Plan de Gestión de Residuos. Memoria.

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PLAN DE GESTIÓN DE RESIDUOS DE CONSTRUCCIÓN Y
DEMOLICIÓN PARA LA CONSTRUCCIÓN DE UNA PLANTA DE
COMPACTACIÓN DE RESIDUOS DOMÉSTICOS URBANOS
AREA DE DESARROLLO Nº16, VALLE DE LA MINA Y HUERTO DEL PARRITO,
MAJADAHONDA (MADRID)
Enero de 2009
ÍNDICE GENERAL
INTRODUCCIÓN
I. MEMORIA DESCRIPTIVA
I.1
Antecedentes.
I.2
Marco Legal.
I.3
Ámbito de Aplicación.
I.4
Objeto del Estudio.
I.5
Justificación del Estudio de Gestión de Residuos de Construcción y
Demolición
I.6
Descripción de la parcela
I.7
Modelo de gestión
II. MEMORIA TÉCNICA
II.1 Identificación de residuos.
II.2 Estimación de la cantidad generada de cada tipo de residuo.
II.3 Medidas de prevención de residuos
II.4 Medidas de separación de los residuos en obra.
II.5 Previsión de operaciones de reutilización. Clasificación de suelos.
II.6 Destino previsto para los residuos no reutilizables.
II.7 Valoración del coste previsto de la gestión de los residuos.
II.8 Prescripciones a incluir en el Pliego de Prescripciones Técnicas.
II.9 Plano de instalaciones previstas.
III. GLOSARIO.
IV.
ANEXOS.
IV.1 Anexo I: Plano de Instalaciones Previstas.
Plan de Gestión de Residuos de Construcción y
Demolición para la construcción de una planta de
compactación de residuos domésticos urbanos.
Majadahonda, Madrid
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INTRODUCCIÓN
La Directiva Comunitaria 91/156/CEE, del Consejo, de 18 de marzo de 1991, por la
que se modifica la Directiva 75/442/CEE, del Consejo, de 15 de julio de 1975, ha
significado la asunción por la Unión Europea de la moderna concepción de la política
de residuos consistente en abandonar la clasificación en dos únicas modalidades
(general y peligrosos) y establecer una norma común para todos ellos, que podrá ser
completada con una regulación específica para determinadas categorías de residuos.
La adecuación de nuestro Derecho a este cambio se realizó a través de la
promulgación de la Ley 10/98, de 21 de Abril, de Residuos. Con esta ley, se pretende
contribuir a la protección del medio ambiente coordinando la política de residuos con
las políticas económica, industrial y territorial, al objeto de incentivar su reducción en
origen y dar prioridad a la reutilización, reciclado y valorización de los residuos sobre
otras técnicas de gestión.
Esta Ley 10/98 es aplicable a todo tipo de residuos, con excepción de las emisiones a
la atmósfera, los residuos radiactivos y los vertidos a las aguas. Prevé la elaboración
de planes nacionales de residuos, que resultarán de la integración de los respectivos
planes autonómicos de gestión, y admite la posibilidad de que las Entidades locales
puedan elaborar sus propios planes de gestión de residuos urbanos.
Los Residuos de Construcción y Demolición1 (en adelante RCDs), con código L.E.R.
170000 (según Lista Europea de Residuos publicada por Orden MAM/304/2002, 8 de
Febrero), proceden principalmente:
•
De derribos de edificios o de rechazos de los materiales de construcción de las
obras de otros de nueva planta u obra civil, incluyendo los generados en los
trabajos de excavación, dragado, etc. asociados a las obras.
•
1
De pequeñas obras de reformas en viviendas o urbanizaciones.
Ver glosario
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Demolición para la construcción de una planta de
compactación de residuos domésticos urbanos.
Majadahonda, Madrid
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Con arreglo a la legislación española – Ley 10/1998, de Residuos – las competencias
sobre el control de su producción y gestión corresponde a las Comunidades
Autónomas, a excepción de los RCD procedentes de obras menores domiciliarias,
cuya gestión (al menos la recogida, transporte y eliminación) corresponde a las
Entidades locales.
Los RCDs se generan en grandes cantidades. La gestión que se ha llevado a cabo se
apoya principalmente en el depósito de estos residuos en vertedero, dadas las
favorables condiciones de precio que proporcionan éstos con unos costes de vertido
que hacen que no sea competitiva ninguna otra operación más ecológica. De esta
manera se contribuye a la rápida colmatación tanto de los vertederos municipales
como los depósitos especiales de RCDs, teniendo lugar incluso vertidos incontrolados
con el impacto visual y ecológico consiguiente.
La mayor parte de los RCDs se pueden considerar inertes o asimilables a inertes, y
por lo tanto su poder contaminante es relativamente bajo pero, por el contrario, su
impacto visual es con frecuencia alto por el gran volumen que ocupan y por el escaso
control ambiental ejercido sobre los terrenos que se eligen para su depósito. Un
segundo impacto ecológico negativo se deriva del despilfarro de materias primas que
implica este tipo de gestión, que no contempla el reciclaje.
Esta situación condicionó la elaboración del Plan Nacional de Residuos de
Construcción y Demolición 2001-2006 (PNRCD) el cual fija unos principios de gestión,
objetivos específicos de reducción, reutilización, reciclado y eliminación, así como
medidas a adoptar para conseguirlos, medios de financiación y procedimientos de
revisión.
