y políticas provinciales. s 9 Parte II - Situaciones de conflicto que afectan a comunidades indígenas. En el apartado anterior vimos los avances que se han registrado en materia legislativa en los últimos 30 años aproximadamente. Pasaremos ahora a repasar algunos casos puntuales donde la aplicación del derecho de los pueblos indígenas encuentra dificultades. I. Realización de obras de envergadura que afectan a comunidades y pueblos indígenas. 1. Comunidad Caraparí. Salta Tal es el caso del reclamo que lleva adelante la comunidad Caraparí perteneciente al pueblo guaraní en la Provincia de Salta en el norte del país. Esta comunidad habita tradicionalmente la zona en el Departamento San Martín, provincia de Salta y a 7 Km de la Frontera con Bolivia. La Comunidad es poseedora y propietaria del territorio con una extensión de 766 hectáreas identificadas con matricula 23.294. Su población se estima en unas 700 personas. Su sistema de producción consiste en la producción de pequeños cultivos hortícola y de plantas frutales que se complementa con la recolección de leña y frutos silvestres y miel del bosque nativo donde habita. En el año 2004 el gobierno argentino a través de la Secretaría de Energía autorizó la construcción de un nuevo trazado del gasoducto que abastece de este combustible desde Pocitos (Bolivia) a la central en Campo Duran (provincia de Salta) de la Empresa REFINOR – Refinería del Norte - a fin de ampliar la capacidad de volumen de transporte del gasoducto. El nuevo trazado que implica la remoción del suelo y el desmonte de una franja de 30 metros de ancho, atravesaría ahora el territorio de la comunidad Caraparí en una extensión de 2 kilómetros. Al mismo tiempo implica la colocación de guardias de monitoreo de la red. En ninguna cláusula del convenio se menciona a las comunidades indígenas de la región ni se establecen consultas para recabar su parecer o para informar la realización de dichas obras. En septiembre de 2004 la Comunidad Carapari interpuso una acción de amparo contra Refinor S.A. y la empresa contratista en quien Refinor delegó la construcción del trazado, ante el Juzgado Federal N. 2 de la Provincia de Salta con el objeto que se ordene la suspensión de las obras de construcción del Gasoducto denominado PocitosCampo Duran que une a Bolivia con Argentina y atraviesa la comunidad. Las razones que esgrime la comunidad son: - Falta de consulta e información sobre los propósitos de la empresa. Al momento de ingresar al territorio de la comunidad la empresa dijo que iba a realizar un estudio topográfico del área para lo cual requirió autorización y la firma de papeles. Sin embargo al ingresar lo hizo directamente con las máquinas y comenzó a desmontar, hecho sobre el cual la comunidad no había sido informada ni mucho menos contaban con su autorización para tales maniobras. - Tampoco hasta el presente la empresa ha acreditado los estudios de impacto ambiental y social que evalúen los efectos sobre la vida tradicional de la comunidades, los referentes a la seguridad geodésica de una obra de s 10 tal magnitud, los planes de mantenimiento y monitoreo del gasoducto, y las autorizaciones administrativas pertinentes. - Por cuanto han ingresado sobre la base del engaño y el ardid a las tierras causando graves daños a sus tierras y formas de vida tradicionales. Tales reclamos los sustenta la comunidad en los derechos constitucionales reconocidos por los artículos 14, 17, 41 y 75 inciso 17 de la CN; el artículo 21 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo y el artículo 15 de la Constitución de la Provincia de Salta. Para sustentar lo peticionado la Comunidad ofreció diversas pruebas a producirse para acreditar los hechos invocados y sustentar su pretensión sustancial. Desde el otro lado y simultáneamente también en octubre de 2004 la empresa Refinor S.A. al conocer la acción de la Comunidad Carapari, interpuso acción de amparo ante el Juzgado Federal No. 1 de la Provincia de Salta, solicitando se le permita continuar con la ejecución del trazado Los procesos judiciales culminaron con un único fallo del Juzgado Federal N. 2 autorizando a la empresa Refinor S.A y su subsidiaria Conta S.R.L continuar con las obras del trazado del gasoducto y ordenando a la comunidad abstenerse de realizar cualquier medida tendiente a obstaculizar estas obras. El fallo fue apelado por la comunidad ante la Cámara Federal de Apelaciones de la provincia quien rechazó la apelación. Ante esta nueva negativa la comunidad presentó un recurso extraordinario que aceptado por la Cámara federal de Apelaciones lo que permitió llegar a la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Finalmente el 30 de octubre del 2007 la Corte Suprema de Justicia de la Nación Argentina rechazó el recurso extraordinario al considerar que en el caso no se encontraba frente a una sentencia definitiva que habilitara su intervención. Ante esta nueva negativa la comunidad Carapari decide recurrir a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos – CIDH - tras considerar agotada la vía judicial en el país y el 30 de abril de 2008 la Secretaría Ejecutiva de la CIDH registró el reclamo de la comunidad bajo el número p-536-08 encontrándose en proceso al momento de la realización de éste informe. 