OBTENCION DE BIOETANOL DE SEGUNDA GENERACION A PARTIR DE RESIDUOS AGROINDUSTRIALES 1 Nora Aimaretti , Carolina Ybalo1, Mercedes Escorcia1, Agustín Codevilla1, María Luisa Rojas2, Francisco Plou3, Juan Carlos Yori4 1 Laboratorio de investigaciones aplicadas. Universidad del Centro Educativo Latinoamericano. Argentina. 2 Departamento Química Inorgánica y Química Técnica. Universidad Nacional de Educación a Distancia. España. 3 Consejo Superior de Investigaciones Científicas. España. 4 Instituto de Investigaciones en Catálisis y Petroquímica. CONICET. Facultad de Química. UNL. [email protected] Av. Pellegrini 1332 - 2000 Rosario – Santa Fe. Tel: (0341) 426-1241 1- INTRODUCCIÓN La creciente utilización del etanol como combustible, sumada a la disminución de reservas de petróleo, provoca la búsqueda acelerada de tecnologías de producción sostenibles, tanto en lo que refiere al costo y efectividad, como al cuidado medioambiental. En este sentido, la revalorización de los residuos agroindustriales es un tópico relevante en la actualidad, dado que el uso de materias primas renovables, desde el punto de vista energético, es necesario atendiendo a su mejor biodegradabilidad y menor toxicidad (Sánchez y Cardona, 2008). El bioetanol producido actualmente a nivel industrial a partir de las materias primas sacaroideas y amiláceas forma parte de los denominados combustibles de primera generación. El principal problema derivado de la producción de bioetanol a partir de este tipo de biomasa es el elevado costo de la materia prima, ya que dichas biomasas están ligadas al mercado alimentario, lo que repercute en el precio final del producto. Por su parte el bioetanol obtenido de descartes agroalimentarios puede ser considerado bioetanol de segunda generación y se presenta como alternativa de futuro a los biocombustibles de primera generación (Sánchez y Cardona, 2008). La selección de la materia prima más apropiada para la producción de etanol, depende fuertemente de las condiciones locales. América del Norte y los países de Europa, basan la industria del etanol en materiales amiláceos debido a que sus condiciones agroindustriales no son adecuadas para el cultivo de caña de azúcar (Patle y Lal, 2008). Puntualmente la selección de sustratos alternativos para la fermentación etílica debe circunscribirse al área de producción y es por ello que se deben profundizar los estudios particulares, en lo que respecta a la reutilización de materiales descartados, de modo de fomentar la producción de biocombustibles de segunda generación. De este modo no se interfiere sobre los materiales disponibles para la alimentación humana ni animal, al tiempo que se colabora con un desarrollo sustentable (Aimaretti, 2011). Fundamentalmente, los factores más importantes a considerar en la fermentación alcohólica sostenible son: los costos de producción, la posibilidad de conseguir a bajo costo una fuente de carbono y una fuente de los demás nutrientes requeridos para el crecimiento del microorganismo utilizado (Colin y Bjorn, 2002). En lo que se refiere a la fuente de carbono, generalmente involucra el 60-77 % del costo total del proceso (Stanbury y Whitaker, 2003), pero es sabido que el mejor sustrato no siempre es el más económico. Por lo tanto, a la hora de seleccionar los sustratos fermentativos más adecuados para este proceso, se deben tener en cuenta algunas premisas que aseguren su factibilidad. Al respecto, el sustrato debe ser: fermentable; disponible: en cantidad, calidad, oportunidad y precio; almacenable durante el período requerido; esterilizable; de composición poco variable; carente de residuos que no puedan ser tratados o eliminados; y además, tener energía potencial elevada (Gaden, 2000). En nuestro país, como ocurre en otros lugares del mundo, las agroindustrias producen gran cantidad de residuos sólidos que en muchos casos son susceptibles de un aprovechamiento económicamente rentable. Por regla general se puede decir que todos estos residuos pueden emplearse como abonos orgánicos, combustibles o como alimentos en algunos casos. No obstante, la gestión inadecuada de ellos también puede derivar en un impacto de diversa magnitud sobre el ecosistema (Yoon y cols., 2005; De Lora y Miro, 1978). Así, un análisis global realizado sobre el sector industrial de la provincia de Santa Fe (Argentina) evidenció que así como se aúnan esfuerzos por