Guía del Viaje a Roma

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I.E.S. RAMÓN OLLEROS GREGORIO
VIAJE A ROMA
GUÍA DE VIAJE
ABRIL 2013
I.E.S. RAMÓN OLLEROS.
VIAJE A ROMA Pág. 1
ROMA CLÁSICA
LOS ORÍGENES DE LA CIUDAD DE ROMA.
En la noche en que Troya era vencida por los griegos, el troyano Eneas, hijo de Venus, huyó junto con su hijo Ascanio en
busca de una nueva patria, de una nueva Troya. Tras un largo periplo y no pocas aventuras, Ascanio había fundado una
ciudad, llamada Alba Longa.
En esta ciudad reinaron sus descendientes hasta llegar a Numitor. El hermano de éste, Amulio, conspiró contra él y lo
destronó. Un oráculo había anunciado que la descendencia de Numitor
destronaría a Amulio, por lo que Amulio encerró a la hija de Numitor,
llamada Rea Silva y la obligó a permanecer virgen. Pero Marte, dios de
la guerra, acabó con estos planes, pues la fecundó y Rea Silva dio a
luz dos gemelos: Rómulo y Remo.
Al enterarse Amulio, arroja los gemelos en una cesta al Tíber. Pero la
cesta acaba encallando en la orilla y allí, según cuen ta la tradición,
una loba los recogió, los amamantó y los cuidó en su guarida del
Monte
Palatino
hasta que un
pastor los encontró
y los rescató.
Cuando
fueron
mayores y tras devolver el trono a Numitor, Rómulo y Remo decidieron
fundar una nueva ciudad en el lugar en el que habían sido recogidos por
la loba.
En ese lugar, existían siete colinas: los montes Capitolio,
Quirinal, Viminal, Aventino, Palatino, Esquilino y Celio. Como no se
ponían de acuerdo sobre dónde fundar la ciudad, consultaron el vuelo de
las aves y Rómulo avistó doce buitres volando sobre el Capitolio,
minetras que su hermano únicamente divisó seis. Rómulo, por tanto,
trazó en el monte Palatino el primer recinto de la ciudad de Roma. Era el
año 753 a.C.
En la época monárquica, Servio Tulio delimitó mediante una muralla –
muralla serviana- el perímetro de estas colinas, quedando fuera el conocido
como campo de Marte. A finales de la época monárquica y principios de la
república la presión demográfica hace que se vayan habitando los terrenos,
pantanosos en su mayor parte, que se ubicaban entre las diferentes colinas.
Especialmente importante fue el espacio que se encontraba delimitado por
el Capitolio y el Palatino, pues en él, se estableció el foro. El foro era el
centro de la vida romana, en él se desarrollaba la política, los negocios, la
administración de justicia, los cortejos oficiales… El comercio tenía otro
lugar más específico: un espacio entre el Capitolio, el Palatino y el Aventino
que fue conocido con el nombre de foro Boario.
EL FORO ROMANO.
Este espacio cambió de aspecto muchas veces a lo largo de la historia
romana. En los primeros siglos se limitó a la zona conocida como
Comitium. De los primeros tiempos es la curia. El foro estaba atravesado
por la Vía Sacra. Por el foro también discurría la cloaca máxima.
El mayor esplendor del foro se produce en época de César (100-44 a.C).
César construyó la Basílica Iulia y los Rostra (tribuna de oradores). En esa época se reconstruyó el primitivo templo de
Saturno. Augusto construyó el Templo del Divino Julio; Tiberio reconstruyó el Templo de la Concordia y el templo de
Cástor y Polux. En época de Tito se construyó el Templo de Vespasiano. Antonino construyó el templo de Antonino y
Faustina. Septimio Severo edificó un arco de triunfo, en el lado opuesto del arco de Tito. Constantino terminó la
construcción de la basílica, iniciada por Majencio. El último monumento erigido en el foro data del año 602 d.C, cuando el
emperador Foca elevó en medio del foro una columna coronada por su estatua.
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LAS BASÍLICAS
La basílica de Majencio o de Constantino. (2)
Era uno de los edificios romanos más importantes destinado a la administración de justicia, y a los
tratos comerciales. Su forma y su planta fue copiada para construir las primeras iglesias. La
Basílica de Majencio se inició en el año 306 d.C. bajo el mandato de Majencio, pero no fue
terminada hasta el 312 d.C., ya bajo Constantino. La basílica de Majencio se dividía en tres naves,
una central y dos laterales. La nave central tenía una altura de 35 metros, 3 metros más que las
naves laterales; y 80 metros de largo. La decoración principal se concentraba en las columnas de
mármol y sobre todo en el artesonado de las bóvedas de cañón. Este artesonado, además de ser
decorativo, reducía el peso propio de las bóvedas y hacía la construcción más económica.
La basílica Julia (16)
VIAJE A ROMA Pág. 2
I.E.S. RAMÓN OLLEROS.
VIAJE A ROMA Pág. 3
Fue empezada a construir por Julio César en el 54 a. C., de quien tomó el
nombre sobre el espacio antes ocupado por la Basílica Sempronia, erigida en
169 a. C. por Tiberio Sempronio Graco, padre de los tribunos de la plebe
Tiberio y Cayo, quien para edificarla habría demolido la casa de Escipión el
Africano y algunas tiendas de las Tabernae veteres. Para despejar el solar,
César tuvo además que desplazar la tribuna de ora dores a la extremidad
oeste del Foro Romano. La Basílica Julia fue acabada por Augusto, pero se
incendió en el 14 a. C. y fue reconstruida por el mismo emperador que la
dedicó a sus hijos adoptivos Cayo y Lucio en el 12. En la escalinata del
pórtico se encuentran juegos grabados en el mármol blanco como una
especie de damas chinas o un círculo dividido en segmentos.
La basílica Emilia (10)
Es la última de las basílicas de época republicana del foro. Fue edificada por los censores M. Fulvio Nobilior y Marco Emilio
Lépido en el 179 a. C. y por ello entonces llamada Basílica Aemilia et Fvlvia. Ha sido destruida y reconstruida varias veces,
en el 78 a.C. por el cónsul Marco Emilio Lépido, por lo que recibió el nombre de Basilica Aemilia. La basílica se emplazó
sobre las Tabernae novae; un incendio obligó a reconstruirla en 14 a.C. por Lepido y Augusto. La última reconstrucción y su
aspecto actual data del 410 cuando fue restaurada después del incendio de Alarico. La Basílica Emilia mide 70 x 29m,
dividida en naves por hileras de columnas. La nave central, de casi 12m está flanqueada por una más pequeña al sur y
otras dos al norte. La basílica, de cara al foro, tenía un pórtico de dos pisos con dieciséis arcos sobre pilastras, detrás del
pórtico hay una serie de tabernae.
Junto a la Basílica Emilia se hallan los restos del templete de Venus cloacina. Era un templo dedicado a la diosa con forma
de pozo, que comunicaba con la cloaca. Era el punto donde la cloaca Máxima entraba en el Foro.
ARCOS
Arco de Tito (3)
El Arco de Tito fue construido poco después de la muerte del emperador Tito (81
d.C.) y recuerda sus victorias contra los judíos. Destaca la escena en la que la
“Victoria”, caracterizada por sus alas, coloca la corona de laurel al emperador y la
entrada de Tito en Jerusalén, honrado por sus soldados que llevan el candelabro
de siete brazos. La inscripción, más sencilla, dice:
Senatus populusque Romanus divo Tito divi Vespasiani (filio) Vespasiano
Augusto"
Arco de Septimio Severo. (17)
Fue erigido en 203 para glorificar las victorias militares del emperador Septimio
Severo y sus hijos Geta y Caracalla bajo los Partos. Es una construcción en
mármol. Consta de un arco principal encuadrado por dos pequeños arcos. Las
fachadas están ricamente decoradas por columnas y bajorrelieves. Una cuadriga
de bronce conducida por el emperador y sus dos hijos, coronaba el arco antiguamente. La arquitectura de este arco de
triunfo servirá de inspiración para el Arco de Constantino, así como éste lo fue del Arco de Triunfo del Carrusel en París.
Bajo el ático de cada fachada, está grabada una larga dedicatoria. Originalmente, las letras grabadas en huecos contenían
letras en bronce hoy desaparecidas:
Imp(eratori) Caes(ari) Lucio Septimio M(arci) fil(io) Seuero Pio Pertinaci Aug(usto) patri patriae Parthico Arabico et |
Parthico Adiabenico pontific(i) maximo tribunic(ia) potest(ate) XI imp(eratori) XI, co(n)s(uli) III proco(n)s(uli) et |
imp(eratori) Caes(ari) M(arco) Aurelio L(ucii) fil(io) Antonino Aug(usto) Pio Felici tribunic(ia) potest(ate) VI co(n)s(uli)
proco(n)s(uli) [ p(atri) p(atriae) | optimis fortissimisque principibus ] | ob rem publicam restitutam imperiumque populi
Romani propagatum | insignibus uirtutibus eorum domi forisque S(enatus) P(opulus)Q(ue) R(omanus).
Arco de Constantino
Se erigió para conmemorar la victoria de Constantino I el Grande en la batalla del
Puente Milvio (312 d.C). Es característico de este arco el haberse construido gracias
al expolio de edificios anteriores, por lo que se podría ver la evolución del relieve
romano en un solo monumento. El arco cruza la Via Triumphalis, la ruta que tomaban
los emperadores cuando entraban en la ciudad en triunfo. Este itinerario comenzaba
en el Campo de Marte, pasaba por el Circo Máximo y alrededores de la colina
Palatina; inmediatamente después el Arco de Constantino, marcharía a lo largo de la
Vía Sacra hacia el Foro romano y la colina Capitolina, pasando tanto por el Arco de
Tito como por el de Septimio Severo. La principal inscripción estaría originalmente en
letras de bronce. Aún puede leerse fácilmente, leyéndose en ambos lados:
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Imp(eratori) ·Caes(ari) · Fl(avio) · Constantino · maximo · p(ontifex) · Avgusto · s(enatus) · p(opulus) · q(ue) · r(omanus)
· qvod · instinctv · divinitatis · mentis · magnitvdine · cvm · exercitv · svo · tam · de · tyranno · qvam · de · omni ·
eivs · factione · vno · tempore · ivstis · rem-pvblicam · vltvs · est · armis · arcvm · trivmphis · insignem · dicavit
TEMPLOS
Templo de Antonino y Faustina.(6)
El templo de Antonino y Faustina es el edificio mejor conservado del Foro Romano. Presenta un pronaos de seis columnas
de orden corintio en el frente y otras dos en cada lateral, de una altura de unos 17 metros. El friso presenta una decoración
de grifos enfrentados y motivos vegetales. Este templo, aunque de pequeñas dimensiones, es de un gran interés por su
conservación, su simplicidad, la severidad y la pureza de su estilo. Sus columnas de una bella proporción, los capiteles
tallados en mármol blanco, así como las basas que reúnen la sencillez y la belleza. Su construcción fue ordenada por
Antonino Pío a la muerte de su esposa Faustina la Mayor en 141 d. C. Pocos años después, en el 161, muere el emperador
y el Senado, al divinizarlo, consagra el templo a la pareja imperial. En el siglo XI se transformó en la iglesia de San Lorenzo
in Miranda.
