Editorial Comunicaciones Técnicas Edita: Real Federación Española de Balonmano. C/ Ferraz nº 16, 28008 Madrid. Tfno: 91 548 35 58 Fax: 91 542 70 49 Pág. web: www.rfebm.com e-mail: [email protected] Secretario Técnico: Miguel Ángel Lebrón Gómez de la Llamosa Fotografía: Carlos Martínez Diseño y Maquetación: Altermedia Comunicación 2000 S.L. Fotomecánica e impresión: Running Producción S.A. Se marchó a Portugal, pero no se ha olvidado para nada del balonmano español, de "su" balonmano, donde ha conseguido grandes éxitos como técnico de clubes, como el BM Guadalajara o el Juventud Alcalá, también como responsable de selecciones nacionales, como la juvenil masculina, o como coordinador técnico. Nos referimos, naturalmente, a Manolo Laguna, quien antes de irse a tierras portuguesas nos prometió transmitirnos sus pensamientos y sus ideas sobre el balonmano, que se practica actualmente en todo el mundo. Los conceptos técnicos parecen que han evolucionado y en la misma línea de anteriores números de "Comunicaciones Técnicas", la Real Federación Española de Balonmano os ofrece esta publicación del mes de Abril con ciertas reflexiones muy atinadas de Manolo Laguna, sobre la continuidad en el juego ofensivo. Laguna pretende hacer unas consideraciones generales respecto al entrenamiento adecuado para conseguir un ataque posicional más fluido, donde las situaciones de lanzamiento ofrezcan más garantías de eficacia, sobre la base de una elaboración colectiva. Su elaborado y acertado trabajo lo ha dividido Manolo Laguna en dos partes. En la primera nos transmite unos conceptos teóricos, que, luego apoyará con ejercicios prácticos en la próxima entrega, que igualmente, os ofrecerá la RFEBM, a través de estas Comunicaciones Técnicas. Vaya, por tanto, una muestra de agradecimiento a Manolo Laguna por el detalle de no olvidarse de los técnicos españoles y, por supuesto, de la Real Federación Española de Balonmano, con la que sigue colaborando estrechamente. En este número colabora: Entre los años 1.988 y 1.993 dirige el C.BM. GUADALAJARA donde se consiguen dos ascensos a División de Honor dirigiendo también las Escuelas de Balonmano de la Diputación de Guadalajara. En los años 1.993 y 1.994 dirige en División de Honor el C.BM. JUVENTUD ALCALA. MANUEL LAGUNA ELZAURDIA Nacido en Camarena (Toledo) fecha: 112-1950 Entre el año 1.970 y el 1.981 entrena Infantiles, Juveniles, Cadetes Entre el año 1.981 y el 1.988 dirige las Escuelas de Balonmano de Alcalá de Henares y es el responsable de Balonmano del C.I.T.D. de Alcalá. Seleccionador Nacional Juvenil en dos etapas diferentes entre 1.993 y 2.000 consiguiendo: Subcampeonto de Europa (Estoril 1.999) Subcampeonato de las Jornadas Olímpicas de la Juventud Europea (Lisboa 1.997) Medalla de plata en los Juegos Mundiales Juveniles (Moscú 1.998) Campeón del Torneo de las Naciones (Madeira 1.998) Campeón de la Copa Latina en 3 ediciones Desde el año 1.986 colabora regularmente y de forma ininterrumpida con la Real Federación Española de Balonmano como Director del Programa de Detección de Talentos. Profesor Titular de la Escuela Nacional de Entrenadores de la Asignatura de Técnica-Táctica Individual desde 1.991. Responsable del Departamento de Promoción y Base de la Real Federación Española de Balonmano, desde 1.996 hasta 2.000. Coordinador Técnico de la Real Federación Española de Balonmano hasta agosto 2.001. Ha impartido cursos de Balonmano en Portugal, Francia, Argentina, Chile, Uruguay, Bolivia, Perú y El Salvador. EN LA ACTUALIDAD Desempeña el cargo de Seleccionador Nacional Junior de Portugal. 1 La continuidad en el ataque posicional (1ª parte) Si reflexiono sobre cuál es el aspecto del balonmano que más he oído comentar en los últimos tiempos, éste sería sin duda alguna el de la continuidad del juego ofensivo. Continuidad es la palabra de moda, los entrenadores de alto nivel la hacen aparecer en todas sus entrevistas de prensa, los más modestos la sacan a relucir en sus conversaciones con otros compañeros y, al fin, todos la reclamamos, muchas veces desesperadamente, desde los banquillos. Sin embargo tenemos la sensación colectiva de que no avanzamos suficientemente en este terreno. Infinidad de veces he oído señalar la falta de continuidad en el ataque como el defecto más característico del balonmano español. Yo también comparto en cierta forma esta opinión, creo que, aunque en los últimos años en general se ha mejorado el juego colectivo, aún se debe avanzar por este camino. COMUNICACIÓN Nº 211 Por Manuel Laguna Elzaurdia 2 El por qué esto ha llegado a ser así sería difícil de analizar; tal vez el excesivo valor que se ha dado al juego uno contra uno o, como extensión, el juego entre dos atacantes próximos, localizado en una zona, en detrimento de otras posibilidades, o la importancia que se concede a los jugadores que más goles consiguen. En cualquier caso, lo