Antonio González Bueno Rosa Basante Pol José Hortega (1703-1761) La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado Madrid, 2015 José Hortega (1703-1761) La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado Antonio González Bueno Rosa Basante Pol Madrid, 2015 © de los textos: Antonio González Bueno, Rosa Basante Pol © Insituto de Estudios Madrileños ISBN: 978-84-940491-0-1 Depósito legal: M-35547-2015 Imagen de la portada: “La rebotica” (1882) Óleo de José Jimenez Aranda (1837-1903) Madrid, Colección particular. 3 Prólogo La profesora Basante y el profesor González Bueno me piden un prólogo para su excelente biografía de José Hortega. Dado que ninguno de los dos necesita presentación ni aval, ni mucho menos su libro -la opinión sobre el cual acabo de adjetivar en el párrafo anterior- la solicitud la considero una deferencia derivada del tiempo: del mucho tiempo desde el día en que nací y del largo periodo de años durante los cuales venimos trabajando juntos. En mi vida académica no creo haber tenido más de cinco ideas de investigación. Tres las he desarrollado yo mismo y dos se las he brindado a mis próximos. Como además soy curioso, y los historiadores de la ciencia y de la farmacia no podemos convertirnos en especialistas en un determinado periodo, me he interesado por épocas muy distintas, lo cual me ha obligado a esfuerzos intelectuales grandes, si bien me ha proporcionado también enormes satisfacciones. La Ilustración, las expediciones científicas dentro de ella, y las instituciones de investigación y docencia, ha sido uno de mis intereses, en el que he coincidido con otros muchos modernistas, historiadores de la ciencia o no. Desde hace al menos treinta años se conoce bien ese ilusionante periodo de nuestra historia. Se sabe la vida y las intenciones de los reyes de la nueva dinastía, de sus principales ministros reformistas y de la mayoría de quienes intentaron llevar a cabo sus proyectos. En el ámbito científico, el advenimiento de los Borbones supuso la resolución de lo que Maravall denominó la polémica entre antiguos y modernos, a favor de estos últimos. Los llamados despectivamente ‘novatores’, durante el Barroco, pasaron a ser apoyados por los técnicos, y por las ideas ligadas al despotismo ilustrado de la nueva dinastía. Sin establecerse un plan pautado, se llegó a la conclusión, como también se hizo en otros países de los denominados periféricos, como Portugal o Rusia, de emplear 4 la ciencia moderna con una doble finalidad: reconquistar el poderío militar y político del antiguo imperio español, y mejorar la vida de los españoles de ambos lados del Océano: en España y los virreinatos. En el tablero de los científicos dedicados a esa tarea, faltaba una inicial y fundamental pieza: José Hortega u Ortega, que de ambas maneras se firmaba el personaje. En un país en donde la inmensa mayoría era analfabeta, los ilustrados fueron una excéntrica minoría, en lo intelectual, aunque muy centrada en el poder de la Corona. Dentro de esa excentricidad, el papel de los boticarios en la política científica ilustrada resulta aún más extravagante. Los médicos contaron con enseñanzas desde la aparición de la universidad en el siglo XIII. Fuera de ella quedaron los cirujanos (tanto romancistas como latinistas) y los boticarios, considerados artesanos hasta que, en 1650, una Real Cédula pasó a estimarlos como practicantes de un ‘Arte Científica’, en consideración, precisamente, a su dependencia de la medicina. Si su situación social varió favorablemente, no hizo lo mismo el estado de su enseñanza. Desde la aparición del Real Tribunal del Protomedicato en el siglo XV, se encargó de examinar a los sanitarios, entre ellos los boticarios, y de vigilar sus establecimientos. Felipe II, en este como en tantos campos, reorganizó y sistematizó su funcionamiento, pero las enseñanzas siguieron ligadas al sistema de maestrías gremiales, en donde existían los gremios y, en donde estos no funcionaron, al aprendizaje magistral y luego al examen del Protomedicato. Sin faltar a la verdad se podría dar fe de la existencia de una gran mayoría de boticarios ignorantones y una pequeña elite, generalmente autodidacta y ligada a la Real Botica, otra institución creada por los Reyes Católicos, excepcionalmente bien preparada en las materias necesarias para la elaboración de fármacos: principalmente la Botánica y la Química, también la Mineralogía y la Zoología y con una excepcional curiosidad científica. A esa elite autodidacta y sabia, ligada a la Real Botica y por tanto al Ejército, pues se convertían en boticarios militares en campaña, perteneció José Hortega. Además gozó de una buena posición económico-social por un matrimonio afortunado y estableció en la calle Montera una de las mejores farmacias de Madrid y de España. Tan boticario fue que llegó a poseer dos farmacias o tres, si como tal consideramos también la dedicada a la atención de las Reales Personas, en un periodo en el que, como 5 ha sucedido luego sin discontinuidad hasta nuestros días, estaba prohibido poseer más de una. José Hortega, hasta ahora, era casi un desconocido. Me había ocupado de él, brevemente, yo mismo en la biografía que hice de su sobrino el gran Casimiro Gómez Ortega. Ahora, en un libro claro, ameno y fácil de leer. se nos ofrece su vida con pelos y señales. La amenidad del texto no impide la rigurosidad del método, tan necesario cuando lo expuesto es absolutamente novedoso, si bien las frecuentes y minuciosas notas a pie de página, la abundancia de la bibliografía, no impiden la agradable lectura a quien desee prescindir de ellas. Para un experto valdría con este prólogo. Para quien no lo es, que deseo sea mayoría pues el texto vale para unos y otros, les diré que José Hortega fue Boticario mayor de los Ejércitos y Boticario de la Real Botica. Se convirtió en el principal animador del Real Jardín Botánico de Madrid y luego en su subdirector. Mantuvo correspondencia con Linneo y se ocupó de su discípulo Löfling cuando llegó a España para visitar los virreinatos americanos. Tras su desdichada muerte en el Orinoco, durante la expedición mandada por el capitán Iturriaga, posiblemente se convirtió en el guardián de sus trabajos. José Hortega fue uno de los principales animadores del Real Colegio de Boticarios de Madrid, la corporación creada con fundamentos científicos y aspiraciones gremiales que, pasados los siglos, derivó en la Real Academia Nacional de Farmacia. En la casa en donde tenía su botica y su magnífica biblioteca estableció una tertulia con médicos, reconocida por el Consejo de Castilla como Real Academia Médica Matritense y superviviente en la actualidad en la Real Academia Nacional de Medicina, en la cual, en los respaldos de los sillones de los académicos, puede verse una copa y una serpiente enroscada, en recuerdo de la profesión de quien fue su creador. Participó también en la confección de las primeras farmacopeas y, además, viajó por varios países europeos, bajo el manto del marqués de la Ensenada, aunque él era de la clientela de Joseph de Carvajal, para estudiar las Academias de ciencias con el fin de establecer una en España. Proyecto incumplido hasta bien entrado el siglo XIX. Estos y otros muchos temas son estudiados, en profundidad y con amenidad, en el texto que tengo el placer de prologar. 6 Con este libro se completa el mosaico de los científicos ilustrados y del proyecto científico de la Ilustración en España y se hace en un escrito que, repito, será del agrado de modernistas, historiadores de la ciencia y curiosos en general. Para acabar, mentiría si no dijese que, a mis ojos, uno de los mayores logros de José Hortega, o al menos el que me hace verle con más afecto, fue el actuar como mentor de su sobrino Casimiro Gómez Ortega, ‘el gordo’ Ortega, a quien dediqué mucho tiempo de mi vida para redactar su biografía y mi discurso de ingreso en la Real Academia de la Historia. Javier Puerto Real Academia de la Historia Real Academia Nacional de Farmacia 7 Índice Introducción Los primeros años Los inicios en Añover La botica de la calle de la Montera En los aledaños de la Puerta del Sol Una acomodada vivienda Un boticario y su Colegio La Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista San Lucas El Real Colegio de Profesores Boticarios de Madrid La tertulia de la botica de Montera La ‘Tertulia Literaria Médico-ChymicoPhisica’ La Real Academia Médica Matritense Al servicio del Rey El cortesano Pehr Löfling, ‘Botaniste du Roy de Hispania’ Una Academia para la Corte Un Gabinete… … y un Jardín La aventura americana Las canelas del Paraíso La tierra de promisión Los restos de un naufragio El comercio de las quinas La obra impresa de José Hortega Un proyecto: la Historia Natural y Médica de España Una realidad: las Ephemérides barométricomédicas matritenses Una atribución compleja: la traducción castellana del Ensayo sobre la electricidad de los cuerpos… del abate Nollet 9 11 15 29 37 48 93 100 129 136 149 156 159 165 174 183 189 191 214 219 8 Coda. La crítica académica al Elogio…. de Joseph Cervi Un hombre en su tiempo El erudito hipocondríaco Una vida burocratizada En el ámbito familiar Sic transit gloria mundi Los bienes terrenales Cronología 228 231 233 240 242 247 255 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 9 Introducción La tradición historiográfica ha querido ver en los primeros años del reinado de Carlos III el periodo en que el reformismo cobra, en nuestro país, carta de naturaleza. No hay duda de que la firma del Tercer Pacto de Familia y, con él, los dramáticos resultados de la Guerra de los Siete Años, supuso algo más que un cambio en las coaliciones hasta entonces existentes entre las Coronas europeas. Pero la primera mitad del XVIII español no estuvo vacía de contenido. Durante los reinados de Felipe V y Fernando VI se comienza a tejer un entramado ideológico, y se planetan algunos proyectos políticos, que permiten explicar el posterior estallido reformista del periodo carolino. Nuestro objetivo es aproximarnos a esos proyectos, plenos de ambigüedades y en buena parte utópicos, visualizadas a través de una de las figuras clave de la primera mitad del siglo: José Hortega. En él confluyen buena parte de las características definitorias del programa reformista: un servidor del Monarca, desde el campo de batalla y desde la tertulia cortesana, que asume un marcado protagonismo en la búsqueda de una nueva estructura profesional y científica, tanto desde la remodelación emprendida en el Real Colegio de Boticarios de Madrid, como desde las innovadoras sesiones tenidas en la Real Academia de Medicina; y que empleará la Ciencia, en particular la Botánica y la Química, para propiciar los necesarios cambios en los ambientes profesionales y culturales en los que se desenvuelve. Un gestor de instituciones, algunas realmente consolidadas, como la Real Academia de Medicina o el Real Jardín Botánico; otras apenas bosquejadas, o sólo temporalmente activas, como el Real Gabinete de Historia Natural o la Real Academia de Ciencias. Un comprometido defensor de los intereses del país, que supo mirar más allá de la realidad pensinsular y alentó –y coordinó con mano férrea- la exploración de la naturaleza americana, atisbando la conveniencia de la realización de inventarios de flora y fauna, en particular de las especies alimenticias y medicinales, con ánimo 10 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol de asegurar su explotación comercial y liberar a la Corona de unas importaciones innecesarias. José Hortega responde bien al concepto de ‘moderno’: cómodo en los ambientes extrauniversitarios, en las tertulias y en las Academias; poco afín a las doctrinas escolásticas de Aristóteles y Tomás de Aquino y más próximo a las ideas de Descartes, Gassendi y Maignan; un hombre que asiste, como otros muchos de su tiempo, al colapso de una imagen aristotélica-medieval de la naturaleza, debido al empuje de la concepción mecanicista que había encontrado su formulación en el orden del pensamiento matemático. Amigo de una ‘segunda generacion de novatores’ que descubre en la experiencia un valor que no acierta a encontrar en la razón. Gregorio Mayáns le califico como ‘boticario de buen gusto’, y no parece que el valenciano –antiguo bibliotecario realerrara en su apreciación. Su biblioteca responde a un criterio de ‘europeización’ en el saber científico, similar al que otros eruditos poseyeron en el ámbito de la literatura o del derecho. Pero su pensamiento no es rupturista ni revolucionario, buen conocedor del pasado, que valora y aprecia, se aprestará a reformarlo bajo las nuevas luces de la ilustración que emanan de la vecina Francia. José Hortega fue uno de los más influyentes boticarios de la España dieciochesca: ejerció con botica propia, preparó medicamentos para particulares y para el Ejército; su contribución a la modernización científica española apenas llegó a los tórculos de la imprenta y -quizás por ello- su figura ha quedado envuelta en la penumbra. Reconstruir la peripecia vital y el pensamiento de un personaje prácticamente ágrafo no es una aventura fácil; sin embargo, el peso de sus actuaciones y la solidez de sus iniciativas fueron tan fuertes que es posible rastrear su huella en los documentos oficiales y en la correspondencia de sus contemporáneos; éstas serán nuestras principales fuentes. José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 11 Los primeros años Los inicios en Añover Hijo de Francisco Hortega Vázquez y María Hernández, José Hortega nació en la villa de Añover de Tajo (Toledo), el 22 de octubre de 1703; apenas unos días después, el 2 de noviembre, fue bautizado en la Iglesia parroquial de Santa Ana; actuó como padrino Isidoro Carmena1. Su padre era originario de Añover, su madre había nacido en Robledillo de la Jara. El matrimonio tuvo otros cinco hijos más: Bárbara Manuela (n. 1714)2, Saturnino, Manuel, María y Josefa. José Hortega mantuvo una buena relación con su familia de Añover; en el verano de 1731, a poco de contrarer matrimonio, les recordará en sus primeras mandas testamentarias3. Al final de La partida de bautismo fue transcrita por Rafael Folch Andreu (Los farmacéuticos en la Academia durante el siglo XVIII. Labor de D. José Hortega. Madrid: Academia Nacional de Medicina [Imprenta de J. Cosano], 1935. [Reimpreso en Academia Nacional de Medicina 1734-1934. Publicaciones conmemorativas del II Centenario de su fundación. Conferencias: 177-282. Madrid: Imp. de J. Cosano, 1935] -cf. pág. 106-); actuó como ministro del bautismo el cura párroco, Alfonso Díez de Cossío. Hemos consultado el acta en el folio 290 vuelto del Libro VI de Bautismos [1684-1704] conservado en el Archivo parroquial de Añover del Tajo [AP Añover], en nada discrepa, salvo en alguna libertad de transcripción, de la publicada por Rafael Folch. 1 Su acta de bautismo, anotada en el folio 165 del Libro VII de Bautismos [1704-1722] (AP Añover) dice a la letra: “Barbara Manuela, Hija de Francisco Hortega y María Hernández. En la Iglesia Parroquial de la Sra. Sta. Ana de esta Villa de Añover de Taxo en quinze dias del mes de diciembre de 1714 años yo Fray Cristobal de Sta. Cruz, Religioso de la Sra. del Carmen con licencia del Sr. Cura, baptice solemne a una niña que nacio á 4 dias de dicho mes, hixa lexitima de Fco. Hortega natural de esta villa y de Maria Hernandez, natural de Robledillo de la Xara, Obispado de Toledo pusola por nombre Barbara Manuela, fue su padrino Isidoro Carmena quien avise el parestesco espiritual, la obligacion de enseñarla la doctrina cristiana y lo firme. Xtobal de la Sta. Cruz [rubricado]”. Fruto del matrimonio de su hermana Bárbara con Pedro Gómez González, nacerá, en 1741, su sobrino Casimiro Gómez Hortega [Ortega]. 2 Cf. Poder para testar que otorga José Hortega a favor de Mariana Aztina, su mujer. Madrid, 1-VIII-1731 (Archivo Histórico de Protocolos Notariales de Madrid [AHPNM], protocolo 14.102, fols. 275r-277r). 3 12 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol sus días, en el verano de 1760, volverá a tenerlos presentes en las que entonces establece4. Ninguno de estos codicilios habría de ser el definitivo, todos quedaron anulados por el firmado el 18 de enero de 1761, apenas unos días antes de morir5. No sabemos dónde pudo formarse como boticario, quizás en la Corte, bajo la dirección de Gregorio Aedo (fl. 1723-1762), a quien reconoce como ‘amo y maestro’ en un documento notarial fechado en el verano de 17606. Sí nos consta que tenía establecida una botica de su propiedad en Añover; en marzo de 1734 la traspasó al toledano Francisco Fernández Conejo, entonces residente en Madrid7; la declaración del propio adquirente hace pensar en una falsa venta8; pero un testimonio colateral confirma 4 Testamento otorgado por José Hortega. Madrid, 11-VII-1760 (AHPNM, protocolo 17.095, fols. 16r-20v). 5 Testamento otorgado por José Hortega. Madrid, 18-I-1761 (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 250r-253v). 6 “… a mi Amo y Mro Dn Gregorio de Aedo la Lamina de plata, que tengo, y me regalo el Excmo. Sr. Duque de Montemar difunto, y suplico al dicho mi Amo la admita y perdone la cortedad pues solo es una muestra de cariño en atencion al mucho afecto, amor, cariño y respeto qe spre le he profesado, y le pido me encomiende a Dios Nro. Sr…” (Testamento otorgado por José Hortega. Madrid, 11-VII-1760. AHPNM, protocolo 17.095, fols. 16r-20v). 7 “Yo tengo como mia propia plantificada una Botica en el lugar de Añover distante siete leguas de la Corte, la qual por ciertos motivos que a ello me mueben, tengo trattado y conzertado traspasarla y benderla á Dn Franco Fernandez Conexo, residente en esta Corte y Profesor de Voticario, examinado por el Real protomedicato, la que haviendola tassado y regulado por persona perita lo a sido en doce mil seiscientos y veinte y cinco rs de vn toda ella (…) Que por precio fixo me ha de dar dicho Franco Fernz por todo el valor y traspaso de la votica, Diez mil reales de vn. en interin de cinco años, á dos mill rs. en cada uno para el dia de San Miguel de Septiembre, que el primero cumplira en el de este año [1734]…” Escritura de tasación y venta que otorga José Hortega a favor de Francisco Fernández Conejo de una botica sita en la villa de Chinchon [sic por Añover]. Madrid, 21-III-1734 (AHPNM, protocolo 16.638, fols. 372r-373v); actúan como testigos Miguel Izquierdo Figueroa, Juan Romero y el bachiller José Forteza. “Digo que por cuantto por hacerme merced y buena obra y otros motivos, que para ello ha tenido, el dia de la fecha [21-III-1734] (…) el señor Dn. Joseph Hortega (…) ha otorgado á mi favor cierta escriptura de venta y traspaso de una botica que dho Sr. tiene suia propia en el lugar de Añober, al precio y quenta de Diez mil rs. vn. (…) y respecto de que el otorgamto. de dha escta solo ha sido á fin de hacerme particular benefizio para ocuparme y mantenerme en ella y ótros motibos, desde luego declaro qe la expresada votica y todo lo en ella contenido es caudal propio de dho Sr. Dn. Joseph, y que ha obligazion que asi juro. Como el ótro tenemos hecha pr dha esta. de taspaso, ha de darse de ningun valor ni efecto…” Escritura de declaración que otorga Francisco Fernández Conejo 8 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 13 la veracidad del traspaso: en agosto de 1735, José Hortega confiará a su padre, Francisco Hortega, poder “… para qe en mi nre y representando mi propia persona acciones y dno y como yo mismo lo aria pudiendo allarme preste, aia perciva y cobre asi judicial como extrajudicialmte o como mas vien bisto le fuere todas y quales quiera cantidades de mrs oro plata vellon trigo zebada aceyte y otras quales quiera semillas y especies qe en qualquier forma y manera se me estubiesen deviendo asi en dicha villa de Añober como en otras quales quier villas ciudades y lugares de estos reynos y señorios (…) o al quitar como tambien por el importe de las receptas que se me dieron para la curacion de diversas personas de la villa de Añober de la botica que tube mia propia en dicha villa que se me estan deviendo…”9. Para esos años José Hortega reside ya en la Corte. Hacia finales de 1728, o en los inicios de 1729, pasó a regentar la botica de Mariana Aztina10, viuda de Luis Llorente11, sita en la calle a favor de José Hortega. Madrid, 21-III-1734 (AHPNM, protocolo 16.638, fols. 374r-374v); figuran en ella los mismos testigos que en la venta de la botica (cf. supra), practicada en el mismo momento en que firma ésta de reconocimiento de propiedad. 9 Poder otorgado por José Hortega a favor de Francisco Hortega, su padre. Madrid, 26-VIII-1735; actúan como testigos Francisco Fernández, Raimundo Melitan y Mateo Fernández de Villa Nueva (AHPNM, protocolo 14.102, fols. 456r-457v). Maríana Aztina fue hija de José de Aztina y Ana María de la Ayesita, oriundos ambos de Tolosa (Guipuzcoa); aportó a su matrimonio con Luis Llorente una dote de 8.587 ½ rs. en vestidos, basquiñas, casacas, briales, guardapiés y mantillas, ropa blanca, plata, diamantes y alhajas, relicarios, anillos y sortijas. La carta de dote y arras de Mariana Aztina fue protocolizada ante Juan Félix del Valle, con fecha de 10-IX-1722 (AHPNM, protocolo 14.100, fols. 151r-156r). 10 11 Luis Llorente, oriundo de Rincón de Soto (Calahorra), falleció en los meses finales de 1728 o en los primeros de 1729; el 10-II-1729, en la escribanía de Manuel García, se verifica la tasación de los bienes que le corresponden a su viuda, Mariana Aztina, fijados en 68.961 rs. 28 ms.: 8.587 rs. 17 ms. de su dote, 2.200 rs. por sus arras, 695 rs. ‘en que se computó la mittad del lecho cotidiano’, 14.482 rs. por su mitad de ganancias y 42.997 rs 4 ms de la legítima de Manuela Llorente, que recayeron en su madre (Cf. Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761. AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). Luis Llorente fue enterrado en la Iglesia de San Luis, aneja a San Ginés. (Testamento de Luis Llorente otorgado por Mariana Aztina, su mujer. Madrid, 29-IV-1729. AHPNM, protocolo 14.101, fols. [1729] 62r-63v). Vivió en el inmueble de la calle de la 14 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Montera, cercana a la parroquia de San Luis. En 1731 desposó a la viuda y adquirió la propiedad de la botica, una de las más importantes de la ciudad. Montera, al menos, desde abril de 1726 hasta su fallecimiento; a su muerte, su viuda pagó los alquileres atrasados (AHPNM, protocolo 16.481, fol. 54). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 15 La botica de la calle de la Montera En los aledaños de la Puerta del Sol La botica de José Hortega estaba situada en un lugar céntrico de la capital del Reino12, en la calle de la Montera, subiendo de la Puerta del Sol a la Red de San Luis. El establecimiento gozaba de cierta solera en Madrid; con anterioridad había sido propiedad de Luis Llorente, primer marido de Mariana Aztina, a quien se la había traspasado, hacia 1711, Ignacio de la Peña13. El edificio donde se encontraba el establecimiento fue adquirido por José Hortega, en una larga sucesión de trámites legales, iniciados en 1731. Una parte del inmueble, en la que se ubicaba la botica, fue comprado a Teresa María Sanguinete, mediante escrituras otorgadas los días 11 y 23 de diciembre de 173214; el edificio estaba sujeto a diversos censos redimibles, La casa ocupaba el número 8 de la manzana 342 de la ciudad de Madrid; el edificio tenía salida a la calle de la Montera y a la calle de los Negros [hoy Tetuán]; la fachada de Montera contaba con 26 pies de longitud y la de los Negros con 16 pies. El espacio ocupado por este edificio corresponde hoy al número 17 de la calle de la Montera; en él la Real Academia Nacional de Medicina colocó, el 13 de septiembre de 1934, una placa con la que se quería perpetuar el solar como ‘cuna de la Academia’ (Cf. Rafael Folch Andreu. “Curiosidad historica. La cuna de nuestra Academia”. Anales de la Real Academia Nacional de Medicina, 69(1): 141-152. Madrid, 1953). 12 Luis Llorente dispuso del local de la botica en régimen de alquiler; la propiedad correspondía a Luis Sánchez de Molina, colegial en el Real de Santa Cruz de Granada, quien disponía de ella por su matrimonio con Teresa Sanguinete. Con fecha de 27-III-1725, Luis Llorente protocolizó un poder para aceptar este arrendamiento, por un periodo de seis años, en un monto de 2.900 rs anuales (AHPNM, protocolo 14.101, fols. 466r-466v); no parece que, salvo una primera entrega, Luis Llorente continuara abonando ese alquiler; tras su fallecimiento, su mujer, Mariana Aztina, entregará a Teresa Sanguinete la suma de 8.700 rs correspondiente a tres años de alquiler, vencidos en abril de 1729 (AHPNM, protocolo 16.386, [1729], fols. 54r-55r; la carta de pago queda fechada, en Madrid, el 23-IV-1729). 13 José Hortega declara haber adquirido tres casas “… que lindan por la parte de arriba con casas del conde de Moriana y pr la devajo con otras de Franco. Labrada…” (Cf. Levantamiento, por José Hortega, del censo sobre tres casas ubicadas en la calle de la Montera, perteneciente al mayorazgo de Nicolás 14 16 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol entre ellos los establecidos sobre los mayorazgos de Nicolás de Ahumada y Velasco y Marín Nicolás de Castrejón15. Otra parte de la finca, con fachada a la calle de Los Negros, fue adquirida, el 10 de octubre de 1733, al Convento de la Merced Calzada16; ésta en aparente estado de dejadez pues, en la primavera de 1759, José Hortega solicitó -y obtuvo- permiso para su derribo y posterior construcción de obra nueva, levantada sobre diseño de Diego de Villanueva17. de Ahumada y Velasco. Madrid, 17-VII-1733. AHPNM, protocolo 15.776, fols. 413r-413v); son las mismas que, en una ocasión anterior, habían sido descritas como “… unas casas que estan en esta dha. Villa [de Madrid] en la calle de la Montera subiendo de la red de Sn Luis a mano izquierda y por las espaldas salen a la calle de los Negros (…) mano derecha con casas del conde de Moriana y por la izquierda con casas de Francisco Labrada…” (Reconocimiento de censo perteneciente al mayorazgo de Nicolás de Ahumada y Velasco, por parte de José Hortega, sobre unas casas en la calle de la Montera. Madrid, 16-V-1733. AHPNM, protocolo 16.134, fols. 253r-254v). 15 Reconocimiento de censo perteneciente al mayorazgo de Nicolás de Ahumada y Velasco, por parte de José Hortega, sobre unas casas en la calle de la Montera. Madrid, 16-V-1733 (AHPNM, protocolo 16.134, fols. 253r-254v); Carta de pago, otorgada por José Hortega, sobre unos derechos del mayorazgo de Nicolás de Ahumada. Madrid, 17-VII-1733 (AHPNM, protocolo 15.776, fols. 412r-412v); Levantamiento, por José Hortega, del censo sobre tres casas ubicadas en la calle de la Montera, pertenecientes al mayorazgo de Nicolás de Ahumada y Velasco. Madrid, 17-VII-1733 (AHPNM, protocolo 15.776, fols. 413r-413v); Carta de otorgamiento de Felipe Ceballos, a favor de José Hortega, sobre el pago de un censo perteneciente al mayorazgo de Nicolás de Ahumada y Velasco. Madrid, 9-I-1736 (AHPNM, protocolo 15.781, [1736] fols. 3r-3v). Escritura de venta de unas casas en la calle Los Negros de Madrid otorgada por el Comendador y religiosos del Convento de la Merced de esta villa a favor de José Hortega. Madrid, 10-X-1733 (AHPNM, protocolo 14.048, fols. 642r-648v). La finca estaba adosada entre la perteneciente al marqués de la Vera y la que fuera propiedad de Francisco Labrada; “tubo de linea treinta y tres pies, con lo que la toca por sus medianerias”. Diligencia de Juan Joaquín de Novales, practicada sobre una casa de la calle Los Negros. Madrid, 7-V-1759 (Archivo de la Real Academia Nacional de Medicina [ARANM], leg. 1,2). 16 17 “Dn. Joseph de Hortega (…) dice: que está derrivando una Casa suya propia en la Calle de los Negros, Parrochia de Sn. Luis, y para poder volver á fabricar. Suppª. á V.S. se digne nombrar sugetos qe. demarquen el sitio segun se practica: á cuyo efecto presenta la Planta de la fachda que intenta hacer…” Instancia de José Hortega. Madrid, 4-V-1759 (ARANM, leg. 1,2). “En cumplimiento de el Decreto que prezede pase á la Casa que expresa el Memorial con el Maestro de obras Joseph Serrano y el theniemnte Visitador y demas Dependientes y aviendose hechado los Cordeles según consta en la Dilixencia que a continuacion de este Ynforme se ofreze…” Informe de Juan Joaquín de Novales, Comisario del Cuartel del Carmen. Madrid, 9-V-1759 (ARANM, leg. 1,2). “El prenotado señor Capitular previno á Dn. Diego Villanueva. Director de José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 17 El inmueble sería valorado, por José Gómez, en 1761, tras el fallecimiento de José Hortega, en 296.510 rs18. La botica se hallaba en la planta baja del edificio; el mobiliario estaba compuesto por unas estanterías de madera, con puertas vidriadas, en las que encontraban acomodo un botamen de Talavera formado por un par de docenas de jarras, de buen tamaño, orladas en azul, más de cuatrocientos botes con un clavel central como adorno, unos doscientos ‘botes chicos’ con su correspondiente rótulo y casi doscientas vinagreras de vidrio; completaban la decoración un par de jarras vidriadas de Génova. Disponía, además, de dos bancos de respaldo, un par de bufetes de nogal, una silla de vaqueta de moscovia19 y una mesa de pino con cajón20. De los instrumentos con que contaba la botica también tenemos constancia: un almirez grande, un par medianos, dos chicos y cuatro de vidrio, con sus correspondientes manos; tres cántaras, dos de estaño y una de azófar; una azuela de cobre con tres medidas; un embudo y su cuchara; un par de pesos; tres potes de hierro y tres espátulas del mismo material. La rebotica aneja contaba, también, con una estantería de madera conformada con puertas vidriadas, estantes y cajones; encontraban en esta planta destino media docena de sillas de paja, dos mesas acharoladas, una escalera de pie, un bufete de caoba grande, un armario con un par de cajones, una mesa de pino, una prensa con su barrón, una estructura de madera similar a la la Rl. Academia de Sn. Fernando, como á cuio cargo á de correr la referida obra y nueva construccion, obtenga lizencia expresa de Madrid, sin el qual requisito no á de principiar…” Diligencia de Juan Joaquín de Novales, practicada sobre una casa de la calle Los Negros. Madrid, 7-V-1759 (ARANM, leg. 1,2). 18 Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761 (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). La localización de la escritura de partición de bienes fue dada a conocer por Rafael Folch Andreu (“La Botica de D. José Hortega”. Boletín de la Sociedad Española de Historia de la Farmacia, 3: 1-10; 97-110; 151-158; 4: 67-71; 109-115. Madrid, 1952-1953). 19 Aun cuando la vaqueta de moscovia solía ser empleada para forrar sillas de mano, no tenemos seguridad de que éste fuera el uso de la pieza consignada en el inventario. Estos datos, y el resto de los que se señalan sobre los enseres del inmueble, proceden de la Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI1761 (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v); los inventarios no ofrecen una ubicación de las piezas por estancias, la reconstrucción de los espacios es subjetiva y obedece a nuetra interpretación de la utilidad de la pieza y su proximidad en el inventario. 20 18 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol empleada para espadar el lino21, un armario de cuatro puertas y ochenta y tres cajones para conservar productos de droguería. En la rebotica parece diferenciarse un espacio de taller, al que ocasionalmente se denomina ‘obrador’; en él se disponen unas mamparas y unas vidrieras, con las que se dota de cierta privacidad a esta zona acotada en la que se ubica un ‘armario de los emplastos’, una espetera para peroles, una grada de cuatro niveles y algunas cordialeras22; para el trabajo en el obrador se emplea un hacha de hierro, una pala pequeña o badil, unas tenazas y unas trébedes chicas, utensilios que nos señalan la presencia de un horno. Completan el ajuar de la rebotica una cincuentena de orzas de Talavera grandes, una veintena de las medianas y una docena de las pequeñas; además de un centenar de botes de vidrio, cincuenta grandes y otros tantos medianos, casi una treintena de vinagreras y un gran conjunto de redomas: setenta de agua, sesenta y seis de jarabes y sesenta y cuatro para aceites. La espetera de la rebotica debió ser amplia, a tenor de los utensilios contenidos en ella: un par de alambiques de estaño con su ollas y cabezas; otro de cobre; un par de baños de María, de estaño, con su ollas; una marmita de hierro con tapa y asas; once peroles de cobre de diversos tamaños; una cazuela de cobre; una argolla de hierro con su canal; un molde, cilíndrico, para vaciar la ‘piedra infernal’ [nitrato de plata]; un rallador y una espumadera; cuatro cazos de latón y uno de hierro; tres peroles y un par de anafres de hierro; tres morteros de mármol, otro de piedra y un almirez de metal; media docena de barreños, nueve ollas y cuatro cazuelas de barro vidriado; casi una cincuentena de botes de Talavera; dos piedras de moler con sus moletas; tres embudos de vidrio, un par de hojalata; tres cedazos y ocho tamices. Unas puertas vidriadas comunicaban la rebotica con el patio; otras, también vidriadas, daban paso a una alcoba, y sendas escaleras permitían el acceso a las estancias particulares y al sotano, respectivamente; la que conducía a las habitaciones recibía iluminación del patio a través de una vidriera. El inventario la identifica como “Quatro cruceros, y un Cavallete”, lo tasa en tan solo 10 rs (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). 21 Hasta ocho de ellas relata el inventario: cuatro sin vidrios, una quinta con dos puertas, otra más con una mesa de nogal y dos en el hueco de las ventanas. 22 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 19 La alcoba de esta planta baja, aneja a la botica y a la rebotica, debía estar ocupaba por los mancebos al servicio del establecimiento; a ellos queda destinado un cofre viejo con dos cerraduras, ‘dos camas de los mancebos dadas de encarnado en cinco tablas’ y otra en cuatro tablas. De la presencia de mancebos en la botica de José Hortega da cuenta un anuncio del Diario noticioso, curioso, erudito y comercial público y económico, publicado en Madrid, el 9 de febrero de 1758: “En la calle de la Montera, en casa de Don Joseph Ortega, Boticario de los Reales Exercitos de su Majestad (que Dios guarde): darán informe de un Mancebo de Boticario, de cuatro años de practica en Madrid, que quiere acomodarse para Mancebo en alguna casa Botica”23. El patio debía estar parcialmente protegido24. Próximo a él se dispuso una ‘pieza de aguas’; tres pares de puertas vidriadas separaban esta estancia, sus paredes estuvieron cubiertas con andanas y en ella se contuvo una silla poltrona, una escalera portátil, cuatro arcones para traer las aguas de Puertollano, con sus cerraduras y baretas de hierro, ocho pies de tinajas y nueve tapas, un baño de madera, cinco cajones de droguería y un arca para víboras. En este ‘cuarto de aguas’ se guardaban, entre otras piezas, un centenar de redomas de diferentes tamaños, una vasija de las denominadas ‘castaña’ por su forma, algunos frascos para contener líquidos, una veintena de orzas doradas destinadas a conservas y otra veintena de vinageras. El sótano de la casa debía ser amplio; de los útiles que en él se conservaban parece desprenderse la doble misión de almacén y laboratorio; se señala la existencia de tres alambiques de vidrio con sus cabezas, otro par de barro y uno más de cobre; un evaporador, también de cobre, ‘tres maquinas de cobre’, un anafre de hierro y un par de culebrinas de estaño, una de ellas con asas; una cincuentena de redomas de vidrio, media docena de matraces, una veintena de retortas, un par de docenas de garrafas, media docena más con forma de ‘castaña’, tres docenas de botellas de cristal y otras cincuenta y seis más de las de cristal negro -las utilizadas para trasportar las aguas de Puertollano-; Diario noticioso, curioso, erudito y comercial público y económico, [9-II1758]: 4. Madrid, 1758. 23 Al menos así parece indicarlo el inventario, que recoge “tres vidrieras del Patio en la parte de abajo” y, al referirse a los objetos de hierro, “Quatro Barillas que caen del Patio de la Botica” (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). 24 cuatro retortas y una docena de crisoles de barro; una olla vidriada y otra de cobre; un par de tinajas de barro, una docena de cabezas de vidrio para alambiques y algunas piezas de Talavera: cinco orzas pequeñas, un par medianas y otro par grandes, con capacidad para un azumbre. Completa este ajuar un ‘recado de plata para botica’ compuesto de veinte piezas entre medidas, embudos, cucharas y pasaderas y cuatro balanzas romanas con catorce pesas, también en plata. Posiblemente se encontraran en este sótano casi un centenar de piezas de cristal: jarras, botellas, frascos y tibores, inventariados por separado, pero que componen unidad con los objetos de la botica25; entre ellos dos piezas de difícil interpretarción: ‘La machina del cajon’, valorada en cien reales, y la ‘Maquina que ay encima de las cordialeras’, tasada en ochenta reales, quizás dos máquinas eléctricas, de alguno de los modelos difundidos por Francis Hauksbee (1666–1713), en los comienzos del siglo XVIII, donde el cristal ocupa el lugar de la esfera de azufre con que Otto von Guericke (1602-1686) había dotado a su generador electrostático. De los simples y compuestos de que disponía la botica de Hortega, también tenemos detallado inventario, realizado en 1761, tras la muerte de su propietario26. Contaba con una buena sección de ‘pedrería’, en la que se incluyen esmeraldas, topacios, zafiros, jacintos, granates, rubíes, perlas, lapislázulis, bezoares, bolos armenios, imanes, corales y una amplia panoplia de ‘piedras medicamentosas’; sobresalen las 55 onzas de perlas, estimadas por el tasador en 3.222 rs. Entre los preparados se incluyen cuarenta y seis elaboraciones distintas: lapislázuli, ojos de cangrejo, corales, cinabrio nativo, madreperlas, marfil, mandíbula de pez lucio, diente de jabalí, polvos de castóreo, polvos de pulmón de zorro y un largo etcétera entre los que destacan, por sus valores de tasación, las seis onzas de preparado de rubí (320 rs) y las ocho onzas de preparado de esmeraldas (192 rs); las más abundantes resultan dos libras de cristal montano (32 rs) y otras dos de cuerno de ciervo (16 rs). Los láudanos son pocos, tan sólo cuatro tipos reconoce el inventario: opiado, histórico, de cinabrio –el más abundante, dos Fueron adjudicados, en su totalidad, a la hijuela correspondiente a Casimiro Gómez Ortega (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). 25 Como en el caso anterior, también todos los objetos de botica pasaron a la hijuela de Casimiro Gómez Ortega (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). 26 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 21 onzas- y urinario –el disponible en menor cantidad, tan sólo dos dracmas-. Las tinturas son abundantes: anticólica, uretrina, de mirra, de antimonio, de succino, de contrayerva, de cascarilla, de cidra, de Paracelso, de alcanfor, de benjuí, de corteza de naranja, de azafrán, de ámbar gris y muchas más, hasta cuarenta y dos refiere el inventario; el licor anodino de Hoffman despunta en la tasación, las veinticuatro onzas de él disponibles suponen 192 rs; el preparado en mayor cantidad son cuatro libras de la ‘tintura de marte’ con vinagre, tasadas en 16 rs. De licores o ‘espíritus’ disponía de hasta treinta y siete tipos diferentes: carminativo de Silvio, de espliego compuesto, de azufre volátil, de cardenillo, de lombrices, de víboras, de cidra, de rosas, de enebros, de claras de huevo, etc.; la tasación más alta, 320 rs, corresponde a las dos onzas de vino rectificado, seguido de los 192 rs en que se valoran las 64 onzas del de clocaria; en cantidad preparada priman las cuatro libras de vitriolo ácido, tasadas en 64 rs y las tres libras del de hollín (90 rs), de lombrices (48 rs) y de succino (48 rs). Aceites empireumáticos dispuso de diecinueve tipos distintos: de jabón, de mirra, de antimonio, de azufre, de cera, de calabaza, de víboras, etc.; la mayor tasación corresponde a las dos libras de aceite tridentino (64 rs); el preparado en mayor cantidad es un aceite de Pacorno, del que tenía disponibles cinco libras (80 rs). Contó aún de más alta variedad de aceites comunes, hasta treinta trazas diferentes: ruda, trementina, rábanos, Agripa, Aparicio, lombrices, alcaparras, romeros, etc.; tres libras de aceite de Mathiolo quedaron tasadas en 150 rs; debió usar con abundancia el aceite de almendras dulces, en el inventario figura media arroba, tasada en 125 rs. También estuvo bien surtido de ungüentos, hasta cuarenta y ocho fórmulas distintas contabiliza el inventario de su botica en 1761: manteca de azahar, blanco, alcanforado, sarraceno, de altea, de cantáridas, egipciaco, rosado, de Galeno, de Agripa, de corteza de castaña, etc.; la tasación reserva el precio más alto, 160 rs, para una libra del ungüento de enjundia humana; los preparados en mayor cantidad son dos medias arrobas de pomada (125 rs) y litargirio (50 rs). Los emplastos ocuparon, también, un buen espacio en esta botica, hasta cuarenta y una composiciones distintas se 22 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol contemplan en el inventario que nos ocupa: de bayas de laurel, de meliloto, matrialcal, de centaurea, de cicuta, de betónica, de almáciga, de gálvano colado, etc.; a destacar las veinte libras del emplasto de Guillén Servén [sub Cerven], tasadas en 70 rs; el precio más alto de esta sección lo alcanzan las tres libras del emplasto estíptico de Crolio, tasadas en 75 rs, seguido de las doce libras del emplasto de jabón, valoradas en 72 rs. De extractos dispuso de hasta veintitrés composiciones diferentes: fumaria, tila, toronjil, ajenjos, acíbar, celidonia o centaurea, comparten espacio con eléboro negro, jalapa o azafrán; en 120 rs fueron tasadas las cuatro onzas de extracto de ruibarbo y en 100 rs la media libra de extracto de opio; el preparado en cantidad mayor son las dos libras del extracto de coclearia (20 rs). Contó con un auténtico arsenal de ‘gomas’, hasta 53 preparaciones distintas: arábiga, escamonea, mirra, opio, benjuí, incienso, tragacanto, pez griega, minio, limaduras de hierro, plomo quemado, alumbre y alcanfor entre ellas; una arroba de goma de agárico queda tasada en 400 rs; en mayor cantidad, tres arrobas, tenía preparado los extractos de resina (42 rs) y de bolo armenio (18 rs). Las píldoras figuran en veintiún tipos: benedictinas de Füller, histéricas, mesentéricas, etiópicas, de almáciga, de ruibarbo, contra el fuego del vientre, etc.; destacan las dos libras de las de palo santo, valoradas en 64 rs, las de más alto precio y las preparadas en mayor cantidad. Hasta siete ‘sales chímicas’ encontramos en la botica de Hortega: de cuerno de ciervo, succino, víboras, lombrices, milpiés, amoníaco y amoníaco aromáticas; las preparadas en mayor cantidad –y también las cotizadas a más alto precio- son las de succino: sus dieciseis onzas se tasan en 800 rs. Entre las inventariadas como ‘sales’ contamos con treinta y cinco fórmulas diferentes, figuran algunas de origen vegetal, como las de quina, ajenjo, genciana o centaurea menor, junto a otras químicas como la febrífuga de Silvio, sal policresta, antimonio diaforético o sal de Marte. La sal de amoníaco fue la disponible en mayor cantidad (24 libras, 384 rs); el precio más alto, 600 rs, corresponde a las veintiuna libras de tartaro soluble. Los ‘preparados de antimonio’ constituyen, en este inventario, un capítulo diferenciado, cuarenta y tres tipos diferentes figuran en él: manteca de antimonio, disolución José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 23 de Saturno, panacea mercurial, flores blancas de antimonio, arcano coralino, ente de Venus, etc.; el valor más alto de tasación corresponde a una libra de bezoárdico jovial (320 rs); el preparado en mayor cantidad son las diez libras de cerusa de antimonio, tasadas en tan solo 16 rs. La botica de Hortega dispuso de veintinueve tipos de aceites esenciales: de clavo, bergamonta, nuez moscada destilada, naranja, cidra, azahar, espliego, hinojo, salvia, mejorana, cantueso, agenjo, canela, benjuí, mostaza, etc.; casi todos preparados en poca cantidad, salvo una libra de aceite de romero (96 rs); el de más alto precio es el aceite esencial de naranja, las veinte onzas con que contó la botica se tasaron en 240 rs. Bajo el epígrefe de ‘confecciones’ recoge el inventario treinta y cuatro preparados: de jacintos, matritense, mitridato, conserva en flor de claveles, de violeta, de rosa, de jara compuesta, coloquíntidas, de melocotón, antitísica de Junken, etc.; la tasación más elevada del grupo corresponde a las ocho onzas de triaca celeste, valoradas en 480 rs; la preparada en mayor cantidad es una arroba de diacatalicón y jirapliega, de efecto purgante, valorada en 125 rs. Los oleosácaros son pocos, tan sólo cuatro: de canela, naranja, cidra e hinojo; de los tres primeros dispuso de dos onzas, del último sólo de una. Más son los bálsamos, cuarenta y uno figuran en el inventario de 1761: de Fioravanti, copaiba, terebinto, de Saturno, venéreo, católico, betún judaico, etc.; la tasación más alta la alcanzan las once libras de bálsamo peruviano, 480 rs; el preparado en mayor cantidad es la sal de Inglaterra, dispuso de una arroba, tasada en 125 rs. De polvos figuran cuarenta y un tipos: dentífricos, de eléboro negro, lirios de Florencia, Serpentaria virginiana, zarza, sen, ruibarbo tostado, y otros de origen químico: etiope mineral, flor de azufre, magnesia oftálmica, azafrán de Marte, etc.; en 180 rs se tasan las dieciocho libras de polvos de Tucia, la cantidad más alta de producto, junto a igual cantidad de un ‘polvo verde’ (24 rs). El epígrafe dedicado a ‘raices’ incluye setenta y dos productos distintos, dentro de un concepto excesivamente amplio; en su mayoría alude a cortezas: palo santo, cascarilla, saxafrás, alcaparras; en otros a frutos: membrillo inmaduro, pimienta larga; y, en algunas ocasiones, a artículos bien alejados 24 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol de la idea de raíz: cantáridas, piedra pómez, víboras secas, culebras, estiércol de lagarto; por supuesto, también incluye algunas raíces sensu stricto: contrayerva, raíz de China, raíz de lino, etc.; disponía de abundantes cantidades de estas ‘raíces’: dos arrobas de palo santo (75 rs), una de saxafrás (87 rs) y otra de quina escogida (750 rs) se contabilizan en su haber; el coste mayor corresponde a las cortezas de quina. Las ‘flores’ sí concuerdan con el concepto habitual del producto; tuvo espliego, romero, malva, cantueso, azahar, retama, amapola, melocotón, rosa…, y así hasta las dieciocho listadas en el inventario, todas de bajo precio: media arroba de flores de romero se tasan en 8 rs y la arroba de flores de malva en 6 rs. Las ‘yerbas’ suman treinta y seis especies distintas: violeta, meliloto, eneldo, toronjil, fumaria, betónica, culantrillo, pulmonaria, etc.; en la tasación sobresalen los 74 rs en que se valora la media arroba de coloquíntida –quizás la pulpa de su fruto, de acción purgante-, la media arroba de cebolla albarrana –sin duda el bulbo de la planta- se tasa tan sólo en 4 rs, al igual que la medida arroba de ajenjos, o la de artemisa. Hortega dispuso de tres tipos de harinas: cebada, avena y habas; la primera en mayor cantidad, ocho libras. Entre las ‘simientes’, se recogen en el inventario hasta cuarenta y ocho distintas: cártamo, lino, melón, calabaza, sandía, eneldo, perejil, cardo santo, albahaca, rábanos, hortigas, etc.; despuntan, en peso, la arroba de cártamo (25 rs), alholva (8 rs), lino (16 rs), melón (25 rs) y calabaza (30 rs). Los jarabes están representados, en la botica de Hortega, por cincuenta y ocho tipos distintos: mora, limón, cuatro raíces, tusílago, balsámico, corteza de cidra, fumaria, membrillo, coral, calabaza, culantrillo, etc.; la tasación mayor corresponde a las diez libras de rhamno catártico, valoradas en 120 rs; en lo relativo a volumen se señalan, además del de rhamno ya comentado, las ocho libras del de claveles (80 rs), yodo sácaro (48 rs), escorbútico de la Bateana (96 rs), cerúleo (96 rs) y corteza de cidra (64 rs). Las aguas componen, también, parte importante del arsenal terapéutico; hasta cincuenta y tres tipos distintos ofrece el inventario: vulneraria, de nueces verdes, de lirios del valle, de ruda, de hinojo, de rosas, de ranas, y algunas más complejas: palata, triacal, de vitriolo y orina, etc.; media arroba de agua de rubia quedó tasada en 200 rs, una arroba de la de manzanilla en José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 25 25 rs, la misma cantidad de la de borraja en 18 rs, al igual que la de achicoria. Tasación de los efectos pertenecientes a la botica de José Hortega [1761] * Producto Pedrería Láudanos Tasa 5.131 rs 00 ms 138 rs 00 ms Producto Tasa Preparados 1.190 rs 00 ms Tinturas 1.201 rs 00 ms Espíritus 1.457 rs 00 ms Aceites comunes 1.070 rs 00 ms Aceites empireumáticos Ungüentos Emplantos 1.171 rs 00 ms Extractos 662 rs 00 ms Gomas 4.948 rs 17 ms Píldoras 198 rs 00 ms Sales ‘chimicas’ 1.425 rs 00 ms Sales 1.821 rs 00 ms Preparados del antimonio Confecciones 1.937 rs 17 ms Aceites esenciales 1.509 rs 00 ms 1.303 rs 17 ms Oleosácaros 104 rs 00 ms Bálsamos 2.171 rs 00 ms Polvos 572 rs 00 ms Raíces 3.770 rs 17 ms Flores 190 rs 17 ms Yerbas 290 rs 00 ms Harinas 209 rs 00 ms Jarabes Simientes Aguas 1.672 rs 00 ms 417 rs 00 ms 1.100 rs 00 ms 30 rs 00 ms 1.712 rs 00 ms Total 37.400 rs 17 ms * Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761 (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). Las ‘Noticias de Comercio’ publicadas por el Diario noticioso, curioso, erudito y comercial público y económico de Madrid dan cuenta de la actividad de la botica de José Hortega y de la calidad de su clientela: “Se perdió el día 18 del mes de Abril una Caxa de tabaco, que forma un caracol, con pintas encarnadas, y montada en plata: se acudirá para la restitucion á la Botica de Ortega, calle de la Montera, en donde darán el hallazgo”27. “La persona que por descuido huviere dexado una Cuchara de plata sobre uno de los mostradores de la 27 Diario noticioso, curioso, erudito y comercial público y económico, [2-V1758]: 3. Madrid, 1758. 26 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Botica de Don Joseph Ortega, calle de la Montera, que la hallaron hará algunos meses, acuda á cualquiera de los Mancebos, los que la entregarán á quien diere ciertas señas”28. Una selecta clientela de la que también nos informan las escrituras notariales; entre sus parroquianos figuran los familiares del duque de Veraguas, Pedro Nuño Colón de Portugal (16761733)29; el batidor de oro Diego Fernández30, María Regalada de Villalpando (1670-1738), marquesa de Osera31, Leonardo Deuberberg32; y un amplio listado de nombres que nos facilita la relación de deudores incorporada a la partición de bienes de quien fuera el propietario de esta botica33. 28 Diario noticioso, curioso, erudito y comercial público y económico, [1-VI1758]: 3. Madrid, 1758. 29 “Por la quenta, que se ha ajustado en esta conttaduria, á Alphonso Gusano Votticario de S.E. y á Joseph Orttega, que lo fue de su familia, consta, se les quedo deviendo por las medicinas que sacaron de sus tiendas hastta el dia quatro de julio de mil setteztos y treinta tres dos mil trescientos y sessentta un y cattorze mrs de vn lo que se consigna aquí…” Testamentaría del duque de Veraguas. Madrid, 10-VII-1733 (AHPNM, protocolo 14.188, fols. 102v-103r). 30 “Item devo á Dn Joseph Ortega, Boticario en la calle de la Montera lo que constase por las rezettas que presentara de las medizinas que se gastaron en la enfermedad de (…) mi mujer…” Memorial y relación jurada que Diego Fernández, batidor de oro haze de los acreedores y deudas contraídas. Madrid, 19-VIII-1735 (AHPNM, protocolo 16.098, fols. 1r-2r). Este conjunto de recetas ha sido estudiado por N. Floro Andrés Rodríguez (“Preparaciones magistrales del siglo XVIII”. Boletin de la Sociedad Española de Historia de la Farmacia, 38 (149/150): 179-199. Madrid, 1987). Informa de ello Diego de Guerra “á cuio cuidado án corrido las Dependencias de la Cassa de la Excma. Señora Marquesa de Ossera mi señora qe esta en el Cielo”, quien incluye, entre las deudas particulares reconocidas, “A Joseph Ortega, Boticario en la Red de San Luis se le deven doscientos y quarenta rs. de las medicinas especiales que de su Botica sacaron para mi señora…” Testamentaría de la marquesa de Osera. Madrid, 16-VII-1738 (AHPNM, protocolo 15.223, fol. 627r). 31 32 “... ciento treinta y ocho rs que se han pagado a Joseph Hortega boticario de la calle de la Montera por las medizinas que gastaron en la ultima enfermedad de dho Dn. Lamberto en cuia cantidad fueron ajustadas las rezetas que de ello entrego”. Inventario y tasación de los bienes, hacienda y efectos que han quedado por la muerte de Lamberto Deuberbeg, vecino que fue de esta villa. Madrid, 9-III-1737 (AHPNM, protocolo 17.141, fol. 448r). 33 Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761 (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). Estos créditos no fueron contemplados en la valoración de bienes, pero sí quedan reflejados en la testamentaría: “Declaramos los otorgantes que de todo lo que se recobrase de los creditos a favor de esta José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 27 Reconocimientos de deudas por medicamentos procedentes de la botica de José Hortega. 24-VI-1761* Deudor Marqués de Estepa [hasta 21-I-1761] Príncipe de Orange Cantidad adeudada 33.191 rs 00 ms Deudor Vicente Alegría Cantidad adeudada 143 rs 00 ms 10.000 rs 00 ms Julian de Vascuñana 100 rs 00 ms Convento del Carmen Calzado Gaspar Salza 9.000 rs 00 ms Juan Trigueros 96 rs 00 ms 7.723 rs 00 ms 94 rs 00 ms Príncipe de Macerano José de Praga 4.033 rs 00 ms 2.929 rs 00 ms Marqués de la Regalía Juan Bautista Lastroyero Duquesa del Populi Martín Martínez y hermanos Francisco Bruno Labradía José Ignacio Torres 2.253 rs 22 ms Pinto Miguel 77 rs 00 ms 1.440 rs 00 ms Gordezuela 76 rs 00 ms 1.400 rs 00 ms Andrade 70 rs. 00 ms Juan Valera 1.310 rs 00 ms Gómez 67 rs. 00 ms Sebastián Fernández de Elices Ramón de la Cruz 1.211 rs 00 ms Juan de Palafox 66 rs. 00 ms 1.200 rs 00 ms Gramont 59 rs. 00 ms Duque de Bournombila Manuel de Erre 1.132 rs 00 ms Ardit 53 rs. 00 ms 1.014 rs 00 ms Rubián 52 rs. 00 ms Duque de Veraguas 1.057 rs 00 ms Quijarro 50 rs. 00 ms 85 rs 00 ms 79 rs 00 ms Diego Sada Parada 994 rs 00 ms Jerónimo Conde 47 rs. 00 ms Embajador de Alemania José Miguel de Quebec Francisco de Cepeda José Rogamas 802 rs 00 ms Trabiesso 45 rs. 00 ms 740 rs 00 ms 42 rs. 00 ms 725 rs 00 ms Conde de Valdehermoso Príncipe Bergeri 674 rs 00 ms Ustariz 28 rs. 00 ms José Real 600 rs 00 ms Larrea 23 rs. 00 ms Conde de la Coruña 529 rs 00 ms 20 rs. 00 ms Benito Hernández 450 rs 00 ms Embajador de Venecia Marqués de la Roca 31 rs. 00 ms 19 rs. 00 ms testamentaría que resultan de la escta. que en este mismo dia se otorga (…) deben hacerse dos partes yguales, la una para la mencionada Dª Mariana Llorente (…) deduciendose lo que resultase importar el quinto [destinado a los nietos de Mariana Aztina] (…) y la otra para el expresado Dn. Casimiro Gómez Ortega…” 28 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Blas de Lesso 367 rs 00 ms Felipe Nápoles 19 rs. 00 ms Salvador de la Mota 364 rs 00 ms 18 rs. 00 ms Agustin Navarro 360 rs 00 ms Campanero de San Luis Domingo de la Hoz Manuel Calvo 300 rs 00 ms Hamileon 17 rs. 00 ms Felipe Murillo 240 rs 00 ms Conde de Lemus 16 rs. 00 ms José Orco 240 rs. 00 ms Lazuela 16 rs. 00 ms Pedro de Yebes 212 rs 00 ms Antonio Gálvez 16 rs. 00 ms Conde de Valparaiso Pedro Estuardo 211 rs 00 ms Fábrica de Zaragoza 16 rs. 00 ms 204 rs 00 ms 12 rs. 00 ms Tomás de Castro Colona Gorba 198 rs 00 ms Marqués de la Victoria Marquesa de Montemar Navarro Catalina de Ramos 137 rs 00 ms 184 rs 00 ms 17 rs. 00 ms 12 rs. 00 ms 12 rs. 00 ms * Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761 (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). No siempre el cobro de estas recetas fue fácil; tal las dispensadas para Diego Fernández, batidor de oro, para quien, entre los años 1732 a 1735, José Hortega elaboró 49 recetas, purgantes y laxantes en su mayoría34, cuya suma hubo de ser reclamada en concurso de acreedores35. En cualquier caso, los datos aportados nos permiten afirmar que José Hortega dispuso de una botica bien surtida; buena parte de su éxito se debio al trabajo que realizara Luis Llorente, su anterior propietario, quien elevó sustancialmente la calidad y cantidad de sus materiales frente a los que recogió de 34 Hay también bastantes recetas para el tratamiento de enfermedades respiratorias, antidiarreicos, tónicos estomacales y digestivos, antiartríticos y antirreumáticos y algún antivenéreo (cf. N. Floro Andrés Rodríguez, Op. cit. nota 30. 1987). José Hortega justificará, tras aportar las recetas: “Importan estas rezs. que se han despachado en mi Botica para Casa del Sr. Diego Fernz. en los años de [17]32-33-34 y [17]35 rs mill quatrocientos, y cinquenta, y ocho rs vn de cuya cantidad baxado el tercio segun estilo quedan ligs. // novecientos, y setenta y dos rs de vn salvo error. Md. y Septbre 1º de 1735 // Son 972 rs.vn [firmado, José Hortega]”. Ante lo cual el juez setenciará: “Que a Dn. Joseph Ortega vezino y boticario de esta Corte, con los bienes de dicho Concurso se le paguen 972 rs prozedidos de receptas por generos sacados de su Botica [firma el escribano, Silvestre Fernández de Lara]”. Concurso de acreedores de Diego Fernández. Madrid, [1735] (AHPNM, protocolo 16.098, fol. 220r y 219r). 35 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 29 Ignacio de la Peña. Más signativa nos parece la relación entre lo que representa el valor de la botica frente al total de bienes del boticario: la práctica totalidad de su haber en el caso de Ignacio de la Peña; algo más de la mitad de su patrimonio para Luis Llorente; y aún menos del cuarto de sus bienes para José Hortega. Resulta evidente un aumento en el potencial económico del boticario en la primera mitad del XVIII, al menos en la serie de quienes trabajaron en la botica de la calle de la Montera. Tasaciones de la botica, y del total de bienes, pertenecientes a los boticarios establecidos en la calle de la Montera (1710-1761) Fecha 1710. 24-I Boticario Ignacio de la Peña* Tasación de bienes 11.270 rs 17 ms Tasacion de la botica 10.275 rs 00 ms [91.17%] * “Ynventario y tasazn. de los bienes que quedaron por muerte de Ignacio de la Peña. Boticario qe. fue de esta villa”. Protocolo del escribano Francisco Nicolás Cascajedo. Madrid, 1710 (AHPNM, protocolo 14.980, fols. 117r-185r); la tasación de la botica fue realizada, el 24-I-1710, por Martín de Zufibia y Francisco de Sienes, asistidos por Diego Bartolomé, en representación del Protomedicato; del resto de los bienes: mobiliario, ropas y pinturas, se ocuparon Francisco Rodríguez del Pozo y Antonio Serratón 1722. 27-VIII Luis Llorente** 80.675 rs 00 ms 49.715 rs 00 ms [61.62%] ** Inventario de los bienes de Luis Llorente. Madrid, 22-VIII-1722 / 12-IX1722, protocolizado ante Juan Féliz del Valle (AHPNM, protocolo 14.100, fols. 101r-136r); de la tasación de la botica se ocuparon José Manzano y Manuel de Lamas, boticarios de la Corte; la tasación de las pinturas corrió a cargo de Salvador Martínez Jordán; la de la ropa blanca, de la costurera Francisca Martina; la de los vestidos, el sastre Mateo Recuero; la de de los muebles de madera y nogal, el carpintero Felipe Portello y de la de los cobres y demás mobiliario de la cocina, se ocupó el calderero Felipe de Linares. 1761. 24-VI José Hortega*** 327.009 rs 01 ms 64.323 rs 22 ms [19,67%] *** Incluimos la totalidad de la biblioteca (14.356 rs 00 ms), los productos (37.400 rs 17 ms) y utensilios conservados en la botica (2.867 rs 00 ms), la rebotica (1095 rs 00 ms), el cuarto de aguas (505 rs 17 ms), la espetera de la botica (2.666 rs 11 ms), el sótano (4742 rs 11 ms) y el cristal (691 rs); no podemos contabilizar el monto del mobiliario, difícil de deslindar entre el propio de la botica y el del domicilio particular. (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). Una acomodada vivienda Los espacios de la zona habitada del inmueble son difíciles de delimitar con la información disponible; vaya por delante que todas las puertas que separan las estancias eran vidriadas, lo que debió dar una amplia luminosidad a las habitaciones. El inmueble constó de tres plantas: un bajo, donde se encontraba instalada 30 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol la botica, un principal y un segundo; disponía, también, de un sótano y de un desván. Además del dormitorio destinado a los mancebos, anejo a la botica y del que nos hemos ocupado líneas arriba, debieron disponerse, al menos, otras seis alcobas: una de ellas estaba amueblada con una cama verde con su cabecero, un arca de cedro con cerradura y llaves, un bufete pequeño de nogal con cubierta de badana y un respaldo de cama de cuero amarillo; otra se situó en la zona del edificio orientada sobre la calle de los Negros36, en ella debió ubicarse una cama torneada y dos camas de cuatro tablas; quizás se trate de la habitación destinada al servicio; nos consta que, al menos en 1734, habitó en el domicilio Manuela López37. Los demás dormitorios debieron situarse en la zona principal de la casa38, al menos fueron cuatro, a tenor de las camas que se indican en los inventarios: una cama verde de cuatro tablas y un tocador de charol con su espejo y cuatro cajones debió constituir el mobiliario del primero; una cama torneada dada de blanco con siete tablas debió ubicarse en el segundo; una cama torneada dada de blanco con cuatro tablas compuso el tercero y dos catres de haya conformaron el cuarto; entre ellos se distribuyeron algunos muebles auxiliares: una mesa redonda en blanco, un espejo con una luna de dos tercios, unos pies de cama, una mampara de badana amarilla y un “Escaparate con 36 Los inventarios aluden a “Unas vidrieras que estan en el pasillo de la alcoba de la calle de los Negros” (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). 37 “… que resido en casa de Dn. Joseph de Ortega de ocupacion Boticario (…) Declaro soi pobre de solemnidad y como tal me mantienen en su casa el referido Dn Joseph de Ortega y Dª Mariana de Aztina su mujer mediante lo qual no teniendo como no tengo vienes ni hazienda alguna para costerar mi entierro, ni para mandar se haga vien por mi alma, atento a lo referuido pido y suplico al Señor Cura o theniente de la Parrochial del Señor San Gines de esta Corte y a el theniente del Señor de San Luis anejo de esta parrochia del Señor San Gines donde a el presente soi parrochiana ó a los de donde fuere al tiempo de mi fallecimiento sean servidos de mandar se me entierre de limosna. Y hagan todo el vien qe pudieren por mi anima como lo acostumbran hazer con otros pobres de solemnidad como yo qe Dios les pagara en buena hora…” Declaración de pobre de Manuela López. Madrid, 29-XII-1734; actúan como testigos Cristóbal García Carretero, Patricio Riel Martínez y Julián de Roda Castillo, “no lo firmo por qe dijo no saber a su ruego lo firmo uno de los testigos” (AHPNM, protocolo 14.101, fols. 438r-439r). Todos ellos, junto a los de la ‘sala de ocio’ que luego describiremos, quedaron asignados a Mariana Llorente (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v), por lo que pensamos que constituyen un espacio físico común. 38 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 31 un Sn Joseph, y su mesa con remate de Bronce”, a buen seguro perteneciente al dormitorio principal. Otro espacio quedó dedicado a lugar de ocio: un cofre tumbón de pellejo de caballo con cerradura y llave, otro cofre de camino forrado de igual material, un oratorio de dos cajones, una mesa de jugar de nogal con dos cajones forrada en paño verde, una grada de tres peldaños y un bufete pequeño con los pies de nogal torneado y cubiertos con distintas maderas y conchas debió conformar su mobiliario. La biblioteca fue la más amplia de las habitaciones de la casa, su paso se franqueba a través de ‘tres puertas vidriadas con vidrios entrefinos’; además de los muebles destinados a contener los libros de su propietario39, la estancia dispuso de chimenea francesa, con pantalla de hojalata, rodapiés y protección de nogal guarnecido de damasco, sobre la que se situó un espejo con su adorno dorado y jaspeado; para el trabajo en la chimenea se contó con dos tenazas de hierro con su badil y urgadero y dos morillos de hierro; la iluminación de la sala se conseguía con una araña de dos cuerpos, con doce luces, la única lámpara con que debió contar la casa. En la sala se dispuso una mesa de juegos, con forro de damasco, media docena de sillas poltronas, una docena de taburetes de nogal forrados de damasco carmesí, otra docena de taburetes de charol y una silla blanca, tallada, guarnicionada de carmesí, quizás la destinada a la presidencia de la Real Academia Médica Matritense, que habría de reunirse en este espacio. Completaban la estancia un tocador con su espejo de nogal, embutido de distintas maderas; un cofre tumbón guarnecido de baqueta de moscovia, otro de baqueta con dos cerraduras; un bufete de nogal con los pies torneados y un tapete de paño verde; un par de escritorios con cajones de nogal y cerraduras; dos alacenas acristaladas, una de ellas con seis puertas en el cuerpo inferior; una banca de pino, destinada a guardar la plata; una mesa camilla con cuatro pies torneados y dos espléndidas cómodas, realizadas en Inglaterra, con tapa de mármol y cajones de madera con aldabones en bronce40. Ubicado en la biblioteca, o en una sala próxima a ésta, se dispuso el gabinete de Historia Natural; “barias piezs y fracmtos 39 Sólo “la Madera de la Llibreria” queda tasada en 1.300 rs (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). 40 Constituyen éstas las piezas muebles que gozaron de más alta tasación, 2.700 rs (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). 32 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol de los reyns Animal, Mineral, que adornan el Gavinete de Histª nat. (…) tassado en tres mil rs. vn” según relata el inventario de bienes de José Hortega levantado tras su fallecimiento. Aneja a la biblioteca debió quedar una sala dedicada a servir de auxilio a ésta principal; un tablero de damasco, un bufete de nogal con pies torneados, otro de nogal y hierro, un armario con cerradura, otro de dos cuerpos, un tercero con puertas y cerraduras, una docena de sillas ordinarias, una mesa redonda de charol y un pie de tinaja debieron encontrarse entre sus enseres. La estancia utilizada como cocina dispuso de tres pies de tinajas, un tajo de picar, una mesa con cajón, una percha de madera para colgar los utensilios de cobre, un fregadero de madera con dos artesas, unos fuelles y un cubo. Los utensilios que componían la espetera de la cocina quedan también inventariados: cazos y perolas de cobre, otros de latón, media docena de velones de diferentes tamaños, un almirez de seis libras y media de peso, doce calderos de latón, un tarro de cobre, tres chocolateras, un par de ollas de cobre y una buena copa de azófar. Aneja a esta estancia queda un ‘cuarto oscuro’41, probablemente una zona de almacén. No lejos debió estar un espacio destinado al cuidado de la ropa: una ‘camilla de secar la ropa’ y una ‘arquilla vieja sin llave ni cerradura’ debieron encontrar aquí acomodo. El inmueble contó con un desván; en 1761 habían recaído en él una artesa de salar tocino, una “mesa de nuebe pies de largo de quita y pon con sus pies”, un escritorio viejo, un bufete pequeño de nogal, ocho bastidores, dos cajones -que fueron de la botica- con sus aldabones, una rinconera de charol, un colgador de vestidor con su pie, un cofre con sus llaves y cerraduras, media docena de sitiales con sus cubiertas de badana y tres jofainas de brasero. Las pinturas que ornaron la casa no fueron muchas y, a tenor de lo tasado, no eran de gran calidad; sobresalen las piezas de temática religiosa: una lámina de San José, un cuadro de ‘Nra Señora de México’, otro con la representación de la parábola del rico avariento, una adoración de los Reyes, un Jesucristo con marco dorado y una Concepción de igual moldura; también dispuso de algunos con motivos decorativos más profanos: 41 Los inventarios aluden a ‘una vidriera del cuarto oscuro’ (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 33 cuatro bodegones de flores, de gran tamaño42; otros cuatro, algo menores, de igual tema43; una representación de un pájaro ‘con su marco dorado’, dos láminas de cobre enmarcadas en negro, dos “Paísajes de una vara de largo y tres quartas de ancho, con marcos dorados” y un cuadro apaisado de ‘muchachos’. Acompañaban a las pinturas cuatro tapices que recreaban temas de Historia Sagrada44. Completan la decoración de las paredes, además de los espejos de madera, ya consignados en los dormitorios, uno de marco negro de una vara, otro par de lunas, de igual tamaño, con su adorno dorado y media docena de cornucopias de luna, también de una vara de longitud. Para proteger el suelo, probablemente el de la biblioteca, se dispuso de una alfombra turca y de un tapete de Liétor. El equipamiento textil de la casa también nos es conocido: lienzos de distintas calidades, desde el sutil cambray (2 varas), hasta el delgado y vasto bocadillo (33 varas, 4rs/vara), pasando por algodón (8 varas), morlés (5 varas), true (34 varas), cambaryón (5 varas), cotanza (25 varas), gusanillo (18,5 varas) y, el más común, lienzo de León (67 varas); un juego de manteles de Flandes, otro adamascado, ocho servilletas de gusanillo y otras veinte de lienzo de León, diez tablas de manteles con dieciocho servilletas; media docena de toallas; seis cortinas blancas; una colcha de gusanillo y otras cinco de lienzo ordinario, cuarenta y seis almohadas, ocho sábanas de lienzo de La Coruña, otras tres de cotanza, veintiocho sábanas ‘de familia’ y once sábanas más. Completan el ajuar doméstico nueve camisas de hombre y seis camisolas sin hacer. Se añaden a él once mantas y dos colchas manchegas; cinco colchones buenos poblados de lana, una hijuela compañera de los colchones, catorce colchones ‘de familia’ de peor calidad, dos colchones de catre y veintidós fundas para colchón. El cortinaje de la casa queda globalmente inventariado; además de las cortinas blancas ya consignadas como lienzos, se añaden otras ciento catorce varas “de lienzo pintado de las cortins (…), una cortina nubarada de coton que tiene nuebe varas 42 “Quatro floreros de á bara, y tres quarts de ancho con su marco oscuro en quatrocientos, y ochenta rs”(AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). “…quatro floreros de a media bara de alto, y mas de tercia de ancho, en tres cientos rs”(AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). 43 Éstos tenían “de corrida, veinte y tres anás por cinco de cayda que hacen en quadro ciento y quince anás, valen mill rs. vn” (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). 44 34 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol (…) cortinas de bayeta encarnada viejas, que tienen veinte y siete varas (…) diferentes cortinas de tafetan anubarradas (…) estopa de la parte de afuera de los Balcones…” La loza de china, utilizada para el servicio de la casa, estaba compuesta por dos orzas largas con sus tapas, sesenta y dos platos de vajilla, otros cuatro platos más para servir, cinco fuentes, tres ensaladeras, treinta y un platos con sus jícaras para tomar chocolate, dieciocho jícaras más y tres tazas sueltas, tres teteras, ocho vasos y dos jarras. Los objetos de plata que fueran propiedad de la casa quedaron tasados al peso, supusieron en total 785 onzas y cinco ochavos45; buena parte eran utensilios para el servicio de mesa: dieciocho platos trincheros con molduras torneadas, un plato grande con moldura y dos asas, tres azafates cincelados con hojas y flores, seis macerinas ovadas decoradas con galones y con sus pocillos soldados, una salvilla con moldura torneada y pie atornillado con nudete, una cazuela con dos asideros y tapa, dieciocho cucharas de plata y tres cucharones, nueve cuchillos y dos tronchantes, una bandeja rectangular cincelada -y maltratada-, tres tembladeras con dos asas cada una, tres vasos redondos y un salero ovado con dos tapas engrosadas. No podían faltar un par de candelabros con plantillas y mecheros ochavados y un platillo y tijeras de espabilar; se completa la serie con algunos útiles de escritorio: un tintero de plata y una salvadera; y algunos otros artículos de uso doméstico: una palangana con moldura y asa, una pila de plata con pilón rematada en una cruz de chapa, una campanilla -sin badajo-, una hebilla, un pedazo de cadena y algunas piezas menores fuera de uso. No cabe duda de que José Hortega disfrutó de sobrados medios económicos, e hizo ostentación de ello; en carta de Pehr Löfling dirigida a Carl Linné, fechada el 15 de octubre de 1753, escribirá: “El Sr. Ortega logró la semana pasada doble sueldo, y es primer Boticario del exército, y goza 24@ de pension como en tiempo de guerra, de modo que en el dia es hombre poderoso. Tiene á más su botica propia, que es la mejor y mas bien surtida de todo el pueblo…”46 Al precio de 19 rs/onza quedaron tasados en 14.915 rs (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). 45 Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 15-X-1753 [L-1652]. (The Linnean Society (London) [LS], signatura: ms. LS, IX: 379-380; 383-384 [duplicado]. El documento, sin cita de localización, fue hecho público por 46 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado Bienes muebles pertenecientes a José Hortega y Mariana Llorente* 35 Tasa Mobiliario de casa y botica 28.755 rs 00 ms Pinturas 3.010 rs 00 ms Lienzos y ropa blanca 4.196 rs 00 ms China 1.353 rs 00 ms Tapices 1.408 rs 00 ms Gabinete de Historia Natural 3.000 rs 00 ms Librería 14.356 rs 00 ms Efectos de la botica [productos] 37.400 rs 17 ms Efectos de la botica [utensilios] 2.867 rs 00 ms Rebotica 1.095 rs 00 ms Cuarto de aguas 505 rs 17 ms Espetera [botica] 2.666 rs 11 ms Sótano 4742 rs 11ms Cristal 691 rs 00 ms Colchones y mantas 1.481 rs 00 ms Hierro 737 rs 00 ms Espetera [cocina] 1.048 rs 00 ms Cortinaje 1.318 rs 00 ms Plata 14.915 rs 00 ms 4.290 rs 00 ms Alhajas7 Total de bienes muebles 129.834 rs 22 ms * Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761 (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). Ignacio Jordán de Asso. “Observaciones de Historia natural hechas en España y en America por Pedro Loefling: traducidas del sueco, según la edicion de Cárlos Linneo”. Anales de Ciencias Naturales, 3(9): 278-315; 4(11): 155-191; 4(12): 324339; 5(13): 82-104; 5(15): 296-340. Madrid, 1801-1802. [Reeditadas en Memorias de la Real Sociedad Española de Historia Natural, 1907]; la referencia en Op. cit. 4(12): 311-319. 1801). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 37 Un boticario y su Colegio La Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista San Lucas En 1721, dos asociaciones religiosas, ambas en situación de decadencia, se fusionaron en una, sosteniendo el carácter mariano de la primera -con capilla propia y fundación privada para el mantenimiento de su culto- y el profesional de la segunda, fundamentalmente integrada por boticarios de la Corte47. La Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista San Lucas tuvo su sede canónica en una capilla ubicada en el camposanto del Hospital General y de la Pasión de Madrid, junto a la calle Santa Isabel, cercana a la de Atocha; se dedicó ésta a la asistencia espiritual de las pobres que morían en el Hospital General, a la vez que practicaba el socorro económico de los congregantes enfermos y la oración por los cofrades fallecidos, combinando así funciones benéficas 47 Justifica esta fecha el siguiente comentario: “Silbestre Fernz. Sacristan que soy, demas de doze años, a esta parte, de la Capilla y Congregzon. de Nra. Sra. de los Desamparados, sitta en el Campo Santo del Rl. Hospital de la Passion de esta Corte (…) Digo, que por el año passado de 1721, se celebró, por dha Congregazon. Junta general á fin de unir á ella la del Glorioso Evangelista Sn. Lucas. Y aviendo efectuado entre otras raznes. qe. se acordaron en ella, fue una, la de qe. como tal sacristan, hiziese un Ynventario de todos los efectos, y Alhajas de dha Congregazon. y Capilla…” Libro 2º de la Juntas de la Congregacion y Hermandad de Nuestra Señora de los Desamparados sita en la Capilla del Campo Santo del Hospital de la Passion de esta Corte desde el Año de 1699 en Adelante. Archivo de la Real Academia Nacional de Farmacia [ARANF], L-3, fol. 94r). La primera junta celebrada por “el Colegio y Congregª de Nra. Sra. de los Desamparados de Valencia, y Glorioso Evangelista Sn. Lucas” lleva fecha de 30-VII-1722 (ARANF, L-3, fol. 96v); la anterior de que tenemos constancia se retrotrae al 8-XII-1715, es ésta la última celebrada por la “Congregacion de Nra. Sra. de los Desamparados” (ARANF, L-3, fol. 92v). De historiar esta Congregación se han ocupado Toribio Zúñiga Sánchez-Cerrudo [María del Carmen Francés Causapé, ed.]. Historia de la Real Academia de Farmacia. Volumen I. Las Congregaciones de boticarios. Madrid: Real Academia Nacional de Farmacia, 2002 y Antonio González Bueno “Ciencia, trabajo y piedad: el quehacer farmacéutico en la España de la primera mitad del XVIII”. Anales de la Real Academia Nacional de Farmacia, 77(3): 76-119. Madrid, 2011. 38 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol con devocionales48. Su calendario festivo se centraba en dos celebraciones, las de sus dobles patronos: el 14 de mayo, Nuestra Señora de los Desamparados y el 18 de octubre, San Lucas. A esta Congregación perteneció José Hortega desde el año de 172949; su integración se produce junto a la de Andrés Famada, Cristóbal de los Ríos, Francisco Ledesma, José Zavaleta, Juan Martínez y Pedro Mercado. Desde entonces contribuyó asiduamente, tanto con su asistencia habitual como con la entrega de limosnas para atender a los gastos de las funciones religiosas organizadas por la Congregación50. La participación en la vida de la Congregación de José Hortega ha de entenderse desde un doble postulado; por un lado -por qué dudarlo- desde una actitud personal vinculada a su piedad individual; y por otro, desde una perspectiva social, como elemento de su adscrición a un mundo profesional determinado, con el que compartía fe y problemas laborales. La entrada en 48 No era ésta la única cofradía vinculada al Hospital General, conocemos otras a lo largo de este siglo XVIII: la Congregación de la Concordia de la Capilla del Obispo para asistir a los enfermos del Hospital General (fl. 1696); la Real Archicofradía y Congregación del Santísimo Sacramento, Nuestra Señora de la Misericordia y Ánimas del Purgatorio de los difuntos pobres del Hospital General, con advocación de la Visitación de Nuestra Señora a Santa Isabel (fl. 1721-1755) (cf. Mercedes Agulló Cobo. “Archicofradías, Cofradías, Congregaciones, Esclavitudes y Hermandades de Madrid (siglos XVIIXVIII)”. Anales del Instituto de Estudios Madrileños, 47: 715-723. Madrid, 2007). Francisco Aguilar Piñal (“Asociaciones piadosas madrileñas del siglo XVIII (Descripción bibliográfica de sus Constituciones). Anales del Instituto de Estudios Madrileños, 7: 253-260. Madrid, 1971) recoge las constituciones publicadas por la Hermandad de Nuestra Señora de la Caridad, con sede en el Hospital Real de la Pasión (ca. 1715), la de la Congregación de Nuestro Padre y Patriarca San Felipe Neri, de seglares, siervos de los pobres enfermos del Real Hospital (1745), la Real Congregación de indignos esclavos del Santísimo Cristo de la Obediencia y Nuestra Señora de las Tres Necesidades, sita en la Iglesia del Buen Suceso, del Real Hospital de la Corte (1749) y la de la Congregación del glorioso San Antonio de Padua erigida en la Iglesia del Real Hospital General de Madrid (1799). En las “Quentas con cargo y data del año 1729 que dexaron Dn. Alfonso Gusano y Dn. Joseph Orobegoitia, consiliarios a dho. año” (ARANF, leg. 3,8,6) queda consignado: “Sr. Dn. Joseph Hortega 60 [rs] y dos tercios”, la anotación correspondiente a su ingreso y a la cuota anual de ese año. 49 50 Sus aportaciones giran en torno a los 15 rs, la cantidad habitual en otros congregantes; con los 15 rs 30 ms que entregó en 1729 apenas hubiera podido abonarse los 15 rs de propina que se le dio al capellán por su actuación en ese dia, o los 15 rs 15 ms que importó el vino y los bizcochos con que se obsequió a los sacerdotes para su desayuno (cf. ARANF, L-5, fol. 17r). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 39 la Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista San Lucas era el primer paso para integrarse socialmente en el gremio de los boticarios madrileños; en una situacion que ha sido definida, para otras agrupaciones semejantes, como una ‘familia artificial’51 que manifiesta su solidaridad en términos de asistencia material y espiritual. Esta Congregación, como la práctica totalidad de las cofradías vigentes en el Madrid del XVIII, era una asociación de laicos, dotados de carácter autónomo tanto para la elección de sus cargos como para la organización de sus actos o para la adquisición y reparación de sus objetos de cultos y, por supuesto, para la gestión de sus bienes. Su vinculación administrativa se establece con el vicario eclesiástico y no con los poderes civiles. La Congregación anotó las juntas realizadas en sus Libros, que nos han llegado íntegros, y conservó la documentación acreditativa de los gastos e ingresos realizados, lo que nos permite aproximarnos a su historia durante el período en que José Hortega estuvo integrado en su seno. Los ingresos de la Congregación se correponden con las cuotas anuales abonadas por sus miembros -60 rs en el periodo temporal que nos ocupa-, las lismonas que éstos colectasen o cediesen a la hermandad, y los beneficios que producía la Fundación Sobremonte, a ella testamentariamente adscrita52. Los gastos se deben a las honras, misas y sufragios por los difuntos, las limosnas entregadas a los congregantes necesitados, algún que otro pleito y el mantenimiento de la capilla de la Congregación, sus enseres y los inmuebles de la Fundación. La Hermandad mantuvo una estructura interna similar a la de la cofradía mariana de procedencia: un hermano mayor, auxiliado por dos consiliarios, un secretario –y su suplente-, contador, tesoro y sacristán, que adquiere la condición de ‘mayordomo de cera’; entre 1725 y 1745 este cargo de sacristán y 51 Milagrosa Romero Samper. Las Cofradías en el Madrid del Siglo XVIII. Madrid: UCM, 1998. 2 vols. (cf. vol. 1: 71). 52 Quedó ésta constituida tras el fallecimiento de José Sobremonte, acaecido en octubre de 1710, quien cedió a la Congregación dos casas de su propiedad, sitas en la calle de San Agustín, frente al Monasterio de las Trinitarias Descalzas, con el compromiso de que, a perpetuidad, se ofrecieren cuatro misas rezadas cada semana por su alma y la de su esposa, Luisa Mateo, y se contratara a un sacistán (cf. Libro de los títulos de la fundación de la capellanía que dejó José de Sobremonte a la Congregación de Nra. Sra. de los Desamparados. ARANF, L-4). 40 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol mayordomo de cera es asumido por quien ostenta el de contador. En la junta formada para 1732 figura un nuevo empleo, el de ‘enfermero’, al que se adscriben dos personas; en las posteriores cambiarán el título por el de ‘celadores’; tradicionalmente este cargo corresponde a quienes han desempeñado el puesto de consiliarios en la junta del año anterior. En diciembre de 1748 la Congregación determina que, en los cargos de consiliario, se alternen los nuevos con los viejos hermanos, para favorecer la integración de los primeros en la estructura de la Hermandad53. Los congregantes realizaban, al menos, una junta general anual, para la elección de los cargos que habrían de conducir la marcha de la Cofradía durante el siguiente año; tradicionalmente celebrada por la congregación mariana en el día de la Inmaculada, desde la década de 1730 cambia de fecha para pasar a realizarse, en la mayor parte de los años, en la fiesta de la Virgen de la Esperanza, el 18 de diciembre. A ésta se añaden otras dos juntas generales anuales más, ambas destinadas a la recaudación de fondos: la primera días antes de la Pascua, para preparar un desayuno para las enfermas pobres internadas en el Hospital General de Madrid, y la segunda, a fines de abril, para organizar las fiestas del tercer domingo de mayo, en honor a su patrona, Nuestra Señora de los Desamparados. Las juntas se celebran, a primera hora de la tarde, en la sede canónica de la Hermandad, la capilla sita en el camposanto del Hospital General y de la Pasión de Madrid. En la asamblea de diciembre de 1731 José Hortega es nombrado consiliario de la Hermandad, junto a Andrés Famada54; “... tambien se acordó en dicha Junta, qe para en ádelante, se propusiessen para Consiliarios, un ántiguo Hermº con otro moderno…” (Junta particular de 18-XII-1748. ARANF, L-3, fol. 124r-124v). 53 54 “Los Congregantes y Colegiados de Nra. Sra. de los Desamparados: y Colegio del Sr. Sn. Lucas estando en Junta general en esta Capilla (…) nombraron tomando Botos Secretos (…) por el año que viene de 1732 los Oficiales siguientes, por hemº maior se religio Dn. Joseph Quessada, por Consiliarios á Dn. Andres Famada y á Dn. Joseph Hortega, por contador y mayordomo de cera se religio á Dn. Antonio Ysnardo de Mora, por Thesorero á Dn. Joseph Ontanillas, para enfermeros á los Consiliarios del año antezedente Dn. Joseph Guerrero y Dn. Joseph Alday, y para Secretario á mi el referido Lorenzo Alquizaleete [sic]” (Junta general de 18-XII-1731. ARANF, L-3, fols. 106r-106v-). Juntos entregarán las corresponcientes cuentas anuales: “Quentas del año de 1732, Dadas por Dn. Andres Famada y Dn. Joseph Ortega Consiliarios de dho. año” (ARANF, leg. 3,9,2). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 41 como venia siendo habitual en la Congregación, ambos pasaron, al siguiente año, a desempeñar las funciones de celadores55. En enero de 1736, la Congregación y Colegio de Nuestra Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista San Lucas decide, en junta general extraordinaria, modificar sus constituciones56; la razón parece residir en la inviabilidad de mantener vinculados los privilegios gremiales de los boticarios de la Corte a una congregación religiosa, de la que no formaban parte todos los individuos del gremio y, sobre todo, en la que tenían cabida otros profesionales no relacionados con esta actividad. La comisión nombrada al efecto –en la que tomó parte José Hortega- produjo, en realidad, unos estatutos, los del Real Colegio de Profesores Boticarios de Madrid, de los que nos hemos de ocupar más adelante. No supuso ello una ruptura de la congregación mariana, que siguió manteniendo su propia vida, paralela a la del Colegio de Boticarios; lo que sí ocurrió fue una separación de funciones: las estrictamente gremiales –y las científicas, en la medida en que éstas tuvieron lugar- pasaron al Real Colegio de Boticarios. Al menos desde diciembre de 1748, la Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista San Lucas estuvo compuesta sólo por boticarios57, la exclusividad se produce años después de escindido el Real Colegio, por un mecanismo que es consecuencia de la propia segregación de esta Corporación: a los boticarios colegiados se les obliga a estar 55 “… por hemº maior se religio al referido Dn. Joseph Quessada, por Consiliario primero á Dn. Nicolas Pasqual, y para segundo á Dn. Franco. de Lerma, para Comntador, y mayordomo de cera se religio á Dn. Antonio Ysnardo de Mora, por Thesorero á Dn. Joseph Ontanillas, para Zeladores á los referidos Dn. Andres Famada y Dn. Joseph Ortega, y para Secretario á mi el referido Lorenzo Alquizaleete [sic]” (Junta general de 18-XII-1732. ARANF, L-3, fols. 106v-107v). “… estando en junta general en dicha Capilla nra casi todos los Colegiales (…) se nombraron en dho dia para formar las Constituziones de la Hermandad de Nra Sra de los Desamparados, y las Ordenanzas y Constituciones del Colegio del Glorioso Evangelista Sn. Lucas los colegiales siguientes: Dn. Felix Palacios, Dn Joseph Quessada, Dn. Juan Moreno Botte, Dn. Joseph Ortega, y a mi el infraescripto secretario [Alquizalete]…” (Acuerdo de 10-I-1736. ARANF, L-3, fol. 109r). 56 57 El literal de la junta particular celebrada el 18-XII-1748 nos revela: “... en esta Junta se admitieron por Herms de la referida congregacion (haviendo precedido los informes y demas requisitos; qe previenen las Constituciones, y hallarse todos los pretendientes admitidos por colegiales del Rl. Collegio de esta Corte de Madrid)…” (ARANF, L-3, fol. 124r-124v). 