199912-Sala Penal-1-239 <br>Aborto Page 1 of 12 199912-Sala Penal-1-239 Aborto José Santos Colque Góngora c/ Angela Muriel Aguilar y otros Distrito: Oruro SENTENCIA Dictada dentro el proceso penal, seguido a instancias de José Santos Colque Góngora contra Angela Muriel Aguilar y otros, por el delito de aborto. VISTOS: La denuncia, diligencias de policía judicial de fs. 1-31, auto inicial de fs. 37-38, indagatoria de fs. 59-59 vta., 61. Pruebas, solicitudes de ampliación del auto inicial de la instrucción, autos de fs. 201-201 vta., 202-202 vta., requerimiento en conclusiones de fs. 223-223 vta., auto final de fs. 230-233, radicatoria de fs. 236 vta., apersonamientos, declaratoria de rebeldía de la coprocesada Marina Medina Estévez de fs. 276-276 vta.; confesión de fs. 281-284, apelación del auto final de procesamiento 300-300 vta., listas de testigos de las partes fs. 285, 301, 303, apertura de debates de fs. 314-315, continuación de debates de fs. 340-343, 349-350, 355357, 364-365, 368-370, acta de audiencia pública de inspección de visu de fs. 384-385, continuación de debates fs. 420-421, 449-450, fs. 480-481, lectura de prueba instrumental y aprobación de actas de fs. 484-484 vta., requerimiento en conclusiones de fs. 640-641, alegatos de las partes cursantes a fs. 643, 645-646, 647-650, todo lo que ver convino y se tuvo presente; y CONSIDERANDO: Que en base a la denuncia interpuesta por José Santos Colque Góngora a fs. 1, se procedió a la elaboración de las diligencias de policía judicial, llegando a determinar que en 12 de abril de 1995 Marina Medina Estévez, practicó un aborto en la persona de Miriam Colque Villca, en su domicilio ubicado en la calle Brasil entre Herrera Nº 306 de esta ciudad. CONSIDERANDO: Que, de los antecedentes del proceso se tiene que se han cumplido los siguientes actuados procesales; 1.- Instrucción: a) Previo requerimiento Fiscal de fs. 32 vta., se dicta el auto inicial de la instrucción de fs. 33, por la sanción prevista en el art. 263-1) del Cód. Pen. b) A fs. 34, el coprocesado José Luis Alvarado Muriel, presta su declaración indagatoria, en ese estado del proceso José Santos Colque Góngora a fs. 37-38, formaliza su querella, y a fs. 59 y 61 los coprocesados Angela Muriel Aguilar de Revollo y Marina Medina Estévez, prestan sus declaraciones indagatorias y transcurrido el término de la instrucción prevista por el art. 171 del Cód. Pdto. Pen., previo requerimiento fiscal de fs. 223-223 vta., se dicta el auto final de la instrucción de procesamiento de fs. 230-233, en contra de José Luis Alvarado Muriel, Angela Muriel Aguilar de Revollo, Marina Medina Estévez, por la sanción prevista por el art. 263-1) del Cód. Pen., disponiéndose la remisión de obrados a conocimiento del Juez de Partido de turno en lo Penal de la Capital. 2.- Plenario: a) Por providencia de fs. 236 vta., se dispuso la radicatoria y alternativamente en cumplimiento de lo previsto por los arts. 230, 231 del Cód. Pdto. Pen., se señala día y hora de audiencia pública de confesión, sin embargo la coprocesada Marina Medina Estévez no se hizo presente y como consecuencia, previo cumplimiento de las formalidades previstas por el art. 250, por auto de fs. 276, en cumplimiento de lo dispuesto por el art. 253 del http://juris.poderjudicial.gov.bo/jurisprudencia/penal/penal-I/gj19991211239.htm 7/29/2009 199912-Sala Penal-1-239 <br>Aborto Page 2 of 12 Cód. Pdto. Pen., se la declara rebelde y contumaz a la ley a fs. 281-284, los procesados presentes prestan sus declaraciones confesorias y cumplidos los actos preparatorios previstos, por el art. 229 del Cód. Pdto. Pen. b) Con el ofrecimiento de las listas de testigos, se señala día y hora de audiencia pública de solemne apertura de debates (fs. 314 - 315) en este actuado procesal se procedió a la lectura del auto final de la instrucción de procesamiento, así como a las listas de testigos, donde la parte civil se ratifica en toda la prueba literal y testifical de cargo producido en la instrucción y funda su acusación en las diligencias de policía judicial, por otra parte se ratifica en la prueba testifical presentada en la instancia del plenario y alternativamente tacha a los testigos de descargo, por su parte los procesados objetan las diligencias de policía judicial, se ratifican en toda la prueba literal y testifical de descargo, tachan a los testigos de la parte civil. Por su parte el defensor de oficio, impugna las diligencias de policía judicial, tacha a los testigos de la parte civil, se ratifica en toda la prueba literal y testifical de descargo. La fiscal se ratifica en las diligencias de policía judicial, se adhiere a la prueba literal y testifical de la parte civil, funda su acusación en los términos del auto final de procesamiento, tacha a los testigos de descargo. Así cumplidas las formalidades previstas por el art. 234-3) del Cód. Pdto. Pen., se declara solemnemente abierto el período de los debates y vista de la causa. CONSIDERANDO: Que durante el período de los debates y procesamiento se han ofrecido y producido los siguientes medios probatorios: a) Prueba de Cargo: Literales: Denuncia, diligencias de policía judicial cursantes de fs. 1 a 31, publicación de fs. 104, certificado de fs. 116, fotocopias simples de fs. 215-218, certificado de fs. 219 vta., fotocopia simple de fs. 220, diligencias de policía judicial cursantes de fs. 422-445, copia de fs. 490, fotocopias simples de fs. 491-494. Testificales: Con las declaraciones de los siguientes testigos: Cristian Facundo Cabero Benito (fs. 341-342), Carmen Gonzales Gonzales (fs. 349 vta.-350), Rocío del Pilar Fernández Mendieta (fs. 355-355 vta.), Josefina Cruz Huanca de Aranco (fs. 364-364 vta.), Carmela Gonzales de Herbas (fs. 368-369). b) Prueba de Descargo: Literales: Marina Medina Estévez, fotocopia simple de fs. 40, certificado de fs. 41, certificado de fs. 52, certificado de fs. 55. Angela Muriel de Revollo, certificado de fs. 153, fotocopia de fs. 154, publicación de fs. 155, fotocopia de fs. 156, prueba de fs. 157, diplomas de fs. 158-161, fotocopia legalizada de fs. 179, fotocopias cursantes de fs. 193-199, certificados de fs. 289 vta., 319 vta., 320, copia de fs. 321, certificado de fs. 321, certificado de fs. 322, solicitud de fs. 323, certificado de fs. 324, 325 vta., fotocopias de fs. 326-327, certificado de fs. 381, fotocopia simple de fs. 398, orden instruida de fs. 619-620, certificado de fs. 621, fotocopia de fs. 622, certificado de fs. 623, fotocopia de fs. 624. José Luis Alvarado Muriel, fotocopias legalizadas de fs. 403-406, certificado de fs. 407, copia legalizada de fs. 408, fotocopia de fs. 409, certificados de fs. 410 vta., 411, fotocopia legalizada de fs. 412, certificados de fs. 453, 454, 455, 456, 457, informe social de fs. 458, certificado de fs. 644. Testificales: Marina Medina Estévez, Martha Sejas Aranda (fs. 190), Irma Antonieta Lazarte de Arce (fs. 191), (listas de testigos fs. 285). Angela Muriel de Revollo y José Luis Alvarado Muriel: Sonia Villca Mamani (fs. 342-343) Salome Juana Cortez (fs. 349 vta.