La problemática urbana ----j ~- • -~ de la Ciudad de éxico MIGUEL ÁNGEL VITE PÉREZ* E 1 objetivo de este ensayo es reflexionar acerca de la problemática urbana de la Ciudad de México, en particular sobre la falta de vivienda para atender la demanda no solvente, lo cual se vincula con el bienestar social, ya que aquélla es parte de las condiciones materiales que reclama la población para acceder a un mejor nivel de vida. El otro tema vinculado es el de la planeación urbana, es decir, la reconfiguración del espacio mediante el establecimiento de prohibiciones para la construcción de viviendas en las áreas clasificadas como de reserva o conservación ecológica y también con la instrumentación de medidas orientadas a revalorizar el centro histórico de la Ciudad de México para transformarlo en una zona de recreo y turismo. Esto es lo que ha caracterizado la nueva planeación urbana: la revalorización del área histórica de la capital mexicana. Estas reflexiones no intentan evaluar las medidas del gobierno local en los ámbitos señalados sino tan solo señalar algunos cambios realizados por un gobierno electo, comprometido con los pobres, en la gestión pública para cumplir los objetivos de desarrollo social. Ello sucede en una situación caracterizada por la pobreza y la precariedad que han provocado la urgencia de medidas de gobierno para dar solución a los rezagos por medio de la promoción de respuestas, más que por la creación de éstas, desde las instituciones gubernamentales. * Doctor en sociología por la Universidad de Alicante, España <[email protected]>. 788 COMERCIO EXTERIOR, VOL. 55, NÚM. 9, SEPTIEMBRE DE 2005 • LA VIVIENDA P ara la atención a los bolsones de pobreza el jefe de gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, estableció los siguientes programas: 1) apoyo a personas con discapacidad en situaciones de abandono y pobreza, que consiste en otorgarles una beca de 600 pesos mensuales, así como servicio gratuito de transporte administrado por el gobierno de la Ciudad de México (metro, trolebús y tren ligero); 2) becas por igual monto para niños en situaciones de vulnerabilidad debido a que pertenecen a hogares donde las mujeres son jefas de hogar (madres solteras); la ayuda tiene como finalidad prevenir la deserción escolar otorgando desayunos escolares en las escuelas públicas de las colonias populares; 3) microcréditos para el autoempleo y la capacitación de adultos desempleados de 40 a 55 años de edad, y 4) créditos para el mejoramiento de la vivienda y en menor medida para su edificación, pero sólo en lote de propiedad familiar. 1 Esto último es resultado del bando número 2, en vigor desde diciembre de 2000, 2 en el que López Obrador estableció una prohibición para la edificación de vivienda en 12 de las 16 delegaciones políticas, de manera que sólo está permitido levantar viviendas en las cuatro delegaciones centrales (Benito Juárez, Cuauhtémoc, Miguel Hidalgo y Venustiano Carranza), en las que paradójicamente el precio 1. Andrés Manuel López Obrador, Primer Informe de Gobierno del Distrito Federal, mimeo., México, 2001, pp. 120-123. 2. El artículo 115 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos establece las bases político-administrativas de organización de los municipios y en su fracción 11 señala que los ayuntamientos, con la participación de las legislaturas de los estados, están facultados para expedir decretos y demás disposiciones administrativas, de observancia general. Sin embargo, para el caso de la Ciudad de México, los órganos político-administrativos llamados delegaciones todavía no funcionan como municipios, a pesar de que en 2000 se eligieron por tres años a sus respectivos delegados. Asimismo, el jefe de gobierno no sólo tiene una responsabilidad compartida con el ejecutivo federal respecto a los nombramientos del procurador de justicia del Distrito Federal y del secretario de seguridad pública, sino que se enfrenta a varias limitaciones para ejercer su puesto. Por ejemplo, la Cámara de Diputados decide el tope de endeudamiento público del gobierno capitalino, mientras que el Senado tiene la atribución de destituir al jefe de gobierno de su cargo. Pero, en realidad, lo que ha limitado la consolidación del gobierno representativo en la capital del país es lo siguiente: la Cámara de Diputados tiene la atribución de aprobar el Estatuto de Gobierno del Distrito Federal y, en materia electoral, en las elecciones locales sólo podrán participar partidos políticos con registro nacional, y la Asamblea Legislativa se integra según los principios de mayoría relativa y representación proporcional. Sin embargo, con la llamada cláusula de gobernabilidad se puede dar el caso de asignar 51% de los asientos de la Asamblea a un partido que sólo haya obtenido 30% de la votación total. l. Marván, La cuestión del gobierno representativo en el Distrito Federal mexicano, memoria del seminario taller Reforma Política en el Distrito Federal, Cámara de Diputados, LV III Legislatura, Comisión del Distrito Federal-Coordinación de Humanidades, Programa Universitario de Estudios sobre la Ciudad, México, 2001, pp. 98 y 99. del metro cuadrado de suelo es caro para los sectores de bajos ingresos. 3 Mediante ese decreto también se pretendía introducir la racionalidad al desarrollo urbano de la Ciudad de México para la planeación de nuevas áreas residenciales, de acuerdo con los lineamientos de protección de las zonas de reserva ecológica. 4 Se trataba de evitar el crecimiento desordenado en las delegaciones del sur y oriente de la gran urbe, donde se localiza la mayor parte de esas áreas, como se muestra en el mapa l. Por tanto, las acciones del gobierno en materia de vivienda sólo incluían el mejoramiento o la construcción de ésta siempre y cuando existiera terreno regularizado o lote familiar en alguna de las 12 delegaciones. Mientras, en las cuatro demarcaciones centrales -cuya característica principal es su despoblamiento, ya que en los últimos 34 años salieron 1.2 millones de habitantes-, se pretendía construir viviendas para los estratos de bajos ingresos, con las limitaciones señaladas del alto precio en razón de su infraestructura urbana. Sin embargo, esas tareas fueron insuficientes pues sólo tenían el propósito de remozar o, en su caso, concluir las viviendas deterioradas o semiconstruidas. Si se considera que éstas representaban la mitad de un total de 2.1 millones de casas habitación en 2000, se puede concluir que en ese año se incrementó el déficit acumulado de nuevas viviendas, calculado en más de 200 000 unidades. 5 Con todo, el llamado crecimiento desordenado de la Ciudad de México ha seguido la lógica de las empresas inmobiliarias y los fraccionadores clandestinos, resultado de la mayor demanda no solvente en busca de un lugar donde edificar su vivienda. 6 En su momento y en términos políticos ella fue redituable para el partido oficial; es grave que también muestre la ausencia de una política de vivienda para las clases bajas de la metrópoli,? 3. Por ejemplo, el precio del metro cuadrado en la colonia del Valle, ubicada en la delegación Benito Juárez, es de 7 000 pesos, monto inaccesible para la población de bajos ingresos. D. Ortiz, S Pantoja y M.L. Vivas, "Parálisis en materia de vivienda", Proceso, núm. 1283, México, 2001, pp. 1-7. 4. El4 de octubre de 2002 el jefe de gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, ordenó el desalojo de un asentamiento irregular situado en una zona de conservación ecológica de la delegación Xochimilco, conocida como Amalacachico, donde 800 familias invadieron un terreno de siete hectáreas. López Obrador también anunció que las áreas de reserva ecológica invadidas por las mansiones de los ricos serían desalojadas, para lo cual formó una comisión integrada por varias instancias oficiales encargada de revisar los expedientes respectivos. T. Sager, "The Rationality lssue in Land-planning", Journal ofManagement History, vol. 5, núm. 2, 1999, pp. 87-107, y E. Baltazar, "Se demolerán inmuebles en los que se detecten irregularidades: Encinas", La Jornada, México, 9 de octubre de 2002, p. 38. 5. S. Ortiz, S. Pantoja y M.L. Vivas, op. cit., p. 6. 6. J. Legorreta, Efectos ambientales de la expansión de la Ciudad de México, 1970-7993, Centro de Ecología y Desarrollo, México, 1994, p. 61. 