INSTITUTO MEXICANO DEL SEGURO SOCIAL DELEGACION REGIONAL EN BAJA CALIFORNIA JEFATURA DE PRESTACIONES MÉDICAS COORDINACION DELEGACIONAL DE EDUCACION EN SALUD Materia ESCUELA DE ENFERMERIA EN TIJUANA INCORPORADA A LA UABC ESTADÍSTICA ENFERMERIA QUIRÚRGICA PROCESO DE ATENCION DE ENFERMERÍA FRACTURA ABIERTA TERCER GRADO DIAFISIARIA DE TIBIA Y PERONÉ QUINTO LIC. CARMEN ALICIA VELIZ BENÍTEZ CAMPOS PÉREZ KARLA DANIELA CASTRO GIL MAYRA REBECA FERNÁNDEZ RAMIRO BRIZIA Tijuana, Baja California a 27 de abril de 2011 INTRODUCCIÓN El Proceso de Atención de Enfermería en la herramienta vital en el quehacer de la enfermería ya que de aquí parte toda la atención y cuidados al paciente, familia y comunidad de manera integral y holística. De esta manera también nos permite conocer de una manera más amplia la patología del paciente y tener los conocimientos y capacidades suficientes para actuar en cualquier necesidad que se presente. El proceso de atención de enfermería que se realizara a continuación se basa principalmente en los once patrones funcionales de Marjory Gordon la cual nos permite realizar una valoración sistemática y premeditada ya que nos permite identificar una gran cantidad de datos e indicios en el paciente ya sea tanto físicos, psíquicos, sociales o del entorno y con el conjunto de todo esto se facilitara la realización de los diagnósticos enfermeros certeros y por lo tanto realizar el proceso de enfermería de manera integral. La fisiopatología de la que tratara este proceso enfermero es Fractura Abierta, las fracturas se conocen como la perdida de continuidad de la estructura ósea esta puede lesionar también los órganos vecinos y es causado por diferentes tipos de factores en los que e incluyen la dirección, velocidad, la fuerza, edad y el tipo de hueso y así también se determina la gravedad de la fractura. Las fracturas también se clasifican de diferentes formas una de ellas son por su exposición al exterior y es cerrada y abierta; las fracturas abiertas o expuestas son las más complicada ya que la fractura o más bien el hueso se está comunicando con el exterior y es importante dar una atención integral ya que son focos de infección latente, por lo que la participación de enfermería es vital para lograr que el paciente se recupere de la mejor manera posible. JUSTIFICACION El presente proceso atención enfermero ‘’PAE’’ , se realizara con la finalidad de dar a conocer el plan de cuidados de enfermería en donde se describen intervenciones independientes e interdependientes basadas en los valores de la profesión y un juicio crítico que permitirá una mejoría plena del paciente. A su vez el proceso de atención de enfermería se ha realizado para desarrollar habilidades y destrezas en su realización, obteniendo de este modo un buen desempeño en el área tanto practica como teórico aplicando todos los conocimientos aprendidos en quinto semestre en las materias de enfermería y patología quirúrgica. OBJETIVO GENERAL Valorara al paciente por medio de los once patrones funcionales de Gordon basándose en los indicios obtenidos para la elaboración de diagnósticos de enfermería de acuerdo a las afecciones y necesidades del paciente, desarrollando así intervenciones de enfermería independiente e interdependiente que logren los objetivos planeados generando una mejora y/o prevención de las problemáticas todo con el fin de conseguir el bienestar total del paciente. OBJETIVOS ESPECIFICOS Adquirir habilidad para la elaboración del PAE y realizarlo de forma correcta sin cometer los errores antes cometidos. Aprender a detectar correctamente los indicios del paciente a través de la valoración de los 11 patrones de Gordon. Elegir los diagnósticos de la NANDA que se apeguen más a las problemáticas del paciente para poder seguir con una planeación adecuada. Realizar las intervenciones independientes e interdependientes así como fueron planteados en el plan de cuidados. CASO CLÍNICO Paciente masculino de 18 años de edad procedente cordero, manifiesta haber ingresado al ala oeste 10 de traumatología y ortopedia a causa “accidente de moto” ubicado en sus tres planos persona, tiempo y espacio. En su valoración se encuentra tranquilo, poco colaborador, cociente, presentando pupilas isocoricas, normo reactivas a la luz, con adormecimiento en el pómulo izquierdo, tórax simétrico normo expansible, a la auscultación sin ruidos pulmonares, fremito vocal audible, frecuencia cardiaca 60x’, llenado capilar -1seg, normo tenso, ruptura de pieza dental premolar del lado izquierdo, con problemas de evacuación aproximadamente 11 días, ardor a la micción, vello fluvial. Rasurado, flacidez en músculos a nivel de miembros superiores e inferiores, fractura diafisiaria de tibia y peroné abierta, con tructor externo, cicatrices a nivel del abdomen, con apósito a nivel del flanco izquierdo, catéter endovenoso a Nivel del antebrazo izquierdo. Estudios de Laboratorio: BIOMETRÍA HEMÁTICA Resultados de Paciente Hemoglobina 7.3 Hematocrito 24.1 Plaquetas 231 Tiempo de Coagulación 4-10min TP, TPT 04-03-11 Valores Normales 11-15gr 42-47% 200-300mil Resultado Val. Normal TP 14 segundos. 11 a 13.5 segundos. TPT 33.9 segundos 25 a 35 segundos Glucosa Creatinina Urea QUÍMICA SANGUÍNEA Resultados de Paciente 115 mg/dl 1.1 mg/dl 33.6 mg/dl Valores Normales 70.00 - 110.00 mg/dl 0.50 - 1.20 mg/dl 10.0 - 50.0 mg/dl FISIOPATOLOGÍA FRACTURA EXPUESTA Se define una fractura como la pérdida o solución de continuidad de un hueso, que puede ser de origen traumático o no traumático. Esta ocasiona una lesión tisular compleja no sólo en el tejido óseo sino también en las partes blandas vecinas y está en proporción directa al tipo y grado de trauma, a la presencia de una patología previa y a otras variables como el estado físico, fisiológico y psicológico de cada paciente. Lo anterior nos obliga a estudiar a cada fractura en forma individual para llegar al diagnóstico integral e indicar el tratamiento adecuado. La mayor parte de las fracturas son el resultado de un traumatismo, como las causadas por un accidente de automóvil, deportes o por una caída. Una fractura tiene lugar cuando la fuerza ejercida contra un hueso es mayor que la resistencia del mismo. La dirección, la velocidad y la potencia de la fuerza, así como la edad, la flexibilidad y el tipo de hueso determinan el tipo y la gravedad de la fractura. Existen varios tipos de fractura, que se pueden clasificar atendiendo a los siguientes factores, localización de la fractura en el propio hueso (epifisarias, diafisarias o metafisarias) , según el trazo de la fractura (transversales, oblicuas, longitudinales, en a la mariposa, conminutas, incurvación diafisiaria o tallo