Módulo de capacitación en violencia de género para

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Módulo de capacitación en violencia de género para promotores y promotoras
comunitarios que trabajan con mujeres y hombres jóvenes de
pueblos indígenas y rurales
Agosto de 2008
Coordinación de contenido: María Elena Collado Miranda
Texto: Guadalupe Huacuz Elías y María Elena Collado Miranda
Fotos de portada: © Sean Sprague/Panos Pictures (muchacha con vestido blanco), © Richard Lord/2006
(rostro de muchacha), David and Lucile Packard Foundation (pareja, foto editada), Alina Barojas (cuatro
jóvenes)
Fotos de interiores: Ipas México
Las fotografías utilizadas en esta publicación son para fines ilustrativos solamente. No implican actitudes, comportamientos o acciones específicas por parte de los sujetos.
Cuidado editorial: Mónica Maorenzic Benedito
Diseño y producción editorial: Alina Barojas Beltrán
Género o sexo: ¿a quién le importa? Módulo de capacitación en violencia de género para promotores y
promotoras comunitarios que trabajan con mujeres y hombres jóvenes de pueblos indígenas y rurales
© 2008 Ipas México, A.C.
Concepción Beistegui 106, Col. Del Valle, 03100, México, D.F.
isbn: 978-970-96057-0-9
1ª edición, 2008
Impreso en México
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género o sexo ¿a quién le importa?
Índice
Agradecimientos
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Prefacio
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Sección I: Introducción al taller
¿A quién va dirigido este manual?
¿Cómo está organizado el manual?
¿Por qué es importante contar con este manual?
¿En qué supuestos se basa el contenido del manual?
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Sección II: Material de apoyo para la preparación y planificación
¿Cuánto tiempo se requiere para la aplicación del manual?
¿Qué experiencia necesitan las/los facilitadores?
¿Qué deben saber las/los facilitadores antes de aplicar el manual?
¿Cuáles son las posibles dificultades que podemos encontrar y cómo podemos resolverlas?
¿Qué materiales se necesitan para los talleres?
¿Qué hacer después del taller?
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15
16
16
18
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Sección III: Los ejercicios del módulo educativo
Guía para aplicar el taller
Para comenzar: Introducción al taller
A. Definición de sexo y género
B. Aplicando el concepto de género al tema de violencia
C. Aprendiendo los conceptos básicos de la violencia de género
Ejercicios para facilitadores
Para terminar: evaluación y cierrre
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28
39
48
74
80
Sección IV: Ejercicios para facilitar el trabajo del grupo
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Sección V: Glosario de términos
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Sección VI: Bibliografía que puede ser utilizada por las y los facilitadores
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3
sección i
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género o sexo ¿a quién le importa?
Agradecimientos
El presente manual ha sido enriquecido con las aportaciones valiosas de muchas personas.
Agradecemos profundamente a Gillian Fawcett García, Leticia Cuevas, María de la Luz Estrada, Susana
García y Eugenia López Uribe por el apoyo y seguimiento minucioso que dieron a los contenidos. Igualmente, agradecemos a María de Bruyn, coautora del manual Género o sexo: ¿a quién le importa? Módulo de
capacitación en género y salud reproductiva dirigido a adolescentes y personas que trabajan con jóvenes
con énfasis en violencia VIH/ITS, embarazo no deseado y aborto en condiciones de riesgo, por la revisión
de este texto.
También queremos dar las gracias a las y los líderes que participaron en las pruebas piloto del manual, sus
comentarios le dieron a éste claridad y enriquecieron la propuesta; entre ellos/as se encuentran:
Ada Luz Vázquez González, Alejandra Arely Gómez García, Antonio Bautista Ayala, Argentina Ramírez
Torres, Arlet Velásquez Cruz, Blanca Luz Álvarez Hernández, Consuelo Ruiz Vázquez, Candelario de Jesús
Cortazar de la Cruz, Danny Saldaña, Dolores Anel González Bautista, Elsy del Carmen Torres, Emperatriz
López Aquino, Flora Gutiérrez Gutiérrez, Gabriel Pura Ozuna, Guadalupe Martínez Solís, Heidi Daniela
Martínez Solís, Hilda Karina Coutiño Penagos, Honorio Vásquez Martínez, Irasema Zaragoza Canales, Irene
Ruiz Bautista, Janet Margarita Jiménez Domínguez, José Antonio Martínez Mata, José del Carmen Ramos
Samudio, Juan Pablo Trujillo Martínez, Juana Cruz Jiménez, Lidia Guzmán Hernández, Liliana Espinosa
Aguilar, Lorena Jiménez Aguilar, Luz Elena Flores Ruiz, María Collazo Collazo, Maribel Martínez Sebastián,
Maricruz Monjarás Solís, Marlene López, Marleni de Jesús Díaz Ramírez, Minerva Santamaría Hernández,
Nancy Zárate Castillo, Omaira Ochoa Mercado, Patricia Stephany López Martínez, Petronila Pérez Díaz,
Piedad Santiago Gallegos, Reyna Jiménez López, Rosalinda Yeep Somellera, Roselia Gutiérrez Luis, Sofía
Robles Hernández. Finalmente, agradecemos también a Raquel Alva y a Rocío Irene Mejía García, por
haber colaborado con las últimas revisiones del manual.
A todas y todos nuestro más sincero reconocimiento y agradecimiento.
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sección i
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género o sexo ¿a quién le importa?
Prefacio
Este manual de capacitación en violencia de género para promotores comunitarios que trabajan con mujeres y hombres jóvenes de pueblos indígenas y rurales surge en el marco de un proyecto financiado por
la Comisión Europea y dirigido a promover la igualdad de género en las actitudes y conductas de niñas y
niños adolescentes, para disminuir la violencia contra niñas y mujeres de comunidades indígenas y rurales
en Chiapas, Oaxaca y Tabasco. Se trata de un proyecto que se desarrollará por un período de tres años —iniciando en 2007— y de manera coordinada entre cuatro organizaciones de la sociedad civil: Católicas por el
Derecho a Decidir, A.C.; Equidad de Género, Ciudadanía, Trabajo y Familia, A.C.; Grupo de Información en
Reproducción Elegida, A.C.; e Ipas México, A.C.
Estas organizaciones, con amplia trayectoria en el campo de la defensa de los derechos de las mujeres en
México, reconociendo que la violencia contra las mujeres es un problema grave que afecta el desarrollo de
las personas, las comunidades y la nación entera, han diseñado un proceso que parte desde la base comunitaria para promover habilidades para la vida que ayuden a niñas y niños adolescentes, en particular de áreas
indígenas y rurales. De esta forma se pretende contribuir a prevenir la violencia en los distintos aspectos de
su vida; a confrontar situaciones violentas de manera tal que puedan reducir sus consecuencias; y a crear
redes de apoyo con personas de su edad para abordar dicho tema con autoridades locales y promover así
una respuesta comunitaria a la violencia contra mujeres y niñas.
Como parte de dicho proceso se desarrolló esta herramienta de capacitación que por su enfoque resulta
indispensable y que ayudará a las y los promotores rurales e indígenas a discutir —desde su contexto sociocultural— el tema de la igualdad de género y de la no violencia contra niñas y mujeres.
Cabe mencionar que gran parte de este manual ha sido adaptado de la publicación Género o sexo: ¿a quién
le importa? Módulo de capacitación en género y salud reproductiva dirigido a adolescentes y personas
que trabajan con jóvenes con énfasis en violencia VIH/ITS, embarazo no deseado y aborto en condiciones
de riesgo, de María de Bruyn y Nadine France, publicado en el 2002 (Ipas y Health & Development Network,
Chapel Hill, NC, EUA).
Disponer de ese material facilitó que ahora se cuente con metodologías asertivas, útiles y pertinentes que se
utilizarán en procesos de capacitación, con el objetivo de promover la igualdad de género en las actitudes y
conductas de niños y niñas adolescentes para disminuir la violencia contra niñas y mujeres de comunidades
indígenas y rurales.
En los procesos de capacitación participarán jóvenes promotores y promotoras de 27 municipios de tres
estados de la República mexicana:
1. Chiapas: Cintalapa, Comitán, Las Margaritas, Reforma, San Cristóbal de las Casas, Soyaló, Suchiapa,
Tecpatán, Tuxtla Gutiérrez, Venustiano Carranza y Villa Las Rosas;
7
sección i
2. Oaxaca: San Pedro y San Pablo Ayutla, Guelatao de Juárez, San Juan Cotzocon, San Francisco Lachigoló,
San Juan Guelavía, Santa María Tlahuitoltepec, Santa María Alotepec, San Mateo del Mar y Teotitlán
del Valle;
3. Tabasco: Cárdenas, Comalcalco, Cunduacan, Huimanguillo, Macuspana, Paraíso y Tenosique.
Se desarrolló este material con la expectativa de que el proceso de capacitación permitirá elevar en adolescentes y jóvenes rurales e indígenas el nivel de conciencia y conocimientos sobre la igualdad de género en
lo tocante a la violencia contra niñas y mujeres, y que además impulsará el surgimiento y fortalecimiento
de líderes jóvenes que, en colaboración con instituciones, organizaciones y autoridades, promoverán en sus
comunidades iniciativas para la prevención de la violencia.
Confiamos en que este manual será de gran utilidad para trabajar el tema de violencia de género en comunidades indígenas y rurales y que contribuirá a que las comunidades y sus miembros se movilicen para
controlar y prevenir la violencia contra niñas y mujeres.
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género o sexo ¿a quién le importa?
Sección i
Introducción al taller
¿A quién va dirigido este manual?
El manual que presentamos a continuación está dirigido a promotoras y promotores que trabajan con población joven de los pueblos indígenas y rurales de México.
También puede ser utilizado por profesionales de instituciones y organizaciones sociales (personal de ong),
docentes, parteras y otras/os prestadoras/es de servicios comunitarios que promuevan el bienestar de la gente
joven, en temas asociados con la equidad de género y contra la violencia de género en sus modalidades
de violencia familiar1 y/o por la pareja íntima.
El objetivo general de este documento es proporcionar estrategias de trabajo grupal para analizar los mecanismos mediante los cuales la cultura de género promueve y refuerza la violencia contra las personas más
vulnerables de nuestra localidad y familia; de manera especial analizamos la violencia contra las mujeres.
Enfatizamos las consecuencias que la violencia de género tiene sobre las personas que la sufren y los mecanismos para enfrentarla.
La violencia de género es un problema que afecta a todas las personas, independientemente de su clase social,
edad, origen étnico u orientación sexual. Sin embargo, sabemos que las relaciones de maltrato-cuidado
que vive la gente joven de comunidades rurales e indígenas tienen sus propias dinámicas; por ello quisimos
diseñar un material especial para quienes poseen una cosmovisión que integra la experiencia de nuestras y
nuestros antepasados, tradiciones, mitos y leyendas de nuestros pueblos.
Sabemos que algunas de estas costumbres ancestrales están basadas en actos relacionados con la violencia
y el maltrato a las personas indígenas; sin embargo, consideramos que como gente joven estamos en proceso de modificar aquellas tradiciones, mitos y costumbres que dañen nuestra salud y que violen nuestros
derechos como humanas y humanos.
NECESIDADES BÁSICAS DE LAS MUJERES INDÍGENAS DE ATENCIÓN A LA VIOLENCIA
Durante una consulta a pueblos indígenas sobre sus formas y aspiraciones de desarrollo (2003-2004),
las mujeres de los 59 pueblos indígenas que participaron en el evento señalaron algunas necesidades
básicas de atención a la violencia de género que sufren en sus comunidades:
• Crear una fiscalía especial para atender programas de violencia física y psicológica.
• Construir albergues o centros de recuperación para las víctimas de violencia.
• Crear programas especiales de procuración de justicia donde participen mujeres traductoras.
• Crear programas para prevenir y evitar el maltrato y la violencia física y psicológica.
• Crear en las comunidades instancias de apoyo para la defensa de los derechos de la mujer.
• Establecer una tribuna judicial para atender problemas específicos de la mujer indígena.
(Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, 2004: 51-53)
1
También se denomina violencia doméstica, pero para este documento utilizaremos el término violencia familiar por ser el término
que se utiliza legalmente y porque el entorno en el cual se puede ejercer la violencia hacia algún miembro de la familia trasciende el
espacio doméstico.
9
sección i
¿Cómo está organizado el manual?
Este documento de capacitación incluye tres materiales didácticos: el manual, una serie de tarjetas para
uso de las y los facilitadores y las hojas de apoyo para entregar a las y los participantes y desarrollar las
actividades.
El manual contiene las siguientes secciones:
Sección i:
Introducción al taller.
Sección ii:
Material de apoyo para la preparación y planificación.
Sección iii: Ejercicios del módulo educativo que cuentan con instrucciones de desarrollo, hojas de
apoyo teórico y cierre.
Sección iv: Ejercicios opcionales para disminuir la tensión en el grupo.
Sección v: Glosario de términos para las y los facilitadores, palabras que, a lo largo del documento,
aparecen en negritas.
Sección vi: Bibliografía que puede ser utilizada por las y los facilitadores.
Como facilitador/a del taller puedes usar —a manera de guías rápidas— las tarjetas diseñadas para cada sesión. Las tarjetas incluyen ejemplos de respuestas para los diferentes ejercicios. Las hojas de apoyo también
pueden ser fotocopiadas y entregadas a los participantes para facilitar la compresión de los temas y para
apoyar el desarrollo de los ejercicios.
¿Por qué es importante contar con este manual?
Lamentablemente, como analizaremos en este manual, la gente joven de comunidades rurales e indígenas
vive en ambientes de violencia de género y/o familiar. Las relaciones basadas en la violencia son aprendidas
desde niños/as y continúan cuando establecemos relaciones afectivas violentas con nuestras parejas (violencia
durante el noviazgo).
En México, la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares, 2006, realizada entre
mujeres de 15 o más años con pareja residente en el hogar, reportó que:
• Siete de cada diez mujeres sufrió al menos un incidente de violencia por parte de su pareja en los
últimos 12 meses, lo cual equivale al 67% de las mujeres encuestadas.
• 37.5% vivió situaciones de violencia emocional que afectaron su salud mental y psicológica.
• 10.2% de las mujeres sufrieron algún tipo de violencia física que les provocó daños permanentes o
temporales.
• 9% de las mujeres declaró haber sufrido violencia sexual, a través de acciones como la intimidación o
dominación para tener relaciones sexuales sin su consentimiento.
• 23.4% ha vivido violencia económica (que su pareja o alguien cercano le haya limitado el acceso al
dinero, cuestionado sobre la forma en que lo gasta y que haya ejercido control sobre sus ingresos).
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género o sexo ¿a quién le importa?
En el ámbito estatal, las mujeres de 15 años y más:
• Vivieron algún tipo de violencia comunitaria (intimidación y abuso sexual) en mayor proporción en
Tabasco (32%) que en Oaxaca (24%) y en Chiapas (18%).
• Experimentaron violencia en el contexto familiar en mayor medida en Tabasco (18%) que en Oaxaca
(16%) y en Chiapas (11%).
La Encuesta Nacional sobre Violencia contra las Mujeres (2003) realizada en los Servicios de Salud de Instituciones del Sector Público del primer y segundo nivel mostró que:
• 34.5% de las mujeres entrevistadas reportó algún tipo de violencia por parte de alguna pareja.
• 21.5% han sufrido violencia con su pareja actual; 27.5% de las mujeres encuestadas en Oaxaca, 20.5%
en Chiapas y 13.9% en Tabasco.
Prevalencia de violencia por parte de la última pareja, por Estado
30
25
20
Violencia psicológica
Violencia física
15
Violencia sexual
Violencia económica
10
5
0
Chiapas
Oaxaca
Tabasco
Promedio nacional
• Respecto a la violencia de género, en 2004 se registraron más de mil cuatrocientos homicidios de niñas
y mujeres en México, es decir que cada día fueron asesinadas cuatro niñas o mujeres. De acuerdo con
cifras oficiales, las entidades con mayor índice de asesinadas son: Chihuahua, Nayarit, Oaxaca, Guerrero,
Veracruz, Estado de México y Distrito Federal.
Especialistas han señalado que las mujeres víctimas de violencia de género experimentan además daños
emocionales que pueden perdurar toda la vida, la violencia física, psicológica y/o sexual suele vivenciarse
en forma traumática.
11
sección i
Por eso cada una de las actividades de este manual tiene como objetivo ayudar a la gente joven a desarrollar aptitudes personales de responsabilidad y respeto frente a su grupo de pares, familiares y demás integrantes de la comunidad (sobre todo hacia las mujeres). Cada una de las actividades a realizar
promueve la equidad de género y la resolución pacífica de conflictos, como parte fundamental del
bienestar y la salud de los pueblos indígenas y comunidades rurales.
En las sesiones del manual se promueven actitudes para que la población joven ponga en práctica
habilidades que le ayuden a identificar situaciones y factores que puedan incrementar o disminuir los riesgos
de violencia de género, y a exigir —a quienes corresponda— la información y los servicios que necesitan.
Este manual también constituye un primer paso para empoderar a la población juvenil frente a desigualdades
de género, generación, orientación sexual,2 situación de pobreza y/o pertenencia a un pueblo indígena.
Como veremos, este documento les alerta a tomar conciencia de que ninguna persona debería ser víctima
de violencia de género en cualquiera de sus manifestaciones (psicológica, económica, física y sexual), ya que
constituye una violación a los derechos humanos, por ello enfatizamos la denuncia informada como principal
herramienta para la erradicación de la misma.
Sobre el método didáctico, los ejercicios participativos que contiene este manual se presentan mediante
una modalidad gradual y sucesiva que es una parte integral del abordaje del tema, tanto con respecto a la
metodología como al contenido:
• Primero, se introducen los conceptos de sexo y género para que las y los participantes comprendan
las diferencias entre ambos. La categoría de género revela las relaciones de poder entre hombres y
mujeres.
• Luego, las y los participantes tienen la oportunidad de reflexionar sobre cómo el concepto de género
influye en sus propias vidas y en la sociedad en general.
• En un tercer momento, las y los participantes analizan algunas maneras en que se transmite y aprende
el género y cuáles son las consecuencias de esto en relación con la violencia.
• En el último grupo de ejercicios se presentan los efectos de la violencia de género (familiar, de pareja
y durante el noviazgo) y los problemas asociados con la salud de quienes la viven.
• Finalmente, se exploran los mecanismos y recursos mediante los cuales cada participante puede
desarticular y enfrentar los actos de poder y violencia en su familia y comunidad de origen.
La modalidad de aprendizaje progresivo tiene valor en virtud de que recoge experiencias previas, construye
nuevos conocimientos o refuerza aquellos ya existentes, siempre con la participación activa del grupo. Además, ofrece herramientas prácticas que permiten a las y los participantes aplicar —en su vida cotidiana, en
su escuela y en sus localidades de origen— lo aprendido.
Las actividades pretenden impactar en los cambios de actitudes y comportamientos de quienes participan.
Las sesiones propuestas en este manual brindan a las y los participantes jóvenes una oportunidad para observar sus propias actitudes y revisar algunas barreras que a veces impiden cuestionar los estereotipos de
género. De la misma manera, les proporciona herramientas para estudiar los mecanismos de poder al interior
de sus comunidades y ambientes familiares.
2
Existe un debate no resuelto entre los términos “orientación” y “preferencia” sexual, pues el primero indica que existe
potencialidad del sujeto para establecerse en cualquier punto de la continuidad entre la heterosexualidad y la homosexualidad y por ello se orienta hacia uno u otro. Mientras que quienes sustentan el segundo término (preferencia) agregan la voluntad política del sujeto de nombrarse como heterosexual u homosexual. En este manual optamos por utilizar el primer término.
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género o sexo ¿a quién le importa?
¿En qué supuestos se basa el contenido del manual?
Cada uno de los objetivos y actividades del manual se basa en varios supuestos básicos:
• Las normas comunitarias y familiares que fomentan y consienten los estereotipos de género pueden
incrementar los riesgos de violencia de género y/o violencia familiar; por lo tanto, las y los jóvenes
requieren tener la capacidad para cuestionar esas normas y costumbres ancestrales en sus pueblos
indígenas y comunidades, cuando hacen daño.
• La perspectiva de género nos permite analizar los mecanismos mediante los cuales factores como la
situación económica, la edad, la posición en la unidad doméstica, las tradiciones y costumbres, el
abuso de alcohol y drogas, la sexualidad diferente entre hombres y mujeres, refuerzan las relaciones
de poder y jerarquía al interior de la familia y la comunidad, en consecuencia, originan la violencia
hacia mujeres, población joven e infantil.
• Existen muchas definiciones de violencia; sin embargo, en este manual tomaremos la definición de la
Organización Mundial de la Salud (oms).
• Para la
oms (2002) la violencia es “el uso intencional de la fuerza o el poder físico, en forma de
amenaza o efectivamente, contra uno mismo, otra persona o un grupo o comunidad, que ocasiona o
tiene grandes probabilidades de ocasionar, lesión, muerte, daño psíquico, alteraciones del desarrollo
o privaciones”.
• La violencia de género es: “Todo acto de fuerza física o verbal, coerción o privación amenazadora para
la vida, dirigida al individuo mujer o niña, que cause daño físico o psicológico, humillación o privación
arbitraria de la libertad y que perpetúa la subordinación femenina” (Heise y cols., 1994).
• Se ha denominado violencia de género porque se deriva en gran medida del estatus subordinado que
ocupan las mujeres en diferentes sociedades. Lo que marca la diferencia con respecto a otras formas
de violencia es que el factor de riesgo o vulnerabilidad es el hecho de ser mujer.
• El concepto de violencia familiar se define en la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida
Libre de Violencia3 como “el acto abusivo de poder u omisión intencional, dirigido a dominar, someter,
controlar, o agredir de manera física, verbal, psicológica, patrimonial, económica y sexual a las
mujeres, dentro o fuera del domicilio familiar, cuyo agresor tenga o haya tenido relación de
parentesco por consanguinidad o afinidad, de matrimonio, concubinato o mantengan o hayan
mantenido una relación de hecho.”
