proyecto curso de atención sociosanitaria a personas en el domicilio

PROYECTO
CURSO DE ATENCIÓN SOCIOSANITARIA A
PERSONAS EN EL DOMICILIO
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1. INTRODUCCIÓN
El lema “Envejecer en casa” se ha convertido en un objetivo común de las
políticas sociales de atención a las personas mayores de los países
desarrollados. El modelo comunitario de atención defiende la conveniencia de
que los problemas de las personas se afronten allí donde se producen, sin que
tengan que sufrir el desarraigo que genera el abandono del modo y del medio
de vida habitual. En consecuencia, los servicios de atención deben disponerse
en torno al domicilio, lo que ha dado y está dando lugar a la aparición de una
amplia gama de modalidades de atención. Entre ellas el servicio de ayuda a
domicilio ocupa un lugar destacado de cara a propiciar/facilitar el
mantenimiento de la persona en su medio de vida habitual, por lo que es uno
de los servicios más importantes y efectivos de cara a hacer operativo este
lema.
En lo esencial los servicios de ayuda a domicilio (S.A.D) consisten en ofrecer
una ayuda personal y/o determinados servicios en el domicilio de aquellas
personas (mayores, discapacitados, familias desestructuradas…) porque su
independencia funcional (habilidad para desarrollar actividades básicas de la
vida diaria) se encuentra limitada o porque atraviesan una situación de crisis
personal o familiar.
Por tanto, la Ayuda a domicilio es una prestación que se proporciona en el
propio domicilio de la persona usuaria y está orientada al ámbito convivencial
para conseguir la autonomía que toda persona precisa y que, bien por
incapacidad física, bien por problemas familiares, o por cualesquiera otras
razones no tiene.
El S.A.D. constituye, pues, una vía óptima de atención a personas con diversas
problemáticas permitiéndoles permanecer en su hogar, en su propio domicilio y
en su propio medio habitual de vida. Tiene como principal objetivo el
mantenimiento de las personas que padecen diversas situaciones de
necesidad en su entorno habitual de convivencia (esto es, en su domicilio, con
su familia y en su comunidad).
El servicio de ayuda domicilio tiene los siguientes objetivos fundamentales:
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Prevenir y evitar el internamiento en centros residenciales de aquellas
personas que, con los apoyos adecuados, puedan permanecer en su
medio habitual.
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Atender situaciones coyunturales de crisis personal o familiar y también
prevenir la aparición de estas situaciones de crisis mediante la oferta de
acción de tratamientos psicosociales en la familia.
Favorecer la autonomía personal del usuario del servicio, ya que no sólo
se trata de prevenir y evitar la institucionalización en centros y la
aparición de crisis familiares y personales, sino que se trata de potenciar
también las capacidades de la persona para que pueda desenvolverse
con la máxima autonomía en su medio natural de vida.
Colaborar con las familias en los casos en que éstas no puedan atender
totalmente por sí mismas las necesidades del usuario.
Promover la participación del usuario y de su grupo familiar en la vida de
la comunidad en que viven.
Potenciar el desarrollo de actividades en la propia casa y en el entorno
comunitario, dentro de las posibilidades reales de la persona.
Potenciar las relaciones sociales, estimulando la comunicación con el
exterior y paliar así posibles problemas de aislamiento y soledad.
Apoyar a las familias en sus responsabilidades de la vida diaria.
Facilitar al usuario del servicio la realización de tareas y actividades que
no pueda realizar por sí mismo.
Conseguir cambios conductuales en la persona tendentes a mejorar su
calidad de vida.
Fomentar el desarrollo de hábitos de vida saludables en cuanto a la
alimentación, higiene, ejercicio físico…
Adecuar la vivienda a las necesidades de la persona atendida, mediante
adaptaciones, reparaciones y/o instalación de ayudas técnicas.
Incrementar la seguridad y la autoestima personal.
Mejorar el equilibrio personal del individuo, de su familia y de su entorno
mediante el reforzamiento de los vínculos familiares, vecinales y de
amistad.