-350), María Angélica Soria Pardo (fs. 355 vta.-356), Fernando Guzmán Villarroel (fs. 364 vta.-365), Justo Tórrez Alarcón (fs. 369-370), Hilda Hooper Claure de Pimentel (fs. 420-421), Miltón Franklin Mariscal (fs. 449-450), Carlota Astete Herrera de De La Barra (fs. 480-481), José Claros Muriel (fs. 481-481 vta.) c) Inspección de Visu.- Realizado en 2 de marzo de 1996, cursante a fs. 384-385, de donde se evidencia: http://juris.poderjudicial.gov.bo/jurisprudencia/penal/penal-I/gj19991211239.htm 7/29/2009 199912-Sala Penal-1-239 <br>Aborto Page 3 of 12 1) Se verificó el inmueble donde José Luis Alvarado convivió con Miriam Colque, desde el mes de enero a mayo de 1995, aspecto que era de conocimiento de Angela Muriel, madre de José Luis Alvarado, ya que Miriam Colque cocinaba y lavaba en la casa, atendiendo a José como a esposo. 2) Posteriormente se inspeccionó el bien inmueble ubicado en la calle Brasil y Herrera Nº 306, actuado en el que Miriam Colque, reconoce el domicilio manifestando"... Vinimos aquí porque estaba embarazada, José Luis y su mamá entraron y hablaron, como José Luis me pegaba mucho, me dijeron que me iban hacer chequear. 3) De inmediato se constituyeron en el domicilio del Dr. Estivens situado en la Calle San Felipe entre Presidente Montes y La Plata s/n., el coprocesado José Luis Alvarado, afirma que Miriam Colque le llevó a ese domicilio, donde se habría practicado el aborto, al respecto Miriam Colque dice: "... a este lugar no vine, no conozco". CONSIDERANDO: Que habiendo las partes agotado la producción de sus pruebas en cumplimiento de lo dispuesto por los arts. 94, 237 y 240 del Cód. Pdto. Pen., en audiencia pública de fs. 484-484 vta., se declara agotada la prueba y cerrados los debates, y abierto el de conclusiones, disponiéndose la remisión de obrados ante la representante del Ministerio Público, en efecto, el requerimiento cursa a fs. 638-639, requiriendo porque se dicte Sentencia Condenatoria en contra de los procesados José Luis Alvarado Muriel, Angela Muriel Aguilar de Revollo y Marina Medina Estévez, por la comisión del delito de aborto, tipificado en el art. 263-1) del Cód. Pdto. Pen., por existir prueba plena y directa, a sufrir la pena de cinco años de reclusión en la Cárcel Pública de esta ciudad con imposición de costas y daños civiles en favor de la parte civil, como también costas y multa en favor del Estado. CONSIDERANDO: Que, conforme determina el art. 135 del Cód. Pdto. Pen., todos los medios probatorios tanto de cargo como de descargo aportados en el proceso, han sido valorados en su conjunto por el órgano jurisdiccional a su prudente arbitrio y conforme a las reglas de la sana crítica, exponiendo invariablemente los razonamientos en que funda esa valoración jurídica, llegando a las siguientes conclusiones: Primera.- El investigador asignado al caso durante las investigaciones de las diligencias de policía judicial arribó a las siguientes conclusiones: a) En 12 de abril de 1995 Marina Medina Estévez practicó un aborto en la persona de Miriam Colque Villca, en su domicilio ubicado en la calle Brasil entre Herrera Nº 306. b) Angela Muriel Alvarado, niega haber tenido conocimiento de los hechos, desconoce las relaciones que habría tenido su hijo José Luis con Miriam Colque. c) Marina Medina Estévez, manifiesta que el aborto que realizó, fue a solicitud de Angela Muriel Aguilar de Revollo y José Luis Alvarado Muriel, aclara además; cuando Miriam Colque V., sufrió hemorragia, ésta la había llevado a la Clínica Cristo Rey donde cancelaron cada uno a Bs. 75.-. d) José Luis Alvarado Muriel admite que mantuvo relaciones amorosas con Miriam Colque Villca, por esta razón estaba esperando un hijo, por otro lado admite que en compañía de su madre Angela Muriel Aguilar, fueron al domicilio de Marina Medina Estévez para pedirle que practicara un aborto en la persona de Miriam Colque Villca. Segunda.- Que tanto de las declaraciones indagatorias como confesorias se tiene: - José Luis Alvarado Muriel, en su declaración indagatoria de fs. 34-34 vta., dice: "...No sé quiénes lo practicaron, pero sé que la muchacha vino cuando estaba mal a mi casa en 28 de abril y me dijo que se había hecho curar con un doctor llamado Félix, ella ya vino con una sonda puesta, se sacó en mi casa, después se fue a la casa de su amiga... yo no di mi consentimiento incluso quise casarme, para ello suscribimos un documento ante un abogado. Reconoce que eran enamorados con Miriam Colque Villca hasta la fecha de 4 de mayo de 1995...". En su confesión de fs. 281-283, dice: "...Es mentira que yo y mi mamá hayamos llevado a la casa de Bracomonte, en esa fecha me encontraba en Huanuni", reconoce haber enamorado por el lapso de cuatro años en lo demás niega haber participado en el delito de aborto. http://juris.poderjudicial.gov.bo/jurisprudencia/penal/penal-I/gj19991211239.htm 7/29/2009 199912-Sala Penal-1-239 <br>Aborto Page 4 of 12 - Angela Muriel Aguilar de Revollo, en su indagatoria de fs. 59-59 vta., dice: "...Yo no sé absolutamente nada, el 12 de abril estuve en la ciudad de Cochabamba... si algo sabe solamente por referencias de su hijo José Luis Alvarado... en ningún momento ha entregado dinero alguno a nadie, las declaraciones en la Policía han sido hechos bajo presión de los funcionarios policiales..." - En su confesión de fs. 283-284, dice: "...Miriam Colque no ha vivido en mi casa, el día del hecho me encontraba en Cochabamba nunca la he llevado a la Clínica Cristo Rey..." - Marina Medina Estévez, en su indagatoria de fs. 61, dice: "...No sé, la Sra. Angélica el día 1º de mayo me hizo llamar con su hijo y en la casa vi a una muchacha que estaba con hemorragia, por ser delicado sugerí que la llevaran a una Clínica... Sobre las declaraciones de la policía es falso ya que estuve presionada y confundida..." No prestó su confesión por haber sido declarada rebelde y contumaz a la ley conforme se evidencia del auto de fs. 276-276 vta. de obrados. Tercera.