• Las y los jóvenes necesitan saber que existe el apoyo de personas sensibles a los temas que se tratan en
este manual, quienes les brindarán soporte en las discusiones con sus padres, maestros y maestras, autoridades civiles y religiosas y otros adultos. Para estar realmente preparado para desempeñar esta función, es
importante que quienes faciliten el tema de este manual hayan experimentado las actividades
propuestas.
3 Publicada
en el Diario Oficial de la Federación el 1 de febrero de 2007.
13
sección i
Algunas modalidades de violencia de género en las comunidades rurales e indígenas de México (testimonios)
“Los problemas de la mujer indígena en las comunidades son explotación de la mano de obra (actividades de más de 8 horas), violencia intrafamiliar, abuso de poder (del hombre), no participa en
asambleas comunitarias y reuniones, no tiene ni voz ni voto en el hogar ni en las elecciones de sus
autoridades municipales, no se le permite ocupar cargos en los cabildos” (testimonio de una mujer
de Huajuapan de León, Oaxaca).
“Antes, una práctica común era el rapto de las jóvenes casaderas o ‘robo a la mala’, dicha práctica
consistía en tomar a la mujer por la fuerza con ayuda de la autoridad local. La colaboración de ésta
se conseguía después de donarle algunos litros de aguardiente. En esta práctica, los dos jóvenes
eran encerrados en la cárcel y pasaban la primera noche juntos; si la mujer no era rescatada por
sus familiares en el transcurso de la noche, a la mañana siguiente no tenía más alternativa que irse
con su captor…” (testimonio de una mujer mixteca).
“En mi comunidad veo muchas mujeres que llegan golpeadas de la cara, lastimadas, acudimos
al agente municipal, juez municipal, no hacen caso ni justicia. A la mujer la abandonan con sus
hijos, sufre de violaciones sexuales tanto en la familia como en la sociedad, ya no existe respeto”
(testimonio de una mujer de Ocosingo, Chiapas).
14
género o sexo ¿a quién le importa?
Sección ii
Material de apoyo para la preparación
y planificación
El equipo de personas que utilice este manual tendrá que comprender los mecanismos de poder que
influyen en las desigualdades de género y en las dinámicas de violencia de género. Para ello, es importante que
antes de comenzar cualquier actividad leas sobre el tema de género, sobre derechos sexuales y reproductivos
de las y los jóvenes, y sobre violencia, en todas sus manifestaciones. Lee especialmente sobre las causas y
consecuencias de la violencia de género, para que puedas responder de manera informada las preguntas de
las y los participantes y generar nuevos conocimientos en el grupo, adecuando tu saber a las costumbres de
la comunidad en la que estás trabajando.
¿Cuánto tiempo se requiere para la aplicación del manual?
Este manual está dividido en tres bloques temáticos, cada bloque tiene una serie de ejercicios y una duración
distinta. El primer bloque tiene una duración de cuatro horas, el segundo bloque es de tres horas y el tercer
bloque requiere siete horas.
El taller completo tiene una duración de 15 horas, incluyendo la parte introductoria, los tres bloques temáticos
y el cierre. Sin embargo, puede ser ejecutado modularmente, dependiendo de los tiempos y necesidades de
cada comunidad, por lo que proponemos dar prioridad a algunos de los ejercicios, con la condición de que
el mínimo de horas necesarias para aplicar el taller será de cinco horas.
Para facilitar la planeación del taller y su adaptación a las necesidades de cada grupo, en el cuadro titulado “Guía
para la aplicación del taller” (ver páginas de la 21 a la 24) hemos marcado con círculo los ejercicios básicos en caso
de que cuentes con el mínimo de horas requeridas para realizarlo (cinco). Los ejercicios marcados con un cuadrado
son los que te recomendamos aplicar para profundizar sobre los contenidos, si el tiempo te lo permite. Por último, los ejercicios marcados con un triángulo son los que puedes aplicar para reforzar la comprensión de las y los
participantes sobre cada concepto, en caso de que cuentes con el mayor número de horas para impartir
el taller.
Te recomendamos que incluyas y adaptes las sesiones de introducción y resumen independientemente del
tiempo con el que cuentes, es decir, se trata de sesiones obligatorias que tendrás que aplicar. Esas sesiones
están marcadas con un hexágono.
¿Qué experiencia necesitan las/los facilitadores?
• Es necesario que las y los facilitadores tengan experiencia previa en el trabajo con grupos o en la
conducción de talleres de capacitación.
• Es fundamental que la persona que facilite los talleres esté sensibilizada y/o tenga experiencia de trabajo en comunidades rurales e indígenas, que conozca las tradiciones de la región. Es preferible que
15
sección ii
haya trabajado con anterioridad en la zona, pues ello le permitirá ser respetuosa/o de los usos y costumbres que imperan en este tipo de localidades y favorecer el diálogo durante las sesiones.
• Es importante que las y los facilitadores pasen por la experiencia del taller previamente. De esta manera
tendrán una idea más clara de los temas que pueden sugerir durante las actividades. La experiencia
vivencial del taller les permitirá reconocer sus propios sentimientos, preconceptos y creencias en relación con el tema de género y con la violencia de género, y estar mejor preparados para apoyar a las
y los participantes.
¿Qué deben saber las/los facilitadores antes de aplicar el manual?
• Se sugiere, en la medida de lo posible, trabajar con un equipo de facilitación que incluya mujeres y
hombres jóvenes.
• Se recomienda que por lo menos dos facilitadoras/es conduzcan el taller, de modo que se puedan turnar
en la facilitación de las actividades y para tomar notas (en las discusiones grupales es necesario elaborar
notas sobre los puntos principales para retomarlos en el resumen de la sesión).
• Como parte del aprendizaje, es necesario que la/el facilitador exprese sus pensamientos y sentimientos;
hable en primera persona (yo). Por ejemplo: “yo pienso…”, “yo siento…”. Cuando hablamos sobre estos
temas es muy importante reflexionar desde lo individual, recuerda que la violencia es una experiencia
por la que pasan todas las personas y que cada una tiene una forma especial de comunicarla.
• Antes de llevar a cabo el taller, el equipo de facilitadoras/es necesita realizar una reunión en la cual
se discuta cada actividad en detalle y se decidan las adecuaciones pertinentes para el contexto local
(hacer traducción, terminología utilizada para ilustrar los puntos del resumen, las escenas del juego de
roles que incluyan aquellos factores de riesgo más importantes para la localidad, etcétera).
• La promoción anticipada del taller garantizará la asistencia del grupo, recomendamos invitar a
las sesiones de 15 a 20 personas, para que las participaciones sean variadas y originen reflexiones
sustanciosas.
• El lugar en donde se realice la reunión, así como el día y la hora tendrán que quedar bien especificados.
Trata de no cambiar, la fecha, el horario o el lugar de la sesión, pues podría provocar falta de credibilidad
en la seriedad de las pláticas.
• La modalidad progresiva de aprendizaje implica que los temas y las actividades de este manual están
organizados de tal forma que es necesario seguir el orden propuesto, a través del sistema modular en
el cual se incluyen las sesiones.
¿Cuáles son las posibles dificultades que podemos encontrar y cómo podemos
resolverlas?
Algunas personas piensan que el término género sólo es una nueva palabra para referirse a las mujeres,
mientras que otras creen que solamente es de interés para las feministas. Otras personas consideran que
las discusiones sobre género tienden a “echar la culpa a los hombres” de las desigualdades que existen entre mujeres y hombres en su familia, en la comunidad o en el mundo entero. Estas creencias equivocadas
contribuyen a generar resistencia frente a la discusión sobre el tema. Es probable que en tu comunidad tam16
género o sexo ¿a quién le importa?
bién haya quienes sostengan que “en las comunidades indígenas, los hombres dicen que a ellos estos temas
no les importan”; sin embargo es necesario saber que los hombres también padecen los efectos negativos
de la violencia y que marcarán de manera importante el desarrollo de la población joven.
Son muchas las y los jóvenes que nunca han oído hablar sobre la palabra género en este sentido. Sin embargo, pueden ser capaces de reconocer que la sociedad espera diferentes formas de comportamiento de
hombres y mujeres, sean jóvenes, adolescentes, niñas o niños. La validación de esta guía ha demostrado
que las y los participantes pueden identificar y expresar el hecho de que mujeres y hombres son tratados
de manera diferente.
Es importante que utilices la palabra género únicamente cuando las y los participantes hayan comprendido
qué implica este concepto, evitando utilizarlo al iniciar el taller.
Al realizar los ejercicios pon especial cuidado en mostrar el efecto de los factores de género tanto en las
mujeres como en los hombres. Por ejemplo, durante las discusiones grupales, da atención a los temas o problemas que afectan a las mujeres y las jóvenes, pero no olvides que los hombres adultos y jóvenes también
tienen preocupaciones relacionadas con la violencia y sus consecuencias.
Sabemos que hablar sobre los temas de género y violencia de género (y de manera especial sobre la violencia
familiar) en las comunidades rurales e indígenas es mal visto, son temas “tabú”, es decir, son vivencias de las
que casi no se habla y quienes las relatan generalmente son personas que han vivido muy cerca los hechos
y hablar sobre ello les puede afectar emocionalmente, es por eso que te recomendamos mostrar respeto,
calidez y escucharles atentamente.
La experiencia de otros talleres ha demostrado que algunas/os participantes pueden sentirse incómodas/os,
tristes e incluso presentar, durante las actividades, eventos de crisis. En estos casos se recomienda que una/o
de las/os facilitadores le invite a salir de la sesión para conversar sobre su malestar en privado, y que cuando
se “calme” se reincorpore a las discusiones del grupo. Es conveniente que estés preparada/o para manejar las
emociones que puedan surgir en las y los participantes al recordar vivencias personales que guardan relación con temas tabú o muy sensibles para ellas/os. Para evitar que las y los participantes se queden con las
emociones negativas, te sugerimos realizar una actividad de cierre de relajación y contacto corporal afectuoso.
Sabemos por experiencia que en los talleres sobre violencia de género pueden surgir algunas dificultades
para controlar las emociones derivadas de los contenidos de las sesiones, en tal caso tienes que mostrarte
segura/o en tu exposición, es importante que des confianza al grupo para que sepan que cuentan con tu
apoyo y comprensión, aun después de la sesión.
Las y los participantes pueden tener la expectativa de que el taller, por el tema, será muy serio, incluso
pueden estar renuentes a asistir a las sesiones, en tal caso te sugerimos que anuncies el taller como: “una
plática sobre salud” para ir introduciendo el tema en la comunidad.
Recuerda que la risa y el humor son componentes importantes de los talleres, haciendo que la discusión de
los temas se torne menos densa, menos amenazante y ¡que también pueda ser divertida!
Es preferible no pedir a las y los participantes que contesten preguntas o que participen en las discusiones,
a menos que lo hagan de manera voluntaria. Si una/un participante se siente incómodo y es “puesto en
evidencia”, ello limitará su participación.
La experiencia demuestra que cuando las o los facilitadores comentan algunas experiencias de otros talleres
para ilustrar los temas, las y los participantes se sienten más motivados a compartir sus observaciones y
experiencias personales. Ello demuestra que los temas de género y violencia de género y familiar afectan a
17
sección ii
todas las personas. Se puede relatar cómo se han “manipulado” los estereotipos de género para conseguir algo
que se quería (por ejemplo, mediante el chantaje de los novios para que las jóvenes no tengan amigos).
En ocasiones, cuando se trabaja en grupos pequeños con participantes de ambos sexos, puede resultar difícil
hablar con libertad. Si tienes dudas acerca de si es culturalmente apropiado realizar actividades en grupos
mixtos, puedes dividir al grupo por sexos y luego reunirlos para que compartan sus respuestas. También
puedes hacer esto en los momentos en que sientas que disminuye la participación y creas que es por estar
en presencia del otro sexo.
Recuerda además que los ejercicios quizá no tendrán la misma eficacia si en el grupo participan miembros
que ejerzan cierto poder frente a cualquiera de las o los participantes. Por ello, es muy importante que observes muy claramente las relaciones en el grupo, y que, en la medida de tus posibilidades, en los trabajos en
equipo no coincidan personas de una misma familia o que tengan relaciones de jerarquía (por edad, laboral
o escolar).
La cantidad de información acerca de temas específicos de violencia de género y familiar que las y los participantes desearán obtener puede variar de un grupo a otro; por tanto, es recomendable tener a la mano
información adicional médica y/o legal (directorios de servicios y grupos de apoyo local frente a situaciones
críticas, como en casos de violencia sexual o incesto, consumo de drogas o abuso de alcohol). Lo anterior es
particularmente importante cuando analices los temas relacionados con la violencia, en tanto que las y los
participantes podrían haber pasado por situaciones difíciles.
Si las y los participantes desean mayor información en temas particulares puedes proveerles de materiales de
apoyo como: videos, folletos, películas (que se pueden analizar en una sesión aparte), carteles, entre otros. Al
final de este documento te proporcionamos una lista de materiales de fácil acceso, realizados especialmente
para jóvenes y debidamente probados en campo.
Al concluir cada sesión será de utilidad que coloques un papelógrafo titulado “temas pendientes”, en el cual
las y los facilitadores y participantes podrán anotar aquellos temas sobre los que deseen mayor información
o discusión; esto permitirá que se incluyan ideas para las actividades de seguimiento del taller.
Durante la sesión procura no ser demasiado directiva/o o muy distante durante el trabajo en grupos
pequeños. Es ideal que en el momento inicial de la actividad permanezcas en los grupos pequeños,
escuchando y contestando preguntas y dudas. Luego puedes observar el trabajo del grupo en silencio o
dejar que éste trabaje solo, y volver a los cinco ó diez minutos para asegurarte de que las y los participantes
hayan entendido las instrucciones y de que no se estén tomado demasiado tiempo para realizar un aspecto
de la actividad.
Finalmente recuerda que las y los facilitadores no participarán en el trabajo mismo del grupo, pero podrán
dar sugerencias y hacer preguntas para la reflexión.
¿Qué materiales se necesitan para los talleres?
Esta guía ha sido diseñada de tal modo que requiere un mínimo de recursos materiales. Se espera que las
y los facilitadores puedan hacer uso de las tarjetas que contiene cada sesión para presentar las ideas clave
sobre los temas tratados y algunos aspectos del taller de forma resumida.
18
género o sexo ¿a quién le importa?
También se pueden utilizar papelógrafos para presentar los puntos más importantes. Si no dispones de
muchos papelógrafos, puedes utilizar un pizarrón u hojas blancas para realizar los ejercicios.
Para las actividades grupales los materiales didácticos básicos son:
• Marcadores y/o plumones, y lapiceros y/o
lápices.
• Hojas de papel, pequeñas y grandes.
• Hojas de apoyo, con la guía de preguntas de
los diferentes ejercicios.
Antes de iniciar el taller, te recomendamos entregar a cada participante una carpeta con las hojas de apoyo.
Algunos de los materiales que necesitas preparar con anterioridad son:
• Recortes de periódicos y revistas locales o nacionales para el análisis de la publicidad.
• Dibujos para el ejercicio “historia del ciclo
vital” y para el “árbol de problemas” (árbol
grande con largas raíces y muchas ramas y
frutos).
Si el taller está dirigido a capacitar a nuevos líderes, te sugerimos que proporciones una copia del manual
y les avises a las y los participantes (desde el inicio de las sesiones) que recibirán una copia, para que sepan
que no es necesario que tomen notas. En caso de que el taller tenga como fin sensibilizar, no es necesario
que proporciones una copia a las y los participantes.
19
sección ii
¿Qué hacer después del taller?
Es probable que las personas que hayan participado en el taller quieran darle seguimiento mediante
actividades concretas para sus comunidades o escuelas; en la etapa de conclusiones puedes recoger ideas
del grupo acerca de cómo realizar el seguimiento o también solicitarles algunas ideas en el formato de
evaluación. Aquí damos algunas sugerencias:
• Busca o diseña otras actividades que se focalicen en el tema de género y violencia y discútelas en el
grupo.
• Realiza otros talleres que analicen algunos temas con mayor profundidad o aborden temas solicitados por las y los participantes (métodos anticonceptivos, derechos sexuales y derechos reproductivos, alcoholismo y uso de drogas entre los jóvenes). Puedes recurrir a las organizaciones e
instituciones que trabajen estos temas en la zona, para que te apoyen en la realización y facilitación
de los otros talleres.
• Visita, junto con las y los jóvenes que lo requieran, las organizaciones locales que prestan servicios de
atención en los temas discutidos, para observar de cerca los apoyos que tienen disponibles y asegurarte
de que son una opción adecuada.
• Prepara un video del taller que pueda ser mostrado en las escuelas, a las/os líderes de la comunidad y a otras personas o instituciones (con prestigio en la región) que tengan posibilidades de
recomendarte o proporcionarte recursos para continuar con los talleres.
• Involucra a las y los jóvenes participantes para
que formen un grupo de consulta integrado
por quienes ya se capacitaron.
• Realiza este mismo taller algunas veces durante
el año, con otras y otros jóvenes.
• Puedes organizar discusiones grupales sobre te-
mas relacionados con la violencia de género que
preocupen a otras personas de la comunidad.
• También puedes elaborar planes de acción para
educar a otras personas de la comunidad en
los temas del manual, incluyendo a las madres
y padres de familia.
• Puedes incorporar algunos de los ejercicios del taller en otros grupos de formación.
• Analiza las campañas de información y sensibilización sobre los temas tratados en el manual que se
realizan en la/s comunidad/es en donde trabajas. Evalúa si la información proporcionada es adecuada a
las necesidades de la población joven, si es sensible al género y/o si promueve violencia de género o relaciones afectivas basadas en el maltrato. Presenta los resultados a los organizadores de los eventos.
• Promueve la colaboración entre las y los participantes de los talleres para tomar conciencia sobre la
aceptación del enfoque de género y el cuestionamiento de la violencia de género en sus discursos,
acciones y actividades.
• Promueve la difusión de los contenidos del manual en otras instituciones y organizaciones de la comunidad (escuelas, talleres artesanales, grupos de las iglesias, grupos deportivos, entre otros).
• Difunde los temas a través de las estaciones de radio comunitarias, si es necesario, en la(s) lengua(s)
originaria(s) de la región.
20
género o sexo ¿a quién le importa?
Sección III
Los ejercicios del módulo educativo
En esta parte se presenta la estructura del taller, es decir el orden en el cual debe ser llevado a la práctica. La secuencia de los ejercicios es importante si consideramos el enfoque de aprendizaje progresivo que se propone; éste permite que las y los participantes comprendan de manera gradual los conceptos, relacionen éstos con sus propias vidas y,
finalmente, los apliquen a los problemas de violencia de género y familiar.
La Guía para aplicar el taller permite tener una visión panorámica de los resultados esperados para cada actividad, la metodología usada, el tiempo mínimo necesario para realizar los ejercicios y los recursos que se requieren.
Se recomienda que uses la guía para preparar las sesiones y que tengas a la mano una fotocopia de la misma
como apoyo para todo el taller.
Las tarjetas que contiene este manual pueden ser utilizadas durante el taller para ayudar a recordar las guías
de discusión a las y los facilitadores. Éstas incluyen: título del ejercicio, objetivo, duración, materiales, descripción, desarrollo y cierre del ejercicio, en algunos casos también incluye posibles maneras de adaptarlo.
Guía para aplicar el taller
Número recomendado de participantes 15-20 personas
para comenzar
Sesión
1. Introducción
al taller
Objetivo
Método
Tiempo
Materiales necesarios
30 minutos
—Papelógrafos u
hojas de apoyo con:
-Objetivos del taller
-Reglas del taller
Comprender las diferencias 45minutos
entre sexo y género y aprender a reconocer los estereotipos de género
—Papelógrafos u
hojas de apoyo con
definiciones
relacionadas con la
orientación sexual
Discusión en sesión Conocer los objetivos del
taller y las reglas que lo
plenaria
regirán
a. definición de sexo y género
2. Género,
no sexo
Lluvia de ideas y
discusión
—Plumones y cinta
adhesiva
3. Sexo y género:
¿qué significan?
Lluvia de ideas y
discusión
Distinguir las diferencias
entre los conceptos de
“sexo” y “género”
45 minutos
—Definiciones de
sexo y género en
papelógrafo u hojas
de apoyo
—Plumones y cinta
adhesiva
ejercicios básicos
Profundizar contenidos
Reforzar la comprensión
Sesiones obligatorias
21
sección iii
a. definición de sexo y género
Método
Sesión
Objetivo
Tiempo
Materiales necesarios
4. Analizar la
música popular
y los estereotipos
de género
Lluvia de ideas y
discusión
Identificar los estereotipos
de género que se
promueven como parte de
las tradiciones culturales
60 minutos
—Papelógrafo o
grabadora con
música de moda en
la comunidad
5. Cuando era
niño/a y
adolescente
Trabajo en parejas y
compartir
experiencias con todo
el grupo
Reconocer cómo el
género ha influido en su
vida cotidiana temprana y
cómo continúa influyendo
actualmente en su manera
de pensar
60 minutos
—Grabadora con
música suave,
relajante
Exposición de quien
facilita y diálogo
grupal
Comprender la influencia
de la cultura de género para
relacionarla con el tema
de la violencia de género y
doméstica
30 minutos
Resumen a
cargo de las
personas que
coordinan el
taller
—Vela y cerillos
—Papelógrafo u hojas
de apoyo con los
puntos centrales del
resumen
B. APLICANDO EL CONCEPTO DE GÉNERO AL TEMA DE VIOLENCIA
6. Creencias y
realidades de
la violencia de
género
Reflexión y análisis
grupal
Analizar las creencias
sociales y culturales sobre
la violencia de género
90 minutos
—Hoja de apoyo y
fotocopias
—Bolígrafos y lápices
para cada
participante
—Papelógrafo y
plumones
7. Analizando
la violencia de
género en las
imágenes de
publicidad
Reflexión y análisis
grupal
Analizar de qué manera
mujeres y hombres son
representados en los medios
de comunicación y cómo
estas imágenes pueden
reforzar la violencia de
género
45 minutos
—Hojas de apoyo con
preguntas
—Recortes de
periódicos y revistas
(si es posible proyecta
un video televisivo
con comerciales)
—Papelógrafo
Resumen a
cargo de las
personas que
coordinan el
taller
Exposición de quien
facilita y diálogo
grupal
ejercicios básicos
22
género o sexo ¿a quién le importa?