Favorecer la aparición de sentimientos positivos ante la vida,
desterrando actitudes negativas hacia la misma, así como actitudes
autocompasivas.
En todo caso, debe quedar claro que el principal objetivo que persigue el SAD
es el incremento de la autonomía personal en el medio habitual de vida de los
usuarios/as del servicio.
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En el cuadro siguiente resumimos estos Objetivos generales del SAD
Facilitar/ Potenciar la autonomía de sus usuarios.
Fomentar hábitos saludables.
Potenciar las relaciones sociales.
Aumentar la seguridad personal.
Conseguir cambios conductuales que mejoren la calidad de vida.
Lograr la permanencia del usuario en su medio habitual de vida en condiciones
de dignidad
Evitar la institucionalización innecesaria
Las características más importantes que definen al SAD son las siguientes:
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Carácter comunitario: Se trata de un servicio que se presta dentro de la
propia comunidad en la que viven los usuarios y sus familias, y que trata
de fomentar la solidaridad al tiempo que trata de evitar el desarraigo de
las personas del medio en que viven.
Carácter domiciliario, ya que se realiza a domicilio, en el hogar en el que
viven sus posibles destinatarios.
Carácter descentralizado: Este servicio se realiza desde el lugar más
próximo al usuario, de ahí que se responsabilicen del SAD las entidades
locales o municipios.
Carácter complementario a las redes informales (familiares, vecinales)
de apoyo personal y social: El SAD pretende complementar los
esfuerzos realizados por las redes informales de apoyo, no sustituirlas
en su labor. También presenta un carácter complementario con
diferentes prestaciones del Sistema de Servicios Sociales y de los
demás Sistemas de Protección Social.
Carácter polivalente: El SAD cubre una amplía gama de necesidades
que presentan personas o grupos familiares carentes de autonomía
personal.
Carácter globalizador: Este servicio considera a las personas y a los
grupos de forma integral (teniendo en cuenta aspectos físicos,
psicológicos, sociales).
Carácter preventivo: El SAD trata de prevenir, proporcionando
mecanismos de apoyo que eviten o frenen el proceso de deterioro y
posibiliten el mantenimiento de la persona en su entorno habitual. Así,
este servicio trata de prevenir o detener situaciones de deterioro en sus
usuarios, así como evitar o prevenir institucionalizaciones innecesarias.
Carácter transitorio/temporal: La prestación de este servicio se mantiene
hasta conseguir los objetivos propuestos en cada caso. Una vez
logrados, sus usuarios dejarían de recibir este servicio.
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Carácter estimulador y educativo: EL SAD facilita la autosatisfacción de
necesidades por parte del usuario, potenciando sus capacidades y
haciéndole agente de su propio cambio, sin eximir de responsabilidad a
la familia.
Carácter técnico: El Servicio es prestado por personal cualificado y con
la formación necesaria para facilitar una atención adecuada al usuario
del mismo.
Carácter asistencial y rehabilitador: Por medio de este servicio se
estimulan aspectos de la relación humana, la autoestima y la mejora de
las condiciones de vida de la persona a la vez que se proporciona al
usuario la atención que precisa.
2. JUSTIFICACIÓN
La profesión de auxiliar de ayuda a domicilio tiende a consolidarse como una
de las de mayor futuro dentro del sector de los servicios sociales. A
continuación trataremos de responder a una pregunta básica: ¿Qué es un/a
auxiliar del SAD?
Partiremos de la base de que el trabajo de auxiliar de ayuda a domicilio
consiste en atender preferentemente a personas con dependencia en su propio
domicilio, para hacer con ellas o por ellas, y en colaboración con su familia y
otros allegados, aquellas actividades de la vida diaria que no pueden realizar
por sí mismas, fomentando su autonomía.
De lo anterior se puede destacar los siguientes aspectos:
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El usuario del servicio será muchas veces una persona que presenta
algún grado de dependencia para la realización de alguna o algunas de
las actividades básicas de la vida diaria.