2. Asociación de Comunidades Aborígenes Lhaka Honhat. Lotes 14 y 55. Salta El siguiente caso es el de la Asociación de Comunidades Aborígenes LHAKA HONHAT3 que desde 1998 mantiene una petición ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos por un conflicto con la Provincia de Salta en torno al territorio de las comunidades que integran la Asociación y que involucran una multiplicidad de intereses político económicos por parte de la provincia. El informe de la CIDH enumera los motivos de la presentación: (…) por violación de los derechos a la vida (artículo 4), integridad personal (artículo 5), a la no injerencia arbitraria en la vida privada (artículo 11.2), a la información (artículo 13), a la libertad de asociación (artículo 16), a la circulación y residencia (artículo 22), a la protección judicial (artículo 25), en concordancia con la obligación general de respetar los derechos humanos 3 La Asociación "Lhaka Honhat" se encuentra integrada por 35 comunidades indígenas de los grupos étnicos Mataco (Wichi), Chorote (Iyjwaja), Toba (Quom), Chulupí (Nivacklé), Tapiete (Tapy´y), que viven en la zona del Río Pilcomayo (lotes fiscales Nº 14 y 55) de la Provincia de Salta s 11 reconocida en el artículo 1.1 de la Convención Americana de Derechos Humanos (…) y los artículos XI, XII, XIII, y XXII de la Declaración Americana de los Deberes y Derechos del Hombre (…), en contra de la República Argentina (…) por el perjuicio sufrido por las comunidades indígenas que conforman la Asociación Lhaka Honhat y, que habitan los lotes fiscales Nº 14 y 55, Municipio de Santa Victoria del Este, Departamento de Rivadavia, Provincia de Salta4. Entre las razones manifestadas por la asociación se encuentra la no consulta a los pueblos indígenas de la región por la construcción de un puente internacional en el marco de la integración del MERCOSUR que afecta sus territorios dividiendo las áreas de recorrido de caza y recolección que van desde el río Pilcomayo hasta el monte. Además porque de concretarse el plan de urbanización de la región implicado en el proyecto significaría el desplazamiento de los pueblos de sus territorios, por lo que la Asociación exige que se realicen estudios para determinar el impacto socio-ambiental que tendrían en sus comunidades y, se considere la opinión e interés de quienes históricamente han ocupado esas tierras. Los peticionarios alegan que a pesar de que la Constitución Nacional y la Constitución de la Provincia de Salta reconocen a los pueblos indígenas la posesión y propiedad comunitarias de las tierras que tradicionalmente ocupan y, aseguran su participación en la gestión referida a sus recursos naturales y a los demás intereses que los afecten, a la fecha no se les han reconocido legalmente estos derechos. CIDH. Op Cit. Sin embargo en los cinco años que duró el proceso de Solución Amistosa entre la Provincia de Salta y la Asociación Lhaka Honhat – en representación de las comunidades y pueblos indígenas del territorio en conflicto- con la mediación de Nación que fuera acordado a partir de la intervención de la CIDH, el Estado no logró articular una salida que diera solución a este reclamo. Finalmente en el año 2005 la provincia convocaría a un referéndum para definir el destino de las tierras en conflicto, iniciativa en todos los aspectos violatorias al proceso de negociación acordada con las comunidades indígenas y comprometidas ante la CIDH. Esta situación puso fin al proceso de solución amistosa ya que las comunidades estimaron que no existía voluntad de arribar a una solución concensuada y habilitó la posterior resolución de la CIDH que finalmente en noviembre de 2006 declaró admisible la denuncia realizada por la Asociación Lhaka Honhat en la cual se reivindica el derecho de propiedad de las comunidades aborígenes sobre sus tierras de uso tradicional. La CIDH sostiene que: el Estado ha tenido múltiples oportunidades de resolver el asunto de fondo, es decir, la tutela efectiva del derecho a la propiedad de los miembros de la Asociación Lhaka Honhat. Por otro lado entiende que ha habido una demora indebida en el pronunciamiento de una sentencia final, razón por la cual concluye que la Comisión es competente para conocer la denuncia presentada y la petición es admisible de conformidad con los requisitos de la Convención Americana. Al presente el caso se encuentra aun en proceso y la CIDH no se ha expedido. En el mes de marzo de 2008 hubo una audiencia ante la CIDH en Washington al que asistieron la representación de la Asociación Lhaka Honhat y un representante del por el estado argentino. En la audiencia se esperaba además la presencia del 4 CIDH. INFORME N° 78/06 PETICIÓN 12.094 s/Admisibilidad. Comunidad Aborígenes Lhaka Honhat - Octubre de 2006 s 12 representante delegado por la provincia de Salta que no se hizo presente. En estas condiciones la asociación se niega a retomar el proceso de solución amistosa por entender que no existe voluntad desde el estado para arribar a un acuerdo y espera en cambio que la Comisión se expida. El análisis del proceso de desarrollo de este caso que espera la resolución de la CIDH –hecho que de resultar favorable será de enorme valor, por lo menos simbólico para las comunidades que aun resisten - permite sin embargo entrever una cuestión de fondo en cuanto a la efectividad de los recursos legales cuando las controversias se agudizan. La cuestión tiene que ver con la incapacidad de los resortes del estado para resolver una situación en la que se ven involucrados intereses político-económicos que amparados en la autonomía provincial han resistido airosamente la, por otro lado, débil presión que ha ejercido el estado nacional, garante en ultima instancia de los derechos que de las comunidades cuando las provincias no lo aplican. A pesar de la referencia al Art. 75.17 de la Constitución Nacional que invoca el Estado al ofrecer la mediación y propiciar la Solución Amistosa5 del conflicto, no instrumenta medidas políticas necesarias para hacer efectivo esta promesa. 