- Que de lo expuesto hasta aquí se tiene: En las declaraciones informativas de fs. 22-22 vta., José Luis Alvarado Muriel, a fs. 23 Marina Medina Estévez, a fs. 24-24 vta., Angela Muriel Aguilar de Revollo, admiten haber participado en la comisión del hecho denunciado y querellado, sin embargo con posterioridad en sus declaraciones indagatorias y declaraciones confesorias de fs. 34-34 vta., 281-283, 59-59 vta., 283-284, respectivamente, niegan toda participación del hecho manifestando además que las declaraciones informativas han sido recibidas sin la participación de su abogado y fiscal y que no estaban en esta ciudad, al respecto de obrados se evidencia: 1) Conforme se evidencia del certificado de fs. 219 vta., fotocopia de fs. 220, revisadas las listas de pasajeros de la Flota Nobleza con salida a la ciudad de Cochabamba a hrs. 8:30 de 12 de abril no se encuentra el nombre de Angela Muriel de Revollo por tanto no se encontraba en la flota, sin embargo en la planilla de fs. 624 aparece el nombre de Angela Muriel, es mayor la contradicción en la que se incurre cuando presente el certificado de fs. 289 vta. de obrados, que se refiere a otra flota. 2) Con referencia al aspecto de que las declaraciones informativas en la policía habrían sido recibidas sin la presencia del abogado y del fiscal, de la audiencia de continuación de debates de fs. 349-350, actuado en el que la agente fiscal Dra. Cila Terán dice: "...Se ha cumplido en las diligencias de policía judicial con lo determinado por los arts. 18, 23-a) de la L.M.P. Es más, las diligencias han sido plenamente ratificadas por Leoncio Baptista Rocha a fs. 340-341. 3) Por otro lado la coprocesada, tanto en su indagatoria como confesión afirma que ella no sabe nada, su hijo no le comunicó nada, todo esto, no es verdad porque tanto de la declaración informativa de fs. 22-22 vta., así como del certificado de fs. 320 y la nota de fs. 351, se evidencia, que Angela Muriel Aguilar de Revollo, madre de José Luis Alvarado Muriel, fue quien junto a su hijo, llevó a Miriam Colque Villca a la casa de Marina Medina Estévez, así como asistieron a una audiencia en el Ministerio Público, que fue atendida por la Dra. Cila Terán, como puede afirmar que ella no sabía nada. Cuarta.- Que la audiencia de inspección de visu realizada en cumplimiento de la previsión legal contenida en el art. 136 del Cód. Pdto. Pen., cursante a fs. 384-385 por el que se procedió al reconocimiento del bien inmueble donde convivían José Luis Alvarado Muriel y Miriam Colque Villca, desde el mes de enero a mayo de 1995, aspecto que era de pleno conocimiento de Angela Muriel y no así de los padres de Miriam Colque Villca, donde se dedicaba a cocinar, lavar y atender como a esposo a José Luis. Se declaró cuarto intermedio, el tribunal se trasladó a la calle Brasil y Herrera Nº 306, reinstalado el acto y concedida la palabra a Miriam Colque Villca- dice: "...reconoce el domicilio, vinimos aquí porque estaba embarazada, José Luis me pegaba mucho, ellos, José Luis y su Mamá entraron a hablar, luego me dijeron que me iban a hacer chequear...". Posteriormente se trasladaron a la casa ubicada en la calle San Felipe entre Presidente Montes y La Plata s/n de propiedad del Sr. Estivens, domicilio donde supuestamente se habría colocado la sonda a Miriam Colque, al respecto Miriam Colque Villca, dice: "A este lugar no vine, no conozco...". Quinta.- Que de las declaraciones informativas cursantes de fs. 20 a 24, se evidencia: a) José Santos Colque Góngora, tanto en su denuncia como en su querella expresa: "Me encuentro unido en http://juris.poderjudicial.gov.bo/jurisprudencia/penal/penal-I/gj19991211239.htm 7/29/2009 199912-Sala Penal-1-239 <br>Aborto Page 5 of 12 matrimonio con Bertha Villca de Colque, con quien hemos procreado 4 hijos entre ellos Miriam Colque Villca, con 20 años de edad, ella a espaldas nuestras había mantenido relaciones amorosas con José Luis Alvarado Muriel con quien en el mes de febrero habían fugado a Cochabamba, en esta circunstancia se dispuso la detención de mi hija en ONAMFA, habiendo recobrado su libertad, volvió a abandonar su hogar, para volver nuevamente con José Luis Alvarado Muriel, bajo amenaza de muerte llegó a convivir, habiéndola embarazado y propinádole malos tratos, como consecuencia con engaños pretextando hacerla curar de la agresión la habían llevado a su domicilio ubicado en la Ciudadela Ferroviaria lugar en el que presumiblemente una enfermera le había administrado una inyección sin explicar de qué se trataba ni cuál era su efecto, le ocasionó el aborto expulsando el feto, produjo una copiosa hemorragia, hecho que la había dejado en completa inconciencia habiendo sido trasladada a la Clínica Cristo Rey, donde la internaron con una identidad falsa (Míriam Fernández) donde se le practicó los primeros auxilios y un legrado uterino en virtud de haber diagnosticado un aborto incompleto. b) José Luis Alvarado Muriel al prestar su declaración informativa, dijo: "...Miriam Colque vino a mi casa con el fin de prestarse Bs. 100.- para poder cancelar porque ella había decidido hacerse el aborto y como no consiguieron se sacó la sonda que le había puesto un doctor, estuvo en mi casa unos días, de ahí le llevamos ante la Sra. Marina en compañía de mi madre ella habló con la Sra. Marina en su casa y luego le hicieron el aborto, la llevamos a mi casa, estaba como 4 días, se fue a su casa, no le volví a ver desde ese día; ella estaba esperando familia de 3 meses para mí. El día 1º de mayo yo no estaba aquí y mi madre me dijo en la noche que la habían llevado a Miriam a la Clínica Cristo Rey, porque había hecho mal su trabajo la Sra. Marina, en compañía de mi hermana Melvy mi madre Angélica y Marina Medina E...." (Enfermera). c) Marina Medina Estévez, en su declaración informativa al contestar a la pregunta ¿Diga cuándo realizó un aborto y a quién?, dijo: "Realice en fecha 12 de abril del presente, a solicitud de la Sra. Angélica Muriel, quien vino llorando en compañía de su hijo José Luis Alvarado... había quedado restos de placenta y por eso la llevamos, yo con Melvy y cancelamos a medias con doña Angela a Bs. 75.