Documento descargado de http://www.elsevier.es el 25/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Rev Esp Med Legal. 2015;41(4):208---211 REVISTA ESPAÑOLA DE MEDICINA LEGAL www.elsevier.es/mlegal REVISIÓN El perjuicio estético en el nuevo baremo夽 Victoria Bares Jalón ∗ , M. Dolores Arnáiz Seco y Carmen García Espinosa Unidad Médica de valoración de Mutua Madrileña, Madrid, España Recibido el 14 de septiembre de 2015; aceptado el 15 de septiembre de 2015 Disponible en Internet el 29 de octubre de 2015 PALABRAS CLAVE Valoración; Daño estético; Tabla VI; Real Decreto 8/2004; Baremo médico; Ley 35/2015; Menoscabo psicofísico; Grados de perjuicio estético Resumen La valoración del daño o perjuicio estético a lo largo de los últimos 25 años ha ido evolucionando y existen unas reglas de utilización en la actual tabla VI del Real Decreto 8/2004 aceptadas por todos. Pero a diferencia del menoscabo psicofísico, el perjuicio estético continúa generando controversia, debido fundamentalmente a que es un daño que se puede objetivar, pero con un gran componente de «subjetividad» por parte tanto del lesionado como del perito. En la Ley 35/2015 de reforma del sistema de valoración se mantienen las reglas de utilización del perjuicio estético contenido en el Real Decreto 8/2004 y aparecen por primera vez una serie de factores a tener en cuenta en su valoración (visibilidad, atracción, reacción y alteración relación interpersonal), así como ejemplos de cada grado del perjuicio. La horquilla de puntos en cada grado se incrementa en función de la gravedad del daño, con la finalidad de poder avanzar en una mejor cualificación y cuantificación de este daño. © 2015 Asociación Nacional de Médicos Forenses. Publicado por Elsevier España, S.L.U. Todos los derechos reservados. KEYWORDS The aesthetic damage in the new scale Assessment; Aesthetic damage; Table VI; Royal Decree 8/2004; Medical scale; Law 35/2015; Abstract The physical harm o aesthetic damage assessment in the last 25 years has progressed and there are some rules accepted by everybody for the use of the actual scale of Table VI contained in the Royal Decree 8/2004. Unlike the psychophysical impairment, the aesthetic damage continues to generate controversy because it can be objectified but with an important ‘subjective’ component, not only from the injured person but also from the expert in charge of the assessment. Law 35/2015 for the modification of the system for the assessment remains faithful to the use rules for the scale contained in the Royal Decree 8/2004, but for the first 夽 Las tablas que no aparecen publicadas en el artículo corresponden a la Ley 35/2015 de reforma del Sistema para la valoración de los daños y perjuicios causados a las personas en accidentes de circulación. Boletín Oficial del Estado, Núm. 228 de 23 de septiembre de 2015, p. 84473-84979. Disponible en: http://www.boe.es/boe/dias/2015/09/23/pdfs/BOE-A-2015-10197.pdf ∗ Autor para correspondencia. Correo electrónico: [email protected] (V. Bares Jalón). http://dx.doi.org/10.1016/j.reml.2015.09.007 0377-4732/© 2015 Asociación Nacional de Médicos Forenses. Publicado por Elsevier España, S.L.U. Todos los derechos reservados. Documento descargado de http://www.elsevier.es el 25/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. El perjuicio estético en el nuevo baremo Psychophysical impairment; Aesthetic damage degree 209 time it is introduced a series of factors which should be taken into account for the evaluation (visibility, attraction, reaction and interpersonal relationship alteration), as well as examples for each grade of injury, with the aim of developing a better qualification and quantification of this injury. © 2015 Asociación Nacional de Médicos Forenses. Published by Elsevier España, S.L.U. All rights reserved. Introducción El daño estético en general ha cobrado especial relevancia en la última década, por la gran trascendencia que tiene todo lo relativo a la imagen y a la armonía corporal, y concretamente esta situación ha influenciado el perjuicio estético derivado de las lesiones producidas en accidente de circulación.Es una secuela que debemos valorar con relativa frecuencia y que es motivo de discrepancia entre las diferentes partes. La valoración del daño estético, a pesar de las modificaciones realizadas en los sucesivos baremos, continúa siendo «bastante imprecisa», debido fundamentalmente a las siguientes