El templo de Cástor y Pólux (12)
El templo de Cástor y Pólux fue construido por Aulo Postumio Albino en el 484 a.C. Fue reconstruido en varias ocasiones,
primero en el 117 a.C. y más tarde, tras un incendio, en el 14 a.C. por Augusto. En la actualidad solo conservamos 3 de sus
columnas. En tiempos de República, a veces se celebraban en este templo las reuniones del Senado y a partir de mediados
del siglo II a.C., el podio se convirtió en tribuna para magistrados y oradores durante lo comicios que tenían lugar en esta
parte de la plaza del Foro.
El templo de Saturno (20)
El templo de Saturno es uno de los templos más antiguos y no estaba exclusivamente dedicado a la religión, pues también
hacía funciones relacionadas con el estado, como por ejemplo, albergar el tesoro, el patrón oficial de medidas y los archivos
estatales. Fue erigido en el 498 a.C. y está situado en las pendientes del Monte Capitolino y fue restaurado en la república.
El templo de Vesta (8)
Estaba situado en el Foro Romano y era uno de los templos más importante de Roma desde el punto de vista religioso.
Data de principios del siglo VII a.C y originalmente constaba de cuatro plantas con habitaciones alrededor del patio, en el
que las sacerdotisas mantenían viva la llama del Templo de Vesta, un fuego sagrado símbolo de la ciudad. Al lado estaba la
Casa de las Vestales (9) donde vivían las 6 sacerdotisas elegidas entre las familias nobles y que estaban sometidas a un
voto de castidad. El aspecto que muestra hoy es el de la restauración llevada a cabo por Septimio Severo tras el incendio
del 191 d.C.
OTRAS CONSTRUCCIONES
Los Rostra (18)
Es la tribuna de los oradores. En el año 338 a. C. el cónsul Cayo Menio se vio envuelto
en una batalla contra la flota de los volcos en el puerto de Antium, donde obtuvo una
gran y definitiva victoria. El cónsul mandó arrancar los rostra (espolones) de los barcos
enemigos para trasladarlos a Roma y colocarlos en el muro de la tribuna de oradores
del Foro Romano. Desde entonces esta fue conocida como rostra y, por extensión, se
acabó por dar el nombre a dichas tribunas. Junto a la tribuna se encontraban el
miliarium aureum erigido por Augusto, que era el punto de partida supuesto de todas las
carreteras del Imperio, situado del lado que linda con el templo de Saturno y el
umbilicus urbis, al extremo norte de la tribuna, algo más tardío.
La Curia (13)
La curia era el edificio donde el Senado Romano se reunía de forma más frecuente.
Como es evidente el actual edificio está reconstruido.
Regia (7)
La Regia era la sede del Colegio de pontífices y hasta final de la República el lugar de culto a los dioses patrios romanos.
Lapis Níger (14)
El complejo arqueológico del Lapis Niger, que se halla debajo del conocido pavimentado de mármol negro, data del siglo VI
a. C. y es famoso por haber sacado a la luz una plataforma sobre la que se encuentra un altar junto al cual puede
reconocerse una base de columna, posiblemente la base de una estatua y una estela con una inscripción en latín arcaico en
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bustrófedon vertical, en sentido contrario arriba-abajo, abajo-arriba. Esta inscripción, de gran valor para los arqueólogos, no
en vano se considera el testimonio epigráfico más antiguo en latín, podría ser interpretada por estar próxima al altar como
una lex sacra, tal vez una maldición tendente a evitar la violación del recinto sagrado. La tradición no sólo habla del Lapis
Niger como la tumba de Rómulo, sino también del lugar donde este habría sido asesinado. Se dice asimismo que en la
parte superior de la columna se encontraría una estatua del mismo Rómulo.
Columna de Focas (15)
La Columna de Focas fue la última adición hecha al Foro Romano. La columna corintia se levanta 13,6 metros desde su
pedestal cúbico de mármol blanco. Focas es además conocido porque fue el que donó formalmente el Panteón al papa
Bonifacio IV que lo rededicó a todos los Santos mártires
LUGARES DEL FORO ESTUDIADOS:
2
3
6
7
8
10
12
La basílica de Majencio o de Constantino
Arco de Tito
Templo de Antonino y Faustina
Regia
El templo de Vesta
La basílica Emilia
El templo de Cástor y Pólux
13
14
15
16
17
18
20
La Curia
Lapis Níger
Columna de Focas
La basílica Julia
Arco de Septimio Severo.
Los Rostra
El templo de Saturno
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FOROS IMPERIALES
Al convertirse el foro en intransitable e inútil a sus objetivos primitivos -ferias y mercados- a su alrededor los diferentes
emperadores fueron ampliando la zona del foro y se construyeron diferentes espacios que acabaron recibiendo el nombre
del emperador que impulsó la obra. Hoy la visión de conjunto está distorsionada porque Mussolini tuvo la mala idea de
construir una avenida, llamada de los foros imperiales, para que, a semejanza de la antigua “via sacra” pudiera recorrer el
foro y celebrar sus desfiles y victorias.
El primero en construirse fue el foro de Julio César, presidido por el templo de Venus Genitrix, mítica antepasada de la
familia Julia. Augusto levantó su foro perpendicularmente al de César. Para comunicar el foro primitivo con el popular y
comercial barrio de la Subura, Domiciano ordenó la construcción del Foro Transitorio, siendo inaugurado en el año 97 por
Nerva. A su derecha se levantaba el Templo de la Paz. El más importante de los foros imperiales es el de Trajano.
Comprendía un pórtico, la basílica Ulpia, una biblioteca y el templo de Trajano. Los edificios se organizaban siguiendo un
eje de simetría que tenía los extremos en la estatua del emperador y en su célebre columna. En la zona norte del patio se
encontraba el mercado, edificado en planta semicircular. Cf.: http://www.youtube.com/watch?v=Kqpj9Z2fdYU (1,27m.)
Foro de Trajano y columna
En el siglo II d.C., Trajano realizó una gran ampliación del foro, y entre los nuevos edificios
construidos, se encontraba el mercado de Trajano. Aunque las basílicas realizaban ya esta
función, el emperador quiso dedicar un área más grande al comercio pues era una actividad cada
vez más importante. En el mercado había todo tipo de tiendas, que en latín se llamaban tabernae,
que vendían productos como aceite, vino, pescado, frutas y verduras. Durante la Edad Media se
siguió utilizando aunque sufrió muchas transformaciones: se le añadieron nuevos pisos y una
torre conocida como Torre de las Milicias levantada en el año 1200.
La Columna de Trajano fue inaugurada en el año 113 d.C, para inmortalizar las batallas del
emperador Trajano contra los Dacios. Lo más destacado es que contiene 200 metros de
altorrelieves que a modo de pergamino en espiral cuentan las proezas de las batallas. En
realidad, se trata de un monumento funerario, pues en su pedestal se ubicaron las cenizas del emperador. Hay que
imaginársela a color pues estaba pintada.
EL PALATINO
El monte palatino, situado al lado del foro, es donde vivieron durante siglos los aristócratas de la ciudad de Roma. Debido a
que allí se ubicó la clase política, el lugar se llenó de palacios y domus, las viviendas unifamiliares romanas de familias con
cierto poder económico, además de que la zona se embelleció con grandes arboledas y bellos jardines.
Durante la república se convirtió en el barrio donde residía la clase dirigente romana, pero en la época imperial, paso a ser
la residencia oficial de los emperadores. En el Palatino tuvieron su morada grandes emperadores como Augusto, Tiberio,
Nerón. La colina estaba plagada de grandes edificios, ahora en ruinas, como la Domus Flavia, la residencia oficial y pública
de los emperadores; la Domus Augustana, la residencia privada del emperador; el Templo de Cibeles, del que se conserva
su podio; o el estadio del Palatino, en forma de circo. Esta suntuosidad dio lugar a que el nombre de "palatino" derivara a la
palabra "palacio", que está presente en la mayor parte de las lenguas.
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EL ANFITEATRO FLAVIO (COLISEO)
El Coliseo es un gran anfiteatro de la época del Imperio romano
y se construyó justo al lado del Foro. Las obras empezaron
entre el 70 d. C. y el 72 d. C. bajo mandato del emperador
Vespasiano y fue terminado en el 80 d. C. por el emperador Tito.
Originalmente era denominado Anfiteatro Flavio en honor a que
la dinastía Flavia lo construyó, aunque más tarde pasó a ser
llamado Coliseo por una gran estatua ubicada junto a él, el
Coloso de Nerón, que actualmente no se conserva.
En la antigüedad poseía un aforo para 50.000 espectadores,
con ochenta filas de gradas. Los que estaban cerca de la arena
eran el Emperador y los senadores, y a medida que se ascendía
se situaban los estratos inferiores de la sociedad. El Coliseo se
utilizaba para peleas de gladiadores y otros espectáculos
públicos como caza de animales, ejecuciones, recreaciones de
famosas batallas, y obras de teatro basadas en la mitología
clásica.
Se conoce que en el edificio también se celebraban naumaquias, batallas navales, puesto que poseía un completo sistema
de drenaje, conectado a cuatro imponentes cloacas, para evacuar el agua tras los espectáculos. Sin embargo, Domiciano,
abandonando la idea de la naumaquia, pavimentó las cloacas para que no se volvieran a utilizar.