Comprender por qué es
importante entender la
influencia de la cultura de
género para relacionarla
con el tema de la violencia
de género y familiar.
Profundizar contenidos
30 minutos
Reforzar la comprensión
—Plumones y hojas
de apoyo o
papelógrafo con los
puntos centrales
Sesiones obligatorias
C. APRENDIENDO LOS CONCEPTOS BÁSICOS DE LA VIOLENCIA DE GÉNERO
Sesión
8. ¿Qué es la
violencia de
género?
Objetivo
Método
Trabajo en pequeños
grupos y
presentaciones en
plenaria
Elaborar definiciones
de violencia de género
(psicológica, económica,
física y sexual) y explorar
la presencia de ésta en sus
vidas
Tiempo
Materiales necesarios
90 minutos
—Papelógrafos u
hojas de apoyo con
la información sobre
violencia de género
—Plumones y lápices
9. Historia del
ciclo vital y la
violencia de
género
Lluvia de ideas, dibujo Analizar la violencia de
género que pueden padecer
y discusión
las personas a lo largo de
su vida y los factores que
incrementan o reducen la
vulnerabilidad frente a la
violencia en contra de las y
los jóvenes
10. Revelando
la violencia
familiar
Juego de roles y
presentaciones en
plenaria
Identificar algunas de
las formas de violencia
familiar y cómo afecta a la
salud de quien la
experimenta y de quien la
ejerce
60 minutos
—Hojas de apoyo con
las preguntas
11. Árbol de
la violencia
en la pareja
Lluvia de ideas,
dibujo y
discusión
Analizar la violencia
durante el noviazgo y
en la pareja enfatizando
las consecuencias para
las personas jóvenes
y buscando posibles
soluciones
90 minutos
—Papelógrafos con
dibujo de árbol
60 minutos
—Papelógrafo u hojas
de apoyo con
preguntas
—Plumones
—Plumones
—Hojas blancas o
de color
—Cinta adhesiva
—Hojas de apoyo
con ejemplo de
respuestas
12. Estrategias
comunitarias
para abordar
la violencia de
género
Exposición de quien
facilita y diálogo
grupal
Analizar las habilidades de
intervención de las y los
participantes en
situaciones concretas de
violencia familiar o en el
noviazgo
60 minutos
—Papelógrafos u
hojas de apoyo con
información sobre la
valoración del riesgo
—Plumones
—Cinta adhesiva
—15 madejas de
estambre de
diferentes colores
ejercicios básicos
Profundizar contenidos
Reforzar la comprensión
Sesiones obligatorias
23
sección iii
c. aprendiendo los conceptos básicos de la violencia de género
Objetivo
Método
Tiempo
Sesión
13.Estrategias
de autocuidado
para
facilitadoras y
facilitadores
Diálogo grupal
Generar recursos
individuales y colectivos
para la autodefensa y el
autocuidado de las y los
activistas para enfrentar
el problema de violencia
de género, que viven las y
los adolescentes y jóvenes
de comunidades rurales e
indígenas
90 minutos
Materiales necesarios
—Papelógrafo y
plumones de colores
—Cinta para pegar
—Fotocopias del
recuadro de
distribución del
tiempo y del
termómetro para
detectar riesgos por
fatiga para cada
participante y hojas
de apoyo
PARA TERMINAR
Evaluación
y cierre
Las y los
participantes llenan
la hoja de
evaluación y hacen
comentarios al taller
ejercicios básicos
24
género o sexo ¿a quién le importa?
Conocer la opinión que
las y los participantes
tienen de los contenidos y
ejercicios del taller
Profundizar contenidos
30 minutos
Reforzar la comprensión
—Formularios para la
evaluación ­
—Hojas de apoyo con
las direcciones de los
centros de atención
en la región
Sesiones obligatorias
Para comenzar
Introducción al taller (Tarjeta 1)
Objetivo
Las y los participantes conocerán los objetivos del taller y pactarán las reglas que lo regirán.
Tiempo: 30 minutos
Materiales necesarios
Papelógrafos o las hojas de apoyo con los objetivos y las reglas del taller.
Descripción del ejercicio
Introducción
• Comienza dando la bienvenida a las y los participantes y agradeciéndoles su disposición para participar
en el taller.
• Menciona que este taller no incluirá conferencias, más bien, facilitadores y participantes trabajarán
de manera conjunta y participativa para realizar los diferentes ejercicios. El éxito de las actividades
dependerá de la buena disposición de las y los participantes de contribuir voluntariamente con sus
ideas y comentarios.
• Explica que el taller busca introducir el tema de género, el análisis de la violencia de género, familiar
y durante el noviazgo, así como las consecuencias para quien la sufre y para quien la ejerce. Invita a
las y los participantes a compartir con el grupo sus conocimientos y a aprender de los aportes de las
demás personas que participan en el taller.
• A las y los participantes que estén poco familiarizados con el tema de género, explícales que el taller
pretende introducir el tema para empezar a comprender de qué manera las expectativas sociales sobre
las mujeres y los hombres afectan y pueden propiciar y/o consentir actos de violencia, sobre todo en
el ámbito doméstico.
Desarrollo
• Presenta los objetivos del taller en un papelógrafo y explica cada uno de ellos.
25
sección iii
Hoja de apoyo
Tarjeta 1
Objetivos del taller
•
Aprender la diferencia entre sexo y los roles asignados a mujeres y hombres en la sociedad
(género).
• Permitir a las y los participantes reflexionar sobre cómo se dieron cuenta de las expectativas
sociales respecto a ser mujeres y hombres.
• Brindar a las y los participantes una oportunidad para compartir su experiencia de ser mujeres
y hombres.
• Llegar a una definición compartida de los términos de sexo y género.
• Identificar cómo las diferencias de poder entre hombres y mujeres pueden desencadenar actos
de violencia contra las personas más vulnerables.
• Identificar las características y tipos de violencia que la gente joven (especialmente las mujeres)
viven en sus comunidades de origen y en sus familias.
• Analizar los mecanismos comunitarios para disminuir la violencia en todas sus manifestaciones,
de manera especial la violencia de género.
• Brindar a las y los participantes la oportunidad de compartir sus experiencias en torno a la desigualdad de género, la violación a sus derechos y la violencia que han vivido en su comunidad,
familia y relaciones con otras personas.
• Analizar cómo y por qué ser mujeres y/o población joven son factores de riesgo cuando hablamos
de violencia de género.
• Elabora junto con el grupo las reglas que regirán durante el taller, las cuales se redactarán de manera
clara en un papelógrafo.
• Pregunta a las y los participantes si desean añadir alguna regla o acuerdo a la lista presentada.
26
género o sexo ¿a quién le importa?
Hoja de apoyo
Tarjeta 1
Sugerencias de reglas del taller
• Todas las personas tenemos diferentes formas de pensar, es importante indicar que podemos expresar nuestra opinión y que si alguien no está de acuerdo con ella no será motivo de confrontación
personal, al contrario, la sesión nos proporciona elementos para analizar y modificar actitudes.
• Si una persona se siente incómoda, no es necesario que conteste preguntas durante el taller.
• Escuchar con respeto las opiniones de todas/os las/os participantes, aun si no se comparten esas
opiniones, todas las participaciones son valiosas.
• Dejar a un lado nuestros temores para expresar lo que realmente pensamos y sentimos sobre un
tema; no hay respuestas correctas o incorrectas, las experiencias pueden haber sido dolorosas
para quienes las vivieron.
• Hablar en primera persona (yo pienso…, yo creo…, no me gusta/me gusta…, etc.) en vez de usar
frases que empiecen con “tú” (tú estás en un error cuando dices eso…, tú no deberías pensar de
ese modo, etcétera).
• Todas las confidencias expresadas durante las sesiones no podrán ser divulgadas fuera del taller,
si alguien quiere platicar su experiencia personal ésta no será motivo de chisme. Así todas y todos
nos sentiremos en confianza para hablar y buscar una solución o por lo menos encontrar historias
o experiencias que nos identifican. lo que aquí se cuenta aqui se queda.
• No usar nombres propios, si se quiere relatar una experiencia de otras personas en la comunidad
o localidades cercanas, no se deben usar nombres propios o situaciones que puedan dar datos de
identificación, esto es para evitar que el taller sea un espacio de chisme.
• Aceptar el uso de términos o frases “sensibles” o “tabú” vinculadas a los temas del taller, ya que
cuando hablamos de estos temas puede que sea necesario usar estas frases.
• Regresar a tiempo después de los recesos.
• Ser puntuales con los tiempos de inicio y cierre de las sesiones.
• Ser empáticos con las demás personas.
• Es importante que te asegures de que las y los participantes comprendan las instrucciones de los
ejercicios y los puntos más importantes del tema, de no ser así repítelos hasta que se comprendan
con claridad.
Cierre
• Explica que el taller está organizado en tres bloques con temas diferentes y que esperas la participación
del grupo en todas las sesiones previstas.
• Señala que de acuerdo con los tiempos con los que cuente el grupo se va a elaborar un calendario con las
sesiones que se trabajarán, retomando las recomendaciones sugeridas en la Guía para aplicar el taller.
27
sección iii
A. Definición de sexo y género
Introducción al módulo
En este módulo se clarifican algunos de los conceptos básicos que anteceden a la comprensión de la violencia
de género y familiar. Por ello, se hace la diferenciación entre el concepto de sexo y género y se ejemplifica a
través de ejercicios centrados en la realidad de las y los participantes en el taller. También se profundiza en
el tema de los estereotipos de género y se cuestiona la forma en la que afectan la convivencia cotidiana y el
desarrollo integral de las personas al obstaculizar el desarrollo de unas potencialidades por fomentar otras
formas que se consideran propias de los hombres o de las mujeres.
Género, no sexo (Tarjeta 2)
Objetivo
Las y los participantes comprenderán las diferencias entre sexo y género y aprenderán a reconocer los estereotipos de género.
Tiempo: 45 minutos
Materiales necesarios
Papelógrafos u hojas de apoyo con definiciones relacionadas con la orientación sexual, plumones y cinta
adhesiva.
Descripción del ejercicio
Introducción
• Inicia la sesión con una actividad grupal que permita romper el hielo entre las y los participantes.
• Posteriormente pídeles que hagan un círculo y explica que van a analizar las características personales,
habilidades y roles (“atributos”) que se asocian generalmente con las mujeres y los hombres.
Desarrollo
• Usa un papelógrafo grande. Haz tres columnas, ponle a la primera el título “mujer”, dejando las otras
dos en blanco.
• Pide a las y los participantes identificar las características
personales, habilidades y roles (“atributos”) que se asocian generalmente con las mujeres, sugiere que incluyan
creencias populares relevantes en sus comunidades o sus
propias ideas.
• Enseguida, titula la tercera columna “hombre” y pide a
las y los participantes hacer nuevamente una lista con
las características personales, habilidades y roles que se
asocian generalmente con los hombres.
28
género o sexo ¿a quién le importa?
• Si las y los participantes no mencionan ninguna característica, atributo o habilidad negativa o positiva
para hombres y mujeres, da algunas sugerencias para garantizar que las dos columnas incluyan palabras
positivas y negativas.
• Si las y los participantes no mencionan ninguna característica biológica (como senos, barba, pene,
vagina, menstruación), añade algunas a cada columna.
• Enseguida cambia los títulos de la primera y tercera columna, escribiendo “hombre” arriba de la primera
columna y “mujer” arriba de la tercera. Revisa la lista con el grupo y luego pregunta ¿Será posible para
los hombres mostrar las características y los comportamientos atribuidos a las mujeres, y las mujeres
podrán mostrar aquellos atribuidos a los hombres? Aquellos atributos que usualmente se consideran
no intercambiables se colocarán en la columna del medio, a la cual se le colocará el título “sexo”.
• Para ahorrar tiempo, no es necesario discutir cada término de la columna por separado; se puede
limitar simplemente a preguntar a las y los participantes si algunos de los términos de las listas no se
pueden intercambiar. Sin embargo, asegúrate de que se discutan todas las palabras relacionadas con
la columna “sexo”.
• Espera que las y los participantes debatan sobre el significado de algunas palabras; uno de los objetivos de este ejercicio es demostrar que las personas asignan diferentes significados para la mayoría de
características que se basan en el género. Por ello, es posible que se produzca un debate en el grupo.
• Pregunta qué pasa cuando alguien no hace lo que la comunidad espera que haga ¿las o los maltratan
o les dicen cosas?, ¿pueden llegar a agredirlas/os?
Cierre
• Explica que todas las palabras que quedaron en las columnas “hombre” y “mujer” hacen referencia al
género.
• Explica que la palabra sexo tiene que ver más con aspectos biológicos y genéticos mientras que el
género se refiere a ideas socio-culturales y a los roles que la sociedad espera que mujeres y hombres
cumplan. Por esta razón, el contenido del concepto de género puede variar de cultura en cultura y en
cada sociedad.
• Señala que con frecuencia las personas
asocian “sexo” con “género”, enfatiza
que no es lo mismo.
• Distribuye las definiciones de sexo y
género elaboradas para el taller; preséntalas en las hojas de apoyo o en el
papelógrafo pegado en la pared. Lee
las definiciones y pregunta al grupo si
requieren mayor explicación.
• Introduce la idea de que las creencias
populares (es decir, los estereotipos)
acerca de las mujeres y hombres son
perjudiciales porque limitan nuestro
potencial para desarrollar al máximo nuestras capacidades. Si aceptamos los estereotipos como guías
para nuestro comportamiento, ello impedirá que desarrollemos nuestros intereses y habilidades. Por
ejemplo, desanimando a los hombres a que participen en el trabajo doméstico o en el cuidado de las
29
sección iii
hijas y los hijos, u obstaculizando a las mujeres elegir roles considerados tradicionalmente “masculinos”, como practicar algunos deportes o estudiar una carrera considerada masculina (como mecánica,
ingeniería o matemáticas).
• Sin embargo, se puede disfrutar al desempeñar roles y atributos usualmente asociados con el propio
sexo, lo importante es que todas y todos tomemos nuestras propias decisiones sobre lo que queremos
hacer, cómo y cuándo.
• Si surge una inquietud o duda entre identidad de género y orientación sexual, te sugerimos no profundizar en el tema de la orientación, aunque puedes resolver la duda proporcionando las definiciones
incluidas en el glosario.
Posibles maneras de adaptar el ejercicio
Adaptación 1
Esta modalidad es posible sólo si en el taller participan mujeres y hombres.
• Pide a los hombres que propongan atributos para la columna que lleva el título “mujer”.
• Pide a las mujeres que sugieran características de lo que es ser “hombre”.
• Pide a todas y todos que digan si creen que los atributos mencionados para ambas columnas siguen
siendo válidos al cambiar el título de las columnas.
• Refuerza la idea de que tanto las mujeres como los hombres podemos desempeñar los mismos roles.
• Presenta las definiciones de sexo y género que se utilizarán en el taller y concluye con un resumen.
Adaptación 2
• Comienza la actividad pidiendo a las y los participantes que asocien los colores tradicionalmente asignados a las mujeres y a los hombres, ¿qué pasaría si se invirtieran?
• Pide a las y los participantes que tomen de una caja algunos objetos tales como una pulsera, un lápiz
labial, un condón, un collar, unos lentes, un sombrero, un mandil, un rebozo, unas botas, un mecate,
un machete, un reloj, un libro. Pídeles que digan cuáles de los objetos pertenecen a una mujer, cuáles
a un hombre y cuáles pueden pertenecer a ambos, a partir de esto puedes proponer la discusión sobre
género.
• Continúa desarrollando el ejercicio tal como se describe en el procedimiento inicial hasta el resumen.
• Pregunta a las y los participantes si les gustaría cambiar sus ideas acerca de los colores u objetos que
asocian con las mujeres y los hombres, y que expliquen por qué.
• Presenta las definiciones de sexo y género que se utilizarán en el taller y concluye con un resumen.
30
género o sexo ¿a quién le importa?
Sexo y género: ¿qué significan? (Tarjeta 3)
Objetivo
Las y los participantes distinguirán las diferencias entre los conceptos de sexo y género.
Tiempo: 45 minutos
Materiales necesarios
Hojas de apoyo o papelógrafo con las definiciones de sexo y género, plumones y cinta adhesiva.
Descripción del ejercicio
Introducción
• Explica el objetivo de la sesión.
Desarrollo
• Escribe la palabra sexo a manera de título en la parte superior del lado izquierdo de la pizarra o el
papelógrafo.
• Pide al grupo que mencione qué palabras piensan o qué cosas asocian cuando escuchan la palabra
sexo. Enfatiza que en este taller se pueden mencionar sinónimos de la palabra sexo, así como palabras
tabú (prohibidas).
• Escribe sus respuestas debajo de la palabra sexo.
• Si las y los participantes están tímidas/os o sienten vergüenza, incítales a reaccionar dando algunos
ejemplos (órganos sexuales, placer, intimidad, genitales).
• Luego escribe la palabra género en la esquina derecha de la pizarra o papelógrafo abriendo una nueva
columna y pregunta qué palabras les vienen a la mente cuando escuchan la palabra género.
• Escribe las respuestas debajo de la palabra género.
• Si los términos que las y los participantes han asociado con la palabra sexo están vinculados principalmente con aspectos físicos (biológicos, genéticos) y aquellos que han asociado a la palabra género
se relacionan con factores sociales, felicita al grupo por su conocimiento sobre el tema.
Cierre
• Si no lo has hecho antes y lo consideras
necesario para reforzar el conocimiento
del grupo, distribuye a las y los participantes las definiciones de sexo y género
y usa las hojas de apoyo o un papelógrafo
para presentar esas definiciones. Lee
las definiciones y pregunta al grupo si
requieren mayor explicación.
• Si surge una inquietud o duda entre iden-
tidad de género y orientación sexual, te
sugerimos no profundizar en el tema de
la orientación, aunque puedes resolver
la duda proporcionando las definiciones
incluidas en el glosario.
31
sección iii
• Si algún/a participante pregunta por la definición de diccionario para la palabra género, señala que las
definiciones que se pueden encontrar suelen explicarlo de otra manera, en este taller se está haciendo
referencia a construcciones socio-culturales definidas por las ciencias sociales.
Posibles maneras de adaptar el ejercicio
Adaptación 1
• Pide a las y los participantes que formen grupos de tres o cuatro personas y entrega a cada grupo hojas
blancas de papel.
• Pídeles que escriban en una hoja —en cinco minutos— palabras o frases que les vienen a la mente
cuando piensan en los términos sexo o género.
• Solicita a los grupos que se tomen otros cinco minutos para elaborar definiciones de sexo y género
basándose en las palabras o frases que han asociado a ambos términos.
• Pide a algunos grupos que presenten sus definiciones al resto del grupo y que hagan hincapié en las
semejanzas y diferencias entre las definiciones.
• Presenta las definiciones de sexo y género que se utilizarán en el taller y concluye con un resumen.
Hoja de apoyo
Tarjeta 3
Definición de sexo
Se refiere a los atributos fisiológicos que identifican a una persona como hombre
o mujer:
• El tipo de órganos genitales (pene, testículos, vagina, útero, senos).
• El tipo de hormonas predominantes que circulan en el cuerpo (por ejemplo,
estrógeno y testosterona).
• La capacidad de producir óvulos o semen.
• La capacidad de embarazarse y amamantar.
32
género o sexo ¿a quién le importa?
Hoja de apoyo
Tarjeta 3
Definición de género
Se transmite a través de una educación diferenciada entre hombres y mujeres y que dicta normas
que nos obligan a actuar de manera diferente a mujeres y hombres dentro de una sociedad. Se refiere
a las ideas y expectativas (normas) extensamente compartidas con respecto a mujeres y hombres.
Éstas incluyen las ideas sobre características y habilidades “típicamente” consideradas femeninas y
masculinas y expectativas comúnmente compartidas acerca de cómo deben comportarse las mujeres
y los hombres en diversas situaciones.
Estas ideas y expectativas se aprenden en la familia, la escuela, con amigas/os, por influencia de
líderes de opinión, instituciones religiosas, culturales, el trabajo, la publicidad y los medios de comunicación.
Esta forma de educación diferenciada influye y se refleja en diferentes roles, posición social, poder
económico y político, que tienen las mujeres y los hombres en la sociedad.
En las comunidades rurales e indígenas la desigualdad de género se manifiesta, en situaciones como
cuando se celebra más el nacimiento de un niño que el de una niña (por ejemplo, en algunos pueblos
cuando nace un niño se hace una fiesta comunitaria, en cambio cuando nace una niña se repudia
a la madre y a la infanta) o cuando se promueve que los adolescentes estudien mientras que las
mujeres tienen que abandonar la escuela para dedicarse a las labores del hogar y prepararse para el
matrimonio.
Analizar la música popular y los estereotipos de género
(Tarjeta 4)
Objetivo
Las y los participantes identificarán los estereotipos de género que se promueven como parte de las tradiciones culturales.
Tiempo: 60 minutos
Materiales necesarios
Papelógrafos o grabadora con música de moda en la comunidad.
33
sección iii
Descripción del ejercicio
Introducción
• Inicia la sesión invitando a bailar al grupo
la canción de moda más importante del
momento.
• Al concluir pídeles que se sienten.
• Explica el objetivo de la sesión y la impor-
tancia de analizar los mensajes implícitos
en la música que escuchamos. Destaca
la importancia que la misma tiene en la
formación de las identidades y en la naturalización de la violencia de género.
Desarrollo
• Pon nuevamente la canción que bailaron al
principio de la sesión y diles que analicen
los mensajes.
• Muestra una hoja de apoyo o pega en la
pared un papelógrafo con las frases más
significativas que sobre el tema tienen otras
canciones que se escuchan en la comunidad.
• Pídeles que analicen las creencias populares
(es decir, los estereotipos) que las mismas
presentan sobre mujeres, hombres y comportamientos sexuales.
