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LEY GENERAL DE PUBLICIDAD
Ley 34/1988, de 11 de noviembre, General de Publicidad.
La adhesión de España a las Comunidades Europeas implica, entre otros, el
compromiso de actualizar la legislación española en aquellas materias en las que ha de
ser armonizada con la comunitaria. El Consejo de las Comunidades Europeas aprobó
con fecha 10 de septiembre de 1984 una directiva relativa a la armonización de las
disposiciones legislativas, reglamentarias y administrativas de los países miembros en
lo que afecta la publicidad engañosa.
La legislación general sobre la materia está constituida en España por la Ley 61/1964,
de 11 de junio, por la que se aprueba el Estatuto de la Publicidad, norma cuyo
articulado ha caído en gran parte en desuso, por carecer de la flexibilidad necesaria
para adaptarse a un campo como el de la publicidad, especialmente dinámico, y por
responder a presupuestos políticos y administrativos alejados de los de la Constitución.
Las circunstancias precedentes aconsejan la aprobación de una nueva Ley general
sobre la materia, que sustituya en su totalidad al anterior Estatuto y establezca el
cauce adecuado para la formación de jurisprudencia en su aplicación por los Jueces y
Tribunales. En tal sentido, el Estado tiene competencia para regular dicha materia de
acuerdo con lo establecido por el art. 149, 1, 1º, 6º y 8º de la Constitución.
La publicidad, por su propia índole, es una actividad que atraviesa las fronteras. La
Ley no sólo ha seguido las directrices comunitarias en la materia, sino que ha
procurado también inspirarse en las diversas soluciones vigentes en el espacio jurídico
intereuropeo.
El contenido de la Ley se distribuye en cuatro Títulos. En los Títulos I y II se establecen
las disposiciones generales y las definiciones o tipos de publicidad ilícita. Se articulan
asimismo las diferentes modalidades de intervención administrativa en los casos de
productos, bienes, actividades o servicios susceptibles de generar riesgos para la vida
o la seguridad de las personas.
En los Título III, constituido por normas de derecho privado, se establecen aquellas
especialidades de los contratos publicitarios que ha parecido interesante destacar
sobre el fondo común de la legislación civil y mercantil. Estas normas se caracterizan
por su sobriedad. Se han recogido, no obstante, las principales figuras de contratos y
de los sujetos de la actividad publicitaria que la práctica del sector ha venido
consagrando.
En el Título IV se establecen las normas de carácter procesal que han de regir en
materia de sanción y represión de la publicidad ilícita, sin perjuicio del control
voluntario de la publicidad que al efecto pueda existir realizado por organismos de
autodisciplina.
En este sentido se atribuye a la jurisdicción ordinaria la competencia para dirimir las
controversias derivadas de dicha publicidad ilícita en los términos de los art. 3º al 8º.
Esta es una de las innovaciones que introduce esta Ley, decantándose por una opción
distinta a la contemplada en el Estatuto de la Publicidad de 1964. Este último con la
figura de un Órgano administrativo, «El Jurado Central de Publicidad», competente
para entender de las cuestiones derivadas de la actividad publicidad. Por razones
obvias, entre otras, las propias constitucionales derivadas de lo dispuesto en el art.
24.2 en donde se fija un principio de derecho al juez ordinario, así como las que se
desprenden de la estructura autonómica del Estado, se ha optado por atribuir esa
competencia a los Tribunales Ordinarios. De conformidad con lo establecido en los art.
4 y siguientes de la Directiva 84/450 de la CEE sobre publicidad engañosa EDL
1984/9858, se instituye en este Titulo un procedimiento sumario encaminado a
obtener el cese de la publicidad ilícita. El proceso de cesación se articula con la
máxima celeridad posible, sin merma de las garantías necesarias para el ejercicio de
una actividad de tanta trascendencia económica y social como es la publicitaria. La
tramitación se realizará conforme a lo previsto en la Ley de Enjuiciamiento Civil de 3
de febrero de 1981 para los juicios de menor cuantía, con una serie de modificaciones,
inspiradas en la Ley Orgánica 2/1984, de 26 de marzo, reguladora del Derecho a la
Rectificación EDL 1984/8937, y en las directrices comunitarias, y tendentes a adaptar
la práctica judicial a las peculiaridades del fenómeno publicitario.