Las tareas asignadas deben realizarse en colaboración con el usuario en
la medida en que éste pueda hacerlo. No debemos hacer las actividades
en lugar del usuario, sino con él en la medida de sus posibilidades.
Debemos ayudar a la persona en la realización de las distintas tareas,
no realizarlas en su lugar. Debemos tener siempre presente que hay que
reforzar las capacidades de la persona en lugar de incrementar su
dependencia, por lo que no debemos caer en la trampa de hacer en
lugar de explicar cómo se hace, simplemente por que hacer es más fácil
y rápido que explicar cómo hacer.
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El trabajo de los auxiliares se realizará también en colaboración con la
familia y otros allegados del usuario, si éste los tiene y puede contar con
su apoyo. Es importante tener en cuenta que el auxiliar no debe sustituir
o suplantar a las personas que hasta el momento ayudaron a la persona,
ya sean familiares, amigos y vecinos, sino más bien complementar la
ayuda facilitada por éstos.
Las tareas y funciones de los auxiliares de ayuda a domicilio van desde la
realización de tareas de higiene personal, tareas domésticas, compañía,
educación-formación, hasta la realización de tareas de atención personal. Es
esta polivalencia (capacidad para asumir diferentes funciones) precisamente lo
que define la profesión del auxiliar y a los profesionales de Servicio de Ayuda a
Domicilio.
La polivalencia es importante, ya que en el desarrollo de su trabajo estos
profesionales tienen que considerar a la persona como un todo que requiere
una atención completa.
Otro rasgo que define el perfil del auxiliar es su marco de actuación, que es el
hogar–domicilio del usuario del servicio, lo que supone una gran
responsabilidad para los auxiliares e implica un elevado respeto hacia las
personas a las que se atiende. En este sentido los usuarios/as del servicio
tienen derecho al respeto a su intimidad, respeto a sus pertenencias, respeto a
sus relaciones personales y familiares, a sus gustos y sus costumbres, etc. Por
todo esto el auxiliar debe comportarse con mucho tacto y discreción en cuanto
a las confidencias recibidas de los usuarios/as del servicio, tratándoles con total
respeto y consideración.
Por otro lado, dado que el grado de relación y convivencia con el usuario es
muy elevado, en este servicio es difícil para el auxiliar no implicarse
emocionalmente con la situación del usuario al que atiende. Así, es frecuente
oír frases del estilo de “no puedo evitar implicarme personalmente”, “me da
pena, está muy solo/a, “me pide cosas y no puedo negarme a hacérselas”…
Pero debe quedar claro que esta excesiva implicación con el usuario/a del
servicio no suele ser conveniente, ya que una persona en un tiempo limitado
(por ejemplo, en dos horas diarias) no puede resolver todos los problemas que
presenta la persona a la que presta sus servicios. El estar más tiempo del
estipulado no resuelve nada y sólo crea problemas, pues las personas que
demandan más tiempo aumentan sus peticiones olvidándose de que el Servicio
de Ayuda a Domicilio tiene unos objetivos que pueden volverse poco
operativos. En el caso de que un/a auxiliar se sienta angustiado/a debe recurrir
al equipo de trabajo del que forme parte para poder desahogarse y para
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objetivar los elementos que le provocan la ansiedad y buscar posibles
soluciones a la misma.
Lo fundamental es aportar soluciones a cualquier problema que le pueda surgir
a un usuario/a sin extralimitarse ni en el tiempo ni en las tareas asignadas. La
respuesta puede venir desde una implicación profesional y no personal. Para
ello, la cuestión clave sería hacer una valoración objetiva de las necesidades
de los usuarios y comunicar la situación a los Servicios Sociales, solicitándoles
las ayudas necesarias para facilitar nuestra labor y mejorar la calidad de vida
del usuario. Por otro lado, habría que contar con la colaboración de la familia
de la persona y no pretender ocupar su lugar.