5 El Estado, desde su primera respuesta, ofreció su disposición para iniciar un proceso de solución amistosa con los peticionarios, a través del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI), con la finalidad de reconocer la posesión y propiedad comunitarias de las tierras en las que habitan estas comunidades, conforme al artículo 75(17) de la Constitución Nacional. s 13 II. DESARROLLO DE EMPRENDIMIENTOS MINEROS: 1. El Caso Orosmayo y Pirquitas. Provincia de Jujuy: En febrero de este año se dio a conocer un informe de la Unidad Fiscal de Investigación de Delitos Ambientales dependiente de la Fiscalía General de la Provincia de Tucumán dando cuenta de la presunta contaminación ambiental ocasionada por actividad minera en la provincia de Jujuy. La investigación fue iniciada a raíz de la denuncia realizada en esa Fiscalía General en junio de 2007 por representantes de comunidades indígenas de la Provincia de Jujuy denunciando la contaminación ambiental ocasionada por desechos mineros provenientes de la Mina Pirquitas y de la Mina Orosmayo, en la localidad de Liviara de la Provincia de Jujuy. La comunidad denunció el grave perjuicio que les ocasiona la explotación aurífera de la mina que opera en la zona desde mediados del año 2.002, mediante la remoción del material, extracción y separación por gravedad y tamizado, para lo cual se realizan importantes movimiento de suelos. (...) Esta forma de explotación se realizó pese a los propios estudios de impacto ambiental oportunamente presentados señalan los impactos ambientales nocivos de este esquema de trabajo, destacando la modificación de la morfología fluvial aguas abajo que produce erosión, sedimentación, trazado del cauce, etc. La remoción de materiales del cauce de los ríos ha provocado un importante aumento del material en suspensión, causando turbidez y tornándola virtualmente inútil para el abrevado de ganado, recurso natural central para la vida de los pobladores de las comunidades. El río Orosmayo y las pasturas que albergan, han quedado de tal manera degradados que las comunidades han sido privadas de su único sustento de vida. Existe pérdida de animales por falta de agua y por contaminación, en los casos en que estos beben el agua. Las empresas han dejado pozos llenos de arcilla o lagunas, que constituyen un peligro para los pobladores6. La gravedad de la contaminación existente, se constata en relatos, fotos y numerosos reclamos, denuncias y demandas judiciales efectuadas por los pobladores perjudicados, e incluso en análisis realizados por el SUNIBROM7 en la zona de Orosmayo y Liviara ya en el año 2003 donde un informe producido por esta institución expresa que sobre estudios realizados en aguas de vertiente de Viscachani, agua del Río Orosmayo, agua de grifo público del pueblo de Orosmayo y agua de grifo público del pueblo de Liviara necesitan tratamiento desinfectante por contaminación no siendo apta para el consumo humano En otro informe realizado por el Area de Ingeniería de la Dirección Provincial de Recursos Hídricos de Jujuy en el mismo año –2003- se destaca que: 6 Actuación Preliminar N° 121/07 “Orosmayo-Pirquitas P.S.A Infr. Ley 24.051 - Fiscalía General de Tucumán febrero de 2.008. 7 Superior Unidad Bromatológica Provincial es un organismo perteneciente al Ministerio de Bienestar Social de la provincia de Jujuy que colabora en la protección de la salud humana vigilando la inocuidad y calidad de los productos de su incumbencia. s 14 “la explotación aurífera se realiza en el interior del cauce del Río Orosmayo, sin la debida autorización y contralor de la Dirección de Recursos Hídricos, habiendo quedado diversos sectores del río totalmente destruido, convertido en una sucesión de pequeñas represas o “piletones”comunicados entre sí y el flujo de agua obstaculizado, con la consiguiente disminución del caudal del mismo, afectando a los usuarios aguas abajo. Es decir que se modificó sin autorización la morfología del cauce. El mismo informe sugiere y recomienda que se realice una intimación a las empresas operadoras para que presenten el plan de explotación minera, que no se encuentra aprobado y autorizado por la Dirección de Recursos Hídricos, que es el organismo que ejerce la superior tutela y poder de policía en temas de ésta índole en todo el territorio provincial para que en un plazo perentorio vuelvan a restaurar las condiciones naturales en los sectores ya explotados dejando el curso de agua en las mismas condiciones que tenía antes de las intervenciones de dichas empresas mineras. En virtud del incumplimiento de la obligación de la empresa de explotación aurífera de realizar la mitigación y restauración de todas las áreas de explotación del Río Orosmayo en el año 2003 la Dirección Provincial de Desarrollo Industrial, Minero y Comercial determinó que a la empresa le correspondía apercibimiento. Sin embargo con fechas posteriores no se ha realizado nuevas intervenciones de control que aseguren el efectivo resarcimiento del área contaminada y es así como las comunidades indígenas de Orosmayo realizan en el año 2007 la denuncia del que surge el informe de Fiscalía de Tucumán que en febrero de 2008 aun concluye que: (...) Estamos en condiciones de afirmar que existiría contaminación en las aguas de las localidades de Liviara y Orosmayo en el Dpto. Rinconada de la provincia de Jujuy, presuntamente por la explotación de minerales, con la consiguiente afectación de la fauna y la flora del lugar y el peligro para la salud de la población que se aprovisiona de dichas aguas. Hasta el presente el caso no ha tenido mayor avance por parte de los jueces con competencia jurisdiccional en la zona afectada. Es necesaria la aclaración la fiscalía que realiza