A partir de la experiencia adquirida en el desarrollo y aplicación del PNRCD 2001-2006
se ha redactado el borrador del II PNRCD incluido como Anexo 6 del Borrador del Plan
Nacional Integrado de Residuos 2007-2015 y se ha aprobado legislación de carácter
básico, como el Real Decreto 105/2008, de 1 de febrero por el que se regula la
producción y gestión de lresiduos de construcción y demolición. En la comunidad de
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Demolición para la construcción de una planta de
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Madrid existe legislación específica sobre este tipo de residuos, como la Orden
2690/2006, de 28 de julio, de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del
Territorio, por la que se regula la gestión de los residuos de construcción y demolición
en la Comunidad de Madrid.
Existe también una pequeña proporción de los RCDs considerados residuos
peligrosos (pinturas, silicona, fluorescentes…) que deberán ser clasificados y
entregados a los gestores autorizados para su correcto tratamiento ambiental,
quedando excluidos de las directrices que establecen los Planes y normas referentes a
RCDs.
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I- MEMORIA DESCRIPTIVA
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Demolición para la construcción de una planta de
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I.1 Antecedentes
El presente Plan de Gestión de Residuos de Construcción y Demolición se desarrolla
partir de las obligaciones impuestas por la legislación relativa a este tipo de residuos.
La Orden 2690/2006 de 28 de julio, de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación
del Territorio, por la que se regula la gestión de los residuos de construcción y
demolición en la Comunidad de Madrid establece que junto al Proyecto Técnico, se
debe adjuntar un Plan de Gestión de RCDs como requisito para obtener la licencia
municipal.
Dicho Plan se elabora para un proyecto consistente en la construcción de un edificio
bajo rasante que albergará un establecimiento industrial para la realización del
compactado y salida de residuos domésticos urbanos.
I.2 Marco legal
Para realización del presente Plan de Gestión de Residuos de Construcción y
Demolición se han seguido las normas y disposiciones, de carácter europeo, estatal o
autonómico, que constituyen el marco legislativo de referencia en materia de residuos.
Orden 2690/2006, de 28 de julio, de la Consejería de Medio Ambiente y
Ordenación del Territorio, por la que se regula la gestión de los residuos de
construcción y demolición en la Comunidad de Madrid.
Plan Nacional de RCDs 2001-2006.
Plan Nacional Integrado de Residuos 2007-2015.
Ley 10/98, de 21 de Abril, de Residuos.
Ley 5/2003, de 20 de Marzo, de Residuos de la Comunidad de Madrid.
Orden MAM 304/2002, de 8 de Febrero, por la que se publican las operaciones
y eliminación de residuos y la lista europea de residuos.
RD 833/1988, de 20 de julio, por el que se aprueba el Reglamento para la
ejecución de la ley 20/1986, básica de residuos tóxicos y peligrosos.
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I.3 Ámbito de aplicación
El Plan de Gestión de Residuos de Construcción y Demolición, según la Orden
2690/2006, de 28 de Julio, de la Consejería de Medioambiente y Ordenación del
Territorio por la que se regula la gestión de los residuos de construcción y demolición
en la Comunidad de Madrid, establece el marco de gestión de los residuos incluidos
en la definición del artículo 1.
A los efectos de esta Orden se definen como residuos de construcción y demolición
los residuos de naturaleza fundamentalmente inerte generados en obras de
excavación, nueva construcción, reparación, remodelación, rehabilitación y demolición,
incluidos los de obra mayor y reparación domiciliaria. La orden los agrupa en dos
niveles:
Residuos de construcción y demolición de Nivel I: Residuos generados por el
desarrollo de las obras de infraestructura de ámbito local o supramunicipal
contenidas en los diferentes planes de actuación urbanística o planes de
desarrollo de carácter regional, siendo resultado de los excedentes de
excavación de los movimientos de tierra generados en el transcurso de dichas
obras. Se trata, por tanto, de las tierras y materiales pétreos, no contaminados,
procedentes de obras de excavación.
Residuos de construcción y demolición de Nivel II: Residuos generados
principalmente en las actividades propias del sector de la construcción, de la
demolición, de la reparación domiciliaria y de la implantación de servicios
(abastecimiento y saneamiento, telecomunicaciones, suministro eléctrico,
gasificación y otros).
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Demolición para la construcción de una planta de
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I.4
Objeto del Plan de Gestión de Residuos de Construcción y Demolición
Este Plan de Gestión de Residuos de Construcción y Demolición tiene por objeto
establecer el marco de la gestión técnica de los residuos para alcanzar una gestión
sostenible de los residuos. Para ello, se establecen los siguientes objetivos:
•
Aumentar los porcentajes de minimización y valorización de residuos
generados.
•
Disminuir los porcentajes de eliminación.
•
Obtener un profundo conocimiento de la producción y gestión de los residuos
para una adecuada evaluación de los mismos, y el consiguiente control del
cumplimiento de objetivos cualitativos y cuantitativos.
•
Se buscará la concienciación y sensibilización medioambiental:
o
Mediante la adopción y promoción de prácticas más sostenibles de
consumo de recursos y de gestión de residuos.
o
Informando y asesorando a los agentes implicados.
En el Plan se identifican los distintos residuos que se generarán en la construcción del
la planta de compactación proyectada y se realiza una estimación de su cantidad. Se
definen las medidas genéricas de prevención y manejo que se adoptarán, el destino
previsto para los residuos, así como los costes derivados de su gestión.
