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10 FORMAS EFECTIVAS DE
PREPARAR ACTIVIDADES EN LA
IGLESIA.
Pastor Abraham Luciano
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10 Formas Efectivas de Preparar
Actividades en la Iglesia.
1- Lo primero es ver las intenciones y el propósito.
Para descubrir las intenciones nos debemos preguntar:
A. ¿Por qué quiero hacer la actividad?
B. ¿Por qué creo que es necesario?
El propósito de la actividad es una meta definida, la cual queremos
alcanzar.
Una actividad con metas, hace posible que podamos identificar algún
tipo de logro. Los resultados pueden ser esperados, si trabajamos por
ellos.
2- Las intenciones deben ser clara para que podamos tener
colaboradores que nos ayuden alcanzar el propósito.
La Biblia habla de un personaje llamado Hanun el Rey de los amonitas.
David decide tener misericordia de Hanun, y fue a consolarle, pero sus
intenciones fueron mal interpretadas y avergonzó a los que David envió
para consolarle.
Este rey no sabía que la intención de David era buena. David había dicho:
Manifestaré misericordia con Hanún hijo de Nahas. 1 Crónicas 19:2
Los años crean en nosotros un tipo de desconfianza en la gente, por las
múltiples experiencia desagradable. Es por eso que al tratar de hacer
nuestras actividades, deben ser conocidas nuestras intenciones para que
la gente se convierta en colaboradores y no en obstáculos o crítico de lo
que hacemos.
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3- En las actividades estamos trabajando para Dios, pero la aprobación
del pastor es muy importante.
No se puede pasar por alto al pastor en cada actividad que se haga. El
pastor es el que meno emocionado debe estar del asunto, porque ningún
pastor debe moverse por emoción, el discierne y ve el beneficio de la
actividad.
Hay que entender que el beneficio de la actividad puede ser material o
espiritual.
Aún dentro del programa, el pastor no debe ser tenido en poco, más
cuando hay visitas que no saben quién es el pastor, porque pueden salir
hablando de que al pastor no lo tomaron en cuenta.
No espere que el pastor apruebe toda las cosas, esto no es sano, espere
un no del Pastor. Lo más recomendable es que usted ore a Dios, para que
se haga la voluntad de Dios.
Tampoco sería bueno, tratar de manipular al pastor para que se haga
algo, si usted cree que usted tiene la razón, deje el asunto como una
sugerencia.
No es saludable que un pastor este haciendo todo lo que se le dice, él
debe consultar con Dios o considerar el asunto a la luz de Palabra. Aarón
peco en su liderazgo, cuando hizo lo que el pueblo dijo, sin ver la realidad
del mal que estaban haciendo.
Éxodo 32:1 dice: Viendo el pueblo que Moisés tardaba en descender del
monte, se acercaron entonces a Aarón, y le dijeron: Levántate, haznos
dioses que vayan delante de nosotros; porque a este Moisés, el varón
que nos sacó de la tierra de Egipto, no sabemos qué le haya acontecido.
En la palabra no encontramos la palabra co-pastor, pero podemos ver a
Aarón como tal. El pueblo le dijo: Levántate, haznos dioses....
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El pueblo puede tener buenas sugerencias, pero también pueden ser
dañinas. Usted no hace las cosas porque el pastor no la hace, se hacen
para ayudar al pastor, no como un modo de remplazarlo.
La mejor forma de hacer una actividad que Dios apruebes es en unidad
a lo que el pastor enseña y es parte de la visión.
En el caso de Moisés, él estaba en la presencia de Dios para ser instruido,
a veces los pastores llegamos a desanimarnos y abandonar el asunto sin
irnos de la Iglesia. Es por eso que el liderazgo que lo rodea debe
convertirse en una motivación, que el pastor entienda que vale la pena
seguir. Lo triste es cuando lo único que se oye en murmuración:
...porque a este Moisés, el varón que nos sacó de la tierra de Egipto, no
sabemos qué le haya acontecido. Éxodo 32:1
Mire esta expresión: ... porque a este Moisés...
Es cierto que usted hará lo que su pastor no puede hacer, la dinámica de
grupo consiste en que cada uno utilice su don para el beneficio de la
congregación. Pero esto no significa que usted no necesita que el pastor
bendiga lo que usted está haciendo.
Usted siéntase un colaborador, en poder ser parte de lo que Dios está
haciendo para bendecir la congregación.
4-En todo lo que Dios nos permita hacer, que podamos decir: ¡El logro
de todo! ¡Para la gloria de Dios!
Una de las cosas que Dios me ha enseñado es la importancia de la ayuda
de los demás. Una persona puede liderar un proyecto, pero sin la ayuda
de los demás el asunto no marchara en victoria. No podemos decir que
no necesitamos a nadie, porque esto habla de que somos muy orgulloso.
