LA ESCUELA: CLASIFICACION, INTEGRACION, SISTEMA ESCOLAR Y CURRICULO; EL CAMBIO TECNOLOGICO Se refiere al espacio al que los seres humanos asisten para aprender. El concepto puede hacer mención al edificio en sí mismo, al aprendizaje que se desarrolla en él, a la metodología empleada por el maestro o profesor, o al conjunto de docentes de una institución. Por ejemplo: “Cuando era chico, odiaba la escuela”, “¿Ves? Esa es la escuela en la que cursé la Primaria”, “Juan dice que hoy no quiere ir a la escuela porque se siente mal”. Es posible encontrar el término escuela con acepciones concretas (físicas) o simbólicas (abstractas). Expresiones como “El temporal destruyó el techo de la escuela” o “La semana próxima pintarán la escuela” refieren a la escuela material, mientras que frases como “Soy la persona que soy gracias a la escuela” o “Siento nostalgia por mis días de escuela” tienen otro tipo de connotación. En general, las escuelas pueden dividirse en escuelas públicas (de acceso gratuito y gestionadas por el Estado) y escuelas privadas (cuya administración responde a empresas o individuos particulares que cobran cuotas a los estudiantes por los servicios educativos brindados). No obstante, hay que señalar que, además de esa clasificación general, podemos llevar a cabo otras muchas en base, por ejemplo, al tipo de alumnos que poseen o a las materias sobre las que versan. Así se puede hablar de escuelas para mayores. Normalmente estas se caracterizan porque tienen como estudiantes a ciudadanos adultos que tienen carencias a nivel formativo y que aprovechan las clases de dichos centros para aprender a leer o a escribir así como para avanzar en sus estudios. Respecto a las materias sobre las que tratan, nos podemos encontrar con lo que se dan en llamar escuelas de artes y oficios. Como su propio nombre indica, estas instituciones educativas, más que asignaturas generales que se abordan en la educación formal, lo que se encargan es de enseñar a sus alumnos todo lo relacionado con una profesión concreta. Más exactamente es frecuente que las clases se centren en “oficios manuales” tales como carpintería, albañilería, herrería… Dentro de esa misma clasificación podemos establecer la existencia de escuelas de tipo artístico donde los alumnos lo que hacen es aprender todo lo relacionado con una disciplina “artística” como es el caso de la música, la danza o el teatro. Función del Estado en la escuela El Estado es aquel que debe cumplir el papel de garante de la integridad de la función educativa, por lo tanto en general su función es inspeccionar y supervisar y, por el otro lado, gobernar, lo cual se transmite en: • Legislación, para la creación de normas de cumplimiento obligatorio. • Ejecución, llevar a la práctica las normas legales con las que las sociedad dispone. • Jurisdicción o Justicia, que consiste en la aplicación de las penas a quienes no cumplan con las normas legales. CALIFICACION La calificación escolar o nota escolar (o simplemente calificación o nota) es un método utilizado para evaluar y categorizar el rendimiento escolar de los alumnos. La lista de las calificaciones escolares se presenta en un documento que, según el país y la institución, recibe entre otros muchos los siguientes nombres: historia académica o expediente académico o expediente escolar o boleta de calificaciones o certificado de notas o certificado de registro de calificaciones o acta de calificaciones o certificación académica, entre muchas otras denominaciones. La calificación puede expresarse con valores numéricos o con letras del alfabeto (generalmente desde la A hasta la F), según los parámetros establecidos por las leyes de cada país. En el caso del valor numérico, por lo general se toma como el mínimo aprobatorio el 60 por ciento de la calificación máxima, en el caso español el mínimo es exactamente el 50% de la materia. Según cada nivel, se consideran las siguientes apreciaciones: excelente, sobresaliente, distinguido, bueno, suficiente, deficiente y muy deficiente en países de hispanoamérica, en España la tradición es "Matrícula de Honor" (es un honor más que una nota, que premia al mejor alumno en el caso de que haya obtenido normalmente una nota media superior al 9'5) "Sobresaliente", "Notable", "Bien", "Suficiente", "Suspenso". En el caso de Hispanoamérica "Deficiente" y "Muy Deficiente" se dan cuando no se obtiene el mínimo aprobatorio, por lo cual se considera al alumno como