Cierre
• Explica al grupo cómo la música puede pre-
sentar significados negativos para mujeres y
hombres; así como para sexualidades diferentes. Menciona que muchas de las piezas
musicales que se escuchan en las fiestas
de los pueblos son machistas. Señala que
algunas de las canciones hacen referencia a
las expectativas de la sociedad en relación
con la inteligencia, las habilidades y comportamientos de mujeres y hombres.
• Explica que dichas expectativas no están basadas en el sexo —en las características físicas— sino en
estereotipos que se tienen sobre las mujeres y los hombres. La palabra género es usada para describir
estas ideas.
• Si no lo has hecho antes y lo consideras necesario para reforzar el conocimiento del grupo, distribuye las
hojas de apoyo con las definiciones de sexo y género elaboradas para el taller o pega un papelógrafo con
la información en la pared. Lee las definiciones y pregunta al grupo si requieren mayor explicación.
34
género o sexo ¿a quién le importa?
Cuando era niña/o y adolescente (Tarjeta 5)
Objetivo
Las y los participantes reconocerán cómo el género ha influido en su vida cotidiana temprana y cómo continúa influyendo actualmente en su manera de pensar.
Tiempo: 60 minutos
Materiales necesarios
Grabadora con música suave, relajante. Vela y cerillos.
Descripción del ejercicio
Introducción
• Señala al grupo la importancia de reflexionar sobre nuestra historia para encontrar los modos como
hemos sido construidos en tanto mujeres y hombres.
Desarrollo
• Si hay suficiente espacio, pide a las y los participantes que caminen por la sala durante tres minutos;
luego pídeles que formen parejas, indicándoles que se sienten espalda con espalda.
• Si no disponen de espacio suficiente, pide al
grupo que formen parejas en otro lado de la
sala, colocando dos sillas espalda con espalda.
• Pon la música que preparaste para la sesión y
con voz suave y pausada, señala lo siguiente:
“Ahora van a cerrar los ojos e imaginarse en un
sitio muy bonito y tranquilo, quizá escuchando una música suave que les gusta; pueden
también recordar a alguna persona a la que
admiran.
• “Ahora vamos a retroceder poco a poco en el
tiempo, van a recordar su niñez. Ahora están
recordando cuando eran pequeñas o pequeños, van a tratar de acordarse de cuando se dieron cuenta de
que eran niños o niñas. O de algún evento o situación que los puso frente al hecho de ser niñas o niños.”
• Pregunta: “¿Eran diferentes o algo (alguien) les mostró que eran hombres o mujeres?”
• “Vamos a reflexionar sobre esta experiencia: ¿Sólo tuvo que ver con algo biológico (por ejemplo, la
primera menstruación o el sueño húmedo) o con comentarios, reacciones de otras personas?, ¿fue una
experiencia positiva o negativa?, ¿o quizá la experiencia no fue ni buena ni mala?”
• Permite que las y los participantes reflexionen sobre estas cuestiones en silencio durante cinco minutos.
• Pídeles que vuelvan al lugar de la reunión poco a poco y que abran lentamente los ojos. Apaga la
música.
• Invita a las y los participantes a compartir algo de sus recuerdos más tempranos con su compañera/o.
• Después de cinco minutos, pide que algunas personas voluntarias compartan sus experiencias en
plenaria, mencionando si éstas fueron positivas, negativas o neutras.
35
sección iii
• Si ningún/a participante se anima a com-
partir sus experiencias, quien facilita el
taller deberá dar algunos ejemplos expresados en otros talleres, generalmente eso
ayuda a que el grupo se anime a compartir
sus vivencias.
• Habla sobre las experiencias vividas para
identificar cuáles de éstas tienen que ver
con el sexo (por ejemplo: ver los genitales
de una niña o un niño y darse cuenta de
que eran distintos o iguales, tener el primer periodo menstrual o sueño húmedo) y
cuáles están más relacionados con el género
(por ejemplo: actividades que estaban prohibidas o permitidas para hombres o mujeres). Si ningún/a
de las y los participantes menciona alguna vivencia que implique características sexuales, proporciona
un ejemplo.
Cierre
• Es importante señalar que, aun si las experiencias más tempranas mediante las cuales reconocimos
nuestro sexo están asociadas con diferencias biológicas, con frecuencia realmente aprendemos a ser
mujeres y hombres a partir de las reacciones y comentarios de la gente que nos rodea.
• Analizar y cuestionar la cultura de género promueve que las personas vayan más allá de las barreras
que les han sido impuestas e impulsa nuestras posibilidades de desarrollo: por ejemplo, por qué a los
hombres se les dice que tienen que saber trabajar para mantener a una familia y a las mujeres que no
necesitan ir a la escuela, ya que cuando se casen se quedarán en la casa.
En caso de que sea necesario disminuir la tensión que el ejercicio pudiera provocar en el grupo, te sugerimos
hacer una actividad de cierre. En la sección iv de este manual encontrarás algunos ejercicios que te ayudarán
para este propósito. Elije el que consideres más adecuado y aplícalo cuando lo creas pertinente.
36
género o sexo ¿a quién le importa?
Cierre del Módulo A
Resumen a cargo de la/s persona/s que coordina/n el taller
Objetivo
Las y los participantes comprenderán por qué es importante entender la influencia de la cultura de género
para relacionarla con el tema de la violencia de género y familiar.
Tiempo: 30 minutos
Materiales necesarios
Hojas de apoyo o papelógrafo con los puntos centrales del resumen.
Desarrollo
•Empieza por enfatizar que a todas y todos nos
han enseñado, desde que nacimos, a comportarnos de determinada manera y a creer en
ciertas cosas. Este proceso continúa cuando
nos convertimos en personas adultas.
•Algunas normas sociales basadas en el género
pueden ponernos en situaciones de riesgo (por
ejemplo: desde niños a los hombres se les pide
comúnmente hacer uso de la violencia para
resolver un conflicto; en algunas comunidades
se obliga a las mujeres a contraer matrimonio con una persona a la que no quieren o
conocen), y puede ser difícil enfrentar estas
situaciones.
•Señala que es importante evitar —en lo posible— comportamientos que puedan ponernos en riesgo
(un ejemplo clásico entre los jóvenes es practicar sexo no protegido sólo para “probar” que están convirtiéndose en “verdaderos hombres” o, en el caso de las mujeres tener relaciones sexuales sin estar
plenamente convencidas, como “prueba de amor”).
•Enfatiza la importancia de comprender cómo se construyen los roles y estereotipos de género, y su
relación con la violencia hacia las mujeres. También es importante darnos cuenta de cómo nosotros
mismos estamos influenciados por nuestra cultura, tradiciones y prejuicios, muchas veces sin ser concientes de ello.
•Puntualiza que podemos desafiar las normas y estereotipos de género y ser cada vez más conscientes
sobre las formas en que influyen en nuestros comportamientos y en las relaciones que establecemos
con nuestras parejas, amigas y amigos. El taller es una herramienta para que se dé este proceso de
cambio.
•Es importante señalar que para incorporar la perspectiva de género en nuestras relaciones personales,
escolares o laborales, no necesitamos usar el termino género; podemos discutir —por ejemplo— la
diferente valoración del trabajo de las mujeres frente al de los hombres en nuestras comunidades,
o la violencia de los hombres contra las mujeres en nuestras casas, para comenzar a hablar sobre el
tema.
•Para concluir esta parte del tema, discute los siguientes puntos centrales con las y los participantes.
37
sección iii
Hoja de apoyo
Cierre Módulo A
Puntos importantes a recordar
1. El género tiene que ver con relaciones no sólo entre mujeres y hombres, sino también entre mujeres
y entre hombres (por ejemplo, las relaciones de maltrato entre la suegra y la nuera o la violencia
por alcoholismo entre hombres, dos ejemplos frecuentes en las comunidades).
2. Una manera rápida de recordar la diferencia entre sexo y género es asociar el sexo con los aspectos biológicos y el género con los aspectos sociales y culturales. Esto significa que el término
sexo hace referencia a las características del cuerpo físico, mientras que los roles de género son
aprendidos de manera gradual y pueden cambiar con el tiempo.
3. El género no sólo se aplica a las personas heterosexuales; afecta también a personas bisexuales,
hombres homosexuales (gays), lesbianas y personas que eligen abstenerse de tener contactos
afectivos y sexuales con otras personas.
4. Mujeres y hombres podemos manipular las ideas y los comportamientos basados en el género
para usarlos en beneficio propio o conseguir lo que queremos aparentemente sin perjudicar a
nadie (por ejemplo, los hombres se aprovechan de las necesidades de algunas familias pobres para
contraer matrimonio con las mujeres, a pesar de que éstas no estén de acuerdo).
5. Es muy difícil ser sensible a la perspectiva de género todo el tiempo. Los estereotipos de género
influyen en las ideas y acciones de casi todas y todos, incluyéndonos.
6. Ser sensible a la perspectiva de género no significa desconocer las diferencias entre mujeres y
hombres. Algunas diferencias permanecen porque son biológicas, y otras porque a veces optamos
por mantener algunas diferencias aún en el contexto de relaciones “equitativas” entre mujeres y
hombres (por ejemplo, dejar el asiento a una mujer mayor o embarazada, ayudar a una mujer a
bajar a sus hijas/os pequeñas/os del autobús).
7. Para incorporar la perspectiva de género en nuestras vidas, no es necesario hablar de género en
sí (es decir, usando el termino “género”). Podemos cuestionar el hecho de que el trabajo diario
de las mujeres no tiene un salario, que los hombres no participen en la limpieza de la casa, o la
falta de compromiso de los hombres para con el cuidado de las y los infantes y en la realización
de trabajo doméstico, a pesar de que en las comunidades las mujeres ayudan en el trabajo del
campo.
38
género o sexo ¿a quién le importa?
B. Aplicando el concepto de género al tema de violencia
Introducción al módulo
En este módulo se analizan algunas creencias sobre la violencia de género que muchas veces aparecen como
verdaderas al presentarse con frecuencia en los discursos cotidianos de las comunidades.
Se analizan de manera crítica los mensajes proporcionados por los medios de comunicación masiva y se
discuten sus implicaciones sociales y la forma en la que fomentan las relaciones de inequidad y violencia
entre hombres y mujeres.
Creencias y realidades sobre la violencia de género
(Tarjeta 6)
Para conocer la magnitud de la violencia de género es necesario analizar las creencias que encubren el
impacto y las realidades que muestran la urgencia de intervenir. Si quieres que este ejercicio tenga un
significado relevante en el ámbito local, puedes añadir o sustituir en la hoja de apoyo algunas creencias y
realidades locales que hagan referencia a la situación de violencia hacia las mujeres en la comunidad y los
comportamientos de los hombres.
Objetivo
Las y los participantes analizarán las creencias sociales y culturales sobre la violencia de género.
Tiempo: 90 minutos
Materiales necesarios
Hoja de apoyo, fotocopias, bolígrafos y lápices para cada participante, papelógrafo y plumones.
Descripción del ejercicio
Introducción
•Señala que el tema de la violencia es un tema tabú del cual poco se habla en las comunidades.
•Puntualiza que en la vida cotidiana existen una serie de creencias que se comparten entre los miembros
de una comunidad y que se expresan como verdades aunque no lo sean.
•Comenta que es importante profundizar en el significado e impacto que tienen esas supuestas verdades
en la convivencia diaria.
Desarrollo
Distribuye la lista de afirmaciones sobre la violencia de género a cada asistente. Pídeles que marquen con
una X si las consideran verdaderas o falsas.
Nota para la facilitadora o el facilitador: Todas las afirmaciones son falsas
39
sección iii
Hoja de apoyo
Tarjeta 6
Marca como falsa o verdadera las siguientes frases
1. La conducta violenta es innata en los hombres.
2. Los hombres violentos son enfermos mentales.
3. El alcohol y/o la droga hacen que los hombres golpeen a sus parejas
(y eventualmente a sus hijas e hijos).
4. A las mujeres maltratadas les gusta que las maltraten sus esposos, si
no, ya se hubieran separado.
5. La violencia es un mal de las mujeres pobres y/o de localidades rurales.
6. Es normal que el hombre golpee a su pareja en ciertas circunstancias.
7. Las hijas de madres maltratadas siempre buscarán una pareja que las
maltrate.
8. El que las mujeres abandonen a su agresor, garantiza que la violencia
se termine.
9. “La ropa sucia se lava en casa”, esto de la violencia familiar es un
problema privado y no tiene por qué hacerse público.
10. Las mujeres están seguras en el hogar y corren más peligro de violencia
con los extraños o fuera de casa.
•Haz grupos de trabajo de cuatro o cinco
participantes.
•Dependiendo del número de equipos,
asigna un número igual de creencias
para que las analicen con sus compañeras/os, esto es, pide a las y los participantes que discutan en grupo por
qué las consideran verdaderas o falsas y
que contrasten con las demás personas
las respuestas que han puesto en sus
fotocopias.
40
género o sexo ¿a quién le importa?
V
F
•Luego pide a las y los participantes que
escriban el resumen de su discusión y que
designen a una persona para exponer al
grupo las impresiones de su equipo sobre
las afirmaciones que les tocó discutir.
•Pide a cada equipo que exponga en el grupo
sus conclusiones en orden ascendente hasta
concluir la afirmación 10, una vez que el o la
vocero/a del equipo exponga sus conclusiones pregunta al grupo si están de acuerdo o
en desacuerdo y por qué. Ya que escuchaste
las apreciaciones grupales, distribuye la lista de las realidades. Da tiempo suficiente para preguntas
del grupo o discusión después de presentar cada realidad.
Hoja de apoyo
Tarjeta 6
Realidades de la violencia de género
1. Realidad: Aunque existe la creencia de que los hombres violentos no se pueden controlar y ejercen violencia porque simplemente “son así”, la verdad es que los hombres maltratadores no son
violentos con todas las personas, ni en todas las situaciones y lugares, sino especialmente con las
personas que tienen menos poder y/o prestigio (las mujeres, las niñas y los niños, las y los jóvenes
y las y los adolescentes y ancianos). Por lo tanto, se considera que la violencia es una conducta que
se aprende a través de lo que nos dice la gente y los familiares (relacionados con la construcción
de roles y estereotipos de género), como una manera de resolver conflictos.
2. Realidad: Contrariamente a la opinión general, la mayoría de los hombres violentos no tiene trastorno mental alguno. Los estudios sobre el tema muestran que son pocos los agresores que tienen
algún padecimiento diagnosticado; y entre los que si lo tienen, no hay un patrón que demuestre
que es la misma patología para todos. La mayoría de los hombres violentos ejercen lo que creen
que es su derecho “natural” de dominio sobre las y los más débiles.
3. Realidad: Es común que se crea que el alcohol y/o la droga son responsables de la violencia, en un
intento de disculpar una conducta que de otra manera no sería tolerable. El efecto desinhibidor
del alcohol o el abuso de substancias puede exacerbar o empeorar la violencia de género y familiar
(en la pareja) si es que ya existe, pero no es una causa, ya que muchos hombres que toman no
son violentos. Por eso los tratamientos para hombres alcohólicos pueden reducir la frecuencia y
severidad de la violencia, pero rara vez resuelven el problema.
4. Realidad: Aunque la conducta de una mujer provoque enojo en su pareja, esto no justifica que sea
maltratada. La violencia es responsabilidad absoluta de quien la ejerce.
5. Realidad: Aunque algunas investigaciones sugieren que la violencia en la pareja es más común
en familias rurales de escasos recursos económicos, otras sugieren de manera consistente que la
41
sección iii
continuación...
Hoja de apoyo (Tarjeta 6)
Realidades de la violencia de género
violencia contra las mujeres se da en todos los estratos socioeconómicos y educativos. Se debe
tener en cuenta que los datos de prevalencia en violencia de género provienen en su mayoría
de organismos públicos, donde acuden más mujeres de escasos recursos económicos, razón por la
cual se generaliza la información.
6. Realidad: La violencia de género es una violación a los derechos humanos de las mujeres. En ninguna circunstancia se tiene el derecho de abusar de otra persona, si bien es cierto que los conflictos
provocan coraje, la violencia no es la única manera de expresarlos, y dista mucho de ser la más
adecuada.
7. Realidad: Si bien es cierto que existen estudios que correlacionan el hecho de haber presenciado
violencia entre los padres durante la niñez, con ser víctima de violencia, esto más bien podría
explicar las razones por las que las mujeres permanecen en la relación de violencia y no el que
“escojan” parejas maltratadoras. El agresor lo es por elección propia, no para “seguirle la corriente”
a una víctima que lo escogió.
8. Realidad: Existen estudios que demuestran que la separación del agresor puede provocar más
violencia y hasta la muerte de la mujer. En México se estima que un alto porcentaje de mujeres
son asesinadas por el novio, ex novio, esposo, o ex esposo y por esta razón es muy importante que
ella tenga un plan de seguridad, que veremos más adelante en otra sesión del taller.
9. Realidad: Las estadísticas muestran que es un problema extendido en la sociedad mexicana y que
tiene costos altos para todas y todos. Cuando hablamos de la violación de los derechos humanos de
una víctima que posiblemente no sepa escapar del problema y que además puede estar en peligro,
el problema se vuelve responsabilidad de todas las personas.
10. Realidad: Contrariamente a la visión de la familia como un refugio de apoyo y amor, un número
considerable de niñas, adolescentes y jóvenes mujeres corren más riesgo de violencia en sus propias
casas por parte de alguna persona que conocen.
Cierre
•Enfatiza que la violencia no es natural y que la persona que la ejerce es responsable de ello.
•Señala que las creencias en torno a la violencia encubren un problema común en las familias, las comunidades y los países.
•Resalta que todas las personas hemos vivido episodios de violencia en la familia y que por ello puede
resultar difícil hablar sobre el asunto, pero que la idea de este taller es abrir la posibilidad de hablar
sobre el tema y revisar críticamente las experiencias.
•Cierra el ejercicio preguntando al grupo si alguna persona quiere hablar sobre las creencias de la violencia
que existen en sus comunidades o sus familias. Señala que en todas partes se construyen creencias en
torno a la violencia y sobre las mujeres y la gente joven, y que estas creencias solamente “encubren”
la realidad.
42
género o sexo ¿a quién le importa?
Analizando la violencia de género en las imágenes de
publicidad (Tarjeta 7)
Objetivo
Las y los participantes analizarán de qué manera mujeres y hombres son representados en los medios de
comunicación y cómo estas imágenes pueden reforzar la violencia de género.
Tiempo: 60 minutos
Materiales necesarios
Hojas de apoyo con las preguntas, recortes de periódicos y revistas que se leen en la comunidad (si dispones
de video y televisión, puedes presentar al grupo algunos comerciales de televisión en los que se presenten
imágenes de mujeres y hombres jóvenes) y papelógrafo. Es importante que incluyas tanto imágenes que
promuevan relaciones de violencia como algunas que muestren relaciones equitativas entre hombres y
mujeres.
Descripción del ejercicio
Introducción
•Explica que los estereotipos de género y ciertas afirmaciones sobre la violencia son creencias o suposiciones que parecen ser “naturales” y, por tanto, no las cuestionamos. Aun cuando conscientemente
no le damos valor a estas creencias, las escuchamos. Podemos observar cómo se manifiestan en la vida
diaria, por ejemplo a través de los medios de comunicación.
•Señala que la violencia y la violencia de género son actos cotidianos en los que todas y todos participamos, ya sea como observadores, víctimas e incluso maltratadores/as, los medios de comunicación
son las fuentes principales de legitimación de la violencia mediante la proyección de imágenes que se
vuelven parte de nuestro entorno.
Desarrollo
•Divide al grupo en equipos de cuatro o cinco personas.
•Reparte a los equipos los recortes (avisos, dibujos animados, fotografías de
“nota roja”, entre otros) de las revistas
y periódicos. Es necesario que los hayas
seleccionado con anterioridad. Toma en
cuenta que en este ejercicio muchas
veces las y los participantes tienden
a analizar de manera crítica todas las
imágenes sin reconocer que también
hay imágenes positivas.
•Pide a las y los participantes que elijan
tres imágenes y que contesten: ¿consideran que estas imágenes podrían propiciar eventos de violencia de género
entre las personas que la observan?,
¿por qué si o por qué no?
43
sección iii
•Pídeles que expongan en grupo su punto de vista respecto a una de las imágenes que han seleccionado
y pregunta al grupo si ellos verían del mismo modo la imagen.
Cierre
•Señala a las y los participantes que es posible interpretar las mismas imágenes desde diferentes puntos de vista, no todas y todos recibimos los mismos “mensajes”. Podemos recibir mensajes diferentes a
aquellos que intentaron dar los que crearon o produjeron la imagen. La experiencia que todas y todos
compartimos es que estas imágenes influyen —muchas veces sin darnos cuenta— en nuestras ideas
acerca de las características y comportamientos “apropiados” o “deseables” para mujeres y hombres.
•Indica que esta actividad nos ayuda a analizar el impacto de los medios de comunicación en relación
con el reforzamiento de los estereotipos y roles de género y sus consecuencias en el aprendizaje de
relaciones violentas, que afectan principalmente a las personas más vulnerables de la sociedad (niñas,
niños, adolescentes, jóvenes y mujeres).
•Los anuncios de publicidad buscan que las personas compren productos y muchas veces hacen esto
reforzando los roles y estereotipos de género. Sin embargo, en tanto las ideas acerca de los roles y estereotipos de mujeres y hombres cambian en la sociedad, los medios de comunicación también pueden
reforzar nuevos estereotipos y roles.
•Las personas jóvenes y adultas continúan aprendiendo y reproduciendo los estereotipos y roles de
género, los cuales determinan de manera significativa nuestros comportamientos en torno al maltrato
o cuidado que tenemos con las personas que nos rodean. Por ello es importante que, una vez que se
reconozca el malestar que generan los estereotipos y los roles de género, podamos hacer algo para
transformarlos.