7. Carlota Botey, titular de la Dirección General de Regularización Territorial de la Ciudad de México, dijo que el suelo habitacional en el Distrito Federal se ha 789 DISTRITO FEDERAL: SUELO DE CONSERVACIÓN ECOLÓGICA, 2001 (HECTÁREAS Y MILLONES DE HABITANTES) - Conservación ecológica Cambios: Superficie total del Distrito Federal Uso urbano Conservación Superficie con vocación forestal Bosques Matorrales y pastizales Deforestación anual promedio Población total En suelo de conservación ecológica En poblados rurales Con actividades rurales Con derechos agrarios 148 342 59 900 = 41% 88 442 =59% 49 689 38 252 11 437 240 8.6 2.2 04 0.2 0.017 Fuente: Primer Informe de Gobierno del Distrito Federal, Anexo Estadístico, mimeo., México, 2001. agotado y los asentamientos irregulares ubicados en zonas de conservación ecológica no se regularizarían, pero aclara que el suelo urbano que sobra es poco y la oferta inmobiliaria es inaccesible para las mayorías, ya que en las delegaciones del sur, como Xochimilco y Tláhuac, el metro cuadrado cuesta 500 pesos. B. Ramírez, "Prácticamente agotado el suelo habitacional del DF ", La Jornada, México, 9 de septiembre de 2002, p. 40, y A. Varley, "Ci ientelism or Technocracy? The Politics of Urban Land Regularization ", en N. Harvey (ed.). Mexico Dilemmas ofTransition, The lnstitute of Latin American Studies, Universityof London y British Academic Press, Londres, 1993, p. 249. 790 LA PROBLEMÁTICA URBANA DE LA CIUDAD DE MEXICO En el cuadro 1 se observa que en 1998la delegación Xochimilco, ubicada en el sur de la Ciudad de México, 8 concentraba el mayor número de asentamientos irregulares (169), con 84 200 personas en 623.3 hectáreas. Del total de tales asentamientos, 109 se encuentran en áreas destinadas al rescate y la preservación ecológicas y 60 en la zona de la montaña, con un tiempo de consolidación que va de dos a 15 años y que alojan a 20 000 familias en Santiago Tepalcat!alpan, San Mateo Xalpa, SanAndrésAhuayucan y Santa Cecilia Tepetlapa. 9 Por su parte Tlalpan, 10 con 133 asentamientos irregulares de 7 566 familias, muestra un importante crecimiento de habitantes por hectárea propiciado por la urbanización acelerada de la zona montañosa del Ajusco, considerada suelo de preservación ecológica y donde se ubica la mayor parte de los asentamientos ilegales. 11 (Vease el cuadro 2.) En Cuajimalpa de Morelos hay 50 asentamientos irregulares, donde habitan 16 877 personas dispersas en 600.6 hectáreas.1 2Aquéllos en su mayoría se han establecido en suelo de conservación ecológica, caracterizado por sus superficies minadas, con pendientes, de desagüe natural, proclives a sufrir deslizamientos del terreno; 18 asentamientos se encuentran en zonas de alto riesgo por ser áreas de escurrimiento natural y de paso de líneas de alta tensión. 13 De 1980 a 2000 en la delegación Tláhuac el número de habitantes por hectárea se incrementó de 15 a 35.4 personas como resultado de una intensa corriente migratoria. 14 8. Colinda al norte con la delegación Coyoacán, al noreste con las delegaciones de lztapa lapayTiáhuac, al sureste con Milpa Alta, y al poniente con Tlalpan . Es la tercera demarcación en extensión. 9. M. Vidrio y G. Avila, " Delega ción Xochimilco", en G. Garza (coo rd .), La Ciudad de México en el fin del segundo milenio, Gobierno del Distrito Federal-El Colegio de México, México, 2000. 1O. Tlalpan se ubica al sur de la ciudad de México. Colinda al norte con las delegaciones Coyoacán y Alvaro Obregón, al sur con el estado de Morelos, al este, con las delegaciones Xochimilco y Milpa Alta, al oeste con la delegación Magdalena Contreras y el Estado de México. 11. La zona del Ajusco se localiza en el surponiente del Distrito Federal y es una porción de la cordillera neovolcánica que forma el límite sur de la cuenca de México. Dicha región es pedregosa, el agua de lluvia se filtra y forma mantos subterráneos que brotan como manantiales. Parte de ella se ha reservado como parque nacional por sus recursos forestales como las coníferas y los árboles de maderas blandas. M. Schteingart, "Expansión urbana, conflictos sociales y deterioro ambiental en la Ciudad de México. El caso del Ajusco", Estudios Demográficos y Urbanos, vol. 2, núm. 3, México, 1987, pp. 449-477. 12 . Limita al norte con la delegación Miguel Hidalgo y el municipio de Huixquilucan del Estado de México, al sur con los municipios de Jalatlalco y Ocoyoacac, al oriente y su ro riente con la delegación Alvaro Obregón, y al poniente con los municipios de Huixquilucan, Lerma y Ocoyoacac. Tiene tres cauces semi permanentes : el río El Borracho, los arroyos Santo Desierto y Tacubaya, y el agua que se filtra en la zona poniente alimenta los acuíferos de la Ciudad de México, pero en su zona sur se encuentra el parque nacional Desierto de los Leones. 13. E. Preciat y S Contreras, "Delegación Cuajimalpa de Morelos", en G. Garza (coo rd. ), op. cit., pp. 569-570 . 14. Se ubica en el extremo sureste de la Ciudad de México y colinda al norte con lztapalapa, al este con la delegación Xochimilco, al sur con Milpa Alta, • • C U A D R O 1 CIUDAD DE MÉXICO: ASENTAMIENTOS IRREGULARES POR DELEGACIÓN, 1998 Asentamientos irregulares Xochimilco Tlalpan Cuajimalpa de Morelos Tláhuac Azcapotzalco Alvaro Obregón Gustavo A. Madero lztapalapa Cuauhtémoc Magdalena Contreras Coyoacán Milpa Alta Total 169 133 50 30 29 23 20 18 16 14 9 7 518 Hectáreas 623.3 487.7 600.6 156.7 837.0 56.0 2325.0 221.2 506.8 5 814.3 Familias 20 7 4 2 000 566 009 277 870 3 465 3 090 13 451 400 3 324 232 2 107 60 791 Personas 84 200 31 862 16 877 9 586 3 662 14 587 13 008 56 528 1 684 13 994 976 8 870 255 834 Fuente: elaboración propia con base en Andrés Manuel López Obrador, Primer Informe de Gobierno del Distrito Federal. Anexo estadístico, mimeo., México, 2001. anterior ha significado la instrumentación de medidas restrictivas para controlar la expansión de los asentamientos irregulares en dichas zonas ecológicas. 17 Por otro lado, la disminución de habitantes por hectárea en delegaciones como Azcapotzalco, Gustavo A. Madero e lztacalco también se puede interpretar como un indicador del límite de su crecimiento, que se ha transformado en un factor que favorece la expulsión de población y que alimenta a los nuevos asentamientos populares irregulares, sobre todo de jóvenes que forman un hogar y requieren con urgencia una vivienda. 18 Este crecimiento por expansión periférica se ha expresado como una ocupación, no libre de conflictos, de municipios del Estado de México, consolidando a la Ciudad de México como una zona metropolitana. 19 CUADRO (Véase el cuadro 2). Tiene cerca de 30 asentamientos irregulares en el sur y en el extremo nororiente, a las faldas de la sierra de Santa Catarina, llamados San Juan Ixtayopan y La Conchita, donde habitan alrededor de 2 277 familias en 2 075 viviendas levantadas en 157 hectáreas; 344 casas se encuentran en suelo de conservación ecológica y carecen de servicios urbanos básicos. 15 En el cuadro 2 se observa que en las cuatro delegaciones centrales (Cuauhtémoc, Benito J uárez, Miguel Hidalgo y Venustiano Carranza) ha disminuido el número de habitantes por hectárea como resultado del cambio en el uso de suelo, que dejó de ser habitacional para transformarse en comercial. Esto ha provocado una expulsión de población hacia las delegaciones de la periferia y de los municipios conurbados, así como una subutilización y deterioro paulatino de su infraestructura urbana. 16 Por su parte, las delegaciones donde se localiza la mayor parte de los asentamientos ilegales se caracterizan por un crecimiento importante de habitantes por hectárea, pero ahora la tendencia es la ocupación de los suelos de conservación ecológica. Con la introducción en la agenda gubernamental del tema del medio ambiente, lo 2 DISTRITO FEDERAL: DENSIDAD DE POBLACIÓN DE LAS DELEGACIONES, 1980-2000 (HABITANTES POR HECTÁREA) Superficie Alva ro Obregón Azcapotzalco Benito Juárez Coyoacán Cuajimalpa de Morelos Cuauhtémoc Gustavo A. Madero lztacalco lztapalapa Magdalena Contreras Miguel Hidalgo Milpa Alta Tláhuac Tlal pan Venustia no Carranza Xochim ilco Distrito Federal (hectáreas) 7 720 3 330 2 663 5 389 8 095 3 244 8 662 2 290 11 506 7 536 4 640 28 375 8 534 30 499 3 342 12 517 148 342 Años 1980 149 416 214 100 41 226 73 243 46 64 108 7 15 5 25 4 54 1990 83 143 153 119 15 184 146 196 130 26 88 2 23 16 155 22 55 2000 89 132 135 126 19 159 142 179 154 29 76 35 19 138 29 58 fuente: Andrés Manuel López Obrador, Primer Informe de Gobierno del Distrito Federal. Anexo estadístico, mi meo., México, 2001. 