CONDICIONES PROCESALES PARA LA APLICACIÓN DE LA RESPONSABILIDAD SOLIDARIA PREVISTA POR EL ART. 30 LCT El fallo de la Sala II de la C.N.A.T., que aquí se publica, tiene por acreditado el desempeño de los accionantes como ayudantes de carga en los camiones que transportaban productos de la demandada, no obstante lo cual, confirma la sentencia de primera instancia que desestimara los reclamos salariales e indemnizatorios de los trabajadores. La confirmación del decisorio de primera instancia se funda, básicamente, en que en el inicio se invocó una relación laboral directa con la empresa demandada –que no se acreditó, lo que obstaría a analizar la eventual responsabilidad solidaria de la misma, ya que ello violaría los principios de congruencia y debida defensa en juicio. No obstante que el fundamento brindado resultaba suficiente para desestimar los agravios, el mismo se ve reforzado por el hecho de que, aun cuando se hubiera introducido oportunamente la cuestión referida a la solidaridad de la demandada en los términos del art. 30 LCT, la solución sería la misma, por cuando el Tribunal considera requisito necesario para acceder a la condena del deudor solidario, la del empleador principal. En tal sentido, el Tribunal sigue el criterio que establece que del juego de los arts. 523/525, 689 y 717 del Código Civil surge que no puede condenarse al deudor accesorio obligado en virtud del art. 30 LCT, si no se condena al deudor principal, puesto que se trataría de una obligación mancomunada –una sola prestación- con solidaridad impropia – la prestación no es divisible respecto del acreedor-, o sea sin comunidad de intereses entre los deudores, porque existiría un principal y otro accesorio. 1 Sin embargo, dicho criterio no es unánime, ya que la Sala III de la C.N.A.T. viene sosteniendo que “la ley impone a un 1 CNAT, Sala I, “Luna, Angel y otros c/ Curtiembre El Antílope SRL y otro”, 19/9/88. CNAT, Sala IV, “San Felippo, Norberto c/ Cristik Construcciones SA”, 10/9/85. CNAT, Sala V, “Pinto, Mario M. c/ Telecom Argentina Stet-France Telecom SA”, 12/2/99. CNAT, Sala VIII, “Perez, Alberto Daniel c/ Raster SA y otros”, 15/6/2001. 2 tercero garantizar, frente al trabajador, el cumplimiento de una obligación que no le incumbe directamente, y que dicho esquema es semejante al de la fianza solidaria en el derecho civil: el dependiente puede reclamar sus créditos a cualquiera de los responsables solidarios, en forma conjunta o indistinta hasta ser totalmente satisfecho, sin estar obligado a demandarlos conjuntamente”. 2 Es decir que se encuadra la situación en las previsiones del art. 705 del Código Civil. También en el campo posturas encontradas. de la doctrina se presentan estas Fernández Madrid sostiene que “…los reclamos deben plantearse tanto al empresario principal como al responsable solidario. La demanda debe ser deducida contra ambos pero diferenciando su distinta situación jurídica…” 3 . En igual sentido, Pirolo entiende que estas situaciones constituyen “…supuestos paradigmáticos de acciones que deben deducirse contra un litisconsorcio pasivo necesario…el codeudor solidario o accesorio puede ser alcanzado por la solidaridad…sólo en caso de que la existencia de la obligación sea previamente establecida en cabeza del deudor principal”. 4 Por el contrario, Guibourg entiende que “El trabajador puede reclamar su crédito a cualquiera de los deudores solidarios hasta ser totalmente satisfecho, y no está obligado a demandarlos conjuntamente…” 5 , al igual que Vázquez Vialard quien afirma que “La extensión de la responsabilidad es una consecuencia de la obligación de contralor, que la norma impone al que contrata o subcontrata…Dicha disposición tiene como objetivo lograr que se satisfagan las obligaciones laborales directamente. En caso de no ocurrir así, nace el débito reflejo a cargo del comitente, aunque solidario ante el trabajador y los organismos de seguridad social, que pueden accionar directamente contra él” 6 , agregando que no es 2 CNAT, Sala III, “Espósito Laine, Pablo y otro c/ Dialener SA y otro”, 16/2/99; “Medina Pedro c/ Praxis Personal SRL”, 16/5/96; “Benitez c/ Romano y otros”, 23/4/98. 3 Juan Carlos Fernández Madrid, “Tratado Práctico de Derecho del Trabajo”, T I, pg. 979, Segunda Edición, Ed. La Ley 4 Miguel A. Pirolo, “Aspectos procesales de la responsabilidad solidaria”, Revista de Derecho Laboral, 2001-1, pg. 416/417, Ed. Rubinzal-Culzoni. 5 Ricardo A. Guibourg, “Las obligaciones solidarias en el derecho laboral”, LT XXVI-B-980. 6 Antonio Vázquez Vialard, “Tratado de Derecho del Trabajo”, T.II, pg.353, Ed. Astrea. 3 necesario que el contratista sea parte del juicio, aunque el empleador puede solicitar que sea citado como tercero en los términos del art. 94 CPCCN. 7 En definitiva, la divergencia entre estas posturas encontradas se centra en determinar la naturaleza y caracteres de la solidaridad laboral y, cuando el art. 30 LCT establece la responsabilidad solidaria del principal por las obligaciones de los cesionados, contratistas o subcontratistas respecto del personal que ocuparen, no se advierte por qué razón dicha responsabilidad no se encontraría regida por las disposiciones de los arts. 699/717 del Código Civil (De las obligaciones solidarias) y, en particular, por el art. 705 que establece que “El acreedor, o cada acreedor, o los acreedores juntos pueden exigir el pago de la deuda por entero contra todos los deudores solidarios juntamente, o contra cualquiera de ellos…”, norma que no puede interpretarse de otro modo que no sea, como habilitando al acreedor a demandar a todos o a cada uno de los deudores. 8 Mariano H. Mark 7 Antonio Vázquez Vialard, “Tratado de Derecho del Trabajo”, T.II, pg.354, nota al pie 1285, Ed. Astrea. 8 En igual sentido, María del Pilar Mancini y Ramón Daniel Pizarro han sostenido que “…no es posible leer en la ley otra cosa que aquello que ella dice: solidaridad. Y no es posible asignarle a la solidaridad laboral efectos más restrictivos que aquellos que consagra el Derecho común para cualquier ciudadano…el acreedor puede, a su exclusivo arbitrio: Demandar al denominado deudor directo, o al deudor vicario o a ambos, formando en tal caso un litisconsorcio facultativo.”. (“Obligaciones solidarias en el Derecho del Trabajo”, Revista de Derecho Laboral, 2001-1, pg. 110, Ed. Rubinzal-Culzoni).