La tutoría en Educación Primaria – María Josefa Martín Pellejero – ISSN: 1989-9041, Autodidacta © LA TUTORÍA EN EDUCACIÓN PRIMARIA María Josefa Martín Pellejero Diplomada en magisterio de Educación Primaria [email protected] 1.-INTRODUCCIÓN Las actividades de tutoría en los centros docentes no son nuevas. En realidad son tan antiguas como la misma actividad docente. Los profesores siempre han orientado y ayudado a sus alumnos, o al menos siempre lo han intentado. En este sentido la tutoría ha existido siempre, si bien a nivel informal, no institucionalizado. Situándonos en el tiempo próximo pasado, podemos encontrar en el ordenamiento legal educativo de nuestro país precedentes institucionales de lo que hoy se entiende por tutoría. A lo largo de estas disposiciones la tutoría se ha ido perfilando como respuesta, por un lado a la necesidad de contrarrestar los inconvenientes que supone, tanto para el grupo de la clase en cuanto grupo como para cada alumno en particular, el desfile interrumpido de los distintos profesores especialistas. Por otro lado, a la necesidad de hacer operativo en la realidad y a todos los niveles escolares el principio general de que la educación, además de instrucción, también es ayuda. Sin embargo hay que reconocer que esta institucionalización “de jure” no está teniendo debido correlato en la actividad diaria de los centros docentes. Sin duda a ello contribuye el hecho de que la estructura actual de la carrera docente no proporciona al candidato a profesor una información en relación con la labor tutorial que habrá de realizar. Por tanto, para dar respuesta a la pregunta ¿es necesaria la tutoría? es preciso que nos planteemos previamente el tipo de educación que queremos para nuestro alumnado. Si pensamos en un tipo de educación que dé respuesta al desarrollo integral de todas sus potencialidades, es decir, que no se centre en un sector, en una parcela del individuo, como puede ser la mera instrucción o transmisión de conocimientos, y si tenemos en cuenta que ello requiere la puesta en práctica de programas de prevención, entonces, sí, la tutoría es esencial en el proceso educativo. 2.-LA TUTORÍA EN LA EDUCACIÓN PRIMARIA La definición de tutoría en educación tiene varias descripciones: Lázaro y Asensi la define como "es la actividad inherente a la función del profesor, que se realiza de 21 La tutoría en Educación Primaria – María Josefa Martín Pellejero – ISSN: 1989-9041, Autodidacta © forma individual y colectivamente con los alumnos de un grupo clase, con el fin de facilitar la integración personal en los procesos de aprendizaje". Otra definición en la misma línea, nos comenta que: "la tutoría es una acción sistemática, específica, concretada en un tiempo y un espacio en la que el alumno recibe una especial atención, ya sea individual o grupalmente, considerándose como una acción personalizada". De ambas definiciones podemos sacar la conclusión de que la tutoría, reúne las siguientes especificaciones: Contribuye a la educación integral. Ajusta la respuesta a las necesidades particulares. Orienta el proceso de toma de decisiones ante los diferentes itinerarios de formación y las diferentes opciones profesionales. Favorecer las relaciones en el seno del grupo como elemento de aprendizaje cooperativo y de socialización. Contribuye a la adecuada relación e interacción de los integrantes de la comunidad educativa. Actualmente, la figura del tutor va adquiriendo cada día una mayor precisión. El diccionario de la lengua lo define como “un consejero o guía de otro que le sirve de apoyo”. Algunos autores definen al Tutor como: - Artigot define al tutor como “Es un profesor que se encarga de atender diversos aspectos que no quedan cuidados de forma suficiente dentro de las clases”. - Sánchez define tutoría como” la acción de ayuda u orientación al alumno que el profesor puede realizar, además, y en paralelo, en su propia acción docente”. El tutor sirve al alumnado de guía en su escolaridad, en su maduración personal y en la búsqueda de su camino en su vida, además es un referente privilegiado como consejero e integrador de experiencias. 3.-FUNCIONES DEL TUTOR Las funciones que debe desarrollar el tutor para el alumnado de Educación Primaria están contempladas en la ley en el Título III; Cap. I, Art. 91. Éstas son: La programación y la enseñanza de las áreas, materias y módulos que tengan encomendados; la evaluación del proceso de aprendizaje del alumnado, así como la evaluación de los procesos de enseñanza; la tutoría de los alumnos, la dirección y la orientación de su aprendizaje y el apoyo en su proceso educativo, en colaboración con las familias; la orientación educativa, académica y profesional de los alumnos, en colaboración, en su caso, con los servicios o departamentos especializados; la atención al desarrollo intelectual, afectivo, psicomotriz, social y moral del alumnado; la promoción, organización y participación en las actividades complementarias, dentro o fuera del recinto educativo, programadas por los centros; la contribución a que las 22 La tutoría en Educación Primaria – María Josefa Martín Pellejero – ISSN: 1989-9041, Autodidacta © actividades del centro se desarrollen en un clima de respeto, de tolerancia, de participación y de libertad para fomentar en los alumnos los valores de la ciudadanía democrática; la información periódica a las familias sobre