razones: es un daño objetivable por el observador, y por tanto mensurable y valorable1 , pero con un gran componente subjetivo, por parte tanto del sujeto que lo padece como del perito encargado de la valoración2 , es un daño cuya valoración se extrae del conjunto de circunstancias individuales del lesionado, y es un daño permanente, que puede modificarse o no con la cirugía3 . Concepto Se han escrito muchas definiciones para el perjuicio estético, desde el punto de vista del Derecho Civil, de la jurisprudencia penal y desde un punto de vista medicolegal. Ruiz Vadillo definió el daño estético o deformidad como «toda irregularidad física visible y permanente, esto es, alteración física o corporal externa en cualquier parte del cuerpo, aun en la que usualmente se cubre, que suponga desfiguración o fealdad ostensible a simple vista; deformidad en suma, es desproporción o irregularidad en el aspecto físico de una persona, es decir, anormalidad desde la óptica de la generalidad»4 . Alonso Santos lo define como «toda irregularidad física o alteración corporal externa, visible y permanente que suponga fealdad ostensible a simple vista», añadiendo que «así lo debe sentir el afectado, cuyo sentimiento de afectación será la base del daño y por tanto la del perjuicio»5 . El baremo actual de lesiones en accidentes de tráfico contenido en el Real Decreto Legislativo 8/2004, de 29 de octubre, define así el perjuicio estético: «Cualquier modificación peyorativa que afecta a la imagen de la persona; constituye una dimensión diversa del perjuicio fisiológico que le sirve de sustrato; refiere tanto a su expresión estática como dinámica»6 . El artículo 101 de la reforma de baremo en accidentes de circulación, conocido como Baremo, contiene «el perjuicio estético consiste en cualquier modificación que empeora la imagen de la persona. Es un perjuicio distinto del psicofísico que le sirve de sustrato y comprende tanto la dimensión estática como la dinámica»7 . Las características fundamentales del daño estético serían: irregularidad física o alteración corporal externa; permanente; visible; que exista fealdad, es decir, desfiguración de la morfología del individuo de carácter peyorativo; que produzca un sufrimiento sentido por la víctima como un auténtico daño moral8 . Tipos de daño estético Habitualmente, el perjuicio estético se suele asociar al derivado de las cicatrices, pero en general la palabra «deformidad» es un concepto amplio de pérdida de patrimonio estético de la persona, entendiendo como tal la alteración de la imagen corporal que podemos percibir por cualquier sentido (vista, oído, olfato, tacto o gusto)9 . El daño estético se puede dividir en: 1. Estático, percibido a simple vista; afecta principalmente a la piel e incluiría cicatrices, quemaduras, pigmentaciones y deformaciones; también es el producido por pérdidas de sustancia, amputaciones y dismetrías. 2. Dinámico, y afecta a la actitud visible, los trastornos en la marcha, la postura, la expresión y la mímica, o a la actitud audible, cuando resulta afectada el habla, tanto por las alteraciones en el tono y en el timbre, como la inteligibilidad y la capacidad de hablar, y alteraciones relacionadas con olor corporal (colostomía de descarga, fístulas, etc.)8,10 . Evolución de la valoración del perjuicio estético En España, en 1989 aparece el primer baremo que valora daño estético con criterios dermatológicos11 ; posteriormente, en 1991, un nuevo baremo recoge por primera vez el término «perjuicio estético» e incluye un capítulo especial referido al perjuicio estético, que lo diferencia en 6 grados, de «ligero» a «considerable»; la puntuación se diferenciaba según el sexo de la víctima, y señalaba que «para las situaciones especiales con deformidades o cicatrices visibles importantes, la puntuación se determinará teniendo en cuenta la edad y el sexo de la persona, así como la incidencia en su imagen para la profesión habitual», y además «se valorará el coste de la reparación quirúrgica por cirugía plástica y reparadora»12 . En el baremo del sistema para valoración de los daños y perjuicios causados a las personas en accidentes de Documento descargado de http://www.elsevier.es el 25/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. 