I.5 Justificación del Plan de Gestión de Residuos de Construcción
y
Demolición
El reciente Real Decreto 105/2008, de 1 de Febrero, tiene por objeto establecer el
régimen jurídico de la producción y gestión de los residuos de construcción y
demolición, con el fin de fomentar, por este orden, su prevención, reutilización,
reciclado y otras formas de valorización, asegurando que los destinados a operaciones
de eliminación reciban un tratamiento adecuado, y contribuir a un desarrollo sostenible
de la actividad de construcción.
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Esta norma de carácter básico sobre la producción y gestión de RCDs es la referencia
que se debe tener en cuenta en aquellas comunidades autónomas en las que no
existe una legislación específica respecto a este tema.
La obra de objeto del presente Plan de Gestión debe aplicar las disposiciones de la
Orden 2690/2006, de 28 de Julio, ya que es la normativa autonómica específica
relativa a los RCDs en la Comunidad de Madrid.
Entre las obligaciones impuestas por dicha Orden está la de incorporar en el proyecto
técnico y junto a la solicitud de licencia de obra un Plan de Gestión de los Residuos de
Construcción y Demolición que se producirán en ésta, identificando los distintos
residuos que se generarán en la construcción de una planta de compactación bajo
rasante y realizando una estimación de las cantidades generadas.
I.6 Descripción de la parcela (Situación, forma, etc.)
La parcela está situada en la C/ Velero, 2, dentro del Área de Desarrollo Nº16, Valle de
la Mina y Huerto del Parrito, en el municipio de Majadahonda, (Madrid).
COORDENADAS DEL EMPLAZAMIENTO
UTM
X
425.917
HUSO
Y
4.479.570
30
DATOS GENERALES DE LA FINCA EN EL REGISTRO CATASTRAL
Superficie (m2)
Referencia Catastral
100.849
Tipo:
6094501VK2769S0001YU
Especiales
La parcela es una manzana completa, propiedad del Ayuntamiento de Majadahonda,
que cuenta en su interior con actuaciones de urbanización y jardinería, pero que está
libre de edificaciones. La manzana aproximadamente triangular, limita al suroeste con
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la C/ Velero, al sureste con la carretera de Boadilla del Monte (M-516), y al nordeste
con unos terrenos sin urbanizar por donde transcurren instalaciones del Canal de
Isabel II. Según los datos de la Dirección General del Catastro la superficie total de la
parcela es de 100.849 m2, aunque el presente proyecto de edificación solo se
contempla una superficie total construida bajo rasante de 1.086,24 m2.
I.7 Modelo de Gestión
A continuación se muestra un gráfico de gestión general de los residuos generados en
la obra:
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II- MEMORIA TÉCNICA
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II.1 Identificación de residuos
De conformidad con la Orden MAM/304/2002 del Ministerio de Medioambiente donde
se establece la Lista Europea de Residuos, la relación de residuos que se prevé
generar, identificados según el código L.E.R., se muestra a continuación:
Identificación de residuos. Códigos L.E.R.
RCDs Naturaleza No Pétrea
L.E.R.
Madera
17 02 01
Cobre, bronce, latón
17 04 01
Aluminio
17 04 02
Hierro y Acero
17 04 05
Estaño
17 04 06
Metales mezclados
17 04 07
Papel y Cartón
20 01 01
Plástico
17 02 03
Vidrio
17 02 02
Residuos Biodegradables
20 02 01
RCDs Naturaleza Pétrea
L.E.R.
Tierras y piedras distintas de las especificadas en código 17 05 03
17 05 04
Hormigón
17 01 01
Mezcla de hormigón, ladrillos, tejas y materiales cerámicos distinta del
Código 17 01 06
17 01 07
Ladrillos
17 01 02
Tejas y Materiales Cerámicos
17 01 03
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Identificación de residuos. Códigos L.E.R.
RCDs Residuos Potencialmente Peligrosos
L.E.R.
Absorbente contaminados (trapos…)
15 02 02
Tubos fluorescentes
20 01 21
Envases vacíos de plástico contaminados
15 01 10
Envases vacíos metálicos contaminados
15 01 10
Baterías y pilas
16 06
Aceites usados
13 02 05
Restos de soldadura
12 01 20
Aerosoles vacíos
15 01 11
Adhesivos, colas, resinas y sellantes al disolvente pastosos
08 04 09
II.2 Estimación de la cantidad generada de cada tipo de residuo
Para optimizar la gestión de los RCDs generados se deben cuantificar los materiales y
elementos que se estima se van a generar.
Cada tipología de obra (infraestructuras de carreteras, demolición de nave industrial,
demolición de obra de fábrica, construcción de obra nueva, etc.) va a producir un
distinto porcentaje de RCD que se debe cuantificar con relación a sus posibilidades de
reciclado o valorización y orientado a su destino final.
Para la construcción de la planta de compactación se han estimado las cantidades
previsibles de RCDs producidos en base a los datos obtenidos anteriormente en la
caracterización de obras del mismo tipo .
Se realiza la estimación de la cantidad de cada tipo de residuo generado en la obra en
metros cúbicos y toneladas. En primer lugar se estima el volumen aparente2 de
residuos generados por metro cuadrado construido.