No se trata de hacerse dependiente de los hombres, es más bien dejar
que Dios nos ayude por medio de otros que son sus instrumentos.
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La unidad de todos los que estamos envueltos en un proyecto le dará la
gloria a Dios y nos puede hacer llegar un poco más lejos. Algo que es
normal en el ser humano, es que fácilmente nos gloriarnos de ciertos
logros donde las personas han puesto sus ojos en nosotros.
El líder que trabaja en unidad, siempre será reconocido, porque él es que
lidera el asunto. Es por eso que no está demás que como quiera
involucremos a los demás en lo que hacemos para la gloria de Dios.
En un libro llamado: Una puerta llamada divorcio. Se enseña que la
unidad en el matrimonio, es lo que hace el matrimonio. El escritor dice:
Sin unidad no existe matrimonio. Sin unidad existen dos personas juntas,
pero no es un matrimonio al estilo divino.
Tomando esa idea, quiero decirle que podemos ser personas que
estamos cercas pero no unida. La unidad es más que estar junto, es
acción mutua en cada proyecto y metas que queremos alcanzar.
Estemos dispuesto a usar el talento de los demás aunque ellos se vean
brillando más que uno. Seamos como el compositor de una hermosa
canción que nadie conoce su nombre, pero si aplauden el que la canta.
Dios reconoce lo que hacemos, aunque nadie lo haga. Dios sabe que esa
canción la puso en ti, aunque otro la cante y sea admirado.
Lo importante es que podamos ser parte del plan de Dios en su obra.
5- Evite hacer las cosas de forma competitiva, no hay que demostrar lo
bueno que somos en lo que hacemos, sólo busque que Dios se agradé
de lo que hacemos.
Dios nos enseña en Filipenses 2.3–4 lo siguiente:
3Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad,
estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo; 4no
mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada cual también por lo de
los otros.
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Donde hay competencia, hay un interés de alimentar nuestro orgullo, y
pensamos que somos superiores que los demás. El que compite busca
demostrar sus habilidades para ser reconocido al final, pero lo
importante no es el reconocimiento, sino que se pueda hacer lo que Dios
espera de nosotros.
6- Aunque todos debieran unirse, no espere que eso sea así, solo siga
con los que están disponibles.
Hay razones justificable por la cual alguien no pueda unirse al proyecto,
como también hay excusa para no hacerlo. Lo mejor que podemos hacer
no es discernir las razones porque es posible que lleguemos asumir algo
que no es.
Hay que aprovechar a los que están dispuestos, porque son los que
puede dar marcha a la actividad, es posible que algunos que no estaban
dispuesto, al ver la marcha de los demás se animen a participar.
No pretendamos saber la razón del porque alguien no se involucra, deje
que Dios trate con ellos porque Dios es el que conoce la verdadera razón
o excusa que ellos tienen.
Tome la iniciativa y prepárese para caminar con los que están dispuesto.
7- No sea perfeccionista, y no se frustré por los fallos y las cosas que no
saldrán tal y como fue planificada.
En la filmación de una película se puede quitar los errores, y cientos de
cosas que no queremos que salga al público, pero cuando se trata de
nuestras actividades de la iglesia, recuerde que las cosas se hacen en vivo
y a todo color. Los errores humanos se pueden tratar de evitar con una
buena planificación y ensayo, pero aun así, suelen salir de una forma u
otra.
Se puede ser excelente, pero no buscar que las cosas salgan perfecta,
hasta el mejor artista, después de meses de ensayo se ha caído en la
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plataforma y han seguido sin mostrar su frustración. Sólo mejoremos lo
que no quedo bien para una próxima oportunidad, y hagamos énfasis en
lo que logramos con éxito.
8- Dentro de todas nuestras planificaciones, es importante que
hagamos un presupuesto del costo y luego ver como poder cubrir los
gastos.
El punto económico es importante en las actividades. Esto puede verse
en una actividad como la oportunidad de poder dar para la obra de Dios.
Hechos 20: 35 dice:
...Más bienaventurado es dar que recibir.
Tenemos que entender la revelación de dar, para poder estar consciente
de la bendición que es poder hacerlo.
En las actividades cuando se necesite finanza para poder hacer las
actividades sin tocar los fondos de la iglesia, debemos tener en cuenta lo
siguiente:
A. Habrá quienes se ofrecerán para dar sin ningún problema, pero
habrá personas que se pueden sentir mal por no poder cooperar.
B. Nadie puede ser obligado a dar, porque nadie sabe los gastos
personales de las personas.
