Congreso Iberoamericano de las Lenguas en la Educación y en la Cultura / IV Congreso Leer.es Salamanca, España, 5 al 7 de septiembre de 2012 Una experiencia para el desarrollo de habilidades comunicativas esenciales, a través de la música y la literatura, con trabajadores de apoyo a la educación María Luisa Gómez García Sección: Experiencias/proyectos de lectura y escritura que involucren a la comunidad educativa del centro escolar 1 Instituto Superior de Investigación y Docencia para el Magisterio (ISIDM) de la Secretaría de Educación Jalisco, México. [email protected] 1 Resumen Con esta participación se tiene contemplado compartir una experiencia de trabajo para estimular las prácticas de lectura y escritura, a través de la música y la literatura. En primer término se plantea una aproximación teórica sobre las más recientes tendencias en torno a la relación entre arte y educación. A partir de estas reflexiones, se da cuenta de una experiencia educativa para el desarrollo de habilidades comunicativas esenciales (escuchar, hablar, leer y escribir), llevada a cabo con trabajadores de apoyo a la educación (intendentes y personal administrativo), en una institución educativa de Jalisco. El trabajo didáctico con los compañeros tuvo la intención de superar problemáticas referidas a prácticas lectoras y escriturales deficientes, a través de la sensibilización por la música y la literatura para un aprendizaje lúdico, que trascendiera a la diversidad de niveles de formación de los participantes: Algunos de ellos, recién habían aprendido a leer y a escribir y otros, estudiaban el nivel medio superior en modalidad abierta. Entre las estrategias se encuentran: Escuchar música para propiciar la relajación y para crear atmósferas propicias para la comunicación y la expresión de las emociones con la escritura de textos en el contexto imaginario. Escuchar poesía en voz de autores mexicanos y relatos de tradición oral. En el habla: Leer en voz alta y contar relatos tradicionales, aprendidos de los ancestros, así como recuperar la historia de vida lectora, a través de la evocación de los recuerdos. En la escritura: Aprender reglas ortográficas y de acentuación, con canciones y juegos de la lírica infantil mexicana y con instrumentos de percusión para acompañar la poesía de Nicolás Guillén; Reconocer elementos básicos de redacción y sintaxis, interviniendo un cuento de Julio Cortázar y componer “calaveritas”, rimas tradicionales mexicanas de Día de muertos. En la lectura: Iniciar con relatos cortos de autores latinoamericanos como Clarisa Pinkola y, para reflexionar y la elección de una novela u otro libro de su interés, con el cual se constituyó un círculo de lectura. 1 Esta participación tiene el propósito de contribuir a la reflexión sobre el papel del arte en la formación integral de las personas y la necesidad de propiciar condiciones para la vinculación entre teoría y práctica en el ámbito de la escuela. En primer término se plantea una aproximación teórica sobre las más recientes tendencias en torno a la relación entre arte y educación. Particularmente, se asumen las aportaciones del arte en la conformación del pensamiento artístico y sus componentes: sensibilidad estética, percepción y creatividad. A partir de estas reflexiones, se da cuenta de una experiencia educativa para el desarrollo de habilidades comunicativas esenciales (escuchar, hablar, leer y escribir), a través del arte, llevada a cabo con trabajadores de apoyo a la educación (intendentes y personal administrativo), en una institución educativa de Jalisco. El trabajo didáctico con los compañeros tuvo la intención, en un primer momento, de diseñar un taller para motivar a la lectura, pero luego de un trabajo muy básico de indagación inicial, nos dimos cuenta que no sólo se trataba de superar problemáticas referidas a lectura, sino también a la producción de textos. Confiamos entonces, en las aportaciones de la música y la literatura para promover una experiencia lúdica y significativa que trascendiera a la diversidad de niveles de formación de los participantes: un total de veintidós compañeros adultos y un menor de edad, entre los cuales unos recién habían aprendido a leer y a