42 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol inscritos en esta Cofradía, pues es ella quien se ocupa, además de las cuestiones devocionales, de los aspectos asistenciales, con lo cual la entidad se convierte de facto en una congregación profesional, aunque no lo fuera de iure58. Pero, aunque estén constituidas por el mismo colectivo, Congregación y Real Colegio son entidades independientes, con normas de funcionamiento propias, y con autonomía en sus respectivas contabilidades. Los boticarios de la Congregación y Colegio de Nuestra Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista San Lucas funcionaron con las constituciones de la hermandad mariana, barrocas en su estructura, anteriores a la fusión entre ambas corporaciones; no se remodelaron tras su unión con la Congregación de San Lucas, ni tampoco tras la segregación de funciones asumidas por el Real Colegio de Boticarios. En los años centrales del XVIII, la Congregación y Colegio de Nuestra Señora de los Desamparados y de San Lucas en nada se parecía a la hermandad mariana de procedencia; de igual modo que en 1737 se habían autorizado unos nuevos Estatutos… para regularizar las funciones del Real Colegio, se hacía preciso redactar unas nuevas Ordenanzas que normalizaran la vida cotidiana de la Hermandad y adoptará sus estructuras a la realidad de la España ilustrada; nos consta la redacción de tales normas en la primavera de 176059, pero no fueron aceptadas 58 Los mismos congregantes reconocen este carácter de cofradía religiosa vinculada a una actividad gremial: “Estando juntos los Herms. Congregantes, en la Capilla de Nra Sra de los Desamparados, sita en el campo sto del Hospital Rl de la Passion de esta Corte (propia dicha Capilla de la Congregacion de los Profesores Boticarios)…” (Junta particular de 18-XI-1750. ARANF, L-3, fols. 126r-126v). Incluso en las manifestaciones formales, tal la junta particular celebrada el 16-XI-1751, reunida en casa del director del Real Colegio “… quien haze las vezes del Hermº Maior, por hallarse este ausente y tener acordado la Junta General, que en el caso de hallarsse impedido el qe es, y en adelante fuese Hermº Maior ocupase su lugar el Director que fuese del Colegio, y en defecto de este ocupe el lugar el Decano del Colegio…” (ARANF, L-3, fol. 127v). 59 “… se leyeron tambien en esta Junta las Nuebas constituciones que la Congregacion tenia determinado se formasen en las que no se alló reparo alguno, y determino que se presentasen en la primera Junta General que se celebrase; y que antes se consultase con abogado si se nos podia seguir perjuizio de subordinacion con el Sr. Administrador del Hospital el darle quenta de las dhas Constituciones…” (Junta particular de 11-III-1760. ARANF, L-3, fols. 152v-153r). “Y teniendo presente los Señores congregantes la falta que ai de nuebas ordenanzas arregladas a nuebo modo de gobierno por la calamidad, necesidad y trascurso de los tiempos; dispuso a este fin nuebas ordenanzas José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 43 por un conflicto de competencias entre la jurisdicción real y la eclesiástica; pese a ello, la Hermandad las tomó como propias y las usó en su vida diaria. Aunque carentes de validez jurídica, quedaron anotadas en el Libro de la Congregación para su exacto cumplimiento60. De ellas conviene resaltar algunas de sus las que leídas en Junta particular celebrada en 11 de Marzo de 1760, se resolbió que se consultasen con persona inteligente y á maior abundamto con el Abogado de mejor nota; lo que se ejecutó, y vistas por los dhos se hallaron varios incombenientes por razon de la oposizion de la Jurisdicion Real con la Eclesiastica, y no era posible a la Congregn superar estas dificultades, por lo que determinó cesar en este asumpto asta mejor ocasión (…) y para precaberse en lo sucessibo la Congregazion de las dificultades que ocurran y resoluziones qe deban practicarse para su gobieno, determina respecto a lo antezedte se gobierne la Congregn por los acuerdos que en adelante se hagan y que estos tengan la misma validazion que ordenanzas (interin que se probee lo combeniente en adelante) y para su inteligencia se acordó…” (Junta general de 18-XII-1761. ARANF, L-3, fols. 156r-159v). 60 “1ª. Que la contribuzion annual de cada congregte sea de treinta y seis reales vn al año, pagados en dos tercios cuia cobranza sea a cargo de los consiliarios y con la eficazia posible pª que no padezca atraso la Congregn. // 2ª. Que los consiliarios no gasten cosa alguna en el año de su empleo, y que los gastos que hubiese sean de qta de la Congregn. // 3ª. Que atendiendo al pago de la obra de la Capilla y otros empeños, no se a de hazer por ahora, la funcion de Nra Sra que se hazia en Mayo con los gastos crecidos que antes, y si solo con su Misa maior como es costumbre en las demas festibidades del año y su gasto a cargo de la Congregn. // 4ª. Que a los Congregtes y sus Mugeres se les asista el dia de su fallezimto con quatro cirios y Blandones pª ponerlos a que alumbren al cuerpo el tiempo que estubiere en la casa. // 5ª. Se acordó que si alguno de los Congregantes ó sus mugeres pidiesen abito para amortajar su cuerpo, se les dara dho abito en la especie de abito, y no el dinero para el y si no lo pidiese dho abito, no se le dará ni en especie de abito ni dinero, y quedará a la Congregzn este veneficio y no a los herederos del difunto. // 6º. Se acordó que a los Congregantes y sus Mugeres que fallecieren se les aya de asistir con veinte y quatro cirios de apabilo y veinte y quatro pobres del Abemaría para que los lleben y acompañen al Cuerpo el dia de su entierro por la calle (si fuere en publico) y si fuese el entierro de Noche, se les asistira solamente con doze achas de a tres pabilos que alumbren al Cuerpo en la Iglesia, y su rescate de quenta de la Congregazion. // 7º. Se acordó que a los Congregantes y sus Mugeres difuntos se les ayan de mandar decir veinte y quatro missas rezadas por el Alma de cada uno de los dhos congregtes lo antes que se pueda, y por cuenta de la Congregazn., recogiendo esta el rezibo correspondiente para entregarlo a los herederos ó parte interesada del Difunto. // 8ª. Que si muriese algun Congregte en remora, se le abisara a la vda ó a la parte interesada del Difunto, de los atrasos del Congregte para la paga de ellos, y haziendola efectiba se le asistira con todos los sufragios y si pudiendo hazerlo, no quisiere pagar los dhos atrasos, no se le asistira con sufragio alguno; pero si fuese pobre y no pudiese pagar los dhos atrasos, se le asistira con todos los sufragios, ó con los que le pareciere a la Congregn. y sea mas combeniente hazer en estos casos, sin que en esto se le 44 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol particularidades: el abandono de la antigua tradición de ofrecer un desayuno a las enfermas pobres del Hospital de la Pasión –la propia esencia de la inicial hermandad barroca-, la contención del gasto en las actividades públicas de la Congregación -‘sin aparato de pompa ni vanidad’-, la particular atención a la asistencia de los congregantes en el momento de su fallecimiento y la incorporación de los mancebos como parte de la familia del difunto, para quienes se destinan los mismos sufragios que para los hijos y viudas. Y el hecho notorio de que estas nuevas ordenanzas de 1760 estipulan, de manera formal, “Que no se admita Congregte que no sea Boticario y con Botica propia en Madrid”. La tensión entre los viejos cofrades barrocos de Nuestra Señora de los Desamparados y los boticarios que se adscribieron a la nueva Cofradía y Colegio, bajo planteamientos gremiales, produjo algunos conflictos sobre el sentido de esta Corporación y los objetivos que habría de perseguir. Centrémonos en uno de estos pleitos, completamente banal, pero que puede ayudarnos a entender el funcionamiento de estas agrupaciones aún barrocas en su mentalidad. Se trata de la exclusión temporal de Cristóbal Vélez como miembro de la Congregación, en el otoño de 1739; el motivo: su enfrentamiento con Miguel Echeverría, a la sazón consiliario primero, al negarse Vélez a postular a pueda precisar a la Congregn en cosa alguna, respecto a ser acto voluntario y charitatibo el que siempre a efectuado la Congregn. por su piedad con sus individuos. // 9ª. Que a los hijos, bajo de la patria potestad, Mancebos y Viudas de los Congregtes se les asistira en su fallecimto con el abito (si lo pidiese como está prevenido en la ordenanza quinta) dos cirios pª alumbrar al Cuerpo en la casa, doze cirios con doze pobres del Ave Maria para que acompañen al cuerpo el dia de su entierro por la calle, y si pidiese los doze cirios pª la Iglesia se le de tambien. Y si fuese dho entiero de Noche no se le dara zera pª la Iglesia. // 10ª. Que se les ayan de mandar decir por cada uno de los hijos (bajo la patria potestad) Mancebos y Viudas difuntos, doze misas rezadas y segun queda establecido en la ordenanza septima. // 11ª. Que se hagan onrras generales todos los años sin aparato de pompa ni vanidad, y en este dia se celebraran a lo menos doze misas rezadas por los vibos y Difuntos Congregtes y dhas onrras se han de hazer en el mes de Noviembre, y el coste de todo sera de quenta de la Congregn. // 12ª. Que los Consiliarios deberan correr con el cuidado de todo y los gastos que tengan se los a de abonar la Congregazn. / 13ª. Que no se admita Congregte que no sea Boticario y con Botica propia en Madrid.” El texto de las Ordenanzas fue copiado en el Libro 2º De las Juntas de la Congregacion y Hermandad de Nuestra Señora de los Desamparados sita en la Capilla del Campo santo del Hosptal de la Passion de esta Corte desde el Año de 1699. en Adelante, como parte del acta correspondiente a la junta general de 18-XII-1761, en que fueron aprobadas (ARANF, L-3, fols. 156r-159v). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 45 favor de la Hermandad mediante la venta de unas roscas, y hacerlo públicamente61. El caso nos interesa porque Cristóbal Vélez apeló a las autoridades superiores, y éstas no fueron otras que las religiosas, porque la vinculación administrativa de la Hermandad se establece con el vicario eclesiástico y no con los poderes civiles62. La actitud de Cristóbal Vélez, negándose a limosnear para la Cofradía, no fue un caso aislado; es una reacción frente a la ‘costumbre antigua’ que intenta perpetuar viejos hábitos de piedad pública, comunes en el Barroco, pero obsoletos para muchas mentes ilustradas63. José Hortega hubo de mediar, en este otoño de 1739, junto a José Muñoz, Juan Moreno El asunto debió tener su enjundia, pues a esta junta general asistió la practica totalidad de los miembros de la Congregación: “para deliberar sobre un caso y accion Indecente que ejecuto Dn. Cristoval Velez Congregte. Boticario en la Plazuela de la Red de Sn. Luis con Dn. Miguel Echeverria fiscal del Rl. Protomedicato y consiliario primero de dha. Congregn. yendo como Consiliario repartiendo las rroscas, como es costumbre antigua a los Herms. Congregtes. y recoger la limosma para parte de los gastos de las Honrras que se celebran todos los años por nuestros Hermanos Congregantes Difuntos al entregarle en su mano dho Consiliario las rroscas las rrecibio y Inmediatamte. las tiro a la calle dho Velez en su misma Botica, y volviendo la espalda se apartaron, por cuio motibo y Accion tan Indecorosa pidio dho Consiliario satisfacion a dha Congregon.; y en vista de su memorial y declaracion de Antonio Mizn., Criado de dha Congregon., Determino por pluralidad de Botos se le vorre el asiento que tiene en dha Congregon., para que no goze de emolumento alguno, y dho. Miguel de Echevarria se contentó y se dio por satisfecho en la dha Congregon…” (Junta general de 20-XI-1739. ARANF, L-3, fols. 112v-113r). 61 Cristóbal Vélez, descontento con el dictamen de la Congregación, acudió al Vicario “pidiendo que se le volviese á rrecivir en dha Congregon. como estava antes y echo autos sobre esto se rrecurrio por rrecurso aparte de la Congregon al referido Sr. Vicario, y visto lo rreferido por Congregon., acordo nombrar quatro sugetos garantes para componer dha dependencia dejando vien puesto a la dha Congregon y a Dn. Miguel de Echeverria quien perdono su vejacion publicamte…” (Junta general de 1-XII-1739. ARANF, L-3, fol. 113v). Cristóbal Vélez fue readmitido en la junta general celebrada el 18-XII-1739: “… se le recivio por Congregte. asentando en los Libros á Dn. Christoval Velez por haver cumplido en lo que se le mando ejecutar por los dhos Quatro Diputados…” (ARANF, L-3, fol. 114r). 62 63 El asunto venía de atrás; ya en la junta general celebrada en diciembre de 1738 se anota: “Y ultimamte intentando algunos de los Congregantes (que fueron pocos) en dha Junta gnral rebatir, y derogar el uso y Memoria antiquissima de que se repartiesen roscas por el tmpo de las animas, por quien se haze esta memª y en cuio beneficio redunda la mucha Limosna, que se saca, quando se reparten, rebatiendo semejante proposizon el mayor numero de los referidos, quedo por acordado su continuazon y stablecimto de dha Roscas…” (Junta general de 18-XII-1738. ARANF, L-3, fols. 111r-112v). 46 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Bote y Lorenzo de Alquizalete, en la readmisión de Cristóbal Vélez como miembro de la Congregación. Será en 1751 cuando José Hortega ocupe un rol de mayor protagonismo en la vida de esta Hermandad; en la junta particular celebrada por la cúpula directiva de la Congregación, en noviembre de 1750, se incorporará su nombre a la terna sobre la que los congregantes habrían de elegir hermano mayor, lo haría junto a dos miembros excelsos, el habitual secretario de la Hermandad, Lorenzo de Alquizalete, y Juan Moreno Bote, que había ostentado la primera presidencia del Real Colegio de Boticarios de Madrid64. La elección de cargos, celebrada el 17 de diciembre, le fue propicia, será José Hortega quien ocupe el cargo de hermano mayor durante 175165. Nuestro congregante no pudo culminar su mandato como hermano mayor, por razones de Estado tuvo que salir, ese verano de 1751, de viaje por Europa; sus funciones pasaron a ser desempeñadas por Juan Moreno Bote, director del Real Colegio66. Pero antes ya había dejado dispuestos algunos cambios sustanciales en la organización de la vida social de la Congregación; su actuación al frente de la Hermandad estuvo imbuida de un cierto espíritu ascético, más centrada en la religiosidad personal que en la pompa de la celebración, un intento de superar viejas formas barrocas de devoción, una muestra más de su actitud reformadora; nos queda el testimonio de una de las reuniones celebradas por la cupula de la Congregación durante el periodo en que José Hortega ejerció como hermano mayor, la junta particular celebrada el 15 de marzo de éste 1751: 64 Cf. Junta particular de 15-XI-1750 (ARANF, L-3, fol. 126r). 65 “Y haviendose tomado los votos, como es practica, en semejamntes actos; quedaron elegidos, los Herms. siguientes. Por Hermº. Maior, el Sr. Dn. Joseph de Ortega. Para Consiliario primero, el Sr. Dn. Sebastian Malo…” (Junta general de 17-XI-1750. ARANF, L-3, fol. 126r). 66 “… estando juntos todos los Herms. que componen la Junta particular, en Cassa del Sr. Director de el Colegio, quien haze las vezes del Hermº. Maior, por hallarse este ausente, y tener acordado la Junta General, qe en el caso de hallarse impedido el qe. es y en adelante fuere Hermª maior ocupe su lugar el Director qe fuese del Colegio, y en defecto de este ocupe el lugar el Decano del Colegio…” Junta particular de 16-XII-1752 (ARANF, L-3, fol. 127v). Y un par de días después, en la junta general celebrada el 18-XII-1752, “El Sr. Director Dn. Juan [Moreno] Botte, qe. ocupaba el puesto del Hermano Maior, por estar este ausente, y tenerlo assi acordado la Junta….” (ARANF, L-3, fol. 138r). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 47 “Estando juntos en Cassa del Sr. Hermº. Maior, todos los oficiales de la Junta particular, y á mas de estos el Sr. Dn. Gregorio de Ahedo; Nro Hermº Maior propusso á la Junta diferentes assumptos pertenecientes al buen gobierno, y edificacion de los Herms. (…) fue proponer, la ninguna utilidad qe. trahía á la Congregacion, la Mussica, que en la principal fiesta de Nra. Sra. se practicaba llevar á la funcion, cuio gasto, le parecia mas propio destinarlo para las urgencias de la Congregacion, y beneficio espiritual de los Herms. Congregantes: lo que igualmente parecio bien, y se aprobó…”67 Todo ello sin merma del sentir religioso propio de la Hermandad, pues, a renglón seguido de suprimir la música en las celebraciones: “Tambien se acordo que Nra. Sra. no estaba Bendita, y que era necessario bendecirla, por lo que el Sr. Hermº. Maior, encargó esta diligencia al Sr. Dn. Martin de Arevalo, primer Comnsiliario, para qe. sin dilacion buscasse sugeto eclesiatico con potestad para ello, y se bendixesse…”68 En definitiva, una muestra más de la actitud reformadora con que los boticarios de mediados del XVIII encaran los nuevos tiempos. 67 No obstante, en la propia junta particular hubo sus discrepancias, de forma que quedó pactado: “Pareció assi mismo á la Junta, qe. en lugar de la Mussica, se podria llevar, seis niños de los expositos, y sus Maestros, para la Missa, y demas funcion, ajustandolo primero, como las honrras funerales en lo [que] quedaron combenidos..” (Junta particular de 15-III-1751. ARANF, L-3, fol. 126v). Los acuerdos fueron llevados a la junta general celebrada el 18-III-1751, “cuias proposiciones fueron admitidas, y aprobadas por toda la Junta general nemine discrepante. Tambien se aprobó por dicha Junta general el combenio ó ajuste qe. el Herº Maior [José Hortega] y el Ssrio. de nra. Congregacion [José Zavaleta] hicieron con el Capellan Maior ó Protector de los niños expositos, y fue qe. la Congregacion, les havia de dar por cada funeral treinta rs. de vellon, y qe devian assistir seis niños de buenas vozes, sus Maestros, con vaxon, y vaxoncillo. Y qe. en la fiesta grande de Nra. Sra. se les havia de dar ochenta reales de vellon, por mañana y tarde, acudiendo á la Missa, y á la fiesta para reservar, y los intermedios de los instrumentos, y organo, corrian por cuenta de los referidos Maestros, llebando sugetos aptos para sus exercicios, y todo esto por los ochenta rs. arriba mencionados, en los qe. qedamos combenidos, aunqe. sin obligacion de papel, ni escritura…” (Junta general de 18-III-1751. ARANF, L-3, fol. 127r). 68 Cf. Junta particular de 15-III-1751 (ARANF, L-3, fol. 126v). 48 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol El Real Colegio de Profesores Boticarios de Madrid En la tarde del 30 de julio de 1723, en el mismo acto público en que, en la Capilla de Nuestra Señora de los Desamparados, se procedía a la creación de la Congregación y Colegio de Nuestra Señora de los Desamparados y San Lucas Evangelista, dos boticarios, Luis Llorente y José Manzano, provenientes de la antigua Cofradía de San Lucas, dan cuenta “… de haverse tratado en Junta particular de las cosas pertenezients á la fundazon del Colegio de Boticarios, y se avia considerado, en ella, ser nezessario, anttes de entablar la pretension, se hiziese publicamte la Theriaca, y Mitridato; para qe hecho fuesse mas formal dha prettesion; qe entendido por la Junta combino, en el todo, y se acordo, que para ayuda de hazer dha Theriaca, respecto de existir, algun caudal del Colegio de Sn Lucas, se usase de el para dho efecto…”69 Su propuesta sería retomada cuatro años después por Francisco Sienes, quien, en la primavera de 1726, mientras ejercía como hermano mayor de esta Congregación, propuso la elaboración de cincuenta arrobas de Triaca magna “echa con las solemnidades que acostumbran hazer por otros Colegios Pharmazepticos de otros Reynos…”70 La solución proyectada en 1726 es compleja: parte de la disminución de los gastos ocasionados por las manifestaciones religiosas de la Cofradía, la supresión de los pagos correspondientes a la asistencia por enfermedad, salvo casos excepcionales, y la elección de un grupo de boticarios ‘notables’ que se ocupen de negociar, con el Protomedicato, las condiciones Junta general de 30-VII-1723 (ARANF, L-3, fols. 96v-97r). Sobre esta etapa del Colegio de Boticarios de Madrid, previa a la formalización de sus Estatutos... de 1736, nos hemos ocupado en Antonio González Bueno (Op. cit. nota 47. 2011), seguimos lo allí expuesto en sus líneas generales. 69 70 Bajo el acápite de “Proposiziones del Sr. Dn. Franco. de Sienes, nro. Hermº mr.” se anota: “Que todos aian de estar unidos componiendo el Colegio de los Armazepticos [sic] de Madrid, y habiendo considerado ser precisso buscar algº. arbitrios ó medios que sean proporcionados al lustre y honor de nra. facultad y conservacion perpetua de nro. Colegio (…) se discurrio hazer un calculo de Costa que tendria la elaboracion de Cinquenta arrobas de Triaca Magna echa con las solemnidades que acostumbran hazer por otros Colegios Pharmazepticos de otros Reynos, y haviendo parecido á nra. Profesion, y utilidad al Colegio, y al mismo tiempo havra caudal del Colegio que con poca diferencia bastara para poner en execucion la referida elavorazion de Triaca...” (ARANF, L-3, fols. 101v-102v). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 49 de la elaboración y el privilegio para la elaboración de la Triaca71. No parece que las propuestas formuladas por Francisco Sienes en la primavera de 1726 se llevaran a término, al menos en lo que se refiere a la vida económica y devocional de la Hermandad, pero marcan la senda por la que, años después, habría de discurrir el Real Colegio de Boticarios de Madrid. Al menos una de sus iniciativas sí parece llevarse a la práctica: la configuración, dentro de la Congregación y Colegio de un sanedrín de boticarios a los que, inicialmente, se confirió el encargo de elaborar la Triaca magna72 y que, en definitiva, llevaría a la segregación del Real Colegio de Boticarios de Madrid. Las negociaciones debieron ser arduas pero, en 1732, Felipe V otorgó, en Sevilla, un 15 de marzo, el deseado privilegio de elaboración de la ‘Teriaca magna de Andromaco’ tomando como modelo -no podía ser de otro modo- la “que executó el Rey Christianissimo Luis Decimo quinto (…) que se hizo en la Botica de Versallas [sic], el año de mil setecientos y veinte y ocho…”73; el privilegio real se concede una vez elaborada la primera Triaca, con las solemnidades versallescas, en el Monasterio de las Descalzas Reales74 y otorga al ‘Colegio de Boticarios de la Villa de Madrid’ “… y pareziendo ser casi imposible ademas de ser mui embarazoso a el todo del Colegio el tener que hazer muchas Juntas a lo que ocurra sobre la fabrica de la Triaca como será preciso para la compra de los simples tanto extrangeros como naturales hablar, y consultar con el Prothomedicato la rezeta que se ha de executar aprovacion de los sustitutos que se deven poner por no allarse verdaderos simples, y en fin otras muchas diligencias que se ofrezcan para qual es preciso que el Colegio elixa diez o doze colegiales de su maior aprovazion para que juntos ó llamados por el hermº maior den disposizion á lo que ocurriese sobre lo referido…” Proposiciones de Francisco de Sienes [1726] (ARANF, L-3, fols. 101v-102v). 71 “… y para la elavorazion de la Triaca, para eleccion y compra de los simples, y para todo lo demas que se ofreziere se nombraron los Colegiales siguientes por Diputados: Lizdo. Dn Felix Palacios, Dn Ignacio Echevarria, Dn. Franco Botte Díaz, Dn Juan Elias de Ariza, Dn. Franco Alfaro, Dn. Joseph Ontanilla, Dn Joseph Manzano, Dn Franco Ortiz, Dn Antonio Sanchez de Mena, Dn Antonio Iznardo de Mora, Dn. Joseph Muñoz, Dn. Miguel Garcia Parra, Dn Joseph Malo y Lorenzo Alquizaleete y lo firme como Scrio de dha Congregacion y Colegio… [Lorenzo de Alquizalete]” (Acuerdo de 6-IV-1726. ARANF, L-3, fols. 101v-102v). 72 Una copia del privilegio concedido por Felipe V al ‘Colegio de Boticarios de la Villa de Madrid’ para elaborar la Triaca magna, firmado en Sevilla, a 15-III-1732, se conserva en ARANF, leg. 4,1. Ha sido reproducido, de manera facsimilar, en Toribio Zúñiga Sánchez-Cerrudo (Op. cit. nota 47, cf. págs. 81-87. 2002). 73 74 “… os movió á acordar el fabricarla con la mayor solemnidad, y 50 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol el privilegio de elaboración y venta de este medicamento, al precio fijado por el Real Tribunal del Protomedicato75. No hay error en la concesión del privilegio; éste se otorga a una agrupación ficticia, englobada en una cofradía religiosa. Obviamente no era ésta una situación que pudiera mantenerse por mucho tiempo; la separación de funciones se presenta como la única solución y, para ello, es necesario discernir entre lo profesional y lo devocional. El detonante que habría de producir esta segregación del colectivo de los boticarios madrileños pudieron ser los problemas planteados por la ‘renta del aguardiente’; ante lo que los boticarios entendieron como una pérdida de sus privilegios profesionales, la Cofradía dotó de poderes, en los comienzos de 1736, a cuatro de sus miembros para que defendieran los intereses de los colegiados76. Los privilegios en torno al impuesto sobre el uso del aguardiente -como ocurriera con la elaboración de la Triacaafectan sólo a una parte de los congregantes, y en el asunto tienen también interés otros boticarios no sometidos a la disciplina de la Cofradía de los Desamparados y San Lucas77; este mismo enero exáctitud, haziendo traher acosta de mucho cuydado y dispendio los generos mas selectos de los parages donde ay Compañía de Levante; y recogidos todos, y puestos de manifiesto, en la Oficina de las Descalzas reales por tres dias, reconocidos, y aprovados con asistencia del Doctor Don Pedro de Aquenza Prothomedico, de el Fiscal, y otros Professores del Colegio, se executo dicho Medicamento con toda puntualidad, y observancia, haviendo quedado depositado en dicha Oficina, hasta que lo aprovase el Prothomedicato, y tasasse el precio á que se devia distribuir…” (Copia del privilegio concedido por Felipe V al ‘Colegio de Boticarios de la Villa de Madrid’ para elaborar la Triaca magna. Sevilla, 15-III-1732, ARANF, leg. 4,1). “…Privilegio, para que solo Vos, y vuestro Colegio pueda elaborar, y vender este Medicamento á los precios que tasare el Prothomedicato; y que si por algun Professor de fuera de Madrid se quisiere fabricar, haya de ser, con la misma formalidad que se han hecho por Vos, y vuestro Colegio, y con vuestra aprovacion, ó como la mi merced fuesse…” (Copia del privilegio concedido por Felipe V al ‘Colegio de Boticarios de la Villa de Madrid’ para elaborar la Triaca magna. Sevilla, 15-III-1732, ARANF, leg. 4,1). 75 76 “… estando juntos la maior parte de los hermanos, y colegiales en nra capilla [nombramos] por Diputados á Dn. Franco Ortiz, Dn Juan Moreno Botte, Dn. Miguel García Parra y Dn. Andres Famada, para seguir y defender la dependencia del Aguardiente con el Recaudador y se les dio poder para seguir en Justicia ó la mejor forma que haia lugar…” (Acuerdo de 6-I-1736. L-3, fols. 108v-109r). 77 “… estando en junta general en dicha Capilla nra casi todos los Colegiales se acordó, continuasen los apoderados en las diligencias empezadas José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 51 de 1736 se acuerda nombrar una comisión mixta, conformada por boticarios y no boticarios, que se ocupe de reformar los estatutos de la Hermandad para hacer viable la independencia colegial, la conforman Félix Palacios, José Quesada, Juan Moreno Bote, José Hortega y Lorenzo Alquizalete78. En menos de un año, la comisión redactó el texto de los Estatutos del Real Colegio de Profesores Boticarios de Madrid, aprobados en asamblea reunida el 12 de diciembre de 1736. El Real Colegio se configura como una corporación limitada a los boticarios con establecimiento abierto en Madrid, siendo obligatoria la colegiación si se desea gozar de los beneficios de la Corporación79. Se rige por una junta directiva compuesta por un director, dos diputados o vicedirectores, un secretario, un fiscal, en la dependencia de los Aguardientes, y que qualquiera individuo que usara del aguardiente fuera de los medicamentos que debe elaborar en su casa, y despacho con rezetas, de Medicos, y Cirujanos, sea excluido del Colegio, y se prozeda contra los tales por la via juridica, como defraudadores de la rrenta del aguardiente, y que se prevengan, y se tengan presentes los Boticarios que no son Colegiales, prezediendo antes un recado a los tales, para si lo quieren ser…” (Acuerdo de 10-I-1736. L-3, fols. 109r). “…asi mismo se nombraron en dho dia para formar las Constituziones de la Hermandad de Nra Sra de los Desamparados, y las Ordenanzas y Constituciones del Colegio del Glorioso Evangelista Sn. Lucas los colegiales siguientes. Dn. Felix Palacios, Dn Joseph Quessada, Dn. Juan Moreno Botte, Dn. Joseph Ortega, y a mi el infraescripto secretario [Lorenzo Alquizalete]…” (Acuerdo de 10-I-1736. ARANF, L-3, fol. 109r). 78 79 El estatuto II limita su composición a los “Professores Pharmaceuticos, los quales estén examinados por el Real Protomedicato: que sean de buena vida, y costumbres, y assimismo capaces de desempeñar los assumptos, que el Colegio fiare á su cuidado”; pero el estatuto XIX precisa: “El Colegio se compondrá de todos los Boticarios, que al tiempo de la aprobacion de estos Estatutos tuvieren Botica propia en Madrid, para que unidos todos, y congregados, coadyuven y adelanten el principal intento que se ha propuesto el Colegio en el Estatuto primero, que tiene por objeto el bien del Publico, y el adelantamiento de todos, y cada uno de los Professores Pharmaceuticos”; y aún más tajante se muestra el estatuto XX: “Ningun Colegial podrá separarse del Colegio de Boticarios, sin licencia del Real Protomedicato”. El estatuto XXIII recuerda: “Ningun Boticario de esta Corte gozará de los Privilegios concedidos por su Magestad al Colegio, ni de los que en adelante les concediere, no siendo individuo suyo” (Estatutos del Real Colegio de Profesores Boticarios de Madrid… Madrid: Imprenta Real, 1737. ARANF, leg. 4,6. Reproducidos por José Luis Valverde. “Textos básicos de Historia de la Farmacia. Estatutos del Real Colegio de Profesores Boticarios de Madrid… Madrid, 1737”. Boletín de la Sociedad Española de Historia de la Farmacia, 23(89): 91 + [27 p.]. Granada, 1972 y en Toribio Zúñiga Sánchez-Cerrudo (Op. cit. nota 47, págs. 94-116. 2002). 52 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol un tesorero y un contador, cuyo mandato se estipula con una vigencia anual. El peso que el desarrollo profesional tendría en la configuración de los trabajos de los que habría de ocuparse este Real Colegio está explicitado en las funciones asignadas a los dos diputados; en ellas se intuye cómo la concesión del privilegio concedido en 1732 fue la razón primera que condujo a la adaptación de la vieja estructura a otra más acorde -al menos formalmente- con los nuevos presupuestos ilustrados80. Los estatutos así conformados fueron elevados por José Hortega, en nombre del Colegio de Boticarios, ante el Tribunal del Protomedicato81; fue su compañero de la Real Academia Médica Matritense, Baltasar de la Torre y Ocón quien, actuando como Presidente subdelegado del Real Tribunal del Protomedicato solicitó, en 2 de enero de 1737, el informe pertinente del Fiscal del Tribunal; éste fue redactado, apenas un par de días después, por Miguel de Echeverría, boticario a la par que Fiscal del Real Tribunal, quien los reconoció y dio por válidos el 5 de enero82. Baltasar de la Torre remitió los Estatutos…, con la aprobación del Real Tribunal, el 12 de enero de 1737; pasaron 80 Estatuto VIII: “Los dos Diputados, ó Vicedirectores deberán correr con la compra, y la preparacion de todas las Drogas, que necessitase el Colegio para la elaboracion, y composicion de la Thriaca magna, que por Privilegio de su Magestad (…) está concedido privativamente al Colegio, su fecha en Sevilla á quince de Marzo de mil setecientos treinta y dos; y assimismo para otras qualesquier composiciones, assi Galenicas como Chimicas, que se resolvieren executar…” (Estatutos… cit ut supra, págs. 6-7). “El Colegio de Professores Boticarios de esta Corte (…) Ha formado quarenta Estatutos, que tienen por objeto el bien Publico, la union de los Professores, y el cultivo, y adelantamiento de la Pharmacia, y sus partes; y respecto de intentar suplicar á su Mag. (…) la aprobacion de dichos Estatutos que exhibimos. Por tanto suplica á V.S. mande vér, y reconocer dichos Estatutos, y estando á la satisfacion del Tribunal, se le devuelvan para el efecto que lleva expressado, en que recibirá merced, & D. Joseph Ortega” (Estatutos… cit ut supra, págs. 20-21). 81 82 “… reconoció los Estatutos que se refieren, los que le parece son muy utiles al bien Publico, por las Reglas, y Maximas que establece para el cultivo, y adelantamiento de la Pharmacia, Chimica, Botanica, é Historia natural, cuyas Facultades es justo que se cultiven, y adelanten, á imitacion de las demás Naciones de la Europa (…) por lo que es digno el Colegio, que V.S. apruebe, por lo que á si toca, dichos Estatutos, interponiendo su Autoridad, para que se pongan en practica con la maior brevedad…” (Estatutos… cit ut supra, págs. 21-22). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 53 a manos de José de Quesada, secretario del Real Tribunal, a la vez que activo congregante de la de Nuestra Señora de los Desamparados de la que, en esos momentos, ocupaba el cargo de hermano mayor83, éste tuvo diligenciada toda la documentación el 23 de febrero de 1737. La tramitación no pudo producirse de manera más rápida. Los estatutos del Colegio de Boticarios, favorablemente informados por el Real Tribunal del Protomedicato, pasaron al Consejo Real de Castilla; el 21 de agosto de 1737 da a ellos su aprobación su presidente, fray Gaspar de Molina, quien los firmará como Obispo de Málaga. El círculo se cierra el 24 de septiembre de 1737, ese día la Cofradía de Nuestra Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista San Lucas realiza, en su Capilla del Real Hospital de la Pasión, un acto extraordinario, presidido por Baltasar de la Torre, médico de Cámara y presidente de la delegación castellana del Real Tribunal del Protomedicato; en él se aceptan formalmente los Estatutos… por los que habrá de regirse el Real Colegio de Boticarios de Madrid, que toma de la Cofradía los privilegios relativos al trabajo de los boticarios84. Él mismo forma parte de la comisión encargada, por acuerdo de 10-I-1736, de la redacción de unas nuevas constituciones: “Se nombraron en dho dia para formar las constituciones de la Hermandad de Nra. Sra. de los Desamparados y las Ordenanzas y Constituciones del Colegio del Glorioso Evangelista Sn. Lucas los Colegiales siguientes: Dn. Felix Palacios, Dn. Joseph Quessada, Dn. Juan Moreno Bote, Dn. Joseph Hortega, y a mi el infraescrito Secretario [Lorenzo Alquizalete]” (ARANF, L-3, fol. 109r). 83 84 El literal del acta es como sigue: “En la Villa de Madrid á veintte y quatro dias del Mes de Septiembre de mill settezienttos y treintta y siette el Sr. Dr. Dn. Balthasar de la Torre y Ocon, Medico de Camara de S.M., Prothomedico de Castilla, y Presidente Subdelegado del Rl. Prothomedicato, con mi asisttencia, se halló en la Capilla de N. Sra. de los Desamparados (propia del Colegio de Botticarios desta dha Villa), sita en el Campo Sto. deel Rl. Hospl. de la Passion, siendo (por papeles de avisso de su sria. deel dia antecendente) se hallaban Juntos la maior parte de los individuos de dho Colegio, á quienes hizo presentte la dignacion de su Magd. y de su Rl. y Supremo Consejo de Castilla, en la aprobazn de los quarenta estatutos que avian firmado para los efectos expressados en ellos: como tambien la que dispensó el Rl. Tribunal del Protomto., y que para continuarlo (en adelante) proporcionandose á ello el Colegio, desseaba toda buena Armonia, y uniformidad, no solo en la observaciozn. de los estatutos, sino tambien en el comercio civil, economico, y christiano; Y que para que assi se estableciesse, y sirviesse de norma en lo siguiente, (supuesta la voluntad del Colegio), nombraria los sugetos que debian ocupar los empleos determinados en dhos estatutos, y por haver combenido todos los Colegiales pressenttes, hizo su ssria. la siguiente eleccions: Para Director. Al Sr. Dn. Joseph Muñoz Valdiviesso. Para Diputado 1º. Al Sr. Dn. Sebastian Martinez. Para Diputado 2º. Al Sr. Dn. 54 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol ¿Cómo se logra tanta presteza administrativa? Es posible que se deba a dos razones: por un lado el peso social e institucional alcanzado por algunos boticarios, particularmente por José Hortega; de otro, por la adecuación de los Estatutos… a las propias querencias de la Administración borbónica. En ellos tiene lugar un cambio estructural sustancial: el paso de Cofradía a Colegio. Las cofradías -y la Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados no es una excepción- quedan bajo la jurisdicción eclesiástica, ante la que han de rendir cuentas y acudir en caso de protección o autoridad85. Con los nuevos Estatutos… el Real Colegio de Boticarios acepta su condición de institución sanitaria, y se cobija bajo el Real Tribunal del Protomedicato, se erige en una institución de carácter civil86. Los Estatutos… del Real Colegio de Boticarios son, en definitiva, una manifestación de la adscripción regalista con que el gremio asume su integración en la estructura estatal borbónica87. Gregorio Ahedo. Para Secretario. Al Sr. Dn. Juan Moreno Botte. Para Fiscal. Al Sr. Dn. Miguel de la Parra. Para Thesorero. Al Sr. Dn. Franco. Ortiz Crespo. Para Contadr. Al Sr. Dn. Lorenzo Alquizalete. La qual fue admitida, y aprobada con general consetimto de todos y en su virtud los nombrados y elegidos ocuparon los respectivos assienttos, y mandó su ssria se pusiesse este auto en el libro de Acuerdos de dho Colegio; en cuyo cumplimiento, y para qe siempre conste lo executo y firmo. Joseph de Quesada [firmado]”. Juntas Generales deste el Año 1737 fundacion de Colegio hasta el año 1767 (ARANF, L-7, fols. 1r-1v). Recuérdese, a modo de ejemplo, el problema creado por la expulsión de Cristóbal Vélez, del que nos hemos ocupado líneas arriba (cf. ARANF, L-3, fols. 112v-114r). 85 No podía ser de otra forma, y así lo explicita el estatuto XXXVIII: “El Colegio estará sujeto en lo que toca á la profession Pharmaceutica al Real Protomedicato, con la particularidad que el mismo Tribunal, ó en su nombre el primer Medico, que es, ó fuere de su Magestad, pueda mandar juntarle, y presidirle, como Protector suyo, siempre, y quando lo dispusiere, y á quien el Colegio deberá dar quenta de todo lo que ocurriere digno de su noticia, cuya decision se observará puntualmente…” (Estatutos… cit ut supra, pág. 18). 86 87 Es significativo el contenido del escrito con el que Juan Moreno Bote, secretario de la Corporación, acompaña a la copia impresa de los Estatutos… remitida a José Cervi, Presidente del Real Tribunal del Protomedicato: “…. cuya notizia, passan gustosos á V.Sª. esperanzados en que, por su Proteccn. han de lograr las maiores ventajas, á emulazion de las naziones estrangeras, cediendo todo en beneficio del Publico, en quien, como en el Colegio, vivira siempre la memoria de deverse á la Heroicidad de V.Sª. el auge, en que se contempla la facultad Medica, y el Arte Pharmaceutica…” (Traslado de carta del Secretario del Real Colegio de Profesores Farmacéuticos [Juan Moreno Bote] a José Cervi [Madrid, 1737]. ARANF, leg. 3,11,2); en términos similares se dirigió a José Suñol, médico de Cámara. Ambos contestaron dando su aprobación y apoyo a la nueva Corporación: “No he podido Yo aver recibido noticia de mayor José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 55 Los Estatutos… normalizan una estructura ya existente, que había permanecido larvada durante décadas, y que ahora se desarrolla al calor de las luces dieciochescas; los mismos boticarios ilustrados reconocían la existencia de su corporación gremial, aun cuando ésta no tuviera cobertura legal hasta la proclamación de septiembre de 1737 a la que acabamos de referirnos. El propio José Hortega admite la existencia del Colegio de Boticarios cuando, en los comienzos del octubre de 1734, y a instancias de quien entonces ostentaba la presidencia de la Real Academia Médica Matritense, el protomédico Baltasar de la Torre y Ocón, comunica la fundación del nuevo instituto; en unos términos básicamente similares a los que utilizará el propio Colegio al establecer el objeto de su fundación en sus estatutos de 1737: la utilidad pública, el amor a la Nación, el desarrollo de las disciplinas sanitarias y la imitación de lo practicado en otras Cortes europeas88. Y nos queda constancia de que, al menos en gusto, y complacencia, que la que Vmd. en nombre del Colegio de Boticarios se ha servido participarme (…) de lo que me he alegrado infinito, pues no ay duda, de que esto servira de mucho adelantamiento al arte pharmaceutica, y de singular lustre á la Nacion Española….” (Carta de José Cerví a Juan Moreno Bote. San Ildefonso, 4-X-1737. ARANF, leg. 3,11,2). 88 “La union de algunos pocos profesores de las facultades Medica Chirurxica, y Pharmaceutica motivó el feliz atrevimto. de emprehender la fundazn. de una Academia Medica, á imitazn de las que ai en otras Cortes, que tuviese pr fin primario el adelantamto. y cultivo de aquellas facultades, y assimismo el aprovechamiento de sus individuos. El amor á la nacion en todos, y el fomento de muchos á promover la utilidad del Publico, acaloró los animos del Magistrado para que se lograse su establecimto. con las seguridades, que verá V. en sus estatutos. La facultad Pharmaceutica, como pral parte de la Academia, contribuira poderosamte. al total desempeño del fin. Con este cuidado instituyo la Academia Plazas de Chimicos, y de Botanicos, que tendra á especial dicha las ocupen los individuos de tan ilustre, y docto congreso; pues sin duda, en poco fiaria la Medicina sus progresos, si la faltasen los ausilios de la Chimia, y la Botanica, finalmente pr esto, y por ser uno de los cuidados de la Academia procurar la comunicazn. y comercio literario con los sabios y eruditos, desde ahora la solicita con V. asegurando por su parte la maior sinceridad para una perpetua correspondencia, y deseando en todo tiempo sus mas agradables mandatos, para venerarlos con el mas profundo respeto…” Carta de José Hortega al ‘Colegio Pharmaceutico’ de Madrid. Madrid, 5-X1734 (ARANF, leg. 3,1,1). El escrito tuvo contestación, firmada en Madrid, a 9-X-1734, por José Quesada y Lorenzo de Alquizalete, quienes a la sazón ocupaban los cargos de Hermano Mayor y Secretario de la Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista San Lucas: “... al Colegio Pharmaceutico de esta villa le leyó su Secretario el cortesano papel de V. (…) celebrando los azertados Institutos de su fundacion, los halla tan conformes con el fin que el Colegio tubo presente al tiempo de su fundazion, 56 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol 1735, se preparó Triaca por parte del ‘Colegio de Boticarios de Madrid’; su elaboración estuvo a cargo de José Ignacio Muñoz de Valdivieso, quien otorgó las correspondientes cuentas; se obtuvo con ello un pequeño caudal que no revirtió en las arcas de la Congregación de los Desamparados, lo que induce a pensar en la independencia que venimos señalando89. La actuación ‘políticamente correcta’ de quienes se ocuparon de elaborar los Estatutos… del Real Colegio -y la mano de José Hortega nos parece en ellos particularmente evidente- les permitiría disponer de nuevas prerrogativas: la elaboración de la Pharmacopoea matritense…, y el establecimientos de las tarifas de medicamentos. Para ello tuvieron que conciliar sus exigencias gremiales con el ideario ilustrado defendido por los ministros de Felipe V; en el primero de los cuarenta estatutos con los boticarios madrileños se dotan para su organización interna se establece: “El Fin primario, é Idea general del Colegio de Boticarios de Madrid, será el cultivo, y adelantamiento de la Pharmacia, Chimia, Botanica, é Historia natural; para lo qual se formará un Jardin Botanico, y un Elaboratorio Chimico, donde publicamente se hagan todos los años, por sus Colegiales, un Curso de Operaciones Chimicas, y otro de Lecciones y Demostraciones de Plantas, y Drogas Exoticas…”90 Una exposición de motivos en la que se hace evidente el modelo seguido: el propuesto por la Real Academia Médica Matritense en sus Estatutos… de 173491, con las salvedades propias de las respectivas que se consideran en la precision de mantener entre uno y otro cuerpo la mas senzilla é ingenua correspondª. (…) aplaudiendo tan noble deseo, y deseando el feliz logro de su execucion, para que se interesen en su utilidad la Medicina, el honor de la Nacion, y el beneficio publico…” (ARANF, leg. 3,1,1). 89 “Cuentas dadas pr. Joseph Ignacio Muñoz de la thª que estubo a su cargo. Año [17]35” (ARANF, leg. 3,10,1); los costes de elaboración se elevaron a 9.095 rs, las ganancias a 9.455 rs 32 ms, la diferencia supuso un beneficio para el Colegio de 360 rs 32 ms; estas anotaciones figuran “Aprobadas pr. el Real Colegio y pasada en quenta”. 90 Estatutos del Real Colegio de Profesores Boticarios de Madrid… Madrid: Imprenta Real, 1737 (ARANF, leg. 4,6). El párrafo transcrito corresponde al estatuto I (cf. pág. 4). Estatutos de la Academia Medica Matritense, aprobados por el Real y Supremo Consejo de Castilla. [Madrid: s.n., 1734]. En el archivo de la Real Academia Nacional de Medicina se conserva una copia manuscrita, firmada por José Hortega el 1-X-1734 (ARANM, leg. 1C,2a). 91 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 57 disciplinas92. Como aquéllos, éstos también incorporan la organización de actos literarios, con carácter público93 y la conveniencia de mantener “comunicación, y comercio literario con los Professores Pharmazeuticos, Chimicos y Botanicos, que puedan servirles de alguna utilidad para el desempeño del fin primario que se á propuesto…”94; actitudes ambas muy del gusto ilustrado, tanto por su carácter centralista, su afán de acercar a la sociedad los adelantos científico-técnicos y el esfuerzo por insertar las actuaciones de estas instituciones entre las de sus homólogas, españolas o europeas. Pero no hemos de llevarnos a engaño, tras estas remozadas formas ilustradas, que tanto recuerdan las estructuras de las academias científicas95, se encuentra la organización gremial “El fin primario ó idea general de la Academia sera manifestar las racionales y provechosas maximas de la Medicina y Cirugia y la mejor practica de sus operaziones por el camino de la obserbazion y experienzia, proponer las utilidades de la Phisica Mecanica, adelantar los descubrimientos de la Anatomia, distinguir sin confusion los experimentos chimicos y finalmente aberiguar quanto pueda ser util y combeniente de la variedad admirable de la Historia natural, en cuia consequencia se pondra con claridad lo vedadero como seguro, lo probechoso como util, lo berosimil cono opinable, y lo experimental como demostrable” (cf. Estatuto 50. Estatutos de la Academia Médica Matritense aprobados por el Rl. y Supremo Consejo de Castilla. Copia manuscrita, firmada por José Hortega. Madrid, 1-X-1734. ARANM, leg. 1C,2a). 92 93 Estatuto XXXII: “Si á los Actos literarios concurrieren Medicos, cirujanos, Boticarios, ú otros Sugetos de Distintincion…” (Estatutos… cit ut supra, pág. 16). 94 Estatuto XXXVII (ARANF, leg. 4.6). El estatuto 48 de la Real Academia Médica Matritense también establece el que “La Academia procurara tener comunicazion y comercio literario, no solo con los eruditos de España, sino tambien con los extrangeros á fin de lograr por este medio los mejores lazos para su aprovechamto.” (Estatutos de la Academia Médica Matritense aprobados por el Rl. y Supremo Consejo de Castilla. Copia manuscrita, firmada por José Hortega. Madrid, 1-X-1734. ARANM, leg. 1C,2a). Incluso en el protocolo seguido en las reuniones: la junta particular de oficiales de 22-II-1738 fue reunida sólo para una cuestión de orden: “se acordó que en Juntta Gral de el Colegio, ninguno de los indibiduos de el Colegio se lebantte para salirse deella, con ningn. pretexto, â excepcion de una grave urgencia / Y tambien acordó que los colegiales, que en adelante entraren, despues de la formn. de el Colegio, hayan de sentarse en inferior assiento, â diferencia de los fundadores Colegiales, y por consiguientte los que fueren entrando en adelante, spre hayan de ser los que gozen de el mas inferior assiento; con lo que se disolvio la Junta.” (ARANF, L-7, fols. 4r-4v). Y en la posterior, de 4-V-1738, “… assi mismo se acordó, que assi como en los demas Colegios, y congregas, tienen la politica, estando Juntos y congregs., de darse unos â otros, el tratamiento de V.Sª. se execute lo mismo en el ntro. en adelante” (ARANF, L-7, fol. 4v). 95 58 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol heredada, por ello -y en clara diferencia frente a los estatutos de la Academia Médica Matritense que le sirven de modelo- en los del Colegio de Profesores Boticarios se prevé, también, una función asistencial para sus colegiales, fijada en términos estrictamente económicos y no religiosos96, y normas sobre la organización del trabajo, fundamentalmente referidas a los mecanismos de acceso a la formación profesional de los futuros boticarios97. La participación de José Hortega en las tareas del Real Colegio de Boticarios de Madrid fue continua desde su ‘fundación’; desarrolló una intensa labor por mantener vigentes los privilegios conseguidos por el Colegio relativos a la Triaca y de defender los más antiguos sobre el aguardiente y las alcabalas98. Así lo reconoció la Corporación quien, en sesión pública celebrada ante el notario Juan Alfonso López de León, el 20 de abril de 1740, en la Capilla de Nuestra Señora de los Desemparados: “… acordaron se diese Poder General á dos individuos del referido Colegio, para seguir todas las dependencias de él, y principalmente lo que se contiene en la citada Real Cedula [dada por Felipe V, el 15 de marzo de 1732, otorgando privilegio perpetuo al Colegio de Boticarios de Madrid para fabricar, elaborar y vender la Triaca magna de Andromaco] (…) dán todo su poder Estatuto XXXIV: “El Colegio tendrá especialisimo cuidado de mirar por las viudas, é hijos menores de sus Colegiales difuntos, procurando en quanto sea possible su alivio, para lo qual señalará el Director el Colegial que tuviere por mas conveniente”. Estatuto XXXV: “Si por la calamidad de los tiempos, ú otro motivo decente, llegase algun Colegial á tal estado, que se vea en la Carcel, ú en otro infortunio, tendrá el Colegio obligacion de atenderle, y mirar por su Botica en todo lo que fuere possible.” (Estatutos… cit ut supra, págs, 16, 17). 96 Estatuto XXXVI: “Ningun Colegial podrá recibir en su Botica Mancebo que no sea hijo de buenos padres, y assimismo que no sepa la lengua latina; como ni tampoco admitir al que saliere de otra Botica de esta Corte, sin que le presente justificacion por escrito del modo con que ha procedido, ó motivos por qué le han despedido, ó se ha despedido.” (Estatutos… cit ut supra, pág. 17). 97 De sus viajes a la Corte, tanto cuando ésta se encontraba dentro o fuera de Madrid, y de los pagos a escribanos e impresores dan noticia las pormenorizadas “Quentas dadas de los poderes de el Rl. Colegio a Dn. Juan Moreno Bote, Dn. Joseph Hortega, y Dn. Christobal Velez de todos los gastos causados en el pleyto con el recaudador de la renta del Aguardiente, gasto de la aprovacion de los estatutos del Colegio, pleyto con los alcabaleros y otras cosas hasta 29 de Septbre de 1737 que importan 3.048 rs vn.” (ARANF, leg. 4,7). 98 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 59 cumplido general, el que de dercho se requiere, y mas se necesite, y convenga á los dhos. Don Juan Moreno Botte, y Don Joseph de Ortega, Individuos de dicho Colegio, y á cada uno in solidum, para que en nombre del expressado Colegio de Boticarios de esta Corte, y representando su accion, y derecho, hagan se guarde, cumpla y execute en todo, y por todo lo resuelto por su Magestad en su citada Real Cedula…”99 Durante 1740 José Hortega desempeñó el cargo de diputado primero; entre los años 1743 y 1747 actuó como secretario primero, en 1748 y 1749 ejerció como director y en 1751, 1756 y 1757 desempeño el cargo de fiscal100. El asentamiento del Real Colegio en Madrid, dentro de una política estatal de marcado carácter centralista, habría de convertirle pronto en modelo a seguir y en el interlocutor válido para plantear, ante el Rey, las reivindicaciones profesionales de todos los boticarios del Reino. En buena parte de estas intervenciones la actividad de José Hortega tuvo un papel crucial, especialmente al ocuparse, entre 1743 y 1747, de la secretaria de la Corporación. 99 Poder otorgado por el Real Colegio a Juan Moreno Bote y José Hortega. Madrid, 20-IV-1740 (ARANF, leg. 4,13,5); además de esta copia, impresa, se conservan un par de copias manuscritas legalizadas (ARANF, leg. 4,13,3; 4,13,4). El acuerdo quedó protocolizado entre los documentos de Juan Alfonso López de León (AHPNM, protocolo 16.386, fol. [1740] 68r-69v). Tras el fallecimiento de Juan Moreno Bote, será Gregorio Aedo quien ostente la representación, “suplicandole concurriese con el Sr. Dn Joseph Hortega, á quanto tuviere por conveniente, y favorable al Colegio” (Junta general de 13XII-1755. ARANF, L-7, fols. 129v-131r). 100 La participación de José Hortega en el Real Colegio de Profesores Boticarios de Madrid puede seguirse a través del Libro de Juntas generales del Colegio de Boticarios de Madrid [1737-1767] (ARANF, L-7). Las ocasionales ausencias de sus cargos, en virtud de sus servicios al Rey, fueron convenientemente suplidas: “… respecto del precisso empleo que es el del primer diputado, y este estarle ocupando Dn. Joseph de Hortega, con el motibo de precissarle el salir de la Corte, en cumpto. de su empleo de Boticario mr. de los Rs. exercitos, sé acordó en dha Junta, que el fiscal, que actualmente lo és del Colegio, sirva intterinamte las ausenzias de Dn. Joseph Hortega…” (Junta particular de 8-V-1740. ARANF, L-7, fols. 15v-16r); José Zavaleta “que hizo de Fiscal por ausencia del propietario el Sr. Dn. Joseph Hortega” (Junta particular de 30-XII-1751. ARANF, L-7, fols. 97v-98r); José Zavaleta “que hizo de Fiscal por ausencia del Propietario el Sr. Dn. Joseph Hortega quienes [sic] esta actualmente empleado en negocios de entidad fuera de España y de orden de la Corte...” (Junta general de 5-I-1752. ARANF, L-7, fols. 98r-99r). 60 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol No obstante, la primera actuación de carácter centralista se produce con anterioridad, se trata de la edición de la Pharmacopoeia Matritensis… (Madrid, 1739), encomendada al Real Colegio. El asunto fue puesto en conocimiento de la Corporación en la junta general celebrada el 6 de mayo de 1738 por su secretario, Juan Moreno Bote: “Por mi, el Ssrio. se hizo presente una carta del Sr. r n D . D . Joseph Cervi, primer medico de Su Magestad, y Presidente del Rl. Protomedicato, en que participaba al Colegio la gracia y cesion que hacia de el libro ‘Pharmª. Matritense’ para que dicho Colegio lo hiciese imprimir y se utilizase el producto de el. Y habiendo conferidose sobre los gastos de su impresión, por no haverlos actualmente en dho. Colegio, se acordo, de conformidad, dar comision á los oficiales que componen la Junta particular, para que estos busquen los caudales que fueren necesarios para dicho fin, como tambien que estos procuren agasajar á dicho Sr. Cervi por el beneficio que recibe el Colegio con dicha cesion…”101 Los caudales los proporcionó, de su pecunio personal, el entonces diputado primero del Real Colegio, Sebastián Martínez102, con quien la Corporación se endeudó en escritura pública; por ella sabemos que la cesión de los derechos sobre la farmacopea se extendió, en el Palacio del Buen Retiro, el 9 de julio de éste 1738103. 101 Junta general de 6-V-1738 (ARANF, L-7, fols. 4v-5v); con anterioridad, el tema había sido debatido en una junta particular, la celebrada el 4-V-1738 (ARANF, L-7, fol. 4v). Sobre la participación del Real Colegio en la edición de las farmacopeas matritenses, utilizando estas mismas fuentes, cf. Toribio Zúñiga Sánchez-Cerrudo (“Historia de la Farmacopea durante la colaboración del Real Colegio de Farmacéuticos”. Anales de la Real Academia de Farmacia, 10(4): 427-482. Madrid, 1944) y María del Carmen Francés Causapé y María José Aliaga (“Intervención del Real Colegio de Farmacéuticos en la edición de la Farmacopea matritense”. Acta 34º Congressus Internationalis Historiae Pharmaciae: 62-65. Belluno: Accademia Italiana di Storia della Farmacia [Tipographia Piave], 2001; una versión más extensa en Ibid. Anales de la Real Academia Nacional de Farmacia, 67(2): 319-332). 102 Obligación del Real Colegio de Boticarios de Madrid contraída con Sebastián Martínez. Madrid, 4-VIII-1738 (ARANF, leg. 4,11,1). La escritura de obligación quedó protocolizada entre los documentos de Juan Alfonso López de León; la deuda habría de saldarse el 14-VII-1741 (AHPNM, protocolo 16.386, fols. [1738] 81r-82v). 103 “Dijeron les toca y pertenezen el Libro yntitulado Farmacopea Matritense en virtud de la Zession hecha de el a favor del expressado Collexio José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 61 Del carácter centralizador con que fue redactado el texto da cuenta el decreto regio, firmado por Felipe V a instancias de su Real Protomedicato y del Consejo de Castilla, inserto tras el extenso y laudatorio texto de la dedicatoria a José Cervi: “… para que por él se hiciessen, y executassen por todos los Boticarios las Medicinas, que debian tener en sus Boticas, assi Galenicas, como Chymicas (...) havia mandado el Proto Medicato su parte, que todos los Boticarios dependientes de su jurisdiccion en estos nuestros Reynos, le tuviessen precisamente, con la calidad de que su falta fuesse Capitulo de Residencia en las Visitas que diessen; y que á todos los que en adelante se examinassen de Boticarios, se entregase con el Titulo de su aprobacion la referida Pharmacopea, pagando su importe según la tassa…”104 La autoria de tan singular obra nos ha quedado velada, tan sólo un breve comentario en el prefacio ‘Lectori S.P.’ nos acerca a su carácter colectivo: “Illius confinciendae cura eruditioribus demandatae túm Facultatis Medicae Doctoribus, túm peritissimis Collegi Pharmaceutici Sociis, atque Examionatoribus, quos omnes in Physica experimentali, & Iatrica speculatione versatissimos oppidò notum omnibus…”105 Lo que parece cierto es que, para el verano de 1738, el texto ya debía estar muy avanzado106, prácticamente listo para entrar en la imprenta de Miguel Rodríguez107; es probable que, por el Sr. dr. Dn. Joseph Zervi (…) su fecha en el Buen Reiro a nuebe de Jullio proximo pasado de este presente año…” Obligación del Real Colegio de Boticarios de Madrid contraída con Sebastián Martínez. Madrid, 4-VIII-1738 (ARANF, leg. 4,11,1). 104 “Decreto del Tribunal del Real Proto-Medicato, auxiliado por el Real y Supremo Consejo de Castilla, para que todos los Professores Boticarios se arreglen en la composicion de los Medicamentos, por lo dispuesto en esta Pharmacopea Matritense &ª (…) Dado en Madrid á seis de febrero de mil setecientos y treinta y nueve años”. En: Pharmacopoeia Matritensis…: [26-32]. Matriti: Michaelis Rodriguez, 1739. 105 “Lectori S.P.” En: Pharmacopoeia Matritensis…: [18-25]. Matriti: Michaelis Rodriguez, 1739. 106 Ya en la junta general de 4-VIII-1738 se tenía noticia de a cuánto habría de elevarse el costo de edición, 40.320 rs (ARANF, L-7, fols. 6r-6v), lo que induce a pensar que se conocía la extensión total de la obra. 107 Pharmacopoeia matritensis Regii, ac Supremi Hispaniarum 62 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol para diciembre de este año estuviera impreso, a la espera de insertar en él las páginas del prefacio, que llevan numeración independiente108, y en las que se incluye el decreto del Real Tribunal del Protomedicato, firmado en Madrid el 6 de febrero de 1739, declarando obligatoria la tenencia de la obra en todas las boticas de España. En cualquier caso, el libro estaba encuadernado y listo para ser distribuido en julio de 1739109. Aun cuando no nos quede testimonio documental de ello, parece evidente que José Hortega colaboró en la elaboración de esta primera edición de la Pharmacopoeia Matritensis… a tenor de su protagonismo en la preparción de la segunda edición del Código, pergeñada desde 1756. En la junta particular celebrada en la primavera de 1756, a la que asiste José Hortega, entonces en su condición de fiscal, se pone de manifiesto la ausencia de ejemplares de la farmacopea y la conveniencia de su edición, por lo que se encarga a Francisco Lerma, a la sazón director del Real Colegio, que se ocupe de practicar las diligencias pertinentes ante el Consejo Real y el Protomedicato110; apenas unos días después se reúne la junta particular para aprobar el escrito preparado por Francisco Lerma, dirigido a José Suñol, donde solicita permiso para que “… el real Colegio de Boticarios (...) pueda ocurrir al Consejo por nueva licencia, y Pribilegio pª poder reimprimir la Pharmacopea Matritense, concediendole el Protomedicatus auctoritate jussu atque auspiciis. Nunc primum elaborata. Matriti: e typographia regia Michaelis Rodriguez, 1739. [38], 484 p., [1] h. de grab. La obra porta un grabado de José Cervi, realizado por Juan Palomino (1692-1777) sobre un dibujo de Valerio de Iriarte. 108 En junta particular de oficales de 28-XII-1738 se acuerda almacenar la nueva farmacopea, una vez impresa, en casa de Sebastián Martínez, quien se ocupó de gestionar las compras de papel y los pagos al impresor (ARANF, L-7, fol. 8r). La ‘Errata typographica’ queda firmada, por Manuel Licardo de Rivera ‘C.M. Generalis Corrector’ en ‘Matriti, jv Idus Decembri, An. MDCCCXVIII” (Pharmacopoeia Matritensis…: [484]. Matriti: Michaelis Rodriguez, 1739). 109 El 13-VII-1739 se reúne a la junta general con el fin de hacer llegar a los distintos obispados la farmacopea impresa (ARANF, L-7, fol. 10r). Se tiraron 3.200 ejemplares de esta primera edición; para ello se invirtieron 420 resmas de papel marquilla, adquiridas a la casa Nevo, a 53 reales la resma; y 836 pliegos para el grabado de Cervi. El impresor, Miguel Rodríguez, cobró 7.416 rs por su trabajo, el encuadernador 12.890 rs. El coste total de edición alcanzó el monto de 58.750 rs, lo que supone algo más de 18 rs. por ejemplar, el Real Tribunal tasó el precio de venta en 40 rs, lo que suponía un evidente beneficio económico para el Real Colegio. 110 Junta particular 23-IV-1756 (ARANF, L-7, fols. 135r-136v). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 63 usufructo de la impresión pº. los mismos fines que deja expuestos, concediendole al mismo tiempo la facultad de hacer las adiciones, y correcciones que tubiere por convenientes, según el estado en que se halla actualmente la Medicina en España, y el metodo que se obserba en las Cortes mas cultas de Europa en esta especie de obras…”111 La respuesta de José Suñol es inmediata, en ella accede a las pretensiones de los boticarios; el Real Colegio, tras pactar la contestación de agradecimiento, delega en su secretario, Juan Bayo, y en Clemente Zaydin para que se ocupen de “asistir a las correcciones y adiciones de la Pharmacopea…”112 No obstante es José Hortega quien actuará como director de la edición del nuevo texto: el 18 de mayo de éste 1756 la junta directiva del Real Colegio acuerda “qe el señor fiscal Dn Joseph Hortega, formase un plan para dha reimpn. y que formado lo presentase en junta particular…”113 Y así fue, en la de 9 de junio de este año: “El Señor Dn Joseph Hortega, cumpliendo con lo acordado en la Junta antecedente presento un plan qe ha formado pª la nueba edicion de la Pharmacopea Matritense, y bisto por los señores de la Junta, y hechado las reflexiones qe pide tan grabe asunto, aprobaron dho Junta particular de 29-IV-1756 (ARANF, L-7, fols. 136v-138v). En cuanto al uso de los beneficios, se señala expresamente: “… á fin de qe el usufructo se emplease en la conservacion del pequeño Jardin Botanico, que tiene dispuesto pª la educacion de los manzebos qe se aplican a la Pharmacia, y para las demas urgencias que pudieran ofrecerse al referido colegio (…) no tiene fondo alguno cierto pª mantener y defender el honor de la Pharmacia bastantemente deteriorado pr. la miseria ó infelicidad a que se hallan reducidos sus Profesores…” (ARANF, L-7, fols. 136v-138v). El escrito fue firmado por toda la junta directiva. 111 La respuesta queda fechada en 1-V-1756; de ella se da cuenta en la junta particular de 3 de ‘abril’ [sic por mayo] de 1756 (ARANF, L-7, fols. 138v-140r). En esta misma junta se pasa aviso a Juan Bayo y Clemente Zaydín, informándoles de la nueva edición de la farmacopea matritense “con las adicciones y correcciones qe combengan para cuia obra los ha nombrado el Rl. Colegio, y en su vrtd se les dara abiso pª qe asistn. a las juntas particulares…” De estas actuaciones se informa en la junta general de 11-V-1756, en ella Francisco Lerma solicita de los colegiados “qe cada uno de dhos señores diese noticia y razon de los defectos qe aia notado de la Pharmacopea, como asi mismo si tubiese algun nuevo medicamto assi simple como compto, los qe examinados por la Junta particular se probidenciara sobre ello…” (ARANF, L, fols. 140r-141v). 112 113 Junta particular de 18-V-1756 (ARANF, L-7, fols. 141r-142v). 64 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Plan, y acordaron se remitiese una copia de el, al señor Dr. Dn. Joseph Suñol para su aprobacion…”114 Pero en el mismo acto en que Francisco Lerma informa de la remisión del proyecto de edición de la nueva farmacopea, comunica a los colegiales un escrito de José Suñol, presidente del Real Tribunal del Protomedicato, en el que plantea algunas dificultades sobre la impresión, una vez consultada la propuesta del Colegio con los protomédicos Miguel Borbón, Gaspar Casal y José Amar: “… pues aunque dias pasados dige á Vmds podian hazer la reimpresion fundado en el exemplar de Cerví que dio por si el permiso en la impresión, he hallado despues el reparo de si se opondra el Real Proto-Medicato por ser todos los products que del penden pertenecientes a la real acienda de S.M. y asi quando Dn. Miguel Eugenio Muñoz, su subdelegado en el Reyno de Valencia pidio permiso pª hacer una reimpresion del Examen de Cirujanos y Parteras, cediendo el producto a su favor en atencion a los gastos qe se le havian originado de dho ministerio, le fue negado por la razon dicha, en cuia consequencia se me hace preciso consular al tribunal pª la determinacion…”115 La respuesta de los protomédicos, remitida a través de José Suñol, supone la paralización del proyecto; otra opción no era posible116. El Real Colegio habrá de esperar tres años, de largas y complejas negociaciones, para que el Real Tribunal concediera los permisos de edición. Aun cuando las transacciones afectan a la estructura toda del Real Colegio, avancemos en lo estrictamente concerniente a Junta particular de 9-VI-1756 (ARANF, L-7, fols. 142v-143v). En Junta particular de 19-VI-1756, el director informa de haber remitido el plan de la nueva farmacopea, con su firma, la de todos los compenente de la junta y la de los colegiales Juan Bayo y Clemente Zaydin (ARANF, L-7, fols. 143r-144v). 114 115 Junta particular de 19-VI-1756 (ARANF, L-7, fols. 143r-144v). El escrito de José Suñol queda fechado en Aranjuez, a 16-VI-1756; el Real Colegio responderá -en principio- que no precisa de los permisos de impresión, de los que ya dispone, sino del plácet al programa de revisión remitido; luego revisaría su postura (cf. infra). En junta particular de 24-VI-1756, el Real Colegio “acordo suspender todas las dilign respecto a la reimpresion de la Pharmacopea Matrits. asta qe V.S. [José Suñol] y el Rl. Proto-Medicato dispongan lo qe hallaren pr mas combte. porqe el Colegio no tiene otro objeto de maior beneracion qe la obediencia y respeto qe tributa A V. y a sus justas determinaciones…” (ARANF, L-7, fols. 145r-145v). 116 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 65 la edicion del texto: en febrero de 1757, la junta directiva -sin el consentimiento de José Hortega- decide elevar un memorial al Rey indicándole la necesidad de imprimir la nueva obra117; ese verano Francisco Lerma, acompañado de algunos colegiales de su confianza, visita, en San Lorenzo de El Escorial, al marqués de los Llanos118, quien sugiere la construcción de un laboratorio químico en las dependencias colegiales como vía para facilitar la concesión de permisos119. Activadas las negociaciones, se retoma el proceso de revisión de los textos120, mas nada habría de avanzarse hasta noviembre de 1760, sin duda las disensiones internas dentro de la organización colegial -de las que luego habremos de ocuparnos- llevaron al Real Tribunal a mantener un prudente silencio121. Será en noviembre de 1760, bajo la dirección de Bartolomé Fernández Ortiz, cuando la junta del Real Colegio tenga noticia de la respuesta oficial del Real Tribunal: “qe se presente dha Pharmacopª, sus correctiones, y cathalogo de Medicinas qe se han de aumentar para hacer su dever…”122; entonces volverán a encargar a José Hortega los trabajos de edición: “Que al Sr. Dn. Joseph Hortega se le abonen todos los gastos que ocurran en la correccion de la pharmacopea 117 Junta particular de 14-II-1757 (ARANF, L-7, fols. 148r-148v). 118 Junta particular de 3-VI-1757 (ARANF, L-7, fols. 151r-151v). En junta particular de 14-VI-1757, a la que no asiste José Hortega, Francisco Lerma da cuenta de su reunión con el marqués de los Llanos, “… resulto haver dado los Sres. del Real Proto-Medicato un Memorial al Rey exponiendo á S.M. qe para conseguir el Colegio lo que pretende se obligue este á poner el laboratorio chimico qe tiene ofrecido en sus estatutos…”, se acuerda emprender de inmediato “quantas diligencias sean precisas pª la construccion de dho elaboratorio, haciendo qe por mros de obras se formen diseños, los qe hara ver a la Junta pª su determinacion…” (ARANF, L-7, fols. 151v-152v). 119 120 En junta particular de 1-VII-1757 “se acordo tener junta el lunes proximo pª disponer el modo de hacer dha Pharmacopea…” (ARANF, L-7, fol. 152v); y en junta particular de 4-VII-1757 “… se acordo formar la Pharmacopea nª arreglada al Plan qe tiene aprobado el Colegio (…) juntandose pª este fin, los oficiales actuales, el Sr. Dn Juan Bayo, Dn Clemente Zaydin, y demas Sres. Colegiales qe combengan, en la Casa del Colegio…” (ARANF, L-7, fol. 153r). 121 En la junta particular de 30-XII-1761, Bartolomé Fernández Ortiz, director y propietario de las instalaciones del Real Colegio de Madrid, se referirá a la publicación de la segunda farmacopea matritense como “la que tanto tpo ha estado parada por vars pasiones de nosotros mismos por las que huviera sido imposible el hallarla oy en el estado de salir a luz” (ARANF, L-7, fols. 240r-241r). 122 Junta particular de 27-XI-1760 (ARANF, L-7, fol. 224r). 66 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol matritense, y que elija los sugetos que gustase dando la junta todas sus facultades…”123 Es un último reconocimiento público a quien tanto había colaborado en la preparación de unos textos que él no habría de ver impresos; en noviembre de 1760, apenas unos días después de serle encomendado este trabajo, es relevado en éste y en las demás misiones que el Colegio le tenía asignadas: “Estando las Dependencias del Rl. Colegio sin curso por la quebrantada salud de Jph Hortega Apoderdo de el, se trato del modo mas util para la menor omision en ellas y se determino qe el Sr. Director y los Sres Diputados practicasen quantas diligencias fuessen precisas y de las resultas diessen noticia individual al dho. Apoderado…”124 José Hortega no pudo disfrutar de los resultados de sus afanes; enfermo desde noviembre de 1760, habría de fallecer en el enero de 1761 y el polémico texto, apenas remozado frente a la versión anterior, no estuvo disponible hasta 1762125. Junta particular de 4-VII-1760 (ARANF, L-7, fols. 221r-221v). En lo cual se reafirma la junta general de 12-VII-1760: “Asi mismo fue determinado el que la Pharmacopea Matritense, que al presente esta arreglada en parte la corrija y concluia el Sr. Dn. Jph. Hortega, y que para este asumpto pueda nombrar algun otro sugeto que le alivie considerando el Colegio la mui dilatada que es esta Comision como que a cargo de dho señor estan tambien las Instituciones Pharmaceuticas que el Colegio tiene ofrecidas al Rl. Protho Medicato…” (ARANF, L-7, fols. 221v-222r). 123 124 Junta particular de 17-X-1760 (ARANF, L-7, fols. 222r-222v). Pharmacopoeia matritensis regii ac Supremi Hispaniarum Protomedicatus auctoritate, jussu atque auspiciis elaborata. Editio secunda locupletior, et longè emendatior. Matriti: typis Antonii Perez de Soto, 1762. [32], 556 p. En junta particular de 17-XI-1760 se presenta el pedimento realizado al Real Tribunal para que “se confirme la gacia de poder reimprimir la Pharmacopea Matritense addicionada como dho tribunal ha conocido en dia quatro de Junio de 1756 en atencion a ser dha obra una de las mas bien recividas en la Europa, y no hallar por util la impresión de la nueva por no dar lugar a mayor demora, como la que se experimenta asta oy de la que se ha seguido, y sigue notable perjuizio assi al beneficio comun de los Profesores, como al mayor bien estar del Rl. Colegio…” (ARANF, L-7, fols. 223r-223v). Diez días después, en junta particular de 27XI-1760, se da noticia de la respuesta del Real Tribunal: “qe se presente dha Pharmacopª, sus correctiones, y cathalogo de Medicinas qe se han de aumentar para hacer su dever…” (ARANF, L-7, fol. 224r). En la junta general de 12-XII1760, ante la imposibilidad de localizar préstamos a interés menor a un 3%, “por esta razon fue preferido a otro el Sr. Dn Bartholome Fnnz Ortiz Botº de la Reyna Madre (…) cediendole segunda vez su venta para su reembolso como tambien se le dio la facultad para que corra con dha impresión, gastos, gratificaciones &ª” (ARANF, L-7, fols. 225v-226v). El 21-XII-1760 se acuerda, en Junta particular, 125 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 67 La actividad de José Hortega en el Real Colegio de Boticarios de Madrid habría de descollar en un segundo frente: la polémica con las boticas de religiosos; un problema incialmente gestado como de índole local que derivó hacia una solicitud de carácter nacional. En la junta particular del 28 de abril de 1745 se da noticia de la apertura de botica presentada ante el Real Tribubal del Protomedicato por el madrileño Convento de Santo Tomás; ante la queja de sus colegiados, la reacción de los miembros de la junta es unánime: “Demanda ante el juez competente, pidiendo que ninguna Comunidad Religiosa pudiese tener botica ni vender Medicina en publico ni secreto según lo regulado por las Bulas Pontificias (...) pidiendo que no solo se cierren las Boticas de las Comunidades, Congregaciones y Lugares Píos de Madrid sino tambien de toda España, y demas dominios de S.M.” 126 buscar sujeto que abra el retrato del Rey para la Farmacopea, pero que antes se pida al Rey licencia para dedicársela, se nombra para ello a Bartolomé Fernández Ortiz (director), José Burruezo y Francisco Brihuega (diputados) (ARANF, L-7, fol. 227r). En la junta particular de 6-I-1761 se da noticia de la aceptación regia, comunicada por real orden de la Secretaría de Gracia y Justicia a Juan Curiel, juez de imprentas, y al Colegio de Boticarios (ARANF, L-7, fols. 227r-231r). Tras la incapacidad de José Hortega de ocuparse de la edición de la obra, la junta general de 12-II-1761 elige a Bartolomé Fernández Ortiz (director) y José Zavaleta (decano) para su coordinación; en esta misma sesión, el director informa haber comprado ya el papel para la impresión de la farmacopea, “lo que hizo presente a la Junta para su aprovacion, y haviendose suscitado sobre este particular controversia, unos, que aquel, otros, qe otro distinto, y algunos que papel fino de Olanda se disolvio la expresada junta sin determinacion…” (ARANF, L-7, fols. 232v-233v). Para marzo de 1761 está escriturado el préstamo de Bartolomé Fernández Ortiz: “… se determino, y aprovo que desde este dia goce el señor Director Dn Bartholome Fernz Ortiz el premio de tres por ciento de los sesenta mill rrs de vn que ha prestado al Rl. Colegio (…) para la reimpresion de la Pharmacopea Matritense…” (Junta particular de 26-III-1761. ARANF, L-7, fols. 234r-234v). A primeros de julio de 1762 la obra está ya concluida, entonces se encomienda a José Burruelo (vicedirector) el que concrete los costes (ARANF, L-7, fol. 253v); será en septiembre de éste 1762 cuando la junta general designe a Francisco Brihuega (secretario interino) y a Antonio Moreno Bote (diputado segundo) “para recoger las Pharmacopoeas de Casa del Impresor y que de ellas se haga pago al Sr Dn Bartolomé Ortiz” (Junta general de 18-IX-1762. ARANF, L-7, fol. 258v). Del análisis de estos pleitos nos ocupamos en Antonio González Bueno. “Las farmacias de religiosos en la reforma sanitaria de la España ilustrada”. Butlletí de la Societat d’Amics de la Història i de la Ciència Farmacèutica Catalana, 2(2): 46-54. Barcelona, 1993. 126 68 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol El Real Colegio de Madrid asume, en su propuesta, una función centralizadora, muy acorde con la organización estatal del momento y vaticinadora de lo que habría de ser su actuación en otros asuntos defendidos por la Corporación127. El pleito contra el Convento de Santo Tomás pone de manifiesto un enfrentamiento entre el Protomedicato castellano, favorable a la apertura de la botica, y la posición de control a ultranza mantenida por el Real Colegio, dispuesto a conseguir el final de la competencia religiosa a cualquier precio128. El Colegio de Boticarios delegó sus facultades en José Hortega y en Juan Moreno Bote129, a quienes dotó de todas las capacidades, legales y económicas, necesarias. Su actuación fue rápida, en la junta particular celebrada a fines de este agosto de 1745, presentaron un primer memorial donde solicitaban la Cf. María del Carmen Callega Folguera. La reforma sanitaria en la España ilustrada. Madrid: UCM, 1988. 127 La visita de inspección para proceder a legalizar la botica de este Convento se realizó en 30-X-1745, pese a la oposición, ya explícita, del Colegio de Boticarios de Madrid; el Protomedicato denegó el permiso de apertura aduciendo falta de géneros. Algo menos de un año después, el 1-X-1746, Pedro Ibáñez, boticario del Convento, formula ante el Prior una declaración en la que acusa a José Moreno Bote, José Hortega y José Fernández de haberle inducido a declararse contrario a la apertura “prometiéndome ácoger, ámparar y regalar, para lo que le prometieron veinte pesos de á quince cada uno”; ante esa declaración se reafirmó, en presencia del juez Antonio Camuñas, un día después. En el documento conservado en la Real Academia Nacional de Farmacia (ARANF, leg. 7,1) consta, anotado al margen por los colegiados acusados: “esto es verdad, pero es falso que le señalásemos cantidad determinada”. 128 En la junta particular de 28-IV-1745, el fiscal, José Zavaleta, da cuenta “que respecto de aver acordado el Colegio en la Junta Genl. de 9 de Sepre de 1741 que se pusiese Demanda ante Juez competente, pidiendo que ninguna Comunidad Religiosa pudiese tener Botica Publica, ni vender Medicina en publico, ni en secreto según lo decretado pr Bulas Pontificales, le parecia muy conveniente qe con la mr brevedad se pusiese en execucion el acuerdo del Colegio; y aviendo oido los Sres. de la Junta la proposicion del Sr. Fiscal, despues de un reflexivo Examen la aprobaron, y acordaron qe los Sres. Apoderados del Colegio Dn. Juan Bote, y Joseph Hortega dirijan enteramte esta Dependencia hasta su total Conclusion favorable ó adversa, recurriendo á S.M. ó á sus Tribunales, ó al Sumo Pontfice, ó finalmte á donde juzguen pr mas conveniente pidiendo que no solo se cierren las Boticas de las Comunidades, Congregaciones, y Lugares Píos de Madrid, sino tambien de toda España, y demas Dominios de S.M. y para qe en esto obren con toda livertad acordó la Junta darles todas sus facultades, y las del todo el Colegio sin limitacion alguna, y qe para ello se les libre todo el caudal qe pidieren á fin de qe se practique quanto se pueda para lograr este intento tan favorable al Colegio, y á la facultad…” (ARANF, L-7, fols. 49r-49v). 129 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 69 clausura de todas las boticas religiosas130. El escrito fue divulgado entre los profesionales del Reino, con lo cual cumplía una doble misión: servir como concienciador de los boticarios aún indecisos, a través de la compilación de textos legales y morales favorables a sus pretensiones y, por otra parte, promover la correspondencia entre los boticarios el Reino y la Corporación madrileña, convirtiéndose ésta en aglutinadora de las demandas emitidas en todo el territorio nacional. Los argumentos esgrimidos por el Colegio madrileño en su extenso memorial, en el que se entrevee la pluma de José Hortega, tienen como base una razón de índole moral: el estado de perfección al que deben aspirar los consagrados al culto divino les obliga a alejarse del trato mundano. Para sostener su teoría, los boticarios madrileños presentan una seleccionada y amplia colección de textos conciliares, junto a otros salidos de las plumas de los Santos Padres, tendentes a demostrar la imposibilidad moral de los religiosos para dedicarse a labores venales. Sirviéndose de la diferenciación establecida por san Jerónimo entre el estado laical y el eclesiástico131, y estableciendo la separación de ambos, en funciones y deberes –el elemento primordial de su discusión-, solicitan ante el Rey, en su calidad de ‘Protector de la Iglesia y de sus sagradas disposiciones’, el que vele por la buena marcha del Estado haciendo cumplir las decisiones de la Santa Rota referente a la inconveniencia de que los religiosos ejercieran oficio público. Sólo en raras ocasiones el Junta particular de 30-VIII-1745 (ARANF, L-7, fols. 49v-50r). Este escrito podría corresponderse con el impreso conservado en el archivo de la Real Academia Nacional de Farmacia (ARANF, leg. 4,3); José Antonio Pérez Romero (“El Colegio de Boticarios de Madrid y las boticas de religiosos”. Boletín de la Sociedad Española de Historia de la Farmacia, 25(99): 139-146. Madrid, 1974) estudió un ejemplar de este mismo impreso, conservado en la Cátedra de Historia de la Farmacia y Legislación Farmacéutica de la Universidad de Granada; basándose en las notas marginales, fija su redacción entre 1743 y 1753. 130 131 El autor cita a san Jerónimo tomando su testimonio de Baltasar Gracián: “S. Hyeronomyn. apud Gratia. 12.q.I.can. 7.ibi: Duo sunt genera Christianorum: est autemunum genus quod mancipatum Divino Officio, & deditum contemplationi, & orationi ab omni stepitu temporalium caesare convenit, ut sunt Clereci, & Deo devoti, videlicet concversi. S. Petr. Clun. Ad D. Bernard. Ep. Apolog. Ibi: An non videtur indecens, &c. Concil. Trident. Sess. 22 de Reform. C.I.”, de donde deduce que “siendo el Religioso, y el Eclesiástico, por su elevada perfeccion, dedicado solamente á la Oracion, Oficio Divino, Exercicios espirituales, y cultivo del Alma, debe estar enteramente apartado de todo esserpito, oficio y cuidado temporal” (Memorial…cit ut supra, fol. 1v. ARANF, leg. 7.1). 70 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol extenso memorial hace alusión a la verdadera razón motivadora del escrito, la dura competencia económica ejercida por las boticas conventuales, constante problema planteado en las actas de las reuniones mantenidas por el Colegio madrileño; y aún cuando ésta aparece lo hace socarronamente, con una disculpa final en la que vuelve a relucir la necesaria separación de las funciones entre clérigos y seglares. A nadie escapa que las consideraciones morales resultan insuficientes para justificar la petición de los boticarios; quizás por ello los colegiales madrileños cuidan de añadir un decisivo planteamiento macroeconómico, de claros tintes ilustrados: “De cuyas consideraciones se infiere igualmente el perjurio grave de la Real Hacienda; pues minorados los Profesores Seculares, y disminuidos sus Patrimonios, se desfalcan, y pierden las Rentas, y Derechos de V. Mag., faltan familias para su Real Servicio y contribuyentes para la subsistencia de la Monarquía (…) y entran los caudales y riquezas en las manos muertas de los Eclesiasticos, y Comunidades Religiosas, donde se estancan, y pierden el debido circulo que debieran dar entre los Vassallos de V. Mag., por ser la sangre que vivifica, y conserva el Cuerpo mystico de la Republica, y mantiene el Comercio, en que consiste su principal subsistencia, de que se sigue grave, y notorio detrimento (…) en perjuicio público y del Real Erario…”132 En la resolución del Memorial… enviado por el Real Colegio de Madrid cifran los boticarios madrileños la esperanza de ver incrementados sus haberes profesionales133; para reforzar su causa, José Hortega, en nombre del Real Colegio, decide solicitar 132 Memorial… cit ut supra, fol. 11v (ARANF, leg. 7.1). En la junta general de 31-VIII-1745, el secretario da noticia de que quieren abrir botica pública los Conventos de Santo Tomás y Carmelitas Descalzos de Madrid, se les pide a los apoderados que se ocupen de paralizar los permisos “pr los graves perjuicios que resultarian á la mayor parte de los Sres colegiales de qe estos dos Combentos tengan Boticas publicas, y que vendan Medicinas, como ya lo executan siete Comunidades desta Corte con notable daño, y perdicion de los individuos del Colegio” (ARANF, L-7, fols. 50v-52r). La botica del Convento de Santo Tomás se abrió; el Diario noticioso, curioso, erudito y comercial público y económico de 2-III-1758 (pág. 2), da aviso de que quien quiera adquirir una ‘librería coral’ se dirija a este establecimiento. También la botica del Convento de la Merced, donde darán cuenta de una capa, según informa el Diario noticioso, curioso, erudito y comercial público y económico de 18-III-1758 (pág. 4). 133 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 71 de otros colectivos farmacéuticos de todo el Reino informes con los que apoyar la solicitud requerida en el memorial elevado al Monarca; en la junta general celebrada por la Corporación a fines de agosto de 1745 se acuerda: “… se escriba en Nombre del Colegio á los Colegios de Pharmaceuticos de Sevilla, Granada, Zaragoza, Barcelona, Valencia, y Pamplona, y asimismo á los principales Boticarios (…) y á los Visitadores de Boticas (…) pidiendo su aprobacion y consentimiento”134 Los informes y poderes a favor de José Hortega, como secretario del Colegio madrileño, no se hacen esperar; visitadores de boticas y agrupaciones profesionales formadas en lo obispados de todo el Reino de Castilla contestan, en breve plazo, a la solicitud formulada desde la institución de la Corte135; mas no sólo el territorio afecto al Protomedicato castellano; también los territorios con jurisdicción independiente como Valencia, Aragón o Navarra envían sus informes al Colegio de Madrid136. A partir de este memorial, y como consecuencia de la continua preocupación de la cúpula de los colegiales madrileños por el problema de las boticas religiosas, se estrechan los lazos de comunicación con otros Colegios profesinales, particularmente con el de Barcelona, que tiene planteados pleitos similares. Un total de doce cartas, dirigidas a José Hortega por Raimundo Ribas, desde la Ciudad Condal, todas durante los años 1746 y 134 Junta general de 31-VIII-1745 (ARANF, L-7, fols. 50v-52r). Se conserva extensa documentación en el archivo de la Real Academia Nacional de Farmacia; la correspondencia disponible ofrece una buena visión de las farmacias de religiosos en la España de los años centrales del XVIII: Sevilla (ARANF, legs. 6,19; 7,8), Cádiz (ARANF legs. 6,21; 7,16), Puerto de Santa María (ARANF, leg. 6,26), Loja (ARANF, leg. 6,9), Antequera (ARANF, leg. 7,6), Córdoba (ARANF, leg. 7,7), Badajoz (ARANF, leg. 6,10), Yecla (ARANF, leg. 6,25), Sigüenza (ARANF, leg. 6,7), Guadalajara (ARANF, legs. 7,11; 7,12), Toledo (ARANF, legs. 6,5; 7,21), Ocaña (ARANF, legs. 6,17; 7.17), Talavera (ARANF, leg. 7,22), Ciudad Rodrigo (ARANF, leg. 7,17), Segovia (ARANF, legs. 6,6; 7,5), Soria (ARANF, legs. 6,4; 7,15), Burgos (ARANF, leg. 6,24), Meruelo (ARANF, leg. 7,24), Salamanca (ARANF, legs. 6,1; 7,18), Zamora (ARANF, legs. 6,15; 7,14), Valladolid (ARANF, legs. 6,22; 7,19), Palencia (ARANF, legs. 6,3; 7,20), Villamaño (ARANF, leg. 6.20), Astorga / Oviedo (ARANF, leg. 6,12), Liébana (ARANF, leg. 6,14), Santiago de Compostela (ARANF, leg. 6,11) y Coruña (ARANF, legs. 6,16, 7,23). 135 Nájera (ARANF, legs. 6,8; 7,13), Zaragoza (ARANF, legs. 6,18, 7,10), Logroño (ARANF, leg. 7,13), Valencia (ARANF, legs. 6,13; 7,9) y Pamplona (ARANF, leg. 6,22). 136 72 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol 1747137, mantienen directamente informado al Colegio madrileño de la situación de un pleito similar entablado entre los boticarios barceloneses y el Convento de Santa Catalina, información tan precisa y detallada que José Hortega llegó a conocer las decisiones rotales antes, incluso, que los propios boticarios pleiteantes138. La razón parece clara, la decisión rotal influiría sobre el veredicto regio ante el Memorial… enviado por el Colegio de Boticarios madrileño; así lo reconoce José Hortega ante su comunicante barcelonés al calificar como ‘lo mas eficaz para todos’139 la publicacion de una decisión regia en la que se decretase el cierre de todas las boticas conventuales. La correspondencia mantenida por José Hortega desde la secretaria del Colegio de Madrid confirman el papel centralizador asumido por la Corporación; es a él a quienes los barceloneses envían los ejemplares de las Cartas ejecutorias redactadas por la Santa Rota para que éstas sean distribuidas al resto de los Colegios de Boticarios del Reino y a quien se considera informado sobre el alcance de estas resoluciones y su posible aplicación a todo el territorio nacional140. El problema de las boticas religiosas mantendrá la atención de José Hortega, y del resto de la junta directiva del Colegio, entre los años 1745 y 1747; en el verano de éste 1747, José Suñol, presidente del Real Tribunal del Protomedicato, escribía a Hortega: “… Puede Vm. asegurar a ese Rl. Colegio, que en quanto estubiere de mi parte protegeré su justa pretension, y ya sabe VM. que siempre he sido opuesto Correspondencia cursada entre Raimundo Ribas y José Hortega (ARANF, leg. 7,4). 