verde), según el tipo de desviación de los fragmentos (angulada, con desplazamiento lateral, acabalgada o engranada), según mecanismo de acción del agente traumático (traumatismo directo, traumatismo indirecto o contracción muscular brusca) y según estado de la piel (abierta o cerrada). Antecedentes La ortopedia es la rama de la medicina que se ocupa de las enfermedades del aparato locomotor mientras que la traumatología se ocupa de las lesiones provocadas por noxas físicas. Si bien se trata de dos especialidades diferentes con un denominador común (el aparato locomotor), hay infecciones que podrían pertenecer a ambas, como por ejemplo las fracturas “patológicas”, es decir aquellas lesiones del esqueleto que se localizan sobre tejido óseo de estructura anormal. Si nos guiamos por la etimología de los términos tanto la ortopedia como la traumatología nacieron con objetivos o áreas de interés distintos a los actuales. La palabra ortopedia proviene de las raíces griegas: orto = recto y Paidós = niño mientras que el vocablo traumatología procede de las raíces (también griegas): trauma = herida y logos = tratado; esto significa que al comienzo la primera se ocupó de la prevención y el tratamiento de las afecciones que podían alterar el crecimiento correcto del niño [y hoy se ha ampliado para incluir todas las enfermedades de aparato locomotor (congénitas o adquiridas) que pueden ocurrir a cualquier edad] y la segunda nació con el objetivo de ocuparse de las heridas y hoy se dedica fundamentalmente a las lesiones del esqueleto (fracturas, luxaciones, etc.) pero también a muchas otras lesiones del aparato locomotor y en este campo se puede superponer con otras especialidades médicas (neurología, cirugía vascular, etc.) Si bien las afecciones del aparato locomotor son las mismas que pueden comprometer cualquier otro aparato u órgano de un ser vivo, para su mejor comprensión es necesario familiarizarse con la terminología habitual. Anatomía General del Hueso El hueso es un tejido vivo, con dos funciones bien definidas: la mecánica y la biológica. En cuanto a la primera el esqueleto proporciona un armazón rígido para protección de órganos y sistemas y una adecuada actividad fisiológica y locomotora que está sujeta en forma constante a diversos esfuerzos. Desde el punto de vista biológico, depende de una buena circulación arterial y venosa local provenientes principalmente del periostio, que permiten iniciar y como respuesta al trauma, un proceso inmediato de inflamación y reparación a través de una serie de acontecimientos ordenados, simultáneos y dependientes uno del otro, que producen cambios locales morfológicos visibles y otros a nivel celular, complejos y todavía no bien conocidos, como es la formación de hueso por estímulo del DNA a través de proteínas mensajeras. Desde el punto de vista sistémico el tejido óseo participa en otras funciones como son la hematopoyesis, homeostasis, control del desarrollo, etc. Los principales componentes del hueso maduro se encuentran en una cubierta externa de hueso compacto denominada cortical, que encierra una red de aspecto más suelto de trabéculas, el hueso trabecular o esponjoso, con sus espacios interconectados que contienen médula mieloide, adiposa o ambas. El hueso cortical está revestido por una membrana perióstica, que contiene arteriolas y capilares que penetran en la cortical y entran en el conducto medular. Estos vasos, estructuras penetran en junto con otras más grandes que uno o más conductos nutricios, proveen la irrigación sanguínea al hueso. El periostio es ininterrumpido sobre el excepto hueso en la porción que es que está cubierta por la sinovial o el membrana intraarticular cartílago. En inserción al hueso, las fibras de los tendones y de los ligamentos se mezclan el con los sitios y periostio. de La estructura perióstica varía con la edad de la persona, lactante y el niño es más gruesa, vascular, activa en y el esta insertada de manera más laxa y en el adulto es más delgada, inactiva y está más adherida. Estas características estructurales acentúan la mayor capacidad del periostio del niño para ser levantado del hueso y estimulado para la formación del tejido óseo. ETIOLOGIA 1. Causas predisponentes Están determinadas por circunstancias, generalmente patológicas, que disminuyen la resistencia física del hueso, de tal modo que traumatismos de mínima cuantía, son capaces de producir su fractura. Entre ellas tenemos: 1.1 Causas fisiológicas Osteoporosis senil. Osteoporosis por desuso (parapléjicos, secuelas de polio, etc.): en que los segmentos esqueléticos han dejado de soportar el peso del cuerpo, y por lo tanto este estímulo osteogenético es débil o inexistente. Osteoporosis iatrogénica: es el caso de enfermos sometidos a largos tratamientos corticoídeos; en ellos no son raras las fracturas "espontáneas" de los cuerpos vertebrales o cuello de fémur. Se han descrito cuadros similares debidos a largos tratamientos con drogas anticonvulsivantes, gastrectomizados, síndromes de mala absorción, etc. 1.2 Causas patológicas Corresponden a aquellas que, en forma directa o indirecta, provocan una importante alteración en la estructura del esqueleto (disostosis hiperparatiroidea, displasia fibrosa poliostótica, etc.) o en un hueso determinado (quiste óseo simple o aneurismático, metástasis, mieloma, etc.). En todos estos casos, la lesión ósea adquiere el carácter de una lesión osteolítica y el hueso, disminuido en su resistencia, se fractura en forma prácticamente espontánea o como consecuencia de un traumatismo mínimo (fractura en hueso patológico). Existen por lo tanto situaciones fisiológicas y patológicas que predisponen al hueso a sufrir fracturas fáciles y ello obliga a considerar esta posibilidad, sobre todo cuando la lesión ha sido determinada por un traumatismo desproporcionadamente leve en relación al daño óseo, o en personas de edad avanzada, donde no son infrecuentes algunos de los factores señalados (osteoporosis, metástasis, mielomas, etc.). 