escribir, otros cursaban la Educación Básica y, los menos, estudiaban el nivel medio superior en modalidad abierta. Ocasionalmente, solían asistir al Taller, una niña de nueve años y un adolescente que iban con sus familiares. La idea nació hace tiempo, en enero del año pasado, con el propósito de generar un programa de motivación a la lectura, entre los compañeros de trabajo. Antes de diseñarlo, fue necesario identificar sus necesidades, por lo que se aplicó un cuestionario que permitiera detectar los conceptos sobre la lectura que permean en sus prácticas lectoras y su discurso, sus experiencias con los libros y sus hábitos lectores. Se trataba de hacer un primer levantamiento de las características del grupo, para estar en condiciones de marcar posibles rutas de trabajo. Con las respuestas del cuestionario, se pudo contar con un diagnóstico que además nos mostró también, como ya se comentó, la necesidad de desarrollar una propuesta que además de promover la lectura, impulsara también la producción de textos. Fue así que se diseñó un Taller breve, de sólo diez sesiones, para desarrollarse en el horario de trabajo, los jueves, de 12:00 a 13:00 hrs. para los compañeros del turno matutino y de 17:00 a 18:00 hrs., para los del turno vespertino. 2 Metodológicamente, utilizamos el Portafolio, para el acopio de los textos que cada compañero escribiera. Así, cada persona tuvo uno donde tomaba apuntes, escribía o dibujaba. Con este instrumento fue posible registrar e ir evaluando los trabajos: Los portafolios: “Son los museos de nuestro trabajo y nuestro pensamiento, exhiben nuestros éxitos, experimentos y sueños. Los portafolios son espejos, aunque sean deformantes, de una realidad en evolución. Nos muestran lo que queremos ver y lo que querríamos no ver. Son un reflejo del yo, los portafolios son un espejo profesional.” (Martín-Kniep, 2011, p.30). Se consideró valioso integrar las aportaciones que ofrece el arte, porque ayuda a: La conformación de mentes que comprendan, perciban y valoren el mundo de forma creativa, renovada y arriesgada. Impacta en el desarrollo cognitivo, emocional y social de las personas, pues no sólo afina la perspectiva estética, sino que permite aprehender la noción de diversidad y el respeto de las diferencias para la construcción de una ciudadanía intercultural. Impulsa el ejercicio permanente de la imaginación, para saber enfrentar con creatividad y responsabilidad la incertidumbre y desarrollar competencias para la vida. Se eligieron Literatura y Música porque, a través del eje de Apreciación artística, se propicia, además del disfrute de las obras de arte, el desarrollo de procesos cognitivos y de interpretación que se enriquecen cada vez más con nuevas experiencias que permiten la valoración del arte y la preservación de la identidad cultural. A continuación presento cómo estuvieron organizadas las sesiones y las estrategias que se emplearon para abordar los contenidos. 3 Sesión 1 El primer jueves de octubre del 2011 iniciamos nuestro taller y explicamos que el objetivo era desarrollar las cuatro Habilidades comunicativas esenciales: Hablar, escuchar, escribir y leer. Entre otras cosas, intentaríamos, les dije, a aprender a: Hablar con propiedad, a Escuchar para apreciar la literatura, a Escribir bien y de forma divertida y, sobretodo, a descubrir el gusto por la lectura. En seguida, vino una actividad de sensibilización, a la que denominé Música y palabras. Que se sustenta en las aportaciones de la música en la vida de las personas: Puede ser un medio para la relajación, desarrolla la fantasía y la imaginación, ayuda a crear atmósferas propicias para el trabajo, La comunicación y la cohesión, el reconocimiento y la catarsis de las emociones y los deseos y también, para elevar la autoestima. Se inició con la escucha de Sonidos de la naturaleza para facilitar la relajación, encontrar la armonía y el equilibrio, pero también para establecer las relaciones asociativas con la música escuchada. Fue así que, gracias al poder evocador de la música, iniciamos con el primer texto: escribir lo que cada quien imaginó al escuchar estos sonidos o, también, lo que recordó. Desde esta sesión y como un fundamento teórico esencial, retomé