17. J.L. Lezama, Aire dividido, crítica a la política del aire en el Valle de México, los municipios del Estado de México limítrofes son La Paz al norte, y al este Chalco, lxtapaluca y Va lle de Chalco Solidaridad. 1979-1996, El Colegio de México, 2000 . 18. M.S. Cruz, Propiedad, poblamiento y periferia rural en la zona metropolitana 15. V. lbarra, "Delegación Tláhuac", en G. Garza (coord .), op. cit. 16 . C. Garrocho, " El centro de la zona metropolitana de la Ciudad de México: de la Ciudad de México, Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Red C. Garrocho y J. Sobrino (coo rds. ) , Sistemas metropolitanos, nuevos enfoques y prospectiva, Secretaría de Desarrollo ¿auge o decadencia'"· en Social-El Colegio Mexiquense, México, 1995. Nacional de Investigación Urbana, México, 2001. C. Sánchez (coords.), ¿Todos propietarios? Vivienda de al· quiler y sectores populares en la Ciudad de México, Centro de la Vivienda 19. R. Coulomb y y Estudios Urbanos, México, 1991. COMERCIO EXTERIOR, SEPTIEMBRE DE 2005 791 Cabe considerar que sólo cinco delegaciones conservan las áreas agrícolas de la gran urbe: Milpa Alta, con 12 295 hectáreas ; Tlalpan con 2 992, Xochimilco con 2 308 , Tláhuac con 5 102 y la Magdalena Contreras con 220, untotal de 22 917 hectáreas, monto que representa 15.44 % del total de la superficie del Distrito Federal. 20 Con todo , la importancia de esas zonas rurales radica en el mantenimiento de los quehaceres agrícolas , frente a la multiplicidad de empleos y los ingresos cambiantes que se tienen que desarrollar para la sobrevivencia famil iar, debido a la precariedad y estacionalidad del empleo urbano. Vivir en el pueblo y tener asegurado el consumo básico puede ser una manera eficaz de sobrellevar las crisis y la esracionalidad laboral en otros sectores de la economía. C omo se sabe, los ciclos de empleo y desempleo resultan cada día menos predecibles, pero más intermitentes y frecuentes . Así las cosas, parecería que en ciertos ámbitos periurbanos , que todavía habría que conocer y analizar con cuidado, se podría estar dando un proceso novedoso de persistencia o reinversión de la agricultura, es decir, de reforzamiento de espacios y quehaceres agrícolas. 21 Esto implicaría la existencia de una dinámica local particular de las actividades económicas, la cual asume diversas formas en lo relacionado con el mercado laboral ante la 20. l. Pisanty, " Ecosistema y áreas verdes urbanas", en G. Garza (coord .), op. cit. 2 1. P. Arias, " Hacia el espacio rural urbano; una revisión de la relación entre el cam po y la ciuda d en la antropología social mexicana", Estudios Demográ ficos y Urbanos, vol. 17, núm. 2, México, 2002, pp. 363 -380. 792 LA PROBLEMÁTICA URBANA DE LA CIUDAD DE MtXICO retirada del papel regulador del Estado, configurando el territorio de la Ciudad de México en una desigualdad en el acceso a los equipamientos y servicios.22 Al mismo tiempo, también como resultado de la pérdida de la centralidad y el aumento de las áreas periféricas de la Ciudad de México, ha creado la fragmentación que se ha convertido en un obstáculo para la construcción de identidades no segregadas. 23 Además, el predominio de los asentamientos irregulares ha sido una causa impulsora de la llamada periferización de la Ciudad de México, la cual en situaciones de deterioro económico contribuye a la generalización de la violencia y la delincuencia, en las que sus habitantes adoptan estrategias de protección caracterizadas por la segregación física, los enclaves fortificados. Lo anterior reproduce una acción social no coordinada y, en consecuencia, se abandonan los espacios públicos para crear otros más exclusivos y privados. 24 22 . Las plazas come rcia les son prop iedad de compañías o corporaciones, pero "su uso es colect ivo. Al ser privados, los administradores contro lan el espacio de una manera más rígida que si pertenecieran al Estado[ ... ] El visitante del centro comercial no puede comporta rse como si estuviera en la calle, debe aceptar una serie de normas y el código de comportamiento del establecimiento, como si estuviera de visita en el espacio de alguien más, no como si caminara por su ciudad". L. López Levi, " Los centros comerciales como espacios multifunciona les", Argumentos, núm. 27, 1997, pp. 91-120, y N. García Canclini, Imaginarios Urbanos, Editorial Universitaria de Buenos Aires, 1997. 23. E. Nivón, "De periferia y suburbios, territorios y relaciones culturales en los márgenes de la ciudad", en N. García Candini (coord .), Cultura y comunicación en la Ciudad de México. Primera parte, Modernidad y multiculturalidad: la Ciudad de México a fin de siglo, UAM-Grijalbo, México, 1998, pp. 205-233. 24. M. Davis, ¿Quién mató a Los Angeles?, Pesebre, México, 1994. • Por su parte, los citadinos necesitan del consumo como un momento importante en su reproducción social, es decir, como una parte de su ciclo económico y cultural. Las restricciones al mismo han sido impuestas por el modelo neoliberal y por la distribución territorial desigual de la infraestructura y el equipamiento que lo posibilitan; en ese sentido, los individuos pertenecientes a los estratos sociales de bajos ingresos tienen limitaciones para participar de los diversos repertorios culturales, de elegir entre múltiples posibilidades para ser individuo y, por tanto, no pueden ser lo suficientemente distintos por no tener acceso a los bienes que se han constituido en opciones para el desarrollo de la individualidad. 25 De este modo, la política económica neoliberal se transformó en una política que tiene la finalidad de elaborar indicadores que muestren un equilibrio en la balanza de pagos, las importaciones y las exportaciones, sin revitalizar la capacidad adquisitiva, el consumo, y la lógica se impone debido a que si el consumo se encuentra mermado, el equilibrio macroeconómico resulta de una baja en las importaciones porque la gente compra menos, lo cual afecta la capacidad de circulación y distribución de los bienes básicos para la subsistencia, el acceso a la educación, los niveles de salud, etcétera. Esta situación acaba por debilitar el tejido social y, en consecuencia, el voto electoral no ha podido revertir la tendencia sino que la ha reforzado porque los gobiernos mantienen la idea de que cada uno se ocupe de sí mismo. 26 25. N. García Canclini, (coord ), op. cit., p. 57-59. 26. /bid, pp. 62 y 63. LA PROMOCIÓN DEL BIENESTAR SOCIAL E 1 régimen de Andrés Manuel López Obrador no ha podido convertir los programas de asistencia social en una política social universal institucionalizada. 27 Mientras, la Ley de Desarrollo Social para el Distrito Federal establecía que se compartieran responsabilidades entre el gobierno capitalino y la sociedad para impulsar el desarrollo social por medio de programas y proyectos. Para tal efecto se configuró un órgano de consulta, de opinión y de vinculación entre gobierno y sociedad, el llamado Consejo de Desarrollo Social, integrado por el jefe de gobierno, el titular de la Secretaría de Desarrollo Social, un funcionario público de la misma quien fungiría como secretario técnico, incluyendo también a los titulares de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda, de Desarrollo Económico, de Salud, de Obras y Servicios Públicos, de la Subsecretaría de Trabajo, de la Procuraduría Social y del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia del Distrito Federal, tres diputados designados por la Asamblea Legislativa, pertenecientes a las comisiones relacionadas con el desarrollo social, y tres representantes de las organizaciones civiles, sociales y de las instituciones de asis tencia privada, instituciones 27. López Obrador justifica de la siguiente manera su asistencia li smo: "Al diablo con el truco de la derecha de calificar de populistas los programas de apoyo social. Nosotros vamos a seguir gobernando para los pobres. i Arriba los de abajo! [El presupuesto del gobierno de la ciudad] no se va a utilizar jamás para subsidiar a los empresarios y a los banqueros, se va a utilizar para mejorar las condiciones de vida de la mayoría de los habitantes del Distrito Federal ". R. Llanos, " Defiende López Obrador sus programas sociales", La Jornada, México, 3 de septiembre de 2002. COMERCIO EXTERIOR, SEPTIEMBRE DE 2005 793 académicas y grup os empresariales; dich a estr uctura se reproduce en escala de los gobiernos delegacionales. 