importante ahora, más que husmear en el pasado, es buscar caminos para mejorar en el futuro. En este artículo pretendo hacer unas consideraciones generales respecto al entrenamiento que yo considero adecuado para conseguir un ataque posicional más fluido y donde las situaciones de lanzamiento ofrezcan más garantías de eficacia, sobre la base de una mejor elaboración colectiva. Indudablemente, habrá que tener en cuenta muchos detalles, sobre todo de aspecto técnico-táctico individual, que no se citan expresamente en este trabajo dada la extensión forzosamente reducida del mismo, pero son fácilmente deducibles de las líneas generales que se exponen. LA IMPORTANCIA DEL SENTIDO COLECTIVO DEL JUEGO OFENSIVO Es evidente que se puede conseguir muchos goles a través de acciones de marcado carácter individual. De hecho, vemos algunos equipos que consiguen victorias importantes jugando en ataque sin mucho sentido colectivo, basándose más en las capacidades de finalización de los jugadores que en la elaboración conjunta de las situaciones de lanzamiento. individual de ataque que genera peligro para la portería rival obliga, para ser neutralizada, a una intervención de los defensores que, en principio, modifica la situación defensiva de origen. La nueva situación puede presentar dos tipos de ventaja para los atacantes: - Superioridad numérica ofensiva en alguna parte de la zona eficaz - Ampliación del espacio de maniobra libre de marcaje en alguna parte de la zona eficaz ¿Es realmente necesaria tanta elaboración? A veces, viendo ciertos partidos, parece que todo es sencillo, que basta con tener un par de buenos lanzadores, algún fintador hábil, o dos jugadores que se entiendan para resolver el ataque posicional con éxito. ¿Por qué darle más vueltas? Sin embargo, ésto sólo es útil cuando la superioridad individual de los jugadores es evidente. Cuando deben afrontarse encuentros contra rivales iguales o superiores, la puesta en escena de recursos individuales ya no es suficiente, entonces sólo los equipos que son capaces de "fabricar" situaciones favorables de lanza miento a través del trabajo coordinado de todo el conjunto están capacitados para rentabilizar adecuadamente esta fase del juego. Así vemos equipos que ganan con facilidad muchos encuentros y, sin embargo, parecen tener una barrera invisible que les impide superar los partidos transcendentes, cuando se enfrentan a los equipos de nivel parecido al suyo. Esa barrera que no vemos, en muchos casos está relacionada con la deficiente elaboración del ataque. Cuando no se puede imponer la superioridad individual, y no se tienen recursos colectivos de ataque, el rendimiento baja tanto en esta fase que es difícil equilibrar el partido. El Balonmano es un deporte colectivo, y solo agotando sus posibilidades colectivas podemos pensar que estamos jugando razonablemente bien. LA CONTINUIDAD ¿Por qué las situaciones de lanzamiento que no logramos alcanzar a través de acciones individuales se pueden conseguir rentabilizando el juego colectivo? La respuesta es sencilla: una acción 3 El Balonmano es un deporte colectivo, y sólo agotando sus posibilidades colectivas podemos pensar que estamos jugando razonablemente bien. Cuando deben afrontarse encuentros contra rivales iguales o superiores, la puesta en escena de recursos individuales ya no es suficiente El encadenamiento inteligente de acciones puede llevarnos a conseguir lo que no podemos lograr individualmente. La continuidad por sí misma no significa nada, se puede jugar con mucha continuidad y, sin embargo, ser muy ineficaz. La continuidad está íntimamente relacionada con el movimiento colectivo del balón. 4 Si se consigue una de estas ventajas, o las dos, la siguiente intervención ofensiva tiene más posibilidades de éxito siempre que el juego se oriente hacia las zonas donde mejoraron las posibilidades del ataque. Si aún así la situación no es suficientemente ventajosa como para lograr un lanzamiento con garantías de gol, es posible que se consiga un mayor desequilibrio defensivo. De esta forma, acumulando pequeñas ventajas se puede llegar a una situación realmente favorable. Para esto, el juego colectivo debe canalizarse adecuadamente para capitalizar las ventajas que se van obteniendo antes de que los defensores logren amortizarlas. El encadenamiento inteligente de acciones puede llevarnos a conseguir lo que no podemos lograr individualmente. De esta forma la palabra CONTINUIDAD pasa a ser la clave para sacar rendimiento al juego colectivo de ataque posicional. Claro que la continuidad por sí misma no significa nada, se puede jugar con mucha continuidad y, sin embargo, ser muy ineficaz. La continuidad para ser rentable debe cumplir las siguientes condiciones: - Cada acción debe aumentar, o al menos mantener, la ventaja lograda por las acciones precedentes. - Hay que mantener la continuidad hasta