- cada una...". d) Angela Muriel Aguilar de Revollo al prestar su declaración informativa: "Yo no la llevé, Miriam ya había ido a mi casa con sonda puesta a la puerta de mi casa...". Sexta.- Que de la prueba testifical de cargo se evidencia que sabían que eran enamorados Miriam y José Luis, saben también que convivieron en la ciudad de Cochabamba bajo un mismo techo, en lo demás abonan su conducta. La prueba testifical de descargo evidencia que tanto Angela Muriel Aguilar de Revollo, como su hijo José Luis Alvarado Muriel, tienen buena conducta, por esta razón se cree que a José Luis Alvarado Muriel le estuvieron haciendo una calumnia, sin embargo estos y otros aspectos no han sido demostrados ni corroborados por otros medios probatorios dentro el presente cuaderno procesal penal. Séptima.- Que cuando se acusa a una o más personas de un delito, como es el caso que nos ocupa deben introducirse en el proceso todos los elementos objetivos y subjetivos que el respectivo tipo penal exige para la consumación del delito, en ese sentido, el cuerpo del delito no es más que la adecuación del acto a un tipo penal, en el caso de autos, para el delito de aborto el art. 263 del Cód. Pen., establece de manera precisa lo que constituye el delito de aborto "el que causare la muerte de un feto en el seno materno o provocare su expulsión prematura". Que dentro los delitos materiales, el aborto ocupa uno de los lugares especiales de ahí que el informe médico legal es una pieza procesal de importancia fundamental, a ese fin, a fs. 11 vta. de obrados el certificado médico establece aborto incompleto. En este sentido se ha consumado el delito de aborto, puesto que se ha producido la interrupción dolosa del proceso fisiológico normal de la gestación, seguida de la muerte del feto. Octava.- Que para la aplicación y fijación de la pena se debe tener en cuenta las previsiones legales contenidas en los arts. 37, 38 y 40 del Cód. Pen., relativos a las circunstancias, personalidad de los autores, educación, costumbres y conducta precedente y posterior, la gravedad del hecho y los atenuantes. POR TANTO: El suscrito Juez 1° de Partido en lo Penal de la Capital, administrando justicia a nombre de la Nación, con la facultad jurisdiccional otorgada por ley, de parcial acuerdo con el requerimiento fiscal en conclusiones de fs. 638-639; FALLA: En aplicación de la previsión legal contenida en el art. 243 del Cód. Pdto. Pen., declarando autores del delito de aborto, previsto y sancionado por el art. 263-1) del Cód. Pen., a los http://juris.poderjudicial.gov.bo/jurisprudencia/penal/penal-I/gj19991211239.htm 7/29/2009 199912-Sala Penal-1-239 <br>Aborto Page 6 of 12 procesados: José Luis Alvarado Muriel, Angela Muriel Aguilar de Revollo y Marina Medina Estévez, los dos primeros de generales conocidas en sus declaraciones confesorias de fs. 281-284 de obrados y la última de generales desconocidas por haber sido juzgada en rebeldía, a quienes se les condena a cumplir la pena privativa de libertad de cuatro años y seis meses de reclusión en la cárcel pública "San Pedro" de esta ciudad, así como al pago de los daños civiles y costas, en favor del querellante y del Estado, a regularse en ejecución de sentencia de conformidad con lo previsto por el art. 349 del Cód. Pdto. Pen. Para la notificación con este fallo a la condenada en rebeldía, notifíquese mediante edicto de conformidad a lo determinado por los arts. 105 y 106 del Cód. Pdto. Pen. Esta sentencia de la que se tomará razón donde corresponda, se funda en las disposiciones precedentes citadas y es pronunciada en la ciudad de Oruro a hrs. 15:30 del 20 de mayo de 1997 y en audiencia pública. Regístrese. Fdo.- Dr. Raúl Basualto Caro.- Juez 1° de Partido en lo Penal. Ante mí: Dra. Elizabeth Maldonado Loayza.- Secretaria. AUTO DE VISTA Oruro, 26 de agosto de 1997. VISTOS: En grado de apelación la sentencia de fs. 656 a 662, pronunciada por el Juez de Partido Primero en lo Penal de la Capital, los antecedentes del proceso, las fundamentaciones en la instancia, requerimiento fiscal de fs. 681; y CONSIDERANDO: Que como emergencia de la denuncia interpuesta por José Santos Colque Góngora y las diligencias de policía judicial, previo requerimiento fiscal, por auto de fs. 33 se instruyó "sumario penal en contra de José Luis Alvarado Muriel, Angela Muriel Aguilar de Revollo y Marina Medina Estévez, por estar los hechos denunciados incursos dentro la sanción prevista por el inc. 1) del art. 263 del Código Penal". Arribado al período de conclusiones, de fs. 230 a 233, el instructor dicta el auto final de la instrucción de procesamiento contra José Luis Alvarado Muriel, Angela Muriel Aguilar de Revollo y Marina Medina Estévez, por existir suficientes indicios de culpabilidad que hacen presumir su participación "en la comisión del delito tipificado por el inc. 1) del art. 263 del Código Penal (aborto), así calificado en el auto inicial de la instrucción...". Que remitido el expediente para el juzgamiento en el plenario, radica éste en el juzgado de Partido Primero en lo Penal, donde en cumplimiento de los actos preparatorios a que hacen mención los arts. 229, 230 y 231 del Cód. Pdto. Pen., los procesados fueron llamados a prestar sus confesiones, cumpliendo con este deber sólo los coencausados José Luis Alvarado Muriel y Angela Muriel Aguilar de Revollo y no así Marina Medina Estévez, por lo que en cumplimiento de lo previsto por el art. 253 del Cód. Pdto. Pen., es declarada rebelde y contumaz a la ley por auto de fs. 276, designándosele como abogado defensor a Gabriel Balderrama, quien fue notificado a fs. 276 vta., cumplido este actuado judicial, se procede a la solemne apertura de los debates y a la recepción de las pruebas de cargo y descargo, hasta que finalmente se dicta la sentencia que cursa de fs. 656 a 662 en la que se condena a los tres procesados a sufrir la pena privativa de libertad de cuatro años y seis meses de reclusión en la Cárcel Pública de "San Pedro" de esta ciudad, por estar subsumido su delito en la previsión normada por el art. 263-1) del Cód. Pen., más el pago de daños civiles y costas en favor del querellante y del Estado a regularse en ejecución de sentencia. Que notificadas las partes, el defensor oficial, la Fiscal de Materia de Familia, Menor, Administrativa, Tributaria, Coactiva y Aduanera y el Jefe del Departamento de Asistencia Social -tal como consta de las diligencias de fs. 664 y 665-, así como publicarse el edicto cuyo ejemplar corre a fs. 676, se producen