El Juez, atendidos todos los intereses implicados y, especialmente, el interés general,
podrá acordar la cesación provisional o la prohibición de la publicidad ilícita, así como
adoptar una serie de medidas encaminadas a corregir lo efectos que la misma hubiera
podido ocasionar.
Por último, en la Disposición Transitoria se establece que las normas que regulan la
publicidad de los productos a que se refiere el art. 8º. Conservarán su vigencia hasta
tanto no se proceda a su modificación para adaptarlas a lo dispuesto en la presente
Ley. La Disposición Derogatoria prevé la derogación íntegra del Estatuto de la
Publicidad de 1964 y de cuantas normas se opongan a lo establecido en la nueva Ley.
TITULO I. DISPOSICIONES GENERALES
Artículo 1
La publicidad se regirá por lo dispuesto en esta Ley y en las normas especiales que
regulen determinadas actividades publicitarias.
Artículo 2
A los efectos de esta Ley, se entenderá por:
- Publicidad: Toda forma de comunicación realizada por una persona física o jurídica,
pública o privada, en el ejercicio de una actividad comercial, artesanal o profesional,
con el fin de promover de forma directa o indirecta la contratación de muebles o
inmuebles, servicios, derechos y obligaciones.
- Destinatarios: Las personas a las que se dirija el mensaje publicitario o a las que éste
alcance.
TITULO II. DE LA PUBLICIDAD ILICITA
Artículo 3
Es ilícita:
a) La publicidad que atente contra la dignidad de la persona o vulnere los
valores y derechos reconocidos en la Constitución, especialmente en lo que se
refiere a la infancia, la juventud y la mujer.
b) La publicidad engañosa.
c) La publicidad desleal.
d) La publicidad subliminal.
e) La que infrinja lo dispuesto en la normativa que regule la publicidad de
determinados productos, bienes, actividades o servicios.
Artículo 4
Es engañosa la publicidad que de cualquier manera, incluida su presentación, induce
o puede inducir a errores a sus destinatarios, pudiendo afectar a su comportamiento
económico, o perjudicar o ser capaz de perjudicar a un competidor. Es asimismo
engañosa la publicidad que silencie datos fundamentales de los bienes, actividades o
servicios cuando dicha omisión induzca a un error de los destinatarios.
Artículo 5
Para determinar si una publicidad es engañosa, se tendrá en cuenta todos sus
elementos y principalmente sus indicaciones concernientes a:
1. Las características de los bienes, actividades o servicios, tales como:
a) Origen de procedencia geográfica o comercial, naturaleza, composición,
destino, finalidad, idoneidad, disponibilidad y novedad.
b) Calidad, cantidad, categoría, especificaciones y denominación.
c) Modo y fecha de fabricación, suministro o presentación.
d) Resultados que pueden esperarse de su utilización.
e) Resultados y características esenciales de los ensayos o controles de los
bienes o servicios.
f) Nocividad o peligrosidad.
2. Precio completo o presupuesto o modo de fijación del mismo.
3. Condiciones jurídicas y económicas de adquisición, utilización y entrega de los
bienes o de la prestación de los servicios.
4. Motivo de la oferta.
5. Naturaleza, cualificaciones y derechos del anunciante, especialmente en lo relativo
a:
a) Identidad, patrimonio y cualificaciones profesionales.
b) Derechos de propiedad industrial o intelectual.
c) Premios o distinciones recibidas.
6. Servicios post-venta.
Artículo 6
Es publicidad desleal:
a) La que por su contenido, forma de presentación o difusión provoca el
descrédito, denigración o menosprecio directo o indirecto de una persona,
empresa o de sus productos, servicios o actividades.
b) La que induce a confusión con las empresas, actividades, productos,
nombres, marcas u otros signos distintivos de los competidores, así como la
que haga uso injustificado de la denominación, siglas, marcas o distintivas de
otras empresas o instituciones, y, en general, la que sea contraria a las
normas de corrección y buenos usos mercantiles.
c) La publicidad comparativa cuando no se apoye en características esenciales,
afines y objetivamente demostrables de los productos o servicios, o cuando se
contrapongan bienes o servicios con otros no similares o desconocidos, o de
limitada participación en le mercado.