reutilizar los descartes generados en la mayoría de las industrias, no se aplica ningún tratamiento que permita revalorizar los descartes agroindustriales. Si bien estos descartes son aptos para la alimentación animal, poseen casi idénticas características fisicoquímicas y nutricionales que los productos comercializados (Aimaretti, 2006). La frutihorticultura es la actividad de la cual deriva la mayor cantidad de desechos orgánicos (Ministerio de Economía de la Nación, 2008). Tal es el caso de la producción de zanahoria (Daucus carota), con un volumen de producción variable provocan un descarte de 20-80 Tn por día que no son industrializadas sino utilizadas para alimentación de animales (MAGIC, 2006). Este descarte se trata generalmente de materiales que no poseen tamaño y/o forma adecuados para su comercialización, o cuyo valor económico no es suficiente como para justificar el gasto de la cosecha y del transporte (MAGIC, 2006). Así, en el material descartado se incluyen unidades con un óptimo grado de madurez y frescura, aptos para ser sometidos a tratamientos que permitan obtener productos económicamente rentables (Sánchez y Cardona, 2008). Esta hortaliza posee varios minerales y es rica en carbohidratos, siendo los principales azúcares solubles: sacarosa, glucosa y fructosa (Suojala, 2000), lo que permitiría la preparación de un mosto apto para el crecimiento y desarrollo de microorganismos (Stanbury y cols., 2003). Por su parte, del mismo análisis surge también la existencia de un descarte de 1 Tn diaria de células de levadura Saccharomyces cerevisiae proveniente de la fabricación de cerveza por una industria de la misma zona geográfica, que ocasiona un gran conflicto para su eliminación, por su elevada carga orgánica (MAGIC, 2006). Asimismo, para que el proceso de producción de etanol a partir de zanahoria descartada sea sustentable, es fundamental un aprovechamiento eficiente de los azúcares, lo cual se favorece mediante la hidrólisis enzimática de las fibras y una eficiente fermentación a etanol de los azúcares producidos. Además, el proceso debe realizarse con una baja demanda energética. Para lograr estos objetivos son necesarias altas concentraciones de sólidos iniciales en el medio de fermentación que permitan obtener altas concentraciones finales de etanol, junto con una eficiente integración de las etapas de proceso, que -2- permita alcanzar los más altos rendimientos con la mínima inversión en equipos y energía. Dado que se considera que estos materiales pueden ser revalorizados como una fuente alternativa de energía renovable, sustituible, eficiente, efectiva, conveniente y segura (Sánchez y Cardona, 2008), el objetivo de este trabajo consistió en revalorizar ambos desechos agroindustriales, cuantitativamente importantes en la región, para obtener bioetanol de segunda generación, mediante un proceso fermentativo cuyo rendimiento podría ser aumentado a través de la hidrólisis de sus tejidos. Brindando de este modo un destino responsable a dichos residuos, que confiere una solución sostenible e integradora que aporta beneficios tanto ecológicos como económicos. 2 – MATERIALES Y MÉTDOOS 2.1-Preparación de los mostos El descarte de zanahoria se obtuvo de un galpón de empaque ubicado en la localidad de Santa Rosa de Calchines (Santa Fe, Argentina). Para la preparación del mosto, éstas se procesaron crudas, previa selección y descarte de las zonas visiblemente atacadas por microorganismos. Así fueron sometidas a la extracción de su jugo mediante un proceso continuo de molienda, prensado y filtrado, en un extractor de jugo marca Tonomac (Argentina). El rendimiento de este procedimiento fue: 0,54 l de jugo de zanahoria, llamado mosto de zanahoria (MZ) por cada 1,0 kg de zanahoria descartada con una concentración promedio de azúcares reductores fue 49,8 ± 13,4 g/l, sobre un total de azúcares de 94,0 ± 11,7 g/l. Como subproducto de esta operación surgen 0,46 kg de bagazo de zanahoria, el cual fue utilizado para preparar mosto de bagazo (MB), suspendiendo 35 g del mismo en 65 ml de agua destilada y agitando manualmente durante 1 minuto. Así, el rendimiento promedio fue de 1,3 l de MB por kg de zanahoria cuya concentración promedio de azúcares reductores fue 5,8 ± 0,4 g/l, siendo la concentración de azúcares totales: 29,6 ± 4,7 g/l. 2.2- Condiciones de fermentación: Para las fermentaciones alcohólicas se