el proceso de aprendizaje de sus hijos e hijas, así como la orientación para su cooperación en el mismo; la coordinación de las actividades docentes, de gestión y de dirección que les sean encomendadas; la participación en la actividad general del centro; la participación en los planes de evaluación que determinen las Administraciones educativas o los propios centros; y la investigación, la experimentación y la mejora continua de los procesos de enseñanza correspondiente. Los profesores realizarán las funciones expresadas en el apartado anterior bajo el principio de colaboración y trabajo en equipo. La tarea tutorial la debe realizar todos los maestros, y cuyas características son la de ser integradora, equilibradora, personalizante, complementadora de la docencia en general. Destacar esta función básica de todo maestro supone afirmar que educar no es solamente instruir, transmitir conocimientos o procedimientos, sino también fomentar y promover el desarrollo integral de cada individuo. Principalmente las funciones de la acción tutorías recae en: Tutor: El tutor sirve a los alumnos como guía en su escolaridad, en su maduración personal o desarrollo de su personalidad y en la búsqueda de su camino en la vida. La función tutorial, es una actividad orientadora que realiza el tutor, vinculada estrechamente al propio proceso educativo y a la práctica docente, dentro del marco de la concepción integral de la educación. El tutor es quien coordina la acción tutorial, responsable y referente de la dinámica orientadora. Coordina y desarrolla la acción tutorial mediante una estrecha correlación con el resto de profesionales. Equipo docente: Nos referimos a los profesores que imparten clase a ese grupo clase y comparten la acción tutorías con dicho tutor. Orientador: Es el especialista en psicología y pedagogía. Será quien dinamice, colabore y ayude al tutor en su acción orientadora. Alumnos: Son los destinatarios, elementos activos y participativos de la acción tutorías. Padres: Responsables de la educación de sus hijos que han de mantener estrecha relación con el tutor y resto de profesores. Su actitud en esta tarea formativa es un factor determinante para el aprendizaje de sus hijos. 4.-EL PERFIL DEL TUTOR Lázaro y Asensi afirman que todo profesor es un tutor y que la tutoría incide en los aspectos del ambiente escolar que condicionan la actividad del estudiante y sus realizaciones de éxito o fracaso. Para determinar más en concreto el perfil del tutor, vamos a hacerlo desde varios aspectos como: conocimientos básicos, características personales, las habilidades que ha de tener, sus actitudes y sus cualidades. En principio, el perfil ideal de un tutor requeriría para cada uno de los factores señalados el cumplimiento de los atributos que a continuación se indican. El tutor debe poseer un conocimiento básico de la disciplina, de la organización y normas de la institución, del plan de estudios de la carrera, de las dificultades académicas más comunes de la población escolar, así como de las actividades y 23 La tutoría en Educación Primaria – María Josefa Martín Pellejero – ISSN: 1989-9041, Autodidacta © recursos disponibles en la institución para apoyar la regularización académica de los alumnos y favorecer su desempeño escolar. En cuanto a las características personales, el tutor debe ser una persona responsable, con clara vocación para la enseñanza, generoso para ayudar a los alumnos en el mejoramiento de sus experiencias académicas y con un código ético. Según las habilidades básicas que debe poseer un tutor, pueden citarse la habilidad para organizar lógicamente el trabajo académico, la capacidad para desempeñarse con disciplina y escuchar con atención los planteamientos de los alumnos. Por último, en cuestión de actitudes un tutor debe demostrar interés genuino en los alumnos, facilidad para interactuar con ellos, respeto, y sin duda, compromiso con su desarrollo académico. 5.- RELACIÓN CON EL EQUIPO DOCENTE El tutor actúa coordinadamente con otros tutores y sobre todo los de su mismo ciclo o curso, gracias a la labor del Jefe de Estudios, encargado institucionalmente de coordinar las funciones de la tutoría y a través del coordinador del Equipo de Ciclo que tiene como función, entre otras, la de “coordinar las funciones de tutoría de los alumnos de ciclo” Partiendo del principio de que las tareas de ayuda y orientación al alumno no corresponden en exclusiva al tutor sino que, deben ser asumidas por todo el equipo de profesores que atiende a un mismo grupo, podemos afirmar que los profesores especialistas (Educación Física, Música, Lengua Extranjera) también tienen funciones tutoriales que cumplir. En este sentido será de gran interés plantear un trabajo cooperativo que logre unos mismos fines para consolidar un trabajo sistemático y conjunto que tenga un reflejo claro en los comportamientos del alumnado. Así, es importante: Realizar un análisis conjunto de los principios de intervención educativa. Buscar procedimientos y actitudes que, debido a su carácter transversal, sean comunes a las distintas áreas y permitan establecer fórmulas de conexión que hagan posible la globalización en los procesos de enseñanza y aprendizaje. Estudiar y buscar acuerdos en las normas de evaluación sobre qué, cómo y cuándo se debe evaluar. El tutor deberá también relacionarse con la Unidad de Orientación en la