reprobado. En el caso español el término adecuado no es reprobar, sino suspender. LA INTEGRACION La integración escolar permite a un sujeto con discapacidad participar de una experiencia de aprendizaje, junto con otros sujetos que tienen otras posibilidades, en el ámbito de una escuela común. Es abrir el aula y la escuela a lo diferente. Es permitir a un sujeto con discapacidad participar de una experiencia de aprendizaje, en el ámbito de la escuela común. Es permitir que este sujeto pueda, desde sus posibilidades, construir sus aprendizajes junto con otros sujetos que tienen otras posibilidades. Es aceptar las diferencias. Es reconocer en la heterogeneidad la mejor condición para el intercambio (aprendizaje). Es abrir el aula y la escuela a lo diferente. Es una toma de posición. Es un derecho de los sujetos que tienen alguna discapacidad. No es un “favor” que hacemos a los sujetos con discapacidad. No es una imposición, que nos llega desde algún lado. No es una estrategia mágica. No es sólo una cuestión de “buenas intenciones”. Si entendemos al Aprendizaje como una construcción social, entenderemos que cada individuo desde su lugar realiza aportes y se enriquece en el intercambio con el otro. Así las diferencias, en lugar de ser un obstáculo para la tarea, son un factor fundamental que enriquece el aprendizaje y favorece el acceso a los distintos objetos de conocimiento. Además, con el contacto con las diferencias cada persona construye su identidad, se constituye como sujeto y aprende a reconocer al otro como alguien distinto de él, ni mejor ni peor, simplemente distinto. En este contexto, el alumno con discapacidad aprende a reconocer lo que puede y lo que no puede hacer; aprende con y de las diferencias, personales y de los otros. Con esto, también, aprenderá a reconocer y buscar su lugar en la sociedad. SISTEMA ESCOLAR El sistema escolar es un conjunto de elementos interrelacionados con un fin determinado; en el caso del sistema educativo, el fin es educar de una manera uniforme a todos los alumnos lo que provoca el retraso de los alumnos más avanzados y la frustración por incapacidad de los alumnos a los que más les cuesta, los elementos principales son: instituciones educativas y normas. El Sistema Educativo o Sistema de Enseñanza puede ser considerado un subsistema social, integrado, junto con otros subsistemas (familiar, ocio/consumo, de trabajo o vida activa) en el amplio sistema social, sometido a sus reglas de juego y exigencias y a la vez prestando un amplio e importante servicio a sus ciudadanos. En él se establece un proceso de "producción de reproducción social". La función que realiza el Sistema Educativo en este proceso de producción de la reproducción social, función que protagoniza y por la que puede ser definido, consiste en retransmitir e interiorizar de forma eficaz y operativa en las nuevas generaciones, que de esta forma quedan integradas socialmente, la cultura "viva", es decir, el conjunto de conocimientos y valores cuya asimilación da como resultado unas actitudes y comportamientos en esas nuevas generaciones, para que estas mediante su integración social, reproduzcan, repongan y aún mejoren el sistema social y su orden. CURRICULO El término currículo ' se refiere al conjunto de objetivos, contenidos, criterios metodológicos y técnicas de evaluación que orientan la actividad académica (enseñanza y aprendizaje) ¿cómo enseñar?, ¿cuándo enseñar? y ¿qué, cómo y cuándo evaluar? El currículo permite planificar las actividades académicas de forma general, ya que lo específico viene determinado por los planes y programas de estudio (que no son lo mismo que el currículo). Mediante la construcción curricular la institución plasma su concepción de educación. De esta manera, el currículo permite la previsión de las cosas que hemos de hacer para posibilitar la formación de los educandos. Para la estructuración del currículo (que es diferente en niveles básico, medio y superior), las autoridades académicas, planificadores escolares, docentes y demás involucrados (pudiendo ser alumnos, egresados, empleadores, etc.) deben tomar en cuenta lo siguiente: • Lo que se debe enseñar y lo que los alumnos deben aprender. • Lo que se debe enseñar y aprender y lo que realmente se enseña y aprende; es decir, lo ideal y es lo real. • Encontrar solución a estos pequeños malentendidos que se crean debido a que no somos capaces de ver más allá de lo que nuestros ojos nos