Edificando con Problemas Domingo 2 de Febrero, 2014

Edificando con los Problemas
EDIFICANDO PARA LA ETERNIDAD CON LOS PROBLEMAS
Nehemías 5: 1 – 13
Ps. Elmer Zevallos
INTRODUCCIÓN
1. Buenos días. Seguimos nuestro estudio del libro de Nehemías. Libro que nos está
ayudando a emprender nuestra VISIÓN 14/19 EDIFICANDO PARA LA ETERNIDAD. La
Visión de Construir una iglesia celular multizona para ganar todo nuestro distrito para
Cristo y enviar misioneros hacia todas las naciones.
2. Nehemías nos ha enseñado a construir para la eternidad con la oración, con la
planificación, con la motivación, con el trabajo en equipo, aún con la oposición. Esta
mañana Nehemías nos enseña a construir para la eternidad con LOS PROBLEMAS.
3. Escúchame hermano: cuando el enemigo quiere que detengas tus metas o tus
proyectos o tus desafíos, sea para tu hogar o iglesia o trabajo va a hacer uso de las
burlas, del desánimo, es decir, de la oposición. PERO ESO NO ES TODO. Su siguiente
línea de ataque también incluye LOS PROBLEMAS INTERNOS. La división y la discordia,
son armas que, a veces, las personas utilizan para luchar entre sí y que sólo ocasiona
que nos volvamos ineficaces para cualquier obra o desafío.
4. Los problemas internos son uno de los peores conflictos a los que nos podemos
enfrentar cuando emprendemos un desafío. ¡ES COMO UNA TRAICIÓN! Y a Satanás le
encanta. A él le encanta dividir para vencer. Y entre las armas que utiliza para ello es el
hambre, la crisis, el dinero, los préstamos, los impuestos altos, las ataduras. En pocas
palabras: problemas económicos.
5. Las estadísticas demuestran que la mayoría de los divorcios tienen que ver con
problemas económicos. ¡Qué terrible! Son problemas internos y son estos problemas
internos los que destruyen más iglesias que cualquier presión externa. Satanás vive
dedicado a destruir iglesias, hogares, amistades, matrimonios, trabajos, etc. Y la división
es su mejor estrategia.
6. Mira un equipo de fútbol. Cuando hay jugadores que se creen estrellas, éstos se
vuelven arrogantes y en lugar de jugar en contra del equipo contrario, juegan en contra
de su mismo equipo porque comienzan a pelearse entre sí. Los hombres tenemos
tendencia a querer las cosas a nuestra manera y lo que siempre va a producir esto es
DIVISIÓN.
7. Los problemas sin resolver detienen la obra del Señor en nuestra vida como en la vida
de la iglesia. La reconstrucción de los muros ha comenzado a peligrar. La unidad del
pueblo de Dios también peligra. La comunión con Dios y su prójimo se ha resquebrajado.
Sólo queda una sola cosa: TENEMOS QUE APRENDER A RESOLVER LOS
PROBLEMAS.
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8. Tenemos que aprender a resolver los problemas como lo hizo Nehemías.
aprendemos en este pasaje de Nehemías 5: 1 – 13?
¿Qué
Aprendemos tres cosas:
1. LA RAÍZ DE LOS PROBLEMAS (vs. 1 – 5):
Para aprender a resolver los problemas primero tengo que identificar sus causas. Que lo
origina. Donde se encuentra la raíz. No puedo atacar solo sus efectos. Tengo que ir a la
raíz de todo conflicto. ¿Donde se encuentra la raíz de todo problema?:
1.1 Cuando los tiempos son difíciles:
Nos dice el verso 1 que hubo un gran clamor del pueblo por la situación de pobreza que
estaba presentándose. Esta situación vino, al parecer, por las escasez de grano (vs. 3).
Probablemente por la falta de lluvias la tierra dejó de producir granos. Y las familias nos
dice el verso 2 eran numerosas. Dice el verso “SOMOS MUCHOS”. A mayor cantidad
mayor la necesidad.
A esto se agrega que la situación económica era difícil. No había liquidez. No había dinero
para comprar el grano y menos para pagar los tributos que eran altos de parte del rey
Artajerjes. Todo esto los llevó a pedir prestado y como es lógico, crecieron la deudas y ya
no había para pagar no sólo el grano sino ahora las deudas.
