ANGEL GONZÁLEZ LITURGIAS PROFÉTICAS. EXÉGESIS VERTICAL DE UN SALMO Después de un periodo de divorcio innatural, salmos y liturgia vuelven a un encuentro. Se busca en el culto una ambientación de salmos y profetas que pueda explicar la fórmula que se ha generalizado de «liturgias proféticas». El autor presenta los dos caminos que se han seguido en la exégesis escriturística. El cultualista, que sigue un procedimiento horizontal, de religiones com. paradas, y el vertical, que -sin olvidar el anterior- busca la génesis, la evolución y sentido de un pasaje literario en la historia de su propio pueblo. Dada la temática de otros artículos de este número, vamos a extendernos particularmente en este segundo método, para hacer ver cómo puede realizarse una exégesis vertical. Liturgias proféticas. Observaciones metodológicas en torno a un género literario. Estudios Bíblicos, 18 (1959) 253-283 Exégesis horizontal y vertical El estudio comparativo de las Religiones aporta gran luz a la penetración del alma y de la teología de Israel. Exponente de ello es el gran avance que ha supuesto el trabajo realizado en los países del Antiguo Oriente, en orden a captar, en los escritos bíblicos, aspectos nuevos, hasta ahora desconocidos. Sin embargo, creemos que el método de las religiones comparadas -lo que podríamos llamar una exégesis horizontal, basada en una comparación a nivel territorial de pueblo a pueblo- necesita ser completado con el estudio particular de los mismos fenómenos en una exégesis vertical que nos dé -profundamente enraizada en la teología e historia del país concreto- el verdadero ambiente vital (Sitz im Leben) de cada uno de sus escritos. Una fusión de datos provenientes de pueblos y religiones distintas corre el riesgo de desvirtuar las características y sentido propio de cada una de las religiones en particular. Porque, subyacente a la fenomenología más o menos semejante, hay en cada religión una autonomía de pensamiento y un espíritu profundo, que escapa a las apreciaciones del mero fenomenologista. Israel, concretamente, no tiene ninguna institución que de alguna manera no exista también en sus pueblos vecinos. El culto, la monarquía, el sacerdocio, el profetismo, no son algo exclusivamente suyo. Israel aprende de sus vecinos, pero tiene - y ello en grado creciente a lo largo de su historia- un concepto de Dios y de sus relaciones con el hombre que determina todo el sentido de su Religión. Lo mismo hay que decir de su literatura. En ella se encuentran géneros literarios paralelos a los de otras literaturas extranjeras. Sin embargo, su ambientación vital tiene una atmósfera religiosa propia. Un análisis profundo de la historia y de la literatura de Israel, nos manifiestan la existencia de una mezcla de estilos en salmos y profetas. Y ambos son usados en las acciones litúrgicas en el Templo. ANGEL GONZÁLEZ El problema que nos proponemos -y de ahí el título "Liturgias proféticas"- es el siguiente: ¿cómo se explica esta interacción o mezcla de estilos, en uña pieza literaria destinada al culto?; ¿se debe a que un profeta intervenía directamente en el momento en que se explícita el oráculo, o más bien a algo más profundo, la íntima meditación de los profetas por parte del salmista? Para resolverlo, no nos basta el camino que nos propone la exégesis horizontal. No basta el estudio fenomenológico, por profundo que sea. Hay que estudiar la génesis, la evolución y el sentido propio de cada religión. La exégesis horizontal habrá sido un primer estadio de la investigación, que prepara la etapa ulterior de una exégesis vertical. La exégesis vertical en Israel Con los datos aportados por el estudio comparativo de las Religiones del Antiguo Oriente, intentamos una captación de los mismos fenómenos, en línea vertical. Buscar, en cada uno de los estadios de la literatura bíblica, la razón de ser del que le sigue. La evolución de las formas y de la técnica literaria, lo mismo que la evolución religiosa de Israel, se deben ante todo al dinamismo interno de su misma vida. Por esto, la religión de Israel no puede comprenderse fuera de su propia historia. Su Religión es la Revelación, y la Revelación se hace en la historia. Cada fenómeno, novedad, indicio de progreso, debe tener su trayectoria propia dentro de la Historia de Israel, aunque en un comienzo haya venido de fuera. Con tales presupuestos vamos a enfocar nuestra exégesis vertical hacia el estudio de un salmo. Los salmos, por su modalidad poética y su lenguaje metafórico inconcreto, necesitan de la historia y de la profecía para ser interpretados; son producto religioso de un momento, que lleva sobre sí toda la carga del pasado. La exégesis vertical analiza este momento a la luz del momento precedente - la historia, "lo pasador- y teniendo presente, el dinamismo interior de Israel y su proyección hacia el futuro. En un ejemplo concreto, haremos ver que un salmo representa una ideología, contiene una teología, y es una interpretación del pasado con proyecciones sobre el futuro. Podremos contestar definitivamente a nuestra pregunta. El salmo 132 Algunos de los salmos contienen un oráculo, que es la forma literaria característica del lenguaje profético: Yahvé aparece hablando en primera persona, por boca del profeta, a la comunidad de Israel. Escojamos el salmo 132, que contiene una parte oracular considerada como forma típica y exclusiva del lenguaje de los profetas. Para sintetizar de