las siguientes apelaciones: A fs. 666, José Luis Alvarado Muriel; a fs. 668, Angela Muriel de Revollo; a fs. 672, José Santos Colque, advirtiéndose que no se interpusieron el recurso de alzada ni la declarada rebelde y contumaz a la ley ni el defensor oficial designado, por lo que conforme a lo preceptuado por el art. 284 del Código del rito, la Sala Penal de esta R. Corte Superior de Justicia, aprehende conocimiento del presente proceso en alzada en esta instancia. http://juris.poderjudicial.gov.bo/jurisprudencia/penal/penal-I/gj19991211239.htm 7/29/2009 199912-Sala Penal-1-239 <br>Aborto Page 7 of 12 CONSIDERANDO: Que, en el memorial de fundamentación de alzada de fs. 688 se señalan como puntos recurridos los siguientes hechos: Que no existe ninguna prueba en contra de los procesados; que en las diligencias de policía judicial no se cumplieron con las formalidades previstas por el art. 23 de la L.M.P.; que Angela Muriel no se encontraba en esta ciudad, por lo que el "alibi" que se propuso está plenamente demostrado; a fs. 690, Angela Muriel Aguilar de Revollo acusa como infringidos los siguientes aspectos: Que existe error por habérsele abierto proceso por el delito de aborto, siendo que le atribuyen que había llevado a la menor el 12 de abril donde la enfermera, ya que no puede haber dos abortos en diecinueve días; que ha demostrado plenamente el "alivio o coartada" por lo que debía determinarse su exclusión del proceso, ya que en la fecha en que se dice se produjo el aborto estaba fuera de esta ciudad; que en la elaboración de las diligencias de policía judicial se prescindió de la intervención y presencia del fiscal; finalmente a fs. 693, José Luis Alvarado Muriel, señala como puntos recurridos los siguientes hechos: Que la denuncia efectuada en su contra es falsa porque no ha sido demostrada con plena prueba; que el delito fue cometido por Miriam Colque Villca; que Miriam Colque Villca en 28 de abril de 1995 fue a lo de un tal Dr. Félix Steves para hacerse colocar una sonda, expulsando el feto el 1º de mayo en la puerta de su casa; que las declaraciones realizadas en la P.T.J. fueron tomadas con engaños, violándose principios constitucionales y de la Ley del Ministerio Público establecida en su art. 23; que se ha hecho errónea calificación del delito. CONSIDERANDO: Que de la compulsa de toda la prueba, así como de los antecedentes procesales, se establecen los siguientes hechos: 1.- Que por memorial de fs. 37, José Santos Colque Góngora formaliza querella contra los hoy procesados por la comisión del delito previsto por el art. 263-1) del Cód. Pen., con el fundamento de que en 12 de abril de 1995, José Luis Alvarado Muriel y su madre Angélica Muriel, llevaron a su hija ante una enfermera en la Ciudadela Ferroviaria, donde ésta última le administró una inyección para provocarle un aborto. 2.- Que del formulario de declaraciones de fs. 22, se desprende que José Luis Alvarado Muriel en presencia de la fiscal Dra. Cila Terán, el abogado defensor Ernesto Loría Tejerina y el policía Leoncio Baptista Rocha, interrogado sobre el aborto ocurrido a hrs. 15:00 aproximadamente en 12 de abril de 1995, en las calles "Herrera" y "Brasil" Nº 306 de esta ciudad de Oruro, respondió: "Al respecto debo indicar que, un día jueves del mes de abril la señorita Miriam Colque vino a mi casa, a fin de prestarse la suma de Bs. 100.- para poder cancelar lo que ella había estado haciéndose hacer el aborto, ella me dijo todo eso, no hemos podido conseguir el dinero, en ese caso se sacó una sonda que le había puesto un doctor y estuvo en mi casa unos cinco días, de ahí le llevamos ante la señora Marina, en compañía de mi madre, yo le avisé a mi mamá porque no sabía nada, después mi mami ya sabía que estaba mal y la llevamos, y mi madre habló con la señora Marina en su casa, y luego le hicieron el aborto, de ahí la llevamos a mi casa, estaba como 4 días y se fue a su casa y no le volví a ver más desde ese día"; "Ellas hablaron yo no escuché, claro que mi madre me dijo me has hecho gastar dinero, me llamó la atención pero no sé cuanto sería el monto"; "Ella estaba esperando familia de tres meses para mí, pero para todo esto tienen la culpa sus padres de ella.". 3.- Que asimismo, del formulario de declaraciones de fs. 23, se tiene que Marina Medina Estévez, en presencia de su abogado defensor Ernesto Loría Tejerina, la fiscal Dra. Cila Terán y el policía Leoncio Baptista Rocha, preguntada sobre el aborto producido a hrs. 15:00 aproximadamente del día 12 de abril de 1995, en el inmueble ubicado en las calles "Herrera" y "Brasil" Nº 306 de la ciudad de Oruro, contestó: "Realicé en fecha 12 de abril del presente, realicé ese trabajo a solicitud de la señora Angélica Muriel, quien vino a convencer llorando en compañía de su hijo José Luis Alvarado"; "Cobré la suma de Bs. 250.-"; "Fue con sonda que lo coloqué"; "Bueno había quedado restos de placenta y por eso le llevamos yo y la hija de la señora Angela de nombre Melvy Alvarado Muriel y luego cancelamos a medias con doña Angélica, la suma que nos cobraron en Clínica Cristo Rey, o sea Bs. 150.- a Bs. 75.- cada una"; "Sí ella vino con engaños indicándome que a la chica se lo habían entregado, porque su hijo había sido su enamorado y que ahora sus padres querían recogérselo sanita y por eso vino a engañarme, así con sus lloros"; "Si, que ella vino a insinuarme y a hacerme pisar el palito ya que como dije vino llorando a engañarme.". 4.- Que, igualmente, en el formulario de declaraciones de fs. 24, Muriel Aguilar de Revollo Angela, con respecto al aborto realizado a hrs. 15:00 del día 12 de abril de 1995, en presencia de su abogado defensor Dr. Francisco Torrico Moreira, la agente fiscal, Dra. Cila Terán y el policía Leoncio Baptista Rocha dijo: "Yo no le llevé, Miriam ya había ido a mi casa con sonda puesta a la puerta de mi casa"; "No, no he hablado nada con la enfermera"; se hace notar que en esta oportunidad, la declarante no dijo que se hallaba en la ciudad de Cochabamba a la hora indicada. http://juris.poderjudicial.gov.bo/jurisprudencia/penal/penal-I/gj19991211239.htm 7/29/2009 199912-Sala Penal-1-239 <br>Aborto Page 8 of 12 5.- Que del certificado de fs. 11 vta., se evidencia que "Miriam Fernández", nombre supuesto del sujeto pasivo, fue atendida el 1º de mayo de 1995 a hrs. 12:10 por hemorragia vaginal, practicándosele legrado uterino a hrs. 14:00, dándosele de alta a hrs. 17:00 del mismo día, habiendo llegado la paciente, acompañada de su tía llamada Marina, quien canceló el importe del tratamiento médico, siendo el diagnóstico de alta "aborto incompleto". 