137 “Esta noticia no he participado ahun á mi Colegio (…) sí á los señores de la Junta que se convocaron á esta su Casa…”; la nota incluye unas supuestas palabras puestas en boca del Pontífice ante la Prelatura: “Estos fraylassos no procuran otro que engordarse ellos, y emprobeser a los Pobres seculares de quienes sacan sus rentas”, todo un símbolo en si mismas (Carta de Raimundo Ribas a José Hortega. Barcelona, 11-II-1746. ARANF, leg. 7,4,6). 138 Carta de Raimundo Ribas a José Hortega. Barcelona, 10-VI-1746 (ARANF, leg. 7,4,14). 139 “Estimare á Vm. me insinue quanto se ofresca para Inteligencia en el Curso de la prevencion [que] sigue su Rl. Colegio en nombre propio y de los demas de nuestra España…” (Carta de Raimundo Ribas a José Hortega. Barcelona, 20-V-1747. ARANF, leg. 7,4,12). 140 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 73 a las boticas de los Conventos, lo malo es que tienen muchos Protectores…”141 Tras el escrito de José Suñol, José Hortega interrumpe la ronda de consultas establecidas con el resto de los colectivos farmacéuticos; la opinión del Real Tribunal parecía proclive a los intereses del grupo profesional al que defendía. No obstante, Hortega no llegó a conocer la resolución del conflicto; la decisión regia se haría esperar hasta el 28 de febrero de 1761, cuando nuestro boticario hacía días que había fenecido; entonces Carlos III dictaminó: “Que subsistan todas las Boticas, que tienen abiertas para el Público las Boticas Religiosas y Lugares Píos; con tal de que la encabecen en personas seglares, idoneas y aprobadas, y se sujeten a la Visita, como las de los seculares, prohibiendo su Magestad, que por ninguna Comunidad se pueda abrir otra nueva sin expressa licencia suya…”142 No fueron éstos los únicos asuntos atendidos por José Hortega como miembro de su Colegio; en enero de 1743, en razón de su cargo de secretario, solicitará de Francisco Javier Quesada, que lo era del Real Tribunal del Protomedicato, la devolución de la documentación relacionada con el Colegio de Boticarios, para que éste pudiera formar su propio archivo, reconocido en sus Estatutos… 143; en el verano de 1744 asumió los trabajos de edición de la nueva tarifa, arreglada a la Pharmacopoea 141 leg. 7,25,1). Carta de José Suñol a José Hortega. Aranjuez, 12-VI-1747 (ARANF, 142 Novísima Recopilación de las Leyes de España. Mandado formar por el señor Don Carlos IV. Madrid: en la Imprenta de Sancha, 1805-1807 (cf. tono VI, libro VII, págs,. 107-108). Aunque dictado el 28 de febrero, la junta directiva del Colegio de Madrid tuvo conocimiento de la decision regia con anterioridad; el 11-II-1761 se reúne junta particular “para comunicar a todos los Sres. del Colegio lo resuelto por los señores del Consejo de S.M. (…) en el Pleito con los boticarios regulares…” (ARANF, L-7, fol. 232r); y en junta general del día siguiente se acuerda: “… que el Señor Director subvenga a cumplir con los Caudales necesarios para su conclusión y que gratifique y pague según parecer de los Peritos que para ello le de el Colegio su entero y cumplido poder…” (Junta general de 12-II-1761. ARANF, L-7, fol. 232v). En junta particular de 31-I-1743 se acueda que José Zavaleta y José Hortega “… supliquen en nombre del Colegio al Sr. Dn. Franco. Xavier de Quesada secretario del Rey Nr. Sr. y Propietario del Rl. Protomedicato que mande entregarles todos los Papeles, é instrumentos qe. se hallen en su Secretaria, y que pertenezcan al Colegio para formar el Archivo que está prevenido pr. el Estatuto IX...” (ARANF, L-7, fols. 25v-26v). 143 74 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Matritense…144, y aún cinco años después, en el verano de 1749, volvería a ocuparse de su actualización145; intervino en las negociaciones con los drogueros de la madrileña calle Postas para evitar la venta de medicinas en sus establecimientos146, promovió la adquisición de nuevos locales para el Colegio, facilitó las relaciones entre la Corporación profesional y los miembros del Real Tribunal del Protomedicato147; aseguró la distribución de las Suponemos que se trata del opúsculo, sin fecha, titulado Tarifa o regulacion de los precios a que se han de vender todos los medicamentos simples, y compuestos, que se tienen repuestos en las Boticas de estos Reynos para el uso medico, arreglada à la Pharmacopea Matritense, hecha por autoridad y mandato del Real ProtoMedicato. En Madrid: por Miguel Francisco Rodriguez, [s.a.]. 46 p., del que la Biblioteca ‘Marqués de Valdecilla’ (UCM) dispone de un ejemplar (signatura: BH MED Foll. 501). La aprobación de esta nueva tarifa por el Tribunal del Protomedicato fue comunicada en junta particular de 23-VII-1744, en ella el director, Lorenzo Alquizalete, informa que el documento está ya en su poder y pronto a imprimirse; se tirarán 3.000 ejemplares, 200 en papel fino y 2.800 en ‘papel de la tierra’; se encomienda que “la eleccion del impresor, del Papel necesario para la impresion, la Correccion de la imprenta, y demas cosas qe sobre este punto ocurriesen, quedase al cuidado del Sr. Dn. Jph de Ortega, el qual admitio este encargo” (ARANF, L-7, fols. 43v-44r). Apenas un mes después, en la junta particular de 14-IX-1744, el director da cuenta de que la tarifa ya está impresa, y firmados un buen número de ejemplares por Javier de Quesada, su precio se tasa en 6 rs y se encarga de su distribución a José Hortega (ARANF, L-7, fols. 44r-44v). 144 En junta general de 6-VI-1749, José Hortega, entonces director de la Corporación, expone que el Real Protomedicato “havia mandado que se compusiese nueba tarifa, mandando pª este effecto á dho Sr. Director [Hortega] y a los Sses Dn Juan Bote, Dn Joseph Manzano, Dn Juan Bayo, y Dn Cristoval Velez, los quales havian compto. la referida Tarifa con asistencia, voto y parecer de todos los Sses. de la Junta particular…”, la tarifa fue leída en esta junta y aceptada por el Colegio (ARANF, L-7, fols. 69v-71v); su texto estuvo listo para la imprenta en agosto de éste 1769, según se señala en junta particular de 19VIII-1749 (ARANF, L-7, fos. 71v-72r). 145 En junta particular de 15-III-1748 se nonbra una comisión para “la composicion de las antiguas diferencias, que subsisten entre el Colegio y los Mercaderes de la Droguería de la calle de las Postas”; la conformarán José Hortega, Juan Moreno Bote y Gregorio Aedo (ARANF, L-7, fol. 61r). 146 147 Particularmente interesante es la visita que el Real Tribunal realiza a los locales del Real Colegio, con motivo de la exhibición de simples para preparar la Triaca en la primavera de 1744, acuden al acto José Suñol, los protomédicos Gaviria y Loqui, los visitadores José Pavón y Francisco Pérez Izquierdo, boticarios de S.M. “estaban adornadas las salas con el Asseo, y compostura que pr. menor esta anotado en papel separado (...) Todos los generos estaban dispuestos en una Bajilla de China, y colocados en un aparador, que se hizo de intento de Madera por orden de el Sr. Director [José Hortega] (…) Asistieron á este acto todos los Sres Colegiales distribuidos en acto de ceremonia, los quales José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 75 producciones colegiales: tarifas, farmacopea y triaca, tanto entre los boticarios asentados en el resto del territorio nacional148 como entre la cúspide del Tribunal del Protomedicato149; potenció la adscripción de los boticarios madrileños a su Colegio150 y, en reiteradas ocasiones, se ocupó de velar, en representación del Colegio, por los intereses pecuniarios de los colegiales difuntos151; sus compañeros reconocieron sus trabajos dejando constancia de su buen hacer, ya en junio de 1748, miemtras ejercía su primer mandato como director: aprovaron y se mostraron satisfechos (…) y el Sr. Director [Hortega] concluyó el acto dando gracias al Tribunl. por medio de una oracion Gratulatoria á que correspondio el Sr. Suñol” (Nota inserta entre las actas de la Junta particular de 15-I-1749 y la general de 6-VI-1749. ARANF, L-7, fols. 69v-71v). Valga como testimonio la correspondencia cruzada con Vicente de la Torre y Monteverde, ‘boticario examinador de la ciudad de Valencia’, relativa a la distribución de la Pharmacopoeia matritensis… (Madrid, 1739) y de la Triaca elaborada por el Colegio; un total de tres cartas fechadas en Valencia, 8-V-1743; Valencia, 5-VI-1743 y Madrid, 15-VI-1743 (ARANF, leg. 4,13,11). 148 149 Tal el envío de ‘doce botecitos’ de la Triaca elaborada por el Real Colegio remitidos, en sendas cartas fechadas el 24-I-1744, a José Suñol y a José Cervi; dación que éstos agradecieron con sus respectivas notas, fechadas en El Pardo, el 25-I-1744, que se conservan (ARANF, leg. 4,13,15). Durante su primer mandato como director, en la junta general de 1-VI-1748, “El Colegio acordó admitir por sus colegiales á todos los Sres. Boticarios que tenían Botica propia en esta Corte, que actualmente no eran colegiales…”: Manuel de Torres, boticario de la calle Ancha de San Bernardo; Martín de Arévalo, de la calle Magdalena; Cristóbal Pina, de la Plazuela del Angel; Antonio Ximénez, de San Antonio de los Portugueses; Nicolás Regidor, de la plazuela de San Ildefonso; Felipe Utrilla, de la calle de Santiago; Manuel Girón, de la calle del León; Pedro Sebastián Malo, de la calle de León; Gregorio del Arco, de la calle Provincia; Antono Méndez, de la calle del Príncipe; Matías Avanzeno, calle de Hortaleza y José Fernández de la Vega, boticario en la Fuente de Relatores (ARANF, L-7, fols. 61v-62v). 150 151 Así, tras el fallecimiento de Miguel de la Parra, se le elige, junto a Lorenzo Alquizalete, “para qe miren y cuiden de su Botica (...) como previenen los Estatutos” (Junta particular de 30-XII-1745. ARANF, L-7, fols. 52r-53v). En marzo de 1748 actuó como tasador en el traspaso de la botica de Lorenzo Alquizalete y María Tovares, su mujer, sita en en la calle de León; el traspaso se efectuó a favor de Pedro Sebastián Malo y María Antonia González; José Hortega actuó como parte propuesta por Pedro Sebastián Malo, Lorenzo Alquizalate recurrió a Gregorio Aedo; la tasación tuvo efecto el 27-III-1748 y fue protocolizada trece días después (Traspaso de la botica de Lorenzo Alquizalete y María de Tovares. Madrid, 9-IV-1748. AHPNM, protocolo 16.343, fols. 89r-96v). 76 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol “… dando las gracias al Sr. Director por el zelo, y quidado con que atendía á los aumentos del Colegio, y al adelantamiento de la Profesion Pharmaceutica…”152 Como vemos, las labores cotidianas del Real Colegio se centraron, al menos en estos años iniciales, en la defensa de los privilegios adquiridos; el fin primero recogido en los estatutos aprobados en el diciembre de 1736 quedó postergado ante la solución de los problemas diarios; no exento de dolor, así lo reconoce un cansado Juan Moreno Bote, en el escrito de dimisión firmado el 22 de diciembre de 1742: “Siendo el principal instituto de este ilustre, y recomendable Colegio, el adelantamto. de las partes, que hermosean la Pharmacia, en maior alivio, y utilidad del publico, hasta hoy no numeramos otro progresso que el de la arreglada formazion de la celebre Thériaca, y la exquisita edicion de nra. Pharmacopea…”153 Quizás no otra cosa pretendiera José Hortega, quien centró su actividad científica en la Real Academia Médica Matritense, limitándose en su actuación en la vida colegial, al menos hasta donde la documentación conservada nos permite deducir, a la estricta y diligente defensa de los privilegios profesionales. Desde su ‘regeneración’, el Real Colegio de Boticarios contó con un espacio propio, unos locales alquilados en la calle San Pedro154, pero parece que éstos sólo fueron utilizados para la teatral exposición de los simples que habría de contener la Triaca, y para su compleja preparación, de la que la Gaceta de Madrid proporciona datos, al menos desde 1738155. Sin embargo, 152 Junta particular de 11-VI-1748 (ARANF, L-7, fols. 63r-63v). En junta general de 5-I-1750, “finalizando los dos años de tal Director con una oracion plausible, y llena de ternezas con que dejo a todos edificados, y dando muestras de el Zelo; con que havia desempeñado este empleo, y todos los Sres correspondieron igualmente agradecidos, como satisfechos…” (ARANF, L-7, fols. 75r-77v). 153 Escrito de dimisión de Juan Moreno Bote. Madrid, 22-XII-1742 (ARANF, leg. 4,13,14). 154 Éstos eran propiedad de fray Manuel Pérez de la Villa, mercederario, residente en el Convento de la Real y Militar Orden de Nuestra Señora de la Merced, Redención de Cautivos, la sede general de la Orden en estos años; se ocupaba de su cobro el Procurador general del Convento, Andrés Ramos. La cantidad semestral del alquiler ascendía a 450 rs. Los datos disponibles parecen asegurar que los locales fueron alquilados el 20-V-1738 (ARANF, leg. 4,8,2; 4,12). 155 “Por privilegio que tiene de S.M. (…) el Colegio de Boticarios de José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 77 y sin duda conviene señalarlo una vez más, las juntas del Colegio no tenían lugar aquí, sino en la capilla de Nuestra Señora de los Desamparados, propiedad de la Congregación mariana. En el verano de 1748, bajo los auspicios de Zenón de Somodevilla y Bengoechea, marqués de la Ensenada (17021781) y por decisión de José Hortega, quien entonces ocupaba la dirección del Real Colegio, éste consiguió el alquiler de unos locales en la calle del Barquillo; el nuevo inmueble permitiría, además de realizar en él las operaciones para preparar la Triaca magna156, la instalación de un jardín botánico y la construcción del laboratorio químico previsto en los estatutos colegiales157. esta Corte, está preparando publicamente los simples para consingir [sic] una porcion considerable de Theriaca Magna de Andromaco, los que fueron aprobados por el Real Protho-Medicato y estuvieron expuestos al público tres días: Y queda asimismo aplicado en el cultivo, y adelantamiento de la Pharmacia, como lo previenen sus Estatutos, en beneficio del público…” Gaceta de Madrid, 19-VIII-1738. En términos similares, aún en el otoño de 1747: “Se halla en la casa del Colegio, a la entrada de la calle de San Pedro, frente del Hospital de la Pasión…” Gaceta de Madrid, 19-IX-1747. 156 Así lo recoge la Gaceta de Madrid correspondiente al 13 de mayo de 1749: “El Real Colegio de San Lucas de Profesores Boticarios de esta Corte tiene expuestos al público en su casa jardín de la calle Barquillo todos los géneros medicinales de la Triaca Magna. El Tribunal del Real Proto Medicato lo aprueba. El público queda satisfecho…” 157 El director, José Hortega, informa “… que con el motivo de los varios Acuerdos, por los quales esta dispuesto, que se busque casa mas comoda para celebrar las funciones del Colegio, respecto de la que actualmente tenia en la calle de Sn Pedro era demasiado estrecha, y assi mismo teniendo presente el deseo que tenian los Sres. Colegiales de que se pusiese en execucion el Jardin Botanico y el Laboratorio Chimico, que están prebenidos pr los estatutos desde el tiempo de la fundacion del colegio habia hallado casa capaz para la consecucion de ambos intereses en la calle Rl. del Barquillo, con todas las Piezas necesarias para la celebracion de las Juntas, y assi mismo con terreno capaz para la formacion del Jardin Botanico, y del Laboratorio chimico, habiendose interesado el Excmo. Sr. Marques de la Ensenada del Consejo de Estado, Ministro de la Guerra, Yndias, Marina, y Hacienda, para el logro de la referida casa, cuyos alquileres eran de mil Rs. de vn en cada un año…” Las nuevas instalaciones estuvieron disponibles desde comienzos de julio de éste 1748; en junta particular de 1-VII-1748 “El Sr. Director [José Hortega] dio cuenta á los Sres. de la Junta como desde este dia empezaba a correr la casa de la calle Rl. del Barquillo de cuenta del Colegio, y con este motivo se acordó, que inmediatamente se hiziese la mudanza de los Muebles y demas efectos del Colegio á la referida casa, y que para la disposicion de las obras que fuesen necesarias, assi en la casa, como en el Jardin, donde era preciso poner Noria y tambien executar otras cosas muy precisas para poner en execucion los intentos del Colegio, acordaron tambien los Sres. de la Junta dar facultad amplia al Sr. Director para que execute, 78 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol En el jardín, ordenado de acuerdo a la propuesta sistemática de Joseph Pitton de Tournefort (1656-1708)158, comenzaron a impartirse clases de Botánica a los mancebos de botica en el otoño de 1751; se ocupó de ello Cristóbal Vélez159. y delibere por si quanto combenga, y que el Sr. Thesorero aprompte el dinero necesario en la forma que se acostumbra…” (Junta particular de 1-VII-1748. ARANF, L-7, fols. 63v-64r). En la junta general de 26-VIII-1748 “... se acordó qe. se colocasen las Plantas en el Jardin Botanico según el Methodo del Sr. Tournefort (...) se acordó nombrar, y con efecto se nombraron á varios Sres. colegiales para cumplimentar y dar gracias á varios Sres. que habian favorecido al Colegio con Plantas para el Jardín y con algunas alajas para adornar la casa…”; José Hortega solicitó la colaboración de todos los colegiales en las tareas de remisión de plantas con las que poblar el Jardín (ARANF, L-7, fols. 64r-64v). La elección del jardinero, Pedro Gallego, con un salario de 4 rs/dia, a correr desde el 9-IX-1748, tuvo lugar en la junta particular de 10-IX-1748 (ARANF, L-7, fol. 65r). En la junta general de 3-I-1749 se acordó “que el Sr. Director [José Hortega] y junta particular pueda encargar a qualquiera Señor Colegial qe tenga Zelo, é inclinacon. a las plantas tome á su cuidado la Clase, ó Clases de plantas, qe discurran ser precisas, y necesarias, para la Poblacion de el Jardin, con tal, que se abone á estos Sses. Colegiales el coste, que tuvieren las dhas plantas y su conduccion, y que ninguno pueda escusarse con pretesto alguno…” (ARANF, L-7, fols. 66r-67v). Las obras del jardín se comienzan a hacer efectivas ese mismo otoño: “para, que el Jardinero regase con mas comodidad, y beneficio de las plantas, y assi mismo para la mejor comodidad, y colocacion de los tiestos, era preciso hacer algunas obras en el referido Jardín, según el plan y demostracion que les hizo presente…” (Junta particular de 8-XI-1749. ARANF, L-7, fols. 72r-72v). 158 159 “Deseando el Real Colegio el poner en execucion, lo que manda el Estatuto primero, y veinte quatro, por lo que mira a el curso de Lecciones y Demostraciones de Plantas que dice se hayan de hacer todos los as. para cuyo fin se ha establecido el Jardin tres as ha, á costa de los caudales del Colegio y por la buena diligencia de sus individuos, con el destino, de qe el publico consiga quanto antes el beneficio tan deseado de esta grande obra, que asta ahora no hay otra igual en España por esta linea: el Sr. Director con el unanime consentimto de todos los señores Colegiados tubieron a bien el nombrar al Sr. Dn Christoval Velez secretario actual del Colegio para qe hiciese las Lecciones y Demostraciones de Plantas según el methodo de Tournefort, todos los Domingos del aº mientras el tiempo lo permita a la ora mas comoda, para que puedan asistir a ellas, los Mancebos de Botica, y los Colegiales que pudiesen (…) dando principio a estas Lecciones desde el dia quatro de este mes que es el Domingo inmediato…” (Junta general de 1-VII-1751. ARANF, L-7, fol. 91r-92v). Del funcionamiento inicial de este jardín botánico nos ocupamos en Antonio González Bueno, Sagrario Muñoz Calvo (“El Jardín del Colegio de Farmacéuticos de Madrid a lo largo del siglo XVIII”. En: Mª. Paz Ferrero (ed.). Actas del Simposium 250 aniversario del nacimiento de José Celestino Mutis: 253-259. Cádiz: Diputación Provincial de Cádiz, 1986). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 79 Este año de 1751 es época de cambios en el Real Colegio; durante el verano, la Corporación, instigada por las propuestas de Cristóbal Vélez160, comienza a desarrollar sesiones científicas; los temas tratados en ellas se reducirían, inicialmente, a los productos incluidos en la Pharmacopoeia Matritensis…; la primera de las disertaciones corrió a cargo de José Hortega, se ocupó de la pulmonaria oficinal161; significativamente hizo preceder su estudio de un “Discurso Preliminar (…) con la historia del restablecimto. del Real Colegio, sus progresos, y el estado en qe oy se alla…”162; su contenido no ha llegado a nuestro días, pero sí sabemos de la critica que en él realizó a los drogueros y herbolarios. Una situación externa, en apariencia banal, socavará esta renacida Corporación, que comenzaba a articularse en torno a sus fines ilustrados; se trata de la solicitud que realiza 160 En el acta de la junta particular celebrada el 17-II-1750 se anota la propuesta de Cristóbal Vélez para que “se diese cumplimiento al estatuto 1º el que expresa, que ademas de la Formacion de un Jardin Botanico y un Operatorio Chymico, se hagan todos los años un Curso de operaciones, chymicas, y otro de Demostraciones de plantas y Drogas exoticas, y para cumplir en parte, se resolvio por la Junta, se diese qta. al Sr. Director, para, que este nombre seis Colegiales, para, que estos desempeñen los Diez Meses que restan de este año, siendo de obligacion de estos traer 10 actos literarios, arreglandose á no tratar, por ahora de otros generos de simples, que los, que componen la Pharmacopea Matritense en Materia Medica, y que en la eleccion de estos, sea peculiar, de el Colegial, á quien se le encargare el assumpto, y si de el Sr. Director ademas de la nominacion por su serie de sugetos, el de el dia, en que se ha de convocar la Junta particular, para que antes, que pase a la General el asumpto pase por esta su aprovacion, y visto, señale dia para convocarla…” (ARANF, L-7, fols. 79v-80v). “El Sr. Fiscal Dn Joseph Hortega, cumpliendo con lo prevenido en el Acuerdo antecedente, presentó una Disertacion cuyo titulo es Disertacion Physico Botanica sobre la verdadera Pulmonaria officinal, y habiendola leydo como previene el Acuerdo 17 de febrero de 1750 la Junta no solo la aprobo, si no es qe se mostro muy satisfecha de todo el contesto de ella, y juntamente le dio las gracias, por el particular desempeño con que esta escrita: y no ofreciendose otra cosa, se determino el que se leyese en junta general…” (Junta particular de 28VI-1751. ARANF, L-7, fols. 90r-91v). La disertación fue leída en la junta general de 1-VII-1751 (ARANF, L-7, fols. 91r-92v). 161 “… y algunas reflexiones muy utiles, sobre la equibocacion in adbertida de algunas especies de Drogas, que estan en uso sin la critica y examen que les corresponde. Una de ellas es aquella simiente que la gente Popular nos pide con el nombre de Cominos rusticos, y que nros Arbolarios ignorantes nos traen con variedad á medida de su antojo…” (Junta general de 1-VII-1751. ARANF, L-7, fols. 91r-92v). 162 80 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol el Ayuntamiento de Madrid, en el verano de éste 1752, para que la Corporación colaborara, ‘por vía de limosna’, a las fiestas con las que celebrar la concesión del culto público a santa María de la Cabeza163. La polémica gira en torno a un asunto de identidad institucional; las colaboraciones económicas se solicitan a las agrupaciones gremiales, y algunos colegiados se muestran contrarios a tal consideración, argumentando los privilegios de los que dispone el Real Colegio164. La división de opiniones produjo un cisma en la Corporación165, que tardaría décadas en resolverse. Los grupos nos quedan nítidamente definidos; por un lado José Moreno Bote y José Hortega, quienes hasta entonces habían ejercido la total autoridad sobre el Real Colegio, al disponer, desde la génesis de la Corporación, de poderes especiales otorgados para actuar en su representación166; de La Sagrada Congregación de Ritos decretó, con fechas 7-VI-1694 y 6-VII-1695, la verificación inmemorial de culto público a la esposa de san Isidro, confirmado y aprobado por el papa Inocencio XII mediante la Bula Apostolicae servitutis officium de 1-VIII-1697. Un decreto de Benedicto XIV, de fecha 15-IV1752, concede en su honor oficio y misa con el rito de doble menor. Sobre la recepción de la noticia en la Villa y Corte, y las celebraciones organizadas en Madrid, cf. Nicolás José de la Cruz. Vida de san Isidro labrador patrón de Madrid, adjunta la de su esposa santa Maria de la Cabeza… Madrid: Imprenta Real, 1790 [particularmente págs. 6-10]. 163 José Moreno Bote, quien a la sazón ocupaba el cargo de director del Real Colegio, argumentó que “en ningun tiempo podia perjudicar este exemplar a los pribilejios de nro. Artte pues Nro. Rey qe D. Gde que nos los ha conzedido y declarado en el año de [17]50 por su Rl. decreto solo puede derogarlos y asi mismo el aprecio atencion y cortesia con que se nos ha hecho esta supca. enbiando su Diputado lo que no han executado asi con todos los demas Gremios solo llamando a sus cabezas en Casa del Sr. Corregidor (…) era preciso y combeniente corresponder con bizarria en lo posible y que no tenia por acertado dar este sonrrojo a la Villa de Madd…” (Junta particular de 4-IX1752. ARANF, L-7, fols. 111v-113r). 164 165 “… ablo uno de los Comisionados [Franciscco Lerma / José María Hontanillas] diziendo con descarada autoridad y destemple, Señores despacito que eso no se debe executar que mi Compañero y yo benimos aquí con veinte y cinco botos cada uno y representamos a el Colegio pleno el Sr. Director [José Moreno Bote] oiendo estas palabras fue tanto lo que se altero que no ubo forma de aquietarle lebantandose de su Asiento y saliendo diziendo era un grande atrebimiento y desverguenza contra su estimazon y honor que antes le tenia dado el Colegio; los demas oficiales oiendo y biendo esto izieron despues lo mismo quejandose que tambien a ellos se les azía poca merzed. Disolbiendose la Junta…” (Junta particular de 4-IX-1752. ARANF, L-7, fols. 111v-113r). 166 “... hazer nombramto. de dos apoderados del Colegio, en quienes José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 81 otro, el liderado por Francisco Lerma, contrario a los poderes permanentes otorgados a estos dos boticarios. Finalmente el Real Colegio contribuyó a los gastos de entronización canónica de santa María de la Cabeza con 3.000 rs, entendiendo “que esta limosna se pide y se da según la boluntad de la debocion de cada uno y no por otro motivo”167. Juan Moreno Bote, que se mantuvo al frente del Real Colegio hasta diciembre de 1753, intentó que la situación volviera a los cauces por los que había discurrido hasta el verano del año anterior; en la primavera de éste 1753 se toman medidas para restablecer el buen funcionamiento del jardín colegial168 y se retorna a las conferencias mensuales impartidos por los colegiados169; es un canto de cisne ante una situación interna crítica, potenciada por la ausencia de José Hortega de la Corte, quien hasta mayo de 1753 estuvo de viaje por Europa, con objeto de sentar las bases de una non nata Academia de Ciencias; también colaboró a este indeseable estado de prostración el fallecimiento de Cristóbal Vélez en ese mayo de 1753 y el de Juan Moreno Bote, al término de 1755. Las funciones de ‘botánico’ del Real Colegio, desempeñadas desde la instauración del jardín por Cristóbal Vélez, pasarán, tras la muerte de éste, a las manos de José recayesse un poder general para seguir todas las dependenzias del Colegio, y principalmte para sostituirle limitado â los sugettos foraneos, que tubiessen encargos del Colegio para las ventas de la theriaca, y denunciar lo que no fuesse de este real Colegio, aunque spre sujetandolo â la Junta particular, y con su inttervencion (…) fueron nombrados pr Podatarios… los Sres Colegiales Dn. Juan Moreno Bote, y Dn. Joseph de Hortega...” (Junta general de 31-III-1740. ARANF, L-7, fol. 15v). 167 Junta particular de 7-X-1752 (ARANF, L-7, fols. 113r-113v). “Notando el Sr. Director [Juan Moreno Bote] y otros señores de la junta particular, el notable quebranto del estanque de la noria, y que á dos pies de altura el agua se iba toda por diversas partes, previendole insensible hizo llamar Peritos para que lo registrasen, y no allando en ellos mas medio seguro que el de hacerlo nuevo, conboco á los señores á esta junta…” se acuerda proceder así “atendiendo de que su fabrica sea firme y permanente para qe despues no origine nuebos gastos á el Colegio…” (Junta particular de 20-II1753. ARANF, L-7, fols. 116v-117r). 168 “Asi mismo se acordo el que se continuasen los exercicios literarios que se havian suspendido pr. razones justas, para lo qual se mando dar los avisos correspondientes…” (Junta particular de 27-III-1753. ARANF, L-7, fols. 117r-118v). Francisco de Aldea lee, en mayo de éste 1753, su “Discurso sobre la Euphrasia ofizinal, y Ruta Capraria” (Junta general de 9-V-1753. ARANF, L-7, fols. 119v-120r). 169 82 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Hortega170 y la vacante de Juan Moreno Bote como apoderado de la Corporación sería cubierta por Gregorio Aedo171. No obstante, pese a estos cambios, que suponen una continuidad en la cúpula colegial, el Real Colegio no logrará superar la crisis latente desde 1752172. En el fondo, asistimos a una lucha interna por el control del Real Colegio y de los privilegios a éste concedidos: los antagonistas, José Hortega y Francisco Lerma -y sus polémicasreverdecen durante los años 1756 y 1757, cuando ambos ocupan lugar en la junta directiva del Colegio; el primero como fiscal, y el segundo como director; subyacente a esta situación se encuentran las negociaciones en torno a la edición de la segunda edición de la Pharmacopoeia Matritensis…, éstas debieron iniciarse durante la visita a los géneros que habrían de componer la Triaca magna, a la que asistieron, en el verano de 1756, los protomédicos José Suñol, Miguel Borbón, Gaspar Casal y José Amar, y de la que no fueron informados algunos colegiales, entre ellos José Hortega173. 170 “… se acordó se levante el Jardin alto quitando los arboles frutales, y que su direccion quede á la disposicion del Sr. Dn. Jph Hortega a cuias hordenes ha de estar sugeto el Jardinero…” (Junta general de 13-XII-1755. ARANF, L-7, fols. 129v-131r); “… el Sr. Director [Francisco Lerma] hizo presente que el estanque del jardin estaba abierto y que hera preciso componer; y oyda la proposicion, el Sr. fiscal [José Hortega], hizo oposicion a que se compusiera, y que en caso de componerlo se diese pª ello quenta a la Junta gnral, y haviendo controvertido sobre este particular se acordo por pluralidad de botos, el qe se compusiera dho estanco sin dar quenta a la junta gnral y qe su coste no exceda de ochocientos rs vn…” (Junta particular de 13-XI-1756. ARANF, L-7, fols. 147v-148r). 171 “… suplicandole concurriese con el Sr. Dn Joseph Hortega, á quanto tuviere por conveniente, y favorable al Colegio...” (Junta general de 13-XII1755. ARANF, L-7, fols. 129v-131r). 172 Entre 1753 y 1756 sólo celebró dos juntas generales, el gobierno de la Corporación se trasladó a las decisiones de las juntas particulares, y aún éstas resultaron menos frecuentes que en períodos anteriores. 173 Cf. “Visita General de los generos de que se compone la triaca magna” (ARANF, L-7, fols. 146r-147r); también asistieron los médicos de Cámara Andrés Piquer, Alfonso Lope, José de León y Pedro Sedano. La visita tuvo lugar el 7 de agosto; de ella da cuenta la Gaceta de Madrid correspondiente al 10 de agosto de 1756: “El sábado pasó el Tribunal del Real Proto Medicato a visitar los géneros medicinales de los que se compone el medicamento llamado Triaca Magna”. Cuando Hortega proteste por no ser avisado, las responsabilidades recaerán sobre el criado del Real Colegio: “… dio á este fin el Sr. Director la orden para ello, pero el criado olbidando algunos sugetos de la Junta particular, solo abisó, á algunos de una y otra Junta, como en efecto assistieron hasta 8, ó 10 Colegiales, por lo qe es cierto de qe solo concurrieron José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 83 Apenas un año después, en los comienzos de junio de 1757, Francisco Lerma se desplaza a San Lorenzo del Escorial para negociar, con Gabriel de Olmeda, marqués de los Llanos (17041758), varios asuntos tocantes al Colegio, entre ellos la reedición del texto174. Los acuerdos de Francisco Lerma con el vice-protector del Real Tribunal175 supusieron fuertes cambios en la dinámica del Real Colegio, sin duda favorables a los intereses de los boticarios madrileños, pero excesivamente arriesgadas desde un aspecto económico. El Protomedicato exigió al Real Colegio la construcción del laboratorio químico previsto en sus estatutos fundacionales176; a cambio permitió la impresión de la nueva Pharmacopoeia Matritensis… y comprometió la promulgación de un Real Decreto por el se impidiese la venta de medicamentos los Diputados y tal qual colegial…” (Junta general de 2-III-1758. ARANF, L-7, fols. 180r-184v). 174 El acuerdo se toma en junta particular de 3-VI-1757 (ARANF, L-7, fols. 151r-151v). 175 Tal era el cargo que, a la sazón, ocupaba Gabriel de Olmeda (17041758), protegido de fray Gaspar de Molina, miembro de Cámara desde 1744; en el último año de su vida presidió, como Consejero de Castilla, el Honrado Concejo de la Mesta; fue viceprotector del Protomedicato y protector del Monasterio de El Escorial; antes había sido fiscal de la Cámara de Castilla (cf. Peris Molas Ribalta. “Los Fiscales de la Cámara de Castilla”. Cuadernos de Historia Moderna, 14: 11-28. Madrid, 1993). 176 “… resulto haver dado los Sres. del Real Proto-Medicato un Memorial al Rey exponiendo á S.M. qe para conseguir el Colegio lo que pretende se obligue este á poner el laboratorio chimico qe tiene ofrecido en sus estatutos…” (Junta particular de 14-VI-1757. ARANF, L-7, fols. 151v-152v). Esta junta particular de 14-VI-1758, a la que no asistió José Hortega, acordó emprender de inmediato “quantas diligencias sean precisas pª la construccion de dho elaboratorio, haciendo qe por mros de obras se formen diseños, los qe hara ver a la Junta pª su determinacion…” (ARANF, L-7, fols. 151v-152v). Meses después, el acta de la junta general de 2-III-1758, aportará nuevos datos sobre estas negociaciones: “… la qe al principio solo fue conferencia verbal entre dhos Señores, paso, á ser contrata formal; llebando por principal objeto en esto el quitar á los Drogueros el qe vendan Medicamentos compuestos, adulterados comunmte. y por eso perjudiciales, á la salud publica. Con este motibo dio el Sr. Fiscal del Protho-Medicato el paso correspondiente en el tribunal (…) sin qe el Colegio interbiniese (…) Tambien se quexa el Fiscal [José Hortega] de dho Sr. Director [Francisco Lerma], de qe no permitió se hiciese contradiccion con el Rl. Protho-Medicato sobre la Contrata; y tiene razon, pero fue el motibo, qe teniendo dho Sr. Director vien penetrada la mente del tribunal, y sabia su celoso fin, y qe no se seguia de esto ningun perjuicio á los Facultatibos, no tubo por conveniente dho permiso…” (Junta general de 2-III-1758. ARANF, L-7, fols. 180r-184v). 84 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol simples al por menor en todas las tiendas de la Corte, salvo en las boticas; la norma fue promulgada el 30 de junio de éste 1757177. En respuesta, el Real Colegio abordó, con premura y exceso de gastos, la construcción del laboratorio químico178. El protagonismo adquirido por Francisco Lerma le llevó, aprovechando una obligada ausencia de su antagonista de la Corte, a privar a José Hortega de los privilegios que a éste tenía concedido el Real Colegio desde marzo de 1740, y que asumió como propios179. La tensa polémica habría de resolverse en una junta general extraordinaria, convocada en agosto de 1757, por decisión del propio José Suñol, quien atendía así a una solicitud formulada por José Hortega180; el cual -entre otras irregularidades- mantuvo 177 “… proibiendo asi mismo la venta de todo compto Chimico y Galenico, con ótras cosas dirigidas todas a que se establezca un elaboratorio chimico en donde se elaboren los medicamtos. qe por su costo y dificultad pueden ser sospechosos de la bondad y qualidades qe deben tener (…) y siendo preciso qe para poder dar curso á este negozio qe en el dia se obligue a mi voluntad el cuerpo del Colegio á poner en ejecucion dho elaboratorio sugetandose á practicar las elaboraciones qe se le señalen…” (Junta general de 6-VII-1757. ARANF, L-7, fols. 153v-154v). Ya en la junta particular de 1-VII-1757, Francisco Lerma presentó los planos del laboratorio químico “y se acordo hacer diligencias pª lo benidero de la casa pª asegurarla”, ya que la construcción se abordaba en un espacio que no era propiedad de la Corporación (ARANF, L-7, fol. 152v); las obras fueron adjudicadas a José Gutiérrez (cf. Junta general de 6-VII-1757. ARANF, L-7, fols. 153v-154v). 178 179 “… y que respecto de hallarse ausente el Sr. Dn. Joseph Hortega, fiscal y apoderado, y el Sr. Dn Gregorio Ahedo (decano y asi mismo apoderado) ocupado, le parecia preciso nombrar nuebos apoderados qe sigan las dependencias del Colegio, maiormte la presente respecto del corto tiempo qe ai pª visitar a los señores ministros, y enterados dhos señores acordaron se propusieran nuebos apoderados, y con efecto propusieron pª primer apoderado a los Sres Dn. Franco Lerma, y Dn. Jph Zavaleta pª segdo a los Sres Dn Jph Burruezo y Dn Clemte Zaydin…” (Junta particular de 5-V-1757. ARANF, L-7, fols. 148v-150r). En junta general de 8-V-1757 (ARANF, L-7, fols. 150r-151r) se elegirán a Francisco Lerma y José Burruezo. 180 Cf. Junta general de 6-VIII-1757 “celebrada de orn del Sr. Dr. Dn. Jph Suñol (…) a la que concurrió en su nombre, y como Presidente el Dr. Dn Juan Jph Garcia Sevilla su Theniente de Protho-Medico (…) y el Dr. Dn. Thomas Joven de Salas Abogado de los Reales Consejos, y Fiscal del mismo [Protomedicato]” (ARANF, L-7, fols. 155r-171r). Responde ésta a una solicitud de José Hortega, realizada a tenor de un escrito de Francisco Lerma, en la que “entre otras cosas, que dara cuenta al Sr. Presidente de el Tribunal del Protho-Medicato, para que con arreglo al Estatuto 38 nombre Persona que presida la Junta General para José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 85 que Francisco Lerma había renovado la junta directiva sin elección, realizado actuaciones económicas perjudiciales para la Corporación, usado de las arcas de ésta sin control y permitido una errónea preparación de la Triaca181. Como resultado de la evitar toda disension, que pueda experimentarse, a causa de la parcialidad. Estas expresiones, dan á entender claramte. que el Fiscal [José Hortega] tiene formado en el Colexio cierto espiritu de partido, que no penetra, ni puede entender el Supte y deseoso de que se sepa la buena fee con que procede, y que no tiene en el Collexio ningun espiritu de partido ni parcialidad; Supca se mande qe cada uno de los Sres. Collexiales, presentes expongan en fée de Hombre de vien las combersaciones, ó sugestiones qe. el Fiscal le hubiere echo, de palabra o pr escrito, pr si, o pr interpuesta Persona, para atraerlos a su partido: ó bien para desbanecer los supuestos Proyectos del Collegio, y si al Sr. Director, no le pareciese suficiente esta especie de exposicion, podra solicitar, que cada uno lo haga con juramento, y lo que resulte de estas Declaraciones, se ponga pr. Acuerdo con inclusion de este papel…” (ARANF, L-7, fols. 155r-171r). 181 “… y enterado de todos ellos [los asuntos tratados en 1756 y 1757] el Sr. Fiscal Dn Jph Hortega, propuso entre otros reparos el perjuicio que podia seguirse al Collegio, dando lugar a que los Directores hiciessen a su arbitrio los gastos, que se causaron en la visita de los Generos de la Triaca, debiendose establecer un methodo regular, y prudente (…) Y en este motibo no puede menos el Fiscal [José Hortega] hablando con el debido respeto que merece el Sr. Director [Francisco Lerma] de hacerle presentte: que le constta que de la referida cantidad a tomado cerca de Diez y seis mil Rs de Vn de que ha dado recibo a los Sres Diputados. No por estto intenta el Fiscal que el Sr. Directtor manifieste el destino de este Caudal, pero le hace presentte que estte es un exemplar que puede traer sus perjuicios en adelante, pues siendo la cabeza del Colegio, es indecente que tenga que dar quentas, exponiendose á las contradicciones, que suelen ocurrir en estas materias (…) Que en la Junta particular de 5 de Mayo [1757] se trattó sobre la eleccion de oficios; que se acordó releegir a todos los oficiales actuales, y en la Juntta Gral de ocho del mismo mes consta igualmte que enterados los Sres Colegiales de la releccion de oficios, digeron que la aprobaban, y aprobaron sbre cuios acuerdos, hace el Fiscal las reflexiones siguientes: Que tales expresiones carecen de la formalidad, que en semejantes actos se acostumbra. Que no hay Estatuto, que de facultad al Colegio para hacer relecciones, ni esta voz reeleccion se halla en ninguno de ellos: Que no constta en los citados Acuerdos que se tubiesen presentes los Estatutos, que ablan de las Elecciones, y es mui regular, que el Sr. Secrettario no los leyese, ni en la Juntta partticular ni en la General (…) Que el Sr. Director en Junta particular de 5 de Mayo [1757], propuso qe se hacia preciso nombrar nuebos Apoderados del Collegio, para seguir sus Dependiencias [sic], quitando los antiguos Poderes que havia dado el Colegio al Sr. Decano Dn. Gregorio Ahedo y Dn. Jph Hortega, sin expresar mas mottibo que hallarse el uno ausente, y el otro ocupado, y pr la misma Certificacion consta que en la Junta Gral de 8 del mismo mes [V-1757], fueron despojados de los Poderes los expresados Colegiales nombrando en su lugar al Sr. Director [Francisco Lerma], y al Sr. Dn. Jph Burruezo. El Fiscal en vista de este procedimto y con la obligazon que tiene de mirar pr el honor de los Indibiduos del Colegio, hace presente, que 86 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol reunión, el Real Colegio dispuso una serie de normas tendentes a contener, dentro de los límites estatutarios182, las capacidades del Director, pero José Hortega no logró el voto de censura esperado; en enero de 1758 reiterará sus protestas y, ante el silencio de la Corporación, optó por abandonarla183. si hubiere algunos otros motibos para haver anulado los referidos Poderes, se les de traslado a los antiguos Apoderados para dar satisfacion de ellos, y en caso de no haverlos, se le reintegre su honor…” (Junta general de 6-VIII-1757. ARANF, L-7, fols. 155r-171r). “Despues de todo lo qual, teniendo presente los disturbios que pueden originarse en adelante (…) se establece pr regla general que todos los meses del año se haya de celebrar una Junta Gral, como se halla prevenido pr los Estatutos, para que en ella pueda exponer cada individuo Colegl. lo que juzgue pr conveniente a favor del Collegio, y en caso que ocurriese alguna circunstancia digna de pronta providencia, podra el Sr. Fiscal pedir directamte al Sr. Director la combocacion de Junta Gral, y este juntando la particular para que estté inteligenciada de la instancia, debera proceder dentro del termino de seis dias perentorios a la combocan. de una, y otra Junta, todo lo qual se haia de obsebar, y obserbe imbiolablemte pr considerarse assi necesario para el rectto regimen del Collegio (…) a cuio efecto y para que se estime estte Acuerdo pr una de las Leyes Generales del Collegio, y se obserbe en todas sus partes (…) se hará presentte en la primera Junta Gral a fin de que no pueda alegarse ignorancia pr ninguno de los Sres indibiduos del Collegio…” (Junta general de 6-VIII-1757. ARANF, L-7, fols. 155r-171r). 182 “Que continuando las representaciones, y protestas, qe por palabra, y escrito, tiene hechas en los años passados de [17]56 y [17]57 (…) de nuevo protesta solemnemente en esta Junta todos los acuerdos hechos, y resoluciones, contra los Estatutos en dichos años de [17]56 y [17]57, y assi mismo, todos aquellos acuerdos, y resoluciones, en donde hubiese faltado alguna formalidad, ó requisito de áquellos qe por derecho se requieren en tales actos. Protesta igualmente el modo con qe se á hecho el Elaboratorio Chímico; porque se á fabricado en terreno ajeno sin licencia formal de su Dueño; y assi mismo sin cuenta, ni razon; y sobre todo, permitiendo qe su coste exceda a los caudales qe actualmente tiene el Colegio. Protesta tambien el modo indecoroso, con qe se á tratado al Decano del Colegio, el Sr. Dn. Gregorio de Ahedo, á quien contra toda razon, y justicia, se le despojo de los poderes del Colegio, sin haverle dado hasta ahora satisfaccion alguna, no obstante haverlo pedido el fiscal [José Hortega], y haver conocido el Colegio, toda la razon, y justicia qe le assiste (…) Protesta tambien la contrata hecha entre el Sr. Director, y el Sr. Fiscal del Rl. Tribunal del Protto-Medicato; por qe dicho Sr. Director no tiene facultad del Colegio para hacer dicha contrata, porque abussó de los Estatutos, ácuerdos, y poderes del Colegio; Porqe dicha contrata es perjudicial, y onerossa al Colegio, y sus Yndividuos (…) Sobre todo Protesta la cantidad de quinze mill reales entregados por dichos Ssres. Diputados al Sr. Director sin acuerdo del Colegio, porque esta suma, es cargo de dichos Ssres Diputados, y no dando inmediatamente de alta justificada de ella deven pagarla sin dilacion, y porque estos, y otros exemplares son nocivos, y de fatales consequencias por lo sucesivo, y para el buen orden del Colegio (…) Porque le consta al fiscal, 183 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 87 Tras la junta general de agosto de 1757 nada volvió a ser como antaño; los gastos del Real Colegio se disparan: aumenta el coste del alquiler de los locales que éste ocupaba, la tasación de las obras del laboratorio químico ascienden a un valor inalcanzable para las arcas colegiales184, los sueldos del administrador185 y otros empleados contratados durante la dirección de Francisco Lerma186 sobrepasan la capacidad económica del Colegio, y las necesarias obras de reparación en el inmueble y su jardín botánico hunden la economía colegial. La solución se buscó fuera del Real Colegio pero dentro del colectivo profesional; el acta de la junta general de 19 de junio de 1759 recoge la aceptación como colegiado de Bartolomé Fernández Ortiz, Boticario mayor de la Reina viuda, Isabel de Farnesio (1692-1766)187; quizás el asunto no mereciera mayor qe en dicha Triaca no se pusso el Marum contusi [sic], y qe este mismo defecto cometieron los Ssres Diputados en la triaca qe hicieron en el año de 1756, aun haviendo assistido al reconocimiento de los generos el Rl. ProthoMedicato…” (Junta general de 10-I-1758. ARANF, L-7, fols. 175r-178r). El grueso del acta de la junta general de 2-III-1758 está dedicado a contestar las críticas formuladas por José Hortega (ARANF, L-7, fols. 180r-184v). 184 En junta general de 20-VI-1758, el director, Clemente Zaydin, notifica el auto de Juan Gayón, realizado a pedimento de José Ignacio Gutiérrez, maestro de obras, mandando se le abonen los 53.430 rs vn “en cuyo precio esta tasado el Elaboratorio Chimico, qe dicho Gutierrez hizo, para el Colegio…” (Junta particular de 1-IV-1758. ARANF, L-7, fols. 190r-191r). 185 Probablemente la misma persona que, en otras actas, se denomina ‘agente’; la junta particular de 2-V-1758 acuerda entregar 1.000 rs al “Agente qe el Colegio tiene actualmte para seguir sus dependencias…” otros 600 rs vn más como ayuda de costa “en atencion, a qe há ya un año qe el dho Agente sirve al Colegio…” (Junta particular de 2-V-1758. ARANF, L-7, fols. 187v-188v). El acta de la junta particular de 26-VI-1758 nos desvelará su nombre: Alfonso Cervantes (ARANF, L-7, fols. 191r-191v). Entre ellos a un empleado para el laboratorio químico: “… se dio quenta, a la Junta de un Memorial qe presentó Dn. Isidro Cudero, en el qe expone: qe haviendo sido admitido por el Colegio para trabajar en el Elaboratorio Chimico, pasó, á ocupar la Casa sin otro motibo qe mandarselo assi su Maestro Dn Franco. Lerma (…) Que mediante qe el suplicante no ha obrado por si mismo en semejante determinacion, ni jamas creyó, qe el ya dho mandato de su Maestro, no estuviesse con la firmeza de estar conforme con las deliberaciones de la Junta, suplica qe en atencion al notable perjuicio qe se le sigue en vivir fuera (…) se le dé habitacion en la Casa del Colegio…” (Junta particular de 1-IV-1758. ARANF, L-7, fols. 186v-187r). 186 “No siendo de menor excepcion, y meritos Dn. Bartholome Fernz. Boticario Mayor de la Reyna biuda, Dª Isabel Farmesio, fue admitido pr tal Colegial, y hallandose con este Carácter, y el ser examinador del Real Proto187 88 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol importancia, salvo porque este colegial, que ahora se recibe con todos los honores, había sido expresamente repudiado por el Real Colegio, en diciembre de 1744, ‘por varios motivos secretos’, de los que, entonces, se dio cuenta al protomédico José Cerví188, quien ostentaba, ademas, el cargo de Médico de la Reina. Los motivos para su recusación en 1744 se vislumbran dentro del intrigante entramado cortesano de los últimos años del reinado de Felipe V (1683-1746)189; los de su aceptación en el verano de 1759 son más evidentes: en el otoño de este año Bartolomé Fernández Ortiz negocia una cesión de su capital con el Real Colegio, aceptando como bienes garantes todos los enseres de la Corporación, incluyendo la producción de Triaca, reservándose la venta y distribución del medicamento elaborado bajo privilegio190; el monto económico es imprescindible para Medicato, se trató con delicadeza y madura reflexion el asiento, qe se le havia de dar, y se resolvio pr. pluralidad de Botos que gozase el primero despues de los Oficales qe componen la Junta Particular…” (Junta general de 19-VI-1759. ARANF, L-7, fols. 208r-208v). 188 En la junta particular de 11-XII-1744 se dio cuenta del memorial presentado por Bartolomé Fernández Ortiz, boticario examinado y sobrino de Francisco Ortiz Crespo, en el que solicitaba ser admitido como colegial, habiendo oido al fiscal, “acordaron que luego que este Pretendiente haga constar que tiene Botica propia en Madrid, y que assimismo es Congregante de Nra. Sra. de los Desamparados como disponen los Estatutos, y Acuerdos del Colegio, se haga de nuevo presente á la Junta esta instancia… (…) y qe este Acuerdo se haga luego presente al Sr. Dr. Dn. Jph Cervi pr varios motivos secretos, y para qe siempre conste la justificacion, y recto proceder del Colegio…” (Junta particular de 11-XII-1744. ARANF, L-7, fols. 45v-46r). 189 Analizados por Rosa Basante Pol. La demencia de un Rey: Fernando VI (1746-1759). Madrid: Real Academia Nacional de Farmacia, 2009. La autora señala: “Fernández Ortiz tuvo dos boticas abiertas en Madrid, que al menos se nos antoja poco ético…” (Op. cit., pág. 87). “… con tal qe el Colegio le entregue los enseres del Colegio; assi de triaca, como de lo demas con la qta y razon qe es debida, y que ha de ser de su qta la Renta de triaca y el dar Dineros para la compra de Generos spre que se necesite su elaboraon y hta la instincion o Pagamto de lo anticipado pr si al Colegio; lo que fue aceptado pr una y otra parte, con universal aceptazon. de todos los Concurrtes.” (Junta general de 22-XI-1759. ARANF, L-7, fols. 210r-212r). En la junta general de 15-XII-1759, Bartolomé Fernández Ortiz presenta un listado con diez condiciones para asegurar el caudal que prestará al Colegio (ARANF, L-7, fols. 212r-212v); éstas fueron estudiadas en junta particular de 29-XII-1759 “… y aunque se observaron algunos reparos, satisfizo dho Sr. Dn. Bartholome con grande nervio, y natural fecundia pr lo que se dieron pr contentos, y satisfechos nemine discrepante de los qe compusieron la Junta Particular…” (ARANF, L-7, fols. 212v-213v). 190 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 89 hacer frente a los pagos -ya judicialmente demandados- de la construcción del laboratorio químico191. En enero de 1760, apenas unos meses después de aceptado como colegial, es elegido como director de un Real Colegio, del que ya es depositario oficial de sus enseres, producciones y documentación192. Consciente de la caótica situación a que ha llevado a la Corporación, Francisco Lerma presentará, en enero de 1760, su dimisión como colegial, el Real Colegio le concederá la consideración de ‘jubilado’193. En sesión general celebrada el 1 de febrero de 1760, el Colegio de Boticarios acuerda devolver los poderes generales de la Corporación a Gregorio Aedo y José Hortega “… que se hallan agraviados con razon del modo con que se executo este despoxo, lo mui util qe hallaba el qe a dhos señores se les devolviessen con todas las Preheminencias, y facultades correspondientes, y la especial de poderlos substituir en otro alguno de sus “… se hallaha a botarse el Pleyto del Mtro de obras y las muchas pruebas, que tenia para salir desayrado el Colegio, y pr consigte a un atropellamto. mandando el Consejo que se aportassen los caudales que no tiene…” (Junta general de 22-XI-1759. ARANF, L-7, fols. 210r-212r). 191 192 En la misma junta general de 5-I-1760 en que se le elige como director, se leen las condiciones del préstamo establecidas por Bartolomé Fernández Ortiz y la protesta que sobre ellas establece Nicolás Regidor, se someten ambas a votación entre quienes componían la junta general “y las aceptaron, y dieron pr buenas y pr tal dieron Poder al Sr. Dn Jph Burruezo y Dn Juan de Herrera para que arreglados a las Condiciones ya dhas (…) se escriturase (…) cediendo el Colegio a dho Sr. Dn Bartholome todos los enseres, utensilios, Papeles, y todo lo demas que le pertenezca percibir a dho Colegio ahora, y en adelante; Y al presente há de percibir trece mil novecientos qta y quatro rs qe se hallan en Thesoreria y todo lo elaborado hta aquí pr el Rl Colegio, de Medicinas…” (ARANF, L-7, fols. 213v-214v). En la junta particular de 30-I-1760, Bartolomé Fernández Ortiz solicitó del secretario, José Ruiz, un inventario de los documentos depositados en secretaría “a que di solucion como asta ahora no se havia practicado tal operación…” (ARANF, L-7, fols. 216v). En junta general de 15-XII-1759, “se leyó pr mi el infraescrito ssrio [Francisco Lerma] un Memorial, en que exponia reverente se me admitiese la separazon del Colegio pr contemplar ser favorable ambas partes, y se probeyó se resolveria para la primera Junta Gral” (ARANF, L-7, fols. 212r-212v); durante la junta particular de 30-I-1760 se lee este memorial “al qe no se le dio curso por estar embarazados en otros asumptos (…) y determino concederle la Juvilacion que apetece respecto a hacersela el mismo por dho memorial” (ARANF, L-7, fols. 216v). Con él presentará la dimisión de su cargo José Burruezo, quien entrega un escrito en el que “hace exonerazn del encargo de Apoderado del Colegio a que se definio y condescendio…” (ARANF, L-7, fols. 216v). 193 90 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol individuos, lo que pr pluralidad de votos quedo otorgado a favor de dhos señores en virtud del amor, celo y desinteres con qe han servido al Rl. Colegio…”194 Es más una muestra de cortesía que un traspaso legal de poderes; la ‘propiedad’ del Real Colegio está en manos de Bartolomé Fernández Ortiz quien ni siquiera reúne a su junta en los locales del Colegio, sino que los convoca en su propia casa. El dolido honor de un -ya anciano- Gregorio Aedo, le impidió aceptar esta ‘devolución’ de poderes; José Hortega sí los volvió a asumir195 y ‘convenció’ al Real Colegio para que, por escrito, se retractara de las declaraciones que la Corporación había efectuado, en torno a sus comentarios sobre la composición de la Triaca magna, en la junta publica de agosto de 1758, convocada por José Suñol196. José Hortega se reincorpora al Real Colegio, cansado y enfermo, en febrero de 1760; sus esfuerzos se dirigen a reconducir los trabajos de edición de la Pharmacopoeia Matritensis… que no pudo ver impresos. En la junta general celebrada por el Real Colegio el 7 de enero de 1761 se da cuenta de su fallecimiento: 194 Junta general de 1-II-1760 (ARANF, L-7, fols. 217r-219r). En la junta particular celebrada el 14-II-1760, Bartolomé Fernández Ortiz da cuenta “de la respuesta de el señor Dn Joseph de Hortega Boticario de S.M. y Mayor de sus Reales Exercitos; como de la de el Señor Dn Gregorio Ahedo Decano del Rl. Colegio, y vista la resulta de ambas se determino, que los Poderes los haya solamente dho Señor Dn Jph Hortega respecto no poderlos admitir el Señor Decano por sus achaques avituales, y abanzada edad, que assi es publico…” (ARANF, L-7, fols. 219r-219v). 195 “Siendo noticioso el Sr. Director de que en la respuesta a una de las protextas, que el Sr. Dn Jph de Hortega hizo siendo fiscal en la Junta general que se celebro el dia seis de agosto del año pasado de mill, setecientos, cinqta. y siete presidida por el señor Juan Jph Garcia Sevillano en nombre de el Sr. Dr. Dn Joseph Suñol (…) la que fue solicitada por dicho Sr. fiscal respecto haversela negado por dos veces el Señor Director que lo era en aquel tiempo [Francisco Lerma]; se adelanta el Rl. Colegio a hacer publico, como jamas en la preciosa elavoracion de la theriaca se havia puesto el Mano Contuso, y reflexionando bien un supuesto tan contrario, mediante haver hecho al Sr. Contador Dn Luis Melendez reconociese las Quentas de los Señores Diputados, y este haver hallado en las pocas que se hallan en la contaduria constaba que los Señores Diputados Dn. Martin de Urruzola, Dn Joseph Gomez Malo, Dn. Andres Caballero, y Dn. Cristobal Velez lo pusieron en dha elaboracion por cuia razon combiene qe assi conste (…) Asi mismo se hizo publico que el año pasado de 1758 no se hecho dho Maro por no haver acudido por el a la casa del Sr. Dn Joseph Hortega pues lo hizo venir para la theriaca…” (Junta general de 1-II-1760. ARANF, L-7, fols. 217r-219r). 196 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 91 “Havdo. fallecido Dn. Joseph Hortega nombro el Sr. Director a dos Sres. Colegs. para que ofrezcan a su familia toda la proteccion del Colegio” 197. 197 Junta general de 7-I-1761 (ARANF, L-7, fols. 231r-232r). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 93 La tertulia de la botica de Montera La ‘Tertulia Literaria Médico-Chymico-Phisica’ José Hortega acostumbró a celebrar tertulia en ‘la pieza de librería’ sita en la vivienda que tenía sobre su botica, en la madrileña calle Montera. Asistían a ella un destacado grupo de profesionales sanitarios, entre los que se encontraban José Corralón, médico de familia de la Reina y del duque de Solferino, Juan Andrés Bereterrechea, cirujano mayor del Ejército, Vicente Carreras, examinador del Real Tribunal del Protomedicato, Francisco García Rico y su hermano, José García Rico, ambos cirujanos asentados en Madrid y Alejandro Martínez de Argandoña, también examinador del Real Tribunal del Protomedicato198. En el verano de 1733, un 12 de julio, aquella tertulia, dedicada a ‘castigar el ocio’ discutiendo sobre ‘lo que la casualidad ofrecía’, decide dotarse de un cierto orden interno y organizarse en ‘Tertulia Literaria Médico-Chymico-Phisica’199; tras dejar correr los meses del estío, los tertulianos se reúnen en la tarde del 1 de septiembre de 1733 y acuerdan un primer reparto de funciones: José Corralón es elegido como presidente, ‘a quien se le reconociese por cabeza’, José Hortega asumirá las tareas de secretario: “para que con puntualidad escriviese los ácuerdos, y árchivase los papeles, y los tubiese promptos para quando fuesen menester”200, y Alejandro Martínez de Argandoña aceptó De la participación de José Hortega en la génesis y primeros años de funcionamiento de la Real Academia Nacional de Medicina se ocupa, con extensión, Rafael Folch Andreu (Op. cit., nota 1. 1935). Sobre la creación y funcionamiento de esta Real Academia cf. Luis Sánchez Granjel (Historia de la Real Academia Nacional de Medicina. Madrid: Real Academia Nacional de Medicina, 2006). De mano del propio José Hortega se conserva una “Historia de la tertulia literaria Medico-Chymico-Phisica” con la que principia el libro de [Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752] (ARANM, L-1, fol. 1-12). 198 El libro de [Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752] (ARANM, L-1) da inicio con una “Lista de los tertulianos qe componen la tertulia literaria según sus Antiguedades” (Op. cit. fol. [I]); allí se menciona un total de 39 tertulianos, el tercero de los listados es “Dn. Joseph Hortega fundr.” 199 200 [Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752] (ARANM, L-1, fol. 3). Sus ausencias serían cubiertas por Manuel Izquierdo: “En la Junta se acordo 94 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol las tareas de fiscal, responsable de regular el discurrir cotidiano de las reuniones. El dos de septiembre definen sus funciones y comienzan la elaboración de los estatututos que habrían de regirles: “… se establecio por toda la tertulia, nomine discrepante, por primer instituto, fin primario, é idea gral., el cultivo de las tres facultades, Medica-Chyrurgica- y Pharmaceutica. Exponer patentes sus erradas maximas; poner de manifiesto lo que evindeciare la vien pensada, y repetida experiencia; declarar como dudoso, lo que aún esta en la linia de las verosimilitudes; castigar los medicamtos. asi simples como compuestos; elevar á predicamto. con digno lo que fuere laudable y de estimazon. Abatir ásta lo infinito, lo que mereze desprecio: Y sobre todo hazer una rigurosa critica á las tres facultades, y á lo que con ellas tubiese conexión proxm. ó remota…”201 No puede quedar duda del afán renovador con que los tertulianos emprenden su tarea; tampoco del campo profesional al que dirigen sus actuaciones, todo el ámbito sanitario, en igualdad profesional entre quienes recibieron su formación universitaria con quienes la adquirían mediante sistemas gremiales202. Los estatutos por los que se habrían de regir los tertulianos, unas ‘bien pensadas máximas’, fueron aprobados y que dn. Manuel Izquierdo sirviese la Secretaria en áusencias y enfermedades del secrº.” (Junta ordinaria de 19-X-1733. ARANM, L-1, fol. 42). [Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752] (ARANM, L-1, fol. 3-4). El mismo texto se repite, con variaciones ortográficas, en la copia de los Estatutos que siguen en el libro de Acuerdos… (Op. cit., fols. 12-13). 201 202 Quizás por ello sean tan reglamentaristas los Estatutos con que se dotan los tertulianos, en particular el capítulo 2º, el dedicado “De los tertulianos, y su numº.“ [Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752] (ARANM, L-1, fols. 12-17); en noviembre de 1733 se modificarán estos estatutos negando la entrada como tertulianos a los cirujanos ‘que tengan tienda abierta’, en clara alusión a los barberos, sin formación latina (Junta secreta de 21-XI-1733. ARANM, L-1, fol. 31). En los comienzos de diciembre de 1740 vuleve a insistirse sobre este particular: “Item se acordó que si algun Academico Honorario, y Cirujano se viniere a establecer en Madrid, y ponga tienda que de ningun modo pueda estar en las Juntas de los Actos pª. lo qual deberá el Ssº. darselo á entender pª. que no se exponga al Desaire” (Junta particular de académicos de número de 6-XII-1740. ARANM, L-1, fol. 399). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 95 firmados en su reunión de 5 de septiembre de éste 1733203; para dar mayor solemnidad a esta sesión, los ocho asistentes que entonces conformaban la Tertulia toman posesión pública de sus asientos204. En la primera sesión oficial, la celebrada el 6 de octubre de 1733, ya está presente la firma de José Hortega como secretario; sus funciones quedan concretadas en los estatutos: “Tambien tendra esta Tertulia un secrº. cuio óficio será recoxer los papeles, y colocarlos en el modo mas óportuno; tenerlos promptos para quando se ofrezcan; archivarlos con órden, y curiosidad; escribir los ácuerdos: presentar los memoriales, y pettiziones: poner los decretos: abisar para las Juntas: nottar los hechos de la tertulia y conservarlos: tomar los votos secretos, y resumir los que se dan en voz; dar una esquela á cada tertuliano del ásumpto que se le repartte: noticiar los pretendientes: leer, ál principiar las Juntas, los hechos de la pasada: recibir y responder á las cartas de la tertulia, de su órden ó en su nbre.: avisar de la muertte, ó áusencia de los tertulianos: y ultimamente tomarles el establecido juramto…”205 Inicialmente la duración del cargo de secretario queda restringida, como la del resto de los miembros de la junta directiva, a tres meses; no obstante, en los propios estatutos de la Tertulia, ya se prevee una situación especial para José Hortega, se reserva para él el puesto de archivero perpetuo206; y, Transcritos, y sancionados con sus firmas, en las primeras páginas de los [Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752] (ARANM, L-1, fols. 12-19). Estos estatutos fueron modificados en junta secreta celebrada el 21-XI-1733 (ARANM, L-1, fol. 31). 203 204 “Dn. Joseph Hortega en la quarta silla de la vanda yzquierda, y en el mas inferior lugar por estar en su casa, y ser esta el lugar escoxido para celebrar las Juntas” ([Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752] (ARANM, L-1, fol. 11). Tras su elección como Secretario pasará a ocupar el puesto que correspondía a este cargo, a la izquierda del Presidente. 205 Cf. el estatuto 5º del capítulo 3º ‘De los Oficios” [Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752]. ARANM, L-1, fol. 19). “Aunque se tiene preste. que en las mas de las Juntas ácademicas es perpetuo el secrto. por varios motivos que han ocurrido se establece que sea, como los demas oficios, por tiempo determinado; pero por áora, y sin limitazon. de tiempo se nombra por archivero, y depositario gral., asi de los ácuerdos, como de los estatutos, y demas papeles perttenecienttes á la secretaria de la tertulia, á dn. Joseph de Hortega para que los guarde, y conserve en su cassa, 206 96 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol en la junta particular de fundadores celebrada el 2 de enero de 1734, se decide modificar los estatutos y nombrar a José Hortega secretario perpetuo207. A las funciones propias del secretario, José Hortega unió, a partir de la junta ordinaria celebrada el 12 de marzo de 1734, el cargo de tesorero, creado en ese mismo acto208. Sólo temporalmente abandonó su cargo de secretario, y fue cuando hubo de ostentar la presidencia de la Corporación, tal tras la sesión celebrada el 5 de abril de 1734, quedando las labores de secretaría encomendadas a Alejandro Martínez de Argandoña209, mas no hubo de detentar la presidencia durante el trimestre que le fue encomendada, el 12 de abril renunciará a su cargo, por áver sido la elexida para celebrar las conferienzs. literarias, y las Juntas extraordinarias y ordinarias, sin que por pretexto álguno pueda la tertulia fundadora en ningun tiempo trastornar, ni alterar este estatuto.” (Estatuto 6º del capítulo 4º “Del modo y orn. de elexir los óficios”. ([Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752]. ARANM, L-1, fol. 22-23). Una ocupación que quedará limitada, en sus actuaciones, por los propios tertulianos fundadores: “No pueda permitir el dho. archivero dn. Joseph Hortega, ni quien por su muerte ó ausencias le sucediese, sacar ningun papel concerniente á la tertulia, á ningun tertuliano, ni á persona extraña sin licencia de los fundadores.” (Estatuto 7º del capítulo 4º “Del modo y orn. de elexir los óficios”. [Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752]. ARANM, L-1, fol. 23). “… usando de su facultad deliberaron derogar el termino de tres meses, que esta establezido pr. lo tocante al Ssro. y desde luego nombraron S. Ssro sin limitacn. de tiempo á dn. Joseph Hortega hasta que se juzgue pr. la tertulia fundadora otra cosa pr. mas conveniente, sin que esto le obste pª. obtener otros qualesquiera honores, que en adelamnte intentaren darle.” (Junta particular de 2-I-1734. ARANM, L-1, fols. 65-66). La junta particular se celebró sin la presencia de José Hortega, por lo que el acta figura firmada por Manuel Izquierdo. 207 “Después deliveró la tertulia de comun acuerdo tributar cada mes para los gastos que ofrezcan; los tertulianos fundadores á razon de cinco rs. de plata; y los demas á quatro rs. de plata; y se debera entender desde primº. de Marzo de 1734 y para qe. estubiese guardado, y prompto este caudal se nombró pr. thesorero pr. la tertulia fundadora á Dn. Joseph Ortega.” (Junta ordinaria de 12-III-1734. ARANM, L-1, fol. 93). 208 209 “El Sr. Presidente mando qe. el Sto. Propietario cesase de su empleo; y qe. el sustituto Dn. Manl. Izquierdo sirbiese la Secretaria; y asi se executó. El Sr. Presidente propuso para Presidente á Dn. Joseph Ortega, y con pluralidad de votos fue aprovado.” (Junta particular de fundadores de 2-IV-1734. ARANM, L-1, fol. 99). Y, a comienzos de abril de 1734: “Dn. Joseph Ortega fue elegido pr. Presidente pr. pluralidad de votos; y como tal fue reconocido pr. todos; y dada la posesion qe. al punto admitio.” (Junta general de elecciones de 5-IV1734. ARANM, L-1, fol. 102). En esa misma sesión fue electo como secretario Alejandro Martínez de Argandoña. José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 97 trocándolo con el que ostentaba Martínez de Argandoña, con lo que Hortega volvió a ocupar la secretaría de la Corporación210. De acuerdo con sus estatutos, los tertulianos acostumbraban a reunirse tres veces en semana; los lunes y viernes, en junta ordinaria, para exponer al resto de los asistentes los asuntos científicos que el presidente les encomendara con antelación; y los miércoles para tratar una cuestión propia de anatomía211; y así fue en la práctica, pero -de manera ocasionalse unieron a éstas unas juntas médicas, reunidas otros días de la semana, para discutir casos clínicos212; lo habitual fue que estas discusiones se integraran en las juntas ordinarias. Las sesiones tenían lugar a las siete de la tarde213. El profuso reglamento con el que se dotan los tertulianos establece, incluso, el formato en que habrían de construirse las disertaciones presentadas; la opción neo-hipocrática es claramente realzada: “Asi en los ássumptos por escripto, como en la lecciones ánatomicas, y demas actos literarios se óbservara un estilo fluido, sin afectacn., elegante y claro sin sonsonettes poheticos, y sobre todo se tendra cuidado que en ninguna orazion lleve el sustantivo sino solamte. 210 “… represntó el Sr. Presidente pr. escrito qe. tenia justos motivos para no continuar el exercicio de la Presidencia, y respecto de ellos esperaba pr. la tertulia la dexazon. qe. desde luego hazia; y no obstante la repugnancia qe. todos manifestaron, condescendieron ultimamte. á sus ruegos, admitiendole la renuncia, con calidad de qe. propusiese para el empleo como acostumbraba...” (Junta ordinaria de 12-IV-1734. ARANM, L-1, fol. 104). La elección del nuevo Presidente recayó en Alejandro Martínez de Argandoña. En mayo de 1734, “La tertulia eligio de comun acuerdo pr. Sto. propietario á Dn. Joseph Ortega sin limitazn. de tiempo...” (Junta ordinaria de 10-V-1734. ARANM, L-1, fol. 107). “Se juntara la tertulia tres vezes en cada semana. Lunes y Viernes para hazer los discursos que se habran trabajado sobre la Medicina, Ciruxia, y Pharmacia, en los quales se tocaran, quando convenga, puntos de Phisica y de Vottica. Asi mismo el miercoles para explicar verbalmte. una leccion ánatomica…” (Estatuto 1º del capítulo 5º “De las Juntas”. [Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752]. ARANM, L-1, fol. 23-24). 211 212 De manera autónoma sólo tenemos constancia de dos de ellas, las reunidas el martes 10-XI-1733 (ARANM, L-1, fol. 50) y el domingo 29-XI-1733 (ARANM, L-1, fol. 56). 213 “En las noches destinadas para áctos literarios, empezara la tertulia sus sesiones á las siete, desde primº. de Octbre. hasta fin de Abl. y desde este tiempo hasta fin de Sepr. ácordara en adelante óra convte…” (Estatuto 1º del capítulo 5º “De las Juntas”. [Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752]. ARANM, L-1, fol. 23-24). 98 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol un adjetivo, porque lo contrario, asi como es bueno para la poesia, es morboxo para la prossa, tambien se observará no amontonar citas ni authoridades, pero esto no se entendera con el savio Hippocrates, cuia solidez en el discurrir, y modo el mas elevado en el pensar le han hecho digno de la mr. benerazon. ante las facultades Medica-Chyrurgyca-y Pharnaceutica”214. Ningún material impreso dejó esta ‘Tertulia Literaria’; pero la lectura de las actas de sus sesiones nos permite conocer la actividad de José Hortega en ella215: en la reunión del 23 de octubre de 1733, apenas constituida, disertó acerca de la composición del bezoárdico jovial y su acción en los casos de histeria216; ese mismo día le fue encomendado un análisis de las aguas minerales del Quinto, que defendió el 16 de noviembre, como estaba previsto217; el 21 de diciembre trató sobre las confecciones y electuarios cordiales e inició con ello un proyecto de largo alcance, destinado “á hacer la critica á la Pharmacia Galenica y Chymica”218; el 18 de febrero de 1734 desarrolló unas 214 Cf. estatuto 7º del capítulo 5º ‘De las Juntas’. [Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752] (ARANM, L-1, fol. 26). 215 Lamentablemente no se conserva, manuscrita, ninguna de las comunicaciones presentadas por Hortega ni a esta Tertulia ni a la Academia que habría de continuarla, algo que ya dejó señalado Daniel García González: “Los cambios de domicilio, los expolios bien o mal intencionados de algún bibliómano han conseguido por ejemplo que de un hombre como José Hortega, pilar central de la creación de la Academia, no se encuentre ni una sola de la docena de comunicaciones referidas en los mencionados libros…” (Daniel García González. Historia de la Real Academia Nacional de Medicina: primera época, 1733-1808. Madrid: Universidad Complutense [tesis doctoral inédita], 1965 –cf. pág. 2-). La disertación le fue solicitada el 6-X-1733, en la primera junta en la que se repartieron temas de trabajo (ARANM, L-1, fol. 40); en el acta de la junta ordinaria celebrada el 23-X-1733 quedó anotado: “Y yo el sto. presente á la tertulia el ásumptto que me señalo el Preste. en 6 de octtre. el que fue leido por mi y aprovado por todos los tertulianos. Y para que prosiguiesen las tareas me dio el Preste. por nuevo asumpto la Historia de la Analisis de las águas minerales del quintto para el lunes 16 de Novre. de este año.” (ARANM, L-1, fol. 43). 216 217 “Yo el secrto. presente á la tertulia el ásumpto que me señalo el Preste. el viernes 23 de Octbre., el que fue leido por mi y aprobado por toda la tertulia, y para que prosiguiesen las tareas me dio el Preste. por nuevo ásumpto un discurso sobre las confecciones y electuarios cordiales para el Lunes 21 de Dizbre de este.” (Junta ordinaria de 16-XI-1733. ARANM, L-1, fol. 52). “Yo el secrto. presente á la tertulia el ásumpto qe se me señalo el Lunes 16 de Ne. el qe. fue leido pr. mi, y aprovado pr. todos los tertulianos, y para qe prosiguiesen las tareas me dio el Presidente pr nuevo asumpto; que 218 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 99 nuevas “Reflexiones sobre sus preparaznes. Pharmaceuticas”219, continuadas en la sesión celebrada el 24 de marzo220. La intervención de José Hortega no se redujo a su participación en las juntas ordinarias, también tomó parte asidua en las juntas anatómicas; el 18 de noviembre de 1733 expuso una historia del mesenterio221, en la celebrada el 27 de enero de 1734, trató de las partes externas de los ojos222 e incluso se le encomendó continuar con las internas, tarea que no culminó por no celebrarse la sesion para la que había sido convocado223. Y es que, desde el 4 de marzo de 1734, las juntas anatomicas se convirtieron en eminentemente prácticas, pasando a ser celebradas en el teatro anatómico del Hospital General de Madrid, gracias a las negociaciones establecidas por José Corralón ante fray Gaspar de Molina, a la sazón presidente del Consejo Real de Castilla224. supuesto qe se me avia propuesto un proyecto, qe se dirigia á hacer la critica á la Pharmacia Galenica y Chymica, qe prosiguiese en hazer reflexiones sobre sus preparaznes. pharmaceuticas y qe presentase un discurso para el Lunes 8 de febº. de 1734.” (Junta ordinaria de 21-XII-1733. ARANM, L-1, fol. 63). 219 “Yo el ssrio. presente á la tertulia el asumpto qe se me señalo el Lunes 21 de Dizbre. de 1733 el qe. fue leido pr. mi, y aprobado por toda la tertulia; y para que prosiguiesen las tareas me dio el Presidente pr. nuevo asumpto qe. prosiguiese con mi proyecto, y qe. presentase un discurso para el Lunes 22 de Marzo de 1734.” (Junta ordinaria de 18-II-1734. ARANM, L-1, fols. 79-80). 220 “Yo el ssrio. presente á la tertulia el asumpto qe se me señalo el Lunes 8 de febº. de 1734 el qe. fue leido pr. mi y aprobado pr. toda la tertulia, y para qe. prosiguiesen las tareas le [sic] dio el Presidente pr. nuevo asumpto, qe. prosiguiese con mi proyecto y que presentase un discurso para el Lunes 3 de Mayo de 1734.” (Junta ordinaria de 26-III-1734. ARANM, L-1, fol. 97). Probablemente no se llevó a efecto, no se celebró tertulia ese día. 221 “Yo el secrto. explique vervalmte. la leccion anatomica del mesentterio que me señalo el Presidente en 27 de octtre. y para que prosiguiesen los temas me señalo el Prete. por nuevo asumpto las partes externas de los ojos para el Miercoles 27 de henerº de 1734.” (Junta ordinaria de 16-XI-1733. ARANM, L-1, fol. 52). En efecto, en la “Junta general para repartir assumptos anatomicos” celebrada el 27-X-1733, se le encarga: “dn. Joseph Hortega la Historia del mesentterio el Miercoles 18 de Novbre.” (ARANM, L-1, fol. 46). 222 “Yo el ssto. explique vervalmte. la leccion anatomica qe. se me señalo el Miercoles 18 de Ne. de 1733 la qe. fue aprobada pr. toda la tertulia; y para qe. prosiguiesen las tareas me dio el Presidente pr. nueva leccion: las partes internas de los ojos, para el Miercoles 7 de Abril de 1734.” (Junta ordinaria anatómica de 27-I-1734. ARANM, L-1, fol. 77). 223 El miércoles 7-IV-1734 se celebró junta particular, la primera del corto período de su presidencia (ARANM, L-1, fol. 103). 224 La noticia fue comunicada a los tertulianos en una “Junta general extraordinaria para notificar a la tertulia el Decreto del Ilmo. Sr. Presidente de 100 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol La Real Academia Médica Matritense La ‘Tertulia Literaria Medico-Chymico-Phisica’ optó, en la primavera de 1734, por reformar su estructura; en mayo de 1734 los tertulianos detienen su actividad225 y emplean los meses del verano en realizar los trámites para legalizar su situación ante el Consejo de Castilla. En la sesión del 12 de agosto de 1734 la ‘Tertulia Literaria’ se convierte, por decisión de sus fundadores, en ‘Academia’226; sus nuevos estatutos obtienen el refrendo regio el 13 de septiembre de 1734227; nacía así oficialmente la ‘Academia Médica Matritense’. Castilla, celebrada el sabado 6 de Marzo de 1734” (ARANM, L-1, fols. 88-92). El decreto, del que el acta de la sesión presenta copia, queda firmado por ‘fray Gaspar, obispo de Barcelona’ [Gaspar de Molina y Oviedo, OSA (1679-1744)] el 4-III-1734. En junta ordinaria de 15-III-1734 “La tertulia nombró pr. Comisarios para dar las gracias al Illmo. Sr. Presidente de Castilla al Dr. D. Joseph Corralon, al Sr. Dr. D. Alexandro Argandoña; el Dr. Dn. Vizte Carreras y Dn. Joseph Hortega.” (ARANM, L-1, fol. 94). La primera de las juntas anatómicas celebradas en el Hostital General de Madrid tuvo lugar el 22-III-1734 (ARANM, L-1, fol. 88-92). José Corralón era médico personal de fray Gaspar de Molina. 225 El 31-V-1734 se celebró junta general para organizar las vacaciones estivales: “Atendiendo á el riguroso calor del tiempo de Estio deliberó la tertulia dar Vacaciones hasta princps. de septe. con la condicion de qe en este tiempo aya dos juntas cada mes…” (ARANM, L-1, fol. 110); y, en efecto, la Terulia celebró, el 12-VII-1734, una junta particular de fundadores, seguida, ese mismo día, de una junta general de elección, en la que se confirió la presidencia a Vicente Carreras (ARANM, L-1, fols. 111-112); ésta sería la última reunión de la Tertulia, en la junta particular de fundadores de 12-VIII-1734 se adoptarán ya los nuevos estatutos y la Tertulia recibiría nuevo nombre (ARANM, L-1, fol. 110). 226 El acta de la junta particular de fundadores, celebrada el jueves 12VIII-1734, es escueta: “Aviendose determinado pr. los tertulianos fundadores formar nuebos estatutos, y asi mismo mudar el nombre de la tertulia lo pusieron en execucion, y ordenaron cincuenta estatutos y pusiron nombre de Academia Medica matritense, y aviendose aprovado dhos estatutos y nombre deliberaron dar quenta al Consejo real de Castilla para su aprovazon. lo que se hizo y se consiguió oy Juebes 12 de Agto. de 1734. Nombrose pr. comisionados para dar gracias a los Sres. del Consejo á los Dres. Alexandro de Argandeña, y Dn. Joseph Corralon.” (ARANM, L-1, fol. 112). 227 “Oy se haze notorio á todos los tertulianos fundadores un decreto de S.M. en que aprueba y manda guardar los estatutos qe. se citan en el acuerdo antecedete. [Junta particular de fundadores celebrada el 12-IX-1734] y todos unanimes y conformes, les pusieron sobre su cabeza, y dixeron qe. le obedecian con la supor. venzon.” (Junta particular de fundadores de 16-IX-1734. ARANM, L-1, fol. 113). La novedad fue anunciada al resto de los tertulianos en la junta general celebrada al día siguiente, el 13-IX-1734 (ARANM, L-1, fol. 113). El 19-XI-1734, constituida ya la Academia Médico-Matritense, su primera junta directiva otorga poder para pleitos, en su representación, a favor de Manuel José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 101 El cambio de ‘Tertulia’ a ‘Academia’ no es baladí, supone el tránsito de una agrupación particular a una institución oficial, sometida al poder del Consejo de Castilla y, por ende, a los deseos del Monarca ¿fue a este cambio de estatus al que quiso referirse José Hortega al argumentar sus “justos motivos para no continuar el exercicio de la Presidencia”? Es posible, de hecho, el peso de Alejandro Martínez de Argandoña y de José Corralón, ambos médicos, el primero al servicio de la Cámara del Rey y el segundo de la Cámara de la Reina –y del propio Presidente del Consejo de Castila-, se hizo cada vez más evidente228. Los Estatutos… de 1734 son, en esencia, similares a los de 1733, de los que resultan una versión ampliada229; se mantiene en ellos el fin primordial, claramente imbuido de las ideas ilustradas, con el que la Tertulia fue fundada: “El fin primario ó idea general de la Academia sera manifestar las racionales y provechosas maximas de la Medicina y Cirugia y la mejor practica de sus operaziones por el camino de la obserbazion y experienzia, proponer las utilidades de la Phisica Mecanica, adelantar los descubrimientos de la Anatomia, distinguir sin confusion los experimentos chimicos y finalmente aberiguar quanto pueda ser util y combeniente de la variedad admirable de la Historia natural, en cuia consequencia se pondra con claridad lo vedadero como seguro, lo probechoso como util, lo berosimil cono opinable, y lo experimental como demostrable”230. Izquierdo (AHPNM, protocolo 16.638, fols. 440r-441v). De hecho, en la comunicación que realiza el Real Consejo de Castilla se explicita: “aprovamos los Estatutos presentados por los Doctores Dn. Alexandro Martinez de Argandoña y Dn. Joseph Corralon para que lo contenido en ellos sea guardado, cumplido y executado en la forma, y vajo las limitaziones y aditamentos que siguen…” Estatutos de la Academia Médica Matritense aprobados por el Rl. y Supremo Consejo de Castilla. Copia manuscrita, firmada por José Hortega, en Madrid, el 1-X-1734 (ARANM, leg. 1C,2a). 228 229 Estatutos de la Academia Medica Matritense, aprobados por el Real y Supremo Consejo de Castilla. [Madrid: s.n., 1734]. [2], 22 p.; la biblioteca de la Real Academia Nacional de Farmacia conserva un ejemplar de este opúsculo (signatura: A-C4 / registro: 3849). En el archivo de la Real Academia Nacional de Medicina se conserva una copia manuscrita, firmada por José Hortega el 1-X-1734 (ARANM, leg. 1C,2a), que es la que utilizamos en este epígrafe. 230 Cf. estatuto 50. Estatutos de la Academia Médica Matritense aprobados por el Rl. y Supremo Consejo de Castilla. Madrid, 1-X-1734 (ARANM, leg. 1C,2a). 102 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol No obstante los nuevos estatutos presentan algunos cambios que conviene señalar. Los académicos quedan ordenados en tres categorías: de número, de ejercio y de honor231; los de número se fijan en veinticuatro, de ellos ocho médicos, ocho cirujanos y otros ocho farmacéuticos232; los académicos de ejercicio guardan igual distribución y número; los de honor ascienden a cuarenta y ocho233. La duración de los cargos electos se eleva a un año, frente a los tres meses establecidos por los tertulianos. Se incorpora la figura de ‘juntas públicas’, una en cada semestre, destinada a mostrar los trabajos de la Academia234, y se establece “Estatuto 1. La Academia Medica Matritense se compondra de Profesores de Medizina, Cirugia y Pharmazia divididos en tres clases de Academicos: la primera comprehendera los de Numero, la segunda los de Exercicio, y la tercera los de Honor”. Estatutos de la Academia Médica Matritense aprobados por el Rl. y Supremo Consejo de Castilla. Madrid, 1-X-1734 (ARANM, leg. 1C,2a). 231 “[Estatuto] 2. Los Academicos de Numero seran veinte y quatro tres Medicos, tres Anathomicos y dos fisicos Profesores de Medizina: Quatro Cirujanos, y quatro Anatomistas disectores Profesores de Zirugia: Quatro Chimicos, y quatro Botanistas, profesores de Pharmazia…” Estatutos de la Academia Médica Matritense aprobados por el Rl. y Supremo Consejo de Castilla. Madrid, 1-X-1734 (ARANM, leg. 1C,2a). En la reforma de los estatutos adoptada en la primavera de 1742 esta situación cambiará: “Que la Rl. Academia MedicaMatritense se componga ademas de los Profesores de Medicina, Cirugia, y Pharmacia, de Profesores de Physica.” (Junta general de 3-IV-1742. ARANM, L-1, fol. 439). 232 233 En la reforma de abril de 1742 quedará sin efecto esta limitación numérica: “Que se suspenda la Clase de Academicos de Numero, y que dicha Academia se componga solamente de dos clases, es á saber de Academicos en Exercicio, y de Honor. Que en una, y otra clase sea abierto el numero de Academicos, para que assi elija la Academia los sugetos que juzgue mas aproposito para sus Exercicios Literarios…” (Junta general de 3-IV-1742. ARANM, L-1, fol. 439). La primera de ellas se celebró, en el Convento de la Santísima Trinidad, el jueves 26-V-1735: “El Sr. Dn. Alexandro Argandoña explico publicamente en el Combento de la Santisima Trinidad Como, pr. donde se celebre la nutricion del foetus; sobre cuyo contenido dificultaron los Academos: el Dr. Serena, el Lcdo. Xiorro y el Dr. Lara. Este acto se celebro en virtud del Estatuto 46 á el qual asistieron ademas de los Academicos un gran numero de facultativos y personas de la mr. distincion, aviendo favorecido este acto dificultando el Dr. Dn. Franco. Perena Medico Honorario de Camara y el Dr. Boncone, de cuya funcion se mostro muy satisfecho todo el numeroso concurso qe asistio.” (Junta pública de 26-V-1735. ARANM, L-1, fol. 161). La siguiente función pública se realizó el lunes 3-X-1735. Tales actos debieron despertar el interés de los académicos pues, en el acta de la junta particular celebrada el 19XI-1735 queda anotado: “Asimismo se acordo qe. en el año proximo qe. viene de mil setestos. y treinta y seis pueda aver dos Juntas mas qe. las dos qe. previenen 234 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 103 la conveniencia de mantener “comunicazión y comercio literario (…) con los extranjeros”235, actitudes ambas muy del gusto ilustrado, tanto por acercar a la sociedad los adelantos científicotécnicos como por insertar las actuaciones de las instituciones españolas entre las de sus homólogas europeas. Los propios académicos participan de este espíritu de apertura hacia el resto de la sociedad y, en el acta de la junta general celebrada el 28 de febrero de 1735, queda anotado al margen: “En esta junta se acordó que pudiesen entrar á oir, y ver las funciones literarias de la Academia los facultativos, y curiosos qe. gustasen”236. A los nuevos estatutos de 1734, conformados al gusto de los tertulianos, el Consejo de Castilla añadió unas ‘limitaciones y aditamentos’, de cumplimiento obligado, y que supondrían el sometimiento de la Academia al Real Tribunal del Protomedicato: “Por lo que mira á la subordinacion, y jurisdizion que sobre la Academia y sus Yndividuos ha de tener el Prothomedicato (…) Que el Presidente de la Academia lo haya de ser perptuo. havitual primer Medico y Decano que es ó fuere del Rl. Protomedicato con la prerrogativa de presidirla siempre que pudiese concurrir, ó juntarla si le parece combeniente (…) En orden á lo prebenido (…) los Estatutos…” (ARANM, L-1, fol. 175); a partir de 1737 la Academia se limitó a realizar los dos actos públicos anuales que señalan sus estatutos; en el acta de la junta particular de 31-X-1737 se anota: “Asimismo se acordó qe. pr. este año no aya mas Juntas publicas, qe las qe estan á cargo del Sr. Dr. Serena, y del Sr. Dr. Leon Gomez, qe combenio con el Sr. Argendoña, se puedan pasar para el año qe. viene, en el qual no puede aver mas que las dhas dos Juntas según los Estatutos…” (ARANM, L-1, fol. 278). 