alguna manera el Sal 132 en una frase, se podría decir que es una oración por la realización de la prosperidad mesiánica (cf. v. 10). Un primer plano nos presenta la figura del Rey, por el cual se pide. Se menciona a David, pero se habla directamente de su descendiente. La oración pide la protección de Dios para su "ungido" o mesías (v. 10.17). Este concepto bivalente se refiere simultáneamente al rey temporal y al Mesías por excelencia, preanunciado en todos los reyes de Israel. La restauración de todo el pueblo aparece en un segundo plano, aunque constituye con el primero un único ANGEL GONZÁLEZ tema: el surgir airoso de ese descendiente de David implica la restauración y la prosperidad de todo el pueblo. Como apoyo de su oración, evoca el salmista los méritos (v. 1-10) y las promesas hechas por Yahvé a David (v. lls), que miran hacia ese Mesías (v. 10.11.17). A lo largo de los dos planos indicados, veremos cómo vienen a sobreponerse la esfera histórica concreta (historia del David humilde, piadoso, merecedor de que se cumplan las promesas hechas a su descendencia, una historia funcional, evocación de David en vista de su descendencia), y la esfera ideal escatológica (el Mesías, nuevo David). a) La figura del Rey (vv. 1-12) El salmo hace referenc ia a la preocupación de David por construir una casa para Yahvé (vv. 1-5) y a los honores que rindió al Arca de su presencia (vv. 5-7) (cf. 1 Cor 17,1-3). Sigue aquí, en forma de oración, el clamor del pueblo pidiendo a Yahvé que se deje entronizar en su morada gloriosa, y que dé también poder y prosperidad al descendiente prometido a David (cf. 1 Cor 17,4-14) en el oráculo del profeta Natán (vv. 8-10 del salmo). "Levántate, Yahvé, a tu reposo, tú y el arca de tu fuerza. Tus sacerdotes visten de victoria y tus amados saltan de alegría. Por amor de David, tu servidor, no desaires la faz de tu ungido". El contenido de estos tres versos es idéntico al de la oración de Salomón en la fiesta de la Dedicación del Templo, dentro del mismo enmarque del oráculo de Natán (cf. 2 Cor 6,41.42). La introducción a la citó directa de la profecía, en forma de oráculo: "Yahvé lo ha jurado a David, verdad de que jamás se apartará" (v. 11), es un tema profético que se repite en el Sal 89,35 s, en el mismo marco de Natán. Tamb ién aparece en otras partes como fidelidad de Yahvé (ls 31,2) o como enlace entre las promesas davídicas y mesiánicas (Is 55, Sal 110,4; 89,4.35.50). Las referencias mesiánicas son, pues, abundantes. La misma expresión "el Poderoso de Jacob" (v. 2.5) está en el contexto mesiánico (cf. Gén 49,25; Is 49, 26; 60,16). b) La restauración del pueblo Los versos 13-18 indican el pleno sentido de las promesas reales en función de tal restauración, enlazando la promesa dinástica con la descripción directa de la era mesiánica. La elección de Sión aparece de nuevo en forma de oráculo. El tema es esencialmente profético y mesiánico y se identifica con el oráculo de la elección de la dinastía (cf. 2 Cor 6,2-6; Sal 78,68-72; Is 55,3), y con el de la restauración, en el que Yahvé manifiesta ANGEL GONZÁLEZ la decisión de elegir por morada eterna una Ciudad Santa (cf. Ez 43,7; Zac 1,16 s; 2,14.16; 3,2; 2 Cor 6,6; 7,12.16; Sal 68,17.78 s). Con el morar de Yahvé en su santa Montaña, se alcanzará la felicidad que promete la era mesiánica: v.15: "Bendeciré sus provisiones saciaré de pan a sus hambrientos " (cf Sal 85, 13; Zac 8,12.) v. 16: "Vestiré a. sus sacerdotes de victoria, -y saltarán de júbilo sus justos" (Cf 2 Cor 6,41; Is 61,10; Jer 31,14; Job 29, 13 s). Sobre este marco de bienestar y como su razón de ser, suena la promesa directamente mesiánica: v.17: "Aquí haré florecer el poder de David" (cf Ez 29,21; Is 11,1; Jer 33,15; Sal 89,25) "y alumbraré la antorcha de mi ungido" (cf 1Re 11,36; 15,4; 2 Re 8,19; Is 42,6; 49,6; Lc 2,32) v. 18: "Cubriré a sus enemigos de ignominia" (cf Sal 89,24.43) "mientras brilla sobre él mi diadema" (cf Sal 89,40) El tema de la restauración ambienta también la primera parte del Salmo. Los versos 1-7 son evocados por su carácter de merecimiento en virtud de la solidaridad histórica del pueblo. También el v. 10 en que sepide a Yahvé que por amor de David no se aparte de su ungido. Conclusión Hemos visto que el salmo contiene dos oráculos, ambos copia de los de Natán y de los de los grandes profetas sobre la dinastía y la restauración. Lo que ha hecho el salmista ha sido redactarlos en forma de oración, después de haberlos meditado y hecho de ellos oración propia. El clima ideológico y religioso corresponde, pues, a la preocupación de la restauración. El tema de David y del Rey sirve de base histórica, pero se desnuda de su dimensión concreta para revestir el carácter mesiánico y escatológico que indican los paralelos temáticos y literarios del salmo. La figura bivalente del Rey pesa más hacia su dimens ión ideal que hacia la histórica. El verdadero ambiente vital (Sitz im Leben) del salmo es el cuadro ideológico que hemos descrito por medio de sus temas y de sus lugares paralelos (en nuestro caso, historia de David y Salomón; profecías de Natán, Isaías, Ezequiel, Jeremías...). El sentido mesiánico resalta entonces con toda evidencia. ANGEL GONZÁLEZ Los salmos solamente pueden interpretarse a la luz de su marco histórico-religioso integral. Sus preocupaciones religiosas, son más profundas que las de reproducir el ritual de una ocasión litúrgica. Extractó: JUAN FCO. CALDENTEY