•La violencia de género y sobre todo la que se propaga en el ámbito familiar es un acto tan cotidiano
que no la percibimos sino a través de imágenes de violencia física. Sin embargo, hay otras formas de
ejercer el maltrato, por ejemplo: cuando no colaboramos en las labores domésticas argumentando
que es un trabajo de mujeres, mediante el control de los gustos de la pareja, a través de los celos sin
fundamento o infundir miedo a adolescentes y jóvenes para que realicen actos en los que no están de
acuerdo, entre otros.
•Es importante que cotidianamente analicemos las imágenes de la publicidad y cuestionemos aquellas
que promueven estereotipos de género, por ejemplo, aquellos relacionados con la imagen del “hombre
macho, seductor, conquistador, fuerte y violento con otros hombres y sobre todo con las mujeres”, o
de la mujer “sumisa y bondadosa” como el ideal de la feminidad.
44
género o sexo ¿a quién le importa?
Posibles maneras de adaptar el ejercicio
Adaptación 1
•Reparte a las y los participantes algunas revistas y periódicos y pídeles que escojan una imagen que
refuerce los estereotipos y roles de género y una que los desafíe.
•Luego pide al grupo que conteste —para cada imagen seleccionada— ¿consideran que estas imágenes
podrían propiciar eventos de violencia de género entre las personas que la observan?, ¿por qué si o
por qué no?
Adaptación 2
•Realiza la actividad tal y como se describe en el ejercicio original.
•Pide al grupo que discuta las siguientes preguntas: las actividades que realizan las mujeres ¿pueden
realizarlas los hombres?, ¿por qué si y por qué no?; ¿las que realizan los hombres pueden realizarlas
las mujeres?, ¿por qué si y por qué no?
Adaptación 3
•Si dispones de televisión y video, en vez de usar recortes de periódicos y revistas, presenta algunos
comerciales de publicidad de los diferentes canales de televisión para que el grupo los analice de
acuerdo con las indicaciones arriba mencionadas.
45
sección iii
Cierre del módulo B
Resumen a cargo de la/s persona/s que coordina/n el taller
Objetivo
Comprender el impacto que tienen algunas creencias colectivas en las relaciones de inequidad y violencia
entre hombres y mujeres.
Tiempo: 30 minutos
Materiales necesarios
Hojas de apoyo o papelógrafo con los puntos centrales y plumones.
Desarrollo
•Menciona que la comunidad, a través de sus costumbres y creencias, deja claro cuáles son los comportamientos deseables para las mujeres y los hombres.
•Puntualiza que algunas de esas creencias están tan arraigadas que muchas veces aparecen como verdades.
•La mayoría de las veces la violencia de género y familiar no es reconocida en las comunidades y se
mencionan justificaciones como “su esposo le pega porque ella no hace las labores del hogar”. Es común
también que las propias mujeres justifiquen la violencia de sus parejas al decir: “me golpeó porque no
estaba en sus cinco sentidos”, refiriéndose a que estaba borracho.
•Los mensajes sobre la desigualdad de género y la violencia de género se transmiten de diversas formas,
de manera formal (por ejemplo en la escuela) y de manera informal en la educación que recibimos en
nuestra familia y comunidad, pero también en los mensajes que transmiten los medios de comunicación.
•Es importante que la población joven tome conciencia de que la mayoría de las veces recibimos información que puede perjudicar nuestra vida futura (por ejemplo, el ejercicio de la violencia como una
forma para resolver los conflictos, o los celos para mostrar el amor hacia otra persona).
•Reflexiona sobre la importancia de construir relaciones equitativas entre los géneros, lo cual controla
los comportamientos violentos.
•Cierra señalando que ninguna persona tiene derecho de violentar a nadie, bajo ninguna circunstancia
y por ningún motivo.
46
género o sexo ¿a quién le importa?
Hoja de apoyo
Cierre Módulo B
Puntos importantes a recordar
1. El hecho de que en una comunidad se diga que no existe la violencia de género no significa que
sea cierto en la realidad cotidiana. Generalmente hablar de violencia en las comunidades no es
fácil y mucho menos reconocerla como un comportamiento que se da entre sus habitantes.
2. El primer paso para empezar a trabajar la violencia de género y familiar en una comunidad es
que se reconozca, para entonces poder pensar de manera colectiva en distintas formas para
controlarla.
3. La violencia familiar suele perpetuarse gracias a la creencia de que la violencia es algo privado,
de lo que no se puede hablar fuera del ámbito familiar.
4. Generalmente el agresor suele preocuparse de que los demás no se enteren de la violencia que
ejerce y no precisamente porque crea que pertenece al ámbito de lo privado, sino porque no
desea exponerse a la crítica social.
5. En la medida en que la comunidad participe para controlar el problema de la violencia de género
y familiar, será posible empezar a reducir su prevalencia.
47
sección iii
C. Aprendiendo los conceptos básicos de la violencia de
género
Introducción al módulo
Las sesiones anteriores nos permitieron comprender cómo aprendemos —a partir de características sexuales
y desde la infancia— a comportarnos con base en rigurosos estereotipos de género que a veces generan relaciones afectivas de violencia. En este módulo se analizará cómo las relaciones de poder y los estereotipos de
género promueven relaciones erótico-afectivas de violencia psicológica, física y/o sexual, donde las personas
más afectadas son las mujeres jóvenes, debido a la inequidad de género.
Se presentan también estrategias concretas para enfrentar, manejar y tratar el problema de la violencia
familiar y —con especial énfasis— la violencia en el noviazgo, que es un tema relevante para trabajar con la
población joven.
Sugerencias para los ejercicios del módulo
Dado que el tema de violencia de género es delicado de tratar en las comunidades rurales e indígenas, te
sugerimos que revises bien las hojas de apoyo para facilitadores, que te presentamos en este manual, antes
de comenzar la actividad. También podrías pedir informes a las personas expertas en el tema o acudir a las
organizaciones e instituciones que trabajan en atención a víctimas, ellas te pueden facilitar información de
apoyo (trípticos, folletos, manuales, material audiovisual) para repartir al grupo.
¿Qué es la violencia de género? (Tarjeta 8)
Objetivo
Las y los participantes elaborarán definiciones de
violencia (psicológica, económica, física y sexual) y
explorarán la presencia de ésta en sus vidas.
Tiempo: 90 minutos
Materiales necesarios
Papelógrafos, plumones, lapiceros, hojas de apoyo
con ejemplos.
Nota para la facilitadora o el facilitador: En este
ejercicio es probable que necesites incluir alguna
dinámica de relajación. Puedes consultar la sección
iv, en la cual hay una serie de ejercicios con ese
propósito.
48
género o sexo ¿a quién le importa?
Descripción de la primera parte del ejercicio
Introducción
•Comienza señalando que el análisis de la violencia es un tema delicado, porque todas y todos alguna
vez en nuestra vida hemos estado involucrados de manera directa o indirecta en casos de violencia.
Destaca que es importante analizar el tema, entre otras cosas porque la violencia puede afectar nuestra
salud, las relaciones laborales, el rendimiento escolar y las relaciones con nuestra familia y amigos. Por
tal motivo, vamos a discutir el problema y a analizar cómo afecta éste a los grupos más vulnerables
como son las niñas y los niños, las y los adolescentes, las y los jóvenes y las personas ancianas. Enfatiza
que la violencia afecta, por motivos de género, sobre todo, pero no exclusivamente, a las mujeres.
Desarrollo
•Señala que esta actividad se realizará en dos partes. En la primera el grupo elaborará la definición de
violencia y en la segunda identificarán las formas de la violencia de género.
•Entrega a cada equipo un papelógrafo y pídeles que elaboren una definición de violencia que refleje
qué significa ésta para el grupo.
•Luego, pídeles que pongan ejemplos.
•Después de 15 minutos pide a los grupos
que presenten sus definiciones en plenaria.
•Presenta en un papelógrafo los ejemplos de
violencia dados por las y los participantes y
explica que hay muchas formas de violencia: económica, psicológica o emocional,
física y sexual; sin embargo, con frecuencia aceptamos cierto tipo de abuso como
“normal”. Incluso no consideramos violentos
algunos tipos de comportamiento abusivo
debido a que estos no son castigados y la
comunidad parece tolerarlos.
•Pregunta a las y los participantes si quieren
añadir otro comportamiento a los ejemplos
de violencia presentados.
•Presenta un resumen de las definiciones
de violencia y violencia de género que se
muestran en el siguiente cuadro y explica
las palabras que no se comprendan (glosario de términos).
49
sección iii
Hoja de apoyo
Tarjeta 8
Violencia de género
Puntos para comprender la violencia
• La violencia es un problema grave, no sólo en nuestros pueblos rurales e indígenas sino en todo
el mundo. La violencia es el abuso del poder a través de la agresión física, verbal, económica y
sexual para lograr que otro u otros hagan o dejen de hacer algo, en contra de su voluntad y a
favor de la persona que abusa.
• Algunos estudios definen la violencia como: todo acto de abuso o coerción en el que una persona
más fuerte o con mayor poder, prestigio y autoridad atenta contra los bienes, la libertad, la
salud y en general los derechos de otras personas; para ello, puede amenazarlas u obligarlas
a hacer actividades que ellas no están dispuestas a realizar o dejar de hacer aquellas que
quieren realizar.
• Son diversas las formas de violencia, entre las que podemos mencionar la violencia política
(como las guerras, revoluciones, terrorismo o crímenes que violan los derechos humanos de las
personas), la socioeconómica, y la de género o hacia las mujeres y las niñas, entre otras.
• Es importante reconocer que todas las personas estamos expuestas a la violencia y que en algún
momento de nuestras vidas podemos hacer uso de ella para controlar o dominar a otras/os. Lo
anterior se debe a que tradicionalmente se nos ha educado para resolver los conflictos de manera
violenta; sin embargo, mujeres, niñas, niños, personas con capacidades diferentes, personas no
heterosexuales, y adultas/os mayores son más vulnerables a los actos de violencia.
Violencia contra las mujeres y violencia de género
• Como vimos en los temas anteriores, la sociedad y la familia le asignan un valor superior a los
hombres y menor a las mujeres. La situación de poder que ejercen algunos hombres trae como
consecuencia que se cometan actos de violencia en contra de otras personas con menor poder
y prestigio como son las niñas y los niños, las y los adolescentes y jóvenes y las mujeres. No
significa que las mujeres no violenten a otras personas; sin embargo, esto ocurre porque alguna
tiene más poder que otra, por ejemplo: las suegras frente a las nueras, sobre todo cuando viven
en la casa del esposo o compañero, o las madres en contra de sus hijos o hijas pequeños.
• En una cultura patriarcal (de privilegios para los hombres y marginación para las mujeres) desde
niños aprendemos a agredir a las niñas o a los niños más pequeños, a las y los adolescentes y
jóvenes, así como a las ancianas, los ancianos y/o las personas que tienen alguna discapacidad
física o que no pueden defenderse y hasta a los animales domésticos.
• Con base en lo anterior, podemos definir la violencia contra las mujeres como: cualquier acto
de fuerza física, verbal, coerción o privación que atente contra la vida, dirigido hacia la mujer
o niña, que cause un daño físico o psicológico, humillación o privación arbitraria de la libertad
y que perpetúe la subordinación de las mujeres (cedaw: Convención para la Eliminación de
Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer).
50
género o sexo ¿a quién le importa?
Segunda parte: Lluvia de Ideas
•Pídele al grupo que, en lluvia de ideas, señale distintas formas de violencia que son comunes entre las
familias de su comunidad y que tienen como objetivo a la población joven.
•Explica que muchas formas de violencia están relacionadas con el género y la edad y brinda algunos
ejemplos que pasan en las comunidades rurales, pregunta a las y los participantes si estos aspectos
estuvieron presentes en las definiciones o discusiones de los grupos pequeños.
•Muestra al grupo en un papelógrafo los distintos tipos de violencia que existen (o proporciona a los
participantes una copia de la hoja de apoyo), destacando que uno de los tipos más reconocidos es la
violencia física, sin embargo enfatiza la existencia de otro tipo de agresiones que aunque no son físicas
(como los insultos, humillaciones, celos, etc.) también afectan el bienestar emocional de quienes las
padecen.
Hoja de apoyo
Tarjeta 8
Tipos de violencia
Psicológica: la violencia psicológica y/o emocional puede darse antes, durante o después del abuso
físico o acompañarlo, sin embargo, no siempre que hay violencia psicológica hay abuso físico. Este
tipo de violencia atenta directamente contra la autoestima y estabilidad emocional haciéndonos
sentir personas humilladas, devaluadas, inútiles, incapaces o indefensas; se manifiesta con amenazas, insultos, burlas, acusaciones infundadas. Dentro de este tipo de violencia se incluye la violencia
verbal. Podemos considerar que la violencia psicológica es la forma más común de la violencia, no
deja pruebas tan visibles como la violencia física y se ejerce mediante lenguaje verbal y no verbal
en actos como:
a) Gritos
b) Amenazas de daño
c) Aislamiento social y físico
d) Celos por parte de la pareja (celotipia) y posesividad extrema de la pareja
e) Intimidación, degradación y humillación
f) Insultos o críticas constantes
g) Acusaciones sin fundamento
h) Atribución de culpas por todo lo que pasa
i) Ignorar o no dar importancia o ridiculizar las necesidades de la persona
j) Las mentiras constantes
k) El constante rompimiento de promesas
l) Llevar a cabo acciones destructivas contra los objetos, animales o seres queridos de la persona
51
sección iii
continuación...
Hoja de apoyo (Tarjeta 8)
Tipos de violencia
Económica: la violencia económica es una forma de controlar, al crear dependencia monetaria. Incluye
control y manejo del dinero, de las propiedades y, en general, de todos los recursos de la familia, entre
los cuales podemos citar:
a) Tener que justificar cada vez que la mujer o las hijas y los hijos necesitan dinero
b) A pesar de contar con liquidez, proporcionar menos dinero del que necesita la pareja y la familia
c) Inventar que no hay dinero para gastos que la pareja considera importantes
d) Gastar el dinero de la familia sin consultar a la pareja
e) Disponer del dinero y los bienes de la pareja sin consultarla
f) Que la pareja, sin consultarlo, tenga a su nombre las propiedades derivadas del vínculo conyugal
g) Privar a la pareja, hijas e hijos de vestimenta, comida, transporte o refugio
Física: se llama violencia física cuando la mujer, hijas e hijos se encuentran en una situación de peligro
físico, reciben cualquier tipo de agresión dirigida a su cuerpo y/o están controlados por amenazas de
uso de la fuerza física como:
a) Empujones, bofetadas, puñetazos, patadas, arrojar objetos
b) Sujetar, amarrar y/o paralizar
c) Abandono en lugares peligrosos
d) Negación de ayuda cuando la mujer, hijas e hijos están enfermas/os o heridas/os
e) Heridas por arma de fuego o punzo cortante
f) Estrangulamiento
Sexual: Incluye cualquier tipo de sexo forzado o degradación sexual como:
a) Intentar que una persona tenga relaciones o practique actos sexuales en contra de su voluntad
b) Obligar a alguien a realizar actos sexuales cuando no está en sus cinco sentidos o tiene miedo a
negarse
c) Lastimar físicamente durante el acto sexual o atacar los genitales, incluyendo la introducción de
objetos o armas en la vagina, boca o ano
d) Forzar a tener relaciones sexuales sin protección anticonceptiva, ni para la prevención de infecciones
de transmisión sexual (incluido el vih/sida)
e) Criticar o insultar con nombres sexualmente degradantes
f) Acusar falsamente de actividades sexuales con otras personas
g) Obligar a ver películas o revistas pornográficas
h) Forzar a observar a la pareja mientras ésta tiene relaciones sexuales con otra persona
i) Burlarse, ridiculizar o vulnerar a las personas con una orientación sexual diferente
52
género o sexo ¿a quién le importa?
Cierre
• Explica que existen roles de género tradicionales que son dañinos y que reflejan violencia de género,
como —por ejemplo— los matrimonios entre jóvenes acordados previamente por los padres o “robarse”
a las mujeres en vez de acordar noviazgos para que la pareja se conozca.
• Refuerza la idea de que tanto las mujeres como los hombres, los niños, las niñas, las y los adolescentes,
jóvenes y las personas adultas sufren violencia. En algunos casos la violencia no está relacionada con
el sexo de las personas (como los robos en casa, los asaltos en las carreteras, las peleas en la escuela,
entre otros); sin embargo, la mayoría de las veces la violencia se ejerce en mayor proporción contra
las mujeres.
Posibles maneras de adaptar el ejercicio
Adaptación 1
• Pide a los grupos pequeños que enumeren los tipos de violencia que conocen y que luego elaboren
una definición de violencia de género que abarque las formas de violencia que se enumeran en la
hoja de apoyo.
• Discute las formas de violencia de género anotadas en la hoja de apoyo y pregunta al grupo: “en tu
comunidad ¿cuáles formas de violencia son las más frecuentes? ¿Por qué crees que sea así?” Analiza
con el grupo sus conclusiones y cierra esta parte de la sesión preguntando a las y los participantes
cómo se sienten.
Historia del ciclo vital y la violencia de género (Tarjeta 9)
Objetivo
Las y los participantes analizarán la violencia de género que pueden padecer las personas a lo largo de su
vida y los factores que incrementan o reducen la vulnerabilidad frente a la violencia en contra de las y los
jóvenes.
Tiempo: 60 minutos
Materiales necesarios
Hojas de apoyo con las preguntas, papelógrafos y plumones.
Descripción del ejercicio
Introducción
• Señala que en esta sesión trabajarán el tema de violencia a partir de su experiencia de vida, recuerda
al grupo que es importante que lo que aquí se diga, aquí se quede, evitemos compartir con otras
personas los comentarios de este taller.
• Explica que existen diferentes modalidades de violencia de género dependiendo de la edad de las
personas. Esas diferentes formas de vivir la violencia de acuerdo con el género y la generación serán
los temas que analizaremos a continuación.
53
sección iii
Desarrollo
• A manera de ejemplo, marca una línea horizontal a la mitad de un papelógrafo o en el pizarrón y dibuja la forma de una persona en el lado superior izquierdo. Pide al grupo que cuenten la vida de una
persona imaginaria y que relaten algunos eventos de su vida en donde haya estado involucrado/a con
situaciones de violencia.
• Pide a cada uno de los equipos que construyan una
historia similar en un papelógrafo explicando las
situaciones que vivió la persona. Señala al grupo
que los eventos felices o influencias positivas en la
vida de la persona se marcarán en la parte superior
del papelógrafo (con palabras, símbolos o dibujos); y
los eventos tristes o influencias negativas se pondrán
debajo de la línea. También deberán utilizar líneas
punteadas entre eventos para mostrar de qué manera
las experiencias más tempranas influyeron en las
vivencias posteriores.
• Las y los participantes tendrán que decidir si el evento
vivido fue positivo o negativo. Algunos eventos pueden estar sobre la línea (ni abajo, ni arriba de ella), si
presentan tanto aspectos positivos como negativos.
• Cuando todos los grupos hayan completado su historia de vida, escribirán las respuestas a las siguientes
preguntas en la parte de atrás del papelógrafo, de
modo que puedan presentar la historia de vida y las
respuestas a las y los demás participantes:
1. ¿Qué situaciones y circunstancias pusieron en
riesgo de sufrir violencia a la persona de quien
relataron la historia?
2. ¿Qué situaciones y circunstancias permitieron que
la persona desarrollara su capacidad para enfrentarse a los riesgos?
3. ¿Qué características, habilidades, personas y servicios pueden ayudar a que personas como las
descritas en las historias, se enfrenten a situaciones
de riesgo, especialmente durante la infancia y la
adolescencia?
• Pide al grupo que identifique qué persona o personas
significativas estuvieron presentes o ausentes en diferentes momentos de la vida de la/el protagonista de
la historia, para darle consejos, orientación u otro tipo de apoyo (por ejemplo, un amigo o una amiga,
una promotora de salud, un integrante de su familia, un/a profesor/a, un sacerdote, un/a líder de la
comunidad, su patrón o patrona, entre otros).
• Presenta en un papelógrafo o pizarrón la hoja de apoyo que contiene formas de violencia relacionadas
con la edad y pregunta si conocen casos similares en las comunidades cercanas o en su comunidad.
54
género o sexo ¿a quién le importa?
Hoja de apoyo
Tarjeta 9
Violencia de género en las diferentes etapas de la vida
Las personas que se dedican a estudiar la violencia en distintos países y culturas, han identificado
muchas formas en que se ejerce la violencia hacia las mujeres y las niñas, en las diferentes etapas de
la vida, y señalan las siguientes formas de maltrato según su edad. Si bien los tipos de violencia que
hemos visto: sexual, psicológica, física y económica, se pueden dar a través de todo el ciclo vital, sus
manifestaciones son diferentes de acuerdo con la edad.
a) Prenatal: Abortos según sexo (en algunas culturas las mujeres son obligadas a practicarse un
aborto si el producto de la concepción es de sexo femenino). Malformaciones consecuencia de la
violencia durante el embarazo (hay bebés que sufren de problemas congénitos derivados de violencia
durante el embarazo).
b) Infancia: Infanticidio femenino, abuso físico, sexual y psicológico hacia las niñas. Que a las niñas
les den de comer menos que a los niños.
c) Niñez: Matrimonio infantil, mutilación genital, abuso físico, sexual y psicológico, incesto, prostitución infantil, explotación laboral y obligar a niñas y niños a participar en actos relacionados
con la pornografía, tráfico infantil.
d) Adolescencia: Durante el cortejo o noviazgo contactos sexuales no deseados, imponiéndolos a través
de la violencia física o emocional. Incesto, estupro, abuso sexual, hostigamiento o acoso sexual,
sexo forzado por razones económicas, prostitución y pornografía obligadas, violación, tráfico de
adolescentes. Tener sexo sin condón, aunque la pareja lo solicite.
e) Vida adulta: Hostigamiento o acoso sexual, violación, violencia conyugal (sexual, física, económica
o psicológica), homicidio conyugal. No usar condón aunque la pareja lo solicite.
f) Vejez: Suicidio forzado u homicidio de viudas por razones económicas, violencia económica, física,
sexual o psicológica.