28 Sin embargo, este órgano de coordinación instirucional, al tener la función legitimadora de los programas de asistencia social, no se puede considerar como un medio para la recuperación del carácter universal de la pol ítica social, lo que se ha confundido con la elaboración de programas y proyectos sociales dirigidos a grupos específicos que comparten una situación de vulnerabilidad 29 y, por tal motivo, sus lazos con la sociedad se encuentran debilitados. Con todo, a estas acciones se les ha identificado más con la promoción de los derechos sociales de los habitantes de la metrópoli. 30 La promoción de los derechos sociales mediante programas asistencialistas ha significado el establecimiento de un modelo de desarrollo social residual, 31 es decir, el acceso a la asistencia depende de la demostración de la necesidad, dar pruebas de carencia de medios, con beneficios pequeños. Sin embargo, el universo de los potenciales beneficiarios está definido desde el gobierno por medio de las siguientes categorías: discapacitados, adultos mayores, madres solteras, desempleados, infantes pobres, lo que hace referencia a una desigualdad por categorías, vinculada con una estructura social que la reproduce y que no ha sido modifi cada por las políticas gubernamentales de asistencia social. 32 Por otro lado, los programas de asistencia social residual se han identificado con el compromiso personal de López Obrador para cumplir con su objetivo de parar el empobrecimiento de ciertas capas sociales, pero son subsidios de duración limitada, debido a que se encuentran restringidos a su periodo de gobierno; de esta manera, su capacidad de desvalorización es reducida. 33 Pero esos programas asistencialistas permiten al gobierno citadino mantener cierto poder distributivo para gestionar apoyos políticos en un momento en que la competencia partidista demanda el voto. Tal vez sea una nueva forma de articular la democracia política representativa con la desigualdad social; sin embargo, no alcanza a configurar un 28. Ley de Desarrollo Social pa ra el Distri to Federa l, Gaceta Oficial del Distrito Federal, núm. 86, México, 23 de mayo de 2000, pp. 4- 6. 29. López Obrado r ha promovido sus apoyos sociales mediante la organización de actos masivos. Por ejemplo, en julio de 2002 entregó a 2 500 desempleados pertenecientes a las 16 delegaciones 1 800 pesos para que continuaran su labor de búsqueda de empleo, lo que es insuficiente pa ra cub rir a las 90 000 personas desempleadas en la Ciudad de México registrada en junio de 2002. J.A. López, "Unos 100 000 menores trabajan en la capital", Milenio Diario, 26 de julio de 2002. 30. Gaceta Oficial del Distrito Federal, op. cit., p. 2. 31. G. Espin-Andersen, Fundamentos sociales de las economías postindustriales, Ariel, Barcelona, 2000, p. 53. 32. Ch. Ti lly, La desigualdad persis ten te, Manantial, Buenos Ai res, 2000, pp. 246 ·257. 33. G. Espin-Andersen, op. cit., p. 71. 794 LA PROBLEMÁTICA URBANA DE LA CIUDAD DE MtXICO equilibrio como el derivado de la administración estatal del bienestar colectivo cuando existía crecimiento económico que impulsaba la expansión de la relación asalariada. 34 Además, como se ha reducido la capacidad de desvalorización del Estado, 35 la lógica de la ganancia ha conformado un espacio urbano dual, es decir, uno privilegiado por su infraes tructura y equipamiento, lo que garantiza los beneficios privados, mientras otro sufre un deterioro permanente. 36 Esto termina por favorecer también la desarticulación social que se intenta detener, al menos en la Ciudad de México, mediante los programas de asistencia social y apoyada en mecanismos de intermediación, como los comités vecinales, para relacionar de manera directa al gobierno con los sectores sociales vulnerables y de ese modo poder controlar los intereses partid istas .37 Sin embargo, como los comités vecinales no han podido constituir un espacio cívico de cooperación y solidaridad,38 su funcionamiento depende de 34. !bid., p. 243. Ante un panorama de pobreza, caída del salario real, reducción del empleo formal con seguridad social, resulta imposible plantear soluciones urbanísticas porque el modelo económico neoliberal ha hecho inviable la economfa nacional: "La inversión de la Federación en el [Distr ito Federa l] se ha desplomado estrepitosamente al bajar de 37.5% que alcanzó de 1989 a 1994 a 21.6% de 1995 a 1998 [ ... ]por lo que no puede haber grandes proyectos (metro, tren suburbano, carreteras, dotación y t ratamiento de agua) y además aumentó el gasto en seguridad pública del [Distrito Federal]: de 15.3% del presupuesto en 1989·1994 a 22.2% en 1995-1999 en detriment o de la infraestructu ra urbana que bajó de 19.1 a 15. 1 por ciento" G. Garza, "Gobierno metropolitano y cambio de modelo económico", Comunal, México, 15 de mayo de 2000, p. 8. 35. Esto tiene que ver con la diferencia entre la racionalidad pública y la privada en la administración de algún bien o servicio. La administración privada busca maximizar el beneficio por medio del uso racional de los recursos en el mercado. En cambio, para la racionalidad pública, las políticas se deciden en relación con la demanda y tienen como objetivo principal ampliar la cobertura. Además, produce en los costos medios, en otras palabras, se asegu ra sólo la recuperación de la inversión, lo que no sucede con la inversión privada que se orienta por la ganancia. G. Ordóñez y T Alegría, "Los servicios públicos en la encrucijada", Ciudades, vol. 3, núm. 11, 1991, pp. 2-8, y L. Kowarick, "Expoliación urbana, luchas sociales y ciudadanía: retazos de nuestra historia reciente", Estudios Sociológicos, vol. 14, núm. 42, 1996, pp. 729-743. 36 . G. Garza, "Global Economy, Metropolitan Dynamics and Urban Policies in Mexico", Cities, vol. 16, núm. 3,1999, pp. 149-169. 37. Ante el surgimiento del pluralismo político, frente a la consolidación de un patrón de desarrollo desigual, la mayor competencia partidista ha obligado a la instrumentación de unpopulismoselectivo, de parte de López Obrador, para intentar mantener el compromiso partidista con los pobres, lo que puede beneficiar la continuidad de la administración de la Ciudad de México de parte de su partido. E. Jiménez, "A New Form of Government Control Over Colonos in Mexico City", en A. Gilbert (ed.), Housing and Land in Urban Mexico, Monograph Series, núm. 31, Center for u.s.-Mexican Studies-University of California, San Diego, 1989, yW Cornelius y A. Craig, TheMexican Political System in Transition, Monograph Series, núm. 35, Center for u.s.-Mexican Studies University of California, San Diego, 1991, p. 119. 38. Por ejemplo, la construcción de un segundo piso vial en el periférico y el viaducto, ubicado en la delegación Benito Juárez, se sometió, por parte del jefe de gobierno, a un plebiscito; pero los comités vecinales no fueron convocados para dar a conocer entre los vecinos los beneficios de la obra; en consecuencia, según Pilar Hernández, vicepresidenta de la Academia Mexicana de Profesionales en Derecho Electoral, los comités vecinales no • • los programas de asistencia social de López Obrador; por tanto, las relaciones verticales de dependencia no declinan sino que tienden a fortalecerse. 39 De esta manera, la autonomía de la participación vecinal disminuye y se instala un sustituto de los derechos sociales por medio de una distribución de pequeños beneficios, lo que en términos políticos favorece al clientelismo, tan útil en el momento en que los derechos políticos adquieren importancia debido a la celebración de elecciones o de plebiscitos, necesarios para legitimar al líder o gobernante. 40 Esto se acompaña de una debilidad institucional que no puede garantizar los derechos ciudadanos, lo que favorece el surgimiento de formas particulares de dominación apartadas de las prácticas sociales, desprendidas de un orden constitucional que, a su vez, debe encontrar su respaldo en políticas públicas distributivas alejadas de los programas de asistencia social temporales y emergentes, sin capacidad para incidir en la solución a los problemas estructurales de la pobreza. 