el concepto de connotación de Roland Barthes (1989) quien retoma, a su vez, la definición de Luis Hjelmslev, que no cita a la letra: “La connotación es un sentido segundo cuyo significante está él mismo constituido por un signo o sistema primero de significación. En tanto que la denotación señala la relación entre el signo lingüístico y el objeto real que designa, la connotación (concepto más intuitivo) se refiere a la comprensión del signo lingüístico, al conjunto de los caracteres evocados por el concepto, como pudiera ser eventualmente, una evocación estética, social, ideológica, etc.” La connotación, añade Roland Barthes, “(…) es una determinación, una relación, una anáfora, un rasgo que tiene el poder de referirse a menciones anteriores, ulteriores o exteriores, a otros lugares del texto, y a otros textos.” Es importante señalar que, a partir de entonces, cada sesión contó con un momento inicial de sensibilización, a partir de música, de aromas, de palabras, por supuesto... A esto último es a lo que habitualmente se llama “el poder evocador” de las palabras. 4 Después de la actividad de sensibilización, retomamos la explicación sobre las habilidades comunicativas esenciales y reflexionamos, en primer término, sobre el habla, a partir de los siguientes subtemas: Cuándo empezamos a hablar Por qué a veces no logramos comunicarnos Denotación y Connotación Uso de arcaísmos y modismos Sesión 2 Una semana después, iniciamos con una actividad de sensibilización, denominada: Aromas y escritura. La intención era explicar cómo, a través de nuestros sentidos, podemos evocar imágenes, recuerdos. El objetivo consistió en afinar la percepción olfativa concentrándose en las propias sensaciones y realizar descripciones. El procedimiento que seguimos consistió en trabajo de pareja: Con los ojos cerrados oler diferentes muestras aromáticas, describir cómo es el aroma y tratar de adivinar de qué especia o hierba aromática se trata. Luego, seleccionar un aroma y concentrarse en él, en qué nos hace pensar, qué recordamos con el aroma elegido. Esto lo compartieron en plenaria y escribieron un pequeño texto. Luego de la sensibilización con los aromas dedicamos el trabajo a Escuchar: acercamiento a la Literatura: Poesía en voz del autor. Escuchamos dos poemas de Jaime Sabines: Los amorosos y A la orilla del aire. Fue aquí, cuando empezamos a incorporar una imagen al inicio del poema: La primera, El beso de Gustav Klim, para el segundo texto, la imagen idílica de una niña en el campo. Dimos un espacio para volver a escuchar ambos poemas y, luego, compartimos en plenaria lo que más le impresionó de cada uno de los textos, las sensaciones que les causó un verso, la imagen que provocó. Algunos de ellos hicieron dibujos. Para cerrar y, en el convencimiento de las palabras permiten evocar mil imágenes distintas. Compartí con ellos una actividad que realicé para el Posgrado que cursé el año pasado en el Centro de Altos Estudios Universitarios de la OEI, en la Especialización de 5 Educación Artística, a partir del poema: A estas horas aquí, también de Jaime Sabines. Titulé a esta actividad: Escuchemos y veamos poesía. Sesión 3 En nuestra tercera sesión de taller, dedicada a la tercer habilidad comunicativa: leer. Nos acercamos a la lectura, a través de una distinta expresión literaria: la narrativa. Narrar es contarle algo a alguien, es como afirma Jerome Bruner (2004) una modalidad de pensamiento casi innata al ser humano, gracias a que estamos en contacto con ella desde la infancia, en voz de nuestras madres o de nuestras abuelas. Para entonces, los compañeros ya habían solicitado que la clase fuera de dos horas. Así que reorganicé mi plan de trabajo previo. Iniciamos con una actividad de sensibilización a la que titulamos: Mi relación con la lectura y mis primeros cuentos. Fue así que con las siguientes actividades, viajamos desde los cuentos de tradición oral mexicanos hasta el cuento contemporáneo. Iniciamos con las preguntas generadoras: ¿Quién me contaba cuentos? ¿Quién me enseñó a leer? Las respuestas fueron compartidas en voz alta por cada participante, y se logró expresar anécdotas divertidas, pero también algunas que confirmaron la antigua consigna