En general, puede decirse que para que un trabajador de ayuda a domicilio
realice bien su tarea son necesarios, al menos, dos cualidades:
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Capacidad suficiente para realizar su trabajo, para lo que se valora la
formación, la experiencia y las capacidades físicas y psicológicas de la
persona.
Motivación. En este sentido se valora el interés de la persona por la
tarea (trabajo) a realizar.
La capacidad, a través de la formación, es un requisito imprescindible para que
el auxiliar a domicilio desarrolle su tarea adecuadamente y pueda afrontar con
éxito todos y cada uno de los aspectos relacionados con su actividad.
La Universidad Camilo José Cela y Grupo Educativo tienen, a través de la
Cátedra Integra3 Grupo Educativo y con el apoyo del Instituto de Gerontología,
el interés por desarrollar una propuesta de formación de auxiliares de ayuda a
domicilio adaptada a los cambios del RD 1379/2008, tanto en duración como
en contenidos.
3. FINALIDAD
Se propone desarrollar un curso con la finalidad formar a las personas que
trabajan o están interesados en trabajar como auxiliares de ayuda a domicilio
que promueva la capacitación en los siguientes niveles:
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Adquisición de conocimientos teóricos necesarios para la ayuda a
domicilio.
Habilidades y destrezas para la asistencia.
Manejo del estrés y afrontamiento de situaciones críticas con la persona
dependiente.
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Este curso da prioridad a los alumnos que forman parte de colectivos en
situación de vulnerabilidad y riesgo.
3. OBJETIVOS
General
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Establecer una propuesta global de formación a personas que asisten
con personas en situación de dependencia y a aquellas que desean
hacerlo.
Este objetivo estará encaminado a:
• Capacitar a los profesionales para la asistencia sociosanitaria a
personas en situación de dependencia.
• Mejorar la calidad y eficacia de la asistencia sociosanitaria a personas
en situación de dependencia.
• Conocer las características y necesidades de atención higiénicosanitaria de las personas dependientes
• Conocer Administración de alimentos y tratamientos a personas
dependientes en el domicilio.
• Entrenar apara mejorar de las capacidades físicas y primeros auxilios
para las personas dependientes en el domicilio.
• Fomentar el mantenimiento, limpieza y organización del domicilio de
personas dependientes
• Potenciar Mantenimiento y rehabilitación psicosocial de las personas
dependientes en domicilio.
• Contribuir a la mejora . el apoyo a las gestiones cotidianas de las
personas dependientes
Objetivos operativos
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Desarrollar una metodología interactiva que asegure un acceso ágil a
fuentes de información solventes sobre la atención sociosanitaria a
personas en situación de dependencia .
Diseñar un programa de autoformación a distancia.
Adaptar y definir el paquete formativo a las diferentes necesidades y
capacidades de implicación de los diferentes actores a los que se dirige
la propuesta.
Garantizar la creación de una red interactiva representativa de los
diversos colectivos participantes, que gestione y coordine el
funcionamiento y actualización de la propuesta formativa.
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4. CONTENIDOS
MÓDULO 1 Higiene y atención sanitaria domiciliaria
1.1. Características y necesidades de atención higiénico-sanitaria de las
personas dependientes.
9 Identificación de las características y necesidades de las personas
dependientes.
9 Delimitación del ámbito de la atención domiciliaria.
9 Aplicación de técnicas de higiene y aseo de la persona dependiente.
1.2. Administración de alimentos y tratamientos a personas dependientes en el
domicilio.
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Planificación del menú de la unidad convivencial.
Utilización de técnicas de alimentación.
Recogida de eliminaciones.
Administración de medicamentos en el domicilio.
1.3. Mejora de las capacidades físicas y primeros auxilios para las personas
dependientes en el domicilio.
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Movilidad de la persona dependiente.
Empleo de técnicas de movilización, traslado y deambulación.
Toma de constantes vitales.
Aplicación de técnicas de seguridad y primeros auxilios.