Artículo 7
A los efectos de esta Ley, será publicidad subliminal la que mediante técnicas de
producción de estímulos de intensidades fronterizas con los umbrales de los sentidos o
análogas, pueda actuar sobre le público destinatario sin ser conscientemente percibida.
Artículo 8
1. La publicidad de materiales o productos sanitarios y de aquellos otros sometidos a
reglamentaciones técnico sanitarias, así como la de los productos, bienes, actividades
y servicios susceptibles de generar riesgos para la salud o seguridad de las personas o
de su patrimonio, o se trate de publicidad sobre juegos de suerte, envite o azar,
podrá ser regulada por sus normas especiales o sometida al régimen de autorización
administrativa previa. Dicho régimen podrá asimismo establecerse cuando la
protección de los valores y los derechos constitucionalmente reconocidos así lo
requieran.
2. Los reglamentos que desarrollen lo dispuesto en el número precedente y aquellos
que al regular un producto o servicio contengan normas sobre su publicidad
especificarán:
a) La naturaleza y características de los productos, bienes, actividades y
servicios cuya publicidad sea objeto de regulación. Estos reglamentos
establecerán la exigencia de que en la publicidad de estos productos se
recojan los riesgos derivados, en su caso, de la utilización normal de los
mismos.
b) La forma y condiciones de difusión de los mensajes publicitarios.
c) Los requisitos de autorización y, en su caso, registro de la publicidad,
cuando haya sido sometida al régimen de autorización administrativa previa.
3. El otorgamiento de autorizaciones habrá de respetar los principios de competencia
leal, de modo que no pueda producirse perjuicio de otros competidores.
La denegación de solicitudes de autorización deberá ser motivada.
Una vez vencido el plazo de contestación que las normas especiales establezcan para
los expedientes de autorización, se entenderá por otorgado el mismo por silencio
administrativo positivo.
4. Los productos estupefacientes, psicotrópicos y medicamentos, destinados al
consumo de personas y animales, solamente podrá ser objeto de publicidad en los
casos, formas y condiciones establecidos en las normas especiales que los regulen.
5. Se prohíbe la publicidad de tabacos, y la de bebidas con graduación alcohólica
superior a 20 grados centesimales, por medio de la televisión.
Queda prohibida la publicidad de bebidas alcohólicas y de tabacos en aquellos lugares
donde está prohibida su venta o consumo. La forma, contenido y condiciones de la
publicidad del tabaco y bebidas alcohólicas serán limitadas reglamentariamente en
orden a la protección de la salud y seguridad de las personas teniendo en cuenta los
sujetos destinatarios, la no inducción directa o indirecta a su consumo indiscriminado y
en atención a los ámbitos educativos, sanitarios y deportivos. Con los mismos fines
que el párrafo anterior el Gobierno podrá reglamentariamente, extender la prohibición
prevista en el presente número a bebidas con graduación alcohólica inferior a 20
grados centesimales.
6. El incumplimiento de las normas especiales que regulen la publicidad de los
productos, bienes, actividades y servicios a que se refieren los apartados anteriores,
tendrá consideración con la Ley General para la Defensa de los Consumidores y
Usuarios y en la Ley General de Sanidad.
En el procedimiento de elaboración de las disposiciones de carácter general a que se
refiere el apartado 2 de este artículo se dará audiencia a las asociaciones de agencias,
de anunciantes y de consumidores y usuarios.
TITULO III. DE LA CONTRATACION PUBLICITARIA
CAPITULO PRIMERO. DISPOSICIONES GENERALES
Artículo 9
Los contratos publicitarios se regirán por las normas contenidas en el presente Título, y
en su defecto por las reglas generales del Derecho Común. Lo dispuesto en el mismo
será de aplicación a todos los contratos publicitarios, aun cuando versen sobre
actividades publicitarias no comprendidas en el art. 2.
Artículo 10
A lo efectos de esta Ley:
- Es anunciante la personal natural o jurídica en cuyo interés se realiza la publicidad.