educativa de: “La letra con sangre entra”. Luego, escuchamos dos cuentos del audio: “La cuentera de Jalisco”, del Conafe (Consejo Nacional de Fomento Educativo) que es una institución dedicada a brindar servicios educativos a pequeñas y alejadas comunidades rurales del territorio mexicano. Se ha preocupado también por rescatar las costumbres y tradiciones de las comunidades, en particular la música que ha coleccionado en materiales como Así cuentan y juegan en el sur de Jalisco o Así cuentan y cantan en los alto de Jalisco, que están conformados por canciones infantiles y rondas para jugar. Cuando escucharon los cuentos, narrados por la voz espléndida de una mujer que podría ser la abuelita de cualquiera y con una producción sonora que inmediatamente nos traslada al campo, entre el graznido de las gallinas, el mugir de las vacas y el canto de los pajaritos, todos se divirtieron mucho y recordaron cuentos de su infancia. 6 Así que la escucha propició la actividad siguiente: contar un cuento a un compañero. Prefirieron los cuentos de tradición oral o los clásicos infantiles. Se entusiasmaron más cuando recordaron los que les contaban sus abuelitas. Los más jóvenes hablaron hasta de los que se han llevado al cine. Dimos enseguida un salto al presente. Previamente yo había seleccionado cuentos contemporáneos latinoamericanos: Dos de Clarice Lispector, la escritora brasileña y uno de Rafael R. Valcárcel, narrador peruano. Hubo suficientes fotocopias de los cuentos para que eligieran uno y lo llevaran a casa para leerlo de tarea. De Lispector, puse a su disposición, en fotocopia, “Felicidad clandestina”, un relato que no debemos perdernos los que amamos los libros y, para ese momento del curso, a todos les estaba gustando la literatura, estaban disfrutando del placer del texto. El otro relato fue, “Una gallina”. Ambos textos, son de difícil clasificación, pues ella misma definía su estilo como un "no-estilo". Curiosamente, algo interesante tienen para las mujeres (la mayoría de las compañeras los seleccionaron luego de echarles un vistazo). Quizá no sean feministas, pero sí están ligados a personajes femeninos que expresan una necesidad de afirmar su identidad, de ser conscientes de sus problemas, de su libertad y de sus deseos. A Rafael R. Valcárcel lo elegí porque sus historias se desarrollan en contextos cotidianos y con un efecto de realidad incuestionable; pero su forma de abordar la vida es muy especial e interesante, son relatos para pensar…y aquellos que prefirieron leer su cuento “Regalos de papel”, claro que se pusieron a pensar. Sobre todo cuando les dije que este autor les llamaba a sus relatos. “No cuentos: Cuentos que no son cuentos, sino recuerdos rescatados del olvido”; es decir una forma de mezclar la realidad con la ficción sin que se notara mucho. Sesión 4 Antes de iniciar con las actividades previstas para esta sesión, directamente relacionadas con la habilidad para escribir, recuperamos lo que fue más significativo para cada uno, luego de haber leído el cuento que seleccionaron. Fue así que expresaron su opinión sobre el cuento y lo interpretaron, desentrañaron lo que les decía a ellos: el mensaje oculto, dijo una secretaria y amenazante me miró: “vas a ver” porque le pasé primero el cuento “Una gallina”, como si se hubiese identificado con el personaje central y con la historia. Primero compartieron su interpretación en parejas y, luego, lo escribieron y lo agregaron a su portafolio. Así que de la locura del No estilo a la ficción cotidiana del No libro… los compañeros entraron al desconcierto, de ¿entonces de qué se trata este taller? Nos divertimos, está 7 bien chido, pero si un día quiero escribir, qué hago si no sé ortografía, ni escribo bien. Era el momento de recordar las reglas de ortografía. Empezamos con los acentos. Iniciamos entonces con la actividad de sensibilización que teníamos preparada: El acento y el ritmo en la música y en las palabras, cuyo objetivo fue contribuir al entendimiento de las reglas de acentuación… Primero se explicó qué es la sílaba tónica, luego se trató de identificarla en las palabras que constituyen el poema Canto negro de Nicolás Guillén. Al tiempo que golpeábamos la mesa, o seguíamos