El Coliseo se usó durante casi 500 años, celebrándose los últimos juegos de la historia en el siglo VI. Más tarde, fue
reutilizado con diferentes fines hasta que fue convertido en santuario cristiano, en honor a los que allí fueron martirizados.
Esta medida contribuyó a detener su expolio y a procurar su conservación.
La arena y el hipogeo
El terreno de juego propiamente dicho era un óvalo de 75 por 44 metros, y en realidad era una plataforma construida en
madera y cubierta de arena. Todo el subsuelo era un complejo de túneles y mazmorras (el hipogeo) en el que se alojaba a
los gladiadores, a los condenados y a los animales. El suelo disponía de varias trampillas y montacargas que comunicaban
con el sótano y que podían ser usadas durante el espectáculo. La cubierta de madera ya no se conserva, con lo que todo el
laberinto subterráneo permanece hoy al aire libre.
La cávea
El amplio graderío interior estaba diferenciado en
gradus, pisos reservados para las diferentes
clases sociales: en el podium, el primero de ellos,
se sentaban los romanos más ilustres: los
senadores, magistrados, sacerdotes y quizá las
vestales. En ambos extremos del eje menor había
sendos palcos: la tribuna imperial (pulvinar), y otra
reservada para el magistrado que en ocasiones
presidía los juegos. Dado que este piso era el más
próximo a las fieras, había una red metálica de
protección y arqueros apostados regularmente.
El acceso desde los pasillos internos hasta las
gradas se producía a través de los vomitorios,
llamados así porque permitían salir una enorme
cantidad de gente en poco tiempo. Estaba tan
bien diseñado que los 50.000 espectadores
podían ser evacuados en poco más que cinco
minutos.
La fachada
La fachada se articula en cuatro órdenes. Los tres órdenes inferiores los forman 80 arcos sobre pilastras, y con
semicolumnas adosadas que soportan un entablamento puramente decorativo. El cuarto lo forma una pared ciega, con
pilastras adosadas, y ventanas en uno de cada dos vanos. Los órdenes de cada piso son sucesivamente toscano, jónico y
corintio. El último piso tiene un estilo indefinido que fue catalogado en el siglo XVI como compuesto. Era corriente
superponer estilos diferentes en pisos sucesivos, pero no era habitual hacer edificios con cuatro órdenes superpuestos. Las
comunicaciones entre cada piso se realizaban a través de escaleras y galerías concéntricas.
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El velario
El Coliseo contaba con una cubierta de tela desplegable accionada mediante poleas. Esta cubierta, hecha primero con tela
de vela y luego sustituida por lino (más ligero), se apoyaba en un entramado de cuerdas del que poco se sabe. Cada sector
de tela podía moverse por separado de los de alrededor. En la parte superior de la fachada se han identificado los huecos
en los que se colocaban los 250 mástiles de madera que soportaban los cables. Al parecer las cuerdas se anclaban en el
suelo, pues de otro modo los mástiles soportarían demasiado peso. A tal efecto había un anillo concéntrico de piedras o
cipos situados a 18 metros de la fachada en la explanada exterior, y que también permitían el control del público para evitar
aglomeraciones.
EL TEATRO DE MARCELO
El teatro de Marcelo es el único teatro antiguo que queda en pie en Roma.
Fue construido en 13 a.C. por orden de Augusto y dedicado a Marcelo, hijo
de su hermana Octavia. Fue el mayor teatro de Roma, podía acoger cerca
de 15.000 espectadores. Su arquitectura fue precursora de la del Coliseo.
Su conservación se debe a que los restos del teatro fueron incorporados a
una fortaleza en el siglo XI, después, en el siglo XVI la noble familia de los
Savelli haría del mismo su Palacio en la parte alta de la cavea, donde hoy
aparecen bien visibles las 12 ventanas.
EL PANTEÓN
El Panteón de Roma es una de las obras maestras más impresionantes de la arquitectura de todos los tiempos. Fue
construido por mandato del cónsul Agripa, yerno del emperador Augusto, en el año 27 a.C. Era un templo dedicado a todos
los dioses (pan quiere decir todo y theos, dios). Después de varios incendios, que prácticamente lo arruinaron, fue
reconstruido enteramente desde los cimientos por el emperador Adriano entre los años 118 y 128 d.C. Adriano mandó
escribir en el frontón del pórtico de la fachada principal la siguiente inscripción: M.AGRIPPA L.F. COS. TERTIVM FECIT
El edificio se salvó de nuevo de la destrucción a principios de la
Edad Media, porque, como dijimos, en el año 608 el emperador
bizantino Focas lo donó al papa Bonifacio IV, que lo transformó en
iglesia cristiana (Santa María de los Mártires). Es el primer caso
de un templo pagano convertido al culto cristiano. Por esta razón
fue el único edificio de la Antigua Roma que permaneció intacto y
en uso ininterrumpido hasta hoy, y es por esta razón también que
ha podido llegar hasta nuestros días como la estructura mejor
conservada de la Antigüedad.
Las proporciones y la estructura del Panteón son representativos
de la concepción religiosa de los romanos: la morada de todos los
dioses, como su nombre indica, aparece como una síntesis del
cielo y de la tierra. Por eso el conjunto tiene una planta circular
cerrada por una cúpula. Tanto la altura del espacio interior de la
cúpula como el diámetro de la pared circular de la planta es de
43,20 m, lo que la convierte en la mayor cúpula de fábrica de la
historia. Las técnicas constructivas romanas han permitido a la
cúpula resistir diecinueve siglos sin necesidad de reformas o
refuerzos. Si nos imaginamos completa la esfera que se inscribe
en la gran sala circular y que determina la bóveda semiesférica,
tendríamos representado el globo celeste reposando en el suelo.
De cualquier forma, lo más extraordinario del Panteón es que se
trata de la primera construcción de la Antigüedad en la que
claramente se pretende crear un caparazón, no preocupándose
en extremo de los volúm enes exteriores. La arquitectura griega creaba sus edificios para ser contemplados desde el
exterior donde se reunía el pueblo para las celebraciones religiosas. En el Panteón, por el contrario, se crea un espacio
interior donde los creyentes romanos adoran a sus dioses aislándose del universo exterior porque el cosmos está bajo su
cúpula. Realmente la obra es una perfecta síntesis de armonía e inteligencia constructiva y nunca, hasta el Renacimiento,
catorce siglos después, el hombre se había atrevido a realizar una obra tan gigantesca. El edificio conserva todavía su
pavimento antiguo de mármoles y restos de policromía sobre los relieves del pórtico. En las capillas interiores, donde antaño
estaban estatuas de las divinidades adoradas, existen hoy capillas con numerosas obras de arte y entre ellas hay tumbas
de personajes ilustres.
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LAS TERMAS DE CARACALLA
Las Termas de Caracalla (211-216 d.C.), situadas cerca de la Via Apia, se distinguieron por su carácter “popular”. El
verdadero impulsor fue en realidad el fundador de la dinastía imperial de los Severos –también padre del emperador
Caracalla–, Septimio Severo, aunque las obras no empezaron hasta la llegada de su sucesor Caracalla. A diferencia de las
anteriores construcciones, estos baños se diseñaron a escala colosal, sobre todo en lo relativo a las bóvedas y la
decoración, en la que no faltaban estatuas, pinturas o mosaicos. Abiertas desde el mediodía hasta el atardecer, los bañistas
acudían solo s o acompañados por sus sirvientes y allí eran atendidos por sus múltiples encargados. A través de ocho
puertas se iniciaba un completo recorrido por las distintas áreas. Desde el apoditerium (vestuario al que se accedía desde
el vestíbulo) se desplazaban hasta la palestra (un equivalente del moderno gimnasio al aire libre), donde se podían practicar
deportes como el harpastum (precedente del rugby) o el trigon (juego de pelota). Pasando una puerta se llegaba al
unctorium (sala de masajes) y luego al tepidarium (sala de ambiente templado), desde donde se conducía al visitante
hasta las salas de vapor (laconica o sudatoria). La zona de baños cálidos se completaba con el caldarium (sala circular
cubierta de una gran cúpula apoyada en ocho pilastras colosales) y desde allí se volvía a una zona templada para más
tarde finalizar en el frigidarium. Ya dentro, las opciones eran varias: bañarse en la natatio (piscina) o en el estanque
central (labrum), darse un masaje, o aplicarse un ungüento. Pero las termas no sólo se limitaron al acondicionamiento del
cuerpo: dentro se realizaban otras actividades como la lectura, conciertos de música, ejercicios de declamación, pasear por
los jardines, etc. En el siglo XX, las termas fueron replicadas en la estación de Pennsylvania en Nueva York, en 1911,
dando una idea más tangible de la grandiosidad de este impresionante conjunto.
Nota: además de estas termas, en Roma hay restos de las termas de Diocleciano, en la actual iglesa de Santa María de
los Ángeles.
FORO BOARIO
El Foro Boario era una zona en la cual se producía el mercado de animales. En esta zona, se encontraba la Isla Tiberina,
fácil de vadear. Esta zona era frecuentada por mercaderes griegos ya en la época de la fundación de la ciudad, en la mitad
del siglo VIII a. C. La ribera del río constituía el puerto fluvial de Roma (portus Tiberinus), que como todo el área, estaba
abierta a los extranjeros, y por lo tanto considerada externa al perímetro de la ciudad, y ubicada fuera de las Murallas
Servianas. Aquí se encontraba un antiquísimo santuario dedicado a Hércules.
El templo de Hércules es un hermoso templo redondo del II siglo a. de J.C., que la tradición popular llama de Vesta,
aunque en realidad, estaba dedicado a Hércules Olivarius, dios patrono de los mercaderes de aceite.
El templo de Portunus se hallaba en la zona del puerto, cerca del puente Emiliano, siendo construido alrededor del 8070 a. C. Presenta 4 columnas en el frente y 7 en los lados. El templo es próstilo, tetrástilo y pseudoperíptero. El orden de las
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columnas es jónico, con una altura aproximada de 8 metros. El frontón, que sobresale mucho, y el entablamento son lisos.
Al templo se accede a través de una escalinata frontal. Tradicionalmente ha sido considerado como el templo de la Fortuna
Viril, pero hoy en día se piensa que estuvo dedicado a Portuno, divinidad protectora del puerto fluvial. El hecho de que este
templo se halla conservado hasta nuestros días en un excelente estado de conservación se debe a que en el siglo IX dC. se
convirtió en un templo dedicado a Santa María Egipcíaca.