lograr una ventaja suficiente, evi- tando forzar las situaciones dudosas. - Las acciones se deben encadenar con suficiente rapidez para evitar la amortización defensiva de las ventajas obtenidas. - En la medida de lo posible, deben ser sorpresivas para los defensores, dificul tando al máximo la capacidad de anticipación. Es preciso destacar que la continuidad está íntimamente relacionada con el movimiento colectivo del balón. Sólo con el balón se puede conseguir gol y, en consecuencia, la situación del balón marca la zona de peligro inminente. Si los defensores logran cortar o condicionar el movimiento de balón conseguirán romper la continuidad del ataque. UNA APROXIMACIÓN AL PROBLEMA No todos los jugadores están preparados para sacar partido en ataque al juego colectivo. En realidad, muchos deben aprender a actuar de acuerdo con las exigencias que el juego en continuidad plantea. Para hacer una aproximación práctica al problema de la continuidad no me perderé en cada uno de los detalles que podrían contribuir a mejorar la continuidad ofensiva. Prefiero marcar lo que, según mi criterio, son los defectos más habituales y contraponerlos al tipo de actuación que debemos buscar. (Cuadro nº1) Cuadro 1 CÓMO SE ACTÚA... ¿QUÉ SERÍA MEJOR PARA LA CONTINUIDAD? ACCIONES LARGAS CON BALON (No consiguen crear peligro con acciones cortas) CREAR PELIGRO CON POCOS PASOS Y POCOS GESTOS. SÓLO SON CAPACES DE CONTROLAR EL ENTORNO PROXIMO PERCEPCIÓN DE TODA LA ZONA EFICAZ Y TRATAMIENTO GLOBAL DE LA INFORMACION SE BUSCA RAPIDAMENTE UNA ACCION DECISIVA SIN VALORAR EL RIESGO SE DEBEN VALORAR LOS RIESGOS Y EVITAR LAS FALTAS A FAVOR QUE ROMPEN LA CONTINUIDAD NO SE UTILIZA LA CIRCULACIÓN DE BALON COMO ARMA PARA ROMPER LA DEFENSA EMPLEAR EL MOVIMIENTO COLECTIVO DE BALON PARA DESEQUILIBRAR Se puede sintetizar esto en los cuatro puntos siguientes: información captada es básico para lograr un ataque más fluido. * Las acciones individuales de ataque, (sobre todo en posesión del balón) son excesivamente largas (muchos pasos, mucho tiempo, muchos gestos) o, por el contrario, son cortas pero no crean peligro. Esto les concede muchas posibilidades a las defensas para amortizar los errores y para adaptarse. * Los jugadores buscan rápidamente una acción decisiva (lanzamiento, finta, pase al pivote) con lo que provocan muchos lanzamientos forzados e inefica ces, pérdidas de balón y faltas de los defensores que rompen la continuidad del ataque. Los jugadores deben adquirir la capacidad de crear mucho peligro empleando "poco tiempo, pocos pasos y los gestos justos", la calidad de las fijaciones está muy relacionada con este criterio, ya que es lo que permite a los atacantes acumular ventajas al dificultar la adaptación de las defensas. * Los atacantes son capaces de controlar el entorno próximo pero tienen dificultades para controlar simultáneamente el resto de elementos del juego. Así la continuidad no se realiza muchas veces en el sentido más rentable para el equipo atacante. Mejorar la capacidad perceptiva de los jugadores y el tratamiento global de la Los jugadores deben adquirir la capacidad de crear mucho peligro empleando "poco tiempo, pocos pasos y los gestos justos" Mejorar la capacidad perceptiva de los jugadores y el tratamiento global de la información captada es básico para lograr un ataque más fluido. Se debe jugar valorando adecuadamente los riesgos y evitando las faltas "a favor" que sólo favorecen los intereses defensivos. Se debe jugar, por el contrario, valorando adecuadamente los riesgos y evitando las faltas "a favor" que sólo favorecen los intereses defensivos. * No se emplea la circulación colectiva de balón como arma para desequilibrar la defensa; se confía en las acciones individuales de los jugadores como recurso principal para crear peligro. Sin embargo, la utilización adecuada del movimiento de balón (cambios sorpresivos de dirección en el pase, pases inesperados a zonas lejanas, cambios en el ritmo de la circulación) produce muchos desequilibrios defensivos que pueden ser aprovechados colectivamente por el ata que. La utilización adecuada del movimiento de balón produce muchos desequilibrios defensivos que pueden ser aprovechados colectivamente por el ataque. 