2. Causas determinantes Son aquéllas que han actuado en forma directa o indirecta en la producción de la fractura; la magnitud del traumatismo supera la resistencia física del hueso y éste se fractura. Es importante considerar este hecho, porque si la fuerza traumática fue de tal magnitud que llegó a la fractura de un hueso sano, es lógico suponer que también pudieran haber sufrido lesiones las partes blandas vecinas, y de hecho con frecuencia así ocurre: fracturas pelvianas con lesiones vesicales; de cráneo con daño cerebral, fracturas vertebrales con daño de médula espinal; lesiones vasculares, neurológicas periféricas, etc., son producidas por lo general por el impacto que fracturó el hueso. La variedad de tipos de traumatismo es enorme, y con frecuencia actúan fuerzas distintas y simultáneas. En general se reconocen: Traumatismos directos: perpendiculares al eje del hueso: provocan una fractura de rasgo horizontal; si ocurre en segmentos con dos huesos (pierna o antebrazo), ambos rasgos se encuentran sensiblemente a un mismo nivel. Traumatismo directo con flexión del segmento: aplastamiento de la pierna por la rueda de un vehículo, por ejemplo. El rasgo de fractura es complejo y suele existir un tercer fragmento (fractura en ala de mariposa). Traumatismo indirecto: la fuerza actúa en forma tangencial, provocando un movimiento forzado de rotación del eje del hueso. La fractura de los esquiadores, en que el pie, fijo al esquí, se atasca y el cuerpo gira sobre su eje, provoca una fractura de rasgo helicoidal, de alta peligrosidad. Traumatismo indirecto por aplastamiento: en caídas de pie. Frecuente en huesos esponjosos comprimidos entre dos fuerzas antagónicas (calcáneo, cuerpos vertebrales, por ejemplo). Traumatismo indirecto, por violenta tracción muscular: provocan fracturas por arrancamiento, con separación de los fragmentos (rótula). No son raras de encontrar en epilépticos, electroshock, atletas. CLASIFICACIÓN Según el mecanismo traumático que las origina es clásico que las fracturas se dividan en directas e indirectas. Las fracturas por causa directa son las que se producen en la zona de aplicación del agente vulnerante (proyectil, bastonazo, coz de caballo) y son comunes en el cráneo, la cara y las falanges de los dedos. Las fracturas por causa indirecta son donde la fractura se produce a distancia del lugar donde se ha producido el traumatismo. Dependiendo de si el punto de fractura se comunica o no con el exterior, se clasifican en: Cerrada, si la punta de la fractura no se asocia a ruptura de la piel, o si hay herida, ésta no comunica con el exterior. Abierta o expuesta, si hay una herida que comunica el foco de fractura con el exterior, posibilitando a través de ella, el paso de microorganismos patógenos provenientes de la piel o el exterior. Tipos de Fracturas: Completa: afecta el diámetro trasversal del hueso en su totalidad; suelen haber desplazamientos. Incompleta: solo abarca una porción del diámetro trasversal del hueso; no suelen haber desplazamientos. En rama verde: solo se rompe un lado del hueso y el otro se doble Trasversa: fractura del diámetro trasversal del hueso Oblicua: ocurre en un ángulo del hueso Espiral: por torcimiento alrededor de la diáfisis ósea. Conminuta: cuando el hueso se divide en varios fragmentos. Deprimida: los fragmentos son empujados hacia dentro (suelen ser frecuentes en las fracturas de cráneo y huesos de la cara) Compresión: fractura en el cual el hueso se colapsa sobre sí mismo ( se ve con frecuencia en fracturas de vertebras ) Avulsión; se desprende de un fragmento del hueso en el sitio de inserción de un ligamento o tendón. Impactada: un fragmento del hueso queda incrustado en otro. Descolocación de fractura: fractura complicada por la exclusión de un hueso de la articulación. De acuerdo a su ubicación en el hueso, se clasifican en: Fractura epifisiaria: ocurre en el tejido óseo esponjoso del extremo articular de un hueso, la epífisis, usualmente lugar de inserción de la cápsula articular y ligamentos estabilizadores de la articulación. Fractura diafisiaria: ocurre en la diáfisis ósea, muchas veces son lugares con poca irrigación sanguínea. Fractura metafisiaria: ocurre en la metáfisis ósea, usualmente muy bien irrigada. Fractura diafisiaria de tibia y peroné abierta: Es aquella que compromete el segmento intermedio de los huesos largos llamado diáfisis, cuya característica principal es que tiene forma de huso o cilíndrico. Estas son las fracturas más frecuentes del esqueleto, este segmento en su cara anteriointerna carece de músculos y solo se cubre con piel; por ello sus fracturas son de mayor incidencia, a su vez suele ser asiento para hematomas, osteomielitis, seudoartrosis entre otras. Fisiología Los huesos poseen varias funciones en el organismo humano como lo son: o Actúan como sostén: Los huesos forman un cuadro rígido, que se encarga del sostén de los órganos y tejidos blandos. o Permiten el movimiento: Gracias a los músculos que se fijan a los huesos a través de los tendones, y a sus contracciones sincronizadas, el cuerpo se puede mover. o Protegen a los órganos: Los huesos forman diversas cavidades que protegen a los órganos vitales de posibles traumatismos. Por ejemplo, el cráneo o calota protege al cerebro de posibles golpes que pueda sufrir éste, y la caja torácica (o sea, las costillas y el esternón), protegen a los pulmones y al corazón. o Homeostasis Mineral: El tejido óseo se encarga del abastecimiento de diversos minerales, principalmente el fósforo y el calcio, que son muy importantes en funciones que realiza el organismo como la contracción muscular, lo cual es el caso del calcio. Cuando uno de éstos minerales es necesario, los huesos lo liberan en el torrente sanguíneo, y éste lo distribuye por el organismo. o Contribuyen a la formación de células sanguíneas: La médula ósea o roja, que se encuentra en el tejido esponjoso de los huesos largos (como por ejemplo las costillas, la pelvis, las vértebras, etc.), se encarga de la formación de glóbulos rojos o eritrocitos. Este proceso se denomina hematopoyesis. o Sirven como reserva energética: La médula ósea amarilla que es el tejido adiposo que se encuentra en los canales medulares de los huesos largos, es una gran reserva de energía. La tibia Es el hueso más voluminoso de la pierna, es par, largo, asimétrico y presenta para su estudio un cuerpo prismático con tres caras y dos extremos, el superior se articula por arriba con el fémur y el peroné, y el inferior, por debajo con el hueso astrágalo del tarso, a través de la polea astragalina ubicada en el tobillo, y con el peroné por la escotadura peronea. Presenta una eminencia en su región ínfero-interna que hace prominencia a simple vista en el tobillo y que es llamada maléolo interno. El peroné Es un hueso de la pierna, largo, par, asimétrico, formado por un cuerpo prismático triangular, con tres caras, externa, interna y posterior; tres bordes, anterior y laterales, y dos extremos, superior o cabeza en donde destaca la apófisis estiloides e inferior o maléolo externo. Se encuentra en la parte externa de la pierna. Se articula por dentro con la tibia mediante una articulación diartrosis del tipo artrodias, formando junto con la tibia la pinza tibioperonea, y por abajo con el astrágalo, formando la articulación "tibioperoneoastragalina". La