En uno de los lados del foro boario tenemos el arco de Jano: cuádruple arco de principios del siglo IV d. C. No se puede
considerar propiamente un arco triunfal, sino más bien su función sería de indicar uno de los límites del Foro Boario. La
estructura presenta una serie de interesantes nichos cuyas medias cúpulas tienen forma de concha.
El Arco de los Argentarios es una pequeña puerta que se encuentra en Roma, adosada al pórtico de la iglesia de San
Giorgio in Velabro. Tiene forma de puerta arquitrabada, por lo que en realidad no es un arco como su nombre moderno
indica. Es una dedicatoria privada de los argentarii et negotiantes boari huius loci (los banqueros y los comerciantes boarios
de este lugar) a los augustos Septimio Severo y Caracalla.
EL CIRCO MÁXIMO
El circo máximo es una de las primeras
construcciones en Roma y la tradición atribuye
a Tarquinio Prisco su edificación. Está situado
en el valle que forman el monte Palatino y el
monte Aventino. Era un gran solar rodeado de
unas gradas, de madera en un principio, donde
se celebraban carreras de cuadrigas. En época
imperial, bajo mandato de Julio Cesar, fue
modificado debido a la gran afluencia de
público ampliándolo hasta los 600m por 225m y
permitiendo una capacidad de unos 250.000
espectadores. El emperador Domiciano
construyó un palco en el Palatino de cara al
Circo para poder ver cómodamente las
carreras, y más tarde Trajano añadió otros
5.000 asientos y amplió el palco del emperador.
Hoy en día se conserva muy poco del Circo, la pista de carreras, hoy
cubierta de hierba y la spina, que dividía el circo. El edificio se utilizó
durante más de 1000 años hasta que Totila, rey de los Godos, ofreció a
los romanos la última carrera en el 549 d.C.
Nota: en Roma también existía el Circo de Domiciano.
¿Dónde están sus restos?
ARA PACIS
El Ara Pacis (Altar de la Paz) es un monumento conmemorativo construido
entre el 13 y el 9 a. C. por decisión del Senado, en acción de gracias por
el regreso del emperador Augusto tras sus victoriosas campañas en
Hispania y Galia, y la paz que éste había impuesto. Está dedicado a la
diosa de la Paz y levantado en Roma, en el Campo de Marte, donde cada
año se debían sacrificar un carnero y dos bueyes. El material utilizado es mármol de Carrara, tiene una planta rectangular
con unas dimensiones de 11 x 10 x 4'60 metros y no está cubierto. Presenta dos puertas: una frontal para el sacerdote
oficiante, precedida de una escalinata, y otra posterior para los animales a sacrificar; estas puertas estaban orientadas
originalmente al este y al oeste. En su interior el centro está ocupado por el ara propiamente dicha que se asienta sobre un
pedestal escalonado. Lo más destacado es la decoración escultórica que recubre el edificio.
TEMPLOS REPUBLICANOS DEL LARGO ARGENTINA
Durante los años veinte, se descubrieron los restos de estos cuatro templos de la época de la República. Los cuatro
templos, originariamente designados con las letras A, B, C, y D, daban a una calle pavimentada, que fue reconstruida en la
época imperial, después del incendio del año 80.
El Templo A fue construido en el siglo III a. C., y es probablemente el Templo de Juturna erigido por Cayo Lutacio Cátulo
después de su victoria sobre los cartagineses en 241 a. C. Más tarde fue reconstruido en forma de iglesia, cuyo ábside aún
está presente.
El Templo B, un templo circular con seis columnas en pie, fue construido por Quinto Lutacio Catulo César en 101 a. C. para
conmemorar su victoria sobre los cimbrios; fue Aedes Fortunae Huiusce Diei, un templo dedicado a la «Suerte del día de
hoy». La estatua colosal encontrada durante las excavaciones y actualmente conservada en los Museos Capitolinos era la
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estatua de la propia diosa. Sólo la cabeza, los brazos y
las piernas eran de mármol: las otras partes, cubiertas
por el vestido, eran de bronce.
El Templo C es el más antiguo de los tres,
remontándose al siglo IV o al siglo III a. C., y
probablemente estuvo consagrado a Feronia la antigua
diosa itálica de la fertilidad. Después del incendio del
año 80, este templo fue restaurado, y el mosaico en
blanco y negro de la cella del templo interior data de
esta restauración.
El Templo D es el más grande de los cuatro, y se
remonta al siglo II a. C. con restauraciones de la última
época de la República, y se consagró a Lares
Permarini, pero sólo una pequeña parte del mismo se
ha excavado, puesto que una calle cubre la mayor parte del mismo.
LA VIA APPIA
Se extiende desde la Puerta de San Sebastián, cerca de las termas de Caracalla, hasta Brindisi, en la costa de Apulia, -el
tacón de la península itálica-. Fue comenzada su construcción por el censor Apio Claudio, el ciego, en el año 312 a.C. La
primera sección del camino era prácticamente una línea recta. En esta vía, se sitúan algunos monumentos romanos y sobre
todo, las catacumbas. Al prohibir la ley romana los enterramientos dentro de los muros de la ciudad, llevó a que los primeros
cristianos excavaran más de 300Km. de túneles y tumbas de varios niveles. Este trabajo se llevó a cabo entre los siglos I y
V. Eran las catacumbas un lugar de enterramiento. Pero del hecho de que allí estuvieran depositados muchos cuerpos de
mártires y santos, hizo que también se convirtieran en un lugar de culto. Entre las catacumbas destacan las de San Calisto
–las mayores y más famosas-, las de San Sebastián y las de Santa Domitila.
Entre los monumentos romanos de la vía appia antica está la tumba de Cecilia Metella y el Circo de Majencio.
COLUMNA ANTONINA
Columna en espiral, de 30m de altura. Se erigió en el año 180 para conmemorar las victorias de Marco Aurelio contra los
germanos y los sármatas. La estatua de San Pablo que corona la columna
desde 1588, sustituyó a una del emperador por orden del Papa Sixto V.
PIRÁMIDE CESTIA
En la época de los Césares, comienzan a construirse en Roma tumbas
gigantescas, algunas de ellas, como la de Cayo Cestio, inspirada en
modelos del Egipto de los Ptolomeos. Es una pirámide de estilo egipcio. Se
construyó en torno al año 12 a. C. como sepulcro para Cayo Cestio Epulón.
Su base, cuadrada, tiene alrededor de 30 metros de lado, y alcanza una
altura de 36,40 metros. Está recubierta de mármol, aunque su construcción
interna está realizada en ladrillo. En tiempos pasados se pensó que la
pirámide era la tumba de Remo.
Para preparar tu visita:
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Roma 3D: http://www.youtube.com/watch?v=pqfOGIwcK1Q&feature=fvw
Roma, ciudad eterna: http://www.youtube.com/watch?v=f9o7U9K1iUU&feature=related
http://www.romereborn.virginia.edu/ (en inglés)
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AL OTRO LADO DEL TÍBER: CASTEL SAN ANGELO, PIAZZA S. PIETRO, MUSEOS
VATICANOS Y TRASTEVERE.
Coger transporte público:
Desde la Estación Termini. Metro Línea A dirección Battistini, estaciones: Ottaviano - S. Pietro - Musei Vaticani o
Cipro (ambas a 10 minutos andando de los Museos Vaticanos).
Autobús (paradas)
49, frente a la entrada de los Museos Vaticanos.
32, 81, 982 Piazza Risorgimento (a 5 minutos andando de los Museos Vaticanos).
492, 990, Via Leone IV / Via degli Scipioni (a 5 minutos andando de los Museos Vaticanos).
CASTEL SANT’ANGELO
Recorriendo toda la Via della Conciliazione se llega al Casel Sant’Angelo, la fortaleza de los papas edificada en la Edad
Media sobre los restos del mausoleo del Emperador Adriano (siglo II d.C.). Este monumento es un ejemplo de la continuidad
del tejido urbano de Roma desde el pasado hasta el presente, en el que los antiguos edificios se vuelven a utilizar y se
modifican para adaptarse a las nuevas exigencias y mantener así un papel activo a lo largo de toda la historia de la Ciudad.
La colocación por parte del Emperador Adriano del mausoleo en la ribera derecha del Tíber y en las cercanías del Vaticano,
determinó más tarde su uso como bastión defensivo, al estar enlazado con los palacios papales por un pasadizo elevado
(llamado “Passetto”) y estar también dotado de un foso que lo rodeaba, de puentes levadizos y de cañones.
En el pasado, el castillo fue célebre por sus terribles
mazmorras, descritas por Benvenuto Cellini, quien
consiguió escapar de ellas milagrosamente; también
fue escenario de ejecuciones, tal y como narra la ópera
lírica Tosca, que concluye aquí su tragedia. Visitar las
58 salas del Museo del Castel Sant’Angelo permite
explorar sus 1.800 años de historia, además de
disfrutar de la maravillosa vista de la ciudad que
ofrecen sus terrazas.
Imprescindible es la visita al Puente de los Ángeles,
con sus estatuas de la escuela de Bernini, que en el
pasado anunciaban a los peregrinos que se dirigían a la
tumba de San Pedro, que su meta estaba cercana. De
este modo se podrá evocar el papel fundamental que
tuvo el río para la ciudad, cuando los edificios y los
jardines se asomaban directamente a sus orillas, en las que se erigían puertos, molinos de agua y plataformas para la
pesca. Las terribles inundaciones que anegaban los barrios cercanos al río determinaron la construcción de sus paredes de
protección que, desde 1870, modificaron profundamente el aspecto del río y su implicación con la ciudad.
CIUDAD DEL VATICANO
La Ciudad del Vaticano, Estado independiente desde 1929 (Patti Lateranensi), surge sobre el lugar del martirio y la
sepultura de San Pedro. El primer emperador cristiano, Constantino, edificó en el siglo IV d.C. una espléndida basílica, que
fue sucesivamente destruida y reconstruida durante casi 120 años (desde 1506 hasta su consagración en 1.614). A la
construcción de la nueva Iglesia, la más grande del mundo con sus 22.000 m2 de superficie total, participaron los mejores
arquitectos de la época, entre los que destacan Bramante, Miguel Ángel y Maderno. La basílica de San Pedro ofrece una de
las experiencias más impresionantes que se puedan imaginar, debido a su inmenso espacio arquitectónico.