5 La mayoría de las acciones con balón no se alargan por problemas exclusivamente técnicos, la raíz del problema suele ser de carácter perceptivo. El trabajo técnico será inútil si no lo acompañamos del correspondiente entrenamiento de mejora de la captación y tratamiento de la información en el juego. EL ENTRENAMIENTO PARA MEJORAR LA CONTINUIDAD De lo expuesto en el apartado anterior es fácilmente deducible que el entrenamiento para mejorar la continuidad en el juego posicional ofensivo debe contem plar cuatro líneas básicas de actuación, que se corresponden con la corrección de los defectos señalados. LA MEJORA DE LAS FIJACIONES Cualquier jugador con una experiencia normal es capaz de conseguir la fijación de uno o varios oponentes durante el juego, sin embargo, no todos son capaces de rentabilizarlas adecuadamente. El objetivo fundamental, como ya he señalado, será el de conseguir que, en las acciones con balón, los jugadores sean capaces de crear mucho peligro en acciones muy cortas, evitando conceder a la defensa tiempo para la adaptación. Esto requiere un detallado trabajo técnico, pero con esto no basta, la mayoría de las acciones con balón no se alargan por problemas exclusivamente técnicos, la raíz del problema suele ser de carácter perceptivo. Cuando vemos un jugador que recibe el balón casi parado, da un bote antes de emprender una acción ofensiva y luego necesita dos o tres pasos para intentar atacar la portería contraria, lo que sucede en realidad es que está "pidiendo tiempo" para captar y tratar la información que le permita actuar. Así muchas veces hablamos de jugadores que en "el entrenamiento dominan las acciones con uno o cero pasos pero cuando llegan al juego siempre necesitan muchos pasos para actuar". No encontramos explicación para esta circunstancia e insistimos en el trabajo técnico o en último lugar aceptamos esta forma de juego de manera fatalista, como si no hubiese solución. En realidad, siempre se puede mejorar si se acierta en el tratamiento del problema. En estos casos el trabajo técnico será inútil si no lo acompañamos del correspondiente entrenamiento de mejora de la captación y tratamiento de la información en el juego. Para que las fijaciones contribuyan mas eficazmente al juego colectivo el entrenamiento se debe orientar según las pautas siguientes: * Mejora técnica - Dominio, en posesión de balón,de las acciones con cero o un paso - Mantenimiento de la orientación de los pies hacia portería en las acciones de ataque con balón - Eliminación de gestos superfluos (en los movimientos de manejo de balón y de otros segmentos corporales) - Utilización predominante en el ataque posicional de los pases con brazo arma do (sobre todo por parte de los jugadores de primera línea.) Este tipo de pases son los únicos que nos permiten atacar simultáneamente a portería, por la posibilidad de lanzamiento inmediato que nos proporcionan y, en consecuencia, dan más capacidad de fijación. * Mejora perceptiva - Introducir, en los trabajos dedicados a la mejora de la calidad de las fijaciones, exigencias perceptivas según los criterios que se exponen en el apartado siguiente. La mejora técnica no es suficiente por sí misma. 6 LA MEJORA PERCEPTIVA Un aspecto trascendente para la mejora de la continuidad en el juego posicional ofensivo es el de la mejora de la captación y tratamiento de la información durante el juego. Aludo conjuntamente a la "captación y tratamiento de información" de forma intencionada, pues aunque estamos acos tumbrados a hablar por una parte de percepción y, por otra, de los aspectos cognitivos, en la realidad son cuestiones que están íntimamente relacionadas. Se percibe desde el conocimiento. No hay percepción sin estímulo, pero el estímulo no determina por completo la percepción. No captamos los estímulos de una forma neutra, simultáneamente a los datos captados se les da un significado; pasamos lo visto por el tamiz de lo sabido. Nuestros proyectos dirigen nuestros sentidos, verdaderamente lo que hacemos es someter a la realidad a una entrevista; no somos responsables de las contestaciones que nos da, pero de la inteligencia de nuestras preguntas depende el interés de las respuestas. Mejorar la capacidad perceptiva está relacionado con "enseñar a preguntar" y se pregunta desde el conocimiento y las propias intenciones. No se trata de que los jugadores adquieran un gran volumen de conocimientos; mucho mas importante que esto es proporcionarles información estructurada de forma lógica para que puedan relacionarla y utilizarla ágilmente. A veces, los jugadores poseen mucha información pero grandes dificultades para manejarla. El Balonmano, como la totalidad de los deportes colectivos, es un juego sencillo, las dificultades cognitivas están al alcance de la comprensión de cualquier persona normal, pero requiere en gran número de ocasiones respuestas muy rápidas, en situaciones muy abiertas, en las que influyen gran cantidad de factores y se admiten múltiples soluciones. En estas condiciones, la eficacia de la respuesta no esta relacionada solamente con la capacidad cognitiva del individuo, sino con la facilidad para responder en el "tiempo útil". Podíamos decir que tan importante es enseñar a responder bien como a actuar con rapidez. Mejorar la capacidad perceptiva está relacionado con "enseñar a preguntar" y se pregunta desde el conocimiento y las propias intenciones. Tan importante es enseñar a responder bien como a actuar con rapidez. 