el ritmo con palmas y pies, para marcar la fuerza de la sílaba. Llegó el momento de utilizar instrumentos musicales de percusiones. Luego de la actividad de sensibilización, tomamos textos provenientes de la lírica infantil mexicana, con los que todos estábamos familiarizados porque eran o bien un juego o una canción que aprendimos y disfrutamos de niños. Por ejemplo: “Naranja Dulce, limón partido, dame un abrazo que yo te pido...” “Arroz con leche me quiero casar, con un mexicano que sepa cantar”, “Estaba la pájara pinta, sentadita en el verde limón” y “Luna luna dame una tuna. Cantamos y leímos los textos, hasta jugamos un poco con El arroz con leche, y luego nos dedicamos a identificar palabras agudas, graves y esdrújulas. El procedimiento fue muy sencillo: 1. Seleccionar palabras de cada tipo 2. Separarlas en sílabas 3. Reconocer la última, penúltima y antepenúltima sílaba 4. Encontrar la sílaba tónica en las palabras 5. Clasificarlas según su acento. 6. Recordar y entender las reglas de acentuación Sesión 5 Estábamos iniciando el mes de noviembre, mes en el que los mexicanos conmemoramos el Día de Muertos, por ello dedicamos esa sesión a la elaboración de Calaveras, con la finalidad de preservar una de las tradiciones más antiguas y significativas de nuestro país. La temática de la Calavera tradicionalmente se dedica a una persona, de quien se destaca su personalidad o sus acciones, irónicamente, y se cuenta su empeño por escapar de la muerte. Se escriben en estrofas de cuatro versos, con rimas en los versos pares. Los versos son octosílabos. 8 Están dedicadas generalmente a un artista, un político u otro personaje público, para llamar la atención sobre sus defectos. En ellas, el protagonista central es la muerte, la calaca, la huesuda o la flaca. En esta ocasión, los compañeros se hicieron calaveras entre ellos o también les dedicaron unas a los maestros. Se dieron, además, el lujo de ilustrarlas y, por supuesto, se leyeron acompañados de un vaso con chocolate humeante y el tradicional pan de muerto. Sesión 6 Esta sesión se dedicó a la evaluación, dado que íbamos a la mitad las actividades previstas para el Taller. Se evaluaron los siguientes temas: 1. De los sonidos a la escritura 2. De las imágenes a la historia 3. Reglas de acentuación Para ello se realizaron las siguientes actividades: 1. Escuchar e imaginar. Se escuchó el Capricho Opus 1, No. 13, conocido como “La carcajada del diablo”, de Nicola Paganini. Una vez escuchada la obra, se reflexiona sobre la relación entre lo que escuchamos y el título y se pidió que escribieran un breve relato sobre lo que imaginaron. 2. Imágenes para construir una historia. Se proyectaron cinco imágenes diferentes: una muchacha, un tigre albino, un marciano, un policía y un cordero. La consigna fue: armar una historia en la que participen estos cinco personajes. 3. Seleccionar dos palabras de los textos recién escritos que representen cada tipo de palabra según su acentuación. Sesión 7 Esta sesión se dedicó a la Retroalimentación, a analizar ¿cómo nos fue en la evaluación? Para ello, cada quien leyó los textos que escribieron y los compañeros dieron su punto de vista, procurando ser objetivos en la valoración (cosa que es difícil por la gran confianza que se tiene luego de más de diez años de trabajar juntos, son prácticamente como miembros de una familia; así que hubo bromas y también discurso edificante). La evaluación de cada aspecto dio por resultado lo siguiente: 9 1. Escuchar e imaginar Logros: Imaginación Creatividad Inspiración en otras historias anteriores. Problemas: No se comprendieron las instrucciones. Recordar los signos de puntuación 2. Imágenes para construir una historia Logros: Imaginación y coherencia en la historia Problemas: No se incluyó a todos los personajes. Fallaron en el uso de la h, la b y la v, la s, c y z y los acentos. 