- Son agencias de publicidad las personas naturales o jurídicas que se dediquen
profesionalmente y de manera organizada a crear, preparar, programar o ejecutar
publicidad por cuenta de un anunciante.
Tendrán la consideración de medios de publicidad de las personas naturales o
jurídicas, públicas o privadas, que, de manera habitual y organizada, se dediquen a la
difusión de publicidad a través de los soportes o medios de comunicación social cuya
titularidad ostenten.
Artículo 11
Los medios de difusión deslindarán perceptiblemente las afirmaciones efectuadas
dentro de su función informativa de las que hagan como simples vehículos de
publicidad. Los anunciantes deberán asimismo desvelar inequívocamente el carácter
publicitario de sus anuncios.
Artículo 12
El anunciante tiene derecho a controlar la ejecución de la campaña de publicidad.
Para garantizar este derecho, las organizaciones sin fines lucrativos constituidas
legalmente en forma tripartita por anunciantes, agencias de publicidad y medios de
difusión podrán comprobar la difusión de medios publicitarios y, en especial, las cifras
de tirada y venta de publicaciones periódicas. Esta comprobación se hará en régimen
voluntario.
Artículo 13
En los contratos publicitarios no podrán incluirse cláusulas de exoneración, imputación
o limitación de la responsabilidad frente a terceros en que pueden incurrir las partes
como consecuencia de la publicidad.
Artículo 14
Se tendrá por no puesta cualquier cláusula por la que, directa o indirectamente, se
garantice el rendimiento económico o los resultados comerciales de la publicidad, o
se prevea la exigencia de responsabilidad por esta causa.
CAPITULO II. DE LOS CONTRATOS PUBLICITARIOS
SECCION PRIMERA. Contrato de publicidad
Artículo 15
Contrato de publicidad es aquél por el que un anunciante encarga a una agencia de
publicidad, mediante una contraprestación, la ejecución de publicidad y la creación,
preparación o programación de la misma. Cuando la agencia realice creaciones
publicitarias, se aplicarán también las normas del contrato de creación publicitaria.
Artículo 16
El anunciante deberá abstenerse de utilizar para fines distintos de los pactados
cualquier idea, información o material publicitario suministrado por la agencia. La
misma obligación tendrá la agencia respecto de la información o material publicitario
que el anunciante le haya facilitado a efectos del contrato.
Artículo 17
Si la publicidad no se ajustase en sus elementos esenciales a los términos del
contrato o a las instrucciones expresas del anunciante, éste podrá exigir una rebaja de
la contraprestación o la repetición total o parcial de la publicidad en los términos
pactados, y en la indemnización, en uno y otro caso, de los perjuicios que se le
hubieren irrogado.
Artículo 18
Si la agencia injustificadamente no realiza la prestación comprometida o lo hace fuera
del término establecido, el anunciante podrá resolver el contrato y exigir la devolución
de lo pagado, así como la indemnización de daños y perjuicios.
Asimismo, si el anunciante resolviere o incumpliere injustificadamente y
unilateralmente el contrato con la agencia sin que concurran causas de fuerza mayor o
lo cumpliere sólo de forma parcial o defectuosa, la agencia podrá exigir la
indemnización por daños y perjuicios a que hubiere lugar.
La extinción del contrato no afectará a los derechos de la agencia por la publicidad
realizada antes del cumplimiento.
SECCION SEGUNDA. Contrato de difusión publicitaria
Artículo 19
Contrato de difusión publicitaria es aquél por el que, a cambio de una contraprestación
fijada en tarifas preestablecidas, un medio se obliga en favor de un anunciante o
agencia a permitir las utilizaciones publicitarias de unidades de espacio o de tiempo
disponibles y a desarrollar la actividad técnica necesaria para lograr el resultado
publicitario.
Artículo 20
Si el medio, por causas imputables al mismo, cumpliere una orden con alteración,
defecto o menoscabo de algunos de sus elementos esenciales, vendrá obligado a
ejecutar de nuevo la publicidad en los términos pactados. Si la repetición no fuere
posible, el anunciante o la agencia podrán exigir la reducción del precio y la
indemnización de los perjuicios causados.