prevención y detección temprana de problemas de aprendizaje, así como en la programación y aplicación de las adaptaciones curriculares o medidas de atención a la diversidad que sean necesarias. La Unidad debe ofrecer un apoyo permanente que ayude a establecer medidas de atención a la diversidad y a desarrollar estrategias que permitan una intervención educativa adaptada a los alumnos escolarizados. En relación estrecha con la Unidad de Orientación se encuentran los maestros y maestras de apoyo a la Integración del Centro que actúan de forma constante en los grupos de alumnos donde así es necesario. Nos referimos concretamente a los 24 La tutoría en Educación Primaria – María Josefa Martín Pellejero – ISSN: 1989-9041, Autodidacta © especialistas de Pedagogía Terapéutica y Audición y Lenguaje que desarrollarán funciones de asesoramiento (metodología, materiales, etc.) y apoyo a la docencia e, incluso en ocasiones, desempeño de funciones docentes directas con los alumnos. Por último y para terminar, también el tutor precisa coordinarse con otros profesionales que intervienen en su grupo de alumnos. En este caso, además de los ya citados, nos referimos a especialistas que pueden estar presentes en Centros que por demandas y necesidades específicas, cuentan con una dotación de personal muy concreta. 6.-COLABORACIÓN CON LAS FAMILIAS Una de las funciones principales de tutoría es asegurar la conexión de la educación familiar y escolar; favoreciendo la participación de los padres en la educación de los hijos de manera coordinada con la escuela. Es una coordinación no siempre fácil. Implicar a los padres conlleva no sólo un acto de voluntad, sino también la puesta en práctica de una serie de acciones frecuentemente trabajosas y de rendimiento no siempre inmediato. Es preciso, estar convencidos de la necesidad de colaboración entre profesores y padres para la educación de los alumnos –respectivamente; hijos- en esta etapa. Los principales medios a través de los cuales los maestros pueden conseguir y favorecer la cooperación de los padres en la educación de sus hijos son las entrevistas personales con madres y padres y las reuniones colectivas con ellos. Por otra parte, además, al analizar qué es razonable esperar de la implicación de los padres y cómo es posible lleva a cabo esa implicación, conviene reflexionar brevemente sobre qué ilusiones se deben evitar. Concretamente, la participación de los padres debe plantearse como un proceso gradual, en el que cada avance ha de consolidarse y evaluarse antes de pasar al siguiente. Lo que se puede esperar de la participación de padres y madres varía, pues, enormemente, según el momento en que se encuentre el proceso de implicación. En ese proceso se pueden diferenciar dos aspectos en los que deseablemente los padres pueden implicarse con actividades diferentes: el intercambio de información y la participación directa. La importancia de la colaboración entre los adultos que inciden sobre el desarrollo de los niños. Entre la familia y el centro escolar debe existir una estrecha comunicación, ya que ambos conjuntamente con el grupo inciden en el proceso educativo del alumno, y únicamente la confluencia de información y orientación sobre la situación familiar y escolar permitirá tener una visión completa de los alumnos. Las influencias que confluyen en el alumno ejercidas tanto por la familia como por la escuela pueden contraponerse o potenciarse. De ahí la importancia de una adecuada coordinación centro escolar-familia, para conseguir que lo que el centro escolar valore no lo desprecie la familia y los criterios educativos sean similares. Para propiciar esta relación y esta actitud positiva por parte de los padres respecto al centro escolar, el tutor tiene el recurso de la realización de las tareas propias 25 La tutoría en Educación Primaria – María Josefa Martín Pellejero – ISSN: 1989-9041, Autodidacta © de su función, ya que es a través de su relación con el tutor, como los padres participan y colaboran con el centro. Por lo tanto, la relación de colaboración con las familias va a ser bidireccional: Por un lado, las familias habrán de colaborar estrechamente y deberán comprometerse con el trabajo cotidiano de sus hijos y con la vida de los centros docentes. Por otro lado, el profesorado tiene la obligación de informar de forma periódica a las familias sobre el proceso de aprendizaje de sus hijos e hijas, así como la orientación para su cooperación en el mismo. 7.-CONCLUSIÓN La función tutorial, es una actividad orientadora que realiza el tutor, vinculada estrechamente al propio proceso educativo y a la práctica docente, dentro del marco de la concepción integral de la educación. Para cubrir esta necesidad orientadora, es preciso potenciar la figura del tutor en todas las etapas y modalidades educativas, como parte integrante e inseparable del propio proceso educativo. Por lo que la acción tutorial es esencial para un buen desarrollo de enseñanza-aprendizaje. BIBLIOGRAFÍA Ley Orgánica de Educación 2/2006, 3 Mayo. ARTIGOT (1973): La Tutoría. Madrid: ICE, UCM y CSIC. Sánchez Sánchez Serafín (1979): La tutoría en los centros docentes. Escuela Española S.A.. Madrid. LÁZARO y ASENSI (1987): Manual de Orientación Escolar y Tutoría. Madrid: Narcea. SÁNCHEZ (1978): La tutoría en los centros docentes. Madrid: Escuela Española. www.educarex.es www.orientared.com 26