MÓDULO 2 Atención y apoyo psicosocial domiciliario
2.1. Mantenimiento y rehabilitación psicosocial de las personas dependientes
en domicilio.
9 Psicología básica aplicada a la atención psicosocial domiciliaria de
personas dependientes.
9 Relación social de las personas mayores y discapacitadas.
9 Prestación de orientación a la persona dependiente y sus cuidados
principales.
9 El ambiente como factor favorecedor de la autonomía personal,
comunicación y relación social.
9 Elaboración de estrategias de intervención psicosocial.
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2.2. Apoyo a las gestiones cotidianas de las personas dependientes.
9 Elaboración de estrategias de intervención en autonomía personal.
9 Intervención de acompañamiento y apoyo en la relación social, en la
resolución de gestiones y en el entorno familiar.
9 Ayudas técnicas y tecnológicas para la vida cotidiana.
9 Motivación y aprendizaje de las personas mayores, discapacitadas y/o
enfermas.
2.3. Interrelación, comunicación y observación con la persona dependiente y su
entorno.
9 Identificación de los problemas de comunicación y lenguaje relacionados
con los principales trastornos generales.
9 Comunicación de las personas dependientes.
9 Aplicación de técnicas para favorecer la relación social y las actividades
de acompañamiento.
MÓDULO 3 Apoyo domiciliario y alimentación familiar
3.1. Gestión, aprovisionamiento y cocina en la unidad familiar de personas
dependientes.
9 Elaboración del plan de trabajo en la unidad convivencial
9 Aplicación de técnicas de gestión del presupuesto de la unidad
convivencial.
9 Confección de la lista de la compra.
9 Compra y conservación de productos de uso común en el domicilio.
9 Aplicación de técnicas básicas de cocina.
9 Higiene alimentaria.
3.2. Mantenimiento, limpieza y organización del domicilio de personas
dependientes.
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Aplicación de técnicas de limpieza del hogar.
Aplicación de técnicas de lavado, repasado y planchado de ropa.
Revisión y mantenimiento básico del domicilio.
Riesgos domésticos.
Teleasistencia.
MÓDULO 4 Prácticas profesionales no laborales de atención
sociosanitaria a personas en el domicilio
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5. METODOLOGÍA
La formación está diseñada para poderse realizar a distancia. Los/as
alumnos/as recibirán la documentación del curso y tendrán un
acompañamiento personalizado en el desarrollo de los mismos. Por otro lado,
las prácticas se desarrollarán con las entidades conveniadas.
El curso tendrá, en definitiva, un carácter semipresencial con una metodología
teórico-práctica, que permita el estudio, la reflexión y el entrenamiento del
alumno en los contenidos antes mencionados.
Para ello los participantes contarán con:
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Tutorías Presenciales
A lo largo de la formación los profesores responsables de las distintas
materias realizarán tutorías presenciales por cada módulo con los alumnos
con la finalidad de dar pautas de trabajo, ampliar contenidos, resolver dudas
y analizar los ejercicios sobre casos.
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Tutorías telefónicas
Para que el alumno/a tenga un acompañamiento personalizado en su
proceso de aprendizaje tendrá una tutoría telefónica semanal.
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Tutoría on line
El alumno tendrá un seguimiento y apoyo continuado del profesorado
durante el desarrollo de cada uno de los módulos. pendencias
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Cuadernillos de evaluación
El curso irá acompañado de un cuadernillo de evaluación que contendrá
una serie de cuestiones o ejercicios acerca de los contenidos desarrollados
en cada uno de los módulos del programa, que el alumno deberá enviar o
entregar debidamente cumplimentado a la dirección del programa en las
fechas indicadas en él.
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6. TEMPORALIZACIÓN
Se propone que la formación tenga una duración aproximada de 600 horas.
La fecha de inicio: octubre de enero de 2009.
7. COSTE
El curso de formación tiene un coste de 250 €
8. DESTINATARIOS
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Toda persona interesada.
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