fractura diafisiaria de tibia y peroné abierta tiene unas características especiales, que dependen del mecanismo de producción, la localización y el estado general previo del paciente, existe un conjunto de síntomas común a todas las fracturas, que conviene conocer para advertirlas cuando se producen y acudir a un centro hospitalario con prontitud. Estos síntomas generales son: Dolor. Es el síntoma capital. Suele localizarse sobre el punto de fractura. Aumenta de forma notable al menor intento de movilizar el miembro afectado y al ejercer presión, aunque sea muy leve, sobre la zona. Impotencia funcional. Es la incapacidad de llevar a cabo las actividades en las que normalmente interviene el hueso, a consecuencia tanto de la propia fractura como del dolor que ésta origina. Deformidad. La deformación del miembro afectado depende del tipo de fractura. Algunas fracturas producen deformidades características cuya observación basta a los expertos para saber qué hueso está fracturado y por dónde. Hematoma. Se produce por la lesión de los vasos que irrigan el hueso y de los tejidos adyacentes. Fiebre. En muchas ocasiones, sobre todo en fracturas importantes y en personas jóvenes, aparece fiebre después de una fractura sin que exista infección alguna. También puede aparecer fiebre pasados unos días, pero ésta es debida, si no hay infección, a la reabsorción normal del hematoma. Entumecimiento y cosquilleo Ruptura de la piel con el hueso que protruye DIAGNOSTICO En la inmensa mayoría de los casos, es posible un diagnóstico certero o por lo menos con un alto porcentaje de exactitud, debe de ser con: Anamnesis y un correcto examen físico (ni siquiera requiere el mover al enfermo, ni al segmento lesionado). La observación cuidadosa En estas circunstancias se debe actuar con prudencia: -No mueva al enfermo en forma brusca. -No mueva el miembro lesionado; si ello es imprescindible, proceda con sumo cuidado. -No olvide que puede ser usted el culpable de provocar desplazamientos de los segmentos óseos: lesiones vasculares, neurológicas (medulares en fractura de columna), lesiones de los segmentos cutáneos (fractura expuesta) con frecuencia han sido provocados por olvidar estas recomendaciones. Valoración de los detalles morfológicos La posición de los segmentos: angulación, acortamiento o rotación del segmento, etc., en general son más que suficientes para que el diagnóstico sea hecho con seguridad o con gran aproximación, suficiente como para permitir tomar una conducta consecuente. Examen Radiográfico El estudio radiográfico, que debe ser realizado lo antes posible, en la mayoría de los casos no hace sino que confirmar un diagnóstico clínico evidente o una sospecha razonable. Debe ser realizado de inmediato. Exigencias Placa grande (30 x 40 cm) que permita el examen de toda la tibia, incluyendo por lo menos una articulación (rodilla o tobillo) e idealmente las dos. Proyección antero-posterior y lateral. Correcta técnica radiográfica. La semiología radiográfica permite investigar: Estado biológico del esqueleto. Nivel de la fractura. Anatomía del rasgo: único, múltiple, conminución, dirección, forma, etc. Compromiso del peroné. Desviación de los fragmentos. Los datos referidos son esenciales para configurar el pronóstico y el plan terapéutico. De este modo tenemos con frecuencia: Rasgo transversal o ligeramente oblícuo: propio de fractura por golpe directo, estable y de fácil tratamiento ortopédico. Rasgo espiroídeo: producido por un movimiento de torsión o rotación de la pierna con pie fijo (o viceversa), ubicada generalmente en la unión del 1/3 medio con el distal; de muy difícil reducción, inestables; los extremos óseos suelen encontrarse desplazados y amenazan perforar la piel. Rasgo múltiple: generando una fractura conminuta; se produce habitualmente por un traumatismo directo, muy violento; por ello con mucha frecuencia acompañada contusión va de de blandas, hematomas, grave partes extensos erosiones de la piel o exposición de los fragmentos. Rasgo en ala de mariposa, que configura un tercer fragmento. TRATAMIENTO La intervención consiste en la reducción de los fragmentos e inmovilización mediante un vendaje enyesado, férula, ortesis o un tratamiento mediante tracción continua hasta la consolidación de la fractura. La tracción es utilizada para alinear los fragmentos, ejerciendo fuerza de tensión transmitida al hueso mediante tiras adhesivas a piel o mediante una aguja metálica que atraviesa el hueso. El objetivo principal del tratamiento ortopédico de estas fracturas es el tratamiento quirúrgico o cruento, donde se utilizara medios de fijación interna Con el uso del clavo intramedular A O bloqueado no rimado se disminuye la estancia hospitalaria, no se necesita el uso de inmovilización con yeso, la incorporación laboral es rápida, las complicaciones son menores y la consolidación es más rápida, para el mantenimiento de la reducción de la fractura con o sin apertura del foco o lesión. Las fracturas diafisiaria precisaran varias semanas o meses para consolidar, dependiendo de la gravedad de la lesión y del correcto cumplimiento de las instrucciones dadas por el médico. 1. Todas las fracturas abiertas deben ser tratadas como una urgencia. 2. Completa evaluación inicial, para diagnosticar otras lesiones que pueden poner en peligro la vida. 3. Tratamiento antibiótico apropiado y suficiente. 4. Desbridamiento e irrigación adecuada. 5. Estabilización de la fractura abierta. 6. Cierre apropiado de la herida. 7. Injerto precoz de hueso esponjoso. 8. Rehabilitación de la extremidad afectada. 9. Rehabilitación del paciente. Con estos principios cumplimos con los tres objetivos principales del tratamiento: 1. Evitar la infección de la herida. 2. Obtener la consolidación de la fractura. 3. Restablecer la función óptima o normal de la extremidad lesionada. COMPLICACIONES Las complicaciones en un sujeto fracturado pueden ser de muy diversa índole. Inicialmente debemos distinguir las complicaciones inmediatas, es decir, el daño que pueden haber sufrido los tejidos circundantes a la fractura, y las repercusiones que éstas puede tener para el paciente. Podemos encontrarnos una hemorragia importante que ponga en peligro la vida del individuo, en cuyo caso el tratamiento de la fractura pasará a un segundo término. Puede aparecer una infección, en el caso de fractura abierta, etc. Pueden existir complicaciones derivadas del reposo prolongado (neumonía, trombosis, etc.) o de la propia intervención quirúrgica. Complicaciones inmediatas * Shock traumático Determinado por el dolor y la hemorragia en el foco de fractura; debe considerarse que fracturas como de diáfisis femoral o pelvis, son capaces de generar una hemorragia en el foco de fractura, que puede llegar a 1, 2 ó más litros de sangre, generando una anemia aguda y shock hipovolémico. * Lesiones neurológicas Por compromiso de troncos nerviosos, sea por la contusión que provocó la fractura o directamente por los extremos óseos desplazados que comprimen, contusionan, elongan o seccionan el nervio. * Lesiones vasculares Una arteria puede sufrir lesiones de diversa naturaleza. Cualquiera que sea, el compromiso vascular debe ser detectado precozmente y resuelto de inmediato. Ignorar la complicación o descuidar su evolución, genera el peligro inminente de necrosis músculo-aponeurótica o gangrena del segmento distal al daño arterial. 