Cierre
•Resalta que las personas (especialmente las mujeres adolescentes y jóvenes, por su situación de género)
pueden atravesar por experiencias de violencia que implican situaciones de riesgo, por eso es importante fortalecer sus habilidades y ayudarles a identificar a personas y servicios que puedan ayudar a
enfrentar estas situaciones de riesgo.
•Algunas de las prácticas más comunes en las comunidades rurales e indígenas en relación con la violencia
de género hacia la población joven están relacionadas con la justificación de la violencia como una
forma de corregir comportamientos, el control durante el noviazgo, el abuso sexual vinculado con el
alcoholismo de los hombres jóvenes, la presión a las jóvenes para que tengan relaciones sexuales con
el novio, los matrimonios forzados por las familias, y pueden ser agravadas por otros factores como
la pobreza y la falta de oportunidades para estudiar fuera de la comunidad.
•Comenta también que las situaciones de violencia de género y los factores de riesgo que enfrenta
una persona en las primeras etapas de su ciclo de vida pueden tener un impacto en su vida futura.
55
sección iii
Algunas situaciones pueden llevar a múltiples problemas de salud, por ejemplo, una niña violentada
en su infancia puede tener desequilibrios emocionales durante su vida adulta o una jovencita que es
acosada y violada sexualmente puede contraer una its, incluso vih/sida, o embarazarse y —para evitar
la vergüenza— pudiera exponerse a un aborto en condiciones de riesgo.
•Los ejemplos anteriores alertan sobre la necesidad de abordar los problemas relacionados con la violencia de género a partir de un enfoque que considere el ciclo vital: la gente joven requiere desarrollar
habilidades y contar con servicios que tengan un impacto tanto en su vida presente como futura. Es
importante que esta población solicite talleres para desarrollar habilidades en la toma de decisiones,
para no exponerse a daños en su salud inmediata y su vida futura.
•Las y los jóvenes tienen derecho a pedir y recibir: toda la información y servicios que necesiten; educación sexual en forma integral; acceso a métodos anticonceptivos, condones y anticoncepción de
emergencia; acceso a aborto por violación; las direcciones de instituciones a las que pueden acudir en
caso de violencia; lugares en donde puedan obtener apoyo para problemas asociados con la violencia
de género y/o su salud sexual y reproductiva.
Revelando la violencia familiar (Tarjeta 10)
Objetivo
Las y los participantes identificarán algunas formas de violencia familiar y cómo éstas pueden afectar la
salud de las personas que la experimentan y de quienes la ejercen.
Tiempo: 60 minutos
Materiales necesarios
Hojas de apoyo con las preguntas.
Descripción del ejercicio
Introducción
•Forma equipos de cinco personas.
•Comienza la sesión expresando las diversas formas en que podemos observar
situaciones de maltrato y violencia entre
los miembros de la familia y las comunidades en donde vivimos. Para ejemplificar,
puedes analizar un relato de un hecho
violento que haya ocurrido en alguna de
las comunidades cercanas a donde estás
trabajando.
•Explica que vamos a analizar los efectos
del maltrato y la violencia, tanto en las
víctimas como en las y los agresores.
56
género o sexo ¿a quién le importa?
Desarrollo
•Entrega a cada equipo escenas relacionadas con situaciones de violencia para que las dramaticen.
Pídeles que preparen y practiquen una escena de diez minutos, usando palabras, canciones, danzas
o simplemente el lenguaje corporal. La escena deberá presentar eventos que pueden llevar al tipo de
violencia familiar a la que alude el guión. Cada integrante del grupo debe asumir un papel.
Ejemplos de escenas:
•Un joven insulta a sus hermanos y hermanas adolescentes, le rompe a una de ellas la libreta en donde
está haciendo la tarea, ella se enoja y le dice a la madre, quien le ordena que lo deje y que se ponga
a lavar los trastes.
•Una madre de familia le pide a su esposo,
que acaba de cobrar el dinero de la cosecha,
que le dé para llevar al médico a su hijo
pequeño porque está enfermo y éste le dice
que no tiene y se va a la cantina a tomarse
unos tragos con los amigos.
•El padre de familia llega borracho a la casa
y comienza a gritar e insultar a su esposa
y sus hijas e hijos, después trata de golpear
a su esposa y las hijas y los hijos jóvenes la
defienden.
•Un niño le cuenta a su mamá que es abusado sexualmente por su primo más grande, lo amenaza con
golpearlo para que no le cuente a nadie.
•Pide al grupo que conteste las siguientes preguntas respecto de las dramatizaciones:
1. ¿Cómo creen que se sientan las personas maltratadas después de haber vivido situaciones de violencia como éstas?
2. ¿Cómo se sentiría la persona que ejerció el maltrato?
3. ¿Qué puede hacer una persona para ayudarse a sí misma cuando ha vivido una experiencia como
éstas?
4. ¿Qué pueden hacer las personas cercanas para apoyar a la persona que ha vivido una experiencia
de este tipo?
Cierre
•Señala que a la mayoría de las personas (y especialmente a los hombres), se nos hace difícil hablar
sobre la violencia familiar y que solamente cuando comencemos a hablar de manera pública sobre las
relaciones de maltrato en las familias, empezará a disminuir la ”tolerancia” que tiene la comunidad
frente a este tipo de actos que ponen en riesgo la salud y la vida de las personas. En la medida en que
el silencio se mantiene, la persona acumula tensión que genera malestares diversos y por ello tiene
que asistir recurrentemente a los servicios médicos.
•Explica que entre aquellas personas que han vivido experiencias de violencia sexual existe la tendencia a
sentirse culpables por lo que les pasó. Por ejemplo, una joven que es abusada sexualmente por su padre,
tío o abuelo, puede pensar que ella causó esa conducta en tanto permitió algún tipo de acercamiento
afectivo. Sin embargo, esto no significa que la violencia estuvo justificada; no hay ninguna excusa para
forzar a alguien a hacer algo, en contra de su voluntad, que pueda ser dañino para su salud.
57
sección iii
•Explica que hay personas que ejercen funciones de autoridad (en nuestra comunidad o en la familia)
que utilizan públicamente expresiones que parecen justificar la violencia; toca a otras personas de la
familia y la comunidad oponerse a dichas autoridades, por ejemplo: hablando en las asambleas comunitarias sobre el tema, denunciando la violencia a través de los medios de comunicación como la radio,
la televisión o los periódicos, mediante pláticas con los padres en las escuelas y/o en las actividades de
la iglesia, entre otros.
•Enfatiza la idea de que la gente joven tiene derecho a vivir una vida libre de violencia.
•Asegúrate de haber recolectado información sobre los lugares específicos que existen en la comunidad
o cerca de ésta, para poder dar referencias concretas sobre los lugares a donde los y las jóvenes pueden
acudir en caso de necesitarlo.
•Puntualiza que como consecuencia de la violencia familiar las personas están expuestas a múltiples
problemas de salud mental y física como: depresión, ansiedad, trastornos de pánico, trastornos del
apetito, disfunción sexual, autoestima baja, riesgo de abuso de alcohol y drogas, lesiones, discapacidad,
obesidad, infecciones de transmisión sexual, colitis, dolor crónico, embarazos no deseados, abortos
peligrosos, trastornos ginecológicos e, incluso, puede haber consecuencias mortales como el homicidio
y el suicidio.
El árbol de la violencia en la pareja (Tarjeta 11)
Objetivo
Las y los participantes analizarán la violencia durante el noviazgo y en la pareja, enfatizando las consecuencias
para las personas jóvenes y buscando posibles soluciones.
Tiempo: 90 minutos
Materiales necesarios
Papelógrafos con el dibujo de un árbol que tiene raíces y ramas (preparado por ti), hojas blancas o de colores,
cinta adhesiva, hojas de apoyo y plumones. Grabadora y música de relajación.
Descripción del ejercicio
Introducción
•Para comenzar esta actividad, pide a las y los
participantes que se coloquen de pie porque
van a realizar un ejercicio físico.
•Señala que esta actividad se realizará en dos
partes.
•Pídeles que estiren sus brazos y sus piernas,
mientras pones la música que preparaste
para esta actividad.
58
género o sexo ¿a quién le importa?
Desarrollo de la primera parte
•Da las siguientes instrucciones mientras
ellas y ellos las ponen en práctica:
—Usen su cuerpo como si fueran actores
de teatro, a continuación imagínense
como una semilla muy, muy pequeña;
colóquense en cuclillas o si quieren (y
el espacio lo permite), acuéstense en
posición fetal.
—A medida que cuente hasta diez, lentamente, comiencen a levantarse como si
fueran un árbol que va creciendo, hasta
terminar con muchas hojas y flores, sus brazos son las ramas, sus dedos las frutas.
—Cierren los ojos y sientan cómo la brisa mueve y sacude suavemente sus ramas, después viene una
tempestad, luego cesa el viento y viene la calma. Muevan sus brazos como si fueran ramas, luego de
manera alborotada y por último háganlo nuevamente con suavidad.
—Dejen que el árbol se sienta a sí mismo. Dejen que las raíces se muevan un poco (muevan sus pies),
después las ramas (brazos y manos) y las frutas (dedos).
—Ahora imagínense que el árbol está marchitándose. El daño entra al árbol a través de sus raíces, propagándose hasta las frutas (los dedos se mueren); la resequedad avanza hasta las ramas (los brazos
y las manos mueren) y al final el tronco también muere. Todo el árbol se muere (terminen la escena
cayéndose al piso).
•Pide al grupo que tome asiento y explica que cuando un árbol está sano obtiene los nutrientes que necesita de sus raíces. Pero cuando “las frutas” comienzan a secarse o malograrse, es señal de un problema.
Puede que los nutrientes sean insuficientes o que estén totalmente dañados. Lo que podemos ver son
signos (las frutas, hojas y ramas mueren) que indican que posiblemente hay un problema a nivel de las
raíces. Lo mismo sucede en la vida, los problemas que vemos, tales como la violencia en el noviazgo y
en la pareja, son resultados observables de otros problemas que ya existían (como el ejercicio desmedido
del poder de algunos hombres sobre las mujeres o los estereotipos y roles de género).
Desarrollo de la segunda parte
•Divide al grupo en equipos de cuatro o
cinco personas.
•Pon el dibujo del árbol con raíces y numerosas ramas con sus frutos en un lugar que
todos puedan ver y explica al grupo que
cuentan con 15 minutos para reflexionar
sobre esta actividad.
•Señala que en el tronco tendrán que
escribir un problema relacionado con la
violencia en la pareja o durante el noviazgo
(sea psicológica o emocional, económica,
física y/o sexual). El problema elegido
deberá analizarse en equipo considerando
cómo afecta a un/una joven.
59
sección iii
•Después de la discusión en equipo,
pídeles que también escriban todas las
causas del problema en las raíces del
árbol y las consecuencias del mismo en
las frutas.
•Una vez que hayan finalizado esta
tarea, entrégales hojas de colores
para que cada equipo escriba en ellas
algunas formas de prevenir las causas
y consecuencias del problema de la
violencia en la pareja (esto es, entre
esposos, amantes y novios) luego pídeles que las peguen cerca del tronco
del árbol.
•Cuando los equipos hayan finalizado su árbol, destaca la importancia de conocer los derechos sexuales
y reproductivos, como una herramienta básica para entender que la violencia no es algo natural y que
atenta contra nuestra integridad como seres humanos.
•Revisa la hoja de apoyo sobre los Derechos de las y los jóvenes y la violencia de género poniendo énfasis en los derechos a vivir libres de violencia sexual (punto 6) y de discriminación (punto 9). Analiza
brevemente los contenidos de los mismos y su significado para la gente joven de las comunidades en
donde realices el taller.
Hoja de apoyo
Tarjeta 11
Derechos de las y los jóvenes y la violencia de género
La Cartilla de los Derechos Sexuales de las y los Jóvenes, de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y la Comisión de Organizaciones Civiles, promotora de la “Campaña Nacional por los Derechos
Sexuales de las y los Jóvenes: Hagamos un Hecho Nuestros Derechos”, difunde desde el año 2003 una
serie de derechos para este segmento de la población en donde incluye, el derecho a:
1. Decidir de forma libre sobre mi cuerpo y mi sexualidad.
2. Ejercer y disfrutar plenamente mi vida sexual.
3. Manifestar públicamente mis afectos.
4. Decidir con quien compartir mi vida y mi sexualidad.
5. Respeto de mi intimidad y vida privada.
60
género o sexo ¿a quién le importa?
continuación...
Hoja de apoyo (Tarjeta 11)
Derechos de las y los jóvenes y la violencia de género
Es de especial importancia destacar que en el tema de violencia las organizaciones de jóvenes y las
instituciones del Estado se comprometieron a luchar porque las y los jóvenes tuvieran el derecho a:
6. Vivir libre de violencia sexual
•Cualquier forma de violencia hacia mi persona afecta el disfrute pleno de mi sexualidad.
•Tengo derecho a la libertad, a la seguridad jurídica, a la integridad física y psicológica.
•Ninguna persona me puede acosar, hostigar, abusar o explotar sexualmente.
•El Estado debe garantizarme el no ser torturada/o ni sometida/o a maltrato físico y psicológico,
abuso, acoso o explotación sexual.
7. La libertad reproductiva (derecho a decidir tener o no hijos/as, cuándo y con quién).
8. La igualdad de oportunidades y la equidad.
Las y los jóvenes de comunidades rurales e indígenas, estamos continuamente expuestos a otras
formas de violencia que no necesariamente se relacionan con el género, pero sí con la edad y la
pertenencia a pueblos que tienen una cultura, origen y tradiciones diferentes a la de la mayoría de
los/as mexicanos/as. Por ello, es importante enfatizar que tenemos derecho a:
9. Vivir libre de toda discriminación
•Las y los jóvenes somos diversos y, por tanto, tenemos diferentes formas de expresar nuestras
identidades.
•Tengo derecho a que no se me discrimine por mi edad, género, sexo, preferencias, estado de
salud, religión, origen étnico, forma de vestir, apariencia física o por cualquier otra condición
personal.
•Cualquier discriminación atenta contra mi dignidad humana.
•El estado debe garantizarme protección contra cualquier forma de discriminación.
10. Información completa, científica y laica sobre sexualidad.
11. Educación sexual.
12. Servicios de salud sexual y reproductiva.
13. Participación en las políticas públicas sobre sexualidad.
Cierre
•Explica que las raíces de la violencia en la pareja están ligadas a los abusos de poder que ejercen los
hombres contra las mujeres, la violencia implica mayoritariamente el uso de la fuerza para producir
un daño. Cuando nos referimos al hombre como “el agresor” y a la mujer como “la víctima”, estamos
haciendo una generalización válida, porque en el mundo las estadísticas muestran que la mayoría de
las víctimas de violencia de género son las mujeres.
61
sección iii
•Expón al grupo que, por lo regular, este tipo de
violencia tiene periodos de tiempo que algunas
especialistas denominan “ciclo de violencia conyugal” o en la pareja y que consta de tres etapas,
descritas en la hoja de apoyo.
•Resalta que las diferencias de género también
hacen que los problemas de violencia en la pareja
tengan distintas consecuencias para las mujeres
y los hombres. Puedes dar un par de ejemplos:
en la violencia cruzada, donde tanto el hombre
como la mujer golpean e insultan al otro, el daño
que puede hacer la mujer es menor cuando sólo usa sus manos; sin embargo, en los casos de violencia
conyugal en los que hay riesgo para la vida, las mujeres se valen de utensilios con los que logran hacer
daño al hombre y generalmente la magnitud es mayor.
•Señala que las soluciones sugeridas deben considerar las necesidades específicas de las mujeres y los
hombres, (por ejemplo, las jóvenes requieren desarrollar habilidades de negociación para evitar tener
contactos sexuales sin protección anticonceptiva y condón; mientras que los hombres pueden hablar
con otros hombres sobre la importancia de los derechos de las mujeres). Comenta al grupo que un
factor para empoderar a las mujeres es que conozcan sus derechos sexuales y reproductivos, los cuales
incluyen su derecho a vivir sin violencia.
Hoja de apoyo
Tarjeta 11
El ciclo de la violencia en la pareja
Leonor Walter
Etapa 1. Acumulación de tensión
En la relación de pareja empiezan a presentarse desacuerdos que van generando ansiedad y hostilidad. Aparecen los primeros indicios de violencia emocional o psicológica en los que el hombre hace
caso omiso a las necesidades y palabras de la mujer, se burla de ella, de sus ideas y su forma de ver el
mundo. Además de que la culpa de todos los males que viven como pareja y como personas, se enoja
frecuentemente y discute con ella. A veces las mujeres prefieren aguantar en silencio estas agresiones para evitar que aumenten en frecuencia e intensidad; otras veces prefieren resistir negándose a
hacer lo que el hombre quiere. En este segundo caso, la mujer hace estallar la violencia para no vivir
en la zozobra de la espera. Esta fase de la violencia genera en la mujer efectos como miedo a hablar,
depresión, llanto continuo y sentimiento de minusvalía.
62
género o sexo ¿a quién le importa?
continuación...
Hoja de apoyo (Tarjeta 11)
Etapa 2. Episodio de golpes agudos
Al profundizarse la tensión emocional, el hombre reacciona ejerciendo violencia física. Aunque esta
es una fase corta, sus consecuencias pueden ser graves. En esta fase podemos registrar empujones,
bofetadas, horas de angustia, amenazas acompañadas de armas u objetos pesados que ponen en
riesgo la salud y vida de las mujeres. Cada una de estas formas de abuso va acompañada de palabras
hirientes que generan también dolor. Durante esta fase, puede presentarse además el abuso sexual.
Esto garantiza, a favor del agresor, un clima de miedo e inseguridad, así como en la mujer la sensación
de no tener escapatoria.
Etapa 3. Luna de miel
En esta etapa hay una especie de resolución del conflicto. El hombre se arrepiente y pide perdón por el
mal ocasionado y promete no volver a hacerlo. En esta fase, el hombre trata a la mujer como si nada
hubiera ocurrido. A lo largo de este proceso cíclico, las mujeres aprenden a conocer las reacciones
de su pareja y creen prevenir la violencia al hacer cosas para evitar que su pareja se enoje más y con
ello lograr que disminuya o detenga su cólera. Sin embargo, la depresión aumenta cuando ven que a
pesar de sus esfuerzos la violencia no cesa, y que por el contrario, incrementa su riesgo y frecuencia.
En este proceso, con la finalidad de prevenir la violencia, muchas veces las mujeres se someten a los
deseos de los hombres.
El ciclo se repite y cada repetición significa un deterioro mayor de las capacidades de la mujer y va
aunado a su capacidad de defensa. Aumenta su sensación de soledad, de que no hay nada que hacer
y piensa que es inútil resistirse.
Cada pareja tiene su propio ritmo y las fases duran un tiempo característico en cada caso, pero las
etapas son cada vez más cortas y la violencia más intensa.
Es importante destacar que este ciclo de violencia conyugal puede presentarse con la misma intensidad
durante el noviazgo, por lo que la gente joven debe conocerlo para revisar si en sus vínculos afectivos
se ha presentado o empieza a manifestarse.
El siguiente esquema muestra el ciclo de la violencia que va desde la preparación de la tormenta/
violencia, la tormenta/violencia y la salida del sol/reconciliación.
63
sección iii
Cierre
•Compara las relaciones de noviazgo y el estado de los árboles. Señala al equipo cuyo árbol no tiene
opciones y su fin es morir, que su árbol habla de las situaciones en las que permitimos que la violencia
sea vista como algo natural o normal en la relación de pareja; y al equipo para quienes el árbol tiene
opción de florecer, enfatízales que si bien en algún momento se permitió la violencia y el abuso en la
pareja, siempre existe la opción de cambiar, buscar ayuda y transformarnos en árboles frondosos, libres
de violencia. El que por algún momento estuviéramos atrapados en el círculo de la violencia, no quiere
decir que tengamos que vivirlo indefinidamente o que tengamos que concluir la relación de pareja,
con severos daños a nuestra afectividad y capacidad de amar.
Posibles maneras de adaptar el ejercicio
Adaptación 1. (Se sugiere aplicar esta adaptación sólo en caso en que el grupo esté bien integrado y con
un nivel alto de confianza entre sus participantes)
•Realiza la primera parte del ejercicio tal y como se describe.
•Luego de ella, pide al grupo que se divida en cuatro equipos.
•Dos equipos dibujarán un árbol seco, marchito y los otros dos equipos dibujarán un árbol frondoso y
con frutos.
•Señala que cada equipo debe escribir en las raíces de estos árboles cómo sería la relación de noviazgo
si se pareciera al árbol que les tocó dibujar. Por ejemplo, la relación dibujada como árbol seco estaría
basada en chantajes, malos entendidos, rivalidad constante, sin comunicación asertiva.
•Explica que es necesario escribir en las raíces y en el tronco las causas que tendrán como resultado
las condiciones del árbol y de la relación de pareja y que deberán agregar estrategias para mejorar la
relación a partir de nutrientes que puedan sanar al árbol (agua, vitaminas, sereno, sol, etcétera).
Adaptación 2
•Realiza la primera parte del ejercicio tal y como se describe.
•Pide al grupo que forme cuatro equipos.
64
•Indica a cada uno de los equipos que dibuje un árbol sin ningún tipo de cuidados, sin agua, sin sol, sin
nutrientes.
género o sexo ¿a quién le importa?
•Posteriormente, pídeles que piensen las características de una relación de noviazgo donde exista violencia
de pareja (escasa comunicación, chantajes, golpes, gritos, etcétera) y que escriban esas características
en las raíces del árbol que acaban de dibujar.
•Comenta que las características que han escrito, son el alimento del árbol. Pídeles que contesten la
siguiente pregunta: ¿ese árbol que dibujaron tiene opción de florecer o de morir?
Estrategias comunitarias para abordar la violencia
familiar (Tarjeta 12)
Hemos dividido esta sección en tres momentos para que puedas revisar con el grupo los diversos niveles de
intervención comunitaria en el tema de la violencia familiar. Va a ser necesario el reconocimiento de los
límites de tu intervención, así como de los recursos con los que se cuenta en la comunidad. Sabemos por
experiencia que en las áreas rurales no es posible encontrar todos los servicios que se requieren para una
intervención integral, por lo que será indispensable que se puedan crear estrategias de apoyo comunitario
(sensibilización de autoridades locales, capacitación de profesoras/es, talleres para hombres y para padres y
madres, entre otros) o formar grupos de autorreflexión con personas en crisis.