235 “[Estatuto] 48. La Academia procurara tener comunicazion y comercio literario, no solo con los eruditos de España, sino tambien con los extrangeros á fin de lograr por este medio los mejores lazos para su aprovechamto.” Estatutos de la Academia Médica Matritense aprobados por el Rl. y Supremo Consejo de Castilla”. Madrid, 1-X-1734 (ARANM, leg. 1C,2a). Las relaciones internacionales se iniciaron solicitando un intercambio de correspondencia con la Royal Society; en el acta correspondiente a la junta general celebrada el 21-X-1745: “se hizo presente á la Junta la carta respuesta escrita á la Academia pr. el Caballero Hans Sloane Presidente del Colegio medico y de la rexia Sociedad de Londres en respta. á la qe. le escribió la Academia en 28 de febro. de este año su fecha en Londres 16 de Septre. de 1735.” (ARANM, L-1, fol. 168). Y en la junta general siguiente, la celebrada el 4-XI-1735: “Asimismo se acordó dar los honores de Academico erudito al Dr. Dn. Juan Sloane presidente del Colexio Medico, y de la rexia Sociedad de Londres con quien la Academia tiene comunicazn. y comercio literario.” (ARANM, L-1, fol. 169). Sir Hans Sloane (1660-1753) fue médico, botánico y coleccionista, de origen irlandés y religión protestante. 236 Junta general de 28-II-1735 (ARANM, L-1, fol. 144). 104 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol quanto á las plazas de Numero, de Exercicio, y de Honor queremos sea, y se entienda que en caso de intentar ó pretender entrar por Sozio de la Academia algun Medico de Camara, ó de las familias Rs. se le admitiese desde luego siendo de ejercicio aunque no aya vacante, y si despues la hubiese no se probea hasta que por muerte ó ausenzia falte alguno de los veinte y quatro, arreglandose los estatutos que hablan de la formalidad con que deben pretender, y ser admitidos los Academicos…”237 La imposición del Real Tribunal se llevó a efecto bajo la presidencia electa de Baltasar de la Torre y Ocón, Subdelegado del Real Tribunal del Protomedicato y protomédico: en junta particular de numerarios reunida el sábado 25 de mayo de 1737, la Academia toma el acuerdo de tratar a los académicos médicos de Cámara y de las Reales Familias como académicos supernumerarios de número, lo que vendría a significar una íntima dependencia entre la Institución y los médicos de Palacio; el acuerdo fue considerado nulo apenas unos meses después238. Con posterioridad, en la reforma de los estatutos presentada en abril de 1742, se establecerá la total independencia de la Corporación frente a los médicos de Cámara y de Familia239; Estatutos de la Academia Médica Matritense aprobados por el Rl. y Supremo Consejo de Castilla. Madrid, 1-X-1734 (ARANM, leg. 1C,2a). 237 En el acta de la junta particular celebrada el 25-V-1737 quedó anotado: “Los Señores Academicos Medicos de Camara, y de las Reales familias del Rey, y Reina nros. Señores seran tenidos, y tratados pr. Academicos supernumerarios de numº. y gozarán de las mismas préeminencias, y prerrogativas qe. los demas Academicos de numero.” (ARANM, L-1, fol. 249). En la junta particular celebrada el 31-I-1738, apenas iniciada la presidencia de Alejandro Martínez de Argandoña: “Los Señores Presidente, Directores, Fiscal y Academicos de Numº. que se nombran acordaron derogar, derogan, y dieron por nulo el Acuerdo qe. se hizo en 25 de Mayo de 1737 respecto de ser en perjuicio de la Academia pr. lo qe. mira á que los Señores Academicos Medicos de Camara, y de las Reales familias del Rey, y Reyna nres. Señores sean tenidos, y tratados pr. Academicos Supernumerarios de Numº. y qe. gozen de las mismas preeminencias, y prerogativas qe. los demas Academicos de Numº...” (ARANM, L-1, fols. 291-292). La derogación quedó anotada al margen del acta de la junta en la fue aprobada: “Este Acuerdo qe. toca á los Sres Medicos de Camara, y de las Rles. Familias, derogó, y dio pr. nulo la Academia como consta de la Junta de 31 de Enº. de 1738, y verifico no averse puesto en Practica pr. ser en perjuicio de Tercero. Mª. y Enº 31 de 1738. Hortega.” (ARANM, L-1, fol. 249). 238 “Que qualquier Pretendiente á entrar en la Academia ahora sea Medico de Camara, ó de las Rles. Familias presente Memorial como está prevenido en el Estatuto X y que la Academia tenga entera libertad para admitirle, ó no admitirle según se resolviese por votos secretos, y como executa 239 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 105 la Academia volvía a surgir libre, aun cuando su presidente perpetuo siguiera siendo el Primer médico de Cámara del Rey240. En cualquier caso, la transformación de ‘Tertulia’ a ‘Academia’ supuso una evidente pérdida de independencia, una sujeción formal al Real Tribunal del Protomedicato y a la ingerencia decidida de los médicos de la Real Casa; quizás no fuera esto lo que el boticario José Hortega deseara para su tertulia de rebotica. A cambio, la institución recibía el plácet del Consejo de Castilla y obtenía la práctica seguridad del auxilio de la Corona241; éste no tardó en llegar: en julio de 1738 Felipe V otorgó su expresa protección: “… concediéndoos juntamente mi Licencia, y Permisso, para que podais abrir un Sello particular, compuesto de alguna ingeniosa Empressa, y usar de él en los casos que lo pidiern; y nombrar Impresor, que imprima vuestras Obras, precediendo licencia de mi Consejo (…) sin faltaros cosa alguna, por haver de subsistir, y permanecer siempre debaxo de mi Real Proteccion…”242 con los demas Pretendientes, en virtud de los Estatutos X y XI los quales se observaran como en ellos se expresa sin aditamentos algunos.” (Junta general de 3-IV-1742. L-1, fol. 441). De la aprobación de los nuevos estatutos informa José Hortega en la junta general celebrada el 28-IX-1742: “En la Junta de oy di cuenta á la Academia de una Rl. Providencia del Consejo su fecha á catorce de Sepre. deste preente año, pr. la qual aprueba S.M. en todo, y pr. todo el Acuerdo hecho pr. la Academia en tres de Abril deste mismo año, y aviendola leido de verbo ad verbum, mandó la Academia que luego incontinenti se observase, y se pussiese en execucion lo que S. Magd. mando, con los demas Estatutos, que pr. esta nueba Providencia quedan en toda su fuerza, y vigor, y en consequencia dio la orden para su observacia…” (ARANM, L-1, fol. 454). 240 En junta particular de académicos celebrada el 5-XI-1735: “Se acordo q . se pidiese á su Magestad qe. Ds. gde. su real Proteccion para la Academia y para governar esta pretension nombraron al Sr. Director, al Dr. Corralon y á mi el sscro. [José Hortega].” (ARANM, L-1, fol. 169). 241 e 242 Real cédula extendida, en el Buen Retiro, el 15-VII-1738 (ARANM, leg. 1C,3a). El amparo real fue dado a conocer a los académicos en la junta celebrada el 19-VII-1738: “Los Comisionados nombrados pa. solicitar de S.M. qe. Dios gde. su Proteccion Rl. pª la Academia, los quales son los Sres. Director, Bereterrechea, Coralon y yo el Ssº. participaron á la Junta como el Rey avia recibido á la Acadª. debaxo de Su Rl. Proteccion, y la concedia licencia pr. usar de sello particular, y poder nombrar Impresor como constaba en la Rl. Cedula de S.M. su fecha en Bn. Retiro á 15 de Julio de 1738 la qual puse yo en manos del Sr Presidente el ql. beso, y puso sobre su cabeza la firma de S.M. y lo mismo hicieron el Sr. Director, el Sr. Fiscal [Alfonso Lope], y yo, y despues se leyo pr. mi la Real Cedula qe todos los Acads. manifestaron sumo gozo pr. las especiales 106 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol De acuerdo con la nueva estructura aprobada por los estatutos de 1734, la Presidencia perpetua de la Academia correspondió a José Cerví243; su presencia al frente de la Institución es sólo testimonio de la sujeción de ésta al Real Tribunal del Protomedicato; para su funcionamiento efectivo, los académicos eligieron un ‘Presidente anual’, el primero de ellos fue Baltasar de la Torre y Ocón, médico de Cámara244; con anterioridad, en la junta primera académica de fundadores celebrada el 18 de septiembre de 1734, los académicos nombraron a José Hortega Secretario perpetuo, cargo que desempeñó hasta su fallecimiento245. Las funciones que competen al Secretario quedan figuradas en el estatuto 20 de los apobados en septiembre de 1734: “El Secretario tendra a su cargo los papeles, los quales archivara con horden y curiosidad. Escrivira los Acuerdos, presentara las Memorias, pondra los Decretos, avisara para las Juntas, notara los echos de la Academia, resumira los que se den en voz, leera al principiar las Juntas, los Acuerdos de la pasada, y finalmente tomara a los Academicos el Juramento establecido…”246 El 20 de septiembre de 1734, los tertulianos fundadores toman posesión de sus nuevas plazas de académicos de número; honras qe. S.M. les hacia…” (ARANM, L-1, fol. 325). 243 Tal carácter de perpetuo se mantuvo mientras fue Presidente del Real Tribunal del Protomedicato; al cesar en el cargo en 1746, a la muerte de Felipe V, la ‘Presidencia perpetua’ de la Academia pasaría a ser ocupada por el nuevo Presidente del Protomedicato, José Suñol Piñal. “Los Academicos fundadores unanimes y conformes elixieron pr. Presidente anual y ordinario, y como substituto del Sr. Dr. Dn. Joseph Cervi Medico Primario del Rey nr. señor, y Presidente Perpetuo de la Academia, á el Dr. Dn. Baltazar de la Torre y Ocon Medico de Camara con exercicio de S. Magd. y se nombraron para qe. se lo participasen como diputados de la Academia ál Dr. Dn. Alexdro. de Argensola, Dn. Juan Andres de Bereterrechea, y á mi [José Hortega]…” (Junta particular de académicos fundacores de 19-IX-1734. ARANM, L-1, fols. 114-115). 244 245 El artículo 28 de los Estatutos... establece que el cargo de Secretario será perpetuo y elegido por los Académicos; éstos propusieron a José Hortega para ocupar el puesto en la primera junta académica de fundadores, celebrada el 18-IX-1734: “Los Academicos fundadores; y de Numero unanimes, y conformes elixieron pr. secretario perpetuo de la Academia, y como Su Majestad manda en los estatutos á qe. se remiten, á Dn. Joseph de Hortega Academico fundador y de numero; cuyo empleo desde luego admitio, y tomo la posesion y lo firmaron…” (ARANM, L-1, fol. 114). 246 Copia manuscrita, firmada por José Hortega, en Madrid, el 1-X-1734 (ARANM, leg. 1C, 2a). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 107 José Hortega se adscribirá a una de las categorías profesionales reservadas a los profesores de Farmacia: “Yo el secretario. Plaza de Botanista de Numero”247. La refundación de esta Real Academia Médica Matritense entra, de lleno, en el nuevo espíritu que incita a las mentalidades ilustradas, de las cuales sus más preclaras mentes científicas encontraron acomodo entre sus bancales; Andrés Piquer Arrufat, elegido académico el 25 de febrero de 1739, lo haría notar así en su oración gratulatoria: “No esta menos dispuesto el Orbe literario de las grandes revoluciones que el Orbe politico, ni son en aquel las epochas menos memorables que en este: Bien puede contarse entre una de las mas notables el establecimiento de tan docta, y sabia Sociedad, pues en ella se afianzan enteramente en España el uso de las mas perfecta Phisica y Medicina. Por su direccion se restituye á su ser el buen gusto; y la Medicina ya cadente por la nimia delicadeza de los razonamientos se reduce al punto fixo de la observacion…”248 La Academia Médica Matritense y el domicilio de José Hortega constituyeron una unidad de hecho incuestionable; el texto del acta de la junta de gobierno, celebrada el 22 de agosto de 1746, es bien elocuente de esta unidad simbiótica entre la Academia y Hortega: “… acordó la Academia que interin S.M. no concediese á la Acadª. casa a proposito para celebrar sus Juntas, nadie pueda innovar ni pretenda sacar á la Acadª. de casa del Dn. Jph. Hortega, Ssrio Perpetuo de ella, en atencion á qe. desde el principio de su fundacion no ha conocido otra casa qe la expresada, pr. la buena voluntad con que la franquea, de lo qe la Acadª. esta agradecida; Junta particular de 20-IX-1734 (ARANM, L-1, fol. 116); el resto de los tertulianos -los no fundadores- tomaron propiedad de sus asientos un día después, en la junta general celebrada el 21-XI-1734 (ARANM, L-1, fol. 118). Al unificarse sus categorías, también se unificaron sus cuotas: “cada uno de los Academicos paguen pr. mesada á razon de quatro rs. de plata” queda anotado en el margen del acta de la junta particular de fundadores celebrada el 16-IX1734 (ARANM, L-1, fol. 113). 247 248 Andrés Piquer Arrufat. Breve Oracion, que embio á la real Academia Medica Matritense el Dr. Andres Piquer en accion de gracias por haber sido nomnbrado su socio (ARANM, leg. 2,27). El manuscrito carece de fecha, pero va adjunto a la carta en la que consta su envío, ésta queda dirigida a José Hortega y datada en 24-XI-1739 (ARANM, leg. 2,26). 108 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Pero qe. se practiquen las diligencias conbenientes pª lograr Casa por S.M. y para este efecto nombró el Sr. Argandoña qe hizo de Presidente, á los Sres. Lope, Monleon y Palomero, cuyo acto fue acordado por los Sres. Academicos…”249 Pese a estos claros intentos de emancipación, la Corporación siguió residiendo en la biblioteca de José Hortega, al menos, hasta 1752; probablemente permaneció allí hasta el fallecimiento de su Secretario, acaecido en enero de 1761250. La transformación en Academia supuso, también, un cierto relajo en la actividad que habían desarrollado los antiguos tertulianos; aunque anecdóticas, no dejan de ser significativas las primeras decisiones que Baltasar de la Torre hace adoptar en la junta general del 4 de septiembre de 1734: “… qe. respecto de qe. las oras prevenidas pr. los estatutos para celebrar los actos literarios eran de mucha incomodidad en el invierno cuyas noches solian ser muy asperas, y lluviosas, y pr. esto gravosas á los Academicos qe. tenia por conveniente qe. durante el invierno se ejecuten los actos literarios desde las onze de la mañana en adelante (…) lo qual se conferenzio entre los Academicos, y todos unanimes, y conformes acordaron qe. assi se executase como el Sr. Presidente avia propuesto (…) se acordó qe. puesto qe. muchas de las Plazas de numero, y exercicio estaban pr. llenarse se tuviese pr. este Junta de gobierno de 22-VIII-1746 (ARANM, L-1, fol. 585). Aún así parece que mantenía alguna independencia, por ejemplo, disponía de portero propio; en el acta de la junta particular celebrada el 30-I-1738 se anota: “Asimismo acordaron qe. todos los Academicos Honorarios qe. de oi adelante se reciban paguen un peso mas, de modo qe. en todo compongan cinco pesos, o un doblon de oro, los quatro para los gastos de la Academia, como hasta aquí, y el uno para el Portero qe. ahora lo es Franco. Ferreiro.” (ARANM, L-1, fol. 288). 249 250 El ‘Libro de Acuerdos de la Academia’ que habría de contener las sesiones celebradas entre el 18-III-1752 y 5-X-1791 se encentra perdido, tal como queda anotado en el primer Libro... ([1733-1752] (ARANM, L-1, fol. 720). Tras el fallecimiento de José Hortega, la Academia tuvo una sede errática, reuniéndose en los domicilios de algunos de sus miembros hasta que, a fines de 1794, le fue concedida una habitación en una de las casas de la calle del Tesoro; allí tuvo lugar la primera sesión en sede propia, la celebrada el 12 de marzo de 1795. De ubicar las diversas localizaciones con las que contó esta Real Academia se ha ocupado Paula de Demerson. “El vagabundeo por la corte de la Real Academia Médica Matritense”. En: José Checa Beltrán, Joaquín Alvarez Barrientos (coord.) El siglo que llaman ilustrado. Homenaje a Francisco Aguilar Piñal: 253-260. Madrid: CSIC, 1996. José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 109 año una junta solamte. en cada semana en lugar de las dos qe. previenen los estatutos, y se determinó qe. fuesen los vierns. á las onze de la mañana como queda prevenido, y se suspendio la que se devia executar los Lunes hasta qe. aya mas Academicos…”251 Pese a estas limitaciones, la actividad de la Academia siguió por los mismos cursos por los que -hasta entonces- se había desarrollado la vida de la Tertulia, y José Hortega continuó dando muestra de su aplicación y de sus lecturas; el 17 de diciembre de 1734 diserta sobre la naturaleza e índole del alcanfor252; el 1 de abril de 1735 intervino ‘presentando objeciones’ a la conferencia pronunciada por Miguel Guarro sobre la utilidad de la sangría para la curación de la catalepsis253 ; el 22 de abril fue el propio Hortega quien expuso ante los académicos una serie de experimentos realizados con alcanfor254; nuevamente interviene en la discusión promovida, en la sesión del 13 de mayo de 1735, tras la conferencia de Bartolomé Serena sobre si el ‘alma animal’ era necesaria para explicar el sentido y el movimiento255; el 21 251 Junta general de 4-IX-1734 (ARANM, L-1, fols. 120-124). Sí se mantuvieron las juntas anatómicas, celebradas en el Hospital General de Madrid, que siguieron reuniéndose los miércoles, como había sido habitual hasta entonces. Éstas cambiarían pronto de formato y de día; en el acta de la junta ordinaria celebrada el 18-II-1735 se lee: “Asi mismo se acordó tener otra junta los lunes de cada semana en la qual cada uno de los Academicos explicase verbalmte. una leccion Anatomica segun el órden que señalase la Academia (…) dexando la Junta de el Vierns. para tratar solamente de actos literarios, sino ocurriese cosa tan precisa que no admita dilacion…” (ARANM, L-1, fols. 140141). En la junta particular celebrada el 8-X-1736, se acuerda “Que las Juntas Generales de los actos literarios empiezen á las onze en punto, y duren hasta las doze y media, y no mas…” (ARANM, L-1, fol. 208). 252 Junta general de 17-XII-1734 (ARANM, L-1, fol. 135). El tema le había sido propuesto en la junta general de 4-XI-1734 (ARANM, L-1, fol. 126). 253 “El Dr. Dn. Miguel Garro presentó á la Academia pr. escrito un discurso qe. contenia: Si para la curazn. de la Catalepsis sea eficaz auxilio la sangria? el qual fue leido en la Junta; y dificultaron sobre su contenido los Drs. Argandoña y Lara, el Ldo. Lopez y Ortega, de cuya funcion se mostraron muy satisfecho el Dr. Carreras qe. presidia, el Director y los demas Academicos qe. se hallaron presentes…” (Junta general de 1-IV-1735. ARANM, L-1, fol. 152). 254 “Dn. Joseph de Hortega presentó á la Academia pr. escrito un Discurso qe. contenia varios Experimentos sobre el Alcanphor; el qual fue leido en la Junta, y dificultaron sobre su contenido el Dr. Serena, y Dn. Carlos Ximenez de Aragon Academico honorario, y todo fue aprobado pr. los Sres. Presidente y Director, y demas Academicos qe. se hallaron en la Junta, qe. fueron la mr. Parte.” (Junta general de 22-IV-1735. ARANM, L-1, fol. 153). 255 “El Dr. Dn. Bartolome Serena presentó á la Academia pr. escrito 110 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol de octubre de 1735 habló tras la disertación pronunciada por Andrés Famada, sobre las preparaciones antimoniales256; el 18 de noviembre será Hortega quien vuelva a tratar en la Academia sobre el alcanfor, esta vez de sus reacciones en medios sulfúreos257; ese mismo día se hizo público el primer informe solicitado a la Academia sobre una obra científica: un texto de Ambrosio de Almunia que habría de llevar por título Llave maestra Chirurgica &; la impresión de la obra fue reprobada y ésta no vio la luz, en su dictamen tomó parte José Hortega258. En la junta general celebrada el 11 de mayo de 1736 Hortega presentó unas reflexiones sobre la raiz de la calaguala259; un discurso qe. contenia: Si para el sentido, y movimiento eran necesarios los espiritus animales, el qual fue leido en la Junta y dificultaron sobre su contenido los Drs. Lara, Lope, Garro, el Lzdo. Xiorro y Ortega…” (Junta general de 13-V1735. ARANM, L-1, fol. 158). “Dn. Andres Famada presentó á la Academia pr. escrito un discurso q . contenia la continuacion de las operaciones utiles del Antimonio el qual fue leido publicamte. en la Junta, y dificulte sobre su contenido yo el Ssrio. [José Hortega] de cuyo Acto se mostraron muy satisfechos el Dr. Carrera qe. presidio, el Sr. Director y los demas Academicos qe. se hallaron en esta Junta qe. fueron la mr. Parte.” (Junta general de 21-X-1734. ARANM, L-1, fol. 167). 256 e “Dn. Joseph Ortega presentó á la Acadª. pr. escrito un discurso qe. contenia Experimentos sobre el Alcanphor pr. medio de menstruos sulphureos el qe. fue leido en la Junta y aprobado pr. el Dr. Carreras qe. presidio, el Sr. Director, y los demas Academicos qe. asistieron qe. fueron la mr. Parte.” (Junta general de 18-XI-1735. ARANM, L-1, fol. 173-175). El asunto le fue adjudicado en la junta general celebrada el 30-V-1735: “Dn. Joseph Hortega: Experimtos. sobre el Alcanphor por medio de menstruos sulphureos el Vierns. 18 de Novbre.” (ARANM, L-1, fol. 162). 257 258 “Asimismo se presento á la Academia la censura del libro Llave maestra Chirurgica & su autor Ambrosio de Almunia, hecha de orden de la Academia por los Dres. Garro, Lope, Dr Dn. Andres de Bereterrechea, Dn. Julio de Dios Lopez, Dn. Andres Famada, y Dn. Joseph Ortega, de la qual consta la reprobacion de dho libro (…) pr. no resultar del alguna utilidad al publico...” (Junta general de 18-XI-1735. ARANM, L-1, fol. 173-175). La solicitud les fue realizada en junta particular de académicos de número reunida el 5-XI-1735: “… que los Dres. Lope y Garro, el Sr. Director, el Ldo. Lopez, Dn. Andres Famada y yo el Sscro. registren para su aprobacion un libro titulado Llave maestra & qe. el Consexo á remitido á la censura de la Academia…” (ARANM, L-1, fols. 169170). “Yo el ssro. presente á la Academia un Discurso pr. escrito qe. contenia varias reflexiones sobre la Raiz de Calaguala, el qual fue leido publicamte. en la junta cuyo contenido dificultaron los Academicos Lope, Xiorro, é Ysasmendi, de cuyo acto se mostraron muy satisfechos el Dr. Carrera, qe. presidio, Dn. Juan Andres de Bereterrechea, y el Dr. Andres Famada qe. hizieron de Directores, y assimismo los Academicos Zapata, Rico, Lope, Lopez, Lara, Brunet, Bedoya, 259 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 111 intervino en la discusión pública mantenida, en la sesión de ese 9 de noviembre, tras la conferencia de Bernabé Araujo sobre la curación del coma soñoliento260, y en la que tuvo lugar el 3 de diciembre, posterior al discurso de Vicente Carreras acerca de la curacion de la alferecía261; él mismo presentó a la Academia, reunida el 10 de diciembre, una visión general sobre el uso médico del alcanfor262. En 1737 fue elegido para dirigir la sección de Farmacia de la Academia, pero rehusó antes de tomar posesión, pasando ésta a ser desempeñada por Louis Riqueur263; es posible que, para entonces, reclamaran más su atención los estatutos del Colegio de Profesores Boticarios de Madrid, recién aprobados y aún pendientes de la confirmación regia. No obstante su actuacion Serena, Xiorro, Campillo, Rodriguez, Ysasi Ysasmendi, y Velez, qe. se hallaron en esta Junta.” (Junta general de 11-V-1736. ARANM, L-1, fols. 202-203). “El Dr. Dn. Bernardo Araujo presentó á la Academia pr. escrito un Discurso q . contenia la Historia y curacion del coma somnoliento el qe. fue leido publicamente en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Academicos Carreras, Lope, Rodriguez y Ortega…” (Junta general de 9-XI-1736. ARANM, L-1, fol. 212). 260 e “El Dr. Dn. Vicente Carreras presentó á la Academia un Discurso qe. contenia la Historia y curacion de la Alpherecia el qual fue leido en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Academicos Rodriguez, Campillo y Ortega…” (Junta general de 3-XII-1736. ARANM, L-1, fol. 218). 261 262 “Dn. Joseph Ortega presentó á la Academia pr. escrito un Discurso qe. contenia la Historia del uso medico del Alcanfor el qual fue leido en la Junta y dificultaron sobre su contenido los Academicos Carreras y Lope…” (Junta general de 10-XII-1736. ARANM, fols. 219-220). El discurso le fue encargado en la sesión celebrada el 13-I-1736: “Diz. Lunes 10. Dn. Joseph Hortega: Del uso medico del Alcamphora.” (ARANM, L-1, fol. 185). 263 La propuesta de José Hortega fue formulada en junta particular celebrada el 31-XII-1736: “Para Directores Pharmaceuticos á Dn. Joseph Ortega y á Dn. Andres Famada.” (ARANM, L-1, fol. 223); la elección se produjo en la junta general celebrada el 1-I-1737: “Por Director Pharmaceutico á Dn. Joseph Hortega Examinador del Real Protomedicato, y Secretario Perpetuo de la Academia, el qual renuncia al referido empleo, y aviendolo admitido la Academia, propusieron los Academicos de numero para Director Pharmaceutico á Dn. Luis Riqueur primer Boticario de S.M. y á Dn. Xptobal Velez, y los Academicos de numº y exercicio eligieron pr. votos secretos al dcho. Dn. Luis Riqueur.” (ARANM, L-1, fol. 224). Estuvo propuesto para el mismo puesto en el año 1742; en el acta de la junta particular de 31-XII-1741 queda anotado: “Para Director Pharmaceutico á los Dres. Ortega y Dn. Jn. de Minuart Boticario de Barcelona.” (ARANM, L-1, fol. 426), finalmente salió elegido Juan Minuart: “Por Director Pharmaceutico á Sr. Dn. Jn. de Minuart Ayudante de Boticario mayor de los Reales Exercitos.” (Junta de elecciones de 1-I-1741. ARANM, L-1, fol. 427). 112 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol en el seno de la institución durante este año es similar a la desarrollada durante los anteriores; en la sesión del 1 de febrero intervino en la discusión posterior al discurso pronunciado por Miguel Campillo relativo a la curación de la artritis264 y, en la semana posterior, el 8 de febrero, tras la disertación de Bartolomé Serena sobre la curacion de la tisis265; participó en el coloquio que siguió a la conferencia que Agustín Lorente leyó, en la junta de 22 de marzo, acerca de ‘la causa de la transmutación del delirio en letargo’266. El 17 de mayo pronunció una conferencia sobre el opio hispano267; el 8 de octubre tomó parte en las discusiones promovidas tras la disertación de Tomás Francisco de Monleón y Ramiro sobre la curacion del dolor cólico convulsivo268. El 31 de octubre da inicio a sus ‘Lecciones botánicas’, comenzó con una disertación histórica sobre la disciplina para pasar a ocuparse, siempre de acuerdo con la propuesta sistemática formulada por Joseph Pitton de Tournefort, de la “El Dr. Dn. Miguel Campillo presentó á la Academia pr. escrito un discurso q . contenia la Historia, y curacion de la Arthritide, el qual fue leido á la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Academicos Lorente, Rodríguez, Lope, Garro, Argandoña, Carreras y Hortega…” (Junta general de 1-II-1737. ARANM, L-1, fol. 232). 264 e “El Dr. Dn. Bartholome Serena presentó á la Academia pr. escrito un Discurso q . contenia la Historia y curacion de la Phtisis el qual fue leido en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Academicos Rodriguez, Lope, Garro, Carreras y Ortega…” (Junta general de 8-II-1737. ARANM, L-1, fol. 233). 265 e 266 “El Sr. Dr. Dn. Agustin Lorente presentó á la Academia un Discurso pr. escrito, que contenia la causa de la transmutacion del delirio en letargo el que fue leido en la Junta, y sobre su contenido dificultaron los Sres. Academicos Nabarrete, Campillo, Lope, Carreras, y Ortega...” (Junta general de 22-III-1737. ARANM, L-1, fol. 241). “Dn. Joseph Hortega presentó á la Academia pr. escrito un Discurso q . contenia la Historia del opio Hispano, el qual fue leido en la Junta, y dificultó sobre su contenido el Sr. Dr. Lope, de cuyo acto se mostraron muy satisfechos el Sr. Dr. Dn. Franco. Fernz. Nabarrete, que hizo de Presidente, los Sres. Directores, y Fiscal, y los demas Sres. Academicos qe. se hallaron en esta Junta, qe. fueron la mr. Parte.” (Junta general de 17-V-1737. ARANM, L-1, fol. 247). La disertación le fue encomendada en la junta celebrada el 11-I-1737: “Dn. Joseph Ortega: Del opio Hispano. Vierns. 10 de Mayo.” (ARANM, L-1, fol. 226), pero ese día fue Vicente Carreras quien ocupó la tribuna de la Academia (ARANM, L-1, fol. 246). 267 e 268 “El Dr. Dn. Thomas Franco. de Monleon y Ramiro presentó á la Academia pr. escrito un Discurso que contenia la Historia, y curacion del Dolor Colico Convulsivo el qual fue leido en la Junta y dificultaron sobre su contenido los Sres. Academicos Palomero, Rodríguez, Serena, Campillo, Garro, Zapata, Bereterrechea, y Ortega…” (Junta general de 8-X-1737. ARANM, L-1, fol. 273). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 113 asarina [Anthirrinum sp.], la hierba doncella [Vinca minor L.], las flores del azafrán [Crocus sativus L.], la argentina [Potentilla anserina L.] y de un Atriplex al que denomina ‘te de España’269; las continuó en la junta del 8 de noviembre, entonces se interesó por el arrayán [Myrtus communis L.], el hisopo vulgar [Hyssopus officinalis L.], los claveles de muerto [Calendula officinalis L.] y la consuelda real [Consolida sp.]; de los usos médicos de estas plantas versaron los comentarios posteriores de José Isasi Isasmendi270. La decisión de la Academia de publicar, desde el verano de 1737, las Ephemérides barométrico-médicas matritenses… supone la necesidad de establecer una ‘mesa censoria’ que se ocupara de decidir sobre las publicaciones propias de la Institución y, particularmente, de una figura que, actuando a modo de ‘secretario de redacción’, mantuviera la relacion con la imprenta y el formato y estilo de los productos literarios que la Corporación produjese; tales tareas quedan nítidamente definidas en el acta de la junta general celebrada el 23 de julio de 1737: “Asimismo se acordó qe. aya un fiscal de citas; el qual tenga obligacion de comprobar las citas, y doctrinas de los asumptos en los mismos Autores originales qe. citase el Autor, lo qual estando conforme lo certificara al pie del Papel; y la Academia nombró para este empleo á mi el Ssrio. “En esta Junta Yo el Ssº. principie las Lecciones Botanicas qe. pr. varios motivos, y principalmte. pr. la esterilidad del año no se avian executado este verano pasado. Antes de la demostracion de las Plantas expuse en una oracion el Estado antiguo, y Moderno de la Botanica, y despues demostre la Yedra terrestre, ó Asarina, la Vinca Pervinca, llamada vulgarmte. Hierba Doncella, ó de la Garganta, las flores liliaceas del Azafran, la Pentaphyloides Argentina, ó Potentilla, y el Atriplex Americanus, ó Atriplex odoratus llamado vulgarmte. the de España pr. el methodo de Tournefort, qe. es ql. se haran las demas lecciones…” (Junta general de 31-X-1737. ARANM, L-1, fol. 277-278). Y es que, en efecto, lo acordado era que estas ‘Lecciones botánicas’ se impartieran en los meses de verano, así quedó anotado en el acta de la junta celebrada el 11I-1737: “Dn. Joseph Hortega, y el Dr. Isasmendi darán hasta fin de 7bre un Curso de Lecciones Botanicas, desde 7 de Junº. Vierns.” (ARANM, L-1, fol. 226). 269 270 “Yo el Ssº. demostre en la Academia las Plantas sigtes: el Arrayan, el Hyssopo vulgar, la Calendula ó Claveles de Muerto, y la Consuelda Real ó Espuela de Caballeros, y despues de la demostracion explicó el uso medico de cada planta el Sr. Dr. Isasmendi de cuyo acto se mostraron todos los Academicos mui satisfechos.” (Junta general de 8-XI-1737. ARANM, L-1, fol. 279). La Academia le había encomendado una disertación más para este año, en el acta de la junta celebrada el 11-I-1737 quedó anotado: “Dn. Joseph Ortega: Del Alcanphor Hispano. Vierns. 6 de Dizbre.” (ARANM, L-1, fol. 226), pero ese día no hubo junta. 114 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Asimismo se acordó qe. aya un revisor de estilo, el qual tenga obligacion de notar lo qe. no estuviese conforme con el buen uso de la lengua castellana, y para este empleo nombró la Academia á mi el Ssrio. Asimismo mando la Academia qe yo el Ssrio. la proponga un systema ortographico, á fin de que todos sus individuos usen en los escritos de una misma puntuacion, y metodo ortographico…”271 No fue ésta la única publicación de la Academia; desde el año 1738, la institución hizo públicos la relación de actos que en ella se organizaban272; se imprimieron de ellos 150 ejemplares anuales, aunque concebidos como efímera, alguno ha llegado a nuestros días273. Los actos literarios celebrados durante 1738 cuentan, como en los años anteriores, con la presencia continua de José Hortega; el 7 de marzo presenta en la Academia unas ‘memorias’ sobre la historia de las plantas de España274. Igual situación se vive en 1739, el 21 de marzo leyó en la Academia una disertación sobre los metodos de las plantas, continuó con las ‘memorias’ para la historia general de las plantas de España275 y, el 2 de 271 Junta general de 23-VII-1737 (ARANM, L-1, fols. 262-266). En el acta de la junta particular de académicos de número celebrada el 25-II-1738, se anota: “… acordaron se imprimiese el Catalogo de los Actos Literarios para este Año de 1738 en la misma forma qe. esta dispuesto y qe se leyó en esta Junta…” (ARANM, L-1, fol. 299). 272 273 Así se lee en el acta de la junta general celebrada el 5-III-1742: “Asimismo arregló, y dispuso la Academia el Catalogo de los Actos Literarios para este presente año, cuyo original queda entre los papeles de mi cargo, y arreglado á el mandó que se imprimiesen ciento, y cinquenta Exemplares, como se ha hecho otros años…” (ARANM, L-1, fol. 437). Este impreso tuvo cierto éxito, Francisco de Sola solicita, en carta a José Hortega, fechada en Estella el 20-IV-1746, la remisión del correspondiente a aquel año (ARANM, leg. 7,504). La Real Academia Nacional de Farmacia conserva uno de estos programas, el relativo a los actos que habrían de celebrarse en 1744 (ARANF, leg. 5,11). 274 “Dn. Joseph Hortega presentó á la Academia pr. escrito su Discurso que contenia las Memorias para la Historia de las Plantas de España, el qual fue leido en la Junta, de cuyo acto se mostraron muy satisfechos el Sr. Presidente, el Sr. Director, el Sr. Fiscal y los Sres. Academicos: Garro, Lopez, Brunet, Serena, Rodríguez, Isasi Isasmendi, Valle...” (Junta general de 7-III-1738. ARANM, L-1, fol. 301). “Dn. Joseph Ortega presento á la Academia pr. escrito una Dissertacion sobre los methodos de las plantas, y continuacion de las Memorias para la Historia Genl. de las Plantas de España, la qual fue leida á la Junta, y assimismo aprobada…” (Junta general de 21-III-1748. ARANM, L-1, fol. 348). 275 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 115 mayo, intervino en la discusión mantenida tras la conferencia de Cristóbal Vélez sobre el examen de la sal amoníaco276. En la primavera de 1740 se anuncia la Campaña de Mallorca, José Hortega, que apenas un año y medio antes había sido nombrado Boticario mayor de los Reales Ejércitos, debe acudir a ella, por lo que la Academia nombra secretario sustituto en la persona de Juan de Dios López277. José Hortega no asistirá a las juntas celebradas por la Academia entre el 20 de mayo de éste 1740 y el 20 de enero de 1741; su asusencia afectó a los actos programados por la Corporación, en el acta de la junta general que habría de celebrarse el 2 de diciembre de 1740 se anota: “Oi correspondia que el Sr. Ssrio. Dn. Joseph Hortega presentase su Discurso: Continuacion de las Memorias pr. la Historia de las Plantas de España, pero pr. estar a la Expedicion de Mallorca de Orden de el Rey (qe. Dios gde.) y pr. aver mui pocos Academicos no se celebró la Junta”278. Se resarció de su falta de contacto con la Academia durante el mes de mayo de 1741, ocupó entonces por tres veces el estrado: el 5 de mayo presentó una disertación botánica sobre una planta de origen chino: el ginseng279; el 12 de mayo otra sobre una planta de América: la ‘cascarilla, ó chacarilla’280 y, el 26 de mayo, sobre la denominada ‘Scrophularia aquatica major ó Betonica aquatica’281. Nada más nos consta que presentara éste 276 “El Sr. Velez presentó á la Acadª. pr. escrito el Examen del sal amoniaco el qual fue leido en la Junta, y dificultó sobre su contenido el Sr. Ortega, y ultimamte. fue aprovado pr. la Academia.” (Junta general de 2-V-1739. ARANM, L-1, fol. 352). “Asimismo se acordo que el Sr. Ldo. Dn. Juan de Dios Lopez sirbiese el Empleo de secretario en la ausencia que está para hacer á la expedicion de Mallorca de orden del rey Dn. Joseph Hortega Ssº. Pepº. de la Acadª.” (Junta general de 8-IV-1740. ARANM, L-1, fol. 384). Juan de Dios López firmará el acta de la junta celebrada el 20-V-1740 y las de los días posteriores, hasta la junta general de 27-I-1741, en que vuelve a recogerse la firma de José Hortega. 277 278 Junta general de 2-XII-1740 (ARANM, L-1, fol. 396). “Yo el Secretario presenté á la Academia una Dissertacion Botanica sobre una Planta de la China llamada Gin-Seng, la qual fue leida en la Junta, y aprobada por la Academia...” (Junta general de 5-V-1741. ARANM, L-1, fol. 416). 279 “Yo el Secretario presenté á la Academia una Dissertacion Botanica sobre una Planta de la America llamada Casacarilla, ó Chacarilla, la qual fue leida en la Junta, y aprobada pr. la Acadª...” (Junta general de 12-V-1741. ARANM, L-1, fols. 416-417). 280 281 “Yo el Secretario presenté á la Academia pr. escrito una Dissertacion 116 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol 1741, las actas recogen su intervención en el coloquio posterior a la disertación de Vicente Carreras, pronunciada el 25 de diciembre, sobre las petequias282. Intervino en la discusión suscitada tras la conferencia de Joaquín Cervino, leída el 16 de febrero de 1742, que versó sobre la utilidad de la aplicación de medicamentos simples en la curación de las enfermedades283; también tomo parte en los comentarios posteriores a la disertación de Pedro León Gómez, el 16 de marzo, sobre el uso de la sangria284; el 13 de abril es Hortega quien diserta en la Academia, esta vez sobre el kermes mineral285. Este año de 1742 correspondió a José Hortega pronunciar una de las dos conferencias públicas que la Academia organizaba anualmente; eligió una disertacion sobre ‘el licor anodino mineral de que hace memoria en sus obras Federico Hoffman’, la leyó, Botanica sobre una Planta llamada Scrophularia aquatica major, ó Betonica aquatica la qual fue leída en la Junta, y aprobada pr. la Academia…” (Junta general de 26-V-1741. ARANM, L-1, fols. 417-418). ‘Scrophularia aquatica major’ es el nombre empleado por Tournefort para designar la planta (Institutiones: 166), ‘Betonica aquatica’ es el común como oficinal. 282 “El Sr. Carreras presentó á la Acadª. por escrito una Dissertacion sobre las Pethequias, que es uno de los Accidentes que acompañan á las calenturas agudas, la qual fue leida en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Ortega, y Lopez y fue aprobada por la Acadª...” (Junta general de 25XII-1741. ARANM, L-1, fol. 425). 283 “El Sr. Cervino presentó á la Academia por escrito una Dissertacion sobre la utilidad de aplicacion de los Medicamentos simples en la curacion de las Enfermedades la qual fue leida en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Torres, Sevillano, Palomero, y Ortega, y fue aprobada pr. la Academia…” (Junta general de 16-II-1742. ARANM, L-1, fol. 434). 284 “El Sr. Leon Gomez presentó á la Acadª. pr. escrito una Dissertacion sobre el uso de la Sangria, sga. pte., la qual fue leida en la Junta, y dificultaron los Sres. Palomero, Lopez, y Ortega, y fue aprobada pr. la Acadª….” (Junta general de 16-III-1742. L-1, fol. 438). “El Sr. Ortega presentó á la Academia pr. escrito una Dissertacion intitulada Memorias sobre el Kermes Mineral, la qual fue leida en la Junta, y aprobada por la Academia…” (Junta general de 13-IV-1742. ARANM, L-1, fol. 446). 285 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 117 ante la junta general del 28 de septiembre, ‘por vía de prueba’286 y la defendió en la junta pública del 1 de octubre287. En los comienzos de 1743, el 25 de enero, participa en el concurrido coloquio posterior a la conferencia de José Lorente sobre el recto medio de administrar la quina288; volvió a intervenir tras el acto, celebrado el 31 de enero, en que Lorente disertó sobre el abuso de la quina289; el 15 de marzo hizo lo propio después de las observaciones anatómico-quirúrgicas pronunciadas por Santa Ana290; y el 22 de marzo intervino en el coloquio posterior a la disertación de Miguel Rodríguez ‘sobre la ventajosa verosimilitud, firmeza, y utilidad del sistema mecánico respecto de los demás’291; el 25 de octubre correspondió disertar a José 286 “Yo el Srio. lei á la Academia, pr. via de prueba como es estilo, la Dissertacion sobre el Licor anodyno Mineral de que haze memoria en sus obras Federico Hoffman Medico del Rey de Prusia, la qual fue aprobada pr. la Academia para el efecto de leerla en Publico el dia primº. de Octubre, como se refiere en el Catalogo de los Actos Literarios deste año” (Junta general de 28IX-1742. ARANM, L-1, fol. 454-455). La bibliografía para preparar la disertación estuvo en su biblioteca; en sus estantes conservaba los seis volúmenes en folio de Friderici Hoffmanni... Opera omnia physico-medica, denuo revisa, correcta & aucta, in sex tomos distributa, quibus continentur doctrinae solidis principiis physicomechanicis, & anatomicis, atque etiam observationibus clinico-practicis superstructae. Methodo facili ac demonstrativa deductae, & per experientiam LVII. annorum stabilitae, cum vita auctoris [J.H. Schultze scripta], et ejus praefatione de differente medicinae & medicorum statu atque conditione, & criteriis boni ac periti medici... Genevae: apud fratres de Tournes, 1740. “Yo el Srio. lei en Publica Junta una Dissertacion sobre el Licor anodyno-mineral, del que hace memoria en varias partes de sus obras Federico Hoffman, Methodo de prepararle, y su uso, la qual fue aprobada pr. la Academia…” (Junta pública de 1-X-1742. ARANM, L-1, fol. 456). 287 288 “El Sr. Lorente presentó á la Academia pr. escrito una Dissertacion sobre el recto modo de administrar la Kina, la qual fue leida en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Torres, Cervino, Campillo, Rodríguez, Argandoña, Palomero, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la Academia...” (Junta general de 25-I-1743. ARANM, L-1, fol. 474). “El Sr. Lorente presentó á la Academia pr. escrito una Dissertacion sobre el Abuso de la Kina, la qual fue leida en la Junta, y dificultaron sobre su contenido, los Sres. Isasmendi, Lope, Palomero, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la Academia...” (Junta general de 31-I-1743. ARANM, L-1, fol. 476). 289 290 “El Sr. Santa Ana presentó á la Academia pr. escrito las observaciones Anatomico-Chyrurgicas, cuyo assumpto fue leido en la Junta, dificultaron sobre su contenido los Sres. Valle, Lopez, Carreras, Palomero, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la Academia...” (Junta general de 15-III-1743. ARANM, L-1, fol. 481). 291 “El Sr. Rodriguez presentó á la Academia pr. escrito una Dissertacion sobre la ventajosa verisimilitud [sic], firmeza, y utilidad del systhema mechanico 118 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Hortega, lo hizo sobre el jabón de España y su uso en medicina292, en una primera parte, que habría de tener continuación en su siguiente conferencia, pronunciada casi un año después, el 22 de mayo de 1744293; durante los últimos meses de éste 1743 siguió participando en las juntas generales: en el coloquio establecido tras la conferencia de Juan José García Sevillano, pronunciada el 8 de noviembre, en la que trató sobre la linfa, su movimiento y usos294; y en la discusión mantenida, el 22 de noviembre de 1743, tras la conferencia de Joaquín Cervino, sobre el movimiento del quilo295. Durante el año de 1744 José Hortega ocupó la dirección de la sección de Farmacia296. No estuvo ocioso durante los primeros meses de 1744; la reforma de los estatutos de la Academia, pergeñada en la junta general de 3 de abril de 1742 y aprobada respecto de los demas, la qual fue leida en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Padros, Lorente, Campillo, Monleon, Lope, Carreras, y Ortega, cuyo Acto fue aprobado pr. la Academia...” (Junta general de 22-III1743. ARANM, L-1, fol. 482). 292 “El Sr. Hortega presentó á la Academia una Dissertacion sobre el Xabon de España, y su uso en Medicina, primera parte, la ql. fue leida en la Junta, y dificultó sobre su contendio el Sr. Fiscal, cuyo acto fue aprobado pr. la Academia” (Junta general de 25-X-1743. ARANM, L-1, fol. 494). 293 “El Sr. Ortega presentó á la Acadª. pr. escrito una Dissertacion sobre el el [sic] Xabon de España, y su uso en la Medicina, la qual fue leida en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Velez, Lope, Garro, y Carreras, cuyo acto fue aprobado pr. la Academia...” (Junta general de 22-V-1744. ARANM, L-1, fol. 526). “El Sr. Sevillano presento á la Academia. pr. escrito una Dissertacion sobre la Lympha, su movimiento, y usos la qual fue leida en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Padros, Lorente, Cervino, Leon Gomez, Rodriguez, Lope, Carreras, Palomero, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la Academia...” (Junta general de 8-XI-1743. ARANM, L-1, fol. 496). 294 “El Sr. Cervino presentó á la Academia, pr. escrito una Dissertacion sobre el Chylo en movimiento, y Destino: segunda Parte, la qual fue leida en la Junta, y dificultaron sobre su contendio los Sres. Padros, Leon Gomez, Rodriguez, Carreras, Palomero, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la Academia...” (Junta general de 22-XI-1743. ARANM, L-1, fol. 498). 295 296 En la junta particular de 31-XII-1743 se proclama su candidatura: “Para Director Pharmaceutico el Dn. Joseph de Ortega actual Srio. y el Sr. Dn. Fco. Lozosoayn, Boticario de familia, y Acadº. Honorario residte. en Pamplona.” (ARANM, L-1, fol. 503). La elección se produjo en la siguiente junta general, celebrada el 1-I-1744: “Por Director Pharmaceutico el Sr. Dn. Joseph de Ortega Boticario de S.M. y Mayor de sus Rs. Exercitos, Examinador del Rl. Protomedicato, fundador, y Secretario Perpetuo de la Academia.” (ARANM, L-1, fol. 505). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 119 por el Consejo de Castilla el 14 de septiembre de aquel año, obligaba a su nueva redacción, a cuyo fin se nombró una comisión formada por Miguel Campillo, quien a la sazón ocupaba plaza de fiscal, y los académicos Vicente Carreras, Alejandro Martínez de Argandoña, Tomás Francisco Monleón y José Hortega297; el trabajo, asignado en los comienzos de febrero de 1744, se dio por concluido en julio de este año, entonces se nombraría una nueva comisión, encargada de su examen, en la que también participó Hortega298. Su colaboración en la redacción de los estatutos, al que se unía su labor habitual como secretario de actas, no le impidió seguir tomando parte en las discusiones académicas: el 23 de marzo de 1744, Vicente Carreras y José Hortega “hablaron en consulta sobre un caso Medico y Pharmaceutico”, cuyo asunto no nos refieren las actas299; y el 22 de mayo continuó con su conferencia sobre el jabón medicinal de España, a la que ya nos hemos referido líneas arriba. Aún más participativo se muestra en 1745: el 15 de enero interviene en la discusión posterior a la conferencia de Vicente Gilabert, sobre el origen de la máquina hidráulico-pneumatica300; el 22 de enero, tomó parte en la tertulia que siguió a la conferencia de Francisco Padrós sobre el abuso de los diaforéticos y el uso 297 “Con motivo de haber necesidad de hacer nueba impresión de los Estatutos, acordó la Academia, que primeramte. se dispusiesen los referidos Estatutos arreglados á las tres cedulas de S.M. para cuyo efecto nombró el Sr. Presidente una Junta particular compuesta por el Sr. Fiscal, y los Sres. Carreras, Argandeña, Monleon, y Ortega, á fin de qe. formen los referidos Estatutos, los presenten á la Academia, con todo aquello qe. les parezca conveniente…” (Junta general de 7-II-1744. ARANM, L-1, fol. 513). “La Academia nombró por revisores de los nuebos Estatutos que estan dispuestos una Junta Particular compuesta del Sr. Presidente, del Sr. Fiscal, del Sr. Secretario, y de los Sres. Carreras y Argandeña, para qe. con su Aprobación se impriman…” (Junta general de 13-VII-1744. ARANM, L-1, fol. 559). 298 299 “Los Sres. Carreras, y Ortega hablaron en consulta sobre un caso Medico y Pharmaceutico, qe. les señaló el Sr. Presidente, y después que hablaron dichos Sres. Academicos, hablo, y resolvio el Sr. Presidente, cuyo acto fue aprobado pr. la Academia…” (Junta general de 23-III-1744. ARANM, L-1, fol. 520). 300 “El Sr. Gilabert presentó á la Academia por escrito una Dissertacion sobre el origen, ó generacion de la Machina Hidraulico-Pneumatica, la qual fue leída en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Campillo, Palomero, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la Academia…” (Junta general de 15-I1745. ARANM, L-1, fol. 541). 120 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol del agua en las calenturas agudas301; en la junta reunida el 9 de abril fue José Hortega quien arguyó sobre la trementina del Principado de Cataluña302; el 26 de abril, dentro de la fórmula del ‘hablaron en consulta’303, intervinieron Cristóbal Vélez y José Hortega sobre un producto químico, el bezoárdico jovial304; en la mañana del 7 de mayo volvió a participar, tras una nueva intervención de Vicente Gilabert, de nuevo relativa a la máquina hidráulico-pneumática305; el 21 de mayo tomó parte en el diálogo que se estableció tras pronunicar, Juan José García Sevillano, su disertación sobre las cautelas que deben observarse en la administración de los medicamentos306. El 24 de mayo de 1746 intervino en la presentación que Antonio María Herrero realizó sobre fósiles, las ‘piedras “El Dr. Padrós presentó á la Academia por escrito una Dissertacion sobre el Abuso de los Diaphoreticos, y el uso del Agua en las calenturas agudas: la qual fue leida en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Sevillano, Campillo, Palomero, Garro, Monleon, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la Academia…” (Junta general de 22-I-1745. ARANM, L-1, fol. 542). 301 302 “El Sr. Ortega presentó á la Academia pr. escrito una Dissertacion sobre la Trementina del Principado de Cataluña, la qual fue leida en la Junta, y dificultó sobre su contenido el Sr. Velez, cuyo acto fue aprobado pr. la Academia…” (Junta general 9-IV-1745. ARANM, L-1, fol. 550). 303 Era ésta la fórmula adoptada para las consultas médico-prácticas, habitualmente celebradas las noches de los lunes y que, desde los comienzos de 1748, pasarían a celebrarse en las mañanas de los sábados; en el acta de la junta general celebrada el 1-II-1748 queda anotado: “La Academia acordó, que las consultas Medico-practicas, que hasta ahora se han tenido los Lunes en la noche, se tengan de aquí en adelante los Sabados á las 11 de la mañana, y qe. los Sres. Academicos consultantes, no puedan hablar mas que un quarto de hora cada uno…” (ARANM, L-1, fol. 629). “Los Sres. Velez y Hortega hablaron en consulta sobre una operación chimica llamada Bezoardico Jovial, principalmte. sobre su color, y sabor, qe. les señaló el Sr. Presidente, y despues qe. hablaron dhos Sres. Academicos, hablo y resolvio el Sr. Presidente, cuyo Acto fue aprobado pr. la Academia...” (Junta general de 26-IV-1745. ARANM, L-1, fol. 550). 304 305 “El Sr. Gilabert presentó á la Academia pr. escrito una Dissertacion sobre la Composicion, y Movimiento de la Machina, Hydraulico-Pneumatica, la qual fue leída en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Sevillano, Carreras, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la Academia…” (Junta general de 7-V-1745. ARANM, L-1, fol. 553). 306 “El Sr. Sevillano presentó á la Academia por escrito una Dissertacion sobre las cautelas que deben observarse en la Administracion de los Medicamentos, la qual fue leída en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Martinez, Ros, Padros, Cervino, Monleon, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la Acadª…” (Junta general de 21-V-1745. ARANM, L-1, fol. 556). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 121 figuradas’, que habría de servir como una de las dos sesiones públicas que la Academia tendría ese año307; el 9 de diciembre de éste 1746 José Hortega ocupó la tribuna para tratar de la sal natural catártica de Añover de Tajo308; y unos días después, el 15 de diciembre, volverá a acomodarse en el puesto del orador para presentar varias noticias sobre el metal similar de ‘Mr. de Reney [sic ¿por Koening?]’309. Ese verano de 1746 la Academia le había encomendado, junto a Tomás Monleón, la representación ante el Consejo de Castilla, para impedir que una nueva agrupación médico-quirúrgica, la Sociedad Médica de Nuestra Señora de la Esperanza, gozara de privilegios que pudieran equipararla a la Regia Academia Médico-Matritense310; situación que fue solventada, al gusto de la Academia, apenas unos meses después311. 307 “El Sr. Herrero hizo la prueba de su Dissertacion publica sobre el origen de las Piedras figuradas, y dificulto sobre su contenido el Sr. Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la Academia…” (Junta general de 24-V-1746. ARANM, L-1, fol. 582). La junta pública tuvo lugar el 6-VI-1746 (ARANM, L-1, fol. 583). 308 “El Sr. Ortega presentó á la Academª pr. escrito una Dissertacion sobre la sal natural cathartica de la Villa de Añover de Tajo, la qual fue leida en la Junta, y aprobada pr. la Academia…” (Junta general de 9-XII-1746. ARANM, L-1, fol. 591). “El Sr. Ortega presentó á la Academia pr. escrito varias noticias sobre el Metal similar de Mr. Reney [sic], las quales fueron leidas en la Junta, y aprobadas pr. la Academia…” (Junta general de 15-XII-1746. ARANM, L-1, fol. 593). 309 310 La primera noticia sobre la fundación de esta sociedad figura en el acta de la junta de gobierno celebrada por la Academia el 14-V-1746 (ARANM, L-1, fol. 580); en la siguiente junta de gobierno, la reunida el 23VI-1746, el problema se vuelve más acuciante: “…varios Medicos, y Cirujanos continuaban la fundacion de una Sociedad Medica en esta Corte (…) y qe. para lograrlo avian ocurrido al Consejo con cierto Pedimento y las constituciones para su Aprobacion, de que enterada la Academia acordó qe. desde luego debia oponerse pr. todos los Medios á qe. no se hiciese la fundacion de la Sociedad Medica qe. se intentaba, y qe. para embarazarlo se ocurriese al Consejo judicial, y extrajudicialmte. hasta conseguirlo, y en su consequencia nombro el Sr. Presidente pr. Diputados de la Academia á los Srs. Monleon y Ortega para qe. en su Nombre practiquen quantas diligencias judiciales, y extrajudiciales sean conducentes, y necessarias, assi en el Consejo, como con los Sres. Consejeros, y qe. de quanto practiquen den cuenta al Sr. Presidente…” (ARANM, L-1, fols. 583-584). 311 En la junta general reunida el 15-X-1746: “Se dio quenta á la Acadª. de un testimonio fecha 25 de octre. [sic por septiembre] deste año, firmado de Dn. Miguel Fernz. Munilla Secretario de Camara del Consejo de Castilla pr. el qual consta, qe. pr. Decretos del Consejo de 12 de Sepre. y de 16 de dicho mes se acordó qe. no ha lugar á la Aprobacion de las ordenanzas qe. solicita la Sociedad 122 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol En el verano de 1746, el 9 de julio, fallece Felipe V; pocos días después, el 10 de agosto, subirá al trono de España Fernando VI; la Academia no parece darse por enterada de estos acontecimientos, al menos no queda testimonio de ellos en sus actas312; sólo se anotó el cambio de su Presidente perpetuo, José Suñol, quien vino a sustituir a José Cerví en la dirección del Protomedicato313. En enero de 1747 José Hortega es elegido por la Academia para que se ocupe de dirigir la sección de Farmacia314; durante este año las actas de la Corporación no llevan su firma de manera habitual, sino la de quien actuará como su sustituto, Antonio María Herrero315. Aun cuando parezcan producirse algunas medica de Nra. Sra. de la Esperanza, cuyo testimonio queda entre los Papeles de la Acadª. la qual quedó enterada de la referida Novedad...” (ARANM, L-1, fol. 590). Sin embargo esta sociedad debió de seguir activa, o al menos una homónima; la Real Academia Nacional de Farmacia conserva, en su archivo, un programa de actos de la Sociedad Médica de la Real Hermandad de María Santísima de la Esperanza de Madrid, correspondiente a 1760 (ARANF, leg. 9,13). No hemos encontrado en ellas alusión alguna al encargo que, de acuerdo con la “Noticia histórica del orígen, progresos y estado actual de la Real Academia Médica de Madrid”, ésta le encargó componer a José Hortega: “… Oracion que de acuerdo del Cuerpo dispuso su Secretario perpetuo a ejemplo de otras Academias, que mas dichosas, pudieron costear con sus donaciones la impresión de las suyas…” Memorias de la Real Academia de Medicina, 1: VII. Madrid, 1797. 312 313 El cambio en la Presidencia de la Academia se anota en el acta de la junta general reunida el 22-VIII-1746: “Aviendo nombrado S.M. al Sr. Dr. Dn. Jph. Suñol pr. su Primer Medico, y de la Reyna nra. Señora, y assimismo Presidente del Rl. Protomedicato, y jubilado en estos empleos el Sr. Dr. Dn. Jph. Cervi, recayó pr. el mismo hecho la Presidencia Perpetua de la Academia en el Sr. Dr. Suñol, en virtud de sus Estatutos, y Ordenes de S.M. y en consequencia nombró el Sr. Presidente pr. Diputados para que le cumplimentasen con estos motivos, y assimismo para qe. le reconociesen en nombre de la Acadª. pr. tal Presidente Perpetuo á los Sres. Isasmendi, y Palomero, y el Sr. Palomero, qe. estaba presente dio cuenta á la Acadª. de que ambos Sres. Diputados cumplieron con este encargo, y leyo en la Junta la oracion de enhorabuena qe. le hicieron…” (ARANM, L-1, fol. 586). 314 En el acta de la junta particular de 31-XII-1746 se anota la propuesta: “Para Director Pharmaceutico á los Sres. Joseph de Ortega, y Dn. Joseph Salvador.” (ARANM, L-1, fol. 594); su elección tuvo lugar en la junta general celebrada el 1-I-1747: “Por Director Pharmaceutico al Sr. Dn. Joseph Ortega actual Secretario.” (ARANM, L-1, fols. 585-598). En el acta de la junta general celebrada el 14-I-1747 se anota: “El S . Presidente propuso á la Academia que tenia por conbeniente que hubiese en ella un Segundo Secretario que supliese las ausencias, y enfermedades del 315 r José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 123 ausencias316, la actuación de José Hortega en la Academia, este año, apenas difiere de la mantenida durante cursos anteriores: en la junta general del 23 de marzo de éste 1747 interviene en la discusión habida tras la disertación presentada por Joaquín Cervino sobre el abuso de algunos medicamentos tópicos317; y el 26 de octubre fue Hortega quien pronunció una conferencia sobre un método para aumentar la solidez de las maderas318. Finalizado su mandato como director farmacéutico vuelve a firmar las actas de las juntas de la Academia, desde enero de 1748; y, como era norma, participa activamente en sus conferencias: el 18 de enero activó el diálogo tras la disertación de Antonio María Herrero sobre la electricidad de los cuerpos319; Secretario perpetuo que lo es el Sr. Ortega actual Director, y conbenidos los Sres. Academicos con la proposicion del Sr. Presidente, propuso este para segundo Secretario á los Sres. Pueyo y Herrero, y habiendose votado por votos secretos fue electo por pluralidad por segundo Secretario el Sr. Herrero, el qual exercerá este empleo por todo el tiempo que fuere la voluntad de la Academia...” (ARANM, L-1, fols. 599-600). 316 No es fácil seguir su asistencia a las sesiones académicas, en ocasiones se anota la presencia de ‘los Sres. Directores’, en otras la del ‘Director Pharmaceutico’ y en las menos se le menciona por su apellido, Ortega / Hortega; probablemente se ausentó en las correspondientes a tres periodos: los días 6-II, 9-II y 16-II-1747; 18-V y 25-V-1747 y 23-XI, 27-XI y 14-XII-1747. De manera excepcional, la firma de José Hortega figura en el acta de la junta general celebrada el 16-XI-1747, aun cuando a ella también asistió Antonio María Herrero quien, a la sazón, realizaba las tareas de Secretario de la Academia (ARANM, L-1, fol. 618). 317 “El S. D. Joaquin Cervino presentó á la Academia por escrito una Dissertacion sobre el Abuso de algunos Medicamentos topicos comunmente recibidos en el uso Medico, la qual fue leida en la Junta y dificultaron sobre su contenido los SS. Ortega, Lope, Lopez, Martinez, Gilabert, Pueyo, y Herrero; cuyo Acto fue aprobado por la Academia…” (Junta general de 23-III-1747. ARANM, L-1, fol. 608). “El Sr. Ortega actual Director Pharmaceutico presentó á la Academia por escrito la segunda Dissertacion sobre la Historia natural de España, la qual intituló, Methodo facil, y demostrado de aumentar la solidez, y la fuerza de las Maderas, y habiendo sido leida en la Junta, fue aprobada por la Academia…” (Junta general de 26-X-1747. ARANM, L-1, fol. 615). 318 319 “El Sr. Herrero presentó á la Academia por escrito una Dissertacion sobre la electricidad de los Cuerpos segunda parte, la qual fue leida en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Lope, y Ortega, cuyo Acto fué aprobado por la Academia…” (Junta general de 18-I-1748. ARANM, L-1, fol. 627). La primera parte fue defendida en la junta general celebrada el 9-XI-1747: “El Sr. Herrero presentó á la Academia por escrito una Dissertacion sobre la electricidad de los cuerpos 1ª parte, la qual fue leida en la Junta, y aprobada por la Academia…” (ARANM, L-1, fols. 616-617). 124 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol el 30 de marzo presentó a la Academia el Elogio histórico de Joseph Cervi320, primer Presidente perpetuo de la Corporación, ésta acordó su impresión inmediata321. Este año de 1748 le cupo, de nuevo, el honor de impartir una de las dos conferencias públicas anuales organizadas por la Corporación, optó por tratar sobre una sal mineral amarga descubierta en la jurisdicción de la ciudad de Cuenca; realizó la correspondiente prueba en la junta general celebrada el 28 de septiembre322, y la expuso públicamente el sábado 5 de octubre323. Aún ocupó por dos veces más, este año de 1748, la tribuna de la Academia: el 24 de octubre presentó una descripción de la ‘Becabunga germanorum, o Veronica aquatica major’324 y, pocos días después, el 31 de este mismo mes, leyó el examen de las aguas de San Fernando que realizó de orden de la Corte325. “El Sr. Ortega presentó á la Acadª. por escrito el Elogio Historico del S . D . Dn. Joseph Cervi, qe. fue Primer Medico de S.M. y Primer Presidente Perpetuo de la Academia, el qual fue leido en la Junta y aprobado pr. la Acadª. nemine discrepante, la qual acordo que se imprimese el referido Elogio tomando antes el beneplacito del Sr. Dr. Joseph Suñol actual Presidente perpetuo de la Acadª.” (Junta general de 30-III-1748. ARANM, L-1, fol. 636). Giuseppe Cervi había fallecido, en Madrid, el 25-I-1748. 320 r r 321 José Hortega. Elogio historico del señor doctor D. Joseph Cervi, leìdo a la Real Academia Medica Matritense en 30 de marzo de mil setecientos quarenta y ocho, por su secretario don Joseph de Ortega. En Madrid: en la Imprenta del Mercurio, 1748. 47 p., [1] h. “El Sr. Ortega hizo la prueba de su Dissertacion publica la qual intitulo sobre una sal mineral amarga nuebamte. descubierta en la Jurisdiccion de la Ciudad de Cuenca, la qual fue leida en la Junta, y aprobada pr. la Acadª.” (Junta general de 28-IX-1748. ARANM, L-1, fol. 640). 322 323 “El Sr. Ortega, leyo publicamte. su Dissertacion sobre la sal mineral amarga nuebamte. descubierta en la Jurisdiccion de la Ciudad de Cuenca, y sobre su contenido dificultaron los Sres. Herrero, y Borunda, de cuyo acto se mostro muy satisfecha la Academia y el numeroso concurso de Profesores, y gente de distinn. qe. asistió á esta Junta publica.” (Junta pública de 5-X-1748. ARANM, L-1, fol. 640). 324 “El Sr. Hortega presentó á la Acadª. pr. escrito la Descripción historica de la Becabunga Germanorum, ó Veronica aquatica major, folio subrotundo IRH 145 la qe. fue leida en la Junta, y aprobada pr. la Acadª… ” (Junta general de 24-X-1748. ARANM, L-1, fol. 641). La referencia alude a “Veronica aquatica, major, folio subrotundo Mor. Hist. Oxon. Part. 2. 323.” (Joseph Pitton de Tournefort. Institutiones rei herbariae. Editio tertia [...] Tomus primus. Parisiis: e Typographia Regia, 1719, pág. 145). “El Sr. Hortega leyó á la Academia el examen de las Aguas de S. Fernando que hizo de orden de la Corte; contra el qual arguyó el Sr. Lope, y fue aprobado por la Academia...” (Junta general de 31-X-1748. ARANM, L-1, fol. 642). 325 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 125 Su participación en los actos celebrados en 1749 es parca; sólo una intervención, en la sesión del 20 de marzo, para actuar en el coloquio posterior a una disertación de Cristóbal Vélez sobre la naturaleza del coral326. No asiste a las reuniones tenidas en la segunda mitad de este año, quizás se encontrara ausente de Madrid327. El año de 1750 acude, desde los inicios, a las sesiones de la Academia; el 26 de febrero participa activamente en el coloquio posterior a la comunicación de Juan Minuart sobre su descripción botanica de la ‘Petasites minor folio subrotundo’328, que habría de hacer popular Pehr Löfling329; en la junta celebrada 326 “El Sr. Velez presento á la Acadª. pr. escrito una Dissertacion sobre la Naturaleza del Coral: á que Reyno pertenece, y si en los distintos colores hay diversidad de virtudes, la qual fue leida en la Junta y dificultaron sobre su contenido los Sres. Herrero, Martinez, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la Acadª...” (Junta general de 20-III-1749. ARANM, L-1, fol. 660). 327 Su firma, como Secretario, figura en la junta general celebrada el 22V-1749 (ARANM, L-1, fol. 665), pero falta en la posterior, reunida el 21-IX-1749, en la que es sustituido en sus funciones por Antonio María Herrero (ARANM, L-1, fol. 665); su rúbrica -y la anotación de su asistencia- no volverá a estar presente hasta la junta particular celebrada el 7-I-1750 (ARANM, L-1, fol. 669). “El Sr. Minuart presento á la Acadª. pr. escrito la Descripcion Botanica de la Petasites minor folio subrotundo, la qual fue leida en la Acadª. y dificultaron sobre su contenido los Sres. Velez, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la Acadª...” (Junta general de 26-II-1750. ARANM, L-1, fol. 680). 328 329 Sobre esta nueva planta, probablemente Petasites pyrenaica (L.) G. López (Ginés López González. “De Linnaei plantis hispanicis novitates nonnullae”. Anales del Jardín Botánico de Madrid, 42(2): 319-324. Madrid, 1986), escribió Pehr Löfling a Carl Linné: “Petasites minor, folio subrotundo Minuartii, que él describió en la Academia médica. Antes de ahora la vi en flor en el jardin [de la Real Botica]; es tan chica que apenas llega á la altura de un dedo. Las hojas son arriñonadas, muy tenues, lisas y verdes por ambos lados. La flor es del color de la del Pentasites vulgar, y consta de tantas piezas quantas son las que forman las series squamarum calycis. Corollulae disci copiosae hermaphroditae; radii feminea ligulatae oblongae integrae: thyrsus pauciflorus. ¿Será quizá alguna de las especies que Vmd. cita, hablando de los Petasites Fl. Lapp. 303. S.? La descripcion que Minuart me comunicó es buena...” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 8-I-1753 [L-1515]. LS, signatura: ms. LS, IX: 360362 -cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46 [4(12): 338-339. 1801; 5(13): 8290. 1802; la cita transcrita en págs. 87-88]-). Joseph Quer (fide Casimiro Gómez Ortega. Continuacion de la Flora Española, ó Historia de las plantas de España, que escribia Don Joseph Quer… Ordenada, suplida y publicada de órden del Rey nuestro señor… por el Dr. don Casimiro Gomez de Ortega… Tomo VI. Madrid: Joachîn Ibarra, 1784) aporta alguna información más sobre la planta: “Esta pequeña especie se cria en Cataluña en las cercanías del Monasterio de S. Gerónimo. La raiz es perenne. Florece por Febrero y Marzo. En el año de 1738 estando D 126 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol el 5 de marzo interpela a Antonio María Herrero tras ocuparse éste de los fósforos naturales y artificiales330; volverá a intervenir públicamente, el 12 de marzo, en el activo coloquio posterior a la disertación de Manuel Pueyo, sobre la necesidad de sangrar en las calenturas agudas331; en la sesión del 26 de noviembre fue José Hortega el encargado de pronunciar la conferencia, en ella, continuando la serie de sus memorias sobre la Historia Natural de España, se ocupó del `lápiz plomo’ de Marbella332. Su participación en las sesiones académicas de 1751 fue escasa, hasta donde los datos disponibles nos permiten saber; el 11 de febrero participó en el coloquio mantenido tras la presentación, realizada por Juan Minuart, sobre las Cacalias y Petasítides333; unos meses después, el 13 de mayo, tomó la palabra en la discusión posterior a la disertación pronunciada por Cristóbal Vélez sobre las variedades, estructura y usos de la fructificación334. Desde la junta general celebrada el 29 de Juan Minuart hospedado en mi casa la hizo venir de Cataluña para el Señor Duran Boticario mayor de S.M. y se plantó en el Jardin de la Real Botica, y ha prevalecido como en su patria propia, de tal manera, que se ha propagado por todas partes; esto es en los Reales Sitios, y Jardin de los Boticarios de Madrid, y en otros de Castilla, Andalucía,Valencia, &c…” (Op. cit., pág. 86). 330 “El Sr. Herrero presento á la Acadª. pr. escrito una Dissertacion sobre los Phosphoros Naturales y Artificiales la ql. fue leida en la Junta y dificultaron sobre su contenido los Sres. Llorente, Padros, Pueyo, Oconell, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la Acadª...” (Junta general de 5-III-1750. ARANM, L-1, fol. 681). 331 “El Sr. Pueyo presento á la Acadª. pr. escrito una Dissertacion sobre la necesidad de sangrar en las Calenturas agudas segda. parte, la qual fue leida en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Creagh, Padros, Herrero, Gilabert, Borunda, Sevillano, Lopez, Lope, Oconell, Carreras, y Ortega, cuyo acto fue aprobado pr. la Acadª...” (Junta general de 12-III-1750. ARANM, L-1, fol. 683). 332 “El Sr. Ortega presento á la Acadª. pr. escrito una Dissertacion sobre el Lapiz plomo de Marbella, en continuacion de las Memoria [sic] sobre la Historia natural de España 4ª parte, la qual fue leida en la Junta, y aprobada pr. la Acadª...” (Junta general de 26-XI-1750. ARANM, L-1, fol. 693). “El Sr. Minuar presento á la Acadª. pr. escrito una Dissertacion sobre las Plantas llamadas Cacalias, y la diferencia entre ellas, y las Petasitides, la ql. fue leida en la Junta, y dificultaron sobre su contenido los Sres. Velez, y Ortega, cuyo acto fue aprobada pr. la Acadª...” (Junta general de 11-II-1751. ARANM, L-1, fol. 701). 333 “El Sr. Dn. Christoval Velez hizo la Demostracion Botanica [sobre] la Fructificación, de su variedad, estructura, y uso de las partes, que la componen contra la qual dificultó el Sr. Ortega cuyo acto fue aprobado pr. la Acadª...” (Junta geenral de 13-V-1751. ARANM, L-1, fol. 706). 334 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 127 mayo de 1751 dejará de asistir a las reuniones celebradas por la Academia; no nos queda constancia de cuándo se reincorporó a ella, sin duda con posterioridad a la celebrada el 18 de marzo de 1752, la última de la que tenemos testimonio por sus actas335. Había iniciado su viaje por Europa, una nueva Academia se estaba forjando en su mente. La firma de José Hortega es sustituida por la de Antonio María Herrero desde el acta de la junta particular celebrada el 13-V-1751, pero a ella asiste, e interpela a Cristóbal Vélez que hizo de ponente en la reunión (cf. supra), el acta de la junta particular celebrada el 29-V-1751 está sancionada por Herrero, pero asiste a ella el ‘Secretario primero’ (ARANM, L-1, fol. 707). No quedará testimonio posterior de su participación; una nota añadida al fin del primer volumen de actas señala: “Se han extraviado todas las actas de las Juntas celebradas desde el 16 [sic por 18] de Marzo de 1752, hasta el 5 de Octubre de 1791, qe. se hallaban insertas en el Libº. 2 de Acuerdos de esta Rl. Acadª. Medica Matritense.” (ARANM, L-1, fol. 720). 335 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 129 Al servicio del Rey El cortesano Tras desposarse con la viuda de Luis Llorente, José Hortega inicia una irresistible ascención en la Corte: con anterioridad al verano de 1733 ingresó como examinador del Real Tribunal del Protomedicato336; en razón de este cargo, en la primavera de 1747, giró visita de inspección, junto a los protomédicos José Suñol, Diego Gaviria y Francisco Logui y los examinadores José Manzano de Carvajal y Juan Bayo, a las instalaciones de la Real Botica, entonces regida por el boticario mayor Bartolomé Pérez Durán337. En octubre de 1738, José Hortega ocupó plaza de Boticario mayor de los Reales Ejércitos338. El acceso al cargo no fue sencillo; tras la muerte de Bernardo Abolín, acaecida el 28 de enero de Así lo reconoce el propio José Hortega al historiar los inicios de la ‘Tertulia Literaria’: “La Tertulia Literaria Medico-Chimico-Phisica tuvo principio en doze de jullio de 1733, en casa de dn Joseph Hortega, Profesor Pharmazeutico, Examinador del Rl. Protomedicato, y socio de la rexia Soziedad de las Ciencias de Sevilla...” [“Historia de la Tertulia Literaria Medico-ChymicoPhysica” ARANM, L-1, fols. 1-12; la cita en fol. 1]. 336 337 La “Copia del papel de aviso escripto al rl. Protomicato en 10 de Abril de 1747” queda firmada, en el Buen Retiro, por Juan Pizarro de Aragón, Sumiller de Corps. Unida a ella figura la “Respuesta del Rl. Protomedicato a este aviso, incluyendo la certificación que despues se insertará de los tres voticarios examinantes”, fechada en Madrid, a 16-IV-1747, por José Manzano de Carvajal, José Hortega y Juan Bayo. La visita tuvo lugar entre el 13 y el 15 de abril; de ella se extendió certificación firmada por “D. Joseph Moreno Carvajal voticario de S.M. y examinador del Real Protomedicato y D. Jph. Ortega voticario de S.M. y mayor de sus reales exercitos, examinador del Real Protomedicato de la Real Academia de Medicina” (AGP, Administración, leg. 429). Esta visita a la Real Botica fue estudiada por María Soledad Campos Díez. El Real Tribunal del Protomedicato castellano (siglos XIV-XIX). Cuenca: Ediciones de la Universidad de Castilla-La Mancha, 1999 -cf. pág. 152-). 338 El nombramiento de José Hortega como Boticario mayor de los Ejércitos, fechado en San Lorenzo de El Escorial, el 22-X-1738, por Casimiro Ustariz, se conserva en el Archivo General de Simancas [AGS], Guerra Moderna, leg. 2411 (fide Rafael Roldan Guerrero. La farmacia militar española en el siglo XVIII. Madrid: Imprenta de A. Marzo, 1925 –cf. pág. 40-). 130 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol 1738, el puesto se convocó a concurso público, al que accedieron José Hortega y Gabriel Ribals, quien había ejercido como primer ayudante de Abolín y tenía larga carrera militar339. Pese a lo esperado, el elegido fue José Hortega; es probable que la decisión de José Cerví influyera en su nombramiento340. En los comienzos de febrero de 1739 comunicará la nueva al secretario del Real Colegio de Boticarios: “Aviendose dignado la Piedad del Rey nro. Señor (...) honrarme con los Honores de Boticario de su Real Persona, ofrezco esta nueva Honra á la disposición de nro. Real Colegio de Boticarios, de quien tengo el Honor de ser el menor subdito...”341 Como boticario de los Reales Ejércitos, mediante real orden del 7 de abril de 1740342, fue nombrado boticario mayor de la farmacia del hospital de campaña, formado en Barcelona, para una expedición militar a Mahón, que no llegó a realizarse343, 339 El proceso ha sido estudiado por Rafael Roldan Guerrero (Op. cit. nota 345, cf. págs. 30-40. 1925), utilizando la documentación depositada en AGS, Guerra Moderna, leg. 2411. 340 No en vano escribiría en su Elogio histórico...: “… mostremos públicamente nuestra gratitud todos quantos Academicos hemos tenido la dicha de lograr por su mano tantos premios, y honores de la benignidad del Rey...” (José Hortega. Op. cit. nota 328, cf. págs. 29-30. 1748). “Suplico á V.S. me favorezca en darle quenta (...) al todo el Rl. Colegio, asegurandoles, que vivira perpetuamente en mi agradecimiento las singulares, y copiosas Honras con que siempre se han dignado distinguirme...” Carta de José Hortega a Juan Moreno Bote. Madrid, 5-II-1739 (ARANF, leg. 4,9,2). 341 Con un sueldo de 100 escudos al mes; como ayudantes contó con Andrés Boo y Juan Minuart (AGS, Guerra Moderna, leg. 2460 –fide Rafael Roldán Guerrero. Op. cit. nota 338, pág. 41. 1925). 342 De inmediato, el 8 de abril, comunica la necesidad de emprender el viaje a la Real Academia Médca Matritense: “Asimismo se acordo que el Sr. Ldo. Dn. Juan de Dios Lopez sirbiese el Empleo de secretario en la ausencia que está para hacer á la expedicion de Mallorca de orden del rey Dn. Joseph Hortega Ssº. Pepº. de la Acadª...” (Junta general de 8-IV-1740. ARANM, L-1, fol. 384). Ante el Real Colegio de Boticarios lo anunicaría un mes después: “… respecto del precisso empleo que es el del primer diputado, y este estarle ocupando Dn. Joseph de Hortega, con el motibo de precissarle el salir de la Corte, en cumpto. de su empleo de Boticario mr. de los Rs. exercitos, sé acordó en dha Junta, que el fiscal, que actualmente lo és del Colegio, sirva intterinamte las ausenzias de Dn. Joseph Hortega…” (Junta particular de 8-V-1740. ARANF, L-7, fols. 15v-16r). Debió viajar poco después del 16-V-1740, tras otorgar poder general a favor de Vicente Carreras (AHPNM, protocolo 16.639). 343 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 131 mediante real orden de 17-XII-1740 quedó relevado del servicio y pasó de nuevo a Madrid344. Desde los comienzos de la década de 1750, quizás con anterioridad, sirvió con fidelidad a José de Carvajal y Lancáster (1698-1754), Secretario de Estado entre 1746 y 1754; actuó de intermediario en la contratación de un médico para el Real Sitio de San Fernando, eleccion que recayó en Miguel Barnades y Mainader (1708-1771)345: Desde luego, viajó a Barcelona; según él mismo comenta en su correspondencia con José de Carvajal, estaba en la Ciudad Condal el 23-VI1740, fecha de la muerte de Jaume Salvador Pedrol (Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 15-VI-1751. AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Medicina y ciencia en la españa ilustrada. 1, Epistolario y documentos. [Acta Histórico-Médica Vallisoletana. Monografías, 10]. Valladolid: Universidad de Valladolid, 1981 –cf. págs. 92-94-); el 27-I-1741 ya se encontraba en Madrid; ese día firma, en su calidad de Secretario perpetuo, el acta de la junta celebrada por la Academia Médico-Matritense (ARANM, L-1, fol. 406). Rafael Roldán Guerrero (Op. cit. nota 338, pág. 42-43. 1925) recoge un “Estado de los empleados para el Hospital de Campaña del Exército de prevencion y sueldos que les corresponden”, aprobado en El Pardo, a 31-I-1741 (AGS, Guerra Moderna, leg. 2460), en el que figura José Hortega como ‘Boticario mayor (...) lo es en propiedad’, con un sueldo mensual de 200 escudos, que este autor relaciona con la expedición militar que, al mando de José Ignacio Carrillo de Albornoz y Montiel (1671-1777), duque de Montemar, partió con destino a Italia en diciembre de 1741; en realidad, el documento parece referirse a la plantilla del personal disponible, no al destinado a esta campaña militar; en cualquier caso, los datos sobre la actividad de José Hortega en la Real Academia Médica Matritense parecen desmentir su participación en la expedición del duque de Montemar. Sobre la biografía militar del conde de Montemar cf. Rafael Cerro Nargánez. “José Carrillo de Albornoz y Montiel, conde de Montemar, un militar andaluz entre Cataluña e Italia (1694-1725)”. Pedralbes, 18(2): 531-538. Barcelona, 1998; Miguel Angel Castán y Alegre “Figura señera de la Caballería española. Don Francisco Carrillo de Albornoz y Montiel. Primer Duque de Montemar (1671-1747)”. Hidalguía, 314: 9-28. Madrid, 2006. 344 La construcción de este Real Sitio se retrotrae a tiempos de Felipe V quien, mediante real decreto de 29 de junio de 1746, compró el lugar de Torrejón de la Ribera para el establecimiento de una fábrica de paños superfinos. Fernando VI tomó posesión del lugar el 30 de agosto de éste 1746; nombró como gobernador a Teodoro Ventura de Argumosa, caballero de la Orden de Santiago y Caballerizo de S.M., conocedor de las modernas técnicas de producción textil de los países europeos. Sobre la historia temprana de este Real Sitio cf. Aurora María Rabanal Yus. “Noticias sobre el Real Sitio de San Fernando y sus Reales Fábricas”. Anales del Instituto de Estudios Madrileños, 10: 257-294. Madrid, 1974; Ibid. El Real Sitio de San Fernando: historia, arquitectura y urbanismo. Madrid: Ayuntamiento de San Fernando de Henares, 1983; Juan Antonio Sánchez Belén, Juan Carlos Saavedra Zapater. “Desarrollo de una nueva población del siglo XVIII: el Real Sitio de San Fernando de Henares”. En: 345 132 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol “En fin la respuesta del Médico de Urgel Don Miguel Barnades es muy larga; pero se reduce a una pintura melancólica del Real Sitio de San Fernando, sin duda por las noticias, y rumores populares que hasta allí ha estendido la ignorancia, o la malicia, y esto le hace mirar la proposición con temor. Lo segundo dice que tiene muger y dos hijos, que se halla falto de medios para levantar su casa, y traer su familia y sus muebles a San Fernando; y concluye dexándolo a mi disposicion, y dictamen, de que infiero con mucha naturalidad, que como es hábil, quiere que le insten de nuevo, y que se dé alguna gratificacion para emprender su viage, y conducir su familia, y su casa, sobre lo que V.E. resolverá lo que sea de su mayor agrado; y que yo bien conozco que a lo mas tarde es preciso principiar las observaciones que V.E. desea desde el mes proximo; y para consuelo de V.E. le quiero dar parte de lo que tengo observado en San Fernando aunque esta carta se dilate un poco…”346 Y aprovecha el escrito para dar su opinión sobre el estado de salud de este Real Sitio, en términos claramente hipocráticos, evidenciando la directa relación entre la correcta ubicación del Juan Rafael Vázquez Lesmes, Siro Luis Villas Tinoco (coord.) Actas VI Congreso Histórico sobre Nuevas Poblaciones: La Carlota, Fuente Palmera, San Sebastián de los Ballesteros: 387-402. Córdoba: Junta de Andalucía, 1994. “El mismo dia que tube el honor de recibir la Orden de V.E. para que avisase al Médico de Urgel, si queria venir a ser Médico de San Fernando, puse en execucion el precepto de V.E. y le escribí quantas circunsatncias me avia prevenido V.E. pero puse especial cuidado en dexarle toda su livertad para admitir, o no admitir cuya conducta no puede menos de ser de la aprobacion de V.E. pues de lo contrario podrían seguirse con el tiempo aquellas quexillas, y chismecillos interesados que dominan a la mayor parte de nuestros médicos. No ha podido llegar la respuesta hasta oy, y como la ciudad de Urgel no está en la carrera de Barcelona, tarda tres semanas la respuesta de una carta…” Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 11-VI-1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs. 92-94. 1981). “Está aborrecido el Médico [de San Fernando], y aunque esto tambien me ha sido más sensible que el Médico de Urgel no aya admitido generosamente la proposicion porque con mis tales quales auxilios, y su habilidad huviera desempeñado honrosamente el encargo, y viendo la necesidad, y la urgencia de embiar Médico, no encuentro a quién proponer a V.E. con las prendas y circunsatancais que V.E. desea; pero en este estrecho pudiera servir otro que no fuese tan aborrecido como el que oy existe, interin que se hallava el que será menester…” Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 11-VI-1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs. 92-94. 1981). 346 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 133 núcleo poblacional, las ventajosas condiciones de sus aires y, por ende, las características saludables de sus habitantes: “Un dia de la semana pasada pasé por la vez primera a ver el Real Sitio de San Fernando, y en el poco tienpo [sic] que estube, porque fui, y vine en un día, observé; lo primero, la amenidad natural del sitio, y la hermosura de su vega. Lo segundo la situación del lugar, su vella planta, y la construccion de sus casas, y me dolí mucho de que no estubiesen concluidas. Lo tercero que está bien batido de los vientos, y particularmente de los orientales, y nortes, a buena distancia del Río. Observé que todos sus habitantes estaban de vello color y robustos a excepcion de los fabricantes de papel, y cartones, y de los vecinos del antiguo lugar. Me informaron que avían pasado un invierno muy sano, y que varias gentes enfermas que avian ido a convalecer allí, se avían curado perfectamente. Al fin no sosegué en hacer observaciones y preguntas, que son largas de referir, pero todas se las diré a V.E. a voca a la venida de Aranjuez; pero añado por último que este Real Sitio solo puede estar sugeto a las mismas enfermedades que los lugares situados en riveras, que en España son muchisimos, y que las más frecuentes serán tercianas, a que tambien son propensos los sitios cuya piedra es de yeso, como sucede en San Fernando (…) Aconsejé a los principales del sitio de San Fernando que más del zumo de limón en la comida, y por refresco, que es muy bueno para precaver las tercianas, y algunos se proveyeron de limones en el mismo día…”347 La intervención de José Hortega -y el monto económico ofrecido por Carvajal348- debió convencer al ‘médico de Urgel’, Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 11-VI1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs. 92-94. 1981). 347 348 “Pues la benignidad de V.E. es tan generosa, y afable, volveré de nuevo a escrivir al Médico de Urgel, haciéndole presente el errado concepto en que está acerca del Real Sitio de San Fernando, y ofreciéndole assimismo la gratificación de los cinquenta doblones para su viage. Mueve a esto que además de lo que tengo escrito a V.E. deste Médico, se aumentan cada día las nuevas noticias de su abilidad; pues me han dicho estos días que el Cabildo de Urgel es muy rico, grave, y circunspecto; que se precia siempre de tener buenos médicos, y que es prueba de su suficiencia el ser Médico desta comunidad en la edad de treinta y seis años. Quiera Dios que ve la buena intención, que sea 134 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol quien decidió su traslado a San Fernando de Henares; la correspondencia se efectúa a través de José de Rueda y Guzmán (m. 1764), Oficial de la Secretaría de Estado349. No era ésta la primera vez que José Hortega se ocupaba del nuevo Real Sitio de San Fernando; algo más de un año atrás, el 31 de octubre de 1749, había leído ante la Real Academia Médica Matritense, un ‘examen de las Aguas de S. Fernando que hizo de orden de la Corte’350. Tampoco sería la última; en carta a José Carvajal, fechada el 15 de julio de 1751, le informa de los requerimientos técnicos para realizar nuevos informes sobre las condiciones climáticas de la localidad: “Para las observaciones que V.E. desea son menester Barómetro y Thermómetro fieles. De los primeros tengo yo bastante; pero de los segundos no tengo mas que uno. Podrá V.E. encargar al embaxador que tenemos en París, que remita seis thermómetros de Mr. de Reaumeur [sic], y que se valga para que sean verdaderos de Mr. el Abate Nollet, autor de las Lecciones de Physica experimental351, sugeto bien conocido en aquella corte, mi amigo y mi correspondiente, y Maestro que fue de Don Ignacio Luzán352, estos instrumentos son pequeños, de muy poca costa, y pueden venir por el correo ordinario. como suyo el acierto…” Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 15-VI-1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs. 94-95. 1981). 349 “La carta irá por mano de Don Joseph de Rueda, para que encargue en Barcelona, que se dirija con seguridad a Urgel. Entre tanto que viene la respuesta continuaré en hacer mis visitas a San Fernando, y me alegraré hallar allí al Governador…” Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 15-VI-1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs. 94-95. 1981). “El Sr. Hortega leyó á la Academia el examen de las Aguas de S. Fernando que hizo de orden de la Corte; contra el qual arguyó el Sr. Lope, y el fue aprobado por la Academia...” (Junta general de 31-X-1748. ARANM, L-1, fol. 642). 350 351 Jean-Antoine Nollet. Leçons de physique expérimentale par M. l’Abbé Nollet.. tome premier [-sixième]. A Paris: chez les frères Guérin, 1743-1748. 6 vols.; la obra estuvo en la biblioteca de José Hortega. 352 Ignacio de Luzán Claramunt de Suelves y Gurrea (1702-1754), Consejero de Hacienda, escritor y diplomático; fue Secretario de la embajada de España en Francia entre 1747 y 1750, su experiencia parisina quedó recogida en Memorias literarias de París, actual estado y methodo de sus estudios... por Ignacio de Luzán. En Madrid: en la imprenta de don Gabriel Ramírez, 1751. José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 135 Años pasados se trageron para el Rey Nuestro Señor y por dirección mía otros seis thermómetros…”353 Su proximidad a la Corte, a partir de la década de 1750, es evidente; el 17 de mayo de 1757, se dirige al Secretario de Estado de Marina e Indias, Julián de Arriaga354, por indicación de Juan Francisco de Gaona y Portocarrero, el II conde del Valparaíso355, para hacerle saber “los defectos que he observado en las porciones de Quina que han venido para S.M. de la América y están depositadas en las Bóvedas del nuevo Real Palacio, y que al mismo tiempo exprese a V.E. las circunstancias y cualidades qe ha de tener la Quina…”356 El informe, aparte de por su contenido intrínseco, quizás uno de los primeros documentos donde la adulteración de la quina se contempla como un problema de Estado, tiene importancia Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 15-VI1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs. 94-95. 