Artículo 21
Salvo caso de fuerza mayor, cuando el medio no difunda la publicidad, el anunciante
o a la agencia podrán optar entre exigir una difusión posterior en las mismas
condiciones pactadas o denunciar el contrato con devolución de lo pagado por la
publicidad no difundida. En ambos casos, el medio deberá indemnizar los daños y
perjuicios ocasionados. Si la falta de difusión fuera imputable al anunciante o a la
agencia, el responsable vendrá obligado a indemnizar al medio y a satisfacerle
íntegramente el precio, salvo que el medio haya ocupado total o parcialmente con otra
publicidad las unidades de tiempo o espacio contratadas.
SECCION TERCERA. Contrato de creación publicitaria
Artículo 22
Contrato de creación publicitaria es aquél por el que, a cambio de una
contraprestación, una persona física o jurídica se obliga en favor de un anunciante o
agencia a idear y elaborar un proyecto de campaña publicitaria, una parte de la misma
o cualquier otro elemento publicitario.
Artículo 23
Las creaciones publicitarias podrán gozar de los derechos de propiedad industrial o
intelectual cuando reúnan los requisitos exigidos por las disposiciones vigentes.
No obstante lo dispuesto en el párrafo anterior, los derechos de explotación de las
creaciones publicitarias se presumirán, salvo pacto en contrario, cedidos en exclusiva
al anunciante o agencia, en virtud del contrato de creación publicitaria y para fines
previstos en el mismo.
SECCION CUARTA. Contrato de patrocinio
Artículo 24
El contrato de patrocinio publicitario es aquél por el que el patrocinado, a cambio de
una ayuda económica para la realización de su actividad deportiva, benéfica, cultural,
científica o de otra índole, se compromete a colaborar en la publicidad del
patrocinador.
El contrato de patrocino publicitario se regirá por las normas del contrato de difusión
publicitaria en cuanto le sean aplicables.
TITULO IV. DE
PROCEDIMIENTOS
LA
ACCION
DE
CESACION
Y
RECTIFICACION
Y
DE
LOS
Artículo 25
1. Los órganos administrativos competentes, las asociaciones de consumidores y
usuarios, las personas naturales o jurídicas que resulten afectadas y, en general,
quienes tengan un derecho subjetivo o un interés legítimo podrán solicitar del
anunciante la cesación o, en su caso, la rectificación de la publicidad ilícita.
2. La solicitud de cesación o rectificación se hará por escrito en forma que permita
tener constancia fehaciente de su fecha, de su recepción y de su contenido.
Artículo 26
1. La cesación podrá ser solicitada desde el comienzo hasta el fin de la actividad
publicitaria.
2. Dentro de los tres días siguientes a la recepción de la solicitud, el anunciante
comunicara al requirente en forma fehaciente su voluntad de cesar en la actividad
publicitaria y procederá efectivamente a dicha cesación.
3. En los casos de silencio o negativa, o cuando no hubiera tenido lugar la cesación, el
requirente, previa justificación de haber efectuado la solicitud de cesación, podrá
ejercitar las acciones y derechos a que se refieren los art. 28 y siguientes.
Artículo 27
1. La rectificación podrá solicitarse desde el inicio de la actividad publicitaria hasta
siete días después de finalizada la misma.
2. El anunciante deberá, dentro de los tres días siguientes a la recepción del escrito
solicitando la rectificación, notificar fehacientemente al remitente del mismo su
disposición a proceder a la rectificación y en los términos de ésta o, en caso contrario,
su negativa a rectificar.
3. Si la respuesta fuese positiva y el requirente aceptase los términos de la propuesta,
el anunciante deberá proceder a la rectificación dentro de los siete días siguientes a la
aceptación de la misma.
4. Si la respuesta denegase la rectificación, o no se produjese dentro del plazo previsto
en el párrafo 2 por la parte requerida, o, aun habiéndola aceptado, la rectificación no
tuviese lugar en los términos acordados en los plazos previstos en esta Ley, el
requirente podrá demandar al requerido ante el Juez, justificando el haber efectuado la
solicitud de rectificación, conforme a lo dispuesto en la presente Ley.
Artículo 28
Las controversias derivadas de la publicidad ilícita en los términos de los arts. 3 a 8
serán dirimidas por los órganos de la jurisdicción ordinaria.