Ninguna fotografía refleja la fascinación que sorprende al turista al observar la enormidad del edificio, el esplendor de sus
decoraciones y las obras de arte que alberga. La alternancia de planta de cruz griega y de cruz latina durante su
construcción (aunque finalmente se escogiese ésta última) conlleva que haya que recorrer buena parte de la nave central
para poder admirar la espléndida cúpula de Miguel Ángel (con una altura de 136 metros y un diámetro de 42 m.). De entre
los tesoros que custodia San Pedro destacan la celebérrima “Piedad” del mismo Miguel Ángel – única obra firmada por el
artista, que la esculpió a los 24 años de edad, utilizando un único bloque de mármol -; el baldaquín que corona el altar
mayor, obra de Bernini creada con el bronce arrebatado al Panteón; y la estatua de bronce de San Pedro, esculpida por
Arnolfo di Cambio. Sorprende la escasez de obras pictóricas, casi inexistentes, sustituidas por los mosaicos de la Escuela
Vaticana.
La Plaza de San Pedro, que indica el confín con Italia, puede albergar a 300.000 personas: acoge a sus visitantes con el
abrazo de la columnata ideada por Bernini y es el lugar en que se celebran importantes ceremonias en las que se entabla
una relación directa entre el Papa y la gente.
I.E.S. RAMÓN OLLEROS.
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Los Museos Vaticanos y sus inmensas riquezas
artísticas, fruto de siglos de coleccionismo y de
encargos papales, ofrecen una extraordinaria
experiencia, ya que la importancia de las obras
expuestas se ve ampliada gracias al esplendor de las
salas que las albergan y que a menudo constituyen de
por sí el motivo de la visita a los Museos. No se
recorren salas creadas únicamente para albergar
colecciones de obras artísticas, sino que se visitan las
mismas galerías y las mismas estancias de los
palacios pontificios que un tiempo estaban reservadas
a unos pocos elegidos. Los Museos exponen una gran
variedad de colecciones que incluyen la mayor
colección de arte antiguo griego y romano, una
recopilación de arte egipcio, otro de arte etrusco y,
naturalmente, las obras maestras del arte renacentista, como los frescos de las Estancias de Raffaello o de la Capilla
Sixtina.
En este lugar se percibe, más aún si cabe, el hecho de que venir a Roma sea un ejercicio de recordar algo que ya se
conoce, más que descubrir por primera vez
cosas nuevas. Muchas de las obras que
caracterizan la cultura artística occidental,
de la que formamos parte, se encuentran
en este lugar.
La restauración de la Capilla Sixtina, que
ha durado veinte años, le ha devuelto el
esplendor de los colores originales y ha
hecho posible que se puedan admirar con
todo detalle, los episodios bíblicos de la
bóveda y el Juicio Universal de Miguel
Ángel, con sus casi 400 figuras
sorprendidas en el momento más dramático de la historia de la humanidad. La Capilla también contiene los célebres frescos
del siglo XV realizados por Botticelli, Perugino y Ghirlandaio, entre otros.
Las visitas didácticas para las escuelas primarias y secundarias están orientadas a despertar en los alumnos el interés por
el arte, la profundización en los conocimientos y la comunicación de observaciones. La duración de la visita es de 2 horas
aproximadamente.
TRASTEVERE
El barrio de Trastevere es ideal para pasear entre sus callejones, sus plazas y sus colores, que aún mantienen intacta su
verdadera alma romana, y ofrece un agradable contraste con el solemne esplendor de cuanto se ha visto durante la
mañana. En la antigüedad, Trastevere (“tras el Tíber”) fue el primer barrio construido en la ribera derecha del río, morada de
artesanos, pescadores, mercaderes y de la comunidad de extranjeros relacionados con la actividad del cercano puerto.
También fue famoso por sus espléndidas mansiones y sus vastos jardines; de entre ellos, destacan los de Julio César,
donde parece que Cleopatra encontró alojamiento y que quedaron como herencia para el pueblo romano.
Durante la Edad Media el barrio asumió el aspecto que aún conserva, con sus callejones estrechos y sus placitas que a
menudo contrastan con la racionalidad de un plano urbanístico unitario y que parecen haberse adaptado a esquemas y a
estructuras anteriores. Es indispensable visitar la antigua basílica de Santa María en Trastevere, con sus mosaicos de
Pietro Cavallini que datan del siglo XIII; y la de Santa Cecilia, con su conmovedora estatua de la patrona de la música,
esculpida por Stefano Maderno. Si también se desea admirar en este barrio el lujo del Renacimiento romano, puede
visitarse la Villa Farnesina, la residencia suburbana del rico banquero Agostino Chigi, que conserva frescos de Raffaello,
Baldassarre Peruzzi y Sebastiano del Piombo.
Además, Trastevere ofrece una gran variedad de restaurantes, pizzerías, bares y pubs donde transcurrir una velada
agradable. Hay muy pocos barrios en Roma que puedan definirse verdaderamente “romano” como el Trastevere. Será
por su atmosfera, por su gente (los que se llaman “trasteverinos”), por el encanto que es posible ver y percibir en cada
placita, en el conjunto mágico de sus callejuelas y callejones, en las magnificas arquitecturas religiosas y publicas que nos
han llegado prácticamente intactas... El hecho es que es casi imposible no quedarse con un recuerdo de él lleno de
colores, olores y emociones.
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Todo en Trastevere nos recuerda el pasado y el presente. Un pasado que empieza desde lejos. Precisamente en el siglo
VIII a.C. cuando toda esta parte, situada, como decían los romanos, “más allá del río Tiber” (de aquí el nombre latino
“TransTiberim” y el consecuente Trastevere) era propiedad de los Etruscos.
A partir de la época imperial, es decir a partir del reino de Augusto (63 a.C.-14 d.C.), fue el barrio más poblado de Roma
sobre todo porque era el lugar donde vivían, entre todos, las comunidades extranjeras, en particular familias de orígenes
orientales como sirios y judíos, que trabajaban en el cercano puerto llamado “Emporium” desarrollando actividades de tipo
comerciales y mercantiles. Los ricos ciudadanos romanos, entre los cuales se pueden mencionar Clodia, amiga de Catullo,
y el mismo C. Julio Caesar (101-44 a.C.), construyeron aquí villas maravillosas con jardines lujosos – llamados “Horti” – con
estatuas y pequeños estanques. Muy precoz fue también la difusión del Cristianismo con la edificación ya a partir de los
siglos IV y V , de las primeras iglesias. Estas representan hoy en día una de las joyas de arte y de fe más admiradas y
conocidas del barrio de Trastevere. Buscarlas entre sus plazas y calles es un
placer y un pretexto para conocer directamente no solo el alma cristiana sino
también para admirar las obras de arte que cada iglesia conserva en su interior.
Entre todas podemos nombrar la de S. Maria in Trastevere, que es la basílica
màs antigua de Roma (año 337, construida bajo el pontificado de Julio I), la de S.
Crisógono, de S. Cecilia y, por ultimo, la de S. Francesco a Ripa.
Pero Trastevere se descubre también entre un taller y un mesón, entre una librería
y una galería de arte y naturalmente, entre sus increíbles restaurantes y
pizzerias. El barrio de Trastevere se descubre poco a poco y sin prisa. La
tranquilidad de sus calles y callejuelas permite al turista màs curioso ver y
admirar siempre algo muy interesante.
Es posible así caminando de encontrar una torre de epoca medieval (Torre de
los Anguillara del siglo XIII), una iglesia – la de S. Benedetto in Piscinula – con
uno de los pavimentos màs bellos de la ciudad (hecho en el siglo XI con trozos
de mármoles antiguos donados por la familia de los Cosmati) y con el
campanario más pequeño de Roma, un “vicolo” (callejón) llamado el “Vicolo
dell’Atleta” porque fue allí que hace dos siglo se descubrió una estatua romana de
gran importancia por la historia del arte clásico, o sea la copia romana del celebre “Apoxyomenos” de Lisippo del siglo IV
a.C., (ahora en los Museos Vaticanos), una sinagoga con fachada original de ladrillo del siglo XI y, como a menudo pasa en
Roma, algunos testimonios de su pasado imperial.
Entre todos se pueden mencionar por ejemplo las murallas (restauradas al final del siglo XV por el papa español Alejandro
VI Borja) hoy “Porta Settimiana” , que mandó construir al final del siglo III el emperador Aureliano y restos de edificios
antiguos hoy en día visibles a un nivel inferior de unos metros bajo el pavimento de muchas iglesias del barrio. La iglesia de
Santa Cecilia, por ejemplo, en sus subterráneos (visibles pagando un billete de entrada) conserva una serie de
construcciones que se han identificado como pertenecientes a diferentes épocas romanas a partir de la republicana (siglo II
a.C.) hasta los siglos II y IV d.C.. La misma cosa es posible admirar en la iglesia de San Crisogono donde no solo se han
descubiertos elementos arquitectónicos de un edificio imperial del siglo IV sino también sarcófagos paganos y frescos de
época medieval de los siglos VIII y XI.
El placer que nos acompaña en un barrio como lo de Trastevere viene además de las magnificas y preciosas obras de arte
que han dejado aquí los más importantes artistas italianos: Arnolfo di Cambio, Pietro Cavallini, Rafael y el mismo
Bernini. Arnolfo es el autor del ciborio realizado en el 1293 en perfecto estilo gótico con recuerdos de elementos
iconográficos clásicos y visible en el ábside de la iglesia de Santa Cecilia. Cavallini del mosaico medieval del 1290 donde
se pueden admirar las primeras aplicaciones de las reglas de la perspectiva antes que llegara en la escena artística italiana
Giotto: estos mosaicos se pueden ver en el ábside de Santa Maria in Trastevere.
El genial Rafael es el autor junto con sus discípulos Giulio Romano, Giovan Francesco Penni e Giovanni da Udine, de un
increíble ciclo de pinturas a fresco (año 1513-1517) de tema pagano conocido como el “Ciclo de Amor y Psiche”, tomado
directamente da un texto del siglo II de Apuleio, y que embellece la loggia puesta en el interior de la villa renacentista
llamada “Farnesina” (es posible admirar los frescos todos los días solo por la mañana pagando un billete de entrada).