1981). 353 354 Sobre Julián de Arriaga y Ribera (ca. 1708-1776), Gobernador y Presidente de la Casa de la Contratación, cf. María Boudot Monroy. “Orígenes familiares y carrera profesional de Julián de Arriaga, Secretario de Estado de Marina e Indias (1700-1776)”. Espacio, Tiempo y Forma [serie IV. Historia Moderna], 17: 163-185. Madrid, 2004. De Juan Francisco de Gaona y Portocarrero (1696-1760), miembro del Consejo Real y Supremo de las Indias y Secretario de Estado y del Despacho de Hacienda, y de su vinculación al grupo político liderado por José de Carvajal, se ha ocupado Francisco Asensio Rubio. “El conde de Valdeparaíso y su tiempo”. Espacio, Tiempo y Forma [serie IV. Historia Moderna], 8: 155-173. Madrid, 1995. 355 El informe se conserva en el Archivo General de Indias [AGI], Indiferente, 1552, fols. 471-473; ha sido trascrito por Francisco Murillo Campos, Diego Bermúdez Camacho “Informe de don José Hortega, de la Real Botica de S. M. [sic], sobre la Quina que vino de América remitida por los Virreyes Pizarro y Mauro”. Anales de la Real Academia de Farmacia, 19(3): 257-258. Madrid, 1953) y estudiado por Matthew James Crawford. Empire’s Experts: The Politics of Knowledge in Spain’s Royal Monopoly of Quina (1751-1808). [A dissertation submitted in partial satisfaction of the requirements for the degree Doctor of Philosophy in History (Science Studies)]. San Diego: University of California, 2009 (cf. págs. 24, 70-72), quien señala el documento como uno de los primeros testimonios destinados a estudiar el tráfico de quina evitando el paso por Portobello, donde la English South Sea Company mantenía una factoría, a la que responsabiliza de los casos de adulteración: “Ortega’s report represents a key moment in the development of the Crown’s employment of learned experts in Madrid to address the problems of the estanco de quina especially the problem of adulteration.” (Matthew James Crawford. Op. cit., pág. 71). 356 136 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol por la relación que establece el II conde de Valparaiso, conocido cortesano del círculo del ministro Carvajal, con José Hortega: “Por orden del Señor Conde [de Valparaiso] he ido varias veces a elegir Quina para Embaxadores y otras personas de distincion á quienes S.M. ha tenido pòr conveniente mandar hacer este obsequio, y puedo asegurar á V.E., que habiendo en el Real Palacio una gran porción de corachas, ha sido muy rara la que he encontrado de buena calidad…”357 Pehr Löfling, ‘Botaniste du Roy de Hispania’ En su Bibliotheca botánica…, publicada en el otoño de 1735358, Carl Linné escribió: “… la flora española no nos ha dado a conocer ninguna planta; siendo así que en lugares fertilísimos de España hay algunas plantas que no han sido descubiertas. Es doloroso que en los lugares más cultivados de Europa se experimente tanta barbarie en la Botánica en nuestro tiempo…”359 El comentario enardeció a algunos entusiastas de la Ciencia española, entre ellos a José Quer, quien realizó un apologético discurso en defensa del conocimiento de nuestras producciones naturales360; pero también afloró en las mesas y AGI, Indiferente, 1552, fols. 471-473 (trascrito por Francisco Murillo Campos, Diego Bermúdez Camacho. Op. cit. nota 356, págs. 257-258. 1953). 357 Carl Linné. Bibliotheca botanica recensens Libros plus mille de plantis huc usque editos, secundum Systema Auctorum Naturale in classes, ordines, genera & species dispositos, additis Editionis Loco, Tempore, Forma, Lingua &c. cum explicatione Fundamentorum botanicorum pars Ima. Amstelodami: Apud Salomonem Schouten, 1736 358 “8. Hispania. Hispanicae Florae nullae nobis innotuerunt, adeoque plantae istae rarissimae, in locis Hispaniae fertilissimis, minus detectae sunt. Dolendum est, quod in locis Europae cultioribus, tanta existat nostro tempore barbaries botanices! Paucissimas istas plantas, quae nobis ex Hispania & Portugallia constant, debemus Curiosis classe III. Tournefortio & paucis allis.” (Carl Linné. Op. cit. ut supra, pág. 96. 1736). 359 Joseph Quer y Martínez. “Catálogo de los autores españoles que han escrito de historia natural”. En: Flora española, ó Historia de las plantas, que se crian en España. 2: 105-128. Madrid: Por Joachin Ibarra, 1762. De su análisis se ha ocupado Ricardo Pascual Guasch. El botánico José Quer (1695-1764), primer apologista de la ciencia española. [Cuadernos Valencianos de Historia de la Medicina y de las Ciencias, 10]. Valencia: Cátedra e Instituto de Historia de la Medicina, 1970. 360 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 137 tertulias cortesanas de la Europa de su tiempo. En los inicios de 1750, durante una cena ofrecida por José de Carvajal y Lancáster, a la sazón Secretario de Estado de Fernando VI, a sir Benjamin Keene (1697-1757), embajador en España del Imperio británico, a la que asistió el botánico Robert More361, debió traerse a colacion el comentario de Carl Linné, al que Carvajal aseguró tendría pronta solucion362. Las consideraciones vertidas en aquella cena madrileña tendrían importantes repercusiones científicas. Robert More prosiguió su viaje europeo y, en Upsala, transmitió la declaración a Carl Linné (1707-1778) quien, a su vez, 361 Robert More (1703-1780) debió de contactar con algunos botánicos españoles; así se desprende del comentario de Pehr Löfling a Carl Linne, al tratar de Drosera lusitanica L: “… he visto un exemplar seco en casa del Sr. Velez (…) es de Portugal, y la adquirió hace pocos años del Caballero Inglés Roberto More, que por curiosidad habia viajado en España…” (Madrid, 13-III-1752 [L1389]. LS, signatura: mss. LS, 9: 348-349 -cf. Ignacio Jordán de Asso, Op. cit. nota 46, 4(11): 166-172. 1801-). La situación es recogida por John Talbor Dillon en la crónica de su viaje por España: “This appears to have been owing to some English gentlemen then at Madrid, and among them Robert More, Esq: F.R.S., who dinning with the prime ministre Don Joseph de Carvajal, had been asked their opinion of Spanish by that minister, who perceiving that the remark of Linnaeus was not without foundation, and being informed that a Spanish flora would turn out as new as it was rich, determined that his country should soon be free from such a reproach; this was afterwards communicated to Linnaeus by Mr. More I his tour throught Sweden, and account for the aplication above mentioned [la venida de Pehr Löfling a España].” (John Talbot Dillon. Travels through Spain, with a view to illustrate the natural history and physical geography of that kingdom, in a series of letters. Including the most interesting subjects contained in the memoirs of Don Guillermo Bowles, and other Spanish writers, interspersed with historical anecdotes. Adorned with... a new map of Spain. With notes and observations relative to the arts, and descriptive of modern improvements. Dublin: printed for S. Price, W. and H. Whitestone, T. Walker, W. Gilbert, C. Jenkin, 1781 –cf. págs. 112113). Quizás recogiendo el comentario realizado por el propio Carl Linné en las páginas introductorias al Iter Hispanicum… de Pehr Löfling (Stockholm: Lars Salvii Kostnad, 1758): “… algunos sabios ingleses (…) salieron á viajar por la Francia, España, Italia, los Suizos, Alemenia [sic], Suecia y Dinamarca. Uno de estos, el Caballero Roberto More, de la Sociedad Real de Lóndres, vino tambien á Upsal, y me contó que hallándose dichos sábios en Madrid, los convidó á su mesa el Exc. Sr. D. Joseph de Carvajal, Secretario de Estado de S.M. Católica, y preguntándoles qué juicio formaban de España, respondiéron entre otras cosas que las excelencias del pais habian sobrepujado de mucho á sus esperanzas; pero que al mismo tiempo acreditaban lo que el profesor Lineo había escrito en su juventud: que la Flora Española es tan rica como deconocida. Bibl. Bot. pág. 96. Manifestó S. E. deseo de ver por si mismo mi proposición; y habiendola leído, aseguró que no tardaría la España en rechazar semejante acusación…” (Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 282-283. 1801). 362 138 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol se apresuró a contactar con el embajador de España en Suecia, Gerolamo Grimaldi (1709-1789), ofreciéndole su colaboracion y manifestándole sus deseos de enviar a uno de sus discípulos a estudiar la flora española. La propuesta de Carl Linné fue formulada a Carvajal en carta de octubre de 1750 y reiterada, al menos, en una ocasión más363: “… en los Dominios del Rey no se ha perfeccionado tanto en otras partes el de las Plantas y Hierbas, cuyo conocimiento y el de sus virtudes respectivas es tan intersante y útil al bien y a la salud de sus gentes (…) el particular beneficio del más individual conocimiento de lo que en este género produce, y al mismo tiempo podría mandar le siguiesen y acompañasen en los experimentos y colecciones a sus Rs. expensas o de ellos, uno o dos Mozos capaces de aprender y cultivar las noticias que adquiriese…”364 En enero de 1751 Gerolamo Grimaldi tuvo constancia oficial de la aceptación de la propuesta linneana365, la noticia llegó a Carl Linné a través de Gaspard Raibaud (1695-1781), profesor de lengua francesa en la Universidad de Upsala366. Ese 363 Carta de Gerolamo Grimaldi a José de Carvajal y Lancáster. Estocolmo, 23-X-1750 (AGS, Estado, leg. 6678 -fide Manuel Lucena Giraldo. Laboratorio tropical. La expedición de límites al Orinoco, 1750-1767. [Caracas]: Monte Avila, 1992 –cf. pág. 118-); Ibid. Estocolmo, 8-I-1751 (AGS, Estado, leg. 6679 –fide Manuel Lucena Giraldo Op. cit., pág. 119). Para Carl Linné fue Gerolamo Grimaldi el responsable último del viaje de Pehr Löfling a España: “… no olvide nunca á S.E. el Sr. Grimaldi, que ha sido el organizador de este viaje, al cual el mundo sabio debe estar siempre agradecido.” (Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, 8-V-1751. Archivo del Real Jardín Botánico de Madrid [ARJB], leg. II,1,6,8; traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. 1908. “Cartas de propia mano de C. Linneo que se conservan en el Jardín Botánico de Madrid”. Memorias de la Real Sociedad Española de Historia Natural, 5: 93-151. Madrid: RSEHN, 1908 -cf. págs. 101-102). Carta de Gerolamo Grimaldi a José de Carvajal y Lancáster. Estocolmo, 23-X-1750 (AGS, Estado, leg. 6678 –fide Manuel Lucena Giraldo. Op. cit. nota 363, pág. 118. 1993); en ella propone una dotación de 100 ducados anuales para el discípulo elegido. 364 365 Carta de Gerolamo Grimaldi a José de Carvajal y Lancáster. Estocolmo, 8-I-1751 (AGS, Estado, leg. 6679 –fide Manuel Lucena Giraldo. Op. cit. nota 363, pág. 119. 1993). 366 Carta de Gaspard Raibaud a Carl Linné. Estocolomo, 7-I-1751 [L1223]. (LS, signatura: mss LS, XII: 99-100; reproducida por James Edward Smith. A selection of the correspondence of Linnaeus, and other naturalist from the original manuscripts. London: printed by Logman, Hurst, Rees, Orme & Brown, 2 vols. –cf. vol. 2: 463-464-). Y así lo recoge Carl Linné: “No bien, habia yo entablado mí José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 139 mismo mes, Carl Linné informó a la Academia de Ciencias de Estocolmo y escribió a José de Carvajal presentándole a uno de sus discípulos, Pehr Löfling (1729-1756), dando cuenta de los trabajos, eminentemenete aplicados, que éste podría realizar: “Ut ejusmodi rerum Naturalium cognitio apud vos excitetur mittam juvenem dilectissimum, Discipulum meum vere primarium, Petrum Löfling, quem sancte testor esse non minus Plantarum, quam Lapidum, et Animalium solida cognitione instructum, nec ulla ratione inferiorem Kalmio367 aut Hasselquistio368, quos nosmetipsi ad exteras terras emisimus (…) Usum exinde Hispaniae redundantem summum fore prevideo, ex quo constabit quaenam Plantae utiles apud Vos sponte occurrunt aut cum fructu coli possunt, quasque chare ab externis antea debuistis. Constabit inde quaenam Plantae Agris Vestris sunt noxia, ut Mechanici Instrumenta conficiant ad easdem eradicandas. Docebit modum, et loca apta demonstrabit rite instruendi Plantationes secundum soli genium, cum dubitem valde dari plantam Europaeam quae non cum fruu intra Hispaniae limites sereretur, ubi fervor solis in depressis, frigus autem in nivosis Alpibus regnat. Errores Populares in Oeconomia quotidie describat, et emendationem suadebit, terras unique observavit, et quomodo steriles emendari queant indigitabit. Detreminanabit ubinam officinalia sponte crescant, et quaenam ad exteras Nationes exportari possunt. Idem de Animalibus et Lapidibus agat, ne quidem neglecto Insecto minutisimo…”369 pretensión quando el Señor Teniente Radbaud [sic] me dio á entender de parte de S. E. que S. M. Católica deseába tener á su servicio un Botánico qué hubiese estudiado conmigo; casualidad que al pronto me llenó de admiración...” (Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 282. 1801). Pehr Kalm (1716-1779), discípulo linneano, explorador de las tierras de Norteamérica. 367 368 Fredrik Hasselquist (1722-1752), discípulo linneano, viajero por las tierras de Egipto, Siria, Palestina, Chipre, Rodas y la isla de Chios. 369 Carta de Carl Linné a José de Caravajal y Lancáster. Upsala, 14-I1751 [L-1222] (transcrita en James Edward Smith. Op. cit. nota 366, vol. 2: 459464. 1821); copia en ARJB, leg. II,1,3,1 (cf. [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363. 1908, págs. 97-100). Es a este escrito al que debe referirse Carl Linné en su correspondencia posterior con Pehr Löfling: “El invierno pasado tuve el honor de escribir al Ministro del Rey de España, y le propuse entonces lo que usted debía observar, con la idea de que S. E. misma diera las instrucciones que para usted fueran más convenientes…” (Carta de 140 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Un detallado repertorio de lo que habría de consistir el trabajo de Pehr Löfling en España, ya esbozado en esta carta remitida a José de Carvajal, fue elaborado por Carl Linné, en una Instruction för Hr. Löfling at observera uti Spanka riket, estructurada en 27 bases, firmada el 8 de mayo de 1751. Tras detallar el método que debía seguir en la descripción de plantas, animales y minerales, y el interés con el que habría de abordar los estudios de economía natural y de patología humana, las instrucciones terminaban con algunas normas relativas a su comportamiento: “25. Cuando haya llegado al término de sus trabajos, deberá el Sr. Löfling entregar una fauna y una flora completas de España, presentando á la Superioridad un herbario de todas las planta del reino, con la descripción de cada una ó referencias al libro donde se halle descrita, así como una fauna sobre los aninales y colección de los insectos, y enseñar cómo puede todo utilizarse en servicio y beneficio del reino, en el cual se halla usted, y del que ha recibido su subvención. 26. Trate de instruir algunos estudiantes españoles en esta útil ciencia, si así les agrada, y observe lo que compran del extranjero, poseyéndolo tal vez en su país, de suerte que, al partir usted con el corazón agradecido, sea sentida su marcha. 27. Ame con pureza, tenga fé en su Dios y no inquiete á nadie en sus creencias: piense y hable siempre con el debido repeto del Rey en cuyo país vive usted; sea honrada su vida y limpia de maldad, y así podrá usted viajar con felicidad por todo el mundo…”370 En abril de 1751, aún en Suecia, Carl Linné le dirigirá la correspondencia, redactada en sueco, a “Mr. Pierre Löfling, Botaniste du Roy de Hispania. Stockholm”371. Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, 8-V-1751. ARJB, leg. II,1,6,8; traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 101-102. 1908). El original se conserva en ARJB, leg. II,1,3,5; reproducido -en su lengua original y traducido al castellano- en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 5-9. 1908). 370 Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, 22-IV-1751 (ARJB, leg. II,1,6,6 -cf. [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, pág. 100. 1908). 371 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 141 Pehr Löfling inició su viaje el 16 de mayo de 1751, navegó en un barco de la Svenska Ostindinska Kompaniet, gracias al patrocinio de su director, Clas Grill (1705-1767); desembarcó en Oporto el 25 de julio372; en Lisboa contacto con el astrónomo francés Louis Goudin (1704-1760), de vuelta de su expedición americana373, juntos emprendieron el camino hacia la Corte de España374, llegaron a Madrid el 20 de octubre, pero hubieron de trasladarse hasta San Lorenzo de El Escorial, donde entonces se encontraba establecido el Monarca y sus Ministros: “Inmediatamente despues de haber llegado, pase al Escurial [sic] para entregar al Ministerio de Estado la carta que traia del Excmo. Sr. Marques de Grimaldi, á quien atribuyo la causa de este viaje y mi fortuna, por cuyo motivo le viviré eternamente agradecido. En virtud de esta carta me despacháron tan pronto como yo pudiera desear. El Excmo. Sr. D. Joseph de Carvajal me dió esperanzas de hacerme pasar en breve á la América á fin de exâminar sus producciones, cosa para mí de la mayor complacencia (…) Mr. Godin se digna suplir mi total ignorancia de la lengua española…”375 372 Desde allí escribió a Carl Linné, con fecha de 31-VII-1751 [L-1298] (LS, signatura: ms. LS, IX: 337-338; traducida al castellano y publicada por Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 297-304. 1801) y 7-VIII-1751 [L1299] (LS, signatura: ms. LS, IX : 339-340; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 304-309. 1801). 373 Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 1-XI-1751 [L-1341] (cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(11): 155-162. 1801). De él adquirió una singular habilidad: “Del señor Godin he aprendido la máxima de adular y halagar y con detalles graciosos mantener a los magnates de buen humor...” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 4-XI-1751. LS, signatura: ms. LS, IX: 398-399; traducida al castellano en Francisco Pelayo López. “Las actividades científicas de Löfling y sus estudios de Zoología en España y América”. En: Francisco Pelayo (ed.). Pehr Löfling y la Expedición al Orinoco, 1754-1761: 103-130. Madrid: Turner, 1990 -cf. págs. 125-127-). 374 “El Excmo. Sr. Embaxador de España ha resuelto mi viage para despues de la mañana, en compañía del célebre Matemático francés Mr. Godin, miembro de la Academia Real de Ciencias de Paris, que ha poco vino de América, donde permaneció por espacio de quince años (…) Es hombre de muchas luces, que me servirá extraordinariamente para el viage, y de cuyo trato espero sacar grande aprovechamiento…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Lisboa, 28-IX-1751 [L-1311] (LS, signatura: LS, IX: 344-345; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 309-315. 1801). Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 1-XI-1751 [L-1341] (cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(11): 155-162. 1801) y poco después insistirá: “La suerte de tener al señor Godin como intérprete ha tenido gran 375 142 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Para su primer encuentro con Pehr Löfling, José Carvajal había pedido un informe privado a José Hortega sobre la situación de los estudios botánicos en España; con fecha de 15 de junio de 1751, éste escribirá: “Mándame V. E. que reservadamente le informe si Don Christóval Vélez y Don Joseph Quer, son áviles en la Botánica, y aplicados a poder esperar que hagan observaciones exactas con utilidad, si se les encarga; y satisfaciendo al honor con que V. E. se digna favorecerme, informaré a V. E. del concepto que tengo formado de ambos, y de los méritos de cada uno; y en todo ablaré con la ingenuidad, y candor que acostumbro siempre que tengo el honor de ser preguntado por V. E.” 376 Y expondrá una prolongada nómina de los estudiosos españoles de nuestra flora, además de los ya indicados: Cristóbal Vélez (m. 1753) y José Quer Martínez (1695-1753), comentará los méritos de Joan Minuart Perets (1693-1768), Josep Salvador Riera (1690-1760), Jaume Salvador Pedrol (1649-1740), Joan Salvador Riera (1683-1726) y Miguel Barnades Mainader (1708-1771), para finalizar: “Concluyo, asegurando a V. E. que con Minuar, Quer, Barnades y Vélez, puede V. E. establecer en la Corte un Jardín Real Botánico, o una esquela Botánica, y por consiguiente introducir en nuestra España este útil, y delicioso estudio; que lo que no es capaz de hacer cada uno en particular, lo executaran todos quatro, con tal que a Minuar se le nombre por Jefe, y que los otros tres le obedezcan, pues uno de nuestros más dañosos defectos, es el infatuarnos fácilmente presumiendo que sabemos mucho, y con esta apreensión no queremos obedecer a importancia para mi causa en la Corte y también le estaré siempre agradecido por su entrega a la ciencia en sus demostraciones ante los ministros, el señor Carvajal sobre todo, y el Marqués de la Ensenada. En una palabra, habló por mi con gran contundencia…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 4-XI1751. LS, signatura: ms. LS, IX: 398-399; traducida al castellano en Francisco Pelayo López. Op. cit. nota 373, págs. 125-127. 1990). Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 15-VI1751 (AGS, Estado, leg. 7896 –fide Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs. 95-100. 1981-). Unos días antes ya había prometido dar su opinión al respecto: “Vélez y Quer son dos sugetos, y ambos aficionados a la Botánica, y mañána diré a V. E. el juicio recto que tengo formado de ambos”. Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 13-VI-1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs. 94-95. 1981). 376 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 143 nadie, ni reconocer por superior a quien imaginamos erradamemnte que no tiene que enseñarnos. De esta manera travajarán los españoles por un lado, mientras que el Botanista Sueco Pedro Leoflingio desempeña por otro las grandes cosas que ofrece. El Terreno es mui basto, y muy inculto, y ay campo para muchos operarios...”377 Tras instalarse en Madrid, Pehr Löfling travó contacto con los pocos naturalistas que, entonces, se ocupan de estos estudios378; en los comienzos de noviembre de 1751, en carta antecedida por las palabras ‘Res privatae’, ya da cuenta a Carl Linné de su opinión sobre el estado de la Botánica en España: “Los botánicos, aquí en Madrid, son hombres interesantes, aunque casi demasiado fieles a Tournefort...”, comenta los trabajos de Joan Minuart379, Cristóbal Vélez -en cuya casa encontrará alojamiento-380 y José Quer381, para acabar solicitando su intervención personal: Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 15-VI1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs. 95-100. 1981). 377 378 “El Sr. Minuart, que se hizo célebre en la Botánica por su nuevo género Cerviana, es hombre de edad, pero un diligente observador. Puede llamarse con razon el conservador de la verdadera Botánica en España. / El Sr. Velez (…) Demostrador de Botánica en el huerto de los Boticarios, fue discipulo del Sr. Minuart (…) tiene una buena librería, que me franquea con toda libertad. / El Sr. Quer (...) há recogido un Herbario, que á mi juicio contiene cosas muy curiosas y exquisitas. Ha plantado tambien su huerto particular de las yerbas mas raras que hay en estas cercanias, y de otras muchas…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 1-XI-1751 [L-1341] -cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(11): 155-162. 1801-). 379 “El señor Minuart ha fomentado la botánica aquí en España; es un hombre muy bueno, a mi me quiere de todo corazón, como si fuera su propio hijo…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 4-XI-1751 (LS, signatura: ms. LS, IX: 398-399; traducida al castellano en Francisco Pelayo López. Op. cit. nota 373, págs. 125-127. 1990). 380 “D. Cristóbal Vélez (…) tiene una hermosa biblioteca de botánica. Su ‘Flora madritensis’ está escrita según el método de Tournefort, pero haré lo que pueda para atraerle hacia otras ideas (…) El Collegio Pharmacopéo Regio le ha encargado la tarea de enseñar botánica a la juventud (…) de ahora en adelante viviré en su casa, donde una habitación ha sido alquilada para mí por la persona que del señor Carvajal recibió la orden de facilitarme las cosas necesarias…” Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 4-XI-1751 (LS, signatura: ms. LS, IX: 398-399; traducida al castellano en Francisco Pelayo López. Op. cit. nota 373, págs. 125-127. 1990). 381 “D. Joseph Quer es un hombre interesante, pero más ‘ad ostentationem que verae scientiae caussa’. Tiene un estudio bastante bonito, 144 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol “Si usted tuviera a bien alentarles mediante algún escrito o de otra manera, creo que sería una tarea fácil inroducir aquí una nueva religión, según sus principios (…) Si usted encontrara alguna forma para mí de promover nuestra ciencia aquí, escribiendo algún artículo u otra cosa que también me pueda recomendar a mi, desearía de todo corazón que me lo hiciera saber, ya que el tournefortianismo reina con tanta fuerza aquí…”382 Las condiciones económicas de Pehr Löfling, al servicio del Rey de España, quedan nítidamente establecidas en los comienzos de 1752383: “De una cosa hablaré á Vm brevemente relativa á mi mansion en esta Corte. El Excmo. Sr. Carvajal ha dado órden para que se me paguen en la Tesorería ocho mil reales anuales, que hacen quatro mil dalers de nuestra moneda. Esta suma, si yo me manejo con prudencia, es muy suficiente para mi solo, y descontando los gastos de alquiler de casa y comida, puedo ahorrar lo bastante para vestirme. Me alegra tener una cosa fixa en que poder afianzarme. Este sueldo se me pagará de quatro en quatro meses, empezándose á contar desde el dia en que llegué…”384 pero su carácter me resulta más rígido que los otros, aunque la razón quizás sea que todavía no puedo conversar bien con él, ya que no habla latín…” Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 4-XI-1751 (LS, signatura: ms. LS, IX: 398399; traducida al castellano en Francisco Pelayo López. Op. cit. nota 373, págs. 125-127. 1990). 382 Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 4-XI-1751 (LS, signatura: ms. LS, IX: 398-399; traducida al castellano en Francisco Pelayo López. Op. cit. nota 373, págs. 125-127. 1990). En su respuesta, Carl Linné sólo tiene palabras de gratitud para estos tres botánicos: “Ter saluta viros aestimatissimos Dominos Minuartium, Velez, Quer...” (Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, 16-XII1751 (ARJB, leg. II,1,6,9; cf. [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 102-106. 1908). 383 No lo estaban con anterioridad; en noviembre de 1751 Pehr Löfling escribía a Carl Linné: “Por lo demás, no están todavía concluidos mis asuntos; queda pendiente el acuerdo sobre mi sueldo anual, dado que en este lugar tan caro 100 ducados no duran más de dos a tres meses, tengo esperanzas de conseguir más (…) Lo que ya está resuelto es vivienda y comida, así como libros y ropa, que es muy importante en este país, donde no te consideran ni minimamente si no te pareces a otra gente en todo…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 4-XI-1751 (LS, signatura: ms. LS, IX: 398-399; traducida al castellano en Francisco Pelayo López. Op. cit. nota 373, págs. 125-127. 1990). 384 Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 14-II-1752 [L-1375] (cf. José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 145 La vida de Pehr Löfling en Madrid no debió ser fácil, fundamentalmente debido a su falta de dominio del castellano; comenzó a adquirir cierta fluidez en nuestra lengua durante la primavera de 1752: “Ya empiezo á disfrutar del trato y del comercio de las gentes, porque me hallo algo suelto en entender y hablar el idioma…”385 Su trabajo como naturalista lo desarrolló, durante los dos años que permaneció en la Corte, siempre en las proximidades de Madrid, “… porque en España se dice que quien goza empleo y sueldo del Rey ha perdido su libertad...”386 El desarrollo de su actividad se rige por criterios fuertemente organizados: “En el dia salgo á buscar las yerbas por la tarde, si el tiempo lo permite, y hago su descripción por la mañana (…) Escribo todas mis observaciones según el orden de Vmd. en quartillas sueltas de papel, para tenerlas siempre ordenadas (…) En mis descripciones botánicas me detengo particularmente en la fructificación, para Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(11): 162-166. 1801). Los mismos 8.000 reales se le asignaron, a fines de 1755, al francés Agustin La Planche, quien pasó a prestar servicio en la Real Casa de la Geografía; al alemán Andrea Keternin, se le concedieron 11.000 reales, con la condición de dar a su hijo, Johan, la cuarta parte para que continuara su formación en la clasificación de minerales; sólo William Bowles se escapa de este presupuesto: fue contratado en estas mismas fechas, como físico-naturalista, por 24.000 reales, una cantidad que se fijó él mismo como sueldo (cf. María de los Ángeles Calatayud Arinero. “Antecedentes y creación del Real Gabinete de Historia Natural de Madrid”. Arbor, 123(482): 9-33. Madrid, 1986 –cf. pág. 12-). Carl Linné le suponía dotado con 100 ducados de pensión: “Si le dan á usted 100 ducados, comida, casa, vestidos, libros, tiene usted más que ningún profesor, no pida usted sueldo demasiado alto antes de estar en situación y que hayan visto lo necesario que es usted y sepan que es para utilidad de la Botánica y honor de la naturaleza...” (Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, [XII-1751] [L-1349]. ARJB, leg. II,1,6,10; traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, pág. 106-108. 1908). 385 Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 7-V-1752 [L-1407] (cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(11): 172-178. 1801). 386 Líneas antes escribía: “Luego que venga el Sr. Carvajal haré un viaje á los montes del Escurial [sic] y S. Ildefonso: pero sin su permiso no puedo hacer el viaje mas corto…” Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 12-VI1752 [L-1434] (LS, signatura: ms. LS, IX: 350-351; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(11): 179-187. 1908). Un análisis de las ‘Recolecciones y lugares de herborización de Löfling en España’ en Ginés López González. “La obra botánica de Löfling en Espña”. En: Francisco Pelayo (ed.). Pehr Löfling y la Expedición al Orinoco, 1754-1761: 33-49. Madrid: Turner, 1990 (cf. págs. 40-42). 146 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol asegurarme mas en la determinacion y doctrina de los géneros…”387 Mas no todo fue trabajo, sabemos que también hubo algo de diversión; al menos en una ocasión asistió a una corrida de todos388. Entre su círculo de amistades figuraron, además de Cristóbal Vélez389, Miguel Barnades, con quien herborizó en los Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 7-V-1752 [L-1407] (Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(11): 172-178. 1801). En la Linnean Society se conserva un manuscrito, de 22 páginas, con letra de Daniel Scheidenburg, titulado Herbarium Löflingianum Matriti, en él figuran 469 especies numeradas, más un ‘suplementum’ en el que se incluyen cerca de 78 especies más, a éstas han de añadirse las aún no estudiadas, “Restant plures indeterminatae, quae a Botanicus Matritensibus determinavi vix possum” (cf. Ginés López González. Op. cit. nota 386, pág. 43. 1990). Sobre estos materiales, y los pliegos remitidos por su discípulo, empezó a construir Carl Linné un borrador, Flora Madritemsis. P. Löflingii, completado con datos de su Iter hispanicum… 387 388 “La fiesta de toros (…) o corrida de toros es para los españoles la mayor diversión. Tienen una pasión extraordinaria para presenciar este peligroso juego, que a casi todos los extranjeros les parece cruel, hasta que se habitúan algo a él (…) La lidia trascurre dentro de un anfiteatro completamente redondo, con escaleras en las que pueden sentarse algunos miles de personas; fue construido hace algunos años fuera de la puerta de la ciudad llamada la puerta de Alcalá…” (Carta de Pehr Löfling a unos conocidos. Madrid, 16VII-1753; traducida al castellano en Francisco Pelayo López. Op. cit. nota 373, págs. 129-130. 1990). La carta figura en la edición alemana del Iter hispanicum… Reise, nach den Spanischen Ländern in Europa und America in den Jahren 1751 bis 1756: nebst Beobachtungen und Anmerkungen über die merkwürdigen Gewächse. Peter Loeflings; herausgegeben von Herrn Carl von Linné... Aus dem Schwedischen übersetzet durch D. Alexander Bernhard Kölpin. Berlin und Stralsund: bey Gottlieb August Lange, 1766. 406 p., 2 lám. [pleg.]. [2ª edición. Berlin: Gottl. August Lange, 1776]. El documento proporciona una pormenorizada descripción del festejo: la estructura de la plaza, el tiempo que cada toro permanece en el ruedo, la apertura de los toriles, la intervención de los picadores (‘cavalleros de plaça’), y de los banderilleros (‘chulos’), el toque de trompetas, la actuación del matador (‘torero de a pie’), y los instrumentos que éstos utilizan: picas, baras de detener, banderillas, muleta, estoque, etc., también describe una suerte de rejones y algunas corridas con perros y monos en el ruedo. “El Sr. Velez incluye a Vd. la inclusa (…) Conozco que elogiándolo se le puede llevar adonde uno quiera; y yo debo estar á Vmd. muy agradecido por haber hablado bien de él; circunstancia que ha bastado para convertir en amistad estrecha nuestro trato regular y cortesano…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 13-III-1752 [L-1389]. LS, signatura: LS, IX: 348-349. cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(11): 166-172. 1801). “Antes de ayer perdí un verdadero amigo, y la España un botánico sabio en D. Cristóbal Velez, cuya muerte me quita la proporcion de disfrutrar su bella librería…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 2-VII-1753 [L-1622]. LS, signatura: mss. LS, IX: 372-373; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(13): 100-104. 1802). 389 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 147 alrededores de San Fernando de Henares, lugar donde éste estaba destinado como médico390; a ellos cabe añadir a los miembros de la Legación sueca en la Corte, y pocos más: “Hay algunos que me tienen envidia aquí, pero entre los idiotas, según cuentan mis amigos, que por otro lado, me dan prueba de una amistad que creo sincera”391 Carl Linné, preocupado por la buena ubicación de su discípulo entre las elites del poder, no duda en darle consejos, siempre en lengua sueca: “Haga usted la corte al Sr. Carvajal; enséñele sólo á él lo que usted descubra y hágale comprender que usted es suyo totus animo et corpore; háblele siempre de él, elogiándole como debe. Escriba usted al Ministro español en Stockholm y déle las gracias; escriba también al Sr. Rebault [sic]392, el profesor de francés, y al Secretario de la Legacion española. Ese lo hace todo…”393 José Hortega no aparece aún en el círculo cortesano frecuentado por Löfling, al menos oficialmente, pero saldría 390 “Aves solo he logrado dos ó tres; pero hará catorce dias que el Dr. Barnades, (…) que estudió en Montpellier, muy aficionado á la Botánica, y mi amigo, me ofreció hacerme traer algunas del país…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 7-V-1752 [L-1407] -cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(11): 172-178. 1801-); “A fin de esta semana iré á S. Fernando, quatro leguas de aquí, con el Dr. Barnades, que reside allí, y espero enviar algunas plantas curiosas (…) ha formado el proyecto de hacer juntos un viagecillo á los Pireneos [sic]; lo que celebraré infinito, porque la lengua catalana es muy distinta de la española, y asi yo solo no podía gobernarme...” (Ib., Madrid, 12-VI-1752 [L1434]. LS, signatura: ms. LS, IX: 350-351 -cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(11): 179-187. 1801-); “… estando en S. fernando en casa del Dr. Barnades a mediado del verano…” (Ib., Madrid, 28-VIII-1752 [L-1461]. LS, signatura: ms. LS, IX: 354-355; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(12): 324-330. 1801). 391 Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 4-XI-1751 (LS, signatura: ms. LS, IX: 398-399; traducida al castellano en Francisco Pelayo López. Op. cit. nota 373, págs. 125-127. 1990); algo más adelante señala, en este mismo texto: “… estaría encantado de poder marchar a América (…) para evitar a los españoles a los que tanto les cuesta ver a extranjeros tener éxito…” 392 Gaspard Raibaud (1695-1781). Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, [1752] (ARJB, leg. II,1,6,11; traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 108-111. 1908). La correspondencia de Carl Linné a Pehr Löfling, durante su estancia en Madrid, va dirigida bajo sobreescrito a Carl Leuhusen [baron de Leuhusen] (1724-1795): “A Monsieur le baron Lehusen [sic], secrétaire en Légation du Roi de Suède. Madrit” (cf. carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, 28-IV-1752. ARJB, leg. II,1,6,12). 393 148 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol pronto a escena; en carta a Carl Linné, fechada el 13 de noviembre de 1752, Pehr Löfling le informa: “En el dia se hallan en Madrid quatro Botánicos Españoles. He disfrutado por espacio de un año la compañía de los tres, y el quarto, que es el Sr. Ortega, no ha vuelto todavia de sus viages, y es el mas afamado de todos. Tengo el gusto de servirme de su librería. Por ese motivo quisiera que á los quatro géneros mencionados se les diesen los nombres de cada uno; especialmente por ser de un órden natural y del mismo pais que los Señores…”394 Lamentablemente la ordenación de los ‘genera nova’ que habrían de incorporarse a la primera edición del Species plantarum… (Holmiae, 1753) estaba ya ultimada, y el maestro no pudo contentar a su discípulo395; la falta de alusiones en la correspondencia entre Pehr Löfling y Carl Linné a la figura de José Hortega impide que su nombre figure en el modo en que Löfling hubiera deseado; no obstante Carl Linné sabrá solventar la situación, incluyendo el nuevo género, Ortega L., en la ‘Addenda’ que figura al final de la obra396. La perspicaz visión de la situación política en la que se desarrolla la actividad de Pehr Löfling lleva a Carl Linné a formularle una demanda más; sus atenciones no han de dedicarse, en exclusiva, al mundo de los naturalistas; su acercamiento hacia el poder debe llegar más allá, 394 Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 13-XI-1752 [L-1507] (LS, signatura: ms. LS, IX: 356-359; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(12): 331-338. 1801). 395 Carl Linné. Species plantarum, exhibentes plantas rite cognitas, ad genera relatas, cum Differentiis Specificis, Nominibus Trivialibus, Synonymis Selectis, Locis Natalibus, Secundum systema sexuale digestas. Holmiae: Impensis Laurentii Salvii, 1753. “Me ha dolido mucho no poder ordenar lo que usted me pedía referente á genera nova, pues ya estaba lo impreso en speciebus; usted me dejó desde el principio en libertad, por lo que he obrado de este modo; así ahora está la Pág. 35. Loeflingia (…) Pág. 89. Minuartia (…) Pág. 89. Queria (…) Pág. 560 Ortega (…) Pág. 332. Velezia (…) Si en algo, que no acierto á explicarme, le he faltado á usted, perdóneme, pues siempre ha sido mi deseo serle grato y causarle satisfacción…” (Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, 13-III-1753 [L-1554]. ARJB, leg. II,1,6,17; traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 130-134. 1908); la misiva se despide con un “Salude á mis hermanos en la Flora Sres. Minuart, Ortega, Vélez y Quer con millones de felicidades”. El género Ortega Loefl. ex L. se incluye en la última página del primer tomo, con la advertencia de que habría de ser incluido en: “Pag. 35, inter Melothriam & Loeflingiam”. 396 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 149 hasta las más altas esferas; en su ánimo de servirle de fiel ayuda a su discípulo en tierras extrañas le escribirá: “Pienso elevar ahora para él [el marqués de Grimaldi] y S. E. el Sr. Carvajal un monumento en el mundo Botánico, que sirva para que sean apreciados mientras la hierba y las plantas crezcan; pues por medio de usted han dado á conocer lo que en la hermosa España ha estado oculto tanto tiempo. Haga de manera que pueda reunir la Floram Hispanicam para honra de S. E. Carvajal y marqués de Grimaldi, y para que el mundo vea con asombro lo que nunca ha visto…”397 Una Academia para la Corte La llegada de Pehr Löfling a la Corte coincide con la partida de ella de José Hortega; a tenor de la información transmitida por el cirujano catalán Josep Borges al botánico Josep Salvador, salió de Madrid el 13 de agosto de 1751, en dirección a Aragón y Cataluña; pocos días después, el 24 de agosto, se encuentra en Barcelona, desde donde emprende camino a Francia; al parecer el viaje queda voluntariamente envuelto en una nube de misterio398; sólo años después, las páginas con las que la Real Academia de Medicina comienza sus Memorias…, darán cuenta de él: “Habian logrado varios Académicos á quienes en calidad de tales concedía fácil acceso y su proteccion el Marqués de La Ensenada, persuadir á este célebre Ministro y por su medio al Rey, quan decorosa y util seria a la Nacion Española la ereccion de una Academia de Ciencias (…) confió S. M. al referido Secretario perpetuo de la Academia Don Joseph Ortega la honrosa y delicada 397 Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, 10-IV-1753 [L-1569] (ARJB, leg. II,1,6,18, traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 134-136. 1908). Y, tras un extenso exordio sobre el cultivo de Avena y Elymus, finaliza: “… todos los Botánicos del mundo han de apreciar á SS. EE. Carvajal y Grimaldi.” Meses después, el 2-X-1753, ante la inminente partida de Pehr Löfling hacia América, insistirá: “El Sr. Carvajal debe ser un gran hombre que ha comprendido antes que nadie lo que otros no han sabido utilizar; debe, sin duda, apreciársele y elogiarle…” (Ib., Upsala, 2-X-1753 [L-1660]. ARJB, leg. II,1,6,23; traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 147-151. 1908). Carta de Josep Borges a Josep Salvador. Madrid, 24-VIII-1751 (Josep Maria Camarasa, Botànica i botànics del països catalans [Biblioteca universitaria, 10]. Barcelona: Enciclopedia Catalana, 1989 -cf. págs. 52-53-). 398 150 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol comision de recoger por si mismo, en cada uno de los paises mas cultos de Europa, informes y noticias exâctas del merito de los literatos que florecian en ellos (…) viajando a este fin con aparente motivo del restablecimiento de su salud y el especial y reservado encargo de asegurarse de las virtudes sociales y prendas morales que el piadoso Rey exigia en todos los que hubiesen de componer tan ilustre Congregacion…”399 Tradicionalmente –quizás siguiendo este comentario- se ha vinculado la figura de José Hortega al proyecto de Academia de Ciencias patrocinado por el marqués de la Ensenada, bajo la orientación técnica de Jorge Juan y Antonio de Ulloa400; enfrentándolo así a la propuesta de Ignacio Luzán, defendida por José de Carvajal401. No obstante, la vinculación de José Hortega al grupo de Carvajal y su amistad, casi devocional, hacia Ignacio Luzán402, parecen sustentar la tesis contraria. 399 “Noticia histórica del orígen, progresos y estado actual de la Real Academia Médica de Madrid”. Memorias de la Real Academia de Medicina, 1: I-XIV. Madrid, (cf. pág. IX). 400 Cf. Pedro Roca. “Orígenes de la Real Academia de Ciencias”. Homenaje a Menéndez y Pelayo en el año vigésimo de su profesordo. Estudios de erudición española, 3: 845-940. Madrid: Victoriano Suárez, 1899. Guillermo Carnero (“El Plan de una Academia… de Ignacio de Luzán”. Nueva Revista de Filología Hispánica, 37: 167-201. México, 1989) señala: “Tanto el marqués de la Ensenada como Carvajal y Lancáster patrocinaron la idea de una Academia de Ciencias; el primero con la ayuda de José Ortega [sic], Jorge Juan, Antonio de Ulloa y otros; el segundo, con la de Luzán...” (Op. cit. pág. 160). Sobre el proyecto de Jorge Juan y Antonio de Ulloa cf., además de las referencia citadas, Julio Guillén Tato. “Juan de Ulloa y los precedentes del XVIII de la Real Academia de Ciencias de Madrid”. Revista de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, 39: 440-461. Madrid, 1940; José María Torroja. “Jorge Juan y los antecedentes de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físcas y Naturales”. Revista de la Academia de Ciencias Exactas, Físcas y Naturales, 67: 11-25. Madrid, 1973. 401 “... mi amigo y mi correspondiente, y Maestro que fue de Don Ignacio Luzán”. Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 15-VI-1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs. 94-95. 1981). A poco de abandonar la sede diplomática española en París, en el gozne entre 1750 y 1751, Ignacio Luzan presentará, ante José de Carvajal, un Plan de una Academia de Ciencias y Artes en que se habían de refundir la Española y la de Historia (Archivo Histórico Nacional [AHN], Estado, leg. 3022,3). La opción planteada por Ignacio Luzán agradó al Secretario de Estado, quien anotó: “… lo he celebrado infinito; esta breve y con méthodo, que se hace facil de comprehender. Dios lo quiera y yo ayudaré, y mucho; sobre todo hablarenos...” 402 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 151 Resulta evidente que el plan de Luzán tiene muchos elementos discrepantes con la propia posición mantenida por José Hortega: la de Medicina es la única Academia que no dispone de una sección propia en el proyecto y en él no se presta atención alguna a los gabinetes requeridos para la experimentación o la exhibición pública (jardín botánico, colecciones intrumentales, de Historia Natural, etc.), cuestiones –ambas- primordiales en cualquier planteamiento avalado por Hortega; pero, quizás por ello, la presencia de José Hortega cobra especial significación en el diseño de Academia ingeniado por José de Carvajal. Como cabría esperar, la figura de José Hortega está presente en la “Lista de Sugetos que conozco y me parece pueden ser aproposito como Académicos” incorporada al proyecto de Ignacio Luzán; se encuentra entre los propuestos para ‘asociados’, aquellos “que deberán ser escogidos de entre los ingenios sobresalientes, aplicados y que muestren más instrucción e inclinación á aquella classe para que se les destina”403: “Dn. Joseph Ortega, para la Chymica y Physica experimental.”404 La gestación de una Academia de Ciencias está también presente en la correpondencia cursada entre Carl Linné y su discípulo Pehr Löfling; en carta remitida en los primeros meses de 1752, redactada en su mayor parte en latín, reserva algunos párrafos personales que escribe en sueco: “El Sr. Godin será seguramente miembro de la Sociedad de Ciencias de Upsala; ya he preparado á todos los señores405. El proyecto de Ignacio Luzán ha sido analizado, entre otros, por Antonio Rumeu de Armas (Origen y fundación del Museo del Prado. Madrid: Instituto de España,1980 –cf. págs. 19-20-) y, de manera particular, por Didier Ozanam (“L’idéal académique d’un poète éclairé: Luzán et son projet d’Académie royale des Sciences, Arts et Belles Lettres (1750–1751)”. Bulletin hispanique, 64bis [Mélanges Bataillon]: 188–208. Bordeaux, 1962), Alberto Gil Novales (“El concepto de Academia de Ciencias en el siglo XVIII español”. Boletín del Centro de Estudios del siglo XVIII, 7/8: 3-23. Oviedo, 1980) y Guillermo Carnero (Op. cit. nota 400), quienes señalan la existencia de otro manuscrito del proyecto de Luzán, probablemente un borrador inicial, con anotaciones de José de Carvajal, en el Archivo del Ministerio de Asuntos Exteriores [AMAE] (mss. 87), éste ha sido transcrito por Guillermo Carnero (Op. cit., págs. 167-201). 403 Guillermo Carnero (Op. cit. nota 400, pág. 184. 1989). 404 Guillermo Carnero (Op. cit. nota 400, pág. 200. 1989). Meses después escribirá: “Si está el Sr. Godin en Madrid, salúdele mil veces. Dígale, ante todo, que el 10 de Octubre fue omnium unanimi consensu 405 152 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Cuide usted de la organización de la Academia de Ciencias, no hiera usted á los teólogos, que en ese caso pudieran tener motivo de queja; proceda con calma y prudencia. El que en el mundo prospera, va por lo más largo; créame, que los pies se vuelvan hacia usted; todas las cosas buenas luchan con los mayores obstáculos…”406 La coincidencia de hechos entre la llegada a la Corte de Pehr Löfling y la salida de ella de José Hortega, unida a los comentarios de Carl Linné sobre el proyecto de Academia de Ciencias, ha llevado a algunos historiadores a pensar en el sueco como posible sustituto del boticario madrileño en la gestión de un -ya pergeñado- Real Jardín Botánico; para estos autores, Pehr Löfling queda íntimamente vinculado a José de Carvajal, mientras José Hortega lo es al marqués de la Ensenada, produciéndose entre ellos un soterrado enfrentamiento407. No parece que sea así; la figura de nuestro protagonista se nos acerca más al círculo de Carvajal, quien -especialmente durante estos primeros años de la década de 1750- no ceja en solitar sus informes, incluso sobre la presencia en España del propio Pehr Löfling. Apenas nos quedan datos del itinerario del viaje de José Hortega por Europa; del 16 de octubre de 1752 data un escrito al ministro Carvajal, fechado en París, en el que, a la vez que le anuncia la remisión de un estudio sobre el arte de hacer los tintes azul y verde que, hasta entonces, se habían guardado como secreto en Sajonia408, le informa de su periplo, ya avanzado: para elegido para miembro de la Sociedad de Ciencias de Upsala, como una pequeña muestra de agradecimiento por el interés que ha demostrado á usted; ruéguele considere esto como una primera muestra de agradecimiento…” Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, 9-XI-1752 (ARJB, leg. II,1,6,16; traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 125-130. 1908). Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, [1752] (ARJB, leg. II,1,6,11; traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 108-111. 1908). La carta carece de fecha, pero lleva una nota posterior, de mano de Simón de Rojas Clemente, que la data en 1-IV-1752; Pehr Löfling señaló haberla recibido el 28-IV-1752 y contestado el 1-V-1752. 406 407 “No fóra estrany que les murmuracions de la Cort tinguessin fonament i que, mentre Ortega era el candidat de La Ensenada, Löfling ho fos de Carvajal (...) oposat per la seva anglofilia a la francofilia del maques de La Ensenada...” (Josep Maria Camarasa. Op. cit. nota 398. 1989; la cita en pág. 53). La memoria no quedó adjunta a esta correspondencia pero, por el contenido de la carta, sabemos que presentaba un método no incluido en el tratado de M. Hellot, que acababa de traducirse (AHN, Fomento, leg. 3182 408 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 153 entonces había visitado Francia, Italia, Flandes y Holanda y se disponía a marchar a Inglaterra. Debió residir en Londres los primeros días de diciembre de 1752; del 7 de diciembre data la propuesta, firmada por sir William Watson409, Henriquez de Castro Sarmento410, Thomas Birch411 y Gowin Knight412, para incluirle como fellow de la Royal Society: “Don Joseph Hortega Professor of Chymistry & Botany in the Court of Madrid, perpetual Secretary of the Royal academy Physico-Medica Matritense, Fellow of the Royal Society of Sevil, Oporto & Bolonia, & of the Academy of Botany of Florensia a gentleman very well versed in Experimental Philosophy, Botany & Natural History being desirous of the honour of being admitted as fellow of the Royal Society of London, we under-writen recomend him as a person deserving that honour, and as the most proper member to communicate to us whatever Shall be wanting from those Kingdoms in Natural Hystory, & to prove a Valuable, & useful Correspondent to the Royal Society.”413 [146]). Sir William Watson (1715-1787), naturalista, médico y físico británico interesado en los fenómenos eléctricos, particularmente en la ‘botella de Leyden’; a él se debe la introduccción de la nomenclatura binomial linneana en Gran Bretaña; fue miembro de la Royal Society desde abril de 1741. 409 410 Jacob [Henriquez] de Castro-Sarmento (1692-1762), médico portugués, naturalista, poeta, exiliado en Londres desde 1720 por su origen marrano y sus creencias deístas, perteneció a la Royal Society desde 1725; firme defensor del newtonismo, realizó considerables esfuerzos por entroncar esta idea científica con la teología judía. Thomas Birch (1705-1766), sacerdote al servicio de la Iglesia de Inglaterra (1731), historiador y crítico literario, amigo personal de Philip Yorke, primer conde de Hardwicke; pertenecía a la Royal Society desde febrero de 1735, fue su secretario entre 1752 y 1765. 411 412 Gowin Knight (1713-1772), científico británico, especialmente conocido por sus trabajos para crear acero fuertemente magnetizado, logrado en 1745 y comercializado por George Adams como parte de sus brújulas; en 1756 fue nombrado primer bibliotecario del British Museum; pertenecía a la Royal Society desde abril de 1745. 413 The Royal Society (London) [RS]. “Certificates of Election and Candidature”. [Joseph Hortega], signatura: EC/1752/36. 154 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol La propuesta fue sometida a votación en la sesión celebrada el 8 de marzo de 1753, y aprobada por mayoría414; desde entonces José Hortega se convirtío en miembro de esta prestigiosa academia británica. En los comienzos de agosto de 1753 será la Academie des Sciences parisina quien le incluirá entre sus correspondientes, su contacto será el médico y botánico Bernard de Jussieu415: “Aujourd´hui 8 août 1753. L’Acade, informée du savoir et de la capacité de Don Vásques y Morales Hortega [sic]. Secretaire perpetuel de l’Acade. de Médicine de Madrid; Membre de la Société Royale de Londres, et de l’Acade de l’Institut de Bologne, et décidant lui donner des marques de son estime qui puissent l’encourager à continuer le commerce des lettres dans lequel il est avec Monsieur de Jussieu le cadet [Bernard de Jussieu], pour les matières de mathématiques et de Physique. L’a nommé pour son correspondant, lui accorde en cette qualité le droit d’entreé aux assemblées quand il viendra à Paris et l’invite à continuer cette correspondence avec le plus de régularitè qu’il sera possible, persuadeé qu’elle en tirera de l’utilité en foi de quoi j’ai signé les présentes auxquelles j’ai apposé le seceau de l’Academie. Pour minute [Jean Paul Grandjean] Defouchy”416 Posiblemente también estableció buenas relaciones con Antoine Baumé417 a quien, pocos años después, en 1757, entregaría una libra de platina para sus investigaciones418. RS. “Certificates of Election and Candidature”. [Joseph Hortega], signatura: EC/1752/35. 414 Bernard de Jussieu (1699-1777), médico y botánico francés, professor del Jardin des Plantes de Paris desde 1722 y miembro de la Academie des Sciences desde 1725. 415 “Lettres de Correspe. pr. D. Hortega”. Académie des Sciences de Paris [ASP], “Dossier Joseph Hortega”. Agradecemos a Florence Greffe, ‘conservateur des Archives de la Académie des Sciences-Institut de France’, el envío de una copia de esta documentación. Jean-Paul Grandjean de Fouchy (1707-1788) fue nombrado Secretario perpetuo de la Académie Royale des Sciences el 2-IX-1743. 416 Antoine Baumé (1728-1804), químico, alumno de Claude Joseph Geoffroy, en 1752 se integró en la Faculté de Pharmacie parisina; no fue miembro de la Académie des Sciences hasta 1773. 417 418 Cf. Luis Fermín Capitán Vallvey. “Platina española para Europa en el siglo XVIII”. LLull, 17: 289-312. Zaragoza, 1994 (cf. pág. 294). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 155 José Hortega estuvo fuera de la Corte española hasta el 12 de mayo de 1753; Pehr Löfling, que esperaba con ansia su llegada para terminar de concretar los detalles de su viaje419, informa de su regreso en carta a Carl Linné, fechada a mediados de mayo: “El Sr. Ortega llegó antes de ayer de sus viajes por Italia, Francia, Inglaterra y Holanda, y ayer tuve el gusto de verle en compañía del Sr. Minuart. Lo saludé de parte de Vmd., y el Sr. Minuart le dixo que Vmd. le habia honrado dando su nombre á la Juncaria; á lo qual se manifestó muy agradecido. No tuve ocasión de hablarle particularmente sobre mis viages, mas espero hacerlo mas adelante…”420 Poco tardaría José Hortega en tratar del asunto con José de Carvajal; de momento, Pehr Löfling tendría que continuar con su trabajo habitual: aprender el castellano, herborizar en las proximidades de la Corte421 y, de manera ocasional, responder a algunas de las cuestiones planteadas desde el Gobierno422. 419 “… no haré viage alguno antes que Mr. Godin y el Sr. Ortega estén de vuelta...” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 8-I-1753 [L-1515]. LS, signatura: ms. LS, IX: 360-362; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(12): 338-339. 1801; 5(13): 82-90. 1802). Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 14-V-1753 [L-1586] (cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(13): 92-98. 1802). 420 “En este año (..) He estado una vez en S. Fernando, y ahora en la primavera con el Baron Lehusen en Aranjuez (…) La semana que viene pienso volver allí, y después ir á Toledo, á los cerros del Escurial [sic] y á San Idefonso. Estos serán mis viages en este año hasta que me destinen á otra parte…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 8-I-1753 [L-1515]. LS, signatura: ms. LS, IX: 360-362; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 4(12): 338-339. 1801; 5(13): 82-90. 1802). 421 422 “El Excmo. Sr. Marques de Grimaldi hace un mes que está aquí; yo he ido á ofrecerle mi respeto é informarle del estado de mis cosas hasta el dia de hoy. Un día se dignó llamarme á su casa, y comunicarme lo que había hablado con el primer Ministro el Señor Carvajal tocante á mi empleo y ocupación. / Entre otras cosas tratamos de la utilidad que tiene en Suecia la Avena cultivada en los arenales de Scania…” Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 26II-1753 [L-1530] (LS, signatura: ms. LS, IX: 363-364; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(13): 90-91. 1802). Carl Linné escribió, en latín, un pequeño estudio sobre la aplicación agrícola de las gramíneas, que hizo llegar a Perh Löfling a modo de carta (Upsala, 20-IV-1753 [L-1565]. ARJB, leg. II,1,6,19; cf. [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 136140. 1908), éste se lo remitió al marqués de Grimaldi, con leves retoques, en los que se dismulaba el desconocimiento de Carl Linné sobre la realidad de la agricultura hispana: “... entregué al Sr. Marqués copia (...) con la traduccion española de la de Vmd. relativa á la Avena de los arenales. S. E. me mandó 156 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Un Gabinete… No cabe duda del interés de José Hortega por fundar en la Corte un Real Gabinte de Historia Natural, al modo de los que había visitado en su viaje por Europa; y no desaprovechó ocasión para ello. Con motivo del viaje organizado a los territorios americanos, en el que habría de participar Pehr Löfling, dará a éste instrucciones concretas sobre la remisión de materiales a la Corte: “… me mandó S. E. que con qualquier navío que salga para Europa remita duplicadas las observaciones, dibuxos y producciones naturales destinadas para el Museo nuevamente establecido en esta corte, á fin de que no se pierdan tan fácilmente. Estas piezas dobles se distribuirán después á los demás Museos de Francia, Inglaterra, Suecia, &c., con la condicion de que estos comunicarán quanto posean de superfluo, y haga falta en el Museo de aquí (…) El Sr. Ortega manifestó su alegría delante de S. E., quien se dignó dar su aprobacion…”423 Sin duda pensando en el acopio de materiales para este Real Gabinete se redactaron -quizás por el propio José Hortegaunas instrucciones dirigidas a Pehr Löfling, y que hoy solo conocemos por la mano de éste, bajo el título “Lo que se debe coleccionar para el Gabinete Real…”424 En la corresponencia remitida por el naturalista sueco a José Hortega, poco antes de su partida para tierras americanas, en diciembre de 1753, se refiere al modo en que habrían de ordenarse las conchas en el Real Gabinete, recomendando las propuestas de Niccolò Gualtieri (1688-1744)425, para advertir de seguido: que copiase una y otra, para entregarlas al dia siguiente al Sr. D. Joseph de Carvajal…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Aranjuez, 24-VI-1753 [L-1600]. LS, signatura: ms. LS, IX: 370-371; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(13): 98-100. 1802). 423 Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 27-VIII-1753 [L-1626] (LS, signatura: ms. LS, IX: 376-378; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(15): 303-311. 1802). ARJB, leg II,2,1 (transcritas en castellano por Francisco Pelayo López, Miguel Ángel Puig-Samper. La obra científica de Löfling en Venezuela. Caracas: Cuadernos Lagoven [Serie Medio Milenio], 1992; cf. págs. 41-43). 424 [Niccolò Gualtieri] Index testarum conchyliorum quae adseruantur in museo Nicolai Gualtieri... et methodice distributae exhibentur tabulis CX. Florentiae: ex typographia Caietani Albizzini, 1742. 425 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 157 “… Vmd. me perdone mi disgression en este assunto, como Vmd, que ha visto tantos y tan bellos Gavinettes que sabra mejor de todos, como se debe instituir el Gavinete del Rey ns. Sr. correspondiente á su grandeza…”426 Es posible que este Real Gabinete sea el mismo que, desde 1752, tuvo carta de naturaleza al cuidado de Antonio de Ulloa; estuvo ubicado en Madrid, en el edificio chaflán entre las calles Magdalena y Lavapiés427. En él encontraron acomodo, además de las colecciones regias, los donativos ralizados por los naturalistas que sirvieron en este establecimiento al servicio de la Corona: William Bowles, Agustin de La Planche, Andrea Keternin, Johan Keternin, Juan Pedro de Saura y José Solano. La dirección de este Real Gabinete, también conocido como Real Casa de la Geografía, pasó, en 1755, a manos de Eugenio Reigosa, quien hasta entonces se ocupaba de la administración del establecimiento y sustituía al director en sus ausencias. El proyecto puede darse por finiquitado en 1756, cuando a los alemanes Andrea y Johan Keternin se les traslada a las minas de Almadén428; realmente, tras la destitución del marqués de la Ensenada, principal adalid del plan, acaecida en junio de 1754, este Real Establecimiento inicia un progresivo declive, que pasará por la distribución de los instrumentos y piezas en él conservados entre las muchas instituciones científicas gestadas en la España de la segunda mitad del XVIII429. 426 Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Puerto de Santa María, 18-XII1753 (ARJB, leg. II,1,7,11). 427 La casa, propiedad de José Pando, fue alquilada por el precio de 19.000 reales, constaba de tres alturas (principal, bajo y segundo), con fachada a las dos citadas calles y a la de la Cabeza (cf. María de los Ángeles Calatayud Arinero. “Antecedentes y creación del Real Gabinete de Historia Natural de Madrid”. Arbor, 123(482): 9-33. Madrid, 1986). 428 Por estas mismas fechas se realquila el piso bajo y el segundo de la casa, agrupándose todos los materiales del Real Gabinete en el principal (María de los Ángeles Calatayud Arinero. Op. cit. nota 427, pág. 13. 1986). 429 De ello da pormenorizada cuenta María de los Ángeles Calatayud Arinero (Op. cit. nota 427. 1986), basándose en el ‘Informe’ atribuido a Francisco de Reigosa, último administrador de este Real Establecimiento, fechado en San Lorenzo de El Escorial, el 29-XI-1773; el informe se conserva en el Archivo del Museo Nacional de Ciencias Naturales [AMNCN], Real Gabinete, 159 (fide María de los Ángeles Calatayud Arinero. Catálogo de documentos del Real Gabinete de Historia Natural (1752-1786). Madrid: Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1987). 158 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol De ser cierta nuestra hipótesis, nos interesa destacar la conjunción de intereses entre un proyecto orbitado en torno a José de Carvajal -la participación de Pehr Löfling en la expedición al Orinoco- y otro claramente dirigido desde la esfera del marqués de La Ensenada -el Real Gabiente de la Casa de la Geografía-; y el papel de conciliador de voluntades que, en tal caso, jugó José Hortega en la aparentemente conflictiva Corte madrileña. José Hortega dispuso de su propio gabinete de Historia Natural; en época tan temprana como la de 1742, su colección debía tener cierta importancia, la suficiente para ser expresamente mencionada en L’histoire naturelle éclaircie dans deux de ses parties principales, la lithologie et la conchyliologie, dont l’une traite des pierres et l’autre des coquillages… publicada, de forma anómina (Paris: chez De Bure, 1742), por Antoine Joseph Dezallier d’Argenville (1680-1765): “La Collection del Señor Hortega, Apotiquaire à Madrid, prouve que le Maître est fort intelligent dans l’Histoire Naturelle, il n’a néglicé aucune de ses parties & il peut montree sur chacune, des piéces très-curieuses.”430 Poco más sabemos de esta colección; como el resto de sus propiedades de carácter científico pasó a manos de su sobrino, Casimiro Gómez Ortega, quien debió enriquecerla y reordenarla; al menos para la parte mineralógica siguió el sistema de Johann Friedrich Wilhelm Wiedemann, en la versión castellana que de éste realizara Christiano Herrgen431. Este gabinete mineralógico fue adquirido, hacia 1817, por el Real Colegio de Artillería de Antoine Joseph Dezallier d’Argenville. L’histoire naturelle éclaircie dans deux de ses parties principales, la lithologie et la conchyliologie, dont l’une traite des pierres et l’autre des coquillages… Paris: chez De Bure, 1742 (cf. pág. 226). 430 “… siendo muy completa y aun duplicada o triplicada en algunos ejemplares, que todos se hallan clasificados y marcados con el numero de la pagina en que los descrive la Oritognosia de Videnmann, traducida por el Profesor Herrgen…” (Solicitud, dirigida por el general-director del Real Colegio de Artillería de Segovia, Martín García de Loygorri, al Secretario de Estado del Despacho de Guerra, solicitando la adquisición del ramo geológico del gabinete de José Hortega. Segovia, 20-VII-1817. AHM Segovia, s/c -fide Andrés Díez Herrero. “La colección de minerales, rocas y fósiles de la Academia de Artillería de Segovia”. Boletín Geológico y Minero, 108(2): 99-106. Madrid, 1997 -cf. pág. 102-). El texto aludido es: Johann Friedrich Widenmann. La Orictognósia, escrita en alemán por D. Juan Federico Guillermo Widenmann... y traducida por Don Christiano Herrgen... Madrid: en la Imprenta Real, por D. Pedro Julian Pereyra, 1797-1798. 2 vols. 431 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 159 Segovia, y constituyó el germen de la futura colección en él atesorada432. … y un Jardín La conveniencia de fundar un Jardín Botánico en la Corte está explícitamente expresa en la carta de presentación de su discipulo Pehr Löfling, remitida por Carl Linné a José de Carvajal, en los primeros días de 1751: “Si placuerit Regi Vestro vere Magno Hortulum concedere, poterit juvenis destinatus curare ut Plantae Vestrates facile omnes, aut vivis radicibus aut seminibus in eum introducantur quo Studiosi Vestrates in eo addiscant patriae suae bona; vel etiam si placuerit mittere juvenes aliquot Vestratum cum Loeflingio, indigitabit non modo omni naturalia in locis eorum natalibus, sed et ipsos docebit methodum singula facillimo negotio dignoscendii. Mihi suffiat si Discipulus mittat semina aliquot minus trita pro Horto nostro, vel siccas aliquot plantas per Herbario meo…”433 La idea debió estar presente en las tertulias de la Corte; al menos Pehr Löfling era conocedor de ella; en carta a Carl Linné, fechada en los comienzos de noviembre de 1751, ya señala: “El señor Minuart (…) me ha enseñado el jardín que, según todos los rumores por aquí, será el Jardín Botánico...”434 y, en diciembre de 1753, en escrito remitido desde Cádiz, se refiere al Jardín de aquel Real Colegio de Cirugía, como “muy necessario aqui para el adelantamiento de la Historia Natural en España, y la Al parecer existía un catálogo de este Gabinete, remitido, en 1817, a la Junta Superior Facultativa de Artillería, para que aprobara su adquisición, cuya localización actual se desconoce; la colección mineralógica de los Ortega fue inventariada y recibida, en Segovia, por Antonio de Bartolomé (cf. Andrés Díez Herrero. Op. cit. nota 431. 1997; Ibid. “Apuntes históricos sobre la colección de minerales, rocas y fósilesde la Academia de Artillería de Segovia”. Llull, 28: 383-413. Zaragoza, 2005). 432 433 Carta de Carl Linné a José de Caravajal y Lancáster. Upsala, 14-I1751 [L-1222] (ARJB, leg. II,1,3,1 [copia]; transcrita por James Edward Smith. Op. cit. nota 366, vol. 2: 459-464. 1821); copia en ARJB, leg. II,1,3,1 (cf. [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 97-100. 1908). Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 4-XI-1751 (LS, signatura: ms. LS, IX: 398-399; traducida al castellano en Francisco Pelayo López. Op. cit. nota 373, págs. 125-127. 1990). 434 160 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol conservacion del de Cadiz [tachado] Madrid, que Vmd piensa erigir…”435 El rumor de su pronta creación se acrecentó en la primavera de 1754, al menos entre los naturalistas catalanes; en carta del cirujano Josep Borges a Josep Salvador, éste le comenta: “… se formarà un Jardí Botànic y Real en la porta de Atocha, prop de Santa maría de la Cabeza. Que D. Josep Ortega es el principal, que D. Josep Quer té 18.000 reals de dotació y Minuart 12.000…”436 La orden de creación del Real Jardín de Madrid no fue firmada hasta octubre de 1755437; pero, a finales de marzo de este año, José Hortega escribe ya a Carl Linné dando cuenta de la creación del Real Jardín, en Madrid, a la vez que le informa del viaje de Pehr Löfling a Caracas y le agradece la descripción de Ortega hispanica L. 438: “Rex noster [Fernando VI (1713-1759)] amplissimum Hortum Botanicum Madriti exivui decreverit; huju studio at culturae assignati fuere D. Quer et Minuart, mihique totius negotii cura, et institutio commissa fuit, namq[ue] in his omnibus promovendis at 435 Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Puerto de Santa María, 25-XII1753 (ARJB, leg. II,1,7,12). 436 Carta de Josep Borges a Josep Salvador. [Madrid], 6-IV-1754 (cf. Josep Maria Camarasa, Op. cit. nota 398, pág. 54. 1989). 437 Sobre la primitiva instalación del Real Jardín Botánico en Migas Calientes cf. Carmen Añón Feliu. “Noticias sobre los reales jardines botánicos de Migas Calientes y el Prado”. Anales del Instituto de Estudios Madrieños, 21: 91116. Madrid, 1984; Ibid. Real Jardín Botánico de Madrid. Sus origenes: 1755-1781. Madrid: CSIC, 1987; Francisco Javier Puerto Sarmiento. La Ilusión quebrada: botánica, sanidad y política científica en la España ilustrada. Barcelona/Madrid: Serbal/CSIC, 1988 (cf. págs. 38-66); Susana Pinar, Miguel Ángel Puig-Samper. “La Botánica en el Jardín de Migas Calientes”. Asclepio, 48(1): 71-100. Madrid, 1996. Carmen Añón (Op. cit., 1987, pág. 11) señala como detonante de la fundación del Real Jardín la presión ejercida por José Hortega ante José Suñol, y la proposión realizada por éste a Fernando VI, con fecha de 31 de octubre de 1753; en términos similares se expresan Susana Pinar, Miguel Ángel PuigSamper (Op. cit., 1996, p. 71). 438 Ortega hispanica Loefl. ex L., Species Plantarum: 560. 1753. “Pro Ortega hispanica quam plurimas reddo tibi gratias, nullamque ocasionem praetermitam ut literas tuas Leoffling scriptas ei diligenter transmitantur.” (Carta de José Hortega a Carl Linné. Madrid, 25-III-1754 [L-1725]. LS, signatura: mss. LS, XI: 277-278). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 161 assequondis aliquamtulum labori et diligentiae impesis fuit…”439 La noticia de la fundación del Real Jardín es recogida por Benito Paltor, en las lejanas tierras del Orinoco, en los meses finales de 1756; éste parece sabedor de la empresa antes de embarcarse hacia América, en el tránsito de 1753 a 1754: “Acabo de recibir una noticia por un Amigo, la que me ha alegrado muchissimo, y es: que el Rey ntro. Señor (que Dios gde.) se ha servido establecer y dotar un Jardin Real de Vegetables, nombrando por Yntendente del referido Jardin, al Dr. Dn. Joseph Suñol, por SubDirectores con igual dependencia á Vm. y á Dn. Joseph Martinez Toledano, por primer Professor de la Botanica á Dn. Joseph Quer, y por segundo, á Dn. Juan Minuart, de que doy á Vm. repetidas enhorabuenas (…) Gracias á Dios que tiene Vm. conseguido, lo que tanto deseaba para el bien publico. O! quan conbeniente fuera que todas las Republicas tuviesen alguns. hombres utiles para fomentar el bien comun, como en Vm. se experimenta…”440 El organigrama del nuevo Real Jardín de Madrid estaba fuertemente inspirado en el modelo organizativo francés, con un médico de Cámara como Intendente, José Suñol, a quien competen los asuntos de carácter económico y administrativo, y dos profesores, José Quer y Juan Minuart, encargados de los aspectos docentes. No obstante, el modelo español incorpora una novedad: el establecimiento de dos cargos intermedios entre el Intendente y los profesores, a modo de subdirectores; para ocuparlos serían designados José Hortega y el boticario mayor José Martínez Toledano. No cabe duda de que el Real Jardín nace estrechamente vinculado a la Real Academia Médica de Madrid; la plaza de Intendente recae en el Presidente de la Academia, y los dos subdirectores también pertenecen a su seno441. 439 Carta de José Hortega a Carl Linné. Madrid, 25-III-1754 [L-1725] (LS, signatura: mss. LS. XI: 277-278). 440 Carta de Benito Paltor a José Hortega. Muitaco, 8-XII-1756 (ARJB, leg. II,4,3,5). 441 Así lo señala el bosquejo histórico que, a modo de introducción, incorpora el primer volumen de las Memorias de la Real Academia Médica de Madrid, de acuerdo con el cual, la Corporación: “... ha sido la oficina, por decirlo así, en que se han fraguado los ventajosos designios de los Establecimientos del Jardín Botánico y Laboratorio Chimico, y el plantel de todos sus catedráticos...” 162 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Las escrituras de venta de los terrenos donde se asentó este primitivo Real Jardín, realizadas en diciembre de 1780, nos ofrecen una extensa descripción física del espacio: la fachada principal se encontraba en el camino del Real Sitio de El Pardo, mirando al Soto de Migas Calientes; su perimetro tenía un contorno irregular, cuyo lado mayor medía 800 pies442; disponía de una ‘casa del jardinero’, estanque, un edificio con sólo una crujía y alzado de cuarto principal y, a la derecha de ésta, otra de cuartos pequeños de teja vana, un invernáculo, un cenador con cubiertas a cuatro aguas, dos entradas y arcos que arrancaban de una columna de piedra berroqueña con asientos del mismo material443. Las casas y el invernáculo se ubican en la esquina superior derecha del espacio, mientras en la esquina opuesta se ubicaba el cenador. La documentación disponible señala el especial protagonismo ejercido por José Hortega durante los años de acondionamiento del jardín del Soto de Migas Calientes444. A [Real Academia Médica de Madrid]. “Noticia histórica del origen, progresos y estado actual de la Real Academia Médica de Madrid”. Memorias de la Real Academia Médica de Madrid, 1: I-LII. Madrid, 1797 (cf. pág. XIV). Las otras medidas que ofrece la “Escritura de la venta del Jardín Botánico...” (vide infra), son 282 pies por un lateral que, formando un ángulo 442 saliente, seguía la línea con 211 pies, hasta conectar con la línea recta de 800 pies; por la izquierda, mirando al Norte, se extendía por 443 pies, a cuya distancia formaba un ángulo entrante y seguía la línea con 306 pies; por el testero que miraba a Oriente, un linea recta de 560 pies cerraba el sitio (AGP, Títulos, leg. 1257/13 –fide Carmen Añón Feliu. Op. cit. nota 445, pág. 94-106. 1987). 443 “Escritura de la venta del Jardín Botánico, sito a las márgenes del río Manzanares, a favor de la excelentísima señora doña María Felipa Campbel, marquesa de Castejón, con una descripción detallada del mismo”. Madrid, 22XII-1780 (AGP, Títulos, leg. 1257/13 –fide Carmen Añón Feliu. Op. cit. nota 445, pág. 94-106. 1987). Un documento, firmado por José Hortega, acompaña a las cuentas de gastos efectuados, desde el 25-X-1756 al 24-XII-1756, con motivo de las reparaciones efectuadas por varios hundimientos de los acueductos del Jardín; éstas ascendieron a 5.636 rs.; en el escrito, dirigido a José Suñol, se hacía constar que, como no se le habían entregado para las obras más que 4.700 reales, se le adeudaba el resto. Con fecha de 26-I-1757 se cargan los gastos habidos en la fábrica del invernadero, importaron la cantidad de 4.435 ½ rs. En 20-II-1758, Hortega remite a Suñol las cuentas de gastos realizados, a la vez que solicita se le librase alguna cantidad para reparar los desperfectos causados por el arroyo que atravesaba el jardín, a la par que le recuerda el adeudo de 500 rs. 7 ms. por los anticipos que él mismo había realizado. José Suñol se limitó a transmitir las solicitudes de José Hortega al conde de Valparaíso (Carmen Añón Feliu. Op. cit. nota 437, págs. 29-30. 1987). 444 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 163 su pluma debemos una extensa descripción de este espacio, poblado de árboles frutales y de hortalizas antes de que fuese destinado por el Monarca al estudio de las plantas. En el proceso de acondicionamiento se desmontaron más de 800 árboles, que fueron trasplantados en la huerta del Convento de la Visitación. Tras finalizar las operaciones del desmonte se formaron doce cuadros grandes adecuados al sistema tournefortiano de veintidós clases y cuatro parterres; el espacio fue cercado con cañas y estacas de pino y, cada parterre, disponía de una puerta verde con llave y cerradura. En opinión de José Hortega, el estanque grande, ubicado en una posición central, era el objeto de menor valor estético, por lo que fue expresamente ‘adornado’ y cercado con una barandilla pintada de verde, en el mismo tono que la protección con la que se dotaba a cada uno de los cuatro parterres con que contaba el Jardín. La vegetación existente con anterioridad a su acondicionamiento estaba prácticamente perdida, en especial los setos de boj, éstos fueron replantados junto con tilos, castaños de Indias, olmos, robinias, jazmines, clemátides, granados, acacias, laureles, pistachos, acebos, avellanos y algunos otros de los árboles que José Quer disponía en el jardín de los Afligidos445. El estanque central fue rodeado de plantas de muy diverso tipo entre las que destacan un drago, algunas bignonias y plantas de añil; en el lado oeste, cercano al río, se cultivaron tiestos con aloes, opuntias, yucas y cereus; al norte del jardín se ubicaba un cuadro de patrones para injertar, otro de hiedra, dos de violetas, un bancal de corona imperial (Fritillaria imperialis L.), tres de jacintos y cuatro cuadros de repuesto con bulbosas y anuales. Junto al cenador, y en las proximidades de una pila de agua, se encontraba un cuadro con plantas de flor como prímulas, verónicas y ranúnculos, además de un cuadro dedicado al cultivo de fresas y un depósito general plantas. El Jardín disponía de cuarenta y dos eras enfocadas al cultivo de plantas medicinales, una platabanda y otras diecisiete eras de plantas ‘venenosas’: mandragora, belladona, datura, beleño, cicuta, tejo, acónito, 445 AGS, Sitios Reales, leg. 248, fol. 138-150 (fide Carmen Añón Feliu. Op. cit. nota 437, pág. 27. 1987). 164 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol ricino, etc.446 Las obras del nuevo jardín comenzaron con rapidez, de finales de 1756 data la construcción de nuevo invernáculo447. Los gastos ocasionados por las labores de acondicionamiento y mantenimiento del Real Jardín fueron abonados con cargo a los ‘caudales sobrantes del Arca del Protomedicato’; el mismo fondo se ocupó de sufragar los sueldos de quienes habrían de encargarse de la enseñanza de la Botánica: 12.000 rs. vn para el primer catedrático y 8.000 rs. vn para el segundo, además de las ayudas de costas para sus posibles viajes de herborización. Tanto el cargo del Intendente, José Suñol, como el de los dos Subdirectores, José Hortega y José Martínez Toledano, tenían carácter honorífico. El Real Jardín dispuso, en sus años iniciales, de un presupuesto de 8.000 rs. para contratar a los jardineros precisos y 800 rs. más para ajustar con un par de ‘soldados inválidos’ el que trabajasen como porteros. 446 Casimiro Gómez Ortega. Inventario de todas las plantas, utensilios y enseres del Real Jardín Botánico, hecho en el mes de octubre de I77I. Biblioteca del Palacio de Santa Cruz de Valladolid (BPSC), ms. 109 (fide Susana Pinar, Miguel Ángel Puig-Samper. Op. cit., nota 437. 1996). Carmen Añón Feliu. Op. cit. nota 437, pág. 27. 1987. Al parecer, de la construcción de los invernáculos –y aún de la planificaicón general del Jardín- quiso ocuparse Ventura Rodríguez [Buenaventura Rodríguez Tizón (1717-1785)] (AGS, Secretaría y Superintendencia de Hacienda, Protomedicato y Jardín Botánico, leg. 951 -fide Carmen Añón Feliu. Op. cit. nota 437, pág. 27. 1987-), aunque no tengamos constancia documental de tales realizaciones. 447 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 165 La aventura americana Las canelas del Paraíso Tras regresar a la Corte, después de su viaje europeo, en la primavera de 1753, es José Hortega quien se ocupa de coordinar la participación de Pehr Löfling en un viaje trasoceánico. El proyecto de viajar a América, bosquejado desde la primera entrevista entre José Carvajal y Pehr Löfling, dos años atrás, hubo de esperar a que Hortega realizara el suyo por las academias europeas; entonces comenzó a vislumbrarse como una realidad; a finales de junio de 1753, escribirá Löfling a Linné: “Todavía no se explican con claridad sobre mi viage; pero el Sr. Marques de Grimaldi me dixo en confianza que ya estaba resuelto, y que pasaria á la América; no sé á que provincia, pues no quiso declarármelo. Creo que iré á Chile, en compañía de otros Señores Oficiales de Marina, matemáticos y directores, y yo deberé tener dos segundos á mis órdenes. Me expresó que nunca podia apetecer mejor ocasión y que mi viaje tendria efecto dentro de breve. En quanto á yerbas le respondí tenía entendido que Mr. Joseph de Jussieu habia herborizado en todo el Perú. Repuso el Sr. Marqués que era cierto; pero que yo iria á otra parte. Le insinué que seria ventajoso el ir á México, en donde Hernández habia estado, pero ob fata seculi dexó sus observaciones obscuras é imperfectas…”448 Poco tiempo después, a mediados de agosto de éste 1753, en presencia de José Hortega, el propio José Carvajal le aporta una información mucho más precisa; tendrá entonces oportunidad de conocer a quienes habrían de viajar con él al Nuevo Mundo: “El 15 de Agosto pasado tuve la honra de hablar con el Excmo. Sr. Carvajal por medio del Sr. Ortega en presencia de mis compañeros, y parece que ya no debo dudar de mi viage (…) Tengo ya dos Médicos jóvenes graduados, conocidos de algún tiempo, por discípulos Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Aranjuez, 24-VI-1753 [L-1600] (LS, signatura: ms. LS, IX: 370-371; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(13): 98-100. 1802). 448 166 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol y ayudantes (…) A mas de estos habrá dos dibuxantes destinados para copiar al vivo todo lo que parezca digno de atencion (…) yo seré el xefe de los quatro por lo perteneciente á la historia natural (…) Hay un xefe ó cabeza á quien todos estamos sugetos. Este dirigirá los viages según las ordenes que lleva, que sin duda son secretas. No podemos decir con certeza adonde vamos hasta que con el tiempo se sepa. El Sr. Ortega, á quien lo pregunté, me dixo que no lo sabia; pero cree que por todo el mes que viene irémos á Cádiz (…) que después nos embarcarémos para la Havana (ó tal vez para otra parte), y de alli pasarémos al rio Marañón ó de las Amazonas. Desde aquí atravesarémos toda la América meridional, empezando por el Brasil, y acabando en el Perú; y si no hay novedad caminarémos hacia el norte hasta llegar á México, desde donde volveremos á España. Otros juzgan que irémos directamente á México, luego al Nuevo México que está más al norte quasi paralelo con la Florida y la Virginia, donde pasarémos á lo largo de la costa del golfo de California. Lo primero parece mas seguro. Otros dicen que estarémos fuera quatro ó cinco años, y otros de ocho á nueve; lo qual muy bien puede suceder…”449 Para este viaje se prepararon unas instrucciones -quizás de mano del propio José Hortega- sobre el trabajo que el sueco habría de realizar; unas máximas que a Pehr Löfling le recordaron a las establecidas en el Peregrinator que Carl Linné incorporó a su Philosophia Botanica…450 Y se fijaron normas concretas para la remisión de materiales y la redacción de los textos: “El diario de mi viage se escribirá en castellano, y las observaciones en latín”451 La operación se concreta en los primeros días de octubre de 1753, Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 27-VIII-1753 [L-1626] (LS, signatura: ms. LS, IX: 376-378; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(15): 303-311. 1802). 449 450 “... se me ha dado una instruccion para mi gobierno, que coincide con las reglas que Vm. deduxo de la Filosofía botánica, é intituló Peregrinator…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 27-VIII-1753 [L-1626]. LS, signatura: ms. LS, IX: 376-378; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(15): 303-311. 1802). Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 27-VIII-1753 [L-1626] (LS, signatura: ms. LS, IX: 376-378; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(15): 303-311. 1802). 451 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 167 para entonces Pehr Löfling escribe a Carl Linné, precisando ya el plan de su viaje: “Mi viage de América está en el día tan adelantado, que mañana, siendo Dios servido, saldré para Cádiz (adonde se llega en 15 ó 16 dias), con el fin de embarcarme este otoño (…) El xefe de la compañía es D. Joseph de Iturriaga, Capitan de alto bordo en la Real Armada, y Director de la Compañía de Caracas, que comercia especialmente en cacao. Su segundo D. Eugenio Alvarado, Coronel de Infantería natural de Lima. Síguese D. Juan Ignacio Madariaga y D. Joseph Solano, Capitanes de Fragata, por las matemáticas (...) Don Joseph Solano es el mismo que me acompañaba á casa del Sr. Carvajal quando yo no entendía el idioma (…) Tengo por segundos dos Médicos jóvenes, D. Benito Paltor, natural de los mismos Pireneos [sic], y D. Antonio Condal, de Barcelona. A estos se agregan dos muchachos de 16 á 17 años de edad, hijos de dos sugetos bien acomodados en esta corte, y se llaman D. Bruno Salvador y Don Juan de Dios Castel, que dibuxan muy bien, y con esta ocasión estudiaran la historia natural (…) En Cádiz me darán 20@ rs. vn., que hacen 1500 rixdalers de Suecia, para vestirme y proveerme de ropa blanca (…) Tengo ya 10@ rs. de sueldo al año, porque me han aumentado 2@. Los Médicos tienen la mitad que yo, así como por lo tocante á sueldo como por la cantidad que recibirán en Cádiz (…) Según las noticias mas ciertas vamos á Cumaná, situada en la parte oriental de Tierra firme (…) desde allí pasarémos por tierra al Orinoco, donde harémos nuestro principal campamento para descubrir mejor este río, sobre el qual varian tanto las relaciones. Despues subirémos rio arriba hasta un ramo de él, que se llama el rio Mete, continuando hasta Santa fe de Bogotá: todo lo qual hace un viage de 500 leguas (…) Desde aquí seguirémos por tierra hasta Quito, despues á Lima y de allí á Buenos-Ayres. Luego baxarémos hácia la tierra de Patagones; y por último ó nos embarcamos para Europa, ó como parece mas cierto retrocederémos por tierra, completamdo asi un giro de 6@ leguas. En una palabra, examinarémos todas las provincias de la América 168 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol meridional. Dios nos conceda un feliz viage para gloria suya y progreso de las ciencias…”452 José Hortega asumirá el control de las actuaciones relacionadas con Pehr Löfling; la vinculación, hasta entonces apenas bosquejada, adquiere un intenso protagonismo. En primer lugar, a mediados de octubre de 1753, se presentará ante Carl Linné como el mediador elegido por el Secretario de Estado: “Mr. Leoffingius se prepare a partir pour l’Amerique et j’ai ray soint pendant son absence de vous remetre ses lettres, et de luy envoyer ses reponces; vous aurez la bonté de me les adresser avec une segonde envelope adressée a S. Exco. M. Dn. Jph. Carvajal Secretaire [tachado] Ministre [sobrescrito] d’etat de S.M.C. Je vous reitere les offr. de mes services et vous prie de croire que Je suis de cour et d’affection…”453 Luego, desde los comienzos de noviembre de éste 1753, se ocupará de mantener una correspondencia, prácticamente semanal, con el discípulo linneano: se interesará por su viaje a Cádiz, le solicita información sobre las plantas encontradas en el itinerario, le sugerirá el estudio de las producciones marinas y le servirá de contacto con Pedro Virgili (1699-1776)454; comentarán 452 Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 15-X-1753 [L-1652] (LS, signatura: ms. LS, IX: 379-380; 383-384 –duplicado-; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(15): 311-319. 1802). En términos similares, aunque limitando el viaje hasta el Virreinato del Perú, se expresa en carta a Carl Linné. Cádiz, 31-XII-1754 [L-1692] (LS, signatura: ms. LS, IX: 388-389; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(15): 327-328. 