7 La tendencia a anteponer el juego reflexivo, basado solamente en la información que el sujeto controla conscientemente, inhibe el tratamiento global de la información que llega al cerebro y prioriza formas de actuación que, en ocasiones, son excesivamente lentas. 8 El problema es que la tendencia a anteponer el juego reflexivo, basado solamente en la información que el sujeto controla conscientemente, inhibe el tratamiento global de la información que llega al cerebro, que es mucho más extensa, y prioriza formas de actuación que, en ocasiones, son excesivamente lentas. No se debe confundir inteligencia con tratamiento consciente de la información. Hay muchos procesos inteligentes que no son totalmente conscientes e incluso otros que son totalmente inconscientes. Este tipo de procesos, que no tienen la precisión de los realizados conscientemente, se adapta bien a las exigencias de muchas situaciones y tienen la ventaja de la velocidad de respuesta y de la mayor cantidad de información tenida en cuenta. Hablando de una forma coloquial, resumiría todo esto diciendo que no se debe anteponer la inteligencia reflexiva a la inteligencia intuitiva, cada una debe tener su lugar en el juego y el entrenamiento debe estar dirigido por este propósito. En consecuencia, el entrenamiento para la mejora perceptiva debe buscar los objetivos siguientes: - Ampliación del campo visual, tanto en amplitud (anchura) como en profundidad. - Disminución del tiempo para la toma de decisiones. - Desarrollo del tratamiento global de la información. - Desarrollo de la atención selectiva. - Desarrollo de la anticipación perceptiva (capacidad de anticipar la actuación basándose en indicios.) La organización del trabajo debe inspirarse en los criterios que enumero a continuación: - Planteamiento de situaciones amplias, en las que inter vengan un número suficiente de jugadores y se desarrollen en zonas extensas del terreno de juego. - Aumento artificial del número de estímulos presentes en las situaciones de entrenamiento (más balones, elementos no habituales, desigualdad en el número de atacantes y defensores, etc.) - No aumentar nunca artificialmente el tiempo de toma de decisión. - Reducción progresiva del tiempo de decisión con normas cada vez más restrictivas, (disminución del tiempo de posesión de balón, límite del número de pasos, restricción de la utilización del bote, etc.) - Evitar los planteamientos reflexivos en el mismo momento de la actuación del deportista. La orientación verbal durante la actuación inhibe el tratamiento global de la información en beneficio del tratamiento analítico. Las reflexiones deben hacerse en pausas o momentos alejados de la práctica. - Organización de situaciones de entrenamiento abiertas, con soluciones no predeterminadas. Las situaciones deben abrirse igualmente, de forma progresiva, según aumenta la capacidad perceptiva de los deportistas. No se debe confundir inteligencia con tratamiento consciente de la información. Hay muchos procesos inteligentes que no son totalmente conscientes e incluso otros que son totalmente inconscientes. 9 No se debe anteponer la inteligencia reflexiva a la inteligencia intuitiva, cada una debe tener su lugar en el juego y el entrenamiento debe estar dirigido por este propósito. LA VALORACIÓN DEL RIESGO Señalaba la escasa valoración del riesgo como uno de los defectos que hacían que se rompiera constantemente la continuidad. ¿Cómo se puede definir con precisión lo que es un riesgo excesivo? Yo, desde luego, no encuentro la forma. Sin embargo hay una referencia que nos orienta sobre el riesgo que se está asumiendo: la eficacia No existe mucha costumbre de controlar la eficacia en el entrenamiento y esto va dejando la sensación de que "todo vale"; al final siempre se juega como se entrena. Cuando hablo de eficacia no me refiero solo a las estadísticas personales de un jugador, es preciso valorar también la eficacia del equipo o el grupo de entrenamiento que está actuando. La referencia colectiva debe tener siempre un significado muy importante para el jugador. Pienso que se asumen riesgos excesivos por cuestión de hábito. Para cambiar esta tendencia es necesario fomentar los hábitos contrarios en los entrenamientos, tanto en el aspecto colectivo como en el individual. Las siguientes líneas de actuación pueden ayudar a este propósito. - En los ejercicios destinados a la mejora de acciones de finalización (lanzamientos, fintas,situaciones 2x2 en un espacio limitado, etc.) proporcionar salidas sencillas para la con tinuidad,no obligar a finalizar a toda costa. - Favorecer, en ejercicios de entrenamiento, la continuidad añadiendo normas que limiten la actuación individual (reducción del número de pasos, restricción de la utilización del bote, etc.) - Ampliar artificialmente las posibilidades de los defensores (si hacen falta al jugador con balón recuperan la posesión del mismo, si tocan al jugador con balón ganan,etc.) - Utilización de juegos con objetivos concretos para los atacantes, desconocidos por los defensores (hay que finalizar en 2ª línea, o en 1ª; hay que conseguir gol después de x pases; sólo hay dos jugadores que están autorizados a lanzar, etc.) - Juegos en igualdad numérica con apoyos libres de marcaje para los atacantes (4x4,3x3 + 2 apoyos) - Control sistemático de la eficacia en todas estas situaciones de entrenamiento, con exigencia progresiva de aumento de la misma. 