El último autor Bernini ha realizado algo verdaderamente único. Se trata de la escultura que representa a la beata
Ludovica Albertoni y que es visible en una capilla de la iglesia de San Francesco a Ripa. Cuando el célebre artista
barroco se puso a trabajar a esa obra él tenia 76 años (1674) y estaba casi ciego. Por eso resulta más sorprendente ver
cómo ha sabido modelar el mármol (¡de una sola pieza!) como si fuese estuco y realizar la expresión de éxtasis de la cara
de la beata y el total abandono de su alma en las manos de Dios de una manera natural y, al mismo tiempo,
escenográficamente teatral.
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PLAZAS, FUENTES, IGLESIAS
PLAZA DEL POPOLO
La Piazza del Popolo es el lugar donde convergen las
tres calles más importantes de Roma: la Via del
Babuino, la Via di Ripetta y la famosa Via del Corso.La
plaza se caracteriza por numerosos elementos. Si se
viene desde la parte norte, por la Via Flaminia, se puede
contemplar la Porta del Popolo, diseñada por Bernini,
mientras que en el centro de la plaza se encuentra un
obelisco egipcio, que se remonta al s. XII a.C. En la
Piazza del Popolo se erigen tres iglesias. La más
importante es la Iglesia de Santa María del Popolo,
que fue construida en el siglo XI, para después sufrir
numerosos cambios hasta el s. XVII, cuando el Papa
Alejandro VII ordenó restaurar la iglesia a Bernini para hacerla más viva y barroca. Dentro de esta iglesia se encuentran
obras de Caravaggio y de Pinturicchio. Las otras dos iglesias, llamadas las Iglesias Gemelas, fueron construidas también
por voluntad de Alejandro VII y proporcionaron a la Piazza del Popolo su configuración actual. Las iglesias se llaman Santa
María in Montesanto y Santa Maria dei Miracoli.
PLAZA DE ESPAÑA
Lugar de encuentro no sólo para los romanos, sino también para los turistas y los
artistas extranjeros que desde siempre se han alojado en los numerosos hoteles y
pensiones de las calles cercanas.
Su famosa escalinata, ideada en el año 1.700 por Francesco de Sanctis, resolvió
en modo eficiente y escenográfico el problema de enlazar la plaza, controlada
durante mucho tiempo por los españoles que en ella tenían su embajada, y la
“zona francesa” en la cima de la colina que incluía a la renacentista Iglesia de la
Trinidad de los Montes.
Sus 138 escalones, engalanados con terrazas y líneas curvas, crean el efecto de
una cascada que parece precipitar a la plaza. En primavera se embellece con
numerosas macetas de azaleas y sirve de escenario para un famoso desfile de
moda. La “Fontana della Barcaccia” es obra de Pietro Bernini, padre de Gian
Lorenzo, y representa una barca semihundida colocada en un pilón bajo, ingeniosa solución del problema de la poca
presión del acueducto que la alimenta y que no permite chorros de agua altos.
Desde la plaza salen, como radios, las calles que albergan las boutiques de las más famosas e importantes marcas de
moda internacional, de entre estas calles destaca Via Condotti, una de las más elegantes del mundo.
PALACIO BARBERINI
Grandioso proyecto que preveía la construcción de un palacio-villa que
igualase e incluso superase las residencias más lujosas de la nobleza
romana. Se elige el proyecto de Maderno basado en una estructura abierta
que preveía la planta del edificio a forma de “H”, con la construcción de dos
alas paralelas unidas por un eje central porticado de acceso y una galería
superior cerrada; en este eje de unión - salas de representación comunes a
ambas alas residenciales – se concentraron las obras más importantes que
Bernini llevó a cabo a partir del 1.629, cuando fue nombrado director de
obras junto con Borrimini (pariente de Maderno y ya contratado con
anterioridad).
A estos dos artistas se deben algunas de las estructuras más significativas del Palacio, como por ejemplo, la escalera
helicoidal del ala derecha (construida por Borrimini copiando una similar existente en el Palacio Farnese de Caprarola); la
escalinata monumental de planta cuadrada firmada por Bernini; la sala oval; o el imponente salón de doble altura en el que
Pietro de Cortona realizó – entre los años 1.633 y 1.639 – el famoso fresco conocido como “Triunfo de la Divina
Providencia”, exaltación alegórica a la gloria de la familia Barberini. Actualmente es una pinacoteca con fondos de grandes
pintores italianos.
SANTA MARÍA DE LA VICTORIA
Iglesia barroca construida por Maderno que destaca entre los turistas por poseer en la capilla Cornaro una de las esculturas
más conocidas de Bernini: El éxtasis de Santa Teresa.
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SAN CARLOS DE LAS CUATRO FUENTES
Del “rival” de Bernini, Borromini. Presenta planta ovalada con profusión de
líneas curvas. En el exterior, la fachada es alabeada (combinación de líneas
cóncavas y convexas, es decir curva-contra curva) y muy dinámica. También
se emplean formas ovaladas .Muestra elementos clásicos como el tratamiento
en los dos cuerpos y en ambos el orden gigante de columnas con volumen
pleno (no adosadas) que soportan un entablamento. La cornisa es muy volada.
Todo ello, además de proporcionar un gran dinamismo teatral, ayuda a
conseguir importantes contrastes lumínicos.
SAN ANDREA DEL QUIRINAL
Es, junto con la iglesia de San Carlo el otro gran referente si queremos hablar
de puro barroco italiano. Fue encargada por la Compañía de Jesús al famoso
Bernini en 1658. Al igual que lo sucedido con la iglesia de San Carlo, aquí
también se disponía de espacio restringido. Para solventar esto, Bernini adoptó
un tipo de planta elíptico que tiene el eje más corto en la entrada que en el altar
mayor. Su armonía es tal que al entrar todo el mundo se queda callado... .Se
dice que Bernini consideraba esta iglesia como su obra más conseguida y que cuando era viejo le gustaba venir hasta ella y
sentarse a contemplarla.
PALACIO DEL QUIRINAL
El inmenso Palacio del Quirinal fue comenzado por Gregorio XIII en 1574 y fue la residencia veraniega de los Papas hasta
1870. En su construcción trabajaron algunos de los arquitectos más prestigiosos del Barroco. Con el tiempo pasó a ser el
palacio del Rey de Italia y más tarde la residencia del Presidente de la República. Frente al Palacio del Quirinal se alzan dos
espléndidas esculturas que representan a los dioses Cástor y Pólux y uno de los obeliscos que indicaban la entrada al
mausoleo de Augusto.
FONTANA DE TREVI
La espectacularidad de la Fuente no se descubre de manera progresiva, ya que ninguna de las calles por las que se accede
permite entreverla. Y aunque el fragor del agua nos avisa de que nos estamos acercando a ella, se nos aparece de repente
como si un telón se levantase ante de nuestros ojos, por lo que su efecto sorpresa no se agota jamás. La Fontana, dedicada
al agua como símbolo de vida, de bienestar y de renovación, fue concebida en el siglo XVIII por el arquitecto Incola Salvi y
su realización duró treinta años.
La Fuente está ubicada en el mismo lugar en que termina el trayecto del antiguo acueducto del “Acqua Vergine” (19 a.C.),
cuya historia aparece representada en los relieves situados en la parte superior de la fachada. El atractivo de la Fontana de
Trevi se ve amplificado por el contraste existente entre la grandiosidad del monumento y la pequeñez de la plaza que la
alberga y que parece casi comprimirla, y también por hallarse adosada a un edificio, lo que no nos permite dar la vuelta a su
alrededor, como sucede normalmente. La figura de Océano en el centro de la fuente parece emerger del agua sobre un
carro tirado por caballos marinos y tritones, entre unas rocas en las que se encuentran representadas más de treinta tipos
diferentes de plantas, en una combinación única de escultura, arquitectura y naturaleza que permite imaginarse al edificio
fundiéndose con la roca y el agua. No os olvidéis de lanzar la célebre moneda a la fuente, para garantizar vuestro regreso a
la Ciudad Eterna.... para seguir el “método correcto” hay que ponerse de espaldas a la fuente y lanzar la moneda con la
mano derecha por encima del hombro izquierdo.
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PLAZA COLONNA
En ella se encuentra el Palacio Chigi, residencia del primer ministro y la columna de Marco Aurelio levantada en el 180 d. C.
para conmemorar sus victorias sobre los bárbaros del Danubio.
SAN IGNACIO DE LOYOLA
Una de las iglesias barrocas más recargadas se levantó en honor del fundador de la Compañía de Jesús. Destaca el techo
de Andrea Pozzo ensalzando el éxito de los misioneros de esta orden.
PLAZA DE LA MINERVA
Alberga la escultura de Bernini de un elefante soportando un obelisco egipcio. En la misma plaza se localiza la Iglesia de
Santa María Sopra Minerva, una de las pocas iglesias góticas que tiene Roma. En su interior hay obras de Miguel Ángel,
Bernini y Filipino Lippi.
SAN LUÍS DE LOS FRANCESES.
Este templo, construido por Domenico Fontana a lo largo del Siglo
XVI es la iglesia nacional de los franceses en Roma, consagrada a
San Luís, rey de Francia. La iglesia está repleta de alusiones a
personajes o hechos de la historia del país galo. Si bien su exterior
es relativamente austero y sencillo, típico renacentista, su interior
es barroco, decorado en mármol de colores dorados.
Constituida por tres naves y capillas laterales, su principal
atracción son los lienzos de Caravaggio situados en la Capilla
Contarelli en los que narra la vocación, inspiración y martirio de
San Mateo
PLAZA NAVONA
Esta plaza, una de las más espectaculares de la Roma barroca, es
un magnífico ejemplo de cómo descubrir el aspecto más antiguo
de la ciudad, en uno de los lugares más visitados de nuestros
días: la forma alargada de la plaza copia la estructura del Estadio de Domiciano, sobre cuyos restos se construyó. El
estadio, destinado a la celebración de campeonatos deportivos, data del
siglo I d.C. y sus ruinas pueden aún admirarse bajo el nivel de la calzada de
la Plaza de Tor Sanguigna.