6.- Que a fs. 344, el Presidente del Consejo Departamental de Oruro del Colegio Médico de Bolivia, certifica que "Félix Stevens no se encuentra matriculado en el Consejo Departamental de Oruro del Colegio Médico de Bolivia"; en consecuencia, si bien la fotocopia de fs. 179, se halla legalizada por el actuario del Juzgado de Instrucción 3º en lo Penal, la literal de referencia no tiene el reconocimiento de firmas y rúbricas por ante autoridad competente, por cuya omisión no tiene valor alguno. 7.- Que a fs. 44, Robustiano Revollo Soliz, con el argumento de que su hijo político José Luis Alvarado Muriel es menor de edad, solicita su libertad provisional, explicando: "...mi citado hijo no cometió tal delito, sino que como no trabajaba y tenía planes de contraer matrimonio con Miriam Colque Villca, ambos voluntariamente, desearon el aborto...". 8.- Que en cuanto a las declaraciones que prestaron los tres procesados en las dependencias de la Policía Técnica Judicial, se concluye que éstas fueron recepcionadas cumpliendo a cabalidad con lo dispuesto por los incs. a) y b) del art. 23 de la L.M.P., habida cuenta que José Luis Alvarado Muriel y Marina Medina Estévez fueron asistidos por el abogado defensor Dr. Ernesto Loría Tejerina, habiendo incluso Marina Medina Estévez a fs. 25, solicitado "libertad con garantía de presentación por los motivos que expone", observándose que el indicado memorial fue suscrito por el mismo causídico Dr. Ernesto Loría Tejerina, en cuyo texto, no se hizo ninguna denuncia sobre engaños, presiones o violencia en la recepción de las declaraciones informativas policiales; asimismo, Angela Muriel Aguilar de Revollo, fue asistida por el abogado, Dr. Francisco Torrico Moreira, quien redactó y suscribió el memorial de fs. 27, en el que José Luis Alvarado Muriel y Angela Muriel de Revollo piden "libertad con garantía de presentación", donde tampoco acusan haber sido presionados y obligados para declarar y firmar en las actas que contienen sus declaraciones informativas policiales, de donde resulta que las diligencias de policía judicial elaboradas en la especie tienen todo el valor legal. 9.- Que, en audiencia pública, cuya acta cursa a fs. 340, el funcionario policial encargado de elaborar las diligencias de policía judicial en los de la materia, Leoncio Baptista Rocha, se ratificó en todos los actuados, aclarando que "las declaraciones que les tomé al señor José Luis Alvarado y Angela Muriel lo hice en presencia del Sr. Loría y la Dra. Terán, creo que también estaba el Dr. Torrico Moreira"; "El Dr. Loría esa vez le dijo que no debía decir nada contra su voluntad, no estaba su madre pero leyeron su declaración antes de que firmara"; "cuando yo les tomé su declaración el fiscal estaba ahí, yo no obligué a nadie con la suma de Bs. 500.- como indican, yo no hablé de esa suma"; por otro lado, la agente fiscal Cila Terán Luna, en audiencia pública, cuyo acta se halla a fs. 349, manifiesta que en el caso que nos ocupa, en el levantamiento de las diligencias de policía judicial se cumplió con lo que determinan los arts. 18 y sgts. de la L.M.P., "así como el art. 23-a) de la misma ley, la suscrita fiscal reconoce que las firmas estampadas en fs. 22 y 23 son mías"; "La suscrita fiscal en cumplimiento de mis funciones en el caso concreto ha recibido las declaraciones informativas de los procesados personalmente, de conformidad a los arts. 23 y 24 de la L.M.P. en colaboración de los asignados de la P.T.J. así como el defensor de oficio"; "de conformidad a los arts. 23 y 24 de la L.M.P. en la recepción de las declaraciones informativas se han cumplido con todas las formalidades de ley". En estos dos actuados procesales, los encausados no han probado que hubieran sido presionados y obligados a firmar las diligencias de policía judicial, habida cuenta que la jurisprudencia nacional nos enseña que: "La imputación hecha por un sindicado, para que merezca fe, debe estar ratificada por otra prueba" (G.J. Nº 1075, pág. 42). 10.- Que, con referencia al "alivio o coartada", argüida por Angela Muriel Aguilar en sentido de que el día en que se produjo el aborto ella se encontraba en la ciudad de Cochabamba, cabe orillar que si bien, a fs. 153, la Administradora de flota "Nobleza" certifica que la aludida incriminada viajó en 12 de abril de 1995 a hrs. 8:30 de la ciudad de Cochabamba con destino a esta ciudad, no es menos cierto que a fs. 219 vta., el Sgto. Pastor Poma, funcionario policial asignado, certifica que revisadas "las listas de pasajeros de la Flota Nobleza con salida en la ciudad de Cochabamba a hrs. 8:30, de fecha 12 de abril no se encuentra insertado el nombre de la Sra. Angélica Muriel de Revollo, por tanto, no se encontraba en la flota nombrada por la señora Angélica Muriel". Como se ve existe contradicción en ambos informes, concluyéndose que el alibí o coartada no se halla justificada, sobre el particular la jurisprudencia dice: "Para la comprobación del alibí o coartada se precisa una prueba completa que lleve la convicción a la conciencia del juzgador y la apreciación que se hace a este respecto por los jueces de instancia no puede observarse en casación" (G.J. Nº 1033, pág. 40). Es más para el http://juris.poderjudicial.gov.bo/jurisprudencia/penal/penal-I/gj19991211239.htm 7/29/2009 199912-Sala Penal-1-239 <br>Aborto Page 9 of 12 hipotético caso en que la citada encausada hubiera viajado de la ciudad de Cochabamba a esta ciudad a hrs. 8:30, su arribo se calcula a hrs. 12:30, lo que significa que a horas 15:00, hora en que se produjo el delito, se encontraba en el lugar de los hechos, sobre este punto, ver la hora consignada en los formularios de declaraciones de fs. 22 y 23. 11.- Que, en obrados no existe prueba que acredite que Miriam Colque Villca, haya dado su consentimiento para provocar la expulsión prematura del feto, pues, como se dijo líneas arriba la imputación hecha por un sindicado para que merezca fe debe estar ratificada por otra prueba, aspecto que se extraña en la especie. 12.- Que, por auto de fs. 109, el Juez Instructor 3º en lo Penal, rechazó "la solicitud de nulidad de diligencias de policía judicial, impetrada por la coimputada Marina Medina Estévez a fs. 42-42 vta. del cuaderno procesal", resolución que no mereció ningún recurso por ninguna de las partes, pese a su legal notificación, por lo que adquirió autoridad de cosa juzgada. 