la investigación preliminar es de la provincia de Tucumán y no tiene jurisdicción en la zona. En cambio el fiscal que realizó esta investigación -Antonio Gustavo Gómez-, actualmente atraviesa un pedido de destitución y mientras dure el proceso no puede abrir nuevas investigaciones. La fiscalía a su cargo fue la encargada, entre otros casos, de la investigación que resultó en el procesamiento judicial de la máxima autoridad de Minera Alumbrera Limited - una de las grandes mineras que operan en la provincia de Tucumán - por delito de contaminación. Siendo el primer caso de estas características en América Latina8. El mismo fiscal ha denunciado la connivencia entre las instituciones del estado y las grandes corporaciones mineras para permitir la continuidad de este sistema que contamina a las comunidades indígenas y las poblaciones cercanas a las explotaciones mineras y despojan a nuestro país de recursos inconmensurables: 8 Minera Alumbrera Limited está gerenciada por Xstrata Plc con base en Suiza con el 50% de acciones y las empresas canadienses Goldcorp Inc y Northern Orion Resources Inc con el 37,5% y el 12,5% respectivamente. s 15 “Los fiscales por mas que empujemos no conseguimos de los jueces las condenas necesarias para que esto se termine de una vez por todas9”. De esta forma se describen los problemas y avatares que deben sortearse ante la falta de compromiso en el cumplimiento de la ley por parte de los jueces federales y la soledad con la que deben llevar adelante estos procesos quienes denuncian esta situación de injusticia. 9 Antonio Gustavo Gómez. Foro de la Agencia de Noticias Copenoa. Septiembre de 2007. s 16 III. DESMONTES Constitución de la Provincia de Salta: Artículo 15: Pueblos Indígenas. I. La Provincia reconoce la preexistencia étnica y cultural de los pueblos indígenas que residen en el territorio de Salta. Reconoce la personalidad de sus propias comunidades y sus organizaciones a efectos de obtener la personería jurídica y la legitimación para actuar en las instancias administrativas y judiciales de acuerdo con lo que establezca la ley. Créase al efecto un registro especial. Reconoce y garantiza el respeto a su identidad, el derecho a una educación bilingüe e intercultural, la posesión y propiedad comunitaria de las tierras fiscales que tradicionalmente ocupan, y regula la entrega de otras aptas y suficientes para el desarrollo humano. Ninguna de ellas será enajenable, transmisible ni susceptible de gravámenes ni embargos. Asegura su participación en la gestión referida a sus recursos naturales y demás intereses que los afecten de acuerdo a la ley. II. El Gobierno Provincial genera mecanismos que permitan, tanto a los pobladores indígenas como no indígenas, con su efectiva participación, consensuar soluciones en lo relacionado con la tierra fiscal, respetando los derechos de terceros. Según un informe oficial de 2004, en los últimos 70 años, el país perdió el 70 por ciento de su patrimonio forestal, con lo que se pone en peligro el 40 por ciento de las especies vegetales y animales, al margen del riesgo que constituye para las personas, dentro de esta realidad, los pueblos indígenas se ven particularmente afectados dado que su modo de vida depende fundamentalmente de la supervivencia del bosque nativo y de las formas de vidas que ella alberga. La Provincia de Salta es una de las provincias con mayor diversidad indígena en su interior - nueve pueblos – y es paralelamente una de las provincias que tiene los antecedente más nefastos en cuanto a desmonte y tala de boque nativo se registra. En el 2007, los permisos de desmonte solicitados abarcaron una superficie casi 6 veces mayor (560%) que la del año anterior10. La deforestación de la provincia se concentra actualmente en el Departamento San Martín y en forma creciente en el Departamento Rivadavia. Allí es donde se encuentran los principales remanentes del bosque tropical seco del Chaco Salteño. En 2007 fue autorizada la deforestación de una superficie de tierras sin precedentes en aquellos departamentos, en territorio de ocupación tradicional y actual, de más de 200 comunidades indígenas. En los departamentos de Anta, San Martín y Rivadavia, habitan más de 23 mil indígenas cazadores-recolectores. Hasta la fecha – y tras décadas de reclamos – sólo han logrado legalizar en forma efectiva sus derechos de propiedad sobre tierras que, en conjunto, constituyen menos del 5% de la superficie afectada por los desmontes propuestos en los últimos tres años. La Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable de la provincia de Salta autorizó durante 2007 el desmonte de más de 400.000 hectáreas de bosques nativos en la provincia. Esta cifra supera ampliamente el promedio de deforestación anual de todo el país. 10 s Según la fundación Asociana se registraron 71 permisos de desmontes que totalizan 435.399 hectáreas. 