ALIANZA PARA LA ALTA MAR - INFORMATIVO Se requiere una decidida acción para proteger la alta mar UNICPOLOS 12 debiera recomendar pasos concretos para mejorar la gobernanza en la alta mar, los que deben ser considerados en RIO+20 Informativo para la 12ª Reunión del proceso abierto de consultas oficiosas (ICP) de las Naciones Unidas sobre los Océanos y el Derecho del Mar A la luz de las crecientes amenazas e impactos que enfrenta la alta mar, los miembros de la recientemente formada Alianza para la Alta Mar instamos a todos los Estados que se reunirán en Nueva York, entre el 20 y 24 de junio de 2011, en la 12ª reunión del ICP a que recomienden fuertes y enérgicas acciones. Específicamente, los Estados debieran recomendar que la Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas1 (UNCSD) en Rio+20 convoque, como una materia de urgencia: una conferencia intergubernamental bajo los auspicios de Naciones Unidas sobre fortalecimiento de la gobernanza en la alta mar, con el claro y específico mandato de: 1. acordar reformas de gobernanza que permitan a los Estados alcanzar los compromisos adquiridos bajo la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar para una efectiva conservación y protección de los ambientes y biodiversidad marina en áreas más allá de la jurisdicción nacional, sobre una base precautoria e integrada; 2.dentro de cinco años, establecer un mecanismo, ampliamente comprehensivo, efectivamente manejado y mundialmente representativo, para la creación y manejo de un sistema de AMPs y reservas de alta mar. La alta mar, abreviación para la porción del océano que se encuentra más allá de los límites de la jurisdicción nacional, incluyendo el Océano Austral alrededor de la Antártica, comprende el 64% de los océanos del mundo y cerca del 50% de la superficie del planeta. Esta vasta área, en algún momento erróneamente considerada un desierto vacío, es ahora reconocida por contener el mayor reservorio de biodiversidad que aún queda en nuestro planeta. Múltiples actividades humanas representan una variedad de amenazas para los ecosistemas de la alta mar, incluyendo la sobrepesca, ruido, contaminación de plásticos y químicos, destrucción de hábitat, y ahora el calentamiento y acidificación de los océanos relacionados con los incrementos en las concentraciones de dióxido de carbón (CO2) en la atmosfera. El objetivo de Rio+20 será asegurar un renovado compromiso político hacia el desarrollo sustentable, evaluando el progreso hecho hasta la fecha y los vacíos Los miembros de la Alianza para la Alta Mar incluyen: Sargasso Sea Alliance que persisten en la implementación de los resultados de las principales cumbres sobre desarrollo sustentable y, deberá hacerse cargo de los nuevos y emergentes desafíos. Dada la abismante importancia de los océanos en las tres dimensiones del desarrollo sustentable, la conservación y uso sustentable de los ambientes marinos debe ser considerada una prioridad clave en UNCSD. Este año, UNICPOLOS se encuentra en una posición única para facilitar el avance hacia dicho fin. Nuestras organizaciones instamos a los Estados participantes de la reunión de UNICPOLOS a recomendar que Rio+20 tome decididas acciones para la gobernanza y protección de la alta mar. La Cumbre de la Tierra de 1992 inició exitosamente algunas de las más requeridas reformas a la gobernanza de la alta mar El capítulo 17 de la Agenda 21hizo un llamado a la adopción de enfoques integrados, precautorios y anticipados para el manejo de los océanos. Bajo el párrafo 17.50 se acordó que “Los Estados deberían convocar, lo antes posible, una conferencia intergubernamental bajo los auspicios de las Naciones Unidas, teniendo en cuenta las actividades pertinentes en los planos subregional, regional y mundial, con vistas a promover la aplicación efectiva de las disposiciones de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar sobre las poblaciones compartidas de peces y especies de peces altamente migratorias”. Tal acuerdo llevó al Acuerdo sobre la aplicación de las disposiciones de la CONVEMAR relativas a la conservación y ordenación de las poblaciones de peces transzonales y las poblaciones de peces altamente migratorios (Acuerdo de Nueva York) y reforzó significativamente el marco de administración para muchas pesquerías de la alta mar. Rio+20 debe ser un nuevo hito para la conservación de la alta mar Desde 1995, cuando el Acuerdo de Nueva York fue adoptado, el número de amenazas y desafíos que enfrenta la alta mar se han incrementado de gran manera, lo que incluye una significativa expansión de las pesquerías hacia la alta mar, contaminación, incremento en los impactos del cambio climático, y nuevas actividades emergentes. Sargasso Sea Alliance En áreas oceánicas más allá de la jurisdicción nacional, muchas actividades humanas permanecen no reguladas o pobremente manejadas, con consideraciones ecosistémicas apenas tomadas en cuenta y, ya sea con falta de información científica o con total omisión de la misma. La naturaleza sectorial del manejo y regulaciones actuales, donde existen, implica que no hay un mecanismo para crear ÁMPs multisectoriales, o para coordinar evaluaciones ambientales y el manejo de los impactos, incluidos los impactos acumulativos, a lo largo de los sectores. En la medida que las actividades industriales marinas, el calentamiento