10 LA CIRCULACIÓN DE BALON COMO ARMA OFENSIVA La utilización del movimiento de balón como arma colectiva de ataque es lo que da sentido a la continuidad en el juego ofensivo. A través de la circulación inteligente es como se consigue capitalizar colectivamente las acciones individuales. Ahora bien, el movimiento por si mismo no crea peligro, es la intencionalidad del mismo la que le otorga valor ofensivo. Esto quiere decir que deben existir intenciones colectivas, que no basta con el buen hacer o la genialidad de uno o dos jugadores aislados, que sólo se puede sacar rendimiento sistemáticamente del movimiento de balón si todos los componentes del equipo se comprometen en esta tarea y si todos dominan los recursos que esta actividad proporciona para desequilibrar a los defensores rivales. No existen reglas fijas, todo depende de las características de la defensa que se No existe mucha costumbre de controlar la eficacia en el entrenamiento y esto va dejando la sensación de que "todo vale"; al final siempre se juega como se entrena. 11 La utilización del movimiento de balón como arma colectiva de ataque es lo que da sentido a la continuidad en el juego ofensivo Pero el movimiento por si mismo no crea peligro, es la intencionalidad del mismo la que le otorga valor ofensivo tenga enfrente. Es muy diferente atacar una defensa que no busca la anticipación y colectivamente funciona con criterios zonales, que otra presionante e individualizada. Pero eso es un problema de planteamiento táctico que definirá qué intencionalidad conviene darle en cada caso al movimiento colectivo de balón. En cualquier caso, existen una serie de recursos que el jugador debe conocer y dominar para aplicar según convenga en cada caso. Los recursos más importantes en este terreno son: - La velocidad con que circula el balón. Esta velocidad depende sobre todo de la duración de las acciones con balón. Si queremos una circulación rápida se debe atacar con acciones cortas (aunque no siempre interesa que el balón circule rápidamente.) - Los cambios de ritmo en la circulación. - Los cambios sorpresivos en el sentido de la circulación. - Los pases sorpresivos a zonas lejanas. - La capacidad técnico-táctica individual para esconder las acciones de pase. (pasar con recorridos cortos de brazo, separación mirada-pase, elección adecuada de la trayectoria del pase, etc.) - La actividad sin balón que asegure apoyos para garantizar la fluidez del movimiento de balón (utilización equilibrada de los desmarques "ofensivos" y "defensivos") El entrenamiento para mejorar el movimiento colectivo de balón puede emplear algunas de las ideas que propongo a continuación: - Trabajos en superioridad numérica clara (6x4,5x4) con un número limitado de pases ( 4 ó 5 ) para conseguir gol. - Situaciones de igualdad numérica con limitación de las posibilidades de la 1ª línea ( número de pasos, prohibición de botar, acotación de las posibles zonas de finalización, etc.) - Juegos en igualdad numérica (6x6, 5x5, 4x4) con utilización de un tema colectivo ( " debe conseguirse gol a través de un cambio de sentido de pase", o "... a través de un pase largo", etc.) desconocido por los defensores. 12 LA CONTINUIDAD DE "LA CONTINUIDAD" En esta "COMUNICACIÓN TÉCNICA" he planteado unas ideas generales sobre la continuidad en el juego de ataque posicional. Sin embargo, soy consciente de que un ejemplo vale, muchas veces, más que mil palabras. Este trabajo quedaría incompleto si no se aportan algunos ejemplos prácticos de ejercicios para la mejora de cada uno de los aspectos destacados en esta exposición. Con toda seguridad el plasmar las ideas en propuestas concretas ayudará a comprender mejor lo que quiero trasmitir. Aplazo para la próxima entrega esta aportación.. La segunda parte será de carácter totalmente práctico. Sólo se puede sacar rendimiento sistemáticamente del movimiento de balón si todos los componentes del equipo se comprometen en esta tarea y si todos dominan los recursos que esta actividad proporciona para desequilibrar a los defensores rivales. (Continuará) 13 La quimera del talento Centros de Tecnificación Deportiva, Detección de Talentos y Futuras Selecciones, constituyen episodios de un único programa que representa la evolución del aprendizaje y adquisición de nuevas capacidades técnicas, tácticas y físicas, denominado Programa Nacional de Tecnificación Deportiva. La fusión de