2
Ver glosario
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A partir de este volumen se obtiene el peso estimado de estos residuos, utilizando los
valores de densidad tipo de cada residuo (generalmente entre 1,5 y 0,5 t/m3) y
eliminando el índice de vacíos que habitualmente contiene el volumen aparente
calculado.
Estimación de la cantidad generada de cada tipo de residuo
La superficie construida para el establecimiento industrial bajo rasante proyectado es
de 1.086,24 m2.
3
2
EVALUACIÓN TEÓRICA DEL VOLUMEN APARENTE (M /M ) Y PESO DE RCDs
TIPOLOGÍA DE OBRA: CONSTRUCCIÓN DE OBRA NUEVA DE EDIFICACIÓN
Edificio: Establecimiento industrial bajo rasante para planta de compactación de R.S.U.
2
Superficie construida (m c): 1.086,24
3
MATERIAL
M /M
2
M
3
Densidad
3
tipo (T/m )
Toneladas
RCDs: Naturaleza Pétrea
Cerámicos
Hormigón
Pétreos
Mezcla de hormigón, ladrillos, tejas y materiales cerámicos
0,015
0,01
0,002
0,01
16,3
10,9
2,2
10,9
1,5
1,5
1,5
1,5
24,45
16,35
3,3
16,35
0,001
0
0,001
0,001
0,001
0,001
0,01
1,1
0
1,1
1,1
0
1,1
10,9
0,6
1,5
0,9
1,5
1
0,9
0,5
0,66
0
0,99
1,65
0
0,99
5,45
0,003
3,3
0,5
1,65
0,055
58,9
RCDs: Naturaleza No Pétrea
Madera
Vidrio
Plástico
Metales
Cableado eléctrico
Papel - cartón
Desechables
RCDs: Residuos potencialmente peligrosos
-TOTAL ESTIMACIÓN
71,84
2
M de uralita = 0
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Teniendo en cuenta los datos proporcionados, el volumen de tierras de excavación
previsto será el correspondiente a las tres plantas bajo rasante que se van a construir,
y a las rampas de acceso de camiones a la instalación. En función de la superficie que
van a ocupar y de las profundidades que se alcanzarán se estima el siguiente volumen
de tierras de excavación:
M3 tierras de excavación
4.746,4
III.3 Medidas de prevención de residuos
La jerarquía que propone la Comunidad Europea sobre las acciones que se han de
llevar a cabo en la gestión de los residuos, también reflejada en el art.11 de la Ley
10/98, de Residuos, determina que las prioridades principales son la prevención y la
minimización.
De
esta
forma
se
conseguirán,
además,
otras
mejoras
medioambientales, como la reducción del transporte de los sobrantes al vertedero o a
las plantas de reciclaje, con la consiguiente disminución de la contaminación
atmosférica y del consumo de energía.
Por minimización, se entiende el conjunto de acciones organizativas, operativas y
tecnológicas necesarias para disminuir la cantidad y/o peligrosidad de los residuos,
mediante la reducción y reutilización de los mismos en origen. Así pues, es
imprescindible que la primera acción asociada a la gestión de los residuos sea intentar
reducir su volumen en el emplazamiento donde se han generado.
El primer paso para optimizar la gestión de los residuos es concebir la construcción
con criterios medioambientales, esto es, organizar las operaciones de construcción,
analizar la situación e identificar donde se puede evitar la producción de residuos
mediante un mejor almacenamiento de los materiales que llegan a la obra, y la
reutilización o el reciclaje de los medios y materiales sobrantes que se emplearán en
su ejecución. De esta manera se tratará de que la cantidad de residuos que vaya a
parar al vertedero sea mínima.
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Teniendo en cuenta la definición de minimización ofrecida, los criterios para reducir los
residuos que a continuación se exponen están centrados en la reutilización y reciclaje
de materiales. Por lo tanto, y siempre que sea posible, se cumplirán las siguientes
premisas:
Desde la fase de proyecto se preverán qué espacios de la obra o de la
urbanización podrán acoger materiales reciclados o reutilizados.
La cantidad de materiales comprados se debe ajustar a las necesidades reales
de ejecución de la obra. De este modo se originarán menos residuos.
Se recomienda que todos los residuos que se producen en la obra se separen
de manera que se facilite su valorización mediante la reutilización o el reciclaje.
Utilizar de forma preferente productos en los que la materia prima contenga
residuos de construcción en lugar de materiales nuevos.
Con un correcto y eficaz almacenamiento de los materiales, además de ahorrar
tiempo y dinero, se desperdician menos materias primas.
Se recomienda que los proveedores de materiales y productos deberán
recoger sus propios embalajes de la obra.
III.4 Medidas de separación de los residuos en obra
Con el fin de cumplir los objetivos establecidos en el Plan Nacional de Gestión de
RCDs, se realizará una separación en origen de los residuos generados en la obra
facilitando la gestión de los mismos una vez depositados en las plantas de valorización
y reciclaje.
Los residuos generados deben separarse en dos grandes grupos generales cuyo
destino será el más adecuado en función de sus características:
Peligrosos.
Inertes.
Orgánicos
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Cada uno de estos grupos generales incluirá residuos de distinta naturaleza (ver
apartado III.2 Identificación de Residuos, código L.E.R.) que serán almacenados y
clasificados en la misma obra.