1. Espasmo arterial traumático: sea por la contusión que provocó la fractura, por los extremos óseos desplazados o por un tercer fragmento proyectado sobre la arteria. 2. Contusión arterial: con trombosis por ruptura de la íntima, que genera además un espasmo que agrava aún más el problema circulatorio. 3. Compresión, desgarro o sección de la pared de la arterial que determina déficit vascular distal con gangrena de la extremidad. 4. Pseudo-aneurisma (hematoma pulsátil), fístula arteriovenosa. 5. Son clásicos ejemplos de lesiones arteriales: 6. Lesión del tronco femoral por fractura de la metáfisis distal del fémur, desplazando hacia dorsal por acción de los gemelos. 7. Lesión de la arteria tibial posterior por fractura de la metáfisis superior de la tibia, desplazada hacia dorsal. 8. Lesión de la arteria humeral por fractura supra-condílea del húmero. * Fractura expuesta Que lleva implícito el riesgo inminente de la infección del foco de fractura. Pero las complicaciones más frecuentes derivadas de la propia fractura, como tales, son las siguientes: 1. Retraso o defectos en la consolidación.- Puede existir una consolidación lenta o una consolidación defectuosa, o incluso una consolidación en mala posición, o con acortamiento, con lo que el miembro fracturado no recuperará toda su función. 2. Rigidez articular.- Es una complicación frecuente, debida a la inmovilización prolongada de las articulaciones colindantes con la fractura. Estas articulaciones anquilosadas suelen necesitar de ejercicio y rehabilitación para recuperar toda su movilidad. En ocasiones aparecen zonas de miositis osificante, que son zonas de músculo que se transforman en hueso alrededor del foco de fractura, impidiendo un correcto funcionamiento muscular. Se produce más frecuentemente en el codo, aunque también en el hombro, cadera y rodilla. El tratamiento consiste en la extirpación de la masa ósea alojada en el músculo, entre 6 y 12 meses después de que ésta aparezca, aunque no siempre con buenos resultados. 2. Osteítis y osteomielitis: Son infecciones del hueso, más frecuentes en las fracturas abiertas (aunque raro, también pueden aparecer en fracturas cerradas, por diseminación de los gérmenes a través de la sangre). 3. Formación de un callo óseo (proceso normal de consolidación de una fractura) excesivamente grande, que puede comprimir las estructuras vecinas, causando molestias más o menos importantes. 4. Lesiones de los vasos sanguíneos, que pueden dar lugar a trombosis arteriales, espasmos vasculares y a la rotura del vaso, con la consiguiente hemorragia. Este tipo de lesiones puede provocar también gangrena seca, debida a la falta de irrigación del miembro afectado. 5. Estiramientos, compresiones y roturas nerviosas, que se pondrán de manifiesto con trastornos de la sensibilidad y alteraciones de la motilidad y la fuerza musculares. 6. Cuando la fractura ha sido articular, puede dejar como secuelas: artritis, artrosis y rigidez posterior de la articulación. DESCRIPCIÓN DE TECNICA QUIRURGICA CLAVO CENTROMEDULAR DE MÜLLER CONCEPTO Definición: Fijación ínter fragmentaria con clavo de Müller en tibia. PASOS PRINCIPALES 1. Incisión de piel en cresta anterior de tibia. 2. Disección de tejido fibroso 3. Retracción de Músculo y visualización de la fractura 4. Legra en foco de fractura e Irriga ANESTESIA Tipo de anestesia: BPD POSICIÓN Decúbito dorsal INSTRUMENTAL BÁSICO Equipo de cirugía general 2 Separadores de Richardson 2 Separadores de Farabeuf 2 Separadores de Benet Separadores de Omán 2 Cánulas de Yankauer Cable y electrodo (cuchillo) Cánula de Frazier No. 12 2 Jeringas asepto Equipo para asepsia INSTRUMENTAL ESPECIAL Pinzas de Verbrucher Equipo de clavos de Müller Pistola de Müller Clavos guías Elevador de periostio 3 Cucharillas Cizalla grande doble articulación Placa protectora de Baehler Punzón Árbol flexible con fresa fija de 9 mm con 36 mm de longitud Árbol flexible sin fresa fija y se coloca fresa de 9.5 mm a 12.5 mm Árbol flexible sin fresa de 13.0 mm a 19 mm con 36 mm de longitud Tubos medulares dé plástico rígido Placa semitubular de 1/2 de 5 orificios Conductor recto Tubo de conducción hueco Mango canutado para guiar el fresado Barra guía canutada para el mazo Mango de conducción para controlar la rotación Mango flexible (para sostener el tubo de conducción) Boquilla cónica con rosca para clavos de 9 a 11 Conductor curva para clavo de tibia Cabeza de percusión Gancho extractor de clavo de Müller Llave en T Llave Española Mazo de percusión (para introducir o extraer el clavo) Fresas manuales de 6, 7 y 8 Martillo Separador de Weitlaner Separador hohman Legra de Key Cinceles rectos ¼ y ½ Gubia doble articulación Legra de Alexander MATERIAL Perifix # 16/17 Punzocat Jeringas de diferentes medidas Huata Vendas elásticas Pasta conductiva Venoset Antibiótico (amikacina) Lápiz cauterio Guantes de varios números Cera para hueso Drenovak ¼ SUTURAS BÁSICAS Crómico atraumático 1-0 Dexon No. 1 Simple atraumático 2-0 Dermalón 3-0 ROPA Bulto cirugía mayor Campos extras Compresas de vientre Bata extra APARATOS ELECTROMÉDICOS Máquina de anestesia Aspirador de pared Electro cauterio y placa Tanque de Nitrógeno Negatoscopio Oxímetro Fluoroscopio Monitor cardiaco SOLUCIONES Isodine Espuma Isodine solución Solución fisiológica PROTOCOLO QUIRÚRGICO previo lavado mecánico de manos, se procede abrir la primera envoltura seguido de lavado quirúrgico de manos y secado de las mismas, se viste bata estéril y calzado de guantes estériles con técnica cerrada, se visten mesas de riñón, mayo y pasteur, se acomoda instrumental y material de esponjear estética y funcional, se hace conteo del mismo en coordinación con la enfermera circulante, se efectúa aseo de la región operatoria y colocación de cateterismo vesical, se viste paciente con ropa estéril, se cierra circuito estéril y se da inicio al acto quirúrgico, previa autorización del anestesiólogo. DESCRIPCIÓN DE LA TÉCNICA Cirujano Instrumentista Delimita campo operativo. Incisión de piel en cresta anterior de tibia. Incide tejido celular subcutáneo hasta aponeurosis superficial Hemostasia vasos sangrantes. 