13.- Que, sobre la apelación de la parte civil, se tiene que entratándose de pena indeterminada que tiene un máximo y un mínimo, es atribución de los jueces el graduar la pena conforme a las circunstancias, atenuantes y demás datos del proceso, que es lo que ha ocurrido en autos, sin incurrir en las infracciones que se refieren en el recurso, pues, se fijó la pena dentro de los límites legales. CONSIDERANDO: Que de todo lo expuesto, se tiene que el juez inferior en uso de la facultad conferida por el art. 135 del Cód. Pdto. Pen., llegó a la plena convicción de que los tres procesados son autores del delito de aborto practicado sin el consentimiento de la mujer, tipificado por el num. 1) del art. 263 del Cód. Pen., en virtud de las siguientes razones de orden legal: Miriam Colque Villca se encontraba embarazada para José Luis Alvarado Muriel y como éste y su madre Angela Muriel no deseaban el nacimiento del feto, aprovechando que la mujer embarazada se quejaba de fuertes dolores y no podía discernir sus actos, en 12 de abril de 1995 a hrs. 15:00 aproximadamente, la llevaron al domicilio de la coencausada Marina Medina Estévez ubicado en la Ciudadela Ferroviaria entre las calles "Herrera" y "Brasil", signado con el Nº 306 de esta ciudad, donde le provocaron la expulsión prematura del feto, empero, como la intervención no fue exitosa y había problemas en la salud de la mujer, en 1º de mayo del mismo año fue conducida a la Clínica "Cristo Rey", donde recibió atención médica. CONSIDERANDO: Que en consecuencia, al pronunciar la sentencia de primer grado, el Juez 1º de Partido en lo Penal, ha hecho una correcta valoración de la prueba aportada. De igual manera resulta correcta la imposición de las penas privativas de libertad; en consecuencia, al dictar la sentencia condenatoria no ha violado la ley en la calificación del delito, ni en la imposición de las penas, a cuyo fin tuvo presente las previsiones de los arts. 37, 38, 39 y 40 del Cód. Pen., toda vez que los procesados no han desvirtuado la prueba de cargo existente en el proceso, conclusión que es incensurable en casación y no contradice ninguna norma legal y llena el voto de la ley contenido en el art. 243 del nombrado Código Procesal Punitivo; en resumen, no existen las violaciones que se acusan en los memoriales de fs. 672, 688, 690-691 y 693 a 695, respectivamente, máxime si tenemos presente que los alzados, habiendo acusado error de hecho en la apreciación de la prueba, no han demostrado esta circunstancia con documentos o actos auténticos que evidencien la equivocación manifiesta del juzgador, tal como exige el art. 253 -3) del Cód. Pdto. Civ., aplicable en materia penal por disposición del art. 355 del Procedimiento que rige en materia penal. Que, el juez a quo, al pronunciar la sentencia impugnada ha enmarcado sus actos dentro de los cánones de ley. POR TANTO: La Sala Penal de la R. Corte Superior del Distrito Judicial de Oruro, de acuerdo con el requerimiento del Fiscal de Distrito a.i. de fs. 681, CONFIRMA la sentencia apelada de fs. 656 al 662, de 20 de mayo de 1997, pronunciada por el Juez 1º de Partido en lo Penal, con la aclaración de que la pena privativa de libertad es cuatro años y seis meses de reclusión en la Cárcel Pública de "San Pedro", así como el pago de los daños civiles y costas, es para cada uno de los procesados condenados. No interviene el vocal de Sala Penal, Dr. Facundo Ramírez V., por estar jubilado. Relator: Dr. Rodolfo Fuentes Borda. Regístrese. Fdo.- Drs.: Rodolfo Fuentes Borda.- Ernesto Araníbar Sagárnaga. http://juris.poderjudicial.gov.bo/jurisprudencia/penal/penal-I/gj19991211239.htm 7/29/2009 199912-Sala Penal-1-239 <br>Aborto Page 10 of 12 Ante mí: Dr. José Romero Soliz.- Secretario de Cámara. REQUERIMIENTO FISCAL SEÑORES PRESIDENTE Y MINISTROS DE LA EXCMA. CORTE SUPREMA DE JUSTICIA REQUIERE: En los recursos de casación y nulidad interpuestos por Angela Muriel Aguilar de Revollo a fs. 703-704 vta., José Luis Alvarado Muriel a fs. 709-711 vta. y el abogado Gabriel Balderrama A. defensor oficial de la coprocesada Marina Medina Estévez, contra el A.V. de fs. 697-700 vta. dictado por la Sala Penal de la Corte Superior del Distrito Judicial de Oruro, en el proceso penal seguido por José Santos Colque Góngora contra José Luis Alvarado Muriel, Angela Muriel Aguilar de Revollo y Marina Medina Estévez por el delito de aborto. Analizado el cuaderno formado en el plenario de la causa, cual corresponde a este ente jerárquico en razón de lo dispuesto por el art. 15 de la L.O.J. se advierten cometidas en su desarrollo, faltas de consideración que deben ser subsanadas por cuanto, al ser procedimentales, interesan al orden público a tenor de los arts. 2 y segunda parte del 308 del Cód. Pdto. Pen.. En la fase plenaria la prueba documental o instrumental, no ha sido leída públicamente para ser valorizada en audiencia, ni se ha subsanado la omisión antes de sentencia, del modo previsto por el art. 237 del Cód. Pdto. Pen., al no haberse cumplido con esta formalidad, carecen de validez. En efecto no obstante haberse celebrado con ese fin la audiencia con acta que la registra a fs. 484 y 484 vta., no se ha cumplido dándose, en cambio, oficiosamente por cerrados los debates como se aprecia de toda ella y, en especial, de su parte final porque el documento no leído equivale a documento no presentado, habida cuenta, como se está en el juicio oral y contradictorio, el descubrimiento es objeto de debate. Esto representa que todos los elementos de juicio de esa naturaleza que sirvieron a los jueces a quo y ad quem de base para discernir y alcanzar sus conclusiones y resoluciones, carecen de valor por mandato de la ley, quedando vacíos los justificativos argumentales que esgrimieron y les sirvieron de sustento quedando por tanto, las resoluciones muy vulnerables. En conocimiento de esa situación invalidante, de un significativo porcentaje de la prueba existente en autos, es consecuente pensar que aparece sensiblemente disminuida la posibilidad de su compulsa y apreciación, también, en su caso, para los jueces de casación, quienes se verían restringidos en su potestad propia establecido en el 298-4) del Cód. Pdto. Pen. por la anotada carencia; lo que es atentatorio a la mejor previsión, la adecuada y