C. Nunca pensemos que porque alguien tiene la posibilidad de dar
cierta cantidad, todos pueden hacer lo mismo.
D. El que no puede dar porque no tiene trabajo, o cualquier
compromiso. Puede participar en otras cosas.
E. Que la falta de dinero no sea la que traiga tensión, el que no tiene
puede participar de otra manera. Además se puede hacer los
proyectos con más anticipación.
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9-Planifiquemos con tiempo nuestras actividades, y en el momento de
empezar estaremos preparados.
Siempre he dicho que la improvisación es sólo buena en tiempo de
emergencia, y aun así puede resultar en añadir más mal que bien.
o
o
o
o
o
o
Se puede hacer un análisis de todo lo que necesitamos para ese día.
Que decir.
Que predicar.
Quien prédica y hasta un predicador de emergencia, por sí falla el que
se invitó.
Adiestramiento de los diáconos.
Cualquier actividad pro-templo, Etc.
10- Debemos entender que todo lo que es de edificación para la
congregación, es lo que el enemigo tratara de que no se haga.
Esto quiere decir que tenemos que estar listo para el conflicto, los
obstáculos, y hasta cierto desánimo y poca participación. Detrás de todo
esto puede estar un ataque del enemigo para que no hagamos la
voluntad de Dios.
En Nehemías 4.1 dice:
1Cuando oyó Sanbalat que nosotros edificábamos el muro, se enojó y se
enfureció en gran manera, e hizo escarnio de los judíos.
Hay actividades que han terminado en:
A.
B.
C.
D.
Disgustos.
Pelea entre hermanos.
Confusión.
Pensamientos que no son en contra del que organizo la actividad.
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El enemigo para tratar de impedir lo que él sabe que será de edificación,
puede hacernos creer que no es la voluntad de Dios. El primer que
sentirá los ataques es el que está organizando la actividad, que se puede
centrar en una sola persona que no está de acuerdo, teniendo 20 que
están dispuesto a cooperar.
Es por eso que es necesario que se oré por las actividades, para que Dios
nos de la victoria. Estos puntos son una preparación pero la victoria viene
de Dios.
Esto lo aprendí de Proverbios 21:31que dice: El caballo se alista para el
día de la batalla; Mas Jehová es el que da la victoria.
Nunca menosprecie una preparación, es importante. Pero parte de tu
preparación se fortalece en la oración. Debemos orar que Dios nos de
victoria en nuestras actividades y que todo plan del enemigo sea
cancelado y que los propósitos de Dios prosperen.
Nehemías es un gran ejemplo de cómo trabajar bajo presión y ataque.
Nunca piense que todo será fácil, lo que es y será de bendición es muy
atacado por el enemigo.
Hagamos una observación de la oración de Nehemías:
Nehemías 1:11
11 Te ruego, oh Jehová, esté ahora atento tu oído a la oración de tu
siervo, y a la oración de tus siervos, quienes desean reverenciar tu
nombre; concede ahora buen éxito a tu siervo, y dale gracia delante de
aquel varón. Porque yo servía de copero al rey.
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Como orar por nuestra actividad:
A. No valla a Dios con exigencia, recuerde que Él es Dios y usted su
siervo.
B. No oré usted solo por la actividad, que otros puedan hacerlo
también. Hasta un ayuno no estaría demás.
C. Preséntale al Señor cuáles son tus deseos, asegurase que su deseo
sea reverenciar y glorificar a Dios en lo que va hacer.
D. Pida por el éxito de la actividad.
E. Pida por la gracia de Dios para la actividad.
Oremos seriamente por el ánimo del pueblo para trabajar para Dios.
Donde el enemigo tiene más efectividad para paralizar y hacer fracasar
una actividad es atacando el ánimo de los hermanos. En Nehemias 4:6
vemos que el pueblo se animó y llego hasta cierto punto de la obra de
edificación. El ánimo es muy importante, mover a un pueblo
desanimado, es como tratar de hacer que un pez nade en lo seco.
Nehemias 4:6 dice: Edificamos, pues, el muro, y toda la muralla fue
terminada hasta la mitad de su altura, porque el pueblo tuvo ánimo para
trabajar.
Mi oración es que en cada actividad Dios nos de éxito y con ánimo pronto
trabajemos para Dios.
1º Crónicas 22.13 Entonces serás prosperado, si cuidares de poner por
obra los estatutos y decretos que Jehová mandó a Moisés para Israel.
Esfuérzate, pues, y cobra ánimo; no temas, ni desmayes.
Deuteronomio 31.6
6Esforzaos y cobrad ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos, porque
Jehová tu Dios es el que va contigo; no te dejará, ni te desamparará.
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