17 Las autorizaciones se dieron en el marco de político legislativo, donde por un lado se discutía la creación de la ley de presupuestos mínimos para la protección de bosques nativos y en la provincia se realizaba la transición para el cambio de gobernador. Sin embargo, a pesar de esto, el nuevo gobierno decidió no dar marcha atrás con las autorizaciones y han sido convalidadas durante 2008. Algunos desmontes alcanzan áreas de yungas que en 2002 fueron incorporados a la Red Mundial de Reserva de Biósfera de la UNESCO. Un informe técnico revela que en el primer semestre de 2008 se deforestaron más de 57 mil hectáreas en territorio de uso tradicional de comunidades wichi, las que están siendo expulsadas de sus tierras11. El 97.7% de la superficie afectada por desmontes en Salta entre 2004 y 2007 se concentra en cinco departamentos: Anta, San Martín, Rivadavia, Orán y Metán. Tan solo en departamento San Martín habitan al menos seis de los nueve Pueblos Indígenas de la Provincia12 El Reclamo del Pueblo Wichi En el mes de octubre siete organizaciones del pueblo wichi solicitaron ante las autoridades provinciales que se paralicen los desmontes en sus territorios que comprenden casi 3 millones de hectáreas, el 70% en el departamento Rivadavia y el resto en San Martín, Anta y Orán. Unas 18 mil personas habitan en este territorio. La zona comprende: el río Pilcomayo, el norte del Bermejo, el río Itiyuro y la ruta nacional 86, el Bajo Itiyuro, General Ballivián, Rivadavia Banda Sur y Banda Norte. En la presentación se denuncia que en cinco comunidades de Ballivián que comprenden 146 familias, 153 mil hectáreas fueron taladas lo que representa el 47% de su territorio de 324 mil hectáreas. En el Bajo Itiyuro, en el límite entre los departamentos Rivadavia y San Martín, se deforestó el 21% del territorio de 118 mil hectáreas. En el Norte Bermejo se desmontaron 65 mil hectáreas, el 19% del total del territorio, de 339 mil hectáreas. El informe resalta que estos territorios están sujetos también a un proceso de “degradación ecológica” debido al libre pastoreo de ganado y a la tala indiscriminada de árboles. Tales denuncias han tenido eco en instituciones del estado nacional como el Instituto Nacional contra al Xenofobia y el racismo (INADI) que ha enviado notas al estado salteño pidiendo la anulación de las autorizaciones de desmontes y la regulación la regulación de la propiedad comunitaria de las tierras indígenas. Por otro lado la Secretaria de Derechos Humanos de la Nación a través del área de Derechos Económicos Sociales y Culturales ha elaborado un informe en conjunto con la Universidad Nacional de Salta enfocando la cuestión de los conflictos sobre las tierras en las que habitan y que a su vez demandan los Pueblos Indígenas de la Provincia donde concluye que: (...) es indispensable y urgente ordenar aquellas tierras de las que depende comunidades indígenas y con las cuales culturalmente. No sólo se trata de detener la suspensión de los desmontes en la supervivencia cultural de las están vinculadas espiritual, social y los desmontes, sino de reforestar 11 Informe técnico elaborado por tres instituciones que acompañan a las comunidades: Tepeyac, Fundapaz y la Fundación Asociana. 12 Guaraníes, Chané, Tapieté, Wichí, Chorote y Chulupí s 18 para recuperar el ambiente y detener las fumigaciones y denuncia que a un año de la promulgación la ley Ley Nº 26.160 de Emergencia en materia de posesión y propiedad de las tierras, no se llevó a cabo el relevamiento previsto en la misma para la posterior entrega de títulos comunitarios, de modo que cuenten con seguridad jurídica sobre sus tierras13. 13 Los Pueblos Indígenas de la Provincia de Salta La posesión y el dominio de sus tierras Departamento San Martín. INFORME CONVENIO MARCO - Secretaría de Derechos Humanos de La Nación Universidad Nacional de Salta. Diciembre 2007. s 19 IV. PETROLERAS: Otro eje de conflictos con las comunidades indígenas en Argentina y donde el derecho de los Pueblos Originarios es permanentemente violentado tiene que ver con la exploración y explotación de reservas hidrocarburíferas. Las comunidades que habitan en territorios con reservas de hidrocarburos sufren las consecuencias de la explotación que destruye sus territorios y contamina los suelos. Las empresas, amparados en acuerdos con los gobiernos provinciales, no les interesa consultar la opinión de las comunidades, y ante el avance que llevan a las comunidades a tomar medidas extremas la respuesta es generalmente la represión y persecución judicial a los referentes comunitarios. 1. Provincia de Rio Negro La cuenca del Ñirihuau se encuentra dentro de la Reserva de Biosfera Norpatagónica creada en el año 2007 y abarca 4,5 millones de hectáreas entre el Parque Nacional Lanín y el río Pico en la Provincia de Chubut, y que comprende otras áreas protegidas, poblados y comunidades indígenas. Toda la región es un vasto espacio de enorme diversidad biológica, cerca de la cordillera de los andes, con lagos y arroyos de gran belleza paisajística y de enorme potencial económico por la fertilidad del suelo, los bosques nativos, sus reservas minerales y sobre todo por el interés turístico. Dentro del área habitan pobladores asentados desde mucho tiempo, dentro de los cuales se encuentran pobladores pertenecientes al pueblo mapuche con presencia en la zona desde antes de la constitución del estado argentino. Estas familias tienen como principal actividad es la ganadería de subsistencia y si bien no están inscriptos en los registros del estado como comunidades, mantienen su identidad y adscripción étnica. La zona de la cuenca de arroyo Ñirihuau fue otorgada en concesión el mes de febrero de 2008 por el gobierno de la Provincia de Río Negro para que se realicen en la zona actividades de exploración petrolífera y gasífera. Se sabe que esta cuenca posee un sistema petrolero activo reconocido dentro del ámbito geológico en los últimos años. Encontrándose incluso pozos petrolíferos que datan de la primera mitad del 1900 que fueron explotados en su momento por el estado cuya empresa fue privatizada en la década del 90 y se encuentran ahora improductivos. La concesión de ésta región (que integra un área más vasta integrada en la política de incentivo a la actividad petrolera del gobierno provincial) despierta temores en muchos sectores por las consecuencias que traerá en el caso de que la exploración resulte exitosa y la empresa adjudicada inicie la explotación