210 Tabla 1 V. Bares Jalón et al. Puntuación otorgada a los diferentes grados del perjuicio estético en los sucesivos baremos Grados de perjuicio estético OM 1991 Hombre Ligero Moderado Medio Importante Muy importantea Considerableb 1-3 4-6 7-9 10-13 14-16 > 16 Ley 30/95 RD 8/2004 Ley 35/2015 1-6 7-12 13-18 19-24 25-30 31-50 1-5 7-13 14-21 22-30 31-40 41-50 Mujer 1-4 5-7 8-10 11-14 15-20 > 20 1-4 5-7 8-10 11-14 15-20 > 20 a El perjuicio estético «muy importante» en el RD 8/2004 pasa a llamarse «bastante importante», y en la tabla 2.A.1.de la Ley 35/2015, de nuevo «muy importante». b El grado considerable en el RD 8/2004 pasa a nominarse «importantísimo», y se mantiene igual en la tabla 2.A.1.de la Ley 35/2015. circulación del anexo de la Ley 30/1995 se mantiene el capítulo especial del perjuicio estético, dividido en 6 grados, donde ya no se hace diferenciación de sexos, unifica la doble escala según la víctima fuera hombre o mujer, y pasa a ser de carácter vinculante para los jueces en los casos debidos a accidentes de circulación13 . Llegamos a la situación actual con el baremo de lesiones en accidentes de tráfico, contenido en el Real Decreto 8/2004, de 29 de octubre; en la tabla VI existe un capítulo especial correspondiente al perjuicio estético, independiente del daño funcional, con unas reglas de utilización donde se establece que edad, sexo y profesión no deben tenerse en cuenta, y que debe incluir todos los aspectos que atañen al perjuicio estético, tanto estático como dinámico. Añade este baremo que el perjuicio estético es el existente en el momento de la producción de la sanidad del lesionado, y es compatible su resarcimiento con el coste de las intervenciones de cirugía plástica para su corrección; la imposibilidad de corrección constituye un factor que intensifica su importancia. Ya en el actual baremo se introducen ejemplos, como que el perjuicio importantísimo corresponde a un perjuicio de enorme gravedad, como el que producen las grandes quemaduras, las grandes pérdidas de sustancia y las grandes alteraciones de la morfología facial o corporal6 . Partiendo de esta situación se elabora la tabla 2.A.1. del nuevo baremo médico de la Ley 35/2015de reforma del sistema para la valoración de los daños y perjuicios causados a las personas en accidentes de circulación; contiene 10 capítulos divididos en sistemas que comprenden las secuelas psicofísicas y un capítulo especial para el perjuicio estético7 . El artículo 96 señala que la medición del perjuicio estético se realiza mediante un porcentaje de menoscabo expresado en puntos, con un máximo de 50, que corresponde a un porcentaje del 100%, lo que no supone cambio respecto al actual baremo7 . El artículo 102 sí es novedoso respecto al actual: recoge que la medición del perjuicio estético se realiza mediante la asignación de una horquilla de puntuación a cada uno de los grados teniendo en cuenta, de modo particular, los factores siguientes7 : a) b) c) d) El grado de visibilidad ordinaria del perjuicio. La atracción a la mirada de los demás. La reacción emotiva que provoque. La posibilidad de que ocasione una alteración en la relación interpersonal del perjudicado. Los grados del perjuicio estético se definen y contienen ejemplos: a) Importantísimo: corresponde a un perjuicio de enorme gravedad, como el producido por las grandes quemaduras, las grandes pérdidas de sustancia y las grandes alteraciones de la morfología facial o corporal. b) Muy importante: de menor entidad que el anterior, como el que produce la amputación de 2 extremidades o tetraplejía. c) Importante: de menor entidad que el anterior, como el producido por la amputación de alguna extremidad o la paraplejía. d) Medio: de menor entidad que el anterior, como el producido por la amputación de más de un dedo de las manos o de los pies, la cojera relevante o las cicatrices especialmente visibles en la zona facial o extensas en otras zonas del cuerpo. e) Moderado: de menor entidad que el anterior, como el que producen las cicatrices visibles en la zona facial, las cicatrices en otras zonas del cuerpo, la amputación de un dedo de las manos o de los pies o la cojera leve. f) Ligero: corresponde a un perjuicio estético de menor entidad que el anterior, como el que producen las pequeñas cicatrices situadas fuera de la zona facial. El artículo 106 señala «daños morales complementarios por perjuicio estético cuando este ha recibido una puntuación que alcance al menos 36 puntos»; el contenido de este artículo no lo contempla el baremo actual7 (tabla 1). Consideraciones El nuevo baremo médico