La plaza tomó su aspecto actual en la época barroca gracias a tres
monumentos fundamentales: la Iglesia de Sant’Agnese in Agone y el Palacio
Pamphilj, en los que colaboró su “rival”, el arquitecto Borromini; y la famosa
fuente de Bernini llamada de los Cuatro Ríos. Los gigantes de la Fuente de
los Ríos, que fue inaugurada en 1651, representan a los cuatro ríos más
grandes de los continentes conocidos en aquella época: el Río de la Plata, el
Danubio, el Ganges y el Nilo, famoso porque la estatua que lo representa
tiene el rostro cubierto para evocar el misterio de sus orígenes (su fuente de
origen no había sido aún descubierta).
La representación de plantas y de animales, junto al movimiento y al
estruendo del agua, parecen infundir vida al mármol de la fuente,
que aparece coronada con uno de los trece obeliscos egipcios
presentes en Roma y decorada con el emblema del Papa Pamphilj.
La cavidad vacía en el centro del monumento se debe una brillante
ocurrencia de su creador, ya que permite al espectador atravesar la
fuente con su mirada y percibir toda la extensión de la plaza.
En el pasado Plaza Navona era un lugar donde se celebraban el
mercado y las fiestas, durante las que se inundaba parcialmente
para que desfilaran los carros de las familias aristocráticas, y aún
hoy se anima con el mercadillo de Navidad, con los artistas
callejeros y con las terrazas de las cafeterías.
I.E.S. RAMÓN OLLEROS.
VIAJE A ROMA Pág. 18
CAMPO DE FIORI
Zona animada, de gran actividad entre los romanos. La
estatua es del filosofo Giordano Bruno, quemado en la
hoguera por herejía en el 1.660 al sostener que la tierra giraba
alrededor del sol.
Conviene no perderse el Palacio Farnesio levantado en el
renacimiento por Antonio da Sangallo el Joven y por Miguel
Ángel.
IGLESIA DEL GESÙ
Primera iglesia jesuita de Roma fundada por el propio Ignacio
de Loyola. Su diseño tipifica la arquitectura de la
Contrarreforma.
PLAZA VENECIA Y MONUMENTO A VÍCTOR MANUEL II
Grandioso monumento a Víctor Manuel II (llamado también "Victoriano"), el monumento más grande de Italia. Fue diseñado
por Giuseppe Sacconi e inaugurado en 1911 para celebrar la independencia de Italia. Este gigantesco monumento fue
levantado en honor del rey Víctor Manuel II, que en 1870 hizo de Italia un reino unificado con capital en Roma. Al pie de la
estatua de Roma está el altar de la patria, la tumba del
soldado desconocido caído en la guerra de 1915-1918.
SANTA MARÍA LA MAYOR
Fusión de estilos arquitectónicos desde el paleocristiano al
barroco. Su fachada es neoclásica. Famosa por sus
mosaicos que van desde el siglo V hasta el XIII (como los de
coronación de la Virgen localizados en el abside). El
artesonado del techo es renacentista. En su interior se
encuentran enterrados varios papas.
SAN PIETRO IN VINCOLI
La iglesia de San Pietro in Vincoli es mundialmente conocida porque en ella se encuentra el Moisés de Miguel Ángel. El
Moisés debía formar parte de un conjunto de 47 esculturas más que Miguel Ángel
debía esculpir para la tumba del Papa Julio II, aunque finalmente no se pudo completar
el proyecto porque el mismo Papa le pidió a Miguel Ángel que pintara los frescos de la
Capilla Sixtina. Pese a la importancia de la obra de Miguel Ángel, la iglesia fue
construida para albergar una importantísima reliquia, las cadenas con las que ataron a
San Pedro. La leyenda cuenta que las dos cadenas que sujetaron a San Pedro
mientras estuvo preso en la cárcel de Roma fueron trasladadas posteriormente a
Constantinopla. Cinco siglos más tarde la emperatriz Eudoxia, esposa del emperador
Valentiniano III, guardó una de ellas en una iglesia de Constantinopla, mientras que la
otra se la hizo llegar a su hija Eudoxia, que se encontraba en Roma. Eudoxia le
entregó la cadena al Papa León I y éste mandó construir la iglesia de San Pietro in
Vincoli (San Pietro Encadenado) para albergar la cadena. Algunos años después la
otra cadena también llegó a manos del Papa León I y al compararla con la otra cadena
las dos se unieron de forma.
Desde ese momento las dos cadenas de San Pedro se guardan con sumo recelo en el
altar mayor de la iglesia de San Pietro in Vincoli.
SAN CLEMENTE
Extraordinaria joya para los aficionados a la arqueología. En esta basílica se producen continuos descubrimientos en una
destacada superposición de edificios sobre una vivienda del siglo II. En su patio se encontró un templo oriental dedicado a
Mitra transformado poco después en un lugar de culto cristiano. Posteriormente se levantó una iglesia del siglo V y sobre
ella la iglesia que puede contemplarse actualmente.
El interior de la basílica presenta tres naves y conserva su aire medieval. Destacan el mosaico con el Triunfo de la Cruz del
siglo XII y los frescos renacentistas de la capilla de Santa Caterina.
I.E.S. RAMÓN OLLEROS.
VIAJE A ROMA Pág. 19
SAN JUAN DE LETRÁN
La catedral de Roma, es la heredera de la basílica levantada en época de
Constantino. Presenta grandes transformaciones producto de las sucesivas
reformas. Su grandiosa fachada del siglo XVIII de estilo barroco está
coronada por las estatuas de Cristo, San Juan Bautista, San Juan
Evangelista y los Doctores de la Iglesia.
Borromini remodeló las cinco naves del interior conservando el techo del
siglo XVI. Añadió los doce nichos de la nave central en los que se colocaron
las estatuas de los apóstoles. Destaca el claustro del siglo XIII.
SANTA MARÍA IN COSMEDÍN.
La iglesia atrae a muchos visitantes debido a la Bocca della Verità, una antigua escultura que se cree que es una tapa de
alcantarilla, ubicada en su pórtico. Según una antigua tradición que proviene
de la Edad Media, la Boca de la Verdad se cierra y devora la mano del
mentiroso que la introduce. Sin embargo, la Boca de la Verdad se hizo
famosa gracias a la película Vacaciones en Roma donde Gregory Peck gastó
una broma a Audrey Hepburn metiéndose la mano dentro de la manga y
simulando que la Boca de la Verdad se la había devorado.
Además, la iglesia merece la pena visitarse sobre todo por su
excepcionalmente bien conservado cierre del coro de la Alta Edad Media y su
muy delicado pavimento cosmatesco (manera de realizar un suelo típico de la
época medieval en Italia, y especialmente en Roma y sus alrededores. El
nombre deriva del apellido Cosmati, uno de los grupos de artesanos del
mármol que crearon obras cogiendo mármol de antiguas ruinas romanas y
colocando los fragmentos en decoraciones geométricas.) Su campanario es
el más alto de los de la Edad Media en Roma.
El interior actual tiene una nave central con dos laterales: estos se dividen por
medio de cuatro pilastras y dieciocho antiguas columnas. En las paredes
laterales se incluyen algunas de las antiguas columnas de la Statio Annonae.
LAS CATACUMBAS
Las catacumbas fueron los cementerios subterráneos de los primeros cristianos y estaban situadas en las afueras de las
murallas para respetar una antigua usanza que prohibía la sepultura de los fallecidos en el interior de una ciudad.
Las catacumbas están distribuidas en varios niveles en galerías subterráneas excavadas en la toba, una roca volcánica
friable que se endurece al contacto con el oxígeno contenido en el aire. Los difuntos, envueltos en un sudario, se enterraban
en nichos y criptas excavadas en las paredes de las galerías subterráneas y se sellaban con planchas de terracota o de
mármol, según la disponibilidad económica del difunto.
Curiosamente, la estratificación de los niveles, necesaria para explotar al máximo el terreno que resultaba muy costoso, va
interpretada en sentido contrario respecto a una verdadera excavación arqueológica: el nivel más antiguo es el primer nivel
al que se accede, es decir, el que se encuentra inmediatamente por debajo del nivel del suelo; una vez completado éste, se
iniciaba a excavar un segundo nivel a mayor profundidad
Una convicción generalizada identificaba las catacumbas como los escondites de los primeros cristianos durante las
persecuciones, pero en realidad, éstas se usaron única y exclusivamente como cementerios y como lugares de culto ligados
a la presencia de tumbas de santos y mártires. Los frescos y las inscripciones en las lápidas reflejan que la muerte era
considerada un descanso antes del despertar en la vida eterna y las catacumbas como un lugar de transición, lo que
contrastaba con las necrópolis paganas, concebidas como morada definitiva de los difuntos.
Existen varias opciones para visitar. Quizá las más conocidas sean las de San Callisto.
Puede ser atractivo realizar un paseo por la Via Appia Antica antes de volver al centro de Roma.
I.E.S. RAMÓN OLLEROS.
ESPAÑOL
hola
buenos días
buenas tardes
buenas noches
hasta mañana
hasta luego
hasta pronto
adiós
nos vemos
nos llamamos
no
nunca jamás
mal
pésimo
desgraciadamente
que pena
VIAJE A ROMA Pág. 20
FRASES COMUNES
ITALIANO
ESPAÑOL
ciao
si
buon giorno
por supuesto
buon pomeriggio
sin duda
buona sera
de acuerdo
a domani
muy bien
a più tarde
óptimo
a presto
excelente
addio
con mucho gusto
ci vediamo
que suerte
ci sentiamo
que rico
no
nunca
mai più
nada
male
muy mal
pessimo
horrible
purtroppo
que feo
che peccato
que horror
ITALIANO
si
naturalmente
senz'altro
d'accordo
benissimo
ottimo
eccellente
volentieri
che fortuna
che buono
mai
niente
malissimo
orribile
che brutto
che orrrore
DE VACACIONES
ESPAÑOL
¿Donde están las duchas / los servicios?
¿Hay algún supermercado aquí cerca?
¿Hay una piscina / un restaurante?
Vamos a visitar la ciudad
¿Dónde está la Oficina de Turismo?
¿Tiene usted un plano de la ciudad?
¿Cuales son los edificios más importantes?
¿Tiene folletos ilustrativos?
¿Hay un guía que hable español?
¿A qué hora volveremos?
¿Cuanto cuesta la entrada?
ITALIANO
Dove sono le docce/ i bagni?
C'è un supermercato qui vicino?