2 Compresas secas. Hoja # 20 montada en Mango de bisturí bard parker # 4. Hoja # 10 montada en mango de bisturí bar. parker # 3. Pinzas de Adson con dientes, electrodo activo Separación de bordes de herida quirúrgica. Separador de Farabeuf Disección de tejido fibroso Tijeras de Metzenbaum y pinzas Adson con dientes Separa bordes de piel Separador de Weitlaner Retracción de Músculo y visualización de la fractura Separador de Hohman Desperiostizacion Legra de Alexander Limpieza en foco de fractura Cucharillas Irrigación de cavidad jeringa Asepto con suero fisiológico antibiótico amikacina Aspiración de herida quirúrgica Cánula de Yankawer y Gasa Toma la tibia del extremo proximal de la fractura Pinzas de Verburger Legra en foco de fractura e Irriga Hace la reducción movilizando la tibia Cucharilla grande, Suero fisiológico en jeringa asepto pinza de Verbruger Fijación provisional de la fractura y reducción de la misma. Placa semi tubular de 1/2 caña Incisión en piel de 6 cm de largo en tendón rotutivo a nivel de interlínea articular ler Bisturí No. 23 en Mango No. 4 Incide aponeurosis superficial 2o. Bisturí No. 22 en Mango No. 4 Hemostasia vasos sangrantes Pinzas de Adson con dientes y cable de Electrocoagulación Desperiostiza Legra fina de Key Inicia con punzón protegiendo la piel con protector de Boleree Punzón y protector de Boleree Continúa rimando Termina de rimar Fresa Manual No. 6 Fresa Manual No. 7 y 8 Introduce en el(conducto) centro medular Guía con oliva Rima conducto según el grosor del clavo de Muiller Pistola de Muíller conectado con árbol flexible con fresa fija de 9 mm flexible con broca cambiable desde 9.5 Irrigación de conducto medular y limpieza Asepto jeringa c/suero fisiológico y antibiótico (amikacina), Gasa Colocación del conducto medular Colocación del clavo medular Tubo medular de plástico rígido Clavo según el que se haya seleccionado y se da al armado Pide toma de radiografía Una vez que esté el clavo en su forma correcta, verificando con la toma de radiografías se procede a cerrar en planos) Pide chasis para radiografía se envuelve en sábana simple Se pide cuenta (textil) Se pide cuenta de gasas y compresas Sutura aponeurosis con puntos separados Dexon No. 1 en porta agujas de mayo Hegar, pinzas de Adson c/d. corte de cabos de sutura tijeras de Mayo rectas Sutura tejido celular subcutáneo Catgut Simple 2-0 montado en porta agujas mayo hegar, pinza hadrón c/d. Corte de cabos de sutura Tijera mayo rectas Sutura piel con puntos separados Nylon 3-0 montado en porta aguja mayo hegar, pinza adson c/d. Corta cabos de sutura. Limpia, seca y cubre herida quirúrgica. Tijera mayo recta Apósito, benjuí, micropore VALORACIÓN RESUMEN CLÍNICO DE ENFERMERÍA C.V. paciente masculino de 18 años de edad, soltero con escolaridad a nivel bachillerato, religión católica y de ocupación obrera. Ingresa al hospital el día 28 de febrero del presente año, al servicio de Traumatología a la cama número 8 por fractura expuesta de miembro inferior izquierdo a causa de accidente de tránsito (motocicleta). Entre los antecedentes personales de importancia se encuentra padecimiento de asma desde los 8 años de edad y en los antecedentes heredofamiliares diabetes mellitus por parte de la abuela. El diagnostico medico actual es de “Fractura Abierta Diafisiaria de Tibia y Peroné” y le tratamiento médico consiste en: Omeprazol 40 mg IV, Vancomicina IV 500 mg c/12 hrs, Dalacin IV 600 mg c/12 hrs, Ketorolako IV 100 mg c/8hrs y Dipirona IV 100 mg c/6 hrs, toma de signos vitales por turno, ayuno hasta nuevo aviso y cuidados generales de enfermería. Datos significativos por patrones funcionales de salud: I. PATRÓN PERCEPCIÓN/ MANTENIMIENTO DE SALUD Casa-habitación con higiene adecuada, hábitos higiénicos personales aceptables, alteración física por fractura expuesta de miembro inferior izquierdo a causa de accidente de transito, refiere percepción de estado de salud como “bueno ignorando la fractura”. Comenta tener interés por el cuidado de la salud a pesar de no tener una asistencia periódica al medico. Alergia positiva al polvo y niega toxicomanías. II. PATRÓN NUTRICIONAL METABÓLICO Presenta hipertermia mostrando 37.5° C, una pequeña elevación de la glucosa con 115 mg/dl, presencia de cicatrices a nivel abdominal y partidura de pieza dentaria premolar izquierda en arcada superior. La alimentación habitual es de tres veces al día; variada, completa, adecuada e inocua, la ingesta habitual de líquidos diarios aproximadamente la misma en hospitalización. es de 1000 a 1,500 ml, siendo III. PATRÓN DE ELIMINACIÓN Presenta ardor a la micción, sin evacuación desde hace 11 días presentando un peristaltismo intestinal disminuido. IV. PATRÓN ACTIVIDAD/ EJERCICIO Presenta frecuencia cardiaca de 60 pulsaciones por minuto, tensión arterial de 110/80 mm Hg, flacidez en músculos a nivel de miembros superiores e inferiores y limitación del movimiento por fractura en tibia y peroné de miembro inferior izquierdo. V. PATRÓN REPOSO / SUEÑO Presenta cansancio, postura de cansancio, ojeras, palidez, indiferencia, refiere dificultad para conciliar el sueño por falta de adaptación al ambiente hospitalario durmiendo de 4 a 5 horas en 24 horas. VI. PATRÓN COGNITIVO/ PERCEPTUAL Presenta actitud irritable, los familiares expresan tener información acerca de la enfermedad y cuidados del paciente pero refieren dificultad para por miedo a lastimarlo. VII. PATRÓN AUTOIMAGEN/ AUTOCONPCETO Presenta irritabilidad y desesperación por su limitación física por lo que en los cuidados de enfermería se muestra poco colaborador, le preocupa su falta de actividad y teme a que la fractura no consolide adecuadamente. VIII. PATRÓN ROL/RELACIONES Presenta cambios en el estado de ánimo, dificultad en la participación, dificultad para demostrar afecto a sus familiares y existencia de sentimiento de pérdida por la fractura en su miembro inferior izquierdo. IX. PATRÓN SEXUALIDAD/ REPRODUCCIÓN Ausencia de conocimientos acerca de autoexamen testicular, por consiguiente no se lo realiza. X. PATRÓN AFRONTAMIENTO/ ESTRÉS Presenta inquietud, cambios en su estilo de vida debido a su estancia hospitalaria, dificultades por parte de los familiares para afrontar el problema de salud del usuario por no saber totalmente como apoyarlo ante la situación y existencia de desesperación por parte del usuario para afrontar su problema. XI. PATRÓN VALORES/ CREENCIAS Refiere no practicar su religión (católica), pero expresa no tener conflictos internos por ello. DIAGNOSTICOS