Parlamento Europeo 2014 - 2019 Comisión de Peticiones 29.5.2015 COMUNICACIÓN A LOS MIEMBROS Asunto: 1. Petición nº 0283/2014, presentada por Fruitos Richarte i Travesset, de nacionalidad española, en nombre de la Asociació per la Judicatura Catalana AJUDICAT, sobre los magistrados y jueces con contrato de trabajo temporal Resumen de la petición El peticionario expone la posición de un grupo que se encuentra en una situación de trabajo temporal precaria y denuncia el abuso de los contratos temporales por parte del sistema judicial con respecto a la alternancia de jueces y magistrados suplentes. Este grupo representa aproximadamente el 25 % del personal oficial total. El peticionario denuncia el abuso de los contratos de trabajo de duración determinada cuando hay necesidad de cubrir un puesto permanente, y no uno específico o temporal. El peticionario afirma que se ha infringido el Derecho de la UE, concretamente las cláusulas 1, 4 y 5 del Acuerdo marco incorporado a la Directiva 1999/70/CE, de 28 de junio de 1999, relativa al Acuerdo marco de la CES, la UNICE y el CEEP sobre el trabajo de duración determinada, que establece las normas básicas para los contratos de trabajo de duración determinada o temporales. 2. Admisibilidad Admitida a trámite el 12 de enero de 2015. Se pidió a la Comisión que facilitara información (artículo 216, apartado 6, del Reglamento). 3. Respuesta de la Comisión, recibida el 29 de mayo de 2015 La Comisión ha recibido un gran número de denuncias similares sobre este tema. La Comisión ha consultado a las autoridades nacionales en relación con los temas planteados en las denuncias. Como ha informado ya a los denunciantes, sobre la base de la información disponible no considera que la situación jurídica actual de los jueces suplentes en España sea incompatible con la Directiva 1999/70/CE sobre el trabajo de duración determinada. La Directiva obliga a los Estados miembros a adoptar medidas para evitar abusos derivados CM\1063574ES.doc ES PE557.380v01-00 Unida en la diversidad ES del uso de sucesivos contratos de trabajo de duración determinada, como exigir razones objetivas para este tipo de contratos, indicar una duración máxima total o especificar un número máximo de renovaciones. Los Estados miembros tienen libertad para elegir entre estas opciones u ofrecer una protección alternativa. No se obliga a los Estados miembros a prever la conversión del empleo de duración determinada en empleo fijo y nada de lo dispuesto en la Directiva impide la resolución del contrato de trabajo de duración determinada. El Tribunal de Justicia ha juzgado explícitamente que el empleo de duración determinada para fines de sustitución puede considerarse justificado por «una razón objetiva» con arreglo a la definición de la Directiva sobre el trabajo de duración determinada (véase en particular el asunto C-586/10, Kücük). El hecho de que la normativa nacional no especifique la duración total máxima o el número máximo de renovaciones para esta sustitución no es, por tanto, incompatible con la Directiva. Si bien el Tribunal ha juzgado la renovación de contratos o relaciones laborales de duración determinada para atender a necesidades que en realidad no tienen carácter temporal, sino muy al contrario, permanente y duradero, no está justificada a efectos de la Directiva (asuntos acumulados C-378/07 a C-380/07, Angelidaki y otros, apartado 103), el Tribunal ha juzgado también que la sola circunstancia de que se celebren contratos de trabajo de duración determinada para atender a una necesidad permanente o recurrente de sustitución de personal por parte del empresario no puede bastar por sí misma para excluir que cada uno de esos contratos, considerado de forma aislada, se haya concluido para llevar a cabo una sustitución de carácter temporal (véase en particular el asunto C-586/10, Kücük). En opinión del Tribunal: «Aun si la sustitución cubre una necesidad permanente, dado que el trabajador contratado mediante un contrato de duración determinada ejecuta tareas bien definidas que forman parte de las actividades habituales del empresario o de la empresa, no deja de ser cierto que la necesidad de sustitución de personal sigue siendo temporal puesto que se presume que el trabajador sustituido reanudará su actividad al término de su permiso, que constituye la causa por la que temporalmente el trabajador sustituido no puede ejecutar él mismo esas tareas» (Asunto C-586/10, Kücük, apartado 38). Por tanto, la Comisión no considera que el marco jurídico nacional concerniente a los jueces suplentes en España sea incompatible con la Directiva 1999/70/CE. Son las autoridades del Estado miembro en cuestión quienes tienen que garantizar que la Directiva se cumpla también en casos particulares. PE557.380v01-00 ES 2/2 CM\1063574ES.doc