los tres programas existentes del C.S.D. en lo que se refiere a la búsqueda, captación y formación de jóvenes con talento, es un paso adelante en la coordinación de un proceso formativo que en este caso afecta a los deportistas que poseen aptitudes para el alto rendimiento. Por: Juan Antonio Moreno Rodríguez Coordinador Técnico de Base de la R.F.E.BM. En el deporte, en general, esta unificación en forma de línea continua, no sólo aparece como una optimización de recursos materiales, económicos, sociales y políticos, sino como una necesidad globalizadora de que todos los esfuerzos humanos implicados al respecto sean coordinados bajo parámetros, directrices y objetivos comunes y que adaptándose a cada etapa o subprograma comparten idéntica filosofía de trabajo. En lo que respecta al Programa de Detección de Talentos Deportivos en el ámbito del Balonmano las aportaciones de Manolo Laguna, ahora en Portugal, Paco Sánchez y Luis Carlos Torrescusa, desde sus primeros compases en el 97, han sido de vital importancia a la hora de sentar las bases del actual programa y elaborar un plan director que permita ejecutarlo de forma operativa. No es tarea fácil. Desarrollar un plan de detección de talentos pasa por la propia definición del concepto de talento deportivo y la necesidad de su revisión a lo largo del tiempo ya que los valores vigentes van modificándose dejando paso a soluciones diferentes cada vez más creativas y eficientes. ¿Qué es el talento? Me aproximaría diciendo que se trata de la manifestación de una/s aptitud/es, capacidad/es o habilidad/es extraordinaria/s en un/os aspecto/s concreto/s. En el caso del deporte en general y el Balonmano en particular podría parecer sencillo establecer el criterio de talento en términos de eficiencia y eficacia, pero al ser actividades sujetas a procesos de formación y al establecimiento de categorías en función de edades y sexo, estos componentes están predeter minados al contexto donde se manifiesten. Es decir, la evidencia en el deporte de lo efectivo y eficaz es inmanente a la propia acción de los sujetos que practican una disciplina en concreto y que interactuan en función de su lógica sociomotriz intentando en cada instante superar al adversario o en el simple hecho deportivo de perder o ganar. Sin embargo, el proce so de detección posee condicionantes de identificación y predicción cuya experien cia nos acerca a la idea de que lo eficaz y eficiente hoy, no lo es tanto en un futuro. Por eso vemos jugadores/as individual mente y equipos colectivamente, que 14 amparados en un sistema de formación que clasifica a sus participantes por edades pueden resolver problemas físicos, técnicos o tácticos en un contexto que difícilmente podrían solucionar en etapas superiores. El crecimiento y la maduración como procesos fisiológicos en el ser humano son acontecimientos determinados genéti camente que no llegan a todos en el mismo momento pero que sí representan un aspecto predecible y por lo tanto son motivo de control. Las manifestaciones físicas, técnicas y tácticas en el juego de alto rendimiento son siempre una tendencia que se extiende y a la que se acogen radialmente los colectivos de categorías inferiores y a este respecto, las cualidades antropométricas han sido siempre un valor preciado en la alta competición, que como demuestran los últimos análisis en el juego de élite juvenil (Cto. Europa Juvenil Masc.’01, Román Seco 2001) se consolida la apuesta por jugadores grandes sobre todo en lo referente a espacios defensivos centrales donde la media de altura se sitúa en 193.6 cm. aunque el promedio de los 7 jugadores titulares de los 12 equipos participantes sea de 187.2. El estudio en el Cto. Femenino no es comparativo puesto que en el trabajo estadístico se incluyen a todas las jugadoras participantes de los 12 equipos y no sólo a las 7 jugadoras iniciales. Aún así la media está en 173.9 (Sevim, 2001). Como contraste decir que nuestros equipos nacionales alcanzan 170 cm. el Junior y Juvenil femenino, 188.3 el Juvenil masculino y 191 el Junior como valores medios. El proceso de determinación del talento deportivo no es tan simple como valorar antropométricamente a un sujeto limitado a cifras de altura, peso, envergadura, pliegues cutáneos etc. pero no por ello renunciaremos a la búsqueda de parámetros objetivos que determinen la compleja quimera de definir el jugador con talento. Así, se han establecido cuatro campos susceptibles de ser medidos objetivamen te y sobre los cuales quedaría expresado el jugador/a con posibilidades de alcanzar el perfil exigido en la élite, que son: las características biológicas (antropometría y valoración biosanitaria), cualidades físicas (fuerza explosiva, velocidad, resistencia y flexibilidad), condiciones para el desarrollo del juego (capacidad de manipulación, cap. de desplazamiento e inteligencia táctica) y características