1. Principios éticos y límites de la intervención
Objetivo
Las y los participantes analizarán sus habilidades de intervención en situaciones concretas de violencia
familiar o durante el noviazgo.
Tiempo: 20 minutos
Materiales necesarios
Papelógrafo u hoja de apoyo con información sobre la valoración del riesgo, plumones de colores, cinta
para pegar.
Descripción del ejercicio
Introducción
•Para empezar: pide a las y los participantes del taller que se reúnan en el equipo
con el que han venido trabajando en las
sesiones anteriores o establece grupos de
tres o cuatro personas.
65
sección iii
Desarrollo
•Una vez en equipos, pídeles que respondan a las siguientes preguntas:
1. Te das cuenta que una vecina tuya está viviendo violencia por parte de su pareja. ¿Hay algo que
puedas hacer como miembro de esa comunidad para ayudarla? ¿Hay algo que pueda hacer la comunidad en su conjunto? Describe cuáles podrían ser esas acciones y, si no hay opciones, por qué no las
hay y cuáles podrían ser las acciones a fomentar en la comunidad para ayudarla.
2. Te das cuenta de que una compañera de tu salón está sufriendo violencia por parte de un miembro
de su familia. ¿Qué podrías hacer para ayudarla a detener la violencia? ¿Hay algo que podría hacer
la escuela o la comunidad? ¿Hay algunas estrategias que ha utilizado tu escuela o tu comunidad que
consideres efectivas para controlar la violencia en estos casos?
3. Una amiga tuya te cuenta que su novio tiene comportamientos agresivos y de control hacia ella.
¿Hay algo que podrías hacer para ayudarla? ¿Qué necesitarías para poder ayudarla? ¿Hay algo que
podría hacer la comunidad?
•Proporciona a cada uno de los equipos
una hoja de rotafolio y una pregunta.
Diles que anoten sus respuestas una vez
que lo hayan discutido en su equipo.
•Una vez que terminen el análisis y la discusión, solicita que —por equipo— hagan
una exposición de cinco minutos con sus
respuestas.
•Comenta algunos de los puntos que se
presentan en la hoja de apoyo.
66
género o sexo ¿a quién le importa?
Hoja de apoyo
Tarjeta 12
Principios éticos y límites para la intervención
•Como hemos visto, las personas aprendemos a vivir con la violencia como si fuera algo natural,
incluso necesaria para subsistir. Por eso, cuando analizamos estos temas, comenzamos un proceso
de reflexión que nos permite ver este fenómeno como una violación a nuestros derechos humanos fundamentales y nos mueve a querer resolver los problemas. Sin embargo, entre reconocer y
actuar para evitar la violencia, hay tiempos y procesos diferentes.
•Es muy importante saber que son las personas afectadas quienes tomarán las decisiones sobre su
situación, en el tiempo y modo que a ellas convenga, y que sólo ellas conocen la dimensión de la
violencia que viven. Lo que las y los jóvenes activistas podemos ofrecer son opciones acerca de las
instituciones en las cuales les proporcionen herramientas para la toma de decisiones, por lo que
será necesario que cuentes con un directorio actualizado que puedas facilitar a cada comunidad
o grupo con el que trabajes.
•Las respuestas frente a estas problemáticas son diversas, por lo que te recomendamos respetar
el proceso de cada persona, y no enjuiciar “su falta de decisión” por el hecho de que pueda estar
cambiando de idea constantemente.
•Muchas de las mujeres que sufren violencia familiar o de pareja tratan de ocultar su situación
con los miembros de su comunidad para evitar las críticas, pues muchas veces tienden a culparlas
por la violencia de la cual son objeto (algunos comentarios comunes en comunidades rurales
e indígenas son: “le pegan porque no hace la comida a tiempo”, o “porque sale de su casa muy
seguido”, o “porque no le pide permiso a su esposo para salir”, etcétera).
•En las comunidades rurales e indígenas, hablar de estos temas puede significar “transgredir” las
tradiciones o costumbres, sobre todo para las personas adultas; sin embargo, las y los jóvenes
podemos influir para que las cosas se modifiquen paulatinamente.
Cierre
•Es importante hacer sentir a las personas que están viviendo violencia que no están solas y que existen
alternativas para solucionar esa problemática.
•Destaca que la violencia no es un problema privado y que sus efectos impactan a la comunidad en
su conjunto. Por ello es importante que sus miembros se sensibilicen y se organicen para atender el
problema y apoyar a las personas afectadas.
67
sección iii
2. Importancia de las redes comunitarias
Objetivo
Las y los participantes analizarán mediante un juego la importancia de contar con una red de apoyo en casos
de violencia familiar y de género.
Tiempo: 20 minutos
Materiales necesarios
Quince madejas de estambre de diferentes colores (procura que haya una para cada participante del taller),
cinta adhesiva y fotocopias con el directorio de organizaciones.
Descripción del ejercicio
Introducción
•Inicia el ejercicio hablando de la importancia de tener un grupo de referencia o un plan de seguridad
comunitaria para los casos de violencia de género.
Desarrollo
•Entrega a cada participante una madeja de estambre de un color diferente. Solicítales que se pongan
de pie, dejen sus cosas en las sillas y que despejen el centro del salón.
•Pídeles que formen una línea en el centro del salón. Una vez ahí, con todas y todos mirando hacia el
mismo lugar, solicita que localicen un punto y no lo olviden.
•Indícales que giren noventa grados sobre su propio eje a la izquierda y que elijan otro punto y así
sucesivamente hasta que hayan girado y elegido cuatro puntos. Es importante hacerles saber que no
importa lo lejano, oculto o difícil que esté el punto, pero que el punto que elijan sea el que más les guste
o llame la atención desde donde están mirando. Procura que el salón donde se realiza esta actividad
no sea muy alto o de paredes de tirol, pues podría dificultarse la actividad.
•Entrega cinta adhesiva a cada participante y diles que peguen una hebra en cada punto elegido sin
romper la madeja y no importa si alguien más escogió el mismo punto.
•Una vez que todas y todos hayan concluido esta tarea, pídeles que se acuesten en el piso y observen
cómo ha quedado el salón.
68
género o sexo ¿a quién le importa?
•Ya que estén todas/os acostadas/os boca arriba, puedes empezar a hacer las siguientes preguntas:
—¿Qué les parece lo que ven?
—¿Cómo definirían la red que han construido?
—¿Con quién/es coincidieron?
—¿Por qué consideras que hubo estas coincidencias?
—¿Qué les parece constituir una red de apoyo para este grupo?
•Pregunta si han visitado alguna institución que trabaje con población joven y si conocen alguna organización o programa para prevenir la violencia cerca de su comunidad. Si la respuesta es positiva,
pídeles que hagan un listado de ellas; si la respuesta es negativa, puedes pedirles que investiguen para
la próxima sesión o entrégales un directorio de las organizaciones e instituciones que tú conoces, y si
tienes el nombre de la/s persona/s que puede/n atenderles, mucho mejor.
Cierre
•Cierra el ejercicio señalando que entre todas y todos ahora son un grupo y una red de apoyo para las
mujeres y otras personas que han vivido o están viviendo episodios de violencia. Recuérdales que es
importante que sean solidarias/os y se apoyen mutuamente, para evitar la violencia hacia las personas
más vulnerables y hacer respetar sus derechos.
3. Plan de seguridad
Objetivo
Las y los participantes diseñarán los lineamientos básicos de un “Plan de seguridad” para las mujeres que
decidan denunciar la violencia en sus relaciones de pareja o en su comunidad.
Tiempo: 20 minutos
Materiales necesarios
Papelógrafo, plumones y hoja de apoyo con el plan de seguridad.
Descripción del ejercicio
•Expón al grupo la importancia de contar con un plan
de seguridad adecuado a la situación específica de
la mujer, de acuerdo con su situación de riesgo, tal
y como se presenta en la hoja de apoyo.
•El plan de seguridad consiste en elaborar una guía
de pasos que la mujer puede seguir en caso de encontrarse en una situación de peligro.
•Antes de pensar en un plan de seguridad, será
necesario analizar los factores de riesgo, vulnerabilidad y protección con que cuentan la/s persona/s
afectada/s.
•Puede suceder que la víctima no tenga muy claro lo
que quiere hacer o que se sienta mal preparada para
dejar o confrontar una relación violenta.
69
sección iii
•Existe una serie de pasos o precauciones que la persona agredida puede seguir para protegerse de
próximas situaciones de violencia.
•Si detectas una persona en riesgo y ella/él no está dispuesta/o a acudir a alguna organización o institución para recibir ayuda, puedes construir un plan de seguridad con ella/él y verificar que reconoce
el riesgo que enfrenta en cada una de sus decisiones. Por lo que habrá que analizar con la persona
afectada las fases de violencia en que se encuentra, así como visualizar si está aumentando el riesgo
o peligro.
•El plan de seguridad puede incluir también recomendaciones para cuando la persona continúa en la
relación de abuso. Recuerda al grupo que no siempre es una opción dejar al agresor y sólo la persona
que está sufriendo la violencia puede valorar si esto le podría generar mayor peligro, por lo que la
decisión es de ella. Independientemente de su decisión, el plan de seguridad le puede ayudar.
•Es muy importante que analices (de manera grupal e individual) la situación de la persona y establecer
si el maltrato que vive se ha vuelto común.
Hoja de apoyo
Tarjeta 12
Plan de seguridad
Sugerencias:
•Cuando se ha hecho una evaluación del riesgo, la persona que atiende a la mujer necesita elaborar
con ella el plan de seguridad. Es indispensable que no se escriba nada, pues de ser descubierto
por el hombre violento, aumentaría el riesgo.
•Se debe ayudar a la mujer a identificar las señales de alerta, que le ayuden a reconocer que la
violencia va a empeorar y que es necesario que ponga en acción su plan de seguridad.
•La mujer debe memorizar el plan y la persona que la acompaña debe asegurarse de que la mujer tiene claros los pasos del plan, para que en un momento de crisis pueda llevar a cabo todo
el proceso y salvaguardar su seguridad. En caso de que sea necesario que la mujer acuda a un
albergue, asegurarse de que la organización de enlace tenga servicio disponible a todas horas.
Plan de seguridad para cuando la mujer está en el domicilio conyugal:
•Guardar en un lugar seguro el dinero que tenga.
•Sacar una copia extra de las llaves de la casa y guardarla en un lugar seguro fuera de la casa.
•Identificar posibles rutas de escape y lugares de refugio (por ejemplo, la casa de una pariente
o amiga, o en caso de contar con uno: un albergue) para cuando necesite dejar el domicilio
conyugal.
•Establecer un código de comunicación con sus hijos y su familia cercana o amistades, para que
en caso de empeorar la situación se movilicen o llamen a la policía.
70
género o sexo ¿a quién le importa?
continuación...
Hoja de apoyo (Tarjeta 12)
Plan de seguridad
•Saber a dónde acudir en caso de necesitar ayuda inmediata, tener accesibles los números de
teléfono y direcciones (de ser posible, llévala a conocer algún refugio o institución donde pueda
recibir ayuda).
•Guardar en un lugar seguro (si es posible fuera de la casa) los documentos importantes (como
acta de nacimiento, identificaciones oficiales de ella y de sus hijos/as, números de teléfonos importantes).
•Preparar una bolsa o maleta sencilla con ropa extra de ella y de sus hijos/as y guardarla con una
persona de confianza en donde esté bien escondida.
•Informar a las personas más cercanas sobre lo que deben hacer en caso de que haya un incidente
violento.
•Acudir a levantar una denuncia al Ministerio Público o autoridad municipal.
•Narrar detalladamente los hechos.
•Solicitar que la o el médico legista examine y dictamine los hechos y anexe su dictamen a la
averiguación. En caso de no contar con un médico legista, acudir a un médico de salubridad o del
sector privado que pueda hacer un informe.
Plan de seguridad para cuando la mujer ha salido del domicilio conyugal:
•Acudir a un servicio disponible de atención psicológica, a un grupo de mujeres maltratadas y/o a
un albergue con atención integral.
•Solicitar una orden restrictiva contra el agresor, para evitar que se acerque al lugar o lugares donde
la mujer y sus hijas e hijos se encuentran por razones de estudio, trabajo o vivienda. O acudir con
la autoridad comunitaria para que les dé alguna garantía de protección.
•Proveer mecanismos de apoyo (alertas que permitan intervenir a alguna compañera del grupo
o promotora) y redes comunitarias (directorio de organizaciones) para cuando el agresor rompa
la orden de restricción (se ha comprobado que la violencia con peligro de muerte se incrementa
cuando la mujer abandona el domicilio, por lo que es necesario que esté en un lugar seguro y cuente
con protección constante). En comunidades rurales, además de la promotora o promotor, pueden
acudir a un grupo de mujeres o a una organización no gubernamental en busca de orientación y
apoyo.
•Cuando haya presentado una denuncia, dar seguimiento a la misma y asegurarse de que las autoridades competentes hayan hecho cargos al agresor.
71
sección iii
continuación...
Hoja de apoyo (Tarjeta 12)
Plan de seguridad
Existen situaciones especiales que requieren de revisión al plantear el plan de seguridad para la
mujer que vive una situación de riesgo:
•Si la mujer usa sustancias antidepresivas, es necesario saber si puede suspender su uso, pues
podría incrementar el riesgo de muerte si interrumpe en esta etapa el consumo de las mismas.
•Si sufre agresiones físicas o sexuales, debe guardar la evidencia y presentarla ante las autoridades
competentes. Es decir, va a ser necesario pedirle que no se bañe y acuda a un hospital y solicite
un informe por escrito de la situación que pueda servirle en el caso de juicio.
•De haber sufrido violación sexual reciente, es importante entregarle anticoncepción de emergencia
y solicitarle una prueba de infecciones de transmisión sexual. Además, deberá presentarse en tres
meses a una prueba de vih/sida.
•En caso de que resultara embarazada por esta causa, explicarle que legalmente puede interrumpir
su embarazo si así lo desea y canalizarla a la institución de salud para que puedan garantizarle
ese derecho. Debido a que es difícil garantizar este punto, será necesario que la acompañes a
realizar los trámites.
Cierre
•Menciona que como líderes de la comunidad, podrán ayudar a mujeres que sufren violencia a establecer
los contactos necesarios para salvaguardar su integridad y hacer un plan de seguimiento para verificar
que el lugar donde le están proporcionando el servicio de atención (legal, psicológica y de salud) es un
lugar confiable y respetuoso de sus derechos.
•En caso de no encontrar respuesta sensible a la problemática dentro de su comunidad o escuela, contacta instituciones cercanas a la localidad y habla con las autoridades civiles y/o religiosas (siempre
con el consentimiento de la víctima). De esta manera, tu participación ayudará a mejorar los servicios
y a promover políticas públicas desde la vigilancia ciudadana.
72
género o sexo ¿a quién le importa?
Cierre del Módulo C
Resumen a cargo de la/s persona/s que coordina/n el taller
Objetivo
Recordar a las y los participantes los temas más importantes que se trataron en esta sesión y aclarar los
puntos que hayan quedado poco claros.
Tiempo: 30 minutos
Materiales necesarios
Hojas de apoyo o papelógrafos con los puntos centrales.
Desarrollo
A manera de repaso con el grupo, señalar que:
•La violencia es un problema grave en todas las sociedades, aunque sus manifestaciones son diversas
dependiendo de los contextos culturales en donde emerge.
•La violencia afecta a los grupos más vulnerables de la población como son los niños, adolescentes,
jóvenes y ancianos. Destaca que la violencia afecta, por motivos de género, más a las mujeres.
•Existen diferentes tipos de violencia: física, psicológica, económica y sexual.
•La violencia tiene impactos importantes sobre la salud física y emocional de las personas, pudiendo
provocar lesiones, desarrollo de padecimientos crónicos, depresión y ansiedad entre otros.
•Las manifestaciones de la violencia son distintas de acuerdo con la edad y el período de vida por el que
se esté pasando. Por ejemplo, la violencia que puede sufrir una joven de 15 años, soltera, que vive con la
familia seguramente será diferente a la que sufra una mujer casada, con hijos, que vive con la suegra.
•Algunas de la prácticas más comunes en las comunidades rurales e indígenas, en relación con la violencia
de género hacia la población joven, se relacionan con el control durante el noviazgo por parte de sus
parejas y el matrimonio forzado, y pueden ser agravadas por la pobreza y la falta de oportunidades
para estudiar.
•La población joven tiene derecho a pedir y recibir toda la información y servicios que necesite como:
educación sexual en forma integral; acceso a métodos anticonceptivos, condones y anticoncepción de
emergencia; acceso a aborto por violación; las direcciones de instituciones a las que pueden acudir en
caso de violencia; lugares en donde puedan obtener apoyo para problemas asociados con la violencia
de género y/o su salud sexual y reproductiva.
•En caso de estar viviendo violencia de género o familiar es importante construir un plan de seguridad
que proteja a la persona y le ofrezca vías para poder salir del problema.
Concluir el resumen diciendo que:
•El papel de las y los jóvenes activistas en el tema de violencia de género y familiar se centra en promover la reflexión y sensibilizar acerca de la problemática, así como ofrecer opciones de instituciones
en las cuales se les proporcionen herramientas para hacer frente a los problemas de violencia por los
cuales estén pasando.
73
sección iii
•En la medida en que comencemos a hablar de manera pública sobre las relaciones de maltrato en las
familias, empezará a disminuir la ”tolerancia” que tiene la comunidad frente a este tipo de actos que
ponen en riesgo la salud y la vida de las personas.
Ejercicio para facilitadoras/es
Estrategias de autocuidado para facilitadoras/es
(Tarjeta 13)
Introducción al tema
Este ejercicio está diseñado especialmente para las personas que facilitaron y moderaron los trabajos durante
las sesiones anteriores. Incluimos el tema de autocuidado al final de este manual porque sabemos que las
personas que trabajamos la violencia de género (como talleristas, en asesoramiento, atención y/o apoyo a
víctimas o con personas que cometen actos de violencia de género), estamos en contacto continuo con el
dolor, al escuchar y/o leer relatos de amenazas, humillaciones, golpes, violaciones, abuso sexual, etcétera.
Partimos de que la violencia es contaminante, vulnera y afecta emocional y físicamente. Esto trae consecuencias para las y los jóvenes activistas: se alejan de este tipo de trabajo, ponen barreras para protegerse del
sufrimiento (a veces se identifican con la víctima o con el agresor y viven en carne propia su rabia o culpa),
la angustia y la frustración, se sienten responsables y/o incrédulos ante actos que cuestionan los sistemas
sociales “básicos” como la familia, la solidaridad y la confianza entre seres humanos. Por eso es importante
estar muy atentos a las “señales” que nos envíe nuestro cuerpo, antes de sobrecargarnos de trabajo.
Objetivo
Generar recursos individuales y colectivos para la autodefensa y el autocuidado de activistas para enfrentar
el problema de violencia de género, que viven las y los adolescentes y jóvenes de comunidades rurales e
indígenas.
Tiempo: 90 minutos
Materiales necesarios
Papelógrafo, plumones de colores, cinta para pegar,
fotocopias para cada participante con el recuadro
de distribución del tiempo y el termómetro para
detectar riesgos por fatiga y hoja de apoyo.
Desarrollo del ejercicio
Introducción
•Analicen en grupos pequeños cómo viven o
han vivido la violencia de género como activistas por los derechos de adolescentes y jóvenes.
En el siguiente cuadro te proporcionamos
algunos ejemplos para la discusión grupal.
74
género o sexo ¿a quién le importa?
Hoja de apoyo
Tarjeta 13
¿Qué pasa con la violencia que padecemos quienes trabajamos
por los derechos de los demás?
•Partimos de la premisa de que en la erradicación de la violencia de género es necesario que las
y los activistas reconozcamos en primer lugar nuestra propia violencia, es decir, aquella que
podríamos estar ejerciendo hacia los demás
•Las mujeres (principalmente) y los hombres jóvenes activistas enfrentamos diversas formas de
violencia de género en nuestra contra, por transgredir el orden patriarcal (basado en la autoridad
del padre) y adultocéntrico (donde las decisiones y normas las establecen los adultos y donde
poco importan las opiniones o derechos de las y los jóvenes), y participar en acciones públicas
tendientes a transformar las relaciones de poder entre hombres y mujeres, así como entre generaciones.
•Como jóvenes activistas a veces nuestro autocuidado es deficiente, por la presión de intentar
cumplir con un “modelo de activista ideal”. Ello se manifiesta en: sobrecarga de trabajo, deterioro
de la salud, desarrollo de actividades de riesgo sin la debida protección, falta de tiempo para
atender nuestras necesidades personales y escolares, entre otras.
•La alimentación se adapta a las posibilidades que dejan las otras responsabilidades y actividades
planteadas anteriormente por lo que hacemos sólo una o dos comidas al día.
•Algunas de las enfermedades que padecemos las y los activistas por la sobrecarga de trabajo ya
sea en casa, escuela, dentro o fuera de las organizaciones en las que participamos son: migraña,
gastritis, gripas y enfermedades del estómago, dolor de cuello o espalda por estrés.
•Vivimos falta de reconocimiento dentro del espacio de trabajo o estudio, y las constantes
fricciones que tenemos cotidianamente con nuestras parejas, amigos/as y familias por salirnos
del estereotipo.
•Dedicamos mucho tiempo al trabajo y al espacio de participación. Algunas veces sin dejar tiempo
libre para las actividades interpersonales y de recreación.
•La imagen de “fuertes e invulnerables” frente a otras/os jóvenes a veces nos hace callar las cosas
que nos afectan y nos hacen sufrir, generando experiencias y sensaciones reprimidas y propiciando
que no busquemos apoyo para resolverlas.
•Después de diez minutos de conversación en equipo, expongan sus conclusiones en plenaria para la
discusión.