utilizó en todos los casos mosto recién preparado. El inóculo fue de 108 céls/ml (Aimaretti, 2011). La temperatura de incubación fue 28 ± 1 ºC. y el gas se recogió en probeta gasométrica. Las fermentaciones se desarrollaron en procesos batch en biorreactor de tanque agitado de fabricación propia (UNL, Argentina) de 5 l de capacidad, dotado de un sistema de calefacción a través de intercambiadores situados en el interior del vaso y de dos impulsores de paletas planas (uno inferior de flujo axial y otro superior de flujo radial) que permitieron estandarizar la velocidad de agitación en 100 rpm. Tal como indican Laopaiboon y cols. (2009) el volumen total de trabajo fue del 75% del volumen nominal del dispositivo (3,75 l) y el progreso de la fermentación alcohólica se realizó siguiendo la producción de CO 2 , que se colectó en probeta gasométrica (Stanbury y cols., 2003). En el momento en que fuera requerido, se tomaron muestras de los cultivos, que se sometieron a centrifugación durante 10 min a 5000 rpm. El sobrenadante se trasvasó a tubos eppendorf de 1,5 ml de capacidad para su almacenamiento y conservación a – 20°C. 2.3- Biocatalizador: Células libres de la levadura Saccharomyces cerevisiae CCUB fueron utilizadas en todos los experimentos. Estas células de levadura se obtuvieron de la industria -3- cervecera cada vez que fuera necesario.Eventualmente fueron conservadas en envase estéril, sin agregado de nutrientes, a 4 ºC y saturación de humedad. Por experiencias anteriores de Aimaretti (2011) se sabe que la levadura filtrada, puede ser almacenada hasta 9 días a 4 °C sin que su actividad catalítica disminuya más del 10%, por lo que en todos los casos se utilizaron levaduras frescas o con menos de 8 días de almacenamiento. Para la preparación del inóculo, se deslieron las células en agua y mediante un recuento directo diferencial con azul de metileno (Tortota y cols., 1989), en cámara de Neubauer fue posible obtener el inóculo deseado de células viables libres en suspensión y luego fue verificado por el método de recuento en placa propuesto por la FDA (1992). 2.4- Parámetros de cultivo 2.4.1- Rendimiento de etanol por cantidad de sustrato (Yp/s): viene dado por la concentración de etanol (g/l) que se produce a partir de la concentración de sustrato presente en el mosto (bs), en un período determinado, es decir, que responde a la siguiente relación: Yp/s = Concentración de Etanol (g/l) / Cantidad de sustrato (g/l) = [g/g]. (Colin et al., 2002). 2.4.2-. Rendimiento de etanol por cantidad de zanahoria (Yp/z): considerando al rendimiento etílico respecto de la cantidad de zanahoria como la cantidad de etanol (g/l) que se produce por cada gramo de zanahoria (base seca), expresando el resultado como [g/g]. 2.4.3- Productividad (P): en este trabajo, con el fin de obtener datos más comparables, se determinó la productividad calculando el tiempo de fermentación necesario para lograr una determinada concentración de etanol. Los resultados correspondientes se expresaron en unidades de concentración respecto del tiempo [g/l.h]. 2.5- Determinaciones analíticas 2.5.1- Detección de azúcares La determinación de los sólidos solubles (SS) se utilizó como método rápido para conocer la cantidad aproximada de azúcares, empleando la variación del índice de refracción, determinado en forma directa con un refractómetro manual (Cosmo, mod. K32, Japón). El método del ácido 3,5-dinitrosalicílico (DNS) fue utilizado para la determinación de los azúcares totales de los mostos (Simon y Freeman, 1985). Por su parte, para la determinación de los azúcares reductores se emplearon las modificaciones propuestas por Bertolini y cols. (1991), que permiten invertir la sacarosa. Se realizaron controles de calidad internos de soluciones de fructosa con cada determinación. La caracterización de los azúcares presentes en los mostos, se realizó mediante Cromatografía líquida de alta resolución de intercambio aniónico con detección amperométrica de pulsos (HPAEC-PAD), según el método propuesto por Pronto (1998). 2.5.2- Concentración de etanol El etanol se determinó por GLC (PERKIN-ELMER, Sigma 3B, Dual FID Chromatograph, EE.UU.) en el cual se utilizó un detector de ionización de llama y una columna (2.0m longitud) empacada con Chromosorb 102 (fabricada por UNL, Argentina). El horno de la columna se operó en condiciones isotérmicas a 150 °C y los puertos del detector e inyector se mantuvieron a 220 y 195ºC ºC respectivamente. Como gas de arrastre se -4- utilizó N 2 , a una velocidad de flujo de 30 cm3/min y como gas de combustión, una mezcla de H 2 y aire (Ratnam y cols., 2003). 