¿LE RECUERDA ALGO A USTED ESTO? No le parece que estuviera leyendo algunos de
nuestros diarios. No le parece a nuestra sociedad. Problemas con la tierra. No chorrea. La
población aumenta. No hay mucha liquidez. Los impuestos son altos. Hay que pedir
prestado. Hay que usar tarjetas de crédito. LOS TIEMPOS SON DUROS. Eso origina
problemas en casa y problemas en la iglesia.
Quizás te preguntes: Si estaban haciendo la obra de Dios ¿Por qué permitió el Señor la
hambruna? Hermano: el hecho de cumplir la obra de Dios no nos exime de los problemas
comunes de la vida. Tal vez no sepamos siempre le por qué, pero Dios tiene sus planes y
propósitos.
Dios quiere enseñarnos muchas cosas a través de los problemas. Pero principalmente
nos quiere ayudar a crecer y a madurar en nuestra fe.
1.2 Cuando tratamos de sacar provecho de los tiempos difíciles:
Son en los momentos de dificultad en que sale a relucir nuestro verdadero corazón. Y
lamentablemente en situaciones así siempre va a ver personas con mal corazón que
buscarán aprovecharse de la situación difícil por la que estamos atravesando. Gente
egoísta y que solo busca su propio beneficio.
¿Qué estaba pasando? Había judíos que tenían ciertos recursos materiales y que les
habían prestado dinero a los necesitados y se aprovecharon de la situación:
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(1) Comenzaron a exigir altos intereses por los préstamos. Dice el verso 11 exigían la
centésima parte del dinero prestado (algo así como un 12 % anual de interés).
(2) Obligaron a los necesitados a hipotecar sus tierras, sus viñas y sus casas para poder
asegurar el dinero prestado y hacerse con el tiempo dueños de todo.
(3) Lo peor, era que empezaron a tomar a los hijos como esclavos sin posibilidad de
rescatarlos por falta de dinero.
(4) Saben que es lo más triste de todo: es que eran sus propios hermanos judíos quienes
estaban oprimiendo.
Es decir, se estaban explotando entre sí. En lugar de ayudarse y de darles una mano a
los pobres, estaban perjudicándolos más. La única preocupación de estas personas es:
“¿QUÉ VENTAJA PUEDO SACAR YO DE ESTE PROBLEMA?”. Eso siempre pasa. Hay
gente que de cualquier problema busca sacar alguna ventaja. Si el líder se enferma a ver
si me quedo con su ministerio. Si no tiene plata le prestó con intereses. Si tiene problemas
con su esposo, me quedo con su esposo.
Notas bien como está presente una cosa: EL EGOÍSMO. Los problemas siempre tienen
que ver con el egoísmo. Cuando hay un conflicto entre lo que yo quiero y lo que tú
quieres, tenemos un problema. Queremos hacer lo que queremos hacer. Pero a nuestra
manera. Recuerdas Santiago 4: 1 “¿De dónde vienen las guerras y los pleitos entre
vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, las cuales combaten en vuestros
miembros?”. Yo siempre quiero tener la razón. Yo siempre quiero beneficiarme. El
egoísmo siempre causa conflictos.
2. LAS CONSECUENCIAS LOS PROBLEMAS (vs. 1 – 5)
La presencia de problemas siempre es peligrosa. Trae sus consecuencias.
¿Qué consecuencias trae la presencia de problemas internos?
2.1 División:
Porque se levantan unos contra otros. “Entonces hubo gran clamor…contra sus
hermanos…” Los problemas externos nos unen pero los problemas internos nos dividen.
Era una división entre hermanos, entre familias, entre todo el pueblo. No hay nada que
haga más daño a una iglesia como a un hogar que la división entre sus miembros. Los
grupos. Unos con este pastor. Otros con este pastor. Otros con un padre y otros con la
madre. Hace daño. Unos a favor de una persona y otras en contra de esa persona.
División. Esto origina partidos.