•En la hoja de apoyo te presentamos un cuadro que te permitirá analizar cómo distribuyes tu tiempo,
esto es ¿qué tantas horas al día dedicas al cuidado de tu persona, y a estar con tu pareja, amigos/as
o familiares? Analiza el tiempo que le dedicas a las actividades recreativas frente al tiempo que le
dedicas a las actividades de trabajo, estudio y/o activismo político.4
4
La idea original de este ejercicio se extrajo de Muruaga, Soledad (1990), Espacio de salud entre nosotras, Madrid.
75
sección iii
•Cada participante deberá hacer un esquema similar y llenar el “círculo-pastel” de acuerdo con el porcentaje de tiempo que le dedica a ciertas actividades, así podrá “graficar” la distribución de sus tiempos
principales.
Hoja de apoyo
Tarjeta 13
Distribución del tiempo
Distribución real
Distribución ideal
•Durante otros diez minutos, discute con tus compañeras y compañeros activistas cuál fue el resultado
de su ejercicio y ¿por qué creen que haya sido así? Analicen ¿qué actividades podrían realizar para su
autocuidado? (hacer ejercicio, ir al cine, atender su salud física y mental, entre otras).
•Responde individualmente el cuestionario que presentamos en el siguiente cuadro. Marca con una X
tu respuesta.
76
género o sexo ¿a quién le importa?
Hoja de apoyo
Tarjeta 13
Termómetro para detectar riesgos por fatiga
si
no
Cambios físicos relacionados con tu trabajo como activista
¿Te sientes continuamente fatigada/o?
¿Con frecuencia tienes dolores musculares, de cabeza, espalda o tensión en la base
del cuello?
¿Tienes problemas para conciliar el sueño o mantenerte dormido?
¿Te enfermas frecuentemente?
Si ya iniciaste vida sexual activa ¿has tenido cambios en tu respuesta sexual?
Cambios emocionales relacionados con tu trabajo como activista
¿Te sientes irritada/o o enojada/o con frecuencia?
¿Reaccionas con ira ante pequeños inconvenientes?
¿Te sientes deprimido por largos períodos?
¿Has notado que regularmente te sientes muy frustrada/o en tu trabajo?
¿Te sientes a menudo impotente frente a las personas que ayudas?
¿A menudo deseas abandonar tu lucha a favor de los derechos y en contra de la
violencia de género?
Cambios en tu conducta relacionados con tu trabajo como activista
¿Has aumentado el consumo de alcohol, psicofármacos u otras drogas para dormir,
aliviar tu ansiedad o sentirte mejor?
¿Has dejado de participar en reuniones sociales o has dejado de ver a tus amigos/as,
novio/a o tu pareja?
¿Estas sobrecargada/o de trabajo?
Cambios en tu vida espiritual relacionados con tu trabajo como activista
¿Te sientes vacía/o o “desconectada/o” con el mundo?
¿Consideras que tu trabajo o tu vida no vale la pena?
Acerca de los cambios en tu tarea de ayudar
¿A menudo te enojas o te impacientas con las personas a las que brindas ayuda?
¿Predominan en ti sentimientos de frustración cuando las personas a las que ayudas
no hacen lo que tú crees que es lo mejor para ellas?
77
sección iii
continuación...
Hoja de apoyo (Tarjeta 13)
Termómetro para detectar riesgos por fatiga
si
no
¿Has notado que estás perdiendo la empatía hacia las víctimas?
¿Te aburren los relatos de las víctimas?
¿Mientras escuchas el relato de la víctima, piensas en otras cosas?
¿Te sientes muy preocupada/o y te llevas los relatos de las víctimas a casa, los cuentas
a las personas cercanas y piensas en ellos cuando sales a divertirte?
¿Abrumas a tus seres queridos y a tus amistades con las necesidades de las personas
violentadas?
¿Tienes poco apoyo en tu trabajo?
•Analicen colectivamente las respuestas, tratando de detectar a las y los activistas que se sientan más
vulnerables. Hagan propuestas colectivas e individuales para mejorar su autocuidado.
•Discutan colectivamente ¿qué tipo de actividades podríamos hacer las y los jóvenes activistas para
enfrentar la violencia de género y promover nuestro autocuidado? ¿Qué hacer para fortalecer las redes
de apoyo entre las y los activistas jóvenes de comunidades rurales e indígenas de la región?
•Después de la discusión, enlista las actividades que son fuente de bienestar para identificar qué cosas
nos hacen bien y qué cosas nos ayudan en el autocuidado.
78
género o sexo ¿a quién le importa?
Hoja de apoyo
Tarjeta 13
Propuestas desde los jóvenes activistas para enfrentar la violencia de género
y promover el autocuidado
•Formar redes de autoapoyo en las que las y los jóvenes activistas contemos con un espacio para
compartir nuestras experiencias y generar estrategias en corresponsabilidad con otras/os.
• La autonomía económica es un elemento fundamental de satisfacción personal para las y los
jóvenes activistas.
•Hacer reuniones anuales para convivir, sin hablar del trabajo.
•Formar y fortalecer nuevos líderes en el tema para descargar responsabilidades.
•Ir a retiros espirituales y no hacer trabajo durante ellos.
•Buscar apoyo y vinculación con otras organizaciones para el fortalecimiento de las propias.
•Después de cada taller, realizar alguna actividad recreativa.
•Tener una meta como líderes.
•Buscar financiamiento para actividades de recreación del grupo de líderes.
•Promover servicios de salud para las y los líderes.
Cierre
•Para concluir la sesión, sugerimos que alguno/a de los/as participantes proponga un ejercicio de relajación e integración grupal.
79
sección iii
Para terminar
Evaluación y cierre
Objetivo
Conocer la opinión que los participantes tienen de los contenidos y ejercicios del taller que recibieron.
Tiempo: 30 minutos
Materiales necesarios
—Copias del formulario para la evaluación final (incluyendo sólo los ejercicios utilizados).
—Hojas de apoyo con las direcciones de los centros de atención de la región.
Introducción
•Entrega a las y los participantes los formularios para la evaluación (previamente saca copias del formato) y pídeles que los llenen antes de retirarse. Una vez que hayan entregado el formulario contestado,
entrégales una copia del módulo educativo o —cuando sea el caso— de la hoja de apoyo.
Hoja de apoyo
Evaluación y cierre
Formulario de evaluación
Fecha__________________
Marca con una cruz tu opinión con respecto a los siguientes ejercicios del manual
Dinámica
Género, no sexo
Sexo y género: ¿qué significan?
Analizando la música popular y los estereotipos de género
Cuando era niño/a y adolescente
Creencias y realidades de la violencia de
género
Analizando la violencia de género en la
publicidad
80
género o sexo ¿a quién le importa?
Muy buena
Buena
Regular
Mala
continuación...
Hoja de apoyo
Evaluación y cierre
Formulario de evaluación
Dinámica
Muy buena
Buena
Regular
Mala
¿Qué es la violencia de género?
Historia del ciclo vital y la violencia de
género
Revelando la violencia familiar
Árbol de la violencia en la pareja
Estrategias comunitarias para abordar la
violencia de género
Estrategias de autocuidado para facilitadoras/es
¿Qué dinámica fue la más valiosa para ti? ¿Por qué?
¿Qué dinámica fue la menos valiosa para ti? ¿Por qué?
¿Cómo evalúas el taller en general? (marca con un círculo)
Muy bueno
Bueno
Regular
Malo
¿Qué fue lo más importante que aprendiste en este taller?
81
sección iii
continuación...
Hoja de apoyo
Evaluación y cierre
Formulario de evaluación
¿Qué sugerencias tienes para mejorar el contenido de este taller en el futuro?
Si recibieras un segundo taller, ¿qué temas te gustaría que se analizaran?
Comentarios adicionales: (Cualquier otro comentario)
Cierre
Una vez que todos hayan entregado la evaluación agradece su participación y pregunta si alguien quiere hacer
un comentario adicional relacionado con la evaluación del taller. En caso de recibir comentarios adicionales
es importante que tomes nota para que los incluyas con las evaluaciones escritas (en una hoja aparte).
82
género o sexo ¿a quién le importa?
Sección IV
Ejercicios para facilitar el trabajo del
grupo
En esta sección encontrarás algunos ejercicios que podrás utilizar para bajar la tensión en el grupo como
resultado del trabajo grupal en temas de violencia.
La Vela
Objetivo
Las y los participantes generarán un ambiente de contención para la(s) persona(s) que hayan mostrado ser
especialmente sensibles al tema de la violencia de género.
Tiempo: 30 minutos
Materiales necesarios
Una vela blanca de cualquier tamaño y unos cerillos o encendedor.
En caso de que optes por la variante en la que las y los participantes se tapan los ojos, requerirás de un
paliacate o trozo de tela para cada uno.
Descripción del ejercicio
Introducción
Al iniciar el ejercicio, habla con el grupo sobre la importancia de proporcionar apoyo a las personas que
han vivido algún tipo de violencia. Además de tratar de ser empáticas/os con ellas, es decir, demostrarles
con nuestras palabras y acciones que nos importa lo que les ha sucedido y que estamos dispuestas/os a
brindarles nuestro apoyo.
Desarrollo
Coloca una vela en el centro del salón, y pide a la persona que veas con mayor afectación que la prenda.
•Pide al resto del grupo que haga un círculo y se entrelacen en un abrazo por encima de los hombros
de las/os compañeras/os que tengan a su lado.
•En el momento en que la persona que prendió la vela se incorpore al grupo, explica la importancia
de no estar ni sentirse solo, de desechar lo que nos hace sentir mal o tristes, de entender que somos
como espejos porque nos reflejamos unas/os con otras/os con nuestros propios dolores, alegrías y
esperanzas.
•Destaca la importancia de ser solidarias/os con la persona, familia o comunidad que sufre algún
problema. Pregunta si alguien quiere decirle unas palabras de aliento a su compañera/o.
•Finaliza el abrazo pidiéndoles que se acerquen más al centro y que se den un apapacho.
83
sección iv
Cierre
Termina el ejercicio preguntando a las y los participantes cómo se sintieron, qué sentimientos surgieron y si
hay algo que quieran externar.
Concluye el ejercicio recordando a las y los participantes que cuando alguien vive determinada situación de
violencia, es muy importante que esta persona sepa que no está sola y que puede solicitar ayuda, así como
contar con el apoyo de nosotras/os, o de cualquier persona de su confianza, con la finalidad de identificar
diferentes vías para enfrentar ese problema.
Posibles maneras de adaptar el ejercicio
Adaptación 1
Esta adaptación puede utilizarse cuando las personas asistentes no están familiarizadas con los talleres
participativos.
•Si las personas se sienten incómodas de tener que elegir una pareja, designa las parejas.
•Después de que hayan compartido sus experiencias por pares, pídeles que comenten lo que manifestaron
sus parejas sin nombrar de quien se trata; esto puede serles menos penoso.
Adaptación 2
Si en el taller hay el mismo número de participantes mujeres que hombres.
•En vez de pedirle a las y los participantes que caminen por la sala, pídeles que formen pareja con una
persona de otro sexo.
•Luego continúa el ejercicio como ha sido descrito en su modalidad original, las y los participantes deben
estar sentados con los ojos tapados.
Adaptación 3
Si en el taller hay el mismo número de participantes de ambos sexos.
•Agrupa a todos los hombres en un círculo mirando hacia afuera y luego a las mujeres en otro círculo
que debe estar dentro del primero con las participantes mirando hacia adentro.
•Pon música suave y pide al grupo que está dentro que dé la vuelta hacia la izquierda y al grupo que
está fuera que dé la vuelta a la derecha.
•Para la música y pídele al círculo de adentro que mire al círculo de afuera. Luego pide a las y los participantes que formen pareja con la persona que tienen enfrente.
•Continúa el ejercicio tal como se describe en su modalidad original, las y los participantes deben estar
sentadas/os con los ojos tapados.
84
género o sexo ¿a quién le importa?
El tren de las emociones
Objetivo
Las y los participantes analizarán las emociones que cada una/o de ellas/os siente ante diversas expresiones
de afecto y de contacto físico.
Tiempo: 30 minutos
Materiales necesarios
Ninguno.
Descripción del ejercicio
Introducción
Al iniciar el ejercicio, comenta con el grupo que la posibilidad de expresar nuestros afectos es un elemento
importante para que cada una/o de nosotras/os tengamos un adecuado desarrollo físico y emocional. La
posibilidad de abrazar, besar y decir cosas agradables a quienes queremos, sin temor a ser cuestionadas/os
o mal vistas/os, es un ejemplo de cómo podemos expresar nuestras emociones.
Desarrollo
•Pide a las y los participantes que se pongan de pie y que formen un círculo colocándose unos detrás
de otros, imaginando que son como los vagones de un tren. Es recomendable que tú te coloques al
inicio de la fila para guiarlos y animarlos a participar.
•Diles que se tomen de los hombros o de la cintura y que comiencen a girar como lo haría un tren
que se pone en marcha. Coméntales que el tren hará varias paradas y que en cada una de ellas, tú
les pedirás que todas/os realicen determinadas expresiones físicas de afecto, por ejemplo: abrazarse,
besarse ambas mejillas, hacerse cosquillas, saludarse de mano, acariciar la espalda, entre otras.
•Una vez que el tren se haya puesto en marcha, tú decidirás en qué momento decirles: “Atención,
atención: Llegamos a la estación de… los abrazos”, todas/os deberán realizar la acción que les indicaste
con varias/os de sus compañeras/os, sin importar que sean hombres o mujeres.
•Después de que tú las/los hayas llevado a tres o cuatro estaciones, podrás elegir a un/a maquinista
más, quien también se deberá colocar al principio de la fila para que sea él/ella quien lleve al grupo a
la siguiente estación. De igual manera, el/la nuevo/a maquinista podrá elegir a alguien más que tome
su lugar y podrán repetir el ejercicio llegando a tres o cuatro estaciones más.
Cierre
Para concluir el ejercicio, puedes pedir al grupo que quien así lo desee comparta con sus compañeras/os
cuál fue su experiencia, cómo se sintieron al vivir diferentes muestras de afecto. Identifica junto con ellas/
os qué expresiones se permitieron y cuáles no, ¿con cuáles se sintieron más a gusto?, ¿cuáles les resultaron
más difíciles? y ¿por qué?
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sección iv
¡Sacude el polvo!
Objetivo
Las y los participantes realizarán diversos movimientos que les permitan relajarse.
Tiempo: 15 minutos
Materiales necesarios
Grabadora y música movida (opcional).
Descripción del ejercicio
Introducción
Pide a las y los participantes que se coloquen de pie alrededor del salón formando un círculo y explícales
que después del trabajo que han realizado en el taller, es momento de realizar algunos ejercicios que les
permitan relajarse.
Desarrollo
•En caso de que cuentes con grabadora y música, enciéndela mientras vas pidiéndoles que muevan todo
su cuerpo, que se estiren y que sacudan sus articulaciones, especialmente las rodillas, muñecas, cadera,
codos, hombros y cuello.
•Puedes ir aumentando y reduciendo la velocidad de los ejercicios e imprimir cierta dificultad al solicitarles que realicen estos movimientos de manera descontrolada y sin despegar sus pies del suelo.
Cierre
Para concluir con el ejercicio, pídeles que inhalen profundo por la nariz y que exhalen con calma por la
boca, mientras emiten algún sonido al momento de sacar el aire. Pueden inhalar y exhalar al menos tres o
cuatro veces.
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género o sexo ¿a quién le importa?
Sección V
Glosario de términos
Esta sección contiene algunos de los conceptos que usamos y que a veces nos parecen difíciles de comprender,
las definiciones que presentamos están adaptadas para que sean aplicables a este manual.
Autoestima: Consideración y aprecio que una persona tiene de sí misma.
Discriminación de género/contra la mujer: son las actitudes que otorgan mayores privilegios a los hombres
que a las mujeres y que dificultan el desarrollo integral de las mujeres.
Empático/a: Se refiere a que seamos sensibles y mostremos interés ante la realidad y necesidades de otras
personas. Es como “ponernos en los zapatos de la otra persona” e imaginarnos cómo se siente ante determinada situación.
Empoderar: Algunas especialistas han señalado que para empoderar a las mujeres se requiere que éstas
posean: a) sentido de seguridad y visión de futuro, b) capacidad para ganarse la vida, c) capacidad de actuar eficazmente en la esfera pública, d) mayor poder de tomar decisiones en el hogar, e) participación en
grupos no familiares y uso de grupos de solidaridad como recurso de información y apoyo, f) movilidad y
visibilidad en la comunidad.
Equidad de género: Es un acto de justicia social y económica, que consiste en dar las mismas condiciones,
trato y oportunidades a mujeres y a hombres, pero tomando en cuenta las características especiales o situaciones (sexo, género, clase, etnia, edad, religión) de los diferentes grupos, de tal manera que se pueda
garantizar el acceso.
Estereotipo: Imagen mental muy simplificada (por lo general) de alguna categoría de persona, institución
o acontecimiento que es compartida en sus características esenciales por un gran número de personas.
Frecuentemente los estereotipos van acompañados de prejuicios, esto es, de una predisposición favorable
o desfavorable hacia cualquier miembro de la categoría en cuestión. Los estereotipos cumplen funciones
individuales (ayudan a defender o preservar el sistema de valores) y sociales (contribuyen a la creación y
mantenimiento de ideologías de grupo que explican y justifican diversas acciones sociales).
Estereotipos de género: Reflejan las creencias populares sobre las actividades, los roles, rasgos, características o atributos que definen a las mujeres y las distinguen de los hombres. De este modo se espera que las
mujeres desde niñas tengan comportamientos como la ternura, la bondad, la prudencia, la sumisión; y que
por el contrario los hombres sean fuertes, atrevidos y de “carácter”.
Estupro: El estupro es un delito de abuso sexual que comete un adulto al tener relaciones sexuales con una
o un menor de edad, que no tiene la edad legal para otorgar su consentimiento en materia sexual, pero
valiéndose de engaños, chantaje o una posición de poder o influencia.
Género: Es la construcción social que se hace a partir de la diferencia sexual y que asigna patrones particulares de comportamiento a través de las tradiciones, los valores y los estereotipos. Se aprende a “ser mujer”
en contraposición al “ser hombre”; es decir, se nos educa para comportarnos ante diferentes situaciones de
acuerdo con lo “típicamente considerado masculino o femenino”.
Identidad de género: Se establece alrededor de los dos años, edad en la que el infante adquiere el lenguaje.
Es anterior a su conocimiento de la diferencia anatómica entre los sexos. El niño o la niña comienza a es-
87
sección v
tructurar su experiencia vital alrededor del género que se le ha asignado. Así, tendrá actitudes de niño o de
niña, comportamientos juegos, etcétera. Una vez adquirida la identidad de género o sea que el niño se sepa
y asuma como perteneciente al grupo de los hombres y la niña al de las mujeres, esta identidad se convierte
en un tamiz por el que pasan todas sus experiencias.
Incesto: Relación sexual entre parientes dentro de los grados en que está prohibido el matrimonio (por
ejemplo: padre e hija, madre e hijo, hermano y hermana, abuelo y nieta).
Mensajes subliminales/implícitos: Son recursos usados por los medios de comunicación (sobre todo la
televisión) para que, sin que el/la televidente se percate de ello, dirigirle un gusto o apreciación por algo o
alguien.
Orientación sexual: Puede ser definida como la sensación de ser capaces de relacionarnos amorosa o sexualmente con alguien. En el mundo, el término que se usa cuando la relación se da con alguien del sexo opuesto
es heterosexual, con alguien del mismo sexo es homosexual, con mujeres y hombres es bisexual.
Prevalencia en violencia de género: Se refiere a la estadística o el resultado, en números y porcentajes, de la
investigación sobre el tema de violencia de género, que se aplica a una población para obtener la frecuencia
con la que ocurren los hechos relacionados con la violencia de género.
Roles de género: Son las prescripciones, normas y expectativas de comportamiento para hombres y mujeres.
El conjunto de deseos acerca de los comportamientos sociales considerados apropiados para las personas de
acuerdo con su sexo (por ejemplo, se cree que es responsabilidad de las mujeres cuidar a las y los hijos, sólo
por haberlos parido). Los roles de género también constituyen la serie de normas, principios y representaciones culturales que dicta la sociedad sobre el comportamiento masculino y femenino, esto es, conductas
y actitudes que se esperan tanto de las mujeres como de los hombres.
Tabú: Se refiere a una prohibición aceptada tradicionalmente por las y los miembros de una comunidad y/o
en una familia, en un tiempo determinado.
Violencia de género: Todo acto de fuerza física o verbal, coerción o privación amenazadora para la vida,
dirigida al individuo mujer o niña, que cause daño físico o psicológico, humillación o privación arbitraria de
la libertad y que perpetúa la subordinación femenina” (Heise y cols., 1994). También se denomina violencia
contra la mujer.
Violencia familiar: El concepto de violencia familiar se define en la Ley general de acceso de las mujeres a
una vida libre de violencia5 como el acto abusivo de poder u omisión intencional, dirigido a dominar, someter,
controlar, o agredir de manera física, verbal, psicológica, patrimonial, económica y sexual a las mujeres, dentro
o fuera del domicilio familiar, cuyo agresor tenga o haya tenido relación de parentesco por consanguinidad
o afinidad, de matrimonio, concubinato o mantengan o hayan mantenido una relación de hecho.
5 Publicada
88
en el Diario Oficial de la Federación el 1 de febrero de 2007.
género o sexo ¿a quién le importa?
Sección VI
Bibliografía que puede ser utilizada por las
y los facilitadores
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89
sección vi
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la Salud, Oficina Regional para las Américas de la Organización Mundial de la Salud (2002), Informe
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Género o sexo: ¿a quién le importa? Módulo de capacitación en violencia de género para promotores
y promotoras comunitarios que trabajan con mujeres y hombres jóvenes de pueblos indígenas y rurales,
se terminó de imprimir en agosto de 2008 en los talleres de Impretei S.A. de C.V. Almería 17, Colonia Postal,
Delegación Benito Juárez, C.P. 03410, México D.F. con un tiraje de 1,000 ejemplares.
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género o sexo ¿a quién le importa?
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