Para hacer efectiva la separación se habilitarán dos zonas para el acopio diferenciado
de los residuos peligrosos y el resto de residuos, en cada una de las cuales se
depositará cada tipo de residuo, separado por tipos o características, en contenedores
específicos con la correspondiente identificación, constituyendo esta acción una
primera medida de gestión de los residuos generados.
III.5 Previsión de operaciones de reutilización. Clasificación del suelo.
En los Planes de gestión de RCDs se contempla la reutilización como una de las
principales acciones, junto con el reciclado y la valorización, para realizar una correcta
gestión de los residuos.
Los objetivos perseguidos con las operaciones de reutilización3 son:
Disminuir la generación de residuos.
Aprovechar los residuos como recursos y ahorrar materias primas.
Promocionar herramientas de gestión ambiental que permitan una disminución
progresiva del impacto de los residuos generados sobre el medio ambiente, el
fomento de las tecnologías limpias y la gestión avanzada de los residuos.
Los residuos potencialmente reutilizables en esta obra son las tierras de excavación y
vaciado. Para determinar si son aptas para trabajos de relleno, nivelación del terreno u
otras operaciones de reutilización, se han valorado las muestras de material
disponibles, correspondientes a cotas entre 0 y -12 metros de profundidad.
Se han seleccionado estas muestras debido a que las plantas bajo rasante
proyectadas alcanzan una cota de -9,37 m y por lo tanto el material de excavación que
posteriormente se podrá reutilizar in situ pertenecerá a los 9 primeros metros de
profundidad.
3
Ver glosario
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Demolición para la construcción de una planta de
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Según los resultados de los ensayos de laboratorio realizados sobre las muestras
recogidas en el estudio geotécnico, los suelos de la parcela se pueden clasificar como
Tolerables4. Para llegar a esta conclusión se han estudiado los siguientes parámetros
disponibles para las muestras:
Límite líquido
Límite plástico
Índice de plasticidad
Cernido por el tamiz 2 UNE; 0,080 UNE y 0,40 UNE
Hinchamiento libre
El estudio geotécnico no se han realizado ensayos para determinar el contenido en
materia orgánica y sales solubles.
SONDEO
1
1
1
MUESTRA
M1
M2
M4
COTA (m)
3,60
6,60
12,00
11,60
Tamiz UNE 2
87,80
90,4
86,59
-
-
Tamiz UNE 0,40
45,15
44,44
58,81
-
-
Tamiz UNE 0,08
23,58
21,14
32,04
-
-
Límite Líquido
32,59
33,84
33,02
-
< 65 %
Límite Plástico
19,18
19,74
17,87
-
-
Índice Plasticidad
13,41
14,10
15,15
-
-
Contenido Humedad
11,67
10,54
8,79
-
-
Índice Colapso
-
-
-
-
< 1%
Hinchamiento libre
-
-
-
0,125
< 3%
-
-
-
-
< 2%
-
-
-
-
< 1%
Contenido Mat.
Orgánica
Contenido Sales
solubles
1
SUELOS
TOLERABLES
En función de la clasificación asignada a los suelos de la parcela, parte de la tierra de
excavación podrá ser reutilizada en la obra. Se prevé la excavación de zanjas para la
4
Según Art. 330, Orden FOM/1382/02, de 16 de Mayo
Plan de Gestión de Residuos de Construcción y
Demolición para la construcción de una planta de
compactación de residuos domésticos urbanos.
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instalación de las redes de abastecimiento y saneamiento. Una vez instaladas las
tuberías se cubrirán las zanjas con el material procedente de la excavación y se
compactará. Del mismo modo se podrán utilizar materiales de excavación sobrantes
para trabajos de nivelación en el interior de la finca, formación de terraplenes o taludes
en el caso de que fuera necesario.
Según el estudio geotécnico no existe capa de tierra vegetal en la parcela estudiada.
El material restante es material potencialmente reutilizable como material de relleno
para la restauración de zonas degradadas (graveras, canteras, minas…), el sellado de
vertederos, acondicionamiento de canalizaciones, regularización de la topografía de un
terreno, etc.
III.6 Destino previsto para los residuos no reutilizables
El reciclado5 y valorización de los materiales presentes en los RCDs sólo tiene sentido
si existe un marco legal que propicie su utilización y haya un mercado efectivo para la
introducción de estos materiales nuevamente en los circuitos económicos.
Los mercados potenciales existentes para la venta de RCDs de naturaleza pétrea
reciclados son:
Bases
y
sub-bases
para
firmes
de
carreteras
de
segundo
orden,
urbanizaciones, polígonos industriales y otras áreas de expansión.
Áridos o residuos de ladrillos para drenajes, rellenos de zanjas y firmes de
caminos.
Áridos o residuos de ladrillos para lechos de patios y azoteas.
Áridos para hormigones pobres.
Piedra labrada, fundamentalmente granito y basalto (adoquines, bordillos,
losas, jambas, dinteles, etc.).
Además, teniendo en cuenta los avances en los procesos de reciclaje del resto de los
elementos pertenecientes al grupo de los residuos inertes, existe un mercado
emergente en cuanto a residuos de chatarra férrica, vidrio, papel, plástico, etc,
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Plan de Gestión de Residuos de Construcción y
Demolición para la construcción de una planta de
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recuperados que son vendidos a las empresas que los demandan para introducirlos de
nuevo en sus procesos de producción o en sus actividades.