1802 [sub 1-XII-1754], el original mantiene la fecha señalada por nosotros). Carta de José Hortega a Carl Linné. Madrid, 12-X-1753 [L-1654] (LS, signatura: mss. LS. XI: 275-276]). La carta fue inserta en la correspondencia remitida por Pehr Löfling: “Incluyo una carta del Sr. Ortega, quien se ha ofrecido gustoso á servir de mediador para que yo desde América pueda tener comunicacion con mi amada patria…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Madrid, 15-X-1753 [L-1652]. LS, signatura: ms. LS, IX: 379-380; 383-384 – duplicado-; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(15): 311-319. 1802). 453 454 Carta de José Hortega a Pehr Löfling. Madrid, 6-XI-1753 (ARJB, leg., II,1,7,3). Sobr él escribirá Pehr Löfling: “Este Dn. Pedro Virgilio es grande amigo de Don Joseph Hortega (…) Es hombre de luces, y de un talento sobresaliente, muy amante de las ciencias, y de todos los que las cultivan. Actualmente es director del Colegio de Cirugia de Cádiz, que él mismo fundó (…) Goza de una grande autoridad, y es digno de los mayores elogios por su desinterés. Es lástima que no sea Botánico; aunque su aficion á las ciencias, le ha movido á poner un jardín en el Colegio…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Puerto de Santa María, 18-XII-1753 [L-1687]. LS, signatura: mss. LS. IX: 381-382; cf. Ignacio José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 169 las riquezas naturales del Reino de Perú (canela de Quito, calaguala, estoraque, acíbar, escamonea, etc.), se interasará por su opinión sobre las teorías providencialistas defendidas por el clérigo francés Jacques Bénigne Bossuet (1627-1704)455; le sugerirá que recurra a José de Iturriga (1699-1767) para solvertar los problemas económicos derivados de la conservacón de los materiales coleccionados y le solicitará una traducción sobre unas experiencias realizadas con aguas minerales, publicadas en sueco456. A lo largo de toda la correspondencia se presenta como el eslabón inmediato con del Secretario de Estado, José de Carvajal y Lancáster: “Estos dias he vuelto á hablar de Vm á S. Exª y puedo asegurar á Vm, que goza plenamente de su gracia, y en mi dexa Vm un amigo, y un agente que cuidara en todo tiempo de conservarsela, porque ninguno mas que yo conoce el merito de Vm, y el fondo de su buen corazón…”457 Las cartas escritas por Pehr Löfling a José Hortega siguen la misma cadencia, casi semanal; en ellas dará concreta información sobre las plantas herborizadas durante su viaje a Cádiz458, sus impresiones sobre el Jardín Botánico del Colegio de Cirugía459; y sus trabajos sobre la historia natural de los mares gaditanos, en particular sobre los peces, a los que dedica gran atención, y de los que ofrece material “para dar principio al Museo ó el Gavinete, que Vmd. intenta instruir en Madrid”460; y, Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(15): 319-327. 1802). 455 Carta de José Hortega a Pehr Löfling. Madrid, 20-XI-1753 (ARJB, leg. II,1,7,5). 456 Carta de José Hortega a Pehr Löfling. Madrid, 11-XII-1753 (ARJB, leg. II,1,7,9). 457 II,2,2,1). Carta de José Hortega a Pehr Löfling. Madrid, 8-I-1754 (ARJB, leg. Entre los fondos del Real Jardín Botánico (Madrid) (leg. II,2,5,10. [30 h.]) se conserva un diario de este viaje; recoge lo acontecido entre el 20-X-1753 y el 15-II-1754; ha sido transcrito por Agustín Barreiro. “De Madrid a Cadiz en 1753; anotaciones y observaciones de D. Pedro Loefling…” Boletín de la Real Sociedad Geográfica, 66: 7-31. Madrid, 1926. [Inicialmente publicado en lengua sueca, con traducción de Johan Almkvist, en Svenska Linné-Sällskapets Ärskrift, [1925]: 25-42. Upsal, 1925]. 458 459 Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Puerto de Santa María, 12-XI1753 (ARJB, leg. II,1,7,4). 460 Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Puerto de Santa María, 27XI-1753 (ARJB, leg. II,1,7,6). Pehr Löfling recogió sus observacioens gaditanas 170 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol por supuesto, se explayará sobre el interés que tiene el estudio de los simples medicinales americanos, particularmente sobre la canela de Quito, pero también sobre la calaguala, ipecacuana, contrayerba, jalapa, cascarilla, etc461. Toda la correspondencia gaditana remitida por Pehr Löfling a José Hortega está plagada de comentarios sobre los trabajos de Pedro Virgili462, con quien estudia las posibilidades de aprovechamiento del Jardín Botánico que éste había establecido en el Colegio de Cirugía: “Con Dn. Pedro Virgilio passé algunos dias la semana pasada tratando sobre el cultivo de su Jardín; y daré en un papel las reglas, que he visto executarse en otros Jardines, á ver como siguiendo á ellas, se logra el fin de este Jardin que reputo muy necessario aqui para el adelantamiento de la Historia Natural en España…”463 Pehr Löfling llegó al Puerto de Santa María el 2 de noviembre de 1753, tras catorce días de camino desde la Corte; pronto pasó a Cádiz y se mantuvo entre esta ciudad y el Puerto a la espera de las órdenes de embarque464. Ocupa su tiempo en sobre los peces en el manuscrito [31 h.] Pisces gaditana. Observata Gadibus ed ad Portus Sª. Maria. 1753. Mens. Nov. et Dec. (ARJB, leg. II,1,7,15); de su estudio se ocuparon Francisco Pelayo López, Joaquín Fernández Pérez. “Los peces de las costas gaditanas descritos por Pedro Löfling en 1753”. En: Paz Martín Ferrero (ed.) Actas del Simposio CCL aniversario nacimiento de Joseph Celestino Mutis: 451455. Cádiz: Diputación de Cádiz, 1986. Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Puerto de Santa María, 18-XII1753 (ARJB, leg. II,1,7,11). 461 462 “En Dn. Pedro Virgili he hallado un hombre tal como Vmd. nos hizo favor de explicarnos, y estimamos individualmente el favor que nos ha hecho, tanto de su propia inclinacion de querer bien a los que se aplican a las Ciencias, como la especial recomendacion, que Vmd. nos dio…” Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Puerto de Santa María, 27-XI-1753 (ARJB, leg. II,1,7,6). 463 Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Puerto de Santa María, 25-XII1753 (ARJB, leg. II,1,7,12). 464 Él mismo lo pone en conocimiento de Carl Linné: “El 20 de Octubre pasado (…) fue el primer dia de mi salida para el viage de América. El 2 de Noviembre llegué felizmente al Puerto de Santa María y el 5 á Cádiz, en donde me detuve solas dos semanas, y luego me restituí al Puerto en compañía de los demas señores, porque aquí hay mejor proporcion para adelantar en la historia natural, y no en una ciudad aislada como Cádiz. Ordinariamente me han ocupado los peces; y llegan á 50 ó 60 las especies, las que he puesto á conservar en espíritu de vino, destinadas para el Museo de la Reyna Ntra. Señora…” (Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Puerto de Santa María, 18-XII-1753 [L1687]. LS, signatura: mss. LS. IX: 381-382; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(15): 319-327. 1802); cumplía así una de las solicitudes efectuadas por Carl Linné meses atrás: “... me ordenó S. M. la Reina muy encarecidamente José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 171 sus trabajos de historia natural, preferentemente la marina, y suele estar acompañdo de los jóvenes médicos que el Rey puso bajo su responsabilidad. Un equipo que tiene en José Hortega su paladín ante la Corte; así se desprende de los comentarios de Benito Paltor, en los momentos de mayor crisis de su aventura americana: “… de las penalidades del viage indispensables por el terreno y su temperie ya era Yo sabedor en esta Corte por el difunto Dn. Joseph Carvajal, requienscat; qn. boca á boca nos lo dixo en presencia de Vm., en ocasion en que Vm. nos presento á ns. Comps. y a ms. á S. Exca (…) juzgo la satisfaccion, menos que en esto medie de todas veras su alta proteccion y empeño de Vm. cuya confianza me tiene amarrado con cadenas en el Rl. Servicio…”465 Pehr Löfling, y con él su pequeño grupo expedicionario, se incorporaban, como naturalistas, a la Expedición de Límites, mandada por José de Iturriaga y Aguirre (1699-1767)466, cuyo objetivo era establecer las lineas divisorias entre los territorios de las Coronas española y portuguesa, derivados del tratado firmado, en Madrid, en 1750. La Expedición, diseñada por José de Carvajal, incluye otros fines secundarios: la recopilación de que le escribiera á usted y le rogara tuviera la amabilidad de reservar para ella toda clase de animales, amphibia, peces en spiritu vini, de los que se hallan en España, y mandarlos á S. M. ...” (Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, 14-V-1753 [L-1587]. ARJB, leg. II,1,6,20; traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 138-140. 1908). El envío de estos peces a Suecia le supuuso contraer una deuda con el cónsul Bellman, aún no saldada en el mayo de 1760, cuando Clas Alströmer visitó Cádiz: “… Löfling, antes de su salida para América, pidió y recibió 400 piastras contra un recibo a nombre del cónsul con el fin de comprar producciones de la naturaleza para la Reina. El citado resguardo se lo ha enviado Bellman a los señores Gril de Estocolmo para poder cobrarlo, pero no ha recibido ninguna respuesta…” Carta de Clas Alströmer a Carl Linné. Cádiz, 7-V-1760 [L-2733] (LS, mss LS, I: 59-60; traducción de Joaquín Fernández Pérez. “Tres apóstoles de Linné en Cádiz: Pehr Osbeck, Perhr Löfling y Clas Alströmer”. En: Francisco Pelayo (ed.) Pehr Löfling y la Expedición al Orinoco, 1754-1761: 51-102. Madrid: Turner, 1990 (cf. págs. 95-96). 465 Carta de Benito Paltor a José Hortega. Muitaco, 25-XI-1756 (ARJB, leg. II,4,3,4). Con quien Pehr Löfling parece mantener una buena relación personal, e incluso comenta asuntos relacionados con la utilidad terapéutica de los vegetales que estudia: “Una Salanamunda de Clusio con ojas lisas y flor blanca (el Infuso de esta es buena contra la Gota, segun como me enseño por experiencia referida el Sr. Dn. Joseph de Iturriaga)…” (Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Puerto de Santa María, 27-XI-1753. ARJB, leg. II,1,7,6). 466 172 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol informes de carácter geográfico y económico sobre las tierras visitadas; su organización territorial, las posibilidades de su colonización, y otras memorias de carácter astronómico, cartográfico y de historia natural: “Uno de los destinados de la expedicion que esta á cargo de V.S. como Comisario principal del Rey es Pedro Leofling [sic] de Nacion sueco, y de profesion Botánico, al cual acompañarán quatro muchachos españoles para que se instruyan. Bien conoce V.S. quanto importa examinar todo lo posible las particularidades que cria la naturaleza en aquellos países tan incognitos; y si como lo presumo el estudio de este hombre se extiende á mas que á un mero Herbolario, podrá ser mui util su trabajo, haciendole reconocer además de los Arboles y hiervas raras, todos quantos Minerales y piedras se encuentren (…) Sin embargo haciendo memoria de los descubrimientos antiguos (…) he discurrido que en ninguna parte se puede emplear mejor la habilidad de Leofling [sic], que en examinar la calidad de esta Canela [de Quito] y ver si hay modo de mejorarla con el cultivo”467 Tras este informe de José de Carvajal a José de Iturriaga, fechado a comienzos de octubre de 1753, la canela se convierte en uno de los temas centrales de la correspondencia entre José Hortega y Pehr Löfling: “Creo que irá vm al Rno. del Peru donde ay grandes cosas qe. ver, y observar, y entre ellas la Canela de Quito que se desea mucho, y creo que por falta de cultivo, coleccion, u, otra circunstancia, nos es óy inutil…” escribirá Hortega en noviembre de 1753468; “La Canela de Quito pienso sea la misma que Plukenecis Phytograph. t. 22 f. 1 y tab. 160, fig. 7 llama Canela peruana, y algunas Pharmacopeas Cortex Winteranno ó Canella alba, que si es verdad, es claro que nunca puede ser de la misma 467 Informe de José de Carvajal a José de Iturriaga. Madrid, 8-X1753 (AGS, Estado, leg. 7375; transcrito por Francisco Pelayo, Miguel Ángel Puig-Samper. Op. cit. nota 424 págs. 53-56. 1992). José de Carvajal también se interesó por la Hitoria Natural del territorio comprendido entre el Orinoco y el Amazonas y el estudio del cacao en las misiones de Moxos (cf. Manuel Lucena Giraldo. “Del Tratado de Madrid al Tratado de El Pardo (1750/1761)”. En: Manuel Lucena Giraldo, Antonio E. de Pedro. La frontera caríbica. Expedición de límites al Orinoco 1745/1761: 6-81. Caracas: Cuadernos Lagoven [Serie Medio Milenio], 1992 –cf. pág. 20-). 468 Carta de José Hortega a Pehr Löfling. Madrid, 20-XI-1753 (ARJB, leg. II,1,7,5). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 173 calidad de la Canela del Levante como son seguros distintos arboles…” responderá Löfling en su contestación de comienzos de ese diciembre469; “…y le prevengo, que la Canela de Quito es muy diferente de la Canela alba oficinal ó Corteza Winteriana, y ácaso podra ser la Casia Lignea. El Sr. Iturriaga ha de tener en su poder una memoria, que contiene las noticias de la referida Canela, pero hasta que Vm se halle en Quito no podremos salir de la duda…”, corregirá Hortega en enero de 1754470. Y es que, de acuerdo con las instrucciones remitidas por Carvajal a Iturriaga, tal debía ser el destino del grupo expedicionario dirigido por Pehr Löfling: “Discurro que luego que llegue V. S. á las cabeceras del río Negro, despachará persona de confianza á Quito para que se prevengan los caudales (…) que libren á favor del Botánico todo quanto necesite para su vestuario y manutencion, y al mismo tiempo podrá V.S. enviarle á el y á los muchachos al pueblo de San Borja (…) á fin de que inmediatamente dispongan que pasen á su destino sin esperar las órdenes de Quito para que en los 3 ó 4 años que ha de durar la expedicion tenga tiempo de hacer los experimentos posibles…”471 Antes de su partida a tierras americanas, Pehr Löfling tuvo acceso a dos textos básicos para su trabajo posterior: la primera edición del Species Plantarum... linneano, y el primer volumen de los trabajos de Pehr Kalm (1716-1719) sobre la naturaleza de la América el Norte472, y a una animosa carta de su maestro, Carl Linné: 469 Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Puerto de Santa María, 18-XII1753 (ARJB leg. II,1,7,11). 470 II,2,2,1). Carta de José Hortega a Pehr Löfling. Madrid, 8-I-1754 (ARJB, leg. Informe de José de Carvajal a José de Iturriaga. Madrid, 8-X-1753 (AGS, Estado, leg. 7375; transcrito por Francisco Pelayo, Miguel Ángel PuigSamper. Op. cit. nota 424, págs. 53-56. 1992). 471 472 “… y como principalmente las Species plantarum de Lineo, que es el uno de los dhos libros es para mi sumo necessario para el viage que voy á hacer como contiene todas las especies que seguramente han podido reducir á sus generos con sus diferencias especificas para conocerlos, y de tal suerte un compendio de todos los autores qe. puede suplir la falta de los mas prolixos quales no puede traer consigo un peregrinante (…) Como los otros son cosa chica, saco que S. Exca. me permitira qe se embiaran juntos, por ser el otro libro un viage, que [el] Profesor Kalm [Pehr Kalm (1716-1719)], Sueco hizo tres años há á la America y con sus exemplos de una atencion grande sobre cosas 174 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol “Por usted será descrita por primera vez toda la magnífica América, cuyo destino ha sido reservado tantos siglos para usted y su tiempo. ¡Ah!, dichoso el que pudiera estar con usted un solo día en el más hermoso paraíso, le felicito á usted tanto como me compadezco de mi. Mi querido Loefling, piense usted en mi, cuando llegue á su destino…”473 La tierra de promisión El 2 de febrero de 1754 Pehr Löfling llevó sus pertenencias al navío Santa Ana, de la Compañía de Curaçao, en el que habría de viajar hacia América474. Los materiales gaditanos que dispuso llegaran a la Corte de España quedaron en poder de Pedro Virgili, quien habría de ocuparse de remitirlos a José Hortega475. La Expedición partió del puerto de Cádiz el 15 de febrero, nueve días después los buques que la componían se sitúan a la altura de las Islas Canarias476. Mientras Pehr Löfling se encuentra camino al Orinoco, José Hortega escribe a Carl Linné dando cuenta de la aventura americana de su discípulo: “Petrum Leoffling Discipulum tuum protegere et amare non denitam, cum ob commendationis tuae memoriam, tum denique ob ejus suavissimam indolem et notissimum meritum: scias tamen vellem eum in naturales y principalmente economicas, me servirá, para con el mayor cuidado hazer semejantes…” Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Cádiz, 8-I-1754 (ARJB, leg. II,2,2,2). El acuse de recepción de los libros, en carta de Pehr Löfling a José Hortega. Cádiz, 2-II-1754 (ARJB, leg. II,2,2,4). Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, 2-X-1753 [L-1660] (ARJB, leg. II,1,6,23; traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 147-151. 1908). 473 Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Cádiz, 2-II-1754 (ARJB, leg. II,2,2,4); el certificado de embarque (ARJB, leg. II,2,6,2) informa de “Tres Baules regulares y en ellos Quatro Dozenas de Camisas nuevas y Diferentes Libros vistos por el Sto. Oficio y su Cama”. 474 475 Algunos de ellos destinados a llegar a las manos de Carl Linné, tras de que Juan Minuart se ocupara ‘de ponerlas en orden’ (Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Navío Santa Ana [a la altura de Canarias], 24-II-1754. ARJB, leg. II,2,6,1). Momento que aprovechó para remitir una nueva carta a José Hortega (Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Navío Santa Ana [a la altura de Canarias], 24-II-1754. ARJB, leg. II,2,6,1). 476 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 175 Provintiam Caracas jam profectum esse. Postea que in Peruvianum Regnum migraturum cum aliis sociis, duo nempe Medici, duoque Pictores, cet quacumque rara, curiosa ac utilia in hac peregrinatione invenevint; observere, colligant depingant, et in Hispaniam transmitans, quaequidem res quamtum utilitatis et incrementi rei Botanicas allaturant, facile conjectare poteris, praesertim cura...”477 Los expedicionarios tomaron tierra en el puerto de Cumaná el 11 de abril, tras un viaje algo más largo de lo habitual, del que Pehr Löfling dará cuenta inmediata a José Hortega: “Nuestro transito del Mar, ha sido verdaderamente mas largo, (…) ha experimentado tanta calma, y viento contrario, pues desde Cadiz á Cumaná, a donde saltamos el dia 11 de Abril, hemos puesto 55 dias que todos antes habian hecho en 40. A Dios gracias, que tantos que salimos para esta expedicion, tantos hemos llegado aca con completa salud. Dn. Antº Condal solamente ha padecido de tercianas, por largo rato del viage. Nuestro ordinario trabajo en el navio ha sido de estudiar la Botanica, y continuar la enseñanza de ella á los Medicos, que ahora se han adelantado muy bien, y lo que mas me alegra, han tomado el gusto de aplicarse seriamente al estudio, que ahora sirven con muchissima utilidad en la collecion de las plantas y principalmente de buscar y preguntar las virtudes y el uso de ellas de los naturales. Los he impuesto en los ambos methodos de Tournefort; y de Lineo, que á breve por si mismos valdran explicarse, en descubrir plantas, y describirlas...”478 Junto a este primer informe desde tierras americanas, Pehr Löfling envía a José Hortega “La inclusa carta suplica á Vmd, que le mande seguir para Suecia, ó por la mano del Embajador Carta de José Hortega a Carl Linné. Madrid, 25-III-1754 [L-1725] (LS, signatura: mss. LS. XI: 277-278]). 477 Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Cumaná, 18-IV-1754 (ARJB, leg. II,2,6,4). En términos similares se expresa en carta a Carl Linné. Cumaná, 18-IV-1754 [L-1744] (LS, signatura: mss. LS. IX: 390-393; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(15): 328-338. 1802). Conservamos una “Memoria de las cosas naturales que se han observado en el viaje desde Cadiz hasta ahora en Cumana”, redactada por Pehr Löfling (AGS, Estado, leg. 7389, fol. 6 –fide Manuel Lucena Giraldo. Op. cit. nota 363, pág. 166. 1993-). 478 176 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol de Suecia, o por otra cubierta al Residente de Suecia en Hamburgo Mr. Kôning; ella es para Mr. Lineo, con inclusa á mis padres...”479 Josep Hortega no utilizará los caminos propuestos por Löfling, y será él mismo quien se arrogue el protagonismo de servir de intermediario entre ambos naturalistas suecos480; en la carta, remitida a fines de octubre de 1754, solicita le remita la correspondencia “sub involucro illo transmitantur à Illr. Mr. Wall Premier Secretaire d’Etat de S.M.C. à Madrid”. Tras la muerte de José de Carvajal y Lancáster, en marzo de 1754, y luego de la breve interinidad de Fernando de Silva y Álvarez de Toledo, es Ricardo Wall y Devreux (1694-1777), el nuevo Secretario de Estado481, quien dirige las riendas de esta política sobre la Historia Natural en cuyo diseño José Hortega se encuentra inmerso. Los cambios acaecidos en la vida política española, de los que Pehr Löfling tiene noticia durante su estancia en tierras americanas, provocan una evidente sensación de angustia en el expedicionario. En carta remitida a su compañero Lars Jonasson Montin (1723-1785), en 1754, escribe: “De España no he recibido carta, pero he sabido más de lo que hubiera querido. El Excelentísimo señor Carvajal, mi mecenas, murió en el mes de abril482. El Marqués de la Ensenada, segundo ministro, ha sido depuesto, y toda la dirección del gobierno ha cambiado. El futuro mostrará lo que me espera…”483 Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Cumaná, 18-IV-1754 (ARJB, leg. II,2,6,4). 479 “Literas â charissimo Leofflingio tuo ex America transportatas libentissime tibi mitto, ex ejis enim scire poteris illum in hac peregrinatione multa rara ac mirabilia observate, quae magnum ornamentum historiae naturali summamque Patriae gloriam imposterum allatura non dubitio: praecipue si omnia quae Loefflingius caeteviquè socii annotaverint, descripserint, atque in ordinem redexerint, Regis sumpotibus, et auspiciis publicam lucem portea consequantur...” Carta de José Hortega a Carl Linné. Madrid, 30-IX-1754 [L1800] (LS, signatura: mss. LS. XI: 279-280). 480 481 El breve paso de Fernando de Silva y Álvarez de Toledo (1714-1776) por la Secretaría de Estado apenas dejará huella en el proceso que nos ocupa. 482 José de Carvajal y Lancáster falleció en Madrid, el 8-IV-1754. Carta de Pehr Löfling a Lars Montin. [América, 1754] (ARJB, leg. II,2,1; traducción de Stig Rydén. Pedro Loefling en Venezuela (1754-1756). Madrid: Ínsula, 1957 –cf. pág. 75). 483 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 177 Bajo uno u otro mandatario es José Hortega quien controla la información relativa al viaje americano de Pehr Löfling; además de convertirse en el interlocutor obligado ante Carl Linné, es él quien informa a los interesados en los avances del naturalista expedicionario; quedan testimonios indirectos de su relación con Daniel Zacharias Hallman, agregado de la legación sueca en España484, Henric Jacob Hildebrand, diplomático al servicio de la Legación madrileña485 y Daniel Scheidenburg, capellán de la Embajada486. Los primeros datos sobre la naturaleza americana llegan pronto a Hortega de la pluma de Löfling: “En estos 7 ó 8 dias, que aqui hemos estado he anotado cerca de 140 especies de plantas las quales todas no puedo perfectamente todavia nombrar, como la mayor parte de ellas nunca antes ha sido vista por tanto que me parece haver entrado en un mundo totalmente nuevo. Los Cerros estan llenos de Cereos y Opuntias, los Sotos de Mimosas, Cassias, Tamarindos y otros arbustos. El nocivo Manzanillo, y Mangles al borde del mar, los campos de Amaranthoides, los predios y Quintas, con Platanos, Nisperos, Cocos, Yuca, Caña dulce, Papapayas, las calles con Papaver spinosum o Anemone de Linné &c. &c. 484 “He tenido carta del señor Hortega esta semana. Dice que un barco ha llegado de Buenos Aires pero que no trae ninguna noticia del querido Löfling (…) No obstante, el señor Hortega ruega a Su Excelencia que tenga paciencia, ya que también es una prueba para él y otros que tienen en esta compañía sus amigos y familiares…”(Carta de Daniel Zacharias Hallman a Carl Linné. Bordeaux, 26-II-1757 [L-2139]. LS, sigmatura: LS, mss. VI: 225-227 –transcrita en Francisco Pelayo, Miguel Ángel Puig-Samper. Op. cit. nota 424, pág. 95. 1992). Daniel Zacharias Hallman (1722-1782) fue alumno de Carl Linné entre 1744 y 1746; ejerció como pastor de la Legación sueca en Madrid. 485 “Hace unos días me fue contado por el señor Hortega que había recibido de las Indias Occidentales la noticia indudable de la muerte del señor Löfling (...) lo que sienten mucho todos los amantes de la Historia Natural que están aquí…”(Carta de Henric Jacob Hildebrand a Carl Linné. Madrid, 27-VI1757 [L-2202]. LS, signatura: LS, ms. VII: 16-17 -transcrita en Francisco Pelayo, Miguel Ángel Puig-Samper. Op. cit. nota 424, pág. 96. 1992). Henric Jacob Hildebrand (1707-1775), diplomático sueco, trabajó en la Legación de Madrd. Daniel Scheidenburg (n. 1720), estudió bajo la tutela de Carl Linné, recibió las órdenes eclesiásticas en 1754; ese mismo año fue nombrado capellán de la Embajada sueca ante la Corte española; fallecería en Madrid (cf. Stig Rydén. Op. cit. nota 483, pág. 16. 1957). 486 178 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol La voz comun es que estaremos aqui en Cumaná dos, tres ó quatro meses, en cuyo intervallo el Sr. Dn. Joseph [Iturriaga] nos ha prometido de poder hazer diferentes viages por esta provincia de Cumaná, á los lugares mas famosos, y ricos de yervas, y otras cosas, donde esperamos enriquezer de varias curiosas observaciones…”487 Pehr Löfling permanecerá en Cumaná hasta finales de junio, fueron tres largos meses de espera antes de adentrarse en las nuevas tierras; durante las primeras semanas de julio herborizará, siempre junto a sus alumnos médicos y los dibujantes, en Ipure, Macarapán y Cumanacoítica; a finales de mes viajan, por mar, a Barcelona, donde, al menos Löfling, cayó enfermo488; tras recuperarse, aún en esos primeros días de agosto, los naturalistas exploran las misiones de Píritu, río Unare, Tocuyo, Puruey y Clarines, desde donde regresan a Barcelona y, a finales de mes, nuevamente por mar, retornan a Cumaná. El último trimestre de éste 1754, Löfling permanece en Cumaná, unas periódicas recaídas de fiebres le impiden el trabajo en el campo abierto; desde aquí escribe su última carta a su maestro Carl Linné: “Estos dos últimos meses no he podido trabajar considerablemente; porque una fiebre con quatro recaidas me ha dexado casi sin fuerzas; pero confío de este modo irme connaturalizando con el clima. Creo que irémos a Guayana, y de allí por el Orinoco arriba hasta el río Negro; podrá suceder que recorramos las fronteras del Brasil, desde el nacimiento del río de la Plata hasta el mar. Mi colección de yerbas asciende ya á quinientas y cincuenta [o] seiscientas distintas especies; las quales, á excepción de unas cincuenta, he reducido á sus géneros y especies. El mes de Agosto hice un viage con D. Benito Paltor [a] treinta leguas de aquí, á las misiones de Piritu, 487 Carta de Pehr Löfling a José Hortega. Cumaná, 18-IV-1754 (ARJB, leg. II,2,6,4). Carl Linné escribirá, en la introducción al Iter Hispanicum… de Pehr Löfling (Op. cit. nota 362. 1758): “Hallóse Loefling como en un nuevo elemento, en un paraiso terrenal parecido á un perpetuo jardin poblado de yerbas olorosas, las quales ningun Botánico habia cogido ni observado…” (cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 291. 1801). Las anotaciones conservadas de Pehr Löfling hacen pensar que no fue él el único en enfermar; entre los gastos ocasionados este agosto de 1754 incluirá: “A un mulato por averme buscado hiervas fuera estando yo y los compañeros malos…” (cf. Stig Rydén. Op. cit. nota 483, pág. 105. 1957). 488 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 179 donde hallé muy buenas cosas; pero no pude disfrutarlas á causa de una fiebre cotidiana que no me dexó en todo el viage. Para ir á Guayana nos dividirémos de modo que yo tomaré el camino de Barcelona, y visitaré [por] segunda vez las misiones (...) desde aquí por la llanura seguiré hasta el Orinoco y Guayana; D. Benito tomará el camino de Paria hasta la isla Trinidad, y de alli al Orinoco, hasta que nos encontremos en Guayana. He sido tan afortunado con los nuevos géneros, que seguramente he hallado treinta, sin contar otros muchos que no me atrevo á determinar por falta de autores (...) Las descripciones de mis plantas subirán á doscientas y cincuenta, las quales aumento cada día en quanto me lo permite la estrechez del tiempo…”489 La visión de la realidad que nos ofrecen los escritos de los médicos acompañantes no es tan idílica como la descrita por el naturalista sueco; por las mismas fechas que Pehr Löfling escribe a Carl Linné, Antonio Condal y Benito Paltor hacen lo propio ante José Hortega: “Escrivimos á v.m. desde Cadiz como nos embarcamos sin haver podido alcançar, por muchas representaciones, libro alguno Botanico, ni tampoco lo hallamos con nuestro dinero; aora vamos experimentando la falta [que] nos hazen, de manera que podemos dezir, que mas es curiosidad lo que vamos á hazer, que adelantamiento; pues a mas de no poder estudiar siempre que hay ganas, no nos podemos apartar del lado de Dn. Pedro [Löfling] para hazer collecciones de cosas que se hallarian iendo por caminos distintos, cada uno en las partidas que se dividen y caso de separarse sera cada uno un soldado sin armas. Á mas de esto (…) pareze se mira con desprecio la Botanica, porque son tan pocas las prevenciones, y auxilios [que] se nos dan para las collecciones assi de animales como pezes (lo que es preciso encargar, y pagar) que lo mas pagamos de nuestro corto sueldo. Carta de Pehr Löfling a Carl Linné. Cumaná, 20-X-1754 [L-1820] (LS, signatura: mss. LS. XI: 394-395; cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 5(15): 338-340. 1802). Francisco Pelayo López (“Los materiales botánicos americanos de Pehr Löfling”. En: Francisco Pelayo (ed.) Pehr Löfling y la Expedición al Orinoco, 1754-1761: 147-157. Madrid: Turner, 1990) presenta una valoración de la actividad botánica de Pehr Löfling en tierras americanas realizada sobre la documentación conservada en el archivo del Real Jardín Botánico de Madrid. 489 180 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Para la colleccion de plantas, y aun para escrivir, tuvimos que esperar tres meses antes no nos dieron papel, y esto despues de muchas representaciones. El trato que nos dan corresponde a lo demas...”490 En diciembre de 1754, siguiendo el plan establecido por Pehr Löfling, comentado en su correspondencia con Carl Linné, los expedicionarios se separarán en dos grupos en su camino hacia la Guayana. Pehr Löfling y los suyos –Antonio Condal y Bruno Salvador Carmona- emprenden viaje a Barcelona; alcanzan la ciudad el día 17 de diciembre, el naturalista sueco sufre un ‘cólico flatulento’ que le tuvo en cama desde esas Navidades hasta los primeros días de 1755. El 18 de enero retorna al camino, sale de Barcelona hacia San Bernardino; tomando esta localidad como centro de trabajo, herboriza en El Pilar, a finales de febrero recolecta en el río Aragua y el 20 de marzo se encuentra en San Miguel. Tras dos meses herborizando en las misiones de la región del Píritu, el 5 de abril inicia el viaje a la Guayana; atravesará los lugares de San Pablo, San Lorenzo, Margarita -donde se encontraba el 15 de abril-, Aragua, Nuevo Hato y Muitaco. Partieron de Muitaco el 23 de abril; con ayuda de una piragüa descendieron el río Pao hasta alcanzar la Guayana el 29 de abril. Tras algunas herborizaciones por las proximidades de la Guayana, los expedicionarios emprenden viaje hacia Suay, donde permanecieron hasta el domingo 18 de mayo, en que se dirigieron a Caroní; tomando como centro esta localidad, colectan en Murucuri, Agacagua y Altagracia; se mantuvieron en este área entre el 28 de mayo y el 10 de junio, allí el grupo recibió noticia de la llegada a la Guayana de Benito Paltor y Juan de Dios Castel, quienes se habían ocupado de herborizar en isla Trinidad. Los primeros días de julio son de frenética actividad botánica, siempre que las lluvias lo permiten; el 11 de julio se dirige a El Hato, regresaron a Capapuy, luego siguiron hasta Altagracia y, de nuevo, hacia Caroní. El 18 de julio parten para Guayana, atravesando Suay, con ánimo de colaborar con Eugenio Alvarado en la elaboración de la carta geográfica del curso del río Caroní. Los expedicionarios llegaron a Caroní el 22 de julio, Carmona pasa al servicio de Alvarado y Löfling 490 Carta de Antonio Condal y Benito Paltor a José Hortega. Cumaná, 19-X-1754 (ARJB, leg. II,2,6,24). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 181 solicitará formalmente la adscripción a su equipo del dibujante Juan de Dios Castel. Las herborizaciones del mes de agosto de éste 1755 parecen decrecer, al menos las practicadas por Löfling; a mediados de septiembre le aquejan unas calenturas, aún con fiebre se dirige, junto a Antonio Condal, hacia Caroní; parece observar una ligera mejoría en octubre, aunque las anotaciones de su diario prueban que no continuó con su labor herborizadora491. Pehr Löfling falleció el 22 de febrero de 1756, en la misión de capuchinos de San Antonio de Caroní, donde fue enterrado. Tras su fallecimiento, el equipo de naturalistas se disgrega; Antonio Condal deserta y Benito Paltor reitera a José Hortega, en distintas ocasiones, su deseo de liberarse de los compromisos adquiridos con la Expedición: “… por lo que suplico á Vm me solicite de todas veras licencias que necesito para vivir en paz, con la que prometo á Vm, exerceré con mas gusto la Botanica á expensas mias; pues es grande la afficion que le he tomado. Con lagrimas en la cara suplico á Vm, se digne solicitarme dha licencia pª. retirarme, la que espero á los cinco meses de la fecha de esta, que tengo determinado esperar, antes que me precipite y me baya por esos montes á vivir entre las fieras ya que entre los hombres tengo tan poca fortuna…”492 Aun cuando inicialmente intentó ocuparse de la formación botánica de los dibujantes493, es probable que pronto abandonara 491 Borrador del Diario de Observaciones echas por Loefling en el Viage de Cumaná à Guayana desde 23 de Abril hasta 6 de Nove. de 1755 (ARJB, leg. II,4,3,1). 492 Carta de Bemito Paltor a José Hortega. Muitaco, 25-XI-1756 (ARJB, leg. II,4,3,4). En los mismos términos se expresará en carta de 15-V-1757, remitida desde Cabruta: “Suplico a Vm. quiera hacer los oficios que puede para que se me consiga la licencia que solicito pª. retirarme; y quando nó: la Graduacion, y Sueldo que me corresponde, de que espero la resulta, lo mas pronto que fuere del agrado de Vm...” (ARJB, leg. II,4,4,8). Benito Paltor continuó con su actividad botánica tras su vuelta a la metrópoli; en 1772 presentó, ante la Real Academia de Ciencias y Artes de Barcelona, una comunicación “Sobre una nueva especie de Quina conocida con el nombre de Cunaurima de Guayana” (cf. Francisco Pelayo, Miguel Ángel Puig-Samper. Op. cit. nota 424, págs. 119120. 1992). “... me acaba de mandar el Xefe: que instruya diariamte. á los dos dibujantes, Dn. Bruno Salvador, y Dn. Juan Castél, en la Theorica y Practica de la Historia Natural, lo qué executo con toda puntualidad, mas por obedecer 493 182 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol esta idea y la propia Expedición. Los dibujantes se integraron, casi de inmediato, en las tareas de apoyo técnico a los trabajos de la Comisión de Límites494. La muerte de Pehr Löfling conllevó el abandono de los estudios sobre Historia Natural emprendidos por la Expedición; no obstante, parece que sí se habían conseguido algunos objetivos; Francisco Auzmendi, oficial que intervino en la organización del viaje, informaba críticamente sobre su desarrollo en el verano de 1757: “Sin haber hecho en tanto tiempo [José de Iturriaga] otra cosa que empeñar inconsiderablemente a sus subalternos en manos de el hambre y de la interperie, no hemos sacado otros frutos sino unos cajones de hojas y cortezas parecidas a la de la canela. No se ha empezado a trabajar en su principal destino y no repara en pedir premios sobre premios…”495 No cabe duda del protagonismo que la canela alcanzó en esta expedición científica al Orinoco. Tras la llegada al trono de Carlos III, la política estatal sobre los acuerdos hispano-lusos relativos a la frontera caríbica cambiaron sustancialmente. La Comisión de Límites dirigida por José de Iturriaga se dio por finalizada en junio de 1760, sin al Xefe que por gusto; porque en ello carezco de honra y provecho que gusto puede haver?...” (Carta de Bemito Paltor a José Hortega. Muitaco, 25-XI-1756. ARJB, leg. II,4,3,4). Proseguía en esta labor meses después: “Estoy actualmente trabajando, en acabár los fundamentos Botanicos, que el difunto Dn. Pedro Loefling dexó sin concluir; pª. instruir en todos los rudimentos a los dos Dibujantes, que por especial orden del Gefe tengo á mi cargo, tomandoles lección todos los dias, é imponiendoles de los referidos principios…” (Carta de Bemito Paltor a José Hortega. Cabruta, 15-V-1757. ARJB, leg. II,4,4,8). 494 Hacia 1758, Juan de Dios Castel y Bruno Salvador Carmona tomaron parte en los estudios, emprendidos por Vicente Doz, conducentes a ubicar un asentamiento aguas abajo del Orinoco; de estos trabajos se conserva, de mano de Castel, una “Relación del descubrimiento de las tierras intermedias entre los ríos Cuchivero y Caura…” (Biblioteca del Palacio Real de Madrid [BPRM], signatura 2824; publicado por Demetrio Ramos Pérez. “El problema de los caribes de Guayana y los proyectos sobre el área del Cuchivero-Cauca”. En: Demetrio Ramos Pérez (comp.) Estudios de Historia Venezolana [Serie Fuentes para la historia colonial de Venezuela, 126]: 633-650. Caracas: Biblioteca de la Academia Nacional de Caracas. 1976). Dictamen de Francisco Auzmendi. [1757]. AGS, Estado, leg. 7395 –fide Manuel Lucena Giraldo. Op. cit. nota 363, págs. 48-49. 1993). Es probable que estos cajones de canela fueran acopiados por José Solano, durante su viaje a Cumaná, camino de Santa Fé, en los primeros meses de 1757. 495 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 183 que apenas se produjera contacto con la comisión portuguesa. El Tratado de El Pardo, firmado el 12 de febrero de 1761 anulaba, por entero, las decisiones firmadas en el Tratado de Madrid. La división territorial fue aplazada, aunque la presencia española quedaba consolidada tras la firma de acuerdos con los nativos del Alto Orinoco496. Los restos de un naufragio Los envíos de Pehr Löfling a Carl Linné no fueron pocos, “Tenemos en el jardín como 70 vegetales suyos” escribirá el maestro hacia la primavera de 1753497, pero no tantos como éste hubiera deseado; la Corte española no debió permitir que los materiales elaborados y colectados por Pehr Löfling salieran en dirección a Upsala, como reiteradamente solicitó Carl Linné498; sus manuscritos, salvo “la flora y las observaciones respecto á las plantas españolas”, sobre las que habría de trabajar durante el viaje a Cádiz, quedaron en manos de José de Carvajal499. 496 Una crónica de esta Expedición en Demetrio Ramos Pérez (El Tratado de Límites de 1750 y la expedición de Iturriaga al Orinoco. Madrid: CSIC [Instituto Juan Sebastián Elcano], 1946) y Manuel Lucena Giraldo (Op. cit. nota 363. 1993). Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, [1753] (ARJB, leg. II,1,6,22; traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 336, págs. 143-147. 1908); la carta carece de fecha, pero incluye una anotación de Pehr Löfling: “recibida en 26 de Agosto, contestada el 27 de 1753”. Gines López González (Op. cit. nota 386, pág. 43. 1990) valora, en varios centenares, las semillas remitidas a Carl Linné por Pehr Löfling, “probablemente más de 500”. 497 “Recoja usted sus materiales y envíelos sellados al Archivo Academiae Upsaliensis, donde estarán más seguros…” (Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, 20-VIII-1753 [L-1630]. ARJB, leg. II,1,6,21; traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 140-142. 1908). 498 Carta de Pehr Löfling a Lars Montin. [América], 4-XII-1753 (ARJB, leg. II,2,1). Y éstas constituían un volumen bastante significativo, de ser cierto el comentario de Carl Linné: “Es casi increible que haya usted podido recoger en España 1.300 especies de distintas plantas; así verá el mundo con asombro la increible riqueza de ese país, y entre ellas tantas plantas raras y nuevas, que si usted no me las hubiera descrito, nunca hubiera pensado que en toda Europa se produjeran tantas especies curiosas.” (Carta de Carl Linné a Pehr Löfling. Upsala, 10-IV-1753 [L-15619]. ARJB, leg. II,1,6,18; traducida del sueco en [Real Sociedad Española de Historia Natural]. Op. cit. nota 363, págs. 134-136. 1908). 499 184 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Tras el fallecimiento de Pehr Löfling, Francisco Villalba, secretario de José de Iturriaga, levantó inventario de sus pertenencias; éstas quedaron en poder de Apolinar Díaz de la Fuente, el maestro de instrumental de Ituriaga, quien firmó el inventario junto a los botánicos-médicos compañeros de Löfling: Benito Paltor y Antonio Condal; el registro quedó fechado el 22 de febero de 1756500. Junto a este inventario, el comandante Juan Valdés realizó otro, datado el 3 de enero de 1756, con sus objetos depositados en Guayana. Las pertenencias de Pehr Löfling, sus ropas, equipajes y libros, salieron a subasta pública en San Pedro y Santo Tomé de Guayana el 4 de julio de 1756, “Los papeles y los otros manuscritos fueron entregados al señor Villalba, delegado de Iturriaga, y no se vendieron (…) El dicho señor Francisco Villalba guardó las cajas y los objetos de valor que pertenecían a la expedición…”501 Las cajas así preparadas llegaron a la metrópoli años antes de que la Expedición de Iturriaga diera por finalizados sus trabajos502, posiblemente de manos de Juan de Madariaga, quien retornó en la primavera de 1757503; contenían los diarios del periplo americano de Pehr Löfling, una compilación de descripciones botánicas, su Flora Cumanensis504 y un grupo de descripciones zoológicas505. Seguimos los datos aportados por Stig Rydén (Op. cit. nota 483, págs. 143-181. 1957) quien, a su vez, los toma de un artículo publicado, en sueco, por el padre Agustín Barreiro (“Pehr Löflings kvarlätenskap och eftermäle”. Svenska Linné Sällskapets Arskrift Ärgäng, 10: 131-136. Upsala, 1927). Los documentos sobre los que el padre Barreiro construyó su trabajo no se conservan en el archivo del Real Jardín de Madrid, tampoco pudo acceder a ellos Stig Rydén, quien los considera “perdido durante la guerra civil española” (cf. Stig Rydén. Op. cit. nota 483, pág. 144. 1957). 500 501 Stig Rydén. Op. cit. nota 483, pág. 147. 1957. La Comisión de Límites dirigida por José de Iturriaga se dio por finalizada en junio de 1760. Un comentario de Antonio José Cavanilles, parece hacer pensar que los materiales regresaron a la metrópoli a la par que lo hacía José de Iturriaga: “Muerte el xefe de la expedicion botanica, se dispersaron los dos Médicos catalanes, Condal y Paltor, y solamente permaneciéron sin fruto para la ciencia los citados dibuxantes, que regresaron á Europa en 1761. Ant. Cavanilles” (Nota en Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 292. 1802). 502 503 Un viaje anunciado en carta de Benito Paltor a José Hortega. Cabruta, 15-V-1757 (ARJBM, leg. II,4,4,8). 504 Flora Cumanensis de Loefling. Borradores arreglados por las 24 clases del Methodo Linneano y empezados á poner en limpio. [Cumaná, IV-1754 / III-1755] (ARJB, leg. II,3,2 [tomo I]. 375 h.; leg. II,3,3, [tomo II]. 228 h.) 505 Sus trabajos zoológicos apenas tuvieron repercusión, pudiéndose José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 185 Es posible que estos materiales pasaron a poder de Ricardo Wall, quien debió hacer entrega de ellos a José Hortega, a quien Carl Linné solicitó la posibilidad de obtener las pertenencias de su discípulo506: éste no le entregó los originales, pero sí permitió al capellán Daniel Scheidenburg que copiara lo que creyera necesario para satisfacer los deseos de Carl Linné; Scheidenburg trabajaba ya sobre una transcripción de la Flora Cumanensis… el 28 de noviembre de 1757507. Con las copias remitidas por Daniel Scheidenburg, más las propias cartas que Pehr Löfling le remitiera desde su partida de Suecia508, Carl Linné compuso Petri Loefling… Iter Hispanicum, eller Resa til Spanska Länderna uti Europa och America, forrattad ifrän Âr 1751 til Âr 1756, med Beskrifningar och Ron ofver de rastrear -no sin cierta dificultad- en la obra de su maestro, lo mejor de su producción en este ámbito se produjo en los estudios ictiológicos; uno de los manuscritos generados por esta expedición, Ycthiologia orinocensis, sive Synopsis Piscium, quosin fluvio Orinoco piscari licet [61 h.] (ARJB, leg. II,4,4,1) recoge medio centenar de descripciones de peces y algunos reptiles y aves. La letra parece atribuirlo a Juan de Dios Castel, pero no hay duda de que en él se recogen buena parte de los trabajos de Pehr Löfling. En el prólogo al Iter Hispanicum… de Pehr Löfling (Op. cit. nota 362. 1758), Carl Linné escribirá: “Mi único consuelo y confianza estriba en el favor del Sr. Ortega, quien por amor y respeto á las ciencias, tendrá á bien comunicarme una cosa tan deseada de los Botánicos como es la Flora de España…” (Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 288. 1801). “De todo quanto ocurrió á Loefling en la América solo he llegado á saber lo que mi buen amigo el Señor Ortega se dignó comunicarme…” (Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 291. 1801). 506 507 “De los manuscritos de Löfling que acaban de llegar de la América Española, J. Hortega me ha comunicado que copie las Observaciones in Plantae Cumanensis, que se componen de Tres Secciones; la primera y la segunda tengo el honor de enviárselas adjuntas a Vmd; la tercera que contiene observaciones sobre los Genera Plantarum de Vmd, pienso enviarla dos semanas más tarde…” (Carta de Daniel Scheidenburg a Carl Linné. Madrid, 28-XI-1757 [L-2260]. LS: mss LS, XUIII: [s.p.]; traducida por Stig Rydén. Op. cit. nota 483, pág. 153-154. 1957). 508 Éstas cuidadosamente censuradas en aquellos párrafos que pudieran ser ofensivos para los botánicos españoles, como ha señalado Gines López González (Op. cit. nota 386. 1990) al cotejar la correspodencia original con la publicada por Carl Linné en el Iter hispanicum… de Pehr Löfling: “Esto se puede apreciar en los originales conservados en la Sociedad Linneana de Londres, en los que dichos párrafos se encuentran enmarcados por paréntesis. Las cuatro primeras cartas enviadas desde Madrid –tres en noviembre de 1751 (…) y otra en diciembre- las refundió Linneo en una, alterando no en poco su contenido…” (Ginés López González. Op. cit. nota 386, pág. 39. 1990). Markvardigaste Vaxter, utgifven Efter des Fränfälle af Carl Linnaeus (Stocockholm: Lars Salvii, 1758)509: “Esta obra comprehende primero las cartas que me escribió (…) Segundo, las descripciones de algunas plantas españolas (…) Tercero, un extracto de los manuscritos de Loefling relativos á las yerbas de la América, que debo al buen zelo é instrucción del Sr. D. Daniel Scheidenburg, Capellan de la embaxada de Suecia en la corte de Madrid, el cual con el permiso de mi grande amigo el Sr. Ortega, tomó á su cargo el arreglar y disponer esta parte de dicha obra en la forma que se publica. Esto es quanto he podido adquirir de los trabajos literarios de Loefling; poco en verdad, pero muy suficiente para acreditar su pericia, y los ardientes deseos que manifiesta el Sr. Ortega de contribuir al progreso de la Historia Natural: quiera Dios que por su influxo logre yo las descripciones de las plantas de América, á que tantas veces se refiere en el extracto…”510 Poco sabemos del trabajo de José Hortega sobre estos materiales, que no debió ser mucho más que el de la propia custodia; el barón Clas Alströmer (1736-1794), discípulo de Carl Linné, de viaje por España en 1760, intentó localizar, La obra fue pronto traducida al alemán, gracias al trabajo de Alexander Bernhard Kölpin: Peter Loeflings... Reisebeschreibung nach den spanischen Ländern in Europa und America in den Jahren 1751 bis 1756, nebst Beobachtungen und Anmerkungen über die merkwürdigen Gewächse herausgegeben von Herrn Carl von Linné... Berlin: G.A. Langle, 1766; en 1771 ve la luz la traducción a lengua inglesa, realizada por Johann Reinhold Forster, e incluida –como apéndice- en una obra de Jean Bernard Bossu: “An abstract of the most useful and necessary articles mentioned by Peter Loefling (...) in his travels through Spain, and that part of South America called Cumana, consisting in his life and his systematical descriptions of the plants of both countries, referred to the pages of the original Swedish edition”. En: Jean Bernard M. Bossu. Travels through that part of North America formerly called Louisiana. By Mr. Bossu (…) translated from the French, by John Reinhold Forster (…) illustrated with notes relative chiefly to natural history, to which is added by the translator a systematic catalogue of all the known plants of English North-America, or, a flora Americae Septentrionalis. together with an abstract of the most useful and necessary articles contained in Peter Loefling’s Travels through Spain and Cumana in South America, referred to the pages of the original Swedish edition… 2: 60-422. London: Printed for T. Davies, 1771; una versión, incompleta, en castellano, obra de Ignacio Jordán de Asso, vio la luz en las páginas de los Anales de Ciencias Naturales, editados al cuidado de Antonio José Cavanilles (Op. cit. nota 46. 1801-1802). 509 510 Carl Linné en el prólogo al Iter Hispanicum… de Pehr Löfling (Stockholm, 1758) (cf. Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 293. 1801). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 187 infructuosamente, algunos materiales de Pehr Löfling en la ciudad de Cádiz511, y proseguió su búsqueda en Madrid: “Si yo pudiera conseguir parte de la colección Löfling en Madrid, donde, según me han contado hay paquetes esperando con la direción del Señor Arquiatra [Carl Linné], sería la manera más fácil de saldar la deuda. He reunido algunos informes sobre Löfling y todavía espero ampliarlos en Madrid y, entonces, le informaré a usted en seguida. Ortega no es tan íntegro como parece y guarda algo de envidia por las publicaciones y colecciones de Löfling. Como podrá imaginar, estos españoles tan simples están contentos con la muerte de Löfling y dan gracias a Dios porque un hereje hubiese muerto en manos de los curas…”512 Es posible que, tras el fallecimiento de José Hortega, la documentación pasara a ser custodiada por William Bowles, asistido por Juan de Dios Castel513; no obstante los trabajos del naturlista irlandés sobre la Historia Natural de España, no debieron permitirle acometer esta responsabilidad que fue encomendada a Casimiro Gómez Ortega, heredero material –y en buena parte espiritual- de la obra de su tío; del aletargamiento que éstos sufrieron nos da cuenta Antonio José Cavanilles, en los inicios del siglo XIX: “El cónsul Bellman (…) ha prometido acompañarme a una oficina aquí en la ciudad [Cádiz] que ha tenido relación con la expedición americana a la que acompañó Löfling, y que deben saber algo también de los restos de éste…” Carta de Clas Alströmer a Carl Linné. Cádiz, 7-V-1760 [L-2733] (LS, mss LS, I: 59-60; traducción de Joaquín Fernández Pérez. Op. cit. nota 464, págs. 95-96. 1990). 511 Carta de Clas Alströmer a Carl Linné. San Lúcar de Barrameda, 12-VIII-1760 [L-2774] (LS, mss LS, I: 64-65; traducción de Joaquín Fernández Pérez. Op. cit. nota 464, págs. 99-100. 1990). 512 513 “… Don Juan de Dios Castel asista a don Guillermo Bowls [sic] en la descripcion de la Historia Natural del Botánico Lofling, asistiéndole en este tiempo con seis mil reales desde primeros de este año y que, despues, pase a la Guayana como segundo de Apolinar Díez de la Fuente…” (Informe de José Solano a Julián de Arriaga, Secretario de Indias. [s.l., s.a.]. AMN, Virreynato de Santa Fe y Brasil, leg. 572(7); transcrito por Antonio de Pedro Robles. “Las imágenes artístico-científicas de la Expedición de Límites al Orinoco”. En: Manuel Lucena Giraldo, Antonio E. de Pedro. La frontera caríbica. Expedición de límites al Orinoco 1745/1761: 82-119. Caracas: Cuadernos Lagoven [Serie Medio Milenio], 1992, cf. pág. 91); otra copia en AGS, Estado, leg. 7398, fol. 51 –fide Manuel Lucena Giraldo. Op. cit. nota 363, pág. 231. 1993). El proyectado segundo viaje al Orinoco no llegó a realizarse. 188 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol “Quiso Loefling que los dibuxos correspondiesen en la exâctitud y tamaño á la grandiosa idea que se propuso al concebir la obra de sus viages que destinaba al público; pero habiendo muerto sin concluirlos, ni se completó la coleccion, ni se executaron sus pensamientos. Traxéronse á España los preciosos dibuxos, y se determinó que se reduxesen á una forma menor sin perjudicar á su verdad y hermosura. Comisionóse [Juan de Dios] Castel para este importante trabajo, y por su muerte á [Bruno Salvador] Carmona, como el mas alto para poderlo desempeñar. Acudió sin cesar por espacio de diez y nueve años á la casa señalada para ello, y depósito de los dibuxos originales514; mas nada pudo hacer, sin duda por las continuas y urgentes ocupaciones del profesor Botánico que debía dirigir sus trabajos (…) Estas noticias me comunicó el difunto Carmona el dia 7 de Diciembre de 1800 en presencia de D. Luis Née. Murió en 10 de enero de 1801. Ant. J. Cavanilles”515. Parte de los manuscritos, y una buena cantidad de dibujos pertenecientes a la expedición Löfling, llegaron al Real Jardín de Madrid en septiembre de 1801, procedían de la Secretaría de Indias donde fueron depositados por su último custodio privado, Casimiro Gómez Ortega516. Posiblemente la propia casa de José Hortega, ocupada luego por su sobrino y heredero material, Casimiro Gómez Ortega (1741-1818), a quien parecen dirigidas las críticas de Antonio José Cavanilles. 514 En nota a la traducción del Iter hispanicum… de Pehr Löfling preparada por Ignacio Jordán de Asso (Ignacio Jordán de Asso. Op. cit. nota 46, 3(9): 290. 1801). 515 516 “… un tomo en folio de cincuenta y ocho dibujos, la traducion publicada en sueco en 1758, el viaje de Loefling de Madrid á Cadiz y los originales y copias de las dos primeras clases de la Flora de Cumaná…” Oficio de Pedro Cevallos a Antonio José Cavanilles. La Granja de San Ildefonso, 8-IX-1801 (ARJB, leg. I,11,2,16). En la actualidad, en el archivo del Real Jardín Botánico se conservan 200 dibujos pertenecientes a esta Expedición, 115 botánicos, 79 zoológicos, 4 etnográficos y dos mapas, además de cerca de 200 documentos, entre ellos los titulados Diario de viaje de Madrid a Cádiz [30 h.] (ARJB, leg. II,2,5,10) y Flora Cumanensis. Nota: Contiene la Copia de las 4 primeras Clases. Nota 2ª. Los originales y copia de la 1ª y 2ª clase se enviaron al Ministerio de Indias [88 h.] (ARJB, leg. II,3,1), al que parece referirse el oficio remitido a Antonio José Cavanilles. José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 189 El comercio de las quinas La participación de José Hortega en el diseño de la aventura americana que llevó a Pehr Löfling, a los médicos Antonio Condal y Benito Paltor y a los dibujantes Juan de Dios Castel y Bruno Salvador Carmona a las tierras de Cumaná no fue un hito aislado en su biografía. Al ocuparnos de su participación en las sesiones de la Real Academia Médica Matritense ya dejamos anotado su interés por las plantas americanas, particulamente sobre la utilidad terapéutica de las quinas. Un informe remitido a Julián de Arriaga en mayo de 1757, cuando éste ocupaba la Secretaría de Estado de Marina e Indias, resulta especialmente ilustrativo; no sólo por el peso político que la emisión del informe supone, sino por la claridad con que afronta el problema del comercio y de la adulteración del producto517. El documento, de escasa extensión, es uno de los primeros testimonios relativos al modelo que ha de emplearse en el tráfico de quina: “Es muy antigua en la América la adulteración de la Quina y por ese motivo perdió el crédito este célebre medicamento, a poco tiempo de su descubrimiento (…) y llegó a tanto este descrédito y la mala calidad de la Quina que habrá veinticinco años [1732] que yo mismo tuve necesidad de valerme de los Ingleses y Holandeses para lograrla buena, pues la que venía a Cádiz era inútil. Esto depende de que los Factores y Directores de las Compañías extranjeras que residen en Panamá, por donde precisamente pasa toda la Quina que viene a El informe, fechado en Madrid, el 17 de mayo de 1757 [sic], se conserva en el Archivo General de Indias [AGI], Indiferente, 1552, fols. 471-473; ha sido trascrito por Francisco Murillo Campos, Diego Bermúdez Camacho “Informe de don José Hortega, de la Real Botica de S. M. [sic], sobre la Quina que vino de América remitida por los Virreyes Pizarro y Mauro”. Anales de la Real Academia de de Farmacia, 19(3): 257-258. Madrid, 1953 y estudiado por José Fonfría Díaz, Joaquín Fernández Pérez, Cristina Jiménez Artacho. “Las dosis de corteza de quina y de quinina en la lucha antipalúdica desde el siglo XVIII”. En: José Javier Escribano Benito, Luis Español González, Mª Ángeles Martínez García (coord.) Historia de las ciencias y de las técnicas [VIII Congreso de la Sociedad Española de Historia de las Ciencias y de las Técnicas], 2: 585-602. Logroño: Universidad de La Rioja, 2004; y Matthew James Crawford. Empire’s Experts: The Politics of Knowledge in Spain’s Royal Monopoly of Quina (1751-1808). [A dissertation submitted in partial satisfaction of the requirements for the degree Doctor of Philosophy in History (Science Studies)]. San Diego: University of California, 2009. 517 190 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Europa, saben elegir la mejor, para dejarnos la que ellos desprecian…”518 Sus conocimientos sobre el mercado de la quina no son cortos: es sabedor de los desvelos de Thomas Blechyden, principal factor inglés de la South Sea Company en Panamá y Porto Bello, quien mantuvo relaciones comerciales con Charles Marie de La Condamine (1701-1774)519. Y, por supuesto, de los informes de Joseph de Jussieu (1704-1779) sobre la descripción y calidades de la quina: “Por estas noticias, que son harto ciertas, inferirá V.E. que se sabe bien en la ciudad de Loja lo que es la verdadera Quina, lo que es la mala, y lo que la adulterada, y que no tengo yo necesidad de poner advertencia alguna, pues el mismo Mr. De Jussieu hizo una prolixa y dilatada descripción para conocerla, para distinguir sus especies y precaver la adulteración520. A V.E. toca el dar las órdenes convenientes sobre este asunto, y V.E. sabrá los Revisores que debe haber en Panamá para no dejar pasar a Europa sino a la Quina de superior calidad, y aun no sería inútil que este examen se repitiese en Cádiz con el mayor escrúpulo por personas severas y de toda integridad…”521 Ciertamente, José Hortega era poco propenso a escribir, pero el tono y la seguridad del informe nos muestran a un experto, seguro del lugar que ocupa en la Corte. 518 AGI, Indiferente, 1552, fols. 471-473 (fide Francisco Murillo Campos, Diego Bermúdez Camacho. Op, cit. ut supra). 519 Luis J. Ramos Gómez. Época, génesis y texto de las ‘Noticias secretas de América’ de Jorge Juan y Antonio de Ulloa (1735-1745). Madrid: Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1985. 2 vols. (cf. vol. 1, pág. 70); Larrie D Ferreiro. Measure of the Earth. The enlightenment expedition that reshaped our world. New York: Basic Books, 2011 (cf. pág. 121). Probablemente se refiere al texto de Charles Marie de La Condamine. “Sur l’arbre du quinquine”. Memoires de l’Academie Royale des Sciences de Paris, [1738]: 226-243. París, 1738. 520 521 AGI, Indiferente, 1552, fols. 471-473 (fide Francisco Murillo Campos, Diego Bermúdez Camacho. Op, cit. nota 517). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 191 La obra impresa de José Hortega Un proyecto: la Historia Natural y Médica de España En el acta de la junta general de la Real Academia Médica Matritense celebrada el 2 de mayo de 1737 queda anotado: “Asimismo se acordó qe. los Sres. Academicos Medicos pongan en noticia del Sr. Dr. Dn. Franco. Fernandez Navarrete las especies de enfermedades qe. ocurrieren cada mes en su Practica, con los syntomas, terminaciones buenas y malas para qe. forme las ephemerides Barometricas qe. á tomado á su cargo…”522 Es la primera noticia que recogen estas actas del que habría de ser el gran proyecto cientifico emprendido por la Corporación: la elaboración de una Historia Natural y Médica de España. El propio José Hortega dará cuenta de los orígenes del proyecto: “En el año de 1733, se empezó à fundar en Madrid una Academia de Medicina, y de Physica experimentál. Sus ilustres Fundadores se propusieron el Proyecto de la Historia Natural, y Médica de España, en cuyo desempeño debían trabajar gloriosamente los Professores de Mathematica, de Physica y Medicina. Todas las Ciencias naturales, todas las Artes utiles, que dan esplendor y magnificencia al Estado, estan comprehendidas en tan vasto Proyecto, y en su execucion se incluyen las mas eminentes felicidades á favor de la Patria, la qual podía gloriarse á su tiempo de competir, y aun exceder en la cultura de las Ciencias, y las Artes á las Naciones mas erudítas de Europa, pues hasta ahora no logra ninguna la felicidad provechosa de tener una completa Historia Natural, y Medica de sus Provincias…” 523 José Hortega atribuye a la Academia un proyecto cuya idea matriz corresponde a uno de sus miembros, Francisco 522 [Acuerdos comunes de la Academia. 1733-1752] (ARANM, L-1, fol. 244). 523 José Hortega. Op. cit. nota 321, págs. 27-28. 1748 Fernández Navarrete (ca. 1680-1742)524, quien había ingresado como académico de número en enero de 1737525 y que, tan pronto como tuvo ocasión, trasladó al ámbito nacional un programa que había realizado en su Granada natal, en una dimensión estrictamente local526. En su primera intervención pública, durante la junta general celebrada el 8 de marzo de éste 1737527; tras exponer las que, a su juicio, debían ser las actuaciones de la Academia, concluyó: “Todas las condiciones referidas concurren en el Assunto de la Historia Natural, y Medica de España. Ninguno creo que es mas notable, mas extenso, mas dificil, mas deseado del Orbe Literario, y que mas llene la curiosidad y expectacion del Principe y de los sabios: utilizando la Nacion, y enriqueciendo la facultad: en que todos los Academicos trabajen unidos: que tenga sugetas todas sus partes al juicio y recto criterio y determinacion de la Academia: y cuia execucion solo tiene materiales dificultades: que infaliblemente se pueden vencer con el favor del Principe, la aplicación, y el tiempo (…) Es trabajo en que unidos se den la mano las tres facultades. La Pharmaceutica tiene muy bien que hacer los Examenes Botanicos, Calificacion, y Analysis, y reconocimiento de Piedras, Tierras, Metales, Minerales, &ª. La Chirurgica tiene en que emplearse en la Anathomia No hay que olvidar que José Hortega publica su crónica en 1748, y que las relaciones de Francisco Fernández Navarrete con la Academia Médica Matritense habían sido especialmente tensas desde los comienzos de 1737 (cf. Junta particular de 30-I-1737. ARANM, L-1, fol. 288). 524 525 “El Dr. Dn. Franco. Fernandez Navarrete Medico de Camara de S.M. y Cathedratico de Medicina de la imperial Universidad de Granada hizo en mis manos el juramto. acostumbrado, y la promesa de guardar los Estatutos, y acuerdos y tomo posesion de Academico…” (Junta general de 11-I-1737. ARANM, L-1, fol. 226). 526 Francisco Fernandez Navarrete [Antonio Gil Albarracín, ed.]. Cielo y suelo granadino. Idea de la Historia Natural de Granada en varias observaciones Físicas, Médicas y Botánicas que para estímulo y satisfaccion de la curiosidad bien aplicda escribía… Almería: Griselda Bonet Girabet, 1997. Aunque inédito hasta 1997, el manuscrito había sido dado por finalizado hacia 1732. “El Dr. Dn. Fco. Fernz. Nabarrete presentó á la Academia por escrito un Discurso qe. contenia el Bosquexo para la Historia Natural de España, el qual fue leido en la Junta, y deste acto se mostraron muy satisfechos el Sr. Dr. Dn. Alphonso Lope qe. presidia, los Señores Director, y Fiscal, y los demas Señores Academicos qe. se hallaron en esta Junta qe. fueron la mr. parte…” (ARANM, L-1, fols. 238-239). 527 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 193 de varios Animales, Aves, y Peces Españoles: en la Disseccion de los que mueren de las Endemias, o mas comunes Enfermedades en España, y la Medicina en la Historia, y Fisica de los Vientos, Climas, Tiempos, Aguas, Alimentos, Costumbres, y Enfermedades Endemicas: y lo que es mas que toda la Academia podra conocer, y deliberar sobre todos estos puntos (...) Ruego pues y pido encarecidamente a la Academia, que ya que por su buena suerte se halla constituida en tan lucidos principios, no se contente con menos que igualar ó exceder el adelantamiento de los Extranjeros. No se puede leer sin rubor del modo que hablan de nosotros. Aun quando no nos nombran, nos ofenden con el silencio. No se dignan de nombrarnos entre las Naciones eruditas. La Academia Leopoldina en su Carta Invitatoria despues de las Italiana, Francesa, Inglesa, y Holandesa con razon elogiadas, no dexa Danes, Suecos, Hungaros, Bohemios, y Lituanos, y otros que no aplaude, y que no se sabe que cosa grande ayan hecho (…) y nos han dexado solos en la ignominia. Vindiquemos pues nosotros nuestra Ilustre Nacion de opinion tan vergonzosa. Y sepa el Mundo que la que en todas Ciencias produxo tan Inimitables Heroes, y la que en la Medicina producia los Valles, Vegas y Mercados quando el resto de la Europa los veneraba, en este Siglo puede producir Academias, que en adelante con diferentes ojos atiendan, y con embidioso respeto distingan…”528 El impacto que la lectura de este texto produjo entre los académicos se evidencia en el acta de la misma sesión pública donde tuvo lugar su lectura: “Asimismo mando la Academia qe. el Sr. Presidente, res los S Directores y Fiscal, y el Sr. Dr. Dn. Franco. Fernandez Navarrete se junten particularmte. para examinar el Proiecto de la Historia Natural y Medica de España, qe. presentó á la Academia el dho. Sr. Dr. Nabarrete, á cuyas Juntas asistirán los demas Sres. Academicos qe. gustasen, para poner en execucion el referido Proiecto, Francisco Fernández de Navarrete. [Illª Academia]. En: Tomo 2º Medico de Miscelanea Medica &ª Recojido en este Tomo por el Dr. Dn. Thomas Francisco de Monleon, y Ramiro… 1745, fols. 59r-67v (RANM, manuscrito, signatura: 17-3ª Biblioteca / 5). Las citas en fols. 63v-64r, 65v, 67r-67v. 528 194 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol admitido y aprobado pr. la Academia, daran quenta en las Juntas ordinarias y Generales qe. se celebren los lunes y viernes, para qe. en su vista resuelva la Academia lo mas conveniente…”529 La asunción de este proyecto, como propio, por la Regia Academia Matritense tiene un interés evidente, dota a la institución de los mismos objetivos centralistas ofertados a la Corona por las otras Reales Academias de la Corte: los cimientos de una lengua común o la construcción de una única Historia para todos los españoles530. A la par que le oferta una posibilidad de visibilidad de sus trabajos ante sus homóninas europeas, uno de los objetivos perseguidos tras la transformación de la vieja ‘Tertulia’ en ‘Academia’. El proyecto presenta otro par de singularidades de interés: establece un verdadero programa de investigación, estrictamente observacional, y lo hace partidiendo de una premisa hipocrática: la relación entre la salud y las condiciones ambientales531. ARANM, L-1, fols. 238-239. Antonio Hernández Morejón señala, la junta del 15-II-1737 como en la que tuvo lugar el hecho; probablemente ésta sea la fecha que consta en el manuscrito que él pudo consultar, pero no la efectiva de la proposición, a tenor de la información que ofrece el Libro de Actas...: “Tambien poseo entre mis manuscritos la proposicion que hizo Navarrete en la junta general de la Real Academia médica matritense, el viernes 15 de febrero de 1737, para que ésta invitase á todos los medicos de la península á escribir cada uno una disertación, á fin de que todos concurriesen á la formación de la historia natural y médica de España, incluyendo el plan y estilo de la obra y órden de las materias que á cada médico en particular se le habría de señalar.” (Antonio Hernández Morejón. Historia bibliográfica de la medicina española. Madrid: Imprenta de la viuda de Jordán e hijos, 1842-1852. 6 vols. La cita en vol. 6: 439-440. 1852); de la localizacion actual del manuscrito al que alude Hernández Morejón nada sabemos. 529 530 Francisco Fernández Navarrete elaboró un memorial complementario de su exposición pública en la Academia en el que queda expresamente patente este carácter centralista del proyecto: “Las primeras Lineas se tiran desde el Centro de la Corte a toda la Circunferencia de España, que unida con nuestras Leyes, esta oportuna para conspirar á nuestro intento. Los Honorarios que tenemos en las Capitales, y Pueblos principales del Reyno son Terminos a que se dirigen estas Lineas. Ya se ve que esta traza dispone hacer Academia de toda España…” Francisco Fernández de Navarrete. [El Mercurio Academico. Harmonioso Proyecto de la Historia Natural, y Medica de España de la Rl. Academia Medica Matritense, por D.F.F.N. Medico de Camara de S.M. Catholica]. En: Tomo 2º Medico de Miscelanea Medica &ª Recojido en este Tomo por el Dr. Dn. Thomas Francisco de Monleon, y Ramiro… 1745, fols. 68r-78v. (RANM, manuscrito, signatura: 17-3ª Biblioteca / 5). La cita en fol. 72r. 531 La idea ha sido sugerida, y desarrollada con mucho mayor detalle, José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 195 Nada puede extrañar el interés con que, desde los sitiales académicos, se observa el desarrollo de esta actuación; en junta general de 15 de junio de 1737 se conocen sus primeros resultados y se toma una decisión trascendente: “El Sr. Dr. Dn. Franco. Fernz. Navarrete presentó á la Academia las ephemerides temporales del Barometro, y Thermometro del mes de Marzo, y Abril, y en su vista mando la Academia qe. se impriman en su Nombre. Item se acordo qe. todos los Viernes hasta princips. re Oct . aya Junta Genl. para tratar sobre el proiecto de la Historia Natural y Medica de España.”532 No hubo que esperar tanto; en la siguiente junta general, la celebrada el 21 de junio, ya está pergeñado el programa y distribuidas las tareas entre los académicos de número533. por Horacio Capel. “Medicina y clima en la España del siglo XVIII”. Revista de Geografia, 32/33: 79-105. Barcelona, 1999. 532 ARANM, L-1, fol. 254. “Asimismo se determino qe. se empieze á buscar en todos los Arzobispados, y Obispados de España los profesores mas Aviles, y de mr. inteligencia, con quienes la Academia á de tener comunicación y comercio literario para desempeñar el gran Proiecto de la Historia Natural, y Medica de España; y para cumplir con esta resolucion se encargaron los Sres. Academicos de varios obispados con el orden sigte.: / El Sr. Lerma de los Obispados de Valladolid, Palencia, Zamora, y Leon. / El Sr. Monleon de Jaen, Alcala la Rl., Guadix, y Almeria. / El Sr. Campillo, Zaragoza, Tarragona, Teruel, y Albarracin. / El Sr. Lope, Valencia. / El Sr. Rico el mr., Salamanca, Segovia, y Avila. / El Sr. Velez, Cuenca. / El Sr. Ortega. De los Arzobispados, y Obispados del Principado de Cataluña, y del Reyno de Galicia. / El Sr. Bereterrechea del Obispado de Pamplona. / Sr. Navarrete, Granada y Malaga. / Asimismo se encargaron de varios asumptos conducentes á formar los aparatos de Historia Natural, y Medica con este orden / Sr. Navarrete. Metodo para hazer las observaciones del Barometro, y Thermometro. / Metodo para formar las Cartas Geographicas, y Corographicas de España. / Metodo para hacer las observaciones Medicas. / Dissertacion sobre el uso de las Mathematicas en Medicina. / Prolusion sobre la Historia Natural y Medica. / Sr. Velez. Methodo para los semi-Metales. / Sr. Monleon. Metodo para los Metales. / Sr. Lerma. Metodo para los Minerales. / Sr. Campillo. Dissertacion sobre los systemas Phylosoficos. / Sr. Brunet. Experiencias Physicas, y Chymicas. / Sr. Bereterrechea, Lopez y Valle. Metodo de Disecar los Animales, e insectos &ª. / Sr. Isasi Isasmendi. Metodo epidemico. / Sr. Carreras. Dissertacion sobre los systemas medicos. / Sr. Ortega. Catalogo de los Autores para la Historia Natural. / Catalogo de los Autores para la Historia Medica. / Catalogo de los Autores Medicos Españoles. / Metodo de plantas. / Metodo de Animales, insectos, Aves y Pezes. / Sr. Lope. Metodo de aguas. / Srs. Rico. Observaciones obstreticias.” (ARANM, L-1, fols. 255-257). Es sin duda éste el primero de los proyectos que señala Antonio Hernández Morejón: “Este ilustre médico [Francisco Fernández Navarrete] concibió además dos grandes 533 196 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Distribución de tareas, entre los miembros de la Real Académica Médica Matritense, para la elaboración de la Historia Natural y Médica de España y el Mercurio Académico de Francisco Fernández Navarrete Académicos Historia Natural y Médica de España [José Hortega]* Baltasar de la Torre Ocón José Corralón Juan Andrés de Bereterrechea Obispado de Pamplona José Hortega Arzobispados y Obispados del Principado de Cataluña y del Reyno de Galicia Vicente Carreras Alejandro Martínez de Argandeña Julián Zapata Miguel Garro Alfonso Lope Juan de Dios López Juan de Burnet Bartolomé Serena Miguel Campillo Miguel Rodríguez Obispados de Valladolid, Ávila y Segovia Obispados de Calahorra, Osma y Burgos Arzobispado de Tarragona, Obispados de Barcelona, Tortosa y Vich Obispados de Oviedo, Lugo y Mondoñedo Villa de Madrid y Sitios Reales Obispado de Pamplona Obispados de Badajoz, Salamanca y Ciudad Rodrigo Obispado de Valencia Arzobispado de Valencia y Obispado de Segorbe Obispados de Astorga, León, Zamora y Palencia Obispados de Córdoba y Cádiz Arzobispado de Zaragoza y Obispado de Tarazona Obispados de Zaragoza, Obispados de Huesca, Tarragona, Teruel y Jaca, Barbastro y Lérida Albarracín Arzobispado de Toledo Juan Isasi Isasmendi Cristóbal Vélez Mercurio Académico de Francisco Fernández Navarrete** Arzobispado de Sevilla Obispado de Cuenca Provincias de Vizcaya, Álava y Guipúzcoa Obispados de Cuenca, Siguenza, Albarracín y Teruel José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado Tomás Francisco de Monleón y Ramiro Francisco Fernández Navarrete Obispados de Jaén, Alcalá la Real, Guadix y Almería Obispados de Granada y Málaga Pedro León Gómez Francisco Lerma Obispados de Valladolid, Palencia, Zamora y León Pedro Palomero Obispados de Jaén, Almería y Guadix y Abadía de Alcalá la Real Arzobispado de Granada y Obispado de Málaga Arzobispado de Santiago y Obispados de Orense y Tuy Obispados de Coria y Plasencia Obispados de Cartagena y Orihuela Obispados de Gerona, Solsona y Urgel Nicolás Valle Francico Rico 197 Obispados de Salamanca, Segovia y Avila * ARANM, L-1, fols. 255-257. Francisco Fernández Navarrete. “Historia natural del Arzobispado de Toledo. Estilo de la obra”. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 404r-413v. [1739] (ARAH, mss. 9/5964). ** Los documentos de Francisco Fernández Navarrete nos ofrecen otra distribucion de tareas, más avanzada que la mencionada en las actas de la Real Academia Médica, en donde la distribución de los territorios objeto de estudio queda repartida en su totalidad y con participación de un mayor número de académicos. La nueva propuesta atiende a la denominación de ‘Mercurio Académico’, un volumen que habría de ser coordinado por el médico granadino534. proyectos: el uno fué la formación de la topografía médica general de España, cuyo plan presentó á la academia médica de Madrid, distribuyendo su ejecucion por obispados; el segundo, el establecimiento de un comercio literario entre todos los médicos de la península, á fin de escribir la historia cronológica de las epidemias de nuestro país…” (Antonio Hernández Morejón. Op. cit. nota 529, vol. 6: 434. 1852). “Este Libro [Mercurio Academico] se participara a todos nuestros Academicos del Reyno, con las demas Providencias que la Academia tenga por convenientes. / El Repartimiento de las Provincias, y Territorios dispuso la Academia que fuese de esta forma. / El Dr. Dn. Balthasar de la Torre y Ocon (…) El Arzobispado de Sevilla. / Dn. Joseph Corralon (…) los Obispados de Valladolid, Avila, y Segovia. / Dn. Juan Andres de Bereterrechea (…) los Obispados de Calahorra, Osma, y Burgos. / Dn. Joseph Ortega (...) el 534 198 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Igual sensación nos transmite la distribución de los temas que los académicos habrían de abordar; más estructurada en la propuesta de Fernández Navarrete: “Los Discursos, Methodos, y Noticias que deben componer el Mercurio dispusso la Academia: que precediendo una Razon de las Noticias que tubo para abrazar este Proyecto, su Proposicion, y Distribucion y la Nominacion de los Academicos, que deben executar assi en esta Corte como fuera de ella en todo el Reyno se repartan entre los de Numero y Exercicio, según la serie siguiente: en que no se guarda el Orden de la Antigüedad sino el que (por ahora pareze) deberan llevar los Assuntos: I. Primeramente: Un catalogo de Libros Españoles Antiguos y Modernos: en los que se ha de dar noticia de todos los que se han escrito en Español, aunque sea por Estranjeros, ó en Idiomas Estrangeros por Españoles, y tratan de los puntos conducentes a la Histora Natural, ó Medicina de España; ya sea por orden Alphabetico ya por Clases, Phisicos, Mathematicos, Metalurgicos, Botanicos, Chimicos &ª. Dn. Joseph Ortega. II. Y Otro Catalogo de Libros Extrangeros Antiguos y Modernos, que en Obra, ó Arzobispado de Tarragona, Obispados de Barcelona, Tortosa, y Vique. / Dn. Vicente Carreras (…) los Obispados de Oviedo, Lugo, y Mondoñedo. / Dn. Alexandro Martínez de Argandoña (…) la Villa de Madrid, y Sitios Reales. / Dn. Julian Zapata (…) el Obispado de Pamplona. / Dn. Miguel Garro (…) los Obispados de Badajoz, Salamanca, y Ciudad Rodrigo. / Dn. Alphonso Lope (…) El Arzobispado de Valencia, y Obispado de Segorbe. / Dn. Juan de Dios Lopez (…) los Obispados de Astorga, Leon, Zamora, y Palencia. / Dn. Juan de Burnet (…) los Obispados de Cordova, y Cadiz. / Dn. Bartolome Serena (…) el Arzobispado de Zaragoza, y Obispado de Tarazona. / Dn. Miguel Campillo (…) los Obispados de Huesca, Jaca, Barbastro, y Lerida. / Dn. Miguel Rodríguez (…) el Arzobispado de Toledo. / Dn. Juan Ysasi Isasmendi (…) las Provincias de Vizcaya, Alava, y Guipuzcoa. / Dn. Xptobal Velez (…) los Obispados de Cuenca, Siguenza, Albarracin, y Teruel. / Dr. Dn. Thomas Franco. de Monleon y Ramiro (…) los Obispados de Jaen, Almeria, y Guadix, y Abadia de Alcala la Rl. / Dr. Dn. Francisco Fernandez Navarrete (…) El Arzobispado de Granada, y Obispado de Malaga. / Dn. Pedro Leon Gomez (…) El Arzobispado de Santiago, y Obispados de Orense, y Tuy. / Dn. Franco. Lerma (…) los Obispados de Coria, y Plasencia. / Dn. Pedro Palomero (…) los Obispados de Cartaxena, y Orihuela. / Dn. Nicolas Valle (…) los Obispados de Girona, Solsona, y Urgel…” (Francisco Fernández Navarrete. “Historia natural del Arzobispado de Toledo. Estilo de la obra”. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 404r-413v. [1739]. Archivo de la Real Academia de la Historia [ ARAH], mss. 9/5964). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 199 Tratado Especial han tratado de los Puntos assi generales, como Especificos que debera tener presentes la Academia para las dos Historias [Natural y Médica], colocandolos en la misma forma que a los antecedentes. Dn. Juan Burnet. III. Exceptas de las Actas de Inglaterra, Viageros y otros Autores de aquella Nacion que han tocado noticias pertenecientes a la Historia Natural, y Medica de España. Dn. Francisco Fernandez Navarrete. IIII. Disertacion Historico Medica. Proluzion (…) Dn. Francisco Fernandez Navarrete. V. Dissertacion Historica. Methodo Cosmographico (…) Dn. Balthasar de la Torre y Ocon. VI. Dissertacion Historica. Caracter de los Españoles (…) Dn. Miguel Rodriguez. VII. Dissertacion Phisica Historica, Methodo Anemologico (…) Dn. Francisco Fernandez Navarrete. VIII. Dissertacion Physica y Methodo Metheorologico (…) Dn. Pedro de Leon Gomez. IX. Dissertacion Physico Analytica de las Aguas (…) El Dr. Dn. Miguel Garro. X. Dissertacion Physica Medico Practica. Synopsis de los Baños (…) Dn. Xptobal Velez. XI. Dissertacion Phisico Analytica Mineralogica (…) Dn. Thomas Francisco de Monleon y Ramiro. XII. Dissertacion Phisico Analytica Metalurgica (…) Dn. Nicolas Valle. XIII. Dissertacion Physico Historico Lytographica (…) Dn. Joseph Ortega. XIV. Dissertacion Historico Phisica Methodo Phitologico (…) Dn. Francisco Lerma. XV. Dissertacion Historico Phisica Methodo Zoologico (…) Dn. Juan de Dios Lopez. XVI. Dissertacion Historico Anatomica (…) Dn. Miguel Campillo. XVII. Dissertacion Historico Critica Synopsis Philosophica (…) Dn. Pedro Palomero. XVIII. Dissertacion Philologica (…) Dn. Alexandro Martinez Argandoña. XIX. Dissertacion Historico Medica (…) 200 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Dn. Vicente Carreras. XX. Dissertacion Historico Critica Synopsis Medico Systematica (…) Dn. Julian Zapata. XXI. Dissertacion Empirico Critica de la Empiria Curativa (…) Dn. Alphonso Lope. XXII. Dissertacion Historico Critica del uso y Abuso de las Mathematicas en Medicina (…) Dn. Joseph Corralon. XXIII. Dissertacion Historico Medica de los mas famosos inventos Medicos (…) Dn. Juan Andres Beretherrechea. XXIIII. Dissertacion Historico Chirurgica de los inventos Chirurgicos (…) Dn. Joseph Ortega. XXV. Dissertacion Historica de la materia Medica yndigena (…) Dn. Juan Ysasi Ysasmendi. XXVI. Dissertacion Historico Medica, del Methodo Epidemico (…) Dn. Bartholome Serena. XXVII. Dissertacion Historico Anatomica Particular (…) Dn. Joseph y Dn. Francisco Rico. XXVIII. Dissertacion Historico Critica Obstetricia…” 535. Distribución de tareas, entre los miembros de la Real Académica Médica Matritense, para la elaboración de la Historia Natural y Médica de España y el ‘Mercurio Académico’ de Francisco Fernández Navarrete Historia Natural y Médica de España [José Hortega]* Disertación Académico Autores médicos José Hortega españoles Autores para la José Hortega Historia Natural Fco. Fernández Navarrete Cartas geográficas Fco. Fernández y corográficas Navarrete Prolusión Mercurio Académico de Francisco Fernández Navarrete** Disertación Académico Bibliografía hispana Bibliografía no José Hortega hispana Exceptas inglesas Juan Burnet Fco. Fernández Prolusión Navarrete Fco. Fernández Cosmografia Navarrete Baltasar de la Carácter de los españoles Torre Ocón Francisco Fernández Navarrete. “Historia natural del Arzobispado de Toledo. Estilo de la obra”. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 404r-413v. [1739]. ARAH, mss. 9/5964. 535 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado Anemología Miguel Rodríguez Fco. Fernández Navarrete Observaciones del barómetro y termómetro Fco. Fernández Navarrete Meteorología Aguas Alfonso Lope Aguas Minerales Semimetales Francisco Lerma Cristóbal Vélez Tomás Francisco Monleón Ramiro Metales Método de plantas José Hortega J. Bereterrechea, Método de Juan de Dios disecar animales e López y Nicolás insectos Valle Método de animales, José Hortega insectos, aves y peces Experiencias Juan Burnet físicas y químicas Sistemas filosóficos Miguel Campillo Observaciones médicas F Fernández Navarrete co Sistemas médicos Vicente Carreras Uso de las Matemáticas en Medicina Francisco Fernández Navarrete Método epidémico Juan Isasi Isasmendi Baños Mineralogía 201 Pedro de León Gomez Miguel Garro Cristóbal Vélez Litografía Tomás Francisco Monleón Ramiro Nicolás Valle Fitología José Hortega Zoología Francisco Lerma Anatomía humana Juan de Dios López Metalurgia Sinópsis filosófica Miguel Campillo Sinópsis filológica Pedro Palomero Alejandro Medicina Martínez Argandoña Sistemática Vicente Carreras médica Crítica de la Julián Zapata empiria curativa Uso y abuso de la Matemática en Alfonso Lope Medicina Inventos médicos José Corralón Juan Andrés Inventos quirúrgicos Bereterrechea Materia médica José Hortega indígena Juan Isasi Método epidémico Isasmendi 202 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Anatomía particular Bartolomé Serena José Rico y Francisco Rico José Rico y Obstetricia Francisco Rico * ARANM, L-1, fols. 255-257. ** Francisco Fernández Navarrete. “Historia natural del Arzobispado de Toledo. Estilo de la obra”. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 404r-413v. [1739] (ARAH, mss. 9/5964). Obstetricia A medida que la definición del proyecto va avanzando, el protagonismo de Francisco Fernández Navarrete se hace más evidente; resulta significativo de este aserto la portada diseñada por éste para el volumen que habría de contener el resultado final: El Mercurio Academico. / Harmonioso Proyecto de la / Historia Natural, y Medica / de España de la Rl. Acade / mia Medica Matritense, por D.F.F.N. [Francisco Fernández Navarrete] Medico de Camara de S.M. Catholica536. Conservamos copia de las minutas dirigidas a un buen número de académicos en que, bajo la firma de Fernández Navarrete, se les urge a remitirle: “una razon de los Pueblos de que se componen [los territorios confiados a su estudio], Obispados con que lindan y quales son los lugares del confin de cada uno por ser precisa antes de todo esta noticia para la Geographia…”537 El afán de protagonismo de Francisco Fernández Navarrete, que conllevó a un encontronazo institucional con José Hortega, estuvo a punto de provocar un incidente diplomático entre la Real Academia de Medicina y la de la Historia, a la que Navarrete también pertenecía. En la primavera de 1738, la Real Academia de la Historia, representada por Fernández Navarrete, solicitó realizar una visita protocolaria a la Médica Matritense, La biblioteca de la Real Academia Nacional de Medicina conserva, entre los manuscritos de Francsico Fernández Navarrete, un bosquejo de esta portada, cf. Tomo 2º Medico de Miscelanea Medica &ª Recojido en este Tomo por el Dr. Dn. Thomas Francisco de Monleon, y Ramiro… [Madrid]. [1745], fols. 68r-78v. (RANM, manuscrito, signatura: 17-3ª Biblioteca / 5). 536 [Borradores de minutas firmadas por Francisco Fernández Navarrete]. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 422r-430r. [1739] (ARAH, mss. 9/5964); conservamos las dirigidas a José Corralón (fol. 422r), Julián Zapata (fol. 423r), Pedro León Gómez (fol. 424r), Miguel Campillo (fol. 425r), Francisco Lerma (fol. 426r), José Hortega (fol. 427r), Nicolás Valle (fol. 427r), Baltasar de la Torre (fol. 429r) y Miguel Garro (fol. 430r). 537 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 203 ésta aceptó y señaló día y hora para el acercamiento institucional: la mañana del martes 29 de abril de éste 1738, pero a él no acudió representante alguno de la de la Historia; la Academia Médica resolvió expresar sus quejas por escrito538. La falta de asistencia de comisionados de la de la Historia, o por mejor decir, de Francisco Fernández Navarrete, era esperada; en un escrito de 30 de abril de 1738, éste da cuenta de su visión de los hechos al que fuera primer secretario de la de la Historia, Juan Antonio de Rada Berganza: “… aviendo sabido que la Academia Medica ha escrito a la nuestra y a otras partes para quexarse de mi y dar no se que satisfaccion (…) no hubo Academia para resolver el lugar del recibimiento, sino el mismo interesado [José Hortega] (…) solo le pedi, suspendiesse el aviso de Mañana para dar Yo cuenta, me parecio tan arrogante la respuesta como agena del respeto de la Academia, y propia de unos pobres hombres que se dexan mandar (…) que por el sitio ha estado despreciada en la facultad hasta que Yo entre venciendo satiras y chocarrerias de las personas de mas distincion de la Corte (…) Por lo que toca a mi podra ver si fue justo qe. con el Caracter de mi comision un solo sugeto (cuio carácter no corresponde) quede con la gloria de deslucirme (…) Ellos gustaran sin duda que Yo pierda las dos Academias. La de ellos por ahora lo hare gustoso: no del todo porque Yo espero en Dios que con el tiempo de otra cosa: Y para entonces Yo sere privilegiado, y ademas de que me desearan no esta en su mano otra cosa…”539 538 El acta de la junta general celebrada el 29-IV-1738 es sumamente elocuente: “La Real Academia de la Historia, a qn. el Rey nro. Sr. ha colmado de muchas honras quiso dar parte de ellas, y de su fundacion á nra. Academia para lo qual nombró pr. Comisarios al Sr. Dr. Dn. Franco. Fernandez Navarrete el qual pidio, dia, y hora á la Academia, y aviendolo dado oy el Sr. Presidente á las 11 y mª. y estando los Sres. Academicos para este Acto, se arreglaron los asientos; y se nombraron los Acads. qe. los debian conducir; pero aviendo esperado los Acads. hasta cerca de la una, no acudieron al cumplimto. citado los Sres. Comisarios de la Rl. Academia de la Historia, en vista de lo qual, y de los Papeles qe. en este asunto ha escrito el Sr. Dr. Navarrete resolvió la Academia dar sus quexas á la Rl. Academia de la Historia.” (ARANM, L-1, fols. 309-310). Carta de Francisco Fernández Navarrete a Juan Antonio de Rada Berganza. Madrid, 4-IV-1738. Expediente del académico Francisco Fernández Navarrete (ARAH, Secretaría, s/n). 