2.6- La caracterización de los efluentes y residuos sólidos obtenidos en el proceso fermentativo se realizó siguiendo la metodología descripta en los Métodos Normalizados para el análisis de aguas potables y residuales (APHA, 2005). 2.7- Análisis Estadístico Todos los experimentos fueron replicados al menos dos veces y todas las determinaciones se realizaron por duplicado. Los datos obtenidos fueron analizados usando el procedimiento de ANOVA de una vía del software SPSS. Las diferencias entre las medias se detectaron aplicando el Test de Rangos Múltiples de Duncan. Los datos se consideraron significativamente diferentes cuando P<0,05. 3- RESULTADOS Y DISCUCIÓN 3.1- Rendimiento etílico de MZ y MB en distintas condiciones Si bien es posible afirmar que el proceso fermentativo es común sea cual fuere la materia prima, la fermentabilidad de cada sustrato depende de sus propiedades intrínsecas. El primer paso en el proceso de producción de etanol es la preparación del mosto. Para ello, tras el acondicionamiento de las zanahorias, se intenta extraer la mayor cantidad de azúcares solubles fermentables, obteniendo MZ y MB, tal como se explica en el punto 2.1. Haciendo referencia a condiciones óptimas de la fermentación alcohólica catalizada por cultivos de células libres de levaduras, halladas en la bibliografía, se evaluó la posibilidad de optimizar el rendimiento etílico de MZ y de MB, siguiendo las recomendaciones de varios autores (Laopaiboon y cols., 2000; Yu y cols., 2009; Patle y Lal, 2008; Stanbury y cols., 2003; Sanches y Laluce, 1998). Para ello se compararon los rendimientos etílicos de los mostos en condiciones naturales, con respecto a los obtenidos a pH 4,5 y/o enriquecimiento con sales, concretamente: 1 % p/v de fosfato ácido de potasio + 1 % p/v de fosfato ácido de amonio + 0,25 % p/v de sulfato de magnesio. Los resultados del rendimiento etílico de cada mosto se muestran en la Tabla 1 junto al detalle de las variables estudiadas. Tabla 1: Diferentes condiciones de fermentación Etanol (g/l) Tratamiento pH Sales MZ MB natural natural natural 30,3 ± 0,2 7,0 ± 0,2 pH 4,5 natural 35,3 ± 0,2 8,1 ± 0,4 Sales natural suplementado 23,7 ± 0,5 5,2 ± 0,5 ambos 4,5 suplementado 22,8 ± 0,4 6,5 ± 0,3 Al evaluar la concentración de azúcares del mosto (por DNS), en función del rendimiento etílico, surgió que en todos los casos, la producción de etanol es directamente proporcional a la concentración de sustratos, manteniendo un rendimiento de producto (Yp/z) constante e igual a 0,109 g/g. No obstante, queda visible en la Tabla 1 que el rendimiento etílico del MZ puede aumentarse mediante el control del pH inicial del mosto. Por su parte, el rendimiento etílico de MB en las distintas condiciones también indica que al controlar el pH inicial se puede elevar mínimamente el rendimiento. -5- Al mismo tiempo se observó en ambos mostos que el agregado de sales, disminuye netamente el rendimiento etílico, lo que puede atribuirse a la posible sensibilidad que pueda tener el biocatalizador a la fuerza iónica del medio (Demain y Davies, 1999). En función de los resultados obtenidos en esta experiencia, se consideraron como condiciones óptimas para la fermentación alcohólica del mosto de zanahoria y de bagazo, la corrección de su pH a un valor estandarizado de 4,5. 3.2- Hidrólisis enzimática de MB Dado que mediante la hidrólisis del tejido de zanahoria suspendido en MB, quedarían disponibles los monoméros de glucosa para ser utilizados por parte del biocatalizador, se propuso adicionar una etapa de hidrólisis de dicho mosto como paso previo a la fermentación. De las hidrólisis conocidas se optó por la hidrólisis enzimática efectuada por el complejo enzimático comercializado como OptimaseCX255L, el cual se compone de un pool de celulasas y xilanas termoestables obtenidas de Trichoderma reesei (Genencor. Danisco). La reacción de hidrólisis se llevó a cabo a pH=5,5 y 70 °C durante un período de 2,5 hs, empleando 400UE/ml de enzima. La evolución de la reacción de hidrólisis sobre MB se siguió a través de la determinación de la concentración de azúcares reductores, detectados mediante la técnica del 3,5-DNS. A su vez, todos los productos de la hidrólisis, se caracterizaron por HPAEC_PAD, destacándose sólo la presencia de glucosa, fructosa y sacarosa en cantidades variables, sin que se advierta la presencia de pentosas o moléculas tóxicas para el biocatalizador, como algunos derivados de la hidrólisis de la hemicelulosa. Como resultado de esta experiencia se logró incrementar el 78,5% el contenido de azúcares de MB, lo que redundó en un incremento del rendimiento etílico a Yp/s=0,290. 