Residuos no reciclables en obra
En la presente obra no se prevé el uso de residuos reciclado in situ, por lo que los
residuos generados en la obra serán transportados a una planta de reciclaje donde
recibirán el tratamiento adecuado para su posterior incorporación a procesos
productivos o de restauración en el caso de los materiales pétreos.
Hormigón y obra de fábrica
Serán transportados a una PLANTA DE RCDs. Estos materiales están constituidos por
sustancias naturales, de modo que cada tonelada de residuos de hormigón que sea
reciclado -por ejemplo, como árido para un hormigón nuevo supone un ahorro
aproximado de una tonelada de árido natural, que debería ser extraído de las
canteras, con los consiguientes impactos ambientales y en el paisaje.
Así pues, reciclar los residuos de obra de fábrica y hormigón puede reportar ahorro de
dinero y, sin duda, beneficiosos efectos ambientales.
Además de reciclar estos residuos para la obra de edificación, también pueden ser
empleados en la formación del paisaje de zonas ajardinadas comunes. El uso
intensivo en obras civiles es igualmente otra buena opción: por ejemplo, en sub-bases
de carreteras y para rellenar terraplenes. Todas estas prácticas ahorran los áridos
naturales y reducen los impactos asociados al transporte de los residuos al vertedero.
Madera
Toda la madera que se genere en la obra será transportada a un gestor autorizado
para la recuperación de este material.
Los residuos de madera presentan diversas posibilidades de valorización: desde la
reutilización y reciclaje al aprovechamiento energético.
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En nuestro país no existe una tradición basada en la utilización de la madera como
material de construcción tan extendida en otros países del centro o norte de Europa,
por lo que el volumen que se genera no es importante procediendo principalmente de
palets, tableros, etc.
Las maderas suelen triturarse y formar parte del relleno de tableros de viruta
aglomerada que se emplean en diversas aplicaciones, o suelen utilizarse como
combustible.
Dos circunstancias afectan negativamente las posibilidades de valorización de los
residuos de madera:
La madera de construcción es habitualmente tratada con productos que son
nocivos para la salud, y por lo tanto convierten los residuos de madera en un
material peligroso para determinadas aplicaciones.
La inclusión de piezas metálicas en la madera -clavos, tornillos o grapasdificulta la recuperación y transformación de los residuos de madera porque
estas piezas son difíciles de extraer y podrían llegar a dañar la maquinaria de
reciclado
Papel, cartón, vidrio y plásticos
Todos los residuos incluidos dentro de alguno de estos tipos serán destinados al
reciclaje por Gestores Autorizados de Residuos no peligrosos que los trataran para
obtener un material comercializable y útil como materia prima en diversos procesos.
De forma general el papel y cartón suele emplearse de nuevo en la fabricación de
papel, el vidrio en la fabricación de envases de vidrio, y el plástico en la fabricación de
envases.
Metales
Todos los residuos metálicos serán recogidos por un Gestor Autorizado para su
posterior tratamiento en una Planta de Reciclaje.
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Residuos peligrosos
Todos los residuos caracterizados como peligrosos serán retirados por Gestores
Autorizados de Residuos Peligrosos para su transporte a Plantas de Tratamiento de
Residuos Peligrosos en las que recibirán el tratamiento adecuado según sus
características y naturaleza.
Residuos desechables
Todos aquellos residuos no peligrosos que por razones diversas no puedan ser
valorizados (reciclados) y que constituyan el rechazo resultante de la obra serán
depositados en un vertedero controlado cumpliendo los requisitos que establece el
Real Decreto 1481/2002, 27 de diciembre, “sobre la eliminación de residuos por
depósito en vertederos”.
III.7 Valoración del coste previsto de la gestión de los RCDs
Los precios de gestión para cada tipo de residuo dependen principalmente del gestor
contratado y de la distancia del transporte. Se pueden establecer unos precios medios
de gestión orientativos según los RCDs sean tierras y pétreos procedentes de la
excavación o escombros de construcción o demolición.
Materiales pétreos, no pétreos y potencialmente peligrosos de construcción y
demolición: 10 €/m3.
Tierras y materiales pétreos de excavación: 4 €/m3.
De este modo podríamos hacer una estimación de los costes en el cuadro que se
muestra a continuación:
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Coste de tratamiento de los RCDs
Tipo de RCD
M
3
Precio
gestión
(€/m3)
Importe
(€)
RCDs procedentes de construcción o demolición
RCD de naturaleza pétrea
40,3
10
403
RCD de naturaleza no pétrea
15,3
10
153
RCD potencialmente peligroso
3,3
10
33
4
18.985,6
RCDs procedentes de excavación
Tierras y pétreos de la excavación
4.746,4
Total
19.574,6
III.8 Prescripciones a incluir en el Pliego de Prescripciones Técnicas
De forma general se citan, a continuación, una serie de prescripciones que deberán
ser tenidas en cuenta para la ejecución de la obra, con respecto al almacenamiento,
manejo, separación y gestión de los residuos en la obra:
Escombros: para el depósito temporal de escombros se habilitará una zona de
la obra, que habrá sido previamente determinada. Dicha zona estará
señalizada y debidamente separada del resto de residuos, particularmente de
los que sean potencialmente tóxicos o peligrosos.