41 Lo anterior impide el goce de los derechos que otorga la democracia liberal. 42 En el cuadro 3, por ejemplo, se puede observar la incidencia de la pobreza en la Ciudad de México, de acuerdo con el método de medición integrada de la pobreza (MMIP) que incluye la medición de ésta con base en las necesidades básicas insatisfechas (NBI) y la pobreza por ingresos o línea han sido la célula ciudadana ni la vinculación de los ciudadanos con el jefe de gobierno en la gestión pública. R. Olayo, "No fueron convocados comités vecinales; al margen de la consulta vial", La Jornada, 3 de septiembre de 2002, p. 38. 39. M. Sobrado, "Organizational Empowe rment versus Clientelism", Latin American Perspectives, vol. 29, núm . 5, 2002, pp. 7-19. 40 . En su segundo informe de gobierno, y como muestra de confianza en su desempeño como gobernante de la Ciudad de México, López Obrador convocó para el 8 de diciembre de 2000 a un plebiscito para que los capitalinos lo ratificaran o no como jefe de gobierno. Esta votación se haría mediante la línea telefónica. Cabe mencionar que la figura del plebiscito la ha utilizado para saber si los citadinos aprobaban un incremento de precio en lo servicios de transporte administrado s por el gobierno del Distrito Federal, así como la próxima consulta para saber si se acepta o no la construcción de una obra vial. C. Escobar, "Ciientelism and Citizenship. The Limits of Democratic Reform in Sucre, Colombia", Latin American Perspectives, vol. 29, núm. 5, 2002, pp. 20-47, y E. Baltazar, M. Servín y A. Bolaños, "Corrupción, principal causa de la desigualdad : López Obrador ", La Jornada , 18 de septiembre de 2002, p. 34. 41. En la lectura de su segundo informe, López Obrador dijo que la desigualdad social y económica es resultado de la deshonestidad de los gobernantes, y defendió sus programas de asistencia social, a pesar de ser calificado como populista y paterna lista . E. Baltazar, M. Servín y A. Bolaños, op. cit. 42 . Se crea entonces una democracia iliberal que consiste en la existencia de un sistema de partidos que permite la celebración de elecciones; sin embargo, la debilidad institucional vinculada a una escasa vigencia de los derechos ciudadanos favorece el autoritarismo de líderes y gobiernos que buscan encontrar un consenso mediante acciones pragmáticas y alejadas, por ejemplo, del orden legal. F. Zakaria, "The Rise of !Iliberal Democracy ", ForeignAffairs, vo l. 76, núm . 6, 1997, pp. 22-43. 3 CUADRO CIUDAD DE MÉXICO: EVOLUCIÓN DE LA POBREZA POR ESTRATOS, 1984·2000 (PORCENTAJES) Años Estratos Método de medición integrada de la pobreza 1984 1989 1992 2000 20.0 33.8 53.8 46.2 100.0 33.1 29.5 62.6 37.4 100.0 33 .5 28.7 62.2 37.8 100.0 38.3 26.6 64.9 35 .1 100.0 22.9 36.2 59.1 40.9 100.0 22 .5 33.8 56.3 43 .7 100.0 25.6 30.3 55.9 44.1 100.0 23 .6 31.1 54 .6 45.4 100.0 16.8 15.1 31.9 68.1 100.0 30.3 18.6 48.9 51.1 100.0 29 .7 18.3 48.0 52.0 100.0 36.6 13.3 49.9 50.1 100.0 (MMIP) Pobres extremos Pobres moderados Suma de pobres Suma de no pobres Total Necesidades básicas insatisfechas (NBI) Pobres extremos Pobres moderados Suma de pobres Suma de no pobres Total Pobreza por ingresos-linea de pobreza (LP) Pobres extremos Pobres moderados Suma de pobres Suma de no pobres Total Fuente: A. Damián, "La pobreza urbana", en G. Garza (coord .), La Ciudad de México en el fin del segundo milenio, México, Gobierno del Distrito Federal-El Colegio de México, 2000, p. 298 ., y J. Boltvinik, "Pobreza en la Ciudad de México", La Jornada, México, 25 de enero de 2002, p. 3. de pobreza (LP). Este flagelo aumentó de 53.8% en 1984 a 64.9% en 2000, pero en ese lapso, periodo que cubre lapolítica de estabilización y ajuste, la pobreza se incrementó 11.1 o/o, aunque se puede observar un aumento en la pobreza extrema: en 1984 era de 20% y en 2000 ascendió a 38.3%, un incremento de 18.3 por ciento. Empero, la pobreza se ha incrementado en la metrópoli mexicana debido a un aumento en el número de pobres extremos. En 2000, el total de pobres fue cercano a 65%, es decir, más de la mitad de la población capitalina. En el caso de la pobreza por las condiciones de vida (evaluada con el método de NBI), el porcentaje de pobres sigue representando la mitad de la población pero ha sufrido una lenta disminución de 4.1 %, ya que mientras en 1984 fue de 59.1 o/o, en 2000 fue de 55%; mientras, la pobreza por ingresos (LP) ha aumentado ante la pérdida del poder adquisitivo del salario, ya que pasó de 32 o/o en 1984 al50o/o en 2000. Esto último es también resultado de un crecimiento acelerado de la pobreza extrema, toda vez que en ese periodo aumentó de 17 a 37 por ciento. COMERCIO EXTERIOR, SEPTIEMBRE DE 2005 795 En consecuencia, resulta necesario atender el problema de la pobreza tanto extrema como de la moderada. N o obstante la incidencia sobre la misma de parte de los programas gubernamentales de asistencia social mantiene la precariedad y contribuye a la debilidad de los derechos sociales. Pero se trata de una vía de formalización, de una parte del universo de los que sobreviven en condiciones precarias, desempeñando actividades económicas informales en que las regulaciones derivadas del orden legal no existen o son muy débiles. 43 Así, los programas de promoción y de ayuda social no han podido limitar la tendencia a generalizar la mercantilización de las protecciones estatales, 44 sobre todo porque se siguen reproduciendo condiciones de vida inestables, caracterizadas por los salarios precarios, el desempleo y el subempleo. 45 LA REDEFINICIÓN DE LA PLANEACIÓN URBANA P or otro lado, también se buscó que la planeación urbana tuviera una incidencia directa en el bienestar de los capitalinos. En ese sentido, el gobierno cardenista (1997-2000) fomentó acciones en pequeña escala, una tendencia que continuó López Obrador mediante la definición de áreas prioritarias con programas parciales, 46 entre los que se destaca ahora el del centro histórico, 47 43. C. Olmedo y M. Murray, "The Formalization of lnformai/Precarious Labour in Contemporary Argentina", lnternational Sociology, vol. 17, núm. 3, 2002, pp. 421-443. 44. R. Lo Vuolo, A. Barbeito, L. Pautassi y C. Rodríguez, La pobreza ... de la política contra la pobreza, Niño y Dávila Editores-Centro lnterdisciplinario para el Estudio de Políticas Públicas, Buenos Aires, 1999, p. 303. 45. C. Olmedo y M. Murray, op. cit., p. 431. 46. De diciembre de 1997 a julio de 2000 se aprobaron 15 programas parciales, de los cuales ocho se localizan en la capital, cuatro en la delegación Cuauhtémoc (en las colonias Santa María la Ribera, Hipódromo Condesa, centro histórico y centro Alameda), uno en la delegación Miguel Hidalgo (en la zona de Tacubaya), uno en la Venustiano Carranza (La Merced) y dos en la Benito Juárez (San Simón Ticumac e lnsurgentes-Mixcoac). 47. El programa de rescate del centro histórico de la Ciudad de México busca la rea lización de acciones integrales, es decir, una planificación integral que relacione la regeneración urbana y habitacional con el desarrollo económico y social, lo que según el exdirector del Fideicomiso del Centro Histórico, René Coulomb, se hace necesario porque los poderes federal y local, en su actuar administrativo, no tienen unidad, lo que dificulta la gestión de los más elementales aspectos de orden urbano y de la convivencia social, como seguridad pública, recolección de basura, mantenimiento de espacios públicos. Es necesario, por otro lado, señalar que el presidente Vicente Fox apoyó el programa, pero el centro histórico equivale a 1% del área urbana del Distrito Federal, con 9.7 kilómetros cuadrados, donde se ubican más de 1 500 edificios catalogados, 9 000 predios y 63 plazas, una parte de ellos abandonados, subutilizados y en condiciones ruinosas, además de que cerca de 20 000 personas se dedican al comercio en la vía pública, pero el uso de los edificios se divide entre habitacional y para bodegas. R. Monge y S. Pantoja, "El proyecto centro histórico por dentro", Proceso, núm. 1294, 2001' pp. 1-6. 796 LA PROBLEMÁTICA URBANA DE LA CIUDAD DE MtXICO donde se ha llegado a definiciones más finas sobre usos del suelo y estrategias de desarrollo en sus 433 hectáreas, además de una mejor coordinación con las 73 000 personas residentes[ ... ) La ventaja de este tipo de planeación es que recurre a una participación más intensa de la población y propone, • simultáneamente, acciones concretas para realizar. 