petrolera en el área. La concesión fue mantenida en secreto por el gobierno hasta último momento, y recién a principios de este año se dio a conocer cuando ya la firma de las concesiones estaba realizada. El retaceo de datos y la falta de explicaciones sobre el proyecto, despierta aun mayores temores en la población, no solo mapuche, que reclaman un proceso mas transparente. También alimentó las sospechas sobre los intereses en juego al postergar la audiencia pública que los vecinos reclaman desde febrero pasado. s 20 Las formas de la resistencia A raíz del conflicto desatado por la adjudicación petrolera de la zona de Ñirihuau los pobladores decidieron constituirse formalmente como comunidad Mapuchetehuelche para defender sus derechos y la biodiversidad el lugar. La comunidad está integrada por familias que hasta ayer se reconocían como pobladores indígenas dispersos y reconoce su origen por la decisión de la Provincia de licitar la exploración hidrocarburífera del área. Esta situación fue agravada por la ocupación de la zona de otras familias mapuches que se vincularon con el paraje a partir de la lucha sostenida contra el proyecto petrolero. Los pobladores, constituidos en comunidad, aseguraron ser "continuadores de la posesión que ancestralmente ejercieron nuestros mayores" y reclamaron el derecho "al territorio, la autodeterminación y la justicia"." Como hijos de la tierras queremos defenderla del saqueo del Itrofill Mongen (biodiversidad) de la usurpación y del atropello que hemos venido sufriendo de parte de organismos de gobierno y multinacionales". 2. Provincia de Neuquen Idéntica situación se vive en la Provincia de Neuquén, donde en Octubre de 2008 el gobierno provincial aprobó una prórroga de las concesiones petroleras por 10 años más para el período 2017-2027 a la compañía Repsol-YPF. A la fecha aun continúa negociando la concesión de otras áreas con otras compañías entre ellas las empresas Pluspetrol - de capitales argentinos que integra sus negocios, entre otras con la compañía Refinor que mantiene conflictos con las comunidades wichi del norte del país - y Petrobras – la mayor compañía petrolera de Brasil -. Loma de la Lata – Comunidades Kaxipayiñ y Paynemil En la provincia de Neuquen las comunidades mapuches son las más afectadas por la actividad petrolífera, por cuanto implica el desmonte del territorio, destrucción de napas freáticas y contaminación de los mismos. El conflicto entre las comunidades mapuches y las empresas petroleras comienzan en la década del 90 en la provincia y hasta el presente no ha habido un cambio de política desde el estado provincial, que sigue otorgando las concesiones a las empresas en territorios de las comunidades sin consultar su opinión. Han tenido amplia difusión los casos de Loma de la Lata por la contaminación generalizada en suelos, aguas y aire las comunidades Kaxipayiñ y Paymemil a raíz de la explotación petrolera. Los hechos alcanzaron máxima gravedad cuando en octubre de 1995 la perforación para una bomba de agua en el puesto de un poblador de la Comunidad Paynemil revela la contaminación por condensados de gasolina de la napa freática en gran volumen y en una extensa superficie. Cutral Co – Comunidad Logko Puran Otro caso de publico conocimiento es el caso de la comunidad mapuche Logko Puran, que desde hace varios años viene ejerciendo diversas formas de movilización en contra de la explotación petrolíferas dentro de su territorio. Los hechos se agravaron cuando en diciembre del año 2004 las fuerzas la policía antimotines (UESPO) arremetieron violentamente en contra de las familias mapuche que bloqueaban caminos en su territorio, en caminos utilizados por la compañía Pioneer s 21 Natural Resources. Producto de la represión, fue herido con bala de plomo un integrante de la comunidad al intentar proteger a una anciana que era arrastrada y violentada por los uniformados. De esta acción de la comunidad, la compañía Pioneer Natural Resources - hoy Apache Corp inicia demanda contra la comunidad por usurpación y turbación de la posesión que culminó el año 2007 cuando el caso fue llevado a juicio oral y publico (integrantes de la comunidad y la organización indígena que acompañó) que determinó la legitimidad del reclamo de la comunidad. Picun Leufú – Comunidad Wentru Tahuel Leufu El caso más reciente involucra a la comunidad mapuche Wentru Tahuel Leufu que habita en zona de estepa a unos pocos kilómetros de Picún Leufú, un pueblo de dos mil habitantes distante a 225 kilómetros de la capital provincial. En esa zona, en el año 2007, el gobierno provincial otorgó a la petrolera Piedra del Aguila la concesión de 2000 hectáreas para exploración y explotación petrolífera. En el lugar habitan familias mapuches que se encuentran en un proceso incipiente de organización comunitaria. La comunidad se opuso al ingreso de la empresa en su territorio por considerarla dañina para su territorio y su forma de vida. Ante esta situación la empresa comienza un proceso de debilitamiento de la comunidad que incluyó la compra de voluntades entre los miembros de la comunidad, diferentes tipos de presiones y amenazas. Finalmente la empresa publicó una solicitada en los diarios locales donde culpaba a la comunidad por la paralización de las obras, el retraso de inversiones y, sobre todo, la responsabilizó por la pérdida de puestos de trabajo que supuestamente habría generado para el pueblo de Picun Leufú. Esta estrategia brindó el efecto esperado por la empresa al volcar el apoyo social que hasta el momento se había mantenido neutral que se manifestó a partir de allí a favor de la empresa la explotación de la zona. La manipulación de la empresa llegó