Artículo 29
Los procesos a que se refiere el artículo anterior se tramitarán conforme a lo
establecido en la Ley de Enjuiciamiento Civil para los juicios de menor cuantía, con las
siguientes peculiaridades:
a) El Juez podrá, de oficio y sin audiencia del demandado, dictar un auto de
inadmisión de la demanda cuando la estime manifiestamente infundada.
b) Sin perjuicio de lo que se pueda acordar para mejor proveer, el Juez, al
momento de decidir el recibimiento a prueba, podrá requerir de oficio al
anunciante para que aporte las pruebas relativas a la exactitud de los datos
materiales contenidos en la publicidad, siempre que aprecie que tal exigencia
es acorde con las circunstancias del caso, atendidos los legítimos intereses del
anunciante y de las demás partes del proceso.
c) El Juez podrá considerar los datos de hecho como inexactos, cuando no se
aporten los elementos de prueba a que se refiere el párrafo anterior o cuando
estime que los aportados resultan insuficientes.
Artículo 30
1. A instancia del demandante, el Juez, cuando lo crea conveniente, atendidos todos
los intereses implicados y especialmente el interés general, incluso en el caso de no
haberse consumado un perjuicio real o de no existir intencionalidad o negligencia por
parte del anunciante, podrá con carácter cautelar:
a) Ordenar la cesación provisional de la publicidad ilícita o adoptar las medidas
necesarias para obtener tal cesación. Cuando la publicidad haya sido
expresamente prohibida o cuando se refiera a productos, bienes, actividades o
servicios que puedan generar riesgos graves para la salud o seguridad de las
personas o para su patrimonio o se trate de publicidad sobre juegos de suerte,
envite o azar y así lo instase el órgano administrativo competente, el Juez podrá
ordenar la cesación provisional dentro de las veinticuatro horas siguientes a la
presentación de la demanda.
b) Prohibir temporalmente dicha publicidad o adoptar las previsiones
adecuadas para impedir su difusión, cuando ésta sea inminente, aunque no
haya llegado aún a conocimiento del público.
2. Las medidas de cesación o de prohibición de la publicidad se adoptarán conforme a
lo previsto en el art. 1428 de la Ley de Enjuiciamiento Civil.
Artículo 31
La sentencia estimatoria de la demanda deberá contener alguno o algunos de los
siguientes pronunciamientos:
a) Conceder al anunciante un plazo para que suprima los elementos ilícitos de la
publicidad.
b) Ordenar la cesación o prohibición definitiva de la publicidad ilícita.
c) Ordenar la publicación total o parcial de la sentencia en la forma que estime
adecuada y a costa del anunciante.
d) Exigir la difusión de publicidad correctora cuando la gravedad del caso así lo
requiera y siempre que pueda contribuir a la reparación de los efectos de la
publicidad ilícita, determinando el contenido de aquélla y las modalidades y
plazo de difusión.
Artículo 32
Lo dispuesto en los artículos precedentes será compatible con el ejercicio de las
acciones civiles, penales, administrativas o de otro orden que correspondan y con la
persecución y sanción como fraude de la publicidad engañosa por los órganos
administrativos competentes en materia de protección y defensa de los consumidores
y usuarios.
Artículo 33
1. El actor podrá acumular en su demanda otras pretensiones derivadas de la misma
actividad publicitaria del anunciante, siempre que por su naturaleza o cuantía no sean
incompatibles entre sí o con las acciones a que se refieren los artículos anteriores.
2. No será necesaria la presentación de reclamación administrativa previa para ejercer
la acción de cesación o de rectificación de la publicidad ilícita cuando el anunciante
sea un órgano administrativo o un ente público.
DISPOSICION TRANSITORIA
Disposición Transitoria Única
Las normas que regulan la publicidad de los productos a que se refiere el art. 8
conservarán su vigencia hasta tanto no se proceda a su modificación para adaptarlas a
lo dispuesto en la presente Ley.
DISPOSICION DEROGATORIA
Disposición Derogatoria Única
Queda derogada la Ley 61/1964, de 11 de junio, por lo que se aprueba el Estatuto de
la Publicidad EDL 1964/95 , y cuantas disposiciones se opongan a lo establecido en la
presente Ley.
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