Maderas, plástico, vidrio, etc.: se depositarán en contenedores habilitados
para tal efecto, debidamente identificados y separados del resto de residuos
generados en la obra, especialmente de los que por sus características, sean
potencialmente tóxicos y peligrosos. Será conveniente utilizar un sistema de
deposición capaz de reducir el volumen de los mismos ya que de otro modo
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estamos almacenando y transportando aire, así se optimiza el almacenamiento
de los residuos para facilitar su transporte. Asimismo será necesario que en los
contenedores figuren claramente especificados los materiales que debe alojar
cada uno de ellos.
Residuos peligrosos: se habilitará un punto limpio para su almacenamiento
evitando el contacto con otro tipo de residuos. Se gestionarán conforme a la
legislación vigente de carácter tanto autonómico como nacional y comunitario.
Sólo podrán ser gestionados mediante gestores autorizados evitando su
almacenamiento por un tiempo superior a seis meses.
Se mantendrán almacenados en contenedores específicos debidamente
etiquetados que permanecerán en todo momento debidamente cerrados.
Residuos Urbanos: se gestionarán de acuerdo a la legislación vigente,
depositándose en contenedores previamente señalizados destinados para tal
uso. También podrían emplearse los contenedores del ayuntamiento situados
en la las proximidades de la obra.
Además, los contenedores de residuos deberán estar correctamente
etiquetados de modo que se identifique el tipo de residuo (especialmente para
residuos peligrosos), período de almacenamiento y datos de la empresa tales
como la razón social o el teléfono.
Estos contenedores con residuos sólo podrán transportarse por transportistas
autorizados debidamente inscritos en el registro de la Comunidad Autónoma
correspondiente. En caso de duda ante la gestión o almacenamiento de
cualquier tipo de residuo generado se recurrirá a la legislación vigente.
Las zonas de almacenamiento deberán estar lo más próximas posible a los
accesos. No se debe proceder a almacenamientos intermedios: cuantos menos
movimientos se lleven a cabo desde el lugar en el que se originen los residuos
hasta su deposición en el contenedor, mejor.
Se ha de impedir que un eventual vertido de estos materiales llegue al suelo,
ya que de otro modo causaría su contaminación. Por lo tanto, será necesaria
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una impermeabilización del mismo mediante la construcción de soleras de
hormigón o zonas asfaltadas, o bien situar las zonas de acopio sobre terrenos
impermeabilizados.
Es necesario describir en un “formulario” los residuos almacenados y su
transporte, para así controlar su movimiento desde el lugar en que han sido
generados hasta su destino final. Este “formulario” puede ser el albarán
facilitado por los transportistas (el que certifica el vertedero o el gestor de
residuos) o un documento específico realizado por la empresa constructora o
de derribo donde figure el tipo de residuo, la cantidad y el destino final. Se debe
comprobar que los residuos han sido gestionados tal correctamente y que del
proceso se han ocupado entidades autorizadas por las entidades competentes
de cada Comunidad autónoma.
III.9 Plano de instalaciones previstas
Se adjunta al presente Plan de Gestión de RDCs,
el plano de las instalaciones
previstas para el almacenamiento, manejo y, en su caso, otras operaciones de gestión
de los residuos de construcción y demolición en la obra (ver Anexo I).
En dicho plano se especifica la situación de:
•
Acopio de RCDs de naturaleza pétrea generados en la obra – Escombros
(hormigón y obra de fábrica).
•
Zona de contenedores de RCDs de naturaleza no pétrea (materiales
reciclables)
•
Zona de almacenamiento de residuos tóxicos y peligrosos.
•
Zona de almacenamiento de residuos orgánicos.
El plano de Instalaciones previstas podrá ser modificado según avance la obra para
facilitar y mejorar, tanto el desarrollo de los trabajos, como el manejo, clasificación y
almacenamiento de los residuos, cumpliendo siempre con las prescripciones técnicas
incluidas en el presente Plan de Gestión de RCDs y con las obligaciones impuestas
por la legislación vigente.
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III- GLOSARIO
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A continuación se definen algunos términos utilizados en el presente Estudio:
•
Residuos inertes: Aquellos residuos no peligrosos que no experimentan
transformaciones físicas, químicas o biológicas significativas. Los residuos
inertes no son solubles ni combustibles, ni reaccionan física ni químicamente ni
de ninguna otra manera, ni son biodegradables, ni afectan negativamente a
otras materias con las cuales entran en contacto de forma que puedan dar
lugar a contaminación del medio ambiente o perjudicar a la salud humana. La
lixiviabilidad total, el contenido de los contaminantes de los residuos y la
ecotoxicidad del lixiviado deberán ser insignificantes, y en particular, no
deberán suponer un riesgo para la calidad de las aguas superficiales y/o
subterráneas.
•
Residuos de Construcción y Demolición (RCD), art. 1 Orden 2609/2006, de
28 de Julio: se definen como residuos de construcción y demolición los
residuos de naturaleza fundamentalmente inerte generados en obras de
excavación, nueva construcción, reparación, remodelación, rehabilitación y
demolición, incluidos los de obra mayor y reparación domiciliaria. La orden los
agrupa en dos niveles:
o
Residuos de construcción y demolición de Nivel I: Residuos generados
por el desarrollo de las obras de infraestructura de ámbito local o
supramunicipal contenidas en los diferentes planes de actuación
urbanística o planes de desarrollo de carácter regional, siendo resultado
de los excedentes de excavación de los movimientos de tierra
generados en el transcurso de dichas obras. Se trata, por tanto, de las
tierras y materiales pétreos, no contaminados, procedentes de obras de
excavación.
o
Residuos de construcción y demolición de Nivel II: Residuos generados
principalmente en las actividades propias del sector de la construcción,
de la demolición, de la reparación domiciliaria y de la implantación de
servicios
(abastecimiento
y
saneamiento,
telecomunicaciones,
suministro eléctrico, gasificación y otros).