539 204 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol En un tono similar se expresa en una misiva, sin datar pero de estas mismas fechas: “… mis Medicos son unos pobres hombres, el Boticario [José Hortega] los manda porque por su mala cabeza se han separado el Dr Josse Araujo y otros, y Yo no lo he hecho sino de la presente asistencia solo por ver si en algun tiempo se mejoran de fortuna y por dexarles que a fuerza de errar se desengañen. Lo que ha pasado vera Vms. en essos papeles sobre el reparo de no aver por donde entrar sino la tablilla del mostrador. El manda al que hace de Presidente y contra el gusto de los otros ha respondido con la magestad que Vm. ve; el aviso mio de ayer fue a la ocasion, y a las once de la noche me embio el otro papel sin hacerse cargo de los motivos que le di. Yo no juzgo necessario responderle. Y tuviese por mejor no hacer caso de tontos presumidos…”540 Un borrador de respuesta, pergeñado por Francisco Fernández Navarrete, insiste en los mismos elementos de la polémica: “Yo creo que nunca por reglas de razon se puede uno librar de que otro se pase de necio o arrogante: y devieron esta mañana aver desauciado pues no era seguro que Yo pudiera aver evacuado mi dificultad que ayer tarde propuse a algunos Señores y la juzgaron legitima. Yo construi el papel de anoche en estos terminos: no queremos esperar, ni dar lugar a que se medite, si quieren vengan aquí, y sino no vengan. Yo es muy cierto que he ido y voy alli; pero recibirle de la Comision me parecio que no cabia por la tablilla del mostrador y por esta conciencia (erronea) no debia por mi obrar en contra quando la Academia esta tratando de establecer su Autoridad (…) La Academia si quiere satisfacer a la otra sera muy facil culpandome a mi y embiando a otro, y quedaran muy gustosos porque ya para mi es tarde...”541 Carta de Francisco Fernández Navarrete a Juan Antonio de Rada Berganza. [Madrid, IV-1738]. Expediente del académico Francisco Fernández Navarrete (ARAH, Secretaría, s/n). 540 Borrador de respuesta [mss. Francisco Fernández Navarrete]. [Madrid, 29-IV-1738]. Expediente del académico Francisco Fernández Navarrete (ARAH, Secretaría, s/n). 541 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 205 Ante la solicitud de explicaciones por parte de Juan Antonio de Rada542, Fernández Navarrete pergeñó una larga representación, en la que da pormenorizada cuenta del incidente: “No me detengo en las razones que me movieron para solicitar privadamente que los Medicos se juntassen en lugar mas decente y menos murmurado, para recibir la Diputacion de V.S. ni en si, no siendo el lugar la esencia de aquella Academia, era de mas lustre suio recibir en otro. Solo dire que, aviendo estado el Segundo Secretario D. Miguel Garro con migo el dia antes, y enterandose, y aprobando mis razones: diciendole (sobre lo que antes le avia propuesto) que ya no eran mias solas, se aparto de mi diciendo, que lo iban a conferir. Pero a la noche, sin dignarse de darles respuesta ni satisfaccion alguna, embiaron seco el aviso para otro dia al medio dia en la Botica. Al qual respondi al instante: que lo hablado ya en este punto me precissaba a dar cuenta a V.S. que suspendieran la junta por aquel dia para tener lugar de hacerlo. Me respondieron el mismo Domingo a las once de la noche con otra exclusiva seca (…) Este aire de altaneria, y siendoles tan facil suspender aquella junta, negar la espera en el primer lance a las resoluciones de V. S. parece a mi mal entender una presumida afectacion de seguridad, que aunque tengan las razones que tubieren me suena a desprecio de aquello que todas las Comunidades tanto repasan para su decoro y no les duelen terminos para arreglar el Ceremonial (…) Contra mi persona es solicitar que V. S. desapruebe lo hecho por mi, con continuarles sencillamente (sin hacer caso de mi estimacion) su urbanidad ceñida a sus leyes: pues ya no puede V. S. desentenderse de lo passado: quedando yo manifiestamente descubierto, y de gran A ellas debe responder el escrito de 5-IV-1738: “Yo no quiero cansar a Vm. con cuanto le considero bien cansado, ni en que sea preciso hablar contra otros: solo que si Vmd. cree de mi que no miento, ni tengo en esto interes alguno particular mio, solo he mirado el decoro de nuestra Academia, y asi con justicia espero que mire por el mio. Remito la copia de la suplica que tengo que presentarle mañana. Y si pareciere sabio facer, o que le toca, o este bien sacrificandome a mi, en haciendo Yo lo que me parece que debo: lo demas no me toca…” Carta de Francisco Fernández Navarrete a Juan Antonio de Rada Berganza. Madrid, 5-IV-1738. Expediente del académico Francisco Fernández Navarrete (ARAH, Secretaría, s/n). 542 206 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol triunfo, jactancia y risa para ellos: que continuaron con radicarme con esso en mala opinion con el Dr. Cervi: y mas no siendo Yo capaz de desdecirme, ni satisfacerlo: no debiendo uno ni otro…”543 Las explicaciones de Francisco Fernández Navarrete no fueron atendidas por la Real Academia de la Historia; y apenas una semana después de mediada la ofensa, en la sesión reunida el 9 de mayo, José Hortega informa del escrito de desagravio remitido por la de la Historia: “Asimismo se dio quenta á la Academia de un Papel escrito pr. el Ssrio. de la Rl. Acadª. de la Historia, y de su orden, en el qual se expresa qe. siendo sabedora la referida Academia de los excesos de sus Comisarios los desaprobó, y advirtio seriamte. á sus Diputados qe. no avian obrado bien, assimismo pedia a nra. Acadª. qe. depusiese qualquier quexa qe. pr. este accidente pudiera aver concebido, y que admitiese á los nuebos Diputados los Sres. Dn. Antonio Fernz. Prieto y, Sotelo, y Dn. Martín de Ulloa, sobre lo qual mando la Academia qe. se suspendiesen de embiar á la Acadª. de la Historia las justas quexas qe. tenian dispuestas, y qe. se respondiese qe. la Academia estaba asegurada de la atencion y cortesia de la Rl. Academia de la Historia, y assimismo que estaba prompta á recibir á los nuevos Diputados, lo que se executó.”544 Ese mismo día, el 9 de mayo, Francisco Fernández Navarrete escribe a Juan Antonio de Rada una carta en tono mucho más humilde, quizás destinada a ser mostrada, como prueba de buena voluntad, ante los ojos de los académicos de la de Medicina: “… aviendo logrado mi corto merecimiento que la Academia este satisfecha de que lo acaecido 543 Representación de Francisco Fernández Navarrete. Madrid, 5-IV1738. Expediente del académico Francisco Fernández Navarrete (ARAH, Secretaría, s/n). La representación se conserva por duplicado. De esta fecha debe ser un borrador de oficio, dirigido a Miguel Garro: “… por lo que Vmd. sabe que deseo y solicito el Lucimiento y decoro de essa Acadª. / Por esta misma razon previne a Vmd. que no me parecia decencia el recibir un Cuerpo tan respetable donde ahora se juntan: y aviendo esos hecho de oficio mio, lo repito ahora por presuncion y reparo que se me ha hecho. / Tambien prevengo que con la distincion que fuese el recebimiento, sera la correspondencia…” (Expediente del académico Francisco Fernández Navarrete. ARAH, Secretaría, s/n) 544 ARANM, L-1, fol. 311. José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 207 en la diferencia con mi Academia Medica (por una extrajudicial diligencia que quisse hacer, no creiendome, ni pareciendome necessario que llegasse a ser noticia formal de una, ni otra) fue solo efecto del celo con que apetezco el maior lustre de ambas…”545 La Academia Médica recibió, con todas las formalidades precisas, a los diputados de la Academia de la Historia en la mañana del viernes 16 de mayo de éste 1738: “Aviendo noticiado el Sr. Dn. Juan Antonio Rada rio Ss . de la Rl. Acadª. de la Historia á nra. Academia qe. estaban nombrados nuebos Diputados para dar la noticia de su fundacion, y de las honras que S. M. avia concedido á sus individuos, pidieron los nuebos Diputados el Miercoles pasado Dia, y Hora pr. medio de un Papel, y el Sr. Presidente señalo oi á las onze y mª á cuya hora llegaron los Sres. Diputados Dn. Antº. Fernz. Prieto, y Sotelo, y Dn. Martin de Ulloa a los quales baxaron á recibir á la Puerta de la Calle los Sres. Academicos Dn. Miguel Rodriguez, y Dn. Pedro Palomero los quales los conduxeron hasta la Puerta del Salon de la Academia, y en este lugar los recibieron los Sres. Academicos Dn. Joseph Ortega, y Dn. Alphonso Lope qe. los acompañaron hasta que el Sr. Dn. Antº. Fernadz. Prieto, y Sotelo ocupo el primer assiento de las Banda derecha, y el Sr. Dn. Martin de Ulloa el primer assiento de la Banda izquierda, y en este estado hablo el Sr. Sotelo, y respondio nro. Presidente, y despues el Sr. Ulloa y tambien respondio nro. Presidente. Dieron quenta de la fundacion de la Rl. Academia de la Historia y presentaron una Copia de los Decretos con que S. M. los ha honrado y finalmte. propusieron á nra. Academia la amistad y mutua correspondencia con la Rl. Acadª. de la Historia, á que respondio el Sr. Presidente dandoles la enhorabuena, y aceptando la amistad, y correspondencia, con lo que se despidieron los Sres. Diputados, y se les acompaño hasta la Puerta de la calle de la misma forma…”546 Tras la partida de la embajada de la Academia de la Historia, los de la de Medicina decideron enviar una representación de buena voluntad ante la de la Historia en la que se plasmaran sus 545 Carta de Francisco Fernández Navarrete a Juan Antonio de Rada Berganza. Madrid, 9-IV-1738. Expediente del académico Francisco Fernández Navarrete (ARAH, Secretaría, s/n). 546 ARANM, L-1, fols. 313-315. 208 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol deseos de cooperación; se nombró para ello a Vicente Carreras y a Bartolomé Serena547, quienes cumplieron con el mandato el 19 de mayo, alli gozaron de ‘el mismo tratamiento, y recibimiento’ del que habían sido objeto los de la Historia en la casa de José Hortega548. Se daba así término a un leve incidente diplomático entre ambas Corporaciones, no exento de algunas consecuencias. A partir de entonces la presencia de Francisco Fernández Navarrete no fue bien tolerada en la Academia Médica; el 2 de junio de éste 1738, el Fiscal de la Academia, Alfonso Lope, solicita se le entreguen los documentos pertenecientes a este académico, de los que se acuerda facilitarle copia549; desde entonces su nombre apenas figura en las actas de la Corporación550. El médico granadino trasladó su proyecto de ‘Historia Natural de España’ a la Academia de la Historia551. 547 “Asimismo se acordo qe. los Sres. Academicos Carreras y Serena pasen á dar la enhorabuena á la Rl. Acadª. de la Historia en nombre de nra. Acadª. cuya noticia se la comunique pr. su ssro. de quien tomaron el Dia, y Hora los Sres. Diputados…” (ARANM, L-1, fol. 315). El acta de la junta general celebrada el 23-V-1738 imforma: “Los Sres. Carreras, y Serena dieron quenta á la Academia de aver executado la comision qe. se les encargo cerca de la Rl. Academia de la Historia (…) Dixeron qe. la Rl. Academia de la Historia les avia señalado el Lunes pasado á las cinco de la tarde en la Pieza qe. ocupa en la Rl. Biblioteca, qe les hizo el mismo tratamiento, y recibimto., y les dieron los mismos asientos qe dio á su Diputacion nra. Acadª y que dexaron establecida la amistad, y mutua correspondencia entre los dos Cuerpos, de cuya comision se dio por mui satisfecha la Academia…” (ARANM, L-1, fols. 315-316). 548 “Que suplicaba á la Academia [el Fiscal] mandase entregarle todos los papeles del Sr. Navarrete, pr. qe. tenia qe. pedir sobre ellos (…) [La Academia acuerda] qe se le entregue al Sr. Fiscal una copia de los Papeles del Sr. Navarrete.” (ARANM, L-1, fol. 317). 549 550 Sólo en una ocasión, que hayamos anotado, en la junta general celebrada el 21-XI-1738: “El Sr. Navarrete presentó á la Academia un libro intitulado Parynetica Epistola, y mandó la Acadª que se le diesen las gracias.” (ARANM, L-1, fol. 332). Sin duda en alusión a la obra de Francisco Fernández Navarrete: Philopolitae speculatoris, ad doctissimos patriaeque amantissimos per Hispaniam medicos. Super morbosis temporum constitutionibus sedulò & communi studio observandis. Paraenetica epistola /calamo ... Francisci Fernandez Navarrete... Matriti: [s.n.], 1738. Así lo relata Casimiro Gómez Ortega: “A pocos meses de haver admitido la comision presentó á la Acadª. bajo el titulo Historia Natural de Espª: un Manuscripto en que havia colocado infinitos materiales recogidos en sus viages por varias Provincias de España y especialmte. durante su larga residencia que hizo en su Patria Granada, cuyo Cielo y Suelo (como el dice) describió con grande industria y exactitud en otra obra manuscrita, de mucha utilidad. 551 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 209 Las tensiones producidas entre Francisco Fernández Navarrete y José Hortega en el seno de la Real Academia Médica Matritense le hacen pensar que su proyecto de ‘Mercurio Académico’ no habría de tener buen fin; a partir de la primavera de 1738 centra sus afanes en convencer a la Real Academia de la Historia de la viabilidad de un nuevo programa, éste concebido como estrictamente personal, y centrado en el estudio de la Historia Natural, en una concepción mucho más positivista, menos filosófica, y -desde luego- nada médica: “En 14 de Julio del mismo año [1738] empezó a leer un papel sobre los principios y reglas de la Geografía, estado de la de España, y medios de adelantarla. Se acabó de leer el día 21 (…) En 24 dho. [XI-1738] continuo leyendo el proyecto de su encargo de Histª. natural (…) En 16 de Marzo [1739] leyó su Disertª. sobre el caracter de los Españoles propia de su materia de Historia Natural (…)”552 “En 17 de Agto. [1740] empezó a leer dho. Sr. Nabarrete sobre el citado asunto, en que hablaba de la creacion del mundo, sus partes y orden dellas; y habiendo reparado no corresponder aquella generalidad a la Historia natural qe. habia de incluirse en el Aparato, assi por deber ceñirse a la de España, como pr. haberse Acompañó el primer Manuscrito con una Colección de 1.200 esqueletos de plantas Españolas recogidas por su mano con la Lista Alphabetica de los nombres antiguos españoles de algunas y razon climatologica de las que el havia nuevamte. impuesto á otras: cuyo paradero se ignora igualmte. que el de la Descripcion del Suelo y Cielo Granadino…” (Casimiro Gómez Ortega. “Noticias historicas sobre los Manuscriptos del Dr. Navarrete y dictamen de su obra”. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 1r-5v. [1771]. ARAH, mss. 9/5964. La cita en fol. 1r). Hoy sabemos que el manuscrito de su Descripcion del Suelo y Cielo Granadino se conserva en la Biblioteca y Archivo de la Provincia Franciscana de Cataluña (cf. Antonio Gil Albarracín. Op. cit. nota 526. 1997); y su herbario fue cedido, a la Real Academia de la Historia, en 1785, por intermediación de Cristóbal Medina Conde, canónigo de la Iglesia Catedral de Málaga; lo componen 1.200 plantas distribuidas en 299 folios (ARAH, mss. 9/5620). [Esquela sobre la actividad de Francisco Fernández Navarrete en la Real Academia de la Historia]. Expediente del académico Francisco Fernández Navarrete (ARAH, Secretaría, s/n). Este escrito suscitó polémica, al parecer promovida por un médico del conde de Benavente, cuyo nota de respuesta, compuesta por Francisco Fernández Navarrete, en Madrid, el 28-I-1740, se conserva entre los documentos de su expediente personal (Expediente del académico Francisco Fernández Navarrete. ARAH, Secretaría, s/n). 552 210 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol de tratar Historica, y no cientificamte. Se suscitó sobre este punto alguna controversia, cuya resolucion se difirio para la Acadª sigte. En ella expuso el secretario haberse ofrecido al publico la Historia natural con la prevencion de haber de tratarse señalando en general los montes, rios, plantas, arboles, animales, &ª constitucion del cielo, aves, &ª sin tocar en las exencias de ninguna de estas cosas por ser esto propio de la fisica (…) En Academia de 31 de Agto. se votó sobre este particular, y quedó resuelto qe. se ciñiese a la relacion del suelo y cielo de España, adornada de las producciones de uno y otro, tanto de las qe. tiene comunes a otras Provinicas, como de las qe. son peculiares de ella, comprovando con los hechos, con la notoriedad, o con la autoridad, procurando siempre no internarse en las razones qe. conduzcan mas a lo cientifico, qe. a la verificacion de los hechos (…) En 19 de Septe. [1740] presento este i [individuo] un interrogatorio de cosas pertenecientes a Historia natural, y se acordó remitir copia a los Honorarios para qe. remitiesen las noticias qe. pudiesen adquirir, que se pedian en el. En 2 de Enº de 1741 presentó concluido el Discurso 4 de su Hist. nat. y hizo solemne juramto. de qe. todas las plantas qe. refiere sin remision a AA. las habia visto y tenia vivas en libros, los quales mostró en la Academia, de qe. certifica el Secretario…”553 La Academia de la Historia, consciente de los posibles problemas que la iniciativa de ocuparse de la Historia Natural podría provocar en la Médico Matritense, estableció nítidamente la linde de sus intereses; en el informe emitido por Antonio Boneta, fechado el 31 de agosto de 1742, se recoge: “… que se distinga siempre la Ciencia Natural de la Historia Natural, entendiendo propia de aquella la explicacion de las ciencias de las cosas y sus causas, y de esta unicamente la noticia de lo que es matteria de 553 [Historia Natural]. Expediente del académico Francisco Fernández Navarrete (ARAH, Secretaría, s/n). Y aún después de su fallecimiento, seguirían cuidándose estos aspectos: “En 21 de Enº de 1743 el Sr. Heredia dió cuenta qe Dª. Feliciana de Bargas, viuda del Sr. Nabarrete presentaba a la Acadª. las piedras, peces, conchas y otras curiosidades qe prueban lo qe dexo escrito de su asunto de Hist. natural. Se acordó dar gracias a dha Sra”. [Esquela sobre la actividad de Francisco Fernández Navarrete en la Real Academia de la Historia]. Expediente del académico Francisco Fernández Navarrete (ARAH, Secretaría, s/n). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 211 aquella ciencia; Y asi como se ha de distinguir lo que es comun á todos los Payses de lo que es peculiar de España, á que es preciso ceñir todos los puntos del Aparato…”554 Pese a que el proyecto de Historia Natural estaba ya en manos de la Real Academia de la Historia, José Hortega no cejó en su intento de mantenerlo vivo en la Médico Matritense; fiel al encargo que le fuera conferido por su Academia, dará cuenta de la idea al Capitán General del Pincipado de Cataluña, solicitando su colaboración555, y siguió trabajando en el plan que la Academia Médica había asumido como propio; en su seno presentó una serie de disertaciones, todas bajo el marchamo común de “Dissertacion sobre la Historia Natural de España”: el 7 de marzo de 1738 realizó un “Discurso que contenia las Memorias para la Historia de las Plantas de España”556, que prosiguió en la junta general del 21 de marzo de 1739, donde leyó una “Dissertacion sobre los methodos de las plantas, y continuacion de las Memorias para la Historia Genl. de las Plantas de España”557; 554 Juan Antonio Boneta. [Escrito de Juan Antonio Boneta sobre la Historia Natural de Fernández Navarrete]. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 7r-8v. [1742] (ARAH, mss. 9/5964). La referencia en fol. 8r. “… con aprobación de S. M. ha emprendido la Academia escribir la Historia Natural y Medica de España, de qe han de resultar á la Nacion, á las Ciencias, y á las Artes los mayores beneficios, y utilidades. Para conseguir este intento necesita la Academia tener Individuos Academicos en todas las provincias de España, y pr. consiguiente en el Principado de Cataluña. Estos Academicos han de ser precisamte. Profesores Mathematicos, Physicos, Medicos, Ciruganos, y Boticarios, todos los quales han de trabajar en la averiguacion de las cosas naturales del referido Principado con el mr. zelo, y ardor, y respeto de qe. S. M. tiene recibido á la Academia baxo de su Rl. Proteccion (…) y pr. consiguiente deben estar distinguidos sus Academicos, para qe. con la debida aplicación desempeñen los trabajos literarios qe. la Acadª. pusiese á su cuidado…” Aun cuando el objetivo del escrito parece radicar en una solicitud de distinción: “Suplica á V. E. se digne tomar la providencia necesaria á fin de qe. los Academicos qe. nombrare la Academia en esse Principado, puedan traer Espada, presentando antes á V. E. ó ante la Rl. Audiencia el titulo de tales Academicos, para qe. con esta distincion se animen á trabajar en beneficio de la Patria, las Ciencias, y las Artes…” Memorial dirigido al Capitan General del Principado de Cataluña. [Madrid, ca. 1737] (ARANM, leg. 8, doc. 582). 555 “Dn. Joseph Hortega presentó á la Academia pr. escrito su Discurso que contenia las Memorias para la Historia de las Plantas de España, el qual fue leido en la Junta, de cuyo acto se mostraron muy satisfechos el Sr. Presidente, el Sr. Director, el Sr. Fiscal y los Sres. Academicos: Garro, Lopez, Brunet, Serena, Rodríguez, Isasi Isasmendi, Valle y con mi asistencia.” (ARANM, L-1, fol. 301). 556 557 “Dn. Joseph Ortega presento á la Academia pr. escrito una 212 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol el 26 de octubre de 1747 hizo pública “la segunda Dissertacion sobre la Historia natural de España, la qual intituló, Methodo facil, y demostrado de aumentar la solidez, y la fuerza de las Maderas”558; es posible que la tercera de estas entregas fuera la conferencia pública dictada el 5 de octubre de 1748 “sobre una sal mineral amarga nuebamte. descubierta en la Jurisdiccion de la Ciudad de Cuenca”559; sí incorporó, como cuarta parte de esta serie, su disertación sobre el “Lapiz plomo de Marbella”, leída en la junta celebrada el 26 de noviembre de 1750560, y es posible que siguiera la senda trazada en comunicaciones posteriores que no han llegado hasta nosotros. Para entonces, Francisco Fernández Navarrete ya había fallecido; expiró el 1 de abril de 1742561. El discutido plan de la Historia Natural de España tuvo su epílogo en la ‘Oración de Gracias’ que Casimiro Gómez Ortega, Dissertacion sobre los methodos de las plantas, y continuacion de las Memorias para la Historia Genl. de las Plantas de España, la qual fue leida á la Junta, y assimismo aprobada…” (ARANM, L-1, fol. 348). 558 “El Sr. Ortega actual Director Pharmaceutico presentó á la Academia por escrito la segunda Dissertacion sobre la Historia natural de España, la qual intituló, Methodo facil, y demostrado de aumentar la solidez, y la fuerza de las Maderas, y habiendo sido leida en la Junta, fue aprobada por la Academia…” (ARANM, L-1, fol. 615). 559 Realizó el correspondiente ensayo en la junta general celebrada el 28-IX-1748: “El Sr. Ortega hizo la prueba de su Dissertacion publica la qual intitulo sobre una sal mineral amarga nuebamte. descubierta en la Jurisdiccion de la Ciudad de Cuenca, la qual fue leida en la Junta, y aprobada pr. la Acadª...” (ARANM, L-1, fol. 640). Tuvo su presentación pública el 5-X-1748: “El Sr. Ortega, leyo publicamte. su Dissertacion sobre la sal mineral amarga nuebamte. descubierta en la Jurisdiccion de la Ciudad de Cuenca, y sobre su contenido dificultaron los Sres. Herrero, y Borunda, de cuyo acto se mostro muy satisfecha la Academia y el numeroso concurso de Profesores, y gente de distinn. qe. asistió á esta Junta publica.” (ARANM, L-1, fol. 640). “El Sr. Ortega presento á la Acadª. pr. escrito una Dissertacion sobre el Lapiz plomo de Marbella, en continuacion de las Memoria [sic] sobre la Historia natural de España 4ª parte, la qual fue leida en la Junta, y aprobada pr. la Acadª...” (ARANM, L-1, fol. 693). 560 561 “Amigo y mui Sr. mio: Participo a V. como Dios Nº. Sr. se llevo para si a nuestro Dr. Navarrete: lo qe. ha sido para mi de mui notable sentimiento. He de mercer a V. de que passe al Sr. Presidente [de la Real Academia Médica Matritense] el Sr. Dn. Vicente Carreras , para que dispongan ambos Vdes. el que se repartan esas Esquelas a los Ssres. Academicos, para qe. assistan al entierrro. Espero le encomiende a Ds. y me mande cosas de su agrado. Desta de V. oi Domingo 1 de Abril de 1742”. Oficio de Tomás Francisco de Monleón a José Hortega. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fol. 449r. [1771] (ARAH, mss. 9/5964). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 213 miembro de antiguo de la Real Academia Médica, pronunciara el 5 de octubre de 1770, con motivo de su ingreso en la Academia de la Historia: “Finalmente empeñado por las instancias de un Académico (a quien la modesta desconfianza de sus propias luces le da más honor que ánsi la misma aceptacion de su encargo) en reveer y coordinar los Manuscritos de Historia Natural del Dr. Dn. Francisco Fernandez Navarrete, uno de los mas instruidos individuos de este cuerpo…”562 El académico cuyo nombre nos oculta Casimiro Gómez Ortega es Felipe García de Samaniego y Montalvo quien, hacia 1766, había valorado los manuscritos de la Historia Natural de Fernández Navarrete. La propuesta de Gómez Ortega fue bien atendida por la Academia y, en la sesión celebrada el 4 de abril de 1771, el propio Casimiro ofrece unas “Noticias historicas sobre los Manuscriptos del Dr. Navarrete y dictamen de su obra”563; acompañó sus noticias de los informes que Juan Antonio Boneta había efectuado, en el agosto de 1742, sobre el contenido del manuscrito, en el que se refleja la opinión de la propia Academia de la Historia564; los elaborados por Martín de Ulloa sobre los ‘monstruos marinos’ recensionados en el texto565 y sobre las referencias en él a cuadrúpedos, reptiles e insectos, emitidos Casimiro Gómez Ortega. [Francisco Javier Puerto Sarmiento, María del Carmen Callega Folguera (eds.)] “Oración de gracias del Dr. D. Casimiro Gómez Ortega a la Academia Real de la Histona por su admisión en ella, leida en la junta de 5 de octubre: de 1770, día de su incorporación”. Dynamis, 7/8: 360366. Granada, 1988 (cf. pág. 365). 562 563 Casimiro Gómez Ortega. “Noticias historicas sobre los Manuscriptos del Dr. Navarrete y dictamen de su obra”. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 1r-5v. [1771] (ARAH, mss. 9/5964). Se trata del borrador del informe, encuadernado en el inicio de los documentos compilados por Casimiro Gómez Ortega, en el escrito consta “Leído en la Acadª. [Madrid] 4 de Abril de 1771” (Op. cit., fol. 5v). 564 Juan Antonio Boneta. [Escrito de Antonio Boneta sobre la Historia Natural de Fernández Navarreete]. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 7r-8v. mss. [1742] (ARAH, mss. 9/5964). El documento queda fechado en “Madrid, Agosto 31 de 1742”. Juan Antonio Boneta ejerció como Secretario de la Real Academia de la Historia entre el 26 de junio de 1741 y 22 de abril de 1743. Martín de Ulloa. [Sobre monstruos marinos]. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 9r-9v. [1740] (ARAH, mss. 9/5964). El documento lleva fecha de “Junio 6 de 1740”. 565 214 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol respectivamente en junio y agosto de 1740566; más una sucesión de escritos cruzados entre Diego Suárez de Figueroa y Blas Antonio Nasarre, en representanción de la Real Academia de la Lengua, y Fernando Fernández Navarrete, sobre la utilización de vulgarismos y la invención de tecnicismos para referirse a términos empleados en Historia Natural567. La obra, prácticamente ultimada, al menos en buena parte de sus capítulos568, quedó paralizada en su proceso de edición. Los móviles que llevaron a Casimiro Gómez Ortega a no dar a la imprenta el testimonio de los trabajos de quien tanta afrenta causó a su tío no nos son documentalmente conocidos, pero son fáciles de imaginar. Una realidad: las Ephemérides barométrico-médicas matritenses Como primera manifestación pública de la Historia Natural y Médica de España, la Academia editó unas Ephemérides 566 Martín de Ulloa. [Sobre cuadrúpedos, reptiles e insectos]. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 11r-12r. [1740] (ARAH, mss. 9/5964). El informe queda datado en “Madrid, Agosto 11 de 1740”. Diego Suárez de Figueroa [Informe realizado por Diego Suárez de Figueroa sobre la invención de voces]. En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fols. 16r-19v. [1739] (ARAH, mss. 9/5964). Representación de Francisco Fernández Navarrete a la Real Academia Española (Op. cit., fols. 20r-28v); Informe de Diego Suárez de Figueroa y Blas Antonio Nasarre sobre la denominación de las producciones naturales y el uso de voces por tradición (Op. cit., fols. 30r-42v), éste queda fechado el 20-I-1740. 567 Han llegado completos hasta nosotros: “Discurso II. Sobre las aguas de Españas” En: Francisco Fernández Navarrete. Historia Natural de España. Papeles remitidos por el Sr. Ortega: fol. 48r-66v. [1740] (ARAH, mss. 9/5964); “Discurso III. Del terreno de España”. Op. cit., fol. 68r-115v; “Discurso IV. De las Plantas de España”. Op. cit., fols. 118r-200v y “Discurso V. De los animales de España”. Op. cit., fols. 201r-401r; el Discurso I, que habría de tratar sobre “El Cielo propio de España”, no se conserva entre los documentos custodiados en el archivo de la Real Academia de la Historia; pero, entre los depositados en la Real Academia Nacional de Medicina, se encuentra El Mercurio Academico. Harmonioso Proyecto de la Historia Natural, y Medica de España de la Rl. Academia Medica Matritense, por D.F.F.N. [Francisco Fernández Navarrete] Medico de Camara de S.M. Catholica]. En: Tomo 2º Medico de Miscelanea Medica &ª Recojido en este Tomo por el Dr. Dn. Thomas Francisco de Monleon, y Ramiro… [Madrid]. [1745], fols. 68r-78v. (RANM, manuscrito, signatura: 17-3ª Biblioteca / 5), donde se contemplan los materiales precisos para escribir este discurso primero; son textos de diferente formato, complementarios en su contenido, que hacen pensar en dos versiones de la misma obra. 568 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 215 barométrico-médicas matritenses, para el mas puntual, y exacto calculo de las observaciones que han de ilustrar la Historia Natural, y Medica de España…569 La publicación recogía los intereses primigenios de la Academia y respondía al criterio hipocrático, tan querido por la Corporación, en el que se establece la relación entre las condiciones medio-ambientales y la salud de sus pobladores: “La Real Academia Matritense, se ha propuesto desde el principio de su fundacion por fin primario, é idea principal de su instituto, conducir la Medicina Española al termino de la mas possible perfeccion, por el camino de la observacion, y experiencia, imitando aquellos pasos, y sigiendo aquellos rumbos, que gloriosamente han emprendido las Academias eruditas de la Europa (…) y siendo tan estrecha la union entre la Medicina de un País, y la Historia Natural de él, bien reflexionada, é ilustrada con las disciplinas Physico-Mathematicas, examinó, aprobó, y se hizo cargo del Proyecto de la Historia Natural, y Medica de España, disponiendo su execucion con distribución tan armoniosa, y comprehensiva, como se verá á su tiempo (...) La convinada observacion de los Phenomenos Meteoricos, y Medicos, está á la vista de quien huviere 569 El título, aún más extenso, fue cuidadosamente valorado por los académicos de número de la Institución; en el acta de la junta particular celebrada el 27 de junio de 1737 anota José Hortega: “Hize presente, y lei á la Academia las Pruebas de la impresión de las ephemerides, y reflexionando las aprobó, y mandó imprimir como estaban baxo el titulo sigte.: Ephemerides Barometrico-Medicas Matritenses para el uso puntual, y exacto calculo de las observaciones qe. han de ilustrar la Historia Natural, y Medica de España extractadas de orden de la Real Academia Medico-Matritense pr. el Dr. Dn. Franco. Fernz. Navarrete Cathedratico de Medicina de la imperial Universidad de Granada, Medico de Camara con exercicio de S.M. y Academico numº. de la Real Academia. Dedicadas al mui ilustre Sr. Dr. Dn. Joseph Cervi &a. Nuestro Presidente Perpetuo.” (ARANM, L-1, fol. 258). El volumen impreso mantiene el título, salvo en el cargo asignado a José Cervi, quien no figurará como ‘Nuestro Presidente Perpetuo’ sino como ‘del Consejo de su Magestad, &c.’ Sólo en el volumen siguiente, el dedicado a las observaciones del mes de junio, figuraría de manera expresa la presidencia de José Cerví sobre la Real Academia, pero tras una larga serie de cargos previos: “Cavallero Parmense, Cathedratico Eminente en la Insigne Universidad de Parma, del Consejo de su Magestad, primer Medico del Rey, y Reina nuestros Señores, Presidente del Real ProtoMedicato, y de dicha Real Academia Matritense, &cc”; es ésta la misma relación de títulos con que comienza la dedicatoria del primer volumen. 216 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol saludado las primeras Reglas de la Medicina practica, y aun de la razon natural…”570 La tirada de esta publicación ascendió a 490 ejemplares, estampados en la Imprenta Real, distribuidos entre los miembros de la Academia y puestos a la venta por la propia Institución571; su repercusión fue aún mayor al aparecer, las correspondientes a los meses de abril y mayo de 1737, prácticamente reproducidas in totum572, en el Diario de los Literatos de España573. El comentarista del Diario… difunde el proyecto de la Academia con tonos altamente elogiosos: “Es la Historia natural la llave de las Ciencias, y Artes, y su estudio el mas olvidado en nuestra España; pero bien conocida su importancia por los Doctos Individuos de la Real Academia Medico-Matritense, han empeñado su aplicacion, é ingenio en solicitar á nuestra Patria los imponderables beneficios que resultan de la continuada, y exacta observacion de la naturaleza respectiva á nuestro Pais: siguiendo el exemplo de las demás Academias de la Europa…”574 El ansiado intento de redactar una Historia Natural de España, del que las Ephemérides barométrico-médicas matritenses… fueron su punta de lanza, quedó sólo en bosquejo; y eso pese 570 [Francisco Fernández Navarrete]. “Introducción”. Ephemérides barométrico-medicas matritenses... extractadas de orden de la Real Academia MedicoMatritense..., 1: [3-9] . Madrid, 1737 . La cita en págs. [3-4, 5] 571 Así queda aprobado en la junta general celebrada el 23-VII-1737: “Item se acordó que por el Sr. Director Chirurgico, y los Sres. Monleon y Ortega formen una lista de todos aquellos sugetos á quien la Academia deverá dar uno, ó mas exemplares de las Ephemerides. Que á cada uno de los Academicos de numº y exercicios se den dos exemplares. A los Honorarios se les remita á cada uno un exemplar. Que se impriman 50# en Papel de Marquilla, 400 en papel fino, y # 40 en papel basto, cuya disposicion, y cuidado de la Imprenta mandó la Academia qe. quedase á cargo de mi el Ssº. [José Hortega] como asimismo la venta de dhas. Ephemerides…” (ARANM, L-1, fols. 262-263). 572 El propio comentarista dará cuenta de esta práctica trasliteración: “No pueden facilmente extractarse estas observaciones: y assi las propondremos en la misma forma que las comunica la Real Academia, creyendo de su generoso espiritu que no se ofenderá de que se dilate por nuestra mano la noticia de sus producciones con la misma extension que aplica su zelo al bien publico…” Diario de los Literatos de España, 2: 312. Madrid, 1737. 573 Diario de los Literatos de España, en que se reducen á Compendio los Escritos de los Autores Españoles, y se hace juicio de sus Obras… 2: 311-340. Madrid, 1737. 574 Diario de los Literatos de España, 2: 311. Madrid, 1737. José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 217 a las facilidades de todo tipo, incluso económicas575, dadas por la propia Academia a quienes se integraran en él como colaboradores. ¿Cuáles fueron las razones del fracaso? Quizás deban buscarse en el excesivo protagonismo que Francisco Fernández Navarrete quiso adquirir en el proyecto, o -si se prefiere- en el afán de apropiación que la Academia manifiestara hacia él, al hacerle, de inmediato, un programa colectivo. Los primeros datos climáticos, correspondientes a los meses de marzo y abril de 1737576, fueron compilados por Francisco Fernández de Navarrete quien los presentó en la sesión celebrada el 15 de junio577; empleó para ello un ‘barómetro de Inglaterra’578 y un ‘termómetro florentino’579. Siguen a estos las anotaciones correspondientes al mes de junio, cuyo compilador, aunque no se haga mención expresa, fue el mismo Francisco Fernández de Navarrete580; también él compuso las observaciones barométricas y termométricas de julio581, no sin dificultades para disponer de 575 “Asimismo se acordó qe. los sugetos qe sean buscados pr. los Academicos para trabajar en el Proiecto, sean livertados de pagar los sesenta rs. y ocho mrs. de vn. qe es estilo qe paguen de entrada los Academicos honorarios…” Junta general de 10-IX-1737 (ARANM, L-1, fols. 269-270). “Aviendo, pues, gastados muchos dias, y trabajo, en prevencion de aparatos y materiales, y pareciendo ser yá conveniente que empiecen á jugar algunos muelles de los muchos que han de servir á esta grande organizacion, determinó que desde el mes de Marzo de este año de 1737, se empezassen las observaciones diarias del Barometro, y Themometro por esta Corte…” ([Francisco Fernández Navarrete]. Op. cit. nota 570, pág. [4]. 1737). 576 En el acta de la junta particular celebrada el 15 de junio de 1737 figura: “El Sr. Dr. Dn. Franco. Fernz. Navarrete presentó á la Academia las ephemerides temporales del Barometro, y Thermometro del mes de Marzo, y Abril, y en su vista mando la Academia qe. se impriman en su Nombre.” (ARANM, L-1, fol. 254). 577 “… un Tubo cristalino sigilado por arriba, recurvo por abaxo con una ampoya cylindrica, catorce vezes mas ancha que el Tubo, en la qual esta suspenso el Mercurio á la altura que marcó Torriceli...” ([Francisco Fernández Navarrete]. Op. cit. nota 570, pág [7]. 1737). 578 579 “… del Tubo por arriba sigilado, y abaxo la esfera, que continene el espíritu de vino, tinturado con la raíz de Alcanna, de 40 grados de ascenso. y 40 de descenso, al tiempo de Madrid.” ([Francisco Ferrnández Navarrete]. Op. cit. nota 570, pág [8]. 1737). El acta de la junta general celebrada el 23 de julio de 1737 precisa: “Asimismo se acordó qe. se impriman todos los meses las Ephemerides Barometricas-Medicas Matritenses, cuyos extractos están encargados al Sr. Navarrete…” (ARANM, L-1, fol. 262-263). 580 581 “El Sr. Dn. Franco. Fernandez Navarrete presento á la Academia las Ephemerides Barometrico-Medicas del mes de Julio, las quales fueron leidas en 218 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol las observaciones médicas, lo que lleva a requirir, en la junta del 5 de agosto de 1737, bajo pena de expulsión, que “todos los individuos tengan entregadas las observaciones Mensuales el dia ocho del mes inmediato…”582 Los datos concernientes al mes de agosto debieron ser los últimos compilados por Fernández de Navarrete. Las tensiones en la Academia Médica comienzan a aflorar en octubre de 1737; una indisposición de Francisco Fernández Navarrete lleva a acordar que de la elaboración de las Ephemérides… correspondientes al mes de septiembre se ocupara Alejandro Martínez de Argandoña583; éstas conllevan una novedad, las observaciones termométricas se completan con los datos procedentes de un “nuevo Thermometro de Mr. de Reamur”584. Martínez de Argandoña siguió realizando este trabajo durante los meses restantes de 1737585; su elección como presidente de la Institución para el año 1738 hace que el trabajo de componer la junta, y para qe. se imprimiesen mando la Academia qe. las revisen los Sres. Academicos Monleon, y Valle, todo lo qual fue aprobado por el Sr. Argandoña qe. hizo de Presidente.” (ARANM, L-1, fol. 266). “… en la suposicion qe. si pasase el dia señalado, y no cumpliese algun individuo queda privado de voz activa, y pasiva en las primeras quatro juntas qe. asistiese, y si prosigue en este Defecto dispondra la Academia lo [que] hallare pr. mas util para su mejor orden y gobierno…” (ARANM, L-1, fol. 259). 582 583 “Asimismo se acordó, qe. el Sr. Argandoña tome á su cargo las observaciones del Barometro y Thermometro, y el Extracto de las Ephemerides Mensuales desde primero de Sept.” (Junta general de 8-X-1737. ARANM, L-1, fol. 273). Respecto a la enfermedad de Francisco Fernández Navarrete queda el testimonio del acta de la junta general celebrada el 18-X-1737: “… y respecto de hallarse tambien indispuesto el Sr. Dr. Nabarrete mando qe. hiciesen el mismo acto [visitarle] los Sres. Argandoña y Palomero.” (ARANM, L-1, fol. 275). “Este Expertissimo Francés, despues de aver reflexionado los gravissimos defectos del Thermometro Florentino, ó de Santorio (…) emprendió renovar todos los inconvenientes, por medio de una nueva construccion del Thermometro con el Espiritu del vino…”Alejandro Martínez de Argandoña. Ephemérides barométrico-médicas matritenses, mes de septiembre, de 1737, extractadas de orden de la Real Academia Médico-Matritense..., 1: 43-63. Madrid, 1737. La cita en págs. 54-55, sigue (págs. 55-58) los principios en que se basa el funcionamiento de este aparato. 584 585 “El Sr. Dn. Alexandro Martinez de Argandoña presentó á la Academia las Ephemerides del Mes de Octbre. las quales fueron leidas en la Junta, y en su vista mandó la Academia qe. los Sres. Academicos Carreras e Isasmendi las rebisen, y con su aprobacion se imprimiesen…” (Junta general de 11-XI-1737. ARANM, L-1, fols. 279-280). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 219 las Ephemérides…se distribuya entre dos académicos: Vicente Carreras se ocuparía de compilar las observaciones médicas y José Hortega las diarias de barómetro y termómetro586; pero para entonces el proyecto está ya tocado de muerte: “Asimismo se acordaron qe. se impriman las Ephemerides del mes de Dizbr. y que se cese en la Impresión de los qe se han formado hasta nueba orden.”587 En esa misma junta se da cuenta de un escrito de protesta firmado por Francisco Fernández Navarrete, cuyo contenido no ha llegado hasta nosostros588. Una atribución compleja: la traducción castellana del Ensayo sobre la electricidad de los cuerpos… del abate Nollet Una leve alusión, en el prefacio histórico que sirve de presentación al primer volumen impreso de las Memorias de la Real Academia Médica de Madrid, señala a José Hortega, el que fuera su primer Secretario perpetuo, como el traductor al castellano de un texto del abate Nollet: “Por la misma pluma [la del Secretario perpetuo] se había publicado en el año anerior [1747] la traducción Castellana del Ensayo de la Electricidad que había dado á luz en Francés el Abate Nollet, contribuyendo este escrito (…) á comunicar al Público la ilustración adquirida, ó aumentada en el recinto, ó con la correspondencia “Asimismo acordaron nombrar para hacer las Observaciones de los Vientos, Barometro, Thermometro, y Temporal al Sr. Secretario Dn. Joseph Ortega, y el Extracto, y disposicion de las Ephemerides al Sr. Academico Dn. Vicente Carreras, lo qual se hizo pr. proposicion á el Sr. Presidente, el qual hizo presente á la Academia qe. las ocupaciones de su Empleo no le permitian proseguir en este trabajo…”(Junta general de 30-I-1738. ARANM, L-1, fols. 289-290). El acta está firmada por Vicente Carreras, Secretario segundo, “pr. no averse hallado presente el Ssº. Perpetuo”. 586 587 ARANM, L-1, fol. 288. Aun cuando no se imprimieran los resultados, sí consta que las observaciones asignadas a José Hortega, las barométricas y termométricas, se siguieron realizando; las compilaciones correspondientes a los años 1738 (ARANM, leg. 8C, doc. 34f), 1739 (ARANM, leg. 8C, doc. 34e), 1740 (ARANM, leg. 8C, doc. 34d), 1741 (ARANM, leg. 8C, doc. 34c), 1742 (ARANM, leg. 8C, doc. 34b) y 1744 (ARANM, leg. 8C, doc. 34a) se conservan, manuscritas, en el archivo de la Real Academia Nacional de Medicina. “En esta Junta se dio quenta á la Academia de un Papel del Sr. Navarrete (…) y lo qe. se resolvio consta en los Papeles originales.” (ARANM, L-1, fol. 290). 588 220 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol de la Academia, y á sostener el crédito del Cuerpo imposibilitado todavía de publicar sus obras…”589 No obstante, la traducción castellana de esta obra del abate Nollet fue firmada por José Vázquez Morales590, y las actas de la propia Real Academia Médica avalan tal autoría591. La edición castellana del Essai sur l’électricité des corps vio la luz apenas unos meses después de que fuera impresa la versión original francesa592, fue presentada a la Real Academia Médica Matritense en la junta general celebrada el 13 de noviembre de 1747; en la misma fecha en que, según el esbozo histórico de la Real Academia de Medicina, José Hortega dio a la prensas su supuesta traducción. La imprenta que se hizo cargo de los trabajos de publicación era bien conocida de José Hortega; según reza en su pie, la obra vio la luz ‘En la Imprenta del Mercurio, calle del Cavallero de Gracia. Se hallará en su Librería, calle de la Montera”, la misma utilizada para el Elogio histórico del Señor Doctor D. Joseph Cervii593. La obra, para completar el equívoco, 589 Memorias… 1: VIII Madrid, 1797. El Libro de Acuerdos de la Real Academia Medica de Madrid que empieza desde el dia 6 de Octubre del Año de 1791 [-1814]: fol. 143v (ARANM, L-2) especifica quién se ocupó de redactar esta noticia: “El Sr. Ortega, Secretario de las Correspondencias Extrangeras, leyó la Noticia Historica, que ha de tener lugar de introduccion en la obra Academica que se está imprimiendo, del Origen progresos y estado actual de la Rl. Academia Medica de Madrid: la qual Noticia merecio la aprobacion de todos los concurrentes, y se acordó la accion de gracias á los Señores, Vice-Presidente [Antonio Franseri], Secretarios [Gregorio García Fernández y Casimiro Gómez Ortega] y Barnades comisionados por la Academia para su formación...” 590 Ensayo sobre la electricidad de los cuerpos escrito en idioma francès por Mons. el abate Nollet... Traducido en castellano por D. Joseph Vazquez y Morales. Añadida la historia de la electricidad. En Madrid: en la imprenta del Mercurio,1747. [24], LXVII, [9], 131, [1] p., [1] lám. En el acta de la junta general celebrada el 13-XI-1747 queda expresamente anotado: “Assi mismo se dió cuenta á la Academia de una carta de Dn. Joseph Bazquez y Morales, por la qual presentaba á la Academia un Libro que la habia dedicado, y que intitulaba Ensayo sobre la electricidad de los cuerpos, y en vista de la Dedicatoria acordó la Academia que se le respondiese dandole las gracias, á cuyo Acto se hallaron presentes los Sres. Presidente, y Director Pharmaceutico, y los Sres. Sevillano, Cervino, Martz., Ros, Bonillo, Pueyo, y Herrero.” (ARANM, L-1, fols. 617-618). 591 Jean Antoine Nollet. Essai sur l’électricité des corps. Par M. l’abbé Nollet… A Paris: chez les freres Guérin, 1746. 592 593 José Hortega. Op. cit. nota 321. 1748. José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 221 está expresamente dedicada “A la Real Academia Médica Matritense”594. ¿Será José Vázquez Morales un pseudónimo de José Hortega? El asunto merece, cuanto menos, una reflexión sumaria. Desde luego el traductor conocía la actividad de la Academia: “Bien sé yo, que V.S. trata, y honra á este Academico [Nollet] con iguales demonstraciones de aprecio (…) Bien publicos son en la Corte los muchos experimentos que ante V. S. han executado sus ilustres Academicos sobre la Electricidad de los Cuerpos. Yo he tenido el honor de ser mas de una vez testigo de ellos, y tambien de las sólidas reflexiones, sacadas directamente de los mismos Hechos, y Experimentos. A los principios no ví sino una, u otra repeticion de los que por medio de los Tubos de vidrio, habian executado en Londres Mons. Gray [Stephen Gray (1666-1736)], y en Paris Mons. du Fay [Charles François de Cisternay du Fay [Dufay] (16981739)]; pero luego que dos Sabios Españoles [Antonio de Ulloa y Jorge Juan] traxeron de aquellas Cortes la idèa, y el uso de los Globos, y de la Machina de Rotacion, se hicieron mas maravillosos, y estupendos los Phenomenos de la Electricidad, y se executaron por orden de V. S. tantos, y tan deliciosos experimentos, que varios de ellos se calificaron por nuevos, hasta que se vieron la luz en el Ensayo de Mons. el abate Nollet…”595 Conviene recordar que la Academia mantenía un especial cuidado con el uso de su nombre en vano; recuérdese, a modo de ejemplo, el comentario inserto en el acta de la junta particular de académicos de número celebrada el 25-V-1737: “Asimismo se acordó qe. el estatuto 44 que dice, Ningun Academico podra usar deste nombre en las obras particulares, que quiera dar á la estampa, sin qe. primero se examinen en las Juntas, se debe entender tambien con las Aprovaciones de Libros, elogios, censuras, y otro qualquier escrito qe. se huviere de imprimir…” (ARANM, L-1, fol. 249). Entre los acuerdos tomados por la Corporacion, en la sesión celebrada el 25-X-1743, se recuerda: “No se podrá usar el nombre de Académico en la obras, si antes no fueron aprobadas por la Academia, como tampoco en los elogios de obras ajenas.” (ARANM, L-1, fol. 249); un requisito ya establecido en los Estatutos de 1734, como recuerda Rafael Folch Andreu. Op. cit., nota 1, pág, 56. 1935). 594 José Vázquez y Morales (Op. cit. nota 590, págs. [2-3]. 1747). La dedicatoria aparece firmada “En mi Estudio á 26. de Octubre de 1747”. La aprobación de la obra fue realizada por José Ontiveros, en Madrid, el 18 de octubre de 1747; la licencia del ordinario, mandada dar por Sebastián Peláez de Caunedo, lleva fecha del 21 de octubre de 1747; y la aprobación de Ambrosio Gambirasi es del 2 de octubre de 1747. El privilegio de impresión, por los 595 222 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Y su dedicatoria incluye una clara referencia a los objetivos estatutarios de la propia Institución: “… pues á quien se ha de obsequiar justamente con Experimentos, y Observaciones physicas, racionalmente explicadas, sino á una Academia, que las ha executado con tanto méthodo, y utilidad, y cuyo noble Instituto es promover el adelantamiento de la Physica, y Medicina por medio de la Observacion, y Experiencia? A una Academia cuyos ilustres Individuos saben deducir de los mismos Hechos experimentales las razones, ó las conjeturas mas acomodadas para explicar con juicio, y sencilléz todo genero de Phenomenos?…”596 Tras relatar los experimentos relativos a la aplicación de la electricidad como elemento terapéutico, realizados por los ingleses Stephen Gray (1666-1736) y Granville Wheler (1701-1770) o por el portugués João Mendes Sachetti Barbosa597, concluye: “Estos Experimentos, y Observaciones principiadas sobre las Enfermedades de los Nervios, por medio de la Electricidad, es otro motivo para dedicar á V.S. esta Obra. Pues quien podrá discernir el mérito de ellas, sino una Academia medica que tan juiciosamente sabe distinguir la valencia de los Experimentos, y los defectos de las Observaciones?...”598 A falta del prólogo hagiográfico habitual, el traductor incluye una “Historia de la Electricidad”, según él mismo indica “extractada de la Historia, y Memorias de la Academia Real de Ciencias de Paris”, de una extensión más que notable599, en acostumbrados diez años, fue despachado, en San Lorenzo, el 6 de octubre de 1747; la revisión de la fe de erratas fue llevada a cabo por Manuel Ricardo de Ribera, quedó firmada el 29 de octubre de 1747, y la tasa de la obra, que corrió a cargo de Miguel Fernández Munilla, es de 30 de octubre de 1747. De modo que la obrita debió salir al mercado en los últimos meses de este año. 596 José Vázquez y Morales. Op. cit. nota 590, págs. [4-5]. 1747. Conviene detenerse en las observaciones recogidas en este introito atribuidas a João Mendes Sachetti Barbosa (1714-1774); el médico portugués era, desde 1747, miembro de la Real Academia Médica de Madrid. José Vázquez recoge la historia clínica de Antonio Núñez, portero de la Cámara de Elvas, en el Alentejo portugués, sometido a técnicas de electroterapia durante el agosto de 1747. La inmediatez del hecho obliga a pensar en la existencia de una correspondencia epistolar entre el portugués y el autor de las observaciones. 597 598 José Vázquez y Morales. Op. cit. nota 590, pág. [14]. 1747. José Vázquez y Morales. “Historia de la Electricidad”. En: Jean Antoine Mollet. Op. cit. nota 590, págs. [1-24], [I]-LXVII. 1747. La traducción 599 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 223 la que pasa detenida revista a las aportaciones de Girolamo Fracastoro, William Gilbert [Gilberto], Otto von Guericke600, Robert Boyle, los experimentos practicados en la florentina Accademia del Cimento, los realizados por Francis Hauksbee, a quien sigue en su edición italiana y no en la inglesa original601 y, particularmente, los llevados a cabo por Stephen Gray602, Charles castellana del abate Nollet ocupa IX, 131 páginas. 600 “… hallanse en la Coleccion de las Experiencias de Magdeburgo pag 147 las mas principales son las siguientes…” (José Vázquez y Morales. Op. cit. nota 590, pág. VI. 1747). En probable alusión a Ottonis de Guericke experimenta nova ut vocantur Magdeburgica. De vacuo spatio primùm à R. P. Gaspare Schotto... nunc verò ab ipso auctore perfectiùs edita, variisque aliis experimentis aucta quibus accesserunt simul certa quaedam De aeris pondere circa terram; de virtutibus mundanis & systemate mundi planetario.... Amstelodami: apud Joannem Janssonium à Waesberge, 1672. Un texto que, hasta donde sabemos, no estuvo en la biblioteca de José Hortega. 601 “En 1709 recogió Mons. Hauxbeé muchas Experiencias, y Observaciones sobre la Electricidad del vidrio que havia hecho (…) y las publicó en un Libro junto con las que havia hecho sobre la luz y sobre la diferencia de otros Phenomenos en el lleno, y en el vacio. Este Libro se traduxo en Italiano síete años despues. De él se ha tomado lo que en breves palabras se va a decir para continuar la idea que se ha empezado…” (José Vázquez y Morales. Op. cit. nota 590, pág. X. 1747). La edición original se publicó en lengua inglesa: Physico-mechanical experiments on various subjects. Containing an account of several surprizing phenomena touching light and electricity, producible on the attrition of bodies... By F. Hauksbee. London: printed by R. Brugis, 1709; Ibid…To which is added, a supplement, containing several new experiments not in the former edition. London: printed for J. Senex and W. Taylor, 1719. La traducción italiana se editó bajo el título Esperienze fisico-meccaniche sopra vari soggetti, contenenti un racconto di diversi stupendi fenomeni intorno la luce e l’elettricita producibile dallo strosinamento de’ corpi, con molte altre notabili apparenze non mai prima osservate, colle spiegazioni di tutte le macchine. Opera di F. Hauksbee... tradotta dall’ idioma inglese. In Firenze: per Jacopo Guiducci e Santi Franchi, 1716. Tampoco estas obras figuran en el inventario de la biblioteca de José Hortega. “En 1720 Mons. Estevan Gray publicó en las Transacciones Philosophicas, num. 366 el descubrimiento que havia hecho de la Electricidad de muchos cuerpos en los quales no se havia conocido…(…) que el mismo Autor publicó en el num 417 de las mismas Transacciones mucho mas admirables y assombrosas (…) En otro lugar de las Transacciones Philosophicas num 422 hace ver este Physico…” (José Vázquez y Morales. Op. cit. nota 590, págs. XIVXVI. 1747). Es probable que aluda a “A Letter from Mr. Stephen Gray to Dr. Mortimer (…) Containing a Farther Account of His Experiments concerning Electricity”. Philosophical Transactions, 37: 285-291. Londres, 1731; seguida por “Two Letters from Mr. Stephen Gray (…) to C. Mortimer (…) Containing Farther Accounts of His Experiments concerning Electricity”. Philosophical Transactions, 37: 397-407. Londres, 1731. Estos textos sí debieron encontrarse en la biblioteca particular de José Hortega. 602 François de Cisternay du Fay603 y, por supuesto, a Jean Antoine Nollet. Este estudio constituye uno de los primeros trabajos sobre los fenómenos eléctricos realizados en lengua española604. Con todo, lo que más nos interesa señalar de él es el carácter novedoso con que se concibe el desarrollo de la ciencia ilustrada: “Por esta razon no debe estrañarse que sin embargo de ser conocida en algunos cuerpos la Electricidad en tiempo de Platón, y acaso antes, nadie haya tenido la curiosidad de examinarla con particular atencion, hasta estos ultimos tiempos, en que cessando poco á poco la verdadera causa de la corrupcion de las 603 “En quanto a Mons. du Fay (…) hemos insertado aquí los mas principales, remitiendo á quien quisiere vér los demás á la Historia y Memorias de la Academia Real de las Ciencias de Paris en los años 1733, 1734 y 1737…” (José Vázquez y Morales. Op. cit. nota 590, págs. LI-LII. 1747). Alude a la colección de articulos publicadas por Charles François de Cisternay du Fay: “Premier mémoire sur l’Électricité. [Histoire de l’Électricité]. Par M. du Fay”. Mémoires de mathématique & de physique... tirez des registres de cette Académie [1733]: 23-35. París, 1733; “Second Mémoire sur l’Électricité [Quels sons les Corps qui sont susceptibles de l’Électricité]. Par M. du Fay”. Mémoires de mathématique & de physique... [1733]: 73-84. París, 1733; “Troisiéme Mémoire sur l’Électricité [Des Corps qui sont le plus vivement attirés par les matiéres électriques, & de ceux qui sont les plus propes à transmettre l’Électrité]. Par M. du Fay”. Mémoires de mathématique & de physique... [1733]: 233-254, 1 lám. París, 1733; “Quatriéme Mémoire sur l’Électricité [De l’Atrácttion & Répulsion des Corps Eléctriques]. Par M. du Fay”. Mémoires de mathématique & de physique... [1733]: 457-476. París, 1733; “Cinquiéme Mémoire sur l’Électricité [Où l’on rend compte des nouvelles découvertes sur cette matiére, faites depuis peu par M. Gray]. Par M. du Fay”. Mémoires de mathématique & de physique... [1734]: 341-361. París, 1734; “Sixiéme Mémoire sur l’Électricité [Oú l’on examiné quel rapport il y a entre l’Électricité, & la faculté de rendre de la Lumiére…]. Par M. du Fay”. Mémoires de mathématique & de physique... [1734]: 503-526. París, 1734; “Septiéme Mémoire sur l’Électricité [Contenant vuelques Additions aux Mémoires précédents]. Par M. du Fay”. Mémoires de mathématique & de physique... [1737]: 86-100. París, 1737. 604 “En efecto, es en esta obra donde aparecen, por vez primera en nuestro idioma, los términos que dan nombre a las distintas máquinas generadoras de electricidad estática e instrumentos de medición (globos de azufre, tubos de vidrio, máquina eléctrica, bruxula electrica…), pero también es en ella donde, al tiempo que se adivinan los conceptos de chispa y luz eléctrica, se constata la presencia de las voces electricidad, electricidad vitrea y electricidad resinosa, así como de algunos de sus derivados (eléctrico, electrizar, electrizado, electrizante, electrificar o electrificción)…” (José Antonio Moreno Villanueva. “Jean-Antoine Nollet y la difusión del estudio de la electricidad: un nuevo léxico para una nueva ciencia”. Documents pour l´histoire du français langue étrangère ou seconde, 18: 405-417. Paris, 1996 -la referencia en págs. 412-413-). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 225 Ciencias, y felizmente introducido el verdadero modo de philosophar, parece que la Naturaleza ha ido quitando el velo á sus mysterios, y abriendo la senda para penetrar sus ocultissimos arcanos…”605 Un renacer de la Ciencia largo tiempo oscurecida desde que las portentosas mentes de los filósofos griegos reflexionaran sobre ella: “Esta opinion [la relativa a las cuestiones sobre la gravedad, la electricidad y el magnetismo] tuvo la misma suerte que otras muchas de los Antiguos que han dado despues tanta gloría á los Modernos. La autoridad de Aristoteles, adquirida por los medios que no ignoran los Sabios, las sepultó en el olvido hasta que bolvieron a restablecerse sobre las ruinas del vulgar Peripato…”606 Y por ello, tras la revisión de los avances del conocimiento de la electricidad durante los últimos siglos, pasa una extensa revista a la idea de los filosofos griegos al respecto; desde Empédocles y Epicuro hasta Lucrecio; desde el Timeo de Platón a las Quaestiones convivales… de Plutarco hasta alcanzar los Progymnasmata… de Tommaso Cornelio, recopilación en si mismos del pensamiento de Aristóteles y Galeno. Todo un tratado de Historia de la Ciencia, en suma. Esta versión castellana del Ensayo sobre la electricidad de los cuerpos… corrió buena suerte entre aquellos de sus coetáneos interesados en el desarollo científico de España; valgan de ejemplo las alabanzas que le dedican el padre Feijoo en sus Cartas eruditas y curiosas…607 o el padre José Francisco de Isla608. 605 José Vázquez y Morales. Op. cit. nota 590, pág. III. 1747 606 José Vázquez y Morales. Op. cit. nota 590, pág. LIX. 1747 “Por lo que mira al señor Abad Nollet, há mucho tiempo que es objeto de una muy particular estimación, mía, por los extractos de sus excelentes lecciones de Física, que leí en las Memorias de Trevoux. El ensayo sobre la Electricidad sólo lo vi, y tengo en la traducción Española, que se hizo en Madrid. Pero está tan bien puesto en nuestro idioma, que creo que para nada nos haga falta el original Francés…” (Benito Jerónimo Feijoo. “Carta XXV. Excúsase el Autor de aplicarse a formar Sistema sobre la Electricidad…” En: Benito Jerónimo Feijoo. Cartas eruditas, y curiosas… Nueva impresión, 4: 351. Madrid: por Pedro Marín, 1774. La edición principe es de 1753). 607 608 “Dice bien Don Josef Vázquez y Morales en su bella traducción del Ensayo sobre la Electricidad de los Cuerpos, cuyo Prólogo comienza así…” José Francisco Isla. Dedicatorias, prologos y advertencias del R.P. Joseph Francisco de Isla... que se hallan en las primeras ediciones de los tomos de Enero, Febrero, Marzo, Abril, y Mayo del Año christiano que traduxo al Castellano, del que escribio en francés el R.P. 226 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Si hemos de dar crédito a los datos aportados por las Memorias… de la Real Academia Nacional de Medicina, habríamos de ver en este José Vázquez un alter-ego de José Hortega: la obra, de un claro talante ilustrado, salió de prensas en la misma fecha señalada por la Academia para el supuesto libro de Hortega, de los tórculos de un librero geográficamente próximo a nuestro biografiado y que no encontró dificultad en que la Academia Médica Matritense aceptara la dedicatoria de la obra; es más, que viera complacida cómo en su proemio se hacía el autor eco de los mismos objetivos que la Institución perseguía. Por otra parte, las relaciones de José Hortega con el abate Nollet están bien acreditadas; en el verano de 1751, éste se refería a aquel, en su correspondencia con José Carvajal, como “Mr. el Abate Nollet (…) bien conocido en aquella corte, mi amigo y mi correspondiente…”609 Sin embargo existió un José Joaquín Vázquez Morales; un sujeto coetáneo a José Hortega, del que apenas nos queda testimonio biográfico610; sabemos que ejerció la profesión de abogado, fue de origen madrileño y se formó en el Colegio de San Ildefonso de la Universidad alcalaína, donde inició sus estudios Juan Croiset. En Pamplona: por Joseph Longás, 1792 (cf. pág. XXIV). El volumen recoge los textos introductorios del padre Isla a la traducción de Jean Croiset. Año christiano ó Exercicios devotos para todos los dias del año, contiene la explicacion del mysterio ó la vida del santo correspondiente á cada dia, algunas reflexiones sobre la Epístola, una meditacion despues del Evangelio de la misa y algunos exercicios practicos de devocion ó propositos adaptables á todo género de personas, escribióle en francés el padre Juan Croiset, de la Compañia de Jesus; traduciale en castellano el P. Joseph Francisco de Isla, de la misma Compañía. Madrid: en la imprenta de Antonio Perez de Soto, 1762-1772. 12 vols. Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 15-VI1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs. 95-100. 1981). 609 Los pocos trabajos que se ocupan de este autor se limitan a valorar su inestimable aportación a la difusión de las nuevas teorías científicas en España, sin aportar datos relativos al personaje (cf. Juan Ramón Zaragoza Rubira. “La electrología médica en la España del siglo XVIII”. Archivo Iberoamericano de Historia de la Medicina y Antropología Médica, 14: 233-242. Madrid, 1962; Ibid. “Esquema histórico de la electroterapia española del siglo XVIII”. En: Actas del I Congreso Nacional de Historia de la Medicina: 181-184. Zaragoza: Cometa, S.A., 1963; José Antonio Moreno Villanueva. Op. cit. nota 604. 1996). José Antonio Moreno Villanueva (“El Essai sur l´électricité des corps (1746) de J.-A. Nollet: primer texto sobre física eléctrica traducido al español”. Grenzgänge, 4(8): 17-32. Leipzig, 1997) le hace miembro de la Real Academia Médica Matritense (cf. pág. 20), aunque, con tal nombre, no figura persona alguna entre los componentes de la Corporación. 610 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 227 el 18 de noviembre de 1724; obtuvo la catedra de Cánones del mencionado Colegio y, como era habitual entre estos colegiales, pasó después a desempeñar un cargo en la Administarción: el de Alcalde de hijosdalgo de Valladolid, de cuya plaza fue promovido a la de Oidor; dejó la carrera togada para ocuparse de la Secretaria del Consejo de Indias por lo tocante al Perú, adscrita al Consejo Real y Supremo de Indias; por lo que hubo de trasladarse a Madrid, donde nos queda asentado, al menos, desde 1749, según nos indica el Kalendario manual y guía de forasteros en Madrid, quien le ubica en la madrileña calle del Baño611, lugar en el que falleció en 1757, tras haber sido nombrado Caballero de la Orden de Santiago612. Este José Joaquín Vázquez Morales es autor de un par de textos polémicos, contrarios a Gregorio Mayáns613, extrictamente relacionados con la interpretacion del derecho de herencia; la polémica pone de manifiesto una discrepancia doctrinal sobre la interpretación de las fuentes, pero en ella subyace el enfrentamiento lastrado entre ‘manteistas’ y ‘colegiales’: los primeros partidarios del humanismo jurídico 611 Cf. Kalendario manual y guía de forasteros en Madrid. Para el año M.DCC. LII. Madrid: Antonio Sanz, 1752 (pág. 54); Ibid. Para el año M.DCC. LII. Madrid: Antonio Sanz, 1752 (pág. 54); Ibid. Para el año M.DCC.LIV. Madrid: Antonio Sanz (pág. 51); Ibid. Para el año M.DCC.LV. Madrid: Antonio Sanz (pág. 51); Ibid. Para el año M.DCC.LVII. Madrid: Antonio Sanz (pág. 51). En el Kalendario… Para el año M.DCC. XLIV. Madrid: Antonio Sanz, 1744 (cf. pág. 64) e Ibd., Para el año M.DCC. XLV. Madrid: Antonio Sanz, 1745 (cf. pág. 64), el nombre de Joaquin Joseph Vazquez Morales sigue figurando entre los Alcaldes de Hijosdalgos adscritos a la Real Chancillería de Valladolid; en el Kalendario… Para el año M.DCC. XLV. Madrid: Antonio Sanz, 1745 (cf. pág. 51), el cargo de Secretario del Consejo y Cámara, por lo tocante al Perú, es desempeñado por Miguel de Villanueva. Joseph de Rezabal y Ugarte. Biblioteca de los escritores que han sido individuos de los seis Colegios Mayores: de San Ildefonso de la Universidad de Alcalá, de Santa Cruz de la de Valladolid, de San Bartolomé de Cuenca, San Salvador de Oviedo y del Arzobispado de la de Salamanca… Madrid: en la imprenta de Sancha, 1805 (cf. págs. 408-409). 612 Joaquín José Vázquez y Morales. Otium complutense duobus libris distinctum. Ad Justinianeae Constitutionis fragmenta sub. Tit. Cod. de incertis personis, et in § 25 cum tribus seqq. Inst. de Legat. in quo eximii non milli J. Cuilis tractatus, utcumque ad materiam pertinentes, ex nova plerumque obsevatione juxta veriorem Jurisprudentiam explicantur. Auctore D. D. Joachin Joseph Vazquez et Morales... Compluti: Josephus Espartosa, 1734; Ibid. Veritas a calumniis vindicata sive Apologia pro otio Complutensi contra calumniam Gregorii Majansii, authore Doct. D. Ioachim Ioseph Vazquez et Morales, J.C. Matritensi... in Maiori Ildephonsiano Lycaeo Academia Complutensi iam hospite & in eadem Universitate Decretalium cathedrae moderatore...... Compluti: [José Espartosa], 1734. 613 228 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol al que claramente se adscribe Mayáns; los otros, defensores del tradicional derecho romano-canónico practicado de manera acorde con el método bartolista614. Nos cuesta ver al colegial alcalaíno que polemizó con Gregorio Mayáns como autor de este tratado de Física615. Nuestra hipótesis es que José Joaquin Vázquez Morales y José Vázquez Morales son dos entidades distintas: el primero un colegial alcalaíno, formado en leyes; el segundo, un pseudónimo de José Hortega. Avala esta hipotesis la documentación relativa al nombramiento de nuestro protagonista como miembro correspondiente de la Academie des Sciences parisina; allí se le hace figurar como: “Don Vásquez y Morales Hortega”616. Coda. La crítica académica al Elogio…. de Joseph Cervi La única obra salida de tórculos con la firma de José Hortega es el Elogio historico del señor doctor D. Joseph Cervi… previamente leìdo ante la Real Academia Médica Matritense el 30 de marzo de 1748617. Ésta, también la primera obra impresa por la Academia, siguió las normas que la primera Tertulia Literaria se había fijado para la redacción de sus escritos: 614 Sobre su polémica con Gregorio Mayáns cf. Mariano Peset (ed.) Gregorio Mayáns y Siscar. Epistolario. IV. Mayáns y Nebot (1735-1742): un jurista teórico y un práctico. Valencia: Publicaciones del Ayuntamiento de Oliva, 1975 (págs. LXXXII-LXXXV) y Pascual Marzal Rodríguez. “Las Diputaciones Iuris: Humanismo y controversia”. En: Antonio Mestre Sanchis (coord.) Actas del Congreso Internacional sobre Gregorio Mayans: 59-87. Valencia: Publicaciones del Ayuntamiento de Oliva, 1999 (en especial, págs. 67-77). El que un jurista se ocupe de textos de Física experimental no fue una excepción en la España ilustrada; baste recordar que Benito Navarro y Abel de Veas, autor de la Physica Electrica, ó Compendio, en que se explican los maravillosos phenomenos de la virtud eléctrica ([Madrid: s.n., 1752]) fue profesor de Jurisprudencia en la Universidad de Sevilla y que su obra, un compendio de lo aprendido en sus lecturas y en sus experiencias con la máquina electrostática, es el segundo libro sobre electricidad publicado en España, tras la traducción del Essai… de Jean-Antoine Nollet. 615 616 ASP, ‘Dossier Joseph Hortega’. Agradecemos a Florence Greffe, ‘conservateur des Archives de la Académie des Sciences-Institut de France’, el envío de una copia de esta documentación. José Hortega. Elogio historico del señor doctor D. Joseph Cervi, leìdo a la Real Academia Medica Matritense en 30 de marzo de mil setecientos quarenta y ocho, por su secretario don Joseph de Ortega. En Madrid: en la Imprenta del Mercurio, 1748. 47 p., [1] h. 617 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 229 “… se óbservara un estilo fluido, sin afectacn., elegante y claro sin sonsonettes poheticos, y sobre todo se tendra cuidado que en ninguna orazion lleve el sustantivo sino solamte. un adjetivo, porque lo contrario, asi como es bueno para la poesia, es morboxo para la prossa…”618 No agradó el estilo a quienes, en los comienzos del XIX, quisieron abordar la compilación de los Elogios… académicos, al modo que lo efectuaba la Academie des Sciences. Ante la posibilidad de su re-edición, en una equivocada idea que supone a José Cerví como fundador de la Real Academia Médica Matritense619, ésta pidió informes a sus socios de número; al menos dos han llegado hasta nosotros. El primero de ellos, sin fecha ni firma, pero que cabe datar en los inicios de 1808, define –probablemente sin ser sabedor de ello- las líneas de estilo que José Hortega quiso imponer en los escritos emanados desde la Real Academia Médica: “… no es una pieza de eloqüencia varonil y pomposa, pero tiene el mérito de ser una relación fiel de su brillante carrera literaria, de su vida arreglada y modesta, de los empleos distinguidos que obtuvo por su merito, del buen uso que hizo del mucho favor que debió á nuestros soberanos, de las virtudes que le fueron familiares en todas las epocas de su larga vida (…) Por otra parte el orden con que está escrito es bueno, su lenguaje justo y no carece de algunas expresiones sublimes al paso que no se halla una sola que se pueda llamar baxa en el estilo de eloqüencia media que era el propio de su autor…”620 Tremendamente más crítica es la opinión de Tomás García Suelto y de Francisco Antonio Zea: “No hay en toda ella un solo rasgo que pueda llamarse oratorio: no hay calor, ni movimiento, ni vida: 618 Cf. estatuto 7º del capítulo 5º, “De las Juntas” (ARANM, L-1, fol. 26). “Tal fue nro. fundador: sabio, celebre, zeloso y liberal patricio, grande hombre á cuyo merito solo faculta para honor de la Academia un elogio digno de su memoria…” Tomás García Suelto, Francisco Antonio Zea. [Dictamen sobre el Elogio historico del señor doctor D. Joseph Cervi]. Madrid, 4-II1808 (ARANM, leg. 23, doc. 1408). 619 Y concluye: “… me parece que se haria una infamia á su buen nombre si se desechase esta produccion suya solo porque no llena nuestro oydo tanto como otras de su clase…” [Anónimo]. [Dictamen sobre el Elogio historico del señor doctor D. Joseph Cervi] (ARANM, leg. 8, doc. 575). 620 230 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol todo es inanimado, todo transpira el frio de la tumba en que yacía Cervi (…) En efecto si se pide eloquencia en los elogios ¿Quién osará comparar á Ortega con Platon, con Plinio, ni con Vic d’Azir, ni con Thomas? Si solo se le pide ingenio, profundidad, y filosofía ¿en dónde se hallará quien se atreva á elevarlo al nivel de Fontenelle, de d’Alambert, ó de Condorcet? Y si se quiere en fin la eloquencia y el gusto unido á la Filosofía y con la Historia ¿Quién no temblará de ponerlo en paralelo con el sublime é inimitable Tacito? Sea pues qual fuese la doctrina qe se adopte, y qualquiera el medio que se escoja, siempre será reprobado el elogio de Cervi compuesto pr. Ortega…” Aunque matizan: “Pero aunque esta composicion considerada como elogio merece los anatemas de la razon y del gusto, si solo se mira como noticia ó relacion historica es ciertamte. digna de aprecio y debe recomendarse á la Academia. En efecto no podian exponerse con mas orden, sencillez y claridad los estudios y servicios, merito y vida de aquel sabio, que lo ha hecho Ortega en el escrito…”621 No cabe duda, la Academia Médica de los primeros años del XIX, los de la dominación francesa, no fue, ni en estilo ni en forma, el sueño anhelado por José Hortega. Atrás había quedado el espíritu de sus fundadores: “… en cuia consequencia se pondra con claridad lo vedadero como seguro, lo probechoso como util, lo berosimil cono opinable, y lo experimental como demostrable”622. Tomás García Suelto, Francisco Antonio Zea. Op. cit. nota 619. 1808 (ARANM, leg. 23, doc. 1408). 621 622 Cf. estatuto 7º del capítulo 5º, “De las Juntas” (ARANM, L-1, fol. 26). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 231 Un hombre en su tienpo El erudito hipocondríaco Es difícil definir el perfil de un personaje del que apenas nos quedan testimonios escritos; sólo algunos retazos presentes en la correspondencia cursada entre sus coetáneos pueden ayudarnos. Contó entre sus afines con Andrés Piquer Arrufat (17111772) ; de la opinión que, de Hortega, tenía formada este médico humanista nos da cuenta José Nebot en su correspondencia con Gregorio Mayáns: “Tiene [Andrés Piquer] una recomendación de D. Joseph Ortega, aboticario, para Vmd., y se ha alegrado mucho de que sea Vmd. su amigo. Nos admiramos de que un boticario escriba tan bien y de indicios de tan buen gusto...”624 623 También disfrutó del aprecio del propio Gregorio Mayáns quien, en el verano de 1754, escribirá a Andrés Piquer: “Me alegro de que Vm. se comunique con D. Josef de Ortega. Yo le soi mui aficionado, porque es mui docto mui curioso i mui amigo de que se cultiven las ciencias. Quando Vm. le escriva, déle mil memorias de mi parte i muchos agradecimientos porque se acuerda de favorecerme…”625 623 “Un boticario de Madrid llamado Josef Ortega me encarga que salude a Vm. [Gregorio Mayáns] encarecidamente. Hágolo por cumplir con dos amigos que venero y estimo entrañablemente…” Carta de Andrés Piquer a Gregorio Mayáns. Valencia, 18-VIII-1745 (Biblioteca del Colegio de Corpus Christi [Colegio del Patriarca] (Valencia) [BCC], Mayáns, carta 45; transcrita por Vicente Peset (ed.) Gregorio Mayáns y Siscar. Epistolario. I. Mayáns y los médicos. Valencia: Publicaciones del Ayuntamiento de Oliva, 1972, pág. 60). Carta de José Nebot a Gregorio Mayáns, 25-V-1749 (BibliotecaArchivo Hispano-Mayansiano [Colegio del Patriarca] (Valencia) [BAHM], leg. 144; transcrita por Vicente Peset, Op. cit. nota 623, pág. 485. 1972). 624 625 Carta de Gregorio Mayáns a Andrés Piquer. Oliva, 21-VIII-1745. (Archivo de la Catedral de Valencia [ACV], leg. 339; transcrita por Vicente Peset. Op. cit. nota 623, págs. 61-62. 1972). 232 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Es posible que Gregorio Mayáns y José Hortega establecieran relación personal durante la estancia del valenciano como bibliotecario de la Real Casa626; y no hay duda que, tras su regreso a Oliva, será Andrés Piquer quien se encargue de mantener viva la relación entre ambos eruditos627. Al menos en 1749 Gregorio Mayáns requirió, en un par de ocasiones, de los servicios de José Hortega para que orientara a sus amigos por la intrincada vida de la Corte: en la primavera le presentó al francés Jean Goezaud [sic] “para que tenga ocasión de tratar con esse Cavallero (…) i aun añado mui útil por ser el más profundo observador de la Naturaleza que Vm. habrá conocido en su vida”628; y, en el otoño, al “Dr. D. Josef Gimeno es inteligente en Medicina i sobrino de un íntimo amigo mío. Va a essa corte a revalidarse...”629 Por la correspondencia de Gregorio Mayáns sabemos que José Hortega pasó por Valencia en los primeros meses de 1753630, quizás de vuelta de su viaje por las Cortes europeas. Y también 626 “Yo no le he escrito desde que estoy en este retiro…” Carta de Gregorio Mayáns a José Nebot. Oliva, 21-VIII-1745 (anotada por Vicente Peset. Op. cit. nota 623, pág. 485. 1972). “El doctor Piquer escribe a Ortega lo que Vmd. le dice sobre cierta dependencia de un memorial o recurso que ha de poner un cuñado del Dr. Piquer al Real Protomedicato, por haber el subdelegado de éste, que es el Dr. Valaguer, injuriado a aquél, habiéndole llamado a su casa, hecho quitar el espadín, no darle asiento, porque se quería hacer cirujano. Le dice Ortega que solicite carta de Vmd., para el asesor del Protomedicato Dn. Matías de la Rubia, sobre lo cual escribirá a Vmd. el Dr. Piquer”. Carta de José Nebot a Gregorio Mayáns. 30-VIII-1745 (anotada en Vicente Peset. Op. cit. nota 623, pág. 62). 627 628 “Aunque Vm. se olvide de mí, quiero darle una buena prueva de la amistad que le professo, suplicando a mi amigo el Sr. D. Juan Goezaud que Visite a Vm. para que tenga ocasión de tratar con esse Cavallero, cuya comunicación le será mui agradable, i aun añado mui útil por ser el más profundo observador de la Naturaleza que Vm. habrá conocido en su vida…” Carta de Gregorio Mayáns a José Hortega. Oliva, 25-V-1749. (BCC, fondo Mayáns, leg. 144; transcrita por Vicente Peset. Op. cit. nota 623, pág. 62. 1972). “Estimaré que si acaso ocurriere algo que pueda causar detención, aplique Vm. su autoridad para que le despachen presto i bien. I pues yo molesto a Vm. repetidas veces, haga Vm. experiencia de mi deseo de servirle i procure por su salud, que Dios guarde muchos años como deseo...” Carta de Gregorio Mayáns a José Hortega. Oliva, 22-XI-1749 (BCC, fondo Mayáns, leg. 144; transcrita por Vicente Peset. Op. cit. nota 623, pág. 486. 1972). José Ximeno era sobrino del historiador y bibliógrafo Vicente Ximeno y Sorlí (ca. 1691-1764). 629 630 Carta de José Nebot a Gregorio Mayáns, 23-V-1753 (comentada por Vicente Peset. Op. cit. nota 623, pág. 485. 1972). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 233 por ella nos queda noticia del carácter hipocondríaco de Hortega, y de su afecto por las aguas minero-medicinales; en carta de Nebot a Mayáns, fechada en julio de 1749, éste le comenta: “El Dr. Piquer me dijo el correo pasado, que dijese a Vd. que Ortega le escribe que se va a unos baños por su hipocondría. Y que no podrá ver ni asistir a Goezaud, a quien Vd. encarga”631. En terminos simililares escribe a su venerado José Carvajal, en el verano de 1751: “Buelbo a repetir a V.E. que es muy largo todo lo que observé en San Fernando, y que sentí no haver hallado al Governador que estaba ausente; pero mi hipocondría adusta y porfiada no me dexa escribir más…”632 Y no debía estar exento de cierta vanidad; en el acta en la que consta, en enero de 1744, su nombramiento como secretario del Real Colegio de Boticarios de Madrid, se refiere a si mismo en estos términos: “Por Secretario reeligieron nomine discrepante al Sr. Dn Joseph de Ortega Boticario de S.M. y Mayor de sus Reales Exercitos, Examinador del Rl. Protomedicato, Socio de la Regia Sociedad de Sevilla, Academico fundador, y Secretario perpetuo de la Rl. Academia Medica Matritense.”633 Una vida burocratizada La presencia de José Hortega ante los notarios madrileños parece ser habitual; son muchas las escrituras, poderes para pleitos o generales, compromisos legalizados y otros actos formalizados ante escribanos en los que figura su nombre. A los de carácter personal, de los que nos ocupamos aquí, han de sumarse en los que actuó como miembro de las corporaciones en las que tuvo cargo de representación, a los que ya hemos hecho mención páginas atrás. 631 Carta de José Nebot a Gregorio Mayáns, 25-VI-1749 (comentada por Vicente Peset. Op. cit. nota 623, pág. 485. 1972). Carta de José Hortega a José Carvajal y Lancáster. Madrid, 11-VI1751 (AGS, Estado, leg. 7896; transcrita por Juan Riera. Op. cit. nota 344, págs. 92-94. 1981). 632 633 Junta general de 2-I-1744 (ARANF, L-7, fols. 38v-40v); de ninguno otro se hace ostentación de cargos. 234 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol En diciembre de 1732 otorgó poder de representación a los procuradores Francisco de la Lastra y Gabriel Pedrero, de los Reales Consejos, y a Diego de Sofa y a Juan Facundo Domínguez, de número de Madrid634. Volverá a otorgar poderes para pleitos en 1735; entonces lo hará en dos ocasiones prácticamente seguidas: en mayo de 1735 contó con Gabriel Pedrero -a quien ya había contratado en 1732- y con Francisco Xavier, de los Reales Consejos y con Simón Casado y Antonio de Rama Palomino, procuradores de Madrid635; apenas unas semanas después, en los comienzos de junio de éste 1735, contará con tres procuradores de Madrid, Antonio Pérez, Manuel Monedero y Antonio Rama Palomino, y otros tres de los Reales Consejos, Manuel Antonio Fraile, Manuel de Blas Ortiz y Pedro de Rueda Osorio, para que le representasen en los pleitos en que pudiera verse inmerso636. Actuó, en septiembre de 1735, como fiador de Tomás Gutiérrez, maestro de obras, en una reclamación que éste presenta por un devengo del que resulta acreedor el Convento de Trinitarios Calzados de la Corte637. “… para qe en mi nombre y representando mi persona propia me defiendan en todos los Pleytos Casuas y negocios civiles y criminales qe al presente tiempo y en adelante tuviese…”. Poder para pleitos que otorga José Hortega. Madrid, 3-XII-1732 (AHPNM, protocolo 14.101, fols. 354r-354v). 634 635 Poder para pleitos que otorga José Hortega a favor de Gabriel Pedrero y Francisco Xavier, de los Reales Consejos y Simón Casado y Antonio de Rama Palomino, procuradores de Madrid, “para qe. en mi nombre y presentando mi persona propia me defiendan en todos los Pleitos causas y negocios civiles y criminales qe al presente tengo y en adelante tuviere...” Madrid, 11-V-1735. (AHPNM, protocolo 14.102, fols. 450r-450v). 636 Poder para pleitos que otorga José Hortega a favor de Antonio Pérez, Manuel Monedero y Antonio Rama Palomino, procuradores de Madrid y Manuel Antonio Fraile, Manuel de Blas Ortiz y Pedro de Rueda Osorio, procuradores de los Reales Consejos, para que le representen. Madrid, 3-VI1735 (AHPNM, protocolo 16.638, fols. 495r-495v). 637 José Hortega se constituye como fiador de Tomás Gutiérrez y se obliga sobre 13.461 rs que a éste corresponden como consecuencia de unas obras por él efectuadas sobre unas propiedades pertenecientes a Mariana Domínguez; éstas habían sido vendidas por un total de 132.000 rs, importe depositado en las arcas del Convento de los Trinitarios de la Corte; para que “se le den y entreguen treze mil quatrozientos y sesenta y un reales de vellon que á el susodicho [Tomás Gutiérrez] se le estava deviendo resto de maior cantidad que por autos judiziales se le havia mandado satisfacer por importe de obra y reparos que executo en las mismas casas. Cuia fianza quiere hazer el otorgante [José Hortega] y poniendola en execucion en la vía y forma que pueda y mas haya lugar en derecho…” Fianza de acreedor de mejor derecho otorgada por José Hortega a favor de Tomás Gutiérrez. Madrid, 17-IX-1735; actúan como José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 235 En mayo de 1740, ante su inminente salida de la Corte como Boticario mayor de los Reales Ejércitos, otorgará un poder general a favor de Vicente Carreras, su compañero de Academia y marido de Mariana Llorente, una de las hijas de su mujer, lo que le convertía en su vecino de la casa de la calle de la Montera638. Son muchos los notarios ante los que José Hortega protocoliza sus intenciones; ante Juan Félix del Valle otorga sus primeros poderes a favor de su mujer, Mariana Aztina (1731) y de su padre, Francisco Hortega (1735), para testar y para reconocimiento de deudas, respectivamente; también ante él legaliza las iniciales representaciones para pleitos (1732, 1735). En tal elección quizás fuera guiado por su propia esposa, no en vano ella protocolarizó en 1722, también ante este notario, su carta de dote y arras y el inventario de los bienes de quien habría de ser su esposo, Luis Llorente, con ocasión de su matrimonio639; también ante él firma su declaración de pobre Manuela López, criada al servicio de José Hortega y su esposa (1734), lo que parece convertir a éste en el notario de preferencia para asuntos familiares. A partir de 1734 José Hortega parece optar por la notaría de José de Gaviria; en ella escritura la venta de su botica de Añover a favor de Francisco Fernández Conejo, con su correspondiente declaración de deuda (1734); es éste el escribano elegido por la Real Academia Médica Matritense para regular los poderes de representación otorgados a favor de Manuel Izquierdo (1735) y testigos Eugenio Alonso de la Monxe, Lorenzo Calderón de la Barca y Agustín de Mena Miguel (AHPNM, protocolo 14.187, fols. 468r-469r). La carta de pago, por parte del Convento de los Trinitarios quedó protocolizada pocos días después: “… se han librado al otorgante para que se le entreguen (…) cantidad que importo la obra y reparos que en el año de mil setecientos veinte y siete havia hecho en dichas casas (…) los prezitados treze mil quatrozientos y sesenta y un reales de vellon…” Carta de pago otorgada por el Definitorio general de los Trinitarios Calzados. Madrid, 27-IX-1735 (AHPNM, protocolo 14.187, fols. 474r-475r). 638 “Joseph Ortega (...) Boticario Maior de los Rls. Exercitos de S. M. Digo qe para su servicio me es forzoso qe está pronto á azer una ausencia de esta Corte, y no teniendo otra persona de mi mayor satisfaccion qe Dn. Vicente Carreras á quien encargar en dicha mi ausencia mi depenencia i negocios...” Poder general que otorga José Hortega a favor de Vicente Carreras. Madrid, 16-V-1740 (AHPNM, protocolo 16.639, fols. 495v-496v). El inventario de los bienes de Luis Llorente fue realizado entre el 22-VIII-1722 y el 12-IX-1722 (AHPNM, protocolo 14.100, fols. 101r-136r); la carta de dote y arras de Mariana Aztina lleva fecha de 10-IX-1722 (AHPNM, protocolo 14.100, fols. 151r-156r). 639 236 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol por el propio Hortega para conferir nuevos poderes para pleitos (1735), firmar como tutor de Mariana Llorente (1738) u otorgar poderes a favor del que fuera marido de ésta, Vicente Carreras (1740). Sus testamentos fueron protocolizados ante Antonio Esteban (1760) y José Payo Sanz (1761), respectivamente. Pero no fueron éstos los únicos notarios con los que José Hortega entró en relación; las deudas contraídas contra su botica por algunos de sus clientes hizo que acudiera a Alfonso Jacinto Vecino, ante quien se solventó la testamentaría del duque de Veraguas (1733) y ante la que él mismo firmó responsabilizándose de Tomás Gutiérrez (1735); el levantamiento de censos sobre las casas de la calle de la Montera le llevó al despacho de Miguel Barrango (1733); el reconocimiento de deuda que sobre él hiciera Lamberto Deuberberg obligó a su visita a José Vicente Fernández (1737) y su vinculación con el Real Colegio de Boticarios de Madrid hizo que trabajara con Alonso López de León, el notario ante el que se protocolarizan la mayor parte de las actuaciones de esta Corporación (1738, 1740). Documentos notariales otorgados por José Hortega o en los que él es parte interesada Fecha 1731. 1-VIII 1732. 3-XII 1733. 10-VII Asunto / Protocolo Poder para testar que otorga José Hortega a favor de Mariana Aztina. AHPNM, protocolo 14.102. Testigos Francisco Ansorena Juan Bautista Monleón Jerónimo Martínez Manuel Rabieso Andrés de Conhina Blanco Poder para pleitos que otorga José Manuel de Mendívil Hortega, a favor de Francisco de la José Correa Linares Lastra y José Pedrero, procuradores Antonio Francos González de los Reales Consejos y Diego de Sofa y Juan Facundo Domínguez, procuradores de Madrid. AHPNM, protocolo 14.101. Testamentaría del duque de Veraguas. [Reconocimiento de deuda a José Hortega]. AHPNM, protocolo 14.188. José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado Fecha 1733. 