3.3- Hidrólisis enzimática de zanahoria El interés sobre el estudio de la aplicación de enzimas en la industria de la extracción de productos vegetales se ha incrementado de modo importante en las últimas dos décadas, debido a que ha mostrado ser una herramienta versátil en la liberación de los componentes de las células del tejido además de liberar compuestos intracelulares (Ovando y Waliszewski, 2005). Particularmente, La aplicación de esta alternativa se basa en uno de los procedimientos que pueden realizarse sobre esta hortaliza para la preparación del mosto, la cual consiste en disgregar la zanahoria, combinarla con una cantidad de agua equivalente al 50 % p/v que asegure la actividad catalítica de 400UE/ml de la OptimaseCX255L, ajustar el pH a 5,5 y la temperatura a 70 °C de modo de que se produzca la hidrólisis durante 2,5 h. Transcurrido este tiempo el material es procesado para así obtener la fracción líquida de MZ, cuyo contenido de azúcares totales alcanza los 95,6 g/l, quedando como subproducto la fracción sólida de bagazo que es considerada como el residuo sólido del proceso. Luego de esta etapa de hidrólisis, se ajusta el pH del mosto a 4,5 y se lo fermenta a 30 °C logrando cuadruplicar el rendimiento, que llegó a Yp/z=0,403. Este aumento del rendimiento se vio favorecido debido a que la caracterización de los productos de la hidrólisis reveló, al igual que en el punto anterior, la presencia de glucosa, fructosa y sacarosa como principales monómeros obtenidos de la hidrólisis, que son todos azúcares directamente fermentables. 3.4- Reciclo de biomasa Con el objetivo de evaluar la posibilidad de aumentar la vida útil del biocatalizador sin comprometer el suministro de nutrientes en exceso, se estudió su actividad biocatalítica -6- en una serie de fermentaciones con reciclos consecutivos de biomasa. De este modo se aseguró el suministro casi continuo de una adecuada composición nutricional del mosto, por renovación del medio cada vez que la fermentación se detuvo. Este procedimiento permitió asemejar el modelo en estudio a un sistema continuo con reciclado de biomasa, evaluando el comportamiento y la productividad de la levadura durante un mayor período de tiempo. El ensayo se realizó por triplicado y se repitió cinco veces de forma consecutiva, con renovación del mosto ya fermentado y reutilización de la biomasa celular en cada caso. Las concentraciones promedio de etanol conjuntamente con sus desviaciones estándar mostraron que el rendimiento etílico se mantiene constante durante al menos los 5 reciclos de biomasa celular, pero se manifestó un aumento en la productividad, dado que se logra disminuir el tiempo de la fase lag. 3.5- Caracterización de los residuos del proceso fermentativo El principal RESIDUO SÓLIDO obtenido como desecho de este proceso consiste principalmente en tejido de zanahoria disgregado (bagazo), con un contenido de humedad aproximado del 67 %. Al respecto Castillo y Gallardo (1989) clasificaron a la zanahoria como un alimento no tradicional voluminoso con alto contenido de agua que por su composición química: materia seca, 7-30 %; fibra bruta, 5-11 % y proteína 4-16 %, se considera un alimento adecuado para cumplir con este fin. En general el bagazo, por su origen, es un alimento pobre en calcio y fósforo, y su digestibilidad podría aumentarse si se dispone de alta concentración de carbohidratos solubles en la dieta (50-75%), porque ello provocaría altas tasas de fermentación ruminal. Además, por su aporte nutritivo, podría utilizarse como suplemento de pasturas base alfalfa en otoñoinvierno incluyendo también un forraje seco (heno) para balancear el porcentaje de materia seca de la dieta. Cabe aclarar que las dificultades ocasionadas por su alta velocidad de deterioro, pueden contrarrestarse al conservarlo ensilado, en combinación con un 15-25 % de cama de crianza de pollo (Castillo y Gallardo, 