2.2 Detiene todo desafío:
Porque las personas están pensando más en los problemas que en la visión o desafío
que Dios ha puesto en nuestro corazón. Detiene la obra de Dios. Detiene todo avance en
un hogar o en un trabajo. La obra de reconstrucción de los muros corría el riesgo de
quedar paralizado. Se corría el riesgo que los hermanos se desalentaran y ya no quisieran
trabajar.
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2.3 Rompe relaciones:
Porque el hecho de tomar partido con alguien hace que las relaciones se rompan. Los
amigos dejan de ser amigos por la sencilla razón que comienzan a tomar partido con
alguien. O porque se ofendieron. O porque se dañaron. Aún rompe relación de familias.
Se enemistan. Se miran pero no se pasan. No se saludan. Más cuando se han herido.
Más cuando alguno de ellos se aprovechó de la dificultad del otro.
3. CÓMO ENFRENTAR LOS PROBLEMAS (vs. 6 – 13)
Nehemías sabía que las consecuencias por la presencia de problemas eran realmente
serias. La presencia de problemas en tu hogar, en tu ministerio, en tu trabajo, debe
solucionarse si no quieres ver paralizado todas tus metas o desafíos. ¿Cómo hacerlo?
¿Qué pasos dar?
3.1 Enojarnos con lo injusto y con lo que va en contra de la Palabra de Dios (vs. 6):
Como siervo, si nosotros vemos que la armonía de nuestro hogar, de nuestro ministerio,
de nuestra iglesia es amenazada de alguna forma, nuestro deber es enojarnos. Más las
situaciones injustas deben enojarnos. La Biblia nos respalda en ello.
Efesios 4: 26 “Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo”.
Nos podemos enojar pero sin pecar. Cuando veas la falta de armonía causada por el
egoísmo, como siervos de Dios, lo mejor que podemos hacer es enojarnos. Pero no por
un asunto de un daño hacia nuestra persona o por un asunto de revancha personal,
nuestro enojo debe ser hacia toda injusticia o egoísmo mostrado por las personas. La
división debe enojarnos rotundamente. Pero mucho más debe ser nuestro enojo cuando
lo que se hace va en contra de la Palabra de Dios. Estos judíos ricos se habían olvidado
de la Ley de Dios en Ex. 22: 25 “Si uno de ustedes presta dinero a algún necesitado
de mi pueblo, no deberá tratarlo como los prestamistas ni le cobrará intereses”
(NVI). Podías prestar dinero a tus hermanos, pero no cobrarle intereses. Se le cobra
intereses al no cristiano. Además, Levítico 25: 35 – 40 prohibía esclavizar a un hermano
judío. Todo eso evidenciaba falta de amor y preocupación por tu hermano. Ellos pasaron
por alto la Palabra de Dios. La estaban desobedeciendo. Hay que enojarnos ante
situaciones injustas y cuando está en juego la Palabra de Dios.
3.2 Meditemos cualquier tipo de solución (vs. 7 a):
“Entonces lo medite….” Nehemías reflexionó. La palabra hebrea para meditar significa:
“CONSULTÉ CONMIGO MISMO” o “DARSE UN CONSEJO UNO MISMO”, en otras
palabras, se puso a pensar. Buscó estar a solas. Oró acerca de la situación. Buscó la
mejor solución. Sabía que necesitaba tener la perspectiva correcta. Ahora, si puedes
pedir un mejor consejo mejor. Recuerda siempre Pr. 11: 14 “….en la multitud de
consejeros hay seguridad” Hay que planificar nuestra respuesta. Recuerda que cuando
estamos enojados, nuestra primera reacción suele ser equivocada por eso meditemos.
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3.3 Corrige el problema con firmeza y tan pronto como se presenta (vs. 7 b – 11):
Ante un problema hay que enfrentarlo. No hay que evadirlo y menos decir: “EL TIEMPO
LO CURARÁ”. El tiempo cura lo que nosotros hemos emprendido para solucionar un
problema. No la nada. No la indiferencia. No la falta de preocupación. No la inacción. Haz
6 cosas para corregir con firmeza:
(1) Reprendamos a los causantes del problema, sea quien sea (vs. 7 b):
“…y reprendí a los nobles y a los oficiales”. No dejes de corregir. Sea tu jefe. Sea tu hijo.