psicológicas (motiva ción, concentración, control emocional y autoconfianza en el deporte). Todos estos valores nos darían un espectro de cada jugador que queda registrado en una base de datos y que son comparables con los aportados por sujetos que han llegado a la alta competición. La aproximación a estas mediciones de un/a jugador/a determinado/a nos facilita ría la interpretación de su posible talento deportivo en la disciplina del Balonmano. La detección precoz del talento deportivo para una mayor y mejor intervención sobre el mismo, es uno de los grandes problemas a los que se enfrenta cualquier tipo de plan de captación. El "cuándo y cómo" representan los puntos de divergencia en los técnicos encargados del proceso de formación de los jóvenes jugadores a la hora de establecer los criterios de selección a ser observados y evaluados. El proceso de detección posee condicionantes de identificación y predicción cuya experiencia nos acerca a la idea de que lo eficaz y eficiente hoy, no lo es tanto en un futuro. El momento de intervención y un sistema competitivo inspirado en el alto rendimiento ponen en tela de juicio los beneficios de una detección y captación temprana. Sin embargo y, como siempre, el juego de contrastes nos acerca a una realidad más acertada. Un vistazo a deportes próximos como son el fútbol, el baloncesto o la gimnasia deportiva nos muestra modelos de práctica competitiva a niveles de selección en edades que en Balonmano, sin entrar en 15 polémica terminológica, comprenden la etapa de aprendizaje de iniciación y que en el actual contexto social y deportivo de nuestro deporte sería totalmente inacepta ble. El "cuándo y cómo" representan los puntos de divergencia en los técnicos encargados del proceso de formación de los jóvenes jugadores El futuro a medio plazo sobre este tema se nos antoja a todas luces contradictorio. Por un lado, existe cierta crítica social sobre la postura del esfuerzo y el rendimiento en púberes y adolescentes, y por otro los clubes españoles de más alto nivel cada vez más, insisten en una extremada juventud protegidos en la excusa de la formación físico-deportiva y educativa más completa de sus clubes y la evitación del pago de derechos de formación a sus equipos de origen. Y el Balonmano de base bajo el temor de que sus infantes potencialmente jugadores se inicien en otras prácticas ludo-deportivas, acoge en su seno a jugadores/as también cada vez más jóvenes. Este hecho no es, ni mucho menos, exclusivo del Balonmano, ni de otras disciplinas, ni del deporte en general. Responde a la dirección universal de una sociedad progresivamente más especializada donde la competencia es la moneda de cambio usual y donde ganar es el privi- legio de los más capaces y preparados en el juego de la vida. Nuestro Programa de Detección de Talentos no es ajeno a los problemas sociales y es muy cauto en el diseño de su plan de acción. Intervenimos cuando el jugador abandona la categoría Infantil (13-14 años) para asumir su etapa de aprendizaje específico en la de Cadete. De todos es sabido que se trata del comienzo de una fase de la vida conflictiva donde la riqueza de las experiencias vividas determinan en gran medida el carácter y personalidad de las personas y su relación con las demás. El apego a los padres y la escuela deja paso a la búsqueda de la propia identidad y la exploración de un complejo entramado social hasta ahora desconocido. Biológicamente la aparición de las hormonas anabólicas prepara fisiológicamente las modificaciones de su cuerpo para esfuerzos físicos de mayor envergadura y en los aspectos tecnico-tácticos su proceso de formación anterior le invita a la solución de problemas más difíciles de resolver en donde los espacios de acción y los tiempos de decisión-ejecución se reducen acercándose de forma inexorable al juego adulto. Entendemos que las exigencias del programa se adaptan a su nuevo status quo y que con respecto a un plan de detección de talentos es un marco ideal para lanzar un primer vistazo con unas mínimas garantías de predicción sobre un futuro incierto para todos. El presente actual del programa nos obliga a mejorarlo y a diseñar nuevas estrategias de intervención con las que se optimizen los recursos que ya tenemos, y se empleen otros nuevos que afiancen el éxito del proyecto. La continua revisión del concepto de talento deportivo, la correcta definición de los objetivos que se pretenden, el análisis continuo de los resultados obtenidos en ciclos anuales y plurianuales, la mayor y mejor intercesión asegurando la completa formación integral de todos los ámbitos de los que toma parte en su vida el jugador de Balonmano, son aspectos que en un futuro próximo los responsables de los programas de detección de jóvenes talentos deportivos deberemos hacer frente si queremos para nuestro deporte el éxito que pienso nos merecemos. 16