1989). No obstante, el bagazo de zanahoria también podría ser utilizado como abono para la tierra, o para la elaboración de compost. En lo que respecta al principal RESIDUO o EFLUENTE LÍQUIDO, el mismo consiste en la vinaza obtenida luego de destilar el etanol, cuya caracterización se muestra en la Tabla 2. Tomando en consideración los valores de DQO y DBO5 mostrado en la tabla, queda visible que la carga orgánica del efluente es muy alta, pero también lo es su Índice de Biodegradabilidad (>0,5). En este efluente los carbohidratos son los principales responsables de la carga orgánica y por lo tanto deberían extremarse las medidas para evitar esta pérdida. Por su parte el análisis de los compuestos inorgánicos presentes, pueden estimarse a partir de la medida de la conductancia específica. Específicamente los cationes calcio y magnesio, en diversas formas de salinificación, revisten importancia por ser los responsables de la dureza de las aguas y junto al catión sodio determinan el Índice RAS, el cual da una idea de la cantidad de sodio presente en el agua de riego en relación a otros cationes. No obstante, se considera poco probable la presencia de metales pesados como: cobre, plomo, cromo, plata, arsénico y boro, en cantidades comprometidas, dado que el efluente proviene de una biotransformación de la zanahoria. Por otro lado, es ventajosa la presencia de bioelementos tales como: nitrógeno, azufre y fosforo, los cuales generalmente son agregados como fertilizantes a los cultivos de hortalizas como la zanahoria (Simon y cols., 2008; García, 2004). -7- Tabla 2: Caracterización del efluente líquido. PARÁMETRO Demanda Química de oxígeno Demanda Bioquímica de oxígeno (DBO5) Sólidos totales Sólidos en sedimentables en 2 h Grasas pH Color Olor Temperatura Conductividad específica Dureza total (Ca2+ + Mg2+) Sodio RAS Potasio Nitrógeno Fósforo Sulfatos VALOR UNIDADES 44000 22750 22600 < 0,1 1,3 4,4 ámbar leve 80 9.68 700 358.6 18,9 2270 1481 150 810 mg O 2 /l mg O 2 /l mg/l ml/l mg/l °C dS/m mg CO 3 Ca/l mg/l RAS mg/l mg/l mg/l mg/l En consecuencia, contemplando la composición química del efluente, sumada a parámetros de olor, color y contenido de grasas adecuados, se propone su utilización como agua de bebida del ganado o como agua de riego. Esta primera iniciativa se fundamenta en que, al utilizar este efluente como agua de bebida para los animales que fueron alimentados con el residuo sólido, es posible aumentar la digestibilidad del bagazo y se incrementa el contenido de fósforo de la dieta, tal como lo indican Castillo y Gallardo (1989). Además, es importante destacar que se requiere de una dilución previa aproximada 1:5 para que el contenido de sodio y potasio no afecte la salud del ganado (Faust y Aly, 1998) y de este modo también se corrige la temperatura y el volumen total disponible sería de 5000 l. Por otro lado, el uso de este efluente como agua para riego de cultivos de zanahoria redunda en que un cultivo regado de forma progresiva, en función del estado de desarrollo de las raíces, produce raíces más lisas con las lenticelas menos marcadas, lo que se traduce además en una mayor tasa de acumulación de azúcares (Simon y cols., 2008). En este sentido, dado que de los sólidos totales, aproximadamente 16 g/l corresponden a azúcares, no es conveniente utilizar el efluente directamente para riego, debido a que puede estimularse la proliferación de algunos microorganismos y provocar un desajuste en la flora microbiana del suelo. Por este motivo, como paso previo se sugiere realizar una dilución 1:10, lo que también permitiría disminuir su temperatura, aumentar el pH y suprimir las restricciones de uso que podría tener por su salinidad, según Ayers y Westcot (1985). 