Aprendizaje sin competencias A través de los tiempos, el sistema educativo ha sufrido mucho cambios para su beneficio, otras veces para grandes desventajas. ¿Cómo saber qué es lo correcto en los cambios? o ¿por qué muchas veces la innovación no trae los resultados esperados? En la reforma educativa actual se implementó un cambio muy notable si lo comparamos con la “escuela vieja” que antes se presentaba. Modelos de educación que han mostrado sin duda alguna, formar mejores ciudadanos y no únicamente en México, sino que puedan ser buenos representantes de él alrededor del mundo. Ante este propósito se presentó a los docentes, padres de familia, ciudadanos y alumnos, el plan de trabajo por competencias, los cuales surgen cuando ya hay un aprendizaje esperado. ¿Qué son las competencias? Jonnaert (2002) define esta palabra como función de situaciones, están tan situadas como los conocimientos en un contexto social y físico. Para ellos era necesario conocer también el concepto de una palabra clave en esta definición: situación, ya que el concepto de situación se vuelve el elemento central del aprendizaje: es en situación que el alumno se construye, modifica o refuta los conocimientos contextualizados y desarrolla competencias a la vez situadas. Por otro lado Tejeda (2006) da el concepto de competencia como un conjunto de conocimientos, procedimientos y actitudes combinados, coordinados e integrados, en el sentido que el individuo ha de saber hacer y saber estar para el ejercicio profesional. Es decir, las competencias van más allá de sólo mostrar o dar el conocimiento a los estudiantes. Tiene que saber desarrollarse en distintos campos y funciones, es dejar que el estudiante adquiera la valoración y la capacidad de hacer diferentes actividades, es hacerlo competente. En otro caso el profesor Ferrández (1997) mencionaba que gracias al conjunto que forman las capacidades se logran las competencias mediante un proceso de aprendizaje. Primero se necesita formar o explorar las capacidades de los alumnos para poder llevarlos a las competencias, es decir, el saber hacer. A partir de todo este conocimiento previamente mostrado, el diciembre del año 2013, surgieron casos de vital importancia para la educación en las escuelas del municipio Uxpanapa, Veracruz. El nivel de educación en las escuelas rurales es muy bajo, existen niños que cursan el 4° grado de primaria y presentan problemas de lectura y escritura, falta de conocimientos, así como también, y en gran manera, falta de enseñanza en competencias. Estos problemas presentados tienen una raíz comenzando por la educación preescolar. Al observar la falta de estrategias primero se indagará las características de una competencia, así como los métodos en los que se puede llevar a cabo el verdadero aprendizaje. En primer lugar se debe conocer al alumno, es decir, tener en cuenta las competencias previas de cada estudiante, para esto se realiza una evaluación. Para esto Zabala explica (2007) que conocer el grado de dominio que el alumnado ha adquirido de una competencia es una tarea bastante compleja, ya que implica partir de situaciones-problema que simulen contextos reales y disponer de los medios de evaluación específicos para cada uno de los componentes de la competencia. Al momento de enseñar, el estudiante adquiere conocimiento, pero, al momento de aplicarlo todo profesor debe evaluar. Ante esta situación muchos maestros se preguntan ¿qué se debe evaluar? Arnau (2008) da pautas sobre los aspectos primordiales a evaluar, lo cual son justamente características de las competencias, ella dice que puesto que ser competente supone ser capaz de responder de forma eficiente ante una situación real, parece obvio que el punto de partida de cualquier actuación evaluadora sean situaciones más o menos reales que ejemplifiquen de algún modo aquellas que pueden encontrase en la realidad. A lo anterior se le da como concepto por situaciones – problemas, lo cual puede basarse en acontecimientos, textos periodísticos o científicos, sucesos, conflictos etc., que mostrando toda la complejidad de la realidad obliguen al alumnado a intervenir para llegar al conocimiento o a la resolución del problema o cuestión. Sin duda, muchos profesores tienen muy abstracto la forma o el proceso en cómo hacer que el alumno sea competente. Para estos casos existen muchas estrategias y teorías que ayudan al maestro a enseñar de forma adecuada para la competencia. Uno de los primeros pasos para una buena enseñanza es la inducción. En base a lo que comenta Cooper (2010) la inducción comprende aquellas actividades y explicaciones que el maestro diseña y aplica con la finalidad de relacionar las experiencias de los estudiantes con los objetivos de la clase. Al hacer esta relación, lo cual es primordial para un aprendizaje, el estudiante tiene ideas en mente de cómo poder realizar la actividad y eso facilita la creatividad e imaginación para desenvolverse. Uno de los métodos más utilizados para la implementación y desarrollo de aplicación de competencias, es el método constructivista. Comenzamos por definir ¿Qué es el constructivismo? Según Carretero (2005) es la idea de que el individuo – tanto en los aspectos cognitivos y sociales del comportamiento como en los afectivos – no es un simple producto del ambiente ni resultados de sus disposiciones internas, sino una construcción propia; que se produce día a día como resultado de la interacción entre esos factores. En palabras resumidas, el constructivismo es una estrategia útil para dejar que el alumno se haga cargo de su creatividad, inteligencia y astucia que le permitirá crear e innovar situaciones y resoluciones ante estos hechos. De estas y muchas estrategias está impregnado el mundo de la educación para los profesores que realmente sienten el deseo de formar ciudadanos con un egreso competente para el mundo. El conocimiento se construye, así como los saberes se comprenden para una vida evolutiva y un avance del mundo. Lista de referencias Arnau, L. (2008) . 11 Ideas clave: como aprender y enseñar competencias. Recuperado de http://redeca.uach.mx/evaluacion/Evaluar%20competencias%20es%20evaluar% 20procesos%20en%20la%20resolucion%20de%20situaciones%20problema.pdf Carretero, M. (2005). CONSTRUCTIVISMO Y EDUCACIÓN. Editorial Progreso. Cooper, J. (2010). Estrategias de enseñanza. Noriega Editores. Ferrández, (1997). El desarrollo y la gestión de competencias profesionales: una mirada desde la formación. Recuperado de http://www.rieoei.org/deloslectores/1089Tejada.pdf Jonnaert, P. (2002). La competencia como organizadora de los programas de formación: hacia un desempeño competente. Recuperado de http://www.redalyc.org/pdf/567/56712875004.pdf Tejeda J. (2006), El desarrollo y la gestión de competencias profesionales: una mirada desde la formación. Recuperado de http://www.rieoei.org/deloslectores/1089Tejada.pdf Zabala, A. (2007). 11 Ideas clave: como aprender y enseñar competencias. Recuperado dehttp://redeca.uach.mx/evaluacion/Evaluar% 20competencias%20es%20evaluar%20procesos%20en%20la%20resolucion%20de%2 0situaciones%20problema.pdf Universidad de Montemorelos Escuela Normal Profesora Carmen A. de Rodríguez Facultad de educación Aprendizaje sin competencias Documento presentado en cumplimiento parcial de los requisitos para la materia de Teoría Pedagógica Licenciatura en Educación Preescolar Por Mirelda Olán Zapata 05 - Mar - 2014