17-VII 1733. 17-VII 1733. 16-VIII 1733. 10-X 1734. 21-III 1734. 21-III 1734. 19-XI 1734. 29-XII Asunto / Protocolo Levantamiento, por José Hortega, del censo sobre tres casas ubicadas en la calle de la Montera, pertenecientes al mayorazgo de Nicolás de Ahumada y Velasco. AHPNM, protocolo 15.776. Carta de pago, otorgada por José Hortega, sobre unos derechos del mayorazgo de Nicolás de Ahumada. AHPNM, protocolo 15.776. Reconocimiento de censo perteneciente al mayorazgo de Nicolás de Ahumada y Velasco, por parte de José Hortega, sobre unas casas en la calle de la Montera. AHPNM, protocolo 16.134. Escritura de venta de unas casas en la calle Los Negros de Madrid otorgada por el Comendador y religiosos del Convento de la Merced de esta villa a favor de José Hortega. AHPNM, protocolo 14.088. Escritura de tasación y venta que otorga José Hortega a favor de Francisco Fernández Conejo de una botica en la villa de Chinchón [sic por Añover]. AHPNM, protocolo 16.638. Escritura de declaración de deuda que otorga Francisco Fernández Conejo a favor de José Hortega. AHPNM, protocolo 16.638. Poder para pleitos que otorga la Real Academia Médica Matritense a favor de Manuel Izquierdo. AHPNM, protocolo 16.638. Declaración de pobre de Manuela López, criada al servicio de José Hortega. AHPNM, protocolo 14.101. 237 Testigos Miguel Izquierdo Figueroa Juan Romero José Forteza [bachiller] Miguel Izquierdo Figueroa Juan Romero José Forteza [bachiller]. [Junta Académica de la Real Academia Médica: José Hortega, secretario] Cristóbal García Carretero Patricio Riel Martínez Julián de Roda Castillo 238 Fecha 1735. 11-V 1735. 3-VI 1735. 19-VIII 1735. 26-VIII 1735. 17-IX. [1735, post. 1-IX] 1736. 9-I 1737. 9-III Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Asunto / Protocolo Poder para pleitos que otorga José Hortega a favor de Gabriel Pedrero y Francisco Xavier, procuradores de los Reales Consejos y a Simón Casado y Antonio Rama Palomino, procuradores de Madrid. AHPNM, protocolo 14.102. Poder para pleitos que otorga José Hortega a favor de Antonio Pérez, Manuel Monedero y Antonio Rama Palomino, procuradores de Madrid y Manuel Antonio Fraile, Manuel de Blas Ortiz y Pedro de Rueda Osorio, procuradores de los Reales Consejos. AHPNM, protocolo 16.638. Memorial que Diego Fernández hace de sus acreedores [Reconocimiento de deuda a José Hortega]. AHPNM, protocolo 16.098. Poder otorgado por José Hortega a favor de Francisco Hortega, su padre. AHPNM, protocolo 14.102. Fianza de acreedor otorgada por José Hortega a favor de Tomás Gutiérrez. AHPNM, protocolo 14.187. Concurso de acreedores de Diego Fernández. [Reconocimiento de deuda a José Hortega]. AHPNM, protocolo 16.098. Carta de otorgamiento de Felipe Ceballos, a favor de José Hortega, sobre el pago de un censo perteneciente al mayorazgo de Nicolás de Ahumada. AHPNM, protocolo 15.781. Tasación de los bienes de Lamberto Deuberberg. [Reconocimiento de deuda a José Hortega]. AHPNM, protocolo 17.741. Testigos Diego Palencia Domingo Hernández Domingo López Juan Romero José Forteza Juan del Cerro Francisco Fernández Raimundo Melitan Mateo Fernández de Villanueva Eugenio Alonso de la Monxe Lorenzo Calderón de la Barca Agustín de Mena Miguel José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado Fecha 1738. 22-III 1738. 16-VII 1738. 4-VIII 1740. 20-IV 1740. 16-V 1748. 9-IV 1760. 11-VII 1761. 18-I Asunto / Protocolo Compromiso en fuerza mayor que otorga José Hortega, como tutor de Mariana Llorente, a favor de Antonio de la Portilla. AHPNM, protocolo 16.639. Testamentaría de la marquesa de Osera. [Reconocimiento de deuda a José Hortega]. AHPNM, protocolo 15.223. Obligación de deuda del Real Colegio de Boticarios de Madrid contraída con Sebastián Martínez, para la publicación de la Pharmacopoeia Matritensis… AHPNM, protocolo 16.386. Poder otorgado por el Real Colegio de Boticarios de Madrid a favor de Juan Moreno Bote y José Hortega. AHPNM, protocolo 16.386. Poder general que otorga José Hortega a favor de Vicente Carreras. AHPNM, protocolo 16.639. Traspaso de la botica de Lorenzo Alquizalete. Tasador por parte del comprador, Sebastián Malo. AHPNM, protocolo 16.343. Testamento otorgado por Hortega. AHPNM, protocolo 17.095. Testamento otorgado por Hortega. AHPNM, protocolo 19.150. 239 Testigos Francisco Ferrizino Raimundo Meritan Juan Vázquez [Junta directiva del Real Colegio de Boticarios: José Ignacio Muñoz de Valdivieso, director; Juan Moreno Bote, secretario] [Junta directiva del Real Colegio de Boticarios: José Ignacio Muñoz de Valdivieso, director; Juan Moreno Bote, secretario] José A. Forteza [bachiller] Luis Romero Pedro Sana Juan Calvete [oficial de carpintero] Agustín García Francisco Xavier González José José La relación de testigos apenas nos permite construir un entorno personal para José Hortega; en cuatro de los actos protocolizados se repite el nombre del bachiller José Forteza (1734, 1734, 1735, 1740), pero todos ellos tienen lugar ante el notario José de Gaviria, lo que más nos induce a pensar en una relación entre este escribano y el bachiller que entre José Hortega y éste; algo similar ocurre -y ante el mismo notario- con Juan Romero (1734, 1734, 1735). No obstante, sí parece que, al menos en algunos ocasiones, contó con compañeros de profesion para que actuaran como testigos en relación con sus asuntos 240 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol personales; así, en el verano de 1735, cuando protocoliza, ante Juan Félix del Valle, el poder otorgado a favor de su padre, Francisco Hortega, figura como testigo un Raimundo Meritan; el mismo que, en marzo de 1738, actuará también como testigo del compromiso en fuerza mayor que otorga Hortega, como tutor de Mariana Llorente, ante José de Gaviria. Es posible se trate de Raimundo Lorenzo Meritan, boticario establecido, al menos desde 1749, en la plazuela del Angel, que fuera miembro del Real Colegio de Boticarios y de la Congregación de los Desamparados y San Lucas, corporaciones ambas en las que llegó a desempenar puestos de responsabilidad640. En el ámbito familiar El matrimonio de Mariana Aztina con José Hortega se produjo en segundas nupcias de la que fuera viuda de Luis Llorente; ésta aportó al matrimonio el fruto concebido con aquél, una hija de corta edad, Mariana Llorente; otra más, Manuela Llorente, falleció tres años después de que muriera su padre, poco antes de que este segundo matrimonio tuviera lugar641. Luis Llorente debió expirar hacia finales de 1728; el 23 de abril de este año, enfermo, otorga poder para testar a favor de su mujer, Mariana Aztina642; ésta atenderá a los deseos de su esposo, ya difunto, en abril de 1729643. En 1745 ocuparía el cargo de consiliario segundo de la Congregación de los Desamparados y, en 1758, desempeñaría el de diputado segundo en el Real Colegio de Boticarios (cf. Libro de la Congregación de Nra Señora de los Desamparados [1699-1791]. ARANF, L-3; Juntas generales del Real Colegio de Boticarios [1737-1767]. ARANF, L-7) 640 641 Cf. Poder para testar que otorga José Hortega a favor de Mariana Aztina, su mujer. Madrid, 1-VIII-1731 (AHPNM, protocolo 14.102, fols. 275r-277r). “.. el dicho Dn. Luis Llorente hallandome en cama de la enfermedad q Dios mando servirme darme (….) pide ser enterrado con el hábito franciscano, en la Iglesia de San Luis, con misa corpore insepulto y otras sesenta más rezadas, de tres reales de limosna”; otorga el poder de testar a su mujer “atendiendo a las muchas prendas, actitudes educacion y demas circunstancias expontaneas que concurren en la dicha Dª. Mariana Aztina…”; nombra como albaceas testamentarios a Juan de las Huertas, presbítero de la Orden de San Juan, Ignacio Aguirre, Juan Antonio Santos de San Pedro y Pedro Llorente (Poder para testar que otorga Luis Llorente a favor de Mariana Aztina, su mujer. Madrid, 23-IV1728; actúan como testigos Juan de Montemayor, Francisco Lazcano, Baltasar Gallego, Joaquín Pérez de Palacios y Francisco de Jaras. AHPNM, protocolo 14.101, fols. [1728], 14r-15v). 642 e 643 Mariana Aztina, viuda de Luis Llorente, otorga testamento, en José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 241 La relación de José Hortega con la hija de su mujer parece fluida, a tenor de la documentación conservada; tras su matrimonio con Mariana Aztina actuó con ella ‘como tutor y curador de su persona y bienes’ hasta que Mariana contrajo nupcias644. Cuando matrimonió, dispuso para ella y su primer marido, Vicente Carreras (m. 1748), las estancias del segundo piso del inmueble de la calle de la Montera645; de la confianza existente entre ambos núcleos familiares da cuenta el poder general que, en mayo de 1740, en vísperas de su incorporación a la frustada expedición militar a Mallorca, José Hortega otorga a favor de Vicente Carreras646; éste, médico de profesión, examinador del Protomedicato, disfrutó de plaza de ‘académico fundador’ en la Real Academia Médica Matritense, instalada en su propio domicilio. Fruto de su matrimonio con Mariana Llorente nacieron dos hijas, María Manuela y María Paula. Mariana Llorente enviudó de José Carreras y contrajo nuevas nupcias con Ignacio Marcoleta, caballero de la Orden de Santiago; de él nombre de éste, el 29-IV-1729; siguiendo la voluntad de su marido, quien fue amortajado con el hábito franciscano y enterrado en la Iglesia de San Luis, se le rezó misa de cuerpo presente por su alma y sesenta misas más; se destinaron 4 rs por manda fozosa a los Santos Lugares de Jerusalén y, según el deseo de su esposo, quedó convertida en curadora de las hijas habidas en el matrimonio, Mariana y Manuela. Mantiene los albaceas instituidos por su marido, a los que nombra por testamentarios junto a ella misma, y establece como sus únicas y universales herederas a sus dos hijas, Mariana y Manuela (Testamento de Luis Llorente otorgado por Mariana Aztina, su mujer. Madrid, 29-IV-1729; actúan como testigos Juan Leorgaz, Pº de la Sierra, José Pérez, Francisco Lerma y Manuel Roque de la Regata y Quevedo. AHPNM, protocolo 14.101, fols. [1729] 62r-63v). 644 Mariana Llorente fue heredera usufructuaria de los bienes de su tío Pedro Llorente, que recibio a la muerte del hijo de éste, José Llorente, su antiguo poseedor. El abad del Convento de San José, Ambrosio de la Torre, se interesó, en fecha de 4-XII-1737, por la dote que llevó al matrimonio quien fuera mujer de Pedro Llorente, Juana Velázquez. José Hortega otorga los poderes precisos a Antonio de la Portilla, abogado de los Reales Consejos, para que se reintegre esta dote a los herederos legales de Juana Velázquez. Este compromiso quedó protocolizado en Madrid, a 22-III-1745; firman como testigos Francisco Ferrizino, Raimundo Meritan y Juan Vázquez (AHPNM, protocolo 16.639, fols. 164r-165r). 645 La carta dotal de Vicente Carreras, otorgada por su matrimonio con Mariana Llorente, fue escriturada con fecha de 17-IV-1740, ante Antonio Muñoz de Ribera (cf. Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761. AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). 646 Poder general que otorga José Hortega a favor de Vicente Carreras. Madrid, 16-V-1740 (AHPNM, protocolo 16.639, fols. 495v-496v). 242 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol nacieron María Josefa e Ignacio. A todos tuvo en su recuerdo José Hortega cuando redactó sus mandas testamentarias: dejo sendas alhajas para Mariana Llorente e Ignacio Marcoleta, y otras tantas para cada uno de los cuatro nietos de quien fuera su mujer647. María Aztina, falleció hacia el 3 de enero de 1761648; poco tiempo después, apenas unos meses, habría de seguir su mismo camino José Hortega. Sic transit gloria mundi Tras matrimoniar con Mariana Aztina, José Hortega y su cónyuge se otorgaron, el 1 de agosto de 1731, mutuo poder para testar649; “Dn. Joseph Ortega declaro ser su voluntad, el conceder como concedio licencia, y Facultad cumplida a la mencionada Dª Mariana Llorente, otorgase para tomar la Alagita que gustase de las qe quedasen por su fallecimiento, y dar otra la que tubiere á bien á Dn Ignacio Marcoleta su marido, a sus quatro hijos (...) á Dª Juana de Aguilar, a Dn. Alfonso Lopez su marido, y á Dn Nicolas de Aguilar hermano de la Dª Juana, en atencion al mucho cariño, que a todos profesaba…” (Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI1761. AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). 647 Ese mismo día, el 3-XI-1761, María Aztina otorga poderes, ante el notario Antonio Esteban Hernández, “estando en cama de la enfermedad que Dios nro Señor a sido servido darme sana de buen juicio, memoria y entendimto natural, ttal qual Dios nro Señor fue Servido concederme (…) por quanto la Gravedad de mi enfermd no me da lugar a hacer y Otorgar mi testamentto Ultima y final voluntad y esta tenerla comunicada con los mis estimados y querido Marido y hixo los nominados Dn. Joseph de Hortega (…) y con Dn. Ignacio Marcoletta. Y para que tenga efecto, por el presente Otorgo quedo y todo mi Poder Cumplido tan amplio y basttante como en ttal Caso se requiere y es necesario a los citados (…) nombro por mis testtamentarios y Albaceas, a los nominados Dn Joseph de Hortega mi segundo y Amado Marido, y a Dn. Ignacio Marcoletta mi Querido Hijo, y a Dn. Alphonso Lopez, a todos tres juntos y a cada uno Insolidum (…) y nombro por mi Unica y Unibersal heredera en ttodos ellos a la referida Doña Mariana Llorente, mi Hija Unica lexitima…” (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 235r-243r); actúan como testigos el presbítero Gaspar de Salas, Francisco Bonilla, Domingo Pazpet, Juan de Cevallos y José de Echevarría, “la Otorgante a qn yo el Esno conozco no lo firmo por la Gravedad de su enfermedad”. 648 Ambos solicitan ser amortajados con el hábito franciscano, que ella aportaba en su dote, en la Iglesia de San Luis, de la que son parroquianos, dejando el resto de los asuntos a sus albaceas y herederos; sólo establecen que, el día de su muerte, se celebre misa de cuerpo presente y otras cien misas rezadas por cada una de sus almas, y se pague de limosna 3 rs por cada una de ellas. Este poder se protocolizó ante Juan Félix del Valle, en Madrid, el 1-VIII1731 (AHPNM, protocolo 14.102, fols. 275r-277r). 649 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 243 José Hortega nombra por universal heredera a su mujer, salvo una manda testamentaria a favor de sus padres650; Mariana Aztina instituye como heredera legítima a su hija, Mariana Llorente, salvo el quinto de sus bienes, que deja para su marido, quien asumiría la totalidad de la herencia en caso de fallecimiento de Mariana Llorente651. Se nombran ambos consortes como albaceas testamentarios, junto a Juan de las Huertas, presbítero de la Orden de San Juan, Pedro Llorente, José Llorente, Manuel Muñoz, Ignacio de Aguirre y Domingo de Aguilar. El documento, en el que se repiten varios de los albaceas que el difunto Luis Llorente había señalado como suyos, parece estar destinado a proteger los bienes de la joven Mariana Llorente, único vástago vivo del primer matrimonio de Mariana Aztina; la presencia de José y Pedro Llorente entre los albaceas así parece indicarlo. Mucho cambió la situación en los treinta años que median entre la redacción de este codicilio y el momento en que habría de ser puesto en práctica, tanto que nunca fue llevado a cabo. En julio de 1760, “en pies, fuera de cama, aunque con algunos achaqs. avituales, de mi buen juicio, memoria, y entendimiento natural”, José Hortega redacta un primer testamento: “… y nombro (por no tener, hijos, ni herederos forzosos) por heredera usufructuaria en todos ellos [mis bienes], a la explicada Dª Mariana Aztina, mi querida y Amada esposa, para que todos ellos los disfrute, para todos los largos días de su vida. Y despues de ellos, instituyo, y nombro, por mi unico y universal heredero de todos los dhos bienes hazdas. y efectos al nominado Dn. Casimiro Gomez Ortega, mi sobrino, e hijo de Barbara Ortega mi hermª y á sus hijos, pª pº todos los que assi fuessen (…) Y caso de qe la nominada Dª Mariana Aztina mi muger, sobreviviese al citado Dn Casimiro mi sobrino y este no dejase hijos ningunos, es mi voluntad (…) qe despues de los largos dias de la dha Dª Mariana mi Muger qe todos mis bienes hazdas y efectos, se vendan, y su producto se reparta por iguales ptes entre los citados Saturnino, 650 Les ajudica cien ducados, por una vez, “en atenzion a lo mucho que les debo” y por la licencia que éstos le conceden de “disponer de mis bienes libremte.” Poder para testar que otorga José Hortega a favor de Mariana Aztina, su mujer. Madrid, 1-VIII-1731 (AHPNM, protocolo 14.102, fols. 275r-277r). Poder para testar que otorga José Hortega a favor de Mariana Aztina, su mujer. Madrid, 1-VIII-1731; actúan como testigos Francisco Ansorena, Juan Bautista Monleón, Jerónimo Martínez, Manuel Rabieso y Andrés de Conhina Blanco (AHPNM, protocolo 14.102, fols. 275r-277r). 651 244 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Manuel, María, Barbara, Josepha Ortega, todos cinco mis hermanos, y entre Dª María Manuela y Dª Maria Paula, Nietas de mi muger (…) por iguales ptes…”652 Añade al testamento algunas mandas, unas de carácter religioso653, otras de disponibilidad de sus bienes: a su hermano Saturnino le cede la casa de Añover que heredó de sus padres654; a sus hermanos Saturnino y Manuel les otorga la propiedad conjunta de sus bienes raíces en las tierras de Añover, procedentes de la testamentaría de sus padres, y algunos otros adquirdos por él en tierras de Yepes655; a sus hermanas, María, Bárbara y Josefa, las recordará con 1.000 rs a cada una de ellas656. También tendría 652 Testamento otorgado por José Hortega ante el escribano Antonio Esteban. Madrid, 11-VII-1760 (AHPNM, protocolo 17.095, fols. 16r-20v). 653 Las relativas a ser enterrado, con el hábito franciscano, en el cementerio de la parroquia de San Luis, anejo de San Gines, “y en el sitio y lugar qe. eligiere Dn. Juan Galvez Presbitero, uno de mis testamentarios”; misa de corpore insepulto con los sacerdotes de la parroquia de San Luis, sepelio acompañado de veinte cuatro pobres del Hospicio con sus hachas “y encargo no se convide a nadie para dicho mi entierro”; manda se celebren por su alma y la de sus padres “diezientas Misas rezadas”, con limosma de 3 rs “y confio en otros muchos sufragios, Misas y diezmos, qe haran celebrar pr mi Alma, mi muger, su hija, y mi hermana Barvara y su hijo Dn. Casimiro…”; reserva 1.000 rs de limosna para los pobres del Hospital General de Madrid y otros 1.000 rs para los pobres del Hospicio de San Fernando de Madrid, a quien dispensa del pago de las deudas que, por las medicinas servidas, pudieran devérsele “y les pido y encargo me encomienden a Dios, y me tengan presente en sus oraziones y exercicios…” (Testamento otorgado por José Hortega. Madrid, 11-VII-1760. AHPNM, protocolo 17.095, fols. 16r-20v). “… una casa que tengo y gozo, mia propia, sita en la poblacion de la citada villa de Añover de Tajo, y heredé de mis Padres y tengo aumentada pª qe la goze en posesión y propiedad, haciendo, y disponiendo de ella á su arbitrio y voluntad, como suya propia…” (Testamento otorgado por José Hortega. Madrid, 11-VII-1760. AHPNM, protocolo 17.095, fols. 16r-20v). 654 “… todos los bienes raizes, qe tengo, y me pertenezen por herencia, y muerte de los dhos Sres. mis Padres, assi en dha villa de Añover, su termino y jurisdiccion, y assi mismo un majardo, qe me toca y perteneze en posession y propiedad en virtud de escriptura de venta, hecha á mi fabor, sito en la ribera de Yepes, y una tierra que compré de Juan Muñz para que todo ello lo repartan entre si…” (Testamento otorgado por José Hortega. Madrid, 11-VII-1760. AHPNM, protocolo 17.095, fols. 16r-20v). 655 “… mis tres hermas. un mil rs de vn por una vez, a cada una, y les encargo me encomienden á Dios. Y es mi voluntad qe dhos Legados y mandas los pague Dª Mariana Aztina mi muger quando gustare, sin que dhos Legatarios, la puedan apremiar para su pago, hasta que como llevo dho fuere del agrado de dha mi muger el pagarlos…” (Testamento otorgado por José Hortega. Madrid, 11-VII-1760. AHPNM, protocolo 17.095, fols. 16r-20v). 656 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 245 en su recuerdo a la familia de su mujer: a Mariana Llorente, Ignacio Marcoleta, su marido, y María Paula, María Josefa, María Manuela e Ignacio, los nietos de Maria Azxtina reserva “una alaxica la que eligiere y fuera del agrado y voluntad de la citada Mariana Aztina”, igual legado establece para Juana de Aguilar, Alfonso López, su marido, y Nicolás de Aguilar “en atencion al mucho amor y cariño que les professo y tengo”. Un último legatario queda señalado en este codicilio, el boticario Gregorio de Aedo, a quien cede una “lámina de plata”657. La muerte de Mariana Aztina, en los comienzos de 1761, fue el detonante que motivó la redacción de un nuevo testamento por parte de José Hortega, dictado el 18 de enero de 1761658, escasos días antes de su propio fallecimiento; en él instituye como su heredero universal a su sobrino, Casimiro Gómez Ortega659 y, como testamentarios, a sus vecinos y amigos Ignacio Marcoleta, Domingo Marcoleta, Gaspar Salza, Juan Gálvez, Pedro Gómez y Alfonso López. A su hermano Saturnino Hortega dejó el usufructo de una casa de su propiedad en Añover de Tajo660; y “… a mi Amo y Mro Dn Gregorio de Aedo la Lamina de plata, que tengo, y me regalo el Excmo. Sr. Duque de Montemar difunto, y suplico al dicho mi Amo la admita y perdone la cortedad pues solo es una muestra de cariño en atencion al mucho afecto, amor, cariño y respeto qe spre le he profesado, y le pido me encomiende a Dios Nro. Sr...” (Testamento otorgado por José Hortega. Madrid, 11-VII-1760. AHPNM, protocolo 17.095, fols. 16r-20v). 657 Testó ante el notario José Payo Sanz; “estando enfermo en la Cama de la enfermedad que Dios nuestro Señor ha servido darme, pero en mi juicio, memoria y entendimiento natural, creyendo firmemente como creo….” Madrid 18-I-1761 (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 250r-253v). Rafael Folch Andreu (Op. cit. nota 1, págs. 107-110. 1935) ofrece un extracto de algunas de las cláusulas testamentarias. 658 “… instituyo y nombro por mi único y universal heredero de todos ellos [sus bienes] al nominado D. Casimiro Gomez Ortega mio sobrino e hijo de Barbara Ortega mi hermana y a sus hijos para que la gocen enteramente en posesion y propiedad.- Y en caso de morir dicho D. Casimiro sin dejar hijos, mando que todos mis bienes se vendan y su producto se reparta por iguales partes entre Saturnino, Manuel, María, Bárbara y Josefa, mis cinco hermanos y entre las mencionadas Manla y Dª Mª Paula Carreras…” (Testamento otorgado por José Hortega ante el escribano José Payo Sanz. Madrid 18-I-1761. AHPNM, protocolo 19.150, fols. 250r-253v). 659 “… el usufructo por los días de su vida, de una Casa que me pertenece en la población de dicha villa [Añover del Tajo], y en caso de morir este antes que su mujer actual, y permaneciendo en viudedad es mi voluntad la disfrute tambien por el tiempo que viviese y por su muerte Manuel Ortega y la suya y despues pase esta casa en posesión y propiedad a D. Casimiro Gómez Ortega, mi sobrino…” (Testamento otorgado por José Hortega ante el escribano 660 246 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol para aquellos con quienes había compartido techo destina una alhaja, en testimonio de recuerdo661; a Ignacio Marcoleta, y a su mujer, Mariana Llorente, encarga particularmente “… confieran el manejo y direccion de la Botica que tengo a dicho mi sobrino (…) luego que se restituya del Instituto de Bolonia, donde reside, atento a que su inteligencia y circunstancias la podran conservar y ser útil…”662 Firman el testamento, como testigos, quienes se hallaban junto al enfermo: Antonio María Herrero, Juan de Andrade, Luis Besterrechea, Francisco Bonilla y José Chavarria. El mismo día en que firma su testamento, el 18 de enero, recibe la Unción de Enfermos: es consciente de su próximo destino. José Hortega murió el 23 de enero de éste 1761; siguiendo sus deseos testamentarios, fue enterrado, con hábito de san Francisco, en el camposanto de san Luis, anejo a la madrileña Iglesia de san Ginés663: “... Y es mi voluntad que cuando la de Dios fuese sacarme de esta presente vida a la eterna, mi cadáver sea amortajado con el hábito de nuestro Serafico Padre San Francisco, sepultado en el Camposanto de la Iglesia de San Luis, anejo de la Parroquia de San Gines de esta Corte, pasadas veinticuatro horas de mi fallecimiento durante cuyo tiempo se ha de poner mi cadáver en el suelo de José Payo Sanz. Madrid 18-I-1761. AHPNM, protocolo 19.150, fols. 250r-253v). 661 “Dn. Joseph Ortega declaro ser su voluntad, el conceder como concedio licencia, y Facultad cumplida a la mencionada Dª Mariana Llorente, otorgase para tomar la Alagita que gustase de las qe quedasen por su fallecimiento, y dar otra la que tubiere á bien á Dn Ignacio Marcoleta su marido, a sus quatro hijos, á Dª Juana de Aguilar, a Dn. Alfonso Lopez su marido, y á Dn Nicolas de Aguilar hermano de la Dª Juana, en atencion al mucho cariño, que a todos profesaba…” (Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI1761. AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). 662 Testamento otorgado por José Hortega ante el escribano José Payo Sanz. Madrid 18-I-1761 (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 250r-253v). 663 La partida de defunción, localizada en el archivo de la Iglesia parroquial de San Luis, fue hecha pública por Rafael Folch Andeu (Op. cit. nota 1, págs. 106-107. 1935). Allí se señalan algunas de sus últimas voluntades: “… manda se digan por su alma doztas misas rezadas su Limna tres reales vn, y que sacada la Quarta Parroquial las demas se celebrasen en altares Pribilegiados, de esta Iglesia de Sn. Luis, manda se den al Hospital gral. por una vez quatrztos reales vn e igual cantidad a la casa de la Inclusa, doztos a los Desamparados y mil a la Rl Casa de Hospicio (…) dio a la Fabrica diez Ducados”. José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 247 una de las piezas de la Casa con una sola vayeta negra y cuatro velas de a libra sin mas pompa, ni ostentación, sobre que encargo a mis testamentarios particularmente el cumplimiento de esta Clausula. Que mi entierro haya de ser precisamente en público, a hora correspondiente de que se me diga en dicha Iglesia de San Luis Misa de Cuerpo presente, con Diacono, Subdiacono, Vigilia y Responso, pagandose los derechos regulares bien entendido que solo han de asistir los Sacerdotes de dicha Iglesia de San Luis y veinticuatro pobres del Hospicio con sus achas, sin convidar a persona alguna para el entiero, si solo se avisará sin detención a mis amigos y conocidos para que me encomienden a Dios…”664 Los bienes terrenales El 24 de junio de 1761, apenas un mes después del fallecimiento de José Hortega, el notario José Payo Sanz, el mismo ante quien había otorgado testamento, protocolizó la partición de sus bienes; intervinieron en ella Mariana Llorente y su marido, Ignacio Marcoleta; de otra parte Pedro Gómez Gutiérrez, padre y administrador de los bienes de Casimiro Gómez Ortega, principal heredero de José Hortega, aún en Bolonia665. Los bienes pertenecientes a José Hortega -y los de quien fuera su mujer, Mariana Aztina, de los que se hace distribución conjunta666- fueron tasados y distribuidos en ‘amigable Testamento otorgado por José Hortega ante el escribano José Payo Sanz. Madrid, 18-I-1761 (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 250r-253v). 664 Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761; firman como testigos Francisco Bruno de Labrada, Diego Riaza y Dn. Trifón (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). La localización de la escritura de partición de bienes fue dada a conocer por Rafael Folch Andreu (Op. cit. nota 12. 1953). 665 666 Tras la formación del obligado testamento de Mariana Aztina, José Hortega e Ignacio Marcoleta “… para la buena cuenta, y razon en lo subscrito, ocurrieron (…) en el inmediato dia ocho [I-1761] ante el Sr. Alcalde Dn Nicolas Blasco de Orozco (…) y por la escribania de Provinzia que exerce Pº Sequeiros y de los Cobos, pidiendo se formalizase el correspondiente Ymbentario y tassacion; con zitacion y asistencia de dhos interesados se dio principio a las formalizan. del primero. No pudiendose continuar como deseaban a causa de la enfermedad que padecia el citado Ortega y mucho menos haviendose berificado su muerte en veinte y uno del enunpciado mes (…) Ignacio Marcoleta dio nuevo pedimto [de inventario y tasación] en veinte y ocho del referido mes [I-1761] (…) pidiendo que con citazion del citado D. Pdro Gomez Gutierrez (…) se continuase partición’; no consta la identidad de los tasadores y la valoración de los bienes, significativamente baja, nos hace pensar más en un acuerdo entre partes que en una estimación real; las piezas -incluidos los materiales de la botica y los libros de la bibliotecase nos presentan tasados unitariamente667. Bienes pertenecientes a José Hortega y Mariana Llorente Tasa Total de los bienes muebles Censo sobre las casas de la calle Montera Dinero en metálico Créditos a favor de Mariana Aztina Inmueble de la calle de Montera Total 129.834 rs 22 ms 5.275 rs 14 ms 8.729 rs 00 ms 10.199 rs 00 ms 296.510 rs 00 ms 450.548 rs 02 ms A los bienes de los que fuera propietario el matrimonio Hortega/Aztina, de cuyo detalle nos ocupamos páginas atrás, hubo de descontarse algunas cargas que pesaban sobre ellos el Ymbentario y tassacion de los vienes que havian dejado el Dn. Joseph Ortega, y su Mujer pª aclarar el Dro que a cada interesado correspondia…” (cf. Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761 (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). 667 “… los referidos [Mariana Llorente, Ignacio Marcoleta y Pedro Gómez Gutiérrez], nombraron tassadores, y con su assistencia se procedio a formalizar el Ymbentario y tassacion (…) en cuio estado deseando los Otorgants. proceder entre si con la Paz, y buena Armonia que los mismos Dn Joseph Hortega y Dª Mariana Aztina les encargaron, y que conceptuan no haver motivo para romper, ademas de que les asisten otras causas justas qe reserban…” (cf. Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761. AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 249 Cargas soportadas por los bienes pertenecientes a José Hortega y Mariana Aztina Tasa Censo sobre las casas de la calle Montera a favor del mayorazgo de Ahumada Censo sobre las casas de la calle de Los Negros a favor del mayorazgo de Mencía Ortiz Negrete Carga Real sobre las casas de la calle de Los Negros Réditos del Real Hospedaje de Corte por un privilegio Reducción por el traspaso de propiedad Censo redimible sobre el memorial de Pedro de Aragón Dote aportada por Mariana Aztina al matrimonio Total 380 rs 25 ms 60 rs. 00 ms 7.229 rs. 14 ms 1.433 rs. 28 ms 28.704 rs. 20 ms 44.000 rs. 00 ms 68.961rs. 21 ms 150.770 rs. 06 ms De modo que la herencia líquida que habrían de percibir los herederos quedó establecida en 299.777 rs 30 ms, una cantidad nada despreciable. Los bienes se repartieran por mitad entre los herederos de los respectivos cónyuges: Casimiro Gómez Hortega [Ortega], el sobrino de José Hortega, y Mariana Llorente, la hija de Mariana Aztina; a ésta pasaron íntegros, además, los bienes que su madre aportara como dote al segundo matrimonio, puesto que de éste no hubo hijos668. José Hortega reservó, por deseo de su esposa, un quinto de los bienes de aquélla para sus nietos “en attencion al mucho cariño qe les tenia, y para Ayuda a tomar estado…”, por cuestiones prácticas, esta carga fue asumida por Casimiro Gómez Ortega669; 668 Por ello a Mariana Llorente le corresponden 218.850 rs 19 ms (149.888 rs 32 ms, mitad de la herencia de José Hortega, y 68.961 rs 21 ms de la dote matrimonial de su madre); de esta suma se descuentan 10.199 rs de créditos incobrables, pertenecientes a la dote de Mariana Aztina, procedentes de las facturas debidas a Luis Llorente y que, como perdidos, no se aplican en la valoración del quinto que habrá de integrar la dote de los nietos de Mariana Aztina. A los 208.651 rs 19 ms resultantes se aplicará el quinto que, por tanto, queda establecido en 41.730 rs 10 ms y que habrá de descontarse del monto correspondiente a Mariana Llorente. De acuerdo con estos datos, la hijuela de Mariana Llorente se fija en 166.921 rs 9 ms, a los que se le han de sumar los 10.199 rs de créditos incobrables, lo que suponen 177.120 rs 9 ms. “… y no siendoles util por lo mismo la adjudicacion de vienes, ó efectos que no fuese en efectivo dinero: Estando de acuerdo todos los otorgantes, y consienten en que este quede á cargo de Dn. Casimniro Gomez de Ortega su 669 250 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol también cargó sobre su propiedad el censo redimible sobre el memorial de Pedro de Aragón670. Distribución de los bienes pertenecientes a José Hortega y Mariana Aztina Mariana Llorente Mobiliario de casa y botica Pinturas Lienzos y ropa blanca China Tapices Gabinete de Historia Natural Librería Efectos de la botica [productos] Efectos de la botica [utensilios] Rebotica Cuarto de aguas 7.808 rs. 00 ms Casimiro Gómez Ortega 20.947 rs 00 ms Total 28.755 rs 00 ms 3.010 rs. 00 ms 3.870 rs. 00 ms -326 rs 00 ms 3.010 rs 00 ms 4.196 rs 00 ms 1.353 rs. 00 ms 1.408 rs. 00 ms -- --3.000 rs 00 ms 1.353 rs 00 ms 1.408 rs 00 ms 3.000 rs 00 ms --- 14.356 rs 00 ms 37.400 rs 17 ms 14.356 rs 00 ms 37.400 rs 17 ms -- 2.867 rs 00 ms 2.867 rs 00 ms --- 1.095 rs 00 ms 505 rs 17 ms 1.095 rs 00 ms 505 rs 17 ms pago a efecto, y señalado en la media casa que se le adjudicara, la qual no ha de poder bender, ni enagenar sin la carga y obligzn de este gravamen…” (Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761. AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). La suma de este quinto ascendió a 41.730 rs 10 ms, que fueron restados de la hijuela de Mariana Llorente (vide supra), de ellos descontó Casimiro Gómez Ortega los gastos del funeral de Mariana Aztina, que ascendieron a 3.728 rs; los bienes -en metálico- de los que se responsabiliza Casimiro Gómez Ortega, a favor de los nietos de Mariana Aztina quedan tasados en 38.002 rs 10 ms, que recaen sobre la propiedad del inmueble de la calle Montera que a él pertenece. 670 “Hallandose como se alla impuesto, cargado sobre la casa que en la calle de las [sic] Montera, con salida a la de los Negros corresponde a esta testamª un censo a redimir y quitar de quarenta y quatro mil rs. de vn en pral con reditos de dos y mº por ciento a favor de las memorias del Excmo Sr. Dn Pedro de Aragon y deseando ebitar la molestia de pagar sus reditos por mitad interin se redimen, estan de acuerdo los otorgants quede a cargo de dho Dn Casimiro el practicarlo e interin obligado a satisfacer sus reditos, y sugeta su mitad de casa al grabamen de uno, y otro, y la que se adjudica a Dª Mariana Aztina, passe libre enteramte. de dho censo…” (Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24VI-1761. AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 251 Espetera [botica] -2.666 rs 11 ms 2.666 rs 11 ms Sótano -4742 rs 11 ms 4742 rs 11 ms Cristal -691 rs 00 ms 691 rs 00 ms Colchones y 740 rs. 00 ms 741 rs. 00 ms 1.481 rs. 00 ms mantas Hierro -737 rs. 00 ms 737 rs 00 ms Espetera [cocina] 60 rs. 17 ms 987 rs. 15 ms 1.048 rs 00 ms Cortinaje 45 rs. 00 ms 1.273 rs. 00 ms 1.318 rs 00 ms Plata 14.915 rs. 00 ms -14.915 rs 00 ms Censo sobre las 5.275 rs. 14 ms -5.275 rs 14 ms casas de la calle Montera Inmueble de la 129.350 rs. 24 ms 129.350 rs. 24 ms 258.701 rs. 15 ms calle de Montera* Alhajas** -4.290 rs 00 ms 4.290 rs 00 ms Gastos del funeral -5.001 rs 00 ms 5.001 rs 00 ms de José Hortega Totales 178.034 rs 21 ms 230.976 rs 24 ms 409.011 rs 11 ms * La cantidad total por este concepto (258.701 rs 15 ms) es la que queda tras aplicar las rebajas de los censos perpetuos y cargas reales sobre los 296.510 rs en que fue valorado el inmueble por el maestro de obras José Gómez; la suma total de dichos censos alcanza los 37.808 rs 19 ms, corresponden éstos al censo sobre las casas de la calle Montera a favor del mayorazgo de Ahumada (380 rs 25 ms), censo sobre las casas de la calle de Los Negros a favor del mayorazgo de Mencía Ortiz Negrete (60 rs), carga real sobre las casas de la calle de Los Negros (7.229 rs 14 ms), réditos del Real Hospedaje de Corte por un privilegio (1.433 rs 28 ms) y la reducción por el traspaso de propiedad (28.704 rs 20 ms); sobre la finca también pesaba un censo redimible sobre el memorial de Pedro de Aragón (44.000 rs), pero éste fue asumido por Casimiro Gómez Ortega (Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761. AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). ** En realidad fueron repartidas entre los más próximos a Mariana Aztina: Mariana Llorente, Ignacio Marcoleta, sus cuatro nietos, Juana de Aguilar, Alfonso López y Nicolas de Aguilar, pero corren por cuenta de la hijuela de Casimiro Gómez Ortega “en calidad de Heredero del enunciado Dn. Joseph de Ortega mandatario de la entrega de las referidas Alajas porque a no procederse de este modo, y vajarse del todo del Cuerpo de Hazª quedaria perjudicado el favor de la mencionada Doña Mariana Llorente por representacion de su madre cuia voluntad no fue el hacer dichas mandas…” (Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761. AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). 252 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol Distribución de las cargas pertenecientes a José Hortega y Mariana Aztina Mariana Llorente Censo sobre la herencia de Mariana Aztina a favor de sus nietos Censo redimible sobre el memorial de Pedro de Aragón Totales -- Casimiro Total Gómez Ortega 38.002 rs 10 ms 38.002 rs 10 ms -- 44.000 rs 00 ms 44.000 rs 00 ms 82.002 rs 10 ms 82.002 rs 10 ms Distribución de la testamentaría de José Hortega y Mariana Aztina Mariana Llorente Bienes Cargas Abono de nivelación Totales 178.034 rs 21 ms -- 914 rs 12 ms Casimiro Gómez Ortega 230.976 rs 24 ms - 82.002 rs 10 ms 914 rs. 12 ms Total 409011 rs.11 ms - 82.002 rs 10 ms -- 177.120 rs 09 ms 149.888 rs. 26 ms 327.009 rs. 01 ms El inmueble de la calle de la Montera, cargado con los censos no liberados y los que la propia testamentaría de José Hortega y Mariana Aztina hacen recaer sobre él, se reparte entre Mariana Llorente y Casimiro Gómez Ortega; el matrimonio Llorente/Marcoleta seguirá habitando en el segundo piso, reservándose para Casimiro Gómez Ortega el principal de la casa -con la biblioteca-, como zona habitable, y el bajo donde se hallaba situada la botica, con las dependencias anejas a ésta671. “Que habiendose de adjudicar (…) al mencionado Dn. Casimiro Gómez Ortega (…) los efectos de la Botica, y librería (…) los quales estan colocados, en la propia Casa que dejo, y que de ningun modo se ha de alterar cosa alguna para que continue como se expresa por medio de la particular inteligª y circunstanzs. de dho Dn Casimiro el credto de la referida Botica (…) empieze a correr desigta. el quarto vajo pral de la Casa, que son los mismos que ha de ocupar (…) y que Dn. Ignacio Marcoleta, y Dª Mariana Llorente su muger continuen abitando el segundo con todo lo que le pertenece…” (Escritura de amigable partición de los bienes que quedaron por fallecimiento de José Hortega y Mariana Aztina. Madrid, 24-VI-1761. AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). Este desigual reparto convertía a Casimiro Gómez Ortega en inquilino del matrimonio Marcoleta/Llorente: “… en esta inteligencia atento a que los alquileres del quarto vajo se állan tasados en quatro mil y quatrocientos 671 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 253 Como si de un último acto de acatamiento a su secretario perpetuo se tratara, la Real Academia Médica Matritense, en la sesión celebrada el 10 de octubre de 1761, eligió a Casimiro Gómez Ortega, con apenas veinte años de edad y con el único mérito de ser el heredero de José Hortega, como miembro de la Corporación672. El ‘nuevo académico’ tardaría en llegar a la Corte española; se hallaba en Bolonia, estudiando -según él mismo relata- Medicina, Botánica e Historia Natural673; el 12 de enero de 1762 recibiría el título de doctor en Filosofía y Medicina por la Universidad boloñesa. Regresó a Madrid con anterioridad al 13 de agosto de 1762, ese día obtuvo el título de boticario que le permitiría ejercer en el afamado establecimiento de la calle de la Montera674; no tenía los 25 años reglamentarios, ni había ejercido los preceptivos cuatro años en botica abierta para poder examinarse ante el Real Teribunal del Protomedicato675. La sombra de José Hortega siguió protegiendo a su sobrino durante muchos años después de su fallecimiento. rrs, los del principal en cinco mil y quinientos y los del segundo en quatro mil y quinientos, que todo hace Catorce mil, y quatro cientos rrs.: Y que computando los respectivos a la mitad de Casa, que se adjudica a Dn Casimiro, y son siete mil y doscientos rrs., con los nuebe mil y nobezientos que obtenga por la vivienda vajo y pral, ay la diferª de dos mil y setecientos rrs. esta suma anual la ha de pagar a los mencionados Dn Ignacio Marcoleta, y Dª Mariana Llorente otorgantes…” (AHPNM, protocolo 19.150, fols. 280r-477v). Datos bio-bibliografícos de Casimiro Gómez Ortega en Francisco Javier Puerto Sarmiento. Ciencia de Cámara. Casimiro Gómez Ortega (17411818). Madrid: Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1992; también en Antonio González Bueno. Gómez Ortega, Zea, Cavanilles. Tres botánicos de la Ilustración. Madrid: Nivola, 2002. 672 673 Casimiro Gómez Ortega. Op. cit. nota 562. 1988. 674 Casimiro Gómez Ortega. Literatura, grados y méritos de Casimiro Gómez Ortega, primer cadrático [sic] jubilado del Real Jardín Botánico de Madrid. [Madrid]: [s.n.], 1814. 2 h. [Biblioteca de la Facultad de Farmacia. UCM, signatura: AF-92GOM]. Sí cumplía el tercer requisito: dominio de la lengua latina, lo había demostrado en su Casimiro Gómez Ortega. De laudibus Caroli III potentissimi hispaniarum regis carmina. Bononiae: ex typograph. SS. Inqusition sub signo D. Thomae Aquinat [Imprimatur Fr. Petrus Paullus Salvatori], 1759. XIV, [1] p., un largo y elegíaco poema en el que se aprecia ya el carácter cortesano de su autor. Es posible que aún publicara un poema anterior: Casimiro Gómez Ortega. Pro Inmaculata Dei-Parentis Conceptionis oratio... / habita... a Don Casimiro Gomez de Hortega... die VI iunii MDCCLVI... Barcinone: apud Paulum Nadal..., [1756]. [7] p.; recientemente localizado en el Seminario Diocesano de San Miguel (Orihuela), signatura: XVIII/3217(21) y que, de confirmarse, sería su primera obra impresa. 675 José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 255 Cronología 1703 22-X. Nace en Añover del Tajo (Toledo), fruto del matrimonio formado por Francisco Hortega y Maria Hernández [AP Añover. L-VI Bautismos]. 2-XI. Es bautizado en la Iglesia parroquial de Santa Ana, en Añover; actuó como padrino Isidoro Carmena [AP Añover. L-VI Bautismos]. 1714 4-XII. Nace su hermana Bárbara Manuela, sería bautizada el 10XII [AP Añover. L-VII Bautismos]. [c. 1728] Se traslada a Madrid, pasa a regentar la farmacia de Mariana Aztina, viuda de Luis Llorente, sita en la calle Montera. 1729 Se integra en la Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista San Lucas, núcleo de los boticarios de Madrid [ARANF, leg. 3.8.6]. 1731 Contrae matrimonio con Mariana Aztina. 1-VIII. Otorga poder para testar a favor de su mujer, Mariana Aztina [AHPNM, Protolo 14.102]. 18-XII. Nombrado, junto a Andrés Famada, consiliario de la Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista San Lucas para el año 1732 [ARANF, L-3]. 1732 15-III. Felipe V otorga, en Sevilla, privilegio al ‘Colegio de Boticarios de la Villa de Madrid’ para elaborar la Triaca magna [ARANF, leg. 4.1]. 256 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol 3-XII. Otorga poder para pleitos a favor de Francisco de la Lastra y Gabriel Pedrero, procuradores de los Reales Consejos, y de Diego de Sofa y Juan Facundo Domínguez, procuradores de número de Madrid [AHPNM, protocolo 14.102]. 18-XII. Nombrado, junto a Andrés Famada, celador de la Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista San Lucas para el año 1733 [ARANF, L-3]. 1733 10-VII. La testamentaría del duque de Veraguas realiza un reconocimiento de deuda a José Hortega, por la medicinas surtidas desde su botica [AHPNM, protocolo 14.188]. 12-VII. Se da por iniciada la ‘Tertulia Literaria Médico-ChymicoPhisica’; sus reuniones se celebran en la casa de José Hortega [ARANM, L-1]. 17-VII. Levanta el censo sobre tres casas ubicadas en la calle de la Montera, perteneciente al mayorazgo de Nicolás de Ahumada y Velasco [AHPNM, protocolo 15.776]. 17-VII. Otorga carta de pago sobre unos derechos del mayorazgo de Nicolás de Ahumada, relacionados con la propiedad de la casa de la calle Montera [AHPNM, protocolo 15.776]. 16-VIII. Reconoce el censo del mayorazgo de Nicolás de Ahumada y Velasco sobre unas casas en la calle de la Montera que han pasado a ser de su propiedad [AHPNM, protocolo 16.134]. 1-IX. Sesión constitutiva de la Tertulia…; queda conformada por ocho tertulianos [ARANM, L-1]. 2-IX. Los tertulianos definen sus funciones y comienzan la elaboración de los estatutos que habrían de regirles [ARANM, L-1]. 5-X. Los miembros de la Tertulia… dan su aprobación a los estatutos por los que ésta habrá de gobernarse y toman posesión de sus asientos; José Hortega firmará el acta como Secretario de la Corporación [ARANM, L-1]. 6-X. Primera Junta ordinaria celebrada por la Tertulia… [ARANM, L-1]. 10-X. Adquiere una finca en la calle Los Negros de Madrid – colindante con las casas de Montera- al Comendador y religiosos del Convento de la Merced de esta villa [AHPNM, protocolo 14.088]. José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 257 23-X. Diserta en la Tertulia… acerca de la ‘Historia sobre la verdadera operación del bezoárdico jovial, sus señales y modo de obrar en los afectos histéricos’ [ARANM, L-1]. 16-XI. Expone en la Tertulia… una ‘Historia de los análisis de las aguas minerales de Quinto’ [ARANM, L-1]. 18-XI. Presenta, en una junta anatómica de la Tertulia…, una ‘Historia del mesenterio’ [ARANM, L-1]. 21-XII. Defiende, ante la Tertulia… una disertación sobre ‘Confecciones y electuarios cordiales’, inicio de una serie sobre preparaciones farmacéuticas [ARANM, L-1]. 1734 2-I. La Tertulia… le nombra ‘Secretario sin limitación de tiempo’ [ARANM, L-1]. 27-I. Trata, en una junta anatómica de la Tertulia…, de ‘Las partes externas de los ojos’ [ARANM, L-1]. 18-II. Prosigue desarrollando, en las juntas ordinarias de la Tertulia…, sus ‘Reflexiones sobre las preparaciones farmacéuticas’ [ARANM, L-1]. 12-III. Ocupa el cargo de Tesorero de la Tertulia…, permanece en él hasta la sesión celebrada el 23-IX-1734 [ARANM, L-1]. 21-III. Protocoliza la venta de su botica sita en Añover (Toledo) a favor de Francisco Fernández Conejo [AHPNM, protocolo 16.638]. 26-III. Continúa exponiendo sus ‘Reflexiones sobre las preparaciones farmacéuticas’, ante la Tertulia… [ARANM, L-1]. 2-IV. Es propuesto, por la junta particular de fundadores, para ocupar la presidencia de la Tertulia… [ARANM, L-1]. 5-IV. Es electo como Presidente de la Tertulia…, permanece en el cargo apenas unos días, renuncia el 12 de abril [ARANM, L-1]. 12-VIII. Los tertulianos aprueban los estatutos de la Academia Médica Matritense, éstos son remitidos al Consejo de Castilla. [ARANM, L-1]. 12-IX. Se expide real cédula aprobando los estatutos de la Academia Médica Matritense [ARANM, L-1]. 18-IX. Es nombrado Secretario perpetuo de la Academia… [ARANM, L-1]. 20-IX. Toma posesión como miembro de la Academia…, lo hace en calidad de ‘Botanista de Número’ [ARANM, Libro 1]. 258 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol 1-X. Realiza la copia de los Estatutos de la Academia Médica Matritense aprobados por el Rl. y Supremo Consejo de Castilla [ARANM, leg. 1C, doc. 2ª]. 5-X. Como Secretario de la Academia Médica Matritense, informa, al Colegio de Farmacéuticos de Madrid, de la creación de la nueva Academia [ARANF, leg. 3.11.1]. 19-XI. Firma, junto al resto de la junta directiva de la Academia Médica Matritense, un poder para pleitos a favor de Manuel Izquierdo [AHPNM, protocolo 16.638]. 17-XII. Diserta, en la Academia…, sobre la ‘Historia del alcanfor y examen físico de su particular naturaleza e índole’ [ARANM, L-1]. 12-XII. Actúa como testigo en la declaración de pobre formulada por Manuela López, criada de su casa [AHPNM, protocolo 14.101]. 1735 1-IV. Toma parte en la discusión posterior a la conferencia pronunciada por Miguel Guarro en la Academia… sobre ‘Si para la curación de la catalepsia sea eficaz auxilio la sangría’ [ARANM, L-1]. 22-IV. Expone, ante la Academia…, un ‘Discurso que contenía varios experimentos sobre el alcanfor’ [ARANM, L-1]. 11-V. Otorga poder para pleitos a favor de Gabriel Pedrero y Francisco Xavier, procuradores de los Reales Consejos y de Simón Casado y Antonio de Rama Palomino, procuradores de Madrid [AHPNM, protocolo 14.102]. 13-V. Interviene en el coloquio posterior a la conferencia de Bartolomé Serena, que versó sobre ‘Si para el sentido y movimiento eran necesarios los espíritus animales’ [ARANM, L-1]. 3-VI. Otorga poder para pleitos a favor de Antonio Pérez, Manuel Monedero y Antonio Rama Palomino, procuradores de Madrid, y Manuel Antonio Fraile, Manuel de Blas Ortiz y Pedro de Rueda Osorio, procuradores de los Reales Consejos [AHPNM, protocolo 16.638]. 19-VIII. Reconocimiento de deuda a su favor por parte de Diego Fernández, batidor de oro, en razón de las medicinas adquiridas en su botica [AHPNM, protocolo 16.098]. 26-VIII. Otorga poder a su padre, Francisco Hortega, para que gestiones sus bienes y propiedades en Añover, incluido el José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 259 cobro de recetas de su antigua botica [AHPNM, protocolo 14.102]. 1-IX. Acude al concurso de acreedores de Diego Fernández, en razón de las medicinas a él suministradas [AHPNM, protocolo 16.098]. 17-IX. Actúa, como fianza de acreedor, a favor del maestro de obras Tomás Gutiérrez [AHPNM, protocolo 14.187]. 21-X. Tomó parte en la discusión tenida en la Academia… a raíz de la disertación presentada por Andrés Famada, referente a las ‘Operaciones útiles del antimonio’ [ARANM, L-1]. 18-XI. Presenta en la Academia… un discurso con ‘Experimentos sobre el alcanfor por medio de menstruos sulfúreos’ [ARANM, L-1]. 18-XI. Firma, junto a Miguel Garro, Alfonso Lope, Andrés de Bereterrechea, Julio de Dios López y Andrés Famada, la censura del libro Llave maestra Chirurgica & de Ambrosio de Almunia, solicitada a la Academia… por el Consejo de Castilla. El informe es contrario a su publicación [ARANM, L-1]. 1736 9-I. Otorga carta sobre el pago de un censo perteneciente al mayorazgo de Nicolás de Ahumada y Velasco, relacionado con la propiedad de las casas de la calle Montera [AHPNM, protocolo 15.781]. 10-I. Nombrado, junto a Félix Palacios, José Quesada, Juan Moreno Bote y Lorenzo Alquizalete, para formar los estatutos del ‘Colegio de Boticarios de San Lucas’ [ARANF, L-3]. 11-V. Expone, ante la Academia…, unas ‘Reflexiones sobre la raíz de Calaguala’ [ARANM, L-1]. 9-XI. Interviene en el coloquio mantenido en la Academia..., tras la conferencia de Bernabé Araujo sobre la ‘Historia y curación del coma somnoliento’ [ARANM, L-1]. 3-XII. Toma parte en las discusiones mantenidas en la Academia..., tras el discurso de Vicente Carreras acerca de la ‘Historia y curación de la alferecía’ [ARANM, L-1]. 10-XII. Diserta, en la Academia…, sobre la ‘Historia del uso médico del alcanfor’ [ARANM, L-1]. 12-XII. Se aprueban, en sesión de sus colegiales, los estatutos del ‘Colegio de Profesores Boticarios de Madrid’ [ARANF, leg. 4,6]. 260 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol 1737 1-I. Es elegido para ocupar la dirección de la sección de Farmacia de la Academia…; renunciará a ella, será Louis Riqueur quien ocupe la plaza [ARANM, L-1]. 1-II. Interviene en la discusión posterior al discurso pronunciado, en la Academia..., por Miguel Campillo relativo a la ‘Historia y curación de la artritis’ [ARANM, L-1]. 9-II. Toma parte en el coloquio que siguió a la disertación de Bartolomé Serena, pronunciada en la Academia..., sobre la ‘Historia y curación de la tisis’ [ARANM, L-1]. 9-III. Reconocimiento de deuda a su favor por parte de la testamentaría de Lamberto Deuberberg, por las medicinas adquiridas en su botica [AHPNM, protocolo 17.741]. 22-III. Interviene, en la Academia..., tras la conferencia de Agustín Lorente, acerca de la ‘Causa de la transmutación del delirio en letargo’ [ARANM, L-1]. 17-V. Diserta, en la Academia…, acerca de la ‘Historia del opio hispano’ [ARANM, L-1]. 23-VII. Acepta nuevas ocupaciones en la Academia…: asume la revisión de fondo y estilo de los manuscritos que ésta publicará como producción propia, entre ellas las Ephemérides barométrico-médicas matritenses… [ARANM, L-1]. 21-VIII. Felipe V da su aprobación a los Estatutos del Real Colegio de Profesores Boticarios de Madrid [ARANF, leg.4,6]. 24-IX. Se reúne, por vez primera bajo sus nuevos estatutos, el Real Colegio de Profesores Boticarios de Madrid; ocupa la presidencia de la junta Baltasar de la Torre y Ocón, médico de Cámara, Protomédico de Castilla y Presidente Subdelegado del Real Tribunal del Protomedicato. José Hortega, como el resto de los asistentes a esta reunión, ostentará la consideración de socio fundador [ARANF, L-7]. 8-X. Toma parte en las discusiones promovidas por la disertación de Tomás Francisco de Monleón y Ramiro, pronunciada en la Academia…, sobre la ‘Historia y curación del dolor cólico convulsivo’ [ARANM, L-1]. 31-X. Da inicio, en la Academia…, a sus ‘Lecciones botánicas’, tras una disertación histórica sobre la disciplina, pasa a ocuparse, siempre de acuerdo con la propuesta sistemática formulada por Joseph Pitton de Tournefort, de la ‘asarina’ [Anthirrinum sp.], la ‘hierba doncella’ José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 261 [Vinca minor L.], las flores del azafrán [Crocus sativus L.], la ‘argentina’ [Potentilla anserina L.] y de un Atriplex al que denomina ‘te de España’ [ARANM, L-1]. 8-XI. Continúa, en la Academia…, sus ‘Lecciones botánicas’, describe el arrayán [Myrtus communis L.], el hisopo vulgar [Hyssopus officinalis L.], los claveles de muerto [Calendula officinalis L.] y la consuelda real [Consolida sp.]; sobre los usos médicos de estas plantas versaron los comentarios posteriores de Joseph Isasi-Isasmendi [ARANM, L-1]. 1738 30-I. No asiste a la junta general de la Academia…, le sustituye en el trabajo de secretaría Vicente Carreras [ARANM, L-1]. 30-I. La Academia… le encarga -en ausencia- realizar las “Observaciones de los Vientos, Barometro, Thermometro, y Temporal” con destino a las Ephemérides barométricomedicas matritenses… [ARANM, L-1]. 7-III. Presenta, en la Academia…, un ‘Discurso que contenía las memorias para la historia de las plantas de España’ [ARANM, L-1]. 22-III. Actúa como ‘curador de la menor’ Mariana Llorente en un ‘compromiso en fuerza mayor’ otorgado como consecuencia de una herencia recibida por ésta [AHPNM, protocolo 16.639]. 4-V. El Colegio… trata, en junta particular, sobre la cesión a él efectuada, por el Real Tribunal del Protomedicato, de los derechos sobre la Pharmacopeia matritensis…; informará a los colegiales en junta general de 6-V. Los componentes de la Junta reciben poderes para ocuparse de este fin [ARANF, L-7]. 9-VII. Felipe V confirma la cesión de los derechos sobre la Farmacopea al Real Colegio de Boticarios de Madrid [ARANF, leg. 4.11.1; AHPNM, protocolo 16.386]. 16-VII. La testamentaría de la marquesa de Osera reconoce la deuda con su botica por las medicinas suministradas [AHPNM, protocolo 15.223]. 19-VII. Asiste, por delegación del Real Colegio, junto a José Moreno Bote, a la sesión pública en la que habrían de ser inspeccionados los géneros empleados para la fabricación de la Triaca [ARANF, L-7]. 4-VIII. Asiste, junto a un buen número de los miembros del Real Colegio de Profesores Boticarios de Madrid, a la reunión 262 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol extraordinaria, celebrada en la capilla de la Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados, en la que la Corporación se obliga en deuda con el boticario Sebastián Martínez, obteniendo así fondos con los que dar a las prensas la Pharmacopoeia Matritensis… [ARANF, leg. 4.11.1; AHPNM, protocolo 16.386]. 22-X. Ocupa plaza de Boticario mayor de los Reales Ejércitos [AGS, Guerra Moderna, leg. 2411 –fide Roldán, 1925-]. 1739 5-II. Comunica al Real Colegio de Boticarios su nombramiento como ‘Boticario de su Real Persona’ [ARANF, leg. 4.9.2]. 6-II. Decreto del Tribunal del Real Protomedicato declarando obligatoria la tenencia de la Pharmacopoeia Matritense… [Pharmacopoeia Matritensis, 1739]. 21-III. Lee, en la Academia…, una ‘Disertación sobre los métodos de las plantas, y continuación de las memorias para la historia general de las plantas de España’ [ARANM, L-1]. 2-V. Interviene en la discusión mantenida tras la conferencia pronunciada, en la Academia…, por Cristóbal Vélez, sobre el ‘Examen de la sal de amoníaco’ [ARANM, L-1]. 20-XI. Toma parte activa en la defensa de Cristóbal Vélez ante la Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista San Lucas [ARANF, L-3]. 1740 7-I. Nombrado para desempeñar el cargo de diputado primero en el Real Colegio de Boticarios de Madrid [ARANF, L-7]. 28-III. Su nombre figura en la propuesta del Real Colegio de Boticarios para elegir a dos colegiales “á quienes se les diesse poder general, pª. qto. ocurriesse en beneficio del Colegº…”; el Real Colegio validaría su propuesta, junto a la de Juan Moreno Bote, en junta general de 31-III [ARANF, L-7]. 8-IV. Ante su inminente salida de la Corte, como Boticario mayor de los Reales Ejércitos, la Academia… nombra como Secretario sustituto a Juan de Dios López [ARANM, L-1]. 20-IV. Recibe del Colegio de Boticarios de Madrid, junto a Juan Moreno Bote, poder general para pleitos (ARANF, L-7; Ibid. leg. 4.13; AHPNM, protocolo 16.386). 8-V. En junta de oficiales del Real Colegio de Boticarios de Madrid se anuncia su proyectada salida de la Corte; por lo que se José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 263 acuerda acumular su cargo de diputado primero al del fiscal del Real Colegio [ARANF, L-7]. 13-V. Firma el acta de la junta celebrada por la Academia…, la de la semana posterior (20-V-1740) llevará la rúbrica de Juan de Dios López. [ARANM, L-1]. 16-V. Otorga poder general a favor de Vicente Carreras [AHPNM, protocolo 16.639]. 23-VI. Permanece en Barcelona; en carta a José Carvajal reconoce haber visitado el Gabinete de los Salvador y asistir al fallecimiento de Jaume Salvador Pedrol, acaecido ese día [AGS, Estado, leg. 7896 –fide Riera, 1981-]. 17-XII. Mediante real orden es reintegrado a Madrid [AGS, Guerra Moderna, leg. 2460 –fide Roldán, 1925-]. 1741 27-I. Firma, en su calidad de Secretario perpetuo, el acta de la junta celebrada ese día por la Academia MédicoMatritense [ARANM, L-1]. 31-I. Su nombre figura, como Boticario mayor, en un “Estado de los empleados para el Hospital de Campaña del Exército de prevencion y sueldos que les corresponden” [AGS, Guerra moderna, leg. 2460 –fide Roldán, 1925-]. 5-V. Presenta ante la Academia… una ‘Disertación botánica sobre una planta de la China llamada Gin-Seng’ [ARANM, L-1]. 12-V. Pronuncia, en la Academia…, una conferencia ‘Sobre una planta de América llamada Cascarilla o Chacarilla’ [ARANM, L-1]. 26-V. Lee, en la Academia…, una memoria ‘Sobre una planta llamada Scrophularia aquatica o Betónica aquatica’ [ARANM, L-1]. 9-IX. No asiste a las juntas generales celebradas por el Real Colegio de Boticarios entre el 9-IX-1741 y 1-I-1742 [ARANF, L-7]. 25-XII. Interviene en la discusión mantenida en la Academia… tras la intervención de Vicente Carreras, ‘Sobre las petequias’ [ARANM, L-1]. 1742 16-II. Arguye tras la conferencia de Joaquín Cervino en la Academia…, ésta versó ‘Sobre la utilidad de la aplicación de medicamentos simples en la curación de las enfermedades’ [ARANM, L-1]. 264 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol 16-III. Tomó parte en los comentarios posteriores a la disertación, en la Academia…, de Pedro León Gómez, ‘Sobre el uso de la sangría’ [ARANM, L-1]. 13-IV. Diserta en la Academia…, esta vez bajo el título de ‘Memorias sobre el kermes mineral’ [ARANM, L-1]. 28-IX. Lee, ‘por vía de prueba’, la conferencia ‘Sobre el licor anodino mineral de que hace memoria en sus obras Federico Hoffman’, con la que la Academia… celebra una de sus dos juntas publicas anuales [ARANM, L-1]. 1-X. Presenta, en junta pública de la Academia…, su memoria ‘Sobre el licor anodino mineral de Federico Hoffman, médico del Rey de Prusia’ [ARANM, L-1]. 28-XII. Propuesto, por la junta particular, para el cargo de Secretario del Real Colegio [ARANF, L-7]. 1743 1-I. Es electo para desempeñar, durante este año, la Secretaría del Real Colegio de Boticarios de Madrid [ARANF, L-7]. 25-I. Participa en el coloquio posterior a la conferencia de José Lorente, dictada en la Academia…, ‘Sobre el recto medio de administrar la quina’ [ARANM, L-1]. 31-I. El Real Colegio le designa para que, junto a José Zavaleta, reclamen de Francisco Javier Quesada, Secretario del Real Tribunal del Protomedicato, la documentación concerniente al Colegio de Boticarios que esta institución tenga en sus archivos, para formar con ellos el propio de la Corporación [ARANF, L-7]. 31-I. Interviene tras la disertación de José Lorente ‘Sobre el abuso de la quina’, presentada en la Academia… [ARANM, L-1]. 15-III. Toma parte en la discusión mantenida, en la Academia…, tras la conferencia de Santa Ana, acerca unas ‘Observaciones anatómico-quirúrgicas’ [ARANM, L-1]. 22-III. Interviene, en la Academia…, tras la disertación de Miguel Rodríguez ‘Sobre la ventajosa verosimilitud, firmeza, y utilidad del sistema mecánico respecto de los demás’ [ARANM, L-1]. 25-X. Pronuncia, en la Academia…, la primera parte de una conferencia ‘Sobre el jabón de España y su uso en Medicina’ [ARANM, L-1]. 8-XI. Participa en el coloquio posterior a la conferencia de Juan José García Sevillano, pronunciada en la Academia…, ‘Sobre la linfa, su movimiento y usos’ [ARANM, L-1]. José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 265 22-XI. Toma parte en la discusión mantenida, en la Academia…, después de la disertación de Joaquín Cervino, que versó ‘Sobre el quilo en movimiento y destino’ [ARANM, L-1]. 30-XII. Propuesto, en la junta particular del Real Colegio de Boticarios, por segunda vez consecutiva, para el cargo de Secretario [ARANF, L-7]. 1744 1-I. Es electo para ocupar, durante este año, la dirección de la sección de Farmacia constituida en el seno de la Academia… [ARANM, L-1]. 2-I. Elegido para desempeñar, en este año, el cargo de Secretario del Real Colegio de Boticarios de Madrid. En su nombramiento se hace constar su cargo de examinador del Real Tribunal del Protomedicato, el de Boticario de S.M. y el de Boticario mayor de sus Reales Ejércitos [ARANF, L-7]. 7-II. Designado, junto a Miguel Campillo, Vicente Carreras, Alejandro Martínez de Argandoña y Tomás Francisco Monleón, para redactar los nuevos estatutos de la Academia… [ARANM, L-1]. 23-III. Junto a Vicente Carreras, presentó en la Academia… ‘Un caso médico y farmacéutico’, cuyo asunto no nos refieren las actas [ARANM, L-1]. [III/V]. Actuando como Director del Real Colegio de Boticarios, articula la asistencia de José Suñol, los protomédicos Gaviria y Loqui y los visitadores José Pavón y Francisco Perez Izquierdo, boticarios de Cámara, en los actos previos a la elaboración de la Triaca. José Hortega lee una oración gratulatoria, a la que correspondió José Suñol [ARANF, L-7]. 22-V. Concluye la presentación, en la Academia…, de su disertación ‘Sobre el jabón de España y su uso en Medicina’, cuya primera parte presentó en octubre de 1743 [ARANM, L-1; ARANF, leg. 5.11]. 13-VII. Nombrado por la Academia… para formar parte de la comisión revisora del texto de sus nuevos estatutos [ARANM, L-1]. 23-VII. En junta particular del Real Colegio de Boticarios se le encarga se ocupe de ‘la elección del impresor, del papel necesario para la impresión, la corrección de imprenta, y 266 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol demás cosas que sobre este punto ocurriesen’ en relación con la nueva Tarifa… [ARANF, L-7]. 14-IX. Una vez impresa la nueva Tarifa…., se ocupará, por encargo de la junta del Real Colegio de Boticarios, de distribuirla entre la cúpula del Real Tribunal del Protomedicato [ARANF, L-7]. 29-XII. La junta particular del Real Colegio de Boticarios le propone, por tercer año consecutivo, para el cargo de Secretario [ARANF, L-7]. 1745 2-I. Electo como Secretario del Real Colegio de Boticarios de Madrid, su mandato tiene cumplimiento anual [ARANF, L-7]. 15-I. Interviene, en la Academia…, en la tertulia posterior a la conferencia de Vicente Gilabert ‘Sobre el origen o generación de la máquina hidráulico-pneumática’ [ARANM, L-1]. 22-I. Toma parte, en la Academia…, en la tertulia que siguió a la conferencia de Francisco Padrés sobre ‘El abuso de los diaforéticos y el uso del agua en las calenturas agudas’ [ARANM, L-1]. 28-III. La junta particular del Real Colegio de Boticarios le encomienda que, junto a Juan Moreno Bote “pidan en su Nombre al Rl. Protomedicato un testimonio, ó certificacion de los Asuntos, y Providencias acordadas pr este Tribunal, tocantes a la Profesion Pharmaceutica” [ARANF, L-7]. 9-IV. Diserta, en la Academia…, ‘Sobre la trementina del Principado de Cataluña’ [ARANM, L-1]. 26-IV. Interviene en la Academia…, junto a Cristóbal Vélez, en una ponencia conjunta ‘Sobre una operación química llamada bezoárdico jovial’ [ARANM, L-1]. 28-IV. La junta particular del Real Colegio de Boticarios le encomienda lleve a término el pleito contra las boticas regentadas por comunidades religiosas [ARANF, L-7]. 7-V. Participa, en la Academia…, tras una intervención de Vicente Gilabert relativa a ‘La composición y movimiento de la máquina hidráulico-pneumática’ [ARANM, L-1]. 21-V. Toma parte en el diálogo que se estableció tras pronunciar, Juan José García Sevillano, su ‘Disertación sobre las José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 267 cautelas que deben observarse en la administración de los medicamentos’ [ARANM, L-1]. 30-VIII. Presenta ante el Real Colegio de Boticarios, junto a Juan Moreno Bote, un Memorial arreglado a la pretensión del Colegio contra las Boticas de las Comunidades Eclesiásticas seculares y regulares [ARANF, L-7]. 30-XII. Al fallecer el boticario Miguel de la Parra, la junta particular del Real Colegio le elige, junto a Lorenzo Alquizalete, garante de los bienes de esta botica [ARANF, L-7]. 30-XII. La junta particular del Real Colegio de Boticarios le propone para el cargo de Secretario de la Corporación [ARANF, L-7]. 1746 3-I. Electo para desempeñar, este año, por cuarto consecutivo, la Secretaría del Real Colegio de Boticarios de Madrid [ARANF, L-7]. 14-IV. Da cuenta, ante la junta particular del Real Colegio de Boticarios, de cómo “avian conseguido dos Decretos de S.M. sobre la instancia que hacia el Colegio de Sto Thomas para abrir Botica al Publico…” [ARANF, L-7]. 24-V. Interviene en la Academia… tras la presentación que Antonio María Herrero realizó sobre ‘El origen de las piedras figuradas’ [ARANM, L-1]. 24-VI. La Academia… le otorga su representación, junto a Tomás Monleón, para que impida, ante el Consejo de Castilla y sus consejeros, que tome apoyo regio otra sociedad médica de carácter similar; la situación fue solventada, a gusto de la Academia, en septiembre de éste 1746. [ARANM, L-1]. 9-XII. Diserta, en la Academia…, sobre ‘La sal natural catártica de la Villa de Añover de Tajo’ [ARANM, L-1]. 15-XII. Ocupa la tribuna de la Academia… para tratar de ‘Varias noticias sobre el metal similar de Mr. de Reney [sic]’ [ARANM, L-1]. 29-XII. La junta particular del Real Colegio de Boticarios le propone como Secretario de la Corporación [ARANF, L-7]. 268 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol 1747 1-I. Es electo para ocupar, durante este año, la dirección de la sección de Farmacia constituida en el seno de la Academia…. [ARANM, L-1]. 2-I. Elegido, por quinto año consecutivo, como Secretario del Real Colegio de Boticarios de Madrid [ARANF, L-7]. 6-II. Inicia un periodo de ausencia a las sesiones celebradas por la Academia…; además de a ésta, tampoco acudirá a las juntas de los días 9-II y 16-II-1747; sí se encontraba presente en las tenidas el 30-I y el 20-II-1747 [ARANM, L-1]. 23-III. Interviene en la discusión mantenida, en la Academia…, tras la disertación de Joaquín Cervino, ‘Sobre el abuso de algunos medicamentos tópicos comúnmente recibidos en el uso médico’ [ARANM, L-1]. 13-IV. Participa, como examinador del Real Tribunal del Protomedicato, en la visita de inspección a la Real Botica realizada junto a los protomédicos José Suñol, Diego Gaviria y Francisco Logui, y los examinadores José Manzano de Carvajal y Juan Bayo; la visita se continuó el 15-IV, emitiéndose el informe al siguiente día [AGP, Administración, leg. 429]. 18-V. No asiste a la junta de la Academia… celebrada este día, tampoco lo hará a la siguiente, la del 25-V-1747; sí participará en la anterior (27-IV) y posterior (26-IX) a este período [ARANM, L-1]. 26-X. Pronuncia, en la Academia…, una conferencia sobre el ‘Método fácil y demostrado de aumentar la solidez y la fuerza de las maderas’ [ARANM, L-1]. 26-X. Firma, ‘en mi estudio’, la dedicatoria a la Academia… del Ensayo sobre la electricidad de los cuerpos… traducción al castellano del tratado del abate Nollet. 13-XI. Presenta, a la Academia..., sub “Joseph Bazquez y Morales”, la dedicatoria del Ensayo sobre la electricidad de los cuerpos… traducción al castellano del tratado del abate Nollet, que es aprobada [ARANM, L-1]. 23-XI. Ausente en la reunión de la Academia… mantenida este día, tampoco asistirá a las posteriores, celebradas el 27XI y 14-XII-1747; sí participó en la realizada el 20-XI y en la particular de elección de cargos tenida el 31-XII-1747 [ARANM, L-1]. 1748 4-I. La junta particular del Real Colegio de Boticarios le propone para el cargo de Director; será electo por la junta general de 5-I-1748 [ARANF, L-7]. 18-I. Participa en el diálogo sostenido en la Academia… tras la disertación de Antonio María Herrero: ‘Sobre la electricidad de los cuerpos’ [ARANM, L-1]. 11-III. Es nombrado, por el Colegio de Boticarios de Madrid, junto a Juan Moreno Bote y Gregorio Aedo, miembro de la comisión que ha de subsanar ‘las antiguas diferencias, que subsisten entre el Colegio y los mercaderes de la droguería de la calle de las Postas’ [ARANF, L-7]. 27-III. Actúa como tasador, representando a Pedro Sebastián Malo, en el traspaso por el que éste adquiere la botica de Lorenzo Alquizalete, ubicada en la madrileña calle del León [AHPNM, protocolo 16.343]. 30-III. Presenta a la Academia… el Elogio histórico del Sr. Dr. Dn. Joseph Cervi…, primer Presidente perpetuo de la Corporación, ésta acordó su impresión inmediata [ARANM, L-1]. 1-VI. La junta general del Real Colegio de Boticarios le otorga, junto a Juan Moreno Bote, poder especial para pleitear contra las boticas regentadas por comunidades religiosas [ARANF, L-7]. 1-VII. Recibe, de la junta del Real Colegio de Boticarios, plenos poderes para el acondicionamiento de los locales de la calle Barquillo, donde habrían de quedar instalada la Corporación, incluyendo un jardín para la enseñanza de la Botánica [ARANF, L-7]. 28-IX. Realiza, ante la Academia…, la presentación de la conferencia pública correspondiente al segundo semestre: ‘Sobre una sal mineral amarga nuevamente descubierta en la jurisdicción de la ciudad de Cuenca’ [ARANM, L-1]. 5-X. Expone su disertación sobre la ‘Sal nuevamente descubierta en Cuenca’ en la sesión pública semestral celebrada por la Academia… [ARANM, L-1]. 24-X. Diserta, en la Academia…, sobre una ‘Descripción histórica de la Becabunga germanorum o Veronica aquatica major’ [ARANM, L-1]. 31-X. Lee, en la Academia…, el ‘Examen de las aguas de San Fernando que hizo de orden de la Corte’ [ARANM, L-1]. 1749 2-I. Propuesto por la junta particular, por segundo año consecutivo, para el cargo de Director del Real Colegio; será electo por la junta general de 3-I-1749 [ARANF, L-7]. 20-III. Interviene, en la Academia…, en el coloquio posterior a una disertación de Cristóbal Vélez, ‘Sobre la naturaleza del coral: a qué Reino pertenece, y si en los distintos colores hay diversidad de virtudes’ [ARANM, L-1]. 6-VI. Redacta, junto a Juan Moreno Bote, José Manzano, Juan Bayo y Cristóbal Vélez, una nueva Tarifa…, aprobada ese día por el Real Colegio de Boticarios de Madrid [ARANF, L-7]. VI. Su estado de ‘hipocondría’ le hace alejarse de la Corte; se traslada a unos baños, según comenta José Nebot en carta a Gregorio Mayáns (25-VI-1749) [fide Peset, 1972]. 21-IX. No asiste a las reuniones de la Academia…; su firma, como Secretario, figura en la junta general reunida el 22-V-1749, pero falta a partir de la celebrada este día; se incorpora a los trabajos de la Academia en la junta particular celebrada el 7-I-1750. [ARANM, L-1]. 1750 5-I. Finalizados los dos años como Director del Real Colegio, pronuncia “una oracion plausible, y llena de ternezas con que dejo a todos edificados, y dando muestras de el Zelo; con que havia desempeñado este empleo…” [ARANF, L-7]. 26-II. Participa activamente en el coloquio posterior a la ‘Descripción botánica de la Petasites minor folio subrotundo’ realizada, por Juan Minuart, en la Academia… [ARANM, L-1]. 5-III. Interpela a Antonio María Herrero tras ocuparse éste, en la Academia…, de ‘Los fósforos naturales y artificiales’ [ARANM, L-1]. 12-III. Interviene, en la Academia…, en el coloquio posterior a la disertación de Manuel Pueyo ‘Sobre la necesidad de sangrar en las calenturas agudas’ [ARANM, L-1]. 26-XI. Pronuncia, en la Academia…., una conferencia en la que, continuando la serie de sus memorias sobre la Historia Natural de España, se ocupa del ‘lápiz plomo de Marbella’ [ARANM, L-1]. José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 271 17-XII. La Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista San Lucas le elige como su hermano mayor para el año 1751 [ARANF, L-3]. 1751 4-I. Propuesto para el cargo de fiscal del Real Colegio de Boticarios por su junta particular; será electo en la junta general de 5-I-1751 [ARANF, L-7]. 11-II. Participó en el coloquio mantenido, en la Academia…, tras la presentación realizada por Juan Minuart ‘Sobre las plantas llamadas Cacalias y la diferencia entre ellas y las Petasitides’ [ARANM, L-1]. 15-III. Celebra junta particular, en su domicilio, la Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados, se adoptan actuaciones destinadas a dotar de una vida menos cortesana a la Congregación; sus proposiciones fueron aprobadas por la junta general de la Congregación celebrada el 18-III [ARANF, L-3]. 13-V. Activa la discusión posterior a la disertación pronunciada, en la Academia…, por Cristóbal Vélez, acerca de ‘La fructificación, de su variedad, estructura y uso de las partes que la componen’ [ARANM, L-1]. 29-V. Desde la junta general celebrada este día dejará de asistir a las reuniones celebradas por la Academia…. [ARANM, L-1]. 11-VI. Escribe, desde Madrid, a José Carvajal y Lancáster, en torno a las condiciones higiénicas del Real Sitio de San Fernando, y el nombramiento de Miguel Barnades como médico del lugar [AGS, Estado, leg. 7896 –fide Riera, 1981]. 13-VI. Escribe, desde Madrid, a José Carvajal y Lancáster, sobre los materiales precisos para realizar observaciones climatológicas en el Real Sitio de San Fernando [AGS, Estado, leg. 7896 –fide Riera, 1981-]. 15-VI. Informa, desde Madrid, a José de Carvajal, sobre la conveniencia de fundar un Real Jardín Botánico en la Corte, y los botánicos que pueden ser útiles para este Real Establecimiento [AGS, Estado, leg. 7896 –fide Riera, 1981]. 28-VI. Presenta, ante la junta particular del Real Colegio, el texto de la primera disertación científica que habría de leerse en el seno de la Corporación; es aprobada [ARANF, L-7]. 1-VII. Pronuncia, ante la junta general del Real Colegio de Boticarios, su ‘Disertacion médico-botánica sobre la 272 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol verdadera Pulmonaria oficinal’; previamente, la junta particular de 28-VI-1751, había dado su aprobación al texto [ARANF, L-7]. 7-VIII. Asiste a la junta general celebrada por el Real Colegio de Boticarios de Madrid, no volverá a anotarse su nombre hasta la junta particular de 29-XII-1753, en que excusa su asistencia [ARANF, L-7]. 13-VIII. Parte en dirección a Aragón y Cataluña; según el comentario de una carta remitida por el cirujano Josep Borges a Josep Salvador (Madrid, 24-VIII-1751) [fide Camarasa, 1989]. 23-VIII. Sale de Barcelona con destino a Francia, según comenta el cirujano Josep Borges en carta a Josep Salvador [fide Camarasa, 1989]. 1752 [I/XII]. Viaje por Italia, Francia, Inglaterra y Holanda, con objeto de sentar las bases de una non nata Academia de Ciencias. 16-X. Desde París, escribe al ministro Carvajal anunciando la remisión de un trabajo sobre el arte de tintorería; en el escrito afirma haber viajado por Francia, Italia, Flandes y Holanda, disponiéndose a marchar a Inglaterra [AHN, Fomento, leg. 3182]. 7-XII. Sir William Watson, Henriquez de Castro-Sarmento, Thomas Birch y Gowin Knight avalan su propuesta como fellow de la Royal Society [RS, EC/1752/36]. 16-XII. Ante la ausencia de su hermano mayor, la Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados se reúne en casa del director del Real Colegio de Boticarios, Juan Moreno Bote [ARANF, L-3]. 1753 8-III. La Royal Society somete a votación la candidatura de José Hortega como fellow de la Sociedad; es aceptado [RS, EC/1752/35]. 12-V. Llega a Madrid, tras su largo viaje europeo [LS. 1586], probablemente vía Valencia, según comenta José Nebot a Gregorio Mayáns (23-V-1753) [fide Peset, 1972]. 8-VIII. La Académie des Sciences de Paris le nombra ‘correspondant’, con el aval de Bernard de Jussieu; el expediente anota su nombre como ‘Don Vásques y Morales Hortega’ [ASP, Ortega]. José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 273 12-X. Escribe a Carl Linné, desde Madrid; asume el control científico de las actividades realizadas por Pehr Löfling en territorio americano [LS. 1654]. 6-XI. Escribe a Pehr Löfling, desde Madrid; se interesa por su viaje a Cádiz, le solicita información sobre las plantas encontradas en el itinerario, le sugiere el estudio de las producciones marinas y le servirá de contacto con Pedro Virgili [ARJB, leg. II,1,7,3]. 20-XI. Escribe a Pehr Löfling, desde Madrid; comenta las riquezas naturales del Reino de Perú (canela de Quito, calaguala, estoraque, acíbar, escamonea, etc.) y se interesa por su opinión sobre las teorías providencialistas defendidas por el clérigo francés Jacques Bénigne Bossuet [ARJB, leg. II,1,7,5]. 11-XII. Escribe a Pehr Löfling, desde Madrid; le remite a José de Iturriga para solvertar los problemas económicos derivados de la conservacón de los materiales coleccionados y le solicita una traducción sobre unas experiencias realizadas con aguas minerales, publicadas en sueco [ARJB, leg. II,1,7,9]. 23-XII. Aunque no asistiera a la junta particular celebrada por el Real Colegio de Boticarios, sí se anota en ella la justificación de su ausencia; participará en la general celebrada el 2-I-1754 [ARANF, L-7]. 1754 8-I. Escribe a Pehr Löfling, desde Madrid; reafirma su rol como el eslabón inmediato con el Secretario de Estado, José de Carvajal y Lancáster [ARJB, leg. II,2,2,1]. 28-I. Asiste a la junta general celebrada por la Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados [ARANF, L-3]. 25-III. Escribe a Carl Linné, desde Madrid, dando cuenta de la fundación del Real Jardín, a la vez que le informa del viaje de Pehr Löfling a Caracas y le agradece la descripción de Ortega hispanica L. [LS. 1725]. 30-IX. Escribe a Carl Linné, desde Madrid; se arroga el protagonismo de servir de intermediario entre el naturalista sueco y Pehr Löfling; solicita le remita la correspondencia “sub involucro illo transmitantur à Illr. Mr. Wall Premier Secretaire d’Etat de S.M.C. à Madrid” [LS. 1800]. 274 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol 1755 17-X. Ocupa la subdirección de Real Jardín Botánico de Madrid, recién fundado [AGS, Secretaría y Superintendencia de Hacienda, leg. 951 –fide Añón, 1987-]. 13-XII. La junta general del Real Colegio de Boticarios le reafirma en sus poderes de representación corporativa [ARANF, L-7]. 13-XII. La junta general del Real Colegio de Boticarios le encomienda la dirección de los trabajos a realizar en el ‘jardín alto’ del Colegio [ARANF, L-7]. 1756 19-I. Propuesto para desempeñar el cargo de fiscal en el Real Colegio de Boticarios; será electo por la junta general reunida el 22-I-1756 [ARANF, L-7]. 18-V. El Colegio… le encarga que forme un plan para organizar la segunda edición de la Pharmacopoea matritensis… [ARANF, L-7]. 9-VI. Presenta, ante el Colegio…, un plan para la elaboración de la segunda edición de la Pharmacopoea matritensis…, éste es aceptado y remitido a José Suñol [ARANF, L-7]. 13-XI. En contra de la opinión de José Hortega, la junta particular del Real Colegio de Boticarios emprende obras de reforma en la estructura del jardín botánico; inicio de sus desavenencias públicas con la organización colegial presidida por Francisco Lerma [ARANF, L-7]. 24-XII. Presenta, ante José Suñol, la cuenta de gastos efectuados en el Real Jardín desde el 25-X-1756 al 24-XII-1756 [AGS, Secretaría y Superintendencia de Hacienda, leg. 951 –fide Añón, 1987-]. 1757 26-I. Entrega a José Suñol la relación de los gastos habidos en la fábrica del invernadero del Real Jardín [AGS, Secretaría y Superintendencia de Hacienda, leg. 951 –fide Añón, 1987]. 14-II. No asiste a la junta particular del Real Colegio celebrada ese día, su cargo será asumido por José Zavaleta; en la junta particular reunida el 5-V-1757 se anota “… el Sr. Fiscal [Hortega] qe se halla ausente de la Corte…”, no volverá a asistir a las reuniones del Colegio hasta la propiciada por él y reunida el 6-VIII-1757 [ARANF, L-7]. José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 275 5-V. Ausente de Madrid; Francisco Lerma, director del Real Colegio, solicita en junta particular los poderes otorgados a Hortega para mediar en el pleito con las comunidades religiosas y la firma de los volantes sobre la Renta del Aguardiente; el Colegio… accede, y se ratifica en junta general celebrada el 8-V-1757 [ARANF, L-7]. 17-V. [sic] Firma, en Madrid, a solicitud del conde de Valparaíso, un informe sobre la calidad de la quina conservada en Palacio; el escrito queda dirigido a Julián de Arriaga, Secretario de Estado de Marina e Indias [AGI, Indiferente, 1552 –fide Murillo Campos, Bermúdez Camacho, 1953; Crawford, 2009]. 6-VIII. Tras su retorno a la Corte, propicia una junta general del Real Colegio, con una representación del Protomedicato; en ella mostrará públicamente sus protestas sobre la actuación de Francisco Lerma como director [ARANF, L-7]. 1758 10-I. Presenta un escrito, ante la junta general del Real Colegio, en el que reitera sus impugnaciones a la actuación de Francisco Lerma como director de la Corporación; pretende sean anulados los acuerdos relativos a la construcción del laboratorio químico del Real Colegio. Hortega consigue que se lean sus denuncias, pero la junta general da por válidas las negociaciones realizadas por Francisco Lerma. José Hortega se retira del Colegio… hasta enero de 1759 [ARANF, L-7]. 11-II. El Real Colegio determina, en junta general, que José Zavaleta y Matías Abancens contesten a las demandas formuladas por José Hortega contra la actuación de Francisco Lerma; el asunto ocupará, por extenso, la junta general celebrada el 2-III-1758, a la que no asiste Hortega [ARANF, L-7]. 20-II. Remite a José Suñol las cuentas de gastos realizados en el Jardín Botánico, solicita nuevas cantidades para reparar los desperfectos causados al desbordarse el arroyo que atravesaba el Jardín [AGS, Secretaría y Superintendencia de Hacienda, leg. 951 –fide Añón, 1987-]. 4-V. Solicita, del Ayuntamiento de Madrid, las diligencias de medidas previas al derribo de una casa de su propiedad, sita en la calle de los Negros; de su nuevo levantamiento se 276 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol ocupará Diego de Villanueva. Las medidas se practicaron el 7-V. Se conserva el plano de la fachada firmado por Diego de Villanueva (ARANM, leg. 1, doc. 2). 1759 27-I. Tras un año de inasistencia, este día retoma su participación en las juntas del Real Colegio de Boticarios, pero no volverá a asistir a las celebradas a lo largo de todo este año [ARANF, L-7]. 1760 30-I. Ante la crítica situación económica en que se encuentra el Real Colegio, por no poder satisfacer los créditos derivados de las actuaciones de Francisco Lerma, mientras éste ocupó la dirección de la Corporación, la junta general de la Corporación acuerda la ‘jubilación’ del antiguo director, que deja así de pertenecer al Real Colegio [ARANF, L-7]. 1-II. A solicitud de Juan Herrera, fiscal del Real Colegio, José Hortega recibe –de nuevo- los poderes de que gozó hasta la primavera de 1757, “con todas las Preheminencias, y facultades correspondientes, y la especial de poderlos substituir en otro alguno de sus individuos, lo que pr pluralidad de votos quedo otorgado (…) en virtud del amor, celo y desinteres con qe han servido al Rl. Colegio…” [ARANF, L-7]. 21-II. En junta general del Real Colegio se reconoce la veracidad de las propuestas formuladas por José Hortega, en torno a la formulación de la Triaca, en su contencioso con Francisco Lerma [ARANF, L-7]. 11-III. La Congregación de Nuestra Señora de los Desamparados y del Glorioso Evangelista San Lucas se dota de nuevas constituciones, limitando formalmente su composición a los boticarios establecidos en Madrid [ARANF, L-3]. 4-VII. El Real Colegio delega en él los trabajos de reimpresión de la Pharmacopea matritensis…; el acuerdo será refrendado por la junta general celebrada el 12-VII-1760 [ARANF, L-7]. 11-VII. Otorga testamento ante Antonio Esteban [AHPNM, protocolo 17.095]. 17-X. Las actas del Real Colegio dan cuenta de su estado de enfermedad: “Estando las Dependencias del Rl. Colegio sin curso por la quebrantada salud de Jph Hortega José Hortega (1703-1761). La peripecia vital e intelectual de un boticario ilustrado 277 Apoderdo de el, se trato del modo mas util para la menor omision en ellas y se determino qe el Sr. Director y los Sres Diputados practicasen quantas diligencias fuessen precisas y de las resultas diessen noticia individual al dho. Apoderado…” [ARANF, L-7]. 17-XI. No asiste a la junta particular del Real Colegio de Boticarios, “Dn. Jph Hortega no asistio pr estar enfermo” [ARANF, L-7]. 12-XII. Su estado de salud empeora día a día; las actas del Real Colegio anotan: “… acordaron qe el Sr. Director exerza por ahora en compañía de los Sres Diputados todas las facultades, qe el Colegio tiene cedidas a su Apoderado Dn. Jph Hortega mediante hallarse (hace muchos dias) enfermo de cuidado a fin qe estos tengan las facultads y viva voz de tales Apoderads par pagar gratificar gastos que ocurran y fueren precisos…” [ARANF, L-7]. 1761 3-I. Probable fecha del fallecimiento de su mujer, María Aztina. 8-I. Junto a Ignacio Marcoleta, acude a Pedro Sequeiros de los Cobos para formalizar el inventario de los bienes de su difunta mujer; éste, que se inicia, no puede completarse por la enfermedad -y posterior fallecimiento- de José Hortega [AHPNM, protocolo 19.150]. 18-I. Dicta nuevo testamento ante José Payo Sanz [AHPNM, protocolo 19.150]. 21-I. Fallece en Madrid [AHPNM, protocolo 19.150]; en las actas del Real Colegio de Boticarios se anota: “Havdo. fallecido Dn. Joseph Hortega nombro el Sr. Director a dos Sres. Colegs. para que ofrezcan a su familia toda la proteccion del Colegio” [ARANF, L-7]. 23-I. Es enterrado, con hábito de san Francisco, en el camposanto de san Luis, anejo a la madrileña Iglesia de san Ginés [AHPNM, protocolo 19.150]. Siglas utilizadas: ACV. Archivo de la Catedral de Valencia AGP. Archivo General de Palacio (Madrid) AGI. Archivo General de Indias (Sevilla) AGS. Archivo General de Simancas AHM. Segovia. Archivo Histórico Militar de Segovia AHN. Archivo Histórico Nacional (Madrid) 278 Antonio González Bueno / Rosa Basante Pol AHPNM. Archivo Histórico de Protocolos Notariales de Madrid AMAE. Archivo del Ministerio de Asuntos Exteriores (Madrid) AMN. Archivo del Museo Naval (Madrid) AMNCN. Archivo del Museo Nacional de Ciencias Naturales (Madrid) AP Añover. Archivo parroquial de Añover del Tajo ARAH. Archivo de la Real Academia de la Historia (Madrid) ARANF. Archivo de la Real Academia Nacional de Farmacia (Madrid) ARANM. Archivo de la Real Academia Nacional de Medicina (Madrid) ARJB. Archivo del Real Jardín Botánico (Madrid) ASP. Académie des Sciences de Paris BAHM. Biblioteca-Archivo Hispano-Mayansiano [Colegio del Patriarca] (Valencia) BCC. Biblioteca del Colegio de Corpus Christi [Colegio del Patriarca] (Valencia) BH. Biblioteca Histórica ‘Marqués de Valdecilla’ de la Universidad Complutense (Madrid) BPRM. Biblioteca del Palacio Real de Madrid BPSC. Biblioteca del Palacio de Santa Cruz (Valladolid) LS. The Linnean Society (Londres) RS. Royal Society (Londres) Este libro se acabó de imprimir del 22 de octubre de 2015; 273 años después de que José Hortega ocupara plaza de Boticario mayor de los Reales Ejércitos