3.6- Diseño de un proceso integrado sostenible La idea del desarrollo sostenible se comenzó a utilizar en 1980, dada la evidencia de que si bien la agricultura moderna había sido exitosa en incrementar la producción de alimentos, el desarrollo había generado una gran cantidad de impactos ambientales negativos y que se necesitaba otro modelo de desarrollo que superara esos efectos -8- indeseables (SAyDS, 2010). Así, para que el proceso en estudio sea sostenible, es fundamental un aprovechamiento eficiente de los azúcares, logrado mediante la hidrólisis enzimática de las fibras (punto 3.2 y 3.3) y la reutilización de los residuos generados (punto 3.5); con una demanda energética baja. Para lograr estos objetivos es necesaria una eficiente integración de las etapas de proceso que permita alcanzar los más altos rendimientos con la mínima inversión en equipos y energía, por lo que se propone el proceso integrado que se describe en la Figura 1. ZANAHORIA DESCARTADA (1 Tn) PREPARACIÓN DEL MOSTO triturado H2O (500 l) hidrólisis enzimática procesado MZ (1040 l ) AT = 95,5 g/l bagazo 450 kg FERMENTACIÓN inóculo CO2 39,8 kg fermentación Yp/z= 0,403 filtración biocatalizador OBTENCIÓN vinaza destilación efluente líquido (970 l) ETANOL 53 l Figura 1: Diagrama de flujo de un proceso fermentativo integrado propuesto para la producción sostenible de etanol. De este modo, con el fin de mejorar la extracción de los azúcares fermentables, minimizar el volumen de agua empleado, disminuir los efluentes y reducir los costos de proceso, el proceso busca incrementar el contenido de azúcares en una etapa de hidrólisis de la zanahoria, como paso previo a la preparación del mosto, obteniendo el bagazo como subproducto. Seguida a esta etapa se propone un proceso de fermentación en sucesivos ciclos batch con reutilización de la biomasa celular. Si bien los resultados mostrados en el punto 3.4 revelaron que la biomasa puede ser reutilizada sin modificar el rendimiento etílico, se cree conveniente profundizar el estudio con el objetivo de evaluar si es necesario o no un recambio total de células, o si es factible el -9- recambio parcial, o si con la duplicación celular ocurrida en el interior del reactor durante la primer etapa de la fermentación es suficiente como para asegurar un inóculo adecuado, quedando las células lisadas, como fuente proteica del mosto. En la etapa final, la vinaza obtenida a la salida del reactor de fermentación es destilada para separar el etanol producido. De este modo se logra cuadruplicar el rendimiento etílico obtenido, el cual asciende a un valor Yp/z = 0,403 g/g. Así, el rendimiento obtenido puede traducirse en la obtención aproximada de 53 l (41,9 Kg) de etanol, 39,8 kg CO 2 , 970 l de efluente líquido y 450 kg de bagazo, por cada tonelada de zanahoria procesada. A su vez, de los residuos generados, el bagazo sería un alimento apto para la alimentación del ganado que se encuentra en los campos circundantes a los cultivos de zanahoria. Considerando que los animales consumen diariamente el 3 % de su peso en alimentos (materia seca), entonces podríamos concluir que con el descarte del procesamiento de 1 Tn de zanahoria, podrían alimentarse 33 vacas lecheras ó 55 animales de invernada. Por su parte, al realizar la dilución 1:5 sobre el efluente líquido, se podría abastecer el consumo de bebida de 85 vacas lecheras ó 170 animales de invernada, en días de verano (Bruni, 2005), quedando el remanente disponible para ser diluido nuevamente 1:2 y así ser utilizado como agua para el riego de 0,025 ha de su cultivo, que es la superficie necesaria para cosechar esa cantidad (rendimiento: 40 Ton/ha). Además de ello, el CO 2 emanado durante el proceso fermentativo podría ser consumido por las células vegetales, durante la fotosíntesis. De este modo es posible devolver a la tierra y al ecosistema la mayoría de los elementos extraídos por la zanahoria durante su crecimiento, lo que lo convierte en un prometedor e integrado proceso sustentable. Esta propuesta se muestra ventajosa respecto al método tradicional diagramado en la Figura 2, en el cual se emplea el bagazo obtenido al extraer MZ, para preparar MB que luego puede ser hidrolizado (ver punto 3.2). Esto se debe a que además de requerir un mayor número de etapas, se requiere de un mayor número de equipos, de volumen mayor, como consecuencia de las menores concentraciones de azúcares de los mostos. Esto conduce a que mediante el proceso propuesto se logre incrementar 20 % el rendimiento etílico. Figura 2: Proceso integrado sostenible de producción de etanol. - 10 - ACTUALIDAD Otra de las alternativas que se espera poder aplicar en un futuro próximo es el proceso de sacarificación y fermentación simultáneas (SFS), en el cual la hidrólisis y la fermentación tienen lugar simultáneamente en un mismo reactor. Es decir, los azúcares fermentables liberados por acción de las enzimas son directamente metabolizados a etanol por las levaduras, minimizando la inhibición de las enzimas por producto final (Olsson y cols., 2006) lo que se reflejaría en rendimientos de hidrólisis más altos, necesidad de menores dosis de enzima, reducción del tiempo total de proceso y productividades de etanol más altas (Aimaretti, 2011). Sin embargo hoy en día no se presenta como una alternativa viable debido a que las condiciones óptimas de pH y temperatura de las enzimas utilizadas en la etapa de hidrólisis, son netamente diferentes a las condiciones de fermentación. 