C'è una piscina / un ristorante?
Andiamo a visitare la città
Dov'è l'ufficio del turismo?
Ha una pianta della citta?
Quali sono gli edifici più importanti?
Ha degli opuscoli illustrativi?
C'è una gioda che parli spagnolo?
A che ora torneremo?
Quanto questa l'ingresso?
DE COMPRAS
ESPAÑOL
ITALIANO
¿Dónde se encuentra el centro comercial?
Dove si trova il centro commerciale?
Estoy solo mirando
Sto solo dando un'occhiata
¿Puede atenderme?
Può servirmi?
¿Puede enseñarme la chaqueta de la vitrina?
Può mostrarmi la giacca in vetrina?
¿Pude enseñarme algo más?
Può mostrarmi qualcos'altro?
¿Cuánto cuesta?
Quanto costa?
¿Acepta tarjetas de crédito?
Accetta carte di credito?
¿Puede envolvérmelo, por favor?
Può incartarmelo per favore?
¿Podría cambiarme este artículo?
Potrebbe cambiarmi questo articolo?
No me gusta el color
Non mi piace il colore
Quisiera ver algún objeto de artesanía
Vorrei vedere qualche oggetto di artigianato
I.E.S. RAMÓN OLLEROS.
VIAJE A ROMA Pág. 21
Per favore, tolga il prezzo e me lo incarti
Dov'è il camerino?
Por favor, quite el precio y me lo envuelva
¿Dónde está el probador?
SUPERMERCADO
ESPAÑOL
Quisiera un kilo y medio de papatas
Déme dos racimos de uva
Me cambia estas naranjas, ¿por favor?
Quisiera medio kilo de manzanas
Luego, trescientos gramos de zanahorias
ITALIANO
Vorrei un chilo e mezzo di patate
Mi dia due grappoli di uva
Mi cambia queste arancie, per favore?
Vorrei mezzo chilo di mele
poi, tre etti di carote
EN LA FARMACIA / HOSPITAL
ESPAÑOL
¿Dónde está la farmacia mas cercana?
Quisiera algo contra las quemaduras de sol
Quisiera algo contra la picadura de insectos
Déme un analgésico por favor
Tome cada seis, ocho, doce horas
Antes / Después de las comidas
¿Hay un médico aquí?
No me siento bien
¿Puede llamar a un médico?
Llamen enseguida una ambulancia
Me siento débil
He comido algo que me ha hecho mal
Tengo fiebre, tos y dolor de garganta
Siento náuseas y tengo diarrea
¿Dónde le duele?
Siento un dolor aquí
uno
due
tre
quattro
-cinque
-sei
sette
otto
nove
dieci
undici
LOS NÚMEROS
dodici
ventitrè
tredici
ventiquattro
quattordici
venticinque
quindici
ventisei
sedici
ventisette
diciassette
ventotto
diciotto
ventinove
diciannove
trenta
venti
quaranta
ventuno
cinquanta
ventidue
sessanta
ITALIANO
Dov'è la farmacia più vicina?
Vorrei qualcosa contro le scottature di sole
Vorrei qualcosa contro le punture d'insetti
Mi dia un analgesico, per favore
Prenda ogni sei, otto, dodici ore
Prima / Dopo i pasti
C'è un medico qui?
Non mi sento bene
Può chiamare un medico?
Chiamate subito un'ambulanza
Mi sento debole
Ho mangiato qualcosa che mi ha fatto male
Ho febbre, tosse e mal di gola
Ho la nausea e la diarrea
Dove le fa male?
Ho un dolore qui
settanta
ottanta
novanta
cento
duecento
cinquecento
mille
diecimila
centomila
un milione
un miliardo
I.E.S. RAMÓN OLLEROS.
VIAJE A ROMA Pág. 22
TRANSPORTES EN ROMA
Roma cuenta con una sencilla red de metro pero más que suficiente para moverse como turista en la ciudad. Es una red segura
(con las normales precauciones) y útil para librarse del congestionado tráfico de la superficie.
El metro de Roma tiene sólo 2 líneas: A y B que se cruzan en la estación de Termini. El horario de funcionamiento es de 5.30 am
hasta las 23:30 pm (los viernes y sábados hasta la 1:30). Los trenes circulan cada 5-10 minutos.
La linea A dispone de interesantes paradas desde el punto de vista turístico de entre las que podemos destacar:
•
Cipro: ideal para los Museos Vaticanos
•
Ottaviano: Para la plaza de San Pedro
•
Flaminio: ideal para ver Villa Borghese o de compras por Via del Corso, Via del Babuino, Piazza del Popolo…
•
Spagna: Para ver la Piazza di Spagna y Trinità dei Monti. Tampoco queda lejos de la Fontana de Trevi.
•
Barberini: Para ver Via Veneto y la Fontana de Trevi
•
Repubblica: Para visitar las Termas dd Diocleziano
•
Vittorio Emanuele: para visitar la Basilica de S.Maria Maggiore
•
S.Giovanni:Para la Basilica de S.Giovanni y la Scala Santa.
La linea B también dispone de interesantes destinos:
•
S.Paolo: Para la Basilica di S.Paolo
•
Piramide: Para ver la pirámide de Caius Cestius
•
Circo Massimo y Colosseo: Para disfrutar de estas maravillas romanas
•
Cavour: para ver S.Pietro in Vincoli.
Tickets y abonos
ATAC , la empresa de transporte de Roma dispone de los siguientes tickets y abonos:
•
BIT: El billete univiaje para metro y autobuses urbanos (1,50€)
Tiene una validez de 100 minutos desde que se valida. En ese tiempo, se puede utilizar en cualquier medio de
transporte municipal. Permite varios viajes en autobús y en tranvía, pero uno solo en Metro (si sales del Metro y
vuelves a entrar necesitas nuevo billete). Si subes a un autobús pocos minutos antes de que caduque tu billete,
debes timbrarlo nada más entrar, y mantendrá su vigencia hasta el final del viaje.
Este será el billete que utilizaremos y lo haremos dos veces al día, por lo que hay que calcular mínimo 3 euros en
transporte diarios. El día de visita de las Catacumbas será el único día en el que compense la adquisición del abono
de un día. Por lo tanto, hay que contar con un gasto de mínimo 18€ en transportes públicos.
BIG: Billete de una día con viajes ilimitados en metro, autobuses y trenes urbanos. Valido hasta las 24 horas del día de
compra (6€)
• BTI: billete para 3 días con viajes ilimitados (16,50€)
• CIS: Para 7 días con viaje ilimitados (24€)
IMPORTANTE: los tickets tienen que ser validados antes de entrar en el metro. Los tickets y abonos se pueden comprar en las
estaciones (ventanilla o máquinas automáticas). También se encuentran en estancos, puestos de periódicos, agencias de viaje,
hoteles, cafeterías ...
•
Visita a las Catacumbas: el bus que lleva justo hasta ellas es el 218 desde San Juan de Letrán. De regreso, tiene parada
en las Termas de Caracalla.
• Desde S. Juan de Letrán
Salida de roma piazza di san giovanni in laterano , 1
Ir a la parada P.ZA S. GIOVANNI IN LATERANO (H)
Coger la línea 218 (ARDEATINA/SCUOLA PADRE FORMATO) para 10 paradas o 218 (ZANETTA) 218 ogni 15 min.
Bajar a la parada FOSSE ARDEATINE
I.E.S. RAMÓN OLLEROS.
VIAJE A ROMA Pág. 23
PLAN DEL VIAJE
(El siguiente plan es totalmente orientativo)
Día 19 de abril:
Salida de la Corredera a las 04:00 de la mañana. Llegada a Barajas.
Facturación para el vuelo IB-3230 con salida a las 08:55 horas. Llegada a Roma a las 11:25. Traslado
al hotel. Comida en la zona del hotel o en el Coliseo.
Desplazamiento en metro hasta el Coliseo (Línea B)
16:55: Visita al Coliseo (entrada gratuita).
Visita al foro republicano (entrada gratuita). Plaza del Campidoglio; Foros imperiales. Columna de
Trajano. Cena. Fontana di Trevi.
Regreso al hotel en metro.
Día 20 abril, sábado.
Desplazamiento en metro hasta Museos Vaticanos. (Línea B + A)
Visita a los Museos Vaticanos. Basílica San Pedro.
Subida cúpula opcional (7€ con ascensor (320 escalones); 5€ sin ascensor (550 escalones).
Comida.
Recorrido por el centro de Roma: Castillo de Sant’Angelo, Navona, Panteón, Area Sacra, Campo di
Ffiori, Il Gesú.
Cena.
Regreso al hotel en metro.
Día 21 abril, domingo (día abono transporte)
Desplazamiento en metro hasta “San Giovanni”. (Línea B)
Desplazamiento en autobús 218 hasta San Calixto.
Vista a Catacumbas de San Calixto. (Entrada 5€). Vía Apia.
Comida.
Visita Termas de Caracalla. (Entrada gratuita)
Visita de San Juan de Letrán.
Desplazamiento en metro hasta la Piazza del Populo. Plaza de España. Cena (en metro)
Regreso al hotel en metro.
Día 22 abril, lunes
Desplazamiento en metro hasta “Termini”.
Santa María la Mayor, S. Pietro in Vincoli (Moises, de M. Ángel); Circo Máximo. S. María in Cosmedin.
(Bocca Verità). Foro Boario. Isla Tiberina. Trastevere. S. Cecilia, S. María in Trastevere, Teatro
Marcelo…
Día 23 abril, martes
Mañana libre. (Compras).
Recogida en el Hotel a las 16:20. Traslado al aeropuerto. Facturación para el vuelo IB-3237 con salida
a las 19:20 horas. Llegada a Madrid a las 21:45. Traslado a Béjar. Llegada a la una de la madrugada
aproximadamente.
I.E.S. RAMÓN OLLEROS.
VIAJE A ROMA Pág. 24
HOTEL SAN GIUSTO ***
Piazza Bologna, 58
Tfno. +39 06-44244598
www.hotelsangiustoroma.com
RISTORANTE-PIZZERIA “IL GRILLO BRILLO”
Via dei Serpenti, 79
Tfno. +39 06-4883029
http://www.ilgrillobrillo.it/
I.E.S. RAMÓN OLLEROS
VIAJE DE FIN DE ESTUDIOS
CURSO 2012-2013
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