libre expedición de sus fallos y la debida administración de justicia, elementos insoslayables del orden público. Otra actuación procesal que no ha quedado terminada la audiencia de conclusiones porque solamente el fiscal las expuso en la audiencia pública prevista por el art. 240 del Cód. Pdto. Pen. Así se deduce del contenido del acta de fs. 640-641 vta. donde se registra que por lo menos alguna de las partes protestó hacer llegar sus fundamentos en forma escrita y otra se reservó el derecho efectivamente ejercitado, después a fs. 640, 645, y 647, pero fuera de cualquier audiencia oral, despojando de esta forma, de esa su naturaleza oral, a ese período procedimental del juzgamiento, desconociendo el propio art. 240 conceptualmente consecuente del 224 de ese mismo cuerpo de leyes rituales. Por todo lo anotado que atenta contra el orden público expresado a través de las normas procedimentales es que, la Excma. Corte Suprema de Justicia de la Nación, en uso de la atrib. 1) del art. 59 de la L.O.J., relativo al http://juris.poderjudicial.gov.bo/jurisprudencia/penal/penal-I/gj19991211239.htm 7/29/2009 199912-Sala Penal-1-239 <br>Aborto Page 11 of 12 307-4) del Cód. Pdto. Pen., corresponde ANULAR obrados con reposición hasta el vicio más antiguo; es decir, hasta en audiencia pública, por el juez del plenario, se subsane la omisión de lectura de la prueba instrumental y/o documental existente en el expediente, antes de sentencia de conformidad con el art. 237 del Cód. Pdto. Pen. y, recién con ella, se proceda a dictarla, incluidas sanciones a los jueces inferiores que creyere convenientes. Sucre, 5 de agosto de 1998. Dr. Edgar Torres Gumiel Fiscal de Sala Suprema AUTO SUPREMO VISTOS: Los recursos de casación y nulidad, interpuestos a fs. 703-704 por Angela Muriel Aguilar de Revollo, a fs. 709-711, José Luis Alvarado Muriel, y a fs. 713 por el abogado defensor de oficio Gabriel Balderrama por Marina Medina Estévez, impugnando el A.V. de fs. 697-700, pronunciado por la Sala Penal de la Corte Superior del Distrito Judicial de Oruro, dentro del proceso penal seguido por José Santos Choque Góngora en contra de los recurrentes, por el delito de aborto; sus antecedentes, las leyes acusadas de infringidas, el requerimiento del Fiscal de Sala Suprema de fs. 720-723; y CONSIDERANDO: Que contra el A.V. de fs. 697-700 de 26 de agosto de 1997, confirmatorio de la sentencia apelada cursante a fs. 656-662 dictada por el Juez 1° de Partido en lo Penal de la ciudad de Oruro, que falla declarando a los procesados José Luis Alvarado Muriel, Angela Muriel Aguilar de Revollo y Marina Medina Estévez, autores del delito de aborto previsto en el art. 263-1) del Cód. Pen., condenándolos con la pena de cuatro años y seis meses de reclusión en la cárcel pública de "San Pedro" de la ciudad de Oruro, así como al pago de daños civiles y costas en favor del querellante y del Estado a regularse en ejecución de sentencia, recurren de nulidad y casación los incriminados con los argumentos expuestos en sus respectivos memoriales mencionados en el exordio, denuncian el quebrantamiento de normas adjetivas así como sustantivas, señalan la violación de los arts. 186-187 del Cód. Pdto. Pen., por no haber considerado la cuestión previa de alibí o coartada que merecía resolución inmediata, asimismo manifiestan que el padre de la víctima supuesta ha actuado sin personería al contar ésta con más de 20 años de edad, vulnerando el art. 12 en su última parte que fija 16 años para poder ejercer personalmente la acción penal. Finalmente denuncian violación al art. 263 por mala calificación de los hechos, correspondía presumir, dada la edad de la víctima y no existir signos de violencia o intimidación probados en el proceso, que ésta dio su consentimiento. Por todo lo expuesto, piden casar el auto recurrido y absolverlos de culpa y pena. CONSIDERANDO: Que de conformidad con el art. 135 del Cód. Pdto. Pen., la valoración de todos los medios de prueba aportados en un proceso corresponde privativamente a los órganos jurisdiccionales, y que la infracción a la ley penal en este aspecto, sólo se produce cuando se ha efectuado mala calificación de los hechos reconocidos en la sentencia o en la imposición de la sanción a los hechos calificados. Que, del examen de los antecedentes que fluyen del proceso, con relación a las infracciones de las leyes que se acusan en los recursos, se establece que tanto el juez de la instancia como la Corte ad quem, han ejercido plenamente la facultad que les otorga la antes citada norma legal. Que al pronunciar sus resoluciones con los fundamentos en ellas expuestas, han procedido correctamente de conformidad a la convicción jurídica formada en base a las pruebas aportadas, con análisis de los datos que informan el proceso, con sano criterio, sin incurrir en error alguno, y que los recurrentes no han demostrado en la forma prevenida por el art. 253-3) del Cód. Pdto. Civ., de aplicación en materia penal de acuerdo a lo establecido en el art. 355 del Cód. Pdto. Pen., las infracciones acusadas en sus recursos. Asimismo, de la revisión de antecedentes cursantes se evidencia que DIRMEPA (ex ONAMFA) fue legalmente notificada, conforme se establece por las diligencias cursantes a fs. 58 vta., 204, 214 y otras, además se constata que ha asistido a las audiencias de debates por las actas cursantes en el proceso. http://juris.poderjudicial.gov.bo/jurisprudencia/penal/penal-I/gj19991211239.htm 7/29/2009 199912-Sala Penal-1-239 <br>Aborto Page 12 of 12 En cuanto a la observación que hace el Ministerio Público de no haberse leído en audiencia pública la prueba instrumental; cursa a fs. 484 el acta de lectura de prueba instrumental, donde las partes determinan se den por aprobadas las actas y la prueba instrumental, por consiguiente no se ha omitido lo establecido en el art. 237 Cód. Pdto. Pen. POR TANTO: La Sala Penal Primera de la Excma. Corte Suprema de Justicia de la Nación, en desacuerdo con el requerimiento fiscal de fs. 720-723, declara INFUNDADOS los recursos deducidos con costas, de conformidad al art. 307-2) del Cód. Pdto. Pen. Relator: Ministro Dr. Héctor Sandoval Parada. Regístrese y devuélvase. Fdo.- Dr. Héctor Sandoval Parada. Dr. Carlos Tovar Gützlaff. Sucre, 2 de diciembre de 1999. Proveído: Dra. Nancy Guardia Coimbra.- Secretaria de Cámara. http://juris.poderjudicial.gov.bo/jurisprudencia/penal/penal-I/gj19991211239.htm 7/29/2009