al punto que un grupo personas, argumentando ser desocupados, ingresaron en la comunidad, efectuando disparos al aire y comenzaron a oficiar de policía privada para que la petrolera comenzara con sus trabajos. (...) Luego sobrevino el incendio de dos casas y un auto de la comunidad, y una fuerte campaña local y provincial para responsabilizar a los mapuches por trabar supuestas inversiones petroleras. “Estamos atrapados, casi no podemos salir de nuestras parcelas, y en el pueblo nos golpean los guardias armados de la petrolera, nos amenazan de muerte. Están dentro de nuestra tierra, con sus casillas y matones que se hacen pasar por desocupados, nos han carneado casi cien chivas. Petrolera, gobernación, jueces y policías hicieron una alianza para repartirse nuestro territorio, no respetan nuestros derechos”, denunció desesperado el lonko Juan Carlos Curruhuinca 14(...) A mediados de enero, los medios provinciales dieron a conocer que se habría llegado a un acuerdo entre la comunidad y la empresa. Pero luego la comunidad denunció el intendente de la localidad de Picun Leufú, junto con representantes del gobierno provincial habría organizado la reunión junto con la empresa donde, bajo presión y sin permitirles leer el acta, los obligaron a firmar. 14 Petróleo, balas y golpes para indígenas de Neuquen. Artículo publicado en el diario Pagina 12 por el periodista Darío Aranda. s 22 En el mes de septiembre y en momentos en que la provincia evaluaba extender las concesiones petrolíferas a las empresas, la Unión Autónoma de Comunidades Mapuche de la zona centro de la provincia de Neuquen emitió el siguiente comunicado, firmado por cuatro comunidades, donde denuncian nuevamente la inconsulta de las comunidades en este proceso: (...) En Neuquén las fuerzas políticas tanto del oficialismo como de la oposición están hablando de las bondades de la explotación hidrocarburífera y de la renegociación de los contratos petroleros, pero de lo que no se habla en ninguna de las partes es que todo esto perjudicará directamente a las comunidades mapuche ya que las concesiones están hechas sobre territorio Mapuche y no en el patio del gobernador ni de los diputados. El oficialismo esta hablando de regalías a los municipios como si las locaciones petrolíferas se hicieran en las plazas de las ciudades. La oposición propone un referéndum para que el “pueblo neuquino decida” y sabemos que la mayor parte de esos ciudadanos viven en las urbes sin información veraz y desocupados ¿Qué decisión pueden tomar los neuquinos si las petroleras y el gobierno les ofrecen un paraíso terrenal las 24hs por los medios masivos? Las 14 comunidades perjudicadas en la concesión que se le otorgó a la trasnacional Pluspetrol denunciamos que el gobierno provincial y nacional son cómplices de la inconstitucionalidad de los contratos petroleros, mineros, forestales, etc. en el wajmapu (territorio mapuche), territorios amparados por distintas legislaciones vigentes del ordenamiento jurídico del estado argentino y del orden internacional15. 15 s Unión Autónoma de Comunidades Mapuche - Zapala septiembre de 2008. 23 V. DERECHOS VULNERADOS: Los derechos que ven realizados las comunidades distan mucho de lo declarado en la Constitución Nacional, el convenio 169 y las leyes más recientes. Las razones son múltiples, dentro de las cuales la falta de una firme voluntad política de fondo es una carencia muy notoria. Son loables los esfuerzos que realizan algunas áreas estatales vinculadas a la protección de los derechos humanos y la promoción social. Sin embargo, la falta de una visión clara en materia de política indígena es la razón por la que se desperdicia el esfuerzo comprometido de muchas personas en diferentes áreas del gobierno, en un sinnúmero de iniciativas de poca incidencia en la práctica, pues donde es necesario un firme compromiso político que respalde la aplicación de los derechos indígenas, las demandas entran en un remanso de inmovilidad a partir del cual es imposible continuar avanzando y es en este lugar donde los intereses foráneos encuentran su principal recurso para dilatar la solución de los conflictos, apelando al desgaste de la movilización de las comunidades. Predomina aun una fuerte visión paternalista del estado16 en el diseño de las políticas indígenas lo cual se trasluce en la propia estructuración del INAI que no tiene autonomía para fijar políticas de fondo por fuera del Ministerio de Desarrollo Social. Existe una notable ausencia de comunicación y articulación entre diferentes áreas del gobierno donde por un lado han surgido en los últimos años diferentes áreas destinadas a la atención de la cuestión indígena y por otro lado se multiplican espacios que superponen esfuerzos pero debilita su incidencia17. El programa de relevamiento territorial que se está llevando adelante actualmente desde el INAI, declara la amplia articulación con otros organismos nacionales a los fines de garantizar la participación y menciona: • • • • Secretaría de Derechos Humanos, (Dirección Nac. de Derechos Económicos, Sociales, Culturales y de Incidencia Colectiva) Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable (Dirección de Pueblos Originarios y Recursos Naturales), INADI Defensoría del Pueblo de la Nación Sin embargo esta articulación ha sido escasa y la participación que a estos organismos se ha dado es nula, según la información que hemos recibido de los propios invitados. Los gobiernos provinciales constituyen el espacio donde los intereses que expolian los derechos indígenas encuentran alianzas de poder. Las diferentes instituciones del estado nacional reconocen a las provincias como los principales centros donde se ancla la resistencia a realizar los derechos de las comunidades indígenas. Sin dejar de ser una realidad que experimentan todos los pueblos indígenas de argentina, tal situación en muchos sentidos no es más que una consecuencia de la ausencia de una política central que desde el estado nacional se canalice hacia las provincias. 