enseñan. Los contenidos. Dentro del marco del nuevo enfoque pedagógico son un conjunto de conocimientos científicos, habilidades, destrezas, actitudes y valores que deben aprender los educandos y los maestros deben estimular para incorporarlos en la estructura cognitiva del estudiante. Si bien es cierto que los contenidos son un conjunto de saberes o formas culturales esenciales para el desarrollo y de socialización de los estudiantes, la manera de identificarlos, seleccionarlos y proponerlos en el currículo tradicional ha sido realizada con una visión muy limitada. La re-conceptualización curricular se ha tenido a bien ampliar esa reducida concepción de los contenidos. En efecto, contamos con tres tipos de contenidos, que se dan simultáneamente e interrelacionadamente durante el proceso de aprendizaje, que son: Contenidos conceptuales (saber) Estos contenidos se refieren a tres categorías bien definidas: Hechos: Son eventos que acontecieron en el devenir de la historia, como ejemplo podemos citar: la rebelión de Tupac Amaru II, el derribamiento del muro de Berlín, etc. Datos: Son informaciones concisas, precisas, sin ambages. Ejm: el nombre del primer astronauta que pisó la luna, el nombre del presidente actual de Uruguay, las fechas de ciertos eventos, etc. Conceptos: Son las nociones o ideas que tenemos de algún acontecimiento que es cualquier evento que sucede o puede provocarse, y de un objeto que es cualquier cosa que existe y que se puede observar. Desde una perspectiva más general, los contenidos conceptuales, atendiendo a su nivel de realidadabstracción pueden diferenciarse en FACTUALES y propiamente conceptuales. Contenidos procedimentales (saber hacer) Se consideran dentro de los contenidos procedimentales a las acciones, modos de actuar y de afrontar, plantear y resolver problemas. Estos contenidos, hacen referencia a los saberes “SABER COMO HACER” y “SABER HACER”. Ejemplo: recopilación y sistematización de datos; uso adecuado de instrumentos de laboratorio; formas de ejecutar ejercicios de educación física, etc. Un contenido procedimental incluye reglas, las técnicas, la metodología, las destrezas o habilidades, las estrategias, los procedimientos; pues es un conjunto de acciones ordenadas secuencialmente y encaminadas al logro de un objetivo y/o competencia. Conviene pues clasificar los contenidos procedimentales en función de tres ejes de los objetivos son: Eje Motriz Cognitivo: Clasifica los contenidos procedimentales en función de las acciones a realizarse, según sean más o menos motrices o cognitivos. Eje De Pocas Acciones-Muchas Acciones: Está determinado por el número de acciones que conforman el contenido procedimental. Eje Algorítmico-Heurístico: Considera el grado de predeterminación de orden de las secuencias. Aquí se aproximan al extremo algorítmico los contenidos cuyo orden de las acciones siempre siguen un mismo patrón, es decir, siempre es el mismo. En el extremo opuesto, el Heurístico, están aquellos contenidos procedimentales cuyas acciones y su secuencia dependen de la situación en que se aplican. Contenidos actitudinales (ser) Estos contenidos hacen referencia a valores que forman parte de los componentes cognitivos (como creencias, supersticiones, conocimientos); de los contenidos afectivos (sentimiento, amor, lealtad, solidaridad, etc.) y componentes de comportamiento que se pueden observar en su interrelación con sus pares. Son importantes porque guían el aprendizaje de los otros contenidos y posibilitan la incorporación de los valores en el estudiante, con lo que arribaremos, finalmente, a su formación integral. Por contenidos actitudinales entendemos una serie de contenidos que podemos clasificarlos en valores, actitudes y normas. Valores: Son principios o conceptos éticos que nos permiten inferir un juicio sobre las conductas y su sentido. Son valores por ejemplo: la solidaridad, la libertad, la responsabilidad, la veracidad, etc. Actitudes: Son las tendencias a predisposiciones relativamente estables de las personas para actuar de cierta manera. Son las formas como una persona manifiesta su conducta en concordancia con los valores determinados. Ejemplos: cooperar con el grupo, ayudar a los necesitados, preservar el medio ambiente, etc. Normas: Son patrones o reglas de comportamiento socialmente aceptadas por convención. Indican lo que se puede hacer y lo que no se puede hacer. El propósito. Plasmar una concepción educativa, la