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•
Residuo, art. 3.a, Ley 10/1998, de 21 de Abril, de Residuos: cualquier
sustancia u objeto perteneciente a alguna de las categorías que figuran en el
anejo de esta Ley de Residuos, del cual su poseedor se desprenda o del que
tenga la intención u obligación de desprenderse. En todo caso, tendrán esta
consideración los que figuren en el Catálogo Europeo de Residuos (CER),
aprobado por las Instituciones Comunitarias.
•
Obra de construcción o demolición, R.D.105/2008, de 1 de febrero: la
actividad consistente en:
o
La construcción, rehabilitación, reparación, reforma o demolición de un
bien inmueble, tal como un edificio, carretera, puerto, aeropuerto,
ferrocarril, canal, presa, instalación deportiva o de ocio, así como
cualquier otro análogo de ingeniería civil.
o
La realización de trabajos que modifiquen la forma o sustancia del
terreno o del subsuelo, tales como excavaciones, inyecciones,
urbanizaciones u otros análogos, con exclusión de aquellas actividades
a las que sea de aplicación la Directiva 2006/21/CE del Parlamento
Europeo y del Consejo, de 15 de marzo, sobre la gestión de los
residuos de industrias extractivas.
Se considerará parte integrante de la obra toda instalación que dé servicio
exclusivo a la misma, y en la medida en que su montaje y desmontaje tenga
lugar durante la ejecución de la obra o al final de la misma, tales como:
o
Plantas de machaqueo,
o
plantas de fabricación de hormigón, grava-cemento o suelo-cemento,
o
plantas de prefabricados de hormigón,
o
plantas de fabricación de mezclas bituminosas,
o
talleres de fabricación de encofrados,
o
talleres de elaboración de ferralla,
o
almacenes de materiales y almacenes de residuos de la propia obra y
o
plantas de tratamiento de los residuos de construcción y demolición de
la obra.
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•
Rechazo o Desechable: Fracción de RCD no susceptible de valorización o
aprovechamiento alguno, cuyo destino sea la eliminación en depósito
controlado.
•
Restauración: Conjunto de actuaciones encaminadas a restituir un espacio
degradado a su estado original o a proceder a su integración ambiental y
paisajística.
•
Acondicionamiento o relleno: Alteración morfológica de un terreno con fines
diferentes a la restauración mediante el aporte y explanación de tierras exentas
de contaminación procedentes de obras de excavación o de material inerte
recuperado.
•
Depósito de RCD: Instalación de eliminación de residuos inertes no
valorizables mediante su depósito subterráneo o en superficie, por periodos de
tiempo superiores a 2 años. Quedan exentos de esta consideración los
espacios que son objeto de restauración o acondicionamiento con tierras
procedentes de obras de excavación o con material inerte recuperado.
•
Planta de RCDs: Instalación privada o pública destinada a la clasificación y
valorización de los RCD reduciendo su tamaño y eliminando las impurezas de
manera que se obtenga un producto final apto para la venta como áridos para
la construcción.
•
Reutilización: el empleo de un producto usado para el mismo fin para el que
fue diseñado originariamente.
•
Reciclado: la transformación de los residuos, dentro de un proceso de
producción, para su fin inicial o para otros fines, incluido el compostaje y la
biometanización, pero no la incineración con recuperación de energía.
•
Valorización: todo procedimiento que permita el aprovechamiento de los
recursos contenidos en los residuos sin poner en peligro la salud humana y sin
utilizar métodos que puedan causar perjuicios al medio ambiente. En todo
caso, estarán incluidos en este concepto los procedimientos enumerados en el
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anexo II.B de la Decisión de la Comisión (96/350/CE) de 24 de mayo de 1996,
así como los que figuren en una lista que, en su caso, apruebe el Gobierno.
•
Eliminación: todo procedimiento dirigido, bien al vertido de los residuos o bien
a su destrucción, total o parcial, realizado sin poner en peligro la salud humana
y sin utilizar métodos que puedan causar perjuicios al medio ambiente. En todo
caso, estarán incluidos en este concepto los procedimientos enumerados en el
anexo IIA de la Decisión de la Comisión (96/350/CE) de 24 de mayo de 1996,
así como los que figuren en una lista que, en su caso, apruebe el Gobierno.
•
Almacenamiento: el depósito temporal de residuos, con carácter previo a su
valorización o eliminación, por tiempo inferior a dos años o a seis meses si se
trata de residuos peligrosos, a menos que reglamentariamente se establezcan
plazos inferiores
•
Volumen aparente: Criterio de evaluación seguido para la estimación de la
cantidad de residuos generados en la obra que representa el volumen total de
la masa de residuos con los espacios vacíos.
Madrid, Enero de 2009.
El Ingeniero autor del Proyecto
D. Rodolfo Campiña Díaz-Agero
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IV- ANEXOS
IV.1 Anexo 1: Plano de instalaciones previstas
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