16 La institución oficial encargada de atender la cuestión indígena –INAI - es una dependencia del Ministerio de Desarrollo Social y dentro de ella como extensión de la Secretaría de Políticas Sociales y Desarrollo Humano según el organigrama del Ministerio de Desarrollo Social. 17 Además del INAI, existen importantes trabajos que vienen desarrollándose en diferentes ministerios y secretarías del estado en temáticas que atañen a los pueblos originarios, dentro de la Secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación (SAyDS) que depende de la Jefatura de Gabinete de Ministros y la Secretaría de Derechos Humanos que depende del Ministerio de Justicia Seguridad y Derechos Humanos. s 24 La ultima instancia de estado para la realización del derecho de los pueblos indígenas, el poder judicial, no ha logrado sentar bases sólidas de jurisprudencia basados en el derecho indígena. Incluso en los casos que han sido favorables a los reclamos indígenas es notable la escasa referencia que se hace justamente a los derechos indígenas. Como consecuencia los derechos que resultan violentados en la totalidad de los casos tiene relación con: - Desconocer el derecho a la propiedad. La mayoría de las comunidades indígenas del país, con personería jurídica comunitaria reconocida, carecen del titulo de propiedad de sus tierras, careciendo incluso de mapa de relevamiento catastral del territorio. Esto facilita el ingreso a sus territorios de empresas y particulares con intención de explotar los recursos y dificulta la defensa expedita de sus derechos, forzando a las comunidades a producir múltiples pruebas para justificar sus derechos en territorios que han ocupado históricamente. - Falta de estudios de impacto ambiental, social y cultural que permitan visualizar las consecuencias de las actividades a desarrollarse dentro del territorio de las comunidades. Los casos que hemos detallados, carecen de un estudio de impacto ambiental que asegure la ausencia de impactos negativos para la forma de vida de la comunidad. En los casos en que tal estudio se realiza falla el control posterior ya que el estado no cuenta con los mecanismos de control adecuados que se ocupen de realizar el seguimiento correspondiente para garantizar las explotaciones se hagan en la forma correcta. De ésta forma es igual que si tal estudio no existiera dado que la mayor de las veces la empresa tiene el mínimo interés en cumplir todas sus obligaciones. - Incumplimiento al derecho de consulta libre e informado. Los procesos de consulta no contemplan los procesos comunitarios de toma de decisión. Es habitual que las empresas requieran la opinión del cacique sin esperar que éste consulte al resto de la comunidad. En otros casos existe manifiesta intencionalidad al omitir detalles de la actividad, para no despertar sospechas antes de iniciarla. - vulneración del derecho de participación en la gestión referida a los recursos naturales e intereses que los afecten. Los estados provinciales son totalmente renuentes a considerar a las comunidades como una actora necesaria de consulta ante temas que involucran su territorio, pese a ser este tema específicamente estipulado en la constitución. De esta forma la mayor de las veces las comunidades toman conocimiento de la situación cuando la explotación ha comenzado. s 25 VI. RECOMENDACIONES: - Agilizar el proceso para demarcación y titulación de las tierras indígenas para la entrega inmediata de los títulos de propiedad comunitaria de las tierras a las comunidades que las habitan. Fortalecer la articulación entre organismos del estado para potenciar el trabajo que se desarrolla en cada institución en pos de la plena realización del derecho de los pueblos indígenas. - - Generar políticas orientadas a la capacitación de futuros jueces y fiscales en el derecho indígena para desarrollar competencias adecuadas a la normativa indígena y puedan aplicarla en los distintos casos que involucran a comunidades y pueblos indígenas. - Control de la actividad minera e hidrocarburífera en las regiones que involucran a las comunidades con especial hincapié en el monitoreo del desarrollo de la actividad de explotación. - Prevención del desmonte y la tala de bosques los territorios de comunidades. Generar instrumentos de control adecuados para prevenir el desmonte y tala de bosques nativos ya sea para emprendimientos productivos o como recurso de supervivencia de la propia comunidad. En este último caso arbitrar los recursos necesarios para que la comunidad pueda fortalecer otros recursos que le permitan subsistir. - Mayor articulación con las provincias para viabilizar medidas que apunten a los fines recomendados realizando el monitoreo posterior adecuado que asegure que se cumplan los convenios y se reconozcan los derechos de los pueblos indígenas. s 26 Agradecimientos: Agradecemos el aporte desinteresado de las siguientes personas e instituciones. ⎯ GAJAT – Grupo de apoyo jurídico para el acceso a la tierra. ⎯ Secretaría de Derechos Humanos – DESC. ⎯ Morita Carrasco. UBA. ⎯ Darío Aranda – Periodista ⎯ Hernán Scandizzo. Periodista. Indymedia. ⎯ Juliette Renaud. SERPAJ – ARGENTINA Piedras 730 -Buenos Aires Tel/Fax ( 54-11) 4361-5745 e-mail: [email protected] Miembro del SERPAJ América Latina, con Status Consultivo ante las Naciones Unidas ( ECOSOC ) y UNESCO s 27