DE ENFERMERIA 1. Estreñimiento relacionado con actividad física insuficiente, disminución de la motilidad del tracto gastrointestinal manifestado por disminución de la frecuencia (aproximadamente 11 días sin evacuar). Pag. 102 2. Dolor agudo relacionado con agentes lesivos (fractura abierta tibia y peroné) manifestado por mascara facial observación de evidencias de dolor, conducta expresiva inquietud, gemidos e informe verbal de dolor. P. 349 3. Deterioro de la integridad cutánea relacionado con inmovilización física manifestado por destrucción de las capas de la piel, alteración de la superficie de la piel. P. 310 4. Deterioro de la movilidad física relacionado con fractura expuesta, ansiedad, deterioro del estado físico, manifestado por limitación de la amplitud de movimientos, facias de dolor y disminución del tono muscular. p.127 5. Deprivación del sueño relacionado con cambio de las etapas de sueño, malestar prolongado, persistencia de un entorno para el sueño incomodo o desconocido manifestado por ansiedad, incapacidad para concentrarse, malestar. P. 115 6. Trastorno del patrón del sueño relacionado con falta de intimidad, iluminación, ruido, mobiliario desconocido en el dormitorio manifestado por cambio en el patrón normal del sueño e informe de haberse despertado. Pag. 118 7. Deterioro de la ambulación relacionado con deterioro del estado físico, deterioro del equilibrio, fuerza muscular insuficiente, dolor manifestado por deterioro de la habilidad para subir y bajar escaleras, para caminar distancias requeridas, para subir y bajar una rampa y para caminar sobre superficies irregulares. Pag. 121 8. Riesgo de infección relacionado con defensas primarias inadecuadas (rotura de la piel, alteración del peristaltismo), procedimientos invasivos herida quirúrgica, catéter, sonda vesical), traumatismo, destrucción tisular y aumento de la exposición ambiental a agentes patógenos. Pag. 303 9. Riesgo de baja autoestima situacional relacionado con trastorno de la imagen corporal, enfermedad física, cambios en el rol social. Pag. 193 10. Deterioro de la movilidad en cama relacionado con deterioro del estado físico, limitaciones ambientales, falta de fuerza muscular, dolor manifestado por deterioro de la habilidad de pasar a la posición supina a sentada, deterioro de la habilidad para pasar de la posición supina a prona, deterioro de la habilidad para pasar de la posición supina a sentada con piernas estiradas, deterioro para cambiar de posición por sí mismo en la cama. Pag. 124 11. Ansiedad relacionado con angustia, irritabilidad, dolor, trastornos del sueño, preocupación manifestado por expresión de preocupaciones debidas a cabios en acontecimientos vitales. Pag. 251 12. Déficit de autocuidado: baño/higiene relacionado con incapacidad para entrar y salir del baño, para secarse el cuerpo, lavar total o parcialmente el cuerpo manifestado por deterioro musculoesquelético, dolor y ansiedad grave. JERARQUIZACIÓN DIAGNÓSTICOS ENFERMEROS SEGÚN PIRAMIDE DE KALISH Auto realización Estima 6.AUTOREALIZACION Auto estima 5. ESTIMA Type equation here. Amor Seguridad Sexo Alimento Aire Pertenen cia Protección Acercamiento Ausencia de riesgo 4. AMOR Y PERTENENCIA 3. SEGURIDAD Actividad Explora- Manipula Novedad 2. ESTIMULO cion cion Innovación Agua Temperatura Eliminación Reposo Evitación 1. SUPERVIVENCIA Descanso del dolor 1. Supervivencia Dolor agudo relacionado con agentes lesivos (fractura abierta tibia y peroné) manifestado por mascara facial observación de evidencias de dolor, conducta expresiva inquietud, gemidos e informe verbal de dolor. P. 349 Estreñimiento relacionado con actividad física insuficiente, disminución de la motilidad del tracto gastrointestinal manifestado por disminución de la frecuencia (aproximadamente 11 días sin evacuar). Pag. 102 Deprivación del sueño relacionado con cambio de las etapas de sueño, malestar prolongado, persistencia de un entorno para el sueño incomodo o desconocido manifestado por ansiedad, incapacidad para concentrarse, malestar. P. 115 Trastorno del patrón del sueño relacionado con falta de intimidad, iluminación, ruido, mobiliario desconocido en el dormitorio manifestado por cambio en el patrón normal del sueño e informe de haberse despertado. Pag. 118 2. Estimulo Deterioro de la movilidad física relacionado con ansiedad, perdida de la integridad de las estructuras óseas, deterioro del estado físico, dolor manifestado por limitación de la amplitud de movimientos. Deterioro de la ambulación relacionado con deterioro del estado físico, deterioro del equilibrio, fuerza muscular insuficiente, dolor manifestado por deterioro de la habilidad para subir y bajar escaleras, para caminar distancias requeridas, para subir y bajar una rampa y para caminar sobre superficies irregulares. Deterioro de la movilidad en cama relacionado con deterioro del estado físico, limitaciones ambientales, falta de fuerza muscular, dolor manifestado por deterioro de la habilidad de pasar a la posición supina a sentada, deterioro de la habilidad para pasar de la posición supina a prona, deterioro de la habilidad para pasar de la posición supina a sentada con piernas estiradas, deterioro para cambiar de posición por sí mismo en la cama. Deterioro de la habilidad para la traslación relacionado con deterioro musculoesqueletico y dolor manifestado por incapacidad para trasladarse entre dos superficies desiguales, de la cama a la silla, hasta el inodoro y levantarse dela cama y ponerse de pie. Déficit de autocuidado: baño/higiene relacionado con incapacidad para entrar y salir del baño, para secarse el cuerpo, lavar total o parcialmente el cuerpo manifestado por deterioro musculoesquelitico, dolor y ansiedad grave Riesgo de síndrome de desuso relacionado con inmovilización mecánica y dolor grave. 3. Seguridad Riesgo de infección relacionado con defensas primarias inadecuadas (rotura de la piel, alteración del peristaltismo), procedimientos invasivos herida quirúrgica, catéter, sonda vesical), traumatismo, destrucción tisular y aumento de la exposición ambiental a agentes patógenos. Deterioro de la integridad cutánea relacionado con inmovilización física manifestado por destrucción de las capas de la piel, alteración de la superficie de la piel. Riesgo de caídas relacionado con disminución de la fuerza en las extremidades inferiores, dificultad en la marcha y deterioro de la movilidad física. 4. Amor y pertenencia No existe diagnostico afectado 5. Estima Riesgo de baja autoestima situacional relacionado con trastorno de la imagen corporal, enfermedad física, cambios en el rol social. Ansiedad relacionado con angustia, irritabilidad, dolor, trastornos del sueño, preocupación manifestado por expresión de preocupaciones debidas a cabios en acontecimientos vitales. 