de los océanos y su acidificación se han acelerado, se hace mucho más urgente e importante el imperativo de reemplazar los actuales enfoques fragmentarios y minados de vacíos y tender hacia marcos institucionales integrados, equitativos y responsables. Otra necesidad específica es un mandato y marco de trabajo para el establecimiento de AMPs, incluyendo las reservas marinas, en la alta mar. A pesar del compromiso hecho por los Estados, en la cumbre Mundial de 2002 en Johannesburgo sobre Desarrollo Sustentable, para facilitar el desarrollo de una red representativa de AMPs al 2012, se ha verificado un progreso limitado, incluida la alta mar. Una de las principales razones de la falta de implementación es la ausencia de un mecanismo internacionalmente acordado para la designación y administración de tales áreas en la alta mar. Las áreas protegidas en la alta mar son un componente esencial de la versión “azul” de una “economía verde”, que busca asegurar la sustentabilidad ecológica de las pesquerías, la conservación de la diversidad biológica y la mantención de servicios ecosistémicos vitales, tales como oxígeno y fijación natural del carbono para beneficio de las generaciones presentes y futuras. Se han hecho avances regionales para el establecimiento de redes de AMPs de alta mar en el Atlántico Noreste, y el Sistema del Tratado Antártico se ha embarcado en el establecimiento de un sistema representativo de AMPs en el Océano Antártico para el 2012. Actualmente se desarrollan conversaciones para la creación de AMPs en el Mar Sargazo, el Mediterráneo y en la región de las Islas del Pacífico, mientras que se han efectuado propuestas para crear AMPs de alta mar del Ártico. Sin embargo, estos loables esfuerzos son insuficientes ante la ausencia de un marco global de gobernanza que permita cumplir, al 2012, los compromisos de establecer un sistema de AMPs de alta mar completamente comprehensivo, efectivamente manejado y globalmente representativo. Se requiere una aproximación global que incluya a toda la comunidad internacional. La 10ª reunión de la Conferencia de las Partes de la Convención sobre Biodiversidad en Nagoya, Japón, en octubre de 2010, acordó un proceso para identificar áreas ecológica o biológicamente significativas, implicando el desarrollo de talleres científicos regionales, con vista a conservar tales áreas, incluyendo la posibilidad de establecer AMPs de alta mar. Sin embargo, se requiere de un mecanismo institucional que permita a los Estados y a las organizaciones intergubernamentales sectoriales cooperar y coordinar sus actividades para este propósito, entre otras cosas a través del establecimiento de AMPs de alta mar. Esto también requiere ser llevado a una escala que permita el establecimiento de redes representativas de AMPs. Las reformas de gobernanza deben también hacerse cargo de la justa y equitativa distribución de los beneficios que emergen de la utilización de los recursos marinos genéticos en áreas más allá de la jurisdicción nacional. Por consiguiente, instamos a que el ICP recomiende a la UNCSD, como una materia de urgencia, a convocar: • una conferencia intergubernamental bajo los auspicios de Naciones Unidas para fortalecer la gobernanza de la alta mar, con el mandato claro y específico de: • acordar reformas de gobernanza que permitan a los Estados alcanzar los compromisos adquiridos bajo la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar para una efectiva conservación y protección de los ambientes y biodiversidad marina en áreas más allá de la jurisdicción nacional, sobre una base precautoria e integrada. • dentro de cinco años, establecer un mecanismo, ampliamente comprehensivo, efectivamente manejado y mundialmente representativo, para la creación y manejo de un sistema de AMPs y reservas de alta mar. Para mayor información Contacto: [email protected] Links • Antarctic and Southern Ocean Coalition: www.asoc.org • Birdlife: www.birdlife.org • Greenpeace: www.greenpeace.org • IPSO: www.stateoftheocean.org • IUCN: www.iucn.org • WCPA de IUCN: www.iucn.org/wcpa • Marine Conservation Institute: www.mcbi.org • Natural Resources Defense Council: www.nrdc.org • Oceana: www.oceana.org • Pew Environment Group: www.pewenvironment.org/ip • Pretoma: www.pretoma.org • Sargasso Sea Alliance: www.sylviaearlealliance.org/hopespots/sargassosea • Tethys Research Institute: www.tethys.org • Turtle Island Restoration Network: www.tirn.net • WDCS: www.wdcs.org, www.cetaceanhabitat.org • WWF: www.panda.org PIE DE PAGINA La Conferencia de Naciones Unidas sobre Desarrollo Sustentable (UNCSD) se llevará a cabo en Rio de Janeiro, Brasil, el 2012 (Rio+20), para marcar el 20º aniversario de la Conferencia de Naciones Unidas sobre Medioambiente y Desarrollo (UNCED), y el décimo aniversario de la Cumbre Mundial de 2002 sobre Desarrollo Sustentable (WSSD) de Johannesburgo. Ha sido convocada bajo la resolución 64/236 de la Asamblea general de Naciones Unidas (UNGA). 1 Las áreas protegidas en la alta mar son un componente esencial de la versión “azul” de una “economía verde”, que busca asegurar la sustentabilidad ecológica de las pesquerías, la conservación de la diversidad biológica y la mantención de servicios ecosistémicos vitales, tales como oxígeno y fijación natural del carbono para beneficio de las generaciones presentes y futuras.