supone un avance en la valoración del perjuicio estético, en su visión tanto estática como dinámica, reseña los factores a tener en cuenta para graduarlo, Documento descargado de http://www.elsevier.es el 25/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. El perjuicio estético en el nuevo baremo incluye ejemplos de cada uno de los grados para tener una referencia y poder extrapolar a la hora de clasificar el grado que valoramos, así como la puntuación recomendada. Al ser un daño objetivable, debemos realizar en la labor pericial una descripción de la lesión para informar del «grado de visibilidad», que en el caso de las cicatrices nos llevará a describirlas por su localización, tamaño, profundidad, morfología, color; las localizadas en la cara si afectan o no a la expresión facial; si aun siendo visibles son «inestéticas», etc. Toda esta información es la que realmente va a ser necesaria para la ponderación del perjuicio y para clasificarlo en uno u otro grado. Al igual que en las pérdidas de sustancia, amputaciones y/o dismetrías, también debemos señalar si son susceptibles o no de corrección quirúrgica. A su vez, debemos describir en el informe tanto la reacción que provoque en los demás como la alteración y la vivencia que supone para el lesionado. Atendiendo a los rangos de puntuación, también se ha conseguido hacerlos más homogéneos en este nuevo baremo: la horquilla de puntos se va alargando de una forma proporcionada y progresiva al ir incrementándose el grado de severidad del perjuicio estético, y se ponderan menos los niveles más leves a favor de los niveles más graves. En definitiva, consideramos que nos ofrece una mejora en la «cualificación» del perjuicio, en su graduación y puntuación. Conflicto de intereses Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses. Bibliografía 1. Sánchez Rodríguez E, Hernández-Cueto C. Nueva propuesta de valoración baremada de perjuicio estético dentro del Real Decreto Legislativo 8/2004. Trauma. Fundación MAPFRE. 2008;19. Abril/Junio. 211 2. Rodríguez Valiente A, Vazquez Sasot A. Revisión crítica de la valoración del daño estético. Propuesta de un nuevo baremo. Cuad Med Forense. 2014;20:26---35. 3. Criado MT. Valoración médico legal del daño a la persona. Valoración del daño corporal. En: Doctrina médico-legal de valoración de daños personales. Tomo II. Madrid: Colex; 2010. 4. Ruiz Vadillo E. La Ley 1994-2, 904 (TS. 2.a , 22 marzo 1994). 5. Alonso Santos J. La valoración del perjuicio estético. Cuad Med For. 1998;14:7---20. 6. Real Decreto Legislativo 8/2004, de 29 de octubre, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley sobre responsabilidad civil y seguro en la circulación de vehículos a motor. BOE núm. 267, 5 de noviembre de 2004, pp. 36, 662-695. 7. Ley 35/2015, de 22 de septiembre, de reforma del sistema para la valoración de los daños y perjuicios causados a las personas en accidentes de circulación. Boletín Oficial del Estado, Núm. 228 de 23 de septiembre de 2015, p. 84473-84979. 8. Pujol Robinat A, Barbería Marcalain E, Medallo Múñiz J, Vidal Gutiérrez C. Valoración del daño estético: criterios evaluadores. Controversias en valoración del daño corporal. Barcelona: Centre d’Estudis Jurídics i Formació Especialitzada. Institut de Medicina Legal de Catalunya; 2014. p. 103---13. 9. Bourchardet FCH, Cobo Plana JA. Utilización del método AIPE en la valoración del perjuicio estético y su aplicación en la legislación brasileña civil y penal. Revista Portuguesa do Dano Corporal. 2011;22:167---81. 10. Gea Brugada M, Bares Jalón V. Perjuicio estético. En: Borobia C, editor. Valoración de daños personales causados en accidentes de circulación. Madrid: La Ley-Actualidad; 1996. p. 641---8. 11. Baremo de indemnizaciones de daños corporales a cargo del Seguro de Responsabilidad Civil derivado del uso y circulación de vehículos a motor de suscripción obligatoria de la Dirección General de Seguros. Resolución de 1 de junio de 1989. 12. Sistema de valoración de daños personales en el Seguro de Responsabilidad Civil ocasionada por vehículos a motor, recogido en la Orden Ministerial de 5 de marzo de 1991. 13. Sistema para la valoración de los daños y perjuicios causados a las personas en accidentes de circulación en el Anexo a la Ley 30/1995, de 8 de noviembre, de Responsabilidad Civil y Seguro en la Circulación de Vehículos a Motor de la Ordenación y Supervisión de los Seguros Privados.