Sea tu amigo. Sea quien te haya hecho algún favor. “O se arregla o se va”. Reclama
valentía, pero es necesario.
(2) Reprendamos en público si la falta fue pública (vs. 7 c):
“Y convoqué contra ellos una gran asamblea” Todo Israel sabía que los ricos estaban
maltratando a los pobres. Había que enfrentar la falta públicamente.
Nehemías se arriesgaba al hacerlo en público, pero sabía que era necesario, pues la falta
de ellos había sido pública. Pero Nehemías tenía que hacer lo correcto pase lo pase.
(3) No minimicemos la falta (vs. 8):
“Y les dije:….Y callaron, pues no tuvieron que responder”. Notas bien hermano. Di
siempre la verdad con amor aunque esta duela.
(4) Apelemos al testimonio correcto que se debe dar (vs. 9):
“…para no ser oprobio de las naciones enemigas…” El no hacer lo correcta es dar mal
testimonio delante de los hombres.
(5) Detengamos la falta y demos el ejemplo (vs. 10):
“…quitémosles ahora este gravamen” Detuvo el interés y él mismo se puso de ejemplo.
Fue el primero en hacerlo.
(6) Corrijamos todo inmediatamente (vs. 11):
“Os ruego que lo devolváis hoy….” No mañana. No el próximo año. Lo que hay que
corregir hay que hacerlo inmediatamente.
3.4 Busquemos un compromiso delante de Dios y de las autoridades (vs. 12):
Nehemías llamó a los sacerdotes, llamó a los judíos y a los prestamistas para que hagan
toda promesa delante de los sacerdotes y delante de Dios. Fue una audiencia pública y
una promesa pública delante de Dios. Cuando usted corrige algo con testigos le ayuda a
tomar en serio su decisión. Cuando usted lo oculta no puede recibir ayuda. Todo debe ser
claro delante de Dios.
3.5 Busquemos que tomen en serio toda promesa hecha a Dios (vs. 13 a):
Si hay algún momento en que se debe tomar a Dios en serio, es cuando le hacemos una
promesa. Si prometemos cambiar hay que cambiar. Si prometemos ayudar hay que
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ayudar. Prometer a Dios es cosa seria. Ec. 5:4 “Cuando a Dios haces promesa, no
tardes en cumplirla; porque El no se complace en los insensatos. Cumple lo que
prometes”.
3.6 Reclamemos obediencia absoluta (vs. 13 b):
“Y el pueblo hizo conforme a esto”. Busquemos siempre que las personas obedezcan a
Dios y a su Palabra. Hasta que no haya obediencia no hay que estar tranquilo. Todo
problema se solucionó porque hubo disposición para hacerlo. Y porque se llevó a cabo
con sabiduría.
CONCLUSION
Un comentarista sugiere 4 lecciones fundamentales de todo esto para aquellos que
trabajamos con personas:
1. LAS PERSONAS SON PRIMERO:
“La iglesia es gente”. Son valiosas delante de Dios. Lo primero no son los programas, la
liturgia, la construcción del templo, las cosas, la infraestructura, lo primero son las
personas. Nehemías entendió esto.
2. HAY QUE ENFRENTAR LOS PROBLEMAS DE RAÍZ:
No dejarlos pasar. Nehemías detuvo la obra y enfrentó el problema. Y dijo es HOY y no
mañana. Si dejas pasar los problemas, éstos se acumulan y tarde o temprano nos
pueden hacer daño. Cualquiera que sea el problema sácalo de raíz. Sea un problema
familiar, financiero, espiritual o personal, enfrentémoslo.
3. HAY QUE TENER VALOR PARA ACTUAR:
Hay que tener valor como el que tuvo Nehemías, de enfrentar los problemas a fin de
encauzarlos en la voluntad del Señor. Vence todo temor e inseguridad.
4. PERSISTE HASTA QUE LO SOLUCIONES:
Nehemías hasta no solucionar el problema no estuvo tranquilo. El persistió hasta que el
pueblo NO HIZO CONFORME A ESTO.
Estas con problemas en casa, en tu ministerio, en matrimonio, en la iglesia, en tus
estudios, en tu trabajo, enfréntalos. Busca la raíz y corrígelo como lo hizo Nehemías.