6. Autorrealización No existe diagnostico afectado PLAN DE CUIDADOS CONCLUSION El proceso de atención enfermero es un método sistemático de gran importancia dentro del cual se encuentran inmersos la realización de diagnósticos e intervenciones de enfermería, la herramienta principal para otorgar un servicio de calidad, además de poder evaluar la evolución y así modificar la estrategia o continuar con ella, para lograr los objetivos buscados. Al aplicar el PAE con un paciente con diagnóstico de fractura expuesta de tibia y peroné, se ha logrado reforzar los conocimientos referentes a la patología y cuidados de enfermería que requiere un paciente en dicho estado, brindando así una atención integral y profesional, para realizar cambios significativos en la vida y salud del usuario. SUGERENCIAS Realizar el Proceso Atención Enfermero (PAE) con un paciente real, el cual se elija mediante una visita a la clínica que sea de elección. Las asesorías deberían de ser mayormente de forma personal, para obtener una mejor comprensión de las modificaciones sugeridas y no virtual (wikispace). Las instrucciones en cuanto a fechas de envío de los adelantos debería de ser más clara, ya que en esta ocasión existieron varias confusiones, tanto como grupal como personal. Todos los coordinadores de la escuela, deberían de realizar y pedir el PAE de una misma manera en cuanto a su forma de elaboración, para no confundir al alumnado. ANEXOS REHABILITACION DE PACIENTE CON FRACTURA EXPUESTA Rehabilitación primaria, secundaria y terciaria. En este caso se utiliza la rehabilitación secundaria. Objetivos: Preservar la función del paciente amenazada por una lesión. Prevenir las complicaciones secundarias. Planificación: Tratamiento postural para evitar complicaciones secundarias (vicio de marcha). Estimulación del lado indemne. Conservación optima del rango de movilidad articular. Normalización propioceptiva. Facilitación de las reacciones de equilibrio. Entrenamiento de actividades integradas (Transferencias y bipedestación). Promover patrones estáticos de marcha. Marcha con desplazamiento. Eje III: Técnicas Kinésicas. Subtemas: Movilizaciones. Fisioterápia. Movilizaciones. En este caso se realizaron con el fin de tonificar y restaurar los tejidos lesionados, desarrollar la fuerza, la resistencia, la coordinación, la amplitud del movimiento y la velocidad. Explicaré brevemente la movilización realizada para este caso en particular. Movilización libre – estática: Se realizó esta movilización cuando el paciente tenía colocado un yeso o también cuando tenía un tutor externo. En esta movilización no hay desplazamiento. Se realiza con el fin de que el paciente pueda contraer sus músculos y de ese modo disminuir la inflamación de su pie. Movilización activa – asistida: Se realizó esta movilización ya que el paciente, a raíz de la pérdida de masa muscular luego de una cirugía no completaba el arco del movimiento. Con el transcurso del tiempo y una vez que el paciente ya está en condiciones de apoyar la pierna, realizó ejercicios en las barras laterales con el fin de completar el arco del movimiento venciendo la gravedad y evitando complicaciones. Movilización activa – resistida: Se realizó esta movilización luego de que el paciente haya evolucionado favorablemente a las anteriores movilizaciones. A esta altura el paciente posee mayor desplazamiento y se realiza para aumentar la resistencia. Realiza movimiento de flexión - extensión, aducción - abducción ejercicios con aparatos como por ejemplo polea, etc. Fisioterápia. En este caso se utilizaron los siguientes mecanismos físicos que son: Onda corta. Ultrasonido. Electroestimulación. Laserterápia. Magnetoterapia. -Onda corta: Solo al final del tratamiento, y para ayudar a mejorar la movilidad, aprovechando el efecto joule (calor). No así en un principio, ya que está contraindicada cuando hay implantes metálicos, u osteosintesis. Tampoco tiene efecto para la consolidación de la fractura. -Ultrasonido: Se utiliza en la parte aguda para disminuir la inflamación y el dolor , NO en la zona de la fractura, sino en las adyacencias con intensidades baja (entre 0,5 y l,5 vatios por centímetro cuadrado) y con modalidad pulsante. La duración del tratamiento es de 5 a 10 minutos dependiendo de la zona a tratar. En la fase sub. Aguda se utiliza para producir calor en profundidad. (Cuando la fractura ya está consolidada) para mejorar la rigidez articular. -Electroestimulación: Se utilizó para favorecer la reeducación del trabajo muscular. Para favorecer la contracción del bombeo muscular y para mejorar la atrofia muscular. Para la reeducación muscular hay que tener en cuente que la contracción debe ser adecuada pero cómoda, la duración del pulso debe ser entre 30 a 40 pulsos por segundos. Las contracciones de bombeo muscular se realizan para ayudar al retorno venoso y así disminuir el edema. - Laserterapia: Indicado por su efecto analgésico trabajándolo en forma puntual y por sistema de barrido. En forma puntual en la zona de dolor o utilizando los puntos de acupuntura, y en forma de barrido en toda la zona a tratar. Según la potencia y la intensidad la duración del tratamiento varía entre 5 a 10 minutos. -Magnetoterapia: Se aprovecha por su reconocido efecto benefactor de consolidación de las fractura (ya que favorece la osteogénesis) y regeneración de tejidos. BIBLIOGRAFÍA 1. Merck S. Manual de Merck de información médica para el hogar. Editorial Océano, 1ª. Edición en español. Barcelona, España 2007 pp. 264-265. 2. Resnick. Kang Trastornos Internos de las Articulaciones. Editorial Panamericana, 1ª Edición. Argentina 200 pp. 80 3. Barbosa Pérez Martha Alicia Técnicas Quirúrgicas de Enfermería. Tijuana, México. Pág. 166-170 4. Bertha A.Rodriguez Proceso Enfermero. Editorial Cuellar, edición 2002. Mexico pp.207-209 5. T.Heather, Crystal Heath, G.Meyer Diagnósticos Enfermeros: Definiciones y Clasificación NANDA. Editorial Elsevier edición 2007-2008. Estados Unidos pp. 102, 310, 127, 118, 115, 349, 121,303, 193, 124, 251 6. Lynda Juall Carpenito Diagnósticos de Enfermería Aplicación a la práctica clínica 9na edición. Editorial Interamericana McGraw Hill. Madrid 2003 pp. 350356, 412-418. 7. Silverman. Varanoa. Ortopedía y Traumatología. Editorial Panamericana. 2da Edición. Argentina. Pág. 3, 281-302. 8. Kozier B., Glenora B. Aurey B. Shirlee S., Fundamentos de Enfermería Ed. Mcgraw. 7ma edición. Vol I y II. España, 2004. p.p. 1350-1357, 702. 9. Rosales S. Fundamentos de Enfermería. Ed. Manuel Morenos. 3era edición, México, 2004. P.p. 131-133, 281 y 290.