48 Esta medida se ha acompañado más de la participación del sector privado que de las organizaciones sociales, sobre todo porque en el espacio del centro histórico predominan las actividades comerciales y de servicios favorables a la realización de cuantiosas inversiones en edificios corporativos, canalizando recursos en la recuperación, revalorización y preservación del patrimonio arquitectónico de esa zona. 49 Sin embargo, a los programas parciales se agregó la planeación participativa como una manera de conducir la gestión del desarrollo urbano, un proceso de interacción de la sociedad y el gobierno, para establecer acciones dirigidas a la atención de problemáticas específicas de la ciudad.5° Sin embargo, al final se retornó a una planeación normativa, la regulación desde el gobierno, pero sin una estrategia general, ya que el nuevo Programa General de Desarrollo Urbano del Distrito Federal (200 1) le confirió a los programas parciales la función de búsqueda de mejoramiento de las áreas urbanas que presentan mayores carencias, para rescatar y conservar los sitios e inmuebles patrimoniales, mejorando también el equipamiento y la infraestructura básica, y reivindicando al Estado como promotor socialmente responsable, mediante el desempeño de su papel como redistribuidor a favor de los sectores sociales débiles. El nuevo programa se asemeja a la planeación empleada por el Estado benefactor que se pronuncia por los pobres por medio de representaciones sociales 48. D. Hiernaux, "Historia de la planeación de la Ciudad de México", en G. Garza (coord.), op. cit., p. 710. 49. El14 de agosto de 2001 López Obrador instaló el Consejo Consultivo para el Rescate del Centro Histórico de la Ciudad de México, integrado por 125 personalidades, entre las que destaca el dueño de Teléfonos de México, Carlos Slim. Este hecho significa que el sector privado tendrá una participación directa en el rescate de los inmuebles históricos y patrimoniales, así como en la creación de nuevos espacios comerciales, mediante la entrega de estímulos y subsidios fiscales y la simplificación administrativa: " La participación de la administración capitalina se enfocará en la creación de una ventani lla única donde se recibirán los trámites de los ámbitos federal y local relacionados con los inmuebles establecidos en las 628 manzanas del área, y el otorgamiento de descuentos de entre 25 y 100 por ciento en el pago del impuesto sobre nómina, predial, adquisición de inmuebles y derecho de inscripción en el Registro Público de la Propiedad". L. Gómez, "Hoy, la instalación del Consejo Consultivo del Centro Histórico", La Jornada, México, 14 de agosto de 2001. 50. "Se pretendía que los programas parciales devinieran en instrumentos de gobierno que señalaran dónde iniciar las grandes obras y proyectos de inversión y dónde y a qué plazos atender las necesidades de mayor apremio". A. Mercado, "Programas parciales de desarrollo urbano", Ciudades, núm. 53, 2002, pp. 44 y 45. • • construidas desde el propio Estado de las que (por supuesto) espera gratitud y lealtad política. 51 Pero el origen de los programas parciales de desarrollo urbano 52 se encuentra en la figura de las zonas especiales de desarrollo controlado (Zedec) , 53 establecida en el decenio de los ochenta. 54 Como un instrumento de planeación urbana buscaba ajustar los precios del suelo para su valorización y mejor utilización, de parte del sector privado, evitando también los procesos prematuros de deterioro. 55 En otras palabras, establecer nuevas zonas de desarrollo inmobiliario, así como la realización de acciones de recuperación de las zonas centrales. 56 Detrás de esto, existía la intención de crear ambientes de negocio para la empresa privada, al liberar la normatividad de la ciudad a favor de las fuerzas del mercado, es decir, transformar las medidas administrativas y fiscales en un estímulo para la inversión privadaY El crecimiento económico y las expectativas internacionales de imagen y negocios, estimularon la demanda inmobiliaria 51. /bid., p.47. 52. La Ley de Desarrollo Urbano del Distrito Federal (1999) transformó las zonas especiales de desarrollo controlado (Zedec) en programas parciales y, de esta manera, su normatividad dejó de ser un asunto de los vecinos para convertirse en un aspecto que compete a las autoridades. 53 . En 1994 se habían aprobado 22 Zedec, la mayoría localizada en áreas urbanas de altos ingresos(cinco aprobadas en la delegación Miguel Hidalgo, seis en Tlalpan, tres en la delegación Álvaro Obregón, una en Benito Juárez, una en Coyoacán, tres en lztapalapa, una en Tláhuac, y dos en Cuajimalpa de Morelos), donde las asociaciones vecinales negociaban con la autoridad los usos del suelo predio por predio, lo que quiere decir que la discusión se restringía a una colonia, renunciándose a considerar la dinámica de espacios urbanos más amplios. Al final de la negociación se establecía el compromiso de no modificar durante 15 años los usos del suelo. A. Azuela, "Pluralismo jurídico y cambio institucional. La regulación de los usos del suelo en la Ciudad de México", en L. Álvarez, Participación y democracia en la Ciudad de México, La Jornada-Centro de Investigaciones lnterdisciplinarias en Ciencias y Humanidades Universidad Nacional Autónoma de México(UNAM), 1998, p. 165. 54. En este caso, la participación social fue reducida a unas pocas áreas, es decir, sólo a las afectadas por las Zedec y adquirió un carácter contractual particular sin sustento en las leyes generales./bid., pp. 172 y 173. 55. En 1995, lasZedec se transformaron en programas parciales de desarrollo urbano y su cambio de figura no modificó sus objetivos originales, ya que fueron incorporados como espacios de excepción en los programas delegacionales "es decir, como áreas cuya normatividad no está regulada por los programas delegacionales sino por la que tienen desde su origen como Zedec". A. Mercado, op. cit., p. 43. 56. J Gamboa, Ciudad de México, una visión, Fondo de Cultura Económica, México, 1994, p. 131. 57. "En 1995 el negocio de los bienes raíces era vender, pero ante la imposibilidad de acrecentar su negocio, por la escasez de inversionistas interesados, gracias a la crisis económica y a que las estrategias corporativas de inversión de empresas internacionales es utilizar la mayor parte de su dinero en producir, pues ahora rentan mas no descartan al posible comprador. Los inversio nistas extranjeros, como el canadiense Paul Reichmann [ ... ] construye [en la actualidad] en asociación con ICA [grupo de constructoras mexicanas] el edificio más alto de América Latina, Torre Reforma [ubicada en la avenida Reforma, la que forma parte del área central de la Ciudad de México]". E. Guzmán, "Incremento en demanda de oficinas inteligentes", El Financiero, México, 23 de marzo de 1998, p. 40. COMERCIO EXTERIOR, SEPTIEMBRE DE 2005 797 como resultado de la apertura comercial con el exterior mediante el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN); de esa manera, se promovió a la Ciudad de México como centro urbano. 58 Así, las Zedec constituyeron un mecanismo regulador del conflicto causado entre vecinos e inversionistas, los promotores inmobiliarios, en colonias presionadas para cambiar el uso del suelo de residencial a comercial. 59 Esta medida en realidad respondió al síndrome NI MBY (not in my back-yard) muy característico de las ciudades estadounidenses, donde los vecinos están de acuerdo en que se realice una obra, necesaria para el desarrollo de la ciudad, pero siempre y cuando no se haga en su vecindario. Por esta vía, en consecuencia, se reproduce un orden urbano fragmentado que responde a los intereses y las lógicas diversas como las de los sectores sociales de ingresos medios y altos y del capital inmobiliario y financiero-comercial. 60 En consecuencia, las áreas de la Ciudad de México que sufren la presión para el cambio de uso del suelo no sólo son espacios con un contenido simbólico e histórico importante, sino que el aspecto cultural se articula con la necesidad de hacer prevalecer el valor de cambio (un espacio articulado por medio de los negocios privados), para sustituir el uso residencial por el del sector comercial y de los servicios, vinculados a los imperativos de la transnacionalización creciente de la economía mexicana. 