3. Identificación de palabras según su acentuación Logros: La mayoría lo hizo muy bien. (A propósito resultó interesante que a la hora de señalar las palabras equivocadas, los compañeros emplearon la estrategia de separación de sílabas y golpeteo en la mesa para marcar la sílaba tónica y explicar en qué consistió el error. Sesión 8 Ante la problemática observada en la evaluación, esta sesión se dedicó al tema: Escritura. Sintaxis y uso de signos de puntuación. Para ello, realizamos las siguientes actividades: 10 1. Explicación de la estructura básica de una oración 2. Identificación y uso de los signos de puntuación 3. Ordenar, en equipos de tres personas, el texto “Por escrito gallina una”, de Julio Cortázar (De La vuelta al día en ochenta mundos). Se trato de una competencia, en la que el ganador era el equipo que terminara más rápido y bien. Cerramos la actividad con una visita a la biblioteca para que seleccionaran un libro que empezarían a leer en casa. Sesión 9 Las cartas: relatos que nacen de la vida y la enriquecen Esta sesión la dedicamos a escribir cartas. Primero, porque fue una necesidad planteada por las compañeras secretarias. Se les dificultaba saber redactar un oficio o una carta formal. Segundo, porque pienso que la carta es dialógica por naturaleza, es decir plantea la posibilidad del encuentro comunicativo entre dos. A través de ella se ponen contacto los enunciados de un hablante con los de otro y se interaniman, en el interior de la conciencia o en el mundo real. En la carta, el enunciador narra al otro algo digno de ser contado, expresa disposiciones emotivas y reflexiona predominantemente sobre sí mismo, “en voz alta” para ser escuchado. Para explicar este tema, decidí también entrar por el lado de la literatura, así que leímos el texto: “Carta a un zapatero que compuso mal unos zapatos”, del escritor jalisciense Juan José Arreola. Luego de la lectura se explicaron los elementos constitutivos de una carta, así como los diversos tipos de cartas. Enseguida, vimos “Merengue a la carta”, un video musical de un grupo mexicano llamado Radiopatías, ensamble de músicos que hacen parodias y tratan diversos temas con un humor. En este caso, el protagonista recibe una carta de amor, escrita por una dama que necesita, urgentemente, cursos de español, de ortografía y de redacción, por lo mal que escribe. La sesión continuó con la elaboración de los siguientes tipos de cartas: 1. Carta al niño Dios 2. Carta de amor 3. Carta formal, dirigida al Presidente de la República o al Secretario de Educación. Concluimos la sesión con un informe sobre el avance de lectura que llevaban en el libro que obtuvieron de la biblioteca. 11 Sesión 10 Evaluación final La sesión se dedicó a reflexionar sobre el taller, a partir de las siguientes preguntas: Cómo me sentí en el Taller Qué aprendí Qué me gustaría aprender en un segundo taller. Qué sugieres para mejorarlo. Finalmente, deseo haber mostrado al compartir esta experiencia, que una de las tendencias actuales en el campo de la educación artística se sustenta en el principio de que su práctica contribuye al desarrollo integral de las personas. Las concepciones sobre la recreación y la estética conforman una nueva orientación; a esta propuesta se le llama “educación a través del arte” y su objetivo no es la educación artística como tal; es decir, no pretende la creación de artistas en las diferentes disciplinas, más bien plantea la formulación de una teoría que incluya todos los modos de expresión literaria, poética y musical en los estudiantes. Desde este punto de vista, la educación a través del arte constituye un enfoque integral de la realidad, pretende la educación de los sentidos en los que se basan la conciencia, la inteligencia y el juicio humano. En el caso de la lectura y la escritura, me parece que permitió transformar aquella vieja consigna y poder decir: “La letra con gusto entra”. Bibliografía Barhes, Roland. (1980). S/Z. México: Siglo XXI Bruner, Jerome. (2004) Realidad mental y mundos posibles. Barcelona: Gedisa Cassany, Daniel. (1999) Construir la escritura. Barcelona: Paidós. Díaz Roig, Mercedes y María Teresa Miaja. (1996). Naranja dulce, limón partido: antología de la lírica infantil mexicana. México: El Colegio de México. 12 Jiménez, Lucina; Aguirre, Imanol; Pimentel, Lucía G. (coords.) (2009). Educación artística, cultura y ciudadanía. Madrid: OEI / Fundación Santillana. Martín-Kniep. Giselle O. (2001). Portfolios del desempeño de maestros, profesores y directivos. La sabiduría de la práctica. Buenos Aires: Paidós. 13