3.7- DISCUSION El contenido promedio de azúcares totales de MZ preparado con hidrólisis enzimática de zanahoria (95,5 g/l) y su rendimiento etílico Y p/Z (0,403 g/g), pueden considerarse adecuados en comparación con otros sustratos similares. Tal es el caso del rendimiento obtenido utilizando cebollas como sustratos, que poseen 67,3 g/l de azúcares totales en el jugo y rinden 0,45 g/g de etanol (Horiuchi y cols., 2000), o al de piña cuyo contenido de sacarosa es de 125 g/l y produce 59,0 g/l de etanol (Y p/s = 0,47 g/g) (Tanaka y cols., 1999). Por tanto, mediante la aplicación del proceso integrado descripto en el punto anterior, se colabora con el aprovechamiento y revalorización de un desecho, al mismo tiempo que se propone la disposición responsable de los subproductos generados, tal como se representa en la Figura 3. Alimento para ganado 1Tn variedad de usos: combustible, farmacéutico, solvente, alimento, bebidas, etc. PROPUESTA Etanol 1Tn En complemento con otra pastura alimenta a 56 animales de invernada Alimento para ganado En complemento con otra pastura alimenta a 55 animales de invernada Bebida para animales Se asegura agua para bebida de los animales alimentados Agua para riego Se puede regar el cultivo de zanahoria Figura 3: Utilización de los descartes de zanahoria, en la actualidad y en la propuesta. Por su parte, tomando en consideración que la zona de trabajo se caracteriza por su elevado rendimiento de zanahoria por ha, podemos concluir que el rendimiento de - 11 - etanol por ha de cultivo es de 2120 l, lo que lo hace comparable con los cultivos energéticos comúnmente utilizados para la producción de bioetanol que se muestran en la Tabla 3. Tabla 3: Rendimiento de cultivo en la producción de etanol. (*Fuente: adaptado de Sánchez y Cardona, 2008). Rendimiento etílico Rendimiento cultivo agrícola (Ton/ha) Litros etanol/Ton Litros etanol/ha Caña* 100 70 7.000 Bagazo de caña* 27 140 3.780 Maíz* 8 370 5.003 Bagazo de maíz* 9 227 2.043 Yuca* 20 180 3.600 Sorgo dulce* 35 86 3.010 Remolacha* 60 100 6.000 zanahoria 40 53 2.120 Actualmente el desafío restante es cómo incorporar a los costos de producción de los sistemas agropecuarios y forestales, el deterioro de los recursos naturales renovables, y el impacto en el medio ambiente, ya que hasta ahora estos no se consideran como un costo de la actividad agropecuaria y por lo tanto, los efectos negativos permanecen como un componente neutral (Rótolo y Francis, 2008), descartando muchas veces cultivos completos por el simple hecho de su baja rentabilidad. 4- CONCLUSIONES Se concluye que es posible obtener bioetanol de segunda generación a partir de desechos provenientes de la comercialización de zanahoria, utilizando como biocatalizador Saccharomyces cereviciae descartada de la elaboración de cerveza, permitiendo aumentar el rendimiento por medio de la incorporación de la hidrólisis enzimática durante la preparación del mosto. Por su parte, la reutilización de los residuos generados, en el mismo ecosistema en donde se cultiva la zanahoria, permite revalorizar el descarte comercial de esta hortaliza, manteniendo una clara conciencia de economía ecológica. Además, cabe aclarar que el mosto fermentado, que también puede llamarse vinaza, es rico en aminoácidos, minerales y otros ácidos orgánicos, por lo que el alcohol producido de zanahoria podría ser usado para el consumo humano, en bebidas, o también ser aplicable como fuente de producción de vinagre o condimentos a base de zanahoria. 5- BIBLIOGRAFÍA Aimaretti N. (2011). Desarrollo de un proceso sostenible para la producción de bioetanol a partir de desechos agroindustriales. Dr Tesis. Facultad de Ciencias. Universidad Nacional de Educación a Distancia. Madrid. España. Aimaretti N. (2006). Aprovechamiento de Residuos Agroindustriales para la Obtención De Nuevos Productos Alimenticios. M.Sc. Tesis. Facultad de Ingeniería Química. 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