61 58. " En los noventa sin duda lo más novedoso del desarrollo urbano en el mundo fueron cuatro medidas generalmente asociadas entre sí: el mercadeo de la ciudad (ma rketing thecity), la regeneración urbana (u rban regeneration ), los desarrollos inmobiliarios emblemáticos (flagship developments) y los proyectos catalizadores (urban catalysts)". A. Mercado, op. cit, p. 49. 59. M. Bassols y S. Arzaluz, "Avatares de la planeación urbana en el DF", Ciudades, núm. 53, 2002, p. 35. 60. En términos sociopolíticos, en México existen las siguientes lógicas de acción: la popular-nacional, apoyada en el pacto social corporativo, la lógica clasista-homogenizante, más acorde con los intereses particulares y con pretensiones de convertirse en generales para organizar la dinámica social, pero su mayor obstáculo es la polarización y desarticulación de la sociedad mexicana, la modernizante-consumista, propia de los sectores sociales mejor integrados al desarrollo (el individualismo posesivo y el pluralismo), la lógica com un itaria-defensiva (la democracia como identidad restringida), la supuesta opción ante la pobreza creciente y la retirada del Estado del ámbito del bienestar social. S. Zermeñoy A. Cuevas (coords.) , Movimientos sociales en México, UNAM, México, 1990, pp. 16 y 17, y F. Díaz, M.L. Lourés, C. Rodríguez y V. Devalle, Ciudad, territorio y exclusión social, mi meo., xv Congreso Mundial de Sociología, Australia, 2002. 61. " En el contexto de la internacionalización, la ciudad de México cuenta con ventajas incomparables, fruto de décadas de concentración de los recursos educativos, culturales y económicos, además de un gran legado histórico en patrimonio urbanístico y arquitectónico de alcances superiores a las demás ciudades del país. La transformación de los usos de este patrimonio-a lo que debe agregarse una política cultural agresiva de los sectores empresariales- ha provisto a la Ciudad de México de elementos internacionalizadores que pocas ciudades contemplan [ ... ] Empero, no debe olvidarse la otra cara de la moneda, que es la fuerte tendencia al dualismo reflejado en su periferia paupérrima y en la exacerbada riqueza 798 LA PROBLEMÁTICA URBANA DE LA CIUDAD DE MtXICO Resulta entonces imposible superar los problemas derivados de la segregación de la gran urbe, mediante la reconquista de su parte central, y por medio de programas de regeneración urbana para hacerla funcional a las necesidades del sector financiero y de la industria de la recreación, sin lazos con la enorme periferia, localizada en los municipios conurbados del Estado de México, donde se reproduce la informalidad. 62 Dicho de otra manera, se trata de erradicarla del centro ya que su destino es más para usos de alta productividad, como los centros financieros, las actividades turísticas y culturales, dominadas por la lógica de los negocios privados. 63 De esta manera, la pérdida de la hegemonía económica y política de la Ciudad de México es resultado de la disminución de la capacidad del Estado mexicano para regular e intervenir en los procesos socioeconómicos, lo que ha significado en el plano regional la manifestación de las fuerzas regionales, tras dejar de lado su sumisión al poder central en los procesos económicos, sociales y políticos de tipo local. 64 También ha favorecido la relocalización de la industria en la periferia conformada por los municipios conurbados; asimismo, con los dos procesos importantes de la política económica, la apertura de los mercados internos para impulsar las exportaciones, junto con la invitación a la inversión extranjera directa, han logrado reforzar el papel de la gran metrópoli como un centro urbano de gestión administrativa. El "Distrito Federal concentró 64.89% del total de las empresas con inversión extranjera directa (IED) creadas entre 1989 y 1994, así como 91.38% del capital social. Es seguido por [el estado del norte de México llamado] N u evo León con 3.72% y, más atrás aún, Baja California. La concentración es evidente, así como la total falta de oportunidades de la mayor parte de los estados de la república frente al proceso de algunas zonas, donde se conjugan servicios de todo tipo, actividades terciarias o cuaternarias y condiciones de vida sin igual ". /bid., y D. Hiernau x, "Giobalización e internacionalización de las grandes ciudades. El caso de la Ciudad de México", Quivera, 1998, pp. 13-24. 62. R.A. Beauregard y A. Haila, "The Unavoi dable Continuities of the City", en P. Marcuse y R. Van Kempen (eds.), Globalizing Cities. A New Spatial Order?, Blackwe ll Publishers, Reino Unido, 2000, p. 23. 63. Para la sobrevivencia en la periferia se ha logrado articular el negocio y el trabajo por cuenta propia en el mismo lugar de residencia, aunque se vive en condiciones materiales sumamente precarias por el déficit de servicios urbanos básicos. D. Hiernaux, "¿ Hacia la ciudad neoliberal? Algunas hipótesis sobre el futuro de la Ciudad de México", en F. Tomas y D. Hiernaux (coords.), Cambios económicos y periferia de las grandes ciudades. El caso de la Ciudad de México, Instituto Francés de América Latina-UAM Xochimilco, México, 1994, p. 41, y A. Lindón, De/a trama de la cotidianidad a los modos de vida urbanos. El Valle de Chalco, El Colegio de México-El Colegio Mexiquense, 1999, pp. 116 y 117. 64 . D. Hiernaux, " Restructuración económica y cambios territoriales en México. Un balance 1982-1995", en C. De Mattos, D. Hiernaux y D. Restrepo, (comps.), Globalización y territorio, impactos y perspectivas, Pontificia Universidad Católica de Chile-Instituto de Estudios Urbanos-FCE, Chile, 1998, p. 102. • • de invitación al capital extranjero. La concentración de las sedes sociales de las empresas con capital foráneo se acompaña de la reticulación creciente de los mecanismos de gestión. Por ello, las inversiones fijas ubicadas en algunos estados son controladas por sedes en la capital de la República". 65 La primacía de la Ciudad de México ya no se debe al empleo industrial o a la concentración de población, sino a su transformación en sede de las grandes empresas comerciales y financieras; por tanto, se trata de una recentralización con desconcentración.66 Es decir, ante su desindustrialización, junto con el desplazamiento de población hacia su periferia, las actividades de servicios articulan el territorio de acuerdo con las necesidades de intermediación de los flujos financieros, de seguros y de consultoría, lo mismo que las empresas inmobiliarias y mercantiles especializadas, para redefinir dónde y cómo se llevan a cabo los negocios, así como los patrones de compra de los consumidores y sus posibilidades de obtener apoyo financiero. 67 Los mercados de capital [local] se están fortaleciendo para permitir a los productores aprovechar los mercados de capital internacionales. La privatización de empresas públicas, las coinversiones con extranjeros y las empresas exportadoras se constituyen en clientes favorecidos por créditos relativamente baratos poniendo en desventaja aún más a las pequeñas compañías nacionales que abastecían a los mercados locales. 68 En consecuencia, de la decreciente participación estatal en la industrialización de México, teniendo como base la ciudad capital, se pasó a un Estado promotor de la inversión privada cuyas prioridades se localizan más en el mercado internacional que en la demanda del mercado interno, 69 lo que ha sido asumido, hasta cierto punto, por la administración del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en la Ciudad de México.7° 65. /bid, pp. 111 y 112. 66. En 1994, de las 500 empresas más grandes de México, 232 se ubicaban en la ciudad capital, 32 en los municipios conurbados, mientras en el estado de Nuevo León había 71 empresas y en Jalisco, 37. /bid., p. 113. 67. "Actualmente casi toda la creación neta de puestos de trabajo se da en el sector servicios, pero, a pesar de su boyante crecimiento, no se puede dar por sentada su capacidad para absorber grandes masas de trabajadores industriales en paro. Muchos, como los servicios empresariales y sanitarios, requieren una intensa cualificación, mientras que los servicios más rutinarios y que necesitan más mano de obra (como la asistencia social, la hostelería o los servicios personales en general) suelen exigir un mínimo de calificación socia l o cultural". G. Esping-Andersen, op. cit., pp. 138 y 139, y E. Soja, Postmetropolis. Critica/ Studies of Cities and Regions, Blackwell Publishers, 2000, p. 114. 