misma que constituye el marco teleológico de su operatividad. Por ello, para hablar del currículo hay que partir de qué entendemos por educación; precisar cuáles son sus condiciones sociales, culturales, económicas, etc. Su real función es hacer posible que los educandos desenvuelvan las capacidades que como personas tienen, se relacionen adecuadamente con el medio social e incorporen la cultura de su época y de su pueblo. Características del currículo educativo El currículo legal, como norma que regula cada una de los niveles, etapas, ciclos y grados del sistema educativo, ha de cumplir cinco características principales: Abierto: El currículo tiene una parte común al territorio nacional (65%-55%: Enseñanzas comunes o mínimas) y otra completada por cada una de las Comunidades Autónomas con competencias en educación (hasta completar el 100%). Flexible: Se puede adaptar a la realidad del entorno del Centro educativo y de los alumnos a los que va dirigido. Inclusivo: Existe una parte de formación común para todos los alumnos a nivel nacional, que cursen estas enseñanzas. Atiende a la diversidad: Permite incluir las diferencias o señas de identidad de cada Comunidad Autónoma. Profesor Reflexivo: Un currículo con las características anteriores, debe dar como resultado la figura de un profesor reflexivo, guía y orientador CAMBIO TECNOLOGICO Durante siglos la escuela ha permanecido igual. Las formas de enseñar, las metodologías, incluso los conocimientos mismos han tenido fortaleza y persistencia tal que el modelo tradicional de aprendizaje que hoy mayoritariamente usamos puede rastrearse hasta antes de la Revolución Industrial y, al decir de algunos, nos quedamos cortos. Sin embargo, el mundo ha cambiado dramáticamente en los últimos treinta años y la escuela, como institución social, debe ser capaz de adaptarse. La globalización, la tecnologización y la hipervinculación han modificado un elemento esencial que era patrimonio casi exclusivo de los sistemas educativos: la gestión del conocimiento. La escuela y los libros tradicionales (de papel) eran los soportes que transmitían mayoritamente el conocimiento y la cultura y sin los cuales era impensable gestionar, promover, transmitir o difundir los saberes nuevos y antiguos. Sin embargo, ello cambió. Bien sabemos que ni el libro tradicional, ni menos la escuela actual, cumplen con las expectativas de los niños y jóvenes actuales y, mucho menos, con las necesidades reales de manejo de información que ellos tienen. Al perder la escuela y los libros el monopolio de la educación, se fueron creando realidades en las cuales el mundo digital se alza como el nuevo reservorio de la cultura universal al que necesariamente debemos adaptarnos o resignarnos a un anquilosamiento personal, laboral, cultural y hasta social. No puede, por cierto, la escuela permanecer ajena a eso. Debemos preparar a nuestros estudiantes en la adquisición de las competencias necesarias para adaptarse a un mundo cambiante. No es fácil para la escuela cambiar la mirada, pues durante siglos recurrió a saberes conocidos para problemas conocidos. Durante siglos fue entregando herramientas y conocimientos que mutaban muy poco y que, por lo tanto, podía el individuo recurrir a ellos a lo largo de su vida cada vez que los necesitara. Ya no es así. Pero no sólo hay que preparar a nuestros estudiantes para dotarlos de las herramientas pertinentes que les permitirán navegar por las marejadas de información de la web, sino que hay la urgente necesidad de establecer y difundir una mirada crítica y ética de los usos tecnológicos que complemente la mera funcionalidad con la que parecen quedarse los docentes más cercanos a la tecnología. El gran desafío, por tanto, no es pensar si es válido incorporar el uso de las tic en educación, esa interrogante ya está hace rato superada, sino cómo aprovechar estas herramientas para desarrollar las capacidades necesarias para desenvolverse en el siglo XXI. No podemos conformarnos con incorporar cantidad de recursos tecnológicos, como suele hacerse a través de los ministerios de educación y creer que con ello estamos en el camino correcto: hay que dar pasos seguros hacia la calidad y ello pasa, forzosamente, por agregar el componente valórico que implica la mirada crítica y la mirada ética de las tecnologías informáticas en educación. Parece fácil decirlo. Pero hacerlo constituye uno de los mayores desafíos que enfrentamos en educación.