68. D. Barkin, "Ganadores y perdedores en el crecimiento urbano latinoamericano", en C. De Mallos, D. Hiernaux y D. Restrepo, op. cit., p. 447. 69. /bid. 70. En la Ley de Planeación del Desarrollo Económico del Distrito Federal (2000) se define, en su artículo 2, la planeación como un medio para impulsar el Existe, pues, la lógica de distribuir las cargas sociales y de liberar al gobierno de sus responsabilidades/ 1 mediante la participación social, como una manera de atender algunos rezagos, pero también acompañada, a pesar de mantener los principios de igualdad y solidaridad, de la aplicación de programas de atención social diferenciada, sobre todo porque prevalece su carácter selectivo y restrictivo. 72 Además, la participación vecinal ha sido definida desde una perspectiva geográfica, cuya base es la división territorial, usada para establecer las unidades espaciales para la formación de los comités vecinales, de acuerdo con los criterios electorales del Instituto Electoral del Distrito Federal. 73 De este modo, los comités vecinales han sido definidos oficialmente como el espacio organizativo de los habitantes de la Ciudad de México/4 mientras, los programas sociales son promovidos por el gobierno de López Obrador, y su operación ha quedado bajo su control, así como la definición de sus beneficiarios. 75 Esto significa que el PRD, al tener un mayor desarrollo integral, mediante el fomento del desarrollo social y económico (fracción 111), para alcanzar objetivos relacionados con la satisfacción de las necesidades básicas de la población, con la ayuda de la participación vecinal. Pero en realidad se trata de una programación de acciones de gobierno, ajustadas a los recursos económicos y humanos, que se busca que tengan una in cidencia socioeconómica. 71. A. García, Análisis de la sociedad del bienestar, Lucina, España, 1993. 72. M. Schteingart y E. Duhau, Políticas sociales, gobernabilidad y pobreza, cuatro casos de colonias populares en fa zona metropolitana de la Ciudad de México, mimeo., El Colegio de México, 1998, pp. 62 y 63. 73. El énfasis otorgado a la democracia representativa, mediada por el voto, donde el sistema de partidos tiene un papel preponderant e, ha mostrado sus limitaciones para evitar la desestructuración social, en otras palabras, para fortalecer la capacidad organizativa de la sociedad mexicana, pero al mismo tiempo, ha mostrado la aceptación de las reglas del juego electoral de parte de las élites políticas, aunque sus comportamientos no se alejen mucho del autoritarismo y de la discrecionalidad. M. Merino Huerta, La democracia pendiente. Ensayos sobre la deuda política de México, FCE, 1993 (Colección Popular, núm. 448). 74. En este caso hay que considera r que los comités vecinales, en ciertas colonias o barrios, pueden llegar a articular la acción de las organizaciones sociales preexistentes, pero con la condición de transformarse en gestores de la ayuda de las autoridades, o sea, en sus intermediarios más que el ser canales de las demandas de sus representados, lo que pone en evidencia la capacidad de respuesta de las mismas autoridades, que en un entorno económico neoliberal, se limitan más a la promoción y la corresponsabi lidad . J. Sobrino y C. Garrocho, Pobreza, política social y participación ciudadana, El Colegio Mexiquense-Sedesol, 1995, p. 288. 75. La directora del Centro de Atención al indígena Migrante (Catim) en la Ciudad de México, Luz Margarita Malo, opi nó con respecto a la política social de López Obrador, lo siguiente: Ha aplicado una política que "busca derechos compensatorios para la población altamente vulnerable, como la de la tercera edad, discapacitados e indígenas[ ... ] en términos generales en dichos programas hay una buena dosis de asistencialismo puro, en el sentido de que generan ayudas, apoyos e incentivos económicos que no tienen garantizado un esquema de seguimiento ni de operación que permita que su impacto no sólo sea económico, sino cualitativo en el seno de las familias que se trata de beneficiar, y de esa forma nosotros pensamos que los apoyos económicos, sin seguimientos, se diluyen". B. Ramírez, "Ciientelar, la política social del gobierno del Distrito Federal", La Jornada, 5 de julio de 2001, y M. Schteingart y E. Duhau, op. cit, pp. 194 y 195. COMERCIO EXTERIOR, SEPTIEMBRE DE 2005 799 acceso a los recursos del poder político, reproduce la lógica de subordinación de las organizaciones sociales a los imperativos establecidos por la necesidad de obtener votos para garantizar su permanencia en los puestos de elección popular y, en consecuencia, el sentido de los programas asistencialistas se encuentra también en la coyuntura electoral. Por tanto, se ha establecido la compensación para determinados grupos sociales que todavía no se ha institucionalizado para convertirse en un derecho social que evite que su vigencia esté dictada por el periodo de gobierno responsable de su ejecución. López Obrador intenta, al menos en su apoyo monetario para los adultos mayores, convertirlo en ley para establecer una pensión universal debido a que en la nueva Asamblea Legislativa (2003-2006), el PRD tiene la mayoría de las diputaciones locales, con ello se daría un paso importante en su institucionalización que ya no estaría sujeta a la duración del periodo sexenal de gobierno. 76 REFLEXIÓN FINAL L a expansión física de la Ciudad de México ha sido impulsada por la multiplicación de asentamientos precarios y habitados por un universo variado de población que no tiene acceso a los mecanismos formales para la compra de una vivienda. De esa manera, su aparición en las áreas de reserva ecológica no debe resultar extraña: expresa la ausencia de una política pública para atender sus necesidades de vivienda en propiedad privada. Asimismo, una medida de gobierno coercitiva sin una opción real para los demandantes de vivienda con bajos ingresos corre el peligro de convertir en criminales a los grupos sociales que ocupan de manera ilegal un suelo para edificar sus viviendas precarias. A su vez, una movilización social fomentada desde el gobierno, en un entorno de precariedad material, sólo puede tener efectos limitados cuando no se acompaña de una política de vivienda que, por ejemplo, abra otras posibilidades mediante la construcción de vivienda en renta. Mientras, se ha optado por reafirmar el carácter de recreo y turismo, mediante el llamado consumo cultural, del centro histórico de la Ciudad de México, lo cual beneficia a los negocios y a la población solvente que desee vivir en él. Aunque la variedad de medidas de gobierno para promover el bienestar social es insuficiente frente al número de pobres, sus limitaciones son también resultado de su focalización aunque con las ayudas a las personas de la tercera 76. M. Durán, "Prepara Andrés Manuel López Obrador pensión; promete enviar iniciativa de ley a la Nueva Asamblea Legislativa del Distrito Federal", Reforma, 11 de agosto de 2003, p. 3. 800 LA PRO BLEM ÁTI CA URBANA DE LA CIUDAD DE MtXICO edad se ha alcanzado legalmente su universalidad (Ley de los Derechos de las Personas Adultas Mayores en el Distrito Federal, 1999). Se necesita entonces recuperar la universalidad de los programas sociales mediante las instituciones y no sólo por medio de la mercantilización para que los compromisos del gobierno local con relación al bienestar colectivo sean una realidad. Asimismo, mantener controlados los presupuestos públicos para manejar los déficit es importante; sin embargo, se ha transformado en el pretexto principal para no gastar o realizar inversión social. Es decir, los objetivos de desarrollo social han quedado subordinados a los imperativos del dogma económico de buscar el equilibrio fiscal y de ver como un signo negativo el endeudamiento gubernamental. El gobierno de López Obrador ha intentado romper con el dogma pero aplicando un programa de austeridad que ha afectado los ingresos de los empleados y, en menor medida, de los altos funcionarios y aplicando también medidas coercitivas contra la corrupción practicadas en las oficinas del gobierno local pero sin que la corrupción de cuello blanco se extirpe del todo en la administración pública. ~